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Publicacion mudha

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MUDHA es una Organización No Gubernamental fundada en 1983, por tanto cuenta con 30 años de trabajo institucional. Fue fundada con varios propósitos siendo el fundamental “la promoción y el fortalecimiento de la organización de las mujeres dominicanas de ascendencia haitiana, a través de la ejecución de planes y programas de educación, salud comunitaria y Derechos humanos que permitan mejorar su calidad de vida y la de sus comunidades”. Esta acción integral procura además desarrollar la capacidad autogestionaria de la institución y de la población meta incorporando una estrategia educativa que permita a los/as beneficiarios / as acceder a nuevas e innovadoras opciones laborales que mejore su nivel de ingresos y con ello acercarse a un vida más justa.

Solange Pierre, también conocida como Sonia Pierre Fue la presidenta y fundadora del Movimiento de Mujeres Dominico-Haitianas (MUDHA)

En reconocimiento por el trabajo que realizaba desde la organización fue merecedora de varios premios en lo que se incluyen el Robert F. Kennedy Human Rights Award 2006 dictado por ex senador de EE.UU. Edward "Ted" Kennedy, pero no en nombre del Congreso de los EE.UU.2 (El senador Edward Kennedy dijo de ella que "Con certeza, puedo afirmar que Sonia es uno de los seres humanos más abnegados, valientes y compasivos de mi generación. Sonia está muy cerca del top ten de mi lista de heroínas".3Pierre también ganó el galardón para los Derechos Humanos 2003 Ginetta Sagan Fund Award de Amnistía Internacional;6 además ella y MUDHA fueron nominados para el Premio UNESCO de Educación para los Derechos Humanos en 2002.7Ella fue honrada por el Departamento de Estado de Estados Unidos con el International Women of Courage Award 2010.

En República Dominicana existen alrededor de 400 bateyes, en los cuales sus habitantes viven en las peores condiciones de vida del país [1]. De acuerdo con un estudio realizado por Áyax Mercedes Contreras, los inmigrantes Haitianos son los más excluidos en la estratificación social seguidos muy de cerca por los Dominico-Haitianos [2]. De hecho, los inmigrantes Haitianos que viven en los bateyes y en otras comunidades pobres y marginadas de la República Dominicana no cuentan con acceso a los servicios públicos más básicos, como por ejemplo, agua corriente, atención médica, educación, y tratamiento de aguas residuales[3].

El tema de los bateyes es un punto crítico para el país en materia de Derechos Humanos y sobre todo un punto de álgido debate a nivel nacional. Los bateyes de República Dominicana aún siguen siendo comunidades excluidas, en condiciones infrahumanas y por debajo de la pobreza extrema, y que en su gran mayoría están compuestos por población afro descendiente, Dominicanos y Dominicanas de ascendencia Haitiana y migrantes Haitianos, que pertenecen al estatus socioeconómico más empobrecido y que además, sufren las mayores privaciones y carencias ante la indiferencia del Estado Dominicano

Los haitiano/a o su descendiente en República Dominicana, en más de un 90% de los casos, viven en pobreza o pobreza extrema, no tienen acceso a las mínimas condiciones de salud, higiene, educación, habitabilidad, están obligados a trabajar en total informalidad, muchas veces en condiciones infrahumanas etc., junto a estos componentes de exclusión sigue existiendo una fuertísima presencia del Racismo y de la Xenofobia en el país y un marco legal que impide en muchas ocasiones el acceso efectivo a las mínimas garantías sociales y a los Derechos Humanos fundamentales.

En la actualidad, la gran carga de prejuicios y discriminación se refleja en el impedimento que tienen los hijos e hijas de los y las migrantes a acceder a la educación. Aunque la legislación no permite este tipo de discriminación, en la práctica es conocido que funcionarios estatales que impidan el acceso a la educación de niños y niñas de ascendencia Haitiana al sistema educativo.

Por Otra parte el Estado ha continuado aplicando la norma limitativa de forma retroactiva hasta la fecha, creando un grave conflicto de ley, sin tomar decisión alguna ante las demandas de la población. El tema fue postergado hasta la emisión de la sentencia 168-13, sobre Juliana Deguis, caso presentado en Amparo ante el Tribunal Constitucional, cuya interpretación de las leyes de nacionalidad ha tenido como consecuencia la desnacionalización de la mayoría de los hijos de inmigrantes haitianos registrados y nacidos en el territorio dominicano a partir del año 1929. Consecuentemente la sentencia 168-13 emitida el pasado 23 de septiembre de 2013 consolida esta política de limitar el acceso a la nacionalidad a los hijos de inmigrantes haitianos e invalida los documentos civiles de personas de origen haitiano.

. Es más, el no tener claridad sobre la aplicación efectiva de la normativa haitiana sobre nacionalidad en la mayoría de los casos, pone en condición de apátridas a cientos de miles de personas nacidas en el país. Para las personas que nunca han tenido un registro civil, que según el conocimiento de las comunidades, se trataría de al menos una cantidad tan numerosa como el caso anterior, la situación es aún más compleja, ya que la decisión del TC les impide de hecho tener alguna vez acceso al registro civil dominicano. Desde fines de los años 90 la comunidad internacional ha mostrado preocupación por este tema acentuándose cada vez más las menciones de denuncia y preocupación a partir de 2005 después de una Sentencia emitida por la Corte Interamericana de Derechos humanos condenando el hecho y conminando al Estado a restituir los derechos de dos niñas domínico haitianas, Dilcia Yean y Violeta Bosico, a quienes se les había negado el acceso al registro civil.

El Estado, como se ha visto, lejos de tomar medidas de restitución y prevención de futuras violaciones, ha provocado que la situación haya ido empeorando para esta población, culminando en la Sentencia 168/13 del TC que ha desencadenado un escándalo al nivel internacional, afectando las relaciones bilaterales con Haití y deteriorando gravemente las relacionas de RD en la región. Recientemente el Presidente Danilo Medina prometió una ley (de validación de actas o de naturalización, aún no se tiene claridad sobre su contenido) que enmiende la situación provocada por la Sentencia del TC y las resoluciones de la JCE en relación a los descendientes de inmigrantes haitianos. Al momento se espera que el documento sea trasmitido al congreso en cualquier momento. No obstante se espera que un gran número de población en riesgo o en situación de apatridia quedará excluida de esta medida, por lo que hemos de tener identificado al mayor número de población para brindar apoyo legal y acompañamiento en el reclamo de sus derechos por un lado y por el otro facilitar el acceso a las soluciones que se brinden para los que puedan acogerse a ellas.

LOS PRINCIPALES PROBLEMA QUE ENFRENTA LAS COMUNIDADES Y

SUS RESIDENTES

son comunidades empobrecidas con un bajo nivel académico y acceso a los servicios básicos, sus moradores no cuenta con oportunidades para la adquisición de capacidades por lo que no se reconoce como sujetos de Derechos, viven expuesto permanentemente a la marginalización, exclusión social, discriminación y a sus consecuencias más aterradoras.

Resulta difícil para los moradores comunitarios, líderes sectoriales y organizaciones sociales que trabajan en estas comunidades establecer un diálogo abierto con autoridades y personalidades que incide en la política pública debido a la falta de sensibilización hacia el tema y la actitud discriminatoria de estos funcionarios hacia esta población

La población no tiene conciencia sobre la importancia de la reorganización comunitaria y la creación de estructuras de base para el desarrollo y crecimiento comunitario por lo que en la mayoría de casos desconocen las obligaciones de los organismos municipales del estado (ayuntamiento, gobernación) en la protección y reconocimiento de sus derechos esenciales

Un segmento significativo de esta población se encuentra indocumentado y el otro se ha visto afectado por la medida burocrática implementada desde el estado con el fin de desnacionalizar administrativamente a un grupo específico. La actual situación ha desencadenado una serie de negación de derechos que mantiene a esta población y sus habitante bajo las condiciones más grande de pobreza y marginalización

COMPONENTE DE TRABAJO

Desarrollar y fortalecer conocimientos, destreza habilidades de las comunidades:

Fortalecimiento de las estructuras comunitarias (junta vecinos, iglesias, asociaciones, otros)

Acompañar a las comunidades a los procesos de reivindicación de sus derechos

DONDE TRABAJAMOS

COMO TRABAJAMOS

SEMCIBILIZANDO Y CAPACITANDO A LOS RESIDENTE DE LA COMUNIDADES

FORTALECIENDO LOS CONOCIMIENTO Y FOMENTANDO EL DESARROLLO DE LOS MIEMBROS DE LAS COMUNIDADES

BRINDANDO ASESORIA Y ASISTENCIA LEGAL A LOS RESIDENTES DE LAS COMUNIDADES

APOYANDO LA NIÑEZ

PROMOVIENDO LA IGUAL DE GENERO Y LA PARTICIPACION DE LA MUJER

APOYANDO LA INCIDENCIA EN TEMAS RELEVANTES DE DERECHOS HUMANOS

SACANDO A LA LUZ PUBLICA LA SITUACIONES QUE ENFRENTAN LAS COMUNIDADES Y SU RESIDENTES

PROMOVIENDO DE LA AFROIDENTIDAD Y LA CULTURA

INCIDENCIA A TRAVES DEL TEATRO DE CALLE

COMBATIENDO LA DISCRIMINACION Y EL RACISMO

HABLANDO POR AQUELLOS QUE NO TIENEN VOZ

NUESTROS LOGROS