Upload
buidang
View
218
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
¿Quién tachó a Caro?
Poema “A Granada”, de puño y letra de José Eusebio Caro, en el cual aparece tachada la palabra “Granada” y reemplazada por “Ocaña”, tomado del libro de Caro La filosofía del cristianismo. Poesías, Edición facsimilar, Instituto Caro y Cuervo, Bogotá, 1991. (Archivo privado del
Ing. Fernando Vega
Ojeda).
Partiendo de que
José Eusebio Caro
nunca entregó a
editorial alguna sus versos para publicarlos, sino que aparecían dispersos en periódicos
y revistas, cabe preguntarnos por qué el poema “A Granada” fue tachado para que
pareciese como “A Ocaña”; porque si él lo hubiese corregido, en el sólo nombre de la
ciudad o país a que va dedicado, sería más bien un desaire con Ocaña antes que una loa.
Y no estamos lejos de advertir este verso acomodaticio por lo siguiente: el verso final
con que termina el soneto “¡Adiós, Ocaña; para siempre adiós!”, suena y suena muy
bien a destierro, a persecución, y preguntamos ¿quién lo desterraba de Ocaña si allí no
había vivido?, ¿quién lo perseguía? Recordemos que Caro se autodesterró en 1850 y se
asiló en Nueva York, debido a sus escritos contra el Presidente José Hilario López y
contra el gobernador de Cundinamarca, quien lo mandó encarcelar. Y algo más, en las
cartas de Nicolasa a su hijo José Eusebio, con un amor dijéramos que meticuloso, le
recomienda desde las camisas hasta los recuerdos del hogar; pero en ellas nunca se
menciona la dulce pasión que su esposo tenía por ella, entonces a qué viene “Mi padre
aquí… Aquí de amor él a sus pies lloraba…”. Retomando la pregunta ¿quién tachó a
Caro?, decir que fue José Joaquín Ortiz, quien recopiló sus poesías y las editó en 1857,
es algo de poca o ninguna probabilidad,
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
pues en primer lugar priva el respeto por el autor y en segundo lugar ningún interés
tenía Ortiz por el amor de Ocaña. Y queda una segunda explicación, que fue su hijo
Miguel Antonio Caro, quien hace la introducción al libro de José Eusebio, Obras
escogidas en prosa y verso, editado 1883 por los redactores del periódico El
Tradicionista, y Miguel Antonio sí, como heredero del fundador del Partido
Conservador y de sus derechos de autor, muy seguramente para congraciarse con el
bastión de su partido, que era Ocaña, acomodó el verso. Una persona, a ojo de buen
cubero, puede observar la diferencia en la caligrafía del que escribió el poema y del que
reemplazó la palabra “Granada” por “Ocaña”. Los historiadores todo lo saben, después
de que se sabe públicamente, pero nunca lo dijeron ni fue puesto en la sana crítica,
como el cuento del fundador Fernández de Contreras y Hernández Sánchez. Algo más,
Ciro Lobo Serna, en Antología poética, de la Biblioteca de Autores Ocañeros, tomo 12,
1973, sobre el supuesto poema “A Ocaña”, hizo la acotación (¿retorcida?) de que José
Eusebio se refería a sus abuelos maternos únicamente y que en el poema Mi lira, Miguel
Antonio cambió “Delina” por “Dolores”; es decir, que la manía de tachar y cambiar sí
era cierta en éste.
Editorial
Este trabajo, a manera de magazín, se publica como la primera edición del periódico
RIZOMA, segunda época, y con la intención de recordar a algunos de nuestros escritores
ya consagrados y desaparecidos y otros que aún están en la brega cotidiana. Así, pues,
que con esto no celebramos ninguna efemérides, estamos hasta la coronilla de éstas.
Pretendemos con esto romper un poco la rutina anual de la pólvora y el “bolegancho”,
de la música estridente y la agresividad carnavalesca, de las condecoraciones a
nulidades, como diría don Raúl Osorio (y no nos referimos aquí al ilustre y apreciado
historiador riodorense), y los desfiles y comparsas de disfrazados de los Genitores; a
propósito, ¿de dónde sacarían que los convencionistas asistieron a la Convención
vestidos de “chepitos”? Tampoco podemos decir que aquí no están todos los que son ni
son todos los que están; los que aquí aparecen, si se quiere, obedecen a capricho
nuestro, a gusto nuestro. De los invitados, sólo uno resultó con la agenda muy apretada,
“La verdad, no he tenido tiempo”, nos espetó en la calle; es decir: “No quiero”;
respetable el eufemismo. De otra parte, con esta selección no pretendemos resaltar la
vigencia de Caro, Milanés, Tablanca, Velázques o Pacheco, frente a los escritores
contemporáneos, pues nos parece que son etapas que se han ido quedando atrás en el
trascurrir de los años.
Entre las poesías, publicamos una de Caro a su novia y después esposa, Blasina Tovar,
considerado aquí nuestro primer poeta —concepto del que disentimos—, de la que dijo
Daniel Samper: “Pese a este poema, Blasina se casó con Caro”. Dos poemas de
Milanés, entre éstos, el último que escribió tres días antes de suicidarse, según contaba
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
su hijo Daniel Enrique, en los cuales aparece claro su pensamiento sobre Dios y el más
allá; es que a Milanés han tratado de “godificarlo” y reducirlo a un simple “irreverente”,
como lo ha calificado alguno de los historiadores de la literatura regional.
Entre los prosistas, destacamos a Euquerio Amaya Rojas, quien en una prosa trasparente
y explícita, censura a los timadores, estafadores y maleantes funcionarios que esquilman
el Estado, prosa que perece haber sido escrita hoy, cuando el escándalo de los altos
funcionarios del Estado a quienes hace poco les decían “ladrones de cuello blanco” es el
pan de cada día y los compara con las grandes inundaciones de nuestros ríos que causan
tanto daño y que hoy también llenan las páginas de los periódicos. Es el momento
oportuno de recordar a quienes fueron elegidos que no pequen por repetir nóminas de
administraciones fatales, que dejaron a Ocaña con las arcas vacías y llena de deudas.
Aparecen también nuevas prosas, unas hechas exclusivamente para esta edición y otras
guardadas en la cosecha de sus autores.
El lector juzgará qué poetas fueron bien recibidos por las musas, parafraseando a Ciro
Lobo cuando habla de Eustoquio Quintero Rueda, en Antología poética, de BAO, 1973.
Los Al Ramá, a cargo de este número, agradecemos a la señora Sugey Eliana Montagut,
directora del semanario Ocaña 7 días, por habernos facilitado el espacio para la
publicación de nuestra columna “Bocadillos”, en la segunda mitad del año que termina.
Coprografía*
Por: Gustavo Lobo Amaya
La Feria del Libro de Ocaña es un evento multitudinario, porque en Ocaña cada ocañero es poeta, escritor, filósofo, ensayista, etc. En cada ocañero hay latente un genio en
literatura y en todo lo que se le atraviese en la vida, por eso hay tantos ocañeros en la historia de la literatura universal.
Aquí no se escriben sino que se cagan libros con una facilidad espantosa. Y aquellos
críticos pusilánimes y cobardes que critican con sorna las ferias de libros terminan engullidos por ellas cuando lanzan sus mediocridades para contribuir a llenar el mundo
de más mierda y para ser reconocidos en su aldea.
¿Quién no escribe en Ocaña? Hasta yo lo hago.
*Octubre de 2011.
Contrabandistas y falsificadores*
Por: Euquerio Amaya Rojas
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
De poco tiempo a esta parte, no hay correo nacional o departamental que no traiga y
lleve periódicos en cuya sesión de noticias no se lea las de cuantiosos robos al Estado,
falsificación de monedas y fraudes a las rentas de licores &. &. Las ofic inas
investigadoras de la República están repletas de procesos de esta clase, y es de apuntar
con dolorosa extrañeza, que estos delitos que hace algunos años apenas se anotaban
escasamente, y de los cuales aparecían responsables individuos del bajo pueblo,
campesinos incautos y malsines ignorantes, empiezan a invadir las altas clases de la
sociedad y ha abarcado la iniciativa de ambos sexos. Andan envueltos en estos líos
hombres de guante y chistera; hay mujeres cogolludas sindicadas también de
contrabandistas y falsificadoras, por lo que se pudiera decir, que el feminismo entre
nosotros, ha empezado por donde termina la libertad del hombre: por la delincuencia.
La causa de tan tremenda crisis de la sociedad, está a la vista de todos. La causa radica
en la necesidad de hacer dinero, de adquirir medios de subsistencia, necesidad que en
algunos cerebros se intensifica hasta producir el desequilibrio de las facultades morales.
Tiene una buena parte de la juventud de hoy, de esta juventud que desgraciadamente se
inició en la escuela de la guerra civil y que se ha formado en el claustro de la deficiencia
educativa, una rarísima idea del delito, quizá surgida y alimentada por la impunidad que
es ambiente en nuestro sistema penal. Así, matar para muchos es cuestión de dinero. Se
dura en la cárcel en relación con el capital de que se disponga. Robar al gobierno, se
dice por ahí, no es robar; defraudar la renta de licores de los departamentos es ya
negocio lícito, tan lícito que se hace a plena luz meridiana y a la vista de la
muchedumbre.
Si alguna cosa hay alarmante por cierto, es este estado de cosas, es esta modalidad
psíquica de la colectividad, mucho más alarmante que las inundaciones de nuestros
grandes ríos, porque ésta es la inundación del cieno, es el ahogamiento colectivo entre el
limo de la necesidad brutal, que por exigente y premiosa que sea, no debe satisfacerse a
costa de todo, a costa del prestigio individual y del porvenir de la Nación, máxime
cuando, francamente, no escasean en el país medios de vivir con honradez y decoro.
*Editorial del semanario Ideas, 6 de enero de 1917, del archivo de Daniel Enrique Amaya Navarro
(PEST).
La bruja1
Por: Cecilia Casadiego Cabrales
La bruja, del historiador francés Jules Michelet2, me dice que todas esas historias de
brujerías, supersticiones y demás provienen de la Edad Media. Sin embargo, nosotros no las ligamos a la herencia europea, hispana en nuestro caso; por el contrario, las tomamos como creencias de indios y negros.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Un tío mío, hermano de mamá, viene desde hace medio siglo recogiendo recetas
médicas de los indígenas del Catatumbo, y él me dice que los indígenas no son supersticiosos, ellos observan y estudian el ambiente, la relación de los mosquitos con
las plantas, la resistencia de los insectos, y entonces usan extractos de plantas para curar o prevenir enfermedades. También le escuché a una antropóloga rusa especialista en los Mayas que éstos nunca escribieron profecías, ni eran supersticiosos, eran estudiosos,
científicos de la época; las supuestas predicciones mayas sobre el año 2012 son inventos mediáticos.
En el libro de Michelet, La bruja, para los jesuitas los conflictos surgen como resultado de la posesión del demonio; él también escribió un libro sobre ellos, Des jésuites, que
no sé si estará traducido al castellano.
Un vecino en Chicago, que enseñaba artes marciales, me comentó que él conocía el barrio donde vivíamos desde que los jesuitas habían llegado. Me dijo: “Ellos llegan a ayudar a los pobres, instalan una iglesia, una escuela, un centro de salud, y el sector
queda saneado, entonces suben los precios de las casas y los pobres tienen que salir”. Y añadió: “Yo estudié con ellos en el seminario, me enviaron a Asia como misionero, fui a
Taiwan donde debía estudiar la cultura china y encontré que las artes marciales era lo mío, y no me ordené como su sacerdote”.
Decía que ellos son muy serios en su trabajo, en las misiones llevan antropólogos, lingüistas, sociólogos, teólogos, etc., a estudiar la comunidad en profundidad, sus
creencias, supersticiones, su relación con el medio natural, físico y sobrenatural. Ellos son los del cuento de la Virgen, negra, amarilla, morena, etc. Su misión se concentra en la Madre de Dios, María. Crean las condiciones para una aparición, un milagro, y así se
convierte en parte de la cultura local y en alguna manera universal, pues coinciden las “apariciones” en culturas tan diversas.
Supongo que no sólo los jesuitas sino las otras órdenes religiosas; sin embargo, los jesuitas son los más agresivos. En la película Shogun, un franciscano encarcelado dice
que está ahí por obra y gracia de los jesuitas de mierda que se merecen todos ir al infierno.
El canal de Historia presentó la historia de la aparición de la Virgen de Guadalupe en México. Fue en 1532 y cerró una era muy dura de las relaciones de europeos y aztecas.
Un indígena se encontró con una dama vestida de blanco y resplandeciente como un sol que le dijo no sé qué cosas. El indio fue donde el obispo a darle el mensaje de la mujer. El prelado le dijo que si esa mujer se aparecía de nuevo él debería pedirle a ella una
prueba para creerle el cuento. La dama apareció e hizo brotar rosas en el cerro de Tepeyac, lugar árido, las cuales cortó el indio y las llevó como prueba al obispo.
Cuando el aborigen descargó las rosas apareció en su tilma la figura de la dama de marras. Es el lienzo que hasta hoy se venera en México y que en el siglo pasado un oftalmólogo al examinar sus ojos encontró en la pupila de la Virgen la imagen del indio
reflejada, una prueba más de que esa mujer sí había conversado con el indio, pues su cara se reflejaba en los ojos de aquélla. No sé quién sería el pintor y autor de la trama, si
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
agustino, jesuita o franciscano, pero, como dice Carlos Fuentes, la Virgen de Guadalupe
es la que decide en México.
Y en Ocaña la Virgen de Torcoroma. No sé aquí cuál era la necesidad de crear esa historia hace 300 años. No recuerdo la expresión exacta de Manuel Ancízar en su obra Peregrinación de Alpha en su paso por Ocaña en relación con la Virgen de Torcoroma,
pero le impresionó una figura tan fea en un lugar donde las mujeres tenían fama de hermosas.
1. Este escrito circu la en internet. 2. Este libro se puede leer en la Bib lioteca Luis Ángel Arango, en Bogotá.
¿Hablar o callar?* Por: Mons. Leonel Pineda G.
La Historia está llena de silencios cobardes y, por consiguiente, culpables. Hay que hablar por encima de las presiones y de las amenazas. Cuando se pretende impedir que hablemos, debemos gritar. Que no nos remuerda la conciencia por no haber hablado
cuando era preciso hablar. Es una vergüenza no proclamar la verdad, porque si no lo hacemos en el momento oportuno, el falso proclamará la mentira como verdad.
Vivimos en una sociedad muda, manipulada, que va repitiendo lo que otros dicen sin detenerse a examinar lo dicho para ver si es verdadero o no. “En la radio dijeron”, “en la
televisión dijeron”, “el doctor tal dijo”… Tenemos derecho a la palabra, pero ese derecho lo utilizan más los malos que los buenos.
Cuando escuchamos, debemos ser críticos, porque muchos se valen de su investidura para imponer su mentira; porque no faltan los que atrincheran detrás de un micrófono
para mantener al pueblo desorientado y engañado. En las constituciones políticas de los países democráticos está consagrado el derecho a la libre expresión, guardando siempre
el debido respeto. Este derecho también cobija a los fieles de la Iglesia católica. La sociedad civil no puede ser una sociedad de sordos y mudos; tampoco la Iglesia. Hay que escuchar, y si lo que se dice es mentira, hay que rechazarlo. HAY QUE
HABLAR. Nadie ni en la sociedad civil ni en la Iglesia tiene derecho a impedir que se hable valiéndose de la intimidación, la persecución y la desinformación. En lo que se
refiere a la Iglesia, el Concilio Vaticano II, en el documento La Iglesia y el mundo moderno, No. 62, dice: “Debe reconocerse a los fieles, clérigos o seglares, la justa libertad de investigación, la libertad de pensar y la de expresar humilde y valerosamente
su manera de ver en aquellas materias que son de su competencia”. *Ocaña, 24 de julio del 2008.
De lo trivial
Por: Joaquín Pablo Santana Barbosa
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Las estatuas
El hombre desde los más remotos tiempos creó la imagen de su semejanza o la de la naturaleza que lo rodeaba, en figuras como la Dama de Elche o los Toros de Guisando en España, las estatuas de San Agustín, en Colombia, Egipto y las grandes de Grecia.
Pero así como construía bellas estatuas que eran veneradas, incensadas, también las destruía o las olvidaba de acuerdo con el capricho político o religioso reinante;
costumbre que aún permanece en nuestros pueblos, sin que a ello escape la ciudad de Ocaña.
En Bogotá la estatua del Libertador que vemos en la Plaza de Bolívar, donada en 1845 por don José Ignacio París con destino a la Quinta de Bolívar, fue puesta en la Plaza de
la Constitución, hoy de Bolívar; el escultor Pedro Tenerani diseñó un soberbio pedestal de mármol blanco, consistente en dos columnas cuadradas con relieves e inscripciones. El primer ataque que recibe el monumento es en 1880, se le reemplaza el pedestal y se
ejecuta el diseño del escultor Lambardi, un pedestal churriguresco que en su época se consideró de mal gusto. En la reconstrucción de la plaza en 1928 se revivió el pedestal
original ya no en mármol sino en piedra; hoy lo conocemos con un pedestal sobrio en piedra. En la misma ciudad las estatuas de Colón y la Reina Isabel la Católica, del escultor César Sighinolfi, fundidas en la ciudad italiana de Pistoia, llegaron a Bogotá en
1897 y permanecieron olvidadas en el edificio de Santa Clara, hasta que en el gobierno de Rafael Reyes se ubicaron en la calle 13 entre carreras 16 y 17; hoy se encuentran en
la avenida de El Dorado, y parece que los Nule decidieron no moverlas al encontrar vacío el cofre de la Reina Isabel.
En Ocaña, en la Plazuela de San Francisco, permanece sobre su pedesta l el poeta José Eusebio Caro, aunque se dice que tal efigie no pertenece al vate sino a un político de un país ecuatorial.
En la administración del alcalde Eduardo Vergel se dispuso la erección de una estatua
de la bruja Leonelda, oriunda de Búrbura, municipio de González, Cesar; la obra se encomendó al señor Iván Lobo Urquijo, quien manejó una imagen de una india patirrajada, lanzando un grito al despojarse de la cuerda que la ahorcaba; su figura no
gustaba porque las facciones no correspondían a la belleza de las ocañeras, de tipo andaluz, y fue reemplazada en la administración de Francisco Coronel por una estatua
de piedra arenisca, de bellas redondeces, con un cabello ondulado y el gesto de su mano bajo él, como cualquier impulsadora de jabón líquido, cara redonda y grandes ojos y sobre todo abundante vello púbico, cosa que la naturaleza negó a la raza indiana, y para
completar mostraba su desnudez a las puertas de la iglesia de San Agustín, de donde salían las beatas santiguándose, en fin, una Leonelda de raza ibérica y, claro, debajo de
ella, la lista de nombres para la eternidad; no duró mucho el encanto, pues el Polaco ordenó removerla y en su lugar montar al legendario Don Antón García de Bonilla, hecho en un material innoble, en caballo de poca alzada.
Otra remoción de estatuas fue la que se hizo del Monumento a la Vida, ubicado en el
triángulo formado por la vía de circunvalación al desembocar en la avenida de
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Francisco Hernández Sánchez, el monumento llevaba un nombre como el de la
escultura de Arenas Betancur en la ciudad de Medellín donde una espiral de frutos americanos termina en una figura humana queriendo alcanzar las estrellas; en el de
Ocaña las figuras humanas lanzan una paloma; hoy fue reemplazado por la estatua del fundador, que luce con lanza, a la manera quijotesca, y los pies enfundados en una especie de suecos, ¿hasta cuándo estará allí?, no lo sabemos. En el Parque del 29 de
Mayo, sacaron a Margario y lo arrinconaron en la trastienda de la alcaldía.
En la pequeña glorieta del Cementerio Central, fue puesto un ángel, que se encuentra como el personaje de una propaganda comercial bancaria, “en el lugar equivocado”, pues de acuerdo con la iconografía católica, en los cementerios hay lugar para los
ángeles del silencio o los que tocan la trompeta del juicio final, pero no para el arcángel Gabriel, el que con vara de nardos en la mano hizo el anuncio a María de la vida, no de
la muerte. En fin de cuentas, que las estatuas en Ocaña las remueven, las mandan al olvido o las ponen “en el lugar equivocado”, o si se trata de monumentos le alteran el diseño del escultor y tergiversan su destino, como la tumba de Milanés. Aquí vienen
bien los versos del payanés Guillermo Valencia: “No manchará su lápida epitafio doliente;/ tallad un verso en ella, pagano y decadente”.
Tachuela. Ocaña cuenta con vos, y para promover el vos bilingüe te entregamos a vos un kit escolar.
Las trampas del poder mediático Por: Fabio A lonso Torrado A.
“(...) lo primero con que topamos no son las esencias de las cosas sino las apariencias; por lo exterior se
viene en conocimiento de lo interior, y por la corteza del trato sacamos el fruto del caudal…”
Gracián
La apariencia no deja ver, algo oculta la apariencia. Y lo oculta como la fiesta de unos
pocos soles oculta el drama de un temporal de invierno. La apariencia es el lugar del
feliz arquitecto de oropeles, es el imperio de lo efímero, de lo contingente, de lo
transitorio, de lo fugitivo…
Con insistencia se ha venido señalando a los medios masivos de comunicación de ser
los corresponsables del progreso de la sociedad, de constituir una fuerza capaz de
actuar, reflexionar, interpretar y transformar, desde la actividad habitual, la vida social
con producción y programación cualificada para que el ciudadano (que no la audiencia
u opinión pública) participe, se eduque y sea capaz de involucrarse y decidir el futuro
que espera como sujeto social. Pero una preocupación nos asalta. ¿Están los medios
locales preparados para producir programación de calidad? ¿Serán capaces de
sorprendernos con algo más que no sean programas de opinión bajo el disfraz de
noticieros con las habituales cinco fuentes no contrastadas, de sorprendernos con algo
que no sean los musicales complacientes para saludar las mañanas o despedir las tardes
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
soñolientas, los magazines con “de todito”, como colchas multicolores o misceláneas
anecdóticas, los relatos para afirmar y engordar supersticiones, los reallytis de moda con
formatos copiados de producciones harto conocidas, todos ellos realizados desde el
sentido común, desde el parecer, sin fuerza investigativa o por lo menos con alguna
profundidad argumental que permita descubrir una perla entre tanta bisutería?
No sobra señalar que la historia de los medios masivos de comunicación en Ocaña
recoge algunos logros significativos en materia informativa y hasta en acciones de
servicio social sobre los cuales sería injusto no hacer especial reconocimiento. Por el
contrario, sin los medios de comunicación y los comunicadores sin diferenciación
alguna, las instituciones, los grupos sociales y las comunidades tendrían menores
indicadores de desarrollo y baja cohesión social. Lo lamentable es que el papel de los
medios se ha desvirtuado a favor de los medios mismos y de los comunicadores quienes
no parecen estar enterados de que los medios son algo más que instituciones con cajas
de herramientas para jugar a hacer cositas; que son empresas con responsabilidad social
que debieran estar al servicio de la ciudadanía; que detrás de estas empresas debieran
estar personas formadas en competencias comunicativas para que entendieran que la
educación desde los medios es la mejor inversión social que se pueda dar a los
ciudadanos
Investigar y narrar desde un medio, entonces, no se aprende de la noche a la mañana.
No basta con tener instrucciones básicas, infraestructura y equipamiento tecnológico de
última generación para contar desde el medio. Se requiere un saber complejo que
involucra múltiples acampos disciplinares para que el producto no sea el bodrio que, por
analfabetismo, entregamos a la sociedad a la que nos debemos.
Traigo esto a colación porque en Ocaña se está desnudando una realidad narrativa mediática que ofende. Desde los medios de comunicación masivos ya no se cuenta nada
porque se cuenta todo con una liviandad olímpica. Con algunas excepciones (porque las hay) se cuenta lo consabido, sin responsabilidad, sin sentido crítico, afirmando la vieja
cantilena, con poca o carente reflexión, sin creatividad alguna. Convencidos del milagro, algunos comunicadores salen a cacarear al aire el tibio huevo henchidos de orgullo. No saben que bajo el papel carbón está servida la realidad social que se
manifiesta como un clisé, chata, sin perfiles ni colores. Somos lo mismo de hace décadas: “blasón de historia y alegría”, “la tierra de los Caro”, “el desfile de los
genitores”, “La mugre”… Mucho y poco para estas generaciones que consumen, sin reparar en aquello que consumen.
Los académicos de Argamasilla* Por: Álvaro Páez García
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Dice Azorín en La ruta de Don Quijote, que no ha conocido hombres más discretos,
amables y sencillos que los buenos hidalgos a quienes describe en el capítulo titulado como este breve ensayo, con ese estilo que Ortega y Gasset denominaba el de los
primores de lo vulgar. En esa descripción no encontramos un solo indicio de que estas buenas personas hayan
estudiado o de que sus concepciones correspondan a criterios más rigurosos que al mero ejercicio del sentido común y de los buenos deseos, que además de patrióticos (yo diría,
ultranacionalistas), estaban circunscritos a su terruño, a su parroquia, desde luego, en torno de ese libro emblemático de España que es El Quijote.
Con el debido respeto a mis mayores y a mis paisanos (porque además sé que no todos son discretos, amables y sencillos, como describe Martínez Ruiz a los de Argamasilla)
creo que en Ocaña, Norte de Santander, Colombia, ha ocurrido otro tanto, y que nuestros ilustres académicos representan análogas circunstancias, no sólo desde el punto de vista de sus cualidades personales, sino en cuanto se refiere a la calidad y cantidad de
sus conocimientos y, sobre todo, a las remotas posibilidades de que sean eficaces.
Uno de los medios para saber si existe una actividad intelectual importante en cualquier parte, es analizando en calidad y cantidad el indicador de sus publicaciones.
En Ocaña no hay nada, no lo ha habido desde hace lustros, y como van las cosas, creo que tampoco habrá en general nada significativo ni a corto ni a mediano plazo, con
escasas excepciones justificativas de la regla, que por cierto nada tienen que ver con la solemne Academia.
La Revista Hacaritama , publicación de la Academia de Historia de Ocaña, se ha limitado a reciclar viejos textos y concepciones que nada sustancial agregan a lo ya dicho, en temas que por cierto ya estaban comenzando a quedarse atrás en el
desenvolvimiento de las concepciones históricas cuando allí se escribieron por primera vez, sobre todo porque en ellos ha prevalecido una ideología conservadurista, orientada
por concepciones ultracatólicas, dentro del hispanismo de sus cultores, en circunstancias que hacen difícil la oxigenación de esos criterios, puesto que dentro de esa limitada concepción, todo lo que viniera de más allá de los Pirineos era (¿es?) anatemizado como
simpatizante de la Revolución Francesa, repitiendo y prolongando en nuestro medio parroquial el aislamiento y la cerrazón mental de la España franquista.
En Colombia y en especial en los Santanderes y Boyacá, región denominada por Virginia Gutiérrez de Pineda “neohispánica”, se conservaron en ese formol ideológico
tales “valores”, hasta el punto de que muchas comarcas (entre otras la nuestra) no han entrado a plenitud en la modernidad. Desde hace tiempos tengo la certeza de que
nuestros ilustres académicos son exponentes de esas desuetas concepciones y responsables, por acción u omisión, de que se las siga perpetuando, al mejor estilo de los de Argamasilla.
Mi criterio al respecto es que debemos hacer un esfuerzo intelectual permanente para
tratar de estar al día, con imaginación, creatividad, constancia y rigor; debemos estar
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
atentos a las nuevas corrientes intelectuales, debemos tratar de insertarnos por lo menos
en la modernidad y nuestras propias creaciones deben tratar de adaptarse a esos o mejores conceptos.
El abanico de paradigmas es enorme y muy variado. Y la excusa para no hacerlo no puede ser, como ya me lo han dicho, “¿por qué no lo haces tú que nos criticas?”. La
respuesta obvia es porque el primer momento intelectual de cualquier crítico que se respete es el análisis, que he venido haciendo y, sobre todo, porque no se trata de mi
responsabilidad. Hace tiempos vengo expresando lo mismo, pero temo haber perdido batallas contra la
unión de sentimientos viscerales y pasionales sobre la identidad ocañera (a la que considero como a todas las identidades locales o regionales, una versión peligrosa de un
nacionalismo a ultranza) y la renuencia a actualizar y adecuar conceptos sobre historia, literatura o sociología. En ese sentido, me remito a lo dicho por Jorge Orlando Melo, en la publicación El malpensante, que expone mejor que yo mis apreciaciones sobre la
identidad.
Yo no me precio de periodista, no me muevo en los medios de comunicación, ni tengo condicionamientos económicos, políticos, profesionales o contraprestacionales con nadie, fuera de los propios de tratar de ser cada vez mejor en lo que hago, buscando con
un mínimo de ética emular en ello a mis ancestros. Por eso puedo decir, parodiando a Borges, que sólo me enorgullezco de los libros que he leído, ya que mis convicciones no
me obligan más que con la palabra y conmigo mismo y no me permiten cometer la irresponsabilidad de escribir cualquier cosa con tal de que los demás repitan lo que no tengo la temeridad de decir: que además de escritor soy el único sucesor intelectual de
Luis Eduardo Páez Courvel. Notas:
Azorín. La ruta de Don Quijote. Obras completas, Tomo II, Aguilar, Madrid, 1947.
Maeztu, Ramiro de. Defensa de la hispanidad. Gráficas González, Madrid, 1946.
Gutiérrez de Pineda, Virginia. La familia en Colombia. Transfondo histórico. U. Nacional de
Colombia, Bogotá, 1963.
Jaramillo Vélez, Rubén. La modernidad postergada. Temis, Bogotá, 1994.
Jaramillo Uribe, Jaime. Historia, sociedad y cultura. Obras completas. Ensayos y conferencias. Comp.
Gonzalo Cataño. U. de los Andes. CESO. Ediciones Uniandes y Alfaomega Colombiana, Bogotá, 2002.
Melo, Jorge Orlando. “Contra la identidad”. El malpensante. Lecturas paradójicas, No.74, Bogotá, Nov.
1-Dbre. 15 de 2006.
*11 de febrero de 2009.
La locución, opción laboral para todos
Por: Nahún Sánchez Castilla
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Durante los 8 años que estuvo vigente el Decreto 2387, de 1983, los aspirantes a ejercer
el sagrado oficio de la locución en Colombia, deberían someterse a rigurosas pruebas de conocimientos generales y de aptitudes. Tenían que ser bachilleres y poseedores de
voces adecuadas, y como en este país siempre ha existido el tráfico de influencias, no se descartaban las palancas de los políticos regionales de turno.
Recuerdo que en Cúcuta, durante el tiempo que laboré en el diario La Opinión, como reportero, el subdirector del importante medio impreso, Cicerón Flores Moya, me invitó
a trabajar en el noticiero “Luces de la Ciudad”, que se transmitía por Radio San José, el que dirigía junto al entonces corresponsal de El Tiempo, Jaime Calderón. Allí hice mis
primeros “pinitos” radiales, pero la felicidad me duró tan sólo unos tres meses, porque me exigieron la licencia de locución, no obstante haberme recién graduado como Comunicador Social-Periodista en la UPB de Medellín.
De ese tiempo para atrás, para hacer locución, se debía contar con verdaderos
“vozarrones” y cierta autoformación académica, lo que de alguna manera enaltecía la hermosa labor de recrear y formar a través de un micrófono.
Ocaña tuvo su época de oro, con locutores que trascendieron en el país y que quizá
desaprovecharon las oportunidades que se les presentaron. Por ejemplo, los desaparecidos Leopoldo Torres y Jesús Alfonso López Vera trabajaron en emisoras de
las grandes cadenas en Medellín y Cali, respectivamente. No se sabe por qué decidieron regresar a su tierra natal y sacrificar las posibilidades de triunfar en el plano nacional y por qué no decir también que en el internacional.
Otro caso es el de Eduardo Candia Jácome, que sigue deleitando a sus oyentes en la
UFM Estéreo con su potente y melodiosa voz, que estuvo en Cúcuta y seguramente desechó las oportunidades que le ofrecieron en otras ciudades, de pronto por la acción
de la “ocañeritis”. Evocar también la voz romántica de Carlos Navarro cuando en el edificio Cabrales, donde operaba Radio Catatumbo, servía de puente entre los enamorados con el programa de boleros que emitía todas las noches, de manera sobria y
amena.
Fue, además, la época de los grandes locutores que llegaron de otras regiones, como Reynaldo Luengas, quien prácticamente revolucionó la radio con creatividad, pero que
en el instante en que se proyectaba nacionalmente, pereció en un accidente motociclístico.
Vale la pena recordar a Sergio Ramírez, que utilizó a la emisora Radio Sonar como catapulta a la narración deportiva en la cadena Caracol. Caso parecido al de Álvaro
Gómez Zafra, que después de laborar en las dos emisoras de am locales, es actualmente el flamante lector de noticias de Caracol Radio en la capital de la república.
Los tiempos han cambiado, no sabemos si para bien o para mal, y, de manera irónica, la
Constitución del 91 obligó a la derogatoria de la última disposición legal que regulaba el ejercicio de la locución en Colombia. “Se garantiza a toda persona la libertad de
expresar y difundir su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
veraz e imparcial, y la de fundar medios masivos de comunicación”, reza el Artículo 20
de nuestra Carta Magna.
Por lo anterior, no existe ninguna condición o filtro para hacer locución, de manera que los dueños o gerentes de las emisoras les pueden abrir micrófonos a quienes quieran, tal
como ocurre en algunas emisoras de la ciudad, donde payasos, vendedores ambulantes, o varados, en general, encontraron la oportunidad de ganarse la vida, haciendo programas musicales de dudosa calidad. Poco o nada importa que cada día maltraten el
idioma y que por la carencia de formación académica se acostumbren a decir disparates. Lo que les interesa a sus propietarios es que generen ganancias económicas, así les
vendan publicidad hasta a los “acuarios” del mercado.
No obstante las circunstancias que rodean esta actividad comunicacional, hay que reconocer que en las nuevas generaciones de locutores hay varios jóvenes que lo hacen con profesionalismo y que tienen posibilidades de trascender en el maravilloso mundo
de la radiodifusión.
Poemario
Neurosis*
Adolfo Milanés
Deseo de una cosa imposible.
Lasitud, inconstancia, pasión,
deseo de vivir invisible
y de rompernos el corazón.
Deseo de no ver lo que vemos
ni de cantar lo que cantamos:
inconsecuencias. Odiar lo que amamos,
y amar lo que nunca encontramos.
Neurosis, mal extraño y profundo.
Emotividad permanente y sagrada,
que no podrá curar en el mundo
sino la última paletada
de tierra…
(A las 4 de la tarde, pensando en Silva)
*Poema escrito 3 d ías antes de suicidarse el poeta. Del archivo privado de Arnold Sanjuán Arévalo.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Lo incierto
Adolfo Milanés
Todos lo decían y lo proclamaban.
Afirmaban que era
más claro que el Sol,
y a pesar de todo yo nunca creí.
Hombres y mujeres hubiéranse muerto
si alguno sostiene que el caso era incierto.
Todos lo decían y lo proclamaban
y todos juraban
y se arrodillaban
en la tierra oscura.
Exhumaron textos, trazaron guarismos,
irguieron teorías sobre los abismos
y cuando el más viejo exclamó “Yo vi”,
tampoco creí.
Reminiscencia pueril*
Edmundo Velázques
Fuerte, curtido al sol, y de vida lleno,
con diez años amables y divinos,
me miraron los soles ponentinos
hurtar la fruta del cercado ajeno.
La hija del mayoral con risas locas
entre sus labios moras me ofrecía,
y al reventar en sangre ella decía:
“Hemos matado un beso en nuestras bocas”.
Robaba a las abejas sus panales
para la amada; y una vez joviales,
al hundirnos los dos en la florida
montonera de mies recién segada,
se inició entre mi sangre alborotada
el placer venusino de la vida.
*Tomado del semanario Ideas, 15 de julio de 1916, archivo de Daniel Enrique Amaya Navarro (PEST).
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Mala mujer*
Luis Tablanca
Mala mujer te dicen cuando pasas
porque vendes tu amor,
y las más de las veces no lo cobras
ni lo cargas en cuenta al comprador.
Mala mujer… Y en tu sonrisa humilde
pareces replicar
que la maldad no puede estar envuelta
en la culpa de amar.
Mala mujer… Y aceptas en silencio
el insulto feroz
sabiendo que no hay nadie sin pecado
y el solo juez es Dios.
Mala mujer… Mentira,
no eres mala mujer,
como no es malo el árbol
cuyo refugio es grato al caminante
en la hora triste del atardecer.
*Tomado de la revista Tierra Nativa.
Pasión
Jorge Pacheco Quintero
Eterna adolescente:
tengo un beso de pluma
oculto en el deseo
para erizar tu nuca,
y el último fulgor de la bondad
sobre la frente pura.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Domingo
Bexy Amparo Mendoza
Se desnuda poco a poco
como si sus vestiduras
se abrieran por sí solas,
cada prenda cae
mientras el cuerpo se debate
entre el sugestivo sábado
y el elemental regreso del lunes.
Quisiera*
Luis Eduardo Páez García
Quisiera poder tener
las tristezas de este mundo,
para enterrarlas a todas
en abismos bien profundos.
Quisiera que los trigales
se llenaran de contento,
al saber que de su fruto
se alimentan los hambrientos.
Quisiera que las guitarras
entonaran mil canciones,
y que su música hermosa
endulzara corazones.
Quisiera que el pescador
que del río saca el sustento,
un día pescara en sus redes
un algo de firmamento.
Quisiera yo, que el obrero
que martilla sin cesar,
fabricara una esperanza
que la paz le hiciera hallar.
Y quisiera que en las tumbas
donde yace todo incierto,
una sonrisa brotara
de los labios de los muertos.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
*Del manuscrito propiedad de Raúl Amaya, 6 de agosto de 1970.
A Pablo Neruda
Armando Astolfo Castilla
Pablo, hermano:
tú hiciste de la palabra un vino
y sacralizaste con tus hostias, pan bendito,
el verbo ser en todos los tiempos y personas.
Hubieras estado vivo, viejo Pablo,
para sacarte en hombros a pasear
para que izaras tus más tiernas palomas de la paz.
Yo hubiera armado una algarabía
para preparar la fiesta de los pobres
y sentarte a la mesa con Jesús Cristo y Carlos Marx.
Vía libre para el rayo
José Ropero Alsina
La lectura
de una larga lista
en pergamino
acaba
por
arrugar más
los
pliegues del anciano
que jugaba
con las volutas del tabaco.
Es difícil
mantener el equilibrio
cuando
hasta la lluvia
anuncia
desde la luz del rayo la matanza.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Exploración
Sonia Picón Mantilla
Languideció la noche:
se posesionó de mi túnica,
resbaló en sus contornos,
exploró llanuras y colinas.
Y extenuado en su andar
se detuvo a descansar
en mi otero preferido,
bajó al foso de agua fresca
a saciar con ansiedad,
la sed que da al caminante.
Blasina*
José Eusebio Caro Ibáñez
¿Quién es la mujer divina?
¡Blasina!
A quien he jurado amar,
Tobar,
con todo mi corazón:
Pinzón.
Y, pues te he entregado el alma,
dame de tu amor la palma,
Blasina Tobar Pinzón.
*Tomado de Versos chuecos. Las mejores peores poesías de la lengua española , de Daniel Samper,
Aguilar, Bogotá, 2005.
Poema
Jhon Janner Vega
Soy un paria del amor
no la dulzura
ni tampoco el beso claro.
Soy un paria en mi lecho
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
mientras asesino instantes.
Mi claridad ha sido siempre
la profundidad oscura del sollozo.
Pero algo me ha dicho que mi esencia es de
ultratumba.
Y esa disculpa es válida
por siglos.
Carteo entre un alemán y un griego
A raíz de la crisis económica de Grecia, la UE debió auxiliar a los helenos para sacarlos de la quiebra. Un
alemán, Walter Wuellenweber, resolvió escribir una carta contra los griegos, publicada en el semanario
alemán Stern, en la cual, entre otras cosas, les dice “no ser merecedores de nuestros euros” y “Son ustedes
los amigos más caros que tenemos”. Un griego, Georg ios Psomás, le responde al alemán en el d iario
Athens Plus, mostrándole que no se puede hablar o escribir sin tener autoridad moral ni intelectual,
desconociendo la historia, cosa muy corriente por estos lares de Villaclaro , ¡y tenga pa‟ que lleve!
Carta de queja a Grecia
Después de que Alemania tuvo que salvar a los bancos, ahora debe salvar también a
Grecia. Los griegos, que primero han hecho alquimias con el euro, ahora en vez de hacer economías, hacen huelgas.
Queridos griegos: desde 1981 pertenecemos a la misma familia. Nosotros, los alemanes, hemos aportado como nadie otro al Fondo común, cerca de 200.000‟000.000 de euros,
mientras que Grecia ha recibido cerca de 100 mil millones de esa suma, o sea, la mayor suma per cápita que ningún otro pueblo de la UE. Nunca ningún pueblo ayudó hasta ahora voluntariamente hasta este grado a otro y por tanto tiempo. Son Uds.,
sinceramente, los amigos más caros que tenemos.
El caso es que no sólo Uds. se engañan a sí mismos, sino que también a nosotros. En esencia, Uds. nunca demostraron ser merecedores de nuestro euro. Desde su incorporación como moneda de Grecia, nunca lograron hasta ahora cumplir con los
criterios de estabilidad. Dentro de la UE son el pueblo que gasta las mayores sumas en bienes de consumo.
Uds. descubrieron la Democracia, entonces deben conocer que se gobierna a través de la voluntad del pueblo, quien finalmente tiene la responsabilidad. No digan entonces que
sólo los políticos son responsables del desastre. Nadie los obligó a evadir durante años impuestos, oponerse a cada política coherente para reducir el gasto público y nadie los
obligó a elegir los gobernantes que han tenido y tienen.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Los griegos son quienes nos han mostrado el camino de la Democracia, de la Filosofía y
de los primeros conocimientos de Economía Nacional. Pero ahora nos muestran un camino equivocado. Y donde Uds. ya han llegado, no va más allá.
Respuesta del griego
Querido Walter, me llamo Georgios Psomás. Soy funcionario y no "empleado público", como despectivamente, como insulto, se refieren a nosotros mis compatriotas y tus
compatriotas. Mi sueldo es de 1.000 euros. Por mes ¿eh? No vayas a pensar que son por día, como te quieren hacer creer en tu país. Fíjate que gano una cifra que ni siquiera es inferior en 1.000 euros a la tuya que es por varios miles.
Desde 1981, tienes razón, pertenecemos a la misma familia. Sólo que nosotros les
hemos concedido en exclusividad a Uds. un montón de privilegios, como ser los principales proveedores del pueblo griego de tecnología, armas, infraestructura (dos autopistas y dos grandes aeropuertos internacionales), telecomunicaciones, productos de
consumo, autos, etc. Si me olvido de algo, perdóname. Te señalo que dentro de la UE somos los mayores importadores de productos de consumo que elaboran las fábricas
alemanas. La verdad es que no hacemos responsables sólo a nuestros políticos por el desastre de
Grecia. Contribuyeron mucho algunas grandes empresas alemanas, las que pagaron enormes coimas a nuestros políticos para asegurarse los contratos, para vendernos de
todo, y unos cuantos submarinos fuera de servicio, que puestos en el mar, quedan tumbados de costado en el mar.
Yo sé que aún no das crédito a lo que escribo. Tenme paciencia, espera, lee toda la carta y si no llego a convencerte, te autorizo a que me eches de la Eurozona, ese lugar de la VERDAD, de la PROSPERIDAD, de la JUSTICIA y de lo CORRECTO.
Estimado Walter, pasó más de medio siglo desde que la II Guerra Mundial terminó, es
decir, más de 50 años, desde la época en que Alemania debería haber saldado sus obligaciones con Grecia. Estas deudas, que sólo Alemania hasta ahora se resiste a saldar con Grecia, (Bulgaria y Rumania han cumplido en pagar las indemnizaciones
estipuladas), consisten en:
1. Una deuda de 80‟000.000 de marcos alemanes por indemnizaciones, que quedó impaga desde la I Guerra Mundial
2. Deudas por diferencias de clearing, en el período entreguerras, que asciende hoy en 593‟873.000 dólares USA.
3. Los préstamos obligados que contrajo el III Reich a nombre de Grecia durante la ocupación alemana, que ascendieron en 3,5 mil millones de dólares durante todo el
período de ocupación.
4. Las reparaciones que debe Alemania a Grecia, por las confiscaciones, persecuciones,
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
ejecuciones y destrucciones de pueblos enteros, rutas, puentes, líneas ferroviarias,
puertos, que produjo el III Reich, y que según lo dictaminado por los tribunales aliados, asciende a 7,1 mil millones de dólares, de los cuales Grecia no vio un billete aún.
5. Las inmensurables reparaciones de Alemania por la muerte de 1‟125.960 griegos (38.960 ejecutados, 12.000 muertos como daño colateral, 70.000 muertos en combate,
105.000 muertos en los campos de concentración en Alemania, 600.000 muertos de hambre, etc. etc.).
6. La tremenda e inmensurable ofensa moral ocasionada al pueblo griego y a los ideales humanísticos de la cultura griega.
Sé, amigo Walter, que no te debe gustar para nada lo que te escribo. Lo lamento. Pero
más me molesta lo que Alemania quiere hacer conmigo y con mis compatriotas. Amigazo Walter, en Grecia operan 130 empresas alemanas, dentro de las cuales se incluyen todos los colosos de la industria de tu país, las que tienen ganancias anuales de
6,5 mil millones de euros. Muy pronto, Walter, si la cosa sigue así, no podré comprar más productos alemanes, porque cada vez tengo menos dinero. Yo y mis compatriotas
crecimos siempre con privaciones, lo vamos a aguantar, no te hagas problema. Podemos vivir sin BMW, sin Mercedes, sin Opel, sin Skoda. Dejaremos de comprar productos de Lidl, de Praktiker, de IKEA. Pero Uds., Walter, ¿cómo se las van a arreglar con los
desempleados que dejará esta situación que por ahí los obligue a bajar su estándar de vida, sus autos lujosos, sus vacaciones en el exterior, sus excursiones sexuales a
Tailandia? Ustedes (alemanes, suecos, holandeses, y restantes “compatriotas” de Europa) pretenden
que nos vayamos de Europa, de la Eurozona y no sé también de donde más. Creo firmemente que debemos hacerlo, para salvarnos de una Unión que es una banda de especuladores financieros, un equipo en el cual jugamos, si consumimos los productos
que Uds. ofrecen: préstamos, bienes industriales, bienes de consumo, obras faraónicas, etc.
Y finalmente, Walter, debemos “arreglar” otro tema importante, ya que tú también eres deudor de Grecia:
¡EXIGIMOS QUE NOS DEVUELVAN LA CIVILIZACIÓN QUE NOS ROBARON! Queremos de vuelta a Grecia las inmortales obras de nuestros antepasados, que guardan
en los museos de Berlín, Munich, París, Roma y Londres.¡Y EXIJO QUE SEA AHORA! Ya que si me muero de hambre, me quiero morir al lado de las obras de mis antepasados.
Georgios Psomás
Contacto en la Santa Cruz*
Cuento de Rolando K.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Tenía varios días sin dormir, lo reflejaban su rostro demacrado y sus actitudes nerviosas. Isidora, su mujer, lo había notado, pero no se atrevía a mencionárselo, por temor a las reacciones violentas con que siempre respondía su esposo Dímar.
Se acercaba el 3 de mayo, día consagrado por la Iglesia católica a la Santa Cruz, a la que
se le había erigido un monumento en el cerro más inmediato, de modo que sus brazos alcanzaran a brindar la protección divina a lo largo y ancho del sector.
Por aquello de la casualidad, un día Dímar levantó el teléfono y, cosa muy común en la región, las líneas estaban cruzadas, lo que le permitió, sin buscarlo, oír la conversación
que no le dejaba dormir.
—Efectivamente, el cargamento se “coronó” —dijo uno.
—Listo. ¿Entonces para lo del billete dónde nos vemos?
—Pues para ello me parece el Cerro de la Santa Cruz. Allí nos vemos el 3 de mayo y le entrego su parte. Claro que si usted no puede llegar, mande a uno de los suyos con una
clave o un santo y seña.
—Listo, hermanito, allá le llego. O mejor, por si no puedo llegar, anote de una vez el santo y seña; quien llegue de mi parte debe decirle: “Ramón, pan y jamón”.
—Listo, nos miramos.
Desde ese momento, Dímar no tuvo paz en sus días ni reposo en las noches. Su
estómago le producía un raro sonido cuando se acordaba del santo y seña, y lo repetía aun sin proponérselo: “Ramón, pan y jamón”. Las rodillas se le volvían de gelatina,
perdía el pulso y hasta la noción del tiempo; se imaginaba a sus vecinos tratándolo de “don”. En un país donde la moral y las buenas relaciones se miden por la cuenta bancaria, tenga plata y le dirán “don”, sin que usted sepa qué objetivo tiene el que le
agranden el nombre anteponiéndole el don. “Don Dímar”.
Soñaba cuando podía conciliar el sueño y se reía dormido con unas carcajadas que despertaban a las gallinas echadas al pie de la ventana del dormitorio.
Eran las 5 de la mañana. Los barrios cercanos al cerro se despertaron con el sonido
alegre de tambores, platillos, trompetas, bombardinos, clarinetes y el inconfundible pum pum del bombo. Llegó el 3 de mayo. Dímar sintió el corazón como de algodón; se le
formó un vacío en su estómago que pretendió llenar con saliva. Se levantó de prisa, fue al sanitario, obró y se bañó, y desde allí ordenó a su mujer que le tuviera lista la maleta con la ropa.
—Aún cuando no esté planchada —le advirtió.
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Se tomó un tinto y se encaminó hasta la cima del cerro, donde la gente se arremolinaba
a mirar hacia las laderas y los barrios del otro lado del río Tejo.
Tenía que estar allí, el hombre de la conversación telefónica tenía que estar allí, y lo vio. Trataba de pasar inadvertido entre los feligreses. Vestía una camisa de cuadros verdes,
rojos y amarillos y un pantalón azul verdoso, y cubría su cabeza con un sombrero negro de ala caída, al mejor estilo gardeliano. Dímar se fue acercando lentamente hasta llegar frente del individuo, extendió su mano derecha y exclamó:
—Marcelino, pan y vino.
Nadie volvió a saber de Dímar. Algunos afirman que lo desaparecieron, otros aseguran que “coronó” el negocio y se marchó al exterior, a Europa. Lo cierto es que nunca volvió por la maleta con ropa... “Aun cuando no esté planchada”.
*18 de d iciembre de 2001.
Bocadillos [email protected]
Por: Al Ramá
Aquí una selección de Bocadillos, publicados en Ocaña 7 días y considerando su vigencia.
*Hay un candidato a la alcaldía nativo de lo que hoy pudiéramos llamar “El
Llano de los Alcaldes”, conocido como CIRO II, que será manejado por el “ilustre letrado” ibañista, experto en hipotecas y doctor en la ciencia del birlibirloque, que pretende godificar al insigne poeta Adolfo Milanés y se
presenta como la solución cultural de Ocaña —aquellos que echaron al poeta liberal al muladar, ahora leen sus versos y derraman lágrimas de estíptico en
homenajes rastreros. (23 de junio de 2011)
*Dijo un taxista: “Para el próximo cuatrienio Ocaña será una ciudad sin mancha, pero con pecas”. “Y váyase lo uno por lo otro”, dijimos nosotros. (11 de agosto de
2011)
*A la Virgen de Torcoroma la convirtieron en trompito de poner, la trastean de
aquí para allá y hasta politiquean con ella. Sólo falta que la alquilen para
bautizos, primeras comuniones y matrimonios. Podrían promover un kit
torcoromero, que incluya miniteca, Aguardiente de los Melo, pasabocas,
recreacionistas para niños, oraciones y recordatorios de la Virgen. (11 de agosto de
2011)
*Para el centenario de la muerte de Alejo Amaya Villamil, médico y
combatiente del ejército de Rafael Uribe Uribe, trajeron a Wálter Márquez,
“historiador, diplomático y político venezolano”, y “escuálido”. ¡Qué ironía!
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
Pero no se dijo que el tal Márquez fue chavista y ahora es de extrema derecha,
que perteneció a la secta teológico-financiera, una mafia, del reverendo Moon, y
que después, siendo embajador de Chávez en la India, se fue para donde el santo
de Alfonso Lobo Amaya, Satia Say Baba; es decir, un “voltiarepas”, además de
tener unos asunticos penales pendientes en la Fiscalía venezolana. Trajo, fruto de
ingentes investigaciones, el dato de que Francisco Fernández de Contreras no se
apellidaba así, sino Hernández Sánchez. “…yo me guíe —dijo Márquez—
inicialmente por el testamento que me proporcionó Luis Eduardo Páez García,
pero fui al testamento original, conseguí copia de él, ahí dice… que su padre se
llamaba Pedro Hernández, que su mamá se llamaba Catalina Sánchez…”.
Bueno, ¿y entonces qué, si esto ya lo sabían Páez Courvel y su hijo don Lalo,
según declaraciones del propio Márquez al semanario La Provincia?
¿Revolcamos las prosapias y le echamos tijera a los árboles genealógicos
ocañeros? Este asunto, por otra parte, ya lo había dilucidado en España José
Gregorio Hernández Cisneros, siervo de Dios, descendiente del fundador de
Ocaña por la rama de los Hernández Yanguas (Cf. Revista Ciencia y Hogar, No.
13, Caracas, 15 de julio de 1919). Al respecto, en correo electrónico a la Dra.
Álix Marina, el Dr. Pável Rondón, ex embajador de Venezuela en Colombia, le
escribe: “Lo más importante es lo que tú planteas; hay asuntos más importantes
en la relación binacional y particularmente en la fronteriza, como para ponernos
sobre esos temas”. (11 de agosto de 2011)
*Ya que hablamos de árboles genealógicos, a los ocañeros se les ha metido esta
ventolera de armar los de sus familias; pero en algunas dicen: “Quitemos a ésta del árbol, pues fue muy generosa”; “Recortemos a éste, pues tuvo malas mañas y
nos afea el linaje”. El historiador Pedro Amadís Santana Barbosa asevera que aquí no se hacen árboles genealógicos sino bonsáis. (11 de agosto de 2011)
*El obispo Gómez Aristizábal declaró a la televisión local que había sido feliz
en esta villa y que pedía perdón por los posibles errores cometidos en su
episcopado aquí. En el Catecismo de la Iglesia católica, 2412, se lee: “Jesús
bendijo a Zaqueo por su resolución: „Si en algo defraudé a alguien, le devolveré
el cuádruplo‟ (Lc 19, 8)”; y, 1459, “Muchos pecados causan daño al prójimo. Es
preciso hacer lo posible para repararlo”. Repararlo, en este caso, quiere decir
devolver. ¿Dónde están la custodia, las campanas y otras cosillas desaparecidas
de las iglesias diocesanas? La absolución tras la confesión no opera si no hay
devolución, dice la doctrina católica. ¡No se vaya a condenar, querido Ignacio!
(25 de agosto de 2011)
*No hubo para el profesor López ni una corona de flores por parte de la
institución carista. Se dice que los profesores hicieron una colecta para tal fin,
¡qué vergüenza! Igualmente se comenta que cuando un profesor le pidió al rector
RIZOMA “Para mí, lo ideal sería un socialismo perfecto, donde todos los
hombres tengan los mismos derechos y los mismos deberes . Una concepción del mundo sin poder”. Doctor Sócrates
Ocaña, 29 de diciembre de 2011
la bandera del colegio para cubrir el féretro, dicho sujeto, arrevolverado, voceó:
“¡Que bandera ni qué carajo! ¡Yo ni sé quién es ese tipo!”. (8 de septiembre de 2011)
*Cuentan contadores de historias que a la fracasada Convención de Ocaña se
filtró una dama disfrazada de hombre, Bárbara Vicenta Lemus. Según un erudito
sociólogo, el hecho originó la ley que manda proveer los cargos públicos en un
30% con representantes del bello sexo. Pues la historia se repite, pero en la
Academia de Historia. Aseguran que a las reuniones de ésta se cuela una dama,
seguramente con la noble idea de completar ese 30%, pues la academia sólo
cuenta con una miembra. Ojalá no le den voto a la neobárbara, porque tiene voz
—repite: “Como Ciro II va a ser el acalde”—, no sea que traslade su mando de
la casa del poeta a la Academia. (15 de septiembre de 2011)
*Y siguiendo con las antigüedades, decía misiá Leticia: “Con la tarde dobla la
espiga”. Resulta que se está dando con profusión un fenómeno social en la Villa
de los Claro —tema interesantísimo para psicólogos, sociólogos, como el
profesor Yuyo, y curas doctos, aunque éstos escasean aquí—: veteranos disolutos
en su juventud y jamonas generosas en sus bellos días se han convertido al
cristianismo y ahora reniegan del demonio, el mundo y la carne. “¡Qué gracia!
—exclamó el doctor Joaquín Santana—. La carne p‟al diablo y los huesos pa‟
Dios”. (29 de septiembre de 2011)
*Entre los candidatos a la alcaldía, cómo no, destacamos a herr Cyrus II, por su
propuesta de seguridad para la ciudad: crear redes ciudadanas y cooperativas de
vigilantes, así como perseguir “las ventas de drogadicción”. De seguro que ya
tiene su Rito Alejo, su Pedro Juan, su Noguera y su José Obdulio. Añadido a
esto que “Es mejor estar acompañado de una bella chica, que de un gay”, ¡Heil,
Cyrus! (13 de octubre de 2011)
Bocadillo combinado. Dijo Moncho Sanjuán: “El atraso de Ocaña se debe al Partido
Conservador, porque siempre hemos estado mandando”. Eso de calificar nuestras
críticas como “viejas posturas contestatarias… resentimiento social”, tiene el viejo
tufillo sesentero de la derecha; porque en cambio de la nueva, también. Nosotros no
promovemos desde estos escritos ninguna opción política, respetamos a los lectores, no
hacemos lo de algunos que son directores de noticieros o trabajan en la radio y son
candidatos a algo, o tienen un cargo cultural y promueven candidaturas clientelistas. A
propósito, reza el epitafio de un contador: “Aquí yace un contador/ que jamás erró una
cuenta…/ a no ser a su favor”. (20 de octubre de 2011)
______________________________________________________________________