LUISE. KUON CABELLO

RE'fAZOS DE LA HISTORIA DE MOQUEGUA

CAPITULO V.- LA REPÚBLICA'

L-'- ' Moqueguá"'TRESVECE:SBENEMERITN' - "Ciudad"

. ~"Bénemérita a laPatria " - "VaÍiente,EsforzadoyLeal.Departamento"·

2.- Moquegua ylaConfederadón Perú-Boliviana. .... .' 3.- El Gran Mariscal Domingo Nieto.

- La muerte de Nieto.. . -' Los restos d~'.Nieto:prócer.de la Independencia.

4.- La Anarquía de 1842 y la Batalla de San Antonio 5.- El terremoto d'el·13 de Agosto de 1868

- Otros movimientos sísmicos en Moquegua . 6.- La Villa" San Francisco de Esquilacbe " . 7.- El ferrocarritdeIlda:,Moqueguac

- Reconstrucción del PiG. 8.- La Guerra con Chile.

MOQl.JEGUA TRES VECESBENEMERITA

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En 1942, Adrián Centti, Primer Director de la Banda d'e Músi­cos del Batallón de Infantería "San Pablo" No. 41, acantonado en

.Moquegua, compuso-la músicadel inspirado "VALS MOQUEGUA", en cuva letrabastante significativa de.! artista moqueguano Miguel Fernández Davila, Moquegua en las diferentes actuaciones que or­ganiza, canta, tal vez inadvertidamente con su primer verso: Tres veces benemérita y muy noble ciudad, su anhelo libertario en la

.. época virreynal, sus luchas por la consolidación de la RepúbUca, '. cuando se proclamara la independencia del Perú, y más tarde, sus

heroicos enfrentamientos a las tropas extranjeras invasoras de su suelo. ' .

1.- MOQUEGUA: "CIUDAD"

Al ponerse el19 de Enero de 1823, el cúmplase por José La rv1ar,

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Presidente de la Junta Gubernativa. ala ley que el.Conqreso presi­dido por Hipólito Unanue, aprobara el día antes¡18 de Enero, quedó Moquegua elevada ala categoría de "c IUDAD", "en consi­"deración queja VilladefJloquegua, proclamó espontáneamente "su independencia, luego que en el año 1814; se presentó la opor­"tunidad. Yque muchos de sus nobleshijos,l1an dado apreciables "testimonios de su valor y constancia en defensa de las libertades del.Perú". . ,

Antes de que estallaraelmovimientodeTupac Amaru, gober­nando el)lirreyManuel Guiribr,en muchos Juqaresdel Perú, en­treellos rVloquegua, dejóse sentir el descontento ante los abusos quecometíari los corregidores en el cobro de los irnpuestos.vqabe­las que oprimían. alvpueblo.Este descontento semanifestó princi­palmente, seg(inrflliendihuru,éh serios desórdenes alas sombras de larioch!'l'y'enla propagación de pasquines y anónimosdeqrosero estildcorH:ralas,autoritlades españblas, que en algunos 'lugares pa­garon" con sus vidas los-excesos cometidos por sus personas. Cerca de cuatro décadas más tarde, aunque para Vargas Ugarte el movi­miento insurreccionalde Pumacahua de 1814, no encontró eco en las Comarcas de Moqüeguay·Taehá, el Congreso del Perú, transcu­rridosapenasnueve añosde aquella'rebelión,elev6al'Jloquegua, en 1823 a "CIUDAD";coÍ'lsiderando'principalmente'esasu espontá-' nea proclamación de la ihdeperidenciaen 1814, en conexión con la cual tuviera Moquegua un saldo trágico con el fusilamiento de los patriotas Astete y Cherveches que complicados con la revolución y eneontrados en'IVJoquegüa;fueron ejecutados-por los españoles enArequipá. ' ',"

y entre los nobles hijos que testimoniaran Su valor y constancia en defensa' de las libertades del Perú, se encuentranlos moquequa­nosvJuan Vélez-de Córdova "Precursor del Cacique de Tinta" comotIó llamara el citado historiador, por haber conspirado complotados por delito de lesa majestad; Manuel Ubalde que con el huanuqueño Gabriel Aguifar conspiróen el Cuzco, siendo.ehor­cados.elBde Diciembre de 1805. Son también moqueguanos, José' Gablnov Pedro Hospiqliosl, Vargas"Felipe Gily otros que acorn­pañarona Zela en Su Primer Grito delndependeneiadadoenTac­na en 1811. Y conexo a las ideas libertarias aunque con móvilesdi-: ferentes, anota Mendiburu, que ejerciendo entre 1801 y 1808 la Subdelegación delVloqueguadon Francisco de los RíosSalazar y Tamayo, lVIárques de Villahermosa de-San José y Conde deSarr-Do-'

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nás, se sublevaron los negros esclavos de las haciendas del valle con miras a dar muerte a los blancos y coronara lino de su raza. San Donás impusoelorden con prudentes y acertadas medidas, pero el fermento de la libertad, iría acrecentándose hasta rebasar en forma incontenible el cauce que la opresión, los tributos.Jalnjusticia yel maltrato habíansehnpuesto durante tres siglos conel despotismo español.'

2.- MOQUEGÚA: "BENEMERITA ALAPATRJA"

"Proclamada la independencia del Perú, les' españoles á fin de . mantener el dominio del rico y poderoso Virreynatodel Perú, aún quedaron con fuerzas suficientes para dominar la costa sur y la sierra central y meridional; desde donde amenazaban las posiciones ganadas por los patriotas en la nueva República .. Acabar con las fuerzas realistas, era, pues, una medida de prudencia que se irnpo­nía para seguridad del territorio independizado. Y con tal fin se despacharon las llamadas expediciones a puertos intermedios, de las cuales, la Primera destacada por San Martín fracasó en Icaan­te "la arremetida de Canterac, y 'Ia Sequnda.ienviada-por la-Junta de Gobierno presidida por el General La IVlar,terminóigualmente .en el fracaso con las derrotas sufridas el) territorio de lVIoquegua, por las .tropas mandadas por el general Arqentino Rudecindo Alva­rado':E¡J .Generalde los tristes destinos" por lo aciago de, sus carn­pañas,.qqmo lo llama Luis Alavza v.PazSoldén. o'

. .

La Segunda Expedición a Intermedios, compuesta deper~anos,· argentinos y chilenos, en número de 3,380 hombres, desembarcó en Arica y después de 53 días de espera a un batallón y caballos de Chile, inició su carnnaña, llevando su artillería en mulas y asnos que proporcionó el veclndário de Tacna. Después de evitar a Va1­déz que había bajado.de.Arequlpa para sorprenderlo en Tacna, se dirigió Alvarado tras aquél hacia Torata yaunqueValdezsehalla­ba en inferioridad numérica por los 2,200 hombres y varias piezas de artillería con que contaba, se situó estratégicamente en lasaltu­ras de Ylubaya y Valdivia, dedonde Alvarado, tácticamente errado, . pretendió desalojarlo. Desde algo entrada la mañana, hasta la caída de la tarde después de nueve horas de porfiada lucha" en la que los patriotas llevando la peor parte perdiendo 24 oficiales y 300sólda~ d6segÚri Mendiburu ymásde 600 para Vargas Ugarte, se retiró AI­,yarado a IVloquegua.

. . ' ". .-. '.

Después de la batalla de Torataque tuvo lugar el 19de Enero de 1823, las bajas sufridas y la falta de municiones, determinaron que

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una junta de' Guerra, decidiera el retiro de los patriotas él Ho, pero encontrándose Alvarado en 1v10quegua el21de Enero, no tuvo más remedio que hacer frente a los realistas que hab ían venido en su seguimientóy que en Torata habían recibido el apreciable re­fuerzo de Canterac con 1,200 hombres y 450 de caballería. Los patriotas que estaban acampados en Samegua, con sus líneas ex­tendidas hasta el Cementerio, haciendo frente a los realistas que se presentaron en .Tornoolornbo, sufrieron una nueva derrota en la oatalla .tJe Moquegua, librada el 21 de Enero. Con 600 bajas y la pérdidardefa artillería, debieron retirarse los restos del ejército patrlotáafpuerto..

. Lastropas deCanteracconseguidoel triunfo, entraron ala ciu­dad que fue saqueada y entregada al pillaje, cqmetiéndose además, otras tropeHas que los historiadores españoles han tratado de negar.

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En la esquinade la Plaza de Armas que enla actualidad ocupa la Oficina de Telecomunicaciones en ese tiempo sin construir; Un cor­neta español tocaba a degüello por orden de Valdez,. mientras la soldadesca rompiendo puertas, ventanas, ocasionando algunos in" cendios y apoderándose de joyas, vestidos y cuanto de valor en­contrabanenIas casas y disparando cuando ·Ies venía en gana, tra­taron de castigar con este ruin comportamiento a la hidalga e inde­fensa ciudad. por la valiosa ayuda que sus habitantes prestaron al ejército de los independientes. Canterac en su afánde contener ta­les extravíos, llegando por la calle Tacna ordenó. al corneta el cese deL toque, y como no fuera obedecido le descerrajó un tiro, con lo que los soldados reconociendo al general, pusieron término a sus desmanes: Sin ernoarqo, por.un acuerdo .entre Canterac y Val­dez, la orden de degüello fue sustltu ída por la de saqueo general. En 15 días de desenfreno y muerte, gruposde soldados utilizaban a cuantos podían para abrir zanjas y enterrar a los muertos que infestaban la atmósfera. Las señoras con sus criados, en los hospi­tales donde yacían los patriotas heridos, con hilos y vendas que hacían de sus propias enaguas, trataban de aliviarlos de susheri­das; en las haciendas los labradores abandonando sus labores ayudaban a los vencidos que se dirigíanal puerto, proporcionán­doles víveres y dinero. LoS españoles con el pretexto de perseguir a los' derrotados, invadieron las haciendas y luego de perseguir a los labradores y a los esclavos; soltaban los caballos en las viñas cojnplaciéndose en destrozar. las vasijas cuyos vinos y aguardientes anegaban las bodegas. Como complemento de tan vandállcadevas­

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tación, los vencedores reunieron al Ayuntamiento y exigieron a los vecinos pudientesCincuenta Mil pesos para ayuda de las necesida des del-ejército y a fa ita-de di nerose apoderaron delos aguard ien­tes que llevados a las plazas de consumo, losconvertían en dinero.

,,- , . ,. .

. Terminada la batalla delVioquegua,entre otros cayó prisionero el moqueguano, Coronel graduado, dernardo Landa y Vizcarra, siendo fusilado por los españoles en "EI Huaico" donde fueraeo­terrado rüonjactancia desmedida, el Jefe realista enel parteque elevara al Virre,y La Serna, le comunicaba "haber reducido a lana- . da el nombrado ejército libertador".

Intervinieron en las batallas de Torata y 1'Jloquegua, al igual que en JUnfn y Avacucho, la florv natadel alfo rnandó realista; Jer6­nimoValdez (yen rJ¡:oqueguaCanfer~rc)JJlonetveíhtstortadores­pañol Andrés Garcfa Camba; Yporellado patriota losmoquequa­110S Domingo Nieto a los 19 añosv.corno Teniente de.Caballería y el Coronel graduado Bernardo Landa y Vizcarra. Otros jóvenes ofi­cialesque alcanzaron galones y notoriedad en la agitada vida de la Repúblicél,como Felipe Santiago Salaverry, fvlanuel de IVlendibur.,u José Bernardo Alcedo. Tambiéh'el GenéralEnriquefelartfnez. los' Coroneles Eugenio l\lecochea,CirHoCdrrea,Franciscó Antonió Pinte, entre otros. . ,

'Tanimportante!j fueronparalosespañoleslasbátallás de Torata ylllloqueglJaqueel Virrey ascendió aCanterac a Teniente General val Briqad ierValdéza lV¡a~iscaldeCampo, ascerisoesteúltirnoque causó mucho descontento y despertó los celos de-laalta oficialidad española. -Elelemerito realista bastante nurneroso.én Arequipa,ob; sequióa Valdez un sable deoro conlalnscrlpción: "Los-amantes del vérdadérorriéritc al héroe dé Toratav'v más tarde cuándo a ra ízde la -caoltutacrón-de-Avacuchevolvléra Valdez ala pérunsu la; el Heyde España, entre otras distinciones le confirió el tftulode Vizconde de Torata. . . . ..

Los dos reveses sufridos parlas patriotas, la falta de pago de vac riosmeses de-sueldo al ejército y. el descontento que existía en la Capital,deterrninaron.la calda deIa Junta LJubernativa presidi­da pOLLa IVlar, primer gobierno propio que tuvo el P9(S; En cuanto a Moqueguay Torata-.cinco.añosdespués deJasbatallas.Jibradas . en su suelo, el mismo General José LaMar. esta vez corno Presi­dente del Perú, prornulqó ell) de Junio de 1828, la ley conque.el Conqreso honrara a esos dospueblos, aprobándola el 3 del-mismo mes, dando ala ciudad de Moqunguael tftulode "BENEIVIERJTA

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A LA PATR lA"y elevando al pueblo .de Torataa la categoría de: "VILLA" porque "las provincias de 1\lloquegua, especialmente su "capital ha prestado servicios muy distinguidos .a la causa de la in­"dependencia" y porque "por ellos ha sufrido las mayores hostili­"dades y perjuicios de los enemigos que saquearon la misrnacapi­"tak.reduciéndola a unestado .deplorable¡quela han hecho digna"de la consideración de los representantes de la Nación"..

3.- MOQUF;(;UA: "VALtENTE, ESFORZADO y, . CEAt Pli:PARTAMENTO

_Tres años desp~ésdeGonstitufdalaHepúblicade Botivia v.qo­bernada.esta porSucre, el GeneralAjustfn Gamarrainvadió en 1828 el'.territorio boliviano movido por el anticolombian isrnode los peruanos que recelabán delas fuerzascolombianas que segu ían

. en Bolivia y'qyé podrían desdeese pafsabrir'un nuevo frente en el Sur, ante la guerra inminente qué con Coíornbia, por el Norte, te­nía el Perú. Np ajenél a esta¡'nÍtasióD era también I,a enemistad pere sonal qu~-conSucre, tenía él, Generalperuano" cuyo inmejorable ascendieúteén ,'la jºv~p ,República, tuvo su rnejorexpresión en el apoyo que 'contó' la invaslónen e! mejor cuerpo delejército boli­viano con su general Pedro Blanco. . . . ..' . .

Años más tarde disuelta la ConfederaciónPerú-Botiviana, nueva­mente Gamarra que ..porsequnda vez ocupaba la'Presidencia-alen­t6 el propósito de .deshacera Bolivia o incorporar el departamento de . La Paz al Perú, tratando de evitar también con-ello. el restable­cimiento de IaConfederación por la que. insistía Santa Cmzpri­mero desde su destierro en Ecuador y luego desde su.exilioenChl­le. . ­

•José 8al!ivián que fue un entusiasta partidario dela invasión pe­

e ruana, cambió de parecer cuando el Presidente boliviano Jose . HUguel" de Velasco, le entregó la autoridad suprema, y haciéndose cargo del ejército que aquél había reunido salióal.encuentro de Gamarra en Ingaviel18de Noviembre de 1841,endonde las rencillas de los generales peruanos, después demás dedos horas de combate, ofrecieron una . fácil victoria a Bolivia: Según José de la HlvaAqüero: '<la reserva peruana no se movilizó, la arti­"lIerfa·,seinutílizó, la caballería se dispersó pronto y la infante­"ría.sedesalentó -contaprematura retirada de San. Román". He­rido Garnarra.enel- hombro derecho, un segunda balazo en el. mis­

. mo lado, en el cuello, por el General Ballivián a quien Gamarra tavoreciera-cuandoaquél estaba proscrito en el Perú, puso fin a

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la vida' del general peruano. Aunque se resienta al sentimiento por· . los -informes de tan lamentable revés, el ejército peruano perdió cuatro banderas, un equipo-de campaña, 24 jefes, unos 150 ofi­ciales y poco mas-de tres mil soldados de tropa yalrededor de 500 muertos, y otros tantos heridos¡ teniendo los contrarios casi igual número de bajas. Días después, que conlngave habían asegurado la Independencia de su país, -oyendo a Riva A!:lüero'"'" "los bo­"livianos se enseñorearon de dos vastos departamentos -Puno y "Moquegua- y si no hubiera sido .por las guerrillas de I\,qendiburu "en 1VI0quegua y de algunos paisanosén Puno, no habrían encon­"trado la más leve resistencia".- Efectivamente, Mendiburu que también estuvo en Ingavi, al llegar a rVloquegua con las querrillas que organizó y con un cuerpo de mil hombresquetorrno con ayu­da de Nieto, recuperó el valle de/ Sama que habrá caído en po­der de 'los bolivianos, hostilizó continuamente al invasor, Gonte­deserción de los propios bolivianos y princlpéllmente delospri­sioneros peruanos que después de Ingavi fueronobligadosa enro­larse en las filas delvencedorv'La ocupación se extendió .hasta Tacha -y Arica, que cayeron enpoderdef'ltlogariños quecontaba con mil hombres. En Tarapacá, relata Basadre que para combatir . al invasor, el vecindario fundió la imagen venerada en él templo, disparando las balas llamadas "del niño Dios". . ..

El General Nieto Comandante Genéral de Arequlpavlvloquegua, que entoncescomprend ía además, Tacna, Arica y Tarapacá, en su proclama fechada en Arequipa .el 22 de Febrero de 1842, dirigida a los dos departamentos, les decía: "Habéis paralizado la marcha "del ejército boliviano sobre vuestros hermanos del Cuzco, los ha­"béis obligado a marchar hasta Torata y Moquegua ya ser abatidos "por las fiébres y por una deserción espantosa y los habéis visto "retroceder casi en estado.de fuga, tiroteándose entre ellos.".

. En una de las escaramuzas las guerrillas moqueguanastomaron prisionero al Capitán boliviano Eugenio Lescano. Nieto que había establecido su Comandancia General enTorata, por la ocupación de rv10quegua, desde aquel lugar por comunicación de 28 de 'Fe­brero de 1842, propuso al General Ballivián, Presidente de Bolivia el canje de dicho prisionero con el Teniente peruano iVlariano Ta­fur, prisionero en Ingavi, propuesta que fue. aceptada por Ballivián en comunicación de 8 de Mario ·de 1842; dirbjida desde Puno, en donde el invasor había establecidosu CuartelGeneral.

Por mediación de Chile. se llegó a firmar .la paz con Bolivia en

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Puno el 7 de Junio de 1842. Por dicho tratado ambos beligerantes convinieron en olvidar para siempre los motivos de la guerra; Boli­via se obligaba a evacuaren un plazo de ocho díasel territorio ocu­

. pado haciéndolo mucho después; se cedían recíprocamente los de­rechos e indemnizaciones de guerra¡no aceptándose el cobro que . hacía el Perú, por los gastos hechos en 30liviadurante la ocupa­ciónde 1821; no fue aceptada la demolleión.de la columna conme­rnorativalevantada en Ingavi con inscripciones jactanciosas y ofen­sivas al Perú y aunque' con el tiempo se'borraron las últimas, se mantuvo la columna. Como recuerda Basadrert'Alqunos historia­"dores bolivianos califican el tratado de Puno como victoria di­"plomática peruana. 3alliviánganó la guerra, pero le escamotea­"ron la paz". .. .

Cerca de cuatro años después del desastrede Ingavi, siendo Pre­sidente de la República el General Ramón Castilla, el Congreso del Perú 'aprobó 'Ia Ley promulgada el 25 de Octubre de. 1845. Por ella, "en consideración a que el departamento de Puno por su inmedia­"cióna Bolivia, recibió el primer golpe de la zaña boliviana y por "la tenaz resistencia con que empezó lashostilidades contra el ejér­"cito invasor ha sufrido exacciones de todo género desde el 22 de "Noviembre de 1841 en que aquí pasó al Desaguadero hasta fines "de Junio de 1842, en cuyo tiempo hizo toda Clase de extorsiones "y consumió en su mantenimiento ganado v-dernés víveres y forra­lijes y destruyó casas y recogió bagajes de toda especie" ....." "Que es justo indemnizara un pueblo que ha sufrido por las inva­"sienesextranjeras y premiaren alguna forma su hero ísmo" la He­presentación Nacional por las conslderaclones anotadas y otras, confirió al departamento de Puno, a más de los títulos de "Bene­mérito y Heroico" el de "VALIENTE, ESFORZADO Y LEAL DEPARTAMENTO"~ . '. .

Por la misma ley, se·hicieronextensivos sus efectos al Departa" mento de Moquegua, en los títulos' honrosos "VALI ENTE, ES­FORZADO Y LEAL DEPARTAMENTO", ostentando ya Moque­gua elde"BENEMERITA A LA PATRIA". Además las compensa­ciones acordadas al Vecino departamento; serían también aplica­bles a Moquegua, autorizándose.alejecuflvq para el establecimien­to de Juntas en cada departamento, las que evaluarían los reclamos por los perjuicios sufridos¡ .dándose preferencia a los que hubiesen perdido todas sus tierras. Esta medida se hizo extensiva, asimismo, a los puntos del Cuzco ocupados por Jas fuerzas bolivianas.

Moquegua. dolorosamente' abatida por terremotos ysequ ías;

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víctima de las depredaciones detosespañoles.a raíz delas batallas' de Torata y Moquequa: invadidapor los bolivianos después de In" gavi, escenario dealgúnos de los princlpalesaoontecirnientos del del, Perú anarquizante del 42; hollada, lacerada; herida y sangrante durante la contienda con Chile, empero, vive aun; con lavigéncia de los versos del "vA1¡s MOQUEGUA", enlos-quelvllquel Angel Fernández Oávila, pulsa también Su amargura, ante lo .injusto de su olvido: Tres veces benemérita y muy noble ciudad, /tu vida es un ejemplo de sinceridad, Ivivesentristecida en la orfandad, Icon. que la Patria premia hero ísmo y lealtad/, _

2>- TVIOQUEGtlA YLÁ CONFEDERACION PERtl BOLIVIANA

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Corría el año 1836. Razonesgeográficas,étn icas, comerciales y algunas otras, pesaban-en muchos peruanos para reconsiderar una vuelta a la unidad política que en-el.VlrrevnatoexlstfaentreelBa­jo y el Alto Perú, convertido esteújtimo desde 182E0n la Repúbli­ca deBelivia, ya que desde eL;á'j'ío 1834,.existíatal proyecto de Confederación proponiéndole ;Gamarraá Nieto la presidencia del ..E$tado Sur peruano que se'. formara,'Qferta que el-moque­guano desestimó, exigiendo más bien éstexa Gamarra.Ia rendí­ción de sus fuerzas a.Orbeqoso que ejercía la Presidencia, Por otro lado, la rnejororqanizaoión y. supremacía quepretendjanlos esta­dos vecinos enSudamérica Hevaron a Santa Cruz, a la sazón.Pre­sidentede Bolivia, ya rnuchoshornores prominentesdelPerú,a considerar muy en serio, la convenien~iadeformar_unaConfedera­ción.entre el Perú y Bolivia. Principal opositora tales propósitos, tanto por su nacionalismo como por su desdén -a los bolivianos, era Felipe Santiago Salaverry que ascendido por Orbegosoa Coro­nel y luego de General, como Inspector General de .las milicias, aprovechando la ausencia de Orbegoso al sur, se proclamó Jefe Supremo de la República. Aliado Santa Cruz con Orbegoso,luego de. algunas accloneacontra Salaverry en la. batalla de Socabavael 7 de Febrero de 1836, después de. dos horas desanqriente.cornba­te, en el que cada ejército perdióel-treintieinco por ciento de sus efectivos.iderrotado., prisionero y sometido. a Consejo de Guerra; Salaverry fue-condenado a muerte y fusilado en la Plaza.deArmas deAreq uipacon ochode.susoñcleles.slendootros veinte deporta­dos;·

Libre de Salaverry, pudo Santa Cruz llevar a cabo sus planes confederativos. Los departamentosdel.Sur: Ayacucho,Cuzco, Pu­

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no y Arequipa que comprend íaf\lloquegúa, Arica, Tacnay Tarapa­cá, formaron el 17 de 1,,1arzo'de 1836, el Estado Sur Peruano. Los departamentos del Norte: Amazonas, Huailas, Jumn, La Libertad y Lima, cónstltuveronelñ.de Agosto del mismo año el. Estado Nor Peruano, conderándose ambos Estados.conBollviaxba]o laautori­dad onnímoda de Santa Cruz. Convocado en Octubre un Congreso a reunirse en Tacna, constitu ído por tres miembros por Estado, un militar, un abogado y un sacerdote, se establecieron las bases de la Confederación, en la que el gobierno general, sería Andrés Santa Cruz con el título de Protector, elegido por diez años can poderes dictatoriales.

Despertados los recelos de Argentina y principalmente Chile por el establecimiento de la Confederación el Congreso chileno apro­bóel 6 de Diciembre de 1836, la declaración de guerra a laConfe­deración.ialeqándose que-Santa Cruz, Presidente de Bolivia, deten­tador injusto de la soberanía del Perú, amenazaba la independencia de las repúblicas americanas y que buques del Perú habían invadi­do territorio chileno para fomentar la guerra civil. Chile con la co­laboración de los peruanos proscritos, entre ellos Gamarra, La Fuente y IVlanuel Ignacio Vivanco, organizó la primera "Expedi­ción Restauradora"con3,2eO' hombres al mando del Almirante ¡~1anuel Blanco Encalada; Esta expedición terminó con el tratado de Paucarpata, entre Santa Cruz yelJefechileno.Anteel fracaso de ella, cuyo retorno fue objeto de manifestaciones hostiles en Chile, los mismos, peruanos; esta vez al mando del General Manuel Sulnes enla Segunda Expedición Restauradora zarparon de Chile

,ellO de Junio de 1838. Domingo Nietoqueseencontrabacoman­dando la división del Norte, fue el principal instigador de.lainquie­tud separatista que fue propagándose en esa lona, pero Orbegoso, Presidente del Estado Nor Peruano que había tratado de negociar con los chilenos sin resultado, ante ello, se decidió a combatirlos. Vencidos los confederados en el Combate de Gu ía el21 deAgos­to, los chilenos ocuparon fa Gapital.-'-Gamarra aliado de.loschile­nos en una reunión devécinosconapoyode los restauradores fue elegido el '24 de Agosto de 1838; Presidente: Provisorio del Perú, desconociéndose con ello la ,autoridad de los jefes confederados. Santa Cruz en defensa de laConfederaclón.tsalió tras Gamarra y los restauradores, trabándose el combate en el puente Buin -sobre el río Salita el 6de Enero de 1839 y 14 d íasdespués el 20 del mismo mes,' en Yungay las tropas-de Bulnes, conCastillaal-fren­te de la caballería derrotaron a-Santa Cruz cuyos batallones boli­vianosse negaron 'a' luchar. Dichas batal Las'deterrninaronel.fin de la Confederación después de cerca de tres añosde'vigenGÍa. Con la

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derrota de Santa Cruz el Perú y. Bolivia volvieron a ser los Estados que existían antes de 1836 y el:Presidente Provisorio Gamarra fue confirmado como tal por el Congreso de Huancayo de 1839, sien­do objeto al mismo tiempo dehonores vdistinciones, yrecibiendo asimismo, recompensasen dinero y algunas mercedes los chilenos.

lJlientras en elNorte del país se libraban fas batallas decisivas en­tre las tropas confederadas y los restauradores, en i\¡]oquegua, se­~ún de cuenta el 1\10. 6 de "E I Republicano" de Arequipa, se fir~ maba una acta en la que los habitantesde i:Jloquegua, con intrepi­dez se .separabande la Confederación, 'siendo su voluntad se resta­bleciese la integridad de la República. Con motivo dé esta acción, las señoras V el pueblo salieron a las calles, vivando la Libertad, la Patria y al veterano que la ha salvado, refiriéndose, seguramente, a Gamarra.

En dicho número 6 de "El Republicano" de Arequipa,se decía: "La chidad de Moquequa puede gloriarse de haber sido uno de los "primeros pueblos de la. República que amó la libertad yla inde­" pendencia. Los españoles destruyeron aquella población, entre­"gándola al furor y al saqueo de la soldadesca desenfrenada, en los "momentosque un triunfo sobre nuestras armas habría henchido "su orgullo ysu deseo de venganza. Un castigo tan bárbaro, ejecu­"tadopara.ser más cruel y, horroroso, cuando la sangre peruana hu­"meaba todavía en sus calles y casas, no pudo contener su "patriotismo, ni moderar su odio justo e implacable a los enemigos "de la libertad... Al lanzarse este pueblo en su pronunciamiento "contra la Confederación y al proclamar su libertad, han sido "extraordinarios su entusiasmo y decisión, tocando hasta el deli­"rio. El pueblo y las señoras han paseado por las callesvivando la "Ia Libertad, la Patria y alveteranoque la ha salvado. Músicas y re" "gocijos no han cesado un momento, y en lVIoquegua se han reno­"vado en esta ocasión Jos solemnes juegos de la Grecia consagra­"dos, a la libertad". "Hijos ilustres de rJloquegua: Sois dignos de "ella. Vuestros hermanos de .Arequipa osfelicitan por vuestras vir­"tudes cívicas; cada d (a sois rnésqueridos a nuestro corazón porque "enlos d (as, de esclavitud y de dolor, no quisisteis separarosdeno­"sotros, no siendo bastante para arrancaros de nuestros brazos la "espadadel conquistador; . " ... ".

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3.-EL GRAN MARISCAL DOMINGO NI'ETO

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Domingo Nieto y ,Márqu~í,naaÓenll();~et!5de Agosto de·1803 del matrimonio dedon'Erarici~cpNi~t(:)'c9rdOQaMaría del Car­men ,Márquez, müy,pr9bableenJahadentfa'Chiribaya, propiedad de sus padres, la que quedó en posesión delhiJpBartolomé a la muerte de éstos y quepor la parte que le corresponde, hace refe­rencia Domingo, ensutestamento. Por la línea paterna se hallaba vinculado a don"lgnácio Nieto vBoa, vecino de Moquegua en don­de fuera Alcalde y Regidor por 1760 y a quien el Hey de España Carlos 111, el lOdeOctubre de 1709 le confirió eLtítulode Conde de Alastaya, yqu~,pqr no tener hijos, recibió ensucesión por Cé­dula de 2 de Setiembre de 1776suhermanQAntonio Nieto, mo­quequano, TenienteCÓronel d~'Ejército y Gaba lIero de la Orden de Santiago. Con la muerte de Antonio Nieto, acaecida el mismo año del nacimiento de Domingo-1803-,desapareció la posesión de dicho. título~'elque, sin embargo, se mantiene en el "Olivar Alastava" de 110,., probablemente, ,'posesión del" Conde en esa época.

Constumbr~dealgunas familias, en aquellostlémpos, era ha­cer cristi,anosa Josredén nadd:os el mis~o día.en. que vieran, la luz> porvezprimera,yesast;' presumiblemente, como al na­ciente 'vástago',eI15deAgostcrde1803,''Yo el. R;P. Pedro Ca­"bello,- ~r( encarqado deestá\doctr¡náde San Gerónimo de "llo,baüticé solemnemente,puseór~oycrismaaDqMI NGO "español} hijo legítimo de D. FraÓ¡i:liscoI)H~toy de la Da.. María "del Carmen rJlárquez; fueron suspadrinosD. Pedro Mugartey y ~a. "Isabel Márquez, a quienes advertí el parentesco y obligación y "para que conste lo ñrmo-- Fr. Pedro Cabello" (*) El bautismo debió llevarse a cabo en la Iglesia que existía en la banda iz­quierda del río, la que desapareció lo mismo que el pueblo de 110, conel terremoto del 13de Agosto de 186R

(*) Estapartida se hallaba inscrita en el folio 119 deíllbro de bautismos dela Parroquia San Jerónimo de 110, cuyo archivo fue' mandado formaren 1769, por el doctor Diego Salguero de Cabrera, Obispo de Arequipa. De­sapareció el citado archivo con el terremoto de Agosto de 1868.

Aunque nada se .conoce de la infancia de Nieto, es probable que casi toda su niñez y su juventud la pasara en Moquegua,en donde educado por sus progenitores con el celo que permitía el medio

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DOMINGO NIETO MARQUEZ

Gran Mariscal de los Ejércitos del Perú. cuyo idealista e indeclinable como portamiento por la constitucionalidad, le valió de los bolivianos el honroso

apelativo de "El Quijote dela Ley".

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Dibujo de Alberto Torres Fernández Maldonado.

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ambiente y las limitaciones educativas existentes, llegará l\lieto a los -18 años saturado de un concepto elevado que en suhogar y él mismo se había formado sobre una patria libre y que desde hacía buen tiempo, constituía también una porfíada aspiración de los criollos y mestizos del Perú; Es por ello que cuando'con la expedi­ción de Lord Cochrane en Abril.de1821, desembarcara Miller en Arica y se presentara en Moquegua, en donde al apoyo de las auto­ridades se sumó el del vecindario. fueron muchos los jóvenes, entre ellos Domingo Nieto, los que se enrolaron en sus filas para luchar por la independencia del Perú. Con el {lradode Teniente de Caba­lIería desempeñó diferentes comisiones y estuvo presente junto con otros jóvenes oficiales que más tardé tuvieran prominente figu­ración,eillas tropas del general argentino Hudecindo Alvarado,en las batallas de Torata ylVloquegua (19 y 21 de Enero de 1823) y cuyos desastrososresultadosdeterminaron la cafda.de la Junta Gu­bernativao-que presidfaLa Mar. Intervino Nieto en la batalla-de Jun ín, el 6 de Juniode 1824, como Capitán del Regimiento "Hú­saresde Jun ín, yen Ayacucho,el 9de Diciembre con el mismo grado actuó como Edecán del General La Mar, General en Jefe de la Plana Mayor del ejército patriota, mereciendo su actuación los elogios de su jefe en el parte que La Mar elevara a Sucre después de la batalla. Con Sucre participó en las campañas de Alto Perú y a raíz del sequndosltio del Callao fue promovido en 1826, co­mo Comandante del Húsares de Jun ín.

Bastante conocido es aquel suceso del que el -principal prota­gonista fue Nieto; ocurrido en la batalla del Portete de Tarqui durante -la guerra con Colombia el 27 de Febrero de 1829 y que Juan Gualberto Valdivia, amigo y admirador de Nieto, describe en sus "Memorias sobre las Revoluciones de Arequipa desdé 1834 hasta 1866". "Montado en su célebre caballo negro en que "el General peleó con Camacaro en el Portete de Tarquicon rno­"tivo de que este Jefe mandó decir a Nieto que ahorrasen la sangre "de sus regimientos y saliese a pelear con él en medio de ambas "fuerzas,y que quedase la victoria por el que venciera. Nieto ma­"tó a Camacaro, peleando a lanza en eldesafíoycuando Camaca­"ro cayó muerto -en tierra, irritada su tropa cargó sobre Húsares "bruscamente, en cuyo choque HúsaresacuchiHó y puso en fuga "a la caballería de Camacero, Pero al retirarse se encontró en el "camino único que tenía que pasar,queelejércitovencedorde "Sucre ocupaba la ladera. Sucre que acababa de vencer en el Por­"tete y perségú ía al ejército peruano, como verdadero valiente y . "caba lIero había dado orden de que no.se disoararasobre Húsares. "Nieto .que observó tan realzada conducta y que marchaba a la

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"cabeza deHúsares se quitó el sombrero, saludando al vencedor de "Pichincha y Ayacucho. Sólo los.héroesdan entalescasos tan alta "muestra de las almas que las animan". Se sostiene que la moha­rra del. asta del pabellón de la Sociedad de Artesanos "Luz y Pro­greso." de Moquégua,es la punta de la lanzaconque.Nieto atravesó

, al Comandante-colcmbiano José MarfaCarnacaro..

Depuesto el. lVI~riscal .La Mar por el pron~nciamientoque en Junio de 1829 dirigió Gamarra en Piura, Nieto que no estuvo de acuerdo se retiró del servicio, volviendo a él.cuandojuzqó que su colaboración era necesaria. Ascendió a Coronel a fines de 1829 yen. 1833 a Generalde Brigada. Como .General de División des­pués, se hizo cargo de la Comandancia Genera] del Ejército,en cuyo cargo debeló en 1835 el levantamiento que encabezó el Sargento Becerra en favor del General Antonio Gutiérrez de la Fuente en la fortaleza del Callao. Al mes siguiente, .en Febrero, eiGeneral Felipe Santiago Salaverry quase había proclamado, Jefe Su premo apresó a Nieto para deportarloa Centro. América. sin conseguirlo, .. pues, Nieto oblig6a la tripulación a desembar­carro en Huanchaco.i.retlraridose.a Chile, antes de' servir aun Gobiernoconstltu ído por la fuerza. " .

. En la época anarquizante de142, en 'la que las asonadas militares fueron desarticulando las fuerzas vitales de la Naclón, defendiendo Nieto las fuerzas del General Vidal, fue ascendidoa Mariscal de los Ejércitos del Perú, después de batir a las fuerzas de Torrico en la batalla de Agua Santa en lea, el 17 de Octubre de 1842~ resultando herido en una mano. Derrocado Vida] por la revolución que en Enero de 1843 estallara en Arequipa,Vivancoquese hab.fa procla­mado Director Supremo, comenzó a desterrar a cuanto militar

. consideraba contrario a su. régimen, .

Él Mariscal Nieto; el Coronel Manuel de Mendlburu.v-futuro autor del Diccionario Biográfico Histórico del Perú-evlos Corone­les Joaquín Tarrico y. Pedro.Ctsneros..lelosde seguir SU .destierro a Chile.xíesernbarcaron en Arica en Mayo de eseañoy pasando a Tac­na, levantaron bandera en defensa de la Constitución contra el Go­biemode Vivanco. La popularidad de que 'gozaba Mendiburuen Tacna, en donde años mástardeseríaPrefecto, y el prestigio y ad­miración que ten íany sentían los'moqueguanosporsu paisano Nie-. to, pese á servivanquistas, .favorecieron la.causa de larebelión en estas dos ciudades, extendiéndose luego el movimiento hasta Tara; pacá, donde también se sublevó Castilla, al mismo tiempo queei movimiento presentaba otro frente con San Ramón yTorrico que luego c~pitularon en la-frontera con Bolivia" .

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Consecuencia de esta reaccion constitucional fue la formación de una "Suprema Junta de Gobiemo T'rovisorio.de los Departa­mentosLibres", cuya Presidencia asumió Nieto hasta sumuerte, ­encargándose de hecho del gobierno -de los departamentos del Cuzco, Puno, Arequipa y IVloquegua. Constituían además dicha Junta, Ramón Castilla, el Secretario General José Chipoco Rivero

, el moqueguano Nicolás Jacinto Chocano y el GeneralJosé Félix Igua ín, al que la Junta hizo Prefecto del Oepartamento de IVlo­queguaqueloera desde el 25 de Abril de 1837 con Santa Cruz, comprendiendo además Tacna, Arica yTarapacé.

La Junta cuyos componentes habían sido enemigos de la Con­federación Perú-Boliviana, cuyo gestor Santa Cruz descleel Ecua­dor, hab ía hecho,. infructuosarnente.. varias tentativas para revi­vir la Confederación-e invadir el Perú y Bolivia, en un nuevo inten­todesembarcó cerca de la caleta de.Camarones.etfS.de Octubre de ,1843 con el propósito de dirigrrSe'á !:lolivia. Úe acuerdo aBasa­dré,descubierto y apresado en, la noche del 2 de Noviembre, fue llevado y encarcelado en iVloquegua, llevándose le tres meses des­pués a' Tacna,en donde ,el Prefecto Iguaín, en cumplimiento del pacto firmado por los representantes de Chile, país que se opo­nía a toda intervención de Santa Cruz en los asuritosdel Perú y Solivia, lo entregó en Sarna el 10. de Febrero de 1844 al Coman­dante de la fragata Santa Cruz en Chillán por disposición del Presi­dente chileno Bulnes. .

Mientras. f\IIendiburu como Agente de la Junta, gestionaba en vano, auxilios primero en Bolivia y luego, en Chile,'Nieto y Casti- '"ª marcharon sobre Tacna, en donde libraron la batalla de Pachía el' 29 de Agosto de 1843contralas tropas vivanquistas.del COro­nel Juan Francisco Balta, Después de esta derrota en su .afán de dominarel movimiento del Sur.iVlvanco despachó una división al mando de su rlllinistrode Guerra, General Manuel de la Guardacon precisas instrucciones de aplicarla pena de muerte a los revolucio­narios. Otra división era mandada por el Coronel Ugarteche.

Nieto que ya se encontraba en Moquequa.al. saber que los Gene" rales Guarda y Fermíndel Castillo, avanzaban de Puno con rumbo

.a Moquegua,.reun ió con ayuda de Castilla 300 soldados y 1,100 milicianos, contribuyendo los vecinos de la ciudad al racionamien­todiario de la tropa. Voluntarios distlnquidosse presentaron alas filas, .del 1'v1ariscal. moq ueguano, entre ellos," muchos' alumnos del Colegio Nacional "La Libertad", como Domingo Barrios, José Ríos, José Zeballos, entre otros, formando una guardia de honor

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con el nombre de "Colurrmade Sagrados". Nieto con dos.cornpa­ñ ¡as vuna.rnltad de caballería se situó en el punto de Saneara, lIa­rnadoAlto deYunquvo a legua y media al noroeste de!lJloquegua, mientras queCasti Ila con el resto de las fuerzas ocu pababa las alturas -deSamequa, hasta Tumilaca, listo para moverse al primer aviso de aquél. Durante 28 días resistieron Nieto y Castilla el ase- ¡

do de 2,800 hombres. de las divisiones de Guarda y Ugartecheque : se situaron al otro lado de Tumilaca. Sin miras a capitular y única- . mente en su afán de evitar derramamiento de sangre hermana,

,Nieto envió a Guarda un parlamentario,solitándole una entrevista la que se efectuó sin ningún resultado. Era, madrugada del 28 de Octubre de 1843, cuando Guarda comenzó a moverse por las can­teras ysíguiendo por Cerro Blanco, para, continuar por detrás de los cerros Cherrchén y El Calvario con el. propósito de llegar a la quebrada de l'JIontalvo para saciar la sed de la tropa y de la caballada, rendidas de fatiga por 48 horas de marchas penosas por el caldeado terreno recorrido. Nieto previendo este movimiento, convenció a Castilla que custodiaba IJEI Portillo" tratando de evi­tar la toma de la población, para que marchara a lvlontalvo para oponerse al propósito de Guarda de llegar al río. El deán Valdivia que vivió por aquellos tiempos, relata en sus Memorias, una genia­lidad de aquéllas en que tan pródiga fue la fecunda agudeza de Castilla y con la que sorprendió eh esta ocasión a lainfanterfa de GuaÍ"gaqúe estaba lista para entrar en combate. Viendo Cas­tilla aíbatallón "Lanao" de Guarda. con las armas en descanso corrió rápidameinte en Su caballo hacia ellos y con' estentórea voz ordenó:"] a..ataIIÓn 1. . ¡Armar pabellones, .. yal aqual. Ante or­deq:tan/tÓnante y sin parar mientes en el jefe contrario que la impartía, el batallón armó pabellones y se fue en carrera al río; he­cho lo cual "Castilla seapoderóde los fuslles, dejó all í parte .de ta "fuerza, y con el. resto marchó hada donde Guarda y lo' encontró 11 con Nieto que trataba de acordar una capitulación. Castilla dijo: "!Qué capitulación! -'-- Ud. es mi prisionero -'-'-o Tomó a Guarda "del brazo y lo entregó a buena custodia."

En relación con esta anécdota que tuvo origen al término dela batalla de la Pampa de San Antonio, el jefe vivanquista Manuel Lanao que comandaba el batallón 11 Ayacucho", tratando de recti­ficar las críticas consideradas por él calumniosas, que se hicieron a la.actuación de su.batallón,en comunicación dirigida a los editores del periódico "Fénix" de .Tacna, dice: IJNo obstante de que poco "antes s~'óyóresónar el corneta de órdenes de nuestro General en "Jefe significó, 'la suspensión del fuego, inmediatamente se nos "presenlp,·,'ei .General Castillo, lntlrnándome la mismaorden a mi

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i

"batallón (Ayacucho) dispcniendn . además que el Capitán Be­"Iaúndemarchase como parlamentario a la fuerzacontrarla.que no "suspendió el fuego, para que losuspendieran supuesto' que Sé "había iniciado parlamento. l'vlas no por eso dejó "Avacucho" "de sostenerlo con decisión, hasta que por segunda vez mandó al "Capitán Mascara con bandera al propio fin. Durante esta breve "suspensión se aproximó el General en Jefe Ramón Castilla con el "objeto de evacuar la entrevista a que fue invitado por uno de "los Ayudantes del General en Jefe don ívlanuel de la Guarda, y "aunque por el resultado de ésta se me ordenó mandase formar

, "pabellones, yo rehusé obedecer. (Armar pabellones: grupo de fu­"siles enlazados por las bayonetas y .descansandoen el suelo las "culatas). iv1ientras que por su propia voz me lo ordenó nuestro "General en Jefe. En este estado el General Castilla con la mayor "enter~?a ordennque marchase el batallón a refrescarse a lo que "repuse lo haría con sus armas y sus respectivos jefes. Masal hablar­"les dicho General con el lenguaje poderoso de sus necesidades "quepor cuarentiocho horas de unsol abrazador nos tenía abruma­"dos, nuestros soldados desoyendo nuestra voz, siguieron las mis­"mas huellas que marcaron los primeros. Igual fin tuvo a pocos "instantes el batallón "Marina" mandado por el General en Jefe "nuestro.a viva voz, y de este modo terminó nuestro accionar en "el campode San Antonio." , .

'l

Como resultado de la batalla qué duró cuatro horas, quedó en poder de las tropas constitucionales todo el tren de guerra, caye­ron prisioneros los Generales iVlanuelde la Guarda, Fermín Casti­llo, toda laoficialldad y 2,000 soldados. Sólo consiquló salvarse la caballería que estaba casi intacta yque al mando de su Coman­dante Fernando Alvizuri se apoderó de la caja militar y se dirigió a Arequipa por Omate. .

Nieto entró victorioso a rVloqueguaen medio de las aclamacio­nes del vecindarios, al que una casi devoción lo ligaba a su paisano. El moqueguano se esmeró en prodigar atenciones a los heridos de ambas partes, tratando con extrema solicitud a los jefes y oficia­les' veneldos, 'Attilie Minuto, en una' anécdota que de aquellos aconteéirn,ilimtos recogió, relata que aí. día siqulente de la ba­talla dé San Antonio, en la misa solemne que en su honor se ofidaba·.eala lqlesia Matriz, el hidalgo moqueguano cedió suasien­to un pobre andana apellidado Guevara al reconocerlo, recordan­do que éste hab ía sido su maestro de primeras letras.

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A raíz de la batalla de San Antonio grande fue él desconcierto en la capital; yaquéseconsiderabadescontadoeltriunfo de las tropas vivanquistas, :porla mejor organización, disciplinavnúrnero sobre las constituciollalesde Nieto y Castilla, enapreciación de los gobiernistas,En cambio, para los vencedores, con el-resonante triunfo alcanzado.Ia autoridad de ladenomi nada "J unta ou prerna", surgida en Aqosto de 1843, sé extendió hasta el Cuzco que fue ocupado. por los constitucionales el ,6 de Diciembre del mismo año. Dos ,meses y días después detentando la Presidencia de dicha Junta, fallecía Nieto en la Ciudad Imperial, ei 17 de Febrero de 1844, antes de llegar a los 41 añosdeedad.

Así y sólo con la muerte, dejó de desfilar por el escenario poi íti­co militar del Perú, el peruano idealista que para Basadret'sentfa una crédula reverencia ante las grandes palabras con mayúscula; Libertad, Indepehdencia, Constitución, Congreso". El incorregible y terco defensor de laConstiiución y leyes de la República,a quien los bolivianos lo bautizaran con el' honroso título de "El Quijote de la Ley"'y los peruanos-con el no menos significativo apelativo de "El Segundo Tomo del General La Mar". El luchador infatigable e incorruptible que recordando a los defensores de la Grecia y Roma antiguas mereciera que se le llamara. "El Mariscal Greco-Romanov.iEl ardoroso patriota que en una.entrevista con Santa GrÚ't, le dijera a éste, que idolatraba a la Patria más que un ' joven loco él su querida". Y así, el militar pundonoroso y valiente, el Gran Mariscal de los Ejércitos del Perú, que con su muerte deja­ra atrás sus hazañas y correrías en'el territorio de un Perú convul­so, turbulento, revolucionario y anarquista, continuará cabalgando por siempre, con aureolas de gloria, en las páginas de nuestra his­toria, '.'en su caballo negrplevantandomontoneras en los corazo­nes buenos" al decir de Basadre.

..' .~ '",

LA MUERTE DEL MARISCAL NIETO •

, En la Casa de Gobierno de Lima, ocupando la Presidencia el General Francisco Vidal, se le comunicó al Mariscal Domingo Nie­to por Juan Crisóstorno de Mendiburu, con fecha 22 de Febrero de 1843 que el Ejecutivo lo hab ía nombrado General en Jefe del Ejército, cargo quéel1inmediata respuesta dos días des­pués no fue aceptada por Nieto, diciendo: "Mis 'frecuentes acha­"ques,no permiten atender con el esmero debido al cúmulo dé "exigencias que trae consigo una campaña enelPerú y que no "bastan a satisfacer losconocimiéntos, la honradez y valor perso­"nales, siendo además necesarios para desempeñar el mando en "jefe una actividad que no puede p~her en ejercicio el que como

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"yo tiene su cuerpo y .suesp íritu enfermos, aunque por otra parte "sean grandes sus demáscualidades militares y poi íticas",Empero, su salud quebrantada no le impidió a ¡'~ietosalir en defensa de Vi­dal,cuandó en Arequipa, Vivanco para derrotar unido a Castilla a las tropas vivanqulstas en la batalla de San Antonio, en h/loquegua, el 28de Octubre de 1843. .

Trasladado al Cuzco, a las siete de la noche del 17 de Febrero de 1844, Domingo Nieto,. Gran IV/ariscar de los Ejércitos del Perú, exhalaba el último suspiro en la antigua capital incaica, cuando no había llegado aún a los 41 añosde edad. Parece no tenerasidero, el rumor que entonces se difundió de que Nieto habrá muerto en- , venenado, ya que enfermo como estabav-sé afirma del h(:Jado-, el mal estado. de su salud, '10 había venido sufriendo hacía más de un.año, desde comienzos de .• 1843. .

.. Si r~ieto no fue reconfortado con los cristianos auxilios de la extremaunción, en el introito al meditado testamentoque firma­rael mismo d ía,resalta el arraigo de su profundo catolicismo y su firme creenciaven el alto misterio de la Sántísima Trinidad ... ." en todo aquello que cree y confiesa nuestra Santa IVladre Iglesia Católica, Apostólica y Romana V en todos los misterios de nuestra Santa fe". El mismo día de su muerte, tal vez con el presentimlen­to de su cercano fin, hizo ·Nieto su testamento en el Cuzco, ante el Escribano Mayor de Gobierno; don Pedro del Mar y Tapia.isirvien­do de testigos el Cura de la Matriz, de 1VI0quegua, presumiblemente don Pedro José IVIartínez, el General Francisco Vidal, Prefecto y Comandante General del Cuzco, nombradopara tales cargos por la Junta, el Secretario General de la Suprema Junta de Gobierno,. don José Chipoco y. Rivero y los Coroneles José González-Ivluqa­buru y Francisco Forselledo. Albacea testamentario fue nombrado el Coronel Manuel de IVlendiburu, ausente enel acto, y como Apo­derado a su fallecimiento, fue designado el Sargento fJlayor-Javier Meza.

Como católico, Nieto en su testamento encomienda su alma a Dios, recomienda que su cuerpo sea amortajádocon el hábito del Corazón de Jesús y que sus exequias se. realicen en el templo que fuere del agrado de su Albaceadispone su cuerpo embalsamado sea conducido a rJloquegua y sepultado en unsepulcrode cal y piedra que se levantaría "en el punto de Saneara llamado Alto de Yungu­"YOj dando frente hacia los puntos que tanto acechó Guarda por,

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"espacio de 28 d íascon su ejército para humillar: a ¡lioquegua, y "que se le disputó y sostuvo hasta impedir de todo punto la entra­"da del enemigo a la ciudad, con lo que SI:! evitó su ruina y se con­"siguió la posesión de su libertad y la de la Hepública, defendiendo "Ia Constitución y el imperio de la ley" ... Haciendo honor a la amistad, dispone que escoja dos de sus caballos, que deben ser el overo y el zaino, su amigo el General Ramón Castilla en razón de haber estado juntos en Pach ía y San Anton io, lugar este últi­mo en Ivloquegua, en donde en Octubre de 1843, derrotaron a las fuerzas de Guarda, iViinistro de Guerra de Vivanco, que acudió a combatir al Gobierno Provisorio delSur, presididopor Nieto.Con la honradez que le caracterizó, hace mención de las cantidades y personas a quienes debe, ascendiendo sus deudas a más de diez mil pesos y cuarenta onzas. Son pocas en cambio los adeudos a su favor, entre ellos, 1,200 pesosque le debe Antonio Lefalde y doce onzas de oro que. tiene el Teniente Coronel don Juan Francisco h/lur.- Aclara que habiendo servidola mayor parte de su vida a la Nación, ésta le debe muchos sueldos, los que constituyen bienes que deja, así como parte de la hacienda Chiribaya, en poder de su hermano 3artolqmé Nieto y una Espada, obsequio de la ciudad de I\Jloquegua que será entregada al primer Congreso para que deter­mine donde' debe depositarse. Recomienda que su Apoderado el Sargento f~1ayor Javier Meza; haga entrega de susbienes a su espo­sa a quien designa como tenedora de los mismos. Sin hacer meno ción.de haber nacido en ILO, tal vez, por la ninguna importancia que entonces tenía el puerto, Nietoañade a su testamento un co­diciloque lleva la misma fecha-17 de Febrero de1844~ v que no fue firmado por lo trémulo de su mano, disponiendo "que es su voluntad que a Nuestra Señora del Rosario delpuerto de 110, se le mande hacer y se le dé un manto y escapulario o un terno completo lo más decente que sea posible, que lo estrenará el primero de Octubre -1844- con una función solemne en la l-glesia, que costeará su hermano i3artolomé Nieto".

Para este testamento y su codicilo, Meza como Apoderado de' Nieto, encargado también de hacer entrega de los bienes del finado a su esposa doña Iv1aría Asunción Sol ís, presentó con fecha 10. de Junio de 1844 un recurso al Juez de Primera Instancia de ¡\flaque­gua, pidiendo la protocolización y archivamiento del testimonio del testamento del \\'1ariscal Nieto, lo que se hizo en la Notaría PÚ­blica de donJuan Fermín Angulo, hoy formando parte del Ar­chivo Notarial del Dr. Víctor Cutipé Vargas Angulo (*) .

. (*) En algún apunte biográfico de Nieto, aparece con losnombresde JOS E DOMINGO. Ni en la partida de bautismo, cuyo texto inserta Juan Gualberto Valdivia, contemporáneo del militar moqueguano, en su obra"Fragmentos

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para la 'Historia .de Arequipa": ni en Jas diferentes proclamas. del. caudillo militar; . ni en la relación oficial de combatientes en la ba­talla, de Ayacucho· .: .' ..' . ni en su testamento aparece Nieto como José Domingo sino simplemente como DOM INGO. . . .

. Importante como era la personalidad de Nieto, ya que al ocurrir su fallecimiento desempeñaba la Presidencia de la "Suprema Junta

. de Gobierno Provisorio de los Departamentos Libres", con autori­dad sobre todo el Sur del Perú, el General Francisco Vidal quiso dejar constancia pública áe dicha muerte ante los Escribanos Públi­cos, Pablo del f,Jlar y Tapia, Julián Rodríguez, Julján Tupayachi y Julián Tituatauchl. Constituídas las personas aludidas, a las ocho de la noche de la fecha citada "en la habitación que en vida mora­"ba el Excelentísimo señor don Domingo Nieto, Gran :'~1ariscal de "los Ejércitos del Perú y Presidente de la Suprema Junta de Go­"bierno Provisorio de la República .•.. se le encontró rendidode­"Iante del catre de cama en que enfermó, con lacara descubierta y "el cuerpo tapado con una sábana y un Santo Cristo en los pe­"chos.. " .". Presentes los mismos que certificaron con su firma el testamento de Nieto, así como muchas otras personas, el Prefecto Vidal ordenó se le llamara por su nombre y apellido, lo que hizo el Escribano ¡~J1ayorde Gobierno, don Pedro .del ¡vlar y Tapia, por tres veces y en la siguiente forma: -"Excelentísimo señor don Domingo Nieto "y no' habiendo contestado, constataron" haber pasado de esta vida a la eterna, naturalmente, por medio de lamuerte". '. .

Nieto casado con doña rVlaría Asunción Salís, tuvo varios hijos, uno de ellos bautizado en IVloquegua ne1830, cuando era Tenien­te. Algunos fallecieron siendo menores, sobreviviendo tres: Bea­triz del Carrnen.. Bárbaro Leonidas y Domingo, habiendo quedado en cinta su esposa al morir Nieto, siendo la hija que no conoció a

, su padre, Fortunata Nieto, mástarde esposa de Sancho Dávila.. '

La falta de medios de comunicación, retardó el conocimiento inmediato de la muerte de Nieto, pues, eh IIJloquegua sólo llegó a conocerse el 7 de lVIarzo, 18 días después de ocurrida. Ante tan infausta nueva, un sentimiento de verdadera congoja, acompañó durante algunos días, las actividades de la silente ciudad . Losgra­ves clamores de las campanas durante 48 horas se elevaron al cielo como plegaria infinita; en el doloroso recogimiento de todo un pueblo, ante la desaparición de uno de sus hijos más ilustres:

Domingo Nieto, El Gran f'Jiariscaldelos Ejércitos del Perú. . 107

Apoco de formarse la Junta de Gobierno Provisorio de los De" partarnentosLibres, por decreto expedido en Tacna el3 de Se~ tiernbre de 1843,S8 dispuso"queella sólo deb ía subsistir mientras se libertase la Capital de la República (del Dictador Vivanco) yse . pusiese. en aptitud de desempeñar el Supremo Poder Ejecutivo Na­cional el llamado por la ley a su ejercicio". Con el fallecimiento de Nieto.: no quedó en acefal íadichaJunta, pues fue asumida la Pre­sidencia por el General RamónCastilla, quien por Decreto expedí­doerr Avacucho el 21 de Febreróde1844 dispón ía "queestándo en el período en que tocaejercer la Presidencia del Gobierno Pro­"visorio la asumo por haber fallecido elilustreldarlscal ;)qmin~o "Nieto en la noche del 17 de Febrero. El señorVocal de la Junta, "Coronel Nicolás Jacinto Chocano (moquequano) y el Oficial ¡·Jla­U yor que despacha la Secretaría General, donJosé Chipoco Rivera "se pondrá en marcha con direcciónaesta ciudad (Ayacucho). "Durará el ejercicio de la Presidencia sólo hasta que los cinco de­"partamentos: Moquequa, Puno, Ayacucho, Huancavelica y Jun ín " que se han sustrafdo a la dominación del usurpador nombren los. "diputados que han de ser vocales de ia Junta Por decreto de 10 de Diciembre de 1844, expedido par el mismo Castilla, dado en

.San Borja disuelve la Suprema Junta de Gobierno Provisorio "y re­signa sin Iirnitación alguna todo el poder y autoridad que ejercía, en la persona de S.E. el Presidente del Consejode Estado Encarga­do del Poder Ejecutivo", que lo ejercía don i\1anUel ívlenéndez.

LOSRES'fOS DEL MARISCAL NIETO

PROCER DE LA INDEPENDENCIA

Cumpliendo una de las disposiciones testamentarias de Nieto, . sus restos fueron conducidos a ¡·J1oquegua, porsu .Apoderado Sar­gento IVlayor Javier Meza. Una copla de aquella época trasmitida a través de los años y por mi venerada madre recordada, decía:

EI17de Febrero A Meza dejó encargado víspera de Carnaval como Sargento ¡·.!layor

.en la ciudad del Cuzco que cc.iduzca su cadáver murió nuestro rVlariscal a Moquequa con honor.

Los restos de Nieto llegaron a Torata el 31;:;0 IVlarzoy setrasla­daron a r1l1oquegua el 11 de Abril de 1844, corno lo da conocer el Subprefecto José Barrios al Prefecto de Nloquegua José Fellx Iguaín, en carta de 2 de Abril de ese año, en la que dice: "Hoy se­"qún los avisos que he tenido debe llegara Torata el cadáver de Su "Excelencia. Mañana subo a aquella Villa para que se tributen all í ,"Ios honores y exequias que le corresponden. '" Teri íaconclu ída

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"ésta cuando se me han; presentado los individuos a quienes he ene "cargado la fábrica del . túmulo suntuoso que debe hacerse en la "líJlesia Iv1atrizdé esta ciudad para colocar en él el cadáver de "S.E.mientras se le hacen las exequias y cerernontas de su entierro, "según la expl icación que hacen demanda dicha fábrica gastos de "consideración para todos los útiles que se necesitan; éstos deben "hacerse .decuenta delEstado, pues la fábrica dedicha lqlesla es "tan r'niserableque no puede gastar diez pesos. Facúlterneusted "para dichos qastos, que aunque estamos enla encuerera(sin ·fon­"dos) empeñaré la venera (refiriéndose aalguna insiqniadel Marls­"cal) paraquese haga todo con solemnidad. Antes de ayer (sería "el 31 de rJlarzo) Elnl¿tarde llegó a Toratael cadáver de S.E.Ayer "estuve en aquella Villa y presencié las exequiasque se le hicieron. "Permaneceré en esa Villa hasta el jueves llque bajará, -inter se "varihaciendo-. los preparativos necesarios.

-. " " .. .

La 'admiración y cordial afecto que supo despertar en sus pai­sanos el vencedor de San Antonio, tuvo manifiesta expresión de dolorso recogimiento cuando se recibieron los restosde Nietoy el llde Abril en "El Huaico". Segun anotaciones dé rvlinuto, tras­mitidas de aquella oportunidad, "fVloquegua estaba completamente "enlutada. De puertas, balcones y ventanas,pend ían ricos adornos "negros. Todas las gentes vistieron sus trajes de duelo. La bandera "nacional estaba a media asta. La ciudad impon ía un aspecto te­"llqioso".

El pueblo en masa" acompañó, "procesional mente.ielcadáver del distlnquido-rnititarhasta.Iaiqlesia Matriz, en donde recibieron los responsos deritual.vel sentidopaneqíricode su amigo 'Párroco y primer historiador moquequano, Juan Antonio I'Jlontenegro y Ubaldi" (1). Parece qUede La Matriz, el ataúd fue trasladado por el Dr. Cayetano Fernández lVIaldonado, cuando ejercía el rectora­do del Colegio Nacibñal"La Libertad"a la CapllladelConvento de San Francisco, hoy terreno libre de escombrosde la-Gran Uni­dad Escolar de Mujeres "Santa Forturiata",mateniéndosedurante muchos años la creencia de que ese era el sitio en dónde reposaban los-despolos rnortalesdelMarlscal.

Es muy probable que la lectura de una de las obras del prelado mollendino, él deán Juan Gualberto Valdivia, qué en vida fue pa­negirista y gran amigo del militarmoqueguano, llevaran al Vicario

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de Moquegua, Alejandro Manrique a deducir en 1924 que losres­tos de Nieto se encontraban en uno de los cementerios de Moque­gua, por la siguiente carta del CoroneliVIendiburu, inserta en "Fragmentos para la Historia-de Arequipa". "Tacna,Junio 15 de "1846. Dr. Sr; Coronel Prefecto del Departamento. S.P.- Desean­"do el Gobierno que lascenizas del finado Gran lvlariscal don 00­"mingo Nieto, que desde el Cuzco fueron traslados a su país natal, "se depositen y reposen de una manera digna de su respetable me­"moria, dispuso se comprase y trajese de Valparíso un sepulcro de "mármol cuyo diseño acompaño aUS. Luego que llegue al puerto "de Arica, quiere S.E. se traslade a Moquegua y queUS. se sirva "disponerse coloquen en él, los restos del finado General, en el "mismo paraje y cumpliendo las prevenciones que dejó hechas en "su testamento, cuya cláusula remitiré a USo desde Lima. Esta es "mi opinión como Albacea del finado GranlVlariscal; mas si sus "compatriotas prefiriesen situar la urna en el panteón de la ciudad "de Moquegua, por lo sagrado de ese lugar, y a fin de conservar a "aquella debidamente lo que no será fácil en el campo abierto y "solitario, de que se encarga el testamento, puede USo convenir "con tales deseos, que desde luego serían razonables. Dios guarde "a Ud.-Manuel de Mendiburu". (1) Monteneqro y Unaldí era 21 años, mayor que Nieto (1782 - 1803)

No estaba desarcetado el Vicario.Idanrique en suspresundones, pues, en comunicación de 31 de Julio de 1846 del Prefecto de Mo­quequa, consedeen Tacna, dirigida al fJ1inistro de Estado en el Despacho de Hacienda, le hace saber que en el bergatín nacional "JOVEN SEVERINA" habían llegado a Arica "siete cajones que "conten ían el mausoleo de mármol para depositar los restos del fi­"nado señorMarlscal D. Domingo Nieto, mandado comprar por el "Supremo Gobierno".- Se añade que no pudiendo verificarse el traslado de dicho mausoleopor tierra en razón del peso y volumen de los cajones, se dispuso que la goleta de guerra" Libertad" que había regresado de su comisión al Loa, los condujera al puerto de 110, para que de.allí el Subprefecto de la Provincia los hiciera con­duciren carros a.su.destino. Igualmente se comunica "con referen­"ciaal lugar en donde debe colocarse'el.mausoleo, según la cláusu­"la testamentaria del señor General Nieto, proced í con motivo de "hallarme en rÍl~oquegua, a donde me dirigí el 13 del corriente "(mes de Julio) atratar sobre el particular.en una junta de perso­"nas notables y leída la de USo (el IVlinistro) después de discutido "el asunto, la mayoría quiso y se resolvió que la tumba del Gran " J1 ariscal Nieto sea la primera que se coloque en el nuevo Panteón "quese va a construir, cuyo plano y ,presupuesto se está formando"

No fue pues; el punto de Saneara llamado"Alto de Yunguyo"

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en donde previa licencia del pretadoeclesiéstico y bendición del lugar se levantarfaün sepulcro de cal y piedra, como lo dispuso Nieto en su testamento, sino en el Cementerio Nuevo, en donde la Benefieiencia de Moquequa proyectaba construir una nueva necrópolis y para cuyo propósito el Congreso' Nacional había votado la suma de 9,688.00 pesos.

Parla comunicación anterlorrnente citada, la tumba del Ma­riscal Nieto, fue pues, la primera en el Panteónf\Juevd,que no tiene hasta la feci la la construcción que se había provectadoelsiglo pasado. . '. ..' '.,

En la tarde del 19 de Noviembre de 1924, constituídos en el Panteón Nuevo, el Cura Párroco Dr. Alejandro I'Jlanrique,el Pre­fecto, el Juez de Primera Instancia, el Agente Fiscal y otras per­sonas, se procedió a la exhumación, sentándose el acta respecti­va: Descubierta la tumba, se encontró dentro de un mausoleo de mármol negro, una urna de madera gruesa forrada interiormente de latón. la parte superior que era de vidrio, en.fragmentos; en el. interior, parte del cuerpo' sin los miembros inferiores que se en­contraron deshechos, apreciándose perfectamente el busto con un largo córte, la cabeza con cabello descansaba sobre un almo­hadón de terciopelo y seda y el cráneo aserrado para el erobal­samiento.Ninguna insignia militar. Sin encontrarse inscripción alguna que certificara la autencidad de' los restos, seles lderrtifl­có que correspond ían alas del Mariscal, por el mausoleo de rnár­mol.por la consistencia dela caja hecha para un largo viaje a lomo de bestla, por los restos de género blancov rojo encontrados que corresponderían al hábito del Corazón de Jesús con que quiso Nieto se le amortajara. Además en la sesión de la Beneflclencla Pública de I'Jloquegua de 9 de Diciembre de 1849, se decía: "Que ya el Cementerio está al servicio pues guarda los huesos del Gran i'Jlariscal Nieto".

Por la líeqadadel mausoleo en "L~:' Joven Severina"la trasla­ción de los restos de Nieto de la Capilla del Convento de San

. Francisco al Panteón Nuevo, debió efectuarse en los últimos meses . de 1846 o en los primeros de 1847..'

Con motivo de 'cumplirse el primer .centenariodela batalla de Ayacucho, en la que Nieto tomara parte como Edecán del General José La Mar, Moquegua quiso. honrar los restos exhumados de Nieto al efectuar su traslado dellotaldela Beneficiencia, en donde provisionalmente se habían depositado; a la Iglesia Santo Dorninqó

fft "

despiéndolo con unasentidaalocución, el Directorde esa institu­ción, Atilio RJvlinuto .

• En lamañanadel8de Diciembre de 1824, en un ataúd obse­quiode la Sociedad de Artesanos." Luz y Progreso" y envuelto en la bandera nacional, confecciónadapor damas moqueguanas, mar­chó el cortejo encabezado por los escolares y seguido por las

. autoridades, sociedades de Artesanos y Obreros con pabellón, por numerosotacompañarniento y por una cornpañja de . infantería No.. 5. En Santo .. Domingo permanecieron Jos despojos mortales alrededor dedos lustros, trasládándoles fuego, al mausoleo de la familia Góngora del Cementerio General, Agueda Vizcárra vda. de Ariqulo •...

Al cumplirse el centenario de la muerte de Nieto, por Decreto Supremo de 15 de Febrero de 1944 se dispuso la erección por el Gobierno de un mausoleo en el punto de Saneara llamado "Alto de Yunguyo" cumpliéndose la disposición testamentaria del cau-: dillo rnoquequano, y además; -Iacolocacián deuna placa metálica . en el Panteón de los Próceres. Incumplidos los propósitosquberna­tivos enunciados, el 24 de Diciembre de 1954, se expidió la Reso­lución Legislativa 1\10. 12177, declarando "Prócer de la Indepen­dencia Nacional; al Mariscal Domingo Nieto y Marquéz, vencedor de las batallas de Jun ín y Avacucho" y autorizando al Poder Ejecu­tivo, a la traslación de los restos mortales correspondientes. Cabe anotarse, que el quincenario "Juventud" que se editaba en Moque­gua, desde su primer número del 12 de Octubre de 1930 hasta el último dé 3 de Abril de 1932, insertó en suspáginascqQ-catácter de 11 Permanente", el reclamo de ese órgano period Istico, para la traslación de los restos de Nieto álPanteón de los Próceres..

En marzo de 1963, el Jefe del B.1. San Pablo No. 4L Tnte.Crnl Justo Arias Aragüez en representación del Ministro de Guerra, soli­citó á César B. 'Chocano, Presldentede la Beneflciencia Pública de IVloquegua,la entrega de los restos de Nieto, laque se realizó en re­rernonia especial el 31def\llarzo de 1963, en la misma necrópolis, con sendos discursos de ambas autoridades y mediante acta con auto de fe del Notario Público Dr. Vidal Barrera Salas. Con acom­pañamiento de la oficialidad y tropa y conducidos en una cureña de cañón, los-restos de Nieto fueron objeto de un emotivo acto re­ligioso en Jalglesia de Belén, desde donde llevados en hombros de elementos vi§ibles de la localidad hasta el aeropuerto y con.hono­resmilitares fueron despedidos por el Alcalde Julio RiscoLópez.

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En el aeropuerto de la Corpac en Lima, a las oncede larnañarra del 10. de Abril, fueron recepcionados dichos restos porJefes y Oficiales del Ejército rindiéndoles 'honores un destacamento dél Regimiento HÚsares de Junín y la banda del Centro de Instrucción Militar del Perú. Conducido el ataúd del prócer, cubierto con la bandera naeionalen una cureña de cañón tirada por cuatro caba­llos y seguidos del Regimiento Escolta "Mariscal Nieto" al Panteón de los Próceres, se ofició en este lugar una misa-de cuerpo presen­te por Monseñor Felipe Santiago .Herrnoza.i.Vicario General Cas­trense.

Hlzoentreqa de los restos a nombre del pueblo.moquequano, el Dr. Manuel G. Abastos, recibiéndololosa nombre del Ejército el Comandante General, Hodolfo Belaúnde. También hicieron uso de la palabra varios oradores. Concurrrieronal acto los Copresidentes de la Junta lVIilitar dé Gobierno, Generales Isaac L1ndley y Pedro Vargas Prada y Vicealmirante Francisco Torres Mattos, Jefes y Ofi­ciales del Ejército y parientes del prócer. Unidades de las Fuerzas Armadas presentaron armas cuando elataúd. era .llevado en hom­bros de" seis oficiales del Regimiento Húsares de Junín al' nicho que se le había destinado en el Panteón de los Próceres, en donde permoctó una guardia durante el día. Con el toque de silencio por un corneta que llevó a un- recogimiento patriótico de los presen­

. tes dejó cumplida al Perú una deuda Que durante 119 años tenía. contraída con el. Mariscal de Agua Sante,cuya vida puede exibir- I

se CInte las generaciones como una enseñanza y un ejemplo: en­señanza de valor, abnegación y arrogancia; y ejemplo de entereza, desinterés y moralidad, virtudes que pueden constituir una recta trayectoria de emulación para todo peruano, encuvo pecho siem­pre debe latir palpitante v encendido el amor a la Patria.

4.-LAANARQUIADEl842 y LA BATALLA DESAN ANTONIO

000000000000000

El Congreso de Huancayo que había dado en forma provisoria la Presidenciá del Perú al General Agustín Gamarra, dispuso la elec­ción del Presidente de la República por los.Colegios Electorales, los que en Julio de 183910 ratificaron como mandatario del país.

Gamarra desde su triunfo sobre,Santa Cruz, victoria que deter­minóla disolución de la Confederaéión Perú-Boliviana, abrigaba propósitos expansivos hacia el Norte, y princlpalrnente por el Sur,

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sobre 6QJivi~,territorio que invadió vterrnínó.en el desastre y su muerte en Ingavi,el 18 de Noviembre de 1841, impulsando esta derrotaperuaná.a los bolivianos a invadir a su vez él Sur del Perú: Puno, Moquegua,Tacna, Arica y Tarapacá y partedelCuzco,

Al ausentarse Gamarra por su campaña a Bolivia, dejó la Presi­denciaa Iv1anuell'Jlenéndez, a quien correspondía ocuparla como Presidente del Consejo de Estado, Y muerto-Gamarra, i\II.enéndez tuvo ante sí, la invasiónholiviana del Sur, losplanes de los pros­critos peruanos en el Ecuador y las ambiciones expansionistasde ese país abrigadas por su Presidente, el General Juan José Flores que habfahecho ya ese intento.vfracasando con Colombia y que ahora, las pretendía sobre el Perú, reclamando las provincias pe­

. ruanas de 'Jaén ylVlafnas, pretensiones a las que no eran ajenas las intrigas de'Santa Cruz; expatriado en ese país. .

Para conjurar el peligro boliviano, se había forniado"el ejército del. Sur" al' marido del GerieralAiítohio Gutiérrez de la Fuente, que no llegó a combatir con los bolivianos y ante la amenza ecua­toriana; se consideró necesaria la. formación de "el ejército, del Norte" a cargo del General JuanCrisóstorno Tarrico.

Firmada la paz con Bolivia el 7 de Junio de 1842; la anarquía, los pronunciamientos militares y la guerra civil en este año, pusie­ron en serio peligro la estabilidad de la República por la ambición por el poder que inquietaba a algunos generales peruanos. Surgie­ron rivalidades entre los jefes de los dos ejércitos, del sur y del nor­te, entre la Fuente y Tarrico, pues éste estando en Limadificul­taba el aprovisionamiento y manutención del ejército sureño, en donde, por otro lado, no todos los jefes de las guarniclorres, sé mostraban muy adictos a La Fuente.' El .General Manuel Igna­cio Vivanco que había regresado de dolivia se adueñó de. Are­quipa,desconociendo tanto la autoridad de la Fuente como del Gobierno de Lima, y en Tacna, el Prefecto, Coronel Manuel de . Mendiburu, se atenía a-cumplir sólo lo dispuesto por el Gobierno de Menéndez.

• e _ • _._

. Despreocupándose deBollvia, araíz del tratado de paz firmado en Puno, el Ministro de Guerra de ¡iIlenéndez, Raygado, dispuso que los Generales .Gutiérrez de la Fuente y San Hornán, marcha­ran sobre Arequipa a someter a Vivanco, disposición .que el prime­ro de los generales no acató, mientras San Romándefeccionando del ejército del Sur V eliminando a los oficiales partidarios de' La Fuente, se dirigió de Lampa a Lima para unirse a TorrlcovGu­

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tié~rez de la Fuente, viendo disminu ída su autoridad sobre un ejér­cito que se desmernbraba, dimitió el mando delejércitodelSur: ante Una Junta. qeJefes, dimisión que no fue aceptada y. un mes después, el 28 de Julio de 1842; se firmaba en efCuzco una acta desconociendo la autoridad' de Menéndez, aducién­dose que. el, Presidente estaba sometido -a la autoridad de Torrico. y pOcosdíasdespués hacía lo propio 'Tórrico afirrnandoIocon­trario, esto es, que Menéndez favorecía con su apoyo a La Fuente.

Para atraersaa Vivanco en Are_qujpª Gutiérrezdela FlJ(~ntele dió la Prefectura de esedepartamento y el grado de General, rnierr­trasque Mendiburu fiel a la autoridad constltuclortalse dirig ía de Tacna a lima. El General Gutiérrez de la' Fuente marchó sobre Tacna a-donde había llegado eL General Ramón Castilla que en Santa Ci"Úz,en Bolivia, habfasufrido un larqocautlverlodespués del desastrede Inqavl. Para resistir a La Fuente, los hacendados y principa les dé Tacna rogaron a Castilla se hiciera-cargo de ladefen­sa de la ciudad, petición que deneqadaen un principio, fue acepta­da finalménteporel soldado tarapaqueño con el compromiso de orqanlzarsev defender a r'Jlenéndez V'con ello al orderrconstitucio­nal, Las fuerzas tacneñasconstitu ídaspor una buena cornpañfade cazadores a órdenes del Coronel Salaverry y ademáscon unacom­pañía de granaderos y otra dé caballería, ambas formadas por civi­les y campesinos, a IQS que se sumaron algunos españoles residen­tes en Tacna, derrotaron a las fuerzas de La Fuente el 22 de Se­tiembrede1842. •. ",'

Con la euforia del triunfo,' Castilla con sus fuerzas se apoderó sin resistenciaríe lVIoquegua,que siendo vivanquista, estaba por tanto, del lado de La Fuente. Para LulsAlavza y Paz Soldán: "Los rnoquequanos que siempre abrigaron emulaciones de campanarios. con los .tacneñoaaperclbiéronse Para expulsara sus tropas corno si" " se tratará de enemigos mortales; pero tenfanrazón. ¿Cómo iba á tolerar Moquequa que Tacna hollasesusuelo, vrnenos viniendo con los humos de su victoria sobre La Fuente?, y además, a exigir alpueblo doce mil pesos para.sostenersus tropas?".' '

" Castilla una vez en la ciudad, instaló-á la cornpañfa-decazádores en la cárcel y a los granaderos a un costado de la plaza; posible­mente en la casa contigua a la cárcel, mientras la caballería se estacionaba en La Alameda (Plaza ,de· los Héroes). Ante íos 'movl­rnlentosdeCastllla-unjoven arrieró José Beltrán reunió a29 pai­sanos quedesdeSamegua.marcharonsobreMoquegua,arma,qos de carabinas, fusiles municiones y también dinero, todo loéuéfúe proporcionado por un grupo de notables de la ciudad: Bernardo

115 •

R(os, Tadeo. Ordóñez, Mariano· Flores, Lorenzo de la Flor, Anto­nio Tapia, Cayetano Durand, Pedro Flores, Antonio Yáñez, Pedro Portocarrero, Felipe Mazuelos y Pedro Góngora, entré otros.'

Con la estrategia que el sentido común Impuso, los rnoquequa­nos trataron ylo consiguieron sitiar a los tacneños, impidiendo su salida de los cuarteles, pues, en una escarmuzacallejera encontrán­dose los moqueguanos en inferioridad numérica notable, deficien­tementearmados y muchos de ellos con desconocimiento del arma que portaban" hubieran ten ido una derrota aplastante; Ya lafina­lidad .propuesta, siete moqueguanos por la esquina. de La Matriz;

. en la calle Ancashronce en la otra esquina en Tacna.y nueve en la esquina de Santo Domingo, iniciaron el ataque a los/cuarteles, su; mándese a los atacantes otros 33 civiles, mientras que once, entre ellos' comisionados de Samegua, Estuquiña, Yaquav y Charsaqua, hostilizaban a la caballería en La Alameda,impidiendoqueacudie­ra en auxilio de los sitiados. Un total de}3moqueguanos, de los que cuatro fueron muertos y tres heridos batieron a las fuerzas de Castilla, qué invitado a almorzar en casa del Cura Valdez, algo alejada de la Plaza, al iniciarse la lucha tomando su espada, se di­rigió al lugar del combate acompañado de cuatro de sus asistentes, dos de los cuales fueron muertos en el trayecto, Según el deán Valdivia, "Un balazo le llevó un bocado de la espada;otro le quitó la charretera izquierda; otro le horadó la charretera derecha y le hirió el hombro". De la cárcel un oficial retiró una parte de los cazadores, no pudiendo hacerlo sino con unos cuantos soldados.

En elotro cuartel, los granaderos no pudieron abrirle la puerta a Castilla, pues se les había trancado, por lo que el Generalesqui­vando las balasde los rnoquequanos .tuvo que retirarse a pie hasta LaAlame.da, en donde lo esperaba la caballerfa con su Comandan­te Castañón. En su retirada hacia "EI Portillo" encontró a su ene­migo NicólésJaclntoChocano, quien en un gesto de caballerosidad quiso prestar ayuda al 'vencido y cediéndole su cabalgadura, ledi­jo: "En la alforja hay fiambre, vino y cien pesosfuertesquepue­den serlede utilidad en el camino".

'. .

A raíz de esta acción librada el 29 de Setiembre de 1842; los moqueguanos tornaron prisioneros ala compañía íntegra de grana­deros, la de cazadores bastantedisminu ída por los muertos que tuvieron y a los tacneños que vinieroncon Castilla. Todos los pri­sioneros fueron tratados consulna amabilidad por sus captores.

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"Desde entonces-e-como 'dice el deánNaldivia-Castilla y los mo­queguanossin odiarse,se respetaron recíprocamente el alfo qrado".

A poco de los acontecido en i'JIoquegua,Puno y Cuzco se pro­nunciaron por Tarrico, defeccionando del ejército de La Fuente, quien se dirigió al Norte para unirse al General JoséFrancisco Vi­dal que en Lirnaestabaa cargo del ejército. Por su parte, Tarrico marchaba deLirna a Jauja para unirse a San Hornán, De Ayacucho, Tarrico' sin aceptar la propuesta que por comunicación le hacía Vi­dal para suspender las hosti lidades,regresó a' Lima, ante el temor de que los contrarios se apoderaran de la Capital, pues, Vidal que se encontraba en lea recibió el refuerzo del General La Fuente que había vuelto de Tacna después de su derrota porCasti lla, Antes del encuentro de las fuerzas Rivales Vida] - Tarrico, éste envió a aquél emisarios con proposiciones ventajosas, lo mismo que a Nieto que comandaba las fuerzas de Vidal, sin que unoniotro las acataran. El choque tuvo lugar enAgua Santa, cercade lea, el 17 de Octubre de 1842, resultando I\lieto herido en una mano. De esta batalla, re­lata Basadre, que iniciada la refriega, Nieto mandó al ataque al Co­mandante Fermín Castillo, respondiendo éste que "se le mandaba avanzar contra una división", ya que las fuerzas de Tarrico eran muy superiores en número y armamento." Llamaré a un sargento" fue la respuesta de Nieto, la misma que aguijoneando elamor.pro­pio del Comandante. Castillo, lo lievó al ataque que contribúvó en forma decisiva a la victoria, 1,

Con el 'triunfo de Agua Santa, Nieto fue ascendido a Mariscal de los Ejércitos del Perú y Vidal entró triunfante con sus tropas a Lima. Por oficio se dirigió a Justo Figuerola, PrimerVicepresiden­te del Consejo. de Estado, para. entregarle la Presidencia,ofreci­miento que por su salud no aceptó Figuerola, quedándose Vidal como mandatario, cargo que le correspond ía en su condición de Segundo Vicepresidente del Consejo de Estado. .

. .

Corría el mes de Enero de 1843.Vidal receloso de Vivanco que dominaba el Sur, lo hizo Ministro de Guerra y iVlarina, a Nieto Pre­fecto del Departarnento-de lVIoquegua con facultades extraordina­rlasenrodoei.Surval General Alejandro Deustua, Prefecto de Are­quipa, '. Conspirando los amigos de Vivanco que se hallaba en el Cuzco, consiguieron el pronunciamiento de la guarnición de Are­quipa, en donde Vivanco gozaba de gran popularidad. Nieto que se hallaba en esa ciudad fue apresado-el 28 de Enero de 1843, por laque se encontró resistencias en Moquegua para plegarse almovi­mientoque se extendía por el Sur. En Lima, Vidal dejó el.mando

117

ajusto Figuerolaque esta vez silo recibióorganizandó unqabine­te del que formaban parte como amantes del ordenamiento legal y de la Constitución Ramón Castilla y Manuel de Mendiburu. El 14 de Febrero, Vivancose proclamó DirectorSupremo de la República y como la corriente revolucionarla llegara también ala Capital.se derribó el gobie,rnodeFiguerola,ocupando Urna, el 27 de IVJarzo el>GeneralJuan AntonioPezet, que regresando de Jauja.a donde había sido enviado para combatirIa revolución, se sumó también a ella, reconociendo a.Vlvanco como Director . Días después el7 de .Abril, ingresó Vivancotriunfanteala Capital. '. .

I\lieto, Castilla¡ Meridiburu , La-Fuente y otros militares que no comulgaban con las'asonadas, ni ·mucho menos-se prestarían a dar cumplimiento al Decreto expedido por Vlvanco, exigiendo atodas, las' autoridades, empleados y dependientes delqoblerno.a jurar. ' " por Dios y por la Patria, obediencia' al Supremo Director, Se diri­gieron .alsur para fomentaruna nueva revolución, levantando ban­deraspor la Constitución. Basadrehace conocer losafanes-de con­jura de las esposas de los generalés enemigos de Vlvanco. DeSCU­biertas,' María Asunción Sol ís, dama chiclayana, esposa-de Nieto que estabaenclnta.rfuecondenada a ebandonarel país, inmedia­tamente déspuésdelparto.La señora Francisca Diez Canseco, es­posede Castilla, fraguó "la-cónspiraciónde las sortijas negras"; porque los complotadosdebfan-reconocerse usando Un anillo con una piedra de ese color. Comprometidosdosofieial~sdelaguardia presidencial, elTeniente Coronel Lastres y el Capitán Verástegui, y descubierta la consplraclón.cpordelación, los dos oficiales, pesea todas las súplicas que en su favor sehicieron fueron ejecutadosen la Plaza de Armas de Lima y la señora.de Castillaeondenada a ocho años dedestterro.rreeluvéndola mientras tanto en su propio dómicillo, bajo vigilancia que Francisca se ingenió dé burlar dis­frazándose, huvendolueqo para reunirse asu esposo.

•Los generales rebeldes desembarcaron eh Arica y avanzando

sobre Taéna, endonde fVlendibüru ten fa. bien ganado prestigio, Nieto Vi Castilla' el 29 de Agosto de 1843, librancombateenPa­chíaéontra500 hombres del- ejército de Vivanco,comandados , por el Coronel Juan Francisco Balta, derrotándolos. Avanzan luego sobre Moquegtia y agrupando á 300 soldados y 1,100 mi­Iiclános,':a.los que se suman varios jóvenes rnoquequanos, y .reci­biéndozontlnuaavudade .laciudad que contribuye al raciona­miento diario de la tropa.v.. . .,; se aprestan a resistir el ataque del, General fVlanuelde la Guarda; IVlinistrodeGuerraque Vivanco ha­bía despachado con 2,800 hombres para derrotara los insurgentes.

118 - '

Después de un asedio de 28 d ías, por los qobiernistas, se libra la batalla dé San Antonio en Moquegua,ef 28 dé Octubre de 1843, con la aplastante derrota de los vivanquistas que por su superiori­dad ten ían descontanda su victoria, en todos los círculos allegados dad ten randesccntada su vlctoría, en todos los círculos allegados al Dlrector., TriunfanteIa revolución en todo el-Sur: Moquegua, Tacna.Aríca, Tarapacá v.elCuzco.seforrna la "Suprema-Junta-de Gobierno Provisorio de los Departamentos Libres"cuya Presiden: cia la ejerce Nietohasta eldía de su muerte en la Capital Imperial, el 17 de Febrerode 1844." . .' , .''Ó'Ó,

LOSBEcLERMPSYLOS PAMPE¡\JOS .". -: ', . .. La campaña que en fllloquegua,llevaron juntos Nieto v.Castilla,

borraron en los rnoquequanos lasquisqui llosidades vresentlrnien­tos que sentían hacia el qeneraltarapaqueño, a causa de su actitud cuando al frente de fuerzas organizadas y constitu (das por.tacne­ños, ocuparon fVIoquegua, después del triunfo que obtuviera en Tacna sobre las tropas de la Fuente, ocupación enlaque.los civiles moqueguanos, defendiendo su suelo ."zurraron la badanoal ata­cante y a sus veteranos",palizaque no dejó múy bienparado el prestigio yamor propio del ingenioso y bizarro general. . ' .

···Y. fueron también las operaciones originadas por lainsurgéncia del' Sljr contra Viyarico,'que,deterrhinaron la derrotade las tropas vivariquistaspor Nieto y Castilla, en la batalladeSanAntonlo, en L~oqu~guay cuya consecuericlá InmedlatafueIa 'formación de la "Suprema Junta de Gobierno de los DepartarnentosLibres'Llas qúedesvincularonca losmoquegué!nos en su partidarismopor Vivanco.rvaquaera profundo el respeto y admiración que sen­tían por el Mariscal de Agua Santa. Aquellaprelacíón de?el pariente yelpaisano antes que cualquier otro "que-muchasve­ces no tiene vigencia ni aplicación,estavezjsí la tuvo con Nieto, en: cuanto al .paisanaje, por cuantosus codepartamentanos-se en­tregaronala causa en que Nieto y Castilla se había empeñado, de­jandode lado a Vivanco,caudillo cuya fama de atractivo, valiente de finas maneras y expresiones cultas con"la cabeza y el corazón de un héroe", conquistó ei fervor deIesarequlpeños de su socie­dad .y de sus mujeres, llegando su simpatía también a Moquegua. y muerto Nieto que habraurildoalosmoquequáhós eh torno a su persona.ameritada porsus-campeñes.irevlvtó.en muchoseseter- .

, vor.que antes sentían .hacia Vivanco,como 16 revela la siguiente carta dirigida a un arnlqo.de Iquique por el vlvanquista Joaquín Guerra, 'Comandante de la goleta "Alerta"que con otros buques bloqueaban Jos' puertos.delquiquey Arica, enelpropósito qobier­

119 .'

nlsta de impedir la ayuda de todo refuerzóv auxi Iio a la Junta de Gobierno Provisorio. . .

.' Desde .eseépoca; o tal vez antes; datan las expresiones de "BELERMOS" como se dióen llamara -losque vivtan de la Plaza hacia Belén y los "PAMPEÑOS"alos que motaban de la Plaza hacia ~'ELPortillo",antesdel cual, es probable no hLtbierailmuchas viviendas ysf un descampado o pampa, en esos tiempos.

Dicha comunicación, en parte dice: "Abordo de la "Alerta" 11 "de Mayo de 1844: .... El 28 del 'pasadO (Abril) a pesar de los "muchos repiques y funciones de toda clase que tuvieron lugar "en Moquegua a consecuencia del triunfo del General Castilla so­"breel ejércitodel Director (Vlvanco) seqún Ias comunicaciones "remitidas de Puno por Cisneros.icasl tiene Jugaren dicha dudad' 'una revolución o .más bien diré una batallaentre los belermltas y "los de la pampa. Los segundos se hallaban en preparativos para "pronunciarse' por el General VlvancoperuJuan de la Sorra de" "nunci6a los demás comprendidos y todo se desconcertó. EItaI "Juan de la Sorra, un cholo de los cabecíllas que dirigen la rnulti­"tud debla ponerse. a la cabeza de la plebe, pero se ha quedado "siempre dividido el pueblo;··Los belermitas estánpor La Fuente, "Castilla y Compañía y los pampeños por el Director (Vivanéo), "de.rnodoque si éste consigue alguna ventaja sobre Castilla, aun­

. "C1uenosea untriunfodecisivo~seprom.inéia.Moquegua a su "favor: A consecuencia del pronunciamiento que se premeditaba

. "ha sido preso el Coronel Balta (Juan Francisco) y de los vecinos "más visibles, dos de los Cabello, uno o dos de los Alayza y otros "más cuyos nombresiqnorarnos, El Subprefecto Barrios Valois ha , "estado temblando; inmediatamente mandó unpropio a Iguafn "(Prefecto) a Tacna llamándolo, pero éste le contestó quesusocu­"pacionesno le permitían moverse. que le mandase todos lospre­"sos con su barra de grillos" lo que no dudo que habré cumplido "al pie de la letra, asf como ha expulsado atodos los arequípeños "que resldfan allf",

Después de la tremenda catástrofe del terremoto del 13 de Agosto de 1868, que significó pérdidas de vidas, propiedades, bie­nes y la ruina.total de Moquegua, devino la tranquilidad, caracte­rfstica envidiable de la siempre soleada tierra moqueguana, hasta que ella fue turbada nuevamente cuando ello. de Noviembre de 1874, Nicolás de Piérolaenun débil barquichuelo "EITalismán", conseguido en Chile con armas y gente, comenzó a desembarcar

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en Pacocha en la noche de ese día y apresurando sus operaciones al· avistar al día siguiente el Huáscar que el gobierno hab ía en­viado en su . busca, emprendieron viaje por trena Moquegua quedando el puerto de 110 en . poder de Grau, después de su breve ocupación porlosrebeldes. En i\tloquegua, Piérolaconlaco­íaboración del vecindario que desde entonces le fue adicto y cómo hombre que sabe montar a caballo, organizó montoneras que su­madas a Sus propias fuerzas, ten ía como propósito derrocara I Pre­sidente I\l\anuel Pardo.' En el "Alto de la Villa", se proclamó Piéro­la Jefe de la República y nombró Prefecto de Moquequa a Julio César Chocano. Pardo que hab Ia conseguido la aprobación de ti n- . cornillones desoles por el Congreso para combatir la revolución, se embarcó en el Callao con algunos batallones y cuatro piezas de artillería y lIegapdo por j,10llendo a Arequipa, firmó en este lugar él Decreto encarqando-laPresidéncia dela República duran­te su ausencia¡ a lVIanuelCostas.Piérola y sus leales ante íaapro­ximaciónde los gobiernistas, ocuparon "Los Angeles", mientras Pardo que había llegado alVloquegua, desde Charsaqua, dispuso se sitiara a los insurgentes. En el combate librado el 7 de Diciembre, los gobiernistas perdieron 10 hombres y tuvieron 25 ó 30 heridos, pero el jefe leal, Contralmirante. Lizardo Montero logró quebrar la resistencia de los rebeldes que rindiéndose perdieron armas yper­trechos. Piérola, su Comandante Andrés Segura y otros, lograron huir hacia Torata y de allí a Puquina, paradirigirseluegoaAre­quipa, en donde librado. el combate de Paucarpata Piérola.v sus adictos sufrieron una nueva derrota' con gr.an desaliento· de sus parciales, asiJándoseel jefe rebelde y.algunos desuspartidarios en Bolivia, En Tarapacá, GregorioAlbarracfn que había orqani­zado .una montonera-fue derrotado igualmente por el Prefecto. de esa localidad. Jactancioso el Presidente Pardo, en una proclama dirigldaal ejército y a la marina, se vanagloriaba de haber puesto fin alarevolución en 37 días.

Cinco años de paz para Moquegua. . Año luctuoso que 'siempre 'recordará el Perú: 1879.. La guerra con Chile y cuatro ocupaciones del suelo moquequano que le deja~ roru''sanqre, dolor, y lágrimas" , saqueos, pillaje, incendios en el va­lle, haciendas y bodegas destrufdas, cupo, desmanes de la solda­desca invasora y también la exaltación del temple de sus hombres y mujeres, valientes, altivos y dignos ante la adversidad, y luego, finalizada la contienda, la desconcertante pobreza que se enseño­reó de esta tierra por muchos e interminables años.

Una nueva intervencióhde las guerrillas moqueguanasque por segunda vez formó Piérola, esta vez con la colaboración delCo­~

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mandante Eduardo Yessup, tuvo el propósito de secundar larevo­lución encabezada en el Sur por "El Califa", con el propósito de . derrocar.al General Andrés Avelino Cáceres, en su segundo pedo­do gubernativo. En el combate librado el 27 de Enero de 1895 en Torata, entre pierolistas y caceristas, encontró la muerte el guerri­llero pierolista Juan Luis PachecodeCéspedes, ':E I Cubano". Mo­quequa, Torata y Faena, .recordarán siempre al personaje cubano que en su idealismo por las causas que abrazó, tejió una leyenda de

. audacia y valentía al frente de sus querrillas, por su bizarro accie­narde hostigamiento a las huestes invasoras durante la guerra con Chile. Sus restos . reposan enel Cementerio General Agueda Vizca­,rra vda, de Anqulode lVioquegua, en tumba que en homenaje de admiración le dedicó el F1egimiento de Caballería "Húsares deJunín". . . , .

.y desde aquellos días; intrascendente ha sido la participación política de Moquegua en el acontecer nacional. Empero, no ha ha­bidomuro de contención a sus arrestos lmpetuosos.vcuando en ocasiones ha pospuesto sus diferencias, para hacer frente a algún enemigo, amenaza o peligro. Así ocurrió, cuando un paro general, paralizó las actividades de la tranquila ciudad durante varios dras, a fines de Abril y en los primeros días de hilayo de 1973, ante el anunciodalcierre de su EscuélaNorrnalvelreclarno insatisfecho d~algunas de sus. ap,remiante~ neeesidades-Err esa ¡<:ircunst?r'lcia, ni las bombas.íecrirnóqenasrniel temor-a la descarga Irreflexiva de las metralletas de la:Guardiade Asalto, pudieron contrarrestar las

. viriles' y agresivas jugarretas de la juventud moquequana, querevi­vieron los ímpetus combativos, de sus antepasados. Y muchos años antes, en las últimas décadas del siglo pasado y primeros lus­tros del siglo. actual hicieron nuevamente. noticia ·Iosenfrenta~ mientos de" Los Pampeños" y "Los Belerrnos": con hondas corno arma y piedras como munición, teniendo comoescenario.de.sus

, contiendas, las faldas de los cerros "Ouarf", "Chenchén", "E lPor­tillo" y "El Calvario". En ciertaoc~sión,)a fuerza pública quiso impedir el combate tradicional que en sábados, domingos o.d ías

" festivos, realizaban los.dosbandoscontricantes, pero ante la mter­vención de.Ios.qendermes, las dos facciones en lucha, olvidando. su rivalidad, se un ieron pararechazarloscon sus primitivas armas¡ de­jando a más de un custodio del orden-sanqrande.por sus heridas. El Prefecto de Moquegua,Justo Pastor Dávila (1888-1890) que con arrojo y valentfc.Jnterviniera-en las batallas de San Francisco, Ta­rapacá, Alto de la Alianza, San Juanv i'Jliraflores, presenciando en una oportunidad, uno de esos enfrentamientos, olvidando el desa­cato a su.autoridadvrecordando queéltambiénhabfa nacido y luchado en f\tloquegua, al ver la arremetida de los representantes de

.122

la. ley y el contundente . rechazo que sufrieron por las huestes.ju­veniles, que se sintió impulsado a exclamar, ante la sorpresa de quienes-lorodeaban. ..

¡Esos .... esos .... son los moqueguanos! Exclamaciónque sintetiza el valor de quienes en cuanta ocasión

seha presentado,_ han dado gloria al Perú y colmado de orgullo las páginas, muchas de ellas olvidadas odesconocidélsdela historia rnoquéquana, . ... - ­

. . -. - ..' . o,: .... (. :~. . . .' -- - : _.

5.-'-ELTERREMOTODEL 13 DE AGOSTO DEl8'68

"e oo o o oó ó oooo

. Las siguientes comunicaciones evidencian en toda su __ dolorosa magnitud;.laterribJe tragedia que f'J1oquegua,

y los diferentes pueblos del Sur del Perú; vivieron en la lamentable hecatombre del 13 de Agosto de 1868.

Extractos de los telegramas cursados por las autoridades rlel Sur, -al Supremo Gobierno al día siguieDlte'de latragedia.,.

De Arequipa se sabeqüetodas las casas se han-cafdo.iOuando principió el movlmierrto se obscureció la atrnósfefasse secaron las aguas yprincip.iaron a' derrumbarse las bóvedas de los edlficios. Los cauces de aguase secaron. La gente huyó a.los camposvecí nos pereciendo muchos en eL tránsito. La· destrucción fue total, sólo quedaron de pié algunas casas de madera fuera de Ia.poblaclón, Esto en cuanto a Arequipa. .

. .,"... "._:" .,- "" . -' :", '. .

. En Moquegu'aprincipiÓ el terremoto_alas4.45p.ITl.,derrum­bandola mayor- parte de los edificios _y enterrando en susesco m­brosa muchos de sus habitantes.· Los' pobladores se retiraron a las faldas del cerro deChechén. donde-han formado una población provisional. En 110, se ha salidoeLmar hasta el Pante6nViejoenla primera inundación, y en la segunda una milla másadelante,pere­ciendo en el puerto la familia de un señor Gambetta que estaba a bordo de la goleta "Josefina"..

En Arica el terremoto fuea la misma hora y redujo a escombros la mitad por la inundación y .la otra mitad por el terremoto. La Aduana fue el último edificio que cayó. El "Wateree" barco de guerra de -los Estados Unidos quedaba encallado a una milla de la pla~.La "América" está .en LaChirnba. La. isla de Alacrán fuecu­

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bierta tres veces por el mar. En Pisagua tres buques 'fueron perdi­dos, todas las casas del muelle de la población fueron destru ídas. De Iquique se dice que la destrucción y la pérdida devidasha sido inmensa. En general en toda la costa se ha notado que el agua del mar era cenicienta.

Enislay subió' el mar cuare~ta pies yendo al qarete.tcdoslos bu­ques que al! í se' encontraban incluso uno que estaba atracado al muelle. No hubo pérdida de ninguno de ellos ni tampoco desgra­cias de vidas, Después deftemporal volvieron a .sus fondeaderos.

En Mejillones la inundación se llevó todos los rieles y durmien­tes que había para el ferrocarril.

En todaslas poblaciones se carecía completamente.de víveres y aguay hab íafalta de ropa.

Chala completamente destru ído.

El vapor"Perú" ha tra ídomuchos de los heridos de la Corbeta "América". Los pasajeros son numerosos y ha traído gratuitamen­te a muchos. Es.indudable queel temblor ha sido ocasionado en el interior, sin embargo muchos creen que ha sido consecuencia de erupciones subterráneas del Misti; pues, en Cobija .el:movimiento no ha sido notable; Se dice de Arequipa que la mortandad no ha sido mucha. La fuerza de línea seocu paba en desenterrar y ente­rrar muertos.

La corbeta peruana "América", el barco de guerra americano, "Wateree", los buques "ChañarciHo". inglés, y americanos 11 Rosa Rivera"y"Regalón" se perdieron completamente. Dela"Améri­

. ca" fallecieron su Comandante, Capitán de Cerbera Mariano A. Reyes, los Alfereces de Fragata, Carlos Herrera y Demetrio Ferrey­ros 'y él Cirujano lVIanuel Román.y3G individuos de la marinería. Muchos resultaron heridos. .

TEXTO DE UNA CARTA

ív'loquegua, 15 de Agosto de 1868

Mi'Querido amigo:

El día 13a las cinco y cuarto de la tarde principió un terremoto

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espantoso- que duró cinco 0. seis minutos (Una.comunicaclónde Tacna dice que .duró 7 .y11:2 minutos). Sólo lamisericordia de Dios pudo habernos salvado en el patio exteriorde la casa¡y víen­do caer las paredes por todas partes, toda la población ha quedado en escombros; las cuatro iglesias han ca ído y presentatodaesta ciudad el aspecto de desolación más espantoso; ha habido muchos muertos, particularmente niños que a esa hora salían de la escuela.

, '.' . Todos nosotros estamos en las faldas del Chenchén; las demás .

familias están por aquí yen los alfalfares; estamos llenos de eluda­do por. tí, pues tememos que hasta Lima haya ocasionado también algunas desgracias el temblor. .

En la Rinconada no hay una sola casa ni bodega en pié; en casa sólo dos tinajas han quedado con aguardiente y la casa también se ha venido al suelo. Dios nosrnire con misericordia; no tengas ciu­dado por nosotros, toda nuestra familia ha escapado y tenemos buena salud.

Mucho ruego a Dios quena hayan sufrido nada y que recibas en buena salud, esta carta y un abrazo.

Tu amigo M.Z. de R.

COMUNICACION DE TORATA Comandancia General de la Primera División.

Torata, 15 de, Agosto de 1868,

Sr. General Jefe de E.M.G. del Ejército . Sr.G.

A las cinco de la tarde del día 13 del pte. hubo un fuerteterre­moto que duró más de doce minutos y destruyó el-templo yla ma- _ yorparte de las habitaciones de esta población y las que quedan en pié amenazan ruina. Los temblores no han cesado pues se habrán repetido más de seiscientos.

La fuerza se ha salvado completamente y existe acantonada en la plaza, porque se destruyeron IQs cuarteles que ocupó, La mayor parte de los rifles que no pudieron salvarse en el momento del con: fticto, seballhecho pedazos porque cayeron encima las paredes.

Lo admirable o notable, es que a pesar de esta horrible catástro­fe no ha habido una sola pérdida de vida ni en el pueblo ni en- la

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tuerza-Sinetnbarqo, se contristaelrnás fuerte-al Ver el cuadro las­'tirneroqae-ofreceesta poblaciÓn pues la mavorparté de sus habi­tantes no tienen más casa que la plaza. ' , .

,EnMoq uequa, .ha sido mayor lo sufrido: porque han pe-recido muchas personas bajo lasrúinas que causó el terremoto. Conunje­fe he remitido cuarenta y cuatro hombres para que ayuden alSub­prefecto a desenterrar los cadáveres.

ApE:lsardequétémo quepor tavla.de' puerto de 110 no pueda llegar esta comunicación, me aventuro a dirigirla para que Us. y el Supremo Gobierno tengan conocimiento de tan triste como des­graciado acontecimiento.

.: Dios gUarde a UD. Tomás Leyseca.

INFORME DEL SUBPREFECTO DE MOQUEGUA

liJloquegua,'Agosto 14 de 1868

Mi señor General Prefecto de este Departamento,

Con .bastante sentimiento comunico a US que alas cinco de la tarde del día de ayer, se sintió un fuerte terremoto que ha destruído la mayor parte de la población; los movimientos de la

, tierra, fueron tan recios y repetidos que no ha habido casa que haya podido resistir sin Ser gravémente averiada, esto es, la que no ha sido derribada desde sus cimientos.

Lamentablemente en extremo es señor Prefecto el cuadro que presenta esta ciudad; los templos, hospital y colegio todo queda derribado,' lncluso el reloj público. Las bodegas de las haciendas han tenido igual suerte y los licores que corítenían,hancorrido por el campo. Las pérdidas que nosha'ocasionadolacatástrofede que doy parte a USo son de pronto incalculables, y muchos años pasarán sin poder recuperarse; nótanse igualmente en el comercio perjuicios de granconsideracion, pues casi todas las tiendas en su desploma han cubierto y destrozado los artículos que contenían.

Respecto a las víctimas que se lamente, no es posible por ahora fijar el número de las que habrían perecido en las casas derribadas, pues no existiendo en la policía una fuerza competente, no se ha podido levantar los escombros, además de que los movimientos de

• 126

"

'

tierra hasta ahora mismo se repiten amenazándonosmayor ruina, y en lo poco que se han.levantado los escombros, se han encontrado cuarenta y tantos cadáveres entre. hombres, mujeres y niños, y de temor se)halla toda la gente del campo. Con el fin de desenterrar los muertos, levantarlos escombros y demoler los edificios que ofrecen peligro he oficiado al Comandante General Coronel Ley- / seca, para que me remita de Torata parte del batallón, y por el ofi­cio que de dicho Coronel adjunto a US., se impondrá de que en aquel pueblo ha ocurridoigualesdesgracias. Oífjnese pues USo si lo juzga conveniente poner esta comunicación en conocimiento del Supremo Gobierno para que se sirva exoneraraestaProvlncladel pago de la contribución predial del semestre de San Juan que lo juzgo imposible de realizar, pues hasta la fecha no se ha consegui­do su realización.

\

Dios guarde aUS.: P. O. Cores

ENVIO DE COMISIONCON PROVISIONES y DINERO PARA LOS DAMNIFICADOS DEL SUR

Lima, Aqosto 21 de 1868

Al Sargento ¡,.'layar don Francisco ~~oriega:

S.E. el Presidente se ha servido nombrar aUS. Jefe dela Comi­sión conductora de las provisiones que remite el Gobierno, para aliviar las necesidades de nuestros desqraciadoscompatrlotasdel Sur. Va con USo el señor D. Pedro Carrión en clase de Comisario, llevando la suma .. de Cuarenta rAil Pesos (40,000.00), treinta mil por cuenta del Estado y Diez mil, parte de los Cuarenta lVIil queha erogado espontáneamente y animado de los más plauslblessenti­mlentosdefilantropfa el empresario del Ferrocarril de Arequi.pa fv'lr. Meiggs. Va igualmente con USo la Comisión de Cirujanos, que forman la sección destinada pata recorrer los puertos pertenecien­tes al Departamento de Moquegua;yencuanto a todos los demás objetos y provisiones de 'comestibles que deben distribuirse en aquellos lugares, se remiten por la " Un ión".

La marcha deUS. y de todos los demás individuos que compo­nen laComisiónque preside, se verlñcaran en el buque norteame­ricano que el señor Ministro de esa Nación 1'v1r. Howey,hafran­queado al Gobierno con este objeto y cuya salida debetenerlu­gael día de hoy.

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El señor iv'Jinistrode Estado en el Despacho de Beneficencia, es el jefe general, que; autorizado suficientemente dictará todas las providencias y medidas que demanden las.circunstancias, y por consiguiente UD. estará sujeto a sus órdenes para cumplirlas y llenar de' un modo 'satisfactorio el desempeño dela importante co­misión que le ha confiado el Gobierno. .

Dios guarde a Ud. . . .: Ped ro Gálvez

. LEY DE SOCORRO PARA LAS POBLACIONES VICTIMAS DEL TERREMOTO

Él 22 de Agosto de 1868, e sea el mismo d.ia de su dación porel Congreso, el Presidente Contitucional de la República, ciudadano Jose'Balta, promulgó la siguiente ley:

Considerando: Que la situación aflictiva a que han quedado re­ducidos muchos pueblos de la República a consecuencia delterre­moto, incendios e inundaciones del 13 del corriente mes, demanda un auxilio pronto y eficaz,

Ha dado la.ley siguiente:

Se autoriza ampliamente al Poder Ejecutivo para emplear todos los medios conducentes al socorro de las poblaciones que han sido víctimas de los terremotos, incendios e inundaciones ocurridos.. dede el 13 del presente mes, debiendo dar cuenta oportunamente. al Congreso delas provindenciasque dictare.;'·· ..

, INFORME DEL SUBPREFECTO DE MOQUEGUA.·

Subprefectura de Moqúegua

Setiembre 4 de 1868

Al señor Ministro de Estado enel Despachode Gobierno, Pollcía y Obras Públicas.

- . . . .

. Cumpliendo con la indicación queme hace US.de que remita al Gobierno una razón exacta del estado da los pueblos y de los re­medios que a mljulcioseanconducentes, expongo: que se hallan en completa ruina todos los pueblos de la provincia. Principiando por esté! población, diré a USo que la mayor parte se halla reducida a escombros; los pocos edificios que existen están tan averiados que son de todo punto inhabitables, y requieren necesariamente

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dernolerse: 10scuatrotemplossehaUanderribados, comotélmbién los hospitales y el Colegio de La Libertad; la torre donde se halla-el reloj público colocado, ha sido también derribada, paro su maqui- . naria no ha sufrido mayores daños.

Los habitantes se hallan diseminados por los alrededores despo- . blados, cobijados bajo de tristes toldos, donde sufren los rigores del tiempo con exposición de la salud.

Las bodegas de las haciendas derribadassobre la vasija; han des- . trozadoésta, ocaslonando.qran pérdldadalosllcores que conte-· nían; las acequias. de regad ío, completamente obstru ídas, unas por los derrumbes de los cerros v-otras derribadas sus calzadas pri­vando de este modo del riego a sus respectivos fundos.

El comerciosehaUa paralizado y se nota carestía de víveres.

El puerto del LO ha desaparecido por completo con los olivares de su inmediación. Los pueblos de Torata, Carurnas, Omate, PU" quina y Winas (Ubinas) han sufrido también en sus habitaciones; pocas sonlas que han cardocpero todasaverladás y requieren las que han caído una formal reparación; -susternplós tarnbiénderri­bados y los caminos completamente obstru ídos por los derrumbes de los cerros, de manera que la comunicación es difícil actual­mente.

Las necesidades más apremiantes de esta poblaci6nson:dema­terialespara carpas, puesto quenohéiyhabitaciol1es útiles, y es di­fícil V casi imposible pára la mavor parte de los vecinos reedificar­las destrutdasr euxlltode 'víveres para evitar el alza de los precios enel comercio de esta plaza.

Otra necesidad urgente sobre· todas es, unbanco en esta ciudad, de donde.los propietarios, podr ían proporcionarse capitales con-un módico interés y con los que atenderfanal reparo de sus fundos y reedificación de sus casas. Esta necesidad es tan imperiosa, que si

. no se satisface, se veránen breve muchas farnlllasreducidas a la mi- .:

. seria por la desaparición de sus fundos .

'. De igual modo, es sumamente necesario'. que el Supremo G()- . bierno suministre a los hacendados un medio fácil de proporcio­narsevasijade madera, corno son toneles v cubas para depositar la próxima cosecha, como también alambiques o falcas para la desti­laciónde los vinos, de lo que actualmente todos carecen.

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Para la reedificación de esta población es menester que el Go­blernoremita madera al menor precio posible.

Oportunamente comunicaré a USo las necesidades que se vayan notando y los medios de satisfacerlas.

. Dios guarde aUS. Pedro Flores ..

DISTRIDUCIONDE LONA Y rdADERA A LOS PUEBLOS .. AFECTADOS POR EL TERREMOTO

(Fragmento) .

Lima, 21 de Setiembre de 1868

Sr. Coronel Dn. Toriblo Llosa Jefe de la Comisión al Sur.

De la lona y madera que lleva US., deberá hacer la distribución en el orden siguiente:

Para el Departamento de rVloquegua, 18 mil yardas; ya las pro- . vincias de Camaná, Lucanas, Parinacochas, Andahuavlas y ia Unión se dedicarán las 7 mil restantes.

De la madera dividiéndola en 100 partes,aplicaráUS..aAre­quipa 40 partes, a Moquegua20 partes, a Arica 10 partes y 20 par­tes a las demás provi ncias. Las 10 partes restantes de las 100 en que se ha dividido toda la madera, las aplicará USo si fuera necesa­rio a las provincias deCondesuyos y de Castilla, cuidando siempre de hacer la distribución del modo más conveniente yen concepto a las exigencias de cada pueblo.

El Gobierno espera de la prudencia y celo de USo que desempe­ñará satisfactoriamente este cargo.

Dios guarde a US: P. Gálvez

INFORME HELMINISTRO DE aENEFICIENCIA· . DE COMISION

(Fragmentos)

Ministro de Beneflciencia en Comisión

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·lV1oquegúa,Setiembre 30 de 1868

Sr, Ministro de Estadoen el Despac~o de Gobierno: . ". - ."

Procurando conocer como 10he hechoen todas partes, el estado actual de la población, espeCialmente sus establecimientos públicos he visitado desdé luego el hospital y. coleqiodeestaciudad, redu­cidos casi a escombrros, no permitiendo el actual estado de estos lugares continuar funcionando sin peligro, por los temblores que se repiten con demasiada frecuencia.

En cuanto al Colegio, su estado es tal, que es de absoluta nece- . sidad pensar en la construcción de otro nuevo, sin perjuicio de ha­cer por ahora refacciones provisionales que permitan la continua­ción de las clases, sin las que las juventud perdería el año escolar, y un tiempoen todo caso precioso. Pueblos tan adelantados como éstos, en' que la Providencia ha querido derramartosdones de la inteligencia, no pueden paralizar su movimiento científico, sin que contraiqan una seria responsabilidad losencargados de su dirección.

Parla nota que me ha pasado el señor Coronel D~ JoséG. de los Ríos, Comisionado del Gobierno y Presidente de la Junta de Auxi­lios de esta ciudad, me he informado de haberse concluído ya la distribución de los víveres que vinieron a su cargo con este des­tino, de un modo bastante satisfactorio, por cuyo. motivo dicho Jefe regresa a la Capltal.,a órdenes del Supremo Gobierno.

Laasplraclón más vehemente que por ahora manifiesta este vecindario, es la traslación de la ciudad al sitio denominado "Alto de la Villa", cuyo temperamento, nivelación y demás ventajosas condiciones hacen, a su juicio, más halagüeno el por-. venir de esta ciudad.

. . . . . . he tenido el sentimiento de saber que las pérdidas ori­ginadas por la catástrofe, tanto en propiedades rústicas como urbanas puedenestimarse, aproximadamente, en seis millones de pesos. Este célculo señor Ministro, no parecerá exagerado, desde que se tengá presente que todas las haciendas del valle, han perdi­do sus cercos, sus oficinas, una gran parte de la vasilerfa y sus caldos envasijados, y que de todos los edificios así públicos como particulares, apenas quedanenpié seis de ellos. En efecto aunque desde lo alto de "EI Portillo"¡I\Aoquegua presenta: su .hermosov antiguo aspecto de ciudad, descendiendo a sus calles y penetrando al interior de las habitaciones, nose ve sino ruinas y escombros, .

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siendo la situación de esta bella ciudad tan lastimosa como la de . Arequipa.· .. . .

Tal circunstancia y la repetición de lostemblores, ha obligado a la mayor parte de los habitantes a establecer .sus moradas en las huertas, alamedas y plazas y otros lugares descubiertos, bajo tíe toldos formados delrnisrnó modo que en ArequipaEsto hace muy precioso a sus ojos el auxilió de la madera yde la lona que deben recibir delSupremo Gobierno. .'. . . . .

Apesar de todo, la remoción de los escombros de las calles está bastante avanzada, laque se debe especialmente a la eficazcoope­ración del batallón l.eqlónPeruana No. 1, a cuyo Jefe, oficialidad y tropa está profundamente agradecido el vecindario de Moque­gua, pues este cuerpo no sólo se ha ocupado de ese trabajo mate­rial, sino que patrullando por las noches por la población, ha. con­servado inalterable el orden y protegido la vida y propiedad de los ciudadanos.

La Comisión que me anunció US, haber venido en el vapor "Mayro" con nuevos auxilios. destinados a estos departamentos, no tengo noticia haya tocado aún a los puertos de Arica ello,. no habiendo podido por consiguiente, ponerme hasta hoy en relación con el\a .

. Debiendo sin ernbarqo: marchar dentro de tresd ías, a dicho puerto de ILO; para dirigirme al deIquique, una vez Uenado eri es­ta ciudad los fines de mi comisión, impartiré de dichos lugares las ótdenesconven ientes al Jefe de la referida Comisión; a "fin de que las intrucciones del Supremo Gobierno aeste respecto, tengan su más exacto cumplimiento. .

Dios guarde a US.· Luciano Benjamín Cisneros.

OTRO INFORME DEL MINISTRO DE BENEFICIENCIA . EN COMISION '

(Fragmentos)

Lima, 12 de Octubre de 1868

Al señor Ministro de Estado enel Despacho .. de Gobierno, Policía y Obras Públicas.

Hasta e.13 de los corrientes he. permanecido en la ciudad de Mo­

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quequa.: dictandotodas las medidas que 'he-crerdo.convenlentes pa- . ra aliviarsus más premiosas necesidades. . .

COn tal propósito, he logrado que la Junta Central de Auxi Iios, destine a esos, fines Jos fondes.rémltidospor.el Supremo Gobierno enauxilio de Moquegua, de manera que muy prontoel Colegioy el Hospital de esaciudad, refaccionados aunqueprovisionalrnente, estarán expeditos para continuar sus importantes funciones,

Siendo lvloquegua un pueblo esencialmente productor, una de su primeras necesidades es la fácil salida de sus productospor Su puerto más inmediato,ILO. Careciendo este puerto de muelle he creído que eLmayor bien que podrahacerseaolcquégua es.ja construcción de .dicno muelle. Al efecto, he dejado en.poderde una Comisióncompuesta de tres vecinos respetables, á saber: D, José Santos Chocano, D. Pacífico Barrios y D. NlateoAlayza, ocho mil pesos destinados a esta obra, que deberá hacerse en la forma que el Supremo Gobierno tenga por conveniente.

Con igual solicitud he atendido también a 'Ias necesidades del culto destinando pequeñas sumas para la reedificación de las ca­pillas de todos los pueblos de las inmediaciones, dando con el mis­mo objeto algunas piezas de 'lona a cada una de ellas. Deseando remediar en lo posible algunas necesidades individúales,herepar­tido también alqunas limosnas. .

Salí deM6queguael 3 para embarcarrre erielpuerto de 110, a bordo del "Tumbes" como lo verifiquéal día siguiente. Triste es el espectáculo que ofrece este puerto donde el terremoto y la inundación han hecho desaparecer todos los edificios sin dejar de .ellos vestigio alguno, haciendoernlqrar ala población que hoy está reducida a los empleados públicos y un comerciante. .

La consnucclón del muelle, cambiará indudablemente la faz dé. este puerto, pero siendo mientras tanto necesario aliviar algunas necesidades, durante mi corta permanencia.alll.ihe.decretadoun .

ligero auxilio para la reedificación de la capillay repartición deli­mosnas, haciendo distribui r también varias piezas de ropa entre los lnd igentes. " .

Continúa el informe con las medidas tomadas en Arica.Plsaqua, Iquique, Tarapacá eIslav, .

Luciano Benjamín Cisneros.

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OTROS MOVIMIENTOS SISMICOS EN MOQUEGUA

Con lasdesastrosas consecuencias que siempre traen consigo, se han presentado en distintas épocas movimientos sísmicos en el Sur del Perú.reuvos departamentos se encuentranenuna zona ve lcáni­ca que partiendo del departamentode Tacnapresentá el Tutupaca o Candarave, el Tacora y el Estique; luego, en fJIoqueguá, el Tiesa­ne en Carumas que aunque no luce la forma de volcán y pareceex­tinguido, tiene sin embargo, emanaciones sulfurosas y algunas. fuentes de aguas termales. Siguiendo la cadena, se presenta el . Ornate, Huavnaputlna oOuinlstaquillasv el Ublnas-cuva perma­nente columna de humo reveladora de su actividad, puede apre­ciarse desde algunos puntos y en el recorrido del ferrocarril de Ju­llaca a Puno. Cerrando el cerco volcánico, en Arequipa el ivlisti yel Chachani y el Pichu-Pichu, considerados estos dos últimos también como volcanes; y por último, hacia el' mar" frente a la costa de Arica; la fosa que se extiende desde este puerto a Moliendo con una profundidad de más de seis mil metros, y con una falla geo­lógica en el mar de Arica según se asevera.

Esta situación del territorio de los tres departamentos sureños, vendría a constituir laexplicación de los terremotos que en ellos han venido presentándose, y que sin lugar a dudas, han ocurrido también desde los tiempos más remotos. Empero, antes de los españoles, no serran tan funestos dada la naturaleza de las cons­truccionesa base de caña, adobe, piedras yuxtapuestas o cueros de animales, sostenidos por palos. . .

, Pocas noticias se tienen de lossismos; ocurridos en la época in­caica. El cronista y religioso mercedario, Martín de Murúa, citado por Luis E. Valcárcel en su Historia del Perú Antiguo, relata que "en tiempo del Inca Yupanqui, padre de Tupac Inca hubo un grandísimo terremoto, causadd por la erupción del volcán f'1listi, movimiento terráqueo que se extendió por una gran área que alcanzaba a casi todo el reino. Transcurrieron cinco días entre el

, fuego y los temblores, cubriéndose el cielo de densas nubles de ce­nizas y la tierra de gran cantidad de ésta y de piedra. Los truenos se escucharon hasta en Chile y la ceniza llegó hasta 150 leguas. La ciudad de Arequipa se destruyó íntegramente, pereciendo sus habl­tantes, excepto los de la que después fue Parroquia de San Lázaro¡ , por haber salido antes al Cuzco, a cumplir con una mita .... Para ca!mar la ira del volcán, el Inca le dedicó muchos sacrificios de lla­

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masque en gran número hizo llevar del Collao. Agrégase,el Inca Yupanqui arrojábadesde sus andas con una honda unas pelotillas de barro llenas de sangre del sacrificio en dirección al volcán para que all í reventaran y se derramase su contenido. Esto hacía en compañ íade muchos (magos) v.se cuenta que, viéndose ira uno de ellos, el Inca se lo impidió y cuándo aquél le preguntara: "'-:"Se­ñor quedaré aqu í? .- el monarca le respondió "Ari, quipay" que quiere decir: "S í quédate",' Tal es el origen del nombre de Arequipa":

Sin poder precisarse el año, esto debió ocurrir; entre los años 1439 y 1475, que fue el período de Gobierno de Yupanqui, Déci­mo Inca. Por el relato anterior, los efectos de este sismo llegarían también a Moqúegua, distante 50 leguas de Arequipa. '

15 DE FEBRERO DE 1600

Erupcionó el volcán amate, Ouintstequillas o Huaynaputina, que deriva de las voces: Huayna-I'vlozo o nuevo y Putina: causar tristeza, En esos tiempos lo llamaban también Chiqui Putina o vol­cán de mal agüero y también MorroPutina. Mariano Felipe Paz Soldán" describe así el desvastador suceso: "Principió su erupción el 15 de Febrero de 1600; los movimientos de tierra, las detona­ciones,la Iluviade una arena blanca muy fina yde ceniza, se sin­tieron a más de 40 leguas a la redonda. 'Ell9 del mismo mes de­bió haber reventado por completo porque las detonaciones fue­ron espantosas y la lluvia de cenizas tal que en la ciudad de Are­quipa, no pudo verse los objetos ni con luz artificial al medio­dia, El día 24 aumentaron los estruendos y cenizas vel 28 terminó con más fuertesmovlmlentosde tierra. El volcán quedó destrozado desde sus bases y los pueblos vecinos de Ouinistacas, Chiqueo mate, L1oque, L1acsata, Colano y Checa quedaron sepul­tados entre las cenizas con sus habitantes. Otros pueblos más le­janos fueron destru ídos y perecieron muchos de sus habitantes, algunas quebradas profundas se terraplenaron con las cenizas y éstas se sintieron por el lado que soplaba el viento hasta200 leguas". El deán Valdivia, dice que en 24 horas se contaron hasta 200 tem­blores y' éstos se sintieron hasta 200 heguas. El río' Tambo fue represado con los escombros y lavas durante 28 horas y que al romperse el dique arrasó el valle de Tambo, salvándose los pobla­dores en los cerros próximos. '

En fVloquegua, situada a 248' kilómetros (50 leguasaprox.J de amate, las cenizas perdieron muchas fincas y quedaron estéri­

, 135,

les otras-por muchos años, lo mismo que en Torata. Arafz de la erupción muchodetos indios que sobrevivieron vinieron de Ornate y UuinistaquiHas a Moquequa, ' , ' '

A [a feichá,elqúe fuera, volcán amate, tiene lasimpleaparien­ciade un cerro sin cráter y sin señales de actividad.

25 DE NOVIEMBRÉDE 1604'

El terreno de este año arruinó la Iglesia de SanSebastián que reedifico el regidor. de San Sebastián de Escapagua,don Juan de Olea y Medina, en lo que .enla actualidad es "Alto-de laVilla". En el Valle' de Moquegua,la Capilla deSan Pedro; levantada dé adobe en 1595, también se destruyó con el sismo, y a raíz de elló, el Capitán Alonso de Estrada que Miguel Cervantes de Saavedra ci­ta en el "Canto de Cal(ope". levantó la Iglesia de 'Santa Catalina, llamada después" La Matriz".

27 DE NOVIEMBRE DE 1630

Nueva destrucción de la Iglesia Matriz.Sereoonstr.uyó conel aporte de 35 mil'pesos de Menda o Merendade Castrójcontribu­Vendó también a ello, en dosoportun idadesdon 'Ambrosio Javier Galdárnez y Corte Real, que también levantó el templo deTorata dé cal y piedra en 1691. ' '

13DE NOVIEIVIBREDE 1655 '. ; '.' -. . - <.:,' :

, Por tercera vez caelatqlesla Mattiz conel.slsmo de esta fecha. Corri6 lareedlñcaclón a cargo, q!'!1 Mavordomodeella.rdonPedró delAlcazár y Padilla.

21 DE OCTUB REDE 1687

Mendiburu mencionaéste terremoto acaecido en Arequipay .lVioquegua: .,'

22 DEAGOSTOOE 1713

" ~A' Causa de los deñossufridosenMoquequa por este movimiento' ,telúrico, el Cabildo de Moquegua juró en forma solemne hacer ca­da año el 15 de Agosto, una fiesta a Nuestra Señora de Loreto, to­mándola como Patrona contra, los temblores; sin que llegara acum­plirse-laprornesa hecha;'

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13 DE MAYO DE 1784

Eldfajueves a las 7.30 de la mañana, precedido de dos temblo­res,'se produjo el gran térremoto rcuvaduraclóhfue 'de cuatro y medio a clnéc.minutos. Porcartaqu~ escribiód ías después;el29 de rvlayo, Frayl'vliguel Pamplona que se hallaba en la VilladelVlo­qu~~ua;:"p.Tt~/~i9~~a:~,segÚt1 ~~f~r~,n~ia:;geL7.~~.~~P']~,~~)~\,x.J.~,wec gUI, la total ruina de la Iglesia Matnz y demaslg\eslas,asl corno de los-edi~i~\9~~rl~a~-~,Qodegas",~i~,~do ~~~§¡9ls9 'sacar; at.~~ñor Sacra­

. . /-', ,. . -. - ­

mentadoala plaza,.para celebrar losoficlos divinos. La gente mo­raba en calles y plazas. Sólo la iglesia de-losexpatriados jesuitas quedó sin detrimento, disponiéndose -sirviese de Viceparroquia y . que 'allí, se colocasen las reliquias e imágenes de las 'iglesias. En . 1I0,~manifestabaelprelado- se retiró el mar más,de 12 horas y no salió de sus I ímites. Juan Domingo Zarnácola y Jáurequi, deta­lla los temblores que se sintieron en Arequipa,desde el13 de ¡Jla~ yo, hastael-Z de Diciembre de ,1784, aunque disminuyendo en In­tensidad.'

-A'corisecuencla.de este sismo-que por cuarta vez trajo por tierra la Iglesia Matriz, el vicariomoqueguano Lorenzo Vizcarra Hurtado de Mendoza.vemprendió en 1792 con su aporte de 29 miI pesos y otras contribuciones la construcción de la nueva Iglesia Matriz, esta vez de piedra y cal.

13DESETIEMBR~DE 1833

En una de las columnas del corredor del antiguo convento de los jesuitas, dando frente al zaguán de: entrada, existe la siguiente inscripción: "gran terremoto del 13 de Setiembre de 1833 derribó gran parte de-este Colegio" (Enesa época "La Libertad", en las actualidad Gran Unidad Escolar de Mujeres "Santa Fortunata") .. 13 DE AGOSTO DE 1868.

Detallado más adelante.

11 DE MAYO DE 1948

la población, pues a raíz del sismo y ante los'continuos temblores que se producían, la gente buscó los espacios abiertos para pasar las noches siguientes, unos a la intemperie y otros bajo carpas o ar­mazones de madera y caña cubiertas que se levantaron principal­mente, en la Avenida de la Estación, en la actualidad Avenida ualta, en "El Picadero" (ocupado por la construcción escolar de la esquina de Junín y Piura, frente ala Plaza de los Héroes) y también en el Parque Bolívar y en las faldas de los cerros. A consecuencia del. sismo, cayeron por tierra las coronaciones de las dos torres de Santo Dominqo, que se hicieron en las obras de re­facción de dicho templo, celebradas el 13 de Diciembre de 1947. También seprodujeron.cuarteaduras de consideración en la ma­yor parte de viviendas, algunas de lascualessufrieron el derrumbe de' techos y paredes. El Colegio Nacional "La Libertad" yellocal de la escuela de la esquina Lima-Ancash,fueron lasconstrucciones escolares más afectadas, suspendiéndose las labores escolares du­rante20d (as. En el Hospita I "San Juan de Dios" se abrieron enor­mes boquetes en lasbóvedas de SI)S salas y grietas de consideración que las dejaron inocupables, pasando los enfermos a ocupar prime­ra el Asilo de la Infancia y luego, la huerta del hospital, en donde se improvisaron burdas barracas. A raíz de este sismo fue demolido el hospital para reconstruirse con material, noble y hasta en tres etapas el local, convertido en un establecimiento escolar yen de­partamentos de alquiler, al ponerse en funcionamiento el Hospital General de fJloquegua en 1967.

I\loquegua y Arequipa fueron las localidades en donde el movi­miento telúrico se sintió con mayor intensidad, considerándose el epicentro del mismo a algunos ki lómetros de Moquegua.

FUENTES DE INFORrdACION

"El Peruano" Lima, 19 de Agosto de 1868 20", " " " 21" " " " 24 ." " " 31" " " " 12 "Setiembre " 21" " " " 10 "Octubre " 13" ;'" "

D. Guillermo Kuon Cabello Monografía del Departamento de Moquegua1901 •

Osear Miró Quesada Elementos de Geografía Científica délPerü.

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MarianeFelipePaz Soldán Diccionario Geográfico Estadístico del Perú. 1877

LlÚS E. Valcárcel Historia. del Perú Antiguo. Ediciones José Mejía Baca. Tomo l.

Juan Gualberto Valdivia Fragmentos para la Historia de Arequipa,

Juan Domingo Zamácola y Apuntes para la Historia de Arequipa. Jáuregui

6.- LA VILLA SAN FRANCISCO DE ESQUILACHE

. "Alto de LaVilla"

000000000000000

Cuando las tropas incaicas comandadas por los capitanes de Maita Cápac, IV Inca, conquistaron la región de fV'Ioqueguapor el año 1120, muchísimo antes que fundaran Arequipay, a fin de mantenerse en la región, -según Garcilazo- se vieron obliqadosa pedirle al Inca colonos para resguardarlo ganado V cultivar la tierra que era muy fértil y estaba poco habitada por el exterminio que venían haciendo los envenenadores de los pobladores. Con tal fin se trajeron losmitimaesdel Collao, estableciéndose unos hacia el lado izquierdo del río Moquingoa, para formar el asiento de Moquechua, mientras que otros en Ia banda derecha del río constituían el pueblo de Escapagua.Másdecuatro siglos de ocupa­ción pacífica por losaymaras del Collao, fueron interrumpidos cuando en avrnaras del Collao, fueron interrumpidos cuando en 1541, o tal vez antes, los espa cuando en 1541, o tal vez antes, los españoles comenzaron a establecerse ene!. territorio de los sojutgados indios, tanto en Escapaqua como en el valle de Moquegua. . '.

Habiéndose edificado en Escapagua la primera iglesia con mate­ria.l de adobe a los pocos años de establecidos los españoles en el asiento, -posiblemente el 20 de Enero de 1540 antes de la proba­ble fundación española de Moquegua -25 de Noviembre-, con los hispanos el nombre de San Sebastián patrono elegido para la iglesia constru ída; se antepuso al nombre ind ígena del pueblo que Ilama­ríase desde entonces "SAN SEBASTlAN DE ESCAPAGUA''; el que con el Valle de Moquegua formaban la Provincia de Colesu­vos que depend ía del Gobernador deChucuito V mientras que en lo judicial SanSebastián de Escapagua obedecía a la Audiencia de

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Lima, los del Vallede Moquegua estaban sujetos a la jurisdicción de la Audiencia de Charcas...

EL Almirante Juan de Olea y Medina, autoridad de la-Provincia de Colesuyos y vecino de Escapaqua, eJ16 de Jun io de 1616, hacía ver a Francisco Borja y Aragón, Príncipe de Esquilache y XII Virrey del Perú, la inconveniencia de las dos jurisdicciones y el que los vecinos de uno y otro asiento vivían distantes y dipersos, sin poderlos.mantenerenpaz y sin que muchos pudieran acudira oir misa a la iglesia San Sebastián los domi ngos y días de fiesta, espe­cialmente, en. época de lluvias, consideraciones que pesaron en el ánimo del Virrey para fundar en el asiento de Escapaqua que se hallaba en una llanura, en alto, con buen temperamento, buena agua, sin sabandijas y con vista agradable, sana y deliciosa, "LA VILLA SAN FRANCISCO DE ESQUILACHE", el 27 de Marzo de 1618, fecha en que se extendía la orden para la fundación y. "donde se han de recoger todos los españoles que viven en elValle de MoqJ:legua, así de una parte como de la otra del río". Se dispu­soeJ trazado del pueblo y señaladas sus calles se pondría en ellas la picota, tomándose posesión en nombre de Su Majestad, con la solemnidad acostumbrada, destinándose luego, solares. para la iglesia, cabildo, cárcel, hosptital y tambo. Contaría con dosreqido­

·res y unprocurador yla jurisdicción de .Ia Villa· sería de UNA LEGUA en tomo, presumiblemente de la iglesia .

•. Las disencionesque desde años antes existían entre los avecin­dados deunoy otro lado del río, se acrecentaron con la fundación de la Villa San Francisco de Esquilache y ante la disposición.virrey­nal de que todos los españoles del valle de Moquegua ten íanque trasladarse a la flamante Villa, 27 vecinos del Valle dieron poder a Juan de la Haya y Cámara y él Juan de Arrioia y Peñarrieta.

·residentes en Lima, para que suplicaran al Virrey la concesión de algunas mercedes y autorización para seguir viviendo. enel Valle. El 22 de Octubre de 1618, el Virrey persuadido de la imposibili- .

·dad de reunir a los pobladores de los.des asientos, ordenó al Cabil­do de San Francisco de Esquilache qué dichas 'poblaciones' se man­tuvieran donde estaban en Setiembre de dicho año.

Después de un pleito de siete años y ateniéndose a una transac­ción que en instrumento público de 25 de Mayo de 1624 se cele­bró entre los pobladores de uno yotrobando~ que aducían razo­nes Varias para que su respectivo asiento fuera la capital, el Virrey don Diego Fernándezde Córdova, a nombrede Felipe IV, Reyde España, falló en Abril de 1625, ¡;. favordel Valle de Moquegua, dis­

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poniendo "que en la parte baja se fundara la capital con el título de "VILLA DE SANTA CATALINA DE GUADALCAZAR, VA­LLEDEMOQUEGUA, PROVINCIA DECOLESUYOS;'.

. .

Con la erección de la nueva Villa, San Francisco de Esquilache, fue perdiendo la poca importancia que aún con su elevación de categoría ten fárespectoal Valle de Moquegua. En su iglesia deja­ron de adrnlnstrarseIos sacramentos, pues la ParroquialdeSanta Catalina, llamada después Iglesia l\ilatriz, atrajo a;lo~~feligresespara ' queformaran.parte desuParróquiav el Cura. Luis: F~r'lánpez Bar­chi IÓP,dí;}sde años antes, 'venía ,gestioné;lj"do para.que. pasaran a Santa Catalina jasbtenes .de la 19lE)sia .de San Seb.astián, que des" trufda-pesiblemente po~ los.terremotos de 1630 y 1655 no hade­jada vestiqies y mientras la Villa San Francisco de Esquilachedes­de 1625 'fue despoblándose quedando con el nombre de "Villa Vieja" y más tarde con eltle "Alto de la Villa", iba llegando en tanto el auge. para ,la Villa Santa Catalina de Gualdacázar", a partir del medio siglo de ese año, y principalmente, en el siglo XVIII, con la construcción de las casoinas solariegas y de los tern­

· pl()$'~La Matriz": "Santo Domingo", "E I .COnvento de los Jesui­tas"" .más. tardeenelsig/o XIX, el Hospital beletmftico" después llamado "San Juan de Dios" y la "Iglesia Belén" como exponentes del florecimiento del Valle por el cultivo de la vida y la elaboración de.aguardientes, florecimiento que llevó a los moquequanos con terquedad religiosa e interesado afán de afincamiento en elJuqar, a reconstruir y reparar en repetidas oca­siones los destrozos ocasionados por los sismosde' 25' de No­viembreríe 1604,27 de Noviembre de 1630, 13 de Novierribre de 1655,21 de Octubre de 1687,22 de Agosto de 1713,13 de Mayo de 1784 y13 de Setiembre de 1833. y fue el terremoto del 13 de Agosto de 1868 el que ocasionando cuantiosos daños en todo el sur del país, llegó también a i'Jloquegua y su distri­tos.v.principalrnente 110, con sus secuelas de ruina, infortunio

·e inquietud. Por información del Prefecto Nicolás Freire con sede eh -Tacna.val Ministro de Gobierno, hubo en'lVIoqueguaco­

· mecuarenta muertos, sin conocerse el número de sepultados por los escombros, la ciudadquedódestru ídaen masde la mitad de sus edificios con .todas sus iglesias quecayeron a tierra, losesta­bléeirnlentos de destilación de licores completamente perdidos y la población' viviendo ala intemperie. Y por segunda vez, la Villa San Francisco de Esquilache,volvió a ser tenida en cuenta, pues, con la. tráqlca experiencia sufrida y el conocimiento de; los movi­

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mientes telúricos anteriores, atemorizada la poblaeión pidió por intermedio desiJ Diputado José Miguel Vélez el traslado de la población al "Alto de la Villa", petición que fue aprobada por el Congreso el 19 de Enero de 1870, días despuésque el Presl­dente José Balta, con la autorización legislativa que se le había conferido y con el propósito de aliviar la situación del Sur, por Decreto de 8 de Enero del mismo año, sacaba a licitación la

. construcción del Ferrocarril de 'lo a Moquegua, con estación terminal en el "Alto de la Villa", y también el de Tacna con la frontera de Bolivia. El 29 de Febrero del mismo. 1870, se colo­có la primera piedra para la nueva capital de la Provincia en "Alto de la Villa"a 1407 metros de altura sobre el nivel del mar. El Gobierno expropió 603,725 metros cuadrados de te­rreno por 96,802 soles y levantado el plano respectivo por los indgenieros Tomás. Lansig y Felipe Cucalón, por Resolución de

"9 de ¡'Jlayo de 1871, se dispuso la adjudicación de lotes a cin­cuenta, treinta y quince centavos el metro cuadrado, debien­do correr los gastos de demolición de cercos, nivelación y ex­tracción de árboles . por cuenta de los. compradores y la nive­lación y delineamiento de las calles con parte del producto de la venta de terrenos, y el. 28 de MayO de 1872, se nombraba al Ingeniero Ramón Estruch para que constituído en el lugar le­vantara el plano e hiciera el' presupuesto para la construcción de un templo para la nueva población.

. . . - .

Inciada la construcción del F.C. de "110 a f\lloquegua el 14 de Febrero de 1871y' conclu ído 22 meses después, en Diciembre de 1872 por Enrique Mejggs, con su estación terminal en el JI Alto de la Villa", el Subprefecto de Moquegua José Luis Torres, infqrmaba al Director de Estadística el 26 de Febrero de 1874 que "mientras no se coloque un puente sobre .el . río yno se erijan los edificios públicos, los propietarios de Moquegua no se mueven ni toman interés por establecerse en "La Villa". Ya el Gobierno de Balta por Resolución. de 10 de Julio de 1871; ante la conveniencia de la construcción "de un puente que ponga en comunicación la arruinada población de Moquegua con la nueva mandada construir.en el "Alto de la Villa", a fin de facilitar el tránsito y conducción de los materiales que deban necesitarse para la nueva población" había dispuesto que el Prefecto procediera a la construcción de dicho puente previa aprobación del plano y pre­supuesto, el que se financiaría con dinero proveniente de la venta de terrenos. Por Resolución de 26de Febrero de 1873, .se aprobó el Presupuesto del Ing. José Hind le para la construcción del puente en 27 mil soles; En licitación la obra; fue ,adjudicada el 4 de Jvla~zo

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de 1874 a Eduardo Henrv.representante de la Casa Gustavo Eiffel y Cía. de Francia, por 26,970 soles, pero fueron Petot y Cía., suce­sores de aquella Casa, los quehicieronel puente en el punto deno­minado "El Rosal". Ante el pedido de los vecinos de rVJoquegua que realizaron un mitin y por la menor distancia entre IVloquegua y La Villa, aparte de otras ventajas señaladas enel informe del I"g: Francisco Waku/sky, por Resolución de 23de Febrerode 1877, se dispuso el tendido del puente en UEllVlajlJelo"-donde/estásitya­do actuatmente-oen lugar de "EI Rosal", vcorno.en estesitio.va estaban constru Idos los machones que podr ían aprovecharse para otropuente de madera, cuyo importe era de 3,500 soles, se apro­bó esta:~onst¡-'ucción"para que transiten por él las carretas de car­ga, permitiendo también e; tráfico de la población de Samegua y del Alto de la Villa al Panteón". Por los trabajos efectuados en "EI Rosal", con el tablero de madera, se cancelaron en 1877 a Petot y Cía, 13,535 soles, más 4,325 soles por indemnizaciones por haberse interrumpido la obra. En total 17,860 soles en aquella época importó el puente "EI Rosal" que encontrándose en buenas condiciones, excepto unos cuantos tablones deteriorados, fue desrnontadoen los primeros años de la décadade ,1940, por el Ing. Departamental de Caminos, tal vez con fines lucrativos en el aprovechamiento de los tablones de buena madera y de la viguería constitu ída por gruesos y largos troncos. El puente de fierro, conocido como "Puente Balta", Gonstru ído también en 1877 por Petot y Cía por la suma de la licitación fue reemplazado en 1968, por otro de doble anchura y de características similares al anterior.

Con un viejo molino y un sugestivo mirador con escalera de ca­racol que restaurados podrían tener algún atractivo; con un aero­puerto inaugurado el 23 de Octubre de 1934 y que desde 1967, lleva el nombre del moqueguano Capitán de Aviación Hernán Turcke Podestá, con ampliaciones en la pista realizadas en dos o tres ocasiones y en la actualidad, y sin prestar servicios desde la extinción del Servicio Aéreo de Transportes Comerciales (SATCO) buen movimiento de pasajeros que tendría; con un moderno Hotel de Turistas de bellas líneas iniCiado en 1964 e inaugurado en la fe­cha aniversaria de Moquegua en 1973, a un costo que supera los och.o millones de soles V con capacidad para 56 camas; con tres centros educativos y una población que puede estimarse en unos 1,500 habitantes, incluyendo a Estuquiña y Los Angeles, el "Alto de la Villa", constituye en la época actual y también lo ha sido en otros tiempos un concurrido centro recreaeional por sus perfuma­dos huertos de frutales; por sus restaurantes campestres con las

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apetecibles viandas de la culinaria rnoquequana y por su eglógico panorama que slernpreextasta elespfritu, invitándolo al descanso y a la meditación. Ysisu sino corno asiento poblacional deImpor­tancia quedó frustrado en dos oportunidades, en la Colonia y en el tiempo corrido de la República, ya que en esta época los trámi­tes' burocráticos quedemoraronnueveaños paraer tendido de un puente, dieron tiempo másque suficientepara que Jospobladores de Moqueque, reconstruyeran dos de sus cuatro templos y repa­raran en sus principales edificiosy propiedsdes.ilosdañosque les ocasionara el.sismo de 1868, a la"VillaVieja"o "Alto de la Villa" con título "VILLA SAl\! FRANCISCO DE ESQUI LACHE" desde 1618, nominación colonial en desusopero no perdida, le queda, empero, subsistente el derecho yla esperanza de que el nombra­miento de las autoridades que corresponden a su categoría, impul­sen su desarrollo y , promuevan la expansión urbana en este pinto­resco y acogedor retazo de la campiña rnoquequana.

7.- EL;FERROCAR1UL DE ILO A MOQUEGUA

o o o ,

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o o o o o o , '

.Con la autorización que le confiriera el éongreso, el' Gobierno del' Coronel Balta, inició la construcción de la mavórpartede los ferrocarriles del pa ís, y entre ellos; el deIlo a i'Jloqueguacuya lici- ' tación se hizo por Decreto de 8 de Enero de 1870, unavez apro­bados los planos confeccionados por Enrique ~,1eiggs, al' mismo tiempo que se licitaba también el de Tacna a la frontera con Boli­via. '

De acuerdo a las.bases se construirían: La vía, talleres, tanques para agua, maestranza en 110, una estación en "EIConde" y otra terminal en í'Vloquegua que fue suprimida al acordarse la extensión de la víaal'" Alto de la Villa", en atención al pedido que hiciera IVloq uegua para trasladar la población a dicho lugar, a ora í'zde la ruina sufrida con el' terremoto del 13 de ,Agosto de 1868. El equi­po rodantese compondría de ocho locomotoras de treinta tonela­das; seis vagones para primera clase, diez vagones para segunda, veinte carros de carga, veinte de plataforma, cuatro cerrados para equipaje, cuatro carros de. mano, seis para ganado y dos carrosa vapor. En el puerto de Pacocha el muelle existente; se prolonqarfá treinta metros dentro del mar, dándole la forma de martillo en su extremidad y una anchura de diez metros. Una línea telegráfica de 95 kilómetros, acompañaría a la vía en su extensión.

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En segunda licitación la obra por Decreto Supremo de 8 de Ju­niode 1870, se presentaron las firmas Deves Freres, Dockendorff y Cía, Enrique Wiman, Fernando Hugues y Montero Hermanos, aceptándose mediante Decreto Supremo de 10de Diciembre de 1870, la propuesta de Deves Freres por 6'700,000 soles' para la construcción del F.C. de 110 a Moquegua, bajo la vigilancia de los iJige"'¡Cl!'"~s ~Qmbfados por el Gobierno. En 12 de Enero de 1871, se aceptó la transferencia que para la ejecución de la obra hizo Deves Freres a Enrique Meiggs por los 6'700,000.00 en bonos emitidos en el .Perú, Londres, Francfort, París yNueva~ York, cantidad que se redujo a5'025,OOO.OO en efectivo, mediantearre­glode 30de Diciembre del mismo año. .

Hasta el "Alto de la Villa" la estación de vía sería de 101 Km.y contaría con cinco estaciones debiendo terminarsela obra en un plazo de treinta meses a partir de los treinta días defirrnada Ta escritura y sujetándose a los planos y perfiles confeccionados por ellng. Alejandro M. GuidoVignaú.· . .

Colocada "la piedra fundamental" del F.C. en el puerto de Pa­coha, distrito de 110, el 14 de Febrero de 1871, con asistencia de las.autoridades, dele iJlunicipa!idad de Moquegua y vecinos no­tables,la construcción de lavíaqúedó terminada 22 meses después, pues, el10 de Diciembre de 1872, el Empresario Enrique Meiggs solicitaba al-Gobierno la recepción de la obra, nombrándose piara ello una comisión compuesta por el Ing. Eduardo Habich, Narciso Alayza y FabricioCáceresquienescon el expediente y planos res' pectivos informaronque"basta compararlo con los mejores ferro­carriles del Perú para ver que no cede en nada'vvque "la empresa ha cumplido satisfactoriamente con todas las obligaciones en la construcción". Para dicha obra el Gobierno expropió en las ha­ciendas del valle por cuenta del Contratista 329¡623 metros de lar­go, ·Ia mayor parte cultivados con cepas que cortadas importaron 113,376 soles, los que agregados al valor del terreno y otrosárbo­les sumaron347,648 soles, y para el paso de la línea por el río Mo­quegua, se construyó un puente cerca del fundoYAcacollo" ydel sitio llamado "E I Rayo" por donde segu ía la vía, a dos kms. de la estación terminal de "La Villa";

Recibido el F.C. el 11 de Diciembre de 1872, fue nombrado C(HnO Administrador el lnq, José Hindley por Resolución de 28 de Marzo.de1873¡sedispusoabrirlo al servicio público. Quedó in­cumplido el contrato-en la instalación de la línea telegráfica que hasta 1874 no existía, a tenor de lo informado por el Subprefecto

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de .Moquequa, Emilio de la Flor al Ministro de Gobierno en Junio de 1874: Dicha línea s610 se instalaría uno o dos años más tarde.

No tocóaBalta ver eltérrnino dela construcción del F.C.que durante su gobierno habíaseinciado, pues fue depuesto.el 22de Julio,deJ8n por el Coronel Tomás Gutiérrezv fue durante el Gobierno de Manuel Pardo, elegido Presidente cl2 .de Agosto del mismo ~ño, que se recepcionólaobta.

. ,- - ", . - . . .

Por Resolución de 14 ele Febrero de 1876, se dió remate el arrendamiento del F.C., incluyendo el Muelle de IloaJuanCauví por diez años y por 28 mil soles pagaderos por trimestres adelan­tados rescindiéndose dicho contra ro en Noviembre con pérdida para ~I contratista de los Cincuentamilsolesdepos,itados como ga­rantía. Se encargó la Administración allng. D.A. Elrnora..Y (jos años después desde el 10. deOctu bre hasta la ocupación de Mo­queguapor los chilenos en Marzo de.1a80, la explotación de la vía, corrió a cargo de la Compañía del F.C. de Iloa Nloquegua.

Sirvió, el F.C. al' invasor chileno en la incursión exploratoria a Moquegua el31 de Diciembre de 1879 y luego para transportar de 110 al Alto de laVilla~G,GOO chilenos que después de dos horas de tenaz y porfiada resistencia de1 ,300 peruanos, muchos de ellos rnoquequanos..el 22 de Marzo de 1880 en la batalla de " Los Ange­les", tuvieron con su triunfo .a Moqueguaa su merced: Entregada laciudad al saqueo yal pillaje de la soldadesca chilena, sus depre­dacionesse extendieron a las haciendas del Valle con destrozo de buen número de bodeqas, luego de hartarse del transparente y del rojo licor y apoderándose de gran parte del material rodante y fijo lo embarcaren-hacia 110, para conducirlode all ía Pisagua y servirse de él en el F.Ci.de PozoAlmonte y Peña Grande, enlquique. Y cuando no tuvieron necesidad de la vía férrea inutilizaronbuena parte de.ella.vsu-puente rquedando a.la.fecha lbs restos-deuno.tíe los estribos, mientras que el otro concluyó su destrucción con el embate torrentosode las aguas en las avenidas de 1900.' .

RECONSTRUCCION y FIN DEL FERROCARRIL

.Para' la restauración' y proqreso de la agricultura en la-Provincia Litoral de Moquegua, Andrés AvelinoCáceres promulgó la Ley de 28 deOctubre de 1886, disponiendolareconstruoción-del F;C. de IlóaMbqueglia, disposición que fue confirmadadurante el manda­todel Coronel Remigio Morales Bérrnúdezpor Ley de 21 dé Se'

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tiembre de 1893, .entreqándoseIa concesión de la construcción a don VíctorVallebona a la que puso término a pedido del mismo Vallebona tres años después por Resolución de 28 de Noviembre de 1896, exonerándolo del pago de la multa impuesta por incurn­plirniento. No fue atendida la petición que en 1894 hiciera dicho Concesionario, para la entrega de los materiales de la Estación de La Villa; por cuanto ésta había sido reconstru (dapor el Regi' miento "Húsares de Jun ín, al que, lo mismo que a otros crerpos del ejército, sirvió de c.uarteldicha Estación.

, El 4. de Febrero de 1897 , esta veze! qobierno de N icolásde Pié­rola celebró contrato con Thomas D. Weir, para la reconstrucción en 12 que se inclura una nueva estación próxima a Moquegua, abandonándose la parte de la antigua I(nea al Alto de La Villa, pero 21 meses después,- no obstante las dos prórrogas concedidas, se rescindió el contrato, igualmente, por incumplimiento, por Re­Solución de 16 de Noviembre de 1898. Autorizado el Presidente E:duardoLópe~ dé Romaña paracelebrarun nuevo contrato para la reconstrucción del F.C., esta vez y por Resolución de 19 de.Se­tiernbre de1902,. s~ .hizó ,con Domingo.Almenara V Federico EI­quera; ccmprornetiéndoseJos contratistas a la reconstrucción en 18 meses, del tramo 1LO-Hospicio Y en12 meses más de este lugar

a lvloquequa. Una nueva rescisión y ante las infructuosas tentativas dé cuatro gobiernos de llevar a feliz término la obra por contrato, fue el Gobiemo de José Pardo el que dióimpulso efectivo a di­chos trabajos por parte del mismo Estado y con los fondos con- . signados de acuerdo ala ley de 30 de Marzo de 1904.

Emprendidas las obras de reconstrucción, en diferentes oportu­nidades, dispuso el Gobierno que Iaautoridad.pol íticade Moqae­gua, recuperara los' rieles,. durmientes y otros materiales de que se apropiaron losparticularés,alparalizarselacirculáéión de lóstre­nes destruidas las instalaciones ferroviarias por los chilenos, en la contienda con el vecinopais del Sur; Para ejecutarseJostrabajos se importaron 90 mil durmientes de pino colorado de California a pervisordelas obras.icontratóconw.R: Grace y Cía. la Casa Gra­ham Rowe y Cía. representantes de Arthur KoopeldeAlemania, proporcionó 1;500tonel'adasderieles y accesorios a 8.70 libras pe' ruanas por tonelada.Z mi I plantinas para losrieles antiguos á17.80Lp. ton.;30milpernospara las mismas a 18.50 Lp. ton;; 86,365 kilos 56péni'qües cada uno y 10 mil, durmientes de roble éoioradode Ghiléa49 peniquescada und.puestcs abordo enIló-con Un total ­de 23,042 libras esterlinas que el Cuerpo dé Ingenieros Civiles.Bu­

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de clavos para el enrislado por 788.80Lp. Secontraró con lacasa Shofield y Cía.la construcción de tres tanques con sus castillos de acero por 540 Lp. para el aprovisionamiento de agua para las loco­motoras; Por intermediario del Cónsul del Perú en Nueva York se adquirieron por 738 libras peruanas dos carros tanques para los trabajos que Se efectuaban. En Abril de 1905,se adquirieron de Estados Unidos por 45,607 pesos oro americano un vagón de pasa­jerosde primeraclaseyotros de segunda, seis carros de plataforma cuatro bodegas de jaula, carros tanques, dos locomotoras puestas a bordo en 110 V una locomotora chica con flete por separado. El plazo fijado para la entrega de las obras de reconstrucción del F.C. fue señalado para el mes de Setiembre de 1908, mesen queterrni­naba el mandato de José Pardo a quien le tocó entregar las obras terminadas con la nueva Estación Terminal enloque hoy es Avení­da Balta (Talleres de Sinamos)enlos días postreros de su gobierno.

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. Entregado altráficoei F.C. vexplotado porel Estado algo más de dos años, ante el déficit ranual'-qüe pasaba de 1,200 tibras perúanas,con fecha 22 de Mayo de 1911, el fJlinisteriá deFomen­to celebró éon Peruvian Corporation un convenio parala explota­ción del F.C. V del rnuelle deHo' por treinta años (20 forzosos V 10 voluntariosí. éomprometiéndose Peruvian al mantenimiento V con­servación de las .explotaciones por el tiempo del contrato.vlado­tación de agua al muelle V pueblo de 110, hasta por una población de diez mil. habitantes, cobrándose a los vecinos elsumistrcdel aquade acuerdo alas tarifas aprobadasporel Gobierno, el que pa­garfa ~I 6 % de interés sobreel.capital invertido en la dotación de agua hasta diez mil libras esterlinas, reembolsándose el capital al 'término del Contrato. De haber entrado en vigencia este con­trato, fue por muy poco tiempo, pues, en el semanario de Mo­quegua;".La Reacción'! de-24 de Enero de 1913, figuraexplo­tándolo.unav'Sociedad Admin istradora del Ferrocarri 1".

En J~nio'de 1924 se adquirió de ~orberto Ellinger por 6,835 libras esterlinas a bordo en llo, un automotor cerrado acombus­tión interna para cargar 10 mil kilos, un coche de pasajeros para 1ra. V 2da. clase con compartimiento para equipaje, un carro re­molquepara cinco toneladas V una planta eléctrica' para cargar los acumuladores. En Noviembre de 1925,' se contrató con The Baldwin Locomotiv Work por 2,020 pesosoro.americano. un tan­que de cuatro .metros de altura V capacidad de cien toneladas de petróleo y con, la misma firma por 2,180 pesos oro americano una locomotora "Mikado".

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Las últimas locomotoras prestaron serVICIOS hasta mediados de 1934, alternándose en los últimos años con los autovagones adqui­rido. A mediados de 1937, se hab ía comprado también a The 3aldwin Locomotiv un camión con motor "J<ALAMAZO" de 45 caballos por 3,530 pesos oro americano. Suprimida la circulación de locomotoras, y al quedar como el principal veh ículo rodante el ca­mión adquirido, el público comenzó a llamar al servicio "E L J<ALAMAZO" por la marca del mismo. Desde el 16 de Marzo de 1933 y por diez años, lo que quedaba el F.C.fueentregado en Administración al Ing. Enrique Mendoza, terminada la cualvcon­tinuada por el Estado, el servicio de autocarriles se mantuvo hasta 1963 en que se d ipuso su paralización por los continuos' déficits que al Estado ven ía ocasionando. Por Ley 15628 expedida durante el Gobierno de Fernando Beiaúnde Terry, se adjudicó a la Corpo­ración de Moquegua los bienes del F.C.I LO-Moquegua para que procediera a venderlos en pública subasta, obteniéndose del re­mate de rieles y durmientes, in situ, aproximadamente un millón novecientos mil soles, siendo favorecido con la subasta Remigio Fernández Blanco, ciudadano español con .sede en .Arequipa. Con anterioridad el material rodantefue transferido a Cliferentes ferro­carriles del Estado. De acuerdo a la Ley, de la subasta, el setenta por ciento por partes iguales debía emplearse en la construcción de casas para empleados y obreros en Moquégua e 110; quince por ciento para la ampliación de los servicios del alumbrado eléctrico y quince por ciento para la ampliación de losserviciosde agua y desagüe también en el puerto. .

Unico medio de comunicación durante varias décadas entre 110 y M()quegua, el ferrocarril ha formado parte de la vida misma de dichas ~oblaciones y también de Tacna. En lasañas desuexisten­cia ha dejado gratas vivencias, y por ello, en quienes utilizamos es­te desaparecido medio de comunicación, florecerá siempre hacia él, con añoranza, algún recuerdo placentero, cornouna inmarchita­ble siernprevida del pensamiento.

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8.- LA GUERRACONCHILE

,.- Cita de Basádre r .

- "Meditaciones

-Aritec~ndentesdel conflicto

" ;:,.. Moquegua en la contienda

.: Sequndaocunación de Moquegua yla Batallade<Los Angeles"

- AcclonesdeTacná vArica

'- Tercera ocupación de Móquegua y el cupo de querrá

- Las campañas de Lima y de la sierra - .

",- La Cuarra vúítirna ocupación , de Moquegua

,.- La creación delDepartamento ' deMoquequa

- El Plebiscito

- 'Consecuencias de la ocupación y el cupo de la paz. '

,- Lo dulce, después de la tragedia.

- El Alfajor de Penco

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Si en el período del 40 al 42 elPerú aparece luchando, desangrándose; bajando y subiendo en un, procesode defi­niciónnacional, el período 'de 18f2a 1866, más o menos,«. y aún en años siguientes, se .presenta caracterizado por el apogeo y, en medio del apogeovporTa prodigalidad. Con la fácil riqucca doleu.uio y delsalitretuvo entonces el Perú todo lo que suele, darse en Iosaristócratas acaudalados: cor­dialidad en el trato, generosidad en el gasto, abundancia en la dádiva, falta de cordurapara ordenar los propios asuntos despreocupación por el mañana. :¿Fueello inevitable? Y aún si 10 fue ¿podemos imaginar una-trayectoria distinta?

Jorge Basadre.- Historia dela República.

MEDiTACIONES

Ha sido participe Moq,legualmlodacausa [ustaen las distintas épocas de la República. Ha defendido el bicolor nacional-con bero ismo espartano en le!. cruenta guerra' de/79: Ha participado con alborozo do- los tiempos gra­tos y de la bonanzaque ha vivido la Patria, ji ba becbo suyos también, el do­lor y la amarguracol1 'lúe kitragediaempañara sus horas de tranquilidad: Ha gozado de la molicie y riq ueza de la Colonia, y también, la desconcertante

.pobreza quesiguiera alacontlenda con nuestro vecino del Sur. Ha esperado-y desesperado. Ha clamado y luchado por resurgir, y ha vivido también, la amar­gura de la injusta y obstinada post,ergación. ' ,

Sus glorias pertenecen al ayer, sus inquietudes al presen te y sus esperan­zas que nunca mueren, se bailan mirando.siemprealmañana, del que nunca desaparecerán los atisbos de una 'promisoria J"rrandeza.,

En ocasiones diversas, un?s y otros, hemos cantado sus glorias, hemos re­lieuado las bazañas de sus béroes, hemos ensalzado laoalia de sus antepasados hemos rendido culto a sus muertos, hen¡os añorado la pretérita grande"" de mejores tiempos, aún no-repetidos, y bcmos dirigido también la, vista ,¡ la a/­tura , en un ajiindellr;gar a ella, disimulando nuestra humana pequeñez. Y hemos hecho' iambién-un recuenioide lo gratoyfavoralJle, mirando a i\:1()­quegua a. través del prisma,del bello color. Va!Jora, en visión restrospcctiua, con la .\'l'renidadde la pü~'qÚI' ·'71llfi,it,71d.\' pa"iúitl'sy ",'/v,¡ 1'/ rscollo deLos odios y rencores, llegaremositambién: a k2S cruentos y dolorosos aconteci­mientos que a Moqúegua Ietrajeronia.gúerra COI/E/ti/e.

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Ai\lTECEDEI'HES DElt. CONF L1eTü'

'Constltu ída la República dedolivia el 6 de Agosto de 1825, en el territorio de la Audiencia de Charcas, pertenecía al nuevo Esta­do la provinciade.Atacama, en cuyo litoral se hallaba Cobija que por decisión de Sucre fue designado puerto principal-de Bolivia. '

El descubrimiento de qrandesdepósitos de guano en el territorio atacarneñoenJ S'B. despertó la codicia de los chilenos quesede­dicarona extraerlo burlando la viqilanciade las autoridades bolivia­nas, hecho que en algunas oportunidades, determinó el apresa: miento por parte de Bolivia de los barcos contrabandistas chilenos, que fueron -no sólo liberados por la fragata "Chile!' sino que sus tripulantes levantaron enMejillonesun ·fortín e izaron la bandera de su .país y aunque el.fortjn fue demolido y bajada la-bandera por los bolivianos, esta circunstancia le valió a Chile para alegar "que había ejercido autoridad en dicho territorio 'Íf que su bandera había flameado en ese litoral". Fue así como Chile cuyo tímite Norte llegaba al paralelo 250.; con la ocupación de rJlejillones extendió. indebidamente, su dominio al paralelo 230 .. que fue fijado como límite norte, creándose - la provincia de Atacama en 1843,en donde también comenzaba a extraerse el salitre, cuya explotación se efectuaba ya en -Tarapaca, territorio en cuyas riquezas había puesto iqualrnente sus miras expansivas Chile. Sin aceptar-el arbritaje propuesto por Bolivia que reclamaba como te­rritorio suyo hasta el paralelo 250,pues, Chile, lo reclamaba hasta el.paralelo.Zdo. estando el general MarianolVlelgarejo al frente del gobierno de Bolivia, se firmó entre este gobernante y el de Chile el tratado del 10 de Agosto de 1866, por el que se señalaba como lí­mite entre los dos países el paralelo 240. estableciéndose el común usufructo de. los depósitos de. guano y de otros minerales existentes en lazona comprendida entre los paralelos 230. y 250. y por el tratado de 1874, los capitalistas e industriales chilenos quedaban eximidos de pagar en Atacamasas contribuciones eim­puestos que estableciera Bolivia y por el tratado adicional de 1875, ambas- partes contratantes someterían al arbitraje cualquier dife­renciaquese suscitara en la apl icación de I tratado del año anterior . Sobre el salitre, otra de las riquezas del desierto de Atacarna. la

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"Compañia Anónima del Salitre y Ferrocarril de Antofagasta", constituida por capitales británicos y chilenos, vinculados estos últi mos á personajes de la poi ítica de Santiago, hab ía obtenido de :v1elgarejo, Presidente de Bolivia, una concesión por 15 años para explotar y exportar el salitre de Atacama. Ca ído Melgarejo, el Congreso boliviano en 1871, señaló el plazo de un año para que las concesiones extranjeras tramitaran la revaljdacióndesus derechos, cosa que /lO hizo la Compañ ía Salitrera, por lo que el Gobierno bo­liviano declaró caduca la concesión, pero en convenio transaccio­nal para que laCompañfa contirrüara la explotación, debía abonar al. Estado.el diez por dento de las utilidades, disposición que modi­ficóel Congreso por el pago de diez centavos por cada quintal. de salitre que se exportara.

Ante la protesta de Chile por el cobro dediezcentavos, conside­rando esa medida.eomoviolatotiade! tratado de 1874, Bolivia -res­pondió que siendo- la Cornpañ íaSalitrera unasociedadanónima,

, pod ía entablaf sus reclamaciones ante los tribunales bolivianos sin tener querecurrir-a lavra diplórnatíca, por lo que Chile obligó a la Compañia a solicitarla rescisión del contrato y la anulación de la concesión, cosas que fueron aceptadas por el Gobierno boliviano, va-raiz de ello,sorpresivamente, Chile dió a Bolivia un ultímátum que venda el.12 de Febrero (1879) para que respondiera sí acep­taba -onrc' 'lrbítraje que proponía para resolver sobre la rescisión. Ante la taita de respuesta inmediata de Bolivia, Chile declaró.rotos los tratados-de 1874 y 1875ydíspuso que su escuadra zarpara del puerto de .Caldera a l-boliviano de, Antofagasta que fue ocupado el 14de Febrero por dos compañ ías de desembarco de 500 hombres al mando del. Coronel Emilio Sotomayor.· Yald íasiguíente, los blindados "Blanco Encalada" y "Cochrane'tv la corbeta O'Higgins, se hacjan presentes en los puertos bolivianos de Tocopilla,Cobija y Mejillones. Bastó que el gobierno boliviano; por esta actitudde fuerza de Chile, cortara el 10. de Marzosusreladonesconeste pars, para que la escuadra chilena ocupara mi litarmente lapróvin­cía deAtacama.

, Años antesen 1873, el gobierno de La Paz separado desu Jitoral . por la cordillera de los Andes y más de cien leguas de desierto; ve'

nía soportando las frecuentes invasiones chilenas de su indefenso y lejano litoral, con la ilegal explotacíóndel guano, salitre y otros minerales existentes en él y es por-ello que, como medida previsora para mantener la integridad y la .soberan ía desu territorio amena­zado, buscó la alianza de países vecinos.. como Argentina que se negó a ellav el Perú que la aceptó y firmó con dicho país un tra­

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tado secreto de alianza defensiva -que no llegó él ser secreto-, el 6 de Febrero de 1873, tratado que para el Perú, significaba tamo biénel evitamientode una posible' alianza' chileno-bólivlanoque traeríaoorrsiqo el desmembramiento del departamentó de-Moque­

'gua, con .Tacna, Arica y Tarapacá;y para cuyaconsecusión, Chile en más de una oportunidad habJa ofrecido a Bolivia su apoyo, a cambio de la cesiónde una parte del litoral bo Iiv,iano hasta rJiejic liones:

En posesión Chile del territorio de Atacama, el Perúofredósu mediación enviando a aquel pa fs en misión especialaJoséAntonio de Lavalle. La prensa y el pueblo de Chile que animosamente ve­nían siendo preparados contra el Perú; recibió en forma hosti! a Lavalle que llegó a Valparafso el 4 de Marzo y cuando el emisario peruano partió a Santiago en la noche del mismo d fa,la muche­dumbre asaltó el Consulado peruano y quemó su escudo. Conven­

cido el gobierno chileno .de que Lavalle trata-ba de .qanar tiempo, mientras el Perú se armaba" recibió empero con cortesía al-peruano, quien propuso al-Presidente chilenoAnfbal Pinto, la desocupación del territorio invadido; volviendo las cosas al punto en que se ha­llaban antes de la ocupación del territorio boliviano. Para Chile no era ya motivo de discusión el impuesto de diez centavos, sino ia reinvindicación del territorio de Atacama Sur que consideraba co- . mo suyo en mérito de 'los tratados celebrados con Bolivia: Por otro lado, Chile que conocía el,tratadosecretoperuano-boliviano pidió explicaciones a Lavalle sobre lo que consideraba deslealtad peruana, considerando la medida de precaución tomada por el Perú, como una amenaza de aqresiónoculta a su pa ís. El Presiden­te Pinto para llegara un arreglo, proponía la continuidad de la ocupación del territorio bollviano jelretomo de la cuestión chile­no-boliviana al estado en que se encontraba en 1866; el someti­miento aunarbitrajesobre el dominio del territorio ócupadov la neutralidadder Perú, comprometiéndose Pinto a no fortificarMe­ji llenes y Antcfaqastasi continuaba en su posesiónya mantener elcomercio del salitre sin entrar en competencia con el Perú. Trató ' también Pinto de la posibilidad de una alianza peruano-chilena si Boliviaatacaba ál Perú; mientras veladamente amenazaba con aliarse con Bolivia si el Perúmanten ía su actitud. '

Cuando Lavalle con autorización de su Cancilleríadióa conocer el tratado secreto con Bolivia, Pinto exigió la neutralidad del Perú, cuya' discusión no fue aceptada por, el peruano, movido por el compromiso contrardo con Bolivia. Terminó Lavalle su misión,

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después de haber hecho todo lo posible para evitarla guerra. Mien­tras el gobierno del Perú respondía a Chile que la petición de neu-. tralidad la resolvería el Congreso que había sido convocado para el 24 de Abril, Chile que había venido preparándose para la guerra desde años antes, sin esperar la respuesta del Perú, le declaró la guerra, lo mismo que a Bolivia, el 5 de Abril de 1879. Así-el Perú se vió envuelto en un conflicto, para el que, imprevisoramente, no se hallaba en condiciones de afrontarlo, pese a que el país sureño. había adquirido dos blindados "El Cochrane" V "El Blanco Enca­lada" y venía armándose en medio de la honda; crisis que sus arcas fiscales confrontaban.

IVlOQUEGUA EN LACONTIENDA

Con un poderío naval rnuvsuperior. Chile sin hallar la forma de destruir ala débil armada peruana, cuyo continuo trajinar por ~I Pacífico iba retrasando sus planes de conquista, pudo por fin dar término a más de seis meses de correrrasdel monitor "Huáscar". cuyo jefe el Contralmirante Miguel Grau encontró en Angamos ante la admiración del mundo, unatumbact.relsapor la sublimidad de su audacia y de su heroísmo. Y libre Chiiedela pesadilla quele había significado "El Huáscar", inició su campaña terrestre en la que el patriotismo de los' peruanos suplió las numerosas y serías deficiencias de su improvisado ejército y si en la contienda cupo a los peruanos el-triste papel de vencidos, la infortunada humilla­ción sufrida-tiene su atenuante en las deplorables condiciones en las que el país se.vió arrastrado auna contienda que no buscó y en 'a que hombres de la talla de Grau, Bolognesi, Uqarte, Inclán,Arias y Aragüez, Sáenz Peña, Cáceres, Espinar, Zubiaga,el moqueguano Justo Pastor Dávi la y much ísimosotros se han ganado con su he­roísmo un sitio en la historia y la gratitud perenne de la Patria. Se perdió SanFrancisco cuando la batalla parecja ganada por el des­bande incontrolable de los bolivianos. Y se ganó en Tarapacá, pero se perdió este rico departamento que quedó en poderde Chile, ante la imposbilidad del ejército peruano de mantenerse en la re· gióncon la ninquna probabilidad de recibir refuerzos. Cien leguas de recorrido bajo el implacable sol del desierto en el día y,~Hrío penetrante de veinte noches, escasos de.alimentos.ipcbres en ar­mamento y municiones, casi descalzos y rotozos sus uniformes, llegaron a Arica 3,416 hombres y 634 dispersos habiendo perecido en el recorrido 72 soldados.

Tratando de evitar' una reacción de los aliados que tenían casi todo su ejército en Taena y Arica, después de la pérdida de Tarapa­

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cá, Chile concibió el pi:mdeestablecerseenl LO y fortificarse allí, no sin antes haber planeado apoderarse de Tacna y Aricayofrecer esas provinciás aBolivia para su alejamiento de la guerra, propósito que Hilarión Daza, Presidente de Bolivia hizo conocer al del Perú General Mariano Ignacio Prado. Con el fin de impedir que por la costa de iVIoquegua llegaran refuerzos deTacna y Arica, Chile mo­vi lizó sus fuerzas de Pisagua y el 8 de Diciembre de 1879 la corbe­ta ü'Hi.ggins y .la cañonera Magal.lanes bloquearon el puerto de Pa­coha y dieciocho días, después la Chacabuco que hab la reemplaza­doa la Magallanes fue enviada a Pisagua para comunicar al General enJefe, Erasmo Escala, que el puerto estaba indefenso loque favo­recería un desembarco, por lo que el Ministro .de Guerra chileno RafaelSotomayor dispuso la salida de Pisagua del transportaCo­piapóescoltado por la Chacabuco con el regimiento Lautaro de 550 hombres al mando del Teniente Coronel Arístides Martínez. Llegados los dos barcos a 110 el 30 de Diciembre ,efectLJaronel de­sembarcoenla madrugada del 31. por las caletas del norte ydel sur, sin ningún tropiezo. Cortada la íínea telegráfica y tomado el ferrocarril emprendieron viaje hacia Moquequa, cortando también a su paso la comunicación telegráfica de Hospicio a Tacna. llega­dos a la estación del Alto de la Villa a. las siete de la noche del mismo 31, intimaron al Prefecto Julio César Chocano que contaba con 450 hombres la rendición de la plaza. Chocano se retiró a Los Angeles, mientras el CornandanteMarttnez el 10. de Enero de 1880, después de amedrentar a la población con algunos disparos de cañón, ocupó la ciudad, cornetiéndose algunos excesos por la tropa y obligando alapoblacióna la preparación de rancho para los invasores. Horas después se retiraron los chilenos al puerto en donde. hicieron fusilar a algunos ileños que vivían en las inmedia­ciones del sitio en que se hab (a levantado el enrielado de la linea férrea.i.rnlentras inutilizaron las locornotoras-de.que se sirvieron, reembarcándose lueqopara Pisagua.

Siempre con el propósito de anular al ejército aliado de Tacna y Arica, el24 de febrero de 1880, zarparon de Pisagua 19 trans­portes y algunas lanchas torpederas*yel 25 de febrero se presen­taron en Pacocha,comenzandoese día y hasta el 29 el desembar­co de cerca de 15 mil hornbres.vpor Puerto Inglés, al mando del Jete de Estado Mayor, Coronel Pedro Lagos, el que con varios oficales se constituyó en el muelle, para colocarla bandera chi­

*. "Blanco Encajada"; "Toro:' con lanchas torpederas, "Itata", "Copiapó ", "Loa", "Amazonas", "Magallanes", "La Mar" ,"Limad", "MéÍtías", "Santa Lucía", '''Humberto'', "Eh/ira", "Muzzi", }'Lancha"; "Anqarnos ", "Tolten", "Abtac" y "Balsa", '

1.~7

lena como signo inequjvoco de ocupación, militar, sin encontrar ninguna resistencia en los .indefensos pobladores del puerto, que incluía a algunos italianos; El Jefe chileno instaló luego su jefa­tura en la. casa de corredores y columnas de madera, en la esqui­na que hoy forman los jirones Dos de Mayo y Junín y que Juera propiedad deNlanuel Tadeo Barrios, Eudocia Barrios de Zapata y otros a llegados moq uegua nos.

O ías después, el 8de Marzo, el Genera I Escala con autorización del Ministro de Guerra Sotomavor, despachó en cuatro naves a la Cuarta División del GeneralOrozírnbo Barboza con 2,300 horn­bres hacia el puerto de Moliendo en donde se efectuó el.desern­barco. Lareducida quarnición del puerto/ante la.enorme superio­ridad debenemigo, se retiró a iVlej ía y Ensenada llevando consi­go las locomotoras. Las fuerzas chilenas que ten ían instruccio­nes de destruir cuanto pudieran.vse dedicaron del 9 al 11de mar­zo aIncendiarlasinstalaeiones fiscales: telégrafo, esta~ión, muelle, aduana y propiedades particulares que dueronsaqueadas por sol­dados ebrios. Consumada la ruina en que dejaron a Moliendo, se reembarcaron los chilenos llegando alloel13 demarzo..

SEGUNDA bCUPACION DE IVlOQUEGUAY LABATALLA DE lOS ANGELES

El comando.chilenóde Pacocha,considerandoconvenientedes' truir a tapequéñadivisióri peruana que' sé hallabaenMoquequa antes que recibiera refuerzos de Arequipa,lo que obstaculizaría su provectadárnarchaa Tacna, dispusola salida dellodel General Manuel i3aquedano al frente de lacaballerfa y de lainfantería li­gera, lo que se hizo por f~rrocarrilenla madrugadadel día 12de marzo rumbo a Hospicio, mientrasunsegundo agrupamiento cons­tituído por la infantería de lmeavla artillería al mando del Coro­nel Muñoz lo hacía a las cinco de la tardedelmismo día. Baqueda­no y su gente se instalaron en "El Conde" el13de marzo, después de desalojar ala columna "Gendarmes Montados"que debíaninfor­mar a Gamarra sobre él avance del enemigo. Con mayoresdificul­tades .tropezóel agrupamiento de Miñoz, pues carentes de agua que la habían consumido los soldados de3aqúedano al llegara Hospicio, procediendo en forma lndlsciplinadatrataron.deencon­trar el río sin obedecer a sus jefes, pon.loque la artillería,tüvo que abrir fuego .sobre los soldados dispersos en procura del orden que ~e restableció con la llegada de 200 hornbresquehab ía envia­doBaquedano con agua y vino y con una locomotora con un tan­que con agua, la que.se descarriló.aritesde.Heqar .a.sudestlno en la bajada de "EI Pacae " por el levantamiento de los rieles que ha­

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b ían hecho los pobladores de "El Conde". Establecido Baquedano enel AltO de la Villa des deel20 de Marzo con 18 piezas de arti­lIería y 'cinco-mi I hombres de lastres armas, de los cuales 800 eran de caballería.vse preparó á vencer la resistencia que podrfa ofrecer el Segundo Ejército del Sur, comandado por el Coronel Andrés Gamarraq ue frisaba en los setenta años, de los que los 20 últimos años estaba retirado del ejército. Siendo adicto a Piéro­la que se habíaprodamado Jefe Supremo de la .República el 23 de Diciembre de 1879,recibióel mando de dicho ejército con 1,300 hombres,teniendocomo· Jefe de Estado Mayoral Coronel Simón l3arrionuevo. Misión de este pequeño ejército era servir de enlace entre el Primer Ejército establecido en Tacna yelque se formaría en Arequipa, resguardar los ferrocarriles de 110 a Moque­gua y de Moliendo a Arequipa y evitar desembarcos del enemigo y su avance. al interior. Desconocido el mando quePiérolale hab ía dado a Andrés Gamarra, por el Jefe mi litar de laHeqión Coronel Velarde; mientras se hacían las consultas a Lima V Tacna; Jos chi­lenos en el interíndesembar<:abanen Ilo: llegando Gamarra-a asumir el cargo sólo el 27 de Febrero, pasando eritonceselCoronel Velardecorno Jefe de Estado Mayor en Tacna.

· Como medida.previa asu plan de ataque , Baquedano-en la rna­drugadadel 21 de Marzo, sabedorque la posición ocupada por los peruanos en Los Angeles desde eld ía 20, era inaccesible, hizo efec­tuar un reconocimiento delaOuebrada de QuilinquHinpor dos soldados que. habían sidó mineros, los que informaron al jefe.chi­leno que con alguna dificultad se pod fa alcanzar un punto por el que se podr ía aparecer por detrás y por la derecha -de los defen­sores de la cuesta. . .

· Las fuerzas de. Andrés Gamarra.constitu fdaspor1,300 hombres, la mayor parte de origen cuzqueño, a los que se unieron "Los Gen­darmes de Móquequa", con 50 níoqUeguanos, sin arrnamento.va órdenes del Teniente-Corone] José.Manue] Jirnénez apodado Hua­cullani, ocuparon las siguientes posiciones: el-batallón Canchis de 300 hombres con el Coronel Velasco' y elCanasde 350 hombres con el Coronel Alvarez ocupaban la Pampa del Arrastrado, Los Granaderos del Cuzco -de 300 hombres, con el'CoronelM; Ga­marra yla ..ColumnaGendarmes de Moquegua; de 50hOr:nbres, con. el Teniente Coronel José Manuel Jiménez, se situaron en la altura de Oulinqui lin Vél batallón Grau, . que .antes era el Huáscar. de 300 hombres, al mando del moquequano Coronel Julio César Chocano. conocedor del terreno, defend ía la ci rila de LosAnqelesdandofrente ala pampa de TorriboIOnibo.. . ....

· Antes dé irilciarseIa batalla, en la madrugadadeldía22, Cho­cano despachó en reconocimiento a un grupo de veinte soldados

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moquequanos.ilos que sorprendieron a unos soldados chilenos que hacían pastar sus caballos, en un potrero cercano aTombolombo, les dieron muerte a cinco y tomaron prisioneros a cuatro chilenos con, sus carabinas, apoderándose también de algunos caballos.

Por el amor a la Patria ya la tierra, un grupo de jóvenes distin­guidos de Moquequa, formaron la columna "Huáscar'i-a laque, las damas moqueguanas obsequiaron un estandarte hecho y bordado por ellas, en cuya cara principal relievaba ei escudo y el nombre de la Columna "Huáscar" y el año 1879, yen la otra cara como símbolo de la Patria, una mujer sentada. Es probable que esta Columna se uniera al batallón Grau, antes Huáscar, constituúío por 300 hombres, muchos de ellos, moqueguanos (*).

Baquedano inició sus operaciones en la madrugada del 21: de Marzo,disponiendoque el CorónelMuñoz con su división cons­titu ída por el Regimiento 20 de 1(nea, una parte delReqimiento Santiago, 300 jinetes del Granaderos y del Cazadores, con una batería de montaña, marchara por Sameguay Turnilaca hasta la quebrada de Quilinquilin,a fin de llegar a Mollisajae impedir la retirada de Torata de los derensoresde é'LosAnqetes" .. pero extraviado Muñoz en su recorrido, el maestro de Sameguav un' lugareño, en sus caballos a lastres de la mañanajnarcharon a aler­tar a Gamarra sobre el avance enemigo, por laque, prevenido, rE­cibió a Muñoz con una descarga de Jusilería deteniéndolo cuando llegaba a Quilinquilin, sin embargo el chileno logró emplazar des­

* Terminado el conflicto el Estandarte fue guardado como reliquia r, lucida sólo en ocasiones excepcionales, por la señora Isabel Barrios Vda. de Angulo, quien al ausentarse aLima, lo dejó en poder la señora Angela Barrios Vda. de .Espinoza, pasando luego a suhermana Guillermína Barrios, la queJo .entre­gó al B.I."san Pablo" No. 41 cuando lo jefaturaba el Tnte. Crnl. Hernán Yervis. Duran te varios años desde 1954, hasta su entrega al ejército, el Estan­darte era portado por damas moqueguanas en el Aniversario de la ciudad (25 de Noviembre}ensurecorrido de la Plaza de Armas al Mun icipior.conacorn­pañamiento de las autoridades, escolares y público.

El 22 de .. Marzo de 1980, conmemorando el l er.r Centenarro.de la batalla de Los Angeles, l ibrada en el cerro del 'mismo nombre, durante la guerra con

'Chile, la Tercera División Blindadaa cargo del General de Brigada EP. Hernán O íázWendOrff, organizó un desfiledvico que partiendo del Municipio, reco­rrió el jirón Moquegua hasta la Plaza de los.Héroes, portando escolares el .Es­tandarte que obsequiaran las damas moqueguanas a laColumna Huascar.Tor­mada pOI' hijos del lugar que pelearon heróicamente con (adivlslón del Coro­nel Andrés Gamarra contra el ejército invasor. Seguía el, bicolor nacional llevado por algunas damas, el General O faz Wendorff y autoridades de la loca­lidad. En la Plaza de los Héroes se ofició una misa de campaña, seguida de la rememoración de aquel acontecimiento de armas por el Profesor Wálte'r Vera Antillaqui, después de la cual antacraclda concurrencia 'se efectuó un desf ilem i litar:'

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pués en la margen izquierda del río Tumilaca, uncañon llevado a brazo,con el Que abrió fuego sobre los peruanos. El día 22,Ba­quedano con su artillería, desde el Alto de la Villa, atacó al Grau de Chocano y manteniendo en reserva sus tres compañías del Re, Qlmientodecaballería "Santiago", hizoavanzar el batallón Bulnes por Tornbolornbo, siendo contenido por 10$ disparondel Grauque defendían la cima de LosAngeles. En tanto,elCoronelArístedes Pv1ar­tínez con batallón Atacarna. trataba de ganar la alturatrepando por las escarpadas faldas que Chocano descuidó hacerlas vigilarcreyén­dolas inaccesibles; Sorprendidos por los 600 hornbres de Martínez que se lanzaron al ataque con bayoneta calada, los 300 hombres del Grau se entablaron en dura ydesigual contienda¡ pero ante la superioridad numérica y lo sorpresivo del ataqué, Chocano y sus hombres no tuvieron otro camino que replegarse. Ocupada la ci­ma de Los Angeles a laque también llegó lVIuñoz por la retaguar­dia, cuando el fuego hubo amainado, Garuara antes de ser copado por completo por el enemigo, emprendió la retirada hacia.Yacan-. go a donde Baquedano llegó también el 23,sin librar ningún combate, retirándose luego a su cuartel del Alto delaVilla.

Al parecer no fue el Coronel Julio CésarChocano, como lo con­signa Vargas Ugarte, el que estuvo en la batalla de Los Angeles, sino el Coronel Francisco Chocano, según versión de Hernán Cho­cano, pariente de ambos militares, residentes en 110; y también, por referencias de moqueguanosde edad, que alguna vez .lo oye­ron de sus mayores, existe en el lugar, la versión de que la derro­ta de los peruanos en Los Angeles, .más que a la superioridad nu­mérica y mejor dotación de armamentos del enemigo, .se debió al descuido y confianza que ten ían los jefes peruanos en su posi­ción defensiva, consideránddla infranqueable, por lo que divirtién­dose y bailando en Torata en la víspera de la batalla, se descuida­ron del enemigoque ya estaba emplazado enel Alto de la Villa.

lniciada la batalla de Los Angeles el22 de IVlarzo de 1§380, des­de las cinco a las diez y media de la mañana, los peruanostuvie­ron 30 muertos y unos 70 heridos. Para los chilenos, las bajas fue­ron unos 100 muertos y mavor número de heridos.

Con los humes.del triunfo entraron los chilenos a Moquegua, dedicándose al saqueo y al pillaje. Larnavor parte de las hacien­

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das del valle fueron objeto de los desmanes de la soldadesca, que luego de embriagarse rompieron los toneles, vaciando sin provecho sucontenido.parte de la línea férrea fue destru ída e inutilizadas sus locomotoras, para impedir molestias al ejército establecido en ,110. Permanecieron los chilenos en iVloquegua hasta el 27 de Abril \de 1880, siendo la división del: Coronel IVluñoz la última' en aban­donarla. Fue dejado un pequeño destacamento de 50 soldados de caballería al mando del Alférez Letelierquiendebía requisar gana" do para mantenimiento del ejército invasor. Letelier reunió en el interiorunas 300 reses y otros productos con los que II~gó a lvlo­quequa.el 2de Mavo, pero un grupo de moquequanosencabeza­dos por Pedro Flores, atacó e hizo prisionero' a Letelier quitán­dole e! ganado y los productos requisados.

Días antes de este suceso, el 1°deAbril, un destacamento chi­leno de caballería que había partido de 110 hacia l.ocumbaal.man­do del Tnte. Crnl: Diego Dublé Alrrieida, fue emboscado por el guerrillero tacneñoGregorioAlbarracín, pero una columna alman­do del Coronel José Francisco Vergara, obligó a Albarracín a re­tirarse a Tacna, seis d (asdespués.

ACCIONES DE TACNA y ARICA

Con la derrota de la división peruana de Andrés Gamarra en IVloquegua, el comando chileno se impuso como operativo siguien­te la toma de Tacna. La batalla del Alto de la Alianza el 26 de Ma­yo de 1880, señaló una victoria másdel ejército chilenoconstitu í­

ido por cerca de 14 mil hombres y 41 piezas de artillería contra ;31 piezas y 8,930soldadós aliados (4, 705peruanosy 4,225 bolivia­nos). Los aliados perdieron entre muertos, heridos y prisioneros alrededor de 210 oficiales y 2,500 soldados, para los chilenos las pérdidas fueron de 23 oficiales, 470 soldados y 1,700 heridos: El

. mismo día de la batalla, se separó el resto de las fuerzas aliadas, siguiendo los peruanos por Moquegua y Torata hacia Arequipa a donde llegaron a comienzos de Junio con cuatro piezas de artille­ría, mientras el Genral Narciso iCampero, a quien correspondió. la jefatura de las aliados como Presidente de o0livia, se retiró con los bolivianos que quedaban por el camino de Paica hacia La Paz, a donde llegaron el lUde Junio con sólo dos de sus seis cañones Krupp.

y mientras se disolvía el ejército aliado, como dice dasadre: "La "artilleríachilena hizo fuego sobre la población de Tacna con pun­"teríá elevada para no dañarla; sólo-una docena de disparos tiraron

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"hacia la.estación del ferrocarril. Los vencedores entablaron pláti­"casríe arreglo con algunos cónsules extranjeros, responsabilizan­"do del orden interno al Alcalde de la ciudad Guillermo IVlal': Lean "ventraron a ella al atardecer".

Sólo quedaba Arica como punto aislado y solitario de la resis­tencia del Sur. Y días más tarde. el 7 deJuniode 1880, un puñado de 1,651 peruanos comandados por Francisco Boloqnesi cumpli­rían con el reto que se habían impuesto de "quemar hasta el últi­mo cartucho" ante el asalto de cerca de ocho mil chilenos apoya­dos 'por su escuadra, que convertir ían el gran ítico Morro de Arica, en una tumba excelsa de gloria vde inmortalidad peruanas para la posteridad.

y para Moquegua, no debe quedaren el olvido entre las decenas de hijos anónimos que ofrendaron sus vidas, los nombres de quie­nespor su patria y por su tierra, se inmolaron en la contienda.

El Coronel Justo Pastor Dávila, Prefecto de Iquique al estallar el confllcto con Chi le. "Oriundo de Moquequa, fermentando en sus venas sangre- mixta de inca e hispano; impetuoso y valiente en campaña, emprendedor y activo "como dice el historiador inglés :,ir C~ement R. IVlarckam, al frente de la división "Vanguardia" intervino en la batalla de Tarapacá, como Jefe de la Primera Divi­sión en la batalla del Alto dela Alianza V más tardeen las batallas de San Juan y Miraflores ,comandando el Tercer Cuérpo de Ejér­cito con 4,300 hombres. Fue Prefecto de Moquégua de 1888 a 1890, en cuya gestión, le tocó ser testigo ocular de los juveniles

. y combativos enfretamientos de los dos bandos rivales de Moque­gua: "Los Parnpeños " y "Los delermos".

-- El TenienteCoronellVtanuelC. de la Torre, Jefe de Detall y miembro dela Junta de Guerraque dió la respuesta al parlamenta­río chileno Juan de la Cruz Salvo al intimar la rendición de Arica.­Fue hecho prisionero en esta plaza, lo mismo que el Mayor Miguel aarrios.

- El Sargento Mayor Manuel M. Zeballos, 40 Jefe del Batallón Iquique l\J o33.- Hecho prisionero en Arica.

- Benigno Vargas y JoséChocano, Capitanes del batallón Tara­pacá l\Jo 23;- Prisioneros en el Combate de Arica ..

- El Capitán Daniel Nieto yel Subteniente ManuelA. Porto­carrero, prisioneros enlas.baterfasdel Morro.

-,-El Teniente Segundo..Manuel Fernández Dávila. Comandante

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de la 'lancha torpedo:"Alieanza" V el Alférez de Fragata Manuel David Flores de las misma dotación, hechosprisiónerosen la Parn­pa de Salinas, en tránsito a Moquegua, el 8de Junio de 1880;

- VitalianoHecerra, Teniente de Granaderos de Tacna, muerto ertel Combate de Arica el7deJunio de 1880.

,...,.... El Coronel FranciscoChocano, defensor de Los Angeles al frente-de! batallón Graude300 hombres, antes "Huáscar" -.

--'-o El Teniente Coronel José Manuel .Jirnénez: (Huacullani) orga­nizador de la Columna Gendarmes de Moquequa con 50 moque­guanos que pelearon en Los Angeles.

- Juan Luis Pacheco de Céspedes "E I Cubano", familiarizado. por sus hazañas montoneras con los vecindarios de lVIoquegua, To­rata y Tacna. Hostilizó en forma incansable con sus guerrillas a los chilenos durante la ocupación de dichas ciudades. Murió en el Combate delToratá el27 de Enero de 1895, al mandode susque­rri llas corno piero lista, en la guerra civi lcontralas tropas gobiernis­tas de Andrés AvelinoCáceres.

TERGERAOCUPACION DE MOQUEGUAYEL CUPO DE GUERRA'

, .

Dueños .los chilenos del sur, para combatir a los dispersos de Tarataque comandaba el Coronel Prado, sobrino del ex-Presiden­te Mariano Ignacio Prado, los chilenos destacaron la división del Coronel Orozimbo Barboza, el saqueador de.Mollendo, para com­batirlo, derrotándolo el 21 .de Julio con lo que ocupó el chileno Tarata yTicaco.·

Núcleos de resistencia quedaban, sin embargo hostilizando con­tinuamente al enemigo, mieritras el tacneño Gregorio Albarracín con sus guérrillas, lo .hacíaen la región de Tacna y Mirave, "EI Cubano" Juan Luis, Pacheco de Céspedes, transitaba con los mismos propósitos entre Tacna y rJloquegua. Por otro lado, solda­dos chilenos de la guarnición de Calama en la frontera con oolivia,

insurreccionados en la noche del 21 de Agosto de 1880, después de dar muerte a algunos oficiales, fueron dominados, dándose luego muerte al' cabecilla. En Tacna, se dispuso la disolución de los Zapadores del Desierto, cuyas intenciones era seguir el ejemplo de los de Calama, pero unos 300 hombresde ese cuerpo que se en­contrabanen Pachía, se sublevaron y desertaron y dirigiéndose u­

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nos a t30livia y otros a Moquequa, recibieron a tiros al piquete de caballería destacado, en su persecución, que tuvo que regresar sin haber conseguido su objetivo.

Por su parte; eLPrefectodelVloquegua, despachó al Coronel José Manuel Jiménez con su columna "Gendarmes de-Moquequaí'<al valle de Sama, no sólo con miras a hostilizar a los chilenos, sirio

. también. para fomentar la deserción de los descontentos, lo que consigüióJiménez,trayendo 18 o más individuos de tropa, como lo manifestará después Salvocuando ocupóf\lloquegua.

. .

BaquedanoaLtener conocimierrto deque en Moquegua había numerosa tropa peruana y gran parte de los desertores chilenos se habíaprefugiado en elvalle de, esa ciudad.ríespachó al Comandan­te Juan de la .Cruz Salvo, con una división, de las tres armas hada Moquegua, en donde redbiólos refuerzos que pidió el Coronel Pedro Lagos. .

Lejosde estar MoquegUa guarnecida, pues, sugentéhabía par­tido a Arequipa para integrarse al SequndoEjército 'del Sur, la división chilena de Salvo el día6de OCtubre de 1880, alas doce del día, lleqó' sin contratiempo; por ferrocarril alaéstación del AI­tode la Villa, endonde eljefechileno estableciósu'cuartelqeherál. .

La colonia Italiana algo numerosa en Moquequa: nombró Una comisión encabezada por Felipe Lava re ilo (nopor Al1gustoMinuc ttovcorno decfasuhl]o Atillo) que se presentó ante el Jefe chileno para conocer los fines de la expedición. Salvo les aseguró que la preserrciade su divisiónnb debía constituir ningún motivo de alar­ma, que' sólo ven ía enbusca.de dos individuos de tropa que extra­viadosen el camino, habían· sido apresados el día anterior, y que también ve n·ía a reclamar la entrega de los 18 desertores chilenos queefComandante J irnénez hab ía.tra ído de-Sarna cuando cumplía una misión dé 'la-Prefectura. .

El día 7 de Octubre a las once delamañana,el italiano Lavare­110 en reiteradas invitaciones convocó a los vecinos del lugar, con­curriendoentre ellos el Escribano Dr. Juan David Navarrete,fVla­nuel Rodríguez y Fernando Gónqora.. Preguntados porSaJvosi entre los presentes había alguna autoridad con quien. entenderse, respondiéronlequetodosse habíanauseritado y que entre los asistentes los más caracterizados .eranlos tres miembrosde.lMuni­cipio mencionados, conviniendo que Juan David Navarrete como " Primir Síndico fuera el intermediario entre el Jefe chileno y el

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pueblo de Moquegua. Aceptada la proposición por Salvo, se pro­cedió a asentar una acta que el mismo Salvo dictaba y en la cual, se hacía constar que a nombre del gobierno chileno impon ía a Mo­quegua la contribución de Cien Mil Pesos (100,000.-) en moneda de buena ley, pagaderos en monedas de plata sellada, y labrada, alhajasv pastas metálicas V además deb ían reunir 50 reses, 20 quin­tales de arroz, 30 de harina, 10 de azúcar y 5 de café o su valor en dinero a precio de plaza. Señalaba un' plazo de 24',horas para la entrega del dinero y de 48 horas para las reses y los víveres. Sos­ten ía Salvo que a pesar de la benignidad con que.los chilenos ha­b ían tratado a la pob lación, elIa se hab ía mostrado muy hosti 1, recordando que err'Mavo último (después de la oatalla de los An­geles) inmediatamente que desocuparon la ciudad, lesquitaron el ganado que hicieron traer de las alturasdela provincia, aracan­do a la fuerza que lo conducía; que el Jefe Jiménezhab ía ido a Sama mandado por la autoridad po lítica para inducircon halagos a la deserción de sus soldados, como lo comprobaba el hecho de haberse traído a 18 o más individuos de tropa y que al ocupar la ciudad, se habían encontrado. impresos esparcidos ofreciendo unagratif'íc'áeióri de diez solesporcada desertor desarmado vvein­te soles si se presentaba con su arma. Algunos de los presentesal manifestarle.a.Salvo que 'la población no pudo impedir la ocupa­ción por ~~contrár~esompletamentedesarmadaV que la deplora- . ble srtuacion econormca en que se hallaban por la guerra les im­ped ía satisfacer un tributo tan exhorbitante en plazo tan corto, aunque de mala gana, Salvo redujo el cupo a .SesentaMil Pesos, incluyendo metálico y plata labrada, sin querer alterar la cantidad

'. ,.;

de víveres a proporcionar, ni modificar tampoco los plazos seña­lados. Al ofrecércele pagar parte del cupo en vinos y aguardientes, sin ningún empacho, les manifestó, los tenía a su entera disposi­ción, cuando los quisiera: Concluyó amenazando al pueblo con el uso de .la·fuerza sin responder por las consecuencias, si no se cum­pi ía con el pago de la contribución. Terminó Salvo obligando a los

, miembros del Municipio a firmar el acta como constancia de la . obligación impuesta y su.intirnación al pueblo,

Portadas las calles de la ciudad, se movilizaron los grupos de hombres 'Y mujeres encargados de la colecta que se organizó, des­

.prediéndose el vecindario del dinero disponible, y de sus alhajas todo lo cual se iba depositando en las mesas colocadas en la pla­za. CumplidasIas 24horas del plazo fijado, a las tres de la tarde del día 8 de Octubre Salvo y las fuerzas chilenas ocuparon la ciu­dad, mientras el pueblo atemorizado buscaba refugio enel templo.

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Según Vicuña ;J1ackenna "Formó el Comandante Salvo su divi­"sión en cuadro como para una ejecución; en la plaza del pueblo, "y tomando su puesto enla cabecera de una mesa provista deba­"lanzas, iba a comenzar la operación de rescate, cuando como en . "Roma, sintióse la voz sentimental de un grupo de damas que ve­"níana solicitar clemencia", '.

. Efectivamente, matronas. rnoquequanas no 0~lvidc3ll1o 'qUl.'apor sus venas corre sangre de próceres y valientes, encabezadas, por. Dominga de la Llosa de Durarrd, María Noel de Tizón, Manuela Sorzano de Barrios, Agueda Vizcarra de Angulo, Jesús Fajardo de Zapatav Clara Fajardo, entre otras, vestidas de riguroso luto; des­pués dé' postrarse ante Santa Fortunata, con altivez se dirigen en cortejo ante" Salvo; para pedirle prórroga del plazo por no haber por'Ho rreunir. pese a sus esfuerzos, el monto de lacantidad im­puesta al' mismo tiempo 'que exigen garantía para las' mujeres y protección para los ancianos y niños.

y 'dejamos al historiador chileno Vicuña Mackenna, elrelato deesta entrevista: . . . .

"Recibiólas el Comandante Salvo con SU -éortes íacaracterfstica y "entonces con eco acentuado pero suplicante habló en los térrni­"nos siguientes la señora DorninqcLlosa de Durand: Señor; nues­"tras acongojados semblantes más bien que nuestras palabras de­"mostrarán a usted la tristísima situación en que nos encontramos. "Tiene usted la fuerza y con ella la suerte de este pueblo, sufortu­"na y su vida; pero esperamos de su corazón magnánimo y gene­"roso que, inspirándose en nobles sentimientos, en el recuerdo de "su esposa e hijo, conceda un luqarderetuqio para la vidade nues­"tros hijos, para la honra de nuestras hijas. Hemos dado todo "cuanto tenemos,el dinero destinado a nuestro alimento, las-alba­"[as que conservábamos con cariflo. Estamos dispuestas a dar más, . "todo lo que tengamos; nuestras propiedades y nuestros muebles. "Pero el honor y la v;; t!a tI,e' los inocentes y débiles quede a salva­"guarda dé los desórdenes de la tropa. Pedirnos un lugar de asiló "para nuestros hijos, Pedimos mayor plazo para cumplir [aobliqa­"dón impuesta al-pueblo; y todo esto pedimos por lo mássanto y"sáqrado que hay en el corazón". . '... , .

"El Comandante Salvo puesto de pie, contestó inmediatamente "yconformea su diario de campaña, de I~ manera siquiente: -Se­"ñora, he escuchado con profundo respetó y emoción las palabras "que usted, a nombre de las distinquidas.señoras de esta ciudad,

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"me acaba de dirigir. Representante nade voluntad superior, yo no "soyaqu ísino el mero ejecutante de las disposiciones del gobierno "de Chile. Tengo el honroso: mandato del gobierno de mi patria, y "dejando aun lado los impulsos personales que pudieran moverme "a alterar mi línea de conducta, me es doloroso, no-poder acceder "a todo .10 que ustedes, señoras, me piden; Las hostitilidadesdel "ejército de Chile se dirigen contra los que hacen hostilidades en "daño de Chile,no contra las mujeres, niños y hornbresindefensos, "las contribuciones de guerra pesan sobre todos los habitantes de "los pueblos. Al hacerlas efectivas, las propiedades y/las cosas de­"ben servir para satisfacerlas.. no las personas. Puedo asegurar a us­"tedas seQ()ras,que ni un cabello de persona alguna dé este pueblo "seratocadopor nuestros soldados. Ustedes pueden reposar tran­"quilas. 1\10 necesitan lugar de asilo. En cuanto a prorrogar el tér­"mino para el pago de la contribución, mees absolutamente irnpo­"sible hacerlo. He fijado un término fatal: no está en mi ánimo "alterarlo. Lo siento, pero no puedo hacer más",

"Mar ía Noel de Tizón (*) con un acento de desesperación que­"hizo asomar las lágrimas y el sonrojo en todos los circunstantes, "exclamó: Es justo, es necesario señor, que ya que usted significa "que se harán hostilidades a, la población.vsi no se alcanza a cum­"plir el Impuesto, es .Indisperisable que indique qué hará. Tene­"mol' elderecho a saberlo, porque como madres, tenernos la obli-: "qación.de.ciudar.de nuestros hljos.fratarernosde ponerlosaSalvo. "Esperóse sirva usted contestarme: ¿Qué hará usted? -El. Co­::madanteSalvo respondió: -Repito, señora, notienen ustedes "mandante Salvo respond ió:- Repito, señora, ,no tienen ustedes "q ue preocuparse de la seguridad de. sus personas.... su vida.y su "honorestánsequros bajo lasarmas de Chile".

Sigue un silencio edJearazosoy luego ¡\liaría Npel de Tizón; le dice al Jefe' chileno:. "Las rnoquequanassabrernos defender la santidad denuestroshoqares ve! honor de nuestras !l-ijas",loque Salvo no .consiqan.en su diario. y por versiones trasmitidas de padres á hijos, la misma' señora,~ntel.ainsensibilidad delchi.leno por prorrogar el plazo para completar el pago del cupo, les dice-a sus desoladas compañeras: "Vamos señoras, parece qué a este hombre no lo hubiera parido una mujer". Algunafibra del.senti­miento humano, al parecer vibra en el alma del chileno, pues alar­

(*) Mari1í NoeldeTizón, hija del marino Capitán Noel, fue ,casada con el Capitán de Navío graduado Rómulo G~ Tizón, vencedor del 2 de Mayo de 1866 eñ el vapor dequerra Colón. en la-guerra contra la escuadra española.

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ga el plazo en 24 horas, disponiendo luego, la entrega delo que se había n:¡caudado. Eset:lía 8 de Octubre, se llevaron iós.chiienos 27,4211,50 pesos; enplátasellada,labrada y alhajas cuya valori­zación la hicieron oficiales chilenos, no permitiéndose la interven­ción de ningún joyero dela localidad, aunque las noticias trasmi­tidas desde esa época, asignan también la intervención dél joyero José Dávila y la certificación del acto por el Escribano Dr. Juan David Navarrete.

El día 10 de Octubre a las once de la mañana, los chilenos se emplazaron nuevamente en la dudad, V se dispuso el registro mi­nucioso de ·Ias casas, incluyendo la de los extranjeros, haciéndose abrir hasta los baúlesv Se extrajeron los revólveres yescopetasque encontraron y de los corrales se adueñaron de reses, carnerosbuen número de caballos, mulas y borricos y áves que hallaron; Se reu­nióalgún dinero yante el apremio de cubrir el monto del cupo los curas de Santo Domingo, Vicente Salt y Francisco Javier Zúñiga, se vieron obligados a entregar la valiosrsirna custodia con piedras preciosas, queantes lo fuera de La Matriz, obsequiada por Manuel Moscoso y Peralta cuando fuera sacerdote de Moquegúa, siendo después Obispo Auxi liar de AreqiJipa, su tierra, y más tarda-de Córdova, Tucurnén.iCuzco.Tlepando al Arzobispado dé Granada. Tan artística joya religiosa, se sostiene que no fue tasada como tal, sino reducida y valorada comochafalonfa.En este segundo día de colecta, incluvendo facustodia y cuatro mil pesos aportados por Ias vcoloniasJtaliana ychina,seréunió ·35;367.50 que con fa entregado el d iaB, hicieron un total de 62,788 pesos.

EnuninformedeJuan David Navarreteal Prefecto deArequi­pa, aparece que después de la entrega de las dos colectas efectua­

. das, el Comandante en Jefe; J.C. Salvo, desde el Alto dela Villav con fecha 12deOctubre, hacía el siguiente cargo:

Déficit de la contribución. (Pesos). .; ; .. 16; 108'.67 . Adeudado por vtveres 14,049.00

Total ...•............ , ...20,157.67 -.----­--=-.:....-_;.,;...;._­

uejabaconstancia que debfan entregarse 3;050 libras de café que seanotancomo percibidos.

. De la cantidad anterior, el 13de Octubre, mediante­recibido firmado por José Albertodravo, Ayudante de Salvo; se entrega a cuenta de la contribución de ­

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guerra......................•....... , ..... Pesos 13,900.00 yel 14, también con recibo firmado por el mismo Ayudante, se entregan por-el mismoconcepto .. Pesos 2,687.60

Entregado :: 16,587.60 quedando por entregar un saldo de . ; ': 3,570.00

Total ,:: 20,157.60

. El ejército invasor, recibió pues, de Moquegua como contribu­ción de guerra, en dos colectas ; .. Pesos 62,788.00 IVlás:. Las entregas de los días 13 y 14de Octubre .. .J 6,587 .60

Totaldela vcontribución de guerra '" 79,375.60

Sobre el adeudo de 3,570 pesos, Navarrete recibió la siguiente comunicación: "Moquequa, 15 de Octubre de 1880.- Sr. Dr. Navarrete: "Muy señor mío: '-A nombre.del ejército chileno hago donación "de la. suma de 3,570 pesos que por el impuesto de guerra nos "adeuda aún el pueblo de iv'loquegua, en beneficio del Hospital de "Caridad, y también dono los dos caballos que andan-en comisión "en Torata, al mismo establecimiento. Con este motivo tengo el "honor de suscribirme de Ud. su atto. y s.s. J.C. Salvo'.'.

La donación de 3,570 pesos hechos por Salvo al Hospital "San Juan de Dios" consistía en vales, vino y aguardiente que fueron entregados adon Angel Ghersi en pago de 3,600 soles que éste prestó a la 8eneficiencia Pública quepresid ía Rafael Alayza, con garantía de los señores José P. Barrios, José R íos, José fJlanuel Peña loza y Domingo darrios.

En sesion de 6 de Diciembre de 1880, don Santiago Torres, miembro de la deneficiencia, propuso que nu ;¡J aceptase la dona­ción que se hacía en favor del nosocomio que corr ía a cargo de la

. institución, porque sería una deshonra para ella por provenir del enemigo, agregando Domingo aarrios que esa cantidad sacada con lágrimas y por medio de la fuerza no podía estimarse como dona­ción y que ladeneficiencia no ten ía facultades ni sería decoroso para ella hacer efectivo ese resto de contribución de guerra.

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La promesa que en varias oportunidades hab ía hecho Salvo de que satisfecha por Moquequa la contribución de guerra; qarantiza­ba que las fuerzas de su mando se.retirarfarien orden, sin causar daño alas personas y propiedades, recibió, una vez más, las más rotunda negación con el vandalismo de los chilenos.. AI evacuar Moquequa, los días 15 y 16 de Octubre, incendiaron en el valle la habitación de unjiobre arrendatario de apellido Robles; la bodega de la hacienda que conducía Oswaldo Zúñiga; la Gasa y oficina de .Ia hacienda de Pedro Flores, en .Charsaqua. en repre­sal iapor su continuo hostigamiento con otros moqueguanos a las huestes invasoras; la de PetronilaVargas de Zavalaga; las ca­sas voficinas de Domingo Barrios en "El Pacae", las de Gaspar . Zapata en "La . Rinconada". y la estación de."EI Conde". Y aunque se salvaron de las llamas las haciendas.de JoséLaureano Artieda yde Lorenzo de la Flor por súplicas y halagos de los administradores dé ellas, quedaron; empero, en once días de ocupación, alo largo del valle las hueltas-siniestras de la estan­cia del enemigo: puertas destru ídas, toneles y vasijjas rotas, licores sustra {dos, complementado está con el malvado derra­mamiento del resto del contenido en la mayor parte de tas bo­degas y muchas sementeras perdidas o consurnidas.. También

'se despacharon por ' 110 hacia Pisaqua, las locomotoras y el ma­terial rodantexiisponiote, para ser utilizados'<eniélvferrocarril de Iquique entre La Noria, Pozo Almonte y Peña Grande, des­pués de haber destru íJo la Estación del Alto de La Villa y . las instalaciones ferroviarias, Ievanténdose vasirnismo, un tra­mo considerable de la línea férrea que inutilizaron el vservi­cio del ferrocarril a l lo.ríesde 1880a 1908,enquefuereconstrÍJído durante el gobierno de José Pardo.'

AsLterminóla expedición de merodeo a Moqueguaque realizó el ejércitochlleno, la cual no fue otra cosa que un acto de piratería y latrocinio, como di..ce Vargas Ugarte. y Tomás Caivano,italiano avecindadoen el Perú, aunque con distorsión de la verdad-al refe

-rirse a la contribución impuesta a Moquegua, decía: "Si se consi­"deraque estos tributos fueron en su mayor parte .recogidos en "géneros, azúcar, tabaco.i.alqodón y miserables alhajas de usoque "el terror arrancara de 'Iosdedos v-orejas de las mujeres, y que sin "beneficio para nadie se destruyeran, como ni siquiera los Hunos "hubieran-hecho en grandiosos V colosales laboratorios industria­"les, no se -puede menos de reconocer que e I recuerdo de estos "hechos quedarán siempre enJa conciencia de los pueblos civili-. "zados e indeleble deshonra Vvergüenza de quien fue su autor".

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LAS CAMPAf\JASDE LIMA y DELA SIERRA

Vencida ,la-resistencia peruana delSur, conelpropósito de obli­gar al Perú a solicitar la paz y envanecidos con SIjS triunfos, elco­mando chileno decidió. mientras organizaba Su plan de campaña para atacar a Limél,despachar al Capitán de Navío Lynch con al­gunos bata llenes en dostransportesesccltados por la Chacabuco, para que recorriera la costa peruana entre Ouilca y Paita, impo­niendo contribuciones-en dineroó en especies, 'con amenaza de la destrucción de sus propiedades a tosomtsos o encaso de resistencia cometido que secu mpíió 'con las consiquientesextorsionesentre el 4 de Setiembre yellO de Noviembre de 1880; Destinados 30 mil chilenos apoyados por la escuadra para la campaña de Lima y quebrantada la heroica resistencia peruana ofrecida por 13,OOOre­clutas mal armados, con escaso o ningún entrenamiento militar contra 21,000 chilenos, en las batallas de San Juan y illliraflbres (l3y -15 de Enero de188l), los chilenos ocuparon el día 18 la capital mientras Lynchlohacíacon el Callao el mismo día.' '

"; '." . . . "-'. .'. ", "

,y la campaña dela sierra, con el objetivo chilenode impedirla teorqanizaclónv. la resistencia de los peruanos, comportó para el invasor operaciones desacostumbradas en tos accidentados.riscos cor­dilleranos, enlosque el desplazarse continuo de los peruanos los lle­vabáaun agotador ycontinljo desgaste que, empero, supera­ban con .su superioridad; su mejor armamento, la frecuente ,re­quisa de ganado y víveres y .suya acostumbrada táctica de ame­drentamientoque imponían a los indefensos pueblos serranos, en los que se presentaban como perseguidores o perseguidos, ,

En el curso de la guerra con Chile, surgieron yse consagraron héroes, y si en cada soldado peruano sobre su deficiente prepara­cién.rnilltar.c se sobrepuso el incentivo anímico de defender a su Patria' hollada.va su suelo; a.su.hoqar y, asufamiliaamenazados, haciendo de cada defensor un luchador valiente; esforzado y sa­criticado y restando 'los triunfos obtenidos en Tarapacaven el Sur; en, Sangrar/ Pucará,» lV1arcava lIe, Concepción, eh el Centró y San Pablo en Cajamarca, triunfos en los que, más que a laestra­teqia, tal vez se debieron ala valerosa lnspiraclon de sus forjadores, desafortunadamente; la campaña peruana durante la contienda con Chile, fue unverdaderodesastre, como dolorosa y lamentable con­tingencia de la imprevisión, de los continuos desaciertos, de los conductores de la política y de las luchas intestinas dela.pre-que­rra. Sin embargo, sin marginara los muchos peruanos que alcanza­ron por sus acciones la inmortalidad, con, el ayacuchanoAndrés

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Avelino Cáceres, "El Brujo de los Andes" ,como lo llamaran los chilenosv más tarde los nacionales" EI Héroe de la Breña",como dice Basad re: "El honor del país ydelejército quedó salvado aun­"que no pudiera hacer más por la falta de apoyo y la desunión de "los peruanos yla desorganización del país, hipnotizado primero "por la falacia del apoyo norteamericano y escindido después "cuando surgieron enel Norte los partidariosde la paz a todo trarr­"ce, cuando el ejército de Arequipa con 4,000 hombres se. quedó "sin prestar servicio alguno, como dice Cáceres en sus.Memorias, "no quedarfan ila resistencia armada para salvar sus personas y sus "bienes" .

LA CUARTAY ULTIMA OCUPACION DE MOQUEGUA " .

'. Después del revés de Huamachuco el10de Julio. de 1883, en donde los heridos fueron ultimados, y en donde,además de los innumerables héroes anónimos resaltó el heroísmo del Coronel LeoncioPrado, que entonces desempeñaba la Jefatura del Estado Mayor de la Primera División, resultarían estériles los propósitos de Cáceres de proseguirla lucha, aunque. contaba con.Ejército del Sur que hab íaorganizado E!n Arequipa el Contralmirante l.izardo Montero" Vicepresidente del Gobierno de Francisco Garcia.Calde­rón' a quien el invasor hab (a desterrado prisionero a Chile. .

- ,- .' , '

En' el I\lorte, el General Miguel Iglesias, un año antes, el 31 de Agosto de 1882, en una proclama que se conoce como, "El Grito de Montán" por el riombre de la hacienda endonde la lanzó, decía que debía terminarse con el perjuicio y humillación dela ocupación enemiga, ya que el Perú se hallabaenel dilema de un

. imposible moral que era la paz y un imposible real que era la gue­rra, por lo que .conocidas sus intenciones de paz mereció el apoyo del enemigo que trató de encontrar en él al caudillo con quien con­certar la pazr.aunque dicho manifiesto encontró unánime rechazo en la opinión nacional.

Para el Presidente de Chile, Domingo Santa María y para la rna­yoríade los.diriqentes chilenos sería imposible llegara la paz, que ellos ansiosos trataban de alcanzarla; mientras existiera el gobierno de Montero en Arequipa, a cuyas órdenes Cáceres combatía en el Centro y el General César Canevaro comandaba las fuerzas del ínea del Segundo Ejército del Sur, constitu ído por 3,000 hombres,dis­tribuidos en ocho batallones de infantería, cinco escuadrones de caballería:' Húsares de Jun ín, Escolta de Su Excelencia, Inmortales

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de Salaverry, Paucarpélta V Socabava: Completaban la dotación peruana siete batallones de la Guardia Nacional con 2,500 efecti­vos, 6 cañones Krupp, 12 piezas de artillería y buena dotación de municiones que habían llegado por lavía de Bolivia.

Con miras a combatir a este ejército se dispuso que el Coronel , José Velásquez, Comandante de las fuerzas de ocupación de Tacna marchara por tierra hacia Moquegua con 3,200 hombres de las tres armas, ordenándose además, que desde el Callao Lynch despachara a 110 3,000 hombres con el Coronel Canto, para que se unieran a Velásquez en Moquegua, lo que ocurrió en la primera semana de Octubre de 1883. Ambos jefes fueron reforzados con 1,200 hom­bres de los batallones Aconcagua y Coquimbo, mientras por otro lado, llegaba de Valparaíso a Moliendo el Coronel Gorostiaga con 700 hombres. Contando además, con 11 cañones I<rupp, bagaje, parque y ambulancias, las tropas chilenas al ocupar por cuarta vez Moquegua, sé organizaron en dos divisiones yla caballería. Una di­visión al mando del Coronel Ruiz, tenía a los batallones Santiago, Cararnpanque, Rengo, Los Angeles, 40. de línea y cinco cañones: La segunda división comandada por el Coronel Canto, la consti­tuíanlos batallones: 20. de Línea, Lautaro, Curicóy seis cañones y la Caballería conelComahdante Vargas, estaba formada por dos escuadrones de" Los Cazadores aCaballo", 2 de "LosCarabineros de Yunqav", el "Santa Cruz" y "Las Heras", Velásque:z estableció su cuattelqeneral en el Alto de la Villa, tomando también Torata y Otora. Las tropas peruanas de Somocurcio y Llosa que estaban en Moquegua se retiraron a Arequipa ante la aproximación de los chilenos y como dice una correspondencia de Iquique al Diario Oficial chileno de Lima del 2 de Octubre de 1883, Juan Luis Pa­checo de Céspedes no creyendo prudente estar cerca de los chi­lenos, se retiró también a Aréquipa.

Montero sin intentar detener al enemigo en fJloquegua, previen­do su avance a Arequipa, ubicó alas batallones peruanos del Coro­nel José God ínez, en las a Ituras de Huasacach iy Jamata,en Omate dominando el camino por donde debía pasar el enemigo, pero los chilenos previo reconocimiento del terreno,escalaron por la noche las alturas de Huasacachi rodeando alas peruanos que ante este peligrase vieron obligados a abandonarlas en la madrugada del 23 de Octubre, dirigiéndose al paso de Chacahuallo, cerca de Pú­quina y del camino hacia Arequipa, en donde trataron de insta­larse para resistir bajo el comando de los Coroneles. Germán y Francisco Llosa, pero temerosos de ser copados continuaron su marchade retroceso hacia Arequipa. (*)

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'AmenazadaArequipa. por la ocupación chílena,el Alcalde de la ciudad Armando de' la Fuente, con apoyo del cuerpo consular, cuyo Decano era Enrique Gibson, solicitaron a Montero se evita­ra LHl combate en las calles de la ciudad, contradiciendo con ello el propósito que animara a mUchos; ya que en un volante que ha- " b Iacirculado días antes se decía que "Arequipaerala llamada áre­dimir al Perú y a Bolivia". De los siete batallonesde!a Guardia Nacional unos se dispersaron y los componentes de otros,arequi­peñas con sus hogares en Arequipa, seretiraron a ellos. desoyendo el llamado a Montero yCanevaro que .105 instaban a resistir el enemigo, y cuando Montero se retiraba de un cuartel para diri girse a otro, recibió una descarga por la espalda, cayendo víctimas algunos de sus acompañantes. Contagiados por estaindisciplina,las tropas de Línea que retrocedía de Puquina, abandonaron también sus unidades, aumentando con su actitud la confusión reinante. Impotente para restablecer" el orden, el Contralrnl rante Montero, con peligro de su vida, por calles alejadas se dirigió a caballo a Chi­guata en la noche del 26 de Octubre, dirigiéndose de all ía Santa Lucía, donde abordó el tren a Puno. Embarcado en el' vapOr "Varal! i" paradiriqirse a La Paz, comunicó a Cáceres que le dejaba el poder como Segundo Vicepresidente del Gobierriode García

. Calderón.

El 27 de Octubre, la Municipalidad de Arequipa entró. en arre­glos con el Jefe chileno Coronel José Velásquez para hacerle en­trega de la ciudad. Velásquez citó a unacomisión de notables de Arequipa en el pueblo de Paucarpata para llegar a un acuerdo so­bre la entrega de la ciudad y el mismo día 29 de Octubre, suscri­biéndose el acta correspondiente, entrabanvictoriosos y sin con­tratiempos 8,000 soldados chilenos a la ciudad del Misti y des­puésde permanecer en ella 54, días se retiraron el 21 de Diciem­bre dé 1883. . ..

Días antes de los acontecimientos de Arequipa Iglesias culrni­nósusarreglosde paz con Chile, suscribiendo el Tratado de An­cón el '20 de Octubre de 1883, el que fue aprobado por la Asam­ble Constituyente convocada por él, "en Marzo de 1884.

(*) Por la ayida que prestaron en esta ocasión y durante la querrá los habi­tantes de Omate y Puquina a las tropas peruanas, el Congreso del Perú dio la Ley de 30. de Noviembre de 1916, promulgada el4 de Oiciemhrede 1916, por José Pardo, por la que: "Elévase a la categoría de Villa los pueblos de Omatey Puquina de la Provincia Litoral de Moquegua, como recompensa a los servicios prestados ala Patria en los años 1879 a í883 y como estímulo a los sentimientos cívicos de sus 'moradores'". .

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En cuantoa Bolivia, d fas después, en el mes de Abril, el gobier­no de Narciso Campero, firmó un Pacto de Tregua con Chile.

Firmado el Tratado de Ancón, los chilenos dejaron él Palacio de Gobierno Y los cuarteles el 23 de Octubre, haciéndose cargo del Gobierno el General Miguel lqlesias ese día. Las tropas chilenas fuerorr movilizándose a su pars.jerrnlnandola evacuaclóhdél terri­torio peruano en Agóstáde 1884. .

Desde la declaratoria de guerra al Perú, el5 Abril de 1879, has­ta la desocupación del pa ts. hab ían transcurrido cinco añosv cua­tro meses conalgunosd fas,quedando un Perú mutilado,herido, ensangrentado, convulslonado el sentimiento patriótico V con el amargor de la derrota llegando a lo más profundo del alma de to­dos los peruanos.

CREACIOI\J DEL DEPARTAMENTODE MOQUEGUA

E.I General Miguel Iglesias que hab lasido designado Presidente de 'él Repúblicapor la Asamblea Constituyente el 1')de hIIarzo de 1884 y cuyo gobierno duró hasta. el 2de Diciembre del mismo año, promulqóIasiquiente ley, creando.el.departamento de Moquequa:

MIGUEL IGLESIAS Presidente Provisoriodela República Por Cuanto: . La Asamblea Constituyente hadado la leysiguiente:

La Asamblea Constituyente . CONSIDERANDO:

. . .

..Queaprobadoel Tratado de Paz con Chile, es urgente deter­minar la condición política im quedeben quedar los territorio des­membrados del Departamento de Tacna que se hallan al norte del río Sama.. . .' .

Que la Provincia Litoral de Moquequa por su situación geográ; fica y otras circunstancias que la tavorecen.está llamada a servir de centro de agrupación de dichos territorios, elevándola a la co­rrespondiente categoría. .

Hadadola ley siguiente:

Art. 10.-Eríjaseen Departamento de Provincia Litoral deMo­quegua, anexándole los territorios desmembrados del departarnen­

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to deTacna que sehallan al norte de! r íoSama.

Art. 20 .- La Capital de este nueVodepartamento será la ciudad de Moquegua.

Art. 30.- El referido departamento se compondrá de tres pro­vincias: la primera denominada Moquegua,cuya capital será la ciu­dad del mismo nombre; la segundaPuquina, cuya captital será el pueblo de amate; yla tercera Tarata, cuya capital será el pueblo del mismo nombre.. .

Art. 40."::" La Provincia de Moquegua comprende los distritos de Moquegua, 110, Torata, Carumas, l.ocumba e Ilabaya, cuyas capi­tales serán lospueblos de los mismos nombres.

La procincia de Puquina, comprenderá los distritos de Puqui­na, amate, Ubinas e Ichuña, cuyas capitales serán los pueblos de los mismos nombres.

La provincia de Tarata, comprenderá los distritos que actual­mente tiene con sus mismas capitales.

Art. 50 .- Si por resultado del plebiscito que ha de fijar defini­tivamentela suerte de las provincias de Tácna y Arica, volvieran éstas a formar parte del Perú, la Representación Nacional recom­pondrá el antiguo departamento de Tacna o dictará la Resolución que, según las circunstancias estime más convenientes.

Comuníquese al Poder Ejecutivo, para que disponga rb necesa­rioa su cumplimiento. .

Dado en la Sala de Sesiones dela Asamblea Constituyente a los treinta y un días del mes de Marzo de mil ochocientos echen­ti cuatro.

Antonio Arenas.- Presidente de la Asamblea. Maximiliano Frías, Diputado Secretario. Juan P. Lafrana, Diputado Secretario.

Al excmo. señor Presidente Provisorio de la República.

POR TANTO:

Mando se imprima, publique y circule y se ledé el debido cum­plimiento.

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; Dado en la Casa de Gobierno, en Lima a primerode Abril de mil ochocientos ochenticuatro.

MIGUEL IGLESIAS Mario Castro Zald ívar

Derrocado Iglesias por Cáceres el 3 de Diciembrede 1885 y ~Ie­gido éste Presidente en los comisios populares del 3 de Junio de 1886, algo más de cuatro meses después, el 26 de Octubre, pro­mulgó Cáceres la Ley-por la que declaró nulos todos los actos gu­bernativos internos practicados por don Nicolás de Piérola y don Miguel Iglesias "que asaltaron el Poder Supremo sirviéndose de las armas que se les hab ía confiado para la defensa de la Repúbli­ca contra el enemigo extranjero".

A los 14 meses de promulgada, quedó así anulada la Leyque creó el Departamento de Moquegua yque al parecer no tuvo efectivi­dad desde su inicio.

EL PLEBISCITO

Transcurridos diez años del Tratado de Ancón, en 1893 debía realizarse el plebiscito en él establecido, para decidir la naciona­lidad de Tacna y Arica. Dos años antes, el Perú inició gestiones in­fructuosas ante Chile para realizarlo. Y temerosa Chile de perder

. esas provincias en cuya posesión estaba, comenzó una campaña de arnedrenternaiento, hostilidad y ultrajes a los peruanos residen­tes en ellas con el propósito de obligarlos a abandonarlas sin con" seguirlo, por lo que, para chilenizar esos territorios, precedió Chile a expulsar en forma masiva a los peruanos, haciendo ocupar por sus nacionales las propiedades de aquéllos, originando las con­tinuas protestas del Perú -por los atropellos cometidos que tacne­ños y ariqueños soportaron con estoicismo y con el corazón y el pensamiento puestos en la patriaamada.

Interviniendo Estados Unidos con aceptación del Perú y Chile, se firmó en Washington el 20 de Julio de 1922, con delegados de los dos países en disputa, el Protocolo y una carta complementa­ria, por los que sometían al arbitraje de Estados Unidos la proce­dencia o no del plebiscito reclamado por el Perú, yen caso positi­vo, el árbitro que también debía resolver las reclamaciones del Perú sobre '.Tarata y Chilcaya, determinaría asimismo, las condicio­nes en lasque el plebiscito se realizaría.

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Habiéndose estipulado en el Tratado de Ancón que a los diez años se llevaría a cabo el plebiscito y no indicándose en el mismo, la caducidad de las obligaciones contraídas después de los diez años en que debía celebrarse, el Presidente de los Estados Unidos Mr. Calvin Coolidge, con fecha 4 de Marzo de 1925, falló por la realización del plebiscito, determinando qué personas ten ían dere­cho al voto plebiscito y disponiendo la restitución de .Tarata y Chilcayaal Perú. Para el cumplimiento de dicho acto, el Gobierno Norteamericano nombró como Presidente del T.ribunal al General Pershing, reemplazado después por el Almirante William l.assiter: No obstante .las adversas condiciones en que se hallaba el Perú, por la permanente tarea de chilenización de las provincias cautivas, en que se hallaba empeñado Chile, aceptó al PerLJ ir al plebiscito, nom­brando como Delegado a don Manuel Ferreyros, mientras Chile lo hacía en la persona de don Agustín Edwards. Desconfiando Chi­le de un resultado favorable y siempre con el temor de perder las dos provincias que ocupaba, en presencia de la Comisión Plebisci­taria y de la que formaban parte notables internacionalistas y ma­gistrados peruanos, reinició sus actos de violencia y los mismos miembros fueron vejados y agredidos, por turbas que, sin duda al­guna habían sido preparadas para tal comportamiento de hostili­dad. En estas circunstancias desfavorables, se consideró irreali­zable el plebiscito, que era lo que Chile pretend ía, quedando por tanto sin solución las reclamaciones peruanas sobre el cumplimien­to de uno de los puntos estipulados en el Tratado de Octubre de 1883. .

CONSECUENCIAS DE LA OCUPACION y EL CUPO DELA PAZ

Cien años han transcurrido desde la declaratoria de guerra al Perú, el 5 de Abril de .1879 y a fines de Diciembre una centuria de la primera ocupación de Moquegua por dos días, porel ejército chic leno, Para. las generacionespresentes que no han tenido participa­ción alguna en la contienda, ni como protagonistas ni como espec­tadores, no conocedores en muchos casos de los diferentes aconte­cimientos que ensangrentaron el suelo de la Patria y el de Moque­gua, en particular, la visión de la guerra con Chile trasmitida por la historia y algunos hechos por la trad ición, si bien dejan en cada uno el resquemor del patriotismo herido, han dejado también atrás, por otro lado, el odio que tales sucesos pudieran inspirarnos, por la crueldad que cada contienda conlleva, y que en el caso del Perú, se puso de manifiesto en el bando contrario por el ensañamiento

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destructivo y sin piedad delosch ilenos, en su afán de causar al enemigo el mayor daño posible.

y tras los interminables días de incertidumbre y zozobra y dela : larga y violenta tempestad, brilló el arco iris con luminosidades de paz en sus colores, abarcando los cielos ya serenos de Lima y San­tiago. Vel 3 de Junio de 1929 se firmó el Tratado con Chile, po­niendo fin a la controversia que desde su firma originara el Trata­do de Ancón de 1883. Volvieron a reintegrarse Tacna y Tarata al senode laPatria. luego de 50 años de cautiverio, pero a la pérdi­da del rico departamento de Tarapacá desde los inicios delague­rra, se sumó esta vez, la del hermoso puerto de Arica, desde cuya rada, su granítico Morro, llevará esculpida por siempre ante la posteridad, la gesta heróicade un reducido y escogido grupo de va­lientes. Y desdeentonces, los dos pa íses se han esforzado en borrar con los años el cruento recuerdo de los infaustos acontecimientos del pasado, en los que la peor parte le tocó vivir y sufrir al Perú.

Particiilarrriente, Moquequa.tabriqendo los mismos sentimientos de amistosa hermandad hacia los vecinos del Sur, no puede menos que hacer un balancede lo que para su suelo y economía significa­ran algo más de cien días que sumaronlas cuatro ocupacionesde su tierra por el ejército invasor. Y ellas vinieron cuando convalecía Moquegua de la tremenda tragediaque en el surdel país originara el terremoto de.l13 de Agosto de 1868, constituyendo factor im­portantísimo de su rehabilitación y del florecimiento de su comer­cio, la construcción del Ferrocarril de 110 a Moquegua, durante el gobierno de José Balta, vía que dió a Moquegua y sus pueblos una salida al rnar.- Terminada de construirse en Diciembre de 1872, lle­vaba sólo ocho años de funcionamiento, cuando fue inutilizada por el enemigo, privándose a Moquegua de este indispensable medio de transporte durante 28 años, ya que su reconstrucción sólo pudo llevarse a feliz término en 1908, durante el gobierno de 'José Pardo. Asimismo, el floreciente comercio de licores que Moquegua había mantenido hasta entonces. con los pueblos del Altiplano, La Paz, Potosí y otros sitios de Bolivia, se resintió en extremo no sólo durante la guerra, sino también a consecuencia de ella, al privarse a Moquegua de otro de sus más usuales medios de transporte, como eran las recuas deaéémilas, principalmente mulas traídas de. Argentina y que en su mayoría fueron requisadas para Su servicio por loschilenos.- La destrucción porel enemigo de gran parte de la vasija de roble de las bodegas del. valle que el gobierno había adquirido en Nueva York para reemplazar a lasti­najas de arcilla cocida, inutilizadas por el terremoto de 1868y de

180 ,

las que correspondieron a ~J)oquegua alrededor de330cuoasde fermentación de 1,500 galones y como 5,500 pipas de noven­ta y quince galones, fue otro de los males que para Moquegua, significó lapresenciadel enemigo en su suelo. Y aparte de los in­cendios, y depredaciones en dinero, víveres, ganadoy otros anima­les, las plantaciones de vid del valle, sufrieron desde entonces la plaga de la: filoxera, minúsculoInsecto transportado, tal vez, en los cascosdelos caballos delejército chileno..

Las ocupaciones chilenas, fueron pues,para Moquequa, como lo fueron para todo el país, terribles sanqrias que anemizaron su organismo colectivo, sumándose a este desastre, la pérdida del mer­cado bo liviano para el negocio de suslicores ylastorrenciales "ave­nldasvde 1900 quesernbrendodestrucción, dejó convertidas en limo sus riberas. La sustitución de los viñedos porel sembrío del algodón, trajeron una pasajera recuperación por el mercado euro­peo que encontró la fibra blanca, dando término a ella ladeprésión universalque siguió a la primera guerra mundial. Ni laelevaciónde la Provincia LitoralaDepartamento por Leyde3 de Abril de 1936 amenquó la angustia económica y la extrema pobrezaquese ense­ñoreó de esta tierra, ni fue aliciente suficiente para detener el con­tinuo éxodo de familias moqueguanas a la Capital en busca 'de rnejores :perspectivas, situación que. abarcó un lapso de varios lustros hasta el año 1955 en que se iniciaron los trabajos prelimina­res de Toquepala.- 234 Millones de dólares invertidos hasta 1960 por Southern Perú Copper Corporation fueron un inyectable económico vitalizante para la quebrantada econorn ía de la región. Mejoró el presupuesto de muchos hogares y alentó un mayor movi­miento comercial y agrícola que disminuyó en los años siguientes, por haberse convertido a Tacha y Arequipa en mercados de com­pra, en sitios de afincamiento y en ocasionales luqares de espar­cimiento, al igual que Arica, para la mayor parte de los poblado­res de Toquepala, Con el establecimiento en Moqueguadealgunas unidades rnilítaresdesde1973 y una inversión superior alos750 millones de dólares de 1970 a 1976 también por Southern Perú Copper Corporation que puso en marcha la explotación del com­plejo minero de Cuajone, el 25 de Noviembre de 1976, por medio del Presidente del Gobierno Revolucionario, Francisco Morales Berrnúdez, se presintió para Moquegua una prornisoria recupera­ción que incidiría en su progreso y desarrollo>- Pero, lamentable­mente, hasta la fecha, ha ha ocurrido así desde la puesta en mar­cha de tan importante centró minero, ni tampoco enel tiempo corrido del presente siglo, en cuvosúltirnos cincuenta años, moque­guanos de notoria influencia en las altas esferas gubernativas; no

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pudieron o no quisieron encontrarsoludones definitivas a proble­mas fundamentales para el desarrollo dé su tierra, pese á que esta circunscripción, de los tres departamentos sureños, ha sido, tal vez, Jill mas castigado en su territorio y econom ía, principalmente, durante la guerra con Chile. Y porelcontrario; desde hace algunos años por imposición del Estado, vienen págando Moquequacomo una contribución de la paz, con la extracción de la riqueza ictio­lógica de su puerto 110 y con la producción cuprífera de Cuajone, Superando ésta en 70 mil toneladas a la producción de Toquepala y con una anualidad de cerca de 180 mil toneladas, con las que casi viene a doblarse el beneficio cuprífero del país alcanzado an­tes de Cuajone, el cobre y la pesca del departamento de Moquequa,

. vienen a apuntalar en forma vigorosa, por las divisas que generan estas riquezas, a lá tambaleante economía del país, constituyendo pues, la extracción de estos recursos un verdadero cupo para Mo­quequa, ya que de ellas no se alcanza una parte de lo que se preci­sa para un despegue alentador, el que, por otro lado, por primar1 .

intereses zonales, ha venido siendo entorpecido con la dependen­cia que se le ha impuesto al departamento de Moquegua, contra­riando su propia conveniencia, a los de Arequipa y Tacna, no obstante sus mayores aportes a la economía nacional. Parafrasean­do lo que Reimondi dijera del Perú, podría decirse de Moquegua que siempre ha sido "UN MENDIGO SENTADO SOBRE UN BANCO DE ORO".

LO DULCE, DESPUES DE LA TRAGEDIA

Si para todos los peruanos, el sostenimiento de la guerra durante más de cinco años, comportó sufrimientos y grandes sacrificios, para los pueblos que tuvieron en su suelo al invasor, entre ellos' Moquegua, no sólo durante la ocupación .sino después de ella, la contienda con Chile, constituyó una verdadera traged ia por los cuantiosos daños en bienes, propiedades y personas que dejó trassí. .

Procedentes de un país de buenos vinos, en Moquegua, los chile­nos no sólo hartaron su paladar hasta la embriaguez con la toma sin medidade.los buenos piscos y tintos, sino que, además,cornpla­ciéronse sádicamente, en destruir las vasijas, derramando sin provee cho lo que fuera muy valioso contenido para susdueños. Y en sus incursiones por la campiña, los más sobrios, encontraron también regalo a su paladar con" las cañas de chupar", llevándolos a excla­

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mar: ¡Bendita tierra ésta en donde hasta los palitos son dulces!. y es que en Moquequa desde los tiempos dela Colonia, y traída precisamente por los españoles, la caña dulce o caña de azúcar, hasta por la década del 50, concitó alguna dedicación del agro mo­queguano.

"El Trapiche" lugar del valle en donde confluyen los ríos Tu­milaca, Torata y atora, para formar el Tambapalla o río Moquequa, debe su nombre, probablemente, a la existencia de algún trapiche o molino de fierro, que al igual que en otros sitios de la campiña existían para la molienda de la caña dulce, accionados por un caba- . 110 con sus aperos que daba vueltas alrededor de la máquina, tri­turando la caña para extraer su jugo que fermentado constituye el guarapo usado como bebida alcohólica, y sometido el zumo a la cocción en grandes peroles de cobre, proporcionaba la miel de caña que, aparte de su. comercialización y empleo en diferentes dulces, permitía la elaboración casera de " las roscas", que ya han desaparecido del quehacer moqueguano.

y . fueron •también los cañaverales de las parcelas cercanas al puente; los de "El Pisanav", "El Puquio", del 11 Puente Rosal", y de los distintos lugares de la campiña, lugares escogidos para el paseo anual de los escolares, o para las caminatas sabatinaso do­minicales de las familias, en los tiempos en que siendo contadas las distracciones e inexistente o escasa la movilidad vehicular, se im­pon ía con ello un restrictivo alejamiento del radio urbano de la a­pacible ciudad. Y las cañas que terciadas se llevaban en acémilas a Carumas y otros sitios, se lucían también en las puertas de las fruterías, en invitación a adquirirlas a dos por medio o en atados de cuatro o cinco trozos de medio metro, para saborearlas en las noches sin ruido, en la tranquilidad de los hoqares,

.Desde hace unas tres décadas, cultivos de más rendimiento,han dejado los cañaverales sólo un dulce recuerdo en los que a ellos acudieron.

EL ALFAJOR DE PENCO·

Por la década del 5Ú, Humberto Maldonado Llosa, locumbeño, que por esa época resid ía en Moquegua y colaboraba con susartí­culos en el semanario "La Reforma", relataba-por versionesre­cogidas en el lugar; que seisdías después de la batalla de "LosAn­geles", librada el 22 de Marzo de 1880, don Luis Tamayo, agri­cultor rnoquequano, en visita a una chacra cercana al Cerro de los

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sucesos; hab ía encontrado a un soldado chileno que herido había desertado después de la lucha. El chileno cuyo nombre no men­cionaba,era natural de San Antonio; pueblo de Chile y casado con' seis hijos había sido reclutado para incorporarlo al ejército de su país cuando se encontrabapodando una viña.

Recogido el. soldado por don Luis a quien hab íaimplorado per­dón, el rnoquequano lo llevó a su casa curándolo de sus heridas, V allí el chileno en agradecimiento se hizo conocer como un exper­to cocinero. Añade l\t1aldonado Llosa: "Este hombre hizo eIPRI­jYIER ALFAJOR DEP ENeO ENfV!OQUEGUA, cuyo nombre-de­riva del de .un puerto chileno donde se originó la golosina que tan­toconocemos hasta ahora". .

y completandoa l\t1aldonado· Llosa diremos que,si el pencotie­ne su origen en el puerto de este nombre de la Provincia de Con­cepción.ren Chile, el dulce de estepa ís, por no existir en él la miel de caña de azúcar, contendría como relleno alguna mermelada de frutas, con sus aditivos de coco y nuez que si son productos chile­nos. El relleno con miel aromatizada con cáscara de naranja, sería pues.vuna modificación oríginadapor la repostería rnoquequana, por la miel que se elaboraba en el lugar y por la naran'jaquetam­biénse produce en Moquegua.

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Desde la guerra con Chile, se añadió así un dulce más a los varia­dosy apetecidos manjares de Moquéqua, con fama alcanzada que nadie ha puesto en tela de juicio, y de 16s que, el secreto de alqu­nos de ellos, viene quedando corno patrimonio de contadas fami­liasdel. lugar y de algunas que residen en Lima, como ocurre con la hojaldrilla. las hojuelas u hojarascas, los turrones, las cocadas, los niditos, las andaditas de granillo, las galletas de miel y de coco, los chancaves, los bolovanes,los pasteles de mantequilla, las alluc­Ilas y algunos otros que se elaboran en muy contadas ocasiones por quienes saben de ellos. Continúan en cambio produciéndose; para regalo del paladar de propios y extraños, aparte de los dulces de membrillo, durazno ocuaresmillo y manjarblanco, guargüeros,tor­titas de maíz, alfajores de manteca, alfares fritos o yanquis (como los llamaban algunos por su buen tamaño}, alfajorillos, besitos, re­pollitos, suspiros, condesas, rosquetitos de magué, empanadas de dulce, recado o queso, voladores, algunos otros omitidos, tal vez, y los famosos pencos que se consumen más fuera de Moquequa

.que en el sitiodeprodutción, por haber llegado a elevadísimos precios que los hacen inalcanzables para su consumorconsiderán­dolos más bien, corno un preciado presente para los que radican más allá de los límites de la hospitalaria tierra rnoquéquana.

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LA REPUclLICA

FUENTES DE INFOli~MACION

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Jorge .3asadre

Tomás Caivano Carlos Dellepiani

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Manuel Mendiburu

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Noviembre. . . 1876 : 15 Noviembre 1877: 2 Marzo - 2 Novbre, 1880: 16-18-23 Noviembre. 1884: 5 Abril 1887: 5 Febrero 1893 : II Agosto 1894 : 26 Enero 1896 : 13 Octubre 1897 : 18 Febrero 1898 : 10 Diciembre 1899 : 14 Diciembre 1902 : 10 Octubre 1905: 1 Diciembre 1908 : 10 Fbro - 2,17 Y l3 Marzo - 10

Abril - 10 Mayo y 19 Nvbre. 1909 : 30 Marzo 1917: 2 Enero 1919: 3 Dcbre 1924: 6 Junio 1925: 20 Nvbre - 28 Y31 Dcbre 1927 : 21 Junio

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Juan Gualberto Valdivia

Rubéri Vargas Ugarte

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Benjamín V.icuñaMackerina

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