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Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=71206905 Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Sistema de Información Científica Pablo Quintero Reseña de " Aromas de lo Exótico (retornos del objeto): Para una crítica del objeto antropológico y sus modos de reproducción" de Héctor Hugo Trinchero Boletín Antropológico, vol. 25, núm. 69, enero-abril, 2007, pp. 115-124, Universidad de los Andes Venezuela ¿Cómo citar? Fascículo completo Más información del artículo Página de la revista Boletín Antropológico, ISSN (Versión impresa): 1325-2610 [email protected] Universidad de los Andes Venezuela www.redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

Reseña de - Aromas de Lo Exótico Retornos Del Objeto

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Aromas de los exótico es una publicación del Hugo Trinchero, Antropólogo y ex-Rector de la Universidad de Buenos Aires. La reseña es afortunada y publicada por Pablo Quinteros, docente de la Facultad de Filosofía y Letras de la misma Universidad.

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    Red de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Sistema de Informacin Cientfica

    Pablo Quintero

    Resea de " Aromas de lo Extico (retornos del objeto): Para una crtica del objeto antropolgico y sus modos

    de reproduccin" de Hctor Hugo Trinchero

    Boletn Antropolgico, vol. 25, nm. 69, enero-abril, 2007, pp. 115-124,

    Universidad de los Andes

    Venezuela

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    Boletn Antropolgico,

    ISSN (Versin impresa): 1325-2610

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    Recensin

    Trinchero Hctor Hugo. Aromas de lo Extico (retornos delobjeto): Para una crtica del objeto antropolgico y sus modosde reproduccin. Editado por: Editorial SB, Buenos Aires, Ar-gentina, 2007. 300 p.

    QUINTERO, PABLOUniversidad de Buenos Aires

    En un reciente artculo, Fernando Coronil reflexiona sobrealgunas de las ms recientes e influyentes investigaciones que sehan producido en el campo de la antropologa; Coronil, luego deplantear un balance de dichas investigaciones, las critica y deses-tima por contribuir ellas al ocultamiento de sujetos, estructuras yprocesos sociales que terminan, bajo las mascaras de lo que l hadenominado occidentalismo, por invisibilizar de diferentes ma-neras al Yo (ego antropolgico) y al Otro (sujetos o relacio-nes sociales en estudio). Segn este autor los dispositivos de des-aparicin o prestidigitacin antropolgica se presentan de tres for-mas diferentes, siendo cada uno de estos modos, producidos poruna corriente antropolgica o un proyecto de investigacin espe-cfico dentro de sta disciplina. Primeramente se nos presenta unoccidentalismo antropolgico que disuelve al Otro por el Yo, pre-sentando a los pueblos occidentales y no occidentales como enti-dades radicalmente opuestas que terminan por resolver estas opo-siciones mediante la absorbicin de los no occidentales en un oc-cidente victorioso y en expansin, este es el caso de las investiga-ciones de Todorov. El segundo lugar, esta ocupado por la incorpo-racin del Otro al Yo, en este modo de representacin la lucidacrtica que se le hace a la expansin occidental borra inconscien-temente el papel que tuvieron y tienen las periferias en la confor-

    Bole t n Antropolgico . Ao 25, N 69, EneroAbril, 2007. ISSN:13252610.Univer s idad de Los Andes . Mr ida . Quin te ro , Pab lo . Recens in . . . pp . 115124.

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    macin del mundo moderno, aqu se ubicaran los extraordinariostrabajos de Wolf y Mintz que sin duda han contribuido a la cons-truccin de una antropologa crtica. En tercer y ltimo lugar estel dispositivo representacional que desestabiliza al Yo por el Otro,que privilegia en este caso la experiencia de los pueblos no occi-dentales borrando en este sentido las consecuencias de la inter-vencin de occidente en estas latitudes, estaran aqu representa-dos las producciones de Taussig y de Mitchell.

    Para salir de este atolladero donde toda produccinantropolgica pareciera estar condenada al fracaso, FernandoCoronil propone, basndose en las producciones del antroplogocubano Fernando Ortiz y del crtico palestino Edward Said, la teo-ra del contrapunteo o el anlisis en contrapunto como forma deintegrar sujetos y comunidades a estructuras histrica ygeogrficamente ms vastas que no invisibilicen ni al Yo ni al Otroy que consideren a las culturas en una relacin de constantecontrapunteo y no como unidades autnomas, que historicen susdiferencias en vez de esencializarlas, y que finalmente determi-nen sus fronteras y su homogeneidad en vez de darlas por sentado.

    Pero lejos de intentar hacer un balance de los alcances dela excelente propuesta de Fernando Coronil, lo que quiero aqu espresentar las principales ideas de un reciente trabajo que logra laspretensiones de Coronil, pero que adems consigue establecerconexiones (contrapuntear) en otros sentidos no menos interesan-tes. Me refiero al ms reciente libro de Hctor Hugo TrincheroAromas de lo Extico (retornos del objeto): Para una crtica delobjeto antropolgico y sus modos de reproduccin. En este traba-jo, Trinchero no slo logra esta integracin entre sujetos, estructu-ras y procesos, poco vista en las ciencias sociales, sino que ade-ms consigue un texto que transita entre la crtica de la teora,metodologa y prctica antropolgica y el estudio de casosetnogrficos basados en su experiencia de trabajo de ms de vein-te aos en el Chaco Argentino, adems de esta difcil pero perti-

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    nente combinacin el autor logra contrapuntear textualmente en-tre el ensayo crtico y la investigacin de campo obteniendo unlibro que sobrepasa e incluso violenta espistmicamente las for-mas de representacin occidentalistas hegemnicas que exponeCoronil.

    El texto de Trinchero rene algunos de sus ltimos traba-jos en once ensayos agrupados bajo cuatro consignas principalesque conforman, como l mismo declara, sus obsesionesantropolgicas. Estas consigas, a saber, Colonialidad; Historia,Mito y Memoria; Fronteras; y Etnicidades aglutinan los temas deesta reciente produccin que podramos abrir y desarbolar en cua-tro grandes temas: 1) Teora y prctica de la antropologa contem-pornea con un nfasis especial en la antropologa argentina y la-tinoamericana en general; 2) La problemtica de los pueblos ind-genas en Argentina desde la construccin del Estado-Nacin has-ta la contemporaneidad; 3) La cuestin de las fronteras tanto en eldesarrollo de la modernidad argentina como en los actuales de-rroteros de la integracin latinoamericana vista en procesos comola constitucin y expansin del Mercosur; y 4) La relacin de lostemas anteriores con la formacin sociocultural del Estado-Na-cin en Argentina. Quisiera entonces, detenerme en algunas de lasideas principales del trabajo de Trinchero (pero no en cada uno delos ensayos) para explorar con ms detenimiento los alcances deltexto, pretendo slo hacer un panorama general de ste y deambu-lar por los pensamientos centrales del libro y no por el contrario,agotar todos los temas que en l se tratan, pretensin que adems,como espero mostrar al lector, sera irreal por la cantidad de argu-mentos directos e intersticiales y por la profundidad de las reflexio-nes expuestas en el texto.

    Aunque como se ha dicho el libro esta conformado por onceensayos agrupados en cuatro secciones especificas, todos los tra-bajos, realizados por el autor entre julio de 1997 y septiembre de2002, poseen un hilo conductor que le da un sentido enhiesto al

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    texto, este tema central en el trabajo son precisamente los retor-nos del objeto o las modalidades de exotizacin del objetoantropolgico que no logran con efectividad su desnaturalizaciny por ende lo reproducen a travs de distintas maneras, para Trin-chero mientras ciertas formas del pensamiento antropolgicocontemporneo pretenden superar las debilidades tericas ymetodolgicas del objeto de la antropologa clsica (las denomi-nadas sociedades primitivas contemporneas), creo que an si-guen vigentes las modalidades antropolgicas que definen su ob-jeto como unidades sociales aisladas, lejanas y exticas, construi-das por una mirada que sigue autodefinindose como distanciada(Trinchero, 2007: 12), desde aqu la preocupacin del autor giraen torno a la crtica de la teora y la prctica antropolgica espe-cialmente desde lo que se ha denominado en el ltimo lustrocolonialidad del saber. En este sentido, el libro comienza a des-entraar la antropologa eurocntrica en tanto que ciencia colo-nial descriptivista y acrtica, sustentadora de la legitimacin delpoder y de la explotacin imperial (Ibd: 36), aqu el autorcontrapuntea su crtica a la antropologa hegemnica con un an-lisis sistemtico y extraordinariamente revelador sobre la produc-cin y reproduccin del conocimiento en la llamada Antropolo-ga Fenomenolgica que otrora domin el escenario de la disci-plina en Argentina, precisamente en los aos en que la ltima dic-tadura manejaba de forma atroz a esta repblica latinoamericana;el examen de Trinchero revela no slo los conocidos orgenes dela ciencia antropolgica como saberes producidos en el seno mis-mo del colonialismo europeo sino tambin las formas poscolonialeso ms bien neocoloniales de esta ciencia humana en las geogra-fas latinoamericanas, en el caso especfico que se revela en eltexto, la escuela fenomenolgica fungi como una maquinaestigmatizadora de los pueblos indgenas, reproduciendo esta vezde modo cientfico los prejudicios que sobre estos sujetos sub-alternos, ya haban sido configurados y recreados por el imagina-

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    rio de la modernidad argentina y la narrativa nacional hegemnicaen su carrera por expandir las fronteras estatales a la vez que cons-trua el imaginario del crisol racial donde el indgena, al igual queotras etnicidades no deseadas, quedaron fuera del pacto fundantede la nacin.

    Quisiera destacar que Trinchero, bajo el estudio de lacolonialidad de la disciplina antropolgica, realiza una ligazn enbuena forma de los derroteros epistemolgicos principales de laantropologa colonial con los itinerarios polticos y tericos de laprimera antropologa argentina, esto lo hace sin perder de vista lapropuesta metodolgica de la mentada antropologa fenomenolgicaque como demuestra el autor distaba mucho de los presupuestosoriginales de Husserl y Gadamer (por supuesto tambincuestionables). Con la exposicin analtica del caso de la escuelafenomenolgica, se demuestra entonces tanto la colonialidad origi-naria de la antropologa del sur como los servicios prestados poresta a las clases dominantes y a la corporacin militar. Si bien essintomtica y reveladora la exposicin del funcionamiento de esteejemplo de ejercicio de la profesin, la crtica terica esta presen-te en toda la obra con una profundidad encomiable que dialoga y enalgunos casos interroga a algunos autores clsicos de la antropo-loga y las ciencias sociales como Goffman, Lvi-Strauss, Godelier,Elas, Levy-Bruhl, Bourdieu y Taussig, para nombrar slo algunos.En varios de estos dilogos se puede ver al autor cuestionar confirmeza algunas de las ideas del establishment antropolgico, comocuando entronca la discusin acerca del papel de la etnografa deba-tiendo con los presupuestos tericos de la antropologa postmodernay su pretensin de reflexibidad textual, que Trinchero reconoce comouna contribucin, pero como un aporte (permtaseme decirlo) mio-pe al colocar su reflexibidad en el papel que juega el textoetnogrfico y no por ejemplo en el rol del antroplogo como suje-to detentador de poder dentro de la prctica etnogrfica mismams an cuando ese sujeto se desempeaba en tareas puntuales

    Bole t n Antropolgico . Ao 25, N 69, EneroAbril, 2007. ISSN:13252610.Univer s idad de Los Andes . Mr ida . Quin te ro , Pab lo . Recens in . . . pp . 115124.

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    solicitadas por el imperio o la nacin en su afn de dominio terri-torial y de control social.

    Desde este cuestionamiento a algunas formas (hegemnicas)de entender la etnografa, Trinchero propone un cometido distintopara la misma desentraando su verdadero fin como una parte crucialdel trabajo antropolgico dentro de una teora crtica del conoci-miento (Ibd: 78). Esta revisin de la prctica etnogrfica le permiteal autor proponer como modelo de superacin epistmica de losanclajes coloniales e imperiales del pensamiento social lo que ldenomina distanciamiento del saber hegemnico, como forma decombatir la pretensin de hegemonismo de lo conocido arraigadocomo saber en los dispositivos y disposiciones del poder. A estedistanciamiento del saber hegemnico, se suma la necesidad de uncompromiso intelectual con las luchas sociales, como una res-ponsabilidad con las subjetividades involucradas en las demandassociales, as, distanciamiento del saber hegemnico y compromisointelectual se funden en una pareja indisoluble que debe ser la orbitanecesaria de una antropologa y una ciencia social descolonizadaque desemboque en un pensar-otro.

    Una forma de este pensar-otro propuesto por el autor esdesarrollado en el libro cuando se descompone el tejido histricoy mtico de las narrativas coloniales y modernas producidas porlos relatos oficiales y populares sobre el Gran Chaco. A la par quese revelan estas narrativas se demuestra el entramado de relacio-nes sociales, culturales y econmicas que se compone histrica-mente en estos territorios crendose un contrapunteo de voceshegemnicas y contra-hegemnicas de las que se vale Trincheropara analizar las relaciones intertnicas y las dinmicas del capi-talismo en la creacin de lo que va a caracterizar como una for-macin social de fronteras en la que la presencia de la figura deldemonio sirvi como caracterizacin y justificacin por parte delos primeros misioneros del carcter brbaro de los pueblos in-dgenas dentro de los cuales se supona resida el diablo. Resulta

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    interesante la resignificacin tiempo despus del demonio por partede los pueblos indgenas, esta vez para nombrar no una presenciainfernal extraterrena (el diablo) si no ms bien una malignidadque habitaba en los ingenios (el familiar) identificada por laexplotacin de la mano de obra barata de los indgenas por partedel capital agroindustrial del Chaco, por lo cual la presencia deldemonio, no como significado compartido entre misioneros e in-dgenas, sino como significante impuesto por los primeros a lossegundos, actuaba tambin en el sentido nativo como un persona-je con el cual lejos de intentar apartarlo se poda pactar para resti-tuir cierto orden (Ibd: 135). El anlisis de Trinchero demuestraque si bien existe una historia oficial sobre el Chaco que sirvi alos intereses de la iglesia, del capitalismo, de la corporacin mili-tar y de la burguesa nacional, existen tambin otras voces de lahistoria que han fabricado narrativas diferentes fondeadas en lamemoria colectiva, sta se yergue para el autor en arma contra eldeclarado fin de la historia y contra la hegemona de la historiaoficial, pero no debe entenderse de ningn modo la memoria comosimplemente la historia de los otros sino adems como una crticapoltica al conocimiento imperante.

    A partir de la discusin entre mito, historia y memoria, ellibro discurre en desarrollar uno de los temas en los cuales se hadestacado Trinchero en los ltimos aos, que es precisamente elanlisis de las fronteras como patio trasero de la modernidad.Desde la crtica expuesta a la colonialidad del saber antropolgicoy la demostracin de la constitucin y actuacin de la narrativanacional en cuanto a los pueblos indgenas, el autor va a desarro-llar una profunda exposicin sobre la construccin de losheterogneos territorios fronterizos en Amrica Latina haciendohincapi en las fronteras del Estado-Nacin argentino como puntode partida para la elaboracin de un marco conceptual sobre lasfronteras que ya haba sido tratado con precisin en su anteriortrabajo Los Dominios de Demonio1, cuando propuso la categora

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    analtica de formacin social de fronteras, pero que aqu desarro-lla desde un balance de cmo se han tratado estos asuntos desde laantropologa y las ciencias sociales, criticando el discurso hegem-nico que en ellas se ha configurado sobre la desregulacin de lasfronteras, la supuesta movilidad social y la celebrada culturatransfronteriza, para desde all, presentar la cuestin de las fronte-ras en el marco de la construccin (y reconstruccin) de las nacio-nes en Amrica Latina como productos estrechamente relacionadospor una parte a la herencia de las unidades administrativas de losimperios coloniales, y por otro lado, a las utopas racionalizadorasdel iluminismo tomadas y sostenidas por las elites criollas (Ibd:161). Para ilustrar esta exposicin terica, el autor despliega unacaracterizacin del chaco central, precisamente como una forma-cin social de fronteras, donde se ejemplifica la dinmica econmi-ca y social en geografas de esta ndole, examinando adems la pro-blemtica de los pueblos indgenas en estos territorios.

    Pero vido de explicaciones Trinchero se interesa entoncespor demostrar la constitucin histrica en la argentina de esta for-macin social de fronteras que es el Chaco central, aqu demues-tra como la creacin de un enemigo interno representado por lospueblos indgenas configur el aparato ideolgico desde el cual lacorporacin militar extendi el dominio sobre la nacin, no slosobre el Chaco sino tambin sobre la patagnia y todas las regio-nes perifricas que en esa poca se encontraban bajo el dominiode la barbarie, este recorrido sirve para demostrar la dinmicasocial de las conquistas a la vez que queda develado el funciona-miento de la corporacin militar y su modelo de guerra, as comosu principal dilema basado en la disyuntiva de conciliar el exter-minio de los indgenas con su utilizacin como mano de obra ba-rata (Ibd: 204). Ahora bien, algo que quisiera destacar, es la de-mostracin que hace Trinchero de que las prcticasrepresentacionales sobre los pueblos indgenas no son nicamen-te dispositivos que funcionaron en el siglo XIX en el momento de

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    emergencia de la nacin, porque como demuestra, estas prcticasrepresentacionales son sumamente contemporneas y al ser difun-didas esta vez por los medios de comunicacin masivos continancumpliendo con la funcin de exotizar y estigmatizar a los pueblosindgenas, para ello analiza las categorizaciones que en el ao 1992se hicieron sobre los indgenas en un momento de reaparicin delclera en varios lugares del territorio argentino y que como discursoestigmatizante se culpabiliz a los pueblos indgenas de la regindel Chaco centro-occidental como los causantes de la transmisinde esta epidemia al tener una cultura inadecuada, antihiginica yatrasada, producindose as el desplazamiento de la causas de laepidemia a los pueblos indgenas, cuando en realidad lo que mos-traba el incremento de este brote era la otra cara del proceso demodernizacin econmica sostenido por el gobierno argentino deese entonces, a saber, el aumento de la pauperizacin de las condi-ciones de vida de amplios sectores de la poblacin nacional (Ibd:228). Otro ejemplo que Trinchero expone sobre la estigmatizacinde los pueblos indgenas en el discurso nacional oficial es el relatode las llamadas mujeres cautivas, raptadas por los malones indge-nas y tan representadas en la literatura, el arte y la historiografanacional argentina, y que contribuyeron tambin a sostener la ma-lignidad histrica de los indgenas.

    Para terminar esta visualizacin sobre algunas de las ideascentrales del trabajo realizado por Trinchero en Aromas de lo Ex-tico (retornos del objeto), deseo subrayar la critica constante a lasteoras del establishment antropolgico que esta presente en todoel libro con una profundidad difcil de imitar. Creo que si bien enlos ltimos aos la critica desde Amrica latina a la colonialidaddel poder/saber y a las estructuras de dominacin eurocntricas dela modernidad colonial han aperturado una serie de produccionesen las ciencias sociales que pretenden desmantelar los metarelatosdisciplinarios y hegemnicos en general, pocos llegan, para serpreciso, al nivel de profundidad y de reflexin que expone Hctor

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    Hugo Trinchero en este libro quizs comparable al tambin desta-cado Estado Mgico del penetrante Fernando Coronil, con quienapertur esta resea. Me gustara entonces cerrar este breve tran-sitar por los pensamientos de Trinchero rescatando una frase querefrindose al compromiso y al distanciamiento en la produccinantropolgica nos llama a la reflexin: para que el trabajo dedistanciamiento sea crtico, debera ser, ante todo, en tanto com-bate con el poder de los aromas de poder, un acto creativo, ungesto de esfuerzo productivo, una bsqueda del lazo con el gritoantes que un silencio reproductivo, un camino metodolgico quesabe de antemano que deber construirse horadando la palabracomplaciente que obstaculiza la emergencia de las preguntas quenos permitan escuchar, descubrir ese grito (Ibd: 86).

    Nota

    1 TRINCHERO, Hctor Hugo. 2000. Los Dominios del Demonio: Civi-lizacin y barbarie en las fronteras de la nacin. El Chaco Cen-tral. Buenos Aires, Argentina: EUDEBA.

    Bibliografa

    CORONIL, Fernando. 1999. Ms all del Occidentalismo: Hacia cate-goras geohistricas no-imperiales en Casa de las Amricas. LaHabana, Cuba. N 214, pp. 21-49.

    TRINCHERO, Hctor Hugo. 2007. Aromas de lo Extico (retornos delobjeto): Para una crtica del objeto antropolgico y sus modosde reproduccin. Buenos Aires, Argentina: Editorial SB.

    TRINCHERO, Hctor Hugo. 2000. Los Dominios del Demonio: Civili-zacin y barbarie en las fronteras de la nacin. El Chaco Cen-tral. Buenos Aires, Argentina: EUDEBA.