24
SAN AGUSTÍN (354-430) Es uno de los autores fundamentales, no sólo del periodo, sino desde una perspectiva universal. El pensador latino que ha tenido más trascendencia. Es un gran recopilador de todo lo anterior. Trató muchísimos temas y gran parte de su doctrina marcó ortodoxia de la iglesia (como su doctrina sobre el milenarismo). Nace en el año 354 d.C en Tagaste (norte de África, actual Argelia) y estudiaría allí la enseñanza básica. Es hijo de padre pagano y madre cristiana (Santa Mónica). En el 365 se traslada a Madura, no lejos de aquella ciudad y cursa estudios secundarios de gramática y cultura latina (primeros poetas como Horacio, Virgilio…). En el 370 se va a estudiar a Cartago, urbe donde podría cursar sus estudios superiores. La idea era que se formase como abogado gracias al apoyo económico de un amigo de la familia. Se hace un experto en el estudio de la retórica (destaca por un latín bastante puro y elegante). Hortensio de Cicerón es un diálogo que le influyó. En él, se defendía que el buen orador no sólo tenía que dominar los instrumentos del idioma sino que debía estar bien formado, tener conocimientos de filosofía. Preocuparse por investigar la verdad. Esto supone un vuelco en su forma de pensar. Comienza a sentir inquietud hacia debates como la cuestión del mal, la naturaleza de Dios, su relación con el hombre o la cuestión del conocimiento. A raíz de esto se hace maniqueo. El maniqueísmo era una doctrina que procede del profeta Mani (214-265) de origen persa (hoy Irán) que propugnaba que mediante su doctrina podía procurar a los hombres la salvación. Le interesaron de esta doctrina a los problemas sobre el pecado y la relación entre hombre y Dios. Sus gustos y conductas con sus amigos que le presentaban conflictos internos que no sabía cómo gestionar. El maniqueísmo defendía un dualismo entre el reino de las tinieblas y el del bien. El hombre debía purificarse de la parte negativa mediante el ejercicio ascético para poder ascender y recuperar el ámbito de lo divino, de donde procedía. Tenía una visión materialista de la divinidad. No aceptaban la idea de las entidades espirituales (sin cuerpo). Entendían a Dios como un elemento corporal y no un simple espíritu. Respecto al problema del mal, para ellos, el pecado era parte de esa parte “mala” humana. El verdadero yo no era responsable de los actos ni del pecado. El mal era una sustancia corpórea, no una negación del ser o la sustancia de las cosas. En el año 374 vuelve a Tagaste para ser profesor de Gramática. No está a gusto con el alumnado y la muerte de un

San Agustín

Embed Size (px)

DESCRIPTION

apuntes de san agustin

Citation preview

SAN AGUSTN (354-430)Es uno de los autores fundamentales, no slo del periodo, sino desde una perspectiva universal. El pensador latino que ha tenido ms trascendencia. Es un gran recopilador de todo lo anterior. Trat muchsimos temas y gran parte de su doctrina marc ortodoxia de la iglesia (como su doctrina sobre el milenarismo).

Nace en el ao 354 d.C en Tagaste (norte de frica, actual Argelia) y estudiara all la enseanza bsica. Es hijo de padre pagano y madre cristiana (Santa Mnica). En el 365 se traslada a Madura, no lejos de aquella ciudad y cursa estudios secundarios de gramtica y cultura latina (primeros poetas como Horacio, Virgilio). En el 370 se va a estudiar a Cartago, urbe donde podra cursar sus estudios superiores. La idea era que se formase como abogado gracias al apoyo econmico de un amigo de la familia. Se hace un experto en el estudio de la retrica (destaca por un latn bastante puro y elegante). Hortensio de Cicern es un dilogo que le influy. En l, se defenda que el buen orador no slo tena que dominar los instrumentos del idioma sino que deba estar bien formado, tener conocimientos de filosofa. Preocuparse por investigar la verdad. Esto supone un vuelco en su forma de pensar. Comienza a sentir inquietud hacia debates como la cuestin del mal, la naturaleza de Dios, su relacin con el hombre o la cuestin del conocimiento. A raz de esto se hace maniqueo. El maniquesmo era una doctrina que procede del profeta Mani (214-265) de origen persa (hoy Irn) que propugnaba que mediante su doctrina poda procurar a los hombres la salvacin. Le interesaron de esta doctrina a los problemas sobre el pecado y la relacin entre hombre y Dios. Sus gustos y conductas con sus amigos que le presentaban conflictos internos que no saba cmo gestionar. El maniquesmo defenda un dualismo entre el reino de las tinieblas y el del bien. El hombre deba purificarse de la parte negativa mediante el ejercicio asctico para poder ascender y recuperar el mbito de lo divino, de donde proceda. Tena una visin materialista de la divinidad. No aceptaban la idea de las entidades espirituales (sin cuerpo). Entendan a Dios como un elemento corporal y no un simple espritu. Respecto al problema del mal, para ellos, el pecado era parte de esa parte mala humana. El verdadero yo no era responsable de los actos ni del pecado. El mal era una sustancia corprea, no una negacin del ser o la sustancia de las cosas. En el ao 374 vuelve a Tagaste para ser profesor de Gramtica. No est a gusto con el alumnado y la muerte de un amigo le causa profunda tristeza. Tampoco le terminan de convencer las enseanzas maniqueas. Conoce a un obispo, Fausto, que no lo convence en sus doctrinas, a pesar de ser una persona amabilsima. En el 383 rompe con el maniquesmo y se aparta del maniquesmo para ser escptico. Lee la biblia pero el estilo le parece tan malo comparado con lo que haba visto que lo aparca. Su idea es, por tanto, que no hay una verdad que el hombre pueda conocer y por tanto lo mejor es no caer en el dogmatismo. Mejor suspender el juicio y conocer slo aquello que se pueda conocer.En el ao 384 se va a Miln donde se hace profesor de retrica. Mnica le hace abandonar a su concubina y le conciertan un matrimonio con la hija de un senador (entre tanto, toma otra concubina). La falta de control sobre sus impulsos le afecta en el alma, al no cumplir las expectativas que haba de un sabio. La lectura de los libros platnicos, de Plotino le afecta fundamentalmente ya que toma del neoplatonismo algunos elementos:-Recuperacin de la idea de certeza: piensa que s es posible conocer verdades. -Percepcin de lo inteligible: frente a la concepcin maniquea de que slo existan entes corpreos, toma del platonismo la posibilidad de conocimiento de lo inteligible. De hecho las verdaderas realidades son las que se perciben por el entendimiento. Las cosas que percibimos por los sentidos deben su ser a las entidades espirituales y a Dios.-Reconocimiento del yo y de dios como espritu: para l la vida de acceso a Dios fundamental est en la propia alma. Es fundamental la relacin el alma y dios. La va de acceso a Dios es el propio yo. -Explicacin del mal: el mal no puede ser una sustancia. El mal es contrario a lo que es (no ser), es ms una privacin del ser, una imperfeccin del ser. Aquello que debe ser y, sin embargo, no es. Mal es carencia de perfeccin propia. El mal nace de la imperfeccin de la propia naturaleza creada.

La posibilidad de entes espirituales le faculta para abrazar la fe cristiana, algo que sucede en el ao 386. Estaba en Miln, los sermones de San Ambrosio en la capital de Miln tambin le influiran. El redescubrimiento de las doctrinas cristianas y la lectura de la biblia le ha dejar su carrera de profesor y decide retirarse con su madre, su hijo y una serie de amigos a una finca de campo, el casicaco, donde llevara una vida tranquila (de observacin) y se prepara para el bautismo. Tras escribir una obra de esttica De pulchro et apto, (no se ha conservado, segn l estaba muy afectada por su concepcin materialista del mundo) escribe varias obras, la primera de las cuales es Contra los acadmicos.

En el 387 se produce el bautismo, junto con su hijo Adeodato y un amigo de la infancia, Alipio (que lleg a ser obispo de Tagaste). En el 388 se produce la vuelta a Cartago. Antes de embarcarse, muere su madre en el puerto de Ostia. En el 391 se ordena de sacerdote y en el 396 Obispo de Hipona hasta el 430, cuando muere. Hecho que coincide con el sitio de Hipona por parte de los Vndalos.

Escribi muchas obras, entre ellas, refutaciones a los maniqueos y a los donatistas. Estos ltimos vinculaban la pureza de los evangelios en virtud de la calidad del sacerdote que lo administra. Tambin escribe mucho contra los Pelafianos, que defendan la idea de que el hombre puede salvarse por sus propios medios. Nosotros nos vamos a centrar en su obra Contra los acadmicos.

NOTAS DEL PENSAMIENTO DE SAN AGUSTN:*Lo veremos ms adelante pero lo que es, es bueno por naturaleza. Ser unidad bondad. Lo que es, por el hecho de ser es uno. Siendo uno es bello. El mal es una carencia de ser. No se puede hacer responsable a Dios por el hecho de no ser.

*Cristianismo: dios uno como dios creador de la nada. Crea al ser a partir de la nada. El neoplatnico es emanatista.

*Usara las ideas platnicas como arquetipos que se encuentran en la cabeza del pensador. Contra los acadmicos (386)Escrita en el 386 refleja las conversaciones de carcter filosfico que mantena San Agustn junto a un grupo de amigos en el casicaco. Supone un ajuste de cuentas con la postura escptica que el propio Agustn haba sostenido. Pretende refutar el escepticismo que postula la teora de que para el hombre no es posible el conocimiento de la verdad.

Si, ya como cristiano, piensa que la verdad se identifica con cristo (el camino, la verdad y la vida), no puede aceptar esa posicin. El hombre puede alcanzar esa verdad pero segn el escepticismo acadmico no. Escribe, sobre todo, contra Arcesilao (316-241 a.C, academia media) y Carnades (academia nueva). Ellos parten de la definicin de verdad de Zenn de Citio: conocimiento verdadero es aquel que no tiene caracterstica en comn con lo falso. A este argumento lo denominaban representacin comprensiva, esto es, aquella representacin mental que surge de la percepcin de un objeto (algo que es) que es asida por la mente de tal manera que el hombre tiene que asentir con la verdad de esa cosa por la propia fuerza que tiene esa representacin en la mente. Es la . Se podra traducir por comprehender. * Comprehender Percipi Comprender con verdad

Arcesilao y Carnades sostenan que para el hombre no es posible discernir el conocimiento verdadero del falso. Por tanto, como no somos capaces de tener un conocimiento que podamos distinguir perfectamente de lo falso, no es posible alcanzar ese conocimiento verdadero, con lo cual, el sabio, no puede prestar su asentimiento a las representaciones que tiene de los objetos. Carnades sostena que el hombre no puede ir ms all de las representaciones de los objetos, no podemos estar seguros de que la representacin procede ese objeto.

El conoca todas estas obras de los acadmicos a travs de traducciones latinas (Cicern y Mario Vitorino principalmente). Concretamente, se dice que sigui la obra de Cicern Cuestiones acadmicas. Tambin haba en la poca traducciones de la biblia en latn. La que se fij como ortodoxa fue la famosa vulgata de San Jernimo.

Agustn pretende refutar las tesis de que nada puede percibirse (percipi). No niega las representaciones comprensivas, slo dice que no son verdaderas. En segundo lugar pretende refutar: a nada se puede prestar asentimiento.

Contra los acadmicos es importante porque trata de situar al platonismo como precursor del cristianismo. A final de la obra lo que dice es que es posible conocer esa verdad, que esa verdad es cristo y lo que nos permite no caer en las garras del escepticismo es la va de la razn (Platn y Aristteles).

No se discute el problema de la verdad como tal. Y es que Carnades y Arcesilao no negaban que hubiera una verdad, slo dudaban que pudiera alcanzarse.

La obra se divide en tres libros:I.- Consiste la felicidad en la posesin o en la bsqueda de la verdad? La posicin de Agustn sera que la posesin de la verdad es la que da la felicidad.

II.- Exposicin de la postura escptica y se empieza a discutir esa postura.

III.- Refutacin de las dos principales doctrinas acadmicas.

La obra est escrita en forma de dilogo. Los interlocutores de la obra son Alipio, Trigecio y Licencio. El primero sobre todo hace de moderador. Trigecio representa la postura de Agustn y Licencio comenzar defendiendo la postura de los acadmicos para acabar convirtindose al final del segundo libro, cuando Alipio le tomar el relevo.

Libro I: Consiste la felicidad en la posesin o en la bsqueda de la verdad? La posicin de Agustn sera que la posesin de la verdad es la que da la felicidad.La obra comienza con la cuestin de si conviene conocer la verdad. Ms bien lo verum como la verdad de algo que se conoce. Hay que tener en cuenta que cuando se habla de verdad se est aludiendo a lo verdadero. Todos acuerdan que s.

Luego se plantean que si es posible la felicidad sin conocer la verdad, es necesario entonces conocerla? para Licencio s podemos ser felices sin conocer si nos esforzamos en buscarla.

Antes de avanzar discuten en qu consiste esa felicidad. Se plantean una definicin de la vida feliz. Ser vivir conforme a lo mejor que hay en el hombre. Lo mejor que hay en el hombre es la mente. La mente es, por tanto, aquello que debe regir al ser humano. Por tanto, no hablamos de felicidad en un sentido actual sino de Eudaimonia griega. No estaban pensando tanto en estar contento como en una actividad intelectual. Aquel que se rige por su parte mejor.

Licencio: para ser feliz basta con que la mente ejerza su propia actividad: la bsqueda de la verdadTrigecio: no, consiste en poseer la verdad. Sino, dime en que te basasLicencio: dime tu cabrnTrigecio: el hombre feliz ha de ser perfecto sabio en todas las cosas pero, sin embargo, el que busca no es perfecto, por tanto, este que busca no es un perfecto sabio.*Perfecto = perfectamente acabado, hecho en su totalidadLicencio: te parecen sabios Carnades y Cicern? ellos defendan que es feliz el buscador, no el poseedor; al sabio slo le queda la bsqueda diligentsima de la verdad porque si diera asentimiento a cosas inciertas no podra llamarse verdaderamente sabio. (Ms adelante rectifica y dice que Cicern no fue en sabio. Estoy lejos de aprobar todas sus posiciones).

La verdad como tal slo es Dios y el hombre no puede poseerla. Slo le queda como solucin una actitud de esforzarse racionalmente en buscar la verdad.

Pero entonces, sera infeliz el hombre que se esfuerza todo el da en buscar la verdad. No es as?

Trigecio: el sabio es aquel que no puede errar. El que se equivoca ni vive segn la razn ni vive ni puede vivir dichosamente.

Licencio: slo le quedan dos posibilidades de refutar a Trigecio:1.- Errando se puede ser feliz2.- El que investiga la verdad sin hallar la verdad no hierra

Licencio opta por la segunda opcin. El sabio puede ser sabio sin hallar la verdad. El verdadero error es aprobar lo falso. Se puede decir que el que busca es feliz porque la felicidad puede consistir en la tranquilidad espiritual, el esfuerzo reflexivo de la razn

Trigecio: ests diciendo que la propia voluntad del hombre le basta para ser feliz? Si alguien dice que es de da cuando en realidad de noche, no hierra, sea cual sea su voluntad?

Licencio: tu definicin de que el sabio es aquel que no puede errar es slo en parte correcta. Licencio hace una matizacin: el que, an sin buscar nada, responde que es de da cuando es de noche, hierra. Pero esa definicin de Trigecio de error deja fuera algunas posibilidades, contempla como errores posturas que no lo son: El que va camino de Alejandra y no llega a Alejandra porque muere por el camino, no hierra. Si se mantiene en la bsqueda diligente de la verdad no se puede decir que hierre y no sea feliz.

El debate gira ahora en torno a qu es entonces la sabidura. San Agustn interviene para decir que la sabidura es la ciencia de las cosas divinas y humanas (lo toma de Cicern). Ciencia sera un tipo de conocimiento. Eso implica posesin de ese conocimiento.

Licencio: no puedo aceptarlo, dentro de esa definicin se incluiran como sabios a algunos que no lo son. Presenta el caso de Albicerio, un vidente que tena facultades que no tena la gente comn aunque tena bastante mala fama. Segn tu definicin, Albicerio posee el conocimiento de cosas divinas y le tiene que ser revelado desde arriba, a pesar de ser llevar una vida disoluta.

Trigecio: cuando yo hablo de ciencia me refiero a un conocimiento cierto que no es susceptible de error. Albicerio ha cometido errores. No posea esa ciencia de las cosas divinas y humanas que caracterizan las cosas divinas y humanas. Adems, no me refiero a cualquier aspecto de la vida humana como saber dnde est escondido tal o cual objeto, que es lo que hace Albicerio, me refiero al saber que conoce sobre las virtudes como el vigor de la templanza, la prudencia.

Licencio: no se puede negar que Albicerio no tenga conocimiento divino. Tena aunque sea cierto conocimiento de la verdad.

Trigecio: ya, pero no sabe de la verdad de las que yo hablo, de las grandes cuestiones.

En realidad Licencio no defiende a Albicerio, slo ataca la definicin de sabidura de San Agustn. Dice que no es muy acabada y propone una definicin alternativa: cosas de las ciencias divinas y humanas que pertenecen a la vida feliz. Para Licencio sera an muy restrictiva y lo amplia con: y tambin su investigacin diligente.

LIBRO II: Exposicin de la postura escptica y se empieza a discutir esa posturaPrimero se dice que los acadmicos dicen que no es posible alcanzar el conocimiento en las cosas tocantes a la filosofa: en cuanto al conocimiento verdadero. Por tanto, el sabio no puede prestar su asentimiento. *Asentar = Aceptar o asumir el conocimiento que se tiene como verdadero

Acadmicos: todo es incierto. No podemos asegurar que el conocimiento que tenemos es verdadero.

Zenn de Citio: es verdadera aquella representacin impresa en el alma por el objeto y que no puede venir de lo que no es. Es decir, que slo es verdadero el conocimiento proveniente de los sentidos de algo que es. Su fuerza, al imprimirse en el alma, obliga a prestar asentimiento a ese conocimiento. Una variante de esta postura sera sostener que conocimiento verdadero es el que no tiene ninguna caracterstica en comn con lo falso en forma de representacin comprehensiva asible por la mente.

Tenemos un criterio objetivo para distinguir el conocimiento verdadero del conocimiento falso. Era la base de los acadmicos para defender su postura.

Escpticos: no hay un conocimiento objetivo de verdad pero, aunque no lo haya, merece la pena intentar acercarse a ella.

Agustn: parecan pintar los academicos a su sabio como condenado a la eterna somnolencia y desercin de todos sus deberes.

Licencio: introdujeron el trmino de lo probable. Aquello que puede servirnos como regla de conducta para la vida sin obligarnos a tomarlo como verdadero.

Trigecio: te agrada la doctrina de los acadmicos? te parece que dicen verdad?

Licencio: no puede decir que s, se contradira. Es decir, dice que la propia doctrina acadmica no es ni verdadera ni falsa, es probable.Probable = VerosmilVerosmil: Verum + Simile lo que se asemeja a lo verdadero.

Trigecio: Qu te parecera si a alguien se le presentara tu hermano y ese alguien dijera que se parece a tu padre, sin conocerlo?

Licencio: es posible que por la fama, un rumor podran decir que esto fuera as.

Trigecio: la fama no se puede confundir con la verdad. Quieren saber lo verosmil sin saber que es la verdad.

Licencio: lo probable, sin asentimiento formal en nuestra parte, basta para movernos ahora

Finalmente Licencio cambia de bando. No se puede aprobar lo que es semejante a la verdad si se ignora lo que es la verdad. Sin verdad, no hay criterio de verdad.Acaba el libro diciendo que quiz lo que dijeran los acadmicos no fuera eso. El caso es que Licencio se ha cambiado y ser Alipio quien tome el puesto de Licencio.

1.- Es probable que nada puede percibirse2.- A nada se debe prestar asentimiento

Libro III: Refutacin de las dos principales doctrinas acadmicas.Refuta 1, refuta 2 y acaba reivindicando la postura platnica, como similar a la aristotlica porque es la verdad que permite llegar a tener conocimientos espirituales.

Critica a la primera postura: dilogo fingido con Arcesilao:Arcesilao: no se existe conocimiento que no tenga que ver con lo falso, que nos permita discernir entre conocimiento verdadero y falsoAgustn: hay que asumir como verdadera, al menos la propia definicin de Zenn de conocimiento verdadero. Si la asumieses como falsa, podramos llegar a tener conocimiento verdadero con cosas en comn con lo falso.Arcesilao: la acepto como probable. Demuestro que nada existe semejante a lo verdaderoAgustn: si lo aceptas como verosmil, estas aceptando que lo asumes como semejante a lo verdaderoSi la definicin es falsa, podran percibirse cosas falsas. Y si la definicin es verdadera, no pueden percibirse las cosas semejantes a lo falso. Con lo cual, la definicin es verdadera

3 argumentos a favor de la posibilidad de conocimientos verdaderos:1.- Es posible tener conocimientos filosficos verdaderos2.- De los conocimientos subjetivos sensibles3.- De la dialctica

En ese momento podr atacar la segunda premisa. Por no ser cierta la primera y por las consecuencias morales de seguir la primera.

A1.- Nada puede percibirseA2.- A nada se debe prestar asentimiento

Objeciones de San Agustn:A1.1.- Si nada puede conocerse con verdad, esto incluye la propia definicin de Zenn, tampoco deberamos seguir las consecuencias de esta definicin.

Otra salvedad es que los acadmicos no extienden su escepticismo a cualquier cosa: las cosas cotidianas de la vida se rigen por el sentido comn. Considera que esta definicin de verdad slo se aplica a las verdades psicolgicas.

A1.2.- Imposibilidad de juzgar las diferencias entre unas y otras doctrinas filosficas. No podramos decir si Epicuro o Demcrito tenan ms razn el uno que el otro. Esto no es propio del sabio.

A1.3.- Existen algunos conocimientos indubitables. Esto lo dar mediante ciertos ejemplos:a1.3.1.- Proposiciones disyuntivas: el mundo o es uno o no es. Si hay muchos mundos, o son finitos o son infinitos.a1.3.2.- Lo percibido por los sentidos. Incluso el remo quebrado en el agua? S, porque hablamos de la percepcin del remo, no de la naturaleza del remo.a1.3.3.- Enseanzas de la dialctica (modo de argumentar que parte de premisas verosmiles para alcanzar premisas con un carcter tambin verosmil). Si hay 4 elementos en el mundo, no hay 5.

Refutada la primera de las proposiciones. Pasa a refutar la siguiente, que era derivada de aquella.

A2.1.- Si hay cosas que se pueden conocer, el sabio tendr que conocer cosas, incluida la sabidura misma. Es decir, el sabio debe asentir, al menos, a la sabidura.

A2.2.- Esta postura comporta posturas inmorales. No todo el que hierra peca pero si todo el que peca hierra. Segn la doctrina acadmica nadie cometera pecado.

Una vez refutado esto, el considera que la doctrina que ms te acerca a la verdad es la platnica (pensaba que Aristteles vena a decir lo mismo). Sobre todo en el conocimiento de las entidades inteligibles. Permite la unidad del alma con Dios. Adems aade que esa posibilidad de conocimiento de la verdad es posible a travs de la encarnacin del verbo divino en Jess, as como en sus enseanzas de tipo prctico. Dos vas de conocimiento que estn perfectamente imbricadas. El sostiene que el conocimiento racional debe de alguna manera guiarse por el conocimiento que procede de la revelacin. Al provenir de dios y ser verdaderos en s mismo, debe usarse para entender y comprender los contenidos de la fe. Dialogo sobre el ordenObra en dos libros de la misma poca de Contra los acadmicos. Tambin escrita en el casicaco, despus de su conversin y antes de su bautismo. El tema general del dilogo es el orden pero, no en sentido general, sino en el de la racionalidad del universo. No slo habla de que est racionalmente organizado sino tambin del papel del mal y de la providencia en ese orden. Tratar la cuestin del orden implica todo este debate. La tesis defendida es que todo parte de Dios como primera causa.

El mal es, en principio, contrario al orden. Hay que explicar cul es la razn de la existencia del mal en el mundo. Cmo puede haber tanto mal en el mundo cuando Dios gobierna todo? Dos salidas son posibles:-La divina providencia no se ocupa del mundo.-Los males se cometen por voluntad divina.

La primera no es aceptable porque implica una dejadez de Dios del mundo que ha creado y la segunda implica un Dios malvado. La nica solucin que concuerda con un Dios bueno que rige el mundo ser decir que el mal reside en la voluntad del hombre.

El hombre tendr que replegarse en s mismo y dedicarse a las disciplinas liberales. Para llegar al conocimiento inteligible lo mejor es abstraerse de los sentidos y centrarse en la propia mente.

Libro I:Escuchan un sonido de agua discontinuo. Licencio dice que esto se puede deber a que hay una obra, se ha taponado el paso y por eso el agua no fluye de manera constante, hasta que por la fuerza de la marea desaparezca ese tapn. Agustn se admira por esa respuesta y comienzan a preguntarse por el origen de esa admiracin.*Admiracin = algo inslito ocurrido fuera del orden manifiesto de las cosas.

Licencio: pero es que no existe nada fuera del orden de las cosas. En el universo, ordenado conforme una razn determinada, todo tiene una causa determinada. El universo no es algo catico sino que se rige por un orden providente, que proviene de su causa primera.Agustn: no porque lo defienda l, pero pondr en cuestin la tesis de Licencio. Ese orden te parece bueno o malo?Licencio: no le parece ni bueno ni maloAgustn: Qu es contrario al orden?Licencio: nada, puesto que eso estara fuera del ordenAgustn: podra ser el error contrario al orden?Licencio: no porque el error contiene su propia causa, por tanto, tampoco escapa al orden de las cosas. Los bienes y los males estn dentro del orden. Agustn: Los males tambin cabrn?Licencio: 1.- Dios no ama o quiere los males porque no pertenece al orden que Dios ame los males. Estn dentro del orden porque procuran la armona del conjunto.2.- La pertenencia del mal al orden es exigida por la justicia divina. Para dar a cada uno lo suyo, tiene que haber una distincin entre bienes y males. El propio ejercicio de la justicia divina requiere de males y bienes.

Libro II:Se dan dos definiciones de orden:-Aquello que, si lo tenemos en vida, conduce a Dios.-Aquello mediante lo cual se hacen todas las cosas que Dios ha establecido / Aquello mediante lo cual Dios obra todas las cosas.

Agustn le pregunta si Dios est sometido a ese orden.

Licencio: ni Dios ni lo que est en Dios escapa al orden. En l, todo es bueno. Donde todo es bueno, no tiene sentido decir que exista ningn orden.

Estamos contradiciendo lo que se deca en libro I de que todo estaba regido por el orden.

El orden afecta a todo aquello donde hay una combinacin de males y bienes. Los males sirven para ordenar las cosas buenas. Aportan armona al conjunto.

Se distingue entre:-Mviles o mutables: las cosas que se hacen en este mundo.-Inmviles o inmutables: las cosas que estn con Dios.

Ahora bien, no estar con Dios no significa estar sin Dios. De lo que existe, no hay nada que est sin Dios. Estn bajo el control o dominio divino.

Estar con Dios se define como estar regido o controlado por Dios. Pero Licencio dir justo lo contrario. Que lo que est regido o controlado por Dios es precisamente lo que no est con l. Estar con Dios ser todo aquello que entienda a Dios.

El sabio, entonces, estar con Dios. Sin embargo es mvil y mutable. Licencio dir que lo que est con Dios no es lo que el sabio hace sino lo que el sabio entiende. No todo lo que entiende el sabio est con Dios. Lo que est con Dios es la concepcin del entendimiento. Lo que entiende el entendimiento son entidades inteligibles e inmutables. El sabio, en tanto que objeto de comprensin por s mismo, tambin est con Dios.*Entendimiento = Nous

Vuelven al problema del orden;Agustn: Todo lo que obra el necio, lo obra con orden? De admitir que as es, se comparara al necio con Dios. Pero al decir que no, estaramos admitiendo algo que est fuera del orden. Trigecio: aunque la vida de los necios, como tal, no est sujeta al orden, sin embargo, la divina providencia lo encaja dentro del orden general de las cosas. Lo que hacen los necios no est fuera del orden sino que se subordina al orden general querido por Dios.

El sabio conoce la disposicin de las cosas buenas y malas del mundo dadas por la providencia.

Para comprender ese orden de las cosas, hay una doble va que ya se atisbaba en Contra acadmicos:-Autoridad-Razn

La razn no es independiente de la autoridad (providencia) pero tiene una misin importante: desvelar los misterios de la fe, averiguar cul es el principio de todas las cosas (Dios), entender la esencia divina (De trinitate habla sobre la trinidad). La filosofa sirve para entender lo que se cree (lo veremos en la Fides quaerens intellectum, la fe que busca entender, una sierva de la teologa).

Habla de la iluminacin: posibilitar las condiciones para que en la mente se puedan tener las ideas divinas.

Para acabar la cuestin de estar con Dios, vuelve a repetir lo de que no es lo mismo no estar con dios que estar sin Dios. Est con Dios todo aquello que, en tanto que lo conoce, goza de Dios. No estar con Dios es todo aquello que no est con Dios pero que s es regido o administrado por Dios.

Orden: aquello con lo que Dios hace todas las cosas. Hace Dios las cosas que no est bien hechas? Es Dios el autor del mal? Se vuelve a remitir a Trigecio, lo que no est bien hecho contribuye a la armona general del todo.

Si la justicia depende en dar a cada uno lo suyo y Dios siempre ha sido justo, habra que pensar que el mal siempre ha existido. Esto es inaceptable. Si se niega que el mal siempre haya existido, es cmo decir que Dios en algn tiempo no fue justo.

Trigecio: Dios ha sido siempre justo porque siempre ha tenido la potestad de distinguir lo bueno de lo malo. Es decir, que no es necesario ejercer la justicia para decir que alguien sea justo, es bastante con tener la potestad de discernirlo.

Esto puede llevarnos a creer que existe algo fuera del orden, el mal. Se podra establecer que el orden slo surge cuando surge el mal.

El orden es previo al mal. El orden ha existido siempre, forma parte de la propia esencia divina. El mal nunca ha existido fuera del orden. El orden siempre ha estado con Dios pero se empez a aplicar cuando comenz el mal.

Agustn detecta que:-El orden comenz con el mal-El orden es previo al mal

Entonces, el mal naci fuera del orden. Es Dios el creador de los males? Se queda pendiente. Slo dice Agustn que para dar una respuesta hay que tener una idea clara del orden, para lo cual hace falta estudiar la ciencia que trate este tema. El resto de la obra trata del proceso mediante el cual uno se tiene que formar para tener esa idea de lo que es el orden.

Expone una pequea historia de la cultura en la que desarrolla en que consistan las artes liberales:-Trivium: gramtica, retrica y dialctica.-Quadrivium: aritmtica, geometra, astronoma, msica.

Este es el proceso mediante el cual el arte va estableciendo el orden de los saberes. Mariano Capela Las bodas de Mercurio y filosofa: a travs de un relato alegrico habla de las 7 artes.

La alta disciplina para conseguir el saber de las cosas es la ley divina. Para conocerlo se establece un doble orden de conocimiento:-Referente a la vida-Referente a la instruccin: aqu estaran las vas ya mencionadas de la autoridad y la razn. Aquella es anterior a la razn pero, en el orden del conocimiento, tiene prioridad la va de la razn. NO SON EXCLUYENTES.

La autoridad nos otorga los principios generales que conducen nuestra vida. Para los indoctos, la autoridad es la nica va que existe para conocer la revelacin divina. Tambin hay que distinguir la autoridad de Dios de la de los filsofos o eruditos que, si siguen slo a la razn, pueden cometer errores.

La ley divina se compone de:-Orden del modo de vivir-Instruccin (intelectual), que se ensea, a su vez, por dos vas:.Autoridad: primera en el orden del tiempo y la nica que seguan las personas indoctas.Razn: buscan razones, adems de lo que se cree.

Primero, Agustn define la razn: movimiento el del alma capaz de discernir y conectar lo que conoce.

Define a qu se aplica el trmino razn, en primer lugar al alma: le corresponde al hombre como animal racional mortal. La racionalidad le acerca a lo divino mientras que lo mortal le aleja de lo divino.

Hace la distincin entre lo racional, aquello que usa o puede usar la razn y lo razonable, y aquello que se dice o hace conforme a la razn (el mbito del pensamiento, la palabra y la accin).

La razn se sirve de los sentidos. Segn la obra, stos contienen vestigios de la razn. Los principales son la vista y el odo. Sobre todo, aquello que se ve y aquello que se oye se puede llamar razonable porque revela un orden determinado que tiene como origen o causa la razn.No es igual decir que algo huele, sabe o se toca razonable.

Tres gneros de cosas conforme a la razn:-Los actos-Las palabras (incluye el pensamiento)-El deleite

El de las palabras es el mbito en el que se incluyen las disciplinas (disciplinas o artes liberales). Forman tambin parte de lo razonable. Son un instrumento de la instruccin por el que el alma se va acercando al conocimiento de dios.

HISTORIA DE LAS DISCIPLINAS:Presenta las artes como una sistematizacin que lleva a cabo la razn. Comenzando por la gramtica, segn Agustn esta naci cuando la razn se dio cuenta de que para que una sociedad fuera habitable era fundamental el uso del lenguaje. Lo primero que hizo fue poner nombres a las cosas. Despus las letras como codificacin de la palabra hablada. Esto se hizo siguiendo un orden que implicaba la existencia de nmeros y clculo. Inclua la gramtica en el sentido actual. Una vez que se descubre la existencia del lenguaje, se perpeta por escrito lo que es digno de memoria, instituyendo as la historia. Luego se instituye la dialctica, que es la disciplina que se ocupa del pensamiento y, por otro lado, de la verdad porque ayuda a elaborar pensamientos verdaderos. Para l es la disciplina de las disciplinas, sus reglas sern aplicables las otras disciplinas, al regular el pensamiento. Nos permite incluso ensear o tambin definir la razn y establecer que es lo necesario para alcanzar el conocimiento cierto. Para los que no pueden aprender la dialctica se instituye una disciplina que ensee el buen vivir mediante la persuasin; la retrica.

Para alcanzar el conocimiento, necesito acceder mediante los sentidos. Comenzando por el odo, distingui su objeto:-Emitidos por la voz humana-Producidos por el soplo del aire-Percusin

La razn lo que hace es sistematizar esos sonidos conforme al tiempo y a la distincin de agudos y graves. Estableciendo un cierto orden y variedad en los sonidos se distinguen las delimitaciones que distinguen esos sonidos nace la poesa. Dentro de ella, la composicin de pies mtricos y ritmos. Dando un paso ms estudio los ritmos y la modulacin de estos. Esto es la medida de los intervalos sonoros, lo que dio lugar a la msica.

Entramos despus en el dominio de la vista para detenerse en orden y hermosura de las figuras y dando origen con ello a la geometra. Esos conocimientos aplicados al mbito de los cielos dan lugar a la astronoma. En este momento Agustn hace hincapi en el nmero. Llega a decir que la razn se da cuenta que todo su poder reside en la potencia de los nmeros (influencias pitagricas). Para l el nmero sera un instrumento revelador de la verdad y de toda medida y clculo.

Todas estas disciplinas forman parte del bagaje del erudito. Contrapone la instruccin y la ignorancia. La erudicin implica la formacin en estas materias y poder as entender la nada, la eternidadconceptos que no puede poseer el ignorante.

La razn cuando discierne lo hace en funcin de lo uno, que est presente en todas las cosas. Esto convierte al uno en un trascendental del ser. Se produce la distincin entre el mbito de lo que es y el mbito del uno. Todo lo que es, es uno. Un algo.

Con esto se quiere conocer el conocimiento que ordena todas las cosas y establecer el alma como va de acceso a Dios. Es estudio nos capacita pues para entender el orden de todas las cosas. El mal est circunscrito a tal orden y no se puede achacar a Dios. La idea de que las vas de la verdad (fe y razn) son la base.

La explicacin del mal en detalle la desarrolla en la obra sobre el libre albedro, la siguiente que vamos a ver (mnimo sus dos primeros libros).Sobre el libre albedro (388-395)Est tambin escrita en forma de dilogo.

Compuesta por tres libros. Se trata, en general, el problema del mal estructurado de la siguiente manera:Libro I: cul es el origen del mal. Es Dios el autor del mal?Libro II: por qu Dios ha dado al hombre el libre albedro? Para esto, habr que:-Probar la existencia de Dios-Ver si proceden de Dios todos los bienes-Ver si el libre albedro debe contarse entre esos bienesLibro III: cmo se armoniza el libre albedro con la presciencia divina y la relacin del pecado con la providencia divina

Libro I: es Dios el autor del mal?Dios no es el causante del mal que otro hace aunque s del mal que se padece. No es responsable del pecado pero s del castigo derivado del pecado.

El mal no se aprende. No est en lo que se aprende (las disciplinas). No, el mal est en otra parte.

El mal que hacemos, el origen del pecado est en el alma humana. Pero el alma humana es creacin de Dios, por qu no le atribuimos el pecado? Antes de abordar esta cuestin intenta explicar qu se entiende por obrar mal.

-En qu consiste obrar mal?-De dnde procede el mal?

En qu consiste obrar mal?Para responder a esto lo que hace es dar ejemplos: sacrilegio, adulterio. Luego se pregunta por qu son malas esas acciones:

El deseo de obrar mal implica un mal en s mismo. Se pueden tener tambin deseos buenos como el deseo de vivir sin temor. Agustn distingue entre:-Deseo bueno: renuncia al amor de las cosas que pueden perderse contra la propia voluntad-Deseo malo: desea lo que puede perderse contra la propia voluntad

Respecto a la definicin previa, matar al amo podra ser un deseo bueno y buena accin. Con la segunda teora, ya nos dice que es un deseo malo, puesto que es un deseo perecedero.

Hay que hacer la distincin entre ley divina y ley humana. Cuando hablamos de bien y mal, hay leyes permitidas por los seres humanas pero que son reprochables desde el punto de vista divino. Esto es porque provienen de un deseo malo.

La ley divina es una ley eterna e inmutable mientras que las humanas son temporales. La ley divina es aquella en virtud de la cual es justo que todas las cosas estn perfectsimamente ordenadas. Si la ley humana quiere ser justa, ha de estar subordinada a la ley divina. Esta ltima variar en funcin de las necesidades de las sociedades a las que se aplica.

El deseo bueno responder a la ley divina, a lo que esta ordenado. Puede haber deseos buenos que buscan leyes humanas si estas son justas.

Alguien estar perfectsimamente ordenado si su razn domina y gobierna todos sus impulsos irracionales. El sabio es aquel que se conduce por la razn.

El deseo malo es siempre voluntario. No se podr decir que era superior a sus fuerzas o involuntario. El deseo siempre es inferior que lo ms poderoso, la mente o razn. Puesto que lo ms perfecto debe dominar sobre lo menos perfecto, la razn deber dominar sobre los deseos. La razn, como origen de la voluntad no puede ser obligada a hacer el mal (ni por lo superior, lo igual ni lo inferior):-Lo inferior est subordinado-Lo igual, otra persona, no puede obligarse al que se rige por la propia voluntad-Lo superior tampoco puesto que ste no puede rebajarse a obligar algo a actuar de una manera inferior.

Lo que nos quiere decir es que la razn humana es responsable de sus conductas y debe asumir las consecuencias de estos.

Pero si el ser humano ha sido creado por Dios, cmo no atribuir esta maldad al creador? Cmo decir que el ser humano se ha precipitado voluntariamente en el mal?

La cuestin radica en tener una buena o una mala voluntad. La buena voluntad es aquella por la que deseamos vivir rectamente. Lo que origina el mal no est en la voluntad sino en lo que hacemos de ella. La cuestin est en aquello que deseemos.

La buena voluntad para l es el mayor de todos los bienes:1.- Resulta gozoso poseerla2.- Basta con quererla para tenerla3.- No puede perderse o arrebatarse de modo involuntario

Ser felices basta con querer serlo. Depende de la buena voluntad. Aquel que posee una buena voluntad posee las cuatro virtudes cardinales:-Prudencia: conocimiento de lo que debemos apetecer o desear y lo que debemos evitar.-Fortaleza: desprecio del sentimiento de la prdida de aquello que podemos perder contra nuestra propia voluntad.-Templanza: virtud que desprecia, ordena los deseos desordenados. -Justicia: dar a cada uno lo suyo.

Las virtudes implican una vida buena y su ausencia miserable. Son bienes que no se pierden por la propia voluntad y que no podemos usar mal. El mal viene, por tanto, del mal uso de la voluntad.

Conclusin: la felicidad o la miseria de nuestra vida proceden de nuestra propia voluntad.

Si los hombres merecedores de la felicidad son los que tienen una buena voluntad, por qu no todos son felices? Cmo se explica que los que tienen una vida miserable la tengan voluntariamente?

La clave es la distincin entre tener una voluntad buena y querer vivir bien. Tanto el que tiene deseos buenos como el que tiene deseos malos, quiere vivir bien. Esto no quiere decir que tenga una buena voluntad, esta no est al alcance de todo el mundo. La voluntad buena depende de aquello que deseamos.

Cuando decimos que los hombres son desgraciados por su propia voluntad no decimos que quieran ser desgraciados sino que su voluntad trae la desgracia.

Resumen: el que tiene buena voluntad es el que ama o desea las cosas eternas, perdurables. Los bienes que no se pueden perder contra la propia voluntad. El que desea cosas temporales, que no ofrecen seguridad ni felicidad, ser desgraciado. Aquellos bienes eternos que desea el que tiene la voluntad buena responden al perfecto orden de todas las cosas. La ley eterna manda a los hombres que aparten su amor de las cosas temporales por los eternos. En todo caso, la culpa, la responsabilidad no radica en los bienes temporales, sino en el deseo de esos bienes.

Por tanto, obrar mal consistira en despreciar los bienes eternos y amar los bienes temporales. El mal procede de la voluntad, del libre albedro. Es decir, de lo que deseamos.

Libro II: por qu nos ha dado Dios el libre albedro?Se obra con la pregunta de por qu Dios ha dado al hombre el libre albedro. Por qu le ha dado algo que puede usarse para pecar.

Hay que considerar el libre albedro un bien? En qu medida Dios puede estar justificado por dar al hombre el libre albedro?

1 Justificacin: se debe a un fin bueno; poder obrar rectamente, a pesar de que se pueda usar mal. En cualquier caso, si lo usas mal es responsabilidad del hombre y no de Dios.Evodio: si el libre albedro se ha creado para obrar rectamente, no debera poder usarse para pecar. Agustn ofrece dos respuestas:1 Fe: a Dios no se le puede culpar de nada malo2 Razn: problema de la justificacin del libre albedro. Para hablar de esto, antes hay que hablar de la existencia de Dios. Como dir San Anselmo, tomado de aqu, (pasaje de Isaas 7,9): si no creis no entenderis. Tambin salmo 53,1: y dijo el necio, Dios no existe.

Lo que queda de libro se basar en:1.- Probar la existencia de Dios2.- Probar que todos los bienes provienen de Dios3.- Probar que el libre albedro se cuenta entre esos bienes

1.- Prueba de la existencia de DiosNo es una cuestin necesaria para l pero si va esbozando argumentos que demuestren esta existencia. Para ello intentar establecer que Dios es algo superior a lo ms excelente que tenemos:-Razn es lo ms excelente: haciendo una gradacin de aquello que nos caracteriza como seres humanos.-Demuestra la existencia del hombre, demostrando que el mismo vive. Uno vive porque uno entiende. Poder hacer uso de nuestra razn demuestra que estamos y que somos seres vivos. En nosotros lo ms excelente es nuestra inteligencia. En la gradacin que comentbamos antes:-Los sentidos corporales, mejores que los objetos, ms perfectos en tanto que seres vivientes.-Sentido interno: discernimos los objetos propios de cada sentido y que aquellos sentidos comunes a los distintos sonidos: las magnitudes y las formas. Tambin nos dir a partir de lo que percibimos, lo que debemos hacer y lo que debemos desear.-Razn: distinguimos entre el objeto que se percibe, el sentido y el acto de percibir. Adems posee una caracterstica que slo posee ella: poder percibirse a s misma. Es lo que caracteriza la razn como algo superior.

Hemos probado que en el hombre no existe nada superior a la razn. Si queremos establecer que hay algo superior a lo creado, hay que demostrar que hay algo superior a la razn.

La razn tambin se caracteriza porque es comn a todos los seres humanos y los objetos que percibe son comunes para todos. El acto de percibir, en el caso de la razn, adems no altera el objeto, como sucede con los nmeros. Precisamente es propio de la razn que sea poseda por hombres sabios.

Es la sabidura distinta para cada sabio o comn para todos los hombres?Aunque los hombres persigan cosas diversas, todos persiguen el sumo bien, la felicidad que no se consigue sino con la contemplacin de la verdad. Si el que es feliz es el que posee el sumo bien, la posesin de la verdad, algo propio del sabio; slo el sabio es feliz. Sabidura = Comn a todos los hombres = Fin ltimo

Lo que es comn no est sujeto a la mutacin propia de lo temporal. Son superiores aquellas entidades fijas y eternas con respecto a las mudables. As, tenemos entidades que son superiores a la propia razn. Aqu no habla mucho de la verdad. Esto lo har en los soliloquios: la verdad es lo que hace a lo verdadero. Aqu nos limitamos a decir que la verdad es superior a la propia razn, por dos razones:1.- No es algo inferior: no juzgamos como ha de ser la verdad. Nosotros juzgamos conforme la verdad. La verdad es el criterio conforme al cual nosotros juzgamos de las cosas. 2.- Tampoco es igual: sera tambin mudable pero la verdad es nica, ntegra e inalterable

La verdad, como la sabidura, puesto que se trata de cosas inmutables constituira aquel bien que es ms deseable para el hombre. Lo que es ms excelente que nosotros mismos son bienes eternos e inmutables.

La existencia de Dios lo constituye la prueba de la verdad. Existe un Dios superior a lo ms perfecto que existe en la creacin. Verdad y sabidura son inmutables, eternas y no dependen del sujeto que conoce para existir. Si hay algo ms excelente que la razn humana, tiene que ser Dios. Si hubiese un ser an superior a la verdad y a la sabidura, eso sera Dios. En cualquier caso, hay un Dios. Una de las novedades de San Agustn ser hacer una demostracin exclusivamente racional de Dios.

2.- Todos los bienes proceden de Dios?Todo ser mudable, es necesariamente susceptible de recibir una forma. Ningn ser puede formarse a s mismo, la tiene que recibir de otro. Esa forma la tendrn que recibir de un ser inmutable y permanente, que es Dios.

Como todos los bienes que existen tienen una forma que les da su forma peculiar de existir, esos bienes proceden de Dios. Podemos simplificarlo de la siguiente manera:P1: Todos los seres inmudables tienen una formaP2: Esa forma procede de DiosP3: Todos los bienes tienen una formaConclusin: Todos los bienes proceden de Dios

3.- Se cuenta el libre albedro dentro de esos bienes?El primer argumento que emplea para demostrar esto es una analoga: entre los bienes del cuerpo hay algunos que pueden usarse mal pero su carencia la consideramos algo malo. Sin embargo, son necesarias para un bien. En el caso de la voluntad, la necesitamos para llevar una vida recta y honesta, aunque pueda usarse mal.

El segundo argumento es distinguir entre distintos tipos de bienes. Distingue entre bienes mayores, las virtudes, que seran los que no pueden usarse mal. Siempre estn regidos por la razn. Gracias a ellos se vive rectamente. Tambin, como antes, son los que no pueden perderse por su propia voluntad.

Por otro lado, los bienes menores sern los que pueden usarse mal y aquellos sin los cuales puede vivirse rectamente. Como las partes del cuerpo.

Finalmente, tenemos los bienes intermedios, entre ellos, las facultades del alma como el libre albedro. La voluntad libre puede usarse mal pero, al mismo tiempo, sin ella no puede vivirse rectamente.

En conclusin, Dios no es responsable del mal porque todo lo que ha creado es bueno, incluyendo la voluntad libre que, como tal es buena. El mal consiste en un mal uso de esa voluntad.