Sicar Informa

Sicar vibra en Madrid con la JMJ

Los talleres arrancan con fuerza un curso ilusionante

"Ha sido un año de trabajo, esfuerzo y gratitud"

"Volvemos con una misión clara. Ser testigos de Cristo en nuestro tiempo y decirle al mundo entero que el Señor sigue vivo". Este es, en palabras de Ricardo Gómez, miembro de Sicar, el camino que deben seguir los jóvenes tras la Jornada Mundial de la Juventud, un encuentro "indescriptible" que

Los jóvenes de la parroquia de Santa

Engracia participaron en esta gran fiesta de fe, que reunió a más de dos millones de personas

congregó el pasado mes de agosto en Madrid a cientos de miles de personas de los cinco continentes, demostrando nuevamente que la “Iglesia es universal”. Tras este magnífico impulso, es momento de aceptar, como pidió Benedicto XVI, el hermoso reto de la Nueva Envangelización.

editorial

Transcurrida la Jornada Mundial de la Juventud, sin casi tiempo de transición, nos vemos encauzados en el inicio de un

nuevo curso. Las experiencias acumuladas, tanto en el propio encuentro de Madrid como en los meses previos de preparación, no han pasado inadvertidas para ninguno de los miles de jóvenes de todo el mundo que, con fe, energía e ilusión, quisimos participar activamente en ella.

Sin embargo, a pesar de la grandilocuencia de un evento de estas características, no debemos recrearnos en él quedándonos parados. Ni mucho menos. El hermoso reto de la Nueva Evangelización, propuesto una y otra vez por el Papa y otros miembros de la Curia, debe despertar en los cristianos un compromiso especial. Y es que, si grande es descubrir el amor de Dios, más aún es compartirlo.

Así, cargados de este espíritu, Sicar comienza, con energías renovadas, una nueva andadura. Si bien la JMJ de Madrid 2011 ha supuesto un punto de inflexión en la trayectoria del grupo, pues era su objetivo primigenio, las señas de identidad del mismo se mantienen intactas. Toca, únicamente, seguir trabajando y orando para cumplir, con Su ayuda, los desafíos del futuro, que son muchos.

En ellos seguirá colaborando Pedro Herrero, aunque ya no como coordinador general. Fiel a su apuesta inicial, ha dejado este cargo tras la JMJ, si bien mantiene una estrecha vinculación como miembro de Musicar y responsable de ‘Uno y Uno’, entre otras cosas. Por más que siga con nosotros, Sicar Informa le agradece, en nombre de todos los jóvenes, el fructífero tiempo dedicado a lo largo de estos tres últimos años.

A partir de este mes de septiembre, José María Albalad y Pablo Soláns asumen la coordinación de Sicar. Lo hacen ilusionados con el proyecto existente y contando contigo, sabedores de que, sin la aportación de todos, el éxito personal, grupal y espiritual no será pleno. Saca todo lo que puedes dar y te guardas. ¡Arrancamos!

02/ Grupo de jóvenes Sicar Septiembre 2011

Arrancamos. ¿Te apuntas?

Número XVI

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Septiembre 2011 Grupo de jóvenes Sicar /03

Caminamos hacia el Padre4

10

Musicar no toca techo14

Uno y Uno sigue su marcha cultivando la vocación al amor

15

El Taller Deportivo arranca con fuerza un curso prometedor16

Agenda

18

19

20 'Literatura y Cine' inicia el curso con un interesante programa

21 A pie de calle, una columna de Chema Albalad

7

Nace el I Concurso de Microrrelatos

Entrevista a Carlos Escribano, obispo de Teruel y Albarracín

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icar

In

form

a ...

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Revitalizante encuentro

8 Yo también estuve allí

9 ¡Gracias, hermanos!

12 Madre Milagros, una vida de servicio por y para Dios

Los 21-21s se consolidan como un espacio de oración 17

22 El Día del Niño celebra el 2 de octubre su segunda edición

Transcurrida la Jornada Mundial de la Juventud, sin casi tiempo de transición, nos vemos encauzados en el inicio de un

nuevo curso. Las experiencias acumuladas, tanto en el propio encuentro de Madrid como en los meses previos de preparación, no han pasado inadvertidas para ninguno de los miles de jóvenes de todo el mundo que, con fe, energía e ilusión, quisimos participar activamente en ella.

Sin embargo, a pesar de la grandilocuencia de un evento de estas características, no debemos recrearnos en él quedándonos parados. Ni mucho menos. El hermoso reto de la Nueva Evangelización, propuesto una y otra vez por el Papa y otros miembros de la Curia, debe despertar en los cristianos un compromiso especial. Y es que, si grande es descubrir el amor de Dios, más aún es compartirlo.

Así, cargados de este espíritu, Sicar comienza, con energías renovadas, una nueva andadura. Si bien la JMJ de Madrid 2011 ha supuesto un punto de inflexión en la trayectoria del grupo, pues era su objetivo primigenio, las señas de identidad del mismo se mantienen intactas. Toca, únicamente, seguir trabajando y orando para cumplir, con Su ayuda, los desafíos del futuro, que son muchos.

En ellos seguirá colaborando Pedro Herrero, aunque ya no como coordinador general. Fiel a su apuesta inicial, ha dejado este cargo tras la JMJ, si bien mantiene una estrecha vinculación como miembro de Musicar y responsable de ‘Uno y Uno’, entre otras cosas. Por más que siga con nosotros, Sicar Informa le agradece, en nombre de todos los jóvenes, el fructífero tiempo dedicado a lo largo de estos tres últimos años.

A partir de este mes de septiembre, José María Albalad y Pablo Soláns asumen la coordinación de Sicar. Lo hacen ilusionados con el proyecto existente y contando contigo, sabedores de que, sin la aportación de todos, el éxito personal, grupal y espiritual no será pleno. Saca todo lo que puedes dar y te guardas. ¡Arrancamos!


Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la Fe.

El Señor está presente en nuestras vidas. Casi siempre

de forma sencilla, por medio de un hilo fino dorado que envuelve, inadvertido, cada acontecimiento y tira de él hacia el cielo. Dios nos habla a cada uno de manera distinta y la relación que de ahí surge es única, de modo que nuestra capacidad de trascender varía mucho a lo largo de los años y entre nosotros. En cualquier caso ésta es la fe cotidiana a que Jesús nos llama, pues nos ha creado para un Amor que no es de este mundo. Si fuera de este mundo, no necesitaríamos superarnos y recorrer un Camino de santidad para seguirle, para vivir eternamente en Él.

Pero en ocasiones somos arrebatados por un ángel con violencia, con independencia de nuestra voluntad o estado de ánimo. Entonces la realidad entera se pliega y se pone al servicio del mensaje, permitiendo que nuestra mirada se ensanche hasta fijarse en lo esencial. Allí donde somos libres y auténticos.

Para contaros las andanzas con mi amigo Jorge en Cuatro Vientos, debo ponerme en esta clave, porque si no no se entiende nada de lo que fuimos testigos. Escribo el relato con la esperanza de que os ayude a recordar vuestras propias experiencias y redescubráis las intuiciones que el

Espíritu Santo sembró en vuestro corazón. “Para que vuestra alegría sea completa”. Que así sea.

La situación de los alrededores del Aeródromo era abrumadora. Llegamos justos de tiempo, con otros dos millones de individuos que resultaron ser hermanos. Esta nueva familia de proporciones inconcebibles, surgía de afluentes caudalosos y avanzaba como un río de alegría desbordante. Los vecinos arrojaban agua desde las

Ignacio Laguna

Caminamos hacia el Padre

La Cruz de los jóvenes, protagonista.

ventanas con cubos, botellas o directamente con mangueras. Así durante kilómetros, para aplacar los calores. Nos mirábamos asombrados, deseosos de llegar al recinto. Luego, vino la decepción para muchos.

Ante la evidencia de una

creciente avalancha humana, la Organización optó por restringir el acceso a la explanada y ubicar a miles de personas con acreditación en lo que, en términos de El Señor de los Anillos una amiga llamaría después ”El Abismo de Helm”: una vaguada de arena fina, situada a varios kilómetros del escenario y felizmente oculta por un talud de tierra de unos veinte metros de altura. Dos pantallas gigantes y varias torres de sonido eran nuestro único eslabón con la civilización perdida y los móviles funcionaban a duras penas. Sólo se ha visto algo parecido en el cine, con elfos, horcos y algún hobbit despistado buscando al mago. Insensatos. Originariamente, se concebía como un espacio para las personas que no estuvieran inscritas en las Jornadas y quisieran participar en el evento. Pero muchos habíamos pagado y nos agolpábamos contra las vallas para hacer valer nuestros derechos. Decenas de policías, bomberos y voluntarios intentaban frenar las oleadas de masa efervescente. Si nos damos cuenta, las cargas a caballo, el agua a presión y las cadenas humanas eran un contrasentido; nada de aquello obedecía a la idea de las Jornadas, sino a las estrictas reglas del caos. Era una prueba, y Jorge llevaba un buen rato riéndose de mí cuando lo supe. Lo mejor que podíamos hacer era buscar un lugar cómodo y comer algo, que no todos los días se contempla a medio millón de


Caminamos hacia el Padre

Benedicto XVI instó a los jóvenes a aceptar el reto de la Nueva Evangelización.

personas cantar, rezar y conversar con una alegría digna de este nombre. Unos minutos después, el Papa apareció en las pantallas y estallamos de júbilo al unísono.

Cualquiera que asistiera a la Vigilia recordará con emoción la Adoración al Santísimo. Ese silencio luminoso en el que nos veíamos envueltos, y que nada tenía que ver con la tormenta que

acabábamos de soportar. Era la viva imagen de nuestros tiempos: frente a un mundo furioso y complejo, la verdad desnuda y vulnerable de Cristo. Frente a una Iglesia asediada por vientos furiosos, el Buen Pastor, que el Papa encarnaba: fuerte en la debilidad por amor a sus ovejas. “Os he hablado de esto para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo” (Jn 16,33).

Hacia el final de la Vigilia, descubrí un boquete desprotegido en la doble valla del recinto. “Si nos damos prisa, igual pasamos antes de que lo cierren”. Y al grito de “¡a por nuestros chicos de catequesis!” salimos disparados hacia el talud. Sucios y empapados, llegamos a la Tierra Prometida, sorprendidos por la facilidad con la que habíamos cruzado las líneas enemigas. Entonces comprendimos que no

habíamos estado tan mal. Aquí la atmósfera estaba cargada y la masificación resultaba opresiva por momentos. Empezamos a recorrer las calles, infestadas de jóvenes que iban y venían, cantaban, bailaban, se abrazaban… y acudían en masa a las cafeterías y a las capillas que quedaban en pie. Al no disponer de móviles, era imposible localizar al grupo, de modo que nos dejamos llevar por el entusiasmo general…

Dos horas después, lo imposible: tres amigos nos colaron ante el escenario, para hacernos unas fotos. Teniendo en cuenta dónde había empezado nuestra peregrinación, nos sentíamos abrumados. “Es que no damos crédito… venimos de cargas a caballo y táctica medieval…” Al despedirnos de nuestros “ángeles”, noté algo bajo la zapatilla y encontré un pequeño crucifijo metálico hundido en el barro. Lo guardé en el bolsillo y comprendí Quién marcaba nuestros pasos.

Se produjo otro hecho de apariencia irrelevante, pero que tuvo sus consecuencias (la Divina Providencia debería aparecer más en los manuales de supervivencia…): ya cerca de la salida, dos mujeres nos pidieron que les ayudáramos a limpiar de barro las sillas para los sacerdotes. Unas quince mil. Habían dedicado el último año a confeccionar las casullas para la Misa, y ahí las tenías a las dos, afanadas en una tarea gigante y sin desesperar. Nos faltó tiempo para decirles que no podíamos estar allí, pero no pareció importarles. Así que empezamos a reclutar voluntarios (de los de verdad) y dos horas después las sillas estaban preparadas. Las quince mil. Tocaba sacar las casullas de las cajas y plegarlas sobre las sillas. Una de las señoras, agradecida, me ofreció una cuando supo que me proponía entrar en el Seminario. Terminamos hacia las cinco de la madrugada y

(Continúa en la siguiente página)



La Jornada Mundial de la Juventud fue una gran fiesta de fe, con más de dos millones de jóvenes de todo el mundo.

destinábamos las fuerzas que nos quedaban para tumbarnos detrás del escenario con los demás voluntarios, que ya dormían. Nos despertó el ruido de los camiones de basura. En dos horas, había cambiado el panorama drásticamente: seguíamos en el suelo, pero era de día y estábamos rodeados de obispos ¿Qué sería de nosotros?

Pasaban los minutos y la gente iba ocupando sus puestos. Quedábamos Jorge y yo, en tierra de nadie. En cualquier momento se descubriría el pastel y nos expulsarían del Paraíso. Por supuesto, sabíamos que pasara lo que pasara éramos unos privilegiados. Y de repente apareció un grupo alborotado de periodistas, que avanzaba hacia las sillas asignadas. “Saca la cámara”, le dije a Jorge mientras le

agarraba del brazo. Segundos después nos colábamos con la prensa, a escasos metros del Papa. No entiendo cómo pasamos inadvertidos, cuando éramos reconocibles como mineros en una Academia de Bellas Artes. Sólo sé que al empezar la Santa Misa me

sentí la persona más agraciada del planeta.

Durante la Consagración, de rodillas, recordé mucho de lo vivido en estos últimos meses, y lo puse en las manos del Señor, con los ojos empañados y la mirada fija en

el Santo Padre (“Tú eres Sacerdote Eterno, según el rito de Melquisedec”).

Tras la marcha del Papa, aprovechando la salida de las autoridades, subimos con decisión la rampa del escenario. Un guardia salió a mi paso, pero debió ver la casulla que colgaba de mi brazo: “Pasa, date prisa”. Y allí puesto, con temor y temblor, besé el Altar.

Desde arriba, la vista se perdía en el infinito, en el inmenso tapiz de realidades personales para las que Dios tiene un plan. Éramos la iglesia peregrina, los nuevos Primeros Cristianos, que arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe, caminamos hacia el Padre.

Entonces supe por qué el Santo Padre nos había congregado en una pista de despegue.


Terminada la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) llega el

momento de regresar a nuestro hogar y hacer balance de la experiencia que hemos vivido. El viaje por la fe que a lo largo de estos días hemos realizado ha supuesto un encuentro profundo y real con Cristo.

Su Santidad Benedicto XVI nos ha despedido con su bendición y una misión clara: ser testigos de Cristo en nuestro tiempo y decir al mundo entero que hoy en día el Señor sigue vivo. Este mensaje, gracias al carácter universal de la Iglesia y a la asistencia de peregrinos del mundo entero, será esparcido por el orbe llevando la buena nueva, la alegría y la esperanza a millones de personas. Especialmente, y a petición del Papa, a los más desfavorecidos, a quienes nos ha pedido que transmitamos su afecto.

Ricardo Gómez

Han sido días de mucho cansancio físico, pero lo que hemos ganado espiritualmente ha merecido la pena. En cada pequeño encuentro que hemos tenido con Dios, bien en las misas, las catequesis o en el silencio de la oración, nuestro espíritu se ha alegrado y llenado de amor.

Los jóvenes tuvieron en Cuatro Vientos un encuentro especial con Cristo.

Esta alegría y este amor han inundado y recorrido las calles de Madrid de la mano de los peregrinos. Hemos querido compartir nuestra fe con todas las personas que han salido a nuestro encuentro. Y, aunque ser cristiano hoy en día no sea fácil, con la gracia recibida del Espíritu Santo hemos sido capaces de acallar las voces que se han alzado contra la libertad religiosa combatiendo la fuerza física con la fuerza de la oración. Durante estos días, los jóvenes han rezado por todos.

Los momentos más intensos de estas JMJ han sido, sin lugar a dudas, los que hemos podido vivir en el aeródromo de Cuatro Vientos. La adoración eucarística de la noche del sábado 20 se vio sorprendida por una fuerte tormenta que no consiguió bajar los ánimos, todo lo contrario. Los jóvenes, al grito de ''Esta es la juventud del Papa'', nos mantuvimos más firmes que nunca

acompañando al Santísimo Sacramento. Hicimos noche allí y el domingo disfrutamos de nuevo de la compañía del Santo Padre durante la Misa de Envío.

La sensación de haber estado allí es indescriptible. El espacio se quedó pequeño para la multitud de jóvenes que acudimos a la llamada del Papa, muchos de los cuales no pudieron acceder a la base. Todos compartíamos la misma fe, las mismas creencias y el mismo afecto por su Santidad, un afecto que él también profesa por los jóvenes. Fieles a la Madre Iglesia, es momento de compartir cada uno de los dones que hemos recibido y colaborar en la ardua tarea de la Nueva Evangelización, a la que hemos sido llamados.

Así, no tardaremos en ver los frutos que han dejado estas JMJ. Mientras tanto, empezaremos a prepararnos para las próximas. Río de Janeiro, en 2013, nuevo reto.

Revitalizante encuentro



Yo también estuve allí

Si, yo estuve allí, en Madrid en las XXVI Jornadas Mundiales de la Juventud…Si, yo estuve allí, junto con dos millones de jóvenes católicos de todo el Mundo…Si, yo estuve allí, y con ellos, dando la Bienvenida al Santo Padre, en las catequesis de los

Obispos, rezando el Viacrucis, cantando a voz en grito “Firmes en la Fe”...Si, yo estuve allí, y en Cuatrovientos, en el calor, en la tormenta, en la adoración, en la calma, en

el silencio, en la oración…Si, yo estuve allí, y escuché al Santo Padre decirnos: “No os conforméis con menos que la

Verdad y el Amor. No os conforméis con menos que Cristo”……pero sobre todo… Él, su Luz, su Presencia, su Espíritu, su Gracia, su Fuerza, estuvo allí… “y

acampó entre nosotros”.

Carolina Sebastián, que vivió en Madrid, junto al resto de jóvenes de todo el mundo, la Jornada Mundial de la Juventud 2011, recoge en unas significantes líneas las vivencias y la

esencia de dicho encuentro.


¡Gracias, hermanos!Hernán Ramírez, uno de los jóvenes paraguayos a los que Sicar les dio la oportunidad de viajar a

España el pasado mes de agosto para vivir en primera persona la Jornada Mundial de la Juventud, ha querido expresar en esta publicación lo que ha significado para él este multitudinario encuentro.

Ramírez, de 25 años, está profundamente satisfecho por la experiencia, ya que, según indica, ha supuesto la consolidación de su conversión: “Hace tres años llevaba una vida desordenada, alejada

de Dios. Ahora he encontrado su verdadero sentido”.

En lo personal, la experiencia vivida en la JMJ ha sido una

bendición, pues ha llenado aquellos huecos vacíos que tenía. Puedo decir que han sido llenados por el amor de Cristo Jesús.

Dice la Palabra de Dios, “la felicidad verdadera no está en recibir, sino en dar”. Al participar en este encuentro, me he sentido más comprometido con mi parroquia (Santa Lucía). Así, he vuelto a Paraguay dispuesto a cuidar las semillas de fe, amor y esperanza que recibí. Es momento de cultivarlas para que germinen y

den buenos frutos. Doy gracias a Dios y a nuestra Madre María Santísima por el gran regalo que nos ha hecho, tanto a mí como al grupo JUPES (Jóvenes Unidos por la Esperenza Solidaria). Estar en Madrid fue una oportunidad excelente.

Me gustaría agradecer a Monseñor Carlos Escribano, Obispo de Teruel, y a todas aquellas personas que han hecho posible que hayamos estado en dicha Jornada. No quisiera mencionar nombres por miedo a olvidar alguno, pues hay muchos.

Sólo me queda desear que nuestro buen Dios os Bendiga siempre y les siga dando esa fuerza que viene de lo alto, junto con nuestra Madre María, que siempre ruega por vosotros.

Antes de concluir, me gustaría dirigirme a Sicar. No tenemos palabras para expresar el bello gesto que han tenido. Gracias a vosotros hemos saciado nuestra Sed con el Amor de Cristo. Y lo hemos hecho en ese pozo tan hermoso llamado ''SICAR''. Los tendremos en nuestras oraciones, queridos hermanos.

Hernán Ramírez, de 25 años, con los colores de su país. Los jóvenes paraguayos vivieron con intensidad la JMJ.

En julio de 2010, pocos días después de concluir el

Camino de Santiago con los jóvenes de su parroquia, fue nombrado obispo de las diócesis de Teruel y Albarracín. Pocos lo esperaban. Todos lo entendieron. Y es que Don Carlos Escribano Subías, entonces Vicario Episcopal de Zaragoza y párroco de Santa Engracia, no había pasado desapercibido por su gran capacidad evangelizadora. Acompañado por una multitud de fieles, el 26 de septiembre de 2010 fue consagrado Obispo. Tras un año al frente de esta nueva misión, Escribano comparte su experiencia con Sicar, el grupo de jóvenes con el que tan intensamente convivió durante su etapa en Santa Engracia.

Se cumple un año de su ordenación episcopal. ¿Qué ha significado este hecho en su vida?

Ha significado un cambio radical de vida. Mis años de sacerdote en Zaragoza y, en especial, los dos que estuve de párroco en Santa Engracia fueron de una gran intensidad pastoral. En septiembre del año pasado fui ordenado obispo. Ha sido un año intenso, de aprendizaje, gratitud y trabajo.

¿Cómo ha sido su llegada a Teruel?

Desde el principio me he encontrado muy a gusto en Teruel.

José María Albalad

"Ha sido un año de trabajo, aprendizaje y gratitud"

Son muchos los rostros anónimos que durante este tiempo se han transformado en amigos y colaboradores generosos en las distintas realidades eclesiales de la diócesis.

En este primer año ha estudiado su nueva realidad. ¿Cómo está la Iglesia en Teruel?

La Iglesia diocesana de Teruel y Albarracín goza de buena salud, aunque en ocasiones nos da la sensación de que somos una iglesia sin excesivos recursos. Lo importante es la colaboración de todos a la hora de asumir el reto de la Nueva Evangelización que nos pide la Iglesia del tercer milenio. Yo confió plenamente en la Providencia y estoy convencido de que el Espíritu Santo nos dará luz y fuerza para seguir anunciando el evangelio en el Teruel de hoy.

¿Qué destacaría de las Diócesis

que tiene a su cargo?En primer lugar la calidad de sus

sacerdotes: son muy abnegados y con un gran sentido de la responsabilidad. También los religiosos y las religiosas nos enriquecen con sus carismas que integran perfectamente en la vida

diocesana. Y los seglares son también de mucha categoría. Como ves, lo que quiero destacar de un modo especial es la valía de los cristianos, de las personas, que aquí viven su fe.

¿Cuál es el principal problema con el que se encuentra a la hora de desarrollar sus objetivos?


Carlos Escribano recibió a la Escolanía de Santa Engracia el pasado mes de julio.


El 30 de septiembre de 2010, Don Carlos Escribano cumple un año como obispo de Teruel y Albarracín.

Si te he de ser sincero, yo mismo. El reto de ser obispo supone que uno tiene que aprender muchas cosas y debe asumir la realidad de la Iglesia desde una perspectiva distinta de la que tenía como sacerdote de Zaragoza.

Lo mejor a lo largo de mi primer año en Teruel ha sido que he contado con el apoyo de mucha gente en las tímidas iniciativas pastorales que hemos emprendido.

Concretamente, siempre ha dedicado especial atención a la familia y los jóvenes. ¿Qué situación se ha encontrado con respecto a estos colectivos?

La Jornada Mundial de la Juventud ha sido un gran regalo que Dios ha hecho a la Iglesia española y también a la diócesis de Teruel y Albarracín. El trabajo que se ha desarrollado a lo largo del curso pasado en ese sentido, creo

que ha ayudado a los jóvenes de aquí a ir descubriendo su papel protagonista en la Iglesia. Un grupito interesante de jóvenes ha participado en la peregrinación a Madrid y creo que han venido muy contentos y con muchas ganas. Lo dicho: ¡un gran regalo de Dios!

Con las familias hemos comenzado ya a trabajar, pero es una línea que espero que pueda madurar a lo largo de este curso que estamos comenzando.

¿Ha cambiado mucho su día a día en comparación con su anterior etapa?

En algunas cosas si y en otras

no. El obispo debe cuidar, igual que el sacerdote, su vida espiritual, pues es el fundamento de la caridad pastoral. En ese sentido mi vida ha cambiado muy poco.

Sí ha cambiado en el desempeño de mis funciones, ya que el trabajo que me toca desarrollar cada jornada tiene poco que ver con la rutina de la vida parroquial.

Sicar Informa le agradece la entrevista y le transmite, en nombre de todos los jóvenes de Santa Engracia, que le tienen presente en sus oraciones, un afectuoso saludo.

Muchas gracias. También la parroquia de Santa Engracia y los jóvenes de Sicar y Iubilum están siempre presentes en mis oraciones. Estáis haciendo un gran trabajo y os felicito. Mucho ánimo y a crecer en compromiso de servicio. Que Dios os bendiga.

Esta es la historia de Milagros Villoldo Solana, un ejemplo

manifiesto de fortaleza y valentía de una religiosa que desde muy joven sintió la llamada del Señor. Es monja desde hace más de medio siglo y ha recorrido diferentes puntos de la geografía española con un claro espíritu de servicio: darse a Dios y a los demás. Tras casi cuatro años en la parroquia de Santa Engracia de Zaragoza, abandona la capital aragonesa rumbo a Valencia.

Muchos expresan admiración. Otros, en cambio, lo califican como algo raro, fuera de lo común. Milagros Villoldo Solana sintió, con tan sólo 14 años, la llamada al seguimiento radical de Cristo, a lo que respondió, eternamente agradecida, sí. Había encontrado su sitio. La forma de vida elegida, basada en la oración y en el servicio, le llena plenamente. Tiene 70 años, una profesión perpetua y los mismos sentimientos y creencias que hace más de cinco décadas, cuando dijo “sí” al Señor de forma definitiva.

Desprende alegría e ilusión, pues tiene la convicción de que su vida, dedicada a Dios y a los demás, es plena en su totalidad. Está orgullosa de haber seguido el camino que, desde muy pronto, le marcó el Señor. A pesar de todo, también ha tenido dificultades. Piedras en el camino que ha

sabido sortear muy bien, gracias, en parte, a su claridad de ideas. “Es una vida de servicio, adaptada a las necesidades concretas del lugar en el que estamos. El sitio es lo de menos”, afirma con rotundidad.

Natural de El Bonillo, un municipio de la provincia de Albacete que destaca por su atractivo turístico y por el mítico queso manchego, Madre Milagros decidió, en 1958, dejar atrás todo

para poner un rumbo nuevo a su vida. No sabía a dónde le llevaría el destino, aunque por su mente rondaba lo que de ninguna forma iba a ocurrir: “Tenía la seguridad de que no volvería a mi casa. Estaba convencida de que había acertado con mi decisión”. El paso de los

José María Albalad

Madre Milagros, una vida de servicio por y para Dios

Llevaba en Zaragoza desde 2008.

años ha dado crédito a este pensamiento, ya que, desde entonces, cumple alegremente los “votos perpetuos” que aceptó con 21 años.

Mientras rellena las vinajeras y prepara el cáliz para la próxima misa -una de sus últimas en Zaragoza-, hace memoria para esbozar unas breves pinceladas de lo que fue su decisión. Una opción de vida única y definitiva. Recuerda con el máximo detalle la forma en que se produjo su vocación, las renuncias que ello trajo consigo y la alegría que le causó aceptar la voluntad de Dios.

La nueva alternativa de vida que se le planteó, tan inesperada como repentina, truncaba sus ilusiones del momento: “En mi mente estaba casarme y, con los años, formar una gran familia”. Tras un breve silencio, motivado por la entrada en el Templo para depositar las ofrendas, Reverenda Milagros señala que, en el momento de la vocación, “formaba parte de una agrupación católica, aunque no pretendía dejarlo todo”.

Sin embargo, esas dudas iniciales pronto se disiparon. Sintió que la llamada de Dios era irrevocable, por lo que aceptó y comunicó la decisión a sus padres, algo que generó gran confusión. “En mi casa no sabían si de verdad era consciente de lo que decía, por lo que me animaron a darme un tiempo que me permitiera reflexionar y valorar lo que quería hacer”, apunta con tono emotivo.


Sentada en una silla de la sacristía de Santa Engracia, sin dejar de ver las necesidades que se generan a su alrededor, indica que aceptó el consejo familiar y se tomó su tiempo. Entonces, era muy joven. Un poco más mayor era cuando se decidió: tenía 17 años. “El Señor me sedujo, a lo que yo le respondí: todo para ti”, exclama con felicidad.

Unos meses más tarde, dejó su familia y su hogar e ingresó en Irún en la Casa Madre de las religiosas Auxiliares Parroquiales de Cristo Sacerdote, congregación a la que pertenece en la actualidad. Irún, municipio guipuzcoano situado en la frontera con Francia, fue el lugar en el que se consagró su vocación. Muy pronto pasó de “Hermana” a “Madre”, reflejo evidente de que tenía muy clara la forma en la que enfocar su vida.

Dicho y hecho. Se convirtió en religiosa a una corta edad, a los 17 años. Tan sólo cuatro después, cuando tenía 21, fue nombrada Madre, lo que significó un antes y un después en su vida. “En ese momento dije, definitivamente, sí al Señor. Acepté la profesión

perpetua”, señala Milagros con rostro sonriente.

En la vida no todo es color de rosa, algo aplicable a cualquier persona. En el caso de esta religiosa, como le gusta decir a ella, la felicidad es la nota predominante. Una alegría propiciada por una causa por la

que vivir y por la que morir, aunque entrañe esfuerzo, sacrificio y dedicación. Su unidad de medida de la felicidad es el servicio a los demás, haciendo buena la doctrina que Jesús plasmó, en su día, en los evangelios: “Amaos los unos a los otros como yo os he amado”.

Por ello, Madre Milagros se ha trasladado allí donde le han destinado, sin ningún tipo de reticencia ni preferencia. “Cuesta porque estás a gusto en un sitio, conoces a la gente, las peculiaridades del lugar… Pero es lo de menos. Ya sabemos que, en cualquier momento, podemos cambiar de aires”, señala. Irún, en sus inicios, Barcelona, Picaña (Valencia), Torrelodones (Madrid) y Zaragoza son los lugares en los que más tiempo ha pasado.

“Es otra forma de vida. Cada sitio te aporta algo y, como es lógico, deja huella en tu interior para siempre”, esgrime. La vida de esta religiosa es, según ella misma califica, “sencilla pero reconfortante”. Sus firmes creencias, apreciables al charlar unos minutos con ella, le han permitido celebrar las bodas de oro. “Siento de corazón lo que hago, lo que me ayuda y me da fuerzas para desarrollar mi labor

El 8 de septiembre fue despedida por los feligreses de Santa Engracia.


día a día”, añade. Una ligera mirada al panorama

actual de la sociedad pone de manifiesto una amplia y variada gama de formas de vivir. Un mosaico caracterizado por la existencia de multitud de estilos. El de las idas y venidas, el de los sentimientos encontrados, el de la frustración, el de la indiferencia, el de la vida feliz… El caso de esta religiosa es un claro ejemplo, a pesar de no ser el mayoritario, de una vida realizada, feliz. “Estoy orgullosa de haber elegido esta vida. No me arrepiento de nada. De hecho, si volviera a nacer, repetiría”, señala con satisfacción.

Oyéndole hablar y viéndole actuar te das cuenta de que la sensación que transmite es fruto de la convicción de ideas y sentimientos profundos que invaden su interior. Un ideario de vida, basado en la religión católica en general y en las órdenes de su congregación religiosa en particular, que le da fuerzas e ilumina para seguir adelante aceptando lo que venga. Son más de 50 años al servicio de Dios y al de los demás. “Y que sean muchos más. Bueno, los que el Señor considere”, añade con rostro sonriente antes de despedirnos.

Musicar no toca techo

Casi un mes después de la Jornada Mundial de la

Juventud, empezamos a calentar motores con el nuevo curso.

La actuación en la plaza del Pilar de Zaragoza ante 4.000 peregrinos, el concierto en el colegio Maristas de Madrid con 300 personas o el ratito de adoración en la Universidad Pontificia de Comillas con 30 han sido para Gloria del Padre. Nuestros éxitos son de Cristo.

Por eso, todos los aplausos y reconocimientos, quedan a los pies de su Cruz, pues Él es el único digno. Todo ha dado fruto, y seguirá dándolo en este nuevo curso, que empieza con fuerza.Para más información, podéis acceder al blog del grupo (www.musikar.tk), donde está colgado, entre otras cosas, el vídeo de nuestra actuación en la plaza

del Pilar, dentro de los días previos a la JMJ, vividos con intensidad.

Respecto al inicio de curso, lo empezaremos el pasado miércoles, 21 de septiembre, con el 21-21s, adorando al Señor, y el domingo 25, con la primera Misa de Jóvenes.La JMJ ha sido muy intensa y se han forjado relaciones más allá del ámbito de Santa Engracia, lo que va a dar lugar a nuevos

compromisos. De hecho, ya en septiembre, Musicar ha colaborado en el sexto aniversario de la parroquia del Espíritu Santo, en el Actur.

Además, está por confirmar un concierto-oración-testimonio en la Cárcel de Daroca, donde

Pablo Soláns


llevaremos Su palabra, que es la Verdad, la cual da Libertad, porque la Verdad os hará libres (Jn. 8, 32).Por otro lado, Barcelona nos espera el 15 de octubre, para otro rato de oración, en un bar católico de evangelización.

El curso empieza fuerte y nosotros también, con muchas ganas de seguir dándole gloria y exprimiendo aquello que se nos ha regalado.

Quedan discos por vender, y esperamos que este curso, la edición de “Tienes mi disponibilidad” se disperse y podamos, si Dios quiere, luchar por un segundo disco.

Recordamos que, éstos, los podéis conseguir en la parroquia de Santa Engracia o en la librería San Pablo. También por email: [email protected]

Mientras, continuamos cantando, orando. A Él sea la Gloria.


Si quieres colaborar con esta publicación, puedes hacerlo

a través de [email protected]

"La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa" (Albert Einstein)

'Uno y Uno' sigue su marcha cultivando la vocación al amor

Tras un verano increible, donde Benedicto XVI nos

alentó a vivir firmes en la Fe, arraigados y edificados en Cristo, nos disponemos a terminar de exprimir la experiencia, remover los posos y, claro, eso implica hacerlo en nuestra ya recuperada rutina.

También, en el itinerario formativo sobre la vocación al amor que es "1y1" y que retomamos este mes de octubre tras dos primeros años muy positivos.

Por ello, tras las fiestas en honor a nuestra Señora del Pilar, el 28 de octubre, volveremos donde lo dejamos, al inicio del tercero de los bloques: “TRASCENDERSE”. Si recordáis, el primer año trabajamos el bloque "CONOCERSE UNO MISMO" y, el pasado, "CONOCER AL SER AMADO".

El calendario de este curso, está disponible en nuestro blog junto a todas las sesiones del año, materiales trabajados, bibliografía, etc. La dirección del blog es

http://unoyuno.wordpress.com. Así mismo, podéis contactar con nosotros por mail escribiendo al coordinador al siguiente email: [email protected].

Esta línea de formación que

Pedro Herrero

El taller volverá el 28 de octubre.

ofrece Sicar, grupo de jóvenes de la parroquia de Santa Engracia, responde a la petición del Papa acerca de ampliar la formación sobre la vocación al Amor más allá de seminarios y cursillos de novios.

Como bien sabéis, todos hemos sido llamados al amor, independientemente de la forma en que esta vocación se concrete (matrimonio, sacerdocio, vida consagrada...).

Por ello, 1y1 está abierto y dirigido a todos los jóvenes a partir de 17 años que quieran profundizar espiritualmente de acuerdo a la directrices que la Iglesia propone acerca de esta llamada al amor.

El curso comenzará a finales de octubre con una presentación y oración en la Cripta. Estáis todos invitados.

Por último, destacar que el día 8 de octubre estaremos en el Escorial, donde presentaremos el itinerario formativo “1y1″ en el anual Encuentro Nacional de Delegados de Familia. Hace un mes, recibimos un correo de la organización con la invitación para presentar este proyecto a otras Diócesis dada la importancia de la propuesta que sigue y ser una experiencia pionera a nivel nacional.


Comienza un nuevo curso y, con él, continúan las

actividades en nuestro grupo de jóvenes Sicar. Este será el segundo año del Taller Deportivo, en el que durante el verano se han renovado energías para mejorar lo que fue su primer curso.

El equipo de fútbol masculino, Sicar FS, volverá a participar en competición oficial. Ha habido nuevas incorporaciones como las de Julio Pueyo, Ángel Palos, Chema Albalad, Pedro Hernández y Pablo Romeo. Sin duda, van a mejorar el nivel del equipo. Ganas e ilusión no les faltan. También continúan en el equipo Pedro Herrero, Ramón Puig, Fernando Navas, Berge, Marcos Sebastián “Kitos”, Jesús Abadía y Rafa Albalad. queriendo mejorar sus actuaciones del año pasado.

Todos nos esforzaremos al

Rafael Albalad

El taller deportivo ha arrancado ya.

máximo para llevar al equipo lo más arriba posible y, con nosotros, a nuestra Santa Engracia. Desde aquí, os animamos a que nos vengáis a animar siempre que os sea posible. Desde el campo, todos los jugadores agradecemos vuestra presencia y apoyo. Como regalo, prometemos dedicaros todos los goles posibles y, por supuesto, las victorias.

Por otro lado, seguimos a la espera del inicio del Torneo Interparroquial, en el que participa nuestro equipo femenino. Estamos

convencidos de que conseguirán revalidar el brillante título que consiguieron el año pasado.

Además, este año, no queremos que este taller se centre única y exclusivamente en los equipos de fútbol. Queremos dar un paso más. Por ello, estamos abiertos a cualquier propuesta que se nos haga: carreras populares, ciclismo, escalada….

De hecho, el Taller Deportivo fue el primero en dar comienzo este curso. Lo hizo el pasado 4 de septiembre en la carrera popular Alcampo San José. En ella participaron varios miembros de Sicar y Iubilum.

Para finalizar, querría aclarar que el principal objetivo de este año es promulgar y promover el nuevo taller de voluntariado. Sin duda alguna, de los más importantes. Y es que, antes de recibir, debemos dar. Próximamente se indicarán las posibilidades de colaborar.

El Taller Deportivo arranca con fuerza un curso prometedor

Varios miembros de Sicar participaron, el 5 de septiembre, en la carrera popular Alcampo San José.

“No os guardéis a Cristo para vosotros mismos.

Comunicad a los demás la alegría de vuestra fe”. Con estas palabras, el pasado 21 de agosto desde Cuatrovientos, el Santo Padre exhortaba a los jóvenes de todo el Mundo a ser testigos vivos de Cristo, valientes, firmes en la fe, sin miedo a hacer participes a cuantos nos rodean de la felicidad que solo el amor de Cristo nos puede dar.

Y desde Sicar queremos seguir respondiendo al llamamiento de Benedicto XVI. Los que hemos tenido la inmensa suerte de vivir tanto los DED en Zaragoza como las JMJ en Madrid, hemos experimentado cómo el Señor ha estado presente en todos y cada uno de los momentos, acompañándonos aun en los momentos más duros de calor, cansancio, etc.

Carolina Sebastián

Los 21-21s se consolidan tras la JMJ como un espacio de oración

Poco a poco retomaremos las actividades realizadas en el curso pasado, pero con algunos cambios y novedades.

En Cuatrovientos pudimos disfrutar de unos intensos momentos de oración y adoración. Debemos seguir buscando


momentos de encuentro personal con Cristo y por ello continuaremos con la oración 21-21s.

Para los que no conocéis en qué consisten los 21-21s, se trata de un espacio de adoración ante el Santísimo Sacramento de media hora de duración para pedir por el Papa y por los frutos espirituales de las JMJ de Madrid 2011, que recientemente hemos vivido y cuyos mensajes y experiencias han de seguir presentes en nuestro día a día.

También os queremos anunciar una nueva iniciativa que desde Sicar vamos a poner en marcha y que estamos preparando con gran entusiasmo. Este año, las sesiones de formación se organizarán en la forma de grupos de estudio y discusión en torno al YOUCAT, para los que no lo conozcáis, un catecismo

especialmente dirigido a los jóvenes, con una explicación contemporánea de la fe católica y al que Benedicto XVI nos anima a acercarnos para conocerlo y estudiarlo “con pasión y perseverancia”. Os informaremos del comienzo de estas sesiones.

Seguiremos con nuestras misas de jóvenes, el cuarto domingo de cada mes a las 20.30 horas y donde nuestra presencia es especialmente importante: somos testimonio de juventud cristiana, valiente y comprometida.

Muchas gracias a todos los que participasteis activamente durante el curso pasado. Contamos con vosotros en este nuevo que comienza y los que os unís a nosotros por primera vez, sed bienvenidos a esta gran familia, os acogemos con mucha alegría. ¡Empezamos!

Los encuentros con el Señor, a través de la oración, resultan vitales.

I Concurso de MicrorrelatosEl curso arranca y, con él,

llegan nuevas iniciativas. Prueba de ello es, por ejemplo, la planteada por el Taller de Literatura. Su coordinador, Ricardo Gómez, ha planteado la posibilidad de llevar a cabo el I Concurso de Microrrelatos, una iniciativa interesante que, si os animáis, puede dar mucho juego y resultar especialmente enriquecedora.

A pesar de que aún no ha comenzado, aprovechamos el primer número del curso de la revista de Sicar para comunicaros en qué va a consistir. En principio, a expensas de las bases definitivas que se transmitirán vía correo electrónico, la idea es que, todo

Sicar Informa, en papel

Rosario por la Vida

El derecho a vivir -proveniente de la Ley Natural- debe ser respetado, por más que, en los últimos tiempos, se venda como algo normal acabar con la vida del ser humano cuando, por el motivo que sea, estorba. Por ello, ahora más que nunca, resulta especialmente importante rezar por la vida. Os

Como podéis comprobar, la revista de Sicar ha pasado a ser impresa este curso. Pensamos que, así, se incitará más su lectura, al igual que la difusión de cada ejemplar entre compañeros, familiares y amigos. Habrá un número cada trimestre. Para ello, se necesita financiación. Si alguien conoce alguna empresa o persona dispuesta, que lo comunique en la parroquia o en el 645 387 737.

recordamos que la parroquia de Santa Engracia de Zaragoza acoge el día 25 de cada mes un rosario con este fin, al que os invitamos a uniros. El Papa Benedicto XVI nos ha convocado a todos los católicos del mundo, en diferentes ocasiones, a orar la vida naciente. ¡Os invitamos a ello!


aquél que lo desee, envíe su microrrelato, de tema libre, al email de Sicar, indicando los datos personales. En su momento se establecerán fechas concretas.

Posteriormente, la organización, tras identificar cada uno de ellos, mandará los textos de los participantes -sin firmar- a toda la lista de destinatarios del grupo, quienes tendrán la opción de votar. Será algo similar a como, en su momento, se eligió el logo de Sicar. De este modo, saldrán los tres primeros clasificados.

A lo largo del mes de octubre se transmitirá toda la información. ¡Id pensando y... escribiendo!

Escribir, una forma de expresarse.

AGENDA

Octubre

- Domingo 2: Día del Niño

- Viernes 21: Veintiún Veintiunos, a las 21:00 horas

- Domingo 30: Misa de jóvenes, a las 20:30 horas

Noviembre

- Retiro de principio de curso (fecha por determinar)

- Lunes 21: Veintiún Veintiunos, a las 21:00 horas


Diciembre

- Campaña de recogida de alimentos

- Viernes 16: Cena solidaria


- Miércoles 21: Veintiún Veintiunos, a las 21:00 horas

Misa de las Familias: todos los domingos a las 11:00 horas.



'Literatura y Cine' inicia un nuevo curso con un interesante programa

El Taller de Literatura y Cine comienza el curso, un año

más, cargado de ilusión. Lo hace con ganas de compartir grandes momentos. La dinámica del Taller, sencilla, consiste en leer un libro cada mes de manera individual. Posteriormente, nos reunimos para comentarlo, discutir los temas principales e intercambiar opiniones, teniendo así un pequeño coloquio-debate.

Tal y como va ligado al espíritu de SICAR, uno de nuestros objetivos es acercarnos de alguna forma a Dios, en este caso a través de la lectura, ya que al fin y al cabo tenemos que darnos cuenta de que Él está a diario en todas las cosas que nos rodean. Se trata de orar sin cesar, de acordarnos del Señor, porque acordarnos de Dios es orar.

Empieza un curso prometedor, que para el Taller de Literatura y

Ricardo Gómez

Las JMJ serán del 16 al 21 de agosto.

Cine comenzará el próximo día 28 de septiembre con el debate del libro ‘‘Un viejo que leía novelas de amor’’, de Luis Sepúlveda. El resto de la programación de este primer trimestre son ‘‘1984’’, de George Orwell, y ‘‘Fausto’’, de Goethe. Títulos que, sin lugar a duda,

pueden dar mucho juego en los debates.

Si nos lo proponemos, cuando acabe este curso podremos hacer balance y ver que no solo habremos ganado en cultura con los libros que hayamos leído, sino que al participar en más actividades habremos ganado espiritualmente y habremos hecho nuevas amistades. Por eso, desde aquí os animo a todos a participar en las diversas actividades que organiza SICAR.

A los que ya sois habituales, sólo me queda agradecer vuestra asistencia y fidelidad al Taller de Literatura y Cine un año más. A las nuevas incorporaciones, daros una calurosa bienvenida. Como siempre os digo, vosotros hacéis posible que este Taller siga funcionando y salga adelante, un reto que entre todos conseguimos. Espero veros en la primera reunión de este curso.

28 de septiembre: Un viejo que leía novelas de amor, de Luis Sepúlveda.

27 de octubre: 1984, de George Orwell.

30 de noviembre: Fausto, de Goethe.

28 de diciembre: Canción de Navidad, de Charles Dickens.

* Para más información, consultar el blog: literaturaycinesicar.blogspot.com

Programación prevista:

septiembre-diciembre

Domingo. 4 de septiembre. Cerca de las cinco de la tarde. Mientras el pelotón de la

Vuelta Ciclista a España se prepara para afrontar la temible ascensión al alto de L’Angliru, en Asturias, el centro de Zaragoza está desierto. La gente parece estar resguardada en sus domicilios del sofocante calor, contemplando desde la distancia -quien sabe- las hazañas de unos ‘locos’ sobre dos ruedas que se retuercen sobre sus bicicletas para salvar, con orgullo, pendientes inhumanas.

La renovada y descuidada Gran Vía de la capital aragonesa es testigo de mi presencia. Mi caminar es lento. Frente a la celeridad de casi siempre, esta vez me toca pasear, observar. Así lo exige el reportaje que llevo entre manos, una obligación laboral que, a pesar de ser festivo, me lleva de cabeza. La redacción de los diarios no entiende de días, ni de horarios. Cierta presión invade mi interior -el tiempo aprieta-, hecho que, en mi caso, aporta una motivación extra, decisiva para lograr el objetivo.

Así, muy a mi pesar, apuesto por quitarme los cascos y apagar la radio. La decisión es costosa. Y es que, por lo que escucho, los corredores de la ronda española están protagonizando un lindo espectáculo en las rampas del L’Angliru, algo que, para un apasionado del ciclismo como yo, es de obligado seguimiento.

Centrado plenamente ya en mi deber, con una tranquilidad absoluta en el ambiente -sólo alterada por el paso del tranvía y algún que otro vehículo-, decido dirigirme a un hombre mayor, de unos 80 años, que descansa en un banco, a la sombra, en compañía de su bastón. Quizás, cualquier otro día

no me hubiera dirigido a él. Habría apostado, probablemente, por alguien joven que me permitiera obtener sus impresiones en un tiempo mínimo.

Sin embargo, el destino me llevó a él. Su reacción, más que de acogida, fue de asombro. Tras la pertinente presentación, decidí sentarme a su lado. Su rostro cambió de inmediato. La mirada al infinito dio paso a un rostro sonriente. La falta de amor y cariño que sufría en su vejez la ratifiqué al pedirle opinión sobre el tema que me ocupaba. “Lo que yo piense no vale para nada”, espetó cabizbajo, a lo que añadió: “Vivo en un centro de éstos -residencias- a los que llevan a los mayores cuando no valemos nada”.

Ante estas afirmaciones, respondí: “Caballero, no diga eso. Usted es la voz de la experiencia, la que yo necesito ahora y la que la sociedad debería, cuanto menos, escuchar”. Entonces, al margen del motivo de la conversación, charlamos durante diez intensos minutos. Fueron pocos pero fructíferos, tanto para él como para mí, y me permitieron darme cuenta de la situación que viven, por desgracia, muchos ancianos en la actualidad.

Hoy, somos jóvenes -enérgicos y dinámicos- con salud para afrontar nuevos retos y satisfacer nuestras incontables apetencias. Destinemos esta vitalidad, aunque sea una pequeña parte, para irradiar de felicidad a las personas mayores. En un tiempo, formaremos parte de este colectivo, sufriendo, tal vez, el olvido que un día consentimos. Un gesto, una mirada o un rato de compañía pueden ser suficiente para evitarlo... En tus manos está.

A pie de calle por

Chema Albalad

Un tesoro arrinconado



Hace dos años, el 25 de octubre de 2009, tuvo lugar

por primera vez la celebración del Día del Niño. Este primer domingo de octubre, coincidiendo con el inicio del curso pastoral, se celebrará su segunda edición.

La jornada comenzará con la Misa de las Familias a las 11. Como este día se celebra en la diócesis el Día de la Educación en la Fe y el Día del Catequista en la Comunidad, tanto los responsables de catequesis de Primera Comunión y Confirmación renovarán su compromiso pastoral en esta misa. Al acabar, de 12 a 14 horas, en la plaza de Santa

Redacción

La familia, clave en la parroquia.

El Día del Niño celebra el 2 de octubre su segunda edición

Engracia habrá juegos para los niños.

A la vez estarán instalados tres pabellones, en los que los grupos que representan a los tres sectores de la actividad parroquial (Evangelización, Oración y Liturgia, Acción Caritativa) ofrecerán una pequeña información de sus actividades. Además, en el patio de la entrada por la calle de Castellano se podrá degustar un “pincho solidario” organizado por la cofradía, en el que la recaudación se destinará a Cáritas.

Os esperamos a todos este domingo. Recordemos el lema de la Jornada de la Familia y Vida de 2006: ¡Vida de parroquia, vida de familia!

En el Día del Niño participan todos los grupos parroquiales. Imagen de la primera edición, en octubre de 2009.


Fran Gil Rodríguez, miembro de Sicar, comparte con esta publicación el arte que lleva dentro

Doce de la mañana

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