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testigotestigotestigoEstimados hermanos en Cristo:
La edición de este TESTIGO, se celebra pasada la festividad del Corpus Christi, festividad en recuerdo de la instauración de la Eucaristía y ya en tiempo ordinario.
Por ello me gustaría aprovechar esta primera vez que me dirijo a vosotros, para informaros de dos cuestiones bien distintas, pero ambas importantes. La primera, aprovechando la festividad mencionada, hacer hincapié en la importancia que tiene para los cristianos la celebración de la Eucaristía donde recibimos el Cuerpo y la Sangre de Cristo y especialmente la que se celebró el pasado domingo 29 de mayo a las 19:00 horas en la iglesia de Santa Catalina y desde allí acompañamos el traslado bajo palio del Santísimo Sacramento por las calles de nuestra ciudad, hasta la iglesia de San Juan.
Recordaros que todos los primeros sábados de mes, aunque estemos en tiempo ordinario, se continúa celebrando la eucaristía vespertina en San Juan ofreciéndose por todos los miembros vivos y difuntos de nuestra Hermandad. Sin pasar lista alguna, parece ser que se nos echa en falta una mayor participación de los Hermanos. ¡Acudamos!!!
En segundo lugar, me gustaría haceros participes de la nueva estructura de la Junta Directiva. Una estructura que parte fundamentalmente de nuestra participación, a nivel individual, o con nuestras familias, en los actos y actividades tan sencillos como el de acudir a las eucaristías, o a las meditaciones o encuentros que durante el año celebramos en la Hermandad. Muchos de nosotros, que nos despedimos el Viernes Santo, no volvemos a encontrarnos hasta el Miércoles Santo del año siguiente. ¿Qué Hermandad estamos haciendo de año en año?
Algunos miembros de nuestra Hermandad han pasado a la acción y participan activamente en el grupo NHS, otros en la campaña del kilo, o en la carrera solidaria. En distintas hermandades han tomado conciencia y ejemplo de las actitudes de nuestra Hermandad de Cristo Crucifi cado en la Agonía en el transcurso de los años, organizando actividades similares y constituyendo secciones penitenciales que dan otra visión de la Semana Santa de Alzira. Ante esto quisiera que nos preguntásemos “¿Y yo qué hago en mi Hermandad? ¿Qué hago por ella?”
La Junta Directiva es un órgano que confi gura una estructura para coordinar el trabajo a desarrollar, pero es fundamental que nos sintamos todos partícipes de llevar a cabo la acción evangelizadora de nuestra Hermandad, fomentando así nuestro espíritu de equipo y de comunidad. Seguidamente detallo todos los componentes de la misma.
Presidente Pedro F. Andrés Jefe de Banda Carlos YeloSecretario Miguel Ventura Vocales: Salvador FerrandisTesorero Luis Vicente Mengual Marcos Ahulló Ruben PalauFormacion Juan Carlos Yelo Agustin Pereperez Luis MengualJuventud Juan Eduardo Santon Ernesto Pau Miguel A. MarradesAcción Social Carlos Capella Juan Mauricio Abril Raul BohiguesOrganizacion Alfredo March Ramon Flor Josep Aguilar
nº54, Junio de 2016
B O L E T Í N I N F O R M A T I V OHermandad de Caballeros de Cristo Crucifi cado en la Agonía
Festividad Corpus Christi
Nos queremos caracterizar por ser una Junta Directiva cercana a todos y con el ánimo de potenciar distintos aspectos necesarios para el presente y futuro de nuestra Hermandad. Por ello hemos creado cuatro unidades para recoger la labor a llevar a cabo. Estas serán la de Formación Evangélica y Turnos, que gestionará el Hermano Juan Carlos Yelo, la unidad de Adoración Perpetua y Juventud, que llevará adelante el Hermano Juan Eduardo Santón; la unidad de Acción Social la encabezará el Hermano Carlos Capella, estando en ella nuestra “NHS”, la Campaña del Kilo, la Carrera Solidaria, etc. y la unidad de Organización Procesional que será coordinada por el Hermano Alfredo March.
Como todos sabéis, nuestra Hermandad la formamos casi cuatrocientos miembros que nos repartimos la responsabilidad de llevar las antorchas y palabras, de iluminar con los cirios el camino, de formar turnos de carga para llevar a Cristo al hombro, así como también de marcar el paso con los tambores y timbales, para cuya responsabilidad se ha nombrado nuevo Jefe de Banda al Hermano Carlos Yelo que será asistido por el Hermano Marcos Ahullo. Como dije en mi presentación de la asamblea, sin ser nadie imprescindible todos somos necesarios, por lo que lo más importante es la unión entre todos para formar los equipos que desarrollen la acción evangelizadora de nuestra Hermandad. Sin querer repetirme, no nos podemos limitar a unirnos sólo en la Semana Santa.
La nueva Junta Directiva consensuada e ilusionada en trabajar por la Hermandad, intentará potenciar aquellas acciones que son necesarias para que el trabajo de los que nos han precedido en los últimos 61 años, genere esperanzas para que por muchos años más, nuestra Hermandad, continúe siendo ejemplo de comportamiento humano y evangelización cristiana.
No me queda más que ofrecer, por si fuera necesario para alguno de vosotros,los correos electrónicos que dispondrán las nuevas cuatro mencionadas, además de las cuentas consolidadas hasta la fecha.
[email protected]@[email protected]@[email protected]@[email protected] vuestra confi anza en la Hermandad, quedo a vuestra entera disposición, uniéndonos en la oración
y en la pasión a nuestro Cristo Crucifi cado en la Agonía recibe un cordial y fraterno saludo.Hermano Presidente
Pedro F. Andrés Oliver
Este salmo es un himno numérico y alfabético, es decir, tiene 22 versículos, tantos como letras hay en el alefato hebreo. Su contenido es sapiencial, de época postexílica, y celebra la providencia de Dios, que con un designio divino guía la creación mediante la Palabra creadora y gobierna la historia de los hombres con justicia y amor.
El himno concluye con el canto de una antífona que ha entrado en el fi nal del Te Deum: «Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti» (v 22), que prorrumpe del corazón de la comunidad, que lo espera todo del Señor, al que invoca como auxilio y escudo (v 20), mientras que los fi eles confían «en su santo nombre» (v 21) e invocan su amor misericordioso, porque sólo de él proceden la alegría y la esperanza (v. 22).
La relectura cristiana del salmo, que pone como tema fundamental la acción creadora y providente de la Palabra a través de la mirada de Dios, nos remite a la persona y a la obra del Verbo, el Hijo de Dios hecho hombre en Jesús de Nazaret, que desempeña un papel específi co en la creación del universo y en la historia de la salvación.
La relectura eclesiológica ve también en el salmo la acción de la Iglesia, que, reunida en asamblea, alaba al Señor por su amor misericordioso no sólo en favor del pueblo de la primera alianza, sino de todos los pueblos, del nuevo pueblo de Dios y de la comunidad universal de la segunda alianza, llamada a la salvación.
a) Para la meditación: Todo cristiano que viene a este mundo se ve situado ante la luz de vida de Cristo. Todos los hombres, hasta los que no tienen fe en el Hijo de Dios, se encuentran ante la Palabra creadora y providente de
recoger la labor a llevar a cabo. Estas serán la de Formación Evangélica y Turnos, que gestionará el Hermano Juan Carlos Yelo, la unidad de Adoración Perpetua y Juventud, que llevará adelante el Hermano Juan Eduardo Santón; la
salmo 32: himno a la providencia de dios
que se manifi esta en la creación. Cada uno de nosotros debe tomar posición frente a esta Palabra que le pone en contacto con Dios y con la historia.
El Salmo 32 canta también a la Palabra de Dios como razón de ser de la historia humana. En efecto, mientras que los proyectos humanos pasan y desaparecen, el plan de Dios permanece y siempre es efi caz, como afi rma el libro de los Proverbios (19,21): «El hombre hace muchos proyectos, pero permanece el designio del Señor». Este proyecto, que abarca todo el universo y a cada persona humana, tiene su centro en Jesucristo y en la salvación que Dios ha proyectado para los hombres. Cada uno de nosotros tiene que responder, porque nuestro destino depende de la respuesta libre y consciente frente a la Palabra del Hijo de Dios, que se hizo visible en Jesús de Nazaret.
b) Para la oración: Oh Señor, por tu Palabra fueron hechos los cielos y la tierra y todo lo que existe en la creación. Te glorifi camos y te alabamos por medio de tu Hijo, Palabra viva y vivifi cante, que obra y nos acompaña en nuestro camino de peregrinos, y nos ha hecho hijos tuyos por medio de su encarnación y redención. Te pedimos alegrarnos en Cristo Jesús y encontrar en él, el Resucitado, la fuerza para poder dar siempre testimonio de tu amor fi el a cada hombre, especialmente a los más abandonados y a los más pobres. Tú que escrutas los deseos de cada corazón, haz que podamos resistir los asaltos del mal y encontremos la fuerza necesaria para combatirlo con el arma de tu Palabra de vida, que es fuerza y luz en el combate espiritual y nos ofrece la posibilidad de encontrar a Jesús ya desde ahora, para alcanzarle después en la patria bienaventurada.
c) Para la lectura espiritual: La Palabra es, por consiguiente, el modelo, si así queremos, la Palabra interior a través de la cual piensa Dios. En primer lugar, deja de pensar en sí mismo y, después, piensa en las criaturas.
Los cristianos piensan con excesiva frecuencia que las cosas del mundo, las bellezas y los esplendores de la creación, el poder cósmico, el poder atómico y las matemáticas, están fuera, como la materia. Todo esto es como otro Dios, al margen del Dios de los cristianos, que es el Padre lleno de amor y que nos ha enviado al Hijo. San Juan afi rma, en cambio, que todos los grandes descubrimientos de los investigadores relativos al mundo, a la tierra, a las estrellas, a los átomos, a las fuerzas de todo tipo detectadas poco a poco en la riqueza de la materia son obra del Hijo de Dios, de Jesús de Nazaret.
AHORA MEDITA CON ATENCIÓN EL SALMO 32:
Aclamen, justos, al Señor:es propio de los buenos alabarlo. Alaben al Señor con la cítara, toquen en su honor el arpa de diez cuerdas; entonen para él un canto nuevo, toquen con arte, profi riendo aclamaciones.
Porque la palabra del Señor es recta y él obra siempre con lealtad; él ama la justicia y el derecho, y la tierra está llena de su amor. La palabra del Señor hizo el cielo, y el aliento de su boca, los ejércitos celestiales; él encierra en un cántaro las aguas del mar y pone en un depósito las olas del océano. Que toda la tierra tema al Señor, y tiemblen ante él los habitantes del mundo; porque él lo dijo, y el mundo existió,
él dio una orden, y todo subsiste.
El Señor frustra el designio de las naciones y deshace los planes de los pueblos, pero el designio del Señor permanece para siempre, y sus planes, a lo largo de las generaciones.
¡Feliz la nación cuyo Dios es el Señor,el pueblo que él se eligió como herencia! El Señor observa desde el cielo y contempla a todos los hombres; él mira desde su trono a todos los habitantes de la tierra; modela el corazón de cada uno y conoce a fondo todas sus acciones. El rey no vence por su mucha fuerza ni se libra el guerrero por su gran vigor; de nada sirven los caballos para la victoria:
Quiero comenzar esta conferencia agradeciendo a la Cofradía de la Mare del Deu del LLuch su amable invitación a participar de manera activa en los actos de conmemoración de su cincuentenario de la Coronación canónica. Soy economista y doctor en Filosofía del Derecho, y en la actualidad ejerzo mi profesión compaginando mi actividad empresarial con la de vicerrector de la Universidad Católica de Valencia; una actividad, ésta última, que ha inspirado el título de la presente conferencia; ¿Qué le pedimos a la Mare de Deu en la sociedad del siglo XXI? Cuando observo a los alumnos, cada día se reafi rma en mí una de las primeras frases del papa Francisco al inicio de su pontifi cado: “no vivimos una época de cambios, sino que estamos viviendo un cambio de época”. Un cambio de época en el que el futuro es incierto para muchas personas y familias, convirtiéndose en sinónimo de una amenaza;amenaza a perder el trabajo, amenaza a la exclusión social, amenaza a los confl ictos religiosos, a los problemas medioambientales, etc.
El título de la conferencia “María y la vida del siglo XXI: haced lo que él os diga”tiene como objetivo analizar la sociedad actual desde cuatro «ejemplos de vida» de la Virgen María: María, madre de Esperanza, María, madre de entrega, María, madre de Misericordia y, por último, María, madre de evangelización. Estos ejemplos de vida son analizados desde el pensamiento tanto desde el actual Papa emérito Benedicto XVI, como desde las encíclicas y exhortaciones apostólicas del actual Papa Francisco.
María:“Esperanza nuestra” en un cambio de época.
El profesor Stefano Zamagni, catedrático de Economía por la Universidad de Bolonia y uno de los expertos más próximos al Papa Emérito Benedicto XVI señalaba que, en la sociedad actual, para muchas personas se percibe el futuro más como una amenaza que como una promesa, siendo uno de los signos más signifi cativos de este sentimiento la llamada “caída de la maternidad”, que se manifi esta en la bajísima tasa de natalidad que tanto preocupa a nuestras sociedades occidentales. Este hecho no sólo es imputable a la situación de precariedad económica sino, de manera especial, a que los hijos cuestionan los intereses individuales que los matrimonios tienen. Dice Zamagni: “(…) convertirse en padre implica la necesidad de dar razón al sentido de la vida ante nuestros hijos. Pero ello comporta vivir de la esperanza, que hace que la vida se vuelva provechosa. La esperanza es el recurso más escaso, sobre todo en los jóvenes” (Zamagni, 2012:49)
Hemos guardado la esperanza en el trastero de nuestra vida y la hemos sustituido por el optimismo. Señala el Cardenal Müller en su libro Informe sobre la Esperanza (2016) que “el hombre de hoy no percibe su falta de fe como una tragedia, pero en cambio, si le inquieta profundamente la falta de esperanza, y lo que es peor, pretende sustituirla con sucedáneos como el optimismo” (Cárdenal Müller, 2016:9). Sólo hay que observar el gran negocio de las dinámicas de autoayuda, el “coaching”, los gurús de la autoestima a través de la neurociencia, el culto al cuerpo y un largo etcétera de nuevos productos en el mercado del optimismo. Pero a lo que esta cultura del optimismo, apoyado por el mito tecnológico, no es capaz de dar respuesta, es al sufrimiento. Ciertamente, vivimos en una sociedad que aguanta poco el sufrimiento, que no acepta y descubre la cruz. El hombre se encuentra con el vacío ante la muerte de un ser querido de manera inesperada, ante una enfermedad grave, o ante el sufrimiento
marÍa y la evangelizaciÓn del siglo xxi
a pesar de su fuerza no pueden salvar. Los ojos del Señor están fi jos sobre sus fi eles, sobre los que esperan en su misericordia, para librar sus vidas de la muerte y sustentarlos en el tiempo de indigencia.
Nuestra alma espera en el Señor:
él es nuestra ayuda y nuestro escudo. Nuestro corazón se regocija en él:nosotros confi amos en su santo Nombre. Señor, que tu amor descienda sobre nosotros, conforme a la esperanzaque tenemos en ti.
Rvdo. D. Javier J. Oriola Micó Director Espiritual
que implica el cuidado de un padre o una madre mayor. El optimismo, basado en el logro del bienestar, no admite el sufrimiento, el fracaso, la pobreza.
Vivir en la Esperanza de Cristo no suprime los problemas de nuestro día a día, sino que es reconocer nuestra debilidad, reconocer nuestra fragilidad; supone, al fi n y al cabo, reconocer que Dios está con nosotros, que cuida de nosotros, que lleva nuestras cruces y que nos hace fuertes.
María: “Vuelve a nosotros tus ojos”. El sentido de la donación una sociedad individualizada.
El cambio de época que vivimos, además del mito tecnológico, aparece dominada por otro importante mito, el de la individualización. Hoy, lo más importante para gran parte de la sociedad, es “vivir la propia vida”, de manera individual y al margen de cualquier vínculo que nos comprometa y nos ate con los demás. En una sociedad acelerada y cortoplacista se pierden las «biografías» que narran la historia de nuestra experiencia humana, sustituyéndose por biografías de usar y tirar. Y en este sentido, “vivir la propia vida”, como señala el sociólogo alemán Ulrich Beck, ha hecho que el cambio de época haya transformado el papel de la mujer como madre.
La individualización del catolicismo se convierte en el gran drama para todos nosotros, a través de dos planteamientos que cada día rompen el sentimiento de comunidad. El primer planteamiento es el gnóstico en el que, como señala el Papa Francisco, «la fe es simplemente una idea intelectual», una fe líquida que fl uye, de un sitio para otro y que no se arraiga y se compromete de manera concreta con el otro. La fe, entonces, queda relegada a la esfera privada, donde el católico es tolerado porque no molesta de manera colectiva o, dicho de otro modo, y como denuncia el Apocalipsis, “ojalá fueras frío o caliente” (Ap. 3,17).
El segundo planteamiento es convertir al catolicismo, dentro de la sociedad informacional, puramente en una «función social», “en el que la acción del cristiano toca, sí la vida concreta, pero sin abrazarla al espíritu” (Cardenal Müller, 2016:43).
María, Madre de Misericordia.
El ejemplo de vida de María es el de la Misericordia. Ella, como nadie, nos lleva a entender por qué hoy, en un mundo tan complejo como el actual, es necesario bañarlo de Misericordia. Este año es especial, tan especial que deberíamos repasar una y otra vez las obras de Miisericordia. Es necesario pedir a María, a la Mare de Deu del LLuch, que bañe nuestros corazones de bienes de misericordia, ya que no podemos ser indiferentes a todo lo que está pasando y que está llevando a millones de personas a ser descartados de la sociedad.
Siempre he tenido la sensación que a los católicos se nos olvida, con frecuencia, la huida de la Sagrada Familia de Nazaret a Egipto. En este momento continuamos viviendo, otra vez más en la historia de la humanidad, el desplazamiento masivo de pueblos que huyen de sus países, de sus casas, de sus tierras. Nos lo planteamos desde nuestros espacios de confort como un problema geopolítico, económico y social. La pregunta que deberíamos hacernos es la siguiente: ¿si tuviéramos que salir de casa de esa forma, que nos llevaríamos? ¿Qué pondríamos en nuestras mochilas y las mochilas de nuestros hijos? ¿Los títulos académicos para poder certifi car una formación concreta, con el fi n de encontrar un empleo? ¿Los libros de familia para poder decir que los niños que van con nosotros son nuestros hijos ¿Qué cogerían?
La cultura del descarte, señalada por el Papa Francisco es, además, la cultura de la indignidad de una condición humana que permite la trata de personas, la explotación humana y la todo aquello que provoca ver cómo la riqueza cada vez se concentra más, cómo una persona que todos valoramos, un empresario de éxito, puede llegar a tener
Narran los evangelistas que muchas veces los apóstoles cuando se encontraban a solas con el Señor, le preguntaban por esta o aquella parábola, por aquel gesto de ese día, por aquel comentario, etc. Esto sucedía porque no habían entendido su signifi cado. Entonces, el Señor les explicaba el contenido de la parábola, o el porqué de aquellas cosas que ellos eran incapaces por si solos de comprender, entre otras cosas por la dureza de corazón y en otras ocasiones, sencillamente por la falta de fe.
Esto hoy sigue vigente, no pasó solo entonces, quizá sean muchas las ocasiones que somos incapaces de entender que quiere el Señor de cada uno de nosotros y todo ello ocurre por la falta de trato con El y por la falta de formación en muchos casos.
La formación es algo a lo que actualmente damos una importancia en todos los ambientes y medios donde nos movemos. Hoy día, motivado por la actual crisis, la formación profesional es un elemento importantísimo en la vida del hombre. Así el obrero de una fábrica, necesita reciclarse para entender las nuevas maquinas, el médico necesita estar al día de los avances de la medicina, y así podríamos nombrar un largo etc. de profesiones y ofi cios.
¿Cuál es la situación real de los cristianos en cuanto a la formación cristiana se refi ere? La respuesta es unánime:
el seÑor se merece algo mÁs
una riqueza personal superior a la suma de todas las rentas de los países de Centro África.
María: Madre de la evangelización.
A lo largo de este artículo he señalado tres ejemplos de la vida de María que, a mi juicio, son necesarios tener en cuenta en lo referente al cambio de época del que somos protagonistas. María: madre de esperanza, María y su sen-tido de donación y María madre de Misericordia. En este último apartado quiero referirme a “María como madre de la evangelización”, y lo haré desde la advocación de María como Mare de Deu del LLuch.
“Ampareu a elsfi lls de esta poblaciò”. Este es el ruego que cantamos en el himno de la Coronación, y con este ruego arraigamos a la mare como moreneta nostra a la tierra de Alzira. Señalaba anteriormente que este cambio de época está creando una sociedad virtual, una sociedad que nos aleja de un espacio concreto, de un lugar determinado, que nos desarraiga, al fi n y al cabo, de los otros. La pregunta que me gustaría plantear es la siguiente ¿Qué ha identifi cado a una ciudad, a un pueblo, a lo largo de la historia? Físicamente, los campanarios. Vivencialmente, las “patronas”, expresadas todas ellas en una determinada advocación. En el caso de Alzira, es fácil distinguir la ermita donde los alzireños tenemos a nuestra patrona.
En este sentido, el Papa Francisco nos dice que debemos recuperar «El gusto espiritual de ser pueblo». Ciertamente, nos refuerza lo que podríamos denominar como «vínculos de proximidad», aquellos que están basados en las relacio-nes dentro de un determinado espacio físico y que potencian los sentidos humanos de la vista, de mirar el rostro del otro con comprensión. Y María es la madre de la Evangelización porque Cristo, en el momento de su muerte, nos lleva a María; no quiso que caminemos sin una madre, no quiso que andemos sin el amor de una madre, una Mare que nos ayuda a ser Iglesia, comunidad de vida. La Mare del Lluch se encarna en el pueblo de Alzira y nos hace ser expe-riencia de vida.
Que esta Mare, desde la Montanyeta hasta cada una de nuestras casas, cuide de nuestra esperanza en cristo, nos acompañe en los momentos duros de nuestra vida, nos guie en tiempos de tribulación y nos ayude a hacer de Alcira una iglesia viva.
Hermano Juan Eduardo Santón Moreno
“Este resumen corresponde a la Conferencia impartida el 13 de Mayo de 2016 en el Cincuenta Aniversario de la Coro-nación Canónica de Nuestra Señora la Virgen del LLuch de Alzira.”
La formación de los cristianos es muy pobre.Ante esta constatación hay también una reacción muy común. Necesitamos formarnos. Sin embargo cuando se
ponen en marcha una serie de elementos de formación viene la segunda parte: Los cristianos no acudimos a aquello que quizá nosotros mismo hemos demandado, o que sin pedirlo, se nos ofrece. Somos incapaces de reconocer, que lo necesitamos.
¿Conclusión? No estaremos formados si no ponemos de nuestra parte y aprovechamos las oportunidades que se nos brindan. A veces ocurre a los que tienen la obligación de llevar la palabra de Dios, que les entra la duda, de si con esto o aquello cansaremos, molestaremos al otro. Pues yo solo quiero recordar, la parábola de la oveja perdida. “Dejo a las 99 y se fue en busca de una, la perdida. Solo por uno que se aproveche de la formación, vale la pena. Los demás, a los que no les interesa, a los que se molestan, a los que no encuentran tiempo, quizá un día tengan que dar cuentas de porque no aprovecharon el momento, ¿será entonces tarde?
¿Por qué formarnos? ¿Por qué esa necesidad? La formación es necesaria desde tres puntos de vista distintos:
1º Mirándonos a nosotros mismos: hoy todos reconocemos que es casi imposible vivir la fe y actuar cristianamente sin una formación sólida, aunque sea muy sencilla. Con la sola formación recibida cuando recibimos la primera comunión es casi imposible salir al paso de las difi cultades del momento.
Necesitamos la formación para reafi rmar nuestra fe y que no se tambalee ante las difi cultades que provoque en nosotros confusión de ideas religiosas.
2º Mirando al mundo en el que vivimos: en el brilla la increencia, la marginación de Dios, la indiferencia religiosa, la pérdida de valores, el materialismo. Sin formación y trato con el Señor, aparecen la desorientación, el cansancio, la desilusión, la apatía y se termina abandonando el precioso itinerario de la fe recibida.
3º Mirando, sobre todo a Dios y desde Dios: El nos ha confi ado la misión de seguir transmitiendo su mensaje de salvación. Cuenta con nosotros para ello y por eso nos ha dado unos talentos y ha dejado su obra en nuestras manos. Llevamos este tesoro en recipientes de barro (2Cor 4,7), nosotros somos los recipientes de barro y no podemos guardar para nosotros mismos este tesoro, sino que lo hemos de difundir.
Si no estamos formados no sabremos qué hacer con su encargo, como trasmitir, como cumplir lo que nos ha confi ado.
La formación es necesaria para, madurar como persona, para lograr encontrar y conocer el plan de Dios sobre cada uno de nosotros, que siempre será una respuesta en libertad y por ultimo para entender y experimentar el gozo de responder a la llamada de Dios.
Concluyo este escrito pidiéndole a la Santísima Virgen “asiento de la sabiduría” su intercesión, para que nos acompañe, nos proteja y nos enseñe el verdadero camino, con matorrales, con espinas, con tierra seca, pero también con tierra fértil que nos llevara un día ante la presencia de su Hijo.
Hermano Juan Carlos Yelo Sancho
[email protected] [email protected] [email protected] [email protected]
testigo
www.cristoagonia.org
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noticias de la hermandad
Desde estas páginas queremos unirnos a todos los Hermanos convalecientes de enfermedades, accidentes o intervenciones quirúrgicas. Que todos ellos puedan notar a través de la comunión de los santos, las oraciones del resto de Hermanos para una pronta y feliz recuperación.
Le pedimos también al Señor, que no se olvide de todos aquellos Hermanos que por diversos motivos están pasando por situaciones difíciles, a todos ellos les recordamos, que tienen a su disposición al grupo de Hermanos de Ningún Hermano Solo, ellos desde el trabajo escondido, intentaran ayudarles en todo aquello que este en sus manos.
A los hermanos de la banda de tambores de nuestra Hermandad que estos días han participado en la tamborada local de Alzira, agradecerles su comportamiento, y recordarles que el triunfo verdadero es siempre el que no se ve, humildad, trabajo, amistad, compromiso. Esas son las actitudes, entre otras, que en la vida os harán triunfar, y las que el Señor os sabrá premiar.
Informaros también, que en la carrera solidaria organizada por la Hermandad, celebrada el pasado 24 de abril en benefi cio de Aspanion, se les hizo entrega de la cantidad de 9013 €.
Por último desearos a todos un feliz verano, que sepamos aprovechar este tiempo para descansar y desconectar de las tareas habituales sin olvidar por supuesto nuestras obligaciones y si Dios quiere, a partir de octubre, retomaremos un nuevo ejercicio, con nuevos proyectos, con nuevas ilusiones.
RECORDAMOS A...
TAMBORADA 2016
CARRERA SOLIDARIA
FELIZ VERANO
