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. INTRODUCCIÓN. . La relación enfermera/paciente se ha modificado, de una relación de carácter paternalista se ha pasado a otra de "Autonomía", dando origen a nuevos y diferentes problemas en la práctica diaria. Los avances tecnológicos, los cambios en los valores sociales y la creciente preocupación por la defensa de los Derechos de las personas enfermas, hacen que surjan y se reaviven los debates en temas controvertidos para la sociedad. La libertad, autonomía, el respeto a los derechos humanos con la escala de valores de cada individuo, configuran un medio cultural. La salud siempre ha sido uno de los bienes más preciados, la enfermedad por el contrario coloca en "alerta" y, en teoría, pone en peligro la vida, todo lo relacionado con ella hace ser proclives a la reflexión profunda puede provocar dificultades de adaptación, sobre todo si se tiene en cuenta que la sociedad, transformada continua y aceleradamente, hace que se acentúe el “individualismo, el consumismo, el culto al cuerpo, el rechazo... En este trabajo se lleva a cabo una reflexión sobre los derechos de las personas enfermas y el papel de la enfermera ante los mismos.

Trabajo de Etica Legal

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.INTRODUCCIN.

. La relacin enfermera/paciente se ha modificado, de una relacin de carcter paternalista se ha pasado a otra de "Autonoma", dando origen a nuevos y diferentes problemas en la prctica diaria. Los avances tecnolgicos, los cambios en los valores sociales y la creciente preocupacin por la defensa de los Derechos de las personas enfermas, hacen que surjan y se reaviven los debates en temas controvertidos para la sociedad.

La libertad, autonoma, el respeto a los derechos humanos con la escala de valores de cada individuo, configuran un medio cultural. La salud siempre ha sido uno de los bienes ms preciados, la enfermedad por el contrario coloca en "alerta" y, en teora, pone en peligro la vida, todo lo relacionado con ella hace ser proclives a la reflexin profunda puede provocar dificultades de adaptacin, sobre todo si se tiene en cuenta que la sociedad, transformada continua y aceleradamente, hace que se acente el individualismo, el consumismo, el culto al cuerpo, el rechazo...En este trabajo se lleva a cabo una reflexin sobre los derechos de las personas enfermas y el papel de la enfermera ante los mismos.

Se inicia centrando el origen y los antecedentes histricos que sustentan los derechos de los pacientes o personas enfermas, se realiza una valoracin y un recordatorio sobre el soporte legislativo que ampara los derechos de los usuarios, y de los mecanismos establecidos por las Administraciones Pblicas para velar por los mismos y al que pueden dirigirse los usuarios, as como el derecho a la autonoma, beneficencia, no mala eficiencia y justicia.

ANTECEDENTES HISTORICOS.

Los avances clnicos han permitido curar enfermedades que hasta hace poco eran incurables, prolongar la vida o retrasar el momento de la muerte durante mucho tiempo con sostificados medios tcnicos.La relacin mdico/paciente se ha modificado, de una relacin de carcter paternalista se ha pasado a otra de "Autonoma", dando origen a nuevos y diferentes problemas en la prctica diaria a los que trata de dar respuesta la BIOTICA. Los avances tecnolgicos, los cambios en los valores sociales y la creciente preocupacin por la defensa de los Derechos Humanos, hacen que surjan y se reaviven los debates en temas controvertidos para la sociedad: la eutanasia, la interrupcin voluntaria del embarazo, el estado vegetativo permanente, la atencin a enfermos en fase irreversible, la fecundacin in Vitro, la inseminacin artificial, la ingeniera gentica, los trasplantes de rganos y el tratamiento de los neonatos con graves minusvalas son algunos ejemplos que entre otros podemos citar.Ante la creciente insatisfaccin de los pacientes por la asistencia recibida de profesionales sanitarios y la Administracin, las demandas judiciales han experimentado un crecimiento exponencial por parte de los usuarios. Las causas de este malestar son mltiples y variadas, de las que podemos enumerar algunas.Como resultado del devenir histrico, somos parte de los llamados pases occidentales y la LIBERTAD, LA AUTONOMA, EL RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS CON LA ESCALA DE VALORES DE CADA INDIVDUO, configuran nuestro medio cultural. La salud siempre ha sido uno de bienes ms preciados, la enfermedad por el contrario nos pone en "alerta" y, en teora, pone en peligro nuestra vida, todo lo relacionado con ella nos hace ser proclives a la reflexin profunda y puede provocarnos dificultades de adaptacin, sobre todo si tenemos en cuenta que nuestra sociedad, transformada continua y aceleradamente, hace que se acente el individualismo, el consumismo, el culto al cuerpo, el rechazo al dolor, la negacin de la muerte, el deterioro del medio ambiente, el paro, la crisis de las ideologas, la demanda de la participacin en las decisiones y la exigencia de una relacin menos paternalista y ms participativa en grado de igualdad en todos los mbitos de la vida familiar, social, poltica y en la relacin sanitario-usuario".Junto con las nuevas tcnicas aparecidas en los ltimos aos (dilisis, trasplantes, mantenimiento artificial de las funciones vitales, etc.), hacen que cada vez ms se muera "deshumanizadamente" en los hospitales, aumenten las enfermedades crnicas, se disparen los gastos sanitarios por la mayor demanda, haciendo que el ciudadano medio asista y contemple todo con asombro y miedo. Todo ello hace que nos replanteemos el papel desempeado por la atencin sanitaria, haciendo de sta una relacin conflictiva. Frente a toda esta situacin, la sociedad y los individuos reivindican y exigen, a travs de la defensa de los consumidores, y derechos de los pacientes, una relacin adulta, de personas que mutuamente se necesitan y respetan. De este contexto histrico surge la 1 Carta de Derechos del paciente (1973) que de alguna manera viene a salvaguardar la autonoma del enfermo frente al hospital. En Espaa, la ley General de Sanidad (1986). recoge los derechos de los pacientes y adquieren valor legal. A partir de este momento el CONSENTIMIENTO INFORMADO es, adems de tica una obligacin legal. La propia Constitucin de 1978 reconoce el carcter prevalente al bien fundamental de la libertad. Sirviendo de cobertura legal al CONSENTIMIENTO INFORMADO en cuanto derecho de auto disposicin que ejerce el usuario ante TODOS los profesionales sanitarios, incluidos el personal de enfermera.

RECURSOS DEL USUARIO ANTE LOS PROBLEMAS ETICO-LEGALES.

El usuario de los servicios sanitarios est amparado ante la empresa, tanto pblica como privada, que presta servicios sanitarios por una legislacin. Esta legislacin establece y regula unos sistemas que por una parte garantizan la asistencia y por otra establecen unos mecanismos, que pudiendo ser usados por el cliente, intentan garantizan la debida prestacin de los mismos, es el "Servicio de Atencin al Usuario".En el escalafn principal tenemos la Constitucin Espaola, que en su Artculo 43: reconoce el derecho a la Salud, la Ley. 14/6, de 25 de Abril, que en sus Artculos 9-10-11 establece los Derechos y Obligaciones de los Usuarios de la Sanidad, el Real Decreto 521/87, de 15 abril, que regula la estructura, organizacin y funcionamiento de los hospitales del INSALUD, la Ley 8/87 de la Generalitat Valenciana, de 4 diciembre, que en su Captulo IV, Articulo 27, organiza las Unidades que velen por el cumplimiento de los DERECHOS Y DEBERES de los ciudadanos, el Decreto 46/88, sobre organizacin y funcionamiento del S.V.S. por los que la Secretara General ejerce las funciones de COORDINACIN DEL PROCESO DE ATENCIN AL USUARIO y las Unidades de Atencin de Calidad en los Hospitales, por ltimo la Orden de 26 Diciembre de 1989 de la Cancelera Sanidad y Consumo, que establece la obligatoriedad de la existencia de la GUIA DEL USUARIO en todos los hospitales.EL PLAN DE HUMANIZACIN DE LOS HOSPITALES est basado en los DERECHOS Y DEBERES DEL CIUDADANO EN MATERIA DE SALUD, reconocidos en la Constitucin Espaola y desarrollados en la ley General de Sanidad, como anteriormente hemos descrito.Se inicia en su primera fase en el marco del NUEVO MODELO DE GESTIN HOSPITALARIA, en abril de 1.984 (dirigido fundamentalmente a los hospitales del INSALUD). Su elaboracin y la creacin de los Servicios de Atencin al Usuario evidencian la voluntad de los responsables sanitarios por hacer del hospital una institucin menos autoritaria, abriendo cauces de comunicacin con la sociedad e incorporando la opinin de los usuarios a los indicadores de calidad. EL PLAN DE HUMANIZACIN, es la referencia en la que debe desenvolverse una parte muy importante de la CALIDAD ASISTENCIAL de la sanidad pblica.Como puntos conceptuales bsicos podemos describir: seguimiento de la Carta de Derechos y Deberes, Servicio de Atencin al paciente, Comisin de humanizacin de la asistencia, realizacin de encuestas post-hospitalizacin con el fin de detectar fallos para su correccin, mejoras estructurales de los hospitales, tales como su sealizacin interna, incorporacin de enseantes (maestros) en los hospitales infantiles, intentos por favorecer la unin de la madre el nio durante la estancia hospitalaria, biblioteca para los pacientes, informacin a los pacientes sobre autopsias, clnicas donacin, instauracin progresiva de las comida a la carta para los enfermos, el Servicio de Atencin al Paciente, etc.Como objetivos podemos describir: acercar la Sanidad al ciudadano, satisfacer las necesidades del paciente hospitalizado, superar los aspectos puramente asistenciales y la incorporacin de la opinin del usuario a los instrumentos de medicin de la calidad asistencial.Los objetivos sintetizan los puntos contenidos en el Plan de HUMANIZACIN y se pueden resumir en las siguientes funciones: Propiciar la integracin del usuario en el hospital, mediante el control de acogida a pacientes y familiares. Realizar el seguimiento de la CARTA DE DERECHOS Y DEBERES. Centralizar y dar respuesta a las reclamaciones. Analizar la informacin obtenida y elaborar propuesta de medidas correctoras tendentes a mejorar la poltica de HUMANIZACIN. Estructural y orgnicamente en la Comunidad Valenciana, se lleva a cabo de acuerdo con el siguiente desarrollo: SERVICIO DE ATENCIN AL USUARIO-CENTRAL: Ubicado en los Servicios Centrales de la Consellera de Sanidad. Dependiente de la Secretaria General. SERVICIOS DE ATENCIN AL USUARIO (SAU) de Centros hospitalarios, de Especialidades y Atencin Primaria. Ubicados en los propios Centros y dependientes del Director del Hospital de rea de Salud. Por la Orden de la Sanidad de 26 de Diciembre de 1.989, se establece la GUIA DEL USUARIO EN LOS HOSPITALES PBLICOS de la Comunidad Valenciana, que regula y pone orden en la relacin Usuario-Hospital, dispone:DERECHOS DE LAS PERSONAS ENFERMAS.

La expresin derechos de las personas enfermas hace referencia a una parte del todo que es el derecho a la salud, derecho ste que abarca tanto al ser humano enfermo como al sano y que se inscribe en la esfera de los Derechos Fundamentales del ser Humano.La legislacin estatal que regula los centros de asistencia sanitaria confiere.En los siguientes artculos se hablara de los derechos de toda persona enferma: Artculo 82Toda persona tiene derecho a una vivienda adecuada, segura, cmoda, higinica, con servicios bsicos esenciales que incluyan un hbitat que humanice las relaciones familiares, vecinales y comunitarias. La satisfaccin progresiva de este derecho es obligacin compartida entre los ciudadanos y ciudadanas y el Estado en todos sus mbitos. El Estado dar prioridad a las familias y garantizar los medios para que stas, y especialmente las de escasos recursos, puedan acceder a las polticas sociales y al crdito para la construccin, adquisicin o ampliacin de viviendas. Artculo 83La salud es un derecho social fundamental, obligacin del Estado, que lo garantizar como parte del derecho a la vida. El Estado promover y desarrollar polticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el acceso a los servicios. Todas las personas tienen derecho a la proteccin de la salud, as como el deber de participar activamente en su promocin y defensa, y el de cumplir con las medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la ley, de conformidad con los tratados y convenios internacionales suscritos y ratificados por la Repblica. Artculo 84Para garantizar el derecho a la salud, el Estado crear, ejercer la rectora y gestionar un sistema pblico nacional de salud, de carcter intersectorial, descentralizado y participativo, integrado al sistema de seguridad social, regido por los principios de gratuidad, universalidad, integralidad, equidad, integracin social y solidaridad. El sistema pblico nacional de salud dar prioridad a la promocin de la salud y a la prevencin de las enfermedades, garantizando tratamiento oportuno y rehabilitacin de calidad. Los bienes y servicios pblicos de salud son propiedad del Estado y no podrn ser privatizados. La comunidad organizada tiene el derecho y el deber de participar en la toma de decisiones sobre la planificacin, ejecucin y control de la poltica especfica en las instituciones pblicas de salud.

Los profesionales de la enfermera son quienes ms cerca estn de los pacientes y sus familiares en los centros de salud.En su prctica diaria, las enfermeras y enfermeros se comprometen a actuar conforme a los principios del Cdigo deontolgico de la enfermera espaola que reconoce en su artculo 14 elderecho a la vida de todo ser humano, a la seguridad de su persona y a la proteccin de la salud.Dice as adems:1. La enfermera/o garantizar y llevar a cabo untratamiento correcto y adecuado a todas las personas que lo necesiten, independientemente de cul pueda ser su padecimiento, edad o circunstancia de dichas personas.2. En su comportamiento profesional,la enfermera/o tendr presente que la vida es un derecho fundamental de ser humanoy por tanto deber evitar realizar acciones conducentes a su menoscabo o que conduzcan a su destruccin.3. La enfermera/ono podr participar en investigaciones cientficas o en tratamientos experimentales, en pacientes que estn a su cuidado, si previamente no se hubiera obtenido de ellos, o de sus familiares o responsables, el correspondiente consentimiento libre e informado.4. Ante unenfermo terminal,la enfermera/o, consciente de la alta calidad profesional de los cuidados paliativos,se esforzar por prestarle hasta el final de su vida, con competencia y compasin, los cuidados necesarios para aliviar sus sufrimientos.Tambin proporcionar a la familia la ayuda necesaria para que puedan afrontar la muerte, cuando sta ya no pueda evitarse.5. La enfermera/o guardar en secreto toda la informacin sobre el paciente que haya llegado a su conocimientoen el ejercicio de su trabajo.La enfermera/o informar de los lmites del secreto profesional y no adquirir compromisos bajo secreto que entraen malicia o daen a terceros o a un bien pblico.Cuando la enfermera/o se vea obligada a romper el secreto profesional por motivos legales, no debe olvidar que moralmente su primera preocupacin, ha de ser la seguridad del paciente y procurar reducir al mnimo indispensable la cantidad de informacin revelada y el nmero de personas que participen del secreto.Derecho a la objecin de conciencia

De conformidad en lo dispuesto en el artculo 16.1 de la Constitucin Espaola,las enfermeras tienen, en el ejercicio de su profesin, el derecho a la objecin de conciencia que deber ser debidamente explicitado ante cada caso concreto.El Consejo General de Enfermera y los Colegios de Enfermera velarn para que ninguna/o enfermera/o pueda sufrir discriminacin o perjuicio a causa del uso de ese derecho buscarlo en el cdigo vnezolano

DERECHO A LA ATENCIN Y A LA SALUD

Todos tenemos derecho a recibir una buena atencin de salud cuando la necesitamos: mujeres y hombres; profesionales, obreros o desocupados.El motivo que nos lleva a pedir consulta puede ser diverso: presin alta, diabetes, personas con cncer, personas que viven con el virus que produce el SIDA (VIH), y mucho ms pero es precisamente la atencin de las personas viviendo con VIH/SIDA la que ha producido ms situaciones difciles en los establecimientos de salud.Razones que explican los problemas en la atencin de personas viviendo con VIH/SIDA:El personal de salud tiene una sobrecarga de trabajo que en algunos casos perjudica su disposicin para ofrecer una atencin de calidad a los pacientes.En el caso de atender a personas viviendo con VIH/SIDA, este problema se agrava por el temor al contagio; porque no han sido bien informados acerca del bajo riesgo de transmisin del virus al personal hospitalario, ni conocen las medidas de bio-seguridad que disminuyen ese pequeo riesgo.Sin embargo, existen normas que garantizan una buena atencin a todo paciente sin ninguna discriminacin:"EL MDICO COMO LEGTIMO DEFENSOR DEL SER HUMANO ANTE EL DOLOR, EL SUFRIMIENTO Y LA MUERTE, NO ESTABLECE DIFERENCIAS ENTRE LOS PACIENTES A LOS QUE ATENDER SIEMPRE CON RESPETO, AMOR Y DISCRECIN Y SIN DISCRIMINACIN DE NINGUNA CLASE"(Cdigo de Etica Profesional del Colegio Medico del Per Seccin 1, Titulo I)"Todo establecimiento de salud, de acuerdo a su nivel de complejidad, esta obligado a brindar atencin a las personas con VIH/SIDA de manera responsable, digna, respetuosa y sin discriminacin""El personal de salud y las instituciones encargadas de la atencin del paciente con VIH/SIDA debern respetar el carcter confidencial de la informacin de la historia clnica esta informacin podr ser proporcionada slo en los casos en que el paciente lo autorice o en estricto cumplimiento de mandato judicial" (Doctrina, normas y procedimientos para el control de las ETS y el SIDA en el Per Ministerio de Salud, abril 1996)"Toda persona con VIH/SIDA tiene derecho a la atencin medica integral y a la prestacin provisional que el caso requiera" (ley N 26626, publicada el 20/06/96)"No podr condicionarse ningn tipo de atencin medica o quirrgica a la realizacin previa de exmenes diagnsticos de infeccin por VIH" (reglamento de la ley 26626 publicado el 18/06/97)Qu puede hacer un trabajador de salud responsable?Buscar informacin sobre la infeccin por VIH y sus formas de transmisin.Conocer y cumplir las medidas de bioseguridad para el control de las infecciones intrahospitalarias.Recordar que la misin del trabajador de salud es atender bien al paciente sin juzgar su conducta.Tener presente la importancia de su rol para dar bienestar a los pacientes.Por su parte, como cualquier otro paciente, las personas viviendo con VIH/SIDA tiene derecho a recibir una atencin de calidad en los establecimientos de salud, pero sabemos que en muchas ocasiones este derecho no es respetado.Qu puede hacer una persona viviendo con VIH/SIDA o su familia en caso de que en un servicio se le niegue la atencin o si el trato es negligente o malo?Tomar nota del da, hora y nombre del personal de salud que le niega la atencin.Solicitar apoyo al Coordinador del PROCETSS del Establecimiento de Salud.S continua el problema, hablar con el Director del Establecimiento de Salud.Si no se obtiene resultado favorable, presentar la queja por escrito ante el Director del Establecimiento de Salud.En casos ms graves se formular la denuncia ante el Ministerio de Salud o la Gerencia Mdico-Quirrgica Essalud, (segn el Hospital), la Fiscala, la Defensora del Pueblo o del Colegio Mdico.

TICA Y MORAL EN LA RELACIN PACIENTE PERSONAL DE SALUD

"El bienestar y el mejor inters del paciente deben ser prioridad para el mdico. ste debe tratar y curar cuando sea posible y adems ayudar a los pacientes a sobrellevar la enfermedad, la invalidez, y la muerte. en todas las circunstancias, el mdico debe ayudar a mantener la dignidad de la persona y respetar la individualidad de cada persona . La obligacin del facultativo hacia el paciente permanece inalterable, aunque la relacin mdico-paciente pueda ser afectada por el sistema de atencin o el estado del paciente. Cualquiera sea la ambientacin del tratamiento, al comienzo de una relacin el mdico debe comprender todas las quejas, los sentimientos subyacentes y las expectativas del paciente. Despus de ponerse de acuerdo sobre el problema que tienen que enfrentar, el mdico presenta una o varias posibilidades de accin. Si ambas partes se ponen de acuerdo, el paciente podr entonces autorizar al mdico a iniciar un curso de accin y el mdico aceptar esta responsabilidad La relacin tiene mutuas obligaciones. El mdico debe ser profesionalmente competente, actuar con responsabilidad y tratar al paciente con compasin y respeto. El paciente debe entender y consentir el tratamiento y debe participar con responsabilidad en la atencin. Aunque el mdico merece una compensacin justa por los servicios prestados, la profesionalidad y el sentido del deber hacia el paciente y la sociedad, deben tener preeminencia sobre la preocupacin por la compensacin; la obligacin primordial del mdico es para con el paciente. El facultativo debe ser flexible y abierto a las preocupaciones del paciente. Hay ocasiones en que las creencias religiosas, culturales u otras del paciente indican decisiones que van en contra del consejo mdico. El facultativo est obligado a tratar de entender claramente las creencias y puntos de vista de su paciente. Luego de tratar seriamente de resolver las diferencias, si el mdico no puede seguir los deseos del paciente, debe retirarse y ceder el cuidado del paciente a otro colega". Aqu tenemos presentado en sociedad lo que podramos denominar el Ideal del mdico: para ser un "buen mdico", ste debe identificarse a la imagen Ideal que se prescribe desde estas prioridades y objetivos, debe respetar estos principios, promover estas actitudes, dejar de lado otros intereses, aceptar estas obligaciones, comprender, acordar y responsabilizarse. Apela al sentido del deber y a la comprensin de los deseos del paciente, dentro de los lmites de una escala de valores personales, de standards cientficos y principios legales. El mdico contara entonces con este parmetro para medir su tica, de acuerdo a la mayor o menor proximidad de la percepcin de la realidad de su prctica, respecto al ideal que se prescribe. Estamos evidentemente en el terreno de los ideales, la imagen, la identificacin, la ideologa.Es esto suficiente para regular la prctica mdica y dar cuenta de la posicin que ms conviene a su tica? Los otros dos materiales nos acercan fragmentos de la realidad de la prctica mdica hoy en da en nuestro medio, segn la apreciacin de dos reconocidos profesionales que reflexionan sobre la concreta ejecucin de la tendencia dominante globalizada.LA ATENCIN MDICA DE LOS TESTIGOS DE JEHOV: Un desafo asistencial, quirrgico y tico, el modelo fundamental de la relacin mdico-paciente haba permanecido casi inmutable desde la Antigedad. Este modelo exiga al enfermo obediencia y confianza en el mdico. El mdico por su parte tena el deber de poseer una autoridad fuerte y buscar el mximo beneficio objetivo del enfermo. A este deber se le llama: "Principio de Beneficencia". En la actualidad, con creciente frecuencia, el personal de salud se ve enfrentado a situaciones que nos alejan de un pasado paternalista y nos ubican frente a los pacientes en una situacin igualitaria, equitativa y menos pasiva que la de antao, lo que no siempre aceptamos con facilidad. Probablemente una de las situaciones ms desafiantes y provocantes es la que nos plantea la asistencia de los Testigos de Jehov. Se estima que en el mundo la cantidad supera las dos millones de personas, y en nuestro pas, si bien no existe un censo publicado, la cantidad sera superior a sesenta mil. La caracterstica ms importante que puede entorpecer la relacin mdico paciente est dada por la negativa a recibir transfusiones de sangre y sus derivados, lo que afecta al personal de salud en su actitud asistencial, tica, moral y legal. Anteriormente los diferendos se diriman exclusivamente en los tribunales; hoy en cambio la predisposicin al dilogo de los Testigos, los Comits de Biotica, las experiencias quirrgicas publicadas, la aplicacin del consentimiento informado y el cambio de actitud de la mayora de los componentes del personal de la salud han permitido lograr el respeto hacia la autonoma de las personas en general y una profunda modificacin en la administracin de sangre y hemoderivados a este grupo en particular.CARTA DE DERECHOS Y DEBERES DE LOS USUARIOS.Por su importancia reproducimos la Carta de Derechos y Deberes del usuario.Derechos:1. El usuario tiene derecho a recibir una atencin sanitaria integral de sus problemas de salud, dentro de un funcionamiento eficiente de los recursos sanitarios disponibles.2. El usuario tiene derecho al respeto a su personalidad, dignidad humana e intimidad, sin que pueda ser discriminado por razones de tipo social, econmico, moral e ideolgico.3. El usuario tiene derecho a la confidencialidad de toda informacin con su proceso, incluso el secreto de su estancia en centros y establecimientos sanitarios, salvo por exigencias legales que lo hagan imprescindible.4. El usuario tiene derecho a recibir informacin completa y continuada, verbal y escrita, de todo lo relativo a su proceso, incluyendo diagnsticos, alternativas de tratamiento y sus riesgos y pronstico, que ser facilitada en un lenguaje comprensible. En caso de que el paciente no quiera o no pueda manifiestamente recibir dicha informacin, sta deber proporcionarse a los familiares o personas legalmente responsables.5. El usuario tiene derecho a la libre determinacin entre las opciones que le presente el responsable mdico de su caso, siendo preciso su consentimiento expreso previo a cualquier actuacin, excepto en los siguientes casos: Cuando la urgencia no permita demoras. Cuando el no seguir tratamiento suponga un riesgo para la salud pblica.Cuando no est capacitado para tomar decisiones, en cuyo caso el derecho corresponder a sus familiares o personas legalmente responsables.6. El usuario tendr derecho a negarse al tratamiento, excepto en los casos sealados en el punto 5, debiendo para ello solicitar el alta voluntaria, en las condiciones que seala el punto 6 del apartado de Deberes.7. El usuario tendr derecho a que se le asigne un mdico cuyo nombre deber conocer y que ser su interlocutor vlido con el equipo asistencial. En caso de ausencia. Otro facultativo del equipo asumir la responsabilidad.8. El usuario tiene derecho a que quede constancia por escrito de todo su proceso; esta informacin y las pruebas realizadas constituyen la Historia Clnica.9. El usuario tiene derecho a que no se realicen en su persona investigaciones, experimentos o ensayos clnicos sin una informacin sobre mtodos, riesgos y fines. Ser imprescindible la autorizacin por escrito del paciente y la aceptacin por parte del mdico, de los principios bsicos y normas que establecen la Declaracin de Helsinki. Las actividades docentes requerirn as mismo, consentimiento expreso del paciente.10. El usuario tiene derecho al correcto funcionamiento de los servicios asistenciales y aceptables de habitabilidad, higiene, alimentacin, seguridad y respeto a su intimidad.11. El usuario tendr derecho en caso de hospitalizacin a que sta incida lo menos posible en sus relaciones sociales y personales. Para ello, el Hospital facilitar un rgimen de visitas lo ms amplio posible, el acceso a los medios y sistemas de comunicacin y de cultura y la posibilidad de actividades de que fomenten las relaciones sociales y el entretenimiento del ocio.12. El usuario tiene derecho a recibir cuanta informacin desee sobre los aspectos de las actividades asistenciales, que afecten a su proceso y situacin personales.13. El usuario tiene derecho a conocer los cauces formales para presentar reclamaciones, quejas, sugerencias y en general, para comunicarse con la administracin de las Instituciones. Tiene derecho, as mismo a recibir una respuesta por escrito.14. El usuario tiene derecho a causar ALTA VOLUNTARIA en todo momento tras firmar el documento correspondiente, exceptuando los casos recogidos en el Art. 5 de los Derechos.15. El usuario tiene derecho a agotar las posibilidades razonables de superacin de su enfermedad. El hospital proporcionar la ayuda necesaria para su preparacin ante la muerte en los aspectos materiales y espirituales.16. El usuario tiene derecho a que las instituciones Sanitarias le proporcione: Una asistencia tcnica correcta con personal cualificado. Un aprovechamiento mximo de los medios disponibles. Una asistencia con los mnimos riesgos, dolor y molestias psquicas y fsicas.Deberes:1.El usuario tiene el deber de colaborar en el cumplimiento de las normas e instrucciones establecidas en las Instituciones Sanitarias.2.El usuario tiene el deber de tratar con el mximo respeto al personal de las Instituciones Sanitarias, los otros enfermos y acompaantes.3.El usuario tiene el deber de solicitar informacin sobre las normas de funcionamiento de la Institucin y los canales de comunicacin (quejas, sugerencias, reclamaciones y preguntas). Debe conocer el nombre del mdico.4.El usuario tiene el deber de cuidar las instalaciones y de colaborar en el mantenimiento dela habitabilidad de las Instituciones Sanitarias.5.El usuario tiene el deber de firmar el documento de Alta Voluntaria, en los casos de no aceptacin de los mtodos de tratamiento.6.El usuario tiene el deber de responsabilizarse del uso adecuado de las prestaciones ofrecidas por el sistema sanitario, fundamentalmente en lo que se refiere a la utilizacin de servicios, procedimientos de baja laboral o incapacidad permanente y prestaciones farmacuticas y sociales.7.El usuario tiene el deber de utilizar las vas de reclamacin y sugerencias.8.El usuario tiene el deber de exigir que se cumplan sus derechos.

DERECHOS DEL MORIBUNDO.1. -El derecho a saber que va a morir.2. -El derecho a rehusar un tratamiento.3. -El derecho a expresar su propia fe.4. -El derecho a mantener la conciencia lo ms cerca posible de la frontera de la muerte evitando el dolor.5. -Morir sin el estrpito frentico de una tecnologa puesta en juego para otorgar al moribundo algunas horas suplementarias de vida biolgica.6. -Morir manteniendo con las personas cercanas contactos humanos, sencillos y enriquecedores.

CONSENTIMIENTO INFORMADO.CONSIDERACIONES.El proceso de Atencin de Enfermera se basa en el individuo, en el ser humano sobre el que se centran los cuidados y exige que cada enfermera considere primero y ante todo las necesidades del paciente/cliente de forma individual. Esta demanda introduce el elemento existencialista. Ningn profesional del cuidado de la salud puede cubrir las necesidades de un individuo sin consultar con l. Dicha consulta es un doble proceso Por haber preguntado a alguien cuales son sus necesidades, uno no est autorizado (excepto en un estado totalitario) a imponer, en la persona, sus propios puntos de vista, e incluso menos a realizar determinadas actividades sobre dicho individuo sin su consentimiento. Es un reto contundente para un grupo de profesionales, que durante cientos de aos ha impuesto el cuidado de enfermera sobre los individuos que deseaban recibirlos de forma autocrtica. El reto cultural del proceso de enfermera es tal, que demanda que las enfermeras vuelvan a enfocar sus bases de cuidado de un modo en que d el control del proceso al usuario.DEFINICIN.Podemos definir el CONSENTIMIENTO INFORMADO como el acto mediante el cual, el profesional sanitario expone al paciente, en relacin horizontal y no paternalista, toda la informacin sobre el proceso que se va a seguir para su recuperacin.Debe contener una informacin bsica que en lo posible, se debe ceir a palabras cortas y directas que sean habituales en el lenguaje diario (no tcnico), teniendo presente que quien nos oiga o lea, no tiene por que tener conocimientos tcnicos ni sanitarios.El consentimiento informado consiste en la explicacin a un paciente atento y mentalmente competente de la naturaleza de su enfermedad, as como el balance entre los efectos de la misma y los riesgos y beneficios de los procedimientos teraputicos recomendados, para a continuacin solicitarle su APROBACIN para ser sometido a esos procedimientos.

REQUISITOS DE LA INFORMACIN:* CALIDAD----------Comprensin.* COMPETENCIA----------Validez.* AUTENCIDAD----------Relacin.

EXCEPCIONES AL DEBER DE INFORMACIN.Que exista rechazo explcito de toda informacin por parte del paciente.Que exista grave riesgo para la Salud Pblica.Que exista situacin de urgencia real y grave que permita demoras.Imperativo legal.Cuando el paciente no est capacitado, en cuyo caso, corresponder a sus familiares o personas allegadas.

RECOMENDACIONES Y PROTOCOLO.

Para su elaboracin se deben tener en cuenta las siguientes RECOMENDACIONES, estando generalmente aceptado que para su confeccin y para llevarlo a cabo debe seguirse el siguiente PROTOCOLO.1. - Explicacin del procedimiento a seguir, incluyendo objetivos y duracin del mismo.2. - Riesgos tpicos y atpicos.3. - Alternativas diagnsticas y teraputicas.4. - Disponibilidad absoluta a ampliar la informacin.5. - Opcin al paciente/ tutor/ familiar para que puedan retirar el Consentimiento Informado en cualquier momento.6. - Debe constar el nombre completo y firma del profesional sanitario responsable directo del procedimiento, hacindose constar que ha informado al paciente/ tutor/ familiar y que puede requerir ayuda de otros profesionales.7. - Nombre completo del paciente/tutor/familiar, declarando que ha ledo / odo y comprendido toda la informacin, firmando libremente.8. - Datos administrativos: nombre, n de historia clnica, habitacin, hospital, fecha, etc.9. - Es conveniente, incluso antes de la redaccin definitiva, darlo a leer a personas ajenas a las profesiones sanitarias, con el fin de comprobar su total comprensin.

NORMATIVA.El Consentimiento Informado es normativo en los siguientes casos:Aborto.Trasplantes.Donacin de rganos.Ensayos clnicos.Realizacin de tcnicas invasivas que supongan o puedan suponer riesgo para el paciente.