Trabajo Práctico III

Reseña de Exposiciones

Objetivo:

Conocer espacios de exhibición de la ciudad. Analizar detalladamente las muestras y

las características de las salas.

Consignas:

Visitar tres exposiciones distintas, en galerías de arte, centros culturales o museos. No

incluir en este trabajo espacios alternativos, como bares, ferias callejeras, etc. Las

exposición puede ser de fotografía o de cualquier otra área de las artes visuales Para

cada muestra redactar un informe completo, desarrollando todos los puntos

consignados en la Guía para ver Exposiciones. En el caso de que en la exposición se

entregue material gráfico incluirlo en el informe.

Marina De Caro, “Contra la Gravedad”

Museo de Arte Moderno de Buenos Aires

Descripción:

La figura humana es la protagonista en las obras de Marina De Caro, donde ella va

modificándola y mutándola hasta crear su propia visión, tanto en los dibujos como en

las esculturas blandas.

En todas ellas configura un mundo diferente, más aniñado, con formas garabateadas,

estallidos de color, trazos libres sin restricciones de tamaños, y luego, espacios

negros, vacíos, donde se despierta la intriga.

La muestra consiste en una retrospectiva de la artista que ocupa dos salas muy

grandes del museo; una con sus dibujos, esculturas y una instalación que invita a los

espectadores a participar, y otra habitación con una única instalación muy grande que

la ocupa por completo. Por el momento, nos centraremos en la primera sala.

Las esculturas, que parecen muñecas de trapo, con caras y formas poco definidas,

son los personajes de este universo. Están hechas de telas, hilos, rellenas como

almohadones, con botones como ojos y otros apliques, con cabello, sin cabello, y con

atuendos particulares realizados por De Caro. Algunas de ellas interactúan con el

espacio, que les sirve de paisaje creando una escena.

Los dibujos están realizados sobre papeles, algunos de ellos parecen arrancados de

cuadernos de anotaciones, y se componen de las combinaciones diversas entre tintas

chinas, carbonilla, tiza pastel, lápiz u óleos. En ellos se crean espacios distintos, casi

abstractos pero en cierto punto reconocibles; llenos de color, y también de vacío

negro, generando una sensación macabra, oscura y de expectativa.

En la misma exposición pueden encontrarse obras de dimensiones enormes, de

tamaño real, o muy pequeñas. Los dibujos pequeños se encuentran ubicados juntos

sobre las paredes, y aquellos que son grandes tienen su protagonismo solos, o más

distanciados del resto. Así también sucede con las esculturas, algunas son

protagonistas en un sector, y otras conforman un conjunto.

Respecto a su montaje, los dibujos están enmarcados de manera clásica, con bordes

blancos o color madera, colocados en ventanas de paspartú o cartón para evitar el

contacto de las obras con el vidrio (para la conservación en caso de humedad). Otros

bocetos, se encuentran en vitrinas con forma de mesa. No se puede observar que

estén sostenidos con tanzas, por esa razón considero que están sujetos a la pared con

clavos o tornillos, excepto en un caso donde una obra muy ancha se encuentra

sostenida por pequeños ganchos de papelería, atornillados a la pared.

En el caso de las esculturas, estas se encuentran o bien recostadas, es decir, con el

torso y cabeza rectos en el aire o sobre una pared y el resto del cuerpo sobre el piso,

colgadas con tanza con metal desde el techo o (algunas pocas) sobre una mesa. Una

de las que se encuentra recostada sobre una pared, utiliza al entorno como fondo

generando así una escena relacionada a ese personaje.

La iluminación está armada con lámparas tipo halospot (no emiten rayos UV o IR) en

rieles, que pueden direccionarse, sin embargo, a pesar que la luz destaca cada obra,

la iluminación general de la sala es pareja, no está en penumbras, todo es

absolutamente visible.

En el caso de las paredes, son en su mayoría blancas sin aportar ninguna

connotación, excepto en la escultura que tiene un fondo de árboles en color rosa, y la

instalación interactiva que es amarilla en su totalidad, incluyendo el piso.

Todas las obras cuentan con cédula nomencladora, pero no justamente debajo de

cada una de ellas, sino que se agrupan en cédulas que se colocan al principio o final

de un grupo, o entre algunas obras. Estás cédulas nombran de izquierda a derecha

generalmente, o despliegan un panel ubicando a las obras con un número en su lugar

correspondiente en la pared, y detalla, título, año de realización, técnica y colección,

junto a su traducción al inglés.

El único texto que se puede encontrar además de estás cédulas, es un texto

explicativo de la exposición, su título y su creadora en el interior de la sala al lado de la

entrada, con su respectiva traducción al inglés.

En cuanto al recorrido de la muestra, si bien no hay una circulación del público muy

definida, si está sugerida. Al entrar, uno se topa con un sector lleno de pequeños

dibujos y dos esculturas muy grandes. Al avanzar, el espectador descubre detrás de

las paredes (tabiques), esculturas que configuran escenas particulares, luego se

atraviesa la instalación que parece la habitación de una persona, se topa con más

cuadros y escenas de esculturas y vuelve a empezar la vuelta. Durante la estadía en

la sala, se reproduce una música de fondo suave pero que parece música para niños.

Como último punto, hablaremos del catálogo de la muestra. Este es similar al del resto

de las exposiciones del museo, siendo estos desplegables de unos 15cmx15cm

cerrados, que al abrirse son enormes e incómodos por su formato. Incluye dos textos,

una reseña de la curadora y el currículum de la artista que, al estar también en inglés

ocupan muchísimo espacio y no llaman la atención a ser leídos. El papel del

desplegable es común, opaco, y a pesar de tener color, las imágenes no son fieles a la

realidad. Además son muchas en tamaños medianos y hacen que el diseño sea

grande, poco transportable y al final poco atractivo. Sin embargo cuenta con

información completa:

- Nombre de la artista, título de la muestra e imagen en tapa

- Imágenes con sus títulos, técnicas, dimensiones y colección

- Información extra de libros y páginas web de la artista

- Nombre del Museo, auspiciantes, horarios, dirección y teléfonos en el dorso

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Adriana Lestido, “México”

Galería Rolf Art

Descripción:

La muestra está conformada por dos series de fotografías; Hierve el Agua, que fueron

tomas realizadas por Lestido en una visita a la zona de Oaxaca y la otra, México, fue

realizada con el fin de ser un reportaje a los habitantes de los bosques de ese lugar

con motivo del Año Internacional de los Bosques declarado por la ONU.

Las imágenes de Lestido reflejan los sentimientos y las relaciones entre las personas

de una forma que sólo con ver sus fotos, la emoción es casi palpable. Sin embargo,

ésta vez, y más allá de algunas presencias humanas, cabe destacar que el nuevo

protagonista que realmente se destaca es el paisaje; el bosque, la roca, el agua, y en

algunos momentos logra que el espectador se sienta tan parte de ellos como lo ha

hecho a lo largo de todos sus proyectos.

Las formas particulares del terreno y la manera en la que la fotógrafa realiza los

encuadres provocan que el ambiente se perciba casi de otro planeta. Algunas

imágenes parecen un extracto de la luna o un lugar fuera de la Tierra. Otras hacen que

quien las ve se pierda en ellas, pudiendo casi recorrer el lugar.

Todo esto sucede a pesar de su tamaño. La mayoría de las imágenes son de tamaño

mediano (un poco más de 20x30cm), y sólo algunas son un poco más grandes. Las

más pequeñas se encuentran agrupadas por sus similitudes de paisaje o zona en

números pares (2,4 o 6 fotos) y las más grandes están o solas, un poco alejadas de

los grupos, o junto a algunas imágenes más pequeñas relacionadas, en grupos de 3

aproximadamente.

Las fotografías fueron realizadas con cámara analógica así que sus copias están

realizadas en gelatina de plata sobre papel baritado (es de buena calidad, y permite

reproducir una gran variedad de tonos, especialmente el blanco brillante, puro), y se

encuentras montadas de forma sobria, en ventanas en paspartú o cartón, dentro de

marcos blancos sin que la copia toque el vidrio. No se observan tanzas que sostengan

las obras por eso asumimos que están colgadas con clavos o tornillos directamente a

la pared. De alguna manera el color blanco acompaña a la monocromía de las

imágenes, de hecho nada en la pequeña sala tenía color específico a excepción del

piso de madera. Lo importante son las formas de lo capturado, más allá de sus

colores.

La iluminación está armada en rieles o soportes cuadrados de luces tipo halospot que

pueden rotarse. Estás iluminan puntualmente las obras, sin dejar la habitación en

penumbras, pero claramente la atención se centra en las imágenes. Hay ventanas en

la habitación que cuentan con cortinas para filtrar la entrada de la luz, aunque la

llegada de luz solar no es muy directa por la ubicación de la galería en sí.

Todas las imágenes tienen cédula nomencladora, no debajo de ellas sino que

nuevamente se encuentran todas las cédulas juntas en la esquina de un conjunto de

imágenes, y en esta se despliega un panel donde se enumera cada una con el nombre

de la serie a la que pertenecen, el lugar de toma, el año, el soporte, tamaño, edición y

laboratorista que realizo la copia.

El único texto que hay se encuentra al entrar, por encima de un soporte en la pared

que sostiene los catálogos, en el que se lee el título de la muestra, la autora y la

curadora; nada más.

La muestra no tiene un recorrido específico más allá de la que la sala está dividida en

dos sectores, pero se tiende a empezar por un sector que está frente al espectador al

entrar a la muestra.

El catálogo de la muestra es de grandes dimensiones, de unos 45cmx35cm, muy poco

transportable, impreso en una sola carilla, y repleta de un texto muy largo de la

curadora acerca de la muestra, y el trabajo de Lestido en cada serie específicamente,

aportando incluso datos de la zona fotografiada, que resultan un poco tediosos de leer

para quien visita la muestra. Esto opaca por completo a la única imagen que hay que

además es sólo un recorte de una foto que es una de las más interesantes de la

exposición. El diseño es muy clásico, aunque en cierta forma acompaña al contexto, y

su calidad de impresión y papel es buena, pero está totalmente desaprovechada para

mostrar lo que importa, que es aunque sea un poco más de imagen. La información

que muestra está correcta e incluye:

- Título y Autora de la muestra

- Recorte de Imagen con su nombre de serie, año, lugar, técnica, tipo de copia, y

dimensiones.

- Fechas de comienzo y finalización de la exposición

- Texto de la curadora

- Nombre de la Galeria, dirección, teléfono, contacto y página web.

Laura Lima, “El Mago Desnudo”

Museo de Arte Moderno de Buenos Aires

Descripción:

La obra de Laura Lima invita a ingresar al mundo de un mago muy particular por un

rato. Recrea un taller lleno de objetos, libros y muebles que están en el aire, discos

viejos, artefactos que parecen ser trucos y muchos elementos más, que conforman un

espacio caótico de punta a punta. Sin embargo al recorrerlo, y ver al personaje dentro

trabajando, concentrado en crear, podemos reconocernos en él cuando nosotros

mismos buscamos algo a partir de lo que crear, y entendemos que es parte de un

proceso. Este desorden es la representación de este creativo mago en sí mismo,

podemos verlo a él en cada espacio.

Por otro lado, Lima busca romper con el espacio del montaje completamente;

absolutamente toda la habitación es el montaje y aporta al mensaje que se quiere

transmitir. Sin embargo, no todo en este caos esta justamente puesto sin sentido

alguno; hay objetos que estas puestos de manera que el espectador tenga que verlos,

y no queden perdidos en el desorden. Además, ésta manera en que

(contradictoriamente) están ordenados los elementos, configura un recorrido y

espacios dentro de la misma sala.

Con esto quiero decir que, por ejemplo, al entrar uno se encuentra con un juego de

sillones de living, con su alfombra, un mueble extraño donde el mago cuelga algunos

sacos, bastante prolijo. Pero, al costado del conjunto, hay una silla sostenida por tanza

con metal, que parece flotar.

Al continuar, vemos que hay una mesa grande de trabajo llena de objetos,

herramientas, pedazos de maniquíes, pinturas, elementos de arcilla, señal de que

estamos en un taller.

Seguimos, y encontramos la cocina, con su mesa, su silla, su heladera y elementos,

algunos como los que funcionan como centro de mesa, modificados por el mago, o

raros para cumplir la función que tienen. Al lado de estos centros, se encuentra una de

las piezas más llamativas de la muestra que consiste en una hoja escrita con lápiz que

habla de la manera en la que el caos funciona como orden, nos enseña a mirar,

encontrar y cómo en cierta manera es la única manera que tenemos de hacer o crear.

Al siguiente instante, encontramos al mago, pintando máscaras en un escritorio,

absorto y encerrado en esa acción. Se sigue el recorrido y empiezan las bibliotecas

altas hasta el techo, combinadas con escaleras, elementos viejos que parecen

intervenidos por el mago, máquinas de las que salen por sus costados papel tipo

serpentina, libros abiertos en el aire colgados con tanza, cartas de póker.

Luego uno se encuentra con un espacio por el cual se puede pasar entre dos

estanterías, pero para entrar allí hay que pasar debajo de una escalera; parece un

detalle sin sentido pero los supersticiosos no quieren pasar debajo de esta, hay que

decidirse a entrar. Quienes se animan, llegan al otro lado entre las dos bibliotecas y se

empieza a notar con claridad como hay libros específicos abiertos para que se vea

alguna hoja en particular o su título, como puede ser el Peter Pan, o títulos y textos

que hablan sobre madurar. Estos elementos que están tomados a otro objeto o

estantería, están puestos con tornillos y los que cuelgan lo hacen con tanza de metal.

En algunos casos hay hojas rotas, manchadas con pintura, siendo negadas; todo

parece estar allí para cumplir una función.

Detrás de estas estanterías hay un último espacio. En este encontramos una silla con

un escritorio y un libro de pintura renacentista abierto. Delante de quien se siente en la

silla se lee “Re signifíquese”. Al lado de esto, se encuentra una escalera apoyada en la

pared, que al subir (simbólicamente porque es inestable para subir a ella) lleva a una

mesa pequeña con un libro, una vela y una silla. Pegado en la pared junto a otros

dibujos se lee “para escribir sueños”.

Queda claro que cada elemento tiene un porque, y cada conjunto puede ser una obra

en sí misma, se pueden hacer recortes dentro de la exposición y descubrir algo

distinto.

Cabe destacar, que este montaje es único, es decir, cada vez que se realiza la

muestra en otro lugar, o en otro país, no se realiza de la misma manera ni con los

mismos elementos, sí con el mismo concepto.

Las paredes son blancas pero están casi cubiertas en su totalidad de elementos, y

aquellas partes que se pueden ver están manchadas con pintura casi todas.

Respecto a la iluminación, busca acompañar el clima de taller/caos, pero está dada

por fuentes que se corresponden con el ambiente, es decir, hay lámparas de mesa,

velas, tubos de luz a una altura normal en algunos sectores (no muy altas o en techo)

y no reflectores o luces normales de museo. Sí está claro, que hay mayor iluminación

en los lugares donde sí o sí el espectador debe mirar, como en donde está el mago, o

en la cocina, etc.

No hay cédulas nomencladoras porque la obra es una sola, pero si hay un texto

explicativo de la muestra en el exterior de la sala, con el título y autora de la muestra,

más un video reportaje a la artista.

La muestra cuenta con un catálogo similar al resto de las exposiciones del museo y

consiste en un desplegable que cerrado tiene unos 15cmx15cm y abierto es más largo

que ancho, y tiene unos 50cmx30cm. El papel es común y opaco pero está impreso en

blanco y negro, así que las imágenes de la muestra no se pueden apreciar demasiado.

Sumado a esto hay mucho texto, uno sobre la muestra, el currículum de la autora, otro

sobre un premio en específico y además promociona una exposición en video de Lima

en otro lugar de Buenos Aires ocupando un espacio bastante grande del catálogo. Su

diseño es incómodo para su lectura, poco transportable, y poco atractivo, si bien

cuenta con información útil como el nombre del museo, horarios, teléfonos, titulo,

autora, sponsors y auspiciantes de la muestra.