Upload
lybao
View
216
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID FACULTAD DE FILOLOGA
DEPARTAMENTO DE FILOLOGA ESPAOLA II (Literatura Espaola)
TESIS DOCTORAL
Juana de la Cruz: vida y obra de una visionaria del siglo XVI
MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTORA
PRESENTADA POR
Mara Luengo Balbs
DIRECTOR
Rebeca Sanmartn Bastida
Madrid, 2016
Mara Luengo Balbs, 2016
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
FACULTADDEFILOLOGAHISPNICA
DepartamentodeFilologaEspaolaII
(LiteraturaEspaola)
TESIS DOCTORAL
JUANA DE LA CRUZ:
VIDA Y OBRA DE UNA VISIONARIA DEL SIGLO XVI
MEMORIAPARAOPTARALGRADODEDOCTOR
PRESENTADOPOR
MARALUENGOBALBS
BAJOLADIRECCINDE:
REBECASANMARTNBASTIDA
MADRID
2015
A mi familia y amigos, por la paciencia y el cario con los que me han
acompaado a lo largo de este proceso, y a todos mis alumnos del Colegio Estudio,
que durante estos aos de contemplacin celestial, me han atado a la Tierra con su
alegra.
Pero, principalmente, este trabajo est dedicado a lvaro, por ser siempre mi
apoyo ms constante y valioso.
3
AGRADECIMIENTOS
Duranteelcurso20082009,asistalasclasesdePolticaySociedad enla
Literatura de los Siglos de Oro impartidas por el doctor lvaro Bustos Tuler,
dentrodelMster deLiteraturaEspaolade laUniversidadComplutense.Enuna
de las clases dedicada a la literatura en torno a los Reyes Catlicos, el doctor
expusolarelevanciaqueelpensamientomesinicohabatenidoenesteperiodo,e
hizoalusina lasrelacionesentrecorteyliteraturavisionaria.Esefueelcomienzo
del camino, que dio lugar a la presente tesis doctoral. Realic un trabajo sobre
Mara deToledo, una beata visionaria coetnea a Sor Juana de la Cruz, que fue
tutelado tambin por Bustos Tuler, quien me proporcion el primer material
bibliogrfico que conoc sobre esta materia, y quienme puso en contacto con la
doctora Sanmartn Bastida.Asquemisprimeras palabrasde agradecimientoson
para l: sin su riguroso asesoramiento y positivos nimos, difcilmente habra
tomadoladecisindeiniciarlapresenteinvestigacin.
Tras finalizar el Mster de Literatura, contact con la doctora Sanmartn,
quienmerecibiamablementeensucasa.All,durantetodauna maana,estuvo
hablando con entusiasmo acerca de las visionarias de la Edad Media y el
Renacimiento, asuntosobreel que estabatrabajando enaquelmomento,yme hizo
variaspropuestasde temasparamitesis,entrelos quehabldelaposibilidadde
realizarunmonogrficosobreSorJuanade laCruz.Desdeentonceshastahoy, la
doctora Sanmartn ha sido el principal apoyo en la realizacin de este trabajo y
paraellaesmimayoragradecimiento.Ledebotodomireconocimientotantopor
sulaborintelectualcomo por suvalorpersonal.He disfrutado yaprendidoconsus
trabajosycharlas, que han sidounade las principales fuentes deinspiracin demi
investigacin. Me ha ayudado a reelaborar y mejorar mis trabajos, que ha
corregido siempre con rigor, y sobre los que ha apuntado valiosas aportaciones,
mehaorientadosiempreconelcorpusbibliogrficoymehaayudadoa corregirla
puntuacinde laedicinde la Vida deSorJuana.Conella heaprendidounanueva
manera de entender la Literatura, y estoy segura de que por muchos aos que
pasen, siempre la reconocercomo mimentora. Solo mequedaagradecerleuna
vezmslapacienciainfinitaquehatenidoconmigoysugenerosidaddesbordante.
5
Me gustara tambin incluir en mis agradecimientos al doctor Garca
Andrs,porsuamabilidady,principalmente, porsulaborenla difusindela obra
de Sor Juana, ya que sin su edicin de los sermones, la realizacin de esta tesis
habrasidomuchomscompleja.
Tambinquerra agradecer a todos los profesores quehan influido en mi
vidaacadmica, especialmente a lvaroAlonso,cuyasinspiradorasclaseshicieron
que cambiarael rumbo demisestudios depostgradoydecidiera adentrarmeenel
mundomedievalyrenacentista.
Por ltimo, me queda agradecer a todas las personas que me han
acompaadoen elterrenopersonal a lolargode estos aos. Valoroenormemente
losconsejosdeaquellosamigosquehanestadopendientesdelaevolucinde mi
trabajo acadmico y que, con sus conversaciones,me han ayudado a centrarmi
investigacin.QuieroresearespecialmenteaClaraMaras (que haseguidocada
uno delospasosde estainvestigacinconsu atencinycarioincansables),aAna
Folguera (de quien he aprendido tanto sobre la creacin de identidades), a
FernandoCastillo(porlapasinconlaquesiempremehahabladodelsigloXV)ya
MiguelSnchez(portodoloquemeensesobreteatro medievalcuando trabaj
conlenConsiliaMvsicorum).
Mimarido,lvaro Pastor, meha demostradounavezmsquees elmejor
compaero que existe: le agradezco su fe inquebrantable enm, sus nimos, su
inters en mi trabajo, y toda la ayuda que me ha prestado, en lo etreo y lo
terreno.Meresultaimposibleresumirenunas lneastodoloqueherecibidodela
lolargodeestosaos.
Amisamigosdesiempre:a Jos,Estrella,Almudena,Alejandra,Alicia,Ins,
Vernica,Ulises,y,muyespecialmentea Gabriela(quetienelo mejor deunaamiga
y deunahermana),lesagradezcoquehayanestado tan presentes tambinenesta
etapa de mi vida. Asimismo, quiero agradecer a mis compaeros y amigos del
Colegio Estudio todos los ratos que han encontrado (entre rifirrafes con
adolescentes y exmenes) para preguntarme por la evolucin de la tesis; entre
ellos, no querra dejar de nombrar de manera individual a Ginebra, Eduardo,
Manuel,Teresa,JosCarlos,Lucay Elena,quemehananimadosiempre,yme han
acompaado especialmente en estos ltimos meses de este trabajo. Un
agradecimiento especialmerecemi familia: a mihermanaRoco le agradezco su
6
apoyoincondicionalytodalaayudaquemehaprestado enelprocesofinaldemi
trabajo,a mipadresuintersenlasmsticas,susconstantesnimos,ycadaviaje
que, junto con mi ta Gloria, ha hecho a la Facultad para ayudarme con la
burocracia, cuandoyo nohe podidohacerlopormi trabajo,amimadreyaCarlos
su cario y todos los esfuerzos que han realizado para que yo haya podido
estudiar, a Pablo sus alegres nimos y sus correcciones, y a mi familia poltica:
Rosa, Rafael yNacho, les agradezco su apoyo y el inters que han puesto enmi
trabajo,comosieldeunhijosuyosetratara.
7
NDICE
RESUMEN. 13
Introduccin
Objetivosdeltrabajo
Conclusionesyresultados
SUMMARY.. 19
Introduction
Objectives
Conclusionsandresults
INTRODUCCIN... 23
1.SorJuanaylosestudiossobresufigura:estadodelacuestin
2.La devocin femenina hispnica y sumarco continental: un campo de
estudioenauge
3.Objetivosymetodologadelainvestigacin
4.Estructuradeltrabajo
I. EL MODELO DE SANTIDAD DE SOR JUANA.. 37
1.Redaccinyescrituradeunavida
2.Juanacomosantaviva
3.LafuncinsalvadoradeSorJuna:elnacimientodelasanta
4.Juanaensuentornofamiliar
5.Elvestidodecaballeroylaambigedadgenrica
6.ElngelcustodioylaVirgenMara,compaerosyprotectoresalolargode
todaunavida
7.Elcaminodelbeaterioalenclaustramiento
8.Laactividadpoltica:enloslmitesdelacondena
9.Elprocesotruncadodebeatificacin
II. EL AYUNO Y EL BANQUETE CELESTIAL: Los alimentos en la biografa
y la obra de Juana de la Cruz.. 83
9
1.Laconfiguracindelmodelofemenino
2.Laabstinenciaenlatierra:elsentidodelapenitencia
2.1. Larenunciaenlainfancia
2.2. Lapenitenciaextremaylafuerzadelayuno
2.3.Elayunoylasexualidad
2.4. Penitencia personal y ayuda comunitaria: el cuidado de los
enfermos
3. Laeucarista
4. Los alimentos del Cielo, las imgenes de alimentacin en el Libro del
conorte
4.1.Elbanquete
4.2.Cristocomoalimento
4.3.Escenascelestialesdelactancia
III. LA REPRESENTACIN DEL DOLOR CORPORAL. 131
1.Larecreacindeunmodeloyloslmitesdelosestudiosbiogrficos
2.Elcuerpoallmiteenlapenitencia
2.1.Elterceroylaconfiguracindelpblico
2.2.Larevelacinperformativa
2.3.ElinstrumentodeDios.Lapalabraylaautojustificacin
2.4.LavivenciadelaPasin.Losestigmas
2.5.Eldeseodeenfermedad
2.6.Laintercesin
3.EldolorenelCielo:lasescenasdelaPasinenlossermones
3.1.Eldeseoerticoylaambiguacindelgnero
IV. TEATRO Y TEATRALIDAD EN LAS VISIONES DE SOR JUANA 183
1.Introduccin:loteatralenlossermones
1.1.Orgenesdelteatromedieval.Problemasdelaacotacin
1.2.Elteatroylaliturgia.Unorigendiscutido
10
1.3.Teatroyactividadesparateatrales
2.Lateatralidadcomomododerepresentacin.
2.1.Elteatrodelacelda:SorJuanacomointrpreteycreadoradeun
textoteatral
2.2. Lavozenlaconcepcindeltexto
2.3. Lasvocesenlacelda
2.4. Lagestualidad
3. Laseparacindeltiempo:elviajecolectivoalCielo
4. EltiempoenelMsAll
5.Lacreacindelespacio
5.1.ElplanodelCielo:unaciudadmedieval
5.2.Afuerasdelaciudad:laNuevaJerusalnyelrboldelavida
5.3.Creacindefiguras:teatrosefmeros
5.3.1.Unapuertaangosta
5.3.2.Lasescaleras
5.3.3.Lasgradas
5.3.4.Lassillas
5.3.5.Lasiglesiasylaspiedras
5.4.ElInfierno
5.5.ElpblicodelCielo
6.Laautorrepresentacindelosactores:atrezoygestualidad
6.1.Elatrezo
6.2.Lagestualidad
7.LasbestiasdelCielo
8.Lasfiestasespontneas:procesionesydanzas
8.1.Latradicindelasprocesiones
8.2.Lasdanzas
8.2.1. La presencia de la danza en la tradicin cristiana y su
inclusinenlasfiestasdelCorpusChristi
8.2.2. Los bailes del Libro del conorte. La influencia de lo
cortesano
8.2.3.Elsignificadodeladanzaenlossermones
8.2.3.1.Losbailesindividualesysusignificado
11
8.2.3.2.Lasdanzasconanimales
8.3Lamiliciacelestialylosjuegoscaballerescos
CONCLUSIONES: Sor Juana de la Cruz: la devocin construida para el
Otro.. 293
BIBLIOGRAFA.. 303
1.Bibliografaprimaria
1.1.Manuscritoscitados
1.2.Biografasimpresas
1.3.Obrasdeteatro
1.4.Obrasdecanonizacin
2.Bibliografasecundaria
ANEXOS. 325
ANEXO I: Vida de Juana de la Cruz........................................................................... 327
ANEXO II: Auto de la Asuncin .......................................................................... 557
ANEXO III: Imagen del libro de la Vida.. 569
ANEXO IV: Imagen del Libro de la casa.. 571
12
ANEXOS
ANEXO I: Vida de Juana de la Cruz
Comiena la vida y fin de la bienaventurada virgen sancta Juana de la Cruz
Captulo 2: Como siendo esta bienaventurada de hedad de siete aos qued hurfana
de su madre
Captulo 3. Como esta bienaventurada virgen busc manera para ser
religiosaCaptulo 4. De como esta bienabenturada comulgava spiritualmente
Captulo 5. Como esta bienabenturada tena graia de ver y or las cosas ynvisibles e
que muy lejos acahazan
Captulo 6. De como estabienabenturada estuvo un tiempo muda antes que le fuese
dada la graia de hablar el spritu por su lengua
Captulo 7. De cmo priv el seor por algunos tiempos el sentido del or y por qu
causa a esta sancta virgen
Captulo 8. De una revelain que esta sancta virgen cont dando consejos a sus
monjas
Captulo 9. De una revelain que le fue mostrada a esta sancta virgen de un
hermano
Captulo 10. De una revelain que a esta bienaventurada le fue mostrada
Captulo 11. De iertos avisos que el Sancto Miguel dio a esta bienaventurada
Captulo 12. De una pltica que el sancto ngel tuvo con esta bienaventurada aerca
de su enfermedad
Captulo 13. De los misterios y duledumbre que el da sancto del domingo manan de
la sancta cruz
Captulo 14. De una revelain que esta bienabenturada le fue mostrada aerca de un
nima
Captulo 15. De cmo quitaron de abadesa a esta bienaventurada y qu fue la causa
Captulo 16. De cmo esta bienabenturada estava muy congojada pensando en sus
tribulaiones
Captulo 17: Cmo, estando elevada esta bienabenturada, cont al sancto ngel su
guardador que hava reprehendido y angustiado a sus hermanas, las religiosas, por
la porfa que tenan de quererla por abadesa
13
Captulo 18. De cmo esta bienaventurada hizo una pregunta a su sancto ngel
Captulo 19. De otras preguntas que esta bienabenturada hizo a su sancto ngel
Captulo 20. De una congoxa que spiritualmente tuvo esta bienaventurada
Captulo 21. De la gran caridad con que esta bienabenturada rog al Senor por la
salvain de la religiosa que hava sido causa de su persiguimiendo, a la qual tena
por abadesa
Captulo 22. De una revelain que estra bienabenturada vido estando enferma
Captulo 23. De cmo esta bienabenturada vido a Nuestra Seora y a su preioso hijo
Nio Jesuchristo en spritu da de la Epifana
Captulo 24. De la ayuda que tenan las personas ausentes de esta sancta virgen
viviendo ella en la carne
Captulo 25. De una pregunta que esta bienabenturada hizo a su sancto ngel
tocante a los ngeles
Captulo 26. De una revelain que vido esta bienabenturada tocante a una imagen
Captulo 27. De una habla que esta bienabenturada tuvo con Nuestro Seor, estando
en oracin
Captulo 28. Cmo fue servido Nuestro Seor de llevar a esta bienabenturada a su
sancta gloria
ANEXO II: Auto de la Asuncin
ANEXO III: Imagen del manuscrito de la Vida
ANEXO IV: Imagen del manuscrito del Libro de la casa
14
RESUMEN
Introduccin
SorJuanadelaCruz(14811534)fuelaabadesadelacomunidadde Cubas
de la Sagra. A lo largode toda su vida, la beata vivi una intensa espiritualidad,
marcadaporunosarrebatosvisionarios enlosquedeclamabaunossermonesque
seran transcritos por una compaera y agrupados en una obra, que llevara el
ttulodelLibro del conorte. Enesamismapoca,seescribiellibrodelaVida,que
recogela semblanza biogrficayespiritual deSorJuana. A pesardelastentativas
debeatificacindelareligiosa,elprocesoiniciadoen1610quedtruncado,pues
loscensoresconsideraronquelaobratenavariospasajesdeunanaturalezapoco
ortodoxa.
Los estudios de la obra y la figura de Sor Juana de la Cruz presentan al
investigador una aproximacin feminista, historicista y teolgica. Este trabajo
pretendeprofundizaren eluniverso creador deSorJuana, analizandoelLibro del
conorte como un texto literario y contextualizando a la religiosa en un marco
europeo.
Objetivosdeltrabajo
El primer objetivo de la presente tesis es enmarcar a Sor Juana en el
contexto de lamstica europea. Consideramos que todava queda un importante
trabajoderevisindelcanonhispnico,quesigueencontrndosedesvinculadode
unaperspectivamsglobalizadora queenmarquelostestimoniosrecogidosdentro
deunmarcocontinental.Estedescuidohaprovocadosimultneamentequeen los
estudios de carcter europeo se haya olvidado frecuentemente la presencia de
estas visionarias y msticas, considerando que dicho fenmeno no tuvo la
suficienterelevanciaenlaPennsulahastalaaparicindeTeresade Jess.
Un segundo objetivo de este trabajo es estudiar los procesos de
construccindeidentidaddeSor Juanacomovisionaria,sindescuidarlacondicin
demujerde Sor Juana.No obstante, partimosde lapremisade queestacondicin
degneronoexponea lareligiosa a unavisindicotmicadelmundoentendido
15
como un espacio en el que el papel de la mujer habra quedado reducido a una
reivindicacin de su gnero dentro del sistema patriarcal dado. Para ello nos
serviremosdeuncorpuscrtico,quehaestudiadolaliteraturamsticayvisionaria
femenina destacando los elementos que unen sus revelaciones y relatos
biogrficosyquehaprocuradosepararse deundiscursocontemporneodelrolde
lamujer.
Nuestro anlisis tendr como tercer objetivo principal recrear los gestos y
voces con que Sor Juana profiri su discurso visionario, y que fueron en gran
medidalosresponsablesdequelareligiosafueseaprobadaporsuaudienciacomo
una verdadera visionaria. Nos interesa, por tanto, atender a los actos que se
describen en su biografa para recrear elteatro del tranceque represent Sor
Juana,perotambindeberemosprestaratencinalossilenciossignificativosdela
obra y a las autocorrecciones que la beata llev a cabo, pues de ellos podemos
inferirlaatencinquelareligiosa pusoalasociedadquelacircundaba.
Conclusionesyresultados
A lo largo de este estudio, hemos definido la identidad sobre la que se
construyeestareligiosa comopersonajepblicoycomoautoradesussermones.
Las obras de revelaciones tratan de una experiencia personal y, por lo tanto, en
ellascobraunaespecialrelevanciasupropiavoz.Latesisquese hadefendidoen
este trabajo es que esa voz expresada no parte siempre de una necesidad de
reivindicar el reconocimiento de la religiosa como mujer, sino como visionaria.
Precisamente la conciencia de las consideraciones intelectuales y sociales que
tanto denostaban su sexo, lleva a muchas de estas mujeres a configurar un
imaginarioenelqueelgneroquedadesambiguado,demaneraqueestedejade
serunrasgodeidentificacindelospersonajesydesmismas.
En esta tesis, nos hemos servido de un aparato crtico centrado en los
estudios que pretenden desvelar los procesos de creacin artstica. Entre los
estudios de los que nos hemos valido, destaca la teora de la performatividad.
Atender a la puesta en escena en esta literatura nos permite, antes que nada,
comprenderla realidaden laquela obrafuecreada,sinla cual,nuncallegaremosa
entender el significado completo del texto. Es por ello, que la atencin a la
16
ejecucin del trance nos ha permitido comprender los textos de las visionarias,
puesestossonel resultado ltimode una vivenciacolectiva, en laquela religiosa
arrastraun grupo deindividuos que,guiadosatravs dela contemplacindesu
trance,pudieronasomarsealCieloqueellalespresentaba.
Unadelascuestionesquemsnoshainteresadoenelcaptuloprimeroha
sido el estudio de las sanciones. Como ya ha quedado sealado, el modelo de
visionaria haba gozado de un importante reconocimiento durante la Baja Edad
Media; sin embargo, este xito fue decayendo hasta el siglo XVII, en el que las
visionesseconvirtieron enunsinnimodeembrujamiento.Conformelavigilancia
se fue extremando durante la primera mitad del siglo XVI, Sor Juana se vio
impelidaamoderartodamanifestacindesantidad.
Dentro de esas autocorrecciones, hemos prestado especial atencin a la
cuestinde losestigmas.Seha insistidoenque laespiritualidaddeSor Juanase
encuentraenmarcada dentro delmovimientodeladevotiomoderna,preocupado
porexplotar losbeneficiosdeuna religiosidad afectiva,queexplorase terrenosque
la espiritualidad centrada en el conocimiento terico de la Teologa habra
descuidado. Entre los rasgos ms significativos de esta religiosidad se halla la
imitatioChristi,quetuvounhondocaladoentrela comunidad franciscanayquese
convirtienunadelas seasdeidentidaddeestasmujeres.
Hemosobservado comoesemodelode santidadenel que se inscribeSor
Juana,llevabarecorriendoEuropadesdeelsigloXIIIconejemplosdereconocidas
visionarias como Hildegarda de Biengen, Matilde de Magdeburgo, Juliana de
NorwichoCatalina deSiena, quienesseconvirtieron enelidealquepersiguiSor
Juanaytambinenelmodeloquesuscontemporneosy posterioresadmiradores
tuvieroncomo referente.Entrelosinspiradoresdeesemodelo, hemosdestacadola
figuradeCisneros,queencarglatraduccindelasobrasdengela deFoligno y
Catalinade Siena, obras quedebieron calar en el imaginario colectivo y que, sin
duda, despertaron el deseo de conocer a una autntica visionaria entre los
hombres y mujeres de la poca. Ante los observadores anhelantes, la religiosa
realizaun alardede desprendimientodetodo loterrenalatravsdeunadevocin
basadaenladesmesurapiadosa.
Entre estos excesos, nuestra atencin ha reparado en primer lugar en la
tormentosarelacin deSorJuanaconla comida, pues, larenunciaalosalimentos
17
cotidianos se haba convertido en una marca probatoria de santidad. Adems,
graciasaesesacrificioescapazdemoldearsucuerpoy transformarloenunente
quevisualmentese diferenciadel resto,rasgo quetambinesunadelosatributos
unificadoresdeestecolectivodemujeres.
Sin embargo, el mayor esfuerzo en cuanto a la actuacin lo hemos
encontrado ensurepresentacindelteatrodeltrance,conelquedefinitivamente
convencer a losobservadoresdequeseencuentrananteunaautnticavisionaria.
La religiosa se entrega a la persuasindel pblico y a este arte se hace especial
referenciaen losepisodiosquerecogensusprimerosarrebatos. Sehadefendido
queelreceptorprimerodemuchasdelasrevelacionesesunpersonajecolectivo, el
delascompaeras dela celda,queestnsiempre presentes enlasaccionesdeSor
Juana dentrode lacomunidadyen sudiscurso visionario. Hemos justificadoque
Sor Juana debe ser consciente de la efectividad en la representacin del trance,
pues aplica las mismas tcnicas que pondr a ejecutar a los personajes de sus
sermones.
Tambinhemosreflexionadosobrelaposicindelabeataenlasociedadde
sutiempo. Sibienes ciertoqueSorJuanano particip deuna maneraactivadentro
de las instituciones terrenales, s reivindic de manera insistente su favorecida
posicinentrela jerarqua celestial.Poreste motivo, elPurgatorioseconvierteen
unodelosescenarios predilectos desusrevelaciones,puesellarecibeelprivilegio
de interceder en la salvacin de sus almas. Como ha quedado justificado en el
primer captulo de esta tesis, la reivindicacin de la Virgen Mara encierra el
propsitoltimodevalidarlaautoridaddelavisionaria.Peroadems,la figurade
laVirgenlesservirparaexpresarsusdeseosafectivosa travsdela expresinde
lamaternidad.
En el amplio apndice que cierra esta tesis, se ha transcrito el fascinante
librodelaVida,queseconservainditoenlaBiblioteca delRealMonasteriode El
Escorial.
Elpresente estudio haabiertonuevas perspectivasen lainvestigacindela
vidayobra delasvisionarias, aplicando unaparatocrticoque,hastaelmomento,
noha sido suficientemente considerado entrenuestros estudios sobre lamstica
hispnica. Confiamos en que la presente tesis sirva como punto de partida para
nuevas lecturas que nos permitan entender mejor el fenmeno de la literatura
18
visionaria que tuvo un hondo calado en la Historia de nuestra literaturamucho
tiempoantesdequeaparecieralafiguradeSantaTeresadeJess.
19
SUMMARY
Introduction
Sor Juana de la Cruz (14811534) was the abbess of the community of
CubasdelaSagra.Duringherlife,thebeata(laysister)livedanintense spirituality,
markedbyvisionary raptures inwhich shedeclaimedsermons.Herwords were
transcribed by a colleague and compiled in the Libro del conorte. At that time, a
biographical and spiritual sketch of Sor Juana, titled la Vida, was also written.
Despiteattemptsatbeatifyingthereligiouswoman,theprocess initiatedin 1610
was frustrated because censors considered that herworks included episodes of
unorthodoxnature.
The studies of theworks and life of Sor Juana have been addressed from
feminist,historicistandtheologicalperspectives.Thisthesisaimsatunderstanding
thecreativeuniverseofSorJuanamoredeeply,analysing the Libro del conorteas a
literarytextandcircumscribingherfigureaspartofaEuropeanmovement.
Objectives
The first objective of this thesis is setting Sor Juana in the context of the
Europeanmysticism.An importantworkof revisionof theHispaniccanon is still
pending.Inparticular,effortsshouldbedevotedatplacingit within acontinental
framework. At the same time, this inattention has provoked that studies at
Europeanlevelhad frequentlyforgottenthepresence ofourvisionaries, assuming
thatthis movementdidnothave relevance enoughin the PeninsulauntilTeresa de
Jess.
A second objective is trying to understand the processes of identity
construction in Sor Juana as a visionary, without neglecting her womanhood.
Nevertheless,we assume that thisgender condition doesnot create in thenuna
dichotomousvisionoftheworldinwhichtheroleofwomenisfocusedinasserting
themselves withinthegivenpatriarchalsystem. Inthisapproach,we will relyon
an innovative critical toolbox, which has investigated feminine mystic literature
underlying thelinkagesbetweentheirrevelationsandbiographiesandwhichhas
intendedto breakawayfromthecontemporaneousfeministspeech.
21
The third main objective of this analysis is to recreate the voices and
gestures with which Sor Juana uttered her visionary speech. Thanks to her
oratoricalproficiency,thereligiouswomanwasregarded byheraudience asatrue
visionary.Weare,therefore,interestedintheactionsdescribedinherbiographyto
recreatethetrance theatrerepresentedby Sor Juana.Butwe will alsodeal withthe
meaningful silences in her work and with the selfcorrection in her behaviour,
giventhattheseallowustoinfertheattentionthebeata payedtothesocietyshe
livedin.
Conclusionsandresults
In our research, the identity of this religious woman both as a public
personality and asauthor ofherownsermonshasbeendefined. Beingapersonal
experience, revelations enhance the relevance of the own voice. This thesis has
claimed that this voice ismostly aimed at vindicating the role of the beata as a
visionary, and not so much as a woman. The consciousness of the social
underestimationofwomenispreciselytheirdriverfordisambiguatinggender,so
thatthelatterisrarelyusedasafeatureforidentifyingcharactersorforasserting
themselves.
Throughoutourwork,acriticalapparatushas beenappliedsoastounveil
the processes of artistic creation. Among the approaches adopted, the
performativity theory stands out. Paying attention to trance staging helps us in
understanding the background in which theworkwas created. In turn, that has
allowed us to perceive the complete meaning of visionary texts, which are the
result of a collective experience. Through the contemplation of her trance, the
religiouswomanguidedheraudiencetotheHeavenshewaspresentingtothem.
Sanctionshasbeenoneof the central issues in chapter one.Thevisionary
model had enjoyed wide acclaim during the Early Middle Ages. However, this
success progressively decayed until the 17th century, in which visions became
synonym to witchcraft. As Inquisitorial watchfulness intensified during the first
halfofthe16thcentury, Sor Juana tendedto moderateherexternal manifestations
ofsanctity.
Amongsignsof selfcorrection, the focushasbeenon stigmas. Ithasbeen
observed how Sor Juanas spirituality is framed within the movement of the
modern devotio, concernedwith exploring the benefits of affective religiosity. A
22
prominentfeatureinthisapproachistheimitatio Christi,whichhaddeepinfluence
intheFranciscancommunityandwhichbecameasignofidentityofthesewomen.
IthasbeenshownhowthemodelofsanctitytowhichSor Juanabelongshad
been going on in Europe since the 13th century, with examples of renowned
visionaries likeHildegardof Bingen, Mechtildof Magdeburg, JulianofNorwichor
Catherineof Siena,whichweretheidealthatSorJuanapursuedandalso the model
thathercontemporariesandsubsequentadmirersusedasabenchmark.Probably
the most influential inspirer of this model was Cisneros, which ordered the
translation ofthetextsof Angelaof Foligno and ofCatherine ofSiena, workswhich
presumablyhada deep impact in the collective imaginary. In the samevein, Sor
Juanaattractedeagerobservers, infrontofwhomsheshowedherdisconnectionof
worldlylifethroughadevotionfoundedonpiousexcess.
In dealing with those excesses, our research has focused on the
tempestuousrelationshipofSor Juanawithfood,sincefasting had becomeaproof
of sanctity. Moreover, thanks to this sacrifice, she is able to mould a visually
distinctbody.Thisisanotherunifyingattributeforthisgroupofwomen.
Nevertheless, we have found that the greatest effort in staging is her
representation of the trance theatre. In her performance, the religious woman
dedicatesherselftopersuadethepublicthattheyare witnessinga truevisionary.
It has been argued that the first recipient of most revelations is a collective
character, the cell colleagues, who are always in Sor Juanas activities in the
communityandinhervisionaryspeech.Wehaveconcludedthat SorJuanamust be
conscious oftheeffectiveness ofthetrance representation, given that characters in
hersermonsapplythesametechniques.
Wehavealsoreflected uponthepositionofthebeata inthesociety ofher
time.While it is true that Sor Juana did not get actively involved in theworldly
institutions, ithasbeen showedthatsheinsistentlyclaimedforherselfafavoured
positionin the heavenlyhierarchy.Forthat reason, the Purgatorybecomesoneof
the preferred settings for her revelations, since she receives the privilege of
interceding in soulsalvation.As hasbeenprovedinchapteroneof thisthesis,the
defence of theVirginMary aims at validating the authority of the visionary. But
additionally,thefigure oftheVirginisusedto expressheraffectiveneedsthrough
theimageofmaternity.
23
In the long annex at the end of this thesis, the book of la Vida has been
transcribed. It is kept, unpublished, in the library of the Real Monasterio de El
Escorial.
Asa conclusion,thisstudyhasopenednewavenuesfortheresearch inthe
lifeandworkofvisionaries, applyingan innovative critical apparatus,whichhas
beenbarely considered in investigations abouttheHispanicmysticism.Our hope is
that this thesiscouldbe usedas a startingpoint fornewreinterpretationsofthe
visionarytexts,whichhavehaddeepinfluenceintheHistoryofourliteraturelong
beforethefigureofTeresa de Jessemerged.
24
INTRODUCCIN
1. Sor Juana y los estudios sobre su figura: estado de la cuestin
Sor Juana de la Cruz (14811534) es una figura que despert inmenso
intersentreloshombresdesutiempoy aunenlosdesiglosposteriores.Fuela
abadesadelacomunidaddeCubasdelaSagra,yestuvoestrechamenterelacionada
con el cardenal Cisneros, quien influy en su vida espiritual y en el devenir de
dicha comunidad. A lo largo de toda su vida, la beata vivi una intensa
espiritualidad,marcadaporunos arrebatosvisionariosqueseconvirtieronenun
espectculo pblico al que asistieron tanto las religiosas de la comunidad como
numerosos seglares, llegados hasta all para contemplar en primera persona los
afamados trances de esta mujer. En estos arrebatos, Sor Juana mostraba una
prdidade lossentidosquedabapasoalaposesindesucuerpoporpartedela
divinidad,momentoenelquedeclamabaunossermonesqueserantranscritospor
unacompaerayagrupadosenunaobra,quellevaraelttulodelLibro del conorte.
En la poca en la que se compuso este libro, o al poco tiempo del
fallecimiento de la religiosa, se escribi el libro de laVida1, que recoge la
semblanza biogrficayespiritual deSor Juana, y cuyaredaccinseatribuyeasu
compaeradebeaterio,MaraEvangelista.Esta biografafuelabase deposteriores
reelaboraciones barrocas (entre las que debemos destacar las de Daza [1610,
1613]y Navarro[1622]),enlasqueseintentarondifuminaraquellosaspectosque
pudiesen poner en peligro el proceso de beatificacin de la religiosa, que fue
iniciadoenRomaen1610.Noobstante,apesardeestastentativas,esteproceso
quedtruncado,puesloscensoresconsideraronquelaobratenavariospasajesde
unanaturalezapocoortodoxa.En 1986se reanudelintento,peronoseconsigui
labeatificacin,quehavueltoaconsiderarse enelVaticanoestemismoao2015.
1 De la siguiente afirmacin de su biografa: dur esta graia de hablar el Spritu Sancto en esta bienabenturada treze aos; la qual le vena algunas vees, entre da y noche, dos vezes, y esto no haviendo tornado en sus sentidos entre la una vez e la otra, e otras vezes al terer da, e otras vezes a quatro das e a ocho e quine, como hera la voluntad de Dios, mas las elevaiones e arrobamientos tena siempre da y noche, e desde su niez hasta que Dios la llev desta presente vida (Vida: 30r) puede conjeturarse que la obra se compuso tras la muerte de la religiosa, luego, el texto debi ser escrito tras el ao 1534.
25
Sin embargo, a pesar de los avatares de este proceso, Sor Juana fue
consideradaunaverdaderasantatantoporsuscoetneos comoporlareligiosidad
populardesiglosposteriores, talcomolodemuestraeltratamiento querecibeen
lasdiferentesproduccionesliterariassobresu personay lasvisitas querecibi su
tumba:encuantoalprimeraspecto,a lasbiografasbarrocasmencionadas, se le
suman tres comedias del mismo periodo, entre las que destaca una triloga de
TirsodeMolinayunosversoscompuestosporelclebreLopedeVega2.
Sor Juana de la Cruz ha seguido despertando curiosidad entre los
contemporneos,ysufigurahasidotratadatantoen elmbitoacadmicocomoen
canalesdedifusindivulgativa(comopruebalarecienteaparicin deunartculo
sobrelavisionariaenlarevistadominicaldeEl Pas [Iwasaki,2015]o sumencin
en el santoral queer, que aborda los relatos hagiogrficos representativos del
colectivoLGBT).
Losestudiosdegnero,nacidosen losaos60yacentuadosen ladcada
posterior en el campo de las Ciencias Sociales, han abierto diferentes lneas de
investigacin,queseplanteanlaconstruccin delasubjetividadfemeninaapartir
de la posicinde las mujeres en lasestructurasde la sociedad patriarcal.Dichos
estudiosse fueronampliandoapartirdeperspectivasdediferentesteorascomo
elpsicoanlisis,quehantenidocomounodelosprincipalesfocosdeatencinlas
creaciones de identidades, tanto personales como sociales y culturales. Desde la
dcada de los 80 han eclosionado las lecturas feministas, que nacieron con la
intencin de reelaborar elcanon tradicionalliterario3,en elquesehabasilenciado
la produccin de textos escritos por mujeres, y que hanmostrado un deseo de
definir los rasgos de la literatura femenina (interpretacin que ha llegado con
bastantefrecuenciaalaconclusindequelaliteraturafemeninaes,en esencia,una
literaturaquehabla desdeladiferenciaytratadeladiferencia[Moi,1999:118]).
Losprimerosestudiosqueatendierona lafiguradeSorJuananacieronala
luzdeestas lneasdeinvestigacin;entreestos,sobresaleeltrabajomonogrfico
2 La fama de santidad rebas los lmites de las fronteras nacionales y lleg a lejanos territorios, como Hispanoamrica o Japn, a travs de la devocin por las cuentas de rosario de la religiosa que inculcaron los misioneros franciscanos (Corts Timoner, 2004: 17). 3 En este sentido, resulta interesante reparar en las relaciones establecidas en las ltimas dcadas entre el mundo acadmico humanista e instituciones de carcter tradicionalmente social, como el Instituto de la Mujer, que en muchas ocasiones han financiado proyectos de investigacin que han permitido releer el canon cultural clsico.
26
de Ronald Surtz,The guitar of God (1997), publicado en 1990, que estudia en
diferentessermonesyepisodiosde labiografadeSor Juana lasestrategiasde la
visionaria, que, a ojos del estudioso, busc con sus escritos y con su actividad
mstica independizarse de los hombres encargados de tutelarla y controlar su
poder4. La intencin de visibilizar a las mujeres e incluirlas en el canon de la
Historiadelaliteraturaquedamarcadadesdeelcomienzodela investigacindel
crtico:
Segn la historiografa literaria tradicional eran pocas las escritoras en la
Espaa de a EdadMedia y del Siglo de Oro. Slo unas cuantas escritoras
medievales sonmencionadasy, apartede casos tan egregios comoTeresa
de JessoMarade Zayas, apenas se constata la presenciade mujeresde
letras en el Siglo de Oro. Sin embargo, baste hojear Apuntes para una
biblioteca de escritoras espaolas de Manuel Serrano y Sanz para darse
cuenta de que existan centenares de escritoras en el perodo de 1500 a
1700.(Surtz,1997:23)
El hispanista estadounidense, que previamente se haba aproximado a la
religiosa en un brevsimo estudio centrado en el anlisis delLibro del
conorte (1982),continuestalneadeinvestigacinenunaobraposterior(1995),
en la que recoga a diferentes figuras femeninas religiosas, que podan
considerarsepredecesorasdeTeresadeJess5.
Algunos estudios dentro de la crtica hispnica prosiguieron esta lnea de
investigacin, entre losque sobresalen varios trabajos deMuozFernndez,que
dedica un captulo a Sor Juana en su obra Beatas y santas neocastellanas:
Ambivalencias de la religion y politicas correctoras del poder (ss. XIVXVI) (1994),
trabajoqueestudiael fenmenode losbeaterioshispnicos comounmodelode
religiosidad independiente de las estructuras patriarcales. La misma autora
4 Como veremos, esta atribucin de un rol social poderoso a travs del discurso mstico ha sido otro de los temas que ms inters ha despertado en la crtica contempornea encargada del estudio de estas mujeres (vase Manzzoni 2005, Beverly 2005). 5 El apunte comparativo entre la obra de Sor Juana y la de msticos posteriores es un lugar comn, que se ha apuntado en otros estudios, en los que se ha sealado que en la obra de Sor Juana pueden localizarse motivos que anuncian la literatura de San Juan y Santa Teresa de Jess (Corts Timoner, 2004: 16).
27
escribiunartculosobreelmasculinogenricoenelLibro del conorte, incluidoen
Impulsando la historia desde la historia de las mujeres (2012) y sobre las
identidades genealgicasfemeninasenlossermonesdelareligiosa(2014). Enuna
misma lnea,debemosresearla labor deGraaCid, especialmentesuartculoLa
feminidaddeJesucristoysusimplicacioneseclesialesenlapredicacinmsticade
Juanadela Cruz(2009),enelqueplanteaelvnculoexistenteentrelaimaginera
agenricadelCristode lossermonesdeSorJuanay lacreacin deuna identidad
dotadadeautoridadporpartedelavisionaria.
LasobrasdeSurtz(1982,1997)editabanalgunosfragmentos tantodelLibro
del conorte como de laVida y elLibro de la casa6, comoposteriormentehara la
brevemonografadeCorts Timoner(2004),quefacilitabanelacercamiento alos
textos dela religiosa.Como sealabael propioSurtz, laedicindeestostextosera
imprescindiblepara que seprodujesela difusindelpersonaje, yaqueaellos les
sucedalomismoquea lasobrasdeotrasescritoras,monjasensumayora,(que)
nuncasepublicaronyhastahoysonasequiblessolamente enmanuscritos(Surtz,
1997: 23). No obstante, la labor de difusin de la obra de Sor Juana se debe,
principalmente, a la edicin ntegrade sus sermones7 (1999) llevada a cabopor
GarcadeAndrs,publicacinquerecogeeltrabajodesutesisdoctoral(1991)8.
El conhorte: sermones de una mujer. La santa Juana (14811534) incluye,
adems de la edicin de los sermones, una introduccin, de la que debemos
destacar lasapreciaciones teolgicas sobre laobra y el estudiode la suerte que
corrielprocesodebeatificacindelavisionaria(trabajoqueyahabacomenzado
enunbrevemonogrficosobrelareligiosa [GmezLpez& GarcaAndrs,1982]).
Estainteresantecuestinnossitaenelmarcodelaespiritualidaddelapoca, en
la que empieza a palpitar la heterodoxia de los alumbrados, contextualizada y
descritaenelimprescindibleestudiodeBataillon,Erasmo y Espaa (1998).
En este sentido, resulta muy interesante la interpretacin de Haliczer
(2002),queapuntaalgunasdelasestrategias seguidas porSorJuanaparasortear
6 En su obra de 1982, en la que transcribe el Auto de la Asuncin, seala la relacin de algunos elementos temticos que aparecen en la representacin y en el Libro del conorte. 7 El manuscrito editado se encuentra en la Real Biblioteca de El Escorial (Ms. JII18). 8 Si bien esta tesis doctoral no sigue la interpretacin feminista propuesta en los estudios citados previamente, tiene muy presente el gnero de la religiosa, anunciado desde el propio ttulo: Una mujer en la Iglesia: La Santa Juana (1991), como hara igualmente el trabajo coetneo de Mara Trivio (1999) Mujer, predicadora y prroco. La santa Juana (14811534).
28
la condena inquisitorial. No podemos olvidar el contexto de la mujer vigilada
(Giles, 1990; Timoner, 2002), en el que se contextualiza esta biografa, pues en
tiemposdelafranciscanasefue complejizando y recrudeciendoelpoderrepresivo
de la Inquisicin.Desde finalesdel sigloXV, comenza gestarseun ambientede
persecucinycontrolsobrelasmujeresvisionarias,algunasdelascuales,ya enla
poca que nos ocupa, padecieron los estragos de juicios inquisitoriales o
eclesisticos,casodeMaradeSantoDomingo.
Elmiedo a lasancinresultaevidente enesta visionaria, encuyabiografa
continuamente se advierte la atencin dedicada al Otro observador (cuya
corporeidad seva repartiendoentreelpblicodelostrances,lossuperioresdela
orden,suspropiascompaerasy, enltimainstancia,elpropioDios). Y esqueel
modelode visionaria, alqueatendemosen esteestudio, sefue creandoapartirde
eseOtro,quepasdeser la fuerzaqueensalza lasvisionarias, en losprimeros
casos medievales, a convertirse en el brazo ejecutor de su destitucin en los
ltimos ejemplos de este modelo de mujer, cuando los arrebatos visionarios
dejaron de considerarse tanto fruto de la inspiracin divina y pasaron a
convertirseenunapeligrosasealdeendemoniamiento.
Podramosconcluir,portanto,queactualmentelosestudiosdela obrayla
figura de Sor Juana de la Cruz presentan al investigador una aproximacin
feminista, historicista y teolgica, investigaciones que, si bien han planteado
interesantesacercamientos a lacomprensindelpersonajeyde laespiritualidad
de la poca, han dejado todava importantes aspectos sin tratar. Entre estas
ausencias, destacamos la falta de unamirada ms amplia que contextualice a la
religiosa en un marco europeo (necesidad sobre la que ha alertado el estudio
Sanmartn Bastida,2012)yel pocointersprestado al Libro del conorte como un
texto literario. Cuestiones que consideramos imprescindibles para adentrarnos
ntegramenteeneluniversocreadordeSorJuana.
Por tanto, la presente tesis nace de la inquietud de ampliar el anlisis de
estabeata, y,conella, lade uncolectivode religiosashispnicasquenospermitir
contemplar conunavisindeconjuntomsampliaunmovimientofascinante dela
culturadelaEdadModerna.
29
2. La devocin femenina hispnica y su marco continental: un campo
de estudio en auge
Como venimos diciendo, el boom de los estudios de gnero ha trado
consigo un replanteamiento del canon, para cuya reinterpretacin ha sido
necesaria una bsquedade textosquealumbren larealidad femeninaeneldevenir
histrico. Dicha empresa se hace ms compleja cuanto ms nos alejamos en el
tiempo, pues la documentacin es menor, por lo que la labor primera ha sido
forzosamente la de localizacin y edicin de unos textos, que, como ya se ha
sealado, seencontrabanprcticamentetodosen fuentes manuscritas.Enelmarco
temporaly socialqueaqunosocupa,esnecesariohacerreferenciaa la labor de
investigacin realizada porautoras comoMaraMilagrosRivera Garretas (1997,
1998, 2003 a y b, 2011), Victoria Cirlot (1999, 2001, 2004, 2014), Blanca Gar
(2001,2005),GraaCid(1999,2000,2004,2011,2012,2913),MuozFernndez
(1989,1999,2007,2012)oIsabellePoutrin(1995),quieneshanrealizadoestudios
imprescindiblessobrebeatas,visionariashispnicasy europeas,y tambinsobre
mujeresseglarescomoConstanzadeCastillaoTeresadeCartagena.
Asimismo, debemos agradecer el esfuerzo realizado por proyectos de
investigacin como Bieses, dirigido por Nieves Baranda Leturio, dedicado al
estudio dela literaturade mujeres,queen elao2012dedic uninteresantsimo
congresosobreel universoreligiosobajo elttulo Escritorasentrerejas. Escritura
conventual femenina en la Espaa Moderna. Tambin desde el ao 2012 existe
dentro de la Facultad de Filologa de la Universidad Complutense de Madrid el
proyecto de investigacin I+D La construccin de la santidad femenina y el
discurso visionario (siglos XVXVII): Anlisis y recuperacin de la escritura
conventual dirigido por la doctora Sanmartn Bastida, que tiene como principal
objetivo reconsiderar la realidad del movimiento visionario medieval y
renacentistaapartir dela aplicacinde las teoras dela performatividad,proyecto
delcualsoyColaboradoraexterna.
No obstante, consideramos que todava queda un importante trabajo de
revisin del canon hispnico, que sigue encontrndose desvinculado de una
perspectivamsglobalizadoraqueenmarquelostestimoniosrecogidosdentrode
30
un marco continental9. Este descuido, motivado en gran parte por la escasa
presencia de testimonios hasta el siglo XIV (Mrida Jimnez, 2000: 158), ha
provocado simultneamente que en los estudios de carcter europeo se haya
olvidadofrecuentementela presenciadeestasvisionariasymsticas,considerando
que dicho fenmeno no tuvo la suficiente relevancia en la Pensula hasta la
aparicin de Teresa de Jess, quien, sin embargo, comparte como ya se ha
indicado, rasgos con sus predecesoras como su concepcin de la humanidad de
Cristoosurelacinconlaeucarista.
Lapresenteinvestigacintienecomoprincipalobjetivoelanlisis concreto
deestavisionaria,noeldereescribirelcanoneuropeodentrodelquese inscribe,
pues consideramosqueesuna tareaqueescapa los lmitesdelpresente trabajo.
Por ello, me gustara anticiparme a las posibles crticas que encuentren
insuficienteeldesarrollodescriptivodeesemodelo,queyahasido descritoporel
aparatocrticoalqueseremitirenlainvestigacin.
La bibliografa empleada en este trabajo podra dividirse en dos grandes
reas: por un lado, contamos con los textos directos de las visionarias europeas
msrelevantesy,porotro,empleamosunosestudiosquehan establecidoel corpus
delasmujeresquese inscribieronen esteamplio fenmeno, y hanestablecidolos
elementos cohesionadores de sus biografas y escritos (entre los que debemos
destacar la labor de Petroff [1986, 1994]), Walker Bynum [1982, 1987, 1991],
Hamburger[1998],Giles[1990],Renevey&Whitehead,[2000]).
3. Objetivos y metodologa de la investigacin
El objetivo principal de la presente tesis es estudiar los procesos de
construccin de identidad de Sor Juana como visionaria. El anlisis de esta tesis
renunciaaestudiar lafigura deesta visionariacomo elresultado deunarealidad
moldeadora(lade laortodoxiayel patriarcado)yse plantea abordaralpersonaje
desde una perspectiva que nos permita desvictimizar su historia. La presente
9 No obstante, s hay estudios que, de manera puntual, han conectado algunos aspectos de la espiritualidad de las visionarias europeas con las peninsulares. En concreto, resulta relevante para nuestra investigacin el artculo publicado por Graa Cid que ha indicado los vnculos existentes entre la espiritualidad de Sor Juana y la de Juliana de Norwich (Graa Cid, 2014).
31
investigacin no descuida la condicin de mujer de Sor Juana que, como
explicaremos, es una categora que influye de manera clara en su construccin
como visionaria y en su devocin. De hecho, en este estudio, en el que
frecuentemente recurrimosa lacomparacin de la religiosaconotrasvisionarias
previas y coetneas, acudimos frecuentemente a referentes comparativos
femeninos.Noobstante,partimos de lapremisadequeestacondicindegnero
no expone a la religiosa a una visin dicotmica delmundo entendido como un
espacio en el que el papel de la mujer habra quedado reducido a una
reivindicacin de su gnero dentro del sistema patriarcal dado10. Como alerta
Sanmartn Bastida en su estudio, que ha servido de base para la presente
investigacin, algunas lecturas sobre la literatura visionaria corren el riesgo de
reducir la vozmstica a la voz de la resistencia, incluso a la de la heterodoxia
(SanmartnBastida,2012:25).
Paraellonosserviremosdeuncorpuscrtico(eminentementeanglosajn),
que ha estudiado la literatura mstica y visionaria femenina destacando los
elementos que unen sus revelaciones y relatos biogrficos y que ha procurado
separarse deun discursocontemporneodelrolde lamujer. Los rasgosdistintivos
justificanel estudiodeestadevocincomouncorpusdiferenciadodelmasculino,
rasgospropiosque, dehecho, explicanque el fenmenomstico yvisionario sea
eminentementefemenino.Larelacinconlosalimentos,lavivenciadolorosadela
Pasin, laafectividadde sudiscurso y suelaboracindeldeseo maternalyertico,
sonalgunosdeloselementosquesehansealadocomopropiosdeestaliteratura.
Sinembargo,laOtredadqueseinfieredelaautoconstruccindelamstica
nose defineexclusivamente comounaestrategia deposicionamientodelamujer
ante elmundodeloshombres:lasvisionarias ejercieron supoderentrehombresy
mujeres,sesirvieronde personas deambossexosy, principalmentedefinieronsu
unicidad a partir de una dicotoma que las separaba del resto por su condicin
espiritual, no sexual. Nuestra investigacin pretende arrojar as luz sobre una
cuestinque,demaneramsomenosexplcita, se trata siempre en losestudios
10 La obra de Bynum ha sido indispensable en la deconstruccin de esta visin del pasado, que muchas veces ha entendido la Edad Media y el Renacimiento como un tiempo en el que las identidades se definan casi exclusivamente a partir de una divisin genrica, lectura que a veces responde ms bien a un enfoque contemporneo de la estructuracin de las identidades sociales (1987, 1991).
32
queabordanlostextos femeninos enuncontextosocial: creemosquela escritura
femeninanosignificasiempreunactoderebeldacontraelsistemapatriarcal.
El movimiento devocional femenino del que se viene hablando en estas
lneas se origina en el siglo XIII y se desarrolla a lo largo de la EdadMedia y el
Renacimiento a travs de un modelo de religiosa, que defini su individualidad
respectoalrestodelasociedadporpresentarsecomo una elegidapor ladivinidad.
Con sus vivencias, biogrficas y espirituales, este amplio conjunto de mujeres
fueronconstruyendo elparadigmaquede maneradirectao indirecta lleg hasta
nuestrareligiosa.
La construccin de esta identidad, evidentemente, no depende
exclusivamente delavoluntaddelavisionaria,sinotambindelosquela rodeany
alientanensuvivenciaespiritual.Enlaconfiguracindel rol visionarioinfluyde
manera evidente el imaginario colectivo, que haba asumido la realidad de las
santas vivas, y que provoc que los hombres de la poca deseasen gozar de la
cercanadeunadeestasmujereselegidasporladivinidad.Entrelaspersonas que
las rodeaban,destaca la presenciade los confesores espirituales, queenmuchas
ocasiones (no parece el caso de Sor Juana) alentaron a las religiosas a que
ejecutaran ciertasprcticasdevocionaleso pusieranporescritosusrevelaciones11.
La presencia del confesor ha inquietado a gran parte de la crtica, que ha
encontradoensupapelelrolnegativodelsancionadordelaspalabrasdelamstica
por su intervencin en el proceso de transcripcin, que pudo ocasionar la
distorsin del verdadero texto proferido por la visionaria (Gar, 1994). No
obstante, en este trabajo preferiremos contemplar la presencia de los otros
(confesores, autoridades eclesisticas) como miembros integradores de un
fenmeno en el que las visionarias no operan de manera aislada, sino que se
constituyencomolaspiezasprotagonistasde unagranmaquinaria,en laquetodos
los elementos cumplen una funcin imprescindible. En el caso de Sor Juana, el
confesorno tienelarelevanciaquejugenla biografadeotrasvisionariascomo
CatalinadeSienaoSorMarade SantoDomingo.Sinembargo,squehubo agentes
11 Para muchas de estas mujeres existi un hombre que las alent a escribir y las apoy en su labor visionaria: tales seran los casos de Hildegarda de Bingen, Isabel de Schnau, ngela de Foligno, Margarita de Ebner, Catalina de Siena o Mara de Ajofrn, que encontrarn en confesores y familiares cercanos no solo los nimos, sino tambin la plataforma para desarrollar sus proyectos (Sanmartn Bastida, 2012: 249250).
33
externos que ayudaron a ensalzarla como a una santa viva, entre los cuales
debemos mencionar al Cardenal Cisneros, las visitas de los nobles, y muy
especialmenteeltestimoniodelascompaerasdesucomunidad.
Esta propuesta interpretativa sigue la lnea de investigacin iniciada por
Sanmartn Bastida en su obra monogrfica sobre Sor Mara de Santo Domingo
(2012), en la que, basndose en las teoras de la performatividad, repar en los
elementosqueunena lasvisionariaspeninsularesconunatradicin europea,que
ampla la concepcin de la devocin femenina espaolamedieval y renacentista
comounacontinuacin deun modeloeuropeo. Laconstruccinde laespiritualidad
de nuestra visionaria se forj y delimit en un contexto geogrfico que defini
algunas de sus caractersticas, pero existenmuchas cuestiones de su imaginario
quenosonentendidasporunarealidadnacionalconcreta.Por ello,atenderemosa
los actos que permitieron a Sor Juana definirse como visionaria, para lo que
habremosderevisarunacadena deimitacionesquesefuedesarrollandodesdela
Baja Edad Media hasta el Renacimiento por una serie de mujeres, que
transformaron en cada una de sus recreaciones unmodelo de santidad, del que
particip Sor Juana como imitadora y, posteriormente, como modelo de
imitacin12.
La concepcin de la vida como un teatro y la sociedad como una puesta en
escenaes unaimagenquehaacompaadoa lahistoriadeOccidente.Sinembargo,
noha sidofijada comoherramientade anlisishastael siglo XX,yla interpretacin
pionera se encuentra en la obra de Nietzsche, y de algn modo ha sido
sistematizada en la obra deMichel Foucault. Como lnea de investigacin, se ha
generalizadoen unmundocontemporneoen elquela subjetividad, larevolucin
de las comunicaciones y la economa de consumohanproporcionado las vasde
teatralidada todos los individuosde lasociedad.Laperspectivade la teatralidad
implicaunanuevaformadeacercarsea larealidad,quehatradoconsigonuevos
conceptoscomolosdeperformatividadorepresentacin, quesuponenunalectura
interdisciplinar, que involucra disciplinas como la Teora del Arte o las Ciencias
Polticas.
12 Adems de las mencionadas influencias sobre Teresa de Jess, parece que Sor Juana se constituy como un modelo imitativo para otras religiosas posteriores menos afamadas como Beatriz de la Concepcin (15941646), Gernima de Ascensin (16051660), Jernima de Asuncin (15551630) y Sor Mara de greda (16021665) (Corts Timoner, 2004: 16)
34
Para realizar esta revisin consideramos imprescindible extender las
herramientasdeanlisisinterpretativodelas quesehaservido lacrticaliteraria.
Si queremos atender al proceso de construccin de Sor Juana como visionaria,
habremos de comprender que el texto que estudiamos es el fragmento del que
dispone el investigadormodernopara asomarse almundo en el que fue creado.
Nos servimos de las teoras de la textualidad enunciadas por Zumthor (1989),
quiendefiendelatesisdequeelinvestigadorcontemporneosehallasiempreante
laimposibilidaddecomprendereltextomedievalensutotalidad.Elinvestigador
sostienequelostextos que secrearonatravs dela oralidad (comoeselcasode
lasrevelacionesrecogidasenelLibro del conorte, perotambin,engranmedida,el
primertextobiogrfico deSorJuana) nopueden ser entendidos sinosolvidamos
detodoloqueacontecientornoalmomentodesucreacin.
ApesardequeasumimoslaincapacidadreferidaporZumthordecomprender
latotalidadde larealidad enla que eltextofueconcebido, nuestro anlisistendr
comoobjetivo principal recrear los gestos y voces conque Sor Juanaprofiri su
discurso visionario, y que fueron en gran medida los responsables de que la
religiosa fuese aprobada por su audiencia como una verdadera visionaria. Nos
interesa, por tanto, atender a los actos que se describen en su biografa para
recrear elteatro del tranceque represent Sor Juana, pero tambin deberemos
prestar atencin a los silencios significativos de la obra y a las autocorrecciones
que labeatallevacabo,pues deellos podemos inferir laatencin quelareligiosa
pusoala sociedadquela circundaba, decuya aprobacindependasuxitocomo
visionariaosucondena porsospechadeendemoniamiento.
Creemos que es imposible comprender a Juana como personaje y como
creadora sin entender sus estrategias de actuacin, pues estas son las que le
concedieronsuposicindentrodesucomunidady suvaloracincomosantaen su
entornosocial,yademstrasciendencontinuamenteensustextos.Lapercepcin
delmundo (almenosdelmundode lacelda)comoun teatroenelqueelladebe
ejecutar una representacin de cuya aceptacin depende su xito o su condena
pareceestarasumida(demaneraconscienteo inconsciente)como lamanerams
efectivadecomunicacin:as,esamanerade actuarpara unpblico apareceren
toda su produccin literaria como unmodus vivendide los personajes de sus
sermones, quienessecomunicanentre s a travs decontinuas representaciones
35
teatrales.Comoveremos,elpensamientoteatral y la concienciadesuefectividad
sever reforzado por elhechode que enla comunidad deSorJuanasedesarroll
unteatroconventual13 (estudiadoporSurtz,198214),quenosservirpara ampliar
lavisintanprximaalteatrodelaquegozaeltexto.
4.Estructura del trabajo
Elpresente trabajoestestructuradoen cuatro captulosque tienencomo
hiloconductorelanlisisdeladevocinperformativa delaquevenimoshablando,
y el modo en cmo estas estrategias de su experiencia como visionaria quedan
reflejadasen sus textoshomilticos.En todos los captulos se har referenciade
manera combinada tanto al relato biogrfico de Juana como a su produccin
literaria, si bien es cierto que, dependiendo de la materia de cada una de las
secciones,nuestraatencinsefocalizarenunadelasdosfuentes.
Comenzamos nuestra investigacin analizando los episodios ms
significativos de su biografa, que sern la base sobre la que construyamos los
captulos restantes, ms centrados en el estudio de la espiritualidad de esta
visionaria.Enestecaptulo,observaremoselevidente deseoqueexisteporparte
de la religiosa y tambin de sus bigrafos de inscribir a la beata dentro de la
tradicin de las santas vivas, que haba cobrado especial relevancia a partir de
algunasafamadasmsticascomoCatalinade Siena(cuyabiografahabacirculado
gracias a latraduccinpromovidaporel cardenalCisneros15);porello, deberemos
13 En el campo del teatro conventual hispnico, resulta imprescindible la obra de Ctedra (2005), quien aborda el fenmeno de una manera exhaustiva para presentar la edicin del Cancionero de Astudillo. 14 En esta obra, Surtz incluye una edicin del Auto de la Asuncin: nosotros realizamos nuestra propia edicin de este interesantsimo texto en un anexo al final de esta tesis. 15 Una influencia que ha quedado demostrada en la construccin de la santidad de otras visionarias, como Mara de Santo Domingo, cuyo confesor, el Padre de la Pea, haba traducido la biografa de Catalina de Siena, a la que se hace referencia en el prlogo del Libro de la oracin de la Beata de Piedrahita. La biografa de Catalina de Siena y sus Epstolas fueron traducidas en Alcal de Henares en 1510 y 1511. Adems de la obra de esta santa viva, en el ao 1510 se imprimi en Toledo la biografa de ngela de Foligno, tambin modelo de comportamiento y espiritualidad para las visionarias peninsulares, que tuvieron que conocerse y difundirse ampliamente en la poca. A la difusin de la obra de estas visionarias del Sur de Europa, debemos aadir tambin la impresin del texto del Liber spiritualis gratiae de Matilde de Hackeborn, que haba sido auspiciada por el Cardenal y que vio la luz en 1505 (Muoz Fernndez, 1994: 119, Sanmartn Bastida, 2012: 266; 2013: 143).
36
atendertambina laspeculiaridadesdelgnerohagiogrficodelqueparticipaeste
relato. En este captulo se presta especial atencin a la actitud de los bigrafos
respectoa losepisodiosquepudieran resultarms sospechososdehereja,pues
dichasobrasfueron compuestasprcticamenteunsiglodespusdela muertede la
religiosa,ylasposibles sanciones delosautoresnosservirnpara comprenderno
tanto a Sor Juana, sino al modelo del que particip y que sigui evolucionando
haciaterrenosmenosseguros.
Ensubiografaencontramostambinepisodiosgenuinosqueserefierena
larealidadhistrica en laqueSorJuanapliceseidealdesantidad. Porello,parte
del trabajo del primer captulo se dedica a analizar las peculiaridades de los
beaterios y el proceso de normativizacin que padecieron (como le sucedi a la
comunidaddeCubasdelaSagra)durantelaReformaencabezadapor Cisneros.
Losdossiguientescaptulossecentranendosaspectosfundamentalesde
lavivencia espiritualde Sor Juana,quesontambinesencialesen la identidadde
suscompaerascontinentalesperoquenohansidoapenastratadosporlacrtica.
Atravsdeladesatencina lasnecesidadesvitalesy tambinatravsdelcastigo
fsico,lareligiosasesitaenunestadoquelaalejadeloterrenalylapredisponea
la vivencia espiritual. En el segundo captulo, atenderemos a la relacin de la
visionariaconlosalimentos, pueses untema que hainteresado notablementeala
crtica estudiosadel fenmenomsticofemeninoyqueconstituyeunode losejes
centrales del libro de laVida. A continuacin, estudiaremos otras prcticas de
ascetismo basadas en el castigo corporal. En ambos captulos atendemos a la
repercusin de sendos hbitos (renuncia al alimento y castigo corporal) en
relacinconel Otro, con supropia identidad y con laconfiguracindelCielocomo
unlugarenelquetodoelsufrimientoterrenalserrecompensado.
Enel cuartoyltimo captuloanalizaremos larevelacin delostrancesde
Sor Juana desde la perspectiva de la performatividad. Nuestro punto de partida
sern los textos que nos han quedado de Sor Juana, a partir de los cuales
intentaremosrecrear(asumiendoloslmitesdelosqueZumthornospreviene16)el
momento del arrebato. Con este anlisis, se pretende arrojar luz sobre la
16 Recordemos que Zumthor sostiene que el investigador contemporneo se encontrar siempre ante la imposibilidad de comprender la obra medieval de manera completa, pues esta naci en un contexto de oralidad, en el que la voz y los gestos de los que lo ejecutaron, fueron elementos clave de su sentido esttico y su significado (Zumthor, 1989).
37
concienciadelpoderdeunaactuacin correctamenteejecutada.Teatralidad ensu
construccin como visionaria, teatrillo dentro de la celda en el asalto de la
revelacin, estructura teatralizada dentro de sus sermones y tambin teatro
dentrode la comunidad:conesteanlisispretendemosdemostrarqueel anlisis
de la puesta en escena de estos textos literarios nos ayuda a comprender desde
unaperspectivanuevalahistoriadeSorJuanadelaCruz.
Por ltimo, esta tesis doctoral presenta un extenso anexo, en el que se
incluyelatranscripcin delaVida, obraqueseencuentrainditaenunmanuscrito
dela Bibliotecade ElEscorial,yel Auto de la Asuncin de la Virgen, recogido enel
Libro de la vida, cuyomanuscrito seencuentraen laBiblioteca Nacionalde Espaa
(Mss.9661).
38
EL MODELO DE SANTIDAD DE SOR JUANA DE LA CRUZ
1. Redaccin y reescritura de una vida
Laprimera biografadedicadaaSorJuanafueescrita durantesuvida,oal
pocotiempodesumuerte.Esteprimertextoparecequeloredactunacompaera
de la religiosa, Sor Mara Evangelista, de quien se dice que recibi inspiracin
divinapara escribir la obra, yaquehastael momento de la redaccinestamujer
era analfabeta. En las diferentes biografas , se nos comenta que el ngel de la
guardaletransmitia Juanaeldeseodivinodequedejaseporescritosuvidaysus
revelaciones, hecho que no resulta cmodo a esta religiosa, la cual no slo se
mostr recelosa ante el mandato de su guardador17, sino que, una vez accedi,
pidien repetidas ocasiones quedejasendeescribir sus revelaciones,deseoque
algunos bigrafos afirman le fue concedidopoco antes de que le sobreviniese la
ltimaenfermedad18. A lolargode suvida,tuvo latentacinen variosmomentos
dedestruirlosescritos (Vida: 88r),idea por laquefueduramentecriticadaporsu
ngel,quien,conuntonoderegainapaternalista, lediceenrepetidasocasiones
queestactuandodejndose llevarpor lasoberbia, locualesundesacatoaDios
(Daza,1611:91v92r).
MaraEvangelistaes sealadacomo laamanuensedel librode la Vidapor
todos los testigos en el proceso de Canonizacin. Sor Mara Purificacin, que la
conocicon82aos,afirmaque:
17 La incomodidad con este mandato se debe, en primer lugar, a la definicin de la santa como una mujer virtuosa y humilde, pero tambin guarda relacin con las dudas que le han ido asaltando acerca de las posibles acusaciones, que pueden sobrevenir sobre una vida, que, como veremos a lo largo de estas pginas, se encuentra rozando la ortodoxia. La expresin ms clara de este sentimiento de peligro se recoge en la biografa de Daza (redactada en una poca en la que, sin duda, la religiosa no solo no habra gozado del reconocimiento de santidad que tuvo en su poca, sino que, probablemente, habra padecido una dura persecucin). En esta biografa, dicha preocupacin queda explicitada en el siguiente pasaje: Y temindolo la santa, y los juycios de los hombres, como estava tan perseguida, y por su causa lo estavan otras religiosas del convento, dixo al Santo ngel: seor, si por esto nos viniesse algn mal a m y a mis hermanas? (Daza, 1611: 91r). 18 No obstante, como veremos, se siguieron recogiendo sus palabras hasta el mismo momento de la muerte.
39
conociaMaraEvangelistaquefueaquellaquecompily escribi elLibro
dela vida, santidadyvirtudes y milagrosde estasierva deDiosJuanade la
Cruz, a la cual esta testigo oymuchas veces que ella haba escrito dicho
libro por voluntadde Diosle dio graciapara elloypara escribirotrolibro,
grandecompendio, llamadodel conhorte, enel cualse encuentranescritos
muchosde los sermonesquepredicaba(). Deca,dichaMaraEvangelista,
que escribi al dictado de dicha sierva de Dios Juana de la Cruz en los
ltimos aos de su vida, cuando permaneca en el lecho, tullido todo el
cuerpoylospiesylasmanosYtodo aquelloquedijo y dict dichaSierva de
Dios, fue () por su Santo ngel Custodio que le mand que lo hiciera
escribir,eigualmentesuconfesor, aquienhabadadoraznde ello.Esto,en
loquese refiere a lavida y milagrosyrevelaciones secretas,pues enlo que
se refiere a sumuerte, trnsito y otras cosas pblicas, escribi SorMara
Evangelista comotestigodevista, comoestatestigolaoydecir(citadoen
GarcaAndrs,1999:2425).
Seala Surtz, a propsito de este fenmeno de mujeres, que dictaron sus
textos, queno tienen sentido alguno las voces crticas, quehanquerido suponer
queelhechodequeellasnofuesenlascopistasdesusobrassignificaqueellas no
seansusverdaderas autoras.Apropsitode estecaso,el crticohaceunareflexin
acercadelasrelaciones entregneroyescritura,analizandolaopresinsocial,que
impeda queuna mujerfuese literata: una prohibicinque las llevabaa autorizar
supalabraa travsdecopistas,entrelosquesedistribuaelimpactode laautora
femenina(Surtz,1995:3y19).Laideadelcrticoquedareforzadaenellibrodela
Vida, que, a pesar de no ser redactado (fsicamente) por la propia Juana, s es
tratadaenelmismocomolaautoradelaobra,comonos loconfirmanlaspalabras
delngel,quienledice:Noscrivasyamssinoquieres,ydiatushermanas que
ese la pndola (Vida: 88r). Y es una cuestin que no ha parecido salpicar a la
crticade SorJuana,quedemaneramsomenosuniformehaafirmadoquedebe
considerarse una de las primeras autoras en prosa castellana (Corts Timoner,
2004:12).
Esta primera biografa, que se incluye como anexo al final de la presente
tesis,permaneceinditayest contenida ennicomanuscrito dela Bibliotecade
40
ElEscorial(Ms.KIII13).Apesardequedebieronexistirotrascopias(almenosla
que semand a Roma para el proceso de beatificacin de Sor Juana), no se ha
conservadoningunams19.
Lapopularidadde lasantidad deJuanasigui creciendotras sumuerte y se
testificaron numerosos milagros atribuidos a las reliquias de la beata y a unas
cuentas de rosario, famosas por haber sido bendecidas por Cristo, gracias a la
peticin de Juana. Sin embargo, habra que esperar al ao 1610 para que la
biografadelareligiosafranciscanafuerapublicadaporelPadreDaza bajoelttulo
Historia, vida y milagros, xtasis y revelaciones de la bienaventurada virgen santa
Juana de la Cruz, de la tercera Orden de nuestro serfico Padre San Francisco. Unao
despus,el autor reescribiyenmendla obradentro del proyectodeescriturade
laCuarta Parte de la Crnica General de la Orden,ytodavahabra derecomponerla
unavezms,en1613,conelttulomsabreviadoHistoria, Vida y Milagros, xtasis
y Revelaciones de la Bienaventurada Virgen Sor Juana de la Cruz. Lapublicacinde
Daza goz de un enorme xito desde su primera edicin, como prueban las
numerosas ediciones que surgieron entre 1611 y 167 en Zaragoza, Valladolid,
Lrida,Madrid,Pars,Trevigi,Pava,Florenciay Lyon(estas tresltimasescritas
en italiano y francs, respectivamente). Sin embargo, algunos pasajes de la obra
fueron censurados por la Inquisicin y en la biografa enmendada de 1613, el
autor tuvoqueretiraralgunosepisodios, evidentementeaquellosqueestuvieron
sujetos a mayor polmicaen suvida,asaber: elmilagrode lascuentas, lavisin de
los guijarros y la mencin al cuerpo de Juana como una vihuela taida por la
divinidad(volveremosampliamentesobreestosdos temasenel captulo tercero
19 Daza dice sobre el libro de Mara Evangelista en su edicin de 1610 que tiene 164 pginas. En el captulo XIX de la edicin de 1613 la hace subir hasta 170 pginas. El P. Navarro dice que es la misma mano la que ha copiado tanto la biografa como los sermones del Libro del conorte. El libro de la Vida y Fin que se llev a Roma no pudo ser el mismo que describen Navarro y Daza, pues tienen diferente nmero de hojas y la letra es distinta a la del Libro del Conorte. Garca Andrs apunta que probablemente el manuscrito fue transcrito por un copista con mejor letra y que este hecho es el que ocasion la diferencia de pginas, pue todos coinciden en que el libro constaba de veinte captulos, como sucede con el manuscrito de El Escorial. El libro que fue llevado a Roma no se encuentra en los archivos del Vaticano, debi de ser devuelto a la orden franciscana cuando el proyecto fue excluido, pero se ha perdido el rastro del mismo (Garca Andrs: 1920).
41
deestainvestigacin)20;delamismamanera,elPadreSosa,censorencargadodela
reprobacin,considernecesarioretirarelsobrenombredesantadelosescritos.
En el ao 1614 se le encarg al Padre Navarro la empresa de volver a
escribir labiografa deSorJuana,tarea queno viola luzhasta1622.Estabiografa
naceconelpropsitodedevolverel crditodeestabenditavirgen,procurando
apoyarloqueparecenuevoo difcildesusrevelaciones, paralo que decideseguir
el estilo de Gonzalo Durn en la edicin de los sermones de Brgida de Suecia
haciendo por sus nmeros anotaciones a los captulos () de suerte que ni la
impericia del indocto halle en qu tropear, ni la censura rgida del ledo
encuentrequmorder (Navarro,1622:prlogo).Navarroconsideraqueellibro
deDaza, adems deserbreve, seha centradoexcesivamenteen ladevociny la
piedaddelavisionaria,enlugardeen clarificarlosepisodiosquepudieranresultar
mscuriosos.Elreligiosohacetambinalgunasmodificaciones,porejemplo, enlas
metforasqueempleaeltextocuandoexplicacmoDioshablaa travsdelcuerpo
de Juana. Sin embargo, lo ms interesante de esta biografa no es tanto lo que
eliminacomoloqueaade:esta obra,queprcticamentetriplicaentamaolade
Daza, se caracteriza por su erudicin y su deseo de justificacin: adems de las
continuasanotacionesdeloslectores,elautorcomentaampliamenteloscaptulos
con comentarios que normalmente tienen la misma extensin que la de la
narracin del episodioyquenosmuestran elansiade Navarroporjustificartodos
losepisodiosquepuedanserentendidoscomosospechosos.
Todala polmicagenerada entornoaestasbiografas barrocas nohizootra
cosa que seguir aumentando la popularidad de Sor Juana, sobre la que se
terminaran componiendo tres comedias, una triloga compuesta por Tirso de
Molina,que,obviando lamatizacindeSosa,llevaporttulo La Santa Juana (1613)
ylasposterioresreelaboraciones de BernaldodeQuirs,La luna de la Sagra y Vida
de Santa Juana de la Cruz (1664) y El Prodigio de la Sagra, Sor Juana de la Cruz
(1723),de JosdeCaizares. A ello se sumanunosversosqueescribiLopede
Vega,dedicadosaunaesculturadelNio Jess,originariadelconventodeCubas
delaSagra,enlosquemencionaa lareligiosa.
20 Adems, concreta algunas fechas, como la del nacimiento de Juana, que sita el 3 de mayo, corrige los aos con los que comenz a tener revelaciones (que cambia de los 22 a los 24) y data su destitucin como abadesa en 1527 (Garca Andrs, 1999: 3637).
42
2. Juana como santa viva
Lasnarraciones trazadasensusbiografas, objetodeeste primer captulo,
reflejan el deseo de inscribir a la terciaria en una tradicin hagiogrfica, que la
presente comouna santa viva. Este fenmenodemujeresmsticas y visionarias,
quehasidoestudiado GabriellaZarrien elentornoitaliano (1996)yporGraaCid
en el contexto peninsular (2001), se perfil desde el siglo XII, se desarroll
especialmente a partirdel sigloXIVyperduren Espaahasta 1541(Graa Cid,
2001: 796) . Algunos de sus mximos exponentes son otras visionarias, que
asumieronunpapelprofticodentrodelacorte,tuvieron unainfanciainclinadaa
la santidad, revivieron la Pasin de Cristo, por la que recibieron el don de los
estigmas, celebraronun matrimoniomsticoy llevaron a cabounavidaespiritual
marcadaporlapenitenciaextrema(Bornstein, 1996:67,SanmartnBastida,2012:
319).
Juana de la Cruz se inscribe en estemodelo demujer, que se inici en el
siglo XIII a partir de figuras comoBrgidade Suecia o Matilde deMagdeburgo y
que, como hademostrado la crticaencargadade analizarel modelovisionarioy
mstico femenino, sefuerecreandoalo largo dela EdadMedia yelRenacimiento
en diferentes pases, rdenes religiosas y circunstancias histricas. Conforme
avanzaron las centurias, el modelo de la santa viva empez a ser puesto en
cuestin, en el momento en el que se empieza a encontrar que el fenmeno es
preocupantemente numeroso (Sanmartn Bastida, 2012: 29). Se desarrollaron
entonces juicios deprobatio spiritum, como los protagonizados por JeanGerson,
que form parte de los procesos de autentificacin de la santidad de populares
visionariascomoBrgidadeSueciao Catalina deSiena.Enelltimoterciodelsiglo
XV se desarroll una obsesin por el descubrimiento de falsas santas, que se
desarroll de manera plena en los dos siglos siguientes (Graa Cid, 2001: 739
41)21.
21 Juana de la Cruz expone la doctrina del Conorte en 1509, en plena efervescencia mstica y Agosto y noviembre de 1512 son dos fechas importantes para el iluminismo franciscano, del que supuestamente Juana no particip. El profeta iluminista de la aristocracia burgalesa, fray Melchor, es denunciado al cardenal Cisneros por fray Andrea y fray Juan Cazalla. Fray Melchor, en busca de una figura para compartir su misin, escribe a Juana de la Cruz. Esta
43
La obra de Sanmartn Bastida (2012), que ha servido de modelo de
investigacindegranpartede estatesis,desvela partirdelafigura deSorMara
deSantoDomingo, cmoalgunasreligiosaspeninsularesquisieron inscribirseen
ese modelocuando estehabacomenzadoavirarhaciaunaforma sospechosade
espiritualidad. Laevolucinde lahistoria de Juanaes especialmente interesante,
pues nos sirve para comprender cmo el modelo de visionaria se fue
distorsionando, y cmo en poco tiempo las marcas que cincuenta aos antes
habansignificadopruebasincontestablesdesantidadseconvirtieron ensignode
herejae inclusobrujera.Peroestecambionoseprodujoexclusivamente tras la
muertedelareligiosasinoque, incuso,duranteeltrascursodesuvidaexistiun
cambio dementalidad que ocasion que la beata desandase caminos que haba
iniciado(comoseestudiarenlosdoscaptulossiguientes).
Veremosque,a pesardequeexistennumerososelementosde labiografa
de la beata que la inscribenen unmodelo narrativode santidad,en laVida de la
religiosaseencuentranyuxtapuestosloselementosfantsticosconlosbiogrficos,
yaque,debidoa la influenciadelosmonjescistercienses,apartirdelsigloXIII,los
aspectos biogrficos comenzaron a adquirir una mayor relevancia que los
maravillososy taumatrgicos (MuozFernndez,1988:9293)22. Noobstante, la
narracin de la infancia, as comomuchos otros episodios, que desgranamos en
estaspginas,seinscribenclaramenteenlatradicinhagiogrfica23.
Lahistoriadelaliteraturahagiogrficatieneprcticamenteelmismolargo
recorrido que la propia historia del cristianismo. Desde el momento en que la
religin asienta su peso y sea seguida por un amplio nmero de fieles, la
proliferacindel culto a losmrtires y santos nodejanuncade existir.Desde el
siglo IVserecogieronrelacionesdemartirologios,en las queseenumerabaa las
vctimasysecontabalatruculenciadelosmartiriossufridosporlasmismas.Conel
pasodeltiempo,estosrelatosfueronevolucionandohastaterminarconvirtindose
remite la carta al Custodio de la Orden, fray Antonio Pastrana, quien a su vez la enva a Cazalla y Cisneros (Gmez Lpez & Garca Andrs, 1982: 32). 22 Klanickzay ha estudiado la evolucin de un doble camino en las obras visionarias: por un lado, el paso de la experiencia a la fbula, y, por otro, su correspondiente inverso, de la imaginacin a la realidad (Llanickzay, 2008: 5068). 23 Gmez Moreno (2010) nos da pautas del modelo de santidad de la hagiografa luego presentes en la literatura espaola.
44
enhistorias independientes, quenarran la vidade un santodesde el nacimiento
hastaloshechossucedidostrassumuerte.
Elgnero hagiogrficoalcanzunagran popularidad con La leyenda urea,
recopilacin devidasde santos realizadapor eldominico italianoSantiagode la
Vorginea mediadosdelsigloXIII, cuyoxito radicanoenlafidelidadalosdatos
histricosdelasbiografasnarradasdesantosymrtires,sinoenla originalidad y
variedadde lashistoriasrecogidasqueprovienen demuydiversasfuentes, entre
las que se encuentra material escrito como los evangelios apcrifos y material
pertenecientea la tradicinoralpopular.El textoalcanzgranpopularidaden la
BajaEdadMediayduranteelRenacimiento. Posteriormente,en laEspaade los
Siglos de Oro resulta imprescindiblemencionar la importancia que tuvieron los
Flos sanctorum de Alonso de Villegas y de Pedro de Ribadeneira, textos que
gozaron de una amplia popularidad en la Espaa delQuinientos y Seiscientos, y
que, sin embargo, se alejaron de las leyendas que haba difundido Vorgine
tratandodeimprimirunmayorrigorhistrico alasbiografastratadas.
3. La funcin salvadora de Sor Juana: el nacimiento de la santa
Lanarracinde la Vida comienza mucho tiempoantesdeque Juana fuese
gestada,yse remonta a los tiempos enlosquese fund sucomunidadenunlugar
enelquela Virgense habaaparecidonuevevecesenlosprimerosdasdemarzo
de 1449. La biografa de Mara Evangelista ya alude a este episodio, que
posteriormente ser ampliado por los bigrafos barrocos, que acudirn a los
testimonios que certifican las apariciones, ampliando la narracin original. Ins,
una joven de trece aos24, se encontr con una mujer vestida de pastora, cuya
procedencia divina no fue capaz de reconocer, y que le dijo que a partir de ese
momento,ademsdeayunar losviernes (comoacostumbrabaa hacerpororden
de sus padres), tambin debe hacerlo los das de Nuestra Seora,
independientementedel da en que cayesen. Adems le ordena quehable con la
gentedesu localidadparaconvencerladequedebenconfesarseyreconducirsu
24 Veremos que, cuando Juana consiga ordenarse religiosa, las biografas dirn que tiene 15 aos; sin embargo, Tirso de Molina, quiz por superposicin con la historia de Ins, la presenta como de 13 aos.
45
comportamiento, puestalycomo secomportansusalmasechan pestilencias.La
jovenquedaasombradaconelencuentroy sedecide a llevar acabo laparte dela
orden que laataeaellaexclusivamente,pero nose atreveadifundirelmensaje
que le han encargado. Por este motivo, la siguiente vez que se encuentran la
misteriosamujerledicequedebehablarsintemory quesi lagentenoconfaen
ella le dar una seal para que lo hagan. Cuando Ins vence su miedo y les
comunicaafamiliaresy allegadoselmensajedelaVirgen,estasevuelveaaparecer
paradecirlequeestavezdebecomunicarestemensajetambinalosclrigos25.
En el ltimo encuentro, Ins se muestra asustada y la Virgen intenta
tranquilizarla, diciendo que no tiene por qu sentir ningn temor. En ese
momento,le agarrafuertementela manoyle dejalosdedospegados, ensealdela
cruz26, marca que muestra a todos sus vecinos a la salida de misa. El milagro
provocaquetodalacomunidadorganice unaprocesinnocturna27,enlaqueIns
clava una cruzquele entreganen ellugardondese haproducido elmilagroyallla
joven les muestra unas huellas diminutas que ha dejado la Virgen en la arena
(arena que posteriormente ser empleada para curar enfermos y operar otros
milagros)(Daza,1611:1r4v).
Insva a Guadalupe,dondese ledespegan los dedos,yen eltranscursode
unaoconstruyen una iglesia,en laquela Virgenoperaun totaldesetentayseis
milagros. Debido a la fama que gana esta iglesia, algunas personas devotas
cercanas a Cubas construyeron una casa pegada almonasterio, en la que Ins y
unas cuantas mujeres se ordenan por la Tercera Orden de San Francisco,
comunidad que ser dirigida por Ins, tal y como eligen lasmujeres que se han
trasladadoall.Durantemuchotiempo, lacomunidades regidapor Ins congran
devocin,pero,transcurridosunosaos,lascostumbres,incluidaslasdelapropia
25 A la relacin de estas mujeres elegidas con las jerarquas eclesisticas volveremos en un punto de este mismo captulo dedicado a la relacin de Juana con el poder. 26 Daza, que utiliza la tercera persona para narrar todo el captulo, se incluye de una manera curiosa en este momento del relato, diciendo cmo vieron los dedos de la nia juntos y pegados, fechos a manera de la cruz, segn que lo mostr y vimos todos los que all estbamos (Daza, 1611: 3r) uso que nos muestra que est siguiendo el archivo, como me apunt la Dra. Sanmartn (Christian, 1989: 264). 27 Daza, en su intento de dar un mayor rigor histrico a este pasaje que en la narracin original tiene un tono ms mtico, aade los nombres de Lope de Lordes y Andrs Ferrandes, las autoridades que presidieron junto con Ins la procesin (hecho, que nuevamente responde al uso de las fuentes que est consultando Daza, como puede cotejarse en Christian, 1989: 266.
46
Ins, se deterioran y terminan dejndose tentar por el diablo, sin que en las
primeras biografas se concrete en qu consiste la cada de las religiosas28. Es
Navarroquiencentra lacadaen lapropia Ins, contandoquefueacusadaporuna
compaera; Ins, llevadaporsuextremadaprudencia,noquiereenfrentarsea la
religiosania lasautoridadeseclesisticasquehanescuchadolacrticay tomauna
extraadeterminacin: leproponeaunhombrematrimonioy consigueatravs de
esta va desvincularse de la vida religiosa. Nacern dos hijos fruto de este
matrimonio, que mantendrn la mente de Ins alejada de la vida religiosa. Sin
embargo, una maana, la Virgen se le aparecer para mostrarle a su hijo, que
comparar a los suyos hacindole ver que, aunque quiere mucho a sus hijos
biolgicos, todava ama ms al Hijo de Dios. El encuentro har que Ins desee
recuperar suanterior estadoyquele supliqueala Virgenayudaparaconseguirlo.
En el transcurso de un ao, su esposo e hijos estarnmuertos, hecho que Ins
agradeceenormementeyquehermanatambinsu vidaconla deotrasreligiosas
como ngela de Foligno oMargery Kempe, que, como veremos posteriormente,
tuvieron que casarse por imposicin familiar, pero pudieron alcanzar
posteriormente el estado religioso cuando los miembros de su familia mueren
repentinamente para que ellas pudieran cumplir su destino. A pesar de que las
restantes biografas nomencionen este episodio29, s aclaran que, despus de la
cada,Ins searrepinti y llevunavida tan devotadurantelosltimosaos desu
vidaqueen elmomentode sumuerte repicaron las campanasde laiglesiaenseal
desantidad.
LaVirgen nosoportala ideade que hayacadounacomunidadlevantadaen
sunombre,porlo que lesuplicasu hijoquemandeaalguienpararestaurarla. De
28 La biografa de Daza concluye el episodio, diciendo: como el demonio donde halla mayor perfeccin procura ms la cada, ocasionndolas con algunos tratos y amistades de seglares, de suerte que en breve tiempo desdixeron de aquel olor de santidad y virtud que se avan criado, hasta salirse del monasterio. Y la triste Yns que en otro tiempo ava sido la primera en la virtud, venida del enemigo, vino tambin a pervertirse y apostat del convento (Daza, 1611: 4r). El relato de la Vida resulta igualmente parco en detalles, aunque quiz menos benevolente hacia la religiosa. En esta biografa se dice nuevamente que fue tentada por el diablo, pero se concluye la narracin de una manera ms tajante, diciendo que cay en algunos peccados y falta de virtud, de manera que ella propia hizo oyo en que ella cay (Vida: 2r). 29 La vida de Juana aparecer siempre vinculada con la de esa primera comunidad de mujeres, y as, en la triloga de Tirso de Molina, en las primeras escenas en las que aparece Juana esta recita una composicin a un grupo de asistentes a una boda en la que desarrolla la historia de Ins