LAS UNIDADES QUE LLEGARON A SER DECENAS.

(Me llama mi amiga M ngeles que da clase en primero de primaria y me dice que si le puedo inventar un poema para que los nios aprendan las unidades y las decenas. Intento el poema pero siento que no quiero salir. Pienso en un cuento y esto es lo que se me ha ocurrido.Ya sabes M ngeles que puedes hacer lo que quieras con el texto. No s si te servir de algo o no, pero ah lo tienes)

LAS UNIDADES QUE LLEGARON A SER DECENAS.

En un lugar muy fro de cuyo nombre no puedo acordarme, vivan los nmeros que ya vosotros conocis: 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9. Ellos caminaban solos y estaban contentos porque todos tenan su nombre. Pero un da el 1 se puso a llorar:-Por qu lloras? - Le preguntaron el resto de los nmeros.-Porque tenemos nombre, pero nos falta el apellido.

-Es verdad- dijeron todos a la vez.- Nos falta el apellido, nos falta el apellido.

Los nmeros mientras caminaban solos por aquellos lugares tan fros, pensaban y pensaban. Hasta que de pronto, el nmero uno dijo:

-Ya no estoy triste, ya tengo apellido, me llamar una unidad.Entonces el 0 dijo:

-Qu bien yo tambin me llamar cero unidades

Entonces salt el 2 y yo dos unidades y as sigui el tres unidades, cuatro unidades, cinco unidades, seis unidades, siete unidades, ocho unidades y nueve unidades. Se dieron cuenta que todos eran de la misma familia y que todos tenan que tener el mismo apellido.

Pas un tiempo y aquellos nmeros que eran unidades se sentan muy bien en aquel pas del fro de cuyo nombre no puedo acordarme. Hasta que otro da, a la una unidad ( que era el nmero 1) se le ocurri que si se juntaba con el cero unidades para jugar y caminar juntos, podan formar otro nmero que ya sabis se llam 10 y como le gust, pasado un tiempo, se uni con otro 1 que por all circulaba solo, para formar el 11, despus lo hizo con el 2 y form el 12 y ms tarde formaron el 13, el 14, el 15, el 16, el 17, el 18 , el 19 y descubrieron que era muy divertido hacer las cosas de dos en dos.

Pero como siempre le pasabe al nmero 1, un da se puso triste y dijo que el 10 no tena apellido.

As, una vez ms, el resto de los nmeros tuvieron que pensar y pensar, hasta que al mismo 10 se dio cuenta y llam a los otros:

- Ya lo tengo. Si yo me llamo diez y soy diez cosas, me llamar decena

-Bien-dijeron los otros, pero entonces Nos quitamos el apellido unidades cuando estemos juntos?

-Noooooo-Dijo el 10- No . Yo por ejemplo, ser una decena y 0 unidades

-Y yo? -dijo el nmero 11- Cmo me llamar yo entonces?

-Muy fcil- explic el nmero 10- tu sers una decena y una unidad

- Y Yo?- dijo el 12 que saba que siempre iba detrs del 11

- T sers una decena y dos unidades

- Ya s -dijo el 13- entonces yo ser una decena y tres unidades

-Es muy fcil- dijo el 14- yo una decena y cuatro unidades

-S, s,-dijo el quince- siempre que est el uno va a ser una decena porque hay diez cosas juntas y luego, cinco, seis, siete, ocho o nueve unidades.

-Bien bien gritaron ya todos porque lo haban entendido

Y desde entonces en aquel pas del fro hizo ms calor, porque la profesora M ngeles, haba explicado a unos nios que vivan en otro lugar donde a veces tambin haca fro, esta historia de cmo las unidades se hicieron decenas.

Luz del Olmo