Uso de la fuerza

Prohibida su reproducción sin permiso de sus autores y editores

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Carlos Guillermo Blanco 1 Comandante Mayor (R) Oficial de Estado Mayor

Licenciado en Administración de Seguridad Pública Certificación en Justicia Criminal y Gestión Policial

Magister en Ciencias en Liderazgo y Gestión Policial [email protected]

[email protected] http://www.slideshare.net/carlosguillermoblanco

¿Por qué sabemos tan poco del entrenamiento policial y de los tiroteos de los policías involucrados, pero pretendemos saber mucho?

¿Por qué hay "Instructores de Tiro" y "Profesores de Defensa Personal" y no hay "Instructores de Uso de la Fuerza"?

"La experiencia es un maestro poderoso, pero la experiencia en sí misma no es la forma más eficiente para aprender" – Teniente Fred Leland Jr.

El que te enoja, te domina

¿Está usted RES (Retirado en

Servicio)? Reaccionas tal

como entrenas

Los viejos hábitos se resisten a morir

Cuando llegue el momento de ejecutar, el momento para prepararse ya ha pasado

¿Vive usted en condición OWAC? (Operating without a clue, Operando sin la menor idea)

En las FF.AA., estar AWOL (Absent Without Leave, ausente sin permiso) significa su baja. En las Fuerzas de Seguridad y Policiales, estar MAWOL (Mentally Absent Without Leave, mentalmente

ausente sin permiso) significa su muerte

1 Nota: El siguiente artículo apareció originalmente en PoliceOne, el recurso en línea para Aplicación de la Ley, y se reproduce con autorización del equipo editorial de PoliceOne. Visite www.PoliceOne.com para acceder a los artículos, información y recursos que ayudan a los oficiales de todos los Estados Unidos a proteger a sus comunidades y mantenerse a salvo en las calles.

Uso de la fuerza


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Evitando diez errores fatales 2 Acorde con el National Law Enforcement Officers Memorial Foundation, hubo 160 funcionarios encargados de aplicar la ley muertos en actos del servicio en 1997. De vez en cuando, especialmente cuando nos vemos cara a cara con la dura realidad, es importante revisar los Diez Errores Fatales que mataron a experimentados Hombres de la Ley. ¡Tal vez una de ellas pueda hacer una diferencia salvando vidas un día para usted! 1. SU ACTITUD. Si no puede mantener su mente en el trabajo durante una patrulla o bien lleva los problemas de su casa al servicio, comenzará a cometer errores. Pueden costarle la vida a usted o a sus compañeros. ¿Está usando su chaleco antibalas? Podría salvar su vida. 2. VALENTÍA SEPULCRAL. Nadie duda de que sea valiente. Pero, en cualquier situación en la que el tiempo lo permita, espere el refuerzo. Hay pocos casos en los que solo, sin ayuda, debe tratar y hacer una aprehensión peligrosa. 3. SIN DESCANSO SUFICIENTE. Para hacer su trabajo debe estar alerta. Estar somnoliento o dormido en el trabajo no va sólo contra los reglamentos, sino que pone en peligro a la comunidad y a todos sus compañeros. 4. TOMAR UNA MALA POSICIÓN. Nunca deje que nadie a quien está interrogando o a punto de detener se ponga en una posición mejor que usted y su vehículo. No hay tal cosa como una llamada o detención de rutina. Todas ellas son llamadas o detenciones de "riesgo desconocido". 5. SEÑALES DE PELIGRO. Como representante de la ley llegará a reconocer los signos de peligro. Los movimientos, los automotores extraños, las advertencias que deben alertarlo para ver sus pasos y acercarse con precaución. Conozca su jurisdicción, su comunidad y vea lo que está fuera de lugar. 6. FALTA DE VIGILANCIA DE LAS MANOS DE UN SOSPECHOSO. ¿Está él o ella al alcance de un arma o preparándose para golpearlo? ¿Con qué más puede golpear un asesino en potencia, sino son sus manos? 7. RELAJARSE DEMASIADO PRONTO. La alarmas de rutina o falsas que son activadas accidentalmente. Caminar hacia y preguntarse si el lugar está siendo retenido. Observe la actividad. Nunca tome todas las llamadas como de rutina, o simplemente otra falsa alarma. Es su vida en la línea. 8. USO INDEBIDO O FALTA DE ESPOSAS. Una vez que haya hecho un arresto espose al detenido y hágalo apropiadamente. Vea que las manos que pueden matarlo estén seguramente esposadas. 9. REQUISA POBRE O INEXISTENTE. Hay tantos lugares para esconder armas que su falta de búsqueda es un crimen contra sus compañeros. Muchos criminales portan varias armas y son capaces y están dispuestos a usarlas en contra suya. 10. ARMA SUCIA O INOPERANTE. ¿Está limpia su arma de fuego? ¿Disparará? ¿Qué hay sobre la munición? ¿Cuándo fue la última vez que disparó para poder dar en un blanco en condiciones de combate? ¿Cuál es el sentido de portar cualquier arma de fuego que no puede funcionar?

La lección detrás de esos diez errores es pensar...y, por favor,… ¡Use su chaleco antibalas!

2 Central Florida Police Stress Unit, Inc. Evitando diez errores fatales (Avoiding ten fatal errors). http://policestressunit.org/ten.htm. Accedido: 15 de febrero de 2014.


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Uso policial de la fuerza 3 La policía hace cumplir el orden social a través del uso legítimo de la fuerza. El uso de la fuerza describe la "cantidad de fuerza requerida por la policía para compeler al cumplimiento por un sujeto reacio" [1]. Los niveles, o uso continuo, de uso policial de la fuerza incluyen la moderación verbal y física básica, la fuerza menos letal y la fuerza letal. Los policías deberían usar sólo la cantidad de fuerza necesaria para controlar un incidente, efectuar un arresto, o protegerse a sí mismos o a otros de cualquier daño o de la muerte. La Policía además debería: • Asegurar que los heridos reciban asistencia médica. • Asegurar que la familia de cualquier persona lesionada sea notificada. Los oficiales reciben orientación de sus respectivas agencias, pero no hay un conjunto universal de reglas de gobierno sobre cuándo y cuánto deberían los oficiales usar la fuerza. El nivel de fuerza que usa un oficial, variará en base a la situación. Debido a esta variación, las directrices para el uso de la fuerza se basan en muchos factores, incluyendo: • La experiencia del departamento de policía. • Las leyes federales y estatales. • Las tecnologías disponibles para aplicar la ley. • Las complejas relaciones que pueden existir entre la policía y los ciudadanos en una jurisdicción dada. El uso excesivo de la fuerza es poco frecuente [2]. La frecuencia de uso policial de la fuerza en eventos que puede definirse como justificados o excesivos es difícil de estimar [3]. Notas: [1] Definición de la Asociación Internacional de Jefes de Policía, ver: http://www.theiacp.org. [2] Hickman, M. J. 2006. «Quejas de ciudadanos sobre el uso policial de la fuerza: Correlato organizacional, administrativo y ambiental» (Citizen complaints about police use of force: Organizational, administrative, and environmental correlates). Documento presentado en la reunión anual de la Sociedad Americana de Criminología, Los Ángeles, California, 1 de noviembre de 2006. [3] Alpert, G. P., y Dunham, R. G. 2004. «Entendiendo el uso policial de la fuerza: Oficiales, sospechosos y reciprocidad» (Understanding Police Use of Force: Officers, Suspects, and Reciprocity). Nueva York: Cambridge University Press.

El uso continuo de la fuerza 4 La mayoría de los organismos de aplicación de la ley tienen políticas que guían el uso de la fuerza. Esas políticas describen una serie escalada de acciones que un oficial puede tomar para resolver una situación. Este continuo generalmente tiene muchos niveles, y los oficiales son instruidos para responder con un nivel de fuerza adecuado a la situación a la mano, reconociendo que el oficial puede moverse de una parte del continuo a otra en cuestión de segundos. Un ejemplo de un continuo uso de la fuerza es el siguiente:

3 National Institute of Justice. Police Use of Force. Fecha de modificación: 20 de enero de 2012. http://www.nij.gov/topics/law-enfor cement/officer-safety/use-of-force/Pages/welcome.aspx. Consulta: 15 de febrero de 2014. 4 National Institute of Justice. The Use-of-Force- Continuum. http://www.nij.gov/topics/law-enforcement/officer-safety/use-of-force/ Pages/continuum.aspx. Consulta: 15 de febrero de 2014.


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Presencia del oficial – La fuerza no es usada. Considerado el mejor modo de resolver una situación. La mera presencia de un oficial de la ley trabaja para prevenir el crimen o difuminar una situación.

Las actitudes de los oficiales son profesionales y no amenazantes. Verbalización – La fuerza no es física. Los oficiales emiten comandos calmos, no amenazantes, como "Déjeme ver su identificación y

registro". Los oficiales pueden aumentar su volumen y acortar los comandos en un intento de ganar el

cumplimiento. Los comandos breves podrían incluir: "Pare", o "No se mueva". Control con la mano vacía – Los oficiales usan fuerza corporal para ganar el control de la situación. Técnica suave. Los oficiales usan agarres, presas y bloqueos de articulaciones comunes para frenar a

un individuo. Técnica dura. Los oficiales usan golpes y patadas para frenar un individuo.

Métodos menos letales – Los oficiales usan tecnologías menos letales para ganar control de la situación. (Consulte «Decidiendo cuándo y cómo usar dispositivos menos letales» 5)

Impacto Blunt. Los oficiales pueden usar un bastón o un proyectil para inmovilizar a una persona combativa.

Química. Los oficiales pueden usar espray químico o proyectiles con productos químicos incorporados para frenar a un individuo (por ejemplo, gas pimienta).

Dispositivos de Energía Conducida (CED, Conducted Energy Devices). Los oficiales pueden usar CED para inmovilizar a una persona. CED descarga un choque de electricidad a distancia de alto voltaje y bajo amperaje.

Fuerza Letal – Los oficiales usan armas letales para ganar control de la situación. Debería ser usada sólo si el sospechoso plantea una seria amenaza al oficial o a otro individuo.

Los oficiales usan armas letales como las armas de fuego para parar las acciones de un individuo.

Diez consejos para ganar peleas mano a mano

Gary T. Klugiewicz 7 de junio de 2005

La pelea mano a mano ocasionalmente es una parte del trabajo policial y algo que planificar. Si usted piensa que algunos eventos en la calle son suficiente entrenamiento, se equivoca. Puede haber una diferencia letal, tanto en términos de mentalidad y tácticas, en una pelea entre dos personas que no están de acuerdo y una entre un criminal que ha optado por comprometer a un oficial de la ley en un esfuerzo por escapar, herirlo seriamente o incluso matarlo. Sí, hay una gran variedad de opciones de fuerza disponibles hoy en día que no tienen que ver con la pelea mano a mano. Pero hay días malos -días cuando los oficiales son derribados, batallas reales donde las opciones avanzadas de fuerza están disponibles sólo si puede luchar a su manera contra ellos. Aquí hay 10 cosas a tener en cuenta que pueden ayudarle a ganar: 1) Sea decisivo y consiga la ventaja del primer movimiento, si es posible. Si usted siente que una pelea es inevitable, no espere a ser el primero en ser golpeado. Tenga cuidado con el lenguaje corporal inicial que indica que está a punto de ser atacado y haga su movimiento decididamente. Una ventaja del primer movimiento puede ayudarlo a estar y mantenerse en la parte superior de la lucha desde el principio. 5 NIJ. Deciding When and How to Use Less-Lethal Devices. http://www.nij.gov/topics/technology/less-lethal/pages/decide.aspx. Consulta: 15 de febrero de 2014.


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2) Ensaye. Usted es consciente de que la lucha a veces es una parte necesaria del trabajo, pero ¿realmente ensayó un plan mental para ello? Esté preparado mediante el pensamiento a través de una pelea (practicar cuando / entonces pensar) justo como lo haría con otros escenarios tácticos. ¿Dónde golpearía primero? ¿Qué haría después de dar su primer golpe? ¿Qué haría usted si es golpeado y pierde el equilibrio o se aturde momentáneamente? ¿Qué haría usted si su lucha va al suelo, como muchas lo hacen? 3) Hágase una pregunta crucial: ¿Estoy ganando? Si su respuesta es afirmativa, ¿por cuánto? ¿Está cerca de lograr el control completo y poner fin a la lucha o usted apenas puede mantenerse? ¿Está él cansado? ¿Está usted cansado? ¿Se está volviendo más loco y más enérgico mientras usted se desvanece? Si usted está perdiendo la lucha, necesita pensar en la retirada estratégica, no en la determinación absurda de mantener el ritmo. 4) Controle la gravedad de la lucha y esté preparado para hacer todo lo necesario para sobrevivir. Hay dos cosas claves a tener en cuenta en una pelea. Primero, su trabajo y su vida no dependen de su lucha limpia. Dependen de que luche para ganar. Segundo, hay una gran diferencia entre luchar por el control y luchar por la supervivencia. Si la lucha pasa de un tema de control, es decir, el movimiento progresivo hacia un arresto, a una cuestión de supervivencia, todo vale. Cuando su vida pende de un hilo, es crucial pensar no-convencionalmente y usar todo lo que pueda para defenderse. Cerrar una puerta en la cara, apuñalar un lápiz en la mano, el cuello o los ojos, tirar a alguien por las escaleras, golpearlo con un teléfono en el puente de la nariz, morder, patear, arañar -lo que sea para sobrevivir- es lo que usted necesita hacer. Esté preparado para eso y para ponerse en modo de supervivencia en el segundo que siente que es necesario. 5) ¿Tiene el espíritu de lucha para seguir peleando incluso si recibió un disparo, corte o golpe? El shock y el pánico pueden ser enemigos mortales en una pelea. Asegúrese de que está preparado para sufrir heridas y seguir luchando. Historias de los oficiales supervivientes contra obstáculos casi insuperables, incluso en las peores situaciones con las lesiones más horribles, abundan. Por desgracia, también hay historias de oficiales que murieron después de haber sido superados por el shock de sufrir lesiones relativamente menores. Siempre perfeccione y alimente su mentalidad de supervivencia. Puede ser uno de sus aliados más poderosos. 6) Cuando pegue: ¡Pegue! ¡Duro! Cada golpe que tire debe ser emitido con la idea de que terminará la pelea. Punto. Otra cosa a tener en cuenta es la apariencia. Si usted puede terminar una pelea con un buen golpe, poderoso, evita la necesidad de una repetida y prolongada lucha, que, francamente, no se ve bien. 7) Nunca discuta con nadie. No caiga en participar en una pelea con golpes medio en serio. Meter el dedo y dar codazos no ponen fin a una pelea. Golpes plenos dados de una manera calculada y diseñados para lograr el impacto necesario para poner fin a una amenaza, es lo que necesita emitir. Si alguien se balancea hacia usted, es serio. El hecho de que puede optar por hacer uno o dos giros a medias o lanzar pocos ganchos al principio, no quiere decir que no vamos a experimentar lo peor pronto. Lo más probable es que lo estén tanteando para ver cómo va a reaccionar y probar su buena disposición y capacidad para participar. Cuanto más tiempo dura la lucha, más probabilidades hay de cansarse, más probabilidades hay de que alguien pueda sumarse contra usted y más probable será que alguien resulte lastimado seriamente. Discutir prolonga una pelea. 8) Golpee para crear una disfunción. Infórmese sobre los puntos del cuerpo que, cuando son atacados, causarán disfunción en su oponente y restringirán -mejor aún si eliminará por completo- su capacidad para seguir luchando. Esto incluye ataques a los puntos motores: la zona inferior del abdomen, las piernas, etc. enseño a todos estos puntos en mis clases de Contramedidas Activas, y estoy consistentemente sorprendido por cuán pocos oficiales conocen los puntos de disfunción más eficaces. 9) No asuma que una pausa significa que se acabó. No tome una pausa en la acción como una señal de que su oponente deja la lucha y será fácilmente restringido. Creer que un segundo aire está viniendo en cualquier momento, resistir la tentación de bajar la guardia y descansar. El objetivo más inmediato es el control, usualmente en la forma de tener al sospechoso esposado. No pare hasta que lo tenga.


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10) ¡Manténgase respirando! Un instinto común en una pelea es contener la respiración, que puede ser muy peligroso. La falta de oxígeno hará que se canse con más facilidad, se sienta mareado, e incluso podría llevarlo a perder el conocimiento. Igualmente importante es el hecho de ser golpeado mientras contiene la respiración, que puede llevarlo a graves lesiones internas. Recuerde que debe decirse conscientemente a sí mismo respirar durante toda la pelea. Podría hacer toda la diferencia.

Explicando la rápida escalada de la fuerza

Gary T. Klugiewicz

16 de noviembre de 2005 Los policías encuentran a menudo que es mucho más fácil ganar la actual "batalla" en la calle que ganar la "guerra" en los tribunales. Tenemos que recordar que no es suficiente hacer lo correcto. Un agente tiene que ser capaz de explicar por qué su uso de la fuerza fue correcto. Para esto a menudo tenemos que "educar" al jurado acerca de las realidades del uso de la fuerza. Para ello, un oficial tiene que ser capaz de "articular", es decir, explicar por qué sus acciones fueron "razonables". Una herramienta para este fin es comprender lo que se conoce como "circunstancias especiales" en las Oportunidades de Evaluación de las Amenazas de un funcionario. Esas se refieren a una lista abierta de las razones referidas como "saltar escalones" o "rápida escalada" a través de las opciones para el uso de la fuerza de un oficial. En resumen, las cosas se están volviendo locas y la escalada de la fuerza normal paso a paso no va a ser suficiente. La seguridad del funcionario requiere una rápida escalada hasta las máximas opciones de la fuerza. He aquí una lista parcial: 1. Su percepción razonable de la amenaza. Ejemplo: Un sujeto se supone está armado, está en actitud sospechosa, tiene un bulto debajo de su cintura, y se niega a mantener las manos sobre su cabeza. Sería una buena idea desenfundar rápidamente su arma. 2. Asalto súbito. Ejemplo: Un sujeto sin previo aviso le lanza un puñetazo a la cara. Este no es el momento para tratar de hablarle. Es el momento de evitar el golpe y escalar rápidamente a la técnica adecuada con las manos vacías, armas intermedias, o más allá. 3. Su posición física. Ejemplo: Un sujeto está luchando con usted en lo alto de una escalera. Usted necesidad poner fin a la lucha ahora - de cualquier forma que pueda antes de terminar arrojado escaleras abajo. 4. Habilidad del sujeto para escalar rápidamente la fuerza. Ejemplo: Usted está tratando con un disturbio doméstico en una casa. El marido se vuelve y va hacia su vitrina cerrada para llegar a un arma de fuego. Usted necesita pararlo antes que obtenga sus armas. 5. Su conocimiento especial sobre el sujeto. Ejemplo: Usted está tratando con un sujeto grande, muy fuerte, extremadamente violento que sabe tiene una historia de enfrentamientos violentos con la policía. El sujeto está empezando a perder otra vez. Es el momento de escalar rápidamente para controlarlo antes que pueda atacarlo. 6. Su lesión o agotamiento. Ejemplo: Usted se ha lesionado la rodilla y cayó al suelo durante un enfrentamiento físico con un sujeto. En vez de huir, el sujeto se vuelve hacia usted y se mueve para matar. Es hora de poner fin a la pelea. 7. Otras circunstancias especiales. Ejemplo: Esta no es una lista completa. Crece con el tiempo conforme los funcionarios experimentan otras "circunstancias especiales" que justifican la rápida escalada de la fuerza.


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Tácticas de de-escalada posteriores al evento

Gary T. Klugiewicz

9 de agosto de 2007 Una de las tácticas policiales verbales más infrautilizadas es el empleo de "interrogación de sujetos", es decir, una táctica de de-escalada posterior al evento al final de una confrontación física. Cuando usted está derribando a un sujeto combativo -literalmente- al suelo, usted está usando un fuerte control de charla. Está gritando órdenes como: "¡Abajo! ¡Abajo! ¡Acuéstese en el suelo!". Después de esposar al sujeto y que está bajo control, usted todavía está bombeado con adrenalina y agitado, dispuesto a seguir luchando. Aquí es donde usted, como policía profesional, tiene que cambiar de marcha con el fin de acabar verdaderamente con la lucha para que pueda empezar los procedimientos siguientes como la prestación de cuidados a un detenido herido, la requisa y el transporte. Con el fin de llevar al sospechoso emocionalmente hacia abajo, usted necesita ir hacia abajo y dejar de gritar órdenes agresivas, de alta energía, en su oído. Está jadeando y resoplando y la adrenalina sigue fluyendo, pero necesita actuar, ver y oír calmadamente. Esto no es fácil y necesita ser programado en sus tácticas. Empiece a hablar con el sujeto en un tono normal de voz. Es cierto, tiene que ser un poco esquizofrénico para hacer esto, pero por eso nos pagan mucho dinero, ¿verdad? Usted proyecte calma porque eso es lo que el sujeto necesita ver y oír para calmarse. Si usted hace de este tipo de de-escalada verbal y no verbal una respuesta programada, acabará de salir. Ni siquiera tendrá que pensar en ello. Está programado. Es reflexivo. Tengo un "lazo verbal programado" que inmediatamente empieza diciendo que el sujeto de una manera muy suave, un tono de voz gentil, que dice así: "Relájese. Tómelo con calma. Va a estar bien. Basta con que respire profundamente. Nadie va a hacerle daño. Se acabó ahora. Respire". Yo me estoy proyectando y viendo calmado. Eso es calmar al sujeto hacia abajo, me está calmando y se ve bien ante cualquier observador. Aún más importante, no tengo que pensar en ello. Simplemente sucede. Es una respuesta programada. Esto me da tiempo para hacer algunas cosas importantes como ser capaz de escanear alrededor en busca de amenazas adicionales y planificar mi próximo movimiento. Recuerde la línea de la película Road House: "Tienes que ser agradable, hasta que llegue el momento de no ser agradable". En el cumplimiento de la ley, tenemos que añadir otra línea, "... y entonces tenemos que ser agradables otra vez". Esta aplicación de habilidades de comunicación táctica tiende a acortar la lucha, reducir las quejas por exceso de fuerza, mejorar la percepción pública, y reducir las complicaciones médicas adicionales propias de la resistencia continua después que el control haya sido inicialmente establecido.

Una buena acción con resultados trágicos: Una visión desde afuera

Gary T. Klugiewicz

11 de Julio de 2012


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La semana pasada, PoliceOne informó que una mujer se suicidó disparándose en la cabeza con la pistola de un oficial de policía de Illinois, mientras que él la llevaba al hospital. Stephanie Hicks, quien sufría de trastorno bipolar, logró apoderarse de la pistola del oficial de la funda y giró el arma hacia ella misma. Como veo este incidente desde afuera, creo que varios puntos deben ser discutidos que ven en cuestiones más amplias que se pueden aplicar a todos nosotros, no importa cuál sea el final que determine la investigación. En primer lugar, esta es una historia trágica. Ilustra la necesidad de que los oficiales realicen una evaluación práctica de riesgos, incluso cuando asisten al público. El oficial estaba tratando de prestar un servicio público a una persona en necesidad. Esta mujer estaba, obviamente, en un mal lugar. Todas las personas en crisis -sea un enfermo mental, bajo la influencia de drogas o alcohol, o simplemente teniendo un momento traumático en su vida- son potencialmente peligrosas. Al usar el Código de Colores de Jeff Cooper (ver el cuadro), un oficial debe estar en Condición Naranja -listo para actuar- cuando gestiona personas en crisis. El Entrenamiento en Tácticas de Intervención en Crisis es importante, pero un oficial tiene que estar constantemente dispuesto a cambiar de marcha para mantener a todos seguros.

CONDICIONES DE LA CONCIENCIA (O CONOCIMIENTO) Código de Colores de John Dean «Jeff» Cooper (1920-2006)

DESCRIPCIÓN COLOR DEL CÓDIGO RESPUESTA

1. Desprevenido. Blanco Relajación total en un lugar seguro. 2. Relajado pero alerta. Amarillo Escanear posibles amenazas. 3. Listo para actuar. Naranja Enfocarse en posibles amenazas. 4. Estado de acción. Rojo Responder a las amenazas: Desprender y escalar. 5. Pánico ciego. Negro Reacción indecisa o excesiva a la amenaza.

Un oficial debe estar en Condición Naranja -listo para actuar- en la gestión de personas en crisis.

Ítem dos: el control de las armas siempre es crítico, especialmente en situaciones de corta distancia como ésta. Cualquiera, en cualquier momento, puede intentar desarmar a un oficial. En este caso, la persona giró el arma contra sí misma. Podría haberla vuelto contra el oficial. Un oficial siempre tiene que estar listo para intentar un desarme. Finalmente, esta tragedia también demuestra la necesidad de transportar a una persona en el asiento trasero del patrullero. Esa persona no estaba bajo custodia, pero aun así, el asiento proporciona una barrera entre el sujeto y el oficial.

La distancia compra tiempo Sin distancia = no hay tiempo

Nuestros pensamientos están con las víctimas de esta tragedia - la mujer que murió y el oficial. Lo que el oficial estaba tratando de hacer era sólo ayudar a una mujer en necesidad. Necesitamos asegurarnos de mantener a todos seguros en el proceso. Como a Jack Hoban le gusta decir, los oficiales necesitan ser protectores. Siempre debemos recordar que tenemos que mantenernos física, legal y psicológicamente seguros para hacer nuestro trabajo. La protección comienza con usted.

Reconocer sospechosos armados

13 de diciembre de 2007


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La mayoría de los oficiales que fueron tiroteados han sido tomados por sorpresa, pero ¿tiene que ocurrir eso? Si sabe cómo leer señales sutiles que indican la portación oculta, ¿puede ser capaz de prever que está tratando con un sujeto armado y ganar una ventaja preventiva de tiempo y posicionamiento? El Sargento-Técnico Jeffrey Kleinsmith, un instructor de la Academia para la división uniformada del Servicio Secreto de EE.UU., recientemente compartió técnicas poco comunes utilizadas por los agentes que protegen al presidente para detectar portadores de armas antes de que ataquen. "Esta capacitación funciona muy bien en la calle", dice Kleinsmith. Como parte de una unidad de recuperación de armas multiagencial que patrullaba los barrios difíciles de Washington, DC, utilizó esos métodos de observación para ayudar a detectar más de 300 armas de fuego ocultas por los sospechosos en los primeros seis meses de su misión, lo que resulta en una disminución del 15% de crímenes violentos en las zonas seleccionadas. El descubrimiento temprano es fundamental, subrayó, porque si usted espera hasta que realmente ve un arma, puede estar muy lejos detrás de la curva reaccionaria para frustrar un ataque. Características comunes e indicadores de individuos armados: 1. Conforme usted observa a un sospechoso potencial, trate de determinar su lado fuerte. Normalmente, los relojes se llevan en el brazo débil y los primeros pasos se toman con la pierna débil. En general, la gente usa su mano fuerte para la mayoría de las acciones, tales como encender cigarrillos, empujar a alguien, sostener o mover objetos y tirar los dados en un juego. Incluso en ausencia de señales confirmadoras, puede contar con que "85 a 90% de las personas en el mundo son diestras", dice Kleinsmith. 2. La gran mayoría de los delincuentes que portan un arma de fuego la meten en la cintura en su parte delantera derecha, entre el ombligo y la cadera. "Deben mantener el arma accesible", dice Kleinsmith. "También se ven armas puestas en sus partes movientes, lo que es 'cool', y fácilmente puede mostrar a sus amigos que está armado". El segundo escondite más común es la parte baja de la espalda, dice Kleinsmith, "pero esto es relativamente poco frecuente, ya que tiende a ser muy incómodo". En casi todos los casos, un arma de fuego oculta será desenfundada. Esto trabaja en su ventaja desde el punto de vista de la observación, pero para el chico malo es "extremadamente desventajoso, porque el peso desigual de la pistola puede causar que se mueva por sí sola" y requiere ajustes. 3. "Conforme se mueva el sospechoso, busque un ‘sentimiento de seguridad’", aconseja Kleinsmith. "Debido a que la pistola está suelta, está constantemente con miedo de que se resbale, y periódicamente la va a tocar, consciente o inconscientemente", para asegurarse de que sigue ahí, y en su lugar. A menudo se puede ver esto en las cintas de vigilancia cuando los ladrones armados se acercan a un objetivo, y "los policías también lo hacen, para tranquilizarse cuando están vestidos de civil", aunque por lo general tienen fundas. Según su experiencia, Kleinsmith dice que ha visto "sólo un chico malo en la calle con una funda". De las 1.301 armas tomadas de la calle por la unidad de recuperación de armas de la que fue parte, sólo siete tenían fundas. Un detective de policía de Nueva York, Robert Gallagher, que fue especialmente hábil en la detección de armas ocultas con las técnicas de observación, "rara vez" encontró una funda entre unas 1.200 armas recuperadas, dice Kleinsmith. "Si encuentras a alguien con una funda vacía", predice Kleinsmith, "hay un arma de fuego dentro de un radio de 20 pies". 4. Estrechamente relacionado con el sentimiento de seguridad es lo que Kleinsmith llama “movimiento corporal protector”. Esto es particularmente notable cuando un sujeto armado está corriendo o se mueve abruptamente; él sostiene su brazo contra el arma oculta, sea rígidamente o con un swing muy restringido. "Incluso si el sospechoso sólo está caminando, puede ver que hace una zancada completa con su pie homólogo opuesto, pero la zancada del lado armado será más corta, casi como una cojera en algunos casos", porque él está tratando de sujetar el arma de fuego en su lugar y minimizar su deslizamiento o riesgo de caerse. El brazo también puede venir contra la pistola "como un movimiento de protección cuando la gente comienza a acercarse al sospechoso". Al igual que usted, cuando se acercó, los delincuentes armados pueden girar su lado armado cuando llega a ellos. "Los juegos de dados ofrecen buenas posibilidades de detectar personas con armas de fuego", señaló Kleinsmith. "Están en cuclillas, de pie, tiran los dados, pasan dinero. El movimiento ayuda a identificar armas escondidas".


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5. Por supuesto, investigue cualquier protuberancia reveladora. "Un arma no es flexible y no se ajusta bien a la forma del cuerpo humano, por lo que puede manifestarse en forma de una protuberancia", recuerda Kleinsmith. Mientras que el arma de fuego en su totalidad no puede ser perfilada, la ropa apretada puede revelar puntas que se relacionan con un martillo de percusión, la empuñadura o la boca del cañón. 6. Al estudiar la ropa del sujeto, pregúntese: ¿Se ajusta a la temporada? En clima frío, ¿es un abrigo desabotonado o sin cierre? ¿Está el sujeto usando un sólo guante, dejando su mano de tiro al descubierto? ¿Está usando el cinturón que no pasa a través de las presillas del pantalón, por ser capaz de cinchar más un arma de fuego oculta? ¿La capa cuelga más baja lastrada por un lado? Cuando camina o corre, ¿el abrigo o la chaqueta rebotan en la pierna, como si algo pesado se encontrara en el bolsillo? ¿Tiene una capucha colgante que parece lastrada, haciendo que el cordón se arrugue? Si un individuo tiene la impresión de tener una billetera en el bolsillo, pero lleva una mochila, entonces, ¿qué hay en la mochila? ¿Es no coincidente el calzado, con un zapato más grande que el otro, posiblemente para ocultar una pistola pequeña? Entre los ciclistas, el escondite favorito de armas de fuego es dentro de las botas, dice Kleinsmith. Algunos también pueden usar bolsas especiales cosidas en sus colores. "Miren a las mujeres que están con los ciclistas", advierte. "La mayoría de las veces ellas portan para los hombres", capitalizando la tendencia de demasiados oficiales a no considerar a las mujeres como una amenaza. 7. Durante una parada de vehículo, observe de cerca a los ocupantes tan pronto como comience contemplando un pullover. "Mira sus hombros", dice Kleinsmith. Un hombro subiendo puede indicar un arma de fuego que se extrae de una cintura; un hombro cayendo puede significar drogas, alcohol, armas, u otro contrabando que se metió debajo de un asiento, o entre los asientos. Si usted decide utilizar las indicaciones tales como las enumera Kleinsmith como justificación para la parada y requisa, "debe ser capaz de articular sus observaciones", advierte. Idealmente, usted será capaz de identificar varias señales. "Anote todas las características que observó, todos los hechos en cuanto a porqué se llevó a cabo la parada. Nunca vaya solo por una corazonada". Además, puede usar esos obsequios para hacerse consciente de tus propias acciones, mientras porta un arma oculta. El lenguaje corporal de un criminal armado "puede ser más magnificado" en relación con un arma oculta, dice Kleinsmith, pero los agentes tienden a compartir muchos de los mismos hábitos nerviosos y modo de vestir. Para una persona conocedora, es posible que inconscientemente telegrafíe su estado armado en situaciones en las que no tiene tal intención. Kleinsmith concluye: "Tratar de aumentar su conocimiento de los individuos posiblemente armados, puede mejorar sus habilidades de observación" - y su seguridad. "Si sabe lo que estás buscando, no puede creer qué le muestran los sospechosos armados".

Activando la memoria muscular

Teniente (R) Raymond E. Foster

Departamento de Policía de Los Ángeles. 21 de febrero de 2006

A fines del mes pasado, una persecución corta de alta velocidad terminó cuando el vehículo del sospechoso chocó con una valla. Por ahora la mayoría, si no todos, hemos visto porciones de una cinta de vídeo que representa a un ayudante del sheriff tirándole al pasajero. El caso sigue siendo investigado, pero aún sin toda la información podemos utilizar el incidente para iniciar conversaciones sobre nuestras políticas, tácticas y capacitación.


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¿Qué es la memoria muscular? Esencialmente, la memoria muscular consiste en entrenarse a sí mismo para hacer algo sin pensar conscientemente en ello. Piense acerca de marcar un número de teléfono de uso frecuente. O bien, para aquellos de nosotros que aprendimos a escribir a máquina, tocamos el teclado, sin pensar conscientemente acerca de las teclas. Apretar el gatillo es otra memoria muscular aprendida. ¿Cuántas innumerables veces apretó el gatillo, con munición real y disparos en seco, sólo para hacer la prensa perfecta? Es probable que le hayan enseñado lo que debe hacer exactamente el dedo índice sin pensar en ello. Las primeras investigaciones en la memoria muscular presumen que lo que usted estaba haciendo era crear vías permanentes entre el cerebro y los músculos que usted usaría para la actividad repetitiva. Usted estaba creando carriles expresos entre los músculos y el cerebro. Sin embargo, cierta investigación sugiere que la memoria muscular es mucho más compleja. Puede ser que la memoria para ciertas actividades repetitivas en realidad reside en los músculos que usted está utilizando. Una explicación sugerida es que cuando usted decide teclear ese número de teléfono de uso frecuente, su mente decide que es hora de iniciar la secuencia de números, envía los primeros dígitos y los dedos toman el relevo. ¿Cuántas veces ha marcado un número que sabía que había sido cambiado? ¿Alguna vez ha marcado el número equivocado a pesar que recordó que había un nuevo número? Todo tipo de entrenadores reconocen el valor de la memoria muscular. Pero ¿hay peligros ocultos? Descargas accidentales. Muchas personas que hicieron descargas accidentales le dirán que el arma de fuego "sólo se fue". Debe haber funcionado mal. Desafortunadamente, cuando el arma de fuego es inspeccionado por el departamento de arsenales, éste dice que la única manera de descargar el arma de fuego era porque el tirador apretó el gatillo. Y el tirador insistirá en que no presionó el gatillo. ¿Es posible pulsar el gatillo sin pensar conscientemente en ello? Claramente, la memoria muscular hace que sea posible. Es más, si la investigación más profunda acerca de la memoria muscular es cierta, puede ser posible que su dedo índice apriete el gatillo sin un mensaje de su cerebro. Tal vez el acto de colocar el dedo en el gatillo inicia una secuencia dentro de las células de los músculos que controlan el dedo índice y el dedo sigue a través de los siguientes pasos. Incluso si su dedo índice no desarrolla una memoria propia, una vez que coloque el dedo en el gatillo claramente ha iniciado la primera parte de una secuencia repetitiva que termina con oprimir el gatillo. Además, es posible que desde que ha puesto en marcha esta secuencia si no dispara, debe ser consciente de enviar un mensaje de "no disparar" a su dedo índice. En una situación de alto estrés usted caerá por defecto al nivel de su entrenamiento. Manejo táctico de armas de fuego. La mayoría, si no todos, los rangos de oficiales y buenos tiradores tácticos le enseñan a colocar su dedo a lo largo del arco guardamonte o marco. La única vez que mueve su dedo índice sobre el gatillo es cuando va a seguir adelante y dispara. En el campo, cada vez que desenfunda su arma sólo debe colocar su dedo a lo largo del marco. Su dedo no se mueve hasta el gatillo sino hasta que usted decide disparar. Aunque es demasiado pronto para saber si la memoria muscular fue contribuyente de alguna manera al incidente de San Bernardino, es un buen momento para revisar nuestras tácticas y destrezas básicas con armas. Podemos utilizar el incidente para abrir un diálogo entre nosotros acerca de nuestras políticas, tácticas y entrenamiento sin ser primero críticos mal informados.

Enfermo y cansado: ¿Cómo daña a los policías la privación del sueño? "La policía va de cero a cien en cuestión de segundos, literalmente y fisiológicamente"

Hayley Hudson

1 de octubre de 2012


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SAN DIEGO - A lo largo de los últimos años, numerosos estudios han demostrado que los policías son uno de los trabajadores en los Estados Unidos más privados de sueño. Dirigiéndose a una multitud de policías que sin duda sabían de antemano lo que hicieron los investigadores, un vocero de la IACP advirtió el lunes acerca de los efectos secundarios de la tendencia. Son más alarmantes que sentirse somnolientos a primera obligación del día o resoplar su cuarta taza de café antes de que haya llegado a la hora del almuerzo, dijo Kerry Kuehl, especialista en medicina deportiva de la Oregón Health and Science University. Su rendimiento realmente es afectado. En un estudio, una persona intoxicada obtuvieron mejores resultados en una prueba de reacción que alguien despierto durante 24 horas, lo cual no es un buen augurio para que la acción rápida y decisiva prescrita en el entrenamiento policial. "La policía va de cero a cien en cuestión de segundos, literal y fisiológicamente", dijo Kuehl. Basado en la estadística compartida por Kuehl, el cuerpo privado de sueño se somete a un asalto lento. Una declaración en particular destacó: un promedio de menos de 6 horas de sueño cada noche es comparable a fumar un paquete de cigarrillos -el eslabón más fuerte probado para las enfermedades del corazón- por día. "Algunas personas se adaptan a la falta de sueño mejor que otras, y creo que es sólo una parte de su estilo de vida", dijo Kuehl. "Cuando estás en deuda crónica de sueño, pierdes la capacidad de darte cuenta de lo cansado que estás". Kuehl presentó entonces a la audiencia una prueba rápida para determinar con precisión su nivel de somnolencia. La Escala de Somnolencia de Epworth en cuyas varias categorías se calificaría usted, usando la siguiente escala. "Puede parecer una tontería, pero si consigue 10 o más, eso en realidad es anormal", dijo Kuehl. Por desgracia, los efectos son doblemente perjudiciales a medianoche o trabajadores de los cementerios, cuya susceptibilidad a la depresión, la ansiedad, la presión arterial alta o la obesidad aumenta únicamente debido a sus horarios de trabajo. "Estamos diseñados para estar despiertos durante el día y dormir por la noche", dijo Kuehl a la sesión. "Ir en contra de la naturaleza es difícil". Y el cambio, dijo, es aún más difícil. "La respuesta parece obvia - sólo dormir más", dijo Kuehl. "Pero no es así de simple".

Escala de Somnolencia de Epworth ¿Qué posibilidades hay de que dormite o se quede dormido en las siguientes situaciones?

Responder considerando cómo se sintió durante más o menos la última semana.

0 = Nunca dormiría. 1 = Leve oportunidad de dormirse.

2 = Moderada probabilidad de dormirse. 3 = Alta probabilidad de dormirse.

1. Sentado y leyendo. 2. Viendo TV. 3. Sentado inactivo en un lugar público (ej.: teatro o reunión) 4. Como pasajero en un auto durante una hora sin un descanso. 5. Acostarse a descansar en la tarde, cuando pueda. 6. Sentado y hablando con alguien. 7. Sentado tranquilamente después de un almuerzo sin alcohol. 8. En un auto cuando para un par de minutos en el tráfico.


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Dile a alguien que haga algo y es algo improbable que siga adelante. Kuehl dijo que sólo tres a cinco por ciento de la población alguna vez cambia con éxito su comportamiento. Así, un programa llamado SHIELD, aprobado recientemente por la Oficina del Sheriff del Condado de Clark, puede o no puede ser eficaz. Aconseja más actividad física, y menos alcohol y tabaco, y una hora adicional de sueño para los oficiales, que se reúnen en grupos antes o después de su turno para repasar la lección recomendada en los planes de enseñanza sobre un estilo de vida saludable. Kuehl dijo que ha visto resultados positivos, pero la acción es requerida. "Esos son sólo herramientas, no ejercicios en clases", dijo Kuehl. "Eso depende del oficial".

Contraterrorismo, policías, y entrenar para el «cuándo» En este mundo post-11Set, nuestro entrenamiento debe tener un abordaje multifacético para “todos los

peligros” de modo que todos los oficiales posean el mismo conocimiento, expectativas y nivel de instrucción.

Sargento (R) Ed Flosi Magister en Ciencias (California State University)

2 de mayo de 2011 Ed Flosi es un sargento del Departamento de Policía en San José, California. Estuvo en servicio más de 27 años y actualmente está asignado como supervisor en la Unidad de Entrenamiento. Tiene una combinación única de formación académica y experiencia práctica en el mundo real del patrullaje, incluyendo operaciones especiales e investigaciones. Es el instructor principal actual de: (1) entrenamiento en el uso de la fuerza, y (2) tácticas de defensa y detención para el Departamento de Policía de San José. Ha sido retenido para prestar testimonio en varios casos en que un funcionario fue acusado de haber utilizado fuerza excesiva. Ha ayudado a la Comisión de California sobre Capacitación y Estándares para los Oficiales de Paz (POST, Peace Officer Standards and Training) brindando conocimientos especializados en varias ocasiones relacionados con el entrenamiento en el uso de la fuerza. Tiene una Maestría en Ciencias de la Universidad Estatal de California - Long Beach y cuenta con una Credencial para la Enseñanza y Aprendizaje de Adultos del Estado de California. Es profesor en West Valley College y sirve como Coordinador de Capacitación en la Ejecución de la Ley para Martinelli y Asociados: Consultores Forenses y Judiciales, Inc. Han pasado casi 10 años desde los ataques terroristas del 11Set, y en ese lapso hemos hecho mucho para aumentar nuestro entrenamiento de preparación para el próximo "grande". Con las noticias de última hora de ayer, que las fuerzas estadounidenses mataron a Osama bin Laden, autor intelectual de los ataques, se nos recuerda redoblar nuestros esfuerzos como agentes de la ley. Cuando entrene para tal evento, es importante recordar que cuando éste ocurra no habrá una sola agencia que tenga todos los recursos para comprometer con el fin de manejar todo el evento. La respuesta tendrá que incluir varias agencias y disciplinas, incluyendo la policía, bomberos y emergencia médica. Una revisión histórica de algunos eventos a gran escala revela algunos hechos muy preocupantes, pero no del todo sorprendentes. Los bomberos y el personal médico de emergencia han sabido y entrenado durante años que es mejor actuar bajo una estructura de comando unificada. Todas las agencias respondientes trabajan juntas sin tener en cuenta lo que dice el parche del hombro. El personal policial está llegando a esa realización. De hecho, en un evento a gran escala todas las disciplinas tendrán que trabajar juntas. La "grande" puede venir de varias formas incluyendo -aunque no limitadas- a: Desastres naturales. Arrojar materiales peligrosos (HAZAMT, Hazardous material) Lanzar Armas de Destrucción Masiva (WMD, Weapon of Mass Destruction) en un acto de terrorismo.


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Esos eventos no necesariamente son mutuamente excluyentes. Un evento a gran escala podría incluir una combinación de esos tipos de sucesos. Sólo necesita un poco de imaginación para pensar en un gran evento en su jurisdicción. Con ese evento en la mente, imagine los diferentes tipos de recursos que tendrían que responder y la gran cantidad de personal necesario para cualquier evento que dure más de 24 horas. Con esta mentalidad, nuestro municipio (Condado de Santa Clara, California), junto con los Jefes de Policía del Condado solicitaron -y recibieron- subsidios a través del Programa de Subvenciones de Seguridad Interior del Estado (SHSGP, State Homeland Security Grant Program) y la Iniciativa de Seguridad de Áreas Urbanas (UASI, Urban Areas Security Initiative) para comprar equipo de protección personal (PPE, personal protective equipment) y financiar un curso de capacitación de dos días para agentes del orden para cuando el "grande" ocurra. El programa de entrenamiento se conoce como Primer Respondiente en el Nivel Operacional-Aplicación de la Ley o, para abreviar, FROLAW (First Responder Operational Level-Law Enforcement). Además del hecho obvio que cuando se habla "la jerga de las operaciones de emergencia", hay necesidad de entender varios acrónimos y otras abreviaturas no pronunciables, y es necesario entrenar para cuando esos eventos ocurran y no por si ocurren. En la gestión de emergencias, hay cuatro fases: 1) Mitigación. 2) Preparación. 3) Respuesta. 4) Recuperación. Desde el punto de vista de administración de los servicios de emergencia, este entrenamiento es sólo uno en la rueda de la preparación. El tiempo y esfuerzo invertido en las fases de mitigación y preparación ayudará en la fase de respuesta; y esperamos disminuir las necesidades de recuperación. La misión del programa FROLAW es "entrenar y equipar a todos los agentes del orden público en el Condado de Santa Clara para responder con seguridad a un evento de armas de destrucción masiva (WMD) o de materiales peligrosos (HAZMAT), un evento de víctimas en masa, ya sea por un ataque terrorista, un accidente industrial o un desastre natural". No sea paranoico – Esté preparado. Este entrenamiento tiene un enfoque multifacético para afrontar "todos los peligros". La capacitación se brinda en todo el condado para que todos los funcionarios tengan los mismos conocimientos, expectativas y nivel de instrucción. Además de aprender sobre las tendencias del terrorismo actual y las técnicas de investigación, en este curso los oficiales aprenden a ponerse bien y a quitarse el traje químico, y operar con traje químico mientras aplica la ley (tácticas de detención, de bastón, búsqueda, conducción, etc.). Es razonablemente previsible que un oficial puede proporcionar protección a los bomberos y al personal médico de emergencia, además de muchas otras tareas relacionadas con la aplicación de la ley al mismo tiempo, mientras está encapsulado en un traje químico durante el "grande", como se describiera anteriormente. El entrenamiento es coherente en todo el condado, de modo que para cuando suceda, todos estemos en la misma página. El curso en realidad habla sobre el hecho que, cuando el "grande" pase, no importa si se trata de un acto terrorista o un derrame accidental de productos químicos, todos estemos juntos en esto; además, tenemos que aprender a trabajar unos con otros sin importar qué dice el parche del hombro. Si un evento de gran envergadura ocurre, esas habilidades y equipos especializados serán requeridos muy probablemente en un escenario de gran ayuda mutua, donde todas las agencias y disciplinas respondan a una emergencia de seguridad pública. Es críticamente importante entender este concepto de trabajo en equipo más allá de las agencias policiales vecinas y abarcar un enfoque más global de respuesta multi-jurisdiccional y multidisciplinaria. Diciéndolo claramente, la policía tiene que aprender a jugar bien con las otras disciplinas para que esto funcione.


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Con esto en mente, hemos comenzado a incluir personal de bomberos y de emergencia médica directamente en nuestro entrenamiento. Los beneficios han sido inmediatamente perceptibles. Hemos aprendido de ellos así como ellos han aprendido de nosotros. Hay mucha mejor comprensión y aprecio por los deberes y responsabilidades del otro. La idea es tener a la policía, bomberos y personal médico de emergencia trabajando juntos en un esfuerzo unificado.

Uso de la fuerza: Definiendo "razonable" versus "necesario" En los últimos años he escuchado muchos "estándares" jurídicos diferentes lanzados en relación con la

cantidad de fuerza que un oficial puede utilizar al efectuar un arresto, impedir la fuga,…

Sargento (R) Ed Flosi 11 de enero de 2012

Para la policía los incidentes con uso de la fuerza, las definiciones de palabras como "razonable" y "necesario" se discuten a menudo, pero a veces también se usan o se entienden mal.

Uso de la fuerza: Definiendo fuerza "objetivamente razonable" El término "objetivamente razonable" es el verdadero -y preciso- estándar legal cuando se enseña el uso de la

fuerza y/o cuando se evalúa el uso pasado de la fuerza de un oficial.

Sargento (R) Ed Flosi 8 de febrero de 2012

En la primera parte, hemos examinado los términos "fuerza mínima" y "fuerza necesaria". Aunque todavía se utiliza ampliamente en las discusiones relacionadas con la utilización de la fuerza de un oficial, debe ser evidente ahora que esos términos tienen algún bagaje negativo con ellos como un estándar sobre la fuerza. Ahora continuaremos la exploración de esos estándares sobre la fuerza para incluir el estándar que aboga para: "objetivamente razonable". Hablando desde un punto de vista gramatical, el término "fuerza objetivamente razonable" es un estándar mucho más preciso para describir qué deben rendir los oficiales que utilizan la fuerza. El término no lleva el idealismo poco realista y utópico del término "fuerza mínima". Además no da ninguna implicación de que describa una cuantía exacta de fuerza que pueda ser debatida durante semanas. No da la idea de que un uso de la fuerza debe ser visto en retrospectiva, para determinar si realmente era "necesario". De hecho, todo lo que uno tiene que hacer es volver a visitar a nuestro amigo el diccionario Merriam-Webster en línea. La palabra razonable (usada como adjetivo) también tiene varios significados y sinónimos. Se incluyen en la lista los siguientes: 1. Es conforme a la razón, y 2. No es extrema o excesiva. Los pocos sinónimos incluidos son: bueno, racional, lógico, sensato y sano. Cuando se comparan las definiciones de los términos escritos sobre este artículo, preferiría ser llevado a un estándar que:


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1) Requiere certeza absoluta y puede considerar los hechos que fueron descubiertos a posteriori, o 2) Toma en consideración el estándar legal usado por la Corte Suprema de EE.UU. y las limitaciones del

desempeño humano. Sé que la respuesta es obvia para mí. Me doy cuenta de que algunos desecharán este pensamiento como "sólo semántica". Advierto a las personas negativas con las mismas palabras que uno de mis entrenadores me dijo hace varios años: "la ley se compone de palabras, y esas palabras tienen definiciones". Por favor, preste atención a estas sabias palabras, ya que es para su beneficio. Decisión objetiva/subjetiva - Análisis objetivo. La palabra "objetivamente" es el adverbio de la palabra "objetivo". En este caso se utiliza como un modificador del adjetivo "razonable" para describir el sustantivo "fuerza" (perdón por la lección de gramática... otra vez). Otra comprobación rápida con el diccionario Merriam-Webster revela la definición de "objetivo" para incluir: "involucrando o derivando de la percepción sensorial o experiencia con los objetos reales, condiciones o fenómenos". Los sinónimos de la lista incluyen: empírica y observacional. Un oficial tomará su decisión sobre la opción de la fuerza en base a las acciones del sospechoso. Si el sospechoso no es resistente y cumple, el oficial no tendrá ninguna razón para tener que recurrir a una respuesta de fuerza. Así, en esencia, es el sospechoso el que obliga a un oficial a elegir una respuesta de fuerza. La opción elegida de fuerza y la forma en que se distribuye y usa contra el sospechoso puede tener un componente subjetivo. El oficial puede tener una variedad de opciones razonables pero en base a las preferencias personales puede inclinarse hacia una más que a otra. Aquí es donde la subjetividad entra en juego. La decisión aún debe hacerse en base a datos objetivos conocidos por el agente en el momento de la aplicación de la fuerza. La respuesta de fuerza del oficial sin duda será evaluada a partir de un estándar objetivo, como se reconocerá claramente después de leer y entender el verdadero estándar legal sobre el uso de la fuerza por parte de un oficial. El verdadero estándar legal. En 1989, la Corte Suprema de los Estados Unidos (SCOTUS, the Supreme Court of the United States) dictó una de las decisiones clave relacionadas con la utilización de la fuerza de un oficial. El caso fue «Graham v Connor» (490 U.S. 386). Esta decisión creó un estándar nacional que sigue vigente hoy en día. En su decisión, SCOTUS dejó en claro que el uso de la fuerza de un oficial hacia un ciudadano libre debe ser evaluado como una incautación de la persona bajo la Cuarta Enmienda. De hecho, SCOTUS dijo que en su contenido: Todas las afirmaciones de que los oficiales han usado fuerza excesiva -mortal o no- en el curso de un arresto, parada de investigación, u otro tipo "secuestro" de un ciudadano libre son analizadas apropiadamente bajo el estándar de "razonabilidad objetiva" de la Cuarta Enmienda, en lugar de bajo un estándar sustantivo del debido proceso. Lo que es importante para el lector de este artículo es la frase "razonabilidad objetiva". ¿Cómo llegó SCOTUS a este término? Tal vez una rápida revisión de la Cuarta Enmienda puede arrojar algo de luz. La Cuarta Enmienda protege a las personas contra registros e incautaciones irrazonables por parte del gobierno y sus agentes. Por lo tanto, lógicamente se deduce que los funcionarios deben actuar de manera razonable al "apoderarse" de la gente. Graham establece una serie de pautas de evaluación y factores que deben tenerse en cuenta al evaluar el uso de la fuerza por parte de un oficial. Esas guías de evaluación incluyen una dirección general a cualquier persona que elige opinar sobre la respuesta de la fuerza de un oficial: El cálculo de razonabilidad debe incorporar el hecho de que los policías se ven obligados a tomar decisiones en fracciones de segundo -en circunstancias que son tensas, inciertas y de rápida evolución- acerca de la cantidad de fuerza que es necesaria en una situación particular.


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Una vez que la persona elige, su opinión entiende esta dirección general, y también necesita ser consciente de esas directrices mientras formula su determinación de la razonabilidad de la respuesta de fuerza por parte del oficial: 1. Juzgada a través de la perspectiva de un oficial razonable.

a. Oficial con igual o similar entrenamiento y experiencia. b. Enfrentando circunstancias similares. c. Actuar de la misma manera o usar juicio similar.

2. Basado en la totalidad de los hechos conocidos por el oficial en el momento en que la fuerza fue aplicada.

a. No importa qué tan convincente sea la evidencia que se encuentra más adelante. b. Ninguna evaluación retrospectiva.

3. Basada en los hechos conocidos por el agente sin tener en cuenta la intención o la motivación

subyacente. 4. Basada en el conocimiento del oficial que actuó apropiadamente bajo la ley establecido en el momento. Para que el uso de la fuerza de un oficial sea considerado "objetivamente razonable", su respuesta de fuerza ("qué" y "cómo") debe ser razonablemente balanceada con los intereses gubernamentales en juego ("por qué"). El nivel de respuesta de fuerza del oficial (quantum) puede ser medido mediante la evaluación de: 1) "Qué" la opción de fuerza fue usada, y 2) "Cómo" se usó. Otra forma de ver esto sería haciendo la pregunta: "¿Cuál era la expectativa razonable de daño?". En Graham, SCOTUS le dio a la aplicación de la ley varios factores para examinar cuando se evalúa el "por qué" de la opción de fuerza de un oficial, incluyendo pero no limitado a: 1) La gravedad del delito en cuestión, 2) La amenaza del sospechoso, y 3) El nivel de resistencia ofrecida por el sospechoso. Para que el uso de la fuerza de un oficial sea considerado "objetivamente razonable", su respuesta de fuerza ("qué" y "cómo") debe ser razonablemente balanceada con los intereses gubernamentales en juego ("por qué"). El nivel de respuesta de fuerza del oficial (quantum) puede ser medido mediante la evaluación de: "Objetivamente razonable" es el verdadero -y preciso- estándar legal cuando se enseña el uso de la fuerza y/o evalúa el uso pasado de la fuerza por parte de un oficial. Debe evitarse usar cualquier otro estándar, porque es un estándar legal falso y puede ser fácilmente malinterpretado o tergiversado - a sabiendas o no.

Uso de la fuerza: Caídas del modelo continuo Debido a que es imposible para cualquier modelo de proceso continuo proporcionar un conjunto de

circunstancias en cada situación única, un modelo de "opciones de fuerza" es la alternativa política óptima

Ed Flosi

30 de mayo de 2012


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En artículos anteriores -Uso de la fuerza: Definiendo «razonable» versus «necesario» y Uso de la fuerza: Definiendo fuerza "objetivamente razonable"- hemos examinado el concepto de "razonabilidad objetiva" según lo establecido en «Graham v Connor». En varios de los comentarios debajo de esos artículos, algunos lectores se refirieron a la continuidad de la fuerza. Algunas de las referencias parecían apoyar este modelo, mientras que otras no lo hicieron. Este debate es una férrea defensa en ambos lados. En consecuencia, muchas agencias han abandonado su modelo de fuerza continua (escalera, escalada, rueda, etc.) por un modelo de "opciones de fuerza". En 2000, el Departamento de Policía de San José se convirtió en una de las principales agencias mayores en alejarse de un modelo continuo de "opciones de fuerza". Este tipo de modelo de política es la que elimina los diagramas bidimensionales y en su lugar refleja el estándar de razonabilidad objetiva como su premisa. Las opciones de fuerza a disposición del agente no están clasificadas en un nivel particular. Esto le da al oficial más flexibilidad y más discreción para elegir la opción de fuerza que es inmediatamente más razonable sobre la base de la totalidad de los hechos conocidos por él sobre esa situación específica. No basado en la ley. Los modelos continuos fueron desarrollados décadas atrás, cuando los tribunales brindaban poca orientación sobre el uso de la fuerza. Estaban acostumbrados a explicar "cuándo" un oficial podría usar un tipo de fuerza en lugar de la tradicional serie de cursos que explican "cómo" disparar una pistola. Los modelos continuos no se basan en la ley y, de hecho, pueden estar en conflicto con lo que se considera "objetivamente razonable" según los estándares legales de hoy. No hay modo posible de que cualquier modelo de proceso continuo prevea toda una serie de circunstancias en cada situación única. Algunos modelos continuos intentan emparejar una opción de fuerza con la agitación de un sospechoso, sin ningún tipo de pensamiento en cuanto a la forma en que se usa la opción de fuerza, la totalidad de los hechos conocidos por los oficiales u otros factores mencionados en la decisión Graham. Durante años, la escopeta para aturdir era referida como "escopeta menos letal". Es bien sabido que la manera en que generalmente se usa tendrá un nivel menor de intrusión que una opción tradicional de fuerza mortal. Afirmar el nivel de una opción de fuerza, antes de saber cómo se utiliza en una situación particular, es problemático. Esta es una de las fallas principales del modelo continuo. Cuanto de fuerza. El nivel (quantum, una cantidad de algo) de cualquier fuerza no es meramente afirmado por la herramienta en sí, sino también por la manera en que se usa. Por ejemplo, ¿dónde pegar con el bastón? Se puede argumentar que debe estar en varios lugares si usted tiene una continuidad. El bastón trabado en los brazos se usa para guiar a un manifestante a la acera con un suave movimiento de empuje; sin duda es una intrusión de nivel muy bajo y por lo tanto, debe ser colocado bajo en el continuo. El mismo bastón usado para golpear a propósito a un sospechoso combativo en la parte carnosa del antebrazo es más de un nivel intermedio de fuerza y por lo tanto, debe ser colocado en algún lugar en el centro. El mismo bastón usado para golpear a propósito a un sospechoso en la cabeza debido a que la situación escala al nivel de la fuerza mortal es, por supuesto, fuerza letal, y por lo tanto, debe aparecer como fuerza letal. ¿Dónde pegaría con el TASER u otro dispositivo de control electrónico? Se podría argumentar que un dispositivo de control electrónico podría ser una herramienta de fuerza letal en base a la forma en que se usa. Si el funcionario tuviera que estar a tres pies de distancia de una persona e inclina el TASER 90 grados (para desplegar sondas en el plano horizontal) y pone el punto rojo directamente en un ojo con lo que la sonda "top" llegará a un ojo y la sonda menor golpeará el otro ojo, hay un riesgo significativo de lesiones corporales graves o muerte... que es la actual definición utilizada por la mayoría de los tribunales de los Estados Unidos. Quienes exigen un continuo para enseñar podrían estar pensando demasiado unidimensionalmente, sin tener en cuenta la segunda parte de la ecuación. El Departamento de Policía de San José enseña (y la política lo refleja), usando el lenguaje de la ley estatal de California que autoriza una fuerza razonable (Códigos Penal de California 835 y 835a) y la Cuarta Enmienda interpretada por la jurisprudencia (específicamente Graham v Connor y Forrester v San Diego).


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Un test que usamos que parece ser muy útil, es la "Escala de Graham". Conceptualizamos una típica balanza de dos platos (como los platillos de la justicia). En un plato ponemos los factores enumerados en Graham sobre la base de la percepción de los agentes en el momento (severidad del delito en cuestión, amenaza del sospechoso al oficial y a otros, el nivel de resistencia del sospechoso). Esos factores son todos "ponderados". La opción de fuerza (la herramienta y la manera en que se usa) va en el segundo plato y es "ponderada" en cuanto a su intrusismo, o expectativa razonable de lesión. Lo que estamos buscando en este modelo es algo así como un equilibrio entre los factores de Graham y la calidad y naturaleza de la intrusión en los derechos de las personas contra las tomas excesivas. Se entiende que el platillo nunca estará exactamente en el nivel muerto, pero eso no es lo que se requiere de los oficiales. Los platos deben ser algo más equilibrados y aquí es donde lo razonable entra en juego en lugar de la cantidad exacta o mínima de fuerza necesaria. Si las puntas del plato están demasiado lejos en el nivel de fuerza (intrusión), entonces nos metemos en una fuerza excesiva. Si se inclina demasiado hacia el otro lado, podemos estar ante un problema de seguridad del oficial. Este modelo puede ser usado como un método de enseñanza a través de diversos ejemplos y escenarios. La clave de este modelo de opciones de fuerza (y cualquier otro modelo) es el entrenamiento. Pasamos tiempo explicando la ley y cómo será evaluada la respuesta de fuerza de un oficial. Al alumno se le dan varios escenarios para operar usando este modelo. Después de realizarse en el escenario, debe expresar claramente y justificar sus respuestas basadas en la ley y en la política. Los tribunales han sido muy claros al decir: 1. La prueba es una de razonabilidad y no de escalada, y 2. Los oficiales no están obligados a usar o tratar alternativas menores hasta lograr una fuerza razonable. Hay varios escollos en el uso del modelo continuo, bien documentados en la literatura. Recomiendo que cada oficial investigue esos artículos a ambos lados del debate. Entonces, y sólo entonces, puede el funcionario tomar una decisión bien razonada en cuanto a cuál es el modelo que mejor refleja las "mejores prácticas".

Fuerza letal: Usted no (intentar) matará

Ed Flosi

27 de junio de 2012 "Bond, James Bond". Si esta es la forma de presentarse, y es empleado por el Servicio Secreto de Su Majestad, y su número de placa es 007, entonces usted tiene una licencia para matar y no necesita leer este artículo. En cuanto al resto de nosotros que podría usar la fuerza letal para detener o aprehender a un sospechoso, por favor siga leyendo. A falta de una sentencia de muerte, el resultado deseado por un oficial cuando usa la fuerza letal no debe ser específicamente matar al sujeto. No importa qué podría haber hecho el sospechoso, debemos confiar en nuestro entrenamiento y al hecho de que no sólo estamos sujetos a un estándar más alto, sino que somos el estándar más alto. Necesitamos separar la emoción y recordar nuestras tareas: 1) Parar de inmediato las acciones del sospechoso, y 2) Arrestar al sospechoso. Trampas verbales. Los oficiales de policía tienen una forma única de comunicación. A veces viene en forma de humor negro para aliviar el estrés. A veces es el oficial tratando de "encajar", cuyo personaje machista sólo se interpone en el camino de lo que el uniformado siente realmente.


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Tal vez usted ha oído a un oficial durante la capacitación de decir algo como: "vamos a matarlos a todos y dejar que Dios lo solucione". No es la intención del oficial matar específicamente en esos casos, pero como entrenadores debemos abordar el lenguaje si lo escuchamos. Los Instructores de policía en el pasado instruían a los oficiales diciendo que cuando apuntaran sus armas a alguien, dijeran que la van a "matar" en lugar de "voy a tirar". En el entrenamiento de simulación de opción de la fuerza, no es raro escuchar a los oficiales gritando: "¡Deténgase o lo mataré!". Cuando se les pregunta si realmente hubiera querido que el sospechoso muriera, su respuesta es abrumadoramente "no". En algunos casos, hemos determinado que el agente había sido entrenado para decir eso - creer que si el oficial dice "matar", asustaría al sospechoso al punto de someterlo. Los oficiales de policía harán según se entrenan, y bajo estrés la respuesta dominante prevalecerá. En un tiroteo, sin duda un acontecimiento estresante, no queremos que los oficiales digan algo que puede causarles problemas más tarde. Aunque se entiende mal por qué se dijo, podría ser interpretado por un tercero como un deseo premeditado de matar, especialmente si resulta en muerte. Esto es algo que un abogado defensor podría intentar explotar. Disparar al centro de la masa. La idea de usar la fuerza letal para detener una amenaza que pone en peligro la vida está en consonancia con la ley, las responsabilidades éticas y con la capacitación actual de la policía. Es bien sabido que al disparar al centro de la masa es muy probable que golpeemos algo que detendrá la amenaza. Esto es puramente una cuestión táctica, aunque bajo estrés no es práctico creer que un oficial puede detener la amenaza en el momento oportuno con precisión golpeando otras partes del cuerpo. También es bien conocido y aceptado, que el disparo al centro de la masa puede causar la muerte. Aunque la muerte puede ser el resultado de apuntar al centro de masa, nunca debe ser la intención del oficial que usa la fuerza letal. La intención del funcionario debe ser sólo detener o aprehender al sospechoso. Una vez dimos una clase de demostración con el Simulador de Opción de Fuerza para el Gran Jurado. En nuestro condado, los oficiales involucrados en tiroteos son revisados por el Gran Jurado para determinar si hay alguna responsabilidad penal en el uso de la fuerza letal. Uno de los miembros realmente no entendía por qué los agentes disparaban al centro de la masa. Este jurista se preguntó por qué los funcionarios no podían disparar a un sospechoso en la pierna para herirlo o dispararle al cuchillo en las manos del sospechoso. Un viaje rápido en el simulador y una introducción a algunas "circunstancias de tensión, de incertidumbre y que evoluciona rápidamente" fue suficiente para convencer a los juristas de las áreas adecuadas de disparo. Disparar a blancos de papel que no devuelven los disparos generalmente es fácil y definitivamente no pone en peligro la vida. Sustituya a un sospechoso armado que incluso podría dispararle al oficial y lo más probable es que la puntería del oficial disminuya en gran medida. En esta situación, si el oficial decide usar la fuerza letal, es porque el uniformado percibió que las acciones del sospechoso son de inminente peligro para la vida, requiriendo acciones para pararlo de inmediato. En otro ejemplo ilustrativo de una aplicación de la fuerza letal, un oficial responde a un robo a mano armada en curso. A su llegada, el oficial ve al sospechoso saliendo de la tienda con una pistola en una mano y una bolsa en la otra. Al ver al oficial, el sospechoso empieza a huir de la policía. El oficial respondiente razonablemente cree: 1) El sujeto que huye plantea una amenaza de muerte o serio daño físico, ya sea al agente o a terceros (si se le permite escapar), y 2) El sujeto ha cometido un delito que involucrando la imposición o amenaza de daño físico grave. Si el funcionario tuviera que disparar a este sospechoso, debería evitar la fuga de un sospechoso muy peligroso. Una vez más, no sería razonable para el funcionario creer que bajo esas condiciones podría detener a un sospechoso que se aleja disparándole a otra cosa que no sea la masa central. Disparar al centro de la masa es la única opción disponible que permitiría al oficial golpear rápidamente al sospechoso en un área que probablemente lo detendrá; es todo una cuestión de táctica. Si el resultado final es la muerte del sospechoso, es el resultado de una decisión táctica provocada por las propias acciones de los sospechosos, no los resultados esperados.


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Disparo de francotirador. Si un francotirador de la policía dispara deliberadamente a la cabeza de un sospechoso, ¿es el resultado pretendido ahora la muerte? Es bien sabido que la supervivencia de este tipo de tiro es muy baja, pero la respuesta sigue siendo la misma. La intención del francotirador es detener las acciones del sospechoso. Si el sospechoso sobrevive al incidente o no, no cambia la razonabilidad o el propósito de la fuerza usada. Nada cambia en esta circunstancia, incluso si se hubiere producido la muerte - es el resultado final de una decisión táctica provocada por las propias acciones del sospechoso. Conclusión. Se entiende que como un agente de la ley, uno puede ser forzado a tomar una vida a fin de salvar otra en determinadas circunstancias. Los oficiales de policía no disparan a matar, ni disparar a herir. En una situación en la que un oficial ha tomado la decisión de usar la fuerza mortal, el sospechoso está haciendo algo que está causando una inminente y significativa amenaza a la vida de alguien y esas acciones deben ser detenidas de inmediato. Los oficiales usan la fuerza letal para detener o aprehender. Recuerde nuestro rol como oficiales de policía y la próxima vez que le preguntan: "¿Los policías son entrenados para disparar a matar?" Cortésmente dígales la verdad. No.

Tres criterios "externos" de entrenamiento de combate críticos Mi principal preocupación con recomendar una escuela/estudio es si esa escuela/estudio tiene un cierto

conocimiento del entrenamiento policial

Sargento Ed Flosi

24 de julio de 2013 Como Instructor de tácticas defensivas, siempre he recomendado ir fuera del círculo de lo que se enseñaba en la academia a fin de encontrar nuevas destrezas que pueden adecuarse mejor al estudiante y su bolsa de herramientas. En consecuencia, reclutas y oficiales por igual me pidieron que recomendara un estilo o sistema de tácticas defensivas para que exploren. A menudo, los estudiantes llegan a la academia con sus propios conjuntos de habilidades que han aprendido del estudio de otros sistemas de combate. Algunos tienen una antecedentes en lucha o en artes marciales, mientras que otros vienen a nosotros con las habilidades que se enseñan en el servicio militar. Aunque todos estos son buenos conjuntos de habilidades para llevar a la academia, en su mayor parte no enseñan lo que pretendemos. Cuando enseñamos tácticas defensivas a los reclutas y a los oficiales en servicio, debemos ser siempre conscientes de que estamos enseñando la solución de la aplicación de la ley. Algunas diferencias que tenemos que abordar son: 1) No estamos tratando de presentar al sospechoso en un tap mientras está siendo controlado por un árbitro. La superficie de la lucha en la que estaremos no será una estera. Es muy probable que sea una superficie dura con un montón de obstáculos, creando posibilidades de lesiones. 2) Nosotros no tenemos que "jugar limpio" ni luchar con reglas propias de un torneo. Se nos permite usar una mayor cantidad de fuerza razonable para superar el nivel de resistencia presentada por el sospechoso. En situaciones de fuerza letal, sólo hay una regla: usted debe ganar. 3) Siempre tenemos que ser conscientes de que si estamos lo suficientemente cerca como para tocar al sospechoso, éste está lo suficientemente cerca como para tocar nuestras armas. Cualquier escuela o estudio que no tiene en cuenta este punto no debe ser considerado. 4) Debemos darnos cuenta de que cuando enseñamos técnicas de suelo a las fuerzas del orden, estas pelearán: a) En un uniforme que es más probable que esté hecho a medida, y b) Usando un cinturón de servicio. Claramente, esos serán más restrictivos y darán menos flujo libre que un karategi.


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Mi principal preocupación con recomendar una escuela/estudio es si esa escuela/estudio tiene un cierto conocimiento del entrenamiento policial. Si usted está buscando para ampliar su conjunto de habilidades que he aquí algunas recomendaciones básicas de lo que debe buscar: 1) Habilidades motoras gruesas: ¿Enseña el estudio las destrezas que utilizan las habilidades motoras gruesas? Manténgase alejado de los lugares que hacen hincapié en las habilidades motoras finas en su enseñanza. Pueden parecer bonitos, pero sabemos que no será eficaz bajo estrés. 2) Fácil de aprender y alto nivel de retención: ¿Enseña el estudio las habilidades que son simples y fáciles de recordar? ¿Se adhieren al principio de "un estímulo: una respuesta", o es que enseñan diversas variaciones intrincadas para el mismo estímulo? Por ejemplo, si tu arma enfundada es atacada, ¿la respuesta depende de qué mano utiliza el sospechoso? El estímulo aquí es su arma que está siendo atacada. Debe tener una respuesta basada en principios simples que funcionarán independientemente de la mano que el sospechoso esté utilizando para atacar. 3) Basado en principios: ¿El sistema utiliza un enfoque basado en principios? Cada pelea en la que estuve siempre fue diferente de todas las demás. Los sospechosos reaccionarán y se moverán de manera diferente a su compañero de entrenamiento. Si el estudio está enseñando una serie estricta de movimientos predicados por un tipo específico de ataque, no se transferirá fácilmente a la situación en la que un sospechoso hace algo inesperado o diferente a cómo respondió su compañero de entrenamiento voluntario. Esas son sólo algunas sugerencias para conseguir que los reclutas y oficiales comiencen a registrarse fuera en una escuela/estudio. Otra cuestión importante para que se pregunte el estudiante es: "¿Estoy a gusto con la organización y los instructores?” Si usted encuentra que la respuesta a esta pregunta es "no", entonces váyase. No hay sistema de tácticas defensivas perfecto para todos. Salga y explore los diferentes tipos de entrenamiento que se ofrecen, encuentre el sistema que funcione para usted y le mantiene a salvo. Mezcle y combine lo que le gusta y descarte lo que no le gusta. Sea lo que sea que usted elige en última instancia, ¡mantenerse en forma y practique sus destrezas!

Hojutsu-Ryu, el arte marcial del tiro 6

Jeffrey Hall

Jeff Hall (arriba, izquierda), retirado del servicio del Estado de Alaska, ex soldado e instructor de la ANR, es un

tirador experimentado y un artista marcial. Puede ser contactado en www.hojutsu.com A primera vista, el concepto del uso de las armas de fuego como un arte marcial "tradicional" parece ridículo. Después de todo, las artes marciales están cargadas de siglos de tradición, misticismo, y hazañas y destrezas sobrehumanas; ¿cómo puede compararse el disparar un arma de fuego con esto? Si considera los principios, en lugar de las herramientas, los disparos con armas de fuego son claramente un arte marcial. La postura, el 6 Hall, J. Hojutsu-Ryu, the martial art of shooting. http://thefiringline.com/forums/showthread.php?t=323416. 1 de diciembre de 2008.


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equilibrio, el enfoque, la ejecución y el seguimiento a son lo mismo, aun cuando el resultado sea el golpe de un puño o de una pistola. Tenemos que dominar cada uno de estos elementos de la técnica antes de que podamos luchar de forma eficaz. En cuanto a la tradición, ¿en qué punto el aprendizaje de una habilidad física se convirtió en una tradición? Estoy bastante seguro de que el primer guerrero que entrenó con una katana [sable japonés o daitō; un tipo particular de sable de filo único, curvado, tradicionalmente utilizado por los samuráis. Ronda el metro de longitud y el kilo de peso] sólo buscaba una herramienta que podía salvar su vida; mejores espadas y técnicas eficaces evolucionaron en un protocolo de entrenamiento formalizado útil para la espada, pero probablemente se desarrolló a través del ensayo y el error. El tiro ha sido siempre un arte marcial. Lo marcial, o militar, fue la razón principal del avance tecnológico de las armas de fuego. Hemos progresado a partir de los tubos de bambú envueltos en resina, hacia los tubos de hierro, a través de una variedad de sistemas de encendido, hasta las armas sofisticadas de hoy. Sin embargo, ninguna tecnología sustituirá el entrenamiento dedicado con instructores profesionales, y toda una vida de dedicación a las artes del tiro. Las armas de fuego fueron introducidas en Japón en 1530 por los portugueses. Aunque algunos puristas desdeñaron las nuevas armas, otros las adoptaron. El samurái [侍, palabra generalmente utilizada para designar una gran variedad de guerreros del antiguo Japón, si bien su verdadero significado es el de una élite militar que gobernó el país por cientos de años. Aunque no existe una certeza del origen exacto de la palabra samurái, la mayoría de los historiadores concuerdan en que tiene su origen en una variación del verbo en japonés antiguo saburau que significa «servir», por lo que el término derivado saburai se convierte en «aquellos que sirven»] después de todo, estaba en el "negocio" de la guerra, y la adquisición de armas de fuego añadió ventajas tácticas y estratégicas a quienes las utilizaban. En 1575 en la Batalla de Nagashino, un ejército de campesinos conscriptos, equipados con armas de fuego, derrotó al ejército clásicamente armado y entrenado Takeda Katsuyori. Esta victoria aseguró la inclusión del arma de fuego en la cultura militar japonesa. Típicamente japonés, pronto evolucionó una formalizada y estructurada disciplina de entrenamiento. Hojutsu o "arte del fuego" es considerado un koryu (古流, literalmente en japonés, ‘antigua escuela’ o ‘antigua tradición’) anterior a 1868. Por lo general, se traduce como "el arte de las armas". Desde que la mayoría de los tiradores modernos perciben al armamento como artillería o armas con servicio de grupos, me tomé la libertad de cambiar el término "artillería" por el de "tiro". Hojutsu-Ryu entonces, es la "Escuela del Arte del Tiro".

En 1999, daba una clase sobre rifles en la ANR de Fairbanks, Alaska. En las tardes, entrenaba en el dojo del So-Shihan Charles Scott. El maestro Kyoshi Yamazaki estaba en la ciudad, en una clínica, y fue invitado a una serie durante el almuerzo. Después de veinte minutos de entrenamiento, el maestro Yamazaki estaba tirando pequeño grupos de proyectiles con un Colt 1911. El maestro Yamazaki causado me iluminó en relación con la similitud del entrenamiento con armas de fuego y otras artes marciales; entonces me propuse hacer del moderno uso de armas de fuego un reconocido arte marcial. Para ello, inicialmente, hubo tres razones:


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• reconocer años dedicados al entrenamiento para alcanzar maestría en el uso de las armas de fuego, • integrar otras armas (manos, pies, palos, cuchillos) en el bagaje del guerrero, y • esforzarse para lograr la excelencia en el entrenamiento con armas de fuego. Un cuarto beneficio, la disciplina, pronto se hizo evidente - se me ocurrió que si podemos inculcar disciplina de entrenamiento marcial en un joven tirador, ¡tal vez tengamos menos idiotas en la calle! Con la ayuda de muchos grandes artistas marciales y tiradores, mezclé la técnica moderna con la estructura de entrenamiento tradicional japonés. No inventé nada - sólo formalicé un concepto que muchos de nosotros hemos hablado durante años. Mis primeros mentores en las armas de fuego fueron, incluyendo a mi padre (un DSC con ocho Corazones Púrpura), Jeff Cooper, y Chuck Taylor, con la posterior influencia de Clint Smith y Louie Awerbuck, entre otros. Los grandes maestros Marcos Shuey y el doctor Charles Scott también me guiaron en este camino. Esta búsqueda ha dado lugar a la inducción en las Artes Marciales de EE.UU. y en la Galería de la Fama de las Artes Marciales Universales, de la promoción a décimo dan y Gran Máster, y ser nombrado soke, o fundador, de la técnica. Lo que esto significa para aquellos de ustedes con antecedentes no tradicionales es que los sobrios y ancianos Grandes Másteres acordaron que el tiro con armas de fuego es un arte marcial, lo "bendijeron", y lo legitimaron en el mundo de las artes marciales. Al momento de ser escrito este artículo, Hojutsu-Ryu es el único arte de las armas de fuego formalmente reconocido. En Hojutsu-Ryu, entrenamos en el dojo, en la retención de armas, el desarme, puñetazos, patadas, palos de todo tipo, armas con filo, y la lucha en el suelo; adherimos al protocolo tradicional (reverencia, meditación, etc.) durante las sesiones en el dojo. En la serie, con ropas normales, empezamos con la pistola y progresamos a través de escopetas, carabinas, revólveres, rifles de precisión, y pistolas-ametralladoras. Cada arma portátil se convierte en la prueba más difícil, hasta el test sandan (3er dan) o prueba de Chuck Taylor para el Combate Maestro de Lucha con Pistola, disparar un 98% en tres pruebas consecutivas. Los estándares requieren que, si se pierde un solo impacto fuera del anillo exterior de puntuación, fracase toda la prueba - el tirador debe comenzar de nuevo. Usamos el "SJH" o blanco Hojutsu ( www.letargets.com). Antes de iniciar el entrenamiento con la carabina, cada estudiante debe también pasar el shodan (1er dan) o test con un revólver (¿cómo denominarse hombre de armas si no puede usar un arma con tambor?)

Dojo: Término empleado en las artes marciales del Japón y Okinawa. Un dōjō es un salón de entrenamiento de artes marciales o de meditación (Zen). Tradicionalmente, es dirigido por un sensei. No sólo tiene relación con las artes marciales (Budo), sino también con el budismo zen. En japonés, dōjō (道場'dōjō') significa literalmente "el lugar de la Vía". Esta expresión se refiere a la búsqueda de la perfección física, moral, mental y espiritual, ya sea para las artes marciales como karate, judo, aikido, nanbudo, jujitsu, kendo, iaido, Taekwondo, Hapkido, etc., o para algunas prácticas religiosas como en el budismo la práctica del zazen, un estado de contemplación en el cual el practicante adquiere un estado de despego del mundo material y de las ideas vanas y egoístas que impiden una visión directa de la realidad.

En cada nivel, el estudiante debe pasar una prueba escrita sobre las armas de fuego, una prueba oral, escribir un ensayo sobre una materia determinada, ser maestro de kata [型 o 形, literalmente: "forma", palabra japonesa que describe una serie o secuencia de movimientos preestablecidos que se pueden practicar normalmente solo pero también en parejas] (hay tres katas, desde el primer hasta el tercer dan), y disparar con seguridad en lapsos comprimidos. Las pruebas escritas se refieren a la historia del desarrollo de las armas de fuego - los estudiantes tienen que saber que la Glock no vino por FedEx desde el paraíso (¡como ocurriera con la 1911!). Nuestro objetivo es desarrollar combatientes que puedan ganar cuando estén en posición horizontal o a 300 metros de distancia. Un típico seminario durará unos cuatro días. Cada mañana nos encuentra entrenando en el dojo durante dos horas, practicando desarmes y retenciones, técnicas con la mano vacía, y kata. El resto del día se pasa en el campo de tiro, perfeccionando la técnica, mejorando la velocidad y la precisión, y la preparación para la prueba.


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El cuarto es día de exámenes. Empezamos a las 08:00, en el dojo, para la kata (sólo la parte subjetiva de las pruebas). En la serie, el test comienza con una parte del tiroteo. Deben rendirse tres sesiones de tiro, en un orden específico, en series desde el contacto cercano hasta los cincuenta metros. Dependiendo de la prueba, los tiempos van de 1,1 segundos a 90 segundos. Para pasar, los estudiantes deben tener dominada la velocidad y la precisión: el 90 por ciento es requerido para shodan (1er grado negro), el 95 % para nidan (negro 2do grado negro), el 98 por ciento para sandan (3er grado negro). Cada exceso de tiempo es penalizado con cinco a diez puntos, según el curso. Después de pasar parte de las sesiones de tiro, los estudiantes deben realizar recargas de velocidad, recargas tácticas, y resolver casos de mal funcionamiento del tipo 1, 2 y 3 en plazos comprimidos. Hojutsu-Ryu no es para todos. No tiene ningún recurso para algunos tradicionalistas que no creen que las armas de fuego pertenezcan a las artes marciales. Tiradores sin antecedentes de fondo en artes marciales no entienden la formalidad de las sesiones en el dojo (¡es más fácil de convertir un buen artista marcial en un tirador que viceversa!). Usted puede adquirir las mismas habilidades con las armas de fuego asistiendo a clases en cualquiera de las escuelas menciono al final del artículo, sin usar “pijama” ni tener que hacer reverencias. Hojutsu es más acerca de mentalidad que de técnica específica, aunque requiero la postura Weaver, en la creencia de que encaja mejor en un sistema global de lucha. En algún momento, la técnica es menos importante que el principio, pero tenemos que construir una base sólida - la Técnica Moderna es ese fundamento. Una vez más, en algún punto, cada arte marcial se convierte en un arte individual; de nuevo, las bases sólidas tienen que ser dominadas antes que el libre pensamiento tenga lugar. Algunos sienten que los estándares son demasiado altos (sin un alto nivel, ¿qué valor tienen? Vaya comprar un certificado de cinturón negro en Internet...). Desde que comenzó el arte, tuvimos un interesante grupo cruzado de tiradores comenzando su entrenamiento. Algunos, como el Soke-Dai Rod Kuratomi, son dedicados karatekas desde hace mucho tiempo; algunos son policías del SWAT, otros son militares. Algunos están muy avanzados en tiro y artes tradicionales, y captan rápidamente las habilidades; otros han iniciado un largo período de formación. En enero de 2007, ocho instructores de armas de fuego deL Departamento de Policía de Las Vegas Metro organizaron un seminario y los ocho obtuvieron cinturones de color marrón, incluyendo el sargento, Rich Fletcher. Para los interesados, Hojutsu proporciona un camino, de muchos, hacia la excelencia en el tiro y en la lucha integrada. Hojutsu-Ryu tiene dojos en Alaska, Texas, Washington, Colorado, Idaho, y California. Las clases son dictadas en todos los EE.UU., y pueden organizarse en cualquier lugar. 2008 verá seminarios en Florida, Italia, y en otros lugares. Los estudiantes sin experiencia con armas de puño deberían considerar también la posibilidad de asistir a clases de armas pequeñas en la Academia Americana de Armas Pequeñas, en Gunsite, en Thunder Ranch, en la Academia de Armas de Fuego Yavapai, en el ITTS, o en Front Sight. Todos estamos motivados por cosas distintas. Puede ser un Máster Distinguido de la ANR, Máster en Combate con Pistola, etc. Si menos de seis pies de tela de algodón negro lo motiva a entrenar duro, únase a nosotros en Hojutsu-Ryu - las destrezas de lucha que aprenda podrían salvar su vida.-

Zen y el combatiente armado

Jeff Hall

7 de enero de 2009


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Los portadores de armas, ya sean profesionales armados o competidores, todos discuten sobre qué es lo mejor. ¿Qué postura, qué calibre, la condición física, 1911 o Glock, carabina o escopeta...?, podemos discutir durante años y nunca ponernos de acuerdo. Algunas opiniones han sido sostenidas tan firmemente, al punto que hubo peleas a puñetazos para definir qué es "mejor". Todo esto es irrelevante si no estamos preparados física y mentalmente. Durante siglos, ser un guerrero fue una forma de vida. Generaciones de hombres entrenaron, lucharon y murieron porque era lo que los hombres hacían. El "progreso" hizo que la sociedad creyera que la mentalidad guerrera fuera anticuada, obsoleta, e innecesaria en la sociedad moderna. La era del combatiente armado ha pasado; desarrollar y fomentar una mentalidad guerrera no fue necesario - fue, de hecho, un error. El único factor más importante para ganar las luchas no sólo fue ignorada, sino desalentada: la mentalidad. Luchar, armados o desarmados, consta de dos partes: mecánica y mental. La parte mecánica, técnica, táctica y de empleo de la pistola, es relativamente fácil de aprender. La parte mental es difícil. Un simple ejemplo de la parte mental es dispararle a una silueta metálica, que nos condiciona para disparar contra seres humanos. Hace años, el teniente coronel Jeff Cooper desarrolló un sistema de códigos de colores para describir la conciencia mental. Su conferencia sobre "Acondicionamiento mental para el combate", con su pirámide coloreada desde el blanco al rojo, se convirtió en un elemento básico en el entrenamiento con armas de fuego defensivas. Recientes autores han añadido el negro, un estado de pánico congelado, a la cima de la pirámide. Estoy de acuerdo con el reconocimiento del pánico, pero creo que podemos evitar la parálisis mediante un entrenamiento riguroso (más sobre esto más adelante). Un par de décadas de sostener lo políticamente correcto, evitando términos como "combate" para describir a dos hombres que se disparan entre sí, ha cerrado el círculo. Eso es bueno. Ahora estamos dispuestos a abordar las realidades del conflicto, y el acondicionamiento mental que se requiere para que podamos prevalecer. Tirarle a otro ser humano nunca puede ser una respuesta reflexiva - debe ser una decisión intelectual. Si usted es un policía, soldado, infante de marina o ciudadano armado, sólo puede disparar cuando el miedo y el peligro inminente se presenten. Esa decisión sólo puede hacerse en el momento y lugar, habida cuenta de la situación real que confronte, sin embargo, la voluntad para hacerlo tiene que ser definida cuando decida a portar armas. He trabajado con un fino colega del Estado de Alaska durante muchos años. Fue literalmente un póster infantil para el Departamento, y se retiró después de una distinguida carrera. En su retiro, dijo que se alegraba de que nunca tuviera que sacar su arma, ya que no sabía si podía haberle disparado a otro hombre. Esta fue una decisión que debía haber tomado hace mucho tiempo, y hacerla afirmativa si podía disparar en caso de necesidad. Su vida, la vida de sus compañeros, y la vida de los ciudadanos podrían haberse puesto en peligro por su indecisión para disparar en caso necesario. Si piensa que no puede portar el arma, vaya a trabajar a Wal-Mart. En el clásico The Shootist de John Wayne, el antiguo tirador J.B. Books le enseña al joven Gillam a disparar. La discusión naturalmente va al conflicto humano, la habilidad con armas de fuego, tácticas, etc. J.B. Books desestima estas cuestiones y discute el ítem de la mentalidad. "No siempre se trata de ser rápido, o incluso seguro, lo que cuenta, es estar dispuesto. Encontré pronto que la mayoría de los hombres, independientemente de la causa o necesidad, parpadea un ojo o da un respiro antes de tirar – yo no lo haré". Los entrenadores están ahora dispuestos a discutir una mentalidad guerrera. Cómo encontrar, desarrollar, fomentar, y entonces controlar la voluntad de ganar en el combate se ha convertido en un tema importante en los foros sobre entrenamiento. Algunos dudan que los jóvenes de hoy tengan lo necesario para ganar; creo que pueden, si están dispuestos a trabajar en ello. Asumiendo que usted va a portar un arma, y que está dispuesto a utilizarla, necesitamos simplificar la decisión intelectual que debe hacerse cuando la lucha comienza. Todas nuestras respuestas tienen que ser automáticas, sin pensamiento, bien ejecutadas, y efectivas - todo lo que necesitamos decidir, entonces, es si necesitamos apretar el gatillo. La única manera de lograrlo es a través de arduo trabajo. Taky Kimura, uno de los primeros estudiantes de Bruce Lee, lo resume: "no hay atajos".


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En una de sus conferencias, Jeff Cooper discutió esta filosofía. Se describió caminando por una calle oscura, siendo enfrentado por un "duende". Cooper dice que de repente mirará al duende, en lugar de la mira de su pistola - cómo llegó la pistola a estar allí sería algo de no pensar. La pistola estaba allí, presentada desde su funda sin pensarlo, y basado en años de práctica repetitiva. El único pensamiento que debía hacerse era decidir si disparar o no. En el gran libro Joe Hyams, Zen en las artes marciales, le pregunta a Bruce Lee qué haría si se viera envuelto en una verdadera batalla, en la que se viera obligado a luchar por su vida. Lee replicó..., "lo he pensado a menudo. Si se tratara de una lucha real, estoy seguro que lastimaría a mi agresor, quizás lo mataría... Me gustaría alegar que no tenía la responsabilidad de mi acción. "’Ello’ lo mató, no yo". ‘Ello’ se refiere a que usted actúa con la conciencia inconsciente, usted justamente actúa. Al lanzarme un golpe, lo intercepto y contragolpeo, pero sin pensarlo. ‘Ello’, simplemente sucede. ‘Ello’ es el estado de la mente a que se refieren los japoneses como mushin, que literalmente significa "sin mente". Mushin se alcanza "sólo a través de la práctica y más práctica, hasta que usted puede hacer algo sin esfuerzo consciente. Entonces su reacción se torna automática". Jeff Cooper y Bruce Lee no se conocían, pero ambos fueron guerreros que dominaron sus respectivas artes, y que entendieron la necesidad de luchar mental y físicamente. Para el tirador, un ejemplo de mushin podría ser una falla para disparar con la pistola. El operador observa y evalúa todo sin pensarlo, después de repetirlo muchas veces como para dar una respuesta automática. Otro factor crítico es el dominio de su miedo. En un viejo episodio de "Gunsmoke", Matt Dillon opina que "un hombre que nunca tiene miedo es un tonto". Es verdad, el miedo debe estar presente para justificar su uso de la fuerza. Lo importante es hacer que el miedo sea su amigo. Ejemplo: tengo miedo a las alturas, así que decidí que saltar desde aviones fuera una ocupación perfectamente lógica. A través de muchas repeticiones, aprendí a controlar mi miedo, a vencerlo, y a saltar. Tuve miedo cada vez que salté (tengo miedo de las serpientes también, si usted trae una serpiente a mi clase, voy a gritar como una niña de diez años de edad, a saltar sobre una mesa, y empezar a disparar) y nunca "superé" mi miedo a las alturas, pero pude confiar en mi equipo y mi entrenamiento para creer que estaba bien. Si no te mata, te hace más fuerte. De modo que salté. Hace años, estuve involucrado en un tiroteo en Alaska. Confesaré que estaba endemoniadamente asustado en mi camino hacia la lucha, y después de la pelea temblaba como una hoja, pero durante la lucha estaba en un lugar feliz. Recuerdo haberme calmado, centrándome en el punto de mira, siendo consciente de las balas trazadoras en el aire, oyendo el retroceso del perno de bloqueo cuando el M-16A1 corrió en seco, la recarga, viendo caer a mi enemigo, y no tener miedo - Yo estaba trabajando en piloto automático, apoyándome en mi entrenamiento y experiencia y controlando mi miedo. Era puro Zen. Una definición del Zen [1] es "este momento en el tiempo". No hay pasado, ni futuro, sólo ahora. El universo se representa sólo en esas estrías cortadas en el punto de mira y en la presión sobre el gatillo. Pensamientos sobre la casa, la familia, el trabajo, el Súper Bowl, no tienen cabida. La mente debe estar vacía, calmada, y preparada para el momento.

[1] Zen (禅) es el nombre en japonés de una tradición del budismo Mahāyāna, cuya práctica se inicia en China bajo el nombre de Chán (禪). Es una de las escuelas del budismo más conocidas y apreciadas en Occidente. Con el popular nombre japonés Zen suele aludirse en realidad a un abanico muy amplio de escuelas y prácticas de este tipo de budismo en toda Asia. Las principales escuelas del budismo Zen propiamente japonés son Rinzai, Soto y Obaku. Se distinguen por su especialización en distintas técnicas de meditación como el koan o el zazén. 7

7 Wikipedia, la enciclopedia libre. http://es.wikipedia.org/ wiki/Zen. Año 2009. Consulta: 8 de enero de 2009.


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Los antiguos Samurái (侍) designa una gran variedad de guerreros del antiguo Japón, si bien su verdadero significado es el de una élite militar que gobernó el país por cientos de años) creían en el destino. El destino podía ser vivir hasta tener 100 años, o morir hoy. Los espartanos creían que regresaban de la guerra con honor portando su escudo, o transportadas, muertos, sobre el mismo. La muerte no era de temer, pero era para ser acogida como un gentil huésped. Quedaba fuera del control del guerrero, era el destino y, por lo tanto, nada que temer. Si no puede hacer nada al respecto, no transpire. La mayoría de nosotros carece de este tipo de dedicación. Salimos cuando las flexiones de piernas –sentadillas- comienzan a doler, no cuando no podemos hacer más. Sentimos el dolor y paramos, no luchamos a través de él - no resoplamos nuestra sangre de la nariz para dar otro golpe, nos paramos. No soy un tipo duro. Tengo 55 años de edad, todas mis partes rotas despiertan en la mañana después que el resto de mí. Trabajo, corro, enseño karate y Hojutsu, pero no soy un dechado de capacidad física. Puedo pellizcarme más de una pulgada y mis abdominales son más un paquete de doce paquete que de seis. Lo importante es que no me saldré fuera. Yo era un instructor de Táser (arma policial no letal que genera unos pulsos eléctricos, similares a los aparatos de electro medicina para rehabilitación o los de gimnasia pasiva, capaces de controlar los músculos motores -principalmente brazos y piernas- de un agresor. Está especialmente indicado en aquellas situaciones de riesgo en la que la ley ampara a los policías el uso del arma de fuego, evitando usar armas letales y salvando la vida del agresor. Es eficaz también con individuos bajo los efectos de las drogas o mezcla de éstas con alcohol) en Spokane, WA, el pasado mes de enero. Un ejercicio nos obligó a correr fuera de la puerta, en el pasillo, por las escaleras, volver, hacer diez flexiones de brazos y diez saltos antes de disparar el TASER. Lo hice todo, me senté en una silla, y medí mi aliento. Un joven, de más de 20 años, con 50 libras de sobrepeso, donuts en mano, me miró y sacudió la cabeza. "Amigo, ¿por qué corre? Lo veo mal". No me molesté en responder, porque cualquiera suficientemente estúpido para hacer esa pregunta, no entendería la respuesta. Hay una antigua balada escocesa:

"... Cuando vengan... Yo estaré de mi tierra Yo estaré de mi tierra Aunque tenga miedo".

Ahí está. La única manera de llegar es a través de entrenamiento duro y disciplinado. Pat Rogers recientemente escribió un gran artículo sobre el auto-entrenamiento versus el entrenamiento bajo un buen instructor – estuvo en lo correcto. Buscar instrucción de calidad, entrene los fundamentos; practique hasta que pueda hacerlo sin pensar, entonces la parte mecánica surgirá en usted cuando se envuelva en una pelea. La parte mental viene sólo a través de la lucha contra la adversidad. No es rápido, no es fácil - disparé durante cincuenta años, fui un artista marcial durante treinta, y acabo de convertirme en un buen estudiante. Pienso, sin embargo, que si tengo que defenderme, podré hacerlo sin pensar. Hay un proverbio ruso: "El hierro se convierte en acero cuando siente el martillo y el calor blanco". Disfrute el sudor y el dolor, libre un combate consigo mismo, y ganará cuando llegue el momento.-

Los cinco anillos y la pistola Usted no puede hacer cosas interesantes hasta que haya dominado lo básico

Jeff Hall

12 de abril de 2010


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Cualquier hombre que se considere un "guerrero" debería leer el tratado sobre artes marciales titulado “El Libro de los Cinco Anillos” (Go-rin no sho) donde Musashi compiló sus conocimientos en las artes de la espada y de la estrategia. Esta obra es hoy usada por ejecutivos de grandes empresas de Japón para trazar

estrategias de mercado y ética de los negocios. Miyamoto Musashi (宮本武蔵 ¿1584? –1645) es considerado kensei o "santo de la espada" de Japón. Musashi practicó el arte de la espada, pero sus enseñanzas se aplican a cualquier arma diseñada para el combate mortal. Si pensamos en términos de principios, más que en el arma o el estilo, la lucha no ha cambiado mucho en los 400 años desde que Musashi escribió el libro. En este artículo, simplemente sustituya "arma" por "espada". Musashi habla sólo en términos de muerte – como con la espada, no tiramos para herir; pero si usted iza su bandera hasta la palabra "muerte", en lugar de ello puede "parar". Soy nuevo con la espada. He pasado 53 años oprimiendo el gatillo de diferentes armas de fuego, pasé 30 años en las artes marciales tradicionales, y acabo de convertirme en un buen estudiante del Camino Marcial. Soy iemoto (director del colegio) de Hojutsu, pero cuanto más estudio, menos sé. Hallé, sin embargo, que los principios son universales, ya sean aplicados a manos, pies, palos, cuchillos o armas de fuego. He entrenado duro, luché con éxito, y estoy vivo mientras que mejores hombres están muertos. Este artículo explicará lo que creo son verdades. Yo no las inventé: las reafirmo en palabras escritas hace 400 años. Musahi mató a más de 60 hombres en duelos. Comenzó con la espada, pero eventualmente usó sólo una espada de entrenamiento de madera (bokken) cuando le resultó demasiado fácil matar a sus oponentes. Ganó tanto por la habilidad como por la táctica. Vivió en una cueva en una zona remota, pero el camino hacia la cueva era bien conocido. Musashi, sabiendo que los espadachines tratarían de encontrarlo y matarlo, era conocido por emboscar a sus oponentes antes que llegaran a la cueva - una buena táctica. El hecho de que ganó más de 60 veces es un testimonio de su arte con el arma. "El desarrollo de la técnica es esencial para la comprensión del propósito. Una vez que una técnica específica ha sido entendida, el guerrero deja de usarla en un nivel consciente, porque en combate tener una identidad consciente impone limitaciones". Los tiradores hoy argumentan hasta la náusea acerca de la postura – Weaver [1] o Isósceles. Soy un tipo Weaver, pero nunca le diré que voy disparar sólo en combate. El terreno y las circunstancias determinan la táctica y la técnica, y si termino de espaldas en el suelo, voy a disparar desde allí. Puedo finalizar tirando con una mano, la mano débil, o con la pistola al revés. Sin embargo, he pasado años perfeccionando la técnica, y probablemente me aproximaré a mi técnica normal bajo estrés. No quiero pensar en ello, sólo lo haré, pero no podré lograrlo sin años de buen y repetitivo entrenamiento. Los que abogan por acortar caminos llevan al estudiante al fracaso (si puedo convertirlo en un pistolero a través del programa que usted escucha en su iPod, me gustaría ser un gazillionaire, no un entrenador y artífice de la palabra).

Empuñadura Weaver

[1] Jack Weaver (1928-2009) fue Deputy Sheriff del Condado de Los Ángeles y un experto tirador. La Posición Weaver es una técnica de dos manos en la cual la mano dominante sostiene la pistola y la mano de apoyo envuelve a la mano dominante. El codo del brazo dominante está casi recto mientras que el codo de apoyo está claramente dirigido hacia abajo. El tirador presiona hacia delante mientras que la mano de apoyo ejerce cierta presión hacia atrás. La tensión isométrica resultante procura disminuir y controlar el temblor del músculo cuando se dispara el arma.


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Entreno a estudiantes en todo el país, y he visto a varios de ellos que no quieren practicar lo básico – quieren tener "alta velocidad, baja resistencia", pero no pueden tirar bien. Usted no puede hacer cosas interesantes hasta que haya dominado los fundamentos. Necesita "...mil días de práctica para el entrenamiento y diez mil días de práctica para el refinamiento". "El Camino no puede ser aprendido a través de concursos frívolos en el que el resultado sirve para el renombre de una escuela o un gran trofeo. Sólo puede llevarse a cabo donde la muerte física es una realidad". Hay muchos profesores y practicantes de lucha con armas de fuego. Algunos de ellos, como Chuck Taylor, Paul Howe, Awerbuck Louie, Pat Rogers, Reitz Scott, y Clint Smith han puesto a prueba sus capacidades y voluntades en el combate contra otros hombres armados. Otros, que nunca han oído las armas disparadas con furia, han pasado su tiempo compitiendo en torneos - tres armas, IPSC, IDPA, PPC, etc., y luego trataron de enseñar a pelear. Yo afirmo que aquellos que nunca han luchado no pueden enseñar cómo pelear tan bien como pueden hacerlo los luchadores exitosos - pueden enseñar a disparar, tal vez rápido y bien, pero no pueden enseñar cómo luchar. Ningún hombre en el mundo puede pivotar un palo de metal como Tiger Woods (o más recientemente, Phil Mickelson este fin de semana en Augusta), pero él es el último tipo en el planeta que contrataría para enseñarme a usar un Asp.

Cuando estoy yendo a gastar mi limitado tiempo de entrenamiento, dinero y munición, los gasto en una escuela de calidad, donde los instructores tienen experiencias del mundo real. Matar a otro ser humano es resultado de la ocupación, las circunstancias, los individuos verdaderamente malos, la mala planificación, o la mala suerte, pero añade validez a las teorías que el instructor enseña. El abandonará, modificará, perfeccionará, o aceptará qué ha funcionado en el "mundo real" y le enseñará a sus alumnos las cosas que lo mantuvieron vivo. "La larga espada debe ser empuñada con la idea de que es algo para matar a los oponentes. No deje que haya cambios cuando la empuñe incluso cuando esté acuchillando a sus oponentes; haga que su agarre sea tal que su mano no se inmute. Su empuñadura cuando corte algo para probar la hoja y cuando acuchille un oponente en combate no debe ser diferente, sujete la espada como si fuera a matar a un hombre". Cuando competía en el PPC, era común que practicara desenfundar el revólver, me detuviera a mitad de camino, tomara el cañón/cilindro con la mano débil, ajustara el agarre, y entonces me posicionara para tirar. Los tiempos eran generosos, haciéndolo posible, pero doy gracias a todos los dioses porque nunca me metí en una pelea con pistola en aquellos días - podría haber hecho lo mismo en la lucha. Un viejo capitán con quien competí vio mi Modelo 19 para disparar a 50 yardas y me dijo que disparara con el pulgar en su lugar, diciendo que mi agarre se mantendría constante. Estaba en lo cierto. Creo que mejoré en diez puntos. Recientemente asistí a una clase donde el instructor abogaba por el cambio en el agarre una vez que se desenfundaba. La mayoría de los entrenadores que conozco, sin embargo, enseñan a establecer el agarre sobre los pliegues de la pistolera, a derrotar los broches de presión, y presentar el arma en un movimiento suave. El agarre nunca cambia. En el tiro a dos manos, la empuñadura de la mano que dispara nunca cambia; cuando disparo con una sola mano, el apretón de la mano fuerte es el mismo. Si es consistente, es más seguro.


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“Cualquiera sea la guardia que adopte (hay cinco posiciones de guardia en el libro de Musashi), no piense que está en guardia; piense que es parte del acto de matar”. Baja disposición, guardia, alta disposición, alta disposición comprimida, disposición “táctica”… muchos tiradores, pese a su disposición, colapsan y se relajan cuando se ponen en guardia. Cuando aprendí la baja disposición años atrás, el guión, la mira, la muñeca y el codo quedaban bloqueados; la tensión isométrica era mantenida, la lucha aún no podría tener lugar. Todo lo sacado de los brazos tiene que ser montado de nuevo para disparar, de modo que relajarse es una mala cosa. Piense en la guardia como una pausa en la lucha, no el final de ella, y esté listo hasta que esté seguro que ha concluido. Usted puede descansar después, no cuando está entrenando o en una pelea. “No hay tiempo o lugar para pensar durante el combate; la espada es la mente”. Una de las clases que desarrollé es la Lucha Integrada. El estudiante tiene un bastón, OC, TASER, manos, pies, cuchillos y armas de mano disponibles para resolver el problema. A menudo veo duda en los alumnos - están tratando de seleccionar la opción correcta de uso. Con todas las cartas de la fuerza ahí, ¿estamos haciendo una sobre ingeniería de la lucha? Todas las opciones anteriores son buenas, todos trabajan parte del tiempo, pero creo que hay demasiados que cada funcionario tiene que considerar. Estoy viendo una tendencia a simplificar el proceso continuo y a tener menos herramientas. Cuando me uní a la policía montada, la política de la fuerza consistía en utilizar “esa fuerza necesaria”, y portábamos revólveres y usábamos guantes. Éramos capaces de resolver el problema rápidamente y dentro de la política sin dudarlo - tal vez es hora de reconsiderar la complejidad de las políticas y las opciones que deben considerar los policías cuando se enfrentan a un tipo malo. Acabo de leer un artículo sobre los policías que en Idaho detuvieron a un hombre que había matado a su mujer – trataron de arrestarlo con el TASER, ¡pese a que tenía una pistola en la mano! Nota para todos los policías: ¡el TASER no tienen cabida en los tiroteos! Jeff Cooper escribió una vez que cuando usted se enfrenta a un duende, debería verlo por sobre la mira de su pistola – cómo llegó hasta allí la pistola es algo en lo que usted nunca pensó, estaba justo ahí, basado en años de práctica. Cuando el tirador entrenado suspende el fuego, escucha, y evalúa sin pensar en ello. La palabra japonesa es "mushin", que significa "no mente" o "sin pensamiento consciente". Si tenemos que pensar en lo que hacemos, la lucha ha terminado y somos una parte del diagrama de la escena del crimen. La presentación, manipulación y disparo seguro de la pistola tiene que ser un proceso inconsciente -piense sólo si debe disparar o no- el resto es automático. Sólo podemos lograrlo con el entrenamiento y la práctica. Estoy aprendiendo el conjunto batto de ocho formas de espadas. Formar cinco es un paso adelante, cortar; retroceder un paso, cortar; pausa, con la espada en alto (haso), evaluar al oponente, entonces avanzar y cortar con un golpe final para concluir la pelea. Suena como un taladro Mozambique (error de perforación, taladro de la armadura corporal), ¿o no? Dos al pecho, pausa, y luego un tiro a la cabeza para finalizar si los dos primeros disparos no funcionaron. Esto se remonta a que los principios universales de sean... universales. No hay nada nuevo en la pelea o en el tiroteo – guión y mira alineados, centrados en el blanco, presionar la cola del disparador; calidad de entrenamiento, años de práctica. “Apuntar”, "instintivo", "intuitivo" y C.A.R., todos pueden tener lugar, pero sólo después que se haya construido una sólida base. No hay atajos, y desde Los 300 hasta Musashi, desde la lanza a la espada, hacia 1911, hasta un rifle de impulsos de plasma en el rango de 40 vatios, no lo habrá.

Gestión de la amenaza con poca luz Técnicas de tiro con ayuda de linterna para su caja de herramientas tácticas

Mike Boyle 2 de enero 2009


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Con los años, los agentes del orden han sido instruidos en diversas técnicas de tiro asistido con linterna. Esto está muy bien si tenemos en cuenta que la mayoría de los tiroteos se producen en condiciones de poca iluminación óptima. En la oscuridad, una fuente de luz le da al agente la posibilidad de navegar, localizar y evaluar las amenazas potenciales y, en su caso, desplegar fuego preciso. Aunque el dominio de la técnica de tiro con ayuda de la linterna es sin duda un plus, sólo representa una parte de un cuadro mucho más grande. Sondear y buscar actividad sospechosa en la oscuridad, realizando controles de credenciales y paradas de automotores siguen siendo tareas muy comunes. En ocasiones, los agentes del orden pueden incluso controlar las amenazas relacionadas con el arresto, con la linterna y la pistola. En el gran esquema, un tiroteo es el escenario menos probable.

Técnica de tiro “manos juntas”, que encierra la linterna y la pistola, resultará en una búsqueda con la boca

del arma.

El oficial detecta actividad sospechosa, pero no una amenaza específica. La linterna puede sondear el área

del problema independientemente de la boca del cañón.

El oficial detecta actividad sospechosa, pero no una amenaza específica.

La linterna puede sondear el área del problema independientemente de la boca del cañón. Para cualquier tipo de razones, las técnicas comúnmente enseñadas de tiro asistido con linterna no añaden nada a la búsqueda o la gestión de amenazas. Muchas instituciones de entrenamiento con armas de fuego usan alguna variación a las Reglas Generales de Seguridad (General Safety Rules) desarrolladas por primera vez por el Coronel Jeff Cooper. Aunque el lenguaje utilizado varía, las reglas y su significado, no. En forma no adulterada, la Regla Nº 2 nos recuerda: "Nunca deje que su boca del arma cubra algo que no esté dispuesto


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a destruir". Los oficiales que sólo han sido instruidos en técnicas de tiro asistido con linterna, inevitablemente las incumplirán durante la búsqueda. Desde que la pistola y la linterna están sujetas en una sola unidad, la boca del cañón es probable que apunte a sujetos que no representan una amenaza. En el mejor de los casos, la búsqueda con la boca del cañón puede ser la causa de quejas de los ciudadanos, a pesar de las mejores intenciones del agente. En una situación muy cargada, de estrés, la búsqueda con la boca del arma, combinada con una descarga involuntaria, puede tener consecuencias trágicas. Tener una técnica en su caja de herramientas tácticas le permite al oficial requisar sin comprometer a la boca del arma, que es el camino a seguir.

Reglas de Seguridad con las Armas de Fuego

Coronel John Dean «Jeff» Cooper (1920-2006)

Regla I: Todas las armas siempre están cargadas. Regla II: Nunca deje que la boca del cañón apunte a cualquier cosa que usted no esté dispuesto a destruir. Regla III: Mantenga su dedo fuera de la cola del disparador hasta que su vista esté sobre el blanco. Regla IV: Esté seguro de su blanco.

Factores de estrés. Las linternas de mano suelen estar equipadas con un botón lateral o interruptor en la tapa posterior. Las linternas más grandes, de gran tamaño como MagLite y Streamlight cuentan con un botón lateral del interruptor que a menudo se activa con el pulgar o el dedo índice. Por otro lado, las pequeñas luces tácticas de BlackHawk, Insight Tech Gear, PentagonLight, SureFire y otros están equipados con un interruptor de tapa posterior que requieren la activación con el pulgar. Dependiendo del fabricante, la activación con el pulgar puede requerir un toque de luz o una presa bastante fuerte. Las armas con luces montadas son ahora parte de la escena de la aplicación de la ley, incluso para los oficiales de patrulla. La activación de estas luces puede ser a través de un interruptor de presión a distancia o un interruptor de la luz misma. En los últimos años, hemos llegado a entender mejor la interacción entre los extremos de las cosas, en particular, cómo se relaciona con una descarga intencional o negligente de un arma de fuego. ¿Es concebible que uno quiera simplemente activar la luz y sin querer dispare el arma? En la tormenta perfecta de la tensión y la confusión, la respuesta, por desgracia, es sí. A lo largo de mi carrera, he realizado un sinnúmero de simulaciones de fuerza-en-fuerza (force-on-force), primero con revólveres modificados que disparaban bolas de algodón y después, pistolas con cartuchos que marcaban. Esos escenarios fueron grabados en vídeo para su posterior revisión por los instructores y participantes. Una observación que hice es que, pese al nivel de entrenamiento o experiencia de los participantes, a menudo ponen su dedo sobre el gatillo conforme aumentan los niveles de estrés. Muy a menudo, los participantes reconocieron el error y quitaron el dedo del gatillo. Por otra parte, algunos participantes montaron el gatillo durante largos lapsos y no lo recordaban después que el ejercicio había terminado.


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Apenas categorizaría mis observaciones como un hecho científico, pero otros entrenadores han llegado a conclusiones similares. El estrés que amenaza la vida, sin duda alguna, tiene un efecto aún más perjudicial. El factor de un dedo en el gatillo junto con la luz y la pistola apuntando al sujeto, y terminamos con la posibilidad de un resultado no deseado. Cambiar la colocación, la manipulación y la acción del disparador puede llevarnos a aguas más fangosas. Condiciones de preparación. Muchos programas de entrenamiento de armas de fuego ponen demasiado énfasis en la puntería a costa de las destrezas operativas. Si un funcionario puede calificar alcanzando el estándar mínimo de puntería, se considera bueno. Otras destrezas críticas, tales como desenfundar, volver a enfundar, cargar y limpiar armas trabadas se suelen olvidar. La instrucción sobre el trabajo desde la posición de apresto o gestionando amenazas a punta de pistola a menudo es deficiente también. Mi preocupación no es con las agencias progresistas que van más allá y cubren todas las bases, sino a los equipos que siguen cortando las esquinas. Los funcionarios defraudados a menudo encuentran una "forma". Desafortunadamente es la forma incorrecta. Esto es especialmente cierto con las destrezas con poca luz. La capacitación con poca luz debe incluir diferentes estados de preparación o apresto, así como las condiciones de luz que los funcionarios probablemente enfrentarán en el campo. Los oficiales tienen que trabajar con la pistola y la luz sujetas al cinturón, solo con luz lista, solo con el arma lista, y con la pistola y la luz pre-desplegadas. Últimamente, uno necesita desarrollar un sistema que prevé una transición sin fisuras desde la búsqueda y exploración de rutina hasta el final a través de la aplicación de la fuerza letal. Tanto la seguridad de los oficiales así como para el sujeto, como la velocidad y la economía de movimiento, son fundamentales. Primero, considere la técnica preferida de disparo asistido con linterna. Las técnicas Harries y Cuello-Índice se ejecutan con la linterna sostenida en una porra o agarre en pronación. Por otra parte, las técnicas Chapman o Rogers requieren un agarre en supinación o de espada. En el caso que una situación aumente hasta el punto de tiroteo, una empuñadura incorrecta retrasará su respuesta. La técnica de disparo preferida dictará cómo se lleva la linterna durante la rutina de búsqueda. Esta técnica de manos juntas fue desarrollada para -y se limita a- el uso de linternas de viejo estilo que posee interruptores montados en los laterales, funciona bien con versiones grandes y pequeñas de los dispositivos de iluminación veteranos. El método es fácilmente asumido por tiradores isósceles o tiradores isósceles-modificado, pero difícil de lograr para las personas con manos pequeñas o cuando usan una linterna pesada. Este último es de especial preocupación cuando la aproximación se usa por períodos prolongados. La técnica Chapman se logra tomando la linterna con un agarre "espada", con el pulgar y el índice evitando el cuerpo, mientras los dedos restantes envuelven alrededor a aquellos que toman el arma. Esto se aproxima a un agarre normal disparando a dos manos, y los brazos proporcionando tensión isométrica. 8

Técnica Chapman Aunque se desarrolló para usarse con linternas de gran tamaño, la técnica Harries funciona igual de bien con luces tácticas más pequeñas, con lo que este método de manos juntas gana su estatus. Como la aproximación ha sido creada para su uso con grandes linternas -una linterna potente puede reposar en el antebrazo de la mano de tiro- este método es menos fatigoso que muchos otros durante el uso prolongado. Sin embargo, la técnica Harries ofrece una pobre ergonomía para otra cosa que no sea la posición Weaver.

8 http://www.nrapublications.org/si/HB_handgun.html.


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Para el método Harries, la linterna se mantiene en un agarre tipo "pica hielo", mientras que el arma se empuja hacia adelante, momento en el que la mano que no dispara cruza por debajo el brazo de retención del arma. La técnica termina con el dorso de las manos una contra otra, creando una tensión isométrica para la estabilidad. El tipo de botón de la tapa posterior de la linterna o interruptor montado en el cuerpo determina si el pulgar u otro dedo operan el interruptor. 9

Harries

La técnica Rogers, perfeccionada luego por SureFire para su uso con el equipo de agarre anillado de la compañía CombatLights, permite el despliegue rápido de la linterna cuando se porta en la funda de SureFire CombatLight. Este método de manos juntas se aproxima a un agarre normal, disparando a dos manos, pero se limita únicamente a pequeñas linternas equipadas con un pulsador. Para realizar la aproximación Rogers/SureFire, la linterna se sostiene entre el índice y el dedo medio de la mano que no dispara con la tapa posterior del pulsador colocado en contra de la palma o la base del pulgar, formando lo que podría considerarse un agarre tipo "jeringa". La mano de la linterna entonces se reúne con la mano del arma, con los dos dedos de la mano sin usar de la mano de la luz envolviendo alrededor de los dedos de agarre de la mano del arma. La luz se activa al ejercer presión para oprimir el botón de la tapa posterior. 10

Rogers / Fuego Seguro Esta técnica de manos apartadas evita que el usuario "marque" su posición mediante el uso de la luz en altura intermitente al azar- y aparta el fuego del centro de la masa, así como proporciona una transición fácil hacia y desde el método del cuello-índice. Funciona bien con linternas grandes y pequeñas y permite disparar en forma ambidiestra. Sus desventajas son la dificultad para mantener la amenaza de la luz y la fatiga por un uso prolongado. Además, la aplicación de este método con una mano o brazo lesionado sería ardua, y el método requiere mucha práctica para perfeccionarlo. La técnica modificada del FBI se lleva a cabo sosteniendo la linterna en un agarre "espada" o "pica hielo" con el brazo extendido fuera del cuerpo y de la mano de la pistola. Para evitar que el usuario se auto-ilumine, la linterna se mantiene ligeramente por delante del cuerpo. 11

9 http://www.nrapublications.org/si/HB_handgun.html 10 http://www.nrapublications.org/si/HB_handgun.html 11 http://www.nrapublications.org/si/HB_handgun.html


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FBI modificado

Cuello-índice Otra opción de manos apartadas, la técnica del cuello-índice, trabaja con linternas grandes y pequeñas por igual, así como aquellas que poseen diferentes configuraciones. Este método ofrece un despliegue rápido, proporciona la iluminación simultánea de lugares de interés y de amenaza y fácilmente permite transiciones hacia y desde la técnica modificada del FBI. La linterna ilumina siempre la dirección en la que el usuario está viendo, está en línea para su uso como herramienta para golpear (con versiones más grandes) y la técnica se puede utilizar con una extremidad lesionada. El problema, sin embargo, es que puede crear reflexión excesiva de la parte trasera de la pistola, y lo más importante, señala el fuego hacia la cabeza del tirador. La técnica del cuello-índice se logra sosteniendo la linterna en un agarre tipo "pica hielo" contra la mandíbula/coyuntura del cuello debajo de la oreja, por lo que se mueve con la cabeza del usuario con un mínimo de bloqueo de la visión periférica. Para las grandes linternas, el cuerpo puede descansar en el hombro y el índice contra la base del cuello. Dependiendo del tipo de linterna, ya sea el pulgar (pulsando la tapa posterior) u otro dedo (lado interruptor montado) opera el interruptor. 12 Un sistema que propongo y que funciona muy bien para la gran mayoría de situaciones de gestión de amenazas es el siguiente: Búsqueda: Un oficial sondea la oscuridad mientras mantiene la linterna en la mano de apoyo. Ningún nivel de peligro se ha detectado, por lo que la pistola se mantiene en la funda. La búsqueda de rutina no se hace con una luz montada en forma fija en una pistola. Listo: Algo no está bien, pero la amenaza específica no ha sido identificada. El oficial lleva su arma de fuego cerca de su cuerpo, similar a una posición de retención del arma. La boca del arma está ligeramente deprimida hacia abajo y lejos. Las manos permanecen separadas y la luz sigue sondeando la oscuridad, independientemente de la boca del cañón de la pistola. Desafío: Una amenaza específica ha sido identificada. Si se prefiere la técnica de disparo de "manos juntas", la luz y la pistola se reúnen en una sola unidad. La boca del arma es ligeramente deprimida debajo del centro de la masa de la amenaza potencial, lo suficientemente baja como para ver las manos y la cintura. El dedo fuera del gatillo, fuera del guardamonte. Una voz de mando verbal es claramente impartida para su cumplimiento. 12 http://www.nrapublications.org/si/HB_handgun.html


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Fuego: La pistola y la luz son presentadas a nivel de los ojos. Poner un índice sobre la amenaza y presionar el gatillo. Este sistema elimina eficazmente el apuntar el cañón de la pistola hacia un sujeto hasta que una amenaza específica haya sido identificada. Pistola y luz permanecen separadas durante la fase de evaluación, por lo tanto, no hay violación de la Regla # 2. El uso de armas de fuego con luces montadas no se recomienda para Búsqueda o Listo, pero es totalmente apropiado para Desafío y Fuego. Con la práctica, los oficiales pueden funcionar muy rápidamente a través de todo el ciclo mientras seleccionan la respuesta adecuada. El riesgo es mínimo, sin embargo, el oficial tiene la capacidad de disparar muy rápidamente si se justifica. Guardia cerrada. El sistema anteriormente descrito permite una respuesta razonablemente rápida en casi todos los eventos más inusuales. En situaciones donde el tiempo y la distancia juegan a favor del funcionario, las amenazas potenciales pueden ser gestionadas con total seguridad sin perder ninguna ventaja. Pero para cada regla hay una excepción.

La técnica de guardia cerrada es usada cuando se buscan amenazas, en las proximidades muy cercanas, que puedan estar armadas.

Una circunstancia muy preocupante sería la búsqueda de un sujeto que probablemente esté armado y en la proximidad muy cercana. Incluso el más mínimo retraso en la localización, evaluación y abordaje de esta amenaza podría ser fatal. Una posible solución a este dilema es la posición de Guardia Cerrada según lo enseñado por el Instituto de Fuego Seguro. Con la posición de Guardia Cerrada, los codos se doblan 90 grados y se meten cerca del cuerpo. La pistola y la luz se llevan aproximadamente a la altura del plexo solar, con los brazos paralelos al suelo. Las manos que sostienen el arma y la luz están ‘atadas’, pero el dedo se mantiene fuera del gatillo y fuera del guardamonte. Si un asaltante representa una amenaza mortal a un paso o dos de distancia, el arma puede ser disparada con un alto grado de exactitud desde esta posición. Por supuesto, el arma debe ser llevada a nivel de los ojos si el tiempo permite una mejor precisión. Esta técnica funciona muy bien con una luz de mano y aún mejor con una luz montada en un cañón. Los críticos opinan que la Guardia Cerrada viola la Regla Nº 2 porque bloquea la luz y la pistola, lo que resulta en la búsqueda con la boca. Sin embargo, tenga en cuenta que esta técnica sólo debe usarse en las situaciones más inusuales cuando un oficial tiene razones para creer que el sujeto está armado. Hay un concepto del Derecho Común inglés referido a veces como la Doctrina de la Competencia de Daños. Esencialmente, indica que le está permitido violar la ley si las circunstancias, al seguir la ley, podrían resultar en un daño mayor que el que le sigue. Al aplicar este concepto a la búsqueda con poca luz, la Guardia Cerrada (Close Guard) efectivamente viola la "ley" (Regla #2), pero resulta en el mayor bien al mantenerlo a salvo. Seguro, pero listo. El entrenamiento con luz baja debe abarcar puntería práctica, tácticas y las destrezas operativas descritas aquí. Al trabajar a través de varias Condiciones de Preparación, inicialmente se debe practicar tiro en seco con las armas descargadas y luego, en baja tensión, ejercicios de fuego real en el área. Conforme los oficiales se hacen más expertos, sus destrezas pueden ser validadas en ejercicios más dinámicos o en escenarios interactivos de fuerza-en-fuerza (force-on-force).


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Buscar y gestionar amenazas mientras se usa una de las técnicas tradicionales de tiro asistido con linterna presenta seguridad y compromisos tácticos. Las técnicas rígidas de "manos juntas" pueden ser fatigantes en muy poco tiempo, lo que agrava el riesgo de una descarga negligente. También pueden contribuir a reducir la percepción en un momento en que necesitamos tanta respuesta visual como sea posible. Aunque las luces montadas en armas tienen mucho que ofrecer, son un complemento, no un reemplazo, por una luz de mano. Las armas con luces montadas prueban ser excelentes herramientas una vez que una amenaza potencial ha sido identificada, pero no son apropiadas para la búsqueda rutinaria. El resultado final: La búsqueda con la boca del arma debe evitarse, excepto en las más extremas circunstancias. La habilidad para buscar en entornos de poca luz independientemente del arma permite al funcionario mayor flexibilidad en el desempeño de tareas rutinarias, mientras mantiene un mayor margen de seguridad.-

Modifique sus tácticas, derrote al oponente Excelencia en el entrenamiento

Ken Hardesty

Ex Marine y actual Instructor de Policía. 30 de septiembre de 2011

El que puede modificar sus tácticas en relación a su oponente, y así tener éxito al ganar, puede ser llamado

un capitán venido del cielo. (PoliceOne Image) "2011 sangriento - ¿Qué puede detener la marea?", "Despedidos: ¿Qué hace usted ahora?" y "Baño de sangre: ¿Existe realmente una guerra contra los policías". Esos titulares ocuparon la portada de las publicaciones policiales mensuales. Los policías en todo el país están bajo escrutinio cada vez mayor, por parte del público y de las administraciones. Además de un mayor escrutinio y supervisión, los policías son atacados físicamente mientras están de servicio en cifras récord. Al escribir estas líneas, la página del memorial de Oficiales Caídos informa sobre 128 muertes en servicio en el año 2011, 49 de ellas en tiroteos. Para colmo, los departamentos de policía de todo el país se enfrentan a recortes presupuestarios masivos, lo que resulta en un menor número de personas y de recursos para capacitación. No importa cómo se sume, la suma es la misma: la moral del oficial ha sido diezmada. Todos los oficiales reconocen a los oponentes visibles: políticos que conducen la política, juicios civiles desfavorables y, por supuesto, a los criminales que enfrentamos a diario. El único enemigo que la mayoría no reconoce podría ser el más peligroso para nosotros como profesionales: la complacencia. Los oficiales están luchando actualmente con la moral baja, la reforma de pensiones, los recortes salariales, y la flacidez de la aprobación pública. Todos esos factores de preocupación pueden conducir fácilmente a los oficiales a la toma de decisiones complacientes. Como instructores tenemos la responsabilidad de combatir esto cuando lo vemos. Sun Tzu escribió: "El que puede modificar sus tácticas en relación a su oponente, y con ello tener éxito al ganar, puede ser llamado un capitán nacido del cielo". En el contexto moderno, el "oponente" son los factores de preocupación que enfrentan nuestros oficiales y las decisiones y tácticas que


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se producen como consecuencia de ello. Como instructores en la aplicación de la ley, hay varios métodos que podemos usar para ganar esta batalla y evitar que nuestros oficiales sean víctimas de este oponente. Aquí hay algunos... Termine en una victoria. Los principales instructores abandonaron hace mucho tiempo la filosofía de "matar" educandos en un ejercicio de instrucción. Aquellos que todavía practican esta táctica deben considerar medidas alternativas. La primera vez que experimenté esto fue mientras estaba con los militares, donde a un aspirante que cometió un error “fatal” se le dijo que estaba "muerto" y se lo separó del ejercicio. Aunque originalmente diseñado para tratar el punto de evitar errores, la capacitación de directivos en los últimos años comenzó a darse cuenta de esta práctica construida en la idea de que los policías y los militares deberían colapsar y rendirse tras recibir un disparo. Obviamente, recibir un disparo no significa que el receptor sea incapaz de continuar la lucha. Una filosofía mejor se puede utilizar cuando los estudiantes cometen errores. Un interrogatorio a fondo (debriefing) garantiza que los puntos de entrenamiento se han logrado y que el alumno entienda cómo mejorar su rendimiento. Una vez hecho esto, ejecute el ejercicio de nuevo. Una vez que las lecciones de la experiencia inicial han sido inculcadas, el estudiante debe realizar mucho mejor la segunda pasada, lo que permite al participante terminar en una victoria. Al permitir que esto ocurra, el estudiante tendrá un enfoque mucho más positivo sobre la capacitación en el futuro, que no se sienta mal acerca de sus habilidades o su desempeño en general, y la moral general de los estudiantes habrá mejorado. Entrenamiento libre de egos. La inserción del ego en cualquier sesión de entrenamiento es un cáncer que se disemina rápidamente y destruye la intención original del material. He visto material fantástico y un esquema bien construido, rápidamente cerrado por una audiencia que vio a un instructor dándose golpes en el pecho. Siempre dije que ego no equivale a credibilidad. Hay un montón de maneras de establecer la credibilidad con una audiencia sin tener un enfoque condescendiente con su presentación. Todos hemos visto los efectos negativos de un instructor que habla despectivamente a los estudiantes o que tiene un aire de superioridad. Nada destruye la moral interna más rápido que afirmarse verbal o físicamente como mejor que los que le han sido confiados a ayudar, monitorear, o entrenar. Quédese con lo que sabe, reconozca la experiencia de los que le rodean, y aprenda algo nuevo cada vez que enseñe. Esta política ha servido mucho en mi organización, incluyéndome a mí. Acepte realimentación. Independientemente del material, pregunte a los participantes cómo se puede mejorar el curso que paga enormes dividendos. Un simple "¿qué podemos hacer mejor?" será más que suficiente. Es probable que se presenten ideas que no había considerado previamente. La información que usted reciba será vigente y aplicable a lo que los oficiales de patrulla enfrentan actualmente. Por supuesto, los planes de estudios exigidos por el estado están estandarizados - sin embargo, la presentación del material siempre se puede mejorar y adaptarse mejor a su público. Por último, cerrar con un agradecimiento hace maravillas para la moral. Al decirle a sus alumnos: "Gracias por venir, tengan cuidado", le enviaremos el mensaje de que son una parte activa en la configuración de los objetivos de capacitación y que en general se preocupa por su bienestar y no lo está llevando a cabo una instrucción del tipo "marque una casilla". No hay duda que enfrentamos tiempos difíciles y retos futuros. Ahora más que nunca, le debemos a nuestro personal entrenarlo de manera adecuada para enfrentar rivales. Modifique sus tácticas, derrote al adversario, y sea el capitán venido del cielo.

Violencia adolescente: Cómo puede, la policía, tener un impacto Los policías llamados a una escuela, para responder por un incidente entre jóvenes, deben ser muy

conscientes de la transmisión vertical de la violencia doméstica a la violencia en las relaciones de parejas adolescentes.

Por: Karen L. Bune. Especialista en Víctimas de la Oficina del Fiscal de Estado, Condado de Prince George, Maryland. Profesora Adjunta en el Departamento de Justicia Criminal de la Universidad George Mason, Fairfax, Virginia y en la Universidad Marymount, Arlington, Virginia. Consultora de la Oficina para las


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Víctimas del Delito y de la Oficina para la Justicia Juvenil y la Prevención de la Delincuencia del Departamento de Justicia de los EEUU. Es Board Certified Expert en Estrés Traumático. Diplomada en la Academia de Expertos en Estrés Traumático y del Centro Nacional para la Gestión de la Crisis. Es Board Certified en Violencia Doméstica. En 2007 recibió el Notable Alumni Award del Departamento de Asuntos Públicos de la American University, Washington, D.C. En 2009 ingresó en la Galería de la Fama del Wakefield High School (Arlington, VA). Recibió el "Chief's Award" del Departamento de Policía del Condado de Prince George, Maryland (2009).

4 de mayo de 2011

Son adolescentes que crecen y solo quieren coincidir entre sus compañeros. Quieren ser frescos y estar en sintonía con la última tecnología. En el complejo mundo de hoy, quieren ser "parte del público" y aún se esfuerzan por ser personas. Tal vez poseen una raya de color naranja brillante en el pelo salvajemente coloreado, un toque de color azul brillante en el dedo y en las uñas de los pies e incluso algunos tatuajes, piercings en el cuerpo, y otros adornos corporales de moda. Mientras se esfuerzan por encajar dentro, también desean ser diferentes. Muchos de ellos son inteligentes, y algunos gozan de oportunidades únicas a las que sus antecesores nunca tuvieron la capacidad de acceder. En general, los jóvenes de hoy tienen una mayor exposición al mundo que los rodea a través de medios académicos, medios de comunicación social y una serie de otras actividades que los colocan en situaciones que pueden favorecer la rápida pérdida de la inocencia y una demanda apresurada para la madurez que, en y por sí misma, puede producir mayores presiones en diversos aspectos de las vidas de esos jóvenes. Queriendo ser independientes, también quieren ser parte de algo. Queriendo estar solos, también quieren estar juntos. Queriendo obedecer, también quieren rebelarse. En la actualidad, los jóvenes parecen tener menos tiempo para saborear su progresión desde la infancia a la adolescencia y las expectativas puestas en ellos por otros, junto con las que se dan a sí mismos, son muy grandes. Las mujeres se maquillan y visten provocativamente antes. Ellos empiezan a salir y son sexualmente activos antes de lo preferido por sus padres y maestros. Los hombres conservan el deseo de exhibir su masculinidad definida por su capacidad para conquistar y demostrar destreza sexual. Quieren ser la atracción magnética de sus contrapartes femeninas y esperan inspirar el asombro y la admiración de sus pares masculinos. La percepción de los adolescentes del romance, la intimidad, el sexo y el amor son, a menudo, coloreados por el bombardeo de varias representaciones de los medios de comunicación. Diversos antecedentes, similar estatus. Muchos de esos jóvenes residen en comunidades bien vestidas y son producto de relaciones de familias cariñosas y saludables. Otros pueden ser los productos de un hogar roto. Algunos pueden haber estado expuestos a la violencia doméstica, las drogas y la adicción al alcohol, y otras disfunciones familiares. No es raro que esos jóvenes reflejen lo que se les presentó en sus años de desarrollo. Para aquellos que han estado expuestos a situaciones de violencia doméstica, la transmisión vertical del ciclo de la violencia puede repercutir en sus situaciones de parejas jóvenes. Los elementos de poder y control, que son componentes dinámicos de cualquier situación de violencia doméstica, se trasladan a las relaciones de pareja de esos jóvenes. A menudo, el macho toma el control, domina a la hembra, y carece de las habilidades esenciales y la comunicación vital para cualquier relación sana. En lugar de emplear la comunicación verbal efectiva para discutir perspectivas diferentes y resolver las diferencias, la violencia se convierte en el reemplazo inmediato y predominante. Similar a las relaciones adultas, la víctima en los noviazgos de jóvenes puede ser varón o mujer. Empujar, abofetear, lanzar al/la compañero/a al suelo, patadas, escupitajos, golpes, tirones de cabello, estrangulamiento, amenazas, mostrar un arma con la amenaza de intimidar, dañar o incluso matar potencialmente, son acciones comunes entre los adolescentes en sus jóvenes noviazgos. Los comentarios degradantes, insultos y amenazas verbales, así como los gritos, son elementos complementarios del abuso emocional que abraza la violencia física.


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Comportamiento impulsado por las hormonas y la historia. Los adolescentes, que tan desesperadamente desean ser aceptados como "parte del público" y que quieren demostrar que pueden manejarse sin la intervención del adulto, tolerarán esas relaciones violentas y abusivas. Para algunos, parece normal porque fueron criados en un entorno en el que fueron testigos de un patrón similar de comportamiento. Para otros, que pueden haber sido criados en ambientes más funcionales y saludables, aceptan el comportamiento porque comienzan a creer que hicieron algo malo para merecerlo. Además, no quieren ser desaprobados por sus compañeros, y no quieren revelar la violencia en los informes a las autoridades escolares, los padres, o la policía, porque sería delatar a su grupo cohesionado juvenil para el cual se esfuerzan tanto por ser parte y ganar aceptación. Como resultado, cuando el primer comentario denigrante es seguido por otro, y la primera acción violenta que ocurre se suma con otras más, el patrón de violencia en el noviazgo ha comenzado. Esas jóvenes víctimas, tanto hombres como mujeres, sufren el abuso emocional, la violencia física, y sufren en silencio. En su mayor parte, no lo dicen a nadie. No quieren sentir ninguna sensación de rechazo, decepción o disgusto de sus padres, profesores u otros adultos en sus vidas. Similar a sus contrapartes adultas que comparten el ciclo de violencia, que ocultan sus heridas, ofrecen excusas por sus lágrimas, y racionalizan el comportamiento de su pareja. Ellos sufren en silencio. El rol de la policía. Es imperativo que las fuerzas del orden, así como el poder judicial, estén en sintonía con este fenómeno perturbador. Cuando la policía es llamada a responder a una escuela por un incidente entre jóvenes, cuando son convocados a una casa por una llamada al 911 y descubre sólo jóvenes adolescentes en el hogar, y cuando ven a los jóvenes gritando en la calle cuando viajan en sus automóviles, tienen que prestar mucha atención a las circunstancias. Los eventos no deben ser rápidamente descartados como una riña entre adolescentes. Deben plantearse preguntas críticas, considerar la naturaleza del fenómeno, y prestar atención a cualquier signo de daño físico que puede ser el resultado de la violencia que no debe ser necesariamente explicada como accidental por los jóvenes involucrados. Los policías pueden jugar un rol clave en la detección de la violencia adolescente. Aquellos que son desplegados como oficiales de recursos en las escuelas o en la comunidad necesitan ser muy conscientes de la transmisión vertical de la violencia doméstica a la violencia entre parejas adolescentes. A través de sus esfuerzos, pueden educar a los jóvenes en las escuelas y en la comunidad sobre las señales de advertencia y los efectos peligrosos de la violencia entre parejas adolescentes, y ser los recursos disponibles de las agencias comunitarias aliadas, Programas de Víctimas/Testigos, y otros más relevantes. Debe haber foros periódicos de la comunidad sobre el tema de la violencia entre parejas adolescentes para educar a las escuelas, padres y residentes de la comunidad, para reconocer los signos y síntomas y conocer los métodos de intervención apropiados para ayudar a esos jóvenes escapar de unas relaciones abusivas y violentas temprano en sus vidas. El 19 de febrero de 2011 el Honorable Herman C. Dawson, de la 7º Corte Judicial de Maryland en el Condado de Prince George, organizó una cumbre sobre la violencia adolescente en una escuela secundaria local. Reconociendo el creciente número de casos de violencia en relaciones de pareja adolescente, fue proactivo en sus esfuerzos por educar a la comunidad a través de esta cumbre que incluyó a diversos profesionales hablando sobre el tema. Su compromiso con esta causa no ha hecho más que empezar, y el Juez Dawson planea continuar sus esfuerzos con un alcance comunitario adicional en el futuro. En todo el país, es fundamental abordar la cuestión de la violencia entre parejas adolescentes. Debe haber un esfuerzo concertado y permanente para educar, desarrollar y mejorar los recursos existentes, y prestar asistencia a jóvenes víctimas de la violencia entre parejas adolescentes que tienen la oportunidad de ser salvados de una vida que, sin la atención e intervención inmediata, puede destruir sus vidas jóvenes de muchas maneras.

Interacción del funcionario encargado de aplicar la ley con el enfermo mental peligroso

Greg Sancier

2 de marzo de 2012


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Desde hace años el debate controversial ha desatado polémica en relación con las personas que sufren de enfermedad mental y que pueda representar una amenaza significativa para el público en general, la aplicación de la ley y para la seguridad pública. La respuesta es: 'No, no lo hace". Estadísticamente, si miramos a los datos más recientes presentados estos muestran que las personas que sufren de enfermedades mentales no son más propensas a ser violentas que la gente de la población en general. Sin embargo, la distinción más importante es cuando las personas que sufren de enfermedad mental demuestra comportamientos particulares, entonces la respuesta es un definitivo Sí, son más violentos. Durante años, no sólo como Instructor Policial en Técnicas de Intervención de Crisis (CIT, Crisis Intervention Techniques), sino como un negociador de rehenes, oficial de patrulla, y más tarde como un psicólogo especializado en intervención de crisis, he respondido a casi miles de incidentes en los que mis interacciones con los enfermos mentalmente graves no eran peligrosas. A la inversa también hubo muchos que involucraron a personas que se encontraban mentalmente enfermas que eran extremadamente peligrosas. Eran peligrosos debido a una serie de condiciones, todas las cuales yo diría que no sólo eran controlados por algún tipo de enfermedad mental, sino también con el factor acompañante del abuso de sustancias - esta condición es conocida por los médicos como un Desorden Co-ocurrente. De hecho, nunca en mis 30 años de experiencia en la aplicación de la ley antes mencionada, me encontré alguna vez con algún sujeto en una crisis de salud mental que no estaba bajo la influencia de alguna sustancia química. Nunca. El fermento de una tormenta perfecta. Las combinaciones de sustancias bajo cuya influencia se encontraban de son infinitas. Entonces, si se agrega una lesión traumática del cerebro y la enfermedad mental combinada con medicamentos psicotrópicos y luego agrega drogas de la calle - tiene un problema importante en sus manos, que, lamentablemente, puede terminar en tragedia. Empecé a notar una tendencia preocupante cuando yo estaba trabajando en la Unidad de Gestión de Crisis, donde parecía que cada vez más no sólo los funcionarios de mi propio departamento de patrulla, sino otros funcionarios en todo el estado, tenían enfrentamientos más letales con los enfermos mentales graves. De hecho empecé a investigar y encontré que mis sospechas no estaban equivocadas. Según el Dr. E. Fuller Torrey, del Centro del Tratamiento de Defensa, cuando el enfermo mental severamente grave pone de manifiesto ciertas condiciones, entonces en realidad son peligrosas. Él hace una lista de 7 indicadores que cuando están presentes pueden ser precursores de la violencia. Me voy a referir a los indicadores después de ver un caso que pasara en el norte de California con un enfermo mental severamente grave llamado Aaron Bassler, que según su padre tenía una enfermedad mental sin diagnosticar. Desgraciadamente desde que empecé a escribir este artículo ha habido muchos más. El caso de Aarón Bassler. El caso más reciente que viene a la mente -para el que fui entrevistado en el noticiero local de televisión- fue el de Aarón Bassler en el condado de Mendocino. Bassler fue extra- oficialmente diagnosticado con una enfermedad mental por su padre, James, quien contó historias de su muerte psicológica gradual desde la edad de 18 años y muchos de sus comportamientos. Para empeorar las cosas Bassler se hizo adicto a la metanfetamina, y si él no era un paranoico y delirante lo suficiente, la adicción a la metanfetamina sólo sirvió para exacerbar la intensidad de su enfermedad mental. Aaron Bassler se ajusta al "perfil" de la peligrosidad exactamente de acuerdo con lo que el Dr. Torrey describe. En el momento de este artículo yo no era consciente de lo que su familia o sus amigos habían hecho en su nombre para obtener atención de salud mental o intervención para él. Aaron Bassler disparó y mató a Jere Melo, un exalcalde, y Matthew Coleman, un naturalista, cuando llegaron a la granja Opium de Bassler. De acuerdo al Dr. Torrey hay una condición que existe con muchas personas que tienen lesiones cerebrales traumáticas y enfermedades mentales graves llamada anosognosia; o más simplemente, la incapacidad para tener una idea de su enfermedad. Bajo las condiciones de la enfermedad mental la persona podría estar exhibiendo delirios y alucinaciones que para ellos son muy reales. Tan real de hecho que cuando te encuentras con ellos en la calle están convencidos de que Dios les mandó a matar a alguien, o cortan una rama, o matan a un niño.


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Estas alucinaciones se llaman “comando de alucinaciones”, donde un poder alternativo, que muchas veces creen que es Dios, está al mando de ellos para cometer algún acto atroz, que para ellos tiene mucho sentido. Según el padre de Aaron Bassler su hijo sentía que los marcianos le estaban pidiendo cometiera ciertos actos. Independientemente de los comandos dados, estos con mayor frecuencia son tan intensos que el resultado suele ser de proporciones trágicas. Después de la tragedia Columbine High School, aunque efectivo en muchos tipos de situaciones delictivas, los equipos SWAT están limitados en sus tiempos de reacción a los tipos de situaciones de Tiradores Activos. La situación promedio de tirador activo es de más de siete minutos. Cuando empecé a estudiar esas condiciones pensé que en base a muchas de las llamadas por enfermedades mentales, donde la violencia se había producido, era lógico que las agencias policiales adoptaran una respuesta similar a las llamadas por crisis con enfermedades mentales. Para muchas agencias esto puede crear un problema logístico basado en los recursos disponibles, relacionados con mano de obra y equipo. Si es práctico hacerlo, los oficiales respondientes deben "pararse" momentáneamente hasta que la mano de obra necesaria llegue, entonces pueden enfrentarse a la amenaza potencial de forma más segura. Lo que esto significa claramente es que una cierta cantidad de entrenamiento sería necesaria para asumir este reto, que es cada vez más común en todo los EE.UU. En cualquier caso, se necesitaría mucho menos tiempo de lo que es necesario para la llamada promedio de SWAT. Parte del equipo estaría integrado por al menos un arma no letal, como una bolsa de aturdimiento y / o TASER, otro de uno o dos oficiales con pistola - arma de servicio u otra alternativa - y luego otro oficial que sería el oficial CIT (Técnicas de Intervención de Crisis). Con los escasos recursos de varios departamentos, reconozco que tener muchos de estos oficiales en una llamada de esta magnitud puede ser algo remoto, en el mejor de los casos. El peor escenario es aquel en que el oficial llega a alguien que está siendo asaltado y el oficial toma medidas inmediatas para salvar la vida de esa persona, o la suya propia, para evitar nuevos actos de violencia. Finalmente, primero y principal. Obviamente, la seguridad del oficial siempre está en primer lugar con cualquier llamada y si se trata de una situación de vida y muerte a la llegada del funcionario, entonces una puesta en escena puede ser un lujo. Sin embargo, si es posible pararse por un momento y tener un plan táctico en su lugar, puede reducir la probabilidad de que las personas resulten gravemente lesionadas o muertas. Le recomiendo que si es posible, el funcionario que responde, si ha estado en una residencia varias veces, que haga un esbozo de esa residencia. Ya cité la investigación del Dr. Torrey, basada en las llamadas por crisis de enfermos mentales en los EE.UU. y lo que ha desarrollado. Entraré en más detalles aquí en lo que respecta a cuáles son esas condiciones y los precursores de la violencia. El Dr. Torrey ha llevado a cabo años de investigación y sus resultados, a pesar de que pueden ser nuevos para el público en general, son hechos que hemos conocido durante años en la aplicación de la ley, ya que hemos enfrentado a gente con enfermedades mentales graves en el tiempo una y otra vez, que eran peligrosos. Las siete condiciones que se enumeran a continuación han sido los factores predominantes en las personas que sufren de enfermedad mental y son propensas a la violencia. Si se dan estas condiciones existe una fuerte probabilidad de que esa persona será violenta en el futuro. Las situaciones realmente trágicas son aquellas en los que la policía es llamada debido a la violencia contra los seres queridos, como miembros de la familia. Muchas veces he hecho a los miembros de la familia a esta pregunta crucial: "¿Usted en el pasado, o actualmente, duerme con la puerta del dormitorio cerrada en la noche?" Obviamente, si la respuesta es afirmativa a esta pregunta, entonces hay un potencial de violencia. Como esa pregunta es emocionalmente dolorosa de responder, no hay duda en mi mente sobre el potencial de violencia, independientemente de si la persona es un ser querido o no. Aquí está la lista del Dr. Torrey sobre el potencial para la violencia: 1) Antecedentes de violencia - La historia pasada del individuo de violencia es el predictor más importante de la violencia en el futuro entre todas las personas, ya sea un enfermo mental o no. 2) Abuso de sustancias – Alcohol, anfetaminas, cocaína y PCP pueden exacerbar las tendencias violentas.


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3) Anosognosia ("desconocimiento de la enfermedad") con incumplimiento de la medicación - Aquellas personas que no son conscientes de su enfermedad y se niegan a tomar la medicación. 4) Desorden de Personalidad Antisocial - La combinación de trastorno psiquiátrico grave en una persona con estas características de personalidad, hacen que sea de esperar una mayor encarcelación y un comportamiento violento. 5) Síntomas paranoides - Las personas que padecen enfermedades mentales graves han fijado las creencias falsas debido a los síntomas paranoides, pueden llegar a ser extremadamente violentas. 6) Deterioro neurológico - Los que sufren de deterioro neurológico son más violentos. 7) Género - Normalmente, los hombres representan el 85-90 % de las conductas violentas en todo el mundo, las mujeres sólo 10-15 %. Las mujeres con trastornos psiquiátricos graves son la excepción a esta regla. Muchos estudios han demostrado que las mujeres con psicosis son iguales de agresivas que los hombres. Si todas o algunas de esas condiciones existen, entonces el rol de quien toma la llamada y / o despachador policial se vuelve aún más crítico. Basado exclusivamente en mi experiencia anecdótica en la calle, estoy totalmente de acuerdo con la evaluación del Dr. Torrey. Si la policía va a reducir la cantidad de lesiones o muertes relacionadas con la enfermedad mental, tener en cuenta estos signos puede ser la clave para una mayor seguridad del oficial, así como la seguridad de la persona mentalmente enferma.

Asegurar entrenamiento relevante después de un incidente con uso de la fuerza Observando a y aprendiendo del cambio en la política y en el procedimiento de adjudicación del uso de la

fuerza del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) en los últimos años.

Capitán Scott L. Sargent

Departamento de Policía de Los Ángeles Comandante de la División Revisión del Uso de la Fuerza

28 de junio de 2010 En promedio, los oficiales del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) son involucrados en alrededor de 1.800 incidentes con uso de la fuerza cada año, incluyendo aproximadamente 60-70 tiroteos con intervención policial, haciendo del uso de la fuerza uno de los temas principales de enfoque interno y evaluación. En consecuencia, como una de las agencias del orden público más grandes y de más alto perfil en el país, la policía de Los Ángeles se esfuerza continuamente por mejorar como una organización modelo de aprendizaje, continuamente revalúa y vuelve a evaluar sus prácticas, mientras se esfuerza por hacer los cambios necesarios y oportunos sobre la base de las Lecciones Aprendidas (Lessons Learned) y las Mejores Prácticas (Best Practices) nacionales. A continuación, algunos de los cambios en los procesos del uso de la fuerza que el LAPD incorporó en los últimos años: Cambio de la Política del uso de la Fuerza. En los últimos años, la policía de Los Ángeles ha emprendido el proceso de evaluar y adoptar formalmente los estándares establecidos en Graham v. Connor, 490 EE.UU. 386 (1989). La nueva política basada en la racionalidad objetiva fue aprobada por la Junta de Comisionados de Policía de Los Ángeles en julio de 2009. Esa política revisó y simplificó muchas políticas dispersas relacionadas con la fuerza y han sido incorporadas plenamente en el entrenamiento de entrada y en el entrenamiento en servicio del departamento, así como una amplia revisión del uso de la fuerza de revisión y los procesos de adjudicación.


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Eliminación de la Serie Continua del Uso de la Fuerza (UOF Continuum). En 2009, la policía de Los Ángeles finalizó la incorporación de la razonabilidad objetiva y de la nueva Política de Uso de la Fuerza (UOF Policy) en todas las áreas de operaciones del departamento, en el entrenamiento en servicio y en la academia. Este mandato del pasado basado en la serie continua ha sido históricamente una carga ineficiente y excesiva para los oficiales, y es contraria a las mejores prácticas y a un entrenamiento eficaz. Exigir a los oficiales que clasifiquen o categoricen la conducta de un sospechoso (es decir, combativo agresivo) antes de elegir una opción de fuerza es un paso innecesario de intervención y puede resultar en una respuesta retrasada o en una vacilación. La nueva Carta de Opciones de Uso de la Fuerza del LAPD (LAPD UOF Options Chart) apoya directamente a las mejores prácticas en el entrenamiento sobre uso de la fuerza, asegurando una efectiva articulación en los informes de arrestos y ordena el desarrollo de habilidades de pensamiento crítico. El nuevo protocolo de entrenamiento del sentido común ha sido bien recibido, ya que permite a los oficiales elegir cualquier opción de fuerza objetivamente razonable en respuesta al comportamiento del sospechoso. Cambio de los Procedimientos de Adjudicación de Uso de la Fuerza. En julio de 2008, la Junta de Comisionados de Policía de Los Ángeles adoptó nuevos estándares de adjudicación para los incidentes de Categórico Uso de la Fuerza (CUOF, Categorical Use of Force). Un incidente CUOF incluye cualquier tiroteos con intervención policial o cualquier otra aplicación de fuerza letal, un golpe a la cabeza con un dispositivo de impacto que es intencional o resulte en la hospitalización, una mordida de un can de la Unidad K9 u otras acciones de la aplicación la ley que da lugar a la hospitalización o la aplicación de un control de sujeción de la carótida. Todos los incidentes CUOF están sujetos a una investigación exhaustiva por el LAPD, División de Investigación de la Fuerza (FID, Force Investigation Division), que eleva su informe final a la División Revisión del Uso de la Fuerza (UOFRD, Use of Force Review Division) para su revisión y la facilitación del proceso de adjudicación. La mayoría de los incidentes CUOF, que promedian aproximadamente 100 hechos por año, están sujetos a una formal Junta de Revisión del Uso de la Fuerza (UOFRB, Use of Force Review Board) donde el FID conduce un estado del arte basado en una presentación de Power Point a un consejo de seis miembros compuesto por un Presidente Jefe Adjunto, un miembro de los pares y representantes de alto nivel del personal de la Oficina de Personal y Capacitación, la Oficina de Operaciones y los empleados de la Oficina Geográfica. Después de la presentación en Power Point de FID, el oficial al mando de los empleados presenta su análisis y las conclusiones recomendadas para Desenfundar y Exhibir un Arma de Fuego, Fuerza Letal, todas las Tácticas Menos o No-Letales cuando sean aplicables y Tácticas (Drawing and Exhibiting a Firearm, Lethal Force, all Less- or Non-Lethal Force when applicable and Tactics). El UOFRB entonces delibera y proporciona resultados de cada empleado en cada una de las áreas de aplicación. El UOFRB hace recomendaciones a través de la UOFRD al Jefe de Policía. El Jefe de Policía formalmente revisa y considera cada incidente y hace recomendaciones formales para la Junta de Comisionados de Policía de Los Ángeles (BOPC, Los Angeles Board of Police Commissioners). Después el BOPC, durante una reunión a puerta cerrada, oye y delibera sobre cada caso y adjudica formalmente cada hallazgo. Durante este proceso, la Oficina del Inspector General conduce un análisis independiente de cada caso también. Ese análisis y las recomendaciones formales para cada una de las áreas pertinentes se transmiten también al BOPC para su consideración durante el proceso de adjudicación definitiva. Antes de julio de 2008, cualquier constatación de Desaprobación Administrativa o Fuera de la Política (Administrative Disapproval or Out of Policy) resultaba en una queja personal que desataba una investigación interna por mala conducta. Además, en la mayoría de los casos, los oficiales eran enviados a entrenamiento formal o divisional en cualquier número de áreas. Este proceso resultó en la palabra "T" (training, entrenamiento) que tiene un cierto estigma negativo. El entrenamiento proporcionado como resultado de un incidente CUOF no siempre fue bien acogido, ya que a menudo era asignado hasta 10 meses después de un incidente y no había una aparición de reprimenda asociada a la adjudicación definitiva de un incidente. Por el contrario, el nuevo proceso de adjudicación establece que todos los empleados que están involucrados de manera significativa en un incidente CUOF reciben un Entrenamiento General de Actualización obligatorio (GTU, General Training Update) en todas las áreas relacionadas con tácticas y


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fuerza involucradas dentro de los 90 días de un incidente. Esto asegura que el entrenamiento sea integral, positivo y oportuno. Este enfoque para el entrenamiento ha sido bien aceptado, ya que no se basa en el resultado del proceso de revisión y es necesario para todos. Tras la finalización del proceso de investigación y revisión, el incidente CUOF es adjudicado formalmente como se ha indicado anteriormente. A partir de entonces, se requiere que el personal significativamente involucrado asista a un amplio Debriefing Táctico del incidente. Además, cuando hay un hallazgo de Fuera de la Política o Desaprobación Administrativa en Tácticas, Desenfunde y Exhibición o cualquier área de Uso de la Fuerza, el Jefe de Policía tiene la opción de uno o más de los siguientes, además del obligatorio Debrief Táctico: • Reentrenamiento amplio. • Noticia para corregir las deficiencias. • Queja Personal. Mientras que el modelo de la policía de Los Ángeles puede parecer complejo desde la perspectiva de una pequeña agencia, asegura que el entrenamiento relevante en las áreas aplicables sea brindado de manera oportuna a los empleados involucrados (GTU) y provee un proceso de debriefing uniforme para todos los incidentes CUOF (Tactical Debrief). Tal modelo puede encajar perfectamente en una agencia más pequeña, centrándose en y construyendo en torno a esos dos componentes clave. Publicación de un Reporte Público de Uso de la Fuerza. En 2009, el primer Reporte Público de Uso de la Fuerza (Public Use of Force Report) fue diseminado por la policía de Los Ángeles. El informe abarca todas las áreas de incidentes CUOF y NCUOF, incluidas las tendencias y las clasificaciones de los incidentes. El Reporte Público de Uso de la Fuerza del LAPD ofrece una visión histórica transparente del uso interno de la revisión y del proceso de adjudicación del uso de la fuerza del LAPD. El Reporte Público de Uso de la Fuerza puede ser consultado en el sitio web oficial de la policía de Los Ángeles. Periódicos TacOps (TacOps Newsletter). En 2006, el UOFRD desarrolló el concepto TacOps para proporcionar a los oficiales de valiosos recursos de seguridad con los objetivos de desarrollar habilidades tácticas críticas fundamentales y asegurar el máximo rendimiento de los oficiales y los grupos. El concepto TacOps ha evolucionado con el tiempo y ahora está compuesto por: • TacOps Newsletter. Un boletín trimestral gráficamente agradable, de varias páginas, repleto de artículos sobre las áreas de seguridad y táctica del oficial, la nutrición y el entrenamiento físico. • Boletines TacOps. Un boletín publicado según las necesidades de seguridad de los oficiales en las cuestiones que son significativas y críticas por su naturaleza, que requieren una difusión oportuna. • Hojas informativas Roll Call (Roll Call Briefing Sheets). La Hoja Informativa Roll Call es una página de resúmenes de múltiples tópicos desde lecciones importantes aprendidas de la revisión del uso de los incidentes de fuerza - publicada según sea necesario. Esos artículos son enviados a los oficiales con mando en todo el Departamento, con la intención de que éstas sean leídas en las votaciones nominales, sesiones informativas y reuniones de las unidades. La policía de Los Ángeles cuenta actualmente con una base de datos de suscriptores y reenvía el TacOps Newsletter a más de 100 departamentos de policía en todo el país.

¿Prestamos atención a las lecciones aprendidas? Identificar y evaluar las lecciones tácticas aprendidas de incidentes locales, nacionales e internacionales es

crítico para mejorar el desempeño individual, grupal y organizacional.

Capitán Scott L. Sargent

13 de julio de 2012


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Hay un renovado interés en el terrorismo y en la preparación de incidentes terroristas a gran escala. En consecuencia, las agencias están evaluando los sitios críticos en sus jurisdicciones y perfeccionando las respuestas tácticas relacionadas y los protocolos de ayuda mutua. Sin embargo, es igualmente importante recoger y comunicar las lecciones aprendidas de incidentes que son menos trascendentales en su alcance, pero más comunes o frecuentemente encontrados por los primeros respondedores. ¿Qué tan bien evaluamos individual y colectivamente los incidentes significativos, incluyendo los que ocurren en nuestro propio patio trasero? Cuando ocurre una larga persecución a alta velocidad, un asalto a un oficial o un agente implicado en un tiroteo, sea dentro de nuestra agencia, en una jurisdicción vecina, o incluso a cientos de kilómetros de distancia - ¿realizamos una evaluación de los hechos conocidos por nosotros para determinar qué lecciones pueden ser aprendidas para beneficio de nuestro propio personal? Una reunión informativa oportunamente táctica sobre el protocolo es un proceso valioso para la identificación de lo que salió bien durante un incidente y cómo podemos mejorar en el futuro. Esas sesiones informativas no tienen la intención de castigar o criticar a algún individuo o grupo. Sean formales o informales, las reuniones de información debe estar en el punto y con todo incluido, sin consideración de rango o posición; todos deben participar y sentir que pueden hablar abiertamente y con franqueza. Algunas agencias tienen sistemas formales de revisión vigentes para evaluar los incidentes y ofrecer reportes posteriores a la acción o evaluaciones menos formales para áreas tales como las tácticas y el uso de la fuerza. Una manera eficaz de transmitir las lecciones aprendidas a nuestro personal es a través de las comunicaciones rutinarias previstas poco después de que ocurra un incidente o un problema o se identifique una tendencia. Esta información puede ser proporcionada a los funcionarios a través del entrenamiento “roll call” (pasar lista) o los boletines tácticos, periódicos u otros medios electrónicos. Muchas agencias, incluyendo los Departamentos de Policía de Nueva York, Chicago y San José, publican regularmente Boletines de Entrenamiento o Tácticas (Training or Tactical Bulletins) que contienen información vital y oportuna. El Departamento de Policía de Los Ángeles publica trimestralmente el TacOps Newsletter, que contiene artículos relacionados con cuestiones tácticas contemporáneas identificadas durante la revisión de las principales tácticas o incidentes de uso de la fuerza. Además, el LAPD publica regularmente un Roll Call Briefing Sheet que se distribuye a comandos operativos en toda la ciudad para su uso cuanto se pasa lista a la asistencia. El objetivo de contar con un proceso sistemático para comunicarse con el personal de línea es asegurar que todo el personal sea informado regularmente de las actuales cuestiones tácticas y tendencias, así como de las amenazas a la seguridad de los oficiales. Desarrollar protocolos para la diseminación de lecciones aprendidas, evaluaciones de riesgos, mejores prácticas y otros temas de actualidad puede ser tan fácil como nombrar a una persona como "clearing house" para las tendencias y temas tácticos y de seguridad del oficial, con una clara responsabilidad de transmitir esa información a todos de la forma más eficaz posible a través del foro adecuado. Si bien muchas de las lecciones más relevantes y las tendencias pueden ser identificadas dentro de nuestra propia agencia, aquellos en la arena global pueden ser identificados a través de fuentes tales como Policeone.com u otros recursos en línea. Independientemente de cómo se lleva a cabo este proceso, como líderes de la agencia, estamos obligados a proporcionar la información más oportuna y pertinente que ayude a garantizar la seguridad de todo nuestro personal.

Disparar al centro de la masa: ¿Tirar para matar o para detener? En la primera parte de una serie de tres, Roy Bedard examina el mantra tantas veces usado en capacitación

sobre el uso de la fuerza policial mortal: "No disparamos a matar. Tiramos para detener..."

Roy Bedard


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Se nos dice que disparemos al centro de la masa corporal, y sin embargo, también se nos dice que "tiremos para parar" en lugar de "tirar para matar." La masa corporal central alberga tu corazón, los pulmones, y un

montón de nervios. ¿Hay alguien más por ahí recibiendo mensajes contradictorios? Estado de negación. Puso un cigarro ida y vuelta entre los dientes mientras hablaba. A través de la envoltura y en la carpeta, el cigarro estaba empapado con la saliva que mostraba un mayor esfuerzo por masticarlo que para fumarlo. Se puso de pie delante de nosotros en la línea de mira para ver si todo el mundo estaba prestando atención. Dio la vuelta, bajó la cabeza y comenzó a caminar de un lado a otro mientras hablaba. "Centro de la masa. Es el ‘centro de operaciones’ para su cuerpo, alberga su corazón, el músculo más importante que envía la sangre a todas las partes de su cuerpo. Los pulmones también están aquí y son necesarios para el intercambio equilibrado de oxígeno y dióxido de carbono. Tiene los nervios, un montón de nervios que pasan a través del centro de la masa. El nervio vago, por ejemplo, representa la autopista de oro de la vida neurológica que mantiene la información entre su cerebro y los órganos vitales. Este nervio es el interruptor principal para la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Apague ese interruptor, vacíe la bomba de sangre o punce un pulmón y es probable que una persona muera de forma rápida. Ahí, gente, es a donde vamos a impactar con nuestras balas". Ser un policía novato en el campo de tiro era a la vez estimulante e intimidante. Recuerdo la sensación de estar en la línea de tiro, con un revólver calibre .38 S&W de seis cartuchos en la mano. Yo había practicado mucho el tiro en seco, pero ahora el cilindro de mi arma estaba cargado con balas de guerra. Dos cargadores de velocidad que, puestos en una bolsa de cuero usado en mi cinturón, me ofreció un total de dieciocho cartuchos. Estaba flanqueado a derecha e izquierda por una docena de otros tiradores novatos. Se hizo silencio ya que todos esperaban las órdenes del Director de Tiro (Range Master). Éste se subió a la torre. Todos mirábamos hacia los blancos de papel que colgaban entre los marcos de metal. A través de gafas de seguridad rayadas pude ver ante mí una silueta oscura con forma humana blasonada en el blanco. Incluso a mediados de la década de 1980, éramos conscientes de los rendimientos decrecientes que los blancos tipo ‘ojo de buey’ tenían en la preparación de uno para situaciones de combate real. Esa es la razón por la que disparábamos a siluetas con forma humana, era psicológicamente condicionante. Apuntar y disparar a una persona era una habilidad muy compleja que iba más allá de la simple puntería. En el centro de la oscura silueta había un dibujo blanco con forma de botella de Coca Cola gigante. Cubría el centro del blanco. Este dibujo hizo que mis ojos se enfocaran de forma más consciente en él. Y allí, en el centro de la botella de Coca Cola, había otro círculo situado exactamente sobre el lugar donde estaría el corazón, si fuera en realidad un ser humano. En ese círculo, el único número que podía leer claramente desde mi distancia era un gran 5X. Mis ojos fueron atraídos de inmediato hacia él. Estaba claro que esta área fue designada como más importante que el resto de la figura, y era aquí que se esperaba pegara con mis balas. Hubo un crujido repentino del parlante y el Director de Tiro dijo: "Dos disparos al cuerpo, al centro de la masa... sígalos con uno a la cabeza. El uso de un arma de fuego es la fuerza letal, gente, y sus disparos necesitan parar la amenaza. Recuerde, la última responsabilidad de quitar otra vida humana es suya. Nadie más puede tomar esa decisión por ti. Debe estar preparado tanto física como mentalmente. Para detener una amenaza mortal tiene que saber cuándo y dónde disparar. Quiero ver una buena colocación en el blanco y un agrupamiento apretado de sus disparos en el pecho. ¿Hay alguna pregunta? OK... ¿Está lista la línea de tiro? La línea está lista... a orden... ¡desenfunden y fuego libre!" Más de 700.000 policías que trabajan actualmente en Estados Unidos han recibido instrucciones de este tipo o similares en la academia. La instrucción en servicio hace lo mismo tratando de perfeccionar esas habilidades con las series de capacitación avanzada. Los policías reconocen que se les otorga una autoridad increíble para matar, para quitar una vida bajo ciertas circunstancias bien definidas. Se llama "homicidio justificado" cuando las mentes razonables acuerdan que disparar (y tal vez matar) a otra persona es razonable y necesario en defensa de los demás. Al aceptar esta posibilidad de matar, el policía también debe aceptar la posibilidad de vivir con ello después de haber matado. Para algunos, esta puede ser la parte más difícil. La reacción psicológica por matar ha afectado las vidas de incontables soldados y policías.


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Cuando la última andanada de disparos fue efectuada, ‘la torre’ habló de nuevo. "Bajen sus armas y escaneen rápidamente su entorno. Cuando esté claro, enfunden su arma. Ahora vamos a pasar y mirar sus impactos. Gente, quiero recordarles - no tiramos a matar... disparamos para parar". Esas palabras cayeron en mis oídos como lo han hecho en cientos de miles de otros funcionarios en todo el país. Aunque la mayoría de la gente razonable no haría dos tiros al pecho y uno a la cabeza para obtener un resultado favorable, una extraña inversión de las condiciones de la psicología nos hace pensar que cuando una persona recibe un disparo de un oficial de la ley, su muerte prematura nunca es porque lo mataron, sino porque murió luego de haber sido penetrado por las balas en las zonas vitales. ¡Qué extraña representación! Bertrand Russell dijo: "Los patriotas siempre hablan de morir por su país y nunca hablan de matar por su país". Dicen que hay dos lados en cada historia. Sin duda, los policías saben que los disparos en la cabeza y los disparos al centro de la masa es muy probable que maten. Este hecho por sí solo cumple con el requisito legal definido para el uso de la fuerza letal. ¿Hay una razón legítima o propósito para no admitir entonces que la policía dispara a matar? Aquí en el sur, algunos de mis colegas de la policía lo hacen fácil al describir los actos de policías implicados en tiroteos u otras formas de fuerza letal. Argumentan que matar y parar es meramente una cuestión de semántica, pero las palabras son sólo semánticas si significan lo mismo y transmiten el mismo mensaje. Sin duda, donde matar siempre significa parar, parar casi siempre no significa matar. Pueden ser similares... pero no son lo mismo. Debido a que parar y matar son cosas diferentes, ¿no es peligroso andar de puntillas alrededor de esta cuestión en lo que parece ser un perpetuo estado de negación? Cuando usamos la fuerza letal, ¿debe ser sorprendente para alguien que un resultado probable sea la muerte?

Disparar al centro de la masa: Me dijeron que nosotros matamos a todos... En la segunda parte de esta serie de tres partes, Roy Bedard recuerda una discusión que había tenido con un

instructor policial en la República Checa.

Roy Bedard

15 de abril de 2011


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La República Checa (Česká Republika) es uno de los países más modernos en el antiguo bloque comunista, y se está convirtiendo rápidamente en un líder reconocido en la profesión de la aplicación de la ley global. Ellos son considerados bastante modernos y actualizados en la teoría occidental, la tecnología y las aplicaciones. Producen una de las mejores armas del mundo, y son grandes contribuyentes a la promoción de metodologías de aplicación de la ley. No hace mucho tiempo, mientras daba presentaciones en la República Checa, fui confrontado con una perspectiva inusual que tiene valor comparativo para nuestro sistema de servicio de policía acá en los Estados Unidos. Un grupo de agentes de la policía me había invitado a visitar el campo de tiro de la policía, una moderna instalación en el interior de la propiedad de la academia. El campo de tiro era hermoso - bien construido con dispositivos de protección adecuada en su lugar. Las siluetas con forma humana podían cambiarse fácilmente detrás de la línea caliente, y mecánicamente enviarla a diferentes distancias. Había hombres y mujeres en servicio que estaban calificando con sus pistolas checas. Cuando se dio la señal para disparar, una gran columna de humo se levantó desde la línea. Durante la primera descarga cada oficial disparó cerca de cuatro o cinco proyectiles. Entrecerré los ojos y miré al suelo. Aunque nací con mala visión, mis ojos eran lo suficientemente buenos para ver que no había un solo agujero de bala en el centro de la masa en los blancos. Entonces, explorando los objetivos más estrechamente, vi lo que parecían ser agujeros -un montón- en las piernas del blanco. “Mi Dios”, pensé, “esto no puede ser una coincidencia”. Miré sobre mi hombro al director de rito, que se estaba preparando para la próxima secuencia. “¿Por qué ellos le están disparando a las piernas?”, dije, con media sonrisa, tratando de preguntar en forma casual. “Este fue un ejercicio no letal”, dijo sin dudar. Me sentí como pez fuera del agua. Estaba sorprendido por su respuesta. No tenía sentido para mí. “Pero si está tirándole, ¿cómo es un ejercicio no letal?”. Mirándome extrañamente como yo lo miraba a él, él replicó: “Nosotros tiramos a las extremidades, para herirlos”. Alcanzamos un punto muerto en el tema, así que lo dejé caer y el ejercicio de instrucción continuó. Durante el almuerzo, me senté junto al instructor y reabrí la conversación: “Cuénteme de nuevo acerca de disparar a las piernas”, le dije. “Oh, lo olvidé, usted es norteamericano. ¡Ustedes matan a todos!”, me respondió. Pensé para mis adentros: "Espera Skippy, tienes que estar bromeando - ¿nosotros matamos a todos?" Supongo que podía leer la mirada incrédula en mi cara porque dijo: "Mira, yo he estado en los EE.UU. He entrenado allí. Ustedes enseñan que todos los disparos deben ir al centro de la masa corporal seguido de un disparo en la cabeza". “Si, pero…” dije, mientras mi mente buscaba dar rápidamente una respuesta inteligente. "Hay razones por las que disparamos a esos lugares". Comencé a hablarle de la fuerza letal en los Estados Unidos. Estaba seguro de que había perdido esta parte de su instrucción en el aula - tal vez fue la barrera del idioma, yo no lo sabía - así que iba defender nuestro método de usar la fuerza letal y a esbozar las razones por las que sólo tiramos al centro de la masa. Hablé con rapidez, tratando de delinear nuestro concepto completo de uso policial de la fuerza. Le dije que era el área del cuerpo más grande de destino y la más fácil de impactar. Sentí que necesitaba un pizarrón, tiza. Yo quería hacer dibujos y gráficos, usar flechas y líneas, y escribir definiciones sanas e inteligentes. Quería 'impresionarlo' a él con mi profunda comprensión de este problema y llevarlo a tomar de nuevo esta última afirmación. Yo era, después de todo, el "experto" que ellos habían invitado desde un país extranjero. Además, yo no podía dejarlo ir. “No tiramos para matar”, dije. “Tiramos para parar”. Él asintió con la cabeza y dijo: "Sí, pero ahí es donde están sus entrañas vitales y un tiro ahí es probable que lo mate". Su arrogancia era notable. Le dije que era nuestro trabajo detener a un sujeto, y el pecho era la mejor zona para hacer eso. "¿Alguna vez ha recibido un disparo en la pierna?", preguntó. "Um, no”. "Bueno, eso lo parará a usted - es muy doloroso". Ahora él realmente se estaba metiendo bajo mi piel. "Está bien", dije, "pero seguramente sus oficiales bajo estrés no van a demostrar las cualidades puntería que tienen en el campo de tiro". ¿Cómo en el mundo puede esperar que impacte en una pierna flaca en movimiento?". Y lo tuve en ese momento.


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"Aquí en la República Checa, la mayoría de nuestros disparos se producen a una distancia muy cercana, de dos a tres metros", replicó. -Sí, dije sin pensar: "Es casi lo mismo para nosotros". Arrugando la cara, respondió: "¿No cree que puede impactar una pierna a una distancia de tres a seis pies?" Me tambaleé hacia atrás - este tipo ‘me estaba meando’. “De acuerdo”, dije, “¿pero qué si pasa el disparo lo atraviesa? ¿Qué pasa con el disparo impactando a una persona inocente que se encontraba al otro lado del blanco?" Ahora lo tenía contra las cuerdas; seguramente esos policías son conscientes del entorno dinámico en el que la policía juega. Una vez más respondió sin dudar. "Esa es otra razón por la que apuntamos a las piernas. A la distancia en la que por lo general disparamos -recuerde, de dos a tres metros- la bala tiene una trayectoria hacia el suelo a tan sólo unos metros. Atravesarlo es raro -usamos balas de punta hueca- pero si ocurre, es probable que no viaje mucho más lejos". Hizo una pausa y continuó: "Ya ves Roy, aquí en la República Checa no siempre disparamos a matar. A veces tiramos para parar - es nuestro disparo no letal”. Contrarresté, "disparos no letales... ¿eh? Vamos, sabes, es probable que no haya un solo centímetro cuadrado del cuerpo que no esté lleno de venas, arterias, o de los grupos principales de capilares sanguíneos ricos a los que una vez que les dispare hará que el sujeto sangre en abundancia". Tan pronto como hablé me di cuenta que se indignaría y desesperaría. -Sí, señor, siempre hay esa posibilidad, pero con la tecnología médica de hoy es raro que un disparo no vital resulte siempre en una muerte". Recordé algo que escuché en la academia años atrás. Estaba destinado a ser fuente de inspiración, pero también se había convertido un hecho estadístico en los países con servicios de emergencia modernos. "Si recibe un disparo, y usted sabe que le dispararon, probablemente sobrevivirá a la herida". Lo he repetido muchas veces en el aula, pero nunca lo había considerado desde la perspectiva del otro tipo. Sería cierto que si un chico malo era baleado y sabía que le dispararon, también era probable que sobreviviera a la herida. Supuse que la mayoría de los policías -si se les obliga a recibir un disparo en un tiroteo- también podrían ser disparados en la pierna, antes que en el corazón o la cabeza, basada exclusivamente en la probabilidad de supervivencia. Era intuitivo y no requería un estudio. Pero yo no estaba hecho todavía. Yo estaba representando décadas de sólida filosofía profesional norteamericana de aplicación de la ley. Este completo concepto de "no tiramos a matar" fue la piedra angular del entrenamiento de la policía moderna. Regresé con una bola rápida. "Bueno, ¿y qué si el tipo dispara contra usted? ¿Hacerlo caer al suelo con un disparo en la pierna puede detener el ataque hacia adelante pero es probable que no detenga la amenaza?", él aún puede dispararle - ¡y usted no tiene tiempo para evaluar la amenaza constante para ver si se detuvo! Me sonrió, "¿Si él le está tirando? Bien, entonces usamos disparos letales - dos en el pecho, uno en la cabeza”. Lo golpeó fuera del parque. Si te están disparando, bien, luego utilice disparos letales - dos en el pecho y uno en la cabeza. ¡Por supuesto que sí! Yo no lo podía creer. Nunca había oído a nadie hacerlo antes, pero este tipo le había dado una explicación razonable a los tiros no letales. Mis pensamientos sobre el tema habían sido claramente el piloto automático por años. Después de años de pensamiento lineal mi punto de vista de la fuerza letal en realidad había llegado a bifurcarse en la ruta.

Disparar al centro de la masa: Los peligros de la negación En la tercera parte y final de esta serie, Roy Bedard mira al entrenamiento sobre la fuerza letal policial en

EE.UU.

Roy Bedard

2 de abril de 2011


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Incluso con cerca de tres cuartos de millón de policías que trabajan en las calles de Estados Unidos -24 horas al día, 7 días a la semana- muy pocos ejercerán realmente su más alto nivel de autoridad. Con todas las amenazas de muerte presentadas a los policías, Estados Unidos puede típicamente esperar solo entre 300-400 incidentes de oficiales de la aplicación de la ley que disparan sus armas a las personas al año. Increíblemente, se estima que en Estados Unidos menos del 12% de los policías desenfundará alguna vez su arma de fuego y disparará a otra persona - ¡en el curso completo de su carrera! Si este número parece extraordinariamente bajo para usted, considere que en la mayoría de los países de Europa occidental, el total de disparos hechos durante toda la carrera a la gente se sitúa en alrededor del 5%. En América Latina, el número es mayor, pero aún es muy bajo en comparación con los Estados Unidos. En Asia, el uso policial de la fuerza mortal es prácticamente inexistente. Ciertamente esas cifras no significan que la mayoría de los policías nunca se enfrentan a amenazas de muerte - de hecho, casi todos los policías que hacen una carrera en la aplicación de la ley se enfrentarán a múltiples incidentes donde el uso de fuerza letal habría sido justificado y apropiado. La investigación reciente indica que un total de 92% de los policías puede contar una situación en la que podrían haber utilizado la fuerza letal y sin embargo optó por no hacerlo. Sin embargo, cuando los reclutas policiales entran en la profesión inmediatamente comienzan a prepararse para la posibilidad de que algún día pueden confrontarse con la necesidad de matar - o morir. Casi todos los bloques de instrucción están atados a este tema común. Hay muchas variables internas y externas que deben ser abordadas a fin de dar claridad durante ese momento crítico; cómo controlar el estrés, cómo reaccionar a las circunstancias cambiantes, cómo seguir adelante y terminar la lucha, incluso si usted es el primero en recibir una herida. Cuando los agentes recitan el mantra "no tiramos a matar" -y lo creen- razonablemente podemos concluir que no están debidamente preparados para tomar una vida humana. Engañar a los funcionarios al hacerles creer realmente que se supone que la policía no mata -o se le permite matar- crea un bloqueo mental letal que saldrá a la superficie más probablemente en ese momento crítico de la verdad - cuando terminar con una vida en aras del bien superior pueda ser necesario. Además, el mantra envía el mensaje equivocado a la comunidad. Ese mensaje indica que cuando un sujeto es muerto a manos de un oficial de la ley, entonces algo ha sido mal hecho, porque seguramente la ejecución de la ley no tira a matar - sólo tirar para parar. Para la mayoría de ciudadanos informados es una certeza académica que disparar a matar no es algo que la policía haga (¡hablar de municiones para los abogados de los derechos civiles y provocar para la persecución de los medios!). ¿Deben los agentes del orden realmente estar dispuestos a asumir un nivel muy inferior al que ellos han creado? Recuerde la última vez que ocurrió un tiroteo en su ciudad natal - o en una ciudad dentro del área de difusión de su canal de televisión local. No es de extrañar que alguien pregunte -y ellos siempre preguntan- "¿Por qué la policía no le disparó al sujeto en el brazo o la pierna? - ¿por qué tienen que pegarle un tiro en el pecho? ¿Por qué no tratan de detenerlo en lugar de matarlo?" La semana pasada escribí acerca de una conversación que tuve con un instructor de la policía en la República Checa. Traté de imaginar una circunstancia en que un oficial le dispararía a alguien intencionalmente en la pierna en el desempeño de su trabajo policial. Pensé en los factores sujeto/agente por el que un sujeto agresivo desarmado, pero mucho más grande que el policía, que dispararle puede ser una respuesta justificada. El obstáculo a superar es saber si ese sujeto es TAN grande que el policía podría justificar su muerte porque su tamaño y aparente fortaleza se consideran en sí mismos mortales. Independientemente de este factor, el papel probablemente informe: "Oficial disparó a ciudadano desarmado", y la agencia tendrá que luchar para explicar la variable ambigua. En el entrenamiento tomamos a los estudiantes de sus asientos y los ponemos en pares, una realmente muy grande y una realmente muy pequeña. Nos encogernos de hombros y decimos: "Está bien - Supongo que con esos dos estudiantes ésta estaría justificado al matar a aquél, usted sabe que es una zona gris".


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Alguien casi siempre grita: "¡Prefiero ser juzgado por doce que portado por seis!" ¿Qué puede decir a eso? Nuestra capacitación ha sido reducida a una cara de la moneda. Pensé acerca de las armas de corto alcance que sólo representan una amenaza inminente mortal en los barrios cercanos. No armas de fuego, sino palos, cuchillos, botellas, piedras. La respuesta estándar en EE.UU. a un sujeto que se acerca con una de esas armas es disparar al centro de la masa. No sólo detenemos la amenaza, por lo general la matamos. Pero un disparo en la pierna... que puede detener a un sujeto y mitigar la amenaza del arma a corta distancia. Ya enseñamos a los oficiales cómo moverse y disparar. Avanzar, retroceder, avanzar y disparar. Mantenga la distancia, dispare a las piernas, caída del chico malo - ¿Es posible? ¿Es razonable? Pensamientos posteriores. El propósito de compartir esta experiencia no es para impulsar una agenda, sino más bien una oportunidad para pensar una vez más acerca de nuestras metodologías de servicio policial. Al pensar acerca de ello de nuevo veremos la necesidad de cambiar, o ganar una resolución más fuerte en nuestro compromiso actual. Hay tantas cosas en las que hemos dejado de pensar acerca del trabajo policial, porque hemos crecido a gusto en nuestros métodos y maneras. Pero como todo en la historia, las certezas de ayer, por lo general son las supersticiones de mañana. El argumento ha sido que no disparamos a matar, porque si lo hiciéramos, sería continuar disparando incluso después que la amenaza se ha detenido. Tiempo y otra vez los oficiales vacían sus cargadores a sospechosos, disparando el arma hasta que se seque. Es común donde los sospechosos son llenados de decenas de balas cuando se disipa el humo. Somos conscientes de que "disparar demás" es un instinto de supervivencia comprado por la excitación y el estrés extremo - que es algo que podemos explicar, pero también es algo que siempre pone en duda nuestros métodos de entrenamiento. Estados Unidos es un lugar extraño. Los policías y sus agencias están constantemente bajo la amenaza de demandas y esto es diferente que en la mayoría de otras partes del mundo. La adopción de políticas más difíciles aumenta el nivel de responsabilidad y, en última instancia, la rendición de cuentas del oficial. Donde los tribunales civiles no permiten que se pague en primas monetarias, nadie está dispuesto a deponer sus propios campos de minas. Endemoniado si lo hace - maldito si no lo hace como dice el refrán. Esta es probablemente la razón por la que policía estadounidense se muestra reacia a adoptar políticas que sugieren que disparar en ciertos escenarios puede ser destinado exclusivamente a herir, por temor a que un disparo para herir accidentalmente mate. No, es mejor un tiro mortal que herir accidentalmente. La policía estadounidense rutinariamente adopta políticas que planifican para lo peor, y esperan lo mejor. Los disparos al centro de la masa probablemente seguirá siendo la única área de impacto enseñada y apoyada en el entrenamiento en los Estados Unidos. Si no tenemos una justificación para matar, entonces simplemente enseñamos a no disparar. Preferimos un modelo en el que no nos veamos obligados a dar tanta cuenta por la precisión, más bien nuestra misión es la de describir los elementos del uso de la fuerza letal. Preferimos que nuestra responsabilidad casi termine en el apretón del gatillo. Si la bala golpea y mata, está bien - si no mata, ¿quizás es mejor?

Instrucción de Tiro y Armas de Fuego – Entrenamiento para la supervivencia POSA

David Kenik, Director Ejecutivo, y Ralph Mroz, Director de Entrenamiento


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Entrenamiento de Supervivencia: Fortalecer el músculo de disparo Ralph Mroz

Desde que porta un arma para defensa propia o para salvar la vida de otro, usted está interesado en las habilidades combativas con armas de fuego en lugar que disparar sólo por la experiencia de tirar. Para alcanzar este objetivo, se involucra en la capacitación, sobre todo en la forma de práctica en un polígono. Qué tan cerca está de llegar a su meta dependerá de la eficacia de su entrenamiento. Vamos a utilizar el levantamiento de pesas y el culturismo [del francés culturisme, práctica de ejercicios gimnásticos encaminada al excesivo desarrollo de los músculos] como una analogía. Si desea ser más grande y fuerte, sabemos que usted tiene que concentrarse en trabajar los grandes grupos musculares de las piernas, espalda, pecho y hombros. Lo hace entrenando en su mayoría con los ejercicios fundamentales para esos músculos: sentadillas, levantar pesos muertos, prensa de banca, prensas, remar, levantar y bajar, y así sucesivamente. Hay un total de quizás una docena de ejercicios básicos en los que pasa la mayor parte de su tiempo. Sin embargo, hay cientos de levantamientos que podría hacer, y la mayoría de ellos trabajan los músculos más pequeños. Son útiles, pero si su objetivo es el tamaño y la fuerza, los usar con moderación, ya que tiene sólo una limitada cantidad de tiempo y energía. La mayoría de estos ejercicios auxiliares se utilizan para refinar la forma y para añadir variedad a su rutina básica para evitar el aburrimiento. Pero si va a cualquier gimnasio, verá gente que pasa su tiempo de entrenamiento valioso en estos ejercicios secundarios. O no conocen nada mejor, o piensan que han inventado una "mejor" manera, o leyeron en una revista en alguna parte que tal y tal hace este ejercicio, o se aburren con los ejercicios básicos. Ahora, vaya a cualquier polígono y vea a la gente allí. Usted verá una gran cantidad de disparos en agrupamientos pequeños, con los ojos enfocados en la mira de la pistola - sin importar el campo de tiro. Verá a las personas tirando de diez a treinta metros, en lugar de cero a siete metros. Verá a la gente aún de pie mientras dispara. Y así sucesivamente. Ahora, sin duda es un mejor apuntador y un mejor tirador el que puede disparar en pequeños grupos, sobre todo a grandes distancias. Pero a la luz de nuestros objetivos, ese tipo de habilidades es secundario. Es muy poco probable que sean destrezas más necesarios para nuestro trabajo que otras, más fundamentales. ¿Cómo sabemos esto? Aquí hay tres fuentes. La primera es la estadística consistente de tiroteos de las fuerzas del orden en los que los agentes fueron asesinados. Esas cifras compiladas por el FBI han sido más o menos las mismas desde hace muchos años: el 50% de los oficiales muertos son asesinados a un metro y medio o menos, y el 75% mueren asesinados a tres metros o menos. La segunda fuente es la encuesta Asociación de Tiradores Policiales (Police Marksman Association) hecha en 1992 que muestra que el tiroteo promedio de la policía se da a unos siete metros (pero tenga en cuenta que esta conclusión era de una muestra muy pequeña.) Finalmente, hay datos del SOP-9 del Departamento de Policía de Nueva York que indican que a partir de 1994-2000, el 69% de sus disparos (de todo tipo) se daban a dos metros o menos, y el 88% era de siete metros de menos. Esos números son muy consistentes año tras año.

“El Informe SOP9 – Un análisis del combate policial del Departamento de Policía de Nueva York” [http://www.pointshooting.com/1asop9.htm]

En 1969 la Sección Tácticas y Armas de Fuego, del Departamento de Policía de Nueva York, instituyó el procedimiento para documentar en profundidad y estudiar las situaciones de combate policial. Para realizarlo, fue designado el Departamento de Orden SOP-9. La recolección de datos se inició en enero de 1970, y más de 6000 casos fueron estudiados durante la década de 1970. Los resultados del estudio fueron publicados en 1981. Distancias de disparo: De septiembre de 1854 a diciembre de 1979, 254 oficiales murieron a causa de las heridas recibidas en un enfrentamiento armado. La distancia de disparo en el 90% de los casos fue menos de 5 metros (15 pies). Contacto a 1 metro…... 34%


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1 metro a 2 metros....... 47% 2 metros a 3 metros....... 9% Las distancias de disparo, donde los oficiales sobrevivieron, se mantuvo casi igual durante los años del SOP (1970-1979), y por un muestreo aleatorio de los casos que se remontan hasta 1929, 4.000 casos fueron revisados. La distancia de disparo en el 75% de los casos fue inferior a 20 pies. Contacto a 3 metros.... 51% 3 metros a 6 metros.... 24%

Entonces, ¿qué significan esas estadísticas en materia de capacitación? Que la prensa de banca y las sentadillas del entrenamiento de supervivencia con las armas de fuego son las técnicas para manejar las amenazas a los siete metros y menos. Detallamos las técnicas pertinentes para esas distancias más abajo, pero primero, una advertencia. Enfáticamente no queremos decir que la capacitación con armas de puño a distancias largas (de 15 a 50 metros) no es útil o ni siquiera importante. Los policías ciertamente tendrán que realizar disparos a gran distancia en el trabajo. Acabamos de señalar que esas destrezas a gran distancia son menos propensas a ser usadas que las destrezas de corto alcance –esos son solo los hechos- y por lo tanto le sugerimos que constituyan su entrenamiento accesorio -no el básico-. Las habilidades a gran distancia y la puntería súper ajustada son el equivalente de los ejercicios de pesas para desarrollar los grupos musculares más pequeños. Son menos susceptibles de ser usados, pero pueden: 1) ser útiles en sí mismos, 2) ayudar a mantener el entrenamiento interesante, y 3) complementarse. Distancia de contacto a 2-3 metros. A esta distancia, si ya no tiene desenfundada su arma, y se enfrentan a un ataque de fuerza letal, simplemente no tendrá tiempo para sacar el arma. La física de la situación dicta que tendrá, al menos inicialmente, que hacer frente a este ataque con técnicas de manos vacías. Esta realidad, por supuesto, significa que el factor de "igualación" del arma de fuego -una de sus principales ventajas- es negado. También significa que la vida es injusta, porque el pequeño, el débil, el herido y el mayor están en desventaja frente a su, sin duda, más en forma joven atacante. La vida, de hecho, no es justa. Lo siento. Su única opción aquí, si usted quiere tratar honestamente con su más probable escenario de defensa propia, es recoger algunas técnicas perversas de mano vacía. Esas, por supuesto, funcionan mejor si usted está en forma, sea cual sea su edad. Tales técnicas son llamadas "combativas" en estos días, en lugar de "artes marciales". La integración de lo combativo con el uso del arma de fuego generalmente va por el término "tiro extremo en cuartos cerrados", y el material avanzado en esta área hoy proviene de un hombre conocido como "SouthNarc", por la razón aparente. Su DVD sobre el tema "Lucha con pistola - Volumen I" está disponible en Shivworks, www.shivworks.com, y es muy recomendable. 3 metros a 7 metros. A esta distancia, si usted está tratando de darle a una persona expuesta, el método probado de tiro al blanco centrado estilo Rex Applegate (a diferencia de muchos otros métodos de "punto de disparo") probablemente es el más útil. Es por la sencilla razón de que bajo mucho estrés (una combinación de sobresalto y miedo), usted está fuertemente conectado a ver la amenaza, no cualquier otra cosa menos importante desde el punto de vista evolutivo, como su mira. (Por supuesto, si no está muy asustado, o no tiene mucho miedo, bien puede ser capaz de concentrarse en la mira.) Aquí la pistola se sostiene con mucha firmeza, el arma en alto para interceptar la línea del ojo / blanco, y el gatillo halado. La técnica funciona con una sola mano y con dos manos, y la mayoría de las personas que más firmemente mantienen el arma de fuego, obtienen mejores resultados (relajado, "firme pero no demasiado apretado", funciona bien; por contraste, para disparos de precisión y no estresantes). Dado que la mayoría de los tiradores han sido entrenados para buscar su punto de mira, la práctica centrada en la meta del tiro toma un poco de concentración mental. Es interesante que, cuando yo no tengo un buen día en el polígono, a esas distancias y con semi-visión de miras, si me fuerzo a centrarme en el blanco, a menudo puedo mejorar los resultados. Si integra una unidad militar o de aplicación de la ley, Lou Chiodo de Gunfighters Ltd. (www.gunfightersltd.com) es una gran fuente para la enseñanza de este método de disparo.


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7-10 metros y fuera. En esas distancias, el disparo con visión tradicional es apropiado. Y nosotros recomendamos encarecidamente que lo practique, y no sólo porque el tiro a gran distancia puede ser necesario. Cuando citamos las distancias anteriores, estamos suponiendo que usted tiene que batir un atacante de tamaño humano. Los impactos en cualquier lugar del torso son aceptables, con la mayoría de los instructores insistiendo en impactar dentro de un área de aproximadamente 8 ½ x 11 pulgadas (el tamaño de un pedazo de papel estándar) como la meta. Si usted tiene sólo una parte disponible de su atacante como objetivo, entonces la precisión requerida aumenta, y por lo tanto se incrementa la distancia efectiva. Un blanco de medio cuerpo humano disponible a 5 metros tiene aproximadamente la misma dificultad que un cuerpo humano completo a 10 metros, y así sucesivamente.

POSICIÓN DE FUEGO ALTERNATIVA

Vista lateral y frontal del punto de la posición de tiro con arma corta, con el codo algo flexionado pero

cerrado [http://en.wikipedia.org/wiki/Point_shooting]

Los nuevos modelos en entrenamiento con armas de fuego Ralph Mroz

Quienes han estado siguiendo los temas de las tácticas de armas de fuego y el entrenamiento en la última década se habrán dado cuenta a estas alturas de algo significativo. Ha habido lo que los teóricos de la gestión llaman un "cambio radical" en el pensamiento acerca de cómo usamos armas de fuego en los encuentros reales y cómo entrenar a la gente para sobrevivir. Esta revolución en el pensamiento y el enfoque ahora es un hecho consumado, al menos en cuanto a los expertos. Ahora comienza el verdadero trabajo-conseguir esta información diseminada y ponerla en acción por las legiones de instructores y operadores de todo el mundo. Esta no es tarea fácil... y, de hecho, no es seguro que tenga éxito. ¿Qué es este cambio radical en el pensamiento y la comprensión a que me refiero? Es esencialmente triple. Primero, que nuestro sistema nervioso central sufre cambios significativos durante la mayoría de los encuentros con amenazas mortales, y que nuestro rendimiento se degrada significativamente como resultado. Segundo, que los plazos involucrados en los encuentros violentos de la vida real son mucho más cortos que los plazos empleados para formular respuestas a ellos, que muchas de esas respuestas son nulas y sin efecto. Tercero, que la respuesta práctica a las agresiones mortales sólo puede lograrse con entrenamiento realista de fuerza contra fuerza.


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Desempeño bajo estrés. La primera degradación del rendimiento bajo estrés es un fenómeno que ha sido bien conocido durante un siglo en los círculos científicos, y por el tiempo que el hombre ha estado en este planeta. Los soldados, los estudiantes de combate y los investigadores formularon la respuesta de "luche o huya" décadas atrás, y delinearon sus efectos: visión de túnel, enfoque sobre la amenaza, exclusión auditiva, pérdida de habilidades motoras finas, un sentido distorsionado del tiempo y la distancia, y así sucesivamente. Este conocimiento era más o menos limitado a los círculos científicos y a los veteranos de guerra durante mucho tiempo. La gran "revolución" en el llamado tiro de combate que ocurrió después de la Segunda Guerra Mundial nos lleva, de hecho, en la dirección opuesta - a depender de la técnica de centrarse en la mira, la motricidad fina y el movimiento físico no-natural. Tan sexy fue su resultado visual cuando se demostró en un polígono libre de amenazas, sin embargo, que asumió las trampas y la sustancia de una religión de culto.

Massad F. Ayoob Louis M. Chiodo Mike Conti Massad F. Ayoob era una voz solitaria en el desierto en los años 70, tratando de volver a centrarse en la realidad que nos impone nuestra bioquímica y estructura cognitiva. Llamó a su método "Stressfire" (estrés del fuego), y se volvió cada vez más difícil argumentar en contra de su fundamento fáctico en los años 80 y 90. Luego, en los años 90 una gran cantidad de investigación y meta-investigación nos llevó de nuevo a la verdad de nuestra respuesta de "luche o huya" durante los encuentros para los cuales compramos armas y entrenamos con ellas - y esta vez, la evidencia científica y de campo fue abrumadora. Hoy en día entendemos los efectos del sistema nervioso simpático anulado, y no hay más debate en los círculos más educados y/o experimentados acerca de la necesidad de basar nuestro entrenamiento a su alrededor. Entrenadores como Lou M. Chiodo en California y Mike Conti de la Policía Estatal de Massachusetts están liderando ahora el camino en el entrenamiento práctico, orientado a los resultados, para los encuentros de vida o muerte. El debate ha terminado. El duro trabajo de entrenamiento comienza.

Armas de aire suave por categoría 13

Spring Pistols

Pistolas eléctricas

Pistolas de gas verde

Spring Rifles

Rifles eléctricos

Rifles de gas verde

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13 Airsoft Guns. http://www.jdairsoftguns.com/


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Escopetas

Productos ICS

Accesorios

Tiempo comprimido y distancia corta. Lo mismo sucede con el segundo elemento ya mencionado, el de los plazos muy cortos de los encuentros violentos. Este hecho no sería tan importante, ¡excepto que los encuentros más mortales ocurren a menos de un metro y medio! No cinco metros, ¡pero casi tocando la distancia! Durante mucho tiempo la comunidad de tiro se ha engañado en la creencia de que un asalto de fuerza letal siempre debe ser enfrentado con una opción de fuerza mortal, a saber, con un arma de fuego. El hecho de que muchas veces es simplemente imposible acceder y utilizar un arma de fuego al ser atacados con intención mortal, enfocarse a un metro y medio era un hecho totalmente pasado por alto, con algunas técnicas bastante ridículas pasadas con ese propósito cuando era presionado. Los instructores de armas de fuego simplemente no sabían respuestas sin armas de fuego, y no se molestaron en probar sus teorías de sillón a toda velocidad y a toda fuerza. (Mi video: “Tiroteo Extremo en Cuartos Cerrados” [Extreme Close-Quarters Shooting] de Paladin Press, lo exploró en profundidad). Estamos más allá ahora, tanto como puedo contarle; los educados en la comunidad de entrenamiento con armas de fuego ahora predican la necesidad de destrezas con manos vacías para tales encuentros cercanos. Un enfoque verdaderamente integral del uso de la fuerza es considerado esencial ahora. Pero la palabra tiene todavía mucho que recorrer. Entrenamiento realista. Del mismo modo también con el tercer elemento del entrenamiento realista. He escrito un libro entero sobre el tema (“Tiro defensivo para encuentros de la vida real” [Defensive Shooting for Real-Life Encounters] de Paladin Press), así que no voy a detenerme en ello aquí. Baste decir que sólo puede desarrollar respuestas realistas prácticas basadas en el estrés a los ataques de fuerza letal poniéndolos en práctica a toda velocidad, a toda fuerza, y con todo el estrés contra un ser humano pensante en movimiento. La tecnología Airsoft y los trajes FIST hacen esto totalmente posible y al alcance de cualquiera. En la actualidad existe un grupo de instructores capacitados haciendo exactamente este tipo de entrenamiento. Si su instructor no lo es, usted tiene que preguntarse, "¿Por qué?". Respuesta: porque no entiende el problema (por lo tanto, demuestra estupidez) o está demasiado avergonzado como para someter sus enseñanzas a una prueba de fuego (por lo tanto admitir la incompetencia y el engaño). Ya no hay duda de que el entrenamiento más realista de fuerza-contra-fuerza es absolutamente necesario. Hacerlo realidad es la cuestión.

Productos destacados

Estilo M83 – M16 con accesorios

P90 con accesorios y blanco

HFC-116S: Pistola de aire suave plateada

estilo Sig Spring

P788

Cargadores

Máscaras faciales

Municiones

Rifle verde estilo 3081C M16A4


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¿Conoce al nuevo jefe? Recuerde la línea en la canción de Who: "Conoce al nuevo jefe, ¿igual que el viejo jefe?" Esperemos que no sea el caso aquí. Los temas discutidos son bien conocidos y acordados por personas con conocimientos en el campo. Pero eso no significa que ese conocimiento va a acabar en la mente y en el repertorio de habilidades del estudiante promedio. Las barreras culturales al cambio –aunque el beneficio del cambio sea demostrable- son a menudo demasiado grandes para la verdad de una nueva manera de superar. En los deportes, en los negocios, en salud, en las relaciones, en la política, y en el desarrollo personal vemos en todas partes la continuación de comportamientos viejos, obsoletos, disfuncionales y desacreditados. ¿Será el caso en el entrenamiento con armas de fuego? Espero que no. La revolución en el entrenamiento con armas de fuego ha terminado, ahora empieza el verdadero trabajo. Validando la técnica de entrenamiento de Fuerza-sobre-Fuerza (FsF) - Una mala idea. Un método de uso generalizado ahora para lograr el entrenamiento que necesitamos, es el entrenamiento de fuerza-sobre-fuerza. Y nadie ha sido un defensor más elocuente del entrenamiento de fuerza-sobre-fuerza en los últimos años que yo. Yo, y muchos otros, hemos señalado correctamente que el entrenamiento estático en el polígono es útil sólo para desarrollar la puntería y las destrezas básicas de manejo de armas de fuego. Hemos proclamado a todo aquel que quisiera escucharlo que el entrenamiento de FsF con algo así como la tecnología Airsoft (Aire Suave) es una necesidad absoluta para el desarrollo de las habilidades que tendrá una persona para salvarse en un encuentro en la vida real. Y me atengo a esa última frase. El entrenamiento de fuerza contra fuerza es una necesidad para desarrollar esas habilidades de supervivencia. Pero muchos instructores han dado el salto desde el reconocimiento de la necesidad de entrenamiento FsF a decir que están validando su currículo vital con ella. Es decir, apuntan al hecho de que las tácticas y técnicas que enseñan van bien con el entrenamiento FsF, y por lo tanto, validan las habilidades de supervivencia. ¡Mal, mal, mal! ¡Ellos bien pueden estar enseñando técnicas que resultarán en que su gente muera! Está mal porque mucho entrenamiento FsF es diferente desde muchos encuentros de la vida real. En una espontánea, violenta, y real lucha por su vida, usted probablemente va a conducir su sistema nervioso simpático (SNS) un estado extremo de lo que yo llamo SNS anulado. Este estado se caracteriza por los bien conocidos síntomas de "luche o huya": visión de túnel, exclusión auditiva, percepción de la desaceleración del tiempo, enfoque en el blanco y así sucesivamente. (Note la común concepción errónea, de que usted no puede ver las miras bajo esta condición. De hecho usted puede -sólo que ya no será conducido a centrarse en la amenaza- que en realidad es la sana cosa táctica para hacer a corta distancia). En el entrenamiento FsF, por contraste, lo que estamos haciendo es inocular a las personas niveles más altos de estrés, de modo que puedan realizar diversas técnicas de supervivencia y de armas, sin sufrir los efectos del fenómeno del "luche o huya" (o SNS anulado). Note la diferencia. En muchos encuentros de la vida real vamos estaremos en el estado severamente debilitado del SNS invalidado. En el entrenamiento FsF, estamos entrenando gente para que no entre en este estado indeseable. Por tanto no podemos afirmar, debido a una técnica sostenida en el entrenamiento FsF, que va a ser fiable -o incluso posible- en un encuentro en la vida real. Nunca seremos capaces de determinar qué funciona en los encuentros de la vida real excepto a través de los Reportes Posteriores a la Acción y los videos de ellos. A fin de responder como si tuviera miedo por su vida, tiene que ser puesto en el temor por su vida, lo que no se puede hacer excepto poniendo realmente en peligro su vida, y que obviamente no podemos hacerlo en el entrenamiento. Como todos los veteranos de Airsoft y Simunitions® saben, es el primer par de escenarios con esas tecnologías que tienen un efecto severo de estrés en los participantes. Los participantes aprenden muy pronto que no quieren morir y ni siquiera resultar heridos. Después de esos escenarios iniciales, esas simulaciones se conviertan en buenos validadores de las tácticas y los plazos - pero no son foros en los que podemos observar los efectos del miedo genuino por la propia vida, y por lo tanto qué funciona bajo esa condición. Lo que esperamos en el FsF es que el nivel de estrés que hemos inoculado en los participantes será más que el nivel de estrés que sentirán en un encuentro en la vida real, y por lo tanto, que las técnicas en que se han concentrado en las simulaciones de FoF logran ponerlos en una situación real. Esto a menudo funciona como estaba previsto cuando tenemos el control de la situación en la vida real, tales como los allanamientos y los


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arrestos. Pero con mucha frecuencia vemos operadores no son capaces de ejecutar habilidades entrenadas cuando pierden el control de la situación. En esos casos, simplemente vuelven a cualquier cosa que les permita la Madre Naturaleza en un estado de SNS invalidado. Entonces, ¿dónde nos deja esto? Propongo que para la mayor parte necesitamos entrenar mucho en esas pocas técnicas, tácticas y destrezas que son posibles bajo un SNS invalidado. Esas destrezas básicas son las únicas cosas que estarán disponibles para nosotros en los encuentros más espontáneos, no planeadas de antemano por nosotros, y que muchas veces serán necesarias incluso en aquellas que lo son. Esto asume que sabemos de antemano cuáles son esas destrezas. Y lo hacemos: un tiro con una sola mano, enfoque en el objetivo, y así sucesivamente -el plan curricular básico enseñado por hombres como Rex Applegate y Fairbairn que habían estado allí. Esas habilidades pueden ser perfeccionadas con éxito con entrenamiento FsF - de hecho, necesitan ser. Después de haberse logrado esta línea de base de destrezas, podemos utilizar simulaciones FsF para entrenar habilidades más complejas, mediante la inoculación a los operadores de altos niveles de estrés. Pero tenemos que reconocer que, a menos que los operadores hayan sido entrenados a fondo en las destrezas básicas que son posibles cuando su umbral de estrés ha sido superado, no serán de ayuda. No se deje engañar en pensar que las simulaciones FoF están verificando que las destrezas que enseña son realmente posibles bajo un estrés extremo. No pueden hacer eso.

Competición y entrenamiento: Cómo entrenar; cómo no entrenar Ralph Mroz

Nota del Autor: Varios artículos han sido escritos acerca de los beneficios del tiro competitivo para los policías. A pesar de que en POSA estamos de acuerdo con los aspectos positivos del uso de la competencia como una forma de entrenamiento, también creemos que los contra-argumentos hacia la competencia de tiro son dignos de considerarse. Cómo no entrenar: Tiro competitivo. De vuelta en el número de septiembre/octubre de 2001 de la Revista American Hand-gunner, Ken Hackathorn (una de las personas más respetadas en entrenamiento táctico) dice que, en relación con las personas serias sobre la supervivencia: "... no dispare como el IPSC [Confederación Internacional de Tiro Práctico]... no puedo decirle a la gente que participe porque veo tantos cursos de fuego que te hacen hacer cosas que son suicidas o estúpidas". Cuando se le preguntó acerca de esa declaración recientemente, Ken dijo: "Pienso que es justo explicar que el tiro tipo IPSC para convertirse en un mejor tirador / apuntador es una cosa, pero mi mensaje a los policías es que el IPSC -para aprender habilidades de supervivencia- es una mala idea. Si usted sigue los requisitos de disparo para hacerlo bien en el IPSC y para ser realmente competitivo, se acondicionará en destrezas reflexivas que serán suicidas en la calle". "[Ahora bien, es] cierto que IDPA [International Defensive Pistol Association] puede seguir el mismo camino para gastar lo que IPSC hizo..... Cuando empezamos IDPA, tratamos de estructurar las reglas y los equipos para limitar la muerte. He dimitido de mi posición en el Consejo de Administración de IDPA. Espero que continúe y lo mantengan práctico para el futuro. Lamentablemente, los estadounidenses parecen estar obsesionados con tener cualquier forma de competencia y convertirla en un juego especializado que con el tiempo casi no refleja los ideales que los organizadores trataron de crear. Como Walt Rauch, trato de advertir a la gente que competición no es entrenamiento.... y el entrenamiento no debe ser competición". La buena competición práctica que requiere que el concursante siga sólidas reglas tácticas básicas es buena. Cosas como el uso de la cubierta para enfrentar las amenazas y para la recarga son buenas. Disparar con ropa de servicio o de civil es bueno. Hacer que los concursantes identifiquen el blanco es bueno. Disparar con luz reducida o baja, es bueno. Así que, en muchos sentidos IDPA es bueno. "Sin embargo, sigue siendo un juego y hay que entender que es sólo un juego de disparos. IPSC ha evolucionado a un deporte de tiro muy emocionante y competitivo. También se ha vuelto casi totalmente sin valor como medio de poner a prueba sus habilidades de supervivencia, y si lo practica de forma rutinaria, está acondicionando las técnicas de tiro reflexivo que bien podría ser fatal para usted si lo intenta en la calle".


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Por desgracia, a nuestros ojos, IDPA está comenzando a seguir la misma ruta. Los cursos de tiro de IDPA, entre otros pecados, a menudo requieren un uso muy deficiente de la cubierta, requiere recargas tácticas (no hay nada táctico en absoluto en ello), mandato de movimiento hacia una zona insegura, ¡y requiere que dispare rápido! Todas esas cosas podrían ser seriamente malas en la calle. Esto no es culpa de las personas involucradas en IDPA o IPSC. Esos son universalmente buenas personas que sólo quieren mantener un interesante, creciente, emocionante y divertido deporte de tiro. El problema es este: cualquier evento de disparos puede juzgarse objetivamente sólo por dos criterios: precisión y velocidad. La corrección táctica no se puede cuantificar, porque siempre es un juicio subjetivo. Y tirar rápido muy a menudo no es lo correcto tácticamente –lo frecuente es agacharse detrás de la cubierta y observar, esperar o comunicarse. No puede juzgar eso, objetivamente, tampoco. Por ejemplo, mi asociación, POSA, está poniéndose en un torneo con pistola por caridad para la Fundación Jimmy, en memoria de la pequeña hija de un amigo y compañero instructor de la policía, que murió de cáncer a los once meses de edad. Cuando yo había llegado con algunas ideas preliminares tácticamente correctas para las etapas del torneo, con cerca de 5-7 disparos por etapas, el Director Ejecutivo de la Asociación, un tirador competitivo, dijo: "Esa de muy pocos disparos. No llegaría siquiera a un partido en el que dispare tan pocos. Se trata de un concurso de tiro, y la idea es disparar y divertirse". Entonces, ¿cuál era su idea de la cantidad "correcta" de disparos por etapas, en promedio? ¡Un sorprendente veinte! Eso no es ni de cerca un número práctico, dada la dinámica de la mayoría de los tiroteos que involucran a policías. (Pero vamos con cerca de 20 disparos por etapas, sin embargo, porque nuestro objetivo es, después de todo, recaudar dinero y que la gente vuelva el año que viene. El partido es el 19 de marzo en Springfield, MA.) Lo que pasa con IDPA es el resultado inevitable del hecho de que se trata de un deporte que es juzgado. Como tal, inevitablemente debe recompensar el comportamiento no-táctico. No hay nada malo con los deportes de tiro, por supuesto; todo bien con algo que trae a los tiradores al redil. El problema con la gente tácticamente mentalizada que participa fuertemente en ellos, sin embargo, es que los deportes de IDPA y de IPSC son realmente muy parecidos al tiro táctico real, aunque no en realidad. Usted puede confundirse fácilmente bajo el estrés de qué es lo correcto que hay que hacer, y las cosas en las que ha gastado cientos de horas de práctica. Como ejemplo: los jugadores profesionales de tenis necesitan tener un descanso del tenis. Tal vez el golf o navegar a vela o el esquí. Sin embargo, no juegan al squash. Squash y tenis son demasiado parecidos, y su práctica de squash sin duda repercute negativamente en su juego de tenis. ¿Cuál es el valor de los deportes de tiro competitivo como IPSC e IDPA? En realidad ofrecen muy poco al verdadero tirador táctico. Sus destrezas de manejo de armas de fuego (desenfundar, tiro rápido y preciso, recarga, etc.) como pocas otras actividades pueden. Pero usted tiene que competir en la moderación y practicar mucho de manera verdaderamente táctica si desea mantener su "memoria muscular" preparada para una confrontación real.

Dave Young En 1998, Dave Young diseñó el "Triángulo de Peligro Inminente" de CAPS, una simple ayuda entrenamiento visual para asistir a los oficiales en la toma de decisiones y en la articulación de sus decisiones de uso de la fuerza. El Triángulo de CAPS ha sido adoptado por varias agencias policiales y de seguridad como su modelo de uso de la fuerza. [Ver: http://www.caps-inc.com/c-11-dave-young.aspx] Cómo entrenar: Estáticamente, dinámicamente e interactivamente. Entonces, ¿cómo entrena para la calle? Una de las maneras más inteligentes para pensar en la respuesta a esta pregunta proviene de Dave Young, de CAPS, las personas que hacen simuladores interactivos con fuego vivo. Dave dice que hay tres niveles de entrenamiento que cada tirador competente debe aprobar regularmente:


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1) Estático. 2) Dinámico. 3) Interactivo.

El primer nivel es entrenamiento estático. Aquí estamos hablando de entrenamiento en el polígono de tiro, por lo general tiradores estacionarios y blancos estáticos. En este nivel de entrenamiento, el tirador pone a punto los fundamentos de las armas y la puntería. El segundo nivel es entrenamiento dinámico. Se puede hacer en un nivel bajo con el movimiento de los tiradores y el movimiento o caída de los blancos y los ejercicios tiroteo en casa. Pero es mucho mejor cumplirlo con un simulador en el que se desarrolla un escenario en forma de video frente a usted. En este nivel, el tirador aprende a tomar decisiones adecuadas, aprende acerca de la reacción crítica y la percepción de los plazos involucrados en un encuentro, desarrolla una apreciación de la cubierta, y prueba su capacidad para operar profesionalmente y de forma segura su arma en un entorno de la vida real. Además de ser el simulador de menor costo en el mercado, el sistema CAPS tiene la ventaja adicional de ser el único sistema con fuego real; el tirador utiliza su propia arma con munición real durante todo el ejercicio. Esta es una ventaja tremendamente importante. ¿Volaría con un piloto que sólo ha desarrollado sus habilidades en un simulador de juego de video, o insistiría en volar con alguien que realmente ha volado un avión? Del mismo modo, si alguna vez tuvo que defender las acciones de un estudiante - o sus propias acciones, ¿preferiría que el jurado vea evidencia en la que usted juega un juego de video caro en un salón recreativo, o prefiere que ellos sepan que usted ejerce el buen juicio en un escenario realista con su propia arma real y con balas de verdad? También considere que una vez que haya dominado los fundamentos del tiro, todo el mundo sigue siendo vulnerable a "flaquear". Todos llegamos al punto donde podemos hacer tiro seco durante todo el día y nuestro punto de mira nunca se mueve, sin embargo, todavía pestañeamos más de lo que queremos durante el fuego vivo. Así que sólo porque usted puede controlar una pistola láser sin retroceso en una simulación, no todo significa que usted ha probado su habilidad para impactar con un arma de verdad. El tercer nivel de instrucción es entrenamiento interactivo, usando réplicas de armas y proyectiles reales (pero no letales). Aquí estamos hablando de “Simunition” o armas de aire suave, con el aire suave como la opción preferida por varias razones. Primero, las réplicas de aire suaves están ampliamente disponibles para casi cualquier arma de fuego, lo que significa que usted puede utilizar sus propias fundas y equipo, y usted estará operando un sistema de armas de fuego idéntico a su arma de fuego real. Segundo, como una tecnología que no deja marcas, usted puede entrenar en su ambiente de entrenamiento real - en sus propias casas, oficinas, cruceros, escuelas, etc. (los proyectiles de marcado no son necesarios porque los participantes suelen saber dónde y cuándo han sido impactados, y si no lo hacen, el instructor que dirige el ejercicio lo hará.) Por último, el aire suave es muy barato, es decir, más entrenamiento podrá hacerse más a menudo. En este tercer nivel de entrenamiento de tiradores interactivos desarrollar y demostrar competencia en todos los aspectos de combate tridimensional con todas sus opciones de fuerza. Cómo hacerlo. La instrucción estática es fácil de hacer, en un polígono o en un foso de arena. Si usted no puede permitirse el tiempo o el costo reducido de hacer esto, ¡no compre un arma en primer lugar! La instrucción dinámica se realiza a muy bajo costo, con motores, blancos que caen y se levantan, y así sucesivamente. Incluso de costo más bajo es cubrir los blancos para tomar decisiones con una toalla vieja, y tener un compañero que tire la toalla en el momento oportuno con una cadena adjunta. O haga una campana, pídale a su pareja que camine hacia usted en un escenario de decisión y retire la cubierta. Pero la mejor instrucción dinámica, de lejos, es el entrenamiento con fuego vivo en un simulador. Cuesta dinero, sin embargo. Nos gusta el sistema CAPS, porque es fuego-vivo y porque cuesta casi como un automóvil, no como un avión. Esto es algo que un club o agencia puede costear. Por último, la instrucción interactiva se hace fácilmente con pistolas de aire comprimido. No necesita ningún lugar especial para entrenar, y las pistolas cuestan alrededor de $125, debidamente puestas a punto. Si usted es serio acerca del entrenamiento de supervivencia -si esa es la razón por la que está interesado en las armas de fuego-, entonces muévase hacia afuera del polígono al siguiente nivel de entrenamiento.


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Videos de entrenamiento gratuito sobre Uso de la Fuerza: Visite www.posai.org para más detalles. La Asociación de Seguridad de Oficiales de Policía (www.posai.org) es una organización sin fines de lucro. POSA ofrece entrenamiento gratuito a los oficiales en forma de DVD, que se emiten dos veces al año.

Sun Tzu para los policías del siglo XXI

Teniente (R) Dan Marcou (SWAT)

1 de junio de 2009 “Cuando sea el momento de golpear, hágalo como los rayos de los cielos”. Es lo que dijo Sun Tzu hace más de 2.500 años. Excepto por el rasgo literario, el significado es el mismo que todos los funcionarios dijeron haber escuchado de su instructor de tácticas defensivas: “Nunca entrene con su adversario”. “El arte de la guerra” de Sun Tzu (también Sun Wu) es uno de los textos de historia más ampliamente difundidos, discutidos, anotados al pie de página, traducidos, y argumentados. Es utilizado en el mundo de hoy por conductores tácticos exitosos en el ejército, en la aplicación de la ley, e incluso en los círculos empresariales. Sun Tzu no podría ser una lectura recomendada para estudiantes académicos, pero después de varios años de estudio cuidadoso y de aplicación de tácticas en la vida real, Sun Tzu puede hablarle a cualquier policía o funcionario táctico que desee sobrevivir en su carrera, su siguiente turno, su próxima llamada, o incluso, muy posiblemente, en el siguiente momento. Un ejemplo de cuán actual puede ser Sun Tzu es su afirmación de que el éxito en una confrontación comienza con “fuerza moral, intelecto, benevolencia y rectitud”. El servicio policial en los Estados Unidos no ha alcanzado la perfección absoluta, pero la mayoría de los policías en la calle son “buenos muchachos”, benévolos y rectos, que buscan a los “chicos malos”. La gran mayoría de los funcionarios se esfuerza por servir con honor. Lo sienten tan orgullosamente como su propia insignia. He aquí algunos principios de más de 2.500 años atrás que aún enriquecen a la táctica necesaria para ganar en el mundo actual de la ejecución de la ley: “El supremo arte de la guerra es someter al enemigo sin luchar”. Una respuesta integral a cualquier situación táctica es parecer un profesional indomable. Desalienta la resistencia, tanto si le habla a un funcionario que parece ser un profesional con el debido apoyo, o a un equipo SWAT que no está meramente presente, sino que es una presencia. Su experiencia (o percepción de la experiencia) alienta la rendición en muchos casos. Intimar a un sospechoso a que se entregue siempre es preferible y los oficiales de todos los niveles se están convirtiendo en grandes comunicadores mediante las tácticas de comunicación profesionales adquiridas en el entrenamiento. Los patrulleros se forman en “judo verbal”, y los elementos de SWAT son altamente capacitados en negociación de la crisis, con conocimientos para escuchar con empatía diseñada para someter sin luchar. TASER 14 es una herramienta que ha prevenido tantas confrontaciones como las ha terminado. En muchos casos, el inminente despliegue de la TASER ha convencido a muchos sospechosos a entregarse pacíficamente en lugar de comprometerse en una resistencia inútil.

14 Wikipedia, La enciclopedia libre. http://es.wikipedia.org/wiki/Taser. Consulta: 2 de junio de 2009.


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El TÁSER es un arma de electrochoque, diseñada como arma no letal, que genera unos pulsos eléctricos capaces de controlar los músculos motores (principalmente brazos y piernas) de una persona, inmovilizándola debido al dolor. Su uso está autorizado generalmente en niveles de amenaza muy inferiores a la que requiere el uso de armas de fuego, apareciendo en ocasiones en el nivel inmediatamente superior a las órdenes verbales. Ha recibido fuertes críticas por parte de organizaciones de derechos humanos así como por la Comité de la ONU contra la Tortura, que dictaminó que el uso de armas TÁSER puede constituir una forma de tortura. El TÁSER, (acrónimo de Tom Swift, personaje favorito de ficción del inventor, John H. Cover, protagonista de una serie de obras infantiles escritas por Victor Appleton entre 1910-1941; en la ficción de uno de esos libros Tom Swift crea un rifle eléctrico) fue diseñado por John H. Cover, piloto de bombardero durante la segunda guerra mundial y más adelante fuera director científico del North American Aerospace's Apollo Moon Landing Program. Es eficaz hasta 7,6 metros mediante el disparo de dos dardos unidos a sendos cables eléctricos, que transmiten los pulsos desde el arma hasta el agresor, si bien también funciona por contacto. Hasta julio de 2008 más de 1.400.000 personas probaron los efectos del TÁSER, bien en intervenciones policiales o bien voluntariamente. El TÁSER moderno dispara dos dardos que contienen los electrodos que se conectan con el arma mediante unos alambres de metal. El arma envía las cargas eléctricas a los electrodos que al ser proyectados sobre una persona controlan los músculos motores incapacitándola. Al principio los efectos de los primeros modelos tenían una cierta dificultad para traspasar la ropa gruesa, pero los últimos diseños son capaces de traspasar un chaleco anti-balas.

“Confiar en los rústicos y no prepararse, es el mayor de todos los crímenes. Estar preparado de antemano para cualquier contingencia es la mayor de las virtudes”. “Rústicos”, 2.500 años atrás, eran los agricultores que dejaban sus implementos de labranza en tiempos de conflicto, se les entregaba una lanza y se los colocaba en la línea del frente de un ejército con poca o ninguna formación. Un rústico era lo opuesto a un profesional. Los administradores están más comprometidos que nunca en la obtención y el mantenimiento de personal altamente capacitado. Los días de la pistola con correa y placa de identificación y el envío de policías a la calle se han ido. El nivel de conocimientos y la educación del funcionario sentado en el patrullero es mayor que nunca en la historia de este país. Los días del “rústico de guardia” se fueron y no regresarán. “Golpee cuando la victoria esté asegurada”. Una de las mayores decisiones de un funcionario en la calle, o de un funcionario a cargo de un equipo armas y tácticas especiales (SWAT) es “¿nos comprometemos o no? ¿Contactamos o contenemos?”. Algunas veces el sospechoso no deja otra opción, en el caso de un repentino asalto a un funcionario –que juró proteger a los demás- o a una posible víctima. Ante la posible acción de un sospechoso, debe tomar la decisión táctica cuando las probabilidades de ganar se basen en sus habilidades superiores, el equipo, la posición, la actitud, y el personal. “Evita al fuerte y ataca al débil”. Hay un tiempo para hablar y un tiempo para usar las manos con control. Hay tiempo para usar las manos con control y un tiempo para desplegar un TASER. Hay un tiempo para portar un TASER y un tiempo para una pistola. Hay un tiempo para llevar una pistola y un tiempo para portar un arma larga. Hay un tiempo para llamar a la puerta con una orden en la mano y un tiempo para tener en la mano una “orden de no tocar”, mientras un equipo SWAT está rompiendo una puerta. Hoy los oficiales de policía se dan cuenta de que ganar es la única opción y las tácticas superiores deben ser utilizadas para ganar. Ganar con su fuerza no sólo es saber cómo hacerlo, sino cuando utiliza sus tácticas y herramientas más eficaces con la justificación del momento para lograr los mejores resultados. “Vaya hacia el vacío, golpee los huecos, evite lo que él defiende y golpéelo donde no lo espere”. Cuando se desplace para tomar contacto, si está preparado en la parte delantera, avance desde atrás. Es el simple concepto de flanquear al oponente y proceder desde donde él menos lo espera a usted. Sun Tzu habló de la necesidad del “Cheng”, o elemento fijador que aferró al oponente en su lugar, y del “Chi” o elemento de flanqueo o acompañamiento. En la aplicación de la ley actual los instructores tácticos insisten en la necesidad de establecer un oficial de contacto y un oficial encubierto, que flanquea al sospechoso. En las operaciones de SWAT el elemento que aferra sería el de los funcionarios en el perímetro interno y el elemento que flanquea sería el equipo de entrada.


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“El experto es divinamente misterioso. Él es inaudible. Por lo tanto él es el master de la suerte de su enemigo”. ¡Sigilo! La capacidad de moverse alrededor de un sospechoso, a través de un área o hacia un sospechoso sin detección puede significar la diferencia entre el éxito y el fracaso de una operación. Equípese y practique para ser capaz de moverse con sigilo como individuo o como equipo. “Los buenos comandantes conducen con sabiduría, sinceridad, humanidad, valentía y rigor”. Algunas cosas nunca cambian. Si usted piensa en los mejores comandantes que ha tenido probablemente sea capaz de enumerar sus virtudes. Si usted es un buen jefe esfuércese siempre por mejorar y ser un gran comandante. Usted puede hacer un impacto positivo en su departamento haciendo un impacto positivo en su personal. Sun Tzu consideró que la disciplina era esencial. Pregúntese a sí mismo si es disciplinado. Si usted se auto disciplina, nadie tendrá que disciplinarlo. Un buen comandante no sólo sabe cómo utilizar eficazmente la disciplina, sino que es un ejemplo. “Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla”. Conocer al sospechoso, el terreno, sus capacidades, tendencias, fortalezas y debilidades, su determinación y los de sus cómplices. Conozca su equipo, sus armas y su nivel de destreza. Conozca estas mismas cosas acerca de sí mismo, su compañero de guardia y de equipo, y usted también conocerá el éxito. Cinco principios esenciales de Sun Tzu para la victoria: 1. Triunfan aquellos que saben cuándo luchar y cuándo no luchar. 2. Triunfan aquellos que saben discernir cuándo utilizar muchas o pocas tropas. 3. Triunfan aquellos que tienen tropas cuyos rangos superiores e inferiores tienen el mismo objetivo. 4. Triunfan aquellos que se enfrentan preparados a enemigos desprevenidos. 5. Triunfan aquellos que tienen generales competentes y no limitados por sus gobiernos civiles. Pregúntese, ¿se aplican estos principios hoy en día? Los historiadores sostendrán que la persona que escribió El Arte de la Guerra fue un general llamado Sun Wu, o (como algunos sospechan) que fue escrito por muchos generales. Discutirán si ha sido escrito de una sola vez o compilado durante un período de tiempo. No puede ser discutido que cualquier concepto o táctica para la victoria, adoptado hacen más de 2.500 años y que sigue siendo válida hoy en día, es atemporal, inestimable y es, de hecho, un principio. Aquí hay un ejemplo de El Arte de la Guerra de Sun Tzu, de un viejo principio de 2.500 años que se ajusta a la ejecución de la ley de hoy. Si tiene espacio en su bolsa de equipo para uno solo de los principios de Sun Tzu, llévese éste: “La victoria está asegurada antes de la lucha”.

Prevenir el error que puede terminar con su carrera Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis – ira, lujuria, codicia y presión de los compañeros- pueden terminar con la

subsistencia de su carrera con tanta seguridad como una bala puede terminar con su vida.

Teniente (R) Dan Marcou, SWAT



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Muchos funcionarios colocan una foto favorita en la visera del patrullero al comenzar cada turno para recordar que harán todo lo posible a su alcance para sobrevivir al turno y regresar a casa donde está la familia. Hay muchos peligros potenciales para los uniformados, que deben estar física y mentalmente preparados para resistir. Esos peligros incluyen criminales, emboscados, maltratadores domésticos y los Cuatro Jinetes. "¿Qué quiere decir ‘los Cuatro Jinetes’?" pregunta usted. Los Cuatro Jinetes. Según el Dr. Neal Trautman, hay cuatro fuerzas imperiosas que llevan la carrera de un uniformado a un abrupto final con tanta seguridad como las municiones de alta velocidad. Se trata de la ira, la lujuria, la codicia y la presión de los pares. Los funcionarios deben estar preparados para protegerse de esos peligros inminentes y los estragos que pueden crear en una carrera y una familia. Aunque no son tan devastadores como los jinetes bíblicos, la Peste, la Guerra, el Hambre y la Muerte, los uniformados que sucumben a la ira, la lujuria, la codicia y la presión de los pares han descubierto que pueden llevarlos a un Apocalipsis de su carrera. Ira. Una carrera en una fuerza de seguridad o policial ofrece a todos los uniformados un sinnúmero de oportunidades para enojarse legítimamente por las cosas que les hacen y les dicen. La mayoría de los civiles nunca podría tolerar el abuso verbal y físico a que son sometidos diariamente los agentes, pero esperan una respuesta estoica profesional de sus funcionarios. Usted puede ver estos dos caminos. Puede decir que es injusto, o puede apreciar la confianza que el público tiene en usted. De todos modos, hay algo de verdad en las palabras del difunto Eldon Mueller, "El hombre que te enoja, te domina". El profesional de la policía puede esperar ser asaltado verbal y físicamente en todas las maneras imaginables. Los uniformados necesitan auto prepararse para actuar por necesidad y no por ira. Esto se puede hacer mediante la capacitación física y el condicionamiento mental. Reaccionar de forma exagerada no sólo pone en peligro la carrera profesional del uniformado, sino que puede cruzar una línea fina entre la batería penal y el uso justificado de la fuerza. Los funcionarios no pueden permitir que los sospechosos los inciten a cruzar esa línea. En marzo de 2010, el Sargento Scott Krause fue declarado culpable por golpear repetidamente a un detenido esposado que pateaba la ventana del patrullero y exigía ser llevado al baño. Krause perdió su trabajo y fue condenado a 18 meses de prisión. Este hombre enfureció al Sargento Krause y, desgraciadamente, lo conquistó. Lujuria. Los uniformados no son tentados tan a menudo como las estrellas del rock, pero siempre y cuando tomen malas decisiones, pueden arruinar su matrimonio, carreras y vidas por unos momentos de placer. Parafraseamos a un sabio oficial que se refería a la lujuria en estos términos: "La insignia obtendrá ‘eso’, pero ‘eso’ va a obtener su insignia". Hay algunos ejemplos extremos en que los agentes en el pasado ingresaban a la agencia con oscuros deseos criminales. En agosto de 2010, el ex-oficial Marcus Huffman fue condenado a 40 años de prisión tras ser declarado culpable de agredir sexualmente a una mujer en una subestación del departamento de policía. La había recogido después que se detuvo a ayudarla, porque ella estaba muy intoxicada y a pie. Codicia. A lo largo de la carrera, a un uniformado se le confiarán muchos millones de dólares en mercancía, dinero en efectivo y todas las tentaciones materiales imaginables durante las investigaciones, los contactos vehiculares y las puertas abiertas. Hay que reconocer que la mayoría de los funcionarios no violan la confianza depositada en ellos por sus comunidades. Pero hay quienes han violado esa confianza. Por ejemplo, en abril de 2010 el Oficial Ronald Jackson fue sentenciado a 18 meses de prisión por robo. Detuvo a una mujer que llevaba una gran cantidad de equipamiento nuevo de alta tecnología robada en Best Buy. La mujer fue detenida por una orden de arresto pendiente. Jackson y su refuerzo, el Oficial Cristian Brezil, dividieron la mercancía robada y no la mencionaron en su informe. La carrera de Jackson ha terminado y el ex policía se enfrenta a una pena de prisión.


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La presión del grupo. La buena noticia es que la mayoría de los uniformados son honorables y valientes, que comparten su sentido de justicia. Sin embargo, ¿qué si ha sido testigo de las acciones de Krause, Jackson, Brezil y Huffman? ¿Qué si esos funcionarios eran sus amigos? ¿Qué si le recuerdan el vínculo que comparten y le piden que permanezca en silencio? ¿Estaría usted dispuesto a tomar medidas que conduzcan a su despido y juicio penal, o sucumbir a la presión? No importa que tan atroz sea el delito, no es un arresto fácil de hacer cuando el sospechoso usa el mismo uniforme que el suyo. El camino del honor. El Detective retirado Frank Serpico, del Departamento de Policía de Nueva York, dijo en una ocasión: "El trabajo policial es una carrera honorable, si la hace con honor". El camino del honor no es siempre el camino fácil de seguir - no habrá muchas oportunidades en una carrera para desviarse de este camino. Si alguna vez se ve tentado a abandonarlo, recuerde las caras sonrientes de su familia en la imagen del visor de su patrulla. Actúe como si lo estuvieran viendo y esfuércese para hacer que se sientan orgullosos. Un funcionario que busca mantenerse fiel a sus principios y altos valores debe recordar que, cuando la tentación de sucumbir a la ira, la lujuria, la avaricia, o la presión del grupo, éstas pueden vender su honor por un centavo. Una vez perdido, sin embargo, no se puede volver a comprar ni por un billón de dólares. Mirar hacia atrás después de finalizar una carrera honorable en la aplicación de la ley es una fuente de satisfacción indescriptible. Proteja su honor con su vida y su vida con su honor.

Una ley exige aptitud a los oficiales Sea serio en su entrenamiento físico

- su vida depende de ello ahora y su calidad de vida depende de ello más adelante.


24 de mayo de 2012 Usted puede no estar al tanto de una ley pasada por alto que manda tener aptitud a todos los agentes del orden público. Los oficiales deben entrenar para alcanzar altos niveles de aptitud o, posiblemente, sufrir severas sanciones bajo esta ley. La ley requiere un compromiso total de todos los oficiales de la calle en la nación para alcanzar un nivel de aptitud física favorable a la supervivencia, mientras: • Participa en persecuciones a pie. • Supera la resistencia del sospechoso. • Lucha para mantener el control de sus armas de servicio. • Intenta rescates físicos. • Participa en combates cuerpo a cuerpo, armado y desarmado. • Proporciona un apoyo eficaz a sus compañeros oficiales. Esta ley exige el cumplimiento obligatorio. Es tan irrevocable como inflexible. Esta ley no admite apelación. Es la ley de la selva, señoras y señores: La supervivencia del más apto. [Según Wikipedia, "supervivencia del más apto" es una frase acuñada por el gran pensador británico y filósofo Herbert Spencer y ampliamente (aunque erróneamente) atribuida a Charles Darwin. Una interpretación de la frase "supervivencia del más apto" dice que "sólo los organismos más aptos organismos prevalecerán" (una visión a veces ridiculizada como "darwinismo social")]


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Lucha en el mundo real. Cada día en todo el mundo, los agentes son asaltados con puños, pies, codos, dientes, cuchillos, pistolas, destornilladores, palos, espadas, vehículos de motor, e incluso en muchas ocasiones, con sus propias armas. Esos ataques se producen en las grandes áreas metropolitanas, así como en "pacíficos" entornos rurales. Mientras un oficial lucha para vencer la resistencia de un sospechoso o ganar una lucha desesperada por la vida, ese oficial necesita no sólo las habilidades tácticas, sino toda la fuerza, la flexibilidad, la movilidad y la resistencia a su disposición. Esos productos sólo mejoran con el entrenamiento - por el contrario, rápidamente disminuyen cuando deja de entrenar. La mayoría de las agencias exigen ciertos estándares físicos para ingresar, pero los requerimientos para cualquier nivel de condición física terminan precisamente cuando se inicia la urgente necesidad de aplicar estos atributos. Los oficiales en las agencias que no requieren repetir exámenes de aptitud física para progresar en la carrera deben auto-motivarse para continuar su entrenamiento físico personal. Algunos entrenan. La obesidad en los Estados Unidos se encuentra en niveles récord y la tentación de vivir el mismo estilo de vida que las personas que servimos han llevado a algunos agentes del orden público a alcanzar niveles peligrosos de obesidad. Desde la que defenderse contra agresiones físicas personales es parte de la descripción del trabajo del agente de la ley, la tentación de llegar a ser físicamente inactivo debe ser vigorosamente resistida. ¡En este mismo momento sus futuros adversarios están entrenando duro en las cárceles de todo el país para estar en mejores condiciones para matarlo! No se detenga. Si usted está entrenando ahora, no se detenga... nunca. A través de los años como entrenador he sido testigo de muchos oficiales más jóvenes que se burlan de los funcionarios mayores de esa edad, que debido a su peso, dificultades para levantarse de la posición de rodillas a una posición de pie, mientras están en el polígono con armas de fuego. "¿Cómo alguien puede dejarse estar de esa manera? Eso nunca me pasará a mí ", es el comentario repetido a menudo por jóvenes oficiales. Luego el patrón se repite tantas veces por desgracia. A medida que esos jóvenes oficiales, en las mejores condiciones poco a poco son superados por la alteración de las prioridades, la complacencia y la edad, comienzan a tomarse "recreos de entrenamiento". El tiempo pasa y "el entrenamiento dura más tiempo y más tiempo. Con el tiempo muchos de esos oficiales burlones se convirtieron en esas personas mayores con dificultades para levantarse de una posición de rodillas en el polígono, debido a su peso. Comience. Si no estás entrenando físicamente ahora, consulte con su médico y empiece a entrenar de inmediato. Comience lento, pero constante, regular y sin tregua, laboriosamente por el camino hacia una mejor condición física. He conocido a oficiales, que están en mejores condiciones en sus 50 años de lo que eran al momento de ingresar a la agencia, debido a un compromiso adquirido durante sus carreras para hacer el trabajo difícil que requiere mantener la condición física propia de un caballero moderno. Dividendos. He experimentado enfrentamientos en las calles, persecuciones a pie, y respondí a llamadas de "oficiales en necesidad de asistencia" no sólo en mi primer año, sino también en el último año de mi carrera. Descubrí desde el primer día hasta el último día, que el sospechoso nunca "norma" su nivel de intensidad por respeto a mi avanzada edad. El entrenamiento físico jugó un papel muy importante en mi carrera personal por la supervivencia. La preparación física no sólo ayudó en mi carrera por la supervivencia, sino también ha mejorado mi vida. Yo recomiendo que cada policía corra, se estire y luche contra la sombra todo el tiempo. El ejercicio no puede detener el proceso de envejecimiento, sino que le permite hacer lo que le gusta hacer más y mejor. Muévase y no deje nunca de moverse, o va a perder. Insto a todos a seguir el ejemplo de un colega mío, el Oficial Willard Sill. Willard siempre se mantuvo en forma, activo, comprometido, y rara vez pudo ser visto sin una sonrisa en su rostro. Se retiró del Departamento de Policía de La Crosse, Wisconsin, en 1960 después de una carrera completa. Creo que la esperanza media de vida actual de un oficial de policía es de alrededor de 58. Willard lo ha superado fácilmente - celebró su cumpleaños número 100 en marzo de 2012 y todavía está sonriendo. Después de retirarse. Al mantener un nivel de condición física lista para la calle durante su carrera, una recompensa puede ser sentir la satisfacción suprema de perseguir a un ladrón de autos pesado, tatuado, con


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pantalones holgados, y atraparlo para esposarle las manos. Otra recompensa después del retiro es la alegría desenfrenada de poder disparar, cazar, nadar, caminar, o simplemente dar largas caminatas para recoger flores silvestres con sus nietos. Sea serio en su entrenamiento físico - su vida depende de ello ahora y su calidad de vida depende de ello más tarde. Mis compañeros corren, levantan, estiran, y luchan con la sombra, para que "la supervivencia vaya a los más aptos"; es la ley de la selva y hay una jungla allá afuera. ¡Manténgase seguro, fuerte, positivo!

Rodney King: La perspectiva de un policía

Teniente (SWAT) Dan Marcou

25 de junio de 2012 "Rodney King, el hombre que estaba en el centro del caso de la brutalidad policial de Los Ángeles que más tarde desencadenó los disturbios de Los Ángeles, ha muerto". Tras el anuncio anterior por ABC World News a principios de este mes, empecé a imaginar cómo un profesor de historia de preparatoria puede tratar de integrar la noticia en sus planes de clases. Tal vez la pregunta puede ser planteada: "¿Puede alguien decirme cómo la paliza a Rodney King impactó a la aplicación de la ley en los Estados Unidos?" He aquí la perspectiva de un policía. El incidente. El 3 de marzo 1991 Rodney King conducía en estado de ebriedad y cuando los agentes intentaron detenerlo, este hombre grande beligerante resistió el arresto. Un ciudadano, George Halliday, tomó su cámara de video y grabó el drama en curso en progreso frente a él. Al final, los oficiales del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) fueron encontrados penalmente responsables. Hubo un juicio viciado de nulidad y cuatro fueron absueltos en la sala de la Corte de Simi Valley. Los oficiales fueron procesados por segunda vez en la Corte Federal y dos fueron declarados culpables de violar los derechos constitucionales de King. Ellos fueron enviados a una prisión federal. Otros dos oficiales fueron absueltos por segunda vez. ¿Qué extrajo la policía de este incidente altamente publicitado? Cuando este caso fue informado, los medios de comunicación optaron por modificar los tres primeros segundos de la cinta que mostraba a Rodney King elevándose desde la calle para cargar contra un oficial en un claro asalto violento. En defensa propia, el oficial golpeó con su bastón PR-24 [“P” prevenir, “R” restringir y “24” pulgadas equivalentes a 60,96 cm] a King.


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El jurado vio esa parte de la cinta por primera vez en la corte después de haber sido deliberadamente ocultada al público por los medios de comunicación. El vídeo corto le dio credibilidad a los oficiales, que declararon que la mayor parte de la batalla contra Rodney King ocurrió antes que Halliday volviera con su cámara. La defensa experta mostró la cinta cuadro por cuadro al jurado, dando lugar a una absolución en el primer juicio. [Ver la totalidad de la cinta Halliday aquí].

Rodney King Las secuelas. A raíz del caso de Rodney King, las cámaras gradualmente se convirtieron en equipo estándar en los coches patrulla en toda la nación. En cuanto a los ciudadanos grabando a la policía, todavía hay un gran desacuerdo sobre cómo debe ser manejado. Cuando surge en mi entrenamiento, les digo a los oficiales: 1) Tenga su cámara rodando también. 2) No tema ni luche contra grabación civil. Acepte que usted será registrado. 3) Aprenda a usar las grabaciones para su ventaja. Ir a través del proceso legal para obtener el material completo como evidencia - te apoyarán más de lo que te harán daño. 4) Un oficial de policía profesional no tiene nada que temer de estar siendo grabado (los oficiales encubiertos no se incluyen aquí). 5) Siempre actúe como si estuviera siendo grabado, porque en el mundo de hoy es probable que lo sea. Desde el arresto de King, los oficiales de la policía de Los Ángeles han hecho cientos de arrestos cada día. Entre uno y tres por ciento de esas personas resisten el arresto, haciendo que los oficiales de policía de Los Ángeles tengan que usar cierto nivel de fuerza para vencer esa resistencia. Y sin embargo, no hubo más cintas tipo-Rodney King. Hay una razón para esto. Después del incidente de Rodney King, el Departamento de Policía de Los Ángeles hizo una amplia revisión de su capacitación sobre el uso de la fuerza y se preguntó: "¿Cómo podemos hacerlo mejor?" Estudiaron no solo cuán a menudo se resiste la gente, sino exactamente cómo resistió. Analizaron los primeros movimientos más comunes de los sospechosos resistentes y buscaron preparar a los oficiales para contrarrestar eficazmente esos movimientos. Se solicitó la contribución de expertos de dentro y fuera del departamento para obtener una variedad de opciones que pudieran ser enseñadas a los oficiales sobre cómo controlar mejor los diferentes tipos de resistencia que podrían enfrentar. Después de un extenso estudio, armaron un sistema eficaz y defendible de Tácticas Defensivas y de Control para sus oficiales. La capacitación. Hay una canción country que dice: "Luché contra la ley y la ley ganó". Es seguro decir que dos oficiales que aterrizaron en la prisión federal, mientras que el sospechoso se va caminando y millonario, no constituye una victoria para los oficiales implicados. Una gran lección aprendida por los instructores de policía a nivel nacional a partir del incidente de Rodney King fue que no sólo los funcionarios deben ser entrenados para sobrevivir físicamente cada llamada, sino que tienen que sobrevivir a cada llamada legalmente y también emocionalmente.


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Los oficiales en el caso de Rodney King sobrevivieron físicamente, pero no todos sobrevivieron legalmente y nadie puede calcular el daño emocional causado a cada funcionario en esa escena. La capacitación policial aún está en evolución, pero seguimos hallando mejores maneras de entrenar a los oficiales para sobrevivir en sus carreras en todos estos niveles. Los medios de comunicación no aprendieron nada. Todavía editan cintas, satisfechos con sacrificar la exactitud e incluso la verdad, para que se adapten a una narración. La perspectiva de un policía: Prefiero ser un policía que Rodney King. Los policías nunca hacen millones de dólares como el señor King, pero siempre tenemos un poco de dinero en el bolsillo y conocemos un lugar donde podemos gastarlo en la mejor salchicha “chili dog” en la ciudad. Nos encontramos con gente interesante, hacemos cosas interesantes todos los días y el mundo se va al infierno en una canasta de mano sin nosotros. Trabajamos con algunas de las personas más graciosas del mundo, que darían su vida por nosotros, aunque no dudarían en tirar la antigüedad por un disparo en algún tiempo fácil extra. Llevamos a gente que ha asustado a sus familias a la cárcel y después vamos a casa hacia una familia que nos ama. Nadie más que un policía ha experimentado el increíble amor que viene como una ola cuando se inclina y besa a su hijo para dormir después de un turno realmente muy duro. Es genial ser un policía. Desde el 3 de marzo 1991 la Aplicación de la Ley Estadounidense se ha convertido en una "verdadera profesión" y todavía se esfuerza por aprender de sus errores y mejorar. Por otra parte, Rodney King vivió su vida sabiendo que 2.000 personas no habrían resultado gravemente heridos, 53 personas no habrían muerto, y 1.100 edificios no habrían sido destruidos si hubiera cumplido solo un arresto legal. Colectó $ 3,8 millones por perder mal la batalla que él comenzó. Sin embargo, el dinero no le compró un "final feliz para siempre", porque King continuó abusando del alcohol, las drogas, y de algunas mujeres en su vida. Al final, el millonario Rodney King murió solo en el fondo de su piscina.

Recuerde el Círculo de Seguridad cuando maneje la boca de su arma de fuego Un concepto de entrenamiento enseñado durante una década, aún no es familiar para muchos policías y

agencias en los Estados Unidos.

Sargento Bill Campbell 22 de enero de 2010

Durante los últimos 12 años, la División de Actividades de Ejecución de la Ley de la Asociación Nacional del Rifle ha enseñado el concepto del Círculo de la Seguridad en los cursos para el desarrollo de los Instructores de Armas de Fuego ofrecidos a nivel nacional. A lo largo de la última década, el concepto ha sido renombrado y vuelto a enseñar en muchas conferencias de capacitación y cursos, pero todavía encuentro que los funcionarios y las agencias no están familiarizados con éste. ¿Qué es el Círculo de Seguridad? El Círculo de Seguridad fue introducido por primera vez por mi amigo y mentor Clive Shepherd conforme desarrollara algunos de los cursos de entrenamiento de la ANR. La intención de Clive en la enseñanza del concepto era que los oficiales tengan un lugar a donde apuntar la boca de sus armas cuando no haya necesariamente un campo de tiro, o cuando se trabaja en y alrededor de otras personas a quienes no hay que dispararles. En el polígono de tiro, usualmente pensamos que los blancos o las bermas son lugares seguros a los cuales apuntar con el arma. Clive lo vio en la calle, el campo de tiro no es fácil de reconocer y los ciudadanos inocentes u otros oficiales bien pueden estar ocupando ese espacio. El Círculo de Seguridad refleja la idea de que puede no haber un "lugar seguro" reconocible al cual apuntar. Por lo tanto, Clive enseñó el concepto de hallar el lugar más seguro al cual apuntar cuando no se utiliza el arma de fuego.


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El sargento supervisa que este Equipo de Detención use el círculo de seguridad para controla la boca del arma

al mismo tiempo que dirige el equipo de policías. Los agentes frente a él están en una sólida posición de apresto.

Al usar y comprender el Círculo de Seguridad, primero debe reconocer que no es una técnica, un movimiento, o giro de algún tipo. Más bien, es un concepto que utiliza tres principios básicos: 1. El Círculo de Seguridad es un lugar geográfico que representa la dirección más segura en la cual apuntar un

arma de fuego en el mundo real o en el ambiente de la calle. El Círculo de Seguridad es el área circular de una yarda alrededor de la cual el oficial está parado o sentado en un momento dado. Puede ser descrito como nuestro "espacio personal". Si extendemos nuestras manos e imaginamos que estamos parados en el centro de un tubo o una columna, el Círculo de Seguridad representaría el lugar donde ese tubo toca el suelo.

Este círculo se mueve con nosotros y va a cualquier lugar al que vayamos. A menudo coloco un hoola-hoop sobre el suelo para demostrar dónde está el círculo y que envuelve completamente todo el cuerpo. 2. El cañón del arma de fuego apunta directamente dentro del Círculo de Seguridad mientras que los ojos

buscan objetivos en un entorno de 360 grados. Basados en nuestras reglas cardinales de seguridad, el cañón siempre debe apuntarse hacia donde no haya ninguna posibilidad de cruzar a otros a menos que queramos dispararles. En la calle, donde hay ciudadanos y otros oficiales, el Círculo de Seguridad se convierte en esa ubicación por defecto hacia donde la boca del arma puede ser dirigida sin poner en peligro a los demás.

[Nota: La Posición SUL consiste en apuntar en una dirección segura. No es una clásica posición de "arma en apresto" sino de "arma segura". Fue inventada por Max Joseph y Alan Brosnan. El término "sul" fue tomado del portugués y significa simplemente "sur" porque es hacia allí a donde apunta el arma en esta posición]

El arma de puño puede ser alejada del cuerpo lista para usar o pegada al cuerpo como en la "posición SUL".


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3. El arma de fuego se sostiene paralela al cuerpo. La distancia en la cual el tirador sostiene el arma separada de su cuerpo no es importante, pero el hecho de sostenerla paralela al cuerpo le da tensión al músculo y hace que el tirador sea siempre consciente de la dirección del cañón. Esta tensión del músculo también evita que el arma sea apuntada sin intención hacia algún blanco durante giros rápidos y conversiones en un entorno de 360 grados. Dependiendo de la técnica de empuñadura del oficial, éste puede relajar un poco el agarre para alcanzarlo. La "técnica sul" sería un ejemplo de ello. Cuando el oficial decide disparar, el arma rota hacia el blanco en la medida en que se extiende a la posición de disparo y alcanza su posición final de empuñadura de tiro.

Los tres principios del Círculo de Seguridad permanecen consistentes pese al arma usada o la posición del

oficial. Entrenando con el Círculo de Seguridad. Una vez que esos tres principios son comprendidos, los policías pueden usar el concepto de Círculo de Seguridad para portar sus armas de fuego con seguridad en un entorno de 360° sin necesidad de apuntar a otros oficiales o ciudadanos. Cuando este fundamento está internalizado, hay un sinnúmero de opciones en el entrenamiento o en las tácticas que pueden ser considerados usando el Círculo de Seguridad. Por ejemplo, los tiradores pueden pivotear y girar hacia una amenaza sin necesidad de apuntar a otros oficiales o ciudadanos alrededor de ellos en una línea de tiro. Además pueden volver al Círculo de Seguridad después de disparar y girar su cuerpo junto con su cabeza conforme buscan y exploran otras amenazas. Los oficiales pueden moverse independientemente o en grupos reunidos, en línea, o en formación de célula (respuesta de tirador activo), y los oficiales que usan el Círculo de Seguridad no le apuntarán sin necesidad a los demás. El Círculo de Seguridad puede usarse con cualquier arma de fuego, aplicando los tres principios. Si el arma es de puño, una pistola ametralladora, un rifle o una escopeta, los principios siguen siendo los mismos para mantener controlado el cañón. Si el Círculo de Seguridad se convierte en una posición de portación defectuosa, también se convierte en un medio de portación de arma en una posición relajada cercana en lugar de extenderla y desperdiciar energía, mientras se busca un objetivo potencial. El Círculo de Seguridad no reemplaza una sólida posición de apresto –de hecho, si el oficial está desafiando verbalmente a un sospechoso visible, probablemente porte el arma extendida en una sólida posición de apresto con un agarre de tiro en anticipación a la posible necesidad de usar la fuerza letal. Pero si el oficial específicamente no sabe de dónde viene la amenaza, entonces el Círculo de Seguridad le permite mantener su arma apuntada con seguridad mientras busca y se mueve según su necesidad. Al momento de escribir los artículos que integran esta columna, describiré el entrenamiento con armas de fuego que con frecuencia obliga a los agentes a trabajar en un entorno de 360° con otros oficiales como lo hacen en la calle. El Círculo de Seguridad es el concepto fundamental que permite este tipo de capacitación. Para los oficiales y entrenadores que buscan hacer su entrenamiento más realista, el Círculo de Seguridad les permitirá un manejo más seguro y más realista del arma en un entorno real.


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Entrenamiento en Artes Marciales Mixtas, ¿es lo correcto para sus oficiales? Las destrezas físicas necesarias para ganar deben ser simples, basadas en movimientos motores gruesos, que

se pueden aprender en una sesión de ocho horas una vez al año, y practicarlas repitiéndolas diez veces.

Ross Torquato Instructor de Tácticas Defensivas y Uso de la Fuerza Oficina del Sheriff del Condado de Brevard 18 de noviembre de 2011 La formación y capacitación policial es por lo general lenta para cambiar. Desafortunadamente, la mayoría de las agencias brindan entrenamiento sólo después de un evento trágico o casi trágico. Por ejemplo, en mi agencia no tuvimos entrenamiento en ningún tipo de entrenamiento formal sobre tácticas defensivas por al menos 10 años antes que un oficial muriera en 1996, al ser desarmado y asesinado durante un robo a una vivienda. No fue sino hasta después de su muerte que comenzamos a llevar a cabo el entrenamiento táctico defensivo en todo el departamento. Al enseñar y capacitar en todo el país, he hablado con muchos instructores que pueden relacionarse con esto. Por primera vez, podemos estar saliendo realmente adelante de la curva de aprendizaje cuando llega la explosión de las Artes Marciales Mixtas. En la preparación para el ataque de los sospechosos que han visto suficientes peleas de AMM en la televisión, o se han entrenado en AMM lo suficiente como para derrotar a un oficial, estamos capacitando a nuestros oficiales para defenderse de estas personas. Muchos entrenadores están enseñando cómo trabajar desde el suelo poniendo a los sospechosos en su guardia. Enseñan técnicas para cuando un sospechoso tiene al oficial en su guardia. Otros enseñan cómo hacer frente a otras series de técnicas de AMM. He participado en muchas de esas clases, aprendí algunas grandes técnicas. El problema es que la mayoría de los oficiales a quienes enseñamos no van a entrenar largo o duro lo suficiente como para poder llevar a cabo estas técnicas cuando están siendo atacados. Ahora déjeme decirle aquí, me encanta el entrenamiento en artes marciales y creo que todos nuestros funcionarios deben entrenar en artes marciales, ya que su vida puede depender de la capacidad de pensar con claridad cuando son atacados. Pero no lo harán. Este es el dilema al que nos enfrentamos como instructores. Esta es la razón por la que enseñar cómo hacer frente a diversas técnicas de AMM no es práctico para la mayoría de nuestros oficiales. Si un sospechoso está entrenando en AMM, y decide atacar a un oficial, el funcionario tiene que ser capaz de ganar, no de contrarrestar con técnicas. He estado en muchas clases como estudiante y vi la consternación, la duda y el desdén que los estudiantes han expresado con varias técnicas. Obviamente, el instructor que enseña la técnica es diestro en la aplicación y enseñanza de la técnica. Pero una vez que los estudiantes empiezan a trabajar las técnicas, no parece que puedan conseguir que funcione. El instructor puede dar una gran instrucción, ser paciente y explicar ampliamente todos los detalles y el estudiante todavía no será capaz de conseguirlo. Tomemos, por ejemplo, al oficial que está de espaldas, con un sospechoso entre sus piernas y agarrando el arma del oficial. He visto a muchos instructores enseñando algún tipo de artes marciales de bloqueo de muñeca para derrotar este ataque. Aunque no diré nada en clases, me pregunto: "¿Por qué el instructor está enseñando una técnica de fuerza no letal para enfrentar un ataque letal?" Al estudiante no se le enseña el concepto de cómo ganar... se le enseña cómo controlar. A veces tenemos que enseñarles a actuar con la violencia con la que nos enfrentamos para que nuestros oficiales puedan ganar. Las destrezas físicas necesarias para ganar deben ser simples, basadas en movimientos motores gruesos, que se pueden aprender en una sesión de ocho horas una vez al año, y practicarlas mediante cerca de diez


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repeticiones. Si usted ha entrenado a los oficiales de las fuerzas del orden en cualquier longitud de tiempo durante el entrenamiento en servicio, usted sabe que la mayoría de los funcionarios practicarán cualquier táctica de control dada entre ocho y diez veces antes de empezar a hablar con su pareja sobre una historia de guerra, quejarse de la agencia o explicar por qué la técnica actual no va a funcionar en la vida real. ¿Van a hacer lo que les enseñó cuando importe? Otro problema común se presenta debido a la capacitación impartida en un ambiente "seguro" para limitar las lesiones. Esas áreas de entrenamiento son una necesidad, ya que los funcionarios estarán obligados a volver al trabajo después que el entrenamiento ha terminado. El reto consiste en inducir estrés y desafiar al estudiante mientras mantiene el entrenamiento seguro. Con la ayuda de un poco de creatividad y equipamiento, los estudiantes pueden ser desafiados de manera segura. Induciéndoles estrés, usted aprenderá qué harán sus estudiantes realmente para resolver un encuentro violento. Usted verá que las técnicas que enseña sin estrés, pueden empezar a fallar o ser olvidadas cuando se añade tensión. Después de aplicar esta teoría a nuestro entrenamiento, me di cuenta de que algunas de las técnicas que enseño no han funcionado o no se utilizan bajo estrés. Entonces comencé a enseñar los conceptos a los estudiantes y hacerles aplicar las tácticas o técnicas que pensaron que resolvería mejor la situación. Este tipo de entrenamiento no excluye la formación de base sólida - se construye sobre ella. Enseñando primero lo básico de diversas disciplinas -armas de fuego, allanamientos, tácticas de defensa, etc.- luego enseñar conceptos bajo estrés, los estudiantes averiguarán por su cuenta qué funciona mejor para ellos. Como resultado, los estudiantes dejarán el entrenamiento sabiendo que las técnicas en las que se basan funcionarán para ellos.

¿Cuándo se convierten los encuentros desarmados en fuerza letal?

Ross Torquato

Brevard County Deputy Sheriff 16 de marzo de 2012

Al enseñarles a los oficiales a controlar a los individuos violentos, necesitamos tomar algunas decisiones filosóficas. Primero, que la vida de un oficial es más importante que la corrección política o responsabilidad potencial. Yo estaba en una clase recientemente, donde el instructor estaba enseñando el uso de una gubia de ojo cuando la situación alcanzó el nivel de fuerza letal. Llamó a la técnica "desplazamiento ocular", que suena más políticamente correcto que "gubia de ojo". Esta corrección política se ha convertido en una broma. Si usted está en una lucha por su vida y no puede llegar a sus armas, puede verse obligado a utilizar una gubia de ojo. Cuando su vida está en peligro, es más probable que recuerde el término "gubia de ojo" o "desplazamiento ocular" - pregunta tonta, sí, pero hace al punto. Además, incluso llamándola "desplazamiento ocular", podría innecesariamente –e incorrectamente- llevar a un juicio y/o al público a creer que está ocultando algo. Segundo, ¿cuándo se convierte un encuentro sin armas en fuerza letal? La mayoría de los estados y jurisdicciones definen la fuerza letal como: fuerza que pueda causar la muerte o lesiones corporales graves. La definición de su estado puede variar ligeramente, pero esta es una definición genérica. ¿Necesita esta fuerza adaptarse inmediatamente a esta definición, tal como un sospechoso se prepara para disparar el arma contra usted? Si la fuerza letal necesita ser inmediata, entonces, ¿cómo es que alguien que agarra su arma de fuego enfundada incurre en fuerza letal? La razón por la que la retención del arma es fuerza letal es porque si el


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sospechoso consigue su arma, él le disparará. Él no la está tomando para arrojarla lejos. Así, aunque no inmediata en este caso, la fuerza letal es inminente. Definiendo fuerza letal. Ahora, digamos que el sospechoso lanza un puñetazo en dirección circular y trata de golpearlo en la cara. ¿Es ésta la fuerza letal? Entiendo que algunos de los factores oficial/sujeto entran en juego, pero ¿no puede un pequeño golpe aturdir o incapacitar a una persona más grande si golpea a la persona en la mandíbula? Incluso si el sospechoso no lo aturde o derriba, ¿cree que va a dejar de atacar después de un golpe? Un golpe no puede elevarse al nivel de la fuerza letal, pero una andanada de golpes en la cabeza puede elevarse a la fuerza letal. Tenemos que darnos cuenta que no es muy común que un oficial sea atacado por un sospechoso que intenta herirlo o matarlo. Es más probable que el sospechoso esté tratando de escapar, pero no debemos estar menos preparados para defendernos. Al tratar de comprender cómo piensan los oficiales, he preguntado a las clases: "¿Cuándo una pelea (sin arma) se convierte en fuerza letal?" La mayoría de las veces, la respuesta involucra al oficial perdido, agotado, o que no tenga otra opción. Aunque justificaría el uso de la fuerza letal, puede ser demasiado tarde. El momento en que estamos perdiendo o estamos agotados, puede ser demasiado tarde. Necesitamos entender que cuando un sospechoso ataca, necesitamos estar luchando, no controlando. La mayor parte de lo que se enseña en tácticas defensivas son las técnicas de control o contra-técnicas a la resistencia del sospechoso. Un sospechoso que está tratando de hacernos daño, no se resiste, él está atacando. Pocos sistemas tratan efectivamente este tipo de sospechoso. Disciplinas combinadas. Un tercer cambio que necesitamos hacer es en la enseñanza de las disciplinas de fuerza. ¿Por qué todavía tenemos instructores de armas de fuego e instructores de tácticas de defensa en vez de instructores de uso de la fuerza? Yo entiendo que los fundamentos de las habilidades con armas de fuego y las habilidades tácticas de defensa se deben enseñar por separado, pero una vez aprendidos, los estudiantes deben estar en clases sobre "usar la fuerza" o cursos de "resolución de encuentros violentos". Al mantener este entrenamiento por separado, los funcionarios pueden no entender cómo y cuándo usar la fuerza mortal a menos que el sospechoso tenga una pistola o un cuchillo. Típicamente, la mayoría de los instructores de armas de fuego enseñará todo lo que necesita saber cuándo su arma de fuego está fuera de su funda. La mayoría de los Instructores de tácticas defensivas enseñan a controlar sospechosos cuando se resisten. En base a estos métodos de enseñanza, ¿quién enseña a usar la fuerza mortal cuando el oficial se encuentra de espaldas, luchando por su vida y perdiendo? Creo que estamos haciendo progresos en esta área, pero pocos instructores enseñan cómo desenfundar un arma de fuego mientras alguien está sobre usted tratando de pegarle un puñetazo, herirlo, estrangularlo o desarmarlo. Los instructores de armas de fuego pueden decir que es una cuestión de tácticas defensivas porque el funcionario se encuentra físicamente comprometido con el sospechoso. Los Instructores de tácticas defensivas pueden tratar de enseñar cómo contrarrestar o escapar al sospechoso, diciendo que si la fuerza letal es necesaria, los sujetos con armas de fuego enseñarán esas técnicas. Cada instructor dirá que es el área de capacitación del otro instructor. Como resultado, esta y mucha fuerza transicional están siendo pasados por alto. Esto lleva a los oficiales a tratar de encontrar una solución mientras son atacados. Haciendo esos cambios filosóficos en nuestro entrenamiento, podemos inculcar la mentalidad adecuada en nuestros oficiales. Los oficiales están siendo heridos y muertos a un ritmo alarmante de este año. Tenemos que darles las habilidades para defenderse.

¿Cómo lograr la "aptitud funcional"? No importa en qué tipo de condición se encuentra, lo importante ahora es prepararse para las peleas y

persecuciones a pie que seguramente ocurrirán en el próximo turno.


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Brian Willis Subdirector Ejecutivo de ILEETA

Law Officer Trainer of the Year for 2011 26 de febrero de 2010

Desde que era niño quería ser policía, y aproximadamente a la edad de 18 años decidí que realmente quería seguir ese sueño. En mi juventud, sin embargo, no fui un gran atleta y, de hecho, durante la mayor parte de ella yo era el gordito ‘nerd’ que quería hacer deporte, pero no tenía mucho talento o el atletismo necesario. Para llevar a cabo mi sueño que tuve que comenzar con tres tareas fundamentales: 1. Dejar de fumar. 2. Ponerme en forma. 3. Completar el ciclo secundario. Dejar de fumar resultó ser el más fácil de los tres - Acabo de dejar de fumar de golpe y nunca miré hacia atrás. En mi búsqueda para ponerme en forma comencé a correr y durante un período muy corto de tiempo logré recorrer muchos kilómetros, corrí un montón en las escaleras, jugué mucho hockey, hice algunos ejercicios de resistencia, y perdí 30 kilos. Yo había dejado la escuela secundaria en el undécimo grado, así que mientras yo estaba poniéndome en forma, también completé un año y medio de clases en seis meses. Yo había cumplido mis tres tareas y ahora era el momento para iniciar el proceso de ser contratado. En mis pruebas pre-empleo me fue muy bien en el test del componente bicicleta y lo hice bien en los demás elementos. Al entrar a la capacitación a los 22 años pensé que estaba en muy buena forma, y el componente físico de la academia incluyó correr mucho, lo que apoyó mi creencia. A pesar de que estaba aeróbicamente bien acondicionado y tenía buen estilo de vida, pronto supe que yo no estaba en buena forma para el trabajo y tenía muy poca aptitud funcional. Lo que he aprendido con el tiempo -y como resultado de peleas, persecuciones a pie (ganadas y perdidas) y otras experiencias- es que hay dos claves para la aptitud funcional: • Los profesionales de la aplicación de la ley necesitan una sólida base tanto de la capacidad aeróbica como de la anaeróbica. • Los profesionales de la aplicación de la ley deben desarrollar una comprensión de la diferencia entre el estilo de vida física y la aptitud funcional (y entonces centrarse en la aptitud funcional) La aptitud funcional se refiere al entrenamiento del cuerpo y sus sistemas de energía en la preparación para las confrontaciones de alta intensidad y corta duración que los profesionales de la aplicación de la ley en las que a menudo se encuentran. Además de fuerza y resistencia, los profesionales de la ley también necesitan desarrollar la velocidad explosiva y la potencia en preparación para los eventos de combate. Para lograr esto, los funcionarios deben comenzar a alejarse de algunas de las actividades físicas tradicionales llevadas a cabo a menudo en las academias de formación y avanzar más hacia actividades de la aptitud funcional que los prepararán mejor para su trabajo. Los ejemplos incluyen: • Limitar la cantidad de entrenamiento cardiovascular de largo aliento, en estado estacionario (carreras largas y lentas) e incluir más de entrenamiento con intervalos de alta intensidad. • Limitar los programas de entrenamiento tradicional de fuerza que a menudo incluyen una serie de ejercicios tipo fisicoculturismo - ésos pueden ayudar a los funcionarios a ser más fuertes y verse mejor, pero


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en el terreno, un oficial nunca estará sobre una superficie plana y estable con un cinturón de peso, elevando las correas y con un vigilante. En una persecución pie o en una pelea, el oficial probablemente estará en superficies desiguales, en las posiciones de estabilidad comprometida, portando el cinturón con equipamiento, chalecos antibalas, y cerca de 20 kilos de material extra. Esas condiciones destacan la importancia de incluir ejercicios compuestos, levantando formas extrañas de objetos, así como el entrenamiento balístico y pliométrico que desarrollan la velocidad explosiva, la potencia y la fuerza funcional. Mirando hacia atrás a mis 25 años como oficial de policía de tiempo completo y mis últimos 20 años como entrenador de la aplicación de la ley, la aptitud funcional es algo que me gustaría haber conocido al principio de mi carrera. Si hubiera sabido entonces lo que sé ahora sobre la fuerza y la aptitud funcional, habría impactado a varias áreas incluyendo: • Me gustaría haber ganado algunas persecuciones a pie que he perdido. • Algunas de las peleas que tuve habrían sido mucho más cortas de lo que fueron. • El entrenamiento táctico básico del oficial hubiera sido más fácil. • Mi cuerpo hubiera estado mucho mejor en numerosos cursos de habilidades físicas que he llevado a cabo como estudiante y como instructor. Pese a sus años de servicio, si no participa aun en las actividades de la aptitud funcional, ahora es un buen momento para comenzar. Aquí hay una lista de algunos recursos policiales para obtener información sobre la aptitud funcional: • Steven Mosley - www.combathard.com • Louis Hayes - www.trinitytraining.blogspot.com • James Di Naso - www.pkcotraining.com • Kathy Vonk - www.loukatactical.com • Jeff Martone - www.tacticalathlete.com Lo importante ahora es estar funcionalmente en forma y mantenerse funcionalmente apto.

No se trata de mí – y, sin embargo, ¡es todo sobre mí! Aunque es difícil no tomar personalmente todos los insultos y ataques verbales y físicos, es importante entender que no se trata de usted - se trata de la rabia de otro, los prejuicios, la ira, los miedos, y otras

cuestiones.

Brian Willis 24 de noviembre de 2010

Cuando comencé mi carrera en el Servicio de Policía de Calgary donde me gradué en 1979, fui asignado al Distrito "E" en el centro de Calgary. El departamento no le había permitido a los reclutas ir desde el curso de adaptación hasta el distrito centro de la ciudad durante varios años – ellos sentían que muchos reclutas no eran capaces de manejar lo que enfrentarían allí a diario. Eso cambió cuando un puñado de miembros de mi clase fue asignado para ir al centro. Mi área de patrulla primaria era el extremo oriental del centro de la ciudad. Era la zona geográfica de patrulla más pequeña en la ciudad, pero había una alta concentración de bares de mala muerte, una gran cantidad de actividad con la droga, la violencia, la prostitución y otras actividades criminales. Justo antes de que me graduara, el ex comandante de esa zona me llevó aparte y me


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dijo que me tomara una foto con todos mis dientes por el riesgo de perder unos pocos temprano en mi carrera, en una de las muchas peleas en las que estaba seguro me encontraría. Mi primer pensamiento fue que no tenía confianza en mis habilidades y lo tomé personalmente. Sin embargo, mientras estaba sentado atrás y reflexionaba, me di cuenta: "No se trata de mí". Él simplemente estaba tratando de prepararme para lo que iba a ser una experiencia reveladora para un novato de 22 años de edad. Años después, en una entrevista de promoción, le recordé la historia y compartimos la risa, y yo sonreía para hacerle saber que todavía tenía todos mis dientes. Mi primer oficial instructor de campo odiaba tener que trabajar conmigo. De hecho, no me habló durante la primera semana que trabajamos juntos. Hubo noches muy largas, porque éramos el último turno nocturno para el cambio del coche en el distrito. Eso significaba que comenzábamos media hora después que todos los demás y nos íbamos a casa media hora más tarde en la mañana. Como oficial joven con ganas, era difícil no tomar personalmente su resentimiento por tener que trabajar conmigo. La realidad era que "no era por mí". Tenía que ver con una serie de factores, entre ellos tener que renunciar a un gran socio a largo plazo para trabajar con el nuevo tipo. Se trataba de la documentación adicional que viene con ser un oficial instructor de campo. Se trataba de la responsabilidad adicional de ser un oficial instructor de campo. En una zona de patrulla muy ocupada y muy violenta, era también sobre cómo vivir con la incertidumbre de cómo su pareja va a reaccionar y si iba a ser capaz de manejar. Nunca fue sobre mí como persona. Al final de las seis semanas, habíamos crecido hasta convertirnos en buenos amigos y hemos aprendido mucho uno del otro. Al principio de mi carrera, tuve un momento difícil para no tomar personalmente todos los insultos y los ataques verbales y físicos. Con el tiempo, me enteré que no se trataba de mí. De hecho, no tenía nada que ver conmigo personalmente. Tenía que ver en parte con el hecho de que era un policía, pero era sobre todo acerca de la ira de la otra persona, los prejuicios, la rabia, los miedos, y otras cuestiones. Ocurrió que yo era el que estaba allí para llevarme su cerveza, su droga, su cónyuge o su libertad. Era más difícil cuando las víctimas o la gente a la cual usted notificaba de una muerte en la familia, se volvían contra usted. Una vez más, no se trataba de mí. Era acerca de sus temores, su rabia, sus sentimientos de ser violada y su necesidad de arremeter contra alguien o algo. Ocurrió por ser el objetivo más próximo. Los mayores desafíos fueron cuando los sujetos me escupían en la cara y amenazaban a mi familia. En una ocasión, un sujeto en el área me dijo que iba a averiguar a qué escuela iban mis hijos, para degollarlos. Esos ataques son muy personales, pero sobre mí solo si yo dejaba que lo sea. Fue realmente sobre el sujeto que trataba de molestar a la policía que lo detuvo para que me diga o haga algo que volvería a atormentarme o pondría en peligro la causa penal. Con el tiempo, también tuve que aprender a no tomar personalmente la política interna. Es fácil quedar atrapado en gemidos, gruñidos, quejas y más quejas sobre "el departamento", especialmente cuando usted es objeto de una investigación interna. Como todo el mundo, a veces, quedé atrapado en la mentalidad de: “¡Ay de mí. La agencia no se preocupa por mí!” Por supuesto, la agencia no se preocupa por mí. La agencia es solo una entidad y es incapaz de cuidar. Como bien dice Dave Smith: "Ama a tu trabajo, pero no ames a tu agencia porque ella no puede responderte con amor". En su poderoso libro, "Supervivencia emocional para la Aplicación de la Ley" (Emotional Survival for Law Enforcement) el Dr. Kevin Gilmartin nos recuerda que “nadie concluirá su carrera con su virginidad profesional intacta. Todo el mundo será ‘jodido’ por la organización, tarde o temprano”. Una vez que aceptamos esa realidad, podremos prepararnos para ella y combatirla con eficacia cuando suceda. A medida que progresé a través de mi carrera y me convertí en un instructor, siempre tenía que recordar que la capacitación no era sobre mí. Siempre es sobre el estudiante. Como instructor, a nadie le importa lo listo que es o cómo está calificado. Lo que importa es si se preocupa por ellos y tiene la capacidad para enseñarles las habilidades que pueden salvar sus vidas.


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Esto se remonta a uno de los temas clave de los cursos que enseño: Usted no ha enseñado hasta que ellos no hayan aprendido. En retrospectiva, me podría haber ahorrado una gran cantidad de estrés en los últimos años si yo simplemente hubiese entendido esta filosofía sencilla: No se trata de mí. Mientras escribo esto y reflexiono sobre las muchas lecciones que he aprendido en los últimos 30 años, me he dado cuenta de que no se trata de mí, es todo acerca de mí. ¿Confundido? Esto es lo que quiero decir cuando digo que es todo sobre mí: • Ser profesional, a pesar de los insultos o ataques, es una opción personal. • Cómo reacciono a las políticas en la organización, es una opción personal. • Comprobar mi ego en la puerta como instructor, es una opción personal. Al final, siempre es sobre la elección; y lo que me ayudará a hacer una mejor elección es responder la pregunta más poderosa de la vida: ¿Qué es importante ahora? Lo importante ahora -en cuanto a las influencias externas y presiones- es entender que "no se trata de mí". Lo importante ahora -desde una perspectiva personales entender que "todo es acerca de mí y las decisiones que tomo".

No deje que el fantasma de nadie...

Brian Willis 18 de mayo de 2012

Durante la Semana de la Policía, las familias, amigos y compañeros de trabajo de los oficiales caídos se reunirán en sus hogares, pueblos y ciudades y en Washington, D.C., para recordar a aquellos que han perdido la vida en el cumplimiento de su deber. Las muertes en actos del servicio continúan devastando a cónyuges, hijos, padres, hermanos, amigos y socios de aquellos que han muerto en el cumplimiento de su deber. Mientras nos detenemos para reflexionar y tomarnos el tiempo para honrar a esos oficiales y sus familias que han hecho el sacrificio supremo, debemos hacernos la pregunta más poderosa de nuestra vida: "¿Qué es importante ahora?" Cuando me pregunto, la cita “No deje que el fantasma de ningún hombre o mujer diga que mi entrenamiento falló” inmediatamente viene a mi mente. No estoy seguro del origen de esta cita, pero yo lo uso en mi programa de Excelencia en el Entrenamiento como un desafío emocional para los instructores. Al hacer una pausa para honrar a los caídos, así como a aquellos que quedan, examinemos tres versiones de esta cita. No deje que el fantasma de ningún hombre o mujer diga que mi entrenamiento falló. Lo que importa ahora es interrogar y disecar minuciosamente los incidentes en los que los oficiales mueren en acto del servicio. Esto no es para criticar al funcionario, sino para aprender de su experiencia y honrarlo mediante el uso de este incidente para prevenir muertes similares. Use lo que aprende de esas sesiones informativas para examinar sus propios programas de entrenamiento. ¿Qué está haciendo en el entrenamiento que potencialmente podría resultar en un oficial muerto? ¿Está su programa de armas de fuego aún centrado en la capacitación de funcionarios de calidad en lugar de entrenarlos para ganar un tiroteo? ¿Está su programa de conducción aún centrado en la velocidad en lugar de la toma de decisiones? Busque las brechas en su entrenamiento. ¿Qué no está haciendo en el entrenamiento que potencialmente podría resultar en un oficial muerto? ¿Está fallando en enseñar combate en cuartos cerrados? ¿Está fallando al enseñar destrezas fracasadas y la transición entre sistemas de armas? ¿Está usted fallando al enseñar el


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uso de armas de oportunidad? ¿Está fallando al enseñar la toma de decisiones? ¿Está fallando al enseñar abordajes del lado del pasajero en los controles de ruta? ¿Está a bordo con programas como “Debajo de los 100” (Below 100), que están diseñados para reducir las muertes en actos de servicio? No deje que el fantasma de ningún hombre o mujer diga que mi entrenamiento falló. A menudo pensamos el coraje en términos de actos físicos de bravura. Rara vez quedamos cortos en el ámbito de los actos de valentía. Es acerca de coraje moral y coraje de carácter. Es sobre el cuidado suficiente de su hermano y hermana profesional de la aplicación de la ley y sus familias tener conversaciones valientes. Las conversaciones valientes con ese funcionario en su turno que nunca usó su chaleco antibalas, siempre conduce muy rápido o nunca usa el cinturón de seguridad. Cuando mira cómo mueren los oficiales de la ley cada año, las conversaciones valientes tienen el potencial de salvar numerosas vidas de oficiales cada año. Son esas conversaciones valientes las que tienen la mayor capacidad para lograr que los oficiales reduzcan la velocidad, se abrochen el cinturón, lleven su chaleco antibalas cada día, y reducir drásticamente las prevenibles muertes en actos del servicio. No deje que el fantasma de ningún hombre o mujer diga que mi entrenamiento falló. "¿Qué es importan te ahora?", es entender que el liderazgo nunca es acerca del grado, posición o título. El grado puede colocarlo en una posición de liderazgo, pero no lo convierte en un líder. Liderazgo es acerca de la acción y la interacción humana. Liderazgo consiste en hacer lo correcto aun cuando no es popular u oportuno. Liderazgo consiste en tener una política institucional de uso obligatorio del chaleco antibalas y no sólo para obtener fondos federales para comprar armas, sino porque es lo correcto. Liderazgo consiste en modelar el comportamiento que espera de sus funcionarios, tales como el uso de su armadura corporal todos los días. Liderazgo es sobre capacitar y educar a sus oficiales. Liderazgo es sobre implementar y apoyar programas de intervención temprana para asegurar que los oficiales tengan acceso a los recursos que necesitan. El liderazgo consiste en comprender que el entrenamiento es una inversión en la seguridad y el profesionalismo de sus funcionarios, la seguridad de sus ciudadanos y la cultura profesional de su agencia. El liderazgo consiste en hacer a las personas responsables de su pobre desempeño y por su comportamiento peligroso. El liderazgo consiste en tomar el comando y el control de los incidentes. El liderazgo consiste en tomar decisiones difíciles como ordenar que cese una persecución que se ha vuelto demasiado peligrosa o en parar a los agentes que realizan un allanamiento sin recursos suficientes o inteligencia adecuada. El liderazgo consiste en ordenar a los patrulleros que bajen la velocidad, innecesaria cuando una llamada ya está bajo control. El liderazgo es acerca de las conversaciones valientes. Un liderazgo débil obtiene oficiales muertos. La falta de liderazgo obtiene oficiales muertos. Un liderazgo fuerte salva vidas. Mientras se toma el tiempo para recordar a los caídos, tómese el tiempo también para hacerse la pregunta más poderosa de su vida, "¿Qué es importante ahora?", y para reflexionar sobre su entrenamiento, su coraje y su liderazgo.

¿Cuál es la diferencia entre el disparo «ofensivo» y el «defensivo»? Cuando está implicado a fondo, mentalmente, físicamente y visualmente, en un tiroteo reactivo verdadero,

no hay diferencia entre el disparo "ofensivo" y el "defensivo".

Dr. Ron Avery

11 de junio de 2012


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Una de las discusiones que parece surgir con bastante frecuencia es sobre el disparo "ofensivo" versus "defensivo". Esas discusiones siguen un tema general, que cuando usted se "asustó" o "sorprendió", reaccionará o se comportará de manera diferente en sus respuestas en comparación con cuando está "listo" y anticipándose a la acción por parte de un sujeto (una llamada por un hombre-con-una-pistola, una llamada a SWAT, etc.) Algunos entrenadores han tratado de capitalizar la respuesta por "sobresalto" y nos dicen qué vamos a hacer y entonces cómo usar la respuesta para fluir hacia una estrategia defensiva. Otros han tratado de justificar una respuesta por defecto, por lo general el punto de disparo, como un ejercicio de acción inmediata para compensar la "transición" desde la defensa a la ofensiva organizada. Otros han expresado la opinión de que no hay diferencia entre el disparo "ofensivo" versus "defensivo". Un disparo es un disparo, punto. Obtuve muchas sugerencias sobre cómo debemos estar siempre preparados para cualquier cosa y que la sorpresa no es una opción. Los códigos mentales de colores, el acondicionamiento mental, la conciencia de la situación, así como un sinfín de rutinas de práctica y ejercicios de entrenamiento están diseñados para hacer que la gente se sienta mejor acerca de los peligros muy reales que enfrentamos en la calle todos los días. ¿Hay alguna diferencia? En algún momento, invariablemente me pregunto: "¿Qué piensa usted, Ron? ¿Hay alguna diferencia entre un encuentro sorpresivo con disparos ofensivos versus defensivos?" Bueno, te diré lo que pienso. Hablaré de experiencias personales, experiencias de entrenamiento, conversaciones con colegas y mi propia investigación. Puede haber una diferencia si fuimos verdaderamente sorprendidos mentalmente -no estaba listo para responder cuando ocurrió- y que eso causa una ansiedad extrema. Físicamente, cuando el estado mental no está en nivel de la tarea de procesamiento -y cuando la mente subconsciente no está bien entrenada- se verá reflejado en las destrezas sub-par. Cuando está implicado a fondo, mentalmente, físicamente y visualmente, en un tiroteo reactivo verdadero, no hay diferencia entre el disparo "ofensivo" y el "defensivo". Si procesa la situación y se enfoca en el trabajo bajo coacción. Ansiedad: Un culpable primario. La ansiedad es un factor primario causante en la falla en el desempeño y también es un factor motivador en muchos que buscan entrenamiento o una respuesta para mitigar su ansiedad. Los altos niveles de ansiedad pueden hacer que las personas tomen malas decisiones, defrauden sus habilidades y se desempeñen en forma mediocre. En lugar de tratar de llegar a "las recetas de entrenamiento" todo el tiempo para que la gente se sienta mejor temporalmente, vamos a trabajar en las aplicaciones principales que crean soluciones más permanentes y viables. La reducción de la ansiedad se logra con compromiso, aceptación, conciencia situacional, preparación y pensamiento adaptativo/ experiencia. Compromiso con la misión. No hay garantías de que vaya a vivir en una situación dada. Pero usted tiene una opción de cómo elige actuar. Como me gusta decir: "Tu voluntad es lo que te lleva a través de la puerta, tus habilidades –espero- te harán regresar fuera de nuevo". Sus valores y creencias -así como la fuerza de las creencias y la conexión emocional que tiene con ellos- son un motor en cualquier situación. Si usted está realmente comprometido a cumplir con su deber e interviene en las situaciones potencialmente peligrosas porque realmente cree que lo que está haciendo es lo correcto, entonces la ansiedad se reduce considerablemente. Dicho simplemente, usted ya ha hecho su elección de lo que va a hacer. No significa que no hay temor. Significa que usted elije actuar de cara al miedo y eso se llama coraje. Parte de nuestras creencias y sistema de valores tienen que ver con cómo te valoras. No voy a hablar por los demás, pero voy a decir lo que pienso. Yo no me pongo como # 1. Puse a los demás como # 1. Cuando los demás están en peligro, valoro sus vidas y con mucho gusto me pongo en riesgo por mi país / sociedad, mi familia y mis amigos. Conciencia de la situación. No voy a entrar en éste demasiado porque es obvio. El mundo es un lugar potencialmente peligroso y es nuestra responsabilidad mantener una conexión con lo que está sucediendo a nuestro alrededor. Cuando veo a los oficiales con los ojos pegados a sus teléfonos y mensajes de texto mientras almuerzan, adoptan una mala posición y, por lo general, están ajenos a lo que sucede a su alrededor, sólo puedo menear la cabeza. Vivir en condición OWAC (operating without a clue, operar sin la menor idea) no es una estrategia para la longevidad. Si usted necesita un tiempo de inactividad, vaya a algún lugar donde esté protegido de las aproximaciones de la gente o pueda ver a alguien que viene de lejos hacia


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usted a través de un largo camino. El código de colores de Jeff Cooper es un excelente tratado sobre la mentalidad, y la prontitud situacional y operativa. Preparación mental y operativa. Como ha sido dicho en el pasado: "La preparación es un estado de la mente, no una abundancia de suministros". Al abordar la cuestión del disparo ofensivo versus el defensivo, todo se reduce a la preparación mental y física. Estoy hablando de los principios aquí, no de los métodos o estrategias. Estar preparado, no 'preparándose': • Cuando espera que ocurra algo y ocurre, y usted sabe qué hacer, hay muy poco tiempo para demorarse. • Espere que algo suceda cuando usted sube a un coche, hace un contacto, va a un bar para un refrigerio en la noche o se sienta en un restaurante. Eso no quiere decir que saque el arma. Esto significa estar preparado para un posible encuentro y tener un plan para la eventualidad de que los sucesos vayan a ocurrir. Este es un modo de pensar. • Enseño a mis alumnos a comenzar con la posibilidad de la fuerza letal en mente cuando entra a cualquier situación y ve por primera vez desde la perspectiva de la fuerza potencialmente mortal. ¿Cuál es su plan? Entonces deje que la situación le muestre el nivel correcto de fuerza que se requiere, si es el caso. Entrenamiento Experiencial y Entrenamiento Técnico. • Entrenamiento experiencial es la instrucción en un entorno similar al que encontrará en el mundo real. No necesita ser exacto si usted tiene una mentalidad adaptativa y puede usar su imaginación apropiadamente. La aclimatación es la clave aquí para permitir que la gente aprenda a procesar, decidir y operar a la velocidad de los compromisos del mundo real. • Entrenamiento técnico es la instrucción en destrezas de tiro verdaderamente reactivas a la velocidad del tiroteo. Es realmente necesario; y veo una gran brecha entre la verdadera velocidad de entrenamiento en tiroteo y la velocidad que la mayoría de la gente tiene en instrucción. Tomar atajos en el entrenamiento tratando de enseñar las técnicas de tiro rápido y sucio, no lo preparará para la totalidad de lo que enfrentará cuando tenga que hacerlo de verdad. Yo puedo hablar de la experiencia de la calle del mundo real sobre cómo entrena, que hace una diferencia muy real en cómo se desempeña. Experiencia. • La experiencia le permite aclimatarse a las situaciones y acostumbrarse a los peligros y distracciones, y ganar la confianza mediante la aplicación exitosa de la habilidad y el juicio. La calma bajo presión se construye tanto por el entrenamiento y la experiencia y saber qué esperar y cómo lidiar con ella. • La experiencia puede ser un problema cuando se encuentra con algo que está fuera de su experiencia y tiene que manejar la situación. Aquí es donde el pensamiento de adaptación entra en juego. Mediante el uso de su experiencia y los principios correctos de entrenamiento, usted puede adaptar su pensamiento a las exigencias de la misión a mano y llegar a una buena estrategia. En resumen, la preparación mental y física minimizará una respuesta deficiente a situaciones peligrosas. Afirmar el compromiso con la misión, entrenar con el nivel adecuado de intensidad, junto con información de alta calidad y capacitación es el camino hacia la verdadera preparación. Mi primer sargento, Dalton Carr, me dijo directamente hace muchos años: "Ron, haga que el primer disparo cuente, puede no conseguir un segundo". Nunca lo olvidé. Disparo ofensivo o defensivo, a todo eso se reduce.


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Destrezas para el tiroteo: Conciencia situacional y enfoque en la tarea El entrenamiento de fuerza-contra-fuerza y entrenamiento en tiroteo reactivo ayuda a desempeñarse mejor

en tiroteos

Ron Avery

12 de agosto de 2013 Los instructores de armas de fuego han estudiado durante mucho tiempo las mejores formas de aumentar la pericia de tiro en situaciones de tiroteo. Las teorías, estudios y experiencia nos han ayudado a crecer en conocimiento y conciencia de los aspectos mentales y físicos del desempeño. He tenido muchos alumnos que participaron en tiroteos, así como informes de campo de muchos amigos y colegas de la policía y de otras comunidades que han estado en tiroteos. Mis propias experiencias como oficial de la ley y entrenador me han dado algunas ideas cruciales. Distorsión de la memoria. Todos sabemos sobre la conciencia de la situación y de lo importante que es mantenerse en sintonía con las personas y el medio ambiente que le rodea y lo que está pasando en el momento. Todos hemos escuchado "informes posteriores a la acción" sobre tiroteos que van desde "no recuerdo mis miras o haber apuntado o jalado el gatillo ni nada" a "recuerdo haber visto mi mira claramente en su pecho a corta distancia y presionar disparos controlados a él". El Dr. Bill Lewinski del Instituto de Ciencias de la Fuerza (Force Science Institute) nos ha ayudado con los aspectos mentales de los encuentros de fuerza letal y la distorsión de la memoria. Una de las cosas claves que he observado en mis estudios sobre el tema es la habilidad de los ejecutantes de alto rendimiento para centrarse en la tarea sobre la ejecución de una destreza, incluso en una situación que evoluciona rápidamente, mientras que otros quedan tan atrapados en el momento que no pueden centrarse con éxito. Para los tiroteos, este enfoque significa quedarse en la cima de la situación en desarrollo, percibiendo y orientándose rápidamente, y luego respondiendo a la amenaza e impactando tan pronto como sea posible. Esto requiere un cambio mental muy rápido desde un conocimiento de la situación (situational awareness) general a un enfoque específico (task focus) en la tarea de disparar para impactar y parar. Como entrenador presto mucha atención a la habilidad del estudiante para la transición de ida y vuelta entre el conocimiento situacional y el enfoque en la tarea. Una de las claves para entrenar exitosamente a un alto nivel de concentración en la tarea reposa en el entrenamiento en ambientes que simulan las condiciones en las que se va a operar. Esto necesita poner al operador bajo estrés y presión hasta que se aclimate a las condiciones y sea capaz de operar en un estado de relativa calma - tomando decisiones críticas bajo esas condiciones, así como ejecutando las destrezas de tiro con altos niveles de velocidad y precisión. Práctica, práctica, práctica. Necesitamos asegurar que un operador en una situación de tiroteo sea capaz de centrarse en los diversos aspectos del ciclo de disparo reactivo para que hagan disparos rápidos y precisos en lapsos muy cortos - no sólo lanzando balas en la dirección general de la amenaza. En el entrenamiento que conduzco, busco ayudar a mis alumnos a centrarse en los aspectos mentales del "control bajo presión" así como en los aspectos técnicos del tiroteo. • ¿Qué ha visto (y recuerda) sobre la pistola en relación con el objetivo? • ¿Qué clase de cuadro de situación tuvo usted (o usó punto de disparo o point shooting)? • ¿Cómo se sintió al manipular el gatillo? • ¿Qué empuñadura de agarre y plataforma de tiro usó? • ¿Qué recuerda después del evento en términos de tareas realizadas?


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Entonces tenemos que ponerlos en situaciones una y otra vez hasta que puedan recordar muchas más cosas con mucho mayor detalle. He encontrado que este enfoque puede ayudar a un tirador a ser mucho más competente en sus habilidades de tiro en los eventos de fuerza letal, así como afinar su habilidad para recordar toda la situación con mucha más precisión. ¿En qué tipos de entrenamiento se involucra que lo pone bajo estrés y presión y le ayuda a obtener mejores resultados en la calle? ¿Se involucra en las competencias de tiro, artes marciales, deportes de competición, meditación, etc.? ¿Con qué frecuencia tira usted? ¿Cuántos disparos en una sesión? ¿Usa un temporizador? ¿Cuánto duran las sesiones? ¿Mantiene un registro de su progreso y destrezas o simplemente dispara? ¿Qué tipo de escenarios de fuerza-contra-fuerza (force-on-force) le resulta más útil?

Evaluación de la amenaza pre-contacto y el «arte de la fuerza»

Dr. Ron Martinelli

14 de enero de 2011 El Doctor Ron Martinelli es un ex policía y detective con más de 22 años de experiencia en la calle principalmente con el Departamento de Policía de San José (California). El Dr. Martinelli es un exdirector de una academia de POST y un instructor de uso de la fuerza con múltiples certificados que es también un criminólogo forense y un calificado experto en prácticas policiales especializado en oficiales involucrados en tiroteos y grandes casos de usos de la fuerza. Está Certificado en Trauma Forense; diplomado en la Academia de Expertos en Estrés Traumático; analista certificado en Uso de la Fuerza en el Centro de Ciencias de la Fuerza y es un miembro reconocido del Colegio Americano del Instituto de Expertos Forenses. El Dr. Martinelli es reconocido nacionalmente como un experto en la psicofisiología y el estrés por las respuestas inducidas. Los oficiales de Policía de San Francisco respondieron a una llamada de un hombre agitado, mentalmente perturbado y discapacitado en silla de ruedas armado con un cuchillo y destrozando los coches aparcados en una calle del centro de la ciudad. Un grupo de al menos seis oficiales uniformados y vestidos de civil, localizaron y rodearon al hombre, que permanece sentado en su silla de ruedas. Los intentos iniciales de los oficiales para comunicarse con el hombre enojado, al parecer delirante, y armado, resultan ineficaces. Los oficiales aíslan y contienen al sujeto, que sigue armado y amenazante, pero confinado a su silla de ruedas motorizada. Por alguna razón desconocida, los oficiales reducen su "brecha reaccionaria" de seguridad y se acercar al hombre. A falta de dispositivos de control electrónico (ECD, electronic control devices), los oficiales deciden usar un arma paralizante consistente en un proyectil de bolsa como su opción de fuerza. Su opción de fuerza de reserva es la fuerza letal, por lo que varios de los oficiales también están cubriendo al sujeto con sus armas de fuego desenfundadas. Durante el curso de la confrontación con el hombre, los oficiales disparan un proyectil bolsa de aturdimiento al sujeto a medida que avanza hacia ellos, lo que parece ser ineficaz. En un momento dado, uno oficial se mueve para comprometerse físicamente con el sujeto. En respuesta, el hombre "discapacitado" responde rápidamente con una cuchillada, golpeando e hiriendo al oficial. A continuación, el sujeto arroja el cuchillo en dirección a los oficiales y comienza a girar su silla de ruedas. Los funcionarios responden a la cuchillada con fuerza mortal, disparándole e incapacitando al sujeto. El oficial herido y su agresor son transportados a un hospital local para recibir tratamiento. De acuerdo con nuestra sociedad tecnológica avanzada, mucho del incidente -incluyendo al oficial involucrado en el tiroteo- fue capturado en video e inmediatamente apareció en Internet a través de YouTube para la revisión y la crítica de todos. Es el segundo incidente en una semana involucrando a oficiales


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del Departamento de Policía de San Francisco. Al día siguiente, el Jefe de Policía de San Francisco George Gascón - Gascón se ha convertido desde entonces en el Procurador del Distrito de la Ciudad- brindó una conferencia de prensa en la que le dijo a los medios de comunicación reunidos que el incidente podría haberse evitado si sus oficiales hubiesen estado armados con pistolas TASER. Mi respuesta a este episodio y a los comentarios del jefe son: “Tal vez y tal vez no. Todo depende”. Pero, ¿de qué depende? Los policías y los ciudadanos a los que protegemos viven y trabajan dentro de una sociedad impulsada y dependiente de la tecnología avanzada. Es cierto que la tecnología ha sido muy útil durante estos años para la aplicación de la ley. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los avances tecnológicos en las opciones de fuerza para la aplicación de la ley -como los dispositivos de control electrónico- no son una panacea para un buen entrenamiento en tácticas de seguridad de los oficiales, la percepción precisa de la amenaza y la gestión de la fuerza. Reglas relacionadas con "El Arte de la Fuerza". Como ex oficial de policía, instructor durante 30 años sobre uso de la fuerza, y Analista Certificado en la Fuerza especializado en la investigación de los tiroteos en que participan un oficial y los principales casos de uso de la fuerza, he utilizado e investigado el uso táctico adecuado de los ECD y otras opciones de la fuerza. También soy un gran defensor de armar a policías con ECD. También simpatizo y apoyo los intentos de la Policía de San Francisco para presionar a la Comisión de Policía de esa ciudad y su notoriamente liberal Junta de Supervisores para permitir que sus oficiales agreguen las TASER a sus opciones de fuerza. He revisado un número de casos en San Francisco y en otras ciudades donde el uso táctico de un ECD u otras formas de armas menos letales que han resuelto muy probablemente la confrontación sin que los funcionarios tengan que recurrir a la fuerza letal. Sin embargo, también soy consciente de que la adición de ECD al arsenal de la fuerza de cualquier departamento es sólo una de una serie de elementos importantes que deben ser empleados para mejorar la seguridad del oficial y de la ciudadanía, mientras que mitiga la exposición al riesgo. Me hubiera gustado que todos consideráramos una estrategia de seguridad que bien podría haber evitado a la policía de San Francisco el hecho más reciente y no cuesta nada. Esta estrategia es el concepto de “Evaluación de la Amenaza Pre-Contacto”. Hay algunas reglas fundamentales asociadas con el concepto de seguridad de los oficiales para la evaluación de la amenaza pre-contacto - el resto de este artículo pretende que los policías y los jefes policiales den una breve mirada a cada una de ellas. Regla 1. "Usted no puede tratar de controlar a los demás a menos que esté primero en el control (emocionalmente)". Los sujetos enojados, agitados o con trastornos emocionales son a menudo afectados por un desequilibrio químico naturalmente producido o externo (ilícito o psicotrópico) que hace que presente síntomas cuando se ven amenazados. Sin embargo, los oficiales que no están capacitados o carecen de confianza en sus tácticas de seguridad y destrezas para la gestión de la fuerza permiten ser "emocionalmente capturados" por la resistencia de un sujeto. Cuando esto sucede y experimentan una "respuesta fóbica escalada" (miedo/amenazas), se auto inyectan sustancias químicas de supervivencia, como la adrenalina, la epinefrina, las endorfinas y la dopamina eufórica. Esas sustancias químicas naturales, que también están afectando a los sujetos con los que tratan, pueden causar que los oficiales experimenten distorsiones visuales y temporales. La descarga aguda de los simuladores puede causar que los oficiales pierdan la "conciencia situacional" y presenten híper vigilancia (pánico y confusión). Esto podría llevar a la aplicación de fuerza excesiva y fallas potenciales de la memoria. Los funcionarios que participan en cualquier confrontación necesitan centrarse tanto en el mantenimiento de su "centro y balance", como lo hacen al tratar son sujetos resistentes o amenazantes. Regla 2. "Manipule el medio ambiente; no sea manipulado por él". Uno de los lemas de los Exploradores (Rangers) del Ejército de EEUU es "improvisar, adaptarse y superar". Los agentes de policía son desafiados a menudo en el campo por las circunstancias únicas y de rápida evolución para las cuales pueden carecer de los equipos tácticos adecuados. Sin embargo, esto no significa que carezca de "conciencia situacional" o que no pueda adaptarse inmediatamente y modificar sus tácticas para en última instancia superar y controlar a


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un sujeto resistente o potencialmente violento. Si permite que el medio ambiente lo controle cuando tiene una clara oportunidad de controlar al medio ambiente, está condenado al fracaso. Siempre que sea posible, tómese el tiempo para pensar con claridad y "fuera de la caja" sobre qué recursos tiene disponibles; o cómo puede explotar el mismo entorno para tener éxito en forma segura y eficaz poniendo a un sujeto resistente o amenazante bajo custodia. Regla 3. Recuerde los "cinco componentes del arresto" (¿Puede cumplirlos?) En todos los escenarios de los arrestos, hay cinco componentes: 1) Verbalización. 2) Abordar al sujeto. 3) Irse “a las manos” con el sujeto. 4) Táctica de control del arresto. 5) Esposarlo / cachearlo antes de su transporte. Es al evaluar al sujeto y su situación en que debe determinar si usted y su pareja(s) pueden lograr cumplir con éxito estos cinco componentes. Este es el componente más importante de cualquier evaluación de la amenaza pre-contacto. Si después de considerar sus circunstancias, usted cree que no puede cumplir con seguridad los cinco componentes de la detención, ¡no entre en contacto! Eso no significa que no se ponga nunca en contacto; sólo significa que usted no fuerce la situación en ese momento. Por el contrario, cuando la situación lo permite, siga las reglas # 1 y # 2. Mantenga la calma, céntrese sobre el mantenimiento de la conciencia situacional, manipule el medio ambiente adaptándose y pensando ‘fuera de la caja’, y pida recursos adicionales para que pueda prevalecer finalmente y de forma segura. Regla 4. Siempre que sea posible, evite la "compresión del tiempo". Los agentes de policía tienen la costumbre de querer actuar de inmediato en el transcurso de un incidente en el que no es seguro ni prudente hacerlo. Esto habla de nuevo de una falta de "conciencia situacional". Recuerde que hay una distinción entre el peligro "potencial" y el "inminente". Mientras que todos los contactos con sujetos resistentes son potencialmente peligrosos, significativamente pocos encuentros ponen realmente al oficial en peligro inminente. El truco es seguir la Regla 1 y no ser tan "emocionalmente capturado" en un evento con un sujeto resistente o amenazante que usted se vuelva irrazonablemente fóbico y corra la adrenalina hasta el punto que se lance a una situación cuando usted no tenga que hacerlo. Ejemplos de compresión innecesaria del tiempo incluyen: 1) Moverse demasiada cerca del sujeto. 2) Tomando una postura para gritar y emitir órdenes complejas o confusas. 3) Rápidamente comprometerse con una persona agitada, furiosa, delirante o psicótica que no presenta un

peligro inminente a la distancia. La innecesaria compresión de tiempo casi siempre empeora cualquier situación táctica difícil mediante la reducción de brecha reaccionaria de un oficial (tiempo de reacción versus distancia). Esto a su vez hace que el agente implicado experimente distorsiones visuales, auditivas y temporales. Esas distorsiones a menudo conducen a la acción del sujeto - problemas de reacción del oficial tales como la percepción de retraso de disparo que rara vez favorece al agente implicado. Regla 5. La distancia y la cubierta son sus amigos. Siempre que sea posible, utilice y mantenga la distancia y la cubierta de cualquier sujeto resistente y potencialmente violento al que intenta detener. La distancia le permite observar más y previene distorsiones visuales tales como el estrechamiento perceptivo o "visión de túnel". La distancia también aumenta la audiencia, el conocimiento de la situación y alarga la brecha reaccionaria. Esos beneficios le permiten al agente implicado mantener el centro y el equilibrio, así como


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trabajar para atenuar o disminuir la posibilidad de que el funcionario sea emocionalmente capturado en el evento. Mantener la distancia de los sujetos resistentes y / o amenazantes que se presentan agitados y psicóticos o intentan la coreografía de un escenario de "suicidio por policía" (¡o ambos!), reduce significativamente la paranoia aguda que estos sujetos pueden experimentar a través de la compresión del espacio y del tiempo. Mantener la distancia de un sujeto resistente y amenazante en última instancia permite a los oficiales una preciosa oportunidad para observar y evaluar lo que está sucediendo con mayor precisión y responder al peligro potencial e inminente de una manera más segura y más eficaz. Últimamente, casi siempre será el compromiso de un departamento y de un oficial y el empleo de las prácticas policiales sanas y el entrenamiento en tácticas de seguridad contemporáneas y gestión de la fuerza; antes que una excesiva dependencia de los artilugios tecnológicos que permitirán a los funcionarios prevalecer sobre los sujetos resistentes en situaciones difíciles. ¡Cuídense!

La anatomía de la victoria (Parte 1): ¿Qué se necesita para ganar? Ganar en la calle viene en muchas formas y significa cosas distintas para diferentes personas

Fred Leland

3 de septiembre de 2012 Se puede ganar en los encuentros de la aplicación de la ley obteniendo el cumplimiento voluntario a través de la comunicación y la negociación, o puede ir y venir ida y vuelta a través de una amplia gama de resultados hasta llegar incluso la fuerza letal. Para la policía, ganar significa una cosa; para un adversario, ganar en sus términos es otra muy distinta. ¿Qué hay acerca de ganar ante los ojos de la gente? ¿Qué tan importante es el apoyo público o decente cuando nosotros los policías usamos la fuerza? ¿Qué resultados podemos esperar durante un encuentro dinámico?, ¿qué pasa en la consecuencia, con o sin apoyo del público? Los policías sabemos que el uso de la fuerza siempre es una opción tomada como último recurso, cuando hemos agotado todos los demás y nuestra decisión es forzada por las acciones de la persona con quien estamos tratando. Fuerza razonable y necesaria, no es algo que los policías toman a la ligera. Atributos del vencedor. Ganar en la arena -los lugares donde se realizan la interacción y los esfuerzos para resolver los encuentros peligrosos y dinámicos en tiempo real- requiere una cierta casta de individuo, una persona capaz de permanecer mentalmente en calma. Una persona que puede pensar crítica y creativamente. Por pensamiento crítico me refiero a la capacidad de centrarse y lograr la comprensión (conciencia de la situación en tiempo real), evaluar puntos de vista y resolver problemas. El pensamiento creativo es igualmente importante, llamado fingerspitzengefühl o sensación en la punta de los dedos, o sentir la situación -Napoleón lo llamó sentimiento de las "tripas"-; nosotros los policías llamamos a esta habilidad nuestro sexto sentido. Una persona que trata con los conflictos y la violencia también debe ser intuitiva. Esto permite la toma rápida de decisiones sin conocimiento consciente o esfuerzo, que se disfruta con el entrenamiento y experiencia... mucha. La autoconsciencia (la comprensión de las propias fortalezas y debilidades), las habilidades sociales (la habilidad para evaluar las fortalezas y debilidades de otras personas), el uso de habilidades de comunicación, y el arte de escuchar son también parte del juego estratégico de la interacción. Cada uno pesa mucho en nuestra habilidad para aislar al adversario y nos ayudan a moldear y remodelar los eventos en términos favorables. Todos esos son atributos clave para ganar, cuando son equilibrados por los esfuerzos para persuadir y cuando sea necesario, por los esfuerzos para usar la fuerza. Ganar requiere conocer y aplicar otras muchas cosas, incluyendo una comprensión de la estrategia, táctica, naturaleza humana, cultura, entorno, clima de


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la situación, efectos psicológicos y fisiológicos, habilidades de comunicación no verbal, toma de decisiones implícita y explícita, fricción en la toma de decisiones, habilidades tácticas, habilidades combativas, habilidades con armas de fuego, enfoque del esfuerzo, incertidumbre, adaptabilidad, engaño, sorpresa, tiempo y espacio, y el liderazgo y la misión general o intención, etc. Cuando nos encontramos e interactuamos con la gente en la calle, todos esos factores se combinan de maneras novedosas y sinérgicas. Cuando se considera en el contexto del conflicto, la crisis y la violencia desde nuestra perspectiva y de los adversarios, nos ayudan a modelar o influir en los eventos y realzar nuestro espíritu y fuerza haciéndonos más seguros y eficaces cuando manejamos encuentros dinámicos.

Fingerspitzengefühl (del alemán, intuición perspicaz) es un concepto militar atribuido inicialmente al Mariscal de Campo alemán Erwin Rommel. Consiste en una intuición propia de ciertos comandantes que les permite evaluar el escenario durante el transcurso de una operación bélica, en mitad de la confusión de la batalla, y tomar las decisiones tácticas necesarias para proporcionar avances. También se la ha denominado como sexto sentido de la guerra que permite realizar un mapa cognitivo de la situación. El concepto fue utilizado de alguna forma por Napoleón, que lo denominaba coup d’oeil (golpe de vista).

Napoleón Bonaparte (1769–1821) Erwin Johannes Eugen Rommel (1891-1944) Se trata de una capacidad cognitiva relacionada con la posesión, que pueden tener ciertas personas, de conexión con las inteligencias múltiples, especialmente las relacionadas con el procesamiento de datos espaciales y visuales. Rommel poseía un elemento móvil, acompañado con un camión de 'enlace de radio' y una escolta mínima. Dejaba a cada columna un comandante en comunicación con él (7° División Panzer). En algunas ocasiones, sin haber conexión física entre Rommel y las tropas fuera de lo que era la radio, le permitía tener una 'visión' sensible que lo que acaecía en cada punto caliente de la batalla. En la actualidad se denomina Fingerspitzengefühl a la capacidad de percibir y comprender la situación en escenarios complejos. En estos casos los decisores confían más en su intuición, que en su capacidad analítica.

Maniobrar y posicionarse para ganar requiere el juego estratégico de la interacción y el aislamiento conforme usted lo acuerda con un adversario, los compañeros y la comunidad en la que trabaja, si la victoria ha de ser completada en las dimensiones morales, mentales y físicas. El coronel John R. Boyd describió el resultado de ganar en las dimensiones moral, mental y física: "A menos que uno pueda penetrar la moral, lo mental y el ser físico del adversario y cortar esos lazos interactuantes que le permiten existir como un todo orgánico, siendo capaces de subvertir, destruir, incautar o bien someter esos bastiones morales, mentales y físicos, conexiones, o actividades de los que depende, uno encontrará sumamente difícil, si no imposible, hacer colapsar la voluntad de resistir de los adversarios".

Coronel (USAF) John Richard Boyd (1927-1997) Moral, mental y físico. Para obtener una mejor comprensión de las dimensiones moral, mental y física del conflicto echemos un vistazo a cómo describe Boyd las tres dimensiones y cómo jugamos el juego estratégico de la interacción y el aislamiento. Moral representa los códigos culturales de conducta o estándares de comportamiento que limitan, sostienen y centran nuestras respuestas emocionales/intelectuales. Moralmente interactuamos con otros evitando desajustes entre lo que decimos que somos, lo que somos y el mundo con el que tenemos que tratar, así


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como por el respeto de esos otros códigos culturales o normas que se espera sostengamos. Moralmente nuestros adversarios se auto aíslan cuando visiblemente mejoran su bienestar en detrimento de otros (aliados, los no comprometidos), mediante la violación de los códigos de conducta o patrones de comportamiento que ellos profesan defender o esperan que otros defiendan. Mental representa la actividad emocional/intelectual que generamos para ajustarnos a fin de hacer frente a ese mundo físico. Mentalmente interactuamos mediante la selección de la información de una variedad de fuentes o canales con el fin de generar imágenes mentales o impresiones que coinciden con el mundo de los eventos o sucesos que estamos tratando de entender y manejar. Mentalmente podemos aislar a nuestros adversarios presentándolos con situaciones ambiguas, engañosas o nuevas, así como al operar en un tempo o ritmo que no pueden ni entender, ni seguir. Operar dentro de su bucle OODA logrará sólo esto desorientándolos o torciendo sus imágenes mentales de modo que no puedan apreciar ni enfrentar a lo que realmente está pasando. Física representa el mundo de materia-energía-información del que todos somos parte, vivimos, y nos alimentamos. Físicamente interactuamos abriendo y manteniendo muchos canales de comunicación con el mundo exterior, por lo tanto, dependemos de otros ahí fuera para sustento, alimento y apoyo. Físicamente aislamos a nuestros adversarios, cortando sus comunicaciones con el mundo exterior, así como por la ruptura de sus comunicaciones internas entre sí. Podemos lograr esto al quitarles sus aliados y los no comprometidos a través de gestiones diplomáticas, psicológicas y de otro tipo. Para cortar uno del otro debemos penetrar en su sistema siendo impredecibles, de lo contrario, ellos pueden contrarrestar nuestros esfuerzos. El bucle OODA (observar, orientar, decidir y actuar) es un concepto originalmente aplicado al proceso de las operaciones de combate, a menudo a nivel estratégico en las operaciones militares. Ahora también se aplica muchas veces para entender las operaciones comerciales y los procesos de aprendizaje. El concepto fue desarrollado por el estratega militar y Coronel de la USAF John R. Boyd.

Diagrama de un ciclo de decisión conocido como el Ciclo Boyd, o el bucle OODA.

Aplicación al mundo real. Es importante que estudie esas dimensiones e intente traducirlas a la forma en que se aplican al mundo de la ejecución de la ley. La idea aquí es destruir la armonía moral, mental y física del adversario, producir la parálisis y el colapso de su voluntad de resistir, mientras que al mismo tiempo amplificamos nuestro propio espíritu y fuerza. Este esfuerzo no es todo sobre la fuerza física sino acerca de la maniobra, interacción y balance de la persuasión y la fuerza en un esfuerzo para aislar moral, mental y físicamente al adversario de sus aliados o cualquier apoyo exterior, así como aislar los elementos del adversario o adversarios uno del otro y abrumarlos siendo capaces de penetrar su salud mental, moral y física en todos y en cualquiera de sus niveles. Todo esto, mientras que al mismo tiempo realzamos nuestro espíritu y fuerza y conquistamos a los indecisos (apoyo público).


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Los policías protegen a la sociedad y tenemos que ganar los difíciles conflictos que enfrentamos, en situaciones rápidamente cambiantes que requieren fuerza de carácter, coraje y resolución. Esos rasgos son inherentes a los policías y los tipos de rasgos que la gente saluda y apoya en los atletas en su intento de ganar un juego, sin embargo en aplicación de la ley, los porteros muchas veces son criticados por el público por la acción tomada donde lo que está en juego es muy superior y, a menudo pagado con la vida y la muerte. La policía usa la fuerza (esto incluye a todos los niveles) en aproximadamente el 1 % de todos nuestros contactos. ¡El uno por ciento! ¿Por qué la falta de apoyo? ¿Qué estamos perdiendo en el orden público que podría aumentar el apoyo? ¿Podría ser que ganar a bajo costo sea la clave para ganar la confianza que buscamos y necesitamos de nuestras comunidades? Conectar Estrategia y Tácticas. Esto me recuerda una pregunta que adapté con la policía en mente, de una que Boyd hizo considerando conectar estrategia y tácticas con nuestros objetivos nacionales. ¿Cómo conectamos las ideas tácticas y estratégicas o el tema para la desintegración y colapso de un adversario, con las metas de nuestra comunidad y de la aplicación de la ley? Boyd tenía algunas respuestas que adapté para nosotros en la aplicación de la ley para considerar. • Ganar el apoyo de nuestras metas y los métodos que utilizamos. • Resolver inflando, escurrir lejos la resolución de los adversarios, y atraer a los no comprometidos. • Poner fin a los conflictos en condiciones favorables. • Asegurar que el conflicto y términos de justicia no provean semillas para (desfavorables) futuros conflictos. En la vista de Boyd nuestra estrategia debe ser ante todo una idea atractiva o un conjunto de objetivos e intereses, que inspira y une a la población, así como a los aliados y a los no comprometidos. Mi pensamiento sobre esto es que, ¡necesitamos el apoyo del público en todo lo que hacemos! Entiendo que ganarse la confianza y el apoyo de la comunidad ha sido muy hablado a lo largo de las últimas décadas, sin embargo, ha sido implementado robustamente en los círculos de la aplicación de la ley sólo con moderación. Para ganar a bajo costo necesitamos implementar esas ideas más vigorosamente en todo lo que hacemos. Debemos ser más transparentes con el público en todo lo que hacemos; es la única manera de obtener una victoria completa en la calle y en los resultados. Más de 2.500 años atrás Sun Tzu dijo: "Usted tiene que ganar sus batallas sin esfuerzo. Evite las luchas difíciles. Luche cuando su posición debe ganar. Usted siempre gana si evita su derrota".

孙子 Esta breve estrofa antigua tiene mucho sentido ya que en el intento de aplicación de la ley para acabar con el crimen grave y los problemas del delito y parar a quienes hacen daño a aquellos a quienes servimos y protegernos a nosotros mismos conforme ponemos en funcionamiento los métodos que utilizamos. Para realzar nuestro espíritu y fuerza al tiempo que ganamos el apoyo del público, debemos aprender a ganar considerando las dimensiones moral, mental y física del conflicto si vamos a tener una victoria completa y total. Nosotros en la policía, ¿realmente necesitamos aplicar esas ideas y principios en nuestros esfuerzos por ganar en la calle? Si es así, ¿por qué no nosotros?


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Para ganar completamente, la aplicación de la ley debe entender nuestra filosofía general, misión e intención. Debemos conocer el objetivo que se desea obtener. Debemos entender el clima de la situación y el entorno o terreno en que estamos trabajando sobre y adentro. Tenemos que saber qué está pasando o cuál es nuestra percepción de lo que está pasando, antes de que podamos tomar buenas decisiones tácticas y tomar medidas. Un buen liderazgo es otro factor clave. La importancia de un sistema de comando adecuado, que lleva a una correcta distribución de la autoridad y responsabilidad entre los diversos escalones, es crítica para el éxito. Sin encontrar el equilibrio correcto entre centralización y descentralización, disciplina e iniciativa, autoridad y responsabilidad individual, es imposible para cualquier organización, y mucho menos a un policía, que opera como lo hace en un entorno donde el desorden, la incertidumbre y la confusión son comunes para funcionar eficazmente. Finalmente ¿entendemos la estrategia y la táctica y cómo nos posicionamos ventajosamente basados en la situación actual? La estrategia primero es sobre evitar el fracaso y entonces posicionarnos nosotros mismos para que podamos explotar las oportunidades que aparecen. Para ello debemos tener un repertorio táctico sano que se pueda aplicar eficazmente en la calle, adaptándose según requiera la situación. Por tácticas no estoy enfocándome solamente en las habilidades físicas, tales como las técnicas con armas de fuego y las defensivas, entradas a las habitaciones o las formaciones tácticas que usamos, aunque son muy importantes. ¡Táctica tiene mucho que ver con el pensamiento tal como lo hace al aplicar la física! Preguntas para considerar. ¿Ha desarrollado sus habilidades de observación al punto en que usted está estudiando la situación y tiene verdadera conciencia? Aquí hay algunas otras preguntas para que se ponga a prueba -para confrontar- al considerar la anatomía de la victoria. • ¿Poseemos habilidades sociales y la habilidad para negociar en un esfuerzo para ganar el cumplimiento voluntario? • ¿Poseemos el pensamiento crítico y creativo y la habilidad para tomar decisiones? • ¿Entendemos la complejidad de decidir bajo presión y cómo el Ciclo Boyd (bucle OODA), cuando es entendido y considerado desde todos lados es crítico para el éxito? • ¿Sabemos cómo aplicar los métodos que conocemos, así comprimimos nuestro propio tiempo y alargamos el tiempo adversario, disminuyendo nuestra propia fricción y aumentando la fricción del adversario en la toma de decisiones? • ¿Poseemos la fuerza de carácter para implementar las decisiones que tomamos o nuestras decisiones llegan a ser puestas en acción basadas en la emoción, la presión de los pares y lo que piensan los demás? • ¿Entendemos los principios tácticos de la velocidad, las maniobras transitorias rápidas y lentas, y entendiendo que equilibrando transiciones lentas y rápidas basadas en las condiciones es crítico para el posicionamiento táctico, explotando las oportunidades y ganando a bajo costo? • ¿Entendemos que el adversario que enfrenta tiene sus propios objetivos y planes y trabajará en contra de usted? • ¿Conocemos bien a nuestra gente y entendemos nuestras fortalezas y debilidades? • ¿Sabemos cómo explotar las debilidades de nuestro adversario, evitando sus puntos fuertes? • ¿Entendemos que no hay una única solución científica a un problema táctico y que la variedad de métodos y de adaptación son claves para ganar?


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• ¿Nuestras políticas y procedimientos toman esto en consideración? Eso es todo por ahora. Marque este espacio para dentro de una semana a partir de hoy (lunes 10 de septiembre) para la segunda parte de esta serie de dos partes. Vamos a profundizar aún más en este debate, centrándonos en las diferencias entre simplemente lograr la victoria y lograr la victoria con un costo mínimo. ¡Manténgase orientado!

La anatomía de la victoria (Parte 2): La victoria al mínimo costo Ganar en la calle viene en muchas formas y significa cosas distintas para diferentes personas

Fred Leland

10 de septiembre de 2012 En la primera parte de esta serie de dos partes, preguntamos y respondimos muchas preguntas importantes sobre nuestra preparación para ganar. Si todavía no ha leído la parte 1, por favor hágalo antes, porque es la base sobre la que se construyó lo que sigue. En el capítulo I del sobresaliente libro de H. John Poole: “Los últimos cien metros: la contribución de los suboficiales a la guerra” (The Last Hundred Yards: The NCO’S Contribution to Warfare), él discute la anatomía de la victoria de la subunidad pequeña y hace algunas preguntas clave de los soldados e infantes de marina individuales. Para los estadounidenses, ¿qué constituye una victoria militar? ¿Qué se necesita para derrotar a un enemigo a toda costa? ¿Qué más se necesita para derrotar a un enemigo con un costo mínimo? Siento esas preguntas - reformuladas sólo un poco para satisfacer la misión de la aplicación de la ley y la intención de proteger y servir- relacionados con la aplicación de la ley y cómo brindamos el servicio de policía.

El Teniente Coronel (Retirado) USMC H. John Poole es un autor estadounidense especializado en pequeñas unidades y tácticas individuales. Sus libros se centran en el rol, entrenamiento y destrezas del soldado de infantería individual y del infante de marina, y en las de los Suboficiales en combate. Poole se ha centrado en las tácticas terroristas e insurgentes, así como en las tácticas contrainsurgentes para derrotarlos. Completó "casi 28 años de servicio en la infantería como oficial y como suboficial, retirándose del Cuerpo de Marines de Estados Unidos en abril de 1993. Durante el servicio, pasó dos años en combate (1966-69), seis años como instructor en la Compañía de Infantería de Entrenamiento Avanzada en Camp Lejeune (1986-92) y un año como Personal a cargo de los Suboficiales (SNCOIC) del Curso de Líderes de Sección de la 3ª División de Combate de Infantería de Marina en Okinawa (1992-93).

No somos soldados. Es importante tener en cuenta que los oficiales del orden público no son soldados o infantes de marina y aunque nuestra misión e intención son similares (en que ambos protegemos y servimos y usamos tácticas similares, obviamente adaptadas para cumplir con nuestro rol en la aplicación de la ley como protectores de aquellos a quienes servimos aquí en el país, el ciudadano norteamericano. Aquí en casa somos una sociedad libre que en su mayor parte trabaja día a día de una manera pacífica y colaborativa sujeta a las normas que la sociedad considere necesarias para que las tácticas y estrategias que usamos estén de acuerdo con los estándares establecidos por la sociedad. Nuestra función es hacer cumplir la ley para garantizar que esas normas sean entendidas y adheridas en todas partes. Sin embargo, hay gente a la que no le gusta jugar con las reglas y se vuelven una amenaza para la sociedad y sus acciones requieren respuestas policiales.


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Tenemos que lograr un delicado equilibrio de persuasión para ganar el respeto que buscamos y la utilidad de la fuerza cuando un adversario decide vivir en sus propios términos que puedan poner en peligro vidas. Las preguntas reformuladas más arriba para satisfacer el rol que la aplicación de la ley, pueden tener este aspecto: Para los estadounidenses, ¿qué constituye una victoria de la aplicación de la ley? ¿Qué se necesita para derrotar a un adversario en crisis a toda costa? ¿Qué más se necesita para derrotar a un adversario en crisis a un costo mínimo? El término "crisis" que uso aquí representa a todos y cualquier encuentro de la aplicación de la ley que, o bien son conocidos como encuentros de alto riesgo o que entramos donde las circunstancias y los riesgos son desconocidos - que tienen el potencial para convertirse en una situación de alto riesgo. Motivo e intención desconocidos. Mi perspectiva sobre el alto riesgo conocido versus el desconocido es que cualquier circunstancia que manejamos en la aplicación de la ley tiene el potencial para la escalada, dado que el motivo e intención de un individuo son casos desconocidos en la vasta mayoría para cuando la policía llega y trata de obtener el cumplimiento voluntario y recuperar el control. Poole explica que los anales de la guerra están llenos de hazañas de ejércitos, divisiones y regimientos, no las acciones separadas de los escuadrones, equipos de fuego y tiradores. Para que el líder de la pequeña subunidad aprenda más de la literatura sobre de su rol durante la guerra, debe examinar un concepto universal para las unidades de todos los tamaños... qué se necesita para ganar. Por supuesto, ganar significa cosas distintas para diferentes personas. Para Sun Tzu en el año 350 antes de Cristo, significaba algo más que derrotar y enemigo: "Sólo cuando el enemigo no podía ser superado por esos medios políticos estaba ahí el recurso de la fuerza armada que se aplicó, con lo que la victoria fue ganada en el menor tiempo posible, con el menor costo posible en vidas y esfuerzo y con infligir al enemigo la menor cantidad de bajas posibles" – Sun Tzu. En cualquier civilización, derrotar a un enemigo a un precio demasiado alto no es ganar. Una victoria ganada con demasiadas vidas no fue victoria en absoluto. Los encuentros callejeros se ganan a través de batallas de ingenio, y las batallas de ingenio se ganan a través de la interacción y los compromisos con un adversario. Los oficiales de todos los grados deben esforzarse para determinar qué se necesita para ganar a bajo costo. Manejar los encuentros dinámicos y ganar en la calle, como se mencionó anteriormente, requiere conocer muchas cosas y luego ser capaz de aplicar lo que sabemos a la situación dada de una manera innovadora considerando por supuesto, el toma y daca de los conflictos y la carga emocional de los individuos. H. John Poole ofrece alguna gran información sobre ganar mínimamente versus ganar a bajo costo. Sólo derrotar mínimamente a un enemigo necesita las siguientes tácticas. Activos logísticos: • Algún conocimiento táctico. • Evaluación precisa de la situación inicial. • Tomar decisiones lógicas. • Rapidez de decisión. • Una ventaja de poder de combate localizado. • Alguna apariencia de control. Activos de Personal: • La voluntad de lucha. • Algún entrenamiento. • Trabajo en equipo. • Algún liderazgo. Para ganar a un bajo costo, existen requisitos adicionales. Táctica: • Estado del arte del conocimiento táctico (considerando las dimensiones moral, mental y física) • Autoridad para hacer decisiones de sentido común en cada escalón dentro de una unidad


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• Minimizar el número de acciones tomadas sin pensar. • Permitir a los subordinados que obedezcan los instintos humanos de supervivencia. • Flexibilidad para una situación en constante cambio. • Hacer un blanco tan pequeño como sea posible. • Consistentemente sorprender al enemigo. • Explotar el éxito para mantener al enemigo fuera de balance (momento) Activos de Personal: • Personal bien centrado. • Tropas con las habilidades de movimiento para utilizar la cubierta existente. • Tropas con las habilidades de tiro para cubrir el movimiento de los demás por el fuego cuando sea necesario. • Entrenamiento especializado para aquellos que lo necesitan para sobrevivir. • Suficiente personal entrenado para rotar en misiones peligrosas. • Apropiada asignación de personal. • Emparejar al personal. • Un estilo de liderazgo que permite a los subordinados reaccionar rápidamente a los peligros imprevistos. Como puede verlo en esta lista, ser bueno no es suficiente. Para ganar a bajo costo en las dimensiones moral, mental y física del conflicto, se necesitan policías de espectro más completo. Requiere policías que entienden y toman todo el conflicto. Debemos mirar más profundo en cómo responder -y aprovechar todas las lecciones- si vamos a mejorar nuestra seguridad y efectividad y ganar a bajo costo. Las soluciones a todas las situaciones tácticas dependen necesariamente del nivel de entrenamiento de los individuos y las unidades involucradas. A menudo, la solución táctica óptima no es viable simplemente debido a las deficiencias en la capacitación de los oficiales individuales y su departamento. Con la unidad y el centro del esfuerzo creando y fomentando esas habilidades, ¡podemos hacerlo mejor! Podemos conseguir los resultados que nos mantengan a salvo en la calle y luego en las consecuencias, obteniendo el apoyo que necesitamos y merecemos. Lo reto a pensar en estas preguntas -inspirado por John Poole y su trabajo en “Los últimos cien metros”- y cómo pueden aplicarse a usted como agente de la ley si sólo tuviera que manejar uno de esos conflictos menos frecuentes, un encuentro de alto riesgo: ¿Costo mínimo? Para los estadounidenses, ¿qué constituye una victoria de la aplicación de la ley? ¿Qué se necesita para derrotar a un adversario en crisis a toda costa? ¿Qué más se necesita para derrotar a un adversario en crisis a un costo mínimo? Los estadounidenses -a los que protegemos y servimos- no tolerarán tácticas policiales descuidadas de los oficiales o líderes. Tampoco deben los policías profesionales tolerar métodos y tácticas chapuceras mal pensados (o peor aún, irreflexivos). Acabo de leer o ver las noticias y toda la charla y el debate sobre las tácticas policiales. ¡No todo el mundo que discute el tema es anti-policía! Si este debate y la discusión no son suficientes para que usted pueda repensar su estrategia y táctica, basta con ver el número de policías asesinados en el cumplimiento del deber. Mire la creciente tasa de policías emboscados. Mire las lecciones aprendidas de nuestra historia policial y pregúntese, ¿estamos aplicando las lecciones aprendidas? Hable con un policía que ha estado allí y ha hecho eso y pregúntele acerca de sobrevivir a la pelea y luego pregúntele por las secuelas y el estrés implicados al tratar con eso. El ir a casa al final de su turno es de suma importancia, pero también queremos sobrevivir a las secuelas. Prefiero ser juzgado por doce que transportado por seis es un gran mantra, hasta que usted es el tipo que está sentado en frente de los doce. Ganar a bajo costo significa que sobrevivimos tanto a la lucha como a sus secuelas. Siempre habrá controversia. Siempre habrá controversia involucrada en cómo manejamos las situaciones, la gente llevará aun las cosas al máximo nivel e intentará usar fuerza letal, así, ¿por qué cambiar nada, por qué preocuparse por ganar a bajo costo cuando tenemos bastante de qué preocuparnos ya? Yo creo -y no creo que sea el único en mi creencia- que al hacer el esfuerzo de entender la estrategia y mejorar tácticamente seremos más capaces de responder de un modo que nos mantenga a salvo en todo tipo de situaciones a las que respondemos. Realmente haremos las cosas más lentas como para posicionarnos, ganando la ventaja


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que viene del posicionamiento y ganando sin luchar en muchas situaciones más, que es el colmo de la habilidad. Cuando tenemos que luchar estaremos mejor utilizando la estrategia y la táctica versus la emoción y la suerte. La habilidad ganará el día versus las reacciones muchas veces elevadas por la emoción. Será bien conocido que hicimos todo lo posible para resolverlo pacíficamente y que el saldo de la persuasión y la fuerza fue usada de acuerdo con nuestra misión general y propósito de proteger y servir. El apoyo vendrá de los no comprometidos porque habremos ganado su confianza. Nuestro esfuerzo conjunto de seguridad pública se basa en lo que los policías pueden lograr colectivamente en patrulla. La confianza de la comunidad es clave para nosotros para lograr cualquier cosa, desde problemas de menor importancia a los problemas de delincuencia grave y cualquier otra amenaza en evolución que puede tener que hacer frente en el futuro. Cómo respondemos y manejamos situaciones es, nos guste o no, juzgado por aquellos a quienes servimos. Es hora de trabajar más duro para incorporarlos con lo que sea que hagamos y cómo lo hacemos. Hagamos lo bien conocido y hablado sobre la mentalidad del 5% más prevalente en aplicación de la ley. No vamos a estar satisfechos con nuestros esfuerzos hasta que la mentalidad del 5% sea más como un 95% y entonces los que portan una placa y un arma de fuego enfundada estarán ahí fuera trabajando con una mentalidad estratégica y táctica que se les darán resultados de los que todos podamos estar orgullosos. Resultados basados en el aprendizaje continuo, la voluntad y habilidad basada en aquellos que predican con el ejemplo a la victoria en todas sus dimensiones. ¡Manténgase orientado!

Táctica y el Ciclo OODA

Duane Wolfe

Bachiller en Ciencias en Justicia Criminal Magister en Educación

21 de mayo de 2010 Hace un tiempo, Andy Casavant escribió un artículo titulado: "Planificación Táctica para todo Oficial". Esta es una versión actualizada de sus ideas - Tengo una copia de un artículo anterior del Sr. Casavant sobre el mismo tema a partir de 1984. En el tiempo que ha pasado esas tácticas siguen siendo tan importantes y viables como lo fueron cuando Reagan era presidente. Mire los estudios de los oficiales muertos y heridos en el cumplimiento del deber de los "viejos tiempos" y ahora. Pronto veremos que las situaciones y circunstancias no han cambiado. He utilizado el artículo de Casavant como la base para las clases que imparto sobre Táctica. Los conceptos son simples, y cuando son aplicados pueden mejorar drásticamente la seguridad del oficial y aumentar la probabilidad de que el oficial prevalecerá. Estos principios de planificación son los siguientes: 1. Movimiento no detectado. 2. Más cerca no siempre es mejor. 3. Si usted puede verlos, ellos pueden verlo. A veces, incluso si usted no puede verlos, ellos pueden verlo. 4. Deje (o hacer) que vengan hacia usted. 5. Cuando se comprometa, muévase en los flancos. Nunca deje que otros se mueven en sus flancos. 6. Conocimiento del terreno. 7. Masa (dos a uno) Otro concepto que yo enseño es el Ciclo OODA de Boyd. Si usted no está familiarizado con él, escriba en cualquier motor de búsqueda y obtendrá numerosos resultados. El concepto ha sido adoptado por la policía, los militares y la empresa privada. El acrónimo surge de Observar, Orientar, Decidir y Actuar. Se trata de un


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procedimiento simplificado de toma de decisiones derivado del modelo más complicado del Ciclo Boyd que es más complejo pero también debe ser estudiado por los agentes y entrenadores. Los Principios Tácticos de Casavant y el Ciclo OODA de Boyd están directamente entrelazados y sus conceptos y aplicaciones deben ser practicados por funcionarios que deseen estar a salvo. 1. Movimiento no detectado - Si el sospechoso no puede verlo, no puede comenzar su ciclo OODA, cuyo primer paso es la Observación. Ellos no pueden prepararse para hacer frente a una situación cuyo desarrollo no pueden ver. A medida que se acerca, usted debe utilizar sus habilidades de observación para recopilar información para formular un plan de acción. Desde que comenzó primero su ciclo, está a la vanguardia del juego y ahora se ha dispuesto a ganar. Con demasiada frecuencia, los oficiales se olvidan de este concepto simple y fallan al no dejar cierta distancia de una llamada y acercarse en forma oculta y/o se lanza a la escena sin tener tiempo para observarla realmente. Yendo por el camino de entrada a una casa, dos aspectos violan claramente este concepto, sin embargo, ¿a cuántos oficiales ves hacerlo regularmente? 2. Más cerca no siempre es mejor - Directamente relacionado con el número uno anterior, necesitamos luchar contra el impulso de acercarnos rápidamente al lugar en la mayoría de las llamadas. Al mantener la distancia, aumentamos la probabilidad de no ser vistos, mientras que nos da la ventaja de observar desde una distancia segura. En una pelea quiero tiempo, distancia y cubierta. Cuanto más me acerco a un sospechoso, menos tengo de cada uno. 3. Si usted puede verlos, ellos pueden verlo - Siempre asuma que ha sido visto y tenga un plan apropiado para responder si las cosas se van al diablo. Al tener un plan en mente, ha comenzado a trabajar a través de las tres primeras etapas (Observar, Orientar, Decidir) del ciclo OODA y será más rápido para responder ya que todo lo que tiene que hacer es Actuar versus tener que formular un plan adecuado bajo el estrés causado por una situación imprevista. 4. Deje (o haga) que vengan a usted - Al permitir que ellos vengan a usted – usted tiene el elemento sorpresa. Por ejemplo, un sospechoso sale de la parte posterior de un negocio mientras comete un robo lleno de bienes, cuando de repente desde una posición que no se ve una fuerte voz de mando les informa que se encuentran bajo arresto. No han tenido tiempo para preparar una respuesta, ya que no sabían que la policía estaba en escena. La sorpresa y el shock (sobrecargando su ciclo OODA) pueden causar una aprehensión fácil. Tome el mismo escenario de robo en curso, rodee el edificio con coches patrulla con sus luces ocultando la ubicación exacta de los oficiales respondientes y un PA ordenando que el sospechoso salga fuera del edificio y usted crea un entorno más positivo para el arresto. Comparemos eso con la opción de un oficial en solitario entrando en el edificio y tratando de requisar el edificio por el mismo y creo que verá quién tiene la ventaja táctica. 5. Moverse en los flancos - Flanquear esencialmente significa acercarse desde una posición donde el sospechoso tiene menos defensas. En una confrontación física eso significa tratar de hacer contacto por detrás o de lado con el fin de cegarlo. Caminar desde el jardín del vecino abrazando de cerca la casa es una versión del flanqueo. La mayoría de la gente espera a alguien para caminar por la acera hasta la puerta principal. Esa expectativa significa que su atención (y sus defensas) se centrarán en ese punto. Al venir desde una dirección inesperada, ha logrado los objetivos 1, 3 y 5. Cuantos más principios se apliquen, más seguro estará. 6. Conocimiento del terreno - Ese conocimiento se puede utilizar de dos maneras. Primero, mediante la comprensión de la "disposición de la tierra" puede ir a tratar de aplicar los conceptos antes mencionados aumentando su probabilidad de éxito. La disposición de la tierra incluye el medio ambiente físico y las condiciones de iluminación. El conocimiento puede ser usado para darle a usted la perspectiva del sospechoso, en otras palabras, para ver la situación a través de sus ojos. Mediante el desarrollo de la capacidad de ver el tablero de ajedrez desde la perspectiva de ambos jugadores, puede anticipar y contrarrestar las respuestas más probables de los sospechosos.


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7. Masa de dos a uno - Al contar con una ventaja numérica sobre el sospechoso(s) cuando sea posible, reduce dramáticamente la probabilidad de una confrontación. Las opciones que el sospechoso tiene son: ¿Debo luchar? ¿Debo huir? ¿Debo rendirme? Las elecciones se toman (usualmente) basadas en la probabilidad de éxito. Si no puedes ganar, ¿por qué luchar? Si no puedes escapar, ¿por qué huir? La moraleja aquí es usar un refuerzo cuando sea necesario, y si usted va a pedir apoyo espere a que llegue (si es posible) antes de continuar con la situación. Como dice Casavant, el objetivo general de esos conceptos es reducir la probabilidad de resistencia. Podemos lograr esto convenciendo a los sospechosos de que no pueden ganar. Podemos reducir las probabilidades de tener que recurrir a la fuerza -que debería ser un objetivo primordial en todos los encuentros policiales- y mediante la reducción de la probabilidad de la fuerza, reducimos el riesgo de lesiones a los oficiales o los sospechosos. Al reducir la tasa de lesiones, reduce el potencial de juicios de responsabilidad. En otras palabras, mediante la aplicación de los principios, su trabajo se vuelve más fácil y más seguro y ¿no debe ser su objetivo final?

Doce elementos críticos de un programa moderno de entrenamiento con armas de fuego Bank Miller y Ben Kurata

17 de agosto de 2007

Considerando la miríada de requerimientos actuales y las restricciones presupuestarias, los instructores de armas de fuego y tiro pueden encontrar sus puestos de trabajo cada vez más desafiantes. Para ayudar a construir una base sólida y establecer algunos criterios básicos que debe incluir un programa de entrenamiento en la aplicación de la ley, la Action Target Academy ha adoptado 12 elementos críticos descritos a continuación. La información reunida para este análisis se obtuvo de varias encuestas realizadas por la Comisión de California sobre Estándares y Entrenamiento de Oficiales de Paz (POST, Peace Officers Standards and Training) y la Oficina Federal de Investigaciones. El FBI ha colectado datos sobre oficiales muertos y asaltados desde 1945, y POST comenzó a recoger tales datos en 1980. Los estudios citados en este estudio abarcan los conducidos por el FBI desde 1995 hasta 2004. Tras resumir esos estudios, se elaboraron las siguientes directrices para la instrucción policial con armas de fuego. Prepare a los funcionarios para los ataques inmediatos, espontáneos, letales. Basado en las estadísticas anteriores, es obvio que las tácticas y técnicas a corta distancia son una necesidad para la supervivencia del uniformado. La comunicación personal con personas desconocidas es una gran parte de la rutina diaria de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Con el fin de comunicarse efectivamente, los funcionarios deben estar suficientemente cerca de la persona para comunicarse. La dificultad surge cuando algunas de esas personas resultan ser «chicos malos». Cuando esto ocurre, el dominio para desenfundar y disparar desde varias posiciones a corta distancia, la retención de armas, los ataques físicos y otras destrezas de combate en cuartos cerrados (close-quarter combat skills) es muy importante. Para satisfacer la cuestión de la distancia corta, un blanco con soporte de cartón básico es lo suficientemente resistente como para soportar la explosión del cañón. Hasta donde vaya lo súbito y espontáneo, un sistema de blancos móviles de alta velocidad que de repente presentan un tipo malo justo cuando la mirada del oficial se distancia puede agregar una enorme cantidad de estrés a la situación. [1] Prepare a los funcionarios para las agresiones por medio de amenazas múltiples y sujetos no involucrados. Las estadísticas nos dicen que hay una probabilidad del 60% de que un asalto involucre más de un atacante. Al mismo tiempo, tenemos que ser conscientes también de los inocentes no involucrados. En muchas llamadas de violencia doméstica, el cónyuge u otro familiar puede comenzar como no involucrado y rápidamente unirse del lado en contra del funcionario, si se da un conflicto.


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Aprender a romper el fenómeno de la visión de túnel y realizar múltiples amenazas con total conciencia de los sujetos no involucrados justifica un entrenamiento del tipo dispare/no dispare, aumenta la supervivencia y disminuye los problemas de responsabilidad. El método más obvio aquí es el de un montón de objetivos. Altos, bajos, algunos más cercanos, algunos más lejanos, algunos reunidos en un grupo y algunos fuera de éste. Otra técnica particularmente eficaz emplea objetivos que giran, aunque tiene que ser controlado individualmente. A medida que su agente está comprometido con los objetivos 1 y 2, y frente al borde derecho de la cara y delante de él, tratamos de enfrentar el objetivo 6 y ver si se da cuenta. Mejor aún, use un objetivo de 180° de giro que puede mostrar un tipo malo o un buen tipo en el mismo lugar en un momento dado.

[2] Integre la repentina transición hacia las armas de fuego desde las técnicas de arresto y control, incluyendo la requisa y el esposado. Muchos ataques potencialmente letales ocurren cuando el oficial está requisando y/o trata de esposar al sujeto. Este cambio repentino a una situación de fuerza letal puede ser excepcionalmente peligroso si el oficial no ha sido acondicionado con las técnicas de respuesta adecuadas. Ejemplos evidentes de la insuficiente formación y acondicionamiento son: un fallo del oficial para crear distancia si surge la oportunidad, o un intento por parte del oficial de sacar su arma de fuego mientras tiene sus esposas todavía en la mano. El uso de maniquíes de arrastre, maniquíes de RCP y blancos que giran son efectivos aquí. Los maniquíes proporcionan realismo y una plataforma para la práctica de técnicas de control, mientras que los blancos que giran proporcionan un indicador visual repentino visual de que la situación se ha agravado.

[3] Integre la repentina transición hacia las armas de fuego desde las técnicas de arresto y control, incluyendo la requisa y el esposado. Muchos ataques potencialmente letales ocurren cuando el oficial está requisando y/o trata de esposar al sujeto. Este cambio repentino a una situación de fuerza letal puede ser excepcionalmente peligroso si el oficial no ha sido acondicionado con las técnicas de respuesta adecuadas. Ejemplos evidentes de la insuficiente formación y acondicionamiento son: un fallo del oficial para crear distancia si surge la oportunidad, o un intento por parte del oficial de sacar su arma de fuego mientras tiene sus esposas todavía en la mano. El uso de maniquíes de arrastre, maniquíes de RCP y blancos que giran son efectivos aquí. Los maniquíes proporcionan realismo y una plataforma para la práctica de técnicas de control, mientras que los blancos que giran proporcionan un indicador visual repentino visual de que la situación se ha agravado.

[4] Base el entrenamiento en el hecho de que la mayoría de los agentes son asesinados a distancias cortas. El cuadro estadístico ya presentado, establece claramente dónde se produce la mayoría de las muertes de oficiales. Sin embargo, es importante notar que no dice: "Enseñe a sus oficiales a disparar a corta distancia". Dice que base su entrenamiento en el hecho de que la mayoría de las muertes se producen de cerca. Es como el tipo que le dice a su médico que se rompió la pierna en dos lugares, y el médico dice: "Entonces, ¡no vaya a esos lugares!" Si la mayoría de las muertes se produce a distancias costas, todos debemos ser conscientes de cuándo es apropiado estar más lejos. Además de las técnicas de combate cercano ya discutidas, un blanco móvil que carga directamente al oficial puede ser extremadamente eficaz para ilustrar la importancia de crear distancia, y demuestra las mejores maneras de moverse con rapidez y eficacia en diversas situaciones.

[5] Base el entrenamiento en el hecho que los oficiales tendrán el control motriz fino y complejo, limitado. Debemos ser conscientes de las diversas respuestas fisiológicas a que se someten nuestros cuerpos durante una situación de combate. Nos centramos aquí en la destreza manual. Cuando la sangre fluye fuera de nuestras extremidades, hacia nuestro corazón, perdemos un grado de control de la motricidad fina y compleja en los dedos y las manos. Por desgracia, los elementos de buena puntería, como el control del disparador, pueden ser los primeros en salir. Antes que se produzca un ataque de pánico, creemos que enseñar las habilidades básicas (como la apropiada manipulación de la cola del disparador) ¡es absolutamente vital y no debe ser abandonado! Sin embargo, haga espacio en su instrucción por el hecho de que el control de la motricidad fina y compleja se reducirá.


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La mejor manera de demostrar los efectos del estrés a sus funcionarios es que los sumerja en él. Hágalos correr, obtener sus pulsaciones del corazón y flujo de adrenalina, y luego envíelos a un escenario interactivo con balas de pintura y «chicos malos» que disparen hacia ellos. Las fallas en la técnica serán sorprendentes.

[6] Integre un contacto de dos personas y equipos de cobertura involucrados en escenarios realistas. El hecho de que uno de sus funcionarios sabe cómo participar de forma segura y eficaz ante las amenazas múltiples, volver a cargar de manera eficiente y pasar de una sola pieza de la cubierta a otra no significa que él sabe cómo hacer las cosas con dos o tres oficiales que ejecutan en torno a él, tratando de hacer lo mismo al mismo tiempo. ¿Dónde está mi boca de cañón? ¿Dónde está mi pareja? ¿Dónde está la boca de cañón de mi pareja? ¡La comunicación táctica adecuada es absolutamente crítica!

Tenga equipos juntos de dos y tres hombres pasando por escenarios tácticos. Use cartón portátil y blancos de acero en una variedad de lugares y configuraciones. Pida a los equipos que rueden de lado a lado, de modo su pareja esté rebotando. Condiciónelos para que sean profundamente conscientes de la boca del cañón, y que se den cuenta de la importancia de la comunicación cuando se trata de moverse, volver a cargar y mantenerse en la lucha.

[7] Enfatice la mentalidad de supervivencia y la voluntad de ganar en todos los entrenamientos de destrezas. Muy a menudo, lo que aporta a la lucha va a dictar el resultado de la pelea. Tener una mentalidad ganadora y una actitud positiva sólo aumentará las probabilidades de la supervivencia del oficial. Aunque nuestro trabajo es peligroso, tenemos el alto riesgo de ser víctima fuera de la calle en lugar de sobre la calle, y en ocasiones la mayor amenaza que enfrentamos es en el espejo. En particular, con los oficiales más jóvenes, las películas y la televisión que han dado forma a gran parte de lo que perciben como la realidad de un tiroteo. Por ejemplo, el tipo que vuela 15 metros y se estrella en un montón de botes de basura después de ser golpeado con un disparo único de arma de fuego. Clint Smith dijo que si te metes en una pelea a puñetazos, puede ser que consigas un puñetazo, si te metes en una pelea a cuchillo es posible que te corten, y si te metes en un tiroteo es posible que te den un balazo. Esto no significa que la lucha ha terminado, sólo significa que puede tener que terminar la pelea un poco diferente de lo que había planeado originalmente.

Saber cómo disparar, recargar, y solucionar el mal funcionamiento, con una sola mano (derecha e izquierda) es imprescindible. Nuestros oficiales deben tener confianza en su capacidad para ganar la lucha, incluso si se lesionan. También deben estar cómodos con estas técnicas para ganar esa confianza.

[8] Integre disparos con una sola mano. Incluya la mano dominante y de apoyo, más desenfundar, recargar y descargar. Muchos disparos de las fuerzas de la ley ocurren con una mano, y usar una sola mano a menudo es para su beneficio táctico (basado en la situación). Incluso si no se lesiona, un agarre tradicional a dos manos puede ser poco práctico o peligroso incluso si significa mucha cubierta u ocultamiento demasiado grande.

Primariamente por razones de seguridad, el entrenamiento de destrezas con una sola mano se ejecuta mejor en pequeños grupos. Debido a que los funcionarios estarán presentando y manejando sus armas de manera no tradicionales y desconocida tal vez, la conciencia de la boca del cañón es de vital importancia.

[9] Integre requisas y limpiezas en estructuras de cuartos cerrados, además de tácticas de combate puertas adentro. Cuando una familia llega a casa para encontrar su puerta de atrás abierta de una patada, llama a la policía. ¿Va la llamada a todo SWAT? Por supuesto que no - se dirige a los más cercanos oficiales de patrulla. Ya sea solo o con un compañero, todos los oficiales solo tiene que saber cómo realizar tareas básicas de cuartos cerrados como la entrada táctica, la navegación del pasillo y el despeje de habitaciones. Ellos necesitan saber cosas como de qué manera se puede ver una puerta si las bisagras están hacia usted, y que necesitan saber cosas como: no exponer partes del cuerpo alrededor de las esquinas, no frotar la espalda contra la pared a medida que se mueven y no pasar el rato en las puertas.


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Una casa de tiro con fuego real es la última herramienta de entrenamiento para estas situaciones. Proporciona una estructura para todo el movimiento táctico y de entrenamiento de navegación, además de aumentar la tensión y el realismo de la capacitación mediante la incorporación de la participación de amenazas con armas reales. Una cosa es disparar un arma en una línea recta agradable fuera del rango de calificación. Es otra cosa completamente distinta cuando se está dentro de un edificio tratando de ser conscientes del medio ambiente en 360 grados.

[10] Enfatice el entrenamiento en situaciones con poca o ninguna luz, tanto como a la luz del día. Porque el 70 % o más de los tiroteos policiales se producen bajo condiciones de luz reducida o declinante, el entrenamiento significativo con sus instrumentos de iluminación de servicio es una necesidad. La identificación del blanco y el reconocimiento de la amenaza son partes críticas de esta capacitación también. Considere que se necesitan linternas durante el día tanto como por la noche, porque uno nunca sabe dónde puede acabar. Las herramientas de iluminación que lleva tendrán un impacto significativo en la forma de manejar el arma, y en última instancia de cómo luchar, por lo que debe ser muy cómodo estar con ellas bajo varias situaciones tácticas. Muchos departamentos han adoptado el uso del láser, por lo que su entrenamiento debe incluir el uso adecuado de estas herramientas también. Si ya tiene una casa de tiro que puede ser oscurecida, tiene un lugar ideal para el entrenamiento con todo tipo de luz. La sesión de tiro en interiores también sirve para este propósito. Si no tiene acceso a esas instalaciones, use su polígono al aire libre.

[11] Integre técnicas "moverse y luego tirar" y "moverse mientras tira". Si usted mantiene una posición perfecta durante un enfrentamiento armado, no lo está haciendo correctamente. Si no se está moviendo para crear distancia, debe estar en movimiento para cubrir. La capacidad de disparar de manera efectiva, mientras que incorpora gran cantidad de movimiento, le da una ventaja táctica dramática. También aumenta las probabilidades de supervivencia y disminuye la probabilidad de impactar algo a lo que no quiere pegarle. Recuerde, cuando se dispara en movimiento no debe moverse más rápido de lo que usted puede impactar, ver y escuchar en algunos casos.

Las técnicas de movimiento efectivas se pueden enseñar con apenas cualquier equipo de blancos. Blancos de hombres corriendo y blancos de giro automatizado pueden hacer la experiencia más realista e intensa al permitir que el entrenador controle la situación y responda a las acciones del alumno.

[12] Integre técnicas de participación para los blancos móviles, lateralmente y cargando. Entrenar sobre blancos móviles se ha vuelto obligatorio para las agencias de aplicación de la ley en todo el país, y con razón. ¿Cuándo fue la última vez que estuviste en un enfrentamiento violento con alguien que sólo se detuvo? Debido a que correr parece ser una parte de la mayoría de los tiroteos, la capacidad de disparar con seguridad y precisión a blancos amenazantes en movimiento puede ser uno de los mayores activos de un agente. Es importante entrenar tanto para el movimiento lateral amenazante como el movimiento de carga, porque cada uno requiere un conjunto de habilidades específicas y de respuesta del alumno.

Algunos sistemas portátiles de blancos móviles son muy eficaces y flexibles, porque pueden ser configurados para ambos tipos de movimiento amenazantes (lateral y cargando). Un sistema pesado montado en un camión puede ser equipado con un blanco de placa de acero para mejorar la memoria muscular a través de la realimentación positiva inmediata del sonido metálico del acero. Una vez más, ser un instructor de armas de fuego hoy es una tarea extremadamente difícil. Tiene que ser en parte maestro, en parte motivador, en parte ingeniero de la faz mecánica, en parte abogado, en parte sargento de instrucción, en parte consejero, en parte personal de mantenimiento, en parte…, etc., etc. Rendimos homenaje a ustedes, los instructores que dedican sus esfuerzos a desarrollar la próxima generación de guerreros, y esperamos que la información que aquí se presenta sirva para centrar y aclarar el proceso.


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«Sus ojos pueden mentirle, sus bocas pueden vomitar odio y suciedad, y sus pies pueden correr para alejarse de usted. Pero sus manos lo matarán si les da la oportunidad…»

Para dar y obtener seguridad donde circula o hay mucha gente… ¡mire las manos!

Tome 20 minutos

Sargento Betsy Brantner Smith

16 de marzo de 2009 Cada luchador contra el crimen sabe que tiene que estar físicamente en forma, no sólo para su supervivencia óptima en la calle, sino para su supervivencia emocional. Sin embargo, muchos policías sienten que no tienen una hora o más de tiempo en el gimnasio, en un programa de artes marciales, o afuera "golpeando el pavimento" para completar una carrera de 10 km, por lo que no se molestan en hacer nada en absoluto. Si usted está teniendo dificultades para iniciar o reanudar un programa de ejercicios físicos, solo recuerde esto: "Veinte minutos". Casi cualquiera de nosotros puede encontrar veinte minutos para participar en algún tipo de actividad física moderada. Si se trata de una carrera de dos kilómetros, una caminata por el vecindario a paso ligero con el perro, 20 minutos en la elíptica, o enseñarle a patear una pelota de fútbol a tu hijo de 8 años, 20 minutos es mejor que no hacer nada. Los beneficios, resulta que no son sólo físicos, sino también emocionales. Según el Centro de Australia Occidental de Salud y Envejecimiento, sólo 20 minutos de ejercicio al día puede ayudar a prevenir el deterioro de la memoria. El estudio de la University College de Londres descubrió que cualquier forma de ejercicio puede mejorar su salud emocional. El estudio también encontró que mientras sólo 20 minutos de actividad física a la semana mejoran el estado mental de una persona, cuanta más actividad realice una persona, menos probabilidades habrán de sufrir trastornos psicológicos. El clima está empezando a mejorar, lleve a los niños, coloque un asiento de niño en su bicicleta, consiga una cochecito para el bebé, desafíe a su hijo de quince años a una carrera, de un paseo con su esposo todas las noches después de cenar. Hace tanto para su bienestar emocional, como para su buen estado físico. Comprométase sólo 20 minutos en cualquier actividad física cinco días a la semana (con la aprobación de su médico, por supuesto) para las próximas dos semanas, y luego monitoree cómo se siente. Esos 20 minutos pronto se convertirán en 30 y luego más, y antes de que usted lo sepa, usted comenzará a mirar hacia adelante para hacer ejercicio y usted será más saludable, más feliz y más apto para luchar contra el crimen.

Haciéndose de tiempo para trabajar Rich Von Voigt

20 de noviembre de 2011


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RIVERHEAD PD, New York. Hace varios años se publicó un artículo del sargento Betsy Smith Brantner sobre mantenerse en forma. Su artículo incluía información muy simple y directa. Ella daba entonces tan en el blanco con la información que aún hoy merece nuestra atención. He aquí mi plan de entrenamiento para cuando estoy sobre la ruta. Cada uno de nosotros tiene un lugar en el que puede salir de la vista del público durante unos minutos al día (detrás de un centro comercial o en algún lugar del almacén). Salga de su patrullero al menos cada hora. Tómese unos minutos para estirar la espalda, las piernas y los brazos. Haga que el tronco asuma la posición y haga 10-25 flexiones en función de su capacidad y progreso a partir de ahí. Haga un par de rotaciones del tronco y vuelva a patrullar. Ahora haga eso a cada hora, a partir de la segunda hora y termine en la séptima hora, con lo cual habrá hecho un mínimo de 60 flexiones de brazos en su recorrido. Haga la prueba.

Herida pequeña, problema mayor Charles «Chuck» Remsberg

Cuando usted piensa en una amenaza con un arma de filo, probablemente piense en un cuchillo en la mano de un atacante. Pero ¿qué pasa con su propio cuchillo, como un

peligro para usted?

Diez hábitos críticos para ganar un tiroteo 15

Aumentan los tiroteos contra delincuentes armados — ¿Cómo podemos asegurar que los policías ganen esas peleas?

17 de febrero de 2010

El autor: Charles Remsberg co-fundó el Seminario original y la publicación de Street Survival, autor de los tres libros sobre entrenamiento de las fuerzas del orden más vendidos, y ayudó a producir numerosos videos de instrucción premiados. Sus casi tres décadas de trabajo le valieron el prestigioso O.W. Wilson Award por sus contribuciones sobresalientes a la aplicación de la ley y el American Police Hall of Fame Honor Award por sus logros distinguidos en el servicio público. Compre el más reciente libro de Charles Remsberg, Blood Lessons (Lecciones de sangre), que le lleva dentro de más de 20 enfrentamientos inolvidables donde la vida de los oficiales está en la línea.

15 Charles Remsberg. 10 critical habits for winning a gunfight. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/2005634-10-critical-habits-for-winning-a-gunfight/. 17 de febrero de 2010.


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John Farnam es un instructor de armas de fuego conocido en todo el país y a quien le gusta decir: “Aprendemos más de nuestros fracasos que de nuestros éxitos”. Por eso es un fuerte defensor del entrenamiento de acción en vivo que incorpora munición simulada. Cuando usted fracasa al usar buenas tácticas, es golpeado con municiones simuladas que jalonan su error y le enseñan a no hacerlo de nuevo, especialmente en un genuino tiroteo. Después de terminar un reciente día de entrenamiento en el cual los oficiales se desempeñaron como jugadores de roles en situaciones crecientemente complejas de “tirar/no tirar” —tanto en escenarios propios del servicio como fuera de él—, Farnam reflexionó sobre lo que ve que aprenden los alumnos con más frecuencia de las experiencias de este escenario. “Hay ciertas lecciones que los oficiales reportan una y otra vez”, dijo. En su mente, éstas comprenden los hábitos críticos que necesitan desarrollar continuamente con el fin de ganar en ese fatídico día, cuando se enfrenten a un adversario armado determinado de verdad. 1. Mantenga la cabeza erguida. “Los oficiales a menudo dicen que un ataque ‘salió de la nada’”, dice Farnam. “No, no fue así. Probablemente tuvo su cabeza gacha y no vio las señales peligrosas, y el delincuente justo estaba esperando esa distracción”. “Cuando usted está en un lugar público, de servicio o no, está en un lugar peligroso. Necesita tener su vista levantada, observar a otra gente y ver qué está haciendo. Conocer detalles. Vea a cada costado y por detrás suyo”. Farnam lo dice en sus entrenamientos de tiroteo, “si algo inesperado ocurre, como una interrupción o quedarse sin munición, muchos oficiales plantan sus pies en el cemento y bajan su arma. Eso parece ser muy natural pero también es muy letal”. “Usted necesita practicar en la oscuridad, de modo que tranquilamente haga todo lo necesario para mantener su arma en funcionamiento sin tener que mirarla. Sus ojos deben estar ocupados buscando información, no mirando sus dedos”. 2. Aprenda a identificar qué es significativo. “Cuando trabaja en su turno o se mueve fuera de servicio, usted es bombardeado con estímulos visuales y auditivos”, dice Farnam. “La mayoría de esa información es distracción inútil. Alguna puede ser interesante, pero no importante. “Lo que necesita saber cuándo está afuera es qué afecta su seguridad y su continua existencia. Desarrollar el hábito de prestar atención a cosas con relación a las cuales debe reaccionar rápidamente. Distinguir lo significante de lo insignificante. Usted desea percibir cuanto antes cualquier cosa que represente una amenaza de modo que pueda alterar su comportamiento y proteger sus mejores intereses”. 3. Ver con ojos honestos. “Desarrollar la destreza para medir rápidamente si una situación amenazante es importante”, dice Farnam, “entonces la clave es tener el coraje de admitir los hechos, incluso cuando no nos gustan”. En su escenario, así como en la calle, “la negación a menudo es un problema. Los oficiales pueden ver señales peligrosas componiéndose pero no quieren confrontar los que están viendo. Así ponen excusas en su mente: ‘Sí, esto se ve mal, pero no lo es, realmente,’ porque no quieren que lo sea". A veces la negación y la demora están basadas en un malentendido fundamental de la naturaleza humana, cree Farnam. "Tome un escenario en el que un oficial se enfrenta a un tipo malo que está con su familia. El oficial puede no hacer frente a la conducta pre-ataque exhibida por el sospechoso, pensando que no intentaría nada, porque está con su esposa e hijos. En realidad, los sospechosos pueden ser más peligrosos en esa circunstancia, porque por dar marcha atrás corren el riesgo de la humillación vergonzosa frente a las personas que son importantes para ellos. Lo mismo con un pandillero que está con un grupo de pares versus uno que está solo cuando lo paras". Farnam dice que usted “necesita evitar la imitación de un alcohólico, pretendiendo realmente que no es cierto, y enfrentar frontalmente la situación, cualesquiera sean las circunstancias”. 4. Tenga un plan. “Usted ve el mundo a través de un filtro compuesto de sus experiencias colectivas de vida”, dice Farnam. "Mientras más diversas sean sus experiencias, probablemente más sofisticado será su análisis y su reacción ante lo que ve”. “El escenario de entrenamiento amplio y variado, así como la vida real actual en


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la calle, se suman a esa diversidad. A mayor exposición que usted tenga, más probable es que reconozca una situación de amenaza potencial y la relacione con algo que ya enfrentó y controló en el pasado. Usted tendrá un mayor sentido de lo que funcionará y qué no, en base a los resultados anteriores. “No se puede cerrar un plan detallado de principio a fin, y no debe esperar que cualquier cosa que haga sea perfecta. La acción agresiva es mucho más importante que la perfección. Pero usted debe tener en cuenta, al menos, el comienzo de lo que hará -un punto de partida- cuando las cosas van mal con cualquier contacto. Ensaye las respuestas potenciales en su capacitación actual y en su imaginación a medida que patrulla. “Tener las opciones ‘cuándo/entonces’ en mente es crítico. Su peor enemigo es tramar - no saber qué hacer porque no ha pensado en ello. No dependa de hacer un plan cuando las cosas se van al infierno. La acción puede desarrollarse tan rápido que no puede continuar con ella. La parte creativa de su cerebro se apaga con la carga de estrés repentino, y se verá obligado a depender de lo que ya ha practicado e incrustado". 5. Evite la “fibrilación cerebral”. Esa es la frase de Farnam para el pánico. "No se necesita mucho para que la mayoría de nosotros se sienta abrumado", observa. "Durante la Segunda Guerra Mundial, muchos soldados se congelaron o no dispararon en combate. O tiraron al aire "disparos de confort" - para sentirse "cómodos" vaciando sus armas. “Los ejercicios en el escenario que son progresivamente más difíciles pueden ayudarlo a aprender a fluir a través de su plan, moviéndose tranquilamente desde lo que esté hacienda hacia lo que necesita hacer después para adelantarse a una situación en desarrollo”. ¡Y mantenga la respiración! Esa es otra disciplina importante que usted puede desarrollar mediante la capacitación repetida en el escenario. "Contener la respiración es parte del pánico", dice Farnam. "Cuando no mantiene el oxígeno que fluye al cerebro, no puede pensar con claridad". 6. Permanezca en movimiento. Detenerse y parar aún son reacciones frecuentes en casos de ataque, dice Farnam — “justo lo opuesto a lo que es deseable”. Para maximizar sus posibilidades de éxito en el ataque, “un predador necesita retenerlo parado en un lugar en particular. Cuanto más tiempo permanezca en un lugar, es más probable que su plan se desarrollará hasta el final. “Retírese de la X. Cuando sienta el peligro, muévase lateralmente con relación a la amenaza. Cuando se mueve hacia delante o hacia atrás en línea recta, su posición relativa en realidad no cambia”. “Manténgase en movimiento hasta que esté detrás de una cobertura, si está disponible. Muévase hasta estar detrás de una cubierta, si está disponible. Su movimiento hará que su atacante para restablezca continuamente su plan y le resulte más difícil para golpear”. “Si está manejando cuando es atacado, manténgase en movimiento. No pare. La penetración de la bala es mucho menos probable cuando un vehículo está en movimiento". 7. Use una cubierta. Muchas veces en sus escenarios, dice Farnam, ve a los oficiales “pararse derechos próximos a cubrirse y disparar desde allí” sin haberse movido nunca detrás de ella, donde obtendrían alguna protección. “Pararse junto a un árbol es lo común”, dice. “Siempre sea consciente de su posibilidad de cobertura más próxima. Eso significa algo que es lo suficientemente grande como para permitir que la mayoría de ustedes se ubique detrás y lo suficientemente fuerte como para detener las balas, en particular las de pistola de bajo calibre, que son las más probables de encontrar. Son detenidos por muchos elementos comunes, desde los postes de electricidad hasta los aparatos de cocina. Los refrigeradores, por ejemplo, tienen varias capas de construcción, y las balas tienden a romperse a medida que avanzan a través de esas capas". Cuando nada mejor está disponible, ponerse detrás de algo que probablemente no impida el paso de los disparos –como un sofá, por ejemplo- es mejor que estar de pie a cuerpo gentil a la intemperie". Los atacantes normalmente tratarán de disparar alrededor de cualquier obstáculo en lugar de a través de él", explica Farnam. "Si el chico malo duda en disparar porque piensa que usted está detrás de la cubierta, entonces la cubierta está en su mente”. “Su meta siempre es presentarse a su adversario como un blanco más difícil, sin comprometer su habilidad para defenderse a sí mismo”.


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8. Luchar “ralentizando”. En los escenarios, Farnam ve a los oficiales innecesariamente “tornando problemas solucionables en un Monte Everest. Correr hacia afuera sin munición, quedarse parados, resultar heridos — todos lentifican la velocidad. Muévase sobre o alrededor de ellos rápidamente, y siga adelante. “La gente tiende a hacerse más problemas de los que realmente tiene. No pierda el tiempo buscando excusas para perder. ¡Salga del pensamiento autodestructivo y céntrese en la manera de ganar! Los resultados son a menudo determinados por quien pega primero". 9. Mantenga la ofensiva y finalice la pelea. “Para ganar, hay que abrumar al sospechoso con tanta fuerza precisa que no pueda tratar con ella y resulte derrotado. “Usted elimina sus opciones hasta que no le queda más que rendirse", dice Farnam. “A menudo esto puede hacerse sin efectuar un solo disparo. Es el ideal. Establecer el control desde el principio. No dude en aplicar su mejor opción de fuerza justificable para neutralizar la resistencia rápidamente. Las agencias que adoptaron el TASER como una política de bajo nivel de fuerza les dieron a sus agentes una gran ventaja y por lo general terminan protegiendo a los funcionarios a y los sospechosos de lesiones graves. “Una vez que tome la ofensiva, no renuncie a ella. Mantenga el control y llévelo hasta su conclusión. Usted no quiere una prolongada batalla. Cuanto más larga sea la resistencia continúa, es más probable que vayan a producirse lesiones. Las grandes batallas campales hacen grandes novelas, pero son un procedimiento policial pésimo. “Cuando las cosas van bien y el sospechoso parece cooperar, los oficiales tienden a relajarse, aliviados. En realidad, este puede ser el momento más peligroso. No baje la guardia. Un fuerte final es tan importante como un buen comienzo". 10. Refuerce rigurosamente. “Perforar en buenas tácticas a través del entrenamiento en el escenario no es una empresa de entretenimiento”, dice Farnam. "Hecho correctamente, es arduo, es un reto, a veces es frustrante - es trabajo. Pero el ensayo regular, repetido, es el componente principal de la actuación guerrera. Cuando tu vida está en la línea, son los hábitos que has cultivado los que hacen a la diferencia".-

Un acrónimo para ayudarlo a mantener su mente alerta 16 MAWOL significa "mentalmente ausente sin permiso"

Charles Remsberg

27 de octubre de 2010 Estar AWOL (Absent Without Leave, ausente sin permiso) en el Ejército puede significar su baja. Estar MAWOL en las fuerzas de seguridad y cuerpos policiales puede significar su muerte. Este nuevo acrónimo fue presentado a los instructores policiales por Ron Borsch, gerente de la academia regional de educación en servicio SEALE (Área Sureste de la Aplicación de la Ley) de Ohio, durante la conferencia anual de entrenamiento de ILEETA 2010. Procura evitar que los funcionarios pasen a un estado peligroso conocido como Condición Blanca. MAWOL significa "mentalmente ausente sin permiso". Al añadir una letra al acrónimo militar universalmente conocido, por no estar donde se supone que debe estar, Borsch ha creado una taquigrafía memorable ante la falta de atención, con una variedad de aplicaciones de valor. Borsch es un inventor superdotado de frases:

16 Charles Remsberg. An acronym to help you keep your mental edge. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/2853047-An-acronym-to-help-you-keep-your-mental-edge/. 27 de octubre de 2010.


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• "Cronómetro de la muerte", describe la velocidad con la que los asesinos activos demandan su víctima. • "Precaución Tombstone", describe la duda indebida en una situación peligrosa para la vida que demanda intervención inmediata. • "SOLO" significa "único oficial salvando las vidas de otros", cuando el primer respondiente necesita tomar acción urgentemente por sí solo sin esperar el apoyo de su refuerzo. MAWOL resultó de reflexiones que "se filtran en el cerebro" acerca de cosas que me molestan, dijo recientemente Borsch. A través de tres décadas de experiencia policial, "siempre estuve preocupado por los policías distraídos o que dividen su atención cuando deberían estar plenamente concentrados en algo, en el ambiente inmediatamente alrededor de ellos". En su forma más leve, fue testigo de este lapso innumerables veces cuando pasaba lista de asistencia al personal y durante las sesiones de entrenamiento. "Al pasar lista a menudo he visto a oficiales leyendo algo, terminando informes, o dibujando diagramas de accidentes en lugar de escuchar la información", dijo. “En las clases de capacitación, se les ve emitiendo mensajes de texto o comprobando su correo electrónico mientras el instructor está tratando de difundir información”. "Si usted los llama, a menudo le dirán que son multitareas. Pero la ciencia tiene muy bien establecido que no puede concentrarse por completo en dos o más cosas al mismo tiempo. Su enfoque tiene que cambiar entre estímulos, y si está atento a las cosas equivocadas en el momento equivocado, puede que le falte información crítica. "En la calle, podría significar su vida". Los Cuatro de Lakewood. Mientras contemplaba una catástrofe -el impactante asesinato el año pasado de cuatro oficiales que trabajaban en sus computadoras portátiles en una tienda de café en Lakewood, Washington-, la designación MAWOL finalmente se gelificó para él. "Mientras estaba sopesando esa tragedia y buscaba alguna ayuda-memoria para la capacitación que posiblemente podría utilizar para evitar muertes de otros funcionarios, el término AWOL se mantuvo en el aire por alguna razón", recuerda. "Con el tiempo se me ocurrió que meter una 'M' para 'Mentalmente', delante de AWOL, describe absolutamente el error fatal de no mantener la cabeza en el juego, de estar ‘ausente’ de lo que es más importante en el momento". Cuando Borsch comenzó a utilizar la sigla en sus clases, la dedicó a la memoria de los oficiales caídos en Washington. Ve múltiples oportunidades para aplicar el término en la aplicación diaria de la ley. Piedra de toque de la capacitación. Los "10 errores fatales" -deficiencias mentales y tácticas que a menudo subyacen en los asesinatos y agresiones a los oficiales- han sido un elemento básico de entrenamiento de supervivencia en la aplicación de la ley desde su primer desglose hace más de 30 años por Pierce Brooks, un detective de homicidios que trabajó el tristemente célebre caso de Onion Field. "MAWOL es un término general para todos esos errores", explica Borsch. "Un entrenador puede ramificarse desde esa palabra hacia adentro cada uno y su importancia: Falta de concentración... tomar una mala posición... no hacer caso a las señales de peligro... relajarse antes de tiempo... no ver las manos, y así sucesivamente". Incluso por sí solo, MAWOL es un error mortal de una sola palabra digno de instrucción y apoyo con historias de casos. Teniendo en cuenta el desafío, sus alumnos plantearán nuevos ejemplos de su propio estudio y observación, y esto ayudará a consolidar el término en su agenda mental". Recordatorio de la autodisciplina. "Como oficial de la ley, usted es un blanco potencial de los delincuentes agresivos y usted necesita operar constantemente en un estado mental no menor que el de ‘conciencia relajada’, incluso en muchas situaciones fuera de servicio", dice Borsch. "Pero en tiempos de relativa inactividad, es fácil ir a la deriva mental, y en situaciones de contacto es fácil distraerse y concentrarse en las cosas equivocadas. La experiencia de estar siempre listo pero sin que pase nada malo comprensible que nos tiente a escapar, a un exceso de relajación, y sucumbir a la comodidad. "En este modo de pensar, es posible que pierda una señal previa al ataque tan sutil como un vistazo al objetivo de su arma. Usted necesita sacudirse la complacencia. "MAWOL es un término conciso y fácil de recordar, que puede hacerlo un hábito de llamada a la mente de vez en cuando como un recordatorio para comprobar su estado mental. ¿Está usted alerta, 360 grados, hacia quienes están a su alrededor y qué están haciendo? En sus contactos, ¿está usted observando las señales de peligro? ¿Está usted atento a su


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intuición, el más importante sexto sentido que es la totalidad de todos sus sentidos, experiencia y capacitación enviándole un mensaje en una vía rápida subconsciente? "Usted puede imprimir MAWOL y pegarlo en su armario o ponerlo en una tarjeta en su bolsillo donde estemos obligados a verla como un sistema". Código de palabra. "MAWOL se puede utilizar en una escena como una palabra clave entre los oficiales", sugiere Borsch. "Tal vez usted quiere alertar a los otros oficiales sobre algo que ha captado intuitiva o concretamente. Decir "MAWOL" alertará a sus colegas sin inclinar la mano hacia el sospechoso. "O tal vez vea la necesidad de que su pareja preste más atención a lo que está pasando, porque él o ella están tomando unas vacaciones de '10 segundos'. En ese caso, MAWOL significaría ‘fíjese’". Componente de la sesión informativa. En las sesiones informativas sobre las lecciones aprendidas, Borsch cree que los entrenadores y otros críticos con demasiada frecuencia se concentran analizando las tácticas físicas de un oficial a expensas de explorar qué estaba pensando - o, más puesto abiertamente, si estaba pensando. "Las bajas ocurren a menudo debido a que de una u otra manera los funcionarios están mentalmente ausentes en los momentos claves en una crisis", dice. "Los policías están acostumbrados a estar en el modo cazador. Con demasiada frecuencia, son sorprendidos por un inesperado cambio de roles, donde se encuentran cazados, pero no son conscientes de la amenaza inminente o listos para hacer frente a los depredadores criminales. "Sorpresa, velocidad y violencia de la acción son 3 factores clave para ganar en combate. Infortunadamente, trabajan también para los chicos malos y para los chicos buenos. El proceso mental conocido como el ciclo OODA -observar, orientar, decidir, actuar- es el más rápido y más ajustados para la persona que está sorprendiendo. Aquellos sorprendidos por el más suelto y más lento ciclo OODA, se ponen en grave desventaja. “Buscar y exponer ejemplos de MAWOL en las sesiones informativas ayudan a conducir a casa la importancia que juega esa actitud mental en mantenerse con vida y sin lesiones". Borsch ofrece este pensamiento final: "Mentalmente ausente sin permiso - es una falta injustificada que no puede permitirse el lujo de tener en su expediente".

Primeros resultados del estudio en curso sobre los funcionarios que sobreviven a las heridas

Chuck Remsberg, Editor en Jefe

9 de febrero de 2011 La primera pequeña muestra de casos de "cerca de perder" [la vida] informa sobre los oficiales que sobrevivieron a las lesiones potencialmente mortales, ha sido revisado por el Proyecto V.A.L.O.R. - con algunas sorpresas nuevas. V.A.L.O.R. (Violence Against Law Officer Research, Investigación de la Violencia contra el Oficial de la Ley) es el nombre genérico para una variedad de estudios en curso del Dr. Matt Sztajnkrycer, que trata de mejorar la atención a funcionarios heridos en el lugar del siniestro. Sztajnkrycer es el presidente de Investigación de Medicina de Emergencia de la Clínica Mayo, doctor de SWAT y asesor médico de policía en Minnesota, y un miembro del cuerpo docente para el curso de certificación vigente sobre Análisis de las Ciencias de la Fuerza. En octubre pasado, lanzó un sitio web (www.valorproject.org) donde los profesionales de la ley de forma confidencial pueden informar los detalles de los encuentros en la calle que podrían haber resultado en la muerte del oficial. Mediante el estudio de las lesiones del sobreviviente, su intención es recopilar información importante que en última instancia será útil para determinar las mejores intervenciones en crisis médicas para el personal herido. [Ver Noticias de Ciencias de la Fuerza - Transmisión # 161, enviado el 22 de octubre de 2010, para más detalles.]


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Recientemente, Sztajnkrycer informó sobre las primeras 37 respuestas que ha recibido - 34 de 17 estados de EEUU y 3 de 2 provincias canadienses. Está representado un "amplio espectro" de autoridades federales, estatales, de condados y de agencias municipales. Hay una distribución relativamente uniforme entre las heridas consideradas leves, graves y críticas. "Aunque necesitamos muchas más contribuciones antes de llegar a conclusiones sólidas que se pueden extraer, yo quería al menos empezar obteniendo información de las personas para que puedan utilizarla. Las respuestas ya están mostrando algunos preliminares de interés relevante para todos", dijo Sztajnkrycer FSN. Por ejemplo: • Casi el 40 % de los casos de lesiones afectan a funcionarios que trabajan solos, sin apoyo inmediato disponible. "Esto tiene una implicación importante para la capacitación médica del departamento", dice Sztajnkrycer. "Sin la capacidad de ayuda de amigos, un oficial herido no sólo tiene que manejar cualquier amenaza táctica que exista, sino también ser capaz de cuidar de sí mismo hasta que el refuerzo o los profesionales médicos lleguen". • Las lesiones más frecuentes (10 casos de los 37) ocurren en ocasión de llamadas a causa de la presencia de "personas sospechosas" - más del doble las domésticas, que a menudo recibe tratamiento destacado en los noticieros. "Esto podría cambiar a medida que obtengamos más datos", explica Sztajnkrycer, "pero en este momento una llamada por persona sospechosa parece ser una bandera roja en particular". La segunda circunstancia más común de lesiones (16%): paradas de automotores por violaciones de tráfico. • ‘Heridas de bala’ fue la causa en más de dos tercios de las lesiones reportadas, con un solo caso de lesión MVA informada. Esto sorprende a Sztajnkrycer y sospecha que hay "parcialidad retrospectiva". "Mirando hacia atrás, los oficiales son más propensos probablemente a recordar y reportar una situación táctica que salió mal que un accidente de conducción que puede ser descartado como ‘una de esas cosas’ sin ningún tipo de lecciones particulares que aprender. Dada la tasa de funcionarios asesinados en MAVs, sin embargo, las lesiones ‘cercanas a hacer perder’ [la vida] en esta categoría son, sin duda, importantes para saber más". • También resulta sorprendente - y también posiblemente influido por el sesgo de la retrospección - la frecuencia con que los agentes heridos necesitaron ser rescatados bajo una amenaza activa continua. "Esto ocurrió en una cuarta parte de la muestra – es mucho", dice Sztajnkrycer. "Si esto es realmente un reflejo de las circunstancias de campo, muestra la importancia de saber cómo evaluar la condición de oficiales caídos y ensayar y realizar extracciones seguras". • La atención médica más común brindada en el campo por los funcionarios a sí mismos o a otros oficiales fue el control de la hemorragia. La mayoría fue hecha por vendaje y presión manual. Sin embargo, en dos casos se utilizaron torniquetes. Esa información es importante, señala Sztajnkrycer, porque alguna cuestión se ha planteado sobre el valor de los torniquetes en el tratamiento de los policías heridos, dado que las heridas mortales a los funcionarios tienden a ser en el pecho o en la cabeza donde los torniquetes no pueden ayudar. Los resultados de V.A.L.O.R., sin embargo, muestran que algunas heridas -con supervivencia- son de hecho una respuesta al torniquete. • Garantías verbales fueron ofrecidas a los oficiales heridos por otros funcionarios en la mayoría de los casos. Incluso si no podía proporcionarse ayuda médica, el estímulo verbal es "muy importante psicológicamente", dice Sztajnkrycer. "Hay una enorme cantidad de confort al estar en presencia de amigos que dicen que todo va a estar bien. Eso puede ser un factor vital en el mantenimiento de la voluntad de vivir". • Más oficiales heridos (aproximadamente 25%), que lo que esperaba Sztajnkrycer, fueron trasladados a un centro médico en patrullero. "Salvo en los casos en que hay preocupación acerca de cómo mover a un paciente a causa de lesiones en el cuello, esto es probablemente deseable, teniendo en cuenta el tiempo de espera para la respuesta de la ambulancia o helicóptero, especialmente en las zonas rurales", dice. "Incluso si usted comienza a moverse hacia un hospital e intercepta al EMS en el camino, usted puede reducir el tiempo perdido. Hay algunos datos recientemente publicados desde Filadelfia que sugieren que el transporte policial de los pacientes con traumas penetrantes (arma blanca o arma de fuego) es seguro. Pero si usted va a transportar a la gente en coche, necesita practicar. No es fácil conseguir un oficial grande que


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lleva un chaleco, un cinturón con equipamiento y así sucesivamente, en la parte trasera de un coche patrulla con una jaula". Además de compilar recuentos estadísticos, Sztajnkrycer analizará las narrativas que acompañan a los casos presentados para obtener datos adicionales, especialmente la información que pueda ser útil para recomendar en la capacitación. Un resumen detallado de los primeros cuasi-accidentes aparece en la página web del Proyecto V.A.L.O.R. y también en una nueva página del Proyecto V.A.L.O.R. en Facebook. Nuevos informes de casos de lesiones se pueden presentar en el sitio web del proyecto, y Sztajnkrycer insta enérgicamente a que se le envíe la información cada vez que tenga conocimiento oficial de las lesiones. "Estoy dedicado a analizar todos los datos que pueda obtener", dice. "Cuanto más podamos aprender acerca de lo que funciona en el campo y lo que no, podremos diseñar mejor capacitación y compartir para ayudar a mantener vivos a los funcionarios". Tiene la intención de seguir recopilando informes de cuasi accidentes indefinidamente. Por favor, recuerde ayudar conforme experimente o aprenda acerca de tales casos.

Editor en Jefe: Chuck Remsberg

5 de julio de 2011 Mientras aumenta el número de muertes de policías, ¿qué puede hacer usted ahora para estar a salvo? Es un año sangriento para los policías hasta el momento. A fines de junio, el total de muertes en actos del servicio en los EE.UU. subió un 8% con respecto al mismo período del año 2010, según cifras preliminares del Fondo Nacional para el Memorial de los Oficiales Encargados de Aplicar la Ley (National Law Enforcement Officers Memorial Fund). Los asesinatos de oficiales por disparos siguen subiendo con un alarmante incremento de 38%. Si las tendencias se mantienen a través de la segunda mitad del año 2011, podríamos ver el mayor número de víctimas anuales en una década. ¿Qué factores conductistas pueden estar influyendo en este aumento preocupante? y, en concreto, ¿qué puede hacer ahora mismo para evitar lo más posible convertirse en una de esas sombrías estadísticas? Consultamos a tres entrenadores destacados, con credenciales en la Ciencia de la Fuerza, para obtener sus recomendaciones. Aquí está su compendio de medidas de seguridad proactiva que puede cumplir inmediatamente, sin costo alguno, y sin ningún entrenamiento complicado para protegerse y proteger a sus compañeros. Es una lista sin excusas, muy apropiada para reforzarlas. 1. Dr. Bill Lewinski, director ejecutivo del Instituto de Ciencias de la Fuerza y principal investigador de la dinámica humana implicada en encuentros letales. "Desde la perspectiva general de los tiroteos de este año, es posible identificar al menos algunos elementos críticos de la seguridad de los oficiales a los que han hecho caso omiso, que resultan en ser tomados por sorpresa y en posiciones insostenibles, por delincuentes que querían matarlos", señala Lewinski. "Usted no necesita ser paranoico para sobrevivir en la calle, pero sí necesita construir ciertas bases críticas de precaución en su repertorio de las que simplemente no debe apartarse en cualquiera de tus contactos". Entre ellos: • Respete la velocidad de ataque. "El sospechoso promedio puede presentar un arma de fuego -desde un bolsillo, desde un cinturón, desde la consola del vehículo, desde su costado, por debajo de su cuerpo- y disparar en cualquier dirección en tan sólo una cuarta parte de un segundo. Eso es más rápido de lo que el oficial promedio puede disparar, incluso si su arma está apuntando al blanco, su dedo en el gatillo, y ya ha decidido hacer fuego. Eso es debido al tiempo que toma procesarlo mentalmente e impulsar una reacción a la acción del sospechoso". Cita casos del principio de este año en que los sospechosos fueron capaces de derribar con disparos a los oficiales en menos de un segundo; y en una confrontación dos agentes próximos de pie al parecer fueron asesinados en ese breve destello de tiempo antes que cualquiera pudiera responder. "Recordar el potencial de la velocidad de la luz de un ataque afectará todos sus comportamientos al acercarse y llegar al contacto con el sospechoso, desde su uso de la cubierta a su posición táctica, a sus comandos verbales, a su estado de alerta", dice Lewinski. "No importa si en un control de ruta usted se acerca desde el lado del conductor o del lado del pasajero, si se coloca directamente delante de la ventana del conductor o del pasajero y se vuelve un blanco fácil. Puede ser fusilado allí antes que pueda pestañear.


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"Del mismo modo, si no monitorea y controla las manos de un sospechoso desde el principio, usted sólo empeora su desventaja reactiva". • "Leer" para vivir. Los experimentos de la Ciencia de la Fuerza en Irlanda del Norte han demostrado que los oficiales en mejores condiciones para defenderse por lo general son los que pueden "leer" con precisión el comportamiento sospechoso que preanuncia un ataque. [Ver el informe de Force Science News #104] "Los agentes más diestros, usando su entrenamiento y experiencia, tienden a saber dónde, cuándo y cómo va a desarrollarse una situación de amenaza", dice Lewinski. "Si usted está atento a los movimientos físicos y señales verbales, que a veces son sutiles, puede detectar y neutralizar o suprimir las amenazas potenciales antes de quedar atrapado detrás de la curva reaccionaria", dice Lewinski. "Esto requiere una evaluación continua de los sujetos y su entorno, evaluar qué están haciendo, qué están diciendo, dónde y cómo se están moviendo, y qué está pasando a su alrededor. Antes de asegurar o mantener el control, usted debe estar consciente y no en un estado de negación o desatención. Algunos oficiales, por desgracia, ni siquiera reconocen que algo tan evidente como un sujeto armado que se niega a cumplir órdenes es una fuerte señal de amenaza". • Evite las trampas verbales. "Todos hemos visto videos de cámaras colocadas en el tablero de un patrullero en que oficiales de pie ordenan abiertamente y gritan repetidamente "¡suelte el arma!" a sujetos amenazantes, que no cumplen", dice Lewinski. "Los oficiales no están usando la fuerza letal cuyo uso está legalmente justificado, y no hacen algo más -como moverse para cubrirse o retirarse- para ganar una ventaja táctica. "Esos agentes quedan atrapados en un bucle verbal repetitivo porque perciben que están perdiendo el control de la situación y no pueden encontrar una salida. Están tácticamente congelados. No pueden pensar creativamente en el momento en que confrontan la posibilidad de su propia muerte, especialmente si nunca han estado en una situación similar antes. Su preparación debe venir antes del evento. Y eso significa experimentar una gran cantidad de escenarios realistas, de fuerza contra fuerza, realizados a la velocidad de un tiroteo, incluso si este entrenamiento tiene que hacerse en su tiempo personal. Esto incrustará opciones que se pueden suscitar cuando usted las necesite para que no sólo siga gritándole a un delincuente que no está escuchando". • Entrene su mente. Un entrenamiento técnico de bajo costo, conducido fácilmente para superar la congelación táctica que le gusta a Lewinski, son los ejercicios encapuchados - si se hacen correctamente. "La idea no es que te bombardeen inmediatamente con esos estímulos intensos y desafiantes al punto que quedes abrumado por el miedo, y luego llamarlo ‘inoculación de estrés’. "El abordaje más productivo es empezar con escenarios que son menos urgentes, donde hay tiempo para practicar la lectura de una situación, evaluar el comportamiento del sospechoso, y luego tomar decisiones tácticas. A medida que se vuelve más diestro, sus socios de capacitación pueden empujar hacia la urgencia, introduciendo gradualmente más intensidad. El centro de gravedad no debe ser meramente infligir estrés. Debería ser su mente, logrando que sea apto para la evaluación rápida de situaciones, detectando amenazas potenciales o no, y empleando opciones apropiadas. Esto toma muchas exposiciones sobre una base continua, no sólo uno o dos ejercicios en el curso de un año". 2. Brian Willis, ex oficial y ex instructor de Calgary (Alberta, Canadá), presidente de “Entrenando una Mente Ganadora” y analista certificado de la Ciencia de la Fuerza. Willis es líder en la campaña iniciada por la revista Law Enforcement para reducir el número anual de muertes de policías en este país a menos de 100, una meta que no se ha logrado desde 1944. El impulso ‘Por debajo de 100’ se centra en cinco principios básicos, conceptos simples que Willis refiere como la "fruta madura" de la modificación de la conducta en la aplicación de la ley - "cosas que cualquier funcionario puede hacer fácilmente como parte de su desempeño diario, que tendrá un profundo efecto acumulativo". • Use el cinturón de seguridad. "Con los años, hemos utilizado la seguridad del oficial como una excusa para no usar la correa por miedo a ser atrapados en una emboscada", dice Willis. "En realidad, muy pocos o ninguno de los funcionarios han sido asesinados porque no pudieron liberarse del cinturón de seguridad rápidamente. Sin embargo, se confirmó que casi el 40% de los oficiales muertos en accidentes de tránsito, no llevaban puestos sus cinturones, y muchas de esas vidas perdidas, sin duda, podrían haber sido salvadas. El


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Gestor del Riesgo, Gordon Graham, ex integrante de la Patrulla de Caminos de California (CHiP, California Highway Patrol), estima que el fiel uso del cinturón de seguridad podría reducir de inmediato la cantidad de muertes en el servicio en al menos 30". • Use su chaleco antibalas. "Más de 3.500 vidas de oficiales han sido salvadas por la armadura corporal blanda", dice Willis, "sin embargo, casi la mitad de todos los oficiales en servicio activo no siempre usan los chalecos. Incluso en las agencias con políticas de portación obligatoria; política que a menudo es ignorada y no se cumple". Un estudio reporta que la gran mayoría de las agencias (el 90%) no inspeccionan regularmente los chalecos de los agentes para garantizar que se ajusten y estén bien mantenidos, transmitiendo una actitud de indiferencia. "Necesitamos empezar a llamar a los oficiales que se presentan a primera obligación sin los chalecos e insistir en que tienen que ponérselos antes de salir a la calle", cree Willis. • Tenga cuidado con su velocidad. Las víctimas policiales de accidentes de tráfico en realidad han bajado este año en comparación con el pasado, pero muchos policías aun "conducen demasiado rápido para atender llamadas que son de menor importancia en su naturaleza", dice Willis. "Cuatro de cada diez accidentes fatales de vehículos policiales involucran un solo vehículo que choca un objeto fijo fuera de la carretera, por lo general un cartel sobre exceso de velocidad, o va demasiado rápido para esas condiciones y pierde el control". A veces la víctima no es el conductor. Cita el caso en que un oficial conducía a 100 mph en una zona de 45 millas por hora, en respuesta a una llamada por robo. Chocó a un compañero que iba a pie recogiendo los restos de una colisión anterior y lo mató, antes de estrellarse contra un poste de teléfono. Ese oficial ya está cumpliendo una condena de 17 años de prisión. • Decida "qué es importante ahora". Esta es la firma del concepto de Willis. "Implica sopesar continuamente sus opciones y determinar qué avanza mejor hacia sus metas", explica. "¿Usted se apresura a hacer un arresto o espera hasta tener refuerzos? ¿Usted pone fin a una persecución cuando el riesgo es demasiado grande, o continúa a pesar de ello? ¿Se compromete en una persecución a pie o en una vigilancia a pie? ¿Habla o pelea? ¿Cierra la brecha y usa el control de la mano vacía, o mantiene distancia y usa un arma intermedia? ¿Dispara o no? Decidir qué es lo más importante en este momento, dadas las circunstancias que está enfrentando, le permite dar prioridad a su comportamiento. Afecta todos los aspectos de su vida, en servicio o fuera de él". • Recuerde: La complacencia mata. "Reflexione sobre la forma en que está haciendo el trabajo", sugiere Willis. "¿Qué se volvió "rutina" en sus prácticas? ¿Qué parece la complacencia en su vida, y cómo puede cambiar su forma de pensar para poder estar en patrulla activa en todo momento? Es auto-evaluación vital, que necesita ocurrir regularmente". Asimismo, insta a "prestar atención a los signos de la complacencia en los demás funcionarios y llevarlos a su atención. Hemos de cuidar lo suficiente el uno del otro para cuestionar los comportamientos peligrosos en lugar de dejarlos pasar. El comportamiento ignorado se vuelve comportamiento tolerado y los costos muy a menudo se anotan en la vida de los oficiales". 3. Bob "Coach" Lindsey, un analista certificado de la Ciencia de la Fuerza, coronel retirado del Jefferson Parish (LA) SO, y creador del popular curso de entrenamiento "Preparación mental para ganar y sobrevivir en servicio y fuera de servicio". En opinión de Lindsey, disminuir las muertes de oficiales se reduce a una simple pregunta: ¿Está usted dispuesto? "Hoy en día", dice, "tenemos los oficiales mejor entrenados y mejor equipados de la historia. Cada uno de ellos puede llevar un cinturón de seguridad abrochado mientras el coche está en movimiento, puede usar un chaleco de protección aunque sea incómodo, puede estar atento a las señales del ataque que usualmente preceden a los actos violentos, puede intervenir para corregir los errores tácticos peligrosos de un compañero... pero hay una diferencia crítica entre capacidad y voluntad. "Tenemos la obligación profesional de estar dispuestos, la responsabilidad personal de ser nuestro propio mejor guardaespaldas. Nos vemos obligados a tener una mejor capacitación y más fuerte convicción que el adversario armado que confrontamos. Si ese adversario nos encuentra inseguros, no preparados para reaccionar, vacilantes, pero él está dispuesto a matar sin dudarlo, ¿quién va a ganar?


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"Usted no tiene tiempo para decidir si está dispuesto en una situación amenazante para su vida. Usted debe hacerlo de antemano y repetidamente confirmar su determinación hablándose a si mismo, visualizando, planificando previamente, y dominando las opciones tácticas, como parte de su preparación para el combate". "La mayoría de los oficiales, Dios mediante, nunca enfrentarán un competencia letal. Sin embargo, todos debemos estar listos y dispuestos para cuando el momento llegue a fin de abordarlo, detener la amenaza y volver a casa sanos y salvos a nuestros seres queridos al final del turno".

Claves para ganar tiroteos (de un policía que «estuvo allí», en varias ocasiones) - Parte I 17

Charles Remsberg

16 de enero de 2013 El detective de pandillas Jared T. Reston sabe algo sobre ganar tiroteos. En una docena de años con la Oficina del Sheriff de Jacksonville (Florida), mató a tres sospechosos que intentaron asesinarlo. Otras ocho veces, fue parte de un equipo de SWAT con el que puso fin a encuentros amenazantes para su vida con fuerza letal. En una batalla con un adolescente sospechoso de robo, que él describe vívidamente en una entrevista en PoliceOne BLUtube, a Reston le dispararon siete veces antes de que él fuera capaz de efectuar tres disparos de contacto mortales a la cabeza de su atacante. Una de las heridas de Reston vino de una calibre .45 redonda que pasó a través de su mandíbula y de su cuello, volando dientes y el hueso en su tránsito. Reconstruir su boca y la cara le tomó 14 cirugías, pero él luchó por una notable recuperación que lo vio de nuevo en servicio completo sólo seis meses después. En la reciente 25ª conferencia anual de la Asociación de Oficiales Tácticos de Illinois, Reston compartió con otros operadores sus secretos abiertos para mantenerse con vida contra fuerzas abrumadoras. Si usted trabaja con un equipo o patrulla las calles solo, estos son los 10 fundamentos que él cree le ayudarán a ganar cualquier enfrentamiento armado, que lo ayudaron a él mismo en varias ocasiones. 1) Estar listo para infligir "violencia incalificable". "Algunos oficiales mueren porque no usaron la cantidad apropiada de fuerza desde el principio", dice Reston, el instructor líder de armas de fuego para el equipo SWAT de su agencia. "Sepa lo que sus estatutos estatales y la política del Departamento dicen acerca de cuándo puede usar la fuerza mortal para que pueda actuar con confianza, sin duda. Usted no debería tener que pensar conscientemente acerca de lo que es permisible o si va a ser demandado. Eso lo pone más lejos detrás de la curva. "Estar preparado para ir en un instante de estar calmo a infligir violencia indecible en aquellos que se llevarían su vida... y luego volver a la calma de nuevo. Comprometerse mental y físicamente para hacer lo que sea necesario -con híper intensidad- para prevalecer. No tendrá tiempo para pensar o calentarse. Usted tiene que tener esa voluntad subconsciente para herir a gente peligrosa justo allí, y volver a encenderlo como un interruptor - como lo haría si alguien estuviera tratando de arrebatarle a su hijo o alguien más cercano a ti. "Puede condicionarse a sí mismo a través del entrenamiento en un escenario con inoculación de estrés. Cuanto más se entrene bajo estrés, menos estrés sentirá cuando sea real. "No dependa de la adrenalina para energizarse e involucrarse a través de una crisis. Más bien puede drenar su fuerza en su lugar. Cuando los disparos comienzan, he conocido oficiales simplemente se cierran. Ni

17 Charles Remsberg. 5 keys to winning gunfights (from a cop who's 'been there' repeatedly). http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/6091484-5-keys-to-winning-gunfights-from-a-cop-whos-been-there-repeatedly/. 16 de enero de 2013.


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siquiera podían hablar con la operadora. Ellos pensaban que estaban listos para un tiroteo, pero no lo estaban". 2) Ensaye mentalmente. Reston es un firme creyente en la integración de horas de imágenes mentales en su régimen de entrenamiento. "Los chicos me preguntan: '¿Le molesta que dispare al sospechoso con disparos de contacto a la cabeza?' y yo digo: 'No, porque yo ya lo hice en mi mente miles de veces'. "Su mentalidad para ganar tiene que ser constantemente afilada o la perderá. El ensayo mental es una forma de afinarla. Imagínese enfrentando y derrotando cualquier tipo de reto que pueda conjurar. Imagínese recibiendo un disparo y cómo va a reaccionar. Y no se imagine el estereotipo de los chicos malos. El agresor que tiene que matar puede parecerse mucho a usted. No siempre son pandilleros o criminales endurecidos. Cualquier persona en cualquier momento puede tratar de hacerle daño". Apenas esté seguro, advierte Reston, que en la vida real usted puede emplear las destrezas que imaginó por sí mismo utilizando para ganar en sus escenarios mentales. Si cándidamente tiene dudas, entonces debe identificar su desafío de entrenamiento(s), ya que "en una crisis no superará el nivel de preparación". 3) Armadura arriba. Sí, el chaleco antibalas es caliente, es voluminoso, "apesta", concede Reston. "Pero es una herramienta que le ayudará a sobrevivir a una pelea física o un accidente de coche, así como un tiroteo. Si no lo usa, usted es perezoso, desconsiderado con su familia, e ignorante de su propia seguridad". Tres de los disparos que le hizo el ladrón impactaron en el pecho, uno en el punto muerto central de su chaleco. "La armadura corporal me ayudó a mantenerme en la lucha. El disparo que golpeó el plato habría sido con seguridad un show-stopper sin el chaleco". 4) Esté atento a las oportunidades para la ventaja. "En la mayoría de los encuentros, esos momentos surgen cuando se puede ganar la mano, pero esas ventanas de oportunidad se abren y cierran rápidamente", dice Reston. "Por ejemplo, un sujeto que te está amenazando en una posición de combate puede bajar sus manos lo suficiente por un instante en que podría aplastarle la cara. O la manera de un sospechoso en un momento dado puede sugerir que está dispuesto a rendirse, pero si se le permite más tiempo para pensar sin ser rápidamente controlado, puede que no. "Sea vigilante y esté listo. Actúe con decisión. Puede no tener otra oportunidad". 5) No sea equipo-dependiente. "Estar preparado para la falla de cualquier arma - por no trabajar o no obtener los resultados que queremos", dice Reston. Su Taser una vez funcionó mal en un momento crítico. "No tenía chispa, no disparaba, que no hizo otra cosa que la cuenta regresiva en la pantalla", recuerda, lo que exige una rápida transición a las tácticas de mano vacía y, finalmente, a su Glock 22 para controlar a un sujeto hostil que estaba decidido a atacarlo. "Un fracaso puede sorprenderlo, pero no debe apagarlo. Conozca la acción inmediata que puede solucionar el problema. Practique una y otra y otra vez, para que sus manos puedan manipular inconscientemente, mientras que sus ojos y su mente se concentran en la amenaza. "Siempre tenga un plan B, para no quedarse atascado en un Plan A que no está funcionando. Sea su propia arma. Si está bien entrenado en las habilidades múltiples, lo que no fallará de usted es usted".

Claves para ganar tiroteos (de un policía que «estuvo allí», en varias ocasiones) - Parte II 18

Charles Remsberg


18 Charles Remsberg. 5 more keys to winning gunfights.. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/6126142-5-more-keys-to-winning-gunfights/. 20 de febrero de 2012.


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Esta serie se basa en la presentación de "Ganar un enfrentamiento armado", dada recientemente en el 25° congreso anual de la Asociación de Oficiales Tácticos de Illinois por el Detective Jared Reston, instructor líder de armas de fuego de SWAT para la Oficina del Sheriff de Jacksonville (Florida). Reston ha sobrevivido a múltiples confrontaciones de fuerza letal, incluyendo un tiroteo con un adolescente sospechoso de robo en la que le dispararon siete veces. Aquí concluye la lista de Reston de 10 elementos críticos que pueden ayudarle a derrotar a un aspirante a asesino.

6) Aborde sus debilidades. Cuando se trata de prevalecer contra las amenazas letales, Reston piensa como Bear Bryant, el legendario entrenador de fútbol 'Bama: "No es la voluntad de ganar, sino la voluntad de prepararse para ganar lo que hace la diferencia". Entrenar para "ese día", cree Reston, lo es todo. "Trabajar en lo que no somos buenos", dice, "porque nunca se sabe qué herramienta o combinación de herramientas dependerá su vida. Dedique tiempo para ir al campo de tiro regularmente, para trabajar con un programa equilibrado para aumentar su fuerza y resistencia, para practicar su DT [DT es una práctica de diseño... hacer las cosas lo más claro y sencillo posible, para hacer que la gente entienda mejor su organización y reconozca su valor]. Busque un entrenamiento adicional fuera de su agencia. Gaste su dinero. Invierta en usted mismo. "Necesitamos ser mejores de lo que éramos hace 20 años, dada la cultura armada criminal de hoy. Toda la motivación que necesita debe ser la constatación de que hay gente que quiere acabar con usted sólo por lo que es y lo que representa - y nunca se sabe cuándo encontrará a uno de ellos".

7) Mantenerse en forma. En la persecución a pie que precedió al tiroteo con el ladrón, el compañero de Reston se quedó atrás - no porque estuviera totalmente fuera de forma, sino porque se había concentrado sólo en el desarrollo de la fuerza en sus entrenamientos, con escasa atención al ejercicio cardiovascular o entrenamiento aeróbico. "No podía correr más de 40 metros", dice Reston. Él estaba fuera de la vista y del campo de tiro cuando Reston le pegó siete disparos al sospechoso. "Tener a dos de nosotros podría haber hecho una diferencia", dice Reston. "No comió ni durmió durante dos días, preocupado por lo que pensaría de él. Luego se puso serio y cambió su programa de entrenamiento". "Mantenerse en forma para que pueda hacer el trabajo de la manera que se necesita no es solo para usted mismo. Es por su pareja, tu familia, otros oficiales, y para la comunidad que ha jurado proteger". 8) Lucha hasta que las luces se apaguen. Cuando su vida está en juego, Reston enfatiza, "¡LUCHE! No se puede poner allí y esperar a que la situación se vaya. Usted puede luchar a través de la recepción de un disparo. Usted puede no sentir dolor durante dos o tres minutos, y en ese momento usted puede ganar. Mentalmente, ensaye hacerlo". Su adversario puede tener una voluntad para ganar que es casi tan grande como la tuya. En el tiroteo con el ladrón de tiendas, Reston había golpeado a su agresor con tantos disparos calibre .40 que "él era un hombre muerto caminando, pero seguía viniendo y disparando". Aunque gravemente herido, la resolución de Reston fue "seguir disparando hasta que las luces se apagaran". Cuando tuvo la oportunidad de agarrar al sospechoso y tirar de él lo suficientemente cerca como para pegarle tres disparos de contacto en la cabeza, lo tomó y terminó la pelea. "Mis últimas palabras nunca serán gritando en la radio pidiendo ayuda", declara. "Si salgo, saldré a pelear". 9) Practique auto ayuda / ayuda al amigo. "Haga su propio kit de tratamiento de heridas si no se le proveyó una", aconseja Reston: "- o esté dispuesto a ver a alguien morir en frente de usted, porque usted no lo hizo". Incluye cuatro pulgadas gasas cuadradas, un torniquete, QuickClot® o hemostáticos similares, y un sello de succión para cubrir una herida en el pecho. "Esos artículos pueden detener un sangrado intenso y puede guardarse en un paquete suficientemente pequeño para que lo lleve con usted", dice. Practique su uso en sí mismo y en otros para que pueda hacerlo automáticamente bajo estrés. Y cuidado con lo que dices alrededor de un compañero herido. Cuando Reston estaba sangrando por varias heridas infligidas por el homicida ladrón, un compañero se arrodilló junto a él, extendió su mano, y le aseguró: "Vas a estar bien". Pero luego se volvió hacia otro oficial y dijo en voz alta: "¿Dónde está el rescate? ¡Él va a morir!". "No reconforte a nadie 'en la Luz", remarca Reston.


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Detective Jared T. Reston 10) No deje que el sospechoso "gane desde la tumba". La determinación para ganar puede necesitar continuar más allá de la victoria inicial. Reston se ha apoyado en su mentalidad guerrera para llevarlo a través de una tortuosa recuperación de los disparos del ladrón de tiendas, incluyendo los meses de cirugías y rehabilitación, con 14 operaciones para reparar su rostro dañado solo. "Todavía duele", dice. Pero incluso mientras se dirigía al hospital en el carro de rescate, se comprometió a regresar. "Yo quería estar fuera de la cama y ser capaz de pararme en el momento del funeral del sospechoso", recuerda. Conscientemente estrechó el tiempo entre medicamentos para el dolor. Dentro de dos semanas, había diseñado una rutina de ejercicios. En seis meses, estaba de regreso en el servicio completo. "Yo no iba a dejar que el tiroteo me definiera ni arruinara el resto de mi vida. Yo no iba a dejar que ese hijo de puta ganara desde la tumba". "Puede que tenga cicatrices", dice Reston. "Todavía no soy capaz de hacer todos los mismos ejercicios que solía hacer. Pero cada día que sigo adelante y logro algo es otra patada en sus bolas. La forma de ganar en la calle y en la vida es establecer metas, forzarse usted mismo. Al llegar a una meta, fije otra". Cualesquiera sean las metas personales que Reston pueda tener en su lista, su capacidad para imponerse en una crisis claramente no ha disminuido. El incidente con el ladrón era el segundo enfrentamiento en el que Reston disparó y mató a un hombre armado. Desde entonces, ha tenido un tercero. Él y otro oficial se estaban acercando a un hombre buscado por asesinato múltiple cuando el fugitivo repentinamente sacó un arma. Los oficiales le pegaron -mortalmente- seis tiros. El sospechoso nunca tuvo una oportunidad. Independientemente de su agencia, Jared Reston ofrece entrenamiento con armas de fuego y táctico para profesionales armados. Póngase en contacto con él a través de: www.restongrouptraining.com.

Armas eléctricas paralizantes: ¿Alternativa a la fuerza letal o una herramienta de cumplimiento?

Dr. Nick Lewer (Director, Centro para la Resolución de Conflictos) y Sr. Neil Davison (Coordinador del Proyecto)

Enero 2006

Proyecto Bradford de Investigación de Armas No Letales (BNLWRP, Bradford Non-Lethal Weapons Research Project)

Centro para la Resolución de Conflictos (Centre for Conflict Resolution) Departamento de Estudios para la Paz (Department of Peace Studies)

Universidad de Bradford, Reino Unido www.bradford.ac.uk/acad/nlw

[TASER: acrónimo de Tom Swift, personaje favorito de ficción del inventor, John. H. Cover, protagonista de una serie de obras infantiles escritas por Víctor Appleton entre 1910-1941; en la ficción de uno de esos libros Tom Swift crea un rifle eléctrico]


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19 Hoy en el Reino Unido las armas de electrochoque TASER sólo pueden ser usadas por los policías entrenados en el uso de armas de fuego en situaciones donde su uso también está autorizado. Pero la Asociación de Jefes de Policía de Inglaterra y Gales está pidiendo que estas armas 'no letales' sean más accesibles a los policías. Si se accede, habrá consecuencias significativas para el uso de la fuerza por parte de la policía en el Reino Unido. La razón de ser del despliegue de armas "no letales" o "menos letales", como TASER, es proporcionar a los policías de una alternativa a la fuerza letal para las situaciones peligrosas y potencialmente mortales que se enfrentan. La mayor disponibilidad de tales armas, se argumenta, limita aún más la necesidad de recurrir a armas de fuego letales y con ello se reduciría la incidencia de lesiones graves y la muerte. Durante los últimos meses, altos funcionarios policiales han emitido declaraciones públicas que el arma TASER debe ponerse a disposición de todos los oficiales en la jurisdicción. Sostienen que debido a que la policía se enfrenta diariamente a individuos peligrosos, la TASER es requerida para proteger a sus oficiales y hacer frente a los delincuentes violentos sin tener que llamar a una unidad de armas de fuego en situaciones apropiadas. Un punto fundamental de esta propuesta es que se trataría de una escalada del armado "visible" de los policías en el Reino Unido. Los opositores afirman que tal extendido uso de las TASER en realidad se traduciría en un aumento en el nivel de fuerza utilizada por la policía en el Reino Unido, preocupación de la que también se hizo eco el Comité Independiente de Quejas Policiales (IPCC) en la reunión del Comité de Investigaciones y Trabajo con Casos Individuales del 27 de abril de 2005. Las lecciones de EEUU sobre un amplio despliegue no son alentadoras. Un informe de Amnistía Internacional de 2004 encontró que "... lejos de ser utilizado para evitar la fuerza letal, muchas agencias de policía de EE.UU. están desplegando armas TASER como opción de fuerza habitual para someter a los individuos que no cumplen o trastornos que no representan un grave peligro para sí mismos u otros". En otras palabras, la TASER ha sufrido la expansión de su misión. No es meramente usada contra las personas peligrosas donde la alternativa es la fuerza letal, sino también contra los niños de la escuela, los enfermos mentales, personas con esposas u otras restricciones, y la gente que resiste pasivamente o simplemente discute con la policía. En varios casos se ha convertido en una herramienta de cumplimiento para los policías en lugar de un arma

19 http://2.bp.blogspot.com/-9sBRg9c7T98/UOZevDOQaaI/AAAAAAAAEZU/1PGwVsFIYk8/s1600/taser.jpg.


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utilizada para evitar lesiones o muertes causadas por el uso de otros medios. Un estudio realizado en 2004 por el diario The Denver Post sobre el uso de TASER en Colorado, descubrió que en un condado un tercio de las 112 personas que recibieron disparos con una TASER estaban esposadas en ese momento. Los Principios Básicos de la ONU sobre el Uso de la Fuerza y de las Armas de Fuego por los Funcionarios Encargados de Aplicar la Ley de 1990 afirman que "los agentes del orden, en el ejercicio de sus funciones, utilizarán en la medida de lo posible medios no violentos antes de recurrir al uso de la fuerza y de las armas de fuego". Desgraciadamente, la experiencia de EEUU indica que las técnicas no violentas, tales como la negociación sencilla, están siendo pasadas por alto en muchos casos por el uso temprano de la TASER para obtener el cumplimiento. ¿Cómo es ser incapacitado por un arma TASER? Cuando se dispara, la TASER impulsa dos dardos de púas sujetos con cables que se adhieren a la piel o la ropa. Al impactar, un golpe eléctrico de 50.000 voltios se descarga en la víctima por un período de cinco segundos. Cuando las púas permanecen unidas, esta descarga se puede repetir varias veces, tirando del gatillo otra vez (y otra vez). Los efectos inmediatos son debilitantes. Causa contracción muscular involuntaria y dolor extremo. La víctima pierde por completo el control sobre su cuerpo y cae al suelo hasta que la corriente se detiene. Toda la experiencia es a la vez dolorosa y degradante. Tanto es así que en 1997, Robin Cook, el entonces Secretario de Relaciones Exteriores, consideró a las armas de electrochoque, como las pistolas paralizantes, entre los equipos "diseñados primariamente para la tortura", diciendo que el Gobierno del Reino Unido "presionaría para lograr una prohibición mundial". En los años siguientes la comercialización de armas de electrochoque cambió, pero sus efectos permanecen. La recepción de un choque de la TASER no está exenta de riesgos para la salud. Mientras que la investigación inicial llevada a cabo por el Laboratorio de Ciencia y Tecnología del Ministerio de Defensa antes de la introducción del Ministerio del Interior sobre la TASER concluyó que la descarga eléctrica es poco probable que tenga un efecto adverso sobre el corazón en individuos sanos, hay preocupación acerca del aumento la susceptibilidad de las personas con problemas cardiacos existentes (por lo menos 2,5 millones de personas en el Reino Unido) y aquellos bajo la influencia de drogas recreativas, incluyendo el alcohol. La investigación posterior en el laboratorio descubrió que un mayor riesgo de insuficiencia cardiaca entre las personas tras el uso de TASER no podía excluirse. Esto es significativo dado que, durante el juicio de un año de duración en el Reino Unido, más del 50 % de las víctimas de TASER estaban bajo la influencia de drogas o alcohol. Los resultados provisionales de un estudio realizado en EE.UU. de más de 21.000 usos de las diferentes armas "menos letales", entre ellas la TASER, han demostrado que el 23 % de las víctimas se encontraban bajo la influencia de drogas y/o alcohol. La policía canadiense destacó otras dos preocupaciones sobre la seguridad en un informe reciente. Los espasmos musculares causados por la TASER pueden dañar la respiración, especialmente si una persona recibe múltiples descargas, y esto también puede contribuir a una disminución del pH en el cuerpo, un desequilibrio químico potencialmente mortal. También la descarga eléctrica no afecta a todos por igual. Los que tienen menor tamaño corporal y menor peso son más susceptibles a los potenciales efectos adversos. Las lesiones secundarias en la cabeza y otras partes del cuerpo se han producido porque la víctima cae al suelo tras ser sacudida con el choque. A menudo, esta caída será sobre una superficie dura como una calle o pavimento, muy lejos de las condiciones controladas en las que algunos policías se han ofrecido como voluntarios para experimentar una descarga de TASER (con dos oficiales que les ayuden en cada brazo y una alfombra de seguridad en el piso). Las púas pueden dejar pequeños cortes y quemaduras en la piel, pero puede dar lugar a lesiones más graves en caso de que lleguen a las zonas sensibles del cuerpo como los ojos, la boca, el cuello y la ingle. Amnistía Internacional ha documentado 103 muertes en EEUU y Canadá entre junio de 2001 y marzo de 2005, siguiendo el uso de la TASER por la policía. En 17 de esos casos, los médicos forenses citaron a la TASER tanto como factor contribuyente, como que no lo podían descartar. En muchos casos, la víctima recibió varias descargas de la TASER. Otros factores como intoxicación por drogas, los actuales problemas del corazón y una condición llamada "delirio excitado" han sido comúnmente citados como la principal causa de


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muerte. El fabricante y otros observadores sostienen que estos factores han causado la muerte, independientemente del uso de TASER, mientras que otros afirman que la interacción de una descarga eléctrica TASER con estos elementos no está suficientemente bien comprendido para justificar esta afirmación. El Ministerio del Interior y las fuerzas policiales del Reino Unido han emprendido una revisión en profundidad de las armas TASER y han participado en algún debate público con respecto a sus planes de despliegue. Sus conclusiones son que los posibles efectos adversos para la salud y las posibilidades de abuso son compensados por su utilidad operativa. Pero podríamos argumentar que los efectos dolorosos y degradantes de la TASER, su susceptibilidad al mal uso, y los riesgos de salud asociados se oponen a una implantación más generalizada en nuestras calles y podría, como la experiencia de los EE.UU. ha demostrado, dar como resultado que el arma se convierta en una herramienta de cumplimiento. Por supuesto, debemos apoyar a la policía para que pueda llevar a cabo, en nuestra representación, a menudo difíciles y peligrosas tareas, pero nos preocupa que ese despliegue más amplio de la TASER socave aún más el carácter distintivo del "servicio policial consensuado" e incrementar una percepción de "servicio policial por cumplimiento" con agentes armados.

Entrenamiento policial sobre la fuerza letal en el siglo XXI El entrenamiento en puntería convencional tiene poco que ver con ganar un tiroteo

Richard Fairburn

Bachelor of Science in Law Enforcement Administration 18 de enero de 2010

Estamos una década dentro del nuevo siglo, pero la manera de capacitar a los policías para emplear la fuerza letal no es diferente de lo que hicimos una década antes que comenzara el siglo XX. Según las estadísticas del FBI, el 80 % de los oficiales muertos cada año en tiroteos, murieron a 6,398 metros o menos, una cifra que cambió muy poco en los últimos 30 años. Los oficiales rutinariamente logran una puntuación de 100 % en la línea de las siete yardas del polígono de tiro, pero en los tiroteos más del 50 % de los disparos yerran su objetivo. La baja tasa de éxito marcada por los policías en la calle no es un problema de puntería. Los oficiales de una agencia grande anotaron una tasa de aciertos en tiroteos de apenas el 11 % durante un período de 10 años que he analizado. Esa es una estadística impresionante, pero otro número fue aún más chocante. Aunque la muestra era pequeña, los ''chicos malos'' en esos incidentes también obtuvieron una tasa de aciertos del 11 %. Su Director de Academia lo resumió perfectamente: "Mis oficiales tienen un centenar de horas de instrucción con armas de fuego en la academia y después son calificados trimestralmente, pero ¿están impactando en la misma proporción que los delincuentes sin entrenamiento académico? ¡Tenemos que guardar todas las municiones, ya que nuestro programa de instrucción parece ser inútil!". A fines de la década de 1990 el programa de capacitación de esa agencia todavía alentaba el tiro con una sola mano, fuego lento y blanco a 22,86 metros (yarda 25). Después de todo, si un oficial puede disparar grupos compactos a 22 metros, puede manejar fácilmente un tiroteo a 3 metros, ¿correcto? ¡Incorrecto! (el 89 % del tiempo). Un tirador novato puede marcar el 100 % en 6,4 metros al final del primer día de entrenamiento. Pero, al menos en esa agencia de policía, aumentar el tiempo de entrenamiento a casi tres semanas sólo produjo un 11 % de impactos en la calle. Recientemente se dieron a conocer datos sobre la tasa de aciertos en tiroteos de los oficiales de los Departamentos de Policía de la Ciudad de Nueva York y de Los Ángeles, y refleja lo que


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he encontrado en el medio oeste. Durante un tiroteo, cerca del 25 % de los disparos efectuados por sus funcionarios impactan en el blanco. La mayoría de los programas "entrenan para el test", lo que significa que practican las destrezas necesarias para disparar y aprobar una calificación en el curso. Muchas pruebas de calificación son una adaptación del antiguo Curso Práctico de Pistola. Muchas agencias están entrenando para el "test" que no tiene similitud alguna con un tiroteo policial. Necesitamos preparar a los oficiales para el próximo enfrentamiento armado, no para el próximo concurso de tiro competitivo. Debemos entrenar en fuerza letal de manera que les asegure a los oficiales pasar el test real -ganar en un tiroteo a 6 metros, no a perforar en grupos compactos a 13-22 metros. Distinguir al "tirador top" de su clase de entrenamiento es bueno, pero que gane su primer tiroteo es mucho mejor. Un programa de entrenamiento que enfatiza la gestión del combate al estrés, sin ninguna formación en puntería, crearía un tirador mejor que cualquier programa basado exclusivamente en el entrenamiento en puntería convencional. Si pueden dominar el estrés, incluso un tirador promedio tendrá puntuación mejor y ganará la mayoría de los enfrentamientos con pistola. Si combaten el estrés, la puntería puede llegar a ser una pequeña parte de la ecuación del tiroteo. Si no pueden dominar el estrés, incluso el mejor tirador puede perder - y morir. La única manera –previa a un tiroteo- para ganar "experiencia" de combate es a través del Entrenamiento Basado en la Realidad (RBT, por su sigla en inglés). No estoy sugiriendo que ignoraremos el desarrollo de las destrezas del tiro al blanco. En lugar de ello, necesitamos desarrollar y testear la puntería de un oficial contra amenazas interactivas, y no imágenes en papel en un polígono de tiro. Una vez que los alumnos de forma fiable pueden impactar blancos de papel a 6,4 metros y cargar/utilizar/vaciar su arma, se deben de enfrentar contra de simuladores computarizados de estrés y adversarios humanos en los escenarios RBT usando municiones de pintura. Sólo cuando un participante logra un 80 % de impactos -bajo estrés, contra blancos vivos hostiles, mientras se mueve a entre 1,5 y 7,5 metros - debemos retornar a la serie con cartuchos de guerra para desarrollar habilidades de puntería más afinada. Hable todo lo que quiera sobre uno de los raros disparos hechos a 22 metros por oficiales armados con pistola, pero aún disparamos pobremente en la calle y meramente entrenamos con más de lo mismo sin querer cambiar ese hecho. Si no volvemos nunca más al polígono de tiro para desarrollar habilidades de tiro de pistola a 13-22 metros, ¡que así sea! Es por eso que todos los policías deben tener rifles de patrulla. Con fusiles, podemos desarrollar habilidades más altas de puntería, basándonos en las verdaderas destrezas para el tiroteo que aprendieron con sus pistolas en los escenarios RBT.

Código de Colores de Cooper: Un simple sistema para la conciencia situacional

Richard Fairburn

9 de agosto de 2010 El último «Código de Colores» de Jeff Cooper ha sido aprehendido y enseñado por instructores competentes durante muchos años. La mayoría está muy familiarizada con los conceptos, pero una revisión de esos esenciales niveles de supervivencia merecería la pena. Cooper descompuso los niveles de la vigilancia en cuatro colores de grados escalados de preparación para el uso de la fuerza letal. Este sistema de código de color es un proceso mental, no físico, y debe ser utilizado independientemente de si usted está armado – aunque estar armado siempre se prefiere. Estar alerta puede ayudarle a evitar una amenaza letal en primer lugar, que siempre es el resultado preferido.


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CÓDIGO DE COLORES DE COOPER - UN CRITERIO PARA MEDIR LA AMENAZA

CÓDIGO ROJO: Luche o huya - Evite la amenaza. CÓDIGO NARANJA: Evaluación de la amenaza. CÓDIGO AMARILLO: Conciencia de la amenaza. CÓDIGO BLANCO: Apagado

Blanco. En condición blanco, usted está relajado e inconsciente de qué se está encendiendo alrededor. Idealmente, un funcionario encargado de aplicar la ley está en blanco solo cuando duerme, pero realísticamente a menudo bajamos nuestra guardia cuando estamos en casa o en cierto ambiente que presumimos seguro, como el cuartel. Puesto que incluso las comisarías de policía han sido atacadas, es mejor estar más alerta incluso cuando usted está en su “guarida”. Como lo prueba la emboscada de la cafetería de Lakewood [en noviembre de 2009, un tirador afroamericano mató a tiros a cuatro policías que estacionaron sus patrulleros en la vía pública y trabajaban con sus laptops dentro del local], usted simplemente no puede estar en blanco cuando viste un uniforme, esté de servicio o no. Si le atacan en condición blanco, muy bien puede morir - a menos que sea afortunado. Prefiero no depender de la suerte. Amarillo. En condición amarillo, usted sigue estando relajado, pero es consciente de quién y de qué está alrededor suyo. Esto meramente significa que usted está prestando atención a las vistas y los sonidos que le rodean si está en casa o moviéndose en la sociedad. La condición amarilla no se compara con la paranoia o ningún otro miedo irracional de personas o lugares. En su lugar, usted simplemente ha movido su alerta a un nivel de atención que le evitará ser totalmente sorprendido por las acciones de otra persona. Mientras camina en un área, no perderá de vista libremente a cualquier persona detrás de usted. Al elegir un asiento en un restaurante, se colocará para ver la entrada o reducir al mínimo el número de gente que puede estar detrás de usted. No necesita insistir en asegurarse el “asiento del pistolero” poniendo su espalda hacia una esquina muerta y su cara hacia la entrada, porque no está anticipando una amenaza; está haciendo meramente un inventario de sus alrededores y de la gente que lo rodea a usted. También ejecutará una somera “qué pasaría si” visualización mental de donde podría aparecer una amenaza y cuáles serían sus reacciones. Si es atacado en la condición amarilla, no debe venir como una sorpresa total. Su respuesta a una amenaza debe haberla planificado hasta cierto punto, permitiéndole que simplemente funcione un plan existente antes que teniendo que hacer uno rápidamente mientras está bajo fuego. Un funcionario competente debe estar en condición amarilla siempre que esté de servicio - o cuando está armado mientras está fuera de servicio. Anaranjado. En la condición naranja, usted ha identificado algo de interés que puede o no ser una amenaza. Hasta que determine la verdadera naturaleza de lo que picó su interés, su “radar” se angosta para concentrarse en la amenaza posible y permanecerá así enfocada hasta satisfacerse que no exista amenaza alguna. Los contactos que usted hace durante su turno -despachados o auto-iniciados- son ejemplos obvios de la focalización en la condición naranja. Esa gente no es realmente una amenaza, o usted se trasladaría rápida y suavemente al color siguiente más alto. En lugar de ello, esos individuos simplemente podrían ser una amenaza, así que usted cambia de la condición amarilla (relajado pero alerta) a la condición naranja (alerta específica). Puede hacer este cambio inofensivo muchas veces al día mientras ejecuta su rutina normal. Si alguien o algo están fuera de lugar, usted cambia desde una conciencia o conocimiento general de 360 grados a una concentración enfocada en una dirección específica. Al mismo tiempo, no puede dejar caer su conciencia o conocimiento general, porque un chico malo delante de usted puede ser una distracción si hay otro detrás.


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Si usted es atacado en condición naranja, debe esperar el ataque. Además, esperanzadamente hará frente a su atacante puesto que usted ha cambiado ya su foco en su dirección. Si está bien entrenado, su mente subconsciente habrá estado buscando su impulsión dura a los acontecimientos o las sesiones de entrenamiento similares que ya ha experimentado, o cualquier situación pre-visualizada de “qué pasaría si” que usted ha catalogado como soluciones posibles si ocurre un ataque. Rojo. Si el foco de su atención en condición naranja halla algo que encuentra amenazante, usted cambiará a la condición roja. Note aquí que la condición roja NO ES el golpe de cocción, porque algunos instructores malinterpretan las enseñanzas de Cooper. En lugar de ello, la condición roja cambia simplemente el foco de su atención de una amenaza potencial a un objetivo potencial. Usted sacará su arma, o se moverá aún más para apuntar mejor, sólo si las acciones de los objetivos potenciales dictan tal respuesta. Una vez que usted ha cambiado a la condición roja, no puede ser sorprendido por su adversario primario; está completamente preparado para rechazar al sujeto si éste empuja tan lejos el incidente. Pero su concentración intensa en una amenaza delantera disminuirá su capacidad para mantener un cierto grado de conciencia en los 360 grados para las amenazas desconocidas que pueden venir de otras direcciones. El entrenamiento eficaz bajo condiciones de estrés elevado le ayudará a evitar la visión de túnel que algunos describen como “mirar a través de un tubo del papel higiénico”. Si es posible, en las condiciones anaranjadas y rojas, muévase a una posición que le dé una ventaja táctica. Idealmente, una pared o un área previamente despejada detrás de usted y algún tipo de cubierta sólida a la que podrá moverse si estalla el tiroteo. Tener uno o más oficiales de reserva en este punto puede realzar grandemente su conciencia situacional, si -y solo si- uno de esos oficiales sigue estando alerta en todas las direcciones – un protector en la retaguardia. Demasiado a menudo, los funcionarios se concentran en la amenaza sobre la escena sin considerar la seguridad a los 360 grados. Si le atacan en rojo, usted debe ser preparado completamente para defenderse. Independientemente de si usted tiene un arma a disposición o hacia el blanco dependerá de las circunstancias, pero mentalmente, usted ya está delante del juego. K.I.S.S. Algunos instructores intentan mejorar el código de colores de Cooper agregando más etapas, como el “negro” para tratar con las consecuencias de un tiroteo. Un instructor utiliza el “negro” para describir a alguien inmovilizado totalmente con pánico - el código de color está diseñado para prevenir esa condición. Mantenga el sistema simple. Cuatro colores me parecen los correctos, permitiendo bastante variedad para todos los problemas, sin ser demasiado complicado. Algunos insisten que usted no pueda pasarse la vida usando este sistema sin volverse paranoico, peligroso para sí mismo y los demás. Creo que los funcionarios equilibrados pueden funcionar con el código de color docenas de veces cada día y no un sufrir peor desgaste. La mayoría de los funcionarios experimentados que aprenden el código de color, señalan que han estado tomando estas medidas por su propia cuenta a lo largo de sus vidas. Como la mayoría de las grandes ideas del entrenamiento, este proceso de cuatro pasos meramente codifica lo que los buenos funcionarios han aprendido durante años por su cuenta. Enseñando a los nuevos reclutas este sistema salvavidas del conocimiento situacional, podemos iniciarlos en el conocimiento que otros han ganado en el curso de sus vidas de supervivencia en las calles.

Extracto del libro: “Construyendo un mejor tirador – Mejorando la puntería, la mecánica, y la mentalidad”

Richard Fairburn

8 de noviembre de 2010


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A diferencia de la mayoría de los libros de “tiro”, no me atreveré a decirle qué arma llevar, ni los detalles de cómo disparar. En algunos momentos de mi carrera he probado casi todas las técnicas de tiro y finalmente llegué a una conclusión que la mayoría de los "expertos" se resisten a admitir. Casi cualquier técnica de tiro puede y va a funcionar.

Hace casi 29 años que esto ya está escrito; asistí a mi primera sesión en un centro de entrenamiento importante y aprendí la Posición Weaver de Tiro nada menos que con el coronel Jeff Cooper. No importa lo que usted piense personalmente del fallecido coronel Cooper, si lo niega a él como el progenitor de todas las diversas escuelas de pensamiento que ahora vemos en el entrenamiento moderno con armas de fuego y la competencia práctica, usted niega la realidad. En mi limitado tiempo junto a él, encontré que Cooper era muy testarudo y, al mismo tiempo, muy curioso acerca de las alternativas serias presentadas por quienes lo rodeaban. Jeff Cooper se aferró a la posición Weaver no porque él no estaba dispuesto a considerar otras opciones, sino porque no había visto nada radicalmente mejor. Conforme evolucionara como tirador y como instructor, miré con honestidad a cada una de los "más nuevas" técnicas de tiro hasta que declinaron. A menudo, esas "nuevas" técnicas eran poco más que un refrito de algo que había utilizado 20 o más años antes. Finalmente llegué a comprender que la mayoría de los aspectos del tiro son cíclicos, repitiendo cada generación más o menos cómo los nuevos tiradores creen que han descubierto algo original, sólo para descubrir que su gran idea es poco más que una técnica antigua que había caído en desgracia. La última iteración de la Posición Isósceles que aprendí en mi juventud se refina un poco a través de la reencarnación, pero ciertamente no es nada nueva [iteración = repetición]. Mi teoría para entrenar a los tiradores es simple. Muéstreles un par de variaciones de agarre y posición y deje que cada estudiante encuentre su propia manera de disparar. Usted puede entrenar a un nuevo tirador para un mejor desempeño, pero no puede meterse dentro de su cabeza o músculos y programarlo con su propio modo de desempeño. Los adultos aprenden escuchando, observando, tratando, fallando y, a continuación, volviendo a tratar hasta que perfeccionan su propio modo personal para realizar una tarea. Un buen instructor juzga el desempeño de los estudiantes por sus resultados, no por sus técnicas. Algunas técnicas que un estudiante puede intentar son claramente erróneas, por razones de seguridad o de incompatibilidad con otros aspectos del programa general. Pero si el nuevo tirador desarrolla un estilo que es seguro y productivo, déjelo. Si su técnica no se ve exactamente (o incluso remotamente) como la suya o la mía, pero funciona para ellos, DÉJELO. Como lo presentaré en esta sección del libro, el aspecto más importante de la construcción de un tirador es programarlo mentalmente. Con la programación mental adecuada, la parte física de su desempeño será capaz de sobrevivir al estrés de un tiroteo. Si usted se concentra demasiado en los aspectos físicos, degradará el aspecto mental de la ecuación. Todos los estilos de tiro se degradarán en cierta medida bajo estrés, de modo que céntrese en la gestión del estrés y deje que la técnica física cuide de sí misma. Si usted es como yo, usted se acercará a cualquier libro que tienen por objeto entrenar el arte del tiroteo con un poco de escepticismo. ¿Quién es este hombre, quién piensa que tiene las respuestas a uno de los mayores peligros potenciales de la vida? ¿Qué me da el derecho a decirle cómo prepararse para una pelea?


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No he experimentado personalmente un tiroteo. Nunca he disparado a otro ser humano, ni hice disparo alguno. Sin embargo, estuve a punto de apretar el gatillo en dos ocasiones como oficial de policía. En ambos casos, yo estaba armado con un rifle AR15, en respuesta a una llamada por "armas". En el primer caso, se nos informó que un hombre tenía a una mujer de rehén en un sótano del apartamento. Otro oficial llegó primero, tomando una posición detrás de un árbol grande con su escopeta. Cuando salí de mi vehículo con el rifle, el otro oficial me dijo que el hombre estaba en la puerta del sótano, con una pistola en la cabeza de una mujer. Al estar familiarizado con el edificio, me moví con cuidado en torno a un muro de contención, sabiendo que pronto sería doble, poniéndome a unos 20 pies de la puerta. Reteniendo la respiración durante un segundo, puse mi rifle al hombro y caminé alrededor de la pared, poniendo la mirada en el rostro del hombre a menos de siete metros. La mujer estaba en frente del torso del hombre, que la sujetaba por el brazo izquierdo, y vi el revólver en su mano, que entonces colgaba a su lado. El hombre se congeló cuando le ordené que soltara el arma, y la mujer corrió rápidamente lejos, a mi derecha. Recuerdo alinear mis miras al pecho del hombre cuando el rehén huyó (probablemente revirtiendo mi entrenamiento para apuntar a la masa del centro - el mayor objetivo). De nuevo le ordené que dejara caer el arma y nunca olvidaré los ojos muy abiertos y la mano temblando, respondiéndome: "¡Estoy tratando de dejarla caer!". El hombre estaba literalmente paralizado por el miedo. Mi pareja había recogido al rehén cuando me dirigí al sospechoso fuera de la puerta para esposarlo y buscando - se las había arreglado para dejar de agitarse lo suficiente como para dejar caer el .357 Magnum. Unos meses más tarde, la llamada vino de un sargento tratando de ejecutar una orden de arresto en una residencia (solo - tontamente). La mujer que buscaba se había armado con un .44 Magnum de ocho pulgadas, lo que obligó al oficial alejarse de la puerta, atrapándolo en un hueco de la construcción. Su única vía de escape lo había obligado a correr de inmediato, dándole a la mujer un tiro recto mientras corría por la acera estrecha. El primer oficial de apoyo, el mismo hombre, de nuevo en su posición familiar detrás de un árbol con una escopeta. Yo estaba detrás de otro árbol cercano, de nuevo con mi AR15 confiable. La noche era de tono negro, pero el interior de la casa estaba bien iluminado. La mujer estaba sentada en una mesa pequeña, directamente en línea con la puerta abierta. Tenía la 0.44 en su mano derecha, moviéndola en varias direcciones, mientras tomaba un trago ocasional de una botella de whisky. Mi visión era muy clara, a una distancia de unos 25 metros. Yo le dije al otro funcionario que abrazaba el árbol que "la llamara afuera", diciéndole que le tiraría si ella apuntaba con el revólver por la puerta grande en nuestra dirección, o hacia el oficial, a pocos metros a la izquierda de la puerta. La situación pareció durar para siempre, pero era probablemente más o menos de un minuto. La mujer borracha nunca apuntó la 0.44 en nuestra dirección y, finalmente, dejó el arma y la botella, manteniendo las manos en el aire como se le indicara. A medida que la cubría, el oficial hizo una loca carrera fuera de la puerta, rompiendo duro a mi izquierda, tan pronto como se aclaró la cobertura. La mujer finalmente salió hacia nosotros para una captura sin complicaciones. En cualquier situación, yo habría justificado el uso de fuerza letal contra un individuo armado y peligroso que amenazaba la seguridad de otro (1 rehén civil y ahora 1 sargento tácticamente más consciente). En efecto, en ambos casos el aparato de puntería había sido dirigido al blanco y el detonante fue sólo la "ruptura definitiva" de la distancia de tiro. Me pregunté después de ambos incidentes. ¿Estaba realmente listo para disparar o dudé cuando debía haber disparado? Con muchos años de reflexión, y varias otras situaciones inciertas en medio, estoy seguro que mis actos estaban en lo cierto. Aunque podría haber legal y moralmente acabado con la vida del sospechoso, no hacerlo era con mucho la mejor opción. En ese momento de mi carrera, yo ya era un experimentado instructor de armas de fuego con una gran cantidad de capacitación de primera clase en mi haber. Estoy convencido de que era una excelente capacitación la que me dio la presencia de ánimo y la confianza para esperar unos pocos segundos extra que se tomó cada delincuente para entender y cumplir. Si bien habían elegido un final diferente, estoy seguro de que habría dado el siguiente paso, operando "en automático", consistente con mi “programación”. Con esos dos incidentes como mi base de referencia, he tenido la oportunidad en mi carrera de entrevistar a docenas de sobrevivientes de tiroteos. Durante el curso de varios proyectos de investigación, las cuestiones


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comunes de la lucha con armas se han hecho evidentes para mí. Agregadas a mi base de datos, han sido las horas que pasé con algunos de los mejores entrenadores de Estados Unidos, muchos de los cuales eran también experimentados pistoleros. Así, mientras que no puedo decir que personalmente he "visto el elefante", he estudiado ampliamente a los que lo han visto. A medida que mi filosofía de entrenamiento personal se desarrolló, me remonté a mis expertos para ver si una idea nueva encajaba en sus experiencias del mundo real. La filosofía de entrenamiento resultante no es mía, sino la combinación de conocimientos y experiencia de todos los pistoleros que he conocido. Sus vidas han demostrado la eficacia de lo que presento aquí. Yo soy simplemente soy el escriba.

Extracto del libro: Construir un mejor tirador - Segunda Parte: Trepando por la escalera de caracol

Richard Fairburn

20 de diciembre de 2010 De acuerdo con recientes estadísticas del FBI, alrededor del 80% de los oficiales que son asesinados en cumplimiento de su deber de cada año mueren a menos de siete metros, una cifra que ha cambiado muy poco en los últimos 30 años. Esa es precisamente la razón por la que los polígonos de policía tienen una línea de fuego a 7 metros. Los agentes de policía rutinariamente logran una puntuación de 100% dentro de la línea de 7 metros en el campo de tiro. Pero, en tiroteos reales más del 50% de las balas disparadas por los agentes yerran completamente el blanco. Esto sugiere que la baja tasa de éxito marcada por los agentes de policía en la calle no es un problema de puntería. "Es maravilloso, en el evento de una pelea callejera, cuán pocos proyectiles parecen golpear a los hombres a los que están dirigidos". - Teodoro Roosevelt. Hace varios años tuve acceso a los registros de oficiales involucrados en tiroteos de una agencia de policía de gran tamaño. Durante el período de una década, los funcionarios de ese organismo obtuvieron un tiroteo tasa de aciertos de sólo el 11 %. Considerada en sí mismo, es una estadística asombrosa, pero otro número fue aún más impactante. Aunque la muestra era pequeña y sin duda no es válida estadísticamente, los chicos malos en los mismos incidentes también obtuvieron una tasa de éxito del 11% cuando disparan a los oficiales. Sabíamos exactamente cómo entrenaban y calificaban los funcionarios de ese organismo y que probablemente estaban seguros en asumir que los delincuentes tenían poco o ningún entrenamiento formal con armas de fuego. Después de dejar que los números se hundieran por unos segundos, el Comandante de la academia de entrenamiento de ese organismo lo resumió a la perfección. "¿Me estás diciendo que mis oficiales, que reciben más de 100 horas de entrenamiento en la Academia sobre las armas de fuego y las calificaciones trimestrales a partir de entonces, están impactando en la misma proporción que los criminales la calle, sin educación formal? Tal vez deberíamos salvar todo el tiempo y las municiones, ¡ya que nuestro programa de entrenamiento parece ser inútil!" La agencia en este proyecto de investigación fue progresista en muchos aspectos, pero su programa de entrenamiento de armas de fuego, como tantos otros, era un programa tradicional basado en la puntería. Dispararon a objetivos que giraban en un rango de distancia conocida. A los oficiales se les permitía todavía un disparo de "coartada" si han experimentado un fallo de funcionamiento durante la calificación. Tanto en el programa de capacitación de la Academia y para el trabajo en el servicio de reparación, se alentó el disparo con una sola mano a fuego lento disparando a la línea de 25 yardas. Después de todo, si un oficial puede disparar a un grupo cerrado con una mano a 25 metros, se puede manejar fácilmente un tiroteo a 10 pies... ¿no? Incorrecto – 89% del tiempo.


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He tenido la oportunidad de aprender de y trabajar con algunos de los mejores instructores de armas de fuego en el país. Pero, sorprendentemente, sólo unos pocos de ellos tenían una gran experiencia trabajando con tiradores toscos que muchas veces nunca habían tocado un arma de fuego antes de llegar a la sesión de capacitación. Muchas de las técnicas principales que he aprendido de esos sobresalientes instructores no parecen funcionar del todo bien con tiradores sin pulir totalmente. Los reclutas simplemente no tenían un marco de referencia para construir. Así, en colaboración con algunos tipos académicos, educados en los principios de la educación de adultos, nos dispusimos a estandarizar y simplificar un sistema para tomar tiradores vírgenes al más alto nivel de preparación en tiroteo posible en el marco de tiempo asignado. El gran... no... La gran diferencia que queríamos en nuestro programa fue la preparación de estos nuevos tiradores para el tiroteo siguiente, no para la próxima sesión de tiro competitivo. Aprendimos al crear este programa que mientras los tiradores crudos por lo general no lo hacen bien tratando de aprender a alta velocidad, técnicas de bajo arrastre de los mejores tiradores, incluso tiradores experimentados mejoraron sus habilidades de manera espectacular con nuestros métodos simplificados. La mayoría de los programas de entrenamiento de armas de fuego entonces (y muchos de ellos aún) se centraron casi exclusivamente en la puntería - conseguir la mejor puntuación posible de tiro. Sin embargo, en mi investigación quedó claro que la puntería no tenía casi nada que ver con ganar un tiroteo. Podríamos tener un tirador de puntuación en bruto del 100% a 7 metros al final del primer día de entrenamiento. Pero, al menos con esa agencia de policía, aumentando el tiempo de entrenamiento a casi tres semanas sólo produjo 11 % de aciertos en la calle. Recientemente se dieron a conocer datos sobre la tasa de aciertos en tiroteos de los funcionarios de los Departamentos de Policía de la Ciudad de Nueva York y de Los Ángeles que encontré en el medio oeste. Durante un tiroteo, menos del 25 % de los disparos efectuados por estos funcionarios puedan dar en el blanco previsto. Cuando las estadísticas son más refinadas siguen la lógica, con mucho mejores tasas de éxito a la luz del día que los que dispararon en condiciones de luz limitada, pero los policías claramente yerran más de lo que pegan. Puntería es una parte importante, absolutamente esencial de un programa de capacitación eficaz. Sin embargo, hemos querido aumentar la tasa de éxito en la calle y al hacer esto, aumentar la tasa de victoria para los funcionarios en la calle. Tomar el premio de "tirador top" en su clase de entrenamiento es bueno, pero ganar su primer tiroteo es MUY irresistible. Eventualmente, hemos identificado varias fases igualmente importantes para la preparación de un oficial de policía, soldado o un ciudadano armado para el tiroteo, y las habilidades de tiro eran sólo uno de los componentes. De hecho, si usted domina las otras habilidades, la puntería puede llegar a ser una pequeña parte de la ecuación general. Originalmente nuestro ciclo de capacitación estaba compuesto por cuatro "M" (Marksmanship, Movement, Mechanics and Mindset): Puntería, Movimiento, Mecánica y Mentalidad. Conforme probamos esta teoría con los oficiales de policía participantes, se hizo evidente que este ciclo se debe repetir varias veces, con cada rotación recibiendo cada vez mayores presiones para la velocidad y la precisión. Mi amigo Bob James, quien ha entrenado a un par de academias cimeras, así como con unidades militares de operaciones especiales, reconoció la naturaleza cíclica de la capacitación eficaz y comparó el proceso con una escalera de caracol. Conforme los estudiantes viajan a través del proceso de capacitación cíclica, viajaron ida y vuelta por el circuito. Pero, mientras que los estudiantes hicieron cada rotación, tanto como subir una escalera de caracol, levantaron cada vez más alto su capacidad para dominar una pelea. Como hemos estructurado el plan de estudios para cada ciclo, eventualmente decidimos que el Movimiento "M" tenía que ser una parte integral de todos los niveles avanzados de puntería "M." De hecho, una vez que un estudiante ha alcanzado un nivel básico de puntería, el movimiento del tirador y su objetivo (s) es esencial para la practicidad. Así, terminamos con tres "M:" Puntería, Mecánica y Mentalidad. Este modelo de entrenamiento de tres partes no es único. Otros entrenadores han delineado programas similares con términos semejantes, pero siguen estructurando su capacitación en un método lineal, de la A a la Z. La diferencia en nuestra filosofía es el sistema cíclico de entrenamiento a través de todas las tres M en un nivel bajo de competencia antes de empezar todo de


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nuevo con plazos más cortos, metas más duras y escenarios de fuerza-sobre-fuerza más difíciles. Cada rotación a través del ciclo de entrenamiento debe ser más difícil que el ciclo anterior para un tirador para mejorar realmente su desempeño. La nueva era en el entrenamiento en escenarios realistas es el entrenamiento "fuerza sobre fuerza" (force on force). Simplemente, los agentes que participan en la capacitación ahora tienen que preocuparse de los malos que disparan de nuevo en lugar del caucho de color rojo o armas de fuego blanco del pasado. Lo que seriamente carecía la capacitación tradicional era inculcar a los participantes el instinto de buscar refugio. Ahora, cuando el riesgo de dolor se convierte en parte de la ecuación, este instinto se forma. Como dijo una fuente, "no hay nada como el miedo al dolor para agudizar la concentración". En las tres secciones siguientes, analizaré cada una de las M en detalle y mostraré cómo se integran y se superponen. Los detalles de la postura, agarre, sistema de armas y cursos de fuego y cursos dependen de usted para desarrollar a sus necesidades. El sistema M3 es un marco filosófico que se basa en principios de aprendizaje de adultos para repetir y reforzar cada lección y cada ciclo para que los estudiantes trepen por la escalera de caracol.

Más allá del rifle de patrulla: Añadir la capacidad de un «Tirador Designado» Los militares de EE.UU. se refieren a ellos como “Tirador Designado” y propongo adoptemos una terminología

similar y el mismo armamento quizás para uno de cada diez oficiales de patrulla.

Richard Fairburn

18 de Julio de 2011 Cargué mi primer rifle de patrulla, un Colt AR15, en un vehículo patrullero Chevrolet Blazer 4x4 en 1985. Los otros dos agentes de patrulla en mi condado tenían sus propios rifles semi-automáticos en estantes cerrados, uno portaba una Beretta AR70 (también en calibre 5,56 mm), mientras que el otro tenía una H&K Modelo 91 con recámaras mucho más poderosas para cartuchos 7.62x51mm OTAN (.308 Winchester). Mientras que más de un objetivo humano potencial vio el final de nuestros rifles en los últimos años, nadie desafió su autoridad. Ahora vemos rifles de patrulla en las manos de muchos policías de EE.UU., generalmente una variación del sistema de AR15/M16/M4. Siempre he creído que un rifle es el arma larga de "respuesta" a la mayoría de las situaciones policiales de tiroteos, ahora parece que la mayoría de las agencias están de acuerdo. Por lo tanto, voy a tratar de estar un paso adelante sugiriendo que ahora necesitamos mover a pocos de nuestros oficiales "más allá del rifle de patrulla". La otra forma dominante de rifle de uso policial en EE.UU. ha sido el rifle de francotirador, generalmente conocido como un rifle de contra-francotirador en sus primeros días después de la masacre de "Texas Tower" cometida por Charles Whitman en Austin, Texas, el 1 de agosto de 1966. Lo que propongo ahora es equipar y entrenar a un porcentaje de nuestros oficiales de patrulla para una capacidad a mitad de camino entre el rifle de patrulla y el del francotirador y que generalmente sólo se despliega como un elemento de un equipo SWAT. El Ejército de los EE.UU. y la Infantería de Marina están desplegando en el terreno esos tiradores de nivel intermedio en número significativo y están demostrando ser extremadamente eficaces en Irak y Afganistán. Los militares de EE.UU. se refieren a ellos como "Tiradores Designados" y propongo adoptar una terminología similar y el mismo armamento quizás para uno de cada diez agentes de patrulla. En febrero de 2009, sólo unos pocos meses después del ataque terrorista en Mumbai, India, PoliceOne publicó mi serie de tres partes sobre la forma en que debemos entrenarnos y prepararnos para hacer frente a los equipos de tiradores terroristas activos. En el desarrollo de esa serie de artículos, me encontré con los borradores del Teniente Coronel Dave Grossman, señalando al Sargento Instructor de SWAT Ed Mohn, y un par de militares de Operaciones Especiales que conozco, añadiendo su valioso aporte al producto final. Yo


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estaba un poco más que satisfecho cuando vi a los departamentos de policía de la ciudad de Los Ángeles, Las Vegas y Nueva York, y a la Asociación Nacional de Oficiales Tácticos (NTOA, National Tactical Officers Association) organizando y capacitando a los agentes de forma paralela a nuestras recomendaciones iniciales - el programa más común es MACTAC (Multiple Attack Counter Terror Action Capabilities), entrenamiento para las Capacidades de Acción Contraterrorista ante Ataques Múltiples. Fue en la tercera parte de esa serie que por primera vez sugerí la necesidad de la capacidad del “Tirador Designado” (DM, Designated Marksman) para responder a un ataque al estilo Mumbai. Añadiendo la capacidad de un Tirador Designado. La forma más sencilla y barata de mejorar nuestros rifles de patrulla existentes es reformar las carabinas calibre 5,56 mm con miras ópticas de baja a media potencia. Esto aumenta la capacidad del tirador para efectuar fuego preciso en distancias más largas de lo que generalmente se puede alcanzar con miras de hierro. Además de la óptica, cualquier rifle de 5,56 DM debe ir acompañado de un proyectil pesado 5,56 mm, como la bala MHP 77gr en la carga Mk262. La mayoría de los Tiradores Designados del Ejército están equipados con una variante M16 que usa una mira óptica de 4x y la carga Mk262. Muchos tiradores de rifle de patrulla pueden montar ya rápidamente miras o lentes de aumento 3x para miras ópticas de baja potencia. Pero lo ideal, creo que nuestros tiradores designados deberán estar equipados con un rifle más potente para tratar más eficazmente con la distancia y la cubierta de la luz interviniente. La plataforma AR15 puede adaptarse para los grandes cartuchos como el Remington .30 AR o el 6.8mm SPC, pero intensificarlo aún más tiene más sentido. Los Tiradores Designados de Infantería de Marina generalmente disparan un M14 actualizado con cámaras para el 7.62x51mm (.308 Winchester). Nuestro Policía-Tirador Designado también debe optar por el cartucho 7.62mm/.308, pero en lugar de disparar el cartucho 168gr Match Hollow Point (MHP: Coincidencia con Puntos Huecos) que usan nuestros francotiradores, debemos optar por un proyectil en expansión de 150 granos. Los proyectiles MHP del francotirador están diseñados principalmente para dar precisión y un errático rendimiento terminal. La elección de un cartucho como la Munición Federal P308E, que utiliza una bala Nosler Ballistic Tip de 150 granos, o una carga Black Hills Ammunition’s Black Hills Gold, que usa un proyectil Hornady 155 granos A-Max, proporcionaría un rendimiento terminal devastador y una menor posibilidad de sobre-penetración, junto con la capacidad de intercambiar indistintamente con la munición militar M80 Ball. El M80 Ball es para la trayectoria de una bala de expansión de 150-155 granos y permite tanto un entrenamiento de costes reducidos, como una mejor penetración contra blancos atrincherados. El rifle M14 modificado para Tiradores Designados del Cuerpo de Marines se puede duplicar con un rifle M1A de Springfield Armory, su modelo Scout Squad es particularmente útil. Si usted prefiere un rifle semi-automático con los mismos controles de operación que su AR para simplificar el entrenamiento, una serie de fabricantes de AR ofrecen una variación del AR10, que está calibrada para el cartucho 7,62 mm. Un rifle de un tirador policial designado debe estar equipado con una mira de 4 aumentos (o un alcance de potencia variable que se ampliará hasta por lo menos 4 veces). Una alternativa a un semiautomático sería el rifle de cerrojo Ruger’s Gunsite Scout, también calibrada para el Winchester 7.62mm/.308. Si nos imaginamos un tirador policial designado como alguien que va a proporcionar apoyo a la precisión de un equipo de oficiales armados con carabinas semiautomáticas de alta capacidad, luchando en formaciones de equipos militares, un fusil de cerrojo en las manos de un tirador experto puede proporcionar un servicio muy fiable. El Ruger Scout utiliza cargadores desmontables con capacidad para 10 cartuchos, lo que permite a un tirador designado cambiar rápidamente de munición de bolas para mayor penetración o incluso añadir trazadoras para marcar un objetivo específico y hacer "fuego dirigido" en apoyo de sus compañeros de equipo. Más allá del rifle de patrulla. Cuando las agencias de policía entrenen en MACTAC, deberían considerar actualizar el armamento de algunos oficiales. Yendo más allá de los rifles de patrulla, añadiendo un porcentaje de fusileros designados a los equipos, con un potente y preciso rifle calibre .30, hará que su agencia sea tan formidable que cualquier terrorista con dos dedos de frente buscará un objetivo más fáci


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Instituto de la Ciencia de la Fuerza Force Science Institute

Ciencia de la Fuerza: Nosotros salvamos vidas y reputaciones. 20 La Ciencia de la Fuerza es la investigación y la aplicación de los principios y procesos científicos imparciales para determinar la verdadera naturaleza del comportamiento humano en encuentros mortales y de alto estrés. Los estudios innovadores y reproducibles de la Ciencia de la Fuerza abordan los problemas reales que encuentran los oficiales de la ley en la calle y son meticulosamente documentados.

Dr. Bill Lewinski: es un científico del comportamiento especializado en temas relacionados con la aplicación de la ley. Tiene un doctorado (PhD) en Psicología con una concentración en la psicología policial es Profesor Emérito de la Universidad Estatal de Minnesota, Mankato, donde ha enseñado durante casi tres décadas. Es el fundador y director del Instituto de Ciencias de la Fuerza (The Force Science Institute), que también tiene su sede en Mankato. El Instituto reúne a expertos de una amplia variedad de disciplinas académicas y de investigación para el estudio de la conducta del oficial en los encuentros con uso de la fuerza. El Dr. Lewinski es el líder en investigación sobre el comportamiento humano en encuentros de fuerza. Su enfoque actual está en los parámetros de acción / reacción, percepción, atención y memoria, y juicio. Su investigación ha sido diseminada en las publicaciones de la aplicación nacional de la ley, sitios web y noticias en línea electrónica. Esta investigación ha sido destacad en «48 Hours Investigate» y en el Panorama de la BBC. Sus estudios más recientes han implicado la investigación tecnológicamente sofisticada sobre los factores psicológicos y perceptuales que impactan en el tiempo de reacción del oficial. El Dr. Lewinski ha entrenado en Goju Karate desde 1967. Es director regional e integra la Junta Nacional de Examinadores de Goju Kai, Karate Do, EE.UU.

Destruyendo mitos y descubriendo hechos fríos con el Instituto de Ciencias de la Fuerza. El Instituto de Ciencias de la Fuerza, una organización de vanguardia que usa sofisticadas mediciones de tiempo y movimiento para documentar -por primera vez- críticas verdades ocultas acerca de la dinámica física y mental de los eventos que amenazan la vida, particularmente a de los oficiales implicados en tiroteos.

20 ¿Quiénes somos? http://www.forcescience.org/whoweare.html. Consulta: 16 de febrero de 2012.


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Curso de Certificación. 21 ¿Están usted y su agencia listos para la tormenta de fuego de un uso de la fuerza controversial? El curso de certificación más reciente de la aplicación de la ley lo prepara para descubrir la verdad cuando los pleitos, las carreras y las reputaciones están en la línea.

«Fuego contagioso»: ¿Realidad o ficción? 22

Dr. Bill Lewinski

1 de diciembre de 2006 El titular del New York Times del 27 de noviembre decía: «50 disparos efectuados y los expertos ofrecen una teoría». La supuesta teoría, que implícitamente critica la actuación de los oficiales y del Departamento de Policía de Nueva York, es que los policías en este incidente comenzaron a disparar y dispararon esa cantidad de cartuchos sobre todo porque otros funcionarios presentes en el lugar también estaban disparando... "disparos contagiosos". Este es un nuevo término en la aplicación de la ley y cuando empezó a ganar reconocimiento en los años 90 se llamaba originalmente "disparos emocionalmente contagiosos". También se la denominó "respuesta reflexiva en masa". Este presunto fenómeno, que ahora se incorpora en el léxico de la aplicación de la ley y que no tiene ni una pizca de investigación para sostenerlo, establece que los agentes dispararon porque su pareja disparó y los oficiales reaccionaron espontáneamente, irracionalmente y por ninguna razón legal. En lo que respecta a este fenómeno presunto, un psiquiatra forense de la Costa Oeste ha sido citado diciendo, "los otros oficiales que se ven afectados por el ‘contagio’ son responsables del pánico, cegándose por los estallidos de los disparos y no auto restringiéndose lo suficiente como para evaluar la situación". Los expertos entrevistados por el New York Times parecieron ser influidos en su conclusión de que eran "disparos contagiosos", por la gran cantidad de disparos efectuados, el número irregular de disparos hechos por los oficiales individualmente y el hecho de que el vehículo implicado fue impactado por aproximadamente la mitad de los proyectiles - una alta tasa de inexactitud que, comprensiblemente, plantea interrogantes sobre el "rociar y rezar" de los oficiales a causa del pánico. El Sargento Craig Stapp, del Departamento de Policía de Tempe, miembro del Consejo Asesor del Centro para la Investigación Científica de la Fuerza (FSRC, Force Science Research Center), ha dicho: “Verá videos de tiroteos donde los oficiales están demorando y demorando su respuesta y entonces uno disparará y luego todos ellos dispararán”. El Sargento Stapp es preciso en su observación y este tipo de pruebas documentadas lleva al espectador a imaginar o proponer algún tipo de influencia grupal sobre la reacción de los oficiales que retrasaron sus disparos hasta que alguien más lo hizo. 21 Certification Course. http://www.forcescience.org/certification.html. Consulta: 16 de febrero de 2014. 22 http://www.policeone.com/officer-shootings/articles/1194558-Contagious-Gunfire-Fact-or-Fiction/


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A continuación, lleva a la consecuencia lógica que los oficiales que dispararon después estaban reaccionando al comportamiento de los demás, o peor, estaban reaccionando a causa de su propio pánico de las armas disparadas junto a ellos. ¿Qué dice la investigación acerca de esto? Teóricamente es posible y razonable que los agentes que actúan en un incidente, influyan en el comportamiento de cada uno. Sin embargo, la explicación de la idea del tiroteo "contagioso" es que la influencia es reflexiva o peor. Se extiende al supuesto de que los oficiales disparan y disparan a menudo a causa de una respuesta de pánico irracional basada únicamente en el comportamiento de los demás oficiales. Esta influencia se supone que ocurre en el momento de máxima intensidad en el encuentro y asume que los oficiales son capaces de percibir y ser influenciados por el comportamiento de otros oficiales en este punto crítico en el incidente. El Centro de Investigación Científica de la Fuerza (FSRC) de la cual soy el director ejecutivo, se ha centrado intensamente en la investigación de la actuación humana en situaciones de alto estrés, tales como cómo y por qué los policías comienzan y finalizan el tiroteo, así como la capacidad de los funcionarios para ver y procesar la información o no ver y procesar la información debido al limitado foco de su atención en una circunstancia amenazante. Mi estudio de investigación de más de 1.000 policías involucrados en tiroteos indica que para la mayor parte, los oficiales implicados en un tiroteo con otros agentes rara vez pueden reportar sobre el comportamiento de esos otros funcionarios y casi nunca pueden describir por completo su propia conducta y mucho menos el comportamiento de otros oficiales en un lugar donde evoluciona rápidamente una escena de tiroteo dinámico y complejo. La investigación hecha por FSRC y otros indican que cada funcionario toma su propia decisión para disparar, dispara varios cartuchos y se detiene por su propia razón, a menudo inconsciente de la actuación de los demás. O si tienen conocimiento de la respuesta de los demás, parece ser una confirmación de sus propias decisiones que la situación urgentemente requería el uso de fuerza letal. FSRC llama a esos tipos de tiroteos, involucrando a múltiples funcionarios y frecuentemente con descarga de muchos disparos, como "disparos sincrónicos". Significa que cada funcionario actúa con independencia pero en concierto con otros en una experiencia compartida de peligro para la vida. Conforme el Teniente Joe Hartshorn, de Homicidios del LASD, observara: "Si usted tiene 10 funcionarios involucrados en un tiroteo, cada uno tiene su propia experiencia en ese incidente". En el pasado esas respuestas individuales que ocurren en concierto con la de otros funcionarios han sido mencionadas también como "tiroteo en manojo o agrupado". Nuevas investigaciones sobre la demografía de los tiroteos "en manojo" o "sincrónicos" de Tom Aveni, del Consejo de Estudios sobre Políticas Policiales y miembro del Consejo Asesor Nacional del Centro para la Investigación Científica de la Fuerza, revela que el tipo opuesto de incidente - tiroteos con un solo oficial implicado - usualmente resultan en un menor número de disparos y la mayor tasa de éxito, tan alto como un 64% de aciertos si los tiroteos ocurrieron durante el día. Los "tiroteos sincrónicos" envuelven al mayor número de oficiales, el mayor número de disparos hechos y las menores tasas de éxito. Usualmente, las grandes agencias metropolitanas se ven implicadas. Esas grandes agencias típicamente solían tener dos policías por patrullero o muchos oficiales individuales por cada patrullero capaces de responder rápidamente a un incidente. A menudo tuvieron unidades proactivas contra la delincuencia callejera que operaba en equipos lo que permitió que un gran número de funcionarios estén presentes o respondan de inmediato a la escena. Esto significa que muchos oficiales con muchas armas y muchas balas estaban presentes en, o respondían rápidamente a estos incidentes. La investigación de Aveni ilustró aún más que los sospechosos involucrados frecuentemente usan medios que prolongan el tiroteo. Por ejemplo, el sujeto utilizó un arma de cañón largo forzando con el tiroteo que el oficial se ‘aleje’, o el sujeto utilizó un vehículo en movimiento que el funcionario percibe como una amenaza,


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ya sea por la utilización directa del vehículo o porque el sujeto estaba disparando desde o detrás de la cubierta del vehículo. El vehículo entonces estaba siendo utilizado por el sujeto como un arma desde la cual el sujeto también contaba con algún grado de protección o no eran visibles al oficial porque estaba dentro o al lado del vehículo. El uso del vehículo o del arma de cañón largo en una posición ‘apartada’ incrementó la duración del evento, el número de disparos efectuados y la exactitud de los oficiales. Los oficiales de esos incidentes impactaron a tasas tan bajas como el 9 % con su volumen de fuego cada vez más hacia el reino del 45 %. Esos incidentes suelen ocurrir y evolucionan rápidamente, eran visualmente complejos y complicados, y amenazaron a más de un oficial. Muchos incidentes ocurrieron con luz muy baja o luz ambiental muy pobre contribuyente a lo que Aveni llama "pandemonio" y no "pánico". La escena era confusa, la acción era compleja y los oficiales eran frecuentemente inconscientes de la posición o el comportamiento de otros oficiales en el lugar. A menudo vislumbraban y podían informar sólo una parte de la imagen total del incidente. La investigación de FSRC indica que la percepción personal de la amenaza por cada oficial individual y la creencia de aquel oficial que su respuesta era necesaria para detener la amenaza, eran las razones principales de porqué comenzaron a disparar, pararon y efectuaron tantos disparos. Frecuentemente los agentes que efectuaron el menor número de disparos, desviaron su atención de la amenaza original, por lo que no vieron desarrollar inmediatamente o estaban esforzándose por la seguridad o tratando de tomar decisiones sobre qué hacer antes de comenzar a disparar. Se comprometieron tarde en la acción, y dispararon menos que nadie. En el otro extremo, el oficial en el corazón de la acción o el que percibe la amenaza frecuentemente dispara a un ritmo más rápido y un mayor volumen de fuego que otros, a causa de la valoración directa de la amenaza y la intensidad emocional del evento. Dispararon incluso después que los otros habían dejado de hacerlo - primariamente debido a su incapacidad psicológica o a veces física para detectar cambios significativos en la amenaza. Esos oficiales que percibieron la amenaza, en lugar de centrarse en ella, en el comportamiento de la amenaza y los disparos para parar esa amenaza, a menudo retrocedían psicológicamente del peligro repentino y directo para sus vidas. Ellos estaban disparando para "salvar sus vidas" en lugar de disparar directa e intencionadamente para detener la amenaza. Esto significa que eran menos capaces de detectar cambios en la amenaza y frecuentemente se dio un cambio radical en la amenaza hacia ellos y no notaron ningún cambio que pudiera resultar en tomar la decisión de detener los disparos. El término "disparos contagiosos" o "respuesta reflexiva en masa" implica que los agentes dispararon sus armas sin un proceso de toma de decisiones. El hecho de que los oficiales pueden disparar un arma sin querer es una realidad en la aplicación de la ley. De hecho se le llama "descarga involuntaria". Se han producido en los encuentros en la calle y han resultado en muerte. También puede ocurrir en ‘tiroteos sincrónicos’. Dependiendo de la razón, incluyendo las ‘respuestas asustadas’, el número de disparos efectuados raramente excede los dos. Además, no me cabe duda, como proponen los expertos, que el sonido de los disparos mejorará la interpretación de la amenaza de cualquier acción que un oficial está evaluando. En un estudio de Londres del FSRC completado recientemente, simplemente el sonido de los disparos inesperados en un escenario – incluso si no fueron identificados por los oficiales como disparos - saltó los pulsos de los oficiales a más de 140 latidos por minuto; sin embargo, no podemos conectar esto a cualquier respuesta provocadora prematura. Asumir que este realce de una interpretación resultó en un contagio de pánico y en disparos y es la razón primaria por la cual se produjo el tiroteo en Nueva York, es irresponsable en este momento. Además de ello, resulta en una hipótesis no probada o adivinanza de los medios y los "expertos" que luego se convierte en un hecho científico para el público, que a su vez alimenta el disenso racial y discordia. Se degrada a los oficiales


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involucrados, el departamento y la comunidad. Todo el proceso es inconcebible e impulsado por los medios de comunicación. La información contenida en este artículo no es una explicación del incidente de Nueva York. El autor no sabe si los policías de la Ciudad de Nueva York que participaron en este incidente usaron la fuerza apropiada y legalmente defendible. Simplemente pone de manifiesto que hay cierta investigación e información a disposición de la comunidad del orden público que ofrece una alternativa científica a una "conjetura" sobre los "disparos contagiosos". También es un estímulo para esperar los resultados de una investigación limpia, neutral y de búsqueda de los hechos antes de saltar a un juicio sobre el comportamiento de los compañeros de profesión. Una pregunta para el lector: ¿Por qué algo tan importante como los "disparos contagiosos", que simplemente es hipotético y no probado, tiene sin embargo el potencial para contribuir al inmenso malestar social y no ha sido ampliamente investigado? Necesitamos la investigación a fin de que pueda ser descartada como ficción o, de ser real, la policía podrá entonces hacer el tipo de entrenamiento que minimizará la posibilidad de que vuelva a suceder.

¿Por qué sabemos tan poco acerca del entrenamiento policial y de los tiroteos policiales pero pretendemos saber mucho?

Luchando contra el fenómeno del fuego contagioso 23

Una de las razones por las que ocurre el fuego contagioso es que, sin intención, lo reforzamos con nuestro entrenamiento con armas de fuego

Chuck Joyner

29 de enero de 2010 Chuck Joyner fue empleado por la CIA desde 1983 a 1987, y fue Agente Especial del FBI desde 1987 hasta su retiro en octubre de 2011. Es el creador del Dynamic Resistance Response Model (DRRM), un moderno modelo de Uso de la Fuerza. Actualmente es Presidente de Survival Sciences, LLC. Ofrece entrenamiento y testimonio experto al área de la aplicación de la ley sobre el uso de la fuerza. La frase «fuego contagioso» es ofensiva para muchos policías. La razón por la que algunos la encuentran ofensiva se debe a que ha sido mal usado para retratar incorrectamente los tiroteos de la policía. Algunos sostienen incluso que el fuego contagioso ni siquiera existe. Otros términos han sido propuestos por la policía y los escritores de los medios para ser más descriptivos o exactos, pero como la mayoría de los funcionarios está familiarizada con el término «fuego contagioso», lo usaré en este artículo. Primero, discutamos qué no es fuego contagioso. Varios funcionarios disparando sus armas no debe ser descrito como «fuego contagioso» si cada agente individual percibe una amenaza y toma una decisión razonable de usar la fuerza letal basada en esa amenaza. Un gran número de disparos tampoco es necesariamente un indicativo de fuego contagioso. Lo más probable es que la amenaza de muerte o lesiones corporales graves siguió existiendo y que los oficiales siguieron disparando para detener la amenaza. Así que cuando los políticos afirman que es inaceptable hacer más de

23 http://www.policeone.com/police-products/firearm-accessories/firearms-storage/articles/1996906-Fighting-the-contagious-fire-phenomenon/


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50 disparos (o algún número arbitrario), están equivocados. Es completamente aceptable y necesario para la supervivencia disparar más de 50 cartuchos si la amenaza sigue existiendo. Por ejemplo, en el tiroteo de 1997 en North Hollywood, los ladrones de bancos Phillips y Matasareanu (fuertemente armados y vistiendo chalecos antibalas) dispararon más de 1.000 tiros a los policías y civiles. Los oficiales dispararon cientos de balas como respuesta. Yo no creo que nadie racionalmente podría caracterizarlo como fuego contagioso o como inapropiado. También ha habido incidentes en los que la policía fue criticada por efectuar disparos múltiples a un conductor de un vehículo en movimiento, incluso después que el vehículo chocó contra un oficial. Los reportes de los medios filmaron el tiroteo de una persona desarmada, sin reconocer que un vehículo puede ser una bala de 4.000 libras. En resumen, el fuego contagioso se puede definir como el fenómeno que se produce cuando un oficial dispara, causando que los otros oficiales tengan una proclividad a disparar también, incluso si desconocen la justificación para el tiroteo. Después de un supuesto incidente de fuego contagioso, cualquier funcionario que haya disparado con su arma puede caer en una de estas tres categorías: 1. El agente disparó después de hacer una determinación personal de que la fuerza mortal era legalmente

justificada y apropiada. Disparó primero o no sabía que los demás también estaban disparando. 2. El agente estaba al tanto de que los demás estaban disparando, y disparó sólo después de hacer una

determinación personal de que la fuerza mortal era legalmente justificada y apropiada. 3. El agente disparó al calor del momento por ninguna otra razón por la que los demás oficiales estaban

disparando. ¿Existe el fuego contagioso? Estoy seguro que el fuego contagioso existe por tres razones. Primero, los funcionarios lo han admitido. La segunda razón es que puedo tener, y tengo, fuego contagioso inducido durante el entrenamiento con armas de fuego. Finalmente, he visto que ocurre repetidamente en el entrenamiento force-on-force. En un incidente crítico, el primer objetivo es sobrevivir. Después que ese objetivo ha sido cumplido, el próximo es sobrevivir a los siguientes desafíos administrativos y posiblemente jurídicos. Cuando un agente utiliza la fuerza letal, lo es por su determinación individual que el tiroteo era legal según lo dictado por Tennessee vs. Garner, 471 US 1 (1985), y estaba dentro de la política del departamento. "Disparé porque mi amigo tiró", no lo cortó y no augura nada bueno en la corte. ¿Por qué ocurre el fuego contagioso? Una razón es que nosotros, sin intención, lo reforzamos con nuestro entrenamiento con armas de fuego. Piense en un día típico en un departamento típico. Todos los oficiales de pie en la línea de fuego, los blancos giran o los silbatos suenan, y todos los oficiales disparan juntos hasta que un cese al fuego da la señal. Nuestra memoria muscular es disparar al mismo tiempo que nuestros compañeros están disparando. Demostrar que el fuego contagioso existe a través de la capacitación. Mientras me desempeñaba como Instructor de armas de fuego del FBI para certificar instructores de otras agencias, siempre incluí varios campos de identificación de blancos. Los blancos podían consistir en formas geométricas típicas o ser una serie de fotografías de caras de tamaño natural de diversos individuos. Cada tablero del blanco contendría seis a ocho objetivos diferentes, más pequeño. Quiero garantizar que la elaboración y colocación de los objetivos más pequeños en cada tablero del blanco eran únicas. Los objetivos serían enfrentados lejos de los tiradores. Una vez en posición, yo describiría el ‘objetivo del tiro’ y mostraría los blancos unos pocos segundos. Los Instructores de armas de fuego debían disparar sólo al objetivo llamado antes de enfrentarlo a la distancia. A orden, entonces pasarían a la derecha a un nuevo objetivo, y continuaría el ejercicio con varias rotaciones. Consistentemente, en cada clase, los oficiales dispararían a sus blancos al oír disparar a los demás, incluso cuando su blanco particular no contenía el objetivo llamado. Cuando se preguntó por qué disparó a un blanco al que no debía disparar, la respuesta típica era "no sé" o bien "todos los demás estaban disparando, así que supuse que debía disparar también".


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Recuerde, esto es una clase de instructores de armas de fuego en un ambiente de bajo estrés (solo que querían obtener sus certificados) - no un montón de nuevos reclutas. Ocasionalmente también llamé a blancos inexistentes, y otra vez, inevitablemente algunos en la clase dispararían. El número de instructores que le tiraban a blancos de "no tirar" fue aún mayor cuando hicimos ejercicios de tiro nocturno y estaban obligados a utilizar linternas para ver los objetivos. Esto indica que confiaban en el juicio de su pareja (o vista) mejor que la propia. Comprendiendo la política de fuerza letal. Otra razón por la que el fuego contagioso puede ocurrir es la falta de confianza de un funcionario para comprender y aplicar la política de fuerza letal. Esto, también, es una cuestión de instrucción. ¿Cómo corregimos esto? Primero, todos los funcionarios necesitan entender y ser capaces de aplicar la ley con respecto a la fuerza mortal en una situación de alto estrés, de vida o muerte. Cada funcionario debe recibir una capacitación regular de actualización jurídica. Un oficial debe estar íntimamente familiarizado con los principios de la política de fuerza letal del departamento. La incertidumbre acerca de cuándo es lícito disparar podría conducir a una respuesta tardía, lo que podría llevar al oficial a la muerte. La instrucción con armas de fuego se puede combinar con una revisión jurídica. Los oficiales se pueden colocar en simulacros de tiroteos en los que tienen que tomar una decisión de fuerza letal, y luego articular la razonabilidad de esa decisión. Después de ejecutar este ejercicio varias veces, los funcionarios deben sentirse cómodos con sus habilidades para la toma de decisiones y poseer la capacidad de articular la racionalidad de sus acciones después de un encuentro con uso de la fuerza. A continuación, necesitamos reconocer que disparar en un curso de cualificación estática y llamarlo por un día no es suficiente. Usted puede haber alcanzado los requerimientos de la política del departamento de tener la puntuación de aprobación para todos los funcionarios, pero no ha comenzado siquiera a proporcionar un entrenamiento con armas de fuego necesario para salvar las vidas de sus oficiales. La instrucción con armas de fuego debe incluir un entrenamiento dinámico que se aproxime a una situación en la vida real. La Asociación Internacional de Pistola Defensiva (IDPA, International Defensive Pistol Association) ofrece un libro que contiene un gran número de cursos, muchos de los cuales se basan en tiroteos policiales actuales. Como instructores de armas de fuego, a veces olvidamos nuestro principal objetivo. No es lograr que todas las oficinas aprueben una calificación de tiro en un curso. Nuestro propósito es asegurar que cada agente sobreviva a, y gane, un tiroteo. Previniendo el fuego contagioso. Para combatir el fuego contagioso, también debe incluir cursos de identificación de objetivos en la instrucción con armas de fuego. Todos los funcionarios deben tener la capacidad de tomar una decisión individual de fuerza letal basada en sus percepciones y sentidos. Además de insistir en los fundamentos del tiro, la toma de decisiones debe ser una parte de la ecuación de la fuerza letal. Esta puede ser reforzada mediante el uso frecuente de simuladores de entrenamiento con armas de fuego y balas de pintura, o entrenamiento force-on-force. Por último, debemos hacer del tiro a un blanco al cual "no disparar" un comportamiento inaceptable. Durante las pruebas de SWAT, yo no estaba contento con errar el tiro al blanco, pero dispararle a un objetivo al que no había que disparar era imperdonable y un descalificador casi instantáneo a tenerse en cuenta como un miembro del equipo. Aunque los informes creíbles de fuego contagioso son raros, nos proporcionan una oportunidad para mejorar nuestro entrenamiento con armas de fuego, incrementar nuestro conocimiento jurídico de la utilización de fuerza letal, y aumentar la supervivencia de nuestros oficiales.-

Encuesta de la Revista de Emergencias Médicas sobre el uso excesivo de la fuerza policial: “¡Ay!”

Capitán (R) Greg Meyer

15 de abril de 2009


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Mi esposa ve que hay investigaciones que estudian la cera del oído en los ratones, el porcentaje de búfalos que se rompen los tobillos mientras hacen esquí de fondo, etc. "¿Gastan ellos el dinero investigando estas cosas?", dice. "¿Y de qué se enteran exactamente que podría ser útil?" Bien, es bueno que no le haya contado sobre el estudio publicado recientemente que encuentra un alto porcentaje de médicos de las salas de emergencia que creen ver con cierta frecuencia a pacientes que son víctimas de "fuerza excesiva" por la policía. Puede ver el informe del estudio, publicado en enero de 2009 en la Revista de Medicina de Emergencias, cuya copia está disponible. La parte realmente extraña de este estudio es el resultado que declara, "de los encuestados, el 97,8 % [de los 315 médicos que contestaron]... respondieron que habían gestionado casos en los que sospecharon, o el paciente les dijo, hubo uso excesivo de la fuerza por agentes del orden público". Le escribí a uno de los autores del estudio en un intento por obtener una copia de las preguntas de la encuesta y esperaba iniciar una interacción con ellos. Estaba particularmente interesado en conseguir algunos números inéditos de la encuesta que muestran cuántas veces sospecharon los médicos que hubo excesivo uso de la fuerza sólo porque el paciente declaró que la hubo, versus la propia estimación de los médicos acerca de la situación. Pero no obtuve respuesta. La cuestión simplemente reclama mayores detalles. Imagínense la situación en la sala de emergencias: Un individuo está siendo examinado. El doctor le pregunta: "¿Qué pasó?" y el tipo responde: "La policía me dejó en mal estado sin ninguna razón". Bien, ¡ese es un número para la encuesta! No importa que el médico no tenga fundamento alguno para evaluar la situación de la calle. Me he contactado con varios médicos de las salas de emergencia, y ninguno tan ingenuo. Le escribí hace mucho tiempo a un conocido, prominente supervisor de la sala de emergencia de un importante hospital del sur de California. Llamó ‘falso’ al artículo y dijo, ‘planeo escribirle una carta al director para expresar mis preocupaciones (indignación) sobre este artículo. Nunca debería haber sido publicado, porque es tan sesgado’. He aquí dos citas del artículo, con mis comentarios (en letra cursiva y negrita): "La justificación del uso de la fuerza por un agente de la ley siempre gira en torno a la amenaza percibida del oficial para con su vida o la vida de otros o el bienestar, un juicio subjetivo que es extremadamente difícil de adivinar segundos después de los hechos y lejos del encuentro". Vamos a seguir adelante; supongo, después del hecho, en ausencia de hechos, lejos del encuentro. "No han habido herramientas validadas para validar los métodos de investigación pidiéndole a los médicos que evalúen la violencia; por lo tanto es posible que las preguntas hechas no evalúen efectivamente las percepciones del EP. Finalmente, las preguntas formuladas le piden a los encuestados un juicio subjetivo, casi siempre sin evidencias objetivas; como tal, este estudio refleja las percepciones de los EP de los eventos y no lo que realmente ocurrió". No importa que no definamos "fuerza excesiva". Es como la pornografía - no podemos definirla, pero lo sabemos cuando la vemos (o lo sospechamos). Un artículo de enero en USA Today cuenta con más reacción del mundo policial. Es en su interés -así como su deber profesional y legal- utilizar la fuerza de manera razonable. La fuerza debe ser usada para controlar la resistencia y la violencia ocasionalmente, y los resultados no son siempre tan bonitos. Creo que la mayoría de los médicos de las salas de emergencia (de hecho, incluso la gran mayoría de la población en general) entiende eso. Lo que hace que los resultados de la encuesta sean un real rascador de cabeza. Uno de los puntos del artículo es que los médicos carecen de protocolos para informar sobre el excesivo uso de la fuerza cuando lo sospechan. Humildemente sugiero que haga lo que el resto del mundo civilizado hace en esa situación: apueste a la supervisión policial. No es difícil de hacer.

¿Por qué dispararle a un herido no tiene sentido científicamente, legalmente o tácticamente? Force Science re-afirma su caso a la luz de recientes «proyectos de ley para no matar» ("no-kill bill").

Un informe especial del Instituto de Ciencias de la Fuerza.


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26 de mayo de 2010

¿Realmente los policías tienen que matar a la gente cuando les disparan?

¿No podrían ser ellos más humanos y justos apuntando a brazos o piernas? Como se informara en Force Science News, el Senador por el Estado de Nueva York, David Paterson [D.-Harlem], ponderó esas preguntas en 2006 y concluyó que los oficiales estaban matando innecesariamente a los sospechosos. En respuesta, introdujo un proyecto de ley que requeriría a los oficiales que traten de disparar a las extremidades de los delincuentes en lugar de apuntarles a lugares que muy probablemente detendrían la amenaza, pero que también resultarían en muerte. Paterson propuso que cualquier oficial que empleara más que la mínima fuerza necesaria para detener a un sospechoso que amenaza su vida, sea acusado por el delito de homicidio. La policía explotó en protesta y Paterson retiró el proyecto de ley. Pero la batalla no ha terminado. El New York Post ha informado que los Miembros de la Asamblea de Brooklyn Annette Robinson [D.-Bedford Stuyvesant] y Darryl Towns [D.-East New York] han introducido un proyecto de ley sobre "fuerza mínima" que requeriría a los oficiales que "le disparen al sospechoso en el brazo o en la pierna" y que usen las armas de fuego "con la intención de parar antes que de matar". "Cuando me encuentro con respuestas de civiles a oficiales involucrados en tiroteos, muy a menudo dicen ‘¿Por qué no le pegaron un tiro en la pierna?’", dijo el Dr. Bill Lewinski, director ejecutivo del Instituto de Ciencias de la Fuerza, en una entrevista a Force Science News en 2006 centrada en la legislación propuesta por Paterson. "Cuando los civiles juzgan a la policía por las muertes causadas en tiroteos -en los jurados, en los comités de revisión, en los medios de comunicación, en la comunidad-, este mismo argumento es llevado adelante muy a menudo. Dispararle a un herido es considerado ingenuamente como un medio razonable para poner fin al comportamiento peligroso”. "En realidad, este pensamiento es un resultado del ‘entrenamiento de Hollywood’, en el cual los policías de las películas y de la TV son capaces de hacer cualquier cosa para controlar los resultados de los eventos que sirven a los intereses dramáticos del director. Refleja una concepción errónea de la dinámica de la vida real y termina por imponer expectativas poco realistas sobre la habilidad de los oficiales de la vida real". El Vicepresidente Joe Biden está de acuerdo. Cuando Michael Paladino, presidente de la Asociación de Detectives de Nueva York, le mostró el proyecto de ley, se burló y sugirió se llamara "Ley John Wayne" debido a las habilidades no realistas que le exige a los policías, de disparar como en una película. A la luz de este rejuvenecimiento de los descarriados pensamientos de "tirar-para-herir", Force Science News está reeditando un “position paper", introducido originalmente tras la legislación propuesta en 2006 por Paterson, que discute porqué disparar para herir versus disparar para detener no es ni práctico ni deseable como estándar de desempeño. Esperamos que esta información le sea útil para hacer frente a toda apología de ‘tirar-para-herir’ que pueda surgir en su jurisdicción. CUESTIONES PRÁCTICAS. El proyecto de Robinson y Town fue elaborado a raíz del controversial tiroteo contra Sean Bell que murió después que los oficiales de Nueva York le efectuaran un total de 50 disparos a él y a otros dos hombres. El Senador Paterson dijo que su legislación propuesta en 2006 fue motivada por el asesinato a tiros en Nueva York de Amadou Diallo, quien fue alcanzado por 19 balas cuando los oficiales pensaron erróneamente que iba a sacar un arma cuando se le acercaban para interrogarlo. Paterson cree que disparar a un brazo o una pierna tendería a detener las acciones amenazadoras de un sospechoso, evitando la necesidad de dispararle a la cabeza o al pecho, donde la muerte es más probable. Al requerir


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únicamente la mínima cantidad de fuerza necesaria para controlar a un sospechoso, aparentemente espera reducir la probabilidad de los disparos "excesivos". Los estudios realizados por el Centro de Investigación Científica de la Fuerza revelaron algunos problemas prácticos con esas posiciones. Lewinski explica algunos de los fundamentos de la dinámica humana y la anatomía y los riesgos relativos a pérdidas e impactos: “Las manos y los brazos pueden ser las partes del cuerpo que se muevan más rápido. Por ejemplo, un sujeto promedio puede mover su mano y su antebrazo a través de su cuerpo en un ángulo de 90º en 12/100 de segundo. Puede mover su mano desde la cadera al hombro en 18/100 de segundo. "El oficial promedio aprieta el gatillo tan rápido como puede con una Glock, una de las pistolas semiautomáticas más rápidas, requiere 1/4 segundo para la descarga de cada disparo”. “No hay forma de que un oficial pueda reaccionar, evaluar, disparar y confiadamente pegarle al antebrazo de un sospechoso o al arma que porta en la mano en los intervalos de tiempo involucrados”. "Incluso si el sospechoso sostuvo el arma de su brazo constantemente durante medio segundo o más, un golpe preciso sería muy poco probable, y en los tiroteos de la policía el sospechoso y su arma rara vez son estacionarias. Además, el propio agente puede estar en movimiento mientras dispara”. "La parte de arriba de los brazos se mueve más lentamente que los antebrazos y las manos. Pero dispararle a la parte superior del brazo, da una mayor probabilidad de impacto a la arteria braquial del sospechoso o a su masa central, ambas áreas con una alta probabilidad de muerte. Entonces, ¿dónde solamente hiere el disparo cuando incluso hay áreas consideradas por algunos como "seguras" del riesgo de fatalidad, y de hecho podrían llevar el mismo nivel de riesgo como cuando se le apunta a la masa central?” “Las piernas tienden inicialmente a moverse más lentamente que los brazos y a mantener posiciones más estáticas. Sin embargo, las áreas de la parte inferior del tronco y la parte superior del muslo son ricas en vascularidad. Un sospechoso impactado allí puede desangrarse en segundos si una de las principales arterias resultara dañada, de modo que, de nuevo, disparar sólo para herir puede no resultar sólo en heridas”. "Por otra parte, si un oficial se las arregla para tomar las piernas de un sospechoso de un modo no fatal, aún quedan las manos libres del delincuente para disparar. Su capacidad para amenazar vidas no ha sido necesariamente detenida" En cuanto a la prevención de los llamados "excesos" de disparos después que una amenaza es neutralizada, Lewinski ofrece esas observaciones: "Veinte años atrás los oficiales eran entrenados para 'disparar y luego evaluar'. Disparaban 1 o 2 proyectiles y se detenían para ver el efecto. Esto requería 1/4 a 1/2 segundo, tiempo durante el cual el sospechoso podría seguir disparando, si no ha sido incapacitado”. "Ahora se les enseña a ‘disparar y evaluar’, para juzgar el efecto de sus tiros a medida que continúan disparando, un proceso en curso. Esto le permite al oficial defenderse continuamente a si mismo, pero como el cerebro está tratando de hacer 2 cosas a la vez -disparar y evaluar-, debe producirse un cambio muy significativo en la conducta del delincuente para que el oficial reconozca el cambio de circunstancias”. “Un sospechoso cayendo al suelo después de ser impactado sería un cambio significativo. Pero analizando la forma en que cae la gente, hemos determinado que toma 2/3 de segundo a un segundo completo o más para que una persona caiga al suelo desde una posición de pie. Y eso cuando han sido alcanzados en un centro motor que produce la pérdida inmediata de la tensión muscular”. "Mientras que el oficial se anoticia de este cambio, va a continuar disparando si está tirando tan rápido como puede bajo el estrés de tratar de salvar su vida. En promedio, desde el momento en que un funcionario percibe un cambio en el estímulo hasta la hora en que es capaz de procesarlo y de hecho dejar de disparar, se gastarán de 2 a 3 disparos adicionales más”.


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"Disparar más allá del momento en que una amenaza es neutralizada no es una acción dolosa, maliciosa en la mayoría de los casos. Es un factor involuntario de la dinámica humana”. "Teniendo en cuenta lo que la ciencia nos dice de los encuentros armados, esta última propuesta es una fantasía, igual que la legislación que Paterson antes de ella. Llevaría a los funcionarios a tener un desempeño sobrehumano y serían sancionados penalmente por no poder lograrlo". CUESTIONES LEGALES. Un mandato de tirar-a-herir no sería legalmente válido porque establece un estándar mucho más allá del establecido por Graham versus Connor, punto de referencia de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. sobre el uso policial de la fuerza, dice el ex fiscal Jeff Chudwin, ahora Jefe del Departamento de Policía de Olympia Fields (Illinois) y presidente de la Asociación de Oficiales Tácticos de Illinois. Reconociendo que los encuentros violentos son "tensos, inciertos y en rápida evolución", la Corte "no requiere a los agentes que usen el método de menor intrusión" de control con fuerza de un sospechoso amenazante, sino "sólo lo que es razonable", explica Chudwin. Cuando la vida de un oficial o de una tercera persona está en peligro, el disparo puede justificarse como razonable. Por definición legal, las consecuencias posibles de la fuerza letal incluyen la muerte y un gran daño corporal. “La ley nunca ha separado esos dos aparte”, dice Chudwin, que es lo que esas propuestas han tratado de hacer. "Los políticos que proponen esos tipos de legislación están diciendo que la policía debería dispararle a alguien sólo un poco. La fuerza letal no se refiere a «sólo un poco». Toda vez que dispare un arma de fuego, hay riesgo sustancial de resultar en un gran daño corporal o en muerte. La ley incluso no hace tanto como sugerir que la fuerza letal deba ser la suficiente para herir pero sin probabilidad de matar. Eso es simplemente erróneo legal y tácticamente, y envía el mensaje equivocado”. El abogado Bill Everett, ex-ejecutivo de gestión de riesgos, instructor de uso de la fuerza, ex-oficial de policía y miembro del Consejo Consultivo Nacional sobre la Ciencia de la Fuerza, está de acuerdo. Como él mismo lo explica, el uso de la fuerza desde un punto de vista legal es un problema de "proporcionalidad", y hay dos formas para medirlo: qué es necesario y qué es razonable. Traza la analogía con una casa que se incendia. "Los bomberos pueden verter lo que en el momento parece ser la cantidad adecuada de agua para detener el fuego versus no usar una gota más de agua de lo necesario, incluso en retrospectiva, para apagar el fuego". El primero se ajusta al enfoque "razonable"; el segundo es la perspectiva "necesaria" y es la esencia del proyecto de ley de tirar-a-herir/fuerza mínima. “Cuando se impone un estándar de necesidad estricta, requiere a los oficiales que piensen mucho en una situación en la que la Corte Suprema reconoce que no hay un montón de tiempo para pensar”, declara Everett. Bajo una directiva de tirar-a-herir, “un oficial frente a un sospechoso que corre hacia él con una botella rota se espera piense en dispararle a un brazo o una pierna, mientras que su propia vida está en peligro". La vacilación que probablemente creará sólo aumentará su riesgo. Dejando la cuestión crítica de la supervivencia del oficial a un lado, Everett predice que el tipo de legislación propuesta "sustancialmente expandiría la responsabilidad civil y penal de los policías". Él pregunta: "¿Qué pasa si un oficial trata de dispararle a una extremidad del sospechoso y termina impactando a un espectador inocente? ¿Qué pasa con la responsabilidad allí? ¿Qué pasa si un oficial intenta disparar a un miembro del delincuente, pero en su lugar le pega en el pecho? ¿Cómo será juzgada su verdadera intención?” "En un gran porcentaje de casos de disparos policiales y bajo el estándar actual prevaleciente de la Corte Suprema, los abogados y los jueces pueden mirar a los hechos y concluir que no hay ninguna base para permitir una demanda civil o para ir a juicio. Pero si cambia el estándar, habrán muchos más casos que irán a los jurados para ser evaluados: 1) ¿el oficial intentó herir o tuvo la intención de matar al sospechoso? y 2) ¿la muerte del sospechoso era absolutamente necesaria? El juicio será la norma y no la excepción. “¿Quién en su sano juicio podría convertirse en un policía en una jurisdicción donde tirar-para-herir y los estándares de estricta necesidad sean la ley? Esas ideas pueden tener algún fundamento humanitario, pero


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una vez que va más allá de la ‘atracción de Disney’ y enfrenta la realidad, el apoyo a esta forma de pensar tiene que evaporarse”. CUESTIONES TÁCTICAS. El entrenamiento moderno enseña que cuando un oficial utiliza la fuerza mortal, la intención debe ser poner fin al comportamiento amenazante del sospechoso lo más rápido posible. En palabras del instructor de armas de fuego Ron Avery, él mismo un campeón de tiro, jefe de la Academia de Tiro Práctico y miembro del Equipo de Asesoramiento Técnico del Consejo para la Ciencia de la Fuerza, tirar al centro de la masa de un asaltante se considera usualmente como la primera opción más efectiva porque la parte superior del torso combina una concentración de áreas vitales y de grandes vasos sanguíneos dentro del objetivo más grande del cuerpo. "Cuando el riesgo del fracaso es la muerte, un oficial necesita la posibilidad de mayor porcentaje de éxito que pueda obtener", nota Everett. Disparar a un más blanco más pequeño que se mueve más rápido como el brazo o una pierna, con la intención de herir en vez de incapacitar invitan a una miríada de dilemas tácticos. Por ejemplo: El instinto de supervivencia de un oficial puede ejercer una influencia irresistible en la selección del

blanco. “No me importa cuán buen tirador es usted”, dice Avery, "si su vida está amenazada va a ir primero a lo más seguro y, en segundo lugar, a preocuparse por la vida de su agresor. Si un hombre está corriendo hacia mí con un arma blanca, la última cosa que voy a pensar es ‘voy a pegarle un tiro en el brazo’". Por lo tanto, tirar al centro de la masa puede convertirse en un defecto psicológico.

El impacto de disparos pobres está destinado a aumentar. Incluso cuando los agentes tratan de tirarle al

centro de la masa, a menudo desacierta el disparo. Lewinski recuerda un caso en el cual un oficial que tiraba bajo un elevado estrés a sólo 5 metros de un delincuente, falló con los primeros 5 proyectiles e impactó los 4 siguientes sólo porque el sospechoso se movió hacia su línea de fuego. "Pegarle con precisión quirúrgica a un brazo o una pierna de un sospechoso que se mueve será prácticamente imposible", afirma Avery. "Tal vez podría contar con una mano las personas que pueden hacer esa clase de tiro bajo presión al límite para sus vidas. Esperar ese nivel de rendimiento de los policías en todas las agencias es ridículo". Los tiros errados pueden llegar a herir o matar a alguien más.

El uso de ciertas armas podría ser desalentado. "Debido al patrón de esparcimiento, un oficial puede evitar

usar una escopeta, por temor a golpear las zonas más vitales cuando se trata de tirar para herir", especula Everett. "Si el delincuente tiene un arma totalmente automática, por ejemplo, ¿un oficial debería dejar de utilizar la mejor arma de defensa que pueda tener, ya que podría barrer o ascender?"

Los disparos “exitosos” podrían ser peligrosos para las personas que están detrás del sospechoso a causa

de la penetración de lado a lado del proyectil. “Virtualmente todos los cartuchos de la policía de hoy están diseñados para penetrar ropa pesada y de 10 a 12 pulgadas de gel balístico", explica Chudwin. "Los disparos con esa capacidad pueden penetrar hasta las armas más grandes" y podría, al igual que los perdidos, viajar para alcanzar objetivos no deseados en el fondo.

Los disparos “exitosos” que no disuaden al delincuente, dejan al oficial aun en peligro. Cuando sabemos

de la experiencia de la calle que incluso múltiples impactos al centro de la masa no siempre paran a los atacantes determinados, trastornados o drogados, "¿cuántos oficiales serían asesinados por delincuentes que reciben un disparo en una extremidad y siguen siendo plenamente capaces de disparar de nuevo?" pregunta Chudwin. De hecho, Avery cree que disparar a un delincuente sin incapacitarlo, "sólo puede enfurecerlo, por lo que duplica su esfuerzo para matarte. No existe una correlación fiable entre herir a alguien y hacer que pare".

"Tirar para herir refleja una aplicación indebida de los equipos policiales. Las opciones menos letales deben

ser realizadas únicamente con herramientas diseñadas para ese propósito", dice Avery. "Si usted deliberadamente usa fuerza letal para poner a las personas bajo custodia sin incapacitarlas, está usando la herramienta equivocada para ese trabajo. Además, si le dispara al brazo o a la pierna y destruye el tejido del músculo, rompe el hueso o destruye la función del nervio, habrá mutilado a esa persona de por vida.


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Ahora los abogados pueden jugar con el argumento del ‘castigo cruel e inusual’ y demandar por lesiones al destruir la capacidad de su ‘víctima’ de ganar un salario y así sucesivamente. No trate de herir a las personas solo con un arma de fuego. Punto”.

Los expertos que consultamos acuerdan que defender a quien sostiene una agenda de tirar-a-herir parecen entender poco sobre dinámica humana, balística, táctica, aspectos legales de la fuerza y los desafíos que los oficiales enfrentan en la calle. Chudwin ha encontrado que esos críticos de las prácticas de la policía a menudo pueden ser iluminados si son invitados a experimentar en escenarios donde se toman decisiones para usar la fuerza, en un simulador de armas de fuego. Avery tiene una idea más dramática, quizás fantástica: "Póngalos en una jaula con un león", sugiere. "Entonces veamos si disparan para herir". [Un agradecimiento especial a Ron Barber en In the Line of Duty, cuyo boletín electrónico alertó a Force Science sobre este reciente proyecto de ley de la Asamblea.]

«El gorila invisible» "Trampas de la mente" que pueden engañarlo a usted y a aquellos que juzgan sus acciones


El jurado no le cree al policía de Boston. Durante una persecución a pie realizada por varios policías a varios sospechosos en un tiroteo, él corrió hacia la derecha más allá del lugar donde sus compañeros policías golpeaban despiadadamente a un hombre negro, pero juró que no había visto ninguna cosa, ni siquiera sabía que los demás policías o su víctima estaban allí. El jurado lo declaró culpable de perjurio y obstrucción de la justicia, detectando un claro ejemplo del "código policial de silencio" que protege a los malhechores con placa. El oficial fue condenado a 34 meses y fue destituido. Más tarde, un tribunal de apelaciones anuló el veredicto, pero por un tecnicismo legal que no tenía nada que ver con lo que había visto o no visto. Por lo tanto, ¿se salió con la suya con su "testi-miento"? Después de todo, ¿cómo podría un policía - un "observador entrenado" - no haber notado una gran acción ilícita que estaba claramente en su campo de visión? Presentado en mayor detalle, este caso abre el primer capítulo de un fascinante nuevo libro acerca de las trampas de la mente humana. Escrito para un público por 2 de los principales psicólogos cognitivos de la nación, el Dr. Christopher Chabris y el Dr. Daniel Simons, El Gorila Invisible "es un recorrido animado de los puntos ciegos del cerebro" que tiene profundas implicaciones para la aplicación de la ley y las personas que investigan y juzgan el uso de la fuerza y otras conductas policiales. Una experta sobre la memoria de renombre mundial, la Dra. Elizabeth Loftus, autora del libro Testimonios presenciales: Civiles y Criminales que fijó estándares, dice que El Gorila Invisible [The Invisible Gorilla: And Other Ways Our Intuitions Deceive Us] debe ser de "lectura obligatoria" para cualquier "curioso acerca de cómo funciona su mente de verdad". A través de casi 300 páginas, Chabris y Simons examinan una serie de "verdades" comúnmente creídas acerca de la cognición humana que son, en realidad, ilusiones. Algunas de ellas han sido abordadas en números anteriores de Noticias de la Ciencia de la Fuerza y se exploran en profundidad durante el curso de certificación en Análisis de la Ciencia de la Fuerza (Force Science Analysis) de 5 días.


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"Nosotros colectivamente asumimos… que prestemos más atención a lo que hacemos, que nuestros recuerdos son más detallados y robustos de lo que son, que la gente confiada o segura es gente competente, que sabemos más de lo que realmente hacemos, que las coincidencias y relaciones muestran causalidad (Ley en virtud de la cual se producen efectos; Real Academia Española, 22º edición) y que nuestros cerebros tienen vastas reservas de energía que son fáciles de desbloquear", dicen los autores. "Pero en todos estos casos, nuestras intuiciones están equivocadas". De hecho, los autores afirman que "prácticamente no hay campo de la conducta humana sin ser tocado por las ilusiones todos los días". "A menos que se reconozca en todos los niveles en el sistema de justicia penal", dice el Dr. Bill Lewinski, director ejecutivo del Instituto de Ciencias de la Fuerza, "puede resultar en graves consecuencias”. Los policías implicados en usos polémicos de la fuerza pueden ser injustamente acusados y condenados por irregularidades y los instructores pueden enviar a la calle a funcionarios innecesariamente faltos de preparación para defender sus vidas. "Los hechos poco entendidos que Simons y Chabris informan deberían ser de lectura obligatoria desde la academia a la sala del tribunal". Apoyado en el libro con documentación detallada, aquí hay sólo algunos de los temas que los investigadores iluminan: Ceguera por inatención (perceptual o por desatención). La mayoría de la gente cree que vemos –y por lo tanto debemos ser capaces de recordar- todo lo que ocurre dentro de nuestro campo visual, registrando y grabándolo como lo haría una cámara de video. En verdad, nuestro cerebro tiende a tamizar las distracciones -incluso aquellas que está mirando directamente- cuando estamos intensamente concentrados en otro objeto o actividad. Una de las pruebas más sorprendentes y famosas de esta realidad se creó y aún es utilizada por Chabris y Simons y otros investigadores (incluyendo Lewinski en el curso de certificación de FSI). A los sujetos a prueba se les dice que vean una película de 1 minuto en la que varios jóvenes están saltando y pasando una pelota de baloncesto y cuenten el número de veces que algunos de esos jugadores lanza la pelota. A mitad de camino en la acción, un evento muy intrusivo se produce en el centro de la pantalla y tiene una duración de aproximadamente 9 segundos. En reuniones informativas posteriores, aproximadamente la mitad de los sujetos de prueba consistente y firmemente niega haber visto la intrusión (una mujer disfrazada de gorila), aunque los ojos seguidores confirman que miró directamente a ella, en promedio, por un segundo. Ellos estaban "tan concentrados" en su tarea de conteo que la interrupción no pudo ser conscientemente registrada visualmente. Chabris y Simons creen que esta "ceguera por inatención" puede ser lo que experimentó el policía de Boston. Cuando pasaba por la escena de los golpes, se concentró intensamente en aprehender al sospechoso que perseguía, que estaba empezando a escalar un muro y potencialmente escaparía. "Pudo haber estado justo al lado de la paliza, e incluso centrado sus ojos en ella, sin verla en realidad", afirman los autores. "Cuando la gente dedica su atención a un área o aspecto particular de su mundo visual, tienden a no darse cuenta de objetos inesperados, incluso cuando esos objetos inesperados son relevantes, potencialmente importantes, y aparecen justo donde están mirando. "Mirar a algo no garantiza que usted se dé cuenta. De hecho, somos conscientes de sólo una pequeña porción de nuestro mundo visual en cualquier momento". Y este "cableado" de nuestra recepción visual "es casi totalmente aislado de nuestro control consciente", con independencia de la inteligencia personal, habilidades, o "capacidad de atención". Para eliminar la ceguera por inatención "nosotros efectivamente tendríamos que eliminar la atención focalizada". CEGUERA POR FALTA DE ATENCIÓN. Leer el fragmento extraído de una nota de Ben Sherwood titulada “¿Por qué algunos sobreviven a las tragedias? Ciencia más allá de la suerte”. Esta nota está reproducida en el sitio web El Argentino bajo el título “Manual para sobrevivientes”:


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http://www.elargentino.com/nota27079Manualparasobrevivientes. Transformación de la memoria. La gente asume que los recuerdos permanecen “consistentes y estables en el tiempo”, escriben Chabris y Simons. Pero la verdad es que nuestras recolecciones pueden llegar a ser increíblemente distorsionadas. Esto es tan cierto para los "recuerdos tipo flash" -aquellos asociados con "eventos sorprendentes y emocionalmente significativos" (Policía Implicado en un Tiroteo, por ejemplo)- como para las ocurrencias comunes y corrientes. Irónicamente, estamos convencidos que son más exactos esos recuerdos más vívidos. Considere estas formas de memoria (entre otras) que Chabris y Simons documentan: • Tratando de interpretar o "tener sentido" de una escena o evento, su mente puede colorear e incluso dictar lo que recuerde acerca de él. "Cada vez que hacemos volver un recuerdo, integramos cualquier detalle que recordemos con nuestras expectativas sobre lo que debemos recordar". • Detalles en nuestras memorias "a veces cambian de un tiempo a otro o de un evento a otro". • "Los detalles ricos que usted recuerda a menudo están mal", pero usted vívidamente los "recupera" y cree en ellos porque "ellos sienten bien". Confiamos en detalles que parecen "encajar en", que "plausiblemente podrían haber ocurrido en lugar de haber sucedido". • Sin saberlo nosotros, "nuestros sistemas de memoria están realizando un esfuerzo constante" para hacer "una historia más convincente", y nosotros sin saberlo podemos añadir detalles que "mejoran" la narración. • Si cambiamos nuestras creencias acerca de algo, también podemos cambiar los recuerdos asociados a ella. Sin embargo, las probabilidades son de 3 a 1 que no nos daremos cuenta de que hemos hecho las alteraciones. • Los investigadores incluso han documentado lo que se llama una "falla de origen" de la memoria; es decir, usted internaliza la memoria de alguien más, pierde la pista de la verdadera fuente, y falsamente pero sinceramente cree que está recuperando "un registro de algo que le pasó a usted en lugar de alguien más". • Cuando los recuerdos son fáciles de recordar ("fluido" es el término de investigación), pensamos erróneamente que significa que son seguros, completos y permanentes. "No experimentamos todas las distorsiones que les pasaron después de haber sido almacenados en primer lugar". • Una memoria puede ser tan fuerte que incluso pruebas documentales de que nunca hubieran sucedido no cambian lo que recordamos". Debido a que esas desconexiones están fuera de nuestro conocimiento consciente, "creemos erróneamente que nuestros recuerdos son exactos y precisos", pero en realidad "lo que recuperamos a menudo está basado en lo esencial, la inferencia, y otras influencias", dicen los autores. Por desgracia, la falibilidad de la memoria es tan pobremente comprendida entre la población en general que la gente a menudo "impugna las intenciones y motivaciones de quienes inocentemente recuerdan mal", concluyen Chabris y Simons. Lewinski dice que esa percepción errónea puede tener graves consecuencias en las investigaciones de Policías Implicados en Tiroteos, cuando los agentes pueden parecer deliberadamente engañosos debido a que sus recuerdos son inconsistentes con los de otros testigos o con la evidencia física. Confidencia o confianza versus competencia. De especial interés para los instructores será la discusión de Chabris y Simmons sobre la confianza versus la competencia. Tendemos a confundir el primero con el último, en nosotros mismos y en otros, cuando en realidad es comúnmente un peligroso vínculo entre la confianza y la incompetencia, afirman los autores.


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Colectivamente, nos consideramos superiores cuando no lo somos. Más del 60% de los estadounidenses y el 70% de los canadienses, por ejemplo, creen que están "por encima del promedio" en inteligencia - una imposibilidad estadística. Los hombres, sobre todo, se dan a esta exageración narcisista. También creemos -falsamente- que tenemos grandes recursos cerebrales no utilizados que están a la espera de ser aprovechados para mejorar nuestra inteligencia aún más. "Tendemos a pensar que nuestros buenos desempeños reflejan nuestras capacidades superiores, mientras que nuestros errores son ‘accidentales’, ‘inadvertidos’, o resultado de circunstancias más allá de nuestro control, y hacemos todo lo posible para ignorar las pruebas que contradicen estas conclusiones", escriben los autores. Así, "sobrestimamos nuestras propias cualidades, especialmente nuestras habilidades con relación a otras personas", e "interpretamos la confianza -o falta de ella- que otra gente expresa como una señal válida de sus propias capacidades, de la amplitud de sus conocimientos, y de la exactitud de sus recuerdos". Sin embargo "la confianza y la capacidad pueden divergir tanto que confiar en la primera se convierte en una gigantesca trampa mental, con consecuencias potencialmente desastrosas". Las personas que son menos calificadas -como aquellos que son nuevos en una determinada tarea- "son los más propensos a pensar mejor de sí mismos de lo que deberían". Los investigadores llaman a esto el "efecto no capacitado y desprevenido". Debido a que esos sujetos no se dan cuenta o reconocen su deficiencia, "es poco probable que tomen medidas para mejorar su capacidad". Además, porque tendemos a creer y confiar en la gente confidente, su injustificada autoconfianza puede engañar a los demás a sobreestimar su capacidad. El entrenamiento sostenido puede ser un remedio en caso de desequilibrio confianza/competencia. Los investigadores han encontrado que enseñar a la gente a realizar una tarea mejor reduce significativamente su exceso de confianza y los hace "mejores jueces de su competencia", reportan Chabris y Simons. "A medida que estudiamos y practicamos una tarea, vamos mejorando tanto en la desempeño de la tarea y sabiendo lo bien que la desempeñamos". La verdadera competencia "ayuda a disipar la ilusión de la confianza La clave, sin embargo, es tener pruebas definitivas de sus propias habilidades -tiene que ser lo suficientemente bueno en lo que hace para reconocer sus propias limitaciones". Y siempre deberá albergar un componente "no estoy seguro" que le motivará a seguir aprendiendo. Para los investigadores y fiscales, Chabris y Simons ofrecen algunos datos aleccionadores sobre el exceso de confianza entre los testigos presenciales. Ejemplo: "erróneas identificaciones de testigos oculares, y su presentación confiada en el jurado, son la principal causa de más del 75% de las condenas erróneas que luego son anuladas por pruebas de ADN". Causalidad. Los críticos de la Policía que hacen o aceptan afirmaciones tales como “la TASER mata” deben ser alimentados a la fuerza con el capítulo de Chabris y Simmons titulado “Saltando a las Conclusiones”. En términos convincentes, aborda "la ilusión de causa" - cómo los no expertos confunden coincidencias, correlaciones y mera cronología con relaciones de causalidad. La mente humana, prefiriendo "percibir significado en lugar de aleatoriedad" en lo que encuentra, tiene una "tendencia hiperactiva a detectar patrones", explican los autores. "Esos extraordinarios patrones de detección a menudo nos sirven bien, permitiéndonos sacar conclusiones en cuestión de segundos (o milisegundos) que tomaría minutos u horas, si tuviéramos que depender de laboriosos cálculos lógicos. "Desafortunadamente, también puede llevarnos por mal camino", permitiéndonos "percibir patrones donde no los hay" e "inferir causa más que coincidencia". Dos inferencias engañosas comunes en la percepción de patrones son que "los eventos anteriores causan más tarde uno" y que cuando dos eventos ocurren juntos, "uno debe haber causado al otro".


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Inconscientemente, estamos cebados para ver patrones que se ajustan a nuestras creencias y "expectativas bien establecidas". Cuando eso sucede, podemos estar tan seguros de que hemos encontrado una relación de causalidad que fallamos en "anoticiarnos de las explicaciones alternativas más plausibles", dicen los autores. Es más, señalan, las anécdotas –historias que la gente escucha- tienden a ser inherentemente más memorables y persuasivos que los datos estadísticos secos. "Nuestros cerebros evolucionaron bajo condiciones en las cuales la única prueba disponible para nosotros era lo que experimentábamos nosotros mismos y lo que escuchamos de otras personas de confianza. Nuestros ancestros no tenían acceso a enormes conjuntos de datos, estadísticas y métodos experimentales. Por necesidad, hemos aprendido a partir de ejemplos concretos", así los ejemplos "se alojan en nuestras mentes, pero las estadísticas y los promedios no lo hacen". Puede ser "difícil de superar una creencia formada de anécdotas convincentes", conceden los autores, así como es difícil convencer a la gente que una correlación (una asociación) no es necesariamente una causa. Y es difícil contrarrestar la influencia de la transmisión de noticias, que "a menudo obtienen la relación de causalidad mal en un intento de hacer la afirmación más interesante o el relato más convincente". Pero desafiante como puede ser la tarea, Chabris y Simons enfatizan que "la única manera -repitámoslo, la única manera- para probar definitivamente" las relaciones de causalidad es conducir experimentos científicos. "La gente no necesariamente acepta los resultados de los estudios científicos, incluso cuando los datos son abrumadores", señalan los autores con tristeza. Pero, en palabras de Lewinski, "eso nunca debe disuadir a la búsqueda incesante de la verdad". Aunque de ninguna manera El Gorila Invisible ha sido hecha a medida exclusivamente de la aplicación de la ley, Chabris y Simons toman nota de la urgente "necesidad de una reforma" en la comprensión del sistema legal de cómo trabaja la mente humana. "La policía, los testigos, los abogados, los jueces y los jurados son muy susceptibles a las ilusiones", explora el libro, escriben los autores. "Porque son humanos, creen que prestamos mucha más atención que la que presentamos, que nuestros recuerdos son más completos y fieles de lo que son, y que la confianza es un indicador fiable de la precisión. "El common law del procedimiento penal fue establecido durante siglos en Inglaterra y los Estados Unidos, y sus supuestos se basan precisamente en intuiciones equivocadas como estas".

¿Están su "control de la mirada y patrón de lectura" vinculado con su desempeño?

Los policías que son muy expertos en tratar con situaciones violentas, ¿evalúan visualmente escenas potencialmente amenazantes de una manera diferente que los oficiales menos hábiles? Los estudios sobre "el movimiento de ojos y los patrones de control de la mirada" de los profesionales versus los aficionados sugieren que puede ser el caso; un proyecto de investigación único lanzado en mayo por el Centro de Investigación de la Ciencia de la Fuerza confirmará si es así realmente. Si es así, FSRC espera determinar cómo pueden ser entrenados mejor los agentes menos competentes para emular a sus compañeros de elite y, por lo tanto, mejorar su nivel de desempeño. Trabajando en Irlanda del Norte bajo los auspicios de FSRC, la Dra. Joan Vickers, reconocida investigadora del patrón de escaneo y comportamiento de la mirada, completó recientemente un estudio de investigación de 2 semanas de pruebas de campo, involucrando a cerca de 2 docenas de oficiales voluntarios. La mitad de los sujetos eran miembros de la Unidad de Apoyo Móvil del Cuartel General (Headquarters Mobile Support Unit), un equipo experto ERU de lucha contra el terrorismo de los Servicios de Policía de ese país, basada en Belfast. "Esos oficiales son consistentes ganadores de las competiciones internacionales de SWAT, y trabajan en un ambiente muy activo contra los grupos criminales organizados que están importando drogas y armas y cometen actos extremadamente violentos de terrorismo", le dijo a Force Science News el


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Dr. Bill Lewinski, director ejecutivo de FSRC. “En la jurisdicción del equipo y sólo en los últimos pocos meses, los patrulleros con policías dentro han sido explosionados, estuvieron bajo fuego de francotiradores y fueron atacados con lanzagranadas". Los otros sujetos testeados eran oficiales "regulares" que recientemente completaron su entrenamiento en armas de fuego y toma de decisiones, pero no tienen una amplia experiencia tratando con las confrontaciones violentas de la vida real. Uno a la vez, todos los oficiales fueron expuestos a una serie dinámica y realista de acción en vivo, escenarios de conflicto que les requería estar atentos a las posibles amenazas, evaluar si el comportamiento de alguno de los participantes requería una respuesta de fuerza letal, y luego reaccionar (disparando simuladamente) o no reaccionar apropiadamente. Los jugadores de rol en las situaciones "trabajaron durante semanas con un profesor de actuación para asegurar que cada escena fuera repetida constantemente para cada oficial", dice Lewinski. "Para que cada encuentro fuera lo más realista posible, no quisimos utilizar simulaciones computarizadas". Antes de entrar en los escenarios, cada uno de los oficiales fue equipado con un rastreador móvil liviano de ojos diseñado para seguir sus movimientos oculares. Cámaras adicionales fueron colocadas para captar la escena en su conjunto y sus movimientos de tiro durante el despliegue de la acción. El rastreador de ojos de peso ligero identifica a dónde está mirando el usuario mediante el monitoreo del movimiento de la mira de la pupila del ojo, capturando la mirada cada 33,33 milisegundos y transmitiendo la información a una computadora que utiliza un software diseñado específicamente para los estudios de Vickers. "En cualquier escenario complejo y en evolución, es imposible mirar a todos los elementos simultáneamente", explica Lewinski. "Hay que fijarse en las señales más críticas en el limitado tiempo disponible, explorando de lado a lado, arriba y abajo, y desde cerca hasta lejos para obtener todo, y el cerebro trabaja con el ojo para procesar la información a fin de determinar qué parece ser lo más importante en lo cual centrarse. "Mediante la coordinación de las imágenes con código de tiempo de varias cámaras diferentes, los investigadores pueden rastrear el movimiento de los ojos de cada oficial – qué miró él o ella, en qué orden y por cuánto tiempo leyeron las situaciones, tomaron decisiones con respecto a las respuestas de fuerza apropiada, y luego desplegaron o no la fuerza letal. Su centro de atención, posicionamiento del cuerpo, juicio, velocidad y precisión de disparo todos pueden ser evaluados". Al analizar la enorme cantidad de datos recogidos, Vickers y su equipo de investigación tratará de identificar las diferencias en los patrones de exploración entre la "elite" y los oficiales "normales" y ver qué patrones parecen correlacionarse más estrechamente con el buen juicio, la velocidad, y la precisión - en síntesis, con desempeño exitoso. El estudio, financiado por el Instituto de Ciencias de la Fuerza, y también con parte de una beca de investigación de la Federación de Policía de Inglaterra y Gales, "es la primera investigación amplia de los patrones de exploración de los policías", dice Lewinski. "Esto es abriendo nuevas e importantes bases que se espera tengan un impacto significativo en el entrenamiento y en la supervivencia del oficial". Vickers fue elegida para dirigir el proyecto debido a su trabajo aclamado con atletas olímpicos y profesionales. Ella es directora del Laboratorio de Psicología Neuromotora en el Centro de Investigación en Kinesiología en la Universidad de Calgary en Alberta, Canadá. Fue jugadora de voleibol de alto nivel y entrenadora. Y se sintió intrigada durante más de 20 años con la forma en que la selección visual se relaciona con el desempeño de las habilidades motrices. Trabajando con atletas en una amplia gama de deportes, como golf, baloncesto y hockey sobre hielo, ha documentado una relación entre ciertos patrones visuales -qué ven los atletas, cuándo lo ven y por cuánto tiempo- y el desempeño de primera categoría. Una mirada ganadora o patrón de lectura en un entorno de alto estrés, competitivo, depende de tres elementos clave, dice ella:


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1. La localización óptima para que los ojos se centren dentro del espacio de actuación. Esto varía, dependiendo de la actividad. El mejor lugar para centrarse, por ejemplo, para un golfista es la parte de atrás de la pelota, mientras que en el baloncesto es la parte frontal del aro. 2. El inicio óptimo o cuándo empiezan a concentrarse los ojos o fijarse en la ubicación óptima. "El tiempo es crucial", dice Vickers. 3. ¿Cuánto tiempo es mantenido el foco antes que ocurra una acción crítica o deje la localización óptima? En el golf, poniendo, por ejemplo, la mirada tiene que permanecer en la parte de atrás de la pelota durante el golpe y luego detenerse brevemente en el green. "La mayoría de los golfistas", dice ella, "no hacen esto consistentemente". Uno de los resultados de los estudios anteriores de Vickers ha sido la identificación de lo que ella llama "el ojo tranquilo". Este es un período de concentración poco antes de la realización de un acto deportivo (un tiro de baloncesto o el swing del bateador) cuando el jugador es capaz de eliminar toda distracción y concentrarse plenamente en el objetivo que él o ella están a punto de pasar. "La duración tiende a ser más larga para los jugadores de elite", dice ella. La idea básica detrás del ojo tranquilo es que su cerebro necesita una ventana de tiempo para recibir la información correcta a fin de organizar el movimiento y entonces controlarlo mientras está ocurriendo". Una vez que el patrón individual de los movimientos oculares es identificado y el patrón de control óptimo de la mirada para la actividad elegida, puede comenzar el entrenamiento para subsanar las deficiencias. Cuando un equipo de baloncesto de la universidad comenzó a entrenar de acuerdo a las recomendaciones de Vickers, el equipo de tiro libre mejoró la estadística de puntuación en la competencia en un 22%. "Normalmente, cuando entrena a atletas usando solamente técnicas fisiológicas o biomecánicas en el nivel más alto obtendrá una mejora sólo del 1% o 2%", dice ella. "La mayoría de los atletas no tienen un problema motriz. Tienen un problema de concentración y la combinación del entrenamiento del ojo tranquilo durante las prácticas activas lleva a mejoras mucho mayores en el desempeño de lo que se encuentra tradicionalmente". Lo que está en juego en la investigación de FSRC de Vickers, por supuesto, son vidas, no sólo puntos en un juego. La esperanza es que ella será capaz de encontrar una similitud susceptible de recibir capacitación en la forma cambiante más rápida, las escenas volátiles son visualmente analizadas por los oficiales que muestran el mejor criterio y la mejor capacidad de disparo. "No podemos saber qué enseñar", dice Lewinski, "hasta que no sepamos qué está ocurriendo con los oficiales de élite altamente capacitados". Él espera que el análisis inicial de los datos de Vickers tome por lo menos 9 meses. Después de eso, una segunda fase de la investigación se pondrá en marcha, para determinar cómo la información revelada podría ser mejor utilizada en el entrenamiento. El Centro de Investigación de la Ciencia de la Fuerza está muy agradecido por la excelente cooperación del Jefe del Servicio de Policía de Irlanda del Norte (PSNI), Hugh Orde, la Federación de Policía de Irlanda del Norte, los miembros de la Unidad de Apoyo Móvil del Cuartel General y los oficiales alumnos del PSNI. Resultados del nuevo estudio de Ciencias de la Fuerza: Los sospechosos boca abajo con manos ocultas son más

peligrosos de lo imaginado.


El último estudio realizado por el Instituto de Ciencias de la Fuerza ha producido dos resultados sorprendentes de importancia para los instructores, oficiales de la calle, y abogados de la policía:


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1. Algunos sospechosos acostados con las manos ocultas bajo el pecho o la cintura pueden apuntar y disparar un arma a un oficial que se acerca más rápido que la reacción con la que cualquier ser humano en la tierra pueda defenderse;

2. El ángulo recomendado a veces como el más seguro para acercarse a un sujeto boca abajo parece que

potencialmente, de hecho, es el más peligroso. Probando 5 ángulos diferentes de exposición de armas y ataque, los Investigadores de Ciencias de la Fuerza descubrieron que el tiempo total promedio que transcurre entre el instante en que un sospechoso boca abajo realiza los primeros movimientos y descarga su arma apuntada y puede ser visto, es de menos de 2/3 de segundo. Un sujeto, en una de las posturas monitoreadas de fuego, se movió tan rápido que la pistola en la mano no pudo ser detectada hasta el momento en que fue descargada. Los sujetos más rápidos sacaron el arma de debajo de su pecho y dispararon hacia arriba y por delante - la línea de aproximación enseñada por algunos instructores como la más protectora para los funcionarios. Un instructor que fue testigo de las pruebas exclamó: "¡Vaya! ¡Sabía que los sospechosos podían ser rápidos, pero no sabía que podían ser tan rápidos!" "Este estudio es el primero de su tipo", le dijo el investigador principal Dr. Bill Lewinski a Noticias de Ciencias de la Fuerza, "y científicamente establece que la desesperada urgencia de los funcionarios que sienten a menudo para controlar las manos de un sujeto en decúbito prono está plenamente justificada. "Si las manos ocultas no son controladas de inmediato y el sospechoso está armado y decide disparar, es probable que el oficial enfrente un desafío insuperable para reaccionar lo suficientemente rápido como para evitar lo que podría ser un ataque fatal". MOTIVACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN. El sentido común en la calle dice que un sospechoso vivo acostado boca abajo con una o ambas manos ocultas bajo su cuerpo representa una amenaza potencial debido a su posible acceso a un arma oculta. Sin embargo, Lewinski señala, "todo el entrenamiento y las tácticas para hacer frente a este problema de campo de la vida real se han basado en la experiencia anecdótica, el impulso, y la suposición, no en algún fundamento científico". Es más, en los últimos años una serie de encuentros polémicos, de alto perfil, han sido capturados en videos de noticias, que muestran a funcionarios usando lo que parecería ser una fuerza extraordinaria expuesta a sospechosos caídos con manos ocultas durante la captura y el arresto. "Los críticos de los medios de comunicación y otros civiles, incluyendo los miembros del jurado y miembros de la Junta de Revisión del uso de la fuerza, parecían incapaces de comprender el sentido de urgencia de los oficiales en algunos de esos casos", dice Lewinski, director ejecutivo de FSI. "Los golpes con porras o linternas propinados por oficiales que tratan de controlar las manos de los sospechosos resistentes" fueron interpretados a veces como brotes maliciosos de rabia y venganza. "Se hizo evidente que teníamos que explorar científicamente el nivel de amenaza presentada por los sospechosos boca abajo con las manos ocultas por las importantes consecuencias legales, de entrenamiento, y de supervivencia de este tema". El Sargento Craig Allen, del Departamento de Policía de Hillsboro (OR), el coordinador en el lugar para el estudio resultante del FSI, lo expresó así: "Vamos a los hechos. Una vez que sabemos con certeza con qué estamos tratando, podemos comprender, explicar y entrenar". PRUEBAS ESTABLECIDAS. Después de algunas pruebas preliminares en la sede del FSI en Minnesota y en el Colegio Técnico del Noreste de Wisconsin para refinar métodos, Lewinski y su equipo de investigación realizaron en febrero pasado una serie de experimentos rigurosos durante 4 días en Oregón, con la ayuda de la unidad de entrenamiento del Departamento de Policía de Hillsboro. Uno a la vez, 39 voluntarios - una mezcla de agentes masculinos y femeninos y estudiantes universitarios, con edades de 19 a 32 años y con aptitudes y niveles de agilidad variados – se echaron de cubito prono sobre esteras en el piso en un edificio comercial vacante. Cada uno portaba un revólver calibre .22 S&W cargado con cartuchos de fogueo de polvo negro bajo su pecho o cintura.


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Cada voluntario realizó 25 disparos, sacando el arma y disparando un tiro tan rápido como era posible 5 veces diferentes cada uno en cinco diferentes direcciones: desde el pecho hacia arriba y adelante, hacia la parte trasera izquierda, hacia la parte trasera derecha, y desde el nivel de la cintura hacia la parte trasera izquierda y hacia la parte trasera derecha. A cada uno se le dijo que dispare como si tratara de darle al centro de la masa del oficial que se acercaba desde las diversas direcciones a una distancia de unos 10 pies (3,048 metros). Tres cámaras de vídeo de alta definición colocadas en tres ángulos diferentes filmaron la acción. Estas cintas codificadas fueron sincronizadas y meticulosamente analizadas bajo la dirección de la investigadora de gestión de la seguridad y candidata al doctorado Madeleine Gonin del Laboratorio de Ergonomía de la Universidad de Indiana. Algunos participantes fueron filmados también por Discovery Channel de Canadá. "Cada uno de los sujetos se movió de una manera un poco diferente, dependiendo de lo que parecía más natural y más rápido para ellos", dice Lewinski. RESULTADOS SORPRENDENTES. A partir del análisis de Gonin de diversos elementos en casi un gigabyte de imágenes de vídeo, dos mediciones son las más importantes, explica Lewinski. Una es la cantidad de tiempo que transcurre desde el momento en que un sujeto comienza su primer movimiento detectable previo al ataque (por lo general un desplazamiento de pies o caderas) hasta que la pistola se descarga. Otra es el tiempo desde el momento en que cualquier parte de la pistola es visible por primera vez hasta que dispara; esto es, desde el momento en que "algo" debajo del cuerpo del sospechoso -ni siquiera identificable aun como un arma- es detectado por primera vez en el marco de una cámara. "Todos los lapsos registrados son sorprendentemente rápidos - mucho más rápidos de lo que imaginábamos antes de los experimentos", dice Lewinski. Específicamente:

ESTUDIO DE HILLSBORO SOBRE SUJETOS EN DECUBITO PRONO (Hillsboro Prone Study, http://forcescience.org/hillsborostudy.html, accedido el 7 de enero de 2011)

Duración del movimiento por posición

Force Science Institute, Ltd. © 2009


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Objeto informado para el tiempo de descarga

Force Science Institute, Ltd. © 2009

DESDE LA INICIACIÓN DEL MOVIMIENTO HASTA LA DESCARGA

Acción Tiempo promedio Tiempo más rápido

Todas las posiciones 0,61 Segundos 0,27 Segundos Desde el pecho hacia arriba y por delante 0,51 Segundos 0,27 Segundos Desde el pecho hacia la parte posterior izquierda 0,61 Segundos 0,33 Segundos Desde el pecho hacia la parte posterior derecha 0,59 Segundos 0,27 Segundos Desde la cintura a la parte posterior izquierda 0,71 Segundos 0,27 Segundos Desde la cintura a la parte posterior derecha 0,63 Segundos 0,27 Segundos

DESDE LA APARICIÓN DEL OBJETO HASTA LA DESCARGA

Acción Tiempo promedio Tiempo más rápido

Todas las posiciones 0,36 Segundos 0,00 Segundos Desde el pecho hacia arriba y por delante 0,25 Segundos 0,00 Segundos Desde el pecho hacia la parte posterior izquierda 0,37 Segundos 0,10 Segundos Desde el pecho hacia la parte posterior derecha 0,30 Segundos 0,07 Segundos Desde la cintura a la parte posterior izquierda 0,47 Segundos 0,10 Segundos Desde la cintura a la parte posterior derecha 0,41 Segundos 0,10 Segundos

A continuación, la misma información presentada con formato de gráficos de barras. INQUIETANTE INTERPRETACIÓN. "Es importante para los agentes saber lo rápido que puede desarrollarse un ataque, porque en términos de tiempo de reacción a amenazas repentinas, un oficial apuntado como blanco es muy probable que esté muy por detrás de la curva", dice Lewinski. "Es consistente con los resultados de otros estudios de tiempo y movimiento de Ciencias de la Fuerza". Señala los tiempos más veloces en los cuales los sujetos de investigación fueron capaces de disparar después que se hizo visible alguna parte de su arma. Para algunos, no hubo diferencia de tiempo; el arma pudo ser vista solo cuando fue descargada. A lo sumo, sólo transcurrió 1/10 de segundo. Incluso los promedios, alargados por la inclusión de los tiradores más lentos, oscilaron entre el ¼ de segundo y menos de la mitad de un segundo. "No hay ser humano en el mundo que pueda reaccionar antes de la descarga en esos lapsos, ¡incluso si esperan una amenaza y tienen sus armas listas!", declara Lewinski. "Incluso antes que el objeto esté a la vista y pueda ser reconocido como un arma, ya salió un tiro".


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Tampoco puede, un oficial que se acerca, esperar ser alertado a tiempo por el movimiento pre-ataque de un sospechoso para anticiparse a la amenaza. Incluso si el tiempo promedio más lento de movimiento inicial de descarga es inferior a ¾ de segundo. "Ver que los pies o las caderas de un sospechoso comienzan a moverse para proporcionar una base física para extraer la pistola casi no tiene ningún valor en un ataque rápido", dice Lewinski. "No hay tiempo suficiente para comprender lo que está pasando y reaccionar". Lo más sorprendente, dice Lewinski, fueron los resultados cuando los sujetos de la prueba sacaron un arma de debajo de su pecho y dispararon al frente y arriba en un ángulo de unos 45 grados. "Algunos instructores y oficiales creen que la aproximación a un sospechoso boca abajo hacia la cabeza proporciona la menor vulnerabilidad, ya que levantar el torso hacia arriba para disparar requiere más esfuerzo", dice Lewinski. "Pero, irónicamente, los tiempos más rápidos de disparo fueron logrados por los sujetos atacando en esa dirección. En realidad, el pecho puede ser levantado y una pistola empujada con muy poco movimiento dinámico. "El tiempo promedio desde el movimiento a la descarga (0,52 segundos) y desde la aparición hasta la descarga (0,25 segundos) son los más bajos en esa posición. Y en el peor de los casos desde la perspectiva de un oficial, el arma no es del todo visible hasta el instante en que se dispara (0,00 segundo)". CONSECUENCIAS LEGALES Y DE ENTRENAMIENTO. La documentación científica de cuán rápido pueden materializarse las amenazas mortales de los sospechosos pronos podría ser útil para explicar a los revisores de la fuerza porqué los oficiales a veces se sienten obligados a recurrir a tácticas físicas vigorosas para ganar el control de las manos ocultas, cree Lewinski. El impacto legal será discutido en mayor detalle por el Capitán Scott Sargent del Departamento de Policía de Los Ángeles, un abogado y Analista de Ciencia de la Fuerza certificado, como parte de un documento oficial sobre el estudio que será publicado por los investigadores en una revista chequeada por pares profesionales. Le avisaremos cuando esté disponible, tal vez en la primavera de 2011. En cuanto a las consecuencias en el entrenamiento táctico, Lewinski comparte un par de observaciones preliminares: 1. Analizando los datos del estudio, parece que los sospechosos pronos tienden a ser más lentos para

desplegar su arma cuando disparan hacia la parte posterior del lado opuesto al de la mano con el arma. Así en este estudio, en los que la mayoría de los participantes eran diestros, los promedios de tiempo más lentos para el movimiento o la aparición del arma para descargarla ocurrió cuando los sujetos estaban disparando a la parte trasera izquierda con un arma oculta en la cintura. "Esto se debe a que tuvo que dar más vueltas para liberar el brazo de la pistola de debajo de su cuerpo", explica Lewinski. "Algunos sujetos, de hecho, tuvieron que rodar casi completamente hasta su espalda antes de ser capaces de disparar. Consecuentemente, acercarse hacia los pies de un sospechoso prono puede ser marginalmente más seguro – si es que algo puede ser considerado seguro al ir hacia un sospechoso boca abajo cuyas manos están ocultas".

2. Mantener el sospechoso incierto en cuanto a la localización de la aproximación del agente puede ser la

mejor táctica para ganar tiempo de reacción o impedir un intento de ataque. "Esto puede requerir la desviación del contacto normal/abordaje cubierto", explica Lewinski. "El funcionario de contacto, que normalmente estaría dando órdenes, puede permanecer en silencio mientras el oficial que cubre, de ser posible detrás de una barrera de protección, imparte órdenes verbales. Esto puede permitir una aproximación más sigilosa por el funcionario de contacto y poner el elemento sorpresa más a favor del oficial. "Cuanta menos información pueda reunir el sospechoso sobre la ubicación y el ángulo del oficial, es probable que sea más lento para conseguir su objetivo".

Lewinski subraya que "estos son sólo sugerencias provisionales en este momento. Estamos mirando ahora a la comunidad educativa por estrategias tácticas que pueden ser probadas con investigación adicional".


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Seis maneras en que los policías pueden ayudar a sus abogados a ganar un litigio sobre uso de la fuerza ¿Cómo puede un oficial ayudar mejor a un abogado en la preparación de la defensa más fuerte posible después de un incidente con disparos u otra importante confrontación de fuerza? Aquí hay seis ideas para poner la discusión en marcha.

Destroying Myths & Discovering Cold Facts Destruyendo Mitos y Descubriendo Hechos Fríos Force Science Institute Instituto de Ciencias de la Fuerza 7 de abril de 2014

El Instituto de Ciencias de la Fuerza (The Force Science Institute) fue puesto en marcha en 2004 por el Director Ejecutivo Bill Lewinski, PhD -un especialista en psicología policial- para conducir experimentos únicos de fuerza letal. El Instituto sin fines de lucro, con sede en Minnesota State University-Mankato, utiliza mediciones de tiempo y movimiento sofisticadas para documentar –por primera vez- las primeras verdades críticas ocultas sobre las dinámicas físicas y mentales de los eventos que amenazan la vida, particularmente de oficiales involucrados en tiroteos (OIS, Officer-Involved Shootings). Sus hallazgos sorprendentes impactan profundamente en el entrenamiento y la seguridad de los oficiales y en la percepción ingenua del público. Para obtener más información, visite www.forcescience.org o e-mail [email protected]. Si usted se beneficiaría de recibir información actualizada sobre las conclusiones de la FSRC, así como una variedad de otros artículos relacionados con el uso de la fuerza, por favor visite www.forcesciencenews.com y haga clic en el botón "Please sign up for our newsletter" ("Por favor, suscribirse a nuestro boletín de noticias") en la parte frontal del sitio. Las suscripciones son gratis.

¿Es un oficial que ha participado en las audiencias o litigios de uso de la fuerza, o es usted un abogado que representa a un LEO (Law Enforcement Officer, funcionario encargado de aplicar la ley) cuando sus decisiones sobre el uso de la fuerza son revisadas o impugnadas? Si es así, nos gustaría escuchar sus puntos de vista sobre cómo un oficial puede ayudar mejor a un abogado para preparar la defensa más fuerte posible después de un OIS (oficial involucrado en un tiroteo) u otra importante confrontación de fuerza. En su experiencia, ¿cuáles son las claves sobre qué hacer y qué no hacer al trabajar con un abogado para obtener una resolución favorable y justificada? Para estimular las respuestas, "Force Science News" llevó esta cuestión recientemente a Heather S. White, una abogada de la responsabilidad policial de Salt Lake City. White es graduada del curso de certificación de la Ciencia de la Fuerza (the Force Science certification course), y ex presidente del Capítulo Utah de la Federal Bar Association.

Heather S. White, Presidente de la firma del Grupo de Práctica de la Entidad Gubernamental (Chair of the firm's Governmental Entity Practice Group). He aquí seis consejos que ofrece después de casi 20 años de defensa de oficiales en las demandas por fuerza excesiva/derechos civiles federales. Note que algunas sugerencias tienen que ver con sus acciones antes que un abogado esté involucrado. ¿De acuerdo? ¿En desacuerdo? ¿Ha aprendido otras lecciones por las malas? Envíe su comentario a: [email protected]. Vamos a publicar reacciones en una futura transmisión. Mientras tanto, recuerde: su perspectiva privilegiada compartida ahora puede ayudar a un hermano o hermana oficial que sobrevive a una amenaza en la calle - y luego es arrojado/a al desconocido tanque de tiburones del juicio legal. He aquí algunos consejos de la Procuradora White, con ejemplos relevantes de sus casos:


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1) Detalle de su entrenamiento. "Es importante educar a su abogado, en detalle, acerca de lo que le han enseñado a hacer, cómo fueron entrenados para hacerlo, y por qué lo hizo en las circunstancias que enfrentó", dice White. "Esto ayuda al abogado a hablar sobre el 'estándar objetivo' detrás de sus acciones de manera que los jueces y los miembros del jurado puedan entender". Ejemplo: Un oficial de pie con un sospechoso de manejar bajo la influencia de alguna sustancia fuera de una camioneta, de repente realiza un barrido del pie que hace caer al conductor al suelo. "En el video el tablero, parecía que el oficial sólo caminaba hacia el chico y lo arrojaba", dice White. Lo que la cámara no mostró fue el delincuente tenso cuando el oficial le tocó el hombro, y luego empezó a tambalearse de nuevo hacia la cabina. El oficial explicó, desde su entrenamiento y experiencia, sobre las señales de peligro de cierto lenguaje corporal y el riesgo potencial de que el sospechoso alcanzara un arma dentro de la camioneta - conceptos que al jurado ingenuo promedio no se le ocurrirían. "Ser capaz de demostrar que los oficiales están entrenados para ver y reaccionar a las cosas de manera diferente a los civiles ayuda a los miembros del jurado a aceptar que en esa situación, habrían hecho lo mismo", dice White. 2) Deje caer su fachada. "Es muy importante que los jueces y los jurados vean a un oficial que ha estado en un tiroteo como un ser humano y no sólo una fuerza robótica", dice White. Ella insta a los clientes a "quitarse la fachada profesional sin emociones" y a expresarle sus sentimientos honestamente. "Quiero saber cómo se sienten después del acto y qué emoción pasó por su mente justo antes de que le dispararon, cuando pensaban que estaban a punto de separarse de su familia para siempre o se dieron cuenta de que estaban a punto de tomar una vida humana". Algunos son "tristes, incluso llorones", otros están enojados por haber sido forzados a hacer una elección de él-o-yo. "Cualesquiera que sean sus verdaderas emociones, un buen abogado puede trabajar con ellas en el tribunal para humanizar al oficial y contrarrestar la imagen mediática de los policías como personas que les gustan las pistolas y como seres agresivos. Cavar a través de la dura armadura mental puede ayudar a construir la imagen de un oficial que no tomó una decisión necesaria para disparar a la ligera". 3) Deje margen de maniobra. "Al describir el tiroteo, en su declaración o en el testimonio, deje un poco de margen para el error. Esto es crítico", dice White. "En lugar de ser demasiado específico acerca de los tiempos, distancias y otros factores que se pueden medir de forma independiente y también comparados con el testimonio de otros testigos, usualmente es mejor evitar los absolutos. Los forenses pueden probar que usted y sus certezas están mal. "Cuando los eventos que amenazan la vida ocurren tan rápido y bajo estrés como en la mayoría de los tiroteos, generalmente es imposible registrar todos los detalles con precisión. Así que realmente es más exacto describir lo que cree que vio o experimentó - cómo parecía ser las cosas desde su única perspectiva. "Cuando no bloquea a su abogado con detalles rígidos, se hace más fácil introducir las limitaciones humanas de la percepción y la memoria y para tratar o evitar potenciales inconsistencias". 4) Piense hacia adelante. Evalúe lo que dice y hace en el escenario de un enfrentamiento en términos de "si desea verlo reproducido en una pantalla grande en una corte federal", aconseja White. Ejemplo: Una mujer que había tratado de ayudar a su esposo a escapar de la policía fue esposada en la parte trasera de un patrullero. Al conversar con un oficial, se puso muy agitada y agresiva, cebándolo en un punto al preguntar: "¿Qué va a hacer, pisarme fuerte?". "No", replicó el oficial: "¡Te voy a romper en la cara!". "Él estaba siendo sarcástico", explica White, "pero lo que dijo fue grabado en el audio de una cámara trasera". En el tribunal, "esto no jugó bien ante el jurado", y dio a White como abogada del oficial un problema de "conducta no profesional" para tratar y distraerse del centro del caso. "El oficial podría haber evitado eso simplemente ignorándola", dice White. 5) Haga comentarios en tiempo real. "Si usted no está registrando sus encuentros en esos días, es probable que alguien más lo haga", dice White. De este modo, su estilo de comunicación se vuelve imborrable y no es descartado fácilmente en el tribunal. Cuando las circunstancias lo permitan, White alienta fuertemente explicar a los sujetos por qué los está instruyendo o pidiéndoles que hagan cosas en lugar de limitarse a ordenarles que cumplan. "En el pleito, de haberse grabado, esto puede ser útil", dice ella. "Si usted es capaz de explicar a medida que avanza por qué está pidiendo o haciendo algo, ayuda al jurado a comprender su pensamiento y sus acciones.


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"Por supuesto, no comprometa su seguridad hablando cuando debe estar actuando inmediatamente. La seguridad del oficial es primordial. Pero cuando sea posible, explicar crea una mejor relación y tiende a darle más credibilidad ante un jurado". 6) Identificar los testigos lo antes posible. "Nunca subestime el valor de conseguir declaraciones de testigos de inmediato, antes de que tengan la oportunidad de fabricar cosas para satisfacer sus prejuicios", dice White. "Cuanto más pronto obtenga incluso una declaración preliminar informal, probablemente será menos contaminada". Ejemplo: cuando una larga persecución de un camión robado a través de múltiples jurisdicciones finalmente terminó en el corral de la propia residencia rural del sospechoso, el conductor saltó de la cabina y empezó a caminar hacia un campo abierto. "Como los oficiales vinieron tras él, de repente se dio la vuelta en una posición de tiro, con un objeto en la mano", recuerda White. Sin dudarlo, dos agentes dispararon hacia el sujeto y lo mataron. "Resultó que no tenía una pistola", dice White. "Él estaba presionando un cuchillo contra su muñeca". Cuando el humo se disipó, un oficial del condado inmediatamente se acercó a un hombre que había estado trabajando en un camión en el patio y le preguntó qué había visto. Él escribió las palabras exactas del hombre: "Llegué a pensar que tenía un arma". El testigo era cuñado del sospechoso. Más tarde, cuando la familia presentó una demanda alegando que los tiradores debían haber sabido que el sospechoso no estaba blandiendo un arma y no representaba una amenaza inmediata", la declaración fue crítica para la determinación del jurado de que los oficiales estaban justificados en el tiroteo", dice White. Si usted es un oficial en el lugar del tiroteo, su implicación con los testigos probablemente no será práctica o deseable. "Pero a menudo", dice ella, "hay otros oficiales presentes que pueden tomar fácilmente hasta esta importante tarea". Esos breves consejos son sólo algunos de los muchos que podrían ser ofrecidos. Háganos saber lo que le gustaría compartir acerca de cómo trabajar con éxito con los abogados en: [email protected]

¿Por qué el Modelo 1911 aún está en servicio? Cuando un colega ve a un oficial probado y competente empacando una 0.45 Modelo 1911 amartillada y bloqueada, sabe que está tratando con un guerrero que lucha por el mejor desempeño en todas las cosas

Richard Fairburn

7 de abril de 2014 Nadie puede cuestionar el dominio de las pistolas Glock en las pistoleras de servicio de los policías de Estados Unidos. En parte debido a su gran historial de rendimiento, la cuota de mercado de Glock es más grande que todas las demás marcas juntas. Pero entre los "tipos de armas", el patrón 1911 automático sigue siendo el rey indiscutible de las pistolas de combate. La única otra arma pequeña con un increíble registro de servicio militar es la ametralladora Browning calibre .50 (o M2 calibre .50). No debería sorprender a nadie que ambos fueron diseñados por el genio de armas John Moses Browning (1855–1926).

John Moses Browning (1855–1926)


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Mi arsenal favorito incluyó dos pistolas de marco de acero de cinco pulgadas, la versión de 4.25 pulgadas

Commander con un marco de aluminio ligero. (Imagen de PoliceOne) Una rica historia. El Cuerpo de Marines de los Estados Unidos alega que algunas de sus actuales pistolas 1911 están construidas sobre marcos de la Segunda Guerra Mundial que han anotado 500.000 disparos de servicio acumulativos. Aunque el sistema Beretta M9 comenzó a reemplazar al 1911 alrededor de 1990, los operadores militares especiales nunca abandonaron la pistola 1911. La Infantería de Marina firmó recientemente un contrato con Colt para una pistola llamada el M45A1, que es meramente el estándar de 1911 con un carril accesorio integral. Más de 100 años después de su aprobación inicial, una pistola 1911 actualizada aún permanece en el servicio militar en los EE.UU.

Pistola de Batalla en Cuarto Cerrado M45A1 (M1070CQBP – M45A1 Close Quarter Battle Pistol)

Algunos instructores afirman que ninguna 1911 puede coincidir con la confiabilidad de una pistola de polímero (a striker-fired polymer pistol). Un entrenador ofrece su clase gratis si usted usa una 1911 que no registre ningún mal funcionamiento, y afirma que nunca ha pagado la apuesta. En la Copa de Oro Colt (Colt Gold Cup) una vez registré más de 1.000 disparos en un solo día, en las manos de tres tiradores diferentes, sin limpiarla y sin un solo fallo de funcionamiento. El interior y la boca del arma estaban cubiertos de hollín negro y lubricante, a excepción de la línea brillante donde las balas se mantienen empujando su camino hasta la rampa de alimentación hacia la cámara. Por desgracia, la razón de tantos disparos con mi pistola ese día era porque la presté a los oficiales que habían experimentado fracasos en sus pistolas 1911 de baja calidad. [Polímero: (del griego, compuesto de varias partes). Compuesto químico, natural o sintético, formado por polimerización (reacción química en la que dos o más moléculas se combinan para formar otra en la que se repiten unidades estructurales de las primitivas y su misma composición porcentual cuando estas son iguales) y que consiste esencialmente en unidades estructurales repetidas.]


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Un raro guerrero. Una bien construida y sintonizada pistola 1911 puede acercarse a lo máximo en confiabilidad y precisión, pero pocas pistolas individuales alcanzarán o mantendrán el máximo rendimiento indefinidamente. La tecnología del diseño de la 1911 de principios de siglo XX requiere un grado de ajuste a mano que es eliminado en las pistolas más modernas, como la Glock. He tenido pistolas 1911 calibrada para el Long Rifle.22, la Luger 9mm, el calibre .38 Súper y la .45 ACP. Actualmente tengo un 10mm Colt Delta en las manos del hombre que considero el constructor estrella personalizado -Richard Heinie- y espero que ambos vivamos lo suficiente para ver a mi última pistola de caza 1911 terminada. Mi arsenal ha incluido dos pistolas de marco de acero de cinco pulgadas, así como mi favorita, la versión 4.25 pulgadas Commander-length con un marco de aluminio ligero. El Lightweight Commander coincide con el tamaño y el peso de cualquier marco de polímero de pistola 0.45 y los ocho cartuchos en su delgado cargador que se ajusta a mi mano. Puedo disparar con la Glock .45 y las pistolas 10mm lo suficientemente bien, pero mi mano debe cambiar al lado para alcanzar el gatillo. Si se le permite portar una 1911 -de uniforme o vestidos de civil- puede ser la última pistola de combate. Para utilizar la 1911 en su máxima eficacia, debe estar dispuesto a hacer una inversión considerable de dinero en efectivo y tiempo de entrenamiento. Necesitará el dinero para comprar una pistola de calidad o personalizar y ajustar un modelo escueto. Necesitará más dinero para comprar munición suficiente para dominar el modo de acción simple "amartillado y bloqueado". Idealmente, usted debe planificar al menos una semana completa de entrenamiento de transición y 1.000 cartuchos de munición para programar el nivel apropiado de memoria muscular. Pocas agencias le darán tanta munición o entrenamiento durante mucho tiempo -a menos que sea parte de un equipo SWAT- por lo que generalmente significa hacerlo por su tiempo y a su costa. Un factor al portar una pistola 1911 está más allá de la cuantificación, pero hay una razón mayor de porqué algunos todavía invertimos tiempo y dinero: el orgullo. Cuando un compañero ve un probado funcionario competente empacando una 0.45 Modelo 1911 amartillada y bloqueada, sabe que están tratando con un guerrero que lucha por el mejor desempeño en todas las cosas. No hay nada como la sensación de un sólido 1911 en la mano - un valor que no se puede definir en cuestión de dólares y centavos.

Tres formas de llevar el entrenamiento sobre uso de la fuerza a los departamentos de policía pequeños ¿Cómo siguen entrenando los departamentos pequeños y medianos -que ya no dan abasto- hasta un

concepto tan dinámico como el uso legal de la fuerza?

Campus Safety

9 de abril de 2014 Dr. Matt Stiehm

El departamento de policía promedio en los Estados Unidos tiene más o menos una docena de oficiales jurados. Típicamente hablando, esos departamentos tienen virtualmente todos sus oficiales asignados a las funciones de ejecución de la ley a tiempo completo - rara vez hay un entrenador de uso de la fuerza a tiempo completo en una agencia de tamaño medio, y tener uno en una pequeña agencia es casi imposible. Yuxtaponga esto con una sociedad estadounidense cada vez más litigiosa. El área que tiene la mayoría de los juicios -y confusión- en el ámbito de la labor policial es el uso de la fuerza (seguido por el uso de la fuerza letal y conducción/EVO). Algunos de los cambios más dramáticos que afectan a las fuerzas del orden se han dado por la vía del litigio civil - Scott v Harris, Tennessee v Garner, y Graham v Connor han establecido precedente para cuando los agentes encargados de hacer cumplir la ley pueden juiciosamente, legalmente, y objetivamente usar la fuerza (hasta e incluyendo la fuerza letal).


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Las agencias de todos los tamaños necesitan mantenerse al tanto de las decisiones judiciales (y ajustar en consecuencia sus políticas, procedimientos, entrenamiento y tácticas). Incluso en una gran agencia esto puede ser desafiante. ¿Cómo siguen entrenando los departamentos pequeños y medianos -que ya no dan abasto- un concepto tan dinámico? Aquí hay tres formas claves: 1) Manténgase actualizado con las últimas investigaciones y la información. Uno podría argumentar que el litigio civil es como los pesos y contrapesos en el gobierno de los EE.UU. Cuando se percibe que el gobierno (policía) ha incursionado en las libertades de los ciudadanos (en concreto, su derecho constitucional a no sufrir registros e incautaciones ilegales, su derecho al debido proceso y el derecho a la protección contra los castigos crueles e inusuales) se busca un chequeo y/o balance. Durante los el entrenamiento pre-servicio y en servicio, los LEO son inundados por la investigación y las "mejores prácticas" en el uso adecuado de la fuerza. Sin embargo, hay agencias y oficiales que aparentemente no se dan cuenta de decisiones básicas tales como Graham y Garner. Esta falta de conocimiento se extiende desde los temas básicos de la Cuarta Enmienda a los aspectos biomecánicos y psicológicos de la fuerza. a) Instituto de Ciencias de la Fuerza (Force Science Institute): Para asegurarse de que sus oficiales están al tanto de los factores humanos antes mencionados, puede ver a la investigación en curso realizada por el Instituto de Ciencias de la Fuerza (y otros). El Force Science News por email es una fuente excelente de la que todas las agencias policiales deben tomar ventaja, independientemente de su tamaño. b) FLETC (Federal Law Enforcement Training Centers) y AELE (Americans for Effective Law Enforcement): Aunque diferentes en estructura y misión primaria, ambos proporcionan una gran cantidad de información a ser utilizada por los funcionarios de los Estados Unidos. AELE (http://www.aele.org/) alberga una excelente biblioteca jurídica en línea, y FLETC (https://www.fletc.gov/) ha proporcionado a alrededor de un millón (casi literalmente) de policías con una excelente formación (a muy bajo o a ningún costo). c) El mejor partido para su inversión en conferencias de formación de formadores tiene que ser ILEETA (International Law Enforcement Educators & Trainers Association, http://ileeta.org/), que se celebra cada año en el área de Chicago (acabamos de terminar nuestra conferencia anual hace dos semanas). Este es un evento de una semana de duración para instructores que vienen de todo el mundo para entrenar los eventos y las prácticas actuales. Organizaciones como ILEETA (y similares) proporcionan una gran cantidad de información durante los seminarios en persona y en línea y mediante boletines por correo electrónico. d) Además aproveche organizaciones como la Academy of Criminal Justice Sciences (http://www.acjs.org/), la Asociación de Justicia Criminal Medio Oeste, u otras asociaciones regionales que proporcionan investigación académica con relación a diversos temas de ejecución de la ley. e) No necesito recordarle que el sitio web en cual está usted -PoliceOne- ofrece una gran cantidad de recursos de entrenamiento para compartir con sus oficiales. Hay una amplia biblioteca de consejos sobre entrenamiento y artículos sobre Uso de la Fuerza, y eso es sólo uno de la miríada de temas del sitio que se actualiza de forma continua y permanente. Y sería negligente si fallara en señalarle un excelente y asequible portal de recursos de capacitación en línea: PoliceOne Academy (http://www.policeone.com/academy/) 2) Reúna sus recursos y cree Cooperativas Regionales de Entrenamiento (Regional Training Cooperatives). Los Departamentos pequeños a veces se ven obligados a tomar decisiones presupuestarias relativas al entrenamiento que puede crear lagunas de conocimiento en sus funcionarios. Esto se puede evitar (y/o mejorar) mediante la búsqueda de alianzas de capacitación con agencias cercanas. Los Departamentos pequeños y medianos pueden utilizar otros departamentos para ayudar en la capacitación. Esto no significa que todas las agencias en la zona o comarca deben entrenar el mismo día, pero el entrenamiento se puede proporcionar con regularidad, con los oficiales de las agencias cercanas invitados a asistir. Este modelo de capacitación tiene muchas ventajas. En primer lugar, los oficiales de las diferentes agencias tienen la oportunidad de conocer y saludar a otras personas que podrían respaldarlos. Además, permite más tiempo en el polígono, en el uso de la fuerza, o cualquiera sea el tema que está siendo entrenado y/o discutido. Para lograr esto, los departamentos pueden llegar y empezar a compartir tanto a los entrenadores como a los


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conceptos de entrenamiento. En esencia, las agencias pueden unirse para crear y fomentar el desarrollo profesional. 3) Luche por los dólares para su entrenamiento (o aténgase a las consecuencias). Finalmente (y más importante), los administradores de departamento deben luchar por los dólares del presupuesto para el entrenamiento de sus oficiales en temas de uso de la fuerza. Cuando los administradores enfrentan una oposición que busca reducir los presupuestos de entrenamiento, simplemente deberían citar el fallo 1989 SCOTUS (Supreme Court of the United States) en City of Canton, Ohio v Geraldine Harris 489 U.S. 378 (1989). [Ella argumentó que su derecho al debido proceso previsto en la Cuarta Enmienda fue violado cuando la policía no le proporcionó atención médica mientras estaba detenida. El caso llegó a la Corte Suprema de los EE.UU. en noviembre de 1988.] Esa decisión dejó en claro que el entrenamiento del personal policial es una responsabilidad de gestión crítica, y que los administradores pueden ser considerados responsables si el entrenamiento inadecuado o incorrecto provoca lesiones o viola los derechos constitucionales de un ciudadano. Si la oposición a aumentar el presupuesto para el entrenamiento persiste, mencione que algunos departamentos se enfrentan ahora a una mayor supervisión del Departamento de Justicia, sanciones y requerimientos adicionales que colocan al departamento y sus oficiales bajo escrutinio extremo. Conclusión. El trabajo policial está plagado de posibles litigios - al menos eso es lo que nos dicen durante el entrenamiento, en reuniones de información y en debates en las cafeterías. Esta noble profesión parece estar bajo ataque -por varios grupos- en las causas judiciales que algún día podría afectar su capacidad para hacer su trabajo. Las agencias y los oficiales por igual deben comprender cuál es la causa de los litigios contra los departamentos de policía. Las agencias deben considerar la forma de limitar su exposición y reconocer que, pese a los presupuestos ajustados, el entrenamiento y el intercambio de información son componentes críticos. Proporcionar recursos a sus oficiales es importante. Los departamentos deberán hacer todos los esfuerzos para proporcionar capacitación a los oficiales para que puedan mantenerse en forma en las tácticas, política de la agencia, y la evolución del derecho. El recurso más importante de cualquier departamento de policía es su personal. Más dinero del presupuesto es asignado al personal más que a otra cosa. ¿Por qué no querría proteger a su organización o a su personal? Brian Willis hace la pregunta: "¿Qué es importante ahora?" Sus oficiales, su departamento y la comunidad todos son importantes. No importa el tamaño de su fuerza, su agencia o su jurisdicción, usted les debe proporcionar a todos los interesados el mejor entrenamiento posible sobre uso de la fuerza.

Nuevo estudio24: las imágenes mentales estimulan la precisión del disparo bajo amenaza Cuando se exponen a un tiroteo simulado, las imágenes mentales consistentemente superan a las otras,

cuyas habilidades para abordar un blanco bajo fuego tienden a erosionar significativamente su nivel "normal" de exactitud.

Destroying Myths & Discovering Cold Facts

Force Science Institute 14 de abril de 2014

Nuestro agradecimiento a Chris Lawrence, miembro de la Facultad para el curso de Certificación de Análisis de Ciencia de la Fuerza, por alertarnos sobre este estudio. Para una descripción detallada de los elementos esenciales de un ejercicio efectivo de imágenes mentales, los investigadores recomiendan "El Abordaje PETTLEP a las imágenes motoras" (The PETTLEP Approach to Motor Imagery), que se puede obtener gratis en línea. 24 FSI. New study: Mental imagery boosts shooting accuracy under threat. http://www.forcescience.org/fsnews/245.html. Consulta: 14 de abril de 2014.


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El Director Ejecutivo Bill Lewinski, PhD -un especialista en psicología policial- para conducir experimentos únicos de fuerza letal, fundó el Instituto de Ciencias de la Fuerza (FSI, Force Science Institute) en 2004. El Instituto sin fines de lucro, con sede en Minnesota State University-Mankato, utiliza mediciones de tiempo y movimiento sofisticadas para documentar –por primera vez- las primeras verdades críticas ocultas sobre las dinámicas físicas y mentales de los eventos que amenazan la vida, particularmente de los oficiales involucrados en tiroteos (OIS, Officer-Involved Shootings). Sus hallazgos sorprendentes impactan profundamente en el entrenamiento y la seguridad de los oficiales y en la percepción ingenua del público. Si usted se beneficiaría de recibir información actualizada sobre las conclusiones de la FSRC, así como de varios otros artículos relacionados con el uso de la fuerza, por favor visite www.forcesciencenews.com y haga clic en el botón "Please sign up for our newsletter" ("Por favor, suscribirse a nuestro boletín de noticias") en la parte frontal del sitio. O envíe un e-mail a [email protected]. Las suscripciones son gratis. Se envían dos artículos por mes. Para obtener el permiso de reproducción o distribución, por favor escriba a: [email protected]

Un nuevo estudio que muestra que la imaginería mental simple puede ayudar al LEO 25 a mantener sus destrezas de tiro y evitar su deterioro en encuentros con amenaza elevadas ha sido reportado por los investigadores en los Países Bajos. En la Academia de Policía holandesa (Nederlandse Politieacademie), los científicos universitarios de las disciplinas del comportamiento humano y la ciencia del movimiento humano condujeron pruebas de antes y después de realizar un test con armas de fuego sobre 66 oficiales. Después de un ejercicio de tiro inicial para establecer una línea de base, algunos oficiales fueron expuestos a una sesión de siete minutos durante la cual se imaginaban a sí mismos disparando con precisión infalible incluso bajo la tensión de un ataque, mientras que un grupo de control meramente escuchó la entrada de audio no relacionada. Luego cuando fueron expuestos a un tiroteo simulado, las imágenes mentales consistentemente superaban a las otras, cuyas habilidades para abordar un blanco bajo fuego tienden a erosionar significativamente su nivel "normal" de precisión. Este hallazgo ha llevado a los investigadores a recomendar que los ejercicios de imágenes no sólo pueden incorporarse en el entrenamiento policial "regular" y la práctica sino que los oficiales "usen imágenes mentales cada vez que tienen un momento libre" para mejorar su rendimiento en lo que pueden ser situaciones de vida o muerte. Un informe del estudio, titulado "Efectos positivos de las imágenes en el desempeño de los policías en un tiroteo bajo amenaza" (Positive Effects of Imagery on Police Officers’ Shooting Performance Under Threat), aparece en línea antes de su publicación en la revista «Psicología Cognitiva Aplicada» (Applied Cognitive Psychology).

El factor ansiedad. En el artículo de los investigadores, la jefa del equipo Laura Colin, miembro de la facultad de Ciencias del Movimiento Humano de la Universidad Libre de Ámsterdam (en inglés, VU University Amsterdam; en holandés, Vrije Universiteit Amsterdam), señala que en los encuentros de fuerza mortal en la vida real, los LEO típicamente impactan a lo que le están disparando solo durante un 15-50 % del tiempo. Esto es "sustancialmente peor que durante las pruebas anuales de tiro", señala Colin, cuando "casi todos los agentes son capaces de impactar bien sobre el 90 % de los blancos". 25 La expresión "funcionarios encargados de hacer cumplir la ley" (LEO, Law Enforcement Officer) incluye a todos los agentes de la ley, nombrados o elegidos, que ejercen funciones de policía, especialmente las facultades de arresto o detención. En los países en que las autoridades militares, uniformadas o no, o fuerzas de seguridad del Estado, ejercen las funciones de policía, se considerará que la definición de funcionarios encargados de hacer cumplir la ley comprende también a los funcionarios de esos servicios.


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El culpable, sugieren otros investigadores, es la "ansiedad" que se deriva de la posibilidad de recibir un disparo en tiroteos reales. Esta amenaza hace que los oficiales "reduzcan la atención dirigida a un objetivo, aceleren la ejecución del tiro, y disparen con mucho menos precisión", escribe Colin. Colin sabía que las imágenes mentales han sido usadas ampliamente y efectivamente en los deportes de alto estrés para mejorar el rendimiento motor. Si las imágenes reflejan con precisión las condiciones del mundo real, parece que funciona porque activa "las mismas redes neuronales que están involucradas" en los movimientos reales imaginados y por lo tanto "fortalecen las vías neuronales necesarias para realizar la acción prevista en la vida real". Las imágenes mentales han sido aplicadas de forma anecdótica en la aplicación de la ley desde que fueron introducidas como "ensayo de crisis" en los Seminarios de Supervivencia en la Calle de Calibre Press (Calibre Press Street Survival, http://calibrepress.com/) en la década de 1980. Pero, escribe Colin, poco ha sido documentado en estudios científicos "sobre el potencial de las imágenes para ayudar a mejorar el desempeño de los oficiales en un tiroteo".

La meta primaria de su grupo era "investigar si las imágenes pueden ayudar a prevenir los efectos negativos de la ansiedad" cuando los agentes están disparando bajo amenazas. "Nuestro objetivo no era reducir el estrés y la ansiedad" de los oficiales, sino dejarles aprender a disparar con precisión "pese a los altos niveles de estrés y ansiedad". Disparos efectuados. Los 53 hombres y 13 mujeres que se ofrecieron voluntariamente como sujetos del equipo de experimentos tenían entre 19-55 años de edad y 1 y 30 años de servicio policial. Las pruebas previas al experimento confirmaron que ninguno tenía alguna predisposición inherente a niveles elevados de ansiedad. Los participantes fueron divididos aleatoriamente en tres grupos, que fueron equilibrados en términos de sus características demográficas. Entonces uno a la vez entraron en una habitación en la academia y, a una distancia de unos 16 metros, confrontaron a un instructor de armas de fuego que vestía ropa de protección. Cada oficial primero le disparó un total de 16 veces desde varias posiciones, apuntando a áreas marcadas en cada pierna y en el pecho. Dispararon una Walther P5 9mm semiautomática idéntica a su arma de servicio, excepto que había sido modificada para disparar "Simunition". Para esta parte del experimento, el "sospechoso" tenía una "imitación de arma de fuego" sin gatillo, que realmente no podía disparar, "haciendo que el desempeño en esas condiciones sea una experiencia relativamente inofensiva" ("amenaza baja”) para los voluntarios. Después de esa sesión de tiro, hubo un período de descanso durante el cual dos de los grupos pasaron por un ejercicio de la imaginación mental, mientras que al tercer grupo (control) se le instruyó para escuchar "atentamente" a las noticias no relacionadas. A todos los participantes se les recordó que estarían en otro tiroteo en breve, éste en "condiciones de alta amenaza". "Intervención" de las imágenes (Imagery "Intervention"). Los grupos de imágenes (imagery groups), sentados cómodamente en una habitación tranquila con los ojos cerrados, fueron instruidos en los iPods para que imaginen su desempeño en el próximo encuentro. Sin embargo, los relatos que guiaron a esos dos grupos eran algo diferentes. El guión para un grupo (designado como EI, por "ejecución de imágenes") concentrado sólo en guiar a los oficiales "a través del ejercicio de tiro... apuntando específicamente a la ejecución exitosa del tiro". Por ejemplo:

"... Usted ve su ropa y los objetivos blancos adjuntos. Ve sus brazos y ve que él apunta el arma hacia usted. Usted también apunta su arma, se centra en la pierna izquierda, dispara y es un impacto. Siente el retroceso del arma en la mano. Apunte a su pierna derecha e impacte de nuevo. Entonces mire al blanco en su pecho, y dispara dos veces; ¡dos impactos!..."


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Los oficiales en el segundo grupo (EEI: "ejecución- emoción de imágenes"), fueron guiados a través del mismo ejercicio de tiro, pero el guión también incluía "la amenaza de ser impactado y de tratar efectivamente con el estrés y la ansiedad que esto evoca típicamente", por lo que los investigadores pudieron determinar si la inyección de emoción y de percepción sensorial en el imaginario podría afectar el resultado. En este caso, la narración incluye:

" ... Ve que apunta su arma Simunition hacia usted. Usted sabe que él puede impactarlo, entonces siente los nervios a través de su cuerpo. Intenta mantener la calma y apuntar a su pierna izquierda. ¡BAM! Él dispara y usted siente dolor en la pierna. Usted... se recupera, se concentra en la pierna izquierda, disparar e impacta. Usted apunta a su pierna derecha e impacta de nuevo. Entonces se fija en el blanco en su pecho, y dispara dos veces; ¡ambos impactan!..."

Cada guión, de unos tres minutos cada uno, se repitió dos veces, con una pausa de un minuto entre ellas. Cuando los guiones, el noticiero y el período de descanso habían terminado, los oficiales se encontraron una vez más cara a cara con el sospechoso - sólo esta vez, él estaba armado con una pistola que disparó Simunition hacia los voluntarios. "Ser golpeado con esos cartuchos produce una sensación de dolor, cuya amenaza se sabe causa un aumento" en la ansiedad de los participantes, explica Colin. Resultados. A través de varios mecanismos de test, los investigadores fueron capaces de confirmar que el nivel medio de ansiedad, la frecuencia cardíaca y el esfuerzo mental invertido fueron significativamente y uniformemente más altos entre todos los grupos durante la porción "amenaza alta" de la experiencia. Donde los grupos difirieron significativamente fue en la colocación del disparo. Durante el primer ejercicio de tiro (amenaza baja), los tres grupos obtuvieron casi las mismas puntuaciones, con una tasa de precisión de alrededor del 40 %. Pero en el ejercicio de alta amenaza, el desempeño del grupo de control se deterioró notablemente, reduciéndose la precisión a casi el 30 % en promedio. Ambos grupos de imágenes, por otro lado, "fueron capaces de mantener su nivel de precisión en el tiro" durante el estrés del ejercicio de alta amenaza. De hecho, los investigadores encontraron que "ellos incluso mostraron un leve pero no significativo aumento en su precisión". Este desempeño superior "no fue acompañado por niveles más bajos de ansiedad", informa el equipo. "Antes que reducir la ansiedad, las intervenciones de imágenes... ayudaron a los participantes a mantener la precisión de disparo pese a los niveles más altos de ansiedad". Curiosamente, el grupo EEI que había recibido la imaginería con emoción infundida (the emotion-infused imagery) "no superó significativamente al grupo EI.... Al contrario, el grupo EI se comportó ligeramente (pero no significativamente) mejor que el grupo EEI...," llevando al equipo de investigación a la conclusión de que "centrarse en la ejecución del tiro acertado es fundamental....aunque no perjudica el desempeño, añadir declaraciones emocionales no tiene un valor adicional". Recomendaciones. Los investigadores señalan que las "intervenciones" de imágenes en este estudio "se implementaron en un solo día y duró sólo siete minutos". El hecho de que incluso esta exposición mínima a la imaginería mental puede "reducir los efectos negativos de la ansiedad" tiene "implicaciones prácticas importantes" para un uso más amplio en el entrenamiento y la práctica policial. "Los instructores policiales pueden desear incorporar intervenciones de imágenes en sus prácticas de tiro para ayudar a los oficiales a lograr más" fuera de su entrenamiento, escribe Colin. "Las imágenes pueden ayudar a los oficiales nuevos y sin experiencia a lograr un mayor nivel de rendimiento más rápido [y] los oficiales que se imaginan su rendimiento de disparo pueden aprender a mantener un centro de atención más dirigido a un objetivo... cuando las circunstancias son estresantes...."


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Además de la práctica regular, los oficiales con una formación adecuada "pueden utilizar las imágenes mentales cada vez que tienen un momento libre", e incluso emplearla cuando ensayan diversos escenarios hipotéticos en el camino a las llamadas potencialmente peligrosas. Los investigadores reconocen que sus experimentos eran de alcance limitado. Sin embargo, consideran sus hallazgos "prometedores" y esperan estimulará un mayor estudio de esta potencialmente poderosa ayuda de entrenamiento que salva vidas. En su estudio y su bibliografía, los autores refieren a la investigación de la Ciencia de la Fuerza realizado en Irlanda del Norte por el Dr. Bill Lewinski y el Dr. Joan Vickers, que comparó la actuación de los tiradores novatos con los de elite. Lewinski dijo Fuerza Science News: "Nuestra investigación mostró que realmente los grandes tiradores tienen la capacidad de centrar su atención con precisión de laser en lo que necesita hacerse para detener una amenaza. El dolor, el miedo y la ansiedad son superados por esta intensidad de enfoque. "Usualmente, esta capacidad se desarrolla a través de la práctica extensa, pero el estudio holandés sugiere que la imaginería, realizada correctamente, podría tener un efecto positivo en ayudar a centrar la atención, ahorrando costos y tiempo de entrenamiento mientras mejora el rendimiento".

Protocolo innovador para el Oficial Implicado en un Tiroteo se centra en la compasión hacia el oficial involucrado 26

Cuándo y cómo entrevistar a un oficial y conducir un recorrido por el incidente son fuentes de controversia entre los investigadores de casos de Oficiales Implicados en Tiroteos (OIS, Officer-Involved Shootings)

Destruyendo mitos y descubriendo hechos fríos

Destroying Myths & Discovering Cold Facts Instituto de Ciencias de la Fuerza

Force Science Institute Traducido por Carlos G. Blanco, M.Sc.

2 de junio de 2014

El Instituto de Ciencias de la Fuerza (Force Science Institute) fue puesto en marcha en 2004 por el Director Ejecutivo Bill Lewinski, PhD -un especialista en psicología policial- para conducir experimentos únicos de fuerza letal. El Instituto sin ánimo de lucro, con sede en Minnesota State University-Mankato, usa mediciones de tiempo y movimiento sofisticadas para documentar –por primera vez- verdades ocultas sobre las dinámicas físicas y mentales de los eventos que amenazan la vida, particularmente de oficiales implicados en tiroteos. Sus hallazgos sorprendentes impactan profundamente en el entrenamiento y la seguridad de los oficiales y en la percepción ingenua del público. Para obtener más información, visite www.forcescience.org o e-mail a [email protected]. Si se beneficiaría por recibir actualizaciones de las conclusiones del Centro para la Investigación de la Ciencia de la Fuerza (FSRC, Force Science Research Center), así como de varios otros artículos relacionados con el uso de la fuerza, por favor visite www.forcesciencenews.com y haga clic en el enlace "Por favor, suscribirse a nuestro boletín de noticias" en la parte delantera el sitio. Las suscripciones son gratis. Dirección: Force Science ® Institute, Ltd., 124 E Walnut St #120, Mankato, MN 56001, Estados Unidos. Teléfono: +1 507-387-1290

26 Force Science Institute. Innovative OIS protocol focuses on compassion for involved officer. 2 de junio de 2014. http://www.policeone.com/investigations/articles/7251707-Innovative-OIS-protocol-focuses-on-compassion-for-involved-officer/?utm_source=newsletter& utm_medium=email&utm_campaign=Exclusive_2&nlid=7244103. Accedido: 4 de junio de 2014. Traducido por Carlos G. Blanco, M.Sc.


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Cuándo y cómo entrevistar a un oficial y conducir un recorrido por el incidente son fuentes de controversia entre los investigadores de casos de Oficiales Implicados en Tiroteos (OIS, Officer-Involved Shootings). Pero sosteniendo que los dos eventos pueden combinarse en una sola ocurrencia, un graduado del Curso de Certificación de la Ciencia de la Fuerza ha traído un nuevo protocolo para la agencia que satisface a los administradores, fiscales, investigadores y oficiales por igual y parece excluir algunos problemas legales acuciantes que se presentan a menudo bajo un enfoque más tradicional. El teniente Todd Larson, comandante de la sección crímenes de personas en el Departamento de Policía de Scottsdale (Arizona), explicó el sistema que él encabezó en una reciente Clase de Certificación de Ciencia de la Fuerza (Force Science Certification Class) organizada por su departamento. Desde entonces, dice, ha sido "bombardeado" por las preguntas de los investigadores de otros organismos en busca de más detalles. Aquí está cómo se produjo el plan de Scottsdale y cómo, después de varias mejoras, hoy funciona: Un veterano de 21 años en la policía y candidato a un Doctorado de Educación en Liderazgo Organizacional, Larson actualmente supervisa todas las unidades de delitos contra las personas de su departamento: investigaciones de pandillas, delitos violentos, violencia doméstica, y la Unidad de Víctimas Especiales (delitos sexuales). Esos se encuentran en el mismo edificio que contiene el Centro de Defensa de la Familia de Scottsdale (FAC, Scottsdale's Family Advocacy Center), donde, entre otras cosas, se proporcionan servicios a las víctimas. "Fue viendo las operaciones del centro que me puse a pensar acerca de cómo estábamos tratando a los oficiales que sobrevivieron a un tiroteo", dice Larson. Centrarse en la víctima. Antes de la creación del Centro, hace más de una década, las víctimas de violación, por ejemplo, "típicamente eran llevadas a un hospital donde eran vistas por una enfermera, vistas por un médico, atendidas por un oficial de patrulla, vistas por un detective, vistas por un trabajador social - y entrevistadas por separado por cada uno de ellos", explica Larson. "A medida que el caso avanzaba, eran entrevistados varias veces por diferentes personas antes de llegar a la corte, añadiendo a su estrés y agravando el trauma del delito en sí". A medida que más se ha aprendido acerca de un tratamiento más progresista de las víctimas, ese procedimiento se cambió. "Ahora", dice Larson, "las víctimas de la violación, del abuso infantil, u otros crímenes violentos, van directamente al FAC en vez de un hospital, donde son médicamente atendidos por una enfermera forense entrenada, son entrevistados por un solo investigador una vez y sólo una vez, y no tienen acceso a los servicios de intervención en crisis. Es un modelo que minimiza el trauma a la víctima". Como Larson observó este enfoque en la operación, se preguntó por qué el mismo protocolo no se aplicaba a los policías que habían estado en incidentes críticos amenazantes para la vida. "Los policías que se ven obligados a defender sus vidas son víctimas de un delito violento contra la persona, también", dice Larson. "Han sido disparados, atropellados, golpeados con un caño - algún tipo de evento traumático Pero los hemos tratado cruelmente como lo hacíamos con las víctimas de violación". Además de la cuestión de sensibilidad, hubo problemas potenciales en el tribunal, dice Larson. Debido a los caprichos de la memoria, los recuerdos de los oficiales sondeados en varias entrevistas durante las investigaciones de tiroteos llevaron inevitablemente a inconsistencias a través de sus diversas declaraciones. "Incluso las pequeñas discrepancias dieron a los abogados de la oposición en los casos civiles y penales la munición con la que martillar la credibilidad de un oficial", dice Larson. Estimulado por estas preocupaciones, Larson hace dos años inició un protocolo simplificado post-tiroteo centrado en la víctima para su sección, y este enfoque fue apoyado por el personal de comando del Departamento de Policía de Scottsdale.


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Acción inmediata. Bajo el enfoque ahora vigente, el cuidado compasivo para que el oficial involucrado comienza en la escena del crimen. Suponiendo que no hay lesión que requiera transporte inmediato a una sala de emergencias, el tirador se mantiene en el área general del incidente brevemente, "a veces a tan sólo 15 minutos o menos", dice Larson. El oficial da una cruda declaración de seguridad pública y es fotografiado en 360 grados, con fotos suplementarias tomadas para escalar, si es el caso. Entonces el oficial es llevado a una habitación de hotel o al Centro de Apoyo Familiar (FAC, Family Advocacy Center). "Un oficial experimenta las mismas reacciones de estrés psicológicos y fisiológicos como cualquier otra víctima de un crimen violento", dice Larson, "y queremos que él o ella estén lejos del ajetreo y el bullicio de la escena en la que se produjo el evento traumático tan rápido como posible". Fuera de las instalaciones en un "área de relax", el oficial puede cambiarse con ropa informal, llamar a los miembros de la familia, contactarse con la asociación de la policía, reunirse con un representante legal, y "sólo calmarse un poco", dice Larson. En este lugar secundario, cualquier arma que ha sido disparada se sustituye por un modelo idéntico, a estrenar. Si un solo funcionario está involucrado en el tiroteo, un "agente del caso" (case agent) es responsable de investigar el uso de la fuerza letal es asignado al oficial. Si varios agentes están implicados, se le asigna un investigador a cada uno y el agente del caso supervisa y coordina sus actividades a partir de ese momento en adelante. Un investigador de la escena del crimen también es nombrado para administrar el análisis de las pruebas en el sitio de tiroteo y ayudar al agente del caso en la realización de cualquier seguimiento de investigación necesario. Una "declaración en movimiento". La señal componente del protocolo de Scottsdale es la combinación caminata/entrevista con el oficial involucrado, la toma de una "declaración en movimiento", en términos de Larson. Si las condiciones del oficial lo permitan, él voluntariamente regresa a la escena del tiroteo por lo general después de una hora o dos de recuperación fuera del sitio. "La iluminación puede ser un factor importante en los tiroteos", explica Larson, "y nos gusta el recorrido que llevará a cabo bajo condiciones lo más parecidas a la original como sea posible. Podemos esperar hasta el día siguiente en el mismo tiempo que el tiroteo, si hubo un cambio significativo". Acompañado por el investigador de la escena del crimen, el agente del caso, un abogado personal, y un enlace de la oficina del fiscal del condado, el funcionario involucrado narra caminando-y-hablando sobre lo sucedido desde su perspectiva, desde la llamada al servicio inicial y la llegada a la escena hasta e incluyendo el tiroteo y sus consecuencias inmediatas. Lo que el oficial dice es capturado en una grabación de audio digital por el agente del caso. No se toma ningún vídeo. Si más de un funcionario está involucrado en el tiroteo, un recorrido por separado se realiza con cada uno, uno a la vez. "El fiscal del condado requiere que 'grabemos una entrevista' con cualquier agente implicado en un tiroteo, pero en qué consiste la entrevista no está definido", dice Larson. Así, "haciendo la entrevista a través del recorrido" no sólo cumple con el requisito, sino que ofrece algunos beneficios distintos además, según cree él: • Estar en la escena real estimula la memoria del oficial mejor que tratar de recordar lo que sucedió en un lugar neutral, dando lugar a descripciones más completas y precisas; • El formato se presta fácilmente a la técnica de entrevista cognitiva, donde una narrativa libre y fluida es alentada por relativamente pocas preguntas abiertas e investigaciones de seguimiento para aclarar cualquier confusión; • Al ser capaz de señalar o pasar a los lugares relevantes, el funcionario está a salvo de tener que estimar distancias o tratar de describir los detalles ambientales desde la memoria, que a menudo conduce a discrepancias por inadvertencia o imprecisiones que un abogado hostil puede explotar; • Y, por supuesto, el proceso es a la vez eficiente y humano: un relato primario de lo que sucedió en lugar de entrevistas repetidas con sus problemas concomitantes.


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"En pocas palabras", dice Larson, "estamos en condiciones de aplicar los principios de la ciencia de la fuerza en línea con los requerimientos del fiscal del condado. Dentro de tres o cuatro horas en promedio, después de presionar el gatillo, el oficial está hecho". El agente del caso toma notas manuscritas "meticulosas" a lo largo del recorrido, dice Larson. De esas, el investigador puede añadir cualquier material complementario importante para una transcripción de la grabación de audio para escribir un resumen oficial del caso. Las observaciones del investigador relacionadas con el recorrido se pueden revisar para ver su precisión con el oficial involucrado antes de su redacción final. Esto ocurre después de que el funcionario ha tenido ciclos de sueño suficientes para estar bien descansado. "Sólo si hay necesidades investigativas específicas, como una razón para creer que un oficial está mintiendo u ocultando pruebas, nos sentaríamos para una entrevista formal después", dice Larson. Una vez completado el recorrido, el funcionario involucrado es colocado en licencia administrativa automática hasta que se aclare para volver al trabajo por un psicólogo de la policía de su elección. "Por lo general", dice Larson, "los funcionarios están de vuelta en el trabajo en tres a siete días, pero pueden tener más tiempo si sienten que lo necesitan". Resultados. En este escrito, este protocolo ha sido seguido en los últimos ocho casos de oficiales implicados en tiroteos en Scottsdale, algunos con un máximo de cinco funcionarios como tiradores. Seis de los tiroteos ocurrieron en los últimos 10 meses. "Ni una sola vez hemos tenido que sentarnos a hacer una entrevista tradicional, formal", dice Larson. "A los oficiales les agrada el proceso, los abogados que los representan parecen contentos con él y dicen que hace más fácil su trabajo en la corte, y nuestros administradores están muy a favor de éste". Otras agencias en el área han adoptado el modelo, y se espera que sigan más. "Hemos entrenado a todos los oficiales en nuestro departamento en el protocolo, así que sabíamos qué esperar, si se exponen en un tiroteo", dice Larson. Reacción del FSI. Hablando en nombre del Instituto de Ciencias de la Fuerza, el director ejecutivo Dr. Bill Lewinski dijo a Force Science News: "El protocolo de Scottsdale es un buen compromiso, rico en características que consideramos reflexiones importantes de principios de la Ciencia de la Fuerza para trabajar con un oficial después de un incidente que amenaza la vida. Tratar al oficial con compasión, no someterlo a múltiples entrevistas, solicitando principalmente lo esencial de lo sucedido desde su punto de vista dentro de la escena del incidente - esos aspectos son muy encomiables". Como nota el propio Larson, Lewinski señala que Scottsdale aún tiene que aplicar el protocolo para un tiroteo complejo que esté plagado de matices muy controvertidos - el tipo de incidente complicado, políticamente cargado, en cuyo análisis el FSI se involucra a menudo. "Puede haber ocasiones en que un enfoque más tradicional de la entrevista puede ser exigido", dice, "y puede haber momentos en los que es necesario un período más largo para la consolidación de la descompresión de la memoria emocional antes de registrarse la declaración de un oficial. Pero el marco general del abordaje de Scottsdale debería permitir que el enfoque basado en el oficial permanezca intacto, y debería ser elogiado y copiado". El Teniente Larson puede ser localizado en: [email protected]

Gestión del enfrentamiento: Los 10 mandamientos de la supervivencia del oficial 27

20 de enero de 2004

27 BLAUER, Tony. Confrontation Management: The 10 commandments of officer survival. PoliceOne. SPEARtips: Close Quarter Tactics. 20 de enero de 2014. http://www.policeone.com/close-quarters-combat/articles/77105-Confrontation-Management-The-10-commandments-of-officer-survival/. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc. Accedido: 10 de julio de 2014.


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Tony Blauer ha estado enseñando profesionalmente durante más de 20 años y ha sido pionero en el trabajo sobre los componentes psicológicos y de comportamiento de los enfrentamientos. Apodado "El Psicólogo de la Autodefensa", Blauer conduce seminarios en todo el mundo y es considerado una de las principales autoridades en materia de protección personal. El Sr. Blauer es el astro en más de 20 videos instructivos y ha aparecido en más de 90 revistas incluyendo "Forbes". Los diez mandamientos de la supervivencia del oficial: # 1 - No deberá no entrenar. # 2 - No deberá derrotarse a sí mismo. # 3 - No deberá rendirse. # 4 - No deberá temer al miedo. # 5 - No deberá telegrafiar sus intenciones. # 6 - No deberá perder la batalla de la calle. # 7 - No deberá invitar al desastre. # 8 - No matará a menos que sea absolutamente necesario. # 9 - No deberá conformarse con la mediocridad. # 10 - No deberá presumir cumplimiento. Mandamiento # 1: No deberá no entrenar. Mi amigo, el oficial Jeff Chudwin una vez me comentó: "Los militares entrenan y entrenan y entrenan y rara vez pelean, mientras que los policía pelean y pelean y pelean, pero raramente entrenan". Hay pocas teorías que "tratan" de explicar por qué la mayoría de los policías no entrenan con la misma integridad e intensidad como sus primos militares. La única válida es la restricción presupuestaria y de tiempo hace que sea difícil. Pero eso todavía no es una excusa. Uno de mis estudiantes de la Real Policía Montada de Canadá, Luc Cantera, corre 4 veces a la semana, dispara, agarra y trepa mástiles sobre una base regular. Su perspectiva: quiere estar listo en cualquier momento, en cualquier lugar y sin previo aviso. Imaginemos, por un momento, resultar gravemente heridos durante una llamada. Imagine el impacto en su confianza, orgullo y actitud. Imagínese si usted se lesionó y no pudo entrenar o posiblemente ir a trabajar durante varias semanas. E imagine si cuando se recuperó "físicamente" era un tímido con las armas. Imagine todo eso. Este escenario es una fantasía, por supuesto (o tal vez una pesadilla). Pero no es necesario. La "totalidad" en su entrenamiento simplemente debe ser exhaustiva, tomar en serio la violencia y entrenar apropiadamente. Siempre les digo a mis estudiantes: "Si voy a perder, déjeme perder con un luchador superior. Déjeme perder porque él era mejor que yo. No porque yo era peor que él". Entrenador Bear Bryant dijo: "La voluntad de ganar se compara poco con la voluntad de prepararse para ganar". Esa es una de mis citas favoritas. El entrenamiento es parte del trabajo y es mejor tomarlo en serio, porque los sociópatas de hoy son mucho más peligrosos que nunca. Las habilidades tácticas defensivas son perecederas. Si no las utiliza, las perderá y la ausencia de su confianza física cuando más lo necesita, puede ser la diferencia entre que usted vaya a casa o al hospital. Usted no puede no entrenar y esperar ser el mejor en el momento del aviso. Los boxeadores se comprometen a luchar con 3 meses de antelación para prepararse para una contienda. No podemos darnos ni tenemos ese lujo. "Usted no puede falsificar su resistencia". Recuerde esto: la mayoría de las llamadas involucran a sujetos que cumplirán, pero no porque ellos piensen que usted es muy hábil en su auto-protección, cumplen porque deciden hacerlo, porque usted es el policía. Comprender la diferencia es crucial. El resistente motivado es responsable de las lesiones de los oficiales. Pregúntese a sí mismo: "¿Controlé mi última confrontación física debido a mi entrenamiento superior, o la controlé porque mi oponente carecía de entrenamiento?" El servicio policial con integridad es una responsabilidad enorme. Si usted tiene esa responsabilidad, es mejor que tenga la habilidad para responder. Un policía es un guerrero de la paz y debe entrenar como un guerrero. Tome todos los aspectos de su entrenamiento en serio: cardiovascular, fuerza, resistencia,


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habilidades simples en cuartos cerrados, tácticas de control y para esposar, retención de armas y desenfundar y disparar - todo aquello que mejore su capacidad de supervivencia.

¿Pueden los policías realmente evitar disparos "extra"? Una revisión de investigación realista.28 Los resultados de un nuevo estudio, obtenido bajo estrés, pero en condiciones de laboratorio no

amenazantes, comprenden un punto de partida para comprender las dinámicas humanas que intervienen en la pronta conclusión de un episodio de tiro.

Force Science Institute

4 de agosto de 2014 Un punto álgido de controversia en algunos tiroteos con intervención policial es que los oficiales no cesan de inmediato el fuego en el momento en que una amenaza mortal termina y ya no están en peligro de muerte. La habilidad de un oficial para dejar instantáneamente de apretar el gatillo una vez que la señal de "parar el tiroteo" se hace evidente, no siempre es considerada. En lugar de ello, el oficial detrás de la pistola puede enfrentar duras críticas de los medios y desalentadoras acciones legales alegando fuerza excesiva deliberada por disparar cartuchos extra "innecesarios". Este es un dilema que el Instituto de Ciencias de la Fuerza (Force Science Institute) ha explorado en la investigación pionera y una revisión de sus conclusiones se publica en la edición actual del Foro Ejecutivo de Aplicación de la Ley (Law Enforcement Executive Forum), una revista revisada por pares profesionales. El informe, escrito por el director ejecutivo de FSI Dr. Bill Lewinski, el Dr. William Hudson, decano del Colegio de Ingeniería, Matemáticas y Ciencias en la Universidad de Wisconsin-Platteville, y Jennifer Dysterheft, una investigadora asociada de la Ciencia de la Fuerza y candidata a un doctorado en la Universidad de Illinois, se centra primariamente en cuatro experimentos sobre percepción-humana, toma de decisiones, reacción-tiempo realizados con 102 experimentados Oficiales Encargados de Aplicar la Ley (LEO, Law Enforcement Officers) en Arizona. "Nuestros resultados, obtenidos bajo estrés pero en condiciones de laboratorio no amenazantes, comprenden un punto de partida para comprender las dinámicas humanas implicadas en la pronta conclusión de un episodio de tiroteo", dijo Lewinski a Force Science News. "Ellos ilustran muy claramente los desafíos para responder instantáneamente a una situación rápidamente cambiante". "Las infinitamente más complejas circunstancias de un mundo real, las peleas con armas que amenazan a la vida probablemente sólo magnifican lo que experimentaron nuestros oficiales voluntarios". Señales de luz. En los experimentos, los oficiales de uno en uno fueron equipados con pistolas Glock de 9 mm de entrenamiento que fueron manipuladas de modo que tirar del gatillo podía ser perfectamente sincronizado a milésimas de segundo. En una sala de entrenamiento, se enfrentaron entonces a un "tablero de estímulo" de 3x3 pies repleto con nueve grupos de luces LED de colores que pueden ser activados remotamente por computadora en patrones impredecibles de complejidad creciente. Cada oficial respondió con cinco "pruebas" cada uno de una serie de cuatro test y los monitores midieron sus tiempos de reacción de presión del gatillo. Test # 1. Para establecer un tiempo de reacción simple y típico, los oficiales fueron instruidos para mirar un grupo arracimado de luces en el tablero y cuando la luz verde se encendía, debían apretar el gatillo una vez,

28 Force Science Institute. Can cops really avoid 'extra' shots? A realistic research review. Destroying Myths & Discovering Cold Facts. 4 de agosto de 2014. http://www.policeone.com/force-science-institute/articles/7419562-Can-cops-really-avoid-extra-shots-A-realistic-research-review/?utm_ source=newsletter&utm_medium=email&utm_campaign=Exclusive_2&nlid=. Accedido: 4 de agosto de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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"lo más rápido posible". El tiempo más rápido entre la luz que destella y un oficial que comienza a mover el gatillo era 0,17 segundos, siendo el más lento de medio segundo. El tiempo medio para percibir el cambio de referencia e iniciar la presión en el gatillo fue de 0,25 segundo. Esto empieza con el arma del oficial ya apuntada hacia la amenaza, con el dedo en el gatillo y el oficial preparado para responder. Test # 2. Para esos cinco ensayos, a los oficiales se les dijo que comiencen a "tirar" tan rápido como fuera posible al encenderse la luz verde y "presionar continuamente el gatillo", como lo harían en un tiroteo real hasta que la luz parpadea y se apaga, representando el fin de la amenaza. Entonces ellos "deben parar inmediatamente" o su "puntuación" sería penalizada. La duración del tiempo de tiroteo varió al azar entre los ensayos. En respuesta a este simple estímulo, algunos oficiales fueron capaces de detenerse de inmediato, pero el más lento en dejar de disparar completó seis presiones más al gatillo después que la luz se apagara antes de soltarlo para siempre. En promedio, los oficiales hicieron un disparo más y comenzaron una segunda presión del gatillo que probablemente se completaría en una situación del mundo real después de detenerse la "amenaza". Test # 3. Los oficiales fueron a ver una fila completa de grupos de luces, que consistían en tres bombillas cada una. Si sólo una o dos luces en un clúster se encendían, los oficiales no dispararían. Sólo cuando un clúster completo se iluminaba simultáneamente ellos dispararían. Este relativamente simple aumento en la complejidad de la toma de decisiones más o menos duplicó el tiempo de reacción. Ahora, en promedio, pasaron 0,56 segundos entre el momento en que un grupo completo se encendía y los oficiales iniciaban una presión del gatillo. Test # 4. En los ensayos finales y más complejos, los oficiales debían centrarse en el estímulo entero en el tablero. Ellos tenían que apretar el gatillo "lo antes posible" una vez que todas las luces verdes en cualquier fila eran encendidas. Como distracciones, las luces amarillas y rojas en los grupos podrían activarse o las luces verdes en una fila podían estar no del todo encendidas. El tiempo de reacción promedio para comenzar a disparar -0,46 segundos- en realidad mejoró ligeramente para este experimento. Los oficiales aprendieron a "anticipar un patrón evolutivo y simplemente tenían que reconocer que el patrón", explican los investigadores. Implicaciones. La toma de decisiones en los experimentos fue la "más simple posible" comparada con los desafíos que enfrentan los oficiales en los encuentros de fuerza letal en el mundo real, señalan los investigadores. En enfrentamientos callejeros, los oficiales deben hacer frente a "una multitud de estímulos, circunstancias ambiguas, mala luz ambiental y una compleja, dinámica y a menudo evolutiva situación amenazante", todo lo cual tiende casi inevitablemente a impactar en la capacidad de un oficial para evaluar opciones rápidamente y reaccionar a los cambios contextuales. "Siempre se espera que los oficiales se desempeñen en niveles expertos de tiroteo", dice Lewinski. "Si disparan en exceso o cometen cualquier error, son muy criticados y responsabilizados. Sin embargo este estudio sugiere, entre otras cosas, que muchos oficiales pueden ser incapaces de cesar el fuego de forma instantánea cuando el sospechoso ya no es una amenaza". Todo lo que hace un oficial toma tiempo. Toma tiempo percibir que un nivel de amenaza ha cambiado y toma tiempo decidir dejar de disparar y activar mecánicamente esa decisión. Cuando los oficiales se involucran en un fuego rápido y continuo, como lo requiere su entrenamiento para defender sus vidas, el proceso para parar es más complejo y por lo general toma más tiempo". En su artículo, los investigadores notan que "si un oficial tomara [meramente] 0,56 segundos para reaccionar a una señal de dejar de tirar, tres a cuatro disparos [extra] podrían ser efectuados por el oficial como una secuencia automática después que ocurriera la señal para parar". Cuanto más lento es el tiempo de reacción del oficial, "mayor es el número de disparos [que pueden ser] despedidos antes que pueda ocurrir una parada consciente". Los investigadores también comentan sobre el número de errores cometidos por los oficiales durante los test # 3 y # 4. En el test # 3, 3 % de los cartuchos disparados eran "falsos positivos"; es decir, los oficiales malinterpretaron el estímulo y dispararon cuando no deberían haberlo hecho. "Ese número fue a más del doble [a 8 %] con la adición de reconocimiento de patrones" en el test # 4.


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"Esto se traduce directamente en tiroteos con oficiales involucrados, sugiriendo que con los componentes complejos de toma de decisiones, además de los patrones de movimiento, hay casi un 10 % de riesgo de oficiales que cometen errores falsos positivos o disparan cuando el patrón parece representar una amenaza en evolución pero en realidad nunca llega a ese punto". Lo que sugiere incluso más peligro físico para los oficiales es el número de falsos negativos que ocurrieron en los test, "cuando los oficiales no dispararon y debían hacerlo". Esto representa sólo el 1 % de los ensayos en los test # 3 y 4, pero en la calle las consecuencias podrían haber sido graves, dando a los "sospechosos letales la ventaja" y poniendo "vidas en riesgo" de los oficiales. Entre otros aspectos problemáticos de incidentes de "disparos extra", los investigadores también abordaron complicaciones controvertidas que surgen a menudo de cartuchos disparados contra vehículos en movimiento y en los sospechosos que están cayendo al suelo después de haber sido impactados. "Antes de analizar los tiroteos de la vida real, es necesario comprender los tiempos de reacción básicos y otros datos registrados en este estudio", dice Lewinski. "El propósito principal del estudio fue crear una base de tales conocimientos. Anticipamos la realización de pruebas más sofisticadas de patrones de reconocimiento y de toma de decisiones en el futuro". El estudio completo, titulado "Tiempo de reacción del Oficial de Policía para comenzar y terminar de disparar: la Influencia de la toma de decisiones y el patrón de reconocimiento"29, pronto estará disponible en el sitio web de la revista, así como en el sitio web del Instituto de Ciencias de la Fuerza. Vamos a hacer un anuncio una vez que se haya publicado el estudio. Los hallazgos del estudio y sus implicaciones para los investigadores y revisores del uso de la fuerza son discutidos en detalle durante el curso de certificación de cinco días en Análisis de la Ciencia de la Fuerza (Force Science Analysis).

Seis preguntas «top» sobre el uso de la fuerza en Ferguson: la respuesta de un policía30 Acorde a los datos desde 2008 de la Oficina de Estadísticas de Justicia, hay aproximadamente 765.000

oficiales juramentados en los Estados Unidos - y un número absurdamente pequeño dispara sus armas fuera del entrenamiento.

Joel F. Shults, Ed.D.

Jefe de Policía (Retirado) de Adams State University (Colorado) Doctor en Liderazgo Educacional y Análisis de Políticas

22 de agosto de 2014 Debido al éxito del servicio policial estadounidense, nuestra ciudadanía es capaz de permanecer felizmente ignorante de la terrible dinámica de encontrarse con un ataque o resistencia. Ese éxito afortunadamente significa que la mayoría de las personas están protegidas de forma segura de cualquier daño, pero también significa que hay algunas preocupaciones comunes y conceptos erróneos acerca de lo que se siente al ser atacado y lo más importante, qué se siente al responder a un ataque. Esto es en gran parte responsable para el coro de preguntas sobre el tiroteo en que se implicó un oficial en Ferguson. Probablemente es más posible que se lo pregunte la gente a la que usted protege. Si usted se encuentra en tal discusión, aquí hay algunos hechos que puede utilizar para generarles una comprensión más profunda. 1. "¿Por qué el oficial le disparó tantas veces?" Los eventos con disparos son más mucho más rápidos de lo que la mayoría de la gente piensa. Según un estudio científicamente validado sobre los tiempos de reacción,

29 “Police Officer Reaction Time to Start and Stop Shooting: The Influence of Decision-making and Pattern Recognition”. 30 SHULTS, Joel F. Ferguson's 6 top use-of-force questions: A cop's response. PoliceOne. Passion for the Job. 22 de agosto de 2014. http://www. policeone.com/use-of-force/articles/7489476-Fergusons-6-top-use-of-force-questions-A-cops-response/. Extraído: 23 de agosto de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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el tiempo desde un evento de amenaza hasta el reconocimiento de la amenaza (proceso de toma de decisiones) es 31/100 segundos. La acción mecánica de apretar el gatillo es tan rápida como 6/100 de segundo. La decisión de dejar de disparar usa el mismo proceso mental y, debido a la cantidad de experiencias sensoriales que el cerebro está procesando, en realidad suele durar más que la decisión de disparar - cerca de medio segundo. Desde que el gatillo sigue operando tan rápido como 6/100 de segundo, es perfectamente posible disparar muchas veces en menos de dos segundos. La mitad de esos tirones de gatillo puede ser completada después de una entrada visual que un sujeto ya no presenta una amenaza. Además, puede tomar más de un segundo para que un cuerpo caiga al suelo tras ser disparado fatalmente. Esto significa que un tiroteo puede terminar antes de que usted tenga el tiempo para decir "uno Mississippi, dos Mississippi". Incluso los múltiples disparos no garantizan que una persona no seguirá avanzando o atacando. Esto también significa que una persona con la intención de tirarle a un oficial de policía puede disparar un tiro mortal mucho más rápido de lo que un oficial puede desenfundar, apuntar al blanco y disparar si el oficial está reaccionando a un arma ya desplegada. Una persona sin entrenamiento que manipula un arma de fuego por primera vez puede disparar fácilmente tres veces en 1,5 segundos después de decidir disparar. Los tribunales han dictaminado que el comportamiento sospechoso que parece ser consistente con un ataque inminente con arma de fuego es una base razonable para que el oficial abra fuego, aun cuando esté el arma claramente visible o no.

2. "Él tenía una herida de bala en la mano. ¿No significa eso que tenía las manos arriba?" El tiempo es siempre un elemento en una confrontación física. Si mira cualquier vídeo y pone un reloj digital sobre el tiempo transcurrido, se sorprenderá a la velocidad de la vida. La investigación ha demostrado que una persona que huye de la policía puede darse vuelta, disparar y volverse para cuando un oficial reconoce la amenaza y devuelve los disparos, resultando en un impacto en la parte posterior del sospechoso. Un disparo en cualquier parte del cuerpo -cuando el sujeto se mueve- depende de la trayectoria del oficial, el arma y el sujeto reuniéndose en un punto diminuto de tiempo en el espacio. A menos que una persona esté inmóvil y ejecutada por los disparos de un tirador que está parado, el punto de entrada de una sola herida de bala tiene capacidad limitada para revelar los movimientos exactos en una situación dinámica. El resultado forense en su conjunto debe ser examinado cuidadosamente. 3. "¿Qué diferencia hace si el oficial que contacta a una persona que cometió un delito no sabía nada al respecto?" Si la persona que está siendo contactada por la policía sabe que él es un sospechoso en alguna actividad criminal, podría tener un significativo efecto en su comportamiento hacia ese oficial. La investigación sobre el miedo, la agresión y la frustración se remonta a la década de 1930 - el vínculo entre esas emociones y comportamientos ha sido observado por organizaciones tales como el Servicio Nacional de Referencia de Justicia Criminal31. El vínculo frustración-agresión se mostró claramente en el video de vigilancia en el cual Brown empujó varias veces al empleado que trató de impedir su hurto de cigarros. Poco importa que el oficial no haya tenido conocimiento del crimen que tuvo lugar 10 minutos antes de que contactara a Brown y su cómplice. Brown sabía muy bien sobre ese crimen y habiéndolo contactado el oficial en un lapso tan corto tras el incidente podría muy bien haber afectado las decisiones que tomó durante ese contacto. 4. "¿Cómo va a ser justo disparar a un adolescente desarmado?" Si una persona es de 1,90 metro de alto y pesa casi 130 kilogramos, la estatura física sola de esa persona le da la capacidad potencial de dañar a otra. En Missouri, la cifra más reciente total de asesinatos anuales es de 386 - de esos, 106 fueron cometidos sin arma de fuego. Según el FBI, en cada año desde 2008 a 2012, en los Estados Unidos más personas fueron asesinadas utilizando sólo las manos y los pies que asesinadas por personas armadas con fusiles de asalto. 31 National Criminal Justice Reference Service.


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ARMA 2008 2009 2010 2011 2012 Rifles 380 351 367 332 322 Manos, puños, pies, etc. 875 817 769 751 678

Un oficial de policía sabe que cada llamada se debe a un "hombre con un arma", porque si él o ella pierden su arma u otro equipo, la situación puede volverse mortal para el oficial. Si la investigación concluye que el oficial desarticulaba el agarre de un arma, el uso de la fuerza mortal es bastante razonable. 5. "¿Qué pasa con todos esos disparos de la policía?" Según los datos de la Oficina de Estadísticas desde 2008, hay casi 765.000 policías jurados empleados en casi 18 mil agencias estatales y locales de aplicación de la ley en EE.UU. ¿Cuántas personas son muertas a tiros por los agentes cada año en EE.UU.? Según datos del FBI, 410 estadounidenses fueron justificadamente muertos por la policía. Para poner esto un poco más en contexto, considere que los civiles que actuaron en defensa propia mataron a 310 personas durante ese mismo período. La Oficina de Estadísticas de Justicia dice que 1 de cada 5 personas mayores de 12 años de edad tiene un contacto personal cara-a-cara con la policía durante el año de estudio para un total de 45 millones de contactos. El uso de la fuerza fue reportado por los arrestados en menos del uno por ciento de esos contactos. De esos que reportaron el uso de la fuerza, la mayoría auto-reportó que habían participado en al menos uno de los siguientes: • Amenazar al oficial. • Interferir con el oficial en el arresto de otra persona. • Discutir con el oficial. • Atacar al oficial. • Posesión de un arma. • Bloquear a un oficial o interferir con su movimiento. • Tratar de escapar o evadir al oficial. • Resistirse a ser esposado. • Incitar a los espectadores a involucrarse. • Tratar de proteger a otra persona de un oficial. • Beber o usar drogas en el momento del contacto. 6. "¿Por qué la policía está militarizada?" El Departamento de Policía de Ferguson no tiene vehículos tácticos blindados en su inventario y ningún equipo de SWAT. Ningún equipo extraordinario estaba en uso por el oficial que le disparó a Michael Brown. El equipo especial utilizado en Ferguson fue puesto en uso sólo después de la respuesta violenta a la noticia cuando el tiroteo se hizo evidente. Afirmar que el equipo y los vehículos causaron la violencia invierte la secuencia de causa-efecto. El peligro era obvio y el equipo apropiado fue traído para hacer frente a la situación. Fuera de un contexto de control de masas, hay muchas razones por las que la policía necesita lo que algunos definen como equipo "militar". Si hay un tiroteo en una escuela y hay un niño herido en el parque infantil mientras que el tiroteo aún está activo, ¿quiere usted que su departamento de policía tenga la capacidad de rescatar al niño? Si es sí, eso significa que el departamento necesitará un vehículo blindado. ¿Se puede imaginar una circunstancia en la que un policía sería agredido por alguien que le tira un ladrillo a él o ella o trata de golpearlo en la cabeza? Si es así, ellos necesitan un casco. ¿Habría alguna vez un momento en que un oficial estaría en un ambiente de


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materiales peligrosos y necesitaría una máscara de respiración? Entonces ellos necesitan máscaras de gas. No estamos quitando los camiones de bomberos porque son demasiado grandes o casi nunca utilizan al máximo la capacidad de lucha contra el fuego - la mayoría de las llamadas de servicio de incendios son de naturaleza médica. Es el mismo principio. Hay un montón de preguntas relacionadas con la situación Ferguson que aún no tienen respuestas y nadie debe pretender saber exactamente qué sucedió el 9 de agosto. Pero es importante que eduquemos al público acerca de cuestiones tales como el uso de la fuerza, el uso de equipo especializado y la dinámica del desempeño humano durante los incidentes de alto estrés. Comencemos en serio a tener esas conversaciones con nuestros ciudadanos.

Examinando cuestiones de tiempo en el tiroteo de Ferguson 32 Dejar fuera todo el llamado análisis de los medios de comunicación del caso del oficial implicado en un tiroteo en Ferguson, es un examen real de la ciencia del desempeño humano durante un evento en rápido desarrollo

y de elevado estrés

Doug Wyllie

29 de agosto de 2014

Nota del Editor: Debido a que no tengo acceso a ninguna información que está siendo examinada por el gran jurado en los disparos a Michael Brown, de 18 años de edad, en Ferguson (Missouri), estoy aquí para empezar a abordar algo de la física, la fisiología y la psicología de este tipo de incidente - no el incidente en sí. No sé cuántos disparos se hicieron en total. No sé cuánto tiempo duró este evento. No sé si la supuesta grabación de audio del incidente es exacta debido a que el FBI no ha emitido aún su análisis de la veracidad de esa grabación. En este espacio y otros artículos posteriores, haré referencia a Ferguson cuando sea relevante o pertinente al discurso público actual sobre ello, pero principalmente examinará la ciencia de la actuación humana y la dinámica de los encuentros de fuerza letal en general.

Es hora de hablar del tiempo. Hay un montón de expertos - que saben muy poco sobre el trabajo policial en general y mucho menos del oficial implicado en el tiroteo de Ferguson en particular - cacareando sobre el número de disparos hechos esa tarde de agosto en Ferguson33. "¿Cómo es que el oficial tuvo que disparar tantos tiros?" y "¿Cómo puede ser que el oficial aun sentía miedo por su vida en el sexto disparo?" Deje fuera todo el llamado análisis de los medios de comunicación del caso del oficial implicado en un tiroteo en Ferguson - es un examen real de la ciencia del desempeño humano durante un evento en rápido desarrollo y de elevado estrés. Para obtener respuestas con respecto a la ciencia del uso de la fuerza en un evento, no necesitamos mirar más allá de la investigación del Instituto de Ciencias de la Fuerza, por lo que hace poco hablé con el Dr. Bill Lewinski, Director Ejecutivo del FSI.34 El primer tópico en esa discusión fue la cuestión del tiempo. De parte del oficial, hablamos del tiempo para iniciar una respuesta, tiempo para concretar una respuesta y tiempo para detener una respuesta. Hablamos del tiempo que le toma a una persona para mover sus brazos, cubrir una distancia de dos metros, así como el tiempo que le toma para caer al suelo a una persona que ha sido disparada fatalmente.

32 WYLLIE, Doug. Examining issues of time in the Ferguson shooting. PoliceOne Editor in Chief. 10-43: Be Advised... 29 de agosto de 2014. http://www.policeone.com/bill-lewinski/articles/7510745-Examining-issues-of-time-in-the-Ferguson-shooting/?utm_source =newsletter&utm_ medium=email&utm_campaign=Exclusive_1&nlid=7508153. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc. 33 La población en Ferguson era de 21.203 (censo de 2010): 29,3 % blancos y 67,4% afroamericanos. 34 FSI: Force Science Institute.


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Tiempo para moverse. En un estudio realizado por el Instituto de Ciencias de la Fuerza en 2013, se descubrió que la persona promedio puede cubrir la distancia de dos metros - sin llegar adelante - en dos tercios de un segundo. Si una persona incluso está caminando desde tal distancia hacia un oficial, estamos hablando de fracciones de segundo antes que la brecha se cierre. Las conclusiones de ese estudio del FSI nos ayudan a entender mejor la vulnerabilidad de un oficial ante un delincuente a distancias relativamente cercanas armados con un arma blanca, un objeto contundente o las manos, los pies y los puños - como fue el caso en Ferguson. Es importante señalar aquí que Michael Brown era de 1,93 metros de alto y pesaba apenas por debajo de 136 kilogramos. Había estado en una lucha violenta sólo diez minutos antes de su enfrentamiento mortal con el Oficial Darren Wilson (y al parecer asaltó al oficial), lo que indica el nivel de amenaza que el oficial pudo haber percibido de Brown en el momento de los disparos.

La policía y los respondedores del Servicio de Emergencias Médicas atienden a Michael Brown en la escena del oficial involucrado en un tiroteo en Ferguson (Misuri) donde Brown murió en un enfrentamiento con el Oficial Darren Wilson. Deje fuera todo el llamado análisis de los medios de comunicación del caso del oficial implicado en un tiroteo en Ferguson - es un examen real de la ciencia del desempeño humano durante un evento en rápido desarrollo y de elevado estrés. "Otra cuestión es la movilidad de un miembro humano", dijo Lewinski. "Un brazo puede moverse desde arriba de la cabeza hacia abajo al costado de una persona en 14/100 de un segundo. Un cuerpo puede moverse desde una posición erguida hasta encorvarse en un ángulo de 45 grados en medio segundo o menos. Eso es fácil de hacer y fácil de demostrar; lo tenemos en nuestra investigación". Por cierto, ese único punto a apuntar en el brazo es una de las razones (entre muchas) de por qué cualquier argumento acerca de tener oficiales que "disparan a herir" es engañoso - un brazo puede moverse tan rápido que es casi imposible golpearlo intencionalmente. Así que por favor ponga esa línea ridícula de "razonamiento" a descansar. Una persona que comienza a cargar contra otra puede hacer ese movimiento desde una posición vertical a una posición encorvada y, dada la investigación del FSI, eso puede pasar muy, muy rápidamente. Finalmente, vamos a considerar el tiempo que le toma a una persona que ha sido disparada fatalmente para caer al suelo, lo que tiene relevancia tanto para el sujeto así como para el oficial en este tipo de eventos - y pudo haber sido un factor en Ferguson.


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"Tenemos 20 ejemplos de personas que recibieron disparos y murieron inmediatamente y antes de que veamos ningún movimiento en absoluto en parte del cuerpo, la persona no se mueve durante un cuarto de segundo. Entonces, puede tomar hasta nueve décimas de segundo para que el sujeto se ponga boca abajo en el suelo"; Lewinski enfatizó que la forma en que una persona cae es crítica. Si una persona está cayendo hacia adelante, donde la cabeza es paralela al suelo - esencialmente la cara hacia el suelo y apuntada hacia el oficial - ese movimiento se puede realizar en medio segundo o menos. Volveremos a visitar este factor otra vez en la siguiente sección. Tiempo para disparar. Con la ciencia detrás de algunos de los movimientos cubiertos, los factores de los tiroteos de los oficiales deben ser considerados. Esos factores incluyen el tiempo para comenzar, la duración de los disparos - recordando que seis disparos pueden salir en uno y en un cuarto de segundo - y el tiempo para parar. "Viendo el tiempo para empezar, estamos buscando a un mínimo absoluto de un cuarto a un tercio de segundo para que un oficial reconozca la amenaza y comience a reaccionar. Si estamos buscando a alguien dando un paso adelante hacia el oficial - o incluso dando un paso atrás - significa que ha caminado ya sea hacia adelante o hacia atrás en el lapso que tarda el oficial para incluso tomar la decisión de disparar y dejando solo el tiempo para poner en práctica esa decisión. Así que podemos tener un movimiento dinámico por parte del sujeto ocurriendo dentro de un período muy breve de tiempo". Debemos recordar también que tal vez el nivel más básico de esta discusión es la cadencia de fuego del oficial de policía promedio. Según una investigación de la Ciencia de la Fuerza, el oficial promedio toma 0,25 segundos para disparar un tiro - lo que significa que una cadencia de cuatro disparos por segundo es bastante común. Si eran seis disparos y seis impactos o diez disparos con seis impactos en Ferguson, estamos hablando de un muy, muy breve período de tiempo. También debemos recordar que se necesita tiempo para dejar de tirar. Se necesita tiempo para siquiera percibir y procesar un cambio en el nivel de amenaza presentada por el sujeto. Y durante ese tiempo, un oficial -quien está comprometido en un fuego rápido y continuo, como su entrenamiento lo requiere para defender su vida- aún sigue disparando al blanco. En un informe muy reciente sobre un nuevo trabajo de investigación sobre este tópico hecho por Lewinski y el equipo del FSI, se dijo que "si un oficial fuera a tomar [meramente] 0,56 segundos para reaccionar a una señal para dejar de tirar, aproximadamente tres disparos [extra] podrían ser hechos por el oficial como una secuencia automática después que la señal para parar ya había ocurrido. Cuanto más lento el tiempo de reacción de un oficial, "mayor es el número de disparos [que pueden ser] despedidos antes que ocurra una parada consciente". "También toma tiempo detectar el cambio y, dependiendo de en qué se centró un oficial, puede o no detectar inmediatamente el cambio del sujeto", me dijo Lewinski durante nuestra conversación de esta semana. Si se confirman los informes de que el Oficial Wilson había sido golpeado muy duramente en la cara - y algo de daño fue hecho a un ojo - eso tendrá un impacto en su capacidad para detectar un cambio en el nivel de la amenaza planteada por Brown. Si usted tiene daño facial significativo, junto con el hecho de que usted está involucrado en una pelea físicamente exigente, esos factores pueden aumentar el tiempo que se necesita para detectar cualquier cambio en el nivel de amenaza del sujeto. "Ciertamente alguien pudo moverse y caer al suelo; su habilidad para detectar el cambio y tomar una decisión para parar podría tomar más tiempo que el que toma ese sujeto para pasar de una posición vertical a una posición horizontal, casi boca abajo", explicó Lewinski. Volviendo a Ferguson, esto podría explicar cómo el disparo mortal entró en la parte superior de la cabeza de Brown, como surge de la autopsia públicamente liberada encargada por la familia.


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"Cuando mira a los tiempos de tiro - con una duración en alguna parte en el reino de un segundo a un segundo y medio - con múltiples disparos y movimiento dinámico de un cuerpo, incluso avanzando hacia adelante, va a tener algunos ángulos inusuales de colocación del tiro, incluyendo en la cabeza", dijo Lewinski. "No estamos diciendo que eso ocurrió en Ferguson, pero los factores del movimiento humano y del tiempo necesitan ser considerados", concluyó Lewinski. Nota: El siguiente artículo apareció originalmente en PoliceOne, el recurso en línea para Aplicación de la Ley, y se reproduce con autorización del equipo editorial de PoliceOne. Visite www.PoliceOne.com para acceder a los artículos, información y recursos que ayudan a los oficiales de todos los Estados Unidos a proteger a sus comunidades y mantenerse a salvo en las calles.

Cómo pueden ayudar los policías a los ciudadanos a entender mejor el uso policial de la fuerza 35 El servicio policial -ya una profesión peligrosa- se vuelve así cada vez más debido a la retórica anti-policial y a

los reportes imprecisos en los casos de uso de la fuerza


3 de septiembre de 2014 Imagínese la siguiente situación hipotética: Un jefe en una conferencia de prensa declara, "Señoras y señores os he reunido aquí hoy, porque los casos de uso policial de la fuerza son rutinariamente mal manejados por los periodistas y los líderes de la comunidad. Es mi creencia de que los periodistas y los líderes de la comunidad pueden hacer un mejor trabajo en esta área si tuvieran al menos un conocimiento básico de lo que es un uso justificado de la fuerza". Hay tres cosas que el público necesita saber acerca de los contactos con la policía. 1. Sea cortés. 2. Sea cooperativo. 3. Sea obediente... Criminalidad, no color. Es importante para usted poder transmitir al público que los policías persiguen la criminalidad, no el color. Los oficiales deben tener una razón para hacer contacto con un individuo. Ellos deben ser capaces de explicar más adelante en la corte que tenían ya sea una sospecha razonable o una causa probable para creer que el individuo había cometido o estaba a punto de cometer un delito. El hecho es que más del 95 % de los contactos policiales se manejan sin elevarse por encima del nivel de diálogo. Esto es porque la mayoría de la gente es cooperativa y conciliadora. Esta es la manera que debe ser, porque es ilegal resistir y/u obstruir a un oficial mientras desempeña su deber. Si una persona no está de acuerdo con una parada o un arresto, el lugar para discutir el caso vigorosamente es en un tribunal, no en la calle. Opciones de fuerza. Cuando un oficial encuentra resistencia, los oficiales están entrenados para usar un nivel de fuerza justificada por la amenaza específica o la resistencia que se les presenta. Por ejemplo, si una persona se aleja de un oficial que hace un arresto y coloca esposas, "No me toques", el oficial puede optar por aplicar una suspensión de cumplimiento a esa persona. Esas suspensiones están diseñadas para convencer a la persona para que cumpla. Cuando un sospechoso se resiste activamente, el oficial también puede elegir desconectarse y desplegar un TASER o utilizar gas pimienta para superar esa resistencia. Podría

35 MARCOU, Dan. How cops can help citizens better understand police use of force. PoliceOne. Blue Knights. http://www.policeone. com/Officer-Safety/articles/7526699-How-cops-can-help-citizens-better-understand-police-use-of-force/?utm_source= newsletter &utm_medium=email&utm_campaign=Exclusive_1&nlid=7525828. 3 de septiembre de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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sorprender a algunas personas el descubrir que cuando un sospechoso golpea a un oficial o incluso si actúa como si él o ella estuvieran a punto de golpear a un oficial, ese oficial puede legalmente golpear con lo que llamamos armas personales corporales. Los oficiales pueden golpear, patear o golpear con los codos y/o rodillas para defenderse y/o proceder a su arresto. Los oficiales también pueden optar por dar golpes con el bastón a áreas específicas del cuerpo. Los oficiales pueden incluso golpear a un sospechoso más de una vez si con una sola vez no se detiene la amenaza del sospechoso. Si un sospechoso trata de golpear a un oficial, no se sorprenda cuando ese oficial devuelve el golpe. Uso de la fuerza letal. Nunca he oído a un oficial decir al principio de un turno, "Espero llegar a matar a alguien hoy". Si bien la gran mayoría de los oficiales nunca disparó sus armas en el cumplimiento de su deber, algunos tienen que hacerlo. Cuando un oficial enfrenta la amenaza de muerte o lesiones corporales graves - o alguien que ellos han jurado proteger se enfrentan a la misma amenaza inminente se justifica que un oficial haga uso de la fuerza letal. Hay tres conceptos erróneos generalmente arraigados sobre la fuerza letal que continuamente surgen y deben ser abordados: 1. Un oficial puede disparar a un hombre desarmado bajo ciertas condiciones. Un oficial puede tener que utilizar la fuerza letal contra un hombre desarmado que es más grande, más fuerte, y/o intenta desarmar al oficial, por ejemplo. En el caso de un sospechoso, que golpea a un oficial hasta el punto de que él o ella pueden sufrir la muerte o lesiones corporales, el uso de fuerza letal es defendible. Los policías no tienen que soportar una severa paliza en el cumplimiento de su deber. Otros factores que podrían justificar la elección de un oficial para utilizar la fuerza letal son el grado de lesión de ese oficial, el agotamiento o el número de adversarios con los que confronta el oficial. 2. Un oficial puede, en ciertas condiciones, disparar a alguien en la espalda. Si ve que un sospechoso está huyendo y su escape presenta una amenaza inminente de muerte o grave daño corporal para la comunidad en general, el uso de la fuerza letal puede ser justificado. En algunas ocasiones una bala podría entrar a través de la parte posterior, a causa de la dinámica de la circunstancia. 3. Los oficiales no son - y nunca serán - entrenados para disparar a herir o disparar a las armas en las manos de los sujetos. Esas no son opciones realistas. Las armas no son lo suficientemente precisas como para intentar deliberadamente esas cosas cuando hay vidas en juego. La línea de fondo. De 2003 a 2012, 535 oficiales fueron asesinados en el cumplimiento de su deber en este país. Otros 580.000 resultaron heridos en el cumplimiento del deber. Me temo que el servicio policial - que ya es una profesión peligrosa - es cada vez así, a causa de la retórica anti-policía y de los reportes imprecisos en los casos de uso de la fuerza. Si cada persona contactada por los oficiales permaneciera cortés, cooperativa y obediente, nunca habría necesidad de emplear la fuerza. La realidad es, sin embargo, que aunque la mayoría de la gente va a cooperar, algunas personas se resisten al arresto. No es fácil para un policía solitario llegar a un sospechoso que se resiste a ser esposado. Si parece rudo, es porque es rudo. El trabajo policial es un deporte de contacto, pero para los policías no hay un segundo lugar. Si alguien en el público ve a un policía que lucha con un sospechoso y decide no darle una mano, al menos dele el beneficio de la duda. Los policías no están pidiendo a los ciudadanos que entren en la arena con ellos - ellos al igual que la tribuna dejan de aplaudir para el otro equipo. La única manera de conseguir que estas tres ideas muy simples lleguen nuestras comunidades es que usted tome esta información y la comparta, con sus dos compañeros oficiales y con los miembros de la comunidad.

Siete verdades sobre el incidente de Ferguson (y otros como el) 36 Usted se unió a esta profesión por una razón, sabiendo que a veces puede llegar a ser tosca - usted es lo suficientemente fuerte como para elevarse por encima de todo y salir y hacer el deber que juró cumplir

36 Duane Wolfe. 7 truths about the Ferguson incident (and others like it). PoliceOne. The Warrior's Path. September 12, 2014. http://www.policeone.com/use-of-force/articles/7556809-7-truths-about-the-Ferguson-incident-and-others-like-it/?utm_source= newsletter&utm_medium=email&utm_campaign=Exclusive_1&nlid=7553896. Extraído: 13 de septiembre de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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El autor. En 2014, Duane Wolfe se retiró de su carrera como Oficial de Paz de Minnesota después de más de 25 años de servicio. Fue patrullero, sargento, S.R.T., Instructor de Uso de la Fuerza y Armas de Fuego y hoy está empleado en el Departamento de Policía de Prairie Parkers. Es un instructor de tiempo completo en el Programa de Aplicación de la Ley en Alexandria Technical College, Alexandria, Minnesota. Obtuvo un Bachillerato en Ciencias en Justicia Criminal de la Universidad Estatal de Bemidji y una Maestría en Educación de la Universidad Estatal del Suroeste. Ha publicado anteriormente artículos en Calibre Press e IALEFI y sirvió en el Consejo Asesor para el libro del Teniente Coronel Dave Grossman, On Combat. Como los medios de comunicación siguen informando sobre los eventos en curso en Ferguson, los policías siguen sintiendo frustración e ira por cómo es retratada nuestra profesión. Aquí hay siete verdades acerca de la situación que puede servir para poner las cosas en perspectiva y permitirle centrarse en lo importante. 1. Habrá más. Conforme los policías usen la fuerza para arrestar, habrá incidentes que capturen la atención de los medios y del público a nivel local, nacional e internacional. No hay nada que usted, su departamento o la profesión puedan hacer para cambiar eso. Usted tiene el deber de prepararse mentalmente y físicamente. Conozca la ley y esté dispuesto a aplicarla. Entrene diligentemente y con propósito. Algunos oficiales serán vencidos y usarán incidentes como el de Ferguson para -por miedo- trabajar menos. Algunos tendrán miedo de usar la fuerza justificada y razonable cuando sea necesario. Lo que hagan los medios, los políticos y el público está fuera de su control. Preocúpese por lo que usted puede controlar. 2. La verdad saldrá con el tiempo. Al escribir estas líneas, la investigación final no ha sido completada. Parte de la información ha salido de una variedad de fuentes. Parte de esa información, entonces, ha sido refutada. Como un oficial de policía usted sabe dos cosas: a. Todos los demás pueden hablar de un caso excepto la policía y eso le da a todo el mundo una

oportunidad para contar su "versión" de la historia. b. Eventualmente tendremos nuestra oportunidad en un proceso legal. Esto nunca cambia, pese a la gravedad del delito o la cantidad de atención de los medios que ha ido acumulando. La verdad va a salir con el tiempo y tendremos que estar preparados para hacer frente a los resultados - buenos o malos. 3. El público escuchará a quienes les hablan. Los medios de comunicación saben que no podemos revelar información y que conducimos investigaciones antes de llegar a conclusiones, pero eso no impide que les peguen una cámara en la cara a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y "exigir respuestas". ¿Por qué? Porque se ve bien en cámara y le da a sus espectadores algo que ver. Los medios de comunicación siempre tienen que alimentar a la "máquina de la información". Cuanto más breve la atención de las personas, más a menudo debe ser alimentada la máquina. En Ferguson, los medios de comunicación se centraron en entrevistar a las personas que querían hablar de la mala conducta policial y el racismo en la primera semana y la siguiente. Cuando eso se vuelve viejo, cambian a la gente de Ferguson que dijo que no tenía ningún problema con la policía o el racismo en la ciudad y querían que los agitadores se fueran porque todo lo que estaban haciendo estaba causando problemas a su pueblo. Tener algo que informar, al parecer, es más importante que esperar los hechos.


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4. Los medios de comunicación, políticos y activistas de la comunidad jugarán siempre para la muchedumbre. Mientras haya una multitud - o una cámara de televisión - habrá quienes se apresuren a ser una parte de ella. Algunos corren para impulsar sus agendas, algunos sólo para ser vistos. Es la naturaleza humana y no vamos a cambiar eso. Solo recuerde, ellos son políticos. 5. El público no entiende el uso de la fuerza, menos de la fuerza mortal. Una de las cosas que podemos hacer es tratar de educar al público sobre nuestros puestos de trabajo antes de que ocurran esos incidentes. Ese es el trabajo de su departamento. Tenga en cuenta que usted también se comunica a través de los medios. Varios oficiales ya están en problemas por sus publicaciones. Recuerde que usted es un profesional en servicio, fuera del servicio y en línea. Tuve una serie de debates sobre los medios sociales con desconocidos que parecían sorprendidos de mis respuestas educadas con la intención de tratar de educarlos acerca de la aplicación de la ley versus a un policía lanzando una diatriba emocional, sesgada, profana y fuera de control, lo que creo que ellos esperaban. ¿Acaso puedo cambiar sus mentes? Quizá sí, quizá no. Pero ciertamente no me encontré con su expectativa de un "gato con botas matón" enojado y mal hablado. 6. Los buenos Oficiales de Policía continuarán dando buena pelea, pese a todo lo demás. Independientemente del resultado de los disparos de Ferguson -o cualquier otro incidente de uso de la fuerza que llame la atención de los medios- aquí está mi consejo: Ponte los pantalones de niño grande, supéralo y sigamos adelante con la realización de nuestro trabajo en la forma en que debe ser hecha. Sabemos que tenemos que mejorar en nuestra profesión, nuestros departamentos y nosotros mismos. ¿Qué está haciendo para arreglar lo que se puede arreglar? No empiece a aflojarse usando esos tipos de incidentes como excusa: "¡Yo les mostraré! ¡Ni siquiera voy a hacer mi maldito trabajo!" ¿Por qué? Porque entonces ellos ganan. Los delincuentes aman a los policías perezosos. Comprenda que aunque esos incidentes ocurren de vez en cuando, las chances de que le ocurran a usted son pequeñas, pero también esté preparado. Si usted está involucrado en una situación de fuerza letal, esté preparado para aislarse de los medios de comunicación y de los amigos hasta que la situación haya terminado. Una llamada anónima se identificó como un amigo del oficial Wilson y dio su versión de lo sucedido. En mi opinión eso no debió haber ocurrido. Mientras que todos probablemente se alegrarán un poco cuando la "verdad" salga, la única gente con la que debería hablar después de un uso de la fuerza mortal es con su abogado y con quienes no pueden ser llamados a declarar en el juicio: clero, consejeros, médicos y cónyuges. 7. Usted no puede controlar lo que sucede, sólo cómo elija reaccionar. Supérelo y siga adelante. La frustración, la ira y un sentimiento de impotencia son comunes en esas situaciones. Son respuestas emocionales legítimas, pero recuerde que usted tiene un trabajo que hacer. Un trabajo que, pese a lo que los medios nos dicen a veces, es valioso, honorable y necesario. Se unió a esta profesión por una razón, sabiendo que a veces puede llegar a ser tosca - usted es lo suficientemente fuerte como para elevarse por encima de todo y salir y cumplir con su deber.

Estudio de Caso: ¿Por qué la distancia de los sujetos sentados aumenta la seguridad del oficial? 37 El mayor factor que afecta la capacidad de un agente para hacer frente a un ataque lanzado desde una

posición sentada es la distancia con el sospechoso - no la posición en sí misma.

Duane Wolfe

37 Wolfe, Duane. Case study: Why distance from seated subjects increases officer safety. PoliceOne. The Warrior's Path. 15 de septiembre de 2014. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/7564315-Case-study-Why-distance-from-seated-subjects-increases-officer-safety/?utmsource= 7563996&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1LeftMore&utm_campaign=P1Mem ber. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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Desde hace algún tiempo, ha habido discusión sobre hacer paradas de tráfico más seguras para el oficial teniendo a los sujetos sentados en la acera. El supuesto es que tenerlo en una posición sentada hace que al atacante le falte más tiempo para llegar al oficial y, por lo tanto, más tiempo para que el oficial reaccione.

Dra. Alexis Artwohl 38 Recordando el consejo de la Dra. Alexis Artwohl - para investigar nuestras conclusiones acerca de cómo hacemos nuestro trabajo - me decidí a someter la idea a prueba. Me puse a comparar ciertas posiciones, buscando saber cuál proporcionaría una mayor seguridad que otras. He utilizado la Táctica de Almacén (Tactical Warehouse) en el Programa de Aplicación de la Ley del Colegio Comunitario y Técnico de Alexandria como el sitio del test. La instalación cuenta con una escena callejera completa con acera, bordillo y una calle de dos carriles. Medí un metro y medio desde la acera y coloqué una mesa con un amortiguador de impacto sosteniendo un tiempo PACT a la altura de la cintura. Una bofetada en el temporizador es suficiente para detenerlo. (He utilizado el mismo concepto para investigar esta evaluación de tácticas policiales).

Duane Wolfe tuvo 42 estudiantes encargados de hacer cumplir la ley levantándose desde varias posiciones

sentadas para demostrar que no era la posición lo que importaba - era la distancia entre el sujeto y el oficial. (Foto cortesía de Duane Wolfe)

Luego tuve 42 alumnos de la aplicación de la ley -41 varones y una mujer- cuyas edades eran de entre 19-25 participando en la prueba. Cada estudiante se sentó en el bordillo y trató de avanzar lo más rápidamente posible para golpear el temporizador en un tono audible desde el temporizador. Los estudiantes fueron evaluados a partir de tres posiciones: piernas rectas, piernas rectas con los tobillos cruzados y piernas dobladas con los tobillos cruzados. A cada estudiante se le dieron tres intentos en cada una de las posiciones - siempre y cuando no hubiera ningún problema con el temporizador - y los tiempos fueron promediados. Los estudiantes vestían ropas de civil y se les dijo que usaran el calzado que normalmente llevaban - desde calzado deportivo hasta botas de vaquero.

38 ILEETA. http://ileeta.org/alexis-artwohl/. Consulta: 25 de septiembre de 2014.


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Comparación de tres posiciones sentadas. El pensamiento prevaleciente había sugerido que para proporcionarle al oficial un tiempo máximo de respuesta a un ataque, un sujeto debe estar sentado con las piernas rectas y los tobillos cruzados. A continuación se enumeran los tiempos promedio (en segundos) para cada una de las posiciones.

Posición Promedio Más rápido Más lento Piernas rectas 1.34 1.14 1.97

Tobillos cruzados 1.35 1.02 2.16 Piernas cruzadas 1.30 0.90 1.77

En cuanto a los tiempos promedios, la posición de los tobillos cruzados brinda el promedio de tiempo más largo para moverse un metro y medio, en comparación con las otras dos posiciones. Sin embargo, se dará cuenta de que proporciona sólo un 0,01 de segundo de tiempo sobre la posición con las piernas rectas y sólo 0,05 segundos de ventaja sobre la posición con las piernas cruzadas. A pesar del cambio de posición, sólo hay un 5/100 centésimas de un segundo de diferencia en el tiempo promedio de movimiento. Pienso que en esta pequeña diferencia es importante de entender que, seleccionar una posición específica brinda una diferencia casi insignificante en los tiempos de los movimientos basado en los tiempos medios de reacción humanos. Consideraciones adicionales. Hay varias cosas importantes a considerar en el estudio, específicamente el método utilizado para lanzar el ataque como una posible señal de pre-ataque, los métodos de ataque y sus tiempos y una comprensión sobre lo que los tiempos ilustran. Ningún video fue tomado del proyecto para un análisis en profundidad, el análisis cuadro por cuadro no es posible, pero a medida que la persona conduce la investigación -y después de haber visto más de 370 intentos- me di cuenta de varias cosas: 1. Los sujetos siempre colocan una o ambas manos hacia abajo en la acera como un medio para usar la parte superior de su cuerpo para empujar hacia adelante hacia su meta.

a. Las manos planas apoyadas en la acera cerca de la cadera podrían ser una señal de pre-ataque. 2. A los estudiantes no se les dieron instrucciones sobre cómo lanzar su "ataque". Sin embargo, me di cuenta que ellos tomaron tres formas: pararse sobre los pies, subir a un pie mientras se arrodillan sobre la otra pierna y mantenerse abajo sobre ambas rodillas.

a. Aquellos estudiantes que se levantaron sobre sus pies generalmente tuvieron tiempos sobre 1,30 y eran los más lentos hasta la meta. Lo hicieron desde las cuclillas a una completa posición de pie.

b. Aquellos que se impulsaron sobre un pie mientras mantenían una rodilla a tierra generalmente tuvieron tiempos entre 1,10 y 1,30. c. Aquellos sujetos que sólo se pararon hacia adelante con sus manos doblando sus piernas, permaneciendo sobre ambas rodillas, generalmente tuvieron los tiempos más rápidos. Usar este método contra alguien justo en frente de ellos les permitiría un ataque bajo a las piernas entre la rodilla y el nivel de la ingle, una posición desde la cual sería muy difícil defenderse.

3. El tiempo real que se necesitaría para lanzar un ataque desde esta posición sería más corto que los tiempos registrados. En el estudio el "ataque" fue iniciado por el sonido de un pitido. Los tiempos registrados incluyen el tiempo que tomó a los sujetos oír la señal y responder a ella. En un asalto, no habría tiempo de retraso causado por la necesidad de escuchar y responder a una señal de un ataque que sería lanzado instantáneamente dando lugar a tiempos de ataque rápidos. El tiempo medio de respuesta a una señal audible es desde 0,14 hasta 0,16 segundos.


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Posición Promedio Más rápido Más lento Piernas rectas 1.19 0.99 1.82

Tobillos cruzados 1.20 0.87 2.01 Piernas cruzadas 1.15 0.75 1.62

4. Los tiempos indicados son promedio. Algunas personas eran más rápidas. Algunas personas eran más lentas. En la calle nunca sabrá dónde estará su sospechoso en la escala. Si compara este estudio y mi estudio anterior, algunas personas se mueven más rápido desde la posición sentada a un metro y medio que otras en una posición de pie. La línea de fondo. Las conclusiones que podemos extraer de este estudio son que la distancia desde un sospechoso -no una posición sentada específica- es la que tendrá el mayor efecto sobre el tiempo de respuesta y la seguridad del oficial. Una distancia de un metro y medio entre la posición sentada del sospechoso y el oficial no brinda mucho tiempo de reacción, por lo que se sugiere una mayor distancia. Otra sugerencia es que los agentes no se paren directamente en frente del sospechoso, en vez de ello, párense en un ángulo que requiera al sospechoso que gire en su dirección - lo que añade tiempo a su ataque.

4 revelaciones del informe filtrado de la autopsia de Michael Brown 39 El hecho de que el informe fue filtrado en realidad puede ser la pieza más interesante de la historia

Doug Wyllie

22 de octubre de 2014 Se reveló el miércoles que el informe de la autopsia de Michael Brown fue filtrado al "St. Louis Post Dispatch". Claro, es una lectura interesante, pero el hecho de que el reporte fuera filtrado del todo en realidad puede ser la pieza más interesante de la historia. El periódico no dijo dónde obtuvo los informes de la autopsia y los toxicológicos que lo acompañan - la oficina del forense dijo que no dará a conocer oficialmente los documentos hasta que la investigación se haya completado. Como columnista de PoliceOne Dan Marcou dijo, "no recuerdo en toda mi carrera haber visto nunca un caso en el que cuatro agencias - locales, del condado, estatales y federales - hayan sido involucradas en un tiroteo con un oficial implicado en los que han permitido tanto rumor, desinformación y conjeturas desinformadas para dictar la narrativa. ¿Ahora tenemos un informe de la autopsia que se filtró? Estamos abriendo nuevos caminos aquí y no en el buen sentido". El documento nos dice un poco más sobre el encuentro el 9 de agosto y parece validar de lleno la historia del Oficial Wilson. Aquí hay cuatro revelaciones del informe filtrado.

Michael Brown

39 WYLLIE, Doug. 4 revelations from the leaked Michael Brown autopsy report. PoliceOne Editor in Chief. 10-43: Be Advised... 22 de octubre de 2014. http://www.policeone.com/ferguson/articles/7701775-4-revelations-from-the-leaked-Michael-Brown-autopsy-re port/?utm_source=7696599&utm_medium=email&utm_content=analysisFullStory&utm_campaign=P1MemberOld&nlid=7696599.


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1. Respalda las declaraciones recogidas del oficial Darren Wilson sobre el incidente. El Post Dispatch tuvo "dos no expertos no implicados directamente en el caso" mirando el informe y sus conclusiones no son sorprendentes: la evidencia apoya la declaración del oficial Darren Wilson de que había un altercado significativo en el coche y que Brown estaba tratando de agarrar el arma de Wilson. Recordemos que Wilson había declarado a los investigadores que Brown había luchado por su pistola dentro del patrullero y que había disparado el arma dos veces, impactando a Brown una vez en la mano.

Dra. Judy Melinek, patóloga forense Dr. Michael Graham

La Dra. Judy Melinek -una patóloga forense en San Francisco- le dijo al Post Dispatch que la autopsia "es compatible con el hecho de que este hombre está tratando de llegar a la pistola, si tiene material particulado de pólvora en la herida. Si él tiene su mano cerca de la pistola cuando se dispara, él está yendo hacia el arma del oficial". El Dr. Michael Graham -un médico forense de San Luis que no es parte de la investigación oficial- dijo al Post Dispatch que "alguien tiene una lesión que le arrancó la piel y la dejó en el coche. Eso encaja con todo lo que salió. Hay sangre en el coche, ahora piel en el coche, que muestra que algo sucedió allí". Además, Melinek agregó que el testimonio de que Brown recibió un disparo mientras huía de Wilson, o con las manos en alto, se desmorona cuando se coloca contra las pruebas contenidas en el informe de la autopsia. "Ella dijo que Brown estaba enfrentando a Wilson cuando Brown recibió un tiro en la frente, dos tiros en el pecho y un disparo en la parte superior del brazo derecho. La herida en la parte superior de la cabeza de Brown indicaría que estaba cayendo hacia adelante o en una posición lanzada hacia el tirador; el tiro fue instantáneamente fatal", le dijo a Post Dispatch. Curiosamente, la narrativa es precisamente la que he descrita como el escenario más probable cuando escribí "Examinando las cuestiones de tiempo en el tiroteo Ferguson". 2. Destaca la importancia de las manos (y en un modo aún no discutido ampliamente). Se ha hablado mucho en los medios sobre los documentos filtrados que detallan una herida de bala en la mano de Michael Brown. El colaborador de PoliceOne Moe Greenberg dijo: "¿Es significativa la herida de bala en la mano de Michael Brown? Sí. Pero también lo son las otras heridas que recibió. Cada una de ellas se convierte en parte del incidente entero - el cuadro grande. No pretendo minimizar su importancia, pero el informe de la autopsia del condado de St. Louis y el testimonio del médico forense serán sólo una de muchas piezas del rompecabezas de Michael Brown a ser consideradas", dijo Greenberg. Esta sola línea en los documentos filtrados sobre las manos puede ser una de las más importantes:

"Las manos del fallecido fueron ensacadas con bolsas de papel para guardar cualquier rastro de evidencia".

Por supuesto que sí. Durante semanas he estado esperando pacientemente cualquier noticia sobre el estado de las manos de Brown. Más específicamente, si los nudillos mostraron signos de inflamación y otros daños típicamente incurridos en un altercado con puños. Este muy probablemente será el próximo documento que se filtrará... 3. Se trata de la totalidad de la evidencia (como debe ser). El hecho es, mucho más ha de ser revelado y aún los documentos filtrados son en realidad dos elementos entre muchos, muchas piezas de evidencia e información relacionadas con el incidente - todos los cuales sin duda están siendo considerados por el gran jurado en estos momentos. "Un reporte de autopsia no es un todo-termina-allí con la 'pistola humeante' como pieza de evidencia que determina la propia culpabilidad o inocencia. El informe de la autopsia del


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médico forense y el testimonio se vuelve tan importante como el relato de un testigo dando cuenta de un incidente, la evidencia física recogida en el caso o las acciones de los oficiales de policía, investigadores y técnicos forenses en todo el curso de la investigación". Greenberg dijo además que "El caso de Michael Brown -pese a su tragedia y controversias- se encuentra al final del día de la investigación de la muerte. En este caso se trata de una investigación de la muerte que ha generado una gran cantidad de atención y, como tal, múltiples autopsias. En cualquier investigación de la muerte, el informe de la autopsia se convierte en una pieza del rompecabezas del caso "global". 4. Pone en duda el motivo detrás de la filtración. Marcou concluyó que "un elemento crítico del oficial involucrado en un tiroteo es una liberación de información precisa de un creíble Oficial de Información Pública de manera oportuna que impide que la desinformación se arraigue en el registro permanente y en la psique pública como ha ocurrido aquí. Nosotros, en la aplicación de la ley conocíamos que esta desinformación ha estado sucediendo desde que los reporteros de noticias dijeron que el agente implicado sacó a un hombre de 126 kilos por la ventana de su patrullero". Por la fuga del informe de la autopsia, alguien arriesgó su carrera para obtener la verdad. Uno se pregunta sobre el momento de la fuga. ¿Por qué ahora y no hace seis u ocho semanas? Creo que la persona que filtró los documentos estaba meramente tratando de preparar al público para lo que todos sabemos que puede venir. Yo sostengo que la fuga anuncia los resultados del gran jurado considerando los cargos contra Wilson como inminentes - y que no se presentarán cargos. Creo que el filtrador estaba (está) tratando de preservar a Ferguson de la quema hasta la tierra cuando se hizo ese anuncio. Tiendo a pensar de esa manera (léase: cínicamente) sobre este tipo de cosas. ¿Qué hay de usted?

5 mitos más comunes de uso de la fuerza desmentidos 40 Demasiados administradores, jefes, alcaldes, concejales, activistas comunitarios y miembros de los medios de

comunicación desconocen "Graham v. Connor" y mucho menos el test de 'razonabilidad' de cuatro puntos.

Duane Wolfe

Minnesota Peace Officer Departamento de Policía de Parkers Prairie

17 de noviembre de 2014 Con el caso de Ferguson aún en los titulares, he tenido la oportunidad de leer un montón de artículos y comentarios de policías e instructores policiales con respecto al uso de la fuerza. Con demasiada frecuencia, he leído comentarios sobre el uso de la fuerza por personas que todavía creen en estos cinco mitos del uso de la fuerza. Vamos a desenmascararlos de una vez por todas. Mito # 1: Los oficiales deben usar un nivel mínimo de fuerza para superar la resistencia del sospechoso. Si usted sigue esta línea de pensamiento, un sospechoso usando 100 libras de fuerza para resistirse al arresto, sólo debería permitirle utilizar 101 libras de fuerza para superarla. Le puedo garantizar que incluso si funcionara, un abogado defensor más tarde diría que la fuerza era "excesiva" y que podría haber cumplido la tarea con 100,5 libras de fuerza. Los oficiales tienen la responsabilidad de poner un sospechoso bajo control rápidamente y efectivamente.

40 WOLFE, Duane. 5 common use-of-force myths debunked. PoliceOne. The Warrior's Path. 17 de noviembre de 2014. http://www. policeone.com/Officer-Safety/articles/7812012-5-common-use-of-force-mythsdebunked/?utm_source=7820009&utm_medium= email&utm_content=exclusive1Headline&utm_campaign=P1MemberOld& nlid=7820009. Accedido: 26 de noviembre de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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Mito # 2: Usted sólo puede usar un nivel de fuerza sobre el nivel de resistencia de un sospechoso. Esta idea no tiene en cuenta las múltiples y cambiantes variables que pueden ocurrir durante cualquier situación de uso de la fuerza. ¿Qué hace si su nivel elegido de fuerza más uno no supera la resistencia del sospechoso? Acorde a este modelo una escalada lo pondría fuera de los límites del uso apropiado de la fuerza. Mito # 3: La presencia y las órdenes verbales son los dos niveles más bajos del uso de la fuerza. En la mayoría de los modelos que conozco, la presencia del oficial y las órdenes verbales son incluidas como los niveles más bajos del uso de la fuerza. En pocas palabras, si no implica contacto con un sospechoso, no es un nivel de fuerza. ¿Ha oído hablar de un caso en el que los oficiales fueron denunciados por uso irracional de la fuerza porque había demasiados oficiales en la escena o debido a lo que dijo un oficial? Mito # 4: Un "force continuum" trabaja o incluso no tiene ningún sentido. Los mitos # 1, # 2 y # 3 son los hijos de este concepto mal concebido. Si la fórmula del uso de la fuerza es una rueda, escalera, pastel o cualquier otra configuración, fallará para tratar con todos los factores necesarios para determinar qué nivel de fuerza es razonable. Si usted está usando uno de esos modelos, hágase esas preguntas: 1. ¿Permite específicamente usar un mayor nivel de fuerza a un oficial que es: más pequeño que el sospechoso, no tan fuerte como el sospechoso, más viejo que el sospechoso o en inferioridad numérica? 2. ¿Permite la fórmula un cambio repentino en la táctica si un oficial resulta herido o agotado? 3. ¿Es un factor en los niveles de destreza conocidos o percibidos del sospechoso? Si es honesto, cualquiera sea la fórmula que está usando, ésta ni por aproximación es capaz de determinar el nivel exacto de fuerza que sería apropiado. Tomar la decisión perfecta es tan difícil que la Corte Suprema de los Estados Unidos ha declarado que el uso apropiado de la fuerza "no es capaz de definición precisa o aplicación mecánica". Ese pastel, escalera o rueda es un intento de "aplicación mecánica". He escuchado a algunas personas explicar que su modelo es simplemente un recordatorio de la utilización de opciones de fuerza. Dudo que el oficial lo tenga con él en la calle. Dudo que tenga tiempo para mirarlo y no me gustaría trabajar con un policía que tiene que llevar un recuerdo de sus opciones de uso de la fuerza en su bolsillo. Espero que su entrenamiento y las herramientas del arresto y control en su cinturón de servicio fueran los únicos recordatorios que necesitarían. Mito # 5: Esa "Fuerza Excesiva" realmente es una cosa. Un uso de la fuerza no es juzgado por el tribunal por ser excesivo o no. No hay un nivel de fuerza "justo ahí" para cualquier uso de situación de fuerza. El tribunal decidirá si la fuerza fue "razonable" basado en un test de tres elementos: 1. La gravedad del delito en cuestión. 2. Si el sujeto representa una amenaza inmediata para la seguridad del oficial u otros. 3. Si el sujeto está resistiendo activamente al arresto o intentando evadir el arresto mediante la fuga. Ese juicio debe venir desde la perspectiva de un oficial razonable en la escena, sin una "retrospectiva 20/20"41. Si cinco oficiales dirían que la fuerza era razonable, debe ser juzgado razonable. Si cinco oficiales dirían que no era razonable, se juzga no razonable. Si cuatro oficiales dirían que no es razonable y un oficial dice que era razonable, debe establecerse como razonable. Desafortunadamente, muchos administradores, jefes, alcaldes, concejales, activistas comunitarios y miembros de los medios desconocen Graham v. Connor y mucho menos el test de 'razonabilidad' de cuatro puntos.

41 20/20 hindsight es una expresión inglesa que significa: "Es fácil saber lo que hay que hacer después de que algo ha sucedido, pero es difícil predecir el futuro".


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Si usted como oficial de policía desconoce el caso Graham v. Connor, su conocimiento y entrenamiento han estado fallando y potencialmente lo ponen cerca del fracaso si intenta tomar decisiones de uso de la fuerza basado en un modelo que no sea la decisión de la Corte Suprema de Justicia de los EEUU (SCOTUS42). Si usted es un instructor de uso de la fuerza y desconoce este caso, usted no debe entrenar oficiales. Cuando se trata de usar la fuerza, primero debemos asegurarnos de que nuestro entrenamiento contiene la información necesaria en orden a guiar nuestras acciones en el entrenamiento y en la aplicación. Ese fundamento debe incluir la comprensión de lo que constituye un nivel razonable de fuerza. Necesitamos eliminar la creencia -y peor aún el uso- del entrenamiento que aboga por protocolo que sostiene el más uno o un nivel mínimo de fuerza. Un uso de la fuerza que es demasiado bajo puede resultar en la lesión del oficial y del sospechoso, causado por no poder controlar eficazmente las acciones de un sospechoso en el momento oportuno. Es su responsabilidad tener la capacidad de tomar buenas decisiones razonables de uso de la fuerza cuando es necesario, así como usar la fuerza con rapidez y eficacia para asegurar su seguridad, la seguridad del público y sí, la seguridad de los sospechosos también.

Cómo el contacto humano puede consolar a un guerrero herido 43 "El poder del tacto tiene profundas raíces en la experiencia humana", dice el Dr. Bill Lewinski, director

ejecutivo del Instituto de Ciencias de la Fuerza.

Durante una reunión informativa especial en la conferencia de entrenamiento de ILEETA este año, el sargento Joseph Ferrera del Departamento de Policía de Southfield (MI) mostró un video de vigilancia de un anciano que caminaba por el vestíbulo de la estación de policía de esa ciudad en una tranquila tarde de domingo y comenzó a disparar una pistola calibre .380. La acción dramática domina el clip de 10 minutos; los oficiales se precipitan desde las oficinas adyacentes y matan al sospechoso. Pero una lección importante es canalizada por una serie de pequeñas interacciones que pasan casi desapercibidas en el borde de los fotogramas del vídeo. En el breve tiroteo antes que el hombre armado cayera, el Sargento Matt Collins es herido en el hombro izquierdo. Con el servicio de emergencia en el camino, fue sentado en una silla del vestíbulo, "con dolor y miedo". Los primeros auxilios son administrados por un operador de SWAT, el Oficial Nick Cazan, quien le dice: "No te preocupes. He visto mucho peor que esto antes". Mientras Collins se recuesta a la espera de transporte, esos intercambios físicos fugaces tienen lugar: Collins peina el pelo de Cazan con la mano... poco después, el Sargento Gary Lask, que había terminado con la amenaza del sospechoso, despeinó suavemente el pelo de Collins mientras pasaba caminando... momentos después, Cazan pone su brazo alrededor de los hombros de Collins... Collins alcanza y agarra la mano de Cazan durante unos segundos.... Ninguno de esos contactos era médicamente importante, como Ferrera señaló en su presentación, sin embargo parecían terapéuticos. Después, Collins le dijo que tocar y ser tocado por compañeros oficiales "me hizo sentir mejor. Tuvo un efecto muy calmante y me aseguró que todo iba a estar bien. Yo sabía que no me iban a dejar". Curiosamente, Ferrera dijo a Force Science News, incluso Cazan y Lask, que no estaban heridos, recordaron sentirse reconfortados por el contacto físico con su colega herido. "El toque humano fue recordado por todos ellos como muy positivo en esas circunstancias tensas e inciertas", dice Ferrera.

42 SCOTUS es el acrónimo para "Supreme Court of the United States". 43 Force Science Institute. How human touch can comfort a wounded warrior. Destroying Myths & Discovering Cold Facts. 8 de septiembre de 2014. http://www.policeone.com/health-fitness/articles/7504844-Human-touch-and-the-wounded-warrior/?utm_ source=newsletter&utm_medium=email&utm_campaign=Exclusive_2&n lid=75407 94. Extraído: 8 de septiembre de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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El poder del tacto. "El poder del tacto tiene profundas raíces en la experiencia humana", dice el Dr. Bill Lewinski, director ejecutivo del Instituto de Ciencia de la Fuerza. "Antropológicamente, tocar es una forma de comunicación que precede a la palabra. En la infancia, la mayoría de nosotros asocia ser tocado por otra persona con el confort, el amor y la confianza. Los investigadores han establecido que los bebés que son acarreados mucho tiempo prosperan mejor que los que se quedan solos en cunas. "En una crisis, tocar en zonas "seguras" universales -la parte baja de pierna, manos, brazos, hombros, pelo- es un medio fisiológico de golpear en la psicología de la compasión, la preocupación y la crianza. Entre los oficiales masculinos, es un gesto que puede ser muy masculino pero muy sensible. Puede ser un medio de comunicación mucho más profundo que las palabras". "El hecho de que las personas que han estado allí nos están diciendo que el tacto es beneficioso es un mensaje que deberíamos estar escuchando". Cuanto más fuerte es el vínculo emocional entre el que toca y el guerrero herido, más probable es el impacto del contacto físico, dice Lewinski. "Al ser miembros de un mismo equipo, comparado con quienes son perfectos extraños, pueden hacer una diferencia. La respuesta puede depender también del área tocada, la cantidad de presión aplicada, la cercanía física de las partes, la gravedad de la lesión y el grado de conciencia implicado. "Todo el mundo es diferente, por lo que necesita monitorear el recipiente por señales de que su tacto es aceptable y beneficioso. Y, por supuesto, al ayudar a un compañero herido, las consideraciones médicas -interrupción del sangrado, mantenimiento de la respiración- son siempre la preocupación primaria". Las palabras correctas. Lo que usted dice a un oficial herido aún importa - y debe reforzar el mensaje de tranquilidad que usted está tratando de entregar a través del tacto. En un programa de entrenamiento denominado "Control Verbal del Trauma"44 que él presenta en toda América del Norte, Brian Willis, presidente de "Entrenar una Mente Ganadora"45 y un graduado del curso de Certificación de la Ciencia de la Fuerza, recomienda este abordaje: "Si conoce al oficial herido, comience llamándolo por el nombre y luego dígale quién eres. Es importante no asumir que sepan quién eres en ese momento crítico. A continuación, algunas frases simples pueden ayudar a establecer una mentalidad positiva: • "Lo peor ha pasado...." • "Usted va a estar bien..." • "Más ayuda está en camino...." "Si es posible, haga que el oficial herido se involucre en algo, incluso si es sólo sostener una pieza de equipo para usted, así se siente comprometido activamente en su supervivencia. Y con entrenamiento, puede aprender a implantar sugerencias en su mente que le ayudarán a reducir el sangrado y controlar otras funciones fisiológicas". "Es importante mantener la calma y proyectar confianza. También es importante entender que el oficial herido puede oír lo que se dice, incluso si él o ella está inconsciente". La eficacia de sus palabras, así como su contacto no verbal, probablemente se verá realzado, dice Lewinski, si puede "bajar al nivel del oficial herido y mirarlo a los ojos". Buena recuperación. El tiroteo de Southfield resultó bien para el Sargento Collins y los demás agentes implicados, dice Ferrera. Collins se recuperó de su lesión y está de vuelta en el trabajo, peses a esos restos de balas del delincuente incrustados en el hombro. Después de que le dispararan, Collins fue capaz de disparar seis veces con su Glock 31, impactando al asaltante tres veces. Situado cerca del delincuente, el Sargento Lask, un veterano de 15 años en SWAT que asistió a Ferrera en el "debriefing" de ILEETA, disparó nueve veces en dos segundos e hizo nueve impactos sólidos. El hombre armado de 64 años de edad puede haber estado buscando el "suicidio por policía", dice Ferrera. Tenía cáncer de garganta y ya no podía hablar o ingerir alimentos o agua por la boca.

44 "Verbal Trauma Control". 45 "Winning Mind Training".


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Por qué los policías no 'disparan a herir' 46 The Question 47


Una pregunta publicada recientemente en Quora expresó: "¿Por qué los policías de los Estados Unidos no son entrenados para "disparar para contener la situación", significando disparar para herir en lugar de una ubicación en el cuerpo que es letal para el sospechoso (es decir, el centro de masa)?" El policía retirado Tim Dees da su opinión sobre el tema, a continuación. Compruébelo usted mismo y añada sus opiniones en los comentarios. Hay demasiadas razones por las que esto no se hace. Aquí hay algunas que vienen a la mente: • Algunas personas no se detienen, incluso cuando han sufrido una herida mortal. Hay muchos casos en que los chicos malos se mantuvieron viniendo o luchando después de que haber sido impactados con lo que una autopsia mostraría era una herida de la que no se puede sobrevivir. Impactar en un área no vital tiene un efecto aún más retrasado. • La mayoría de los disparos de la policía tienen lugar bajo condiciones casi de pánico, muy rápidamente y sin previo aviso. En las películas, usualmente hay algunos diálogos concisos que preceden a la "hora de la verdad". En la vida real, es más como: "Buenas noches señor, ¿puedo ver tu licencia de...-¡ARMA! ¡BUM! ¡BUM! ¡BUM!" Vea algunos de los muchos vídeos en YouTube de policías disparando y verá policías y chicos malos disparando salvajemente y mutuamente en su respectiva dirección. De hecho, los chicos malos generalmente son mucho más fríos bajo fuego pero, de nuevo, ellos saben que está viniendo. En resumen, los tiros cuidadosamente dirigidos hechos para limitar los daños no son realistas. • Desarrollar este nivel de habilidad en la puntería requeriría muchas más horas de entrenamiento que el que reciben actualmente los policías y mantenerlo requeriría muchas más horas. Muchos policías no reciben ningún entrenamiento de puntería después de salir de la academia. Ellos están obligados a disparar un curso estándar de tiro de 25 a 50 disparos, tan sólo una vez al año (aunque trimestralmente probablemente sea más estándar). La munición es cara y rara vez hay municiones disponibles para la práctica. Incluso hay menos dinero disponible para pagar a los oficiales para que practiquen. Algunos policías practicarían por su cuenta (y algunos lo hacen), pero hay que recordar que se trata, en definitiva, de un trabajo. Usted espera que le paguen cuando está haciendo un trabajo para alguien; los policías también lo hacen. • El disparo de precisión, especialmente el tipo que se hace rápidamente y reflexivamente, es muy difícil. La mayoría de los tiradores experimentados nunca llegan a ser especialmente buenos en eso. Las personas que no han tirado mucho (o cualquiera) generalmente no tienen idea de las habilidades que se requieren. Si lo duda, le insto a que se ponga en contacto con su departamento de policía local y vea si tienen acceso a un simulador de uso de la fuerza. Esos son, en esencia, videojuegos donde los personajes son de tamaño natural y las armas de fuego usadas disparan rayos láser. Juegan en escenarios de toma de decisiones de 46 The Question. P1 Community. Why cops don't 'shoot to injure'. PoliceOne. 18 de diciembre de 2014. http:// www.policeone.com/officer-shootings/articles/7996521-Why-arent-cops-trained-to-shoot-to-injure/?utm_ source=7996791&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1RightMore&utm_campaign=P1Member&nlid=7996791. Accedido: 20 de diciembre de 2014. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc. 47 "The Question" ("La pregunta") reúne artículos generados por los usuarios de nuestra página en Facebook a partir de preguntas que planteamos a nuestros seguidores, así como algunos de los mejores contenidos que encontramos en Quora, un sitio web de preguntas y respuestas creado, editado y organizado por su comunidad de usuarios que son expertos en su campo. El sitio agrega preguntas y respuestas para una amplia gama de temas, como la seguridad pública. Las preguntas y respuestas que aparecen aquí en P1 se publican directamente de Quora y los puntos de vista y opiniones expresadas no reflejan necesariamente los de P1.


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'disparar / no disparar' para ayudar a entrenar a los policías, tanto en la puntería como en la buena toma de decisiones en condiciones de estrés. Yo solía ejecutarlos como entrenador regional y siempre invitado por vecinos del lugar -especialmente los críticos de la policía- para ir una o dos veces. Muy pocos fueron capaces de sobrevivir a los encuentros (en un sentido virtual - 'fueron asesinados' en el escenario, aunque no resultaron heridos físicamente) y cada uno dejó un nuevo sentido de la dificultad de ser un policía.

Por qué los policías necesitan ver más que las manos 48 Si realmente nos fijamos en las manos, ¿estamos renunciando a centrarnos en otros indicios corporales y de

comportamiento que podrían darnos advertencias tempranas de incumplimiento?

Joel F. Shults, Ed.D. Jefe de Policía (R)


El ojo humano y el sistema de visión es ilusión alrededor del 97 %. Sólo un pequeño rango de visión no es distorsionado en la retina - ¡e incluso eso está al revés! El resto es trabajo del cerebro que teje juntas una imagen que tenga sentido. La razón por la que usted no ve una mancha mientras sigue el camino de un hockey en el disco, por la que no se da cuenta de la ceguera temporal por el parpadeo de sus ojos y por la que no es consciente de los millones de estímulos introducidos en su sentido visual, es el trabajo mágico del cerebro. Aunque pensamos que vemos las cosas instantáneamente, cada enfoque requiere un procesamiento cerebral y cuando miramos de lado a lado, el movimiento lleva tiempo. El cerebro no sólo crea su imagen del mundo, sino su interpretación también. Si una sonrisa es falsa o sincera y si un detenido está cumpliendo verdaderamente o simplemente tratando de ganar tiempo para hacer su movimiento está basado en la experiencia del observador. Ciencia de la Visión y Percepción. Los estudios de la mirada y el enfoque presentados por Joan Vickers en su libro "Entrenamiento en la Percepción, Cognición y Decisión"49 -así como el Instituto de Ciencias de la Fuerza publicó la investigación del Dr. Bill Lewinski- da evidencia de que los atletas de elite tienen una mirada más larga en un punto focal importante que los ejecutantes menos competente. Estos atletas de élite (incluyendo los tiradores) han desarrollado habilidades de orientación muy precisos. 48 SHULTS, Joel F. PoliceOne. Why cops need to watch more than the hands. Passion for the Job. http://www. policeone.com/Officer-Safety/articles/8341393-Why-cops-need-to-watch-more-than-the-hands/?utm_source= 8333620&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1RightTitle&utm_campaign=P1Member&nlid=8333620. 25 de febrero de 2015. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc. 49 VICKERS, Joan. Perception, Cognition, and Decision Training.


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¿Son las manos nuestro mejor objetivo a enfocar? ¿Hay indicios anteriores de movimiento amenazantes que podemos notar, sin fijarnos en las manos? Las manos son el punto final de los nervios y del desempeño muscular y por lo tanto nos proporcionan un aviso de sólo una fracción de segundo sobre un golpe inminente de agarre del arma. Si realmente nos fijamos en las manos, ¿estamos renunciando a centrarnos en otros indicios corporales y de comportamiento que podrían darnos advertencias tempranas de incumplimiento? Un atacante debe pasar por su propio proceso de escaneo, focalización y lanzamiento de la mecánica del movimiento corporal para un ataque. Tal vez el movimiento de un hombro o la ruptura de una muñeca nos darían unos pocos útiles milisegundos para desplegar una acción de salvamento. Otro problema es la ambigüedad de los movimientos de la mano. A menudo le damos al sujeto bastante ventaja esperándolo a que llegue a su cédula de identidad en los mismos lugares en su coche o en su persona en los que pueden estar ocultando un arma. Nosotros decimos que vemos todo en nuestro entorno, sin saber dónde puede aparecer una amenaza. La realidad es que no podemos ser al mismo tiempo consciente de cada espacio posible alrededor nuestro o incluso delante de nosotros. Los jugadores de elite tendrán un sentido más preciso -desde el entrenamiento y la experiencia- de qué movimientos son consistentes con un ataque. Asociado con esto es el diferenciar entre la agresión y el mero ataque de ira. También debemos estar menos centrados en el comportamiento en vuelo y más centrados en el comportamiento de ataque. Ambos representan un riesgo, pero es evidente que el comportamiento de ataque es más importante para la supervivencia del oficial que el vuelo (reconociendo que algunos vuelos no son más que redesplegarse para un ataque). Los oficiales a menudo tienen la misma respuesta de emergencia interna para ambos, usando un valioso espacio en el cerebro preocupándose tanto de un sospechoso que se aleja como de un sospechoso que quiere matarlos. Ver la imagen completa. No estoy recomendando arrojar lejos el viejo consejo de ver las manos. Sin embargo, es hora de dejar que la ciencia pese dónde debe estar nuestra atención en pos del mejor resultado posible. Todos los oficiales están entrenados para observar un sujeto escaneando el entorno (en busca de la ruta de escape o de cualquier ventaja en el ambiente), apretando los dientes o la mandíbula (el movimiento facial involuntario común a un sujeto que se pone en modo de ataque), así como el individuo que toma una posición de lucha con una pala, apuntando a su pistola u otras armas y los cambios en la forma en que el sujeto responde a usted verbalmente. Tenga la intención de saber qué está buscando y qué ordena a sus sujetos contactados que hagan.

¿Servicio de Policía inteligente? Por qué la táctica de "ojos cerrados" del Departamento de Policía de Nueva York no sirve de nada.50

Sugerir que los oficiales deben ponerse en peligro apartando literalmente sus ojos de lo que están haciendo es ridículo en el mejor de los casos y posiblemente sea criminalmente negligente en el peor de los casos.

Doug Wyllie

Jefe de Redacción de PoliceOne 24 de febrero de 2015

50 WYLLIE, Doug. Smart policing? Why NYPD’s 'closed eyes' tactic is anything but. PoliceOne. 10-43: Be Advised... http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/8335302-Smart-policing-Why-NYPD-s-closed-eyes-tactic-is-anything-but/?utm_source=8333620&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1LeftTitle&utm_campaign= P1Member&nlid=83. 24 de febrero de 2015. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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Los oficiales de policía que trabajan para el venerable Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York han recibido instrucciones de cerrar los ojos durante situaciones tensas, potencialmente violentas. Según el New York Post 51un policía que asistió a este patentemente estúpido (y peligroso) "entrenamiento", dijo que a los oficiales les dieron "ejercicios de respiración para aprender a calmarse" y les dijeron que cuando se meten en una situación tensa, los policías deben "dar un paso atrás, cerrar los ojos y tomar una respiración profunda". ¿Hiperventilando todavía? Bien, qué tal esto: Este "consejo" ha sido presentado a unos 4.000 oficiales de policía y se les enseñará a unos 16.000 más como parte de un cartilla de "Servicio de policía inteligente" de $ 35.000.000 que incluye perlas de sabiduría, como dar pastillas de menta a los policías para el aliento para "ayudar a dejar de maldecir de la forma en que un fumador deja el hábito" y rociar a los manifestantes con aceite de bebé para que no puedan entrelazar sus brazos - policías usarían guantes de goma, por lo que su agarre no se vería afectado. Usted no puede ser estúpido (pero usted puede contrarrestarlo) Usted no puede inventar estas cosas. Aunque suena como un típico titular de los medios que encontraría por aquí cada Día de los Inocentes, esta historia es -por desgracia- demasiado real. El programa de la Policía de Nueva York fue ideado por Michael Julian, una bola vibrante (goofball) del departamento -palabras del Washington Post, no mías- que fue contratado a finales de 2014 como comisionado adjunto de entrenamiento del departamento. Dos meses más tarde fue "ascendido" a subjefe de personal (con suerte, una posición en la que él puede hacer menos daño).

Las ideas del zar de la reforma Michael Julian como darles pastillas de menta para los oficiales de policía a punto de maldecir, lograron que fuera reasignado después de sólo dos meses.

Julian sugirió que los oficiales rocíen con aceite de bebé a los manifestantes revoltosos que enlazan los brazos para ayudar a apartarlos, dijeron las fuentes. Tan ridículo como el programa de Julian en Nueva York, hay muchas maneras tratadas-y-verdaderas con las que los oficiales del orden pueden -y lo hacen- entrenar para estar más seguros y ser más exitosos en las calles. Consideremos las ideas de cerrar los ojos y respirar profundamente. Note que esos dos ejercicios sucedan en la seguridad de la sala de la brigada o en el centro de entrenamiento en el servicio de la agencia - no en la calle. 51 NYPD’s idea of reform included breath mints and baby oil. http://nypost.com/2015/02/20/nypds-idea-of-reform-included-breath-mints-and-baby-oil/. 20 de febrero de 2015. Accedido: 26 de febrero de 2015.


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1. Cierre sus ojos: ¿Alguna vez ha visto el vídeo de los Ángeles Azules (Blue Angels) reuniéndose en torno a una mesa de conferencias antes de realizar una exhibición de vuelo? Cada uno de ellos tiene sus ojos cerrados mientras escuchan la voz alta del comandante sobre todas las maniobras. Esta poderosa herramienta de visualización puede ser empleada con el "cuando / entonces" pensar que ya puede estar dando vueltas en su cerebro antes de ir a atender la llamada.

2. Respire profundamente: Hay múltiples formas en que los oficiales pueden emplear la 'respiración autógena' -a veces llamada respiración de combate- en el entrenamiento. Para un ejercicio de respiración que realmente puede ayudar a patrullar, intente practicar la respiración autógena mientras está en "código 3" en un simulador de conducción vehicular. Incluso puede hacer este ejercicio con sólo una cinta de audio de las sirenas a todo volumen (una vez más, ¡con los ojos cerrados!).

"Aprender técnicas para auto-calmarse y de relajación deben ser parte del entrenamiento de cada oficial - pero no para su uso en la línea del frente", dijo el Jefe (Retirado) Joel Shults. "La preparación para la confrontación violenta requiere preparación, no relajación. La reducción de la capacidad del cerebro para tomar decisiones rápidas en entornos volátiles ignora la ciencia de la capacidad humana". El Teniente (R) Dan Marcou añadió: "Enseñar 'respiración autogénica' - a veces llamada respiración de supervivencia - es una técnica valiosa, pero decirle a un oficial de policía que cierre sus ojos durante una tensa situación en la calle, es invitarlo a morir en la oscuridad". De vuelta en la calle, cuando enfrenta el tipo de situación caliente para la cual Julián sugiere una táctica de "ojos cerrados", los oficiales deben emplear las comunicaciones tácticas (Yudo Verbal o técnicas similares) mientras evalúan rápidamente al sujeto en cuanto a los indicadores no verbales de pre-ataque como el rechinar de dientes, apretar los puños y echar un vistazo en busca de cualquier arma o escapar. Respirar calmadamente juega un factor en esto, pero ciertamente no es cerrando los propios ojos. Hubo un elemento en el entrenamiento del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York que en realidad puede tener algún valor. Nos han informado que a los asistentes al seminario les mostraron la escena de la película "Road House" de 1989 en la que el personaje de Patrick Swayze dio el sabio consejo: "Hay que ser agradable - hasta que es el momento de no ser agradable".

En la película de 1989 "Road House"52 el personaje de Patrick Swayze dio lo que fue sin duda el mejor consejo para los oficiales de policía que alguna vez saliera de Hollywood:

Regla 1: "Nunca subestime a su oponente - espere lo inesperado". Regla 2: "Es un trabajo - no es nada personal". Regla 3: "Sea agradable - hasta que es el momento de no ser agradable".

52 "Road House". http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/8116185-How-Swayze-s-Road-House-can-be-an-officer-training-device/. 12 de enero de 2015.


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Como ha observado el colaborador de PoliceOne Charles Humes, los oficiales deben "tratar a las personas con cortesía, respeto y de manera agradable - hasta que / a menos que decidan no ser tratados de manera agradable. Cuando ellos optan por no ser bien tratados, usted solo tiene que responder según el caso, apropiadamente. Desde la dirección verbal hasta la fuerza letal, la opción del contacto siempre está sujeta a cómo se desarrolla la situación". ¡Prescindamos del...Aliento a Menta, por favor! A raíz de los grandes fallos del jurado sobre la muerte de Michael Brown (Ferguson) y Eric Garner (Nueva York), los políticos de todo el país se han estrellado contra las agencias de aplicación de la ley con demandas de que el servicio de policía estadounidense sea "reformado" de alguna manera. Sugerir que los oficiales deben ponerse en peligro apartando literalmente sus ojos de lo que están haciendo es ridículo en el mejor de los casos y posiblemente sea criminalmente negligente en el peor de los casos. Ya hay una preocupación válida entre muchos profesionales de la ley de que el caso Ferguson puede causar que los oficiales duden al aplicar la fuerza letal. Las empresas privadas han surgido con productos halcón que supuestamente reducirán mágicamente la frecuencia (y / o peligro relativo) del uso policial de la fuerza en los incidentes. Tales ideas pondrán a los oficiales (y, en última instancia, al público inocente, respetuoso de la ley) en peligro - una sociedad que no apoya a su policía deben estar preparados para someterse a sus criminales. "La policía de todo el país ha mostrado una moderación y profesionalidad increíbles", dijo Shults. "Refinar la capacidad de los oficiales para hacer frente al desorden es loable, pero de todos los problemas en los que los contribuyentes podrían invertir 35 millones de dólares, este no es uno de ellos". Es posible que cuando los instructores en la Ciudad de Nueva York dijeron "cierre sus ojos", lo decían metafóricamente, pero por lo que he podido recabar (de la información actualmente disponible) tal descargo no fue articulado. El hecho de que esto se ha vuelto parte del régimen de entrenamiento para el Departamento de Policía de Nueva York suplica una pregunta potencialmente mayor: Si puede ocurrir allí, ¿puede suceder en otros lugares? Por desgracia, probablemente, sí. ¿Ha oído hablar de una idea propuesta de entrenamiento post-Ferguson que debe ser arrojada inmediatamente en el archivo circular? Quéjese en el área de comentarios a continuación.

6 hechos de uso de la fuerza que mantendrán seguros a los oficiales y sus puestos de trabajo 53 No entender los primeros cinco de esos hechos de uso de la fuerza podría costarle su trabajo - co entender el

sexto podría costarle la vida.

Tim Barfield

Jefe del Departamento de Policía de Wellington (Kansas) 13 de julio de 2015

53 BARFIELD, Tim. 6 use-of-force facts that will keep officers and their jobs safe. PoliceOne. Becoming Knights. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/8657189-6-use-of-force-facts-that-will-keep-officers-and-their-jobs-safe/?utm_source=8657077&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1LeftTitle&utm_campaign =P1Member&nlid=8657077. 13 de julio de 2015. Traducción del Mg. Cte My (R) Carlos G. Blanco.-


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En mi experiencia como oficial de policía, supervisor e instructor de uso de la fuerza, he llegado a comprender una serie de hechos importantes sobre el uso de la fuerza. Creo que si más oficiales entendieran cuán importantes son esos hechos, serían mejor versados y conocedores de la materia por su propia seguridad o la de su colega. En mis clases -y en conversaciones con otros instructores de uso de la fuerza- esos seis temas emergen en varias ocasiones. No entender las cinco primeras podría costarle su trabajo - no entender la sexta podría costarle su vida. 1. El uso de la fuerza nunca se ve bien. Si usted tiene que usar la fuerza en el cumplimiento del deber, no importa qué opción que elija, nunca se verá bien. Una de las herramientas que he usado durante años es analizar vídeos de cámaras corporales hasta cámaras de tablero y todo lo demás entre ambas. Qué gran manera de ver las opciones que elige la gente y los hechos desencadenantes que llevaron al incidente. No estoy diciendo que conozco todos los hechos, pero estudiando los videos de incidentes con oficiales involucrados sin duda puede ayudar a entender qué funciona y qué no. Esto no es sólo acerca de la técnica sino que hay para aprender sobre el lenguaje corporal, el habla, la actitud y los indicadores pre-asalto. Haga lo que necesite hacer - nunca se verá bien. 2. Demasiados policías no leen ni entrenan. Demasiados oficiales no leen ni se capacitan en temas de uso de la fuerza. Muy pocos policías asisten a clases de artes marciales. Muchos de ellos también fallan en leer sobre el entrenamiento o el uso de la fuerza si no es en horas de trabajo. No espere en su departamento. Recuerde: si usted está involucrado en una confrontación física a las tres de la mañana, puede culpar a cualquiera, pero es usted quien está ahí afuera, no ellos. 3. La mayoría de los policías no conocen Graham v. Connor. Comprobé que cuando se trata de incidentes de uso de la fuerza, los policías que la usan casi siempre hacen lo correcto. Conocer la ley es crucial. Graham v. Connor es probablemente el mejor caso de uso de la fuerza que pudo haber sido seleccionado por la Corte Suprema de Estados Unidos. Cuando los policías que usan la fuerza se meten en problemas es porque, pese a que hacen lo correcto (dentro de la ley), casi nunca pueden defenderlo porque no están versados en la ley. Familiarícese con Graham v. Connor, porque es posible que tenga que defenderse con ella. 4. Demasiados jefes y administradores no conocen la ley. Demasiados estudiantes me dicen que las mismas personas que deben estar preparadas para defender y apoyar a sus oficiales cuando son llamados a pararse en la brecha entre el bien y el mal, no conocen la ley. Es difícil entender cómo cualquier oficial puede graduarse de una academia de policía y no tener un conocimiento profundo de Graham v. Connor. Es aún más difícil para mí entender cómo el líder de una organización que debe conocer la ley para proteger a sus oficiales puede dejar de entender la ley. 5. Los fiscales muy a menudo carecen de la valentía moral para aplicar la ley. Los fiscales, que sin duda deben entender la ley, a menudo están demasiado involucrados políticamente al aplicar la ley correctamente o no la entienden. Cualquiera sea la forma que elijan para defender sus malas decisiones para enjuiciarlos, los oficiales nunca deben confiar en un fiscal que no puede explicar con claridad la decisión Graham v. Connor antes de buscar una revisión. 6. No usar la fuerza apropiada puede ser mortal. Impulsado por cualquier factor que sea que impulse a un oficial a reaccionar en incidentes de uso de la fuerza, más oficiales y sospechosos resultarán heridos por la falta de uso de la fuerza suficiente y razonable que por aquellos que utilizan "fuerza excesiva" o irrazonable. La postura y el fracaso para elegir una opción de fuerza cuando es razonable a menudo conduce a más lesiones a los oficiales y a los sospechosos por igual. La fuerza nunca se verá bien; usted tiene que leer y entrenar para defender sus acciones, comprender Graham v. Connor y, después de todo eso, no deje de usar el nivel de fuerza apropiado.


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Confianza versus ego: cómo uno de ellos puede hacer que lo maten 54 Respiro jurisprudencia. Como tácticas. Sangro políticas. Conozco mi trabajo. Conozco mis limitaciones.

Entonces, ¿cómo podría hacer yo tan mal esta porquería? El ego se puso en mi camino. He sacrificado mi seguridad por encima de mi orgullo.

Teniente Comandante Paul Marik

Maestría en Gestión de la Justicia Criminal Instructor Máster en Respuesta Táctica

Analista Certificado en Ciencia de la Fuerza Departamento de Policía de Pleasant Prairie (Wisconsin)

Operador Sénior de SWAT del Condado de Kenosha 12 de junio de 2015

Chequee su ego en la puerta. Cuando salga, no se moleste en agarrarlo. Déjelo solo y no vuelva a verlo de nuevo. ¿Por qué? Hará que lo maten, por eso. En esta discusión, le estoy hablando directamente a: • Los veteranos con 20 años de servicio que corrieron y pelearon en las mismas calles durante su carrera. • El tipo "yo he visto todo". • A quienes los novatos miran y dicen: "Ese tipo ha visto algo grave [de p... madre]". • El operador táctico que se niega a renunciar y a darle la mano a la próxima generación. • El recluta que ya ha estado en combate en el extranjero y piensa que lo sabe todo. • El instructor que piensa que su somnífero diario no apesta (un culpable por aquí). • La "rata de gimnasio" o el experto en artes marciales que se pavonea pasando lista cada día pensando que no hay nadie en el planeta que pueda tocarlo. La confianza es un prerrequisito. Pero el exceso de confianza - es el ego y su detrimento. Acabo de terminar una larga semana de 'entrenar-a-instructores' en el Programa de "Entrenamiento Avanzado de Respuesta Rápida para la Aplicación de la Ley" (ALERRT, Advanced Law Enforcement Rapid Response Training) organizado por el FBI y algunos serios caballeros de Texas y Utah. Era una clase difícil, sobre todo porque pensé que no me iban a enseñar nada. Estaba gravemente humillado. El Instructor Maestro de la clase era un oficial recientemente retirado de Amarillo (Texas) que dijo: "El ego no es su amigo. Déjelo en la puerta y abra su mente". Comencé a pensar, si ese es como un buen consejo para el entrenamiento, ¿cómo es que no hablamos de eso en las tácticas callejeras? En un ejercicio, mostró su parada de tráfico mensual. Lo que comenzó como una violación a la señal 'pare' a las 04:00 se convirtió en mi zambullida en su coche y casi usé un Dispositivo Electrónico de Control (ECD, Electronic Control Device) para removerlo. Fue esposado y mis oficiales llegaron solo para ver el final. Hice mi trabajo y el malo fue a la cárcel. Nadie resultó lastimado. Es una victoria, ¿no? Incorrecto.

54 MARIK, Paul. Confidence vs. ego: How one of them can get you killed. PoliceOne. The True North of Policing. http://www.policeone.com/Officer-Safety/articles/8569186-Confidence-vs-ego-How-one-of-them-can-get-you-killed/?utm_source=8568570&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1LeftTitle&utm_campaign=P1Member&nlid=8568570. 12 de junio de 2015. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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Revisando el video después (como lo hago siempre y recomiendo que usted lo haga también), me di cuenta de que mi ego se puso en el camino de mis tácticas. Pensé: "Respiro jurisprudencia. Como tácticas. Sangro políticas. Conozco mi trabajo. Conozco mis limitaciones. Entonces, ¿cómo podría hacer yo tan mal esta porquería? El ego se puso en mi camino. Sacrifiqué mi seguridad por encima de mi orgullo. Me acerqué a mi jefe y le dije que necesitábamos hacer que ese vídeo del dash cam (ubicado en el tablero frente al asiento del conductor) fuera parte de nuestro entrenamiento sobre contactos de vehículos de este año; 'esto es lo que no se debe hacer'. Sí, algunas partes eran muy buenas, pero cuando fui desafiado fue fuera de las carreras. "¿Va a desafiarme? ¡Le mostraré!" Solíamos llamarlo "desacato a la policía"55 (contempt of cop). Pero le diré qué es – es estúpido. He aquí algunas ideas para ayudarle a través de situaciones cuando usted ve rojo y el ego empieza a levantar su fea cabeza. Pregúntese: • ¿Debo continuar solo? • ¿Dónde está el refuerzo? • ¿Por qué estoy siendo desafiado? • ¿Es legal lo que estoy haciendo? • Incluso si es legal, ¿es prudente? • ¿Cuál es la ventaja? • ¿Cuál es la desventaja? • ¿Qué es importante ahora? (GANAR = W.I.N.: What’s Important Now?) Cosas para no pensar: • No necesito respaldo. • Puedo manejar a este tipo. • Si me muevo lo suficientemente rápido, las tácticas no importan. • Esto no debería ser un problema. • Se ve débil. • Yo soy más fuerte que él. • He hecho esto un millón de veces antes. Tan pronto como mordí el anzuelo, supe que cometí un error. Pronto estaba peleando - y perdiendo. Ahora estaba pensando cosas completamente diferentes. • Paulie - usted es un maniquí. • ¿Cómo se metió en este lío? • Espero que el refuerzo llegue rápido. • ¿Cómo fue que terminé dentro de su coche? • ¿Por qué estoy perdiendo ante un niño tan flaco? • Hora de retirarse. • ¡Fuera de aquí! • ¿Dónde diablos está el refuerzo? • Escalar o desacoplar, ¡pero hazlo rápido! Después de una revisión adicional, me autoevalué (con razón) como el idiota del pueblo por la noche. No hice clic sobre por qué actué así, sin tácticas, sino hasta dos semanas más tarde cuando mi buen amigo desde Amarillo lo dijo en un cuarto lleno de aspirantes a tipos duros. "El ego no es su amigo". No podía ser más correcto. Siempre va a haber alguien grande, más fuerte y más rápido. Los va a conocer - a menudo. Háganse usted mismo y sus otros oficiales un enorme favor. Mantengan ese ego bajo control. Sus verdaderos amigos son las buenas tácticas y la cabeza fría.

55 "Desacato a la policía" (contempt of cop) sale de la jerga de la aplicación de la ley en los EE.UU. que refiere al comportamiento de la gente hacia los oficiales de la aplicación de la ley que los oficiales perciben como una falta de respeto o una insuficiente deferencia hacia su autoridad. No es delito.


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Por qué los policías deben agregar "imágenes mentales estratégicas" a su repertorio 56 Las "imágenes mentales tácticas" nos llevan a través del día, pero las "imágenes mentales estratégicas" nos

llevan a través de la noche.

Jeff McGill

Oficina del Sheriff en el Estado de Florida Maestría en Justicia Criminal

Profesor Adjunto de Justicia Criminal Ex Oficial de la Fuerza Aérea

22 de julio de 2015 El despliegue de los vehículos es impecable y hacemos en silencio nuestro camino hasta la casa. La radio crepita en mi oído cuando el equipo del perímetro anuncia que está desplegado en su lugar. El grupo está en la puerta y entonces golpea. Esperamos. La siguiente cosa que escuchamos son los gritos del equipo del perímetro de que alguien está tratando de entrar por la ventana. El "brechero" (breacher) camina hasta la puerta y la golpea. La puerta se agrieta y astilla bajo la fuerza, el equipo fluye inmediatamente a través de la abertura. Está oscuro en el interior y cuando me dirijo a la sala, hay un fogonazo, el chasquido sordo de un disparo y el olor a pólvora en el aire. Yo disparé a la silueta varias veces hasta que se arrugó… y todo está tranquilo. Es entonces cuando me doy cuenta de mi fuga de sangre. Yo sé lo que pasó. Yo sé qué hay que hacer la próxima vez... A todos nos han dicho que pasemos escenarios mentalmente a través de nuestras mentes y trabajemos nuestro camino a través de los incidentes críticos. El párrafo anterior es mío. Los mejores oficiales han pasado miles de escenarios del tipo "si/entonces" a través de sus cabezas en un esfuerzo por desarrollar varias opciones de respuestas tácticas antes que fueran necesarias. Usted puede prepararse mentalmente para usar la fuerza, perseguir un vehículo, atender un robo en progreso y una multitud de otras tareas que puedan necesitar planificación bajo alta presión y poco tiempo. Hacer "imágenes mentales tácticas" (tactical mental imagery) puede salvar su vida. Tenemos que considerar que "las imágenes mentales estratégicas" (strategic mental imagery) pueden salvar igualmente su vida. Déjeme explicárselo... Imaginería Mental Estratégica. Hay otro aspecto de la imaginería que necesitamos introducir y es la imaginería mental estratégica. Lo que comúnmente preparamos para nuestro escenario del peor caso (worst-case scenario), puede que no venga tan cerca como para alcanzar el verdadero nivel de trauma. Nos preparamos para lo que más comúnmente ha decidido nuestra mente que estamos dispuestos a aceptar. Tener que considerar una respuesta al asesinato en masa de niños, que su pareja esté siendo tiroteada en el asiento del pasajero junto a usted o tener que dar la novedad de una muerte en la línea del deber, son todos eventos que es probable que evite mentalmente incluso el oficial más endurecido. En esas situaciones extremas nos beneficiaríamos de la imaginería mental estratégica. Las imágenes mentales tácticas nos llevan a través del día, pero las imágenes mentales estratégicas nos llevan a través de la noche. Si bien las tácticas son variables y dependen de nuestra situación, nuestra estrategia puede ser algo fijo, con el consistente objetivo general de recuperarnos con poca o ninguna lesión mental a largo plazo de cualquier trauma que enfrentemos. Al hacer una imagen estratégica mental usted: 56 McGILL, Jeff. Why cops should add strategic mental imagery to their repertoire. PoliceOne. Mindset and Mental Health. http://www.policeone.com/critical-incidents/articles/8687341-Why-cops-should-add-strategic-mental-imagery-to-their-repertoire/?utm_source=8687184&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1LeftTitle&ut m_campaign=P1Member&nlid=8687184. 22 de julio de 2015. Traducción del Mg. Cte My (R) Carlos G. Blanco.-


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• Atenderá una reunión informativa (briefing) de un incidente crítico. Si no es para usted, que sea para ayudar a sus colegas. • Reconocerá que usted está teniendo una respuesta normal a un evento anormal. • Hablará con alguien de confianza y luego hablará algo más. • Mantendrá un horario normal y tratará de asistir a las tareas diarias. • Comerá alimentos saludables, beberá agua y limitará el consumo de alcohol. • Descansará. El sueño puede ser difícil al principio, pero mejorará con el tiempo. Haga esta imagen tan real y tan detallada como aquella que hace para los encuentros tácticos. ¿Dónde está la sesión informativa, en quién confiará usted para hablar, cómo se ve el día después? Piense "fuera de la caja" y empiece a prepararse táctica y estratégicamente para incidentes que nunca consideró. La imaginería mental es un método fácil y eficiente para salvar su vida en el corto y en el largo plazo. Prepárese para el evento completo y sus secuelas. Durante mi carrera, había hecho una larga lista de imágenes mentales tácticas en muchos escenarios y me consideré bien preparado para una de las peores situaciones: recibir un disparo en la línea del deber. Como en el relato anterior, mis escenarios eran realistas y contenían detalles de las imágenes, los sonidos, el olfato y el tacto de la situación. Hacerlos auténticos en la mente nos permite construir un mapa al que podamos recurrir cuando enfrentemos una experiencia similar en el mundo real. Este no es un concepto nuevo; múltiples estudios han demostrado su beneficio en el mundo del deporte. Me gustaría argumentar que la aplicación de la ley es sólo el deporte más extremo del planeta y que a su vez podemos beneficiarnos de su uso tal como los atletas profesionales. No pasemos simplemente el día. También pasemos a través de la noche.

¿Pueden el estrés y la fatiga afectar el prejuicio del oficial y la toma de decisiones? 57 Los medios de comunicación y los expertos dicen que la raza afecta a la decisión de un oficial para disparar y con algunos recientes tiroteos policiales, la evidencia anecdótica apunta en esa dirección también - ¿pero qué

dice la ciencia?

Jonathan Page

22 de julio de 2015 Jonathan Page es profesor, neurocientífico cognitivo y co-fundador de World is Round, LLC. Ha dirigido investigaciones durante más de una década estudiando la percepción humana y la acción. Su amplia investigación sobre las respuestas fisiológicas al estrés y cómo influye en la conducta lo llevó a buscar nuevas y más efectivas formas de lidiar con el estrés y las situaciones estresantes. Colaborar con la investigación de campo del Servicio de Policía Metropolitana de Londres, los militares estadounidenses y las fuerzas del orden federales y estatales en los EE.UU. le proporcionó a Jon el conocimiento que necesitaba para desarrollar la técnica de comando cognitivo (C²). Junto con su esposa Kasee, Jon fue co-autor de un programa de entrenamiento que se usa actualmente en las academias policiales de los EE.UU. También fue autor del libro NeuroCop y publicó su investigación en varias revistas profesionales.

57 PAGE, Jonathan. Can stress and fatigue affect officer bias and decision-making? PoliceOne. NeuroCop. http:// www.policeone.com/use-of-force/articles/8686228-Can-stress-and-fatigue-affect-officer-bias-and-decision-making/?utm_source=8687184&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1RightTitle&utm_campaign=P1Member&nlid=8687184. 22 de julio de 2015. Traducción del Mg. Cte My (R) Carlos G. Blanco.-


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Los estudios de laboratorio han demostrado que los oficiales de policía no tienen en cuenta la raza en su decisión de disparar - en cambio, los oficiales se centran en la identificación del arma. Probablemente eso no lo sorprenda si usted es un oficial de la ley, pero probablemente sorprenda al público en general. Vamos a quebrar algunos datos interesantes sobre la investigación en esta área. Joshua Correll, Ashby Plant y otros investigadores de la psicología y de la policía han demostrado consistentemente que en estudios de laboratorio, los oficiales de policía deciden disparar sobre la base de la identificación de un arma, no de la raza. Sin embargo, ese no es el caso cuando gente ajena a la aplicación de la ley participa en esos mismos estudios de laboratorio. Los estudiantes universitarios y los miembros de la comunidad muestran consistentemente prejuicios raciales. Aún más interesante, las minorías también muestran sesgos raciales - incluso hacia su propio grupo étnico. Lo hacen porque debido a los sesgos implícitos en nuestra cultura. El sesgo implícito lleva a los estereotipos que influyen en nuestros comportamientos. Desde que los policías también son personas, los investigadores esperan que respondan igual que el público en general en tareas de la "decisión de disparar". En los estudios de investigación [véase más abajo en las referencias], los oficiales cometieron algunos errores-de-hecho en los tiroteos -aunque mucho menos que los miembros de la comunidad- pero tenían las mismas probabilidades de identificar erróneamente un arma en las manos de un sujeto blanco como en las manos de un sujeto negro. Ese no fue el caso para los estudiantes universitarios y miembros de la comunidad - que erróneamente identifican mucho más un arma en las manos de un negro versus un sujeto blanco. El hecho de que los oficiales de policía no mostraron los mismos prejuicios raciales que los miembros de la comunidad se atribuyeron al entrenamiento y a la experiencia laboral. Estudio Científico de Raza, Género y Edad. Mis colegas de investigación y yo en World is Round LLC hemos encontrado resultados similares en el laboratorio usando el género en lugar de la raza: los estudiantes universitarios fueron significativamente más propensos a identificar erróneamente una no-arma como arma cuando el objeto fue emparejado con un rostro masculino versus uno femenino; los oficiales de policía no mostraron este mismo sesgo de género. Fui invitado recientemente para asistir a un entrenamiento con fuego real con el departamento del sheriff y vi algo parecido en el polígono. Sin el conocimiento de los adjuntos ("deputies") en el evento de entrenamiento, los instructores habían reemplazado los pósteres estándar de chicos malos con pósteres de niños pequeños y adolescentes reteniendo a otros niños como rehenes - como uno puede esperar en una situación de tiroteo en la escuela. Cuando los adjuntos ("deputies") redondearon la barrera de madera contrachapada y enfrentaron a los pósteres, ellos "eliminaron" las amenazas sin dudarlo. Les pregunté a varios de los adjuntos si fue duro disparar a un menor de edad. Cada adjunto dio la misma respuesta básica: "Yo no miré la edad del sujeto, sólo vi las armas y los rehenes y procedí como fui entrenado".


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La abrumadora evidencia de más de una década de investigación muestra que en el laboratorio, los policías no toman su decisión de disparar basada en la raza o, como lo muestra una evidencia más reciente, tampoco en el sexo o la edad. El control cognitivo les permite centrarse en cambio conscientemente en identificar y responder a un arma. El sesgo racial en el mundo real. Esa fue la buena noticia, pero ese no es el final de la historia. Otras investigaciones han demostrado que la excitación y la fatiga y la activación repentina del estrés -por amenaza de daño o amenaza a su vida, por ejemplo- puede revertir las diferencias encontradas en la investigación de laboratorio antes mencionadas. Los oficiales de policía que estaban privados de sueño como parte de un estudio de investigación mostraron signos de prejuicios raciales en sus decisiones de disparar y se desempeñaron de modo similar a miembros de la comunidad. Lo mismo puede decirse de los oficiales bajo la activación del estrés y aquellos con cargas cognitivas elevadas (por ejemplo, desde la multitarea). Esas situaciones hacen que sea difícil para los oficiales superar sus sesgos implícitos y conscientemente dirigir su enfoque a identificar un arma. La fatiga y el estrés apartaron el control cognitivo de su atención y acciones. Los hallazgos como ésos sugieren que cuando los oficiales están "en su juego", sus decisiones de disparar no son sesgadas racialmente. Sin embargo, si el oficial comienza a perder el control cognitivo, entonces los sesgos pueden jugar una parte en la decisión de un oficial para disparar. La investigación científica ha demostrado que el control cognitivo es la clave. Entrenar para mantener el control cognitivo. La mayoría de los tiroteos -sino todos-con intervención policial se producen bajo algún tipo de excitación de estrés o amenaza de daño. En otras palabras, la vida real es diferente de la vida de laboratorio. La activación del estrés puede robarle el control cognitivo a un oficial. Pero hay buenas noticias. La investigación ha demostrado también que hay maneras efectivas de lidiar con el estrés y la amenaza en el mundo real, manteniendo el control cognitivo. Los escenarios de entrenamiento de acción en vivo -o incluso el video de entrenamiento de alta intensidad que crea altos niveles de excitación- ayudarán a los oficiales a aprender a mantener el control cognitivo y centrarse en la información importante durante las situaciones de alto riesgo. Nuestra investigación en los últimos años ha demostrado específicamente la importancia del entrenamiento de la mentalidad para mantener el control cognitivo. Me refiero a ella como Comando Cognitivo (C²) y la investigación sobre cómo el C² impacta en el uso de la fuerza y de las decisiones de disparar es abrumadoramente positiva. El entrenamiento ha eliminado efectivamente el sesgo en el laboratorio, pero el estrés resultante de la amenaza o peligro revierte esas ganancias. El entrenamiento debe ir más profundo. Debemos seguir encontrando maneras de preparar mejor a los oficiales por lo que puedan enfrentar en la calle. Porque como la investigación científica actual lo muestra, los oficiales que están en control cognitivo basan sus decisiones para disparar en la identificación de un arma, no en los prejuicios raciales. Referencias. Parte de la información en este artículo se obtuvo de la investigación de esos cuatro artículos: Correll J, Hudson SM, Guillermo S, & Ma DS (2014). The police officer's dilemma: A decade of research on racial bias in the decision to shoot. Social and Personality Psychology Compass, 8(5), 201-213. Correll J, Park B, Judd C, Wittenbrink B, Sadler MS, & Keesee T (2007). Across the thin blue line: Police officers and racial bias in the decision to shoot. Journal of Personality and Social Psychology, 92(6), 1006. Plant EA, & Peruche BM (2005). The consequences of race for police officers' responses to criminal suspects. Psychological Science, 16(3), 180-183. Plant EA, Peruche BM, & Butz DA (2005). Eliminating automatic racial bias: Making race non-diagnostic for responses to criminal suspects. Journal of Experimental Social Psychology, 41(2), 141-156.


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27 Oficiales Encargados de Hacer Cumplir la Ley criminalmente asesinados en los Estados Unidos en 2013 (Fuente: FBI)

Circunstancias en la escena del incidente

Llamadas perturbadoras 4

Situaciones de arresto 6

Desorden civil 0

Manejando detenidos 0

Investigando a personas sospechosas 5

Situaciones de emboscada 5

Actividad investigativa 1

Manejando personas con enfermedad mental 0

Persecuciones de tráfico / paradas 2

Situaciones tácticas 4


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¿Su agencia refleja esas tendencias en el uso de la fuerza? 58 Pese a la cobertura mediática hiperbólica, la mayoría de los últimos arrestos fueron efectuados con la

comunicación verbal solamente, siendo una rareza extrema el uso de la fuerza letal por parte de la policía.

Force Science Institute

3 de agosto de 2015 Una nueva encuesta sobre el uso de la fuerza revela que el uso de porras como armas de control o para golpear se está desvaneciendo, la lucha en el suelo garantiza un mayor énfasis en el entrenamiento y a pesar de la cobertura mediática hiperbólica, los últimos arrestos son efectuados con la comunicación verbal sola, siendo una rareza extrema el uso de la fuerza mortal por parte de la policía. Esas y otras conclusiones sobre el estatus actual de la fuerza como una opción en la calle provienen de las respuestas anónimas de casi 300 oficiales encargados de aplicar la ley a un cuestionario publicado en línea por el Dr. Michael Schlosser, director del Instituto de Entrenamiento Policial de la Universidad de Illinois (University of Illinois Police Training Institute) y el analista estadístico Michael Gahan. Los participantes representaban una amplia gama de tamaños de departamentos y experiencia, aunque todos trabajaban en el estado de Illinois y más del 90 % ciento eran hombres.

El estudio completo, que aparece en la revista de derecho "Foro Ejecutivo de la Aplicación de la Ley" (Law Enforcement Executive Forum), puede ser accedido por una pequeña tarifa haciendo click aquí. Un resumen del estudio está disponible allí sin cargos. A los efectos de la encuesta, la fuerza es definida como "cualquier táctica que un oficial usa sobre un asaltante resistente, combativo o mortal, [incluyendo] la manipulación conjunta, puntos de presión, derribos, golpes, armas intermedias y el uso de un arma de fuego". Las opciones de no fuerza, usadas sobre los arrestados "cooperativos", incluida la comunicación verbal, mantener el control sin torsión o dolor y las técnicas de esposado. Esos son los aspectos más destacados de los resultados. Frecuencia de la fuerza. Los recientes eventos en las noticias "han dado la impresión de que los oficiales a menudo usan la fuerza y la fuerza letal puede parecer más frecuente de lo que es en realidad", señalan los autores. De hecho, "la mayoría de las interacciones entre la policía y los ciudadanos... implican una pequeña probabilidad de fuerza. Incluso... la mayoría de los arrestos no requiere fuerza alguna en absoluto". • La mayoría de los oficiales dijo que tiene "más probabilidades de ganar la cooperación usando sólo sus habilidades verbales". Según el 96 % de los encuestados, los arrestados "con frecuencia o con mucha frecuencia cooperan" con su voz mando sola. • Más de la mitad de los oficiales (57 %) dijo que para ellos es "raro o muy raro" usar armas personales, como los puños y los pies. Otro 15 % dijo que nunca usa tales defensas. 58 Force Science Institute. Does your agency reflect these use-of-force trends? Destroying Myths & Discovering Cold Facts. http://www.policeone.com/use-of-force/articles/8695064-Does-your-agency-reflect-these-use-of-force-trends/?utm_source=8693916&utm_medium=email&utm_content=Exclusives1RightTitle&utm_campaign=P1Member&nlid=8693916. 3 de agosto de 2015. Traducción de Carlos G. Blanco, M.Sc.


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• Casi 9 de cada 10 (86,2 %) dijo que nunca ha usado la fuerza letal. • Al arrestar a sujetos resistentes activos (los que "se tensan, se alejan o corren"), los oficiales son "más propensos" a usar las técnicas de control y de derribo, en lugar de opciones de fuerza como el gas pimienta o la TASER para ganar el control. Casi el 87 % dijo que "nunca o muy raramente / rara vez" abordan la resistencia activa con gas pimienta y alrededor de 6 de cada 10 informaron que "nunca o muy raramente" usan la TASER. En un "hallazgo interesante", los investigadores reportaron que los oficiales eran "más propensos simplemente a 'mostrar' una TASER para ganar el cumplimiento... que 'desplegar' realmente una TASER". • Incluso en el trato con un asaltante "agresivo", cuyo comportamiento "es probable que cause daño físico", los oficiales en la práctica tienden a usar derribos por un amplio margen para obtener el control, en lugar de emplear una TASER. Bastones acumulando polvo. Casi todos los oficiales (96 %) llevan un bastón, según la encuesta, pero una ligera mayoría (51 %) nunca lo ha usado como una herramienta para golpear. Alrededor de la mitad reportó que "raramente / muy raramente" usan el dispositivo, incluso para hacer palanca o control, con otro 40 & que dijo que no lo hace. "Parece como si el bastón, que alguna vez fuera una herramienta policial de uso común, está perdiendo su protagonismo", señalan los investigadores. "No es un 'ir a' la herramienta para la mayoría de los oficiales.... Es posible que el uso de porras, incluso cuando es apropiado, parece ser más agresivo y los oficiales están preocupados por la opinión pública". Miscelánea. Entre otras cuestiones, la encuesta preguntó: "¿con qué frecuencia una pelea termina en el suelo al intentar detener tanto a sujetos resistentes activos como a asaltantes agresivos?" Casi 6 de cada 10 (58,1 %) de los participantes dijeron que "con frecuencia o mucha frecuencia" van al suelo cuando se trata de asaltantes agresivos, con cerca de 4 de cada 10 (38 %) que dice que es el caso con los resistentes activos. Entre otros hallazgos: • "No hubo correlación entre el uso de la fuerza y la experiencia del oficial" (El tamaño de la muestra de mujeres era demasiado pequeña como para determinar correlaciones estadísticas.) • Los oficiales de los departamentos más pequeños (50 efectivos o menos) son "más propensos a ser provisto de una TASER" por sus agencias que los de los departamentos más grandes. En total, el 70 % de los participantes de la encuesta portaban una TASER, comparados con más del 90 % que llevaba gas pimienta y porras. • Los encuestados informaron más frecuentemente que diciéndoles a los arrestados que están bajo arresto después de hacer el primer contacto físico con ellos, aunque dependiendo de las circunstancias, los oficiales pueden "usar una amplia gama de abordajes para arrestar sospechosos" y colocarlos en una posición de esposado. Impacto del entrenamiento. Los resultados de la encuesta sugieren que el entrenamiento de las fuerzas del orden necesita ser reequilibrado en ciertos aspectos importantes, dicen los investigadores. A saber: • "El entrenamiento del oficial debe enfatizar el control en tierra / lucha en el suelo como una parte más grande" del plan de estudios. • Dada la "disminución" del uso de las porras y la posibilidad de que "un día los oficiales no los portarán más con ellos", debe dedicarse menos tiempo a la instrucción con bastón. • "El mostrar las pistolas TASER debería abordarse mediante el entrenamiento basado en escenarios a un nivel mayor".


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• Como reflejo del hecho de que la encuesta mostró que los oficiales en los departamentos más pequeños predeciblemente son menos propensos a tener refuerzos en los arrestos, a los patrulleros en las agencias "debe proporcionársele más entrenamiento con situaciones de detención con un solo oficial". • Por último, porque los oficiales "parece que están haciendo un buen trabajo de comunicación con los detenidos" para ganar la cooperación, "la importancia de las tácticas verbales debería seguir destacándose como una de las habilidades más importantes para la formación de los oficiales de la ley".


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ÍNDICE

Pág. Autor Tema 2 Florida Police Press Evitando diez errores fatales 3 NIJ Uso policial de la fuerza 3 NIJ El uso continuo de la fuerza 4 Gary T. Klugiewicz Diez consejos para ganar peleas mano a mano 6 Gary T. Klugiewicz Explicando la rápida escalada de la fuerza 7 Gary T. Klugiewicz Tácticas de de-escalada posteriores al evento 7 Gary T. Klugiewicz Una buena acción con resultados trágicos: Una visión desde afuera 8 Charles Remsberg Reconocer sospechosos armados

10 Raymond E. Foster Activando la memoria muscular 11 Hayley Hudson Enfermo y cansado: ¿Cómo daña a los policías la privación del sueño? 12 Ed Flosi Contraterrorismo, policías, y entrenar para el ‘cuándo’ 13 Ed Flosi Uso de la fuerza: Definiendo "razonable" versus "necesario" 15 Ed Flosi Uso de la fuerza: Definiendo fuerza "objetivamente razonable" 15 Ed Flosi Uso de la fuerza: Caídas del modelo continuo 17 Ed Flosi Fuerza letal: Usted no (intentar) matará 19 Ed Flosi Tres criterios "externos" de entrenamiento de combate críticos 21 Jeffrey Hall Hojutsu-Ryu, el arte marcial de las armas de fuego 25 Jeffrey Hall Zen y el combatiente armado 28 Jeffrey Hall Los cinco anillos y la pistola 31 Mike Boyle Gestión de la amenaza con poca luz 38 Ken Hardesty Modifique sus tácticas, derrote al oponente. 39 Karen L. Bune Violencia adolescente: Cómo puede, la policía, tener un impacto 41 Greg Sancier Interacción del funcionario de seguridad con el enfermo mental peligroso 44 Scott L. Sargent Asegurar entrenamiento relevante después de un hecho con uso de la fuerza 46 Scott L. Sargent ¿Prestamos atención a las lecciones aprendidas? 47 Roy Bedard Disparar al centro de la masa: ¿Tirar para matar o para detener? 49 Roy Bedard Disparar al centro de la masa: Me dijeron que nosotros matamos a todos... 51 Roy Bedard Disparar al centro de la masa: Los peligros de la negación 53 D. Kenink y R. Mroz Instrucción de Tiro y Armas de Fuego – Entrenamiento para la supervivencia 54 Ralph Mroz Entrenamiento de Supervivencia: Fortalecer el músculo de disparo 56 Ralph Mroz Los nuevos modelos en entrenamiento con armas de fuego 60 Ralph Mroz Competición y entrenamiento: Cómo entrenar; cómo no entrenar 63 SWAT Dan Marcou Sun Tzu para los policías del siglo XXI 65 SWAT Dan Marcou Prevenir el error que puede terminar con su carrera 67 SWAT Dan Marcou Una ley exige aptitud a los oficiales 69 SWAT Dan Marcou Rodney King: La perspectiva de un policía 71 Bill Campbell Recuerde el Círculo de Seguridad cuando maneje la boca de su arma de fuego 74 Ross Torquato Entrenamiento en Artes Marciales Mixtas, ¿es lo correcto para sus oficiales? 75 Ross Torquato ¿Cuándo se convierten los encuentros desarmados en fuerza letal? 76 Brian Willis ¿Cómo lograr la "aptitud funcional"? 78 Brian Willis No se trata de mí – y, sin embargo, ¡es todo sobre mí! 80 Brian Willis No deje que el fantasma de nadie... 81 Ron Avery ¿Cuál es la diferencia entre el disparo «ofensivo» y el «defensivo»? 84 Ron Avery Destrezas para el tiroteo: Conciencia situacional y enfoque en la tarea 85 Dr. Ron Martinelli Evaluación de la amenaza pre-contacto y el «arte de la fuerza» 88 Fred Leland La anatomía de la victoria (Parte 1): ¿Qué se necesita para ganar? 93 Fred Leland La anatomía de la victoria (Parte 2): La victoria al mínimo costo 96 Duane Wolfe Táctica y el Ciclo OODA

98 Bank Miller y Ben Kurata

Doce elementos críticos de un programa moderno de entrenamiento con armas de fuego


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/ Pág. Autor Tema 102 C. G. Blanco ¡Mire las manos! 102 B. Brantner Smith Tome 20 minutos 102 Rich Von Voigt Haciéndose de tiempo para trabajar 103 Charles Remsberg Herida pequeña, problema mayor 103 Charles Remsberg Diez hábitos críticos para ganar un tiroteo 106 Charles Remsberg Un acrónimo -MAWOL- para ayudarlo a mantener su mente alerta 108 Charles Remsberg Primeros resultados del estudio sobre oficiales que sobreviven a las heridas 110 Charles Remsberg Mientras aumenta el número de muertes de policías, ¿qué hacer? 113 Charles Remsberg Claves para ganar tiroteos - Parte I 114 Charles Remsberg Claves para ganar tiroteos - Parte II

116 Dr. Nick Lewer y Sr. Neil Davison

Armas eléctricas paralizantes: ¿Alternativa a la fuerza letal o una herramienta de cumplimiento?

119 Richard Fairburn Entrenamiento policial sobre la fuerza letal en el siglo XXI 120 Richard Fairburn Código de Colores de Cooper: Un sistema para la conciencia situacional

122 Richard Fairburn Extracto del libro: «Construyendo un mejor tirador – Mejorando la puntería, la mecánica, y la mentalidad»

125 Richard Fairburn Extracto del libro: «Construir un mejor tirador - Segunda Parte: Trepando por la escalera de caracol»

127 Richard Fairburn Más allá del rifle de patrulla: Añadir la capacidad de un «Tirador Designado» 129 FSI Ltd. Force Science Institute Ltd. - Instituto de la Ciencia de la Fuerza 130 Bill Lewinski «Fuego contagioso»: ¿realidad o ficción? 133 FBI Chuck Joyner Luchando contra el fenómeno del «fuego contagioso»

135 Capitán (R) Greg Meyer

Encuesta de la Revista de Emergencias Médicas sobre el uso excesivo de la fuerza policial: “¡Ay!”

136 FSI Ltd. ¿Por qué dispararle a un herido no tiene sentido científicamente, legalmente o tácticamente?

141 FSI Ltd. «El gorila invisible» 145 FSI Ltd. ¿Están su "control de mirada y patrón de lectura" ligado a su desempeño?

147 FSI Ltd. Los sospechosos boca abajo con manos ocultas son más peligrosos de lo imaginado.

152 FSI Ltd. Seis maneras en que los policías pueden ayudar a sus abogados a ganar un litigio sobre uso de la fuerza

154 Richard Fairburn ¿Por qué el Modelo 1911 aún está en servicio?

156 Dr. Matt Stiehm Tres formas de llevar el entrenamiento sobre uso de la fuerza a los departamentos de policía pequeños

158 FSI Ltd. Las imágenes mentales estimulan la precisión del disparo bajo amenaza

162 FSI Ltd. Protocolo innovador para el Oficial Implicado en un Tiroteo se centra en la compasión hacia el oficial involucrado

165 Tony Blauer Gestión del enfrentamiento: 10 mandamientos de la supervivencia del oficial

167 FSI Ltd. ¿Pueden los policías realmente evitar disparos "extra"? Una revisión de investigación realista

169 Joel F. Shults Seis preguntas «top» sobre el uso de la fuerza en Ferguson: la respuesta de un policía

172 Doug Wyllie Examinando cuestiones de tiempo en el tiroteo de Ferguson

175 Dan Marcou Cómo pueden ayudar los policías a los ciudadanos a entender mejor el uso policial de la fuerza

176 Duane Wolf Siete verdades sobre el incidente de Ferguson (y otros como el)

178 Duane Wolfe Estudio de Caso: ¿Por qué la distancia de los sujetos sentados aumenta la seguridad del oficial?

181 Doug Wyllie 4 revelaciones del informe filtrado de la autopsia de Michael Brown 183 Duane Wolfe 5 mitos más comunes de uso de la fuerza desmentidos


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/// Pág. Autor Tema 185 FSI Cómo el contacto humano puede consolar a un guerrero herido 187 Tim Dees – P1 Por qué los policías "no disparan a herir" 188 Joel F. Shults Por qué los policías necesitan ver más que las manos

189 Doug Wyllie ¿Servicio de Policía inteligente? Por qué la táctica de "ojos cerrados" del Departamento de Policía de Nueva York no sirve de nada

192 Tim Barfield 6 hechos de uso de la fuerza que mantendrán seguros a los oficiales y sus puestos de trabajo

194 Paul Marik Confianza versus ego: cómo uno de ellos puede hacer que lo maten

196 Jeff McGill Por qué los policías deben agregar "imágenes mentales estratégicas" a su repertorio

197 Jonathan Page ¿Pueden el estrés y la fatiga afectar el prejuicio del oficial y la toma de decisiones?

200 FBI 27 Oficiales Encargados de Aplicar la Ley criminalmente asesinados en 2013 en los Estados Unidos

201 FSI ¿Su agencia refleja esas tendencias en el uso de la fuerza?

Education

Uso de la fuerza