Upload
others
View
10
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
AMPARO DIRECTO:D.C. 309/2010.
QUEJOSA:********************
PONENTE:MAGISTRADO WALTER ARELLANO HOBELSBERGER.
SECRETARIO:ENRIQUE CANTOYA HERREJÓN.
México, Distrito Federal. Acuerdo del Quinto
Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito,
correspondiente al diez de junio de dos mil diez.
V I S T O S para resolver, los autos del juicio de
amparo directo D.C. 309/2010, promovido por **********, en
contra de la autoridad y del acto siguientes:
“III.- AUTORIDAD RESPONSABLE. - - - C. Juez
Trigésimo Cuarto de lo Familiar del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal. - - - IV.- ACTO RECLAMADO. -
- - Lo constituye la sentencia definitiva del expediente
número ********** de fecha veintiséis de marzo del año dos
mil diez, dictada por el H. ‘Juzgado’ Trigésimo Cuarto de lo
Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
D.C. 309/2010.
2
Federal, en el juicio ordinario civil (divorcio incausado),
seguido por ********** en contra de **********, cuyos
considerandos y resolutivos son del tenor literal siguiente:
(se transcriben)”.
Acto que los quejosos consideran viola en su
perjuicio las garantías contenidas en los artículos 14, 16 y 17
constitucionales; y
R E S U L T A N D O:
PRIMERO.- Mediante escrito presentado el diez de
diciembre de dos mil nueve, ante la Oficialía de Partes Común
en Materia Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, **********, por su propio derecho, demandó de **********
**********, en la vía ordinaria civil (divorcio incausado), las
siguientes prestaciones:
“A).- La declaración judicial por sentencia
ejecutoriada respecto de la disolución del vínculo
matrimonial que une a la suscrita **********, con el
demandado **********, de conformidad a lo ordenado por los
artículos 266, 267 y demás relativos del Código Civil
vigente para el Distrito Federal, con todas las
D.C. 309/2010.
3
consecuencias inherentes a dicha determinación. - - - B).-
Como consecuencia de la anterior prestación, se demanda
la procedencia por sentencia ejecutoriada respecto de la
correspondiente liquidación de la sociedad conyugal
celebrada entre las partes de este juicio, previos los
trámites de ley; para el caso de no aprobarse el convenio y
se reserve dicha cuestión para la etapa de ejecución de
sentencia. - - - C).- El pago de la pensión alimenticia, a
razón de **********), mensuales a favor de la
suscrita**********; así como, de nuestros hijos de nombres
**********, todos de apellidos **********, por la manutención
de nuestros hijos desde el mes de septiembre del año dos
mil nueve, hasta la fecha de la presentación de la demanda
y las que se sigan generando, mismas que serán liquidadas
en ejecución de sentencia. - - - D).- La condena al
demandado respecto al pago de los servicios de suministro
de luz, teléfono, cablevisión, sky, predial, agua, seguros de
gastos médicos, celulares, tenencia vehicular, seguros de
vehículos, viajes, comidas de fin de semana, que ha venido
pagando desde hace varios años a la fecha como parte de
los alimentos que ha otorgado a la suscrita y a nuestros
tres hijos, sentenciando que dichos conceptos deberán de
ser cubiertos por un tiempo igual al de la duración del
D.C. 309/2010.
4
matrimonio. - - - E).- El pago de gastos y costas que se
originen con motivo de la tramitación del presente juicio.”
Apoyó su demanda en los hechos y preceptos
legales que estimó pertinentes.
SEGUNDO.- Por razón de turno correspondió
conocer de dicha demanda al Juez Trigésimo Cuarto Familiar
del Distrito Federal, quien previa aclaración, por auto de
dieciocho de enero de dos mil diez, dictado en el expediente
********************, la admitió a trámite.
TERCERO.- Por auto de dieciséis de febrero de dos
mil diez, se tuvo a ********** dando contestación a la demanda
instaurada en su contra, conforme a su interés convino, y por
oponiendo las excepciones y defensas que consideró
pertinentes.
CUARTO.- Seguido el juicio por su cauce legal,
concluyó en su única instancia con la sentencia dictada el
veintiséis de marzo de dos mil diez, conforme a los siguientes
puntos resolutivos:
D.C. 309/2010.
5
“PRIMERO.- Ha sido procedente la solicitud de
divorcio presentada por la señora ********** en contra de
**********, (sic) expresó su inconformidad con la propuesta
de convenio de la actora y exhibe su contrapropuesta de
convenio. - - - SEGUNDO.- Se declara disuelto el vínculo
matrimonial existente entre ********** y **********, celebrado
el día cuatro de septiembre de mil novecientos ochenta y
cuatro, bajo los siguientes datos: ********** del Registro Civil
del Distrito Federal. - - - TERCERO.- Se declara disuelta la
sociedad conyugal establecida, misma que se liquidará en
la vía incidental que sea planteada. - - - CUARTO.- En los
términos del artículo 289 del Código Civil (sic), los
divorciantes podrán contraer nuevo matrimonio civil, sin
restricción alguna. - - - QUINTO.- Se establece una pensión
alimenticia provisional a favor del menor hijo de las partes
**********, por la cantidad de ********** Cantidad de dinero
que el demandado deberá depositar dentro de los primeros
cinco días de cada mes, en la cuenta número ********** a
nombre de ********** que la demandante tiene ante la
institución bancaria denominada ******************************,
sirviendo las fichas de depósito o los traspasos o
comprobantes de operación como pago de pensión
alimenticia; apercibido que de no hacerlo así, se le aplicará
una medida de apremio contenida en el articulo 73 del
D.C. 309/2010.
6
Código de Procedimientos Civiles (sic), por desacato a una
orden judicial. Complementando la pensión alimenticia
provisional del menor hijo, la actora con los ingresos que
ésta percibe. Dicha pensión alimenticia provisional deberá
subsistir hasta que se dicte sentencia interlocutoria en la
incidencia que resuelva, en su caso respecto de la pensión
alimenticia definitiva, cuando se cuente con los elementos
que resulten necesarios para ello, atento a lo dispuesto por
el artículo 282 del código sustantivo de la materia. - - -
SEXTO.- Se determina la guarda y custodia definitiva del
menor ********** a favor de su señora madre ********** quien
la ejercerá en el domicilio establecido como conyugal
ubicado en ******************************; actualmente
****************************** de esta ciudad. - - - SÉPTIMO.- Se
establece un régimen de visitas y convivencias definitivo
entre el demandado ********** y su hijo **********, los fines de
semana de cada quince días, debiendo pasar a recoger a su
hijo el día sábado a las nueve horas en el domicilio
establecido como conyugal ubicado en **********,
actualmente ********** de esta ciudad, y reintegrarlo al
mismo el día domingo a las veinte horas. En lo que
respecta en las vacaciones escolares del menor de semana
santa, verano, invierno se repartirán en forma equitativa en
un cincuenta por ciento para cada divorciante, tomando
D.C. 309/2010.
7
también los cumpleaños o algún evento festivo o social,
previo acuerdo entre ellos. Autorizando salidas o viajes del
menor al extranjero, con el deber de informarse
previamente el itinerario a seguir, así como realizar todos
los trámites necesarios para que el menor realice el viaje al
extranjero. Debiendo iniciar dichas convivencias (sic)
sábado diecisiete y domingo dieciocho de abril de dos mil
diez y así sucesivamente, apercibidos que de no permitir
dicho régimen de convivencias definitivo al infractor se le
aplicará como medida de apremio una multa por el
equivalente a sesenta días de salario mínimo general
vigente en el Distrito Federal, con fundamento en el artículo
73 del Código de Procedimientos Civiles (sic), por desacato
a una orden judicial. - - - OCTAVO.- En su oportunidad
procesal dese debido cumplimiento al artículo 291 del
Código Civil (sic). - - - NOVENO.- Guárdese en el legajo que
se lleva en este juzgado, copia certificada de la presente
resolución. - - - DÉCIMO.- En cumplimiento a lo dispuesto
en el Título Tercero denominado ‘Destrucción del Fondo
Documental’ del ‘Reglamento del Sistema Institucional de
Archivos del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal y
del Consejo de la Judicatura del Distrito Federal’, en sus
artículos 28 y 30, se hace saber a las partes que en su caso,
una vez que este asunto, se considere como concluido en
D.C. 309/2010.
8
los términos a que se refiere la fracción VII del artículo 2 de
dicho reglamento, el expediente será destruido en el
término de seis meses contados a partir de la notificación
respectiva que ordene su destrucción. Ante lo cual las
partes interesadas que hayan presentado pruebas,
muestras y documentos una vez concluido el juicio y
ordenada su destrucción, deberán acudir al juzgado a
solicitar la devolución de sus documentos dentro del
término antes (sic) referido. Para conocimiento de los
interesados, el reglamento se encuentra visible para su
consulta en el archivo de este juzgado. - - - DÉCIMO
PRIMERO.- Notifíquese.”
QUINTO.- La sentencia de fondo de primera
instancia, constituye el acto reclamado en este juicio de
amparo. La demanda de garantías se presentó el veintisiete de
abril de dos mil diez, ante la Oficialía de Partes Común en
Materia Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, la que la envió junto con sus anexos, a la Oficina de
Correspondencia Común de los Tribunales Colegiados en
Materia Civil del Primer Circuito, y su conocimiento
correspondió a este Quinto Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito, el que mediante auto de presidencia de
trece de mayo de dos mil diez, la admitió a trámite. El Agente
D.C. 309/2010.
9
del Ministerio Público Federal de la adscripción, se abstuvo de
intervenir.
Por auto de veinte de mayo del año en curso,
dictado por la Presidenta de este órgano colegiado, se turnaron
los autos al Magistrado Walter Arellano Hobelsberger, para
formular el proyecto de resolución respectivo; y
C O N S I D E R A N D O:
PRIMERO.- Este Quinto Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito, es competente para conocer y
resolver el presente juicio de amparo directo, de conformidad
con los artículos 103, fracción I, 107, fracciones III, inciso a), y
V, inciso c), de la Constitución General de la República; 46 y
158 de la Ley de Amparo; 37, fracción I, inciso c), 38, 144 y 145
de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, y el
contenido del Acuerdo General 57/2006 del Pleno del Consejo
de la Judicatura Federal, relativo a la determinación del número
y límites territoriales de los circuitos en que se divide el territorio
de la República Mexicana, y a la jurisdicción territorial y
especialización por materia de los tribunales colegiados y
unitarios de circuito y de los juzgados de distrito, en virtud de
que se impugna una sentencia definitiva dictada por una
D.C. 309/2010.
10
autoridad jurisdiccional en materia familiar con residencia en
este circuito.
SEGUNDO.- Es cierto el acto reclamado, porque así
se advierte de las constancias que el juez responsable remitió
como apoyo a su informe justificado, consistente en el
****************************************, éste del índice del Juzgado
Trigésimo Cuarto de lo Familiar del Distrito Federal.
TERCERO.- El presente juicio de amparo directo se
promovió oportunamente.
La resolución que constituye el acto reclamado fue
notificada a la promovente del presente juicio de amparo
**********por medio de Boletín Judicial número cincuenta y
nueve, del lunes cinco de abril de dos mil diez, como se
advierte de la certificación que obra en la foja setecientos
cincuenta y dos del ********** ******************************así
como en la diversa certificación que en términos del artículo
163, de la Ley de Amparo realizó el juzgado responsable, la que
obra en la foja siete vuelta del expediente en que se actúa.
D.C. 309/2010.
11
En ese orden de ideas, debe indicarse que la
notificación judicial surtió efectos el martes seis de abril de
dos mil diez.
Por tanto, el término de quince días a que se refiere
el artículo 21, de la ley de la materia, transcurrió del
miércoles siete al martes veintisiete de abril de dos mil
diez, ya que los días diez, once, diecisiete, dieciocho,
veinticuatro y veinticinco de abril del presente año, fueron
inhábiles para el juzgado responsable.
Ahora bien, el escrito por el que se promovió el juicio
de amparo que nos ocupa, se presentó ante la Oficialía de
Partes Común en Materia Familiar del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal, el veintisiete de abril de dos mil
diez, como consta en el sello que obra en la foja cuatro del
presente expediente, y en la certificación realizada por el
juzgado para cumplir con lo dispuesto en el artículo 163 de la
ley de la materia.
Por consiguiente, si la demanda de amparo se
exhibió ante la Oficialía de Partes Común en Materia Familiar
del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, el
veintisiete de abril de dos mil diez, y la última fecha para
D.C. 309/2010.
12
promover el juicio de garantías era ese mismo día, es
inconcuso que la demanda en mención se presentó antes de
que concluyera el plazo legal, por lo que es claro que la
promoción del presente juicio de amparo directo se hizo
oportunamente.
CUARTO.- Las consideraciones en que se sustenta
la sentencia reclamada son las siguientes:
“II.- Se ha acreditado fehacientemente el vínculo
matrimonial celebrado por **********y **********, así como el
nacimiento de sus tres hijos de nombres ********** todos de
apellidos ********** siendo mayores de edad los dos
primeros y menor el último, con la exhibición de los
atestados correspondientes del Registro Civil (sic).
Documentos públicos a los que se les concede valor
probatorio pleno atento a lo dispuesto por los artículos 39 y
50 del Código Civil (sic), en relación con los preceptos 327,
fracción IV y 403 del Código Procesal Civil (sic). - - - III.-
Atento a lo dispuesto por el artículo 266 del Código Civil
reformado, publicado en la Gaceta Oficial del Distrito
Federal el día tres de octubre de dos mil ocho, en que se
señala que el divorcio disuelve el vínculo del matrimonio y
deja a los cónyuges en aptitud de contraer otro. Podrá
D.C. 309/2010.
13
solicitarse por uno o ambos cónyuges cuando cualquiera
de ellos lo reclame ante la autoridad judicial manifestando
su voluntad de no querer continuar con el matrimonio, sin
que se requiera señalar la causa por la cual se solicita,
siempre que haya transcurrido cuando menos un año
desde la celebración del matrimonio. Sólo se decretará
cuando se cumplan los requisitos exigidos por el siguiente
artículo. Siendo el caso que la señora **********, solicitó ante
esta autoridad judicial, la disolución del vínculo
matrimonial que la une con el demandado **********, al
manifestar que es su voluntad no querer continuar con su
matrimonio, cuya duración es mayor a un año.
Admitiéndose a trámite el divorcio incausado y
ordenándose emplazar al enjuiciado, lo cual se realizó y al
dar contestación a la demanda instaurada en su contra por
escrito presentado el día dieciséis de febrero de dos mil
diez, expresó su voluntad de disolver el vínculo
matrimonial que lo une a la actora, pero su inconformidad
con el convenio exhibido por ésta, presentando su
contrapropuesta, sin que en la audiencia celebrada el día
tres de marzo del presente año, se lograran poner de
acuerdo, por lo que el suscrito juzgador ordenó traer a la
vista los autos para dictar la sentencia correspondiente con
fundamento en el artículo 272-B del código adjetivo.
D.C. 309/2010.
14
Asimismo y teniéndose por cubiertos los supuestos del
numeral transcrito, pues la actora en forma unilateral
solicita la disolución del vínculo matrimonial, sin señalar la
causa de terminación del matrimonio, aunado a que las
partes celebraron su matrimonio el día cuatro de
septiembre de mil novecientos ochenta y cuatro, teniendo
más de un año de casados en relación a la fecha de la
‘interposición’ del presente juicio por la actora, que lo fue
el día diez de diciembre de dos mil nueve, satisfaciéndose
plenamente los supuestos de dicho numeral 266 del Código
Civil (sic). - - - En cuanto a lo señalado en el artículo 267
del código sustantivo de la materia, que igualmente fue
reformado y publicado en la Gaceta Oficial del Distrito
Federal el día tres de octubre de dos mil ocho, el cual
refiere que el cónyuge que unilateralmente desee promover
el juicio de divorcio deberá acompañar a su solicitud la
propuesta de convenio para regular las consecuencias
inherentes a la disolución del vínculo matrimonial,
debiendo contener los requisitos ahí señalados. - - -
Artículo que a criterio de este juzgador, se tiene por
cumplimentado, ya que la actora junto con su escrito inicial
de demanda, exhibe su propuesta de convenio en el que
contempla los requisitos del numeral señalado; teniéndose
que el enjuiciado al dar contestación a la demanda
D.C. 309/2010.
15
manifiesta su inconformidad con el convenio exhibido por
la actora y presenta su contrapropuesta respectiva; y en la
audiencia celebrada el día tres de marzo de dos mil diez,
sólo compareció personalmente la actora, no así el
demandado, que lo hizo a través de su apoderado legal, sin
que haya sido posible resolver lo relativo al convenio de la
actora y contrapropuesta del demandado. - - - Por lo que
se deberá declarar disuelto el vínculo matrimonial que une
a ********** y **********, celebrado el día cuatro de septiembre
de mil novecientos ochenta y cuatro, bajo los siguientes
datos: ********** del Registro Civil del Distrito Federal, con
todas sus consecuencias jurídicas. - - - Ahora bien, resulta
importante señalar que el Código Civil (sic) vigente a partir
de las reformas sufridas a partir del día tres de octubre de
dos mil ocho, establece un conjunto de medidas, que el
juez debe decretar, con el fin de proteger la seguridad e
integridad de la familia. El referido código establece que el
divorcio disuelve el vínculo matrimonial y deja a los
cónyuges en aptitud de contraer otro. Puede solicitarse por
uno o ambos cónyuges cuando cualquiera de ellos lo
reclame ante la autoridad judicial, manifestando su
voluntad de no querer continuar con el matrimonio, sin
necesidad de señalar una causa específica, siempre que
haya transcurrido al menos un año desde su celebración. -
D.C. 309/2010.
16
- - Cuando el trámite del juicio de divorcio inicie mediante
solicitud unilateral, debe acompañarse una propuesta de
convenio, en el que, en su caso, se señale: - - - a) La
persona que tendrá la guarda y custodia de los hijos
menores o incapaces; - - - b) Las modalidades bajo las
cuales uno de los progenitores ejercerá el derecho de
visitas o convivencia, cuando no conserve la guarda y
custodia; - - - c) La forma, lugar y fecha de pago de la
obligación alimentaria, respecto de los hijos y/o cónyuge,
así como la garantía para asegurar su debido
cumplimiento; - - - d) Designación del cónyuge que
conservará el uso del domicilio conyugal y del menaje; y - -
- e) Lo relativo a la administración de los bienes de la
sociedad conyugal, durante el procedimiento, hasta que se
liquide, así como la forma de liquidarla, mediante la
exhibición de las capitulaciones, inventario, avalúo y
proyecto de partición. Si el matrimonio se encuentra bajo el
régimen de separación de bienes, deberá señalarse el
monto de la compensación a que tendrá derecho el
cónyuge que durante el matrimonio se haya dedicado al
trabajo del hogar y, en su caso, al cuidado de los hijos, o
que no haya adquirido bienes propios o habiéndolos
adquirido, sean notablemente menores a los del otro
cónyuge. - - - El artículo 282 del Código Civil para el
D.C. 309/2010.
17
Distrito Federal, establece que una vez iniciado el juicio de
divorcio, deben dictarse las medidas provisionales
pertinentes que regirán hasta su conclusión. En los casos
de divorcio que no concluyen mediante convenio, dichas
medidas subsisten hasta que se dicta sentencia
interlocutoria que resuelva acerca de la situación de los
hijos o bienes. - - - El mismo precepto prevé dos clases de
medidas, unas que deben resolverse de oficio y otras una
vez contestada la solicitud de divorcio. - - - El juez cuenta
con la más amplia libertad para dictar las medidas
adecuadas para salvaguardar la integridad y seguridad
familiares. Para ello, de oficio debe señalar y asegurar la
cantidad que a título de alimentos se dará a los acreedores
que corresponda, ordenar lo necesario a fin de que los
cónyuges no se puedan perjudicar en sus bienes ni en los
de la sociedad conyugal, inclusive mediante la anotación
preventiva de la demanda en el Registro Público de la
Propiedad y de Comercio del Distrito Federal o revocar o
suspender los mandatos otorgados entre éstos. - - - Una
vez contestada la solicitud de divorcio, el juez debe
resolver cuál de los cónyuges continuará en el uso de la
vivienda familiar, del menaje respectivo y en su caso, lo
relativo a la guarda, custodia y convivencia de los hijos.
También podrá acordar las demás medidas que considere
D.C. 309/2010.
18
necesarias. - - - En el caso concreto que ahora se resuelve,
el día diez de diciembre de dos mil nueve, la actora
**********, inició en forma unilateral el juicio de divorcio y
acompañó a su escrito la propuesta de convenio
correspondiente, en donde entre otras cosas propone que
el domicilio conyugal sea habitado por ella y su menor hijo,
así como el pago de una pensión alimenticia a su favor y el
de dicho pequeño hijo de nombre ********** por la cantidad
de **********) mensuales, mediante depósito en cuenta
bancaria a nombre de la actora, basándose para ello en el
hecho de que su cónyuge, el hoy demandado está dado de
alta ante la autoridad hacendaria como persona física con
actividad empresarial, constituyéndose diversas
sociedades mercantiles o empresas, siendo dueño o
principal accionista, exhibiendo una lista, exhibiendo los
folios reales correspondientes, pero sin que se conozcan
los ingresos económicos actuales del cónyuge demandado
con esos documentos. - - - Exhibiendo también los folios
reales expedidos por el Registro Público de la Propiedad y
de Comercio del Distrito Federal, apareciendo el
demandado **********, en las escrituras públicas asentadas
como comprador único o acompañado de otras personas
de diversos bienes inmuebles. - - - Considerando también
la actora una lista con diversas cuentas bancarias, tanto
D.C. 309/2010.
19
nacionales como extranjeras en que el demandado
******************** es titular único o cotitular o a través de
persona moral, presentando diversos estados de cuenta. - -
- Que su menor hijo requiere seguir estudiando exhibiendo
la constancia correspondiente de fecha trece de enero de
dos mil nueve en el anexo veinticinco, así como continuar
con el seguro de gastos médicos mayores, que también
reclama para ella. Requiriendo también el pago de servicios
de suministro de luz, teléfono, cablevisión, sky, predial,
agua, celulares, tenencia vehicular, comidas de fin de
semana que ha venido otorgando desde hace varios años.
Señalando también que el demandado otorgó a sus hijos
medios de transporte, otorgando a su hija ********** un
vehículo marca ‘******************************, modelo **********
a su hijo ********** el vehículo **********, modelo ********** y a
su hijo ********** el vehículo **********, modelo **********,
pagando todos los derechos, tenencia, verificación,
gasolina, servicio de reparación, mantenimiento. - - -
Expresando la actora que cuenta con ingresos propios
derivados de su actividad profesional, pero que dichos
ingresos equivalen a la cantidad de ********** a **********
mensuales en promedio, que comparados dichos ingresos
con los gastos que se generan mes a mes en la familia
como mantenimiento de los inmuebles, actividades
D.C. 309/2010.
20
sociales y recreativas, ropa, alimentos, servicios que se
pagan en el hogar conyugal como luz, predial, teléfono,
gastos médicos mayores, diversión, esparcimiento que
ascienden a la cantidad de ********** mensuales; por lo que
atendiendo al principio de proporcionalidad se debe
establecer que al ser los ingresos de la actora inferiores en
comparación con los ingresos del demandado se debe fijar
una pensión a su favor para seguir llevando el
mantenimiento el mismo nivel de vida que ha tenido en los
últimos diez años con el demandado. Siendo el caso que la
actora fue requerida para que manifestara bajo protesta de
decir verdad la fuente y el monto total de sus ingresos,
desahogando la vista por escrito presentado el día primero
de marzo de dos mil diez, exhibiendo recibos de honorarios
correspondientes a los meses de enero, febrero, marzo,
abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre,
noviembre y diciembre de dos mil nueve, así como enero y
febrero de dos mil diez, por diversas cantidades, variando
sus ingresos de acuerdo a los pacientes que solicitan
terapias; presentando también estado de cuenta número
********** de ********** (sic), con
**********************************************************************
por el período del primero al treinta y uno de octubre de
dos mil nueve, por la cantidad de **********. Expresando
D.C. 309/2010.
21
además la actora que es profesora en la ********************
que le paga cada seis meses la cantidad de **********, que
depende de cada semestre en que le asignan una materia
para impartirla en ese período de tiempo, siendo también
profesora de la ********************, variando sus ingresos de
acuerdo a las entrevistas y asignaturas que le sean
otorgadas. - - - En cuanto al enjuiciado al dar contestación
a la demanda por escrito presentado ante este tribunal el
día dieciséis de febrero de dos mil diez, señala que en
cuanto a los alimentos siempre ha cumplido para con la
actora e hijos, no obstante que dos de ellos son mayores
de edad, cumpliendo siempre con holgura con su
obligación de mantener a su familia, exhibiendo estado de
cuenta número ********** de ********** (sic), a favor de la hija
**********, por el período que va del primero al treinta y uno
de enero de dos mil diez, por la cantidad de **********,
estado de cuenta número ********** de **********(sic), a favor
del hijo ********** por el período del primero al treinta y uno
de enero de dos mil diez por la cantidad de **********
exhibiendo transferencias de dinero de la cuenta del
demandado a la cuenta de su hija **********, a la cuenta de
su hijo **********, por la cantidad de ********** semanal para
cada uno, del mes de septiembre de dos mil nueve a los
primeros días de febrero de dos mil diez, así como
D.C. 309/2010.
22
depósitos a la cuenta de la actora por los meses de
diciembre de dos mil nueve, enero y febrero de dos mil diez
por ********** cada uno, un depósito en el mes de febrero de
dos mil diez por la cantidad de **********; además, la actora
reconoce que trabaja, pero omite mencionar que obtiene
ingresos muy elevados, tan es así que tiene cuentas
bancarias en **********, número **********, que cuenta con un
saldo al día treinta y uno de diciembre de dos mil nueve de
**********, con la aclaración que en dicha cuenta bancaria
también están incluidos el demandado ********** y los tres
hijos procreados ********** de apellidos **********. Contando
con una camioneta marca ********** modelo ********** con un
valor de ********** exhibiendo copia simple de factura, así
como recibo de pago de tenencia del Gobierno del Distrito
Federal, de fecha de vencimiento treinta y uno de marzo de
dos mil nueve, a nombre de ********** con un total a pagar
de **********, por lo que la actora no tiene derecho a recibir
pensión alimenticia. - - - Manifestando su inconformidad
con el convenio de la actora en cuanto al pago de pensión
alimenticia para la actora, exhibiendo su contrapropuesta
proponiendo otorgar una pensión alimenticia únicamente a
favor de su menor hijo **********, por la cantidad de **********,
depositándolos en la transferencia bancaria, como lo ha
estado realizando, dentro de los primeros cinco días de
D.C. 309/2010.
23
cada mes, la que comprenderá colegiaturas, uniformes,
útiles escolares, vestido, zapatos, comida, gastos médicos,
comprometiéndose a seguir pagando el seguro de gastos
médicos mayores y garantizar en su momento la pensión
alimenticia en términos del artículo 317 del Código Civil
(sic), incrementando dicha pensión alimenticia en términos
del artículo 311 del Código Civil (sic). - - - Siendo éstos los
elementos con los que se cuenta para determinar la
pensión alimenticia provisional a favor del menor hijo de
las partes, haciéndose la aclaración de que falta por
conocer las cuentas bancarias, de cheques, de ahorro o de
cualquier otra especie con las que cuente el demandado,
en virtud de que no fue posible recibir el informe
correspondiente de la Comisión Nacional Bancaria y de
Valores, pues ello provocaría retardar el fallo que ahora se
emite, lo cual es contrario al sentido que el legislador dio a
la reforma en materia de divorcio, pues a partir del tres de
octubre de dos mil ocho, se crea la figura jurídica de
divorcio incausado, en donde basta con que uno de los
cónyuge en forma unilateral o en conjunto soliciten la
disolución del vínculo matrimonial para que ésta se
decrete, resolviendo las consecuencias jurídicas
inherentes, si los cónyuges se ponen de acuerdo en el
convenio exhibido o efectuado en audiencia que al efecto
D.C. 309/2010.
24
se señala, se determina en la misma resolución que se
dicte disolviendo el vínculo matrimonial y si no se ponen
de acuerdo, se dejan a salvo sus derechos y se resuelve en
vía incidental. - - - Considerando este juzgador que en
cuanto a la reclamación de la actora ********** para que le
sea proporcionada una pensión alimenticia, por lo menos
provisional a su favor, no es procedente, en virtud de que
como se ha expresado con antelación la actora cuenta con
ingresos económicos propios, contando con una cuenta
bancaria a su nombre teniendo un ingreso superior a los
**********, de lo que se deduce que no tenga la necesidad
apremiante de que le sean otorgados alimentos a su favor
para la satisfacción de sus necesidades alimentarias, sino
que además se encuentra obligada a proporcionar
alimentos a su menor hijo, de acuerdo a sus posibilidades,
al igual que el padre. Motivo este por el cual deja de tener a
su favor la presunción de necesitar los alimentos y por
ende no se fijan alimentos provisionales a su favor. - - -
Ahora bien, con las actuaciones antes (sic) señaladas se
puede determinar respecto de la pensión alimenticia
provisional reclamada para el menor hijo de los
divorciantes. Para lo cual resulta necesario indicar que la
palabra alimentos proviene del latín aIimentum, que
significa comida, sustento y asistencia, pudiéndose definir
D.C. 309/2010.
25
el derecho a alimentos como la facultad jurídica que tiene
una persona denominada acreedor alimentista para exigir
de otra llamada deudor alimentista lo necesario para
subsistir, en virtud del parentesco consanguíneo, del
matrimonio o del divorcio (en determinados casos). - - - En
nuestro derecho la obligación de dar alimentos se puede
satisfacer de dos maneras: a) Mediante el pago de una
pensión alimenticia; o, b) Incorporando al acreedor en casa
del deudor. Así lo dispone el artículo 309 del Código Civil
para el Distrito Federal. - - - La obligación alimenticia tiene
su origen en un deber ético, el cual con posterioridad fue
acogido por el derecho y se eleva a la categoría de
obligación jurídica, la cual tiene como propósito
fundamental proporcionar al familiar que así lo requiera lo
que sea suficiente y necesario para su manutención o
subsistencia; debiendo entenderse este deber en su
connotación más amplia, esto es, el de asegurar al
acreedor alimentista los medios de vida suficientes cuando
éste carezca de la forma de obtenerlos y se encuentre en la
imposibilidad real de procurárselos, debiéndose demostrar
que quien deba proporcionarlos (deudor alimentista) tenga
posibilidad económica para hacerlo y que quien deba
recibirlos tenga necesidad de ello, en términos del artículo
311 del Código Civil para el Distrito Federal. - - - En
D.C. 309/2010.
26
principio, debe establecerse que el derecho a recibir
alimentos está regulado en el Título Sexto, Capítulo II, del
Código Civil para el Distrito Federal, específicamente en los
artículos 301 al 323. - - - Ese derecho sustantivo
(correlativo a una obligación) encuentra su justificación en
el vínculo de solidaridad que enlaza a todos los miembros
del grupo familiar. - - - La obligación alimentaria es el
deber jurídico que tiene un sujeto, en su carácter de
deudor, de ministrar a otro, en su calidad de acreedor, lo
necesario para subsistir, de acuerdo con las posibilidades
del primero y las necesidades del segundo. - - - Dicha
obligación jurídica puede derivar de la ley, como sucede en
el caso del matrimonio, el concubinato, el parentesco o el
divorcio; y también puede tener su origen en algún
convenio de renta vitalicia o de divorcio voluntario e,
inclusive, en la voluntad unilateral de una persona
(testamento). - - - Los artículos 164 y 303 del Código Civil
para el Distrito Federal, prevén la regla general de que los
cónyuges deben contribuir económicamente al
sostenimiento del hogar a su alimentación y a las de sus
hijos, así como el que los padres están obligados a dar
alimentos a sus hijos, pues esta obligación surge con
motivo de la formación de la familia, ya que esto implica
una relación interpersonal entre aquéllos, orientada a
D.C. 309/2010.
27
cumplir diversos fines, como son el proporcionarse ayuda
y socorro mutuos, también es una relación jurídica, pues el
derecho establece cargas de carácter obligatorio para los
cónyuges para con sus hijos, una de las cuales son los
alimentos. - - - Los progenitores tienen las mismas
obligaciones, y consecuentemente, tendrán derechos
semejantes, como sucede en el caso de los alimentos para
los hijos, que prevén los artículos 164 y 303 del código
sustantivo, en que los padres contribuirán a la alimentación
de sus hijos en proporción a sus posibilidades. - - - En
efecto, el fundamento de la obligación de dar alimentos es,
en general la solidaridad humana, en el caso específico de
los padres hacia los hijos lo es el deber de apoyo y socorro
entre los miembros de la familia, los alimentos dentro de la
familia derivan de la filiación o parentesco y, por lo tanto,
su ministración debe traducirse en el cumplimiento
espontáneo de uno de los deberes principales asumidos
entre los miembros, por ello el cumplimiento del deber
alimenticio dentro de la familia se convierte en una de las
obligaciones neurálgicas y connaturales de la misma. - - -
De conformidad con el artículo 308 del citado ordenamiento
legal, el concepto de alimentos comprende: la
alimentación, vestido, habitación, asistencia en caso de
enfermedad (médico, medicinas y hospitales, etcétera) y,
D.C. 309/2010.
28
además, para los menores todos los gastos necesarios
para su educación primaria y para proporcionales algún
oficio, arte o profesión. - - - De acuerdo con el artículo 311
del Código Civil para el Distrito Federal, la cuantía de los
alimentos que los progenitores tienen la obligación de
proporcionar a sus hijos, debe atender a la posibilidad de
éstos y de acuerdo a la necesidad del que tiene derecho a
recibirlos. - - - Estas circunstancias resultan aplicables al
menor hijo de los divorciantes, de nombre ********** que
según su atestado de nacimiento cuenta en la actualidad
con la edad de trece años y cinco meses, requiriendo de
comida, vestido, habitación con su mantenimiento
respectivo y pago de servicios, médico y medicinas en
caso de necesidad, transporte, recreación y educación que
según su edad se encuentra en educación secundaria o su
similar en el colegio particular **********, con su respectivo
pago de inscripción, colegiaturas, uniformes, útiles
escolares, libros, tareas, trabajos de investigación,
etcétera. Por ello, al tener en cuenta que la necesidad de
los alimentos se produce de momento a momento por estar
relacionada con la subsistencia misma del acreedor
alimentario, y que, por tanto, debe favorecerse la pronta
decisión judicial sobre la fijación de una pensión, sea
provisional o definitiva, prescindiendo de formalismos
D.C. 309/2010.
29
procesales innecesario, pues el cumplimiento de esa
obligación debe quedar plenamente asegurada en la
medida de sus necesidades y conforme a las posibilidades
del deudor; lo que tiene como finalidad, la de dar certeza
jurídica al cumplimiento de esa obligación, todo lo cual
tiene como sustento la circunstancia de que los alimentos
son de tracto sucesivo y por tanto la necesidad de
recibirlos surge de momento a momento, motivo por el cual
no puede quedar a potestad del deudor alimentista realizar
los pagos periódicos necesarios para la manutención de
sus acreedores, o bien proporcionar alimentos
periódicamente y por la cantidad que estime necesaria. - - -
Por tanto, atendiendo a las circunstancias especiales del
caso concreto que se analiza, habida cuenta que el
demandado propuso en su convenio de divorcio en otorgar
en concepto de pensión alimenticia a su menor hijo la
cantidad de **********; sin embargo atendiendo al análisis de
la capacidad del demandado, a las empresas de las cuales
es accionista, a los bienes inmuebles de los cuales es
propietario único o copropietario, a los gastos de
educación que ha efectuado para con sus diversos hijos
********** de apellidos **********, con las cantidades de dinero
que tiene depositada en la cuenta de cada hijo mencionado
que es superior a los ********** respectivamente, a los
D.C. 309/2010.
30
vehículos automotores que han sido asignados a cada hijo;
así como también al hogar de residencia en el cual se
encuentra establecido su domicilio conyugal, que es el
********** actualmente **********de esta ciudad, lo que se
traduce en un hecho notorio de capacidad económica y
nivel de vida elevados, lo cual, conlleva a este juzgador a
estimar como pensión alimenticia provisional a favor del
menor hijo de las partes **********, la cantidad de **********.
Cantidad de dinero que el demandado deberá depositar
dentro de los primeros cinco días de cada mes, en la
cuenta número ********** a nombre de ********** que la
demandante tiene ante la institución bancaria denominada
******************************, sirviendo las fichas de depósito o
los traspasos o comprobantes de operación como pago de
pensión alimenticia; apercibido que de no hacerlo así, se le
aplicará una medida de apremio contenida en el artículo 73
del Código de Procedimientos Civiles (sic), por desacato a
una orden judicial. Complementando la pensión alimenticia
provisional del menor hijo, la actora con los ingresos que
ésta percibe. - - - Dicha pensión alimenticia provisional
deberá subsistir hasta que se dicte sentencia interlocutoria
en la incidencia que resuelva, en su caso respecto de la
pensión alimenticia definitiva, cuando se cuente con los
elementos que resulten necesarios para ello, atento a lo
D.C. 309/2010.
31
dispuesto por el artículo 282 del código sustantivo de la
materia. - - - Resultando importante destacar que tanto en
el convenio de la actora como en la contrapropuesta del
demandado existe consenso en cuanto a que la actora
**********detente la guarda y custodia definitiva de su menor
hijo **********, así como en el régimen de visitas y
convivencias del padre ********** con su hijo. En tal virtud,
se determina la guarda y custodia definitiva del menor
********** a favor de su señora madre **********, quien la
ejercerá en el domicilio establecido como conyugal
ubicado en **********actualmente ********** de esta ciudad. - -
- Asimismo, se establece un régimen de visitas y
convivencias definitivo entre el demandado ********** y su
hijo **********, los fines de semana de cada quince días,
debiendo pasar a recoger a su hijo el día sábado a las
nueve horas en el domicilio establecido como conyugal
ubicado en ****************************** actualmente **********
de esta ciudad, y reintegrarlo al mismo el día domingo a las
veinte horas. En lo que respecta en las vacaciones
escolares del menor de semana santa, verano, invierno se
repartirán en forma equitativa en un cincuenta por ciento
para cada divorciante, tomando también los cumpleaños o
algún evento festivo o social, previo acuerdo entre ellos.
Autorizando salidas o viajes del menor al extranjero, con el
D.C. 309/2010.
32
deber de informarse previamente el itinerario a seguir, así
como realizar todos los trámites necesarios para que el
menor realice el viaje al extranjero. Debiendo iniciar dichas
convivencias el sábado diecisiete y domingo dieciocho de
abril de dos mil diez y así sucesivamente, apercibidos que
de no permitir dicho régimen de convivencias definitivo al
infractor se le aplicará como medida de apremio una multa
por el equivalente a sesenta días de salario mínimo general
vigente en el Distrito Federal, con fundamento en el artículo
73 del Código de Procedimientos Civiles (sic), por desacato
a una orden judicial. - - - Por otra parte, en cuanto a la
medida provisional relativa a ordenar la anotación
preventiva de la presente demanda en el Registro Público
de la Propiedad y de Comercio del Distrito Federal, para
que los inmuebles y derechos corporativos no sufran
menoscabos y se haga del conocimiento de terceros la
presente demanda, así como el girar oficio a la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores, para que requiera a todas
las instituciones financieras que operan en este país,
como, a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que por
su conducto se giren instrucciones a los **********, para que
informen respecto de las cuentas bancarias que pudiese
llegar a tener el demandado **********. Al efecto resulta
importante volver a señalar que mediante decreto del tres
D.C. 309/2010.
33
de octubre de dos mil ocho, se reformaron, derogaron y
adicionaron, diversas disposiciones tanto del Código Civil
como del Código de Procedimientos Civiles, ambos para el
Distrito Federal, respecto de la tramitación de los juicios de
divorcio, para el efecto de que, en lo que interesa fueran
resueltos con una mayor celeridad y en beneficio de las
partes involucradas. A estos juicios ordinariamente se les
ha venido denominando ‘divorcios incausados’ porque para
su procedencia no se requiere de la acreditación de alguna
causal, sino solamente de la voluntad de alguna de las
partes de no querer seguir unida en matrimonio. - - - En la
exposición de motivos que dieron origen a las reformas en
trato, el legislador señaló que: - - - I.- Que el matrimonio se
trata de una institución del derecho civil que parte de la
base de la autonomía de la voluntad de las personas. - - -
II.- La disolución del matrimonio obedece a que ya no se
cumple con sus fines, al hacer imposible su coexistencia,
no sólo como pareja sino también con los hijos. - - - III.-
Que tomando en cuenta el gran costo emocional y
estructural que producen las relaciones disfuncionales
entre los cónyuges derivada, en la gran mayoría de los
casos, por la separación de los cónyuges y por violencia
familiar, el divorcio resulta ser una solución menos dañina,
pues cuando éste se da por voluntad de las partes, más allá
D.C. 309/2010.
34
de lo doloroso que pudiera significar, disminuyen
considerablemente los conflictos sociales y familiares. - - -
IV.- Que en aras de lograr una congruencia entre la realidad
y el derecho, las reformas se orientan al establecimiento de
mecanismos más eficaces y menos lesivos para lograr el
divorcio, a través de un procedimiento judicial más eficaz y
certero, haciendo que el Estado cumpla con su obligación
de protección de la integridad física y psicológica de sus
ciudadanos, esto es, que su tarea no consista en
empeñarse en mantener, de forma ficticia, un vínculo que
en la mayoría de los casos resulta irreconciliable, sino en la
protección a la familia, evitando que exista violencia entre
los consortes producto de un enfrentamiento constante en
el que los menores se pudieran encontrar en medio de esa
dinámica poco afortunada, por lo que será mayor el daño
producido por esa lucha para lograr el divorcio, que el
divorcio en sí mismo; de ahí que la voluntad del individuo
ya no desee seguir vinculado a su cónyuge, no se puede
hacer depender de la demostración de la concurrencia de
alguna posible causal de divorcio. - - - V.- Que para lo
anterior, se parte del respeto al libre desarrollo de la
personalidad de los cónyuges, lo cual lleva a otorgar mayor
trascendencia a su voluntad individual, cuando alguno de
ellos ya no desea continuar con el matrimonio, por lo que la
D.C. 309/2010.
35
supremacía de esta voluntad para dar por terminado el
matrimonio, no implica el menoscabo de los derechos que
a su favor consagra la ley, ni se considera como pretexto
para el incumplimiento de sus obligaciones con respecto a
los demás integrantes de la familia. - - - VI.- Que dentro de
este procedimiento, el juzgador actuará como facilitador
para coadyuvar a su aligeramiento, el que, en antaño,
generaba años de desgaste y heridas incurables en los
menores que indefectiblemente son parte del conflicto, por
lo que la sociedad en su conjunto se verá beneficiada con
la sencillez y celeridad propuesta, pues no habrá ese
desgaste entre las partes orientado a probar alguna causa
de divorcio, que es lo que genera más desajuste emocional
e incluso violencia entre los consortes. - - - Por su parte
los artículos 267 y 283 del Código Civil (sic), en lo
sustancial señalan que el cónyuge que unilateralmente
desee promover el juicio de divorcio deberá acompañar a
su solicitud la propuesta de convenio para regular las
consecuencias inherentes a la disolución del vínculo
matrimonial, debiendo contener como requisitos, entre
otros la manera de administrar los bienes de la sociedad
conyugal durante el procedimiento y hasta que se liquide,
así como la forma de liquidarla, exhibiendo para ese efecto,
en su caso, las capitulaciones matrimoniales, el inventario,
D.C. 309/2010.
36
avalúo y el proyecto de partición; así como la sentencia de
divorcio fijará la situación de los hijos menores de edad
para lo cual deberá contener entre otras, la siguiente
disposición, tomando en consideración, en su caso, los
datos recabados en términos del artículo 282 de este
código, el juez de lo familiar fijará lo relativo a la división de
los bienes y tomará las precauciones necesarias para
asegurar las obligaciones que queden pendientes entre los
cónyuges o con relación a los hijos. Para lo dispuesto en el
presente artículo, o de oficio o a petición de parte
interesada, durante el procedimiento el juez se allegará de
los elementos necesarios, debiendo escuchar al ministerio
público, a ambos padres y a los menores. - - - De lo
anterior se desprende que el cónyuge que desee promover
el juicio de divorcio deberá acompañar a su solicitud la
propuesta de convenio que contendrá la manera de
administrar los bienes de la sociedad conyugal y la forma
de liquidarla, así como fijar lo relativo a la división de los
bienes y tomar las precauciones necesarias para asegurar
las obligaciones que queden pendientes entre los
cónyuges, que el juzgador se allegará de los elementos
necesarios durante el procedimiento. Lo que implica que se
le atribuye al juzgador familiar el deber de tener los
suficientes elementos durante el procedimiento para
D.C. 309/2010.
37
resolver sobre las cuestiones planteadas por los
divorciantes en sus propuestas de convenio. - - - Sin
embargo, el artículo 287 del Código Civil (sic), contempla
un proceder distinto que debe observar el juez familiar, en
relación a la atribución de allegarse de los elementos
necesarios durante el procedimiento, pues dispone que en
el supuesto de que los cónyuges no se pusieran de
acuerdo con relación a las cuestiones que debe contener
ese convenio, el juez en la sentencia definitiva solamente
decretará la disolución del matrimonio, dejando expedito el
derecho de los cónyuges para que lo hagan valer en la vía
incidental. - - - Por tanto, del contenido de los artículos 283
y 287, ambos del Código Civil (sic), no obstante que
regulan una misma situación en concreto, las soluciones
que planten son incompatibles entre sí, es decir, no
permiten su aplicación u observancia simultáneas.
Debiendo dar cumplimiento al artículo 18 del Código Civil
(sic), que señala: ‘El silencio, obscuridad o insuficiencia de la
ley, no autorizan a los jueces o tribunales para dejar de resolver
una controversia’, en tal razón deberá observarse la norma
que mejor salvaguarde los valores del sistema jurídico.
Señalando que las normas en comento no obstante estar
contenidas en un ordenamiento sustantivo, implican
aspectos de naturaleza procesal, pues regulan una etapa
D.C. 309/2010.
38
del procedimiento de divorcio, precisamente lo relativo al
dictado de la disolución que lo decreta y algunas de sus
consecuencias, como la forma de liquidar la sociedad
conyugal, con su anotación provisional de la demanda ante
el Registro Público de la Propiedad y de Comercio,
respecto de los bienes inmuebles y personas morales que
la conforman, así como el obtener la información de las
instituciones bancarias nacionales e internacionales
respecto a las cuentas bancarias o de valores
pertenecientes al demandado, es decir, tener en
consideración cuestiones relacionadas sobre la
procedencia de prestaciones accesorias. - - - Porque al
implicar cuestiones procesales los artículos 283 y 287 del
Código Civil (sic), se tienen que observar los principios del
debido proceso contenidos en el segundo párrafo del
precepto 14 constitucional, en cuanto a que nadie podrá
ser privado de la libertad o de sus propiedades, posesiones
o derechos, sino mediante juicio seguido ante los
tribunales en los que se cumplan las formalidades
esenciales del procedimiento. Es decir, las formalidades
esenciales del procedimiento son: - - - 1.- La notificación
del inicio del procedimiento y sus consecuencias; - - - 2.-
La oportunidad de ofrecer y desahogar las pruebas en que
se finque la defensa; - - - 3.- La oportunidad de alegar; y, - -
D.C. 309/2010.
39
- 4.- El dictado de una resolución que dirima las cuestiones
debatidas. - - - Teniendo aplicación la tesis de
jurisprudencia número 218 emitida por el Pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, consultable en el
Apéndice 2000, Novena Época, Tomo I, en Materia
Constitucional, página 260: - - - ‘FORMALIDADES
ESENCIALES DEL PROCEDIMIENTO, SON LAS QUE
GARANTIZAN UNA ADECUADA Y OPORTUNA DEFENSA
PREVIA AL ACTO PRIVATIVO’ (se transcribe). - - - Por su
parte, el artículo 17 de la Constitución, prevé que toda
persona tiene derecho a que se le administre justicia por
tribunales que estarán expeditos para impartirla en los
plazos y términos que fijen las leyes, emitiendo sus
resoluciones de forma pronta, completa e imparcial, lo que
se traduce en el derecho jurisdiccional efectiva. - - - Por
tanto, toda vez que la actora en su propuesta de convenio
señala una lista de bienes inmuebles que dice pertenecen a
la sociedad conyugal así como refiere también la existencia
de empresas y sociedades que se constituyeron por el
divorciante dentro de la sociedad conyugal, mencionando
también la apertura de cuentas bancarias pertenecientes a
la sociedad conyugal; listas que (sic) sólo se acreditó la
existencia de algunas, no así de otras, solicitando la
anotación preventiva de la demanda ante el Registro
D.C. 309/2010.
40
Público de la Propiedad y de Comercio y el obtener la
información necesaria respecto a las cuentas bancarias
aperturadas por el divorciante. - - - Mientras que el
demandado al contestar la demanda y exhibir su
contrapropuesta de convenio se opone categóricamente a
que se ordene la anotación preventiva de la demanda ante
el Registro Público de la Propiedad y de Comercio del
Distrito Federal y se gire el oficio a la Comisión Nacional
Bancaria y de Valores para que requiera a las instituciones
bancarias que informen respecto a las cuentas bancarias
pertenecientes a éste, incluso en su contrapropuesta
señala que todos los bienes adquiridos durante la vigencia
del matrimonio de las partes pasarán a ser de su exclusiva
propiedad por resultarle aplicable a la actora lo dispuesto
por el artículo 194 Bis del Código Civil (sic). - - - Así
entonces, al existir desacuerdo entre los cónyuges en sus
convenios respectivos en cuanto a la sociedad conyugal y
su liquidación, resulta aplicable el contenido del numeral
287 del Código Civil (sic), en cuanto a que en la sentencia
definitiva sólo se concretará a declarar disuelto el vínculo
matrimonial, dejando a salvo los derechos de los cónyuges
respecto a la liquidación de la sociedad conyugal que
harán valer en la vía incidental, con lo cual se da
cumplimiento al principio de debido proceso en el juicio de
D.C. 309/2010.
41
divorcio, con un procedimiento recientemente adoptado
por el legislador, al establecer un mecanismo más eficaz y
menos lesivo, para lograr, como fin primordial, el divorcio
tramitado a voluntad de uno de los cónyuges y con ello la
protección de la familia; mientras que al dejar la liquidación
de la sociedad conyugal para que sea tramitada en
incidente se contiene un efectivo derecho de defensa
mediante la preparación y el desahogó de las pruebas
ofrecidas, acatando cabalmente el principio de
contradicción”.
QUINTO.- Los quejosos formularon los siguientes
conceptos de violación:
“PRIMER CONCEPTO DE VIOLACIÓN.- Violación
a las garantías de legalidad, legítima defensa, seguridad
jurídica y debido proceso legal, contenidas en los artículos
14, 16 y 17 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos; por violación directa conculcándose
flagrantemente lo dispuesto por los artículos 81, 84, 278,
279, 281, 285, 287, 289, 684, 685, 941, 944 y demás relativos
y aplicables del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal; toda vez que, la resolución impugnada
carece de razonamiento legal alguno, por no corresponder
D.C. 309/2010.
42
al estado que guardan las actuaciones; además que no
están debidamente fundadas y motivadas con lo cual se
vulneran las formalidades esenciales del procedimiento,
puesto que el a quo, en forma por demás dogmática
determinó una cuestión apartada por completo de la
legalidad; razón, por lo que, como ya se dijo, se violentan
los artículos 81, 84, 278, 279, 281, 285, 287, 289, 941, 944 y
demás relativos y aplicables del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, además que no expresa
razonamiento lógico jurídico mediante el cual funde y
motive las resoluciones impugnadas. - - - En efecto es de
explorado derecho que, toda resolución debe estar
debidamente fundada y motivada siguiendo las normas del
procedimiento, de conformidad con lo dispuesto en el
artículo 81 del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal, y a las siguientes jurisprudencias firmes y
obligatorias, en términos de lo dispuesto por los numerales
192 y 193 de la Ley de Amparo, cuyo título y texto, le
ordenan: - - - La publicada con el número V.2°. J/32, visible
en la página 49, del Tomo: 54, correspondiente al mes de
junio de 1992, Octava Época, del Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, que dice: ‘FUNDAMENTACIÓN Y
MOTIVACIÓN.’ (se transcribe). - - - De igual manera se cita
la siguiente jurisprudencia: publicada en el registro número
D.C. 309/2010.
43
197,923; Novena Época, Instancia Tribunal Colegiado de
Circuito, del Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Tomo VI, agosto de 1997, tesis XIV.2°. J/12, página
538, que señala: - - - ‘FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN.
EL CUMPLIMIENTO DE TALES REQUISITOS NO SE LIMITA
A LAS RESOLUCIONES DEFINITIVAS O QUE PONGAN FIN
AL PROCEDIMIENTO.’ (se transcribe y cita precedentes). - -
- Por lo que, el juzgador de primera instancia además no
vigiló lo dispuesto por el artículo 81 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, que
establece: (se transcribe). - - - La resolución combatida
materia del presente medio de impugnación, viola en
perjuicio de la recurrente y de mi menor hijo de nombre
**************************************** nuestras garantías
consagradas en los artículos 14, 16 y 17 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos; en virtud que, el
juez de los autos, no se pronunció congruentemente
respecto de todas y cada una de las manifestaciones
vertidas que en su momento se le apartó (sic), conculcando
con dicho actuar lo que disponen los artículos 192 y 193 de
la Ley de Amparo, al dejar de aplicar las jurisprudencias
firmes, antes (sic) transcritas. - - - Ello es así; toda vez que,
el juez de los autos dogmáticamente sin fundar su
resolución, sostiene otras cuestiones sin observar las
D.C. 309/2010.
44
manifestaciones vertidas por la suscrita, mediante escritos
presentados los días primero de marzo del año dos mil
diez, siendo que, de constancias de autos del juicio de
origen, determinó que serían analizadas al momento de
pronunciarse la sentencia definitiva que ahora es materia
del acto reclamado; por lo que, ahora en restitución de mis
garantías deberá de reponerse dicha sentencia
necesariamente revocándose la misma y entrar al estudio
de todas y cada una de las constancias que corren
agregadas. - - - SEGUNDO CONCEPTO DE VIOLACIÓN.-
Como se colige del concepto de violación antes (sic)
transcrito, la sentencia reclamada adolece de congruencia
externa con relación a las constancias de autos, mismas
que de conformidad con lo dispuesto por el artículo 327,
fracción VIII del Código de Procedimientos Civiles para el
Distinto Federal, deberá de concederse pleno valor
probatorio, ya que, en ésta se dieron los argumentos que
sentaron las bases para que dicha resolución ‘fue’ dictada
conforme a derecho y se procediera a entrar al estudio de
los elementos de la acción planteada y las condiciones
especiales para su procedencia, estudio y pronunciamiento
que debió realizar e incluso analizar dichas cuestiones en
forma oficiosa, pero no lo hizo, por lo cual es evidente que
con su abstención conculcó los artículos 81 y 281 del
D.C. 309/2010.
45
Código de Procedimientos Civiles para el Distinto Federal,
dado que la hoy responsable se abstuvo ilegalmente de
pronunciar cuestión alguna respecto de las afirmaciones
que difundí antes de pronunciamiento de dicha resolución,
argumentos lógicos jurídicos que son el sustento de mi
demanda inicial vertidos, dentro de los cuales a manera
ilustrativa se destacan los siguientes: - - - 1.- De la
instrumental de actuaciones que conforma el juicio en que
se actúa, a las cuales en términos de lo dispuesto por el
artículo 327, fracción VIII de Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, se le debe conceder pleno
valor probatorio, se advierte que, la suscrita
******************** en mi libelo inicial, manifesté que contraje
matrimonio civil con el señor ****************************** bajo
el régimen de sociedad conyugal, con fecha cuatro de
septiembre del año de mil novecientos ochenta y cuatro,
ante el Juez Trigésimo del Registro Civil en el Distrito
Federal, tal como se acreditó con la copia certificada de la
partida de matrimonio número ******************************,
que se encuentra agregada en autos. - - - Por otra parte, al
celebrarse el vínculo matrimonial bajo el régimen de
sociedad conyugal, ante el Oficial del Registro Civil antes
(sic) mencionado, de conformidad con lo dispuesto por el
artículo 103, fracción VII del Código Civil para el Distrito
D.C. 309/2010.
46
Federal, los hoy divorciantes firmamos el convenio
(Capitulaciones Matrimoniales), bajo las siguientes bases: -
- - I.- El matrimonio se contrae bajo el régimen de sociedad
conyugal. - - - II.- La sociedad conyugal comprenderá
todos los bienes muebles e inmuebles y sus productos que
los consortes adquieran durante su vida matrimonial,
incluyendo el producto del trabajo. - - - III.- En los bienes y
productos de la cláusula anterior, cada consorte tendrá la
participación del cincuenta por ciento. - - - IV.-
Administrará la sociedad el marido, teniendo todas las
facultades inherentes a su cargo, según el Código Civil
vigente. - - - V.- Las bases para liquidar la sociedad serán
las establecidas por el mismo código en sus artículos
relativos. - - - 2.- La suscrita **********, bajo formal protesta
de decir verdad, manifesté que derivado del matrimonio
civil que contraje con el señor ******************************,
concebí tres hijos de nombres
************************************************** todos de apellidos
**********, para lo cual exhibí copias certificadas de las actas
de nacimiento números **********, de fecha **********; acta de
nacimiento número ********** de fecha ********** y acta de
nacimiento número **********, de fecha
**************************************** mismas que corren
agregadas en autos, de conformidad con lo dispuesto por
D.C. 309/2010.
47
los artículos 1, 95 fracción II, 255 fracción V, 267, 294, 296,
327 y demás relativos y aplicables del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal. - - - 3.-
Ahora bien, de la demanda inicial se advierte que, la
suscrita demandó como prestaciones las siguientes: (se
transcriben). - - - Lo anterior, en virtud que, manifesté bajo
formal protesta de decir verdad, que todos los gastos
derivados del inmueble sito en
*************************************************************************
*****************actualmente*****************************************
************************************************* los absorbía el
demandado ******************************; en virtud que, aun y
cuando la suscrita cuenta con un trabajo, siempre mis
ingresos han sido más bajos, de los que obtiene el
demandado, como se podrá corroborar con los diversos
recibos que acompañé a mi escrito presentado el día
primero de marzo del año dos mil diez, fecha en la cual
desahogué el requerimiento formulado por el juez de los
autos, al señalar la fuente y monto de mis ingresos. - - - 4.-
Con fecha veintiséis de marzo del año dos mil diez, se dictó
sentencia definitiva, en la que sus puntos definitivos se
determinó: - - - (se transcriben). - - - 5.- En base a lo
anterior la autoridad responsable no determinó en forma
correcta el pago de la pensión alimenticia a favor de mi
D.C. 309/2010.
48
menor hijo ****************************** a cargo del señor
******************************; en virtud que, si bien es cierto
que, determinó en forma provisional el pago de la pensión
alimenticia; también lo es que, para poder determinarla no
contó con elementos fehacientes para poder fijar una
cantidad que comprendiera el pago de la colegiatura,
uniformes, útiles escolares, vestido, zapatos, comida,
gastos médicos, el pago de gastos médicos mayores; ya
que, de la resolución mencionada en el punto inmediato
anterior, se señaló: - - - (se transcribe). - - - Por lo que,
ahora en atención a que mi menor hijo de nombre **********
pueda tener una vida con ‘satisfactores’ y pueda seguir
gozando de atención medica, educación, alimentación,
tener ratos de esparcimiento y recreación en términos del
artículo 5° de la Ley de Derechos de las Niñas y Niños del
Distrito Federal, que establece: - - - ‘...De manera
enunciativa, mas no limitativa, conforme a la presente Ley las
Niñas y Niños en el Distrito Federal tienen los siguientes
derechos: - - - A) A la vida, integridad y dignidad: - - - I. A la
vida, con calidad, siendo obligación del padre y la madre, de la
familia, de los Órganos Locales de Gobierno del Distrito Federal
y de la sociedad, garantizar a las niñas y niños, su
sobrevivencia y su desarrollo, así como el acceso a los medios
y mecanismos necesarios para ello; - - - II. A la no
D.C. 309/2010.
49
discriminación, por lo que la observancia a sus derechos se
hará sin distinción alguna, independientemente del fenotipo,
color, sexo, idioma, religión, opinión, origen nacional, étnico o
social, posición económica, impedimentos físicos, el nacimiento
o cualquier otra condición de la niña y niño, de su madre, padre
o tutores; - - - III. A una vida libre de violencia; - - - IV. A ser
respetado en su persona, en su integridad física,
psicoemocional y sexual; - - - V. A ser protegidos contra toda
forma de explotación; - - - VI. A recibir protección por parte de
sus progenitores, familiares, órganos locales de gobierno y
sociedad; y - - - VII. A recibir información respecto de
cuestiones de seguridad pública y de protección civil. - - - B) A
la identidad, certeza jurídica y familiar: - - - I. A la identidad,
tomando como base el conjunto de atributos y derechos de la
personalidad conforme a lo previsto en la legislación civil; - - -
II. A ser registrados después de su nacimiento, con un nombre
y apellidos propios, de conformidad con lo establecido en la
legislación civil; - - - III. A solicitar y recibir información sobre su
origen, sobre la identidad de sus padres y a conocer su origen
genético; - - - IV. A vivir y crecer en el seno de una familia,
conocer a sus progenitores y a mantener relaciones personales
y contacto directo con ellos, aun en el caso de estar separados,
salvo si ello es contrario al interés superior de la niña y niño; - -
- V. A integrarse libremente y sin presión de ninguna autoridad,
D.C. 309/2010.
50
institución u organización, a un hogar provisional y a recibir los
beneficios de la adopción llegado el caso; - - - VI. A emitir su
opinión en todos los asuntos que le afecten y a ser escuchado
tomando en cuenta su edad y madurez en todo procedimiento
judicial o administrativo, ya sea directamente o por medio de
representante; - - - VII. A recibir un trato digno y apropiado
cuando sean víctimas de cualquier tipo de ilícito o cuando ellos
mismos cometan infracciones; - - - VIII. A recibir el apoyo de
los órganos locales de gobierno, en lo relativo al ejercicio y
respeto de sus derechos a través de las instituciones creadas
para tal efecto como son: - - - Sistema para el Desarrollo
Integral de la Familia en el Distrito Federal, del Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal, de las Procuradurías
Competentes y de la Comisión de Derechos Humanos del
Distrito Federal. - - - C) A la salud y alimentación: - - - I. A
poseer, recibir o tener acceso a los satisfactores necesarios,
considerando alimentos, bienes, servicios y condiciones
humanas o materiales, que posibiliten su desarrollo armónico e
integral en el ámbito físico, intelectual, social y cultural; - - - II. A
tener acceso a los servicios médicos necesarios, para la
prevención, tratamiento, atención y rehabilitación de
discapacidades y enfermedades, de acuerdo con las bases y
modalidades que establecen las disposiciones jurídicas de la
materia; - - - III. A recibir orientación y capacitación para
D.C. 309/2010.
51
obtener conocimientos básicos en materia de salud, nutrición,
higiene, saneamiento comunitario y ambiental, así como todo
aquello que favorezca su cuidado personal; - - - IV. A ser
protegidos y orientados contra el consumo de drogas,
estupefacientes, uso de tecnologías o cualquier otra cosa que
les genere estado de dependencia o adicción; - - - V. A la salud
y a los servicios integrales para la prevención, el tratamiento de
enfermedades, su atención y rehabilitación. - - - D) A la
educación, recreación, información y participación: - - - I. A
expresar su opinión libremente, conocer sus derechos y a ser
escuchados en el ámbito familiar y comunitario, así como en
todo procedimiento administrativo o judicial, que afecte sus
esferas personal, familiar y social; - - - II. A ser tomados en
cuenta para cualquier acto relacionado con su vida personal y
social; - - - III. De asociarse y reunirse; - - - IV. A recibir
información adecuada a sus etapas de crecimiento, que
promueva su bienestar social, así como su salud bio-psicosocial
y sexual, enalteciendo los valores de paz, equidad, democracia,
solidaridad, libertad, justicia, respeto y tolerancia; - - - V. A
recibir educación de calidad, conforme lo señala el artículo 3°
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; - -
- VI. A participar en la vida cultural de su comunidad, así como
al desarrollo de la creación artística, a la recreación,
esparcimiento, actividad deportiva, y a los juegos y actividades
D.C. 309/2010.
52
propias de su edad; - - - E) A la asistencia social: - - - I. A ser
sujetos de programas de asistencia social cuando se
encuentren o vivan circunstancias de desventaja social, que
garanticen la protección integral en tanto puedan valerse por sí
mismos y que le auxilien a recuperar su salud y equilibrio
personal, en caso de daño físico o mental; - - - Y los demás
que les reconozcan otros ordenamientos legales...’. - - - Ahora
bien, la autoridad responsable violó lo dispuesto por el
artículo 941 del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal, que es de tenor ‘literal’ siguiente: - - - (se
transcribe). - - - Esto es, debió de haber suplido la
deficiencia de la suscrita al momento de fijar
provisionalmente la pensión alimenticia a cargo del ahora
tercero perjudicado **********, esto es, que al no tener
elementos para poder determinarla, ya que, el demandado
en el juicio de origen fue omiso en señalar la fuente y
monto de sus ingresos, debió de allegarse de otros
elementos de prueba, y con fundamento en lo dispuesto
por el artículo 288 del Código de Procedimientos Civiles
para el Distrito Federal, debió de haber ordenado girar
atento oficio a la ****************************************
********************, a efecto de que en auxilio de las labores
de dicho juzgado, dentro del término de tres días contados
a partir del día siguiente de la recepción del oficio de
D.C. 309/2010.
53
cuenta, dicha dependencia ‘informará y requerirá’ a todas las
instituciones bancarias e instituciones financieras que
operan en nuestro país; así como, a la Secretaría de
Relaciones Exteriores, para que en auxilio de la autoridad
responsable se sirva girar instrucciones a los bancos de
los Estados Unidos de Norteamérica, Suiza, Luxemburgo,
‘Bristish’ Virgen Island, Inglaterra, Alemania, para que
informaran las cuentas bancarias que tiene el demandado y
deudor alimentista ******************************, y en caso
afirmativo que existan dichas cuentas bancarias, éstas
deberían precisar el tipo de cuenta (sic) se trata y que
remitieran los estados de las cuentas de los últimos cinco
años a la fecha; por lo que, dicha información se debería de
recabar por las autoridades en comento y hacerla llegar a la
brevedad posible previniendo a las mismas que de no
hacerlo se les impondría una medida de apremio conforme
a la ley de la materia, precisándose el R.F.C. del
demandado ****************************** es el **********, lo
anterior para el único efecto de garantizar la pensión
alimenticia de mi menor hijo
**************************************** - - - Sin menoscabo de lo
anterior, se deberían congelar los fondos existentes de
dichas cuentas y de esta forma impedir que el demandado
******************************, dilapide los bienes y valores que
D.C. 309/2010.
54
conforman la sociedad conyugal y que sirven para
garantizar el pago de la pensión alimenticia a favor de mi
menor hijo ******************************; siendo las siguientes:
- - - a).- ******************************bajo formal protesta de
decir verdad. - - - Bajo formal protesta de decir verdad,
existen las cuentas bancarias números **********, a nombre
de la suscrita ******************** y el hoy demandado
******************************. - - - b).- **********
*************************************************************************
*****************, a nombre de la suscrita ********** y el hoy
demandado ******************************. - - - c).-
*************************************************************************
*******************************************************************, a
nombre de
*************************************************************************
*****************. - - - d).- ******************************. - - - e).-
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************
*************************************************************************
*************************************************************************
D.C. 309/2010.
55
*************************************************************************
*************************************************************************
********************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
****
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
***************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
****************************
*************************************************************************
***************** **********
*************************************************************************
*********************************************************
******************** ****************************************
**************************************** ********** **********
**************************************************Ahora bien, atento
a lo dispuesto por el artículo 321 del Código Civil para el
Distrito Federal, que establece que tratándose de
D.C. 309/2010.
56
alimentos, éstos son irrenunciables y no pueden ser objeto
de transacción precisamente para proteger los derechos de
los acreedores; por lo que, correlacionado con el artículo
308 del ordenamiento legal antes (sic) invocado, se
entiende que, los alimentos deben comprender habitación,
comida, vestido, asistencia médica, gastos de educación; y
no obstante lo anterior la responsable determinó el pago de
la pensión a alimenticia a favor de mi menor hijo
******************************, en forma provisional y que el
demandado y deudor alimentario ******************************,
ha exhibido diversas transferencias bancarias por
concepto de gastos semanales y manutención a favor de
nuestro menor hijo, quedando éstas a su libre arbitrio al
señalar dichos conceptos por gastos semanales; como se
advierte de la instrumental de actuaciones que conforma el
juicio en que se actúa, a las cuales en términos de lo
dispuesto por el artículo 327 fracción VIII del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, se le debe
conceder pleno valor probatorio; es por ello, que ahora
acudo ante esta H. autoridad de amparo a efecto de
solicitar se determine y fije un incremento en el pago de la
pensión alimenticia a favor de mi menor hijo. - - - Por lo
que, dicha cantidad deberá atenderse a cada uno de los
conceptos mencionados, y por ser un caso de extrema
D.C. 309/2010.
57
urgencia deberá declararse procedente el incremento en el
pago de la pensión alimenticia, ya que, la arbitraria
cantidad que se ha fijado en forma provisional no
constituye ni la cuarta parte de dinero que se requiere
mensualmente para pagar los gastos para mi menor hijo
como lo es la habitación, comida, vestido, asistencia
médica, gastos de educación, centros de esparcimiento y
recreación. - - - Debe decirse que, el derecho de percibir
los alimentos es primordial y debe atenderse en forma
expedita, ya que, nuestro menor hijo
******************************, tiene derecho para contar con
una vida con ‘satisfactores’, gozar de atención medica,
educación, alimentación, tener ratos de esparcimiento y
recreación como lo contempla el artículo 5° de la Ley de
Derechos de las Niñas y Niños del Distrito Federal. - - -
Asimismo, es necesario hacer notar a esta H. autoridad de
amparo que, la autoridad responsable al fijar
provisionalmente el pago de la pensión alimenticia a cargo
del demandado ******************************, nunca atendió a
los ingresos y percepciones y/o cualquier otro similar que
obtuviera el demandado, ya que, de constancias de autos
se advierte que nunca mencionó la fuente y monto de sus
ingresos; por lo que, ahora deberá suplir en todo momento
la deficiencia de la suscrita a favor de mi menor hijo. - - -
D.C. 309/2010.
58
Esto es, suplir la deficiencia de la suscrita en la demanda
de amparo, puesto que el fijar una pensión alimenticia a
favor de mi menor hijo es un 'satisfactor' que debe de
ocuparse en forma urgente. - - - Por lo que, es procedente
y conforme a derecho, en atención a las garantías de
audiencia y legalidad contempladas por los artículos 14, 16
y 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, se debe decretar el pago de la pensión
alimenticia a favor de mi menor hijo
******************************toda vez que, como ya mencioné
atento a lo dispuesto por el artículo 321 del Código Civil
para el Distrito Federal, que establece que tratándose de
alimentos, éstos son irrenunciables y no pueden ser objeto
de transacción precisamente para proteger los derechos de
los acreedores y correlacionado con el artículo 308 del
ordenamiento legal antes (sic) invocado, los alimentos
deben comprender habitación, comida, vestido, asistencia
médica, gastos de educación; por lo que, al momento de
fijarse la pensión alimenticia deberá atenderse a cada uno
de los conceptos mencionados, y por ser un caso de
extrema urgencia deberá de incrementarse la pensión
alimenticia correspondiente. - - - Las anteriores
consideraciones encuentran apoyo y sustento legal en los
siguientes criterios jurisprudenciales, que a continuación
D.C. 309/2010.
59
se transcriben y que son del tenor ‘literal’ siguiente: - - -
‘ALIMENTOS. EL EXAMEN DE SU CUMPLIMIENTO
COMPRENDE NO SÓLO SU SUFICIENCIA, SINO TAMBIÉN
LA REGULARIDAD DE SU PAGO Y ASEGURAMIENTO.’,
‘ALIMENTOS. PARA DETERMINAR EL MONTO DE LA
PENSIÓN CUANDO NO SE HAYAN ACREDITADO LOS
INGRESOS DEL DEUDOR ALIMENTARIO, DEBE
ATENDERSE A LO DISPUESTO EN EL ARTÍCULO 311 TER
DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL.’ (se
transcriben, cita datos de localización y precedentes). - - -
Por otra parte, el artículo 5° de la Ley de Derechos de las
Niñas y Niños del Distrito Federal, contempla que el
derecho de los niños de percibir alimentos por parte de su
progenitor; por lo que, si bien es cierto que, el demandado
señor ********************, ha depositado a través de
transferencias bancarias hasta antes del pronunciamiento
de la sentencia materia del acto reclamado por la cantidad
de ******************************, en forma provisional; también
lo es que, de acuerdo a la jurisprudencia transcrita, el pago
efectuado por el demandado no es suficiente para cubrir el
pago de alimentos; ya que, no basta que haya probado
haber ministrado antes y durante la tramitación del juicio,
ya que tal obligación es de tracto sucesivo, en razón de que
la necesidad de recibirlos surge de momento a momento. -
D.C. 309/2010.
60
- - Sin embargo, esta H. autoridad de amparo, ahora en
restitución de las garantías violadas y con las facultades
que establece el artículo 941 del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, se deberá ‘para’ fijar una
pensión alimenticia suficiente y a determinar su
aseguramiento; porque se trata de una obligación que
tiende a satisfacer necesidades de subsistencia, que no
puede quedar a la potestad del deudor alimentista,
proporcionarla en el tiempo y por la cantidad que estime
necesaria. - - - Por lo que, solicito se ordene a la
responsable que incremente el pago de la pensión
alimenticia; toda vez que, mi menor hijo tiene derechos
para contar con una vida con ‘satisfactores’, gozar de
atención médica, educación, alimentación, tener ratos de
esparcimiento y recreación en términos del precepto legal
antes (sic) mencionado. - - - Las anteriores
consideraciones se apoyan en los siguientes criterios que
a continuación se citan: - - - ‘ALIMENTOS. CONVENIENCIA
DE SU FIJACIÓN EN UN PORCENTAJE DE LOS INGRESOS
DEL DEUDOR.’, ‘ALIMENTOS. A FIN DE OBSERVAR LOS
PRINCIPIOS DE PROPORCIONALIDAD E IGUALDAD ENTRE
DEUDOR Y ACREEDOR ALIMENTARIOS, ASÍ COMO
LOGRAR EL EFICAZ CUMPLIMIENTO DE DICHA
OBLIGACIÓN, LA FIJACIÓN DE LA PENSIÓN
D.C. 309/2010.
61
CORRESPONDIENTE PUEDE HACERSE EN EFECTIVO, EN
ESPECIE O INCLUSO, DE MANERA COMBINADA.’ (se
transcriben, cita datos de localización y precedentes). - - -
Bajo ese tenor, se debe ponderar el bienestar y salud del
menor, ya que, es una necesidad de extrema urgencia y
con ello se podrá evitar un grave e irreparable daño a mi
menor hijo ********************, toda vez que, se reúnen las
circunstancias de extrema urgencia para que se fije la
pensión alimenticia solicitada: - - - 1.- Que ésta se solicita
en atención a las necesidades del menor; - - - 2.- Que la
misma se pondera en atención a las necesidades del
acreedor y la capacidad económica del deudor; y, - - - 3.-
Que se solicita en atención a la urgencia en la medida,
entendiendo ésta como determinar el peligro que correría el
acreedor que de no recibir la pensión durante el período
que dure el juicio, pueda verse afectada subsistencia de
una necesidad esencial de éste. - - - Por otra parte, al
momento de fijarse el incremento del pago de la pensión
alimenticia a favor de mi menor hijo deberá ponderarse;
que si bien es cierto que, la suscrita se encuentra
laborando, también lo es que, mis ingresos son muy
inferiores a los que percibe el demandado ********************;
por lo que, en términos de lo dispuesto por los artículos
315 y 317 de Código Civil para el Distrito Federal, solicito el
D.C. 309/2010.
62
aseguramiento de los alimentos a favor de mi menor hijo
******************************; por tanto, ‘solicito se sirva
requerir al demandado para que garantice el cumplimiento
en el pago de la pensión alimenticia’. - - - TERCER
CONCEPTO DE VIOLACIÓN.- La resolución materia del acto
reclamado viola en perjuicio de la suscrita y de mi menor
hijo lo dispuesto por los artículos 14, 16 y 17
constitucionales; así como, el artículo 327, fracción VIII de
Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal,
416 y 416 Bis del Código Civil para el Distrito Federal, al
determinar el régimen de visitas en forma definitiva, ya que,
la resolución materia del acto reclamado establece que: - - -
(se transcribe). - - - Lo anterior denota que la autoridad
responsable al momento de pronunciar la resolución
definitiva en el presente juicio, en relación al régimen de
visitas, no dio debido cumplimiento a lo dispuesto por el
artículo 282 del Código Civil para el Distrito Federal, que
establece: - - - (se transcribe). - - - Por otra parte, el
artículo 283 del Código Civil, establece: - - - (se transcribe).
- - - Sin embargo, en la especie el juez de los autos al
momento de pronunciar la resolución definitiva, no tomó en
cuenta cada uno de los supuestos previstos por los
preceptos legales antes (sic) mencionados; por lo que,
ahora en atención a la restitución de mis garantías y
D.C. 309/2010.
63
salvaguardando en todo momento a mi menor hijo
******************************, deberá de dar estrictamente
cumplimiento a los preceptos invocados. - - - Asimismo,
cabe destacar que, desde mi libelo inicial señale en el
hecho marcado con el número catorce, que: - - - (se
transcribe). - - - Es decir, que el señor ********************, no
es una persona segura para poder convivir con mi menor
hijo ******************** (sic), y en todo caso deberá de
atenderse a su parecer; sin embargo, el juez de primera
instancia antes de determinar el régimen de visitas en
forma definitiva, debió allegarse con una plática con mi
menor hijo; C. Agente del Ministerio Público de la
adscripción; así como, una representante de Sistema
Integral para la Familia (DIF), pero en la especie no
aconteció. Todo ello está perfectamente regulado en los
artículos 416, 416 Bis, 416 Ter y 417 del Código Civil para el
Distrito Federal; numerales todos ellos que fueron ‘de
facto’ conculcados de facto por la responsable al
determinar dogmáticamente un régimen definitivo de
visitas y convivencias sin haber tomado en consideración
las manifestaciones de esta suscrita y sobre todo el
derecho que le conceden los artículos 282, apartado B,
fracción II, segundo párrafo, 283, fracción IV y 416 Bis,
párrafo segundo, in fine del Código Civil para el Distrito
D.C. 309/2010.
64
Federal, pues es un derecho primordial de los menores el
opinar con relación a las situaciones que ellos desean
respecto de la convivencia con sus progenitores, en la
especie nuestro menor hijo, tiene miedo de convivir con su
señor padre, sin embargo, ello poco le valió al responsable
en su ilegal determinación. - - - Por otra parte, como ya
quedó indicado con relación al señor ********************; sus
conductas tienden a causar problemas, debido al avance
de suministro de medicamentos, al grado que ha llegado a
tener ideas suicidas, lo anterior manifiesto, bajo formal
protesta de decir verdad, ya que, en más de una ocasión
me amenazaba que se iba a suicidar; tal es el caso que, a
continuación refiero a usted una de tantas: - - - ‘...A mis
hijos quiero decirles que los quiero y que les pido perdon (sic)
por cualquier falta que les hice durante su vida. - - - Espero que
tengan una vida plena y feliz y logren lo que se propongan en la
vida. - - - Son una linda persona y espero que Dios los vendiga
(sic). - - - Con todo mi amor. - - - Su papá que siempre los
quiso. - - - **********.’. - - - Documental que se exhibe en este
acto como documental privada y solicito sea tomada en
consideración. - - - Ahora bien, ante las constantes
conductas que ha venido presentando el demandado
********************, la suscrita no está inconforme que vea a
mi menor hijo ********************, pero siempre y cuando
D.C. 309/2010.
65
esas visitas y convivencias se encuentren debidamente
supervisadas a través de un especialista en el
******************************, en un horario que no los afecte y,
esta visita sea a través de una persona de dicha
dependencia que los vigile y los cuide al momento en que
el señor ********************, lo vea. - - - Para lo cual ‘previo’ a
determinarse el régimen de visitas en forma definitiva la
autoridad responsable debió allegarse de elementos para
determinar el régimen de visitas, por lo que, en este acto
propongo la prueba pericial en materia de psiquiatría y
medicina a cargo del demandado ********************. - - - Lo
anterior, en virtud que dicha probanza es idónea para
acreditar que necesariamente debe de modificarse el
régimen de visitas. - - - Por otra parte, con fundamento en
lo dispuesto por los artículos 291, 346, 347, 348, 942, 943 y
demás relativos del Código de Procedimientos Civiles para
el Distrito Federal, deberá ordenarse a la autoridad
responsable que en restitución de las garantías violadas
deberá admitirse la probanza de referencia, ya que, se
podrá acreditar que el demandado no es una persona
idónea para convivir con mi menor hijo ********************. - -
- Por otra parte, sin perjuicio de lo establecido en el Título
Décimo Sexto, en cuya disposición establece en el artículo
942 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
D.C. 309/2010.
66
Federal, que establece: - - - (se transcribe). - - - Del
contenido de dicho precepto legal, por una parte se
advierte la intención del legislador de facilitar en los
procedimientos sin imponer formalidades a los litigantes;
sin embargo, las controversias del orden familiar tienen
sus reglas específicas en los artículos 943 y 944 del
ordenamiento legal antes (sic) invocado, en los cuales
marcan los lineamientos a que deben de ceñirse las
pruebas ofrecidas por las partes, siendo en la especie ésta
una prueba idónea para que necesariamente sea
modificado el régimen de visitas señalado por la autoridad
responsable. - - - Asimismo, para el supuesto sin conceder
que esta H. autoridad de amparo, no determine los
lineamientos a la autoridad responsable para admitir el
desahogo de dicha probanza, estaría conculcando
flagrantemente lo dispuesto por los preceptos legales que
a continuación se citan: - - - Artículo 278 de Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, que
establece: - - - (se transcribe). - - - El artículo 279 del
ordenamiento legal antes (sic) invocado, que establece: - - -
(se transcribe). - - - Y lo dispuesto por el artículo 944 del
código adjetivo de la materia, que establece: - - - (se
transcribe). - - - Toda vez que, se actualizan de los
supuestos previstos por los preceptos legales antes (sic)
D.C. 309/2010.
67
invocados, deberá revocarse la sentencia materia del acto
reclamado. - - - Asimismo, al momento de pronunciarse la
resolución que resuelva el acto reclamado deberá de
observarse lo dispuesto por los artículos que a
continuación se transcriben: - - - El artículo 285 del Código
de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, que
establece: - - - (se transcribe). - - - El artículo 289 del
código procesal civil para el Distrito Federal, que establece:
- - - (se transcribe). - - - Lo dispuesto por el artículo 293 del
código adjetivo de la materia, que establece: - - - (se
transcribe).- - - Y el artículo 298 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, que
establece: - - - (se transcribe). - - - Por las anteriores
consideraciones deberá admitirse la prueba pericial en
materia de psiquiatría ofrecida por la suscrita. - - - Para lo
cual designó como perito en materia de psiquiatría de esta
parte al ****************************** **********, con número de
cédula profesional de Médico Cirujano **********,
**********************************************************************;
persona especialista en la materia y que bajo formal
protesta de decir verdad tiene los conocimientos
necesarios para resolver los cuestionamientos, materia del
dictamen pericial correspondiente; con domicilio en
*************************************************************************
D.C. 309/2010.
68
*******; por lo que, sobre el cual en su caso los auxiliares de
la administración de justicia deberán rendir sus dictámenes
periciales; ya que, con la probanza en mención se
acreditará que el demandado incidentista no es una
persona apta para mantener una convivencia con mi menor
hijo ******************************. - - - Atendiendo a lo
dispuesto en la parte in fine del artículo 346 de Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, que
establece: - - - (se transcribe). - - - Por lo que, atendiendo
al precepto legal antes (sic) mencionado, para el supuesto
sin conceder que, se determine designar un único perito de
acuerdo a las Listas de Peritos Auxiliares de la
Administración de Justicia, y para que dicha probanza
pueda desahogarse de la mejor forma posible y que dicho
auxiliar esté con aptitud de rendir el mismo, por una parte
solicito se prevenga al perito que en su caso designe mi
contraparte para que: - - - 1.- Se limite única y
exclusivamente a rendir su dictamen con los elementos
que tenga a su alcance. - - - 2.- Que no tenga contacto con
las partes (únicamente para llevar a cabo el examen
correspondiente) y menos aún con los colitigantes. - - - 3.-
Que rinda dicho dictamen de acuerdo a su leal saber y
entender. - - - 4.- Que atendiendo a su ética y
profesionalismo no ventile antes de que rinda su dictamen
D.C. 309/2010.
69
sus conclusiones. - - - 5.- Que no se preste para negociar
el asunto para con mi colitigante. - - - Y de no cumplir con
lo solicitado se aperciba que, se hará del conocimiento del
Consejo de la Judicatura su incumplimiento. - - - Por lo
que, una vez que se determine la designación de dicho
auxiliar de la administración de justicia y se le haga de su
conocimiento su designación para que acepte y proteste el
cargo conferido, el perito deberá de entrevistar y realizar
los exámenes al señor ********************; por lo que, deberá
de presentarse puntualmente en el consultorio de dicho
perito, en las fechas y horas que para tal efecto señale
dicho especialista; por lo anterior, solicito se requiera al
señor ********************, para que se presente en forma
personal y no por conducto de apoderado legal alguno, en
los días y horas que se determinen por el auxiliar de la
administración de justicia, para que se encuentre en aptitud
de realizar los exámenes y entrevistas, bajo el
apercibimiento que de no presentarse se tenga al señor
**********, por ciertas las afirmaciones de todos y cada uno
de los hechos de mi demanda incidental, lo anterior con
fundamento en lo dispuesto por el artículo 287 del Código
de Procedimientos Civiles. - - - Los puntos y cuestiones
sobre los que debe versar el cuestionario son los
siguientes: - - - a).- El perito habrá de determinar el estado
D.C. 309/2010.
70
psicológico y psiquiátrico actual del señor **********, en sus
aspectos emocionales. - - - b).- El perito habrá de
determinar el estado psicológico y psiquiátrico actual del
señor **********, en sus aspectos personales. - - - c).- El
perito habrá de determinar el estado psicológico y
psiquiátrico actual del señor **********, en sus principales
rasgos de personalidad. - - - ch).- El perito habrá de
determinar si como resultado de las evaluaciones
practicadas al señor **********, encontró síntomas de
alteraciones conductuales, que se puedan diagnosticar
dentro de alguna entidad psicopatológica determinada o
alteración emocional psicológica más aún psiquiátrica. - - -
d).- El perito habrá de determinar si como resultado de las
evaluaciones practicadas al señor **********, encontró
síntomas de alteraciones emocionales que se puedan
diagnosticar dentro de alguna entidad psicopatológica
determinada o alteración emocional psicológica más aún
psiquiátrica. - - - e).- El perito habrá de determinar si como
resultado de las evaluaciones practicadas al señor
**********, encontró síntomas de alteraciones psicológicas
que se puedan diagnosticar dentro de alguna entidad
psicopatológica determinada o alteración emocional
psicológica más aún psiquiátrica. - - - f).- El perito deberá
determinar, en caso de encontrar alguna alteración o
D.C. 309/2010.
71
trastorno en el señor **********, indique a qué causas se
puede atribuir y cómo influye dicha alteración en su vida
personal. - - - g).- El perito deberá determinar, en caso de
encontrar alguna alteración o trastorno en el señor
**********, indique a qué causas se puede atribuir y cómo
influye dicha alteración con su familia. - - - h).- El perito
deberá determinar, en caso de encontrar alguna alteración
o trastorno en el señor **********, indique a qué causas se
puede atribuir y cómo influye dicha alteración con su hijos
de nombres ************************************************** todos de
apellidos **********. - - - i).- Que diga y determine el perito, si
‘en’ el señor **********, presenta antecedentes de conductas
abusivas en su vida personal. - - - j).- Que diga y determine
el perito, si en el señor ******************** presenta
antecedentes de conductas abusivas en su vida laboral. - - -
k).- Que diga y determine el perito, si ‘en’ el señor **********,
presenta antecedentes de conductas abusivas en su vida
educativa. - - - I).- Que diga y determine el perito, si ‘en’ el
señor **********, presenta antecedentes de conductas
abusivas en su vida familiar. - - - II).- Que diga y determine
el perito, si ‘en’ el señor **********, presenta antecedentes de
conductas abusivas en su vida con sus hijos de nombres
************************************************** todos de apellidos
********************- - - m).- Que diga y determine el perito si
D.C. 309/2010.
72
el señor ******************** presenta antecedentes de
conductas agresivas en su vida personal. - - - n).- Que diga
y determine el perito si el señor **********, presenta
antecedentes de conductas agresivas en su vida laboral. - -
- ñ).- Que diga y determine el perito si el señor **********,
presenta antecedentes de conductas agresivas en su vida
educativa. - - - o).- Que diga y determine el perito si el
señor **********, presenta antecedentes de conductas
agresivas en su vida familiar. - - - p).- Que diga y determine
el perito si el señor **********, presenta antecedentes de
conductas agresivas en su vida con sus hijos de nombres
************************************************** todos de apellidos
**********. - - - q).- Que diga y determine el perito si el señor
**********, presenta antecedentes de conductas negligentes
e irresponsables en su vida personal. - - - r).- Que diga y
determine el perito si el señor **********, presenta
antecedentes de conductas negligentes e irresponsables
en su vida laboral. - - - s).- Que diga y determine el perito si
el señor **********, presenta antecedentes de conductas
negligentes e irresponsables en su vida educativa. - - - t).-
Que diga y determine el perito si el señor **********, presenta
antecedentes de conductas negligentes e irresponsables
en su vida familiar. - - - u).- Que diga y determine el perito
si el señor **********, presenta antecedentes de conductas
D.C. 309/2010.
73
negligentes e irresponsables en su vida con sus hijos de
nombres **************************************** todos de
apellidos ********************- - - v).- Que diga y determine el
perito si el señor **********, puede presentar conductas
agresivas de manera verbal o física en su vida personal. - -
- w).- Que diga y determine el perito si el señor **********,
puede presentar conductas agresivas de manera verbal o
física en su vida laboral. - - - x).- Que diga y determine e
perito si el señor **********, puede presentar conductas
agresivas de manera verbal o física en su vida familiar. - - -
y).- Que diga y determine el perito si el señor **********,
puede presentar conductas agresivas de manera verbal o
física en su vida con sus hijos de nombres
************************************************** todos de apellidos
**********. - - - z).- Que diga y determine el perito si con los
estudios practicados al señor **********, resulta perjudicial
para el desarrollo de sus hijos de nombres
************************************************** todos de apellidos
**********, la estancia en el seno familiar de éste. - - - Que
diga el perito, qué estudios, procedimientos o técnicas
utilizó para llevar a cabo sus conclusiones. - - - Que diga el
perito finalmente sus conclusiones. - - - No es óbice
mencionar, que el señor **********, en su contestación de
demanda ha reflejado diversas angustias y represalias para
D.C. 309/2010.
74
con mis hijos **************************************** todos de
apellidos **********, ya que, ha manifestado que les va a
quitar los vehículos en los que se trasportan, seguro de
gastos médicos y que me va a dejar en la calle sin nada. - -
- Asimismo, sin perjuicio de la designación que hace la
suscrita en relación al perito designado de esta parte; y en
atención a la circular número **********, de fecha **********,
correspondiente al acuerdo plenario número **********,
emitido en sesión ordinaria de fecha **********, solicito se
sirva girar atento oficio al **********, en su carácter de
****************************************
*************************************************************************
***************************, con domicilio sito en
*************************************************************************
*************************************************************************
******************************************************, para que en
auxilio de las labores de este juzgado, se sirva designar
perito en materia de psicología a fin de que, se proceda al
desahogo de la prueba pericial en mención. - - - CUARTO
CONCEPTO DE VIOLACIÓN.- La sentencia materia del acto
reclamado como se ha venido insistiendo viola en mi
perjuicio, las garantías de legalidad y debido proceso legal,
ya que el juez del juicio de origen no vigiló el
pronunciamiento de la misma, ya que, no obstante que en
D.C. 309/2010.
75
proveído de fecha **********, manifestó que proveería lo
conducente al requerimiento sobre la declaración de los
bienes adquiridos dentro de la sociedad conyugal fue
omiso pronunciarse al respecto; por lo que, debió atender a
lo siguiente: - - - a).- En aplicación y cumplimiento a las
cláusulas que establecimos en las capitulaciones
matrimoniales, la rendición de cuentas con motivo de su
administración, a partir del día **********, (fecha en que
contrajimos nupcias), hasta la fecha que se cumpla con tal
obligación. - - - b).- La rendición de cuentas que guardan,
las operaciones, contratos y cuentas bancarias propiedad
de la sociedad conyugal que a continuación se detallan y
las que existan, hayan existido o en el transcurso de este
incidente se descubran o no se hayan relacionado, pero
que se encuentran a nombre del señor **********, o de la
suscrita a partir del día **********, (fecha en que contrajimos
nupcias), hasta la fecha que se cumpla con tal obligación. -
- - c).- La presentación y entrega de la lista de contratos de
arrendamiento, cuentas o cualquier otro activo productivo
que encuentre explotando el señor **********, en forma
personal, o a través de empresas o sociedades, donde él
sea accionista o que mantenga algún interés legal,
económico o patrimonial, a partir del día **********, (fecha en
que contrajimos nupcias). - - - d).-La presentación y
D.C. 309/2010.
76
entrega de una lista de sociedades que fueron constituidas
durante la vigencia de la sociedad conyugal por el señor
********************o que éste mantenga intereses, partes
sociales, activos, intereses en las sociedades que a
continuación se listan a partir del día **********, (fecha en
que contrajimos nupcias), hasta la fecha en que se cumpla
con tal obligación. En forma ejemplificativa mas no
limitativa, señalo las siguientes empresas como bienes de
la sociedad conyugal: - - - A saber: - - - **********
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
************************************
*************************************************************************
*************************************
*************************************************************************
***********************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
D.C. 309/2010.
77
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
***************************************
************************************************************Por lo que,
de cada una de las anteriores empresas deberá: - - - 1.- La
rendición de cuentas del estado que guardan las
operaciones, contratos y cuentas bancarias propiedad de
las empresas que se detallan en la lista anterior, a partir del
día ******************** (fecha en que contrajimos nupcias), y
hasta la fecha en que se cumpla con tal obligación. - - - 2.-
La presentación de entrega de la lista de clientes a partir
del día ******************** (fecha en que contrajimos
nupcias), y hasta la fecha en que se cumpla con tal
obligación. - - - 3.- La presentación de todos los actos,
donde se haya usado la firma social, de las multicitadas
empresas. - - - 4.- La presentación del inventario de los
bienes muebles, inmuebles, equipos y vehículos,
inversiones, chequeras en México y en el extranjero,
propiedad de las sociedades multicitadas. - - - 5.- La
presentación de un listado de los actos jurídicos
celebrados por las empresas multicitadas, a partir del día
D.C. 309/2010.
78
******************** (fecha en que contrajimos nupcias), y
hasta la fecha en que se cumpla con tal obligación. - - - 6.-
En cumplimiento del clausulado de las capitulaciones
matrimoniales y de las actas constitutivas de cada una de
las empresas, mediante la presentación del balance anual
del estado financiero de cada una de las sociedades
indicadas y de la sociedad conyugal. - - - 7.- El
cumplimiento de las cláusulas constitutivas de las
sociedades citadas mediante la presentación de
documentos que demuestren cómo se distribuyeron las
utilidades que obtuvieron las sociedades ya multicitadas y,
en su caso, cómo se acreditan a la sociedad conyugal. - - -
8.- La nulidad de los actos celebrados en contravención de
las capitulaciones y a la sociedad conyugal que tenemos
celebrada el señor ********** y la suscrita. - - - 9.- La nulidad
de los actos donde se hayan vendido acciones o trasmitido
las mismas de las sociedades antes (sic) mencionadas sin
el consentimiento de la suscrita, y en contravención de las
capitulaciones matrimoniales, de la sociedad conyugal y de
las sociedades mercantiles ya detalladas. - - - 10.- La
nulidad de los actos que requiera mi consentimiento de
acuerdo a la sociedad conyugal, las capitulaciones
matrimoniales. - - - 11.- El pago de los daños que se
derivan de la conducta del demandado en términos y
D.C. 309/2010.
79
aplicación del artículo 108 del Código Civil, que serán
cuantificados a juicio de peritos. - - - 12.- El pago de los
perjuicios que se derivan de la conducta del demandado en
términos y aplicación de los artículos 520, 562, 596,
fracción IV, 702 y 859, fracción I, del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal y artículos
109, 608, 611, 612 y 1164, del Código Civil, que serán
cuantificados a juicio de peritos. - - - 13.- La presentación
de los documentos que amparen las pretensiones
mencionadas en los incisos que anteceden en este capítulo
del presente incidente. - - - 14.- El pago de la cantidad que
resulte por concepto de regalías, por utilidades,
honorarios, intereses, venta de acciones, prestaciones de
cualquier tipo, devolución de impuestos, sueldos,
arrendamientos, compraventas o cualquier acto mercantil o
civil del que la sociedad conyugal o el señor **********, se
haya visto beneficiado, a partir del día ********** (fecha en
que contrajimos nupcias), hasta la fecha que cumpla con
tal obligación, tal y como se detallan los hechos de este
incidente, la que se liquidará en ejecución de sentencia. - - -
15.- El pago de los intereses legales que resulten de la
cantidad que se demanda en la pretensión anterior, desde
la fecha en que debió ser entregada hasta que la actora se
dé por pagada, los que se liquidarán en ejecución de
D.C. 309/2010.
80
sentencia. - - - 16.- El pago de las mensualidades
rentísticas que se percibe mes por mes por cada uno de los
inmuebles que a continuación se citan a razón de: - - -
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*******
*************************************************************************
*************************************************************************
************************ - - - Por lo que, la autoridad
responsable debió analizar: - - - 1.- De la instrumental de
actuaciones que conforma el juicio en que se actúa, a las
cuales en términos de lo dispuesto por el artículo 327,
fracción VIII del Código de Procedimientos Civiles para el
Distrito Federal, se le debe conceder pleno valor
probatorio, se advierte que, la suscrita **********, en mi
D.C. 309/2010.
81
libelo inicial, manifesté que contraje matrimonio civil con el
señor **********, bajo el régimen de sociedad conyugal, con
fecha **********, ante el Juez Trigésimo del Registro Civil en
el Distrito Federal, tal como se acreditó con la copia
certificada de la partida de matrimonio número **********,
clase **********, que se encuentra agregada en autos. - - -
Por otra parte, al celebrarse el vínculo matrimonial bajo el
régimen de sociedad conyugal, ante el Oficial del Registro
Civil antes (sic) mencionado, de conformidad con lo
dispuesto por el artículo 103, fracción VII del Código Civil
para el Distrito Federal, los hoy divorciantes firmamos el
convenio (CAPITULACIONES MATRIMONIALES), bajo las
siguientes bases: - - - I.- El matrimonio se contrae bajo el
régimen de sociedad conyugal. - - - II.- La sociedad
conyugal comprenderá todos los bienes muebles e
inmuebles y sus productos que los consortes adquieran
durante su vida matrimonial, incluyendo el producto del
trabajo. - - - III.- En los bienes y productos de la cláusula
anterior, cada consorte tendrá la participación del
cincuenta por ciento. - - - IV.- Administrará la sociedad el
marido, teniendo todas las facultades inherentes a su
cargo, según el Código Civil vigente. - - - V.- Las bases
para liquidar la sociedad serán las establecidas por el
mismo código en sus artículos relativos. - - - Por lo
D.C. 309/2010.
82
anterior, la suscrita como copropietaria del 50% (cincuenta
por ciento), de los bienes adquiridos dentro de la sociedad
conyugal tiene derecho a demandar como consecuencia de
la disolución del vínculo matrimonial, la liquidación y
participación de los bienes adquiridos durante la sociedad
conyugal. - - - Por otra parte, en autos se advierte que,
señalé como bienes adquiridos dentro de la sociedad
conyugal los bienes muebles e inmuebles, sociedades,
empresas, acciones y demás valores que la suscrita tenía
conocimiento a la presentación de la demanda inicial, son
los siguientes: - - - EMPRESAS Y SOCIEDADES
CONSTITUIDAS DENTRO DE LA SOCIEDAD CONYUGAL: - -
- (transcribe las empresas citadas). - - - INMUEBLES
ADQUIRIDOS DENTRO DE LA SOCIEDAD CONYUGAL: - - -
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
*************************************************************************
D.C. 309/2010.
83
************************************************** - - -
ACCIONES,_ADQUIRIDAS DENTRO DE LA SOCIEDAD
CONYUGAL: - - - ********** **********. - - - CUENTAS
BANCARIAS APERTURADAS DENTRO DE LA SOCIEDAD
CONYUGAL: - - - (transcribe las cuentas bancarias
citadas). - - - Ahora bien, la autoridad responsable con
fecha veintiséis de marzo del año dos mil diez, dictó
sentencia definitiva, en la que en sus puntos resolutivos
determinó: - - - (se transcriben). - - - En virtud que se
manifestó bajo protesta de decir verdad al juez responsable
que la suscrita desconoce los montos de las rentas que, el
demandado ha percibido por el arrendamiento de los
mismos, el juez omitió hacer pronunciamiento alguno
respecto de ello, por lo cual se vulneró el artículo 81 del
código adjetivo civil, situación que deberá ser reparada por
la autoridad de amparo. Y en su oportunidad de igual forma
deberá prevenirse al demandado señor **********, hoy
tercero perjudicado informe los nombres de las personas
físicas o morales con las que tiene celebrado los contratos
de arrendamiento de los inmuebles referidos, se gire atento
oficio a cada uno de los arrendatarios e inquilinos a efecto
de que se le haga de su conocimiento que deberán de
abstenerse de hacer pago directamente al señor **********, y
que la cantidad que se paga por concepto de las
D.C. 309/2010.
84
mensualidades rentísticas correspondientes deberán ser
depositadas en el juzgado de origen, por cualesquiera de
los medios establecidos por la ley, previniéndoles que para
el caso de que no hagan pago de las mensualidades
rentísticas correspondientes, se les impondrá una medida
de apremio conforme a la ley de la materia, por desacato a
un mandato judicial. - - - O bien, deberá crearse una cuenta
bancaria a efecto que ahí sean depositados los pagos de
las pensiones rentísticas y genere rendimiento y solidez
para la sociedad en cuestión. - - - Debe indicarse como ya
ha quedado asentado en autos, que se estableció desde un
principio como domicilio conyugal en el inmueble sito en
*************************************************************************
*************************************************************************
************************ - - - Como se advierte de las
capitulaciones descritas en el hecho marcado con el
número dos, se establecieron las bases y condiciones
sobre las cuales los consortes nos sujetaríamos durante la
sociedad conyugal; en las que, se acordaron las utilidades
y beneficios las cuales serían en partes iguales para la
suscrita y el señor **********. - - - En la sociedad conyugal,
quedó designado como administrador el señor **********,
cuyas facultades y obligaciones de acuerdo a las
capitulaciones matrimoniales quedaron establecidas en las
D.C. 309/2010.
85
cláusulas descritas en el hecho marcado con el número
dos. - - - Asimismo, el señor ******************** hasta hoy en
día actúa como representante legal de la sociedad
conyugal, con todo por cuanto ha hecho y por derecho le
corresponde como una universalidad jurídica. - - - El
demandado **********, con las facultades que constan en el
acta civil de matrimonio y en las capitulaciones
jurídicamente establecidas, ha ejercido y representa la
sociedad conyugal la cual constituí con la citada persona
en todas las actividades comerciales y civiles; en las que
adquirió bienes y activos para la sociedad conyugal,
celebrando contratos, constituyendo sociedades anónimas
y mercantiles; actuando en forma personal, ‘administrado y
cobrado’ todo lo relativo a las sociedades mercantiles
citadas de la sociedad conyugal, quien hasta el día de hoy
tiene en su poder, toda la documentación que acredita tales
hechos; por lo tanto, en cumplimiento y para efectos de los
artículos 95, ‘fracciones’ II, 255, fracción V y 287, del
Código de Procedimientos Civiles, se manifiesta BAJO
FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD, que los
documentos que se citan en los hechos precedentes, esto
es, en donde se advierten las circunstancias de tiempo,
lugar y forma que se describen se encuentran en las
oficinas del señor ********** y de las sociedades
D.C. 309/2010.
86
multicitadas, es en el domicilio de las mismas, ubicado en
la **********por lo que, la suscrita no las puede exhibir; por
lo que, atendiendo a su consideración solicito se requiera
al demandado incidentista para que dentro de término de
tres días, contados a partir del día siguiente en que se le
notifique el presente incidente exhiba la documentación
que obra en su poder, previniéndole que para el caso de no
exhibirlas se tendrán por ciertas las afirmaciones que hace
la suscrita, de conformidad con lo dispuesto por el artículo
287 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal; sin perjuicio de lo anterior, deberá de imponérsele
una medida de apremio conforme a la ley de la materia. - - -
Para determinar lo anterior, se deberá tomar en cuenta lo
siguiente: - - - El demandado **********, como representante
legal de las sociedades multicitadas abrió cuentas de
cheques en esta ciudad y en el extranjero; así mismo, con
esa calidad dicha persona libró innumerables cheques de
esas sociedades y además contrató servicios bancarios,
cartas de crédito, cajas de seguridad en lo personal y a
nombre de las sociedades; por lo tanto, en cumplimiento y
para efectos de los artículos 95, ‘fracciones’ II, 255, fracción
V y 287, del Código de Procedimientos Civiles, se
manifiesta BAJO FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD,
que los documentos donde se encuentran los hechos, es
D.C. 309/2010.
87
decir las circunstancias de tiempo, lugar y forma que se
describen se encuentran en las oficinas del señor **********
y de las sociedades multicitadas, es en el domicilio de las
mismas ubicado en la **********. - - - Ejemplo de la mala
administración, es el hecho que con fecha **********, el
señor **********, fue acusado penalmente ante la
Procuraduría del Distrito Federal por mis hermanos los
señores ********** e ********** ambos de apellidos **********
por tratar de cobrar una misma deuda por más de dos
ocasiones, por lo tanto, en cumplimiento y para efectos de
los artículos 95, ‘fracciones’ II, 255, fracción V y 287, del
Código de Procedimientos Civiles, se manifiesta BAJO
FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD, que los
documentos donde se encuentran los hechos, es decir las
circunstancias de tiempo, lugar y forma que se describen
se encuentran en las oficinas del señor ********** y de las
sociedades multicitadas, es en el domicilio de las mismas,
ubicado en la ******************************; por lo que, la
suscrita no las puede exhibir; por lo que, atendiendo a su
consideración, solicito se requiera al demandado
incidentista para que dentro del término de tres días,
contados a partir del día siguiente en que se le notifique el
presente incidente, exhiba la documentación que obra en
su poder, previniéndole que para el caso de no exhibirlas
D.C. 309/2010.
88
se tendrán por ciertas las afirmaciones que hace la
suscrita, de conformidad con lo dispuesto por el artículo
287 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal; sin perjuicio de lo anterior, deberá de imponérsele
una medida de apremio conforme a la ley de la materia. - - -
Respecto a este rubro, los bienes muebles que ha
adquirido la sociedad conyugal, y que se refiere a
mobiliario y equipo o adaptaciones para las propiedades
que habitamos, oficinas etc., el señor **********, mantiene en
su poder el inventario y las facturas de los muebles
indicados. En cumplimiento y para los efectos de los
artículos 95, fracción II, 255 fracción V y 287, del Código de
Procedimientos Civiles, se manifiesta BAJO FORMAL
PROTESTA DE DECIR VERDAD, que los documentos
donde se encuentran los hechos, es decir las
circunstancias de tiempo, lugar y forma que se describen
se encuentran en las oficinas del seños ********** y de las
sociedades multicitadas, es en el domicilio de las mismas,
ubicado en la **********por lo que, la suscrita no las puede
exhibir; por lo que, atendiendo a su consideración solicito
se requiera al demandado incidentista para que dentro del
término de tres días contados a partir de día siguiente en
que se le notifique el presente incidente, exhiba la
documentación que obra en su poder, previniéndole que
D.C. 309/2010.
89
para el caso de no exhibirlas se tendrán por ciertas las
afirmaciones que hace la suscrita, de conformidad con lo
dispuesto por el artículo 287 del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal; sin perjuicio de lo anterior,
deberá de imponérsele una medida de apremio conforme a
la ley de la materia. - - - Desde el año de mil novecientos
ochenta y cuatro hasta la fecha, el señor **********, con
quien formé una sociedad conyugal y la suscrita **********
pactamos, de conformidad con lo prevenido en el Código
Civil un convenio, respecto a bienes futuros que al
momento de casarnos no los teníamos, bajo las siguientes
bases: - - - (se transcriben) - - - Es decir la suscrita tiene
derecho a la participación del cincuenta por ciento de
todos los bienes y productos que se adquirieron durante
nuestro matrimonio. Teniendo derecho a cobrar los
gananciales, créditos y productos en la misma proporción,
incluyendo el producto del trabajo de las personas,
entidades y sociedades. - - - El señor **********, tiene la
documentación e información en su poder, entre las que se
encuentran: - - - a).- La sociedad conyugal a través del
señor **********, se adquirió un inmueble en **********
********************, inmueble valuado en $1’000,000.00 (un
millón de dólares de los Estados Unidos de Norteamérica
00/100), o su equivalente en moneda nacional. Bienes,
D.C. 309/2010.
90
gananciales y créditos debidos a la sociedad conyugal
$1’000,000.00 (un millón de dólares de los Estados Unidos
de Norteamérica 00/100). - - - b).- Respecto a las
sociedades mercantiles, cabe señalar que éstas, son
propietarios de activos fijos y circulantes, tiene cuentas de
cheques y acciones, mismas que ha explotado el señor
**********, con toda libertad y nunca ha rendido cuentas, ha
cobrado de manera unilateral y ha invertido en la misma
forma sin ingresarlo a la cuenta de la sociedad. - - - c).-
Cada sociedad tiene clientes y con todos hace negocios y
no ha ingresado y no ha rendido cuentas a la sociedad
conyugal. - - - d).- Estas son algunas de las sociedades
que se han constituido durante la vigencia de as sociedad
conyugal, pero el demandado el señor ******************** ha
hecho caso omiso de la sociedad conyugal y de las
capitulaciones matrimoniales, cobrando todos los
conceptos correspondientes de las sociedades
mercantiles, sin ingresarlos en las cuentas de cheques de
la sociedad conyugal o sin informar el estado de los
cobros, es decir sin rendir cuentas en los términos y
condiciones de su cargo, de acuerdo a la sociedad
conyugal, a las capitulaciones matrimoniales y a las
escrituras de cada empresa, por lo tanto, en cumplimiento
y para efectos de los artículos 95 ‘fracciones’ II, 255
D.C. 309/2010.
91
fracción V y 287, del Coligo de Procedimientos Civiles, se
manifiesta BAJO FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD,
que los documentos donde se encuentran los hechos, es
decir las circunstancias de tiempo, lugar y forma que se
describen se encuentran en las oficinas del señor **********
y de la sociedades multicitadas, es en el domicilio de las
mismas, ubicado en la ********** **********por lo que, las
suscrita no las puede exhibir; por lo que, atendiendo a su
consideración solicito se requiera a! demandado
incidentista para que dentro del término de tres días,
exhiba la documentación que obra en su poder,
previniéndole que para el caso de no exhibirlas se tendrán
por ciertas las afirmaciones que hace la suscrita; sin
perjuicio de lo anterior, deberá de imponérsele una medida
de apremio conforme a la ley de la materia. Actualmente el
señor ********** está ocupando y usando los activos de la
sociedad conyugal, llámense sociedades mercantiles,
muebles, inmuebles, bienes, honorarios, derechos, etc., al
extremo que según he sido informada por el mismo, ha
dispuesto para sí o para ‘interpósita’ persona de los activos
de la sociedad conyugal, ha celebrado nuevos contratos de
compraventa, venta de acciones, ha dispuesto de los
derechos según me ha dicho de las sociedades citadas de
los activos inmobiliarios, de los bienes muebles, como
D.C. 309/2010.
92
chequeras e inversiones ha cambiado, de nombre las
cuentas, empleando los expedientes, archivos, activos de
las sociedad conyugal disponiendo para sí también de los
arrendamientos y de las cuentas bancarias, todo lo anterior
lo ha hecho sin mi consentimiento, no ha tomado mi
opinión, no ha celebrado asambleas para dar a conocer la
situación real de las sociedades legalmente constituidas, o
al menos no me ha dado participación de ello. Y me ha
amenazado de disponer de todos los activos de la sociedad
conyugal y de dejarme sin mi participación legal. - - - La
conducta asumida por el señor **********, al abstenerse de
rendir cuentas, de utilizar activos de las empresas
mercantiles y de la sociedad conyugal para fines distintos y
exclusivos, de realizar actos extraordinarios sin cumplir
requisitos legales, todo ello causa a mi persona y a mi
patrimonio conyugal daños y perjuicios y que son razones
para iniciar este incidente, sin perjuicio de las acciones
penales que procedan. - - - Asimismo, las anteriores
consideraciones encuentran apoyo en los siguientes
criterios que a continuación se ‘describen’: - - -
‘SOCIEDAD CONYUGAL. CONSECUENCIAS DE LA
OMISIÓN DE FORMULAR CAPITULACIONES
MATRIMONIALES EN ESE RÉGIMEN PATRIMONIAL
(CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL EN MATERIA
D.C. 309/2010.
93
COMÚN Y PARA TODA LA REPÚBLICA EN MATERIA
FEDERAL VIGENTE PARA EL DISTRITO FEDERAL HASTA
EL 31 DE MAYO DE 2000)’, ‘CAPITULACIONES
MATRIMONIALES. RÉGIMEN APLICABLE CUANDO HAY
OMISIÓN DE FORMULARLAS (CÓDIGO CIVIL PARA EL
DISTRITO FEDERAL EN MATERIA COMÚN Y PARA TODA
LA REPÚBLICA EN MATERIA FEDERAL VIGENTE PARA EL
DISTRITO FEDERAL HASTA EL 31 DE MAYO DE 2000)’,
‘CAPITULACIONES MATRIMONIALES, REQUISITOS QUE
DEBE REUNIR EL DOCUMENTO RELATIVO PARA
ACREDITAR EN EL JUICIO DE AMPARO EL INTERÉS
JURÍDICO DEL CÓNYUGE QUE EN CARÁCTER DE
COPROPIETARIO RECLAMA LA AFECTACIÓN DE UN
INMUEBLE.’ y ‘SOCIEDAD CONYUGAL, DEBEN
CONSIDERARSE INCLUIDOS EN ELLA LOS BIENES
ADQUIRIDOS POR HERENCIA POR UNO DE LOS
CÓNYUGES, SI EN LAS CAPITULACIONES
MATRIMONIALES SE PACTÓ QUE AQUÉLLA
COMPRENDERÍA TODOS LOS QUE ADQUIRIERAN ÉSTOS
DURANTE SU VIDA MATRIMONIAL’. (se transcriben, cita
datos de localización y precedentes). - - - Cabe hacer
alusión, como ya se mencionó que durante todo el tiempo
en que duró el matrimonio civil celebrado entre los
cónyuges, se adquirieron innumerables bienes de los
D.C. 309/2010.
94
cuales el hoy tercero perjudicado señor **********, siempre
ha tenido la posesión y administración, tan es así que,
muchos se encuentran rentados y se han generado frutos y
ganancias que corresponden a la sociedad conyugal. - - -
Por lo que, el juez cometió un error al haberse abstenido de
requerir al señor **********, cuáles son los activos y pasivos
que conforman la sociedad conyugal a liquidar. - - - Siendo
que lo anterior es procedente conforme a derecho, toda vez
que, el señor **********, ha puesto en renta los bienes
adquiridos dentro de la sociedad conyugal, obteniendo el
ciento por ciento de los frutos, y por lo cual, la suscrita
manifiesta BAJO FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD,
que desconoce la cantidad neta que éste ha percibido por
la renta de dichos inmuebles. - - - QUINTO CONCEPTO DE
VIOLACIÓN.- La sentencia, fue omisa en proveer los
escritos presentados los días
************************************************** ya que,
respetuosamente solicité a la autoridad responsable
previniera al demandado **********, para que se abstuviera
de realizar acto jurídico alguno, que perjudicara el
patrimonio de la sociedad conyugal, esto es, que no
dilapidara, transmitiera, enajenara, vendiera, gravara algún
bien adquirido dentro de la sociedad conyugal y que con
dichos bienes se garantizara el pago de la pensión
D.C. 309/2010.
95
alimenticia a favor de la suscrita y de mi menor hijo
**********. - - - Es el caso que, se manifestó por el juez de
los autos que dichas peticiones formuladas serían tomadas
en consideración al momento de pronunciarse la sentencia
de divorcio correspondiente. - - - Sin embargo, manifesté
BAJO FORMAL PROTESTA DE DECIR VERDAD, que el día
**********, mediante correo de paquetería de **********
enviado por
************************************************************,
proveniente de
*************************************************************************
***************************, dirigido a la suscrita **********, con
domicilio en
************************************************************, se me
hizo llegar el escrito suscrito por
****************************************, en su carácter de
********************, de fecha ****************************** - - - De
la documental de referencia se advierte que, el señor
**********, ha causado perjuicio a mis hijos, a la suscrita; así
como, a la sociedad conyugal, al haber celebrado contrato
de comodato respecto del
*************************************************************************
*************************************************************************
**************al causar acto de molestia por no permitir el uso
D.C. 309/2010.
96
y disfrute de dicho inmueble para con sus hijos, ya que, por
una parte el comodato celebrado con el señor
******************************, no genera ganancia lícita a favor
de la sociedad conyugal; y por la otra parte, antes de
verificar acto jurídico alguno respecto de los bienes
adquiridos dentro de la sociedad conyugal tuvo que dar
aviso previo a este H. juzgado; toda vez que, si bien es
cierto que, con fecha **********, se ordenó turnar los autos
para dictar la sentencia de divorcio correspondiente;
también lo es que, el señor **********, no tuvo que disponer
a su libre arbitrio de dicho inmueble; ya que, el mismo
ahora se encuentra en litigio. - - - Por otra parte, con
fundamento en los artículos 137, fracción IV, 287, 288 y
demás relativos y aplicables del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, se debió prevenir al
demandado para que dentro del término de tres días,
exhiba el contrato de comodato de fecha **********,
celebrado por el señor **********, en su carácter de
comodante y ********************, en su carácter de
comodatario, en el que se contengan los términos en que
fue celebrado el mismo, apercibiéndole que de no exhibirlo
se tendrán por ciertas las manifestaciones que hace la
suscrita en relación al perjuicio ocasionado a la sociedad
conyugal, ya que, su conducta puede incurrir en un delito
D.C. 309/2010.
97
incluso de índole penal; por lo que, desde este momento
solicito se dé la intervención correspondiente al C. Agente
del Ministerio Público adscrito a este juzgado, para que
manifieste lo que a su representación social corresponda;
sin perjuicio de lo anterior, deberá de imponérsele como
medida de apremio una multa equivalente a la cantidad de
ciento veinte días de salario mínimo diario general vigente
en el Distrito Federal, por desacato a un mandato judicial
de conformidad con lo dispuesto por el artículo 73, fracción
I, del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal. - - - Es el caso que ante la negativa del
demandado hoy tercero perjudicado de señalar y detallar
cada uno de los bienes adquiridos dentro de la sociedad
conyugal, ahora se deberá declarar la nulidad de la
celebración de dicho acto jurídico denominado comodato
de fecha **********; en virtud que, si bien es cierto que, la
******************************, funge según su dicho ser
******************************, **********
**************************************************; también lo es
que, dicha persona no se encuentra facultada para dar
posesión de dicho inmueble; toda vez que, BAJO FORMAL
PROTESTA DE DECIR VERDAD, en el
*************************************************************************
*************************************************************************
D.C. 309/2010.
98
************** se encuentran objetos personales tanto de la
suscrita ******************** así como, de mis hijos de
nombres **************************************** todos de
apellidos **********, regalos (joyas, pulseras, aretes,
gargantillas, anillos que en su momento dado el divorciante
me obsequió), por lo que, la conducta de la **********.
**********, puede incurrir en un delito incluso de índole
penal; por lo que, desde este momento solicito se dé la
intervención correspondiente al C. Agente del Ministerio
Público adscrito a este juzgado, para que manifieste lo que
a su representación social corresponda y en caso que se
tipifique algún delito inicie la averiguación previa
correspondiente. - - - La suscrita **********; así como, de
mis hijos de nombres ********************
****************************** todos de apellidos **********, en
muchas ocasiones en los períodos vacacionales ‘llegan a
acudir’ al
*************************************************************************
*************************************************************************
************** mismo que servía como fuente de recreación y
esparcimiento y como era de costumbre en este período
vacacional no iba a ser la excepción, tan es cierto ello, que
en diversas ocasiones le llegué a comentar al señor
**********, que del día **********, acudiría toda la familia a
D.C. 309/2010.
99
descansar y disfrutar de esos días, pero es tan grande
ahora la admiración que me causa, que el demandado a
sabiendas que dicho inmueble se ocupaba por sus hijos y
la suscrita, de la noche a la mañana haya celebrado
contrato de comodato, causando con ello un perjuicio que
se traducirá en forma económica, ya que, se tendrán que
realizar diversos gastos que no se tenían contemplados
para poder disfrutar ese período vacacional con mis hijos,
lo que en su momento procesal oportuno presentaré para
que se sirva requerir al demandado que cubra con dichos
gastos. - - - Ahora bien, de igual forma se causa perjuicio a
la suscrita; así como a la sociedad conyugal, porque el
*************************************************************************
*************************************************************************
**************para que pudiera ser usado y disfrutado, se
tuvo que acondicionar, es decir, que se encontraba
acondicionado con todo el menaje correspondiente
muebles, camas, sillones, lo anterior se acredita con los
diversos pagos, recibos y facturas, documentales que
corren agregadas en autos del juicio natural, y que desde
este momento se ofrecen como prueba de parte de la
suscrita **********. - - - Con fundamento en lo dispuesto en
el artículo 124 de la Ley de Amparo, se solicita la
suspensión del acto reclamado, únicamente en cuanto al
D.C. 309/2010.
100
régimen de visitas y convivencias del tercero perjudicado
con su menor hijo”.
SEXTO.- Es esencialmente fundado el motivo de
inconformidad que vierten los quejosos en el sentido de que la
sentencia reclamada es ilegal, ya que:
- El juez responsable al emitir la sentencia reclamada, resolvió en forma indebida el régimen de visitas y convivencias que debía regir en definitiva entre el menor **********, y su progenitor **********, pues dejó de advertir que el citado menor, no fue escuchado dentro del procedimiento de origen, y que por ello, en la especie no se contaban con los elementos suficientes para estar en condiciones de emitir un pronunciamiento definitivo en relación con el citado régimen de visitas y convivencias dentro de la sentencia reclamada; máxime que dentro de la litis natural (hecho catorce de la solicitud de divorcio), se alegó que el tercero perjudicado **********, tenía conductas inestables que podían poner en peligro al citado menor.
Lo anterior se afirma en atención a las siguientes
consideraciones.
En el caso a estudio, es preciso establecer en
primer lugar que, en una democracia constitucional como la que
se vive en México, el derecho familiar debe ser visto como un
conjunto de principios y valores procedentes de la Constitución,
de los tratados internacionales, así como de las leyes e
interpretaciones jurisprudenciales, dirigidos a proteger la
estabilidad de la familia y a regular la conducta de los
D.C. 309/2010.
101
integrantes del grupo familiar entre sí, y también a delimitar las
relaciones conyugales y de parentesco, conformadas por un
sistema especial de protección de derechos y obligaciones
respecto de menores, incapacitados, mujeres y adultos
mayores, de bienes materiales e inmateriales, poderes,
facultades y deberes entre padres e hijos, consortes y
parientes, cuya observancia alcanza el rango de orden público
e interés social.
Esas facultades y deberes de carácter asistencial
que nacen entre los descendientes y ascendientes, parientes
colaterales (hermanos, tíos, sobrinos), tienen potestades y
sujeciones establecidos especialmente para la protección de los
menores de edad.
El derecho de familia se ocupa, entre otros
aspectos, aunque de manera preponderante, de la protección
de los menores a través del ejercicio de la patria potestad, que
es considerada como institución protectora de la persona y
bienes de los hijos menores de edad no emancipados, que en
principio tiene su origen en la filiación.
En ese sentido, es pertinente precisar que el
sistema jurídico de nuestro país establece diversas
D.C. 309/2010.
102
prerrogativas de orden personal y social en favor de los
menores. Así, el texto actual del artículo 4o. constitucional
establece:
"Artículo 4o. ... Los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud, educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral.
Los ascendientes, tutores y custodios tienen el deber de preservar estos derechos. El Estado proveerá lo necesario para propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio pleno de sus derechos.
El Estado otorgará facilidades a los particulares para que coadyuven al cumplimiento de los derechos de la niñez. …”
De la declaración de principios contenida en el
preámbulo de la Convención sobre los Derechos del Niño,
instrumento internacional en el que nuestro país es parte,
resaltan como puntos esenciales, los siguientes:
a) La igualdad de derechos para todos los miembros
de la familia humana, la dignidad y el valor de la persona
humana;
b) La promoción del progreso y elevación de los
niveles de vida dentro de un marco de libertad; el derecho de la
infancia a tener cuidados y asistencia especiales por su falta de
madurez tanto física como mental; la protección de la familia,
como grupo en el cual la niñez crece y se desarrolla;
D.C. 309/2010.
103
c) El reconocimiento de la persona humana en su
niñez, su necesidad de crecer en un ambiente familiar de
felicidad, amor y comprensión para lograr un desarrollo pleno y
armonioso;
d) La preparación de la niñez para una vida
independiente con "espíritu de paz, dignidad, tolerancia, libertad,
igualdad y solidaridad”;
e) La toma de conciencia de las condiciones
especialmente difíciles en las que viven muchos niños y niñas
en el mundo; y
f) La importancia de las tradiciones.
Con base en esa declaración de principios, los
artículos del 1 al 41 de la citada convención enuncian, entre
otros, los derechos para la niñez que a continuación se
enumeran:
- El derecho a la vida y a un sano desarrollo
psicofísico.
- El derecho a la identidad, que incluye el derecho al
nombre y a la nacionalidad.
- El derecho a una atención especial en consideración a sus propios intereses calificados de superiores en todas las instancias judiciales, administrativas o de bienestar social.
D.C. 309/2010.
104
- El derecho a dar su opinión y que ésta sea tomada en cuenta en todos los asuntos que les afecten, incluyendo los de carácter judicial y administrativo.
- El derecho a la no discriminación.
- El derecho a vivir en familia, que incluye la
incorporación plena a una nueva familia a través de la
adopción.
- El derecho a ser protegido contra peligros físicos o
mentales, contra el descuido, el abuso sexual, la explotación, el
uso de drogas y enervantes o el secuestro y la trata.
- El derecho a que se le proporcionen los cuidados
alternativos adecuados en caso de desamparo familiar.
- El derecho a una educación, trato y cuidados
especiales en caso de impedimento psicofísico o cuando hayan
sido víctimas de maltrato.
- El derecho a disfrutar del más alto nivel posible de
salud.
- El derecho a la enseñanza primaria y a una
educación que respete su dignidad y los prepare para la vida en
un espíritu de comprensión, paz y tolerancia.
- El derecho al descanso, al juego y a las
actividades culturales y artísticas.
D.C. 309/2010.
105
- El derecho a disfrutar libremente de su cultura,
religión o idioma.
Ahora bien, de la indicada Convención sobre los
Derechos del Niño, cabe destacar lo prescrito en los
dispositivos 3, 9, 12, 19, 20, 21 y 27, que en forma
preponderante constriñen a los tribunales judiciales a velar por
el interés superior del niño, en los siguientes términos:
"Artículo 3.
1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.
2. Los Estados partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas y administrativas adecuadas.
3. Los Estados partes se asegurarán de que las instituciones, servicios y establecimientos encargados del cuidado o la protección de los niños cumplan las normas establecidas por las autoridades competentes, especialmente en materia de seguridad, sanidad, número y competencia de su personal, así como en relación con la existencia de una supervisión adecuada.”
"Artículo 9.
1. Los Estados partes velarán porque el niño no sea separado de sus padres contra la voluntad de éstos, excepto cuando, a reserva de revisión judicial, las autoridades competentes determinen, de conformidad con la ley y los procedimientos aplicables, que tal separación es necesaria en el interés superior del niño. Tal determinación puede ser necesaria en casos particulares, por ejemplo, en los casos en que el niño sea objeto de maltrato o descuido por parte
D.C. 309/2010.
106
de sus padres o cuando éstos viven separados y debe adoptarse una decisión acerca del lugar de residencia del niño.
2. En cualquier procedimiento entablado de conformidad con el párrafo 1 del presente artículo, se ofrecerá a todas las partes interesadas la oportunidad de participar en él y de dar a conocer sus opiniones.
3. Los Estados partes respetarán el derecho del niño que esté separado de uno o de ambos padres a mantener relaciones personales y contacto directo con ambos padres de modo regular, salvo si ello es contrario al interés superior del niño.
4. Cuando esa separación sea resultado de una medida adoptada por un Estado parte, como la detención, el encarcelamiento, el exilio, la deportación o la muerte (incluido el fallecimiento debido a cualquier causa mientras la persona esté bajo la custodia del Estado) de uno de los padres del niño, o de ambos, o del niño, el Estado parte proporcionará, cuando se le pida, a los padres, al niño o, si procede, a otro familiar, información básica acerca del paradero del familiar o familiares ausentes, a no ser que ello resultase perjudicial para el bienestar del niño. Los Estados partes se cerciorarán, además, de que la presentación de tal petición no entrañe por sí misma consecuencias desfavorables para la persona o personas interesadas.”
"Artículo 12.
1. Los Estados partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño.
2. Con tal fin, se dará en particular al niño oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño, ya sea directamente o por medio de un representante o de un órgano apropiado, en consonancia con las normas de procedimiento de la ley nacional.”
"Artículo 19.
1. Los Estados partes adoptarán todas las medidas legislativas, administrativas, sociales y educativas apropiadas para proteger al niño contra toda forma de perjuicio o abuso físico o mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual, mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o de cualquier otra persona que lo tenga a su cargo.
D.C. 309/2010.
107
2. Esas medidas de protección deberán comprender, según corresponda, procedimientos eficaces para el establecimiento de programas sociales con objeto de proporcionar la asistencia necesaria al niño y a quienes cuidan de él, así como para otras formas de prevención y para la identificación, notificación, remisión a una institución, investigación, tratamiento y observación ulterior de los casos antes descritos de malos tratos al niño y, según corresponda, la intervención judicial.”
"Artículo 20.
1. Los niños temporal o permanentemente privados de su medio familiar, o cuyo superior interés exija que no permanezcan en ese medio, tendrán derecho a la protección y asistencia especiales del Estado.
2. Los Estados partes garantizarán, de conformidad con sus leyes nacionales, otros tipos de cuidado para esos niños.
3. Entre esos cuidados figurarán, entre otras cosas, la colocación en hogares de guarda, la kafala del derecho islámico, la adopción, o de ser necesario, la colocación en instituciones adecuadas de protección de menores. Al considerar las soluciones, se prestará particular atención a la conveniencia de que haya continuidad en la educación del niño y a su origen étnico, religioso, cultural y lingüístico.”
"Artículo 21.
... Los Estados partes que reconocen o permiten el sistema de adopción cuidarán de que el interés superior del niño sea la consideración primordial .... .”
"Artículo 27.
1. Los Estados partes reconocen el derecho de todo niño a un nivel de vida adecuado para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social.
2. A los padres u otras personas encargadas del niño les incumbe la responsabilidad primordial de proporcionar, dentro de sus posibilidades y medios económicos, las condiciones de vida que sean necesarias para el desarrollo del niño ... .”
D.C. 309/2010.
108
En esos términos, como efecto jurídico inmediato
derivado de esa convención internacional, se recoge en el
sistema jurídico mexicano la fraseología: "interés superior de la
niñez”, la cual implica que en todo momento las políticas,
acciones y toma de decisiones en esa etapa de la vida humana,
tendrán que realizarse de modo tal que, en primer término, se
busque el beneficio directo del niño o niña a quien van dirigidas.
De esta manera, las instituciones familiares
heredadas desde el derecho romano sufren una importante
evolución que permite hoy un mayor acercamiento a los
derechos de la niñez y se aleja de los intereses propios de los
adultos.
La patria potestad es un ejemplo muy claro de esta
evolución; antiguamente, implicaba el derecho de vida o muerte
que el padre tenía sobre las personas sujetas a él; visión que,
poco a poco, fue cambiando para dirigir su foco de atención
hacia la eficacia plena de los derechos de la niñez,
estableciendo no sólo atribuciones para quien ejerce la patria
potestad, sino también deberes, pues los primeros sólo existen
en función de estos últimos y para facilitar su cumplimiento. Así,
la institución de la patria potestad se transforma de un simple
D.C. 309/2010.
109
poder o facultad carente de trascendencia e injusto, en una
verdadera función de carácter personal y social.
En el indicado panorama, el concepto interés
superior de la niñez, cuya salvaguarda es prioritaria en el
sistema jurídico mexicano, permite delimitar con precisión y
claridad los derechos que les corresponde a las personas
adultas en relación con los niños, para lo cual se privilegia el
deber de atenderlos y cuidarlos, con el objeto permanente de
alcanzar el mayor beneficio posible para ellos, como un
imperativo de la sociedad hacia las personas que ejercen la
patria potestad o custodia, de tal manera que la protección de
los infantes en México, se ubica incluso por encima de los
derechos de los adultos, y cumple hoy en nuestro sistema
jurídico una trascendente función social de orden público e
interés social.
En ese orden de ideas, por interés superior del
menor debe entenderse el catálogo de valores, principios,
interpretaciones, acciones y procesos dirigidos a forjar un
desarrollo humano integral y una vida digna, así como generar
las condiciones materiales que permitan a los niños vivir
plenamente y alcanzar el máximo de bienestar personal,
familiar y social posible, cuya protección debe promover y
D.C. 309/2010.
110
garantizar el Estado en el ejercicio de sus funciones legislativa,
ejecutiva y judicial, por tratarse de un asunto de orden público e
interés social.
Así, por disposición expresa del artículo 133
constitucional, los tribunales judiciales, al resolver sobre
controversias que incidan sobre los derechos de los menores,
tienen la obligación de atender a estas disposiciones, pues el
citado precepto establece:
"Artículo 133. Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que emanen de ellas y todos los tratados que estén de acuerdo con la misma, celebrados y que se celebren por el Presidente de la República, con aprobación del Senado, serán la Ley Suprema de toda la Unión. Los Jueces de cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y tratados, a pesar de las disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones o leyes de los Estados.”
Acorde con lo que dispone dicho precepto
constitucional, los tratados son la fuente del derecho
internacional y, como consecuencia de ello, el constituyente
determinó la incorporación de las normas contenidas en los
tratados al sistema jurídico nacional, y las hace vigentes en
cuanto se cumpla con los requisitos que la misma establece.
El Máximo Tribunal de Justicia del país ha sostenido
que, de acuerdo con la interpretación gramatical de la primera
parte del artículo 133 de la Carta Magna, para considerar que
D.C. 309/2010.
111
un tratado sea, junto con las leyes emanadas de la Constitución
y aprobadas por el Congreso de la Unión, la "Ley Suprema de
toda la Unión”, es menester que se satisfagan dos requisitos
formales y uno de fondo: los primeros se hacen consistir en que
el tratado se hubiere celebrado por el Presidente de la
República y que sea aprobado por el Senado. El requisito de
fondo consiste en la adecuación de la convención internacional
con el texto de la propia Ley Fundamental.
Por otra parte, la Suprema Corte de Justicia de la
Nación destaca la supremacía de los tratados frente a la
legislación local.
Esa misma postura ha sido sustentada por las
diversas teorías asumidas por los principales constitucionalistas
mexicanos, las que plantean la superioridad de los tratados
frente a la legislación local.
Tal situación se ve reforzada, no sólo por la fuerza
normativa que representan los compromisos internacionales,
sino sobre todo por el hecho de que ese tratado es suscrito por
el Presidente de la República en su carácter de Jefe de Estado
y con la participación del Senado de la República, en un
proceso que representa la participación de las entidades
D.C. 309/2010.
112
federativas para la incorporación de un compromiso
internacional al derecho positivo mexicano.
Así, como lo ha determinado el más alto Tribunal
Judicial, cuando surgen conflictos entre lo prescrito por las
normas de derecho interno y el derecho internacional adoptado
como vigente, de acuerdo con nuestro sistema constitucional,
debe partirse de la base del nivel jerárquico de la norma en
cuestión y sobre todo al mandato que la Constitución Federal
establece sobre el particular; en consecuencia, un tratado
tendrá la jerarquía que expresa o tácitamente la propia Ley
Fundamental le otorgue, y que en nuestro ámbito constitucional
se ubica jerárquicamente por encima de las leyes comunes y
federales y en un segundo plano respecto de la Constitución
Federal.
Sirve de fundamento a lo anterior, la tesis del Pleno
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en la
página 46, del Tomo X, noviembre de 1999, del Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, que dice:
"TRATADOS INTERNACIONALES. SE UBICAN JERÁRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS LEYES FEDERALES Y EN UN SEGUNDO PLANO RESPECTO DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL. Persistentemente en la doctrina se ha formulado la interrogante respecto a la jerarquía de normas en nuestro derecho. Existe unanimidad respecto de que la Constitución Federal es la
D.C. 309/2010.
113
norma fundamental y que aunque en principio la expresión '... serán la Ley Suprema de toda la Unión ...' parece indicar que no sólo la Carta Magna es la suprema, la objeción es superada por el hecho de que las leyes deben emanar de la Constitución y ser aprobadas por un órgano constituido, como lo es el Congreso de la Unión y de que los tratados deben estar de acuerdo con la Ley Fundamental, lo que claramente indica que sólo la Constitución es la Ley Suprema. El problema respecto a la jerarquía de las demás normas del sistema, ha encontrado en la jurisprudencia y en la doctrina distintas soluciones, entre las que destacan: supremacía del derecho federal frente al local y misma jerarquía de los dos, en sus variantes lisa y llana, y con la existencia de 'leyes constitucionales', y la de que será ley suprema la que sea calificada de constitucional. No obstante, esta Suprema Corte de Justicia considera que los tratados internacionales se encuentran en un segundo plano inmediatamente debajo de la Ley Fundamental y por encima del derecho federal y el local. Esta interpretación del artículo 133 constitucional, deriva de que estos compromisos internacionales son asumidos por el Estado mexicano en su conjunto y comprometen a todas sus autoridades frente a la comunidad internacional; por ello se explica que el Constituyente haya facultado al presidente de la República a suscribir los tratados internacionales en su calidad de jefe de Estado y, de la misma manera, el Senado interviene como representante de la voluntad de las entidades federativas y, por medio de su ratificación, obliga a sus autoridades. Otro aspecto importante para considerar esta jerarquía de los tratados, es la relativa a que en esta materia no existe limitación competencial entre la Federación y las entidades federativas, esto es, no se toma en cuenta la competencia federal o local del contenido del tratado, sino que por mandato expreso del propio artículo 133 el presidente de la República y el Senado pueden obligar al Estado mexicano en cualquier materia, independientemente de que para otros efectos ésta sea competencia de las entidades federativas. Como consecuencia de lo anterior, la interpretación del artículo 133 lleva a considerar en un tercer lugar al derecho federal y al local en una misma jerarquía en virtud de lo dispuesto en el artículo 124 de la Ley Fundamental, el cual ordena que 'Las facultades que no están expresamente concedidas por esta Constitución a los funcionarios federales, se entienden reservadas a los Estados'. No se pierde de vista que en su anterior conformación, este Máximo Tribunal había adoptado una posición diversa en la tesis P. C/92, publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Número 60, correspondiente a diciembre de 1992, página 27, de rubro: 'LEYES FEDERALES Y TRATADOS INTERNACIONALES. TIENEN LA MISMA JERARQUÍA NORMATIVA.'; sin embargo, este Tribunal Pleno considera oportuno abandonar tal criterio y asumir el que considera la jerarquía superior de los tratados incluso frente al derecho federal.”
D.C. 309/2010.
114
Ahora bien, derivado de la adopción de la
Convención sobre los Derechos del Niño a la que se ha hecho
referencia previamente, surge la Ley para la Protección de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, publicada en el
Diario Oficial de la Federación el veintinueve de mayo de dos
mil, con el fin de desarrollar los lineamientos que derivan del
artículo 4o. constitucional, y así atender la necesidad de
establecer principios básicos conforme a los cuales el orden
jurídico mexicano habría de proteger que niñas, niños y
adolescentes ejercieran sus garantías y sus derechos,
estableciendo para tal efecto, como principio central el del
"interés superior de la infancia”, que tal como se encuentra
dispuesto en la Convención Internacional sobre los Derechos
del Niño, implica que las políticas, las acciones y la toma de
decisiones relacionadas con ese periodo de la vida, tienen que
darse de tal manera que, en primer término y antes de cualquier
otra consideración, se busque el beneficio directo del infante y
del adolescente a quien van dirigidas, señalándose en esa
convención que las instituciones de bienestar social, tanto
públicas como privadas, los tribunales, las autoridades
administrativas y los órganos legislativos deberán responder,
viéndolo como prioritario, a ese interés superior del menor, de
modo y manera tales que quien pretenda fundamentar una
decisión o medida en el interés superior del niño, deberá regirse
D.C. 309/2010.
115
por la interpretación que se desprende del conjunto de las
disposiciones de esa convención. Todo ello se precisó
justamente en la exposición de motivos de la Ley para la
Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Asimismo, se apuntó en esa exposición que nuestro
sistema jurídico no atendía aún a esta nueva forma de ver a los
menores, porque fue diseñado cuando se les consideraba como
seres afectados de una especie de minusvalía, que los hacía
distintos de los adultos y dependientes de éstos, creando un
sistema que establecía un control casi ilimitado y autoritario
sobre quienes no habían cumplido aún la mayoría de edad, que
no protegía sus garantías ni sus derechos, ni atendía sus
necesidades de desarrollarse y crecer plena, espontánea y
libremente, señalándose que un sistema de tal naturaleza
resultaba contrario a la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos.
Corolario de tales consideraciones fue señalar la
necesidad de marcos jurídicos que sustentaran y permitieran la
puesta en marcha de un nuevo sistema, con la participación en
todo el país tanto de los servidores públicos de todas las
instancias, en los tres órdenes de gobierno, como de las
madres, los padres, otros familiares y demás integrantes de la
D.C. 309/2010.
116
sociedad civil, para así cumplir los compromisos adquiridos al
suscribir la Convención Internacional sobre los Derechos del
Niño.
Así, según se lee de la indicada exposición de
motivos, esta nueva ley procuró desarrollar los lineamientos que
derivan del artículo 4o. constitucional, con el fin de atender a la
necesidad de establecer los principios básicos conforme a los
cuales el orden jurídico mexicano habría de proteger que niñas,
niños y adolescentes ejercieran sus garantías y sus derechos,
estableciendo las bases de la acción concurrente de los
Municipios, de los Estados y la Federación, para permitir que
las Legislaturas Locales emitiesen disposiciones sobre el orden
normativo que obligara a que garantías y derechos
constitucionales se hicieran efectivos también a los menores, de
conformidad con los principios jurídicos dispuestos en la
referida convención internacional, buscándose en todo
momento alcanzar el objetivo fundamental de esa protección, el
asegurar a niños, niñas y adolescentes la oportunidad de
desarrollarse en todo sentido y con plenitud, atendiendo para
ello a una percepción social de la norma jurídica de
conformidad con la cual, para que una ley efectivamente
promueva un cambio radical sobre los derechos de los
menores, debe proteger ese ejercicio tomando en cuenta las
D.C. 309/2010.
117
especificidades y circunstancias de éstos en situación de
desigualdad real o sometidos al abuso de poder, extendiendo el
ámbito de efectividad de la norma al atenderse a la idea de que
la protección de niñas, niños y adolescentes debe preverse
tanto en el ámbito público como en el privado.
Para tal efecto, según se apunta en la multicitada
exposición de motivos, se planteó como principio central el
relativo al "interés superior de la infancia”, que tal como se
encuentra dispuesto en la Convención Internacional sobre los
Derechos del Niño, implica que las políticas, las acciones y la
toma de decisiones relacionadas con ese periodo de la vida,
tienen que darse de tal manera que, en primer término y antes
de cualquier otra consideración, se busque el beneficio directo
del infante y del adolescente a quien van dirigidas, señalándose
en esa convención que las instituciones de bienestar social,
tanto públicas como privadas, los tribunales, las autoridades
administrativas y los órganos legislativos deberán responder,
viéndolo como prioritario, a ese interés superior del menor, de
modo y manera tales que quien pretenda fundamentar una
decisión o medida en el interés superior del niño, deberá regirse
por la interpretación que se desprende del conjunto de las
disposiciones de esa convención.
D.C. 309/2010.
118
Asimismo, permea en la intención de la ley,
consolidar el principio del trato igualitario como una forma de
evitar abusos, violencia, un trato discriminatorio y aun de
explotación, pensando en quienes están en situación de
abandono o en estado de peligro por razones de violencia en
cualquiera de sus formas, en quienes sufren alguna adicción,
los que están afectados por alguna deficiencia física, emocional
o mental o requieren tratamiento especial, quienes trabajan, los
que sufren las consecuencias del tráfico de personas y su
explotación, destacando como otro principio el de la familia,
como espacio primordial para el desarrollo de los menores y la
corresponsabilidad entre la familia, el Estado y la sociedad en la
protección de sus derechos, para asegurar al menor una vida
libre de violencia y con respeto a la diversidad cultural.
De igual forma, se precisó el derecho de vivir en
familia en la forma en que lo comprende la Convención
Internacional de los Derechos del Niño, que es el de vivir en la
familia de origen, reunirse con ella cuando por diferentes
razones ha habido una separación, vincularse con ambos
progenitores en casos de conflicto entre éstos e integrarse a
una nueva familia cuando es imposible la vida con la de origen,
determinándose la obligación de velar porque los menores sólo
sean separados de sus progenitores mediante sentencia judicial
D.C. 309/2010.
119
que declare, válida y legítimamente, la necesidad de hacerlo y
de conformidad con los procedimientos legales en los que se
garantice el derecho de audiencia de todas las partes
involucradas, así como el derecho a mantener el contacto y la
convivencia con el progenitor de quien se esté separado.
Este tribunal colegiado constata que efectivamente
la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes, en concordancia con la intención prevista en la
exposición de motivos, consagró en su artículo 3o., entre otros,
los principios del interés superior de la infancia; el derecho de
vivir en familia como espacio primordial de desarrollo; el de la
corresponsabilidad de los miembros de la familia, el Estado y la
sociedad, y el de la tutela plena e igualitaria de los derechos
humanos y de las garantías constitucionales.
A su vez, en su artículo 4o., la ley en mención,
introdujo el respeto irrestricto al interés superior de la infancia,
pues determinó que las normas aplicables a los menores se
entenderán dirigidas a procurarles, primordialmente, los
cuidados y la asistencia que requieren para lograr un
crecimiento y un desarrollo pleno, dentro de un ambiente de
bienestar familiar y social, con el señalamiento de que, para
atender a ese principio, el ejercicio de los derechos de los
D.C. 309/2010.
120
adultos no podrá, en ningún momento, ni bajo ninguna
circunstancia, condicionar el ejercicio de los derechos de niñas,
niños y adolescentes.
Por su parte, el artículo 7 del referido ordenamiento
estableció como obligación para las autoridades federales, del
Distrito Federal, estatales y municipales en el ámbito de sus
atribuciones, la de asegurar a los menores la protección y el
ejercicio de sus derechos y la toma de medidas necesarias para
su bienestar, tomando en cuenta los derechos y deberes de sus
madres, padres, demás ascendientes, tutores y custodios u
otras personas que sean responsables de los mismos, siendo
deber y obligación de la comunidad y, en general, de todos los
integrantes de la sociedad, el respeto y el auxilio en el ejercicio
de sus derechos.
Finalmente, como parte del derecho de participar, el
artículo 41 de la indicada ley, determina que el derecho a
expresar opinión por parte de los menores implica que se les
tome su parecer respecto de los asuntos que los afecten y el
contenido de las resoluciones que les conciernen.
A su vez, los artículos 48 y 49 determinan la
creación de instituciones especializadas con funciones de
D.C. 309/2010.
121
autoridad para la efectiva procuración del respeto a los
derechos de los menores, para lo cual se les faculta para
representar legalmente los intereses de niñas, niños y
adolescentes, ante las autoridades judiciales o administrativas,
sin contravenir las disposiciones legales aplicables.
Lo expuesto se robustece con lo establecido en los
artículos 1 y 4 de la Ley de los Derechos de las Niñas y Niños
en el Distrito Federal, publicada en la Gaceta Oficial del
Gobierno del Distrito Federal el treinta y uno de enero de dos
mil, ya que en dichos preceptos se establece:
“Artículo 1.- La presente ley es de orden público, interés social y de observancia general en el Distrito Federal. Los beneficios que se deriven de esta ley, serán aplicables a todas las niñas y niños que se encuentren en el Distrito Federal.”
“Artículo 4.- Son principios rectores en la observancia, interpretación y aplicación de esta ley, los siguientes: 1.- El interés superior de las niñas y niños. Este principio implica dar prioridad al bienestar de las niñas y niños ante cualquier otro interés que vaya en su perjuicio.”
En las condiciones apuntadas, debe concluirse que
toda contienda judicial en que se vean involucrados derechos
inherentes a los menores, debe resolverse sin desatender un
principio básico: el interés superior del niño, conforme lo
disponen la Convención sobre los Derechos del Niño; la Ley
para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y
D.C. 309/2010.
122
Adolescentes; y la Ley de los Derechos de las Niñas y Niños en
el Distrito Federal. Ahí radica la importancia de la delimitación
interpretativa que han de realizar los órganos jurisdiccionales
para establecer en cada caso, de qué manera se establece el
interés superior del niño.
Por otra parte, es importante destacar que el
derecho de visitas y convivencias, conocido en otros países
como el derecho de relacionarse, es una institución
fundamental del derecho familiar en México, que tiene como
finalidad, regular, promover, evaluar, preservar y en su caso,
mejorar o reencausar la convivencia en el grupo familiar
respecto de menores fundamentalmente, al estar vinculado
inicialmente tal derecho con la patria potestad, así como con el
derecho de guarda o custodia. Sin embargo, los menores tienen
derecho de convivir con sus padres aun en casos en que éstos
hayan perdido la patria potestad sobre ellos; de tal forma que
ese derecho se encuentra incluso por encima de la voluntad del
guardiante o de la persona a cuyo cargo se encuentre la
custodia del menor, por tratarse de un derecho humano
principalmente dirigido al citado menor, aunque también
favorezca de manera indirecta a sus ascendientes.
D.C. 309/2010.
123
En sentido amplio este tribunal colegiado considera,
como lo ha hecho un sector de la doctrina especializada, que el
derecho de visitas y de convivencias se refiere a cualquier
forma de comunicación, es decir, al implementar el régimen de
visitas y convivencias, el juzgador deberá resolver acorde con
las circunstancias de cada caso, para lo cual cuenta con una
gama muy amplia de posibilidades para promover la
convivencia familiar, pues ello se da en una carta o un
telegrama, una llamada telefónica, un correo electrónico, una
videoconferencia, una reunión o una estancia por horas, días o
semanas, pues lo que trasciende es que todas son formas de
convivencia que propician el trato humano, aunque sin lugar a
dudas ello ocurre con mayor intensidad cuando las personas
directamente se ven, se dan afecto y se conocen mejor;
debiendo prevalecer siempre en las modalidades que se
adoptan, el derecho de los menores de edad, conforme a su
interés superior.1
En atención a la realidad social que prevalece en la
actualidad, se ha colocado al derecho de visitas y convivencias
en un lugar destacado en el derecho familiar, no obstante que
por muchos años fue una institución relativamente
intrascendente, que tenía un carácter accesorio frente a otras
1 Cfr. Francisco Rivero Hernández. El Derecho de Visita. Editorial José María Bosch. Editor, S.L. – Barcelona, España, 1997. pp 21 y ss.
D.C. 309/2010.
124
instituciones a él vinculadas, otrora de gran solidez en México
como el matrimonio, realidad que dejó de prevalecer en nuestra
sociedad, por ello, en la época actual ese derecho denominado
también de custodia provisional, opera plenamente no sólo
dentro del matrimonio, sino después de roto cualquier vínculo
matrimonial o incluso fuera del matrimonio, esto es, en uniones
libres, concubinatos, y por supuesto en asuntos de adopción de
menores.
Aún más, aunque en la práctica forense no se ha
extendido y desarrollado suficientemente el derecho de visitas y
convivencias, éste no solamente vincula al menor con sus
padres, sino también rige en relación con sus parientes
(abuelos, tíos, primos), allegados y amigos.
Así las cosas, es claro que hoy el derecho de visitas
y convivencias en nuestro país es una institución del derecho
de familia imprescindible para conseguir una mejor formación
del menor de edad, desde los puntos de vista afectivo y
emocional, pues se reconoce en el trato humano la existencia
de un valor jurídico fundamental que debe ser protegido, pues
de él deriva la posibilidad de que el menor se relacione con
ciertas personas unidas a él por lazos familiares e incluso
meramente afectivos en situaciones marginales a la familia.
D.C. 309/2010.
125
Por supuesto que el derecho de visitas y
convivencias, y específicamente su implementación práctica en
el régimen de visitas y convivencias, adquiere una importancia
inusitada en situaciones de crisis matrimoniales,
extramatrimoniales o de malos entendidos entre los miembros
de una familia.
De ahí que se estime que en esos casos, el derecho
de visitas y/o convivencias viene a ser un remedio o recurso de
protección excepcional cuando las relaciones familiares han
dejado de ser normales, pues busca reactivar la convivencia
que se ha perdido o desgastado en un sin número de
situaciones.
Al resolver, los jueces deben atender
necesariamente a la realidad imperante en la sociedad, de tal
forma que a través de sus interpretaciones se den respuestas
adecuadas que compaginen la realidad con el derecho con
sentido de justicia y equidad. 2
En nuestra sociedad mexicana, es común
implementar un régimen de visitas y/o convivencias entre
2 Cfr. Walter Arellano Hobelsberger. Interpretación y Jurisprudencia en el Juicio de Amparo. Ed. Porrúa. México, D.F., 2009. pp. 716 y ss.
D.C. 309/2010.
126
padres e hijos tras la crisis matrimonial (hipótesis que se
actualiza en el caso a estudio), ya que en este tipo de crisis
ocurridas dentro del matrimonio o durante la tramitación de un
proceso judicial de divorcio (en las que se dan separaciones
de hecho o bien derivadas de nulidades, privación,
suspensión o pérdida de la patria potestad, así como la
violencia familiar), se suele impedir la convivencia con uno de
los progenitores, e incluso se rompe frecuentemente la
posibilidad de relacionarse padres e hijos, en atención a que se
dificulta o imposibilita la convivencia entre ellos, pues los
problemas de los progenitores trascienden muy fácilmente a los
hijos.
En estos casos de crisis llega a ocurrir que alguno
de los cónyuges, o ambos, tomen partida y, frecuentemente, en
lugar de buscar acuerdos convenientes a los intereses de los
menores, cierran toda posibilidad al otro de ver o tener contacto
con ellos, lo que provoca que estos últimos se vuelvan víctimas
verdaderas de las desavenencias del matrimonio, y no en pocas
ocasiones son utilizados como instrumentos que sirven para
que los cónyuges se ofendan o dañen entre sí, siendo por
consecuencia los mayores perjudicados no los cónyuges, sino
los hijos.
D.C. 309/2010.
127
Por ello, es claro que en este tipo de crisis, la
autoridad jurisdiccional competente forzosamente deberá
implementar el régimen de visitas y/o convivencias a favor de
los hijos menores de edad, de la manera más conveniente,
atendiendo al interés superior de éstos, con independencia de
los intereses y derechos con los que cuenten sus progenitores,
para el efecto de incentivar, preservar y reencausar la
convivencia en el grupo familiar, sobre todo entre los menores
hijos con sus progenitores; máxime que ese derecho es de
orden público y de interés social, como ya se mencionó en
párrafos procedentes.
Asimismo, no debe soslayarse que en nuestra
sociedad mexicana, cada vez es más frecuente el nacimiento
de hijos fuera del matrimonio, siendo que, en otras épocas, por
razones culturales o por presión social, este tipo de situaciones
terminaba en matrimonio, pero hoy no es necesariamente así;
y, ante tal circunstancia, ocurre con frecuencia que los hijos
menores de edad nacidos fuera del matrimonio, suelen ser
restringidos en el ejercicio de su derecho de visitas y/o
convivencias, ya sea por uno u otro progenitor. Es evidente que,
salvo casos de excepción en los que puede perjudicarse al
menor, en ese tipo de situaciones también debe operar con
toda plenitud el derecho de visitas y convivencias, el cual tiene
D.C. 309/2010.
128
como objeto superar un problema humano de hecho que
muchas veces alcanza tintes dramáticos.
Lo anterior se justifica, como se asentó previamente,
ya que al convivir se propicia el trato y la calidez humana, las
personas se ven, platican, se brindan afecto y, en síntesis, se
conocen mejor.
Con las convivencias se fortalecen sentimientos
afectivos y valiosos que colman los fines de la institución
familiar de visitas y convivencias, pues los acercamientos de las
personas son esenciales para alcanzar su tranquilidad, felicidad
y armonía, personal, familiar y social, máxime cuando se trata
de infantes.
Es por ello que en las familias conformadas a través
de relaciones extramatrimoniales también debe prevalecer la
comunicación a través del derecho de visitas y convivencias
que se tiene previsto a favor de los menores.
Por otra parte, debe señalarse que el derecho de
visitas y convivencias, como cualquier otro derecho, para lograr
su plena eficacia tiene que ver con aspectos sustantivos y
procesales, de tal manera que el Estado Mexicano ha
D.C. 309/2010.
129
comprometido esfuerzos a nivel nacional e internacional en
ambos rubros, tomando siempre como punto de partida el
interés superior del menor.
La esencia de las visitas y las convivencias se
encuentra en las relaciones humanas y en la comunicación
entre personas que en conjunto tienden a enriquecerlas
espiritual y afectivamente, sobre todo al menor tanto en
situaciones de normalidad, como de afectación o en riesgo de
ser afectado, lo que constituye la mayor justificación que se
puede dar a nuestra institución de visitas y convivencias.
Del análisis de los textos vigentes de los artículos
1o. y 4o. de la Constitución Federal, se advierte que hoy se vive
un momento de protección excepcional al menor de edad, que
trasciende al derecho de visitas y convivencias, donde
convergen tanto el derecho privado como el público, pues en
los indicados preceptos constitucionales se consagra la
pretensión de fortalecer los vínculos entre los miembros de la
familia, lo cual en principio pertenece al ámbito del derecho
privado, pero al mismo tiempo alcanza la esfera del derecho
público, ya que se consagra una salvaguarda absoluta en la
protección de la familia por parte del Estado, que está
interesado en dar especial protección al núcleo familiar, en el
D.C. 309/2010.
130
entendido de que, en gran medida, ello conduce a una mejor
sociedad.
En materia de derecho público, existe un objetivo
muy claro sustentado en lo previsto en la Constitución, en los
tratados internacionales, así como en las leyes federales y
locales, que consiste en implementar mecanismos eficaces de
protección de los infantes y forjar una sólida cultura jurídica
respetuosa de los derechos humanos en torno al derecho
familiar, y en especial al derecho de los niños. Además, se
previene la protección de las mujeres y los ancianos en los
entornos familiar y social.
En términos de lo expuesto, y en relación con el
derecho de vistitas y convivencias que en nuestro país se
encuentra regulado por los convenios internacionales, las leyes
federales, los códigos civiles y procesales, así como los
criterios jurisprudenciales, se concluye que:
a) Los principales protagonistas son, en primer lugar
los niños, y los incapacitados, sus padres o tutores, y parientes.
b) Tiene como fin que no se agrave aún más la
situación de convivencia derivada de conflictos y
enfrentamientos familiares, mas no dirigir ni mucho menos
D.C. 309/2010.
131
manipular la vida del menor no gobernado, o de tomar alguna
decisión en su presente o futuro.
c) Pretende alcanzar un equilibrio psicológico que es
necesario para el desarrollo personal, familiar y social, así como
conseguir grandes satisfacciones por los afectos recíprocos que
a veces se quebrantan por el derecho o de hecho, ello, sin
soslayar que los daños que se puedan causar con un derecho
de visitas y convivencias inadecuado, pueden ser igual o
mayores que en los casos en los que se rompe toda
convivencia.
d) No existen esquemas, fórmulas o soluciones de
validez general para determinar el régimen de visitas y
convivencias, por tratarse de un tema enteramente casuístico y
particular en su aplicación concreta, y por ello, no puede
avalarse la existencia de unas pretensiones de validez única o
universal, pues es un tema vinculado con las relaciones
humanas que amerita múltiples matices. Es por ello, que en
estos asuntos se requieren respuestas judiciales de gran nivel
que implican la intervención original y creativa de los jueces.
e) El régimen de visitas y/o de convivencias
legalmente se refiere a la manera en la que se realizará el
derecho de visitas y convivencias, derivado de un acuerdo o por
determinación judicial, pero siempre que previamente sea
debidamente escuchado el menor, para estar en condiciones de
resolver en cada caso conforme a su interés superior.
f) Es una institución que es parte de la naturaleza
humana, aunque desde un punto de vista filosófico se ha
considerado como de esencia social.
D.C. 309/2010.
132
Asimismo, se concluye que en atención a la nueva
forma de ver al derecho de vistas y convivencias vinculado con
los menores de edad, en éste siempre se debe atender el deber
de:
1. Extender cada vez más los lazos familiares.
2. Una revalorización y un mayor perfeccionamiento
de las relaciones personales.
3. Replantear los papeles que juegan el hombre y la
mujer en la actualidad.
4. Encontrar las fórmulas más adecuadas para
permitir la plena vigencia de los derechos de los niños en
uniones de facto y en los divorcios, bajo diversas
circunstancias.
5. Ampliar el concepto tradicional de familia, con
apoyo en el reconocimiento de los derechos de los niños, que
no deben verse como derechos de propiedad de los padres,
sino como verdaderos seres humanos con derechos propios de
la mayor importancia.
Lo anterior se afirma, pues se reitera que el derecho
de visitas y convivencias tiene como finalidad la búsqueda
incesante de desarrollo pleno del menor por medio de la
implementación o fortalecimiento de los lazos que deben existir
D.C. 309/2010.
133
entre él y sus familiares, en los casos en que los vínculos
afectivos se han resquebrajado, ya que en este caso, no son
fáciles las relaciones humanas, por existir serias dificultades
para verse y relacionarse de manera normal, ello, en atención a
que las relaciones sociales alcanzan en los niños y en los
jóvenes una dimensión aún mayor que la simplemente familiar,
dado que en la época en la que vivimos se hace indispensable
una concepción de relaciones humanas que comprometa otros
núcleos sociales.
Se requiere una gran sensibilidad social y judicial
sobre la importancia de los derechos de los niños y jóvenes,
para crear conciencia sobre su presencia en su entorno, en
donde se les debe considerar y tratar como seres humanos
plenos que requieren una individualización y personalidad que
ha de ser comprendida, respetada y protegida.
Desde hace muchos años, los estudios de
especialistas en psicología dan cuenta de la influencia que tiene
el medio en que viva el futuro adulto en sus primeros años y
sobre todo del afecto de que se vea rodeada o durante su
infancia y primera juventud.
D.C. 309/2010.
134
Bajo esa perspectiva, todo el potencial del niño y del
joven, dependerá de las condiciones y circunstancias en que se
desarrolle dentro de su núcleo familiar y social, pues cuando se
ve envuelto en las crisis familiares, de lo que por cierto no tiene
culpa alguna, ocurre frecuentemente que se le niega su
derecho a encontrar afecto en el ambiente familiar y en el
ámbito social en que se desenvuelve, y es ahí donde se pueden
generar serias distorsiones en la personalidad, complejos,
angustias, sinsabores, desinterés por su desarrollo y en muchas
ocasiones por su vida; en pocas palabras, se le va clausurando
la posibilidad de ser feliz.
Lo expuesto en el párrafo que antecede, hace
patente la apremiante necesidad de advertir que, por su
fragilidad y vulnerabilidad, es el menor, el niño o el joven, el
más necesitado de protección en los ámbitos familiar y social;
por lo que dicha protección se convierte así en una auténtica
prioridad, al tratarse de un asunto delicado que se eleva al
rango de orden público e interés social. En este aspecto, debe
insistirse que la sociedad verdaderamente está interesada en la
mejor formación posible de los ciudadanos a partir de la familia,
pues no debe soslayarse que los ciudadanos con problemas
psicológicos desde la infancia, que tal vez no llegaron a ser
superados, podrán no alcanzar los estándares más
D.C. 309/2010.
135
convenientes para la sociedad, ya que su adaptación a los
requerimientos sociales podrán no ser los más idóneos.
En el entorno reseñado, queda en claro que el
derecho de visitas y de convivencias en México, no es
solamente un asunto de política gubernamental, sino que se
trata de un tema de política de Estado, pues el renovado interés
por su regulación se evidencia a la luz de los valores que están
de por medio para encontrar un equilibrio dinámico de
relaciones que propicien vínculos paterno-filiales más
provechosos, de ser necesario incluso a través del consejo o de
la asistencia profesional.
Cuando son los jueces quienes deben resolver
sobre el régimen de visitas y/o convivencias, nos encontramos
ante un sistema ciertamente artificial, sin embargo, a través de
él se pretenden crear las condiciones más adecuadas para
equipararlas a las relaciones humanas que se habrían de
desarrollar normalmente en la familia.
Existe una amplia gama de posibilidades de
ensanchar el camino de las visitas y/o convivencias, no
obstante que, como se apuntó anteriormente, en la tradición
judicial de nuestro país existe una visión superficial o al menos
D.C. 309/2010.
136
bastante incompleta de las perspectivas que ofrece el derecho
de visitas y de convivencia familiar, que por supuesto ha de
mejorarse en las resoluciones judiciales.
Cabe insistir que en la actualidad, se viven
situaciones diversas; así por ejemplo, cuando la pareja se
separa de hecho o de derecho, los progenitores viven nuevas
relaciones de pareja, de amigos, de novios o compañeros
sentimentales; todo lo cual complica aún más las relaciones
afectivas entre los menores de edad y sus progenitores, y pone
en riesgo las comunicaciones de las visitas o de las
convivencias y, simultáneamente, la guarda y custodia de los
menores hijos.
Una variante psicológica del derecho de visitas y
convivencias, es cuando los padres tuvieron dos o más hijos y
se encuentran separados; también puede darse el caso de que
uno y otro hijos se trasladen alternativamente al domicilio del
otro progenitor. Esa puede ser una propuesta de solución
interesante para regular las visitas y convivencias en algunos
casos, pero debe verse con cuidado para medir los efectos que
produce en los menores en cada supuesto.
Ahora bien, en cuanto a la adaptación de los hijos a
D.C. 309/2010.
137
la separación de los padres y al régimen de visitas, debe
decirse que diferentes estudios que se han realizado en otras
latitudes, que inicialmente no presentan una realidad muy ajena
a la que ocurre en México, han indicado que:
- A corto plazo (a partir del segundo año), los niños
comienzan a adaptarse a la crisis matrimonial o familiar de sus
padres.
- En ocasiones la separación es necesaria y
conveniente. Los niños en su mayoría sienten dolor, pues
durante la transición de la separación, sufren ansiedad, e
incluso en muchos de los casos los cónyuges han llegado a
culparlos a ellos por las desavenencias, lo que complica su
sufrimiento.
- El factor edad puede ser determinante en la fijación
de las visitas y convivencias, pues no es lo mismo hablar de
niños de ocho o diez años que de jóvenes de dieciséis o
diecisiete, por ello, todo debe obedecer a estudios que se
hagan y que determinen las mejores condiciones posibles de
comunicación entre los niños y sus progenitores.
- Las visitas y/o convivencias que tantos beneficios
pueden y deben arrojar, a veces se convierten en el origen de
problemas, puesto que pueden usarse como conductos de
reproche de un cónyuge al otro, lo que agrava la situación de la
relación humana que se busca.
- La situación más conflictiva que se suele
D.C. 309/2010.
138
presentar, proviene de las mujeres que se consideran
abandonadas, a quienes incluso les duele que los hijos deseen
ver al padre y usan las visitas y/o convivencias para enterarse
de las vidas que llevan sus maridos. Todo eso fomenta
evidentemente el rencor y el odio, lo que de modo alguno
favorece a la relación humana de normalidad que se busca.
Asimismo, conviene destacar que, la doctrina
especializada da cuenta de que, en lo que respecta al
desarrollo de las relaciones personales y de la comunicación
padre e hijo en la práctica, se dan respuestas muy interesantes,
puesto que por un lado los hombres que habían permanecido
muy próximos a sus hijos durante el matrimonio y
compartían con ellos el tiempo libre, empiezan ahora a
mantener una relación irregular y poco frecuente; y por el
otro, los padres que habían permanecido alejados de los
hijos durante el matrimonio con un reducido trato con
ellos, tras la separación, la relación se vuelve más regular y
emocionante, más próxima. 3
La misma fuente doctrinal apunta que la frecuencia
de las relaciones entre el padre no custodio y los hijos depende
de varios factores, a saber:
3 Cfr. Francisco Rivero Hernández. El Derecho de Visita. Editorial José María Bosch. Editor, S.L. – Barcelona, España, 1997. pp. 21 y ss.
D.C. 309/2010.
139
a) Reacción depresiva de los padres después de la
separación, es decir, hombres desmotivados que fueron
rechazados por la esposa y temen también serlo por los hijos.
b) Padres culpables o que se sienten culpables por
la crisis matrimonial.
c) Segundas nupcias del padre.
d) A veces es el propio menor quien rechaza el
contacto con el padre.
En estos casos, al menor le es difícil tomar una
actitud neutral en la problemática que se da entre sus padres, lo
cual es muy natural dado su grado de madurez emocional, pues
con su postura, el menor protege a alguno de los padres, y en
muchos casos, su respuesta se debe a la manipulación
realizada por uno de ellos o por un tercero que frecuentemente
es un familiar, como llega a ocurrir con la suegra o los tíos. A
este fenómeno se le conoce psicológicamente como alineación
parental o síndrome de madre y/o padres maliciosos.
Por ello, en estos casos la autoridad judicial debe
ser prudente y tener buen cuidado para determinar cuál es el
régimen de visitas y convivencias más conveniente, y no forzar
situaciones en torno a las convivencias que en ocasiones no es
posible resolver sin previa asistencia profesional, ya que una
D.C. 309/2010.
140
propuesta precipitada puede provocar daños o un mayor
rechazo, y por ello traer resultados contraproducentes a la
convivencia y las relaciones humanas.
Una vez analizadas las instituciones del derecho
familiar destacadas en párrafos precedentes, las cuales deben
regir en el caso a estudio por ser de orden público e interés
social, se reitera que los motivos de inconformidad que se
destacaron en párrafos precedentes, son fundados y suficientes
para otorgar a los aquí quejosos el amparo y protección de la
Justicia Federal.
Ello es así, ya que al ponderar en el caso a estudio
el interés superior del menor **********, así como el derecho
con el que éste cuenta para opinar sobre las modalidades para
convivir con sus progenitores, en términos de lo dispuesto por
los artículos 282, apartado B, fracción III, 283, fracciones I, III, y
último párrafo, del Código Civil para el Distrito Federal; y 941,
del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal,
este órgano colegiado advierte que el juez responsable emitió la
sentencia reclamada en forma ilegal, en virtud de que soslayó
que en los autos del juicio natural, no existían elementos
suficientes para resolver en definitiva el aspecto referente al
régimen de vistas y convivencias que debía prevalecer entre los
D.C. 309/2010.
141
padres con su menor hijo ya referido, ni por consecuencia, para
emitir la sentencia reclamada en la forma en que lo hizo.
En efecto, por principio de cuentas debe destacarse
que los artículos invocados en el párrafo que antecede tanto del
Código Civil, como del Código de Procedimientos Civiles,
ambas legislaciones para el Distrito Federal, sostienen
literalmente lo siguiente:
- CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL:
“(REFORMADO, G.O. 3 DE OCTUBRE DE 2008)ARTÍCULO 282.- Desde que se presenta la demanda, la
controversia del orden familiar o la solicitud de divorcio y sólo mientras dure el juicio, se dictarán las medidas provisionales pertinentes; asimismo en los casos de divorcio en que no se llegue a concluir mediante convenio, las medidas subsistirán hasta en tanto se dicte sentencia interlocutoria en el incidente que resuelva la situación jurídica de hijos o bienes, según corresponda y de acuerdo a las disposiciones siguientes: …
…B. Una vez contestada la solicitud: …
…III.- El Juez de lo Familiar resolverá teniendo presente el interés superior de los hijos, quienes serán escuchados, las modalidades del derecho de visita o convivencia con sus padres; …”
“(REFORMADO, G.O. 2 DE FEBRERO DE 2007)ARTÍCULO 283.- La sentencia de divorcio fijará la
situación de los hijos menores de edad para lo cual deberá contener las siguientes disposiciones:
I.- Todo lo relativo a los derechos y deberes inherentes a la patria potestad, su pérdida, suspensión o limitación; a la guarda y custodia, así como a las obligaciones de crianza y el derecho de los hijos a convivir con ambos progenitores. …
D.C. 309/2010.
142
…III.- Las medidas necesarias para garantizar la convivencia de los hijos con sus padres, misma que sólo deberá ser limitada o suspendida cuando exista riesgo para los menores. …
…Para lo dispuesto en el presente artículo, de oficio o a petición de parte interesada, durante el procedimiento el Juez se allegará de los elementos necesarios, debiendo escuchar al Ministerio Público, a ambos padres y a los menores.”
- CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL:
“ARTÍCULO 941. (REFORMADO PRIMER PARRAFO, D.O.F. 30 DE DICIEMBRE DE 1997)
El juez de lo familiar estará facultado para intervenir de oficio en los asuntos que afecten a la familia, especialmente tratándose de menores, de alimentos y de cuestiones relacionadas con violencia familiar, decretando las medidas precautorias que tiendan a preservar la familia y proteger a sus miembros.
(REFORMADO, D.O.F. 27 DE DICIEMBRE DE 1983)En todos los asuntos del orden familiar los Jueces y
Tribunales están obligados a suplir la deficiencia de las partes en sus planteamientos de derecho.
(REFORMADO, D.O.F. 27 DE DICIEMBRE DE 1983)En los mismos asuntos, con la salvedad de las
prohibiciones legales relativas a alimentos, el Juez deberá exhortar a los interesados a lograr un avenimiento, resolviendo sus diferencias mediante convenio, con el que pueda evitarse la controversia o darse por terminado el procedimiento.”
“(REFORMADO, G.O. 2 DE FEBRERO DE 2007)ARTÍCULO 941 BIS.- Cuando a petición de parte
interesada, se deba resolver provisionalmente sobre la custodia y la convivencia de las niñas y los niños con sus padres, previamente se dará vista a la parte contraria y, en caso de desacuerdo, se señalará día y hora para que tenga verificativo la audiencia que resolverá sobre la custodia y la convivencia de los menores misma que se efectuará dentro de los quince días siguientes.
En la sesión donde sean escuchados los menores deberán ser asistidos por el asistente de menores correspondiente, adscrito al Sistema Integral de la Familia del Distrito Federal, quien no requerirá comparecer para protestar el cargo. Para que tenga verificativo la
D.C. 309/2010.
143
audiencia respectiva el Juez de lo Familiar tomará en consideración la programación de audiencias que tenga la Institución.
Quien tenga a los menores bajo su cuidado, los presentará a la audiencia, para que sean escuchados por el Juez y el Ministerio Público adscrito.
El Juez de lo Familiar oyendo la opinión del Representante Social y valorando todos y cada uno de los elementos que tenga a su disposición, pudiendo incluir valoración psicológica del menor y de las partes que solicitan la custodia, determinará a quién de los progenitores corresponderá la custodia provisional de los hijos menores de edad.
A falta o imposibilidad de los progenitores para tener la custodia de los menores se considerarán las hipótesis previstas en los artículos 414 y 418 del Código Civil.
Las medidas que se tomen deberán tener como principio fundamental el interés superior del menor.
Cuando cambie de domicilio el ascendiente que conserva la guarda y custodia, éste tiene la obligación de informar al Juez y a quien no ejerce la custodia los datos del nuevo domicilio y número telefónico para efecto de mantener la comunicación del menor y del ascendiente que no ejerza la guarda y custodia.
El incumplimiento de esta disposición dará lugar a lo establecido en el artículo 73 de éste ordenamiento.”
“(REFORMADO, G.O. 2 DE FEBRERO DE 2007)ARTÍCULO 941 TER.- El ascendiente que no le sea
otorgada la custodia podrá convivir tal y como lo fije el Juez, diversos días de la semana, fuera del horario escolar y sin desatender las labores escolares y debiendo auxiliarlo en dichas actividades.
Asimismo, en forma equitativa, se podrá regular la convivencia en fines de semana alternados, periodos de vacaciones escolares y días festivos; cuando estos ya acudan a centros educativos.
El Juez de lo Familiar, antes de regular el derecho de convivencia de manera provisional, deberá tomar en cuenta todos los elementos que estén a su alcance para decidir bajo el principio del interés superior del menor. En especial valorará el hecho de que una de las partes manifieste que ha habido violencia familiar, pudiendo solicitar valoración psicoemocional que determine si existen síntomas en el menor, de haber vivido cualquier tipo de violencia familiar, ya sea psicológica, física o sexual, independientemente de que exista o no
D.C. 309/2010.
144
indagatoria al respecto, a fin de proteger la integridad física y psicológica de los hijos.
En caso de duda, y para salvaguarda de los hijos menores de edad o incapaces, deberá ordenar que las convivencias se realicen en los Centros e Instituciones destinados para tal efecto, únicamente durante el procedimiento.
Las convivencias de manera provisional no se otorgarán por el Juez de lo Familiar cuando exista peligro para la integridad física, sexual y psicológica de los hijos menores de edad.”
Ahora bien, se reitera que las alegaciones de los
quejosos transcritas en párrafos precedentes son fundadas, ya
que el juez responsable dejó de atender que los artículos 282,
apartado B, fracción III, y 283, último párrafo, ambos del Código
Civil para el Distrito Federal (ordenamientos de orden público y
de interés social), son claros en establecer que el juez de lo
familiar debe resolver las modalidades del derecho de los
hijos de visita o convivencias con sus padres, teniendo
presente en todo momento el interés superior de los
propios hijos, quienes siempre deben ser escuchados; y
que del análisis de las constancias que informan al juicio
natural, a las cuales se otorga pleno valor probatorio en
términos de lo dispuesto por los artículos 197 y 202 del Código
Federal de Procedimientos Civiles, de aplicación supletoria a la
Ley de Amparo, no se desprende la existencia de alguna
promoción o actuación judicial que justifique que el menor
**********, haya sido escuchado por el juez responsable dentro
del procedimiento de origen; no obstante que ese llamamiento
D.C. 309/2010.
145
constituye, en términos de los preceptos legales destacados en
líneas precedentes, un requisito indispensable para estar en
condiciones de resolver las modalidades del derecho de visitas
y convivencias entre el menor quejoso con sus progenitores; lo
cual se fundamenta en lo establecido en los preceptos de la
Constitución y la ley, así como en la Convención sobre los
Derechos del Niño.
De ahí se concluye que el juez responsable resolvió
el invocado régimen de vistas y convivencias de manera ilegal,
al no atender en forma previa al interés superior del menor,
derivado del derecho que tiene para opinar sobre las
convivencias con sus progenitores, que indudablemente debe
prevalecer incluso sobre los derechos de sus padres. Ello es
así, al tener el derecho de visitas y convivencias el propósito de
asegurar, de la mejor manera posible, el ejercicio pleno del
derecho humano del menor para convivir, en este caso, con sus
padres, máxime que, según aparece de constancias de autos,
el menor tiene la edad de trece años, lo que le permite al
juzgador contar con su opinión que pudiera influir en la decisión
final del juzgador, por el grado de madurez propio de esa edad,
pues el indicado derecho de visitas y convivencias en relación
con el divorcio, busca encontrar la mejor forma de sustituir las
relaciones afectivas, de amor y respeto que deben darse
D.C. 309/2010.
146
naturalmente en una relación familiar, en este caso, procedente
de un matrimonio, es decir, entre los padres con su menor hijo,
quien es considerado como un ser humano en formación,
altamente vulnerable, y por ello, las instituciones buscan
otorgarle una protección excepcional apoyada en su interés
superior.
En otras palabras, el menor es un ser humano
vulnerable que está en formación, es decir, en pleno desarrollo
físico, psíquico y emocional, que por ello requiere de la
compañía, de la comprensión y de la supervisión, vigilancia,
cariño y consejo de sus padres para reafirmar su identidad y
poder orientar su vida.
En la especie, el juez responsable debe escuchar al
menor antes de fijar el régimen de visitas y convivencias, aun
cuando el juicio natural sea un divorcio sin causa regulado por
el artículo 266 del Código Civil para el Distrito Federal, porque
se trata de un derecho humano que le debe ser respetado en
términos de lo dispuesto por el artículo 1o. de la Constitución
General de la República; así como de los diversos artículos del
1 al 41 de la Convención sobre los Derechos del Niño; 3, 4, 7,
41, 48 y 49, de la Ley para la Protección de los Derechos de
Niñas, Niños y Adolescentes; 1 y 4, de la Ley de los Derechos
D.C. 309/2010.
147
de las Niñas y Niños en el Distrito Federal; y 283, fracción III, y
último párrafo, del ordenamiento legal primeramente invocado.
Lo anterior, partiendo de la base de que la dignidad
humana es el origen, la esencia y el fin de todos los derechos
humanos, pues es una valor supremo establecido en el artículo
1o. de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, a virtud del cual se reconoce una calidad única y
excepcional a todo ser humano por el simple hecho de serlo,
cuya plena eficacia debe ser respetada y protegida
integralmente sin excepción alguna.
De ahí que se concluya que en términos de lo
dispuesto por el artículo 1o. de la Constitución General de la
República; así como de los diversos artículos del 1 al 41 de la
Convención sobre los Derechos del Niño; 3, 4, 7, 41, 48 y 49,
de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes; 1 y 4, de la Ley de los Derechos de las Niñas y
Niños en el Distrito Federal; y 283, fracción III, y último párrafo,
del Código Civil para el Distrito Federal, la dignidad humana del
menor de edad se preserva en este caso, al ser escuchado
antes de que el juzgador fije el régimen de visitas y
convivencias.
D.C. 309/2010.
148
Así las cosas, conforme a lo dispuesto en los
numerales de la Constitución, el citado tratado internacional, la
ley federal, así como la normatividad del Distrito Federal
invocados, el juez debe preservar la dignidad de la niñez en
todas sus interpretaciones y resoluciones que pronuncie, sobre
la base del respeto absoluto de su dignidad, lo que implica
asumir las mejores determinaciones posibles en cada caso
sometido a su potestad, conforme a su interés superior, acorde
con criterios jurídicos que permitan la plena eficacia de sus
derechos humanos.
Pero además, en el numeral 4o. de la Constitución,
se retomó el concepto de dignidad humana en favor de la niñez,
lo que resalta expresamente la intención del constituyente
reformador de acentuar la salvaguarda de ese valor supremo
cuando se trata de ese importante grupo social.
Al quedar plenamente justificado dentro del
procedimiento de origen, que el menor ********** no compareció
ante el juez responsable para el efecto de que fuera
debidamente escuchada su opinión con respecto al derecho de
visitas y convivencias que debe regir en relación con sus
progenitores; se concluye que dicho juzgador no se encontraba
facultado para emitir la sentencia definitiva dentro de la
D.C. 309/2010.
149
controversia natural, en virtud de que no colmó todas las
exigencias para estar en condiciones de resolver en definitiva el
multicitado derecho de visitas del menor ********** con sus
progenitores, puesto que no tomó en consideración el interés
superior de éste, vinculado con la opinión que por
comparecencia debió emitir con relación a las modalidades de
las visitas y convivencias que a su criterio debían darse entre él
y sus progenitores, de acuerdo con el grado de madurez propio
de su edad.
No es obstáculo para estimar lo anterior, el hecho de
que el juez responsable haya considerado dentro de la
sentencia reclamada, que dentro del procedimiento natural
existió un consenso de las partes contendientes para que
el régimen de visitas y convivencias ya invocado, rigiera
en los términos resueltos; ya que si bien es verdad que
dichas partes contendientes (cónyuges), en sus respectivos
convenios fueron coincidentes en establecer un régimen de
visitas y convivencias como el que determinó el juez
responsable dentro de la sentencia reclamada; también lo es
que dicho consenso por sí solo no puede servir como base para
justificar la legalidad del pronunciamiento que emitió el juez
responsable en relación con tal aspecto.
D.C. 309/2010.
150
Ello es así, pues no debe soslayarse que el artículo
287 del Código Civil para el Distrito Federal, es claro en
establecer que, en el caso de que los cónyuges lleguen a un
acuerdo respecto del convenio estipulado en el artículo 267 del
citado ordenamiento legal, el juez debe aprobarlo de plano al
decretar el divorcio mediante sentencia, pero siempre que tal
aspecto, no contravenga ninguna disposición legal; y en el caso
a estudio, se advierte, en forma fehaciente, que la aprobación
del convenio respecto del régimen de visitas y convivencias que
consideraron debía regir entre el aquí tercero perjudicado y su
menor hijo, sí contraviene lo dispuesto por los artículos 282,
apartado B, fracción III, y 283 último párrafo, ambos del Código
Civil para el Distrito Federal; por no haber atendido al interés
superior del menor, el cual se encuentra directamente vinculado
con el derecho que tienen los niños para opinar con respecto al
régimen de visitas y convivencias que debe tener con sus
progenitores. Así las cosas, la opinión del menor forzosamente
debió ser conocida y en su momento ponderada por el juez
responsable, al emitir el pronunciamiento de la sentencia
reclamada en esta instancia constitucional.
Lo anterior, máxime que los artículos de los
ordenamientos jurídicos ya invocados, y la aplicación del
tratado internacional a que se ha hecho referencia a lo largo de
D.C. 309/2010.
151
esta ejecutoria son de orden público y de interés social en
atención a la naturaleza de las hipótesis normativas que
regulan, y que por ello, debieron ser acatados.
Con independencia de lo asentado, debe destacarse
que el hecho de que los padres del menor estén de acuerdo
con el régimen de visitas, no es obstáculo para que al indicado
menor de edad se le respete su derecho a conocer y opinar
sobre el régimen de visitas y convivencias al que estará sujeto,
pues se trata de un derecho humano que se le debe respetar en
términos de los fundamentos jurídicos invocados; incluso debe
advertirse en todos los casos de manera oficiosa por el juez de
la instancia, y de no haberlo hecho, en el juicio de amparo
deberá suplirse la deficiencia de la queja en términos de lo
dispuesto por el artículo 76 bis, fracción V, de la Ley de
Amparo.
De igual forma, se estima que es ilegal la
determinación de la sentencia reclamada que aquí se analiza,
en virtud de que el juez responsable, también dejó de advertir
que durante el curso del procedimiento natural, la quejosa
**********, en el hecho catorce de su solicitud de divorcio,
expresó que el aquí tercero perjudicado, presentaba conductas
fuera de lo normal o irregulares, y que por tal circunstancia,
D.C. 309/2010.
152
igualmente en atención al interés superior del menor **********
dicho juzgador debió allegarse, incluso de oficio, de los
elementos de prueba idóneos para el efecto de constatar si el
aquí tercero perjudicado presentaba o no las conductas que le
atribuyó la aquí quejosa en el hecho ya referido, y si ello
implicaba algún riesgo para el menor, a fin de estar en
condiciones de definir en la sentencia que resolvió el fondo del
asunto, la forma como debía decretarse el régimen de visitas y
convivencias entre el aquí tercero perjudicado con su menor
hijo, en caso de que dicho régimen fuera procedente, lo
anterior, en términos de lo dispuesto por los artículos 283,
fracción III, y último párrafo, del Código Civil para el Distrito
Federal; del 1 al 41 de la Convención sobre los Derechos del
Niño; 3, 4, 7, 41, 48 y 49, de la Ley para la Protección de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; 1 y 4, de la Ley de
los Derechos de las Niñas y Niños en el Distrito
Federal; y al no hacerlo así, es claro que dicha autoridad
responsable dejó en completo estado de indefensión al citado
menor de edad.
Lo anterior se corrobora, si se toma en
consideración que en el hecho destacado en el párrafo que
antecede, la quejosa ****************************** sostuvo
literalmente lo siguiente:
D.C. 309/2010.
153
“… 14.- Es conveniente hacer del conocimiento de su señoría que, el hoy demandado **********, presenta conductas de depresión, angustia, estado de ánimo exaltado, actos impulsivos, tendencias a causar conflicto y a buscarlo, tendencias a la agresión verbal, a pesar de que toma diversos medicamentos y que lo hacen realizar conductas fuera de lo normal, y necesita de diversos medicamentos para poder salir adelante y sin el suministro de éstos sería peor su conducta.
Lo anterior es del conocimiento de los C.C. ********** ambos de apellidos **********; ya que, en diversas ocasiones en las que llegamos a convivir en nuestra casa su comportamiento no era normal y se alejaba sin decir palabra alguna; por lo que con fundamento en lo dispuesto por los artículos 255 fracción V, 267, 291, 357 y demás relativos del Código de procedimientos Civiles para el Distrito Federal, desde este momento es mi deseo ofrecerlos como testigos; en virtud de que, manifiesto bajo protesta de decir verdad, que saben y les consta que, aun y cuando siempre se le ha tratado de buena forma al hoy demandado se ha negado a convivir argumentando que se encuentra enfermo.
Se hace la aclaración que, bajo protesta de decir verdad, que hace aproximadamente diez años toma diversos medicamentos.
Los medicamentos psiquiátricos que actualmente toma el señor **********, cabe mencionar que éstos le han sido recetados por sus médicos tratantes y son los siguientes:
a).- SEROQUEL - Antipsicótico (indicado para psicosis agudas y crónicas).
b).- LAMICTAL – Anticinvulsionante (indicado para controlar la impulsividad).
c).- ALTRULINE – Antidepresivo (indicado para pacientes con depresión y ansiedad).
d).- RIVOTRIL – Anticonvulsionante (sedativo, miorrelajante, ansiolítico, antiepiléptico).
e).- STILNOX – Hipnótico de corta duración (indicado para insomnio crónico). …” (fojas 35 y 36, del juicio natural).
Lo anterior, pues no puede soslayarse que el
D.C. 309/2010.
154
derecho de visitas y convivencias ha de enriquecerse, cuando
sea necesario, con la ayuda del conocimiento interdisciplinario;
así, por ejemplo, con la ayuda de la psicología, el juez está en
condiciones de tomar mejores decisiones para que el ejercicio
del derecho de visitas y convivencias le resulte lo más
provechoso posible al menor de edad, sobre todo en
situaciones en donde el vínculo matrimonial se encuentre en
crisis, pues se corre el riesgo de que la falta de comunicación o
un inadecuado régimen de visitas y/o convivencias ocasione
una mayor afectación al menor.
De ahí que se corrobore que el derecho de visitas y
convivencias no debe analizarse a la luz de un sistema cerrado
e inflexible en cuanto a la forma que debe operar, sino más
bien, debe ser resuelto acorde con una labor de valoración
cuidadosa, prudente y casuística para encontrar la mejor
manera en la que debe llevarse a cabo, para verdaderamente
contribuir al más óptimo desarrollo del menor.
Ello, en atención a que, en la determinación del
régimen de visitas y convivencias, no se trata de encontrar
soluciones simplistas de carácter pragmático que puedan ser
endebles o contraproducentes, sino que se buscan respuestas
de mayor peso, que en ciertos casos podrán estar apoyadas en
D.C. 309/2010.
155
conocimientos especializados, con los cuales se permita una
mayor certeza al juzgador de que las decisiones que al respecto
toma sean verdaderamente aprovechables, para colmar los
fines del derecho de visitas y convivencias. Naturalmente, en su
oportunidad todo ello será analizado por el juez en términos de
lo dispuesto en el artículo 402 del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, en el cual se establece que los
jueces, al valorar en su conjunto los medios de prueba que se
aporten y se admitan en una controversia judicial, deberán
exponer cuidadosamente los fundamentos de la valoración
jurídica realizada y de su decisión, lo que significa que la
valoración de las probanzas debe estar delimitada por la lógica
y la experiencia, así como por la conjunción de ambas, con las
que se conforma la sana crítica, como producto dialéctico, a fin
de que la argumentación y decisión del juzgador sea una
verdadera expresión de justicia, es decir, lo suficientemente
contundente para justificar la determinación judicial y así
rechazar la duda y el margen de subjetividad del juzgador, con
lo cual es evidente que deben aprovecharse “las máximas de la
experiencia”, que constituyen las reglas de vida o verdades de
sentido común.
Por supuesto, al pronunciar una resolución judicial,
de manera especial han de ser consideradas las presunciones
D.C. 309/2010.
156
legales y humanas previstas en los artículos 379 al 383 del
Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, con
base en los principios que las rigen, los cuales se hacen
consistir en que la presunción debe ser grave (digna de ser
aceptada por personas de buen criterio); precisa (que el hecho
en el cual se funde sea parte, antecedente o consecuencia de
aquel que se quiere probar), y que cuando fueren varias las
presunciones han de ser concordantes (tener un enlace entre
sí). De ahí que para cumplir con esos principios, el juzgador
haciendo uso de su amplio arbitrio, debe argumentar para
justificar su decisión, apegado a las reglas de la sana crítica.
Al respecto, debe tenerse en cuenta que en la
materia civil, revisten singular importancia las presunciones,
que son consecuencias conjeturales que la ley o el juzgador
construyen a partir de un hecho o hechos conocidos para
acceder a otros desconocidos; de ahí que resultan
imprescindibles las amplias facultades con las que el Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal ha dotado al
juzgador en el artículo 402, en relación con los numerales 379
al 383, para resolver los negocios judiciales sometidos a su
potestad; lo que al mismo tiempo pone de relieve la gran
responsabilidad que tiene a su cargo para decidir con sentido
de justicia, y más aún con equidad, por ser ésta la justicia de
D.C. 309/2010.
157
cada asunto en concreto, según las circunstancias, condiciones
y eventualidades particulares, evidenciadas en los hechos
controvertidos y justificados con los correspondientes medios
de convicción, después de que ha realizado una ponderación
prudente, ajustada al sentido común, así como al raciocinio
lógico y a su experiencia, sin olvidar el buen criterio y la buena
fe que debe acompañar a todo juzgador.
Al quedar justificado que en el caso a estudio, el
juez responsable incurrió en las irregularidades indicadas, se
concede a **********, por su propio derecho y como
representante de su menor hijo **********, el amparo y
protección de la Justicia Federal para el efecto de que el juez
responsable deje insubsistente la sentencia definitiva dictada el
veintiséis de marzo de dos mil diez, en el juicio ordinario civil
(divorcio incausado) número 2059/2009, promovido por los
quejosos, en contra de **********, y en su lugar emita otra, en la
que siguiendo los lineamientos establecidos en esta ejecutoria
de amparo, deje sin efectos la sentencia definitiva y ordene la
reposición del procedimiento a fin de recabar de oficio los
elementos de prueba idóneos para el efecto de que pueda estar
en condiciones de corroborar si el aquí tercero perjudicado
presenta o no las conductas que le atribuyó la aquí quejosa en
el hecho catorce de su petición de divorcio y si éstas ponen en
D.C. 309/2010.
158
riesgo al menor, con el objeto de poder definir en su momento,
en el dictado de la nueva sentencia definitiva que en su
oportunidad emita, si las medidas necesarias que garantizaran
la convivencia del menor **********, con su progenitor, deben
regir en los términos que se habían determinado en la sentencia
reclamada; o bien, quedar moduladas, limitadas o suspendidas;
por otro lado, en acatamiento a lo dispuesto por los artículos
282, apartado B, fracción III, del Código Civil para el Distrito
Federal; del 1 al 41 de la Convención sobre los Derechos del
Niño; 3, 4, 7, 41, 48 y 49, de la Ley para la Protección de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; 1 y 4, de la Ley de
los Derechos de las Niñas y Niños en el Distrito Federal; ordene
la comparecencia del menor **********, bajo las bases que
establece la legislación aplicable al caso concreto, a fin de que
sea escuchado en relación con el derecho de visitas y
convivencias que tiene respecto de sus progenitores, y para
tales efectos igualmente se le dé intervención al Ministerio
Público, con el objeto de poder estar en condiciones de
resolver, en su oportunidad, con plenitud de jurisdicción, lo que
en derecho corresponda en relación con el régimen de visitas y
convivencias entre el indicado menor con sus progenitores, y en
lo demás, resuelva conforme a sus atribuciones; todo lo anterior
con apoyo en el interés superior del multicitado menor de edad,
D.C. 309/2010.
159
sin soslayar lo que más adelante se menciona en relación con
las medidas provisionales que pudieran proceder.
Al haber procedido el juicio constitucional por las
irregularidades referidas en párrafos precedentes, es
inconducente entrar al examen de los diversos conceptos de
violación encaminados a controvertir la ilegalidad de la
sentencia reclamada, en virtud de que ésta quedó sin efectos, y
con la reposición del procedimiento, oportunamente se hará un
nuevo examen de los diversos aspectos sustantivos planteados
dentro de la litis natural que quedaron sin efectos.
Sirve de apoyo a lo anterior, el criterio establecido
en la tesis de jurisprudencia número 3, localizable en la página
8, de la Segunda Parte, Tercera Sala, del Informe rendido a la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, por su presidente, al
terminar el año de mil novecientos ochenta y dos, cuyo texto es:
“CONCEPTOS DE VIOLACIÓN. ESTUDIO INNECESARIO DE LOS.- Si al examinar los conceptos de violación invocados en la demanda de amparo resulta fundado uno de éstos y el mismo es suficiente para otorgar al peticionario de garantías la protección y el amparo de la Justicia Federal resulta innecesario el estudio de los demás motivos de queja.”
Asimismo, debe señalarse, que al quedar sin efectos
la sentencia reclamada por las razones expuestas, el juez de
D.C. 309/2010.
160
origen se encuentra legalmente facultado para acordar lo que
corresponda sobre peticiones o emitir de oficio, con plenitud de
jurisdicción y con apoyo en los elementos de prueba que tenga
a la vista, o que considere necesario recabar, las medidas
provisionales que estime pertinentes en relación con la
pensión alimenticia provisional que debe regir en favor del
menor quejoso **********, y en relación con los aspectos
vinculados con los bienes que conforman a la sociedad
conyugal, y en su caso, sobre los posibles perjuicios que
se les pudiera ocasionar, lo anterior, en términos de lo
dispuesto por el artículo 282, apartado A, fracciones II y III, del
Código Civil para el Distrito Federal.
Por lo expuesto, y con apoyo en los artículos 158 y
190 de la Ley de Amparo, se resuelve:
ÚNICO.- La Justicia de la Unión ampara y protege a
**********, por su propio derecho y como representante de su
menor hijo ********** en contra de la sentencia definitiva dictada
el veintiséis de marzo de dos mil diez, por el Juez Trigésimo
Cuarto de lo Familiar del Distrito Federal, en el juicio ordinario
civil (divorcio incausado) número **********, promovido por los
quejosos, en contra de **********. El amparo se concede para
D.C. 309/2010.
161
los efectos precisados en el último considerando de esta
ejecutoria.
Notifíquese. Con testimonio de la presente
resolución, devuélvanse los autos a la autoridad que los remitió
y, en su oportunidad, archívese este expediente como asunto
concluido.
Así lo resolvieron por unanimidad de votos, los
Magistrados integrantes del Quinto Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito, licenciados María Soledad
Hernández Ruiz de Mosqueda, Walter Arellano Hobelsberger y
el Secretario en Funciones de Magistrado en términos del
artículo 26, segundo párrafo, de la Ley Orgánica del Poder
Judicial de la Federación, licenciado Juan Francisco Sánchez
Planells, siendo ponente el segundo de los nombrados, quienes
firman con intervención del Secretario de Acuerdos licenciado
Francisco Javier Escalera Soto, que autoriza y da fe.
162
El licenciado(a) Francisco Javier Escalera Soto, hago constar y certifico que en términos de lo previsto en los artículos 8, 13, 14, 18 y demás conducentes en lo relativo de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión pública se suprime la información considerada legalmente como reservada o confidencial que encuadra en el ordenamiento mencionado. Conste.