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Antología literaria del grupo TALIUM
Catalogación en la publicación – Biblioteca Nacional de Colombia
Antología literaria del grupo Talium / Gustavo Arrieta López, editor. – 1a. ed. – Santa Marta : Universidad del Magdalena, 2019.
256 p. – (Colección Humanidades y Artes. Serie Literatura y estudios literarios)
Incluye datos biográficos de los autores.ISBN 978-958-746-218-0 -- 978-958-746-219-7 (pdf) -- 978-958-746-220-3 (e-pub)
1. Cuentos colombianos - Siglo XXI - Colecciones 2. Poesía colombiana - Siglo XXI – Colecciones 3. Literatura colombiana - Siglo XXI – Colecciones 4. Antologías literarias I. Arrieta López, Gustavo, 1971-, ed. II. Serie
CDD: Co863.5 ed. 23 CO-BoBN– a1046899
Primera edición, agosto de 2019 © UNIVERSIDAD DEL MAGDALENA Editorial UnimagdalenaCarrera 32 No. 22 - 08Edificio Mar Caribe lado A - primer piso(57 - 5) 4217940 Ext. 1888Santa Marta D.T.C.H. - [email protected]://editorial.unimagdalena.edu.co/ Colección Humanidades y Artes, serie: Literatura y estudios literarios Rector: Pablo Vera Salazar Vicerrector de Investigación: Ernesto Amarú Galvis ListaCoordinador de Publicaciones y Fomento Editorial: Jorge Enrique Elías-Caro Diseño editorial: Luis Felipe Márquez LoraDiagramación: Eduard Hernández RodríguezDiseño de portada: Andrés Felipe Moreno ToroIlustración de portada: Adriana Marcela Daza MonsalvoCorrección de estilo: Yimmy Restrepo Hamburguer Santa Marta, Colombia, 2019 ISBN: 978-958-746-218-0 (impreso) ISBN: 978-958-746-219-7 (pdf)ISBN: 978-958-746-220-3 (epub) DOI: https://doi.org/10.21676/9789587462180 Impreso y hecho en Colombia - Printed and made in ColombiaXpress Estudio Gráfico y Digital S.A.S. - Xpress Kimpres (Bogotá) El contenido de esta obra está protegido por las leyes y tratados internacionales en materia de Derecho de Autor. Queda prohibida su reproducción total o parcial por cualquier medio impreso o digital conocido o por conocer. Queda prohibida la comunicación pública por cualquier medio, inclusive a través de redes digitales, sin contar con la previa y expresa autorización de la Universidad del Magdalena. Las opiniones expresadas en esta obra son responsabilidad de los autores y no compromete al pensamiento institucional de la Universidad del Magdalena, ni genera responsabilidad frente a terceros.
Colección Humanidades y ArtesSerie: Literatura y estudios literarios
Contenido
Presentación ..............................................................11
Joel José De la Cruz Valiente .....................................17Benedetti en el Caribe
Antonio José Escorcia Valencia .................................25Bochinche¡Toda mi vida quedó hechas cenizas! El tejado
María Alejandra Zapata Izquierdo ...........................35Unas arrugas llenas de recuerdos¿Cómo le explico que lo volvería a hacer? No mires, no respires, no te muevas
Rubén Darío Balanta Mera .......................................45Este cuento no merece ser leído
Kiara Marcela Fornaris Parra ...................................53Cuando las mujeres pescaban
Pedro Antonio Díaz Rodríguez ................................61¡Hoy lo mato!
Fredys Eduardo Molina De la Cruz ..........................69El perro y la babilla
Aura Mena De la Cruz ...............................................77Conversaciones
Lizkateris Ospino Pertúz ...........................................85Las muñecas de mi hermana
Isabel Cristina Londoño Amarís ...............................97Paso fino
Yarluis Meza Altamar .............................................. 105La carta
Verónica Muñoz Rizzo ............................................ 115SilviaLa distancia estándarLadrido
Leydy Manuela García Sarria .................................. 123Historia de amor
Diego Armando Soledad Sánchez ........................... 131Historia a dos cartas
Luís Alfredo Parra Gómez ...................................... 139QuimeraComplexiónTelonero de viaje
María Luisa Erazo Calderón ................................... 147El día en que me acosté con un escritor
Javier de Jesús Viloria Escobar ................................ 153Cicatrices en los huesosInfiernos apilonados en mis huesos rotosHistorias en tus huesosLos huesos se le pudren
Andrea Carolina Viloria Mejía ............................... 163Sensual, no sexual
Martha Brigitte Rojas Aguilar ................................ 171Mujer oceánicaEl nombre de las cosasMetáforas elementales
Hernán Darío Angarita Manrique .......................... 179Melanofobia
Camilo Andrés Múnera Benítez ............................. 185Altar de rosas
Nerina M. Durán Blanco ......................................... 193Y aquí… la historia
Javier Enrique Gámez Rodríguez ........................... 201A mi pequeño amigo verdePromesasPoesía para todos
Yahel Tatiana Mejía Rendón ................................... 211Diario de una enfermera que decide no suicidarse
María Fernanda Zapata Izquierdo .......................... 221Ser wirakuko“Sé”Immarcescibilis
Mohamed Leonard Dávila Tarazona ...................... 229Humanidad de la cebollaBananerasLa sabiduría de Martín
Datos de autores ...................................................... 237
Ilustradores – Grupo de Artes Unimagdalena ....... 251
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Presentación
Cada nueva compilación literaria del Grupo Talium le brinda a los lectores la posibilidad de ser testigos de un proceso creativo basado en la interpretación perso-nal que cada artista hace de su “realidad cotidiana”, en el compartir y retroalimentar la lectura de sus textos y en la edición, aunque solitaria, de cada frase, imagen o trama, de la mano de toda esa algarabía babélica que resulta de la experiencia adquirida.
Así, esta obra es el resultado de la creación, aprecia-ción y edición de cuentos y poemas por parte de inte-grantes del Taller Literario desde antes y durante el año 2018; son 26 los autores quienes desde su quehacer libre y espontáneo, compendian esta muestra representativa de nuestra “literatura joven” en el departamento del Magdalena.
Son 21 estudiantes, dos de ellas de la comunidad indí-gena Arhuaca y cinco graduados de diferentes programas académicos -9 poetas/17 narradores-, en la búsqueda de su propia voz, de un estilo auténtico, no son solo datos estadísticos para los indicadores, aunque los primeros muestren la continuidad de los procesos creadores de parte de la mayoría de egresados que integraron e inte-
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gran Talium, y los segundos nos hablen de la necesidad de comunicarnos mediante otros códigos, de contar o poetizar lo que muchos consideran solo ficción o versos.
Luego de múltiples lecturas salieron a relucir puntos de confluencia entre los textos, “ejes temáticos” en los que coinciden -en tonos similares- dinámicas sociales disímiles frente a lo que es nuestra idiosincrasia, a las creencias populares, a los pecados capitales y al ámbito social. Por tal motivo, se enmarcaron dentro de cuatro subtítulos, un tanto arbitrarios, y a la manera del famoso ejercicio de escritura creativa el “cadáver exquisito”.
Ya sabemos que “El Caribe es una caldera que se lleva en la sangre”, pero “El pasado está ahí, tiempo fantasma e inexplicable, sin memoria”, aunque “Tu amor, sea un trópico caleidoscopio para combatir la guerra”, necesita-remos “Una sociedad real, por favor”.
Por otra parte, celebramos la participación del Grupo de Artes Universidad del Magdalena, “un espacio educa-tivo, artístico y lúdico” a cargo de la licenciada en Artes Plásticas Marena Saballet. Así, doce jóvenes inquietos aprendices de la pintura y el dibujo, quienes después de leer cuentos y poemas, nos obsequian una interpretación muy personal a través de sus ilustraciones. Cabe aclarar que dichas imágenes no pretenden fotografiar las escenas literarias de cada cuento o poema a las que se endosan, sino que, desde lo que son “obras de arte”, buscan dar cuenta de otro proceso creativo tan válido como los que “dibujan” con palabras. De esta manera, pintura y litera-tura se integran para lograr una publicación visualmente atractiva para los lectores de la Antología. Los ilustrado-res emplearon la técnica de la acuarela sobre el respectivo
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papel y en una dimensión particular (de 17 x 25 cms). Ellos son: Adriana Marcela Daza Monsalvo, Baldemar Fuentes Contreras, Daniris Vargas Tuirán, Eliana Carolina María Wong Lubo, Gilma Teodora Gutiérrez Salgado, Harold W. Hernández Montenegro, Jennifer Andrea Palacio Vergara, Juan Gabriel González Vanegas, Karilyn Elvira Better De la Hoz, Nicolás Mauricio Franco Candelario, Ruth Mireya Vargas Ospino y Yitzhak Ahmed Ramos Mercado.
Disfrutemos entonces de la lectura de la presente III Antología del Grupo Talium.
Gustavo H. Arrieta LópezDirector Grupo Talium
“El Caribe es una caldera que se lleva en la sangre”
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Joel José De la Cruz Valiente
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Ilustración: Gilma Gutiérrez
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Benedetti en el Caribe
Lo cierto es que el calor y la pereza no se llevan bien, la primera es combustible de la siguiente y espantar los mosquitos parece ser la única actividad; encender el abanico es inútil para estos casos, pues el fogaje solo aumenta, contribuyendo al santo sacrificio de dar su sangre para redimir a la mosquitera que danza en remo-lino sobre su cabeza.
— No veo la susodicha belleza de los pueblos de la que habla Benedetti.
— ¿Dijo algo mijo? — No era con usted.
Llevaba menos de dos semanas en el sector de Ciénaga conocido como “aguacoca”, donde aún había empalizadas de cactus y la laguna maloliente supuraba sin razón. Era uno de esos lugares que podrían remontarse al principio de los tiempos o[…] al final. Anterior a eso se encontraba en su casa del barrio María Eugenia, leyendo un grueso volumen de Benedetti, la hamaca se mecía suavemente con su respiración y el ramaje de los árboles de mango y almendras refrescaban el patio que emanaba un aroma a jabón de bola azul y cloro que procedía de la batea donde
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su madre, con un manduco, aporreaba una masa húmeda de ropa. En ese momento le dio una de esas crisis nihi-listas, en las que todo aquello que le rodeaba se reducía a la nada; ese televisor terminará algún día en la basura, al igual que mi teléfono, el aire acondicionado y todo aque-llo de lo que me siento orgulloso.
Llegó a la conclusión de que la ciudad no era bonita, simplemente por el hecho de ser ciudad y toda la lírica samaria no salía del tema de la playa, la sierra y el con-creto; al igual que en los pueblos el calor y los mosqui-tos. Así que decidió buscar una belleza en los pueblos, tal y como la veía el poeta Mario Benedetti en vez de nuestro Nobel. No obstante, cuando llegó a la terminal empezó a arrepentirse de su decisión al ver a un hombre de aspecto gastado, gritándole casi en el oído: “Ciénega, Ciénega”, al mismo tiempo que aferraba sus dedos sin uñas en su hombro, al parecer ese hombre no sabía, ni le importaba, saber nada sobre el espacio personal. Era uno de esos buses con Wifi, pero no sacó el teléfono debido a que detrás de él iban unos tipos hablando de “dios-sabrá-qué” con acento venezolano. A su lado había un gallero que, sin respeto por el animal, llevaba en una sola jaula dos gallos finos que se la pasaron dando picotazos y can-tando, hasta la estatua enorme de un negro que sostenía un machete como si retara al dios de la guerra.
Se bajó con soberbia, esperando ver a los ciclota-xis, a las negras vendiendo pescado, a los señores de las almojábanas o a los que vendían galleta griega en bolsas marrones; sin embargo, un montón de motos se abalan-zaron sobre él. El cambio de temperatura entre el bus y
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la calle hicieron que le picara la piel, por lo que aceleró el paso hasta casi estrellarse con un mendigo, que yacía en el suelo y, que metía sus mugrientos dedos en las hen-dijas de las baldosas, sacando un barro verdoso y malo-liente que se llevaba a la boca con infinita exquisitez, haciendo que a él le dolieran el estómago y el corazón: “El mendigo que ha sido clase media ahora tiene pinta de profesor emérito y pide su limosna en versos yámbi-cos”, evocando a Benedetti, miró con resignación cómo el bus se alejaba de él y el negro se hacía más pequeño, aunque después de caminar un tiempo se percató de que no conocía el lugar, excepto por la dirección que tenía escrita en el reverso de una hoja de calendario. Al final paró una moto, a la que sin razón y con temor le dijo que era lugareño, que no estaba para nada perdido y que su tía ya lo estaba esperando, el tipo de la moto era un joven como de 19 años que sonriendo le respondió.
— “Tranquilo compa’, igual yo no hago moto, iba a vi-sitar a mi hembrita cuando me llamaste, pero si te llevo termino de completar los helados, son 3.000 de aquí a allá, es que a ella le gustan de los caros”.
Por alguna razón se sintió identificado con aquél joven y en vano intentó entablar una conversación hasta que llegó a su destino, un lugar sórdido, lleno de perso-nas agradables, el suelo que pisaba crujía por los espina-zos de pescado, ya amarillos y poco apetecibles para los gatos; el aire olía a sol y peos de mosca.
No hay más belleza que la de Gabo pensó, a la vez que recitaba mentalmente al poeta uruguayo: “Fea, pero
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simpática como esas flacas avispadas de las que uno solía enamorarse, mientras los falsos tímidos besaban a seduc-toras rubias de prestado y lucidez cero kilómetro1”.
Todos los días transcurrieron igual y para su sorpresa descubrió que los mosquitos le pican hasta a los negros, pero de no ser por ellos, se hubiese aburrido infinita-mente, pues los jóvenes de su edad nunca estaban en la casa y a él no le gustaba salir, los pocos niños que jugaban descalzos (bajo su propio riesgo) tenían panzas infladas que resaltaban con las costillas, además de estar todos “gripientos”, por lo que se pasaban las manos sucias por la nariz, echando los mocos a un lado del cachete, como resultado se les formaba una marca de barro, moco y sudor en la cara; aun así fue la única belleza que encon-tró, y después de dos semanas se despidió de su tía y de los primos que apenas habían notado que estaba allí.
Cuando llegó a Santa Marta su hermana le preguntó entre risas:
— ¿Encontraste la belleza necesaria para escribir un poema como Benedetti?
Después de reflexionar un poco respondió: — No, pero si la suficiente como para escribir un cuento como Gabo.
— Será una mierda. — Eso espero.
1. Mario Benedetti, Puntos de vista en La vida ese paréntesis. Buenos Aires, editorial sudamericana, 1988, pág. 104
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Antonio José Escorcia Valencia
