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Atlas Digital del Departamento de Biología Celular y Tisular de la Facultad de Medicina

Sistema digestivo: Intestino grueso

Vista panorámica de la pared del intestino grueso. Los pliegues apreciables a simple vista corresponden a

engrosamientos focales de la submucosa. Note que las criptas son mucho más profundas que en el intestino delgado.

CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Enrique A. Sampedro Carrillo

Procesamiento: Laboratorio de Histología del DBCT, Facultad de Medicina, UNAM.



En este campo se distinguen las capas de la muscular externa (extremo derecho), la submucosa y las criptas

intestinales profundas y con muy numerosas células caliciformes. Note que no hay vellosidades.

CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Mucosa del intestino grueso. Se identifica la muscular de la mucosa, la lámina propia con

numerosas células linfoides y las grandes criptas intestinales.





Un detalle característico del intestino grueso es la gran longitud de las criptas en comparación con las del intestino

delgado. Además, en la base, en condiciones normales no se encuentran células de Paneth.





Criptas del intestino grueso. La cantidad de células caliciformes es tal que prácticamente

no se identifican células de absorción.





El epitelio que reviste las criptas del intestino grueso, cambia bruscamente al continuarse con el

epitelio superficial, que como se aprecia en la imagen, carece de células caliciformes.





Observe las diferencias entre el epitelio superficial del intestino grueso y el que se

continúa formando las criptas.





Normalmente se encuentran conglomerados linfoides situados en la porción más superficial de la submucosa, que

muestran continuación hacia la lámina propia atravesando la muscular de la mucosa.





Observe la estrecha relación existente entre los conglomerados linfoides del intestino

grueso y la base de sus criptas.





Corte transversal de apéndice

cecal humano. Observe la gran

cantidad de folículos linfoides

situados en la submucosa e

infiltrando la base de la mucosa.





Detalle de la pared del apéndice cecal que muestra la estrecha relación entre los

conglomerados linfoides y la mucosa.





Las células del sistema neuroendocrino epitelial difuso son fácilmente demostrables con

técnicas de impregnación metálica (Fontana-Masson y Grimelius) en el apéndice cecal.





Célula argirófila del apéndice cecal humano. Forma parte del sistema neuroendocrino epitelial

difuso.





Observe las diferencias entre el epitelio superficial del intestino grueso y el que se

continúa formando las criptas.





Normalmente se encuentran conglomerados linfoides situados en la porción más superficial de la submucosa, que

muestran continuación hacia la lámina propia atravesando la muscular de la mucosa.





Las células del sistema neuroendocrino epitelial difuso son fácilmente demostrables con

técnicas de impregnación metálica (Fontana-Masson y Grimelius) en el apéndice cecal.





Célula argirófila del apéndice cecal humano. Forma parte del sistema neuroendocrino epitelial

difuso.





El tracto digestivo termina en el ano.

En la zona ano-rectal, se puede

identificar transición de epitelios de

escamoso sin estrato córneo a

intestinal con criptas profundas.




Sistema digestivo: Glándulas salivales

Vista panorámica de glándula parótida humana (H y E). Observe que en condiciones normales se

encuentran abundantes adipocitos uniloculares alternando con los acinos serosos.





En esta imagen se aprecia el detalle de los acinos serosos. Recuerde que cada célula anabólicamente activa tiene una

porción basal basófila y una apical acidófila. En la izquierda tenemos un adipocito unilocular.





Las glándulas submaxilares, son mixtas. Contienen unidades secretorias serosas, mucosas y

mixtas. Note las media lunas serosas. Podemos identificar un conducto.





Este campo muestra lo coexistencia de unidades serosas con unidades mucosas.

Glándula submaxilar.





La tinción con mucicarcmín de Mayer, nos muestra en amarillo pálido los conductos, en

rosa las unidades mucosas y en tono pardo, las unidades serosas. Glándula submaxilar.





Las glándulas sublinguales contienen unidades secretorias mucosas. Se pueden

identificar conductos con células de tipo cilíndrico simple con un citoplasma acidófilo.

Glándula sublingual.

CRÉDITOS: Fotografía: Dr. César E. Montalvo Arenas




Numerosas unidades secretorias mucosas en una glándula sublingual.




Sistema digestivo: Hígado

El hígado de cerdo teñido con tricrómico de Masson es muy útil para explicar y mostrar el concepto de lobulillo clásico.

Estos animales en condiciones normales tienen septos conjuntivos finos perilobulillares.





En esta imagen las venas centrales del lobulillo clásico se encuentran ocupadas por abundante sangre, mientras que en

los elementos vasculares de los espacios porta no encontramos contenido hemático.





Cuando resaltamos las fibras reticulares con la técnica de impregnación metálica (doble impregnación de Pío del Río

Hortera), los límites del lobulillo clásico quedan muy claros.


Procesamiento: QFB Concepción Rugerio Vargas



Aquí se muestra una vena central del lobulillo en hígado humano. Note el arreglo radial de

los cordones de hepatocitos.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Vena central del lobulillo clásico en hígado humano. Observe que los cordones de hepatocitos

tienen una distribución radial a partir de este vaso.





Este campo muestra en el extremo izquierdo, un espacio portal y hacia el extremo derecho,

una vena central del lobulillo.





Usted debe identificar los elementos de la tríada portal.





Hígado humano teñido con tricrómico de Masson. Se observan los elementos de un espacio

portal.





Espacio portal hepático, Tinción: tricrómico de Masson.





La flecha nos muestra un hallazgo histológico poco común. Se trata de un hepatocito en

mitosis.





En el hígado de rata, no es raro encontrar gotitas de grasa en el citoplasma de los

hepatocitos.





Hígado humano que muestra cordones de hepatocitos con distribución irregular.





No es raro encontrar hepatocitos binucleados. En esta imagen, usted debe identificar al menos

dos casos.





Detalle de un hepatocito binucleado haciendo el “bizco”.





Con grandes aumentos, los núcleos de los hepatocitos son muy demostrativos de la estructura

normal de este organelo.





En esta imagen, el citoplasma de los hepatocitos muestra estructuras azules que

corresponden a retículo endoplásmico.





Los cortes semifinos permiten estudiar detalles casi ultraestructurales de los hepatocitos.


Procesamiento: Dr. Adrián Rondán Zárate y Dra. Silvia Antuna Bizarro.

Laboratorio de Microscopía Electrónica del DBCT, Facultad de Medicina, UNAM.



Como usted ya sabe, el hígado es uno de los principales reservorios de glucógeno en el

organismo. Aquí se evidencia esta importante macromolécula por medio de la técnica de carmín de

Best.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Las impregnaciones metálicas permiten estudiar la distribución de las finas fibras de

colágena tipo III.



Laboratorio de Técnicas Especiales del DBCT, Facultad de Medicina, UNAM.



La doble impregnación de Pío del Río Hortega nos muestra el detalle de la malla de fibras

reticulares del hígado.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga





Las fibras reticulares conforman una malla de sostén relacionada estrechamente con los

cordones de hepatocitos.






En los hospitales, se usan las técnicas de impregnación modernas, como la de Wilder, para

la demostración de las fibras reticulares en el hígado de nuestros pacientes.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Los canalículos biliares contienen grandes cantidades de la enzima ATPasa, lo que se

demuestra con histoquímica enzimática en esta imagen.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Detalle del arreglo de los canalículos biliares demostrados por medio de histoquímica

enzimática para la identificación de actividad de ATPasa.





Las células de von Kupffer (macrófagos del hígado) se demuestran con técnicas de PAS modificadas como en esta

imagen. Note que el citoplasma se encuentra en contacto con la luz del sinusoide. CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Enrique A. Sampedro Carrillo




Corte de hígado teñido con una modificación a la técnica de PAS. Se identifica una gran célula

de von Kupffer.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Enrique A. Sampedro Carrillo




La microscopía electrónica de transmisión nos muestra el detalle de una célula

de von Kupffer. CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Enrique A. Sampedro Carrillo

Procesamiento: Laboratorio de Microscopía Electrónica del HRLALM, del ISSSTE.


Sistema digestivo: Vesícula biliar

Panorámica de la pared de la vesícula biliar. Note las proyecciones de mucosa hacia la superficie luminal. Una

característica peculiar de este órgano, es la distribución irregular de los haces de leiomiocitos.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Pared de la vesícula biliar teñida con tricrómico de Masson. Note el epitelio cilíndrico simple, las proyecciones de

mucosa hacia la luz y el arreglo peculiar del músculo liso.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Joaquín Carrillo Farga




Vesícula biliar teñida con tricrómico de Masson.





Detalle de la mucosa de la vesícula biliar teñida con tricrómico de Masson. Note el tejido

conjuntivo laxo y el aspecto del epitelio cilíndrico simple.CRÉDITOS: Fotografía: Dr. Enrique A. Sampedro Carrillo




Detalle de la mucosa de la vesícula biliar teñida con tricrómico de Masson. Note el tejido

conjuntivo laxo y el aspecto del epitelio cilíndrico simple.





Detalle del epitelio cilíndrico simple de la vesícula biliar. Tricrómico de Masson.




Sistema digestivo: Páncreas

Numerosos acinos serosos conforman la mayor parte del parénquima del páncreas.





El páncreas es un órgano con carácter de glándula mixta en cuanto que contiene unidades secretorias exocrinas de tipo

seroso, coexistiendo con porciones endocrinas que conocemos como islotes de Langerhans.





Note la basofilia basal de las células acinares y su continuidad con la zona acidófila que en este

campo permite apreciar el detalle de los gránulos secretorios.





Detalle de células acinares del páncreas. Los núcleos celulares se ven con dificultad debido a la intensa

basofilia basal. Note el aspecto de los gránulos citoplásmicos intensamente acidófilos.





Vista panorámica de páncreas humano. No cabe duda que la mayor parte del parénquima

corresponde a unidades secretorias exocrinas serosas.





Detalle de las unidades serosas del páncreas humano. Note la basofilia basal y la acidofilia

apical.





El páncreas del perro muestra una notable dilatación de las cisternas del retículo endoplásmico rugoso, lo

que imparte un aspecto deshilachado a la zona citoplásmica con basofilia.





Acinos serosos del páncreas humano. Es muy clara la zona basófila y la zona acidófila. Esta

imagen es indistinguible de un corte de glándula parótida.





El tricrómico de Gallego permite un buen contraste entre el aspecto de la zona exocrina y la

endocrina del páncreas. Es muy claro el voluminoso islote de Langerhans.





Detalle de un islote de Langerhans rodeado de numerosas unidades serosas.



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