Bernini La Panera

7/24/2019 Bernini La Panera

1/8

LAS NIMAS DE BERNINI

ILUMINAN EL MUSEO DEL PRADO

BAJADA

La vida del ilustre escultor barroco ia! Lore!"o Ber!i!i #$%&'($)'*+ estuvo sie,-re asociada al ,ece!a".o / -oder de las

cortes reales / -a-ales0 u! co,-le1o la"o de a2ectos / va!idades-alacie.as de los 3ue la corte es-a4ola e! Ro,a !o estuvoa1e!a5 / de las cuales sur.iero! las vei!titr6s obras de suautor7a 3ue el Museo del Prado e89ibe al -:blico 9asta el ' de2ebrero;

Las notables habilidades tcnicas de Gian Lorenzo Bernini, fueron -desde

su ms temprana juventud- asertivamente promovidas y administradas por su

padre, el escultor Pietro Bernini. e cuenta !ue a los " a#os el pe!ue#o Gian

Lorenzo fue presentado ante el Papa Pablo $, !uien solicit% personalmente al

cardenal &a'eo Barberini vi(ilase de cerca la educaci%n del ni#o.

Probablemente las habilidades manuales desple(adas en a!uel encuentro

hicieron sospechar al Papa !ue se encontraba frente al )nuevo &i(uel *n(el+,

dispuesto ah por ios para alumbrar con sus obras la (loria cat%lica y de oma

barroca.

Las cr%nicas de la poca y la prol/ca creaci%n de Bernini, nos

testimonian !ue 0en efecto- no tard% en convertirse en favorito de las

autoridades vaticanas, siendo ya desde de los 12 a#os el escultor ms amado

por los prncipes eclesiales y el hombre de con/anza de los sucesores de an

Pedro. 3l cnit de su (loria vaticana acontecera cuando su tutor de infancia

&a'eo Barberini ascendi% al trono papal bajo el nombre 4rbano $555,

convirtiendo a un Bernini de tan s%lo 67 a#os en el registade toda la ciudad, es


2/8

decir, el encar(ado de diri(ir la puesta en visible del 8amante escenario del

mundo !ue era la oma del i(lo 9$55.

BERNINI < LA =OR>E ESPA?OLA

5nmejorablemente posicionado en la escala creativa y social, Bernini era

enftico al momento de valorizar estilos visuales. :unto con amar sin dudas el

estilo propio, tena especial predilecci%n por la esttica francesa y no ocultaba

su desdn hacia las artes espa#olas. 3n el catlo(o de la e;posici%n del Prado

se reco(e una de sus frases !ue no ofrece lu(ar a se(undas lecturas< =Los

espa#oles no tienen (usto al(uno, ni conocimiento de las artes=y !uizs por

ello, no tena problemas en trabajar para mecenas ibricos !ue decidan)acertadamente+ poner un proyecto en manos italianas.

3s as como la curatora a car(o del catedrtico espa#ol elfn

odr(uez, pone en relieve el empleo del multifactico talento de Bernini como

escultor y ar!uitecto al servicio de los poderosos de 3spa#a, y 0asimismo- en la

e;posici%n se da testimonio de su dominio tcnico como pintor, inventor de

fuentes y de otros elementos ornamentales, car(ados de soluciones de alta

calidad y lujo esceno(r/co. >ambin se e;ploran las apuestas e;itosas del

napolitano como dramatur(o, dise#ador de artefactos para festivales yceremonias reli(iosas. $ale la pena en este punto hacer menci%n a sus

)ar!uitecturas efmeras+, producidas en el conte;to de una (ran /esta con

fue(os arti/ciales, realizada especialmente para celebrar el nacimiento de la

infanta &ar(arita &ara de 3spa#a en el a#o 7?@7. 3n 7??" realizara un evento

parecido para conmemorar la Paz de *!uis(rn A!ue puso /n a la )Guerra de

evoluci%n+ entre 3spa#a y ranciaC, todos ellos encar(os en !ue tuvo la

capacidad de innovar y al mismo tiempo mostrarnos su capacidad de

transformar radicalmente materiales inertes, en acontecimientos, cuerpos e

historias, !ue fuesen re8ejo simb%lico del poder de los hombres en la tierra.

Don esta e;perticia en el jue(o diplomtico, saba bien c%mo !ueran proyectar

su ima(en en la ciudad de oma los poderosos e;tranjeros. >al fue el caso del

rey elipe 5$ de 3spa#a !ue deseaba acrecentar su presencia simb%lica en la


3/8

ciudad eterna, y es as como sur(ieron proyectos escult%ricos para la baslica

de an Pedro y anta &ara &a((iore.

3n esta lnea, la muestra del Prado e;hibe ma!uetas como la del

&onumento a elipe 5$, o la pe!ue#a escultura ecuestre de bronce dedicada a

su descendiente Darlos 55 A7?"2C. >ambin se presentan una serie de dibujos!ue (ra/can ceremonias de canonizaci%n, como la de anto >oms de

$illanueva en la Baslica de an Pedro.

ANIMAS

Los trabajos !ue dan nombre a esta e;posici%n son dos bustos de mrmol !ue

Bernini tall% a sus tempranos veintiEn a#os. e trata de un busto femeninotitulado )*nima beata+ y uno masculino titulado )*nima dannata+ Aalma

bienaventurada y alma condenada respectivamenteC, ambas obras fueron

realizadas por encar(o del clri(o espa#ol residente en oma Pedro oi; de

&ontoya, y actualmente son conservadas en la embajada de 3spa#a ante la

anta ede. Las dos esculturas representan opuestos radicales< uno la serena

e;presi%n de un rostro femenino ante la salvaci%n paradisacaF otro el horror de

un alma condenada 0supuesto autorrerato de Bernini- !ue (rita ante la

inminencia de las brasas del in/erno. 3sta dupla de obras acentEa esapolarizada oposici%n de ori(en medieval entre salvaci%n y condena, resultando

tremendamente atractivo el modo en !ue Bernini sintetiza las e;tremas

opciones del paraso y el in/erno, pasadas por el cedazo hispano del culto a las

nimas del pur(atorio. *ntes de Bernini, la preocupaci%n de la escultura se

haba centrado en la voluntad de hacer inmortal el cuerpo de dioses y hroes.

Por el contrario, para Bernini el mrmol estaba ah para representar la

condici%n corruptible de la carne. 3l alma condenada es lejos mucho ms

propositiva y trans(resora !ue su par, realizada por un artista plenamente

consciente del espectador, de sus emociones primarias, de sus puntos de vista

alrededor de una pieza de mrmol. Dlaro, hoy tal vez no nos parezca

trans(resor, pero pensemos !ue en 7?12, Bernini rompi% con todos los lu(ares

comunes de sus predecesores, descubriendo una nueva manera de contar


4/8

historias con un trozo de piedra !ue en sus manos Ay en las de sus ayudantesC

poda parecer tan d%cil como la cera o la arcilla.

tras obras en e;hibici%n corresponden a un

posible Autorretratopintado al %leo A7?6@-6"C, el busto en mrmol de sumecenas cipione Bor(hese A7?61C, y un ma(n/co boceto en terracota de su

obra maestra< )3l ;tasis de anta >eresa+, prestado al Prado por el &useo del

Hermita(e, e inspirado en los relatos msticos de la anta espa#ola >eresa de

IvilaF un verdadero )Best eller+ entre los cat%licos de 3uropa Dentral del si(lo

9$55, y !ue la familia Dornaro de oma !uiso hacer perdurar en la i(lesia de

anta &aria della $ittoria, esculpida por la mano de un Bernini en plena

madurez.

>odo este conjunto de obras resulta una demostraci%n indiscutible !ue el

maestro italiano domin% con e;celencia tanto la diplomacia, como el cincel. Los

mrmoles de Bernini y su habilidad de trans/(urarlo en otras sustancias como

ve(etales, acero, cabellos o piel, estuvieron al servicio de sus e;ploraciones

tcnicas, pero tambin de sus afectos y a/nidades polticas, !ue contemplaron

antes !ue todos nosotros el (olpe de la luz sobre los volEmenes de piedras o

metalF fueron ellos los primeros en contemplar las e;presiones inmortales de

sus )almas+, !ue morarn en conjunto hasta el " de febrero en las anti(uasdependencias de los reyes de 3spa#a.


5/8

5z!uierda< J*nima beataJ A7?7KC.erecha< J*nima dannataJ A7?7KC. Gian Lorenzo Bernini.

3l historiador del arte Hoard Hibban ase(uraba !ue, sin menospreciar el Almabienaventurada, sta sala perdiendo ante la comparaci%n con su pareja.

Bernini captura el des(arrador (rito del condenado, el cual percibimos en cadaarru(a del semblante, en los ojos horrorizados y en la boca desencajada.


6/8

Brentood, Dolecci%n particular. Proyecto para la J3scultura ecuestre de Darlos55J A7?"2C. Gian Lorenzo Bernini.


7/8

an Petersbur(o, &useo del Hermita(e. Boceto en terracota para el JM;tasis deanta >eresaJ Ac. 7?NOC. Gian Lorenzo Bernini.


8/8

&adrid, &useo acional del Prado. J*utorretratoJ Ah. 7?6@ - 7?6"C. Gian LorenzoBernini.

Documents

Bernini La Panera