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limay.pe JUNIO 2020 AÑO 1 EDICIÓN N° 026 SEMANARIO El encierro prolongado puede afectar nuestra salud mental, con sensación de pánico al salir de casa. ¿Qué significa esta nueva tecnología que muchos esperan y otros temen? EL 5G LLEGA CON POLÉMICA PAG. 6 DIRECTOR: RAMÓN ESPEJO PAGS. 8-9 La informalidad y su factor clave en la pandemia. CUIDADO CON EL SÍNDROME DE LA CABAÑA’ PAG. 12 PAG. 7 ¿Hambre o salud? El gran dilema Especialistas señalan que empresas deben brindar seguridad y apoyo psicológico a trabajadores. Christian Rivero está listo para regresar a la pantalla chica con nuevo programa “YO NO PODRÍA IRME A OTRO PAÍS, TENGO MI FAMILIA AQUÍ”

CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’ · 2020. 6. 12. · es el dolor dos veces y la función de la yerba purísima, el dolor dos veces y el bien de ser, dolernos doblemente

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Page 1: CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’ · 2020. 6. 12. · es el dolor dos veces y la función de la yerba purísima, el dolor dos veces y el bien de ser, dolernos doblemente

limay.peJUNIO 2020 AÑO 1 EDICIÓN N° 026

SEMANARIO

El encierro prolongado puede afectar nuestra salud mental, con sensación de pánico al salir de casa.

¿Qué significa esta nueva tecnología que muchos esperan

y otros temen?

EL 5G LLEGA CON

POLÉMICA

PAG. 6

DIRECTOR: RAMÓN ESPEJO

PAGS. 8-9

La informalidad y su factor clave en la pandemia.

CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’

PAG. 12

PAG. 7

¿Hambre o salud? El gran dilema

Especialistas señalan que empresas deben brindar seguridad y apoyo psicológico a trabajadores.

Christian Rivero está listo para regresar a la pantalla chica con

nuevo programa

“YO NO PODRÍA IRME A OTRO PAÍS, TENGO

MI FAMILIA AQUÍ”

Page 2: CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’ · 2020. 6. 12. · es el dolor dos veces y la función de la yerba purísima, el dolor dos veces y el bien de ser, dolernos doblemente

Cada día son más los peruanos que vienen otorgando su preferencia a LIMAY.PE, que cuenta con una edición digital que se actualiza minuto a minuto con lo último en noticias de política, actualidad, espectáculos, deportes, turismo, salud, ciencia y tecnología. Si quieres ser parte de nuestra familia virtual solo debes dar click a nuestra página web o dar like a nuestro fanpage: https://www.facebook.com/Limay.pe/ y automáticamente estarás al día de todo el acontecer, además de disfrutar de las me-jores promociones para toda la familia. ¡Súmate ya!

Página 2Cortitas de Limay - Click.

Página 3Lo dijo -Editorial.

Páginas 4 -5 Refresco en el gabinete ministerial?Analistas abor-dan el desempe-ño del actual Consejo de Ministros.

Opinion (Anibal Quiroga).

Páginas 6Informalidad y cuarentena. Uno de los principa-les problemas de nuestro país es la informalidad.

Páginas 7El síndrome de la cabaña. La paranoia de las personas al salir de casa para volver a una nue-va normalidad.

Páginas 8 y 9Entrevista exclusiva Christian Riveros.

Páginas 10-11EE.UU. arde. Asesinato de Afrodescendiente George Floyd reabre viejas heridas en la primera potencia mundial

Páginas 12Qué es el 5G y por qué tan polémico. Una nue-va tecnología que genera mucha resistencia, se habla de conspiración del nuevo orden mundial.

Páginas 13Autoridades desobedientes . Diversas autorida-des de gobierno, alcaldes, regidores, etc, desaca-taron las medidas dispuestas y generaron un mal precedente.

Página 14El retorno del “Hays” en el cine.Parte de los protocolos para esta nueva etapa. .Página 15Consejos para mamás en casa. Mujeres atentas con estos consejos para mantener bien sus ce-jas y otras partes del cuerpo.

Página 16Crucigrama – Horóscopo.

limay.peJUNIO 2020

AÑO 1 EDICIÓN N° 026

SEMANARIO

El encierro prolongado puede afectar nuestra salud mental, con sensación de pánico al salir de casa.

¿Qué significa esta nueva tecnología que muchos esperan y otros temen?

EL 5G LLEGA CON

POLÉMICA

PAG. 6

DIRECTOR: RAMÓN ESPEJO

PAGS. 8-9

La informalidad y su factor clave en la pandemia.

CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’PAG. 12

PAG. 7

¿Hambre o salud? El gran dilema

Especialistas señalan que empresas deben brindar seguridad y apoyo psicológico a trabajadores.

Christian Rivero está listo para regresar a la pantalla chica con nuevo programa

“YO NO PODRÍA IRME A OTRO PAÍS, TENGO MI FAMILIA AQUÍ”

error pero ya queda un precedente francamente insólito.

GROSERO SUB REGISTRO Sigue la controversia por el sub

registro de muertes en el Perú a causa del COVID-19. A todas luces nuestro índice de letalidad es simi-lar al de otros países que cuentan incluso con un mejor sistema de sa-lud, sin embargo las cifras oficiales del gobierno nos ponen muy por debajo de ellos cuando los cremato-rios estan colapsados y los cadáve-res apilados por todos lados. Como si ocultar muertos fuera cosa de jue-go. Por favor, mejor es transparentar las cifras, actuar sobre una base real

y respetar más la inteligencia de la gente.

DEBILITACIÓN DEL VIRUSHay una corriente mun-

dial que señala un notorio debilitamiento del virus. En Europa y Norteamérica ha habido un bajón de cifras de contagios y muertos, ade-más que los nuevos conta-giados ya no están padecien-do la agresividad inicial que sufrieron las primeras vícti-mas de la peste. En nuestro

país se percibe en menor grado eso pero ya hubo mucho menos pacientes que ingresaron a UCI y eso nos da una sensación

de esperanza para los si-guientes días. La meseta pa-rece haber llegado por fin. Vizcarra recién podría salir a dar cifras positivas y aho-ra sí podríamos creerle. ¿O no?

CLÍNICAS INHUMANASLas clínicas privadas y los espe-

culadores de medicina y oxígeno han sido lo realmente feo en esta pandemia. No se entiende cómo el afán de ganar mucho más dinero del que corresponde, puede sobre-

pasar el respeto a la vida del próji-mo. Subir el precio de un produc-to aprovechando la emergencia ya es un oportunismo condenable pero bueno, ni modo; pero de ahí a ponerle cifras de 500% o 700% de sobreprecio ya es delictivo. Un asco.

EL OXÍGENO ES VIDAY lo más penoso ha sido cómo

pequeños empresarios vieron en el oxígeno medicinal la opor-tunidad de enriquecerse de la noche a la mañana. El Estado, para variar, reacciona tarde cuando ya mucha gente ha muerto esperando un poco de oxigeno mientras sus familiares buscaban di-nero desesperadamente para poder pagar los 6 mil soles que pedían por unas horas de oxí-geno que contiene ese balón. En sus con-ciencias quedará, si es que la tienen.

EMBAJADORES DE PACOTILLA

Si bien la sus-pensión del co-bro de los pea-jes por parte del Congreso ha sido polé-mica y ha ge-

nerado muchas críticas además de una demanda de inconstitucionali-dad ante el TC, un grupo de emba-jadores (Canadá, Francia, Colombia y Australia) se mandó la parte y se atrevió a mandar una carta al pro-pio presidente del Congreso de-mostrando su inconformidad con la medida (?). Increíble pero cierto. De hecho esto fue re- c h a z a -do de plano por el Estado peruano y los embajadores reconocieron su

DIRECTORRamón Espejo Castañeda

REDACCIÓNJeans Carlos Campos CarbajalRuby Pimentel AnhuamánViviana Rodriguez Revilla

COLUMNISTASAníbal Quiroga LeónSergio Verastegui Valderrama

DISEÑO Y DIAGRAMACIÓNOscar Luis Bravo

DIRECCIÓNJr. Centenario 348 Breña

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Ramón Espejo (*)

Y, desgraciadamente, el dolor crece en el mundo a cada rato, crece a treinta minutos por segundo, paso a paso,

La muerte es la espada de Damocles con la que nacemos y vivimos. Nos acompaña con su amenazante guadaña que preferimos ig-norar, sea por conveniencia o simplemente por forzada costumbre. Esta pandemia, sin embargo, se encargó de darle su privilegiado lugar, a diestra y siniestra. Todos han muerto en estos meses y de cierto modo, todos hemos muerto también. Hoy murió el padre de un amigo a quien también consideré un amigo, como esas presencias que acompañan toda tu existencia por añadidura. Ha sido duro saberle partir. Personificar las cifras de deceso en un rostro familiar, con marcados rasgos de nobleza en la piel, hincha del Muni elegante, con una inteligencia cultivada que no sabía de premuras para escoger la palabra bien dicha, que la prisa es solo para los ladrones y los malos toreros.

y la naturaleza del dolor, es el dolor dos veces y la condición del martirio, carnívora, voraz,es el dolor dos vecesy la función de la yerba purísima, el dolordos vecesy el bien de ser, dolernos doblemente.

Mi amigo con 80 años murió luego de tres días sentado en una silla de ruedas en un pasillo del hospital Almenara, esperando una cama que nunca llegó. En tv el presidente decía en su habitual conferencia que aún había cuartos UCI disponibles y celebraba que habilitaría miles más “para que nadie quede sin ser atendido”. Yo le creí.

Jamás, hombres humanos,hubo tanto dolor en el pecho, en la solapa, en la cartera,en el vaso, en la carnicería, en la aritmética!Jamás tanto cariño doloroso,jamás tanta cerca arremetió lo lejos,jamás el fuego nuncajugó mejor su rol de frío muerto!

Me ha dolido su partida y el dolor sigue creciendo por el desparpajo del sistema. Duele además la muerte parcial de los familiares que reciben al ser amado en un frasco con cenizas. El familiar es quien queda hecho polvo. El dios es él.

Jamás, señor ministro de salud, fue la saludmás mortaly la migraña extrajo tanta frente de la frente!Y el mueble tuvo en su cajón, dolor,el corazón, en su cajón, dolor,la lagartija, en su cajón, dolor.

Nuestro país también ha muerto un poco. Ha expuesto lo peor de nuestra condición humana de manera sistemática. Nos volvió jueces de la pobreza, sicarios del negocio, asesinos a gran escala, cómplices de las mentiras del gobierno, cínicos sobrevivientes de una pandemia que se lleva lo mejor de nosotros.

¡Cómo, hermanos humanos,no deciros que ya no puedo yya no puedo con tanto cajón,tanto minuto, tantalagartija y tantainversión, tanto lejos y tanta sed de sed!

Un sector ha sido pujante y clave: El que se reinventó, el que respetó con estoicismo, el que no sucumbió al aplauso fácil pero mostró la verdadera solidaridad, que sufrió como propio el sufrimiento del hermano y hoy vuelve a la vida para tratar se ser mejor. Sobre esa base hay que reconstruir. Nada nos devolverá al amigo, nada aplacará la ausencia del familiar perdido, nada secará nuestras lágrimas negras de impotencia, pero mañana cuando salga el sol podremos decir con la frente en alto que hoy aspiramos a ser mejores que ayer, que descansen en paz, que pronto nos veremos para estar juntos y conversar de este mal episodio, que hay que reconstruir esto con mucha paciencia, que la prisa es para los ladrones y los malos toreros.

Señor Ministro de Salud: ¿qué hacer?¡Ah! desgraciadamente, hombre humanos,hay, hermanos, muchísimo que hacer.

Más de nueve monstruosSi las clínicas están haciendo cobros indebidos, también deberían ser acusadas (de traición a la patria). Y si nosotros los ciudadanos no hacemos las cosas bien, lo mismo. Y a mis colegas que en un hospital esconden un ventilador, también, ¿verdad? Y si yo pido un ventilador y no lo conectan al día siguiente, eso es también traición a la patria (...) Yo acusaría de traición a la patria a todos aquellos que no usan mascarilla, a todos aquellos que especulan con las mascarillas, los medicamentos. ¡Nos estamos muriendo!

Lustrabotas de Cajamarcaemplean escudo de madera

Para mantener distancia por Covid-19

Pilar Mazzetijefa del Comando COVID-19 y

exministra de Salud

A Abdón León Cárdenas y todos los que se van.

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/05JUNIO / 2020 POLÍTICA

Por: Viviana Rodrí[email protected]

OPINIÓNAníbal Quiroga León ([1])

([1]) Jurista. Profesor Principal PUCP

En su última “conferencia de prensa vertical y reglada”, el Presidente de la República al responder el nuevo dardo envenenado de ATV de ten-er que referirse -malaya su suerte- al escándalo farandulero/político

Swing, no cabe duda que pegó un capotazo y volteando la respuesta en 360° empezó por victimizarse por una foto antigua corrida en redes y, sin responder el eje central del tema, terminó hablando de la maratón de Gla-dys Tejeda, las medallas de oro de los Panamericanos y el orgullo nacional. Sólo faltó, como en los estadios de Rusia 2018 cuando jugaba la selección peruana, ponerse de pie y entonar “Contigo Perú” al mejor estilo del Zambo Cavero.Fue uno de los “bullets” que le habían preparado para la ocasión, para que la pregunta de marras -si nuevamente tocaba en suerte- no le pillara de-sprevenido como la primera vez, dejándolo sin aire, y sin una respuesta coherente. Los profesionales del marketing político hablan de los “bullets” como frases cortas que se repiten machaconamente para que queden en el imaginario popular. Los llamados “bullet points” son frases o ideas cor-tas que recogen las características principales de un producto político. Sus destinatarios (nosotros) debemos entender rápidamente lo que es o quiere el producto. El Presidente los usa permanentemente y, en algunos casos, le venden “bullets” copiados, como -por ejemplo- “el Perú primero”, toma-da de la política norteamericana “America First”; o aquella expresión “Debo alejarme hoy, para poder abrazarte mañana” copiada del Primer Ministro italiano. Otras son nativas: “nos apegamos estrictamente a la Constitución”; “en nuestro gobierno hay tolerancia cero a la corrupción”; “todos los fun-cionarios públicos que prestan servicio al Estado han sido convocados por estricta meritocracia”; o, “no me van a doblegar”; etc. Finalmente, como bien aconsejaba un viejo político, se responde lo que se quiere, no lo que te pre-guntan.Sin embargo, en medio de una pandemia que aún no hemos domeñado, con carencias esenciales en materia de salubridad (lo del oxígeno medicinal es escandalosamente obsceno) o actitudes socio-económicas inadmisibles en las que brilla por su ausencia la mínima solidaridad (como el que las clíni-cas cobren por pruebas moleculares que no realizan, y que el Instituto Na-cional de Salud hace gratuitamente, o que las empresas de telefonía amen-acen, cuales “hombrecitos amarillos”, el cortar abruptamente los servicios de conectividad (datos e internet) con la complaciente anuencia del OSIPTEL, el regulador que no regula y que juega para las grandes empresas; la actividad política también enfrenta mínimos. Por eso tanto populismo en el Congreso y por eso el espectáculo de la semana pasada: un Premier que se resistía a pedir un voto de confianza por temor a su negación, ante un Congreso que -nacido de la improvisación, la prisa y las encuestas, con el “síndrome de Estocolmo” a cuestas- se lo iba a conceder de todas maneras, también por temor.Quizás por ello mismo sea el momento de plantearse en serio un recambio ministerial profundo. El Poder Ejecutivo también requiere de una necesaria oxigenación, lo que no significa que todos los ministros deban o tengan que irse, pues los mejores y funcionales a la pandemia -que no son la mayoría, lastimosamente- podrían ser reconfirmados. Pero esencialmente la cabeza del Consejo de Ministros debería cambiar: el Premier.Si, como ha dicho el Presidente de la República, se trata de meritocracia y de buscar a los mejores, hay varios peruanos y peruanas que con holgura podrían ocupar ese cargo y colaborar más eficientemente a sacarnos de la pandemia, liderar a los ministros, tener la vocería apropiada del Poder Ejec-utivo, y ayudarnos a salir de la grave secuela de crisis económica, social, de seguridad y credibilidad que aún tendremos por delante. Pero, claro, eso pasa porque el Presidente honre su promesa de buscar meritocracia para el aparato del Estado y no la anteponga a la mera lealtad e incondicionalidad que, al parecer, es la característica básica su relación con el actual Premier y la razón de su permanencia.

Un necesario recambio ministerial

04/ JUNIO / 2020POLÍTICA

que cien soldados en un mes”“Richard Swing gana al día más

“Creo que el hecho maci-zo de que en nuestro país exista un 70 por ciento

de personas que trabajan in-formalmente tiene sus venta-jas y sus desventajas. La gran desventaja es que es gente que no tiene acceso al sistema bancario, ni en forma plena al sistema de salud ni a los dife-rentes sistemas de beneficios que proporciona el Estado; y la gran ventaja es que esa gente está día a día preocupada por ver cómo subsiste sin deberle nada al Estado. Los miembros de ese alto porcentaje de pe-ruanos trabajan y subsisten por su cuenta, por ellos mis-mos. No dependen de nadie, son independientes: solamen-te necesitan un espacio donde desarrollar sus labores, sobre todo en estos momentos de crisis social motivada por las medidas económicas y sanita-rias ordenadas por el Gobier-no. Es más, esa gente informal es la más independiente del país. No depende de ninguna ideología ni de ninguna agru-pación política”, nos dice el general Roberto Chiabra, mar-cando la cancha.

Preguntado por qué hay tantas voces que sugieren que el estado de emergen-cia se prolongue, el toque de queda permanezca en todo el país (quizá por el miedo a los asaltantes y ladrones) y la más grande cuarentena del planeta dure un poco más con algunos ajustes, Chiabra dice: “significa que están asumien-do que la estrategia que han aplicado está fracasando o no le tienen confianza, porque si han proyectado que de aquí a diciembre hay que mante-ner el estado de emergencia

Dirigió a las tropas peruanas en el frente de batalla del Alto Cenepa, ganó la guerra y, luego, tuvo el honor de comandar el Ejército en las etapas posteriores a la caída de Alberto Fujimori. Sus opiniones no solo toman en cuenta el tema militar, sino todo lo que conforma

nuestro tejido social, que en países tan antiguos y de tanta diversidad como el nuestro es incomprensible para los extranjeros. Y a veces hasta para los que no han salido nunca de Lima o han preferido conocer otros países antes que el nuestro. Habla Roberto Chiabra.

Después de la pandemia hay que hablar menos y hacer más. Hay gente capaz que no quiere trabajar para el Estado porque

no quiere terminar presa. Por eso abundan los mediocres en la administración pública.

han pasado cuatro años de gobierno, ya estamos todos de salida. Creo que el ministro de Defensa está haciendo una buena tarea porque ha hecho que la gente se de cuenta nuevamente que las Fuerzas Armadas son las institucio-nes en las que se soporta el Estado. No solamente en esta emergencia sanitaria, porque debemos recordar lo que hi-cieron las FF.AA. ante el Fenó-meno del Niño Costero. Suce-de, también, que las Fuerzas Armadas están disimulando la incompetencia de los minis-tros civiles, pero yo creo que este a Gobierno no me va a llamar”.

“Debemos orientar todo nuestro esfuerzo en cómo hacemos para ayudar a todos esos formales que hemos convertido en informales, en ambulantes, por estas medi-das económicas mal elabo-radas. No puede ser que los burócratas les digan a los for-males que recién van a abrir sus negocios en noviembre. Con eso les estás diciendo que se conviertan en ambu-lantes. Ahora hay más que nunca. No puede ser que a las clases medias más vulne-rables las empujes a la pobre-za. No es posible que la suma del Covid-19 y la incompe-tencia del sector Economía -y del Gobierno en general- haya hecho que la clase me-dia perdió lo que se logró en 5 o 10 años”, dice con su habi-tual contundencia.

¿Qué hacer cuándo la pandemia retroceda y haya que poner a caminar nuevamente a un país gol-peado y empobrecido?

“Reorganizar la es-tructura gubernamental. El Perú no puede seguir manteniendo 18 ministe-rios que tienen funciones superpuestas y sin respon-sabilidades definidas. Un ejemplo concreto y peno-so es el de los retornantes, a los cuales los ve la minis-tra de Ambiente, pero la responsabilidad no asumi-da es del Ministerio de la Mujer y de las Poblaciones Vulnerables. No se puede tener a dos ministros con-trolando mercados y para-deros. Entonces, lo prime-ro es la reestructuración ministerial.

Tampoco es posible que cada vez qué hay un evento recurrente tú re-curras a un “zar” o a un “notable“. Para reconstruir el Norte, un zar; para refor-mar la política, otro; para volver justa a la justicia, un tercero. Eso solo significa que los que están en las cabezas de los ministerios son una sarta de incompe-tentes. También hay que repensar la descentraliza-ción, que ya tiene 20 años de edad... hay que ver si en esta crisis algún goberna-dor ha servido para algo. Hay que ver qué hacemos con regiones tan aisladas como Loreto, adonde solo se llega por avión. Hay que erradicar la corrupción de a verdad y no con discur-sos grandilocuentes.

Hay que habilitar o re-habilitar los 30 mil o 35 mil colegios en pésimo esta-do. Hay que ponerles agua y desagüe a todos ellos. No es justo que solo 3 de cada 10 colegios esté en regula-res condiciones. Ninguna autoridad educativa ha dicho que durante los me-ses sin clases presenciales, el Ministerio se dedicará a dotar de agua y desagüe a esos locales, a pintarlos y reforzar sus estructuras, a reparar carpetas, pizarras, pisos y ventanas. Nadie ha dicho nada.

Hay que reformar, cam-biar o parar de cabeza a la burocracia encargada de auxiliar a los más pobres, entregarles los bonos, ahora, y los desayunos es-colares, antes de la llega-da del virus. No se puede ser indolente además de incompetente. Los bonos han comprobado qué hay dos millones de peruanos ene ene: no reciben bonos, no reciben canastas, no tie-nen educación virtual, no tienen acceso a los bancos. ¿Donde están el MIDIS y to-dos los demás organismos de la incompetencia, de la indolencia y de las aseso-rías inútiles”.

Vizcarra y el futuro“Vizcarra llegó al poder

sin saber cómo, y a los dos meses ya quería irse. Re-cordemos que hace ya un buen tiempo quiso el re-corte de los mandatos y el adelanto electoral, por eso a cada rato dice y repite que

el 28 de julio de 2021 se va. No hemos aprendido nada después de 20 años de subversión. Creo que si después de este Covid-19 no hacemos las reformas necesarias para que el país camine corremos el riesgo de convertirnos en un estado fallido. La única ventaja es que, a pesar de todo, somos un país rico. Después de la pandemia hay que hablar menos y hacer más. Hay gente ca-paz que no quiere trabajar para el Estado porque no quiere terminar presa. Por eso abundan los medio-cres en la administración pública. Por eso los que están en el poder y en esa administración se la llevan en paila. Si por bailar te pagan 15 mil soles y si por hablar babas te pagan lo mismo, para qué vas a tra-bajar. Un sujeto llamado Swing gana en una hora lo que 100 soldados ganan en un mes”.

y estamos recién en junio, sig-nifica que en los próximos seis meses no vamos a tener nada eficaz. Lo que tendrían que ha-cer ahora es trabajar en forma conjunta por sectores. Si están las 24 horas del día en las calles por qué no se organizan en sectores, de tal manera que en cada sector siempre exista un elemento policial o militar, que sean los que actúen de inme-diato ante un robo asalto”

Como intuyo que el guerre-ro de mil batallas ha entrado en calor, le pregunto qué haría si es llamado por el Gobier-no para un nuevo servicio a la Patria. El general responde: “personalmente creo que va a ser difícil que me llamen, ya Roberto Chiabra

Luego de haber avanzado

LOS INFORMALES NO LE DEBEN NADA AL ESTADO

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/05JUNIO / 2020 POLÍTICA

Por: Viviana Rodrí[email protected]

OPINIÓNAníbal Quiroga León ([1])

([1]) Jurista. Profesor Principal PUCP

En su última “conferencia de prensa vertical y reglada”, el Presidente de la República al responder el nuevo dardo envenenado de ATV de ten-er que referirse -malaya su suerte- al escándalo farandulero/político

Swing, no cabe duda que pegó un capotazo y volteando la respuesta en 360° empezó por victimizarse por una foto antigua corrida en redes y, sin responder el eje central del tema, terminó hablando de la maratón de Gla-dys Tejeda, las medallas de oro de los Panamericanos y el orgullo nacional. Sólo faltó, como en los estadios de Rusia 2018 cuando jugaba la selección peruana, ponerse de pie y entonar “Contigo Perú” al mejor estilo del Zambo Cavero.Fue uno de los “bullets” que le habían preparado para la ocasión, para que la pregunta de marras -si nuevamente tocaba en suerte- no le pillara de-sprevenido como la primera vez, dejándolo sin aire, y sin una respuesta coherente. Los profesionales del marketing político hablan de los “bullets” como frases cortas que se repiten machaconamente para que queden en el imaginario popular. Los llamados “bullet points” son frases o ideas cor-tas que recogen las características principales de un producto político. Sus destinatarios (nosotros) debemos entender rápidamente lo que es o quiere el producto. El Presidente los usa permanentemente y, en algunos casos, le venden “bullets” copiados, como -por ejemplo- “el Perú primero”, toma-da de la política norteamericana “America First”; o aquella expresión “Debo alejarme hoy, para poder abrazarte mañana” copiada del Primer Ministro italiano. Otras son nativas: “nos apegamos estrictamente a la Constitución”; “en nuestro gobierno hay tolerancia cero a la corrupción”; “todos los fun-cionarios públicos que prestan servicio al Estado han sido convocados por estricta meritocracia”; o, “no me van a doblegar”; etc. Finalmente, como bien aconsejaba un viejo político, se responde lo que se quiere, no lo que te pre-guntan.Sin embargo, en medio de una pandemia que aún no hemos domeñado, con carencias esenciales en materia de salubridad (lo del oxígeno medicinal es escandalosamente obsceno) o actitudes socio-económicas inadmisibles en las que brilla por su ausencia la mínima solidaridad (como el que las clíni-cas cobren por pruebas moleculares que no realizan, y que el Instituto Na-cional de Salud hace gratuitamente, o que las empresas de telefonía amen-acen, cuales “hombrecitos amarillos”, el cortar abruptamente los servicios de conectividad (datos e internet) con la complaciente anuencia del OSIPTEL, el regulador que no regula y que juega para las grandes empresas; la actividad política también enfrenta mínimos. Por eso tanto populismo en el Congreso y por eso el espectáculo de la semana pasada: un Premier que se resistía a pedir un voto de confianza por temor a su negación, ante un Congreso que -nacido de la improvisación, la prisa y las encuestas, con el “síndrome de Estocolmo” a cuestas- se lo iba a conceder de todas maneras, también por temor.Quizás por ello mismo sea el momento de plantearse en serio un recambio ministerial profundo. El Poder Ejecutivo también requiere de una necesaria oxigenación, lo que no significa que todos los ministros deban o tengan que irse, pues los mejores y funcionales a la pandemia -que no son la mayoría, lastimosamente- podrían ser reconfirmados. Pero esencialmente la cabeza del Consejo de Ministros debería cambiar: el Premier.Si, como ha dicho el Presidente de la República, se trata de meritocracia y de buscar a los mejores, hay varios peruanos y peruanas que con holgura podrían ocupar ese cargo y colaborar más eficientemente a sacarnos de la pandemia, liderar a los ministros, tener la vocería apropiada del Poder Ejec-utivo, y ayudarnos a salir de la grave secuela de crisis económica, social, de seguridad y credibilidad que aún tendremos por delante. Pero, claro, eso pasa porque el Presidente honre su promesa de buscar meritocracia para el aparato del Estado y no la anteponga a la mera lealtad e incondicionalidad que, al parecer, es la característica básica su relación con el actual Premier y la razón de su permanencia.

Un necesario recambio ministerial

04/ JUNIO / 2020POLÍTICA

que cien soldados en un mes”“Richard Swing gana al día más

“Creo que el hecho maci-zo de que en nuestro país exista un 70 por ciento

de personas que trabajan in-formalmente tiene sus venta-jas y sus desventajas. La gran desventaja es que es gente que no tiene acceso al sistema bancario, ni en forma plena al sistema de salud ni a los dife-rentes sistemas de beneficios que proporciona el Estado; y la gran ventaja es que esa gente está día a día preocupada por ver cómo subsiste sin deberle nada al Estado. Los miembros de ese alto porcentaje de pe-ruanos trabajan y subsisten por su cuenta, por ellos mis-mos. No dependen de nadie, son independientes: solamen-te necesitan un espacio donde desarrollar sus labores, sobre todo en estos momentos de crisis social motivada por las medidas económicas y sanita-rias ordenadas por el Gobier-no. Es más, esa gente informal es la más independiente del país. No depende de ninguna ideología ni de ninguna agru-pación política”, nos dice el general Roberto Chiabra, mar-cando la cancha.

Preguntado por qué hay tantas voces que sugieren que el estado de emergen-cia se prolongue, el toque de queda permanezca en todo el país (quizá por el miedo a los asaltantes y ladrones) y la más grande cuarentena del planeta dure un poco más con algunos ajustes, Chiabra dice: “significa que están asumien-do que la estrategia que han aplicado está fracasando o no le tienen confianza, porque si han proyectado que de aquí a diciembre hay que mante-ner el estado de emergencia

Dirigió a las tropas peruanas en el frente de batalla del Alto Cenepa, ganó la guerra y, luego, tuvo el honor de comandar el Ejército en las etapas posteriores a la caída de Alberto Fujimori. Sus opiniones no solo toman en cuenta el tema militar, sino todo lo que conforma

nuestro tejido social, que en países tan antiguos y de tanta diversidad como el nuestro es incomprensible para los extranjeros. Y a veces hasta para los que no han salido nunca de Lima o han preferido conocer otros países antes que el nuestro. Habla Roberto Chiabra.

Después de la pandemia hay que hablar menos y hacer más. Hay gente capaz que no quiere trabajar para el Estado porque

no quiere terminar presa. Por eso abundan los mediocres en la administración pública.

han pasado cuatro años de gobierno, ya estamos todos de salida. Creo que el ministro de Defensa está haciendo una buena tarea porque ha hecho que la gente se de cuenta nuevamente que las Fuerzas Armadas son las institucio-nes en las que se soporta el Estado. No solamente en esta emergencia sanitaria, porque debemos recordar lo que hi-cieron las FF.AA. ante el Fenó-meno del Niño Costero. Suce-de, también, que las Fuerzas Armadas están disimulando la incompetencia de los minis-tros civiles, pero yo creo que este a Gobierno no me va a llamar”.

“Debemos orientar todo nuestro esfuerzo en cómo hacemos para ayudar a todos esos formales que hemos convertido en informales, en ambulantes, por estas medi-das económicas mal elabo-radas. No puede ser que los burócratas les digan a los for-males que recién van a abrir sus negocios en noviembre. Con eso les estás diciendo que se conviertan en ambu-lantes. Ahora hay más que nunca. No puede ser que a las clases medias más vulne-rables las empujes a la pobre-za. No es posible que la suma del Covid-19 y la incompe-tencia del sector Economía -y del Gobierno en general- haya hecho que la clase me-dia perdió lo que se logró en 5 o 10 años”, dice con su habi-tual contundencia.

¿Qué hacer cuándo la pandemia retroceda y haya que poner a caminar nuevamente a un país gol-peado y empobrecido?

“Reorganizar la es-tructura gubernamental. El Perú no puede seguir manteniendo 18 ministe-rios que tienen funciones superpuestas y sin respon-sabilidades definidas. Un ejemplo concreto y peno-so es el de los retornantes, a los cuales los ve la minis-tra de Ambiente, pero la responsabilidad no asumi-da es del Ministerio de la Mujer y de las Poblaciones Vulnerables. No se puede tener a dos ministros con-trolando mercados y para-deros. Entonces, lo prime-ro es la reestructuración ministerial.

Tampoco es posible que cada vez qué hay un evento recurrente tú re-curras a un “zar” o a un “notable“. Para reconstruir el Norte, un zar; para refor-mar la política, otro; para volver justa a la justicia, un tercero. Eso solo significa que los que están en las cabezas de los ministerios son una sarta de incompe-tentes. También hay que repensar la descentraliza-ción, que ya tiene 20 años de edad... hay que ver si en esta crisis algún goberna-dor ha servido para algo. Hay que ver qué hacemos con regiones tan aisladas como Loreto, adonde solo se llega por avión. Hay que erradicar la corrupción de a verdad y no con discur-sos grandilocuentes.

Hay que habilitar o re-habilitar los 30 mil o 35 mil colegios en pésimo esta-do. Hay que ponerles agua y desagüe a todos ellos. No es justo que solo 3 de cada 10 colegios esté en regula-res condiciones. Ninguna autoridad educativa ha dicho que durante los me-ses sin clases presenciales, el Ministerio se dedicará a dotar de agua y desagüe a esos locales, a pintarlos y reforzar sus estructuras, a reparar carpetas, pizarras, pisos y ventanas. Nadie ha dicho nada.

Hay que reformar, cam-biar o parar de cabeza a la burocracia encargada de auxiliar a los más pobres, entregarles los bonos, ahora, y los desayunos es-colares, antes de la llega-da del virus. No se puede ser indolente además de incompetente. Los bonos han comprobado qué hay dos millones de peruanos ene ene: no reciben bonos, no reciben canastas, no tie-nen educación virtual, no tienen acceso a los bancos. ¿Donde están el MIDIS y to-dos los demás organismos de la incompetencia, de la indolencia y de las aseso-rías inútiles”.

Vizcarra y el futuro“Vizcarra llegó al poder

sin saber cómo, y a los dos meses ya quería irse. Re-cordemos que hace ya un buen tiempo quiso el re-corte de los mandatos y el adelanto electoral, por eso a cada rato dice y repite que

el 28 de julio de 2021 se va. No hemos aprendido nada después de 20 años de subversión. Creo que si después de este Covid-19 no hacemos las reformas necesarias para que el país camine corremos el riesgo de convertirnos en un estado fallido. La única ventaja es que, a pesar de todo, somos un país rico. Después de la pandemia hay que hablar menos y hacer más. Hay gente ca-paz que no quiere trabajar para el Estado porque no quiere terminar presa. Por eso abundan los medio-cres en la administración pública. Por eso los que están en el poder y en esa administración se la llevan en paila. Si por bailar te pagan 15 mil soles y si por hablar babas te pagan lo mismo, para qué vas a tra-bajar. Un sujeto llamado Swing gana en una hora lo que 100 soldados ganan en un mes”.

y estamos recién en junio, sig-nifica que en los próximos seis meses no vamos a tener nada eficaz. Lo que tendrían que ha-cer ahora es trabajar en forma conjunta por sectores. Si están las 24 horas del día en las calles por qué no se organizan en sectores, de tal manera que en cada sector siempre exista un elemento policial o militar, que sean los que actúen de inme-diato ante un robo asalto”

Como intuyo que el guerre-ro de mil batallas ha entrado en calor, le pregunto qué haría si es llamado por el Gobier-no para un nuevo servicio a la Patria. El general responde: “personalmente creo que va a ser difícil que me llamen, ya Roberto Chiabra

Luego de haber avanzado

LOS INFORMALES NO LE DEBEN NADA AL ESTADO

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que no cree en mesetasHambre vs Salud, el punto crítico

Aglomeraciones, desorden y caos. Esta es la descrip-ción de lo que se ha visto

las últimas semanas en los alre-dedores del emporio comercial de Gamarra, ubicado en el distri-to de La Victoria, donde vende-dores ambulantes llegaron para vender alimentos preparados, ropas, audífonos, entre otros artículos que no son de primera necesidad en plena pandemia del coronavirus, convirtiendo el sitio en un foco infeccioso.

Se juzga la exposición de es-tas personas, pero muchos des-conocen que ellos sobreviven de lo que ganan en el día a día. Para entender cómo la informalidad ha sido uno de los factores que ha contribuido al incumplimien-to de la cuarentena obligatoria, el economista Jesús Collazos Ce-rrón explica que se debe evaluar desde dos puntos de vista: del lado de la informalidad y sobre la gestión el gobierno. El primero, explica, se trata de un sector que representa el 70% aproximada-mente de la población económi-camente activa dedicada a dife-rentes actividades.

“(Esta población es) caracte-rizada por la falta de disciplina, cultura y ahora empujada por una necesidad tremenda de carácter económico, lo cual los ha impulsado a incumplir con las normas requeridas por el Gobierno para mantener el dis-tanciamiento y para contribuir a que haya menos contagios y menos letalidad”, sostiene.

Sobre el punto relacionado a la gestión de gobierno, Colla-zos refiere que no ha sido la más apropiada pues explica que no tenía un plan de contingencia para situaciones así, además la falta de servicios de asistencia médica a nivel nacional y de no contar con un asesoramiento adecuado de profesionales con-tribuyeron a ello. No obstante, precisa que los gobiernos regio-nales y locales tampoco tuvie-ron un papel acertado.

“(El Gobierno) tenía que ase-sorarse de gente que conozca el comportamiento de estas masas, gente que pueda orientarlo a to-mar mejores decisiones para ir soltando en qué rubros y activida-

Cerca de cumplir tres meses en cuarentena, un sector de la población se ha visto obligado a salir a trabajar para llevar un alimento a su hogar y compartirlo con toda la familia. Sin bonos, canastas

ni ningún apoyo del Estado, prefieren calmar el hambre antes que cuidar la salud. ¿Es que acaso lo peor está por llegar?

Por: Jean Carlos [email protected]

males no debe enmarcarse en posturas a favor o en contra del derecho laboral. “Se trata del or-den y de la responsabilidad que como ciudadanos tenemos ante los demás y ante la sociedad en su conjunto. Si nos quedamos sólo en el “necesitan trabajar” entonces pronto seremos los lí-deres mundiales del COVID-19”, manifestó.

La solución, para Parodi, se encuentra en la aplicación del principio de autoridad, seguido de la educación pública y priva-da y demás medidas que, por más que parezcan duras, resul-tan necesarias anteponiendo el bien común, pero teniendo una actitud propositiva, planteando en soluciones posibles para la ansiada formalización, que hoy más que nunca todos necesitan para evitar la expansión de la enfermedad.

Esto es solo una muestra de las profundas desigualdades que hay en el Perú y que por lo tanto no todos enfrentan en las mismas condiciones la crisis generada por la pandemia del coronavirus que hasta la fecha bordea los 200 mil contagiados y los 6,000 fallecidos en el todo el país.

des (se puede permitir el reinicio de sus economías)”, consideró.

Una señora contó a un no-ticiero matutino que volvió a la informalidad forzosamente ante la necesidad de generar in-gresos para mantener a sus dos menores hijos y para poder pa-gar el préstamo del banco que había usado para formalizar su negocio de venta de productos naturales justo antes de la pro-

pagación de la enfermedad tras haber sido ambulante por diez años seguidos. Un triste caso que al parecer se repetirá inevi-tablemente.

La mirada de un historiadorPara el historiador Daniel Pa-

rodi Revoredo, la informalidad es consecuencia de que el Es-tado no haya podido satisfacer las demandas de la población

peruana. “El Perú informal, y es comprensible que así haya sido, se construyó durante el último medio siglo de vida indepen-diente desde otros principios, ante el desborde popular más absoluto, y la consecuente in-capacidad del Estado por sa-tisfacer las demandas sociales”, agregó.

En tal sentido, sostuvo que el tema de los comerciantes infor-

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Por: Ruby [email protected]

mentales post cuarentenaCuidado con las enfermedades

Con el progresivo desconfi-namiento que se está dan-do de a pocos en el país,

llegará una nueva normalidad que no va a ser fácil asumir. Y aunque en un inicio de la cuaren-tena vivimos cierta euforia por salir a las calles, hoy en día, tras varios meses de confinamiento, muchas personas tendrán que afrontar las consecuencias psi-cológicas.

Laura nos cuenta preocupa-da que la situación que vive con su novio la tiene mortificada porque desde que empezó la crisis sanitaria, Ramón, su chico, empezó a cambiar. “Él siempre fue una persona equilibrada y tranquila, ahora anda muy ner-vioso, siente que ve al virus per-siguiendolo por todos lados y no para de desinfectarse muchas veces con exceso, cuando no sale de casa para nada”. Cuando ella intenta tranquilizarlo recibe como respuesta que es necesa-rio hacerlo “para estar a salvo”. Ramón no ha salido de casa des-de que se inició la pandemia, ha renunciado a su trabajo y tiene pavor que acabe la cuarentena porque dice que “allá afuera está en peligro”.

Conversamos con el médi-co psiquiatra Carlos Bromley, quien advierte que “sería absur-do pensar que tras la pandemia por el Covid-19, el mundo re-grese a ser el mismo de antes”. Desde los procedimientos has-ta la convivencia pasando por el trabajo y la vida social, todo cambiará radicalmente, señala el doctor Bromley. “Aunque in-tentemos minimizar el temor a un posible contagio, la sensa-ción de inseguridad estará pre-sente en cada momento. Es por esto, que ahora más que nunca

/07JUNIO / 2020 ESPECIAL

fobia (miedo a contaminarse o ensuciarse) y el síndrome de la cabaña (no querer salir de casa). Ambos relacionados al temor de tener contacto con personas del exterior. Esto podría convertirse en un serio problema para los negocios, si no son atendidos a tiempo por algún especialista”, mencionó Bromley.

En este caso, Laura tendrá que entender que ella sola no po-drá ayudar a Ramón, por lo que tendrá que acudir con un psicó-logo para que lo oriente a que, además de seguir las medidas necesarias para evitar contagios, pueda restablecer la seguridad y estabilidad mental que perdió en este tiempo. Él estaría atrave-sando por un cuadro de misofo-bia y el síndrome de la cabaña. No es una tarea fácil de superar, pero tampoco imposible.

los empleadores deben brindar-le la seguridad a sus trabajado-res aplicando todos los protoco-los de bioseguridad y sanidad, que establezca el Estado”.

Incluso, Bromley recomienda a las familias contratar los servi-cios de un psicólogo que apoye en el restablecimiento de la se-guridad de las personas que se han visto afectadas. Lo mismo in-dica a las empresas para obtener el buen rendimiento de sus em-pleados. De lo contrario, serán personas inseguras e inestables y, por ende, mostrarán deficien-cia en las actividades que hagan fuera de casa o en el trabajo.

“Tras este tiempo de aisla-miento es muy probable que se presente dos tipos de enferme-dades mentales leves: la miso-

LA MISOFOBIA Y EL SÍNDROME DE LA CABAÑA SON SECUELAS DEL ENCIERRO

La emergencia Nacional, el cambio de rutina, el confinamiento prolongado y a esto hay que añadirle situaciones traumáticas como el incremento constante del número de fallecidos, o la

impotencia de las personas de saber morir a sus familiares o amigos y no poder despedirlos con un velorio o entierro rodeado de cariño y afecto. Todo esto ha reforzado el pánico al contagio, pero esto

no es la única consecuencia de la pandemia que afecta nuestra mente.

Deben tomar en cuenta estas recomendaciones para brindar-les seguridad de bienestar a esas personas que después de

meses de confinamiento regresan a retomar sus labores con miedo a contraer el Covid-19 en cualquier momento.

Las empresas que están reintegrando a sus empleados

Proporcionar instalaciones adecuadas para el lavado de manos, desinfectante de manos y pañuelos de papel. Es necesario prestarle mucha atención a los síntomas que presen-ten los trabajadores cuando regresen a sus centros laborales. Si queremos trabajadores productivos, debemos apoyarlos a supe-rar las consecuencias de esta pandemia. Limpiar las áreas comunes con mucha frecuencia. Brindar información a los empleados sobre los síntomas causados por el virus y sobre qué deben hacer si tienen dudas. Mantener actualizados a los empleados sobre los cambios en las políticas y prácticas laborales, a causa de la propagación del virus.

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08/ /09JUNIO / 2020

“Estamos como quin-ceañera, emocionados”, comenta Cristian Ri-

vero al contarnos sobre el regreso de ‘Yo soy’ pero ahora bajo el nombre ‘Yo soy, grandes batallas’, tí-tulo que viene acorde con los tiempos. “Con la pan-demia nos quedamos en el aire. Estábamos preocu-pados por lo que íbamos a hacer, porque ‘Yo soy’ es la vitrina que reconoce el ta-lento peruano y afortuna-damente hace un mes nos

ENTREVISTA

“Para recibir hay que dar, es una manera de Sin duda este tiempo ha ser-vido para unirlos más

como familia Hay gente a la

que le ha ido muy bien, hay g e n t e que ha termina-

do sepa-rándose. A

nosotros nos ha servido para co-

nocernos más y también para ser empáticos, porque hay que ser conscientes de la realidad que estamos vi-viendo, hay que ser más co-laboradores y ayudar en lo que podamos. Hay que ser solidarios. Practicar el efecto boomerangExactamente. Para recibir hay que dar, es una manera de hacer que la vida fun-cione. hay que restribuir, así como ganas también hay que dar. Existe gente que no tiene para su día a día, por eso no hay que criticarlos si salen a traba-jar, el sistema nos ha ex-plotado en la cara. Con los bonos no llegamos a toda la gente. El Gobierno tiene que trabajar en el sistema de salud, educación. Hay mucho por hacer. Esta cri-sis nos permite despertar de esa burbuja en la que vivíamos y creíamos que todo estaba bien.

Por: Ruby [email protected]

¿En algún momento has pen-sado dejar el país? En algún momento pensé en irme pero no fue por una si-tuación de emergencia, sino por temas de mi carrera ja-más por huir de mi país. Gia-ne experimentó por dos años y piensa lo mismo, no hay nada como tu país, tu gente, tu comida. Yo no podría irme a otro país, tengo mi familia aquí, tendría que sacarme la lotería y recibir una gran pro-puesta laboral para irme con toda mi familia (risas). Por cierto, tu imitación a Diego Boneta en el papel de Luis Mi-guel fue bastante divertida…(Risas) No soy de hacer Tik tok, no es una red que me guste mucho pero como soy fanático de Luis Miguel y tra-bajo con un equipo de redes, entonces dije voy a hacer mi versión, a los dos díaas veo que Adal Ramones hizo su imitación y yo quise hacerlo también. Giane me ayudó y aproveché para promocionar el regreso de ‘Yo soy, grandes batallas’. Entonces de pronto nos sor-prendes en un live con Diego(Risas) Le he escrito a Esto-colmo de La casa de Papel (Esther Acebo), a Ernesto la Guardia, a Christian Meier, a Ellen DeGeneres, a Jennifer López, les he escrito porque por ahí y me paran bola, lo peor que puede pasar es que no me responsan (risas)

Les contesta fuerte y claro a Andrea Llosa, Magaly Medina y Juliana Oxenford

Cristian Rivero está listo para regresar a la pantalla chica con ‘Yo soy, grandes batallas’ pero antes reflexiona en

medio de la crisis sanitaria a causa del Covid-19

inventaste…Así es, ahora tenemos más tiempo para

pensar, a veces me siento con Giane y agra-

decemos por lo que tene-mos. Nos hemos replantea-

do un montón de cosas, qué tan distanciados estábamos con nues-tro yo interior. Esta nueva dinámica 24/7 de estar todos juntos, es maravillosa. Mi hijo

no me ha dicho tantas veces te amo, pero

hoy nace de la nada. Hay momentos bonitos, estamos interrelacionán-

donos de una ma-nera mas bonita, hay

cosas que no vamos a querer que se acaben

cuando se termine la pandemia.

dieron luz verde”, agrega el conductor del reality.Para el regreso del programa de competencia artístico se tuvo que hacer un replantea-miento en el formato para que se adecúe a las disposi-ciones de las autoridades sa-nitarias. “Nos reunimos para sacar ideas que se acoplen a la normativa y sale este sub-formato del formato de ‘Yo soy’ que se llama: ‘Yo soy, grandes batallas’. Buscamos entretener a la gente que esta tan cargada de noticias, que no son las mejores, a lo lar-go del día y necesitábamos pues generar un espacio de hora y treinta o de dos

horas de entretenimiento que reúna a la familia para pasarla bien”. ‘Yo soy, grandes batallas’ pre-sentará una tribuna de cinco grandes imitadores, luego el jurado decidirá quien se que-da y quien se va. “El que se va puede volver a retar al que se queda, todos los participantes son consagrados, todos van a poder ver nuevamente a su favorito, van a disfrutar con ellos”. ‘Yo soy, grandes batallas’ con ayuda socialAdemás de brindar entreteni-miento, el programa también podrá ayudar a las familias

que se han visto afectadas en este tiempo. “Hemos he-cho una sinergia para poder sacar todo lo bonito de ‘Yo soy, grandes batallas’. Esta-mos súper contentos”, agrega Cristian que, además, nos de-talla que para poder obtener la aprobación del retorno de este espacio que se hizo ex-trañar por el público nacional y que precisamente no estará en el set pero podrá disfrutar de la participación de cada participante por televisión, se tuvo que cumplir con un estricto protocolo de biose-guridad. Por ello, aún queda en stand-by la realización del casting, por ahora solo po-

hacer que la vida funcione”

drán participar los artistas que anteriormente ya han pasado por el escenario de ‘Yo soy’.Personalmente, ¿cómo te afectó esta pandemia?Cuando se dio la medida de emergencia pensé que iba a durar dos semanas, teníamos la fe y las esperanzas (que sea así) porque se decía que se había tomado las medidas

adecuadas a tiempo, pero luego vimos que esto se alar-gaba, luego vinieron las cla-ses virtuales, gracias a Dios tenemos una computadora y otro dispositivo para que los chicos puedan conectarse en sus clases; pero ya luego em-piezo a pensar que mi cham-ba es con la gente, porque mi chamba es comunicar. Esa es

mi carrera. Entonces decido hacer lives con mis amigos: con Xiomi, Almendra, Marco Zunino, Leslie Shaw. Empiezo a rescatar sus historias de éxi-to, a saber que hay detrás de sus logros, con la finalidad de motivar a la gente. Empleaste esta palabra que se ha puesto de moda: Te re-

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“Estamos como quin-ceañera, emocionados”, comenta Cristian Ri-

vero al contarnos sobre el regreso de ‘Yo soy’ pero ahora bajo el nombre ‘Yo soy, grandes batallas’, tí-tulo que viene acorde con los tiempos. “Con la pan-demia nos quedamos en el aire. Estábamos preocu-pados por lo que íbamos a hacer, porque ‘Yo soy’ es la vitrina que reconoce el ta-lento peruano y afortuna-damente hace un mes nos

ENTREVISTA

“Para recibir hay que dar, es una manera de Sin duda este tiempo ha ser-vido para unirlos más

como familia Hay gente a la

que le ha ido muy bien, hay g e n t e que ha termina-

do sepa-rándose. A

nosotros nos ha servido para co-

nocernos más y también para ser empáticos, porque hay que ser conscientes de la realidad que estamos vi-viendo, hay que ser más co-laboradores y ayudar en lo que podamos. Hay que ser solidarios. Practicar el efecto boomerangExactamente. Para recibir hay que dar, es una manera de hacer que la vida fun-cione. hay que restribuir, así como ganas también hay que dar. Existe gente que no tiene para su día a día, por eso no hay que criticarlos si salen a traba-jar, el sistema nos ha ex-plotado en la cara. Con los bonos no llegamos a toda la gente. El Gobierno tiene que trabajar en el sistema de salud, educación. Hay mucho por hacer. Esta cri-sis nos permite despertar de esa burbuja en la que vivíamos y creíamos que todo estaba bien.

Por: Ruby [email protected]

¿En algún momento has pen-sado dejar el país? En algún momento pensé en irme pero no fue por una si-tuación de emergencia, sino por temas de mi carrera ja-más por huir de mi país. Gia-ne experimentó por dos años y piensa lo mismo, no hay nada como tu país, tu gente, tu comida. Yo no podría irme a otro país, tengo mi familia aquí, tendría que sacarme la lotería y recibir una gran pro-puesta laboral para irme con toda mi familia (risas). Por cierto, tu imitación a Diego Boneta en el papel de Luis Mi-guel fue bastante divertida…(Risas) No soy de hacer Tik tok, no es una red que me guste mucho pero como soy fanático de Luis Miguel y tra-bajo con un equipo de redes, entonces dije voy a hacer mi versión, a los dos díaas veo que Adal Ramones hizo su imitación y yo quise hacerlo también. Giane me ayudó y aproveché para promocionar el regreso de ‘Yo soy, grandes batallas’. Entonces de pronto nos sor-prendes en un live con Diego(Risas) Le he escrito a Esto-colmo de La casa de Papel (Esther Acebo), a Ernesto la Guardia, a Christian Meier, a Ellen DeGeneres, a Jennifer López, les he escrito porque por ahí y me paran bola, lo peor que puede pasar es que no me responsan (risas)

Les contesta fuerte y claro a Andrea Llosa, Magaly Medina y Juliana Oxenford

Cristian Rivero está listo para regresar a la pantalla chica con ‘Yo soy, grandes batallas’ pero antes reflexiona en

medio de la crisis sanitaria a causa del Covid-19

inventaste…Así es, ahora tenemos más tiempo para

pensar, a veces me siento con Giane y agra-

decemos por lo que tene-mos. Nos hemos replantea-

do un montón de cosas, qué tan distanciados estábamos con nues-tro yo interior. Esta nueva dinámica 24/7 de estar todos juntos, es maravillosa. Mi hijo

no me ha dicho tantas veces te amo, pero

hoy nace de la nada. Hay momentos bonitos, estamos interrelacionán-

donos de una ma-nera mas bonita, hay

cosas que no vamos a querer que se acaben

cuando se termine la pandemia.

dieron luz verde”, agrega el conductor del reality.Para el regreso del programa de competencia artístico se tuvo que hacer un replantea-miento en el formato para que se adecúe a las disposi-ciones de las autoridades sa-nitarias. “Nos reunimos para sacar ideas que se acoplen a la normativa y sale este sub-formato del formato de ‘Yo soy’ que se llama: ‘Yo soy, grandes batallas’. Buscamos entretener a la gente que esta tan cargada de noticias, que no son las mejores, a lo lar-go del día y necesitábamos pues generar un espacio de hora y treinta o de dos

horas de entretenimiento que reúna a la familia para pasarla bien”. ‘Yo soy, grandes batallas’ pre-sentará una tribuna de cinco grandes imitadores, luego el jurado decidirá quien se que-da y quien se va. “El que se va puede volver a retar al que se queda, todos los participantes son consagrados, todos van a poder ver nuevamente a su favorito, van a disfrutar con ellos”. ‘Yo soy, grandes batallas’ con ayuda socialAdemás de brindar entreteni-miento, el programa también podrá ayudar a las familias

que se han visto afectadas en este tiempo. “Hemos he-cho una sinergia para poder sacar todo lo bonito de ‘Yo soy, grandes batallas’. Esta-mos súper contentos”, agrega Cristian que, además, nos de-talla que para poder obtener la aprobación del retorno de este espacio que se hizo ex-trañar por el público nacional y que precisamente no estará en el set pero podrá disfrutar de la participación de cada participante por televisión, se tuvo que cumplir con un estricto protocolo de biose-guridad. Por ello, aún queda en stand-by la realización del casting, por ahora solo po-

hacer que la vida funcione”

drán participar los artistas que anteriormente ya han pasado por el escenario de ‘Yo soy’.Personalmente, ¿cómo te afectó esta pandemia?Cuando se dio la medida de emergencia pensé que iba a durar dos semanas, teníamos la fe y las esperanzas (que sea así) porque se decía que se había tomado las medidas

adecuadas a tiempo, pero luego vimos que esto se alar-gaba, luego vinieron las cla-ses virtuales, gracias a Dios tenemos una computadora y otro dispositivo para que los chicos puedan conectarse en sus clases; pero ya luego em-piezo a pensar que mi cham-ba es con la gente, porque mi chamba es comunicar. Esa es

mi carrera. Entonces decido hacer lives con mis amigos: con Xiomi, Almendra, Marco Zunino, Leslie Shaw. Empiezo a rescatar sus historias de éxi-to, a saber que hay detrás de sus logros, con la finalidad de motivar a la gente. Empleaste esta palabra que se ha puesto de moda: Te re-

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10/ JUNIO / 2020ESPECIAL

(Black Lives Matter) Las vidas negras importan

El pasado 25 de mayo, un policía acostumbrado a actuar sin medida ni cle-

mencia contra las personas que aparentemente vivían fuera de la ley, detuvo, sometió, esposó, tiró al piso y puso una rodilla en el cuello durante largos mi-nutos hasta que el detenido llamado George Floyd murió asfixiado. El homicidio ocurrió en Minneapolis, Minnesota, y el muerto era afroamericano, que es la forma “políticamente co-rrecta” que usan unos 280 mi-llones de norteamericanos de todos los colores para referirse a unos 40 millones de personas descendientes de los africanos que llegaron a América luego de ser secuestrados y transpor-tados como animales en unos buques usados en un comercio inmoral, pero absolutamente legal, desde agosto de 1619 hasta 1865, es decir, durante casi dos siglos y medio.

Tras ese brevísimo resumen de la más infame de las prácti-cas utilizadas por los hombres para explotar a sus semejantes, habría que preguntar: ¿en qué momento de los 400 años que han pasado desde que unos africanos abandonaron los bu-ques para trabajar como bestias en los arrozales de las Carolinas, en las minas de Pensilvania o en los algodonales de Misisipi murió realmente George Floyd? ¿En qué plantación, bosque, urbe pequeña repleta de blan-cos o una moderna ciudad don-de hay enormes comunidades de descendientes de suecos y de alemanes fue ejecutado su-mariamente un hombre de un metro noventa que trabajaba como portero, como chofer o en cualquier chamba que se le presentara?

¿Saben los locutores de te-levisión que hoy día comentan detalladamente los múltiples velorios de Floyd -e intentan elevar al gigantón asesinado por un policía a un nivel de se-midiós-, que en los cuatro siglos de hegemonía política de los blancos, quienes van a las me-jores escuelas y universidades y acceden mayoritariamente a los mejores empleos, los miem-bros de una comunidad que

Como los afroamericanos representan solo una octava parte de la población de los Estados Unidos, la tercera del mundo detrás de la China y de la India,

sus votos no pueden inclinar una votación para definir quién será el nuevo presidente de ese país en

noviembre próximo.

/11JUNIO / 2020 ESPECIAL

George Zimmerman, un muchacho de ascendencia afroperuana por línea materna y alemana por rama paterna, mató con alevosía en febrero de 2012 al afroamericano Trayvon Martin, pero fue absuelto porque sembro en el jurado la idea que Martin era un delincuente. En respuesta a ese

“error judicial”, los activistas crearon el movimiento #BlackLivesMatter, BLM, el motor de la movilización por el asesinato de George Floyd.

Habría que preguntar: ¿en qué momento de los 400 años que han pasado desde que unos

africanos abandonaron los buques para trabajar como bestias en los arrozales de las Carolinas, en las minas de Pensilvania o en los algodonales de

Misisipi murió realmente George Floyd?

Por: Viviana Rodrí[email protected]

tiene 10 millones de habitan-tes más que el Perú han sido discriminados, abusados, desa-tendidos en salud y educación y marginados? Es cierto que no todos los cuarenta millones de afro descendientes viven en si-tuación de pobreza o de discri-minación, porque hay lugares en la Norteamérica blanca y

clasista donde existen peque-ñas comunidades que algunos periodistas llaman los barrios de la “aristocracia negra”, como en la añosa Pensilvania, en la industrial Oklahoma City, en la sureña Memphis y en varios lu-gares de California. Son pocos, pero son.

Como los afroamericanos

representan solo una octa-va parte de la población de los Estados Unidos, la tercera del mundo detrás de la Chi-na y de la India, sus votos no pueden inclinar una votación para definir quién será el nue-vo presidente de ese país en noviembre próximo. Para lo-grar que el ex vicepresidente demócrata Joe Biden, quien fue compañero de fórmula de Barack Obama en las exitosas elecciones de 2008 y de 2012, gane el primer martes de no-viembre tiene que producirse una gigantesca suma de vo-luntades y de minorías, entre las cuales la afroamericana es la más grande. La más grande pero no la más aglutinante, la mayor de esas voluntades es la de los que detestan, odian y aborrecen a Donald Trump.

Sin embargo, no todo con-siste en protestar, quemar patrulleros, apedrear edifi-cios públicos y saquear tien-das exclusivas. Para ganar, los votantes demócratas tienen que acudir masivamente a las urnas, triunfar en los estados donde hay mayor número de miembros de los colegios electorales y obtener la mitad más uno de estos. El triunfo no pasa por ganar como siempre el ultraliberal California, el “iz-quierdista” New York y el súper demócrata Illinois, estados que tienen 55, 29 y 20 compromi-sarios, que es como se llaman a los electores que aporta cada estado. Para que Biden expulse a Trump de la Casa Blanca, lo enjuicie y lo cargue de cadenas tiene que obtener la mitad más uno de los 538 compromisa-rios, vale decir, 270 votos.

Cincuenta años después que la Guardia Nacional de Ohio disparara y matara a 4 es-tudiantes de la Universidad de Kent, la Kent State, tratando de silenciar una protesta contra el “olvido” del presidente Richard Nixon de ponerle fin a la Gue-rra de Viet Nam, los estudian-tes universitarios de casi todo Estados Unidos abandonaron cuarentenas, semi cuarentenas y todo tipo de distanciamiento social y se manifestaron a lo lar-go y a lo ancho del país contra la violencia policial. Violencia estructural e institucional con-tra las minorías afroamericana, homosexual y latinoamerica-

na, que los universitarios y los activistas de ascendencias afri-cana y latinoamericana inten-taron transformar en una lucha militante contra Trump, contra sus mentiras, contra sus fobias y contra sus excesos.

A partir de esos enfrenta-mientos, la gran prensa liberal (The New York Times, CNN, The New Yorker y The Washington Post) intentó colocar a Donald Trump como culpable exclusi-vo y excluyente de la violencia policial, ocultando que el gran país del norte, como Gran Bre-taña, como Israel, como Fran-cia, como Brasil, como el Perú, como la Argentina y como la India estamos divididos como todas las naciones democráti-cas del mundo en dos mitades políticas, a favor y en contra

de alguien: de Trump, de Bo-ris Johnson, de Netanyahu, de Macron, de Bolsonaro, de Viz-carra, de Alberto Fernández y de Narendra Modi. Unanimi-dad (forzada) solo en Cuba, en China, en Rusia y en Corea del Norte.

Así las cosas, si Joe Biden y sus aliados políticos, econó-micos y periodísticos quie-ren sacudirse del antipático inquilino de la mansión más protegida del mundo tienen que hacer mejor las cosas, redoblar las apuestas y mo-vilizar a un país golpeado duramente por la pandemia, pero recuperando rápida-mente su poderío industrial, comercial y agropecuario. Esperemos qué pasará en el futuro por llegar.

El 29 de mayo se conmemoró el Día del Servidor Público, homenaje a todos los trabajadores que desarrollan su actividad productiva en las diferentes entidades estatales, cuyo número, según recientes

estimaciones, ronda el millón y medio de personas.Más allá de las reflexiones sobre el servicio civil en el Perú, sus caren-cias, contradicciones y retos en los tiempos aciagos que vivimos, resulta apremiante que los servidores públicos retornen a las fuentes donde se origina su propia labor. Se debe resaltar, por encima del logro de los ob-jetivos institucionales y el conocimiento de por qué se deben alcanzar, para qué es la función pública, lo que aún subyace en la oscuridad del debate público.En un primer momento, a finales de los años ochenta del siglo XX, la dis-cusión se centró en el “tamaño” del Estado: rescatarlo de las garras del clientelismo político que convirtió a muchas entidades en agencias de empleos para los favorecidos por el gobierno de turno, llenas de ofici-nas multiplicadoras de trámites. Eran tiempos donde los tramitadores campeaban y la corrupción era asumida como parte del costo de cada paso de todo procedimiento.Con la bandera de la eficiencia, entendida como un Estado con menos, pero más capacitados, servidores muchos trabajadores públicos se que-daron sin empleo, en una siega indiscriminada que no siempre supo distinguir entre buenos y malos elementos. Pero también surgieron nuevas entidades que moldearon el nuevo Estado y respondieron con mayor precisión a las necesidades del país, instituyendo el concepto de meritocracia como condición necesaria para el acceso y ascenso en la carrera pública.En un segundo momento, en el contexto de la corrupción generaliza-da evidenciada durante los años finales del siglo pasado, ya en el sig-lo XXI se puso sobre el tapete la institucionalización de la ética en el servicio público, cuyos principios se tradujeron en un Código de Ética de la Función Pública y en ciertas normas y compromisos destinados a preservarla y a luchar contra las redes de corrupción existentes en casi todas las entidades públicas. Y, consecuentemente, se ampliaron y perfeccionaron las sanciones penales y administrativas contra la cor-rupción de los servidores públicos. Ambos principios, la eficiencia y la ética, a la que habría que añadir la innovación tecnológica en la gestión de las entidades y en los proced-imientos administrativos, son, a la vez, aún agendas pendientes y heri-das abiertas en el cuerpo de la administración del Estado. Lo que parece pura hipérbole en el quehacer cotidiano, se revela sin máscara a quien quiera ver en estos días de crisis producida por la pandemia de la COVID 19, que mezcla los más bellos episodios de entrega y heroísmo de los servidores públicos, con lamentables ineficiencias y graves latrocinios con la propia emergencia a cuestas que, según ha reportado el Ministe-rio Público, ya suman más de seiscientos.Ninguna revolución del servicio púbico será posible si no se pone én-fasis en el compromiso con la persona que deben tener los servidores y funcionarios del Estado desde la labor que realizan, por más alejada de la atención al público que pueda parecer. Y no solo por el manido tópico de que “su remuneración proviene de nuestros impuestos”, sino porque ser parte del servicio público requiere, precisamente, de una empatía con el prójimo que no se agota en el mero logro de objetivos institucionales, sino que llega a la satisfacción de saber que el trabajo de cada día sirve para cubrir las necesidades de mucha gente.La administración pública es el brazo actuante del Estado para concre-tar y garantizar los derechos fundamentales que nuestra Constitución consagra. Nunca lo olvidemos. Menos en estos tiempos de emergencia nacional en que deben aflorar los mayores esfuerzos de servicio hacia el público, que no es otro que nuestro pueblo, nuestra nación.

El reto del servicio público en la pandemia

OPINIÓNSergio Verastegui Valderrama (*)

Page 11: CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’ · 2020. 6. 12. · es el dolor dos veces y la función de la yerba purísima, el dolor dos veces y el bien de ser, dolernos doblemente

10/ JUNIO / 2020ESPECIAL

(Black Lives Matter) Las vidas negras importan

El pasado 25 de mayo, un policía acostumbrado a actuar sin medida ni cle-

mencia contra las personas que aparentemente vivían fuera de la ley, detuvo, sometió, esposó, tiró al piso y puso una rodilla en el cuello durante largos mi-nutos hasta que el detenido llamado George Floyd murió asfixiado. El homicidio ocurrió en Minneapolis, Minnesota, y el muerto era afroamericano, que es la forma “políticamente co-rrecta” que usan unos 280 mi-llones de norteamericanos de todos los colores para referirse a unos 40 millones de personas descendientes de los africanos que llegaron a América luego de ser secuestrados y transpor-tados como animales en unos buques usados en un comercio inmoral, pero absolutamente legal, desde agosto de 1619 hasta 1865, es decir, durante casi dos siglos y medio.

Tras ese brevísimo resumen de la más infame de las prácti-cas utilizadas por los hombres para explotar a sus semejantes, habría que preguntar: ¿en qué momento de los 400 años que han pasado desde que unos africanos abandonaron los bu-ques para trabajar como bestias en los arrozales de las Carolinas, en las minas de Pensilvania o en los algodonales de Misisipi murió realmente George Floyd? ¿En qué plantación, bosque, urbe pequeña repleta de blan-cos o una moderna ciudad don-de hay enormes comunidades de descendientes de suecos y de alemanes fue ejecutado su-mariamente un hombre de un metro noventa que trabajaba como portero, como chofer o en cualquier chamba que se le presentara?

¿Saben los locutores de te-levisión que hoy día comentan detalladamente los múltiples velorios de Floyd -e intentan elevar al gigantón asesinado por un policía a un nivel de se-midiós-, que en los cuatro siglos de hegemonía política de los blancos, quienes van a las me-jores escuelas y universidades y acceden mayoritariamente a los mejores empleos, los miem-bros de una comunidad que

Como los afroamericanos representan solo una octava parte de la población de los Estados Unidos, la tercera del mundo detrás de la China y de la India,

sus votos no pueden inclinar una votación para definir quién será el nuevo presidente de ese país en

noviembre próximo.

/11JUNIO / 2020 ESPECIAL

George Zimmerman, un muchacho de ascendencia afroperuana por línea materna y alemana por rama paterna, mató con alevosía en febrero de 2012 al afroamericano Trayvon Martin, pero fue absuelto porque sembro en el jurado la idea que Martin era un delincuente. En respuesta a ese

“error judicial”, los activistas crearon el movimiento #BlackLivesMatter, BLM, el motor de la movilización por el asesinato de George Floyd.

Habría que preguntar: ¿en qué momento de los 400 años que han pasado desde que unos

africanos abandonaron los buques para trabajar como bestias en los arrozales de las Carolinas, en las minas de Pensilvania o en los algodonales de

Misisipi murió realmente George Floyd?

Por: Viviana Rodrí[email protected]

tiene 10 millones de habitan-tes más que el Perú han sido discriminados, abusados, desa-tendidos en salud y educación y marginados? Es cierto que no todos los cuarenta millones de afro descendientes viven en si-tuación de pobreza o de discri-minación, porque hay lugares en la Norteamérica blanca y

clasista donde existen peque-ñas comunidades que algunos periodistas llaman los barrios de la “aristocracia negra”, como en la añosa Pensilvania, en la industrial Oklahoma City, en la sureña Memphis y en varios lu-gares de California. Son pocos, pero son.

Como los afroamericanos

representan solo una octa-va parte de la población de los Estados Unidos, la tercera del mundo detrás de la Chi-na y de la India, sus votos no pueden inclinar una votación para definir quién será el nue-vo presidente de ese país en noviembre próximo. Para lo-grar que el ex vicepresidente demócrata Joe Biden, quien fue compañero de fórmula de Barack Obama en las exitosas elecciones de 2008 y de 2012, gane el primer martes de no-viembre tiene que producirse una gigantesca suma de vo-luntades y de minorías, entre las cuales la afroamericana es la más grande. La más grande pero no la más aglutinante, la mayor de esas voluntades es la de los que detestan, odian y aborrecen a Donald Trump.

Sin embargo, no todo con-siste en protestar, quemar patrulleros, apedrear edifi-cios públicos y saquear tien-das exclusivas. Para ganar, los votantes demócratas tienen que acudir masivamente a las urnas, triunfar en los estados donde hay mayor número de miembros de los colegios electorales y obtener la mitad más uno de estos. El triunfo no pasa por ganar como siempre el ultraliberal California, el “iz-quierdista” New York y el súper demócrata Illinois, estados que tienen 55, 29 y 20 compromi-sarios, que es como se llaman a los electores que aporta cada estado. Para que Biden expulse a Trump de la Casa Blanca, lo enjuicie y lo cargue de cadenas tiene que obtener la mitad más uno de los 538 compromisa-rios, vale decir, 270 votos.

Cincuenta años después que la Guardia Nacional de Ohio disparara y matara a 4 es-tudiantes de la Universidad de Kent, la Kent State, tratando de silenciar una protesta contra el “olvido” del presidente Richard Nixon de ponerle fin a la Gue-rra de Viet Nam, los estudian-tes universitarios de casi todo Estados Unidos abandonaron cuarentenas, semi cuarentenas y todo tipo de distanciamiento social y se manifestaron a lo lar-go y a lo ancho del país contra la violencia policial. Violencia estructural e institucional con-tra las minorías afroamericana, homosexual y latinoamerica-

na, que los universitarios y los activistas de ascendencias afri-cana y latinoamericana inten-taron transformar en una lucha militante contra Trump, contra sus mentiras, contra sus fobias y contra sus excesos.

A partir de esos enfrenta-mientos, la gran prensa liberal (The New York Times, CNN, The New Yorker y The Washington Post) intentó colocar a Donald Trump como culpable exclusi-vo y excluyente de la violencia policial, ocultando que el gran país del norte, como Gran Bre-taña, como Israel, como Fran-cia, como Brasil, como el Perú, como la Argentina y como la India estamos divididos como todas las naciones democráti-cas del mundo en dos mitades políticas, a favor y en contra

de alguien: de Trump, de Bo-ris Johnson, de Netanyahu, de Macron, de Bolsonaro, de Viz-carra, de Alberto Fernández y de Narendra Modi. Unanimi-dad (forzada) solo en Cuba, en China, en Rusia y en Corea del Norte.

Así las cosas, si Joe Biden y sus aliados políticos, econó-micos y periodísticos quie-ren sacudirse del antipático inquilino de la mansión más protegida del mundo tienen que hacer mejor las cosas, redoblar las apuestas y mo-vilizar a un país golpeado duramente por la pandemia, pero recuperando rápida-mente su poderío industrial, comercial y agropecuario. Esperemos qué pasará en el futuro por llegar.

El 29 de mayo se conmemoró el Día del Servidor Público, homenaje a todos los trabajadores que desarrollan su actividad productiva en las diferentes entidades estatales, cuyo número, según recientes

estimaciones, ronda el millón y medio de personas.Más allá de las reflexiones sobre el servicio civil en el Perú, sus caren-cias, contradicciones y retos en los tiempos aciagos que vivimos, resulta apremiante que los servidores públicos retornen a las fuentes donde se origina su propia labor. Se debe resaltar, por encima del logro de los ob-jetivos institucionales y el conocimiento de por qué se deben alcanzar, para qué es la función pública, lo que aún subyace en la oscuridad del debate público.En un primer momento, a finales de los años ochenta del siglo XX, la dis-cusión se centró en el “tamaño” del Estado: rescatarlo de las garras del clientelismo político que convirtió a muchas entidades en agencias de empleos para los favorecidos por el gobierno de turno, llenas de ofici-nas multiplicadoras de trámites. Eran tiempos donde los tramitadores campeaban y la corrupción era asumida como parte del costo de cada paso de todo procedimiento.Con la bandera de la eficiencia, entendida como un Estado con menos, pero más capacitados, servidores muchos trabajadores públicos se que-daron sin empleo, en una siega indiscriminada que no siempre supo distinguir entre buenos y malos elementos. Pero también surgieron nuevas entidades que moldearon el nuevo Estado y respondieron con mayor precisión a las necesidades del país, instituyendo el concepto de meritocracia como condición necesaria para el acceso y ascenso en la carrera pública.En un segundo momento, en el contexto de la corrupción generaliza-da evidenciada durante los años finales del siglo pasado, ya en el sig-lo XXI se puso sobre el tapete la institucionalización de la ética en el servicio público, cuyos principios se tradujeron en un Código de Ética de la Función Pública y en ciertas normas y compromisos destinados a preservarla y a luchar contra las redes de corrupción existentes en casi todas las entidades públicas. Y, consecuentemente, se ampliaron y perfeccionaron las sanciones penales y administrativas contra la cor-rupción de los servidores públicos. Ambos principios, la eficiencia y la ética, a la que habría que añadir la innovación tecnológica en la gestión de las entidades y en los proced-imientos administrativos, son, a la vez, aún agendas pendientes y heri-das abiertas en el cuerpo de la administración del Estado. Lo que parece pura hipérbole en el quehacer cotidiano, se revela sin máscara a quien quiera ver en estos días de crisis producida por la pandemia de la COVID 19, que mezcla los más bellos episodios de entrega y heroísmo de los servidores públicos, con lamentables ineficiencias y graves latrocinios con la propia emergencia a cuestas que, según ha reportado el Ministe-rio Público, ya suman más de seiscientos.Ninguna revolución del servicio púbico será posible si no se pone én-fasis en el compromiso con la persona que deben tener los servidores y funcionarios del Estado desde la labor que realizan, por más alejada de la atención al público que pueda parecer. Y no solo por el manido tópico de que “su remuneración proviene de nuestros impuestos”, sino porque ser parte del servicio público requiere, precisamente, de una empatía con el prójimo que no se agota en el mero logro de objetivos institucionales, sino que llega a la satisfacción de saber que el trabajo de cada día sirve para cubrir las necesidades de mucha gente.La administración pública es el brazo actuante del Estado para concre-tar y garantizar los derechos fundamentales que nuestra Constitución consagra. Nunca lo olvidemos. Menos en estos tiempos de emergencia nacional en que deben aflorar los mayores esfuerzos de servicio hacia el público, que no es otro que nuestro pueblo, nuestra nación.

El reto del servicio público en la pandemia

OPINIÓNSergio Verastegui Valderrama (*)

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12/ JUNIO / 2020ESPECIAL

grandes polémicasLa 5G llega y genera

En los últimos tiempos se ha buscado alarmar a la po-blación mundial sobre los

efectos negativos que tendría el desarrollo de los avances tecno-lógicos, específicamente sobre la quinta generación o usualmente conocida como 5G.

Así pues, surgieron teorías en plena emergencia sanitaria provocada por la pandemia del nuevo coronavirus y también se propagaban tan rápido como la enfermedad. Una de ellas daba cuenta sobre unos microchips.

Según dicen, este chip bio-métrico se usaría para acceder a la próxima realidad de la quinta generación integrada que se está implementando de manera rápida, con lo cual se buscaría programar a todos los seres hu-manos adhiriendo la tecnología en sus cuerpos para entonces convertirlos prácticamente en robots a disposición de quienes los controlen. El miedo está en que pueda significar la caja de pandora que abra la puerta al transhumanismo.

A ello se suma la teoría que surgió a inicios de año cuando la pandemia se iba expandiendo, la cual señala que la 5G puede in-utilizar al sistema inmune, con lo cual haría que las personas sean más susceptibles a contraer el coronavirus y como si eso fuese poco, también se dijo que el virus puede transmitirse a través del uso de la tecno-logía 5G.

Así como el virus, estas informaciones fueron ganando terre-no entre la población mundial, que de por sí ya se encontraba con-mocionada por la crisis generada a causa de la emergencia sanitaria y desembocó en la quema de antenas de esta red en dis-tintos países del continente eu-ropeo, como por ejemplo Reino Unido, donde incluso han ame-nazado a unos ingenieros de te-lecomunicaciones que ni siquie-ra trabajan en la implementación de esta red.

Frente a ese panorama, ex-pertos salieron a desmentir estas informaciones y lo mismo hizo la Organización Mundial de la

En medio de la emergencia sanitaria que atraviesa el mundo, han surgido teorías las cuales señalan que esta tecnología controlará a los humanos y que sus ondas electromagnéticas

provocan el coronavirus, pero ¿qué tan cierto es eso? En este artículo se lo contamos.

Salud (OMS) que se pronunció al respecto para detener todas estas teorías conspirativas que como se ha visto también pueden causar daños. “Los virus no se desplazan por las ondas electromagnéticas ni las redes de telefonía móvil. La COVID-19 se está propagando en numerosos países en los que no

Por: Jean Carlos [email protected]

cerán nuevas profesiones, los mo-delos educativos serán aún más anticuados y casi todo aspecto de nuestra vida tendrá un cambio significativo”, sostuvo Goga.

Ciertamente, esta red ya ha em-pezado a dar las primeras muestras de cómo está cambiando el mun-do. Como en China, donde crearon una aplicación con el fin de geolo-calizar a sus pacientes con corona-virus para que las autoridades pue-dan tomar medidas preventivas y trabajar por zonas focalizadas. Para ello fue fundamental el desarrollo de una red de internet móvil ca-paz de soportar cantidades muy inmensas de datos y ahí es donde entra a tallar la 5G ya que sin ella hubiese sido muy difícil.

Para ello fue fundamental el desarrollo de una red de internet móvil capaz de soportar

cantidades muy inmensas de datos y ahí es donde entra a tallar la 5G ya que sin ella

hubiese sido muy difícil.

existe una red 5G”, explicó.Si bien es cierto, que la

quinta generación no está relacionada al coronavi-rus, es importante saber hasta dónde puede llegar, ya que se trata de una de las tecnologías más im-presionantes de los últi-

mos tiempos, a pesar de no controlar personas.

Para el experto en tecnolo-gía, Arturo Goga, esta red va más

allá de su aplicación para los celu-

lares inteligentes, por lo que tam-bién podría alcanzar a hogares, edificios y ciudades como parte de un cambio radical en la vida de las personas pues se estable-cería una conexión digital de ob-jetos cotidianos con la internet.

“Ahora nos encontramos a puertas de la siguiente gran re-volución tecnológica: la hiperco-nectividad, a través de redes 5G. Los saltos exponenciales de la inteligencia artificial cambiarán radicalmente el mundo. Apare-

Corea del Sur fue el primer país en instalar una antena 5g, específicamente en Seúl en el 2019. Posteriormente le siguieron ciudades como, Dubai en Emiratos Árabes, Sapporo en Japón, Beijing en China y así ha venido progre-sivamente de oriente a occi-dente. Mientras que, en Perú, la implementación empezó hace poco, la empresa Entel se encuentra ejecutando esta nueva tecnología.

ANTENA

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terminaron violando la cuarentenaDeberían dar el ejemplo, pero

Desde el inicio del estado de emergencia, declarado por el Gobierno para frenar al

coronavirus, se decía que no se-ría fácil la tarea de hacer cumplir la cuarentena obligatoria entre la población peruana. Ciertamente, muchos la incumplieron, algunos por necesidad, otros por indisci-plina, pero de este último grupo nadie nunca se imaginó estaría integrado por nuestras propias autoridades públicas.

El caso que más ha llamado la atención es del alcalde del distrito de Tantará, Jaime Rolando Urbina Torres, de la región Huancavelica, que se metió a un ataúd y fingió estar muerto para evitar ser dete-nido por haber estado bebiendo licor con sus amigos, pero al ser descubiertos fueron llevados a la comisaría de la zona.

Después de días de silencio, Urbina se pronunció para justifi-car su actuación diciendo que se había metido al féretro para comprobar su tama-ño. “Me eché en el ataúd con la finalidad de verifi-car el tamaño, la altura, el ancho, ese fue el motivo por el cual me eché en el ataúd”, explicó. La imagen dio la vuelta al mundo.

Recientemente, la Po-licía intervino al alcalde distrital de La Unión (Piu-ra), Fernando Ipanaqué Mendoza, por haber esta-do reunido con personas bebiendo licor junto a otras personas entre las que se encontraban, el Gerente Munici-pal y su Gerente de Imagen Insti-tucional.

Al ser trasladado a la depen-dencia policial de la Comisaría de La Unión, los pobladores del asen-tamiento humano Leoncio Amaya intentaron lincharlo porque ade-más del bochornoso hecho, criti-can al funcionario edil por realizar una mala gestión en el marco de la emergencia sanitaria provocada

/13JUNIO / 2020 ESPECIAL

Las autoridades que han sido intervenidas en pleno estado de emergencia tienen un factor común, se encontraban en reuniones tomando licor. Especialistas sostienen que en principio habrían

cometido los delitos de violación a las medidas sanitarias y de resistencia a la autoridad.

normas de restricción de derechos en el marco de la emergencia sani-taria que estamos viviendo y tiene una pena de 3 a 6 años de prisión efectiva.

Sobre el caso específico del alcalde Ipanaqué, cuyos vecinos denuncian que no está hacien-do nada por la población ante la pandemia, la abogada señaló que podría ser denunciado por incum-plimiento de sus funciones.

¿Cómo se puede exigir a los pe-ruanos a que cumplan la cuarente-na obligatoria confinados en sus casas cabalmente, si nuestras pro-pias autoridades las incumplen? Ellos deberían ser los primeros en dar el ejemplo, pero terminaron violando las medidas sanitarias.

policías y hasta un señor padre de la patria, el congresista Marco Verde de Alianza Para el Progreso, quien fue captado bebiendo licor en una reunión social en su vivien-da en la región de Pasco.

SancionesLa abogada Rosemary Ugaz

sostiene que, en principio, las au-toridades estarían cometiendo el delito sobre la violación de medi-das sanitarias, como figura en el

artículo 292 del Código Penal, el cual castiga con una pena privativa de libertad no menor de seis meses ni mayor de tres años y con 90 a 180 días-multa.

Asimismo, Ugaz indica que otra in-fracción sería el de resistencia o desobe-diencia a la autoridad debido al mandato del Gobierno para el cumplimiento de las

por la pandemia del coronavirus.Otro ejemplo es el caso de

Wilmer Constantino Fernández, alcalde distrital de la Habana (Mo-yobamba, San Martín), que por segunda vez, así como lo lee, los agentes policiales de la comisaría de Rioja detuvieron al burgomaes-tre por estar reunido con un grupo de personas ingiriendo alcohol. La primera vez sucedió en abril.

En la lista negra también se en-cuentran otras autoridades como

Por: Jean Carlos [email protected]

Alcalde de la provincia del Santa (Chimbote, Áncash), Roberto Briceño Franco.Alcalde distrital del Santa Lucía (Lampa, Puno), Ángel Castillo Colque.Alcalde del distrito de Pias (Pataz, La Libertad), Amaro Cueva Salvatierra.Alcalde distrital Pomalca (Chiclayo, Lambayeque) Néstor Lazo Pomares.Alcalde distrital de Estique (Tarata, Tacna), Hernán Henry Tapia Quenta.Alcalde provincial de Tambopata (Madre de Dios), Keler Rengifo.Entre otros.

AUTORIDADES INTERVENIDAS POR BEBER LICOR EN REUNIONES SOCIALES EN PLENA CUARENTENA

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14/ JUNIO / 2020ESPECIAL

código del amorEl coronavirus y el nuevo

Todos, absolutamente todos los seres que vivimos en este tiempo hemos visto una obra

de ficción en el cine o en la televi-sión. Sin embargo, hasta 1967 los estudios cinematográficos, esas fábricas de sueños nacidas en Ho-llywood hace más de un siglo, te-nían que sujetarse a normas estric-tas sobre los besos, los abrazos, las escenas eróticas y el acercamiento social, la contrapartida del actual distanciamiento social.

Hasta hace unos poquísimos meses, la gente se reunía con otra gente, se arremolinaba y tomaba refrescos helados en los días cá-lidos y cafecitos calientes en las épocas frías, y cervezas y rones y vinos en las noches de relax. Se saludaba con besos y abrazos, y gritaba y festejaba los triunfos de sus equipos en tribunas atestadas por hinchas de sus propios colores y de los colores rivales. Era la convi-vencia humana forjada a lo largo de años y años de aprendizaje social, de prohibiciones, de censuras y de libertades. De pronto un día, como en una pesadilla larga y colectiva, todo cambió: había llegado un vi-rus letal, microscópico pero mortal. Y tras él solo una forma de evitarlo: taparse la boca y la nariz para im-pedir la transmisión del germen de unos a otros. Y mantenerse lo más lejos posible los unos de los otros, nadie sabe quién puede ser porta-dor del virus.

Como el miedo a la muerte es la mejor forma de educar a la gente, las personas conscientes (y pudientes) obedecieron en un instante. Y los más preocupados en su salud y en las de los suyos se recluyeron en sus casas, sobre todo aquellas personas con niños y con ancianos que cuidar. Por eso, llamó profundamente la atención que en los días finales del pasado invierno europeo, una revista española pu-blicara la historia de una cantante que se había contagiado del temi-do Covid-19 sin haber salido de su casa ni una sola vez durante la lar-ga cuarentena. Con un poquito de maledicencia, la revista del corazón señalaba que el productor de la todavía no estrenada última can-ción de la intérprete también había contraído la enfermedad, aunque solamente había violado la cuaren-tena al visitar a la diva durante unos pocos minutos. “De lejitos nomás”, dijeron los artistas.

Ante la posibilidad de que la gente del espectáculo se infecte

Desde que tenemos uso de razón, nuestra vida ha estado ligada a una pantalla luminosa donde las personas se aman, se odian, se desean, se temen, viven y

mueren. Desde que se inventó el cine nos ha acompañado en todas las etapas de nuestra historia y hoy no podía ser la excepción

por el hecho de violar la estricta regla sanitaria de distanciamiento de un metro entre un rostro y cual-quier otro, ninguna de las naciones asiáticas y europeas que recibieron al bicho en los primeros meses del año y lo soportaron entre 90 y 100 días hasta que perdió la capacidad asesina original, han autorizado ninguna forma de espectáculo en ambientes cerrados. Así, el teatro, la ópera, la zarzuela, los programas de concurso y los conciertos han quedado suspendidos indefinida-mente. Y cuando todo vuelva a la normalidad allá y acá, los espec-táculos masivos todavía seguirán prohibidos. Dicen todos los bien in-formados que de pronto hasta fines de 2021. Es decir, adiós a las galas fastuosas del Bicentenario.

Días atrás, uno de esos sabe-lotodo que siempre aparecen en cada generación dijo en un pro-grama televisivo con más fama que sintonía que el desescalaje de las prohibiciones de distanciamien-to en el mundo del espectáculo hará recordar al Código Hays que decidía que se podía y que no se podía hacer en las pantallas cine-

Por: Viviana Rodrí[email protected]

Así, durante casi 40 años, los ac-tores no pudieron besar ni tocar a las actrices, a menos que el guion dijera claramente que los persona-jes estaban casados. Tampoco se podían exhibir cuerpos sin ropas, jovencitas en ropas ligeras, hom-bres con los vellos de axilas expues-tos, caricias, abrazos, besos, etcéte-ra, etcétera. Esa era la parte carnal prohibida, pero también estaban excluidas las palabrotas, las blasfe-mias y las lisuras (esto es increíble, porque en nuestra industria cine-matográfica todas las películas co-mienzan con unos carajos, todas), la exhibición de armas, de delitos y de centenares de cosas que se ven en la realidad, pero que estaban proscritas de la pantalla.

Como la curiosidad nos ganó, seguimos revisando el mundo de nuestros bisabuelos y nos encon-tramos que el año que entró en vigencia el Código Hays se ponía fin a la prohibición de la comercia-lización y del consumo de bebidas alcohólicas en todo el territorio nor-teamericano. Por un pelo, no coinci-dieron una y otra prohibiciones. Por un tul no se tocaron ambas, que, dicho sea de paso, hicieron ricos entre los ricos a los descendientes de irlandeses capitaneados por los Kennedy, la familia más influyente en el Partido Demócrata: el enemi-go íntimo del Partido Republicano.

matográficas entre 1934 y 1967, es decir entre la juventud de nuestros bisabuelos y la de nuestros padres. Y como siempre hay preguntones, uno le pidió al Facebook Oficial de ese programa que le dijera qué era dicho código y quién era el señor Hays. Resulta que nadie contestó, y por eso nos lanzamos a la búsque-da de la respuesta.

William H. Hays fue un sacer-dote protestante de enorme vin-culación con los poderes políticos y económicos existentes en los Estados Unidos durante los años treinta. Siendo líder del ultra con-servador Partido Republicano fue

contratado por los productores de Hollywood para que conciliara a la inmensa cantidad de católicos de esa época con las películas que estos consideraban libertinas. Con un sueldo de 100 mil dólares anua-les, una fortuna para la época, Hays buscó al sacerdote jesuita Daniel A. Lord, quien había elaborado un manual para que los productores de Hollywood no se equivocaran a la hora de filmar las escenas com-prometedoras. “Los No y los Ten Cuidado” resumían todo los que los católicos no querían ver y los artistas podían exhibir: poca piel y mucha distancia entre ellos y ellas.

Así, durante casi 40 años, los actores no pudieron besar ni tocar a las actrices, a menos que el guion

dijera claramente que los personajes estaban casados. Tampoco se podían exhibir cuerpos sin ropas,

jovencitas en ropas ligeras, hombres con los vellos de axilas expuestos, caricias, abrazos, besos, etc.

William Harrison Hays.

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14/ JUNIO / 2020ESPECIAL

código del amorEl coronavirus y el nuevo

Todos, absolutamente todos los seres que vivimos en este tiempo hemos visto una obra

de ficción en el cine o en la televi-sión. Sin embargo, hasta 1967 los estudios cinematográficos, esas fábricas de sueños nacidas en Ho-llywood hace más de un siglo, te-nían que sujetarse a normas estric-tas sobre los besos, los abrazos, las escenas eróticas y el acercamiento social, la contrapartida del actual distanciamiento social.

Hasta hace unos poquísimos meses, la gente se reunía con otra gente, se arremolinaba y tomaba refrescos helados en los días cá-lidos y cafecitos calientes en las épocas frías, y cervezas y rones y vinos en las noches de relax. Se saludaba con besos y abrazos, y gritaba y festejaba los triunfos de sus equipos en tribunas atestadas por hinchas de sus propios colores y de los colores rivales. Era la convi-vencia humana forjada a lo largo de años y años de aprendizaje social, de prohibiciones, de censuras y de libertades. De pronto un día, como en una pesadilla larga y colectiva, todo cambió: había llegado un vi-rus letal, microscópico pero mortal. Y tras él solo una forma de evitarlo: taparse la boca y la nariz para im-pedir la transmisión del germen de unos a otros. Y mantenerse lo más lejos posible los unos de los otros, nadie sabe quién puede ser porta-dor del virus.

Como el miedo a la muerte es la mejor forma de educar a la gente, las personas conscientes (y pudientes) obedecieron en un instante. Y los más preocupados en su salud y en las de los suyos se recluyeron en sus casas, sobre todo aquellas personas con niños y con ancianos que cuidar. Por eso, llamó profundamente la atención que en los días finales del pasado invierno europeo, una revista española pu-blicara la historia de una cantante que se había contagiado del temi-do Covid-19 sin haber salido de su casa ni una sola vez durante la lar-ga cuarentena. Con un poquito de maledicencia, la revista del corazón señalaba que el productor de la todavía no estrenada última can-ción de la intérprete también había contraído la enfermedad, aunque solamente había violado la cuaren-tena al visitar a la diva durante unos pocos minutos. “De lejitos nomás”, dijeron los artistas.

Ante la posibilidad de que la gente del espectáculo se infecte

Desde que tenemos uso de razón, nuestra vida ha estado ligada a una pantalla luminosa donde las personas se aman, se odian, se desean, se temen, viven y

mueren. Desde que se inventó el cine nos ha acompañado en todas las etapas de nuestra historia y hoy no podía ser la excepción

por el hecho de violar la estricta regla sanitaria de distanciamiento de un metro entre un rostro y cual-quier otro, ninguna de las naciones asiáticas y europeas que recibieron al bicho en los primeros meses del año y lo soportaron entre 90 y 100 días hasta que perdió la capacidad asesina original, han autorizado ninguna forma de espectáculo en ambientes cerrados. Así, el teatro, la ópera, la zarzuela, los programas de concurso y los conciertos han quedado suspendidos indefinida-mente. Y cuando todo vuelva a la normalidad allá y acá, los espec-táculos masivos todavía seguirán prohibidos. Dicen todos los bien in-formados que de pronto hasta fines de 2021. Es decir, adiós a las galas fastuosas del Bicentenario.

Días atrás, uno de esos sabe-lotodo que siempre aparecen en cada generación dijo en un pro-grama televisivo con más fama que sintonía que el desescalaje de las prohibiciones de distanciamien-to en el mundo del espectáculo hará recordar al Código Hays que decidía que se podía y que no se podía hacer en las pantallas cine-

Por: Viviana Rodrí[email protected]

Así, durante casi 40 años, los ac-tores no pudieron besar ni tocar a las actrices, a menos que el guion dijera claramente que los persona-jes estaban casados. Tampoco se podían exhibir cuerpos sin ropas, jovencitas en ropas ligeras, hom-bres con los vellos de axilas expues-tos, caricias, abrazos, besos, etcéte-ra, etcétera. Esa era la parte carnal prohibida, pero también estaban excluidas las palabrotas, las blasfe-mias y las lisuras (esto es increíble, porque en nuestra industria cine-matográfica todas las películas co-mienzan con unos carajos, todas), la exhibición de armas, de delitos y de centenares de cosas que se ven en la realidad, pero que estaban proscritas de la pantalla.

Como la curiosidad nos ganó, seguimos revisando el mundo de nuestros bisabuelos y nos encon-tramos que el año que entró en vigencia el Código Hays se ponía fin a la prohibición de la comercia-lización y del consumo de bebidas alcohólicas en todo el territorio nor-teamericano. Por un pelo, no coinci-dieron una y otra prohibiciones. Por un tul no se tocaron ambas, que, dicho sea de paso, hicieron ricos entre los ricos a los descendientes de irlandeses capitaneados por los Kennedy, la familia más influyente en el Partido Demócrata: el enemi-go íntimo del Partido Republicano.

matográficas entre 1934 y 1967, es decir entre la juventud de nuestros bisabuelos y la de nuestros padres. Y como siempre hay preguntones, uno le pidió al Facebook Oficial de ese programa que le dijera qué era dicho código y quién era el señor Hays. Resulta que nadie contestó, y por eso nos lanzamos a la búsque-da de la respuesta.

William H. Hays fue un sacer-dote protestante de enorme vin-culación con los poderes políticos y económicos existentes en los Estados Unidos durante los años treinta. Siendo líder del ultra con-servador Partido Republicano fue

contratado por los productores de Hollywood para que conciliara a la inmensa cantidad de católicos de esa época con las películas que estos consideraban libertinas. Con un sueldo de 100 mil dólares anua-les, una fortuna para la época, Hays buscó al sacerdote jesuita Daniel A. Lord, quien había elaborado un manual para que los productores de Hollywood no se equivocaran a la hora de filmar las escenas com-prometedoras. “Los No y los Ten Cuidado” resumían todo los que los católicos no querían ver y los artistas podían exhibir: poca piel y mucha distancia entre ellos y ellas.

Así, durante casi 40 años, los actores no pudieron besar ni tocar a las actrices, a menos que el guion

dijera claramente que los personajes estaban casados. Tampoco se podían exhibir cuerpos sin ropas,

jovencitas en ropas ligeras, hombres con los vellos de axilas expuestos, caricias, abrazos, besos, etc.

William Harrison Hays.

/15JUNIO / 2020 BELLEZA

Por: Ruby [email protected]

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tiempos de la Covid-19A sonreír con los ojos en

Las sonrisas y muecas que solíamos observar quedaron a un lado y

son, ahora, nuestros ojos el artilugio para comunicarnos y nuestras cejas el arco que refuerza nuestra mirada.Las marcas de belleza han emprendido sus propias campañas al respecto, con mascarillas con mensajes o líneas de cosmética más centradas en las miradas que permitirán que nuestro rostro hable mejor. Es más, Alexan-dra Valverde, especialista en Micropigmentación de Va-lentina Extensiones de pesta-ñas y Cejas Europeas señala: “Si con algo se tiene que con-quistar o sonreír ahora será con la mirada, como lo hacen las hindúes”. Y es que los ros-tros maquillados y coquetos quedaron en stand-by desde la quincena de marzo.

Alexandra se dedica des-de hace cuatro años a realizar el trabajo de micropigmenta-ción de cejas y extensiones de pestañas y remarca que las mujeres siempre quieren verse bellas, aún ahora que estamos en medio de una crisis sanitaria. Y para suerte de las mismas, desde el pa-sado 25 de mayo se permiten realizar trabajos a domicilio, relacionados al rubro de la belleza, siguiendo adecua-damente los protocolos de bioseguridad que detalla el Ministerio de Salud (Minsa). Opción que para muchas ha resultado fabulosa y nece-saria, aunque para otros les parezca una frivolidad. Sin embargo, verse y sentirse bien es importante, pues se relaciona con el autoestima.

“Estamos atendiendo por citas, con los protocolos de bioseguridad determinados por el Minsa, estamos basa-dos a trabajar en función a lo que ellos han determinado: usando mandiles, mascarillas y mascaras de protección. Antes de proceder estamos

Si con algo se tiene que conquistar o sonreír ahora será con la mirada, como lo

hacen las hindúes.

El uso de la mascarilla ha pasado a formar parte de nuestra vestimenta diaria y esto se ha convertido en un obstáculo para apreciar

las expresiones del rostro.

tomando la temperatura a los clientes y desinfectamos la zona. Tenemos una máquina de vaporización que elimi-na cualquier tipo de virus, de acuerdo a ello procedemos a realizar el procedimiento al cliente. Básicamente ese es el protocolo. Además, estamos llevando nuestras camillas, agujas estériles. Todo es nuevo”.

De diez a quince clientes que solía atender a diario, la cifra se redujo a cuatro por día nos cuenta Alexandra que, incluso, ha contratado un “taxi privado para que tras-lade al especialista y no tenga contacto con nadie más, evi-tando así cualquier modo de contagio”.

El protocolo de bioseguri-

dad también indica mantener la distancia entre los clientes como mínimo de uno a dos metros dentro del local don-de se brindará el servicio de salud o belleza. En ese caso, la especialista en micropigmen-tación nos detalla que el cen-tro donde brindará atención no solo es fumigado constan-temente, las cabinas a donde ingresarán los clientes “tienen un distanciamiento de tres metros”.

La micropigmentación tie-ne una duración entre uno y tres años, mantener las cejas lindas y en perfecto estado no es difícil, sobre todo con estos tips que nos brinda Alexandra:

-A la hora de depilarse, no

hacerlo en exceso para no da-ñar el crecimiento de los ve-llos. Se debe tomar en cuenta que para realizar la micropig-mentación se necesita que los vellos sean naturales y lo-grar así un bonito diseño.

-Ahora que estamos en casa si queremos que nues-tras cejas resalten, podemos maquillarlas con sombras, siguiendo el crecimiento na-tural de los pelitos.

-Si queremos conseguir el crecimiento de los pelitos de las cejas, para ello se puede usar aceite de ricino o aceite de coco. Esto permite que nuestras cejas se vean más pobladas, mucho más volu-minosas.

“Si necesitan consejos, no duden en mandarnos sus fotos para evaluarlas gratui-tamente, nosotros las aseso-ramos”, añade la especialista de Valentina Extensiones de pestañas y Cejas Europeas.

Page 16: CUIDADO CON EL ‘SÍNDROME DE LA CABAÑA’ · 2020. 6. 12. · es el dolor dos veces y la función de la yerba purísima, el dolor dos veces y el bien de ser, dolernos doblemente

El Profesor Yanely Cel: 945752031 / Facebook: yanely tarot

ARIES (21 DE MAR AL 20 DE ABR)

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(22 DE NOV AL 21 DE DIC)

(22 DE DIC AL 21 DE ENE)

(22 DE ENE AL 19 DE FEB)

El amor de tu vida espera una respuesta a tus errores. Salud, ama la vida y valora a tu familia. Trabajo, aprende a escuchar, tú no eres perfecto.

El amor es un mundo mágico, no eres cobarde, dile tus sueños. Salud, depende de ti y de nadie más. Trabajo, cambia tu manera de pensar o tropezarás.

Ten el valor de curar tus heridas del amor, lo pasado olvídalo, enfócate en el presente. Salud, ejercicios. Trabajo, reúnete con gente exitosa que la vida te sorprenderá.

Tu energía positiva endulza a esa persona, la verdad no te conviene si tienes pareja. Salud, dolor de cabeza, dieta. Trabajo, pierdes tiempo y dinero.

El amor te está matando el miedo a perderle, crea nuevas opciones. Salud, tu descuido te llevará a donde no quieres ir. Trabajo, brillante y decidido.

Amor, tu mundo interior te dice olvida el rencor, la vanidad. Salud, no le hagas caso a lo que te provoque, respeta la dieta. Trabajo, mira el éxito de los demás.

Ya deja de pensar que tienes mala suerte y no dejes escapar tus sueños. Salud, te cuesta la dieta. Trabajo, las personas triunfadoras, sufrieron.

Amor, para no sufrir solo di la verdad. Salud, el dinero compra remedio pero el dolor solo tu trabajo, despacio y buena letra.

Amor, una actitud positiva hará milagros en su felicidad. Salud, mantente optimista en los tiempos difíciles. Trabajo, evita problemas con personas cercanas.

Amor, no gastes tus energías en discusiones. Salud, no te rindas, la vida te recompensará agradablemente. Trabajo, detente, bota el miedo al fracaso, eres amado.

El amor quiere libertad para decirte sus inspiraciones, dale alas y permítele volar. Salud, respira profundo, sonríe, cree en ti. Trabajo, sé más amable.

HORÓSCOPO

El amor es para ganadores, que no te derrote el ego. Salud, cuídate y te cuidarán, olvídate del pasado. Trabajo, lo ganado es fruto de tu sudor, cuídalo.

CÁNCER (22 DE JUN AL 22 DE JUL)

Por: Yanely

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