(de poema a poema) - Bienvenidos a lasalina.es · (de poema a poema) Diputación de Salamanca 2009 Palabras preliminares: “Para seguir dando pasos: Charo Ruano”, ... La colección,

CHARO RUANO

Y ahora algunos pasos

(de poema a poema)

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CHARO RUANO

(de poema a poema)

Diputación de Salamanca2009

Palabras preliminares:“Para seguir dando pasos: Charo Ruano”,

Mª Ángeles Pérez LópezEdición y selección de poemas,

realizada por Mª Ángeles Pérez López

1ª Edición: Abril, 2009© Diputación de Salamanca y la autora© Del prólogo: María Ángeles Pérez López

Diseño y maquetación: Difusión y Publicaciones

Foto de cubierta: Alberto Solé

I.S.B.N.: 978-84-7797-316-4

Depósito Legal: S. 383-2009

EdicionEs diputación dE salamanca

sEriE autorEs salmantinos, nº 38

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Imprime: Imprenta Provincial

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Para seguir dando pasos: Charo Ruano

Cuando a Emily Dickinson le preguntaron cómo sabía que algo que había leído era poesía, respondió sin delicadeza: “Si me congela en el acto, es poesía”, “si siento que mi cabeza se abre y queda desnuda, imposi-ble de cubrir con ningún abrigo, eso es poesía. ¿Es que hay alguna otra forma de darse cuenta?”. La anécdota, recreada por Paola Kaufmann en la novela La hermana (2003) podría ser asentida también por Charo Ruano, que ha hecho del lenguaje poético su desabrigo, esa exploración del propio ser que no admite concesiones, mira con valentía y rotundidad el vivir entero y se en-trega de modo completo en cada vez.

Nacida en Berganciano (Salamanca) en 1957, la voz de Charo Ruano es bien conocida. Ligada profesional-mente al periodismo (actualmente como columnista habitual de El Adelanto y años atrás como directora y presentadora del programa de Televisión Salamanca “El cuarto de atrás”), y también vinculada de modo importante al mundo de la literatura infantil –con Ca-talina lina luna (1993), La polilla de los libros (1998), De aquellas y estas infancias (2002) y El bizcocho de ca-nela (2006)–, su nombre está unido al de varios libros de poesía. El primero, titulado Hicimos de la noche un

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Palabras preliminares

largo poema (1984), fue un verdadero acontecimiento en la Salamanca de mediados de los ochenta. Editado por Amarú, un sello que se estrenaba precisamente con su título, venía a dar sentido y solidez a un proyecto auspiciado por la librería Víctor Jara.

La colección, titulada Mar Adentro, apunta una de las cualidades intrínsecas al poemario: la vida de inte-rior, la pasión que transita por los territorios de lo ín-timo y se desborda a la búsqueda del amado (el libro, el hombre), de modo que la mirada recuerda el proceso de crecimiento y construcción del yo entre visillos, esos mismos que narró magistralmente Carmen Martín Gaite y que aquí no impiden la entrada del mundo, sólo la tamizan.

Su apuesta radical por un lenguaje de lo íntimo y la pasión en términos líricos, que llevó a la autora a elegir una cita de Cernuda, lo sitúa lejos, desde luego, de las líneas dominantes de la poesía española en esa década, en concreto del coloquialismo y la narratividad de la poesía de la experiencia con su incorporación de la mito-logía novelesca y cinematográfica, señalando así lo que va a ser una de las señas inequívocas de la identidad de Charo Ruano: su no filiación con grupos y tendencias, su búsqueda estrictamente personal de un lenguaje íntimo y depurado que nos ratifica en la percepción de que se trataba de un libro transitando su propio camino, de que se trata de una poeta transitando su propio camino.

De un lado, Hicimos de la noche hacía inequívoca la entrega al acto literario: el poema “La palabra”, que abre esta antología, disponía la identificación total entre el li-bro y la autora: “Un deseo/ morir a tiempo/ dejando todos los versos/ en tus manos/ Son mi vida/ Cuídame”. Charo Ruano se ha declarado, permanentemente, lectora y es-critora. Los libros son la masa misma de su proceso de

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Mª Ángeles Pérez López

construcción identitaria, de su lugar en el mundo. Las bi-bliotecas, las librerías (Víctor Jara siempre), las ferias del libro, los suplementos culturales, las revistas del gremio de libreros saben bien de esa dedicación en cuerpo y alma, de una entrega que, como decía, es íntima y total.

De otro, quien ronda las palabras con esa terca y prodigada pasión nombra una y otra vez la palabra que parecería clausurarlo todo: el “silencio”. Pero la autora sabe bien que la médula misma de la palabra poética es esa ronda inquebrantable al silencio, la tensión, no siempre dolorosa, que se establece entre decir y no de-cir. “Alguna tarde de éstas” alude a esa relación ambi-valente, en la que lo deseado y lo temido cruzan sus te-rritorios para dejar a la poeta en tierra de nadie: “Alguna tarde de estas/ ya no leerás mis versos/ los he guardado todos/ conmigo en mi silencio” y más adelante, “Tengo miedo esta noche/ Tengo miedo al silencio/ A que sea verdad/ Que no te lleve versos”.

Ambas cualidades conectan el libro con su raíz neorromántica, tanto literaria como filosófica, y per-miten entender el desapego de la propia vida en la edad más temprana (no en vano la muerte es presencia constante en el poemario), la noche como cronotopo que une de modo indisoluble el tiempo y el espacio, la mitificación del artista y del arte y la construcción de una voz inconfundible que apuesta por el verso corto –preferentemente heptasílabo– y la estrofa asonantada en los versos pares, lo que enlaza el libro con la matriz misma del romance: “Alguien me mandó flores/ y yo deseaba versos/ Alguien gritó mi nombre/ y yo quería silencio” (del poema “Alguien me mandó flores”).

No exentos de ironía distanciadora –de modo que un verso, de pronto, puede romper la tensión creada, como “Las mujeres adoran las flores…” en el último

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poema citado, el final de “Sólo un verso” o de “La llama”–, los poemas sin embargo van conformando un poemario orgánico, fuertemente trabado, en el que un puñado de motivos literarios se adensan hasta hacer in-disociables los distintos elementos. Así, el poema “No me quites el silencio”:

No me quites la nocheni el silencio, mi vidadéjame con mis sueñoscon el viento, hay heridasque no las calma el tiempoque no quieren caricias

[…]

Déjame con la nochetal vez la única amigaque lee todo mi cuerpoque lee todas mis líneasque nunca me rechazaYo soy la noche misma

Sin puntuación, pero utilizando las mayúsculas para distinguir el comienzo de frase, en el manejo libre de las convenciones de la lengua (lo que la lleva a jugar con la tipografía como en “Al final”), la autora va cons-truyendo ese proceso de búsqueda pasional en el que la reflexión metapoética se tiñe de angustia, de miedo y desesperación. De ahí el título, realmente hermoso, que viene a dar su color al conjunto: quien se nombra a sí misma “ahogada en tinta” en el poema “Búscame” e intenta escribir “si se acerca el miedo”, ha hecho de

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la noche un largo poema. Es decir, ha apostado todo lo que quería ser como poeta (al menos para la altura de 1984) a ese espacio noctámbulo, solitario y frío que cerca el silencio:

Y de pronto el silenciollenando cada cosacon su nostalgia inútildestruyendo las horas[…]Todo el silencio, todocomo una gran mentiraalimentando el llantoinsoportable vida

La difícil libertad que conquista el yo lírico cierra el libro con el poema que le da título, capaz de clausurar la angustia vivida al armonizar aquellos elementos en tensión: noche, poema, caricia, miedo, resueltos en ese “Hicimos/ hicimos/ la noche nuestra” dispuesto tipo-gráficamente a modo de escalera descendente. Quien ha bajado hasta la intimidad de su yo sube ahora a cerrar un libro intenso y emotivo atravesado por la pasión (el padecer, la entrega completa, la cercanía a la muerte).

El impacto de Hicimos de la noche un largo poema en-tre los lectores y sin duda, en la propia autora, explica el silencio de siete años que requiere para publicar el siguiente, titulado La cálida quietud de la tristeza. El mismo sello editorial, con el que la poeta ha estable-cido una estrecha relación de complicidad y de trabajo, un título también largo –en este caso un endecasílabo perfecto, al que parecía querer aproximarse el título an-terior–, pero ahora una relación atenuada con respecto al libro (y su cuerpo el poema) que viene presidido por

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una cita de Gil de Biedma, se afianza en la relación con el otro (el amado, el amante). Si bien muchos motivos se repiten (en especial la noche con su capacidad hip-nótica y posesiva), el libro adelgaza la presencia de lo metapoético y entra sin ambages en los caminos de la poesía amorosa:

Cuídate de la nochede su sombra alargadadel cuchillo que esconde[…]Cuídate de la nocheque se hará con tu cuerpoAmor lento, sosegadoespejismo, dulce muerte

El poema en el que aparece el título del libro, “Como un manto de estrellas”, apuntala la misma idea en la que se fusionan dos de sus motivos centrales: la noche y el silencio. De nuevo la disposición tipográfica en forma descendente cierra un poemario que agudiza algunos aspectos del poemario anterior y sella otros, resolviendo así la necesidad que Ruano podía sentir de cerrar defini-tivamente Hicimos de la noche. En ese sentido, La cálida quietud de la tristeza trabaja de manera más afilada sobre “el inquietante sonido/ del silencio” que nombra en su final, de modo que ofrece poemas tanto breves como largos que se relacionan de modo complejo con la pala-bra ausencia y su larga parentela léxica.

Un paso más adelante, publica un libro marcada-mente diferente: La frontera (1993). Sólo han pasado dos años desde La cálida quietud, pero ahora Charo Ruano ha encontrado un camino realmente distinto, que no resulta irreconocible para sus lectores pero que

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señala la necesidad de nueva brújula y nuevas cartas de marear: el título breve, dominado por el sustantivo, el carácter fuertemente trabado del poemario en torno a la noción de frontera (escrita con mayúsculas para reforzar su perfil singular), las citas iniciales de Saint John Perse y Adonis que abren el libro a otros horizontes cultura-les y la inserción de los textos en un espacio imaginario de carácter simbólico dotan al libro de silueta propia. Ahora sí la autora abre un camino distinto, el de quien escribe desde las tierras de interior (Salamanca con su condición periférica y no sólo por su posición geográ-fica como frontera con Portugal –en esa raya imaginaria e inequívoca de los que han sentido menos interés ha-cia el país vecino de lo que querríamos suponer– sino también por las complejas y a veces difíciles relaciones con los grandes foros de la cultura o del poder). En este caso, Ruano se coloca en el interior de ese espacio inte-rior. La colección en la que publica el libro la editorial Víctor Jara es, una vez más, la titulada Mar Adentro. Pero ahora el título adquiere sentido pleno: ese mar infinito de la planicie en la meseta central, con su aisla-miento y su silencio seculares, son interiorizados por la autora, que convierte la Frontera en tierra de nadie, en espacio para el silencio y el dolor:

La Frontera es el reinode la melancolíaes la tierra de nadieaún por habitar Paraíso soñadoque a menudo es infierno

¿Dónde está el otro lado?

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o más adelante:

La Frontera es mi hogarel único que tengoVivir siempre en el filode la espada y los sueños

Varios encuentros se producen en el término Fron-tera, que es también cruce, puerta, umbral: el cuchillo que separa lo interior de lo exterior; la línea que divide vida y muerte, cuerpo y alma o razón y pasión; el espa-cio intermedio y desolado de quien no pertenece a nin-gún lugar y tampoco se pertenece a sí mismo. Ese des-amparo ontológico y metafísico tiñe el libro de Ruano. Su tono, más contenido que el de los libros anteriores, sin embargo resulta más desgarrador, porque la Fron-tera es también el espacio deseado. Temido y deseado a un tiempo, especialmente si partimos del concepto la-caniano del deseo como carencia. Su fascinación como cristalización de lo intermedio y a la vez como zona permeable a todos sus alrededores, resulta tan potente que el libro erige una ciudad mítica llamada Frontera, habitada por sujetos en permanente búsqueda de sí, nómadas que “peregrinan siempre/ en busca de hori-zontes/ que se alejan”. Así sin duda la autora, que cierra ese libro con el poema “Probablemente nada”:

Probablemente nadaprobablemente nadieprobablemente tierraprobablemente el aireprobablemente un besoprobablemente túsin decir adiós te irás

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Probablemente el cielose llenará de signosprobablemente solosprobablemente hundidosProbablemente un díavolvamos a encontrarnosprobablemente nuncapodré olvidar

Probablemente nadaprobablemente nadieesperará mi vueltapreparando el paisajeNi flores, ni esperanzani ventanas abiertas

Probablemente nuncaPodré volar

La frontera atraviesa también este poema: dividido en estrofas de cuatro versos con rima y otras de cuatro versos sin rima que disuenan claramente tras las ante-riores, el texto se fractura y divide también en esos dos versos últimos que ni siquiera tienen ya continuidad gramatical, porque la autora utiliza la mayúscula en el último para dejarlo desgajado o descolgado, más allá de la frontera que constituye ese imposible.

En el camino que van construyendo los libros, Charo Ruano abre con Los rostros de la huida (1996) un núcleo temático nuevo: tras la frontera, la huida. Que a veces es huida hacia delante, de tono mucho más enfático e intenso que los libros anteriores, porque es conducida por un yo lírico de gran fuerza que ha sido erigido sobre nuevos vectores: la creación de una figura masculina (“Eligió la mentira/ y se escondió/ durante

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largo tiempo/ entre la nada/ que llegó a confundirse/ con el aire/ un aire irrespirable/ una batalla/ por man-tenerse asido/ a ciertos gestos/ reconocerse aún/ en las mañanas”) que establece una compleja relación con el tú femenino del poemario (“No le gusta casi nada/ de la vida/ excepto mirar/ sin ser mirada”). Y del diá-logo imposible entre esas dos voces que desdoblan y multiplican el yo lírico, surge el silencio como tótem y palabra clave una vez más (“El silencio/ fue su apuesta más firme/ Inútil presentar batalla”). Qué paradoja en-tonces la del poeta conducido necesariamente al espa-cio vacío, la página en blanco a la que aspiran tantos autores mientras un golpe de dados no puede abolir el azar. Por ello los poemas de Ruano trabajan con la dimensión visual de la página: rodean el poema de un espacio silente muy amplio y disponen los versos a par-tir de numerosos márgenes que albergan en sí la mudez y la muerte. La base rítmica se fractura con frecuencia cuando el poema se queja, disonante, porque no hay respuesta para la pregunta “Qué hacer con toda la be-lleza/ que he acumulado / tras mis ojos/ heridos de luz”. De ahí la agresividad del yo poético; su explosión ver-bal en el verso “os odio” repetido en varias ocasiones y tan cercano a ese “malditos” del poema de Fonollosa que abre el libro; y por último la reiteración de aquellos ítems que conforman toda una trayectoria poética:

Sois mi fracasomi norte, mi fronterael lazo que trabapies y manosel beso pegajosola tristeza

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Sois el espejoque refleja la imagendeformada y cruelextraña mueca¿por qué me reconozcoen vuestros gestos?¿por qué el llantono purifica y quema?

Al tiempo, la reflexión metapoética es muy notable, como en “Construimos la pasión”. ¿Qué puede propo-ner el artista contemporáneo que no sea, también y ne-cesariamente, una reflexión sobre su material literario? Esa es la sustancia misma de la obra poética de Ruano, la indagación metaliteraria en la que los lazos entre lite-ratura y realidad, entre propuesta personal y parricidio literario, entre cosa y signo son puestos en cuestión per-manentemente. De otro lado, no puede olvidarse que, si esta cuestión enlaza a la autora con los poetas de su generación y la sitúa en un marco de continuidad con la tradición de modo que el poema se percibe como un ente ahistórico, por su parte Ruano va a ofrecer un perfil sin-gular al agudizar el enlace con las formas populares por el empleo del verso corto y la frecuente rima asonante. La tradicional frontera entre alta y baja poesía, o popular y culta, va a ser inviable para Ruano, que desarrolla el poema lírico en un formato deliberadamente acrónico, de modo que puede hacerse válida la propuesta del chileno Óscar Hahn, quien al escribir sonetos recuerda que son estrellas fijas en un cielo blanco cuya luz todavía nos alcanza (“Estrellas fijas en un cielo blanco/ son los bellos sonetos pues no giran/ en torno de orbe alguno ni han rotado/ sus densas masas de catorce cifras// No reflejan la luz del sol tampoco/ pero irradian su propia luz de adentro/ Y en el

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albor parecen en reposo/ o muertos cuyas tumbas son sus cuerpos [...] / Y aunque hace miles de años extinguidas/ su fulgor todavía nos alcanza”).

En el siguiente libro, Frente al azar de otros amores (2000), Charo Ruano recorre de nuevo el territorio pa-sión en la estela cernudiana que abre la cita inicial: “Tú fluyes en mis venas, respiras en mis labios,/ Te siento en mi dolor;/ Bien vivo estás en mí, vives en mi amor mismo,/ Aunque a veces/ Pesa la luz, la soledad”. Poe-mas así en que se aguzan los sentidos, en especial el oído y el tacto, porque la experiencia del amor es sensorial y porque el poema se desplaza hacia el amado, sale de sí mismo y pivota hacia el cuerpo del deseo para poder volver al territorio metapoético con una nueva palabra recién descubierta (“He llenado la casa de flores”). La matriz rítmica es armónica; a diferencia de poemarios anteriores, evita su fractura y tiende, de manera mucho más clara por tanto, hacia los sonidos de la tradición:

Eras la cariciaque nace temblandolos labios sutilescapaces del fuegoEras la mañanarecién inventadaeras agua frescay yo sed y anhelo

Ponías tanta luzen mi vida oscuratanta libertaden cada reencuentroPonías tanta prisaen cada cariciasentía tus ansiasentre beso y beso…

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Y te iba dejandonavegar despacioHabía tanto amoren tu piel sin tiempo

Donde la obra de la poeta se hace mucho más per-sonal es con el siguiente libro, el extraordinario Sobre el cansancio (2004). Una vez más, la construcción es orgá-nica para un poemario que viene precedido por dos citas memorables de Antonio Gamoneda (“Este es un año de cansancio/ Verdaderamente es un año muy viejo”) y Coetzee (“¿Cómo escribir cuando el cansancio es como una mano enguantada que te agarra el cerebro y te lo estruja?”). Desde ellas se marca el tono laso y desfalle-cido, que además tiene un carácter tan insistente que permea el conjunto con su luz oscura. Veintiún poemas de la primera parte y once de la tercera se titulan igual que el libro. Esa reiteración dolorosa y obsesiva ahoga la respiración, hace inviable cualquier forma de énfasis y deja desgastadas las palabras. La misma palabra can-sancio se tiñe de los varios matices que imprime cada una de sus acepciones: fatiga, desde luego y en primer lugar, pero también desgaste, pesadumbre o hastío. La autora acusa además dos fuertes golpes de la vida (tan fuertes, yo no sé, como del odio de Dios, que diría Vallejo): la muerte de su padre y de su querido amigo el escritor Gonzalo Torrente Ballester, afincado en Sa-lamanca los últimos años de su vida. Ambos fallecen el 27 de enero de 1999, y las huellas de ese profundo dolor quedan impresas en su obra de modo indeleble.

Como si sólo le quedara ese refugio llamado len-guaje, la “casa segura” de la que hablaba Karl Kraus (ins sichere Haus der Sprache), la palabra cansancio atrae a las demás hacia sí y sobre la base morfosintáctica (“Ante el

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cansancio/ Bajo el cansancio/ Con el cansancio/ Contra el cansancio/ Desde el cansancio...” y así hasta utilizar doce preposiciones) y rítmica del título trabaja el resto del poemario: son muchos los ejemplos que podrían ponerse y en todos ellos se advierte el latigazo que el pentasílabo imprime con su ritmo rápido y doliente, aunque en ocasiones utilice el heptasílabo (especial-mente en “Perdón por la tristeza”):

[…]Sobre el cansanciobreve y amargode las huidassiempre con vueltasiempre cerradasbillete y vidaregreso y casacruel prisioneraen el cansancio

Incluso cuando el verso es de arte mayor, su base rítmica sigue siendo la misma y entonces la autora uti-liza el decasílabo, lo que da profunda unidad al libro y señala su aspiración a una totalidad o absoluto que aquilate y agote la palabra agotada:

Sobre el cansancioazul acerode tantos mares ya visitadosalmacenados en la memoriadel azul cielo al azul pálidoel más celeste o ese marinoel gris oscuro de los naufragios[…]

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Esa vinculación con una base estrófica en la que la rima asonante suele arrancar de los versos impares (de modo que la palabra cansancio, la primera que rima, establece su ley implacable), nos permite recordar una cita del poeta venezolano Rafael Cadenas que dice que “hablar una lengua es una filiación a un territorio cultu-ral específico”.

Territorio llamado tradición y sustrato popular que se reinventa aquí, a la luz de las palabras de Eliot que recordaba cómo la obligación directa del poeta es con su lengua. Aquí, las obligaciones que asume la palabra cansancio son numerosas: resemantiza la cuestión meta-poética, ya presente en libros anteriores (“Sobre el can-sancio/ de tinta y verso/ … Sobre el cansancio/ de tinta nueva/ azul violeta, negra de espanto/…”); funda nue-vos lazos con antiguas palabras de la autora, en especial frontera (“Luego escapar, huir deprisa/ que no se paren más los caballos/ y que te acerquen hasta la orilla/ la fron-tera de este cansancio”; “Sobre el cansancio/ triste, aca-bado/ de las fronteras/ de los caminos/ y de las muertes/ puestas a plazos”); y por último, propone un conjunto de relaciones literarias nuevas: la percepción cristalográfica del hielo, que tantas veces acompaña al cansancio del yo lírico, nos lleva hasta La mujer helada (1981) de An-nie Ernaux, una de sus narradoras preferidas o hasta El muro (1963) de Marlen Haushofer, otro de sus libros de cabecera. No sólo porque el mandato del frío sea largo en Salamanca y se cumpla cada invierno de modo inexo-rable, sino también porque el hielo conforma la ausencia de vida (“sin sangre ya en las venas”), la anulación del concepto pasión, la pérdida como dimensión central del ser humano. Es decir, el lugar de la episteme poética en la escritora, que se exige a sí misma atreverse a nombrar lo innombrable, cada una de las derrotas (“porque el can-sancio es fuerte/ es duro, fiel, amargo/ y rompe tus costu-

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ras/ tus ansias, tu letargo/ el deseo insatisfecho/ se adueña de tus actos/ y ya sólo eres duelo/ herida, llaga acaso/ que nunca cicatriza/ todo por el cansancio/ … / Me ganó la batalla/ Como siempre/ el cansancio”).

Pero, quien ha sido derrotada por el cansancio sin embargo es capaz de poner en pie su siguiente libro, el último hasta la fecha, titulado Té de jazmín en porcelana inglesa (2006). Dedicado a su amiga Candelas, que mu-rió siendo joven y amando la vida intensamente, el libro entra con valentía en el espacio del quirófano, los largos tratamientos de quimioterapia, el terror de las biopsias, la angustia de un final trágico que se percibe cada vez más cercano. Dice el argentino Juan Gelman que la poesía enfrenta a la nada, mira a los ojos de la muerte. El libro de Charo Ruano se sitúa exactamente en ese lugar, la nada, el vacío tras la desaparición de la persona que-rida, para nombrar la vida y hacerla presente. Por eso la cita elegida para abrir el libro es de la uruguaya Juana de Ibarbourou, que se atrevió con ese verso extraordinario: “Caronte: yo seré un escándalo en tu barca”.

En el libro de la salmantina, el escándalo nace pre-cisamente de la contundencia con que la vida se en-frenta a la muerte, de la intensidad con que la vida es señalada una y otra vez. La selección para este libro, realmente amplia en relación con los libros anteriores, viene dada justamente por esa vocación de vida:

Que no se entere nadieDe que tuvimos miedoQue no éramos tan fuertesSolo fue aparentarY dejar que creyeranQue todo era posibleEn nuestras manos firmesDecisión, fuego y sal

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La forma elegida se corresponde, ya lo sabemos, con el taller Ruano: tiras asonantadas de versos fre-cuentemente heptasílabos, con numerosos paralelis-mos y repeticiones que funcionan a modo de estribillo (“Sólo quiero dormir/ Dormir profundamente/ Dormir para olvidar/ Dormir para perderme”) y en los que la angustia de la despedida duele en el cielo mismo de la boca: “Frágil, tenue, cansada/ Borrar el maquillaje/ Deshacer el guión,/ Saltarse este absurdo/ Y falso so-siego/ Y dejarse querer/ Y dejarse morir/ Lentamente/ Sin miedo”.

Precisamente porque la poesía aspira a derrotar a la muerte (aunque no sea más que “la fugaz derrota de la muerte” que escribió Agustín García Calvo), la au-tora cierra el libro y la presente antología con un poema arraigado en la esperanza:

Me gusta pensar que vives lejosQue te fuiste a una ciudad del norteDonde casi siempre llueve y es invierno

Una ciudad pequeñaCon un puerto de marHelado y quietoCon un faro lejano yMuy antiguoQue aún emite señalesComo aullidosY alerta a los barcosY a los muertos

Ciudad elegida al azar, puro caprichoComo el salón de té que ahora regentasHay que cumplir alguno de los sueños

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Y reformaste el salónPintura, encajeCortinas y mantelesTodo a juegoY ahora té de jazmínEn porcelana inglesaY tarta de limón…[…]

En tiempos de inflación verbal como los nuestros, la obra de Charo Ruano es exigente consigo misma, se circunscribe a siete poemarios a lo largo de 25 años y pa-rece mirar con atención, a veces distanciada, estos tiem-pos del exceso: el poema “como locos” del austríaco Ernst Jandl dice tanto de nuestro presente que asusta:

como locos

como locos trabajan todos en nuevas novelas ycomo locos en nuevas piezas teatrales y comolocos en nuevos poemas y los pintorespintan como locos sus nuevos cuadros ylos escultores dan cincel como locos en sus piedrasy los compositores escriben como locos sus feas notasy los músicos día y noche soplan como locos su saxofónsu trompeta su trombón clarinete flauta oboe fagot

(traducción de Francisco Díaz Solar, La Habana, Torre de Letras, 2008)

Quizás alguien deba conservar la cabeza. Y hacer algo con ella, por ejemplo, dejarla desnuda, congelada en el acto si se encuentra de frente, como aquí, con la poesía.

Mª Ángeles Pérez LópezUniversidad de Salamanca

y ahora algunos pasos de pared a pared…

Wislawa Szymborska

No tienes ni siquiera talento para el roce.

Andrés Neuman

Con el tiempo los cuerpos se acostumbrana caminar completamente solossobre la tierra de la soledad…

…Sólo queda la noche. Y nos perdemosen el largo silencio de las callesvacías. Y al llegar la madrugadasentimos frío y respiramos muerte

Eloy Sánchez Rosillo

Hicimos de la noche un largo poema (1984)

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Charo Ruano

UNA PALABRA

silencioUna nostalgia volverUn deseo morir a tiempodejando todos los versos en tus manosSon mi vida Cuídame

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Y ahora algunos pasos (de poema a poema)

ALGUNA TARDE DE ESTAS

no te traeré mis versosme esperarás sentadoen el café leyendo

Pedirás lo de siemprey así pasará el tiempono me verás llegary la noche en silenciolo irá cubriendo todomarcharás de regresoy esperarás que llamemañana por teléfono

Alguna tarde de estasya no leerás mis versoslos he guardado todosconmigo en mi silencio

Alguien te llamaráY te dirá que he muertoestaba un poco loca…tú callarás diciendoque no, que es imposibleque me he ido con el vientoy que vendré mañanay te traeré algún versoEscrito por la nochecon notas y secretoscon cosas que han falladocon algún que otro sueño

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Charo Ruano

Tengo miedo esta nocheTengo miedo al silencioA que sea verdadQue no te lleve versosDame la mano fuerteLa noche me va envolviendoTengo frío y a vecesTengo sí, mucho miedoA que una tarde de estasYa no veas mis versos

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ALGUIEN ME MANDÓ FLORES

y yo deseaba versosAlguien gritó mi nombrey yo quería silencioFue una mañana clara y odio el amanecerfue un día sin esperanzay tuve que volvermis ojos hacia dentrobuscando en mí el dolorde una nostalgia antiguapara sentir la vidasin muerte alrededor

Alguien me mandó floresy yo quería morirlas flores en mi entierrono me servían al finse fueron deshojandoy la noche avanzóy me perdí en su sombrasin miedo, sin temorY olvidé las floresque un día al amaneceralguien me mandó a casaporque quedaba bienLas mujeres adoran las flores…

Sentí que mi almacon la rabia temblóYo quería los versosPero las flores No

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Charo Ruano

NO ME QUITES LA NOCHE

ni el silencio, mi vidadéjame con mis sueñoscon el viento, hay heridasque no las calma el tiempoque no quieren caricias

No me quites la nochemi piel está dormidaquiero volar despaciollenarme de alegríasentir todo el silencioentre versos y rimas

Quiero coger tu manomuy fuerte, no hay prisano hay ninguna razónmás grande que mi vidala que quiero tenerla que busco día a día

Déjame con la nochetal vez la única amigaque lee todo mi cuerpoque lee todas mis líneasque nunca me rechazaYo soy la noche misma

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EL MIEDO

El miedo es empezar sin ti

Es soñarte en la nochey no verte jamásesperar en silenciosaber que no vendrásEs sentir con el albaaún más fuerte el dolordescubrir la nostalgiainventar el amorEl miedo es la tristezael ansia de morirel llanto alguna tardey nunca revivir

Es mirarse las manosy no poder gritarde rabia o de cansanciopor qué no escribiránEs sentir que los labiosresecos, sin saborse apagan, se oscurecenEs desesperación

El miedo lo descubresen un momento todoy nunca te abandonainmóvil simple solo

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Charo Ruano

Te araña, te manejatoda la soledades como una amenazasi el miedo acecha ya

Y el miedo es esta nocheque tampoco vendráses sentirme gastada derrotada fugaz Es perderme en el sueño tener que despertar sonreír un minutoal siguiente llorar

El miedo es la añoranzaes volverse y buscartu mano entre las sombrassaber que no estarásDar vueltas como locaQuerer la libertadQuerer el viento todoQuerer resucitar

Y sentir luego el fríocon tanta intensidadsoledad y silencioamor y libertad

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El miedo es la palabraque nunca se diráes el paso frustradoel abrazo, es callarY el miedo es esta nocheque tampoco vendrássentir que los versosya no temen morirEl miedo el miedo es empezar sin ti

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Charo Ruano

SÓLO UN VERSO

para liberar las ansias de marchary ver de lejos cómo destruís mi vida o me edificáis un templo

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BúSCAME

en la noche cerca del silencio ahogada en tinta sola con mis sueños

Búscame en la tierra navegando vientos escondiendo estrellas intentando versos

Búscame en la muerte entre piedra y fuego mis manos audaces destruyendo tiempos

Búscame en la noche si se acerca el miedo y nadie me espera ¿Qué haré con los versos?

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Charo Ruano

LA LLAMA

El fuegoser fuego llamaoscilar como ellos

parpadear temblar temblar

Todo se pierde en ellosla mirada, el miedo

Te fascinan te atormentany al final te queman

Odio las cenizas

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AL FINAL

siempre hay que pararse en algún sitio siempre hay que coger alguna mano siempre hay que atarse a alguien a algo

Al final siempre hay que renunciar a un montón de sueños de esperanzas Por eso no quiero llegar al finalAl final Hay que morir ne ce sa ria men te…

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Charo Ruano

ME DAS TODA LA VIDA

en cada encuentroy toda muerte con tu marchaCuidamos las palabras, las miradasNos contempla el silencio, tenazEl no cambia

Me das toda la muerte en el encuentroen el abrazo, el deseotoda el ansiareducida a furtivas cariciasnavegando incapaces de soportar la nada

Es un sueño Quererte alguna nocheEs un sueñosentirte en la mañanaY descubrir tu manoentre mi pielY dos cuerpos recientes que se abrazan

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DESPUéS DE TI

habré esperado tantoque no podré dar tiempoHabré querido tantoque no podré dar amorY estaré tan desesperadamente solaComo antes de ti

Golpeo tu puertate busco y me rechazas

Todos estamos solos me dicesy yo sé que ni a ti, ni a mínos importaban ayer los otros

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Charo Ruano

Y DE PRONTO EL SILENCIO

llenando cada cosacon su nostalgia inútildestruyendo las horasY de pronto el silenciocomo una sombra localeve, sutil, airadoenvolviéndome todaNi batallas, ni risasni palabras, ni bromassólo un tiempo infinitoy una muerte sin formasSólo una tenue luzencadenada al albaun fantasma y mil manosdestruyendo palabrasTodo el silencio, todocomo una gran mentiraalimentando el llantoinsoportable vida

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PIéNSAME LIBRE

suéñame solasiénteme enteralatiendo en tu sienflotando en tu bocaInvéntame débilacaríciame todafuerte y tan pequeñaentre luz y sombra

Inventa mi cuerpoesa línea rotaSuéñame perdidasilencio de muertefugaz mi deseoy tenaz mi alcobaen la soledadmás dura más tensa más solame pierdo y te buscoy nunca te hallo

Eres fuego y cenizaEres humo y antorchaansia entre mis labiossemilla que explotaY nunca me alcanzaestéril ternurapalabras sin forma

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Charo Ruano

Piénsame libresuéñame solay háblameaunque la noche nos encierrey la nostalgia se oponga

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HICIMOS DE LA NOCHE

un largo poemaSe nos quedo prendidaen la piely nos dejo la angustiamás calmada, serenaHicimos hicimos la noche nuestra

Volamos con el vientotuvimos una estrellajugando en nuestras manossin miedo sin reservasHablamos de las cosasque a veces queman lentaslos momentos y el tiempoque se aleja se aleja

Hicimos de la nocheuna caricia enteraSe nos quedo prendidaen los labiossinfonía nostalgiaentre nerviosa y bella

Hicimos hicimos la noche nuestra

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Charo Ruano

Luego al amanecernos dolió la mañanaY se quejó la pielen silencio, resecahambrienta de ternurao quizá soñolientatemblando con el frío…el alba estaba cercaHicimos de la nocheun largo poemacon versos sin palabrasuna caricia enteraSin angustia Sin miedoHicimos hicimos la noche nuestra

La cálida quietud de la tristeza (1991)

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Charo Ruano

LA GéLIDA CARICIA

del amante furtivono despertó en su pielninguna sensaciónSólo el sabor a frutade unos labios distintospuso alas de espumaen aquel corazón

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EL HUECO DE TUS MANOS

Fue mi mejor refugioPero aun sigo huyendo

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Charo Ruano

A VECES EL DESEO ES TAN BREVE

que cuando me abrazasya quiero que te marches

…

Sobre mis labiosronda una cariciaque no llega a hacerse realY no te beso

Deseo que te marchesQuiero quedarme solaCuando te has idobusco tu númeroy te llamo de-ses-pe-ra-da-men-te

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TUS LABIOS EN MI CUERPO

dibujan una sendadelicada y febrilpor la que se deslizael deseo más hondoel silencio más tenso

Y busco tu miradacierro los ojostiembloIntento la cariciay es solo un goce nuevo

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Charo Ruano

HUBO UN DíA QUE FUE PERFECTO

y una noche sin palabrashubo amores sin descansoy amantes de madrugada

Cuando la luna avanzóentre tinieblas quebradasuna voz entre las sombrasme habló de ti sin nostalgiaCuando el viento se hizo amablesuave brisa, llanto y alasreveló sobre mi pieluna huella, otra mirada

Y ya no podrá la lluviadestruir rastros y pisadasy trazar caminos nuevoscomo tantas madrugadasBorrar los besos antiguoslos que no dejaron nadasólo el corazón hastiadoel deseo sin esperanza

Hubo un día que perfectotus manos sobre mi almohadatus labios hablando quedosobre mi piel abrasadaSe estremecieron las sombrasse estrecharon las nostalgias…Hubo un día casi felizy una noche sin palabras

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NO TE FíES DE Mí

tengo malas costumbresbusco estrellasen las tardes de lluviaY cuando me preguntas¿dónde estabas?apenas si respondo

En el cálido lechojunto a tu piel desnudavoy desgranando cuentosque escuchas impacienteDespués nos abrazamos

No te fíes de mísuelo cerrar las puertaspara que no entre nadiey pasar largas horas con los ojos cerradosinvocando fantasmasY a menudo me escuchanme separan de tiy me dejo llevarno importa dónde

No te fíes de míle he jurado a la nochefidelidad, amory cien cosas peores

En el húmedo lechoentre tus brazos, sigocontándote una historiaVoy de farol …Mañana me habré ido

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Charo Ruano

CUíDATE DE LA NOCHE

de su sombra alargadadel cuchillo que escondeCuídate del chillidode las aves rapacesque profanan el lechode lo que más amamos

Y huye

Cuídate de la trampa del amor más oscurode los cielos cubiertosde la nieve de marzoCuídate del amanteque sale siempre huyendodisfrazando la prisadejándote el silencioen tus sábanas tibias

Y huye

Cuídatedel tímido aleteo de la soledadque te espía radiantey te tiende sus brazosCuídate del silenciode un otoño sin sombras

Y huye

Cuídate de la nocheque se hará con tu cuerpoAmor lento, sosegadoespejismo, dulce muerte

Y huye

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COMO UN MANTO DE ESTRELLAS

huyendo de la nocheoro azul negro

ausencia desesperación deseo

calma soledad miedo

La cálida quietud de la tristezaEl inquietante sonido del silencio

La frontera (1993)

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Charo Ruano

LA FRONTERA ES UN REINO

de sombras apagadasfragor de armas secretasy rutilante luz

Esperanzas, silenciollantos entrecortadosy amores a destiempoque siempre acaban mal

La Frontera es el reinode la melancolíaes la tierra de nadieaún por habitarParaíso soñadoque a menudo es infierno

¿Dónde está el otro lado?

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LA FRONTERA ES MI HOGAR

el único que tengoVivir siempre en el filode la espada y los sueñosAlimentando vidas distintas

Aquí nos encontramos¿Recuerdas?

Sólo por esomereció la penaAcercarse a La Frontera

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Charo Ruano

LA MUJER TENíA ASPECTO

de haber llorado muchosus ojeras apenaspodían ser más profundas

Llevaba de la manouna niña pequeñay un gran bolsodonde seguramentetrasladaba su casa

Y era joven, muy jovenapenas treinta añosque sólo le habían dadounas horas de amory tanto sufrimiento

La niña se aferrabaa una muñeca viejadespeinada y oscuray cantaba felizuna canción sin nombre

Ellas no cruzarían habitantes eternasde este lugar terribleque llamamos Frontera

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AQUí EN LA FRONTERA

cuando llega la nochecon sus tonos rojizosel silencio es el únicoque se atreve a salir

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Charo Ruano

TE ESCRIBO DESDE EL OTRO LADO

Amor, ahora es de noche

Aquí todos tienenla piel desconociday prisa, siempre prisapor llegarmás arriba, más alto

Yo también tengo prisapor tenerte a mi ladoy perderme en tu pechocomo la última nocheallá en La Frontera

Un rumor de caderasmerodea mis sueñosy palabras extrañasque entiendo sólo a mediasy que a veces me asustan

Amor, si pudierascruzar de madrugadauna noche sin lunasin estrellas, sin vientoy venir a mi ladoSi pudieras…

Qué más puedo decirteQue te quiero y te quieroAhí en La Fronteradonde esperas el sueñohazme un sitio a tu ladoPor si puedo escapar

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Sé QUE EL DOLOR

será terriblecuando llegue

Cuando le sientabatir las alasen torno a míRomper cristalessaltar sonrisaspegarse a mi pielpara aniquilarme

No podré escaparNo quiero escapar

Aquí en La Fronterasabemos del dolor

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Charo Ruano

ALGUNOS HABITANTES DE LA FRONTERA

son nómadasperegrinan siempreen busca de horizontesque se alejan

Las estaciones son su refugiosu último hogar

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PROBABLEMENTE NADA

probablemente nadieprobablemente tierraprobablemente el aireprobablemente un besoprobablemente túsin decir adiós te irás

Probablemente el cielose llenará de signosprobablemente solosprobablemente hundidosProbablemente un díavolvamos a encontrarnosprobablemente nuncapodré olvidar

Probablemente nadaprobablemente nadieesperará mi vueltapreparando el paisajeNi flores, ni esperanzani ventanas abiertas

Probablemente nuncaPodré volar

Los rostros de la huida (1996)

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Charo Ruano

ELIGIÓ EL MAR

porque del mar había venidoun mar de aceroy de saladas aguasazul marino a vecessiempre hieloregazo donde hundirsetodo o nada

Eligió el marporque era para siempreinamovible, quietocruel nostalgiaporque en el había enterradodos amoresunos años de paz y tantas ansias

Eligió el mary una vez decididofue sencillocerrar todas las trampasSólo queríaun atardecer cálidoy un reflejo de luzallá en el agua

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Eligió el mary por primera vezen mucho tiempodurmió sin temerla madrugadaLa imagen de espejoera su imagensu decisión sin dudala más sabia

Eligió el marporque del mar había venidoun mar de miedosy de saladas lágrimas

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Charo Ruano

ELIGIÓ LA MENTIRA

y se inventó otra historiaotra mujer, otro paisaje otra miradakilómetros de aguaen cada huidadesasosiego a vecesy distancia

Eligió la mentiray se escondiódurante tanto tiempoentre la nadaque llegó a confundirse con el aireun aire irrespirableuna batallapor mantenerse asidoa ciertos gestosreconocerse aúnen las mañanas

Pero el cuerpono entiende de mentirasy le cuesta fingiry a veces callaotras grita su gozo enloquecidoNo se puede engañar a nadie al alba

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No pudiste olvidara la mujersusurraste su nombrey era el aguallenando tus pulmones de silencio

La mareaoscura y transparenteCon una extraña urgenciale devolvió a la playa

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Charo Ruano

NO LE GUSTA CASI NADA

de la vidaexcepto mirarsin ser mirada

Perderse en huecosráfagas y esquinasinventarse una pielcada mañanaY salir a la calleentera y fuertedespués de ganar la madrugada

Disfrazarse de vientoy fieramentefieramente lucharpor cualquier causalas nobles, las justaslas perdidasLa eterna soledadde las palabras

El silenciofue su apuesta más firmeInútil presentar batalla

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QUé SOLA ESTá LA MAR

allá a lo lejosQué solaQué fríaQué distante…

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Charo Ruano

HABRá QUE PENSAR

en el suicidioen hacer y deshacer maletasliberarse de fardos y prejuiciosy disparar sin miedo a la cabeza

Que no tiemble la manoque no tiembleno es posible escaparesto es la guerraun minutola paz, el infinitoun minutoel corazón se quiebra

Que no tiemble la manoque no tiembleSólo una vezdirecto a la cabeza

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OS ODIO

profundamente os odio

Por obligarme a escapara las estrellasponer cera en las alasa mis sueñosY disparar en el vueloa las cometas

Os odioProfundamente os odio

Sois mi fracasomi norte, mi fronterael lazo que trabapies y manosel beso pegajosola tristeza

Sois el espejoque refleja la imagendeformada y cruelextraña mueca¿por qué me reconozcoen vuestros gestos?¿por qué el llantono purifica y quema?

Os odio profundamente os odio

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Charo Ruano

Qué hacer con toda la bellezaque he acumulado tras mis ojosheridos de luz¿Qué hacer con ella?

Quemaré inciensoen los rinconesabriré la ventanadesde ellael vacío serátan sólo un pasoapacible, infinitosin tinieblas

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CONSTRUIMOS LA PASIÓN

sobre palabrasfrase a fraserito a ritovacías, bellas, gastadas

Las palabras sonun frágil equilibrionos unen nos atan nos engañan

Las amamos tantoy no entendemosque fuera de los labios deseadosSon nada

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Charo Ruano

APENAS HAY YA NADA QUE DECIR

con leves gestos aprendidosnos buscamosLos labios, el pelo, la cinturaunidos en el beso y tan lejanos

Temblando de deseola piel se abrey recibe la lluvia y el abrazoquietos como estatuasateridosDeseando escaparamar, quedarnos

No hay palabrasni tiempo, ni esperanzaSólo este ansia fugaz

Sólo muerteSólo llanto

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CUANDO TRANSCURRA EL TIEMPO

y me hayas olvidadopon en orden mis cosasairea los armariosY quema las facturas(no intentes entenderlas)las cartas, los papeles…

Los libros en paquetespara la bibliotecaTeresa ya lo sabeLos recuerdos de amigostambién puedes quemarlos(¿Qué amigos, qué recuerdos?)

Cuando transcurra el tiempoy sólo haya cenizasrecuerda que querertenunca fue suficienteY te quise…

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Charo Ruano

DESCANSA

Recobra el alientoHay que seguir

Cómo enfrentarte a tu caraen el espejosi no conoces ningunode tus rasgosSi has olvidadolas muecas, la sonrisa…

El pulso firmetrazando sobre el ojouna sombra de luzdespués los labios

Cómo enfrentarte a tu caraen el espejo

¿Quién es la extrañaque te está mirando?

Años de angustiade soledad, de miedote han dejado sin rostro

Hay que intentarloHay que inventarse una cara

El tiempo lentamentela irá des-di-bu-jan-do

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CON LOS AñOS

perdió la resistenciaal dolor, a la soledad

Ya no confíaen las noches de insomnioSabe que son eternasy que al final el miedo llegará Y duendes y fantasmasy mil dolores sordosharán su casa en ella

Y estará solacomo ayercomo siempre

Nunca hasta ahorafue un problema la soledad

No rozar a nadieNo mirar a nadieNo amar a nadie

Nadie podrá herirla

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Charo Ruano

EL AMOR ES SIEMPRE

empezar de nuevosorprender la pielcon la luna llenaBeberse de golpela risa, los vientosy gritarle al mundoque todos lo sepan

El amor es siempreal amanecercálido y firmevoraz y recienteEmbriaga la bocay te deja el almaperdida de luzlos labios ardientes

El amor es siempreun combate duroen el que unos ganany los otros pierdenY lo pierden todoy no hay esperanzaDiáfano y terriblecruel niño inconsciente

El amor es siempreempezar de nuevosorprender los labiosquererte, quererse

¿De dónde la fuerzapara continuar?

¿De dónde la fuerzapara no perderse?

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QUé NO DARíA

por una cariciapor una palabraque llegara a tiempoPor un fuerte abrazoen las noches fríasporque su ventanalimitara al cielo

Qué no daríapor una sonrisacuando cruza el puentedirecto al infiernoPor una lunasin cuartos menguantesQué no daría por no tener miedo

Por cerrar los ojostranquila, tranquilavencer al insomniosólo con el sueñoPor volar despaciosin plomo en las alasQué no daría por guardar un beso

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Charo Ruano

OTRA VEz LA TRISTEzA

otra vez el delirioel ansia de partirel vértigo, el vacío

La sonrisa quebradala música sin ritmola pausa en el combatealguien acaba herido

El viento en la ventanala atracción del abismoun silencio que es falsotal vez un desafío

Mañana será tarde

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EL VIAJERO LLEGA DE MADRUGADA

cansado, desorientado y solo

Deshace la maletaLa ropa en el armariocamisas, calcetinesel pequeño relojun cuaderno de notasque apenas utiliza

Coloca cada cosacomo si fuera a estaren esta habitaciónel resto de su vida

Cualquier lugar es buenopara amarpara morirvivirirse quedandoal borde de la vida

El viajero releealgunas páginasperiódicos, revistasUn libro de poemasque no ama…

Una llamadala voz extraña, ajenadesconocida esta noche

¿Qué hará después?

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Charo Ruano

No dejará notasni mensajes

Ama tanto este lugarque lo ha acogidoen sucesivas huidas…Hoy sientela necesidad implacablede habitarlo

Que algo suyoquede sobre la camaun rastro de perfumeo cualquier rasgoque rompala indiferencia todade las mil habitacionesque ha ocupado

¿Por qué es tan tristela música esta noche?

Siempre te pareció triste¿No recuerdas acasocómo lloraste cuandopor vez primerasentiste que la muerteespiaba tus abrazos?

El viajero despaciose ha vestidoes una ceremoniasin flores, ni invitados

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Amanece y otros viajeros llegancansados, solos, desorientados

Deshacen la maletaindiferentes…

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Charo Ruano

LOS ROSTROS DE LA HUIDA

son eternosgrabados a cincelsobre la tierraQuemados por años de silenciode caminos inciertosy frágiles conciencias

Los rostros de la huidatienen siempreun nombre, un apellidouna tristezaLa necesidad implacablede avanzarinventarse otro mundosocavar las fronteras

Unirse en una frágilcaravanay llegar a un extremo de la tierradonde la lluviavaya borrando rastrospara que nadie encuentreviejas huellas

Los rostros de la huidatienen luzel cansancio corriendopor las venasy el ansia inagotable de fundirse con la noche

Y sólo es nochecuando velas

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EL POEMA DECíA

que el amor siempre siemprenos devuelve la vida

¿Quién era aquel poetaque murió, viejo, tan viejosin saber nada de amor?

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Charo Ruano

EL VIAJERO QUE HUYE

no necesita sombrani billete de vueltani maletas, ni librosni amaneceres nuevos

Sólo una miradaque le ayude a cruzaresa puerta invisibleque se abre al abismoa la nada o al cielo

Frente al azar de otros amores (2000)

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Charo Ruano

ME DIJISTE UNA NOCHE

que me queríasy ya no te fuiste de mi ladoUna noche de copas y de músicaUna noche de sueños sin futuro

De madrugada al regresar a casame besaste desesperadamentey nos dormimos abrazadosDos seres desvalidosbuscando el calorel contacto de otra pielpara sentirse vivos

Y en la mañanadespertar con resacabesarnos despacioY descubrirnos juntoscomo ayercomo tantos díascon un amor indispensable y justoFrente al azar de otros amores

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HE LLENADO LA CASA DE FLORES

he cambiado de lugar los libroshe encendido el fuego tempranose anuncia el otoño, hace frío

He descubierto en el bosque esta tardeuna nueva palabra, otro ruidohe dejado una piedra muy blancajunto a nuestro árboldonde juega el niñoporqué allí se reúnen los magoslas musas, las caricias que a veces perdimos

Al volver regresé cansadame asustó el silencioel viento y el fríopor eso encendí el fuegoTardas demasiadola mesa está puesta y esperando el vino

He cerrado los ojos muy fuertehe soñado reencuentros, caminosun abrazo, un silencio, una nochey tantas cosas aún por decirnos

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Charo Ruano

ERAS LA CARICIA

que nace temblandolos labios sutilescapaces del fuegoEras la mañanarecién inventadaeras agua frescay yo sed y anhelo

Ponías tanta luzen mi vida oscuratanta libertaden cada reencuentroPonías tanta prisaen cada cariciasentía tus ansiasentre beso y beso…

Y te iba dejandonavegar despacioHabía tanto amoren tu piel sin tiempo

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CUANDO TODO PARECE

ser distintotu boca, tu abrazotu miradaY la alcoba se llenade silencioY mis manos te buscany te alcanzanEl mundo podría ser perfectosi pudiéramos volarcomo las águilasY huir, huirlejostan lejosDonde nuncanos encontraran

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Charo Ruano

TODAVíA QUEDAN HUELLAS DE TU AMOR

en mi piel, en mi estancia, en mi paisajeHuellas que sólo yo distingoy que cuido febril, sin inquietarmeTodavía nacen sombras alargadasal filo de la tardecuando se despereza la tormentaY busco una luz para seguirY busco un silencio y un amanteY pienso que volverás un díaY sueño, sé que podré abrazarteY muero un poco cada nocheentre espumas de llantos que renacen

En mi estancia se extingue lentamenteun último minuto hasta agotarseNo hay tiempo para amores diferentesTodavía quedan huellas en mi carne

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TE MARCHAS SIEMPRE AL ALBA

como huyendoTe marchas presurosollevándote en la pieluna caricia inútil, mi cariciaun beso y un deseoPasan lentas las horasPasan lentas y tiemblo

Amo las noches largastu cuerpo y mi cuerpocomo sombras oscurasbuscándose afanososasustados y ciegosIntentando abrazosdibujando comienzosque nos dejan exhaustosy rotos y deshechosY algunas nochesSí, algunas nochesNecesito unas manosque tracen en mi cuerpola senda tortuosa del placer más antiguo del misterio más lentoY asustada te quieroTe quiero más aúnY a cambio está el silencio

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Charo Ruano

Te necesito ahorate necesito y sientoque respiras cansadoNos queda mucho tiempome dices sin palabrasen un inútil gestode ternura y rechazo

Amo las noches largasY todo este silencioque deshace mis labios mis manos mi deseoY amo esta soledadque me cubre y abrigaY es lo único que tengo

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QUé SERíA DE Mí

sin la dulce violenciade algunas noches de amorSi tus manos no me buscaranen las madrugadas más fríascuando la niebla y el dolorhacen imposible el descansoy la palidez del albanos asusta

Qué sería de mísi tu voz no pronunciara mi nombrealgunas tardesmi nombre, recordándomeque aún estoy viva

Una noche apenas iniciadanos aguardacon distintos ropajescon luces distintasSólo deseamosserenar el corazóncalmar las ansiasY un instinto de muertenos corroeSi no te soñarano existiríasSi no tomaras cuerpoEn mi desvarío un cuerpo un deseo un abrazo

Qué sería de mísin la dulce violenciade algunas noches de amor

Sobre el cansancio (2004)

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

seco y heladode abrir los ojoscada mañanay de inventarsea cada pasoalguna vidapara seguirVivir de acuerdocon lo inventado

Por unas horasser tú sin miedopor unos díassin el pasadollegar del ceroal infinitopor un momentotodo en tus manos

Sobre el cansancioseco y primariode buscar besosmanos, cariciasdepender siemprede los abrazosde las miradas, de los reprochesde la ternura, de aquellos labiosque fueron todo…

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Tantas palabrastantos deseosno deseados

Sobre el cansancioseco y heladode estar cansadosaberte solasaberte siempresin aliadossin falsas citas, sin agoníassin despedidassobre el cansancio

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

duro y mortalde las ciudades, de los viajesy de los barcosDe los caminos llenos de arenay de horizontes siempre lejanossiempre lejanos, inalcanzablesy tan hermosos…quizás por esopor intocables, inmaculados

Sobre el cansanciofrío e incolorode los hotelesdel extrarradiodonde buscasteun día refugiopor unas horas un sitio cálido

Luego la luz azul y grisla cama ajena, el cuerpo extrañoy aquel paisaje lleno de sombrasy aquel sonido de agua en las manos

Sobre el cansanciobreve y amargode las huidassiempre con vueltasiempre cerradasbillete y vidaregreso y casacruel prisioneraen el cansancio

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SOBRE EL CANSANCIO

azul acerode tantos mares ya visitadosalmacenados en la memoriadel azul cielo al azul pálidoel más celeste o ese marinoel gris oscuro de los naufragios

Sobre el cansanciomortal y blancode aquella luna y de aquel barcodonde creíste hallar el nortedonde dejaste huellas y barrode aventuras sólo soñadaspapel y pluma, palabra y dardoy marineros que se bebían a golpe de ola todo el cansancio

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

de tinta y versode los poemas nunca acabadosde los amores nunca vividosy de las muertes que te dañaron

Sobre el cansanciode las palabras viejas y oscurasamor, deseos, cuerpo, letargode los labios que te mecieronde las caricias que te trabaronla piel, los huesos, la libertadde ser un día sobre el cansancioeterna y sola, fugaz y libre

Sobre el cansanciode tinta nuevaazul violeta, negra de espantotrazar deprisa algunas letrashuellas de versos, de amores variosLuego escapar, huir deprisaque no se paren más los caballosy que te acerquen hasta la orillala frontera de este cansancio

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SOBRE EL CANSANCIO

viejo y esclavode regresarsiempre con calmasiempre despacioa los cuartelesa los redileslos hospitalesa los despachos

Sobre el cansanciogris y agotadode regresara los hogaresa las prisionesa las costumbresa los trabajos

Sobre el cansanciotriste, acabadode las fronterasde los caminosy de las muertes puestas a plazos

Sobre el cansanciofrío y heladode las mañanas llenas de luzde los inviernos, de los otoñoslas primaveras y los veranos

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Charo Ruano

Sobre el cansanciotriste y azulde los amores que nunca fueronde los abrazos puestos a pruebade las caricias que se agotaron

Sólo palabrasSólo mentirasSólo promesasSólo el engaño

Sobre el cansancioviejo y cansadode las mujeres y de los niñosy de los hombresde tantos pasossiempre perdidos en la distanciaen el caminoen el erroren el fracaso

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SOBRE EL CANSANCIO

casi infantilde los deberes y los trabajosde levantarse cada mañanasalir al mundo sólo esperandoen cada esquina una miradaen cada gesto siempre el milagro

Sobre el cansancioduro, asustadode tantos niños con ojos tristesya sin preguntas, ya resignadosa la miseria, a la barbarietodo el dolor entre sus manos

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

tibio, leallas mismas fraseslos mismos gestosigual rutinaigual fracaso

No queda nadatras el cafésólo el murmullode extraños labiosTe llamaréSabes que es falso¡Pero qué importa!Importan sólosólo las manosque ayer amabasy hoy desconocesen el cansancio

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SOBRE EL CANSANCIO

seco y mortalde los inviernosplenos de llantode soledadde tardes negrasde agobio y asco

Sobre el cansanciode los veranosde luz y aguade sombra y tintade versos quietoso apresurados

Sobre el cansancioadolescentede muchas rimasy pocos labiosel cuerpo oscuroy misteriosoesconde dentromiedo al fracasodeseo quizásmás misteriosoque el otro cuerpojusto el que amamos

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Charo Ruano

Sobre el cansancioseco y mortalde los otoñostristes y pardosocres y rojoscomo la rabiaque llena enterala piel, las manos

Sobre el cansanciode estar cansadosobre otrostibios cansancio

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SOBRE EL CANSANCIO

siempre agitadode abrir los ojos cada mañanaagua, cafédolores varios

Sobre el cansanciocasi irrealde lo queridode lo soñadoSaber que vivesporque te miranporque te hablanporque te llamany tú respondesaún respondesen el cansancio

En el cansanciosiempre agitadola luz se filtralo abrasa todoaún estás vivoy tan cansadoagua, cafédolores variosy esta tristezaroyendo el almasin compasióny sin descanso

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

aterradorde cerrar fuerteojos y labiosQuedarte fuerasiempre del mundode sus criaturasy de sus lazos

Ni la traiciónni los amoresni los deseossólo el cansancioaterradoren tu universoseco y helado

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YO Sé QUE VOLVERáN

la ira y la tristezael cansancio infinitoel dolor y la penacomo vuelve la nochecon su carga de estrellascon su rastro de miedocomo vuelven las guerras

Yo sé que volveránla rabia sorda y secael llanto inoportunolas madrugadas lentascomo vuelve la lunacon sus rasgos de nieblacon olor a caféa secretos, tormenta

Hasta cuándo podrésoportar el dolorHasta cuándo tendréque firmar otra treguapara no herir, matarpara seguir aquímuriendo lentamentesin sangre ya en las venas

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Charo Ruano

LO PEOR ES EL MIEDO

invadiendo tu viday llenando tus huecostu silencio, tu prisaEs la inquietud fatallas luces encendidases la cáscara frágilque protege la heridaY que cedeY te abrasa el dolorY la heridaes tan grande…Y el cansancio y el miedoCubren todas las ruinas

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ATRéVETE A NOMBRARLO

Atrévete a nombrarel suicidio y sus formasel dolor y sus causasel cansancio y sus horas

Atrévete a nombrarloatrévete a nombrarel amor, sus derrotasla pasión, sus locurasla huida, sola, sola

Atrévete a gritarPon orden en las cosassentimientos, ideasque te llenan de euforiaY te arrastran, te llevanY te dejan exhaustahelada, vacía, rota

Atrévete a nombrarloatrévete a nombrarel abrazo que odiaslos labios que te acunanel cansancio y sus horasimperturbables, quietasacechando tu sombrallenando tu silenciode miedo de zozobra

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Charo Ruano

Hasta cuándo callarhasta cuándo tu bocase negará a nombraruna a una las cosaslos sentimientos todosy todas las derrotas

Atrévete a nombrarloatrévete a nombraral culpable que lloray finge ser distintoy es la misma sombra

Atrévete a nombrarloatrévete a nombrarel amor y sus formas

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CUANDO FUI INMORTAL

contra el cansanciocontra el tiempo y las sombrasla furia y los rechazos

No existía en mi piella marca de tus manosde las caricias brevesdel roce de tus labios

¿Qué me hacía inmortal?

Tal vez sólo el fracasode no esperar nadanada, contra el cansancioque hoy me ahogame asustasube hasta mi regazotoma cuerpo en mi cuerpoy llena mis armariosde miedos escondidosde silencios frustradosde amores por nacerde besos y reclamos

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Charo Ruano

Cuando fui inmortalcontra el cansancioeste cansancio antiguoy viejo y arrugadoque enrojece mis ojosparaliza mis manosPor mis venas corríasangre, luz, vida, tiempotal vez tiempo robadoa las horas de sueñofantasmas del descansoque dejaban su huellaen mi almohadapisadas en mi cuarto

Huellas que yo borrabacon toda la pacienciaque se me ha ido agotandoporque el cansancio es fuertees duro, fiel, amargoy rompe tus costurastus ansias, tu letargoel deseo insatisfechose adueña de tus actosy ya sólo eres dueloherida, llaga acasoque nunca cicatrizatodo por el cansancio

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Cuando fui inmortalcontra el cansancioeran tiempos de pazo eran pocos añosluchando por la luzpor flotar en el barro

Después en contra el tiempoy las sombras, la furiael hielo y los rechazosY tus manos tan lejosY tus labios tan fríosY tú sólo un extraño

Se rompió la armoníainmortal de mi cantode mis versos recientesescondidos, paganos

Me ganó la batallacomo siempreel cansancio

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Charo Ruano

BORDEAR LA LOCURA

con paciencia infinitarecorrer paso a pasocon cuidadosus rasgos, sus esquinasEl borde afiladoque puede herir tu vidael vapor que alimentael fantasma, las ruinas

Bordear la locuramezclar todas las pistasinvestigar el odioel amor, la rutinaConjugar la ternuraa solas, deprimidael tiempo es tu enemigoNo recuerdas qué díacreíste ser felizy escapas tan deprisaque en la huida te dejasla piel y la sonrisalos abrazos no dadoslos besos, las caricias

¿Qué hacer ahora desnuda?

Ahora sólo una heridallena todo tu cuerpoEl cansancio asfixiantela locura infinita

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ANTE EL CANSANCIO

Bajo el cansancioCon el cansancioContra el cansancioDesde el cansancioEn el cansancioEntre el cansancioPara el cansancioPor el cansancioSin el cansancioSobre el cansancioTras el cansancio

NADA

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Charo Ruano

SOBRE EL CANSANCIO

de tantos librosSobre el cansanciode tantos cuadrosTardes de cineimaginadasTardes de músicasilencio y llanto

Sobre el cansanciode los fantasmasque tantos libroste van dejandoSobre el cansanciode las figurasapenas vistas, insinuadasen algún cuadro

Sobre el cansanciohuir, huir,por cualquier huecosiempre a diarioy regresarel alba apenasentre los dedosentre los labios

Sobre el cansancioinventar hoyotros amoresotros relatosOtras pinturasy algún acordeque desentonede lo creado

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SOBRE EL CANSANCIO

insatisfecho y estructuradode no ser nadienada en sus manosnada en sus vidasen su fracaso

Ser la concienciade los rechazosde las tormentasde los errores

Nada ha cambiadodesde aquel día¿Quién sabe cuándo?que descubristeque eras distintaque eras acasotan implacabledureza y cantoPor las heridasnunca curadaspor los amoresque no llegaronpor la esperanzay por los sueñosPor la ternurasiempre en las manosequivocadasPor el cansancioinsatisfecho y estructuradode no ser nadienada en sus manosnada en sus vidasnada en el airenada de nadaSólo cansancio

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Charo Ruano

PERDÓN POR LA TRISTEzA

Perdón por el cansancioquise dejarlos fuerahuir, abandonarlospero no fue posibleellos tejen los lazosde mis guerras diariasy de cada fracaso

Son mis trampasmis grietasmi rutinami llantopor todo lo perdidopor todo lo jugadopor cada día de menoso de másEl cansanciocomo una sombra largaacecha cada espacioy lo llena y lo colmacon multitud de abrazosque me dejan vacíay rota, sólo el llantoy esta tristeza viejano me han abandonadoen años de rutinade amor inacabadode violencia dormidade fracaso en fracaso

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Perdón por la tristezaPerdón por el cansancioPerdón por la agoníaPerdón por este llantoque me nubla los ojosque me enreda las manosque me obliga a temblary fallar el disparo

Té de jazmín en porcelana inglesa (2006)

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Charo Ruano

NO IMPORTA LO HONDO

Que caves la tumbaLo lejos que esparzas las cenizasNo importan los recuerdosLos responsos, los ritos

No importa que alejesLas fotos más queridasQue escondas las cartas, los regalosTodo lo que te traiga su presencia

Sólo el tiempoAliviará el dolorY la ausenciaPero una parte de tiHabrá muerto

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QUE NO SE ENTERE NADIE

De que te has ido lejosQue no se entere nadieQue ya no volverásQue la muerte y el tiempoGanaron la batallaY te fuiste tranquilaSin dejar nada atrás

Que no se entere nadieDe que a veces lloramosPor la ausencia, el deseoPor no poder estarJuntas y discutiendoComo cambiar el mundoY las reglas, las normasEl juego de verdad

Que no se entere nadieQue te ayudé en la huidaQue preparé contigoCamino, casas, panQue el día de la marchaFue largo y tenebrosoQue nos arrepentimosY quisimos cambiar

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Charo Ruano

Que no se entere nadieDe que tuvimos miedoQue no éramos tan fuertesSolo fue aparentarY dejar que creyeranQue todo era posibleEn nuestras manos firmesDecisión, fuego y sal

Que no se entere nadieDe que te fuiste lejosY preparas tranquilaLo que será un hogarEn un futuro próximoDiferente y cercanoEl cielo que buscamos Cuando llegue la paz

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LA úLTIMA VEz QUE NOS VIMOS

Llevabas escrito en los ojos el final

Me abrazaste muy fuerteNosotras a quien tanto nos costabaAbrazarnos

Me dijiste que no ibas a morirQue no querías morirQue no podías morirQue te resistías a morir

Mi vida hace feliz a mucha genteMe considero necesariaY mi muerte les causaría tanto dolor

Yo pregunté si tenías miedoO te sentías solaY tú repetiste con voz acabadaNo, porque no voy a morir

Me enseñaste la túnica naranjaCon el pañuelo a juegoY te pusiste unas gotas de la coloniaQue yo te había llevado

El último día que nos vimosRepasamos unas fotos, un libroVolvimos a abrazarnosTe dije que volvería en septiembreY tú afirmaste sentirteUn poquito más fuerte

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Charo Ruano

Tus ojos, tu voz, tu cuerpo reducidoDesmentían tus palabras

Cuando nos despedimosTú sabías que era el último abrazoY yo que nunca te volvería a ver

Nos tocamos, nos reconocimos

Hacia la mitad del pasilloCuando me iba, me llamasteY nos abrazamos desesperadas

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SÓLO QUIERO DORMIR

Dormir profundamenteDormir para olvidarDormir hasta perderme

En un sueño tranquiloDe paz, tiempo y juguetesDormir como los niñosSin miedo a las serpientes

Que como pesadillasAdiestradas, solemnesInvaden mi descansoY se hacen con mi mente

Sólo quiero dormirDormir profundamenteDormir para olvidarDormir hasta perderme

En un bosque encantadoDe palabras y puentesPara cruzar la nocheRecuperarte, verte

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Charo Ruano

Y olvidar el dolorQue me araña y me mienteDesterrar la amarguraLa enfermedad que hiereY acuchilla los díasCon locura, conscienteY me deja en la tardeDescolorida y débilUn sabor a caféDiluido, rebelde

Sólo quiero dormirDormir profundamenteDormir para olvidarDormir hasta perderme

Y no, no despertarSueño eterno, que dueleEn el alma a los otrosEscoger, descansarDormir y no soñarDormir y no llorarDormir y no escucharDormir profundamente

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EMPEzAR DE NUEVO

Sin familiaSin amigosSin amoresSin preceptos

Sin casas adosadasSin compromisos previosSin nadaSin nadieDe cero

Curarse las heridasY los golpesLos malos amoresY los buenos

Cambiar de teléfonoDe ciudad, de paísAbrir los brazosAl mundoUn mundo ancho y ajeno

Y hacerlo poco a pocoO de golpe más nuestroSin conocer a nadieSin defraudar a nadieSin engañosSin miedo

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Charo Ruano

Empezar de nuevoEstrenar la vidaComo antes de niñaEstrenabas cuadernosY escribir una cartaMuy larga, muy pensadaDe adiósA todo esto

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SUPIERON DESDE SIEMPRE

Que no tenía remedio

Tenía la boca grandeY la lengua afiladaUna mente despiertaInteligente, rápida

Tenía mil recursosY todas las palabrasNi los años, ni el tiempoLograron suavizarla

Era de amores rápidosY amistades eternasTé con limón y risasLibros de humor a medias

Viajes por el mundoBuscando otra experienciaOtra vida, otros mundosQuizás otras parejas

Ni los años, ni el tiempoAcabaron con ellaSólo la mala suerteUna cruel compañeraQue se bebió de golpeSu risa y sus reservasY la dejó agotadaRotas ya las cadenasQue la unían a la vidaAl amor, la bellezaLa muerte ronda siempreFugaz, esquiva, alerta

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Charo Ruano

Le sirvió una copaLa sentó a su mesaLe hizo un hueco en su camaLe prestó su experiencia

Y cuando puso ordenEn su vida, en sus cuentasEn sus viajes sin rumboY amistades eternas

En sus hombres amantesO amantes a la inversaEn sus recuerdos todosDeshizo la maleta

Y se dejó caerRendida ya y despiertaLa batalla finalLo mejor de la guerra

Quién la recordaráQuién hablará de ellaQuién le llevará floresA la tumba desierta

Quién vivirá en la casaQue cuidó sin reservasQuién en su espacio todoQuién, cuando, como…, ellaQue nunca se callabaOptó por la reservaNo llorar, no gritarNi suspiros, ni quejas

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Sólo este sueño eternoDe morfina y tristezaSólo este adiós lejanoPorque no quedan fuerzas

Y en el momento últimoCuando todo se acercaRecordar la batallaY que mueres en ella

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Charo Ruano

LA MUJER FRENTE AL ESPEJO

Se dibuja las cejasEn un gesto mil veces ensayadoY que nunca le saleSe ve que son pintadasAunque ha probado todo

¿Qué hacer con las pestañas?

Piensa que no le importaTodo el mundo lo sabeYa todos la conocen

Se coloca el pañueloSe lo anuda con graciaUna túnica a juegoY las sandalias nuevasSigue siendo verano

La colonia la inundaCon su aroma a lavandaRelaja su sonrisa y piensaQue quien sabe, tal vezEl nuevo tratamientoFuncione

Se retoca los labiosY abandona la estanciaLa esperan los amigosDe ideas alternativasDe tratamientos variosProbados casi todos…

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Aún le queda esperanzaY tiempo calculado En varios mesesSegún el optimismo de Los médicos

La mujer piensa rápidoLe quedan por hacerPapeles, documentosEl último teatroLa luna junto al puertoCon su mejor amigoUn baño...El agua tibia, saladaEl olor para siempreDel mar Mediterráneo

Quisiera tener fuerzasPara irse de viajeY recoger la casaEn el regresoNo quiere que otras manos Que las suyasColoquen, clasifiquenHurguen en sus heridasEn su vida acabadaPero no tiene tiempoLe quedan pocas fuerzasY tanto por hacer

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Charo Ruano

La mujer sonriendoAtraviesa el salónDonde tantos la esperanEl aroma a lavandaLe da fuerza y sosiegoPiensa por un momentoEn tantas cosas nuevasEn tantas sensacionesComo ha ido descubriendo

Es su fiestaEs su turnoSu veladaSu juegoSólo que no es un juego

Ella es jugadoraSabe que aquí la apuestaEs alta y muy difícilY que la perdió siempre, siempreDesde el comienzo

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Aún así la mujerSe dirige al pianoLos amigos la observanLa admiranElla quiere un abrazoConsumir este fuegoQue la reduce todaA cenizas y luegoFrágil, tenue, cansadaBorrar el maquillajeDeshacer el guión,Saltarse este absurdoY falso sosiegoY dejarse quererY dejarse morirLentamenteSin miedo

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Charo Ruano

CIERRAS LOS OJOS LENTAMENTE

Invocando el sueñoComo cada nocheUn sueño que no llega y te persigueBaila a tu alrededorSin tocarte, sin alcanzarte

Cuánto hace que juegas con él?Cuánto que no confías

La habitación templada, oscuraInvita al sosiego y al descansoRepasas las ausenciasLos afectos quebradosEl último poemaTe preparas al sueño

Es inútil

Insomne, cansadaTe mueves por la casaComo un duende asustadoEl aroma a caféTe conforta y abrigaY lo intentas de nuevo

Dormir para olvidarDormir para seguirDormir y descansar

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Y vuelven las ausenciasEl poema inacabadoY te ronda algún miedoY te saca a bailarY te abraza en silencio

Cierras los ojos lentamenteInvocas el sueñoComo siempreLos labios heridosEl cuerpo secoY el profundo cansancioDe tantas noches en velaY en secreto

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Charo Ruano

EL PERFUME DEL Té

Llena toda la estanciaámbar de té dijeronUna sutil fraganciaQue te hubiera encantado

Más tarde el inciensoComo una ofrenda nuevaFlor de arce, Sándalo,Flor de GeishaSegún la habitaciónSegún la compañía Momentos de armonía O decadencia

Luego la ceremoniaMil veces repetidaY siempre diferenteElige el té que quierasTé a la rosa, Magnolia,Orquídea, Té de los cirujanosA las puertas de China

Tés madurados, envejecidosTés ahumadosTés negrosDe hoja torneada, o rizada

Tés verdesTés blancosTés negros

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Colina de opioIsla MauricioY las mezclas inglesasQue siempre almacenabasPara los días corrientesSin nada que celebrar

Té para samovarTé ruso ahumadoTé verde a la vainillaPríncipe Wladimir

Té de PascuaIkebanaTe de concubinasFlor de naranjo

Té marinoEl Monte del Agua BlancaSur del NiloMontaña de JadeRondó veneciano

Tenías todo a puntoPara el salón de téLas velas, el inciensoLas mil especies Que habías conseguidoLas teteras, las tazasLos manteles bordados…

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Charo Ruano

Tenías las pastas al té verdeCaramelos de téAzúcar kandysTé heladoEl Té a los bosques de canelaEl Té de monjesBombones mandarín

Y la estrella, la que apurasteJusto la tarde antes de inaugurarEl Opium HillDulce como la tarde Thai Que en circunstancias determinadas y según la preparaciónda resultado

No sé si era lo que buscabasPara acabar tus díasEse salón de téDulce y amargoEn el que se fundieranLos deseos, las ansiasLos temores más fuertesLos abrazosEn el que los secretosNo dolieranY fuera sencillo descifrarlosLos chicos que elegisteY preparan el téLo han conseguidoUn espacio inimitableReservadoúnico para tiEn la distancia

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Caramelos al té negro perfumadoY después en la noche Tés azulesSuaves, relajantes, cálidosO quizá el Té amarillo de V dinastíaTé del emperadorRaro, ligeramente dulceMágico y dorado

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Charo Ruano

LO MáS DIFíCIL SERá EL VACíO

Que han dejado tu voz y tus palabrasTu risa, tus gestos desmedidosTus salidas de tono, tus reproches

Lo más difícil será la ausenciaNo llamarás, no vendrásNo quedaremos para reír o pelearPara hablar, hablar, hablar

A quién contarle ahoraLo que a ti te contabaA quién las confidenciasQue nadie entenderíaQuién me hablará de amantesCada trimestre nuevosDe viajes imposiblesY de marcas de té que habías probado

Era tu vena inglesa

Dónde el proyectoDe dejar la enseñanzaDe buscarte otra vidaY de emigrar muy lejos…

Lo más difícil seráCuando llegue el inviernoY no regreses

Y en el café sola,En nuestra mesaFrente a nadie Pedir tu té y no poder probarloOdio el té… pero su olorMe traerá tu presencia

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NADIE ME HA ExPLICADO

Porque mi padre y Don GonzaloMurieron el mismo día, el mismo mesCon apenas cinco horas de diferenciaUn 27 de enero de 1999 frío y radiante

Ese día era tu cumpleañosNo tenían porque grabarmeA fuego, la fechaNunca se me olvidaba

Desde entonces te peleasteImpotente contra la enfermedadContra el dolorLa muerte te acabó ganando la partidaEn septiembreUna fecha dulce y querida para mí7 de septiembre de 2004

Por que golpearme con tanta sañaNo necesito tanto dolorTanta ausenciaPara recordar a los que quiero

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Charo Ruano

ENTERRAR A LOS HIJOS

Cavar hondo las tumbasRezar hasta agotarsePedir explicacionesQue casi nunca lleganQue casi nadie entiendeY seguir con la vida

Amanecer tempranoDespués de una nocheDe insomnio y pesadillaEl café siempre amargoLa luz ya siempre oscuraY la sonrisa seca

Recordar a la hijaQue se fue antes de tiempoY los dejó tan solos, tan tristes, tan heridosRecordar sus palabrasSu risa, y su promesaEl viaje por hacer

El mar enfurecidoUn día de galernaEl mundo se acababaDetrás de la tormenta

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Ella no quiso el marComo último refugioLa tierra siempre al norteSiempre al norte, la tierraLo dijo en los últimos días

Por eso cavan hondaMuy honda la tumba Aunque eran cenizasSólo cenizasSus cenizas

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Charo Ruano

ALICANTE DE NUEVO

Clínica VistahermosaHabitación 14

El calor sofocanteSe alivia por momentosAl traspasar la puerta

La habitación pintadaEn tonos claros, suavesInvita al sosiego

He regresadoPara recuperartePara vivir contigoEsos últimos díasEsas últimas horasConscientes

Necesito saberNecesito entenderNecesito llorarAquí, donde viviste

La enfermera me ayudaRecuerda tus palabrasTu rabia, tu ironíaLa quietud de tu hermana

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El médico me huyeNo voy a pedir cuentasParece no creermeCuando le digoQue nunca le culpasteSabiendo que se había equivocadoTantas veces

Respiro hondoY te buscoImagino tus manosRecorriendo la mesaColocando en jarronesLas flores que llegabanAún no me he muertoDe nuevo tu ironía

SufristeHoy sé que fue más duro de lo que yo pensaba

Por qué no te quejastePor qué no nos dijistePor qué no nos gritasteParad, parad, es mi vida

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Charo Ruano

EL DOLOR ES SABER

Que no volveré a verteEs sentir que tu cuerpoSe deshizo en mi abrazoEs pensarte, quererteDisputarte a la muerte Sabiendo la partidaPerdida de antemano

El dolor es la ausenciaEs la casa vacíaEl polvo en los mueblesRevestidos de blancoY el timbre del teléfonoQue anuncia mil preguntasAunque sólo diré, que noQue aún no has llegado

El dolor es el fríoRecorriendo la estanciaDonde ayer respirabasY esperabas en vanoLa leve mejoríaPara salir al mundoPasear por el puertoObservar a los barcos

El dolor es el vientoQue cada madrugadaLlora por ti en la calleArrastrando a su pasoFantasmas y recuerdosDeseos no cumplidosLos años por vivirY los años pasados

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El dolor es el miedoMetido hasta los huesosEs la agenda abiertaPor la efe de fracasoEl libro con la páginaQue ya nunca leerásEl perfume, la cremaY la barra de labios

El dolor es el llantoCubriéndote la caraEl gesto más violentoEl temblor de las manosLa dulzura temidaDe caricias y besosY la soledad toda…Cuando cae la nocheY sólo hay vacíoPreguntas y rechazos

El dolor, el dolorEl dolor que se acabaQueda la huella tibiaDe la ausencia, el abrazoY el recuerdo agridulceDe unos días distintosCuando aún no sabíamosQue el dolor llegaría Con su carga de lágrimasArrasándolo todoDejándonos sin armasAbatidos y exhaustos

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Charo Ruano

DESEABAS UN FUNERAL A LA AMERICANA

A la manera norteamericanaPara ser más exactos

Ambiente relajado, velas encendidasFlores, conversaciones variasEn tono suave…Las copas y las tazas preparadasCanapés, té y vinoUnas palabras de alabanzaDe reconocimientoAlgún reprocheY música de Haendel

Te horrorizaba la rigidezDe nuestros ritosLlantos, caras compungidasCirios, discursos hablando deLa vida eternaEl protocolo del pésameLos besos…

Cuántas veces me dijisteEntre risas y lágrimasTendrás que hablar en mi funeralDe algo servirá tenerUna amiga escritora

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No hablé, no estuveCasualidades del destinoObligaciones de agendaLa vida continúaAunque el alma se te partaY el dolor te arrasePero sigo pensando en tu funeralA la americanaA la manera norteamericanaPara ser más exactos

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Charo Ruano

DE REPENTE LA VIDA

Se reduce a papelesActa de defunciónHistorial médicoPapeles del trasladoFunerariaEntierroMisa, plegarias, Responsos, cementerio

Testamentoúltimas voluntades

Deshacer la casaDestruir las cartasAbrir cajonesFacturas, recortesIr quemando las navesLos recuerdos

Dar de baja la luzEl gas, el teléfonoY dejar en la agenciaPapeles nuevosSe alquila, se vendeEs otro comienzo

Y ya no es tu casaPorque tú sólo eresUn papel, un recuerdoTal vez una fotoQue no envejece a tiempo

Ya sólo eres pasadoPasado, pasadoUna vida reducidaA papel impreso

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ME GUSTA PENSAR QUE VIVES LEJOS

Que te fuiste a una ciudad del norteDonde casi siempre llueve y es invierno

Una ciudad pequeña Con un puerto de marHelado y quietoCon un faro lejano yMuy antiguoQue aún emite señales Como aullidosY alerta a los barcosY a los muertos

Ciudad elegida al azar, puro caprichoComo el salón de té que ahora regentasHay que cumplir alguno de lo sueños

Y reformaste el salónPintura, encajeCortinas y mantelesTodo a juegoY ahora té de jazmínEn porcelana inglesaY tarta de limón…La chimenea encendidaY tertulias amablesJunto al fuego Afuera sigue la nieve…hay náufragos

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índice

Para seguir dando pasos: Charo Ruano ............... 7Mª Ángeles Pérez López

Hicimos de la noche un largo poema ..................... 27

UNA PALABRA ................................................................................ 29ALGUNA TARDE DE ESTAS ....................................................... 30ALGUIEN ME MANDÓ FLORES ................................................ 32NO ME QUITES LA NOCHE ....................................................... 33EL MIEDO ........................................................................................ 34SÓLO UN VERSO ............................................................................ 37BúSCAME ........................................................................................ 38LA LLAMA ........................................................................................ 39AL FINAL .......................................................................................... 40ME DAS TODA LA VIDA ............................................................... 41DESPUéS DE TI .............................................................................. 42Y DE PRONTO EL SILENCIO ..................................................... 43PIéNSAME LIBRE .......................................................................... 44HICIMOS DE LA NOCHE ............................................................. 46

La cálida quietud de la tristeza ............................ 49

LA GéLIDA CARICIA ..................................................................... 51EL HUECO DE TUS MANOS ....................................................... 52A VECES EL DESEO ES TAN BREVE ....................................... 53TUS LABIOS EN MI CUERPO ..................................................... 54HUBO UN DíA QUE FUE PERFECTO ...................................... 55NO TE FíES DE Mí ........................................................................ 56

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CUíDATE DE LA NOCHE ............................................................ 57COMO UN MANTO DE ESTRELLAS ....................................... 58

La frontera ........................................................... 59

LA FRONTERA ES UN REINO ................................................... 61LA FRONTERA ES MI HOGAR ................................................... 62LA MUJER TENíA ASPECTO ...................................................... 63AQUí EN LA FRONTERA ............................................................. 64TE ESCRIBO DESDE EL OTRO LADO .................................... 65Sé QUE EL DOLOR ....................................................................... 66ALGUNOS HABITANTES DE LA FRONTERA ....................... 67PROBABLEMENTE NADA .......................................................... 68

Los rostros de la huida ......................................... 69

ELIGIÓ EL MAR ............................................................................. 71ELIGIÓ LA MENTIRA ................................................................... 73NO LE GUSTA CASI NADA .......................................................... 75QUé SOLA ESTá LA MAR ............................................................ 76HABRá QUE PENSAR .................................................................... 77OS ODIO ............................................................................................ 78CONSTRUIMOS LA PASIÓN ........................................................ 80APENAS HAY YA NADA QUE DECIR ......................................... 81CUANDO TRANSCURRA EL TIEMPO ..................................... 82DESCANSA ....................................................................................... 83CON LOS AñOS ............................................................................... 84EL AMOR ES SIEMPRE ................................................................. 85QUé NO DARíA ............................................................................... 86OTRA VEz LA TRISTEzA ............................................................ 87EL VIAJERO LLEGA DE MADRUGADA .................................. 88LOS ROSTROS DE LA HUIDA .................................................... 91EL POEMA DECíA .......................................................................... 92EL VIAJERO QUE HUYE ............................................................... 93

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Charo Ruano

Frente al azar de otros amores ............................. 95

ME DIJISTE UNA NOCHE .......................................................... 97HE LLENADO LA CASA DE FLORES ...................................... 98ERAS LA CARICIA .......................................................................... 99CUANDO TODO PARECE ........................................................... 100TODAVíA QUEDAN HUELLAS DE TU AMOR ....................... 101TE MARCHAS SIEMPRE AL ALBA ............................................ 102QUé SERíA DE Mí .......................................................................... 104

Sobre el cansancio ................................................. 105

SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 107SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 109SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 110SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 111SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 112SOBRE EL CANSANCIO .............................................................. 114SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 115SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 116SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 118SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 119YO Sé QUE VOLVERáN ................................................................ 120LO PEOR ES EL MIEDO ............................................................... 121ATRéVETE A NOMBRARLO ....................................................... 122CUANDO FUI INMORTAL ........................................................... 124BORDEAR LA LOCURA ................................................................ 127ANTE EL CANSANCIO ................................................................. 128SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 129SOBRE EL CANSANCIO ............................................................... 130PERDÓN POR LA TRISTEzA ...................................................... 131

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Té de jazmín en porcelana inglesa ......................... 133

NO IMPORTA LO HONDO ........................................................... 135QUE NO SE ENTERE NADIE ..................................................... 136LA úLTIMA VEz QUE NOS VIMOS ........................................... 138SÓLO QUIERO DORMIR .............................................................. 140EMPEzAR DE NUEVO .................................................................. 142SUPIERON DESDE SIEMPRE ..................................................... 144LA MUJER FRENTE AL ESPEJO ............................................... 147CIERRAS LOS OJOS LENTAMENTE ........................................ 151EL PERFUME DEL Té ................................................................. 153LO MáS DIFíCIL SERá EL VACíO ............................................. 157NADIE ME HA ExPLICADO ........................................................ 158ENTERRAR A LOS HIJOS ............................................................ 159ALICANTE DE NUEVO ................................................................ 161EL DOLOR ES SABER ................................................................... 163DESEABAS UN FUNERAL A LA AMERICANA ....................... 165DE REPENTE LA VIDA ................................................................ 167ME GUSTA PENSAR QUE VIVES LEJOS .................................. 168

CHARO RUANO


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(de poema a poema) - Bienvenidos a lasalina.es · (de poema a poema) Diputación de Salamanca 2009 Palabras preliminares: “Para seguir dando pasos: Charo Ruano”, ... La colección,