Doctrinas Del Eclesiastés

5/16/2018 Doctrinas Del Eclesiast s - slidepdf.com

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Bravo y Allende Editores, 1998

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puede ser reproducida, transmilida o almacenada, por cualquier procedimiento, s€a

meciánico, ópticos o quimicos, incluidas folocopias y páginas INTERNET. El editor autoriza

citas en todo tipo de publ¡caciór! siempre que se mmcion€ la fueflte.

O Bravo y Allende, Editores Lrda.

lnscripciór N' I 04.034t.s.B.N. 956 . 7003 - 47- 5

Se termino de irnprimir ela primera ediciót ¿n el ñes de rna)o de I 998, en los tálleresgráficos hÍA-FARI, Cóndor 890, fono-fa\: 6330649. Santiago de Chil€

Diagramsción y edición de tefos:s¡ra Aguilera y Emilio Rir€no.

PRINTED IN CHILE - ITIPRESO EN CHILE



Todos los caminos llevan a Jerusalén. Cualquiera cosa

que venga a nuestras manos se rompe a poco o mucho de

probarla. Se rompe sin lazo que la sujete. Y no tenemos que

sufrir muchas veces esta decepción para imaginarnos en tó-rrida terraza donde cae entera la luz del cielo mientras

Koheleth suspira: <Vanidad de vanidades, todo es vanidad>.

***

¿Qué viene primero que nada a la mente para refutar al

sabio de Jerusalén? De división en división, vamos a dar en

particutas de materia que ya no podemos dividir, por más

energía de que dispongamos. Si nunca vamos a sobrepasar

ese limite, no todo es vanidad. La sustancia de las cosas con-

sistiría en sus partículas indestructibles.,f :1. *

Se responde: Koheleth de Jerusalén habla de vanidad,

no de vacío. En mi Diccionario Académico se desvanece así

lavanidad: <calidad de vano>. Y las acepciones de <vano>

son como decepciones: <falto de realidad, sustancia o enti-

dad; hueco, vacío, falto de solidez>.

*'*,*

De una New English Bible, traduzco. <Vaciedad, dice

el Predicador, vaciedad, todo es vaciedad>



También dice Koheleth:

...en cuanto a los hombres, me dije: Dios los ha pro-bado y les ha hecho ver que no son más que bestias.Porque el destino de los hombres y las bestias es elmismo: como mueren las bestias, igual muere el hom-bre; igual respiran unos y otros, y la distinción delhombre sobre la bestia es nada, porque todo es vani-

dad. (Cap.III; 18,19)

¿No queda claro que vanidad es vaciedad? El hombre es másque las bestias de Ia forma en que A + 0 es mayor que A.

***

Leo una interpretación muy concreta de <vanidad>. Enhebreo <jebcl> es por <aliento>, <humo>, (vapoD. En la in-terpretación que digo, David y Salomón representan una gra-ciosa diatriba:

David dijo: el hombre es como un humo. pero,¿de

qué especie? El humo de un homo o el de una fogatatiene sustancia. Entonces vino su hijo Salomón y ex-plicó: un humo de humo.

¿Vale la figura? Si se enciende un fuego de humo, el humo detal fuego será humo de humo. Pero tal fuego es un disparate.



R. Gordis traduce <<jebel>> recurriendo a otros textos

bítrlicos: <aliento, vapoD, <viento>, <ráfagu. Se apoya en el

significado de <aliento> y de éste separa, para definir <vani-dad>, las cualidades: insubstancial, transitorio.

F.C. Burkitt ofrece <burbujo como traducción y co-

nrcnta: ((un soplo, una burbuja ligera que se desvanece> e

intcrpreta: <todo, absolutamente todo es pasajero, ilusorio y

vacio de realidad>.

**,1(

H. Odenberg interpreta (todo es vanidad> así: <no hay

realidad ni substancialidad ni permanencia en el producto del

trabajo humano. No hay producto en absoluto, todo se des-vanece en el aire y deja vacías las manos del hombre>.

* *'*

No cuesta recordar un asombro de nuestra niñez: cuan-

do vimos troncosreducidos por el fuego a un simulacro de

troncos. <Aquí había troncos>, nos decimos hurgando con el

pie, esto no es más que su forma>. La forma de los troncos

se sostiene apenas como en piel de cenizas; la sustancia se

esfumó.



Una generación pasa y otra üene, pero sólo la tierrapermanece por siempre sin cambio. EI sol se levanta

y el sol se pone, sin aliento corre hacia el lugar delque otra vez se levanta_ yendo al sur y volüendo alno(e, el viento gira y gira, y luego ruelve sobre suruta. Todos los ríos van al maq pero el mar nunca sellena; al lugar del que fluyen los ríos, los ríos conti-núan fluyendo.

Así traduce R. Gordis. Sólo la tierra permanece. La tierra espolvo y el resto es vanidad. Las generaciones, yendo y vi_niendo, dan al polvo una visible agitación. pero de ello sóloresulta que el polvo welve al polvo. El carbono al carbono,el hidrógeno al hidrógeno. Más que círculo vicioso, círculo

estúpido.

. Sale y asciende el sol para descender al punto de parti-da. Los vientos y las aguas corren agitados hacia el iugar

desde donde partieron. Todo se mueve con diligencia bus-cando algo sin más resultado que volver al inicio y reiniciarla búsqueda. Eterno girar sin fin, sin resultado, sin propósito.Así se explica la aflicción de espíritu: porque no,

"ifoizamosor alcanzar algo, que nunca alcanzaremos.

l0



Yo, Koheleth, reiné sobre Israel en Jerusalén. Apli-qué mi mente a buscar y averiguar en mi sabiduría

todo lo que ocurre bajo el cielo -triste cometido conque Dios aflige a los hombres. He contemplado to-das las obras hechas bajo el sol y visto que todo es

vanidad y aflicción de espíritu. Ni lo torcido se puede

enderezar, ni lo vacío llenar. (Cap.I;12-17)

Dios puso en el hombre un impulso que lo lleva a con-ducirse con una agitación que recuerda los giros sin destinodcl sol, las aguas, los vientos y la tierra: el impulso de cono-cer todas las cosas. Como abarcar lo infinito en lo finito'como meter el platillo enla t&\ como morderse [a nuca.

Dios puso en el hombre un impulso de logro imposi-

ble. Siendo un impulso impuesto por Dios, el hombre lo obe-dece; obedeciéndolo pone su empeño y diligencia en esta

prodigiosa empresa: hacer nada como si estuviera haciendo

algo. ¿,No es una maravilla, una tragedia, un chiste y una

estupidez?

**¡1.

El círculo, en el intento de aprehender lo infinito en Io

finito, tiene su muestra y caricatura en el absurdo propósitodel perro de morderse la cola. Gira, gime, se enfurece. Es la

forma pemrna de la aflicción de espíritu.

ll



F{ay que tnmar mucho aliento para siquiera comenzara leer Eclesiastés. Hilaire Duesberg, por ejemplo, nos dice:

Salomón sólo prestó su máscara a Koheleth para queexpresara rnejor ia vanidad de todas las excelencias huma-nas. Antes del Concilio de Jamnia (90 A.C.) <Eclestiastés>era tenido por libro inspirado; después, también. Fue duranteel Concilio que trataron de sacarlo del canon. Hay quienes

ven en este texio una discusión de Salomón consigo mismo.En cuanto a su ortodoxia...se ha prestado a este autor cadauno de los malos pensamientos conocidos por los hombres:escepticismo, epicureísmo, egoísmo, pesimismo... (Dict. deS¡tirinalité, 1960)

,f ,i ,t

Otra figura de vanidad resulta de considerar a dos quevan de un punto a otro. Uno lo hace por camino largo y acci-dentado; el otro, por ruta corta y llana. Vistas las cosas desdeel punto de llegada ¿cuál es la diferencia?

He oído decir que la sabiduría excede a la insensatezcomo la luz a la oscuridad; que el sabio lleva los ojosen la cabeza y que el insensato camina en las tinie-blas. Pero yo sé que a ambos aguarda Ia misma suer-te. Me dije, pues, la suerte del insensato me aguardatambién. ¿Por qué, pues, me he hecho tan sabio? Y

me dije que esto también es vanidad. Porque el sabio

t2



no es más recordado que el necio En la multitud de

los días

que vendrán todo será olvidado.Aborrecí, pues, la üda, porque todo el trabajo hecho

bajo el sol me pareció sin valor y todo vanidad y caza

del viento. (CaP.II; l3- l7)

r.¡t*

También se puede entender así la vanidad: el sabio hizo

el camino con los ojos abiertos y a la luz; el insensato anduvo

a tientas y tropezones por las tinieblas. Pero el mismo día

estaban los dos a las puertas del mismo cementerio'

***

Et pequeño trata de meter el platillo en la taza No-ha

leído a Piaget. Trata de entrarlo de canto, de plano"' ¡No

hay manera! Chilla, patalea, arroja el platillo contra el suelo'

¡Oiia la vidal Por cósa parecida Jerjes ordenó a sus ejércitosque azotaran al mar; y éste gritaba tanto que se oía en el

Olimpo.Absurdo de absurdos, Jerjes.

¿Sólo él? He visto curas bendiciendo tanques y filóso-

fos tirándose las ideas de las barbas.

l3



En lugar de decir que Dios puso en los hombres laaflicción de alcanzar lo inalcanzable, dicen algunos biólogosque la Evolución arrinconó en nuestro .ar"b.o progru,iu,incompatibles. los de nuestros ancestros arbóreos y-los denuestros ancestros esteparios. Unos salen a aullar al desier_to; otros a clamar desde los eucaliptus.

*,t*

. En nuestra era científica, cualquier muchacho es capazde- concebir la tierra empujada por una gran fuerra estelarsobre la superficie del sol; y sabe que no-alcanzaria a llegaralli una porción de nuestro planeta sin antes disolverse-enhumo. De modo que la sentencia <Todo es vanidadr¡ resulta

actualmente obvia hasta para un muchacho. Esta es la intui_ción grande de Koheleth. captar una obviedad cuando no eraobviedad.

***

. A la hora de las cuentas, el sabio no difiere en nada delrnsensato. Peor están las cosas entre eljusto y el perverso:

En mi vana existencia he üsto: justo que perece por sujusticia y perverso que alarga sus días con su pe.ve.si_dad. (Cap.\4I; l5)

Más dice Koheleth: que el justo recibe la recompensa del

t4



l,('rvcrso y éste, la del justo. ¿Puede concebirse injusticia

r rrtyot'l ,***

Las desaveniencias comunes de la justicia y Ia injusti-lil llcvan a preguntarse: ¿Y si proponerse que eljusto reciba

:;rr ¡rropia compensación y el injusto la suya fuera como tra-

l;r rlc meter el platillo en la taza? Búsqueda dejusticia: apa-Iro tlcl viento.

***

Considérese labalanza que la dama de ojos vendados

()stcnta a las puertas del tribunal: en un platillo, loshechos;

t'n el otro, su exacta retribución. Pero ¡no hay manera! Los

hcchos deljusto se pagan con los merecimientos del perver-

so, y las acciones de éste, con los merecimientos de aquél'

¿Qué hacer? ¿Odiar la vida, reüsar la balanza o hacerse exa-

¡ninar la cabeza?

***

¿Cómo se resuelve esta increíble paradoja, que aljusto

correspondan los merecimientos del perverso, y a éste, los

de aquél? Nada más fácil: porque todo es vanidad y cero es

igual a cero.



Lo mismo vale de la sabiduría y la estulticia:La suerte del insensato me aguarda también a mí. ¿porqué, pues, me he hecho tan sabio?

¿En qué difiere Koheleth del insensato? En sabiduría.

Pero, si a la hora de Ia muerte son iguales, la sabiduría es cero.

)i,t*

Se puede considerar a Koheleth como experto del ceroy al hombre ordinario como inexperto. Koheleth detecta elcero como el lebrel la liebre. El cero se encuentra en todaspartes, pero se escurre de todos. ¡y se materializa de tantasmaneras! Cuanto más concretas tanto más dificiles de perci_

bir. A Macbeth le tomó una vida de proezas, intrigas y críme_nes darse cuenta de su despreciable nadidad.

**,r

Para el lógico y el matemático, la unión del triángulo yel cuadrado

tiene como producto la vaciedad. S¿lo unldiotalrataría de unir triángulo y cuadrado. Koheleth nos dice queel hombre que produce lo que no consume está producienioel triángulo cuadrado. También cuando el hombrá clama por Iajusticia, clama por un triángulo cuadrado. y ése que, allájsudacincelando su estatua está cincelando un triánguló cuadrado.

l6



¡Sc vc tan bien con las aguas! Van al mar para colmarlo: y

,h.r.,;t.crrr¡rcño resulta que salen del marpara empeñarse de

rrr, r', r t'rr colnlarlo. ¡SevetanbienconelperroI Por incontables

,lrr( s('ilr los giros y feroces las dentelladas, la cola se escurre.

¡(ir rros lircra dado ver como Koheleth ve! ¡Si pudiéramos ver

l.r'; rril li.rrnras y la infinita e\tensión del cero como vemos las

rl, rrl, llirclas sin destino del perro tras su cola!

(-Jn matemático dirá que cosechamos decepciones y pa-

rrtlojirs ¡ror andar haciendo tonterías con el cero. Y por si

lircra poco, con el infinito: tratando de obtener algo con infi-

rrilos ceros.

Encuentro este pasaje en los escritos de Benjaminlira nklin:

...cuando empujo mi imaginación a través y más alládel sistema de los planetas, más allá de las estrellas

hjas, en ese espacio infinito en toda dirección, y lo

concibo poblado de soles como e[ nuestro, cada unocon su grupo de planetas moviéndose en torno, en-

tonces esta pequeña esfera en que nosotros nos mo-

vemosparece, aun en mi estrecha imaginación' algo

que es ¿asi nada y yo mismo menos que nada y sin

ninguna importancia.

l7



Actualmellte no tenemos que fundar en nuestra imaginaciónu¡a tflca vreJa como esta. Tenemos observado universo sufi_

ciente para concluir que somos <(menos que nado.!t :¡ :k

Dijo el astronauta James Lowell mientras girando ensu nave en torno a la luna contemplaba Ia tierra:

No dejo de pensar que soy un viajero solitario venidode otro planeta. ¿eué tendría que preguntarme vien_do la tierra desde aqui? Si está o no está habitada.

Si estuviera Koheleth en lugar de Lowell, ¿qué pensaría? por_que toda la tierra estaría ante sus ojos, suspendida en los

espacios como una burbuja... ¡y con cuánta zalagarda sin tonni son de renacuajos que reptan encima!

***

El <cero por relación> o <cero-FranklinD. lo encuentroen Koheleth cuando dice que con el paso de las generaciones

las cosas se desvanecen en el olvidó. Como obia el tiempo,obra el espacio. La tierra inmensa, yendo uno hacia la luna,va perdiendo todo su detalle, hasta verse como un plato ly_minoso en el negro firmamento. Viajando así, acasá. un díaverán los cosmonautas el sislema solar entero que se esfilmaallá lejos en un destello.

t8



Ill <cero por relación> tiene grados o potencias

l)irigcnes es un cero por relación a Alejandro. Pero tiene

I rrrnbión especies. Como se ve al considerar que Alejandro esrn cero por relación a Diógenes.

***

¿Qué ocurre a un niño cuando entra en el mundo de

l,,s nriyores? Corre con su balanza a ponderarlo todo La

b¿tanzá sube del lado que debiera bajar; baja del lado querlcbiera subir. El niño se llena de aflicción de espíritu, co-

rrrienza a patalear. Andando el tiempo, se habitúa a las condi-

ciones pricticas del equilibrio. Asi terminan los niños'

:l l. il.

No hay justicia. Por millones y millones son los-hom-

bres gaseadós, incendiados, masacrados sin un gramo dejus-

ticia."¿Cómo úu."rr."u.go

de tanto daño? ¿No habrá más

allá dé éste un mundo de justicia? ¡Vaya! ¿Cómo no se me

ocurrió antes?

't*+

La frase hebrea que se traduce por <aflicción de espíri-

i)), es <<rejul nnj>. Bián podría traducirse por <dar de palos

al viento>i. Muchos autores ponen <caza del viento> o <pas-

toreo del viento>>. Siendo así de sentido, bien pudo traducirse

<apalearel mao, <incendiar el infierno>, (acarrear agua con

el canasto>. Desáe pequeño escuché y volví a escuchar (aflic-

l9



,***

Tengo ante mí un diccionario hebreo_alemán. Dice:ruaclt.:geist, tyind. primero,lo abstracto, después lo concre_to. ¿Vamos a insistir en caminar así, patas arriba? Lo que merecuerda un limerick de E. Lear:

[{abía un joven testarudo en Zaireque se estuvo con las piernas al airehasta que el marruecole subió al chaleco

a ese joven ecléctico de Zafte.

ción de espíritu>; la lrase <caza del viento> la encontré farde-muy tarde.. ;Cuanto_ tiempo dormi mi Eclesiastes po|. auurude una traducción abstracta!

¿Será porque Lear es inglés que rie así? Vean el diccionariohebreo-inglés: rlacá wintl,spirit.

***. También puede entenderse vanidad como superfluidad.

Dice Koheleth:

Hé aquí que un hombre ha trabajado con saber y ap_

titud; no obstante, debe dar su porción a un hornbr"

20



(luc no ha hecho nada por ella Ciertamente, esto es

v:rnidad y mal grande... No hay bien más grande que

conter, beber y darse satisfacción de su

trabajo...(C.II;21,24)

I rrl vcz t¡ttctla más claro cuando dice:

..Lo que nre pareció bien es que conviene al hombre

corne,: y bebei y disfrutar en todo su trabajo que so-

irorta iebajo del sol durante los días de la vida que

Dios da; porque esa es su parte (C'ilL;22)

Lir pnrte de mi lrabajo que excede lo que puedo comer' beber

v rlisfiutar es vanidad.

't 't 'l

¡Si pudiéramos ventilar con Koheleth ciertas

implicaciones!F.l'bien más grande consiste en el disfrute de lo que nuestro

propio trabalo produce. El mal más grande consiste en queitrás Aisfrut"n'¿el producto de nuestro trabajo. Desde los

tiempos de Sócrates, tratan todos de acostumbramos a pen-

sar que en esto último hay dos males: el que padecen quienes

no iirnu,on lo que producen y el que padecen quienes dis-

frutan lo qu" produ""n otros. No es así para Koheleth:

Al hombre que favorece, Dios da sabiduría' conoci-

2l



miento y alegria; pero al que no, asigna la tarea deanrasar y recoger tan sólo para cederlo al hombreque complace a Dios.

Dislrutar lo.que otros producen es un mal para algunos, unmal necesario para otros, un bien para cusi todos.

" '

***

Si el mismo Dios me da a disfrutar Io que otro produ_jo, ¿no.es mi disfrute pleno? ¿Compla"" u'Oio, u"i u ir,preleridos dislrutar así? Si concebimos un Dios que ;";;;;con deseos que no podemos cumplir, que nos

"uiig.. t."üá_jar^sin descanso para el disfrute á. otior, qr.

"o;¡;;;;;isfmtar sin trabajo lo que otros produ."n, ."1";;;rl;;;;con la teolo.qía!

La vanidad en Koheleth se lorma con las cosas que al

examen se esfuman. Unas se esfuman fisica y literalmente.¿Dónde está mi madre, muerta hace tant",

"nÁfV.lr.."ii

que_pasaba un amigo tan amado. Miré rna, a" ."."u i fu nJestaba.

22



Vrnidad es el vacío sin sustancia, la realidad que se

r li:;r ¡t'lvc en la prueba; la búsqueda que jamás tendrá término;ln t'rrlrcga sin compensación; el fruto que no ha de ser consu-rrrirlo, cl sudor superfluo; el trabajo destinado a otros; el con-:;r¡¡rro de los bienes ajenos.

***

<Todo es vanidad> es: <<Nada tiene sentido ni funda-rrronto>; <nadie conoce la razón de las cosas>; (nada lleva unscllo de necesidad>; <igual que el mundo es, puede no sen>;

<rla Io mismo que el mundo sea o que no se¿D); (si se resta e

los hombres de la existenci4 no se va a notaD).

¡r.**La injusticia que todo lo infecta, la aüdez que no co-

noce límites, la ignorancia radical, el derroche, la insensatez,

la crueldad, la violencia sin freno, la guerra, el pillaje, la es-

clavitud, el atropello humillante, la insolencia del poder, el

cálculo denigranie, la impotencia ante e[ desorden,todo ello

y en todos nosotros, ¿no es razón para acogernos al sabio

del nihilismo universal? Todo se torna parejo con la muertede todos. ¿Quién puede dudarlo? No hay que fingir alturas nipueriles compensaciones. Venimos del polvo, volvemos al

polvo. ¿Se púede esperar compensación más cierta y mejor?Ño hay quien merezca ni reciba más que pudrirse en la

huesera. Toda la bajeza, toda la grandeza, vanidad.



Si existió un discurso exacto de Koheleth, ya no lo te-nemos. Yendo de escriba en escriba casi desapareció. Manos

adversas, escandalizadas, temerosas, torpes, piadosas fueroninsertando sus <<correcciones> en el original. Así como lo te-nemos -embutido de inconsistencias- todavía impresiona fuer_temente. ¿Qué hace en medio de la Biblia esta pieza magis_tral de escepticismo, hedonismo, individualismo, cinismo,oport unismo, egoísmo, materialismo, nihilismo? Se dice que

la falsa atribución a Salomón lo salvó de la genizah. pero nohay que ser un experto para deducir que no pudo procederde Salomón, que fue escrito cuando los ejércitos de Alejan-dro estaban bien arraigados en Siria y Egipto. Como cual-quier hombre culto de su época, Koheleth conoce la cienciay la filosofia helenísticas.

***

¡La genizahl Suena como nombre de amenaza. No dejade tenerla. Uno escribe un libro, lo confia a un editor, que iopone a dormir en la gaveta de abajo, y ya estamos en la

ge.nizah. Literalmente, genizah es archivo y todo lo que llegaa los estantes de la genimh lleva sobre sí un rótulo que dice:<Vanidad de vanidades>. pasado el tiempo, el escritó luelveal polvo viajando por las tripas de alguna rata.

Recorro bibliotecas y nunca dejo de examinar con cui-dado los estantes

de la genizah. Visito librerías de segundamano; allí se pudren enla genizah por miles los libros. Hace

24



rn lrrrl)(), trn anligo me envió desde Berkeley dos títulos

,i, ,, t,,',,ii, ,,,1,,.. l.oI rescató alpasar de la corriente-que.los

ll, r',1,,r,, lrrs irlcincradores dela genizah Disfruté leyéndolo.s'

¡rl,r¡ rr,lr ll(| ¡roco, transcribi de sus páginas para las mías ¿lrán

,,,,,,1,,,',, n,i, escritos a la genizah'l ¡Vaya estupideces que

¡,rr'¡,,rrrrlol l'lscribo para la ge nizah' venga tarde o temprano'

**¡i

llay trna paradoja -por decir una-con este texto de

t,.,,lrt lc{li. De iodos los escritos que forman la.Biblia'

I r l'si¡rstós debió en primer lugar y por su misma indole pa-

1,.', ,i,''nás

trámites a la genizah' Pero ocurrió y con tüerza

rrursilarla exactamente lo contrario:se instaló en medio de

lll()s y sentenció: Todos irán ala genizah'

¡Me olvidaba! Dentro de nosotros' todos llevamos un

¡icltizah.' ¡t" me olvidabal En todas las empresas del hombre'

.,r el patio del fondo,aguarda con las fauces abiertas la

lqt'n izah.

***

Todo esto he visto en los días de mi vanidad Justo

;;;";;*por su justicia, impío que alarga sus días

1"" i" Á"r¿1"¿ No seas pues demasiado justo' ni sa-

il;;;;;.¿po. qué destruirte? No hagas mal

25



mucho ni seas insensato, ¿por qué morir antes de tiem_po? Mucho

mejor aferrar lo uno y lo otro; ¡porqu".lque teme a Dios cumplirá con su deber medlanteambos. No seas insensato, porque bien se ha dicho:<La sabiduría da al hombre sabio fuerza mavor ouedicz que rigen en la ciudad>. Ni seas en .*..á iuJ_porque se ha observado: <No hay un hombre'en ü

tierra siempre en Io recto>. (C.VIi; l5_20)

Aquí atendemos a: la vida, la sociedad, lajusticia y la sabidu-ri1 Hay que.orienrarse por un términornüio entá l; j;ñ;.y la perversidad; y otro entre Ia sabiduria y la insensatez-A¡te todo, vivir. La sociedad me destruye ,i'pr"t"naá oUr*de

acuerdo a la justicia y la sabiduría. ¡ño rnuiurari ¡i ;;;;_ré. Y mentiré y robaré. pero con medida. fo¿o.on ,"Jiju.

Ni que deciq estamos ante el pasaje más cruel y másduro de tolerar de Eclesiastés. pesimista, ,"ufirtu,

"oúard",ínico y practicista. Trago amarguísimo que a la postre no

queda más que tragar y que resulta mucho más odioro pornuestra presunción que por sí mismo.

**r.

He aquí la única firmeza, la solaecuación respetable,el solo bien que permite orientar los pasos y dar ,"nii¿o u ü

vida de acuerdo a Koheleth:

26



S¡ rrrr lronlbre vive muchos años' que disfrute de to-

rlos l{ocordad que los días de oscuridadson muchos

y r¡rrctlcallí adelanteno hay nada Disfruta' jove.n' en

trr irrvcrttud y que tu corazón goce de los días jóve-

rrcs Sigue los irnpulsos de tu corazón y los deseos de

t,,r,,jos. De todo esto Dios pedirá cuenta Aparta la

lristeza de tu corazón y el pesar de tu cuerpo' porque

la niirez y la juventud son un suspiro efimero Re-t ttcrda a tu creador en tu juventud, antes de que ven-

q¡n los malos dias y se acerquen los años *qT9l-

-,-1asuno siento en ellos ningún placen> (C XI; 8-10'

C XII; l)

l;( sicnte con claridad la intercalación admonitoria en este

¡rrriiculo del texto. Como si cogiendo la pandereta' sale

1,., ,helcth a danzar bajo el sol; pero hay un piadoso y un celo-

,,,, t¡Lrc a medias lo sujetan de la túnica < ¡Dios te pedirá cuen-

t¡1,,. <iRecuerda a tu creador!> Hay muchos que entienden

,'l rcxto así. Pero hay también (y yo estoy con ellos) quienesintcrpretan estas frases como lo más esencial de Koheleth:

,,Si ¡io disfrutas, Dios te pedirá cuentas)); y <Disfruta' que

cllo place a Dios>

'i(**

La culminación de la vida como solo criterio de firme-

27



za, sentido y felicidad. Tiempo de nacer, tiempo de morir;tiempo de aspira¡ tiempo de declinar. Avanzar

desde el albahacia el mediodía, retroceder desde el ocaso t u"iu"l

."Jio_dia. Todo converge sobre el supremo bien: el mediodía de lavida; la expectación, el anhelo, el deseo, de la mañana de Iavida; la desesperación, el repudio, el hastío de Ia tarde. Ellímite exacto de ambas trayectorias en el cenit. ¿No es prue_

ba.y. contraprueba de que todo el sentido, todo el bien y lalelicidad se encierran donde la vida culmina?

¿Quién gusta la fruta verde, quién la gusta pasada?¿Móse nada más bello que la fruta en sazón?

¡t :t*

¿Qué provecho hay para el que trabaja en el esfuerzoque hace?...Encontré que no hay más bien para elhombre que disfrutu, y p.o"rrurr"-bi"n"rtu,

"niu uiau,

y también que todo hombreque come y bebe y dis-fnrta del bienestar en todo su trabajo,

"Ío ",uí Jon

de Dios. (C.II;22, 2a)

El bien único del hombre se produce con la satislacción delhambre, Ia sed y el gozo (sexua.l, se entiende); y cuando aquellocon que_sat¡sf¿tzgo

esos apetitos fi.le el resultado de mi traba-1o. puedo considerarlo un don del cielo. Es decir, el bien.definido de acuerdo a Iajusticia _el que resulta d";";r;;i;28



1,, r¡rrc se produce- es un balance con el visto bueno de Dios'

liltrandemasiados cuervos en la construcción del mmdo

1'*'i

Hay muchos pasajes en Koheleth que implican' valo-

,lr', y haán un fundamento de la <ecuación económica> -la

',,,',ii.lnd

entre las cosas que el hombre disfruta y el duro tra-

l)ili() que se da produciénclolas. Pero, no encuentro una plz-,

',cle comentario en todo lo que leo ¿No se aclaran las cosas

, n politica, en moral, en jurisprudencia, si se toma ese pnncl-

¡,ir',': que la felicidad del'hombre

se forma con el consumo de

i,, qu" p.odu"" su trabajo? ¡Claro que se aclaran! No sea

rnás que Por contraposlclon.

***I-'Ecclésictsle, de E Podechard (1912) trae encima su

N¡hil Obstol e Inprimahtr. Para este autor, Koheleth es un

'uo.*,on.""rurio en la historia religiosa que va del ant'i-

gro ulnu"uo t"rtamento, la muestra y prueba por reducción

it ubrurdo de la Redención, el Juicio y la Vida Futura Esta

es una articulación interesante de la categoría <absurdo)' una

náid""ti"u de los absurdos> o <tríada absurda>: Koheleth

muestra que el mundo entero es un absurdo' Podechard en-

cuentra que tat empresa prueba por el absurdo la verdad de otro

absurdo.

29



Robert Gordis traduce así Ios tres primeros versículosde Eclesiastés:

] l,r':1r: de Kohelerh. hijo de David, rey en Jerusatén.¿.. vantdad de vanidades, dice Koheleth, vanidad de vanida_des. todo es vanidad.3. ¿Qué provecho recibe el hombre de todo su duro trabajobajo el sol?

i,.il.y I Ginsberg, el primerversícuto es el rírulo del Iibro.y esta de acuerdo con podechard en que el tercer versículoes,inseparable del segundo y que juntoi

"rtubl...n .i;ffi;del libro. Más dice Ginsbe.n ¿" lui"lu"iOn;;;;;f;üil;el tercer versículo:

El mundo en que vivimos e sjehel. ocero. Esto olan_tea.la.cuestión del yitron (provecho)

" ol", ;;;;;_oe haber para el hombre en Ia adquisicibn de los,bie_nes mundanos. pero primero hay que probar la ore_mrsa. Esto se hace en los versículos

que siguen, 4 aI I : el mundo no tiene propósito, por io t""io "l tL_ne valor.

Asi, probada Ia proposición (todo es vanidadr a tepregunta <¿qué provecho recibe el hombre de to¿o rr'¡r-trabajo bajo el sol? <se responde:

."ro p.ou".ho.-"

-- -"'"

30



N4ás de una vez vienen juntas en <Eclesiastés>> las ex-

¡,rtritrrtes <<.iabcl>> y <<reulrrraj>. Son exclusivas de Koheleth

ir, l irrgf és, nos resulta familiar la expresión <<t'atti.l)'>> y"t t tLtl'i't¡tt of spirib> <Vejación> y <vejamen>- remiten^a

' 1,'\¿rl'c)) que ás <sacudir con violencia> y <maltratan. R.

t i,rrlis traáuce <treul ruaj>, por <<chasing of tt'ind> Renán

,ltr, ,.r¡xilrtre clc l'¿¡n>. Poáecñard hace ver que <rzuÓ> deriva

,1, ,,r¿cr,que es <quebrao y asi <<brisenetrl d'es¡tt'il>> es la

rr,r'l'rciion de algunos. ¿Por qué no. entonces' khrise rc:tl

,l, ttttt^? Podecüard pone <'poursuilc dc t'¿ttl' Así tendría-

rrris nrctálbras con términos concretos: Pastor de üento' cMa

,1.,1 viento Yo me quedo con <apaleo de viento> y que lo

,lil;Lrjt: Brueghel.

ConiJencajar el platillo enlataza, morderse la nuca o

r lrsguñar un vidrio.

***

Caso de un filósolo que de lejos escuchó' después' no

clc tan lejos y finalmente de cerca -por ejemplo' de estación

"n "rtación*i"ntru, viajaba de la tierra a la luna- la palabra

Je Koheleth: Vanidad de vanidades, todo es vanidad lr4irar

la tierra desde la luna es escuchar de muy cerca <Todo es

vanidad>.

***Koheleth dice que la pena es prelerible a la alegría.y

dic" que en la alegría reside todo el bien; dice que el sabio

3l



vale por diez y dice que el sabio no sabe nada: dice preleribleel_que está mueno al que e.stá vivo

,0,..

,,u1"L"""'o.rr"vrvo que un león mueno; dice que hay qu. Airf.tu, ioio .flacer y dice preferibte ir a Ia casa ." ilJ; ;;;;; ;;""""iesta: dice que encuenrra a Ia mujer,á,"r;rd;;'i;;.".- dice dislruta la vida con Ia mujer que amas, dice que elsabio camina en la luz y dice

"no¡oUl". n¡ ;;;.;; J,;",ue tas paredes oyen>,

dice que la corte es cá;ü#;1..que hay que obedecer al rey;.dice-nada ¡",""lrlilJu"r'1,isfrutar y dice que el beber y el dirf."¡. ,""'1"r."r".r;;, ;;*

ll:lerible el muerto qre no sab"""a.,"J¡.. or""áriUr"'".,rvo.porque siquiera sabe que esrá vivo; dice ou" ,ojo

",an¡dad. pero prefiere et vint at ,gr.,

"iü;;;.;.,,'.*,"1

dice.que Dios permite al que le u.giada. oue "1".,1".,li liLpioo1.... y dice que Dios da al q* I. ugáau to q;;i"rl..l,ro. Ul escriror talmudista que cira c.n u wJrgni"r".jr*teniendo a Koheleth por Salomón): -D"' --v¡'¡ui

A}. Salomon ¿dónde está ru sabiduría, dónde tu inte_

tigenciar Como si no basrara ;;ñ;;i,;;il:;te contradices a ti mismo.

l:r:,ly-cII*"s dicen. no, no se contradice, discute consi_o mrsmo. Otros dicen. no. discute con o,ro Sulorn¿n. óiror,ll:1:.r," con varios No. no; cira y ."r;;;; ;;;";;;;ue se contradicen.

No, no: son quienes l" ,.""í"r]ú"" i",ue contradicen y se contradic

"rrtpri.un ,in ."ffi;;'#"*;):::-"_:"" errores que se;cnpclon en transcripción. No:

12



|., rlr l{'\lo con las páginas desordenadas No: esuntexto am-

¡,rri ,rr k r, lo givcr-sado por tontospiadosos o adversarios hábiles'

***

l)cs¡rués de tener por cosa cierta por siglos y siglos

,¡rr, lsoltelcth era Salomón, de pronto para todos es.obvio

,¡,,, ,',, kr es. Tal como la tierra que era plana en un tiem-po,

r,'r, r rt r ls t¡ue ahora ¡ a quién se le va a ocufrir tamaña estupidez!l l , ,,lr() Kolreleth entonces, ¿un impostor y un tramposo?

*+'t

I le aquí un argumento para blanquear la impostura de

1.. olrL'le th. Lo encuentroen Wright:

La autoridad y veracidad de Eclestiastés no peligran

por que se niegue la autoría de Salomón Ningún <he-

.lto ñittóri.o, ,. resuelve por ello en <ficción litera-

ria>. Es del todo impropio para cualquier defensor

de la autoría de la Ságráda Escritura decir que el li-

bro de Koheleth eslá expuesto a la acusación de <en-gaño y falsedad> y que sus doctrinas deben ser consi-

áe.adas con sospicha si la suscripción del tibro (Pa-

labras de Koheléth, hijo de David, Rey en Jerusalén)

se considera no una verdad histórica sino un artificio

literario.

[)arece incontrovertible, con una tachadura sobre <engaño y

lhlsedad>. Porque en punto a doctrina el texto puede estar

33



:i:"r.,9: de verdades. lo que no quita que hay engaño. Seclrtundió que era de Salomón y no es de Salomónl Eso se

llama. engaño. ¿Dirá algún cínico: con ""g"ño ;;; ,; ;;mamá la cuchara en la boca?

Se cita con frecuencia esta afi¡mación enorme de

Schopenhaeur: <Ningún hombre puede corp*n¿"i.ir.*l_do versículo de Eclesiastés si no ha ttegado a ;r; #;;;11:rll. "^l:.".0rÍ.

estoy privado de compienderlo. K"h;t"t;,que to escnbtó, no pudo hacerlo antes de sus setenta años.Jesús, que murió pasados sus treinta,

"" t"r" op"¿;. ;i;;ue tienen que estar disolviéndose de u"¡", nu"rtro. t i.*,para comprender que todo es vanidad? ¿y qué diremos delos sesos de uno? Si se disuelven, ¿cómo no,ran u ¿irolu"rs"también sus pensamientos? ¡setenia a¡ost . OernasiJo''"-

*1.*

, C.ualdo Koheleth dice que <así como un hombre vienear mundo desnudo, así debe partir desnudo del mundo>, esemonu,me,nlal comentarista que es C.H.H. migtt consideraque er sabto nos está indicando <uno de los peores males de

3^10.r"Por lo tanro habría que considerar un bien qr;;;;,

por e.¡emplo, se lleve su dinero al otro mundo. R Kohelerh noparece que

se le ocurra una maravilla así. No va más allá Jeargumentar Ia inutilidad del esfuerzo qu""rpl"urno, "n

p._34



,hr, rr hicttcs que no podemos consumir y que van a aprove-

r

lr¡rolros cuando muramos.

i(x1'

,, /,' , ,,/> significa (odo> en hebreo;y también (el todo> o la

trrt.rlrilittl. óe manera qu" <9 e col jebel>> puede entenderse de

r lr r', lllílllOfaS:

a) t-a totalidad es vanidad:

A+B....+z:0b) Todo es vanidad:

A=0; B=0;...2=o

l,rr¡rre cn modo alguno es lo mismo'

**¡t

¿Habrá observado Schopenhaeur que lo que dice acer-

, ¡r tlc üs setenta años que debemos cumplir antes de estar en

, ,,,,,ti"ion", d" antender la frase <Vanidad de vanidades' todo

ls vanidad)) va en favor de la vida y en contra del pesimismo'

r'r)nro doctrina propia de viejos y buenos para nada? A los

\clcnla años ya se vivió de sobra y ponerse en contra de.la

virla no es más que una astucia de la vida misma Estorba

rno a los setenta años

35



lu¡ero opinaba que el autor de Eclesiastés tendría ouenaDer Msrtado Ia Biblioteca de Alejandría. ¿Cuántos ,rol,im"ne,

contendría en eseriempo? Es sabijo, lm ilu"rion", ¿" u;;;;;^::0y""" " T:{.insignifi cante cosa caminando por Ias"no_",:1T o:.""i biblioteca pública. En una biblioteca como Ia de/ueJandn4 tas reflexiones de Kohefeth se las reparten entre elportero y los que quitan el polvo de los anaqueles.

,***. Hay un comentario de Eclesiastés, monumental, meti_culoso, lleno de trabajo como pocos, de C.H.H. Wrisht. En_cuentro este volumen en la biblioteca de la ortodox;ü;;-

sidad de I r¡nd. Fue publicado en l gg3. Lo .n.urco u uou',buscarlo al día siguiente _23 de julio d" ld_;il"";í;que debo emplear mi cortapapelás. D*untr.rt;rl;;;;;;¡nadie lo leyó!

,*i*

,-,,^ )lli-T:'o bajo el sol. \4ejo y4 me ocurre compren_oeno asl: tas hermosas mujeres que amé habían sido va Lma_

::l T:_.1'::rguates a mí; y votverán a ser y votverán a ser yvorveran aser,. amadas por otros como yo. És un pensami#

to que enciende el corazón en sus cenizas v lo tr"" or-lo¡tarde.contento. veo el rosrro de mis amaclas á"".""uI""í'J,imil mujeres que comienzan a f¡orecer. ü"j;;'#il;marán. Los ojos, atisbando po, tos uijtos;;iuJ"nlñ:36



más que melancolía tienen primicias de eternidad. Nada nue-

vo bajo el sol. Entonces, ¿todo volverá y volverá y volverá?¡t**

Hochnut, creo recordar, se apellida un dramaturgo ale-

mán que finge una escena en su obra <El Mcario>. En ella

PíoXII

va aemitir

su pronunciamiento sobre la persecueión

de judíos en Italia durante la Segunda Guerra lvlundial. lvfien-

tras va dictando, intervienen y dictan sus consejeros como si

la palabra pontificia fuera una pelota con la que cada uno

quiere arrancarse. De toda esta <<dialéctica de la pelotera>

resulta la declaración de Pío )ilI. Este recuerdo se asocia a

mis lecturas en que veo eltexto de Koheleth pasar de rnanoen mano como una pelota

**¡t

A propósito de los logros de la lingüística modernq la

crítica, la paleografia que cubren de ridículo a teólogos,moralistas y beatos desnudando textos como <Cantar de

Cantares> y <Eclesiastes)) como triángulos amorosos, poe-

mas de la vendimia, breüarios de politica, comercio, intrigas

de corte y cosas así, puede considerarse lo que dice Renán:

No es sin temor que se ponen las manos sobre textossagrados que han fundado las esperanzas en la eter-

nidad, ni que en nombre de la ciencia crítica se recti-que han consolado



seculares

a la humanidad, la han ayudad o a cruzar tanto áridodesierto y la han hecho conquistar verdades muy su-

periores a las de la filosofia...El Cantar de los Cantares, caro a tantas almas piado-sas, subsistirá a pesar de nuestras demostraciones.Como una estatua antigua que la piedad medieval'hubiera vestido de Madona conservará su respeto,

aun cuando el arqueólogo haya probado su origenprofano. Por mi parte, no se trata de sustraer ta venera-ción a la imagen transformada en sant4 si no de despo_jar la de sus velos por un momento para mostrarla a losamantes del arte antiguo en su casta dignidad. (De suItth.odacciótt al Cantar de los Cantares.)

Se queda uno pensando si no bastará un pasaje así para acre-ditar a un hombre de brillante y profundo. También, üene elrecuerdo de esa imagen de Ludwig wittgenstein, esa escare-ra que empleamos y ala que damos con el pie después de

estar arriba. La frase <<dorar la píldoro> deja la operación enclaro: el dorado va fuera. Con la Madona y Venus parecemuy obvio: Vestimos a Venus de Madona. ¿O será que ves_timos a la Madona de Venus? Ambiguo asunto. Como parapsicoanalistas.

38

***



Hay una conclusión que Koheleth seguro que dedujo

¡rirnero que nadiey como cosa innegable: Que para sus

ii,¡,,"rur, jurdin"s, palacios, serrallos fue necesario que Dios

l,' ,li"ra a manos llenas de lo que muchos produjeron con su

rlrrlo trabajo bajo el sol y a quienes Dios no amaba'

t<¡'*

Sobre el bien y el disfrute del fruto de nuestro trabajo

(rkrctrina explícita y reiterada en Koheleth)' encuentro en

l( B.Y Abbott:

Thtts, the good of tife is in the living of it' The profiI

ofwork isin the doing of il, nol in a'tygrcfit or.tesidue

ihi"h th" ,on"on

exhibit as an achievemet't or pdss

on lo his descendanls'(El bien de la vida reside' pues' en üürla'il provecho del trabajo está en ejecutarlo'.no

en un resultadoque el hombre pueda exhibir

como un logro y dar en herencia a sus des-

cendientes)

De manera que el bien de la vida está en üvirla El provecho

;.1 trlü;; Jrta"n

.¡".utuao, no en algún provecho o resi-

duo que el hombrepueda oslentar como su logro o dejar a

sus descendientes."-- -[-ue"iUi.n de la vida está en vivirla quizás qué signifi-

39



ca. No hay uno de muestra que después de vivir su vida notenga que reconocer que Ia ha vivido. AJgo que no tienen

que_ver con Io que afirma Koheleth. En.ránto-u que el pro_vecho del trabajo está en ejecutarlo, ., ao.t.inu lu" furlsonreír a nuestro sabio. y también a los que," up-p;un ¿"iproducro de nueslro trabajo. Se puede escribir

"". dU"ir, .ta manera de Samaniego, de una gallina pujando y.u.ur"un_do: <El valor del huevo está en ponerlo>, mientras el dueRodel gallinero

le aviva los pujos y el cacareo.

)*¡k*

Lutero, que es el primero que desconoció Ia autoría deJaromon, soslrene que <<Eclesiaslés fue escrito por Sirach en

l:IOo,O" los macabeos> y que el libro

", "un" .rp".i" j.tatmud. compilación de muchos libros, probablem.nt.

o."_parado en la biblioteca de ptolomeo. en 'Egiptoo. ", Muy propicio ambiente. una inmensibiblioteca atesra_

da de paprros polvorientos. para meditar sobre la vanidad.

Ni deja de instruir la noción de un Talmud en miniatu_

ra. Cuando el asunto se expande, ," "nrur"""n ,r,inconsistencias, cuando se contrae, saltan a Ia vista.

¡***

,. F"la biblia

'.quesiempre leí, los versiculos I 7 y l8 del

caprtuto pnmero dicen:40



17. Y di mi corazón a conocer Ia sabiduria y también a

rrrtcrcler las locuras y desvaríos; conocí que aun esto era

¡r llir:ción de espíritu.18. Porque conocí que en la mucha sabiduría hay mu-

, lrrr rnolestia; y quien añade ciencia añade dolor.

Parece claro: los asuntosque

Koheletlrse propuso co-

roccr y entender son. la sabiduría, las locuras y los desva-

rros. lluscando conocer la sabiduría y entender los desva-

r los, supo que se embarcaba en la caza del viento. ¿Por qué?

I'orque la sabiduría trae muclia molestia y porque aumentar

l;r ciencia es aumentar el dolor. O sea, el versiculo l8 da las

rlzones para la conclusión que trae al final el 17.

<Conocer la sabiduría> tendría que significar <hacerse

slbio>. Sólo así se puede entender que la empresa acarrea

rnucha molestia.

<Entender las locuras y desvaríos>, por el contrario, será

adquirir ciencia de ellos observando a los otros y, acaso, ob-

servándose uno mismo. Sería este conocimiento el que <aña-

de dolonl.

4t



Esta es la traducción de G.A. Burton:

17. Di mi corazón a conocer la sabidu¡ía v el conoci_miento, la locura y el desvarío, conocí iue esto estambién caza del viento.I 8. Porque en mucha sabiduría hay mucha afliccióny ef que acrece el conocimiento acrece el dolor.

En esta versión (se conoce el conocimiento>. ¿Gno_seolngía a la moderna? La conclusión oel que acrece

-elco_

nocimiento acrece el dolon> supone desesperación, no es_cept¡cismo. Vale para nuestros tiempos muy especialmente,en que todos pueden acrecer el conocimiento sin terminar nicon una millonésima de las

montañas que hay.+*'l

La traducción de Renán es así.

I 7. Apliqué mi espíritu a conocer Ia sabiduría y a dis-

cernirla de la locura. pronto aprendí que esto es tam-bién pastar el viento.

18. Porque el que atesora sabiduría atesora tristeza,y acumular ciencia es acumular mal humor.

Aquí, el objeto del conocimiento Io forman la sabidu_ría y la distinción entre ésta y la locura_ pero no se entiende

42



rrr¡( lro la conexión argumentativa entre los dos versículos'

, l'or t¡tré tendría que ser pastar elviento la acumulación de

',,rlrithrria? ¡,Por qué tendría que acarrear nral humor y qué

rrrr¡roltaria si lo acarrea?

*'**

Por su Parte, R. Gordis traduce así:

17. Pero aplicando mi mente aprendí que la sabiduría

y el conoiimiento son locura y desvarío Sí, percibí

que esto es también caza del viento'

18. Porque mientras más sabiduría más pesar y acre-

cer el conocimiento de uno es acrecer su dolor

Parece que aquí la sabiduría se identifica con la locura

y el conocimiento con el desvarío. El versículo l8 se com-

pondría con las razones de ambas id entifrcaciones: Si

¿rcreciendo mi sabiduría acrezco mi pesar, la sabiduría es lo-

cura. Si acreciendo mi conocimiento acrezco mi dolor, el

conocimiento es delirioEntender a los traductores de Eclesiastés: caza del üento'

**,f

<Deseo de viento>, <correr tras e[ viento>, <cazarel

viento), (pastorear el viento>>, (agarrar e[ viento¿-son.fra-

ses con ias que se trata de traducir el <<rejul ruaj> deKoheleth'

43



Sorr ¡rrclLriblos a <aflicción de espiritu> (que es tan común)¡rorque indican o sugieren la aflicción de espiritu del caso.Vetnos al pequeño tratando rabioso de rneter el plafillo en lataza, vemos al perro acometer con {i-¡ria tras su cola. <¡Alu>,decimos, <de una aflicción asi de espiritu se trata! 'Iambiénen ésas me he visto yo>). <dlejul ruaj>> pudo ser una fiasecorriente que Koheleth escuchó cien veces en el mercado yque Ie gustó para expresar una idea con colorido Repasandonuestras lrases populares para expresar nociones afines, en*cuentro: escribir en el agua, rasguñar un vidrio, dar patadasal aguijón, acarrear agua con un canasto, ladrarle a la luna,morderse la nariz, amarrar perros con longanizas, atajar elviento, agarrarle el trasero a un áninla, buscarle el cuesco a labreva, buscarle las cinco patas al gato, pedirle peras al olmo,alcanzar las estrellas, arar en el ntar, co¡ner sandwiches cleilusiones con rebanadas de viento, hacerle el quite a la sonr-bra. En inglés encuentro <gelly itt a vite>, que podriamostraducir <coger mermelada con alic ates>>, y <<knife cattl whittleils r.¡ut handle>>, que podríarlos corresponder con truestro<<morderse la nuco>

La dificultad de leer como un discurso el texto deKoheleth se muestra in extruntis en la hipótesis de Bickell.Para éste, el texto estaba en fascículos que se trastrocaron aldeteriorarse su amarra. EI que los amarró de nuevo los dis-puso al buen tuntún. Este seria el creador de la segunda edi_

44



, irin de Eclesiastés, que la posterioridad trata de leer dando

rle ¡ralos al viento.

***

Renán insiste en el gran arraigo de la antigua doctrinajrrclia de acuerdo a la cual no hay ser inmortal otro que Dios'

lusio hace unos días vi por la televisión a un árabe hacer

lrrrla Lie losjudíos que quieren fundar por tercera vez el tem-

¡rlo: <lJstedes tratan de inmortalizar piedras, sólo Dios es

inrnortal>>. Dice Renán de esta vieja doctrina:

El hombre es un ser pasajero, y el peor acto de orgullo

sería igualarse a Dios atribuyéndose la inmortalidad

Este argumento choca con la doctrina de lajusticia deI)ios. Es tan eüdente, universaly militante la injusticia terren4

(lue una nueva creencia -lajusticia celeste y de acuerdo a ello

la existencia del hombre más allá de fa muerte- no podía me-

nos que abrirse paso y triunfar De modo que Eclesiastés

-opina Renán- representa el sordo forcejeo de las dos ten-

r.lencias, el momento fatalista, escéptico, pesimista: Estamoscn las manos de Dios, él nos levanta del polvo y nos delr¡elve

al polvo. Sólo Dios sabe qué hace y por qué. A nosotros no

noi queda más que resignarnos y acomodarnos con .humil-dad a la vida que nos cayó en suerte. ¡Koheleth puro!

45



, Plru,GoÍis, no hay cosas disjuntas en los dos prime_ros versículos del capítulo XI, que traduce así:

L Envía tu pan sobre las aguas. de modo que Duedasencontrarlo otra vez después de muchos jiu.. ---""2. Divide rus medios .n ii.t" , o.ho por.-ion-"r. oor_que no sabes qué calamidades pr"a.n u.nlr roüi. iutierra.

y comenta:

La mayoría de los comentaristas modernos conside_ra ef versrculo I_como consejo comercial. <Envia tusmercaderias a ultramanr, donde la ganancia

"rr"nr_

ramente rnayor, mientras el versículo 2 ordena div?r_sjficar Ia inversión para reducir los riesgos

""*,*_es. Seguramente, esta es la percepción más adecua_da del pasaje.

. Antes de los comentaristas modernos, sólo se leía cari_ji.1,.:::1":::.sicuros Así. d",,,é .;i;;;;;; ;ü;ffi:::::e^ merc.an r¡lista,>. de <reparte a siete y aun ut.ño,, u ,,in_vrene en stele y aun en ocho lugares>.

t(+.*

__ Imaginemos una historia: unjoven rico, inquieto, inte_ligente, sale de los círculos niadosos

d. d;i:;;;l;;;Alejandría. Allí se encuentra con novedades que Io aplastan:

46



l¡ r icnc;ia, la filosofia, las letras y el arte. De welta a casa

¡., ¡r r,: rrrás verá que ignorancia, superstición y barbarie?Tam-

l,r,'n. vuelve de un infierno de materialismo y desenfreno No

,1,' jrr tlc tener coherencia dramática la imagen de un Koheleth

,r.'r salido de la provincia, welto a la proüncia'

*{'*

I-{av lenguas paratáxicas y lenguas hipotáúcas Las pri-

,,','ro= contienen partículas que expresan la conjunción de las

¡rroposiciones, las segundas tienen además partículas para

cxpresar la subordinación de unas a otras Por ejemplo, en

lrt:br eo no hay más que <salí y llovia> para expresar lo que en

cspañol podría decirse <salí, aunque llovía>, <salí, Porgue

lloviu, <salí cuando llovía). La conjunción, o coordinación'

sc expresa en hebreo mediante la letra <vav>'

Hay una ((vau) en un pasaje crucial de Eclesiastés' s

el versículo 9 del capítulo XI que en la Biblia de todos los

días reza así:

Alégrate, mancebo, en tu mocedad y tome placer tu

"orLón "nlos días de tu juventud; y anda en los ca-

minos de tu corazón y en la vista de tus ojos: mas

sabe, que sobre todas estas cosas te traerá Dios a

juicio.

47



El sentido de la última parte de este versículo se hadeterminado traduciendo (vav) por la aAuersati,ra, <masriPodechard también traduce en ad'versativa: ,.p;r;; G;;li;.en.cambio, pone (y)) podechard considera,'eso ,; ;; üuttrma parte del versículo no es de Koheleth, sino la inser_ción de un piadoso hasid. Gordis, en

".rbi"; ;;;r;;;;;Ju<vav>> de consecuencia -es decir, debiendo interpieru.." .ornJ(iporque). la última parte no sólo es auténtica, ,¡no ou"

"*_resa.the .heort of Kolteleth! vicx,point (<el corazón de ladoctrtna de Eclesiastés>).

¡Véanse las consecuencias de filosofar enparatáxica !

La vida es un don de Dios. Entonces, la vida en sazónes por excelencia un don de Dios. Aquí encuentro otra repre_sentación para aprehender Ia concepción de Koheleth: e'n Lsazón de la vida. una pareja danza: y Oior. ,onr;"nJo, i",reva et compas.

,f**

Cr:ando niño, recuerdo, jugábamos con las avellanascomo si fueran bolitas, Al (cabe), a los <<tres hoyito.r, ,,alpuño y al duro>, al <ñoclo>. pero las avellana, son sirniln[de.avellanos. ¿Juegan los hombres doctos con I". ,;;, ;;iEclesiastés como los niños con las

avellanas?

lengua

48



<l)ios ha ordenado las cosas para que el hornbre le

tlrr¡¡r¡ Ni por asomos he llegad<l a un estado asi contenr-

,,'.,,,..r.,.f oi¿.n de las cosas ¡Cuandopienso en los almace-

i,,ll,. L,,l'rrutoriot' fábricas y transacciones dentro de una mt-

rur..,:rtla célula! Todo que admiraq nada que temer'

***

Cuando dice Koheleth que Dios da al necio el impulso

rlt acumular, y da al que ama lo que acumula el necio' ¿hay

,r111ún bandidó en el templo que no aplauda?

++¡!

No hay un piadoso comentarista que no enrojezca cuan-

rlo debe comentar lo que otros piadosos comentaristas inter-e alaron para frustrar una doctrina limpia como un teorema'

"rtf"tiUilcomo la cuadratura del círculo y que' de pasaq

iruiiu-inn"""rurios los bolsillos: que cada cual produzca lo

que consume y consuma lo que produce

'i' ¡f *

Hay un Pasaje de Robert Gordis:

Quienquiera que tuvo de joven grandes sueños que

,i "rfu*uron,-o que amó y perdió,o que fue golpea-

do en las fortalezas de la injusticia, teniendo que tor-

49



nar quebrado y sangrante, pasó frente a las puertasde Koheleth y reposó por un tiempo a la sombra desus aleros.

Veo macizos inaccesibles, áridos desiertos, océanosrugientes, selvas impenetrables de donde retornan heridos yagobiados hombres que no llegaron a nada con sus sueños.Koheleth ha instalado una tienda para que estos hombres serecobren y consuelen. Aquí tiene lugar lo que dice

Schopenhauer sobre los 70 años cumplidos para;ntenderEclesiastés. No se trata de Ia hospedería u oasis que pintaCordis, sino de la antesala en penumbra del cemenierio.

*f,*

EI mismo Kohelerh hubiera visto en todo el ingenio ytiempo empleado en la interpretación de su p"qu"nuobra maestra un ejemplo más de la futilidaá del es_fuerzo humano. porque casi no hay aspecto del libro-sea de fecha, de autoría o de interpretación_ que nosea asunto de gran diferencia de opinión.

Es Gordis olra vez. Entonces, ¿bajo cuál techo se am_para ese hombre que vuelve abatido y decepcionado? por ellado que se acerque, no va a faltar un cerbero que lo espante.¿Vanidad de vanidades?

50



,, l'cro, eso es sólo del licencioso.>

,,1'ero, eso es sólodel impudor, el lasto' la codicia >

,, l)üro, eso no es más que una meláfora >

,r Sólo una anticipación de la redención.>

,,No más que un lapso de desesperación >

,, No más que arrechuchos de un viejo >

<LJna fase en el desarrollo de la conciencia religiosa >

,.llstallidos de la existencia ¡n extt¿ttli\'>t<Diálogo propedéutico entre un piadoso y un desesperado >

(llsto se leyó mal, se transcribió peor.>

<Un carnet de notas...al buen tuntún >

(Esto que se encuentra primero, va después'>

<¡Cuántas manos revolvieron este pasaje!>

(Este es un flariseo. >

<No, un epicúreo.>

<No, un cínico, un Maquiavelo, un utilitarista )<Aquí está Pirrón, este es Hume, este es Aristóteles )<Esie pasaje lo borroneó un escriba que comía y bebia hasta

caer de narices roncando sobre el papiro >

¿Dónde, pues, cobijarse?

***

Un N. Smith observa que es dificil suponer que

Eclesiastés fue escrito como un himno a la cosecha del vino

La verdad, en Io más encumbrado de la vida bajo el sol y

como su fruto más precioso, Koheleth me hace imaginar una

5l



kcrnrcsse campesina llena de luz y colorido, de flores, risas,danzas, canciones y una larga mesa bajo un parrón cargada

de viandas y bebidas. ¡Y qué hermosas las mujeres! Así es yno puedo ni voy a evitarlo leyendo el discurso de Kohelethen su culminación. A la que sigue la decrepitud, la muerte yel olvido.

¿Quiénes son para Koheleth los insensatos -locos,estultos, imbéciles? Se disputa y disputa al respecto. Los quese apartan del camino de Dios; los que se apartan de la ley;los que no se apartan de la ley; los que no se acercan al tem_plo; los que no salen del templo; los que no oran; los queestán orando

todo el día. ¡eué tentación de agregar: los io_mentaristas del texto de Eclesiastés!

*

Capítulo X, versículo 3.

Basta ver al tonto dar un paso por el camino y se veque la cabeza no lo sigue; con su sólo andar va di_ciendo: <Soy un tonto).

Uno ve en la calle a un sujeto que camina y no necesitamás. No importa saber si viene del Banco

Central o va alhipódromo. Si se trata de un tonto, se trata de un tonto que

52



r ¡urina; y un tonto camina sólo como un tonto puede cami-

lt l

Con cosas así, queda a la üsta que Koheleth no puedet( rlcrar a los tontos.

Encuentro en un cuento de T Wolfe que Renán escri-

l\i lhc only lhitrg thal can give one a conceplio^ tf'\",ttlit ttite is íeexteitof htman stupidrry (<lo único que pued€

,l,,,nos un concepto áel infinito es la extensión de la estupt-

rlt:z humano>).

,tt*

Wright da esta versión del Capítulo III' l8-22:

I said itt my heart, it happens in accordance lothe

,r*ururc o¡ th, to'rs of men' in order thal God mtry lest

iierl, ia'n r¿"r that they may see tlnt they a'e beasts'

they wilh respecl lo lhentselws' For a chnrce are lhe'riíU,nu

o¡ r,n, and a chance is lhe beal' and th1

sanre llit \rrcl chor<'e happens to lhem: Iike the death

of the'one, so-is lhe death of the olher: and otrc h''eolh¡í n ail; md a s'ttperiority of the man ot'er the beasl

there is nol;for att is rtrurity' All are going to orrc ptace'

att werc ttm the dttst, ad all arc rehning to lhe dusl'

Who hienveth with rcgard to lhe spirit of rhe sons.oJ

men whelher il ascendeth u¡uards' and rcilh rcgatd lo

lhe spirit of lhe beast, whether it descendeth dauu'anlsto the earth?

53



So I sot that thete v,as nothi g befter than that a nnnshonld tqoi. a itt hit.u,orks., /or. thot i, hrs portiott. Fb)tho can brirg hint to se¿ y

lnt shall be citer hin|(Me dije en mi corazón: ocurre de acuerdo a las ma_neras de los hijos del hombre, de modo que Dios losponga a.prueba, y para que ellos comprendan queson bestias, los unos para con los otros. fo.qu" io,hijos del hombre son una suene, y una suerte es labestia, y Ia misma suerte cae a ambos: como Ia muer_te de uno, así es la muerte del otro; y el mismo aire esa ambos; y superioridad del hombre sobre la bestiano hay; porque todo es vanidad. Todos van al mismolugar, todos vienen del polvo, y todos

retornan alpolvo ¿Quién sabe en lo que al espíritu a" fo, f,lo,del hombre respecta, si asciende hacia arriba, y en loque respecta al espíritu de la bestia, si descienie ha_cia abajo, hacia la tierra?Así conrprendí que no había nada mejor queel

hombre dislrute de sus rrabajos, porqr. .rues su parte. porque¿quién puede moitrarle

lo que habrá después de él?)

54



[-a versión que dan otros del versículo l8 es:

I'orlóchard:

( irrrdis :

'I he New Englishllible :

Inglish Bible:

Je ai tlit dans mon coe r, au sujetde

fils de l'homne: ttDieu veu! les laireconnailre, el mo lrer tlu'ils sonl

quanl d eux de béles.>

I said to nryself crmcertring nren:

usrtrely God has testetl lhent antl

shov,n that they are nolhingbul

beasls. ¡

I vid lo mYseff: <ln dealingv'ilh nten

it is God\ PurPose lo lesl thent and

to see whal theY üulY are.t

I saidi¡t mine heart, It is because of

lhe sons of men, thal God nruY Ptovethem, and that theY maY see thal theY

lhemselves ate beasls.

Con tanta versión diferente, ¿no es para pensar que somos

unasbestias?

+**

Cualquiera sea la versión de Capítulo III, 18, debemos

considerar Capítulo ü1, l9-21 como una prueba de esta pro-

posición: homúre y bestia son idénticos. Las razo-nes son dos:

i;Éi;;tri"" (por el hebreo <<micrab>, Gordiídice </ate>'

55



Wright <chance>, podéchard (soló)) del hombre y el destinode Ia bestia son uno mismo. Esto se prueba asi: 1a ; Como eihomb¡e

muere, igual muere la bestia. Esto * p."¡á "rl. i",,1U¡ nrismo espiritu (hebreo <<ruaj>t; Gordis: nsplin,: Wrishtl"bt¿¿1h>. podechard: <sott/-fle>) penenece ál ¡"rn¡* i .ianimal Hombre y. bestia, quitado el <<rtnj>t. yrr¡ ul .iírooepostro det que vlenen: el polvo. (b) No hay modo de mos_trar que el espíritu del hombre va a Dios y á del animal a latierra

o lo contrario., . fespués de esta prueba (que no tienen qué envidiar aIas de.los academicos) concluye Koheleth 1y no pu.ao uqrioeJar de hacerme una representación de un joven que habien_do reducido al absurdo toda escolaridad, ,i* l.:,j, ,rr l¿pi_ces y tablillas y dice ¡adósl a gritos y se va de danza y jolio_rro por las.lerrazas

y bajo los parrones de Jerusalen.¡:Alégrate, mancebo, en tu mocedad y tome placer tucorazón en los días de tu juventud; y anda en los ca-minos.de tu corazón, y en la vista de tus o.;os... yacuérdate de tu Creador en los días de tu jwentud,antes de que vengan los matos días, y lleguen los añosde los

cuales digas: no tengo en ellos contentamiento(Cap.XI, 9; Cap.XII, l)

Leo las declaraciones de un <brilish primatecottsultat >>

que se encargó de entrenar unas mil Dersonasque actúan en un filme sobre el mundo primitivo.

56



... se trata de una gran habilidad La capacidad de

actuar como un chimpancé da otra percepción de la

vida: nos fuerza a recordar que somos animales

***

Cuando Koheleth dice <los hombres no son más que

lrcstias>>, nos tienta pensar que dice <los hombres son esen-

, rtrl o genéricamente bestias> O sea que metemosa

^r'istótefesentre medio diciendo algo que ni las bestias ne-

tiarian, aunque hay que hacerse una bestia para poder- com-

i,''""aÉtr" ise britiih prinratc cotts ltdnt -como probable-

l""nt" l" ocurre a muchos cuando el profesor les habla del

r.1ónero y sus especies- considera que siendo animales tene-

;;;;q;¿ ,., "uüllor, elefantes, culebras,caracoles y toda el

Arca de Noe.

*t{(

En un Diclionnttire de la llible, 1926' encuentro un

artículo de E. Philippesobre Koheleth:

...Eclesiastés, tiende a mostrar que la felicidad aqui

abajo consiste en temer a Dios y observar la- ley' dis-

fruiando moderadamente de los bienes que la Provi-

dencia ha deparado al hombre Este libro es' así' una

especie de tratado de la beatitud terrestre'

57



Pero en el complemento d,e 1979,leo:

...Esta vida, la declara Koheleth, absurda... Es puescon conocimiento de causa que no cree que sea iosi-ble al hombre encontrar Ia verdadera felicidad. ions-tala,1uzga,lamenta los antagonismos, pero no buscareducirlos a una armonia.

Esto viene firmado por A. Baroucq.

+**

Del artículo de Koheleth en The Catholic Encyclopediase encarga G. Gietmann_ Dice que

la muy recurrida frase <<come y bebe, porque esto eslo mejor de la vido, no es, evidentementÉ. más oueuna formula típica mediante la cual se adviene al h#_bre de toda especie de excesos.

Uno imagina un rotito, que ha sido salvado de su alcoholis_mo por los hermanos evangélicos, que se cruza con otro to_

:.y1:":"ld:.de escabeche y te espera: ¡Bebe no más, bebe,n...!¡No tenis idea de la que te espera!>

58



{ ap.ltl, l9-2 l. es pasaje en que para muchos está.el

rr', lr.rzu de la inmortalidad del alma por parte de Koheleth

i',,¿,.ir"t¿ dicc que ruaT en tal pasaje es <soplo de.vida>' no".rlrrraa, porque ii se la interpreta como <tallna>' lgual ten-

,r,i,,"lfJ."f'n"*bre

y el animal Pero, si es así y el alma del

i',,,ufrt" t^ arriba, ¿qué seria de la del animal que va a la

,,,,, ,luZ ¿'¿".at, puiu l(oh"t"ttt y la tradición judía' después

,'" tr**","t

iotUr" va al shaol Pero' si va abajo' con e1

'i"¡f¡, p.*""; y si va arriba, va al seno de Dios' no al shaol'n,ri,

"f

'ftotUr.-su alma- no iría al shaol' que resultaría una

..,"ri-""iOn superflua. Podechard considera que todo pro-

vicne de identific ar nnj con repesh' el alma individual Pero'

¿¿" á¿"¿" salió esta tiepesh? Por lo que se dice' no es.más'r,¡rre

,troj . Todo parece provenir de una innovación nacida de

.unlpuiu. la suerte que corre el animal con la del hombre

iqr", *g'¡" Koheletil, son enfáticamente la misma suerte)'

i'J"ttí¿ dice que el ruaj animal tiene que ir a la tierra'

porque seria un insulto a Dios que fuera a su seno' en tanto

seria un insulta al hombre que su'lloi

no fuera al seno de

Dios. O seaque el nepesh habría sido fundado por ésos que

según Koheleth no saben ni cómo volver a casa.

**,f

Koheleth dice: no llegamos a ningún resultado estu-

diando; no sabemos nada del plan delmundo No vamos.a

ninguna parte buscando justicia No vamos a ninguna parte

59



buscando nquezas. Hay que ser medidos en Ia cienci4 lajusticiay el añn de lucro. Todo debe orientarse a disfir¡tar de nuestro

lote aquí, mientras üümos y hasta donde nos den las fuerzas.Con el pode¡ prudentes, sea el poder del rey, sea el del sacerdo_te. Nadie mueve una tilde de la rutina en que Dios puso las cosasdel mundo. Dios tiene arregladas las cosas, no sabemos cómo nipor qué ni qué nos va a nosotros en ello si es que somos algomás que arena en la mezcla. Debemos avenimos

"onnu"rt-*

entem ignorancia y resignamos a la voluntad insondable de Dios.¡Feliz aquél quien se le permite apartarse, y comer, beber y dis_Íiuta¡ en retribución de su trabajo!

***

^. fasamos al n¡ediodía por las fuentes de soda, bares ycafés de la ciudad. Vemos allí apiñadas multitudes que co_men ansiosas enorrnes sandwiches y que beben en jirros lacerveza. ¿Son felices? ¿Satisfacen su apetito en proporciónde su trabajo? Si es así, ¿por qué esa furia,

"ruanri"áad,

"ruesesperación en sus rostros? ¡Cómo detesto las caras de las

mujeres mascando con la boca atiborrada! En los hombres,pase. que por algo son bestias.

En Le Catholicisme, hier, aujourd'hui, demain (1952),

viene un artículo, <Eclésiaste>, firmado por A Duvai Aq;iviene la historia de ese rabino Tanhum, que decía:

60



Oh, Salomón, ¿dónde está tu sabiduría, dónde tu in-

teligencia? No basta que tús palabras contradigan las

de David, tu padre. Se contradicen incluso entre sí

También se refiere aquí que los judíos leen Eclesiastés en las

fiestas del Tabernáculo, en octubre. Dice, al final:

Es la obra de un discípulo que ha agrupado como ha

podido los desarrollos y aforismos de su maestro entorno a un tema. Todo es vanidad-..

Los místicos lo invocan; los moralistas y escritores lo

degustan; los espiritus independientes se deleitan en

é1.

¿Será porque lo editó mentecato?

+*i.

En el Diclionnaire de Théologie Catholique ('1911),

leo de un Bigot que un Desvoeux en un ensayo filosófico y

crítico sobre Eclesiastés escribió:

que el fin del autor es probar la inmortalidad del alma

o más bien Ia necesidad de admitir <un estado futuro

de recompensa y de castigo> después de este vida.

6l



Dice también Bigot:

No hay libro en el Antiguo Testamento en que se hayapensado encontrar más errores filosóficos que ánEclesiastés. En casi cada uno de sus versículos, se haquerido descubrir trazas de... pesimlsmo,determinismo, fatalismo, materialismo, escepticismo,epicureísmo.

***

Este veredicto encuentro de Du Hamel:

Eclesiastés se propone reunir Ias distintas opiniones,pensamienros diversos que habitualmenr. iu.bun eiespíritu humano en relación a los bienes y a los m¿_les, para decir, al fin del libro, lo que hay qu" p"n_sar... El objeto del libro es recomendar el temoi de

Dios, la observación de los mandamientos: todo elresto no es más que asunto de búsqueda, de diserta_ción, y formulado en modo vutgar.

-Eluuro. pur"""1

veces participar de Ia opinión de los otros, pero losrechaza de pronto persuadido de qu. no ," d.b" bur-car la felicidad más que en Dios, siendo las cosas crea_

das incapaces de hacemos felices, vanas y ,ruJio_nas como son.

62



¡l)e pronto! Está lleno de <<de prontos> el discurso de

Koheleth, que se resuelven así, de pronto.

***

Esto es de un Jahn, de quien no sé más:

El designio del libro es enseñar a los hombres a su-

primir el deseo insaciable de poder, de honores y deplaceres y, a pesar de la aflicción de su vida, no exce-

derse de forma inconsiderada en el disfrute de algu-

nos placeres inocentes, bien que fugitivos e inciertos.

(Einleitutg in die góttl¡che Bi¡cherdes Alten Bundes,

Wien, 1802)

Leo de una historia en el Talmud, de un rabino Hananiah

ben Hegekiah que decla¡aba incompatible el libro de Exequiel

con algunos pasajes de la Tora (Exodo y Levítico). Le traje-

ron no sé cuántas arrobas de aceile(<<lhree

hundrednteanresr). Entonces, este Hananiah -por lo demás devoto

y santo- subió al segundo piso y no bajó hasta traer expandi-

do adecuadamente el libro de Exequiel. Desde el segundo

piso se tiene más perspectiva.

63



De los libros que pertenecen al Canon, que lueron es-critos por inspiración divina, se decía que <manchan las ma-

nos>>. <<De.file tc hantls>>, dicen los comentaristas ingleses;<<st¡uillc l¿s ntuitts>>, los franceses. ¿Cómo entender que untexto sagrado manche las manos? Podéchard expone unaexplicación a partir de <las ideas primitivas de la impureza yIa santidad>:

Quienquiera que haya entrado en relación con un sersobrenatural debe purificarse inmediatamente con elfin de romper el contacto y no exponerse él mismo asufrir o transmitir a otros una influencia ternible. Lanecesidad de purificarse las manos después de em-plear un libro, como si hubieran sido manchadas, tie-

ne pues su razón de ser en la santidad de ese libro.

<La influencia teniible> se entiende. Cosa de magia. Lo queno entiendo yo es que se hable de impureza, de suciedad. Siando con un dios en el bolsillo estoy lleno de pode¡ de peli-gro, de amenaza. Cualquier cosa, menos suciedad.

Wright tiene una explicación más entendible. Aunqueuno empieza por entender y termina por no entender mucho.Wright conrienza por decir <<strange phrase> por este <<def Iclh¿ honds>>. Lo que ocurría de antiguo es que el pan y otrasofrendas para los levitas eran tenidos por tan sagrados como

los escritos, y como tales se almacenaban juntos. pero

64



... los manuscritos asi preservados eran muchas ve-

ces dañados y hasta enteramente destruidos por los

ratones. Esta profanación era caus¿t de no pequeñoescándalo, además de traer pérdidas serias -puesto

que los libros eran artículos muy caros en esa época.

Para dar térnrino a tal situación. se hizo la solemne

declaración de que el pan y otras cosas tocadas por

las Sagradas Escrituras eran ceremonialmente <inr-

puros>... E.l resultado de tal regulación parece habersido muy beneficioso. Los Escritos Sagrados dejirron

de conservarse en lugares en que estaban expuestos

a peligros peculiares.

I rr trna palabra, una razón económica llevo a estampar cr

| .rr'nrir (inlpuro', sobre las cosas que tuvieran contael(' L()nrrrr libro sagrado. Las manos se pueden lavar. pero .contt'Lrvlrr rrn pan?

l'ara zcnwn mi diccionariode hebreo ofrece ttnrc

\t tt\t)tt, larnt: para el: linrc, period, sctt.stttt.

Wright dice qúe zem(t <designa más bien el momento

,ll rrricio> eu tanto e/ designa el período abarcado por el acon-

rr.r rrricnto Por ejemplo, zentott es el instante en que üno

, nr¡rirza a morir y e/ es el tiempo durante el cual. de acuerdo

,r l, rs nlédicos, las técnicas y los tiempos que corren lo tlenen

6¡



a uno muriendo y que depende del dinero que tiene pu.u pu-gar por este ¿/. Pero esta distinción entre tiempo de inicio

ytiempo de duración no la traduce Wright como la entiende,o"to""

ll),"0" cosa hay una sazón y un riempo ouru ,ooopropósito bajo el cielo.

¿De dónde salió esta <sazóru>? Mejor traduciría Webe¡ |que dice:

IPara todo hay un momento, un tiempo para toda cosa I

,","",,:*::;:::n".0, queano,a:Iara todo hay un momento, y un tiempo para toda

cosa baio los cielos.I

Podéchard dice que zeman es <<el período que una cosa Idebe duran y ¿1 (la época en que debe ocurrin>. Wright y IPodéchard -dos grandes autoridades- difieren seriamente tra- |duciendo :¿nt(tt' y et.

IEl texto hebreo dice:

,.u0":i::',':iiz;i;;:i;í:'l;ri:í:,'?,:,'"!;'*''',"-l



l'arajephesh mi diccionario da. desire. vis/t; objccl, tu'licle.t)rlcberg dice que hay que <elegir entre dos traducciones., ¡rropósito>, cuyo significado es más cercano al primitivo',r'rrtido <deseo>; o (cosa). Esta últinla le parece más apro-

¡'rrLla, porque incluye tanto los casos pasivos como los acti-\ ,, \ (.nutnerados en el larnoso pasaje.

Pero ni de zcntatt, ni de et, ni dejephe./? resulta nada

,lr( se parezca a <<sazón¡r. Los que eligieron <sazón>, ¿con-,rri( rirron sol¡o, clue en latin es <sembrar>?

I r l;r lliblia inglesa de todos los dias, dice:

'lit ercrylhitrg thcrc is o saasott, cutd o linrc to ev:ry

I' u tlrt ts¿ tt t ttl,,' t ll¿ t tt'r' t t.t.

'I'odo tiene su estación, y hay un tienrpo para cada

¡rr opósito bajo los cielos

I r Lr lliblia española de todos los días, dice:

I'uru t¿¡dets las cosas hay sazón, y todo lo c¡re se

tlt¡t:tc debajo del cielt¡ lie,B su t¡empo.

I rr rni lectura de todos los días entendí que hay unrr, rrlr ) ( n quc uno ríe y un tiempo en que uno llora. Entendí

67



que el tientpo de cada cosa es el tiempo de la sazón de cadacosa. Que el tiempo de las rosas es inconlundible, como

lo esel tiernpo de las cerezas y el de las mariposas. Entendí que nose pueden esperar cerezas en inviemo ni mariposas en el ataúd.Entendí que hay que tener presente las oposiciones que sedan en las cosas, que así como se danza, también se trabaja,que así como se vive también se muere. Entendí que hay que

fener presente los futuros sufrimientos cuando se goza. Esoes más o menos lo que entendí. No entendí que hubiera fuga-cidad en las cosas, sino que volvian y volvian siempre idénti_cas y conlo en un carrusel. No entendi que las cosas fuerannecesariamente como son, sino que sólo son así.

Ni siquiera entendí que cuando era tiempo de llorar nopudiera trno reir, por tonto que pareciera

*+*

En Histot.¡d lleligiorum, Leiden, 1969, Ieo de LeoWidengren de la Universidad de Uppsala:

...a step leading to absolule pessinisn is taken inthe hook that bears the nante Ecclesiaste... üerythingis ¡turposeless. rltaniÍy of vatúty, all is vanity...))Actually, here God is thougltt as inscrutable Fáte...7'he langnge indicates a laler stdte (in respect ofJob) rf the Hebr.eu, language, anclfor that reásontlecanrnt date the book beforc 200 B.C.

68



(... en el libro que lleva el nombre <<Eclesiastes> se da un

iuro qu"

"ondu""

al pesimismo absoluto no hay pro-

pOti,o "n cosa alguna <<Vanidad de vanidades' todo es

vanidad...> De hecho' se piensa aquí a Dios como desti-

no inescnrtable... El lenguaje indica un tiempo postenor

(respecto ile Job) del lenguaje hebreo' y por esa razon

no podemos fecha¡ este libro antes del 200 AC )

A,¡rri hav un caso de asimilación universal si uno es fatalis-,u'.n,oi""s GoJ is thought as Fal¿ (Dios se concibe como

¿"rii""l. Si *""s

escéptico, God is thought as Dorrát (Dios

.""on"ib"

como duda). Si materialista, as Mdller' elc'

*'l+

En lhe EnycltpeLlia oJReligiotr,(NY ' 1987)' Samuel

'lerrien se encarga de Eclesiastés:

Como el libro abunda en'ton

sequilur y contradic-

ciones, esrudiosos de pasadas generaciones sugirie-

ron que era una antología de reflexionessobre la exs-

tencia escritas por diferentes manos Una uniformi-dad del lenguaje, estilo e incluso tono ha llevado a

oÁ, u"onii¿".-

el libro como un diario intelectual

de un profesor laico que reacciona a las corrientes de

unu"rlturo

cosmopolita surgente A una edad avan-

zada, que él describé con sardónico realismo ()CI: l-8)'

"r"ribó "n forma de libro estas reflexiones' glosán-69



dolas con citas de Ia sabiduria tradicional. Un disci_

lyl:p-rflj.9::,.libro con algunos toques

suyos (t:2a;L l2; I. l5; XII. I t-13) De acuerdo a otra úipótesis,Koleleth debate las opiniones d" sus pred"cesores

"ncluso las propias; el libro consiste en los apuntes declase tomados por uno de sus alumnos.

¿De dónde resulta toda esta diligenre turba de eruditosen forno a Koheleth? De sus argumentos pesimistas, escépti_cos, agnósticos, materialistas, egoístas, nihilirtur, .pl"úr"or,cínicos, hedonistas y, de ahí, maquiavélicos, practiáistas, oporitunistas, instalados en el mero centro de la Biblia.

, ¿Y cómo llegó a instalarse este hombre en tal lugar?La. mayoria dice que ello lue porque se hizo pasarlorSaionrtin. Pero, no hubiera pasado si no se Io.r.y..un. uFo,que, pues, lo creyeron?

Por lo que cuentan de ese rabino Hannaniah, dispuestoa conciliar a Exequiel con la Tora por sus buenas medidas dey:i,:, ffgr qué no podría explicarse igual el caso deKofieleth? El hombre era muy rico. O sea, ,i.nu^UOn o

rnulegton de chambones se da a la tarea de <expandirri el discur_

70



so de Koheleth para asegurar su ortodoxia, olvidándose de

borrar lo tachado (así como esos zotes que no saben volver a

casa).

Y en vez de aceite, ¿no podría ser vino? Después de

todo, el discurso de Koheleth -no hay nada mejor para el

hombre que beber y comer y disfrutar- les viene bien a los

productores de vino y a los dueños de tabernas, burdeles yrestaurantes.

Me seduce una imagen: Un fauno se escurre y se pone

a brincar entre las nuevejerarquías celestes: ángeles, arcán-geles, tronos, potestades... faunos... serafines, querubines.

¿Qué hace un fauno aquí? Danza ebrio, feliz. Allá viene co-rriendo un teólogo. Se queda mirando asombrado. Reflexio-na: Hmm, sí. Este es un momento necesario en la expansiónhistórica y sistema dialéctico de la religión. El momento fau-no. O la esfera Fauno.

***Otra versión del famoso jebel jebelint, de Ia pluma de

A. Maillot ( 1971):

Fragililé absohte, dil Kohelerh, Ít'agilit¿, toutest

f'agilité.7l



Si algo es frágil, no cuesta romperlo Pero si todo es frágil,

no cuesta romper las partes de lo ya roto. Y así adelante

hasta que no queda nada que romper porque no queda nada

***

Dice Ginsberg, comentando a Koheleth como nadie:

. .. un hombre alcanza el único bien, ventaja, porción(tob, yitron, he leq) que pueda obtener de la vida cuan-

do -¡Deo volentel- disfruta de lo que adquiere.

Esto viene de Eclesiastés (III:13-14) que Gordis traduce:

I htou, rhal lhere is tto other good in life bul lo behappy rvhile one lives. Indeed, every man who eats,

tlrinks and enloys happiness in his work -that is lhe

gift of God

Me pregunto: ¿No será esta frase <<thdt is lhe giÍt of God>> la

inserción de las inserciones enEclesiastés? La inmensa ma-

yoría de los hombres que trabajan, disfrutan una parte ínfima

del producto de su labor ¡Es que Dios no les permite más! Si

no fuera esto más que una inserción, Koheleth se pondría a

un paso de llamar a la rebelión universal de los esclavos.

72



Ahora me encuentro con que iebel, para un A M'

I )rrbarle (1946) es <decepción>!

+**

Para D. Buzy (1941) la esencia del discurso de

Itoheleth, partiendo dei sinsentido de la vida o la imposibili-

,lad de alánzar Ia felicidad, consiste en la condenación de

krs esfuerzos que se hacen para alcanzarla ¡'Ibdos vanos!

Mcter el platillo en latazay apalear el viento

'l' :t *

Sinthah, <alegrío, aparece l7 veces en el discurso de

l( oheleth. Parece todo lo que pueda haber de felicidad. Se es

lr:liz y sólo se es feliz cuando se está alegre Se está alegre a

1,, ,nása con los amigos, entre los helechos con la amada,r untando y danzando a la sombra de los árboles en flor'

,1.**

'Iodavía otra versión del versículo famoso (H:H:

S, Irrnidt, 1966):

Nada, todo es nada, dice Koheleth'

l't ro, cuidado con confundir la nada de los hebreos con la

rrrrrl¡r de los occidentales.

73



Baroucq traduce jebel por <absurdidad>. O sea:

Absurdidad de absurdidades, todo es absurdidad.

No me he dado el trabajo de averiguar (habiendo lle-gado a leer sus ensayos muy tarde en mi vida) si todoEclesiastés está en Montaigne (lo que no me extrañaría); pero

anoto esto:

... si has visto un día, lo has visto todo: un día es iguala los otros. No hay otra luz u otra sombra; este mis-mo sol, esta luna, estas mismas estrellas, este mismoorden y disposición de las cosas, es el que tus ances-

tros disfrutaron y que disfrutará tu posteridad.o también,Todo en todo, la distribución y variedad de todos losactos de la comedia se cumplen en un año. Si obser-vas la revolución de las cuatro estaciones, compren-den la infancia, la juventud, la ürilidad y la vejez delmundo. El

año ha desempeñado su parte y no conocemás arte que empezar otra vez. Siempre será lo mis-mo.

***

En la actualidad prevalece la teoría de un autor único

74



rlc Eclesiastés. Con la teoría de los muchos autores se expli-

cln sin más las contradicciones. Con la de sólo uno, hay que

Ir¡rlicarlas por su temperaniento, su carácter, estilo, circuns-t;rncia. Para nuestros psiquiatras, no iniporta que hava ntu-

, lros Koheleth en uno. ¿Quién no es un esquizolréllico'J Tam-

l)( )co desentona un Koheleth existencialista, lleno de temor y

tcrnblo¡ angustia y desesperación... y disparates

Justo: leo que Koheleth es el primero que señaló y tra-tr r <<la historicidad de la existencia humana }r lo nenl¡'t, Lo

,lrr't: K. Galling. Si, una tradición judia se presta a esto: Los

¡r,rzis trataron de eliminar a los judios de la historia' lrr

+'l'*

La felicidad, ¿quién la trajo al diccionario sin averiguar

',r ,.' ¡rosible? Un emperador chino mandó a un sirvicnte clue

lr, ¡ir p()r eJ reino 1 le trajera la camisa del hombre más leliz'

\ r ( :.Lrlló que el hombre más feliz no tenía cantisa Estcly

.,,,rr() de que tanlpoco tenía sombra y que se alimentaba, ,,rr ll ¡ran del pandemonium. Hasta -cinico como lo obligan

,r rr{)- se me ocurrió muchas veces pensar que ese empera-

,1,'r lc rli.jo a su sirviente: <Vete a buscar la camisa del hom-

l,r, rrrirs fcliz; pero dedícate a pasarlo bien. A la vuelta me

rr ,r( ,, ( sl¿r noticia: que el hombre más feliz no tiene camisa >

75



A. Maillot dice que la demostración en Koheleth es

calidoscópica en oposición a nuestra demostración que es

cursiva. ¿No nos estarán divirtiendo con una distinción retó-rica? Baroucq ve en esta exposición calidoscópica más un

asunto de didáctica que de lógica. De todos modos, con una

lógica calidoscópica no hay tonto que se pierda.

Duesberg

GlasserSchmidt

Baroucq

Gordis

Maillot

El fondo de Koheleth es la justa me-

dida.Es el proceso a la felicidad.Es una crítica a la sabiduría tradicio'nal.

Es la muestra del fracaso al buscar unsentido a la condición humana.

Es un intento de averiguar el prove-

cho de una vida dedicada al trabajo.Es una desmitificación, un ataque, ¡la luz de la vejez y la muerte, de todac

lasconsolaciones, de todas las reco-

tas de felicidad con las cuales se dan

ánimo los hombres.

Heidegger habla de historia en los sentidos de: dejar

noticia; la noticia que se deja; y el saber de esa noticia Parl

76

I

I



Koheleth no hay historl¿ g¡ ¡ingu¡s de estos sentidos; o mejordicho: no se saca nada de dejar noticias; porque, en verdad,

no se dejan noticias. Pero, entonces, ¿quién puede sabcrlas?

**,k

También dice cosas del trabajo Heidegger que haríannrover la cabeza a Koheleth: Que el hombre, trabajando, se

libra a la apertura de lo que es; que la cesantía deja en el

vacío el ser liberado para las cosas; que la alegria, como es-tado de ánimo fundamental, es la base de la posibilidad deltrabajo auténtico.

*:i<+

Leo un articulo, <Choosing Deotltt, en el Nattstreck,agosto 26, l99l . Las nuevas técnicas médicas prolongan lavida. Los hombres mueren cada vez más Iiejos. También, alnrorir, están nluriendo por largo tiempo. l\{ediante transfu-siones. diálisis, transplantes, están los pacientes muliendc¡,sin terminar de morir. El tientpo de morir que nos diccEclesiastés se expande sin temor del orden de los cielos. Dice

un enfermo: I do mird ttying, but I hot,enl any choice... Mylife is at a poinl vhere ¡l can o ltnger succeed (((me pre-ocupa morir, pero no tengo opción... mi vida está en un pun-to en que no puede seguir>). Es el punto del tiempo en quese tendría que morir. Pero las técnicas médicas intewienen yexpanden el instante, El enferr¡o quiere la muerte, no quiereestar muriendo:

77



?'he option Íhol note antl nrore paliertts, antl the irfamilie.s, dcnw d is tt¡ leap j.og d¡ting tf death is alllhal myaits. While nnny people choose dealh, no r.¡nechoose dying.

(La opción que piden cada vez más pacientes y fami-liares es saltarse estar muriendo cuando sólo aguardala muerte. I\4ientras que muchos eligen la muerte no

hay uno que elija estar muriendo.)

Pero aquí hay dinero en juego. Mucho dinero. Este es uncaso más de liquidación de la teología por la economía. Opor la economía del cuerpo médico o por la economía de losparientes.

Años de años que Ieí una novela, 1¡t lhe Regitting.Eslahistoria de dos hijos judíos de una familia del Bronx, NuevaYork. El mayor sale al mundo de los gentiles y

luelve des-pués de años, Ileno de prestigio. El menor sigue en su Bronxy su sinagoga. Tendidos a Ia siesta, le confia a su hermanosus tribulaciones. nadie le puede decir qué fue de esa ave quesalió del Arca de Noé y no volvió. ¿eué fue de esa especieaninral? El hermano mayor mueve la cabeza. <Hermánito,lee a Darwin por el amor del cielo>. Así podemos imaginar

aKoheleth, welto a Jerusalén después de viajar por el Asia

78



Nlenor, por Grecia y por Egipto: <Hermanitos, está bien, está

bien, peio, por amor de Dios, lean a Pirrón, Iean a Epicuro, a

Zcnón, a Aristóteles).*t(t(

Siempre me atrajeron esos cuadros de antiguos padres

dc la iglesiacristiana, aislados en grutas, en parajes inhóspitos,

unreni'zados de bestias, protegidos por leones, por ángeles,

sin más luz que la de una vela alumbrando viejos papirosI:xcogitan guiados de lo alto. Pasan las palabras del lreb¡eo

al gri"ego, áel griego al latin. iJebel jabelim, uecol jehelt

¡,lioraJratando deádivinar qué dijo Koheleth -si es que hubo

un KoÍleleth, si es que dijo algo- con tanto sudor y trabajo y

ningún resultado, pienso.de otra manera cuando veo esos

.ui,ltot y me pregunto si no estaré mirando a uno de esos

insensatos que no conocen ni el camino a su casa

*''*

En Suecia, donde vivo ya por casi vcinle años, encuen-

tro oue esto se cumple: todos se levanlan. trabajan y consu-

rnen el producto de su trabajo. Incluso. desde la perspectivadel meicado mundial, parece que cada succo consume más

de lo que produce. Con lo que este pueblo scria un preférido

de Diós, que hasta quitaría a otros lo que producen para

darlo a ellós. (Y a mí también, como es obvio)

79



Gordis dice que gracias a Ia inconsistencia de Koheleth-que nos dice que nada es nuevo y todo es vanidad- tenemos

su escrito, una obra lnaestra. Pero, ¿si no es así? ¿Si Kohelethlue consistente y no escribió nada, y lo que llegó a nosotroslo anotaron y editaron a Ia buena de Dios alumnos suyos?

,¡*,l

Hace unos días, tuve un sueño-Koheleth. Estaba en es-pacios oscuros conversando con alguien. De pronto, haciarni izrluierda, allá abajo, pasaba flotando un enorrne cuerpo,oscuro, brillante, con lomos de cetáceo. <¡Mira, allá va lalie¡ra!>, decia la otra persona. Silenciosa, enorme y solitariase alejaba la tierra entrando en las tinieblas con toda su cargade vanidades y locuras.

¡Nueva versiónl lleyisctl Bible, l9S9:

7 he urlzls of the speaker.. firtilit¡,, ulter/utility, .scrysthe s¡taake4 ewrylh¡ng ¡s futile.

<Futil> es porfitti<t, que en latín es porjarro de base redondaque no puede quedar erecto. He visto en Knosos de estosñrtios que se encajaban en hoyos ajustados. -/eó¿l es <<humo>>,(vapor>, (polvo)). Ahora es <sin asentadero>. No está mal:tratar de alcanzar el conocimiento es como tratar de asentarun futio. O nrorderse la cola, o rasguñar un vrdrio. perofutio

{t0



es también por (recipiente roto) Echar agua en un vaso sin

lbndo. Acarrear agua en un futio.

Dice Daniel Defoe en un texto dedicado a las exequias

clel una vez célebre John, Earl of Marlborough:

Nada de su inmensa riqueza, nada del botin y trofeode sus enemigos, de la munificencia de su reconocida

soberana, de la fortuna amasada en la guerra y en la

paz, nada de sus inmensas reservas de oro -que para

algunos son tantas que no me atrevo a decirlo- puede

darle de r,uelta Ia vida ni prolongársela un instante

Está muerto. Y dicen algunos que ese gran tesoro'del que fue dueño en este mundo, tenia una extraña y

particular propiedad: que no podia llevarse nlucho

de él al otro mundo.

Este Marlborough es, supongo, el héroe de una canción de niño

que comienza: <Mambru se fue a la guerra, dóminoqdóminon,

d..oo y qu. t.t*ina con dos pajaritos sobre su ataúd

... cantando el Pío, Piodóminon, dóminon, dero,

cantando el Pío, Pío,

cantandoel pío

Pan.

8l



O sea que Daniel Defoe tiene de profeta, porque dice, en el

mejor estilo Eclesiastés:

¿Cuál es pues Ia obra de la vida? ¿Cuál el asunto deestos grandes hombres que cruzan el escenario delmundo en aparente triunfo? ¿Se trata de crecer altoen labios de la fama y llenar muchas páginas de histo-ria? ¡Vaya! Esto viene a parar en forjar un cuento

para lectura de la posteridad hasta que se transformeen fábula y romance. ¿Se trata de abastecer a los poe-tas y vivir en lo que éstos llaman sus versos inmorta-les? En palabras llanas, esto no es más que transfor-marse después en balada y canción y ser cantado porlas abuelas para acunar a los niños o en las esquinas

para formar gentío en beneficio de los rateros y lacanalla...

Cuesta contener una carcajada bien motivada. Pedro canta elMambru mientras Pablo levanta las billeteras.

***

Joseph Addison, yendo por el cementerio de la abadía deWestminster, se refiere al resumen en polvo que hay allí detantas vidas y tanta grandeza. También al resumen verbalque dice lo mismo sobre todas las lápidas: nació en tal fecha,

murió en tal otra. Se entretiene viendo cavar y sacar a flor detierra huesos y cenizas.

82



Upon this I began fo consider wif h nyself tlltat in-

nimterable nntltitudes ofpeople lcty corrfused bgether

rmcler lhe pavintenl rtf that ancienl calhedral; hrttvmen ancl v'onett, f iends and enemies, prie"sls turcl

solcliers, nronks and prebendaries, verc crunthled

ontong one another; ond blendecl logether in lhe same

"onr,rro,nrnrr; how beauly, strenglh ctttd yottlll, rt'ilh

old age, rt'eahrcss and deforntity lay mrdisl inSnrishcd

in lhe same prontiscttous heap of ntatter'

(Entonces comencé a considerar qué enorme multi-

iud yace confundida bajo el suelo de esa antigua ca-

tedral; cuántos hombres y mujeres, amigos y enemi-

gos, monjes y soldados se amontonan alli mezclados

en el polvo; cómo yacen, la belleza, \a fuetza y lajuventud, la vejez, la deformidad y la flaqueza, en un

montón Promiscuo de ruinas.)

¡¡:k*

Todavía otro, Sommerset Maugham, en su HuntattBondage .

La respuesta era obvia: la vida no tenía ningún signi-

ficado. Sobre la tierra, satélite lanzado en el espacio,

los seres vivientes habían nacido bajo influencias que

formaban parte de la historia del planeta Y del mis-

mo modo, bajo la influencia de otras circunstancias'83



desaparecían. El hombre era tan insignificante comolo podían ser otras formas de üda...

***Nota uno consistencia en el viento cuando pasa; y des-

pués reflexiona: <Ya pasó. Una consistencia de nada>. Perolas rachas de viento mueven las aspas del molino.

***

Refiriéndose a la historia, en su estilo poético y esoté-rico, dice Heidegger que la conclusión fundamental de la his-toria es: <todo ya ha sido).

Esta conclusión principal nos entrega un certificado

que nos autoriza para eludir todo lo grande, algo quenos da una apariencia de superioridad, pero que enverdad no es otra cosa que la impotencia del tiempo.Yo denomino a este estado: pereza histórica.

Koheleth nos da estos certifcados a manos llenas. Todo ya hasido, nada nuevo bajo el sol. La impotencia del tiempo se

hace patente en el giro sin sentido y sin término de todo.

Lo que ha sido, será; y lo que fue hecho, otra vez sehará; no hay nada nuevo bajo el sol.

84



En un libro de <análisis transacciottal>>, de Thorrr¿rs A'

Harris, donde se trabaja con ta hipótesis de las tunciones

parenl, aduh, child en todas nuestras transacciones, leo:

The chitd soys: fut, dri¡tk, antl be nrcny ftt' lomorrow

we'll die.

(El niño dice. come, bebe, alégrate,porque mañana

morirás.)

O sea, Koheleth sería el niño en nosotros; y el niño, segrin

este autor, está siempre en Ia posición: I ct¡tt ttt¡l O K (yo no

estoy bien).

*¡*+

En su novela The F-rench Lieuteno tls Woman, John

Fowles reflexiona sobre su héroe, unjoven victoriano:

... We cottld nol expect him to see whal we are onlyjust beginning -<tnd wilh so much more knowledge

and lhe lessotts oJ exislenlialist philosophy ot our

disposal- lo realize ourselves: that the ¿Iesire to hold

arul the desirc lo enioy dre mulually deslntclive' His

stqlement lo himself shottld have been, <l possess

lhis now, thereiore I am happy>, ir$teod ol whal so



t

l4ctorianly was: <l cannol possess lhis foreve4 andlherefore I am sadt¡.

(No podriamos esperar de él que üera lo que - conmucho más conocimiento y lecciones de la filosofiaexistencialista a mano - recién comerzamos a ver: queel deseo de conservar y el de disfrutar son mutua-nrente destructivos . Eljuicio suyo sería. (Poseo esto

ahora, por tanto, soy felia en lugar de lo que, tanvictorianarnente, era: no puedo poseer esto por siem-pre, por tanto estoy triste)).)

O sea -según este autor que no deja de exhibir sus notas deeducación- estamos sólo hoy comenzando a damos cuentade lo que está escrito para todas las edades y alcances enEclesiaslés.

Las cuatro columnas del discurso de Koheleth. La eco-nómica: que cada uno consuma lo que produce; la lógica:

que no se busque racionalidad en la sociedad de los hombres;la filosófica: que deseamos conocerlo todo y no logramosconocer nada; la moral: que el sumo bien consiste en el gozode las cosas materiales mientras somos jóvenes: comer, be-ber, fornicar.

86



Todos los ríos van a dar al mar y el mar no se llena; al

lugar que van los ríos continúan yendo.

Así traduce Podéchard 1,7 y su comentarioes:

... [en I, 5-7] está la idea de esterilidad, al menos

relativa, de los elementos. El ejemplo de los ríos la

pone en pleno valor. (Tal trabajo) es vano. Todosjun-

tos no llegan a llenar el mar; y a pesar de ello, o más

bien a causa de ello, deben renovar su acción cons-

tantemente. Igual, la naturaleza entera es incapaz de

producir nada estable y durable, y por tal motivo está

condenada a un recomienzo perpetuo y penoso Y se

piensa, forzosamente, en el tonel de la Danaidas y en

la roca de Sísifo. Porque el esfuerzo es inmenso, siem-

pre infructuoso o a lo menos sin resultado durable, y

ii".pr" u t"nouurse, y por esta razón no sólo sin efi-cacia, sino sin fin, no sólo inútil y vano, sino insensa-

to y absurdo, tan ilusorio y ridículo como el esfuerzo

de la ardilla cautiva que corre locamente en la jaula

giratoria sin ir a ninguna parte, o como el de la ola

que bate con furia la ribera, pero siempre en el mis-

mo punto o que en todo caso no avanza un espaciosino para retroceder otro tanto. Este punto de vista

nuevo prepara las afirmaciones de los versículos que

siguen; porque Koheleth no se refiere a la monotonía

de los fenómenos naturales y a la esterilidad de la

acción de las cosas sino para ilustrar la monotonía de

87



la existencia humana y la esterilidad del esfuerzo de

las generaciones . (1" Ecc Ié s ¡a.t te .24 l)

En la naturaleza, como también en los asuntos del hombre,monotonía de los procesos y acciones; monotonía ycircularidad; circularidad y cansancio; cansancio y sinsentido,sinsentido y esterilidad.

Tratar de rasguñar un vidrio, de morderse la cola, lanariz o la nuca, son buenas caricaturas de estupidez, despro-pósito, reiteración sin alcance, giro sin término que ayudan a

comprender la experiencia de Koheleth. Llevan a Ia vista el

principio del giro sin alcance y así de su absurdo y todo lodemás. Acaso, la ardilla en la jaula giratoria suministre elapoyo mejor: porque la ardilla trata de escapar por una tra-yectoria recta, pero lajaula translorma la recta en círculo; dedonde resulta todo el absurdo de su situación y la desespera-ción en que se agita. A la historia de Sífilo le falta este meca-

nismo de giro sin término.

Sobre la influencia de la cultura griega en Koheleth,que tanto se afirma y tanto se niega se puede considerar:

En pro. Que uno va al último rincón del mundo y allí están

88



los jeans, la Coca-Cola y el rock'n roll.

En contra: Que uno va a la misma Nueva York y se encuentra

con ambientesjudíos de los tiempos de Abraham en Ber-Sheva.

**t

Hoy, 3 de junio de 1996, leo una frase de un seño¡

Robert Emery en el Netrs:veek lttlcrnational que sin'e para

un agregado a estas notas sobre Eclesiastés:

I lhink il is oll a bil ofnonsen.se. It isit¡sl st¡lla bir úlobacco.

Todo esto me parece un poco absurdo. No se trata

más que de un puñado de tabaco.

Se trata de cigarros encontrados en una bodega y quedatan del siglo pasado. El asombro de Emery se debe a que

un americano ha olrecido comprarle 500 a dos mil dólares

cada uno. O sea un millón de dólares. Lo que me tomaría

unos cuarenta años ganar como profesor. Podemos suponer

que un magnate como éste despacha los 500 habanos en un

año. Imagino a Koheleth en los años en que se dio a la vidaespléndida fumando una tal cantidad de cigarros y arrojando

la cola del último, escribir: <... y me dí también a las delicias

y el aroma del más caro tabaco encontrando que esto era

también vanidad, puro humo).

89



También versifica con su Eclesiastés Calderón de la

Barca, en su Tbatt'o del Mtotdo, recita el Mundo:

Corta fue la comedia de la viday más para el que está considerando

que todo es una entrada, una salida.

Ya todos el teatro van dejando

a su primer materia reducida

la forma que tuvieron y gozaron.

Tierra salgan de mí, pues tierra entraron.

Cobrar quiero de todos con cuidado

las joyas que les dí con que adomasen

la representación en el tablado,

pues sólo fue mientras representasen.Pondréme en esta puerta, y avisado,

haré que mis umbrales no traspasen

sin que dejen las galas que tomaron.

Tierra salgan de mí, pues tierra entraron...

Pero, un detalle: al pobre no se le dio nada; antes se le quitólo poco que tenia. Así tendrían que devolvérselo al salir de ElGran Teatro de la Mda. En cuanto al rico, no parece irse tandesnudo. Dice:

90



... ¿A quién mirar no le asombra

ser esta vida una flor

que nazca con el albory fallezca con la sombra?

Pues si tan breve se nombra,

de nuestra vida gocemos

el rato que la tenemos,

dios a nuestro vientre hagamos.

¡Comamos hoy y bebamosque mañana moriremos!

Este es el final de un escrito mío autobiográfico:

... Leo y releo las palabras del sabio entre los sabios

Las secuencias de sus razonamientos se destruyen en guerra

pareja y sin cuartel. Se invierten, se desinvierten, se combi-

nan, se resfuerzan, se desvanecen. Según unos, dijo el predi-

cador. vanidad de vanidades. Según otros. futilidad de futili-

dades. Según otros: vaciedad de vaciedades. Según unos, norecibió influencias. Según otros, de los egipcios viene, de

Aiejandría viene, de los escépticos, de la Academia, del Li-ceo, de los cinicos, de los epicúreos. Para unos, es un místi-

co de los auténticos. Para otros, un agnóstico de los peores

Dicen que no es uno, sino dos; que no son dos, sino tres,

cinco, nueve, ciento. Se dice que el texto original estaba en

9l



arameo y ya no está. De su traducción al hebreo, fueron sa-

cando esto y poniendo estotro celosos, piadosos, copiosos,

lirriosos rabinos. No quedó nada de nada. ¡Interpolación deinterpolaciones! Por mejorar, echaron a perder. Por borrar,

subrayaron. Por construir, destruyeron; y destruyendo y arro-jando los escombros levantaron quieras que no el más gran-

dioso monumento de la desesperación, la protesta y la resig-

nación.l'raté de entender el discurso aniquilante del predica-

dor ¡¡ientras las pulgas y las chinches hacían un almuerzo de

nri cuerpo en los camastros del Ejército de Salvación. Meestuve cabeceando en largas siestas de verano, en escaños de

iglesias solitarias, remotas. Ala caza del viento en bibliote-

cas polvorientas y en librerias de segunda mano. Perplejoante los nichos vacíos de los cementerios. Vanidad de vani-

dades, aliento de t¡n aliento, nada de nada.

O sea. miré y no vi, creyendo que veía; y cuando porfin vi, encontré que era nada de ver, que andaba viendo cosas

sin sustancia, que me hinchaba de insensatez tratando de en-

cumbrarme. Miré, y vi por fin que no hay nada que ver de

patente que es todo y de claro que se hace el mundo de vacíoque está. Escudriñé mis enredos y mis enredos de enredos yencontré que no hay nudo que no se desanude, secuencia que

no pueda intervenirse, sentido que no pueda trastrocarse, vín-

culo que no pueda desvincularse.¡Vaya, me dije, desvínculo de vínculos! No había cabe-

9)



za que no pudiera cambiar de hombros, brazos que no pudie-

ran arrancarse. No había ojo que no pudiera vaciarse ni sar-

tén en que no pudiera freirse. Miré y vi con toda claridad unazalagarda de tonterías formadas con aspavientos. Reí y rei,

lloré y lloré, viendo el desvanecimiento de todo en torno mio.

Que el sol termina por calcinar los huesos y el viento poraventar todo el polvo. \4 desquiciarse mi mundo en sacudi-

das grotescas, perderse sin esperanza todo el sentido y el

propósito.

(¿Y con esto, qué se hace con esto?> me pregunté,

como cualquier hijo de vecino perplejo con un sapo en la

palma de la mano. <¿A dónde se va con esto desde aquí?>,

me pregunté. Y me abracé al Predicador de Jerusalén, por-que no habia dónde ir, porque justamente de suponer que hay

dónde ir üene la aflicción de espíritu y el odio de la vida.

93



Lecturas Referidas

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Castellino, M. 1969. Cqnaanite _ phenician infltrence inKoheleth.

- 1952b. Thc language of Kohelerh.

- 1958 Koheleth antl Rccent Discot,ery.di Fonzo, L. 1967 . Ecclesiaste.Fernández, A. 1922. Es Eclesiastés una Versión?.

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95



t¡. l.Si exisno'un díscarsl #,a,cto de Kohel¿th, ya no lo

tenemos.

Yendo de esmba m esntba casi desaparecii. MarwsI 1 t. 7

aduwsas, escandalizadas, temerosas, torpes, piadoqas,ftnlueron insertando sus "correccinnes" en el ong¡nal. Así

i'omo la tenemii,;:amhatido de inconsistencias- todauíapresionafuun@

t ¿Qué h*tT \td*

de k Búha esta.pran magimal

de escepticismo, hedanismo, fudiuidualismo, cinisml,CIpyrtunisma, egoísmo, ffiaterialismo, nihiiismo?ñ 7,se dice que,'k t'aka atribunon a salomon Is satuó

dÉ In seniryh. P.ero rw hoy quu ssr un expertü püra deducir

Qü;€ Tto Wda Wced r fu Salnmon... que fae esmto amndo

lns ejncitos de Alejandro estabanüm arcaigados m Siria3lFgpry.

Cffmü mal4uiw hombre ntkn d,e su tpaca, Koheleth

cannce la ctencia y k filosoiía kelnr¡rsrfca.

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