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ilustración y diseño: ALFREDO PEÑALOZA M. EJEMPLAR GRATUITO www.elreto.com.mx El Reto • Año 17 • Número 751 • 12 al 18 de SEPTIEMBRE 2014 • Ciudad Juárez, Chihuahua • Director: Samuel Schmidt

El reto 751

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Semanario de politica, cultura y algo de humor. Ciudad Juarez, Chihuahua, Mexico. Numero 751, semana del 12 al 18 de septiembre del 2014

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Page 1: El reto 751

ilustración y diseño: ALFREDO PEÑALOZA M.

EJEMPLAR GRATUITO www.elreto.com.mx El Reto

• Año 17• Número 751• 12 al 18 de SEPTIEMBRE 2014• Ciudad Juárez, Chihuahua• Director: Samuel Schmidt

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12-18 Sept 2014 2

Panacea universal: re-medio que buscaban los antiguos alquimis-

tas para curar todas las enferme-dades. Alquimia: transmutación maravillosa e increíble. Falacia: engaño, fraude o mentira con que se intenta dañar a alguien, o bien, hábito de emplear falsedades en daño ajeno. Ilusión: concep-to, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos, aunque también puede definirse como esperanza cuyo cumplimiento pa-rece especialmente atractivo y, en el último de los casos, como ironía viva y picante. Será un símbolo de modernidad y un gran legado para las futuras generaciones de mexica-nos.

Aeropuerto: terreno llano provisto de un conjunto de pistas, instalaciones y servicios destina-dos al tráfico regular de aviones. Placebo: sustancia que, careciendo por sí misma de acción terapéuti-ca, produce algún efecto curati-vo en el enfermo, si este la recibe convencido de que esa sustancia

posee realmente tal acción. Mal: desgracia, calamidad, enferme-dad, dolencia. Ilusionismo: arte de producir fenómenos que parecen contradecir los hechos naturales. Engañabobos: cosa que engaña o defrauda con su apariencia. Es-

peranza: estado del ánimo en el cual se nos presenta como posi-ble lo que deseamos. Demagogia: degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder. Con su cons-trucción ganan todas las regiones del país y ganan todos los mexicanos.

Proyecto: primer esquema o plan de cualquier trabajo que se hace a veces como prueba antes de darle la forma definitiva. Sandez: despropósito, simpleza, necedad.Entreguista: que implica entrega o abandono y renuncia a la lucha. Lacayo: servil, rastrero; criado de librea cuya principal ocupación era acompañar a su amo a pie, a caballo o en coche. Yerno: respec-to de una persona, marido de su hija. Transparentar: permitir que

se vea o perciba algo a través de él. Los arquitectos Fernando Romero Havaux y Norman Foster serán las cabezas del desarrollo del nuevo ae-ropuerto internacional de la Ciudad de México.

A medida del deseo: se usa para expresar que a alguien le sa-len las cosas según apetecía. Amo: dueño o poseedor de algo (o de casi todo); también, hombre que tiene uno o más criados, respecto de ellos (y éste tiene muchísimos criados). Poder: dominio, impe-rio, facultad y jurisdicción que alguien tiene para mandar o eje-cutar algo. Absurdo: contrario y opuesto a la razón; que no tiene sentido. Extravagante, irregular. Chocante, contradictorio. Dicho o hecho irracional, arbitrario o disparatado.Devorar: comer su presa, tragar con ansia y apresu-radamente, destruir. Exceso:abuso, delito o crimen.

Relumbrón: cosa deslum-brante de escaso valor. De relum-

brón: más aparente que verdadero, o de mejor apariencia que calidad. Necesidad: aquello a lo cual es imposible sustraerse, faltar o resis-tir; carencia de las cosas que son menester para la conservación de la vida. Miseria: estrechez, falta de lo necesario para el sustento o para otra cosa, pobreza extrema-da. Delirio: despropósito, dispa-rate. Descentralizar:transferir a diversas corporaciones u oficios parte de la autoridad que antes ejercía el gobierno supremo del Estado. Reubicar: cambiar de lugar alguna cosa. Centralismo, centralización y concentración en una región del país del grueso de las actividades políticas, económicas y culturales han sido condiciones para

limitar el ejercicio de la democracia en su sentido más extenso.

Amontonar: poner unas co-sas sobre otras sin orden ni con-cierto; apiñar personas, animales o cosas, o bien, juntar y mezclar de manera confusa y desordena-da. Agotar:extraer todo el líquido que hay en una capacidad cual-quiera, así como gastar del todo, consumir. Sobreexplotar: utilizar en exceso los recursos naturales. Reserva:guarda o custodia que se hace de algo, o prevención de ello para que sirva a su tiempo. Algún iluso, alguna vez en el pasa-do, planteó los llanos adyacentes al actual aeropuerto, como una reserva ecológica en recuerdo de la tragedia ambiental que ha significado el ago-tamiento de recursos por el amon-tonamiento de depredadores en el Valle de México.

Dispendio: gasto, por lo ge-neral excesivo e innecesario. Uso o empleo excesivo de hacienda, tiempo o cualquier caudal. Co-

rrupción: en las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en la utiliza-ción de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores.Polución: contaminación inten-sa y dañina del agua o del aire, producida por los residuos de procesos industriales o biológi-cos. Salvaje: dicho de una actitud o de una situación: Que no está controlada o dominada. Civiliza-

ción: estadio cultural propio de las sociedades humanas más avan-zadas por el nivel de su ciencia, artes, ideas y costumbres. Lujo: demasía en el adorno, en la pom-pa y en el regalo. Abundancia de cosas no necesarias. Todo aquello

que supera los medios normales de alguien para conseguirlo. ¿Es necesario contar con uno de los ae-ropuertos más grandes del mundo en una de las ciudades más grandes y contaminadas del mundo?

Catástrofe: suceso infausto que altera gravemente el orden re-gular de las cosas;cambio brusco de estado de un sistema dinámico, provocado por una mínima alte-ración de uno de sus parámetros. Fauna: conjunto de los animales de un país o región. Conjunto o tipo de gente caracterizada por un comportamiento común que fre-cuenta el mismo ambiente. Flora: conjunto de plantas de un país o de una región. Conjunto de ve-getales vivos adaptados a un me-dio determinado. Medio: espacio físico en que se desarrolla un fe-nómeno determinado. Conjunto de circunstancias o condiciones exteriores a un ser vivo que in-fluyen en su desarrollo y en sus actividades.

Utilizando el “libro en el que se recogen y explican de forma or-denada voces”, dejo a ustedes al-gunas de las piezas del “juego que consiste en componer determinada figura combinando cierto número de piezas”, como una forma de entrar a este “problema o acertijo de difícil solución”. Partimos de un “argu-mento formado de dos proposicio-nes contrarias disyuntivamente, con tal artificio que, negada o concedida cualquiera de las dos, queda demos-trado lo que se intenta probar”: ¿La mayoría de los mexicanos necesita ese aeropuerto?

RicaRdo León historias cotidianas

[email protected]

lascotidianas.wordpress.com

Panacea, modelo para armarEsta semana no se me ha dado la escritura. Fluyen

en mi cabeza un sinnúmero de ideas que no he po-

dido ligar adecuadamente para expresarlas en este

espacio. De plano, estoy atorado. He decidido dar a

los lectores los elementos que considero más im-

portantes para que, en un trabajo de tipo colabora-

tivo, me ayuden a decir lo que haya que decir con

respecto a la nueva panacea del régimen. Dejo a

ustedes algunos conceptos, definiciones y anotacio-

nes en espera de su colaboración en esta tarea que

hoy será colectiva… en caso de que acepten mi

propuesta.

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3 samueL schmidtNúmero 751 Entre

telonesTarde pero sin sueño. Fi-nalmente la jerarquía católica mexicana reaccionó Frente a los asesinatos masivos de cris-tianos en irak. los humanistas mexicanos por el contrario siguen callados.

Ya pa’qué. cuando ha sido asignado el proyecto Faraó-nico del nuevo aeropuerto algunos empiezan a protestar. como siempre en méxico las voces son a destiempo.

será. si es cierto que altos Funcionarios planean llevarse un modesto 10%, y para lo que queda del sexenio co-municaciones y transportes piensa invertir 600,000 mi-llones, seguro habrá algunos nuevos multi millonarios.

¿sacaTón? obama volvió a posponer la decisión para me-jorar las condiciones para los migrantes. ¿a quién le teme?

prueba de fuego. la contaminación brutal del río sonora mostrará si es en serio la protección del am-biente, o si como siempre, los grandes capitales se saldrán con la suya.

na’más. 692 mil millones de pesos piensan pedir presta-do el gobierno para el 2015. será mejor cambiar la política Fiscal para propiciar creci-miento y captar más impues-tos. ¿cuánto de eso se van a robar?

∫ ∫ ∫ ∫ ∫ ∫

Estuve de acuerdo con él que ese tipo de nombramiento de un rector se-ría el principio de la limpieza de las

universidades, porque ayudaría a sacudirlas de las rémoras que da una politización comple-tamente inadecuada. Véase el actual enfrenta-miento entre la UNAM y la Comisión Nacio-nal de los Derechos Humanos, alrededor de la sucesión inminente en la Comisión y para lo que el equipo político de la UNAM se prepa-ra a conquistar, para satisfacer sus ambiciones políticas.

Me indicó el  personaje, no creas que no se ha hecho nada, los rectores de ahora, compa-rados con los de hace 20 años, tienen un perfil académico mucho más marcado. Y también en eso tiene razón, y es que aumentó el nú-mero de mexicanos con estudios de doctorado –algunos patito- y por lo tanto de rectores con carrera académica.

Así lo será en muchos casos, le respondí, pero desafortunadamente se está extendiendo el perfil  de los caciques en las universidades lo que no es poco preocupante.

Él dijo con vehemencia, el caso de la Uni-versidad de Guadalajara es el ejemplo clásico de un cacique. Y sí que tiene razón, en la se-gunda universidad del país no se mueve una

hoja si el cacique no lo autoriza, los funcionarios responden a una abstrac-ción determinada por el “Grupo Universidad”, el cual responde a los inte-reses, no siempre claros y no siempre explícitos, del cacique. Pero, respondí, de botepronto te puedo decir que ya son más los casos que están siguiendo este modelo, están las universi-dades de Hidalgo, Colima, Tlaxcala.

Se sorprendió, y después de sostener que en Guadalajara el cacique pone rectores a con-veniencia, no se imaginaba que un personaje tuviera esa capacidad, y mucho menos, que pudiera aprobar a todos los funcionarios, o por lo menos dar su visto bueno. Este tipo de manejo de la administración universitaria, tie-ne un gran impacto académico y distorsiona las actividades de los académicos que entran a la gestión académico-administrativa. Desde muy abajo en la jerarquía administrativa, mu-chos universitarios caen en el nivel de incom-petencia de Peter, porque al estar más interesa-dos en dar el brinco jerárquico, descuidan las tareas del nivel en el que están ubicados.   

Una consecuencia del dominio de los ca-ciques, es que la administración se compone de grupúsculos cerrados que defienden su endogamia, cierran los accesos a nuevos per-sonajes que podrán estar mejor calificados y refrescarían los enfoques administrativos; pero llega un momento en que se les terminan los contlapaches de confianza y empiezan a de-signar a sus familiares. Como los caciques no tienen una función pública, no hay legalmente nepotismo, aunque este si existe en la realidad, que es donde realmente hace daño, porque en la realidad es donde se desquicia la naturaleza de las instituciones aunque los personajes se pongan por encima de la ley.

Las instancias institucionales parecen

funcionar, los mecanismos universitarios operan for-malmente, así el cacique logra el aval necesario para justificar actos reprensibles, no hace mucho tiempo se destituyó fulminantemente a un rector que había exigi-do que el cacique informara sobre los recursos universi-tarios que él maneja. Muy poco tiempo después el rector destituido se “suici-

dó”. No es este el espacio para el análisis de-tallado del caso.

Así, no obstante que puede haber una cierta legitimación a las acciones de esos ca-ciques, en la realidad se propicia una degrada-ción institucional muy severa, porque se mina la autoridad de las instancias formales, para ser reemplazadas por un sistema de lealtades ca-ciquiles, y el daño generado, no se recupera fácilmente.

El sistema meritocrático que debe carac-terizar a la vida universitaria se viene abajo y es reemplazado por un sistema de valores dis-torsionado, que propicia y recompensa el so-metimiento al cacique y sus métodos, los que llegan, en algunos casos, a ser muy violentos.

El modelo caciquil universitario mexica-no, en plena expansión, agrede la democracia, mina la fortaleza de las instancias de gestión académica que debe normar al espacio de generación de conocimiento, y facilita la co-rrupción, aunque solamente fuera porque se genera un espacio donde se escamotea la ren-dición de cuentas, y se crea un mecanismo de manejo faccioso de recursos públicos. Termi-no con una nota, el hecho que una universi-dad genere recursos, no implica que los pueda usar de acuerdo a los intereses de un grupús-culo y su cacique, que se ha apoderado de la institución.

[email protected]

¿Imagínate que a un rector de

universidad lo eligiera la junta

de gobierno, suponiendo que

exista junta de gobierno, sin

que él tuviera nada que ver

con la institución y que hu-

biera sido reclutado por haber

destacado académicamente? Me

dijo enfático un hombre que

lleva muchos años en el campo

de la evaluación educativa y

que lucha, porque cree que es

por la educación por donde

debemos empezar a limpiar al

país.

Caciquesuniversitarios

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Número 75112-18 Sept 2014

Cansado de los reproches de su mujer, un hombre la lleva por fin a jugar golf por primera vez en su vida. El primero hoyo

era un par tres, así que le da un bastón, le pone la bola en el tee y le dice: “Pégale y la pelotita tiene que caer junto a la banderita que está allá.” La mujer toma el bastó, se perfila sobre la bola, hace un swing perfecto, la pelotita sale dispara-da y cae justo junto a la banderita. El hombre, asombrado, la toma del brazo y la lleva junto a su bola. Dándole el put le dice: “Ahora la tie-nes que meter en el hoyito.” La mujer, con cara de furia le dijo: “¡Animal, me lo hubieras dicho desde el principio!”

HILARANTEEste flamante anuncio del Banco ANZ

(página 10 del Australian Financial Review) es realmente irresistible. No puede ser tanta belle-za, me temo que se trata de un esquema Ponzi; ese banco va a quebrar por excesivamente ge-neroso. Ofrece los siguientes estupendos rendi-mientos a inversionistas selectos que depositen determinada cantidades a plazo, de cierto mon-to para arriba. Por ejemplo, en yenes, el mínimo es 23.5 millones ($223,000 dólares gringos). Si el depósito es en libras esterlinas, el rendimiento ofrecido es de 0.00%. Si es en dólares de Hong Kong, de 0.00%. Si es en dólares canadienses, de 0.00%. Si es en yenes japoneses, de 0.00%.

Si es en coronas suecas, danesas o noruegas, de 0.00%. Si es en rands sudafricanos, de 0.00%. ¡Es una verdadera oportunidad! Escribe cuanto antes a anz.com Pero apúrate, estas gangas no se presentan todos los días.

FLASHMOBAsí han bautizado a la irrupción inespe-

rada de músicos, cantantes o bailarines en un lugar público (plazas y centros comerciales, sobre todo), con coreografías previamente en-sayadas y sin fines de lucro. El ejemplo clási-co de flashmobs (https://www.youtube.com/watch?v=uswltlxoRJU) es la espléndida esce-nificación en vivo, en Amsterdam, del famoso cuadro de Rembrandt “La ronda de noche” para promover el Rijksmuseum. Me llegó un flashmob operístico en la Gran Plaza Mazat-lán:  https://www.youtube.com/watch?v=J7FwYwOwHpI&feature=youtu.be  ¡Por supuesto mi tierra no se iba a quedar atrás! Y pensar que cuando el Toño Haas empezó su labor cultural allá por los 50s, la opinión prevalente era que se trataba de un empeño inútil puesto que los ma-hatlecos éramos básicos de corazón y siempre tendríamos nada más cinco pasatiempos: oír tambora, comer callos de hacha, beber cerveza, correr olas y ligar gringas. Sin duda la tambora, los callos, la Pacífico, surfear y gringuear eran (y supongo que siguen siendo) cosas buenas de

la vida, pero no está mal añadirle unas proba-ditas de otras clases de cultura, ¿no? Por cierto, el cuadro de Rembrandt representa a las mili-cias ciudadanas urbanas en la Holanda del siglo XVII; una forma de autodefensas. O sea que ese tipo de organizaciones no son nada nuevo. Pero hoy Mireles no tiene quién lo pinte, digo yo.

CRISISMe dice un queridopaisano: “Leí tu comen-

tario acerca de los anuncios espectaculares va-cantes. Creo que es todo el país. En Sinaloa se viene un piojillo* kabrón: la agricultura sin pre-cios redituables, las granjas camaroneras cua-rentenadas, se empieza a ver locales comerciales vacíos, siendo que hace unos años te pedían un guante altísimo si querías uno. Hay quien dicen que es porque hay más oferta de locales, no sé, pero toda la gente se está quejando. En fin, veremos, dijo el ciego.” (*Piojillo: periodo de vacas flacas.) Esta situación de apremio no es privativa de Sinaloa, ni siquiera de México entero; también en EU se siente el apretón. Leo: “El cierre de tiendas Office Depot evidencia una seria astringencia en el sector de pequeños negocios. Acaba de anunciar que cerrará 165 durante 2014 y 400 más en 2016. Los suminis-tros para oficina son un buen indicador de la salud del sector. McDonalds lleva nueve meses sin reportar avance alguno en sus ventas en EU.”

OOOOOOMMMMMMRecuerda meditar cuanto puedas, cuando

puedas.

GuiLLeRmo FaRbeR BUhEdEra

Viuda del golf4

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Paisaje de arte y literatura en MéxicoPáramohiLda soteLo • editoRa •

Cultura12-18 Sept 2014

Número 751

Mi infancia fue mágica, privilegiada. Tengo muchos recuerdos bellos, ricos, intensos, divinos. Viajábamos mucho. Casi siempre en bola, el montón de primos y primas; infantes terribles la mayoría, y yo la peor de todas. Fui la pequeña mente siniestra detrás de sendas travesuras. Dentro del amplio territorio viajero, ciertos viajes quedaron nítidamente incrus-tados en la memoria y en el corazón. Los viajes en tren eran fabulosos. Vivíamos en el DF y hacíamos el trayecto a Ciudad Juárez para ver a nuestros primos y cruzar de “american” a El Paso, Texas y la tienda de juguetes y comer en Lubby’s y ver el zoo-lógico y… Me lleva el tren. Volvamos a mi historia. Viajar en tren era increíble. Salías del DF a las siete de la tarde para pasar dos noches y llegar a Juárez a las siete de la mañana. Un tiempo larguísimo para hacer tantas cosas. Viajábamos en pullman. Las mamás tenían su cabina y nosotras (mi hermana y yo) peleábamos para ver quien se quedaba con la litera de arriba. Las cortinas eran gruesas y rojas. El tren tenía un olor indescifrable y único. Llevábamos muñecos, juegos de mesa, barajas de la “Old Maid”, rompecabezas, libros y colores para pintar.Las mamás realmente nos mandaban bien equipa-das para que no nos aburriéramos durante el largo trayecto, como si eso fuese posible. Había tanto que ver y que hacer todo el tiempo. Contábamos ade-más con un beneficio extra. Las mamás se encerra-ban por horas en sus cabinas, por lo tanto, éramos libres de hacer lo que quisiéramos sin ninguna res-tricción ni vigilancia.

El viaje que evoco lo hicimos en compañía de mi madre, mi hermana Rocío, que era menor, y mis dos queridísimas primas Chispis y Diana. Chispis era mi cómplice más fiel; Diana y Rocío, de naturale-za tranquila, eran inseparables. Chispis y yo éramos intrépidas, aventureras y algo inquietas (Ok. Hasta hace poco tiempo me enteré que soy hiperactiva). Nos íbamos hasta el cabús del tren, estábamos un rato en el vagón de los juegos que también era el

de los fumadores; parábamos por el carro comedor, cruzábamos los pasillos estrechos de los pullman (eran varios carros, creo).

Era divino pasar entre vagón y vagón. Las puer-tas eran pesadas, el piso se movía, el ruido era inten-so con su traca traca. Íbamos a los carros de segun-da y tercera clase donde había mucha algarabía y vendimia, la gente viajaba apretujada entre cajas y petacas y gallinas en cajitas y niños de todos los tamaños y muchos olores mezclados. Me parecía encantador todo ese ambiente y ruidajo y gentío. Me encantaban los asientos de madera, pero creo que si hubiese viajado

52 horas seguidas en esos asientos asesinos no me hubiera parecido tan lindo. Y así llegábamos hasta las máquinas. Allí saturaban muchas male-tas (al menos tengo ese recuerdo) y ya no nos deja-ban seguir más adelante. Olía a aceite y a humo y había machísimo ruido y yo siempre quise acercar-me un poco más para hablar con el maquinista y hacerle un chorro de preguntas. (No es de extrañar que cuando era pequeña me pusieran dos apodos bastante acertados: El “FBI” y la “Gestapo”). Y de nuevo hacíamos el recorrido hacia nuestro pullman o hacia el carro de descanso, como se le llamaba, a cenar en el carro comedor o esperar el momento emocionante en el que un amable personaje abrie-se nuestras literas.

Una tarde (probablemente la del segundo día), mi prima y yo viajábamos en el espacio entre vagón y vagón (ése donde el piso se movía haciendo tras-tras) y sacamos nuestras cabecitas para que nos pegara el viento que acariciaba nuestros cabellos despeinados. De repente el viento se hizo brisa. Pe-queñas gotitas se impregnaron en nuestros rostros y cabellos infantiles. Qué rico, exclamé casi exta-siada. Es una lluviecita, le dije a mi prima llena de emoción.

—Saca la cabeza para mojarnos bien. —Ella obedeció sin chistar. La lluviecita, la lluviecita. Gri-tábamos las dos al unísono, felices. Dicen que monkey see, monkey does y saqué la lengua. Abrí mi boca para recibir el rocío maravilloso, y creo que en mi estado nirvánico, cerré los ojos. Mi prima hizo lo mismo. Un sabor amargoso recorrió entonces mis papilas gustativas. Mi olfato se vio lento para detectar el origen del olor.

—Guácala —gritamos las dos al mismo tiem-po. Nos volteamos a ver, desencantadas y haciendo cara de asco.

—Son meados, no es lluviecita. Son los meados del tren —dijimos con los ojos muy tristes, inten-tando quitarnos la humedad con las mangas de la ropa. Guácala, dijimos muertas de la risa y salimos corriendo a platicar nuestra desventura a Rocío y Diana. Más tarde realmente llovió. Nos llovieron los coscorrones que mi madre aplicó con injundia mientras nos lavaba el pelo y nos restregaba la cara, el cuello, los hombros, los brazos, con furor. Ella, de tan delicado olfato, y nosotras, expandiendo el olor en su divina cabina. Lo bueno es que siempre traía perfume.

—Sí serán pendejas —nos dijo— ¿Cómo es po-sible que no puedan distinguir el olor del agua de una bola de meados? ¿Pues qué no tienen nariz?Y volvió a coscorronearme. Yo pensé para mis aden-tros, mientras me llovían los coscorrones: “Qué bueno que nunca confesamos que le dimos unos traguitos a la maldita lluviecita…”

LluviecitaaRminé aRjona

escritora

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Mr. Brainwash es el sobrenombre artístico del

director de cine francés Thierry Guetta. Comenzó filmando documentales sobre el arte urbano de Obey (Shepard Fairey) en 1999, y a través de este artista pudo conocer a Banksy. Desde entonces Mr. Brainwash ha rodado horas sobre el trabajo realizado por estos dos grafiteros, siguiéndoles por las calles, con el riesgo que ello conlleva.

Mr.Brainwash

6 12-18 Sept 2014Número 751 Cultura

La respuesta es un rotundo no.

No solamente el internet se requiere para entretenimiento, si no que es necesario para mi trabajo de maestro. De igual for-ma me encontré sin poder comunicarme con mis compañeros de trabajo, de la banda, mis amigos, y prácticamente me sentí como si me hubiera quedado sin luz o sin agua. Pensé inclusive salir corriendo a un restaurant que ofrece internet gratis. No lo podía creer. En el espacio de 5 años el internet se ha convertido en una necesidad.

Lejanos son los días cuando pedir trabajo requería ir a una oficina para una entrevista y llenar una solicitud. En cualquier Universidad ahora es necesario inscribirse por internet. En las es-cuelas primarias, desde este año, las inscripciones son digitales. No recuerdo la última vez que vi un cheque a mi nombre, se de-posita directo al banco, y la verdad no recuerdo cuando he tenido que ir al banco para arreglar algún asunto. No sé cómo he llegado a depender tanto del internet. Es imposible estar sin este servicio e inclusive me cuesta trabajo recordar como resolvíamos nues-tras vidas sin teléfonos celulares.

Es evidente que este miedo es uno de los principales en los trabajos de ficción en los últimos 15 años. Tenemos el ejemplo de La Carretera del autor Cormac McCarthy donde un padre y su hijo caminan por una América devastada por el fin del mundo. En el libro (y la versión cinematográfica) no existe el internet, ni los ce-lulares y básicamente no hay electricidad. Las visiones del fin del

Hace algunos días me quedé sin internet. Se me olvido pagar el recibo y con los apuros decidí esperarme al siguiente día para poner el servi-

cio otra vez. En la noche me cuestione si en verdad era necesario un servi-cio que no está al alcance para la mayoría de los habitantes de este planeta. El continente Africano por ejemplo, según las estadísticas de en “Internet World Stats” una asociación que se usa por las cadenas de hoteles y Facebook entre otros, considera que solamente el 21% de la población tiene acceso al internet. Latinoamérica cuenta con solamente 49.5% de usuarios mientras Estados Unidos con 88%. Bajo estas circunstancias es obvio que si casi la mi-tad de la población que habla español no tiene internet, ¿a poco no puedo sobrevivir sin ella?

El Fin del

MundoLo Dijo LuisLuis catañeda

ESTA SEMANA:

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Paisaje de arte y literatura en MéxicoPáramo7 12-18 Sept 2014Número 751

mundo en años anteriores se han basado en el miedo a quedar-nos sin comida, o sin tierra, pero ese miedo se ha transformado al miedo de quedarnos sin tecnología.

En el libro Guerra Mundial Z de Max Brooks, y The Walking Dead del escritor Rober Kirkman e ilustrador Tony Moore uno de los problemas esenciales es que los zombies están acabando con nuestra tecnología y la única forma de sobrevivir es recuperándo-la. Solo menciono algunos casos porque estamos invadidos por series de televisión sobre el fin del mundo con la misma trama.

El fin del mundo como tema no es nada nuevo. Tengo que mencionar el Apocalipsis de la Biblia donde también, aunque simbólicamente, se habla de los últimos días de nuestra exis-tencia como raza humana. “El Rompimiento”, la separación entre los elegidos y los que se quedan en este mundo es igualmente un tema recurrido. Desde los ochentas con el libro The Stand de Stephen King, hasta mi autor favorito Tom Perrotta The Leftovers (2011) (Los que quedan atrás), se ocupan de investigar lo qué nos hace seres humanos y lo que nos hace dejar de serlo.

Es importante notar que el miedo a quedarnos sin tecnolo-gía tiene un sentido un poco más enigmático: el miedo de ser como las demás sociedades. De esta manera no es el miedo a los zombies o a que termine nuestra tecnología, sino de pertenecer a esas sociedades que no son iguales a la nuestra y que represen-tan nuestra xenofobia.

[email protected]

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Paisaje de arte y literatura en MéxicoPáramoCultura8 12-18 Sept 2014Número 751

El registro más antiguo que tenemos de Polifemo, es el que se encuentra en La Odisea de Homero, obra que se

ubica aproximadamente a finales del siglo VIII a. C. Consta de 24 cantos, que narran las aventuras vividas por Ulises durante su regre-so a Ítaca, cuando concluyó la guerra de Troya. Los cíclopes aparecen en el noveno canto. Po-lifemo es pastor, “nació de la ninfa Toosa, des-pués que esta se unió con Poseidón en honda cueva”, cosa que sabemos por boca del mismo Zeus, desde el primer canto.

La voz narrativa es la del propio Ulises. Cuando Alcínoo –quien lo ayudó a continuar su viaje de regreso a su hogar–, le dice: “Ea, ha-bla y cuéntame sinceramente por dónde an-duviste perdido y a qué regiones llegaste, qué gentes y qué ciudades bien pobladas había en ellas; así como también cuáles hombres eran crueles, salvajes e injustos, y cuáles hospita-larios y temerosos de los dioses”. Él le platica que durante su navegar por el mar llegaron a una isla y desde la playa ven la tierra ocupa-da por los cíclopes, los oyen hablar, escuchan los sonidos propios de su vida diaria; así que Ulises decide ir a investigar qué clase de hom-bres son aquellos.

A partir del verso 105 se encuentra la descripción tanto de la tierra de los gigan-tes como de ellos mismos. Así, nos entera-mos que:

los cíclopes soberbios y sin ley, no plan-tan árboles, ni labran los campos, sino que todo les nace sin semilla y sin arada –trigo, cebada y vides–. No tienen ágoras donde se reúnan para deliberar, ni leyes tampoco, sino que viven en las cumbres de los altos montes, dentro de excavadas cuevas; cada cual impera sobre sus hijos y mujeres y no se entrometen los unos con los otros.

Es Ulises quien detalla el hogar y posesio-nes de uno de estos seres en particular:

En uno de los extremos y casi tocando al mar una excelsa gruta a la cual daban sombra algunos laureles, en ella reposa-

ban muchos hatos de ovejas y de cabras, y en contorno había una alta cerca labra-da con piedras profundamente hundidas, grandes pinos y encinas de elevada copa. Allí moraba un varón gigantesco, solitario, que entendía en apacentar rebaños lejos de los demás hombres, sin tratarse con nadie; y, apartado de todos, ocupaba su ánimo en cosas inicuas. Era un monstruo horrible y no se asemejaba a los hombres que viven de pan, sino a una selvosa cima que entre altos montes se presentase ais-lada de las demás cumbres.

Se encaminó entonces a la cueva del cí-clope, llevando consigo “un pellejo de cabra lleno de negro y dulce vino”, era un licor tan pesado que cuando los hombres lo bebían po-nían 20 partes de agua por una del vino. Ade-más, Ulises mismo reconoce que “ya desde el primer instante se figuró mi ánimo generoso que se nos presentaría un hombre dotado de extraordinaria fuerza, salvaje, e ignorante de la justicia y de las leyes”.

Una vez que Ulises y sus compañeros lle-gan a la isla donde vive el cíclope, entran a su cueva, toman víveres que guarda el gigante y

ahí se quedan a descansar. Cuando el cíclope regresa a su hogar, se da cuenta que ha sido invadido; coloca la piedra que sirve de puer-ta y riñe con los invasores, a raíz de lo cual se come a dos de ellos. Luego, y ya entrados en rivalidad, Ulises le da a beber del fuerte vino que llevaba, para que se embriague, lo enga-ña diciéndole que su nombre es Nadie, calien-ta la punta de una rama de olivo y, cuando el cíclope duerme, se lo encaja en su ojo, provo-cándole –como es fácil imaginar– un daño irreversible.

Es hasta en el verso 403 donde nos ente-ramos del nombre de este cíclope: Polifemo, precisamente porque da alaridos de dolor cuando ha sido herido, razón por la que los otros cíclopes se acercan para saber el motivo de sus gritos; sin embargo, cuando Polifemo les dice que “Nadie” lo ha herido, ellos se reti-ran. Una vez que el gigante quita el peñasco de la puerta de su cueva y se sienta ahí para, cegado, a tientas capturar a sus agresores, és-tos escapan. Cuando Odiseo está ya fuera de peligro le grita y lo hace enojar aún más; en-tonces Polifemo:

arrancó la cumbre de una gran montaña, arrojóla delante de nuestra embarcación de azulada proa, y poco faltó para que no diese en la extremidad del gobernalle. Agitóse el mar por la caída del peñasco y las olas, al refluir desde el ponto, empuja-ron la nave hacia el continente.

Y Odiseo y sus compañeros logran escapar.

Es la obra homérica, el registro más anti-guo, donde se encuentran los conocidos ras-gos tanto del gigante como de su entorno. Para finalizar, no olvidemos que La Odisea ha sido considerada de forma general, un poe-ma épico, “por su lengua, metro, composición, época de creación e, incluso, por el espíritu”. Esta extensa obra, juntamente con La Ilíada, son los cimientos de la épica grecolatina, es decir, toda la literatura occidental es deudora de alguna manera, de los textos homéricos.

Algunos personajes literarios son muy afortunados, son de esos persona-jes que nacieron con buena estrella. Mucha gente los conoce aunque no haya leído las obras donde aparecen. A pesar de que no todas las opinio-nes sobre ellos van encaminadas en sentido positivo, la mayoría de los comentarios demuestran el peso que dentro del arte tienen. Tanto es así que encontramos una larga estela de obras en las que aparecen una y otra vez. Hay una historia de un ser extraordinario cuya edad abarca, no siglos, sino milenios, Polifemo.

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De mi Cuaderno de Apuntesmargarita salazar mendoza

Polifemo: el de las

muchas voces

Page 9: El reto 751

Paisaje de arte y literatura en MéxicoPáramo 912-18 Sept 2014Número 751

En un ambiente de fiesta y alegría, entre más de 20 mil asistentes, se llevó a cabo la “Carrera de la Amistad” en la que estu-vo presente el Presidente Municipal, Enri-que Serrano Escobar, para hacer entrega de los premios a quienes obtuvieron los primeros lugares en esta justa atlética.

Iniciara a las 6 pm con la presentación de Tony Meléndez Jr., Sonora Xtrema, Da-miana Villa, Ensamble de Voces Los Reyes del Mariachi, Lluvia Vega, Fiesta Mexica-na del Viva México, Mariachi Canto a mi Tierra, Gerardo Fierro, Ensamble de Ma-riachi, Gerardo Salas.

El programa de la noche del 15 de Sep-tiembre concluirá con el concierto del Conjunto Primavera.

46a “Carrerade la Amistad”

Buscan convertir la Juárez en corredor comercial

Talentos chihuahuenses en la Fiesta Mexicana la noche del Grito de independencia

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El tema central de este año será “La arquitectura en el tiempo y el pai-

saje del Mayab”, que de alguna manera también estuvo presente en los dos encuentros anterio-res: el primero, en 2012, versó sobre el tiempo, mientras el segundo, en 2013, se ocupó del con-cepto del paisaje.

La programación de este festival es impre-sionante: más de 300 actividades que cubren prácticamente todas las expresiones artísticas y académicas en torno a la milenaria cultura maya. El país invitado será Guatemala, y el esta-do invitado, Campeche.

Se desarrollarán foros de reflexión sobre la arquitectura maya y sus vinculaciones con la cul-tura contemporánea y se presentarán grupos de músicas tanto nacionales como internacionales. También se ofrecerán funciones de danza, pláticas acerca de muy diversos temas, presentaciones de libros, escenificaciones teatrales y habrá espectá-culos para la divulgación de tradiciones popula-res, entre otros muchos encuentros.

Se trata, entonces, de diversos ejes de este gran festival de la cultura, el más importante del país después del Cervantino, si bien este último es fundamentalmente artístico más que acadé-mico o de reflexión y de divulgación de la cultu-ra popular.

El Festival Internacional de la Cultura Maya tendrá, además, un conjunto de homenajes a destacados representantes de las letras mexica-nas y latinoamericanas, ya desaparecidos, como Octavio Paz, Carlos Fuentes, José Emilio Pacheco, Gabriel García Márquez y Emmanuel Carballo. El escritor y periodista yucateco Leopoldo Peniche Vallado estará entre los homenajeados.

Asimismo, se celebrará un Coloquio de Mujeres en el cual se abordará el tema de la

estética de los mayas.

Tan amplio y prometedor festival contará también con un atractivo y vasto programa diri-gido a los niños. Y presentará grupos de recono-cida calidad artística prácticamente en todas las plazas públicas de Mérida. Además, habrá activi-dades en Progreso y en Valladolid e Izamal, estas dos últimas reconocidas como ciudades mágicas.

Con la presentación oficial del Festival que se hizo hace unos días se nos dio un magnífico antici-po de la variedad y alto nivel artístico y académico de las diversas actividades que se realizarán del 17 al 26 de octubre. En efecto, tanto en el salón Jaime Torres Bodet del Museo de Antropología, como en el Teatro José Peón Contreras de la capital yucate-ca, se presentaron grupos locales con indumenta-ria, instrumentos y música mayas tradicionales, así como artistas de talla internacional, entre ellos el pianista y compositor Pedro Herrera, direc-tor de la Orquesta Típica Yukalpetén, y el flautista Álvaro Vega Díaz, director de Música de la Escuela Superior de Artes de Yucatán. Las participaciones de estos artistas constituyeron un extraordinario adelanto de la calidad de lo que veremos a lo largo de los diez días que durará el festival.

Desde luego, tiene un gran mérito quien lo fundó y lo preside, el maestro Jorge Esma Bazán, un promotor cultural fuera de serie y ameritado creador de instituciones culturales, que cuenta con el decisivo respaldo del gobernador de Yuca-tán, Rolando Zapata Bello, y el apoyo valioso de la Secretaría de la Cultura y las Artes del estado, a cargo de Roger Metri, así como del Consejo Nacio-nal para la Cultura y las Artes.

Nos vemos, pues, en Yucatán, para atestiguar y disfrutar una vez más las amplias actividades de este magno festival.

Ahora que se están realizando diferentes remodelaciones a lo largo de la Avenida Juárez, comerciantes del sector se coor-dinan con el apoyo de las Direcciones de Limpia, Alumbrado, Seguridad Pública, entre otras, para poder mejorar la imagen y condiciones de las calles que desembo-can en esta.

Llegó la hora del festival de festivales y hay que celebrarlo con fan-farrias., me refiero al Festival Internacional de la Cultura Maya,

cuya tercera edición acaba de anunciarse tanto en la capital de la re-pública como en la ciudad de Mérida, Yucatán.

Yucatán, lleno de cultura

La Manzana FLechaDamartha chapa

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No va a ser un curso fácil para nadie, y menos en la actual situación polí-tica. Negros nubarrones cubren el

horizonte, y no solo el electoral. Aunque las municipales y regionales serán en mayo próximo, el otoño se prevé caliente social-mente hablando, y el invierno más que convulso. O sea que antes que la primavera florezca de nuevo vamos a vivir una etapa política y partidaria de alto voltaje, de una intensidad inusual, y eso que de intensi-dades políticas vamos bien servidos en los últimos años. La confrontación de la pri-mavera será, además, el prólogo de las legis-lativas de noviembre; así que el año 2015 se nos anuncia recargado de emociones y tensiones que pueden llegar a afectar seria-mente la salud del ciudadano.

La economía no remonta el vuelo por mucho que Mariano Rajoy hable de que ésta tiene ya raíces vigorosas [sic]. Serán vigorosas, portentosas, poderosas o mega galácticas, pero no se ven por ningún sitio. Es cierto que las cifras macro están mejo-rando, pero no lo es menos que más allá de los Pirineos la recuperación económica está entre tibia y fría (Alemania, Francia e Ita-lia están como están) y el Banco Central Europeo acaba de dejar el interés finan-ciero para la banca en el 0.05. ¿Cómo de espeso está el panorama para que Draghi, desoyendo a Merkel, haya bajado los tipos al mínimo histórico? En las tierras que go-bierna [es una forma de decirlo] Rajoy, el desempleo no disminuye. Los pocos pues-tos de trabajo que se crean son estacionales, precarios y mal pagados. El Partido Popu-lar ha conseguido algo inimaginable hace pocos años: que se pueda ser trabajador a jornada completa, y estar por debajo de la línea de pobreza. Peor es no tener trabajo o tenerlo a tiempo parcial, dicen los de Rajoy [y los grandes empresarios, junto a los ban-queros], y tienen razón. Razón cargada, eso sí, de una sobredosis de cinismo superlativo. Esos trabajadores precarios y mal pagados deberían, en esa lógica, agradecer a sus em-pleadores que no usen el látigo contra ellos.

España, la de las raíces vigorosas, va estu-pendamente. Eso dicen desde el Gobierno y la mayoría de la gente se pregunta de qué país hablan.

La política partidaria está retorcida, gripada, obsoleta. Y ello ocurre porque el modelo de la Transición colapsó. Ya no sirve. Hay que reformarlo a fondo, si no queremos que el sistema se venga abajo; si no queremos que el actual escenario de partidos se abra a los extremismos de de-recha y a los populismos de distinto signo, así como a los diversos particularismos que pueden medrar con facilidad en un escena-rio como el actual.

La Constitución de 1978 se quedó pe-queña y la sociedad actual no cabe dentro de ella. Hay que cambiarla, actualizarla, sintonizarla con una realidad glocal que no

es ni parecida a la de finales de los años se-tenta del siglo pasado. Todo el mundo lo sabe, todos sabemos que hay que hacerlo, pero nadie tiene la suficiente claridad de ideas ni el necesario liderazgo como para afrontar ese reto. No hay más que tacticis-mo, cortoplacismo, cálculos mezquinos y la disposición de todos a saltarse un ojo si en el envite deja ciego al adversario.

La cuestión catalana es la evidencia de la obsolescencia del modelo que surgió en los años del retorno a la democracia. Los nacionalistas moderados de Convergència i Unió están a las puertas del divorcio entre partidos, y además han perdido la dirección de un proceso que auspiciaron porque des-de Madrid, prácticamente, se les empujó a hacerlo y porque no tuvieron el suficiente realismo estratégico como para desmar-carse de las opciones netamente soberanis-tas o independentistas. Estos últimos han emprendido un camino hacia la secesión exprés que no se pregunta por el día des-pués y que atiende más a sentimientos que a cálculos. Y es que España se concibe des-de el centro de una forma que ni siquiera es mínimamente amable con las periferias. España es muy plural, y lo es por razones que vienen de siglos atrás. Negarlo, como hace el nacionalismo español, no conduce sino a la confrontación con los nacionalis-mos periféricos. Y es que los nacionalistas españoles, por negar que no quede: hasta niegan que ellos sean nacionalistas.

Los partidos políticos sistémicos están entre deslegitimados por la corrupción y por su política anti social [el caso del PP] o desaparecidos en combate [poco comba-te] desangrados en sus luchas internas [el caso del PSOE]. La coalición liderada por el Partido Comunista, Izquierda Unida, sufre en sus carnes la aparición de un nue-

vo grupo, Podemos, cuya cotización sube y sube en las encuestas, que amenaza con poner patas arriba el sistema. Es la versión hispana de aquel que se vayan todos argen-tino, aunque como allá no se sepa quiénes ni cómo los van a substituir. Además, para completar el marco, están los nacionalis-tas periféricos [en País Vasco, Galicia, País Valenciano, Baleares, Canarias, Aragón] y otras nuevas agrupaciones políticas de ca-rácter local o regional de izquierda [Guan-yem Barcelona, por ejemplo] o de derecha [UPyD, Ciudadanos]. Se augura un esce-nario bien complicado a la hora de generar mayorías de gobierno.

¿Y qué se le ha ocurrido proponer al PP en este escenario? Pues cambiar la ley elec-toral; es decir, cambiar las reglas del partido cuando estamos al final de la segunda parte. Y eso sin contar con nadie, valiéndose de la mayoría absoluta que tienen en el Parla-mento de Madrid. Para evitar que coalicio-nes postelectorales los desalojen de las alcal-días allá donde pierdan la mayoría absoluta que ahora tienen [serían centenares, según las encuestas], quieren que sea alcalde el ca-beza de la lista más votada. Una villanía, un auténtico golpe al Estado, una devaluación sin precedentes de la calidad de la demo-cracia española, que no pretende más que evitar el peor efecto del descalabro electoral que las encuestas les anuncian: la pérdida del poder local.

Es difícil saber si se atreverán, aunque como juegan a la desesperada es posible que lo hagan. Más allá de todo lo dicho, la decisión de cambiar las reglas del juego sería un pésimo mensaje a la ciudadanía: los políticos [así, en general, como se ha-bla despectivamente en la calle] no tie-nen otro objetivo que perpetuarse en sus cargos. Y eso mientras millones de ciu-dadanos buscan trabajo sin encontrarlo y sienten como el Estado social tiembla bajo sus pies. Un escenario que ni pintado para que arraigue el discurso populista; ese sí, con raíces vigorosas.

El verano entra en su última fase, se han acabado las vacaciones

para los que tienen trabajo y los muchachos vuelven a los centros

de enseñanza: ha comenzado el nuevo curso.

Comienza el nuevo cursocon la amenaza de Golpe al Estado democrático

joan de aLcazaR

Page 11: El reto 751

Un caso en cuestión es el de la crisis fi-nanciera de 2008. Después de seis años, las condiciones de esa crisis no han sido

superadas. En Europa la fragilidad económica y social sigue siendo el rasgo predominante: la producción apenas crece, el desempleo está aún en niveles muy elevados, la deflación está en el horizonte. La desigualdad es tema de de-bate abierto. Los países donde la crisis se cebó con mayor fuerza, como en Grecia o Portu-gal, el deterioro social persiste. España, Italia y Francia están aún en la cuerda floja.

La crisis exhibió rotundamente las profun-das fallas que pueden tener los mercados y, tam-bién, las políticas públicas. Las intervenciones de los gobiernos, especialmente por la vía de los bancos centrales y de la fuerte contracción fis-cal, parecen apenas contener los efectos más os-tensibles al concentrarse en prevenir el colapso de los sistemas financieros. Pero distan mucho de crear condiciones para recomponer la acti-vidad productiva, la recuperación de los ingre-sos de las familias y el proceso de acumulación.

Las pautas de la gestión económica se ha-bían impuesto en el marco de los que denomi-nó como la gran moderación. Esta era la con-vicción convertida en ortodoxia en la década de 1980, que sostenía que mantener la infla-ción en niveles bajos garantizaba menores fluc-tuaciones macroeconómicas y ponía las bases del crecimiento rápido y sostenible. Tal orto-doxia quedó molida. Dio lugar, en cambio, a un fuerte proceso de endeudamiento, con altos grados de especulación que desataron la crisis.

En México hubo también rasgos de este tipo, pero aquí la expresión más contundente fue y sigue siendo el estancamiento produc-tivo, en un entorno muy desigual entre los sectores económicos, las regiones y la misma sociedad. Claro que aquí se genera riqueza en abundancia; también marginación y diferen-cias crecientes. El criterio esencial de la política monetaria sigue siendo la estabilidad de pre-cios que, por cierto, tiende a desbordarse.

La estabilidad de los precios de aquella gran moderación provocó con el tiempo una mayor rentabilidad asociada con riesgos cada vez más grandes, en una manifestación del carácter de las decisiones que toman los agentes en los mercados preponderantes. Con ello se quebró también la supuesta racionalidad que sustenta-ba las teorías de la eficiencia de los mercados.

Los bancos centrales generaron una enor-me liquidez, con tasas de interés bajas. Los ban-cos comerciales decidían cómo usarla. Ese fue el caso más notorio de las hipotecas chatarra; no debe olvidarse que aquí también quebraron las empresas constructoras. Esto estuvo marca-do por el dinámico proceso de innovaciones financieras, cuyos principios crearon teorías, se plasmaron en las políticas monetarias y fiscales y fueron ensalzadas por analistas y políticos en todas partes.

La Reserva Federal atajó la crisis con enor-mes inyecciones de liquidez, las tasas de interés han sido prácticamente de cero. Y siguieron siendo los bancos los que decidían sobre su uso. Esto incluso en un entorno de nuevas regulaciones acerca de los re-querimientos de capital y de las condiciones para preve-nir los efectos de riesgo sistémico que represen-taban las instituciones más grandes. La eco-nomía no se recu-pera y el desem-pleo es resisten-te. La economía mexicana es dependiente de esa crisis.

Los cimientospág. 11

12-18 Sept 2014Número 751

CoNSejo editorialVictoria Caraveo Carlos Ramírez

Enrique CortazarJorge LópezPedro Siller

direCtor GeNeralSamuel Schmidt

editora GeNeralRubi Rivera

editora CUltUraHilda Sotelo

diSeño Peñaloza

ColaboradoreS Kamel Athié

Martha Bátiz ZukLuis CastañedaMartha ChapaSandro Cohen

Pedro EcheverríaGuillermo Fárber

El FisgónMarco Antonio Flota

HelgueraLuis Felipe Fernández

Antonio Hermosa (Sevilla)

Ricardo LeónJorge López

Carlos RamírezRubi Rivera

Margarita SalazarKive SchmidtRosie Schmidt

Pedro SillerCarlos Spector

Héctor Subirats (Madrid)

Ricardo Vigueras

Todo el mundo ha estado insistiendo en que la reforma fiscal de Videgaray está colapsando

la economía. Mientras todo mundo se queja que no hay dinero, la captación fiscal se derrumba y el go-bierno sigue anunciando obras espectaculares.

Con este tipo de política no queda de otra más que pedir dinero prestado, solamente que los montos son espectaculares y ya nos acercamos a deber casi la mitad del PIB.

La fórmula del crecimiento sano consiste en gas-tar lo que se tiene, si se pide prestado es para pagar con lo que produzca la inversión de la deuda, pero lle-vamos mucho tiempo pidiendo prestado para pagar lo que debemos. Ahora vamos a pedir prestado para tapar el agujero fiscal producto de una mala política.

Se abre un hoyo para tapar otro hoyo, solo que los nuevos hoyos son cada vez más profundos y mientras los mexicanos vivimos cada día peor.

El presidente Peña se está embarcando en una política que le cambiará la cara al país. Se ini-

cian grandes proyectos de infraestructura que traerán finalmente la modernidad, con ella, empleos, y mejor calidad de vida para los mexicanos.

Peña recibió un país con una economía complicada, con escaso crecimiento, pero con candados por todos lados, hasta que no pudo crecer más, lo que impacto las finanzas públicas.

La economía necesita un serio impulso del gobierno para despegar y para eso, no hay nada mejor que un plan agresivo de construcción de infraestructura, este crea empleo y estimula a la inversión privada, generán-dose una dinámica importante.

Si los impuestos están caídos porque la economía no crece, hay que pedir prestado, ya veremos como el estímulo económico generará una inercia que no solo nos sacará del hoyo, sino que nos elevará de nuevo a las grandes ligas económicas en el mundo.Nadie dice que se tiene que llegar a la violencia. No necesitamos que los ejidatarios desfilen enarbolando machetes, tam-poco que haya enfrentamientos callejeros, necesitamos una sociedad que hable armónicamente con su gobi-erno. Así todos saldremos ganando.

Más deuda para tapar el agujero fiscal de la reforma Videgaray

Semanario de Política y CulturaEjemplar GratuitoOficinas: Av. 16 de Septiembre No. 455 Oriente, despacho 307 (zona Centro),Ciudad Juárez, Chih., México.Teléfono y fax 612-7206e-mail: [email protected] autores son responsables del contenido de sus artículos.Registro en trámite.

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En Contra

a Favor

pabLo saLazaR

miGueLoRtiGosa

León bendesky

Las reformas de todo tipo tienden a imponerse sobre unos cimientos ya existentes. Como pasa con una edificación, su estructura, el dise-ño y, finalmente, su funcionamien-to, dependen de dichos cimientos. Así que de alguna manera surgen y se aplican en relación con un conjunto de elementos que fijan sus términos, sus límites y posibi-lidades.

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¿Está seguro de lo que ve? Me suena Más claro ni...

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