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1492: la Invasión

Encartado 12 de Octubre

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  • 1492: la Invasin

  • 2Historia breve de un 12 de octubre

    El da de la invasin. Ese da empez el saqueo, la muerte y la des-truccin de toda una cultura. El da que los de este lado, desnudos, sin conocer el poder del arcabuz, el caballo y el dinero, entraron a la historia por la puerta grande de la civilizacin, sujetos de la mano de los reyes catlicos y el cristianismo representados por empren-dedores, banqueros y curas venidos del otro lado a descubrirnos. Y, asombrados, descubrieron que no tenamos alma ni dioses verda-deros; que, en realidad, ni siquiera hombres ramos. Pero igual se quedaron. Intercambiamos oro y maz por sfilis y ratas. Hasta que por fin empezamos a tener un alma prestada y nos convertimos en dignos sbditos de su majestad. Ese da fuimos despojados de nues-tra historia y nuestros dioses; nuestra identidad, en suma, fue barrida por un proceso de conquista y colonizacin que alcanz el ltimo rincn de nuestra tierra y de nuestra memoria. Pero el mundo de la academia jams advirti la tragedia.

    Y as suceden cosas como que a uno de los procesos ms degradan-tes en la historia de la humanidad nos ensearon a llamarlo descubri-miento de Amrica, y de nios celebrbamos el da de la raza, suerte de macabro festn institucional en el que blancos espaoles, crimi-nales, ladrones y estafadores danzaban de la mano con aceitunados indgenas torpes, ignorantes, majaderos e ingenuos. Cuando tamao insulto historiogrfico se torn demasiado grueso como para tragar-lo y de la Europa de posguerra vino la moda de sustituir el trmino de raza por el de etnia para lavar la cara a una academia que se haba quedado muy atrs en el camino del progreso, se comenz a hablar del encuentro entre dos mundos. La misma infamia. Solo que, disfra-zada de infame cursilera, se tornaba doblemente infame.

    Por ltimo, y solo en el marco poltico, ideolgico y an geopoltico, de la Revolucin Bolivariana es que se le dar a tan nefasto asunto el nombre apropiado: invasin, sin ms, con toda la carga criminal que ello supone, sin disimular su sentido trgico (en el riguroso sentido griego original del trmino) y en virtud del cual lo nico susceptible de ser conmemorado es la resistencia indgena. Ya deca Joyce que el lenguaje es conciencia.

    Cuando los espaoles pisaron por vez primera tierra americana, se hallaron frente a civilizaciones cuyo autntico valor no supieron apreciar. No era el oro lo ms valioso que aquellos pueblos posean, sino su arte, su ciencia, su literatura, su religin y sus ciudades; todo un complejo cultural que haba tardado siglos en desarrollarse y ma-durar. Pero no era esto algo que pudiese llamar la atencin a una horda de curas y saqueadores bien pertrechados decididos a impo-ner su desmedida ambicin y religiosidad intolerante por encima de cualquier otra consideracin. Sobre las ruinas de las ciudades y las culturas indgenas se echaron los cimientos de las construcciones espaolas y se impuso el modo de pensar de los de Castilla.

    Sin duda, no faltar quien aore seguir hablando del duro descubri-miento, o del dulzn y cursi encuentro entre dos mundos, y de cmo los europeos nos trajeron la cultura, aunque, para la poca, el teatro azteca fuese tcnicamente superior al del siglo de oro espaol. Pero la historia sigue all. Los muertos que la invasin, conquista y coloni-zacin dejaron tras de s, gozan de buena salud.

    Oscar Len

    Tito Salas. Combate entre conquistadores e indgenas. Coleccin de la Casa Natal del Libertador.

  • 31492: la Invasin

    La ciencia de la pocaAntes de los viajes colombinos, los hombres de ciencia ms ilustres suponan que la tierra era plana. Inglaterra constitua el lmite oc-cidental y los territorios asiticos el extremo oriental. Los mapas as concebidos descono-can por completo la existencia de Amrica y Australia. De frica solo se conoca con precisin la costa mediterrnea. Se supona que a partir de la lnea ecuatorial la tempe-ratura creca gradualmente, y que cuando un hombre blanco rebasaba dicha lnea se volva negro. En un mundo as concebido no exista el polo sur. A medida que se avanzaba en esa direccin el calor se haca intolerable. Para los hombres de ciencia, como para los rudos marinos anteriores al siglo XVI, las regiones australes eran morada del demonio y dems espritus malignos.La tierra se extiende a enorme distancia

    hacia el Oriente. Los europeos conocemos nicamente su parte occidental. Pero debe tener, sin duda, una costa oriental. Por con-siguiente, si tan grande es la extensin hacia oriente del continente asitico, y la tierra tan

    pequea y redonda, la costa oriental de Asia no debe hallarse muy distante de Europa. Y, por tanto, navegando hacia el oeste, a tra-vs del ocano Atlntico, llegar, necesaria-mente, a dicha costa. Esto deca Coln. En un clculo completamente errneo, estim esta distancia en unos 4.600 kilmetros. Ni siquiera pasaba por su mente que entre Eu-ropa y la ignota costa asitica la distancia era mucho mayor y se interpona el vasto conti-nente que luego se llamara Amrica.

    Cuando el proyecto expedicionario de Co-ln fue presentado a los reyes de Espaa di-versas fueron la objeciones en virtud de la cuales los cientficos consideraron que la em-presa ofreca dificultades insuperables. Aun admitiendo que pudiera ser atravesada la zona trrida y su calor infernal, la circunfe-rencia de la tierra deba ser tan grande que se tardara lo menos tres aos en recorrerla; la tripulacin perecera de hambre y sed dada la imposibilidad de llevar provisiones sufi-cientes para un perodo tan largo. Aunque la tierra fuera redonda, solo sera habitable en

    el hemisferio norte, protegido por el cielo. El otro hemisferio sera un desierto de agua, un abismo sin fondo, un infierno. Adems, an suponiendo que por el camino indicado por Coln lograse un buque llegar a la India, ja-ms podra regresar; la redondez del globo presentara ante l una especie de montaa a la que no podra subir, ni con la ayuda de los vientos ms favorables.

    Fueron los marinos portugueses los primeros en abrirse paso hacia el sur, remontando las costas occidentales de frica. Cuando Bartolom Daz lleg, por casualidad, al cabo de Buena Esperanza tuvo que afrontar los temores imperantes de la poca. Los sabios aseguraban que los arrecifes del cabo Bojador haban sido colocados al sur de Marruecos para impedir que los hombres avanzasen hacia las regiones australes; all seran aniquilados por los rayos del sol convertidos en fuego lquido. Pero Daz fue y volvi, y Coln se hallaba entre la muchedumbre que presenciaba su retorno triunfal a Lisboa.

    Oscar Len

    Annimo. Planisferio de Cantino, Lisboa, 1502, disponible en http://upload.wikimedia.org

  • Rendicin de Granada (02/01/1492)En el siglo VIII, la derrota de los visigodos y la posterior ocupacin de la pennsula ibrica por parte del Califato Omeya gener una reconfi-guracin del territorio que hizo posible el establecimiento de un nuevo sistema sometido bajo las rdenes de la dinasta rabe encabezada por el califa Al-Walid I, artfice de la expansin del Imperio islmico. A partir de entonces, los cristianos emprendieron una incansable lucha por la reconquista de la regin; esta pugna territorial se extendi hasta

    finales del siglo XV, etapa crucial en la historia del Imperio espaol ya que 1492 fue un ao decisivo en el proceso de consolidacin del Estado moderno comenzando por la unificacin de la religin. El 6 de enero, tras una larga guerra de desgaste, el reino de Granada cedi frente a las presiones del rey Fernando II y capitul ante los reyes cat-licos, luego de entregar las llaves de la ciudad (2 de enero de 1492). Este evento signific el fin de la llamada reconquista espaola.

    Expulsin de los judos de Espaa (31/03/1492)A finales del siglo XV, la consolidacin del Estado moderno espaol exiga la unifica-cin de la religin bajo la fe catlica pues los siervos y sbditos deban profesar la misma doctrina que su venerado monarca, en tal sentido, a partir de la asociacin de los rei-nos de Castilla y Aragn, la poblacin juda comenz a resultar un grupo incmodo para la empresa evangelizadora, por tanto se dio inicio a una campaa de segregacin que lue-go se transform en una frrea persecucin, hasta que el Tribunal de la Santa Inquisicin consider conveniente la expulsin definitiva de las familias judas, siguiendo el ejemplo de las naciones vecinas de Europa. El inquisidor Toms de Torquemada dise un proyecto de ley para justificar dicho destierro argumen-tado que la medida era para contrarrestar delitos como la usura en la venta de diversos productos y comestibles. Los reyes catlicos aprobaron la propuesta y el 31 de marzo de 1492 se firm el decreto de expulsin de los judos de todo el territorio espaol.

    Neruska Rojas

    Cronologa (1453 1506)1453 Luego de ms de un mes de sitio cae la ciudad de Constantinopla, capital de Imperio bizantino, en manos del Imperio otomano actual Turqua bajo el regente Mehmed II. Esto cierra las puertas del comercio de Occidente con Oriente a travs del Mediterrneo. Los otomanos se convierten en el ene-migo comn de Europa.

    Llega a su fin la llamada guerra de los Cien Aos (1337-1453). Conflicto armado entre los reinos de Inglaterra y Francia por el control de las enormes posesiones de los reyes ingleses en territorio francs desde 1154.

    1458 El reino portugus bajo la tutela de Alfonso V inicia la conquista del norte de frica con Alcazarseguir (1458), Arzila (1471) actual Marruecos luego de haber conquistado varias islas atlnticas, Madeira (1424) y las Azores (1427).

    1469 Se realiza el matrimonio entre Isabel de Castilla y Fernando de Aragn, ambos pertenecan a las familias reinantes de Castilla y Aragn, lo que sell la unidad dinstica entre ambas monarquas.

    1471 La monarqua portugue-sa, en su continua expansin hacia el noroccidente africano, descubre la costa septentrional del golfo de Guinea, empresa a cargo de los navegantes Joao de Santarm y Pedro Escobar. Llegaron a las islas de Santo Tom (1571) y Prncipe (1572).

    1474 Tras la muerte de Enrique IV, regente de Castilla, estalla una guerra por la sucesin al trono castellano entre Isabel de Castilla apoyada por la corona de Aragn, y Juana la Beltraneja apoyada por Portugal.

    1476 Ambas facciones se enfrentan en la importante batalla de Toro, de la cual sale victorioso el bando de Isabel de Castilla, y deja en muy mal estado los pertrechos del bando de Juana la Beltraneja.

    Francisco Pradilla, La Rendicin de Granada, Palacio del Senado, Madrid, 1882.disponible en: http://www.culturandalucia.com

    Emilio Sala, La expulsin de los Judos, 1889. Disponible en: http://deespana.blogspot.com

    Retrato de Alejandro VI, Autor desconocido, disponible en: commons.wikimedia.org

  • La vieja costumbre de repartirse el mundo (Tratado de Tordesillas)Luego de meses de negociaciones, el 7 de junio de 1494 los reinos de Espaa y Portugal lograron establecer en Tordesillas un acuerdo para fijar los lmites sobre los dominios ultramarinos, para garantizarse la posesin de las tierras y las aguas que hubiera a uno y otro lado de la lnea imaginara fijada. Los hallazgos de Coln en 1492 despertaron la ambicin de los reinos, quienes vean en los descubrimientos la solu-cin a sus problemas econmicos.

    Se dice que Espaa, con la intencin de garantizar la paz con Juan II de Portugal, otorg la cortesa de modificar los lmites planteados en el tratado Inter Caetera y propuso el trazado de una lnea a 370 leguas de las islas Azores que dio ms extensin territorial a los portugueses. El hoy famoso tratado de Tordesillas estableci literalmente la repar-ticin del mundo en dos grandes pedazos, hecho que caus alarma en el rey Carlos VIII de Francia quien exclam: antes de aceptar el reparto de Tordesillas, quiero que me muestren en qu clusula del testamento de Adn se estipula que el mundo es de los espaoles y de los portugueses.

    El pequeo donativo de Alejandro VI (bulas alejandrinas)La Inter Caetera, tambin conocida como bula de donacin, es un documento por medio del cual el papa Alejandro VI otorg a Isabel de Castilla y Fernando de Aragn la posesin de todas las tierras e islas que en el avance de su labor exploratoria realizaran en Occidente. Esta bula fue emanada el 25 de septiembre de 1493 desde Roma y estableci que Espaa no podra tomar posesin de los territorios que ya se en-cuentren ocupados por otros reinos catlicos o que hayan sido cedidas previamente por la Iglesia; sin embargo, tena a su disposicin todo lo que hallara en su camino hacia las Indias. Este es un documento muy particular que expresa el principio jurdico medieval que afirmaba la jurisdiccin de las islas a San Pedro y a sus sucesores: los Papas; de all que fueran ellos quienes autorizaran la cesin de dichos territorios.

    Expendio de seres humanos (factoras portuguesas)Con las exploraciones realizadas por los navos portugueses por el borde de la costa de frica durante el siglo XV, paulatinamente se fue-ron estableciendo las llamadas factoras, para dinamizar el comercio de algunos productos provenientes de ese continente. El oro y algu-nas especias fueron los primeros productos que comerci la cadena de factoras portuguesas, pero luego se dedic al negocio de la esclavitud, cazando seres humanos, para llevarlos primero a las islas Canarias y Azores para que trabajaran en las plantaciones de caa de azcar. No obstante, fue en Amrica donde este comercio de humanos se hizo lucrativo. Un triste ndice ilustra parte de lo que implic la entrada en operacin de estas factoras, se estima que en solo 50 aos (entre 1550 y 1600) llegaron a vender al menos 15.000 esclavos africanos.

    Las ms clebres de las factoras fueron la de Sao Jorge Da Mina y Casa Da Mina; esta ltima se convirti hacia 1506 en la Casa da India, porque hacia ese territorio estaba enfocada su actividad econmica.

    Andrs Burgos

    1479 La guerra de sucesin castellana llega a su fin con la firma del tratado de Alcovas, en el que se reconoce a Isabel como legtima reina de la corona de Castilla y por otro lado se les acepta completa soberana de los espacios ultramarinos anexados por los portugueses. Este tratado sera ratificado por el papa Sixto IV con la bula Aeterni Regis (1481).

    1482 Se inicia la guerra por la reconquista de Granada, territorio ocupado por los musulmanes del reino Nazar a cargo del regente Mu-hammad XII Boabdil.

    1485 Su propuesta es rechazada por el rey Juan II de Portugal, lue-go de haber sido revisada por su junta de expertos Junta ds Matemti-cos que desestimaron la viabilidad de la empresa.

    1486 A finales de ao, Coln llega al reino de Castilla y consigue ser recibido por la reina Isabel I, su esposo Fernando I y su corte para presentarle el proyecto.

    1491 Luego de cruentas batallas en el sur, de las conquistas de Ronda (1485) y Mlaga (1486), comienza el sitio final de la ciudad de Granada, ltimo bastin militar del reino Nazar.

    1492 La corona de Castilla accede a la propuesta de Coln, se le con-cede, a travs de las capitulaciones de Santa Fe, poderes especiales antes de su viaje y se le insta a zarpar en la brevedad posible.

    - En este mismo ao finaliza el sitio de la ciudad de Granada con su reconquista para el reino de Castilla y la expulsin de los musulmanes de estos territorios.

    - Rodrigo de Borgia, cardenal espaol, es elegido como Papa, luego de la muerte de su predecesor Inocencio VIII. Asume con el nombre de Alejandro VI.

    - Cristbal Coln zarpa del puerto de Palos de la Frontera el 6 de agosto con 120 hombres y tres naves, pasando por las islas Canarias conquis-tadas en 1483 donde estuvo hasta el 6 de septiembre, llegando a la isla de Guanahan a la que bautiza San Salvador (isla Watling). Adems, realiza otros hallazgos en el Caribe: Santa Mara de la Concepcin (islas Caicos), Isabela (Soometo), Juana (Cuba), Tortuga y La Espaola (Quis-queya) en donde funda el primer establecimiento espaol en el conti-nente: el fuerte Natividad.

    Retrato de Alejandro VI, Autor desconocido, disponible en: commons.wikimedia.org

  • La empresa de ColnDesde la antigedad, reputados matemticos y astrnomos haban planteado la hiptesis segn la cual la tierra era redonda. Eratste-nes incluso haba medido la esfera. Pero nadie se haba propuesto circunnavegar el mundo. Los avances tcnicos que permitieron pasar de la navegacin de cabotaje a la transoce-nica abrieron las puertas de la historia a una dimensin mundial.

    En 1295, Marco Polo regresa de su viaje al Extremo Oriente. Con ello dio a conocer a los europeos la realidad diversa y distinta de antiguas y brillantes civilizaciones orientales. Por primera vez los europeos supieron de la existencia de pases como Japn y Madagas-car. Dos siglos ms tarde, Cristbal Coln, que haba estudiado acuciosamente los trabajos de Marco Polo, iniciaba un viaje de navegacin transocenica que, en 1492, lo colocara, sin sa-berlo, en el continente americano. Marco Polo muri sin saber que la tierra era redonda. Co-ln, que crey haber llegado a la India, nunca

    imagin que con lo que en realidad se tropez fue el hasta entonces desconocido continente que se interpona entre Europa y Asia.

    El 3 de agosto de 1492, partiendo de puerto de Palos, se hizo a la mar la expedicin colom-bina. Auspiciado por la reina Isabel, Coln lo-gr habilitar tres pequeas embarcaciones y 105 hombres. Tena 41 aos de edad. Las tres carabelas se dieron a cruzar el Atlntico. Toda la travesa estuvo marcada por el terror de los tripulantes, que atribuan al demonio cual-quier fenmeno no explicado. En Canarias, la erupcin del Teide fue el primer presagio f-nebre. Horas ms tarde la tripulacin se halla-ba lanzada a lo desconocido.

    La direccin de los vientos atlnticos hizo pensar a los hombres de Coln que jams regresaran a Espaa. Cundieron la desespe-racin y el pnico. Los hombres esperaban el castigo de una muerte terrible, desatada por la clera del cielo. La brjula enloqueci. La

    vista de aves extraas y la incertidumbre de das y das sin atisbar tierra firme aumenta-ba la aprensin de la tripulacin. Cuando los buques tropezaron con una inmensa masa de algas flotantes, lugar que Coln bautiz como

    mar de los sargazos, los marineros pensaron que ese deba ser el principio de un inmenso pantano donde terminaba el mundo y comen-zaba la morada de los demonios. De los mur-mullos la tripulacin pas al motn abierto y Coln estuvo a punto de ser arrojado al mar.

    Segn los clculos iniciales de Coln, lue-go de 700 leguas de travesa las naves deban detenerse; a simple vista aparecera tierra fir-me. Sin embargo, haba recorrido 908 leguas, y todo a su alrededor era mar abierto. Segn sus nuevos clculos deban estar entonces a la altura de las costas de Japn. A su entender, haban remontado demasiado hacia el norte. En consecuencia, desvi rumbo al sur. De ha-ber recorrido 240 leguas ms, Coln habra descubierto la costa de Florida. Pero la alte-racin de la ruta lo hizo poner proa hacia las Bahamas, que distaban 168 leguas. Acaso esto salv su vida, amenazada por una tripulacin cada vez ms desesperada. El 11 de octubre se hall un trozo de madera labrada y la rama desgajada de un rbol, seal inequvoca de la proximidad de la costa.

    En la noche Coln observ fuego encendido. El da 12 de octubre, a la dos de la madrugada, Rodrigo de Triana, marinero de La Pinta, atis-b la costa. Al amanecer, a una distancia de seis millas, emerga de las aguas una bella isla, exuberante en vegetacin, resplandeciente a la luz del sol. Se trataba de Guanahan, una de las islas Bahamas. As, despus de largos y agotadores das de navegacin, Coln crey haber convertido su sueo en realidad. Pero, el experto navegante solo haba recorrido ape-nas una cuarta parte del camino entre Europa y el Lejano Oriente. Su proyecto se basaba en un clculo errneo del tamao de la Tierra, a la que supona mucho ms pequea de lo que efectivamente es.

    Oscar Leon

    V. Turgis, Cristobal Colon ante los reyes catlicos en la corte de Barcelona. Siglo XIX. Disponible en: http://aphu.org.uy

  • Las carabelas y sus tripulantesEn el primer viaje a las Indias de 1492, Cristbal Coln realiz la tra-vesa con tres navos, la Santa Mara fue el nao que encabez esta em-presa, su propietario Juan de la Cosa fue tripulante de ella en este viaje, meda 36 metros y contaba con 3 mstiles, tena una capacidad aproxi-mada para 40 tripulantes, el 25 de diciembre de 1492 la embarcacin se encall y fue destruida para armar el fuerte Natividad. La Pinta fue la segunda embarcacin usada por Coln, su capitn fue Martn Alon-so Pinzn, conocedor del mar, era una carabela nrdica que le per-mita alcanzar mayor rapidez, tena aproximadamente 30 metros de largo y una capacidad de 25 tripulantes. La Nia, construida en 1488 por Juan Nio, fue bautizada con el nombre de Santa Clara, su capitn fue Vicente Ynez Pinzn, meda 30 metros de largo y contaba con una capacidad para 20 tripulantes.

    Sobre los datos de la tripulacin del primer viaje colombino se tie-nen algunas dudas, hay listas de varios investigadores que recogen nombres y datos de estos primeros viajeros que son recogidas por el religioso Bartolom de las Casas, testigo coetneo al hecho, como tambin surgen otros nombres por invento o confusin de algunos autores. La investigadora Alice Bache Gould public una nueva lista de los tripulantes de 1492, donde proporciona 87 nombres que con seguridad estuvieron en el viaje y otros 19 nombres cuya presencia es dudosa.> Alice Bache Gould. Nueva lista documentada de los tripulantes de Coln en 1492. Alicante, Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, 2006, diponible en http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/nueva-lista-documentada-de-los-tripulantes-de-coln-en-1492-i-1/html/00ab8d38-82b2-11df-acc7-002185ce6064_4.html#I_0_

    Fray Bartolom de las Casas relat en su diario que a las dos horas despus de medianoche [del 12 de octubre de 1492] pareci la tierra, de cual estaran dos leguas [de distancias], la tierra a la que se refera el religioso se trataba de la isla de Guanahan, bautizada por la empre-sa espaola como San Salvador. Al llegar la luz del da y ver personas desnudas en la isleta, desde la Santa Mara se envi una barca arma-da, el almirante Cristbal Coln junto con dos capitanes y marineros navegaron hacia tierra. Coln llevaba el estandarte real junto con dos banderillas de Cruz Verde, al pisar tierra declar que la isla era pose-sin de los reyes catlicos.

    Sobre el intercambio con los indgenas (pepitas de vidrios)Las primeras impresiones de Cristbal Coln se recogen en su diario de viaje y Bartolom de las Casas lo incluye en su relacin, especifica que estas son las palabras del Almirante: Yo, porque no tuviesen mucha amistad, porque conoc que era gente que mejor se librara y convertira a nuestra santa fe con amor que no por fuerza, les di a algunos de ellos unos bonetes colorados y unas cuentas de vidrio que se ponan al pescuezo, y otras cosas muchas de poco valor con que hubieron muchos placer y quedaron tanto nuestros que era ma-ravilla. Los cuales, despus, venan a las barcas de los navos, adonde nos estbamos, nadando y nos traan papagayos y hilo de algodn en ovillos, y azagayas, y otras cosas muchas, y nos las trocaban por otras cosas que les dabamos, como cuentecillas de vidrio y cascabeles.

    Impresin de Cristbal Coln sobre la apariencia de los indgenas

    Mas me pareci que era gente muy pobre de todo. Ellos andan todos desnudos, como su madre los pari, y tambien las mujeres (...) y todos los que yo vi eran todos mancebos, que ninguno vi de edad de mas de treinta aos, muy bien hechos, de muy hermosos cuerpos, y bue-nas caras, los cabellos gruesos, casi como sedas de cola de caballos y cortos (...) ellos son del color de los canarios, ni negros ni blancos. > Relacin del primer viaje de Don Cristbal Coln. Buenos Aires, Emec Editores, segunda edicin, 1942, pp. 25-26.

    Sobre las armas y seales de defensa

    Ellos no traen armas ni las conocen, porque les mostr espadas y las tocaban por el filo y se cortaron con ignorancia. No tienen algn hie-rro, sus azagayas son unas varas sin hierro, y algunas de ellas tienen al cabo un diente de pez y otras cosas (...) son de buena estatura, de gran-deza, buenos gestos; yo vi algunos que tenan seales de heridas en sus cuerpos y les hice seas que era aquello y ellos me mostraron como all venan gente de otras islas que estaban cerca y que les queran tomar y se defendan. > Relacin del primer viaje de Don Cristbal Coln. Buenos Aires, Emec Editores, segunda edicin, 1942, p. 26.

    Joselin Gmez

    1495 Cristbal Coln prosigue en su segundo viaje por el conti-nente an desconocido, enva a su hermano Diego a Castilla para hacer frente a las intrigas y conflic-tos surgidos entre los colonos.

    - 24 de marzo: Coln marcha, junto a su hermano Bartolom, al frente de 200 espaoles, 20 jinetes y un grupo de perros de pelea para enfrentar a Caonab, lider de la resistencia arawaka. Dos das des-pus masacran a los indgenas, que junto a las enfermedades y esclavi-zacin, determinan la derrrota de la resistencia arawaka en la isla.

    - En Castilla, una Real Cdula auto-riza a otros navegantes y marinos a recorrer Amrica, aunque es dero-gada ms tarde debido a que soca-vaba los derechos del Almirante.

    -El rey de Francia conquista Npo-les y Roma. En respuesta se forma la liga de Venecia integrada por el Papa, Espaa, el Imperio germano, Venecia, Gnova, Miln y Npoles. En el Imperio germano se rene la Dieta de Worms, destinada a intro-ducir reformas en la organizacin imperial.

    1494 Se firma el tratado de Tordesillas mediante el cual quedan deslinda-dos los territorios castellanos y portugueses de ultramar por el trazado de una lnea de 370 leguas de las islas de Cabo Verde hacia el poniente.

    - Coln funda en La Isabela el primer cabildo del continente, el cual fue presi-dido por su hermano Diego Coln. En busca de tierra firme rodea la isla Juana (Cuba) y llega a Jamaica a la que llama Santiago; estallan los primeros conflictos por el control entre los europeos.

    - Cansado y enfermo, Coln se encuentra desilusionado debido a que todava no encuentra ninguna seal de cercana de China o Japn.

    Ramn Snchez (dir.). Historia de Venezuela. Caracas, Ediciones Edime. 1968.

  • 10

    Lista tripulantes de las tres carabelas segn Alice Bache GouldLista de tripulantes con referencia a las listas de Fernndez Duro, Nicols Tenorio y Cerero y Henri Vignau

    Fernndez Duro Tenorio Vignau Alice Bache Gould TripulanteX X Alonso, grumete.

    X X X X Alonso, Maestre, fsico (muri).X Alfonso Clavijo, criminal.

    X X X X Alonso de Morales (muri).

    X X Alonso de Palos, grumete.X X Alvaro, marinero.

    X X X X Andrs de Huelva, grumete.X X Andrs de Yevenes, grumete (impreso, Yruenes).X X Antn Calabrs, marinero.

    X Antonio de Cullar (muri).X X Bartolom Bives, marinero.

    X X X X Bartolom Garca, contramaestre.x x Bartolom Roldn, marinero.

    x Bartolom de Torres, criminal.x x Bernal, grumete.

    x Cristbal Caro, platero, grumete.x x x x CRISTBAL COLN, Almirante y capitn general.x x x Cristbal Quintero, marinero, uno de los dueos de La Pinta.x x x x Cristbal Garca Sarmiento, piloto de La Pinta.x x x x Chachu, contramaestre (muri).

    x x Diego, Maestre.x Diego de Arana, alguacil de la flota (muri).

    x x x x Diego Bermdez.x Diego Leal, grumete.

    x x x x Diego Lorenzo, alguacil (muri).x Diego Prez, pintor (muri).

    x x x x Diego Martn Pinzn.x Domingo, tonelero (muri).

    x x x x Domingo de Lequeitio (muri).x Fernando Medel, grumete (impreso, Mndez).

    x x Fernando de Triana, grumete.x x x x Francisco de Huelva (muri).

    x x Francisco Medel, grumete (impreso, Mndez).x x x x Francisco Nio.x x x x Francisco Martn Pinzn, maestre de La Pinta.x x x x Francisco Garca Vallejos, marinero.x x x x Garca Alonso.x x x x Garca Hernndez, marinero, despensero de La Pinta.

    x x x Gil Prez, marinero.x x x x Gmez Rascn, marinero, uno de los dueos de La Pinta.

    x Gonzalo Franco (muri).x x x x Jcome el Rico, genovs (muri).

    x x Juan, grumete.x x x Juan, Maestre, cirujano (muri).

    x x Juan Arias, grumete.x x x Juan Arrez, marinero.

    x x Juan Martnez de Azoque, marinero.

    x x Juan de Medina, sastre, marinero (probablemente muri).x x x Juan de Moguer, criminal, marinero.

    x x x x Juan Nio, maestre de La Nia, y en parte su dueo.x x Juan de la Plaza, marinero.x x Juan Quadrado, grumete.

    x x x x Juan de la Cosa, maestre y dueo de la Santa Mara.

  • x x x Juan de Moguer, criminal, marinero.x x x x Juan Nio, maestre de La Nia, y en parte su dueo.

    x x Juan de la Plaza, marinero.x x Juan Quadrado, grumete.

    x x x x Juan Quintero de Algruta, contramaestre de La Pinta.x x Juan Reynal, marinero.

    x x x Juan Rodrguez Bermejo, marinero de La Pinta (el mismo que Rodrigo de Triana).

    x x Juan Romero, marinero.x x Juan Ruiz de la Pea, marinero.x x Juan Verde de Triana, marinero.x x Juan Vezano, marinero.

    x x x x Juan de Xeres, marinero.

    x x x x Lope, calafate (muri).x x x x Luis de Torres (muri). x x x x Martn Alonso Pinzn, capitn de La Pinta.

    x x x Martn de Urtubia (muri).x x Miguel de Soria, grumete.

    x x x x Pedro de Arcos, de La Pinta.x x x Pedro Arrez, marinero.

    x x x x Pero Gutirrez, repostero de estrados del rey, iba en la Santa Mara (muri).x x x x Pedro de Lepe (muri).x x x x Pero Alonso Nio, piloto.

    x x x Pero de Salcedo, paje de Coln.x x x x Pedro de Soria.

    x x Pedro tegero, grumete.x x x x Pedro de Terreros, maestresala de Coln.x x x x Pedro de Villa, marinero.

    x Pero Yzquierdo, criminal.

    x x Pedro Snchez de Montilla, marinero.x x x x Rodrigo de Escobedo, escribano de la armada, en la Santa Mara (muri).

    x x Rodrigo Gallego, grumete.x x x x (Rodrigo de Triana; vase Juan Rodrguez Bermejo.)

    x x x Rodrigo Monge.x x x x Rodrigo de Xeres.x x x x Rodrigo Snchez de Segovia, veedor, en la Santa Mara.x x Rui Garca, marinero.

    x x Sancho de Rama, marinero.x x x x Sancho Ruiz de Gama, piloto.x x x x Vicente Yez Pinzn, capitn de La Nia.

    43 46 76 87 (Con Rodrigo de Triana seran segn cada lista 44 47 77 88.)

    Julio Garca Condoy, Vicente Ynez Pinzn, 1462, Coleccin Museo Naval de Madrid.

    > http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/nueva-lista-documentada-de-los-tripulantes-de-coln-en-1492-iv-0/html/00ab953a-82b2-11df-acc7-002185ce6064_5.html#I_0

    Grabado sobre la embarcacin y salida del Puerto de Palos, Coleccin Fotos Embajada de Estados Unidos en Espaa. Disponible en: http://dspace.uah.es

  • 12

    El chocolate, de Amrica para el mundoEl chocolate, esa deliciosa especie tan fa-miliar en nuestro pas como en el resto del mundo, es un producto obtenido del cacao, fruto oriundo de las zonas tropicales de Amrica, y que los espaoles conocieron y llevaron a Europa desde tiempos de la inva-sin y la conquista.

    Su nombre deriva de la palabra azteca cho-co, que significa cacao, y late, que significa agua. La palabra chocolate equivale a agua de cacao.

    Cuando en 1516 los hombres de Castilla desembarcaron en Mxico e iniciaron la con-quista del pas, observaron la enorme impor-tancia que all se conceda al rbol del cacao. Sus semillas eran utilizadas por los aztecas como unidad de intercambio monetario. El cacao formaba parte fundamental en la dieta del hombre prehispnico. Con l se prepara-ba una bebida muy semejante al chocolate de hoy, pero sin azcar. El pueblo llano lo mez-claba con maz. Segn relataban cronistas espaoles, para los que el chocolate era ms un licor que un alimento propiamente dicho, el emperador azteca Moctezuma, ordinaria-mente culminaba sus comidas sorbiendo una jcara de chocolate.

    De gusto muy poco agradable al paladar espaol, el chocolate tuvo en principio esca-sa aceptacin. Solo cuando se combin con azcar se propag ampliamente su consumo. Pero el conquistador apreci desde un prin-cipio las cualidades de esta bebida de gran poder energtico. Hernn Corts escribi al emperador Carlos V acerca de las cualidades vigorizadoras del chocolate.

    En 1520 los conquistadores enviaron pan de chocolate a Espaa. El producto tuvo tanta aceptacin que muy pronto se crearon fbri-cas que perfeccionaron los mtodos de pre-paracin que incluan el azcar. El chocolate tambin recibi el nombre de soconusco, pues as se llamaba una antigua regin de Guate-mala, que lleg a ser famosa por la calidad de su cacao.

    Durante los siglos XVII y XVIII se generali-z el consumo de chocolate en Italia, Francia, Inglaterra, Alemania y Estados Unidos.

    Segn una antigua leyenda azteca, Quetza-coalt, dios del sol y hacedor del mundo, se trajo desde el mundo divino las semillas del cacao, para procurar a los hombres un man-jar que era propio de los dioses: el chocolate.

    Mathieu Ogier (grabado) en la obra de Philippe Silvestre Dufour. Americano con su chocolatera y su jcara, Lyon, 1685, en Carlos Duarte. El arte de tomar el chocolate, historia del. Caracas,

    Editorial Ex Libris, 2005.

    El maz: la planta de AmricaLos restos mas antiguos de plantas cultivadas en Amrica datan de 7.000 aos. Fue entonces que el hombre aprendi a sembrar. Pero den-tro de este lento proceso, uno de los momentos ms cruciales se produjo 2.000 aos ms tarde cuando comenz el cultivo del maz. He aqu un elemento capital para la economa, el ritual y los modos de vida americanos. Aunque no aclarado por completo, se considera que el maz es oriun-do de Amrica. La primera referencia escrita apareci en el Popol Vuh, texto donde los mayas recogen los mitos y concepciones respecto al ori-gen y evolucin del mundo. El maz fue la base de

    la economa mesoamericana y andina. Se consti-tuy en el eje de la dieta alimenticia, debido a su alto valor energtico y la facilidad de su conser-vacin. Su consumo fue muy variado: solo, coci-do, en tortillas, como bebida o refresco, mezcla-do con chocolate. Pero aparte de su carcter de bien de consumo e intercambio, fue un elemento ritual y suntuario. La necesidad de racionalizar su cultivo impuls los conocimientos de cmpu-to del tiempo y las variaciones meteorolgicas. Su vinculacin a los ritos religiosos explica que el dios maya Yumkax lo fuese a la vez del maz y de la agricultura en general.

    Pluche, Noel. Espectculo de la naturaleza. Madrid: Imp. de Pedro Marn, 1771, entre pp. 96-97. Coleccin Libros Raros de la BN.

  • Los incas: arquitectura e ingenieraQuien recorre las ruinas de los templos, fuertes y ciudades incaicas puede pensar que estas enormes murallas fueron levantadas por una raza de gigantes.

    Los bloques de piedra, de forma polidrica, han sido perfectamente calzados y ajustados, de modo que hoy se encuentran tan firmes como en tiempos de los antiguos incas.

    Para trasladar estas piedras, algunas de las cuales alcanzan centenares de kilogramos de peso, a las altas cimas montaosas los incas han debi-do poseer amplios conocimientos de ingeniera y arquitectura.

    As se construyeron los Pucaraes, fortalezas emplazadas en lugares muy elevados. Uno de los ms notables es el de Sacsahuamn, que do-mina todo el valle del Cuzco.

    Otro aspecto sorprendente de la cultura inca y cuya utilidad prc-tica se extiende hasta el presente es el de las obras viales. Caminos amplios, muchos de ellos de hasta seis metros de ancho, pavimentados con lajas y alcantarillados, unan al Cuzco, la capital, con las ms remo-tas regiones del imperio, llegando a los actuales lmites con Ecuador y Colombia, y hasta el ro Maule, en Chile. Los obstculos que oponan ros y precipicios eran salvados con puentes cuyo tendido demuestra, una vez ms, sus amplios conocimientos de ingeniera.

    Cronologa (1453 1506) 1499 Disputa y rebelin de los colonos espaoles en Amrica. Coln solici-ta la presencia de un juez a la metrpoli.

    - Producto de la autorizacin real concedida a otros viajeros distintos a Coln, Alonso de Ojeda, Juan de la Cosa y Amrico Vespuccio recorren las costas venezolanas y llegan a la parte occidental del territorio (lago de Maracaibo).

    - En la tripulacin del primer viaje de Alonso de Ojeda a Venezuela viene un tal Juan Pintor, el primer artista europeo que pisa tierras americanas.

    1500 El comendador real Francisco de Bobadilla llega a Santo Domingo y se hace cargo de la gobernacin de las islas y tierra firme. Cristbal Coln es hecho prisionero junto con sus hermanos y enviado a Castilla; es recibido por los reyes catlicos.

    - Vicente Yez Pinzn recorre la costa oriental de Venezuela y avista el ro Orinoco. Explora la costa brasilera, cerca de Maranhao 11 miembros de su tripulacin son asesinados y otros heridos por las flechas de los indgenas. Cerca del ro Amazonas, 36 indgenas son capturados.

    - Pedro lvarez Cabral llega a Porto Seguro (actual Brasil) en una docena de barcos de comercio portugueses. Su destino original era la India por la va del cabo de Buena Esperanza, pero se desvi de curso.

    - Juan de la Cosa dibuja el primer mapa de las tierras descubiertas en las Indias.

    - Francia se anexiona el ducado de Miln y concierta con Espaa el tratado de Granada para repartirse el reino de Npoles.

    Los mayas: la perfeccin en el cmputo del tiempoLa zona seca de Yucatn, la zona hmeda y boscosa del actual estado mexicano de Chiapas y el actual Guatemala constituyen el marco geogrfico donde se extendi la civilizacin maya. El pueblo maya, ancestro de los actuales chortis de Guatemala, fue uno de los representantes de las altas culturas mesoamericanas. A lo largo de 18 siglos los mayas desarrollaron una cultura donde los conocimientos cientficos y las realizaciones artsticas alcanzaron su cima ms elevada. El maya, pueblo agrcola, precisaba de un exacto cmputo del tiempo para organizar adecuadamente las labores y los ciclos de cultivo. A tal necesidad dio precisa respuesta el perfeccionamiento del calendario y la invencin de un sistema matemtico que inclua el concepto del cero. Aunque algunos de sus hallazgos aparecen ya en otras culturas, la complejidad y precisin en el cmputo del tiempo son totalmente originales y caractersticos de la cultura maya.

    Nativo recostado de un muro inca. Cuzco, Per, 1907. Coleccin Biblioteca del Congreso de Washington.

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  • Las maravillas de Tenochtitlan En los primeros das de su estancia en la ciu-dad imperial de Tenochtitlan, Hernn Cor-ts y sus hombres recorrieron los lugares ms importantes. Visitaron la plaza mayor y el imponente templo de Huitzilopochtli, dios de la guerra. En Tlatelolco asistieron al mercado, al que acudan diariamente entre 25.000 y 30.000 personas, y casi 50.000 en poca de feria. Rigurosamente organizado,

    el mercado ofreca una inmensa gama de productos: mantas, vestidos, calzados, cue-ros, hachas de cobre, cuchillos de peder-nal y obsidiana, collares, cermicas. Todos procedentes de distintas poblaciones del pas. Luego subieron los 114 escalones del Teocaltli, el adoratorio piramidal. Desde su cima pudieron admirar el imponente paisaje del lago en cuyo centro haba sido elevada la

    ciudad de Tenochtitlan. Esta se comunicaba con tierra firme por medio de tres calzadas: una en direccin al sur, hasta el fuerte Xo-tolt, por donde entraron los espaoles da de su arribo; una segunda en direccin al norte, hasta Tepeyacac; y la tercera hacia el poniente, que llevaba hasta Tlacopan. Unas 60.000 familias vivan en Tenochtitlan.

    Vista de la ciudad de Tenochtitlan desde el mercado de Tlatelolco. Detalle del mural de Diego Rivera. Mercado de Tlatelolco, 1929-1951. Coleccin Palacio Nacional de Mxico.

    El juego de pelota en MesoamricaPor testimonios de cronistas, representacio-nes artsticas y espacios destinados a este jue-go, es fcil deducir que en el mundo mesoa-mericano, desde la meseta central de Mxico hasta Yucatn, el juego de pelota despert entusiasmo muy similar a los de un deporte de masas en la actualidad. El nmero de can-

    chas es enorme. Casi todas tienen forma de doble T, con un gran espacio rectangular en el centro flanqueado por altos muros. En el centro del campo y a cierta altura haba ha-ba un aro de piedra. El jugador que lograba pasar la pelota a travs de dicho aro ganaba el partido y, como vencedor, tena el derecho

    a quedarse con todo lo que llevaban los es-pectadores. La pelota con la que se jugaba era maciza y de caucho negro. Se le daba im-pulso con la cadera y con la rodilla, debida-mente protegidas con pedazos de cuero. Los contendientes pasaban la noche anterior al partido en vela, practicando algunos ritos.

    1501 Amrico Vespuccio, esta vez a las rdenes del rey de Portugal, emprende un segundo viaje a Amrica: de frica pasa a las costas de Brasil y luego baja hasta la Patagonia, su propsito era encontrar finalmente el acceso a oriente por el oeste.

    - La corona espaola autoriza la introduccin de esclavos negros en las Indias. Se establece el sistema de licencias reales para comerciar con Amrica. Nicols de Ovando es nombrado gobernador de las Indias.

    - Luis XII de Francia es proclamado rey de Npoles.

    - Francisco de Bobadilla, caballero de la Orden de Calatrava, llega a Santo Domingo al frente de las carabelas Goda y Antigua. Tiene plenos poderes para investigar reportes de creciente deterioro de condiciones de vida en la isla. Coln y su hermano Bartolom son arrestados en octubre y encadenados son llevados a bordo de uno de los barcos de Bobadilla rumbo a Sevilla

    - Se realiza el matrimonio de Catalina de Aragn, hija de los reyes catlicos de Espaa con el hijo de Enrique VI de Inglaterra, Arturo.

    - La corona espaola prohbe de nuevo a los extranjeros viajar a las Indias Occidentales

    - El comerciante Cristbal Guerra y su hermano Luis regresan al golfo de Paria en una carabela de 50 to-neladas en bsqueda de perlas. Se enfrent a los indgenas y esclaviz a varios antes de volver a Espaa.

    - El navegante florentino, Am-rico Vespuccio regresa a nuestro continente, esta vez piloteando una expedicin portuguesa comandada por Andr Concalves. En este viaje

    llega a la Patagonia, este viaje lo convence a l y a otros estudiosos que estos territorios son parte de un nuevo continente y no son parte de Asia.

    - Una expedicin colonizadora compuesta por los barcos Santa Mara de la Antigua, Santa Ma-ra de la Granada y las carabelas Magdalena y Santa Ana liderada por Ojeda llega a la isla de Marga-rita. Debido a problemas con los suministros algunos espaoles se separan de la expedicin y atacan a un poblado indgena en Cuman, matando a 78 de ellos.

  • y recibe instrucciones acerca de la educacin, adoctrinamiento de los indios y rgimen de trabajo de las encomiendas. Organiza varias expe-diciones punitivas para contrarrestar la resistencia indgena tales como la masacre en Jaragua.

    1504 Cristbal Coln regresa definitivamente a Espaa; trata de restablecer sus privilegios, disminui-dos por las autorizaciones concedidas a otros navegantes y exploradores.

    - Muere Isabel la Catlica; la herencia de Castilla pasa a su hija Juana, bajo la regencia de Fernando se ve ame-nazada la unidad entre los reinos por fricciones en la corte.

    1505 Coln es recibido cordial-mente por Fernando el Catlico pero se le niegan sus antiguos privilegios sobre las Indias. - Los litigios por la sucesin de la coro-na de Castilla parecen resueltos cuando las cortes de Toro reconocen a Juana I como reina y a Fernando como regente segn el testamento de la reina Isabel.

    1506 Cristbal Coln muere el 20 de mayo en Valladolid.

    Investigacin: Pedro Liendo Sojo

    1502 Cuarto y ltimo viaje de Cristbal Coln: recorre los territorios antes descubiertos y en busca de tierra firme bordea el litoral de Centroamrica y las las costas de Panam en donde funda la localidad de Beln, que abandona por la hostilidad de los indios.

    - La primera expedicin masiva de pobladores (2.500) llega a La Espaola, bajo el gobernador designado Nicols de Ovando. Entre ellos se encuentra Bartolo-m de las Casas, Hernn Corts y Francisco Pizarro.

    1503 La corona espaola crea la Casa de la Contratacin de Sevilla, orga-nismo encargado de controlar y conducir el trfico humano y comercial con las Indias.

    - Muere el papa Alejandro VI, y es coronado Julio II.

    - Coln permanece aislado por casi un ao en la isla caribea de Jamaica. En noviembre regresa muy enfermo a Sevilla.

    - Nicols de Ovando, en sus funciones de gobernador, reorganiza las colonias

    Los nmeros de la catstrofeHolocausto o catstrofe demogrfica son los nombres que algunos estudiosos han dado a la violenta disminucin de la poblacin ind-gena producto del proceso de colonizacin y conquista iniciado por los europeos en 1492. La magnitud de este acontecimiento ha llevado incluso a denominarlo como el genocidio y etnocidio de mayor tras-cendencia en la historia de la humanidad.

    Para tener una idea del desastre demogrfico es necesario saber el nmero de habitantes de este continente antes de la llegada de Coln. Sin embargo, no se sabe con exactitud la cantidad de poblacin indge-na que exista en el continente justo antes de la invasin europea. No disponemos de censos ni rcords confiables, solo estn los registros de las autoridades coloniales, las crnicas, los relatos de diversos testigos y, adems, estn las fuentes arqueolgicas. Por esta razn solo se pue-de hacer una estimacin del nmero de habitantes de este continente sustentada en los antiguos y modernos mtodos demogrficos.

    El brusco descenso demogrfico es atribuido a diversas causas: la guerra contra los indgenas, la esclavizacin, el rgimen de trabajo y las enfermedades tradas por los europeos tales como la viruela.

    Desde el siglo XVIII se han venido produciendo profusos debates con prcticamente ningn consenso sobre la cantidad de poblacin indge-na que exista en el continente justo antes de la invasin. La discusin y las diferencias en los clculos entre los estudiosos no va a terminar, qui-z no se llegue nunca a un acuerdo, pero tampoco es el punto principal. Son estimados que nos acercan a la magnitud del impacto. La realidad es que la diversidad de cmputos sobre la poblacin indgena previa al 12 octubre de 1492 apuntan a un solo hecho: lo que sucedi en Amrica en el primer siglo despus de la invasin europea fue una catstrofe para los millones de indgenas que habitaban nuestro continente.

    Poblacin de Quisqueya (actual Hait y Repblica Dominicana)Los demgrafos e historiadores se han interesado en calcular la pobla-cin de esta isla para el momento de la llegada de Cristbal Coln. No solo porque fue uno de los primeros territorios a los que lleg en su pri-mer viaje, sino porque fue all desde donde se desarrollaron las nuevas experiencias de poblamiento y colonizacin del continente.

    Bartolom de las Casas estimaba para la isla una poblacin entre 3 y 4 millones de habitantes, en el otro extremo encontramos los clculos rea-

    lizados por ngel Rosenblat, cuyo recuento da entre 100.000 a 120.000 habitantes cuando Coln llega a la isla; por otro lado, Sherburne F. Cook y Woodrow Borah han estimado una poblacin de 7 a 8 millones de habitantes para la misma fecha. Las notables diferencias en las cifras de cada uno de los autores son un reflejo de la diversidad de fuentes, m-todos utilizados y posiciones ideolgicas que marcan el trabajo de los investigadores.

    Regin Alfred Kroeber (1939)ngel Rosenblat

    (1945)Julian Steward

    (1949)Karl Sapper

    (1924)Henry Dobyns

    (1966)William Denevan

    (1976)Suzanne Alchon

    (2003)Canad y EE UU 900 1.000 1.000 2.000-3.000 9.800-12.250 4.400 ~3.500Mxico 3.200 4.500 4.500 12.000-15.000 30.000-37.500 21.400 16.000-18.000Amrica Central 100 800 740 5.000-6.000 10.800-13.500 5.650 5.000-6.000AAntillas 200 300 220 3.000-4.000 440-550 5.850 2.000-3.000Andes 3.000 4.750 6.130 12.000-15.000 30.000-37.500 11.500 13.000-15.000Resto de Suramrica 1.000 2.030 2.900 3.000-5.000 9.000-11.250 8.500 7.000-8.000Total 8.400 13.380 15.490 37.000-48.500 90.040-112.550 57.300 46.500-53.50

    Veamos los clculos realizados por los diferentes investigadores por regin

    Los terribles nmerosPara el momento de la llegada de los espaoles a nuestro continente, la pennsula ibrica tena una poblacin que no llegaba a los 10 millones de personas. En nuestro continente, siglo y medio despus de 1492, solo quedaban entre 1 milln y seis millones de indgenas, segn clculo de diversos investigadores. Estos nmeros hablan de un genocidio.

  • Diseo y diagramacin: ngel Pellicer, Mahyvith Alvarado, Javier Vliz, Gabriel Serrano (GASS) / Iconografia: Osman Hernndez, Willmar Rodrguez, Noelis Moreno, Romer Carrascal, Neil Ochoa / Correccin Csar Russian

    Rif:G

    -200

    0847

    90

    ...Y SU NOMBRE

    VIRUELA

    GRIPE

    TIFUS

    SARAMPIN

    MALARIA (PALUDISMO)

    DIFTERIA

    TOSFERINA

    Como jinetes del apocalipsis, los conquistadores trajeron enfermedades nunca antes conocidas en el continente. Las poblaciones nativas, que no haban desarrollado resistencia, sucumbieron por millones a partir del primer contacto.

    El siglo XVI marc el inicio de la conquista de los territorios desconocidos hasta el momento por las principales potencias europeas; en las embarcaciones tripuladas por los colonizadores viajaron animales, diversos frutos y los grmenes que desataron devastadoras epidemias en las diversas regiones del continente americano. Los primeros afectados fueron los habitantes de Santo Domingo y Puerto Rico, quienes iniciaron las estadsticas de muertes a causa de viruela, gripe y tifus.