Enviando Morraldeherramientascontralasadicciones.pdf

7/25/2019 Enviando Morraldeherramientascontralasadicciones.pdf

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TODA VIDA, TODA LA VIDA.

Hiplito Irigoyen 98 - Crdoba CP5000 - Tel. (0351) 422 1015

www.pastoraldeadiccion.org.ar- [email protected] 1de 17-

Estimados Prrocos y Vicarios:

Desde la Pastoral de Adicciones, venimos observando lanecesidad de contar con algn material que permita dar un marco de apoyo integral apersonas y familias afectadas por la problemtica de las adicciones.

Por este motivo, hemos elaborado esta primera gua ellamada MORRAL DE HERRAMIENTAS, con el objeto de orientar a quienes lonecesiten.

Este material lo hemos dividido en tres secciones quepermiten diferenciar tres mbitos distintos de accin, pero que necesariamente deben

estar articulados para hacer efectivo el apoyo:

Introduccin: nos presenta la problemtica de la adiccin relacionada alindividuo adicto,

La familia: nos brinda una orientacin acerca de cmo aconsejar y sostener alentorno cercano al adicto, como medida esencial para su recuperacin.

La parroquia: como agente de contencin, orientacin y apoyo.

Agradeceremos los aportes y sugerencias que deseen

realizar a este primer material, para que con la ayuda de todos da a da podamosmejorarlo para poder brindar una mejor prevencin y orientacin en el seno de nuestrascomunidades.

Pastoral de Adicciones.Pastoral Social Arquidiocesana.


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MORRAL DE HERRAMIENTAS.

Introduccin

Adiccin segn la Real Academia Espaola es el hbito de quien se dejadominar por el uso de alguna o algunas drogas txicas, o por la aficin desmedida a

ciertos juegos.

La adiccin es una enfermedad primaria, crnica, con factores genticos,

psicosociales y ambientales que influyen en su desarrollo y manifestaciones. Laenfermedad es frecuentemente progresiva y puede ser fatal. Es caracterizada porepisodios continuos o peridicos de descontrol sobre el uso, uso a pesar deconsecuencias adversas, y distorsiones del pensamiento, ms notablemente la negacin.

Es importante reconocer en el proceso adictivo que cuando un individuo sesomete, se adhiere y se esclaviza a algo perdiendo as su libertad. No solo nosreferimos a sustancias, adicciones qumicas como en el caso de las drogas, sinotambin a otras adicciones, no qumicas como por ejemplo al consumo, sexo, juego, etc.

Nuestra preocupacin como Pastoral de Adicciones y Pastoral Social

Arquidiocesana es compartir con los prrocos, vicarios parroquiales y agentespastorales una sencilla y prctica gua de cmo proceder en situaciones vinculadas aadicciones.

Si bien una persona puede sostener que no es adicta porque: Slo bebe alcohol una vez a la semana o cada quince das, solo bebo cuando

salgo a divertirme, Slo fuma unos pocos cigarrillos por da, lo cual es nada o insignificante frente a

quien fuma dos paquetes por da pero contina fumando convencido de lo dejocuando quiero,

Slo toma medicamentos no prescriptos por un profesional, cuando siente unaafeccin concreta o no puede dormir o est muy cansado, etc., incorporandodrogas que pueden -en excesos o por habitualidad- ser muy perjudiciales para susalud y su vida cotidiana.

Esta negacin ya es una manifestacin de su problema que lo puede llevar msfcilmente a perder el control sobre sus consumos.

Otra caracterstica notable de las adicciones es la marcada modificacin de laconducta frente a su entorno y fundamentalmente a los afectos.


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Estos ejemplos cotidianos nos permiten tambin imaginar cules pueden llegar a ser lasconsecuencias en el consumo de otras drogas estimulantes y/o depresores del SistemaNervioso Central como medicamentos, cocana, marihuana, paco, anfetaminas, etc.

Qu nos mueve como cristianos a ocuparnos de esta problemtica?

El valor de la VIDA como un regalo de Dios.

Apreciar TODA VIDA, TODA LA VIDA.

La Familia

Entendemos por familia un grupo humano de convivencia unido por vnculosafectivos que cumple funciones de proteccin, socializacin, educacin y transmisin devalores y modos de vida1.

La familia no puede ni debe ser indiferente frente a la situacin de lasadicciones, ya que ella es el primer nivel en la prevencin.

En situaciones de adicciones es quien debe compartir, acompaar y sosteneractivamente al adicto en su proceso de recuperacin.

En el siguiente cuadro se enumeran algunos de los factores de proteccin y deriesgo que se deberan trabajar, fortaleciendo unos (protectores) y atenuando otros(riesgo) a fin de disminuir la posibilidad de la aparicin de alguna conducta adictiva enalguno de sus miembros, en especial los adolescentes y jvenes.

1SEPADIC. Abordaje familiar.


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La Parroquia

En nuestro pas, desgraciadamente, el comercio de la droga se ha instaladoentre nosotros y se lo puede encontrar en todos lados: en la escuela, el club, en laesquina de cada barrio, en los boliches, en las crceles, en los lugares de trabajo yhasta en nuestras parroquias. Ya no somos un pas de paso de droga. El comerciode la droga en Argentina lleg para quedarse y crece cada da ms, destruyendo a

jvenes, familias y as a nuestro futuro. Es un negocio tan prspero como maligno,comercia con la vida de nuestros hijos sobre todo llevndolos por un camino queconduce a la muerte.

Los que se inician en el consumo son cada vez ms chicos en edad, destruyendode este modo la inocencia, enfermndolos de tal manera que casi sin darse cuentacambian la alegra y el juego por la violencia y el desamparo.

Esto pasa en todos los ambientes, y los que comienzan probando la droga porcuriosidad o falsa diversin, al convertirse en adictos frenan su crecimiento y eldesarrollo de su personalidad y los daa tambin fsicamente, pudindolos llevar a unamuerte prematura. Tambin anula todo crecimiento de desarrollo en la sociedad, a losnios y jvenes les impide continuar estudiando bien, a los que trabajan les hace perderel empleo y a todos les impiden crecer y fomentar los vnculos de afecto y amor.

Nada de esto est en los planes de vida y abundancia de Dios para con nosotros,sus hijos amados.

La droga deshumaniza, pues anula el don precioso y nico de la libertad quetodos poseemos y quiebra los proyectos de vida, sueos y esperanzas de cada uno delos adictos llevando sufrimiento y dolor a todas las familias.

Los que comercian y trafican con este mal tan atroz, tambin sufren y generan lacorrupcin y la muerte que ellos mismos venden, generando y padeciendo asesinatospor encargo, esclavitud, prostitucin... Nada bueno sale de un negocio tan mortal.

Lo primero que debemos tener en cuenta es que frente a las adicciones nuestramisin es orientar y acompaar.

La lucha contra el narcotrfico, la falta de control en la venta de medicamentos oalcohol, etc. sonfunciones indelegables del Estado,y ante estas situaciones debemosexigir que el mismo asuma su rol.

Entonces cul es nuestro servicio?

Nuestro servicio es animar a la prevencin en todos nuestros mbitos deevangelizacin como la catequesis, los grupos, el ejercicio cotidiano del ministerio;


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ayudando a la articulacin con otras instituciones no eclesiales y a los padres a crearconciencia en relacin a estos desafos. No podemos solos, y no debemos estar solos.

Frente a una situacin puntual de adiccin, lo primero que debemos es saber que laparroquia no es quien debe curar, no somos ni la entidad adecuada, ni somosprofesionales capacitados para asumir tal responsabilidad pero s es necesario:

El acompaamiento pastoral afectivo y efectivo a la persona, familia y entornocercano.

El acompaamiento desde la oracin. El respeto por la intimidad de la persona y de la familia. La objetividad frente a la situacin. Orientar hacia la derivacin a una institucin adecuada.

Hay una Buena Noticia que nos conduce a la vida:

Como seguidores de Jess, angustiados por toda esta situacin, no podemos callarlo que hemos visto y odo:sabemos bien que la Buena Noticia anunciada por Jessnos conduce a la vida y nos ensea el camino de la salvacin.

Nuestros Obispos de Amrica Latina, reunidos y preocupados por esto nos dicen:

La alegra que hemos recibido en el encuentro con Jesucristo, a quien

reconocemos como el Hijo de Dios encarnado y redentor, deseamos quellegue a todos los hombres y mujeres heridos por las adversidades;deseamos que la alegra de la Buena Noticia del Reino de Dios, deJesucristo vencedor del pecado y de la muerte, llegue a todos cuantosyacen al borde del camino, pidiendo limosna y compasin (cf. Lc 10, 29-37; 18, 25-43).

Conocer a Jess es el mejor regalo que puede recibir cualquier persona;haberlo encontrado nosotros es lo mejor que nos ha ocurrido en la vida, ydarlo a conocer con nuestra palabra y obras es nuestro gozo.

(Documento de Aparecida, 29)

Por eso soamos y proponemos:

Aunque sabemos que la lucha contra la drogadependencia y sus estructuras decomercio mortal necesitan el compromiso de toda la sociedad y el Estado unidos enesa misin, pensamos que desde nuestras comunidades parroquiales y nuestra vida defe familiar, laboral y barrial, podemos comenzar a construir de a poco y entre todos,tres caminos que ayuden a combatir este mal a fuerza de bien:

1. Generar una cultura de la vida: Recordando a cada instante y ensendoles a

nuestros hijos, la vida buena a la que estamos llamados, mediante espacios de


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encuentro, ternura, dilogo, afecto y verdadera diversin, donde puedan sentirseamados, reconocidos, esperanzados, valorados, y que despierte en cada unoganas de crecer, desarrollar sus talentos y disfrutar de lo hermoso que es vivir encomunin con los dems.

2. Prevenir y educar:Sin temor a tocar el tema, ensearles a nuestros chicos desdepequeos que: no es bueno que te drogues, explicndoles todos los daos queproducen; y tambin hacerlo con la poblacin mayor. Explicando que es msfcil entrar que salir, que no es algo manejable sino que al contrario, nos puedemanejar hasta perder el control. Educando tambin en el valor de la vidahumana, de nuestra gran dignidad como hijos de Dios y templos del EsprituSanto. Anunciando claramente que Dios nos invita siempre a optar por la vidaporque nos ama y quiere lo mejor para nosotros.

3. Denunciar: Hablando claramente de quienes trafican con la droga comocomerciantes de la muerte, y solicitando a las fuerzas pblicas y al Estado quese comprometan en la lucha contra este mal.

Y por sobre todas las cosas queremos ser signo del amor de Dios, especialmentecon los que sufren y padecen esta terrible enfermedad de la adiccin, con sus familias,con las madres que da a da lloran por sus hijos y ruegan al Seor por su recuperacin;Velando por cada uno de los nios pues en ellos est nuestro futuro.

Propuestas solidarios y educativas para vivir mejor:

Les proponemos dos gestos concretos En cada comunidad se podr pensar enalgn otro que parezca ms adecuado. El primero es un gesto solidario y el segundo es dedifusin para informar, educar y de ese modo prevenir.

Propuesta solidaria: Queremos una cultura de la vida

Para esta propuesta necesitamos contar -por una parte- con un espacio adecuado,que puede ser algn saln parroquial disponible, o el aula o patio de la escuela del barrio,o un lugar del club o de la sociedad de fomento, donde puedan ofrecerse espacios

creativos, culturales, de expresin o de juego para nuestros chicos. Y por otra parte,necesitamos contar con los talentos que cada uno pueda ofrecer: si hay alguien que sabemsica o algn instrumento; si otra persona tiene experiencia en armar un grupo de teatro;o pueda compartir sus saberes creativos que pueden ser de lo ms variados: pintar, cocinar(ofreciendo un taller para cocineritos), organizar buenos partidos de ftbol u algn otrodeporte; y hasta los abuelos que sepan narrar buenas historias y cuentos para nios. Cadatalento es til y valioso y puede proponerse como encuentro recreativo o taller semanal,para que los nios tengan oportunidades que los inviten a crecer y desarrollarsesanamente.

Pueden ofrecerse varias posibilidades, bien combinadas para que no se

superpongan en horarios y lugares, y con una duracin determinada (por ejemplo: un mes


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de duracin, o 4 clases, o durante un semestre) de manera que tanto los voluntarios quelos ofrezcan como los chicos que participen, tengan las metas claras y sepan si podrnhacerlo o no.

Propuesta Educativa: difusin de una cartilla Eleg la vida

La Pastoral Nacional sobre Drogadependencia, prepar una cartilla sobre laadiccin a las drogas llamada: Elegir la vida es mejor, ante el creciente flagelo de ladroga2, que explica con mucha claridad qu significan las adicciones, las caractersticasespeciales que tienen las adicciones a las drogas, detalles sobre ellas, qu efectosproducen, y textos que ayudan a conocer mejor esta enfermedad para poder prevenirla.

La propuesta sera la difusin en nuestro barrio y en nuestros lugares dedesempeo cotidiano: en las familias, la escuela, el trabajo, entregarlas y tambinanimarnos a comentarlas sin temor a tratar el tema. Cuanto ms se sepa, ms se puedeprevenir.

* * *

Para finalizar, los invitamos a unirnos en la oracin para pedirle a Jess que nosgue y acompae siempre:

Seor Jess, Luz del mundo,

te pedimos ilumines nuestras nochesy nos protejas en las tormentas de la vida,

calmando toda tempestad.

Seor Jess, Buen Pastor,

que das la vida por tu rebao,

guanos siempre por sendas de esperanza,

aparta de nosotros todo peligro

y cuida especialmente a los ms pequeos.

Seor Jess, Hijo amado del Padre,

recurdanos la gloriosa dignidad de ser hijos de Dios,y aydanos a anunciar esta buena noticia

a cada hermano que no lo sabe.

Seor Jess, Buen Samaritano,

levanta al cado, fortalece al dbil,

ayuda al desvalido,

y danos un corazn solidario

semejante al tuyo.

Seor Jess, Camino, Verdad y Vida,

2Ver anexo en este Trabajo.


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no permitas que nos separemos de ti,

y llena nuestras vidas con la alegra de tu salvacin.

Te lo pedimos a Ti, que vives y reinas,

en unidad del Padre y del Espritu Santo. Amn

A continuacin les ofrecemos un listado de instituciones que se sugieren paraacompaar profesionalmente la problemtica de adiccin en lo personal y familiar.

Pastoral de Adicciones

Pgina principal http://www.pastoraldeadiccion.org.ar/

SERVICIO DE ORIENTACION TELEFONICA

La Secretara de Prevencin de Drogas de Nacin tiene su 0800 gratuito. Puedenllamar para recibir orientacin desde cualquier provincia argentina.

SEDRONAR

0800 222 1133

ONGs. Telfonos y mails

INSTITUCIN TELFONO MODALIDAD DETRATAMIENTOFUNDACIN POR UN

MUNDO MEJOR

Argello

[email protected]

03543 -420805

- Hospital de Da/centro de Da.

- Consultorio externo

- Residencia/Internacin.


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ASOCIACIN PROGRAMACAMBIO

Crdoba

[email protected]

0351 -4732323

- Ambulatorios.

- Hospital de Da/centro de Da.- Consultorio Externo.

ASOCIACIN CIVILPROGRAMA DEL SOL

Crdoba

[email protected]

0351 -4743938


- Ambulatorios.

- Consultorio Externo.

REMAR

Crdoba

[email protected]

0351 -4234296

- Consultorios externos.

- Comunidad Teraputica.

- Hospital de Da/Centro de Da.

ASOCIACIN CIVILPROGRAMA ANDRS

Argello

[email protected]

03543 -420281

- Consultorios externos.


- Residencia/Internacin

ASCIACIN CIVIL NAZARET

Ro IV

[email protected]

0358 -154169374

- Hospital de Da / centro de Da.

- Comunidad Teraputica.


FUNDACIN CLNICA

DE LA FAMILIA

Ro IV

[email protected]

(0358)4635609

(0358)4639311

-Consultorio externo.

-Ambulatorios.


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Organizaciones Gubernamentales

INSTITUCIN TELFONO MODALIDAD DETRATAMIENTO

INSTITUTO

PROVINCIAL DEALCOHOLISMO Y

DROGADICCIN (IPAD)

Crdoba

0351 4342457 - Ambulatorios.


- Hospital de Noche.

- Residencia/Internacin.

- Desintoxicacin.

CASA DEL JOVEN 0351 - 3432431 - Consultorios externos.

ASOCIACIN DESPERTARES

[email protected]

0351-153927613

- Ambulatorio

- Centro de Da- Comunidad Teraputica

- Hospital de NocheASOCIACIN NUESTRA

VIDA

Crdoba

[email protected]

(0351) 481-04689

- Ambulatorio

- Centro de Da

PRO JOVEN

Villa Carlos Paz

[email protected]

(03541)15576959

- Ambulatorio

- Centro de Da


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Crdoba - Ambulatorios.

- Hospital de Da / Centrode Da.

HOSPITAL DE NIOSDE LA SANTSIMA

TRINIDAD

(Servicio de Toxicologa)

Crdoba

0351 4586455 - Consultorio Externo.

- Internacin.

- Tratamiento dedesintoxicacin.

HOSPITAL COLONIASANTA MARA DE

PUNILLA

Santa Mara

03541 - 489678 - Consultorio Externo.

- Internacin.


HOSPITAL COLONIADR. EMILIO VIDAL

ABAL.

Oliva

03532 - 428933 - Consultorio Externo.

- Internacin.


NUEVO HOSPITAL SANANTONIO DE PADUA

Ro IV

0358 4672935 - Consultorio Externo.

- Internacin.


HOSPITAL JOSANTONIO CEBALLOS

Bell Ville

0353 - 4421002 - Consultorios externos.

- Internacin.


HOSPITAL J.ITURRASPE.



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San Francisco - Internacin.

- Tratamiento dedesintoxicacin.HOSPITAL

PROVINCIAL RIO III.03571 439203 - Consultorios externos.

- Internacin.


DIRECCIN DE SALUDPBLICA DE ALTAGRACIA


- Ambulatorios.

CENTRO DEREHABILITACINSOCIO-LABORAL

Crdoba

0351-4342432 - Ambulatorios.

Hospitales Generales con servicio de Salud Mental

Institucin y Telfonos

Hospital Rawson Crdoba. 0351 - 434 8759Hospital Materno Provincial Crdoba. 0351 - 434 8761Hospital Trnsito Cceres de Allende Crdoba. 0351 - 434 2411Hospital Materno Neonatal Crdoba. 0351 - 434 8350Hospital Crdoba Crdoba. 0351 - 434 9010Hospital San Roque Crdoba. 0351 - 434 8918

Hospital Misericordia Crdoba. 0351 - 434 4110Hospital Peditrico Crdoba. 0351 - 434 6060Hospital Arturo Illia - Alta Gracia. 03547 - 429 282Hospital Santa Rosa de Calamuchita. 03546 - 426 681Hospital Domingo Funes. Villa Caeiro. 03541 489679Hospital Aurelio Crespo. Cruz del Eje. 03549 - 426 101Hospital Villa Dolores. 03544 - 426 415Hospital Pasteur. Villa Mara. 0353 -461 9115Hospital San Vicente de Paul. Villa del Rosario. 03573 - 424 706Hospital Abel Ayerza. Marcos Jurez. 03472 - 422 826

Hospital Pedro Vella - Corral de Bustos. 03468 - 423 368


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Hospital Ramn J. Crcano Laboulaye. 03385 - 453 242Hospital Vicente Agero - Jess Maria. 03525 - 426 703

Hospital Romagosa - Den Funes. 03521 - 426 223Hospital J. J. Puente - San Francisco del Chaar. 03522 - 497 930


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Anexo

Elegir la vida es mejor. Ante el creciente flagelo de la droga Lujn (Buenos Aires), 26 Junio 2011 (AICA)

El flagelo del consumo de drogas se va expandiendo como una mancha de aceite quebusca cubrirlo todo. As lo muestran estadsticas propias y ajenas, nacionales yextranjeras. No hace falta ir tanto a los libros o a Internet. Alcanza con mirar nuestrosbarrios, escuchar a los docentes, a las familias.

Las causas? Varias y diversas.

Por un lado, hay mayor disponibilidad de sustancias. Se pueden conseguir confacilidad. Desde hace ya varios aos los nios y adolescentes en general saben delugares en el barrio en los cuales se vende; algunos de stos tambin cerca de lasescuelas Si hay ms disponibilidad ms drogas es que ha crecido el narcotrfico.Es el resultado de menos control, ms sobornos, ms amenazas, ms traslado desoberana a bandas mafiosas que se aduean de barrios enteros.

Por otro lado, esto se debe al crecimiento nefasto de cuatro elementos ntimamentevinculados: delito - corrupcin - impunidad - tolerancia social; esta ltima favorece elaumento de la demanda.

Debemos aceptar la realidad que nos desafa y preocupa: el tema es conocido pero noest asumido por la sociedad en su conjunto.

La persona que se droga es vctima de un malestar que tiene que ver con el sentidomismo de su propia existencia, con el sentido de la vida. La sociedad tiene un doblediscurso: por un lado promueve la bsqueda de placeres fciles, de pasarla bien, deconsumismo, confundiendo a nuestros nios y adolescentes con mensajes equvocos; ypor otro, no brinda igualdad de oportunidades para acceder al ejercicio de los derechoselementales a la educacin, al trabajo, a la salud Muchos hermanos nuestros noalcanzan a gozar de la belleza de la existencia, y sienten que la vida vale poco, casinada.

La mayor tolerancia social se debe, entre otras cosas, a una disminucin en lapercepcin del riesgo que provoca el consumo de sustancias. Esto es el resultado demensajes poco claros cuando no mentirosos que afectan en particular a nuestrosadolescentes y jvenes, pero que inciden en la sociedad en su conjunto. Seamosconcretos: algunos dicen un porro no hace nada y no es cierto. ste es un mensaje

mentiroso. Si no somos claros, la tolerancia social termina hacindose cultura ynaturalizndose el consumo. Muchos se inician en este camino con la idea falsa de tener


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control sobre la droga, adentrndose en un laberinto al cual es fcil entrar pero muydifcil salir.

Otro ejemplo: se dice que la persona puede tener una conducta de uso, abuso odependencia, y que slo este ltimo es un consumo problemtico. ste es un mensajeambiguo porque, de una distincin cierta al clasificar el consumo (uso, abuso,dependencia) se saca como consecuencia que slo uno es problemtico; en realidadquienes hoy son dependientes pasaron por las otras etapas sin poder detenerse a tiempoy liberarse del uso y abuso; muchos de los que protagonizan peleas callejeras o dentrode los boliches y otros hechos de violencia, son quienes han usado o abusado. En lasguardias de los hospitales durante los fines de semana es donde se ve si el consumo fueo no fue problemtico.

Otra cuestin que cada tanto se plantea est vinculada a la despenalizacin. Tenemosque tener claras las ideas y las seales que se dan a la sociedad. Hablar de despenalizaras, sin ms, redunda en facilitar el consumo dando un mensaje confuso, que favorece latolerancia social y disminuye la percepcin del riesgo. Pero simultneamente hemos deafirmar que al adicto no hay que criminalizarlo, sino ayudarlo. Para nosotros ellos sonlos dbiles del Evangelio y, como haca Jess en su tiempo, los acogemos, losabrazamos, los acompaamos, les damos cobijo.

Pero con la droga no hay que dar pasos que faciliten su acceso y la hagan aparecercomo algo natural, porque no es natural que una persona deba drogarse para vivir.

La legislacin actual lo que pena es la tenencia para el consumo y establece unaserie de medidas para orientar el tratamiento de las personas afectadas. No se buscameterlo preso: se trata de curarlo.

Todo camino que oriente a la legalizacin de las drogas no es bueno. En los informesmundiales sobre drogas de las Naciones Unidas se rechaza sistemticamente estapostura y dicen textualmente que sera un error colosal terminar con la fiscalizacin delas drogas.

Sostenemos de igual manera que la droga no se combate solo con intervenciones de

ndole sanitaria y judicial, es necesario crear relaciones humanas ricas en valoresespirituales y afectivos, y hacia all orientamos nuestros esfuerzos.

La lucha contra la drogadependencia se gana con la educacin y la prevencin, yhacia all debemos direccionar nuestra energa.

La Iglesia, profundamente preocupada por esta grave situacin, hace susesfuerzos dentro de su propia realidad para contribuir a promover la vida en unasociedad libre del flagelo de las drogas. Se tejen redes, se informa, se invita a grupos deayuda y recuperacin, se habla del dolor y se lo transforma.

El sistema escolar la escuela constituye un mbito particularmente apropiado


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para difundir los valores de una vida sana y digna, vivida en libertad y alejada de laesclavitud de la droga.

Con la ley que promueve un Programa para la Prevencin de las Adicciones en todoel sistema escolar sancionada en diciembre de 2009 se ha dado un paso importantehacia la formulacin de una poltica que permita preparar a nuestros chicos para viviruna vida libre de drogas. Es ahora de vital importancia que la implementacin de la leyrespete acabadamente el espritu que llev a formularla.

Quin necesita ayuda? Sin dudas el que est preso o sometido a la adiccin. Perotambin las familias muchas veces desorientadas y sin contencin; en este mismosentido la sociedad ve que le estn robando la vida de sus adolescentes y jvenes, yqueda paralizada. Notamos una actitud seriamente contradictoria: crece la tolerancia

social al consumo, pero a los adictos se les tiene miedo cayendo incluso en una actitudexpulsiva. La drogadependencia es una enfermedad, un padecimiento que expresa ungran malestar interior psquico y espiritual, y que en lugar de generar compasin,muchas veces provoca rechazo, expresado habitualmente de modo hiriente yetiquetando: son ladrones, vagos, violentos, mataron a tal o cual. A ninguno denosotros nos gustara que hablaran as de un hermano, un hijo, un amigo, cuandosabemos la tragedia que significa para una familia tener un miembro que se droga.

No parece que quienes debieran dar ejemplos claros estn liderando la situacin.Esto se percibe en la escasa formulacin de polticas pblicas para asistir a los quepadecen la adiccin. Se genera angustia y desamparo ante la falta de servicios en

hospitales pblicos. El reclamo de una mayor eficacia en la persecucin del delito y laexistencia de deficientes controles fronterizos hace que se escuchen frecuentementesospechas sobre la vinculacin de los dineros del narcotrfico con varias actividades dela vida nacional. A veces pareciera que hay gente a la que no le interesa frenar el daoque se provoca, sino todo lo contrario.

Se promueve una exaltacin de supuestas libertades individuales sin hacer dao aterceros que revela, por lo menos, una falta de cercana con la realidad que padecen laspersonas que se drogan, en especial los ms chicos y los ms pobres.

En sntesis, faltan mensajes que expresen con claridad y absoluta contundencia: no

es bueno que te drogues, vos pods vivir una vida libre y digna, alejada de la esclavitudde la droga.

Es de fundamental importancia que los organismos del Estado en todos sus nivelesmunicipal, provincial y nacional desarrollen acciones concretas para promover losbeneficios de una sociedad libre de drogas y que al mismo tiempo ofrezcan espaciospara la recuperacin de quienes han cado en la adiccin.

Este domingo celebramos en toda la Iglesia la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre deCristo. A l lo adoramos en la Eucarista, y a l mismo le servimos presente en nuestroshermanos que sufren.


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www.pastoraldeadiccion.org.ar- [email protected] i 17 d 17

Nuestra dedicacin a esta tarea pastoral est vinculada estrechamente a la opcinpreferencial por los pobres. El mismo Jess quiso juzgar la autenticidad de nuestra fe enel amor que tenemos a los hermanos.

El 26 de Junio ha sido instituido por Naciones Unidas como Da Internacional de laLucha contra el Uso Indebido y el Trfico Ilcito de Drogas. Reunidos en Lujn condelegados diocesanos de Pastoral de adicciones de todas las Regiones del Pas,renovamos nuestro compromiso en el servicio a la vida. La vida es un regalo de Diospara la felicidad. Todo lo que nos esclaviza y oprime es contrario al Plan de Dios, quenos ama de verdad.

Al Santuario de la Virgen de Lujn peregrinan multitudes de jvenes y familias cada

ao. A su cario de Madre, a su corazn que comprende todos los dolores, confiamossus hijos ms pobres y afligidos.+

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