Los límites de la conciencia. Ensayos contra la sociedad tecnológica Juanma AgullesEdic. El Salmón 7 €

De los filósofos estoi-cos romanos, Epic-teto es sin duda el menos conocido. A

Séneca y Marco Aurelio se les ha glosado más, pero a él, salvo la edición de su Enqui-ridión (Anthropos), un breve resumen de sus enseñanzas orales, las famosas Diser-taciones no se han vuelto a reeditar a un precio asequi-ble y solo disponemos de un libro sobre su pensamiento, Epicteto y la sabiduría estoi-ca (Olañeta), de Jean-Joël Duhot. Así que se agradece que Paloma Ortiz nos pre-sente ahora esta antología de los mejores fragmentos de las Disertaciones.

Qué cuEnta

Epicteto insiste una y otra vez en que lo importante en un filósofo no consiste en sa-berse de memoria la doctri-na de sus maestros, sino en ponerla en práctica en todo momento. El filósofo debe entrenarse duro para vivir según los principios que en teoría profesa. La muerte

de un hijo, el destierro, la bancarrota, la enfermedad o la vejez son pruebas que nos pone el destino para que nos templemos en ellas. Para conseguir la deseada imper-turbabilidad, el filósofo de-be someter sus opiniones a un férreo control, pues son ellas las que nos hacen su-frir y no las cosas en sí mis-mas. Lo fundamental para Epicteto es que aprendamos a distinguir lo que depende de nosotros (nuestras ideas de las cosas) y lo que no (casi todo lo demás).

Por Qué hay QuE LEErLo

Ante cualquier cosa que nos impulse a la tristeza debe-mos decirnos lo siguiente: “No es que esto sea un in-fortunio, sino que el sobre-llevarlo noblemente es una suerte”. Ante las adversida-des, debemos recordar que “las circunstancias difíci-les son las que muestran a los hombres. Por tanto, cuando des con una di-ficultad, recuerda que la divinidad, como un maes-

tro de gimnasia, te ha enfrentado con un duro contrincante”. El filósofo estoico debe mantenerse, en todo momento, “en guar-dia frente a sí mismo como si se tratara de un enemigo y un conspirador”. Si quie-res saber cómo encaraban los estoicos los reveses de la vida, este es tu libro. No encontrarás mejor libro de autoayuda filosófica.■ Gabriel Arnaiz

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FH

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Los límites de la con-ciencia. Ensayos contra la sociedad tecnológica, de Juan-

ma Agulles, despliega su contenido utilizando co-mo alimento la estela de Mumford, sin evitar, y lo celebramos, la suma de otros ingredientes, de otras referencias, y por supues-to, el hecho de que Juanma es contemporáneo nuestro y la fuerza de su propia ca-pacidad reflexiva.

Qué cuEnta

En el dintel de este libro en-contramos dos citas, y en una de ellas, la de Camus, brilla de forma especial este fragmento: “Cada genera-ción, sin duda, se cree des-tinada a rehacer el mundo. La mía sabe, sin embargo, que no lo hará. Pero su ta-rea quizá sea más grande. Consiste en impedir que el mundo se deshaga”. En menos trazo no cabe mayor declaración de intenciones, y el reto propuesto no es

ninguna abdicación en mí-nimos, porque el animal con el que nos enfrentamos, esta sociedad tecnológica, es una hidra de infinitas cabezas y aprender sus movimientos, sus deseos y sus debilidades, es una tarea titánica, a la al-tura tan solo de la de hacer que su corazón se pare.

Por Qué hay QuE LEErLo

La mirada crítica de Agu-lles tiene como fin atentar contra lo que él denomi-na sociedad administra-da: “La vida administrada, es el resultado del proceso de industrialización y de la consolidación de la Técnica

y del Estado como realida-des opuestas a la sociedad”. Cada artículo que compo-ne esta obra es un ataque

contra ella desde diferentes flancos. Así, escribe Agu-lles: “El imperio de los tecnócratas conduce a un totalitarismo encubierto, que se cree capaz de im-poner su criterio sobre los riesgos y los sacrificios que todos debemos asumir pa-ra mantener el actual or-den social en beneficio de unos pocos”, y no se puede expresar de forma más ro-tunda lo que el programa de esa vida administrada esconde. Y ese “sacrificio de todos en beneficio de unos pocos” será la pie-dra de toque interpreta-tiva que guíe este ensa-yo, y que dará especiales frutos en la reflexión que el autor despliega a propósito de la crisis vivida. No será el único acierto de Agulles, y podemos decir que cada artículo guarda una llave relevante para compren-der mejor qué eso que él ha denominado como ‘vi-da administrada’. Es un gusto topar con li-bros así, libros que conti-

núan una tradición de pen-sadores que es tan potente como fecunda, y que, en definitiva –ya lo decíamos en la reseña sobre el libro de Mumford–, que se en-frentan conscientemente al estado del mundo en lugar de refugiarse en las múlti-ples maneras que el ser hu-mano tiene de evitarlo.■ Gonzalo Muñoz Barallobre

¡Tenme siempre a mano!

Manual de vidaEpictetoAriel12,95 €

Rehacer el mundoSiguiendo los pasos de Lewis Mumford (pág. 46), Juanma Agulles se lanza a una dura crítica contra la sociedad tecnológica, un ataque desde todos los flancos hacia ‘la vida administrada’, llamando a la acción del lector frente a la suave indiferencia de nuestra zona de confort.

Se publica una antología de las «Disertaciones» de Epicteto, el menos conocido de los filósofos estoicos romanos. Una obra amena llena de sabiduría práctica con la que alcanzar, si no la felicidad, sí la imperturbabilidad de ánimo.

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