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(0) Ediciones de 'la Revista Notarial del Colegio de Escribanos de la Pcla. de BuenosAires. Reproducido con autorización de la autora.

Caprtulo I

PRECEDENTESHISTORICOSLa razón por la que denominados al presente capítulo Precedentes

HistóriCOS y no Antecedentes Históricos, la basamos en la circunstanciade que, al efectuarse la reforma de nuestro código civil en virtud de laley 17.7H que, Incluye la prodigalidad como causal de Inhabilitación den­tro de la normatlvldad de dicho cuerpo ,legal, los legisladores no han te­nido en cuenta aparentemente de ningún modo al Derecho Romano, sino

Cap. VI: La actitud del notariado frente al pródigo.

Titulo 3-1: Francia; Titulo 3-2: Italia; ntulo 3-3: España; Titulo 3-4: Alemania; Titulo3-5: Suiza; Titulo 3-6: Perú; Titulo 3-7: Brasil; Tftulo 3-8: Venezuela; Titulo 3-9: Chile;

Titulo 3-10: Paises Varios.

Cap. IV: Derecho Internacional PrivadoCap.' V: Análisis de distintos supuestos práctiCOS con respecto a los cuales la ley

guarda silencio.

Titulo 502 Asentimiento por poder; Titulo 5-3: Acto realizado sin el asentimiento delcurador.

Cap. 111:Leglalact6n comparada

Titulo 2·1: Situación jurldlca antes de la reforma de la ley 17.711. Titulo 2·2: El artIculo

152 bis del código civil incluido por la ley 17.711. Titulo 2-3: Concepto de prodigalidad.

Titulo 2-4: Requisitos necesarios para la procedencia de la declaración de Inhabilitación.

Titulo 2-5: Régimen jurfdlco aplicable a los pródigos. Titulo 2-8:, Curador. Titulo 2~7:El proceso de Inhabilitación de los pródigos.

Cap. 1: Precedentes Históricos

Cap. 11:Código Civil Argentino

SUMARIO

HGlMEN JURíDICÓ DE LÓS PRODIGOS (*)Por

Ana Raquel Nuta

(1) Digesto, libro 27, trtulo 10, ley 1. .. ....(2) ,ARANGIO·mJlZ.. VJCENZO. l,..tilUCloi.. de Detedl() lmInMO, pág. 561 y "g.(31,PAUlO.Sentandup Jibro ..JII....tülllo:.4 .... ..lJI.PIJlINQ.I~ •• :

que más blen s8"haft,od8ntf1do: hacta-las:-dlsIDBicb"_.qae Integran laslegisiaciones de distintos países en el derecho moderno.

El Derecho Romano conoció la institución de la prodigalidad; asl lee­mos en el Digesto que M si 108"pretores-'huf*éren hallado un hombre queno tiene tiempo ni fin para los gastos, pero que consume sus bienes des­trozándolos o disipándolos. darle un curador del mismo modo que a unloco" (1).

De este párrafo puede Inferirse en primer lugar el concepto que losromanos tenían del pródigo, como '8q!Jetla-persona que disipa descontro­ladamsnte sus bienes y además su asimilación al furiosus sometiéndolocomo a este último a una curatela.

El más antiguo de los curadoees,"cuya.exístencla es conocida por lasDoce Tablas y probablemente también por lo costumbre que la precedió.es el Mcurador furiosl".

Con respectoala ·.c.ur.a..prod"it~ laa Doce rabias estaWeda~:q_ tt:un ciudadano que tuviera hIjos dilapidase los bienes heredados.del.padre.o de{ abuero. taflfa ·qtJe"perder·su df~ponlbllidad, atribuyendo la admínle­tr.ación de ta1ea.b1eaes,& Jos ~se,. a f'IIlta:tde ~-'8 ,_~ .. stf-.'.

El tránsito de los bienes paternos o heredados del' abuelo S' te ad­ministración del curadorvse, cumplía, madiante: .una solemne Interdictopronunciada por el magistrado jusdiscente, de 'Ia cual nos ha llegado lafórmula: Ouando.tiblhona,w.tacna·av .... e"mequlda .. ldi8prrdls;I .... 'que .tuos.act.atestatem. -peatuGÜl), .011;.88111 :,....., ,tIM .. ""'COIIIIDercIO'que Interdicto (2). .

Por ende. puede deductrse. qu&~.en.,.eJ.~r.9tme'L'fIe las' Doce Tablassolamente se considera pródigo' al que desJ)i1fara'los bienes. de la f8ml:,It,a.¡()lse&:1los;:nered$toe1-de....tb~"atemo-o.,del·padte. los, .... patetneavitaque, según versión de PaulOc'Urpiáno~).

De' elto se desprende que no estaba sometido a eurateJa el q~­sipaba los bienes provenientes de otro .ori~.

Posteriormente se amplió el ámbito de la Interdicción a todos losbienes. cualquiera fuese su procedencia. e incluso contra el disipadorque no tuviere hijos.

Respecto al régimen jurídico podemos decir que el pródigo quedabeincapacitado (incapacidad de hecbo).WlI'&:realizar todo tipo de negocio ju­rídico y actos de disposición de su patrlmonlo •.

Aunque se asimilaba eU:urator prodigi al curatofl fudosi¡,.tal &ümil¡·tad quedeba' desvtrttJada- 'por' tas 'dlsth1t8s facultades.que ..el.J1§g,inau:.JeiII(.;oror,pba-'-81 pródigo y -al fUrIosus' o' loco. ,"'.'

Natur.alment-e-.queen ei:derecb()::r~"no se ~~Iestado Iir-

(4) Conf, ARÁNGIO~!Rutz;'obr; 'CIt.. '~MB!J"rfERRO JeBE M, ,~,,,,,,,,'.. Ito................ .(5) FUSTEL DE C~Ut:iANGES, lit·dudád" 1lIftIga, .pág. ~98'y"Sfg;

termedló entre la alienación y el pleno goce de las facultades mentales.Sin embargo, como muy bu~~ __ , :_¿,judstelt'f'.O"'an&B~¡íñfJA)nintuir. una .cierta ¡graduación .dentro ael..ámbito·,.g&R8l'aJ..... lasr:enferme-dattes mentilles. ' . .

,ilLo.:ae.t.8videaoiet·por' euaf1't&facuItaban:11 reaHzar:at·pr6di:go Cfertosactos vedados al loco o furiosus.

-.En, el· dateobo:..dásicOy·;eI pródigo podía:ceLebuFvaqueitoa .actos que~JDPAiH1Man-Uf»~.a.p8ra su patrimonio, en .cambio,··te&:..stában prohl­:hldoa-.:UKI!J&>los que .'aran:;tma (eftBjenación o· bien coatraer 'obliga­oieae.s.:eMles,u Raturales', salvo Jas':que fueren 'ajenas' 8':·su'v.okmtad.

'No pedlan testar váttdamente' Jos pro'digos int~ctos, y' al respectonos dicen las lnstltutasrde Justhiiano: Tampoco puede hacer testamentoe':~o,:a!C,uten lel astá:'prohfbida fa adrntmsttaCiónr'de'susl btenes: mas_,.vet.iGlo 4tkqU8"~; heehe 'antes .de·qoe' se' ~t1Ubler8"l'\festo entre­dicho en sus bienes.

'.8 e.urator. pl'ÓdiOI, '!aHgual que 'el'curator runosl, :permaneeen en elOIIJ.';tO,mieJltl_ subsistan· h1s causales' origerr de "sU"nombramtento. SI.JHan._.l ..... .,..."em.....".,I2t',cesaclOrrdebió:ser·-decUir.sda:poref·magls­.~~p~..te~·evoIuoibnó-, IeYantlinl'lGselipitonjur..'1I1mtftfiatamentedesaparecidas las causales que orighlar'mt:úlcha'~p~ttva,' comoera Ia desl,9n8c.ión.del_curador .

.-Amilo&. __ res, reepmyclen·frei.lte.'8'hrpersona, UI:Jerada< de:1S"C\lfa­tela o ante sus herederos.ceen ¡una (aetlo ~um~uttlls, ''qUe "se' dIs­tingue .deJa.aCCión.nor.ma! .en ~uanto,pneSIdflOOA•..tma;:ge&tión 'DO cvolun­tallA.Sino 1l1)llU8sta..como ..deheres deJ .oar.go.; y" hacen ,·valer lasdtvenf:Ua­les :.pretenSiones .dé.,lndemniz.ación .con l.Iil.,iudlalual.cGntrarialn·,.tamDiénútU (41. . . '

SlntetlzandQ, en . .el derecho rOI1l8AO" JlIa8. encootNdamoa fll8BÜL8 per­sonas que detentando Jos tres status (status- IIbertatis,.·,status·.dvitatls y.tatus·famnJ8S), es declr ...slendo. capaces de. deteooo.'1l9l' .pacd.eGer. de'...guna alteración mental (en este caso la prodigalidad), estaría afectadapor una Incapacidad de hecho y sometida a interdicción, similar a la delloco o furiosus.

En realidad la propiedad no se concibió al principio como un dere­cho individual, sino CO.molun :cferecho ~ (farilifia. la fortuna pertenecía,como dice formalmente Platón y como dicen implícitamente todos losantl.1IIO&:,Ieaislád_s.."il,loa ant~pas8dos 'y 'a~,kis ~d.es&eridteñtes.. Por sunaturaleza misma no se dividía esta propiedad. Sólo poqía haber un pro­pietertoterrtCítdadamtBa¡.'que,'era:ta fatm'1Jamisma, Y'Uff fJsirfructuario:ekpadl'eftsJ. .' . .

CorrK)'ventOs,:este principio explica el porqué'de la Instituctón de laprQdJ.gaUdad _lst,"'_ho romano,)J8'.qtJ& tndUdáblementec, éf'"aijre noara :due60a:Jím•• lf8n_da~fottura'famUJ.ar, Se't1'ataba,"sftlltlg8r a''dudasde~AIIIIá::iBCtusWR mUy '~rente co", todo el fégimEtril·'páti"imonf8l.

No .sucede lo mismo dentro del sistema de nuestro código civil,

(6) ESCRICHE.JOAQUIN. Diccionario razonado de leglalllCl6n '1 lurt.prudencI.. Paria,México, 1925.

(7)SALVIOLl, GIUSEPPE,Stor)a del dlrltto italiano, Turrn, 1930, pág. 438.(8) SAUX ACOSTA. EDGARDO,Loa pródlgoa, •Revista de etenolas Jurldloas y Socl.

les", Universidad Naclo~1 del L1tor!lI,Santa' Fe, 1~ ~ma;, 82/85.62

Título 2-1: Situación Jurídica antes de la reforma de la ley '17.711.

Nuestro código clvU no Incluía la Institución de la prOdigalidad apar­tándose así no sólo del derecho romano, sino también del c&:Ugo 'ctvilfrancés y de los códigos americanos y europeos existentes en la época.

Haciendo caso omiso de todos aquellos antecedentes, Vélez: Sér8~field en la nota al artículo 54 se expide claramente' en centra de' fa i~clusión de los pródigos en el régimen de incapacidad del meñclonadó

CODIGO CIVIL ARGENTINO

Capítulo 11

como vamos a poder apreciar más adelantEn el antiguo derecho español encontramos también la Interdicción

por causa de prodigalidad, pero para poder declararse la misma, previa­mente debía Justificarse que una persona malversaba su patrimonio enperjuicio de su familia (6).

Surgen como vemos dos condiciones para la restricción de '11 capa­cidad: 1) la existencia de la familia. No se determinan grados ni ramas,de parentesco, lo cual permite una crítica en cuanto a la vaguedad delconcepto por la amplitud que del mismo se desprende. Indudablementetanto la doctrina como la Jurisprudencia debieron suplir este vacfo. 2)que los actos realizados perjudiquen a su familia.

En las Leyes de Partidos se trató al pródigo Igual que al alfenado,enumerándose una serie de actos, contratos, profesiones, que no podfarealizar o desempeñar. .

El derecho Intermedio francés como así también el derecho estatu­tario italiano consignaban disposiciones respecto del' pródigo, aunqueeste último derecho era mucho más severo porque la InterdiCCión. ade­más de ser proclamada públicamente en las iglesias y lugares adecua-dos, Implicaba también la prisión (7). ' -,

Esto no era sino el reflejo del período que se vlvía por la tndeterml­nación del origen de las enfermedades mentales, confundiéndolas con losposeídos por fuerzaa malignas o demoníacas.' ,

En el derecho Intermedio francés no se lo asImilaba al pródigo ponel allenado. Precisamente Pothler no los consideraba como, a en~ermosmentales sino como a "personas que saben lo que hacen", arendo'por fatanto responsables de los daños ocasionados por 108 actos mcltos.

Además los contratos hechos por el pródigo. anteS ~e .Ia,'declarac;ló~_de la InterdIcción, eran válidos, a diferencia de lo que ocurre cuando la,incapacidad se debe a la enfermedad mental (8).

(9) LAGOMARSINO.CARLOS A. R.• Los pródigos en l. reforma del c6d1go civil, "ElDerecho", 23-903.

(10) COLMO. ALFREDO~Conferencia: .EI c6dIgo civil en su cincuentenario, leccIones yensayos. Fabultad de Derecho. Buenoa AIres, n' 12, p6g. 88.

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articulo. diciendo que no. se los debe sujetar a Juicio n1 someterlosa Interdicción.: Según lagomarslno. pocas notas del código civil. evidencian comoésta la tendencia 1ndlvidualista vigente en la época de su redacción (9).

Nosotros. en lugar de exponer las razones por las que Vélez Sárs­fteld adopta tal postura, no encontramos nada mejor que proporcionarlos fundamentos que él mismo expuso con meridiana claridad, trans­cribiendo textualmente sus palabras en la citada nota del articulo 54:"las razones de esta resolución son: 1) que la prodigalidad no alteralas facultades Intelectuales; 2) que la libertad Individual no debe serrestringida, sino en los casos de interés público, Inmediato y evidente;3) que en la diferente manera de hacer gastos inútiles que concluya unafortura, no hay medio para distinguir con certeza el pródigo del que nolo es, en .el estado de nuestras costumbres. y todo será arbitrarlo enlos jueces, poniendo Interdicción a algunos. mientras quedaban Innu­merables disipadores, y 4) que debe cesar la tutela de los poderes pú­bllcos sobre las. acciones de los particulares. y ya que no es posibleponer un máximum a cada hombre en sus gastos, el que se llamasepródigo habría sólo usado o abusado de su propiedad, sin quebrantarley alguna-. ,. Nuestro codificador cita el articulo 4413 del Código de lousiana

que dice: ·L~ Interdicción no tendrá lugar por causa de disipación ode prodlgalldad-. En base a dicha cita muchos autores han sostenidoque la base de dicho criterio fue el Código de Lousiana.

Nosotros por el contrario. sin restarle importancia. consideramosque la principal fuente de Vélez Sársfleld se halla plasmada en la pos­tura sobre el particular de Freltas. en su Esboco. en el cual también re­pudiÓ dicha Incapacidad.

Freltas con argumentaciones análogas. que lúego dio Vélez Sárs­fleld, habra establecido que en la prodigalidad no hay alteración de fa­cultades mentales, que la restricción. de la libertad sólo se concibe encasos de eminente necesidad, que es dlfrcil establecer un criterio quedistinga al pródigo del que no lo es y que el arbItrio serra grave y peli­groso.

El criterio adoptado en nuestro cédleo civil fue objeto de severascriticas por parte de la doctrina, aunque debamos reconocer Queha con­tado con el beneplácIto de otros autores tales como Alfredo Colmo (101.

Las opiniones adversas sostuvieron que Vélez Sársfleld se hablaInclinado por el aspecto económico en su fundamentación, dejando delado los criterios no sólo de protección familiar y de la persona mismadel pródigo, sino también. las teorías sobre patoloqla psfqulca que au­toriza a- sustentar casos fronterizos o marginales que no llegan a serexactamente el..de un demente.

En base a dichos criterios. los provectos de reformas del códigocivil previeron la situación de los semlallenados.

(11) Actas,. Segundo Congreso Córdoba, * 113 y. sjg.(12) LLAMBIAS, J., EnMlo •• la- ........ ,4Iel,06cQg0 ~ '.J~2'h711"","',J-.aIg.64

El anteproyecto de Blbllonl permitía la Interdicción. no, sólo ·de los~enfmmos mentales- sino tambfén a Jos- '-cfébile& de··-espftltú·, -aCfe­randa en la nota al artículo 140 que no era su Intención eetáfsleeer'd08'estados, eseocialrnente"distlQtGa smo simpleaelltl8í. __ ' dOa,.ado~diferentes dentro, de, la var.iedad ,que puede ·pr. __ .. '.fIn' 1&'19............de la enfermedad mental.

Al incluir.a los -débiles fIe.--espíriW- quiso ~rrd& -~8' _­Rerarrespecto-a 108' semiaUenados. Tal ineluafón,l.sHt=ernllt8t!go:qtJeqsu~ser conslGerw.la .como una, posiekJn,.de .Wtnguardkt~;petac'_~éprJca, [(vemás de forma qu& de fondo, por cuanto 'splicaltlh ...,t_s, ~doB 'Osemiali.enados) el sistema de' interdicción am¡!)lio. '

El proyecto de la Comisión Réformadora delqif\orf~6,-·sl~0 fas1tneamlentos del Anteproyecto de lJ1bUont,' trata, de' '~ere,. la ''PoSiciónde éste prevJntendo fa poSlbllfdad de apllcaofón'por el' JÍJezde un ',~g,­'men de semUnterdfcefón, pero no aclafó dfCho "'gfmen 'como' tampocoque éste habfa 'sIdo 'espeelffcamente creado '-para "ser 'apllcado '8 lbssemi alienados.

El desencuentro entre fas conceptos de sernlátlenacfón y semllnter­dicción es ID que motivó nuevamente .serlas. criticas. ademáS por, nohaberse expedido en forma concluyente por la Inclusrón de' la '~prodl­galidad.

Sin embargo, el Segundo Congreso, Nacional de 'Oereébo CiVJJ, rea­lizado en Córdoba en el año 1937 recomienda e~presamente.,la .no I"efu­slón del pródigo entre los Incapaces, pese a las, posiciones' termInantesde algunos partidarios de dicha Incorporación, entre elfos él "Dr. AlfredoOrgaz_Tf1}. , .

Por su parte. el Anteproyecto de código Civil de :1954' :esta6-lece;ensus artículos 94 y 97, un régimen de inhabllltaélóÍ\.parcJIiCAsf: '.") ..lc:J8que, por su prodigalidad. embriaguez habitual, uso 'de 'estupéf~ér$ntes ograve desarregJo .de .conducta. ~usfera' a 'su ~fi!rñl1ta':ti 'Cftr -en.Ta' lndl­gencla; -2") tos 'sordomudos y fos degos _qtJe"l'lOlf1úftfe,,," 'reéft)fdo unaeducación súflc1ente ~y' los em.erm08' y' dMllJes merttáles' 'q(Je"é1 jUez 'es­time lnaptos para dirigir eus acctones en' ta -vfda '~ha''il "'ael"~·ciclo (fe su pfena cepaetdad' pudiere resultarfes presbM'l&te¡11et'\iW·jfij(ii'ldaño".

Al decir dél 'Dr. Llarnbías ~e trata de una, pJ.C)t~n ~rtgfda prln­clpalmente a .la famlfia del Inhabilitado para Itnpeij'r~a,·t!~ 'que 'e80geel mal de aquellos a quienes debe protección y arnparoTr2).

, No pademos deJar'de mencionar dentro de' 'os '8nte~8ntes, 'té, ,PO~nencia conjunta de los Ores. Borda y tlambfas presentada en eI"'~~Congreso NacIonal .de. Derecho ClvH, y el despaCfro'~ (fa 'comt$'f6n .1'ft­pectlva, según el cual'· el régimen de Inhabilitación o de"semfeapaéldades el medio técnico escogido por el dereCho ;coittelllPoJí~ieO' para sU..plir las deficiencias psíquicas que adofecen ctertas "personas médica­mente norrnales~"Ctnlndb esos defectos pueden ,traddOttse>eA perjotclospatrimoniales para el St:Jfetoy consecuéntémente para ,ta famlUa. 1'.am­bién funciona como remedio, en el orden Jurídico de ciertos hábitos vi-

(13) Tercer Congreso Nacfonal de DereCho Civil, 1962, Córdoba, tomo ti, ~. 729 y slg.(14) UAMBIAS, obri citada. .

é5

olOIPI que,~ ~CMlducJra la mlse.rle·. (1-3).El Dr. lIambfas expresa que por falta m$terta1 de tIempo no' fue

considerado por el Congreso, pero que por la .orlentac.!.6nmanlfestedaen los debates por sus Integrantes, DO dúda de qUe. babda sido.apro­'bado (14).

:' NO$ p,aflnlílmos r:ealizar .una pequeña c:rfta.· lB .ellcho,'de..,achocuando se refiere a personas con algwta deficiencIa -pa(qulcapero """dlcamente normales. Consideramos que desde el punto de vls~ de lapalCépatólogfeelJo indica una evidente contl'adlcctón, pues nlngíin perl­tO médico pslquletra o psicólogo puede encontrar MftOi_- a una por­aona con alteraciones mentales tales que no s610 evidencien una auto­destrucción en el sspectc patrtmonlal sino una evidente agresión en esemismo campo- hadla .su familIa.

Es Importante destacar que el consensoprevIo a lá rei.onna.eracasiunánImeen el sentido de que existía una laguna Jurídica entre el régi­men de la capacidady el de la Incapacidadestablecida fJEJJ' VtHez Sárs­fleld, y de la necesIdad de cubrir ese vacío aglutinando baJoun ordennormativo -quepodría ser llamado de "-lnhabllltacI6n·, una serie de caeosfronterizos hasta ese momento legalmente IgnoradoS.

Título 2-2: El Articulo 152 Bis del Código CivilInclurdo por la ley 17.711.

la InsercIón de este $rt(culo en nuestro ordenamiento legal. ha re­ceptado la. corrIente predomJnantedentro de las leg1slaclgnaamoder­nas.

El Anteproyecto de 1954 es el antecedente nactonal Inmedtato. porcuaRto acona&feba--come vtmos anteriormente- le· Inclust6n de unrégimen de Inhabl"tacl6n o de semlcapacldad.

Pensamosque antes de examinar el .referldo artículo 152 bis, nopodemos dejar de mencionar la reforma de un artt.culo que, por su ca­herencia arm6nlca con aquél. se halla InterrelacIonado.. Se trata del articulo 141 que dice: -Se declaran tncapaces por de­mencia, las personas que por causa de enfermedadesmestales no ten­gan aptItud para dirIgir su persona o administrar sus blenes".

ConsIderamos plauslble la actualización de este articulo edecuán­dolo a las nuevas corrientes psicológicas, por cuanto- la dinámica enque se desarrolla el estudfo de la .pSicología,permite el descubrImientodía a día de casos dIstintos a los que se atribuyen rótulos que puedenser cJrcunetanclalea,1M) iNSloen cuanto al encuadramiento del eenluntede sfntom8a, lino también por la mactuallzaolón en que ,pueden caerpor QI transcurso del tiempo, con el avance de la8 tnvestlgaCIonesenese terreno.

Oesde la óptica Jurídicano podemospermItir ver petrificado nuestroderecho (tal como ocurría con el artículo 141 antes de la reforma), porconceptos constreñfdores o, por el contrario, condenarlo 8 sucesivas

reformas para adaptarlo a la plasticidad que Indlldábiei'nente tiene laInvestigación pslcopatológlca.

El nuevo artículo deja un amplio margen de criterio a los peritos,médicos y psicólogos, para establecer si la enfermedad mental (cual­quiera fuese su denominación) es de tal. Importancia para producir elefecto que prevé la ley, vale decir, si el Individuo es Incapáz de dirigirsu persona y administrar sus bienes. .

Indudablemente, el criterio que subyacentemente ha prevalecido enla reforma --en los artículos que mencionamos 141 y 152 bls-. ha sidoel de actualizar las normas legales en este sentido; en el caso del pri­mer artículo estableciendo una noción general de continente y delendeen manos de los peritos correspondientes determinar la noción de conte­nido, y en las del juez, si a esta determinación le es aplicable la normalegal pertinente. .

En el segundo ejemplo, el del arto 152 bis. incorporar un sistema.no de Interdicción propiamente dicha. sino de • Inhabilitación • a ciertossupuestos que a nuestro entender. sí son casos de alteración mental. yllenando de esta manera ese vacío legislativo a que hicimos menciónanteriormente.

Así nos dice el artículo 152 bis: "Podrán Inhabllltarse Judicialmente:19) A quienes por embriaguez habitual o uso de estupefacientes esténexpuestos a otorgar actos jurídiCOSperjudiciales a su persona Q patri­monio; 2'1)A los disminuidos en sus facultades cuando sin llegar al su­puesto previsto en el artículo 141 de este código. el Juez estime quedel ejercicio de su plena capacidad puede resultar presumiblementedaño a su persona o patrimonio; 3'1) A quienes por la prodigalidad enlos actos de administración y disposición de sus bienes expuslese ti sufamilia a la pérdida del patrimonio. Sólo procederá en este caso la In­habilitación si la persona Imputada tuviere cónyuge. ascendientes o des­cendientes y hubiere dilapidado una parte Importante de su patrimonio;La acción para obtener esta Inhabilitación sólo corresponderá al cónyuge.ascendientes y descendientes. ..'.

•Se nombrará un curador al inhabilitado y se aplicarán en lo perti­nente las normas relativas a la declaración de Incapacidad por demenciay rehabllltaclén". .

•Sin. la co~formldad del curador los Inhabilitados no podrán dtspo­ner de sus bienes por actos entre vivos" .

. "Los lnhabllltados podrán otorgar por sí solos actos de admlnlstr~clón, salvo los que limite la sentencia de inhabilitación teniendo encuenta las circunstancias del caso". . .

Cabe aquí reflexionar sobre el aspecto de..carácter tultlvo que pre­tendieron .imponer los legisladores. aunque limitándolo al ál11blto.de lafarnllla, y dentro de ésta. a los herederos forzosos 'Iascendlentea, des­cendientes y cónyuges). . .

Es indudable que los autores de la reforma del año 1968. han tra­tado. de- romper en este aspecto.'la: estructura de corte netamente lndl­vlduallsta, como lo examinamos precedentemente. del oodtflc8dor~ enSEi

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(15) Diccionario EnclclopMlco Espesa Calpe.(16) Tratado práctico de Derecho ClvU Franc6s, tomo 1, pág. 679 Y slg.(17) SPOTA, ALBERTO G., obra citada.(18) LAGOMARSINO. CARLOS A. R., Prodigalidad, Enciclopedia Jurfdlca Omeba, tm. 23,

pág. 419.(19) BORDA GUILLERMO A., La reforma del código civil. Inhabllltacl6n. '·EI Derecho·

27·10-1969. tomo 29.

Trtulo 2-3: Concepto de Prodlgallda~

El Diccionario Enciclopédico define al pródigo, del latfn prodlguscomo: disipador, gastador, manirroto, que desperdicia y consume suhacienda en gastos Inútiles y vanos, sin medida, orden ni razón (15).

Plantel y Rlpert 'entienden que e.1pródigo es el' que por desarreglomental o de costumbre disipa su fortuna en gastos tocos (16). ,

Por su parte Spota considera que pródigo es el. que por la mani­fiesta y reiterada tendencia a la disipación de bienes se pone en peli­gro de caer en la Indigencia y en su caso, de hacer peligrar el sustentomaterial y moral, que, como jefe de hogar, debe a su familia (17).

. Lagomarslno entiende por prodigalidad la conducta que observa elpródigo y por pródigo a la persona que disipa sus bienes 'en forma irra­cional y en detrimento de su patrimonio (18).

Borda expresa que se trata de personas que malgastan Irrazonable­mente su fortura, en una medida que las exponen perderla. Muchas ve­ces en el fondo de esta conducta imprudente hay una verdadera fallamental, bien que no alcancen los caracteres de una verdadera demencia,pero aunque así no fuere, lo cierto es que el pródigo revela una falta deaptitud para administrar libremente sus bienes. Es .lógico por lo tanto.que la. justicia Intervenga para protegerlo a él y a su familia, tanto másque cuanto con frecuencia estos débiles de espíritu o de carácter suelenser víctimas de personas que aprovechan de su modalidad para despo­jarlos de su patrimonio (19).

. Largo sería enumerar autores y definiciones que sobre pródigo yprodigalidad se pueden verter en el presente trabajo, sin embargo, re­sulta oportuno recalcar, antes de admitir tal o cual definición de la doc­trina o legislación, que la coincidencia se encuentra en que se trata de

el supuesto de que estuviera en peligro la estabilidad patrimonial de losherederos forzosos componentes de la familia. .

Sin embargo, sostenemos que ellos no quisieron o no se atrevierona llevar la reforma hasta sus últimas consecuencias al Incluir la. dife­renciación entre los miembros componentes de la familia, e Incluso,nuestra crftlca se torna más severa en razón de que han olvidado quedetrás de la definición jurídica que de prodigalidad podamos dar, .se en­cuentra un alterado mental que es la persona misma del pródigo, y aquien el Estado le debe protección, como acertadamente 1.0 han contem­plado en los Incisos 1~) y 2~) del artículo en examen, para supuestosdistintos de inhabilitación. . ' .

68

(20) BORDA, GUILLERMOA., obr. el....

Conforme 8 nuestro código dril los requisitos

Título 2-4: Requisitos necesarios para la procedencia de laDeclaración de Inhabilitación

un problema de actos irrazonables que afectan el patrlmonto,1:' 'f' .•<

Surgen claramente; t~Qt9 ~n doctrioa .como.-~ Ip,"ilItn ,fegi&Ía­clones, dos posiciones que incluso pueden deducirse de las dlstlntasdefiniciones a que, hemos hecho referencfa. ,

Ul')as se enrolan en la posición tuitlva familiar. y dentro de 6ata ~8clr,pun~CfiP!a ~IJJs;.vamente a los herederos ~.SO.,es -decir. ·quepued~ hecer ,p,eligrar el patrimonio de manera tal~·.·haoerlos caer enIa indlgenc.1fi. Sólo en este supuesto el orden jurfdioo: acudlria en auxi­lio, .declarando la InhabUltaclón parcial del pródigo. 1Il,atl '»:.•oIicltaaenlas peracmas Int8!eaadQJ.

En el pensar de Borda, si una persona no t1ene ·nf oónyuge, ni as­cendientes ..ni descendientes. si está solo en la vida, no parece Justifi­carse su Ir,I,terdicoión p()r Iás que .clilaplde su fOl'ltd'la. Alié él con susactos de prrodlgalidad. En cambio, existiendo aquellos parientes esaconducta se torna grave y socialAl8Rte -malsana (2P).

lIamatfva resulta la evidente contradicción. en que Incurre este. au­tor, pues en el mismo trabajo, unos párrafos anteriormente. según pue­de constatarse en la definición que hemos tranecrlpto, :te coloce,'en laposición de protección no sólo a la familia sino también. a: :1a:.persoaadel inhabilitado.

Se. trata. sin lugar. a dudas de. una conc.epción .origJnal~por c.uantDpara Borda, ~I existe familia habr.á protección para el ,pródJgo .pefo•• le,m­pre teniendo en miras el íoterés fiarniJlar; si no la .hav no.,le, otOrGA-·nfA.guna protección.

Indudablemente 8U posición ha prevalectdo , ya que nuestro e6dlgocivil adopta el criterio antedicho. conforme el- .cual el .tnteJ1!sfundam~n-tal que se protege es el de la familia. '

Sin restarle la debida importancia que nos merece la ·famftla, consi­deramos que el IndiViduo en sr es el que tiene necee~ ~ la protec­clén del 'ordenamiento Jurrdlco. por tratarse -y aunque resulte rette­rativa- de un alterado mental.

Ambos, familia e individuo, no son sino. células lntQgrantes de, .untodo 'que conforma la socledad. y. precisamente con miras ·a·Ia .defensasocial, es Que se hace Indispensable .la Intervención estatal en .Ios ca­sos de prodigalidad, aun cuando el individuo no posea famma I:\lguna.

Pero además. entendemos Que la Intervención -del- 'Estado no debeconstreñirse a Impedir de que dilapide su patrimonio sino. que su accio­nar vaya más aná proporcionándole o adecuéndoJe los 'metflos necesariospara su rehabilitación, restltuy~ndolo fuego, útflmente a la lloc1edad.

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(21) Canf. BORDA, obra cIbIda.

, .1') Que uná péréÓl'lá a fravás de actos de admln1strací6n o' disposl:ci6n de su. bienes exponga a su familia a la pérdida del patrimonio.

2"') la persona en cuestión debe tener herederos fOl'ZOS09,es decir,ascendientes, descendientes o cónyuge;

~l Que alguna de las personas Interesadas (ascendientes,- descen­dientes o c6nyuge) solicite la inhabilitación;

4~)Que el presunto pródigo hubiere dilapidado una parte importantedé sU plIlrlmonlo.

Desmenuzando el texto legal, reiteramos aquí nuestra crítlca ante­rlar en áqueffa párte ,que limita la protección y S4 córrelaflw. ac:éión ex­clustvamente a. f~rrnflMes .determinados, ignorarido ti. aql:l.ellós que per­tenecIendo al grupo familiar, stn ser 109 indicados por la ley pueden even­tualmente encontrarse tnteresados en la pre~ervacióri del patrimonio" pordéPer:'det.qulzd~ eC0116mlc'améntedel presunto pródigo,; .sumando a elloel Interés dar t:stado en defender no sófo la táZ pafrirrión(al,·sirto princi-palmente también la salud mental del cuestionado. e

Con rélaef6n' 8 las personas interesadas qüe éiíl1merá ra' léy, se nospreseritan af9Uriós' fMerrogantes, cuya respuesta áéñérá sef'súptidá porla doctrina y la Jurisprudencia, en razón de que el artículo 152 bis', nadadice al respecto.

En prliTlér lugar se nos presenta el caso de los padres' naturaleS" (as­cend~wté8 naturales) y el de los hijos extramatrlrnonlales. Ént-endel1'losque al no hacer la ley ninguna distinción, la doct1ina y J1.u:fsp'ru'denclat~ .debe hacerla y por lo tanto, incluir dentro del ámbito' de epll­caclón del mencionado artículo, a dichas personas. I

En segundo 1\Jfer; observamos la situacIón de los, 'hijo$- y padres;acIoptivos. en el que la rey 19ua!mente nada dice, por lo' que eAtendemosdeberá reéú'rrf'r88 a la ley 19.'t34 sobre adopción, la que determIna que eladOptado se" ConSIderado hijo legitimo;

ReauftJrlttiPOrlánte destaé8t al attféUfo' 3569 6ré ~lRi éSt\!ib~é re y&cación hered'tarla del adoptante, salvo respecto de los bienes que eladoptado hubiere recibido a título gratuito de la familia de sangre.

EventuáfnteritEf; podrán tener derecfto támf>i'éñ'a s01iertar la inhabi­litación los hijos legitimados.

Por Illttmb, nos queda analiiér el caso de loS c6nyuge1Sdlvorcladoe.en él qUe, e8 hídúdabl~. que el cónyuge Inocente estar(á Irtcruido dlJfttrode la8 ~8id0néS del artículo 152 bis, siempre que conserve la voca­ción hereditaria (art. 3574). En el supuesto de no sét asf, ni:) podtia acelo­nar por sr. pero lo, podría efectuar en representación de- sus hiJoS mena-res o incapaces (21). '

Créemos; ~. es Indispensable analizar además st' ét hecho de serasce-nchent9¡,deeótmdiénte eS cónyuge basta, ti sarfs n~éSdrro la coexis­tencia de circunstancias como ser: la situación econtStnl'C'i¡de lds mis­mos, sl están o no a carge' del presunto pródigo:' etc.

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Es importante resaltar que para que quede configurado el c tode pródigo y ante el silencio de la ley, no es suficiente la realización deun solo acto sino una reiteración de la actitud dilapidadora. vale decir.la existencia de una cierta "habitualidad".

Dentro de los sistemas existentes en la legislación comparada. comoveremos en el capítulo respectivo, encontramos aquellos que ponen alprédlqo prácticamente en un pie de igualdad con el demente, como su­cedía en el derecho romano, estableciendo con respecto a ellos un régi­men de Interdicción.

Los autores de la reforma de la ley 17.711optaron por un sistemamás atemperado. denominado "de Inhabilitación". por el cual se nombraal pródigo un curador.

Título 2-5: Régimen jurídico aplicable a los pródigos

Aparentemente y realizando una lnterpretaelén exegética del textolegal, bastaría ser alguno de los familiares mencionados, Independiente­mente de su situación patrimonial o de si dependen o no económicamentedel individuo en cuestión, para poder solicitar la Inhabilitación.

Respecto a la terminología que utiliza la norma vigente sobre ..elque hubiere dilapidado una parte Importante de su patrimonio", enten­demos que es susceptible de crítica en razón de su amblqüedad.

Quedaría por lo tanto, en manos de los jueces la determinación dedicho concepto.

Creemos que va a resultar extremadamente difícil determinar elquantum total del patrimonio, si tenemos en consideración que la mayorparte de las grandes fortunas se encuentran bajo la forma de capltales .anónimos (por ejemplo: acciones al portador), y mucho más aún precisarqué ha de entenderse por "una parte Importante del patrimonio" (porsupuesto que a nuestro modo de ver, siempre debe ser el 50% más 1del patrimonio).

Hubiera sido preferible un criterio más cierto, como por ejemplo eldel Código del Perú que se refiere a la pérdida de la tercera parte deJpatrimonio.

Incluso, aun establecido un porcentual, a los mismos Jueces les vaa costar determinar el patrimoniO total porque, como expresamos másarriba, la zona gris en que se adentrarán estará conformada muchas ve­ces por ese capital anónimo impreciso de adjudicar.

Recalcando nuestra crítica, expresamos que evidentemente el tempe­ramento objetivo que resulta de la ley, que presta esencial Importanciaa la faz económica, olvida la persona misma del pródigo.

El juez no debe circunscribirse sólo a la cuestión económica, impor­tante porque representa la faz objetiva del hecho en cuestión, sino tam­bién considerar el dictamen de los peritos médicos y psicólogos y, na-'turalmente, ante la duda, expedirse en contra de la Inhabilitación.

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(22) lLAM(:lIAS. obr. citada.

El Inhabilitado no podrá disponer, sln la conformidad, de dicho cura-dor, por actos entre vivos. '

la ley establece un principio general y es que M los Inhabilitados po­drán otorgar por sí solos actos de administración". Mas como toda reglageneral, está Inserta la excepción, consistente en aquellos supueetceque limite la sentencia de inhabilitación, teniendo en cuenta las circuns-tancias del caso. .

En principio estamos de acuerdo con lo estatuido. en"esta norma delartículo 152 bis In fine, porque consideramos que, siendo los pródigosalterados mentales y no existiendo nunca un caso idéntico a otro, es in­dispensable otorgarle al juez un margen de movilidad. Sin embargo, nopodemos dejar de señalar un aspecto que entendemos debe ser tenidomuy en cuenta por los jueces por el peligro y la gravedad de los efectosque encierra: de acuerdo con el texto legal, puede llegarse a un régimen'de Interdicción total, en el que el pródigo no podría realizar por sí ningúnacto de disposición entre vivos, ni de administración.

Es Indudable que la Inhabilitación constituye una seria restricción alas facultades jurídicas de una persona, por lo que es vital que el juezvalore cuidadosa y concienzudamente las circunstancias del caso.

Ante la duda, resulta conveniente que se expida a favor de la ampli­tud de las facultades concedidas al inhabilitado.

Debemos recordar que, siendo la regla general la capacidad, el régl- ..men estatuido por las normas legales es de inhabilitación, pero sólo enla faz patrimonial, por cuanto el pródigo o inhabilitado conserva su plenacapacidad 'para todos los actos de la vida civil, como por ejemplo puedecontraer matrimonio, reconocer hijos naturales, adoptar, iniciar demandade divorcio, etc.

Según lIambías, la inhabilitación presenta cierta analogía de contras­te con la habilitación de edad. Esta se aplica a los menores que han al­canzado cierta edad para eliminar su Incapacidad, confiriéndoles una ca­pacldad restringida similar a la de los menores emancipados por el ma­trimonio.

la Inhabilitación tiene un sentido tutelar que se concreta no en unaampliación sino en una restricción de capacidad y se aplica a aquellaspersonas capaces por razón de edad, que por diversas causas .convleneretraer a una situación de incapacidad con relación a determinadosactos (22). '

Estamos contestes con la opinión de Llambías porque señala con­cretamente y sin tapujos de que nos encontramos en esta instituciónante un problema de Incapacidad pero para determinados actos, por elloconsideramos adecuada la denominación de inhabilitacl6n o semicapaci­dad debido a que siempre nos encontramos en el término medie entre elrégimen de la cepaetdad y el régimen de la incapacidad.

Resulta curioso observar que del análisis del artículo 152 bis, nosurge prima facle, cuál es la condición básica de los inhabilitados, ya

(23) LLAMBIAS. obra cItacIa.(24) BORDA. GUILLERMO A•• Derecho ele F........ pAg. 385.

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no dice que se nombrarálitado y que sin la. conformidad, del mismo aquél' no·podf.é dreponer desus bienes por actos entre- vivos.

Como puede observarse, los autores de la refOrma ·I~ enforma contundente al incorporar en este régimen una nu9W8' figura JU!':ridlca.

lo criticable reside en la denominación de esta figura, al derle elnombre de otra qUlt ya exlstia en nuestra 1egi8Jact6n.

Esto puede prestarse a gran cantidad de confusiones.En nuestro derecho, se llama curatela a la repraselltaCJónJagal de lo~

Incapaces mayores de edad. trátese de dementes.. sordomudI:Hs. que ~saben darse a entender por escrito. a la adml!1latr.acJónd8 clGr.t~ blenea,abandonados o vacantes. etc. (24).

Como vemos, la figura del curador que presenta nuestra. ley antesde la reforma de la ley 17.711. es totalmente. cJlstfnta a.la.que ésta 00&.Introduce a través del mencionado articulo. 1~ bis;. resultandO imposl­ble aplicar en toda su amplitud las normas que rigen. Ia. cueatela, a dichafigura en examen.

No se 'trata de un representante de la persone, o de. los bienes deella. sino de un &sIstente de la misma. de modo que nc, pO<{riaÍl serieaplicables. por ejemplo las normas relativas a la rencDcl6n de cuentas.

El llamado "curador" del articulo 152:bis .no puede, r..eaJlzar.acto&porsr mismo. sino simplemente limitar sus funciones, a.prestar, su conformi­dad: a ros actos de disposición entre vivos. o. a. loa de. adinJ,aistraclón

< que especrflcamente determine el juez; que reaüce er InhaBilitado.Dejamos para el final del presente trabajo< algunos: Intttnrogantes

TItulo 2-6: Curador

{Jué por un tedo se les Impide la realizavivos y por el otro se les permite la concreción de los a~ ele admi-nistración. con las Hmltacfones señaladas precedentemente.. .'.

tndudablemente se trata de una imperfección téaoH::a.. ya.que ~I par:;..timos de la premIsa de la "capacidad" basta selalll8l'Re con determinarqué actos les está vedado reaHzar por si mismos.

El Anteproyecto de 1954. en au artfcuJo 96 6n~ alftSJonaba' losactos que .el Inhabilitado no podía efectuar sin· fa a.tto.......de su curader.

No mencioneba los que podía realizar, pues 8f1. GaftItt en el .prlft­clplo general. de la ~pacfdad. Era por lo. tanto, lo qú& oorreependfe.

De la misma forma· estaba eeneebtda la ponencIa pres_entada.conjun-_tamente por los Orea. Borda y lIambiás al 3er. Congre.so. Nacional de.Derecho Civil (23)~

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(25) Conf. lLAMBI:'~ 404 l 1.10.; ,!UILLERMO J. BLANCH, El ..- de InhIbIII-tacl6n ... los , -El Derecho " tomo 33. pág. 819.

(26) 8. z. cte" e., M. L 1¡lncldente sobre curatela de bienes. ElIpedIente 141.338.

Trtúlo- 2~1:El proceso de Inhabilitación de los pródigos

Nuestro artfculo 152 bis determina que se aplicarán. eA lo pertinentela8 nonnas rellltlfttt a la declaración de IncapacJdad.por demencia y re­habilitación.

En 'Primer lugar 'Corresponde analizar qUlánes son las. personas habi­litadas para Iniciar el proceso. En este caso particular nos encontramoscon ,,.. ""Icc!ón establecfda 8ft la mtsma norma tegal~'c6nyage. aseen­diente$ y deecendtentes.

, Es indudable que la norma que estamos analizando ha modificado,en e~C8I8- CORCr_ de la prodigalidad, al artfctllo 144 det cóc:ftoocivil alno"Jlaceoo extenaivo a la ml8ma.

Exlstirfa un supuesto en el cual el Ministerio Público se encontrarlahablUtado' para....... fa· demII'Ic1a, CGB~ serfe 8ft' et ClISO' de que elprócJjgo carecter .. '.de cónyuge. y asc:endféf1te8, teftiendb amamentede.~cendientes' menoree.

De adoptar otro temperamento, es decir, que el Ministerio Pupilar nose eooontr.ara haPtUtado para realizar la de'lI.meht, quedartan despl'Otegl­dos los interesea de los menores (25).

En el caso especia1 del cónyuge, al no aclarar nada dJcho artículosobre las calidades o condiciones del mismo, entendemoa que se apartadelartfculo 144 del 'códIgo civil, y por lo tanto el cónyuge. dlvOJClacIopue­da 8DHcatar 18klhabHltactón, naturalmente sl conservara su vocaciÓR 1Mbcesorla.

Hdtendo dUuctdado las cuestiones emerg.entes QIJ8. pedrfan plano­tearaecon respecto ala8 personas de los ascendlentes,..desaendlent8S ycónyuges, nos' remitimos a lo expresado anteriormente en el párrafo 2.-4.

En lo que concierne al Ministerio Pupilar, entendemos que él debeser parte y tener activa Intervención durante todo el lapso eR, que ae sus­tBflCIe el proceso de fnhabttltaclón, por expresa disposición del artículo152 bis del código civil cuando establece que, se aplicarán en lo perti­nente, la. normaStrelattv88' a la declaración de Incapac1dadpor ,deme-ncia.

ES ilustrativo en este sentido un fallo de la Cámara Nacionat de Ape­laciones en lo Civil. sala ·F· del 1A de agosto de 1'96&,qua, estabteGfó.que, mientras no, se r.esuelva en definitiva si cOf.r.eapondeo na hacer lu­gar a la InhablUt~c16n de los incisos 29 y 39 del artícuto 1:82bis' del có­digo cJvl1,el' M1nlst81JoPupilar como órgano de- asistencia y contralor esparte en la sustanciación del proceso, por ser aplicables en lo pertinentelas normas relativas a la declaración de incapacidad por demencia, segúnlo preceptúa la citada norma del artículo 152 bis del código civil (26).

J)ráctlcos (iUé té nos pfanteán en' re}aclón con l.actuación de la Ilgurédel ... ......., legal" equlvocamente llamado por la ley' "curador".

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(27) OLIVA VELEZ, JORGE MARIO, El Ministerio Pupilar y la Inhabllltacl6t1 Judldal, "ElDerecho", 29-849.

(28) LINO E. PALACIO, Manual de Derecho Procesal, 11,pág. 335 Y slgs.COLOMBO, Derecho Procesal, t. IV, pág. 452 Y slg8.

(29) Código de Procedimientos, Pela. Buenos Aires, ley 7425, arto 632. Y slgs. y respec­tlvos códigos locales,

Concluido el proceso de inhabilitación, el Ministerio Pupilar no pue­de intervenir en ningún otro acto judicial o extrajudicial referente al In­habilitado. Esta premisa no resulta arbitraria sino que se desprende delos mismos preceptos que el código civil vierte en su artículo ~2 cons­treñido estrictamente al caso en cuestión y que expresa: • Las personasde existencia visible son capaces de adquirir derechos o contraer obliga­ciones. Se reputan tales todos los que en este código no estén expresa­mente declarados incapaces".

Con lo que una vez más reiteramos que el principio en materia deinhabilidad es la capacidad.

Estaríamos contestes con la opinión de Oliva Vélez, en cuanto a quefuera del proceso, el Ministerio Pupilar sólo podría tener participaciónen las cuestiones entre el Inhabilitado y su curador (27).

Con respecto al carácter del juicio se sostienen diversas tendenciasUna de ellas deja librado al criterio del juez el tipo de proceso aplicable (28).

Nos Inclinamos por la tesis de que debe ser sumario en virtud de laremisión expresa que efectúa el artículo 152 bis a los artículos 624 ysiguientes del código de procedimientos en lo civil y comercial de laNación (29).

Para realizar un trabajo en cierta forma exhaustivo, pasaremos deInmediato a un análisis detallado en los artículos 624 y siguientes delcódigo de procedimientos en lo civil y comercial de la Nación, en losque puntualizaremos cuáles son de aplicación para el caso de Inhabili­tación por prodigalidad, y cuáles se desecharían por no.adaptarse a nues­tro modo de ver, y siguiendo para ello la metodología que detenta elcódigo. . . .

Artículo 624: Requisitos: ..Las personas que pueden pedir la declara­ción de demencia se presentarán ante el juez competente exponiendolos hechos y acompañando certificados de dos médicos, relativos al es­tado mental del presunto Incapaz y su peligrosidad actual",

Con relación a las personas que pueden pedir la declaración, hici­mos anteriormente un estudio de cada una de ellas y al cual nos remi­timos.

Ya en lo concerniente a que debe acompañarse certificados de dos·médicos, consideramos que para el pedido de declaración de Inhabilidadpor prodigalidad no corresponde, por cuanto la ley en su artículo 152 bis,adopta un criterio objetivo para su calificación, cual sería la de que,hubiere dilapidado una parte importante de su patrimonio y expusiere a.su familia a la pérdida del mismo. Por supuesto que nos encontramosfrente a un tope mínimo, que es el del 50% del patrimonio.

15

Aunque de la simple lectura de este último párrafo surqina unaincongruencia en nuestra posición reiteradamente expresada de que elpródigo es un alterado mental. tal incongruencia no sería asf, pues auncuando seguimos sosteniendo que se trata de un alterado mental con una ,estructura psrqulca que le es propia y cuya delimitación desde ese án­gulo escapa. totalmente al esquema de este trabajo, además teniendo encuenta que toda clasificación o encuadramiento siempre son relativoscuando nos enfrentamos a fenómenos psicológicos complejos, recono­cemos que la ley para aceptar la procedencia de la aceJón se remite auna serie de actos concretos, de carácter patrimonial que haya realizadoel presunto pródigo.

Ello no obsta a que luego el juez pueda designar peritos médicos opsicólogos para Informarse del estado de las facultades mentales delpresunto pródigo (artículo 626 del cód. de procedimientos).

Artículo 626: Resolución: ..Con los recaudos de los artículos ante­riores y previa vista al asesor de menores e Incapaces, el juez resolverá:

19) El nombramiento de un curador provisional: que recaería en unabogado de la matrícula. Sus funciones subsistirán hasta que se dis­cierna la tutela definitiva o se desestime la demanda.

29) La fijación de un plazo no mayor de 30 días, dentro del cualdeberán producirse todas las pruebas.

39) La designación de oficio de tres médicos psiquiatras o legistas,para que infor.,en, dentro del plazo preindicado, sobre el estado actualde las facultades mentales del presunto insano. Dicha resolución se no­tificará personalmente a aquél".

El primer inciso nos parece acertado al estipular el nombramiento deun curador, por cuanto de no ser así se verían frustradas las pretensio­nes del que, con legítimo derecho, solicite la inhabilitación. Por su­puesto que a nuestro criterio puede recaer dicha designación sobre cual­quier persona, pues no se trata sólo de un curador ad IItem.

Sin embargo, es preciso destacar que coincidentemente con lo yaexpresado en el parágrafo 2-6, debemos tomar con suma cautela la de­nominación de curador a que se refiere el código de procedimientos, yaque el mismo, aun provisoriamente designado como medida cautelar,debe limitar sus funciones a la mera asistencia de los actos que realiceel presunto pródigo en materia de disposición o aquéllos de adminis­tración que el juez estime convenientes.

Del inciso 29 reiteraríamos nuestra posición en cuanto al caráctersumarlo del juicio.

El Inciso 39. entendemos que no resultaría obligatorio sino faculta­tivo para el juez, teniendo en cuenta que esto haría al agotamiento depruebas e Informes que eventualmente necesite para expedirse sobrela inhabilidad del presunto pródigo.

En este caso, de acuerdo al artículo la designación puede realizarsede oficio, es decir, aun sin pedido de parte.

ArtículQ 627: Prueba: ..El denunciante, únicamente podrá aportar

7&

Aqur, recalcamos que, desde el punto de vista procesal, se diferen­cia de otras figuras de inhabilitación estipuladas en el' artr~ulo 15~bis,que indudablemenfe neeeSltEtrfan la deslgnacl6n' de 1M' curadóf' td IRem~

Los artículos 632, en materIa de traslado de las actuaf.oÁes, ~3 encuanto 8 la sentencia y recursos, 634 relacionado con 18$ aostas y 635relativo a la rehabilitación, consideramos que son ápnc~t)fes ar procesóde inhabilitación por prodigalidad· a que; nos elfttUrtos;.'teflto..,..dtf;

Estimamos que. específicamente en el' artfculo' 635 1esalttt oGnve-

pruebas que acrediten los hechos que hubiese ill'f8CBdo¡. y ;st IW«IU~Insano las que hagan a la defensa de su capacidad. L.. prulDat qdelaquéllos o las demás partes ofrecieren. se produoirWl er.... '_ó "tW­visto en el inc. 29 del artículo anterior".

Surge del artículo transcrlpto, la neeestdad de COrrer'fta.ladó al pre-..sunto InhabHitado por prod;galidad para que éste opongá '~das 18&de-fensas que hagan a su posiCión; .

Independientemente de etlo, es decir de los der&Ohea "8 la leyaCU'erda al presunto fnhabltitadó y al denunciante, son paRH el Mtnist&rlo Pupilar y, eventualmente, el curador provisorio. .

Respecto a las pruebas, deberá admitirse una ampIitu4 d. cnterfe'tat, que no coarte a ras mismas y conlleven elemento& mt§e. 11118 aaff.,cientes para la evaluación del juez.

Según la opinión de algunas autores, relacionado con e.· curador ... 'lite",. poi" el hecho de recaer la designaci6n de un abogado' de la matrt­cula, consideran que el inciso 19 del artíoulo 628 se feftéf"él·,H~S'miSmosal hablar del nombramiento d~ un curadór p;ovl.'ondf1.

Sobre el curador provisional nos hemos expedlCJoanteriorrnente, sus­tentando una posición favorablct ,.., ....... _ -*'.'~'..hatlleolimitadas, para el caso especial det prmJe$O de-"'~ _:~galidad a la mera asistencia o asesoramlente, tal 8Dfn8-o ,..,. "'en--clonada anteriormente, pero de ninguna manera 88üfNe ~espectñcas de curador ad litem típicas de los proo8Sos .. <Jedareclón'de incapacidad u otros de Inhabilidad a qU'8se- refier..l art(cu~ ;t52,·biIt.excluyendo el de prodigalidad.

Esta conclualón no es en modo alguno arbitlwl~ al_.~ ., .• 'contrario responde 8··un verdadero crlterfo' lógico en ~l~ .. _, ...bien en todo momento hemos eostenrdo y lo sfJ9UlreJ11O&.haGl.~.q .... elpródigo es un alterado mental, su slntomatologra quedaria. ~8A_,circunscripta a una serie de actos cuyo basamento serían verdadera8alteraciones psicofóglcamente prt>fUndas, p&m' flue de rt~ rtUlneI'aafectarran, fuera de íos ac10S de rndole patrimotffet .. stt 'détielWofvi1'fffeftttJ,sociak famUiar y personal.

De modo tal, que estaría perfectamente cap«cftac:fel'para jdefelider~'personalmente en el proceso por el cual se sonélla 8U ihhá1:illttaC16ñ'por prodigalidad;

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nlente su transcripción, como lo hemos hecho con otros, conforme supartlcijLar inter"', ..... e su análl8ls:

Artículo 635: aet:labiUtac-ión: "El declarado demente podrá promoversu rehabilitación. El Juez designará tres médicos p$iquiatras o .Iegistaspara que- fa eJ(aml~n de acuerdo con los tr.ámites prevjs.to& para la de­ctaracl61\ de demencia, hará o no lugar a la r.ehabiUtQción·.

Esta disposición, al decir de Llambías y que nosotros compartimos,está preceptuada por razones de humanidad para eludir la eventualidaddQ que: ~guien qtle haye, recobrado la salud mema1 pueda ~eguir siendoGOMlder>4l®,iflotlpaz por ,la maljcla, quizás, de qtrienes 1:Ieben 'velar porél {;un.

Entendemos que este argumento es perfectamente' VálJdo, en cuantoa .Ia rehabllltecíéndel declarado pródigo., .: En el artíeuJe 152 IMs encontramos una remisión .,general a .las nor­mas pr.eceptuadas a la' incapacidad por demencia,. y en particular a larehablHtacl6n, es decir, 'que podrfamos de ello deducir gue dlcha remi­sión sería directa al artículo 635 del código de procedimientos.

Ello evidencia la sustanGi8QÍÓnde dos criter.iDs dim:ilttGs: uno parala declaración de la Inhehlüdad ,par prodigalidad '1, eLotJ:o ,pa,:a su -reha-bilitaCIón. ,

El. ~prlmero de ~Ios -expresado reiteradamente en' este ·trabajo­recurre. al. Inrorme. de Jos m~icos psiquiatras e IncJusive'l'8icófogos, perosólo como una prueba más que lleve al juez al eonveneimlento de la exis­tencia de causas suficientes para la declaración de tnbebílídad, paro elt8ll1fálel'emento... ser, conforme a la ley, emlnentemente·obJetivo. valedectr, que aun cuando del Informe de los médicos surja la existencia deuna alteraetórt mental y dé una determinada sintomatología característicada Ullpródigp. l' la persona en cuestión no ha reaHzado actos que 'tmpor­ten la pérdida de la mayor parte del patrtmonto o bien' expusiere a su fa­mIlla a .la pérdida del mismo, el luez nunca podría, en base a dichos In­for.mes exclustsamente, ni aun en el supuesto de la propia declaracióndel presente pródigo en el sentido afirmativo' de pretender realizar dichosactos, declarar la prodigalidad, si los mismos no' se han concretado.

Quizá podrla declarar la inhabilitación en base al articulo 152 bi-s delcódigo cM', pero no fundándose en e1 lnclso 3'? que estamos analizando,afno en el IncisO' 29 del citado artículo, verbigracia, por debilidad mentalde la cual pueda resultar presumiblemente' daño a su persona o ..a supatrimonio.

'En cuanto al segundo criterio, adoptado por la ..ley .para la rehabi­litación' del pródigo, dir.emos que los le.gisladores de la ley nl?17.111 nose 'han referido exclusivamente en especial al caso .de la rehabilitaciónpor prodigalidad, sino que han optado por la remisión ,ya citada.

Entendemos que aun en el supuesto de que htible1"an'pretendido le­gislar con respecto a este tema, no habrían podido apartarse dél criteriolj:fglstadQ en el articulo 635 del código de procedimientos.

Al ,expresar que se trata de un criterio subjetivo, nas referimos aque eJ Juez únicamente puede basar su sentencia en el Informe de los

(ao) IJ.AMBtAS, JOAOUIN J., TreIIMIo ... DeNcho CIVIl. Parte ',Generál. tomo J,:fI69" 529Y slgs.

78

médicos psiquiatras o pslcóloqos y ello no es arbitrario, por cuanto seencuentra imposibilitado de disponer de pruebas obJetivas.

No debemos olvidar que desde el momento en que fue declarada lainhabilitación se nombró un asesor o asistente legal, llamado por la ley"curador" a los efectos de que pudiere controlar los actos patrimonialesde disposición y, eventualmente, los de administración del pródigo.

Por lo tanto, nunca el juez podría encontrarse frente a actos quehayan surgido exclusivamente del pródigo y que demuestren que efec­tivamente, ya no existe en él la sintomatología que provocó la declara­ción de inhabilidad.

Independientemente de que la prueba del Informe médico sea con­tundente, lo cierto es que era indispensable encontrar una salida para nocondenar de por vida a una persona a su inhabilitación, sin que ella, o laspersonas interesadas que la ley estipula, puedan solicitar la rehabilita­ción de la misma.

Negárselo sería verdaderamente inhumano.Los artículos no enumerados aquí del código de procedimientos, en

materia de incapacidad, no los consideramos pertinentes en relación alproceso de inhabilitación y de rehabilitación del pródigo, porque los mls­mas se refieren en su mayoría, al hecho de la internación que obvia­mente. no resultan de aplicación para el supuesto de prodigalidad.

Concerniente a la sentencia que declara la Inhabilitación por prodi­galidad. la misma debe reputarse constitutiva, y por consiguiente produ­cirá efectos desde que ha pasado en autoridad de cosa Juzgada.

Siguiendo el principio general, debemos considerar como válidos toodos los actos realizados antertor,nente por el declarado Inhábil, a menosque se pruebe, en forma fehaciente y para cada acto determinado. quela conducta de la persona se encontraba afectada por los sfntomas pro­pios de prodigalidad. lo cual podría originar la existencia de mala fe, porejemplo en terceros adquirentes.

Sin embargo, este último pensamiento es sumamente peligroso porla inseguridad jurídica que podría engendrar. de modo que el Juez debeactuar con suma cautela al respecto.

En esta última parte. no debemos descuidar nunca el carácter oble­tlvo que tanto hemos remarcado. que exige la declaración de inhabUidadde nuestro código civil. vale decir. que para poder Impugnar un acto an­terior a la declaración de prodigalidad es menester que la persona Inte­resada demuestre que con dicho acto o actos el presunto pródigo dila­pidó la mayor parte de la fortuna y puso en peligro los Intereses patri­moniales de la familia.

La ley 11.111 no previó la inscripción de la sentencia en el RegistroNacional de Estado Civil y Capactdad de las Personas; sin embargo lamisma debe ser ordenada en virtud de lo estipulado en el artrculo 1'1del decreto-ley 8204 de 1963, que dice: "Todos los actos y hechos quedan origen. alteren o modifiquen el estado civil y la caoacldad de laspersonas deberán Inscribirse en los correspondientes registros de lasProvincias y de la Nación".

79

El artículo 513 del código civil francés dice: "Puede prohibirse a lospródigos litigar, transigir, tomar en préstamo, recibir capital y dar recibo,enajenar y gravar sus bienes con hipoteca; sin la asistencia de un con­sejero designado por el tribunal".

Como vemos, se desprende de la redacción del artículo que la leyfrancesa no hace pesar sobre el pródigo una declaración genérica de In­capacidad sino que se limita a establecer cuáles son los actos para losque necesita la asistencia de un curador.

En realidad, mucho se discutió en el Consejo de Estado sobre lasventajas y desventajas de la institución de la prodigalidad.

Se anallzaron varias posiciones y entre las mismas se destacaban laposición de, Emmery, quien afirmaba: "Se ha dudado mucho tiempo sidebía reprimirse fa prodigalidad. Los romanos, los cuales habían defen­dido la propledad corno el fus utendi, fruandi, abutendi, admitieron a pe­sar de ello la interdicción de los pródigos; ya que el objeto de una sabialegislación debe consistir en establecer lo que mejor conviene a la so­ciedad, para la cual' se promulga la ley, sin detenerse con minuciosa pre­sión en todas las consecuencias que el raciocinio pueda hacer derivarde un principio abstracto.

El Estado, interesado en la conservación de la familia, no puede ad­mitir que el derecho de propiedad constiuya para el ciudadano el dere­cho de arruinar su familia para satisfacer miserables fantasías o aun ver­gonzosos caprichos.

Sin duda el propietario puede impunemente abusar de su cosa, y eljus abutendl debe respetarse, porque todo acto realizado por su propie­tario capaz es siempre válido; la prueba de la prodigalidad no resulta deun único abuso y menos de algunos' pocos abusos. Pero si el abuso llegaa ser habitual, no se puede negar, que el disipador es una especie dedemente cuya conducta' carece de discernimiento y sería peligroso darleel entero y libre ejercicio de un derecho, del cual él no usa, porque no

Capítulo 111

Legislación comparada

, .Resulta Ifustrativo, en el presente trabajo, insertar el capítulo deleplgrafe para examinar cómo países, con diferentes legislaciones, esta­blecen pautas paralelas o diferenciadas para el caso de Inhabilitaciónpor prodigalidad.

. Esto apunta a comparar los distintos sistemas legales y la forma enque abordan y resuelven la figura en cuestión, como así también el ca­rácter tuitivo que otorgan a la misma.

Título 3-1: Franela

p~ esto se Infiere, c~mo lógica consecuencia de todo régimen de pu­bllcldad, que la sentencia no sería oponible a terceros de buena fe .y atftulo oneroso, antes de su inscripción en los registros pertinentes.

(31) EMMERY. nlt. SPOTA, Tndado de Derecho Civil. 'vol. 32. t. 1. .plg. Si18 , __(32) SPOTA. ALBERTO G., ob cIt., pág. 551 Y slg.(33) DE PAGE. tomo 11.pág. 354. n' 417-21. , .(34) RIPERT. G., Y BOULANGER, J., Tratado de Derecho CMI. ed. te Ley, Buenos AIrea.

1963. t. 111,pág. 606 Y Slg8.(35) SlOLFI, t. 1, 2' parte, p6g; 209, m1m•• 244, 245.

El código civil Italiano de 1865, tomando como fuente el artIculo 513del código civil francés, establece un sistema de semlfntei"dlccl6n quedenomln6 de -fnhabl1ttaclón- y que se apnc'aba cuando 'la. ébfarmedadmental no era tan grave.

El artículo 339 de dicho cuerpo legal establecfa: •A 108 enfermosmentafes cuyo estado no sea tan grave como para 08ar,lugar' s Interdic­ción, y al pród1go, el trtbunal -podrá deelarárlos- ~ 98rs etrtar enjuicio, hacer trensaccíones, tomar a préstamo, reclbir ..capltaJas , eonee­der liberaciones. enajenar e ,hipotecar .sus bienes. nl.haGw ctrG acto iqueexceda la slmp]e admjntstreclén, sin la. aslsteocia.de. un curador.~e .......brará .el Consejo de Famllia o de tutela. La InhabtUtac:l6n,P&.HKIea 'Promo­verla qulenes tienen derecho de promover la lnter.diccJÓA·.

Con una Simple lectura se observa en la 1'edacc1ón -det artlotJtf) :tainfhJencta francesa y, eomo ésta, omrte establecer 1_ cCoriIdt~es .pe....t1culares que debe reunk' ,1 sujeto para que 1M'OCBda la' IlrmatRhtactÓfl.

De allí que surjan discrepancias en doctrina como en Jurlsprtide'nc1a,pues algun08 entendía]1 que en ciertos supuestos -era 'Ind18pen8a'Me lainterdicción, y en otros, bastaba la simple ilihablfltact6n~ {35).

En la práctica el pr6digo era equiparado al débll mental ..8D e11:6dlgode 1865, al igual que en la Jurisprudencia francesa.

T(tuW 3-2: Italia

sabe usarlo. stno que abusa cont1nuamente· (31).

El código civil francés, no adopta un sistema de representación atoo­de mera asistencia del inhabilitado, tal como lo dice muy claramente elartículo 513 e Interpretado adecuadamente por la doctrina en forma pa­cifica.

Como bien dice Spota, se lo priva el Inhabilitado de realizar actosgraves de comercio Jurídico que, indudablemente, puedan poner en pell·.gro la tranquilidad patrlmonlal de la familia, pero 88 te lJ8fJ1lllte -en carn­blo el pleno ejercicio de sus derechos en la esfera del derecho" 'faml·lía, en materia de testamentos, actos conservatorios y de edmmlstraot6nnormaf (32).

En realidad existe disoordancia en la doctrina con respecto a· si elpródigo puede entablar acciones personales como -ser las de dtvon:lo.sea o no vincular y de oposición al matrimonio (33).

La doctrina ha establecido que el pródigo también necesita de laasistencia del Consejo Judicial cuando pretende constituir servidumbresu otros derechos reales, o cuando acepte o repudie herencias o paraproceder a una partición, etc. (34). .

81

(36) MESSINEO, FRANCISCO, Manual de Derecho Civil y COmercial, Buenos Aires, t. 11,pág. 127 Y sigs.

Título 3-3: España

El código civil español en su artículo 200, nos dice: "Están sujetos

El nuevo código Italiano mantiene la Inhabilitación por prodigalidadal igual que el anterior de 1865.

ASí, su artículo 415 dispone que: "El mayor de edad enfermo de­mente, cuyo estado no es tan grave que dé lugar a la Interdicción, puedeser inhabilitado. Pueden también ser inhabilitados aquéllos que, por. pro­digalidad o por abuso habitual de bebidas alcohólicas o de estupefacien­tes, exponen a sr mismos o a sus familias a graves perjuicios económl­oos... ",

Se elimina -como hacía el código de 1865- una enumeración queIndudablemente trajo aparejada en la práctica graves discrepancias doc­trinarias y jurisprudenclales respecto a cuáles actos requieren una Inter­dicción, y cuáles una Inhabilitación.

De acuerdo al artículo 424 se aplican, en cuanto a las normas querigen la Inhabilitación, las disposiciones de la curatela del menor eman­cipado.

El artículo 427 establece que los actos ejecutados por el interdictodespués de la sentencia de interdicción pueden ser anulados a instanciasdel tutor, del interdicto o de sus herederos o causahabientes. Son igual­mente anulables los actos ejecutados por el interdicto después del nom­bramiento del tutor provisorio en el caso que al nombramiento siga lasentencia de interdicción.

Pueden ser anulados, a instancias del inhabilitado, de sus herederoso causahabientes, los actos que excedan de la administración ordinariaejecutados por el Inhabilitado sin la observancia de las formalidades pres­criptas, después de la sentencia de la inhabilitación o después del nom­bramiento del curador provisorio, en el caso que al nombramiento hayaseguido la Inhabilitación.

Es importante destacar que el código italiano de 1942 mantiene lainhabilitación del pródigo consagrada en el de 1865, pero no sólo paralos actos realizados en perjuicos de su familia o que la expongan a gra­ves daños económicos sino los que él realice contra sí mismo.

En principio no puede realizar más que aquellos actos que no ex­cedan de la mera administración. Además, puede ejer:cer el comerciocon el consentimiento o la venia de la autoridad judlclal, la que puedenombrar a esos efectos específicos un delegado interventor (artículos,394 y 425) .(36).

Fuera del plano estrictamente patrimonial, el pródigo o inhabilitado,dentro del régimen jurídico italiano, es capaz y por lo tanto puede con­traer matrimonio, reconocer hijos naturales, ejercer la patria' potestad o.la tutela, deducir acciones de estado, etc.

.22

(37) Código civil español interpretado y anotado con arreglo a las modificaciones Intro­ducidas por la ley del 24-4-58. por JOSE AIMBLAS; 2' edición feelaborada Y puestaal día por ARTUROMAJADA. edlt. Bosch. Barcelona •

Titulo 3-4: Alemania

Dispone el articulo 6, Inciso 2'? del código civil alemán que: •Podrá

8 tutela: 19) los menores de edad no emancipados legalmente; 2'1) Loslocos o dementes, aunque tengan intervalos lúcidos, y los sordomudos.que no sepan leer y escribir; 39) Los que por sentencia ftrme hubiesensido declarados pródigos; 49) Los que estuviesen sufriendo la pena deInterdicción clvll-.

El artículo 201 por su parte nos dice que: • La tutela se ejercerá porun tutor bajo la vigilancia de un protutor y del Consejo de Famllla".

Este código, al igual que el chileno y el colombiano ha adoptado e1criterio de equiparar al pródigo al furiosus sometiéndolo, por lo tanto, aInterdicción, al Igual que en el Derecho Romano; consiguientemente 'esmotivo de restricción de la personalidad y de sometimiento a tutela aun­que el pródigo no pierda la patria potestad ni queda personalmente so­metido al tutor.

En Aragón y en Cataluña. al igual que en el Derecho Románono po­dian coexistir' conjuntamente varios tutores. Las instituciones del pro­tutor y Consejo de Familia las tomó el código civil español del napoleó­nico, y éste a su vez, del derecho consuetudinario francés (37).

Además, consideramos muy importante la disposición del artículo221 que determina: • La declaración de prodigalidad debe hacerse en jui­cio contradictorio. La sentencia determinará los actos que quedan prohi­bidos al Incapacitado. las facultades que haya de ejercer el tutor en sunombre y los casos en que por uno o por otro habrá de ser consultado.el Consejo de Familia·.

Es decir. que en el régimen del código civil español existen tresclases de actos. de acuerdo a lo que determina la sentencia:

1- Los que puede realizar el pródigo por sí mismo sin asistenciaalguna; .

2 -:- Los que realiza el tutor en su nombre, y3 - Aquellos actos para cuya realización, tanto el pródigo declarado

tal" como su tutor necesitan de la autorización del ConseJodeFamilia.

Por su parte establece el articulo 222, que sólo puede pedir la de­claración a que se refiere el artícuso 221 el cónyuge y los herederosforzosos del pródigo, y por excepción el Ministerio Fiscal,.por si o a íns­tancla de algún pariente de aquéllos. cuando sean menores o Incapa­citados.

Los actos del pródigo, anteriores a la demanda de Interdicción nopodrán ser atacados por causa de prodigalidad, de acuerdo 8 lo queestablece el' articulo 226.

83

Tftulo 3-5: Suiza

El artículo 370 del código civil suizo establece que: •Se proveerá detutor a todo mayor de edad que por sus prodigalidades, su ebriedad. suinconducta o su mala gestión, se exponga él o exponga a su familia acaer en la necesidad, o no pueda prescindir de cuidados y asistenciapermanente o amenace la seguridad de otros".

Existe una tutela pública consistente en la autoridad de vigilanciadesignada por los cantones, y una privada o familiar potestativa para al­gunos casos. consistente en un Consejo de Familia.

El organismo tutelar lo completa el tutor y curador, siendo.el primeroel representante legal y el que cuida en general de la persona y de losbienes; el segundo, es decir el curador, se Instituye para un negociodeterminado o gestión de ciertos bienes.

Aquí encontramos una parte de la norma digna de mencionarse es­pecialmente, y que resulta de la disposición que permite la inhabilita­ción para el supuesto no sólo de que exponga a su familia a una impor­tante pérdida patrimonial, sino también a sí mismo, lo que Indicaría queel Estado puede actuar decretando la inhabilidad de una persona cuyosactos atenten contra la Integridad de su patrimonio, aun cuando éste ca­rezca de parientes legítimamente interesados y que puedan velar por él.

llama la atención dentro de la norma preceptuada por el código civilsuizo, la posibiildad de declarar la inhabilitación para el supuesto deno­minado •mala gestión".

declararse la interdicción del que, por su prodigalidad, se exponga a srmismo o exponga a su familia a caer en la lndlqencla".

la última parte del artículo dice que la • interdicción cesará cuandohaya desaparecido su causa".

En la exposición de motivos, con respecto al tema de la interdic­ción, nos ilustra que el código ha ampliado las causas de Interdicciónque consignaba el derecho antiguo. En primer lugar, dispone en concor­dancia con el vigente, que puede declararse interdicto a aquél que, porenfermedad mental, está incapacitado para cuidar de sus asuntos.

Con respecto a la interdicción por prodigalidad expresa que la mismadebe admitirse cuando el pródigo, merced a la disipación se expone a símismo o expone a su familia al peligro de la miseria.

los efectos legales son los mismos que en la interdicción por Imbe­cilidad. Para admitirla por prodigalidad se ha entendido que debe preva­lecer no sólo el interés del pródigo mismo o el de su familia, sino tam­bién IIldirectamente el bienestar público.

A diferencia de la interdicción por demencia, ésta no lleva consigola incapacidad total para regir sus negocios sino solamente una restric­ción de dicha capacidad (se le nombra un tutor).

Acepta el derecho alemán un régimen de semiincapacidad, ya quepuede realizar ciertos actos sin el consentimiento del tutor como porejemplo= los que le produzcan alguna ventaja patrimonial .

84

El código civil venezolano en su artículo 409 establece que mediantedeclaración [udlclal quedan inhabilitados M el débil de entendimiento cuyoestado no sea tan grave que dé lugar a la interdicción y el pródigo",.~..." -, - ,. - -

Título 3-8: Venezuela

Título 3-7: Brasil

Como lo señalamos en el párrafo 2-1 del Capítulo 11,la fuente deVélez Sársfleld se basa en la posición adoptada por Freitas en su Esboco,en el cual repudia la interdicción por prodigalidad, argumentando que noexiste alteración de las facultades mentales, y que la restricción de lalibertad sólo se concibe en casos de inminente necesidad, -r-esulmndodifícil: establecer un criterio que distinga al pródigo del que no loes, yque el arbitrio sería grande y peligroso.

El código civil de Brasil en sus artículos 6'" inciso 3" y 459 se apartarotundamente de la postura adoptada por Freitas.. determinando que elpródigo es relativamente incapaz.

Impone también el nombramiento de un curador para la reallzaclénde determinados actos.

El código peruano, al igual que nuestra legislación, solamente per­mite la demanda de Interdicción por prodigalidad al cónyuge y herederosforzosos. es decir, ascendientes o descendientes y sólo excepcional-mente puede efectuarlo el fiscal (artículos 582 y 586). '

Es importante destacar un sistema peculiar como lo es el peruano,que en materia de prodigalidad distingue dos gradaciones: la primeraestablecida en el artrculo 576 va dirigida al pródigo o díslpador habltuaJque dilapide más de la tercera parte de sus bienes, ya sean. raíces ocapitales. En este caso, como ya lo expresáramos, la acci6n puede Ini­ciarla el cónyuge, los ascendientes o descendientes.

la segunda, semejante a la que nos trae el código suizo, permite ladeclaración de Incapacidad por amala gestión" al que haya perdido másde la mitad de sus bienes.

Así lo determina el artículo 583; sin embargo, si en este último su­puesto la acción es interpuesta por el marido no rige la tasa antes men­cionada.

Título 3-6: Perú

Es decir, que el contenido de la inhabilitación de la legislación sU,lzapuede ser mucha más amplio y llegar incluso a los actos de mala admi­nistración de los bienes.

En nuestro derecho, puede darse el supuesto --el artículo 152 asílo prevé- de que una persona declarada pródigo, s.1el jue:t lo estimareconveniente, puede inhabilitarlo para alguno o todos 10$ actos' de admi­nistración, inhabilitación que no puede conjugar alsladamente sino eon­juntamente con, 10$ actos de disposición.

85

El código de este país con una terminología muy particular nos diceen su artículo 342 que: "Están sujetos a curadería general los menoresadultos que no han obtenido habilitación de edad: los que por prodigali­dad o demencia han sido puestos en entredicho de administración de susbienes; y los sordomudos que no saben darse a entender por escrito".

Más adelante, en su título XXIV se refiere a las reglas especialesccncemlentes a la curadería del disipador, en les articulos que correndel 442 y 455.

En el primero de estos últimos, establece que: ..A los que por pró­digos o disipadores han sido puestos en entredicho de administraciónsus bienes, se dará curador legítimo ... ",

Resulta a todas luces de evidente significación, por la eventual com­probación que cabría con nuestro código civil, el artículo 443 del códigode Chile que se refiere de manera muy determinada y específica a laspersonas que pueden iniciar el juicio de interdicción, no prestándose qui­zás a las dudas que, por la amplitud como han sido manifestadas, sur­gen de nuestro ordenamiento legal.

El mencionado artículo dice: ..El juicio de interdicción podrá serprovocado por el cónyuge no divorciado del supuesto disipador por cual­quiera de sus consanguíneos legítimos hasta el cuarto grado, por suspadres, hijos y hermanos naturales, y por el Ministerio Público. El Minis­terio Públtco será oído aún en los casos en que el juicio de interdicciónno haya sido provocado por él".

Independientemente de las dfverqenolas dectrlnarlas sobre quienespueden tener derecho a solicitar la inhabilitación por prodigalidad, ennuestro derecho .debemos reconocer que el código de Chile no da már­genes de duda respecto a los mismos.

Es de enorme valía, a nuestro entender, la última parte del artículo

Título 3-9: Chile

Como vemos esta disposiciÓn se asemeja un poco a los Incisos 29y 39 del artículo 152 bis de nuestro código.

E igualmente, también como en éste 108 actos de administraciónordinaria pueden serie prohibidos al pródigo sin la intervención del cura­dor, cuando el juez así lo estime conveniente y oportuno.

Los artículos siguientes se refieren a las personas que pueden pro­mover el juicio de Inhabiiltaclón, encontrando en este aspecto una po­sición de avanzada con relación a nuestro código civil.

Esto resulta de la amplitud de las personas mencionadas: el cón­yuge, cualquier pariente y aun cualquier persona a quien le Interese,además al síndico procurador municipal. e incluso, de acuerdo a los ar­tículos 4409 en su segunda parte y 395, el juez puede promover eljuicio de inhabilitación de oficio.

Es este país el que sustenta a través de su legislación una protec­ción muy vasta en resguardo, no sólo de la persona, sino también, de losbienes del pródigo.

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Si bien no conserva actualidad. el problema de la prodigalidad en elámbito del derecho internacional privado, podríamos decir que el mismoha quedado minimizado luego de la reforma introducida por la ley 17.711.

Antes de dicha reforma, se habrían planteado dos posiciones muyconocidas: una territorialista y otra extraterritorialista ..

En materia de capacidad existía y existe en nuestro código civil unaregla general Incorporada en los artículos 6~y 79 del mismo, que dicen:

Artículo ~: ..La capacidad o incapacidad de las personas domlcilla-

Capítulo IV

Derecho Internacional Privado

Hemos dejado de lado algunos países como Ecuador, Colombia, laley noruega de 1895, etc., por considerar que son muy similares a lospaíses que aquí hemos examinado y que, por consiguiente, nada aporta­rían en más de lo que éstos expresan.

Quedan, sin embargo, algunas legislaciones que no hemos conside­rado, por cuanto al rechazar la inhabilitación por prodigalidad, solamentenos ofrecen la información de su reglamentación en ese sentido. Taleslos casos como el de Luisiana. el de Bolivia, el de Uruguay, el lnglésy otros. '

Título 3-10: Países Varios

por ia cual se considera que el Ministerio Pupilar debe ser oído en todojuicio de interdicción. Además de que con la postura adoptada por elcódigo de Chile se protege no sólo .Ios intereses patrimoniales de lafamilia -como propone la exposición de motivos de la reforma de nues­tra ley 17.711y una parte de la doctrina-- sino también que lleva a lapráctica la tesis sustentada explícita e impHcitamente a través de todoeste trabajo, en cuanto debe protegerse también la persona y los Inte­reses del pródigo, aun en los supuestos de que posea familia pero éstase desinterese de él, o bien que no la posea.

Sin lugar a dudas, es el Estado quien debe cumplir la misión socialfundamental en cuanto a la protección de la persona, e incluso de susbienes.

En el código de Chile, en este sentido tal intervención es irrever­sible.

Sin embargo cabe una objeción, y ella va dirigida a un artículo, el445, en el que se determina: "La disipación podrá probarse por hechosrepetidos por dilapidación que manifiesten una total falta de prudencia.El juego habitual en que se arriesgue porciones considerables del patri­monio. donaciones cuantiosas sin causa adecuada. gastos numerosos,autorizan la lnterdlcclón",

La abstracción y ambigüedad de estos preceptos merecen nuestrasevera crítica que formulamos en los mismos términos con que lo he­mos hecho al comentar la reforma de nuestro código civil.

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(38) MARGARITAARGUAS y CARLOSA. lAZCANO. Tratado de Derecho InternacionalPrivado,pág. 114 y slgs.CARLOSA. LAZCANO.Derecho Internacional Privado,pág. 212 y slgs.

(39) VICO. CARLOSM.• Curso de Derecho Internacional Privado. tomo l. página 417y sigs.

(40) WERNERGOlDSCHMIDT. Sistema y F1lo8offadel Derecho Internacional Privado.tomo l. pág. 480 y slg.• tomo 11.pág. 140 y slgs.

das en el territorio de la República, sean nacionales O extranjeras, será;uzgada por las leyes de este código, aun cuando se trate de actos eje­cutados o de bienes existentes en país extranjero",

Artículo 79: • La capacidad o incapacidad de las personas domicilia­das fuera del territorio de la República, será juzgada por las leyes de surespectivo domicilio, aun cuandose trate de actos ejecutados o de bienesexlstentes en la República·.

Tratadistas como Vico, Margarita Argúas, Carlos A. Alcorta y otrospropugnan que debe admitirse la incapácidad de un pródigo dispuestapor la ley domiciliaria, aceptándose las medidas resultantes de la Inter­dicción ordenada por el Juez del domicilio.

Dichos autores creen admisible, por .10 tanto, el efecto extr.aterrito­rial, aunque el juez argentino no lo disponga, porque una cosa es aplicarla Institución y otra muy distinta reconocer sus efectos (38).

Para Vico se trata de un simple caso de incapacidad de hecho, quepuede tener efectos extraterritoriales dado que, notoriamente no se en­cuentra en la condición de las instituciones contrarias al espiritu de lalegislación de un país, como sucede con las incapacidades que estableceel artículo 99de nuestro código civil.

Por lo tanto para este autor, también como hemos expresado ante­riormente, debía regirse la Institución de la prodigalidad por la tesi'S ex­traterritorialista de acuerdo al principio general antes mencionado, valedecir, por las leyes del domicilio (39).

Por otra parte, Goldschmldt puntualiza que la admisión de fa incapa­cidad por prodigalidad, en contra del espíritu liberal del código. civil talcomo surge de la nota del artículo 54, no puede afirmarse que irfa contrala moral y buenas costumbres.

Se discute, dice, si la incapacidad por prodigalidad va contra el or­den público argentino.

Verbigracia, si es o no de aplicación el derecho extranjero en nues­tro país.

El primer argumento que proporciona la nota del artículo 54, no estal, sino sencillamente establece una distinción entre demencia y prodi­galidad. El pródigo disfruta de plena capaeldad de obrar, mientras lasentencia extranjera de incapacidad no se halla reconocida (40).

lazcano coincide con Vico y Carlos A. Alcorta en contra de la opi­nión de Arnancio Alcorta en que debe admitirse la Incapacidad de unpródigo dispuesta por la ley domiciliaria ,aceptándose .Ias mikJidas re­sultantes de la Interdicción ordenada por el juez del domicilio. Para

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(41) AMANCIO ALCORTA.Curso de Derecho Internacional Privado, tomo 11,página 65y 51g5.

(42) ROMERODEL PRADO.VICTORN.• Derecho Internacional Privado, tomo 11.pág. 51Y 5igs.

dicho autor la interdicción no está fuera de la comunidad jurídica, y así,resulta a su entender, claramente de la nota, el artículo 54, pues nocontraría disposiciones de orden público.

El artículo 48 del Código Bustamante, dispone que la declaración deprodigalidad y sus efectos se rige por la ley personal del pródigo; elartículo 90 agrega que no obstante ello no se aplica la ley del domicilioa las personas cuyo derecho nacional desconoce la institución.

Por su parte, el artículo 100 establece que la declaraclón de Inca­pacidad hecha en un estado tiene eficacia extraterritorial en los demáscuando el derecho local así lo permite. En realidad, esta disposición norechaza en modo alguno los efectos de la interdicción, sino que permitelimitarlos.

Ubicándose en una posición netamente territorialista, Amancio AI­corta nos dice con relación a este tema que las leyes extranjeras no sonaplicables en la República, según el artículo 14 del código civil, cuandosu aplicación fuere Incompatible con el espíritu de la legislación de estecódigo, y no puede dudarse, sigue, que en esta situación se encuentrael caso de la prodigalidad (41).

En el mismo sentido se manifiesta Romero del Prado, teniendo encuenta el pensamiento para él claramente manifestado por Vélez Sárs­field, y lo dispuesto en el artículo 14, inciso 2'?de nuestro código civil.Por lo tanto, el pródigo declarado tal en el extranjero no sería un Inca­paz entre nosotros (42).

Con la sanción de la ley 17.711, consideramos que el problema anivel de derecho internacional privado ha quedado prácticamente solu­cionado.

El único inconveniente que pudieran encontrar los sostenedores dela posición territorialista es que no existe uniformidad de criterios enlas distintas legislaciones en cuanto al régimen Jurídico aplicable a lospródigos.

Nuestro país ha optado por un régimen atemperado, poniendo alpródigo en una situación intermedia entre la capacidad plena y la Inca­pacidad, denominándola de "inhabilidad".

En estos momentos, con relación al enfoque que estamos estudian­do en el presente capítulo, sólo quedaría un problema a resolver: cuandola interdicción decretada en el extranjero '(asimilándolo al demente o'ncapaz) va más allá de lo pretendido en nuestro ordenamiento jurldico.El interrogante en cuestión es si dicha situación atenta contra el ordenpúblico argentino.,

Habiéndonos enrolado desde el comienzo en la posición extraterri­torial, con relación al tema de la prodigalidad, consideramos hoy másque nunca superado el problema, al encontrarse incluida una norma es-

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(43) NUTA,ANA R.• Funcióny urgenciade la venia Judicialprevista en el artículo 1277del código civil, Revista Notarial n9 802.

(44) ORGAZ.ALFREDO.El acto de administraciónen el código civil, en su volumenNuevosestucftosde derechodYlf; pág. 60 Y slgs.

lamentablemente no podemos dejar de reconocer la insistencia conque los legisladores de la reforma han incurrido en errores técnicos, la­gunas y contradicciones en la redacción de la misma.

Uno de los aspectos sobre el cual la ley guarda absoluto silencioes el del epígrafe.

En primer lugar, debemos destacar que el artículo 152 bis sólohabla de la conformidad que debe prestar el curador al Inhabilitado, yasea para disponer de sus bienes o bien, cuando el juez lo estime conve­niente, para otorgar actos de administración.

Dicho asentlrnlento o conformidad, está desprovisto de toda exigen­cia formal, de donde puede deducirse que tanto puede ser expreso comotácito. Este último podría darse en el supuesto de que el pródigo otorgueun poder al curador para la venta de uno de sus bienes. El solo hecho dellevar a cabo dicho acto, lleva implícita su conformidad al mismo.

Como hemos dicho anteriormente, los actos para los que puede re­querirse la conformidad del curador pueden ser de dos clases: de dispo­sición y/o de administración.

Escapa a la índole de este trabajo, establecer todos los criterios dedistinción para determinar cuándo- un acto debe entenderse de disposi­ción y cuándo de mera conservación o administración.

Basta decir, que la doctrina está prácticamente de acuerdo en quela calificación de un acto debe fundarse tanto en su finalidad, como enlos efectos de carácter económico, es decir, el modo como ese actoincide sobre el patrimonio (43). _

Según Orgaz es acto de disposición el que, importando o no una ena­jenación, altera o modifica sustancialmente 'as elementos que confor­man el capital, o bien compromete su porvenir por largo ttempo, Ehcambio, es acto de administración el que, Importando o no una enajena­ción, tiene por fin hacer producir una renta normal al patrimonio (44).

En el caso concreto de que el curador o asistente se negara a pres:­tar su conformidad, el pródigo puede recurrir al juez solicitándole venia

Capítulo V

Anállsls de distintos supuestos prácticos con respectoa los cuales la ley guarda silencio

Título 5-1: Situación en la cual el curador se niegaa prestar su asentimiento

peclflca en nuestro ordenamiento legal. Por consiguiente. no podernosefectuar gradaciones sobre este particular.

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(45) NUTA,ANA R., Falta del consenUmlentoconyugalen el boleto de cornpr.venta.Revista Notarial n' 808.

Entendemos que por analogía podría ser aplicable a este supuestolo relativo a la falta de consentimiento conyugal a que alude el artículo1277 del código civil ..

Reiterando una posición sentada recientemente. consideramos queexisten dos tipos de consentimiento distintos: el primero sería el de la

declaración de voluntad del titular que es un elemento esencial delacto. En este caso se trata del consentimiento prestado para cualquieracto que fuere por el pródigo (45).

El segundo caso apunta a la llamada ·conformldad del curador" porel código civil. consentimiento éste que apunta a la eficacia del actomencionado.

Es necesario dejar totalmente esclarecido que. la conformidad a quealude el código civil en el artículo 152 bis (consentimiento del curador).nunca podría suplir el consentimiento del titular. en este caso del pró­digo.

El mal llamado •curador" sólo tiene funciones de asesoramiento pa­trimonial que de ninguna manera pueden confundirse con funciones derepresentación. siendo por lo tanto tndispensable para la realización decualquier acto de que se trate el consentimiento del pródigo.

Entrando estrictamente al análisis del subtítulo de este capítulo. po­demos decir. una vez más. que la ley sólo se refiere a la conformidadsin determinar el tiempo en que ésta debe producirse.

Consideramos que de llegar a tal situación. es decir. que el prÓdigo

Título 5-3: Acto realizado sin el asentimiento del curador

Título 5-2: Asentimiento por poder

El problema aquí planteado se evidencia en el siguiente supuesto:si el curador puede otorgar a una tercera persona un poder (conformidadanticipada) a los efectos de que preste su asentimiento al acto o actosa realizar por el pródigo.

Categóricamente nos expedimos en contra de dicha posibilidad. puessi bien el código no modifica en el arto 152 bis las normas generalesen materia de mandato. consideramos que la designación del llamado"curador" es intuitu personal y por lo tanto a6so1utamente Indelegable.

Judicial supletoria. naturalmente previo traslado al curador para que éstese expida acerca de la causal de su oposición.

En el supuesto de que el juez no encontrara ..justa causa" de oposi­ción debe prestar su consentimiento al acto a realizar por el pródigo.

Pensar de otra manera sería poner en manos de una persona. eneste caso el curador. un ejercicio que podría ser arbitrario y redundaren un manifiesto perjuicio para el pródigo e incluso para su familia.

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(46) NUlA. ANA R., Interpretación "a priori" de la ley por el notarlo y su eventual .....pon_illeIad por aHM,amlento, -La Ley·, 3()'12-1971.tomo 144.

Caprtulo VI

La actitud del Notarlo frente al pródigo

Sabemos perfectamente que los casos sometidos a un notarlo notienen siempre una interpretación única, una solución perfecta sino quesiempre existen varias posibilidades entre las que tendrá que elegir, comoprofesional de deercho, con toda la responsabilidad profesional que elloimplica.

Quizás la tarea más importante del notarlo sea ésa, la de darle vida,vigencia, a normas que·hasta ese momento eran letra muerta. Para cum­plir con su cometido debe estudiar e interpretar cuidadosamente la ley,valiéndose para ello de las doctrinas existentes en la 'materia, de lajurisprudencia y fundamentalmente de su propio criterio jurídico (46).

Es indudable que la tarea del notario frente a esta nueva normativi­dad que plantea el artículo 152 bis, no es nada fáciL

El reglamento notarial de .la provincia de Buenos Aires en su sec­ción 111,bajo el título "De la denegación de funciones", establece unprincipio general: "El escribano de registro no puede negar su minis­terio".

Sin embargo, a renglón seguido establece una serie de excepcionesentre las cuales podemos ver "dudas fundadu del escribano respectodel estado mental del requirente".

Consideramos que la posición del notario frente al pródigo es bas­tante compleja.

Si se trata de una persona no declarada pródigo y, ateniéndonos 8una interpretación exegética de la ley, que nos remite a una prueba ob­jetiva, tendríamos que el notaria, hasta la inhabilitación del mismo, puedeactuar con toda libertad.

Conforme a lo sostenido en el presente trabajo -el pródigo es unalterado mental-, entendemos que el notario debe proceder con extre­ma cautela ante actos otorgados por una persona de su conocimiento,autorizados por él, y que por la índole de los mismos lleven a su con­vencimiento de que el otorgante no se encuentra en un perfecto estadode salud mental.

Por supuesto que el escribano no es un perito para juzgar el estadomental de los otorgantes, pero su responsabilidad es tan grande y la

otorgue un acto que le estaba vedado sin la conformidad del curador,dicho acto sería nulo, pero de nulidad relativa, pues nada obsta a que elcurador preste su asentimiento con posterioridad. !

En igual situación se encuentra el cónyuge que no prestó su con­formldad, para el caso planteado en el artículo 1277 del código civil, ylo realiza a posterior' del acto en cuestión.

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misión de confianza tan importante, que no debería otorgar la escriturasi duda del estado mental de ta persona en cuestión.,

La solución, aparentemente no es tan fácil, pues si bien la reglamencionada por nosotros juega perfectamente para los casos de demen­cia e incluso, luego de fa reforma con respecto al caso de ..debilidadmental- del artículo 152 bis. inciso 2~. es de aplicación más complejacuando se trata de casos de presunta prodigalidad o de los pródigosya declarados tales.

Es necesario discriminar dos casos distintos:

1~)Posición del notario frente al presunto pródigo; el notario en estecaso debe evaluar dos situaciones distintas. Una sería. como yalo hemos dicho. la posibilidad de alguna manife9taci6n externade alteración mental del otorgante: fa otra evaluar ~Io coos'" ,deramos prácticamente imposible- si los actos otorgados porel presunto pródigo ascienden a una parte ímportaate de su pa..trimonio, según el criterio objetivo establecido por nuesfto é&digo civil.

2'1) Posición del notario frente al ya declarado prddigo; como 10 IYé­mos manifestado anteriormente, la ley nada' dice respecto a lanecesidad de la inscripción de la Inhabilitación por prodigalidad.Aun así. la consideramos indispensable (ver Título 2-7).

Sin embargo, el escribano no tiene obligación de solicitaral Registro Nacional de Estado Civil y Capacidad de las Perso­nas un certificado que acredite que no ha sido declarado pródigo.

Consideramos importante destacar aquí. aunque no más sea en for­ma tangencial. la necesidad de establecer por vía legal y en forma obli­gatoria de que el notario solicite al Registro Nacionalde Estado Civil yCapacidad de' las Personas un informe sobre las mismas.

Como síntesis. podemos manifestar que el notario frente a un pre­sunto pródigo debe actuar como profesional de derecho. depoeltarto defe pública. con la máxima cautela, con el objeto de salvaquarder la $e­guridad jurídica.

Ya sí, frente a un pródigo declarado tal. la realidad lo emplazaráante dos situaciones muy distintas: el conocimiento que pueda tener dela declaración de inhabilitación por prodigalidad. lo llevará a no permi­tir otorgar actos de disposición y/o administración cuando el JU8l asílo estime. sin la conformidad del curador. La segunda situación a plan­tearse consistirá en el desconocimiento que pueda tener de la declara­ción de inhabilitación por prodigalidad, en cuyo caso debe actuar comosi se encontrara -si así lo sospechara- frente a un presunto pródigo,salvando siempre su responsabilidad por los actos que éste pudierotorgar.