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Importancia de la alineación y la estabilidad en la prótesis unicompartimental de rodilla Programa de Medicina e Investigación Traslacional Doctorando: Iker Iriberri Etxabeguren Director de tesis: Francisco Maculé Beneyto Tesis Doctoral

Importancia de la alineación y la estabilidad en la

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Page 1: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

Importancia de la alineación y

la estabilidad en la prótesis

unicompartimental de rodilla

Programa de Medicina e Investigación Traslacional

Doctorando: Iker Iriberri Etxabeguren

Director de tesis: Francisco Maculé Beneyto

Tesis Doctoral

Page 2: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

1

1

OSI Bidasoa

Page 3: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

2

Don Francisco Maculé Beneyto, jefe de la Unidad de Rodilla del Servicio de Cirugía

Ortopédica y Traumatología del Hospital Clinic de Barcelona y profesor de la Facultad de

Medicina de la Universitat de Barcelona,

CERTIFICA

Que el proyecto de Tesis Doctoral titulado “Importancia de la alineación y la estabilidad en

la prótesis unicompartimental de rodilla” ha sido realizado bajo su dirección por el

licenciado en Medicina Iker Iriberri Etxabeguren, y reúne todos los requisitos científicos y

formales para ser presentado en la Facultad de Medicina de la Universitat de Barcelona, y

defendido ante el tribunal correspondiente para la obtención del grado de Doctor.

Y para que así conste a todos los efectos, firmo el presente certificado en Barcelona a 4 de

marzo de 2019.

Fdo. Francisco Maculé Beneyto

Page 4: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

3

Zuretzat maitia, beti babesa eman didazulako bide

luze honetan. Tesi honekin batera mundua ezagutu

dugu eta etorkizuneko ametsak sortu ditugu.

Bidea askoz luzeagoa, amaigabea izan dadila!

Page 5: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

4

AGRADECIMIENTOS

Al Dr. José Francisco Aragón Martínez, por plantar en mí la

semilla de las unis y permitirme incluir en mis estudios a sus pacientes,

sin los cuales esta tesis no hubiera sido posible. Gracias a Marga,

Sandra, Cristina, Sonia y tanta gente que me ha acompañado en este

camino. Mis más sinceros agradecimientos al Dr Francisco Maculé por

dirigirme esta tesis doctoral. A todo el Servicio de Traumatología del

Hospital Bidasoa, en el que sigo creciendo gracias a su ayuda.

Medikuntza ikasketak ezin izango nituen gure gurasoen

ahaleginik gabe egin, eskerrik asko momentu txarrenetan ere nire

etorkizunagatik borrokatu zenutelako. Leku berezi bat daukazue izeba

Inaxi eta osaba Danik, zuek gabe tesi hau ez zen posible izango.

Eta zuri ere sis, maite zaitut.

Gracias Antonio por ser mi guía en el camino de la

investigación, todo un ejemplo a seguir, la inspiración en los momentos

más difíciles. Alba, Sara, Migue, Carmen, Ganix: gracias por acogerme

en vuestro grupo, no sé si alguna vez lo merecí. Eduardo, empezamos

este camino juntos y juntos lo acabaremos, gracias por tu amistad.

Eta Luis, hemen zu falta zara, seguru egunen batean iritsiko zarela.

Page 6: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

5

Los resultados de la presente tesis doctoral han sido publicados en revistas científicas del

ámbito de la Cirugía Ortopédica y la Traumatología. Las publicaciones que han resultado

hasta el momento son las siguientes (Anexos 1 y 2):

1) Iriberri I, Aragón JF. Alignment of the tibial component of the unicompartmental

knee arthroplasty, assessed in the axial view by CT scan: does it influence the

outcome? Knee. 2014 Dec;21(6):1269-74. doi: 10.1016/j.knee.2014.06.008. Epub

2014 Jul 8.

Revista: The Knee.

Factor de impacto 2017: 1,903.

Primer cuartil del área de conocimiento (Q1).

2) Iriberri I, Suau S, Payán L, Aragón JF. Long-term deterioration after one-stage

unicompartmental knee arthroplasty and anterior cruciate ligament reconstruction.

Musculoskelet Surg. 2018 Dec 6. doi: 10.1007/s12306-018-0582-4.

Revista: Musculoskeletal surgery.

Factor de impacto 2017: 1,28.

Segundo cuartil del área de conocimiento (Q2).

Page 7: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

6

ÍNDICE

TÍTULO

Importancia de la alineación y la estabilidad en la prótesis unicompartimental de rodilla

RESUMEN……………………………………………………………………………… 9

INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………13

Contexto……………………………………………………………………………………... 14

Indicaciones…………………………………………………………………...…………….. 17

Influencia del LCA en la PUR………………………………………………………….….... 19

Técnica quirúrgica ………………………………………………………...…………….….. 22

Alineación: …………………………………………………………………………….…. 24

Eje de las extremidades inferiores……………………………………………….…... 25

Alineación en el plano coronal…………………………………………………...….. 28

Alineación en el plano sagital……………………………………………………….. 30

Alineación en el plano axial…………………………………………………………. 32

Page 8: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

7

HIPÓTESIS Y OBJETIVOS…………………...…………………………….… 36

METODOLOGÍA………………………………………………………………….... 38

Alineación en el plano axial…………………………………………………………………. 39

Prótesis unicompartimental de rodilla asociada a plastia de LCA…………………………... 41

RESULTADOS……………………………………………….………………………. 43

Alineación en el plano axial…………………………………………………………………. 44

Prótesis unicompartimental de rodilla asociada a plastia de LCA…………………………... 46

Anexo 1: Alignment of the tibial component of the unicompartmental knee arthroplasty,

assessed in the axial view by CT scan: does it influence the outcome?.................................. 49

Anexo 2: Long‑term deterioration after one‑stage unicompartmental knee arthroplasty and

anterior cruciate ligament reconstruction…………………………...………….…………..... 56

DISCUSIÓN…………………………………………………………………………… 63

ALINEACIÓN EN EL PLANO AXIAL……………………………………………………. 64

Referencias anatómicas para establecer la rotación del componente tibial…………………. 65

Instrumental para establecer la rotación del componente tibial…………………………….. 70

Instrumental específico para pacientes……………………………………………… 70

Navegador…………………………………………………………………………… 72

Page 9: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

8

Cirugía asistida por robot……………………………………………………………. 74

Análisis……………………………………………………………………………………… 76

PRÓTESIS UNICOMPARTIMENTAL DE RODILLA ASOCIADA A PLASTIA

DE LCA……………………………………………………………………………………... 79

Inestabilidad ligamentosa clínicamente manifiesta…………………………………….……. 81

Alternativas a la combinación de PUR y plastia de LCA…………………………………… 83

Pronóstico en caso de revisión……………………………………………………….……… 86

Estudios previos de PUR y plastia de LCA…………………………………………….…… 89

CONCLUSIONES…………………………………………………….……………. 92

BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………………. 94

Page 10: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

9

RESUMEN

Page 11: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

10

INTRODUCCIÓN:

La prótesis unicompartimental de rodilla (PUR) es una técnica que ha generado controversia

desde su primera descripción hace más de 40 años. En comparación con la prótesis total de

rodilla (PTR), la PUR presenta un plazo de recuperación más corto, con menos dolor, menos

morbilidad asociada, un mayor rango de movilidad y una cinemática de rodilla más parecida a

la rodilla nativa no protésica. Sin embargo, la supervivencia a largo plazo suele ser menor tras

una PUR, con un riesgo relativo de necesidad de revisión 2,2 veces mayor que tras una PTR.

El objetivo de esta tesis doctoral es analizar aspectos que no hayan sido previamente descritos

de dos de los factores que pueden influenciar la evolución de una PUR: la alineación y la

estabilidad.

HIPÓTESIS

La alineación rotacional del componente tibial de la PUR tiene influencia en el resultado

clínico postoperatorio.

La asociación de PUR y plastia de LCA puede presentar buenos resultados a largo plazo.

METODOLOGÍA:

En el estudio de alineación se incluyen 101 casos de PUR en 88 pacientes. Tras 71 meses de

seguimiento medio (de 36 a 150) se realiza una TC postoperatoria y se examina clínica y

radiológicamente a los pacientes, realizándose las escalas de WOMAC y KSS. Se mide la

alineación rotacional tibial mediante el protocolo de Yoshioka y se observa su distribución. Se

divide a los pacientes en dos grupos diferentes dependiendo de un valor diferente de

WOMAC o KSS cada vez y se analizan las diferencias de angulación tras cada comparación.

Page 12: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

11

En el estudio de estabilidad se incluyen 8 pacientes con artrosis unicompartimental medial de

rodilla e inestabilidad ligamentosa asociada por déficit del LCA, a los que se realiza una PUR

medial asociada a plastia de LCA, en un solo acto quirúrgico. Tras un seguimiento mínimo de

10 años, se realiza un análisis clínico y radiológico de los pacientes con el objetivo de

observar los resultados a largo plazo.

RESULTADOS:

El componente tibial de la PUR se implantó con una alineación media de 11,9º (de -1º a 32º)

de rotación externa. En los pacientes con mejores resultados clínicos se observa una menor

angulación en rotación externa. Las diferencias entre grupos fueron estadísticamente

significativas cuando el buen resultado fue definido como una puntuación menor a 10 en la

escala WOMAC.

Tras la asociación de PUR y plastia de LCA los pacientes presentan un índice de satisfacción

personal de 8,8 (de 4 a 10). Tras 14,6 años de seguimiento medio la puntuación media en la

escala de WOMAC fue de 26 (de 1 a 52) y en la KSS de 154 (de 102 a 200). Tras 9 años de

seguimiento, se realizó una cirugía de revisión a PTR por aflojamiento aséptico. Se observó

otro caso de deterioro clínico tras 13 años de seguimiento.

CONCLUSIONES:

La alineación en el plano axial de las PUR tiene influencia en el resultado clínico

postoperatorio. La implantación del componente tibial de una PUR en rotación neutra o ligera

rotación externa se asocia a mejores resultados en la escala WOMAC. La técnica de manos

Page 13: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

12

libres para la determinación de la alineación rotacional del componente tibial de la PUR

presenta una gran variabilidad, de hasta 33º.

La asociación de PUR y plastia de LCA proporciona buenos resultados clínicos a largo plazo

en pacientes con artrosis unicompartimental medial y clínica de inestabilidad por rotura de

LCA. Sin embargo, se observan algunos casos de deterioro tras un seguimiento a largo plazo,

con índices de fracaso mayores que tras una PTR.

Page 14: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

13

INTRODUCCIÓN

Page 15: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

14

CONTEXTO

La prótesis unicompartimental de rodilla (PUR) es un procedimiento con resultados

contrastados para el tratamiento de la gonartrosis aislada de un solo compartimento. A pesar

de que las primeras series publicadas hace más de 40 años presentaban un alto índice de

complicaciones1,2,3

, estudios recientes han mostrado resultados satisfactorios4,5,6,7

. Hoy en día

las publicaciones sobre esta prótesis son numerosas, abriendo nuevos campos de

conocimiento y favoreciendo su constante evolución.

La primera revisión de casos fue presentada por Insall et al. en 1976 e incluía 24 pacientes1.

Menos de la mitad de los casos obtuvieron resultados favorables (5 excelentes, 6 buenos),

siendo las PUR laterales las que presentaban mejor evolución. En consecuencia, el autor

desaconsejaba las PUR para casos de gonartrosis medial y recomendaba realizar osteotomías

de tibia proximal. Curiosamente, esta conclusión ha resultado ser totalmente opuesta a la

situación actual, en la que se indican 10 veces más PUR mediales que laterales y se considera

técnicamente más demandante la implantación de PUR laterales8.

Marmor presentó hace más de 3 décadas los primeros estudios con datos evolutivos a largo

plazo, con un seguimiento mínimo de 10 años2,3

. De los 60 casos intervenidos entre 1972 y

1976, un 70% presentaba resultados satisfactorios (30 excelentes, 8 buenos) y el 87% refería

alivio del dolor. Sin embargo, los 21 casos de fracaso fueron considerados inaceptables por

muchos cirujanos, siendo esta la principal razón por la que siguieron realizando las técnicas

habituales, como la prótesis total de rodilla (PTR) o la osteotomía de tibia proximal.

Page 16: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

15

Con la introducción de la prótesis de inserto tibial móvil tipo Oxford empezó a revertir el

porcentaje de complicaciones de los primeros estudios. Goodfellow presenta en 1988 los

primeros 103 casos tratados con esta prótesis, con un índice de fracasos del 9% a 36 meses de

seguimiento medio9. Entre los pacientes que conservaban la prótesis en el momento del

estudio, el 96% referían alivio del dolor.

En los últimos años, el índice de supervivencia de la PUR ha aumentado hasta llegar a datos

equiparables a la PTR en estudios a largo plazo con tamaños muestrales grandes. Pandit et al.

publicaron en 2015 un estudio que incluye 1000 PUR, donde la supervivencia a 10 años es del

94% y a los 15 años del 91% 10

. Otros estudios han descrito tasas de supervivencia a 10 años

del 94%4, 97%

6 y 98%

5. Argenson et al. presentan en 2013 los resultados de los 70 casos que

seguían vivos tras 20 años de seguimiento medio, de una cohorte original de 160. De los 70

supervivientes, 51 no precisaron ningún tipo de cirugía de revisión, siendo un 73% de los

casos11

. Todos estos estudios demuestran que, a diferencia de lo observado en las series

iniciales, la PUR puede ser un procedimiento fiable, con resultados satisfactorios a largo

plazo.

Sin embargo, los evolutivos postoperatorios son diferentes dependiendo de la experiencia del

cirujano. A pesar de que en manos expertas los índices de supervivencia son altos, la mayoría

de las revisiones de PUR corresponden a prótesis implantadas por cirujanos que realizan este

procedimiento en pocas ocasiones12

. En consecuencia, los datos globales de supervivencia a

largo plazo suelen ser peores para la PUR, como se puede observar en un estudio que describe

los datos incluidos el Registro de Artroplastias de Finlandia entre 1985 y 2011 (27 años)13

. El

Page 17: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

16

índice de supervivencia de Kaplan-Meier de las 4713 PUR intervenidas en este periodo fue de

89,4% a los 5 años, 80,6% a los 10 años y de 69,6% a los 15 años. Los datos correspondientes

a las 83511 PTR realizadas en el mismo periodo fueron de 96,3%, 93,3% y 88,7%

respectivamente. El riesgo relativo de necesidad de revisión fue 2,2 veces mayor en pacientes

con PUR. Estos datos poblacionales pueden considerarse más extrapolables a cualquier grupo

de pacientes que los publicados por expertos experimentados en la indicación y la técnica

quirúrgica de la PUR.

La PUR ha demostrado varias ventajas en comparación con la PTR, que incluyen un plazo de

recuperación más corto14,15

, con menos dolor16

, un mayor rango de movilidad17

y una

cinemática de rodilla más parecida a la rodilla nativa no protésica18

. La morbilidad asociada a

las PUR es menor que en las PTR, siendo la pérdida de sangre menor19

y con bajos índices de

complicaciones20

. Por último, en un análisis del costo-eficacia se calculó que cada

procedimiento de PUR suponía un ahorro sustancial en comparación con la PTR, con una

diferencia de 1761 libras esterlinas por rodilla21

.

Page 18: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

17

INDICACIONES

El resultado favorable y la supervivencia de las PUR están estrechamente relacionadas con la

adecuada selección de pacientes. Los mismos autores de los estudios iniciales, con un alto

índice de fracasos, señalaban los errores de indicación como posible causa de los resultados

desfavorables1,2

. A medida que se entendió la importancia de respetar las contraindicaciones

fue aumentando la tasa de supervivencia.

Los candidatos ideales para una PUR deben cumplir con las siguientes condiciones22

:

- Pacientes mayores de 60 años23

.

- Menos de 82 kg de peso23

.

- Artrosis grado 2 o 3 de Ahlbäck24

, que afecte a un solo compartimento y que no

sea secundaria a enfermedades inflamatorias.

- Osteonecrosis espontánea del cóndilo femoral medial25

.

- Movilidad articular preoperatoria: debe sobrepasar los 90º de flexión y no debe

tener un flexo mayor de 10º.22

- Ligamento cruzado anterior (LCA) intacto, sin ningún tipo de inestabilidad

ligamentosa23

.

- Eje mecánico en el plano frontal: debe tener un varo de rodilla menor de 15º en

artrosis mediales, o un valgo menor de 10º en artrosis laterales26

. Esta deformidad

debe ser corregible pasivamente27

.

Si se respetan estrictamente los criterios de indicación, el número de pacientes tributarios de

PUR es limitado. En un análisis de 250 pacientes intervenidos de PTR de forma consecutiva,

Page 19: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

18

Sculco consideró que solo 19 casos (8%) cumplían los criterios de selección28

. Ritter et al.

compararon los hallazgos preoperatorios e intraoperatorios de 4021 casos intervenidos de

PTR, con el objetivo de identificar rodillas con artrosis medial aislada, candidatos para

PUR29

. Observaron que solo 247 pacientes (6,1%) cumplían con los criterios anatómicos y

que de estos solo 168 cumplían con el resto de criterios clínicos: solo el 4,3% de los pacientes

cumplían con todos los criterios de indicación para una PUR.

Sin embargo, algunos criterios de los mencionados en las indicaciones son cuestionados por

algunos autores. Por ejemplo, Pandit analizó una cohorte de 1000 pacientes y observó que un

68% de casos se realizaron en pacientes que presentaban como mínimo una contraindicación

para PUR25

. Analizó si los resultados de pacientes con contraindicaciones para PUR eran

diferentes a los que no tenían contraindicaciones y observó que no había diferencias

significativas entre ambos grupos. Uno de los aspectos que mayor controversia ha producido

es si las PUR están realmente contraindicadas en pacientes con rotura de LCA e inestabilidad

anterior. Las conclusiones observadas en la literatura médica son contradictorias, razón por la

que este tema ha sido uno de los seleccionados para esta tesis doctoral.

Page 20: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

19

INFUENCIA DEL LCA EN LA PUR

La primera descripción de la ruptura del LCA como factor de riesgo para el fracaso de las

PUR se remonta al estudio de Deschamps y Lapeyre en 198730

. De los 15 pacientes en los que

se detectó una inestabilidad anterior preoperatoria, 13 obtuvieron resultados no satisfactorios

y 10 fueron reoperados en un periodo medio de 3,5 años. En la serie original sobre prótesis

tipo Oxford de Goodfellow de 1988, se realizaron PUR en 37 pacientes con rotura de LCA9.

El índice de fracasos observado en este grupo (6 casos, 16,2%) fue mayor que en los que

tenían un LCA sano en el momento de la operación (4,8%) y se recomendó incluir la

integridad del LCA como criterio de indicación de futuras PUR. En un artículo de revisión del

año siguiente, Kozinn y Scott reforzaron esta idea afirmando que ambos ligamentos cruzados

deben estar íntegros para garantizar el mejor resultado de una PUR23

.

Estas referencias son las que marcaron la tendencia de años posteriores a contraindicar la

PUR en pacientes con déficit de LCA. Sin embargo, en artículos más recientes se cuestiona su

validez31

. En las series iniciales la selección de pacientes no era estricta y se indicaba PUR en

casos con patología muy avanzada, que era lo que condicionaba su fracaso. Por ejemplo, entre

los pacientes del estudio de Goodfellow9, 2 de los 6 fracasos corresponden a una implantación

bilateral simultánea en un paciente con un varo de rodilla preoperatorio mayor de 20º en

ambas rodillas, además de una inestabilidad anteroposterior severa. Ambos implantes se

aflojaron a los 4 meses de evolución y el error se atribuyó al déficit de LCA en lugar de a la

severa alteración del eje mecánico, pudiéndose haber cometido un sesgo de confusión. Por

otro lado, la evolución de los materiales e instrumentales desde los años 80 ha contribuido a

que la implantación de los componentes protésicos sea actualmente más fiable. Como

consecuencia, en la bibliografía más reciente se pueden encontrar múltiples referencias con

Page 21: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

20

grandes tamaños muestrales de pacientes con déficit de LCA a los que se les ha implantado

una PUR y presentan buenos resultados a largo plazo31-34

. Si en estudios iniciales se

cuantificaban 3,3 revisiones por cada 100 años observados, en referencias actuales los

fracasos han disminuido a 1 revisión por cada 100 años observados35

.

Por ejemplo, Boissonneault et al. presentan un estudio tras la implantación de 46 PUR

mediales de tipo Oxford en pacientes con déficit de LCA y se compara con un grupo control

de pacientes con PUR y LCA intacto31

. Tras 5 años de seguimiento medio, no describen casos

de aflojamiento en ninguno de los grupos y no encuentran diferencias significativas en cuanto

a resultados clínicos. En el grupo con déficit de LCA se incluye el único paciente que precisa

revisión a PTR, debido a la progresión de la artrosis al compartimento lateral. Engh et al.

también comparan 76 casos de PUR en rodillas con rotura de LCA con 706 casos con LCA

sano34

. Tras 6 años de seguimiento medio, tampoco encuentran diferencias significativas entre

los grupos. Uno de los puntos de mayor interés en este estudio es que a 5 pacientes con déficit

de LCA y clínica de inestabilidad preoperatoria se les asoció una plastia de LCA en la misma

intervención. El resto de los pacientes, además de no referir inestabilidad preoperatoria,

contaban con una maniobra de cajón anterior negativa antes de la operación. El autor propone

así un nuevo planteamiento del abordaje de los pacientes con rotura de LCA: indica una PUR

aislada en pacientes sin clínica de inestabilidad, pero le asocia una plastia de LCA si la

presenta. Así, plantea que los síntomas y la biomecánica alterada de la rodilla son más

determinantes que un simple hallazgo patológico, la ruptura del LCA.

En pacientes con déficit de LCA sintomático y artrosis de rodilla secundaria que no responden

al tratamiento conservador, existen varias posibilidades de tratamiento quirúrgico36

:

- Plastia de LCA aislada.

Page 22: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

21

- Osteotomía de tibia proximal con o sin plastia de LCA asociada.

- Próstesis unicompartimental de rodilla con o sin plastia de LCA asociada.

- Prótesis total de rodilla.

Dado que estos pacientes suelen ser jóvenes y activos, se priorizan los tratamientos que

conservan el mayor stock óseo posible y no se recomienda realizar una PTR de entrada37,38

.

La ausencia de estudios de alta calidad científica, sin ningún ensayo clínico aleatorizado

publicado hasta ahora, dificulta determinar cuál de los procedimientos es el más adecuado

para estos pacientes36

. Sin embargo, sí que se ha demostrado que la asociación de una plastia

de LCA en rodillas con PUR puede restablecer la cinemática de la rodilla en niveles parecidos

a rodillas con PUR y LCA sano39

, pudiendo prevenir así sobrecargas y aflojamientos del

componente tibial. Existen varios estudios que demuestran que la asociación de ambas

técnicas puede proporcionar buenos resultados a corto y medio plazo37,40-44

. Sin embargo,

ningún autor ha descrito resultados a largo plazo.

El objetivo de nuestro estudio es demostrar que la asociación de plastia LCA y PUR es una

técnica que proporciona buenos resultados en pacientes con rotura de LCA sintomática y

artrosis avanzada unicompartimental, tras un seguimiento a largo plazo. (Anexo 2)

Page 23: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

22

TÉCNICA QUIRÚRGICA

Las técnicas quirúrgicas de la PUR aislada y asociada a plastia de LCA están descritas en los

Anexos 1 y 2 respectivamente.

En comparación con la PTR, la técnica quirúrgica de la PUR es considerada más exigente,

siendo esta la principal razón para que la consecución de resultados satisfactorios sea menos

frecuente28

. A pesar de que en manos de cirujanos experimentados la supervivencia de las

PUR puede llegar a ser equivalente a las PTR4-6,10,11

, generalmente la tasa de revisiones suele

ser mayor45-49

. Cuando la mayoría de los estudios a largo plazo sobre PTR refieren

supervivencias del 95% a 15 años de seguimiento50

, los de PUR describen tasas como el 82%

a los 12 años de Scott46

o el 79% a los 15 años de Tabor47

. A pesar de ello, los resultados a 10

años de seguimiento son aceptables y se tiene en consideración el carácter conservador de las

PUR, donde la resección ósea es menor y se mantienen todos los ligamentos importantes de la

rodilla51

.

a b

Imagen 1: resección ósea en una intervención habitual de PTR (a) y de PUR (b)

Page 24: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

23

La mayoría de las revisiones de PUR corresponden a prótesis implantadas por cirujanos que

realizan este procedimiento en pocas ocasiones12

. Un cirujano ortopédico realiza como media

cerca de 25 prótesis de rodilla por año28

. Si las indicaciones de PUR se respetaran de forma

estricta, cada uno tendría 2 o 3 pacientes con criterios para PUR. Realizar un procedimiento

de forma poco frecuente puede condicionar resultados comprometidos, sobre todo si se trata

de técnicas que precisan un alto nivel de experiencia. Así, Bini et al. observaron, en un

análisis de 1746 PUR, que los cirujanos que realizan 12 o menos PUR por año tienen un

riesgo de fracaso 2,18 mayor que los que realizan más de 1252

. Además, la curva de

aprendizaje es larga: la tasa de complicaciones no empieza a descender hasta que se realiza la

16ª intervención y no llega a ser aceptable hasta después de los 29 casos53

.

La experiencia del cirujano tampoco garantiza la adecuada colocación de la prótesis, como

describen Tsai et al54

. En su estudio se incluyen 77 rodillas intervenidas de PUR por un solo

cirujano experimentado. Se analizó por radiografía biplanar si el alineamiento de la prótesis

seguía las recomendaciones del fabricante. Se observó que solo un 14% de pacientes

disponían de una colocación adecuada y de que el 42% de los casos presentaba un error de

alineamiento de ambos componentes. Si incluso en manos de cirujanos experimentados la

correcta alineación es un objetivo difícil de conseguir, es evidente que una de las debilidades

de este procedimiento es la poca fiabilidad de la técnica de implantación. Todo nuevo

conocimiento que ayude a que esta intervención sea más reproducible contribuye a la mejoría

de los resultados y a que la técnica sea accesible para cirujanos menos experimentados. El

objetivo de la segunda parte de esta tesis doctoral va orientado en este sentido.

Page 25: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

24

ALINEACIÓN

La alineación de las prótesis se puede medir en los 3 planos del espacio. Además, su

disposición puede influir en el eje de la extremidad inferior intervenida. Por lo tanto, estas son

las variables a medir a la hora de analizar la correcta implantación de una PUR:

- Eje de las extremidades inferiores.

- Colocación de la prótesis en el plano coronal.

- Colocación de la prótesis en el plano sagital.

- Colocación de la prótesis en el plano axial o rotación.

En el plano coronal, se recomienda colocar el componente tibial perpendicular al eje

mecánico tibial55

. En el plano sagital se recomiendan 5º de pendiente posterior y en el axial,

que esté paralelo a la línea de Akagi56

. En cuanto al componente femoral, se debe implantar

perpendicular al eje mecánico femoral en el plano coronal, con ligera flexión en el plano

sagital y paralelo al eje epicondilar en el plano axial55

. En las PUR mediales, se recomienda

mantener el eje de la extremidad en un varo de 1-4º, que corrija parcialmente la deformidad

preoperatoria, pero sin sobrecorregir al valgo57

.

En los siguientes apartados se analizarán de forma individualizada cada una de estas

variables. Se muestra la evidencia existente para el componente tibial de la PUR medial, que

será el sujeto del estudio que se planteará al final.

Page 26: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

25

1) EJE DE LAS EXTREMIDADES INFERIORES

Se ha demostrado que la disposición del eje de la extremidad inferior tras la implantación de

una PUR influye en la progresión de la condropatía del compartimento sano, en el desgaste

del polietileno protésico, en la recurrencia de la deformidad en varo y en la supervivencia de

la prótesis58,59

.

Para medir el eje de las extremidades inferiores, se realizan radiografías anteroposteriores de

toda la longitud de ambas extremidades, con el paciente de pie, en carga58

. Hay diferentes

formas de medir el eje:

- Eje mecánico: línea proyectada desde el centro de la cabeza femoral al centro de la

articulación del tobillo. Kennedy propuso la división de la interlínea tibia en 6 zonas

de medial a lateral y observó que en una rodilla sana el eje mecánico suele pasar por

las zonas 2 y C60

. (Imagen 2a)

- Eje anatómico: corresponde a los ejes de las diáfisis de los huesos largos. En el fémur

se encuentra en desviación en valgo con respecto al eje mecánico aproximadamente de

6°, mientras que en la tibia es igual al eje mecánico61

. (Imagen 2b)

- Ángulo cadera-rodilla-tobillo: formado por la línea que une la cabeza femoral con el

centro de la rodilla (eje mecánico del fémur) y otra línea que une el centro de la rodilla

con el centro del tobillo (eje mecánico de la tibia). Estos ejes generalmente forman una

línea recta (180º). Por lo tanto, las rodillas varas tienen menos de 180º y las valgas

más de 180º.27,58

(Imagen 2c)

Page 27: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

26

En la PTR la inclinación del componente tibial determina directamente el ángulo

femorotibial. Sin embargo, en la PUR el platillo tibial se puede colocar en cualquier

inclinación y no siempre influye directamente en el ángulo femorotibial62

. La alineación

postoperatoria del eje de la extremidad depende del grosor del inserto tibial, del nivel de corte

tibial, del balance ligamentoso y de la deformidad preoperatoria58

. El mayor problema reside

en la dificultad de determinar intraoperatoriamente y de forma precisa la angulación que

persistirá tras la operación58

.

Uno de los errores más frecuentes es la sobrecorrección a valgo, lo que favorece la

degeneración del compartimento lateral. Kennedy describió, tras analizar la colocación de 52

PUR, que si el eje mecánico pasaba por las zonas 2 y C los resultados insatisfactorios eran del

a c b

Imagen 2: a) Eje mecánico y división de la tibia en 6 zonas, propuesta por Kennedy60

. b) Eje

anatómico y ángulo que realiza con el eje mecánico. c) Ángulo cadera-rodilla-tobillo (HKA = hip-

knee-ankle)

Page 28: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

27

5'4% (2/37) y si pasaba por las zonas 3 y 4 aumentaban al 13'3% (2/15)60

. Hernigou et al.

observaron que la progresión de la artrosis en el compartimento femorotibial contrario

aparecía de forma más frecuente y severa en pacientes con valgo tras una PUR medial58

. Seis

de las 10 rodillas en valgo (60%) desarrollaron artrosis lateral, con un desgaste de 0,23 mm

por año para estas 6 rodillas. Por el contrario, solo 8 de las 48 rodillas restantes (17%) la

desarrollaron, con un desgaste de 0,12 mm por año. Estas 14 rodillas con pinzamiento del

compartimento lateral presentaban una puntuación significativamente más baja en la Knee

Society Score.

En el mismo estudio se constató que la hipocorreción del varo aumenta el desgaste del

polietileno y favorece la recidiva de la deformidad en varo. Las 8 rodillas con un varo severo,

cuyo ángulo cadera-rodilla-tobillo era menor a 170º, presentaban un desgaste del polietileno

tibial de 0,21 mm por año. Sin embargo, el desgaste en el resto de las 50 rodillas era de 0,13

mm por año58

. Tras un seguimiento medio de 15 años, estos pacientes presentaron una

recurrencia del varo de 6,4º de media. Gulati et al. también observaron peores puntuaciones

en la Knee Society Scrore en el grupo de pacientes con el eje anatómico en varo63

. En otro

estudio de Ridgewayet al. se observó que en las PUR que precisaron cirugía de revisión la

corrección del varo preoperatorio había sido menor (6,6º) que en los pacientes que no

precisaron revisión (9,1º)59

.

Generalmente la carga que se reparte en la tibia se distribuye un 75% en la meseta medial y

un 25% en la lateral64

. En los casos en los que el eje mecánico se sitúa en las zonas 0 o 1, el

ángulo femorotibial mide entre 0 y 7º de varo60

. Estos pacientes realizan el 100% de la carga

en el compartimento medial65

. Sólo cuando el ángulo femorotibial es de 0º o valgo empieza a

cargar peso en el compartimento lateral65

. Un varo excesivo puede condicionar que toda la

Page 29: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

28

carga se distribuya por la zona medial y provocar un aflojamiento precoz del implante59

. Por

el contrario, una hipercorrección a valgo es la mayor causa de deterioro del compartimento

sano lateral58,66

. En conclusión, el criterio esencial en las PUR es la hipocorrección de la

rodilla2. La única corrección que precisa la PUR es la que completa el gap por déficit condral

secundaria a la artrosis66

.

2) ALINEACIÓN EN EL PLANO CORONAL

La angulación del componente tibial se mide tomando como referencia el eje diafisario de la

tibia. Se traza una línea desde el espacio entre las dos espinas tibiales hacia el centro de la

diáfisis y otra que siga la superficie de la meseta tibial en la imagen preoperatoria o en la base

del componente tibial una vez colocada la PUR68

. Un ángulo menor a 90º se traducirá en una

inclinación tibial en varo y si el ángulo es mayor a 90º la implantación será en valgo. El valor

medio de la población suele ser de 87º, por lo tanto 3º de varo69

. (Imagen 3)

Imagen 3: medición de la inclinación tibial medial en el plano coronal respecto al eje

diafisario tibial, que se realiza de la misma forma tanto en la tibia original (a) como en la

protésica (b).

a b

Page 30: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

29

Varios estudios biomecánicos han estudiado esta variable de la alineación, con resultados

dispares. Sawatari et al. lo analizan mediante simulación por ordenador y aplicación de cargas

controladas y observan que el área de colapso de hueso esponjoso aumenta a medida que

aumenta el varo del componente tibial69

. Para disminuir el área de colapso, la inclinación más

recomendable para el componente tibial de una PUR es una ligera inclinación en valgo de 2º a

4º. A medida que el componente tibial se coloca en un varo progresivamente ascendente

aumenta el stress local. Iesaka et al. midieron la concentración de stress en la cortical medial

de la tibia en modelos en los que se implantó el componente tibial desde 5º de valgo hasta 10º

de varo, con 1º de diferencia entre cada uno62

. Observaron que el stress aumenta a medida que

la inclinación cambia de valgo a varo, llegando a valores un 50% mayores en los casos de

varo. De la misma forma, también aumentan las fuerzas de cizallamiento en el hueso cortical

metafisario, lo que puede provocar una fractura de la meseta medial. Refieren que las cargas

están homogéneamente distribuidas a 5º de valgo del componente tibial. Sin embargo, Inoue

et al. describen un mayor riesgo de fractura de meseta tibial medial en componentes tibiales

colocados entre 3º y 6º de valgo y recomiendan la implantación del platillo tibial entre 0 y 3º

de varo70

.

Ningún estudio clínico realizado en pacientes portadores de PUR ha relacionado la

inclinación en valgo del platillo tibial con mejores resultados o mayor supervivencia. De

hecho, ninguna de las técnicas quirúrgicas aconseja la implantación en valgo. En cuanto a la

PUR de platillo móvil tipo Oxford (Biomet, Swindon, UK), se recomienda que el corte

horizontal sea perpendicular al eje de la tibia71

. En la técnica quirúrgica del implante Accuris

(Smith & Nephew, Inc, Memphis, TN), de platillo fijo, se insta a respetar la anatomía previa y

Page 31: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

30

colocar el implante en 2-4º de varo. Esta recomendación está basada en las publicaciones de

Cartier66

, quien refiere que la mayoría de pacientes presentan una deformidad ósea en varo

antes de la operación. Por eso recomienda realizar el corte tibial según el eje epifisario y

respetando la anatomía original, al contrario que en la PTR, que se hace guiado por el eje

mecánico de la tibia.

Los siguientes estudios refuerzan la línea de trabajo propuesta por Cartier. Collier et al.

presentan una serie de 245 PUR en la que describen que el riesgo de revisión disminuye si el

platillo tibial se implanta con un varo 5º menor que la inclinación de la tibia original antes de

la operación (8º de varo de media)67

. Refieren que el cambio en la angulación en el plano

coronal es más importante que la angulación de forma aislada, sin compararlo con el

preoperatorio. En este mismo sentido, Chatellard et al. refieren que la supevivencia de las

PUR disminuye si la inclinación del componente tibial varía más de 3º con respecto a la

anatomía original72

. Por lo tanto, la evidencia existente sobre la inclinación del platillo tibial

en el plano coronal recomienda no variar demasiado la angulación con respecto a la anatomía

original.

3) ALINEACIÓN EN EL PLANO SAGITAL

La inclinación en el plano sagital también se conoce como la pendiente o el slope y se define

como el ángulo que forman en el plano sagital la inclinación posterior de la tibia y una línea

perpendicular con el córtex tibial posterior73

. En la meseta tibial medial suele ser de unos 10º

hacia posterior, mientras que suele ser de 7º en el compartimento lateral74

. La pendiente

posterior en la que se implanta la tibia protésica influye en la alineación entre la tibia y el

Page 32: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

31

fémur en el plano sagital. Así, por cada 10º que aumenta el slope posterior, se produce una

translación tibial anterior de 6 mm75

. Esta translación suele ser mucho más pronunciada en

caso de asociarse una rotura de LCA73

. (Imagen 4)

La colocación del componente tibial se recomienda con una pendiente posterior inferior a 7º a

raíz del estudio de Hernigou et al. sobre 99 pacientes con 16 años de seguimiento medio73

.

Observaron que el slope posterior medio era significativamente menor en los pacientes que no

precisaron cirugía de revisión (4º de media) que en los que la necesitaron (9º). Más

concretamente, los casos con rotura de LCA en el momento de la cirugía de revisión de la

PUR tenían un slope posterior mayor a 8º. En la radiografías de estos pacientes se observaba

además una translación tibial anterior mayor a 10 mm. De los 17 casos que precisaron

revisión 5 conservaban el LCA en la cirugía de recambio: su pendiente posterior era de 0º. Sin

embargo, los 5 casos cuyo LCA había sido considerado intacto en la cirugía primaria y estaba

Imagen 4: medidas en una radiografía lateral, incluyendo el slope del platillo tibial (c) y la

translación tibial anterior (d).

Page 33: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

32

roto en la revisión, presentaban una pendiente de 14º. Por lo tanto, la degeneración progresiva

del LCA se relaciona con una pendiente posterior aumentada. Por otro lado, los 11 casos con

ausencia de LCA en el momento de la cirugía que no habían precisado revisión, tenían un

slope posterior menor a 4º y una translación tibial anterior menor a 10 mm. Por lo tanto, la

estabilidad de PUR con déficit de LCA se puede aumentar disminuyendo la pendiente

posterior de su componente tibial. Con un slope posterior excesivo la posición del fémur se

retrasa y aumentan las fuerzas de cizallamiento en la parte posterior del platillo tibial76

. Sin

embargo, con una pendiente disminuida el desplazamiento posterior del fémur es parecido a

una rodilla sana78

y la rodilla es más estable en flexión34

.

A pesar de que la pendiente posterior del componente tibial ha sido relacionado con una

mejor movilidad de la rodilla tras una PTR78

, está correlación no se presenta en las PUR. Se

ha descrito que los pacientes con mayor slope posterior del componente tibial pueden

presentar una limitación de la extensión de rodilla79

o una mayor flexión41

. Sin embargo, no

existe una clara evidencia en este sentido y la mayoría de referencias no informa sobre

variaciones en la movilidad73

.

4) ALINEACIÓN EN EL PLANO AXIAL

La alineación en el plano axial indica la rotación con la que se implanta el componente

protésico. La metodología de medición no está estandarizada y se han propuesto diferentes

líneas para representar el eje anteroposterior (AP) de la tibia. La orientación del borde lateral

del componente protésico con respecto a estas líneas representaría la alineación rotacional y la

Page 34: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

33

medición se realiza por Tomografía Computerizada (TC). A continuación se describen las

líneas propuestas en la bibliografía:

Línea transepicondilar80

: se traza una línea que una los dos epicóndilos femorales y

otra línea perpendicular a esta, que será la que determine el eje AP. La línea

transepicondilar es el gold standard, la referencia anatómica con la que se comparan

las demás líneas propuestas81

. (Imagen 5a)

Línea de Akagi82

: línea que une el punto central del ligamento cruzado posterior

(LCP) con el borde medial de la inserción del tendón rotuliano. Entre las líneas

propuestas en la literatura médica es la que más fiablemente reproduce la línea

perpendicular a la línea transepicondilar81

y la más reproducible83

. (Imagen 5b)

Protocolo de Yoshioka84

: se traza una línea tangente que una los dos cóndilos

posteriores de la meseta tibial proximal y otra línea perpendicular a esta, que será la

referencia anatómica para determinar la rotación. (Imagen 5c)

Se ha sugerido que la alineación ideal en extensión de rodilla sería en rotación neutra, pero

que para mantener la congruencia con el fémur tras la rotación externa que realiza la tibia

durante la flexión la rotación interna tibial sería más adecuada85

. Estudios biomecánicos in

vitro refieren que la carga que tiene que soportar la metáfisis tibial es mayor si el componete

tibial se coloca en rotación externa que en neutro86

. En la literatura médica no se encuentra

ningún estudio clínico sobre esta variable hasta que en 2006 Campbell et al. presentan un

Page 35: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

34

estudio sobre la alineación de 60 rodillas portadoras de PUR, medida por TC80

. Los autores

proponen 2 métodos para medir la rotación de los componentes: tomando como referencia la

línea que une ambos cóndilos posteriores tibiales refieren 6,59º de rotación externa media con

una desviación estándar de 7,23º, mientras que según la línea transepicondilar sería de 5,68º ±

6,77º. Los autores informan de la gran variabilidad que presenta esta medición en

comparación con los demás planos. Servien et al. describieron en 19 pacientes una colocación

en 6,5º de rotación externa como media87

. La variabilidad en este estudio era también alta con

un rango de 19º entre los 6,0º de rotación interna máxima y los 13,2º del paciente con mayor

rotación externa.

Estudios realizados en PTR han demostrado que los errores por implantación en rotación

interna de los componentes tibial y femoral se asocian a dolor de causa desconocida, rigidez

articular o cirugía de revisión prematura88-91

. En cambio, los 2 estudios mencionados sobre

PUR son puramente descriptivos y no relacionan los grados de rotación con el resultado

clínico obtenido. A pesar de que se ha demostrado que la alineación en todos los demás

c a b

Imagen 5: tres líneas referencia para medir la rotación del componente tibial: a) Línea transepicondilar.

b) Línea de Akagi (izquierda) y su diferencia con la perpendicular a la línea transepicondilar.

c) Protocolo de Yoshioka.

Page 36: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

35

planos del espacio influye en el resultado final, la implicación que la angulación en el plano

axial puede tener en el paciente es todavía una incógnita.

El objetivo del segundo estudio presentado en esta tesis doctoral es aportar conocimiento

sobre la colocación del componente tibial de la PUR en el plano axial y analizar si tiene

implicaciones en el resultado clínico postoperatorio. (Anexo 1)

Page 37: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

36

HIPÓTESIS Y

OBJETIVOS

Page 38: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

37

HIPÓTESIS

La alineación rotacional del componente tibial de la PUR tiene influencia en el resultado

clínico postoperatorio.

OBJETIVOS:

1) Observar mediante TC la alineación en la que se coloca en el plano axial el

componente tibial de la PUR y determinar la variabilidad con la que se implanta en

este plano.

2) Correlacionar los grados de angulación de la alineación rotacional del componente

tibial de la PUR con los resultados clínicos y satisfacción personal del paciente.

3) Valorar si la asociación de PUR y plastia de LCA representa una opción para

conseguir buenos resultados en pacientes jóvenes con artrosis unicompartimental de

rodilla e inestabilidad ligamentosa por rotura de LCA.

4) Identificar las complicaciones que aparecen a largo plazo tras la asociación de estas

dos técnicas.

Page 39: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

38

METODOLOGÍA

Page 40: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

39

ALINEACIÓN EN EL PLANO AXIAL

Entre abril de 1999 y diciembre de 2009 se realizaron 210 PUR mediales consecutivas en 186

pacientes, por un único cirujano experimentado (J.F. Aragón). Entre los criterios de

indicación se incluye una artrosis unicompartimental medial grados 2 o 3 de Ahlbäck24

, varo

intraarticular de rodilla, un eje mecánico < 10º de varo o valgo y una limitación leve de la

movilidad. Veintiséis pacientes fueron excluídos siguiendo los siguientes criterios de

exclusión: artrosis del compartimento lateral o femoropatelar (12 casos), rotura del LCA (3),

otras inestabilidades ligamentosas, antecedente de infección (1), revisión a PTR realizada

antes del inicio del estudio (9) y edad mayor a 80 años (1). En la intervención quirúrgica, el

corte sagital del componente tibial se realizó mediante la técnica de manos libres, se situó en

el borde más lateral del compartimento medial y se procuró realizarlo en ligera rotación

externa con respecto al eje AP tibial. En los primeros 11 casos se implantó un modelo tipo

Genesis unicompartmental knee replacement (Smith & Nephew, Inc, Memphis, TN) y en los

90 siguientes una Accuris Uni Knee System (Smith & Nephew, Inc, Memphis, TN). Todos

los pacientes tenían un seguimiento mínimo de 3 años, excepto si la cirugía de revisión se

había realizado antes de ese periodo.

Se contactó por teléfono con los pacientes para invitarles a participar en el estudio y 58 no

fueron localizados o no quisieron participar en el estudio. Acudieron a la visita un total de 102

pacientes, a los que se explico el estudio y se solicitó un consentimiento informado. Catorce

pacientes rechazaron realizarse una TC, por lo que al final se incluyeron 88 pacientes en el

estudio (101 rodillas).

Page 41: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

40

Las TC se realizaron con la extremidad inferior en extensión completa y rotación neutra de la

cadera. Se tomaron imágenes cada 1 mm desde el extremo superior de la rótula hasta la

tuberosidad tibial anterior. La alineación rotacional del componente tibial se midió siguiendo

el protocolo de Yoshioka84

. Se traza una línea tangente que une los dos cóndilos posteriores

de la meseta tibial proximal y otra línea perpendicular a esta, que será la referencia anatómica

para determinar la rotación (Imagen 5c). El ángulo que produce con el borde lateral del

platillo tibial se considera el ángulo rotacional del componente tibial. La rotación externa se

muestra en valores positivos y la rotación interna en valores negativos.

Todos los pacientes completaron la escala de WOMAC, KSS y la escala viasual analógica

(EVA: rango de 0 a 10, 0 para ausencia de dolor y 10 para dolor severo). Se realizan múltiples

comparaciones y en cada una los pacientes son divididos en 2 grupos según los resultados

obtenidos en las escalas WOMAC, KSS y EVA: Grupo A (mejor resultado) y Grupo B (peor

resultado). En cada comparación el valor límite que divide los 2 grupos cambia y se observa

si hay diferencias significativas en la alineación rotacional de ambos grupos. Se analizó la

alineación rotacional de los pacientes que precisaron cirugía de revisión. Por último, se

registró el índice de satisfacción personal del paciente con un rango de puntuación del 0 al 10.

Análisis estadístico: se observó mediante el test de Kolmogorov-Smirnov que la distribución

de los datos no era compatible con la normalidad, por lo que las diferencias entre variables

cuantitativas fueron analizadas por un test no paramétrico, la U de Mann-Whitney. Se realizó

un análisis multivariable mediante regresión lineal múltiple para determinar la relación entre

las escalas a estudio (WOMAC, KSS y EVA) y cualquier otra variable que pudiera influir en

el resultado (alineación en el plano coronal y sagital, material del componente tibial, índice de

Page 42: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

41

masa corporal, género y tiempo de seguimiento). La significación estadística se estableció en

un valor de p inferior a 0,05. Cuando se realizaron múltiples comparaciones, se llevó a cabo la

corrección de Bonferroni92

y se dividió el valor de p de 0,05 por el número de comparaciones

realizadas. Como el número de comparaciones fue de 5, el valor de p se estableció en 0,01.

PRÓTESIS UNICOMPARTIMENTAL DE

RODILLA ASOCIADA A PLASTIA DE LCA

Entre enero de 1994 y febrero de 2004, 10 pacientes con artrosis unicompartimental medial

sintomática y déficit de LCA fueron tratados mediante PUR y plastia de LCA. Todos los

pacientes presentaban signos de artrosis secuandaria a una lesión de LCA previa. Referían en

todos los casos síntomas de inestabilidad ligamentosa y dolor en cara medial de la rodilla. Los

criterios de exclusión comprendían las roturas de LCA secundarias a gonartrosis, roturas de

LCA sin síntomas de inestabilidad, una deformidad en varo mayor a 10º, un flexo mayor a

10º, signos de artrosis del compartimento lateral o femoropatelar y lesión del complejo

postero-lateral. Todos los procedimientos se realizaron por el mismo cirujano (J.F. Aragón),

mediante la combinación de las dos técnicas en un solo acto quirúrgico. No se pudo completar

el seguimiento de 2 pacientes: uno murió por causas no relacionadas con su prótesis de rodilla

y el otro se había mudado fuera. Todos los pacientes tenían un seguimiento mínimo de 10

años, excepto si habían precisado una cirugía de revisión antes.

Análisis clínico: se registró el índice de satisfacción personal del paciente con un rango de

puntuación del 0 al 10. Se obtuvieron las puntuaciones preoperatorias y postoperatorias en las

Page 43: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

42

escala de WOMAC, KSS y EVA. También se observaron la movilidad articular y la

estabilidad ligamentosa, mediante los test de Lachman y pivot-shift.

Análisis estadístico: se observó mediante el test de Kolmogorov-Smirnov que la distribución

de los datos no era compatible con la normalidad, por lo que las diferencias entre variables

cuantitativas fueron analizadas por un test no paramétrico, la U de Mann-Whitney. La

significación estadística se estableció en un valor de p inferior a 0,05.

Page 44: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

43

RESULTADOS

Page 45: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

44

ALINEACIÓN EN EL PLANO AXIAL

Tras 69 meses de seguimiento medio (rango de 14 a 150) el componente tibial se observa en

una media de 11,9º de rotación externa (rango de -1º a 32º). Por lo tanto, la variabilidad entre

los dos valores extremos es de 33º. El paciente con el platillo tibial a 32º de rotación externa

fue considerado un outlier y se excluyó del análisis estadístico, para evitar sesgos.

Cuando el límite entre los grupos se establece en un valor de 10 en la escala de WOMAC, los

pacientes en el Grupo A presentan una alineación media de 8,7º (n=21), mientas que en el

Grupo B el valor medio es de 12,5º (n=79), diferencia estadísticamente significativa

(p=0,008). A pesar de que en el resto de comparaciones en las 3 escalas no presentaban

diferencias significativas, en el Grupo A siempre se observan valores medios de rotación

externa del componente tibial menores que en el Grupo B. Es decir, los pacientes con menos

rotación externa obtienen mejores resultados clínicos.

1 1 1 2

4

6

7

5 5

7 7

8

3 3 3

5

9

5 5

6

2 2 2 1 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

-1 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 24 26 32

Angulación axial

Grados de rotación

Frecuencia

Imagen 6: distribución de los casos dependiendo del ángulo rotacional del componente tibial.

Page 46: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

45

Valor límite

de WOMAC

Grupo A

(n) AR DE Rango

Grupo B

(n) AR DE Rango p

5 13 8,5 4,2 -1 a 17 87 12,4 5,8 1 a 26 0,048**

10 21 8,7 4,2 -1 a 17 79 12,5 5,8 1 a 26 0,008*

15 30 10,3 4,9 -1 a 19 70 12,3 6,0 1 a 26 0,14

20 38 10,7 5,3 -1 a 24 62 12,3 5,9 1 a 26 0,20

25 47 11,0 5,4 -1 a 24 53 12,3 5,9 1 a 26 0,27

Valor límite

de KSS

Grupo A

(n) AR DE Rango

Grupo B

(n) AR DE Rango p

190 20 10,9 4,6 4 a 19 80 11,9 6,0 -1 a 26 0,47

180 40 11,4 5,6 -1 a 24 60 11,9 5,8 1 a 26 0,70

170 47 11,0 5,5 -1 a 24 53 12,4 5,9 1 a 26 0,65

160 55 10,9 5,4 -1 a 24 45 12,7 6,0 1 a 26 0.12

150 66 11,6 5,8 -1 a 26 34 11,9 5,6 1 a 21 0,65

En el análisis multivariable se observa que la puntuación en las escalas de WOMAC y KSS

puede verse influenciada por el género del paciente, siendo la única variable entre las

analizadas que puede constituir un sesgo de confusión. Quince pacientes precisaron una nueva

intervención quirúrgica: su alineación rotacional media fue de 12º (rango de 3º a 19º), por

11,7º (de -1º a 26º) entre los que no precisaron más cirugía. Esta diferencia no fue

estadísticamente significativa (p=0,84)

Tabla 1a (según WOMAC) y 1b (según KSS): ángulo rotacional observado en el Grupo A y Grupo B,

en función del valor límite de puntuación establecido para determinar ambos grupos.

n: tamaño muestral, AR: ángulo rotacional, DE: desviación estándar, p: significación estadística.

* Estadísticamente significativo. ** Pierde la significación estadística tras la corrección de Bonferroni.

Page 47: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

46

PRÓTESIS UNICOMPARTIMENTAL DE

RODILLA ASOCIADA A PLASTIA DE LCA

Los 8 pacientes incluidos en este estudio fueron tratados mediante PUR y plastia de LCA

combinada en un solo acto quirúrgico. Tras un seguimiento medio de 175 meses (rango de

117 a 258), los pacientes referían una satisfacción media de 8,8 sobre 10 (rango de 4 a 10).

Los pacientes presentaron mejoría en las escalas clínicas de WOMAC, KSS y EVA, con

diferencias estadísticamente significativas en todas ellas (p<0,01). La movilidad aumentó de

una flexión media de 110º (de 60º a 130º) en el preoperatorio a 120º (de 110º a 130º) en el

postoperatorio. Dos pacientes presentaron un flexo menor a 10º. En un paciente el test de

Lachman era positivo y en otro era laxo pero con un tope firme. El test de pivot-shift fue

negativo en todos los casos. Ninguno de los pacientes refería síntomas de inestabilidad en el

postoperatorio.

Un paciente precisó cirugía de revisión a PTR a los 117 meses de seguimiento. Desde la

radiografía postoperatoria inicial se detectó un error de alineamiento del componente tibial,

con una pendiente posterior de 19º. La evolución clínica fue satisfactoria durante 9 años,

Preoperatorio Postoperatorio Progresión

KSS 94 (62 a 165) 154 (102 a 200) 60 (30 a 104)

WOMAC 59 (3 a 81) 26 (1 a 52) 32 (2 a 60)

EVA 8 (6 a 10) 3 (0 a 7) 4,6 (1 a 6)

Tabla 2: valores preoperatorios y postoperatorios obtenidos en las 3 escalas clínicas y progresión de uno

a otro. Los datos se muestran como media y rango.

Page 48: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

47

cuando tras una caída accidental presentó dolor y signos de aflojamiento e inestabilidad en la

radiología. A la exploración física, presentó inestabilidad anterior. La cirugía de revisión se

realizó con una prótesis CR convencional tipo Profix total knee system (Smith & Nephew,

Memphis, TN), con un vástago tibial de 16 x 60 mm, pero que no precisó suplementos

tibiales. Intraoperatoriamente se constató la ruptura de la plastia de LCA y el aflojamiento

aséptico del componente tibial. La evolución postoperatoria fue satisfactoria.

Imagen 7: evolución radiológica de la única paciente que precisó cirugía de revisión a PTR. En el

postoperatorio inmediato (1, 2) se detectó un slope posterior de 19º. Tras 9 años de seguimiento se

observa una subluxación secundaria al aflojamiento del componente tibial y la inestabilidad

ligamentosa (3). Imagen final tras la revisión a PTR (4).

Page 49: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

48

Otra paciente refirió dolor en su rodilla tras 13 años de evolución, con una EVA de 7,

WOMAC de 52 y KSS de 120 y una satisfacción personal de 4 sobre 10. En la radiografía no

se observaron líneas de radiolucencia, ni signos de condropatía en el resto de compartimentos.

A la exploración física, el test de Lachman era laxo pero con un tope firme. En la última visita

de seguimiento, la paciente rechazó una revisión a PTR como tratamiento de su gonalgia.

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49

ANEXO 1

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ANEXO 2

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DISCUSIÓN

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64

ALINEACIÓN EN EL PLANO AXIAL

Antes de la publicación de nuestro estudio sobre la alineación en el plano axial del

componente tibial de la PUR, solo existían 2 referencias que la describían80,87

. Ambas se

limitaban a la observación de las medidas, pero ninguna correlacionaba el resultado clínico

con la alineación en este plano. Esta correlación sí que se había estudiado, por el contrario, en

varios estudios sobre alineación en los planos coronal67,72

y sagital73

. Nuestro estudio ha sido,

por lo tanto, el primero que ha analizado la posible influencia en el resultado funcional de la

rotación con la que se implanta el componente tibial de la PUR medial. Se observó una

colocación neutra o en pocos grados de rotación externa (RE) en los pacientes con mejores

resultados. Esta conclusión se asemeja a las expuestas en estudios posteriores, como en el de

Liow et al.93

quienes refieren mejores resultados en pacientes con una rotación entre 3º de RE

y 3º de rotación interna (RI) que en los que tienen una RE mayor a 10º. Sin embargo, esta

línea de investigación no ha hecho más que abrirse y recientemente se ha observado que esta

variable es más determinante para prótesis de inserto móvil, que para los de inserto fijo, cuyos

resultados en posiciones subóptimas en el plano axial son mejores85

. Por lo tanto, queda de

manifiesto la necesidad de más estudios para poder determinar la posición idónea en el plano

axial y en qué casos es relevante.

La segunda conclusión más importante de nuestro estudio fue la gran variabilidad observada

entre los diferentes casos, con un rango de 33º entre el componente colocado en 1º de RI y el

más rotado, con 32º de RE. Este dato ya había sido señalado en las 2 publicaciones anteriores:

Campbell et al.80

describen una alineación de 6,59º ± 7,23º y Servien et al.87

de 6,5° ± 5,1°

con un rango de 19º (entre -6º y 13,2º). Estudios más recientes también coinciden en esta

Page 66: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

65

línea: Tsai et al.54

describen un rango de 28º (entre -9º y 19,2º), igual que Lee et al.94

(entre

-4º y 24,3º). Liow et al., tras analizar la alineación de los 2 componentes de la PUR mediante

radiografía biplanar con el paciente en bipedestación, concluyeron que la mayor variabilidad

se observa en el plano axial, tanto para el componente femoral (rango 39,4º), como para el

tibial (rango 26,8º)93

. Todos los autores atribuyen la variabilidad de la alineación en el plano

axial a la falta de instrumentación para su precisa realización80

, por lo que la creación de

herramientas que determinen de forma fiable la rotación de componentes es una posible línea

futura de investigación. A continuación se describirá el estado actual de la situación, por una

parte enumerando las referencias anatómicas que se toman como referencia y analizando su

validez y por otro lado describiendo los últimos avances publicados con el objetivo de

disminuir la variabilidad rotacional en las PUR:

1) REFERENCIAS ANATÓMICAS PARA ESTABLECER LA

ROTACIÓN DEL COMPONENTE TIBIAL

La alineación rotacional se ha realizado hasta hace pocos años por técnica de manos libres. El

cirujano utiliza como guía diferentes referencias anatómicas e intenta establecer así la

rotación adecuada. A continuación se enumeran algunas de ellas:

Cabeza de fémur: en la técnica quirúrgica de la prótesis tipo Oxford se recomienda

orientar la hoja de sierra hacia la cabeza del fémur, que el cirujano asistente localizará

entre el pubis y la cresta ilíaca anterosuperior71

. Sin embargo, localizar la cabeza de

Page 67: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

66

fémur en el campo quirúrgico resulta dificultoso y no existe ningún fundamento

teórico que lo respalde como una referencia fiable95

. (Imagen 8)

La cresta ilíaca anterosuperior (CIAS) también ha sido propuesta para la

implantación de la PUR96

. Sin embargo, un estudio reciente ha desaconsejado usar

esta referencia por su gran variabilidad y la dificultad de localizarla de una forma

precisa en el campo quirúrgico94

. Los autores describen, usando sistemáticamente la

CIAS como guía, una rotación del componente tibial media de 8,7° ± 4,8°, con una

variabilidad de 23º (rango de 1,9º a 25,2º).

Eje transmaleolar en el tobillo y segundo metatarsiano: son 2 de las referencias

más utilizadas por el cirujano a la hora de implantar una prótesis de rodilla. Sin

embargo, estudios con TC han demostrado que el eje transmaleolar se desvía una

media de 27º del eje anteroposterior de la tibia, con una variabilidad de 41º (rango

entre 8º y 49º). En cuanto al segundo metatarsiano, la deviación media con respecto al

Imagen 8: representación gráfica del corte sagital tibial en la técnica quirúrgica de la prótesis

de tipo Oxford71

, en la que se recomienda tomar como referencia anatómica la cabeza femoral

para establecer la alineación rotacional.

Page 68: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

67

eje anteroposterior real no es tan alta (5,2º), pero la variabilidad sigue siendo muy

elevada, con un rago de 46º (entre -21,9º y 24º)82

.

Borde medial de la tuberosidad tibial anterior (TTA): la línea que une el centro del

LCP con el borde medial de la TTA es la que menos se desvía de la línea

perpendicular al eje transepicondilar en rodillas artrósicas, con una desviación media

de 0,3º ± 5,581

. Sin embargo, presenta un rango de variabilidad de 30º y su aplicación

en las PUR no es viable por precisar la visualización del LCP.

Pared medial del intercóndilo femoral: sistema propuesto por Kawahara et al.en un

estudio anatómico mediante resonancia magnética (RM) de 45 rodillas sanas97

. Los

autores defienden el paralelismo en comparación con el eje AP de la tibia por una

desviación media de 0,1º ± 4,4º de rotación externa. Sin embargo, el rango de la

desviación es de 17º y un 27% de casos presentan desviaciones mayores a 5º.

Imagen 9: A) Proyección en una imagen de RM de una línea en la pared medial del intercóndilo

(continua) y el eje AP de la tibia (intermitente). B) Histograma que cuenta la cantidad de

mediciones en rotación interna o externa con respecto al eje AP de la tibia.

A

Rodillas

Rotado a externo Rotado a interno B

Page 69: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

68

Línea de Akagi82

: Akagi et al. estudian en 30 pacientes sanos la línea que une el

punto central del ligamento cruzado posterior (LCP) con el borde medial de la

inserción del tendón rotuliano. La desviación media en comparación con el eje AP de

la tibia fue de −0,2° ± 2,8° con un rango de 12º (entre -5,5º y 6,3º). Esta línea presenta

menos variabilidad que el eje transmaleolar o el segundo metatarsiano y es

considerado por muchos como la referencia gold-standard para estudios en PTR. El

problema de esta referencia para la realización de una PUR es que al conservar el LCA

la base del LCP no es accesible en el campo operatorio.

Línea AP sustitutiva (sAP): línea que une la espina tibial medial y el borde medial

del tendón rotuliano a nivel de la superficie articular. En un estudio de TC realizadas

en 31 pacientes para la planificación de PUR, se observó que la línea sAP era

prácticamente perpendicular al eje transepicondíleo femoral (90.4º ± 3.6º), con un

rango de 14º entre los 2 valores más desviados a cada lado (82.9º-96.8º)95

. A pesar de

que el rango sea ligeramente mayor al observado con la línea de Akagi, su aplicación

es más fácil en las PUR. Por un lado, no precisa visualizar el LCP y utiliza la espina

tibial medial como referencia posterior, que es accesible durante el procedimiento de

la PUR. Por otro lado, los extremos de la línea están en el mismo plano y es una

referencia que se puede aplicar in vivo, a diferencia de la línea de Akagi, más

reproducible en mediciones por TC. Así, los autores muestran la manera de determinar

esta línea de forma sencilla intraoperatoriamente, con la rodilla en flexión, la ayuda de

una aguja y de un rotulador. La debilidad de este estudio radica en que las mediciones

se hacen en TC y sería interesante conocer cuál es la reproducibilidad y variabilidad

de la determinación de la línea sAP en un procedimiento quirúrgico in vivo. (Imagen

10)

Page 70: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

69

La línea sAP parece un método adecuado para la determinación de la rotación con referencias

anatómicas intraoperatorias y con un margen de error reducido en comparación con las demás

referencias. Sin embargo, hasta que la fiabilidad de su aplicación quede demostrada, la

evidencia actual indica que las referencias anatómicas son poco fiables. Todas ellas presentan

una gran variabilidad, lo que asegura que un porcentaje de pacientes presentarán una

desviación excesiva, que puede condicionar un peor resultado cliníco93

. Un objetivo de futuro

A

Imagen 10: Ilustraciones que muestran en el plano axial (A) y sagital (B) las líneas de Akagi

(Tibial AP line) y la línea AP sustitutiva (sAP). C) Determinación intraoperatoria de la línea sAP

con ayuda de una aguja que une el borde medial del tendón rotuliano (α) y la espina tibial

medial (β). D) Marcaje con rotulador para poder realizar el corte sagital que determina la

rotación del componente tibial de la PUR.95

C D

Page 71: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

70

sería que la variabilidad en el plano axial disminuyera al nivel de los planos coronal y sagital.

Esta situación refleja una de las debilidades de la PUR y los avances en este campo podrían

contribuir a que la supervivencia de las PUR se asemejara más al de las PTR.

2) INSTRUMENTAL PARA ESTABLECER LA ROTACIÓN

DEL COMPONENTE TIBIAL

En los últimos años se ha pretendido subsanar el vacío de técnica quirúrgica que presenta la

PUR a la hora de determinar la rotación de los componentes con múltiples propuestas basadas

en la tecnología. La alineación rotacional puede considerarse hoy en día uno de los aspectos

que más está evolucionado en la PUR. Nuestro estudio fue pionero en plantear la importancia

de la rotación del componente tibial y ha sido citado en estudios posteriores54,55,85,93-95,98-100

.

Algunos de ellos forman parte de la nueva tendencia que propone diferentes técnicas para

disminuir esta variabilidad en su implantación. A continuación se enumeran algunas de ellas:

INSTRUMENTAL ESPECÍFICO PARA PACIENTES

El instrumental específico para pacientes (IEP) es una alternativa técnica que estudia la

anatomía del paciente y crea un instrumental adaptado a ella para acelerar el procedimiento

quirúrgico y corregir errores de alineación. Se realiza una RM o TC de la extremidad a

intervenir que incluya cadera, rodilla y tobillo. Basado en estas imágenes se produce un plan

digital preoperatorio que es supervisado por el cirujano, quien lo modifica basándose en su

Page 72: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

71

experiencia. Una vez el plan ha sido aprobado se crean las guías de corte intraoperatorias, de

uso único y personalizado para el paciente al que se implantará la prótesis. En las PTR se ha

demostrado que mejora el alineamiento, disminuye el tiempo quirúrgico y la cantidad de cajas

de instrumental necesarios para realizar la intervención101

. Recientemente se han presentado

nuevos estudios en PUR que presentan el IEP como una alternativa para reducir la

variabilidad en la rotación de los componentes y prevenir errores de malrotación:

Dao Trong et al. presentaron resultados esperanzadores en su estudio sobre 25 rodillas102

. El

instrumental se creó basándose en imágenes de TC de los pacientes y tras la cirugía se

realizaron TC de control para analizar el alineamiento de los componentes. La diferencia

observada entre la posición final de los componentes implantados y la planificación

preoperatoria fue de solo 1,5º ± 3,3º para la rotación del platillo tibial. En los planos coronal

(0,03º ± 1,7º) y sagital (1,1º ± 2,6º) la variación de alineamiento respecto al planificado

también fue mínima, aunque la desviación estándar sigue siendo menor que en el plano axial,

reflejando una mayor variabilidad para este plano. En todos los casos incluidos en este estudio

el tamaño de los componentes femoral y tibial implantados fue el mismo que se planificó

preoperatoriamente. El IEP se presenta así como una herramienta fiable para garantizar la

adecuada colocación de componentes de forma precisa, disminuyendo la variabilidad en el

plano axial y previsiblemente influyendo en mejorar el resultado clínico final.

Sin embargo, estudios posteriores han descrito una variabilidad mayor en la alineación

rotacional tras utilizar el IEP. Kerens et al. afirman que el IEP traslada de forma precisa la

planificación preoperatoria a la implantación in vivo en todos los planos, excepto en la

rotación del componente tibial98

. En su estudio sobre 26 rodillas, en el que la planificación se

Page 73: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

72

realizó mediante RM, describen un rango de 19º (entre -6,5º y 12,5º) para esta variable, con

una mediana de 4’5º de diferencia con respecto a lo planificado preoperatoriamente. Además,

en 12 pacientes se precisó realizar una resección tibial adicional y en 5 de estos el tamaño del

implante tibial fue diferente al planificado. En la serie de van Leeuwen et al. se describe un

rango de 28º en la colocación del platillo tibial (entre 17º de RI y 11º de RE), tras una

planificación mediante RM99

. Los autores señalan que en algunos casos observaron un

espacio entre la guía y la tibia que indicaba su inadecuada adaptación a la anatomía del

paciente.

La variabilidad en los resultados tras el uso del IEP indica que esta técnica en desarrollo

precisa todavía una evolución y clarificar cuál es su metodología para conseguir una mayor

precisión en la implantación. Ninguno de los artículos correlaciona el resultado clínico con la

alineación conseguida y ésta sería otra variable a analizar en futuras publicaciones. En el

estudio que menor variabilidad muestra la planificación fue realizada mediante TC, cuando en

los otros dos estudios se hizo por RM. Se precisan más estudios para aclarar si este es un

factor importante o no. En conclusión, existen indicios que señalan que el IEP puede ser un

instrumento adecuado para disminuir la variabilidad en la rotación del componente tibial de la

PUR, aunque todavía precisa de un mayor desarrollo.

NAVEGADOR

El navegador ha sido otra de las herramientas propuestas para mejorar la precisión en la

alineación. Se realiza mediante la ayuda de un ordenador que recibe la señal de unos sensores

colocados en la tibia y el fémur del paciente durante la cirugía. Dispone de un software que

Page 74: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

73

realiza una evaluación dinámica de la anatomía y cinemática de la rodilla, con lo que orienta

al cirujano sobre cómo realizar los cortes óseos (Imagen 11). En las PTR se ha demostrado

que el navegador disminuye significativamente los errores de alineación103

. En las PUR, los

resultados han sido prometedores en el plano coronal y sagital27

, pero menos satisfactorios en

el plano axial:

Martinez-Carranza et al. analizaron por TC postoperatorio la orientación de los componentes

de 13 PUR implantados mediante navegador104

. La alineación rotacional pudo medirse en 10

de ellos y observaron que 6 casos presentaban una diferencia de más de 3º con respecto a la

rotación planificada para el componente tibial. El rango fue de 24º (entre 4º y 24º de RE) y la

diferencia media entre lo calculado por el navegador y la alineación postoperatoria medida

por TC fue de 11º.

Toda et al. analizaron la alineación de 23 casos de PUR implantados con ayuda de navegador

mediante un software que convierte radiografías en 2 planos en imágenes tridimensionales55

.

El 100% de los componentes tibiales fueron colocados a más de 3º de desviación de lo

Imagen 11: imagen intraoperatoria que muestra la colocación de sensores en tibia y fémur, además

de un sensor que transmite información sobre la superficie articular. En la imagen de la derecha,

se observa el modelo óseo creado por el ordenador, que establece el corte en el plano coronal.104

Page 75: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

74

planificado en el plano axial y la diferencia de alineación entre lo planificado

intraoperatoriamente y lo medido postoperatoriamente fue de 7.5º ± 4.5º. En los planos

coronal y sagital la implantación fue mucho más precisa, con errores de alineación en el 13%

y 8,7% de los casos respectivamente.

Por lo observado en los dos estudios expuestos en este apartado, el navegador es un

instrumento útil para establecer con precisión los cortes en los planos coronal y sagital, pero

no parece ser la mejor herramienta para disminuir la variabilidad en el plano axial.

CIRUGÍA ASISTIDA POR ROBOT

El sistema robótico es una variante de la navegación que además cuenta con un dispositivo

que realiza los cortes óseos según la planificación. Esta se puede realizar preoperatoriamente

por TC o intraoperatoriamente mediante sensores y mapeo de las superficies óseas. Suele

disponer de una sierra de alta velocidad que facilita realizar los cortes óseos dentro del área

determinada en la planificación preoperatoria. (Imagen 12)

La orientación rotacional fue analizada mediante Cobb et al. en 2006 en un ensayo clínico

aleatorizado en el que incluyen 28 rodillas105

. Todos los pacientes realizaron una TC

preoperatoria y el cirujano planificó con las imágenes obtenidas los cortes óseos a realizar y la

talla y posición de los componentes. El uso del robot alargó el tiempo quirúrgico una media

de 16 minutos. En el seguimiento postoperatorio se realizó una TC de control para determinar

la alineación. Los pacientes operados mediante sistema robótico presentaron una alineación

Page 76: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

75

en el plano axial de entre 0,1º y 8,4º grados (rango 7,3º) con una media de 2’8º ± 2,5º,

mientras que los operados por técnica tradicional la implantación se realizó entre 0,7º y 13,1º

(rango 12,4º) con una media de 5,1º ± 3,7º. La variabilidad fue menor en el grupo asistido por

robot, pero los autores no precisan si esta diferencia es estadísticamente significativa.

En un estudio más reciente, Dunbar et al. describen su técnica asistida mediante un sistema

robótico basado en una guía táctil de referencia dinámica106

. Refieren que los errores de

implantación media en todos los planos son menores a 3º, incluido en el plano axial. Los

autores realizan una comparación con las alineaciones de prótesis implantadas mediante

navegador con referencia fija del estudio descrito en el párrafo anterior105

y señalan que los

resultados son más precisos con la técnica basada en la referencia dinámica. Sin embargo, no

se informa sobre la significación de estas diferencias, ni de si tienen influencia en el resultado

clínico. (Imagen 13)

Imagen 12: imagen intraoperatoria de dos sistemas robóticos

diferentes105,106

.

Page 77: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

76

La cirugía asistida por robot ha demostrado proporcionar una menor tasa de revisiones en

comparación con pacientes tratados mediante técnica tradicional107

. En ese mismo estudio de

casos y controles de Batailler et al. se observó que los errores de alineación eran también más

frecuentes en el grupo control. Sin embargo, los planos de alineación analizados fueron

únicamente el coronal y el sagital, lo que traduce la falta de estudios que relacionen la

alineación rotacional con los resultados clínicos.

3) ANÁLISIS

En los últimos años ha surgido un gran debate sobre la importancia de la alineación rotacional

de los componentes de la PUR. Ha quedado en evidencia que la variabilidad con la que se han

implantado ha sido excesiva, pudiendo ser esta una de las causas que han condicionado peores

resultados clínicos93

y una menor supervivencia107

. Se han propuesto varios métodos para

Grados

Pro

po

rció

n d

e ro

dill

as

Imagen 13: distribución de los errores de implantación del componente tibial en el plano axial.

La técnica asistida por robot mediante referencia dinámica (gris) se compara con la técnica con

robot y referencia fija (negro) y el procedimiento tradicional mediante instrumentación manual

(blanco).106

Page 78: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

77

establecer de forma más precisa la alineación en este plano y se ha observado que pueden ser

útiles para minimizar los errores de precisión. Los estudios actuales sugieren que el

instrumental específico para el paciente tras planificación por TC o la técnica asistida

mediante un sistema robótico basado en una guía táctil de referencia dinámica pueden ayudar

a mejorar la implantación de la PUR en el plano axial. Así mismo, la implantación del platillo

tibial en una rotación casi neutra parece relacionarse con mejores resultados. A pesar de que

parece lógico pensar que si se minimizan los errores de alineación los resultados serán

mejores, es mandatorio que esto sea demostrado por estudios contrastados. El resultado

clínico y la supervivencia del implante son los objetivos finales que aportan un beneficio al

paciente y la vía de investigación abierta precisa de un mayor desarrollo para ofrecer garantías

y asentar la evidencia.

Entre las debilidades de nuestro estudio destaca la heterogeneidad de los pacientes. Las

diferencias en el tiempo de seguimiento, el material de los componentes o el diseño de la

prótesis podrían justificar por sí solas diferencias en los resultados. Se decidió realizar un

análisis por intención de tratar con el objetivo de formar un grupo lo más grande posible, que

pudiera dar más información sobre la variabilidad de la alineación. Sin embargo, solo se

pudieron incluir 101 de los 210 casos a los que se les implantó una PUR medial en el periodo

establecido, siendo esta otra gran debilidad. Entre las pérdidas, destacan los 9 pacientes que

precisaron una revisión a PTR antes de que empezara este estudio, a los cuales no se les

realizó ninguna TC cuando eran portadores de la PUR. En consecuencia, se perdió

información sobre su alineación rotacional y queda como incógnita si fue una causa de

fracaso en algunos de ellos. El seguimiento a largo plazo de futuros recambios de pacientes

incluidos en este estudio podría aportar datos interesantes en este sentido. En los 4 pacientes

que precisaron cirugía de revisión durante el transcurso del estudio, las diferencias de

Page 79: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

78

alineación no eran estadísticamente significativas. La ausencia de registros preoperatorios de

las escalas clínicas analizadas también supone una gran pérdida, ya que no permite evaluar si

la progresión tras la operación fue mayor en pacientes sin errores de alineación en el plano

axial.

La técnica de implantación de la PUR ha carecido hasta hace poco de evidencia suficiente

para poder indicar cuál es su alineación idónea en el plano axial. Nuestro estudio ha

contribuido a identificar la variabilidad de alineación como un problema y ha demostrado por

primera vez que tiene influencia en el resultado clínico. Ha sido pionero en este ámbito del

conocimiento y ha abierto vías futuras de investigación. El gran tamaño muestral del estudio

supone una de sus mayores fortalezas, ya que incluye más pacientes que ningún otro estudio

sobre el tema en cuestión. Las publicaciones de los últimos años parecen aportar una

información valiosa para el desarrollo de esta variable, contribuyen a que en un futuro su

importancia sea conocida por todos los cirujanos y promueven que su aplicación durante la

implantación de la PUR sea consensuada.

Page 80: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

79

PRÓTESIS UNICOMPARTIMENTAL DE

RODILLA ASOCIADA A PLASTIA DE LCA

El tratamiento indicado para pacientes con artrosis unicompartimental y rotura de LCA no

tiene hoy en día una base científica suficiente y es causa de controversia. La asociación de

plastia de LCA a la PUR es una de las posibles opciones, pero por ahora los estudios son

limitados y entre todos suman apenas 150 pacientes que han sido tratados con esta técnica37,40-

44. El que mayor seguimiento refiere de todos ellos cuenta con 5 años de media

37, periodo

insuficiente para poder comparar su evolución con el tratamiento gold-standard, la PTR,

cuyos resultados a 10 y 20 años son sobradamente conocidos en la literatura médica108

. La

mayor fortaleza de nuestro estudio radica en el largo periodo de seguimiento, ya que con 14,6

años de seguimiento medio y 10 años de seguimiento mínimo, supone la primera referencia

de resultados a largo plazo de la combinación de las 2 técnicas mencionadas. Los resultados

son en general buenos, pero se observan complicaciones que no se hubieran detectado con los

seguimientos a corto y medio plazo de estudios anteriores, cuyos resultados eran a priori

prometedores. La presencia de complicaciones a largo plazo puede ser un factor determinante

para muchos cirujanos a la hora de tomar la decisión de indicar una cirugía, por lo tanto

nuestro estudio abre una línea investigadora que puede tener una notable repercusión, en

contraste con lo previamente publicado sobre esta técnica.

La debilidad más importante de nuestro estudio es el pequeño tamaño muestral, con solo 8

pacientes que lo completaron. Aparte de los 2 pacientes que se perdieron en el seguimiento, la

técnica combinada se realizó en 5 pacientes más: en 2 casos se implantó una PUR lateral y los

otros 3 no cumplían con el criterio de 10 años de seguimiento mínimo. Los pacientes con

Page 81: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

80

PUR lateral fueron excluidos del estudio para conservar la mayor homogeneidad posible,

mientras que los 3 casos con menos de 10 años de seguimiento no se incluyeron porque el

objetivo era analizar los resultados a largo plazo. Las diferencias en periodos de seguimiento

y materiales utilizados tanto para la plastia de LCA como para la PUR son también

limitaciones a considerar.

La combinación de PUR y plastia de LCA aporta ventajas que se deben valorar

positivamente. No se ha observado ningún caso de fracaso a corto plazo, ya que las 2

pacientes con resultados adversos presentaron una evolución satisfactoria durante 9 y 13 años.

El empeoramiento clínico apareció a la edad de 67 años en ambos casos, más adecuada para

una PTR que los 58 y 54 años en los que se realizó la técnica combinada. Por lo tanto, la

intervención inicial aportó una buena solución provisional para estas pacientes y facilitó la

conservación de stock óseo de cara a futuras cirugías de revisión. Los pacientes portadores de

PUR presentan un mayor rango de movilidad17

y conservan una cinemática de rodilla más

parecida a la rodilla nativa no protésica18

que los pacientes con PTR. Los resultados clínicos

observados en los pacientes incluidos en nuestro estudio han sido equiparables a los obtenidos

tras PUR aisladas en rodillas con LCA sano. La mejoría en la calidad de vida que esto puede

suponer es la principal razón por la que la técnica combinada está indicada en pacientes

jóvenes. La supervivencia a largo plazo es menor que en las PTR y el paciente debe ser

informado del riesgo de fracaso a medio plazo. En pacientes mayores la demanda de actividad

y la esperanza de vida son menores, por lo que primaría la mayor supervivencia a largo plazo

de las PTR, que continuaría siendo la técnica gold standard para casos con artrosis

unicompartimental asociados a inestabilidad de LCA.

Page 82: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

81

INESTABILIDAD LIGAMENTOSA CLÍNICAMENTE

MANIFIESTA

La necesidad de asociar una plastia de LCA a los pacientes que se operan de PUR y tienen

una rotura de LCA es sujeto de discusión. Mancuso et al. aseguran en un metaanálisis en el

que incluyen 26 estudios, que el riesgo de fracaso se multiplica por 2 en los casos que no se

asocia plastia de LCA36

. Los estudios que analizan este tema se limitan en general a describir

la ausencia o presencia de LCA como variable a estudio9,23,30-34

. Sin embargo, no todos los

pacientes con rotura de LCA presentan una inestabilidad clínica y, por lo tanto, no se debería

de indicar una plastia de LCA en todos ellos. Siguiendo la línea que plantean Engh et al., sería

preferible seleccionar pacientes con síntomas claros de inestabilidad que además sea

objetivable mediante exploración física34

. Estos casos presentan una alteración de la

biomecánica, que es la que puede influenciar la supervivencia y el resultado final de una PUR.

A pesar de que la ruptura de LCA y la artrosis de rodilla se observen simultáneamente en

muchas ocasiones, la secuencia en la que se producen las dos lesiones condiciona que la

fisiopatología sea diferente y debe ser considerada para su adecuado tratamiento.

Por un lado, pacientes con una artrosis primaria avanzada pueden desarrollar una rotura

degenerativa del LCA35

. En la artrosis medial primaria con LCA sano, el patrón de lesión

inicial suele afectar más al aspecto anteromedial de la meseta tibial22,109

. A medida que la

enfermedad evoluciona, la lesión de la meseta medial se extiende hacia posterior y el LCA se

ve dañado por el roce con los osteofitos, que incluso pueden romperlo. Así, estos pacientes

presentan un patrón de lesión más extenso, que puede afectar simultáneamente a la parte

anterior y posterior de la meseta tibial medial29,109

. Suelen tener una edad más avanzada y los

síntomas de inestabilidad suelen ser menos frecuentes.

Page 83: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

82

Imagen 14: a) Radiografía lateral preoperatoria de una rodilla con déficit de LCA y artrosis

secundaria. La línea blanca resalta el patrón de lesión posterior en la meseta tibial.

b) Radiografía lateral preoperatoria de una rodilla con artrosis primaria y LCA intacto. La erosión

de la meseta tibial afecta a la parte más anterior.31

Por otro lado, los pacientes con una lesión primaria de LCA presentan episodios repetidos de

subluxación anterior de tibia respecto al fémur, que generan un patrón de lesión que suele

afectar más a la parte posterior de la meseta tibial medial y permiten la conservación del

cartílago de la parte anterior109,110

. Tienen un riesgo a 10 años de desarrollar artrosis 5 veces

mayor que si tuvieran una rodilla sana111,112

. Los pacientes suelen ser jóvenes y activos, la

etiología de la ruptura de LCA suele ser traumática y suelen ir seguidos de síntomas de

inestabilidad.

El análisis de los componentes extraídos tras cirugías de revisión de PUR ha demostrado que

el patrón de erosión observado en el preoperatorio se mantiene tras la implantación de la

Page 84: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

83

prótesis113

. Los aflojamientos de platillo tibial, causa más frecuente de fracaso en pacientes

con déficit de LCA9, podrían ser secundarios a estas cargas. Suggs et al. demostraron en un

estudio cadavérico, que la estabilidad anteroposterior de una rodilla con PUR y LCA intacto

es parecida a una rodilla no operada. Sin embargo, en una PUR con déficit de LCA el

desplazamiento entre tibia y fémur es de más del doble que si el LCA está intacto114

. La

constante subluxación anterior de la tibia en rodillas inestables produce una sobrecarga en la

parte posterior del platillo tibial. Esta sobrecarga no se produciría en rodillas con rotura de

LCA y estabilidad anterior conservada, que mantendrían un patrón de carga anteromedial22

.

Por consiguiente, el criterio de indicación propuesto por Engh et al.34

parece más lógico y

evitaría la contraindicación innecesaria de PUR en la mayoría de pacientes con rotura de

LCA, pero sin inestabilidad clínica.

ALTERNATIVAS A LA COMBINACIÓN DE PUR Y

PLASTIA DE LCA

Plastia de LCA aislada: Shelbourne et al. presentan 53 casos de plastia de LCA aislada

realizadas en pacientes con artrosis unicompartimental asociada y 34,2 años de edad media38

.

Imagen 15: a) El patrón de erosión en rodillas artrósicas con LCA intacto afecta inicialmente a la

parte anteromedial del platillo tibial.

b) El mismo patrón de erosión se mantiene tras la implantación de la PUR.24

a b

Page 85: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

84

Treinta y cuatro casos presentaban una artrosis grado I de Ahlbäck24

, 16 casos un grado II y 3

casos un grado III. De todos ellos 33 fueron valorados tras 5,5 años de seguimiento medio y

25 pacientes presentaron resultados parecidos a la normalidad. Siete casos precisaron cirugía

de revisión: 1 resección de cicatriz adherida, 1 meniscectomía lateral, 1 condroplastia del

cóndilo femoral medial, 2 revisiones de la plastia de LCA, 1 osteotomía valguizante de tibia

proximal a los 6 años y 1 PTR a los 14 años. Los autores no precisan el grado de condropatía

preoperatoria de los casos de revisión. En pacientes con artrosis grado I y II de Ahlbäck la

plastia de LCA ailada puede reportar resultados satisfactorios, sin embargo puede ser

insuficiente para grados más evolucionados. Las rodilla varas comprometen la supervivencia

de las plastias de LCA, por lo que en casos de varo articular secundario a artrosis es preferible

añadir una técnica que corrija el alineamiento de la rodilla que realizar una plastia de LCA

aislada115

.

La osteotomía valguizante de tibia proximal (OVTP) es una técnica habitual para el

tratamiento de artrosis unicompartimental. Uno de los factores asociados con resultados

favorables tras una OVTP es la estabilidad ligamentosa116

, por lo que en casos de

inestabilidad por déficit de LCA se ha propuesto la combinación de OVTP y plastia de LCA.

Mehl et al. compararon un grupo de 26 pacientes tratados con OVTP, con otros 26 casos

tratados mediante la combinación de OVTP y plastia de LCA117

. A pesar de que observaron

peores resultados en la escala Lysholm en los tratados con la OVTP aislada, destacan que un

77% de ellos referían una mejoría de sus síntomas de inestabilidad ligamentosa. Así,

recomiendan realizar la OVTP aislada en pacientes mayores, cuyo síntoma principal sea el

dolor, tengan un nivel de actividad bajo y artrosis más avanzada. En casos de pacientes

jóvenes, activos y cuyo síntoma principal sea la inestabilidad, recomiendan asociar la plastia

de LCA. La supervivencia de OVTP en rodillas con déficit de LCA es mayor cuando se

Page 86: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

85

realiza asociada a una plastia LCA que cuando es aislada37

. La mayoría de estudios muestran

resultados satisfactorios, con alivio del dolor y gran mejoría funcional117-119

. Sin embargo, la

combinación de ambas técnicas es muy demandante y se ha descrito un índice de

complicaciones de hasta el 24%118

, siendo las más frecuentes la rotura de plastia de LCA36

, la

trombosis venosa profunda o la rigidez articular118

. En caso de necesidad de cirugía de

revisión a PTR, los resultados son parecidos a las revisiones de PUR a PTR o PTR primarias,

aunque el índice de reoperación es del doble tras revisiones de OVTP120

.

La indicación de esta técnica combinada se limita a estadíos iniciales de artrosis, con una

pérdida parcial del espesor del cartílago articular menor al 50%117-119

. Se diferencia de la PUR

en que esta se indica más en casos de artrosis avanzadas en las que existe contacto entre hueso

tibial y hueso femoral por pérdida del espesor completo del cartílago articular25

. No son

técnicas comparables, ya que a pesar de que ambos traten la artrosis unicompartimental, la

indicación se realiza en diferentes estadíos de condropatía. Por consiguiente, la plastia de

LCA también se puede asociar a ambas técnicas si el paciente presenta inestabilidad,

siguiendo los mismos criterios de indicación.

PUR aislada: como ya se ha comentado en la introducción, Hernigou et al. observaron que

los pacientes con PUR y ausencia de LCA que no habían precisado revisión tenían un slope

posterior menor a 4º 73

. Siguiendo esta línea, Suter et al. decidieron colocar las PUR con LCA

estable con un slope posterior parecido a la rodilla nativa, mientras que en los casos con

inestabilidad de LCA el slope posterior fue menos pronunciado121

. En el estudio cinemático

postoperatorio observaron que, con una pendiente 39% menor en casos con déficit de LCA,

no había diferencias significativas entre los grupos y que los pacientes de ambos no referían

Page 87: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

86

inestabilidad al descender cuestas o esclaeras. Por lo tanto, los autores recomiendan colocar el

componente tibial en un slope posterior menor para contrarrestar el déficit de LCA.

PRONÓSTICO EN CASO DE REVISIÓN

Una de las razones que un cirujano se plantea al indicar una PUR es la dificultad que puede

entrañar el recambio a PTR en caso de fracaso. Sin embargo, la mayoría de recambios de

PUR se pueden realizar con una PTR estándar, sin necesidad de vástagos, ni de suplementos

tibiales ni femorales. Saldanha et al. describen que el 77% de las revisiones a PTR de sus 36

PUR mediales tipo Oxford se realizaron con PTR estándar122

. Solo 2 de los casos precisaron

aumentos tibiales y solo en 6 de ellos se implantaron vástagos intramedulares. Tras 2 años de

seguimiento medio la puntuación en el apartado de rodilla de la escala KSS fue de 86,3 y de

78,5 en el apartado funcional. Sin embargo, se realizaron 3 nuevas revisiones: 1 aflojamiento

aséptico del componente tibial, 1 del componente femoral y 1 revisión a PTR con vástago por

dolor persistente. Levine et al. describen buenos resultados de 31 casos de revision de PUR a

PTR tras 45 meses de seguimiento y refieren que son equiparables a PTR primarias123

.

Ningún caso presentó dolor moderado o severo, ni inestabilidad ligamentosa. En cuanto a la

movilidad, la flexión media fue de 115º y se observó limitación de la extensión de 2º y 8º en 2

pacientes. La puntuación media en la escala KSS fue de 91 en el apartado de rodilla y de 81

en el apartado funcional. Un caso precisó una segunda revisión por infección a los 8 meses de

evolución. Los autores subrayan que estos resultados son claramente superiores a los

obtenidos tras revisión de PTR.

Page 88: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

87

Por otro lado, si se comparan los resultados de PTR primaria con los de PTR tras revisión de

PUR, estos últimos son menos favorables. Rancourt et al. compararon 63 casos de PUR

revisados a PTR con 126 PTR primarias124

. El primer grupo precisó de polietilenos más

gruesos y de mayor tiempo de isquemia y en 15 casos se precisó algún vástago, suplemento o

injerto óseo. Es decir, en el 76% de casos los recambios se realizaron con PTR estándar. La

estancia hospitalaria y el descenso de hemoglobina fueron similares en ambos grupos. A 3,1

años de seguimiento medio, la puntuación en la escala WOMAC fue 6 puntos mayor tras

revisión de PUR (25,8 vs 19,8 tras PTR primaria). Järvenpää et al. describen que sus 21 casos

de revisión de PUR a PTR obtuvieron peor puntuación que el grupo control de 28 PTR

primarias en los 3 apartados de la escala WOMAC (dolor, rigidez y capacidad funcional) tras

10,5 años de seguimiento125

. Los autores indican que durante la intervención precisaron

colocar injerto óseo en 4 pacientes, vástagos en 6 y suplementos en 8 casos. Mientras que el

grupo de PTR primarias precisó una cirugía de revisión por aflojamiento aséptico, en el grupo

de recambio de PUR a PTR la necesitaron 2 revisiones, ambos por desgaste de polietileno.

Curiosamente, estos 2 pacientes fueron reintervenidos una tercera vez, el primero por

aflojamiento séptico del componente tibial y el segundo por inestabilidad. En un metaanalisis

en el que se incluyeron 536 pacientes con PTR (209 tras revisión de PUR y 327 primarias), se

observaron mejores resultados de WOMAC, KSS y movilidad tras PTR primaria126

. Además,

tras la revisión de PUR era más frecuente la implantación de suplementos, vástagos, injertos

óseos y polietinenos más gruesos. Sin embargo, no había diferencias en cuanto a tasa de

revisión, estancia hospitalaria o complicaciones postoperatorias.

La cirugía de revisión no ha sido necesaria en la mayoría de los pacientes intervenidos de

PUR con plastia de LCA asociada. Sin embargo, el análisis de los estudios tras revisión de

PUR es interesante para conocer el pronóstico de los casos de fracaso y la mayoría de

Page 89: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

88

pacientes obtienen buenos resultados tras un recambio. Además, solo una cuarta parte de los

casos descritos en la literatura médica precisan de suplementos o vástagos122-125

. Si se

comparan las puntuaciones obtenidas en las escalas clínicas tras una revisión de una PUR a

PTR con PTR primarias, estas últimas obtienen mejores resultados. Sin embargo, no es

razonable comparar pacientes con prótesis primarias con otros con artroplastias de revisión. Si

nos cuestionamos si los pacientes con artrosis unicompartimental e inestabilidad ligamentosa

son tributarios de PTR o de PUR asociado a plastia de LCA, sería más equitativo comparar la

evolución tras las revisiones de ambas técnicas. Las referencias en este sentido son escasas y

la mayoría sugieren que los resultados tras revisión de PUR son mejores tras comparar sus

casos con referencias bibliográficas sobre revisión de PTR122,123,127

. En el único estudio en el

que se comparan resultados de pacientes propios pareados, Cross et al. comparan 4 grupos

tras 4,8 años de seguimiento medio: revisión de PUR, revisión de osteotomía tibial, PTR

Revisión de PUR a PTR PTR primaria Revisión de PTR

Número de pacientes 49 97 43

Edad 61,5 58,9 60,7

Seguimiento

(años)

4,56 3,59 4,17

KSS postoperatorio

(escala de rodilla)

85 86 71

KSS postoperatorio

(escala funcional)

79 85 61

Flexión

postoperatoria

115 117 109

Tiempo quirúrgico 120 109 163

Estancia hospitalaria 3,2 1,84 4,1

% de componentes

de revisión

34% 1% 100%

Tabla 3: Datos demográficos y resultados postoperatorios de 3 grupos incluidos en el estudio de

Cross et al.120

Page 90: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

89

primaria y revisión de PTR120

. Por un lado observaron que los resultados clínicos eran

significativamente mejores tras una revisión de PUR que tras una revisión de PTR. Además,

el tiempo quirúrgico y la estancia hospitalaria fueron significativamente más cortos. Por otro

lado, observaron que se los resultados tras una revisión de PUR se parecen más a una PTR

primaria que a una de revisión.

En conclusión, tras comparar los estudios de revisiones de PUR y PTR, se puede concluir que

el buen pronóstico en caso de necesidad de revisión de PUR es una ventaja de cara a indicar la

combinación de PUR y plastia de LCA. La mayoría de pacientes no precisan revisión y

obtienen mejores resultados funcionales que una PTR primaria. En caso de revisión, los

resultados son mejores que tras una revisión de PTR, aunque ligeramente peores que una PTR

primaria. La única desventaja de la técnica combinada sería la menor supervivencia, aunque

en caso de fracaso y necesidad de recambio a PTR, la mayoría de casos obtienen resultados

parecidos a una PTR primaria.

ESTUDIOS PREVIOS DE PUR Y PLASTIA DE LCA

Los estudios sobre PUR asociada a plastia de LCA se resumen en la Tabla 4. El de Weston-

Simons et al. es el más destacado por ser el que más pacientes incluye (51 casos) y el que

mayor seguimiento medio tiene (5 años)37

. A diferencia de nuestro estudio, en 18 pacientes

las 2 técnicas se realizaron en diferentes intervenciones quirúrgicas. En pacientes cuyo

síntoma principal fue la inestabilidad realizaron una plastia de LCA aislada y, en caso de

persistencia de dolor, asociaron la PUR en un segundo tiempo. En caso de que el síntoma

principal sea el dolor, preconizan las 2 técnicas de forma simultánea. Los resultados clínicos

descritos, con una media de 170 puntos en la escala de KSS, son ligeramente superiores a los

Page 91: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

90

nuestros (156 puntos de media). La comparación de estudios es poco valorable por la

heterogeneidad de los grupos, aunque todas las referencias describen resultados satisfactorios

con la técnica combinada. Las complicaciones observadas son también diferentes y no se

determina un patrón concreto de fracaso tras la técnica asociada. Cabe destacar que ninguno

de los estudios describe la inestabilidad o rotura de la plastia de LCA como causa de revisión.

En contraste con esta circunstancia, los 2 pacientes con resultados desfavorables en nuestro

estudio presentaban signos de inestabilidad del LCA.

La mayor diferencia entre los estudios se observa en el tiempo de seguimiento: con 14,6

meses de media, nuestro estudio casi triplica el seguimiento más largo descrito hasta el

momento. A pesar de que un mayor deterioro podría ser esperable a largo plazo, la evolución

de los pacientes es satisfactoria.

Tabla 4: resumen de los datos más interesantes observados en estudios sobre la técnica combinada

de PUR y plastia de LCA.

Año: año de publicación. n: tamaño muestral. Combinado: las 2 técnicas se realizaron en una sola

intervención quirúrgica. Separado: se realizaron en 2 intervenciones diferentes. *Causa de revisión.

Page 92: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

91

Iriberri

Tian

44

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12

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2009

2006

2006

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8

28

14

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27

9

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14,6

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2,2

5

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2

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2,8

Seg

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(años)

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C

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33

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18

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ltado clín

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94

(62–

16

5)

59

(3–8

1)

31

± 7

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60

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7,1

63

,7 ±

6,5

4,4

± 1

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29

(10,2

)

45

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)

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)

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)

72

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)

28

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)

40

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)

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)

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(1-5

)

77

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11

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,4 ±

10

38

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15

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5,3

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85

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16

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8,2

11

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-

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Com

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Page 93: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

92

CONCLUSIONES

Page 94: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

93

La alineación en el plano axial de las PUR tiene influencia en el resultado clínico

postoperatorio.

La implantación del componente tibial de una PUR en rotación neutra o ligera

rotación externa se asocia a mejores resultados en la escala WOMAC.

La técnica de manos libres para la determinación de la alineación rotacional del

componente tibial de la PUR presenta una gran variabilidad, de hasta 33º.

La asociación de PUR y plastia de LCA proporciona buenos resultados clínicos a

largo plazo en pacientes con artrosis unicompartimental medial y clínica de

inestabilidad por rotura de LCA.

A pesar de que los resultados tras la PUR asociada a plastia de LCA son muy buenos a

corto y medio plazo, se observan algunos casos de deterioro tras un seguimiento a

largo plazo, con índices de fracaso mayores que tras una PTR.

Page 95: Importancia de la alineación y la estabilidad en la

94

BIBLIOGRAFÍA

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