Indio viejo. Relato de un libro de Jimmie Durham

09/27/2007 09:36 PMRplica21: Obsesiva Compulsin por lo Visual

Page 1 of 4http://www.replica21.com/archivo/articulos/g_h/525_galindo_durham.htm

Buscar

Gabriela Galindo

Indio viejo.

Dhotsua fue un gran hroe cherokee que fue asesinado en 1923 en una batalla por defender sutierra frente a las grandes empresas petroleras de Oklahoma. Cuando Dhotsua muri, sus ltimaspalabras fueron: "Estoy muy orgulloso de nosotros" y su primo que estaba con l le pregunt "Terefieres a la sociedad guerrera o a nosotros los cherokees?. Y l le respondi: "No, quiero decir anosotros los mamferos".

Esta es una de las tantas historias con las que podemos toparnos enuno de los libros ms recientes de Jimmie Durham, la traduccin alespaol de la original edicin editada en 1998, Entre el mueble y elinmueble (Entre una roca y un lugar slido) y presentado hacealgunas semanas en el bar Covadonga. Disertaciones aparentementedeshiladas destilan un cmulo de argumentaciones en una no-estructura de pensamientos agudos y plagados de un sentido delhumor trgico para los que piensan con los sentidos y sabroso para losque piensan con la razn.

Jimmie Durham es bien conocido por sus esculturas de carcterantropozoomrfico, sus intrincadas instalaciones y su activismopoltico como miembro del American Indian Movement en los aos 70;sin embargo, su poesa y ensaystica es tan intensa como su obraplstica. De ascendencia Cherokee, Durham ha encontrado el modo deconfrontarnos desde la irona a los estereotipos y prejuicios de lasculturas colonizadoras de occidente.

El calvario de los sentimientos al que nos lleva Durham en este ensayo(por cierto mal traducido al espaol) comienza con la compra de unoscuantos diccionarios, las palabras formadas por letras que acomodadasde una u otra forma crean un viacruxis de reflexiones. "Una vez queusted comienza a poner una palabra detrs de otra, a menudodescubre que, sin haberse dado cuenta, ha confesado algo" (p. 89). Unbreve frrago de informacin como reza el ttulo de su primercaptulo; s, un revoltijo, un caos, una mezcla confusa de datos quenos llevan por entuertos lingsticos, breves relatos, anlisiscontundentes y llanas confusiones, pero que en todo momento nosrevelan la importancia de lo trivial y retuerce los convencionalismospolticos a carcajada abierta. Self Portrait pretending to be Rosa Levy



El diccionario, como dira Georges Perec, es una simple listaque nos sobrepasa y no es posible agotarlo, y por ende seconvierte en material de referencia. Se trata de un enlistadode convenciones aparentemente aleatorias. El reto estriba enlas relaciones que uno es capaz de hacer entre una y otrapalabra. Las canas de Jimmie Durham dibujan un juego decomplejas relaciones semnticas entre palabras y lenguas(ingls, alemn, francs) hasta convencernos de cosas quepareceran totalmente absurdas (si no hubisemos pasado poruna breve y contundente disertacin lingstica) tales como:que las sillas nos han convencido de que las necesitamos comointermediarios y son esenciales para nuestra vida sexual y paracolmo, son espas del Estado! Para llegar a esta conclusin,tuvimos que sacar de la memoria la clebre escena del cruzadode piernas de Sharon Stone (Basic Instict), para imaginarla encircunstancias como un escenario en Japn --ella vistiendo unKimono y arrodillada en un tapetitoo como pigmea en laestepa africana y acuclillada en la tierra.

Durham arroja piedras sobre las etimologas y provoca risas. Su laberinto discursivo nos revela las trampas que se esconden trasel lenguaje: "Aparte del Dolor, que es el nico 'presente' que conocemos, est el inmediato pasado; es decir el lenguaje" (p.46).Todo lo que decimos, desde el momento de pronunciarlo se convierte en pasado. El nico terreno baldo para la reconstruccindel mundo efmero de la vida es el relato. Historias como la del indio Leonard Peltier acusado de matar a dos agentes del FBI osu versin de lo sucedido cuando conoci a Gilgamesh son narraciones/ficciones que se van imbricando dentro del ensayo querevelan la crueldad del poder, el mundo de la obediencia confrontado con el mundo de la subversin, el efecto destructor de laHistoria y la inevitable sustancia de dominio que se concentra en la llamada "civilizacin occidental".

Esculturas, 1991

Trapecista del arte, cocinero y activista en receso, Durham muestra a travs de esteanecdotario personal, articulado sobretodo por el arte de la ocurrencia, un modo de deentender la cultura dominante partiendo de lo hallado en la memoria. El aparato delpoder es tan prodigioso que ha creado toda una serie de artilugios para conservar sudominio sobre el lenguaje (o como deca Benjamn: lo nico que no soporta laburguesa, es que la cambien la sintaxis). Tal es el caso de la arquitectura, otrainvencin del Estado creada para conveniencia de s mismo. La arquitectura se nospresenta como una estructura fuerte y suprema que se sostiene gracias a su fundamentoesencial: La piedra. la piedra es la base de toda estructura y se encuentra oprimida porello: "La piedra sufre por el peso arquitectnico, el peso de la metfora y el peso de lahistoria" (p.60). Como en una fbula, podramos situar a la piedra como larepresentacin de la identidad de los pueblos que han sido tragados y digeridos por lacolonizacin.

En su instalacin presentada en el Museo de



En su instalacin presentada en el Museo deArte Contemporneo en Pori, Finlandia en elao de 1997, Durham coloc cientos depiedras por todo el museo, invadiendo hastalas oficinas, baos y pasillos. Era un acto de"liberacin" de las piedras, su intencin eralograr la independencia de la propiaarquitectura y su relacin con el museo. Lapiedra debe revelarse ante la estructuraque lo domina y sobreponerse a la opresinejercida por el aparato del poder. Esto loobservamos tambin en una de sus msrecientes obras que se encuentra en la callede un adinerado barrio de la ciudad deMxico: El Pedregal. En la instalacin vemosun auto cuidadosamente estacionado,aplastado por una gigantesca piedratezontle. Cada del cielo, la piedra (elindividuo) se subleva ante la mquina (elpoder) y la aplasta sin misericordia.

Entre el mueble y el inmueble es una obra francamente inclasificable, nos hace pasar sin sobresaltos de un breve relato a unareceta para hacer bollos o narrar jugosas observaciones al margen, como aquella en la que Jimmie nos relata una conversacincon un amigo suizo: "Los cherokees tienen que matar para comer. Igual que todo el mundo, pero un buitre no, as que es mspuro, ms elevado, ms moral que el resto de nosotros. Eso le estaba diciendo a un amigo suizo cuando se enoj mucho y dijo:'No, los buitres son espantosos, hacen que otros hagan la matanza en su lugar'. Y yo dije: 'No, no, sos son los suizos, estscometiendo un error'".(p.38)

El ensayo est salpicado de breves narraciones como la de la pequeaaraa que se instal en el retoo de un cocotero y Durham decidi tomarlaa su cuidado Se encarg de que el pequeo arcnido tuviera comidacolocando pedazos de fruta podrida alrededor de la maceta para que sejuntaran moscas y mosquitos. El problema surgi cuando la planta muri(cosa que era de esperarse, Jimmie viva en Berln y todos sabemos que uncocotero no puede sobrevivir con tan tremendo clima) pero, contrario a loque podra esperarse, la araa no muri simplemente se qued en estadoletrgico "Tal parece que est 'jubilada'. No tiene telaraa, no come, no semueve. Pero tampoco muere". (p.32)

Pensaramos que una araa no puede vivir fuera de su telaraa, fuera de su"hogar", pero he aqu lo que Durham nos revela. El hogar es un invento, unamentira, en realidad lo que necesitamos es un espacio para contenernuestras posesiones, ellas son las que nos permiten conservar el sentido delyo. Nuevamente nos lleva a la reflexin sobre la identidad, la individualidady el sentido que stas adquieren dentro de cada cultura. Se trata delsentimiento de identidad con el que una persona se reconoce a s misma;tal clase de identidad queda constituida por la memoria. Esto me hacerecordar una de sus ms exquisitas esculturas realizada en 1987 y tituladaAutorretrato, esta pieza es un monumento a la identidad, se trata de unafigura humana recortada en piel de tamao natural con una mscarafigurando su rostro y sobre la que ha pintado por todo el cuerpo una seriede estatutos reveladores sobre su persona, tales como:

Hola, soy Jimmie Durham y quiero explicar algunas cosas.Como artista estoy muy confundido, pero mi salud es buenaSoy adicto a la nicotina, al alcohol, a la cafena y no duermobienTengo 12 hobbies, 11 plantas en casa y una cicatriz porapendicitisLos penes de los indios son por lo general grandes ycoloridosMi piel no es tan oscura pero estoy seguro que muchos indiostienen la piel color cobriza Self-Portrait, 1987



Segn Kant la identidad de la conciencia estriba simplemente en lacondicin formal de los pensamientos y su cohesin. A esto podemosdecir que Jimmie Durham aade el asombro ante lo cotidiano y elcuestionamiento de lo ms obvio y definitivo.

Como un simulador de incertidumbres, irnico y puntual, Entre elmueble y el inmueble nos remite a la reflexin sobre la peculiarcondicin del ser americano en relacin con el europeo y se vislumbra elfenmeno de lo "indgena" (puntualizando obviamente en el errorlingstico de la palabra 'indio') dentro del proceso de globalizacin enesta poca inevitablemente postcolonial. Europa como una entidadpoltica ms que geogrfica y Amrica como el gran poder, para Durhamel problema de lo indgena se expresa dentro de un marco ideolgico yen la praxis geopoltica. Nos desafa a contrastar las ideas del"pensamiento occidental" (europeo o americano) con el mitoenmascarado de lo "latinoamericano" (Jimmie vivi en Mxico ocho aos)para develar el producto de la cultura de la dominacin.

La irona, la ocurrencia y la agudeza, son as los ejes de este libro quecierra muy afortunadamente con un par de poemas que, sin serconclusin de nada simplemente nos dejan con una sonrisa.Particularmente me refiero a Una cancin para mi enemigo, donde conuna gran dulzura nos recuerda que todos tenemos esos "malossentimientos" que no nos dejan estar, hasta que los soltamos al aire paraque alguien ms los recoja y decida guardarlos o sencillamente, tirarlosa la basura.

Jimmie Durham. Entre el mueble y el inmueble (Entre una roca y un lugar slido). Ediciones Alias, Mxico. 2007

Rplica21. Todos los derechos reservados. 2000-2007 Fecha de publicacin: 14.08.2007

Documents

Indio viejo. Relato de un libro de Jimmie Durham