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Mariana Fernández Massi y Facundo Barrera Insua La dinámica salarial en la industria argentina (2003- 2012). Un estudio sobre la productividad como límite superior

La dinámica salarial en la industria argentina (2003-2012). Un estudio sobre la productividad como límite superior

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La salida de la crisis económica del año 2001 marca el inicio de una etapa donde los salarios en el sector industrial argentino mostraron una notable expansión respecto al fin de la década anterior. Sin embargo, esta tendencia no ha sido homogénea en las distintas ramas de actividad del sector. Con objeto de contribuir a una caracterización de la dinámica salarial en Argentina, esta investigación se centra en el análisis de los diferenciales inter industriales en la relación entre productividad y salarios. A partir del análisis de los datos provenientes del Censo Nacional Económico 04/05 y la Encuesta Mensual Industrial, se distinguen diferencias en las pautas de evolución de tal relación y se evalúa en qué medida se ha modificado la desigualdad sectorial tanto en lo referido a salarios como productividad. De esta aproximación se desprende que durante el primer quinquenio (2003-2007) ha habido un incremento del salario real mayor al de la productividad para todos los sectores industriales; mientras que en el quinquenio siguiente el comportamiento ha sido más heterogéneo. Mediante el Índice de Theil puede afirmarse que la recuperación inicial de los salarios acompaña una reducción en la desigualdad, que se estabiliza para el resto del período.

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  • Mariana Fernndez Massi y Facundo Barrera Insua

    La dinmica salarial en la

    industria argentina (2003-

    2012). Un estudio sobre la

    productividad como lmite

    superior

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    La dinmica salarial en la industria argentina

    (2003-2012). Un estudio sobre la productividad

    como lmite superior.

    Mariana Fernndez Massi1 y Facundo Barrera Insua2.

    Resumen

    La salida de la crisis econmica del ao 2001 marca el inicio de una etapa donde los salarios en el sector industrial argentino mostraron una notable expansin respecto al fin de la dcada anterior. Sin embargo, esta tendencia no ha sido homognea en las distintas ramas de actividad del sector.

    Con objeto de contribuir a una caracterizacin de la dinmica salarial en Argentina, esta investigacin se centra en el anlisis de los diferenciales inter industriales en la relacin entre productividad y salarios. A partir del anlisis de los datos provenientes del Censo Nacional Econmico 04/05 y la Encuesta Mensual Industrial, se distinguen diferencias en las pautas de evolucin de tal relacin y se evala en qu medida se ha modificado la desigualdad sectorial tanto en lo referido a salarios como productividad.

    De esta aproximacin se desprende que durante el primer quinquenio (2003-2007) ha habido un incremento del salario real mayor al de la productividad para todos los sectores industriales; mientras que en el quinquenio siguiente el comportamiento ha sido ms heterogneo. Mediante el ndice de Theil puede afirmarse que la recuperacin inicial de los salarios acompaa una reduccin en la desigualdad, que se estabiliza para el resto del perodo.

    1 Lic. En Economa (UNS) / Becaria doctoral (CEIL-CONICET) / Docente en la Universidad Nacional de Moreno.

    2 Lic. En Economa (UNLP) / Becario doctoral (CEIL-CONICET) / Docente en la UNLP.

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    I. Introduccin

    La salida de la crisis econmica del ao 2001 en la Argentina, marca el inicio de una

    etapa donde los salarios en el sector industrial argentino muestran una notable expansin. Sin

    embargo, esta tendencia no ha sido homognea en las distintas ramas de actividad del sector.

    La desigualdad salarial, al igual que la del conjunto de los ingresos de la poblacin, experimenta

    una importante reduccin, que no se replica para el conjunto de los sectores econmicos. Entre

    ellos, la industria contiene buena parte del sector privado registrado, a priori ganador en lo

    que se refiere a la recomposicin de los ingresos de los trabajadores aunque con importantes

    heterogeneidades a su interior.

    Preguntarnos por los factores que afectan en la desigualdad salarial implica una pregunta

    anterior: cmo se determinan los salarios. La respuesta ser distinta segn el enfoque terico

    adoptado. La determinacin del salario en el enfoque neoclsico parte de la premisa que, si no

    median rigideces externas, el salario se iguala a la productividad marginal. El enfoque que aqu

    proponemos, tambin asume que la productividad es uno de los principales determinantes del

    salario, pero interesa conocer la medida promedio, y no marginal. La lgica subyacente es

    distinta. En la teora neoclsica la productividad es un atributo del individuo y por lo tanto,

    depende de atributos personales. As, la productividad est determinada por los aos de

    escolarizacin y el entrenamiento recibido en el trabajo. Trabajadores ms productivos recibirn

    salarios superiores. En la teora marxiana, perspectiva que adopta este trabajo, la productividad

    se vincula al puesto de trabajo, y est determinada fundamentalmente por las condiciones

    productivas del establecimiento/firma. De all que para comprender los niveles de salario

    consideramos primordial comprender las condiciones de acumulacin de los sectores

    econmicos que pagan esos salarios.

    Con el objetivo de contribuir al conocimiento de esos procesos, esta investigacin se

    centra en el anlisis de los diferenciales inter industriales en la evolucin de la productividad y

    los salarios. En un esquema terico donde la tasa salarial efectiva se establecer entre un lmite

    superior dado por la tasa de ganancia del capital a nivel sectorial, y un lmite inferior constituido

    por un salario mnimo que asegure las condiciones materiales para la reproduccin de la fuerza

    de trabajo, nos interesa en particular analizar la productividad como variable explicativa

    relevante para la constitucin del primero de los lmites mencionados.

    En la segunda seccin se desarrolla la perspectiva terica sobre determinacin del salario

    adoptada en el trabajo. Luego, en la tercera seccin, se presentan algunos elementos que

    caracterizan el perodo bajo estudio. Con el propsito de analizar el acercamiento/alejamiento

    del salario efectivo de su lmite superior, en la tercera seccin se presentan los resultados

    empricos sobre la relacin entre salarios y productividad en la industria manufacturera.

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    Finalmente, se presentan las principales conclusiones de este trabajo y los nuevos interrogantes

    surgidos a la luz del mismo.

    II. Marco de Anlisis

    El problema de la desigualdad salarial ha sido debatido extensamente en la literatura

    econmica. El punto de partida de este debate es la concepcin general acerca del

    funcionamiento del mercado de trabajo y los mecanismos de determinacin el salario. En este

    apartado planteamos, en primer lugar, cules son los elementos clave en la determinacin de

    salarios y, en segundo lugar, cmo se plasma empricamente el enfoque adoptado.

    II.1. Sobre la determinacin de salario

    David Ricardo (2007 [1817]), considera que el salario surge del valor trabajo resultante

    del nmero de horas aplicadas a la produccin de los bienes necesarios para mantener al

    trabajador y su familia. De este modo, se sostiene una teora del salario de subsistencia donde

    su precio natural es el que permite la reproduccin de las familias, al tiempo que ese nivel

    presentar oscilaciones producto de la interaccin de las fuerzas de oferta y demanda del

    producto3.

    En la actualidad, las lecturas ms frecuentes provienen de la escuela neoclsica, la que

    retoma la explicacin de las fuerzas del mercado y traslada la definicin del salario a la esfera

    de la circulacin, desanclando su vnculo con la rbita productiva. En la teora de salario de

    equilibrio, el funcionamiento del mercado de trabajo es el mismo que para cualquier otra

    mercanca, la oferta y la demanda se encargarn de fijar el precio y el nivel de ocupacin. En

    este modelo, la productividad aparece como una propiedad del trabajador e interesa en relacin

    a sus aportes marginales: bajo los supuestas de competencia perfecta, sin mediar rigideces

    externas, una empresa maximiza sus ganancias al pagar un salario real que iguale la

    productividad marginal del trabajo, lo que significa que se pagar en funcin del incremento del

    producto generado por la incorporacin de un nuevo trabajador. En el equilibrio, el salario

    tendr un doble significado: visto desde la demanda ser el pago por el producto adicional

    creado por el trabajo, mientras que visto desde la oferta, ser el ingreso marginal que obtiene

    la ltima hora de trabajo ofrecida (Carciofi, 1986).

    3 La Ley de hierro de los salarios estableca que si el precio de mercado de la mano de obra se encuentra por encima

    del nivel natural, la condicin de los trabajadores es floreciente y dichosa lo que da lugar a un incremento de la

    reproduccin de las familias, un incremento de la oferta de trabajo y una disminucin del salario. Si, por el contrario, el

    valor de mercado es inferior, disminuye la tasa de reproduccin de las familias, por lo que el salario retorna a su nivel

    natural (Ricardo, 2007).

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    Al ser entendida como un atributo individual, la productividad se encuentra directamente

    relacionada con los aos de formacin de los trabajadores. Los salarios sern proporcionales a

    sus productividades personales, debidamente ajustados segn el stock de capital humano: a

    mayor educacin, mayor ser su productividad y, en consecuencia, sus ingresos sern ms

    altos (Mincer, 1974). La forma ms divulgada de estimar el retorno a la educacin es mediante

    una funcin economtrica de segundo orden, segn la cual, la variacin de los ingresos

    laborales se explica por el promedio de aos de educacin y la experiencia laboral4. En este

    marco, Mincer (1974) explica las diferencias salariales al sealar su vnculo con los distintos

    niveles de formacin de los trabajadores.

    Por otra parte, ntimamente relacionado con la productividad, el progreso tcnico aparece

    en los modelos de crecimiento como una variable exgena. Este es el caso del conocido

    desarrollo de Solow (1956), donde el trmino que representa el cambio tecnolgico, afecta la

    posicin de la funcin de produccin y no su pendiente. Luego, en los modelos de crecimiento

    endgeno, el progreso tecnolgico pasa a depender de variables como la acumulacin de

    capital fsico, humano y tecnolgico, afecta la tasa de crecimiento futuro.

    Un ltimo punto a destacar de este tipo de modelos tiene que ver con que la

    productividad se construye a partir del aporte del trabajo y del capital, siendo estos factores

    complementarios en la funcin productiva. As entendida, la productividad no slo descansa en

    los aportes aislados de los respectivos factores, sino que se invisibiliza el conflicto de intereses

    entre empresarios y trabajadores organizados.

    Una lectura alternativa es la propuesta por la teora marxiana donde la productividad,

    dada la definicin terica de valor, proviene exclusivamente de lo que sucede en torno al

    trabajo. En este esquema, analizar la productividad requiere como paso complementario,

    conocer los mecanismos vinculados con la competencia por el mercado. Mediante la entrada y

    salida de capitales en las distintas esferas de la produccin, se establece un ratio oferta-

    demanda donde se definir un beneficio medio para el conjunto de los mercados. All, el ritmo

    de acumulacin de la economa, junto con sus ramificaciones sectoriales, aparece como la

    variable independiente crtica: tendencialmente ajusta para que la oferta y demanda del

    mercado de trabajo, mantengan la tasa de salarios dentro de los niveles normales de

    beneficio (Botwinick, 1993). Es decir, en casos excepcionales, un ritmo de acumulacin

    acelerado presiona sobre la oferta de trabajo, reduce la masa de trabajadores desocupados,

    incrementa los salarios y presiona sobre la tasa de beneficios. Si esto sucede, se ralentizar el

    4 La tasa de retorno de la educacin est dada por el coeficiente de la variable educacin y se interpreta como el

    porcentaje en que se incrementan los ingresos por cada unidad (ao) adicional de educacin, manteniendo todo lo

    dems constante.

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    ritmo de acumulacin hasta que se establezca una apropiada relacin entre oferta y demanda

    (Marx, 2004 [1867]).

    De manera terica, es posible pensar que las tasas salariales pueden variar al interior de

    ciertos lmites que garantizan el normal funcionamiento de la economa. De ser as, puede

    pensarse un lmite superior dado por la tasa de ganancia, y uno inferior influido por las

    condiciones materiales necesarias para la reproduccin del trabajador y su familia (Botwinick,

    1993; Marshall, 1979; Watson, 2002). En lo que se refiere a este ltimo, el cual no

    trabajaremos en profundidad, su valor de referencia puede vincularse con el mencionado salario

    de subsistencia. En palabras de Marx (1976),

    El valor de la fuerza de trabajo est formado por dos elementos, uno de los cuales es puramente fsico, mientras que el otro tiene un carcter histrico o social. Su lmite mnimo est determinado por el elemento fsico; es decir, que para poder mantenerse y reproducirse, para poder perpetuar su existencia fsica, la clase obrera tiene que obtener los artculos de primera necesidad absolutamente indispensables para vivir y multiplicarse. El valor de estos medios de sustento indispensables constituye, pues, el lmite mnimo del valor del trabajo (pg. 69) 5.

    En lo que se refiere al lmite superior, tal como se explicit anteriormente, el mismo se

    relaciona de manera directa con la tasa de ganancia. Esta tasa es un promedio de los

    resultados que deja la pulsin por adquirir una porcin de mercado y suplantar a sus

    competidores en el conjunto de la economa. A su vez, la utilizacin de diversos mtodos de

    produccin de diferentes edades en cualquier industria dada, establece un abanico de tasas de

    ganancias que se recrea permanentemente con la dinmica de la acumulacin de capital

    (Shaikh, 1980).

    Ante un incremento de salarios tal que lleve a la tasa de ganancia por debajo del nivel

    normal, su recomposicin se da en la esfera de la circulacin a travs del sistema de precios.

    Es decir, funciona como la variable independiente en un sistema de fijacin de precios y

    salarios (Marshall, 1979). Esto se deriva de la asimtrica distribucin del poder entre actores

    enfrentados, presente en las condiciones de produccin y distribucin de la economa

    capitalista.

    Una vez establecida la tasa de ganancia mnima aceptada, el lmite superior puede ser

    aproximado a partir del estudio del ritmo de crecimiento de la productividad del trabajo y los

    precios (Marshall, 1979).

    5 El terico de la dependencia Ruy Mauro Marini, seala que para lograr valorizarse de manera competitiva, los capitales

    insertos en los pases dependientes no buscan corregir el desequilibrio entre pecios internacionales y valor interno de

    las mercancas vendidas a travs de un esfuerzo por ganar productividad, sino que recurren a una mayor tasa de

    explotacin del trabajador (Marini, 2007). En este caso, podra inferirse que el lmite inferior se encuentra por debajo

    del valor contenido en una canasta de bienes que el trabajador requiere para vivir y reproducir su fuerza de trabajo.

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    La productividad entendida como un atributo del puesto de trabajo y determinada

    fundamentalmente por las condiciones productivas del establecimiento/firma, juega un papel

    central dentro de la competencia capitalista. Aquellos capitales que tengan los mtodos de

    produccin ms eficientes, tendrn una estructura de costos inferior, principal herramienta para

    el enfrentamiento con otros capitales (Shaikh, 1980). Un aumento de la productividad es al

    mismo tiempo una reduccin en el costo medio de produccin no explicado por cambios en los

    costos relativos de los factores de la produccin. A mayor productividad, mayor reduccin de

    costos y mayor posibilidad de incremento de los salarios, dados los precios en los productos

    vendidos tanto en el mercado interno como en el externo.

    De esta forma, segn la mirada propuesta en el trabajo, el desigual desarrollo del cambio

    tecnolgico, extensin de la jornada y/o intensidad productiva de la fuerza de trabajo, se

    encuentra en el centro de la explicacin de una estructura salarial desigual. Dinmicamente,

    sectores econmicos con un mayor crecimiento de la productividad media, desplazarn el lmite

    superior (logrando mayores beneficios), en caso de que el salario medio no llegue a acompaar

    ese ritmo de crecimiento. En el caso inverso, donde el ritmo medio de los salarios crece por

    encima de la productividad, la restriccin estar ms cerca de hacerse efectiva, lo que podra

    afectar las condiciones de acumulacin del capital sectorial.

    Luego, cun cerca o lejos de ese techo se fije el salario efectivo, depender

    fundamentalmente de la fortaleza que los colectivos de trabajadores tengan en la negociacin

    (Botwinick). Asimismo, entendemos que en este modelo no puede ser excluda la incidencia del

    Estado. La poltica pblica en general, y el marco de la regulacin estatal del salario en

    particular, pueden favorecer o menoscabar el accionar de los trabajadores.

    II.2. Del lmite terico a su aproximacin emprica: acerca de la variable de

    productividad.

    El lmite superior al incremento de salarios estar dado entonces por la productividad,

    esto es, por el incremento en el valor producido por los trabajadores. Tal como hemos sealado

    antes, las fuentes bsicas de crecimiento de la productividad son la incorporacin de tecnologa

    y las mejoras en la organizacin productiva. Intentar medir estas mejoras de la productividad

    conlleva diferentes problemas metodolgicos y conceptuales, que brevemente desarrollamos

    aqu.

    Una de las principales formas de incrementar el producto por trabajador es extender su

    jornada de trabajo. Si se analiza el producto por trabajador, este incremento en la cantidad de

    horas trabajadas redundar en aumentos de productividad. Diversos autores utilizan

    indicadores de productividad por trabajador (Beccaria & Yoguel, 1988; Graa & Kennedy,

    2008), mientras que otros, para aislar este factor, recurren a la productividad por hora

    trabajada (Coremberg, 2009; Marshall, 2009). En este trabajo se evala la productividad por

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    trabajador, pero considerando este aspecto, se analiza luego la evolucin de las horas

    trabajadas. Aun sin incrementar las horas trabajadas, el aumento de productividad puede

    conseguirse con un incremento en la intensidad del trabajo, eliminando tiempos muertos,

    comprometiendo un esfuerzo mayor por parte del trabajador, etc. Este factor solo puede ser

    captado en estudios que aborden procesos productivos especficos y concretos; en estudios de

    mayor alcance, aparecer entremezclado con las fuentes mencionadas antes.

    Ahora bien, tanto la tecnologa, como la organizacin productiva y la forma de utilizacin

    del trabajo tienen especificidades en funcin del tipo de producto y la intensidad en el uso de

    capital y de trabajo. En este sentido, si se compara la productividad en un momento del tiempo

    de dos establecimientos que producen bienes y realizan procesos dismiles, no es posible

    afirmar que uno ha incorporado ms tecnologa o ha introducido mejoras organizativas respecto

    al otro, pues parte de esa diferencia est explicada por la propia naturaleza del proceso

    productivo. Por ejemplo, un establecimiento dedicado a la refinacin de petrleo tendr siempre

    una mayor productividad que un establecimiento en el cual se confecciona vestimenta, aun

    cuando este haya incorporado la tecnologa de punta para el sector textil.

    Por ese motivo, la medida de productividad brinda buena informacin cuando se utiliza

    para comparar establecimientos de un mismo sector por ejemplo, la industria textil argentina

    en relacin a la misma industria en otros pases-, o cuando analizamos su variacin en el

    tiempo, es decir, en trminos relativos a las caractersticas propias de cada sector u actividad.

    No obstante, la comparacin de niveles de productividad entre sectores, aun cuando est

    contemplando aspectos distintos a las mejoras tecnolgicas y organizativas, es relevante para el

    anlisis de los lmites superiores, ya que justamente la intensidad en el uso del capital o el

    trabajo, y el tipo bien producido inciden en esos lmites.

    As, las medidas de productividad agregada ya sea de diferentes establecimientos de

    una misma rama de actividad o del total de ramas de actividad de la economa- combinan las

    caractersticas y las tendencias de unidades heterogneas. Por ende, un factor explicativo de su

    evolucin son los cambios en la composicin de esa rama o esa economa. En particular,

    resultan relevantes: i. el cambio en la composicin por tamao de establecimiento; ii. el cambio

    en la composicin sectorial. As, por ejemplo, diversos autores postulan que el incremento de

    productividad que se dio en Argentina durante la dcada del 90 es atribuible al cambio en el

    patrn industrial y al cierre de establecimientos pequeos y el consecuente aumento de la

    concentracin (Katz & Stumpo, 2001; Schvartzer, 1997).

    El crecimiento de la demanda de los bienes producidos puede motorizar incrementos de

    productividad. Sin embargo es preciso distinguir dos mecanismos: el primero es que, habiendo

    capacidad instalada ociosa, un incremento en la demanda motiva un aumento en la utilizacin,

    lo cual acrecienta la produccin a un ritmo mayor que la contratacin de nuevos trabajadores;

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    el segundo, consiste en ofrecer las condiciones de rentabilidad para que haya incorporacin de

    nuevas tecnologas.

    Coremberg (2009) ofrece una medicin de la productividad laboral en Argentina en el

    marco de su propuesta de estimacin de la contribucin de los distintos factores productivos al

    crecimiento. Si bien no compartimos el marco terico conceptual del autor6, nos interesa

    destacar algunas de sus advertencias respecto a la medicin de la productividad laboral.

    La primera advertencia refiere al numerador del indicador de productividad. Las distintas

    mediciones habitualmente utilizadas se basan en ndices de volumen fsico. Sin embargo, como

    estas mediciones no se realizan por producto especfico sino para un sector o para el total de la

    economa la necesidad de agregar bienes heterogneos implica recurrir a la moneda para su

    homogeneizacin. As, aunque la evolucin del indicador resultante no se vea afectada por los

    precios, la medicin inicial congela el efecto de los precios relativos de aquel momento para

    toda la serie (Coremberg, 2009: 16).

    La otra advertencia refiere al denominador, en particular cuando se utiliza la cantidad de

    ocupados. El autor seala que segn la fuente utilizada puede haber un subregistro de la mano

    de obra: si utilizamos registros de la seguridad social los trabajadores informales no aparecen

    (Coremberg, 2009: 78). Por su parte, en las Encuestas de Hogares solo se relevan datos de la

    ocupacin principal, invisibilizando las ocupaciones de quienes tienen ms de un empleo.

    Cuando analizamos sectores de actividad especficos, en particular la industria, cobra

    relevancia otra causa de subregistro. La proliferacin de formas de contratacin mediadas por

    empresas creadas a tal fin, ya sean agencias de empleo eventual o empresas subcontratadas,

    desdibuja las estadsticas de empleo sectorial, ya que trabajadores que desempean sus tareas

    en una cierta empresa industrial, son contratados por una empresa de servicios. As,

    dependiendo de la fuente de informacin y de la forma en la cual es declarado el empleo,

    puede ser considerado un ocupado de un sector u otro7 (Marshall, 1998).

    Ms all de la distancia entre aquello que se quiere medir y lo que efectivamente se

    mide, nos interesa aqu destacar la relacin entre la productividad y el empleo. Siendo este

    ltimo el denominador del indicador de productividad, la misma va a aumentar siempre que el

    6 Este desacuerdo refiere a la concepcin general sobre el funcionamiento del mercado de trabajo, que se plasma en su

    propuesta de diferenciar la calidad del trabajo a partir de atributos del trabajador -educacin, gnero, edad-

    (Coremberg, 2009: 76). Sin embargo, el mtodo de diferenciacin implcita de calidades de empleo que finalmente

    adopta, distinguiendo por sector de actividad, se aproxima ms a la idea de que la productividad es un atributo del

    puesto de empleo y no de la persona que lo ocupa.

    7 En el Censo Econmico se reconoce este problema, al sealar: Sin embargo, para facilitar la realizacin de estudios

    de productividad y evitar el sesgo que ocasionaran los cambios en la relacin laboral (entre asalariados, no asalariados,

    contratados y personal de agencia), en el CNE 2004/05 se relev informacin sobre la cantidad de personal de agencia

    y que cobra por factura. (Sntesis Metodolgica CNE 2004/2005, INDEC: 12).

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    producto crezca ms que el empleo. De all su carcter procclico: en contextos de crecimiento

    de la actividad, se aumenta la produccin sin incrementar el plantel inmediatamente; mientras

    que en contextos de recesin, se reduce la produccin antes de que se despidan o suspendan

    trabajadores8.

    As, un incremento de productividad no necesariamente es una buena noticia: puede

    deberse a un magro crecimiento del producto con nulo, o incluso negativo, crecimiento del

    empleo tal como ocurri en los ltimos aos de la dcada del 90-; y si no es compensada por

    aumentos equivalentes en el nivel de salarios traer consigo un empeoramiento de la

    distribucin funcional del empleo. Vale aclarar que en el perodo estudiado en este trabajo ha

    habido una expansin del empleo en todas las ramas, por lo cual, los incrementos de

    productividad no se deben a reducciones de los planteles.

    A partir de los datos provenientes del Censo Econmico y la Encuesta Industrial Mensual

    (EIM) de INDEC analizaremos la relacin entre la evolucin de la productividad y del salario en

    el perodo 2003-2012. Para analizar la evolucin de ambas variables es suficiente evaluar el

    ndice de salarios y de productividad de la EIM. Sin embargo, proceder de tal forma implicara

    predicar sobre los cambios en la brecha entre el lmite superior y el salario respecto a 2003. Ese

    ejercicio es vlido y es de inters para este trabajo, pero oculta aquella brecha inicial de 2003.

    Por ese motivo, incorporamos los niveles de ambas variables: pues es el nivel de productividad

    lo que acta como un lmite real. As, una tasa de variacin del salario por encima de la

    productividad no implica que el lmite superior haya sido superado, sino que la brecha se ha

    reducido respecto a 2003. Los niveles de productividad y salarios surgen del Censo Econmico,

    y las variaciones anuales de la EIM.

    Los Censos Econmicos se realizan en Argentina cada 10 aos y constituyen la fuente de

    informacin sobre la estructura productiva con mayor alcance geogrfico y de actividades. Los

    datos utilizados aqu corresponden al Censo Econmico 2004 que relev informacin referida al

    ao 2003. A partir de los datos recolectados en cada establecimiento, se dispone de datos de

    valor de la produccin, puestos ocupados asalariados y no asalariados-, y masa salarial. Con

    estas variables construimos los indicadores de productividad de cada sector de la industria

    manufacturera para el ao 2003. Para analizar la tendencia a lo largo del perodo 2003-2011,

    este primer dato fue actualizado a partir de informacin proveniente de la EIM.

    El relevamiento de la EIM abarca 3000 locales industriales de distinto tamao, que

    cuentan con ms de diez personas ocupadas9, dispersos en diferentes puntos del pas. En esta

    8 Las medidas tendientes a flexibilizar el uso de la fuerza de trabajo apuntan a alinear mejor la cantidad de trabajadores

    al ritmo de actividad, de manera tal de atenuar la cada de productividad que se espera al reducir el nivel de actividad.

    9 El Censo Econmico, en cambio, comprende unidades productivas de distinto tamao. Para compatibilizar los datos de

    ambas fuentes, solo se utiliz la informacin del censo correspondiente a los establecimientos de ms de 10 ocupados.

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    encuesta se considera como obrero al personal con categora no superior a la de supervisor y

    que est afectado al proceso productivo (elaboracin de bienes, control de calidad, acarreo

    dentro del local, tareas auxiliares a la produccin, mantenimiento de equipo de produccin,

    almacenaje y reparacin). El ndice de Salario por Obrero (ISO) expresa la evolucin del salario

    correspondiente a ese personal y comprende el salario bruto por todo concepto (horas

    normales y extras, vacaciones, licencias por enfermedad, premios y bonificaciones, excepto

    aguinaldo, indemnizaciones por despido y asignaciones familiares).

    III. El desenvolvimiento macroeconmico en la etapa actual

    La crisis econmica y social que tuvo su momento culmine en los aos 2001-2002,

    posibilit renovadas condiciones acumulacin de capital. La salida de la convertibilidad tuvo dos

    rasgos salientes: la pesificacin asimtrica post-devaluacin, que permiti la licuacin de las

    deudas de las grandes empresas y el saneamiento de sus balances; y una fuerte cada del costo

    laboral real llevndolo a niveles mnimos histricos. La devaluacin nominal de 2002, que

    finaliza ubicndose en torno al 400%, permiti la reduccin de los costos de produccin en

    dlares y permiti mejorar la competitividad tanto de los sectores exportadores como aquellos

    que compiten internamente con importaciones.

    Asimismo, creci la demanda internacional de los commodities que vende la Argentina,

    tanto por el aumento en las cantidades transadas como por el incremento de precios10. De esta

    forma, los sectores exportadores vinculados a la explotacin de bienes naturales se vieron

    favorecidos por trminos de intercambio muy favorables, lo cual redund en un avance de la

    frontera de produccin sojera y un incremento en el nmero de proyectos vinculados a la

    minera.

    En una economa integrada al mercado mundial con baja productividad relativa, un tipo

    de cambio alto supone la cada del precio relativo de los bienes no transables, en particular de

    uno de los principales precios de la economa: el salario, es decir bajos salarios y/o malas

    condiciones de trabajo (Fliz y Prez, 2007). En efecto, entre 2001 y 2002 el salario real tuvo la

    cada ms pronunciada del perodo. Debido a la brecha entre precios mayoristas y minoristas, la

    cada del costo laboral fue an ms pronunciada, permitiendo cierta recomposicin salarial sin

    afectar las ganancias de las empresas. El patrn distributivo de principios de la dcada intent

    consolidarse a travs de un pacto social, pero a partir de 2006, en un contexto de crecimiento

    de los precios al consumidor, los reclamos por recomposiciones salariales comenzaron a

    agudizarse.

    10 Esto se debe, por un lado al aumento de la demanda por el ingreso de China como gran comprador, y por otro, a la

    presin que la demanda especulativa de commodities ejerci sobre el precio de las mismas.

  • 11

    Durante esos aos el contexto institucional present numerosas modificaciones. Los

    primeros aos marcaron un rol activo del gobierno en la promocin de aumentos salariales en

    el sector privado mediante incrementos de suma fija no remunerativa, lo que fue

    complementado con aumentos incorporados a los salarios bsicos por decreto. Dada esta

    modalidad de regulacin,. hacia el ao 2005 el sector privado registrado haba logrado

    recomponer el salario real al nivel de 2001, aunque sin alcanzar el nivel medio de la dcada

    anterior.

    A partir del ao 2004 se modifica el marco legal de la negociacin colectiva al derogar la

    Ley de Reforma Laboral (N 25.250), sancionada en el 200011. Esto permiti reactivar la

    negociacin colectiva, y desde 2006 se consolidan las rondas de negociacin donde los grandes

    gremios acuerdan y actualizan las pautas salariales del convenio sectorial12 (Etchemendy,

    2011). Luego, las diferencias en el poder de negociacin de los distintos sindicatos y cmaras

    empresariales se tradujeron en aumentos dispares segn el sector (CENDA, 2009).

    Estas formas de intervencin, regulando los salarios bsicos o promoviendo paritarias,

    afectan directamente a los trabajadores registrados, pero no a los trabajadores no registrados.

    El mercado de trabajo ha heredado de los aos noventa y an mantiene, elevados niveles de

    empleo no registrado que implica que, hacia el cuarto trimestre de 2012, el 34,6% de los

    asalariados se encuentren es esta condicin. Una de las principales medidas que busca

    recomponer el salario de este grupo desfavorecido fue el aumento del salario mnimo vital y

    mvil, que pretende arrastrar indirectamente sus salarios. Sin embargo, a pesar del impulso del

    crecimiento econmico con un nuevo patrn de creacin de empleo13, los trabajadores

    informales recin en 2011 lograron recuperar su salario real a niveles ya bajos- del 2001. Por

    11 La misma flexibilizaba el empleo en varios sentidos, pero aqu rescatamos en particular sus implicancias sobre la

    negociacin. En primer lugar, obstrua la negociacin por actividad al exigir nuevos requisitos y establecer que, en caso

    de concurrencia de convenios de diferente mbito, sera aplicable el del mbito menor (aunque tuviera peores

    condiciones). En segundo lugar, habilitaba el descuelgue del convenio colectivo por acuerdo entre empleador y

    sindicato y derogaba la regla de ultraactividad de los convenios colectivos tanto para los vigentes como para los futuros

    (Recalde, 2011). La modificacin de 2004 refuerza los convenios sectoriales al incluir clusulas inmodificables por la

    negociacin de empresa, y restituye la ultraactividad de los convenios esta figura, abolida con la reforma laboral del

    2000, significa que un convenio es vlido hasta que se negocie un nuevo acuerdo, incluso aunque se haya vencido su

    perodo formal-.

    12 En efecto, la mayor intervencin estatal no se circunscribi solo a este mbito, sino que es uno de los rasgos

    caractersticos del nuevo modo de regulacin, interviniendo activamente en la formacin de precios (a travs de

    impuestos al comercio exterior, acuerdos de precios internos, fijacin de tarifas, etc.).

    13 Groisman (2011), seala que en el quinquenio 2004-2009 prevalece la creacin de puestos de trabajo asalariados

    registrados en la seguridad social. Entre puntas, este tipo de empleo creci un 44%, mientras que los puestos no

    registrados lo hicieron tan slo en un 7%. Adems se regularizacin de parte de las contrataciones del sector pblico,

    aunque parte de la cada del empleo no registrado en este sector se debe a la reduccin del peso de los planes de

    empleo, que al no tener descuento jubilatorio se computan como no registrados (CENDA, 2007b).

  • 12

    su parte, los trabajadores del sector pblico, cuyos gremios s cuentan con negociaciones

    salariales, en 2012 aun no recuperaban el nivel de salarios de 200114.

    Al observar la variacin trimestral desestacionalizada del producto, se pueden distinguir

    dos perodos: la etapa de los aos 2003-2007 de crecimiento sostenido a tasas chinas, y la

    que se abre a partir del ao 2008, con un desenvolvimiento del PIB ms moderado y la

    novedad de tasas de variacin negativas. As es que, para el primer perodo se observ una

    tasa de crecimiento trimestral promedio de 2.28%, mientras que en 2008-2012 esa misma tasa

    cae al 1,23%.

    Las diferencias mencionadas entre perodo y perodo tambin tienen su correlato en el

    mercado de trabajo. Entre los aos 2003 y 2007, se aprecian francas cadas en las tasas de

    desocupacin y subocupacin (mayores al 10% y 8%, respectivamente)15. Sin embargo, desde

    el 2008 en adelante, las series se estabilizan16 (Grfico 1).

    Grfico 1|| Crecimiento econmico -variacin trimestral y promedio del pbi- y tasa de

    desocupacin, subocupacin. Aos 2003-2012.

    0

    5

    10

    15

    20

    25

    -2

    -1

    0

    1

    2

    3

    4

    2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012

    tasa

    de

    varia

    cin

    pbi

    % d

    e la

    PEA

    Tasa var pbi tasa var media pbi

    Tasa de suboc (eje sec) Tasa de desoc (eje sec)

    Fuente: Elaboracin propia sobre la base de datos del INDEC.

    14 Tomando los ndices de salarios publicados por INDEC y el IPC-INDEC, el sector informal habra superado el nivel de

    2001 en marzo de 2008, y el sector pblico en agosto del mismo ao. Utilizando estimaciones alternativas para el ndice

    de precios en ninguno de los dos sectores se ha logrado superar ese nivel.

    15 En particular, en el perodo bajo anlisis, se observa una dinmica en espejo entre la tendencia de la tasa de

    variacin del PBI (construida a partir de una media mvil de dos perodos), y la tasa de desocupacin (Barrera, 2009).

    16 La varianza de las series de desocupacin y subocupacin en el segundo perodo fue de 0.4 y 0.7, mucho menores a

    las existentes en la etapa inicial (8.7 y 8.4, respectivamente).

  • 13

    En lo que a productividad se refiere, para dichas sub-etapas Marshall & Perelman (2013)

    sealan diferencias en elasticidad empleo-producto y en la fuente del crecimiento de la

    productividad entre estos dos subperodos. Entre 2004 y 2007 el pas experiment una alta

    elasticidad empleo-producto y el crecimiento de la productividad se consigui mediante la

    ampliacin de la escala de produccin utilizando capacidad instalada. En cambio, entre 2008 y

    2011 la elasticidad fue moderada y el crecimiento de la productividad habra sido motorizado

    por cambios tecnolgicos y organizacionales.

    En el segundo subperodo la desaceleracin de la actividad y de la absorcin de mano de

    obra fue ms pronunciada en el sector productor de bienes, que era el que ms haba crecido a

    inicios de la dcada. Es decir: los sectores que ms se recuperaron entre 2003-2007, fueron los

    que ms se desaceleraron en la segunda etapa (CENDA, 2009). As, desde 2008 el desempeo

    del empleo en el sector privado fue menos dinmico que el empleo total, pues decrece la

    incidencia del sector industrial como creador de empleo y crece la participacin del sector

    pblico17 -que de ese modo, tiene un rol contracclico conteniendo la cada del empleo-.

    La recuperacin del salario en el sector privado registrado fue ms pronunciada en el

    primer quinquenio. En efecto, durante ese perodo los conflictos laborales en el sector fueron

    escasos, mientras que s ocurran en el sector pblico, que no lograba una recuperacin del

    salario a niveles de 2001.

    La recuperacin de la cantidad de puestos en la industria acumulada a lo largo de la

    dcada no fue suficiente para retornar los niveles de mediados de la dcada del 90. En efecto,

    la participacin de la industria en el producto se recupera en la primera mitad de la dcada

    aunque aun as no vuelve al nivel de 1996-, mientras que la participacin en el empleo

    asalariado registrado es siempre decreciente excepto 2003-2004-.

    De aqu surgen dos consideraciones importantes. Por un lado, de la evolucin de la

    participacin industrial en el empleo se desprende que el sector terciario ha ganado peso en la

    estructura ocupacional. Por el otro, la conjuncin de ambas participaciones indica que el

    producto medio (producto/total de ocupados) de la industria ha crecido en relacin al resto de

    la economa.

    El grfico 2 muestra la participacin de los distintos sectores industriales en el empleo

    industrial registrado al inicio del perodo bajo anlisis y al final. Alimentos y Bebidas es el sector

    que presenta una porcin mayoritaria de los puestos de trabajo industriales y que ms puestos

    de trabajo ha generado durante la posconvertibilidad. Sin embargo, desde 2004 la tasa de

    17 Una importante porcin del aporte de la Administracin Pblica a la creacin de empleo registrado est vinculado, en

    realidad, con la registracin de personal previamente ocupado en el sector (CENDA, 2011). A pesar de los pases a

    planta se ha incrementado la participacin de contratos por locacin de servicios en la rbita del Estado. Otra parte del

    incremento se debe a la absorcin de empresas privatizadas en los 90 (CENDA, 2007).

  • 14

    variacin de empleo del sector ha sido menor al nivel general de la industria, por lo cual ha

    perdido algunos puntos en su participacin relativa. Los dems sectores tienen una

    participacin menor al 10%, evidenciando por un lado, la importancia del sector de Alimentos y

    Bebidas, y por otro, el bajo grado de concentracin sectorial del 70% del empleo restante.

    Grfico 2 || Participacin en el empleo registrado y el producto industrial. Ao 2003 y 2012.

    31,4% 28,5% 31,9% 33,5%

    5,7%5,4%

    8,8%8,4%

    12,8% 12,2%

    6,4%7,7%

    5,0% 7,1%5,6% 8,1%

    13,2% 9,1%

    32,8% 32,1%

    17,4% 17,1%

    0%

    10%

    20%

    30%

    40%

    50%

    60%

    70%

    80%

    90%

    100%

    2003 2012 2003 2012

    Alimentos Productos textiles Productos qumicos

    Productos de caucho y plstico Otros productos de metal Maquinaria y equipo

    Automotores Productos de petrleo Metales comunes

    Otros

    Empleo Industrial Producto Industrial

    Fuente: Elaboracin propia en base a MTySS

    En la siguiente seccin analizamos la evolucin de los salarios de los trabajadores

    asalariados registrados en la industria manufacturera, en relacin a la productividad. Hemos

    visto aqu que los trabajadores registrados del sector privado han tenido una evolucin mucho

    ms favorables que los salarios de otros conjuntos de trabajadores. Este aspecto debe ser

    considerado para matizar los resultados presentados en la prxima seccin, pues las

    conclusiones que puedan obtenerse no pueden extenderse a toda la estructura ocupacional.

    En particular, aqu analizaremos un conjunto de los trabajadores del sector privado:

    aquellos ocupados en la industria manufacturera; y la estructura productiva industrial. La

    evolucin de la desigualdad, tanto salarial como productiva, contemplando solo este sector,

    subestima seguramente la desigualdad general. Sin embargo, consideramos que este recorte es

    pertinente y nos aporta elementos importantes: ms all del peso del sector industrial en la

    estructura del empleo y del producto, es relevante conceptual y simblicamente.

    IV. La relacin entre productividad y salarios al interior de la industria

    En esta cuarta seccin analizaremos la evolucin de la productividad, que consideramos

    que expresa el lmite superior al crecimiento del salario. Nos interesa indagar entonces cmo ha

    evolucionado la relacin del salario con ese lmite, identificando si la brecha se ha agrandado o

  • 15

    achicado; as como tambin preguntarnos si esta evolucin se ha dado junto a un proceso de

    profundizacin de las heterogeneidades sectoriales o de homogeneizacin de las condiciones

    salariales. Con tales propsitos analizamos primero la relacin entre la evolucin de

    productividad y salarios en el perodo y luego evaluamos la desigualdad sectorial en cada una

    de estas variables.

    III.1. Evolucin de la productividad y los salarios sectoriales

    El propsito de este trabajo consiste en analizar el perodo 2003-2012. El punto de

    partida propuesto es un momento en el cual la brecha entre productividad y salario real se

    haba ampliado sustancialmente como consecuencia de la inflacin cambiaria de 2002-2003. En

    el grfico 3 se presentan los ndices de productividad y salario real de la industria

    manufacturera, y se puede apreciar como la fuerte cada del salario en 2002 amplia la brecha

    respecto a la productividad.

    Grfico N 3 || ndice de productividad y de salario real por obrero18 entre 1997-2012. Nivel

    general industria manufacturera

    60

    80

    100

    120

    140

    160

    180

    1997 1999 2001 2003 2005 2007 2009 2011

    ndice de productividad

    ndice de salario real por ocupado

    Fuente: Elaboracin propia en base a INDEC y CENDA

    Entre 2003 y 2012 la productividad en la industria aument un 54%, mientras que los

    salarios reales de los obreros industriales aumentaron en un porcentaje mayor: 89% -sin

    embargo, ese incremento no alcanz para mantener la misma relacin que en 1997-. Ahora

    bien, estos incrementos punta-a-punta se han concentrado en diferentes subperodos, que se

    corresponden con aquellos identificados en el apartado anterior.

    18 El ndice de salario real se calcula como cociente entre el ndice de salario por obrero y el ndice de precios de

    consumidor. Para este ltimo se utiliza el IPC-INDEC hasta 2006 y desde 2007 el IPC-7 provincias calculado y publicado

    por CENDA.

    + 54%

    + 89%

    + 54%

    + 89%

  • 16

    Entre 2003-2007 el crecimiento del salario real fue muy superior al de la productividad

    (56% y 15% respectivamente), en gran medida, debido a que la recomposicin de salario

    nominal que se da en el perodo no es contrarrestada con incrementos de precios. Durante el

    quinquenio siguiente (2008-2012), en cambio, los salarios reales crecieron un 23% mientras

    que la productividad aument en un 28%. Si bien ya en 2008 haba una dinmica negocial

    intensa, los incrementos de salario nominal fueron siendo erosionados por la inflacin. A su vez,

    la produccin continu creciendo y disminuy la incorporacin de nuevos trabajadores1920.

    Esta dinmica a nivel agregado surge de comportamientos heterogneos de los distintos

    sectores industriales21. En el cuadro N 1 se clasifica los sectores industriales segn su nivel de

    salarios y productividad en 2003. Aquellos con altos (bajos) salarios, son aquellos cuyo nivel de

    salarios est por encima (por debajo) del salario medio industrial; aquellos con alta (baja)

    productividad tienen un nivel de productividad mayor (menor) a la media industrial.

    Cuadro N 1 || Nivel de productividad y salarios en 2003.

    Altos salarios Bajos salarios

    Alta productividad

    Productos de tabaco. Papel y productos de papel. Fabricacin de coque. Sustancias y productos qumicos. Metales comunes. Aparatos de radio y televisin. Vehculos automotores.

    (23,2%)

    Alimentos y bebidas. (30%)

    Baja productividad Edicin e impresin.

    (4,3%)

    Productos textiles. Confeccin de prendas de vestir. Curtido y terminacin de cueros. Produccin de madera. Productos de caucho y plstico. Productos minerales no metlicos. Metal excepto maquinaria. Maquinaria y equipo ncp. Maquinaria y aparatos elctricos. Instrumentos mdicos y de precisin. Equipos de transporte ncp. Muebles y colchones y otras industrias.

    (42,3%)

    Nota: El porcentaje indicado en negrita entre parntesis indica la participacin de los sectores de cada celda en el empleo total industrial.

    19 En 2009 y 2010, en efecto, cay el empleo industrial como producto de la crisis internacional.

    20 A nivel agregado y para ambos subperodos, la explicacin del aumento en la productividad est en que el aumento

    de la produccin es mayor que el aumento de la cantidad de ocupados. La intensidad horaria no tiene un rol relevante

    en esta dinmica; por ende, podemos concluir que el aumento de productividad no se debi a un aumento en extensin

    de la jornada sino en intensidad del trabajo (mejoras tecnolgicas, cambios organizativos, mejor utilizacin de la

    capacidad instalada, etc.).

    21 Se analizan los sectores industriales a dos dgitos segn CLANAE CNE04, que con esa desagregacin es equivalente al

    CAES-Mercosur utilizado en la EIM. Se excluyeron dos sectores, ya que debido a su baja participacin en el empleo no

    estaban disponibles todos los indicadores necesarios para este trabajo. Estos dos sectores son: Fabricacin de

    maquinarias de oficina, contabilidad e informtica y Reciclamiento.

  • 17

    Fuente: Elaboracin propia en base a CNE 04/05.

    Del cuadro se desprenden dos aspectos relevantes para este estudio. Por un lado, en

    general se corrobora que aquellos sectores que tienen una productividad por debajo (por

    arriba) de la media, son los que ofrecen salarios ms bajos (ms altos) que el salario medio.

    Por otro lado, que una de las excepciones es el sector ms relevante en trminos de

    participacin en el empleo y en el producto industrial: Alimentos y Bebidas.

    Al analizar la evolucin de la productividad y el salario por sector encontramos una nueva

    diferencia entre subperodos. Los grficos 4 y 5 muestran la variacin punta a punta de la

    productividad y el salario en 2003-2007 y 2008-2012 respectivamente. En el grfico 4 vemos

    que el incremento salarial por encima del incremento de productividad es comn a casi todos

    los sectores industriales. En cambio, en el siguiente subperodo (grfico 5) el nivel general ya

    comentado esconde comportamientos sectoriales ms heterogneos: en 10 sectores la

    productividad creci por encima del salario, y en otros 11 sucedi lo contrario.

    Grfico N 4 || Variacin de la productividad y del salario real por obrero por sector entre 2003-

    2007.

    19 Cueros

    20 Madera

    21Papel22 Edicion e Impresin

    23 Coque

    16 Productos de Tabaco

    17 Productos Textiles

    18 Confeccion de Prendas de Vestir

    24 Sustancias y Productos Quimicos

    25 Productos de Caucho y Plastico

    26 Productos Minerales No Metalicos

    27 Metales Comunes28 Metal 29 Maquinaria y Equipo

    31 Maquinaria y Aparatos Electricos NCP

    32 Equipos y Aparatos de radio, Tv y

    Comunicaciones33 Instrumentos Medicos

    y de Precisin

    34 Vehculos Automotores

    35 Equipo de Transporte NCP

    36 De Muebles y Colchones, otras ind

    15 Alimentos y Bebidas

    0%

    10%

    20%

    30%

    40%

    50%

    60%

    70%

    80%

    -20% -10% 0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80%

    Variacin de productividad

    Varia

    cin

    de

    s

    ala

    rios

    Fuente: Elaboracin propia en base a INDEC y CENDA

  • 18

    Grfico N 5 || Variacin de la productividad y del salario real por obrero por sector entre 2008-

    2012.

    20 Madera

    21Papel

    27 Metales Comunes

    28 Metal

    16 Productos de Tabaco

    17 Productos Textiles

    18 Confeccion de Prendas de Vestir

    24 Sustancias y Productos Quimicos

    25 Productos de Caucho y Plastico

    26 Productos Minerales No Metalicos

    31 Maquinaria y Aparatos Electricos

    NCP

    32 Equipos y Aparatos de radio, Television y

    Comunicaciones33 Instrumentos Medicos y de Precisin

    34 Vehculos Automotores

    36 De Muebles y Colchones, Ind.

    Manufactureras NCP

    15 Alimentos y Bebidas

    0%

    10%

    20%

    30%

    40%

    50%

    0% 10% 20% 30% 40% 50%

    Variacin de productividad

    Va

    riaci

    n de

    sa

    lario

    re

    al

    Fuente: Elaboracin propia en base a INDEC y CENDA

    En ambos perodos hay un acercamiento del salario al lmite superior determinado por la

    productividad. Sin embargo, este acercamiento es ms acentuado y generalizado en 2003-2007,

    mientras que en el quinquenio siguiente solo en algunos sectores el salario crece por encima de

    la productividad, acortando la brecha entre ambos. Por tanto, en el primer subperodo, la

    recuperacin del salario en forma generalizada sugiere que la reduccin de la brecha con la

    productividad no se explica por el accionar de cada colectivo de trabajadores, sino que

    responde a una conquista del conjunto de los trabajadores. Es relevante considerar aqu el rol

    que el Estado asume en esos aos, decretando los aumentos generalizados de suma fija al

    menos para los trabajadores registrados de la industria, cuyos salarios analizamos aqu-.

    En efecto, ambos subperodos muestran particularidades en lo referido al rol del Estado

    en la negociacin salarial. Mientras que en los primeros aos el Estado interviene motorizando

    incrementos salariales y la reapertura de la negociacin; en el segundo subperodo su rol

  • 19

    apunta a la alineacin de pautas salariales. En ambos casos, su forma de intervencin responde

    a una problemtica macroeconmica especfica: en los primeros aos de la posconvertibilidad,

    era necesario un aumento salarial generalizado que reactive el componente de consumo de la

    demanda agregada; en los ltimos aos, la aceleracin de la inflacin motiva la intervencin

    directa o indirecta- en la negociacin para moderar los aumentos y evitar el aceleramiento

    tambin de los incrementos salariales.

    III.2. Desigualdad salarial y productiva, parte de un mismo fenmeno?

    Tal como hemos sealado en el apartado terico, ms all de las diferencias que puedan

    aparecer al interior de los sectores econmicos, la dinmica productiva es un condicionante

    central de las posibilidades de incremento salarial. Asimismo, hemos observado que luego de la

    cada del costo salarial producto de la devaluacin, existe una primera etapa donde, de manera

    generalizada, los incrementos salariales aventajan a los de productividad, mientras que ese

    comportamiento no se replica en el segundo perodo donde el fenmeno se encuentra ms

    repartido.

    En la presente seccin presentamos evidencia, resumida en el ndice de Theil22, sobre la

    estructura y dinmica de las disparidades en productividad y salarios al interior de la industria.

    Esto nos permite conocer, tanto en una variable como en la otra, si los sectores que llevan un

    menor ritmo de crecimiento son los ms atrasados, lo que redundara en una cada de la

    disparidad. O, si por el contrario, son los ms aventajados, lo que reducira las brechas

    existentes.

    En lo que se refiere a la productividad, el comportamiento de las series muestra una

    tendencia decreciente. Es decir, el ndice que releva las disparidad en la productividad media

    sectorial entre los aos 2003 y 2012, indica que sta prcticamente se reduce a la mitad

    (grfico 5). Al mismo tiempo, al examinar el ndice de Theil fijo23, se pueden hacer dos

    comentarios adicionales. En primer lugar, al fijar las contribuciones sectoriales al producto

    industrial, se puede observar que la tendencia decreciente se encuentra explicada

    principalmente por la disparidad en la productividad. Es decir, a lo largo del perodo se produce

    un achicamiento de la brecha de uno de los sectores ms productivos: Fabricacin de coque,

    productos de la refinacin del petrleo -ver theil Ptvme (Prod fx) del grfico 5-. En segundo

    lugar, luego de fijar las productividades relativas (Ptv fix), se observa que los movimientos en la

    serie se encuentran emparentados con los cambios en las contribuciones al producto industrial.

    De esta manera, el incremento de la disparidad que se da durante los aos 2008 y 2009, donde

    22 Para conocer las ventajas y desventajas de este indicador de desigualdad, puede verse (Barrera, 2009).

    23 El ejercicio consiste en mantener fijo, a lo largo de toda la serie, la ponderacin inicial de cada sector. En un caso, lo

    que se refiere a la participacin del producto sectorial en el producto total (prod fix), y en otro, fijar la distribucin de

    productividades iniciales.

  • 20

    impacta la crisis internacional en nuestro pas, se explica por el incremento en la participacin

    relativa de Fabricacin de coque, productos de la refinacin del petrleo.

    Grfico 5 || Desigualdad en productividad entre Ramas industriales. ndice de Theil. Aos 2003

    a 2012.

    Fuente: Elaboracin propia en base a datos de CNE04 y EMI.

    En consecuencia, puede afirmarse que dada la magnitud que aporta a la desigualdad el

    sector Petrolero, los cambios en el ndice de Theil son un reflejo de los sucesos de aquel sector.

    Por ende, se vuelve necesario excluir el sector del anlisis para observar lo que sucede en el

    resto de la industria en el perodo. As, al reconsiderar la desigualdad, encontramos que lo que

    se adverta como una cada en la heterogeneidad estructural, no puede continuar afirmndose

    sino todo lo contrario. A partir de 2009 el crecimiento de la productividad y participacin de

    Alimentos y Bebida, sector que explica una tercera parte del producto industrial y que duplica

    la productividad media del total de las ramas, explica los incrementos globales de desigualdad.

    La desigualdad salarial exhibe varios fenmenos que debemos comentar por separado.

    Por un lado, se da una reduccin muy fuerte de la desigualdad entre 2003 y 2005. No obstante,

    a partir de aquel ao, ms all del incremento coyuntural por la crisis, los valores permanecen

    al nivel de 2005 (grfico 6). Por otro lado, al separar los efectos tal como realizamos para la

    productividad, se observa que la reduccin en la desigualdad se explica por el efecto ingreso: el

    ndice que posee la estructura de empleo fija (emp fix), sigue prcticamente la misma tendencia

    que el general.

    Grfico 6 || Desigualdad salarial entre Ramas industriales. ndice de Theil Aos 2003 a 2012.

  • 21

    Fuente: Elaboracin propia en base a datos de CNE04 y EMI.

    A su vez, al fijar la estructura de salarios, la serie de desigualdad se va incrementando a

    lo largo del perodo hasta llegar a su pico en 2009. Esto afecta el ndice general tanto en el

    incremento mencionado como en la reduccin 2009-2012.

    La dinmica salarial pareciera acompaar la mejora en los indicadores del mercado de

    trabajo: los salarios recuperan, en parte, el poder de consumo durante el primer subperodo,

    coincidente con los aos de cada en las tasas de desocupacin y subocupacin. Durante la

    segunda etapa, una vez que se ha reactivado la economia y las tasas mencionadas descienden

    por debajo de los dos dgitos, los movimientos en la serie slo responden a incrementos en la

    desigualdad, mientras que la mejora se detiene.

    V. Reflexiones finales

    Comenzamos este trabajo presentando enfoques contrapuestos sobre la determinacin

    del salario. El enfoque aqu adoptado asume que en este marco de relaciones sociales el salario

    se define entre dos lmites: un lmite superior, dado por la tasa de ganancia y un lmite inferior,

    bajo el cual ya no podra garantizarse la reproduccin de la vida. As, la desigualdad salarial

    estara explicada fundamentalmente por diferentes lmites superiores y diferentes relaciones de

    fuerza para acercarse o alejarse de ese lmite. En este trabajo nos hemos centrado en el primer

    aspecto, reconociendo no obstante la necesidad de avanzar en abordajes que permitan estudiar

    el segundo. En lugar de trabajar aqu con la tasa de ganancia, hemos utilizado como proxy el

    nivel de productividad.

    El perodo estudiado evidencia una fuerte recuperacin del empleo y la actividad respecto

    a la crisis previa; y un rol activo del Estado en materia de regulacin salarial tanto a travs de

  • 22

    incrementos por decreto, como reactivando la negociacin colectiva y canalizando a travs de

    vas institucionales la disputa distributiva-. En particular, los salarios del sector privado lograron

    recuperarse y superar los niveles de la crisis, no as los del sector pblico: all la desigualdad se

    ha ampliado. Sin embargo, cabe preguntarse qu ha ocurrido al interior del sector privado, en

    particular, en un sector paradigmtico como lo es la industria.

    A lo largo del perodo 2003-2011 el crecimiento de los salarios de los obreros industriales

    registrados fue superior al crecimiento de la productividad. Esto no implica haber erosionado la

    tasa de ganancia, sino simplemente que el salario efectivo ha ido reduciendo la brecha respecto

    al lmite superior que exista en 2003. Vimos que en aquel entonces, como consecuencia de la

    crisis de 2001-2002 la brecha entre productividad y salarios se haba ampliado sustancialmente.

    El anlisis del ndice theil de salarios permiti observar que la cada en la desigualdad salarial se

    concentr en la primera etapa. El motivo no fue un cambio en la composicin del empleo por

    sector, sino que efectivamente hubo una reduccin en la desigualdad entre los salarios medios

    de cada sector.

    A su vez, a lo largo del perodo hubo tambin reduccin en la desigualdad en

    productividad. Esto implicara que los lmites superiores que enfrentan los trabajadores de

    distintas ramas de actividad se han ido alineando. Sin embargo, este resultado ya no se

    mantiene si se excluye del anlisis el sector petrolero; por lo que solo podemos concluir que se

    han achicado las brechas de productividad con ese sector, pero no entre el resto de los sectores

    industriales.

    As, la reduccin en la desigualdad salarial no se dio junto a una reduccin de la

    desigualdad productiva. Inclusive, en el perodo 2008-2012, cuando la desigualdad salarial se

    estabiliza, la desigualdad productiva se incrementa. En este marco de anlisis eso implica que

    persisten brechas en los lmites superiores que enfrentan trabajadores ocupados en distintas

    ramas de la industria. Una posible explicacin, que esbozamos aqu solo a modo de hiptesis

    para explorar en futuros trabajos, es que el comportamiento de la desigualdad salarial est

    explicado fundamentalmente por la poltica de regulacin salarial del Estado. El perodo de

    fuerte reduccin coincide con los incrementos salariales de suma fija; mientras que en el

    segundo cobra relevancia la negociacin colectiva pero en un contexto de aceleracin de la

    inflacin. De este modo, la pauta de inflacin acta como una referencia que alinea los

    acuerdos salariales y puede estar explicando que no haya grandes cambios en la estructura de

    salarios relativos de la industria.

    La elaboracin de un marco de anlisis y los resultados obtenidos en este trabajo abren

    ms preguntas de las que responden. Por un lado, nos planteamos cun pertinente es la

    medida de productividad como aproximacin a ese lmite superior de los salarios, pero tambin

    qu implicara esto para sectores distintos a la industria manufacturera en los cuales la idea de

    productividad se hace ms difusa o es inapropiada. Por otro lado, es necesario incorporar a esta

  • 23

    mirada un anlisis de los factores que explican la distancia entre ese lmite superior fijado por la

    dinmica de acumulacin y el salario efectivo: la organizacin de los trabajadores, las

    respuestas empresariales y las formas de regulacin estatal.

    Ms all de estas preguntas y de los elementos que an quedan por desarrollar,

    consideramos que este marco de anlisis permite conciliar cierto determinismo del cual solemos

    pecar quienes consideramos que la estructura productiva y las condiciones de acumulacin

    tienen un rol central para comprender el nivel y las caractersticas del empleo con la certeza de

    que es posible disputar, aun en este marco de relaciones sociales, la forma en la que se

    distribuye el producto social.

    VI. Referencias Bibliogrficas

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