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1 Los Camélidos Sudamericanos Guanaco, Llama, Vicuña y Alpáca. Introducción: Son mamíferos herbívoros pertenecientes al Orden Artiodactyla, Familia Camelidae, bajo la denominación de Camélidos Sudamericanos se engloba a dos especies silvestres, la Vicuña y el Guanaco; y a dos domésti- cas, la Llama y la Alpaca. La crianza de alpacas y llamas constituye una actividad económica de gran importancia para un vasto sector de la población altoandina, principal- mente de Perú y Bolivia y, en menor grado de Argentina, Chile y Ecuador. Se estima que alrededor de 500 mil familias campesinas de la Región andina dependen directamente de la actividad con camélidos sudamerica- nos, además de otras que se benefician indirectamente de ella. Los principales productos que se derivan de los camélidos sudamericanos son: 1. La fibra, cuyas características singulares, principalmente en los casos de la Vicuña y la Alpaca, hacen que tengan en general una altísima cotización en el mercado internacional. 2. La carne, cuyo valor nutritivo es similar y en ciertos casos superior a otras carnes. 3. Las pieles y cueros, con múltiples usos industriales y artesanales. 4. El estiércol que se usa como fertilizante o como combustible. 5. Además la llama por su tamaño y fortaleza, se utiliza también como animal de carga y cumple un papel importante en el transporte en las áreas rurales carentes de vías de comunicación.

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Los Camélidos Sudamericanos

Guanaco, Llama, Vicuña y Alpáca.

Introducción:

Son mamíferos herbívoros pertenecientes al Orden Artiodactyla, Familia Camelidae, bajo la denominación de Camélidos Sudamericanos se engloba a dos especies silvestres, la Vicuña y el Guanaco; y a dos domésti-cas, la Llama y la Alpaca. La crianza de alpacas y llamas constituye una actividad económica de gran importancia para un vasto sector de la población altoandina, principal-mente de Perú y Bolivia y, en menor grado de Argentina, Chile y Ecuador. Se estima que alrededor de 500 mil familias campesinas de la Región andina dependen directamente de la actividad con camélidos sudamerica-nos, además de otras que se benefician indirectamente de ella. Los principales productos que se derivan de los camélidos sudamericanos son:

1. La fibra, cuyas características singulares, principalmente en los casos de la Vicuña y la Alpaca, hacen que tengan en general una altísima cotización en el mercado internacional.

2. La carne, cuyo valor nutritivo es similar y en ciertos casos superior a otras carnes.

3. Las pieles y cueros, con múltiples usos industriales y artesanales. 4. El estiércol que se usa como fertilizante o como combustible. 5. Además la llama por su tamaño y fortaleza, se utiliza también como

animal de carga y cumple un papel importante en el transporte en las áreas rurales carentes de vías de comunicación.

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En las zonas altas, donde la agricultura y ganadería común no son viables, la crianza de los camélidos constituye el único medio de subsisten-cia de las familias campesinas. Las especies silvestres Vicuña y Guanaco, que se consideran antece-sores de la alpaca y la llama, respectivamente, constituyen un valioso re-curso genético y económico que debe ser conservado y aprovechado sus-tentablemente. Con los programas nacionales de conservación y participa-ción campesina en los países de origen, puestos en marcha por los gobier-nos durante los últimos años se ha logrado impedir la depredación e incre-mentar su número.

HABITAT

El hábitat de los camélidos sudamericanos está constituido principal-mente por las formaciones ecológicas de Puna y Altos Andes que se distri-buyen desde el norte del Perú hasta el norte de Argentina, incluyendo las respectivas áreas altoandinas de Bolivia y Chile; teniendo como caracterís-ticas generales de ser más húmeda hacia el norte donde se continúa hacia el Páramo, y más seca hacia el sur. La altitud de las punas oscila entre los 3,800 y 4,500 msm. con una temperatura promedio de 6º C a 8º C y 400 y 700 mm. de precipitación. Actualmente también constituye hábitat de llamas, alpacas y vicuñas los Páramos del Ecuador. Para el caso del guanaco además de las forma-ciones anteriores puede considerarse como hábitat propia; zonas más bajas como la etapa desértica, el matorral, las lomas costeras y la formación cha-queña del Paraguay. En general, los camélidos pueden vivir desde el nivel del mar hasta más de 5,000 m. de altitud. La alpaca puede vivir alrededor de las zonas húmedas o bofedales; la vicuña en cambio prefiere las praderas altas y la llama habita en todos los niveles prefiriendo los lugares secos. La vegetación dominante en caso de las punas está conformada prin-cipalmente por gramíneas, alternadas con especies de porte reducido, compuestas y escasos bosques de los géneros Polylepis, Buddleia y Pu-ya.

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Anatomía, Fisiología y Hábitos

Todos los camélidos sudamericanos, presentan glándulas metatarsia-nas, labio leporino, organización social polígama, utilización de estercoleros, ausencia de significante dimorfismo sexual y ovulación inducida con una sola cría por parto y por año. Las cuatro especies tienen el mismo cariotipo, pudiendo cruzarze en-tre ellas y producir híbridos fértiles. Asímismo tienen una vida productiva de aproximadamente 14 años, quedando aptos para la reproducción a los 2 años. Poseen 3 estómagos, dos pares de almohadillas al término de la se-gunda falange, y la última falange se encuentra cubierta con uñas, cojinete, almohadilla plantar, no deteriorando el suelo con el pisoteo. El crecimiento de los incisivos es continuo, semejante al de los roedores y poseen glóbulos rojos elípticos, pequeños y anucleares. Son territoriales, especialmente la vicuña y el guanaco conformando grupos sociales tipificados como familias, tropillas de machos y solitarios; actúan en grupos, siendo gregarios. En situación de agresividad voltean las orejas hacia atrás y levantan la cara y la cola, especialmente los machos durante la época de celo; se re-vuelcan en tierra suelta, arena o ceniza y defecan en sitios preestablecidos que utilizan como señas de territorialidad entre familias.

Producción. Sus productos primarios son la fibra y carne y los secundarios: cuero piel y estiercol. La fibra de los camélidos se clasifica como fibra textil de origen ani-mal de naturaleza proteica, considerándose como fibras textiles especiales. Las caracteristicas físico-mecánicas de la fibra de los camélidos son influenciadas por factores de edad, sexo, altitud de zona de crianza, alimen-tación, genéticos, etc. Uno de los parámetros más importantes en la clasificación de la fibra para su posterior uso textil es la longitud, separándose las más largas para el peinado y las más cortas para el cardado. Las fibras más finas presentan ausencia de médula; lo cual le otorga una ventaja en el teñido. La fibra del camélido es sólida a los rayos del sol, lavado, uso y pro-cesos físico-químicos.

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La carne es rica en proteinas, conteniendo la de alpaca 21.274% y la de llama 24.821%, poca grasa y poco contenido de colesterol. Las cuatro especies de camélidos sudamericanos pueden cruzarse entre ellas produciendo híbrido fértiles, pero de características fenotípicas y genotípicas inconstantes entre generación y generación. El cruce natural más común es entre la llama macho y la alpaca hem-bra conocido como huarizo y menos frecuente entre la llama hembra y la alpaca macho conocido como misti. Un híbrido por monta natural o inseminación artificial es el paco vicu-ña, resultante del cruce de una alpaca hembra y una vicuña macho produ-ciendo un individuo con fibra casi de la finura de la vicuña pero de mayor rendimiento. Algunos autores opinan que son recomendables estos cruces por considerar que no se obtiene ninguna ventaja real. Teóricamente es posible el cruce entre cualesquiera de los camélidos sudamericanos y los camellos del viejo mundo que sería hecho por métodos artificiales.

Guanaco

El Guanaco es el camélido más grande de los camélidos silvestres; vive en un amplio rango de ambientes, desde el desierto caluroso hasta las zonas frías y húmedas y desde el nivel del mar hasta los 4.000 mts. de alti-tud. Tiene un delgado y lanudo pelaje relativamente corto, de color café claro con tonos negros en la cabeza. El área de alrededor de los labios es blan-cuzca, como así también las orejas, la parte inferior del cuerpo y la parte interna de las piernas. Se han descrito cuatro subespecies geofráficas: 1. Lama guanicoe guanicoe: ubicada en la Argentina y Chile al Sur de los 38º. 2. Lama guanicoe huanacus: restringido a Chile. 3. Lama guanicoe cacsilensis: que habita en los altos Andes de Perú y Bolivia desde los 8º30' y Noreste de Chile. 4. Lama guanicoe voglii: restringido en la vertiente oriental de los Andes de Argentina entre los 21º y los 32º de latitud sur.

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El guanaco también es un animal gregario conformado: Grupos Fami-liares polígamos, Tropillas de Machos, Machos Solitarios. Es pasteador y ramoneador con preferencia por lo primero, llegándose a alimentar en casos extremos de raíces y tallos subterráneos y tomar in-clusive agua de mar. Los grupos son sedentarios, en la medida en que la alimentación no escasee, de ser así, émigran.

Características de los guanacos Longitud 1.50 a 2.20 m. Alzada 1.20 a 1.50 m. Peso 120 a 150 kg. Finura de fibra 15 a 19 micras Largo de fibra 3 a 4.5 cm. Peso de vellón 0.40 kg. Población actual en el Perú 4,000

El rango de distribución del guanaco es extenso, presentándose en forma discontínua entre el norte del Perú y Tierra del Fuego (Arg.), desde el nivel del mar hasta los 4.600m de altitud. Por efecto de la cacería descon-trolada y el deterioro de sus hábitats naturales sufrió una retracción del 58% en Argentina, 75% en Chile y Perú, está reducido a su mínima expresión en Bolivia y Paraguay, mientras que en Ecuador se lo considera extinguido (Puig 1991). En la región Altoandina y Puneña las poblaciones son pequeñas, en-contrándose en muchos casos en una disminución progresiva de sus núme-ros. En la porción más austral de su distribución (región patagónica y Tierra del Fuego) se presentan las poblaciones más grandes (Puig 1991). En la actualidad la especie no se encuentra amenazada de extinción a nivel continental. Sin embargo, las últimas evaluaciones por región efectua-das por el GECS para las Listas Rojas de UICN, detectan una serie de po-blaciones que ha disminuido drásticamente su tamaño y corren riesgo de desaparecer. Algunas de ellas habitan terrenos muy degradados, que su-frieron un uso ganadero extensivo por más de cien años. La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amena-zadas de Flora y Fauna (CITES), considera al guanaco en su Apendice II, permitiéndose el comercio de sus productos bajo regulación planificada por la autoridad administrativa del recurso de cada país.

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La Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), a través de su GrupoEs-pecialista en Camélidos Sudamericanos (GECS), brinda una base interna-cional de apoyo científico-técnico a través de documentos, asesorando a los países en sus acciones de manejo del guanaco y sus habitats, y a CITES en su toma de decisiones. Grandes esfuerzos se realizan para reemplazar la cacería comercial de crías (chulengos), desaconsejada por quitar sustentación a la población dado que tiende a provocar fuertes disminuciones poblacionales y a defor-mar la pirámide de edades. Existen actualmente dos opciones para manejo sostenido del guananco: - La formación de un plantel de animales en semicautiverio a partir de crías capturadas a temprana edad. -El manejo de una población silvestre con esquila viva y suelta, y extracción de excedentes poblacionales. Los planteles en semicautiverio son más apropiados para sitios con buena disponibilidad económica y operativa, mientras que el aprovecha-miento en libertad ofrece mayores beneficios en ambientes con poblaciones abundantesen guanacos. Entre Parques Nacionales, Reservas Provinciales y Privadas, son 27 las áreas protegidas de Argentina habitadas por guanacos, y 8 las de Chile. Están localizadas en distintos ambientes, desde la Puna a tierra del Fuego, y de la Cordillera de los Andes a ambos Océanos en Patagonia. Al-gunas presentan abundancia de guanacos, mientras otras incluyen sólo marginalmente sitios habitados por guanacos. Entre las que mayor relevan-cia han tenido pueden mencionarse el Parque Torres del Paine (XII región, Chile) y la Reserva La Payunia (Mendoza, Argentina).

Mientras la simple eliminación de la cacería furtiva del guanaco puede en algunos casos ser suficiente para desencadenar un proceso de recupe-ración poblacional, hasta recuperarsu nivel óptimo, no es raro el caso de poblaciones diezmadas que habitan ambientes fuertemente deteriodados, donde la protección del hábitat juega un rol importante para la recuperación del guanaco. Las áreas de conservación que protegen la especie necesitan ser for-talecidas, dado que muchas de ellas no disponen de plan de manejo, in-fraestructura apropiada ni presupuesto específico. Hábitats importantes de-ntro del área de ocupación del presupuesto específico. Hábitats importantes dentro del área de ocupación del guanaco podrían perderse, al no estar re-presentados en los sistemas de áreas protegidas.

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Vicuña

La Vicuña constituye el camélido silvestre sudamericano más peque-ño, escaso y frágil; y probablemente es la forma ancestral de la alpaca, con especial adaptación a sitios de altura. Habita las regiones altas de los An-des entre los 3.000 y los 4.600 metros. Su rango de distribución actual se extiende aproximadamente desde los 1º 30' en los páramos del Ecuador hasta los 29º 00' de latitud sur en Argentina. Tienen largos y sedosos mechones de color blanco sucio que cuelgan del pecho y lo protegen del frío cuando se echa. El cuello lomo y los lados son de color café claro o canela ; el vientre y el interior de los muslos son de color blanco. La cabeza es pequeña con orejas y ojos prominentes. El cue-llo es largo y su cuerpo muy estilizado. Se han descrito dos subespecies: 1. Vicugna Vicugna Vicugna: de mayor tamaño y color más claro que la segunda subespecie caracterizándose por la presencia de un mechón pec-toral blanco y el color canela típico. 2. Vicugna vicugna mensalis: que se caracteriza por un marrón más claro, subiendo el color blanco ventral hasta la mitad de las costillas y carece del mechón pectoral. En cuanto a organización social sigue más o menos el mismo patrón que el del guanaco siendo más sedentario y territorial que éste. La época principal de parición es entre febrero y abril y la gestación dura poco más de 11 meses. En cuánto a la alimentación, la vicuña es casi exclusivamente pasto-readora, prefiriendo las zonas ricas en pasto con zonas de agua. Prefieren gramíneas cortas, herbáceas y algunas plantas suculentas; raramente co-men pastos duros; ocasionalmente ramonean la tola. La vicuña entre todos los camélidos tiene el privilegio de poseer la fibra de origen animal más fina del mundo.

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Características de las vicuñas Longitud 1.25 a 1.50 m. Alazada 0.75 a 1.00 m. Peso 33 a 55 kg. Finura de fibra 12 a 15 micras Largo de fibra 2 a 4 cm. Peso de vellón 0.20 kg. Población actual en el Perú 120,000

La distribución de la vicuña se restinge a las provincias biogeográficas Pu-neña, Prepuneña y Altoandina. Ambos camélidos silvestres presentan hoy una distribución en parches, provocada por la cacería descontrolada y el detrioro de sus hábitats naturales. Se ha fijado como límite tentativo entre las dos subespecies de vicuñas el paralelo 18º S. Aunque no se dispone de información acabada sobre distri-bución y abundancias a nivel subespecífico, se considera que todas las vi-cuñas del Perú, las del altiplano norte, centro y parte del altiplano sur de Bo-livia, y las de la región de Tarapacá en Chile pertenecen a la subespecie norteña. Por otro lado, todas las vicuñas de Argentina y las de las regiones de Antofagasta y Atacama en Chile son de la subespecie austral.

En la actualidad la especie no se encuentra amenazada de extinción a nivel continental. Sin embargo, las últimas evaluaciones por región efectuadas por el GECS para las Listas Rojas de UICN, detectan una serie de pobla-ciones que ha disminuido drásticamente su tamaño y corren riesgo de des-aparecer. Algunas de ellas habitan terrenos muy degradados, que sufrieron un uso ganadero extensivo por más de cien años. La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (CITES), considera al guanaco en su Apendice II, permi-tiéndose el comercio de sus productos bajo regulación planificada por la au-

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toridad administrativa del recurso de cada país. La Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), a través de su GrupoEspecia-lista en Camélidos Sudamericanos (GECS), brinda una base internacional de apoyo científico-técnico a través de documentos, asesorando a los paí-ses en sus acciones de manejo del guanaco y sus habitats, y a CITES en su toma de decisiones. Grandes esfuerzos se realizan para reemplazar la cacería comercial de crí-as (chulengos), desaconsejada por quitar sustentación a la población dado que tiende a provocar fuertes disminuciones poblacionales y a deformar la pirámide de edades. Existen actualmente dos opciones para manejo soste-nido del guananco: - La formación de un plantel de animales en semicautiverio a partir de crías capturadas a temprana edad. -El manejo de una población silvestre con esquila viva y suelta, y extracción de excedentes poblacionales. Los planteles en semicautiverio son más apropiados para sitios con buena disponibilidad económica y operativa, mientras que el aprovechamiento en libertad ofrece mayores beneficios en ambientes con poblaciones abundan-tesen guanacos. Entre Parques Nacionales, Reservas Provinciales y Privadas, son 27 las áreas protegidas de Argentina habitadas por guanacos, y 8 las de Chile. Es-tán localizadas en distintos ambientes, desde la Puna a tierra del Fuego, y de la Cordillera de los Andes a ambos Océanos en Patagonia. Algunas pre-sentan abundancia de guanacos, mientras otras incluyen sólo marginalmen-te sitios habitados por guanacos. Entre las que mayor relevancia han tenido pueden mencionarse el Parque Torres del Paine (XII región, Chile) y la Re-serva La Payunia (Mendoza, Argentina). Mientras la simple eliminación de la cacería furtiva del guanaco puede en algunos casos ser suficiente para desencadenar un proceso de recupera-ción poblacional, hasta recuperarsu nivel óptimo, no es raro el caso de po-blaciones diezmadas que habitan ambientes fuertemente deteriodados, donde la protección del hábitat juega un rol importante para la recuperación del guanaco. Las áreas de conservación que protegen la especie necesitan ser fortaleci-das, dado que muchas de ellas no disponen de plan de manejo, infraestruc-tura apropiada ni presupuesto específico. Hábitats importantes dentro del

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área de ocupación del presupuesto específico. Hábitats importantes dentro del área de ocupación del guanaco podrían perderse, al no estar represen-tados en los sistemas de áreas protegidas.

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Los Camélidos Domésticos

Es el mayor de los camélidos domésticos sudamericanos, asemejándose en casi todos los aspectos morfológicos al guanaco cacsilensis. Es el animal más dócil de todos los camélidos, también se caracteriza por ser rústica, mansa, ver-sátil, tímida y por reconocer fácilmente al dueño; su uso es preferentemente como animal de carga y tiene excelentes perpesctivas como animal carnicero por su alto rendimiento y peso. Su distribución geográfica se localiza desde la zona de Pasto en Colombia hasta el centro de Chile y norte de Argentina. Se han descrito dos subespecies: 1. Raza de pelambre corto o poco vellón llamada __"Ccara", "Q'ara" o "Pelada": caracteri-zada por el __poco desarrollo de fibra en el cuerpo, además de __ausencia de fibra en la cara, cue-llo y piernas. 2. Raza Lanuda también llamada "Ch'aku": es la menos __común de las dos Variedades, con vellón algo __semejante al de la alpaca, con fibras largas y finura __media. La llama es primordialmente pastoreadora y ramoneadora, desarrollándose en zonas con pastos rústicos. El color de su fibra es marrón (claro y oscuro) y mezclas, correspondiendo éstos a los llamados colores naturales. El vellón presenta hasta un 20% de cerdas largas y protuberantes fáciles de descerdar y el resto son fibras cortas y finas de 20 a 26 micras.

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* Longitud 1.50 a 2.00 m. * Alazada 1.10 a 1.50 m. * Peso 108 a 155 kg. * Finura de fibra 25-34 micras * Largo de fibra 6-15 cm. * Peso de vellón 1.7 kg., variable *Población actual en el Perú 1´150,000

La distribución de la vicuña se restinge a las provincias biogeográficas Puneña, Prepuneña y Al-toandina. Ambos camélidos silvestres presentan hoy una distribución en parches, provocada por la cacería descontrolada y el detrioro de sus hábitats naturales. Se ha fijado como límite tentativo entre las dos subespecies de vicuñas el paralelo 18º S. Aunque no se dispone de información acabada sobre distribución y abundancias a nivel subespecífico, se considera que todas las vicuñas del Perú, las del altiplano norte, centro y parte del altiplano sur de Bolivia, y las de la región de Tarapacá en Chile pertenecen a la subespecie norteña. Por otro lado, todas las vicuñas de Argentina y las de las regiones de Antofagasta y Atacama en Chile son de la subespecie austral.

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Es considerablemente más pequeña que la Llama, raramente es utilizada como animal de carga, siendo más bien criada para producción de fibra y carne, el uso de su fibra es el principal ingreso de la cría de alpaca y es un producto bien valorizado, no se utiliza como animal de carga. Su actual distribución geográfica se extiende desde Ecuador (reciente introducción) hasta el Lago Poopo en Bolivia, con un menor número de animales en el norte de Chile y Argentina. Se presentan dos razas: 1. La Huacaya: que se caracteriza por tener un vellón __parecido al del ovino Corredale, com-puesto por fibras __finas de unas 24 micras perpendiculares al cuerpo de __buena longitud y pre-sencia de ondulaciones; 2. La Suri: que se caracteriza por tener el vellón como el __del ovino de Lincoln con fibras mas finas que la __huacaya, agrupadas en mechas espiriladas o rizadas, __que crecen paralelas al cuer-po. Se alimenta, al igual que la vicuña, de plantas suculentas, pero a diferencia de ésta es mas afecto hacia las plantas herbáceas que a las gramíneas, sólo ramonean cuando hay extrema necesidad. El color de la fibra es variado, aunque más uniforme que el de la Llama, vá del blanco al negro, presentando tonalidades del marrón claro, oscuro, as¡ como el gris plata, todos ellos como colores naturales. La fibra de la alpaca presenta poca calidad afieltrante con un diámetro promedio de 22 a 24 micras, cuyo color blanco es la mejor cotizada en el mercado.

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* Longitud 1.20 a 1.50 m. * Alazada 1.00 a 1.20 m. * Peso 59 a 90 kg. * Finura de fibra 20-30 micras * Largo de fibra 7-23 cm. * Peso de vellón 1.6 kg., variable * Población actual en el Perú 3´000,000

Ciertas situaciones logran que volvamos a valorar el placer y la utilidad que genera investigar ...

La vicuña (Vicugna vicugna) es el camélido silvestre más pequeño que habita las zonas altoandinas y puneña de la Argentina, Bolivia, Chile y Perú, y cuyo pelaje está compuesto por la fibra de origen animal más fina del mundo: 12 micrones de diámetro en promedio. La coloración de las vicuñas es variable: existe una subes-pecie (Vicugna vicugna mensalis) que habita principalmente el Perú, en la cual el pelaje canela oscuro – clasificado en el comercio internacional de fibra como co-lor vicuña– se distribuye en el lomo y los flancos del animal, mientras que la vi-cuña que habita en la Argentina pertenece a la subespecie Vicugna vicugna y es

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mucho más clara, por lo que su fibra tiene menor valor comercial. Son animales territoriales, y su organización social se basa en grupos ‘ familiares’ y grupos de animales ‘ solteros’ , cuya distribución es muy variable (véase ‘ Paisaje con vicuña’ , Ciencia Hoy, 4; 46-55, 1989).

La vicuña, endé-mica de la región andina, formó parte de la cultura y economía local. El ‘ manejo’ anterior a la con-quista hispánica estaba basado en la técnica del chaku, o sea esquila y suelta posterior de los animales. Desgracia-damente, en este siglo la población de vicuñas disminuyó drásticamente debido a la caza indiscriminada. A partir de la década del 60 se implementó una legislación estricta y la creación de áreas para su protección. Estas medidas permitieron la recuperación de las poblaciones; tuvieron éxito, entre otras razones, porque fue-ron aceptadas y acatadas por las comunidades rurales locales.

Es dentro de este contexto que un grupo de pobladores de la Puna jujeña – una cooperativa de llameros en Cusi-cusi y la familia Maidana, de Cieneguillas (zona de reserva MAB, El hombre y la Biosfera, UNESCO)– detectaron ciertos proble-mas: las poblaciones de vicuñas comenzaron a extenderse, y los animales pasto-reaban en las zonas de crianza de llamas. Los llameros transmitieron sus inquie-tudes al ingeniero Hugo Lamas, quien los asesora en el manejo de los animales desde su cargo en el Instituto de Biología de la Altura (INBIAL), dependiente de la universidad nacional de Jujuy; él, a su vez, se comunicó con la autora de este tra-bajo para solicitar su colaboración.

Vicuñas con cría. Jujuy

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Puesto que era necesario estimar el número de >animales, su localización y su relación con los pobladores, se realizó este estudio procediendo a recorrer una amplia zona des-de Abrapampa – Jujuy– hasta el área de Vilama, lugar en que convergen las fronteras de Bolivia, Chile y la Argentina (véase la figura 1). Cuando se detectaba la presencia de vicuñas se fotografiaba el área, se registraban los datos de longitud, latitud, altitud y el número de animales. También se identificaba el tipo de grupo que formaban esas vicu-ñas – los animales ‘ solteros’ o los grupos familiares– , su estructura y actividad prin-cipal. Este trabajo no fue sencillo, ya que en la época en que se realizó el estudio –durante el mes de septiembre– los machos de los grupos familiares expulsaban las crí-as de aproximadamente ocho meses de edad, las cuales se incorporaban a las tropas de solteros.

Figura 1. Ubicación geográfica de Cieneguillas, Cusi Cusi y Vilama

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Esta primera recorrida nos permitió diferenciar dos agrupaciones de animales: una perteneciente al sistema puneño en la zona de Cieneguillas – en campos pertenecientes a la familia Maidana– y la otra al sistema altoandino de Vilama.

En algunos de los campos de Cieneguillas se han instalado alambrados para ove-jas, lo cual no constituye una barrera para las vicuñas, ya que los saltan con faci-lidad. Además, como los pobladores han sido respetuosos de las leyes proteccio-nistas de vicuñas, sus propiedades son un ejemplo de convivencia entre la explo-tación pecuaria de llamas y ovejas y la presencia majestuosa y silvestre de la vi-cuña.

Se censaron más de 450 vicuñas en los campos de los hermanos Maidana. La composición del grupo familiar promedio consistía en un macho, tres hembras y dos crías, mientras que el promedio de animales en los grupos de solteros fue de 17; este valor tenía una dispersión muy alta – tres como mínimo y 60 como máxi-mo– , lo cual es común en esta clase de agrupaciones.

Un dato im-portante fue que el por-centaje de pa-rición dentro de los grupos familiares era muy elevado – 68%– por lo que se pudo inferir que estas poblaciones de vicuñas no habían llegado a la capacidad de carga ambiental y que estaban aumentando, ya que no habían lle-gado a su máxima densidad. Se calculó una densidad de 0,06 vicuñas por hectá-

Grupo familiar de vicuñas de un tolar mixto.

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rea o, lo que es lo mismo, una vicuña cada 18 hectáreas. Es necesario destacar que en estos campos las vicuñas no estaban solas, sino que pastoreaban en compañía de llamas y, en algunos casos, también de ovejas.

En Cusi-cusi, Vilama, se censaron 616 animales que formaban grupos más nume-rosos que en la zona de Cieneguillas. Su comportamiento también era diferente. En algunos casos las vicuñas se mimetizaban con el entorno altoandino y mostra-ban mayor frecuencia de comportamiento de alerta; también reaccionaban rápi-damente, con distancias de fuga – o sea la distancia mínima a la cual se puede acercar un observador antes de que el animal emprenda la huida– mucho mayo-res, hábito común en aquellos animales sometidos a disturbios y/o furtivismo (véase ‘ La brava reserva de laguna Brava’ , Ciencia Hoy, 28:25-32, 1995).

Los propietarios de los campos en Cieneguillas se quejaban por un lado por la presencia de vicuñas en sus terrenos, y por el otro por la imposibilidad de explo-tarlas comercialmente. Los pequeños criaderos de vicuñas no serían para ellos una solución (véase el recuadro "Modelos de manejo de vicuñas"). Las quejas principales residían en que la presencia de las vicuñas no permitía el descanso de los campos en rotación, que estos animales eran portadores silvestres de sarna y que, además, atraían a los pumas. Los dueños de los campos explicaron que las vicuñas penetraban en sus territorios por ‘ presión ambiental’ , buscando pastu-ras, fuentes de agua y tranquilidad, y que una vez que estaban instaladas era im-posible expulsarlas.

Explicamos a los pobladores que no se habían detectado vicuñas sarnosas en sus campos y que, en realidad, son los animales domésticos – llamas y ovejas– quienes atraen a los pumas. También se aclararon los términos de los ‘ benefi-cios’ de la explotación de la fibra de vicuña. Veamos algunos datos: el precio de mercado para la fibra de vicuña en nuestro país es de aproximadamente 300 pe-sos por kilo; por cada esquila de vicuña se obtienen 200 gramos de fibra, pero los animales se pueden esquilar cada tres años, lo cual significa una ganancia de so-lo 20 pesos por año por vicuña. Además, la obtención de la fibra requiere de una

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metodología y mano de obra de alto costo, y a su vez el mercado es suntuario, y por lo tanto muy variable.

En Cusi-cusi nos reunimos con aproximadamente veinte miembros de la Coopera-tiva Agro Ganadera Cuenca del Río Grande de San Juan. Estos pobladores expu-sieron sus demandas y problemas con respecto a las vicuñas, al igual que los de Cieneguillas, pero además hacían referencia a un número de vicuñas mucho ma-yor que los animales censados por nosotros. También sostenían que las vicuñas comen día y noche, por lo que se les aclaró que esta visión no es correcta, ya que esta especie tiene hábitos exclusivamente diurnos.

La primera conclusión a la que se llegó después de las dos reuniones con los po-bladores es que se habían distorsionado algunos de los inconvenientes provoca-dos por las vicuñas, especialmente en lo concerniente al contagio de sarna, ya que en ninguno de los 1069 animales registrados se observaron signos de esta enfermedad.

Es común declarar pla-ga – o especie perjudi-cial– a aquellos anima-les que se quiere explo-tar comercialmente. Por ejemplo, se han dejado de usar recuas de mulas y burros para el trans-porte, por lo cual estos animales se han asilves-trado, multiplicado, y

habitan en toda la Puna. Un burro pastorea el equivalente de ocho vicuñas, pero los burros no fueron motivo de queja. Se deduce que es porque los burros no tie-nen valor económico...

Ovejas en Cieneguillas

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De todas maneras, es cierto que las vicuñas compiten con las llamas en el pasto-reo, por lo que es necesario generar estrategias que permitan a las vicuñas seguir recuperando sus poblaciones al mismo tiempo que deben contemplarse las nece-sidades de los habitantes. Es importante destacar que creemos haber logrado que los pobladores entendieran la importancia de tener en cuenta los conocimientos científicos existentes como base para encarar un proyecto de manejo de fauna sil-vestre. Posibles soluciones Se describen a continuación cuatro acciones que podrían solucionar la problemá-tica ambiental diagnosticada en esta campaña:

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1. Uso de las vi-cuñas silves-tres con esqui-la

En Cie-neguillas – a 3500m sobre el nivel del mar– , la existencia de campos alambrados haría posible la esquila de los animales, aunque sería necesario realizar pri-mero un plan de trabajo, un estudio detallado de la población a manejar, un análisis de las condiciones topográficas y de recursos que permitan eva-luar una ruta de fuga – los lugares por donde los animales escaparían frus-trando la posibilidad de capturarlos– , y un pequeño ensayo de esquila con seguimiento posterior para determinar sus consecuencias; no hay que olvi-dar, por supuesto, los trámites administrativos pertinentes. En Vilama, a 4600m sobre el nivel del mar, las condiciones ambientales más severas agregan un factor de riesgo importante a la mortalidad postesquila. Por otro lado, los animales censados estaban muy dispersos, lo cual implica un es-

Formación volcánica llegando a Cusi-cusi

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fuerzo adicional de captura que influirá negativamente en el resultado del cociente costo/beneficio de la fibra obtenida.

2. Criaderos privados

La cantidad de vicuñas detectadas en la zona estudiada haría inne-cesaria la instalación de criaderos. Recordemos que en el primer documen-to para la apertura del mercado norteamericano a la fibra de la vicuña se recomienda no comprar fibra de esta procedencia, ya que los criaderos no evitan el furtivismo ni garantizan la conservación de vicuñas silvestres. Es decir que la existencia de vicuñas dentro de un criadero alambrado no está relacionada con lo que sucede fuera de este; peor aún, los criaderos pue-den reducir los esfuerzos por mantener a las poblaciones silvestres, lo cual redundaría en la pérdida de la variabilidad genética y el consabido peligro que esto implica.

3. Subsidio al productor

Se propone esta idea porque existen pobladores que han demostrado un compromiso hacia la conservación de las vicuñas, y como consecuencia de esta actitud actualmente deben aceptar estos animales en sus campos de pastoreo. La tolerancia y el cuidado de las vicuñas deberían ser com-pensados.

En el caso que estamos presen-tando el pastoreo de vicuñas limita la pastura para las llamas, lo cual ocasiona un cier-to lucro cesante. Los pobladores locales determi-

Grupo de solteros de vicuñas en Vilama

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naron que el pastoreo de dos vicuñas es equivalente al de una llama, por lo tanto se decidió calcular la pérdida económica, medida en costo de fibra de llama – de la mejor calidad– que genera una vicuña. Suponiendo que toda la fibra de la llama sea homogénea y de la mejor calidad, cada llama rendi-ría un beneficio de cinco pesos por año, sin contar los costos de manuten-ción, sanidad, esquila, etcétera. Es decir que si dos vicuñas equivalen a una llama, el productor deja de ganar – con la evaluación más optimista– dos pesos y medio por año por tolerar una vicuña pastoreando con sus llamas, por lo cual debería recibir un subsidio de dos pesos y medio por vi-cuña por año. Una opción diferente de este subsidio, sería la disminución y/o exención de algún tipo de gravamen o impuesto a los pobladores que tienen vicuñas en sus campos.

4. Eco-turis-mo

5. El atractivo tu-rísti-co de la fau-na sil-vestre y de los paisajes prístinos aumenta en forma sostenida desde hace años, así como los destinos exóticos y aislados. El viaje desde Cieneguillas hasta Cusi-cusi es de una belleza escénica tal que muchos ecoturistas de-

Nicolás y Susana Maidana, poseedores de campos con vicuñas en Ciene-guillas, miembros de la cooperativa "Los pioneros", con la autora y el Ing. Lamas.

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searían disfrutar. Por el contrario, la zona altoandina de Vilama es suma-mente atractiva, pero está destinada a un subgrupo selecto de viajeros, debido a la altura y a la falta de infraestructura.

6. Cieneguillas, cercana a La Quiaca y de fácil acceso por la ruta 9, puede ser un potencial centro de ecoturismo. La posibilidad de estable-cer una reserva en la zona no debería descartarse.

La historia de las vicuñas ha tenido momentos críticos; se había llegado a la casi extinción de la especie (véase el recuadro ‘ Los camélidos extraandinos’ ). En este momento en que las poblaciones se recuperan, es necesario generar proyec-tos creativos que no pongan en juego nuevamente la supervivencia de las vicu-ñas. Recordemos que a veces el uso de la fauna silvestre puede ser económica-mente sustentable – o sea que no se comprometa su capacidad de renovarse– sin serlo ecológicamente. Es decir que el valor comercial de una especie no ase-gura su conservación, por lo que hay que tener en cuenta que cualquier explota-ción de fauna silvestre debe ser rigurosamente regulada a niveles comunales, na-cionales e internacionales. Por otro lado, el valor de mercado de la fauna puede aumentar la probabilidad de conservación si se la utiliza correctamente. Una sociedad es sustentable solamen-te si tanto la condición humana como la del ecosistema son satisfactorias; si una de ellas es afectada en forma negativa, la sociedad se convierte en no-sustentable. Este punto de la articulación sociedad-naturaleza es vital en el tema de los camélidos. El tema del uso sustentable de las vicuñas genera conflictos puesto que afecta in-tereses económicos importantes. Estos animales poseen un alto valor económico, biológico, cultural y místico. Estuvimos a punto de perder la batalla. Ahora las vi-cuñas están recuperadas; de nosotros depende no volver a equivocarnos. Agradecimientos La autora desea expresar su agradecimiento a los miembros de la Cooperativa ‘ Los Pioneros’ de Cieneguillas, y especialmente a la familia Maidana, quienes la invitaron y le posibilitaron traba-jar en sus campos. También agradece la hospitalidad y calidez de los miembros de la Cooperativa

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de la Cuenca del Río Grande de San Juan, así como la colaboración de Yanina Arzamendia en el trabajo de campo. Una mención especial merece el ingeniero Hugo Lamas, capaz de tender ‘ puentes’ entre la ciencia y la gente, y que sabe transformar el trabajo de campo en una tarea siempre agradable

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Bibiana Vilá: Doctora en Ciencias Biológicas de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (UBA), y realizó estudios posdoctorales en la Wildlife Conservation Research Unit, Zoology, Oxford. Profesora Asociada en la Universidad Na-cional de Luján e investigadora del CONICET.

VICUÑA (Vicugna vicugna)

Antonio Brack

1. Problemática: Perú posee el 85% de la población mundial de vicuñas, con 140 mil cabezas. Este camélido sudamericano vive hasta 20 años y está adaptado al clima de la puna, entre los 3,500 y 5,000 m. La vicuña posee una fibra tan fina y suave como la seda, cuyo valor llega a los $ 385 por kg, equivalentes a 2,000 kg de lana de ovino andino. En nuestra sierra hay casi 18 millo-nes de ha de pastos naturales aptos para el forraje, donde se podrían manejar hasta 1 millón de vicuñas para la producción de su cotizada fibra, así como su cuero y piel. ¡ Criar vicuñas es una magnífica opción para el desarrollo de los Andes !

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2. Acuerdos Internacionales: La exportación de vicuñas fértiles y de cualquier otro material de reproducción (óvulos, embriones congelados, semen congelado, etc.) está prohibido y regulado por el Convenio para la Conservación y Manejo de la Vicuña, firmado en 1979 entre Perú, Bo-livia, Chile, Argentina y Ecuador. 3. Manejo: Existe el peligro que salga subrepticiamente material reproductivo de vicuña y tal parece que algún país vecino ya lo ha obtenido, a través de vicuñas vivas y también de pacovicu-ñas. El pacovicuña es el cruce entre alpacas y vicuñas, es un híbrido que posee 50% de material genético de las dos especies antes mencionadas. Al cruzar pacovicuñas entre sí, en la primera ge-neración (F1) el 25% salen vicuñas puras, el 25% alpacas y el 50% pacovicuñas... al volver a cru-zar los híbridos, se repite la proporción. No es conveniente exportar pacovicuñas ya que otros paí-ses podrían obtener material genético de vicuña y convertirse en competidores, haciéndonos per-der el potencial económico que representa la fibra de vicuña para la economía altoandina. Los decisores políticos deben tomar acciones y no permitir de ninguna manera la exportación de material genético. 4. Propuesta: Impulsar la cría intensiva de vicuñas en módulos de 10 a 30 mil ha. 5. Sectores: Agricultura, Sector Privado y Comunidades. 6. Experiencias: En la sierra peruana, R.N. Pampa Galeras - Bárbara d'Achille. 7. Áreas Prioritarias: Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Arequipa, Puno, Cusco, Junín y Li-ma. 8. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades altoandinas dueñas de las tierras aptas. 9. Beneficios: Económico: US$ 14 millones anuales por producción de fibra, carne, piel y cuero. Ecológico: Recuperación de tierras degradadas y control del sobrepastoreo. Social: 5 mil empleos. 10. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el in-greso de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles. 11. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm. 12. Tiempo de Maduración: 5 años.

ALPACA (Lama pacos)

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Antonio Brack

Alpaca Suri

1. Problemática: Perú posee la mayor población mundial de alpacas, con cerca de 3 millones de ejemplares, y dos variedades domesticadas: Suri y Huacaya. La raza huacaya tiene fibra corta y rizada, y son la mayoría. La raza suri vive casi exclusivamente en Puno y su población está decli-nando, por lo que corremos el riesgo de perder su fina y sedosa fibra de hasta 40 cm de largo. Hoy en día, debido a la falta de manejo, predominan las alpacas blancas y muchas alpacas manchadas. La pérdida de la finura de la fibra de alpaca debe resolverse con un manejo adecuado, en vista que el precio está en estrecha relación con su calidad. 2. Manejo: Resulta urgente seleccionar alpacas en diferentes hatos, de acuerdo a sus colores, evi-tando el cruce con las manchadas o "moromoros", con el fin de mejorar la calidad de su fibra. Otra opción interesante para el manejo de la alpaca, es la cruza entre hembras de alpaca de fibra grue-sa con machos de vicuña, con el fin de obtener pacovicuñas de fibra muy fina. Pero para ello hay que tener en cuenta que estos híbridos, a pesar de ser fértiles, no son permanentes, y si se cruzan entre ellos retornan a alpaca y vicuña. 3 Propuesta: Impulsar la cría, selección y manejo de alpacas. 4. Sectores: Agricultura, Sector Privado y Comunidades. 5. Experiencias: En toda la sierra peruana. 6. Áreas Prioritarias: Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Arequipa, Puno, Cusco, Junín, Lima y otros departamentos. 7. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades altoandinas dueñas de las tierras aptas.

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8. Beneficios: Económico: Si se mejora la finura de la fibra y se aprovecha en forma integral esta especie (fibra, cuero y carne) y su transformación, sería una actividad de US$ 50 millones anuales. Ecológico: Por sus características ayudarían a controlar la desertificación de los Altos Andes; no erosionan los suelos por pisoteo en vista que cuentan con una almohadilla en la planta de sus patas y la uña o casco no toca el suelo. Social: Es una de las pocas oportunidades de mejorar las condi-ciones de pobreza de las comunidades altoandinas junto con el turismo, la minería y la acuicultura. 9. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el ingre-so de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles. Perú posee 18 millo-nes de hectáreas de pastos naturales o forraje para los camélidos. 10. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm. 11. Tiempo de Maduración: 5 años.

LLAMA (Lama glama)

Antonio Brack

1. Problemática: La llama es la forma doméstica del guanaco, y su domesticación se dio probla-mente en los Andes de Perú y Bolivia, y en la costa norte de Perú, miles de años atrás.

2. Población: La población peruana de llamas llega a cerca de 900,000 cabezas y a nivel mundial viven aprox 2.5 millones. En forma tradicional y natural sólo existen llamas en Perú, Bolivia, Chi-le y Argentina. En la época prehispánica fue introducida a Ecuador y Colombia, y a partir del siglo XIX a otros países. Actualmente, hay poblaciones de llama en USA, Canadá, Nueva Zelandia, Australia, Francia, Italia y otros países que han sabido valorarla. 3. Historia: La llama fue criada intensamente durante la época prehispánica como único animal de carga, ya que tiene la capacidad de transportar hasta 75 kg. Existían enormes piaras de llamas car-gueras para trasladar los productos y hasta hubo una raza especial, mucho más grande y fuerte, para esos fines... hoy, esa raza es muy rara. La carne de llama era consumida fresca y secada al sol, con fines de almacenamiento, en forma de charqui. Cuentan los cronistas que acompañaron a los conquistadores, que en los almacenes o colcas existían enormes reservas de charqui. La fibra de llama era utilizada para hacer telas, ponchos, tapices y otras indumentarias. Del cuero de llama

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se hacían sogas y lazos de gran resistencia. Sin embargo, su uso como animal de carga ha perdido vigencia con la introducción de los equinos y la amplia red de carreteras en la Sierra. Hoy en día, países de Europa y USA consideran a la llama como un animal muy ecológico, muy eficiente en cuanto a su consumo de agua y alimentos, resistente al clima y a las enfermedades, y lo han adop-tado como medio de transporte dentro de sus áreas protegidas. 4. Manejo: Se le puede cruzar con la alpaca y al híbrido se le conoce como huarizo o llapaca, que tiene la ventaja de producir fibras más finas que la llama y en mayor cantidad que la alpaca. Al cruce con la vicuña se le conoce como llamovicuña. De otro lado, Perú posee 18 millones de hec-táreas de pastos naturales altoandinos, que pueden servir como forraje para la llama y el resto de camélidos, quienes digieren los pastos con un 22 % más de eficiencia que los ovinos, eso significa que hay una mejor oportunidad de negocio criando camélidos. 5. Propuesta: Impulsar la crianza y manejo de llamas. 6. Sectores: Agricultura, Sector Privado y Comunidades. 7. Áreas Prioritarias: En toda la sierra peruana, Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Arequipa, Puno, Cusco, Junín, Lima y otros departamentos. 8. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades altoandinas dueñas de las tierras aptas. 9. Beneficios: Fibra: para la confección de telas, que reciben el nombre de bayeta, y que se usan para hacer costales, alforjas y otros utensilios de gran durabilidad, así como arneses para los caba-llos. También podría dar origen a una agroindustria moderna para la confección de alfombras y otros artículos. Cuero: tiene un excelente potencial para talabartería fina, y este aspecto debe ser estudiado y desarrollado. Carne: por vivir de pasturas naturales, podría tener un excelente poten-cial como carne "orgánica" de características especiales, por su bajo contenido de colesterol. 10. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el in-greso de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles. 11. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm. 12. Tiempo de Maduración: 5 años.

GUANACO (Lama guanicoe)

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Antonio Brack

1. Problemática: El guanaco es una especie silvestre y se le encuentra desde el norte del Perú (dpto. de La Libertad) hasta el Sur de Chile y Argentina, con una pequeña población en el Chaco de Bolivia. La población total a nivel mundial llega a más de 500,000 cabezas, con la mayor de ellas en Argentina.

2. Población: En el Perú, el guanaco es una ESPECIE EN PELIGRO DE EXTINCIÓN, con una pobla-ción que no supera los 5,000 ejemplares, por lo que urge crear estrategias para su protección y el aumento de su población. Posteriormente, podrá pensarse en su aprovechamiento.

3. Historia y Hábitat: En la época prehispánica la población de guanacos era mucho mayor, y aún hoy en día se encuentran ciudades que le hacen honor a su nombre, como Huánuco. El guanaco vive desde el nivel del mar hasta los 3,800 m, es un típico migrante que visita las vertientes occidentales andinas, durante el verano, cuando éstas, gracias a las lluvias, abundan en pastos; y también llega a las lomas costeras, entre junio y setiem-bre, cuando estas formaciones vegetales reverdecen debido a la acción de las neblinas. En la actualidad, las rutas de migración del guanaco se han cortado por las carreteras y los poblados, y ahora sólo acude a contados luga-res, como las lomas de Atiquipa y las de Cháparra.

4. Propuesta: Impulsar la protección del guanaco a través de reservas privadas o áreas protegidas.

5. Sectores: Agricultura, Sector Privado y Comunidades.

6. Áreas Prioritarias: En toda la sierra peruana y sería deseable reintroducirlo en la costa.

7. Garantías: El marco legal vigente que garantiza contratos entre el estado y las comunidades altoandinas dueñas de las tierras aptas.

8. Potencial: Fibra: tiene entre 18 a 24 micrones de diámetro, pero con abundantes cerdas, lo que implica un proceso de descerdado. Con la fibra fina es posible hacer telas finas. Cuero: ofrece un interesante potencial para el curtido y la elaboración de artículos de cuero, y tiene una alta resistencia a la tracción. Carne: es de tipo sil-vestre, con bajo contenido de grasas, lo que favorece la salud humana. Además, por ser silvestre, no recibe va-cunas, medicamentos u otros insumos veterinarios, y por ello su carne tiene excelentes posibilidades como "car-ne natural u orgánica", de buena aceptación en los mercados mundiales. Material Genético: es de interés para cruces con llama y obtener ciertas características especiales para la finura de su fibra.

9. Oportunidades: Acuerdo de Preferencias Arancelarias Andinas - ATPA, que permite el ingreso de fibras finas de camélidos a los mercados de USA, libres de aranceles.

10. Requisitos: Pertenecer a una comunidad organizada o poseer tierras arriba de los 3,800 msnm.

11. Tiempo de Maduración: 5 años.

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Técnicas de Inoculación de Microchip en: Guanacos (Lama guanicoe) y Vicuñas (Vicugna vicugna) Por Méd. Vet. Alhelí Gonzales Chaves y Lic. Marcelo Silva Croome (*) [email protected]

Resumen:

El objetivo es describir la inoculación de microchip en guanacos y vicuñas como mé-todo de fiscalización por organismos competentes. Se trabajó en establecimientos de Santa Cruz, Chubut y Río Negro (año 1999) donde se realizan técnicas de captura y cría de guanacos en semicautiverio y en Salta (año 2000), donde se desarrollan técnicas si-milares en vicuñas. Se utilizó el sistema TROVAN, subcutáneamente en zona escapular, registrándose en planillas.

Se inocularon 744 guanacos pertenecientes a 7 establecimientos de Río Negro, 1 de Santa Cruz y 1 de Chubut. El 80 % eran crías y juveniles, y el 20 % adultos. En Río Ne-gro fueron inoculados 570 animales (121 adultos y 449 juveniles). En Chubut, 128 ani-males (23 adultos y 105 juveniles) y en Santa Cruz 46 animales (todos juveniles). Res-pecto a las vicuñas, se implantaron 74 animales de un solo establecimiento, 74% adultos y 26 % crías - juveniles.

La inoculación de un total de 818 animales ocurrió sin alteraciones patológicas ni muertes o pérdidas de microchip a la verificación, concluyéndose que esta técnica es se-gura y confiable para la fiscalización y monitoreo de la cría de estos camélidos por parte de los organismos competentes en la materia.

Introducción

La técnica de identificación mediante la implantación de microchip, es novedosa aquí en la Argentina. Existen varios sistemas. Uno de ellos, el sistema TROVAN, se utiliza en el país hace menos de 10 años.

Al poder utilizarse la inoculación tanto en establecimientos ganaderos, piscifactorías, mascotas domésticas, así como en especies silvestres, prontamente se extendió a zooló-gicos y criaderos de fauna silvestre con el objeto de facilitar la identificación de animales para individualizar planteles reproductores y evitar consanguinidad, controlar los plante-les existentes en colecciones zoológicas a fin de supervisar su evolución en el tiempo, realizar un seguimiento individual para el manejo científico de poblaciones en cautividad

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y facilitar el seguimiento de los ejemplares en los intercambios entre instituciones u otros.

La técnica consiste en la introducción en forma intramuscular o subcutánea de un microchip, en zonas del cuerpo que varían según la especie animal, previa prepara-ción de la zona (depilado o desplumado y desinfección).Los microchips tipo TROVAN (uti-lizados en este trabajo), se caracterizan por tener un código alfanumérico de 10 dígitos, inalterable e irrepetible, que permite la posibilidad de 500 billones de combinaciones po-sibles. Su tamaño es de 2,2 mm x 12 mm, y se encuentra encapsulado en cristal biológi-co, el que no produce reacción tisular (rechazo) ni migración (si bien esto último, según la bibliografía consultada, depende del punto de inoculación).

Para su introducción se utiliza un inoculador especialmente construido para estos fi-nes. Este tipo de técnica, si se realiza correctamente, es incruenta, sin generar derra-mamiento de sangre ni dejar secuelas o producir alteraciones. Diferente bibliografía es-tablece que no producen cambios tisulares, ni trastornos físicos, ni efectos colaterales o alteraciones en la conducta en el animal. La lectura del mismo se realiza mediante un lector con funciones variables que van desde la simple lectura hasta acciones múltiples como lectura, búsqueda y grabación.

La capacidad de memoria en estos aparatos llega en algunos casos a 3160 lecturas. El sistema TROVAN ha sido adoptado a nivel internacional por C.B.S.G (Grupo de Espe-cialistas de Cría en Cautividad) para su uso en zoológicos; por la convención CITES (Convención Sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) para su uso en especies protegidas en todo el mundo y a nivel nacional, por la DFyFS (Dirección de Fauna y Flora Silvestres de la Secretaría de Desarrollo Sustenta-ble y Política Ambiental).

La falta de publicaciones en el país sobre esta técnica determina la carencia de meto-dologías stándard para la inoculación, tipos de microchip mas adecuados según especie animal o zonas corporales donde inocular. Como consecuencia, muchas veces se trabaja en base a experiencias personales que se transmiten oralmente o en base a la improvi-sación, sin tener en cuenta los inconvenientes que esto significa para los animales (heri-das, infecciones, muertes por estrés) y para los productores (pérdidas de microchip y animales).

El objetivo de este trabajo es describir el sistema de marcado mediante la implanta-ción de microchip en guanacos y vicuñas como posible método de fiscalización y monito-reo de la cría de estos camélidos silvestres por parte de los organismos competentes.

Materiales y métodos

Para la realización del presente estudio se trabajó con establecimientos de la Provin-cia de Santa Cruz, Chubut y Río Negro (año 1999), donde se están desarrollando técni-cas de captura, mantenimiento y cría de guanacos en estado de semicautiverio y en la provincia de Salta (año 2000), donde se desarrollan técnicas similares en vicuñas. Res-pecto a los guanacos, al momento de la captura, se escogen a los chulengos de pocos días de vida, con lo cual ésta se ve facilitada, aumentando el riesgo de traumatismos y muertes si la misma se llevara a cabo con ejemplares juveniles o adultos.

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Luego de varios meses de manejo en corrales de cría, los ejemplares son trasladados a potreros de grandes dimensiones (promedio 5.000 has). Esto no sucede en vicuñas, donde se utilizan potreros más chicos, tratando de mantener la estructura familiar. El período inicial de manejo permite un grado superlativo de amansamiento de los anima-les, con el posterior beneficio que esto implica cuando al procederse al traslado a los po-treros definitivos, se logra el arreo de los mismos con gran facilidad, minimizando los riesgos antes descriptos.

En el momento de proceder a realizar alguna ac-tividad con los ejemplares (vacunaciones, despara-sitaciones, diversos análisis, inoculación de chip, etc.) se procede a su encierro dentro de corrales con un sistema de mangas similares a los utilizados en ganado doméstico y por este medio se van cap-turando individualmente. Tanto en el manejo de guanacos como de vicuñas, la mayoría de las ve-ces, los productores tienen en cuenta la división en grupos según edades.

Las diferencias entre las metodologías de manejo de guanacos y vicuñas se deben principalmente a diferencias de tipo económico y social, pero en rasgos generales, es básicamente la misma. Para el marcado se utilizó el sistema TROVAN, de origen alemán, con su correspondiente inoculador y lector. Los animales fueron maneados y encapucha-dos (sólo los adultos), para evitar, en el primer caso, patadas, y en el segundo, morde-duras, escupidas y la posibilidad de observar una vía de escape, realizándose la inocula-ción subcutáneamente en la zona escapular derecha previo corte de pelo y desinfección con antisépticos.

Todos los guanacos y vicuñas, sin importar la edad, fueron inoculados en la misma zona. El lado escogido para realizar el implante, se debió exclusivamente a la practicidad para el operador, pero respetando en lo sucesivo dicha ubicación, con lo cual se facilita la lectura posterior. Luego de realizado el implante se procedió a topicar nuevamente con antiséptico y a utilizar el lector para comprobar el éxito de la operación, liberándose des-pués a los animales. La inoculación se registró en planillas donde constan lugar de inocu-lación, Nº de microchip, edad y sexo del animal.

Resultados y Discusión:

Se inocularon un total de 744 guanacos pertenecientes a 7 establecimientos de Río Negro, 1 establecimiento de Santa Cruz y 1 establecimiento de Chubut. El 80 % de los animales estuvo representado por crías, cuyas edades oscilaban entre los 3 y 8 meses, en tanto que el 20 % estaba representado por animales adultos (edades comprendidas entre 18 meses y 3 años).

En la provincia de Río Negro, fueron inoculados un total de 570 animales: 121 adultos y 449 juveniles. En la provincia de Chubut, se inocularon un total de 128 animales: 23 adultos y 105 juveniles; y en la provincia de Santa Cruz, se inocularon un total de 46 animales, todos ellos juveniles. Cuatro meses después en Río Negro, se verificaron el 50 % de los establecimientos. En ninguno se registraron muertes ni alteraciones (bicheras,

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infecciones, etc.) por la inoculación de microchip en los ejemplares de guanacos o pérdi-das de los mismos y las lecturas se realizaron sin inconvenientes.

Respecto a las vicuñas se implantaron microchip en la paleta derecha de un total de 74 animales. El 74% de los mismos era adulto (edades entre 18 meses y 14 años) y el resto (26%) eran juveniles, con edades comprendidas entre 6 días y 12 meses. Los ani-males pertenecían a 1 establecimiento de cría de la provincia de Salta. La inoculación de microchip en un total de 818 animales (guanacos y vicuñas) se realizó sin alteraciones patológicas ni muertes o pérdidas de microchip a la verificación, de lo que se puede con-cluir que esta técnica puede considerarse segura y confiable para la fiscalización y moni-toreo de la cría de estos camélidos por parte de los organismos competentes en la mate-ria.

Cabe destacar la facilidad de lectura así como la conveniencia de la zona elegida para la inoculación dada la baja incidencia de golpes o fracturas que pudieran afectar la inte-gridad del microchip e interferir en su futura lectura. @

Referencias:

• (*) De la Dirección de Fauna y Flora Silvestres, Secretaría de Desarrollo Sustenta-ble y Política Ambiental (Argentina).

• El resumen de este trabajo fue presentado en el "III Encuentro de Medicina de Pequeños Rumiantes del Cono Sur y I Congreso de Especialistas en Pequeños Ru-miantes y Camélidos Sudamericanos, del 26,27 y 28 de Octubre de 2000. Facul-tad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires, Argentina."

• Trabajo aceptado por la Asociación Mexicana de Técnicos Especialistas en Ovino-cultura, A. C., para exponer ante el Comité Científico del Segundo Congreso Lati-noamericano de Especialistas en Pequeños Rumiantes y Camélidos Sudamericanos y el XI Congreso Nacional de Ovinocultura, mediante nota del 11 de abril del 2001, cuyo texto reza lo siguiente: Estimados participantes. Me es grato informar-les que el Comité Científico del Segundo Congreso Latinoamericano de Especialis-tas en Pequeños Rumiantes y Camélidos Sudamericanos y el XI Congreso Nacional de Ovinocultura, a celebrarse del 22 al 25 de mayo de 2001 en la Ciudad de Méri-da, Yucatán, ha emitido un dictamen favorable, y su trabajo titulado: Técnicas de inoculación de microchip en guanacos (Lama guanicoe) y vicuñas (Vicugna vicug-na), ha sido ACEPTADO en la modalidad de PRESENTACIÓN ORAL. Para tal efecto, se dispondrá de 10 minutos para la exposición y 5 minutos para preguntas, pu-diendo utilizar proyector de diapositivas o cañón. Agradecemos su valiosa participación. Atentamente. Firmado: M en C María del Rosario Jiménez Badillo - Secretaria de AMTEO

Bibliografía:

• DIARIO OFICIAL DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS - N° 268, 14 de septiembre de 1992. Pág. 110.

• DIRECCIÓN DE FAUNA Y FLORA SILVESTRES, Secretaría de Desarrollo Sustenta-ble y Política Ambiental, Datos inéditos -1999 -2000.

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• ID SYSTEMS: The magazine of automated data collection- One leap ahead of ex-tinction-An RF/ID system tracks an endangered species at the site of Sidney's new Olympic Stadium by Mark Nichoson-June 1996 -Vol. 16, N° 6

• KLEINTIERPRAXIS- Año 37, (Año 1992) - pág. 51 -.54.

• OLD ENGLISH SHEEPDOG Club Argentino - Comunicado a sus Socios - Arq. Ga-briel Molinari

• PRIMERAS JORNADAS DE IDENTIFICACIÓN ELECTRÓNICA DE ANIMALES - Buenos Aires, 29 de mayo de 1996 - Buenos Aires, Argentina.

• REVISTA WEEKEND "Sistema de identificación computada - Manejo de Fauna". Behlert Olaf, Willms Nobert. Ejemplar Nº 47, Abril de 1993 - Buenos Aires, Argen-tina.

• Silva Croome, M; Carcacha, H; Labraña, M; González, A; Gonzales Chaves A; IDENTIFICACIÓN DE ANIMALES SILVESTRES MEDIANTE LA UTILIZACIÓN DE TRANSPONDERS - Comunicación oral. Primer Congreso de Ambiente y Calidad de Vida Catamarca 2000. 26, 27 y 28 de octubre del 2000. Organizado por la Facul-tad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad Nacional de Catamarca. Argenti-na.

• Silva Croome, M; Gonzales Chaves, A; IDENTIFICACIÓN DE GUANACOS (Lama guanicoe) y VICUÑAS (Vicugna vicugna), MEDIANTE LA UTILIZACIÓN DE "TRANS-PONDERS SUBCUTÁNEOS"- Asistente con presentación de trabajo. Res. Nº 776/00. III Encuentro de Medicina de Pequeños Rumiantes del Cono Sur y I Con-greso Argentino de Especialistas en Pequeños Rumiantes y Camélidos Sudameri-canos- 26,27 y 28 de octubre del 2000. Organizado por el Área de Pequeños Ru-miantes del Departamento de Producción Animal de la Facultad de Ciencias Vete-rinarias de la Universidad de Buenos Aires. Argentina.

La Vicuña

La vicuña es un camélido que puede medir de 80 a 90 cm., con un largo de 1.60 a 1.75 metros siendo de color marrón en la parte superior del lomo y los laterales; su pecho es blanco, su fibra o lana extraída esta considerada la más fina del mundo. Este camélido esta perfectamente adaptada a la puna, ecorregión de los Andes entre los 3.800 y 5.200 metros sobre el nivel del mar, el Perú es el país que posee el mayor número de estos animales (142.000 según censo del 2001), las vicuñas también habitan en Chile, Argentina y Bolivia.

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El kilo de su fibra se cotiza en 308 dólares en el mercado internacional por sus características de abrigo y finura, la cual puede resistir bajas temperaturas. De cada ejemplar se obtiene entre 200 y 300 gramos de lana. Su nombre científico es vicugna vicugna, pertenece a la clase de los mamíferos, orden artiodactyla y familia camelidae, es exclusivamente herbívora, y su dieta esta compuesta por la hierbas que pueden encontrar en pastizales y pajonales. Las hembras tienen una sola cría, que nace tras 11 meses de gestación, entre diciembre y abril, en especial en febrero, luego del nacimiento de la vicuña se desarrolla un periódo de lactancia que dura cerca de 6 meses. En este lapso las hembras pastan junto a sus crías, mientras el macho vigi-la. La vicuña es un animal silvestre, gregario y territorial en el que se distinguen 3 tipos de grupos: I: El grupo familiar constituido por un Macho "Jainacho", las hembras en promedio de 4 y las crías del año. El macho familiar defiende su territorio contra otros machos familiares y los ma-chos jóvenes. Las crías machos son expulsadas del grupo a los ocho meses de edad. II. Los machos jóvenes que no han llegado a edad reproductiva se agrupan en conjuntos que pueden llegar a los 200 individuos en zonas sobrepobladas formando tropillas errantes que mi-gran a trabes de amplias áreas, en conflicto permanente con los machos familiares III. Las vicuñas solitarias, por lo general, son machos familiares viejos despojados de sus territo-rios.

ECONOMIAS REGIONALES: EL NEGOCIO DE LA LANA FINA La vicuña acuña y no se apuna Crece el negocio de la vicuña argentina. La calidad textil de su fibra natural es de las más buscadas y mejor pagadas en el mundo. LILIANA COBELO.

LA MARCA EN EL ORILLO. De la Puna al mundo, con la marca Vicuña Argentina.

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La Puna también existe. Y tras un largo tiempo de soledad, viento y polvareda, su desarrollo integral ha dejado de ser la quimera de unos pocos. El eje del crecimiento es el agro, junto a las artesanías y el turismo. En la actividad pecuaria el mayor potencial está en el aprovechamiento de la fibra de vicuñas. Se viene trabajando desde hace tiempo en varios frentes: mejoramiento en la conducción de las tropas, sanidad y en la propia esquila. De esta manera, y a través de la asistencia técnica permanente de los criadores se ha ido logrando mejorar, y mucho, la calidad de la fibra. Tanto interés en la vicuña tiene sus motivos: el pelo de vicuña es uno de los más cotizados por su calidad textil. Es fino, suave al tacto y sedoso, las tres razones de su alto valor comercial. En la actualidad, el vellón se está pagando a 363 dólares el kilo, mientras que la fibra proveniente de garras y barrigas cotiza a 100 dólares. Cada animal produce un total de 350 gramos de fibra (200 de lana vellón y 150 de barriga y garras) y es esquilado bianualmente. En total, repartidos entre Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan y La Rioja existe una población silves-tre de casi 70.000 vicuñas, 1.850 ejemplares viven en semicautividad, y hay alrededor de 25 cria-deros. En la Puna de Salta-Jujuy la mayoría de las vicuñas está en un sistema INTA-Cambio Ru-ral, de trabajos cooperativos, con el criadero de INTA como proveedor de tecnología, de genética y de animales. En general, la cría está en manos de minifundistas. La Argentina no quiere quedarse atrás en este negocio. Más a partir de los indicios de reactiva-ción que está teniendo en países que están naturalmente dotados para su cría y son competidores de la Argentina (como Chile y Perú), y por el crecimiento que se observa en la demanda mundial de lana fina. Si tomamos sólo el caso de Chile, allí está aumentando rápidamente el número de animales en cría: 250 el año pasado y 1000 en éste. En el país trasandino hay fuertes capitales de-trás de la cría, 4 criaderos tienen 1000 animales, concentrados en la Primera Región, al norte del país. Abran cancha En 1964 el INTA de Abra Pampa se inició en la cría de la vicuña con 16 animales. Hoy ya son 1800 los ejemplares en producción. Con métodos de agarre, captura y esquila y un programa sani-tario, estos camélidos sudamericanos de 35 kilos, producen 350 gramos de una fibra con una finu-ra de 10 a 15 micrones -la lana más fina de oveja es de 19 micrones-, medulación de menos del 1%, rindes al lavado superiores al 85% y una formidable resistencia a la tracción -de 35 Newton por kilotex-. El sistema de producción organizado por el INTA está integrado por el Campo Experimental de Altura de Abra Pampa y 23 criaderos de Jujuy y Salta, pertenecientes a pequeños productores de origen coya. Cada minifundista que desee asociarse al sistema, por contrato, recibe de la firma Pelama Chubut los materiales de alambrado y corrales y del INTA 36 animales. Los productores devuelven a la firma el valor de los materiales en dos años, abonándolos con fibra, y reintegran al

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INTA 3 crías por año, durante 12 años, de forma de realimentar el sistema y permitir que otros "crianceros" se integren a la producción. Así, aseguran en el INTA, los productores, como mínimo, duplican su ingreso bruto. También se logra conservar la especie, dado que hasta la implementación de este sistema de semicautividad, las vicuñas eran cazadas para usar su fibra. Ultimo momento En tanto, en el marco de la XII Conferencia de las Partes CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres ) que finalizó ayer en Santiago de Chile, donde participan más de 160 países, se aprobó por unanimidad la propuesta presentada por la Argentina, sobre ¨Transferencia del Apéndice I al Apéndice II de la población de vicuña (Vicugna vicugna) de la Provincia de Catamarca". La idea es permitir el comercio internacional de fibra esquilada de vicuñas vivas, de telas y productos manufacturados derivados y de artesanías bajo la marca Vicuña Argentina. La propuesta argentina contempla tanto el uso sostenible de animales del medio silvestre en los departamentos de Belén, Tinogasta, Antofagasta de la Sierra y Santa María, como la captura de vicuñas para iniciar criaderos en semicautividad, con la tecnología existente ya desarrollada por el INTA. La propuesta en CITES fue apoyada inicialmente por los países vicuñeros (Chile y Pe-rú), luego por la Comunidad Económica Europea y después por el resto de las naciones. No hubo objeciones. Noviembre del 2002 Desarrollo socioeconómico de las comunidades rurales de los valles andinos del Departamen-to de Molinos (Salta, Argentina), a través de la recuperación, conservación y uso sostenible de los camélidos que habitan en ese ecosistema

Duración: Tres (3) años (Septiembre 2002 - Agosto 2005)

Entidades Participantes: Asociación de Artesanos y Productores de San Pedro Nolasco de los Molinos (ASAPRO-SPN) - Departamento de Molinos, Provincia de Salta, Argentina; Consejo de Investigación, Proyecto N º 945: "Molinos, en la conquista del desarrollo social sustentable" - Universidad Nacional de Salta - Provincia de Salta, Argentina; Convenio de Cooperación y Asistencia Científico-Técnica entre el Grupo Ecología y Manejo de Vertebrados Silvestres (IADIZA, CONICET) y Universidad Nacional de Salta a través de Proyecto Nº 495; y Fundación Bio-diversidad - Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina.

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Antecedentes

Los camélidos sudamericanos

La cría de camélidos representa un caso ejemplar de relación armónica entre las comunidades ru-rales y un recurso endémico de alto valor, generando beneficios que contribuyen a mejorar la si-tuación socioeconómica de las comunidades rurales de la Puna, preservando sus tradiciones y co-nocimientos, y contribuyendo a la conservación del ecosistema.

Entre las características más relevantes relativas al alto valor del manejo sustentable de camélidos en su hábitat natural, podemos destacar que:

• Son especies que habitan un ecosistema de particular fragilidad;

• Es un recurso de alto valor desde el punto de vista económico y de mercado;

• La sabiduría instalada, base fundamental para el manejo de estas especies, se encuentra en manos de una de las comunidades rurales de menores recursos económicos del país; y

• Existen posibilidades de manejo sustentable y aprovechamiento de fibra de las poblaciones de camélidos silvestres, cumpliendo los requisitos establecidos por los organismos interna-cionales.

En 1997, durante la décima reunión de la Conferencia de las Partes en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES PNUMA), que se llevó a cabo en Harare, Zimbabwe, se adopta en forma unánime la transferencia al Apéndi-ce II de la CITES de la población de vicuñas de la Provincia de Jujuy en Argentina, así como de las poblaciones en semi-cautividad que se encontraban en diferentes provincias del área de distri-bución de la especie, lo que incluía la experiencia salteña de Molinos. De esta manera, la Asocia-ción Artesanos y Productores de San Pedro Nolasco de los Molinos contribuye directamente a la recuperación, conservación y manejo de una especie vulnerable, y se beneficia con la fibra de vi-cuña esquilada en vivo para producir una artesanía de alta calidad, acorde con el nivel artístico de los artesanos que la conforman. Hasta épocas recientes el mercado de fibras de camélidos se basó fundamentalmente en los costos y cantidades de producción, sin importar la sustentabilidad del manejo de la especie, ni la situa-ción socioeconómica de los productores y artesanos. Actualmente, el mercado se pregunta además ¿quién produce y cómo lo realiza? En el país, las respuestas a estas preguntas se dan con superfi-cialidad, siendo algunos operadores políticos o comerciales utilizadores de camélidos y sus pro-ductos los que responden con un discurso teórico de alternativa ecológica, de respeto al hábitat, al bienestar humano y de preservación de la cultura de las comunidades rurales que manejan ese re-curso. Pero en la práctica, poco o nada se hace por mejorar la situación de los camélidos, de las comunidades andinas y de la biodiversidad. Existen cuatro especies de camélidos sudamericanos: la llama (Lama glama) y la alpaca (Lama pacos), ambas domésticas; y las silvestres guanaco (Lama guanicoe) y vicuña (Vicugna vicugna). La población total de camélidos americanos se estima en unos 7,5 millones de cabezas, de las cua-les 51 % se encuentra en el Perú, 37 % en Bolivia, 10 % en Argentina y 2 % en Chile. Los camélidos son originarios de América del Sur (Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú). Aproximadamente unas 65.000 familias criollas e indígenas (aymarás, quechuas, chipayas y uruit-

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hus) dependen para sus ingresos y seguridad alimentaria, de la cría y pastoreo de camélidos tales como las alpacas y las llamas. Esas comunidades rurales están política, social y económicamente marginadas y, en consecuencia, carecen de capacidad para atraer inversiones. Una de las pocas opciones que poseen para superar esa marginación es la de agruparse en asociaciones que las vin-culen con otros eslabones de la cadena de elaboración, transformación y comercialización de sus productos. Contexto Las condiciones de vida de esas comunidades rurales dedicadas a la cría de camélidos en el Alti-plano y Valles Andinos, donde se concentran las actividades de cría de alpacas y llamas, se carac-terizan por sus críticos niveles de pobreza y falta de suministro de servicios básicos. El índice compuesto de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), aplicado por la República Ar-gentina, enfatiza cuatro elementos esenciales de la vida humana con los cuales se identifica como pobre a aquella parte de la población: que reside en hogares que no satisfacen niveles mínimos referidos a condiciones de habitabilidad de las viviendas, a las condiciones sanitarias y a la asis-tencia escolar. En "Pobreza Rural - Diversidad de Situaciones Operacionales"- trabajo realizado por Miguel Murmis de la Dirección de Desarrollo Agropecuario de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación 2001 (Argentina) - se discrimina este índice en Rural y Urbano aunque debe tenerse en cuenta que la vida rural andina posee una serie de particularidades que no se consideran dentro de los índices. Para el Departamento de Molinos, Provincia de Salta - Argentina, esté índice no escapa al encon-trado en el resto de la región Andina. Si tomamos en cuenta que la población total de Molinos es de 5.025 habitantes, 3.624 de ellos se encuentran dentro de la población rural que posee Necesida-des Básicas Insatisfechas, o sea el 71,40% de la población. En la clasificación por orden de pobre-za del país, se ubican en 8º lugar sobre un total de 522 posiciones, en el nivel que agrupa a las po-blaciones de condiciones más críticas de satisfacción de cada una de las necesidades contempladas por este índice. La esperanza de vida es baja. En la Puna, como no existe la alternativa de obtener un ingreso extra predial en la zona se debe recurrir a la migración, o a la minería. En la región puneña se presentan serios problemas de mi-gración de la población económicamente activa, especialmente los jóvenes mayores de 18 años. La tasa de migración supera el 50 %. Se caracteriza por ser temporal y ocurre en función de las características estacionales y económicas de determinados productos. La parcela queda entonces en mano de la mujer, los hijos u otro familiar. A diferencia de lo anterior, en Molinos, el 80 % de los que migran lo hacen de manera definitiva siendo sus destinos más comunes los sectores gas-tronómicos y de la construcción de la ciudad de Buenos Aires. Debido a esto, en el sector agropecuario alto-andino, es fundamental el papel de la mujer tanto en las actividades hogareñas como en las actividades productivas. Además, resultan importantes las tareas que ejecutan niños, quienes desde muy pequeños aprenden el oficio de pastores, y ancianos quienes participan en el proceso a través de la transmisión de sus conocimientos ancestrales. La mayor parte de la población lleva a cabo actividades pecuarias ante la imposibilidad de desarrollar actividades agrícolas que generen recursos económicos significativos, y esto se debe a las extre-mas condiciones climáticas que caracterizan la región. Desde la época colonial, los únicos límites para la expansión de la cría de ganado foráneo o exóti-co fueron la calidad de las tierras de pastoreo y los problemas asociados a la altitud. Hoy esa acti-vidad ha producido una alta degradación del hábitat, en consecuencia de la biodiversidad. Debido a esto, los rebaños de llamas son relegados a las tierras localizadas por encima de los límites de la producción agrícola, las cuales son de valor marginal para la cría de ganado foráneo (bovino, ovi-no y caprino).

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Guanacos, vicuñas y llamas han sobrevivido dentro del marco de organización socioeconómica actual porque son elementos esenciales de la cultura andina. Desde épocas pre-hispánicas se con-sideraba que los rebaños silvestres eran de propiedad divina, y los seres humanos podían aprove-char sus beneficios dadas ciertas condiciones de manejo otorgadas por los dioses, mientras que los rebaños de llamas eran de propiedad comunitaria y considerados una fuente básica de riqueza de los Andes. Aún en la actualidad se practican ritos para asegurar el incremento y bienestar de los rebaños. Por lo mencionado en párrafos anteriores es preciso promover la recuperación de los sistemas tra-dicionales de producción, basada en la cría de camélidos, para asegurar una mejor distribución de los beneficios. Es necesario disminuir la pobreza rural descubriendo horizontalmente, con la parti-cipación activa de los pobres, vías de desarrollo ocultas en el propio mundo, que constituyen una fuente dinámica preñada de potencialidades productivas, que se deben posibilitar, respetar y guiar, para que éstas cumplan su sentido esencial: la vida. La vida es como una sinfonía existencial, por-que las partes (partitura, instrumentos y ejecutores), actúan en función del todo. Así, vivir es reali-zarse con sentido y dar sentido, es armonizar el desarrollo sustentable, con el desarrollo humano sustentable. Esta armonización se logra estimulando la integración vertical y horizontal de los procesos agro-industriales a través de la implementación de tecnologías apropiadas que atiendan a las peculiari-dades de la diversidad biológica regional y de las formas heterogéneas de constitución de las uni-dades productivas localizadas en la Puna y en los Valles Alto Andinos. Otras acciones a largo pla-zo (relevamiento a través de censos, diseño y puesta a punto de un programa de manejo regional, establecimiento de una estructura eficiente de ejecución y monitoreo del programa) servirán para la incorporación de las poblaciones de camélidos silvestres en el sistema de aprovechamiento sus-tentable propuesto aquí. El desafío es encontrar el equilibrio entre la producción, la conservación del ambiente y la reduc-ción la pobreza rural. "En la actualidad se acepta en forma generalizada no sólo que el medio ambiente afecta a la po-breza, sino también que la pobreza afecta al medio ambiente. La presión que la población ejerce sobre unos recursos de tierra limitados (en ausencia de otro posible modo de desarrollo) podría dar lugar a una explotación excesiva de los recursos existentes y, por tanto, a su degradación." (FAO,1989) Hábitat El hábitat de los camélidos es escarpado y se caracteriza por poseer estratos alto andinos semi-húmedos y semi-áridos, afectados por un clima de tundra fría, húmedo en las partes altas y seco en las praderas más bajas. La altura promedio de la región es de 4.000 m.s.n.m., en un rango de 3.000 a 5.000 m. El hábitat presenta "bofedales" o "ciénegos", que son áreas de alta concentración de vegetación hidrófita permanentemente anegadas y en las cuales la cría de camélidos presenta los más altos índices de productividad, como así también lo que se denominan "pastizales de altura" lugares en que pastan generalmente las llamas. Clima: El altiplano presenta 4 sub-tipos climáticos que van desde las orillas del Lago Titicaca (sub-tipo A) hacia las zonas cordilleranas (sub-tipo D) con variaciones de temperatura de 0ºC has-ta 13ºC; con precipitaciones de 400 a 700 mm, lo que determina un desarrollo variable de la agri-cultura y la ganadería. Ecológicamente presenta cuatro formaciones: a) Pradera o Bosque Húmedo Montano; b) Monte Húmedo y Muy Húmedo Sub-Alpino; c) Tundra Pluvial Alpino; y d) Nival (L.R. Holdridge); y, según P.Vidal: a) Región Suni; b) Región Puna; y c) Región Janca. La tempe-

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ratura media anual es de 4ºC, con aproximadamente 210 días de heladas por año, precipitación media de 600 mm y humedad relativa de 63% en las zonas más elevadas. Suelo: Los procesos de deforestación y de erosión, agotamiento y pérdida del suelo, la desertifica-ción, degradación de los ecosistemas, sedimentación de los ríos y pérdida de flora y fauna; se han acentuado. La ocupación del medio, asociada a una variabilidad de relieve de fuertes pendientes, presión por las tierras y un sobre pastoreo basado en la introducción de especies exóticas, han pro-vocado una degradación de las tierras cultivadas y de las pasturas disminuyendo la productividad y acentuando el empobrecimiento. Flora y fauna: La vegetación está formada por una pradera de bajo porte, predominando las gra-míneas duras y silificadas como Stipa ichu y Festuca dolichophylla y plantas arrosetadas, rastreras y en cojines compactos. Existen zonas que permanecen anegadas todo el año. También existen matorrales de thola (Paratrephia spp y Baccharis spp) y relictos de bosquecillos de queñua (Poly-lepis spp). Existen grandes áreas de desierto frío, con extensas superficies de suelos arenosos y denudados. La fauna silvestre alto-andina se caracteriza por ser pobre en especies. Pocas especies, altamente especializadas, se han aclimatado a este ambiente rudo y hostil. Entre las especies carac-terísticas podemos citar el cóndor (Vultur gryphus), el suri (Pterocnemia pennata garleppi), puma (Felis concolor), gato andino (Oreallurus jacobita). Existen abundantes lagunas alto-andinas de aguas dulces al norte y saladas en el sur, con abundante avifauna. Se destacan los flamencos o parihuanas con tres especies (Phoenicoparrus jamesi, Phoenicoparrus andinus y Phoenicopterus chilensis) y la choca de copete (Fulica cornuta). La explotación de los recursos naturales y la so-bre explotación de algunos de ellos, ha provocado una fuerte modificación en la composición de la fauna y la flora. Algunas especies, como la chinchilla, han desaparecido y otras se encuentran amenazadas de extinción como la taruca, el guanaco, la vicuña y el suri, situación que aún es posi-ble revertir. Recursos forestales: La población arbórea es escasa en número y densidad. Entre las recolectadas para leña podemos destacar las siguientes especies: "Tola" (Parastrephia lepidophylla), "Churqui" (Prosopys feroz), "Queñoa" (Polypepis tomentella), "Añagua" (Ademisa horridiuscula), "Copa copa" (Artemisa copa), "Yareta" (Azorella yareta) y "Tolilla" (Fabiana densa). Por su uso medi-cinal: "Muña Muña" (Saturesa parviflora), "Pupusa" (Werneria papposa), "Rica Rica" (Acant-holippia hastulata) y "San Pedro" (Chuquiraga atacamentsis). Sistemas de producción: Las sequías e inundaciones influencian el uso de los recursos naturales en diferente intensidad. Las sequías, generan una fuerte disminución de la población ganadera, pérdida de variedades dentro de las especies de cultivos practicados en esta zona, deterioro de los pastizales naturales e introducidos así como una fuerte deforestación para su uso como combusti-ble, por parte de las comunidades locales. Las excesivas precipitaciones causan en las regiones fuertemente cultivadas una alta pérdida de variedades, disminución de los volúmenes de produc-ción e incremento de los niveles de erosión hídrica. Estas condiciones ecológicas hacen que la producción agropecuaria comporte grandes riesgos. Durante los últimos 20 años las tendencias presentan un estancamiento siendo más agudo en la agricultura que en la ganadería. Los términos de intercambio sectoriales tienen un crecimiento lento. El poder adquisitivo de la producción agropecuaria muestra un incremento relativo, que implicaría que la capacidad adquisitiva de los productores tiende a empeorar. Los sistemas productivos son en general del tipo de agricultura tradicional y en tierras marginales (solo existen suelos de clase III y IV) y, por lo tanto, el objetivo no debe ser de aumentar la productividad a niveles superiores sino estabilizar la producción con el objeto de lograr la sostenibilidad de los sistemas productivos. Esto es posible si se adecua el me-dio físico con andenes, terrazas, camellones, q'ochas, irrigaciones, etc., o a través de la utilización

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sostenible de especies locales como los camélidos, que poseen una alta estabilidad productiva y responden a condiciones climáticas extremas. Los camélidos muestran mayor resistencia a la sequía que el ganado introducido, y su excepcional movilidad asegura el mantenimiento del rebaño a pesar de la inestabilidad climática que a menudo afecta a los cultivos de la región y permiten extender las áreas de producción a regiones donde no se puede cultivar ni criar de manera rentable ganado introducido. Los camélidos han evolucionado para adaptarse a los ecosistemas alto-andinos, la forma del labio superior le permite escoger lo que come y cortar las hojas sin desprender las plantas de raíz, como ocurre con el ganado introducido (ovinos). Además, las patas presentan cojines en los dedos que no dañan el suelo como ocurre con las pezuñas de los demás ungulados. Su utilización sustentable permitirá remplazar gradualmente el ganado introducido constituyendo una alternativa para la recuperación de los suelos, y en con-secuencia, del hábitat. Esta situación favorecerá a otras especies muy amenazadas que comparten el mismo hábitat como la chinchilla, el gato andino, la taruca, el suri y el cóndor. Justificación La conservación de los recursos naturales vivos es fundamental para el bienestar de las comunida-des rurales directamente ligadas a ellos. La reducción de los efectos adversos para la diversidad biológica provocados por las actividades productivas y la distribución equitativa de los beneficios derivados de la utilización adecuada de los recursos genéticos, requieren necesariamente del esta-blecimiento de condiciones esenciales tendientes a armonizar los usos actuales de los recursos biológicos, con el desarrollo económico y social y con las actividades tendientes a la generación de empleo y a la erradicación de la pobreza. Revertir el proceso de deterioro y ordenar el uso de los recursos naturales con fines productivos para la conservación de la biodiversidad dentro del agro-ecosistema, tendrá pocas posibilidades de éxito si no está asociado a un tipo de retribución directa o indirecta que cubra los costos de con-servación que se imponen a las comunidades involucradas. Revalorizar la diversidad cultural de las comunidades alto-andinas siempre que, como lo pregona el Convenio sobre la Diversidad Bio-lógica: a) entrañe estilos tradicionales de vida que hacen a la conservación y a la utilización soste-nible de la diversidad biológica; b) promueva el respeto de esa diversidad cultural, sus conoci-mientos y prácticas; y c) permita que los beneficios derivados de la utilización de esos conoci-mientos y prácticas se compartan equitativamente. Para ello se prevé la adquisición de superficie de tierra para ser destinadas a Unidades de Manejo (UM) con el objeto de lograr su recuperación y preservarla del mal uso a las que fueron sometidas durante décadas. Por medio del relevamiento y recuperación de los camélidos sudamericanos y su utilización sustentable en las mencionadas unidades se pretende acreditar la factibilidad de la cría de estas especies con el consiguiente desarrollo social de sus comunidades y fundamentando, además, la posibilidad de replicar esta experiencia en otras superficies que al presente se encuen-tran abandonadas o semi-abandonadas por falta de productividad. En el caso particular del manejo sostenible de vicuñas, se logrará el aprovechamiento de la fibra a través de la esquila proveyendo materia prima de alta calidad a asociaciones de artesanos tejedo-res, que confeccionarán tejidos artesanales de excelencia. Al mismo tiempo, se favorecerá la com-prensión sobre la conservación de los camélidos silvestres con el objeto de erradicar la caza furtiva de los mismos (vicuñas y guanacos) en el Depto de Molinos y los Valles Calchaquíes en general. 1) El manejo de camélidos como herramienta de conservación y recurso económico Los camélidos domésticos sudamericanos son la alternativa más viable para mantener los ecosis-temas alto-andinos y mejorar las condiciones de vida de las comunidades rurales del Altiplano. Existen evidencias que demuestran que los rebaños de camélidos domésticos representan la fuente alimentaria más confiable de la puna. Su aprovechamiento incluye la fibra, el cuero y el estiércol

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(indispensable como fertilizante y combustible). Además, las llamas han sido utilizadas como animales de carga. Estos usos, que han garantizado la subsistencia de las comunidades que habitan las tierras altas, constituyen el vínculo exitoso a la actual economía de mercado. Esos productos pueden transformarse mediante procesos artesanales y/o industriales, obteniendo otros de alta ca-lidad destinados a los más exigentes mercados. En lo que hace a camélidos silvestres, en Molinos, será necesario repetir el censo realizado y am-pliar su área e investigaciones, a fin de tener clara conciencia de su estado de conservación reali-zando las acciones necesarias (relevamiento a través de censos, diseño y puesta a punto del pro-grama de manejo, establecimiento de una estructura eficiente de ejecución y monitoreo del pro-grama) de esas poblaciones silvestres, a fin de alcanzar en el mediano plazo su aprovechamiento sustentable: cumpliendo con los requisitos internacionales a los que ha adherido la Nación Argen-tina, y cimentando el esfuerzo realizado anteriormente por la ASAPRO-SPN con asistencia cientí-fico técnica del Convenio de Cooperación GEMAVER (IADIZA, CONICET) con la Universidad Nacional de Salta. Entre los productos que han logrado un mejor posicionamiento en los mercados se pueden men-cionar: a) Fibra de vicuña y de llama para la industria textil. La fibra de vicuña es, sin duda alguna, la de más alta calidad que existe en el mercado. Con res-pecto a la fibra de llama, tradicionalmente se la consideraba de calidad inferior a la de alpaca. Sin embargo, el resultado de investigaciones recientes y gracias a los avances tecnológicos de descer-dado la fibra de llama es hoy considerada de similar calidad a la de alpaca. La aceptación y de-manda del sector industrial textil se ha incrementado rápidamente en los últimos años y se consi-dera que la fibra de llama podría ser un substituto de la fibra de alpaca. b) Artesanías y confecciones con fibra. Estos productos se encuentran bien posicionados en los mercados nacionales e internacionales debido al esfuerzo privado y a algunos proyectos de apoyo al sector. Por ejemplo, en el caso de la llama / alpaca y de acuerdo con los registros pertinentes de Bolivia, las exportaciones de productos de fibra aumentaron de 147.600 kilos exportados por un valor USD 5,1 millones en 1998, a 201.400 kilos por un valor de USD 5,6 millones 1999. Con estas cifras de exportación el sector se ubicó en el puesto 31 del total nacional y en el puesto 23 del total nacional de productos no tradi-cionales. c) Charque de llama. El charque de llama es un producto que se comercializo en mercados tradicionales en ciudades y poblados rurales, principalmente de Bolivia y Perú, además se lo consume localmente en las re-giones donde se cría este camélido. La venta de charque ha alcanzado nuevos mercados en dife-rentes ciudades (supermercados), y también cuenta con una creciente demanda en restaurantes especializados en gastronomía étnica de Europa. Además, se ha constatado que existe una crecien-te venta y exportación de charque de llama / alpaca a mercados del oriente boliviano, la costa pe-ruana y el Brasil. d) Carne de llama / alpaca. El volumen de carne de llama / alpaca comercializada formalmente en puestos de venta al consu-midor final se ha incrementado significativamente en Bolivia, Chile y Perú e informalmente en el norte Argentino. La introducción de cortes especiales y la mejora en las condiciones higiénicas de venta han sido factores determinantes para la difusión de este producto que se convierte en un substituto a la carne de res. Los mercados en los que se ofrece carne de llama / alpaca han trascen-dido los mercados tradicionales y siguen en proceso de expansión. De manera muy particular, el producto está siendo aceptado por el sector de consumidores de alimentos sanos, debido a que esta

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carne no contiene colesterol y los médicos recomiendan su consumo. Varios restaurantes que ofre-cen platos típicos en Bolivia y Perú, han comenzado a ofrecer en su menú platos basados en carne y charque de llama / alpaca. Estos platos son solicitados por turistas y por consumidores locales que han emigrado de la región alto andina a las ciudades, lo que origina un mercado cada vez más interesante. e) Cuero de llama. Durante muchos años el cuero de llama fue desestimado y no se lo aprovechaba en el mercado tradicional del cuero. Hoy se lo utiliza en pequeña escala y poco a poco va obteniendo mayor aceptación. No obstante, los curtidores de cuero recién comienzan a perfeccionar su procesamien-to con el objeto de mejorar su calidad. Con el fin de desarrollar la agregación de valor de la materia prima textil se implementará un cen-tro de acopio, clasificación y lavado de fibra como así también una planta de procesamiento, tec-nología canadiense, para la obtención final de hilados y fieltro. Con ello se busca homogeneizar la calidad de los productos y la eficiencia en los procesos para finalizar así en la confección de dife-rentes tipos de prendas por parte de los artesanos teleros. Con relación a la materia prima carne, camélidos domésticos, el fin es lograr "charqui" como pro-ducto final. Este producto es un alimento básico ancestral de estas comunidades como así también de la población tradicional de la ciudad de Salta. Para llevar a cabo este objetivo se implementara un centro de faenado que cumpla las mínimas condiciones de bromatología exigidas por las auto-ridades sanitarias. Como continuación del proceso se implementarán secaderos, cuya fuente es la energía solar, ya desarrollados por el Instituto de Investigaciones en Energía No Convencionales (INENCO) de la Universidad Nacional de Salta y la Asociación de Artesanos y Productores de San Pedro Nolasco de los Molinos (ASAPRO-SPN) con el apoyo del Programa Regional de Ca-mélidos Sudamericanos (Programa IICA-FIDA-Camélidos). Por último se prevé la promoción y prospección de nuevos mercados. Con relación a los productos textiles estas actividades se centraran en localizar nichos de mercados que valoren la calidad y el origen de las prendas artesanales producidas. Estos nichos se localizan en su mayoría en el conti-nente europeo. Con respecto a los productos cárneos estas actividades se centrarán específicamente en reconquis-tar y mercado olvidado en la ciudad de Salta como así también en la provisión de "charqui" a las poblaciones de emigrantes que se han asentado en los suburbios de la ciudad mencionada y que acostumbran al consumo de este producto y al presente no cuentan con el mismo que posea una calidad bromatológica aceptable. Con el fin de acceder a nuevos mercados para la fibra natural, las carnes magras y los cueros, se deben realizar esfuerzos con el objeto de introducir cambios básicos para que las comunidades rurales dispongan de mejores técnicas de cría y de elaboración de productos. De esta manera, sus productos serán más competitivos. Por estos motivos, la estrategia del presente Proyecto se basa en las tres etapas básicas de la cadena de valor agregado, a saber, producción, transformación (primaria y secundaria), y comercialización.

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Catamarca también podrá producir y exportar fibra de vicuña

Durante su XII Conferencia, realizada recientemente en Santiago de Chile, la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) aprobó la propuesta de "Transferencia del Apéndice I al Apéndice II de la población de vicuña de Catamarca", que posibilitará el comercio internacional de fibra, telas y artesanías producidas en esa provincia con la marca Vicuña Argentina. En mercado mundial, la fibra de vicuña, que en Argentina sólo es exportada legalmente por criaderos, tiene un valor de 360 dólares por kg de lana vellón y constituye un importante recurso para el desarrollo de comunidades de altura de nuestro país. En este sentido, ya en 1997, la CITES había acordado el pasaje de las poblaciones de vicuñas silvestres y de los criaderos de INTA en Jujuy al Apéndice II, lo que permitió la comercialización legal de fibra esquilada de animales vivos. La propuesta presentada en Chile -elaborada y consensuada por diversos entes provinciales de Catamarca, el INTA, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, y otras organiza-ciones- contempla el uso sostenible de animales del medio silvestre, lo que facilitará la incorpora-ción de vicuñas para iniciar criaderos en semicautividad. La aprobación de la CITES constituye un momento histórico para Catamarca, ya que por primera vez permitirá la cría de este camélido, con tecnología desarrollada por el INTA. Esta organiza-ción ya instaló en la provincia dos criaderos experimentales y está propiciando la creación de la Comisión Provincial de la Vicuña, donde se definirán las políticas para el uso sustentable de la especie con la participación de todos los sectores involucrados.

Informes: Ing. Francisco Rigalt, INTA Catamarca 03833-441192, [email protected] y Dr. Gustavo Rebuffi, INTA Abra Pampa, 03887- 1562, [email protected]

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Hablando de llamas , alpacas y otras cosas.........................

Hay en el reino animal una clase o grupo denominado de los mamife-ros, que entre muchas caracteristicas distintivas tienen mamma ( del latín ) y cuerpo cubierto de pelos. En este grupo hay un conjunto de animales llamados Artiodáctilos que apoyan los dedos de los pies para caminar, aquí está la familia de los camélidos con solo 2 dedos funcionales en cada miembro. Son ellos rumiantes con pelo lanoso y largo. Las patas y cuello también muy largos. Esta familia nos interesa pues en ella encontarmos los camélidos suda-mericanos, originarios de este continente, con 4 especies represen-tadas en nuestro país.

El guanaco y la vicuña son las dos especies silvestres ó salva-jes, son parte de nuestro patrimonio faunístico, todos los argentinos somos dueños de ellas , por ello también es que está prohibido toda clase de manejo, caza ó comercialización de ellas y sus productos. Ultimamente las autoridades que rigen sus destinos otorgan per-misos para su cría controlada, en puntuales casos que así lo justifi-quen.

Las llamas y alpacas son las dos especies domésticas; hace más de 4000 años que han dejado de ser silvestres pués sobre ellas se ejerció uno de los procesos de domesticación más eficientes que el hombre haya realizado sobre animal alguno. De ellas se obtiene fibra para hilados, cueros, carne, leña con la bosta seca y además como animal de carga.

Las llamas y alpacas constituyen nuestra ganadería doméstica autóc-tona. Si después de la conquista de América los europeos no hubie-ran traído consigo las primeras vacas, cabras y ovejas, inexistentes hasta ese momento en estas tierras, tal vez otro hubiese sido el destino de nuestros camélidos.

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La realidad es otra, ahora solo viven en Argentina unos 100.000 ejem-plares de llamas y muy pocas alpacas, estos animales tienen dueños que acreditan su propiedad con señales que se hacen en las orejas , señales estas que registran y otorgan las distintas direcciones de ganadería de las provincias donde se crían estos camélidos , esto a su vez está afirmando y acreditando su domesticidad, cualidad que mu-chas personas desconocen.

Alpacas en Arequipa ( Perú ) Llamas en La Evelina ( Las Acequias )

El contacto del hombre y el manejo sobre las llamas y alpacas durante miles de años ha permitido seleccionar artificialmente ejemplares con

distintos fenotipos, así vemos vellones de variados colores que van del blanco al negro pasando por la gama de los marrones y grises , distri-buidos estos colores en tobianos, pintados, overos, etc., estas ca-racterísticas los diferencian de las vicuñas y guanacos que solo po-seen el color tabaco ó canela y que a su vez caracteriza a gran parte de las especies de mamíferos silvestres. Por contrapartida la

gran variedad de pelajes es común a los animales domésticos en gene-ral y por supuesto a las llamas y alpacas.

El manejo general es sencillo y facil pues son dóciles y curiosas. Se debe evitar el manejo ruidoso y brusco, aceptando el ritmo pausado al que se mueven.

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Son animales longevos que llegan a vivir más de 20 años, tienen una preñez de 11 meses y por lo general una sola cría por parto. La madre no lame al recién nacido por lo que este debe secarse al sol, ayudado por esa cualidad genética que poseen y que hace que los nacimientos ocurran mayoritariamente a media mañana ó medio-día cuando la temperatura por lo general es más benigna. En cien-tos de nacimientos ocurridos en nuestro establecimiento solo uno su-cedió al anochecer.

Vellón de alpaca

Se esquilan anualmente ó cada dos años dependiendo del largo de fibra que se pretenda obtener. El método es parecido al usa-do en ovinos. Los muy buenos ejemplares rinden 2,5-3 kilos de fibra por año, con un rendimiento al lavado de más del 90 %.

Las llamas y alpacas son rumiantes que se alimentan de las mismas pasturas naturales ó cultivadas por el hombre para el resto de la ganadería tradicional. No existen diferencias sustanciales en los tratamientos sanitarios, las vacunas y antiparasitarios son los mismos que en vacunos. Conviven con ellos y con los ovinos y capri-nos. No es indispensable construir alambrados y corrales especiales, aunque es preferible que estos últimos sean más pequeños para un tra-bajo más cómodo y si es posible de uso exclusivo, así se evita el de-terioro que provoca el ganado bovino en estas instalaciones, dete-

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rioro desconocido en el manejo de llamas.

Las llamas y alpacas conviven en armonia con otras especies domésticas

Las llamas y alpacas conviven en armonía con otras especies domésticas como aquí en La Evelina

La existencia de variados fenotipos, en llamas fundamentalmente, permite la cría de distintos animales, así es dable observar las deno-minadas "cargueras" que son llamas grandes y de gran rusticidad , buenas para carne pero de pobre vellón. Las más lanudas denomi-

nadas Calana con un muy buen vellón, similar al compacto de ovejas y las Ulpan con excelente vellón con sedosas mechas rizadas y

caídas, son las que procuranos criar en nuestra cabaña. Además hay tipos intermedios entre los nombrados.

La domesticación con su arma clave , la selección, a permitido a través del tiempo variar la calidad de llamas y alpacas en forma noto-ria. En nuestro establecimiento hemos continuado con esta selec-ción desde hace más de 15 años. Ahora asociado al establecimiento LA EVELINA hemos constituímos una de las primeras cabañas con una calidad superlativa de animales , 130 llamas con pedigree, registradas en el Intenational Lama Registry (ILR) de USA, que nos permite ofrecer ejemplares de excelente calidad y sobre todo con un origen conocido.

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Cuando una persona compra una llama , una madeja de nuestra lana ó un sweater tejido por nosotros, sabe donde nació y fué criado el animal que los produjo, más aún, ustedes pueden ver en nuestra pá-gina de INTERNET las fotos de las llamas y donde ellas viven. Si lo desea lo invitamos a conocerlas personalmente para que usted les muestre las hemosas prendas que compró.

Packing en Las Rocallosas USA

Un párrafo aparte merecen la mansedumbre y facilidad de apren-dizaje de estos animales que permite su uso como cargueros , el " packing" que realizan mucho en otros países y especialmente en Nor-

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teamerica. Manejándolos con un simple bozal pueden transportar mochilas, carpas, enseres y lo que usted imagine se necesita para reli-zar largas caminatas por los más dificiles senderos. Los ejemplares macho son los más resistentes para ello, con la ventaja de ser muy fru-gales y necesitando muy poca comida y agua por día, aliviando la tarea del caminante.

En el golf se convierte en un caddy que puede transportar varias bol-sas de palos sin dificultad y sin deteriorar el césped de la cancha , ya que poseen almohadillas en los dedos de las patas que evitan el so-brepisoteo , además pueden con sus afilados dientes comer y mantener corto el pasto sin arrancarlo. Estas son algunas de las adaptaciónes a los frágiles ambientes de las regiones de altura ó de Puna, donde los pastos son muy delicados, que les ha permiti-do durante muchisimos años no deteriorarlos.

Nos agrada comentar que en la zona andina de Mendoza ya funciona una empresa de turismo que ofrece llamas para realizar caminatas

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en forma individual ó en grupos guiados.

Si usted desea incorporar a su empresa animales adiestrados para es-tas actividades mencionadas, nosotros les vendemos los animales adecuados y los transportamos a destino sin costos adicionales.