Los Manuscritos de Geenom (i)

7/23/2019 Los Manuscritos de Geenom (i)

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LOS MANUSCRITOS DE GEENOM (I)

«Terrestres: Esta es la historia»

A todos los que con el despertar de su consciencia y su esfuerzo estánempezando a construir la Nueva Era...

Conozco a los miembros del grupo Aztlán desde hace varios años y no albergo dudaalguna acerca de su honestidad. La historia que el lector podrá leer en estas páginaspodrá resultar o no creble! pero puedo dar fe de que no está inventada ni es fruto de laimaginaci"n. Al menos en lo que se refiere a la informaci"n recibida. #e comprobado! esosi! que algunas cosas han sido noveladas para dar agilidad al relato y que han sidocambiados algunos de los nombres reales por otros ficticios. $ero me consta que elcontenido del libro responde con e%actitud a lo que ha sido trasmitido y no hay en &l! por tanto! fabulaci"n consciente alguna.

No estoy en condiciones! por supuesto! de confirmar que lo que el grupo lleva recibiendodesde hace diecis&is años proceda realmente de un ser e%traterrestre. Ni creo que ellos!ni nadie en situaci"n similar! pueda ofrecer pruebas tangibles distintas a las de su propiavivencia personal o a la que supone! per se! la documentaci"n recibida durante los 'ltimostres lustros.

(ebo añadir que en esta &poca de finales de siglo que vivimos es para mi absolutamenteinnecesario convencer a nadie de que en nuestro inmenso )niverso tiene que haber! y sinduda as es! multitud de mundos habitados! muchos de ellos tecnol"gicamente másavanzados que el nuestro por meras razones de antig*edad. + que siendo esto as!

resulta absurdo plantearse si esas civilizaciones pueden estar o no en situaci"n decomunicarse de alguna forma con nosotros o! incluso! de via,ar por el espacio y llegar anuestro planeta. Argumentar que ello no es posible porque los terrestres no sabemosc"mo hacerlo resulta! simplemente! infantil. + s"lo una actitud de orgullo desmedidopuede hacernos pensar que los hombres de la -ierra estamos a la cabeza del más queprevisible con,unto de mundos habitados del Cosmos.

Consecuentemente! y sin entrar a valorar si ello está o no teniendo lugar! debo afirmar que a mi ,uicio la comunicaci"n con seres de otros planetas es hoy! cuando menos!posible! si no probable.

(ebo! en todo caso! e%presar mis reservas en cuanto al m&todo de comunicaci"n utilizadola oui,a por cuanto cualquier estudioso conoce la comple,idad del mismo y! en especial!la dificultad de discernir la fuente! el origen del mensa,e! y! por ende! la validez de sucontenido. $ero tengo que añadir! en honor a la verdad! que estas mismas dudasrazonables se las plante" el propio grupo desde el inicio mismo del contacto y as lomanifiestan en la narraci"n de los hechos! e%plicando las razones que les llevaron conposterioridad a tener la certeza de que el contacto era aut&ntico.

En todo caso! al lector más informado no de,arán de sorprenderle las coincidencias

e%istentes entre algunas de las informaciones recibidas por el grupo Aztlán y lastrasmitidas a otros contactados de diversos lugares de nuestro planeta. Ello obliga a

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pensar que la fuente es evidentemente la misma! sea esta cual sea /el subconsciente o lamemoria gen&tica de uno o varios de los miembros del grupo! el inconsciente colectivo delque hablara 0ung! el 1registro a2hásico1 de los esoteristas y la tradici"n oriental! el campounificado propuesto por el fsico (avid 3hom o el 1campo m"rfico1 o 1campomorfogen&tico1 que menciona 4upert 5heldra2e6 si queremos buscar una e%plicaci"n

convencional o más ortodo%a a la e%periencia vivida por el grupo! constatable yabsolutamente real. La otra alternativa! por supuesto! es aceptar la realidad de que lainformaci"n procede efectivamente de seres e%traterrestres y de ah la sorprendentesimilitud del contenido de muchos mensa,es algunos muy concretos en sus detalles quevienen trasmiti&ndose desde hace d&cadas a contactados de todo el planeta.

En todo caso! quiero e%presar mi satisfacci"n por la decisi"n de los miembros del grupo Aztlán de dar a conocer esta primera obra! a la que estoy seguro y as lo deseo seguiránotras entregas! y felicitarles por su valenta al hacerlo arrostrando las previsibles burlas deotras personas con menor apertura de consciencia. $orque! en 'ltima instancia! ello nos

permitirá ampliar nuestra visi"n de nosotros mismos y del mundo y nos hará refle%ionar sobre la grandeza del ser humano y la inmensidad del )niverso.

0758 AN-7N97 CA:$7+

(irector de la revista

;:<5 ALL< (E LA C9ENC9A=

;5oy >eenom! un ser humano que ha recorrido un largo camino por el sendero de laevoluci"n! un duro aprendiza,e me ha ido llevando a trav&s de milenios hasta el punto en

que hoy me encuentro! pr"%imo ya a trascender del plano fsico. #e pasado por todos losestadios de la etapa humana! desde la manifestaci"n más burda hasta la más sutil! desdela inconsciencia y la duda! a la consciencia y la seguridad! desde la intuici"n a la certezade saber! al fin! para que he sido creado.

=:is palabras son para vosotros! hombres de la -ierra! vosotros que os trazáis un caminomuy corto! que os adelantáis como todos los adolescentes al futuro del hombre! osquedan a'n miles y miles de años para alcanzar lo que llamáis la sabidura! ?)E N7 E57-4A C75A ?)E LA C7N5C9ENC9A (EL 74(EN ?)E (E3E -ENE4 @)E5-47:)N(7! y cuando hablo de mundo me refiero a esa porci"n de )niverso que el hombre

debe conocer paso a paso! vida tras vida! generaci"n tras generaci"n...=

;)no de los hitos que el ser humano se encuentra al llegar al punto donde estáis! esconocer su situaci"n e%acta. (e d"nde viene! d"nde está y hacia d"nde va...=

;Esta historia que hoy! al final de mis das como ser humano! voy a contaros! no es unabiografa! pues sera demasiado e%haustivo y además no os servira de mucho! pues ess"lo una vida! no LA @9(A. $or el contrario! tratar& de transmitir aquellas cosas que sonlas que hoy me van a permitir dar este nuevo paso. Aquellas cosas que el hombre busca ypor las cuales vive! lucha y muere cientos de veces. Lo hago porque 5E ?)E (E37

#ACE4L7! porque una fuerza que ya ha empezado a formar parte de m! as me lo e%ige.

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=7s hablar& del hombre! del papel que desempeña en la Creaci"n. (e c"mo siendo parteintegrante de la Naturaleza! lleg" a agredirla! para luego cuidarla y protegerla. (e c"mos"lo la consciencia puede hacer identificar a la Naturaleza como una madre. Al principiose depende de ella como un reci&n nacido depende de su madre. Luego el hombreadolescente se rebela contra ella y la repudia y agrede! pensando que &l lo puede hacer

me,or. 5"lo cuando es adulto el hombre vuelve su mirada y ve a una madre que le hadado todo! su sangre! su casa! su leche! su calor... y siente amor nuevamente por ella.@osotros! hombres de la -ierra! sois adolescentes! unos más y otros menos! a'n pensáisque pod&is enmendar 1errores1 producidos por el Cosmos.

=@uestro siguiente paso es volver la vista a vuestra madre y vivir con ella y para ella.Cuando aprendáis a amar a vuestra anciana madre! a cuidarla y protegerla! cuandohayáis comprendido que ella os necesita! os convertir&is en su fuerza vital! para que enella sigan viviendo vuestros hi,os y los hi,os de vuestros hi,os...=

;Ahora! cuando siento que la energa que constituye mi cuerpo fsico se estátransformando! cuando s& que mi paso por la vida humana está tocando a su fin! cuandohe comprendido y asimilado lo que es el dolor! la muerte! el amor! la incomprensi"n! ladesarmona! el odio! la paciencia! la humildad! la soberbia! cuando s& que he conocido ymane,ado todos los aspectos fsicos de la vida! ahora debo dar un paso más! un pasohacia adelante. No necesito que nadie me lo diga. Lo s&.

=En estos momentos en que me voy para quedarme! quiero hacer! no obstante! un 'ltimorepaso a aquello que constituye mi baga,e! mi e%periencia! mi raz"n de partir y mi llegada.?uiero que se cumpla tambi&n en m! como postrer tributo de un hombre a otros hombres!

la má%ima que ha sido mi referencia constante -7(7 L7 ?)E 5E 4EC93E E5 $A4A(A4L7...=

;Como conclusi"n final de mi e%istencia humana! he comprendido que s"lo es complicadoaquello que nosotros lo hacemos complicado. ?ue el hombre lleva dentro de s lasrespuestas a todas sus preguntas. ?ue no se puede poner lmites a su propiaimaginaci"n! a sus deseos! a su consciencia. ?ue crear instituciones para que el hombreaprenda lo que ya sabe! es reducir la capacidad humana de conocerse a s mismo.

=#e vivido muchos años y muchas vidas y de todas ellas siempre he aprendido algo. #e

sido sordo y luego he sabido escuchar. #e sido ciego y luego he sabido ver y mirar. #esufrido en propia carne mis propios errores! pero tambi&n he sabido levantarme ycontinuar mi camino...=

;El hombre que piensa que no necesita a nadie! aquel que se autoproclama constructor de s mismo! es como la abe,a herida que gira y gira sobre s misma. -odos!invariablemente! necesitamos a los demás y esta lecci"n tendremos tambi&n!invariablemente! que aprenderla...=

;El conocimiento! aplicado a la evoluci"n del ser humano! produce armona! y al hablar dearmona no s"lo se habla de un bienestar ambiental! se habla sobre todo de la perfectainterrelaci"n de todo lo e%istente! visible e invisible.

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=EB hombre! desde sus primeras etapas hasta las 'ltimas! recorre un camino que no esa,eno a su propio estado fsico. La armona para &l es saber! en cada momento de suevoluci"n! cuál es su etapa fsica! para adaptarse a ella y saber as interrelacionarsearm"nicamente con su entorno...=

;...hay siete etapas dentro del cuarto gran peldaño! el peldaño humano. 5iete grados de

evoluci"n que van desde el hombre primitivo /.B6! al hombre supraconsciente /.D6!pasando por el hombre inconsciente /.6! el hombre consciente /.F6 /punto en el cual! elhombre tiene el cien por cien de las riendas de su evoluci"n6! peldaño en el cual osencontráis la mayora de los seres humanos del planeta -ierra.

=Estáis pr"%imos a dar un gran salto! el que os llevará al siguiente escal"n El hombre dela Nueva Era /.6. El paso siguiente es el peldaño de los :aestros /.G6! y lo son! por ser los primeros del escal"n humano con capacidad /garanta de uso del libre albedro hacialo positivo6 para servir de referencia a sus hermanos menores del peldaño

.F. + as llegaramos al .H! :aestros de los . y a los .D! los 'ltimos humanos queserán! a su vez! los primeros en formar parte del primer escal"n del plano energ&tico/G.B6.

=5i he utilizado este smil de la escalera! es por su sencillez y claridad para retenerlomentalmente. 5"lo es una forma de dividir y razonar el camino de la evoluci"n...=

9. )N ENC)EN-47 (9IE4EN-E

El silencio volvi" a reinar en el sal"n. Como 'nico signo de vida! el vie,o relo, de pared

de,aba or su latido en un tictac mon"tono y persistente.El abuelo se levant" y comenz" a remover! muy despacio! las brasas de la chimenea. Elchisporroteo de las llamas hizo que se levantaran un mont"n de pequeñas estrellitas decorta vida que intentaban ascender por el tiro de la chimenea sin conseguirlo.

Ninguno de los dos parecamos tener prisa por romper el silencio y aunque nuestrospensamientos seguan caminos aparentemente diferentes tenan! no obstante! muchospuntos de cone%i"n. El daba la impresi"n de sentirse entre esperanzado y triste! era unarara mezcla. +o! en cambio! senta curiosidad e inter&s por descubrir para qu& me haba

hecho llamar el abuelo con tantas prisas.Iinalmente se decidi" a hablar. 5us o,os fi,os en las llamas brillaban de un modo especial.Como si estuviera hablando consigo mismo fue desgranando palabras que brotaban comoel discurrir plácido de un ro de corriente tranquila.

JAlberto! en estos 'ltimos meses he estado tratando de asomarme un poco a tu vida! atus sentimientos y a tus ideas y no creas que ha sido por simple curiosidad. :i inter&sobedece a un prop"sito concreto que más adelante te e%plicar&.

5e pas" la mano por la frente haciendo una pausa antes de continuar! como si quisiera

poner un poco de orden en sus ideas antes de empezar a hablar de nuevo.

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-E44E5-4E5 E5-A E5 LA #95-749A! L75 :AN)5C49-75 (E >EEN7:

JCuando echo la vista atrás me doy cuenta de que desde el principio mi vida ha tenidoun denominador com'n la lucha. (e ,oven! cuando el cuerpo está plet"rico de fuerza y lamente se alimenta con la ilusi"n y los ideales! uno no teme al enfrentamiento. (espu&scon el paso de los años! a medida que vas acumulando e%periencias y compromisos! vas

perdiendo esa fuerza y ese empu,e original.

:e gustara hablarte un poco de m! de mis ilusiones y esperanzas! de mis logros y misdecepciones! de mis esfuerzos y mis derrotas. Estoy en una edad en que casiconstantemente me sorprendo a mi mismo haciendo balance de todo lo vivido en elpasado y siento la necesidad de contrastarlo con alguien! de verbalizar esos procesos queen ocasiones es difcil valorar al ser uno mismo el protagonista.

(esde muy ,oven tuve un Norte en mi vida buscar el por qu& de las cosas. Es un impulsotan arraigado en m que no logro recordar cuando empez" ese afán por desvelar! por

descubrir! por desembrollar los misteriosK lo cierto es que todas las referencias y losrecuerdos que tengo de pequeño ya apuntan a esa actitud. (ebe ser una caractersticafamiliar que se transmite gen&ticamente porque mirándote me parece estar vi&ndomehace muchos años! tu eres tambi&n una persona inquieta y buscadora.

+o observaba al abuelo en silencio. A medida que hablaba pareca que iba animándosepor momentos! o al menos su voz sonaba más clara y decidida a pesar de estar salpicadade un cierto tono nostálgico.

JAl principio! cuando estudiaba! crea que en la ciencia! en el estudio y en la

investigaci"n de otros hombres iba a encontrar respuestas a mis muchos interrogantes. +en honor a la verdad he de decirte que he encontrado algunas respuestas! pero no pudehallar el sentido profundo de las cosas. 5iempre llegaba hasta un punto en el desarrollol"gico del que no poda pasar y! con el tiempo y la e%periencia! fui descubriendo que laciencia no tena todas las respuestas que yo deseaba encontrar.

$or otro lado! la religi"n tambi&n se me quedaba corta. (aba a la vida un sentido que seme anto,aba irreal! potenciando la ceguera mental y la falta de congruencia. Al finaltambi&n llegaba a un punto del que no poda pasar. A partir de &l! s"lo haba una soluci"nla fe. )na coletilla que se añada siempre que faltaban las respuestas.


(urante mucho tiempo s"lo logr& ver enfrentadas esas dos posturas por un lado laciencia como e%ponente del agnosticismo y con una rigidez mental impropia! creo yo! delos ;cientficos=. $or otro lado! una religi"n ciega y obstinada! anulando y negando una delas facultades más importantes del hombre su capacidad de razonar.

Al cabo de los años he aprendido que lo que yo intentaba era compaginar esas dosposturas! para lo cual deba realizar una labor de análisis! desbroce y reconstrucci"n

hasta encontrar lo que de aut&ntico haba en la religi"n y la ciencia. +o buscaba una formade ver las cosas que fuera capaz de respetar y contener a las dos.

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#oy podra decirte que creo haberla encontrado. $ienso que todos llevamos en nuestrointerior un sentimiento ntimo que nos impulsa a ;religarnos=! a reencontrar a (ios.Necesitamos canalizar nuestra espiritualidad! nuestra trascendencia y eso se manifiestaen un afán por saber! por investigar! por alcanzar cotas más elevadas... A ese impulso! endefinitiva el motor que nos posibilita para conseguir ob,etivos! yo lo llamo 4EL9>9759(A(.

Es para m un concepto nuevo que representa una tendencia natural que nace con elpropio hombre y que marca toda su trayectoria evolutiva! es el via,e hacia el origen delque partimos.

La religi"n! no habra hecho más que institucionalizar y manipular esa tendencia!cargándola de ritos! liturgias y dogmas que terminan por ahogar el sentimiento original. As! por un lado la religiosidad sera el impulso primario por saber y tendra una funci"n;generadora= y por el otro! la ciencia sera la concreci"n de los logros obtenidos y tendrauna funci"n ;elaboradora=. Es difcil compaginar las dos tendencias pues a simple vistaparecen contrapuestas. 5in embargo! cuando se encuentra su ,usto valor! te das cuenta

de que son complementaras y que al apoyarse una en otra te ayudan a avanzar ydesarrollar tus potencialidades.

(esgraciadamente! los hombres nos polarizamos en uno u otro bando! sin conseguir balancear las dos posiciones! con lo cual se crea un grave desequilibrio de fuerzas quenos obliga a estar insatisfechos durante una gran parte de nuestras vidas.

$or primera vez el abuelo 3aldomero levant" su vista del fuego y se incorpor"mirándome.

+o desde el sill"n! le miraba con el más vivo inter&s. No me sorprendan susrazonamientos ni nada de lo que me estaba contando! ya habamos hablado muchasveces de esas cosas. +o conoca muy bien la filosofa del abuelo! estaba asentada sobre

unos pilares muy s"lidos los de la e%periencia. No tena ante mi a un hombre quehablaba de las teoras de tal o cual fil"sofo! sino a alguien que hablaba de s mismo! desus procesos! de la resoluci"n de sus dudas! alguien a quien su impulso investigador! lehaba llevado a unas conclusiones de las que ahora hablaba con claridad y con fuerza.

5in embargo s me sorprenda su actitud! yo sospechaba que aquella no era unaconversaci"n como la de otras veces! algo en la actitud del abuelo me haca notar una

especial trascendencia. ?uise decirle todo esto pero no pude. :e dio miedo romper laemoci"n del momento y 'nicamente le mir& tratando de refle,ar el calor y la admiraci"nque senta por &l.

El abuelo volvi" a sentarse! pero esta vez frente a m. Con los codos apoyados sobre lasrodillas y ambas manos rodeando la taza de t& de peña! de la que daba pequeños sorbos.

Cada vez que hablaba con el abuelo yo perda totalmente la consciencia del tiempo! eraun gran conversador y en especial aquella noche una sensaci"n muy peculiar de misterioflotaba en el ambiente desde que comenzamos a hablar.

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J#e de decirte! como preámbulo! que si he llegado a algunas conclusiones no ha sidosolo. #e contado con la ayuda inestimable de seres que me han ido enseñando aencontrar lo aut&ntico de las cosas! que me han ayudado a decantarme y a decidir mipropia escala de valores.

@oy a contarte algunas cosas que seguramente te sorprenderán. $or favor! esc'chalas

con atenci"n y no te de,es guiar por la primera impresi"n. -e lo digo por e%periencia.-"mate tiempo para meditarlas. +a las comentaremos más adelante! si quieres.

Asent.

J#ace mucho tiempo tuve un encuentro ins"lito! una e%periencia que al principio pareci"una simple casualidad y que sin embargo! a la vuelta de unos pocos meses! dara un girotrascendental a mi vida.


Iue una mañana en que me diriga hacia el bosquecillo de hayas. 5iempre que meencontraba aturdido o preocupado! o simplemente necesitaba refle%ionar a solas acuda aaquel lugar. Lo recordarás porque hemos ido muchas veces ,untos en los veranos quepasabas aqu. All! entre las vie,as hayas! haba encontrado muchas respuestas! habandespertado intuiciones que despu&s! cuando llegaba el momento de ponerlas en práctica!daban buenos resultados. 5eg'n mi costumbre caminaba con firmeza mirandoobstinadamente al suelo mientras apartaba la ho,arasca cada durante el otoño. 4ecuerdoque haca fro.

Estaba preocupado! haca varios das que las vacas estaban aque,adas de alg'n male%traño. #aba e%aminado una y otra vez a los animales y a pesar de todos los sntomasno haba encontrado una soluci"n que acabase con el problema. #aba aplicadodiferentes remedios pero ninguno haba sido lo suficientemente efectivo.

Como t' bien sabes! la mayor parte de las familias de 3ur"n dependan! por aquelentonces! del ganado. ?ue muriese alg'n animal era algo grave! pues cada uno era elresultado de muchos sacrificios. +o lo saba y! como veterinario! pona el má%imo empeñoen ayudar a esas buenas gentes.

(e pronto me par& sorprendido. Al otro lado de un pequeño claro del hayedo descubr aun hombre que pareca e%aminar la corteza de un gran haya. @i que tena un ob,etometálico en las manos! pues un tibio rayo de sol haba refle,ado un destello. :e acerqu&intrigado. A esa hora de la mañana nadie acostumbraba a visitar aquel solitario lugar. Loshombres del pueblo estaban afanados en sus tareas y las mu,eres en sus quehacerescotidianos! por eso era raro ver alguien por all.

J5erá un forastero Jpens& mientras me acercaba.

El hombre pareci" notar mi presencia! pues se volvi" y de," de manipular la corteza delárbol! quedándose all! de pie! esperando que yo llegara.

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A medida que iba apro%imándome repar& en la e%traña ropa de aquel persona,e. @estauna especie de tra,e de una pieza que le cubra desde los pies hasta el cuello! era de unatela muy blanca. Cuando estuve más cerca me di cuenta de que algo colgaba de sucintur"n. Era una especie de escafandra con un visor de cristalK realmente era un atuendopoco usual. $ens& que deba tratarse de un apicultor.

:e sent muy satisfecho con mi razonamiento al tiempo que apresuraba el paso! deseosode encontrarme con aquel hombre.

:e detuve a unos pasos de &l! notando c"mo unos o,os verdes y lmpidos se quedabanfi,os en los mos. )n escalofro de emoci"n me recorri" la espina dorsal. Al llegar frente alforastero su figura pareci" a'n más imponente. Era un hombre alto y delgado! confacciones bien dibu,adas y la serenidad refle,ada en el rostro! de piel muy blanca y pelorubio.

4ecuerdo que ba,& instintivamente la mirada hasta encontrarme con las manos del

desconocido! esperando que &ste hiciera alg'n ademán de saludo! pero el hombre no semovi". )na de sus manos sostena una especie de regla o varilla metálica con la quehaba estado hurgando en la corteza del árbol. 0amás olvidara aquellas manos. Eranincreblemente blancas! de dedos largos y rectos. Al principio llegu& a pensar que llevabaguantes pero despu&s! al fi,arme más detenidamente! observ& que no era as. Cuandoalc& los o,os me encontr& nuevamente con su mirada.

5in saber muy bien por qu& sent que ante aquellos o,os mis recelos se desvanecan yque una sensaci"n de tranquilidad me invada! anulando definitivamente la inquietud ye%trañeza que en un primer momento me haban dominado.

En realidad no fue en ese momento cuando me di cuenta de estos detalles! sino varashoras despu&s cuando reviv la escena y trat& de encontrar e%plicaci"n a algunas piezasque no enca,aban.

Nunca podr& e%plicar muy bien los siguientes instantes! s"lo que al cabo de algunosminutos haba ya entablado con aquel desconocido una animada charla. 5in saber muybien c"mo me encontr& contándole mis preocupaciones sobre la e%traña enfermedad delganado.

El pareca tener un gran conocimiento sobre hierbas y sus propiedades curativas.#ablamos largo rato acerca de los beneficios de tal o cual hierba y sobre otros temas quedas más tarde fueron tomando la importancia debida. Iinalmente me aconse," quesuministrara a las vacas un cocimiento a base de mezcla de varas races! hierbas ycortezas de árboles.

Iue una charla agradable y el tiempo pas" volando. El sol ya estaba en su c&nit. Como sitomase consciencia de la realidad en aquel mismo instante! me desped del desconocidoy a toda prisa volv a casa. :ientras preparaba el cocimiento de hierbas me di cuenta deque ni siquiera le haba preguntado su nombre. Lament& mi olvido pero no me preocup"

demasiado pensando que ya tendra más oportunidades de hablar con mi nuevo amigo yseguir intercambiando e%periencias y conocimientos.

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Al cabo de algunas horas las vacas afectadas empezaban a mostrar los primerossntomas de recuperaci"n y las terneras más ,"venes tomaban ya alimento.


#aba sido una larga noche y un largo da tambi&n. Empezaba a anochecer y el cansancio

por la tensi"n sufrida en las 'ltimas horas comenzaba a de,arse notar.

Cuando por fin! ya en casa! apoy& la cabeza en la almohada y rela,& mi mente!empezaron a aflorarme dudas y preguntas. Las desech& sin contemplaciones deseoso deenganchar ese sueño reparador que tanto necesitaba. +a tendra tiempo al da siguientede pensar.

La mañana amaneci" h'meda y plateada. )na lluvia persistente proporcionaba un brillosingular a los te,ados y las calles. Aquel da no tena ning'n aviso pendiente salvo ir almatadero a 'ltima hora de la tarde! decid quedarme en casa ordenando papeles.

Cog el maletn y empec& a hacer un rápido inventario del contenido con la intenci"n dereponer lo que faltase. Iui de,ando en la mesa el instrumental! varios frascos de cristal dediferentes tamaños! el cuaderno de notas y recetas... (e pronto me par& sorprendido. Enel fondo del maletn un ob,eto redondo brillaba. Lo cog y lo acerqu& a la luz del fle%o queiluminaba mi mesa de traba,o.

J(e d"nde ha salido estoM J:e pregunt& e%trañado. A punto estaba de llamar a laabuela para preguntarle! cuando comenc& a recordar... Como entre una neblina apareci"en mi mente el recuerdo del e%traño encuentro que la mañana anterior haba vivido en el

vie,o hayedo...JAquel hombreO Je%clam& en voz altaJ s! &l me lo dio.

)n tropel de recuerdos se amontonaba en mi mente y eso era algo que me pona muynervioso. 4espir& profundamente y me sent& ,unto al ventanal sin de,ar de mirar aquelmedall"n de metal plateado. -ena unos e%traños dibu,os haciendo una especie deespiralK era bastante ligero y colgaba de una cadena. Le di varias vueltas pero no habaninguna inscripci"n. (eforma ordenada! empec& a rememorar la escena.

4ecord& al e%traño individuo y la sorpresa y curiosidad que me caus" verle all! vestido de

aquella forma. Le haba tomado por un apicultor! pero... ni en el hayedo! ni en laspro%imidades haba instalada ninguna colmena. +o conoca bien la zona y lo saba concerteza.

J-al vez hayan puesto alguna en estos 'ltimos das Jpens& sin demasiada convicci"n.En el pueblo todo se saba en seguida! y yo no haba odo ning'n comentario al respecto.

5egu cavilando sobre las posibles razones de la presencia de aquel hombre en elhayedo.

JEl caso es que cuando pens& que era un apicultor la idea me pareci" l"gica. (ecualquier modo! poda haberle preguntado para salir de dudas. 4ecuerdo que pens& en

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ello! pero se me olvid" en seguida. -al vez fue mi propia preocupaci"n! estaba pensandoen otras cosas Jme ,ustifiqu& algo inc"modo conmigo mismo! mientras daba vueltas almedall"n buscando una y otra vez alguna señal de alg'n tipo.

Aquel hombre me inspir" confianza. $or eso a los pocos minutos estaba hablando con &lcomo si le conociese de antes. $ero! hablandoM +o s hablaba! pero ahora recuerdo su

cara fi,a como una fotografa. El no despeg" los labiosO Jtermin& en un diálogo conmigomismo! dando un respingo en el asiento al darme cuenta de lo que acababa de decir.

5in embargo! yo oa con claridad las respuestas a mis preguntas. 5e estableci" undiálogo entre nosotros. Lo habr& soñado todo o habrá sido una alucinaci"n producto delcansancio o la preocupaci"n del momentoM Jme preguntaba una y otra vez mientras unacierta desaz"n me invadaJ. No puede ser una alucinaci"n. -engo aqu el medall"n! el;sensor= como lo llam" &l. :e e%plic" que se trataba de un receptor de energa y queademás tena la facultad de potenciar la que tenemos los seres humanos.

Ahora recuerdo c"mo aquel hombre me lo entreg". Lo llevaba colgado de su cuello y muydespacio se lo quit" y lo puso en mis manos.

:e di cuenta de que al rememorar la escena las imágenes pasaban ante mis o,os comouna pelcula! recordando hasta los más pequeños detalles que antes me haban pasadodesapercibidos.

A partir de ah no recordaba nada más. La siguiente vez que haba visto ese ;sensor=haba sido en el fondo del maletn. C"mo haba llegado allM 5eguramente lo habapuesto yo mismo! pero cuándoM No recordaba en absoluto haberlo hecho.

:e mord el labio. :e molestaba de,ar cabos sueltos pero por más que ahondaba en mimemoria! no lograba ning'n resultado para resolver el enigma del medall"n. Iinalmentedecid seguir avanzando.

9nstintivamente me acerqu& a la mesa y! sacando unos folios en blanco! comenc& aescribir. #aba demasiados descubrimientos! demasiadas ideas revueltas en mi cabeza ynecesitaba ordenar los pensamientos. No comprenda muy bien el alcance de lae%periencia que haba vivido! pero algo en mi interior me deca que haba sido

9. )N ENC)EN-47 (9IE4EN-EB

muy importante y que deba refle,ar punto por punto mis percepciones ahora que a'nestaban frescas en la memoria.

As fui rellenando folios y folios describiendo al individuo. :e sorprend al recordar hastalos más mnimos detalles sobre la fisonoma de aquel hombre! como si los tuviesegrabados en mi cerebro y estuviese mirando una fotografa. 9ncluso hice varios dibu,os!uno del rostro y otro de cuerpo entero. 4ecord& el e%traño smbolo que el desconocido

llevaba impreso sobre su tra,e blanco en el centro del pecho. Era un crculo cruzado por una lnea transversal inclinada.

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Escrib varias notas sobre recetas naturales! f"rmulas curativas aprovechando losrecursos de la tierra y tambi&n algo que me haba interesado desde que ingresara en una7rden #erm&tica en mis tiempos de estudiante el descubrimiento y mane,o de lasenergas! sobre todo de la energa del hombre.

Escriba deprisa! como si temiese que de un momento a otro todo fuese a desaparecer demi cabeza. :ás tarde me preocupara de buscar los porqu&s! pero ahora s"lo deseabaagrupar toda la informaci"n que pudiese sobre el suceso. )na y otra vez miraba aquel;sensor= que era la prueba evidente para m de que no haba sido un sueño! de que enverdad aquello haba sucedido.

Cuando por fin levant& la cabeza de los papeles era ya medioda. $ens& rápidamente enacercarme al hayedo.

JC"mo no se me ha ocurrido antesM A lo me,or vuelve por all! o quizá encuentre alg'nindicio de su presencia.

No lo pens& dos veces. 5al de la casa como una e%halaci"n y a toda carrera me dirighacia el bosquecillo. )na bruma pega,osa se haba adueñado de aquel lugar. #aca fropero no lo sent. 5"lo quera llegar cuanto antes al claro. :e detuve reconociendo el lugar.5! all haba sido. Camin& despacio hacia el haya vie,a donde haba tenido tan particular encuentro! tratando de recuperar el aliento. :iraba alrededor esperando encontrar algo.$ero aquel lugar! como de costumbre! estaba totalmente solitario! ni siquiera los pá,aroscantaban a esas horas. La lluvia y la niebla! o quizá el haber sido testigos de alg'n hecho

e%traordinario! les haba hecho enmudecer.

5acud la cabeza pensando que eso ya eran desvaros. )n par de pasos más y ya estaba ,unto al tronco. Con dedos temblorosos roc& la corteza del árbol. All! tal y como esperabahaba una profunda hendidura! la corteza haba sido raspada. 5! era cierto! alguien sehaba llevado un trozo! una muestraM

No saba si alegrarme por el hallazgo. 5e entremezclaban por un lado la decepci"n de noencontrar más pruebas del suceso y por el otro la comprobaci"n una vez más de que yohaba estado all con alguien.

Camin& en amplios crculos buscando afanosamente alguna prueba! alg'n ob,eto! algoraro que no estuviera antes en el bosque! pero todo fue in'til. -ampoco hall& resto algunode colmenas por all! aunque eso ya lo daba por sentado.

5ent fro. Con las prisas haba salido de la casa en mangas de camisa y la temperaturaera bastante ba,a. #und las manos en los bolsillos y a paso rápido me dirig de nuevohacia el pueblo.

En das sucesivos y obedeciendo a un impulso interno! me sentaba ante la mesa deldespacho y pasaba varas horas escribiendo mis recuerdos de aquel da. Era como si! enalguna parte de mi cerebro tuviese almacenada informaci"n y que por alg'n e%trañomecanismo esa informaci"n fuera saliendo progresivamente al e%terior...

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Aquel encuentro me de," bastante inquieto. No tena todas las piezas del rompecabezas yeso me disgustaba. Continuamente me sorprenda tratando de encontrar e%plicaciones alos hechos. :iraba una y otra vez aquel e%traño medall"n sin encontrar ninguna pista.

Con el paso de los das las cosas se fueron reposando y comenc& a soñar deformaasidua con una serie de escenas y lugares que se repetan una vez y otra. :e vea

volando a gran velocidad por encima de un paisa,e montañoso! pasando muy cerca de lascopas de los árboles y los picachos de los montes.

(urante el sueño tena la sensaci"n de que deba ir a alg'n sitio! pero en lugar de esodaba vueltas y vueltas sobre el mismo sector del terreno. No lograba reconocer el lugar pues la velocidad me impeda distinguir el paisa,e con nitidez. Era como si pasaran unapelcula ante mis o,os a gran velocidad.

(urante varios das estuve inquieto. All deba haber algo que me atraa poderosamente!pero qu& eraM Al despertar siempre me quedaba la sensaci"n de que no haba logrado el

ob,etivo.

)na noche! antes de dormirme! concentr& mi pensamiento cuanto pude en una sola ideasi volva a soñar lo mismo descendera hasta ver el lugar donde me encontraba. #astaque el sueño me venci" martille& mi cerebro una y otra vez con ese 'nico pensamiento.

(e pronto me vi como protagonista de mi propio sueño. Como en ocasiones anteriores!allá aba,o poda ver los picachos blancos con las 'ltimas nieves del invierno. 4einaba laluz del atardecer y el sol teña de tonos violetas los bosques y las montañas.

Las piedras blancas de los impresionantes farallones de los $icos de Europaresplandecan! erigi&ndose como gigantes plateados al recibir los 'ltimos rayos del sol.

-ard& un poco en darme cuenta de que estaba volando despacio. #aba reconocido lasmontañasO Efectivamente! poda contemplar a placer el paisa,e porque me deslizabacomo una pluma de,ándose mecer por una suave brisa.

Al instante reconoc aquellos para,es. (esde mi altura! el @alle de @alde"n de,aba ver todasu belleza. :e senta libre y henchido de maravillosas sensaciones. 5aba que estabasoñando y quera vivir el sueño con toda intensidad. $areca como si el tiempo y el mundo

se hubiesen detenido. -odo era quietud! hasta el discurrir rápido del ro parecaamortiguar su murmullo para no romper aquella paz.

(e pronto me vi envuelto en un torbellino. >ir& a gran velocidad como en una especie deespiral. :e di cuenta en seguida de que ya no estaba en el mismo lugar. El sueño habacambiado repentinamente y me encontr& de cara al firmamento. )n cielo oscurotachonado con miles de estrellas me hizo sentir un e%traño vaco en el est"mago perdidoen aquella inmensidad. El horizonte de BPQ grados a mi alrededor me caus" una profundaimpresi"n y los o,os se me humedecieron.

Al cabo de unos segundos un grupo de estrellas llamaron poderosamente mi atenci"n.Iormaban una especie de amplia circunferencia y dentro pareca estar contenido un

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triángulo is"sceles dividido por la mitad. Cont&! sin saber muy bien por qu&! las estrellasde cada uno de los lados del triángulo.

:e pareca estar ante un ,eroglfico que deba descifrar. No encontr& relaci"n alguna entrelos n'meros que salan de la suma de aquel con,unto de estrellas.

(e pronto el firmamento se volvi" negro y las estrellas desaparecieron. Iue una impresi"ntan fuerte que me encontr& repentinamente sentado en la cama! inmerso en la oscuridaddel dormitorio. #asta varios segundos despu&s no comprend que todo haba sido unsueño y que haba terminado bruscamente! sin darme tiempo a reaccionar.

A la mañana siguiente! mientras traba,aba en el despacho! me sorprend reproduciendo eldibu,o geom&trico que haba visto en mi sueño tratando de hallar alguna relaci"n.

#ice varios dibu,os hasta que uno de ellos me pareci" una fiel r&plica de la imagen quehaba visto en sueños. Coloqu& los n'meros resultantes de la suma de los lados del

triángulo y puse unos n'meros de forma inconsciente.


(e manera instintiva comenc& a dar vueltas a aquella secuencia de n'meros y al finalllegu& a la conclusi"n de que se poda tratar de una fecha RH.

Estuve varias semanas dándole vueltas al tema. (iscurra el mes de mayo y aquella fechase acercaba sin que yo tuviera claro si estaba volvi&ndome loco buscando e%plicaciones ymisterios donde no los haba o si! por el contrario! aquello tena una cierta l"gica. -enamuchas dudas y en ocasiones evitaba conscientemente pensar en el tema! pero era algoque me obsesionaba.

)n buen da! consultando unos antiguos mapas de la zona! me fi,& con detenimiento en el@alle de @alde"n. 5iguiendo el curso del ro se llegaba a unas praderas deforma circular que la gente de por all conoca por Corona. +o tena señalados varios invernales... Jalver mi gesto interrogante por ignorancia! aclar"J los invernales son unas cabañas de

piedra donde se guarda el ganado y los pastos durante el invierno. Curiosamente esasconstrucciones formaban un crculo. )na imagen se qued" grabada en mi retinaK busqu&rápidamente el dibu,o de las estrellas! intent& colocarlo de varias formas y finalmentecomprob& que haciendo coincidir el v&rtice superior del triángulo con una pequeña ermita!el resto de las estrellas enca,aban perfectamente con la posici"n de los invernales.

5era aquella la claveM Era ese el lugarM?u& haba allM #aba estado durante tantosdas sin entender nada que ahora! ante la posibilidad de haber resuelto el enigma! tenaque contenerme para no salir corriendo hacia Corona.

El siguiente fin de semana via,& hasta all. Estaba emocionado. 4econoc el lugar al quehaba ido en más de una ocasi"n.

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4ecorr palmo a palmo el terreno. Con mi dibu,o en la mano verifiqu& la distribuci"n dellugar y comprob& que era una fiel r&plica en cuanto a proporciones y medidas de aquellugar. 3usqu& alg'n indicio de algo e%traño! algo que no enca,ara en aquel ambiente. Noera fácil pues no saba lo que buscaba en realidad. Al cabo de un rato de dar vueltas yvueltas desist decepcionado. Aquello no me conduca a nada.

@olv malhumorado por haber puesto demasiadas esperanzas en un par de coincidenciasque en el me,or de los casos podan ser meras especulaciones alentadas por miimaginaci"n. (urante el camino de regreso recapacit& y volv a pensar en lo curioso deesas coincidencias. Iue en aquel momento cuando decid quemar mi 'ltimo cartucho.(entro de unas semanas sera de 0unio. +o estara en ese lugar ese da. 5i no ocurraalgo me promet a m mismo olvidar el asunto. )na vez tomada esta decisi"n me qued&más tranquilo.

El tiempo que me separaba de aquella fecha pas" muy rápido. 4ecuerdo que la vsperaprepar& mi mochila como un ritual y me encamin& hacia Corona decidido a acampar allesa noche. El da transcurri" muy despacio. Encontr& algunos aldeanos de Cordiñanes! elpueblo más cercano! que segaban los pastos ya altos por aquellas fechas. Aprovech& la ,ornada para recolectar hierbas! hice una buena provisi"n de tila y otras plantas que youtilizaba a menudo. )n da claro y despe,ado haca prever una noche diáfana. $oco apoco la oscuridad fue cayendo sobre el lugar. #aba una hermosa luna que bañaba deplata la pradera!

J?u& bien se está aquO Jpens& disfrutando del momento.


:e tumb& sobre una manta y cara al cielo pase& mi mirada por las m'ltiples lucecitas queparpadeaban inquietas. No s& cuánto tiempo pas"! pero de pronto tuve una e%trañasensaci"n. No pude ver nada pero percib c"mo los mil ruidos de la noche desaparecan.El silencio era absoluto. :e incorpor& sobre los codos pensando que tal vez alg'n lobo seestaba acercando. :ientras aguzaba el odo comenc& a percibir un ligersimo zumbidomuy le,ano. 9ntent& averiguar de d"nde provena y al darme la vuelta hacia el Este! not&c"mo una luz! al principio pequeña como una estrella! iba movi&ndose y agrandándosemás y más. #aba aparecido por detrás de las montañas! en el lado opuesto a la luna que

ya se haba ocultado.:e puse de pie sin apartar los o,os de aquella luz que continuaba aumentando detamaño! acercándose deforma constante. Antes de queme diera cuenta tena sobre micabeza un disco de dimensiones gigantescas.

99. )N @9A0E 9NC4ES3LE

La aceleraci"n de mi pulso en aquel momento debi" sobrepasar todos los lmites. 7a los

latidos de mi coraz"n con más intensidad que el leve zumbido que se escapaba de aquelartefacto luminoso.

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La visi"n de aquella enorme máquina me de," boquiabierto y paralizado. Estaba tanasustado que ni siquiera poda moverme. 5in ninguna duda aquella fue la impresi"n másfuerte de mi vida.

(e repente! sin saber c"mo! me vi envuelto en una especie de pompa de ,ab"ngigantesca. En ese momento perd la consciencia y me sent flotar y elevarme

suavemente.

Cuando abr los o,os me encontr& recostado sobre una especie de sill"n espon,oso. Conla vista todava nublada! parpade& varias veces tratando de acostumbrarme a laluminosidad que reinaba en aquel lugar. :uchas veces haba ledo que ante e%perienciasins"litas de via,es a e%traños lugares los protagonistas siempre se preguntaban mehabr& muertoM +o me haba redo de esas e%presiones pensando que eran ridculas. -easeguro que en aquel momento la posibilidad de estar muerto fue lo primero que mecruz" por la cabeza.

(escubr un destello luminoso frente a m y me frot& los o,os. Al retirar mis manos vi unmedall"n e%actamente igual al que yo haba recibido del ;apicultor=. Al alzar la vista vique penda del cuello de un hombre ,oven! de unos FQ años! moreno! que estabaligeramente inclinado sobre m! observándome.

J3ienvenido.

La voz del desconocido sonaba suave y armoniosa. :e incorpor&! abr la boca dispuestoa responder al saludo pero en vez de eso un mont"n de atropelladas preguntas salieronincontenibles.

J?u& hago aquM! qui&n eresM! d"nde estoyM! qu& quer&is de mM JEl desconocidosonri" y me pidi" con un gesto que tuviera paciencia.

J-ranquilzate 3aldomero. No te ha ocurrido nada y nada te ocurrirá. En seguida vendrána e%plicarte el motivo de tu presencia. No obstante! te dir& que yo estoy aqu comointermediario. Como t'! soy un hombre de la -ierra. )n da emprend un largo via,e paraservir de apoyo a una :isi"n de ayuda a nuestro planeta. Como yo hay bastantespersonas en distintos lugares del 5istema 5olar que están colaborando con los #ermanos:ayores para ayudarles a llevar a cabo su tarea.

Apenas entend lo que me quera decir sobre misiones! terrestres y #ermanos :ayores.

J-' eres de la -ierraM Jpregunt& asombrado! mirando el entorno que le rodeaba.

JAs es! aunque ahora no vivo en ella Jrespondi" con tranquilidad el desconocidoJ minombre es 0on.

J$ero... no entiendo nada! c"mo puedes ser terrestre y via,ar en este aparatoM! y qu&es eso de la :isi"nM! qui&nes son los #ermanos :ayoresM! por qu& me hab&is tradoaquM! qu& tengo yo que ver en todo estoM

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J-en un poco de calma! por favorJinsisti" 0onJ no te inquietesK no va a ocurrirte nada.5i tienes paciencia entenderás en seguida de qu& se trata todo esto. Comprendo queest&s asustado y sorprendido! pero ten confianza y no te preocupesK nadie te va a causar mal alguno.

$oco a poco la seguridad y el aplomo de 0on y sobre todo su voz tranquila y serena me

fueron infundiendo confianza. :i cerebro funcionaba a toda velocidad. :e pareca unsueño lo que estaba viviendo! pero no! no lo eraK all! frente a m estaba 0on tan real comoyo mismo! mirándome y sonriendo como si esperase a alguien! y all estaba yoK podamoverme! tena tacto y vista! estaba vivo y consciente de cuanto me rodeaba.

:ir& alrededor. $or primera vez me fi,& con detenimiento en el lugar en que meencontraba. Era una amplia sala abovedada en la que no haba ángulos o aristasK todaslas formas eran suavemente redondeadas. Las paredes! de color marfil! permitan que atrav&s de ellas se filtrase una luz blancoazulada. No vi ninguna abertura de ventanas opuertas. En el centro de la estancia haba una gran mesa circular sobre la que penda unaesfera multifac&tica. Alrededor de la mesa pude contar siete sillas del mismo material queel sill"n donde yo me encontraba. -enan apariencia metálica! sin embargo su tacto erasuave y espon,oso.

A la izquierda pude ver una serie de paneles y pantallas con gráficos en continuomovimiento. )na gran pantalla central permita ver indistintamente el firmamentoestrellado y la -ierra a gran altura. $oda distinguirclaramente Europa! <frica y parte de Asia 7ccidental! aunque no totalmente! pues las masas de nubes cubran parte de lasuperficie del planeta. )na sensaci"n de miedo me recorri" la espina dorsal poniendo

erizado todo el vello de mi piel. Estábamos en el espacioO! pero eso era imposibleO Nadiehaba conseguido subir tan arriba. :e fi,& en la pantalla tratando de descubrir si se tratabatan s"lo de una fotografa.

Como si adivinara mis pensamientos! 0on me di,o

J#emos tenido que ascender para no ser descubiertos y no provocar trastornosKqueremos pasar desapercibidos Je%plic".

J(e qu& planeta vienesM Jle pregunt&.

J@ivimos en un sat&lite del planeta 0'piter llamado >anmedes J respondi" 0on!dispuesto a satisfacer mi curiosidad.

J0on! Jme sorprend llamándole por su nombreJ yo tengo un medall"n igual al que t'llevas. :e lo entreg" un hombre e%traño que encontr& por casualidad hace alg'n tiempoqu& es e%actamente y para qu& sirveM

0on toc" el medall"n con sus dedos.

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J5e trata de un ;sensor=! un acumulador de energas. Llevándolo sobre el ple%o solar concentra una serie de energas beneficiosas para el cuerpo y la mente! sobre todo adeterminadas horas del da y de la noche.

9ba a preguntarle más cosas sobre ese ;sensor= pero &l continu" hablando.

JAlgunos hermanos tienen la responsabilidad de recoger muestras de la flora y fauna delplaneta. 5abemos de tu encuentro y desde entonces hemos observado con inter&s tusprocesos hasta el da de hoy.

J?uieres decir que todo ese asunto de los sueños y las claves! de las estrellas! del ,eroglfico! ha sido provocado por tiM Jle pregunt& molesto ante la idea de que alguienpudiera estar manipulando mi mente.

0on volvi" a rogarme calma con un gesto.


JNo! no he sido yo. 5"lo soy un terrestre como t' y no tengo poder para comunicarmementalmente. Los #ermanos :ayores te han inducido telepáticamente una serie deimágenes y sueños con el 'nico prop"sito de que este encuentro tuviera lugar! pero esono ha interferido en tu libre albedro! si es eso lo que te preocupa

Los #ermanos :ayores son seres humanos de mayor grado de evoluci"n. 5u tasavibratoria es muy elevada y su conocimiento y dominio de la mente está a años luz del

nuestro. Ellos pueden transmitir y recibir mensa,es telepáticos incluso de un planeta aotro.

J?ui&nes son esos #ermanos :ayoresM Jpregunt& intrigado.

J5on hombres parecidos a nosotros fsicamente. $ronto vendrá uno de ellos parae%plicarte el ob,eto de tu presencia aqu

Nuevamente tuve que tragar saliva y pasarme la mano por la frente para no dudar de loque estaba viviendo. Era real y me estaba ocurriendo a m. $ens& en ello y despu&scomprend que mi aparente tranquilidad era consecuencia de no saber calibrar el alcancede la e%periencia. 7 tal vez fuera la tranquilidad de 0on! o la paz que se respiraba enaquel lugar! o la profundidad del espacio que rodeaba a la nave. Lo cierto es que al pocode estar all ya no tena miedo y confiaba en aquel hombre de mirada tranquilizadora.

@esta un tra,e muy similar al de mi amigo el ;apicultor=! aunque no llevaba escafandra.-ena los o,os pardos y al hablar! su acento delataba su ascendencia vasca.

Estaba enfrascado en estos pensamientos cuando! por el cambio de e%presi"n de 0on!me di cuenta de que algo estaba sucediendo a mi espalda. >ir& en redondo y siguiendo ladirecci"n de su mirada me encontr& con que una puerta corredera se haba abierto y tres

hombres haban hecho su aparici"n. :e qued& bastante sorprendido. Al principio pens&que eran iguales los tres! despu&s al fi,arme con más detenimiento! not& algunas

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diferencias. 5u estatura! peso y formas fsicas eran! yo dira que id&nticas. 5us cabellosrubios y algo largos tenan el mismo color! su piel y el color de sus o,os tambi&n. Noobstante! tenan rasgos que les diferenciaban ligeramente. Eran bastante altos! yo diraque sobrepasaban los dos metros! pero perfectamente proporcionados. -odos ellosvestan tra,e blanco de una sola pieza y en el pecho lucan un escudo con una especie de

dibu,o de un planeta cruzado por una lnea transversal! parecido a las representacionesque hacemos de 5aturno! en seguida reconoc que era e%actamente igual al del;apicultor=.

Cuando entraron en la sala y la puerta se cerr" tras ellos sent un escalofro. (e inmediatome di cuenta de que eran diferentes a nosotros! de que ante 0on yo no haba tenido enning'n momento esa sensaci"n que me recorra la espina dorsal! haciendo que todos missentidos estuvieran alerta. En seguida pens& que esos seres no eran de la -ierra. :icerebro luchaba por ordenar el c'mulo de sensaciones que me embargaban. $erocuriosamente no sent miedo! sino emoci"n.

J3aldomero! estos son tres hombres de >anmedes que han colaborado conmigotray&ndonos en su nave y que ahora nos ayudarán para recibir a nuestro #ermano :ayor.

:e dirigieron una leve inclinaci"n de cabeza y dentro de m pude percibir tres saludosdistintos provenientes de cada uno de ellos. 5in embargo! ninguno de los tres despeg" loslabios. Tnicamente mostraron una leve sonrisa.

:ir& a 0on y &ste debi" notar mi asombro! porque inmediatamente e%plic"

JEllos están un peldaño por encima de nosotros en la escala de la evoluci"n y tienen

dominio de la telepata! por eso pueden llegar a comunicarse mentalmente contigo.

Les observ& increblemente tranquilo. Aquellos hombres irradiaban paz! pero la situaci"nno de,aba de ser lo suficientemente e%traña como para asombrarme.

En el suelo del e%tremo opuesto al que nos encontrábamos se produ,o una aberturacircular como de F metros de diámetro! por la que emergi" de un piso inferior un e%trañoartefacto. 5e trataba de un crculo metálico que tena a ambos lados! enfrentándose!como dos pantallas c"ncavas de unos metros de altura por B de anchura. (el centrogeom&trico de cada pantalla sala una especie de antena. $arecan radares

rectangulares. (etrás de cada pantalla haba un comple,o cuadro de mandos con muchosbotones luminosos.

J@amos a prepararnos Jdi,o 0on mientras me invitaba a ponerme de pieJ. Antes quieroe%plicarte algo. Este ser que ahora vas a ver está muy evolucionadoK de hecho seencuentra un peldaño más arriba que estos otros que nos ayudan! es decir! está dosescalones por encima de ti y de m. La diferencia de vibraci"n entre &l y nosotros es tangrande que no podemos! sin preparaci"n previa! soportar su presencia.(esgraciadamente no tenemos tiempo para esa preparaci"n! por eso &l va a venir hastaaqu en proyecci"n energ&tica! en una energa que nosotros llamamos astral. >racias a la

avanzada tecnologa de esta nave podremos visualizarle ba,o esa especie de arcoenerg&tico que está situado sobre la plataforma circular que actuará como lente receptora

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o condensadora de energa. @eremos una imagen energ&tica en tres dimensiones perotan real como t' y como yo. :e comprendesM

A pesar de no haberme enterado muy bien de las e%plicaciones asent! moviendo lacabeza arriba y aba,o. La verdad es que ya no me caba mayor asombro y estaba! por momentos! mas ansioso de ver a aquel ser.

Los tres hombres de,aron de manipular sobre los paneles de cada pantalla y se dirigieronhacia nosotros hasta quedar a nuestro lado. -odos estábamos a la misma distancia delaparato.

El hombre que estaba en el centro de los otros dos nos dirigi" una mirada y supensamiento nos lleg" con claridad

J@amos a concentrar nuestras mentes e intentemos al unsono emitir la llamada.

-odos cerraron los o,os e inclinaron ligeramente la cabeza. +o hice lo mismo y apenascerr& los o,os percib un sonido mantenido y armonioso en mi cerebro! emitido por los allpresentes

J7777777::::::::::::...O

Era un sonido que yo conoca bien por las enseñanzas de la 7rden! un mantra! comodicen los orientales! que se poda utilizar con dos fines para armonizar la mente o paraemitir una llamada a entidades superiores. 5in embargo en aquella sala tuvo unavibraci"n especial que se e%tendi" por toda la estancia! impregnando cada partcula delaire. -al vez fuera por estar en medio del espacio o porque aquellos hombres eran

capaces de emitir una gran armona! lo cierto es que a pesar de que yo haba repetidoese sonido muchas veces! nunca haba sentido a nivel fsico lo que en aquellos segundospude sentir el discurrir de la sangre por mis venas! el circular del aire por mis pulmones ytodas mis c&lulas llenas de vida. Al mismo tiempo! una luz de color verde el&ctrico parecainundar el interior de mi cabeza e intentaba escapar a trav&s de mis párpados cerrados.

(e pronto aquella vibraci"n ces" y el color verde desapareci". Abr los o,os sorprendido yme qued& mudo por el asombro. Ante nosotros y ba,o ese arco energ&tico! la figuraimponente de un hombre muy alto se estaba terminando de formar. :e qued&

sobrecogido. Era un ser resplandecienteK toda su imagen desprenda luz. 5us cabellosplateados le rozaban los hombros. 5obre el pecho luca un emblema que consista en uncrculo dentro del cual haba un triángulo invertido. (esde sus hombros se deslizaba unacapa blanca que llegaba hasta el suelo. 5us o,os! de un azul intenssimo! destacabansobre su piel increblemente blanca.


No pude por menos que parpadear! turbado ante esa mirada limpia y clara La sensaci"n

de algo grande me embargaba y me hencha el pecho hasta sentir que me iba a estallar.)na especie de energa intensa nos envolvi" a todos los presentes! una energa especial

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que produca un sentimiento de hermandad y amor. :e senta inundado por sentimientosque no podra e%plicar hasta varios meses despu&s.

)na voz clara y segura reson" en mi interior

J>racias! hermanos! por vuestra colaboraci"n.

(espu&s dirigi" su mirada hacia m y! tras una leve pausa prosigui".

J3aldomero! por favor escucha con atenci"nK mi mensa,e va dirigido especialmente a ti.

:e sent como un niño pequeño ante alguien muy superior en todos los sentidos y s"lopude tragar saliva y parpadear en señal de asentimiento.

(urante un buen rato! no podra precisar cuanto! aquel hombre habl" fundamentalmentedel futuro de nuestra humanidad y del planeta. Nuestro mundo iba a pasar por una seriede graves dificultades y pareca que los hombres de la -ierra no estábamos preparados

para afrontarlas.

Ese hombre! y otros muchos! estaban involucrados en programas de ayuda a nuestroplaneta! y para llevarlos a cabo necesitaban personas de la -ierra que estuvierandispuestas a intentar cambiar el rumbo de las cosas.

El abuelo inspir" profundamente y los o,os se le humedecieron por la emoci"n. Elrecuerdo de aquella escena haca revivir sentimientos que surgan de lo más profundo desu ser. 5u voz vibraba mientras narraba con voz lenta y ronca aquellas vivenciasocurridas haca tantos años. 5e abstraa y! mirando las llamas! pareca revivir

mentalmente cuanto estaba contando.

+o permaneca mudo por el asombro y por la emoci"n de aquel momento. ?uerarespetar el ritmo del abuelo! sus silencios! sus pausas. :e daba cuenta de que aquelhombre estaba abri&ndome su coraz"n y depositaba en m una confianza que no habatenido en nadie. :il preguntas se atropellaban en mi cerebro! pero call& a la espera deque &l continuase. La narraci"n era tan completa! tan descriptiva que yo no tena quehacer ning'n esfuerzo para visualizar lo que el abuelo contaba.

(espu&s de la breve pausa! retom" su narraci"n.

JAlberto! no puedo darte! por ahora! más detalles sobre la informaci"n que recibK noobstante! voy a terminar de contarte el resto de lo que ocurri" aquella noche inolvidablede ,unio.

(espu&s de or a aquel ser! tom& la decisi"n de colaborar con ellos. -ena ante m algoque ni siquiera hubiera podido soñar y lo acept&.

Antes de marchar! aquel hombre se despidi" diciendo

J#e de retirarme ya. Espero que esta energa inicial que te anima vaya creciendo con el

tiempo! y alg'n da te sirva para encontrar la raz"n de tu e%istencia.

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$oco a poco la imagen tridimensional que se haba formado ba,o el arco energ&tico fuediluy&ndose hasta desaparecer.

+o no me atrev a dar ni un paso. :e qued& all! mirando al vaco donde antes habaestado ese ser luminoso. (entro de m senta una ine%plicable alegra! al tiempo que unasensaci"n de irrealidad me haca dudar si todo lo que me estaba ocurriendo no sera un

sueño.

0on me sac" de mi abstracci"n devolvi&ndome a la realidad.

J3aldomero! debes regresar a la -ierra. +a está preparada la burbu,a energ&tica que tede,ará en el mismo lugar que te recogimos. -engo algo para ti Jdi,o dándose la vuelta yacercándose hacia un e%tremo de la sala.

Cuando volvi" traa en sus manos un libro.

J5on unos ;manuscritos= que debes leer para tener una idea completa de la graninterrelaci"n que e%iste entre todos los seres del )niverso. ;Conserva este libro como untesoro! pues lo es. #az buen uso de la informaci"n que contiene son muchos datos sobrela historia del hombre. L&elos y pon tu mente en disposici"n de aprender y asimilar cosasnuevas=.

+o permaneca quieto! impresionado a'n por todo lo que haba ocurrido.

0on! con movimientos pausados y casi ceremoniosos! me ofreci" ;un grueso libro depastas blancas=. E%tend mis brazos y lo cog mirando el emblema que haba en laportada. Era un dibu,o de la gala%ia rodeada por estrellas.

5egua mirando aquel emblema cuando de pronto me encontr& de nuevo en el suelo. :ispies se hundan en la hierba de la pradera y sent una brisa fresca que me despe,"totalmente.

9nstintivamente mir& hacia el cielo con el tiempo ,usto de ver como una rueda luminosagiraba a gran velocidad! haci&ndose cada vez más pequeña hasta desaparecer perdidaen el firmamento infinito como una estrella más.

:e de,& caer y sentado en el centro de la pradera! con el libro apretado fuertemente

contra m! como si temiera que de un momento a otro fuera a desaparecer como habaocurrido con la nave! comenc& a llorar.

Era tal el c'mulo de emociones que en aquel momento me embargaba! que s"lo podantener salida con el llanto! un llanto suave pero incontenible que fue calmándome poco apoco.

$or mucho que lo pensara no me caba en la cabeza que una cosa seme,ante pudierahaberme sucedido a m. ?ui&n era yoM $or qu& haban confiado a un pobre veterinariotoda esa informaci"nM

$or otra parte! el hecho de haber vivido una e%periencia tan asombrosa me hacasentirme e%traño! como si no terminara de cre&rmelo. 5era realmente cierto que haba

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via,ado al espacio con seres de otros mundosM Nadie haba conseguido volar tan alto ymucho menos tan rápido! al menos yo no tena noticia de ello. #aca un par de años!cuando acab" la 5egunda >uerra :undial! se hablaba de que pronto el hombre podraponer un sat&lite artificial en "rbita! pero lo que yo haba presenciado era algoinfinitamente más avanzado! no s"lo por el hecho de haber via,ado al espacio! sino

tambi&n por el vehculo en el que fui! una nave espacial tecnol"gicamente a miles de añosde distancia de la más avanzada t&cnica terrestre.

$ens& en la abuela qu& dira ella de todo estoM 5eguro que pensara que haba sufridoalguna alucinaci"n! pero afortunadamente tena una prueba el libro que 0on me habaentregado.

:e senta tremendamente feliz. #aba vivido algo reservado a muy pocos hombres! algomuy importante! tanto como para no guardármelo s"lo para mK pero al mismo tiemposent miedo a la incredulidad de la gente! a que no me creyeran y me tildaran de loco. Elresto de la noche no pude dormir! mirando sin cesar el inmenso cielo estrellado con lasecreta esperanza de que ;ellos= volvieran otra vez.

El abuelo call"! pude ver como rodaba una lágrima por su me,illa.

J-al vez t'! Alberto! alg'n da! puedas comprender lo que te estoy diciendo.

5ent como el coraz"n se me estru,aba. El abuelo continu" despu&s de unos cuantoscarraspeos

JA la mañana siguiente regres& a casa y comenc& a leer aquellos manuscritos. Ah

estaba contenida la historia de la vida! el nacimiento del planeta! de los hombres! de lascivilizaciones que lo han poblado! pero sobre todo de lo que el hombre ha venido aaprender a hacer aqu! en este pequeño planeta. Ah! Alberto! estaban contenidasmuchas! muchas respuestas... en definitiva! toda una filosofa de vida. Aquellos seres medieron una clave para contactar con ellos y mantener comunicaciones telepáticas. Enseguida comenc& con las prácticasK fue una &poca muy dura! sobre todo al comienzo!pues los esfuerzos me parecan muchos y los resultados pocos. :e senta poseedor deun gran tesoro. :i deseo era compartirlo! comunicárselo a todo el mundo. Ese afán mellev" a cometer algunos errores que luego pesaron grandemente en mi ánimo.

5e levant" de su asiento y camin" hacia el amplio ventanal. La luz de la luna llenaderramaba una claridad casi diurna. (e espaldas a mi y escudriñando el cielo prosigui"como si estuviera pasando una nueva página de su vida.

J>racias a un amigo! en mis tiempos de estudiante yo haba entrado en contacto conuna antigua 7rden #erm&tica que pareca conservar intacta la enseñanza tradicional! elsaber desde el principio de los tiempos. (urante muchos años he bebido de esa fuente! ya'n hoy sigo con ellos. Iue la necesidad de canalizar mis inquietudes lo que me llev" aingresar en esa 7rden. $eri"dicamente reciba informaci"n que yo estudiaba con muchointer&s. Cuando tuve esta e%periencia con los ;e%traterrestres= se abrieron ante m

nuevas puertas! nuevas posibilidades! e intent& incorporarlas en mi vida. Las enseñanzascontenidas en los manuscritos! as como las comunicaciones que iba teniendo! me

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proporcionaban una visi"n más amplia de lo que la 7rden me ofreca. Cuando me sentun poco más seguro de lo que tena me di cuenta de que la nueva filosofa no contradecala de la 7rden! sino que le daba una dimensi"n mayor. :e puse en contacto por carta conalgunos miembros con el afán de intercambiar informaci"n. :is me,ores mpetus yenergas se volcaron en contrastar los datos que para m haban sido tan reveladores. En

aquella &poca todas las actividades de este tipo estaban censuradas! y resultaba muydifcil ponerse en contacto con otros miembros.

Iinalmente! me dirig con mis flamantes descubrimientos a la 5ede Central. La respuestade las altas ,erarquas no se hizo esperar. La manipulaci"n! el elitismo y la falta de visi"nde los dirigentes fueron sembrando el miedo y el desconcierto y poco apoco me fueroncerrando todas las puertas. Empezaron a llegar comunicaciones de la 5ede Central sobreel peligro de dar cabida a nuevas in,erencias que no haran sino desvirtuar el verdaderosentido y saber de la antigua y tradicional 7rden. 5ufr una tremenda decepci"nK hubomomentos muy difciles de superar. La impotencia! la frustraci"n y la angustia me hacan

sentirme incapaz de llevar a cabo mi ob,etivo.

$or otro lado me encontraba solo. A pesar de que las comunicaciones con los guase%traterrestres llegaron a ser muy fluidas! el no tener a nadie para contrastarlas me hacasentirme inseguro en muchos momentos y sobre todo! era una responsabilidad que mepesaba como una losa. En las comunicaciones yo reciba datos tan concretos ye%plicaciones tan racionales a mis preguntas! a los que ni la l"gica más aplastante podaplantear la más mnima ob,eci"n. #aba mucho de desmitificaci"n y de claridad en esasteoras! mucho de luchar contra la institucionalizaci"n de todas las ideas! que es elverdadero cáncer de la sociedad. La 7rden! a lo largo de los años! se haba ido cargando

con elementos manipuladores. :i filosofa se vio fuertemente atacada por unos pocosque! como los antiguos sacerdotes! no queran perder los privilegios del poder y elreconocimiento.

Con el paso del tiempo mis fuerzas fueron mermándose y tuve que admitir mi fracaso enel intento de difundir lo aprendido. (iversas enfermedades me mantuvieron apartadodurante mucho tiempo de cualquier actividad e%terior! salvo las de mi profesi"n. Laquietud y el retiro obligados me hicieron comprender que no podra ,ugar el papel que mehaba propuesto.

El abuelo volvi" a tomar asiento ,unto a m y continu" hablando con nostalgia.

JCuando me entregaron los manuscritos! me dieron tambi&n una serie de conse,os yrecomendaciones. Entonces no entend algunas cosas que el tiempo se ha encargado dedesvelarme. Ahora veo claramente que ellos saban que yo no podra llegar hasta el final.5& que pensaban en alguien más! en un posible sucesor y creo que tenan un planperfectamente estructurado.

#izo una pausa! interrumpiendo su relato. @olvi" a bucear con su mirada en m. Enaquellos momentos yo estaba ya totalmente en tensi"n! esperando que el abuelo! de

alguna forma! me diera entrada! me invitara a romper el silencio. $ero &l pareca sumidoen un mar de recuerdos.

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$or fin me decid a hablar.

JAbuelo! lo que me has contado me ha de,ado absolutamente boquiabierto. 5i no vinierade ti pensara que me estaban tomando el pelo. Ahora no s& qu& pensar. -e das cuentade lo que me has contadoM )n via,e espacial en ovni y con e%traterrestresO 5i pareceuna historia de ciencia ficci"nO Además! lo que el ser energ&tico te cont" debi" ser muy

importante! porque si no! no te habran transportado fsicamente. -engo muchsimascosas que preguntarte! abuelo! pero hay algo que me inquieta! por qu& me lo hascontado a mM $or necesidad de contarle a alguien tu secreto! o por algo que serelaciona conmigoM

$or primera vez su voz son" cansada.

J+a no voy a contarte nada más! pero si quieres informaci"n la tendrás. 5"lo necesitoorte decir que ese inter&s que manifiestas es algo más que curiosidad! que deseasconocer más para descubrir esa filosofa de vida de la que te he hablado. El tiempo

apremia y los acontecimientos que se avecinan son muy graves.

Las 'ltimas palabras resonaron cargadas de tristeza.

J4ealmente tengo una curiosidad enorme! siempre me han atrado los temas de cienciaficci"n! de civilizaciones del futuro! de otros planetas... pero no es s"lo esoK tambi&nquiero conocer esa filosofa de vida que te enseñaron. :e gustara saber el porqu& de lascosas! de la vida y la muerte! en fin! de la raz"n por la que he venido a este mundo. $or otra parte! me gusta tu forma de ser! y si es fruto de esas enseñanzas! pues con mayor motivo. 5 abuelo! quiero conocer más.

:e pareci" percibir que se le aflo,aban los m'sculos al abuelo mientras me oa. Iue comosi se le soltasen las amarras o como si hubiese entregado una pesada carga. 5e sinti"feliz! su e%presi"n haba cambiado.

Lentamente se levant" y sali" del sal"n.

5orprendido por su reacci"n me puse en pie sin saber qu& hacer d"nde haba idoMNotaba un hormigueo constante en las piernas y! como siempre que me emocionaba oviva algo importante! senta el est"mago atenazado por los nervios.

A los pocos minutos el abuelo reapareci" trayendo en sus manos un sobre grande. 5ecoloc" frente a m y me mir" muy serio. En sus o,os descubr dos lágrimas que pugnabanpor no caer. No di,o nada! abri" el sobre y e%tendi" sus dos manos haca mi ofreci&ndomesu regalo. ;)n grueso libro de pastas blancas con un dibu,o de la gala%ia rodeada por estrellas=! que aunque no cont& estaba seguro de que seran veinticuatro! esperaba ser recogido por una mano amiga que diera vida a cada una de sus páginas.

La carretera serpenteaba entre los montes. Estaba comenzando a oscurecer y los árbolesque flanqueaban el camino movidos por el viento! proyectaban sobre el asfalto sombrase%trañas. #aba comenzado a llover.

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:ientras conduca el coche! tratando de concentrar la atenci"n y no apartar los o,os de lacarretera iba rememorando una y otra vez lo que haba vivido durante el fin de semana encasa de los abuelos.

#aca tan s"lo horas que haba hecho el camino en sentido inverso! respondiendo auna llamada escueta del abuelo ;Necesito hablarte! ven en cuanto te sea posible=. Ese

cortsimo mensa,e telef"nico fue suficiente para movilizarme de inmediato! yo le conocabien y saba que s"lo poda tratarse de algo importante.

$ero las conversaciones mantenidas durante el fin de semana haban superado todas mise%pectativas. #aba convivido con los abuelos desde niño durante todos los veranos!senta por ellos un gran cariño y admiraci"n y su figura para m era la representaci"n de lacoherencia y el buen hacer.

:uchas veces habamos contrastado ideas y filosofas. +o era una de las pocas personasque conoca su vinculaci"n con la 7rden desde que se fuera a estudiar @eterinaria a

:adrid. Aquellas enseñanzas que recogan el saber oculto de la humanidad desde lostiempos del antiguo Egipto haban sido para &l un aut&ntico manantial que calm" durantemuchos años su sed de conocimiento. 8l siempre me deca que aquella semilla eraaut&ntica y que aunque admita mis criticas sobre la ;comercializaci"n= de ese saber! noobstante ah haba grano! s"lo haba que hacer la labor de separar la pa,a del trigo! peroel que de verdad tena ansias de b'squeda lograba encontrar respuestas.

+o nunca me sent atrado por la 7rden! vea demasiado la inmensa estructura ,erárquicaen la que se haba convertido por su afán en difundir y divulgar sus enseñanzas. Era denuevo una gran instituci"n con un organigrama que se diferenciaba muy poco del decualquier multinacional.

#asta ese momento haba pensado que todo el baga,e del abuelo haba surgido de susestudios en la 7rden! c"mo era posible que hubiera mantenido su secreto durante tantosañosM :e pareca increble! a pesar de que &l deca que el tronco era com'n! a m mecostaba traba,o admitir la interrelaci"n que poda e%istir entre una Escuela #erm&tica muyantigua y unos seres de otros planetas involucrados en unas supuestas misiones deayuda a la -ierra! seres cuya tecnologa estábamos a'n muy le,os de alcanzar.

Cierto es que desde que me cas&! haca dos años! nos habamos distanciado un poco y

las visitas nunca eran tan prolongadas como en el pasado. 5in embargo! raro era el mesque no nos acercábamos por 3ur"n para pasar con ellos un fin de semana. + el abuelotodos esos años guardando celosamente esa increble e%periencia...

:iraba de vez en cuando al asiento de al lado donde descansaba el manuscrito. Allestaba! patentizándome! que todo haba sido verdad.

A medida que transcurra el tiempo iba dándome cuenta de que haba credo la historiadel abuelo más de lo que pensaba! de que a pesar de lo ins"lito de los hechos! estosenca,aban como piezas irregulares de un puzzle.

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+ ah me encontraba! camino de Le"n! donde -eresa me esperaba. -endra quecontárselo todo! el abuelo me haba hecho prometer que compartira con ella la lectura delmanuscrito. ?u& pensaraM C"mo iba a reaccionar cuando le contara que nuestroabuelo 3aldomero haba via,ado haca más de G años en una nave tripulada por serese%traterrestres y que desde entonces haba mantenido contactos esporádicos a nivel

telepático con ellosM A partir de ese momento! mi preocupaci"n durante el resto del via,e fue tratar de hallar elmodo de transmitirle a -eresa la historia de la forma más verosmil posible. -enamos queleer el libro y tratar de aplicar en todo momento la l"gica y el razonamiento! entre los doslograramos una mayor ob,etividad. Cuando termináramos volveramos a 3ur"n parahablar con el abuelo! &l nos esperaba con el resto de la informaci"n que Jyo no sabamuy bien por qu&J ahora se haba callado.

La reacci"n primera de -eresa fue! como era de esperar! de sorpresa. +o intentabareproducir el relato del abuelo de la manera más fiel que era capaz! aunque me dabacuenta de que me faltaba la seguridad con que &l me lo haba dicho. #aba cosas queincluso a mi me costaba creer y eso se trasluca en mis palabras.

Al final! despu&s de varias horas de conversaci"n nos encontramos ante el momento queambos esperábamos con e%pectaci"n enfrentarnos a la lectura de los manuscritos.

En aquel momento ninguno de los dos podamos imaginar lo importante que iba a ser aquel libro en nuestras manos! el cambio que de una forma progresiva se iba a producir en nuestras vidas.

Admitir la posibilidad de que la historia del abuelo fuese real era una revoluci"n enmuchos de nuestros esquemas mentales! pero el contenido de ese libro iba a suponer una revoluci"n a'n mayor.

999. L75 :AN)5C49-75 999a 9N-47()CC9UN

#emos enseñadoO Nos centramos en el cuerpo y cuando &ste se hace vie,o nos damoscuenta que el "rgano menos desarrollado es el que tiene las claves de la vida.

=Esta historia que hoy! al final de mis das como ser humano! voy a contaros! no es una

biografa! pues sera demasiado e%haustivo y además no os servira de mucho! pues ess"lo una vida! no LA @9(A. $or el contrario! tratar& de transmitir aquellas cosas que sonlas que hoy me van a permitir dar este nuevo paso. Aquellas cosas que el hombre busca ypor las cuales vive! lucha y muere cientos de veces. Lo hago porque 58 ?)E (E37#ACE4L7! porque una fuerza que ya ha empezado a formar parte de m! as me lo e%ige.

=7s hablar& del hombre! del papel que desempeña en la Creaci"n. (e c"mo siendo parteintegrante de la Naturaleza! lleg" a agredirla! para luego cuidarla y protegerla. (e c"mo!s"lo la consciencia! puede hacer identificar a la Naturaleza como una madre. Al principiose depende de ella como un reci&n nacido depende de su madre. Luego el hombre

adolescente se rebela contra ella y la repudia y agrede! pensando que &l lo puede hacer me,or. 5"lo cuando es adulto el hombre vuelve su mirada y ve a una madre que le ha

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dado todo! su sangre! su casa! su leche! su calor ... y siente amor nuevamente por ella.@osotros! hombres de la -ierra! sois adolescentes! unos más y otros menos! pero a'npensáis que pod&is enmendar errores producidos por el Cosmos.

;@uestro siguiente paso es volver la vista a vuestra madre y vivir con ella y para ella!porque un da! al igual que yo hoy! tendr&is que decir adi"s para volver a ser parte de ella!

de su energa! de su fuerza. $ara volver a ser! como parado,a repetida en tantasencarnaciones! padre y madre de vuestra madre. Cuando aprendáis a amar a vuestraanciana madre! a cuidarla y protegerla! cuando hayáis comprendido que ella os necesita!os convertir&is en su fuerza vital! para que en ella sigan viviendo vuestros hi,os y los hi,osde vuestros hi,os=.

;5oy >eenom! un ser humano que ha recorrido un largo camino por el sendero de laevoluci"n! un duro aprendiza,e me ha ido llevando a trav&s de milenios hasta el punto enque hoy me encuentro! pr"%imo ya a trascender del plano fsico. #e pasado por todos losestadios de la etapa humana! desde la manifestaci"n más burda hasta la más sutil! desdela inconsciencia y la duda! a la consciencia y la seguridad! desde la intuici"n a la certezade saber! al fin! para que he sido creado.

;:is palabras son para vosotros! hombres de la -ierra! vosotros que os trazáis un caminomuy corto! que os adelantáis como todos los adolescentes al futuro del hombre! osquedan a'n miles y miles de años para alcanzar lo que llamáis la sabidura! ?)E N7 E57-4A C75A ?)E LA C7N5C9ENC9A (EL 74(EN ?)E (E3E -ENE4 @)E5-47:)N(7! y cuando hablo de mundo me refiero a esa porci"n de )niverso que el hombredebe conocer paso a paso! vida tras vida! generaci"n tras generaci"n.

;)no de los hitos que el ser humano se encuentra al llegar al punto donde estáis! esconocer su situaci"n e%acta. (e d"nde viene! d"nde está y hacia d"nde va.

;Conocer someramente las etapas del camino evolutivo! nos hace afrontar con másseguridad el programa evolutivo de cada vida! conocer los logros y los fracasos adquiridosy en definitiva! aumentar la C7N5C9ENC9A que es el me,or indicativo del avance.

;Cuando decimos que el hombre no está solo en su )niverso! no s"lo hablamos de lae%istencia de otros mundos similares! sino que tambi&n hacemos referencia a su origen ya su futuro.

;5i pusi&ramos escalones hipot&ticos a la manifestaci"n del )niverso desde su principiohasta su reintegraci"n! veramos que el primer captulo de la historia!

/.G6! y lo son! por ser los primeros del escal"n humano con capacidad /garanta de usodel libre albedro hacia lo positivo6 para servir de referencia a sus hermanos del peldaño.F. + as llegaramos al .H! :aestros de los . y a los .D! /los 1'ltimos1 humanos! queserán! a su vez! los 1primeros1 en formar parte del primer escal"n del plano energ&tico oquinto gran peldaño6.

=5i he utilizado este smil de la escalera! es por su sencillez y claridad para retenerlomentalmente. 5"lo es una forma de dividir y razonar el camino de la evoluci"n.

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=Es agradable verme refle,ado en cada rellano del pasado! no os pod&is imaginar elcamino que os queda para llegar al final de vuestro trayecto como seres humanos! comotampoco os imagináis las maravillas que os aguardan esperando ser descubiertas por vosotros a lo largo de LA @9(A.

=:e gustara! como un primer paso! contaros c"mo naci" vuestro planeta y c"mo surgi"

en &l la vida. Las hip"tesis mane,adas por vuestros cientficos se van apro%imando cadada más a la realidad! pero a'n les falta mucha humildad para hallar la verdadera raz"n dela vida! porque no se trata s"lo de un proceso fsico! sino fundamentalmente energ&tico.Es la energa vital la que permite a un ser inerte vivir. 5in esa energa! los cuerpos! antesvivos! se descomponen! les invade el caos. La vida es armona! la muerte caos. :irad avuestro alrededor y ver&is que todo es energa. Cuando esa energa se pone al serviciode la evoluci"n! surge la vida. Estoy hablando de la más sutil de las energas el amor.

;@uestro planeta! la -ierra! naci" de una forma similar a como nacen todos los planetasen el )niverso partiendo de su estrella! de su sol. )na liberaci"n de energa positiva queal compensarse con energas de signo contrario dio lugar a una masa incandescente quetom" una "rbita alrededor del astro que la gener". 5e haba creado el primer peldaño dela escala evolutiva! el 4eino mineral! Cuando la masa se enfri"! su atm"sfera compuestapor carbono e hidr"geno permiti" que! por la acci"n de las m'ltiples radiaciones solares!los elementos qumicos depositados en la corteza fueran el caldo de cultivo que a lo largode milenios diera lugar a lo que llamamos vida.

;-odo lo que acabo de deciros responde a un plan! todo tiene un porqu&! una raz"n y unae%plicaci"n que s"lo necesita de tres elementos para ser comprendida humildad!

paciencia y deseos de conocer! de saber! en definitiva curiosidad=.999. L75 :AN)5C49-75 999b. $rimera manipulaci"n gen&tica

;$asaron millones de años durante los cuales realizamos visitas frecuentes! tanto paraobservar el desarrollo del sistema ecol"gico del planeta! como para incorporar nuevasespecies vegetales y animales que complementaran el equilibrio del sistema ecol"gico dela -ierra. La Confederaci"n de :undos #abitados de la >ala%ia haba estado observandola evoluci"n del ,oven planeta y consideraron que haba llegado el momento de dar unnuevo paso adelante colaborar al despertar de la vida inteligente.

=Eso ocurri" hace mucho! mucho tiempo! apro%imadamente tres millones de años devuestra era. +o tuve el privilegio de participar en esa misi"n.

;3uceo en mis recuerdos y visualizo! como si lo estuviese viviendo! aquella maravillosae%periencia

;Nuestra nave atraviesa el espacio a velocidades que s"lo podrais admitir en vuestrossueños! cada uno de los componentes de la e%pedici"n sabe muy bien cual es su funci"ny la realiza en silencio.

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;$or fin aparece ante nosotros el ob,etivo LA -9E44A! es una pequeña esfera! pocobrillante! sin sat&lite alguno y que se mueve lentamente en una amplia "rbita alrededor delsol.

;Lo que va a suceder en este planeta ya ha sucedido cientos de veces en otros tantosplanetas. 5in embargo! no por haber sucedido tantas veces es menos importante. Creo

que es necesario para el hombre asomarse a la

=EB :aestro ha colocado la esfera plateada en la vertical sobre la cabeza del macho.-odos los presentes se recogen en meditaci"n! esperando! mientras el techo de la b"vedase abre lentamente de,ando ver un firmamento sobrecogedor. Al cabo de unos minutos unamplio haz de luz se hace visible al entrar por la abertura! mientras que la esfera! a modode reductor! la concentra en un rayo finsimo que se proyecta sobre la frente del animalque tiene ahora sus o,os cerrados. $ermanece as durante unos segundos! despu&s laesfera! suspendida en el aire! se traslada sobre la cabeza de la hembra y de nuevo unpenetrante rayo de luz vuelve a proyectarse sobre el centro de su frente achatada.

=La trascendencia c"smica de este momento viene marcada por el paso de animalirracional a incipiente ser humano. La labor consciente de estos #ermanos que se prestancomo medio para que se cumpla LA LE+ tiene un valor determinante para todos los sereshumanos! pues de esta manera tiene lugar! energ&ticamente! una modificaci"n gen&tica!que hará que sus cerebros de primates

;.. .(esde hace tiempo los animales de la -ierra se han acostumbrado a nuestrasesporádicas visitas. Como siempre! nuestra atenci"n va dirigida a la manada de simios.Cada vez que nos acercamos se sienten sobrecogidos y a la vez atrados por lairradiaci"n de nuestra nave. A veces! además de observarles desde le,os! les invitamos aentrar. Es entonces cuando tenemos la oportunidad de mirarles a los o,os y profundizar enel naciente mundo de sus sentimientos y sus deseos! de calibrar su desarrollo fsico ypsquico. A medida que les hemos ido observando saban que su deber era avanzar!evolucionar! que sus hi,os y los hi,os de sus hi,os se veran beneficiados por suse%periencias! por sus refle%iones y sus descubrimientos. -odo su baga,e se transmitira asus descendientes por herencia gen&tica. Cada hi,o recibirá en s los logros de los padres.Esa idea de continuidad estaba impresa en cada una de sus c&lulas=

;#ace muchos miles de años que el hombre e%iste sobre el planeta -ierra! lase%periencias de todos esos años se han ido acumulando! no s"lo en el inconsciente!como en los simios! sino tambi&n en el incipiente consciente! ampliándolo cada vez más.

=EB hombre ya ha dado un paso adelante en su evoluci"n. Cuando vivi" la manipulaci"ngen&tica se coloc" en el primer peldaño de la escala humana. Ahora! despu&s demilenios! ya se encuentra en el segundo peldaño. Este avance viene marcado por sudesarrollo cerebral.

=Este nuevo sentimiento maternal de las hembras! arranca desde el comienzo de lamanipulaci"n gen&tica y se va desarrollando progresivamente! haci&ndose más patente amedida que evolucionan los individuos. Es el origen de algo que desembocará! cuandoadquieran la consciencia! en el sentimiento familiar. Además hay una necesidad

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psicol"gica de las hembras de ser 'tiles a la comunidad! protegiendo y cuidando a los quemás adelante serán la tribu. 5in esa protecci"n el ndice de mortandad sera muchsimomayor y se correra el riesgo de desaparecer como especie...

=...Los das pasan. 3a,o las pieles la figura de la mu,er tambi&n va cambiando. 5u vientreha crecido indicando claramente que dentro de poco la tribu tendrá un miembro más. Los

senos han duplicado su tamañoK son como una promesa de que cuando nazca el hi,o! lanaturaleza le procurará alimento a trav&s de su madre.

;Esta mu,er! como las otras! pasará varias veces por esta e%periencia. No saben por qu&!pero todas esperan ese da en que la vida pase en silencio a su lado y les rocesuavemente el vientre.

=(esde ese momento aumentará su utilidad e importancia para la tribu. 5erán mu,eres yserán madres. Estarán cumpliendo con la parte que les corresponde en el cuidado ycontinuidad de la tribu. La paternidad se ad,udicará al ,efe! ya que es &l el responsable de

la seguridad...

=7tro de los hitos importantes en la vida de los hombres primitivos fue el descubrimientodel fuego! porque acarre" una serie de avances psicol"gicos muy sutiles e igualmenteimportantes.

;-odava viven en cuevas. A veces pintan en las paredes cosas sencillas como manos!lanzas o peces. 5on trazos simples como los de un niño. Cuando consiguen mantener unrecuerdo de algo! lo pintan! o cuando tienen una parte de su anatoma dañada la pintantambi&n! elevado. Este hecho no de,aba de sorprender al ,efe de la tribu que vea c"mo

cada da la muerte se llevaba a varios miembros de la tribu. 5i no eran atacados por lasfieras! ni estaban enfermos $or qu& moranM

=EB hambre era la llamada de alarma de la vida! un mecanismo para sobrevivir! no unamolestia que haba que calmar. La caza era la vida.

=La muerte fsica haba sido algo cotidiano y misterioso que s"lo podan llegar a entender si era violenta! no si era por inanici"n o enfermedad. Este hombre ha sido capaz de unir elconcepto 1falta de alimentos1 al concepto 1muerte1 y crear como resultante el concepto1caza1.

;Crear un concepto significa dar sentido a una cosa que en este caso se haca de formaintuitiva! s"lo para saciar el hambre. El sentido de la caza es el de la supervivencia! no elde saciar el hambre! y eso fue una de las cosas que! refle%ionando! llegaron a descubrir estos hombres.

;Este paso fue muy importante. 5era la antesala de los ritos funerarios y de cuestionarsepor primera vez la vida y la muerte. 5us vidas tienen ya una nueva dimensi"n=.

999. L75 :AN)5C49-75 999e. 5egunda manipulaci"n gen&tica. #ombres conscientes/#ombres .F6

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;Ahora llegamos a trav&s de este via,e por el pasado a una página muy importante paravosotros! es un hito en la historia de vuestro mundo! algo que s"lo sucede una vez encada planeta y que es de una gran trascendencia para el Cosmos.

=Los hombres primitivos que poblaban la -ierra! como hab&is podido observar! han idoavanzando paso a paso y han llegado al punto de necesitar la ayuda de #ermanos el

poder! sino el deber! fundamentado en un conocimiento de las leyes que rigen el)niverso 1)n )niverso equilibrado debe tener unas leyes ,ustas! universales y eternas ys"lo el hombre con su ignorancia puede alterar el orden y desequilibrar el mundo en elque vive. $ero afortunadamente el )niverso es infinito y las atrocidades de toda la vida deun hombre! de una sociedad sobre un planeta! desencadenan los mecanismos deregulaci"n del Cosmos y! ese hombre! esa sociedad! tendrá que compensar sus errores1.

;$ara todos los seleccionados! formar parte de la e%pedici"n a la -ierra es muyimportante. No obstante! para los que se queden! hay otros traba,os que hacer en apoyode la e%pedici"n. El esfuerzo realizado durante la preparaci"n se ve ahora recompensado.

;#ace alg'n tiempo que se suspendieron las clases prácticas. -odos los conocimientosnecesarios se han adquirido tras largos años de dedicaci"n. +a no via,arán a la -ierrapara observar y recoger datos! sino para establecerse y traba,ar 1in situ1. Les ha llegado elmomento de poner en práctica uno de los a%iomas que repetidamente recibieron de sus:aestros V-7(7 L7 ?)E 5E 4EC93E E5 $A4A (A41.

=La e%pedici"n está compuesta por e%pertos en bioqumica y bioenerg&tica! botánica!geologa! sociologa! psicologa y otras especializaciones que se han considerado 'tilespara la misi"n. -odos están listos para embarcar ,unto con sus :aestros.

=5u preparaci"n mental ha sido igualmente e%haustiva. #an tenido que aprender losprincipios que rigen la vida en la -ierra! su historia! su evoluci"n! sus mutacionesgen&ticas naturales que han convertido a los peces en anfibios! a &stos en reptiles! a&stos a su vez en aves! para desembocar! algunos de ellos! en mamferos. -ienentambi&n un profundo conocimiento de la biologa terrestre! de la estabilidad tel'rica! de suestructura geol"gica! de la ecologa.

;-odos esperan con emoci"n la partidaK concentran sus mentes en los componentes dela e%pedici"n quienes muy despacio! comienzan a entrar en la gigantesca nave que les

transportará a la -ierra.

;5ituados en sus puestos de traba,o! los e%pedicionarios reciben telepáticamente las'ltimas instrucciones. Es una concienciaci"n colectiva sobre la finalidad y trascendenciade su traba,o.

;$ara Apu casi no e%iste la noche! y menos hoy que miles de luces multicolores de lagran ciudad flotante empiezan a activarse. Es un da de alegra y felicidad. $or fin rumbo ala -ierra! en un via,e sin apenas tiempo ni espacio.

;-odos unidos! concentran su mente para ponerla en cone%i"n con los sistemas vitales denavegaci"n. Apoyados por su avanzada tecnologa logran la e%pansi"n de los espacios

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interat"micos de la materia que constituye la gran pirámide y todo lo que alberga en suinterior! sin perder por ello su fuerza de cohesi"n. As podrán trasladarse a la -ierra enpocos minutos para! una vez all! reducir los espacios interat"micos a su posici"n natural!es decir! constituyendo nuevamente materia visible...

;...La -ierra hace GQ.QQQ anos.

;Amaneca! el cielo se iba iluminando poco a poco con una luz difusa! a'n brillabanalgunas estrellas como testigos perezosos que parecan negarse a marchar. $rimero sede,aron ver los perfiles de las montañas! despu&s las siluetas de los árboles recortándoseen el horizonte ... poco a poco la batalla entre la luz y la oscuridad llegaba a su fin. El solapareci" bañando de dorados refle,os todo el paisa,e.

;Estamos en una zona conocida por vosotros como 9raq. #ace

GQ.QQQ años que la gran nave de Apu lleg" a la -ierra y se asent" en este lugar. 5e eligi"

este emplazaW =)n buen da descubrieron con e%trañeza que la gran pirámide luminosa habadesaparecido. $asaron los años y muchos todava recordaban la Ciudad habitada por losdioses. (e generaci"n en generaci"n fueron transmiti&ndose fantásticos relatos sobre loshombres altos y rubios! unos a'n los buscaban! otros miraban al cielo esperando ver aparecer aquella ciudad flotante de la que les hablaban sus mayores! algunosconstruyeron pequeñas pirámides tratando de imaginarse c"mo fue aquella primera...=

999. L75 :AN)5C49-75 999f. Las >eneraciones de la -ierra. La Escala C"smica

;-odo en el Cosmos está relacionado! as! cada uno de los planetas del )niverso cumpleuna funci"n muy importante que s"lo &l puede cubrir. Los planetas son seres vivos quenacen! crecen! se desarrollan! enferman y alg'n da mueren. (urante su larga vidadistintas civilizaciones ocuparán ese planeta y se establecerá una simbiosis entre &l y lahumanidad que lo puebla. 5i el hombre evoluciona! el planeta tambi&n lo hará! pues al ser respetadas las leyes de la Naturaleza &sta se desarrollará en toda su plenitud y armona.

;$ero! volvamos a la -ierra. El hermoso planeta azul es muy ,oven a'n! sin embargopuede ya contarnos una vasta historia al albergar a lo largo de su e%istencia a tres

generaciones de seres humanos.=)na generaci"n de un planeta es un colectivo de personas o espritus que decidenrealizar una tarea com'n durante un periodo de tiempo! al cabo del cual! si en su mayorahan alcanzado el ob,etivo se produce el cambio de generaci"n de esa mayora a unaetapa superior en la escala evolutiva. 5i no lo han logrado pasarán 'nicamente aquellosque hayan realizado durante sucesivas encarnaciones un esfuerzo mantenido! con lo quesu ser integral tendrá una vibraci"n acorde a la nueva etapa.

;Cada generaci"n tiene un plazo previsto por el colectivo. En el caso del planeta -ierraese plazo suele ser de se generaron los grandes cataclismos geol"gicos que lasdiferentes tradiciones nos han hecho llegar como (iluvio )niversal.

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=Los cambios geol"gicos que marcaron el final de la generaci"n atlante modificaronmasas continentales y borraron casi en su totalidad los vestigios de esa generaci"n. Atlántida y Lemuria desaparecieron ba,o las aguas y los continentes se reconfiguraron alaspecto en que hoy los conoc&is. 5in embargo! estos acontecimientos no sucedieron dela noche a la mañana. 5u comienzo ocurri" hace G.QQQ años y su final hace

apro%imadamente B.QQQ. (urante ese tiempo! naves de la Confederaci"n de :undos#abitados de la >ala%ia fueron recogiendo especies animales y vegetales parasalvaguardarlas del cataclismo y poder reintegrarlas a su hábitat natural una vez hubierapasado todo.

=(e la misma forma! muchos hombres que haban alcanzado un grado de evoluci"nacorde con el de sociedades arm"nicas que pueblan otros planetas! fueron llevados aellos para seguir su ascenso evolutivo. $or el contrario! quienes no alcanzaron ese gradode evoluci"n tuvieron que repetir sus e%periencias nuevamente en la -ierra! dando lugar ala -E4CE4A >ENE4AC9UN! la actual! la cual está constituida por tres tipos de razas

humanas diferentes

=La raza blanca! compuesta por los terrestres que sobrevivieron al cataclismo y que nohaban alcanzado el nivel evolutivo suficiente para acceder al siguiente escal"n en laescala evolutiva. Eran los descendientes de los uranitas que haban sido trado haciaG.QQQ años.

=La raza negra! procedente de un planeta que sufri" alteraciones en la "rbita alrededor desu sol! como consecuencia de las cuales se vio modificada su masa y su atm"sfera! loque provoc" que sus habitantes tuvieran que ser trasladados a la -ierra.

=La raza amarilla! procedente de un sat&lite de 5aturno ya desaparecido. Al parecer! lacausa de la desaparici"n fue la incorrecta utilizaci"n de la energa at"mica! que provoc"!al estallar! el cintur"n de asteroides y polvo que forman los conocidos anillos de 5aturno.La raza ro,a es el resultado de un mestiza,e ocurrido en ese planeta.

=0unto a todos estos hombres vinieron algunos terrestres de la generaci"n atlante queantes del cataclismo haban sido sacados de la -ierra por los #ermanos :ayores yllevados a colonias donde se ocuparon en aprender y practicar un modo de vida basadoen el respeto y el equilibrio. Estos hombres vinieron a la -ierra como $atriarcas y dieron

referencias sobre cuál era el ob,etivo a lograr! a la nueva generaci"n que comenzaba.=EB ob,etivo era el mismo que el de cualquier generaci"n de cualquier planeta aprender aconstruir sociedades arm"nicas! basadas en relaciones de intercambio ,usto entre todoslos hombres. Aprender a regular las dimensiones inferiores! vegetal y animal! basándoseen el equilibrio ecol"gico. Aprender a no interferir en la evoluci"n del hombre y del planetaque le sirve de soporte=.

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+ un buen da terminamos de leer los manuscritos. #aban transcurrido algo más de dosmeses desde que el abuelo me hiciera entrega de su preciado secreto. 5i tuviera quehacer un balance de ese tiempo tendra que admitir que fueron das muy intensos en losque se removan continuamente nuestras estructuras mentales.

La e%periencia del abuelo y más tarde la lectura del libro fueron un aut&ntico revulsivo en

nuestras vidas. -anto -eresa como yo nos sentamos como si hubi&ramos descubierto unanueva dimensi"n de las cosas! todo pareca tener más sentido. #aba momentos en quenos asaltaban las dudas! era todo tan increble! pero a la vez resultaba tan posible! tanl"gico que fuera as. -uvimos que hacer verdaderos esfuerzos para no contárselo a todoel mundo! necesitábamos contrastarlo con la gente para ver cual era la respuesta de losdemás! sin embargo 3aldomero haba insistido en que todava no di,&ramos nada.

:eses más tarde entend por qu& la insistencia del abuelo en que compartiera con -eresala e%periencia! casi sin darnos cuenta nos encontramos los dos participando de unproyecto com'n tratar de desenmarañar un ovillo que estaba muy enredado.(escubrimos nuevas facetas en la comunicaci"n! nuevas potencialidades en el otro ysobre todo particularidades de la personalidad que antes se nos anto,aban como barrerasahora no sabamos muy bien por qu& se haban convertido en factores complementarios.

Cuando cada noche nos sumergamos en la lectura del libro! en comentarlo! en identificar los esquemas... estábamos sin saberlo poniendo nuevos ladrillos s"lidamente asentadosen nuestra relaci"n de pare,a. Nos haba ido bien hasta entonces! no tenamos másconflictos que los habituales! pero sin embargo participábamos de dos mundos diferentesy eso en ocasiones creaba distancias! yo con mi traba,o en el peri"dico con horarios

irregulares y ella con sus clases provocaban que muchas veces no nos encontráramos enlos momentos y lugares que queramos. $ara cada uno el traba,o era muy importante ycada uno de nosotros miraba en su direcci"n! eran como dos pompas de ,ab"n que lomás que lograban era llegar a tocarse tangencialmente pero nunca a mezclarse.

La historia del abuelo nos hizo mirar a ambos en la misma direcci"n y ah fue dondeempezamos a encontrar puntos en com'n. A m me vena muy bien el realismo de -eresapara hacerme ba,ar los pies a la tierra y ella necesitaba de mis elucubraciones para mirar un poco más allá de su entorno. (iscutamos durante horas sobre lo ledo! loanalizábamos! lo contrastábamos con bibliografa sobre antropologa y arqueologa!

intentábamos averiguar qu& referencias haba en otras religiones o filosofas...! cuandoquisimos darnos cuenta haban pasado dos meses.

Llegamos a la conclusi"n de que los manuscritos no eran una novela sino una especie delegado hist"rico misteriosamente hilado! y todo ello dentro de un trasfondo moral! social yfilos"fico que podra hacer cambiar el rumbo de la humanidad igual que haba cambiadonuestra convivencia. Era imposible no tomárselo en serio! aquello se haba convertido enel e,e de nuestra vida! planteándonos dudas y preguntas sobre temas que parecamostener muy claros desde nuestra posici"n de adultos racionales e instruidos.

5in embargo algo faltaba. #abamos ledo los manuscritos! los habamos traba,ado yestudiado a conciencia! pero qu& haba de los e%traterrestresM ("nde estaban ahoraM

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A lo largo de la historia de la -ierra la haban hecho habitable! haban permanecido cercaobservando! hasta la aparici"n del hombre! y ahora que muchas personas y lugares delplaneta atraviesan momentos difciles! ahora que hemos alcanzado una capacidad dedestrucci"n que puede desbaratar todo su traba,o... ?u& hacenM ?u& sentido tiene queesos manuscritos no puedan ver la luz p'blicaM 5i las teoras son ciertas deberan ser

difundidas. No entendamos por qu& el libro haba llegado a nosotros y por qu& debamossilenciarlo. No queramos que todo acabara ah! queramos averiguar más! llegar al fondo.

Estábamos esperando la llegada de las Navidades para acercarnos a 3ur"n y poder hablar con el abuelo! tenamos un largusimo cuestionario que habamos ido haciendodurante todo ese tiempo! los manuscritos haban tenido la virtud de arrancar el motor de la

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curiosidad y ahora resultaba imposible pararlo! las ganas de saber más! de conocer respuestas! de descubrir nuevos caminos iban creciendo cada da que pasaba.

Los amigos más cercanos de nuestro entorno estaban intrigados! no entendan la pocadisponibilidad de tiempo que de repente tenamos! les chocaba nuestra voluntariareclusi"n en la lectura! por otra parte advertan un cambio en nuestra actitud! parecamosmás contentos! como si supi&ramos algo importante que los demás ignoraran. Aunque yono me di cuenta aparentemente tambi&n en mi forma de escribir y sobre todo en los temasque tocaba se haban operado cambios seg'n decan mis compañeros de la redacci"n.

)no de esos artculos se lo envi& al abuelo! quera que se diera cuenta de que estábamostraba,ando sobre el tema como &l quera

;(urante muchos años los hombres hemos estado investigando! buscando en la nochede los tiempos! tratando de desentrañar los misterios de nuestro origen. La antropologa!la historia! la mitologa! e incluso la religi"n nos han dado su respuesta! su e%plicaci"n.5in embargo! la mayora de las veces esa respuesta está reñida con las demás! lo quehace que uno se plantee un interrogante $or qu&M $or qu& no hay una e%plicaci"n quesatisfaga a todosM 5e trata 'nicamente de meras e%plicaciones parciales que sirven alos intereses particulares de un sector determinado de nuestra sociedadM

Lo cierto es que el hombre de nuestros das! tal vez de forma intuitiva! sabe que muchas

de las preguntas que hoy es incapaz de contestarse podran tener respuestareconstruyendo la historia del ser humano desde sus orgenes como especie para as! a lolargo del tiempo! poder detectar las desviaciones que han tenido lugar.

-raslad&monos mentalmente al origen del hombre. Aquellos seres primitivos! parientescercanos de los simios! debieron ser seres que vivan inmersos en la Naturaleza! conunos comportamientos regidos por las leyes naturales.

(urante milenios estos hombres iran aprendiendo! poco a poco! a reconocer su entorno ydesarrollar su capacidad cerebral. (esarrollaran el lengua,e! se regiran por unas

elementales normas de convivencia! tendran una incipiente cultura... En definitiva! iranen pos de la caracterstica que les haca distinguirse del resto de los animales su

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capacidad de raciocinio! de entendimiento y de refle%i"n! para poner sus manos al serviciode sus ideas! dominando paso a paso a la Naturaleza! aliándose con ella para utilizar lascosas que &sta le ofrece.

$ero qu& traera consigo! realmente! esta capacidad de razonarM

Era el comienzo de la consciencia! el darse cuenta de la repercusi"n de sus actos. +a noera un ser inconsciente como los animales! ahora era libre! deba encontrar dentro de s elcamino a seguir a partir de lo que su impulso! su conciencia interior! le dictase. Era un ser dotado de ;libre albedro1.

Este fue un gran paso en la evoluci"n del hombre que pas" de estar en armona con laNaturaleza! el modo inconsciente de los animales! a tener que aprender a estar enarmona con ella al modo de los hombres! es decir ;religándose= conscientemente.

A esta etapa! en la que el hombre que poblaba la -ierra no tena problemas pues viva en

un estado de inconsciencia! podramos identificarla con los tiempos del $araso. 5e movapor impulsos instintivos que le hacan actuar sin poner en tela de ,uicio ese impulso! por eso viva en armona con la Naturaleza. La adquisici"n de consciencia! el libre albedro! lacapacidad de raciocinio! sera lo que la tradici"n nos ha hecho llegar como el ;pecadooriginal= que significara la posibilidad de conocer el bien y el mal! simbolizado por el;árbol de la ciencia del bien y del mal=.

Al hombre siguen llegándole los impulsos internos! pero ahora son analizados por sunueva capacidad razonadora y su libre albedro decide finalmente qu& hacer.

El tiene una tendencia innata que le lleva a actuar en armona con las leyes de laNaturaleza. Con el paso del tiempo las religiones han manipulado esa tendencia creandoel concepto ;pecado= que no es otra cosa que una cortapisa al libre albedro.

En este punto y fundamentalmente por miedo! el hombre puede caer en la tentaci"n deactuar deforma inconsciente! instintiva! pero es un error! lo que ha de hacer es aprender aactuar en armona con esas leyes naturales! pero C7N5C9EN-E:EN-E! es decir!sabiendo por qu& y para qu&.

C"mo es posible que durante siglos se haya asimilado la consciencia y la raz"n con el

pecado! o cuando menos con una traba para la evoluci"n espiritual del ser humanoM Noserá el cerebro! precisamente! la herramienta para avanzarM 5i adquirimos el librealbedro no deberamos ir seleccionando nuestras decisiones para crear la armona delorigenM

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Con el paso de los años las nuevas generaciones van desvirtuando las enseñanzas de losmayores que haban sido transmitidas de padres a hi,os. El hombre se siente ale,ado desu origen! de esa armona que una vez vivi"! y comienza a buscar! a observar cuanto lerodea. Eso! con el tiempo! le hace crearse dependencias del entorno.

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La Naturaleza es deificada! aparece el miedo a los elementos! a los animales! a losfen"menos naturales. El hombre intenta apoyarse en lo que encuentra alrededor! creacultos a todo lo que no domina! se rodea de instituciones! de leyes! de normas.

Con ellas se siente seguro! pero lo que está ocurriendo en realidad es que esa moralficticia creada por &l le está poniendo filtros que están deformando una voz que antes

llegaba clara desde su interior la voz de la conciencia.

Con el transcurso del tiempo el hombre comienza a depender de los más poderosos! losmás hábiles o los más fuertes! a los que otorga la capacidad de establecer las leyes!apareciendo las clases! las barreras! las naciones! las ideologas que separan a unos deotros ... y los hombres nunca más vuelven a sentirse hermanos nacidos de una mismafamilia con un tronco com'n.

Las instituciones religiosas! polticas y econ"micas! movidas por el deseo de poder y laadquisici"n de bienes materiales! han mantenido a los hombres durante siglos sumidos en

la superstici"n y la ignorancia. La manipulaci"n ha sido tan sutil que muchos hombres noson capaces de utilizar por s mismos lo que les fue dado como una herramienta de la queservirse para poder evolucionar cerebro y libre albedro.

A lo largo de la historia de la humanidad seres especiales! grandes maestros! profetas!rishis! avatares... vinieron a la -ierra para intentar refrescar la memoria al hombre dándolelas referencias que haba perdido. El mensa,e de todos ellos era casi id&ntico vivir enarmona con el entorno y sus seme,antes. 5in embargo! al cabo de un corto espacio detiempo sus palabras y enseñanzas eran manipuladas en beneficio e inter&s de unospocos! avasallando al resto! transgrediendo las más elementales leyes de respeto hacia elser humano.

$ero cuánto tiempo podra mantenerse este estado de cosasM La situaci"n no parecefácilmente reconciliable. $or un lado! una buena parte de la humanidad aboga por laraz"n a ultranza! por otro! un gran n'mero de hombres promueven la fe ciega y lascreencias no contrastadas. $or qu& hemos de elegir uno u otro caminoM 5i en nuestrocerebro pueden generarse estas dos tendencias por qu& no esforzarnos en con,ugarlasM$or que valorar más la intuici"n en detrimento de la raz"nM! por qu& desterrar laimaginaci"n en favor de la l"gicaM Nuestro cerebro está capacitado para desarrollar

ambas potencialidadesK desde el momento en que nos decantamos por una de ellasinfravaloramos la otra.

Es el hombre un ser trascendente! como nos dice la religi"nM! y esa trascendenciapuede ser intuda primero y razonada despu&sM Avanzara el hombre más rápidamenteen todos los aspectos si admitiese dentro de s esta ambivalenciaM

:i intuici"n! o mi raz"n! o ambas! me dicen que s=.

Ecologa C"smica

$or si eso fuera poco! por aquellos das! Noviembre de BYDG pareca que todo seconfabulaba para apoyar nuestras nacientes inquietudes. Los medios de comunicaci"n

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denunciaban constantemente los problemas que el hombre tena! nuevas guerras!tensiones! terrorismo! violencia... $areca que todo iba en contra del propio hombre. ?u&le,os estaba el ob,etivo que! seg'n los manuscritos! haba venido a cumplir crear unasociedad arm"nica con lo y los que le rodeabanZ.

5in embargo! hubo un hecho que fue el detonante que marc" nuestra decantaci"n

definitiva hacia la necesidad de tomar una postura más activa. )na noche nos vimossorprendidos por un programa de televisi"n que desde el principio capt" nuestro inter&s.Era un reporta,e cientficoinformativo que haba dado la vuelta al mundo! hablaba sobreel planeta -ierra y la acci"n sobre &l de los hombres.

El programa era una denuncia clara de los errores que a nivel ecol"gico se estabancometiendo! y apuntaba las posibles consecuencias de esos errores si no se ponan losmedios adecuados para impedirlo. 5e analizaba la marcha de los acontecimientos a partir de B.PQQ con la revoluci"n industrial! cuando el hombre comenz" su fren&tica carrera por el dominio de la t&cnica.

A partir de ese momento se crearon máquinas. (e la propulsi"n martima a vela se pas" ala máquina de vapor. 5e invent" el ferrocarril y el motor de e%plosi"n. 5e construyerongrandes n'cleos industriales donde antes haba bosques. 5e allanaron montañas paraque las máquinas pudieran pasar y se arrasaron bosques enteros para la e%tracci"n deminerales a cielo abierto.

Las aguas empezaron a recibir los residuos qumicos que producan las fábricas y el airelos vapores t"%icos. Los elementos base del progreso el petr"leo! el carb"n! la energanuclear! producen por s mismos contaminaci"n. 5e han inventado máquinas pararecolectar mayor cantidad de alimentos! pero los cultivos masivos han trado plagas queson combatidas con pesticidas que a su vez tienen efectos per,udiciales en el agua! latierra y todos los seres vivos. 5e produce más de lo que se consume y hay que utilizar conservantes.

$or otra parte! un informe sobre la utilizaci"n de la energa nuclear señalaba ladestrucci"n de las capas altas de la atm"sfera! creando fisuras por las que se filtran rayossolares nocivos para la vida! como los terribles rayos gamma. 5urgen enfermedades detipo canceroso! tres de cada cinco habitantes sufren predisposici"n al&rgica de alg'n tipo!

no s"lo en las ciudades! sino tambi&n en el campo.Las alteraciones climatol"gicas dan lugar a gravsimos problemas. (esaparecen lasestaciones intermedias! primavera y otoño! del verano se pasa al invierno. Ladesertizaci"n se e%tiende a numerosos continentes. <frica! en otro tiempo lleno de vida yrecursos! es hoy un verdadero desierto. En amplias zonas desaparecen los bosques! ycomo consecuencia! el hambre y la miseria hacen su aparici"n. Etiopa es el segundopas más pobre del mundo. El promedio de vida no alcanza los GQ años! y un D[ deniños muere antes de cumplir los cuatro años. La falta de agua impide el cultivo de lastierras y el desierto va avanzando a pasos agigantados. 5us gentes se mueren de

tuberculosis o enfermedades intestinales provocadas en gran parte por el consumo deaguas putrefactas y contaminadas.

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La IA7 /7rganizaci"n de Naciones )nidas para la Agricultura y la Alimentaci"n6 advertaque! si se mantiene la actual tasa de nacimientos! en el año QQQ habra unos quinientosmillones de personas que no podrán ser alimentadas adecuadamente. En la actualidad!unos cincuenta millones de personas mueren cada año en el mundo como consecuenciadel hambre o de las carencias alimenticias. No obstante el ndice de natalidad no es un

problema sino la mala repartici"n de las riquezas.$or otra parte la estabilidad de la corteza terrestre parece más frágil cada da! losterremotos! los volcanes que entran en erupci"n despu&s de haber permanecido mudosdurante mucho tiempo! podran desatar una cadena de acontecimientos queconvulsionaran todo el planeta.

La fauna terrestre tambi&n está afectada. 5e e%tinguen por falta de protecci"n muchasespecies! se contin'an celebrando safaris! partidas de caza! matanzas de focas yballenas! etc.

El programa terminaba sin dar ninguna salida a los innumerables problemas planteados!'nicamente era una e%posici"n de una situaci"n real y comprobada.

Nos quedamos mudos. Estábamos más receptivos a estos temas o qu& estabaocurriendoM En el reporta,e se hacan denuncias muy fuertes! la crtica a determinadossectores era clara y directa! y nos preguntábamos c"mo se les habra colado en televisi"nun programa seme,ante.

Estábamos convencidos de que ese programa tendra repercusiones y levantarapol&micas. 5in embargo! bamos a llevarnos más de una sorpresa. $ara la mayora de la

gente aquel programa pas" desapercibido! o en el me,or de los casos no pas" de ser unade tantas informaciones fatalistas sobre el futuro! pero que se vean demasiado le,anascomo para preocuparse.

Aquella noche tardamos más de lo habitual en conciliar el sueño. (ábamos vueltas en lacama inquietos y desasosegados. -odava permanecan en nuestra mente algunas de lasimágenes y datos que habamos visto por televisi"n.

-rat& de sumirme en la negrura del sueño... Al cabo de un rato abr los o,os y pens& queme haba equivocado! que algo no andaba bien. @olv a cerrarlos pero al abrirlos de nuevo

la misma imagen apareci" ante m.

At"nito pase& la vista por el paisa,e que me rodeaba sin reconocerlo. Estaba en unainmensa llanura árida y seca! las tierras estaban agrietadas por profundas hendidurasentre las que salan a veces briznas secas de algo que en otro tiempo debi" ser hierba.

No le,os de all unos troncos calcinados se retorcan a'n erguidos como pidiendorespuesta a un sol abrasador que caa a plomo sobre ellos. Las rocas estabanmisteriosamente ennegrecidas con manchas parduzcas que en otro tiempo debi" ser alg'n tipo de musgo.

:e par& un momento! perciba el calor asfi%iante! pareca que hasta los vientos habanhuido de aquel lugar. El silencio era total.

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(i una vuelta completa! muy despacio! intentando escudriñar alg'n indicio de vida! alg'nsigno de movimiento! de color... pero s"lo consegu que el sol cegador me obligara acerrar los o,os y a protegerme la cara con las manos.

Cuando apart& la vista! una nueva escena llen" mis pupilas. :e encontraba ahora en unprofundo valle! entre elevadas montañas peladas y oscuras que parecan enormes

gigantes montando guardia al lecho de un pequeño ro que dificultosamente discurrasilencioso.

)n desagradable olor me hizo volver la cabeza y fi,ar la vista en sus aguas de un color terroso! en las que flotaban ob,etos y cuerpos muertos de animales. )na inmensa nube deenormes mosquitos de un tamaño fuera de lo com'n! revoloteaban a pocos centmetrosde las aguas casi estancadas! produciendo un continuo zumbido. A orillas del cauce habatambi&n algunos huesos de animales y restos de pieles. 5ent c"mo una sensaci"n demareo me embargaba y camin& durante largo rato tratando de ale,arme de aquel lugar.$rácticamente todo el cauce del ro estaba en las mismas condiciones.

#aca un calor h'medo y sofocante! pega,oso y desagradable que me obligaba a respirar por la boca. Los matorrales se adheran a mis piernas como intentando retenerme.

Al cabo de alg'n tiempo me encontr& pisando un suelo arenoso en un espacio abierto!ante m las aguas espumosas del mar llegaban brincando hasta la playa! respir&profundamente tratando de eliminar de mis pulmones el hedor que haba respirado.$ercib el familiar olor a salitre pero mezclado con otros que no pude reconocer. Iuiacercándome hasta la orilla y de pronto mis pies se quedaron clavados! estaba pisandoalgo pega,oso y negro. 7bserv& c"mo cada nueva ola lama y depositaba estas manchasen sus continuas idas y venidas. Cantidad de pequeños crustáceos y peces de todo tipose encontraban flotando en las aguas! hasta que finalmente eran e%pulsados a la playaquedando aprisionados entre las rocas o en la inmensa mancha negra que se e%tendahasta donde alcanzaba la vista.

:ov la cabeza a uno y otro lado negando la evidencia qu& estaba pasando allM! era la-ierraM! era mi planeta o estaba en un lugar desconocido y terrible del que estabahuyendo la vidaM

9ntent& que aquella visi"n desapareciera y me pas& la mano por la frente. :e di cuenta

con toda claridad de que estaba asustado! necesitaba encontrar a alguien! preguntar qu&era aquella pesadilla. 5ent c"mo sudaba y c"mo la angustia iba ascendiendo por miest"mago hasta quedárseme agarrada a la garganta.

@i a lo le,os unos altos edificios que se erguan amenazadores! apenas haba luces!estaba atardeciendo. :e dirig apresuradamente hacia all! quera llegar cuanto antesporque necesitaba cada vez más hablar con alguien de aquel mal sueño.

Corr a toda la velocidad que me permitan las piernas y antes de darme cuenta meencontr& pisando el asfalto de una gran avenida. :ir& al cielo y lo encontr& nublado! pero

al fi,arme con más detenimiento me di cuenta de que no eran nubes sino una especie depolvo negro que pareca sustentado sobre los edificios como una gran capota oscura. La

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luz del atardecer apenas llegaba hasta donde la calzada. :e volv en una y otra direcci"nbuscando alg'n movimiento! apenas algunas luces artificiales iluminaban de trecho entrecho un trozo de la calle! las ventanas de los edificios tambi&n mostraban pálidasiluminaciones.

Los altos edificios de metal se me anto,aron como grandes moles opacas que en otro

tiempo debieron ser brillantes. Camin& y no encontr& árboles o pá,aros o plantas. A vecesalg'n sonido metálico! alg'n ruido como de generadores o alg'n tipo de maquinariarompa el silencio! pero las calles estaban desiertas.

Cruc& una especie de plazoletilla con un parque infantil. (e pronto la silueta familiar de unárbol surgi" ante m como una verdadera aparici"n. Avanc& con las manos e%tendidaspara verificar que aquello era real! la sensaci"n del tacto me de," perple,o! era fro! erametal! no era la rugosa corteza de un árbol! era s"lo un monumento erigido en su honor.

7 unos pasos a mi espalda y me volv al reconocer un sonido familiar. )n grupo de

personas caminaba calle aba,o. No poda ver sus caras y trat& de aguzar la vista sinconseguirlo. Cuando estuvieron lo suficientemente cerca me di cuenta de que todosllevaban puestas unas máscaras que les cubran el rostro. Levant& una mano y avanc&hacia ellos. $arecan delgados y d&biles! seres grises y silenciosos.

@i que tambi&n haba algunos niños entre ellos. -odos caminaban como siguiendo unaespecie de ritual. Asombrado observ& c"mo desfilaron ante mi sin ni siquiera reparar enmi presencia c"mo era posibleM No me veanM Les llam& a gritos pero nadie se volvi".Corr tras ellos y comprob& que ni me vean! ni me oan. 5e detuvieron un momento anteun gran panel donde se dibu,aban unos n'meros BYFP .QQ.

Abr los o,os con estupor! eran una hora y una fecha. )nas palabras roncas se escaparonde mi garganta no es posibleO

:e sent& sobresaltado! estaba sudando y temblaba violentamente. Abr los o,os cuantopude tratando de ver en la oscuridad mientras repeta una y otra vez No es posible. No esposible. No es posible.

:e restregu& los o,os y poco a poco los contornos de la habitaci"n se fueron perfilando.5alt& de la cama y fui hacia la ventana abierta! una suave brisa de aire fresco me

reconfort". :ir& ávidamente afuera! vi la calle silenciosa! los coches aparcados! el parqueinfantil de la plazuela! el ruido familiar de las ho,as de los árboles al chocar unas con otrasmovidas por el viento. $ude percibir claramente los mil pequeños ruidos que poblaban lanoche.

5ent que el aire que penetraba en mis pulmones era el más fresco y perfumado que ,amás haba respirado! not& c"mo los o,os se me humedecan a la vez que un profundoestremecimiento recorra mi espina dorsal desde su base. -odo haba sido un mal sueño!una horrible pesadilla...

5acud la cabeza tratando de apartar aquellos espantosos recuerdos. :ir& a -eresa quedorma plácidamente a,ena por completo al mal rato que yo haba pasado. 5in embargo!

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la inquietud se fue apoderando de mi ánimo abri&ndose paso mientras una hondapreocupaci"n comenzaba a embargarme. 5era posible que esa pesadilla tuviese visosde realidad dentro de unos añosM! cuál sera el futuro! de seguir por ese camino! que seapuntaba en la actualidadM 4echac& la idea. Los gobiernos tomaran medidas! loscientficos lo arreglaran! los investigadores! los t&cnicos... hay mucha gente en el mundo

preparada para luchar contra estos problemas.$ero en qu& estaban pensando todos ellosM! por qu& no hacan nada antes de quefuera demasiado tardeM! es que no lean los peri"dicosM

5enta como mi cerebro! todo mi ser se revelaba ante la realidad que surga frente a mcomo un fantasma escapado de la pesadilla. Amaneca. 5in embargo algo en mi interior haba cambiado! gracias a ese sueño me haba hecho consciente del problema que senos avecinaba! y s"lo se me ocurra como remedio dar mi pequeña respuesta personal+o iba a luchar contra ese futuro! iba a intentar que a mi nivel esas cosas no fuesendegradándose! iba a defender la vida! por m y por las generaciones futuras que merecansin duda

una -ierra con posibilidades para el desarrollo de la vida en todos sus "rdenes.

4espir& profundamente tratando de mantener la calma. @olv a mirar a -eresa largamente.5aba que poda contar con ella! que tambi&n en ese empeño iba a ser mi compañera.

Era un nuevo da martes! BD de (iciembre de B.YDG.

(urante todo el da siguiente me vi dominado por las sensaciones que haba vivido en

sueños. )na y otra vez me repeta que s"lo haba sido eso! un sueño. 5in embargo! elrecuerdo de aquellas imágenes tan reales me haca estremecer cada vez que volvan a mimente.

#abl& con -eresa durante mucho rato intentando por un lado desahogarme! y por otrohallar el eco de su comprensi"n y su apoyo.

#ablaba a borbotones! como si no pudiera dar rienda suelta a mis sentimientos reci&ndespertados. Al principio las ideas salan mezcladas y oscuras! pero poco a poco! entrelos dos! logramos llegar a una postura clara.

$ensábamos que nosotros! como seres humanos! habamos recibido un planeta desingular belleza! el planeta azul. )n verdadero vergel un paraso agua y energa! tierrapara crecer y plantas para alimentar a los animales.

:illones de insectos! de microorganismos! miles de plantas! infinidad de especies... -odo!autorregulándose en la más perfecta de las armonas! nada sobraba en el espectacular mecanismo de la vida en la -ierra. Nada e%ista por azar ni por capricho.

Las aguas de sus mares fueron pobladas por miles de especies marinas. 5us cieloslimpios surcados por miles de aves. Cientos de ros y lagos de aguas cristalinas fluan por

las venas de la -ierra dando vida y frescor a su paso.

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-odo era e%uberante y lleno de vida! pero faltaba una pieza por enca,ar! porque todo locreado no tena raz"n de ser sin el hombre. -odo aquello era el regalo que el Cosmoshaba preparado para &l! para que pudiese vivir! crecer y multiplicarse. -odo naci" para &l!y as fue c"mo el 'ltimo eslab"n de los animales se transform" en hombre! con unacaracterstica diferenciadora del resto de la creaci"n su capacidad de razonar.

5in embargo! con el paso del tiempo se ha llegado a la degradaci"n del planeta. Elhombre! considerando que la Naturaleza es contraria a sus intereses! ha ido tomando unaserie de medidas que terminarán yendo en contra de s mismo. 5u falta de humildad le hahecho olvidar que &l es uno más y que su misi"n es bien sencilla saber estar.

Los avances tecnol"gicos logrados por el hombre no son negativos! lo negativo es laintenci"n y el uso que d& a esos avances. :uchas veces se cometen errores! pero eso noes un problema! pues as aprende el hombre! equivocándose. 5in embargo cuando seconocen las consecuencias de los actos y a pesar de todo! en aras del progreso se sigueadelante! es cuando se está yendo en contra de la verdadera ecologa c"smica.

$or qu& el hombre no se haba dedicado más a investigar y desarrollar energasnaturales no contaminantesM C"mo es posible que se contin'en haciendo pruebas dee%plosiones nucleares cuando se sabe el per,uicio que se está causando a todos lospueblosM Las respuestas a todas estas preguntas seguramente tendran un tristedenominador com'n la rentabilidad de monopolizar los recursos! la preponderancia por elpoder y el control. En definitiva! la economa y la ambici"n marcaban la pauta delcomportamiento humano.

Las causas haba que buscarlas en un desconocimiento total en lo que al hombre mismose refiere. Enfocando el progreso hacia afuera y con una escala de valores equivocada yse nos ha olvidado progresar en los valores humanos.

No habra nada de malo en el progreso si estuviera impulsado por el inter&s com'n! sipretendiera me,orar las condiciones de vida de todos los hombres de la -ierra! si estudiaraa la Naturaleza con respeto! para servirse de ella sin agredirla.

$ero nos mueven otros intereses! otros dioses a los que veneramos! y con motivacionestan mezquinas no se pueden conseguir otros resultados que los que ahora tenemos y alos que hemos llegado paso a paso a trav&s de cientos de años! aunque sea más grave el

daño ocasionado en los cien 'ltimos años. $ero no nos engañemos! lo que ha cambiadoes que el hombre de hoy cuenta con más medios para destruir que en el pasado! pero losm"viles son los mismos poder! economa... y un total desprecio por la Naturaleza.

Nosotros no queramos admitir que la situaci"n no tuviera una soluci"n! pero cuálM Laactitud más normal era que,arse de lo mal que se hacen las cosas y de lo terribles queson los dirigentes que provocan las guerras. 5in embargo! qu& hacemos nosotros! qu&postura tomamos ante este desbara,uste general los ciudadanos de a pieM Culpamos a lapoltica! a los dirigentes! a la sociedad de consumo de la que formamos parte! añorandoun equilibrio ecol"gico e%terno que es imposible alcanzar porque no sabemos cuidar nuestra propia ecologa. 5omos culpables todos de no saber respetar nuestro propiocuerpo. 5i fu&ramos conscientes de ello! no introduciramos en nuestro organismo

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elementos nocivos! ni le obligaramos a los e%cesos o defectos que nuestros hábitos devida conllevan.

5i respetáramos la vida por conocerla! cuidaramos de ella en nosotros mismos y encuanto nos rodea. -odo esto suena a t"pico cuando nos resulta tan c"modo utilizar lossprays aunque destruyan la capa de ozono! o nos apetece usar cosm&ticos aunque est&n

hechos con placentas de animales o grasa de ballenas! y qu& difcil es resistirse a laabrumadora avalancha de consumismo que nos empu,a en brazos del alcohol! el tabaco yla drogaO

C"mo renunciar a esos maravillosos abrigos de pieles que se e%hiben en las peleterasM!si total! el daño ya esta hecho. +! a qui&n se le ocurrira pensar en deshacerse de sucoche! que es un elemento más en la cadena contaminante! cuando lo que estamospensando es c"mo comprarnos uno me,or y más potente que el del vecinoM

+! desde luego! no hay más que salir un domingo al campo para ver qu& c"modo resulta

tirar la basura y los desperdicios al suelo! porque como no hay papelerasO ?ue las pongael Ayuntamiento! que para eso pago yoO No voy a traerme una bolsita para la basura paraluego cargar con ellaOK es mucho más c"modo arro,arla al suelo.

No haba más remedio que rendirse ante la evidencia! haba en la vida cotidiana infinidadde aspectos sobre los que nunca habamos reparado. E,emplos tontos pero quecolaboraban a aumentar el problema. Cada uno es responsable de haber perdido unaparte de aquel idlico planeta azul que\un da fue arm"nico y equilibrado.

:ientras el hombre no aprenda a mirar dentro de s! a preguntarse si es correcta su

valoraci"n de las cosas! de la Naturaleza! de su relaci"n con ella! todo adelanto de laciencia y de la tecnologa de que disponga! será como ,ugar con una bomba! felices einconscientes! hasta que nos estalle en la cara.

?u& ha de ocurrir para que el hombre de este planeta reaccioneM Acaso una catástrofemundialM -endrá que nacer una nueva generaci"n y morir esta para recordarnos quea'n tenemos pendiente de cumplir el fin para el que fuimos creadosM Construir sociedades arm"nicas y aprender a vivir en armona con el entornoM

Aquella pregunta tambi&n qued" sin respuesta! qued" flotando en el aire como si quisiera

impregnar cada una de sus partculas! aleteando y resonando en nuestros odos sin quede nuestro interior surgiera ninguna respuesta.

9nconscientemente buscamos uno la mano del otro! intentando sumar nuestras fuerzas.No sabamos muy bien a qu& tendramos que enfrentarnos pero la decisi"n de tomar unapostura activa y responsable se haba ido afianzando en nosotros con toda claridadaunque en principio s"lo contábamos con nuestra propia intencionalidad.

@. EL A3)EL7 :)E4E

)na semana más tarde recibimos un lac"nico telegrama de la abuela 4osario ;El abuelose nos va. Está agonizando. 5i pod&is! venid a su lado cuanto antes=.

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Nos pusimos inmediatamente en caminoK el via,e se hizo especialmente largo. El tiempoera muy maloK el viento! el agua y el granizo nos acompañaron todo el camino. $arecaque la carretera se empeñaba en prolongarse más y más impidi&ndonos llegar a nuestrodestino.

Cuando llegamos a 3ur"n encontramos el pueblo cubierto por la nieve. Las farolas!

adosadas a las fachadas de las casas! vertan aqu y allá un chorro de luz amarillenta quese estrellaba contra la blancura del suelo. Era ya noche cerrada y entre espesosnubarrones de vez en cuando apareca la luz brillante de la luna que arrancaba destellosplateados al chocar contra las estalactitas heladas que pendan de los aleros de loste,ados.

)na serenidad especial reinaba en el pueblo! s"lo rompan el silencio unas campanadaslentas! graves! espaciadas! que se perdan valle aba,o. -ragu& saliva! yo conoca muybien ese sonido y el mensa,e que encerraba.

El camino hacia la casa era un continuo ir y venir de genteK negras siluetas silenciosasque contrastaban sobre la blancura de la nieve. 9ban a casa de (. 3aldomero! su buenveterinario! su fiel amigo! pues eso haba sido para ellos el anciano. :u,eres y hombresenvueltos en sus chales y ropones apresuraban el paso para dar su 'ltimo adi"s al quemarchaba.

Al llegar a la casa nos recibi" una bofetada de silencio que hizo que el coraz"n se nosencogiera un poco más. Apenas entramos la abuela 4osario sali" y se arro," en misbrazos. :e pareci" más frágil que nunca! más menuda. )nas lágrimas quedas y suaves!rodaron

por las me,illas de la anciana que no pronunci" ni una sola palabra. 5e de," conducir mansamente por -eresa hacia la cocina.

:e qued& parado en el umbral de la puerta y cerr& los o,os mientras por la nariz se mecolaba aquel olor familiar! tan dulce y pega,oso como siempre. La angustia me brot"desde el est"mago y subi" hasta la garganta! una sensaci"n de mareo me invadi". Abrlos o,os y respir& profundamente mientras me acercaba a la cama. Afortunadamentetodos haban salido de la habitaci"n.

9luminado por las lamparitas de las mesillas pude ver el cuerpo del abuelo que yacasobre el lecho. Le haban puesto un tra,e marr"n oscuro! muy nuevo! los zapatos! suboina ...

:ir& aquel rostro e%tremadamente pálido! era &l! lo saba! sin embargo me costabatraba,o reconocerle. :e acerqu& a la cama y apoy& una mano sobre las del abuelomientras me inclinaba para darle un beso en la me,illa. Al levantarme una e%trañasensaci"n me invadi". Aquel ser postrado no tena nada que ver con mi abuelo3aldomero! aquello era como una funda vaca que no me inspiraba ning'n sentimiento.

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Al principio me sent turbado por esta idea y hasta un poco culpable! sin embargo una yotra vez algo martilleaba en mi cerebro el abuelo ya no estaba all. Aquel ser poda tener su apariencia fsica! pero el abuelo ya se haba ido.

Cerr& los o,os tratando de evocarle mientras intentaba poner orden en las ideas. 4ecord&frases odas al abuelo muchas veces! sus teoras sobre la energa vital que animaba al

cuerpo fsico! &l lo describa como una especie de fluido que rodeaba a todos los seresvivos y que formaba un doble e%acto del cuerpo a nivel energ&tico. Cuando esa energase desprenda o se agotaba sobrevena la muerte.

5erá lo que la 9glesia Cat"lica llama el almaM Lament& no haber prestado más odo aaquellas teoras! me hubiese gustado saber más! tal vez as! ahora tendra unae%plicaci"n a la sensaci"n que me haba producido la presencia del abuelo! la deencontrarme con alguien cuyos rasgos me eran familiares! pero emotivamente le sentatan a,eno a m que no saba qu& pensar de esos sentimientos.

La entrada de algunas personas en la sala dispuestas a rezar sus oraciones me hizovolver bruscamente a la realidad. $ermanec all durante unos minutos con la cabezainclinada y los o,os cerrados! recordándole fuerte! sereno! paseando por el hayedo!recibiendo el sol del atardecer ... vivo.

5al de la habitaci"n y me refugi& en el despacho! all me pareca que la presencia delabuelo era más patente! más real que en el otro cuarto. :e sent& frente al escritoriomientras aspiraba el aire con deleite. Aquel sitio siempre me haba gustado de maneraespecial! el olor del tabaco de pipa que el abuelo guardaba en un pequeño castillo demadera! mezclado con el olor a papel que se desprenda de los libros que cubran por entero dos de las paredes ... 5! all me senta más con &l que en ning'n otro lugar.

Entorn& los o,os y las imágenes acudieron a mi mente como atradas por un poderosoimán. :e pareca estar vi&ndole a veces nostálgico y silencioso y otras comunicativo yalegre. 4ecord& cuanto le gustaba caminar y lo agradable que resultaba ir a su lado enaquellos largos paseos al atardecer por el hayedo vie,o. :e pareca sentir mis pieshundi&ndose en la mullida alfombra de hierba y ho,as cadas. El bosquecillo a esa horamágica cobraba un encanto especial! el sol bordaba filigranas sobre la hierba al atravesar las copas de los árboles y refle,aba en el suelo los complicados arabescos que formaban

las ramas entrelazadas de las enormes y vie,as hayas. Nunca llegue a saber si las habanplantado demasiado cerca o es que a lo largo de los años cada árbol haba ido estirandosus ramas hasta entremezclarse con las de sus vecinos más cercanos. Lo cierto es queformaban ya un con,unto inseparable.

5iempre se sentaba en el mismo lugar! sobre un vie,o tronco cado y desde allcontemplaba como el sol iba poni&ndose y como la oscuridad iba ganando terreno en subatalla contra la luz. El bosque entonces cambiaba y adquira un aspecto un tantofantasmag"rico! las ramas que se alzaban hacia lo alto parecan estirarse a'n máshaci&ndose más imponentes! los cantos de los pá,aros iban cesando hasta desaparecer

en el crep'sculo de un da cualquiera. 4ecord& con nostalgia una frase que haba

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escuchado algunas veces en boca del abuelo cuando se abstraa perdido en sus propiospensamientos ;)na inmensa tristeza me sube por las cuerdas del alma.

5"lo recordaba esas palabras pero desde la primera vez que se las o sent como sirefle,aran un estado de ánimo muy especial con el cuál me identificaba en muchosmomentos. Cada vez que senta nostalgia o tristeza esas palabras acudan a mi recuerdo

sin saber muy bien por qu& ...

(on 3aldomero! como todo el mundo le llamaba era muy popular entre sus convecinos.#aba entregado a esa tierra y a las gentes de esa aldea los me,ores años de su vida. A lolago del tiempo haba logrado ganarse no s"lo el respeto sino tambi&n el cariño franco dela gente de la montaña. #aca varios años que ya no e,erca como veterinario! sinembargo todava seguan llamándole cuando haba alg'n problema ;especial=. -odo elmundo en el pueblo haba tenido en alguna ocasi"n la oportunidad de recibir su ayudafuese del tipo que fuese.

Tltimamente pasaba los das haciendo lo que más le gustaba leer! pasear! observar lanaturaleza! los animales! la vida]

Era un gran observador! por eso me gustaba ir a su lado! sorprendi&ndome a cadamomento que siempre supiera como se llamaba tal o cual planta o árbol! y para qu& podautilizarse! y como se criaba! e incluso alguna leyenda o historia sobre el tema! conoca elcanto de los pá,aros! y las costumbres de los animales que habitaban por los alrededores.

Abr los o,os y mir& alrededor! todo estaba como si el abuelo acabara de salir de esahabitaci"n. El álbum de fotos estaba sobre la mesa! acarici& la tapa de piel marr"n ya

gastada por los bordes. Al abrirlo fue como si una ráfaga del pasado se escapase de entresus páginas y se quedara instalada en la sala llenando el ambiente de recuerdos.

Aquellos antiguos retratos de cart"n duro y grueso! ya amarillentos en parte por el pasodel tiempo! y en parte porque aquellas fotos tenan un color indefinido.

:uchas de esas imágenes estaban grabadas en mi recuerdo de forma indeleble! unas por haberlas vivido y otras por haber mirado muchas veces aquellos retratos mientras losabuelos me e%plicaban con detalle cada escena.

(esde pequeño pasaba con ellos todas las vacaciones escolares y eso hizo nacer entrenosotros unos lazos muy fuertes basados en vivencias cotidianas que habamoscompartido. :e pareca estar sentado con ellos alrededor de la mesa! en la cocina! unsitio especialmente acogedor. $or las paredes blancas se distribuan vasares a diferentesniveles que soportaban platos de cerámicas muy antiguas! de la bisabuela! algunos deellos rotos se su,etaban por detrás con una laña de metal. La cocina encendidadesprenda un agradable calor! las piñas chisporroteaban y un suave perfume a resinaquemada completaban el cuadro para sentirse abrigado y recogido. #aba calor de hogar en aquella cocina! siempre haba sido la parte más utilizada de la casa y daba laimpresi"n de que sus paredes guardaban el calor humano de los momentos que all

habamos pasado.

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)nos golpecitos en la puerta me sacaron de mi ensimismamiento! venan a buscarmepara cumplir el ritual acostumbrado los hombres debamos velar al difunto en una sala ylas mu,eres en otra haran compaña a la abuela. Aquella noche fue larga! muy larga...

(urante todo el da siguiente las visitas se sucedieron. @ino gente de varios pueblos delos alrededores! realmente el abuelo tena muchos amigos. A eso de las cuatro de la tarde

las campanas de la torre volvieron a de,ar or su tañido melanc"lico y tristeK anunciaban lallegada del sacerdote. El vie,o párroco! con una casulla morada y seguido por dosmonaguillos! lleg" a la casa. 4ez" una oraci"n acompañado por los vecinos mientrascerraban el ata'd. -odo el pueblo estaba all! las figuras enlutadas contrastabantremendamente con el paisa,e inmaculado.

(espu&s de las bendiciones! entre varios! alzamos el f&retro sobre los hombros y nosencaminamos hacia la iglesia precedidos por el párroco y los monaguillos. Al paso de lacomitiva algunos niños se paraban y quitándose los gorros se santiguaban inclinando lacabeza. :e sorprendi" lo familiarizados que esos chiquillos estaban con la muerteKseguramente desde muy pequeños haban visto pasar muchas comitivas como aquella yeso les haba hecho considerarlo como un suceso más de su vida cotidiana! sin miedos ysin aspavientos! sin mitos.

Llegamos a la plaza y subimos los escalones de entrada a la iglesia. El fro de los siglospareca haberse colado en el interior! las paredes de grandes bloques de piedra viva!parecan de hieloK haca all más fro que fuera.

Colocamos el ata'd sobre una mesa en el centro del pasillo! ,unto al altar mayor.Enseguida comenz" la celebraci"n. +o apenas lo oa! al principio prest& atenci"n perodespu&s las palabras del sacerdote en lugar de ofrecer consuelo y esperanza abundabanen el dolor y el sufrimiento. (esconect& mentalmente el sonido y de pronto sent c"mo micuerpo era sacudido imperceptiblemente por un prolongado estremecimiento. Cerr& loso,os y de repente tuve la sensaci"n de ver la iglesia desde muy arriba! como si el te,adohubiera desaparecido y yo me hubiera elevado varios metros por encima. $oda ver allaba,o a todo el mundo sentado en los bancos. (e pronto me encontr& frente a frente conuna figura muy familiar.

JAbueloO

El abuelo no hablaba pero me sonrea. 4epar& en que no iba vestido como en el f&retro!sino que llevaba un ,ersey de lana de color gris muy claro y pareca! sO $areca más ,oven. :e fi,& en sus manos! no tenan arrugas! con los dedos perfectamente rectos! sinlas deformaciones producidas por la artrosis de los 'ltimos años! su cabello! su cara! todoera más ,oven! pero sobre todo su e%presi"n! los o,os claros del abuelo brillaban llenos devida! de ilusi"n.

9ba a preguntarle algo cuando o claramente una voz que llamaba

J3aldomero! debemos irnos.

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No pude ver a nadie ni acert& a comprender de donde surga aquella voz! me pareci"percibir como si alguien allá arriba tendiese una mano al abuelo. 5in embargo cuandolevant& la vista no pude ver nada! s"lo una especie de cono muy grande sobre nosotrosque teniendo su base sobre la iglesia desembocaba en un t'nel de luz! allá arriba en loinfinito del cielo.

@i c"mo el abuelo se iba ale,ando por ese t'nel vertical. 5us o,os siguieron fi,os en mhasta que la distancia y la luz difuminaron su imagen.

5ent nuevamente una sacudida y abr los o,os! un olor fuerte a incienso se estabadesparramando por la iglesia mientras los presentes entonaban cánticos tristes!arrastrando mucho las notas.

)na sensaci"n de paz y sosiego como pocas veces haba e%perimentado se apoder" demi! senta el pecho e%pandido de gozo y alegra! el abuelo estaba bien y además noestaba solo. -al vez todo haba sido una ,ugarreta de mi mente! de mi imaginaci"n

desbordada por los 'ltimos acontecimientos y el cansancio! pero lo cierto es que me sesenta tan tranquilo y tan feliz que tena ganas de subir al pulpito y gritar a los cuatrovientos

JNo llor&is por el abuelo! &l está bien y es feliz. 5ea lo que sea! detrás de la muerte hayalgo que no produce miedo ni rechazo! sino paz y esperanza! el abuelo ya no está en esaca,a de madera que vamos a enterrar! está ya muy le,os! o muy cerca! no lo s&! peroe%iste de otra forma.

:e contuve a duras penas pues las manifestaciones de dolor se sucedan en parte

alimentadas por el responso del sacerdote. 5eguramente pensaran que el dolor me habahecho perder la raz"n si intervena.

Cuando el oficio termin" volvimos a cargar el ata'd sobre los hombros y fuimosturnándonos hasta llegar al cementerio separado apro%imadamente un 2il"metro delpueblo. )n viento helado soplaba levantando nubecillas de nieve en polvo. En elcementerio se produ,eron nuevas escenas de dolor! era la separaci"n definitiva del ser querido y el apego les haca rechazar la idea de que ya no volveran a verle. +o estabasereno! tena la plena seguridad de que el abuelo lo me,or que poda hacer era ale,arsede aquel ambiente triste cuanto antes e ir en pos de la claridad que haba al otro lado del

t'nel. $ensaba que en lugar de añorar su presencia! como hacan los familiares y amigos!deba apoyarme en la idea de que el abuelo haba hecho muchas cosas en la vida y ahorapodra seguir haciendo otras all donde estuviera. -ena la certeza de que haba unacontinuidad.

$oco a poco se fueron marchando todos de la casa. La abuela deambulaba de un sitio aotro de la casa buscando no se saba muy bien qu&. Estaba muy aturdida! nunca se habaseparado del abuelo! haban vivido el uno para el otro haciendo las cosas en funci"n delcompañero y ahora... Aqu&l por el que ella viva y haca las cosas más pequeñas se habaido de,ándola completamente descolocada A qui&n iba a cuidar! para quien iba a cocinar!con qui&n iba a comentar sus pensamientosM -endra que remontar una empinada cuestaen los pr"%imos meses.

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(ecidimos acostarnos temprano aquella noche! a la mañana siguiente saldramos haciaLe"n. 5in embargo! antes de retirarnos la abuela nos avis" que tena algo para -eresa ypara m. Al cabo de unos minutos sali" del despacho del abuelo con un sobre grande yblanco en las manos. 5e dirigi" al sal"n seguida por nosotros dos. J$ocos das antes demorir el abuelo me de," este sobre y me pidi" que os lo entregara despu&s de su muerte.

El saba muy bien que se iba! prepar" todas sus cosas de,ando solucionados hasta losmás pequeños detalles. Algunas personas mueren angustiadas pensando en lo que a'nles queda por hacer! puedo aseguraros que con el abuelo no ha sido as! pareca que lotena todo previsto.

+o s& bien que ha habido cosas en su vida que no ha podido llevar a cabo por ser empresas demasiado grandes y encontrarse solo! tena mi apoyo y mi comprensi"n! perono fue suficiente. Eran proyectos muy ambiciosos los del abuelo y hubiera sido preciso lacolaboraci"n de muchos para sacarlo adelante. Las enfermedades y la falta de medios leimpidieron lograr algunos de sus ob,etivos. El abuelo! vosotros lo sab&is! tena algo de

mucho valor siempre crea con mucha fuerza en las cosas que haca! por eso se entreg"tanto! lo mismo en su profesi"n que con las personas.

5"lo deseo que en este sobre encontr&is lo que buscáis y que sea para vuestro bien!proporcionándoos tantos ratos de plenitud como a vuestro abuelo. El confiaba en vosotrosy yo tambi&n.

Emocionada call" cuando ya empezaba a quebrársele la voz. :e entreg" el sobre y laabrac& sorprendido. La abuela sali" del sal"n con la tranquilidad del que ha llevado abuen t&rmino una tarea encomendada.

-eresa y yo nos miramos apenas habamos tenido tiempo de estar solos en todo el da!habamos comentado entre interrupciones constantes la sensaci"n vivida por ambosaunque con diferente intensidad! de la falta de emotividad ante el cuerpo sin vida delabuelo. -eresa haba comentado que le dio la impresi"n de ser un tra,e vaco! como unode esos monos de traba,o colgado de una percha esperando para ser vestido por alguien.

Ella! no haba sentido en ning'n momento la presencia cercana del abuelo. 5in embargo!en la iglesia! hubo un momento que le sinti" a su lado y una hondsima emoci"n lainvadi"! haci&ndola derramar las lágrimas que hasta entonces no haba soltado! eran

lágrimas de emoci"n no de dolor. All s estuvo el abuelo durante unos minutos! ella no lehaba visto ni odo! pero su intuici"n haba percibido claramente su presencia.

+ ahora estábamos all! en el sal"n! mirándonos sin saber qu& decir y sin decidirnos aabrir el sobre. Las palabras de la abuela nos haban hecho recapacitar! todos los sentidosestaban alerta! era un momento muy importante en nuestras vidas. 9ntuamos que nuestrofuturo estaba muy relacionado con el contenido de aquel sobre.

Iinalmente rasgu& con cuidado uno de los laterales! saqu& un fa,o de papelesmanuscritos! reconocimos la letra del abuelo. @olv a meter la mano al darme cuenta deque a'n quedaba algo dentro y se lo mostr& a -eresa era el sensor.

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El primer folio era una carta del abuelo dirigida a ambos! la letra! irregular en ocasiones!denotaba que haba sido escrita en varias etapas! probablemente coincidiendo conmomentos de me,ora fsica de los 'ltimos das.

Comenc& a leer en voz alta! las palabras escritas por 3aldomero tenan una fuerza tal enaquel sal"n que nos pareca estar escuchando su voz grave! un poco ronca cuando

hablaba de estos temas! denotando una emoci"n contenida.

;:is queridos Alberto y -eresa

#a llegado el momento en que debo marchar! mi vida aqu se acaba! el plazo que se medio para hacer o deshacer en esta vida! DG años! llega a su fin! lo hecho! hecho está y lopendiente quedará para una nueva e%istencia donde tenga la oportunidad de seguir aprendiendo y e%perimentando.

En estos años he comprendido que la muerte fsica es una realidad ob,etiva! sin embargo

no es la 'nica que ocurre en el hombre! el renunciar a los propios valores es tambi&n unamuerte! y lo es por despreciar el traba,o realizado! por creerlo in'til.

El hombre que quiere vivir debe pensar que la @9(A es un con,unto de vidas que a su vezintegran más vidas y &stas se componen de vivencias. #e aprendido que el conocimientoes un medio para alcanzar la sabidura que es la manera correcta de aplicar esteconocimiento. 5e adquiere cuando e%iste deseo de ello! pero solo preguntando yaplicando se logra la verdadera fuente del saber! que siempre mana y a la que se acercanlos que tienen sed.

El hombre del futuro en la -ierra deberá ser un hombre abierto de mente! que no sequede anclado en lo conocido. Cuando el hombre se queda anclado surgen los dogmascomo necesidad de e%plicar su postura. La ciencia se replantea sus postuladosconstantemente y el hombre que está naciendo ahora ya no se asombra de los avancestecnol"gicos! solo el que está conforme totalmente con lo hecho! dándole un valor inamovible se quedará anclado! el que parte de lo hecho como plataforma para me,orarloy ampliarlo estará en condiciones de vivir de acuerdo a su tiempo. El hombre queconstantemente se replantea sus logros no está orientado al futuro! sino al pasado! pueses del pasado de quien duda.

Alberto! -eresa! en los 'ltimos tiempos insistais mucho en que os di,ese c"mo se podacomunicar con los e%traterrestres! pues bien! ha llegado el momento para vosotros igualque en su da lleg" para m. Al final de esta carta encontrar&is la clave de contacto! osruego que hagáis uso en conciencia de ella.

No es nada complicado! sino más bien algo de constancia y perseverancia! habr&is detener fuerza de voluntad al principio pues los resultados primeros pueden parecerosdefraudantes! sin embargo! no ce,&is en el empeño! s& por e%periencia que merece lapena el esfuerzo.

#e de pediros algo que ya os he dicho muchas veces ten&is que traba,ar en equipo!tambi&n por e%periencia s& que solo no se puede llegar al final! buscad gente que

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comparta vuestras ideas! con los que os sintáis en sintona y for,aos ,untos los ob,etivos!la fuerza de todos os hará llegar a la meta final. (eber&is buscar y e%perimentar ydespu&s difundir el resultado de vuestras investigaciones. 4ecordad lo que dicen los:aestros ;-7(7 L7 ?)E 5E 4EC93E E5 $A4A (A4=.

+o os ped que confiarais en m y en mi historia sin daros a cambio ninguna confirmaci"n!

y es más! me guard& informaci"n que os hubiera ayudado a comprender un poco me,or.5iento que en alg'n momento lo hayáis pasado mal pero deba hacerlo as! no era por falta de confianza en vosotros! sino porque era necesario que a pesar de todas esasdificultades! que surgiera en vosotros la necesidad de saber y la capacidad de dar cabidaa otra forma de entender las cosas.

#ubo una parte de mi e%periencia en el ovni aquella noche del de 0unio que silenci& aprop"sito! se trata del mensa,e que recib del #ermano :ayor. 4ecuerdo la escena y suspalabras como si las tuviera grabadas en alguna parte de mi cerebro por la que no pasa eltiempo ni el olvido! cuando la rememoro es un fiel retrato de lo que all ocurri". Aquel ser me habl" de una forma que hizo que mi vida y mis ob,etivos cambiaran

;A comienzos de vuestro siglo el Conse,o de los Ancianos gobernadores de la >ala%ia!se reuni" ante la necesidad de elaborar un plan de ayuda al planeta -ierra. Estos:aestros son responsables del equilibrio que debe reinar en el )niverso y haban venidoobservando y analizando el proceso evolutivo de este planeta igual que el de otrosmuchos. 5u gran capacidad mental les permiti" e%trapolar para comienzos del pr"%imosiglo el fin de vuestra humanidad si antes no se operaba alg'n cambio! no s"lo en loshabitantes sino tambi&n a nivel geol"gico del propio planeta.

En aquella reuni"n se encontraban tambi&n B #ermanos :ayores cuya presencia habasido requerida para esta misi"n y a quienes dieron informaci"n sobre el futuro de la -ierra!las guerras que la asolaran! las armas nucleares y qumicas! la contaminaci"n y lasluchas por el poder! que haran de ella un planeta dolorido y masacrado en un plazo nomuy largo.

Asimismo! se mostr" c"mo iban a variar las condiciones tel'ricas produciendomovimientos ssmicos de gran envergadura. :uchos volcanes entraran en erupci"n y lastierras y los mares se tendran que asentar de nuevo.

-odo esto sucedera lentamente! sin que apenas los terrestres se apercibieran de ello.$ero la -ierra llegara progresivamente a un punto en que el ser humano ya no tendradonde apoyarse! habra perdido la fe en s mismo y en sus seme,antes. Las institucionescaeran por su base y los valores en que se asentaba la sociedad se perderan en lanoche de los tiempos.

El poder econ"mico y poltico dominara la -ierra y los más poderosos aplastaran a losmás d&biles. $ara entonces el ser humano habra perdido el Norte y la raz"n de ser de sue%istencia y no sabra d"nde encontrar respuestas a tantas preguntas.

$or todo ello decidieron poner en marcha un plan general de acci"n con ayuda de los B#ermanos :ayores a los que se les encomendara un misi"n muy concreta crear grupos

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que sirvieran de referencia a todos aquellos que buscaran la verdad en su interior. $araello sera necesario entrar en contacto con seres humanos terrestres que estuvierandispuestos a implicarse en esta misi"n.

Cuando se avecinase la catástrofe estos grupos de personas permaneceran unidos ypara entonces deberan haber alcanzado un grado de consciencia de las cosas y una

capacidad de ayuda y comprensi"n que les hiciese dar referencias y serenidad a unahumanidad que ya estara al borde de la locura.

$ero antes de todo esto! comenzaran su traba,o como n'cleo de e%pansi"n para difundir el mensa,e a todo aquel que se acercase a ellos en busca de respuestas. -endran quecompartir con sus seme,antes todo lo que aprendieran! desmitificar las instituciones!utilizar la mente con el mayor provecho posible y conocerse un poco más cada da parapoder conocer y entender a sus seme,antes. -endran que romper sus estructurasmentales para dar cabida a nuevos conceptos de convivencia! traba,o y entendimientoentre los seres humanos! con ob,eto de formar n'cleos cohesionados de hombres quecompartieran una filosofa de vida entre ellos y con los demás! y ala vez diseminar todo loque aprendieran de sus guas! siguiendo la má%ima -7(7 L7 ?)E 5E 4EC93E E5$A4A (A4.

La necesidad de este cambio en el hombre de la -ierra tiene tambi&n otro prop"sito y queva empare,ado con la evoluci"n del propio planeta La -ierra va a sufrir una serie decataclismos provocados en gran parte por la negligencia de los terrestres en cuanto a lascontinuas agresiones que sufre el subsuelo por las e%plosiones nucleares! y en partetambi&n por la invasi"n del sistema solar por un planetaRro de grandes proporciones. La

-ierra va a cambiar. El planeta debe estar en consonancia y armona con los seres que lohabitan y cuando se recupere de esta catástrofe alo,ará a seres como los que hasencontrado en esta nave! seres humanos que estarán ya un peldaño más arriba en laescala evolutiva=

:e senta abrumado por la cantidad de informaci"n que estaba recibiendo. No obstantepoda notar c"mo mi cerebro estaba receptivo y grababa cada palabra de aquel ser que apesar de las e%trapolaciones tan trágicas que estaba haciendo! segua manteniendo lamisma serenidad.

;3aldomero! hermano! comprendo muy bien c"mo te sientes en estos momentos. 5& quecuanto estás oyendo es difcil de asimilar! pero sabemos que t' eres un hombre quebusca la verdad y queremos pedir tu colaboraci"n para traba,ar ,untos en este empeño enfavor de la -ierra y su humanidad.

Aparte de esta misi"n que apenas te he esbozado hay otras muchas que involucran ahombres de otros planetas que realizan todo tipo de traba,os! desde recoger muestras dela flora y fauna de la -ierra hasta el cuidado y vigilancia para que no se produzcangrandes catástrofes compensando las fuerzas geol"gicas o ayudando a que la -ierrapierda parte de su presi"n interna provocando la aparici"n de nuevos volcanes! etc.

-ambi&n hay terrestres como 0on que colaboran con nosotros ayudando en realidad a sushermanos. 5e han establecido diferentes colonias fuera de vuestro planeta y están

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aprendiendo a vivir como vivirá el nuevo hombre de la -ierra. En ocasiones como &sta!por e,emplo! via,an hasta aqu con distintos prop"sitos evitar acontecimientos b&licos!apoyar los movimientos humanistas.

:ir& a 0on que me sonri" mientras me lanzaba una mirada de afecto y apoyo.

:e senta cada vez más inquieto! estaba muy nervioso y me pareca que no estabacomprendiendo nada de lo que me decan! que se me escapaban las cosas.

;-ranquilzate! nada se te pedirá que no puedas hacer. Necesitamos que vayanfraguándose grupos de hombres y mu,eres en todo el planeta! que est&n dispuestos aintentar la e%periencia de conocer! asimilar y vivir la filosofa de vida que hab&is perdidocon el tiempo. )na forma de volver al origen! de reencontrar el camino descubriendo losverdaderos valores de las cosas. Aprendiendo el significado de palabras como compartir!confiar! amistad! sinceridad! humildad... -odo ello entre varias personas que tendrán! conel tiempo! la ayuda de un gua! de un #ermano :ayor que les enseñará y les ayudará a

andar aunque no andará por ellos=.

(urante unos minutos rein" el silencio en la estancia. -odos aquellos seres tenanpuestos sus o,os en m! esperando una respuesta. 5ent c"mo me decan que menecesitaban! que haba un traba,o que debamos hacer los terrestres y que! sin nosotros!sin nuestra colaboraci"n! no podra llevarse a cabo la misi"n.

(e pronto reaccion& y el miedo desapareci". :e di cuenta de lo que me estabanofreciendo y sent como se me pona la piel de gallina seres superiores a m en evoluci"nme pedan colaborar en una misi"n en la que aprendera y encontrara respuestas! donde

tendra la oportunidad de dar un paso adelante en el conocimiento y en la propiaevoluci"n espiritual. El proyecto se me anto,aba muy ambicioso! y por si eso fuera pocoestaba la implicaci"n con los momentos que iba a atravesar la -ierra! la situaci"n era muygrave como para no sentir la responsabilidad sobre los hombros. #aba que hacer algo!haba que hacerloO! qu& duda cabaM

J+o no s& muy bien si voy a seros 'til. :i intenci"n es ayudar en la medida de misposibilidades! avisando sobre los riesgos que conlleva nuestra actitud. No obstante no s&como hacerlo! si cuento esto no me creerán...

-ermin& mirándole! esperando sus directrices. $ude ver la alegra refle,ada en sus o,os.

;No te preocupes! a'n no debes hablar. (ices bien! no te creeran! y además te faltamucha informaci"nK debes prepararte bien antes de empezar a difundir. -e entregaremosunos manuscritos que han sido dictados por uno de nuestros :aestros. 0on ha traba,adomucho transcribi&ndolos. (ebes leer esa informaci"n con mucha atenci"n! analizarla ycontrastarla con tus ideas y las de los demás! aunque en principio sin descubrir su origen.

Al mismo tiempo comenzarás a hacer algunos e,ercicios de concentraci"n para poder facilitar la comunicaci"n telepática con nosotros y podrás preguntarnos cuantas dudas te

sur,an. Contarás con nuestra ayuda siempre que lo pidas. 9ntentaremos que se abran los

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canales de comunicaci"n! pero t' debes poner de tu parte para que no haya interferenciasy la comunicaci"n sea clara y puedas confiar en los mensa,es recibidos=.

Ese es el relato que completa mi e%periencia en las praderas de Corona.

5"lo hay una cosa más que queda pendiente. En estos tiempos de mitificaci"n! de

misterios! de enseñanzas rebuscadas y complicadas! donde surgen ideologas! sectas!filosofas! que aparecen hoy y desaparecen al da siguiente! tendr&is una labor importanteque hacer. (eb&is desenmascarar esa mitificaci"n y los manipuladores que la alimentanen todos los lugares donde vayáis. $ero e%iste un compromiso que yo! desgraciadamente!no pude llevar a cabo. 5e trata de realizar ese traba,o en concreto en la 7rden! confo enque vosotros! aprovechando vuestra ,uventud y vuestros medios! podáis lograrlo. +o mesiento comprometido porque all di mis primeros pasos y me gustara que el conocimientoy las e%periencias que por esta otra va alcanc&is revierta de alguna forma en la 7rden.

Entre estos escritos encontrar&is instrucciones sobre c"mo utilizar la clave de contacto!

tambi&n algunos conse,os basados en mis e%periencias positivas y negativas! sobre cuáles el me,or m&todo de los que e%isten! qu& necesitáis! c"mo se realiza la comunicaci"n...

Iinalmente quiero deciros unas palabras recibidas de un gua para que record&is algo quedeb&is tener presente siempre

;Los hombres están unidos por un sentimiento religioso y se desunen por la interpretaci"nrazonada de ese sentimiento. 5in embargo no olvides que para cualquier empeño que elhombre se proponga siempre le mueve un sentimiento religioso! aunque lo llame de milformas diferentes. Ese impulso le hará tender a unirse a otros hombres=.

No perdáis nunca el inter&s y los deseos de evolucionar y ;ellos= siempre estarán convosotros. Abrid vuestros o,os y vuestro cerebro a esta oportunidad que se os brinda! no lade,&is pasar! es importante para vosotros y puede serlo para más gente.

?ue la paz y el amor c"smico os guen. 3aldomero

(e,& la carta y el resto de los papeles sobre la mesa. :e temblaba ligeramente la mano. All estaba lo que tanto habamos buscado! con esa clave se cerraba una etapa ycomenzaba una nueva mucho más rica y prometedora.

Lemos varias veces la clave de comunicaci"n y no le encontramos sentido! seguramentetendramos que leer todas las instrucciones sobre c"mo utilizarla. Lo haramos en Le"n.Los dos a la vez pensamos en ponernos en contacto con nuestros me,ores amigos!Iernando y $ilar! les de,aramos leer los manuscritos y les contaramos todo! para ver laposibilidad de empezar a traba,ar ,untos! estábamos seguros de que la idea les atraeratanto como a nosotros.

Esa noche dormimos plácidamente! estábamos agotados por el cansancio y las vivenciasde esos das y además por primera vez tenamos la sensaci"n de haber encontrado unpunto de partida! sabamos ya de d"nde haba que arrancar y c"mo! solamente nosquedaba por decidir el cuando.

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Aquella noche a las BQ en punto son" el timbre de la puerta. -eresa dio un respingosobresaltada. Eran nuestros amigos! esta vez haban sido e%trañamente puntuales.

Llegaban helados de fro! la ciudad estaba desde haca tres das cubierta por la nieve. 5equitaron los abrigos y se acercaron a la chimenea! un suave calor se e%tenda por elsal"n. -odos estábamos nerviosos! esa era la noche del intento y la inquietud haca presa

en nosotros! no sabamos c"mo iba a salir! por un lado deseábamos tener la e%periencia!pero por otro un cierto recelo o tal vez un inconfesado miedo al fracaso nos haca retrasar el momento de comenzar el e%perimento.

(urante el 'ltimo mes Iernando y $ilar haban ledo los manuscritos y nos habamosreunido muchas noches para hablar sobre ellos. El tema les interes" desde el principio.Los posibles recelos se desvanecan cuando pensaban que &ramos nosotros! sus amigosde toda la vida! quienes les estaban contando aquella alucinante historia. A nosotros nosconocan! saban que no &ramos ningunos locos! el que nosotros lo crey&ramos les dabauna cierta garanta.

A trav&s de las notas del abuelo! pudimos saber con todo lu,o de detalles! de qu& modo serealizaba la comunicaci"n telepática con los e%traterrestres! cuáles eran los m&todos ycuáles las venta,as e inconvenientes de cada uno.

3asado en su e%periencia! nos sugera que utilizásemos como medio de contacto algoparecido a la oui,a. 5iguiendo sus instrucciones preparamos un tablero redondo def"rmica blanca! pegamos en crculo todas las letras del alfabeto y los n'meros del Q al Y! ycomo receptáculo de la energa utilizamos un vaso de cristal que debamos colocar bocaaba,o sobre el tablero. 4ecomendaba tambi&n que hici&semos el e,ercicio usando unamesa de madera! evitando los metales que! pareca ser! desviaban la energa.

5u decantaci"n por ese sistema se basaba en una raz"n fundamental era una f"rmulapara traba,ar en grupo! la recepci"n era m'ltiple! por tanto se contaba con varias mentesa trav&s de las cuales llegaba el mensa,e. Nos dara! además! la oportunidad de aprender a unificar criterios concentrándonos los cuatro en emitir la misma idea! la longitud de lasondas mentales! al armonizarse! llegara más le,os y sera capaz de recibir con másfacilidad. )na de las desventa,as era la lentitud de la recepci"n! pero era una pegamnima si se comparaba con una mayor fiabilidad para evitar en lo posible interferencias.

Los otros m&todos eran individuales la psicografa y la inducci"n telepática.

En la psicografa o escritura automática el mensa,e era recibido por uno solo de lospresentes que! rela,ando su brazo! consegua al cabo de alg'n tiempo escribir de formainvoluntaria! mientras los demás permanecan en estado de rela,aci"n para no interferir obien intentaban! a su vez! recibir el mensa,e. Este sistema a pesar de ser más rápido en larecepci"n! poda tener algunos problemas de protagonismos! al no tener todo el mundo lamisma facilidad! e incluso poda ser una puerta abierta a las interferencias ya que elmensa,e era captado por una sola mente! y poda verse desvirtuado al atravesar los filtrosmentales del receptor.

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Los filtros representaban una aut&ntica trampa en las comunicaciones. El abuelo losllamaba as porque los comparaba con cristales coloreados que cada persona tena y atrav&s de los cuales vea el mundo que le rodeaba. Entre ellos estaba la educaci"n! losconvencionalismos sociales! los hábitos ... $or otra parte! al ser una sola la mentereceptora era muy difcil separar lo recibido del e%terior de lo generado por la propia

mente subconsciente.El haba utilizado la psicografa en sus comunicaciones con los guas! sin embargo ybasado en su e%periencia nos recomend" el

@. EL A3)EL7 :)E4E

traba,o en grupo como salvaguarda de muchos de los inconvenientes que &l encontr".

La inducci"n telepática! se reciba tambi&n a trav&s de una de las personas que en estadode rela,aci"n transmita en voz alta el mensa,e al resto! aunque a nivel subconsciente era

recibido por todos. Esta práctica produca una beneficiosa apertura de canales en todoslos participantes! pero tena tambi&n el mismo tipo de inconvenientes que la psicografa alser un m&todo individual! lo que poda crear dependencia del grupo hacia uno de susmiembros.

5abamos! no obstante! que en las primeras comunicaciones un porcenta,e muy elevadode lo recibido seria fruto de nuestro subconsciente! pero el abuelo nos anticipaba que eseporcenta,e ira decreciendo con la práctica. (ebamos aprender a no interferir el mensa,eque se nos enviaba.

-ambi&n nos adverta que un m&todo similar era utilizado por el espiritismo. 5in embargo!la diferencia era muy grande! mientras nosotros pretendamos la comunicaci"n con sereshumanos fsicamente vivos y de una superior evoluci"nK el espiritismo era contacto condesencarnados y casi siempre aparecan espritus que se encontraban en el mismo gradode evoluci"n que las personas que contactaban.

$or eso debamos concentrarnos en pensamientos altruistas que nos haran elevar lavibraci"n! traspasando as los estratos inferiores de la mente y evitando sintonizar conseres de ba,o nivel de evoluci"n.

La luz de la lámpara chocaba contra la blancura del tablero. -odos lanzábamos miradasfurtivas a la mesa sin atrevernos a dar el paso. Iinalmente fue Iernando quieninterrumpi" la conversaci"n sobre la enorme nevada cada y pronunci" las palabras quede alg'n modo todos esperábamos.

J3ueno! vamos a intentarlo.

Nos sentamos alrededor de la mesa. @erbalic& las instrucciones que todos conocamos.(ebamos rela,arnos durante unos minutos para despu&s empezar a generar pensamientos positivos.

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-odos cerramos los o,os y tratamos de rela,ar el cuerpo mientras concentrábamos lamente cuanto podamos. (espu&s de unos minutos pusimos el dedo ndice de la manoderecha sobre el vaso! apoyando suavemente las yemas sin e,ercer presi"n.

Con tono que! muy a mi pesar son" trascendente! emit en voz alta la llamada para quelos demás pudieran concentrarse sobre la misma idea.

J?ueremos comunicar con #ermanos :ayores! seres humanos fsicamente vivos y deevoluci"n mayor a la nuestra! que deseen ayudarnos a evolucionar. Nos gua el deseo deaprender.

La voz no sali" de entre aquellas cuatro paredes! sin embargo! los pensamientos via,aronpor el espacio a una velocidad increble buscando encontrar la nota de resonancia enalguna estrella le,ana! en alg'n apartado planeta donde otros hombres pudieran captar lallamada y enviar su respuesta.

@9. $49:E4A5 EX$E49ENC9A5$asaron varias semanas y cada viernes seguamos reuni&ndonos en casa e intentábamosuna y otra vez el contacto. 5in embargo! a pesar de que seguamos al pie de la letra lasrecomendaciones del abuelo los resultados no eran muy halag*eños.

$ercibamos en algunos momentos una energa que mova el vaso deslizándolo por eltablero de una a otra letra pero no pasábamos de ah. A veces pareca que se conformabauna palabra! pero inmediatamente despu&s aparecan letras sin ning'n sentido. Nosturnábamos intentado descubrir si alguna de las combinaciones resultaba más efectiva!

mientras tres de nosotros colocábamos el dedo sobre el vaso otro tomaba nota de lasletras que se iban marcando. El desencanto y la frustraci"n estaban a punto de hacer mella en nuestro ya tambaleante ánimo! s"lo nos mantena la confianza que el abuelopareca tener en aquel m&todo.

La primera dificultad que tuvimos que salvar fue que nuestros pensamientos atravesaranel mundo de los desencarnados. Efectivamente! cuando el vaso comenzaba a moverse deforma involuntaria y haca amplios crculos sobre el tablero era un claro indicio de que allhaba alg'n tipo de energa. A la pregunta de qui&n eres! se correspondan las respuestasmás variopintas! habamos ledo sobre el espiritismo y las in,erencias de los ;espritus

burlones= que intentaban comunicar en cuanto vean un canal abierto. A los pocosminutos! cuando detectábamos que no era la comunicaci"n que buscábamos lode,ábamos para reanudarla con una nueva llamada pasados unos momentos. -enamosmuy claro que no queramos comunicar con desencarnados! sino con hombresfsicamente vivos! y que por su evoluci"n superior pudieran aportarnos alguna enseñanza.

En las notas que el abuelo de," se haca referencia al espiritismo como una práctica muyantigua y bastante usual desde los albores de la humanidad. 5in embargo tambi&nadverta que en el noventa y cinco por ciento de los casos la comunicaci"n no serealizaba con desencarnados! sino con el subconsciente del presunto m&dium.

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(e cualquier modo fuera el propio subconsciente o alg'n espritu! lo cierto es que noconseguamos ninguna frase coherente. En ning'n momento sentimos miedo! las notasdel abuelo hablaban bastante sobre las energas que nos rodean! energas que soninofensivas y no interfieren en el mundo fsico. 5iempre que estuvi&semos armonizados!emitiendo vibraciones positivas y sobre todo tomándonos en serio lo que estábamos

haciendo no haba prácticamente posibilidades de interferencias.#abamos odo historias sobre e%periencias paranormales! algunas sorprendentes! y enalguna ocasi"n se nos pas" por la cabeza la posibilidad de que nos ocurriera a nosotros!pero recordábamos las palabras del abuelo y sus conse,os ;5"lo si deseáis abrir lapuerta al mundo de los desencarnados permitir&is con vuestro consentimiento yresponsabilidad la interferencia de un mundo con otro! pero liberar&is energas difciles decontrolar! y que a la larga crean necesidades y dependencias recprocas. 4ecordad quevuestro ob,etivo está más allá de este tipo de e%periencias. Elevad vuestro tono vibratorioy dirigid la llamada a los #ermanos :ayores! ellos si que pueden controlar las energas=.

(esde el principio tenamos clara una cosa la mente era algo muy delicado para ,ugar con ella. #aba que saber en cada momento qu& se estaba persiguiendo y para qu&K elcontrol deba mantenerse a toda costa y para ello su consciente actuaba como un filtroperfecto desechando cuanto no tuviera visos de coherencia.

El paso de los das fue haciendo que un cierto desánimo se apoderara de casi todosK s"loyo me empeñaba en mantener la ilusi"n pese a quien fuera. :i ob,etivo era bien claro#aba que seguir adelante hasta conseguirlo. $ocas veces a lo largo de mi vida me habaobcecado tanto en una idea! pero desde que descubr el tema algo especial reson" muy

dentro. Es una sensaci"n que se tiene muy pocas veces en la vida! pero te da el ntimoconvencimiento de que eso es importante y debes perseguirlo.

Al cabo de alg'n tiempo tuvimos lo que consideramos un pequeño premio a la constancia.)na de las noches de reuni"n! despu&s de hacer la rela,aci"n y emitir la llamada notamosclaramente que el vaso daba vueltas de una forma más uniforme! los movimientos eransuaves y mantenidos. -odos percibimos que se trataba de una energa distinta.

Emitimos la pregunta de rigor ?ui&n eresM El vaso fue deslizándose sin titubeosseguidos por los dedos de -eresa! $ilar y AlbertoK Iernando tomaba nota! fue escribiendo

las letras que el vaso marcaba.J5oy 9sthar.

JEres un desencarnadoM

JNo. @ivo.

JEstás fsicamente vivoM

J5i.

J("nde estás ahoraM

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J@ia,o en nave.

El coraz"n nos dio un vuelco. (esde luego las respuestas eran casi telegráficas! lacomunicaci"n era lenta! distaba mucho de lo que el abuelo nos haba dicho que se podallegar a conseguir! pero sin embargo! no haba interferencias! las letras se marcaban deforma decidida y clara. (urante unos minutos surgi" el desconcierto y la sorpresa en el

grupo. Lo habamos logradoM Jnos preguntábamos sin atrevernos a creerlo despu&s detantos intentos fallidos.

Ese pequeño desbara,uste hizo que se perdiera la onda y hubo que concentrarse denuevo para recuperar la comunicaci"n.

J@ives en un planetaM Cuál es el nombre de tu planetaM

J5i. @enus.

J$ero si @enus no está habitado! no puede haber vida! los cientficos dicen que estárodeado por una capa de gases que hacen la atm"sfera irrespirable y no es posible eldesarrollo de la vida humana JComent" Iernando que era quien formulaba las preguntasen voz alta para que todos nos concentrásemos sobre la misma idea.

$or toda respuesta el vaso marc" un signo de interrogaci"n.

J#ay vida en @enus! vida humanaM Confrmanos por favor.

J59.

Entonces a Iernando se le ocurri" algo que vena rondándole por la cabeza desde quecomenzara la comunicaci"n.

J$uedes darnos una prueba de que estamos contactando contigo! que no es productode nuestra propia menteM

JLo intentar&.

Al cabo de unos segundos el vaso marc" las siguientes letras.

JConectad la radio. 7nda corta D.F :hz.

Iernando se levant" y encendi" el aparato. Ii," el dial en el punto indicado y volvi" a lamesa con los demás. -odos estábamos e%pectantes y el coraz"n desde haca diezminutos nos lata a ritmo acelerado.

En ese punto del dial 'nicamente se oa el tpico ruido parásito! no se captaba ningunaonda! de pronto! por encima de ese ruido se alz" claramente un pitido agudo. El vaso sedesliz" sin que mediara pregunta verbalizada.

J5oy yo.

J?uieres decir que t' estás produciendo ese sonido mantenidoM

J5.

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Iernando no se de," convencer tan fácilmente y casi desafiante di,o.

J#azlo intermitente.

9nmediatamente el pitido prolongado se torn" corto e intermitente. El cerebro de Iernandofuncionaba a velocidad de v&rtigo. No daba tiempo a los demás a que formuláramos

ninguna pregunta.

J#azlo más grave.

Al momento el sonido se volvi" grave y mantenido nuevamente.

JAhora más agudo.

El sonido nuevamente fue como el que haban escuchado la primera vez.

Nos miramos unos a otros buscando en los o,os de los demás la confirmaci"n de lo que

cada uno pensábamos era verdadOOO.@olvi" a organizarse un pequeño revuelo! todos queramos preguntar y cada uno algodistinto! no lográbamos ponernos de acuerdo. Iernando intent" poner un poco de ordenanotando algunas preguntas y comenzando un improvisado cuestionario.

JC"mo es la vida en tu planetaM

J(ebo irme! lo siento! s"lo puedo comunicar unos minutos. Amor! adi"s.

+ dicho esto el vaso se qued" materialmente clavado en el centro del tablero.

Evidentemente la energa! no saban muy bien de qu& tipo! que lo haba movido! habadesaparecido.

A pesar de los esfuerzos por concentrarse y recuperar el contacto no lo logramos. Eranlas tres de la madrugada y estábamos tan entusiasmados con lo que acabábamos de vivir que no podamos creerlo. 5in embargo nuestra curiosidad no estaba saciada ni muchomenos! tenamos cientos de preguntas en el tintero! pero una cosa era cierta! habamosconseguido algo importante! por primera vez tenamos la confirmaci"n de que era posiblecontactar telepáticamente con alguien coherente.

Aquella noche disfrutamos plenamente del hito logrado. En los das que siguieron nosvimos dominados por las dudas! sera nuestra propia menteM! alg'n elemental! comollamaban a los seres desencarnados! que gastaban bromas a los cr&dulos vivosM! cabala posibilidad de que hubi&ramos contactado con alg'n otro terrestre que nos habatransmitido telepáticamente esas frasesM! despu&s de todo eran cortas! casi monoslabos!podra haberlas enviado alguien como un e%perimentoM ...

(urante toda la semana formulamos mil con,eturas! sin embargo! sobre todas lasespeculaciones reinaba un hecho claro La e%periencia de la radio era inequvoca!habamos captado una señal que variaba seg'n nuestras indicaciones! a ese hecho

resultaba más difcil encontrarle e%plicaci"n! era como una nota discordante que noshaca dudar.

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+ si todo hubiese sido verdadM! + si el tal 9sthar e%istiese y hubi&ramos estado;hablando= con un ser de otro planeta durante unos minutosM

El abuelo nos haba advertido que las primeras comunicaciones seran cortas y quecorrespondan a una etapa en la que era necesario pulir la longitud de onda... Nosencontrábamos inmersos en un mar de dudas y apenas podamos esperar que llegara el

pr"%imo viernes para confirmar el logro o descubrir el engaño.

En esos das lemos cuanto cay" en nuestras manos sobre el fen"meno 7@N9! y sobre loscontactos e%traterrestres! haba una vasta literatura! a veces fiable y otras puramenteespeculativa. Nos enteramos a trav&s de un libro de

0.0. 3entez ;7@N95 5.7.5. a la humanidad= que un grupo de personas en $er'aseguraba mantener contactos telepáticos con seres de otros planetas. Los m&todos queseguan eran similares a los nuestros.

$reparamos a conciencia la siguiente reuni"nK hicimos un amplsimo cuestionario a modode gui"n! tenamos además una petici"n final queramos una cita! un avistamiento.

Esta idea nos creaba en el fondo un poco de inquietud pero necesitábamos confirmaci"nde la veracidad de las comunicaciones por todos los medios y ese nos pareca el másdefinitivo. 5i nos citaban en un lugar y a una hora determinada y veamos una nave... nocabra ya duda. El miedo a lo desconocido luchaba en nuestro interior con los deseos por descubrir la verdad.

(urante las siguientes semanas pasamos por diversas e%periencias de comunicaciones

que nos llevaron desde la má%ima ilusi"n al más profundo desánimo. #ubo nochesenteras de esos viernes! en las que no sacábamos nada en claro. Las interferencias sesucedan! las comunicaciones eran esporádicas y duraban s"lo unos minutos. 5ealternaban los contactos con e%traterrestres que siempre parecan ir de paso por la -ierra!ocupados en alg'n traba,o! con intentos de los elementales por captar la onda mental queles permitiera comunicarse o manifestarse al mundo de los encarnados. Iueron dosmeses en los que aprendimos varias cosas

El resultado del contacto dependa en gran medida de nuestro estado de ánimo!comprobamos por e%periencia que cuando nosotros estábamos más cargados

emocionalmente! más alterados! más desarm"nicos en definitiva! la longitud de onda queemitamos no deba tener la suficiente fuerza para traspasar la barrera de los elementalesy esa noche nos bamos a la cama de vaco! sin ni siquiera haber cosechado uno de esoscontactos cortos pero que resultaban tan gratificantes.

Aprendimos tambi&n a no tenerle miedo al mundo de lo invisible! de las energas! a poder controlar las interferencias! muchas veces involuntarias! de los desencarnados. Lestratábamos con respeto pero con firmeza! pidi&ndoles no interferir! pues nuestro ob,etivoera comunicar con seres humanos vivos de otros planetasK en la mayora de los casos lapetici"n era atendida y la interferencia ya no volva a producirse.

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Con la práctica era más fácil concentrarse y observar pequeños progresos en la recepci"ncuando tenamos alg'n comunicante. Aprendimos a reconocer enseguida una buenacomunicaci"n de las que buscábamos! se notaba claramente diferente a las otras encuanto a coherencia! continuidad! falta de interferencias! etc.

Casi siempre una petici"n saltaba al tablero de forma persistente $uedes darnos una

citaM $odramos ver tu naveM

Normalmente las respuestas eran una negativa amable

;No estáis preparados a'n=. ;Estoy traba,ando=. ;No puedo desviarme=. ;Lo siento! noes posible=.

5in embargo! algunas veces conseguamos arrancar al comunicante un lugar y una hora.Con los ánimos e%altados cogamos el coche y nos ponamos en marcha hacia el lugar indicado! las estrellas y la oscuridad de la noche fueron mudos testigos de estas idas y

venidas infructuosas. :irábamos al cielo con obstinaci"n esperando ver el punto luminosoque se desplazase veloz! pero todo era en vano! la b"veda celeste permaneca inmutableante nuestros o,os ansiosos. Al final! cansados y helados de fro volvamos a casa lamayora de las veces con las manos vacas. Cuando intentábamos comunicar de nuevorecibamos respuestas como ;No nos hab&is visto por las condiciones climatol"gicas=.;bamos a mucha altura=. En más de una ocasi"n llegábamos tarde al lugar de la cita!entonces nos reconcoma la duda lo hubi&ramos visto de haber llegado a tiempoM

A todos nos contrariaban lo que considerábamos ;tomaduras de pelo=! pero el que peor lo llevaba era Iernando! no entenda por qu& era tan difcil verlos cuando continuamente

aparecan noticias de avistamientos fortuitos y haba cientos de libros con testimonios detestigos presenciales de las evoluciones de los supuestos 7@N95. >ente que setropezaba con ellos mientras que nosotros que manifestábamos un claro inter&s por eltema no acumulábamos más que una decepci"n tras otra.

(ecidamos no salir más! pero despu&s de unos das! cuando surga la posibilidadvolvamos a pedir nuevamente la cita! era la esperada prueba definitiva y ante la quimerade esa confirmaci"n sucumbamos muchos viernes.

-iempo despu&s descubrimos que muchas de aquellas comunicaciones correspondan a

interferencias propias! la ine%periencia del principio! unida a nuestros deseos por lograr unavistamiento eran los ingredientes perfectos para que se dieran ese tipo decomunicaciones. )na vez más la paciencia deba imponerse sobre el apresuramiento.

Las comunicaciones que mantenamos no eran desde luego las que esperábamos.Contactos de diálogos abiertos y continuados donde no se interrumpiera la comunicaci"ny se pudiesen hacer preguntas y pedir aclaraciones como cuando tienes unaconversaci"n con alguien de t' a t'.

4ecibamos retazos de informaci"n interesante pero la comunicaci"n era tan corta! cinco

minutos apenas! que no permita mantener un hilo de continuidad! y apenas lográbamosformular media docena de preguntas. Los interlocutores eran distintos aunque a veces

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surga alg'n ;vie,o conocido=! alguien que ya haba aparecido en alguna otra ocasi"n!notábamos entonces que la comunicaci"n era más fluida. ?ueramos conseguir establecer contacto con la misma persona pero aparentemente eso resultaba bastantedifcil! no s"lo por el corto tiempo que duraba sino porque se estableca aprovechandovia,es de esos hombres a la -ierra! via,es esporádicos y que no siempre coincidan con

los das de reuni"n del grupo.$or otra parte en alguna ocasi"n nos decan que a esos hombres no les permitancomunicar largamente con los terrestres! sus misiones eran otras. Algunos de loscomunicantes confirmaron incluso su posici"n! eran seres humanos /a. dimensi"n6 en elcuarto peldaño de la escala evolutiva /.6.

Algunos de los supuestos e%traterrestres con los que comunicamos nos confirmaban sucolaboraci"n en misiones de ayuda a la -ierra! pero e%clusivamente a niveles fsicos ytecnol"gicos como recogida de muestras! traba,os geol"gicos en el subsuelo! etc.

(urante todo este tiempo luchamos con verdadera constancia por mantener el espritu deequipo! los deseos de avanzar! la fuerza de voluntad ... + as a comienzos del mes de Abril! cuando la primavera estallaba en los campos regándolo todo con una nueva luz quehaca parecer los colores reci&n estrenados! un tibia noche! una noche especial quesiempre recordaramos! lanzamos una vez más esperanzados la consabida llamada alespacio esperando ser escuchados.

J?ueremos comunicar con seres humanos fsicamente vivos! de evoluci"n superior a lanuestra. Nos gua el deseo de aprender.

@99. A4-AX. $49:E4 C7N-AC-7

Arta% avanz" con paso firme hasta abordar la pasarela m"vil que le llevara hasta laentrada misma del edificio 5ede Central del Conse,o de ôna. Ese era un gran da! iban adarse a conocer los resultados finales del Concurso sobre investigaci"n y desarrollo queperi"dicamente se hacan entre la zona Norte y 5ur.

En el 'ltimo e,ercicio &l y su equipo de colaboradores haban estado a punto d& alcanzar la menci"n especial! pero al final se impusieron los me,ores resultados de otros.

(esde entonces haban traba,ado mucho esforzándose y concentrando susinvestigaciones sobre la flora y fauna de <frica! una zona de la -ierra en vas dedesertizaci"n. #aban conseguido salvaguardar animales y plantas que estaban ya apunto de desaparecer! logrando su traslado y aclimataci"n a un planeta laboratorio.

No obstante! para algunos organismos tuvieron que crear de forma artificial unascondiciones ambientales especiales! produciendo en algunas zonas un microclima quefuera similar al de la -ierra! para despu&s ir deduci&ndolo de forma gradual hasta que lasespecies eran capaces de sobrevivir en el nuevo medio.

Antes de que se diera cuenta ya haba llegado! abandon" el carril m"vil y se par" frente ala sede del Conse,o. Era un enorme edificio de forma piramidal! construido de un material

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transparente y que de,aba pasar la luz permitiendo la visi"n de dentro afuera! pero no alrev&s.

#aba una gran animaci"n! el sal"n principal! capaz de albergar a una buenarepresentaci"n del planeta estaba prácticamente lleno. 5e dirigi" hacia la grada que leshaba correspondido! all estaban ya sus once compañeros de equipo! tan ansiosos como

&l! esperando los resultados finales.

(urante los 'ltimos tres das se haban estado presentando los traba,os de una y otrazona. 4ealmente era sorprendente ver como cada año funcionaban me,or y sealcanzaban cotas más elevadas en el conocimiento de la naturaleza y del mundo material.

Iinalmente la voz del presidente del Conse,o tom" la palabra y en un breve peroelocuente discurso agradeci" a todos su colaboraci"n y sus esfuerzos en favor del biencom'n.

)n silencio general se e%tenda por el enorme recinto. Cientos de o,os estaban clavadosen los enormes paneles que en breves segundos comenzaran a mostrar la relaci"n delos traba,os premiados. Las letras luminosas empezaron a aparecer a la vez que un levemurmullo se e%tenda entre los asistentes. El rostro de Arta% y sus compañeros se ilumin"de ,'bilo. All estaba su aportaci"n! entre la lista de los elegidos. 5e felicitaronefusivamente unos a otros! era muy agradable ser seleccionado! no s"lo por el premiosino porque significaba una muestra de reconocimiento al esfuerzo y eso les compensabade las duras horas de desánimo y cansancio. Lo que haban logrado era bueno para lacomunidad y as se lo reconocan.

Cuando termin" la asamblea y se repartieron las menciones se dirigi" rápidamente a sucasa. @irna! su compañera! haba estado viendo la transmisi"n de la ceremonia y sali" arecibirle antes de que entrara. <mbar y Lerna sus hi,os se abalanzaron sobre &lfelicitándole efusivamente apenas le vieron.

5e dirigieron todos a la sala comunal que serva de centro de reuni"n e intercambio a lafamilia! era el recinto más espacioso de la vivienda! estaba dotado de varios panelesdedicados a consulta! lectura de escritos! visi"n de documentales y pelculas! percepci"nmusical! etc. -odos ellos podan ser accionados individual o simultáneamente sin interferir unos con otros y permitiendo en todos ellos la captaci"n a nivel e%trasensorial total tacto!

odo! vista! olfato! y mil y una sensaciones.

Cuando estuvieron todos sentados empezaron a hacer planes sobre el via,e. 5i! el premiohaban sido unas vacaciones para todo el grupo y sus familias en âra! un planeta! sinhabitar por seres humanos y que resultaba un verdadero paraso por su vegetaci"n y suspaisa,es e%"ticos.

)nos das despu&s tomaban una nave de transporte unifamiliar que les llevara hastaâra. (urante el via,e vieron proyecciones sobre el planeta que iban a visitar! datos sobresu clima! temperatura! fauna! flora! etc. Estaba situado a tres años luz de (ino y fue

evacuado en parte antes de sufrir la invasi"n de un cuerpo estelar fro. -ard" casi cienaños en recuperar la atm"sfera descontaminada y un suelo capaz de desarrollar vida.

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Ahora resulta un planeta increblemente bello! del choque con aquel astro surgi" unasegunda luna y siempre se encuentra inundado de luz. 5u superficie está poblada por numerosas plantas gigantes y miles de flores de las más diversas especies. En elsubsuelo corren cientos de ros de un e%traño color verde provocado por los pigmentosque ciertas plantas desprenden en contacto con el agua. A menudo surgen g&iseres de

color verde el&ctrico que sorprenden al visitante. #ace una temperatura alta perosuavizada por el frescor de la vegetaci"n y una suave brisa perfumada que procede de losnumerosos lagos que salpican aqu y allá la superficie del planeta.

Iue un via,e inolvidable. La estancia en âra les hizo olvidarse del mundo tan tecnificadoen el que vivan y recobrar la sensaci"n de vivir en la Naturaleza. (isfrutaron de cuantoles rodeaba! el sol! las plantas! aquellos paisa,es rec"nditos que parecan esperar quealguien les descubriera. 5u espritu estaba e%altado por sentimientos de amor y respetohacia la Naturaleza que era una inmensa e%plosi"n de vida! era asombroso ver comocada especie tena su sitio! cada planta su altura id"nea! cada flor su color más

adecuado! y como convivan en su aparente disparidad unas ,unto a las otras ofreciendolo me,or de s. En los das que pasaron all aprovecharon para recargar su ánimocompartiendo vivencias y estrechando lazos. Arta% y @irna utilizaron parte de su tiempo enrecordar pasa,es de su pasado que haban sido significativos en sus vidas.

>racias a la capacidad que tenan de cone%ionar sus cuerpos mentales pudieronconcretar en imágenes esos hitos su nacimiento! su infancia! la estrecha relaci"nmantenida con su madre que se ocup" de su educaci"n! vigilando de cerca sustendencias naturales y sus inclinaciones para no interferiras.

En (ino el papel de la madre es fundamental en la formaci"n de los hi,os. (esde quenacen hasta los siete años tienen especial inter&s en que sepan cuando antes quienesson! qu& lugar ocupan en el Cosmos! y qu& futuro les espera si son fieles a su condici"nde hombres. Ella es la encargada en esta primera etapa de la vida de enseñar las normasfundamentales de la moral! la base para crear sociedades arm"nicas! el verdaderosentido de conceptos como convivencia y respeto...

A partir de los siete años comienza su formaci"n e%trafamiliar con unos estudios básicosgenerales encaminados a formar la infraestructura para los estudios superiores. En eseperiodo su formaci"n está dirigida principalmente al conocimiento de la organizaci"n

social! de la historia del planeta! de los "rganos o conse,os rectores de las instituciones decarácter cientfico! etc.

Iinalmente la formaci"n superior corresponde siempre a una decantaci"n natural de lasaptitudes del individuo. A Arta% siempre le haba gustado la biologa! por ello sus maestrosconsideraron acertado que encaminara sus pasos en esa direcci"n. @irna! por su parte!mostraba una clara preferencia por el arte en distintas manifestaciones! sobre todo lapintura y la escultura. -ena un espritu sensible y creativo que le haca captar la forma yel color dándole una dimensi"n personal.

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Ambos permanecieron formándose hasta cumplir los FQ años! edad en la que tuvieron!como todos! la obligaci"n de revertir a la sociedad el fruto de esos estudios mediante eltraba,o.

#asta entonces hombres y mu,eres se relacionan sin establecer lazos ni compromisos!pero llegados a esa edad es habitual hacer la elecci"n de la que será la pare,a definitiva

para esa encarnaci"n. A partir de entonces se convierten en mon"gamos! la poligamia y lapoliandria son rechazadas socialmente.

Los hombres y mu,eres de (ino son conscientes de la importancia de seguir el plan devida trazado desde que nacen! por eso no permiten que su mente se vea ocupada enpreocupaciones que podran desviarles de &l.

4ecuerdan y visualizan el momento en que ambos decidieron unir sus vidas y colaborar eluno en los planes del otro. La elecci"n no fue difcil! &l se sinti" atrado por la gransensibilidad y el temperamento artstico de @irna! aparte de su aspecto fsico! y a ella le

gust" el espritu investigador de Arta%. El amor surgi" entre los dos de una forma decidida. Ambos pensaron que sus caractersticas podran ser complementarias y que de su uni"nsaldran ambos beneficiados. Conectaron rápidamente! tenan muchas cosas en com'npactos de anteriores reencarnaciones! conocimiento mutuo de los programas! y una formacompartida de entender la pare,a una unidad! el cien por cien de ser humano! en la que laaportaci"n de cada uno ,ugara un papel fundamental. Las caractersticas de la mu,erelaboradora y constante con una gran capacidad intuitiva! unidas a las del hombre máscreativo y generador de ideas daran como consecuencia un n'cleo familiar estable.

-odava se estremecen emocionados cuando reviven la ceremonia de su uni"n.4eunieron a sus seres más queridos! familias y amigos! y conscientes de la trascendenciadel momento se prepararon para vivirlo intensamente.

Estaban frente a una mesa circular! &l a la derecha! ella a la izquierda! sobre la mesahaba una planta! delante de ella una vela encendida! un recipiente con agua y unapequeña pirámide.

)nificaron sus mentes con unos sonidos arm"nicos para requerir la presencia de un:aestro que actuase como testigo de e%cepci"n de aquella uni"n. El :aestro acudi" a sullamada y les e%plic" la simbologa de los elementos que iban a mane,ar. A pesar de que

aquello era conocido por todos! sus palabras sonaban nuevas! pues se viva la situaci"ncomo 'nica e irrepetible.

Con voz pausada el :aestro fue e%plicando

;El fuego y el agua son antag"nicos pero son necesarios por separado. (e la energa ydel agua surge la vida! representada por la planta.

La pirámide simboliza la concentraci"n de vuestras energas que os ayudarán a eliminar los 2harmas pendientes entre ambos=.

Con un gesto les anim" a proseguir. Arta% cogi" el recipiente con el agua y se lo ofreci" a@irna diciendo ;La uni"n que hoy realizamos vivirá porque este agua tiene la vida=.

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Ella cogi" la vela con la otra mano y se la dio a &l diciendo ;Esta uni"n que hoyrealizamos vivirá porque esta llama tiene la vida=.

(espu&s ambos de,aron las ofrendas sobre la mesa. Arta% coloc" la pirámide entre lasmanos abiertas de @irna! puso las suyas encima como tapándola para que laconcentraci"n de energas tuviera lugar. Luego! sin separar las manos! se dieron un beso

que sellara la uni"n.

(espu&s hicieron partcipes a los all reunidos de sus ob,etivos fsicos y espirituales.

Ahora! despu&s de los años se sentan muy satisfechos de las e%periencias vividas.#aban logrado un nivel de entendimiento muy alto! como consecuencia de muchas horasde compartir vivencias y pensamientos! de intercambiar datos incluso sobre sus 'ltimasreencarnaciones.

A menudo practicaban e,ercicios mentales en pare,a! e,ercicios de sintona! meditaci"n!

rela,aci"n! via,es astrales! sofronizaciones! etc. que servan en buena medida paraaumentar su desarrollo a nivel mental! pero tambi&n les proporcionaban unossustanciosos resultados con datos de gran valor sobre su programa! porque surgan de lasuma de dos espritus con los mismos ob,etivos.

(ecidieron tener dos hi,os! en base a criterios sociales! 2hármicos y de dedicaci"n <mbar y Lerna! a'n en la fase de formaci"n familiar completaban la familia. Los nombres no lesfueron puestos al nacer sino cuando cumplieron los tres años! pues normalmente es unsonido representativo con el aspecto fsico y psicol"gico! y es a esa edad cuando elcuerpo está más definido y la psique apunta ya una personalidad determinada.

El periodo vacacional termin" y tuvieron que regresar a (ino.

)n nuevo da comenzaba y Arta% se dispuso a reanudar su actividad habitual. 5e dirigi"hacia su pequeña nave de transporte y tecle" la clave de acceso! inmediatamente lacompuerta de entrada se elev" y se acomod" en su interior.

Activ" los sistemas de energa y accedi" al computador central para recibir el informe delda. 5u plan de traba,o no haba sufrido variaciones durante las pr"%imas horas debainvestigar un apasionante terreno en el que 'ltimamente estaba empezando a bucear la

relaci"n entre la mente y el espritu. #aban logrado aislar unas subpartculas queparecan ser unidades de grabaci"n. La memoria del hombre estaba compuesta por millones de estas subpartculas que parecan tener funciones especficas siendoselectivas y almacenando las e%periencias a diferentes niveles de acceso.

Cruz" rápidamente el espacio que le separaba de los laboratorios ubicados en una zonamontañosa no le,os de la ciudad. All ,unto con un centenar de hombres se entreg" contes"n a hacer pruebas y comprobar hip"tesis. 5e enfrascaba en lo que haca de tal modoque no era consciente del tiempo transcurrido hasta que le daban la señal para finalizar sutarea.

Cuando sali" al e%terior el sol estaba en su c&nit! difuminando un poco la atm"sfera!ligeramente verdosa! que rodeaba el planeta.

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(espu&s de un corto descanso se dirigi" al Centro de Iormaci"n dispuesto a afrontar enlas pr"%imas horas nuevas enseñanzas. Era un enorme edificio con multitud de pequeñosrecintos individuales para autoformaci"n y unas grandes salas para enseñanza impartidapor un maestro. Clases de astrologa! fsica! qumica! gen&tica! botánica! zoologa!biologa! etc. se impartan continuamente a diferentes niveles. 7tro sector del mismo

edificio se complementaba con clases de arte en todas sus manifestaciones m'sica!pintura! escultura! literatura.

3ásicamente esas eran las dos grandes ramas de la investigaci"n y el saber queprimaban en (ino! por un lado la ciencia! en su afán por descubrir el mundo material!desde las subpartculas at"micas hasta las macrogala%ias de polvo c"smico! y por otro elarte! que abra nuevas fronteras a la e%presi"n interior.

Asisti" a una clase te"ricopráctica de biologa y con eso dio por terminada su ,ornada detraba,o! el resto del da lo empleara en pasar tiempo con la familia y recuperar algunasmaterias que llevaba más atrasadas.

Lleg" a casa cuando a'n la luz del da no se haba e%tinguido. @ivan! como el resto delas familias! en edificios individuales de formas suavemente redondeadas! elevados variosmetros sobre el suelo y construidos de un material seme,ante al acero. 5on amplios yconfortables! dotados de todos los avances que la tecnologa ha alcanzado. Latemperatura se regula por un sistema muy sensible de captaci"n de ondas!autorregulándose en virtud de las necesidades. El espacio interior está distribuido en lagran sala comunal y los espacios dedicados al descanso. La decoraci"n es austera y conun gran sentido práctico. El color de los muros y techos puede ser virtualmente

transformado dependiendo del estado de ánimo y las necesidades de las personas.9ncluso hay varios grupos de investigaci"n en el planeta que se dedican al estudio de lacromoterapia y sus aplicaciones.

-oda la familia reunida disfruta de los momentos de descanso y se comentan lasincidencias ocurridas durante el da. <mbar cumplirá pr"%imamente siete años! y esa esuna edad clave pues va a tener lugar un hecho muy importante la cone%i"n a nivelenerg&tico de las glándulas pineal y pituitaria! lo que facilitará enormemente su capacidadtelepática y otras facultades e%trasensoriales. $odrá comunicar fácilmente sus trescuerpos mentales consciente! subconsciente e inconsciente lo que le permitirá tener más

parámetros tanto internos como e%ternos. (esde que naci" le han estado preparandopara que haga un buen uso y desarrollo de estas potencialidades y sobre todo para quelas encauce a la consecuci"n de su plan de vida.

Llega el momento de la cena y los cuatro alrededor de la mesa colocan las manos varioscentmetros por encima de su plato! mientras cierran los o,os y mentalmente energetizanlos alimentos.

Es una costumbre antigua que algunas familias han querido conservar.

Ellos saben que los alimentos están adecuados a las necesidades cal"ricas ynutricionales de cada uno y que los aparatos han medido la cantidad de protenas!

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gl'cidos y lpidos que necesita cada organismo para estar en equilibrio! pero a pesar detodo les gusta ;condimentarlos= con su propia energa.

Cuando los niños se retiran a descansar y se quedan a solas @irna comenta con Arta% suplan de traba,o para el da siguiente #aba sido asignada para guiar un grupo devisitantes del planeta (oru%! mostrándoles los lugares más significativos de la ciudad!

pero sobre todo hablarles sobre la organizaci"n social de (ino.

Está un poco preocupada! los habitantes de (oru% se encuentran en su misma etapa deevoluci"n! pero no están al mismo nivel. 5u civilizaci"n ha mantenido una serie de hábitosque en (ino hace generaciones que desaparecieron. No han desarrollado todava elsentido de igualdad entre hombres y mu,eres! relegando a estas a tareas puramentedom&sticas para bienestar del hombre! y las diferencias entre los dos se%os se patentizandesde el nacimiento! educándose a los varones en unas materias y a las hembras enotras.

La Confederaci"n acord" que! para intercambiar culturas y poder beneficiarse los quemás lo necesitaban! los habitantes de los planetas de menos nivel evolutivo via,aran encomisiones a planetas más desarrollados socialmente y ese era el caso de (ino.

Arta% la tranquiliz"! saba perfectamente que ella podra mane,ar la situaci"n con facilidad!y además esas comisiones iban acompañadas siempre por personal de mantenimientodel orden! que estaba encargado de controlar cualquier problema.

A la mañana siguiente @irna! ,unto con un pequeño comit& de recepci"n esperaba la navede (oru%. )n ligero zumbido les avis" de su pr"%ima llegada. )n destello metálico les

ceg" por un momento y despu&s pudieron ver como el enorme artefacto descendasuavemente sobre el suelo.

Cuando se abri" la compuerta tuvo un estremecimiento esperando! no saba muy bien! loque iba a aparecer por aquella abertura. )na veintena de hombres y alguna mu,er fuerondesembarcando. Eran morenos y de aspecto fuerte! tenan rasgos duros y o,os inquietos.El ,efe de la e%pedici"n se adelant" unos pasos mientras les daba las gracias por lainvitaci"n y presentaba a sus acompañantes como un grupo de avanzados hombres deciencia y tecnologa.

5uspir" aliviada y sus recelos desaparecieron inmediatamente. Con seguridad fueconduci&ndoles por los distintos edificios ob,eto del inter&s de los visitantes! a la vez quedesgranaba informaci"n sobre la vida y costumbres de su planeta

J(esde hace miles de años el planeta (ino alberga a una sociedad arm"nica. Esta ideacomienza por el respeto al propio cuerpo y al de los seme,antes. Nosotros no ingerimosanimales! s"lo vegetales.

J#abr&is observado que las diferencias fsicas entre los habitantes de (ino son muypocas! la altura! la comple%i"n! el aspecto general es muy similar de unos a otros.

Creemos que esto ocurre porque cada vez vamos teniendo más consciencia de nuestraaparente individualidad! que no de,a de ser eso una mera apariencia. Además a medida

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que se evoluciona las caractersticas se hacen más perfectas! incluso a nivel puramentefsico.

JNo e%isten &lites de poder! ni tampoco el dinero! las necesidades se cubren por elintercambio de productos. La producci"n es controlada en base al conocimiento de lasnecesidades reales. 5"lo lo verdaderamente 'til tiene raz"n de ser. El traba,o se decide

en virtud de las aptitudes y capacidades de las personas. El tiempo se distribuye de formaequitativa seis horas de traba,o! seis de formaci"nRinvestigaci"n! seis horas de ocio y seisde descanso. El tipo de traba,o es bastante mental y creativo! la mano de obra estáprácticamente mecanizada por ordenadores y robots. En nuestra sociedad nadie se ,ubilapues siempre hay alguna actividad 'til que desempeñar en pro de la comunidad.

JNo hay asesinatos ni suicidios! ni atentados contra la propiedad a,ena. 5alvo casosaislados no es necesario el empleo de la fuerza! aunque e%iste un grupo de vigilancia laguardia estelar.

JEl gobierno está formado por un conse,o de ancianos que han demostrado su sabiduramediante la e%periencia. 5on ayudados por algunos ,"venes ya que el desgaste neuronalsigue e%istiendo a medida que se enve,ece. El sistema es democrático! no hay lucha por el poder de ning'n tipo! ni econ"mico! ni poltico! ni social. -odos los individuos sonvalorados en funci"n de su utilidad. No e%isten los partidos polticos ni tampoco conceptosde regi"n o estado! en definitiva no hay fronteras.

A medida que iba hablando @irria notaba como iba adquiriendo más seguridad en lo quedeca. Continuaban visitando los lugares más significativos. (e pronto una de las mu,eresvisitantes alz" un poco la voz y pregunt" con cierto titubeo

JE%isten diferencias! a nivel social! entre hombres y mu,eresM

La pregunta era muy clara! no haba lugar a dudas. @irna se volvi" y con serenidad mir" alos o,os de su interlocutora.

JEn absoluto! para nosotros hombre y mu,er son seres humanos con las mismaspotencialidades! y por tanto merecen id&nticas oportunidades. Consideramos a losindividuos 'tiles incluso a veces en la propia complementareidad! pero dignos del mismotrato y respeto.

El grupo de visitantes animado comenz" a lanzar nuevas preguntas.

JAntes di,iste que la guardia estelar apenas tena que intervenir salvo en muy contadasocasiones! qu& tipo de problemas son los que provocan su intervenci"nM

$alideci" ligeramente! esa era una pregunta comprometida! o al menos lo sera larespuesta! inspir" y trat" de e%plicarse lo me,or que pudo

JA veces se producen esporádicos trastornos cuando llegan visitantes de otros planetas.5on conatos aislados de delincuencia como pequeños hurtos de recuerdo! faltas de

respeto a los habitantes de (ino! y algunas interferencias a nivel se%ual! como intentos derelaci"n con personas que no lo desean. Curiosamente! el mayor n'mero de estos 'ltimos

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altercados viene provocado por mu,eres que abordan a los hombres intentando forzar sulibre albedro. Este sentimiento posiblemente sea una r&mora del pasado! de la etapaanterior en la que en muchas culturas la mu,er estaba subordinada a nivel se%ual por elhombre.

(urante un buen rato continuaron hablando de ese tema! de las represiones que haban

castrado culturalmente en los planetas a las mu,eres y en algunas ocasiones muyesporádicas a los hombres! y entendan que esos espritus necesitaban compensarse ysaciar sus carencias. L"gicamente al encontrarse en libertad esos sentimientos grabadosa lo largo de siglos salan al e%terior sin canalizar.

En la etapa .F un gran n'mero de civilizaciones se encontraban con el hito de la igualdadde derechos y oportunidades para hombres y mu,eres! de ah que reci&n incorporados auna nueva etapa . tuvieran reminiscencias del pasado en sus comportamientos.

La ,ornada termin" y todos se sintieron satisfechos! en los das siguientes asistiran a

clases y participaran de la vida de la ciudad como cualquier habitante del planeta! de estemodo! aparte de cruzarse sus descubrimientos a nivel tecnol"gico! lo haran a nivel social!cultural y educacional! beneficiándose del intercambio.

@irna regres" a casa contenta! la e%periencia haba sido enriquecedora y los resultadosbuenos. ?uera llegar cuanto antes para hacer partcipe a Arta% de cuanto habasucedido! saba que al da siguiente &l marchara de nuevo a la -ierra para continuar sutraba,o en ese planeta.

Esa noche! desde el pequeño observatorio que tenan instalado en su casa sintonizaron la

-ierra. Arta% le e%plicaba cuanto conoca de ese pequeño planeta azul! y mientrashablaba se iba dando cuenta de que a lo largo de los via,es que haba realizado all se fuesintiendo cada vez más cercano a ese mundo que estaba tan desequilibrado! y unainquietud comenz" a crecer en su cerebro 5i continuaban as las cosas! qu& iba a pasar con el planeta -ierra y su humanidadM

La luna llena e%tenda un manto luminoso sobre la pradera! la noche era cálida yperfumada! una suave brisa arrastraba tras de s multitud de aromas. El silencio era casitotal! 'nicamente se de,aban or algunos ruidos apagados y le,anos! reinaba la másabsoluta quietud. En la falda de la montaña un e%traño ob,eto permaneca semioculto

entre el monte ba,o disimulado en las sombras! se trataba de una pequeña nave dereconocimiento. 5u forma! completamente circular la haca parecer como una burbu,aplateada ba,o la luz de la luna! diferentes orificios circulares! a modo de ventanas larodeaban! se apoyaba sobre tres soportes metálicos que la mantenan a medio metro delsuelo! una pequeña antena coronaba la parte superior! en el e%tremo una pantalla deradar de forma rectangular daba vueltas de forma continua pero sin emitir el más leveruido.

Arta% se incorpor" y mir" alrededor. Nada se mova. En silencio comenz" su camino deregreso a la nave. Apartaba a su paso la maleza y las altas hierbas pr"%imas a la laguna!arrastrando tras de s una especie de carrito con ruedas que dos horas antes haballevado vaco y ahora estaba repleto.

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5u traba,o de recolecci"n haba terminado por esa noche. Con movimientos segurosintrodu,o su carga en la pequeña nave y poco despu&s tambi&n &l desapareca en suinterior.

A los pocos segundos el ob,eto esf&rico! emitiendo un levsimo zumbido! una vibraci"ncasi imperceptible se elev" a gran velocidad! yendo a perderse en el firmamento! cerca de

un punto especialmente luminoso. La enorme nave de forma lenticular recibi" a lapequeña tragándosela por una compuerta que se abri" en la parte inferior.

Entreg" las muestras a dos compañeros para una primera clasificaci"n y conservaci"n! yse dirigi" hacia la sala de readaptaci"n molecular. :ientras reciba pasivamente la lluviade iones y cuando su mente a'n estaba impregnada por la belleza del paisa,e queacababa de de,ar! percibi" una llamada mental que poco a poco fue imponi&ndose hastaque le lleg" con nitidez. Concentr" su mente dispuesto a atender la improvisadainvitaci"n. $ercibi" a cuatro terrestres sentados alrededor de una mesa! utilizando unrudimentario m&todo de captaci"n de mensa,es telepáticos. 7bserv" sus astrales. Lavibraci"n que emitan le atra,o! cada vez les reciba con más claridad.

J?ueremos comunicar con seres humanos fsicamente vivos de evoluci"n superior a lanuestra. Nos gua el deseo de aprender.

J5oy Arta%. 7s saludo terrestres.

J(e qu& dimensi"n eresM Jverbaliz" Iernando.

J.

J+ en qu& peldaño de la cuarta dimensi"n estásM

J.

JConfrmanoslo con letras.

JC)A-47.

Cruzamos miradas significativas. $areca una buena comunicaci"n. :ás animadosseguimos adelante con el cuestionario que tenamos preparado para aquella noche delviernes. Las respuestas eran cortas pero claras. La energa del contacto se mantena ypudimos establecer una comunicaci"n fluida y sin interferencias.

J$or qu& has acudido a nuestra llamadaM

J:e gustáis.

J$or qu&M

J?uer&is aprender.

@99. A4-AX. $49:E4 C7N-AC-7

JEn que lugar habitasM

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J (ino. JEs un planeta de nuestra gala%iaM J5i. :uy le,ano! a F años luz. JCuantosaños necesitaramos para alcanzar vuestra evoluci"nM JQQ J("nde te encuentrasahoraM JEn una nave! en el espacio! cerca de la -ierra. J?u& has venido a hacer en la-ierraM J9nvestigaci"n! estamos catalogando las especies vegetales de vuestro

sistema solar. 4ecogemos semillas para implantarlas en nuestro planeta.

J$odramos ver una nave tuyaM

J-al vez cuando tenga misi"n en España.

J$odremos comunicar contigo otro daM

J9ntentadlo el pr"%imo viernes. (entro de D das volver& a la -ierra. Ahora he de irme. Amor! adi"s! hermanos.

JAdi"s Arta%.

)na vez más habamos ganado la batalla al sueño con las armas del entusiasmo!tenamos por primera vez una cita para comunicar la pr"%ima semana! era un nuevo pasoque nos acercaba un poco más a nuestro ob,etivo! un pequeño avance que para nosotrosrepresentaba mucho.

#aban transcurrido varias semanas desde nuestro primer encuentro con Arta%. (esdeentonces la estrella de la buena suerte empez" a brillar para nosotros. Lascomunicaciones con ese nuevo interlocutor haban llegado a ser bastante fluidas ysiempre! antes de acabar el contacto pedamos confirmaci"n para la siguiente

comunicaci"n.

A lo largo de ese tiempo! de la mano de Arta% nos habamos asomado a la etapainmediatamente superior a la nuestra. (escubrimos el mundo de los avancestecnol"gicos! de la utilizaci"n de la raz"n y la l"gica empleados para el bien com'n. (ealguna manera fue tomando forma algo que en la escala evolutiva que encontraron en losmanuscritos s"lo eran unos simples n'meros

..

Nos sentamos bastante satisfechos de los resultados que habamos obtenido hasta elmomento! pues aunque no fueran muy espectaculares al menos eran coherentes. 5inembargo! haba una inquietud constante y compartida por todos que nos mantena unidosdesde el principio! por eso! aquella calurosa noche del mes de Agosto! despu&s dehaberlo comentado ampliamente entre los cuatro! incluimos en el cuestionario unapregunta especial.

Cuando Arta% respondi" a la llamada le planteamos enseguida nuestras intenciones?ueramos comunicar con un #ermano :ayor alguien que estuviera en el mismo gradode evoluci"n que los :aestros que contactaron con el abuelo en su da. Le pedamos su

ayuda para lograrlo.

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(urante unos segundos que nos parecieron interminables el vaso no se movi". (espu&s!como si Arta% hubiese estado meditando su respuesta fue señalando muy despacio

JE%iste un organismo que es la Confederaci"n de :undos #abitados de la >ala%ia! estáformado por ancianos :aestros que rigen los destinos de los planetas que están ba,osu influencia. La -ierra lo está. Ellos son los que determinan la intervenci"n de otras

civilizaciones. 5& que hay planes de ayuda a vuestro planeta dadas las especialescircunstancias que atraviesa. :i capacidad de informaci"n es limitada! pero si vosotros lodeseáis puedo intentar emitir una llamada para ver si los #ermanos :ayores la captan ypueden contactar con vosotros.

La respuesta del grupo no se hizo esperar. 59O Estábamos entusiasmados! pareca quepor fin bamos a lograrlo! eran los 'ltimos metros antes de alcanzar la cima.$ermanecimos all! e%pectantes! esperando que algo! no sabamos muy bien qu&!sucediera.

JEsperad durante un minuto en concentraci"n! por favor.

Cerramos los o,os intentando centrar nuestras mentes en una sola idea Comunicar conun #ermano :ayor.

Nuevamente pareci" que el tiempo! ,ugándonos una mala pasada! se alargaba.-ranscurridos unos segundos el vaso comenz" a girar con rapidez alrededor de las letrasdel tablero marcando amplios crculos. + apareci" un nuevo comunicante.

J5oy Xaloc! amor! hermanos. #e captado la llamada de Arta% y me ha transmitido

vuestro deseo de entrar en contacto con alg'n gua destinado a misiones de ayuda a la-ierra establecidas por la Confederaci"n. :i funci"n es otorgar guas para grupos enformaci"n. (eb&is llamar utilizando vuestro m&todo habitual de contacto y repitiendo laclave que os dar& a continuaci"n.

En aquel momento sent que una emoci"n no controlada recorra mi espina dorsalhaciendo que el vello se me erizara. :ir& a los demás y me di cuenta de que algoparecido les ocurra a ellos. Contenamos la respiraci"n como si temi&ramos que encualquier momento fuera a interrumpirse la comunicaci"n. 5in embargo! de forma claraapareci"

J___ F A G ACAEL.

J-ened fe en vosotros mismos. ?ue la paz y el Amor C"smico os guen. Amor! adi"s.

En el sal"n se organiz" un pequeño revuelo. Estábamos tan e%citados! tan euf"ricos!haba sido aparentemente tan fácil que no terminábamos de cre&rnoslo.

Cada viernes vivamos intensamente las emociones de los avances logrados! perodespu&s durante el resto de la semana la parte racional se impona y las refle%iones sepoblaban de dudas + si todo fuese una ,ugarreta de nuestra menteM + si sin darnos

cuenta estábamos creando una historia irreal que s"lo e%ista para nosotrosM + si fuesenmensa,es de partes muy profundas de nuestra menteM + si...M Las con,eturas eran

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infinitas caban tantas posibilidadesO Era un mundo tan desconocidoO #aba tan pocasoportunidades de contrastarO Al final! despu&s de encarnizadas luchas mentales s"lo nosquedaba una actitud por adoptar era claro que ni la informaci"n que recibamos! ni lae%periencia que estábamos teniendo ocasionaba ning'n per,uicio! por tanto! seguiramosadelante intentando en cada momento tener los pies bien fi,os en la tierra y admitiendo

solamente lo que pudiera tener contrastaci"n! lo demás sera considerado como hip"tesisde traba,o.

Este pacto era asumido por todos y despu&s de cada comunicaci"n desmenuzábamos sucontenido buscando posibles incongruencias con informaciones anteriores.

No obstante! aquella noche se nos anto,aba diferente. 9ntentamos recuperar el contactocon Arta% para darle las gracias por su ayuda. Iue en vano! seguramente ya estara muyle,os. A pesar de todo nos concentramos durante unos minutos y pensando en &l emitimosmentalmente un ;gracias= que estábamos seguros podra via,ar por el espacio hasta loslugares más rec"nditos de la gala%ia para alcanzarle. Le estábamos agradecidos. A lolargo de los contactos que habamos mantenido con &l haba ido mostrándonos

una personalidad que ya nos era familiar! como cuando te carteas con alguien que noconoces. ?ue Arta% se brindase como intermediario portavoz del mensa,e haba supuestouna ayuda inestimable. 5in ella nos habra resultado mucho más difcil conseguirlo! o por lo menos habramos tardado bastante más. )na corriente afectiva uni" desde entonces aseres tan dispares y durante muchos años el grupo fue consciente del papel fundamentalque haba ,ugado ese hombre en sus vidas. Iue para nosotros el primer e%ponente de lacolaboraci"n entre los seres humanos independientemente del lugar que ocupen en el

Cosmos.@999. ACAEL EL >)9A

+ por fin lleg" el da. Era el H de Agosto de BYDD. 5entados en la terraza esperábamos lallegada de nuestros amigos! disfrutando de una agradable noche de verano. 5e oancantar los grillos en el ,ardn! el cielo estaba cua,ado de estrellas! poda verse la @aLáctea con toda nitidez. $ermanecamos mudos hundiendo las pupilas en el firmamento!ni -eresa ni yo queramos romper el silencio! s"lo limitarnos a disfrutar de aquellosmomentos de soledad y quietud.

+o refle%ionaba sobre las vivencias de los 'ltimos meses! y haca balance. Ni siquierahaba pasado un año desde que fuimos a 3ur"n y el abuelo nos hizo depositarios de sutesoro cuántas cosas habamos vivido desde entoncesO Cuántas haban cambiadoO Nopude por menos de sonrer ante un pensamiento que cruz" por mi mente hace un año nisiquiera sabamos que estas cosas e%istan y ahora cualquiera que nos viera hablandocon un vaso pensara que estamos locos.

4ecord& el sentimiento de ridculo que tenamos al principio! y que a'n nos embargaba devez en cuando! cuando nos dábamos cuenta de que estábamos! de alguna forma!dirigiendo preguntas al vaso.

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+a nos habamos acostumbrado a esa sensaci"n y empezábamos a admitirlo comonormal! como que se trataba de un simple medio de comunicaci"n como otro cualquiera.?u& nos deparara el futuroM En qu& terminara esa aventura en la que sin saber c"monos habamos visto envueltosM

:e encog de hombros. El afán de profundizar y de llegar al final se impona sobre los

demás sentimientos. Al fin y al cabo 'nicamente debamos preocuparnos por no;colgarnos= del tema! sino darle la importancia ,usta! y en ese prop"sito estábamos loscuatro firmemente asentados. Entretanto nos limitaramos a vivir la e%periencia. (espu&sde todo! desde el punto de vista meramente personal era enriquecedor y eso era lo másimportante por el momento.

Con mi acostumbrada forma de enfocar los acontecimientos me encontr& ya mentalmentepensando en futuro! intentando intuir cuales seran los siguientes pasos. ?ui&n sera AcaelM 4espondera a la llamadaM ?u& iba a significar para nosotros esa nuevacomunicaci"n que habamos buscado de forma intuitivaM 4epresentara alg'ncompromisoM :e senta inquieto! por un lado haba deseado y esperado que llegase esanoche! por otro un cierto desasosiego me invada.

Cuando comenc& esta aventura nunca pens& que el tema me atraera tanto! fue con elpaso del tiempo cuando me di cuenta de que con cada paso adelante mis fibras latan yen alguna parte de mi cerebro las teoras resonaban familiares.

#aba encontrado en -eresa! Iernando y $ilar partes complementarias de m mismo. Esose manifestaba en que de forma natural cada uno adoptaba una funci"n en el grupodependiendo de sus potencialidades o de sus tendencias. As! aprovechábamos elempu,e de Iernando y su personalidad inquisitiva! la capacidad refle%iva de -eresa quenos obligaba a desmenuzar todos los temas hasta estar seguros de que nada seescapaba y todos los entendan y el escepticismo de $ilar! que no entorpeca la marchadel resto sino más bien al contrario! pues tena una orientaci"n positiva haci&ndolespermanecer con los pies bien firmes en la tierra. +o aportaba la ilusi"n y el no rendirnosante las dificultades! era como si estuviese sustentado por una mano invisible que a'n enlos momentos de desánimo general me haca subir por encima de las circunstancias ycontagiar a los demás la confianza de que tarde o temprano alcanzaramos nuestroob,etivo.

Cuando llegaron Iernando y $ilar me di cuenta de que en todos haba una e%citaci"nmayor de lo habitual! aunque intentábamos simular que se trataba de una noche comotantas otras. #aba un cierto aire de trascendencia que se respiraba en el ambiente!bromeábamos especulando sobre la posibilidad de que Acael no apareciera y la clavesimplemente hubiera sido una interferencia inconsciente provocada por nuestros propiosdeseos.

5"lo haba una manera de salir de dudas intentarlo.

Nos sentamos alrededor de la mesa y practicamos el e,ercicio acostumbrado. (urante larela,aci"n me pregunt& por qu& estábamos all. +o saba mis razones! intua las de -eresae intentaba adivinar qu& era lo que haba enganchado tanto a Iernando y $ilar. (e

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cualquier modo! aunque los motivos fueran distintos en todos! haba un denominador com'n tenamos inter&s por descubrir la verdad y ese era el caldo de cultivo que nospermita aunar esfuerzos para generar pensamientos altruistas y emitir una llamadauniforme y clara! que rebot" entre las cuatro paredes del sal"n pero no se qued" ah! sinoque se fue transmitiendo por el espacio en busca de un interlocutor le,ano que

respondiera a su demanda.J5omos un grupo de personas de la -ierra que queremos comunicarnos con un#ermano :ayor. F a G Acael! F a G Acael! F a G Acael...

:uy le,os de la -ierra! fuera de nuestro sistema solar e%iste un planeta llamado Apu! es unastro radiante. 5u atm"sfera se encuentra permanentemente inundada de luz! como sicada partcula del aire fuese una pequeña antorcha diminuta. -odos los espaciosinterat"micos tienen esa particularidad! hasta los más rec"nditos rincones estánimpregnados de una luminosidad permanente.

El amanecer de un nuevo da es un momento especialmente bello. El cielo entero secubre con innumerables ráfagas luminosas de distintos colores seme,ando inmensasauroras boreales.

La mayora de los habitantes del planeta contemplan cada mañana ese maravillosoespectáculo que la Naturaleza les ofrece.

:ersan es una de las muchas localizaciones o enclaves de convivencia que seencuentran en las zonas más f&rtiles del planeta. -iene alrededor de

BQ.QQQ habitantes y cuenta con todos los servicios necesarios. Acael! Alna y sus dos hi,os 7prun y -or2 observan desde una pequeña terraza circular situada sobre su casa c"mo paulatinamente los ,uegos de luces van e%tingui&ndose paradar paso a los rayos dorados y cálidos de la estrella Alfa 3 de la Constelaci"n delCentauro! que cada mañana hace que la ciudad comience a activarse.

Cada miembro de la familia tiene unas tareas especficas para la ,ornada que comienza

-or2! el menor de los hi,os! tiene F años y se prepara para ir al centro de formaci"n. Es!sin duda! lo más importante del planeta. Las escuelas fueron construidas antes que la

casa del >obierno. All

se determinan los grados de capacidad intelectual de los alumnos! sin tener en cuenta lasdiferencias de edad o se%oK se analizan las potencialidades y las inclinaciones naturales! yse forman grupos de desarrollo te"ricopráctico de cada una de las ramas del saber. 5eimparten clases de sociologa! filosofa! biologa! matemáticas! fsica! qumica! astronomay la más importante La Ciencia del +o.

7prun cuenta ya Y años y está siendo preparado desde hace alg'n tiempo en r&gimenintensivo por los Conse,eros de educaci"n! con los que convive largos periodos de

tiempo! aunque sin abandonar su vida familiar. Esta civilizaci"n altamente evolucionada.5uper" hace milenios la investigaci"n meramente fsica y se encuentra inmersa en la

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investigaci"n de los comportamientos humanos! para lo cual han desarrollado otro tipo detecnologa! de carácter moral! basada en el adecuado uso de la mente para que lamanifestaci"n del yo interno a nivel fsico sea lo más ntida posible dentro de sus l"gicaslimitaciones.

Alna es psic"loga y desde hace años da clases a alumnos . en >anmedes. (urante

mucho tiempo ha estado investigando y profundizando sobre los procesos mentales y elacceso al mundo del subconsciente. 5us conocimientos y e%periencias le han permitidoenseñar a otros hombres a recorrer el camino que ella emprendi" un da.

Acael es soci"logo. 5u traba,o consiste en la formaci"n de grupos de traba,o quedesarrollen las potencialidades y capacidades individuales que son aportadas despu&s alresto. Actualmente traba,a con hombres . y con ,"venes .G de Apu que están siendopreparados en esa especialidad.

A pesar de tener una continua actividad! la vida familiar se desarrolla de forma normal.

>racias a su capacidad cerebral tienen un contacto mental continuo! lo que les permitecompartir sus vivencias y sus pensamientos aunque est&n fsicamente separados.

No obstante esa tarde van a asistir todos ,untos a la Asamblea que tendrá lugar comocada semana en el <gora. Es un enorme recinto en el que se desarrollan nuevas ideas.5e habla de filosofa! se plantean hip"tesis y se e%ponen teoras. Es uno de losacontecimientos que más aceptaci"n tiene. Cuenta con una gran asistencia y un buennivel de participaci"n.

Acael! como soci"logo! ha intervenido muchas veces en las Asambleas de :ersan. Esta

tarde presentará una hip"tesis en la que ha estado traba,ando 'ltimamente ;C"mo secone%iona el espritu con los diferentes cuerpos del hombreM=

Los asistentes escuchan con atenci"n la e%posici"n y despu&s comienza un coloquiointeractivo y constructivo en el que las opiniones de todos son respetadas y valoradas. Esun e,ercicio de fle%ibilidad mental continuo en el que buscan encontrar nuevos caminos enel conocimiento del Cosmos y aportan sus ideas con miras a construir una teora máscompleta que pueda ser compartida y en definitiva redunde en su propio enriquecimiento.

:ientras en el interior se desarrolla la reuni"n! -or2 se ha quedado fuera con otros niños

de su edad! en los enormes ,ardines que rodean el <gora. El lugar está flanqueado por altsimos árboles de copas estilizadas. #ay una gran variedad de flores a cual más e%"ticay pintoresca. Los niños ,uegan entre las plantas hasta que provocan la aparici"n de lospequeños seres de la Naturaleza. 5on sus compañeros de ,uegos preferidos laspequeñas campanillas voladoras que se divierten haciendo e%trañas cabriolas ydescribiendo en el aire complicados vericuetosK las diminutas lucecitas que se enciendeny se apagan a voluntad mientras los niños van en su b'squeda en una persecuci"nincesante. 5on seres que siempre han e%istido en la fantasa de las mentes infantiles!pero que son tan reales como ellos mismos las pequeñas hadas de la Naturaleza.

Cuando termina la reuni"n regresan a casa. Es un edificio totalmente esf&rico en el quetodo está absolutamente mecanizado. La tecnologa ha alcanzado su mayor desarrollo.

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#ace miles de años que dominaron las máquinas de las que se sirven para disponer demás tiempo que dedicar a la investigaci"n de la moral y los comportamientos humanos!sus principales centros de inter&s durante la etapa .G.

7prun propone aprovechar el tiempo de ocio que tiene la familia haciendo un poco dedeporte. #ay un ,uego que practican a menudo los cuatro y que les sirve de distracci"n a

pesar de ser muy sofisticado y laborioso psquicamente. Consiste en atrapar mentalmenteuna pelota invisible que se hace visible a voluntad del que la lanza. Los demás tienen queadivinar donde aparecerá! para ello han de distraer la mente del lanzador antes de quementalmente ordene la concentraci"n molecular de la pelotaK en ese momento cede en suinfluencia durante un segundo al quedar materializada! y es entonces cuando puedecambiar de propietario.

7tro ,uego que les gusta practicar es uno similar al a,edrez! pero con más casillas ydificultades intermedias que se van generando a lo largo de la partida. $or e,emplo lose%pedicionarios de -or2 se acercan a la primera lnea de defensa de su oponente! en ese

momento 7prun pone fosos que dificultan la maniobra! pero su hermano no se da por vencido y construye puentes para salvar el obstáculo! entonces es sorprendido por elflanco derecho que ha quedado descubierto para construirlos ... + as van poni&ndosemutuamente dificultades que el contrincante debe salvar hasta un n'mero prefi,ado antesde comenzar la partida. En este ,uego está prohibido el uso de la telepata.

5on grandes amantes de la m'sica y la armona en todas sus facetas y procuran rodearsede ellas pues saben de sus beneficios. -oda su vida está regida por la l"gica. $racticanhabitualmente la paciencia y lo hacen cuando más cansados están que es cuando másdifcil resulta e,ercitarla. 5u vida familiar y social es muy activa! tienen amigos! se unen enpare,as en un acto totalmente consciente y asumiendo libre y voluntariamente el papelque desempeñará cada uno. Los niños son importantsimos pues representan la evoluci"nfsica. 5i no hubiera nacimientos no habra evoluci"n. Es por eso que regulan elnacimiento de seres humanos en base a una evoluci"n correcta de la colectividad.

$ractican la meditaci"n en familia con el prop"sito de aunar e%periencias para saber másclaramente qu& deben hacer en con,unto y c"mo pueden ayudarse mutuamente. Almeditar pasan a un estado de consciencia superior en el que no tienen edad fsica. Al

volver a la realidad ob,etiva ese estado se pierde parcialmente pero les ayuda a aumentar su grado de confianza mutua.

Apu es una gran comunidad formada por una humanidad totalmente interrelacionada queconstituye una sola raza! todos cumplen una funci"n. -odos tienen lo necesario y pagancon su traba,o. No e%iste el dinero ni los bancos. Las costumbres de vida son similares entodo el planeta. La comida es prácticamente igual aunque seg'n la latitud! los alimentosvaran en su composici"n de protenas! vitaminas o grasas! las cuales son sint&ticas. 5"loa los que están en proceso de cambio biol"gico se les suministran grasas vegetales.-ienen una estatura de a !G metros. 5u cabello es rubio y sus o,os azules. 5on

fsicamente muy parecidos unos a otros pues no hacen distinci"n entre cuerpo fsico y

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espritu. $ara ellos todo el con,unto forma su cuerpo el fsico! la energa! el pensamientoy el propio espritu son lo mismo variando 'nicamente el nivel vibratorio.

@iven el equivalente a B.QQ años terrestres. La vida fsica dura más para que no hayainterrupciones continuas del programa del que son plenamente conscientes. $or tantotienen pocas probabilidades de involucionar. -ienen acceso al subconsciente! cuyos

mensa,es les llegan sin trabas. )tilizan su cerebro al HG por ciento de su capacidad. 5onclarividentes y clariaudientes totales. 5u comunicaci"n es telepática. Emplean lossonidos bucales 'nicamente para hacer traba,os con la materia! modificándola.

-odos traba,an. No hay nadie que estando sano de,e de traba,ar. Los porcenta,es deutilizaci"n de su tiempo son tres horas de traba,o! tres horas de estudio! dos horas paracomer y el resto para descansar o hacer lo que deseen. En las factoras se construye detodo materiales de construcci"n! naves intergalácticas! electromagnos! etc.

Los avances tecnol"gicos son increbles. Cuentan desde hace muchos años con el

electromagno! que es un aparato capaz de actuar por vibraci"n sobre la cohesi"nmolecular de la materia! aumentando sus espacios interat"micos hasta hacerladesaparecer. (espu&s vuelven a concentrarla en el lugar deseado mediante unelectromagno receptor! lo que les permite via,ar a grandes distancias en tiempose%traordinariamente breves. Tltimamente han desarrollado aparatos individuales que seincorporan a los tra,es.

#ace milenios que descubrieron el sistema de captaci"n holográfico! y hoy siguenutilizándolo aunque mucho más sofisticado. Esto les permite sin moverse de casaaveriguar la composici"n de los planetas! si tienen vida o posibilidades de ella! suscondiciones tel'ricas! sus riesgos de desastres geol"gicos! etc.! y en ocasiones les estápermitido por la Confederaci"n actuar para demorar esos desastres o evitarlos! en virtudde unos ob,etivos superiores.

$ara desplazarse por las diferentes ciudades utilizan vehculos a&reos! terrestres ysubterráneos por rales.

Los subterráneos son tan grandes como ciudades y están intercomunicados. 5onalmacenes y fábricas de energa que e%traen del subsuelo. $ara desplazarse por estossubterráneos se utilizan trenes de un material similar al plástico. Circulan sobre rales pero

no tienen ruedas! utilizan aire que desplaza a los vagones. El vehculo tiene unos tubos alo largo de todo &l que se adaptan a los rales! una vez que se cierra el circuito se produceuna corriente de aire a alta presi"n que desplaza el vehculo hacia adelante. Al final deesos tubos hay muchos orificios de salida que regulan la presi"n! velocidad y a veces ladirecci"n.

La velocidad que alcanzan es lenta! alrededor de GQQ 2mRh.! la capacidad es de milpersonas pero no suelen ir más de FQQ " QQ ya que la misi"n de estos trenes estransportar materiales.

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)tilizan una gran variedad de energas! derivadas todas ellas de la fusi"n nuclear! como laenerga v"ntica! que es una radiaci"n que emiten los iones de la partcula vont! un mineralradioactivo parecido al uranio pero mil veces más potente.

Las naves tripuladas por hombres .G via,an a una velocidad G veces superior a la luz! loque hace que desaparezcan del plano fsico y se integren en un plano o dimensi"n

aespacial y atemporal! raz"n por la cual pueden trasladarse s"lo con la ayuda delpensamiento.

Es un plano de alta vibraci"n energ&tica muy parecido al astral. Las mol&culas vibran a talvelocidad que se consigue la fusi"n at"mica.

(escubrieron hace milenios que todos los ob,etos materiales están formados por mol&culas afines pero e%istiendo entre ellas distancias impresionantes! de acuerdo a sutamaño! a pesar de ello están perfectamente cohesionadas. Ellos consiguieron aumentar esa distancia intermolecular manteniendo la fuerza de cohesi"n.

El planeta está regido por un Conse,o de ancianos que delega en muchas personas paraasegurar as que todas las necesidades est&n cubiertas. 3ásicamente es una comunidadunida por el amor y el respeto a los demás y todos sus empeños van dirigidos al biencom'n.

Acael plante" hace alg'n tiempo su deseo de traba,ar con hombres .F de la -ierra.(adas las especiales circunstancias que atravesaba ese planeta tuvo que seguir unapreparaci"n especfica que ya haba concluido. 5e encontraba por tanto listo paracomenzar una nueva etapa de su vida.

La estancia estaba suavemente iluminada por unas tenues luces de tonalidad azul. Acaelba," a'n más la intensidad y durante unos segundos contempl" el resultado. 5atisfechofue a sentarse en una especie de sill"n situado en el centro de la sala. Al hacerlo! unacompuerta en el techo se descorri" de,ando ver una c'pula circular por la que seasomaba el firmamento estrellado.

El sill"n cambi" de forma cuando el material se amold" perfectamente a su cuerpo. Eraplenamente consciente de que se acercaba un momento muy importante para &l y queravivirlo en toda su plenitud. )na m'sica muy suave sonaba de fondo. +a estaba listo para

zambullirse en el mundo del subconsciente. Comenz" su preparaci"n recordandosomeramente los acontecimientos que le haban llevado desde haca muchos años hastael momento presente en que se encontraba ante un nuevo hito.

Como si la ocasi"n se prestase a ello quiso tener presente todo el proceso! record" quedesde muy ,oven sinti" una gran inquietud por el desarrollo de vida humana en planetas.F y . que estuvieran ante un cambio de generaci"n. Esto le llev" a pedir permiso a laConfederaci"n para via,ar a mundos que estuvieran a punto de sufrir ese trance. 4ecord"su primer via,e a la -ierra! haca ya QQ años terrestres ...

(esde el principio ese planeta le atra,o especialmente! sobre todo por sus sonidos ensuperficie. 5iempre haba sido un enamorado de la m'sica y la que se oa all le cautiv".

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Centr" sus esfuerzos en la -ierra y sus pobladores! focalizando sus estudios enprofundizar en ellos! y cuando por fin se gest" una misi"n para ese planeta ofreci" sucolaboraci"n para salvar cuanto pudiera de tan bello lugar. As! durante mucho tiempoestuvo transportando plantas! animales y personas! a las diferentes colonias que sehaban establecido para este fin en >anmedes! lo y otros puntos del 5istema 5olar.

El siguiente paso fue su preparaci"n integral para guiar un grupo de terrestres. El reto erade una tremenda importancia pues se trataba de despertar la consciencia y formar a unoshombres que desconocan totalmente las leyes )niversales.

#aca sesenta das terrestres que haba terminado su formaci"n y estaba a la espera degrupo. Cuando Xaloc le dio la noticia la recibi" con ,'bilo. Esperaba poder hacer un buentraba,o avalado por su e%periencia de soci"logo! su conocimiento de la -ierra! de lahistoria de su humanidad y por 'ltimo el conocimiento! que desde haca unos trescientosaños! tena de los componentes del grupo. 5! los :aestros le haban permitido seguir decerca la evoluci"n de un n'mero determinado de espritus del planeta. Algunos de ellos seconformaran en grupos de traba,o! otros en cambio comenzaran solos su andadura.

Aquella noche! por fin se iban a ver satisfechas sus e%pectativas. No obstante saba queno iba a resultar tarea fácil. Era consciente de los duros momentos que tendra queatravesar. 5in embargo! el miedo haba sido desterrado de su mente haca muchos años ysu deseo de establecer una cooperaci"n con aquellos hombres imperaba sobre las demáscosas 5e ayudaran mutuamente a evolucionar.

9nterrumpi" sus pensamientos. El momento se acercaba pero antes quera comunicar consus :aestros para recibir los 'ltimos conse,os. Iue reparador orles y sentirse! una vezmás! una de las piezas del engrana,e. $ermaneci" en absoluta quietud fsica y mentalconcentrando su pensamiento en el planeta azul y poco a poco! una clave de llamada fueabri&ndose paso entre la bruma. Acael percibi" la luminosidad de los astrales que emitanla llamada. 3ásicamente reinaba el color plateado que indicaba felicidad. 5inti" amor yentrega por aquellas cuatro personas que le parecan niños luchando por un lado por creer lo que estaban viviendo y por otro por no de,arse arrastrar por los acontecimientos.La clave se iba imponiendo

J5omos un grupo de personas de la -ierra que queremos comunicarnos con un

#ermano :ayor! F a G Acael! F a G Acael! F a G Acael...Con una honda emoci"n se dispuso a responder a la llamada.

Al notar que el vaso comenzaba a deslizarse por el tablero abrimos los o,os. Iuimosleyendo las letras mentalmente y una respuesta clara apareci" ante nosotros con unagran fuerza.

J___! G a F Acael os saluda! amor! hermanos.

$or primera vez desde que comenzamos con los contactos nos quedamos mudos.

7lvidamos el cuestionario y no acertamos a pronunciar palabra. (urante unos minutosnos miramos unos a otros sin saber que decir. La comunicaci"n se produ,o de una forma

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muy rápida. Apenas habamos tardado tres minutos en establecer contacto y muy en elfondo temamos que no apareciera el interlocutor.

El vaso fue deslizándose con seguridad por el tablero seguido por nuestros dedos. Enaquel momento &ramos -eresa! $ilar y yo quienes mane,ábamos el vaso! mientrasIernando recompona las cuartillas y se preparaba para anotar

J3uenas noches hermanos. #e sido informado por Xaloc que me esperabais.$ertenezco a un grupo de hombres .G que tienen la misi"n de ayudar a los habitantes dela -ierra para que alcancen un grado de evoluci"n superior! dados los acontecimientosque el planeta va a atravesar.

Aprovech& el momentáneo respiro para lanzar una pregunta.

JEntonces! va a haber una autodestrucci"n en la -ierraM

J-odo dependerá de la marcha de los acontecimientos. En este momento los parámetrosactuales indican un gran riesgo de cambios traumáticos que culminarán en el año .QB.El planeta volverá a ser habitado unos cuarenta años despu&s por los nuevos hombres deuna nueva generaci"n que est&n dispuestos a afrontar el reto de crear una sociedadarm"nica. Antes de continuar he de formularos una pregunta.

)n silencio casi s"lido se e%tendi" por el sal"n. 4oto 'nicamente por el deslizarse delvaso sobre el tablero.

JEstáis dispuestos a modificar los esquemas mentales prefi,ados! siempre que se osdemuestre que estabais equivocadosM bamos de sorpresa en sorpresa. Estábamos

acostumbrados a hacer nosotros las preguntas pero Acael claramente diriga lacomunicaci"n por unos derroteros desconocidos.

4ecord& entonces que al abuelo tambi&n le haban hecho una pregunta similar cuandoestuvo en Corona.

JAntes de que contest&is quiero e%plicaros algo. El traba,o del grupo tendrá un ob,etivomuy concreto acceder a las zonas internas del ser a partir del consciente. No será algofácil y en ocasiones será necesario la catarsis personal para llegar al resquebra,amientode esos esquemas mentales.

J5egunda pregunta 5ab&is o intus los riesgos que conlleva el traba,o de grupo encuanto a lo que vosotros llamáis rotura de esquemas mentales mediante ;catarsis=M

(urante unos minutos meditamos la respuesta. )no a uno fuimos respondiendo con unacierta dosis de inseguridad.

J5. 5. 5. 5.

J3ien! entonces hemos de sentar algunas premisas de funcionamiento

Nada de hegemonas Nada de desconfianzas Nada de mentiras Nada de cetros y mitrasNada de pre,uicios

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+ mucho de amor! humildad! ,usticia y caridad! que serán los cuatro puntos cardinales delgrupo de acuerdoM

J5.

J7tra cosa! todo lo que se manifieste p'blicamente en el grupo debe ser cumplido! y

nada a partir de ahora! que sea e%plcitamente confidencial! podrá ser dicho fuera delgrupo.

J(e acuerdo Jverbalic& mientras los demás asentan con un movimiento de cabeza.

J(urante el primer año la preparaci"n será fundamentalmente psicol"gica! deb&isdestruir barreras estructurales que os separan. Cada uno de vosotros tiene unapersonalidad conformada por sus e%periencias! que son distintas en cada caso. (ebemostraba,ar en unificar criterios y desmitificar aquellas cosas de vosotros mismos quecorresponden a cuestiones de imagen y de funcionamientos puramente mecánicos.

Iernando apunt" $odemos divulgar nuestras e%perienciasM

JCuando podáis hablar yo os lo dir&! ahora no os creeran.

J$uede venir más genteM

JNo de momento. Es me,or esperar un poco a que nos conozcamos me,or. (espu&s!cuando la base est& firme y s"lidamente asentada! será el momento de pensar enampliaciones.

J(etecto a trav&s de la luminosidad de vuestro astral que estáis ligeramenteconturbados. $or esta noche de,aremos aqu el contacto! pero antes de irme he dedeciros que no os preocup&is! no se os pedirá nada que no seáis capaces de llevar acabo! no habrá ninguna interferencia en vuestras vidas ni en vuestras mentes. @uestrolibre albedro tomará siempre las decisiones que le parezcan oportunas. La evoluci"ndebe ser natural yconsciente! +7 75 A+)(A48 A AN(A4 $E47 N7 AN(A48 $74@757-475.

JNosotros no somos dioses! s"lo seres humanos que intentamos evolucionar igual quevosotros y tambi&n necesitamos ayuda de dimensiones superiores y a veces inferiores.

@osotros me ayudáis al permitirme que os ayude.

En aquellos instantes por mi cabeza cruzaban ideas controvertidas que no terminaban deconformarse. 5upona que a los demás les ocurra lo mismo. Acael continu" imparable.

J-ened fe en vosotros mismos y seguid alimentando vuestro deseo de descubrir la luz dela verdad all donde se encuentre. JEl pr"%imo viernes seguiremos. Amor G a F adi"s.

JAdi"s Acael

El silencio que se haba mantenido durante la comunicaci"n se rompi" por cuatro sitios

diferentes al irrumpir todos en e%clamaciones de sorpresa. #ablábamos todos a la vez y

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apenas terminábamos las frases! cada uno comentaba lo que consideraba más chocantepero ni siquiera esperaba la respuesta del otro.

(espu&s de un buen rato de desahogo y cuando se hubieron tranquilizado un poco losánimos comenzamos a releer las notas. 8ramos incapaces de hacer un análisispormenorizado de lo que habamos recibido! pero s nos pusimos de acuerdo en unos

cuantos puntos.

Aquella comunicaci"n era claramente distinta a cuantas habamos recibido hastaentonces. Acael haba mostrado una ;personalidad= definida y claramente detectable atrav&s de sus palabras. Nos pareca difcil pensar que aquellas frases pudieran haber arrancado de nuestro propio subconsciente. Nosotros habamos sido los primerossorprendidos por la coherencia! rapidez y falta de interferencias desde el primer momento. Además la propuesta de Acael de traba,ar en el grupo era algo que ni siquiera sabamosc"mo iba a funcionar. Lo buscábamos inconscientemente siguiendo los conse,os delabuelo! pero nunca habramos podido concretar las e%pectativas en unos puntos tanclaros como los que ah se refle,aban.

$or otra parte! nos dimos cuenta de la clara direcci"n de la comunicaci"n. Era unainvitaci"n a participar en un traba,o que pareca estar perfectamente definido! como siestuvi&semos apuntándonos a recibir clases en un curso organizado con un programadesarrollado y pormenorizado.

La imaginaci"n de unos y otros volaba especulando sobre las posibilidades que esotendra. )n ser a ese nivel de evoluci"n sera un aut&ntico maestro. Ante nosotros see%tenda un camino que se perda en el horizonte! un camino que en ocasiones sera llanoy fácil y otras tortuoso y pedregoso d"nde conduciraM Apenas se vislumbraba elcomienzo! el resto habra que ir descubri&ndolo avanzando paso a paso y estábamosdispuestos a afrontar el reto.

La sombra de la duda se interpona constantemente y volvan a aparecer los vie,osfantasmas que nunca terminaban de irse! + si todo fuera un engañoM + si estuvi&ramossigui&ndole el ,uego a alguien que no tuviese buenas intencionesM + si...M Apartamosesas inquietudes que de momento no conducan a nada y decidimos esperar a tener máscontactos para hacer una evaluaci"n completa.

No obstante! aquella era nuestra noche para vivir la ilusi"n! más adelante ya vendran lasdudas y las inquietudes. Ahora queramos de,arnos inundar por el sentimiento de felicidadque nos embargaba. A altas horas de la madrugada brindamos por el futuro! nossentamos afortunados por tener esa oportunidad. #abamos alcanzado el primer ob,etivocomunicar con un hombre .G. Era todo un hito en nuestras vidas pero no podamospararnos ah. Eso era s"lo el comienzo! la puerta de entrada.

)n firme prop"sito y voluntad de continuar arraig" en el ánimo de todos y pactamosconscientemente que mientras encontrásemos congruencia en la comunicaci"nseguiramos adelante.

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A millones de 2il"metros de distancia! y seg'n supimos más adelante! Acael se una anuestro pacto aportando su deseo de guiarnos mientras encontrase en nosotros deseosde evolucionar.

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