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25 AÑOS DE EXPANSIÓN MISIONERA

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LA EXPANSIÓN EN EL CORAZÓN DE LA MISION

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NUEVAS FUNDACIONES

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EDUCAR ES EXIGIR PERO EXIGIR AMANDO

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NUESTRO FUNDADOR EL PADRE TOMÁS MORALES

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EL INSTITUTO BERITp. 12

LA CRUZADA ES MARIA Y FAMILIA

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FIDELIDAD Y GRATITUD

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l 20 de noviembre de 1986, nuestra Directora General Lydia Jiménez llega por primera vez a tierras peruanas, y tras breve paso por la ciudad de Lima, se dirige a la ciudad de Chachapoyas a conocer la Jalca, lugar de misión a pedido del entonces Obispo Mons. José María Hornedo.

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A l año siguiente, arriban las primeras cruzadas que iniciarán la fundación, ellas son: Sacramento Moreno, Soledad Sánchez, María Begoña Álvarez y Begoña Lafuente, llegan a tierras limeñas el 28 de octubre de 1987, y tras una breves estancia en Lima de 10 días llegan a la ciu-dad de Chachapoyas, el 10 de noviembre de 1987, en donde iniciaran la acción misionera en la Jalca Grande, donde son recibidas por el P. Juan Rimachi a quien apoyarán en labor pastoral y catequética de la zona. El 24 de diciembre de ese año se inaugura el Hogar de la Cruzada de Santa María y se procede a la bendición de la Capilla, aquí será en adelante el centro donde se desarrolle la vida de las primeras cruzadas en Perú, así como también el lugar de apostolado que acoge a chicas jóvenes.

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l 17 de enero de 1989, María Jesús Ayuso (Cruzada de Santa María), María Esther Iglesias (militante) y Mabel Cortez (militante) llegarán a Lima a iniciar la nueva fundación. Así dos de ellas empezarán a trabajar como docentes en la Univer-sidad Femenina del Sagrado Corazón y también se adquiere el primer inmueble de la institución, en el distrito de la Molina y el 13 de mayo del mismo año por Mons. Javier Aríz, entonces Obispo Auxiliar de Lima bendecirá nuestra primera Capilla.

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E l año 1990, llegan desde España cuatro cruzadas más para reforzar la fundación limeña. A fines de este año, un total de once cruzadas de Santa María en Perú van sembrando el amor a Cristo en las jóvenes, prin-cipalmente a través de las tandas de Ejercicios Espirituales, las cuales son impartidas en grupos pequeños de jóvenes alumnas o compañeras nuestras.

ste mismo año las primeras vocaciones empiezan a surgir, así llegan tres chicas de Tacna, entusiasmadas por conocer nuestra vida consagrada habiendo sido motivadas por la vida de los Cruzados de Santa María, quienes en ese entonc-es tenían ya una casa en el sur del Perú. El 13 de mayo de ese año, una de estas tres jóvenes, Isela Cruz Vincha, ingresará en la Cruzada de Santa María, siendo la primera peruana en incorporarse a la institución.

uestra labor apostólica se va desarrollando en diferentes ambientes, sobre todo en la enseñanza de jóvenes, estuvimos presentes en la Universidad Femenina del Sagrado Corazón, en la Universidad del Pacífico y en diversos institutos pedagógicos. Poco a poco muchas jóvenes se irán acercando a Dios a través de nuestro apostolado una a una, animándolas a participar en los Ejercicios Espirituales al estilo de San Ignacio y también en los Campamentos de Santa María, los dos medios más característicos de nuestro apostolado.

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espués de Lima, vino la fundación de Chiclayo en 1995, donde se nos encomendó llevar una casa de Ejercicios Espirituales, en la actualidad el Señor nos ha permitido poder tener una casa propia.

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n Lima en el año 1994 adquirimos un segundo in-mueble, el cual ha sido destinado a actividades del Movimiento Juvenil Milicia de Santa María y también a ser residencia universitaria para chicas que vienen a Lima desde provincias.

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P osteriormente en el año 2010 a petición de Mons. Javier del Río hemos ido a Arequipa en donde están 4 cruza-das, esta fundación es la primera que se hace sólo con voca-ciones peruanas.

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esde la llegada al Perú de la Cruzada de Santa María, el centro de misión han sido los centros de enseñanza, la formación integral de los jóvenes. Estamos presentes desde que llegamos en universidades, colegios y centros educativos secundarios.

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U na de nuestras armas de apostolado es la vida sencilla y el cumplimiento del deber donde nos toque hacerlo, de esta manera muchos jóvenes se sentirán interpelados a in-terrogarse sobre cuestiones más profundas y sobre el sentido de sus vidas. Iniciada una amistad, se les propone diversas actividades como células de formación, campamentos, Encuen-tros Universitarios Católicos, convivencias de semana santa, y principalmente los ejercicios espirituales.

a formación de minorías, un tema tan actual, y tan necesario en la formación de la juventud y de la sociedad actual, tan masificada por diversos medios de comunicación, se hace necesaria, especialmente en la formación de la dimen-sión humana (valores como: exigencia, superación reflexión y constancia) y espiritual (virtudes teologales, en la humildad, en la vida interior, reconociendo la primacía de la Gracia y en el apostolado). Forjándola también en la responsabilidad, campo que afecta a toda su persona y vida: trabajo, familia, vocación, reforma del carácter, amistad, en su compromiso social, como laico bautizado, lanzándola, sin miedos, a dar la cara y a aprender, alegre, en los fracasos.

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E l P. Tomás Morales S. J. ha sido el instrumento de Dios para regalar a la Iglesia el carisma de la Cruzada de Santa María, la cual –en palabras suyas- es tronco ignaciano y savia carmelitana, además de fundar este instituto secular, también es fundador del I. S. Cruzados de Santa María y del Movimiento Juvenil Milicia de Santa María, en sus ramas fe-menina y masculina.

En Perú, con la llegada de las primeras cruzadas, también se empezó a poner en marcha el Movimiento Juvenil, sus activ-idades van encaminadas a la formación integral, con carac-terísticas propias: santidad sencilla y alegre, mediante el cultivo de la vida interior, la responsabilidad apostólica misionera, la sólida formación humana (cabeza, voluntad, corazón).

Desde su llegada al Perú la Milicia de Santa María se hace presente, en el apoyo pastoral de parroquias, escuelas y univer-sidades, generando así un clima de cambio, en la persona, para el encuentro con el Señor en los Ejercicios Espirituales y/o los campamentos de verano.

Con el paso de los años, las militantes harán un discernimien-to vocacional y seguirán el llamado que Dios tiene para ellas; consagración o familia.

Juntamente con la Cruzada, La Milicia de Santa María, con sede en el Perú, se hace presente en diversos eventos eclesiales, congresos internacionales, misioneros y en la Jornadas Mun-diales de la Juventud desde el año 2000.

La Milicia de Santa María, agrupa a adolescentes desde los 12 años, a los que denomina juveniles, y jóvenes de 16 años a las que denomina militantes, este último grupo tiene compromisos de permanencia en el movimiento y suele realizar y renovar estos compromisos el 8 de diciembre de todos los años en la festividad de la Inmaculada Concepción.

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la sombra de la Milicia surge otra institución, el Instituto Berit de la Familia, que nace el 8 de octubre de 1998, en Madrid y llegará a la ciudad de Lima el año 2005; es un centro de formación, orientación y acción familiar promovido por las Cruzadas de Santa María, con el apoyo de un grupo de matrimonios, para orientar a otros en la vocación a la Dios los llamó. El Instituto es un lugar de encuentro de formación permanente, donde se desarrolla diversos temas de formación familiar.

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ntegran el Instituto Berit de la Familia en el Perú, los miembros de la Milicia de Santa María, que han contraído matrimonio y diversas parejas de esposos que han recibido una sólida formación espiritual basada en el carisma del Padre Morales. El Instituto Berit de la familia, brinda charlas de for-mación matrimonial a novios.

omo podrán comprender el Instituto Secular Cruza-das de Santa María, es un gran árbol, de donde brotan muchas ramas, que todas unidas en el tronco ignaciano (los ejercici-os epirituales), se alimentan de la savia carmelitana (santidad contemplativa en la acción) que nutre a esta gran familia y nos hace uno con Cristo.

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a Cruzada de Santa María tiene como modelo de madre y mujer a la Virgen, mediante Ella sabemos nos vienen las gracias del cielo, por ello nos inspira su ejemplo. Nues-tro apostolado es mariano, por dirigirse a Ella, o por hacerlo siempre ¨con el dulce nombre de María en el corazón¨ Diver-sas actividades son inspiradas en la Virgen, como Campañas Formativas, Misas de los Sábados, y son en las fechas claves de celebraciones para ella que ingresamos en la institución.

También como toda familia católica nuestro carisma tiene como centro a Cristo Eucaristía, por ello en todas nuestras casas se organizan Vigilias de los Primeros Viernes, Adoraciones al Santísimo y Vigilias Reparadoras.

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nfinitas gracias a Dios por habernos dado este carisma y haber inspirado al Padre Tomás Morales esta obra maravillosa, por su vida entregada. Por ser instrumento de Dios y por haber traído a la Cruzada de Santa María al Perú.

Que estos 25 años sean el final e inicio de una nueva historia, la misma que demanda una fidelidad al carisma fundacional y la unidad con la Iglesia. Le pedimos a la Virgen, que interceda por nosotros ante su Hijo, para que todos seamos dóciles a la voluntad de Dios.

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Poderosísima y buenísima Madre mía: Se acerca el día de tu Con-cepción Inmac-ulada. Quiero pedirte un mila-gro. Uno de esos milagros que más te gusta realizar.

cada día, a aceptar sonriendo sufrim-ientos, pequeños o grandes , pasa-jeros o persis-tentes, por amor a ese Dios que me ama con exceso.Toda hermosa eres, María, y no hay en ti mancha de pecado. así quieres también a tu Cru-z a d a - M i l i c i a , santa e inmacula-da en Cristo Jesús para alabanza del Padre de los cielos.Haznos santos, todo, solo, siempre de Dios, arránca-nos de la tierra, ar-rástranos al cielo.

Así sea.Tomás Morales

S.J.

Deseo ardientemente, Madre querida, entrar en el camino de la santidad. Condúceme tú. Quiero hacerme humilde y pequeño en brazos de Dios, consciente de mi debilidad y confiado hasta la auda-cia en su bondad de Padre. Enséñame a conservar el corazón desprendido de cosas y afectos de la tierra, a vivir en perfecto olvido de mi mismo; dame Madre la santidad ambiciosa que te pido, sen-cilla y alegre como la tuya, santidad contagiosa que arrastre hacia ti nuevos hijos en alegría desbor-dante. Enséñame a cumplir con tu ducle nombre siempre en el corazón, mis humildes obligaciones de