SANTAS MISIONES POPULRES

PARA UNA MISIÓN PERMANENTE

PRIMERA PARTE: UNA VISIÓN GLOBAL DE LA EXPERIENCIA

TEMA 1 HISTORIA DE

LAS SANTAS

MISIONES POPULARES:

Las SMP nacieron en las comunidades eclesiales de base, comenzaron poco a poco en 1,989 entre algunos agentes pastorales y animadores de las CEBS, que se reunían para cursos de formación o en casas de animadores o animadoras, en el sur de Pará, Brasil.

Se dieron cuenta de que los trabajos pastorales, a pesar de tanta dedicación, no llegaban a las masas de los católicos, alejados, sobre todo en la periferia de las grandes ciudades. Además veían a las comunidades sumisas en una rutina estéril con celebraciones sin vida y muchas personas abandonaban las comunidades.

A la par de esto se veía el crecimiento de otras iglesias sobre todo pentecostales que avanzaban a un ritmo impresionante.Ante esto alguien propuso, ¿porqué no ponemos en marcha las Santas Misiones?.

La sugerencia fructificó y decidieron llevar a cabo las Santas Misiones, para esto los misioneros tendrían que salir del pueblo y ser personas llenas de ternura solidaria y de audacia profética, se necesitaban misiones más acordes con los anhelos y preocupaciones del pueblo. Tenían que comprometerse con la transformación del Ser Humano y de la sociedad, y decidieron llamarlas Santas Misiones Populares.

Luego un pequeño equipo se encargó de materializar la experiencia.

La experiencia se inicio en Xinguará, una parroquia del sur de Pará, Diócesis de Concepción de Araguaia, con el obispo don José Patrick, todo empezó en el año 1,991. Luego en 1993 se realizó en

Transamazónica- Anapú.

La experiencia fue tan positiva que luego corrió la noticia por distintas partes de Brasil. La Conferencia Nacional de Obispos de Brasil elaboró para los años comprendidos entre 1996 y 2,000 el «Proyecto Rumbo al Nuevo Milenio» en el que incluyó como sugerencia la experiencia de las SMP, haciéndola así más conocida.

Comunidades cansadas se han reanimado y han nacido otras, ha crecido el gusto por el Evangelio y por el seguimiento de Jesús, muchas personas dedican tiempo y energía a construir vida y ciudadanía para todos.

No faltaron fallos y dificultades peros los hechos demuestran que las SMP no son «fuego de Paja». Han crecido en contenido, espiritualidad y metodología, gracias a la valiosa colaboración de muchos misioneros y misioneras.

¡ADELANTE MISIONERO (A)!