100
TEMA 5 el socialismo 1. La configuración de una ideología socialista con anterioridad al marxismo DROZ, J. Historia General del socialismo Droz divide las primeras etapas del surgimiento del socialismo en tres: a) Diversas utopías anteriores a la revolución industrial.- org de un régimen de goce colectivo de los bienes que permitan la desaparición de un gran número de vicios materiales y morales inherentes al egoísmo y a la codicia , de los que se hace responsable a la propiedad individual . b) La contemporánea de los comienzos de la era industrial.- presenta un pensamiento socialista dominado ya por la idea de pauperismo , pero todavía conceptual u utópico, desprovisto –a excepción de los primeros ensayos de Marx anteriores a 1848- de cualquier análisis científico de la economía y la sociedad. c) De 1848 a 1875.- interacción que se produce de manera progresiva entre el pensamiento socialista y el movimiento obrero , los esfuerzos emprendidos en la época de la I Internacional para crear entre los obreros de los diversos países una solidaridad basada en una ideología común, y simultáneamente la formación de los movimientos obreros nacionales en el seno de la clase obrera, cuya orientación en esa época es sensiblemente diferente. LA UTOPÍA SOCIALISTA HASTA EL COMIENZO DE LA ERA INDUSTRIAL ■ En Oriente la tradición del utopismo igualitario, que no ha dado lugar al socialismo moderno pero ha servido a los teóricos actuales de la legitimación Tema 5 El socialismo 1

Socialismo / Ciencias Políticas

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Socialismo / Ciencias Políticas

Citation preview

Page 1: Socialismo / Ciencias Políticas

TEMA 5

el socialismo

1. La configuración de una ideología socialista con anterioridad al marxismo

DROZ, J. Historia General del socialismo

Droz divide las primeras etapas del surgimiento del socialismo en tres:

a) Diversas utopías anteriores a la revolución industrial.- org de un régimen de goce colectivo de los bienes que permitan la desaparición de un gran número de vicios materiales y morales inherentes al egoísmo y a la codicia, de los que se hace responsable a la propiedad individual.

b) La contemporánea de los comienzos de la era industrial.- presenta un pensamiento socialista dominado ya por la idea de pauperismo, pero todavía conceptual u utópico, desprovisto –a excepción de los primeros ensayos de Marx anteriores a 1848- de cualquier análisis científico de la economía y la sociedad.

c) De 1848 a 1875.- interacción que se produce de manera progresiva entre el pensamiento socialista y el movimiento obrero, los esfuerzos emprendidos en la época de la I Internacional para crear entre los obreros de los diversos países una solidaridad basada en una ideología común, y simultáneamente la formación de los movimientos obreros nacionales en el seno de la clase obrera, cuya orientación en esa época es sensiblemente diferente.

LA UTOPÍA SOCIALISTA HASTA EL COMIENZO DE LA ERA INDUSTRIAL

■ En Oriente la tradición del utopismo igualitario, que no ha dado lugar al socialismo moderno pero ha servido a los teóricos actuales de la legitimación nacional, está vinculada con las más antiguas tradiciones religiosas (confucianismo, taoísmo, budismo, islamismo y la predicación milenaria del Mesías cuya venida, bajo una forma u otra, debía abrir una era de justicia, de abundancia y bienestar. Este socialismo se manifiesta en general como un movimiento de protesta contra el orden establecido, como una aspiración confusa a una mayor justicia. Esos sueños solidarios tienen un carácter campesino y están ligados al recuerdo de una rica economía de subsistencia, a la nostalgia de un estado de armonía entre el hombre y la naturaleza, sin ninguna noción precisa de progreso.

■ Tampoco la Antigüedad griega ha ignorado esa noción de “edad de oro” que se expresa en la obra de Hesíodo. Pero lo principal es que al forjar los términos de economía –goce igualitario de los bienes de este mundo- y de la isonomía –igualdad de todos los miembros de la ciudad ante la ley- y al relacionar esos dos términos con las ciudades de Esparta y Atenas respectivamente, el pensamiento griego ha proporcionado a los socialistas

Tema 5 El socialismo 1

Page 2: Socialismo / Ciencias Políticas

una serie de modelos que a través de los siglos no han dejado de inspirar a los reformadores sociales.

Pero hasta después de la crisis suscitada por la guerra del Peloponeso los teóricos no formularon sistemas de carácter comunista. PLATÓN soñó para los dirigentes de la República , los guardianes y los filósofos, un régimen de comunismo integral, ligado a una educación común estrechamente vigilada por la ciudad que se extendía a las mujeres y los niños. En las Leyes trasforma ese sistema en un reparto igualitario de la propiedad acompañado de un riguroso control de nacimientos y de la prohibición de manejar el oro y la plata; las actividades de los ciudadanos son controladas por un consejo nocturno que aplasta cualquier veleidad de independencia. Aparecerá también la influencia del estoicismo que, al contrario que Platón, condena la esclavitud y se niega a limitar la práctica del comunismo a una minoría de dirigentes.

■ A partir que el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano, ya no hubo lugar para la enseñanza del comunismo en la Iglesia. Sin embargo a lo largo de las Edad Media existieron espíritus que esperaban a la vez el advenimiento del Reino de Dios y la destrucción del orden social existente. El milenarismo reaparece en todas las épocas y sobre todo a partir del s. XIV en que se manifiestan las primeras quiebras de la sociedad feudal.

■ De vuelta a Platón, las dos grandes utopías del s. XVI, la de Moro y la de Campanella, inician realmente el socialismo moderno, porque en la base de su visión del mundo se encuentra una crítica profunda de la sociedad de su tiempo, y, en particular, de las consecuencias que tiene el ascenso del capitalismo para las clases más humildes. Pero los comienzos de los tiempos modernos, que vieron ascender a la burguesía y consolidarse a la monarquía absoluta no son demasiado propicios para la floración de un pensamiento favorable a los oprimidos: las experiencias socialistas se limitarán a comunidades estrechas y sin proyección.

■ Por el contrario, el siglo XVIII francés tiene una importancia capital en

la historia de las ideas socialistas. BABEUF hará una crítica de la renta feudal. Y a partir de Rosseau es imposible no ser sensible a la denuncia de las relaciones humanas basadas en la desigualdad.

Aunque en general, los revolucionarios franceses de 1793 adictos a la causa popular no lograron superar la contradicción entre el derecho a la existencia y el mantenimiento de la propiedad privada y de la libertad económica, el BAUVERISMO fue la primera doctrina comunista que se inscribió en la trama de la historia europea. Babeuf mantuvo en 1795 en Le Tribun du Peuple la necesidad de suprimir la propiedad personal y de establecer una comunidad de bienes y trabajo.

■ En la elaboración del programa comunista de la CONJURACIÖN DE LOS IGUALES, BUONARROTTI, fue clave basándose en las experiencias de Córcega e Italia. La idea esencial que animaba a los conjurados era

Tema 5 El socialismo 2

Page 3: Socialismo / Ciencias Políticas

que la revolución política no era nada sin la revolución social. Es verdad que el bauverismo era un comunismo de distribución que siente predilección por las formas antiguas de producción y que no aporta ningún tipo de análisis del desarrollo de la producción industrial. De todos modos el comunismo se convierte por primera vez en fuerza política. Y la Conspiración para la igualdad, llamada de Babeuf se considera un eslabón capital en la historia del pensamiento socialista.

EL SOCIALISMO UTÓPICO AL COMIENZO DE LA ERA INDUSTRIAL

Ligado al desarrollo de la gran industria, reacción contra la injusticia social, grito de dolor (Durkheim) de una sociedad en la que la miseria de los trabajadores crece a la inversa de la riqueza, el socialismo utópico o conceptual se orientó hacia una especie de pupulamiento de sistemas “fabricados sin relación con la realidad ni con el grado de madurez del período considerado. Lo que llamó la atención de los hombres fue el pauperismo, la pobreza considerada enfermedad social, la reducción de un gran número de individuos al estado de parados o condenados, pese al trabajo que realizaban, a una miseria sin esperanza. La condena del capitalismo , la denuncia del egoísmo y el dinero, la llamada a una mayor justicia y fraternidad son temas habituales de los escritores socialistas; en su pensamiento se trata de restituir al hombre “la libertad de vivir”, es decir, de crear para todos los hombres las condiciones previas necesarias para un desarrollo armónico de sus facultades.

Los sistemas socialistas vacilan entre el sueño de una edad de oro situada en el pasado y la anticipación de un mundo transformado bajo el signo del progreso científico.

CONTRADICCIONES. Mientras que la escuela societaria estima que la organización vendrá desde abajo y manifiesta su hostilidad a cualquier ingerencia autoritaria o centralizadora de los poderes públicos, mientras que PROUDHON ve en el mutualismo la panacea para los grandes problemas sociales, otros como LOUIS BLANC, atribuyen al Estado un papel decisivo en la organización del trabajo. A los ojos de algunos, el Estado es un instrumento de explotación; para otros fuente necesaria de toda transformación social. De aquí parten las diversas reacciones en relación con el papel de la violencia: la mayoría de los socialistas la rechazan y preconizan medios reformistas, pacíficos, para la transformación de la sociedad, confiando en la apremiante pasión de la razón.

OWEN: el hombres es un producto social del medio en que vive, insiste en la eminente virtud de la educación.BLANQUI: concibe la revolución como un golpe de audacia acertado y realizado por conspiradores organizados y disciplinados.El socialismo, x esto, es acusado por unos de conducir a la dictadura y de transformar el estado en una vasta prisión, y por otros de desarrollar formas peligrosas de impugnación y de resistencia y de ser un factor de anarquía.

Tema 5 El socialismo 3

Page 4: Socialismo / Ciencias Políticas

■ INGLATERRA: el precoz desarrollo del maquinismo y del sistema fabril liga desde muy pronto el socialismo a los resultados de la industrialización; la ideología no precede a la economía, sino que la acompaña. Cartismo: El socialismo se expresa a través del CARTISMO, que aunque no es una ideología propiamente socialista, pero hace surgir entre las masas una ideología de clase.

■ FRANCIA: Abundancia de doctrinas, Francia patria de la revolución. El denominador común de todos los sistemas socialistas anteriores a 1848 es esa filosofía de los derechos del hombre que se impuso en 1789 y que ahora se aplica a las injusticias del nuevo orden social fruto de la gran industria. Por el contrario, los vínculos entre los pensadores socialistas y la clase obrera todavía están mal establecidos, pese a que entre una cierta elite obrera, aún generalmente artesana, se extiende un conocimiento difuso y el socialismo se convierte para muchos en varias fórmulas cargadas de esperanzas , pero lo más frecuente era habérselas con motines proletarios sin futuro.

■ ALEMANIA: El socialismo es un movimiento de intelectuales porque el desarrollo está atrasado en relación con los grandes Estados occidentales, y no hay como en Francia tradición revolucionaria. Muchos artesanos alemanes emigrados fueron iniciados en el extranjero en las doctrinas socialistas (Weitling, teórico de un comunismo artesano). Dos grandes espíritus, Marx y Engels, colaboraron en sentar superando el utopismo a la luz de la economía política, las bases de un socialismo científico, realizando un análisis preciso de las contradicciones económicas y sociales de su tiempo; su primera definición fue su Manifiesto Comunista (1848). La empresa de Marx se proyecta, antes incluso de la revolución de 1848, sobre el socialismo internacional a través de la Liga de los Justos convertida en 1847 en Liga de los Comunistas, pero en Alemania misma, únicamente comunidades aisladas y restringidas están en condiciones de captar el alcance del mensaje.

■ Otros países, con excepción de Bélgica, el socialismo no es en 1848 más que un asunto de pequeños grupos , en gnral sin contacto con el resto de la nación (España: asociacionismo obrero BCN, Italia reformismo social).

Las utopías de la 1ª mitad del s XIX han sido un elemento esencial de la toma de conciencia por una fracción de la población cada vez mayor, de la gravedad de la cuestión obrera y esos remordimientos sociales que afectan a las clases desfavorecidas en presencia de tantos sufrimientos e injusticias.

LOS PRIMEROS CONTACTOS ENTRE EL SOCIALISMO Y EL MOVIMIENTO OBRERO

El período va de 1848 hasta la disolución de la I Internacional --- es una época de penetración de ideas socialistas en el seno del mundo obrero, que experimenta la necesidad de organizarse en partidos políticos independientes de la burguesía.

Tema 5 El socialismo 4

Page 5: Socialismo / Ciencias Políticas

Las revoluciones de 1848 no han revestido un carácter específicamente socialista en Europa, y como se ha dicho el socialismo sólo fue la cola -inquieta- de la democracia burguesa. Pero los años revolucionarios hicieron penetrar en el mundo obrero el sentimiento de su autonomía y contribuyeron ampliamente a su educación revolucionaria.

En FRANCIA el problema esencial fue el drcho al trabajo; pero la solución de los Talleres Nacionales, de Louis Blanc, terminó en fracaso, y la represión de la insurrección de junio de 1848 significó un reflujo decisivo para el movimiento obrero, así como el alejamiento de los trabajadores del ideal republicano.

Blanc fue precursor de teorías posteriores, al afirmar que los trabajadores sólo podían resolver sus problemas mediante la acción revolucionaria, y se anticipó a la formulación del principio social, adoptado después por Karl Marx, según el cual conviene “que cada uno aporte según sus capacidades y cada uno reciba según sus necesidades”. Blanc creía que este principio podía llevarse a la práctica mediante la creación de “talleres sociales”, asociaciones de trabajadores financiadas por el Estado y supervisadas por los propios obreros

En mayo de 1948 demócratas y socialistas pudieron obtener en las grandes ciudades y algunas regiones campesinas del sur de Francia un relativo éxito electoral; pero el miedo a los “participacionistas” (socialistas) y a los “rojos”, facilitó el ascenso de Luis Napoleón y su golpe de Estado a finales de 1851. Entonces el economista Reybaud dirá que el socialismo ha muerto.

En ALEMANIA , gracias a la valía de ciertos líderes, la participación del mundo obrero en las revoluciones no fue nula, pese a estar situada a la sombra de movimiento democrático:

- Born puso en marcha la Fraternidad obrera, que mantuvo el espíritu de combatividad en las masas

- Marx y Engels desde un periódico de gran tirada supieron definir para el proletariado la orientación que debía seguir en la lucha y el significado de alianzas que debía establecer.

La represión que siguió a las insurrecciones de la primavera de 1849 pusieron fin al combate: Marx desde su exilio en Londres, que la fase conspirativa del movimiento obrero había terminado; y el proceso de Colonia arruinó en 182 la acción de la Liga de los comunistas; en 1864 se cerraron las últimas secciones de la Fraternidad.

Los años 50 fueron un período de recesión para el movimiento obrero.El despertar se iba a producir cuando por razones diversas la vida política se reactivara en los diferentes Estados continentales. El movimiento obrero, que intenta independizarse de las formaciones políticas burguesas, está ya en pleno ascenso cuando, a raíz de un viaje de algunos obreros franceses a Londres, se crea en esta ciudad en 1864, la PRIMERA INTERNACIONAL.

En esa época tres figuras dominan el socialismo europeo:

Tema 5 El socialismo 5

Page 6: Socialismo / Ciencias Políticas

a) K. MARX.- había redactado los estatutos y el mensaje inaugural de la Asociación Internacional de Trabajadores, acaba la redacción del tomo I del Capital (1867) y que constituye el punto culminante de su pensamiento: descubriendo la ley de la plusvalía, base científica de la explotación del proletariado.

b) PROUDHON.- condenó la propiedad como fuente de renta del trabajo; pero su ideal sigue siendo el de una República de pequeños propietarios, de productores unidos por el mutualismo y ligados por los créditos concedidos sin interés por una banca del pueblo. Pasión por el individualismo, combate contra el absolutismo y la arbitrariedad, defiende una anarquía positiva que sería el triunfo de lo económico sobre lo político. Su socialismo antiestatal prohíbe a lkos obreros toda acción subversiva, incluso la utilización de la huelga.

c) BAKUNIN.- piensa que el Estado, ligado a la religión y cargado de todos los males inherentes a la alienación, debe ser destruido inmediatamente, sin período de transición, y ser reemplazado por una federación de comunas. No retrocede ante el terrorismo como medio de acción política.

La importancia de la Internacional es que dio al movimiento obrero una amplitud sin precedentes, revelándose las necesidad de la lucha de clases y de la solidaridad internacional. Despertó la conciencia de los trabajadores. Pero la AIT fue víctima de las disensiones ideológicas y tácticas que existían en su seno. ANEXOFrançois Nöel Babeuf (1760-1797), pensador y político francés, fundador del socialismo revolucionario. Nacido en Saint-Quentin, vivió sus primeros años al servicio de la aristocracia terrateniente. Babeuf, que detestaba la desigualdad y la injusticia, apoyó con entusiasmo la Revolución Francesa; al final del Periodo del Terror, arremetió contra el régimen que surgió con la reacción termidoriana, que suponía una vuelta atrás en sus teorías socialistas. Con el seudónimo de Gracchus Babeuf, publicó el diario Tribun du peuple, en el que condenaba con gran mordacidad a los enemigos de la Revolución. Defensor de la colectivización de la tierra y de los bienes, y de la absoluta igualdad política y económica de todos los ciudadanos, propuso la supresión de la propiedad privada mediante la confiscación y la abolición del derecho de herencia. Estos principios se conocen con el nombre de babuvismo. En 1796 participó en una rebelión para derrocar al Directorio (conocida como la ‘Conjura de los Iguales’) e instaurar un Estado comunista. Fue ejecutado el 28 de mayo (8 de pradial según el calendario revolucionario) de 1797, tras el fracaso de la revuelta.

Louis Blanc (1811-1882), líder socialista e historiador francés, nacido en Madrid y educado en París. Colaboró en diversas publicaciones políticas y en 1839 fundó la Revue du Progrès como un medio para dar a conocer sus doctrinas socialistas. En términos generales, puede decirse que en su concepto de orden social Blanc fue precursor de teorías posteriores, al afirmar que los trabajadores sólo podían resolver sus problemas mediante la acción revolucionaria, y se anticipó a la formulación del principio social, adoptado después por Karl Marx, según el cual conviene “que cada uno aporte según sus capacidades y cada uno reciba según sus necesidades”. Blanc creía que este principio podía llevarse a la práctica mediante la creación de “talleres sociales”, asociaciones de trabajadores financiadas por el Estado y supervisadas por los propios obreros.

Durante la Revolución de 1848, Blanc se convirtió en un líder del gobierno republicano provisional que alcanzó el poder tras la abdicación del rey Luis Felipe. Sin embargo, después de la sangrienta represión de la revuelta obrera en París en junio de 1848, se vio obligado a huir del país para salvar su vida y vivió exiliado en Inglaterra 22 años. Durante este periodo escribió los doce volúmenes de la Historia de la Revolución Francesa (1847-1862). Tras la caída del II Imperio en 1870, Blanc regresó a Francia y fue elegido miembro de la Asamblea Nacional en febrero de 1871, pero se opuso a

Tema 5 El socialismo 6

Page 7: Socialismo / Ciencias Políticas

las medidas más extremistas adoptadas por la Comuna de París. Fue miembro de la Cámara de Diputados, elegida tras la Constitución de 1875, desde 1876 hasta su muerte.

Tema 5 El socialismo 7

Page 8: Socialismo / Ciencias Políticas

2. Las grandes ideas políticas en la obra de Marx y Engels

Introducción

La obra de Marx puede dividirse entre sus primeros escritos filosóficos (Manuscritos filosóficos y económicos, 1844; La ideología alemana, 1845-1846), sus panfletos (Manifiesto Comunista, 1848), sus análisis de acontecimientos contemporáneos (El 18 brumario de Luis Bonaparte, 1852; La guerra civil en Francia, 1871) y los escritos fundamentales de su madurez (Contribución a la crítica de la economía política, 1859; y, sobre todo, El capital, vol. 1, 1867; vols. 2 y 3, publicados póstumamente). Las ramificaciones de la doctrina marxista podemos encontrarlas en ámbitos filosóficos, económicos, históricos, políticos y de la mayoría de las ciencias sociales. Ningún otro teórico ha sido tan estudiado y tan discutido durante el siglo XX como Karl Marx. La razón de este interés está lejos de ser exclusivamente académica. Ningún otro pensador moderno ha tenido tanta influencia sobre los movimientos políticos y sociales.

Marx pretendía desvelar las leyes inherentes al desarrollo del capitalismo. Creía que cada época histórica se caracterizaba por un modo de producción específico que se correspondía con el sistema de poder establecido y, por lo tanto, con una clase dirigente en perpetuo conflicto con una clase oprimida. Así, la sociedad medieval estuvo caracterizada por el modo de producción feudal, en el que la clase poseedora de la tierra obtenía una plusvalía del campesinado que trabajaba aquélla. Las sucesivas transiciones del sistema de esclavitud al feudalismo, y del feudalismo al capitalismo, se produjeron cuando las fuerzas productivas (es decir, los grupos relacionados con el trabajo y los medios de producción como las máquinas) no podían seguir desarrollándose con las relaciones de producción existentes entre las distintas clases sociales. Así, la crisis que afectó al feudalismo cuando el capitalismo necesitaba una creciente clase trabajadora conllevó la eliminación de las bases legales e ideológicas tradicionales que ataban a los siervos a la tierra.

La relación fundamental del capitalismo, basada en salarios, parte de un contrato entre partes jurídicamente iguales. Los propietarios del capital (capitalistas) pagan a los trabajadores (el proletariado, poseedor únicamente de su fuerza de trabajo) salarios a cambio de un número de horas de trabajo acordado. Esta relación disfraza una desigualdad real: los capitalistas se benefician de parte de lo producido por los trabajadores y no remunerado en sus salarios. Esta plusvalía generada en favor de la clase capitalista proporciona a los propietarios del capital una gran riqueza y el control sobre el desarrollo económico de la sociedad. De esta manera se están apropiando no solamente de la riqueza, sino también del poder. La compleja superestructura política, el conjunto de leyes e ideologías, regula y refuerza este tipo de relaciones sociales. En efecto, al poseer la plusvalía, los capitalistas pueden acumular riqueza y poder, determinando la dirección que seguirá la sociedad. Los bienes producidos mediante el sistema capitalista deben tener valor de uso, ya que, de no tenerlo, no se podrían encontrar compradores; pero, para el capitalista, tienen que tener valor de cambio: no se producen para el consumo del propio capitalista, sino para que éste pueda intercambiarlos por dinero. Así, la producción capitalista

Tema 5 El socialismo 8

Page 9: Socialismo / Ciencias Políticas

es esencialmente una producción dirigida al intercambio y no a la satisfacción de necesidades. La competencia hace que las empresas capitalistas ineficaces vayan a la quiebra, y se tienda a la concentración de empresas y la creación de monopolios, al tiempo que los mercados no dejan de crecer, pues las técnicas productivas y las medios de intercambio están continuamente cambiando y mejorando.

Las crisis son un fenómeno inherente al capitalismo. Los capitalistas intentan aumentar la intensidad de la jornada laboral y, en consecuencia, la productividad del trabajo. Por su parte, los trabajadores, si están organizados, resistirán. Los capitalistas intentarán ampliar los mercados, pero al mismo tiempo pagarán a sus trabajadores el mínimo posible. Si lo consiguen, tanto el consumo como la demanda de los trabajadores disminuirán, los mercados se reducirán y el capitalismo entrará en crisis.

Karl Marx

Marx nació en Tréveris el 5 de mayo de 1818 y estudió en las universidades de Bonn, Berlín y Jena. Publicó un artículo en la Rheinische Zeitung (Gaceta Renana) de Colonia en 1842 y poco después pasó a ser su jefe de redacción. Aunque su pensamiento político era radical, todavía no podía calificarse de comunista. Las críticas de las condiciones sociales y políticas vertidas en sus artículos periodísticos le indispusieron con las autoridades, que le obligaron a abandonar su puesto en el rotativo en 1843; poco después, el periódico dejó de editarse y Marx se trasladó a París. Los estudios de filosofía, historia y ciencia política que realizó en esa época le llevaron a adoptar el pensamiento de Friedrich Hegel. Cuando Engels se reunió con él en la capital francesa en 1844, ambos descubrieron que habían llegado independientemente a las mismas conclusiones sobre la naturaleza de los problemas revolucionarios. Comenzaron a trabajar juntos en el análisis de los principios teóricos del comunismo y en la organización de un movimiento internacional de trabajadores dedicado a la difusión de aquéllos. Esta colaboración con Engels continuó durante toda su vida.

Disertación doctoral La diferenciación entre la filosofía de la naturaleza en Demócrito y en Epicuro (1841), actitud crítica frente al pensamiento de Hegel, cuyo método seguirá apreciando, aunque separándose de su sistema. Según el, la filosofía es incompatible con la religión.

Anales (1844), el estado político a sus ojos no es ya la encarnación de lo universal, sino una realidad que, como todas las demás, trata de someter a crítica.

Droz señala como Marx establece desde casi al principio la distinción entre una revolución política, que es la protesta de una clase particular contra su aislamiento en el Estado, y una revolución social, que es la protesta del hombre contra su exclusión de la comunidad humana.

Engels reveló a Marx la imp de la economía política. En los Manuscritos económico-filosóficos (1844) partiendo de los economistas clásicos, Smith y Ricardo, demostrará que la propiedad privada no puede ser considerada una verdad eterna, que debe ser sometida a análisis histórico y que es la consecuencia de una alienación en el régimen capitalista de trabajo, el cual, de manifestación espontánea de las fuerzas esenciales del hombre, se

Tema 5 El socialismo 9

Page 10: Socialismo / Ciencias Políticas

transforma en una actividad contingente y aleatoria: efectivamente, el obrero, forzado a vender su trabajo, recibe como pago mucho menos de lo que produce, y se empobrece y se desprecia en la misma medida en que su producción gana volumen y valor. En una palabra, la ALIENACIÓN es un fenómeno esencialmente social cuya abolición precisa de una profunda transformación de la sociedad.

En La sagrada familia (1845) Marx y Engels delinean los primeros trazos de lo que será el materialismo dialéctico, es decir, que el ser es quién determina la conciencia y que las ideas están ligadas a las circunstancias de la vida real de los hombres: en la medida que éstas expresan los intereses de una clase ascendente, adquieren su verdadera fuerza y se convierten en motor de la historia. Desde entonces lo fundamental del pensamiento de Marx se refiere a las condiciones de clase que son la causa determinante de la alineación.

Entretanto, Engels publica La situación actual de la clase trabajadora en Inglaterra. Droz considera que hay cierto utopismo en esta obra porque piensa que el comunismo se sitúa “por encima del antagonismo entre proletariado y burguesía” y que será posible convertir a la mayor parte de dicha clase a sus ideas; está persuadido de que la verdad del comunismo es tal que convencerá a los espíritus cultos.

La obra decisiva en la cual se expresa la colaboración de Marx y Engels es La ideología alemana (1846). La aportación esencial de esta obra reside en el análisis de la división del trabajo, que lleva consigo la contradicción fundamental inherente a su propiedad privada y que es el origen de la división de la sociedad en clases: la burguesía surge a raíz de la especialización de un determinado número de individuos en las funciones del comercio. La historia está para Marx y Engels ligada a las formas de producción y de cambio, que ellos estudian en el marco de la sociedad tribal, de la sociedad comunal, de la sociedad feudal y, por último de la sociedad moderna, donde se elaboran las relaciones de producción capitalista y donde se desarrolla una clase autónoma de comerciantes. El Estado no es más que la expresión de las aspiraciones de la clase dominante; y la forma jurídica de que se dota este Estado es, en última instancia, la expresión en el mundo de las ideas del modo dominante de producción. Este materialismo es histórico y dialéctico. La historia no avanza de forma lineal, sino bajo el efecto de la contraposición que se establece entre las fuerzas de producción y las relaciones sociales surgidas de estas formas. Y esta transformación dialéctica lejos de ser mecánica y fatal es obra constante de las clases oprimidas en lucha contra las clases dominantes. El comunismo no es un ideal que sirva de pauta, sino el movimiento real de la sociedad aboliendo el estado actual de las relaciones sociales. En esta obra M y E sientan las bases del socialismo científico.

MANIFIESTO COMUNISTA.- Marx se vio obligado a abandonar París en 1845 debido a su implicación en actividades revolucionarias. Se instaló en Bruselas y comenzó a organizar y dirigir una red de grupos llamados Comités de Correspondencia Comunista, establecidos en varias ciudades europeas. En 1847,

Tema 5 El socialismo 10

Page 11: Socialismo / Ciencias Políticas

Marx y Engels recibieron el encargo de elaborar una declaración de principios que sirviera para unificar todas estas asociaciones e integrarlas en la Liga de los Justos (más tarde llamada Liga Comunista). El programa que desarrollaron —conocido en todo el mundo como el Manifiesto Comunista— fue redactado por Marx basándose parcialmente en el trabajo preparado por Engels y representaba la primera sistematización de la doctrina del socialismo moderno. Las proposiciones centrales del Manifiesto, aportadas por Marx, constituyen la concepción del materialismo histórico, concepción formulada más adelante en la Crítica de la economía política (1859). Según se explica en estas tesis, el sistema económico dominante en cada época histórica, por el cual se satisfacen las necesidades vitales de los individuos, determina la estructura social y la superestructura política e intelectual de cada periodo. De este modo, la historia de la sociedad es la historia de las luchas entre los explotadores y los explotados, es decir, entre la clase social gobernante y las clases sociales oprimidas. Partiendo de estas premisas, Marx concluyó en el Manifiesto que la clase capitalista sería derrocada y suprimida por una revolución mundial de la clase obrera que culminaría con el establecimiento de una sociedad sin clases. Esta obra ejerció una gran influencia en la literatura comunista posterior y en el pensamiento revolucionario en general; ha sido traducida a multitud de lenguas y de ella se han editado cientos de miles de ejemplares.

El objetivo de la Liga, declaraba el nuevo programa, es “el derrocamiento de la burguesía, el dominio del proletariado, la abolición de la vieja sociedad de clases y la fundación de una sociedad de una sociedad nueva, sin clases, ni propiedad privada”. Marx y Engels fueron encargados de redactar un Manifiesto Comunista.

Manifiesto Comunista (en alemán, Manifest der kommunistischen Partei), declaración de principios y objetivos de la Liga Comunista (organización secreta de artesanos e intelectuales alemanes emigrados) publicada en Londres, poco antes de la Revolución de 1848 de París, que tuvo lugar en febrero. Escrito por Karl Marx en colaboración con Friedrich Engels, el Manifiesto del Partido Comunista (su nombre completo) está dividido en cuatro partes, precedidas de una introducción.

En la primera parte, Marx, siguiendo el discurso filosófico de Georg Wilhelm Friedrich Hegel basado en la sucesiva superación de contradicciones entre tesis y antítesis a través de respectivas síntesis, traza las líneas generales de su teoría del devenir histórico y profetiza el fin de la explotación de unas clases por otras. Identifica la lucha de clases como el motor primario de la historia, describe el mundo moderno como escenario de una confrontación trágica y sangrienta entre la burguesía dirigente (la clase capitalista opresora) y el proletariado (la clase trabajadora oprimida). Movida por la lógica del capitalismo de buscar beneficios cada vez mayores, la burguesía revoluciona de forma constante los medios de producción económica, punto de apoyo de la historia, y al hacerlo, pone de forma inconsciente en movimiento fuerzas sociohistóricas que ya no puede controlar, creando con esto la clase destinada a poner fin a su poder: el proletariado. Según el Manifiesto, a medida que éste vaya creciendo en número y en conciencia política, el intenso antagonismo de clases originará una revolución y la inevitable derrota de la burguesía.

Tema 5 El socialismo 11

Page 12: Socialismo / Ciencias Políticas

En la segunda parte, Marx considera a los comunistas aliados y vanguardia del proletariado y hace hincapié en la necesidad de abolir la propiedad privada, cambio fundamental en la existencia material que desenmascara la cultura burguesa, expresión ideológica del capitalismo. Tras la revolución, la producción económica estará en manos del Estado, o sea, del proletariado organizado como clase dirigente, con lo que la distinción de clases empezará a desaparecer debido a la desaparición misma de la propiedad y de la división social del trabajo.

La tercera parte, que critica varias corrientes socialistas de la época es pone de manifiesto la formidable capacidad crítica y polémica del autor. La última parte, que compara la táctica comunista con la de otros partidos europeos de la oposición, termina con una contundente llamada a la unidad: “¡Proletarios de todo el mundo, uníos!”

El Manifiesto constituye la presentación más concisa y expresiva, hasta resultar de gran belleza literaria en opinión de numerosos autores (André Gide, André Malraux y Noam Chomsky, entre otros nombres) de la visión materialista que Marx tenía de la Historia. De ahí que, a pesar del poco efecto inmediato que tuvo en su momento, se convirtiera con posterioridad en el documento más influyente para la formación y consolidación de dos de las ideologías políticas más influyentes desde entonces: el socialismo y el comunismo.

“La historia de toda la sociedad –escribe Marx- no ha sido hasta hoy día más que la historia de la lucha de clases”. La historia subraya la división de la sociedad en dos clases antagónicas, actualmente burguesía y proletariado. Las armas de las que la burguesía se escribió para acabar con el feudalismo se vuelven contra ella; y con los abusos propios del régimen capitalista, minado por las contradicciones internas, los que provocarán su inevitable caída. La ley de concentración capitalista se verá favorecida por las crisis periódicas de superproducción, que supondrán la ruina para los pequeños productores: de ahí nacerá, frente a la existencia de empresas cada vez mayores, el aumento de la proletarización de las clases medias. El proletariado, producto genuino de la gran industria, es la única clase “verdaderamente revolucionaria”: la condición de proletariado es la negación de las demás clases; y la revolución proletaria tendrá un carácter mucho más radical que todas las que la han prendido. En virtud de una inevitable catástrofe, un día se llegará a la expropiación automática de las empresas anónimas. Entonces se establecerá el régimen colectivista, el régimen sin clases, donde el Estado, hasta entonces instrumento de presión al servicio de una clase determinada, desaparecerá reabsorbiéndose en la sociedad. “En lugar de la sociedad burguesa, con sus clases y sus antagonismos de clase, surge una asociación en la que el libre desarrollo de cada uno será la condición para el libre desarrollo de todos”.

Por enriquecedor que fuese el Manifiesto, a principios del año 1848 no constituyó, sin embargo, más que una premonición: la clase obrera a la que se dirigía, aún no existía. La sociedad que describía todavía era parcialmente desconocida en Alemania, aún estaba gestándose. Sin

Tema 5 El socialismo 12

Page 13: Socialismo / Ciencias Políticas

duda, M y E sobrestimaron la madurez de los trabajadores, los cuales no tenían, y por mucho tiempo no tendrían, una clara concepción de la lucha de clases. El manifiesto no influirá, pues, de una manera real en los acontecimientos de 1848. Hasta mucho más tarde no se convertirá en el tesoro común de la clase obrera alemana.

Miseria de la filosofía (1847).-

Exilio Político.- Poco después de la aparición del Manifiesto, estallaron procesos revolucionarios (las revoluciones de 1848) en Francia, Alemania y el Imperio Austriaco, por lo que el gobierno belga expulsó a Marx temeroso de que la corriente revolucionaria se extendiera también por el país. El pensador alemán se trasladó a París y después a Renania. Fundó y editó en Colonia una publicación comunista, la Neue Rheinische Zeitung (Nueva Gaceta Renana), y colaboró en actividades organizadoras de agrupaciones obreras. En 1849 fue arrestado y juzgado bajo la acusación de incitar a la rebelión armada. Aunque fue absuelto, se le expulsó de Alemania y se cerró la revista. Pocos meses después las autoridades francesas también le obligaron a abandonar el país y se trasladó a Londres, donde permaneció el resto de sus días.

Una vez instalado en Inglaterra, se dedicó a profundizar en sus ideas, publicando nuevos escritos, y a alentar la creación de un movimiento comunista internacional. Durante ese periodo, elaboró varias obras que fueron constituyendo la base doctrinal de la teoría comunista. Entre ellas se encuentra su ensayo más importante, El capital (volumen 1, 1867; volúmenes 2 y 3, editados por Engels y publicados a título póstumo en 1885 y 1894, respectivamente), un análisis histórico y detallado de la economía del sistema capitalista, en el que desarrolló la siguiente teoría: la clase trabajadora es explotada por la clase capitalista al apropiarse ésta del ‘valor excedente’ (plusvalía) producido por aquélla

El capital (en alemán, Das Kapital ), principal obra teórica de Karl Marx, que pasó a formar parte del doctrinario marxista en sus argumentaciones de tipo económico y que marcó un hito en la historia de la economía.

El proceso de redacción y edición de El capital fue complejo. Marx comenzó a escribir esta obra en 1862. Su primera intención fue desarrollar un profundo análisis explicativo de los conceptos de capital y capitalismo. Con ello, continuaba un proyecto que ya había iniciado en Contribución a la crítica de la economía política (1859) y Fundamentos de la crítica de la economía política (1859). Salvo la primera parte (El desarrollo de la producción capitalista), publicada en 1867 en Hamburgo, el resto de la obra fue editada tras la muerte de su autor. Ello se debió a que Marx continuó la redacción de El capital, en forma de apuntes y anotaciones, hasta 1883. Fue su colaborador Friedrich Engels quien, a partir de aquellos borradores, pudo publicar de forma póstuma la segunda parte (El proceso de circulación del capital, 1885), así como la tercera (El proceso de conjunto de la producción capitalista, 1894). Más tarde, el político alemán Karl Kautsky publicaría Teorías sobre la plusvalía (4 vols., 1905-1910), a partir de manuscritos de Marx que estaban llamados a conformar la cuarta parte de la obra.

En El capital, Marx pretendió analizar los orígenes del capitalismo, su más recóndita esencia y los resortes y mecanismos económicos y sociales que

Tema 5 El socialismo 13

Page 14: Socialismo / Ciencias Políticas

generaba y reproducía históricamente. Trataba así de justificar y proporcionar argumentos para la revolución, concepto que ya había desarrollado y defendido en su obra Manifiesto Comunista (1848). Para ello, fundamentó su estudio en la búsqueda de las intrínsecas contradicciones del modo de producción capitalista, las cuales encontró a la luz de los conceptos de mercancía, valor, fuerza de trabajo, salario y plusvalía. Llegó a la conclusión de que los trabajadores, cuya única forma de subsistencia era la venta de su fuerza de trabajo, generaban en la producción de cada mercancía un aumento del valor de ésta, no incluido en el precio pagado por su trabajo. En ese incremento de valor que el proletariado añadía a las mercancías producidas con su trabajo se hallaba el fundamento de los cada vez mayores beneficios de la clase capitalista.

El capital

I (1867) Es el fundamento de la obra considerada en conjunto, ya que analiza las categorías esenciales del capitalismo: la producción de plusvalía, la producción del propio capital y la acumulación de plusvalía en forma de capital.

II (1885) Está consagrado al proceso de circulación del capital, a los problemas de la circulación de los diferentes elementos del capital, de la realización de la plusvalía y de la reproducción posibilitada por la circulación.

III (1894) El propio Marx declara que pretende “descubrir y describir las formas concretas a las que da el movimiento del capital considerado como un todo. Trata de la división de la plusvalía en beneficio industrial, bancario o comercial, y también la evolución de esta participación con una tendencia fundamental a la disminución de la cuota de beneficio.

IV (1905) contiene los análisis críticos desarrollados por Marx a propósito de los economistas que le habían precedido: se publicó con el título Teorías sobre la plusvalía.

Conceptos:

MERCANCÍA Y VALOR. En el corazón del primer libro se encuentra la noción de plusvalía. Marx parte de la noción de mercancía. Se pregunta en que consiste el valor de cambio de una mercancía. En tanto que valores de cambio, todas las mercancías no son más que porciones determinadas de tiempo de trabajo. El que produce es a su vez propietario de los medios de producción y de los productos de su trabajo. No hay separación entre propiedad y trabajo. La producción capitalista aparece, pues, como la forma superior de la producción mercantil. Las manifestaciones del trabajo concreto tienen, sin embargo, algo en común. Todas exigen un gasto de energía física e intelectual por parte de los trabajadores.

LA FUERZA DE TRABAJO. Entre todas las mercancías hay una muy particular, que es precisamente la fuerza de trabajo, es decir, “el conjunto de facultades físicas e intelectuales que existen en el cuerpo de un

Tema 5 El socialismo 14

Page 15: Socialismo / Ciencias Políticas

hombre, en su personalidad viva, y que debe poner en movimiento para producir cosas útiles”. Esta fuerza de trabajo es una mercancía.

LA ACUMULACIÓN ORIGINARIA. El proceso de producción capitalista se inicia con la compra de esta fuerza de trabajo por los capitalistas propietarios de los medios de producción. De todos modos, para que el “hombre de las monedas” encuentre en el mercado la fuerza de trabajo deben darse dos condiciones. La primera es que el poseedor de la fuerza de trabajo pueda disponer libremente de ella. La segunda es que esté obligado a alquilarla para vivir. Para que el poseedor de la fuerza de trabajo se vea obligado a alquilarla, debe estar desposeído de la propiedad de los medios de producción, porque si dispusiera de los medios de producción utilizaría por sí mismo su fuerza de trabajo.

LA PLUSVALÍA, FUENTE DE BENEFICIO. La acumulación originaria creó las condiciones de la producción de plusvalía. El capitalista compra la fuerza de trabajo a su precio. El salario es el precio, es decir, el aspecto monetario de la fuerza de trabajo. Para Marx el salario a destajo no es más que una variante, rentable para el patrón, del salario por horas. Si el salario fuese realmente el precio del trabajo, no se podría comprender ni el desarrollo del capitalismo ni el fenómeno de la explotación capitalista.

Fórmulas:

1) M-D-M El hb produce una mercancía, la cambia por dinero, y con este dinero compra otra mercancía.

2) D-M-D Con el dinero un hb compra una mercancía que luego vende para tener dinero.

3) D-M-D+d Con el dinero se compra una mercancía: está sufre una transformación y cuando es vendida bajo su nueva forma su valor ha aumentado (D+d)

4) Explicación de D+d, explicación del incremento de la plusvalía: La fuerza de trabajo puede suministrar más trabajo del que cuesta.

Tiempo de trabajo suplementario (TS)-------------------------------------------------- = cuota de plusvalíaTiempo de trabajo necesario (TN)

Mediante este rodeo llegamos de nuevo a la teoría del valor (en el proceso productivo) de la realización del valor (en el proceso de cambio).

En El Capital, Marx se dedica especialmente a demostrar que el beneficio comercial y el bancario derivan de la plusvalía. No basta con que una empresa se convierte en propiedad de sus obreras para resolver el problema de la explotación capitalista.

PLUSVALÍA ABSOLUTA Y PLUSVALÍA RELATIVA. El capitalismo se nutre, pues de la plusvalía. Al ser la plusvalía la única fuente de beneficios, el crecimiento de esa plusvalía es la tendencia fundamental, vital del capitalismo. Marx distingue dos formas de incrementar la plusvalía: aumentar la plusvalía absoluta o pasar a la plusvalía relativa.

Tema 5 El socialismo 15

Page 16: Socialismo / Ciencias Políticas

DE LA COOPERACIÓN SIMPLE A LA GRAN INDUSTRIA. Marx establece 3 estadios históricos de la plusvalía relativa:

1) Cooperación simple .- forma de proa basada en la explotación, por un capitalista aislado.

2) División manufacturera .- Basada en la técnica artesanal , pero que comparta un nuevo tipo de división de trabajo. Capitalista trabajo intelectual y obrero manual.

3) Maquinismo y gran industria .- rev industrial. Desgaste físico y moral.Al obrero la maquina se le antoja el enemigo del que proceden todos los males. Le aplasta a él y a su familia. Le encadena. Le hace perder hasta la apariencia de libertad en la org del trabajo que era una de las caract del artesanado. Al perfeccionarse al hacer sola el trabajo de varios obreros, aumenta el peligro de desempleo.

LA LEY GENERAL DE LA ACUMULACIÓN CAPITALISTA. Marx define el capitalismo como un sistema de reproducción. Es la teoría llamada de los dos polos, “acumulación de riqueza en un polo” y “acumulación de pobreza, de sufrimiento, de embrutecimiento, de degradación moral de esclavitud en el polo opuesto, entre la clase que produce el capital”. Esta ley es una ley tendencial que actúa en mayor o menor intensidad en función de las fuerzas antagonistas, que frenan su aplicación o que por el contrario la aceleran.

La ley también lleva consigo las crisis económicas. Estas crisis precipitan el movimiento de centralización de los capitales, a la vez que llevan consigo una agravación de la condición obrera (paro y disminución de los salarios).

EL “SOCIALISMO CIENTÍFICO”. No existe una solución de continuidad brutal entre los socialismos premarxistas y El Capital. Pero con la obra de Marx se sientan los principios de lo que Engels llamará socialismo científico”.

La ley de la plusvalía aparece como la ley fundamental de la producción capitalista. Incluso aunque no sean conscientes de ello, cuando los obreros emprenden la lucha contra los capitalistas lo que ventila en ese combate es la cuota de plusvalía, ya que se trate del salario o de la duración del trabajo.

Hay una convergencia de dos procesos: el de la lucha de clases y el del conocimiento teórico que descubre las leyes del proceso histórico. A medida que los obreros toman conciencia de esta convergencia, su combate, que es la forma moderna de la lucha de clases, llega a un nivel superior, el nivel político. Marx se levanta contra la llamada ley de bronce de Lasalle, según la cual la presión demográfica hace imposible cualquier elevación de los salarios.

DE LA SOCIEDAD CAPITALISTA A LA SOCIEDAD SOCIALISTA. El capitalismo no es un sistema de producción eterno. No es más que una categoría histórica, y por tanto transitoria. También él está llamado a

Tema 5 El socialismo 16

Page 17: Socialismo / Ciencias Políticas

desaparecer, como han desaparecido los sistemas de producción que él ha reemplazado.

“El objetivo final” de El Capital es “desvelar la ley económica del movimiento de la sociedad moderna”. “Cuando una sociedad llega a descubrirla”, no “puede abreviar el período de gestación y disminuir los dolores de su alumbramiento”.

Marx rechaza en El Capital las tentaciones del utopismo. No esboza un “modelo de sociedad socialista.

EL ALCANCE DEL CAPITAL. La obra de Marx abre una nueva etapa en la historia del socialismo, pero es preciso esperar una decena de años desde la publicación del libro primero de El Capital para que verdaderamente se pueda hablar de difusión del marxismo.

En la doctrina económica marxista (que analizó en profundidad tal concepto), la plusvalía equivale al beneficio que el capitalista obtiene por la apropiación del trabajo excedente no pagado a los asalariados. En una jornada de trabajo, los trabajadores destinan parte de la misma a producir por valor de su consumo de subsistencia, lo que se denomina producción socialmente necesaria. El resto del tiempo se genera un plusvalor que se apropia el capitalista. La diferencia entre el tiempo total de trabajo y el socialmente necesario se denomina plusvalía. Se puede establecer la razón entre la masa de plusvalía y el capital variable utilizado, a la que se denomina tasa de plusvalía. Esta tasa expresa el grado de explotación de los trabajadores, y también puede definirse como el cociente entre el trabajo excedente y el socialmente necesario. El capitalista puede aumentar la tasa de plusvalía incrementando la plusvalía absoluta (sin variar el proceso productivo amplía la jornada o disminuye el salario) o la relativa (introduciendo mejoras tecnológicas).

Despés de El Capital, la siguiente obra de Marx, La guerra civil en Francia (1871), analizaba la experiencia del efímero gobierno revolucionario francés conocido como la Comuna de París, establecida en esta ciudad durante la Guerra Franco-prusiana. Marx interpretó su creación y existencia como una confirmación histórica de la necesidad de que los trabajadores tomen el poder mediante una insurrección armada y destruyan al Estado capitalista. Aclamó a la Comuna como “la forma política, finalmente hallada, en la que podía producirse la emancipación del trabajador”. Esta teoría fue desarrollada en Crítica del programa de Gotha (1875) en los siguientes términos: “Entre los sistemas capitalista y comunista se encuentra el periodo de transformación revolucionaria de uno en otro. Esta fase corresponde a un periodo de transición, cuyo estado no puede ser otro que la dictadura revolucionaria del proletariado”. Durante su estancia en Inglaterra, Marx también escribió crónicas sobre acontecimientos sociales y políticos para periódicos de Europa y Estados Unidos, entre ellos varios artículos sobre las ‘revoluciones liberales’ en España y en la América hispana. Fue corresponsal del New York Tribune desde 1852 hasta 1861 y escribió varios artículos para la New American Cyclopedia.

Los últimos años.- Después de la disolución de la Liga Comunista en 1852, Marx se mantuvo en contacto con cientos de revolucionarios a fin de crear otra organización de la misma ideología. Sus esfuerzos y los de sus colaboradores

Tema 5 El socialismo 17

Page 18: Socialismo / Ciencias Políticas

culminaron en 1864 con la fundación en Londres de la I Internacional. Pronunció el discurso inaugural, escribió sus estatutos y posteriormente dirigió la labor de su Consejo General (órgano directivo), superando las críticas del grupo seguidor de Mijaíl Bakunin, de carácter anarquista. Tras la eliminación y represión de la Comuna parisina, en la que habían participado miembros de la I Internacional, la influencia de esta organización disminuyó y Marx recomendó trasladar su sede a Estados Unidos. Los últimos ocho años de la vida del filósofo estuvieron marcados por una incesante lucha contra las dolencias físicas que le impedían trabajar en sus obras políticas y literarias. Los manuscritos y notas encontrados en Londres después de su muerte, ocurrida el 14 de marzo de 1883, revelan que estaba preparando un cuarto volumen de El capital que recogería la historia de las doctrinas económicas; estos fragmentos fueron revisados por el socialista alemán Karl Johann Kautsky y publicados bajo el título de Teorías de la plusvalía (4 volúmenes, 1905-1910). Asimismo, Marx planeaba realizar distintos trabajos que comprendían investigaciones matemáticas, aplicaciones de éstas a problemas económicos y estudios sobre aspectos históricos de varios desarrollos tecnológicos.

Su influencia.- Marx no ejerció una gran influencia en vida, fue después de su muerte cuando su pensamiento comenzó a destacar dentro del movimiento obrero. Su concepción pasó a denominarse marxismo o socialismo científico, una de las principales corrientes de la teoría política contemporánea. Su análisis del sistema capitalista y su teoría del materialismo histórico, la lucha de clases y la plusvalía son las principales fuentes de la ideología socialista contemporánea. Su tesis sobre la naturaleza del Estado capitalista, el camino hacia el poder y la dictadura del proletariado tienen una importancia decisiva en la acción revolucionaria. Estas doctrinas, comentadas por la mayoría de los socialistas después de su muerte, fueron retomadas por Lenin en el siglo XX, y el desarrollo y aplicación que el político ruso hizo de ellas fue el núcleo de la teoría y la praxis del bolchevismo y de la III Internacional.

Friedrich Engels (1820-1895), pensador y economista político alemán, fundador, junto con Karl Marx, del socialismo científico o comunismo. Nació en Barmen (en la actualidad Wuppertal) en el seno de una rica familia protestante. Desde joven estuvo influido por los trabajos del poeta radical Heinrich Heine y del filósofo Georg Wilhelm Friedrich Hegel y en 1839 empezó a escribir artículos literarios y filosóficos para distintas revistas y publicaciones. En 1842 se hizo partidario de las ideas comunistas gracias al socialista alemán Moses Hess. Ese mismo año conoció a Karl Marx.

Su colaboración con Marx.- Desde 1842 hasta 1844 trabajó en la empresa de tejidos que su familia tenía en Manchester y en esta ciudad inglesa entró en contacto con el cartismo, movimiento que defendía la ampliación del sufragio a los trabajadores. Colaboró en la revista Northern Star, entre otras, y realizó estudios de economía política. Su experiencia y sus estudios le llevaron a la convicción de que la historia sólo podía explicarse a partir del desarrollo económico de la sociedad, afianzándose su teoría de que los males sociales de su tiempo eran el resultado inevitable de la aparición de la propiedad privada, y de que aquéllos sólo podrían eliminarse mediante la lucha de clases, que culminaría con la instauración de una sociedad comunista. Estas conclusiones fueron expuestas en un estudio histórico, La situación de la clase obrera en Inglaterra (1844), ensayo que le proporcionó fama de economista político revolucionario.

Tema 5 El socialismo 18

Page 19: Socialismo / Ciencias Políticas

En París, en 1844, Engels visitó a Marx, quien había publicado una serie de escritos que simpatizaban con el comunismo. Los dos descubrieron que habían llegado, por caminos separados, a las mismas conclusiones, por lo que decidieron trabajar de forma conjunta. Esta colaboración se prolongó hasta la muerte de Marx en 1883, y se realizó en dos sentidos: por un lado, llevaron a cabo la exposición sistemática de los principios del comunismo; por otro, organizaron un movimiento comunista internacional. Otros aspectos de menor relevancia relativos a su colaboración incluyen los artículos periodísticos para el New York Tribune y otras publicaciones.

Al elaborar los principios comunistas, Marx y Engels partieron de la filosofía para después adentrarse en otros campos de estudio. En concreto, Marx se centró en el pensamiento político, en la economía política y en la historia política; los intereses de Engels se dirigieron a las ciencias físicas, las matemáticas, la antropología, las ciencias militares y la lingüística.

El Manifiesto Comunista, que influyó en toda la literatura comunista posterior y es considerado como la exposición clásica del comunismo moderno, apareció por primera vez en 1848. Fue escrito por Marx, basándose en un borrador preparado por Engels.

Las contribuciones de Engels a la exposición teórica del comunismo incluyen los siguientes trabajos: La subversión de la ciencia por Eugen Dühring (conocido popularmente como Anti-Dühring, 1878), obra de la cual se publicaron separadamente varios capítulos, bajo el título Del socialismo utópico al socialismo científico (1892), que se convirtieron en una de las exposiciones básicas más conocidas del socialismo; y El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado (1884). Engels hizo la que se considera su principal contribución al marxismo al publicar, póstumamente, a partir de notas y borradores, los volúmenes segundo y tercero de la principal obra de Marx, El capital.

Además de contribuir a la literatura y a la teoría del marxismo, Engels participó activamente en los primeros pasos del movimiento revolucionario de su tiempo. En 1848, tras el inicio de la revolución en Alemania, Marx y Engels viajaron a Colonia, donde publicaron un periódico comunista.

Después del fracaso de las revoluciones de 1848 en una serie de países europeos, Engels trabajó en una fábrica de tejidos en Manchester, convirtiéndose, con los años, en la principal ayuda financiera de Marx y su familia. Se unió a la empresa propietaria de la fábrica en 1864, y se jubiló cinco años más tarde.

Engels se trasladó a Londres en 1870 y, tras convertirse en miembro del Consejo General de la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT o Primera Internacional) comenzó a sustituir a Marx en la dirección de dicho Consejo. Tras la ruptura entre marxistas y anarquistas en el seno de la AIT en 1872 (que condujo a su disolución cuatro años más tarde), Engels siguió en contacto con grupos revolucionarios de todo el mundo. No participó directamente en la creación de la Segunda Internacional en 1889, pero sí tuvo una considerable influencia en el diseño de sus programas y políticas.

Tema 5 El socialismo 19

Page 20: Socialismo / Ciencias Políticas

3. La socialdemocracia histórica y la obra de K. KAUSTSKY

Socialdemocracia, teoría y doctrina política que aboga por una transición pacífica desde la economía capitalista de mercado hacia el socialismo usando los canales políticos propios de las democracias liberales, es decir, el parlamentarismo.

ANTECEDENTES

Nació y evolucionó a partir del socialismo del siglo XIX, recogiendo las aportaciones de Karl Marx y Friedrich Engels; compartía por tanto sus raíces ideológicas con el comunismo, pero repudiaba el uso subversivo de la violencia política que implicaría una revolución en el sentido marxista del término. Debido a esto, para los comunistas, la socialdemocracia es una forma de revisionismo, dado que renuncia a uno de los pilares básicos del marxismo: la lucha de clases. La socialdemocracia apareció en Alemania de la mano de August Bebel y Wilhelm Liebknecht, principales fundadores del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) en 1869, y que, a pesar de la política represiva del canciller Otto von Bismarck, fueron elegidos miembros del Reichstag (Parlamento) en 1871.

Los orígenes de la social democracia alemana

A lo largo de los años 1848-1875 el socialismo alemán avanzará considerablemente con respecto al de otros Estados europeos. Para explicar esto algunos exaltan el genio de Lassalle, que había sabido demostrar que la clase obrera no podía esperar ya nada de la burguesía y que debía organizarse de forma autónoma.

Otros han insistido en el papel jugado por Marx y Engels que no olvidaron nunca el problema de la organización de la masa obrera alemana, desde la época de la Liga de los comunistas, en cuyo seno forjaron una sólida base militante , hasta el congreso de Gotha, cuyas debilidades denunciaron.

Sin embargo, Droz destaca que no es tan importante el papel de los líderes como han querido evidenciar otros autores. La fuerza del movimiento socialista alemán reside en la precoz constitución y dinamismo de las asociaciones obreras que, desde 1848, formaban una túpida red, y que durante la Revolución recibieron, de manos de la Fraternidad y de la Liga de los Comunistas, una incipiente base organizativa. Fue clave la influencia de Lassalle, Liebknecht y Bebel.

Los obreros más avanzados de estas asociaciones son quiénes exigirán en 1863 la formación de un partido obrero independiente de trabajadores. Y ellos lograrán poner paz a los enfrentamientos que mantienen los líderes de las diferentes facciones y lograrán la unificación de la socialdemocracia.

Dos períodos:1. el socialismo en las revoluciones de 1848. Sin llegar a revestir un

carácter específicamente socialista, darán pie a un trabajo de

Tema 5 El socialismo 20

Page 21: Socialismo / Ciencias Políticas

clarificación en el seno de la elite obrera y determinarán el nacimiento de las primeras asociaciones obreras.

2. formación socialdemocracia alemana (60’) Después de 1960 se formarán 2 partidos obreros: uno “lassalliano”, basado en la independencia entre el mundo

obrero y las formaciones políticas de la burguesía y el otro llamado en 1869 “eisenachiano”, que después de haber

tenido un cariz pequeño burgués, se acercó a las concepciones marxistas

Ambos partidos se enfrentarán durante mucho tiempo, pero su fusión en 1875, en el Congreso de Gotha, proporcionará a la clase obrera los cuadros doctrinales y los elementos de organización que harán de él un partido modelo para el resto de grandes países industriales. La fusión iba a proporcionar muchas ventajas, entre ellas proporcionar al socialismo alemán un medio de afrontar las duras pruebas que le preparaba el gobierno de Bismarck.

La socialdemocracia alemana (1875-1914)

La política de Bismarck según DROZ dejo a la clase obrera alemana en situación de paria. Esta no va a encontrar, entonces, otro refugio que la creencia en un mundo mejor, el cual se presenta como una necesaria evolución.

Los propios obreros van a ser concientes de que el sueño mesiánico en una próxima revolución es ya inviable, de que la evolución del sistema capitalista –que se va haciendo monopolista e impersonal- los va aprisionando en sus redes, y que en definitiva la revolución no está al alcance de su mano. Pero la concentración industrial facilita la organización y el aislamiento del ejército proletario; por ello pueden confiar en que por la vía sindical y proletaria les será posible, si no poner fin a su condición proletaria sí mejorarla sensiblemente. Cuando se les preguntaba por su futuro , numerosos obreros respondían que confiaban en una transformación de la sociedad “por la vía evolutiva”; tal vez ellos no verían el nuevo estado de las cosas, pero sus hijos sí.

Así fue como la socialdemocracia, partido revolucionario de clase obrera, se transformó poco a poco en un partido reformista de ambiciones limitadas y objetivos prácticamente alcanzables. Aunque en realidad, señala Droz, que el partido se refugió en una posición centrista que le permitía seguir usando la terminología revolucionaria, a la vez que relegaba la revolución a un futuro lejano y nebuloso, dando prioridad a la acción política inmediata pero esta actitud no pudo impedir que se formara una oposición en el seno del propio partido, entre una derecha reformista y una izquierda que seguía siendo fiel a los ideales revolucionarios.

El crecimiento del partido hará a Bismarck dictar leyes de excepción contra la socialdemocracia, ya que siente pánico ante sus progresivos avances electorales. Cuando se da cuenta de que no podría alcanzar sus objetivos hizo

Tema 5 El socialismo 21

Page 22: Socialismo / Ciencias Políticas

aprobar una serie de leyes de “protección obrera ”, primer esbozo de la legislación de la seguridad social.

Finalmente, Bismarck caerá, ya que Guillermo II no quiere una crisis social cuando accede al poder, por lo que Droz habla de victoria socialdemócrata, ya que consigue concesiones del gobierno en materia social, y supo mantener en las masas la confianza en el triunfo de la revolución, a la par que hizo un uso razonable de los medios de acción que la ley le proporcionaba.

El programa de Erfurt

En el Congreso de Erfurt (1891), Liebknecht impulsó una declaración programática que supuso la más clara afirmación hasta la fecha de las tesis socialdemócratas. Pese a que la represión continuó, la táctica de no-confrontación de Liebknecht dio buenos resultados. Aunque los socialdemócratas fueron sistemáticamente bloqueados por los partidos monárquicos y católicos, buena parte de las propuestas del SPD pasaron a engrosar la legislación laboral alemana, que antes de la I Guerra Mundial era la más avanzada del mundo en cuanto a seguros sociales y laborales. En 1912 el SPD era el partido alemán más votado, con un total de 110 diputados sobre los 397.

Se dirimieron dos posturas: por un lado estaban un grupo de jóvenes que protestaban por lo que llamaban un aburguesamiento del partido (serán expulsados del partido un año después) y por otro un núcleo anarquista. Fue clave la declaración del diputado Georg Von Vollmar a favor de la política reformista en Eldorado de Munich en junio de 1891. Fue la semilla de este movimiento.

Una vez canceladas estas dos hipotecas, el Congreso de Erfurt pudo llevar a cabo la redacción del programa, que sustituiría al de Gotha, y a la vista del cual Engels publicó, con gran desagrado por parte de numerosos miembros del partido, las Glosas Marginales de Marx, ignoradas durante mucho tiempo.

El autor principal del programa fue KARL KAUtSKY, quien, tras haber militado mucho tiempo en Austria, dirigía en Stuttgart la revista Neue Zeit (tiempo Nuevo), en la que colaboraron Bebel, Liebknecht... y que se había convertido en el principal representante del socialismo científico en Alemania. Acostumbrado a examinar las contradicciones y las crisis que, por lo menos hasta avanzados los años 90, permitían prever la próxima desaparición del capitalismo, Kautsky se convirtió en el guía espiritual de una generación de socialistas, a los que mantenía en la convicción y a la espera de la catástrofe necesaria, inevitable, que ocurriría en aquella, época y para la cuál convenía que la socialdemocracia estuviese preparada. Con este espíritu redactó la parte teórica del pgma de Erfurt, el cual, limpio de toda fórmula lassalliana, presenta con un lenguaje marxista los problemas de la monopolización de los medios de producción, de la ruina de las clases medias, de la multiplicación de las crisis, del papel emancipador de la clase obrera y de la Internacional de los trabajadores. En él se afirma tb que la realización del futuro Estado socialista comporta la toma de poder político por parte de la clase obrera. Finalmente, la declaración de Erfurt venía acompañada de un programa

Tema 5 El socialismo 22

Page 23: Socialismo / Ciencias Políticas

práctico, con una serie de reivindicaciones alcanzables a corto plazo que habría de proporcionar al proletariado las armas que necesitaba: el sufragio universal directo y extensivo a las mujeres, la separación de Iglesia y Estado, la escuela laica, el impuesto progresivo sobre la renta, una legislación social que aplicase la jornada de 8 horas, la prohibición de trabajo de los niños menores de 15 años, el seguro obrero a cargo del Estado y el respeto al derecho de asociación.

Podía parecer que entre las dos partes del programa, yuxtapuestas entre sí existía una contradicción; y las controversias a este respecto entre Vollmar y Bebel, entre quienes consideraban primordiales las exigencias políticas y quienes insistían en la ortodoxia, muestran que a partir de entonces no faltarían dificultades, pero sería la crisis revisionista la que iba a poner sobre el tapete lo difícil que era interpretar el pensamiento de Marx y Engels en lo relativo a la cuestión de las relaciones entre teoría y práctica. De hecho en el programa no había contradicciones sino unidad dialéctica. Era evidente, por una parte, que en la Alemania imperial las reformas inmediatas no podían ser conquistadas más que por una clase social que estuviese animada por un espíritu de lucha y por la voluntad de tomar el poder y, por otra, que la mera afirmación revolucionaría adquiría un carácter irreal y mesiánico si no iba acompañada de una serie de acciones concretas aunque de carácter limitado. A pesar de que es cierto que el pgma planteaba de forma demasiado categórica la tesis de la proletarización absoluta de la clase obrera –fuente de numerosas críticas, también es indudable que plasmaría durante varias décadas las aspiraciones del partido. Sobre las bases de Erfurt el partido crecería prodigiosamente.

En 1891 tuvo que adaptarse a la legislación reaccionaria del Imperio alemán, que prohibía las asociaciones de sociedades políticas. Se produce una dualidad en la expansión del partido: no se logra penetrar profundamente en otras clases sociales aparte de los obreros fabriles y hay gran diferencia de votos entre el campo y la ciudad. Una de las causas más importantes del movimiento revisionistas fue el deseo no sólo de extender la influencia del partido a nuevas capas sociales, sino también convertirlo en un gran partido democrático, que perdiendo su carácter reivindicativo de clase, englobara al conjunto de las fuerzas progresistas del país.

Droz perfila las características de la obra Kausky a partir de su confrontación con los planteamientos revisionistas y su relación con Rosa de Luxemburg.

ANEXOSocialdemocracia, teoría y doctrina política que aboga por una transición pacífica desde la economía capitalista de mercado hacia el socialismo usando los canales políticos propios de las democracias liberales, es decir, el parlamentarismo.

Tema 5 El socialismo 23

Page 24: Socialismo / Ciencias Políticas

Nació y evolucionó a partir del socialismo del siglo XIX, recogiendo las aportaciones de Karl Marx y Friedrich Engels; compartía por tanto sus raíces ideológicas con el comunismo, pero repudiaba el uso subversivo de la violencia política que implicaría una revolución en el sentido marxista del término. Debido a esto, para los comunistas, la socialdemocracia es una forma de revisionismo, dado que renuncia a uno de los pilares básicos del marxismo: la lucha de clases. La socialdemocracia apareció en Alemania de la mano de August Bebel y Wilhelm Liebknecht, principales fundadores del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) en 1869, y que, a pesar de la política represiva del canciller Otto von Bismarck, fueron elegidos miembros del Reichstag (Parlamento) en 1871. En el Congreso de Erfurt (1891), Liebknecht impulsó una declaración programática que supuso la más clara afirmación hasta la fecha de las tesis socialdemócratas. Pese a que la represión continuó, la táctica de no-confrontación de Liebknecht dio buenos resultados. Aunque los socialdemócratas fueron sistemáticamente bloqueados por los partidos monárquicos y católicos, buena parte de las propuestas del SPD pasaron a engrosar la legislación laboral alemana, que antes de la I Guerra Mundial era la más avanzada del mundo en cuanto a seguros sociales y laborales. En 1912 el SPD era el partido alemán más votado, con un total de 110 diputados sobre los 397.

Para los teóricos socialdemócratas, el análisis marxista, que entendía que el capitalismo estaba abocado a la autodestrucción, debido a la sobreproducción, la tendencia a la concentración del capital, el paro masivo y la miseria de las masas trabajadores, no se estaba dando en la realidad. El pujante poderío industrial alemán se estaba distribuyendo entre un número creciente de compañías, la extensión del sufragio universal permitía a los trabajadores elegir a representantes de izquierdas que velaban por sus intereses, y se producían mejoras reales en sus condiciones laborales y en su nivel de vida. Es decir, la vía parlamentaria del SPD actuaba como correctora de los excesos del capitalismo.

El distanciamiento entre socialdemócratas y comunistas se evidenció todavía más al apoyar los primeros la política nacionalista del gobierno alemán durante la I Guerra Mundial, eludiendo una de las premisas básicas del socialismo obrero, el internacionalismo. La Revolución Rusa, que llevó al poder en octubre de 1917 a los bolcheviques en Rusia, y la propia escisión provocada por los espartaquistas en el seno del SPD, provocaron la ruptura final entre socialdemócratas y comunistas, agrupándose estos últimos en la III Internacional en 1919.

Después de la II Guerra Mundial, la socialdemocracia llegó al poder en diversos países europeos, como Suecia (donde gobernó prácticamente sin interrupción durante medio siglo), el Reino Unido (a través del Partido Laborista, cuya ideología guarda grandes concomitancias con las tesis socialdemócratas básicas) y la República Federal de Alemania. Desde entonces, los partidos socialdemócratas se han destacado por su defensa del llamado Estado de bienestar, abandonando definitivamente actitudes típicamente marxistas como la necesidad de la nacionalización de las fuerzas económicas y el desprecio del parlamentarismo, institución esta última que Marx consideraba una mera fachada burguesa para la dominación de clase.

Karl Johann Kautsky (1854-1938), teórico marxista alemán y uno de los primeros líderes del Partido Socialdemócrata de su país. Kautsky nació en Praga y estudió en la Universidad de Viena. Fue amigo y discípulo de los líderes comunistas Karl Marx y Friedrich Engels. Fundó en 1883 el periódico Die Neue Zeit, que se convirtió en una de las principales publicaciones socialistas de Europa bajo su dirección, y en órgano teórico del Partido Socialdemócrata, al que Kautsky se unió. Kautsky fue reconocido como uno de los teóricos del marxismo más destacados de su tiempo, estimado por su defensa de las doctrinas revolucionarias, opuestas al revisionismo, concepción más liberal del líder socialdemócrata Eduard Bernstein, con el que mantuvo una enconada disputa ideológica en el Congreso de Erfurt (1891) cuando redactó el programa del Partido Socialdemócrata. Posteriormente, el propio Kautsky adoptó una perspectiva menos radical.

Se adhirió al pacifismo durante la I Guerra Mundial, a la que calificó como una aventura imperialista. Fue uno de los dirigentes de la facción izquierdista que se separó de los socialdemócratas en 1917 para formar el Partido Socialdemócrata Independiente. Se opuso a la Revolución Rusa de noviembre de 1917, y se negó a seguir a un sector de su partido que en 1922 se unió al Partido Comunista Unificado, que apoyaba al régimen soviético. Después de la

Tema 5 El socialismo 24

Page 25: Socialismo / Ciencias Políticas

I Guerra Mundial, residió la mayor parte del tiempo en Viena, desde donde dirigió las actividades de los socialistas austriacos.

La mayor aportación de Kautsky al marxismo se encuentra en su obra Teorías sobre la plusvalía (4 volúmenes, 1905-1910), basada en manuscritos y notas de Marx que originalmente iban a ser la base de su cuarto volumen de El capital (3 volúmenes, 1867-1894).

Tema 5 El socialismo 25

Page 26: Socialismo / Ciencias Políticas

4. El revisionismo socialista: Berstein y el socialismo fabiano

Socialismo fabiano

Fabian Society (Sociedad Fabiana), organización educativa socialista británica que defiende el cambio social a través de la reforma democrática. Fue fundada en Londres, en 1884, por un grupo de intelectuales de clase media que rechazaban la lucha de clases de la teoría marxista, pero deseaban promover la igualdad a través de la colectivización de la propiedad y el control democrático de los recursos naturales. Eran partidarios de la transformación pacífica y gradual y, por ello, eligieron para su grupo el nombre de un antiguo general romano, Fabio Máximo Verrucoso (el Contemporizador), quien consiguió la rendición de un poderoso enemigo con tácticas de dilación y evitando las batallas decisivas. Con el tiempo, se crearon sociedades fabianas locales por toda Gran Bretaña afiliadas a la organización original.

Desde sus comienzos, la Sociedad atrajo a varias figuras de gran valía intelectual que facilitaron su éxito. Entre ellos, cabe destacar al economista Sidney Webb y a su esposa, la socióloga Beatrice Webb; a la reformista social Annie Besant; al dramaturgo George Bernard Shaw; al futuro primer ministro James Ramsay MacDonald; al novelista H. G. Wells. Bernard Shaw fue especialmente eficaz como divulgador de las ideas fabianas. La obra Ensayos fabianos (1889), editada por él, llegó a ser un clásico del pensamiento socialista británico. Los fabianos nunca crearon un partido político y dedicaron su tiempo principalmente a la educación y la investigación sobre temas sociales. No obstante, participaron en la fundación del Comité de Representación Laborista en 1900, que posteriormente se convertiría en el Partido Laborista, con el que han mantenido una estrecha relación.

Sus orígenes La Sociedad fabiana nace el 4 de enero de 1884 y ejerció una influencia considerable en la orientación del socialismo laborista. Fue su nodriza intelectual. Droz destaca 3 características esenciales:

1. Se sitúa desde una perspectiva de socialismo reformista. Sirve de contrapeso al mesianismo revolucionario de los social-demócratas o de los anarquistas. Rechaza la violencia. La paciencia y el tiempo permitirán construir el socialismo respetando a la libertad de todo el mundo. Por ello los fabianos se encuentran entre los pioneros del socialismo democrático.

2. Tiene grandes ambiciones tanto en el plano de la teoría como en el de la acción. Puede considerarse el único gran intento social-demócrata completamente autónomo en relación al marxismo.

3. El fabianismo es un movimiento esencialmente burgués e intelectual. Ello explica su rechazo de los impulsos emotivos, su total impermeabilidad a la sensibilidad “obrerista”. En lugar del sueño, los hechos. En lugar de la fiesta revolucionaria, los organigramas. Es un socialismo antirromántico que intenta a la vez ser empírico y científico. Es un socialismo frío y calculador, que habla al cerebro más que al corazón.

Tema 5 El socialismo 26

Page 27: Socialismo / Ciencias Políticas

El origen de la asociación hay que buscarlo en un pequeño grupo preocupado por los problemas sociales que se reúne en Londres en el otoño de 1883 para buscar una nueva vía que lleve al establecimiento de comunidades fraternas. Se produce una división y de una de las partes surge la Fabian Society. Su lema (Podmore: “es preciso saber esperar el momento oportuno, como hizo Fabio pacientemente en su lucha contra Aníbal, a pesar de las críticas de que era objeto por su lentitud, pero cuando llegue el momento será preciso golpear fuerte, como hizo fabio”).

En su composición social, el moviendo fabiano siempre incluyó una mayoría aplastante de elementos de la burguesía. Así los fabianos proceden de una capa social en ascenso, la del mundo intelectual, los cuadros y las profesiones liberales, es decir, la clase media ilustrada o, si se prefiere, capacitada. Esto conlleva cierta concepción de transformación de la sociedad: una reforma operada desde arriba por medio de expertos ilustrados, hábilmente situados en puntos estratégicos.

Doctrina y acción

Progresión lenta de la doctrina, pero sus octavillas van mejorando. Se desarrolla una importante propaganda (Webb) basada en una sólida información (= reputación y seriedad).

El objetivo perseguido es la transformación global de la sociedad mediante la apropiación colectiva y la gestión de los medios y bienes de producción, la tierra, los capitales y las industrias en beneficio de la comunidad. De esta manera se acabará con los privilegios y los monopolios de una minoría de ociosos. La emancipación de los individuos permitirá la igualdad de todos. Pero esta transformación debe lograrse mediante la persuasión. Este socialismo, que actúa dentro de las más estricta legalidad, se inscribe en la tradición constitucional. La violencia y la insurrección quedan excluidas. Cambio gradual y pacífico: no hay exaltación revolucionaría ni denuncia airada de la burguesía. GRADUALISMO REALISTA, sobrio, casi prosaico, se conforma con medidas parciales (progresivas, progresistas). Enlaza con la tradición racionalista del utilitarismo de Bentham, confía en el poder ilimitado de la razón.

Su doctrina se basa en un humanismo, el de la justicia social y la dignidad de las personas. Pero en este socialismo ordenado y respetable, la razón se impone a la mística.

Al servicio de esta doctrina, el método fundamental de acción es la propaganda. Es preciso ilustrar, educar y persuadir. Con la palabra y con la pluma (se multiplican conferencias, folletos ... y sus ideas penetran en todas partes). Importancia del aparato de propaganda de difusión de sus ideas. SE ha desarrollado un verdadero mito fabiano. Pero los fabianos no lograron influir en la política liberal ni captaron la importancia del nuevo unionismo, ni creyeron realmente en la idea de un partido del trabajo. Pero no podemos despreciar sus méritos:

Tema 5 El socialismo 27

Page 28: Socialismo / Ciencias Políticas

1. desarrollo de la ideología socialista en Gran Bretaña2. supieron utilizar al servicio de su ideología la herencia liberal radical.

Los planteamientos del socialismo fabiano han servido de base para inspirar el pensamiento revisionista y en particular de Berstein.

Revisionismo

Revisionismo, concepto que históricamente designó el intento de modificar, en un sentido moderador, algunos de los puntos fundamentales del marxismo. Puesto que suponía la vulneración de principios básicos de las doctrinas políticas, sociales y económicas enunciadas por Karl Marx y Friedrich Engels, el término fue utilizado de forma despectiva por sus detractores, que identificaron ‘revisión’ con traición a la ortodoxia del comunismo.

ORÍGENES El revisionismo surgió en Alemania en la segunda mitad del siglo XIX, poco tiempo después de haber sido formulado el propio socialismo científico. El primer teórico político que reivindicó como necesaria la autocrítica marxista fue Eduard Bernstein, miembro del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD). Bernstein abogó por el concepto reformista y pacífico que había de caracterizar al socialismo, sugiriendo que el sistema parlamentario podía constituirse en vía para alcanzar aquél. No tardó en abrirse la polémica en el seno del SPD, en tanto que la cuestión afectaba a su propia ideología y esencia programática. El debate, abierto y desarrollado en los congresos de Erfurt (1891) y Stuttgart (1898), planteó las profundas diferencias existentes entre las tesis revisionistas de Bernstein y las defendidas por Karl Kautsky, el cual argumentaba que los pilares en que debía radicar la fuerza del movimiento obrero eran la teoría de la revolución y la no colaboración con las fuerzas de la burguesía. La revisión al marxismo propuesta por Bernstein, expuesta principalmente en su obra Postulados del socialismo y lecciones de socialdemocracia (1899), fue también rebatida por Rosa Luxemburg y objeto de dura crítica por parte de Lenin.

La crisis revisionista se abre en 1899 con la publicación de la obra de Berstein Las premisas del socialismo y las tareas de la socialdemocracia. Muchas de sus preocupaciones habían aparecido con anterioridad (Hóchberg o Vollmar o debate sobre la cuestión agraria). Dichas manifestaciones sólo están en línea de una práctica reformista y en ellas no se aprecia ningún intento de poner en duda la interpretación que el partido daba al marxismo a partir de Erfurt. Berstein va mucho más lejos ya que pone en cuestión la propia teoría, de la que, en su opinión debe derivarse la práctica. El revisionismo, por lo menos hasta 1914, fue esa orientación teórica que criticaba a sabiendas los fundamentos del marxismo, con vistas a trasformar el partido en un movimiento de reforma democrático y socialista.

Las causas políticas y económicas de la corriente revisionista

La corriente revisionista es independiente de la política social del nuevo emperador. Al subir al poder Guillermo II mostró cierta simpatía por el movimiento obrero y convocó en Berlín una conferencia internacional para la protección del mundo del trabajo (se pretendía mejorar la situación de los

Tema 5 El socialismo 28

Page 29: Socialismo / Ciencias Políticas

trabajadores y reconciliarlos con el Estado: se prohibió el trabajo dominical, reducción jornada....). pero el emperador pronto dejaría de lado estas veleidades y, bajo influencia de los industriales adoptó una actitud hostil hacia el movimiento obrero. Las clases dirigentes seguirán siendo hostiles al socialismo.

La evolución hacia el reformismo no está ligada a la política social del gobierno del Reich, sino a las nuevas posibilidades que se abren a los diputados socialistas en los Landtags de Estado –especialmente en Alemania del sur- para colaborar con partidos burgueses y obtener preciosas ventajas para la clase obrera. También importancia de los Ayuntamientos.

Pero los factores económicos ilustran mejor el desarrollo del revisionismo: mientras q el período bismarcksiano estuvo asociado a una larga depresión económica en 1895 empieza una nueva fase de prosperidad que se traduce en aumento de precios, de la producción agrícola y de la producción industrial. Se transformó la vida del proletariado profundamente. El bienestar aumentó incesantemente, pero la clase obrera, señala DROZ siguió de lejos la prosperidad general, y se benefició del creciente bienestar de forma muy limitada: la renta nacional crece más deprisa que el poder adquisitivo de los trabajadores.

A partir de 1895 un sector cada vez más numeroso de la clase obrera toma conciencia de que el viejo mesianismo revolucionario ya no es viable, de que la estrategia fundada en la inminencia de la catástrofe resulta inadecuada y de que las vías de progreso y de la emancipación social deben buscarse mediante un mejor conocimiento de las técnicas de la producción capitalista.

La ofensiva de Vollmar y la cuestión agraria

La cuestión agraria proporcionará al revisionismo la primera ocasión para poner en tela de juicio la ortodoxia marxista. En un opúsculo publicado en 1894 y titulado Los campesinos y la socialdemocracia, Vollmar sostendrá que se debía defender además de las obreros agrícolas al pequeño y medio campesinado, al que había de proteger de la proletarización, y en ello basaba su pgma de reformas: nacionalización ce las hipótecas, reducción del tipo interés agrícola, y posibilidad de utilización de los bienes comunales.

Entretanto, Engels publicó en la Neue Zeit un estudio sobre La cuestión campesina en Francia y Alemania, en el cual manifestaba desacuerdo con la idea de los campesinos fueran los propietarios de sus tierras. Vollmar y sus propuestas fueron rechazadas. El dogmatismo teórico se imponía a la práctica reformista; y esta victorias era obra de KautsKy , que durante, la polémica había comenzado a escribir su monumental obra La cuestión Agraria ( 1899), en la cual presenta el proceso de proletarización de los pequeños campesinos como algo irreversible y rápido, y en consecuencia rechaza cualquier programa agrario tendente a mejorar su situación. La rentabilidad de la gran propiedad plantea la posibilidad de formar un partido popular que uniera a los obreros, campesinos y pequeña burguesía contra la clase feudal y

Tema 5 El socialismo 29

Page 30: Socialismo / Ciencias Políticas

capitalista. Y aunque hubo críticas contra Kaustky, la tentativa de Vollmar, no paso de eso, de tentativa.

Berstein: el hombre y la doctrina

Autodidacta, procedente de una familia de judíos berlineses, Eduard Berstein se orientó hacia el socialismo por razones sentimentales y por la impresión que le dejaron los horrores de la represión contra los comunards franceses.

En 1872 se afilió al Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), y desde 1881 a 1890 editó junto a August Bebel el diario Sozialdemokrat (Socialdemócrata). Durante su exilio en Londres, de 1888 a 1901, Bernstein conoció al coautor del Manifiesto Comunista, Friedrich Engels, y estudió las teorías desarrolladas por éste y Karl Marx sobre la naturaleza de la sociedad capitalista y el establecimiento del socialismo. Bernstein rechazó los argumentos de Marx y de Engels en pro del derrocamiento violento del capitalismo mediante la revolución. Elaboró en cambió su propia teoría, conocida con el nombre de revisionismo, que hacía más hincapié en los métodos evolutivos y reformistas que en los revolucionarios para conseguir una sociedad socialista.

Factores que explican la evolución de Berstein:- sus relaciones con los medios fabianos de Londres, que le inician en la

idea de democracia industrial- sus conversaciones con el refugiado polaco Stanislaus Mendelson- el conocimiento que adquirió de las obras de los socialistas de cátedra,

de Brentano y de Shulze-Gävernitz, los cuales le hicieron comprender que la burguesía no es sistemáticamente hostil a la clase obrera y que debe favorecerse un acercamiento hacia ella, e incluso la obra de Jualian Wolf titulada El socialismo y el orden socialista capitalista que condena la teoría marxista de la depauperación creciente de las masas.

A partir de 1895 la nueva coyuntura económica le lleva a estudiar el conjunto de problemas que plantea la tesis marxista de la proletarización de las clases medias. Tras la muerte de Engels, que le libera de las posibles inhibiciones que le quedaran, inicia en la Neue Zeit la publicación de unos artículos sobre “Problemas del socialismo”; en 1898, en el congreso de Sttgart, presenta públicamente por primera vez sus principales conclusiones y al año siguiente hace una exposición definitiva del reformismo, en su obra Las Premisas del Socialismo.

Orientación antimaterialista a causa de su conocimiento neokantiano. Parte de las ideas que consideraban a Kant el verdadero y único padre del socialismo alemán. Berstein empezará a poner en duda el carácter determinante de los factores económicos en la formación de la conciencia de los pueblos: “Si reina la necesidad, ¿para qué la acción?” , en su opinión el socialismo debe basarse en consideraciones de orden moral; las nociones éticas de justicia e igualdad son potencias generadoras de acción creativa. Convencido de que el socialismo detenta la verdad “en la medida en que se basa en el idealismo moral”, Berstein pone en cuestión todo el edificio del pensamiento marxista, según el cual los factores ideológicos no hacen más que reflejar las modificaciones producidas en los modos de producción y cambio. El ataque contra los principios económicos del

Tema 5 El socialismo 30

Page 31: Socialismo / Ciencias Políticas

sistema se basa también en los conceptos de la economía marginalista para la cual el valor se fundamenta en la utilidad, la necesidad y el gusto, o sea, en criterios de orden psicológico: a partir de ahí le será fácil desmantelar la concepción marxista del valor-trabajo, así como el análisis de la plusvalía que de él se deriva. Consecuencias sociales y políticas:1. no es posible tomar en consideración la teoría catastrofista de

Marx, según la cual la derrota del capital supone la culminación de un proceso que se desarrolla de manera ineludible: el nº de propietarios no va disminuyendo, sino todo lo contrario; las clases se benefician del aumento de riqueza; las sociedades de accionistas, cuyos valores cotizan en bolsa, permiten a muchos pequeños ahorradores participar en los beneficios de las empresas; y las cooperativas obreras disminuyen el beneficio comercial a favor de los trabajadores; lejos de debilitarse el capital, mucho + vigoroso de lo que Marx había previsto, resiste cada vez mejor las crisis que van perdiendo progresivamente volumen, duración y gravedad, y sólo conllevan ligeras perturbaciones.

2. es inexacto hablar de lucha de clases ; el capitalismo ha permitido concesiones cada vez más importantes a los obreros

3. es absurdo ver en el Estado un instrumento represivo en manos de las clases dirigentes, el Eº obedece cada vez más al interés gnral (resulta evidente que la práctica de la democracia borra poco a poco las discriminaciones debidas al origen social, la propiedad y las creencias, y el Estado obedece cada vez más al interés general). El proletariado no tiene necesidad de conquistar el poder, no tiene sentido una dictadura del proletariado.

Berstein llega a la conclusión de que a partir de ahora la socialdemocracia debe liberarse de la fraseología superada para

convertirse en un “parido de reformas socialistas y democráticas”. Debe salir de su aislamiento y buscar alianzas con los partidos de izquierda

que no aceptan la dictadura del proletariado –sin ignorar la importancia de la cuestión social.

El socialismo se convertirá en un objetivo a alcanzar, no por la violencia, sino mediante una serie de reformas sucesivas: sólo un paciente trabajo desde dentro puede mejorar la sociedad capitalista. Así pues, lo esencial

no es el objetivo del socialismo –o sea, la revolución-, sino el “movimiento”, gracias al cual el partido avanzará paso a paso por la vía

de las conquistas sociales.

Las reacciones ante el revisionismo

A penas fueron publicadas, las tesis revisionistas provocaron en el partido – en la intelligentsia- una viva convulsión: Ignaz Auer escribió a Berstein: “Eduardo, eres un asno; esas cosas se hacen, pero no se dicen”. a) Rosa de Luxemburg.- ¿Reforma social o revolución?.- criicaba la doctrina de Berstein mostrando los lazos vivos y dialécticos que unen la teoría y la práctica. Le criticaba su intento de introducir el virus burgués en la socialdemocracia, sustituyendo así una visión proletaria del mundo por una visión burguesa. Para ella, aunq Marx podía haberse equivocado en

Tema 5 El socialismo 31

Page 32: Socialismo / Ciencias Políticas

cuestiones de detalle, sobre todo al momento del hundimiento del capitalismo o la periodicidad de las crisis. Abandonar el objetivo socialista , tal y como lo definió Marx, suponía también abandonar los medios de lucha, puesto que estos al ser desviados de su objetivo perdían su carácter revolucionario. Sus esfuerzos se centraron en que los lectores desecharan toda esperanza en la eficacia de los métodos parlamentarios y sindicales de lucha. La violencia seguía siendo la suprema ley de la lucha de clases para Rosa y creía que era necesaria una larga lucha para el triunfo del proletariado.b) Kautsky, amigo de Berstein elabora una crítica más matizada. Parece que estaba de acuerdo con el análisis revisionista en muchos puntos, pero en el folleto “Berstein y el programa social-demócrata” (1899) puso sumo cuidado en no hacer concesiones en lo relativo a los principios del marxismo, en particular en el materialismo histórico y el papel del proletariado a lo largo del proceso revolucionario. En su opinión era importante conservar a toda costa el ideal revolucionario, aun cuando la practica del partido tendiese a un cierto oportunismo. Además pensaba que el oportunismo democrático que podía tener sentido en Francia o Inglaterra era inadecuado para Alemania, donde el poder residía en emperador apoyado con una coalición de la aristocracia terrateniente y los magnates de la industria, y donde la inmensa mayoría de la burguesía parecía satisfecha con la monarquía autoritaria. Pero a pesar de todo Kautsky seguía en la línea del programa de 1891, que separaba la teoría de la práctica; y no intentaba como Rosa subordinar la práctica a un esquema estructurado de revolución, entendida como objetivo final.

Intentaron echarlo del partido pero no lo consiguieron.

NO serán tanto los teóricos del revisionismo como los secretarios obreros o los militantes sindicalistas quienes determinarán la política de la socialdemocracia, convertida en un partido de pragmáticos propagadores de algunas fórmulas revolucionarias que no eran tomadas demasiado en serio.

El partido se refugiará en este contexto en una especie de fatalismo revolucionario. Basándose en el Manifiesto Comunista, así como en la profecía de Engels según la cual la situación permitía a los socialistas “cruzarse de brazos y dejar que sus enemigos trabajasen para ellos”, Bebel y sus amigos del Vorstand, insisten sin demasiado fundamento en el carácter “ineludible” de una revolución que constituye la culminación de un proceso natural.

Kautsky no creía por aquel entonces en la vía puramente parlamentaria para alcanzar el poder y tampoco negaba la necesidad de poderosos movimientos de masas para conquistar la democracia fue él quién más contribuyó a definir el marxismo formal y vulgar, una marxismo que eliminaba las componentes revolucionarias del maestro y se remitía al automatismo de las fuerzas de la historia: si el capitalismo se dirige inevitablemente a su fin ¿por qué el proletariado no va contentarse con esperar confiadamente el momento de recoger la “herencia de la burguesía”? lo importante es que para ese momento haya cogido la madurez necesaria para reemplazar a la clase dirigente. Para kautsky la socialdemocracia era un partido revolucionario pero

Tema 5 El socialismo 32

Page 33: Socialismo / Ciencias Políticas

tb un partido que no hacia la revolución; y se presentaba como el teórico de la revolución futura, pero tb de la expectativa en lo inmediato.

Kautsky renuncia a incluir en su análisis el problema de la toma de poder, y por eso la organización se convierte para él en el sucedáneo de la acción (52). A finales de siglo, la socialdemocracia se complace en esa inmovilidad y en ese aislamiento que hacen del Eº dentro del Eº, sin proyección real sobre la sociedad.

La crisis revisionista (dentro de la II Internacional –1889-1914-)

Un pensador y un libro sirvieron de detonador. Durante su estancia en GB, adonde había acudido a instancias de Engels, Berstein se familiarizó con las tesis de los socialistas de cátedra alemanes y con las reflexiones y experiencias fabianas . Pondrá en cuestión el marxismo a partir de la reflexión teórica y de la observación de la realidad. La obra sale a luz en 1899 bajo el título Las premias del socialismo y las tareas de la socialdemocracia. Kautsky reconoce que es el primer libro importante de la literatura de la socialdemocracia alemana. Rechazando el revolucionarismo derivado de la tradición blanquista lo que en el orden político propone Berstein es considerar al socialismo no como una corriente exterior y radicalmente separada del liberalismo burgués, sino, como heredero legítimo de éste. La negativa a separar liberalismo y socialismo, y la convicción de que el socialismo es la expresión del liberalismo llevado hasta las últimas consecuencias, le inducen a conceder mucha importancia a todo lo que suponga un perfeccionamiento progresivo de la democracia: hay que tener la valentía de abandonar una fraseología superada por los hechos y aceptar convertirse en un partido de reformas socialistas y democráticas. Desde este punto de vista no tiene sentido reivindicar el poder sólo para el proletariado. “la dictadura de clase supone un nivel inferior de civilización”.

Tras la publicación de la obra los debates desbordaron el ámbito estrictamente alemán. Y fue en Francia donde la raíz de la crisis revisionista quedó completamente al desnudo: el problema residía en saber cuál debía ser la posición del socialismo en relación con la sociedad establecida, la naturaleza y el grado de integración en ella que podía aceptar para seguir influyendo en su desarrollo. Esta cuestión dominaría la historia del movimiento obrero del siglo XX, y sólo los herederos del leninismo han dado progresivamente una respuesta compleja basada en una ambivalencia que tiende a superar la dicotomía lucha de clases-colaboración de clases.

El revisionismo se vio oficialmente acosado, denunciado y rechazado por la condena que lanzó sobre él el congreso internacional de París (1900), donde Kautsky presentó una moción muy matizada –se la llamó moción colchoneta- pero a la vez de una gran dureza. Dijo que “en Eº democrático moderno, la conquista del poder político por el proletariado no puede ser resultado de un golpe de mano, sino de un largo y penoso trabajo de organización proletaria en el terreno económico y político, de la regeneración física y moral de la clase obrera, y de la conquista gradual de los municipios y asambleas legislativas”.

Tema 5 El socialismo 33

Page 34: Socialismo / Ciencias Políticas

Falta saber si la entrada de los socialistas en un gob burgués sería sólo un expediente “forzado, transitorio y excepcional”. La lucha de clases impide todo tipo de alianzas con cualquier fracción de la clase capitalista.

En esta condena es ratificada en el congreso internacional de Ámsterdam en 1904: “el congreso condena enérgicamente los intentos revisionistas tendentes a cambiar nuestra probada y victoriosa táctica basada en la lucha de clases.

Sin embargo, esta condena es en definitiva más verbal que eficaz: por lo demás en los diez años que faltan para llegar a la gran ruptura de 1914, el concepto de revisionismo dejaría de ser la palabra mágica de la demonología socialista para dar paso a un nuevo concepto, el de imperialismo, también destinado a ser el blanco de muchos ataques y tener un porvenir excepcionalmente fecundo.

REVISIONISMO EN EL SIGLO XX Tras el triunfo de la Revolución Rusa (1917), el revisionismo siguió significando el alejamiento del corpus doctrinal marxista, o más bien marxista-leninista, tras el surgimiento del leninismo como reinterpretación, aceptada como ortodoxa, del marxismo. Pero adquirió entonces mayores connotaciones peyorativas y pasó a designar, de hecho, no tanto la divergencia ideológica, sino el no seguimiento de las directrices impuestas desde 1919 hasta 1943 por la Komintern (y por su sucesora desde 1947, la Kominform). La tendencia se aceleró desde la llegada al poder de Stalin en la Unión Soviética. Con la implantación del estalinismo, la hegemonía del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) sobre el movimiento comunista internacional no tardó en revertir en la calificación de revisionista para toda actitud política que cuestionara tal liderazgo. Así, en 1948, una declaración oficial de la Kominform acusó de revisionismo al Partido Comunista Yugoslavo, dirigido por Tito, y le expulsó de la organización. Apartados de la línea oficial estalinista, Tito y el Partido Comunista Yugoslavo (que en 1952 pasó a denominarse Liga de los Comunistas de Yugoslavia) iniciaron, sin renunciar al marxismo, una vía al socialismo distinta a la que desde Moscú se imponía como ortodoxa.

El concepto de revisionismo alteró por completo su significado desde la muerte de Stalin en 1953, especialmente desde el proceso de desestalinización iniciado en el XX Congreso del PCUS (1956). La pujanza adquirida por determinados partidos comunistas del Tercer Mundo determinó que fuera la nueva actitud soviética, protagonizada por Nikita Jruschov, la tildada de revisionista por su supuesto acercamiento a Occidente. Papel fundamental jugó en este sentido Mao Zedong, líder del Partido Comunista Chino (PCCh) y promotor de una nueva ideología que se declaraba heredera de la ortodoxia marxista-leninista en los países subdesarrollados: el maoísmo. Consecuencias del ‘revisionismo soviético’ argumentado desde el PCCh fueron la Revolución Cultural proletaria (iniciada por Mao en la década de 1960 en China para recuperar el espíritu revolucionario ‘olvidado’ en la Unión Soviética) y la rivalidad chino-soviética por lograr la hegemonía en el movimiento comunista mundial.

Tema 5 El socialismo 34

Page 35: Socialismo / Ciencias Políticas

En Europa, durante la década de 1970, una nueva forma de revisionismo surgió con la aparición del denominado eurocomunismo. Protagonizado principalmente por el Partido Comunista Francés (PCF), el Partido Comunista Italiano (PCI) y el Partido Comunista de España (PCE), sus respectivos líderes (Georges Marchais, Enrico Berlinguer y Santiago Carrillo) abanderaron una fórmula política muy distinta al marxismo original, en la que apostaban por la democracia y el pluralismo político como valores sustitutivos de la revolución.

Eduard Bernstein (1850-1932), político, pensador y escritor alemán, nacido en Berlín, en cuya universidad estudió. En 1872 se afilió al Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), y desde 1881 a 1890 editó junto a August Bebel el diario Sozialdemokrat (Socialdemócrata). Durante su exilio en Londres, de 1888 a 1901, Bernstein conoció al coautor del Manifiesto Comunista, Friedrich Engels, y estudió las teorías desarrolladas por éste y Karl Marx sobre la naturaleza de la sociedad capitalista y el establecimiento del socialismo. Bernstein rechazó los argumentos de Marx y de Engels en pro del derrocamiento violento del capitalismo mediante la revolución. Elaboró en cambió su propia teoría, conocida con el nombre de revisionismo, que hacía más hincapié en los métodos evolutivos y reformistas que en los revolucionarios para conseguir una sociedad socialista. En 1901 fue elegido diputado del Reichstag (cámara baja del Parlamento alemán), donde participó en tres legislaturas (1902-1906, 1912-1918 y 1920-1928). En su obra Postulados del socialismo y lecciones de socialdemocracia (1899) expuso sus críticas al marxismo.

Eduard Bernstein revisa el marxismoPoco tiempo después de que el socialismo científico fuera formulado surgieron dos tendencias en su seno: la ortodoxa (que respetaba en todos sus puntos la ideología comunista y el programa de acción revolucionaria de Karl Marx y Friedrich Engels) y la revisionista. Esta última nació en el seno del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) y tuvo como principal portavoz a Eduard Bernstein. Sus tesis reformistas y moderadoras (cuyo punto fundamental era la consecución del socialismo a través del sistema parlamentario y no por medio de la lucha) no fueron aceptadas por sus correligionarios “ortodoxos”, en cuyas filas destacó la figura de Karl Johann Kautsky. Bernstein expuso las principales tesis del revisionismo en su obra Postulados del socialismo y lecciones de socialdemocracia (1899

Ferdinand Lassalle (1825-1864), político y pensador alemán cuyos escritos constituyen la base de la filosofía política conocida como socialismo de Estado. Nació en Breslau (actual Wroclaw, Polonia). En 1848, colaboró en Alemania con Karl Marx y Friedrich Engels en la organización de actividades revolucionarias y actos propagandísticos, por lo que fue encarcelado durante un breve periodo. Posteriormente, elaboró una doctrina socioeconómica que difería de la elaborada por Marx y Engels en muchos aspectos. Lasalle consideraba que la acción de una ley económica, a la que él denominaba “ley del bronce de el salario”, impedía a los trabajadores mejorar sus condiciones de vida en la sociedad capitalista. Proponía la formación de asociaciones y cooperativas de trabajadores, mediante la ayuda y supervisión del Estado, que garantizaran que el obrero recibiera “el producto completo de su trabajo” El modelo de Estado ideado por Lassalle estaba basado en el sufragio universal. La principal aportación de este pensador al movimiento obrero fue la creación de la Allgemeiner Deutscher Arbeiterverein (Asociación General de Trabajadores Alemanes) en 1863, el primer partido político de trabajadores que

Tema 5 El socialismo 35

Page 36: Socialismo / Ciencias Políticas

se constituyó en Alemania y que sería el precursor del Partido Socialdemócrata alemán. Lassalle fue herido de muerte en un duelo por una asunto sentimental y falleció en Génova. Entre sus obras se encuentran Heráclito el oscuro (1857), La guerra italiana y la misión de Prusia (1859), El sistema de derechos adquiridos (1861), y El programa de los trabajadores (1862).

Tema 5 El socialismo 36

Page 37: Socialismo / Ciencias Políticas

4. LA SOCIALDEMOCRACIA POSTERIOR A 1945

LICHTHEIM, GEORGE “BREVE Hº DEL SOCIALISMO” (II)

La guerra de 1914 constituye una de las grandes catástrofes de la Historia, ya que con ella comienza el declive de Europa como centro de poder mundial y la desintegración de la democracia liberal como la forma política de la civilización europea. Aunque este cambio sólo se manifestó en toda su amplitud después de la guerra de 1939-1945, el primer impacto fue, en algunos aspectos más duro, ya que puso fin a un largo periodo estabilidad. Respecto al mundo obrero, se vino abajo la creencia de que la clase obrera podía evitar que los gobiernos europeos se enfrentaran en una guerra. En lugar de esto, el torrente de odio que dominó a todos los beligerantes trajo consigo la transformación de la mayoría de los partidos socialistas existentes en pilares de sus respectivas sociedades nacionales. Por otro lado, minorías importantes de la inteliguentsia y de la clase obrera se radicalizaron a raíz de esta patriótica matanza, alejándose profundamente de la tradición liberal democrática.

La guerra no destruyó, como algunas veces se dice, la unidad del movimiento obrero internacional, dado que la ortodoxia socialdemócrata anterior a 1914 se había enfrentado ya a la tendencia sindicalista.

Pero sí se abrió una nueva fosa al identificar el socialismo revolucionario con el régimen bolchevique que en 1917-1918 surgía de la convulsión de la revolución rusa, simultáneamente la socialdemocracia reformista crecía en nº e importancia, al menos en Europa central y occidental. La guerra había hecho tomar conciencia a los gobiernos de la necesidad de asegurar la lealtad de la clase obrera organizada. Los acuerdos de paz tardíos en 1919 fueron un triunfo de la democracia liberal, que permitió al movimiento obrero incorporar los elementos democráticos de su programa al armazón constitucional del nuevo orden internacional coronado por la Sociedad de naciones.

Sin embargo, desde la perspectiva socialista, se había pagado un precio muy alto por estos resultados. La guerra no sólo había muy destructiva sino que también había dejado al descubierto la debilidad política de la clase obrera organizada, al enfrentarse a la fuerza elemental del nacionalismo.Consecuencias IGM:

- Revolución Rusa: Instauración del régimen bolchevique, es claramente disfrazado como gobierno de los soviets (consejos de obreros y campesinos), que en teoría debían ejercer el poder, pero que de hecho estaban controlados por el partido de Lennin, que a partir de 1918 abandonó el apelativo de “socialdemócrata” para llamarse comunista.

ALEMANIA.- El hecho de que la socialdemocracia alemana y austriaca fuera a partir de 1918 nominalmente marxista, pero actuara en la práctica como reformista, no se replanteó a partir de 1945, cuando la victoria de los aliados

Tema 5 El socialismo 37

Page 38: Socialismo / Ciencias Políticas

en la IIGM aseguró el funcionamiento más o menos normal de las instituciones democráticas en el territorio mutilado de la RFA y en Austria. En estos países, como era de esperar, los socialdemócratas abandonaron los últimos vestigios de su pasado, aunque al menos el partido austriaco mantuvo en su programa la socialización de la economía con un sector público lo suficientemente amplio como para marcar la pauta al resto.

En contraposición el SPD de Alemania Occidental se convirtió oficialmente al liberalismo económico hacia 1960, y a finales de 1969 parecía destinado a gobernar en camaradería con los supervivientes del liberalismo de la clase media, tras demostrar su credibilidad en una coalición de demócratas cristianos. Se ha definido frecuentemente la evolución del partido desde la guerra como un proceso de emancipación del marxismo.

K. Schumacher se fijará entonces como objetivo de aunar el socialismo democrático con el socialismo alemán, además que proclamaba que el socialismo estaba acabado. Vaticinio que resultó erróneo, ya que lejos de estar liquidado el capitalismo alemán floreció a partir de 1950. Pero lo que realmente desmoronó a este laussealliano de transformar el SPD en un gran movimiento democrático nacional fue la división de Alemania y la constitución del gobierno de Bonn en 1949 sobre una plataforma predominantemente católico-romana, a la vez que Alemania del Este, separada del resto del país, se convertía en un satélite ruso bajo control comunista.

Su muerte puso fin a este experimento nacional democrático y sus sucesores abandonaron el programa de Godesberg de 1959 tanto el nacionalismo como el socialismo, sustituyéndolo por una nueva línea política vagamente humanista y democrática, compatible con la ética cristiana. Sh. defendía que para ser auténtica una democracia debía ser socialista y sustentada por la clase obrera. Sus herederos abandonaron tanto su filosofía como su política y si los frutos que recogieron fueron pocos, puede decirse que el SPD se ha convertido en una fuerza efectiva de poder.

GB.- La evolución de GB después de la IIGM difiere notablemente de la de Alemania, entre los vencedores y porque el partido laborista había ganado la confianza de los electores al participar en el gobierno de 1940 a 1945. Eentre 1945 y 1951 hubo una polémica sobre las exigencias de nacionalización de la achacosa economía británica. La decisión de nacionalizar las industrias y servicios clave podía defenderse en términos pragmáticos, y por ello no fue desautorizada al recobrar los tories el poder en 1951. Además se acentuó la necesidad de intensificar el trabajo y se racionaron los bienes de consumo de primera necesidad, como exigía la administración en lucha contra la escasez de posguerra.

La reincorporación del partido laborista al poder en 1964 fue precedida por una larga y penosa controversia sobre la socialización, que acabó como había empezado, en punto muerto.

Tema 5 El socialismo 38

Page 39: Socialismo / Ciencias Políticas

A esta situación se sumó la escisión política provocada por la Revolución Rusa y su secuela estalinista, contribuyendo a crear mayor confusión. El movimiento obrero occidental había entrado en crisis de todas formas por las discrepancias en sus reacciones ante la IGM, la depresión de la década de los 30 y el surgimiento del fascismo. La escisión comunista añadió una nueva dimensión, y evidentemente la situación no se mitigó con los enfrentamientos sectarios entre estalinistas, los trotskistas y, a partir de 1960 aproximadamente, los maoístas, que habían descubierto en China un nuevo modelo, aplicable en su opinión no sólo a países subdesarrollados y preindustriales del tercer mundo, sino también los países desarrollados. Ante este caos resulta sorprendente lo que llegará sobrevivir un movimiento socialista. Lo consiguió sin duda porque sus adherentes obreros o intelectuales no tenían otra alternativa. El comunismo soviético se identificaba con el estado policía de Europa del Este hasta el punto de que, después del baño de sangre en Hungría en 1956 y más tarde con la invasión de Checoslovaquia en 1968, incluso algunos comunistas de Europa occidental más avezados comenzaron a marcar sus distancias del en su tiempo admirado modelo estalinista. Tal vez la socialdemocracia carezca de relieve, pero al menos ya se la conocía y no era una amenaza para la libertad y la dignidad.

Por ello el socialismo siguió disfrutando del apoyo de las masas, sobre la tácita aceptación de que se actuaría como un agente reformista a favor de los intereses de los trabajadores frente a la creciente invasión de la tecnología industrial y la injerencia estatal. La socialización tendría lugar lentamente (si es que tenía lugar) y sólo a condición de que ola mayoría del electorado estuviera dispuesto a ratificarla. Fue más fácil cumplir este requisito una vez se tomó conciencia de que un creciente número de asalariados estaba dispuesto a tolerar, incluso a acoger con agrado una cierta dosis de socialismo bajo el nombre de planificación económica, seguridad en el trabajo y pleno empleo.

En principio, la garantía estatal del trabajo para todos podría convertirse en una etapa de transición en la que habría puestos de trabajo vitalicios, práctica vigente en la administración y en las universidades, e igualmente aplicable a la industria si la economía pasaba a ser controlada por el estado.

La tendencia general en todos los viejos países industriales hacia la estabilidad y a distanciarse de la perpetua inseguridad asociada al mercado libre respondía a deseos humanos de profunda raigambre. Pero presuponía un estadio avanzado de formación de capital, un ritmo razonable de crecimiento económico, la existencia de una disciplina laboral y un cierto nivel de madurez política general. Era poco realista propugnar un régimen de estas características como solución a los problemas de los países industrializados recientemente, donde la producción tenía por fuerza que primar sobre consideraciones de cualquier otro tipo. Una vez más el socialismo democrático se manifestó como una teoría y práctica adecuada a los países privilegiados del mundo. Fuera de ellos, con un capital acumulado con grandes sacrificios y sus instituciones políticas relativamente estables, el viejo sueño de aunar la igualdad y la libertad adquirió una imagen claramente utópica. Pero incluso este enjuiciamiento no tiene en cuenta la ola anarcosindicalista que recorrió Europa en mayo de 1968, dando lugar a una

Tema 5 El socialismo 39

Page 40: Socialismo / Ciencias Políticas

huelga general en Francia y algo semejante a una coalición de obreros-estudiantes en otros países industrializados. Evidentemente, aquello contra se rebelaron los estudiantes no tenía relación directa con los objetivos tradicionales del movimiento obrero aunque se pueda aducir que la “alienación” que experimentaban era en sí misma un aspecto de la explotación.

También en Europa del Este, donde el capitalismo no es un sistema económico dominante, comenzaba a surgir una inteliguentsia de oposición, soslayando los problemas del estalinismo, los estudiantes y obreros de los países nominalmente socialistas del bloque soviético y de Yugoslavia se rebelaban contra las estructuras autoritarias y burocráticas implantadas a partir de 1945.

Surgirá, al este y al oeste de la frontera política que divide el continente, un nuevo tipo de sociedad para la que no se ha encontrado hasta el momento un apelativo más adecuado que el de TECNOCRATA. La contraposición clásica entre socialismo y liberalismo ha quedado algo trasnochada a finales de la década de 1960.

En los movimientos obreros, la aristocracia obrera es el estrato más militante y con mayor conciencia política de la clase obrera y el vehículo principal de las actividades socialistas, o comunistas. Esta es una fragante contradicción con la teoría leninista. En las capas bajas de la sociedad no ha surgido ningún moviendo social digno de mención. No existe correlación entre pauperismo y socialismo o entre revolución y desesperación.

En la práctica el socialismo democrático siguió siendo una herejía prohibida en los países del este.

Tema 5 El socialismo 40

Page 41: Socialismo / Ciencias Políticas

6. CRISIS Y HUNDIMIENTO DEL COMUNISMORamón Cotarelo

Estudia las causas concomitantes de la crisis mundial del comunismo, tanto de su desaparición como de su transformación.

Se trata de la crisis de las estructuras políticas y económicas bajo las que ha vivido durante 50 años casi un tercio de la humanidad.

1.CONSIDERACIONES GENERALES

Entre los años 89 y 91 desaparecieron todos los sistemas comunistas de Europa. Fue un hundimiento insólito.

Cuando Gorvachov accedió al poder absoluto en la URSS, en 1985, ni uno sólo de los analistas puso en cuestión los objetivos del nuevo Secretario General, consistentes en reformar el aparato del comunismo y democratizar la URSS. Nadie pensó que al ser el comunismo irreformable, el intento de transformación acabaría con la estructura completa del sistema.

Carácter inesèrado del fenómeno.- no se espera y además se afirmaba lo contrario (que el comunismo no era reversible).

Los otrora poderosos Estados policiales comunistas, armados hasta los dientes, que parecían inexpugnables, se vinieron a bajo uno tras otro silenciosamente (excepción Rumania) sin presentar resistencia, sin que hubiera intervención militar ni conato alguno de oposición o algarada, en una especie de generalización del proceso cuyo nombre se acuñó para Checoslovaquia, pero que podría servir para todos: “la revolución de terciopelo”. En Polonia hicieron falta 10 años, en Hungría 10 meses, en Alemania Oriental 10 semanas y quizá en Checoslovaquia 10 días. CARÁCTER ACELERADO DEL PROCESO.

El sistema comunista se basaba en un inmenso artificio de movilización y propaganda que descansaba sobre tres pilares:

1. el orgullo de la reconstrucción nacional, ligada a la mitología revolucionaria (quedó aniquilada , ya en tiempos de Stalin, la pretendida ruptura en la historia del país entre la época revolucionaria y la posterior para evidenciar la continuidad del espíritu ruso)

2. la conciencia de superioridad sobre el mundo capitalista ( la USS ya no esperaba la desaparición revolucionaria del mundo capitalista, sino que aceptaba la idea de la convivencia con él,y q al final se demostraría su superioridad)

3. el apoyo ideológico prestado por los intelectuales occidentales (acabó desvaneciéndose.

La destrucción de estos 3 pilares del aparato propagandístico dejaron al régimen soviético inerme e incapaz de explicar o, cuanto menos, disfrazar, las

Tema 5 El socialismo 41

Page 42: Socialismo / Ciencias Políticas

causas de su profunda crisis en los años 80. Ya desde la invasión de Checoslovaquia (1869) quedó claro que el orgullo de haber creado una nueva forma de nación proletaria, haciendo cuadratura del círculo de generar un nacionalismo internacionalista, no era otra cosa que una nueva versión del panesvalismo ruso. El estancamiento económico breszneviano, con sus factores concomitantes de descenso en el nivel de vida de la población y la corrupción generalizada del aparato burocrático, puso en evidencia, a su vez, que la pretendida superioridad del orden capitalista era una sarcástica entelequia.

Distinto fue en los regímenes comunistas no europeos, en todos estos lugares, el comunismo sólo conseguirá mantenerse negándose a sí mismo.

2. LAS PARADOJAS DEL HUNDIMIENTO DEL COMUNISMO

1) Ya muy temprano en la historia del marxismo se hizo patente la contradicción que suponía creer que la historia está regida por leyes científicas y al mismo tiempo instar de las personas un comportamiento subjetivo que coadyudara a la evolución y, además, dado que suponía a ésta un carácter positivo y emancipador que acelerara el advenimiento de una sociedad perfecta.

Marx creía haber descubierto la ley que explica y permite predecir el fin fatal del capitalismo, condenado a desaparecer en función de una tendencia intrínsica a este modo de producción y que él formuló como ley del “descenso de la tasa de ganancia del capital”. (el capitalismo tiene una tendencia imparable al empobrecimiento que le lleva de crisis en crisis, hasta el momento de su crisis general que tiene entonces aspectos revolucionarios porque será sustituido por un nuevo modo de producción más justo: el comunismo.

Pero Marx no dejo indicaciones acerca de cómo debía ser esta sociedad comunista. Los comunistas si ocuparon en señalar como debía ser con todo lujo de detalles, como Rosa de Luxemburg.

Probablemente el ensimismamiento de los autores comunistas en esta creencia en las leyes objetivas de la historia y en la esperanza en la famosa “crisis general del capitalismo”, tantas veces anunciada y tantas veces protestada, les impidió ver la paradoja de que, al final su predicción se cumpliera pero no con el capitalismo, sino con el comunismo. Le ha pasado al comunismo lo que esperaban le pasase al capitalismo.

2) Se trata de las elaboraciones sobre los “períodos de transición” o las “economías de transición”. El marxismo ha dedicado tiempo y energías a prever lo que no iba a suceder, mientras que ignoró olímpicamente lo que sí sucedió.

3. CAUSAS DEL HUNDIMIENTO DEL COMUNISMO

Factores casi todos de índole económica.

Tema 5 El socialismo 42

Page 43: Socialismo / Ciencias Políticas

1. imposibilidad del cálculo económico.- El presupuesto teórico básico del socialismo marxista o comunismo es erróneo. Consiste en suponer en el mercado tal nivel de irracionalidad que hace ser social ineficiente. Al abolir el mercado, la autoridad comunista abolía de un golpe el único mecanismo objetivo de cálculo económico racional. No existe vía posible de fijación de precios que no sea el mercado. Ya desde los años 70 la economía soviética rayaba el desastre.

2. baja productividad.- consecuencia de lo anterior. Toda actividad económica soviética era burocrática en el sentido de la inexistencia de incentivos reales a la productividad.

3. incapacidad de adaptación.- Fueron economías muy inflexibles, muy rígidas, no aptas para dar respuestas a tiempo a circunstancias cambiantes.

4. la falta de competitividad internacional.- su aislamiento en una economía mundial cada vez más interdependiente le condujo a la ruina. No alcanzaron las nuevas tecnologías.

5. la revolución de las expectativas decrecientes.- conciencia que las gentes tienen de ellos y su efecto social. Pesimismo, esto le dio el golpe de gracia.

4. EL FRACASO DEL PROGRAMA COMUNISTA

1. la abolición de la anarquía del mercado.- el comunismo no abolió la anarquía productiva, sino el mercado. Y con ello, al contrario, se incrementó dicha anarquía.

2. abolición de la explotación del hombre por el hombre.- al abolir el mercado, podía pensarse en abolir asimismo el carácter mercantil de las relaciones humanas. Desde el momento en que un patrono no paga al trabajador el producto íntegro de su trabajo, hay explotación. La oferta comunista no consiste en prometer la abolición de la plusvalía, sino en prometer que se abolirá el carácter privado de la apropiación. Son los hombres los que explotan a los hombres.

3. superación de las contradicciones sociales fundamentales.- contradicción entre el campo y la ciudad y entre el trabajo manual y el intelectual.

4. extinción del estado y del dercho.- desde el mto en Eº y drcho eran dos superestructuras política y jurídica de clase, en el momento en que dejará de haber clases, no serían necesarias tales superestructuras, que serían sustituidas por formas libres de asociación voluntaria de los seres humanos. La justicia de la clase obrera acaba siendo siempre la justicia de partido y es evidente que justicia y partido son términos antitéticos.

5. abolición del nacionalismo a favor del internacionalismo.- la idea de q el nacionalismo es una ideología burguesa y que el proletariado es una clase universal que no puede reconocer patria sin traicionar sus interesses alimenta toda política leninista

6. perspectiva del hombre nuevo.- contrario criminalidad, absentismo laboral, alcoholismo...

Tema 5 El socialismo 43

Page 44: Socialismo / Ciencias Políticas

5. EL COMUNISMO Y EL SOCIALISMO OCCIDENTALES FRENTE AL HUNDIMIENTO DEL COMUNISMO

El hundimiento del comunismo ha influido decisivamente en la política de los países occidentales, sobre todo al tener un claro impacto tanto en los partidos comunistas como en los socialistas democráticos.

Las reacciones comunistasHan entrado en una crisis tan aguda que autoriza a pensar que puedan desaparecer en un futuro más o menos próximo. Algunos, incluso, se han disuelto o, como el italiano, han cambiado de nombre y de simbología.

Para los eurocomunistas la caída del comunismo fue por la ausencia de la falta de democracia.

Las reacciones socialistasDicen que entre socialismo y comunismo ya no habían puntos de contacto. El elemento diferenciador era la democracia.El socialismo democrático ha abandonado decididamente toda perspectiva de cambio social radical o de acercamiento a la utopía.

¿Qué futuro para el comunismo?Las sociedades que han salido del comunismo tienen un panorama complejo ante sí: cómo reconstruir órdenes sociales, económicos y políticos racionales, más a tono con los imperantes en el mundo occidental.

Los partidos comunistas occidentales en la medida que consigan mantener su identidad y no la cambien, la revoquen o la disfracen.

Cotarelo no cree que en este mundo haya lugar para el ideal y la utopía comunista.

AnexoUnión de Repúblicas Socialistas Soviéticas o Unión Soviética (en ruso, Soyuz Sovyetskikh Sotsialisticheskikh Respublik), Estado federal plurinacional, formado por distintas repúblicas europeas y asiáticas, creado como resultado del triunfo de la Revolución Rusa de noviembre de 1917 en el territorio del antiguo Imperio Ruso, fundado con tal denominación en diciembre de 1922 y cuya disolución se produjo en diciembre de 1991. La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), primer Estado en el cual se aplicaron los principios del socialismo, ha sido llamada asimismo Unión Soviética y también, erróneamente, Rusia Soviética o simplemente Rusia.

TRAS LA I GUERRA MUNDIAL

La historia de la URSS comienza cronológicamente el 7 de noviembre de 1917 (25 de octubre, según el calendario juliano por el que se rigió Rusia hasta 1918), cuando la Revolución Rusa culminó con la conquista del poder por el Congreso de los Soviets de toda Rusia, dirigido por los bolcheviques. Tras autoproclamarse depositario de la autoridad gubernamental, el Congreso promulgó inmediatamente una serie de decretos por los que Rusia dejaba de combatir en la I Guerra Mundial, era nacionalizada toda la tierra y se constituía el Consejo de Comisarios del

Tema 5 El socialismo 44

Page 45: Socialismo / Ciencias Políticas

Pueblo (Sovnarkom) que actuaría como primer gobierno obrero y campesino y estuvo presidido por Lenin.

El 15 de noviembre de 1917, los soviets garantizaron el derecho a la igualdad y a la autodeterminación de todas las numerosas nacionalidades que habitaban el territorio del antiguo Imperio Ruso. La primera nación en sacar provecho de esta situación fue Finlandia, donde se estableció un gobierno nacional que estrenó de inmediato la independencia del dominio ruso. En otro de sus primeros decretos, el gobierno soviético proclamó la separación Iglesia-Estado. Aunque se garantizaba la libertad religiosa individual, el Estado declaró su aconfesionalidad. Las ideas fundamentales de estos y otros decretos quedaron recogidas en la Constitución de 1918, que proclamó la República Socialista Soviética Federada de Rusia.

2.1 El tratado de paz

Las negociaciones de paz con Alemania se iniciaron en diciembre de 1917. Los términos de la paz presentados por los alemanes eran inaceptables, por lo cual las negociaciones quedaron rotas en febrero de 1918. Sin embargo, una nueva ofensiva alemana llevó a los dirigentes soviéticos a reanudar las conversaciones y a principios de marzo se concluyó la Paz de Brest-Litovsk. Según los términos de ésta, la República Socialista Soviética Federada de Rusia tuvo que ceder Ucrania, Polonia y los llamados Países Bálticos. El gobierno soviético también fue obligado a pagar unas elevadas indemnizaciones a Alemania. Lenin consideraba esencial para la causa soviética la firma del tratado, a pesar de su dureza, porque daría el tiempo necesario para consolidar el régimen recién constituido. Además, el líder bolchevique creía inminente la extensión de la revolución soviética a otras naciones europeas. Aunque esas revoluciones estallaron posteriormente en algunos países, especialmente en Alemania y Hungría, fracasaron en su intento por hacerse con el poder, por lo que el gobierno soviético fue el único en proclamar como objetivo el establecimiento de un Estado socialista.

La firma de la Paz de Brest-Litovsk produjo una escisión en el seno del gobierno soviético. El Partido Socialista Revolucionario, que había estado colaborando con los bolcheviques, declaró que el tratado constituía una traición a la causa de la Revolución y abandonó el gobierno. Confiando en sus tradicionales métodos de lucha política, miembros de dicho partido asesinaron al embajador alemán con la vana esperanza de provocar nuevamente el comienzo de las hostilidades. También llevaron a cabo atentados contra algunos líderes bolcheviques. Lenin fue seriamente herido por uno de estos actos terroristas, lo que acabaría por provocar pocos años más tarde su prematuro fallecimiento. Como respuesta, los bolcheviques iniciaron el llamado Terror Rojo, con la supresión del Partido Socialista Revolucionario y la ejecución de numerosos opositores políticos. Otros partidos y facciones minoritarias fueron igualmente eliminados por los bolcheviques.

De este modo, la República Socialista Soviética Federada de Rusia se convirtió en un Estado con sistema de partido único, el Partido Comunista Ruso (bolchevique), nombre que adoptó el Partido Obrero Socialdemócrata Ruso (POSDR) en marzo de 1918. Siete años más tarde, recibiría una nueva denominación, Partido Comunista de los Bolcheviques de la Unión, que en 1952 se transformaría en la definitiva de Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS). Los principales partidos comunistas creados en muchos países a raíz del triunfo de la Revolución Rusa pasaron a depender en mayor o en menor medida desde entonces del soviético, hasta que años más tarde algunos de ellos se apartaron por diversas razones de los dictados provenientes de la que dio en llamarse patria del comunismo.

2.2 La Guerra Civil

Lenin y Stalin Esta imagen nos muestra a los dos principales dirigentes de la Unión Soviética: Lenin y su sucesor en el liderazgo del Estado, Stalin, quienes gobernaron desde la creación del mismo, en 1917, hasta la muerte del último de los dos, en 1953.Culver Pictures

Tema 5 El socialismo 45

Page 46: Socialismo / Ciencias Políticas

La política social y económica de los bolcheviques provocó en 1918 el estallido de la Guerra Civil y la intervención de potencias extranjeras. En Siberia, un Ejército compuesto por 45.000 antiguos prisioneros de guerra checos, la llamada Legión Checa, que habían sido armados por el gobierno zarista para combatir a los alemanes, inició una ofensiva contra las autoridades soviéticas. Múrmansk y Arjanguelsk, las principales ciudades del extremo septentrional de Rusia, fueron ocupadas por tropas aliadas. El Ejército japonés ocupó Vladivostok, en el sureste ruso, ciudad en la que una fuerza expedicionaria estadounidense desembarcó poco después. Los alemanes invadieron la Rusia Blanca (una región más o menos equivalente a la actual Bielorrusia), Ucrania y el Cáucaso. En el otoño de 1918 el almirante Alexandr Vasílievich Kolchak, al mando de un ejército contrarrevolucionario, se proclamó comandante supremo de Rusia y estableció su capital en la ciudad siberiana de Omsk.

A comienzos de 1919, el Ejército Blanco mandado por el general Antón Ivánovich Denikin lanzó desde Ucrania una ofensiva contra las tropas soviéticas, mientras que otro, dirigido por el general Nikolái Yudenich avanzó hacia Petrogrado (actual San Petersburgo). A pesar de los reveses iniciales, los bolcheviques lograron repeler estos ataques a comienzos de 1920. En abril de ese año, el Ejército polaco lanzó un nuevo ataque con ayuda de tropas bielorrusas bajo el mando de Piotr Nikoláievich, barón de Wrangel. Dos meses más tarde las tropas soviéticas, reorganizadas por el comisario (ministro) de la Guerra Liev Trotski en 1918 con el nombre de Ejército Rojo, iniciaron la contraofensiva. La guerra con Polonia finalizó con la firma en 1921 del Tratado de Riga, por el que determinadas áreas occidentales de la Rusia Blanca y de Ucrania pasaban al control de Polonia. Tras la expulsión de las tropas de ocupación japonesas de Siberia oriental a finales de 1922, la Guerra Civil llegó a su fin. El régimen soviético no estaría ya en peligro inmediato durante largo tiempo.

Liev Trotski Trotski fue el lugarteniente de Lenin durante la revolución bolchevique de Rusia de 1917 y más tarde desempeñó importantes puestos en el nuevo gobierno del partido comunista. Cuando Lenin quedó incapacitado por una apoplejía, Trotski perdió el liderazgo del gobierno ante Stalin y tuvo que exiliarse. Fue asesinado en México por agentes de Stalin en 1940. THE BETTMANN ARCHIVE Los bolcheviques derrotaron a las tropas extranjeras y a las fuerzas contrarrevolucionarias rusas gracias a su determinación, organización y buen mando, a la desunión de sus rivales y a la renuncia final de las potencias extranjeras participantes en la guerra.

El denominado comunismo de guerra, política aplicada por los bolcheviques durante el conflicto civil, supuso la rápida nacionalización de la industria y de los medios de transporte y la confiscación de todos los suministros y equipos necesarios para la actividad bélica, lo que arruinó por completo la economía del país. Cuando cesaron las hostilidades y quedó consolidado el régimen soviético, el gobierno tuvo que hacer frente a la necesidad de restaurar la economía. Trotski y otros dirigentes preferían mantener esta rígida política de guerra para continuar la evolución hacia el comunismo. Lenin optó por reducir la gravosa economía de guerra impuesta a los agricultores, con el objetivo de estimular la producción agraria, y por mitigar los controles sobre la industria y el comercio para permitir la creación de pequeñas empresas que lograran aumentar la producción. La denominada Nueva Política Económica (NEP), aplicada desde marzo de 1921 por Lenin, fue adoptada en 1922 por el Partido Comunista de los Bolcheviques de la Unión, si bien a principios de 1929 resultó abandonada de forma definitiva por el sucesor del primer dirigente soviético.

LA ÉPOCA DE STALIN

Iósiv Stalin Stalin fue el principal dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) desde 1929 hasta 1953. Hizo de la URSS una gran potencia mundial; sin embargo, su gobierno se enmarca dentro de las dictaduras terribles del siglo XX. Hulton Deutsch

Tema 5 El socialismo 46

Page 47: Socialismo / Ciencias Políticas

La prematura muerte de Lenin en enero de 1924 desencadenó una dura lucha por el poder. Los principales antagonistas fueron Trotski y Iósiv Stalin, entonces secretario general del partido, los cuales se proclamaban legítimos herederos de Lenin. Gracias al control sobre el aparato del partido, Stalin logró obtener el apoyo de la mayoría de los miembros de éste y consolidar así su poder. En noviembre de 1927, tras un referéndum interno, el partido repudió por completo las ideas políticas de Trotski, que fue expulsado de aquél y tuvo que exiliarse en Alma Atá (la actual Almaty, en Kazajstán). Dos años más tarde, Trotski fue desterrado de la URSS, y en 1940 murió asesinado en México a manos de un agente soviético.

En 1929, Stalin fue reconocido como máximo dirigente del partido y del Estado. A partir de ese momento inició la serie de purgas que caracterizarían sus años de mandato, y que afectaron en primer lugar a sus antiguos aliados durante la pugna con Trotski. Esos dirigentes, especialmente Nikolái Ivánovich Bujarin y Alexéi Ivánovich Ríkov, fueron expulsados de los más altos órganos del partido.

Desde entonces, Stalin sólo confió en su control del partido y de la policía y en los compañeros que él había elevado al poder. Entre estos destacaron Viacheslav Molótov, Valerian Vladimírovich Kuibishev, Grígori K. Ordzhonikidze y Kliment Efrémovich Voroshílov.

3.1 Fundación de la URSS

La Internacional La Internacional (que aquí se puede escuchar en un arreglo para orquesta) fue musicalizada en 1888 por Pierre Degeyter, aunque su texto ya había sido compuesto por el poeta francés Eugène Pottier durante la Comuna de París (1871). En 1910 fue adoptada por la II Internacional y traducida a un gran número de lenguas. A partir de entonces fue reconocida universalmente como enseña sonora del movimiento comunista. Desde 1917 hasta 1944 fue también el himno oficial de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas."l'Internationale'" by Pierre Degeyter, E.Pottier, Bresztovszky E. performed by Magyar Rádió es Televizió Szimfonikus Zenekara és Enekkara, Vezényel: Kórodi András, from Best of Communism: Selection of Revolutionary Songs (Cat.# Hungaroton HCD 37898) (c ) Le Chant du Monde (p)1997 Gong Forgalomba Hozza A Hungaroton Terjeszti A Gong-Express Kft. All rights reserved. Ampliar Durante la década de 1920 se produjeron cambios radicales en la administración gubernamental y se lograron notables mejoras en la economía nacional y en las relaciones exteriores. En diciembre de 1922, y previa aprobación de los respectivos congresos de sus soviets, la República Socialista Soviética Federada de Rusia (RSFSR) y las repúblicas socialistas soviéticas de Transcaucasia, Ucrania y Bielorrusia formaron la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, entidad que surgió como tal en este momento. La Constitución de 1924, promulgada en enero de ese año, reorganizaba los territorios bajo control soviético en torno al nuevo Estado. Aunque se garantizaba un cierto grado de autonomía a cada una de sus repúblicas integrantes, el gobierno soviético central mantenía un rígido control sobre las relaciones exteriores, la defensa y la economía planificada. Durante los años siguientes, Transcaucasia quedó dividida en las repúblicas socialistas soviéticas de Georgia, Armenia y Azerbaiyán. La creación de las repúblicas de Kazajstán y de Asia central fue resultado de su separación de la RSFSR. A su vez, la República de Asia central se dividió en las repúblicas socialistas soviéticas de Turkmenistán, Uzbekistán, Tayikistán y Kirguizistán.

En 1924 las grandes potencias mundiales, que intentaron en un principio aislar al régimen soviético, ya habían establecido relaciones diplomáticas con éste y la URSS empezó a participar en las conferencias internacionales. Estados Unidos fue, de todas las grandes potencias, la última en reconocer formalmente al gobierno soviético, lo que sucedió en 1933, durante el inicio del primer mandato del presidente Franklin Delano Roosevelt.

Tema 5 El socialismo 47

Page 48: Socialismo / Ciencias Políticas

3.2 La transformación económica

Hacia 1927 la NEP trazada por Lenin, bajo la cual se permitió un cierto capitalismo, había generado la suficiente recuperación económica como para retomar el camino hacia el socialismo, de acuerdo con los objetivos a largo plazo de los soviéticos. Por ello, en 1928 se inició un periodo de economía planificada, dirigida desde el Comité de Planificación Estatal (Gosplan, creado en 1921), con la puesta en práctica del primero de los planes quinquenales aplicados por Stalin. Los objetivos básicos de estos planes eran transformar a la URSS de un país agrícola en una potencia industrializada, llevar a cabo la completa colectivización de la agricultura y transformar la naturaleza profunda de la sociedad.

3.3 La Gran Purga

Nikolái I. Bujarin En 1929, después de perder la confianza de Iósiv Stalin, el dirigente soviético Nikolái I. Bujarin fue destituido de cuantos cargos ejercía. Ocho años más tarde resultó detenido y, sometido a la implacable Gran Purga estalinista, murió ejecutado en 1938 acusado de traición.Archive Photos A mediados de la década de 1930, la política soviética estuvo caracterizada por las drásticas purgas, tanto en el seno del Partido Comunista como en el del gobierno, de todos los elementos supuestamente opuestos a la política estalinista. Las purgas se iniciaron en 1929 y alcanzaron su punto más virulento en diciembre de 1934, tras el asesinato de Serguéi M. Kírov, un leal partidario de Stalin. Entre los años 1935 y 1939 Stalin ya había desplazado a todos sus opositores de los cargos de poder. Muchos fueron encarcelados, deportados a Siberia o ejecutados. De hecho, entre 1934 y 1938 dos tercios de los miembros que tenía el Comité Central del Partido Comunista en 1934, fueron sentenciados a muerte y ejecutados. De la misma forma, entre 1936 y 1938, más de la mitad de los oficiales superiores del Ejército Rojo fueron purgados.

En una serie de espectaculares juicios celebrados en Moscú entre 1936 y 1938, conocidos genéricamente bajo la denominación de Gran Purga, varios altos dirigentes del partido, incluidos Grígori Zinóviev, Liev Kámenev, Bujarin y Ríkov, fueron acusados, condenados y ejecutados entre otros motivos por su supuesta participación en una conspiración con Alemania y Japón para derribar al régimen soviético. Idénticos cargos se hicieron en otro juicio, de carácter secreto, contra algunos oficiales del Ejército Rojo, entre los que se encontraba el mariscal Mijaíl Nikoláievich Tujachevski, que también fueron ejecutados. Los llamados procesos de Moscú suscitaron críticas en todo el mundo hacia el régimen soviético, que quedó seriamente debilitado a nivel internacional a causa de tan numerosas ejecuciones.

3.4 Política exterior

Desde el punto de vista soviético, los sucesos internacionales ocurridos durante la década de 1930 pusieron en creciente peligro la seguridad de la URSS. En el Extremo Oriente, Japón ocupó Dongbei Pingyuan (Manchuria) en 1931 y las fricciones entre las tropas de ocupación japonesas y las soviéticas, estacionadas a lo largo de la frontera con dicho territorio, se hicieron cada vez más frecuentes. En 1938 los esporádicos choques armados derivaron en una seria guerra fronteriza. Al mismo tiempo, el ascenso del nacionalsocialista Adolf Hitler al poder en Alemania en 1933, y su política expansionista y anticomunista, supusieron una amenaza mayor para la seguridad soviética. Buscando establecer alianzas con otras potencias, especialmente con Francia y Gran Bretaña, la URSS ingresó en la Sociedad de Naciones en 1934. Durante los cinco años siguientes, el comisario soviético de Asuntos Exteriores, Maxim M. Litvínov, solicitó repetidamente a los miembros de esa organización internacional la adopción de medidas conjuntas contra las sucesivas agresiones de las potencias fascistas. La URSS intentó también obtener apoyo para la que llamó política de seguridad colectiva, consistente en promover la

Tema 5 El socialismo 48

Page 49: Socialismo / Ciencias Políticas

formación en países extranjeros de los denominados gobiernos de Frente Popular. Esta política exigía la colaboración de los grupos políticos comunistas, socialistas y centristas para hacer frente a los movimientos fascistas.

En el verano de 1938 se originó una grave crisis cuando el gobierno alemán exigió del gobierno de Checoslovaquia la autodeterminación de los Sudetes, una zona fronteriza con una gran minoría de población alemana. La URSS anunció su intención de ayudar a los checoslovacos en su resistencia contra tales pretensiones y pidió que Francia y Gran Bretaña ofrecieran una ayuda similar. Los gobiernos francés y británico, por el contrario, aceptaron las garantías ofrecidas por Hitler en el sentido de que con esta demanda Alemania ponía punto final a sus reivindicaciones territoriales. El resultado de la tibia postura adoptada por Francia y Gran Bretaña fue el Pacto de Munich, firmado en septiembre de 1938, que aseguraba la cesión de los territorios en litigio a Alemania. La firma de este pacto significó el fracaso de la política de seguridad colectiva soviética. En marzo de 1939 tropas alemanas, a través de los Sudetes, penetraron en Checoslovaquia y tomaron rápidamente el pleno control del territorio.

3.5 La II Guerra Mundial

Ocupado en una guerra fronteriza contra Japón en el Extremo Oriente y alarmado ante los progresos alemanes en Occidente, el gobierno soviético inició negociaciones secretas con Alemania para establecer un pacto de no agresión entre ambos estados, en tanto que continuaban las conversaciones iniciadas anteriormente con Francia y Gran Bretaña para firmar una alianza contra Alemania. En agosto de 1939 se anunció de forma repentina la firma del pacto de amistad y de no agresión entre Alemania y la URSS. Este acuerdo (conocido como Pacto Germano-soviético, o también Pacto Ribbentrop-Molótov, por ser esos los nombres de sus dos principales negociadores) contenía una cláusula secreta que determinaba el reparto de Polonia y las esferas de influencia de ambos países en Europa oriental.

El 1 de septiembre, la invasión alemana de Polonia llevó a Francia y Gran Bretaña a declarar la guerra a Alemania. Así comenzó la II Guerra Mundial. Dieciséis días más tarde el Ejército Rojo cruzaba la frontera polaca, ocupaba la parte oriental de Polonia y comenzaba la sovietización de los territorios ocupados. Cientos de miles de polacos fueron deportados a Siberia. El 29 de septiembre los gobiernos alemán y soviético firmaron un tratado por el que se delimitaban sus respectivas zonas de interés en Polonia. También reconocía la supremacía de ambas potencias en sus respectivas zonas de influencia y establecía una defensa común contra injerencias de terceros países.

El acuerdo de no agresión firmado con Hitler marcó el inicio de una nueva fase en la historia de la URSS. Durante los años inmediatamente anteriores a dicho pacto, el objetivo principal de la política soviética había sido la construcción del socialismo, esto es, la industrialización del país. La ocupación del este de Polonia fue la primera de una serie de anexiones territoriales que afectaron a Estonia, Letonia, Lituania, Carelia, Besarabia y la parte septentrional de Bucovina. Los pactos de no agresión impuestos por la URSS a los Países Bálticos le dieron el derecho a estacionar tropas en dichos territorios.

3.5.1 La Guerra Ruso-finesa

A finales de 1939 el gobierno soviético exigió a Finlandia la cesión del istmo de Carelia, en la costa finesa del golfo de Finlandia y al noreste de Leningrado (actual San Petersburgo), para poder establecer allí una base naval. El gobierno finlandés rechazó las exigencias soviéticas, lo que originó la no declarada formalmente Guerra Ruso-finesa, iniciada el 30 de noviembre de 1939 al invadir la URSS el territorio finlandés.

A pesar de una valerosa pero inútil resistencia, los finlandeses fueron vencidos por las tropas soviéticas, muy superiores en número. La guerra acabó el 12 de marzo de 1940. Según los

Tema 5 El socialismo 49

Page 50: Socialismo / Ciencias Políticas

acuerdos del tratado de paz consiguiente, la URSS se hizo con los territorios del istmo de Carelia y el puerto de Viborg, además de obtener otros territorios estratégicos y compensaciones económicas.

3.5.2 Expansión en el Báltico y en los Balcanes

La expansión soviética continuó durante 1940. Entre el 15 y 16 de junio, la URSS exigió el establecimiento de gobiernos prosoviéticos en los Países Bálticos, es decir, Lituania, Estonia y Letonia, así como el libre paso de las tropas soviéticas por sus respectivos territorios. Sin esperar respuesta a tales exigencias, el Ejército Rojo ocupó dichos estados. La URSS impuso gobiernos propicios y reprimió a todos los elementos antisoviéticos. Los tres estados quedaron anexionados a la URSS por decretos promulgados por el Soviet Supremo entre el 1 y el 8 de agosto de ese año.

Al mismo tiempo, la URSS dirigió sus objetivos hacia la península de los Balcanes. Exigió a Rumania la devolución de Besarabia, territorio que aquel país había anexionado a costa de la RSFSR en 1918, y la entrega del norte de Bucovina. Rumania accedió a finales de junio de 1940. Los territorios cedidos pasaron a formar parte dos meses más tarde de la República Socialista Soviética de Moldavia. A finales de ese año, los alemanes impusieron en Rumania un gobierno títere y garantizaron la frontera rumano-soviética.

La URSS, recelosa aún de las intenciones alemanas, tenía interés en poner fin a las hostilidades con Japón. El 13 de abril de 1941 los dos países firmaron un pacto de neutralidad valedero por cinco años.

3.5.3 La invasión alemana

El 22 de junio de 1941 Alemania invadió la URSS, sorprendiendo a Stalin, que se había negado a creer en la inminencia de una ofensiva alemana. Italia y Rumania declararon la guerra a la URSS ese mismo día. De forma instantánea se transformaron todas las alianzas políticas y militares internacionales y la guerra comenzó a adquirir dimensiones mundiales. Alemania se enfrentaba desde ese momento a sus enemigos en el este y en el oeste, como ocurrió durante la I Guerra Mundial. Como quiera que Finlandia, Hungría, Albania y otros estados satélites de las potencias del Eje declararon también la guerra a la URSS, Gran Bretaña y Estados Unidos se comprometieron a ampliar su ayuda al gobierno soviético. El programa estadounidense, fundamentado en la Ley de Préstamo y Arriendo, que ya había sido aplicada desde 1940 para ayudar a los británicos, proporcionó a la URSS unos 12 millones de dólares en pertrechos y alimentos. Tras la entrada de Estados Unidos en la guerra (diciembre de 1941) las tres potencias se aliaron militarmente.

En enero de 1942, cuatro meses después de que se hubiera comprometido a aceptar los principios de la Carta del Atlántico, el régimen soviético y otros 25 gobiernos de los países aliados firmaron una declaración por la que se adherían formalmente al programa y a los objetivos de dicho documento y se comprometían a cooperar en la guerra contra las potencias del Eje.

El ataque alemán contra la URSS se desplegó desde el océano Glacial Ártico hasta el mar Negro. Durante el resto del verano y hasta finales de 1941, las tropas alemanas avanzaron por el interior del país y llegaron a las puertas de Leningrado y Moscú y a Ucrania. Puesto que el Ejército Rojo se tambaleaba ante los ataques alemanes, Stalin inició el traslado de las plantas industriales y sus obreros, que estaban al alcance del enemigo, más allá de los montes Urales. Gran parte de lo que no pudo ser trasladado fue destruido, siguiendo una política de tierra quemada.

Tema 5 El socialismo 50

Page 51: Socialismo / Ciencias Políticas

Durante algún tiempo pareció que el rápido ataque alemán iba a triunfar, puesto que millones de soldados soviéticos fueron cercados y aniquilados o capturados. En los Países Bálticos, Bielorrusia y Ucrania los invasores encontraron una amistosa recepción por parte de quienes habían sufrido el estalinismo. Sin embargo, las atrocidades cometidas por los alemanes en su avance multiplicaron la resistencia soviética. El avance hacia Leningrado quedó detenido en septiembre de 1941, pero la ciudad estuvo sitiada hasta enero de 1944. Las bajas producidas durante el asedio superaron la cifra de 1.250.000 personas. En los primeros días de 1942, Moscú se vio liberada definitivamente del cerco germano.

3.5.4 La batalla de Stalingrado

El avance de las tropas soviéticas En la batalla de Stalingrado, uno de los enfrentamientos épicos de la II Guerra Mundial, los rusos frenaron el avance de los alemanes en el frente oriental con dos unidades acorazadas situadas al oeste y al sur de la ciudad. Tras varias semanas de lucha encarnizada con bajísimas temperaturas, el VI Ejército alemán, dirigido por el general Friedrich Paulus, se rindió. Los alemanes perdieron 200.000 hombres y tuvieron que retirarse a la línea del Cáucaso, de la que habían partido en el verano de 1942. Culver Pictures En el sur, los alemanes tuvieron más éxito. Conquistaron toda Ucrania y presionaron hacia el río Volga para separar Moscú y Leningrado del Cáucaso y del suroeste de Asia, pero fueron finalmente detenidos y derrotados en la épica batalla de Stalingrado, que duró desde agosto de 1942 hasta febrero de 1943 y cuyas consecuencias supusieron un punto de inflexión en el curso de la guerra. A partir de ese momento, los alemanes fueron desplazados constantemente hacia el oeste. En la primavera y verano de 1944, Ucrania y los Países Bálticos habían sido liberados. A finales de agosto, los ejércitos soviéticos ya combatían en los territorios polaco y rumano. El 22 de abril de 1945 el Ejército Rojo entró en la periferia de Berlín. Tres días después las tropas rusas y estadounidenses se encontraron en el río Elba. El 8 de mayo de 1945 acabó la guerra en Europa.

La defensa de Stalingrado La invasión del Ejército alemán prácticamente había provocado la derrota soviética. Pero en julio de 1942, Iósiv Stalin dio esta orden: "Ni un paso atrás". Los soviéticos y los alemanes combatieron en las ruinas de Stalingrado, que aparecen en la foto, en una encarnizada lucha por la ciudad que duró cinco meses. Archive Photos Tres meses más tarde, según un tratado secreto, la URSS declaró la guerra a Japón. Tras una serie de rápidos movimientos, el Ejército soviético, que no encontró más que una débil resistencia japonesa, ocupó gran parte de Dongbei Pingyuan (Manchuria), Corea del Norte, las islas Kuriles y la parte meridional de la isla de Sajalín, que habían estado hasta entonces en poder de los japoneses. Por estas acciones, la URSS reclamó su parte en la definitiva y poco posterior victoria aliada sobre Japón.

3.5.5 Acuerdos de posguerra

Los 'Tres Grandes' en Teherán De izquierda a derecha, el líder soviético Iósiv Stalin, el presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt y el primer ministro británico sir Winston Churchill reunidos en Teherán en 1943 para elaborar la estrategia militar y la política europea de la posguerra, en el momento culminante de la alianza entre el Este y el Oeste. Se decidió invadir Francia en 1944, pese a la oposición de Churchill.UPI/THE BETTMANN ARCHIVE Ya a finales de la guerra, la URSS era reconocida como una de las grandes potencias mundiales. Stalin había participado junto a los jefes de gobierno de Estados Unidos y Gran Bretaña en las conferencias de Teherán (1943), Yalta y Potsdam (ambas celebradas en 1945), para decidir la estrategia política y militar general de la guerra y establecer una política común sobre Europa en la posguerra. La URSS también desempeñó un importante papel en las conferencias internacionales previas a la creación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Tema 5 El socialismo 51

Page 52: Socialismo / Ciencias Políticas

En lugar de establecer inmediatamente un tratado con una Alemania derrotada y desorganizada, las potencias vencedoras crearon temporalmente cuatro zonas de ocupación. La zona oriental fue asignada a la URSS. Berlín, que se encontraba dentro de la zona soviética, fue a su vez dividida en cuatro sectores, de los cuales el oriental acabó por ser también asignado a los soviéticos. Las zonas ocupadas fueron gobernadas como partes de un solo país, con un comercio libre entre cada una de ellas. El territorio alemán situado al este de una línea formada por los ríos Oder y Neisse de Lausitz (la llamada línea Oder-Neisse) pasó a ser asignado a Polonia en espera de alcanzar un acuerdo definitivo. La parte septentrional de Prusia Oriental fue entregada a la URSS. Los soviéticos establecieron, sin embargo, su propio régimen en las zonas que les fueron asignadas y en 1947 ya habían levantado el que dio en llamarse telón de acero, a fin de separar Europa oriental y algunas zonas de Europa central de la Europa occidental. La URSS, por haber sufrido enormes pérdidas, exigió ingentes reparaciones bajo la forma de industrias alemanas desmanteladas e instaladas en la Unión Soviética, así como parte de la producción industrial germana. También se benefició de los trabajos forzosos de millones de prisioneros de guerra alemanes.

3.6 El inicio de la Guerra fría

Ejército Rojo El Ejército Rojo fue creado en 1918 con el objeto de proteger las fronteras y los logros revolucionarios del Estado que habría de denominarse Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Durante la II Guerra Mundial, llegó a estar compuesto por 12,5 millones de soldados movilizados. Su función cambió tras el final del conflicto y pasó a ser un elemento fundamental del mantenimiento del equilibrio de bloques propio de la Guerra fría.Ilkka Ranta/Lehtikuva Oy/Woodfin Camp and Associates, Inc. El gobierno soviético afrontó los problemas de la posguerra bajo el prisma de una política expansionista destinada a aumentar los territorios controlados por gobiernos comunistas leales a la URSS, a fortalecer su seguridad en previsión de futuras agresiones y a utilizar el movimiento comunista internacional como instrumento para incorporar a otros países a la órbita soviética.

La nueva política soviética pronto vulneró los acuerdos adoptados durante la guerra. En la Conferencia de Potsdam, celebrada en julio y agosto de 1945, tras la victoria en Europa, el gobierno soviético formuló unas demandas manifiestamente exageradas para sus auténticas necesidades de seguridad nacional. Dichas peticiones fueron rechazadas por Estados Unidos y Gran Bretaña con el fin de evitar la creación de una gran esfera de influencia soviética. A pesar de la creciente acritud entre los antiguos aliados, en Potsdam se alcanzaron diversos acuerdos sobre las directrices generales de la política de ocupación, sobre las indemnizaciones de guerra y sobre las provisionales fronteras germano-polacas y polaco-soviéticas.

Utilizando la amenaza de su poderío militar, la URSS intentó aplicar un progresivo control sobre las estructuras políticas, económicas y sociales de los territorios fronterizos ocupados por ella. La política exterior soviética generó un conflicto político, diplomático y económico de dimensión mundial con Estados Unidos conocido como Guerra fría.

3.6.1 Conquista del poder

Países en la órbita de la URSS Al concluir la II Guerra Mundial (1945), los comunistas tomaron el poder en varios países de la Europa del Este que habían sido ocupados por fuerzas soviéticas, siguiendo el peculiar nuevo orden internacional surgido tras el conflicto. Ocho de esas repúblicas pasaron a formar parte de la denominada órbita soviética, en tanto que, en el caso de Besarabia, Letonia, Estonia, Lituania y la Polonia oriental fueron incluidas directamente como parte de la URSS.© Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos. Ampliar

Tema 5 El socialismo 52

Page 53: Socialismo / Ciencias Políticas

En los países donde la influencia de la URSS era predominante (Polonia, Hungría, Rumania, Bulgaria, Albania, Yugoslavia y la República Democrática de Alemania) la estructura política y económica fue gradualmente reorganizada. Los grupos políticos opositores fueron aislados y eliminados; se expropiaron grandes posesiones de tierra y, con la excepción de Polonia, se impuso la colectivización agraria y la nacionalización de la industria.

Para lograr el dominio político, la URSS aplicó una estrategia consistente en la colaboración inicial con gobiernos de coalición en los que los comunistas, a pesar de ser minoritarios, controlaban los ministerios a cuyo cargo estaban la policía, las Fuerzas Armadas y la gestión de la política económica. A comienzos de 1947 comenzaron a implantarse en Europa bajo la influencia soviética los denominados regímenes calificados como democracias populares, bajo los cuales los comunistas ejercieron un control autoritario del Estado. En 1948, Checoslovaquia, país que no estaba situado directamente en la órbita soviética, cayó bajo el control de la URSS debido a la labor de los comunistas en el gobierno de coalición.

Yugoslavia hizo frente ese mismo año a los intentos soviéticos por lograr el control del país, que sobrevivió a las enormes presiones sólo gracias a la actitud de rechazo al control soviético de su principal dirigente, Tito, y a la ayuda de las potencias democráticas occidentales. Como consecuencia, el Partido Comunista Yugoslavo fue expulsado en 1948 de la Oficina de Información Comunista (Kominform) y Tito se convirtió durante los primeros años de la Guerra fría en uno de los más destacados portavoces de la que habría de ser la Organización de Países No-Alineados. Esta situación general alarmó a Estados Unidos y a Europa occidental y condujo a la creación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en abril de 1949. La URSS, por su parte, había fundado tres meses antes el Consejo de Ayuda Mutua Económica (COMECON) para coordinar la actividad económica de los estados bajo su control: los miembros fundadores de dicho organismo fueron, además de la propia URSS, Bulgaria, Checoslovaquia, Hungría, Polonia y Rumania, si bien pronto se añadieron la República Democrática de Alemania y Albania.

3.6.2 Relaciones con China

Las relaciones con China durante este periodo fueron conciliatorias. En agosto de 1945 los gobiernos chino y soviético firmaron un tratado de amistad y de alianza por el que la URSS concedía ayuda económica y militar, según lo convenido anteriormente con los aliados. Aunque la URSS se comprometió a respetar la soberanía china sobre Dongbei Pingyuan (Manchuria), las autoridades soviéticas despojaron a esta región de prácticamente toda su maquinaria industrial y resistieron activamente los intentos del gobierno chino de restaurar su autoridad. Mientras tanto, las armas requisadas a los soldados japoneses hechos prisioneros fueron entregadas a los comunistas chinos. Cuando el Ejército soviético se retiró, toda Dongbei Pingyuan (Manchuria) cayó en manos de los comunistas chinos. El posterior triunfo de éstos en 1949 alteró temporalmente todo el equilibrio de poder en Asia en favor de la URSS.

4 LUCHA POR EL LIDERAZGO

Stalin mantuvo un control absoluto del Partido Comunista y del Estado soviético hasta su muerte, que tuvo lugar en marzo de 1953, momento en el que una nueva generación de políticos pudo acceder al poder. Gueorgui Maximiliánovich Malenkov fue nombrado secretario general del PCUS y jefe del Estado; Lavrenti P. Beria, vicepresidente del Consejo de Ministros; Kliment E. Voroshílov, presidente del Presidium del Soviet Supremo. Nikita S. Jruschov sucedió a Malenkov como secretario del Comité Central del PCUS ese mismo año. Todos ellos, junto con otros dos viceprimeros ministros, Nikolái Alexándrovich Bulganin y Lázar M. Kaganóvich, se convirtieron en los auténticos dirigentes del país.

No obstante, de inmediato surgió la lucha por el poder. Beria fue pronto destituido por "actividades criminales y contra el partido". En diciembre de 1953 se anunció que había sido

Tema 5 El socialismo 53

Page 54: Socialismo / Ciencias Políticas

juzgado por conspiración, hallado culpable y fusilado. Otros destacados funcionarios, próximos a Beria, resultaron también ejecutados un año más tarde. En 1955, Malenkov fue obligado a dimitir y Bulganin le sucedió en el cargo de primer ministro.

4.1 Proceso de desestalinización

En una sorprendente maniobra realizada en el XX Congreso del PCUS (celebrado en Moscú entre el 14 y 25 de febrero de 1956), diversos líderes comunistas denunciaron la política de Stalin y repudiaron gran parte de lo que representó, en lo que ha sido considerado el punto culminante del proceso de desestalinización. Jruschov fue quien dirigió el más violento ataque a Stalin, al que condenó por haber sustituido un órgano colegiado de poder, propio del marxismo, por un culto a su personalidad que había acarreado unas consecuencias desastrosas para la URSS. Acusó a Stalin de ser culpable de "arrestos y deportaciones masivas de miles de personas y de ejecuciones sin juicios de honestos e inocentes comunistas". También le acusó de no haber preparado una defensa adecuada contra la invasión alemana en 1941 y de mala conducción de la guerra, que costó la muerte innecesaria de "cientos de miles de nuestros soldados"; de "sospechar de manera enfermiza" de sus colegas y de que "evidentemente tenía planes para eliminar a todos los antiguos miembros del Politburó"; así como de ser responsable de la ruptura con Yugoslavia y poner en peligro las "relaciones pacíficas con otras naciones".

Los ataques contra Stalin conmocionaron profundamente a muchos comunistas en la URSS y en todo el mundo. En la campaña de desestalinización fueron retirados los retratos de Stalin y rebautizadas las localidades que tenían su nombre, reescribiéndose los libros de texto a fin de revisar su reputación.

4.2 El ascenso de Jruschov

Nikita Serguéievich Jruschov Jruschov pasó a ser el principal dirigente de la Unión Soviética (URSS) en 1958. Aunque no descuidó el poder militar soviético abogó por métodos pacíficos para vencer al capitalismo. Fue destituido de sus cargos en octubre de 1964.UPI/THE BETTMANN ARCHIVE La lucha por el poder concluyó finalmente con el triunfo de Jruschov en 1957. Logró expulsar de sus cargos a Molótov, Malenkov, Kaganóvich y otros dirigentes. Cuando Bulganin se vio obligado a dimitir en 1958, Jruschov obtuvo la presidencia del gobierno, se mantuvo al frente de la secretaría del partido y todo señalaba que el liderazgo colectivo había acabado. Durante el XXI Congreso del PCUS (1961) se manifestó un nuevo culto a su personalidad. Repitió algunas acciones de las que había acusado al anterior dictador; retiró del mausoleo de la plaza Roja moscovita el cuerpo de Stalin, que se encontraba detrás del de Lenin, y pidió la expulsión del partido de aquellos estalinistas que se le habían opuesto en 1957. En los años siguientes la campaña desestalinizadora se suavizó y fue reconocida la participación de Stalin en la creación del Partido Comunista y en la victoria en la II Guerra Mundial.

4.3 La caída de Jruschov

Leonid Brezhnev El dirigente político soviético Leonid Brezhnev emergió de las filas del Partido Comunista de Ucrania. Pasó a ser líder de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1964, después de abanderar la expulsión de Nikita Jruschov. Se le conoce principalmente por la ‘doctrina Brezhnev’, según la cual la URSS intervendría en cualquier país del bloque soviético en el que el comunismo se viera amenazado. En 1968 dirigió la invasión de Checoslovaquia, que había iniciado una reforma política.THE BETTMANN ARCHIVE Leonid Brezhnev, que en 1960 había sustituido a Voroshílov como presidente del Presidium del Soviet Supremo, fue asignado en 1963 al secretariado del PCUS. En julio de 1964, a propuesta de Jruschov, se le relevó de la presidencia del Soviet Supremo para que se dedicara en exclusiva

Tema 5 El socialismo 54

Page 55: Socialismo / Ciencias Políticas

al partido. Anastas I. Mikoyán, veterano funcionario del PCUS, fue designado su sucesor al frente de dicho organismo. En el otoño de ese año, Jruschov se encontraba en el momento cumbre de su actividad política tras viajar extensamente por la URSS y por el extranjero; sin embargo, fue destituido en el mes de octubre, tanto de la jefatura del gobierno como de la secretaría general del partido. Las posibles razones para su expulsión fueron el progreso insatisfactorio de la agricultura y de la industria y los desastres habidos en política exterior, como la crisis de los misiles de Cuba de 1962 y el fracaso de los esfuerzos soviéticos (desde 1959) por apoderarse de Berlín. Se produjo cierta campaña de descrédito del líder depuesto y algunos de sus más estrechos colaboradores también fueron destituidos.

4.4 Brezhnev obtiene el poder

Siguiendo el precedente establecido tras la muerte de Stalin para la sucesión, se dividieron los cargos de poder. En 1964, Brezhnev fue nombrado secretario general del PCUS y Alexéi Nikoláievich Kosiguin primer ministro (presidente del Consejo de Ministros). Durante los siguientes cinco años ambos personajes trabajaron aparentemente juntos, como un equipo. Nikolái V. Podgorny, desde su cargo de presidente del Presidium del Soviet Supremo, ostentó la jefatura del Estado entre 1965 y 1977. No obstante, desde la década de 1970 y a pesar de mantenerse la apariencia de un liderazgo compartido, Brezhnev destacaba por encima del resto de personalidades políticas. En 1976 fue reelegido secretario general del PCUS y también se convirtió en jefe del Estado en 1977, en sustitución de Podgorny. En este mismo año se promulgó una nueva Constitución. Brezhnev murió a finales de 1982 y rápidamente fue sucedido en la secretaría general del partido por Yuri Andropov, antiguo jefe de la policía secreta soviética (KGB).

5 DESARROLLO ECONÓMICO

El desarrollo económico soviético tras la II Guerra Mundial continuó basado en la planificación estatal, que se manifestó en sucesivos planes quinquenales y en un plan septenal (1959-1965), aunque en ciertas ocasiones éstos no se anunciaron en su totalidad hasta que llevaron uno o dos años en funcionamiento.

5.1 Agricultura

La agricultura colectivizada continuó ocupando la actividad económica de gran parte de la población. Las explotaciones agrícolas surgidas tras el triunfo de la Revolución de 1917 fueron esencialmente de dos tipos: de un lado, se encontraban los denominados koljozes (en singular, koljoz), desarrollados especialmente a partir de la década de 1930, cuya esencia se basaba en la propiedad colectiva de los medios de producción; en tanto que, al mismo tiempo, existieron los llamados sovjozes (en singular, sovjoz), de propiedad estatal y máxima expresión del sistema de propiedad socialista.

Jruschov desarrolló dos grandes planes para incrementar la producción de grano, poniendo en cultivo tierras marginales, especialmente en Kazajstán (Programa de Tierras Vírgenes e Improductivas) y cultivando maíz. Ninguno de los dos lograron un éxito completo. En 1958, gran parte del control de la producción agrícola pasó de los organismos gubernamentales a 39 consejos de zona. Los agricultores introdujeron la maquinaria, que previamente habían alquilado, y el gobierno pagó a precios más elevados la cesión obligatoria de las cosechas. Las malas condiciones climatológicas fueron en gran medida responsables de las pobres cosechas de grano en los años 1963, 1965, 1969, 1972 y 1975. Otras causas fueron la aparente ineficacia de la agricultura colectivizada y la escasez de mano de obra, motivada por la migración de la población rural joven a las ciudades. La deficiente producción de grano hundió la tasa de crecimiento económico y aumentó considerablemente la deuda exterior, ya que para evitar una hambruna el gobierno soviético tuvo que importar grandes cantidades de trigo procedente de Estados Unidos y Canadá.

Tema 5 El socialismo 55

Page 56: Socialismo / Ciencias Políticas

Las autoridades soviéticas tomaron la iniciativa para combatir el problema; se decidió pagar un salario mensual a los agricultores; ofrecer nuevos incentivos por el aumento de productividad; adoptar nuevos métodos de gestión más eficaces y generalizar el uso de fertilizantes, de maquinaria y de sistemas de irrigación. Esta política a largo plazo supuso la reactivación de un plan ideado por Jruschov para trasladar a los habitantes de un gran número de pequeños pueblos y reubicarlos en grandes centros agrícolas. Todas estas medidas, acompañadas de unas idóneas condiciones climatológicas, dieron como resultado las mayores cosechas soviéticas de grano en los años 1973, 1974 y 1976. La irrigación y la reforestación hicieron que incluso las tierras marginales de Kazajstán fueran notablemente productivas.

5.2 Industria

La rápida industrialización lograda en la URSS gracias a los planes quinquenales de Stalin convirtió al país en la segunda superpotencia industrial y militar del mundo. Sin embargo, la producción de bienes de consumo había quedado rezagada. Se ha estimado que el total de la producción industrial de 1957 era 33 veces superior a la de 1913, pero el incremento de los productos de consumo fue sólo 13 veces mayor, dato que hay que comparar con el incremento de la producción de la industria pesada: 74 veces superior a la de 1913. El régimen de Jruschov prometió un aumento de los bienes de consumo, pero apenas lo logró. Las agrupaciones industriales se consolidaron en 1957 y de nuevo en 1962. También se fusionaron diversas empresas industriales. En torno a 1964 la atención se centró en las industrias de fertilizantes, de plásticos y de caucho.

5.3 Administración y gestión

Jevséi Grigórievich Liberman y otros economistas soviéticos propugnaron mediada la década de 1960 la introducción de ciertos elementos capitalistas dentro de la estructura económica marxista como medio para elevar el nivel de la producción industrial; en especial centraron sus teorías en la necesaria presencia del beneficio como estímulo para mejorar los rendimientos. El primer ministro Kosiguin aceptó esas ideas, lo que suponía admitir el fracaso de los métodos de gestión vigentes hasta entonces y que habían reprimido la capacidad productiva. Los principios correctos del modelo económico socialista —señalaron estos economistas— debían consistir en asociar una dirección general centralizada con la contabilidad de costos de cada empresa, mantener una producción basada en encargos y establecer incentivos salariales y otras prácticas capitalistas.

En un proyecto piloto aplicado desde julio de 1965, 400 empresas textiles y de calzado basaron su producción en encargos recibidos en vez de en las cuotas impuestas por el gobierno. En octubre, el Soviet Supremo promulgó una legislación para aplicar el que pasó a ser conocido como Plan Liberman en otros sectores industriales, en la agricultura, en los transportes, en la construcción y en las comunicaciones. El capital humano sería asignado a cada empresa y el órgano de gestión determinaría su utilización. También se asignaría a cada empresa una nómina total, pero la administración podría pagar por tiempo trabajado o por trabajo a destajo y tendría la facultad de conceder primas según los beneficios. A mediados de 1969, las empresas que proporcionaron un tercio del total de la producción industrial estaban operando con este nuevo sistema. Sin embargo, los acontecimientos de la década de 1970 originaron el declive del Plan Liberman.

5.4 Construcción

Algunos sectores industriales quedaron considerablemente rezagados, especialmente el de la construcción. La migración de la población rural a las ciudades, pareja al proceso de industrialización acelerada, originó escasez de viviendas. Se imitaron los nuevos sistemas occidentales, no sólo de paredes prefabricadas sino de estructuras completas, pero las industrias

Tema 5 El socialismo 56

Page 57: Socialismo / Ciencias Políticas

necesarias para fabricar tales productos no se crearon con tanta rapidez como se había proyectado, y raramente se cumplieron los objetivos previstos para la construcción de viviendas. Además, las que se edificaron eran de mala calidad y se deterioraron rápidamente.

5.5 Minerales

La explotación de los recursos de Siberia utilizando mano de obra forzosa fue de gran importancia para el crecimiento de la economía soviética. La apertura de nuevos y extensos campos petrolíferos y la explotación de grandes yacimientos de gas natural en Tiumen (Siberia occidental) aumentaron los recursos energéticos de la Unión Soviética. Además se descubrieron minas de cobre y carbón en la zona oriental.

6 DESARROLLO CULTURAL

El teatro Bolshói de Moscú El teatro Bolshói domina la plaza Sverdlova de Moscú. Ocupa el lugar de un antiguo teatro que ardió en 1853. Conserva el gran pórtico de ocho columnas coronado por el carro de Apolo perteneciente al edificio anterior. Este recinto ha sido escenario de actividades políticas así como de eventos artísticos.Robert Harding Picture Library Desde mediados del siglo XX, el gobierno soviético intentó, dentro de estrictos límites ideológicos, que todos los ciudadanos de las diversas nacionalidades de la URSS participaran en la cultura de una sociedad comunista homogénea, conservando al mismo tiempo las tradiciones específicas de cada pueblo o nacionalidad. Todos aquellos que siguieran la línea oficialista del PCUS tenían a su disposición una enseñanza libre bajo la forma de escuelas matutinas, de clases vespertinas, de universidades populares voluntarias y de cursos por correspondencia. Se hicieron especiales esfuerzos para llegar a zonas aisladas donde habían sido escasas las oportunidades de recibir algún tipo de educación. La enseñanza se impartía en lengua rusa o en alguna de las muchas otras habladas en la URSS. Se proporcionaron a los pueblos iletrados sus propios alfabetos, diccionarios y gramáticas. Como resultado de esta política, el analfabetismo (que afectaba al 70% de la población antes de la Revolución) fue erradicado.

Los avances en el campo de las ciencias naturales fueron sobresalientes. En algunas áreas de la química y de la física, por ejemplo, los soviéticos aventajaron al resto de los países. Se prestó gran atención a la energía nuclear y a la astronáutica. Los primeros satélites en la órbita terrestre, los Sputnik 1 y 2, fueron lanzados en 1957. El astronauta soviético Yuri A. Gagarin protagonizó en 1961 el primer vuelo espacial pilotado que trazó una órbita alrededor de la Tierra. A inicios de la década de 1980 la tecnología soviética había producido más de 30 vehículos espaciales tripulados y la URSS había lanzado más de 1.100 satélites espaciales.

Las bellas artes no fueron menos relevantes. Se fundaron sindicatos para escritores, pintores y otros artistas. Se construyeron teatros y salas de conciertos. Las orquestas y compañías teatrales y de danza hicieron giras por todo el mundo. Los clubes locales y los palacios de la cultura popularizaron y generalizaron diversos aspectos culturales entre la población. El gobierno promovió grupos de aficionados. No obstante, los disidentes y sus familiares fueron perseguidos duramente y a veces deportados a Siberia o ingresados en hospitales psiquiátricos.

6.1 Control estatal

El gobierno insistió en que todos los aspectos de la cultura soviética debían fomentar la consecución de una sociedad comunista. Esta premisa no supuso un serio condicionante para la ciencia, aunque la actitud vacilante del gobierno hacia el ingeniero agrónomo Trofim D. Lysenko mostró cómo los valores políticos pueden afectar a las concepciones científicas.

La influencia comunista tendió, en cambio, a obstaculizar el desarrollo de las ciencias sociales, puesto que éstas debían ceñirse y quedar limitadas en el ámbito creativo a la ortodoxia

Tema 5 El socialismo 57

Page 58: Socialismo / Ciencias Políticas

ideológica. La actitud soviética hacia la música fue más ambigua. Los compositores Serguéi S. Prokófiev y Dmitri D. Shostakóvich sólo en algunas ocasiones gozaron del favor oficial. A partir de la mitad de la década de 1960 el jazz y la música dodecafónica empezaron a ser consideradas. Las bellas artes y la literatura sufrieron graves limitaciones con el régimen soviético, al exigir éste la adhesión de dichas ramas artísticas al realismo socialista, exaltación optimista y secular del pueblo soviético, dentro de un estilo que satisficiera el gusto popular. Durante la década de 1920 el arte modernista ruso conoció una edad de oro, pero a instancias de Stalin fueron prohibidas la literatura de vanguardia y las obras pictóricas de Marc Chagall, Kazimir Maliévich y Wassily Kandinsky, entre otros. El Estado garantizó en teoría la tolerancia religiosa pero en la práctica era ateo y rechazó la existencia de una religión organizada. Los servicios religiosos estaban restringidos y los creyentes, además de ser relegados en su promoción profesional y educativa, eran sometidos a propaganda antirreligiosa y, en ocasiones, detenidos.

6.2 Los disidentes

Alexandr Solzhenitsin Esta fotografía muestra el momento en el que el escritor de origen ruso Alexandr Solzhenitsin recibe el doctorado Honoris Causa por la Universidad de Harvard en 1978. El autor pasó largos años de prisión y exilio en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) debido a sus opiniones antiestalinistas y antisoviéticas; después fue expulsado de su país. En sus relatos y novelas, describe la realidad del sistema penal soviético y la vida en la URSS tanto durante la dictadura de Stalin como posteriormente.UPI/THE BETTMANN ARCHIVE Una pequeña pero persistente corriente de intelectuales, artistas, creyentes y nacionalistas disidentes distribuyeron clandestinamente literatura prohibida por la censura a través de escritos o incluso microfilms, que recibió en conjunto la denominación de samizdat, y llevaron a cabo manifestaciones para conseguir una mayor libertad. Durante el proceso de desestalinización, entre los años 1955 y 1964, se produjo un proceso de deshielo del control gubernamental al que siguió una política mucho más represiva, especialmente tras los intentos de liberalización en Checoslovaquia durante la primavera de Praga, en 1968.

En la URSS, cientos de disidentes fueron cesados, detenidos, enviados a instituciones psiquiátricas o a campos de trabajos forzados, acusados de haber cometido acciones consideradas subversivas contra el régimen. Los más distinguidos entre estos abiertos opositores fueron el escritor Alexandr Isáievich Solzhenitsin y el físico nuclear Andréi D. Sajárov, ambos galardonados con el Premio Nobel, el primero con el de Literatura, en 1970, y el segundo, con el de la Paz, cinco años más tarde. A Solzhenitsin se le prohibió la publicación de sus obras en la URSS en 1968, y en 1974 fue expulsado por la fuerza del país. Sajárov, por su parte, gracias a su notable reputación científica, pudo eludir durante bastante tiempo medidas represivas contra su persona pero, tras denunciar la intervención soviética en Afganistán en diciembre de 1979, fue aislado al mes siguiente con su deportación a Gorki (actual Nizni Nóvgorod), donde fue puesto bajo arresto domiciliario, situación en la que permaneció hasta diciembre de 1986, fecha en la que pudo regresar a Moscú.

Muchos intelectuales disidentes eran judíos que quisieron emigrar a Israel pero que se veían impedidos a hacerlo por la indisposición de las autoridades soviéticas a perder ciudadanos formados a costa de fuertes inversiones. Sin embargo, se permitió a otros miles de judíos abandonar el país. Entre los disidentes religiosos se encontraban los testigos de Jehová, los católicos lituanos y los baptistas. Entre los disidentes nacionalistas más destacados cabe mencionar a los tártaros de Crimea y a los alemanes trasladados a Siberia durante la II Guerra Mundial, que deseaban regresar a su país de origen.

7 RELACIONES INTERNACIONALES

Tema 5 El socialismo 58

Page 59: Socialismo / Ciencias Políticas

Tras la II Guerra Mundial, la URSS estableció estrechas relaciones con sus denominados países satélites de Europa del Este. A partir de 1949, el COMECON intentó la integración económica de sus miembros en un bloque económico regional. Según esta planificación, cada país produciría aquello para lo que estuviera más preparado y obtendría de los demás países aquellos productos de los que careciera. Sin embargo, surgió resistencia a este sistema supranacional, especialmente por parte de Rumania, que rechazó la condición que se le asignó como país básicamente agrícola y productor de petróleo. A pesar de tales descontentos, se establecieron nuevos vínculos económicos, en los que se incluyó la creación de un Banco de Colaboración Económica. Los oleoductos y gasoductos que transportaban el petróleo y gas respectivamente desde la región de los montes Urales y del río Volga hasta Polonia, Checoslovaquia, Hungría y la República Democrática de Alemania reforzaron la dependencia económica de estos países con respecto a la URSS.

7.1 Relaciones con los países satélites

Pacto de Varsovia El Pacto de Varsovia fue el nombre que recibió un tratado de cooperación firmado por ocho estados europeos pertenecientes al bloque soviético (el grupo de países en la órbita de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, URSS) el 14 de mayo de 1955, en la ciudad polaca homónima. La organización resultante del acuerdo era una alianza militar dominada por la URSS y formada inicialmente por los estados firmantes: Albania (que la abandonó en 1968), Bulgaria, Checoslovaquia, República Democrática de Alemania (que se separó de la misma en 1990, tras su reunificación con la República Federal de Alemania), Hungría, Polonia, Rumania y la propia URSS. En julio de 1991, el Pacto de Varsovia dejó de existir. La fotografía muestra una reunión de su Comité Político Consultivo, en la capital polaca.Archive Photos Yugoslavia, que inmediatamente después de finalizar la II Guerra Mundial parecía interesada en colaborar con la URSS, pronto rompió de forma brusca con ésta al negarse a aceptar la dirección impuesta desde Moscú. En los otros estados que conformaban el área de influencia soviética, el dominio de la URSS fue incrementándose hasta 1955: en 1952 el 80% del comercio exterior soviético era mantenido con estos países. En 1954, la URSS otorgó un cierto grado de independencia económica a la República Democrática de Alemania, que quedó exenta de continuar pagando indemnizaciones en concepto de reparaciones de guerra, pero mantuvo un gran contingente de tropas soviéticas en su territorio. La creación del Pacto de Varsovia en 1955 como alianza militar que integraba a la URSS y sus países satélites fue la respuesta a la fundación de la OTAN y sirvió para fortalecer el control soviético sobre Europa del Este. Tras la muerte de Stalin en 1953, las relaciones con Yugoslavia mejoraron, pero volvieron a deteriorarse después de la invasión de Checoslovaquia en 1968. Desde 1961, la URSS perdió completamente la influencia sobre Albania, país que hasta 1978 mantuvo estrechas relaciones con China.

7.1.1 Las crisis polaca y húngara

El control soviético sobre su bloque de influencia se vio seriamente amenazado en 1956 debido al proceso de desestalinización. El descontento popular y las manifestaciones que tuvieron lugar ese año en Polonia fueron seguidas por un cambio forzoso del gobierno polaco, por la continuidad de la presencia "temporal" de las tropas soviéticas en el país, la cancelación de algunas deudas y la concesión de créditos adicionales.

La Revolución húngara de finales de ese mismo año adquirió características más graves. Las manifestaciones de obreros y estudiantes en favor de la liberalización del régimen comunista provocaron la intervención de las tropas soviéticas, que aplastaron brutalmente el movimiento, mataron a miles de personas, detuvieron a otras muchas e impusieron un gobierno presidido por János Kádár. La URSS fue condenada por numerosos países y por la ONU, pero tras esta actuación mantuvo durante largo tiempo un gran control sobre Hungría.

Tema 5 El socialismo 59

Page 60: Socialismo / Ciencias Políticas

7.1.2 La primavera de Praga

Tanques soviéticos en Praga En la primavera de 1968, el partido comunista checoslovaco propuso reformas radicales en el gobierno. La primavera de Praga se produjo cuando los reformistas comenzaron a liberalizar y democratizar el país y relajaron sus vínculos con la Unión Soviética. Los líderes soviéticos se sintieron amenazados por estos cambios, y el Kremlin envió a 650.000 soldados soviéticos, alemanes, polacos, húngaros y búlgaros para ocupar el país el 20 de agosto. Se detuvo y castigó a los reformistas, y Checoslovaquia volvió a ser un estado comunista dictatorial.UPI/THE BETTMANN ARCHIVE La crisis checoslovaca del verano de 1968 fue reflejo de la flexibilización del sistema soviético, revisionista desde 1960, y de la presión en el seno del Partido Comunista Checoslovaco para introducir cambios en la política económica. El partido, alarmado por el estancamiento económico, intentó establecer un socialismo de rostro humano. El descontento y el clamor en pro de reformas condujeron pacífica y gradualmente a la sustitución de Antonín Novotný como líder del partido y jefe del Estado por Alexander Dubcek y Ludvík Svoboda, ambos comunistas leales durante mucho tiempo a la URSS. Los dirigentes soviéticos se alarmaron por los alcances políticos de la llamada primavera de Praga, en especial por el fin de la censura y la posibilidad de que los checoslovacos entablaran relaciones comerciales más estrechas con los países occidentales. La URSS ejerció presiones de todo tipo y cuando todas esas medidas fracasaron, unos 600.000 soldados soviéticos y del Pacto de Varsovia (excepto de Rumania) invadieron y ocuparon Checoslovaquia en agosto de 1968. A pesar de la resistencia pasiva, unánime e impresionante, las fuerzas soviéticas se hicieron con el control del país. Dubcek fue destituido en abril de 1969 y todos los controles anteriores fueron restablecidos.

La represión del movimiento reformista en Checoslovaquia fue seguida por el reforzamiento de los controles en la propia URSS y sirvió para reafirmar su dominio sobre todos los países de la Europa del Este, excepto en Rumania, Yugoslavia y Albania. En cambio, debilitó a los partidos comunistas de los países no pertenecientes al bloque soviético, dividió al movimiento comunista internacional, alarmó a Occidente y retrasó todas las negociaciones internacionales sobre desarme. Desde el punto de vista soviético, mejoró su posición en el contexto europeo; al aceptar el statu quo territorial existente en Europa, la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa (de la cual surgiría en 1994 la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa), celebrada en la ciudad finlandesa de Helsinki en 1975, ratificó aparentemente el dominio soviético en Europa del Este. La URSS desempeñó un gran papel en la paralización, a comienzos de la década de 1980, del proceso que conducía en Polonia a la creación de sindicatos libres y hacia un régimen democrático.

7.2 Relaciones con la nueva China

En 1949, la URSS reconoció plenamente al gobierno comunista chino de Mao Zedong, se alió con él y comenzó a exigir que sustituyera en la ONU al gobierno nacionalista de Jiang Jieshi, establecido en Taiwan. Se firmó un tratado de 30 años de vigencia por el que se acordaba la concesión de créditos soviéticos a China al 1% de interés. Ambos países apoyaron a Corea del Norte durante la guerra de Corea, que tuvo lugar desde 1950 hasta 1953. A finales de la década de 1950 las relaciones aún parecían estrechas y el comercio soviético con China alcanzó un volumen de 2.000 millones de dólares anuales. No obstante, en la década siguiente las relaciones entre ambos países se deterioraron gradualmente. Surgieron desacuerdos ideológicos sobre la interpretación del marxismo, especialmente en lo relativo a los movimientos revolucionarios en países en vías de desarrollo. En realidad, los motivos profundos eran la antigua rivalidad y el temor mutuo de las dos potencias, cuyos líderes continuaban siendo enormemente nacionalistas y celosos guardianes de cada pulgada de sus territorios. Además, luchaban por el liderazgo del resto del mundo comunista.

Tema 5 El socialismo 60

Page 61: Socialismo / Ciencias Políticas

Esta rivalidad salió a la superficie cuando la URSS negó en 1959 ayuda a China para el desarrollo del poderío nuclear de esta última. Esta pugna se reflejó además en el resentimiento chino, que se hizo patente al manifestar este país que la URSS aún poseía territorios que habían sido considerados chinos con anterioridad a una serie de tratados firmados en 1858 y 1860. También era debida a los quizá inevitables conflictos entre dos países que compartían una larga frontera común en Dongbei Pingyuan (Manchuria). Al crecer en intensidad, el conflicto amenazó incluso con acabar en guerra entre ambos países. Los enfrentamientos entre unidades militares situadas en la frontera arrojaron nuevas sombras sobre la política general soviética. La visita del presidente estadounidense Richard Nixon a China en 1972 alarmó aún más a la URSS sobre la posibilidad de un realineamiento de potencias. A pesar de los esfuerzos soviéticos llevados a cabo tras la muerte de Mao Zedong en 1976 para suavizar las relaciones, la rivalidad chino-soviética aumentó. China animó a los países de Europa del Este a que buscaran un mayor grado de libertad, a que establecieran relaciones con la Comunidad Europea (la actual Unión Europea) y a que giraran hacia Occidente para obtener ayuda militar y económica. Las negociaciones chino-soviéticas para mejorar sus relaciones comenzaron a finales de 1979, fueron rotas a principios de 1980 y se reanudaron en 1982.

7.3 Relaciones con otras naciones asiáticas

La URSS reconoció en 1950 a las fuerzas comunistas vietnamitas de Ho Chi Minh. En 1954 participó en el establecimiento de los Acuerdos de Ginebra que dividieron al país en Vietnam del Norte y Vietnam del Sur y continuó apoyando al primero. A lo largo de la guerra de Vietnam, durante la década de 1960 y primeros años de la siguiente, la URSS y Estados Unidos incrementaron sus niveles de conflicto. Tras la victoria norvietnamita en 1975, la URSS mantuvo su apoyo a Vietnam en su lucha contra China.

Las relaciones con otros países asiáticos fueron conciliatorias pero también agresivas. El primer ministro Kosiguin rindió un importante servicio a la paz mundial en 1966 al mediar en una nueva fase del enfrentamiento entre la India y Pakistán por la región de Cachemira (la conocida como segunda Guerra Indo-paquistaní). Durante el tercer conflicto indo-paquistaní, que concluyó con la creación del Estado de Bangladesh en 1971, la URSS apoyó a la India, mientras que China y Estados Unidos tomaron partido por Pakistán. A pesar de mantener relaciones normales con Japón, nunca llegó a firmar un tratado de paz tras la II Guerra Mundial, ya que la URSS se negó a devolver a Japón las estratégicas islas Kuriles, ocupadas en 1945.

En diciembre de 1979, en un intento de apuntalar un gobierno marxista tambaleante, la URSS envió numerosas tropas que cruzaron la frontera de Afganistán, ocupando el país. En medio de la condena del resto del mundo, las tropas soviéticas tuvieron que combatir para aplastar la resistencia nacionalista y tomaron posiciones aparentemente para una larga temporada. Aunque la lucha continuó durante años, un nuevo Estado satélite asiático había entrado en la órbita soviética.

7.4 Penetración en África

Los intentos soviéticos por ejercer su influencia en África sufrieron dos notables contratiempos durante la década de 1960. El primer jefe de gobierno de la República Democrática del Congo (denominada Zaire desde 1971 hasta 1997), el prosoviético Patrice Lumumba, fue asesinado en una revuelta en 1961. En Ghana, el presidente Kwame Nkrumah y su gobierno comunista fueron derrocados en 1966 y los asesores soviéticos expulsados. Sin embargo, durante la década de 1970 la URSS con la ayuda de tropas cubanas logró colocar en el poder un gobierno prosoviético en Angola y ayudó a Etiopía a rechazar a los somalíes. Asimismo, apoyó en Rhodesia (actual Zimbabue) al antigubernamental Frente Patriótico y a grupos similares en Sudáfrica. Todo ello alarmó a Occidente por considerar estas acciones como una nueva forma de imperialismo soviético.

Tema 5 El socialismo 61

Page 62: Socialismo / Ciencias Políticas

Las relaciones con Egipto fueron estrechas durante las décadas de 1950 y 1960. La URSS apoyó a Egipto cuando este país nacionalizó el canal de Suez en 1956, le ayudó en la construcción de la presa de Asuán y respaldó a los egipcios en la guerra de los Seis Días de 1967. En 1971 ambos países firmaron un tratado de amistad valedero durante quince años. Sin embargo, Egipto ordenó al año siguiente la salida de todos los asesores militares del país. Las críticas soviéticas a la visita del presidente egipcio Anwar al-Sadat a Jerusalén en 1977 para alcanzar la paz en el conflicto árabe-israelí, irritaron más aún a Egipto. En diciembre de 1977, Al-Sadat ordenó a la URSS cerrar sus consulados y cesar todas sus actividades culturales. Los asesores soviéticos también fueron obligados a abandonar Sudán y Somalia.

7.5 Relaciones con Europa occidental

En 1955, la URSS aceptó la independencia y neutralidad de Austria. En ese mismo año se establecieron relaciones diplomáticas plenas con la República Federal de Alemania (también conocida como Alemania Occidental), pero el denominado milagro alemán y la nueva Östpolitik aplicada desde 1969 por el canciller Willy Brandt incrementaron las dudas soviéticas sobre su posición en una Europa del Este tentada por el comercio, la tecnología y las ideas occidentales. El problema de Berlín Occidental, enclave situado en pleno territorio de la República Democrática de Alemania (Alemania Oriental), era particularmente espinoso. La URSS intentó poner todo Berlín bajo control de Alemania Oriental y apoyó las peticiones de este país para la reunificación alemana. No obstante, las relaciones con Alemania Occidental mejoraron a finales de la década con la llegada al poder en ese país de los socialdemócratas. En agosto de 1970 los gobiernos de la URSS y Alemania Occidental firmaron un tratado por el que renunciaban al uso de la fuerza para zanjar las disputas y se aceptaban las fronteras europeas existentes en ese momento, incluida la llamada línea Oder-Neisse entre Alemania Oriental y Polonia. Las tensiones se redujeron aún más cuando en 1973 las dos Alemanias se reconocieron diplomáticamente.

7.6 Relaciones con Estados Unidos

Las relaciones soviéticas con Estados Unidos tras la II Guerra Mundial estuvieron caracterizadas por periodos alternativos de tensión y distensión en el marco general de la Guerra fría.

En 1962, la URSS y Estados Unidos sufrieron un grave deterioro de sus relaciones como consecuencia de la crisis de los misiles de Cuba. La URSS había mantenido estrechas relaciones con el gobierno de Fidel Castro, al que prometió ayuda en caso de un ataque estadounidense. En 1962, cuando la URSS instaló rampas de lanzamiento de misiles y el presidente John Fitzgerald Kennedy exigió su retirada, el máximo dirigente soviético Jruschov cedió. La URSS continuó apoyando a la maltrecha economía cubana mediante el establecimiento de relaciones comerciales y la concesión de créditos y ayuda técnica, política que otorgó al gobierno soviético una gran influencia en los asuntos cubanos. Esta influencia aumentó a partir de 1976 como resultado de la colaboración entre los asesores y militares soviéticos y cubanos en África y Asia.

7.6.1 Control armamentístico

El desarme internacional fue considerado cuestión de importancia primordial tanto dentro como fuera de la ONU. En 1954 y más tarde en 1959, las propuestas soviéticas de desarme total fracasaron al negarse la URSS a adoptar las medidas de verificación de los acuerdos. En 1960, la URSS anunció la reducción de un tercio aproximado de su poderío militar, pero de nuevo los países occidentales optaron por no seguir el camino soviético sin unas medidas de inspección más rígidas que las aceptadas por ella misma.

En 1953, la URSS contaba ya en su arsenal con la bomba de hidrógeno. Durante los años siguientes, las cada vez más poderosas pruebas nucleares realizadas por todas las grandes

Tema 5 El socialismo 62

Page 63: Socialismo / Ciencias Políticas

potencias hacían imperativo un acuerdo sobre la limitación de dichas armas. No obstante, poco se había logrado hasta 1963, año en el que la URSS firmó un acuerdo con Estados Unidos y Gran Bretaña por el que quedaban prohibidas todas las pruebas nucleares excepto las subterráneas. Además se unió a Estados Unidos en el compromiso de mantener libre el espacio de todo tipo de armamento. Las negociaciones, iniciadas en 1969 sobre reducción de armas nucleares de largo alcance, conocidas como Conversaciones para la Limitación de Armas Estratégicas (SALT), concluyeron en acuerdos firmados en 1972, 1974 y 1979 que limitaban el número de misiles y silos nucleares.

7.6.2 La distensión

La URSS llevó a cabo una activa política internacional respaldada por un creciente poderío militar, pero también se inclinó hacia la distensión con Occidente y en especial con Estados Unidos. En mayo de 1972, el presidente Nixon visitó la URSS. Los acuerdos entre ambas potencias abarcaron diversos temas: la cooperación en investigación médica, la limitación de armamento, la protección del medio ambiente, la exploración espacial y las medidas tendentes a evitar los incidentes marítimos. A estos programas de colaboración le siguieron la condonación por parte estadounidense de la deuda soviética por los préstamos y arriendos de la II Guerra Mundial, un pacto comercial de tres años y una serie de programas de intercambios culturales.

Los esfuerzos para lograr un nuevo tratado de limitación de armas estratégicas, después de 1975, fueron obstaculizados por la represión de los disidentes en la URSS y en Europa del Este, por la participación soviética en Angola y en otros estados africanos y por el continuo apoyo a la causa árabe contra Israel. A pesar de esos focos de tensión, los negociadores soviéticos y estadounidenses alcanzaron en junio de 1979 un acuerdo que se materializó en el SALT II. Poco más tarde Brezhnev se reunió en Viena con el presidente de Estados Unidos, Jimmy Carter, para la firma formal del nuevo tratado. Sin embargo, la intervención del Ejército soviético en Afganistán en diciembre de ese año hizo que el Congreso estadounidense no ratificara dicho acuerdo.

Las relaciones entre Estados Unidos y la URSS empeoraron al iniciarse la década de 1980. Estados Unidos condenó el papel desempeñado por la URSS en la represión de la disidencia en Polonia y el derribo, en septiembre de 1983, de un avión civil de las líneas aéreas coreanas en el espacio aéreo soviético.

8 LA ERA DE GORBACHOV

Brezhnev falleció en noviembre de 1982. Su sucesor en la jefatura del Estado y en la secretaría general del PCUS, Yuri Andropov, murió a su vez tras una prolongada enfermedad en febrero de 1984. Por su parte, Konstantín Ustínovich Chernenko falleció a los trece meses de ser elegido secretario general del partido, cargo en el que fue sucedido en marzo de 1985 por Mijaíl Gorbachov.

8.1 Glasnost y perestroika

Tras consolidar su poder al modificar la composición del Politburó, Gorbachov inició una campaña con el objetivo de reformar la sociedad soviética. Sus planes exigían la perestroika (en ruso, ‘reestructuración’) de la economía nacional y la glasnost (en ruso, ‘apertura’ o ‘transparencia’) de la vida política y cultural. En el Congreso del PCUS celebrado a finales de junio de 1988, Gorbachov propuso una serie de reformas constitucionales que trasladarían el poder del partido a una asamblea legislativa elegida por sufragio universal, reducirían el papel del partido en la gestión económica y aumentarían considerablemente los poderes presidenciales. Tres meses después, Andréi A. Gromiko abandonó su cargo de jefe del Estado (que, en calidad de presidente del Presidium del Soviet Supremo, desempeñaba desde 1985) y Gorbachov le sucedió en el puesto.

Tema 5 El socialismo 63

Page 64: Socialismo / Ciencias Políticas

En marzo de 1989 el pueblo soviético participó en las que han dado en ser consideradas las primeras elecciones libres celebradas desde 1917 y eligió un renovado Congreso de Diputados del Pueblo. Este Congreso, convocado en mayo, constituyó el Soviet Supremo y eligió a Gorbachov presidente para un mandato de cinco años. Dos trágicos sucesos, el grave accidente ocurrido en abril de 1986 en la central nuclear de Chernóbil, que causó serios daños al medio ambiente y reveló grandes deficiencias en el programa nuclear soviético, y el terremoto de Armenia en diciembre de 1988, que provocó más de 25.000 muertos y dejó al menos a 400.000 personas sin hogar, obstaculizaron el proceso de reforma de la economía nacional preconizado por Gorbachov.

8.2 Iniciativas en política exterior

McDonald’s en Moscú La apertura de la cadena de comida rápida McDonald’s en la Unión Soviética en enero de 1990 señaló un cambio en la política económica del gobierno con respecto a la inversión extranjera. La gente hace cola para entrar en este primer día en que McDonald’s atendió a 30.000 personas.Ken Graham/ALLSTOCK, INC. En abril de 1988 se llegó a un acuerdo para la retirada de las tropas soviéticas que ocupaban Afganistán. Las estadísticas oficiales publicadas en mayo indicaban que habían muerto 13.310 soldados y 35.478 resultaron heridos durante la guerra. La retirada finalizó en febrero de 1989. En octubre los dirigentes soviéticos reconocieron que la intervención en ese país había "violado las normas de comportamiento correcto".

Firma de un tratado histórico Con el ascenso al poder del líder soviético Mijaíl Gorbachov en 1985, mejoraron las relaciones entre la URSS y los países occidentales capitalistas. A finales de la década de 1980, Gorbachov y el presidente de Estados Unidos Ronald Reagan negociaron tratados históricos de reducción de armas nucleares. Ambos aparecen aquí durante la firma del Tratado de Armas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) en 1987.UPI/THE BETTMANN ARCHIVE Entre 1985 y 1991 Gorbachov celebró diversas reuniones en la cumbre con los presidentes estadounidenses Ronald Reagan y George Bush. En el encuentro de Reykjavík (Islandia) con Reagan, que tuvo lugar en octubre de 1986, los dos líderes intercambiaron audaces propuestas de reducción de armas, pero las negociaciones se rompieron a causa de la demanda soviética de la limitación de las investigaciones y pruebas del programa estadounidense de Iniciativa de Defensa Estratégica. Los dos presidentes firmaron un acuerdo en diciembre de 1987 por el que se eliminaban los misiles de alcance medio y algunos tipos de los de corto alcance. En mayo de 1990 Gorbachov y Bush firmaron un tratado que ponía fin a la producción de armas químicas y reducía los arsenales de este tipo de armas. En julio de 1991 ambos mandatarios volvieron a firmar otro acuerdo por el que se recortaba sustancialmente el número de armas nucleares estratégicas.

Las iniciativas de Gorbachov en otros aspectos de política internacional fueron igualmente sorprendentes. En diciembre de 1988 anunció ante la Asamblea General de Naciones Unidas la reducción unilateral de armas convencionales, en especial en Europa del Este y en la frontera chino-soviética. Durante su visita a Pekín en mayo de 1989, China y la URSS acordaron reanudar unas relaciones normales tras treinta años de conflicto encubierto. En un encuentro con el papa Juan Pablo II, celebrado en Roma, Gorbachov prometió garantizar la libertad religiosa en la URSS. La Unión Soviética y la Ciudad del Vaticano acordaron establecer relaciones diplomáticas. Las relaciones con Israel también mejoraron notablemente, al flexibilizar las restricciones migratorias a los judíos rusos. Al crecer la tensión en el golfo Pérsico desde agosto de 1990, la URSS apoyó en general la política, encabezada por Estados Unidos, de utilizar la presión económica y militar para forzar la retirada iraquí de Kuwait.

Tema 5 El socialismo 64

Page 65: Socialismo / Ciencias Políticas

EL COMUNISMO EN CRISIS

Entre las más importantes novedades de la nueva política soviética, destacó a partir de 1989 la negativa de la URSS a intervenir en Europa del Este, a diferencia de épocas pasadas, en el desarrollo de los movimientos reformistas que pusieron fin a los gobiernos comunistas de Polonia, Hungría y Checoslovaquia y que culminaron en octubre de 1990 con la reunificación alemana. En 1991, el COMECON y el Pacto de Varsovia, dos de las piedras angulares de la política exterior soviética, fueron disueltos. Tampoco el comunismo soviético era inmune a las fuerzas que habían hundido a los regímenes de los países del Este. En febrero de 1990 y en un proceso de deterioro cada vez mayor de la economía soviética, el PCUS acordó ceder su monopolio político. En marzo, cuando Gorbachov era el presidente ejecutivo del país, grupos insurgentes lograron un significativo ascenso en las elecciones locales. Gorbachov había perdido considerable apoyo entre la población por su política interna. El 11 de marzo Lituania declaró su independencia, desafiando las sanciones impuestas por Moscú. Los grupos nacionalistas y los movimientos independentistas también actuaron en otras repúblicas y los estallidos de violencia étnica cada vez se hicieron más frecuentes. En noviembre, Gorbachov pretendió de nuevo ampliar sus poderes presidenciales para ejecutar sus reformas políticas y económicas.

El sector duro comunista, en el que se encontraban muchos de los altos cargos del gobierno, dio un golpe de Estado en agosto de 1991, mantuvo a Gorbachov bajo arresto domiciliario e intentó reinstaurar el control centralizado comunista. En tres días los reformistas encabezados por Borís Yeltsin detuvieron el golpe y comenzaron a desmantelar el aparato del partido. Con la URSS al borde del colapso, el Congreso de Diputados del Pueblo acordó el 5 de septiembre establecer un gobierno provisional en el que el Consejo de Estado, encabezado por Gorbachov y compuesto por los presidentes de las repúblicas participantes, ejercería poderes de emergencia. Al día siguiente, el Consejo reconoció la independencia de Lituania, Estonia y Letonia.

La creciente influencia de Yeltsin acabó con la de Gorbachov, y el gobierno de la Federación Rusa asumió los poderes que había ejercido el desaparecido gobierno soviético . El 21 de diciembre de 1991 la URSS dejó formalmente de existir. Once de las doce repúblicas que habían permanecido casi hasta el final integrando el Estado soviético (Georgia había declarado su independencia en abril de ese año), Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Kazajstán, Kirguizistán, Moldavia, Rusia, Tayikistán, Ucrania y Uzbekistán; acordaron crear la llamada, de forma imprecisa, Comunidad de Estados Independientes (CEI). Gorbachov dimitió el 25 de diciembre y al día siguiente el Congreso de Diputados del Pueblo proclamó la disolución de la URSS.

Tema 5 El socialismo 65