GEOPOLITICA PETROLERA
CESAR HERNANDO BUSTAMANTE
http://letrasypolitica.blogspot.com/
El componente petrolero en la geopolítica mundial, resulta ser de suma
importancia para poder entender que está pasando en el entramado de
intereses en el mundo actualmente, este afecta directamente a la
economía, incide en temas militares, es el soporte para la aplicación de
estrategias políticas encubiertas. La baja de los precios del petróleo, el
descubrimiento de nuevas tecnologías, tanto para la exploración, como
para la explotación, los efectos en los precios en productos de consumo
masivo y por lo tanto en el nivel de vida de los ciudadanos, la incidencia
que tiene en el mercado de valores, el hecho de haber afectado los ingresos
de ciertas dictaduras incomodas para occidente y por último el alto
consumo de China son variables que, en el ajedrez político mundial,
terminan siendo claves para entender muchas decisiones de parte de
algunos países, sobre todo los Estados Unidos, que en apariencia son
inexplicables.
La intervención de las potencias en el oriente en el último siglo, no tiene
otra causa que su interés por las grandes riquezas petroleras. El petróleo es
el fluido vital de la economía mundial, es la sangre y el oxígeno del
desarrollo, de todo lo que se mueve. El oro negro es la clave.
El economista Salomón Kalmanovits, explica de manera muy sencillo los
efectos directos en la baja de precios: “Para los países importadores de
petróleo, la reducción de precios equivale a un impulso de su demanda que
puede aliviar la recesión europea y acelerar el crecimiento norteamericano.
Para los países productores es una calamidad, siendo Venezuela la más
afectada por haber perdido eficiencia, ser tan regalada y endeudarse en
estos años de bonanza. Rusia es otra damnificada, pues depende del
petróleo en dos tercios de sus ingresos externos. Arabia Saudita y los países
del golfo, también Noruega, cuentan con costos bajos de producción y con
enormes ahorros que les permiten sortear la caída de sus ingresos.
Colombia es otro perjudicado, pues la mitad de sus exportaciones deriva
del petróleo, pero como buen nuevo rico no hizo ahorro de su corta racha
de fortuna; por el contrario, se especializó en tan volátil actividad y se
endeudó aprovechando ese colateral”.
Los Estados Unidos han venido recogiendo frutos de sus investigaciones,
tecnologías como el Fracking, le han permitido aumentar su producción
petrolera y disminuir su dependencia de los países productores; “Canadá
con su explotación en las arenas bituminosas y México con sus grandes
yacimientos en el golfo, hacen de Norteamérica un formidable productor de
crudo con los correspondientes efectos en los precios y en
la paleolítica energética global. El petróleo, a nivel económico constituye
“el rey de las ‘commodities’, el recurso natural de mayor importancia
geopolítica desde hace más de un siglo, y a pesar de los avances científicos
para descubrir fuentes alternas de energía seguirá junto con el gas, su
vecino de las profundidades, teniendo suma importancia en los años por
venir”.
El excelente columnista y analista Marcos Peckel, explica magistralmente lo
que significa esta variable: “La geopolítica petrolera es una compleja
maraña de yacimientos, rutas marítimas, oleoductos, puertos, tanqueros,
ambiciosas compañías multinacionales y precios. El mercado del crudo no
se comporta como el de otras commodities, pues se puede asumir que el
recurso es infinito y simplemente abriendo o cerrando los grifos se controla
la oferta y esto depende tanto de factores económicos como políticos. En
los últimos 50 años el precio del crudo ha oscilado entre los tres y los 150
dólares por barril, habiendo experimentado más volatilidad que cualquier
otro recurso natural. El mercado se ha visto afectado igualmente por el
arribo de varios nuevos países productores, Colombia por ejemplo, y es
dable suponer que nuevos yacimientos serán ‘descubiertos’ en la medida
que esto le convenga a las grandes empresas explotadoras, trasportadoras
y refinadoras, las originales ‘siete hermanas’ -Exxon, Mobil, Shell, Texaco,
BP, etc-. a las cuales se han agregado apenas un puñado más.
Sí se revisa la historia fatídica de la relaciones entre occidente y oriente, las
intervenciones y guerras del último siglo, se entenderá lo que significa la
relación petróleo y política, gran parte de las guerras y los grandes
conflictos de los últimos cincuenta años, desde la guerra del Yom Kipur,
hasta las tensas relaciones de hoy entre Iran y los Estados Unidos.
El petróleo en muchos casos, por factores económicos y políticos es la
clave: “Desde entonces el ‘arma del petróleo’ ha sido usada principalmente
al revés: restringiendo las exportaciones a países a los que el Consejo de
Seguridad ha impuesto sanciones, como Iraq, Irán y Libia. Rusia por su
parte, el principal proveedor de gas natural a Europa, ha usado los grifos
para limitar las exportaciones, subir los precios y extraer concesiones
políticas”[1].
Otra variable poco estudiada son los excedentes de capital producto de la
explotación del petróleo. Estos siempre terminan en los grandes fondos de
inversión de occidente. Este es un tema alucinante, pues con ellos se
altera muchas economías, sobre todos en los países emergentes, se crean
políticas de fomento y se estructuran plataformas económicas muy fuertes;
igualmente han servido para incentivar la perversa especulación, con los
denominados dineros golondrinas, así como políticas de intervención
encubiertas. Es un hecho, el tema del petróleo da como para un libro,
espero seguirlo tratando en este blog.
01/04/2015
Recommended