Metodología para la Convocatoria a las Mesas de Diálogo y para el

Desarrollo del Diálogo

CHILE, UNA MESA PARA TODOS

A través del Diálogo construimos el Chile del Bicentenario

DIOCESIS DE VALDIVIA - EQUIPO DIOCESANO PARA LA MISIÓNESCUELA DE VERANO 2010

CON QUIÉNES DIALOGAR?

Cada unidad pastoral determina con antelación con qué tipos de personas realizará la experiencia.

Según su Rol en la sociedad:(Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile, “En Camino al Bicentenario”. Documento de Trabajo. Septiembre de 2004)

Los Intelectuales y EducadoresLos Políticos, Gobernantes y LegisladoresLos Administradores de JusticiaLos Empresarios y Líderes EconómicosLos Trabajadores y SindicalistasLos Agricultores, PescadoresLos ArtistasLos Líderes ComunitariosLos Comunicadores SocialesLas Fuerzas Armadas y Policiales

Según su edad:JóvenesAdultos mayores

CON QUIÉNES DIALOGAR?

Probablemente sean personas con diferentes CREENCIAS y ACTITUDES ante la vida

* Integración Acrítica* Supervivencia a la Defensiva* Cumplimiento Pasivo

* Quejido Permanente* Desesperanza del Absurdo* Crítica Violenta

* Optimismo descomprometido

* Realismo Comprometido

* Realismo Cristiano Comprometido

CARACTERÍSTICAS DE LOS ENCUENTROS DE DIÁLOGO: (Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile, “En Camino al

Bicentenario”. Documento de Trabajo. Septiembre de 2004)

• Ser una invitación de la Iglesia

• Ser espacios de diálogo entre personas con las cuales no tenemos habitualmente contacto y que representan distintos sectores y actividades de la sociedad.

• Ser experiencias de encuentro profundo.

• Ser invitación construir una mirada compartida y esperanzada de Chile.

• Ser espacios de reflexión de temas esenciales actuales, identificando desafíos, sueños y proyectos.

• Suscitar el compromiso de los participantes.

METODOLOGÍA:

• FORMA DE CONVOCATORIA: Invitación personal

• LUGAR DE REUNIÓN: Sala exclusiva para la actividad

• DURACION Y NÚMERO DE ENCUENTROS: Un encuentro de no más de dos horas y media.

• IDENTIFICACIÓN Y NÚMERO PARTICIPANTES: Los que decida la unidad pastoral. Recomendable no más de 20 personas ni menos de 6.

• ORGANIZACIÓN DEL DIÁLOGO: dos animadores (Un Moderador y un Secretario).

• ACTA DE CONCLUSIONES: El Secretario hará un acta con las conclusiones para entregarlo a los participantes.

• ENTREGA PRESENTE SIMBÓLICO: De ser posible, al final del encuentro.

TEMARIO:

1. SALUDO Y PRESENTACIÓN DE LOS PARTICIPANTES

2. INDICACIÓN DEL MOTIVO DEL ENCUENTRO

3. FINALIDAD DEL ENCUENTRO: ¿PARA QUÉ NOS REUNIMOS?

METODOLOGÍA:

4. COMIENZO DEL DIÁLOGO CON UNA PREGUNTA: ¿Qué riquezas o valores positivos es posible reconocer en la realidad que vivimos? ¿Qué nos gusta del barrio (ciudad o país) en que vivo?

METODOLOGÍA:

TEMARIO:

5. UNA SEGUNDA PREGUNTA:

¿Qué agregaría para que nuestra convivencia social fuera más humana?

¿Cómo me gustaría que fuera el barrio (ciudad o país) en que vivo?

6. UNA TERCERA PREGUNTA:

¿Cuál es la situación de los más pobres entre nosotros?

¿Qué formas de exclusión conocemos?

7. UNA CUARTA PREGUNTA:

¿Qué podríamos aportar a la construcción de una sociedad mejor?

¿Es posible sumar fuerzas y trabajar juntos por esta mejor sociedad?

OTRAS CONSIDERACIONES A TENER PRESENTE:

• Se sugiere iniciar el encuentro con algún tipo de dinámica que favorezca la entrada en confianza de los participantes (“romper el hielo”), cuidando que ésta tenga un carácter más bien formal y que apunte al objetivo del encuentro.

• Es posible que de los propios participantes surjan temas o preguntas que sean de su especial interés. En este caso, habría que dar los espacios necesarios para que se expresen. Sin embargo, el moderador debe procurar que tales temas o preguntas no se escapen de los objetivos del diálogo o que puedan generar discrepancias más que coincidencias

• Ver la posibilidad de tener una atención hacia los participantes (café galletas), que no debieran significar una interrupción brusca y prolongada del diálogo que pudiera perder su ilación.

• Recordar que no se trata de un encuentro religioso, pero lo religioso (nuestra fe) debe estar implícito en nuestra actitud y argumentos.