11.- Pablo González Casanova - La democracia

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    1/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    2/34

    s gT.6II U v3 ' 0 -,.,CgE&! m

    4,2 c.2.-2= .23" 0 4P 9 24 1 g 3 s82 m.5O O Eo s z o? i z c e . i

    C T I 8 a:b) $ g3m s E g g0 , ' - of E , o e -g u.2v, .,C .z 0 90 E2t ;~cn a , S U=ss ;

    Z o " C 0 -E . 2 raw 6. J " O C- -,= - - 2 0tams6 ~ " w - 0X a- v , b o woa.;;;;= .-s z r n ,O* , D E++ a . 5 ~

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    3/34

    -c ' 3 g3 u -O s.-G a g

    o u 9 )= > *E:'u 0 u243 05 g3$ a -5g +" g - g)"O:" E5 $ g- %'*"ap= a45 % ;i.I 2 2sa - "23g:.2 0 gcrr *a$g s d+ " 0m o o ,a: a

    ( d m ( d 9 )'&x o c a 5'1OS.t;'or;g g 2 g . K aO C " g';.g3 % 3 . z 6 0@ 0 g x:s gg z ~ m c d ,a E . % dpad 0 0 5 5- 2 2 2.a, c, .- nL.'* 0 E275 5 4 .5a s k 0 0 ..&'C g a,g a . - o +Y m a 3 g gm uZP !g E ' ~ E* w- t: e ::p p 3 0

    (d 2 4- E $ &2 x m n.r(" rn " 2 i : ZC (Oz c ' G 3Q . 2 P, O Q ,$ a m 0 9.9k * c. ) a,;a . lc ,3_o,) .34 0 2 g z cJ " . r : z s

    cd a,b ? E

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    4/34

    1 s .tropiezo. Es obvio qu e esta ac.tl:u(i i . i ' ~ ~ ~larga frustraci6n juridica - i r~ lp ide cori f l c c t ~ t *L,observaci6n que nos permits el anilisis sistelni~icu I 'nosotros rnismos corn^ s ~ soliticos,-- y del pais como unpair en que el derecho p';6[;co y 10s modklos te6ricos 'tienen un extrail0 y raro comportamiento, que merece ,una investigation sin angustia, objetiva.- . En cuanto a la necesidad de relacionar el poder 'nacional -de la Naci6n-Estado- con la estruc tura interna-cional, es tamb iin ap remiante ;n estos paises, que desdesu advenimiento a la vida independiente han vivido, comoproblema vital, el de la expansi6n, penetraci6n o dominiode las grandes potencias sobre las pequeflas naciones.No nos referimos al problema como "imperialismo" entanto que este ttrmino estd cargado de otro tip0 devalores y nos hace perder la perspectiva del poder nacio-

    ml. Nos referimos a lo que Perroux llama el "efecto dedam-" de las grades naciones y las grandesampresas;a la dlnimica politica de la desigualdad que afecta el"complejo tota l de las econ omias nacionales" y de la"fuena contractual del Estado", que hace pesar sobreestas naciones la arnenaza de quedarse como '.'nacionesaparentes", sin pslitica propia. Este problema vital yempiricamente evidente corresponde a un f e n h e n o casifisico, de fuerza, presi6n y politica, que 10s propioside6logos del imperialisrno no pueden negar ni tachar deret6rico o de metafisico. Sale de la polimica, comprende10s procesos politicos de estas naciones, y aunque no 10sexplique en su totalidad, explica su con~ porta mie nto laforma de incrementar la fuerza contractual del Estado.Los ide6logos e investigadores de las pequefias nacionestienen dos importantes objetivds: d_e un lado denunciar alas grandes potencias en cuanto las dominan y explotan,de otro, descubrir y au me nta rla s fuerzas .nacionales, y ver-uzes son 10s obsta'culos que se les oponen y cbrnopueden salvarlos. Es este ultimo problerna el que aquiparticularmente nos interesa, y el mis importante quizis,desde un pu nto de vista prictico, cu ar~ do n la s actuales

    1 L tic l \ ~ ~ , . ~ ~i ~ i U F 0 1 0 g r~ runa, . I .~ l ! c i : i c , , favorable a la nacibn y a1

    ! , L , .+icidad de negociaci6n del EstadoI ~ ~ ~ X I C ~ I I O .-393. En cuar *1 1 zngis is de las reaco- _estructura D O ~ ~ L I ~ Jla estructua social -propi0 de todo--.estudio cientifico deI Estado, y en Io particular de lasociologia politic a-, es un anailisis qu e se hace aprernianteen nuestros paises, en 10s que la estrat if icacibn, la r n o ~ il i~dad, las clases y grupos sociales, son notablemente distin-tos a sus correlatos de las sociedades metropolitanas.En las ciencias sociales, como en el tekeno juridico,hemos tendido a aplicar a nuestra realidad, de un mod0automitico, las categorias y conceptos europeos que sefundan en la experiencia politica de Europa. Parece habersido m is fdcil a nuestra mente -en sus circunstancias-forzar el comportarniento de 10s hechos para qu e sejusten a 10s modelos de 10s paises dominantes, que hallarnuestros modelos. Y aunque esta situaci6n desaparece ya .del panorama intelectual, con 10s procesos de independen-cia cultural y politica de 10s paise s subdesa rrolIados, 10scarninos concretos de investigacibn apenas foman bre-chas.Nuestros paises -subdesarrollados, pobre s, coloniales osemicoloniales- se parecen mucho mbs en tre s i de lo quese parecen a 10s paises metropolitanos. En todo caso, lasgeneralizaciones que comprendan a unos y o tr os d e b e r hsuceder a las generalizaciones que se deduzcan de laexperiencia de 10s propios paises pobres. Acabar con 10s -ultimos vestigios de colonialismo intelectu al -con disfrazconservador o revoluciona-rio- e intentar un anf i s i s de ias& c m ss ehtre la estructura pol it ica y la estructurasocial, con ~ a t e g g & ~ ~ r o - a d e0s p a i y s s u b d e a--d o ~ , s de vital importancia para el anilisis de las institu-- -- - - - - -ciones politicas de ~ 6 x i c c

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    5/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    6/34

    I'L! l

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    7/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    8/34

    11. SINDICATOS, IIUELGAS Y 1IUELr;iii; ;;i:;En la evoluci6n de la de~nocracia e tipo euroamerica-no, co n posterid ridad a1 flore cim iento de las ideas ilustr a-das, surge una organizaci611 que , desde la segund a mitaddel siglo XIX, no puede ser ignorada a1 analizar el juegodemocritico. Me reficro a 10s sindicatos y uniones detrabajadores. En efecto, la lucha democritica de paisescomo indaterra, Italia o 10s Estados Unidos es absoluta-mente inexplicable si no se considera el papel bisico quejuegan las uniones y sindicatos. En Mtxico el articulo 123de la Co nstitu ci6n -uno de 10s mSls avanz ados, y pioneroen su gtnero- reconoce el derecho de asociaci6n de 10strabajadores, asi como el derecho de huelga.En la realidad, el sindicali -mmo fuerza---- politica- --G a c i o n a l- prese nta 6 ~ 1 tP1es z c t r ist-de una varia-b w e n d i e n t e , n o 6 1 0 del partido_____el gobiemo, sinoespecificamFnte del Ejecutivo.En j.%G-te=aS-hoS terceras par tes de 10strabajadores sindicalizados pertenecen a una organizaci611,la Confederacibn de Trabajadores Mexicanos (CTM), unidaestrechamente al partido gubernamental, al travis delsector obrero del partido, y al gobierno. Otros sindicatosno afdiados a esa central tienen tarnbiin fuertes vinculoscon el partido y el gobierno. Los dirigentes logran obtenercomo concesion un nGnlero considerable de curules. Por

    ejemplo, en la legislatura de 1952-55 habia 35 diputacio-nes obreras, de las que 19 eran de la gran central y elresto de otras centrales y sindicatos del partido guberna-mental (ferrocarrileros, djneros, CROC, CROM, CGT)?La vinculaci6n de 10s liideres de estos sindicatos con elgobierno lleva varizs dicadas y desde 1940 10s principalesde ellos son unas veces diputados y otras senadores.En el periodo constitucionalista de la Revoluci6n Mexi-cans, 1918-62 , se cuentan p ~ ro menos 52 escaiiosocupados por senadores del sector obrero (33 de 1940 a1962) y mis de 250 ocupados por diputados del misrnosector (1 50 desde 1940).5 Un estudio d e sus intervencio-

    ' 2 : c in^?, .b, diiiuhnente podria revelar el peso y l. C ~ ~ , . i i ; c . , t i i ~ ~e 10s representantes de un movJLLlentobrero i~:cit.pendiente.Peso aparte di: cstos dntos, que requeririan minuciosainvestigaciones para pasar de la cjemplificacibn al wslisipropiamente dicho, un indicador de la dependencia desindicalisrno mexicano respecto del gobiemo y en particular del presidente es, sin duda, el dc las huelgas,En efecto, observando en sus gcandes tendencias lcantidad de huelgas y huelguistas que surgen en 10distintos regimenes presidenciales, se advierte precisamente que, cuando gobieman presidentes famosos por spolitica obrerista y popular, es cuando hay un mayonumero de huelgas y huelgu istas -corn0 si 10s dirig entesindicales y 10s obreros se sintieran protegidos por lafuerza presidential e ' incluso alentados-, y que ocurrexactamente lo contrario cuando 10s presidentes tienenuna politica general menos radical, o de alianza mbabierta con 10s sectores patronales, nacionales o extrapjeros. Asi, vemos que mientras en el periodo del presidenteObreg6n -que con t6 entre sus partidarios m is decididos 10s "Batallones Rojos" y a 10s lidere s obreros- se da unpromedio anual de 197 huelgas, en el periodo de Calles yel maximato callista el promedio baja a 41 , para subir conel de Lazaro Cird enas a 478. Con posterioridad el prome, dio es de 38 7 con Avila Camach o, de 10 8 co n Atemin,' 248 con Ruiz Cortines, de 472 con L6pez Mateos., cuanto a1 promedio de huelguistas es de 64 000g6n); 4 000 (Calles y maximato); 61 000 (Cirdenas)56 000 (Avila Camacho); 19 000 (Alemdn); 25 000 (RuizCortines); 53 000 (L6pez Mateos) (Cuadro 111).

    , En la mayor parte del mundo donde hay sindicatos yuniones obreras reahente poderosos, se encuentra unaclara correlation entre 10s movimientos huelguisticos y elciclo econbmico; en el nuestro esta correlaci6n es surna-mente baja, y s610 con un indicador, el de las exportacio-nes y en un pcriodo reducido alcanza . 5 0 . ~iq-politica presidqncial -en sus grandes tendencias- es

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    9/34

    . A * . .deterrninante de qw : i ; i j : i i : ; : -:::.,;...: . :... . - . . .:huelgas o huelguis tas.-Existen sin embargo, algxnas ~ z s v ~ ; ~ c I ~ ~ ~ L ' si c , 211-dencia general. En 1934, en el climax de la iv~lit tcaantirrevolucionaria de Calles, en 19 43 4 4, precisamentedespuis de que en sus dos pl-heros aiios el gobierno deManuel Avila Camacho logra que disrninuya el nGrnero dehuelgas a una cuarta parte de 10s ultunos aiios del periodocardenista, y en 1958 -despuCs de un period o en que lashuelgas habian mantenid0 un indice relativamente bajo-surgen grandes movimientcs huelguisticos q11c evidente-mente no depcnden de la politica del Ejecutivo. Enefecto, mientras en 193 3 hay 13 huelgas con 1 084huelguistas, en 1933 hay 202 huelgas con 14 68.5 huel-guistas; mientras en 194 2 estallan 9 8 hue!gas con 1 3 64 3huelguistas en 1 93 3 hay 766 huelgas con 81 557 huelguis-tas y cn 1944, 887 hr;eIgas con 165 744 huelguistas.Finalmente, rnientras en 1957 hay 193 huelgas con 7 137huelguistas, en 1958 hay 740 huelges y (iO 6 1 1 huelgilis-ts., De un aiio para otro vemos c6m0, por lo menos entres casos, surgen verdaderas explosiones que tienen distin-tcs significados y efectos. Las huelgas del 33, que revelanel descontento del movimiento obrero ante la politicaconsenradora y antiobrera del maximato; las huelgas del43-44 en la tpoca de Aviia Camacho, en que el movimien-to obrero quiere demostrar su fuerza, ignorada por elnuevo gobierno; y las huelgas del 58, en que el movimien-to obrero lucha por recuperar su independencia, sonfen6menos que revelan ccimo el movimiento obrero, aun-que dependiente en sus grandes tendencias de la politicadel Ejecutivo, es urn fuena lpotencial que se manifestsciclicamente en forlna explosiva.Sobre 10s efectos que alcanzan estas manifestaciones,encontram os diversas variantes: es eviden e que las huelgasdel 33 fueron decisivas en la sucesi6n presidencial quellev6 a Cirdenas a1 poder, y decisivas en la politicapopular del presidente Cjrdenas. En ese caso el propio

    I ttccc.,ldaii GI: daf mayor inportancia~ ~ ~ l i ' c i ' o de controlatlo haciendo unaboierista y revoiucionaria. En cuanto a las huelgas. a -i, dieron I I I F : I ~ 3 linz repnsi6n considerable qu e 'perrnitio a1 Ejecutivo__- -continuar controlandoalmovimien- Ito obrero,-y acentuar la politica rn=Ts - antes.- Finalmente, las huelgas d f i 9 ~ 8 errnitieroque el rnovirniento obrero aI&zara 6xitos parciales en I- - - --r e ~ u p e r a ~ x ~ o ne ~ s u emocracia interna -es el caso de lo- =2indicatos de tee telefonistas y electricistas--

    Arnv1 c a z d e l sindicato ferrocam lero, que/con posterioridad se lanz6 a -a que termin6 en un!fracaso politic o totalA1 estudiar 10s problemas que plantea la demo cracia enM6xico es necesario analizar cuidadosamente las huelgasdel 33, del 44 y de l 5$ , ver en qui forma nacieron yevolucionaron 10s conflictos, c u 8 fue la estrategia quesiguieron 10s bandos en pugna, por quC en unos casos lashuelgas tuvieron dxito a1 alcanzar u na politica obrerista yen otros fracasaron, por quC en unos casos 10s sindicatosmantuvieron su independencia y en otros la perdieron.De todos modos, au nque el movimiento obrero, en sustendencias generales, presenta marcadas caracteristicas dede en den cia res e c t ~e la politica del Ejecutivo y en- -- -----+ ----------q u e s& -i icueniii i--- --una fuerza 1atente.-y en alguno s casos real, operan teya- de la vida politica mexicana.

    111. EL PRESIDENTE Y EL CONGRESOSi el poder del gobierno y su d i n h ic a no se ajus tan a10s modelos de la teoria cl hi ca de la democracia, cuan dose ve la preponderancia casi absoluta del partido gubema-mental sobre 10s d e m b partidos, y la de 10s sindicatos yuniones gubernamentales, el poder del presidente dentrodel congrefo se aleja por lo menos en la misma magnitudde ese modelo. . .En e!gder . L e w U -- --- de Senadores est i

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    10/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    11/34

    inmediato. Provoca una serie de mcdir!;:: (;I: .: .'.:ri.:;:?~ c ~ : icontrol del Congreso For el Ejecutivo.3 . El control integral del Legislativo solo e s x)[o llasta1940. El rolnpimiento de la "tradicibn" es en si u n 1:echoimportante, dados 10s a11 tec ed ent es. S~ ignificado cuanti-tativo y cu alitativo es muy cscaso, sin enlbargo, entirminos de fuerzas politicas, y de su representacibn yactuacibn legales e institucionales en el C:ongreso.

    4. Las difercncias entre la carnara heredada y la camararenovada son nlinirrlas y no son significntivas. El presiden-te ti en e el contro l, tan to de 10s diputados elcgidosdurante el sexenio presidencial anterior, como de 10sdiputados elegidos en su propio gobierno.5. Si se observa el periodo 1934-1964 se advierte que,mientras en el gobierno del general Lizaro Cardenas todos10s proyectos de ley enviados por el Ejecutivo (en 10safios correspondientes) son aprobados por unanirnidad, elmenor nu ~n ero e proyectos aprobados sin ningcn voto encontra corresponde a1 gobierno del senor liuiz Cortines.Estos hechos revelan que en la politica lzcxicana ungobierno apoyado en el pueblo y cuya poiitica cs esencial-rnente p cyular no corresponde necesariamente a unamayor oposici6n e n el Legislativo, y viceversa. Como esevidente, la dernocrarizacibn de un pais tiene distintoscanales.

    6. Los proyectos que s61o a lca nz an una aprobaci-onmsyoritaria . nunca se enfrentsn a u i l a oposicion queexceda-del -5% y , si se estudiara cuiles proyec tos fueronaprobados por unanimidad y cuales por mayoria, sedescubrir ia que c o m o ocurre , en regimenes con sistemade partidos- 10s proy ectos de ley realmente vertebralesson aprobados por unanimidad.

    lica. Sanciona actos del Ejecutivo. Les da una vaIidez y

    cu~n ple s a misma funci6n l a C h a r a de Diputados, cuyosignificado te6rico aparece en la comunidad como "creen-cia legal", y desde qu e el pen sam ient o racional de l siglo,~XVlII transfiere el act0 legislativo de Dios a1 pueblo, y a10s representantes del pueblo. Desde un punto de vistaantropolbgico, las leyes en Mixico son sistemas de creen-cias y 10s modelos de gobierno tambiCn. Este fen6meno seadvierte, particularmente, en el andisis del comporta-miento de la C h a r a de Diputados , aunque puede obser -varse en otras instituciones. Los procesos de frustraci6nson en es te caso mis agudos , y quizds por ello, el starusde diputado es el que e s t i mi s violentamente expuesto a1 .

    thumorismo y la caricatura pol i t icos . L a a c ie n te reforma 5al--rt iculo 54. constitucional -va a -modif=-como v e ~ -mos- tanto la es tructura como las funciones que ha *EfiiZ la Cimara de Diputados desde Obreg6n a nuestrosdias.

    IV . EL PRESIDENTE Y LA SUPREMA CORTEDentro de este cuadro general, la hip6tesis que parece

    mis viable a1 estudiar la Suprema Corte de Jus t ic ia , es quese aparta del modelo de M ontesquieu por lo menos tan tocomo el Congreso. Hay en este terreno, sin embargo,algunos hechos inesperados e interesantes para ver c6mose 1la ido estructurando la vida politica de Mexico y c u i les su dinimica. La desviaci6n del modelo ilustrado no esen un solo sentido; la realidad nb hace exactamente locontrario de lo que previ el modelo.Considerarnos que un indicador importante para estu-

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    12/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    13/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    14/34

    ! L>el total cie las I ~ ~ G ; C I I L L . L . >pull. .vLd, .. . - .- . .. .' ilistrii o F ederal por s i solos recibieron en el ~ l i i r r ~ oiio ~ ; . I ? ~ C J ~ C I - . - !:i*.!?~lnu nr;diu porta la l ~ jdf lac jon'3 de qiie s e d i s p ~ n e e dstos (1 962) el 87% del tota!, y las -salvo e ; irimos aAos en que hay un ligero

    ! entidades federativas sblo el 10% (Cuadro IX). aumento- f i n un hecho que, en lo particular,1 En el period0 que va dei maximato callista al cuarto esta p r ~ ~ : : : ; ~ ~ . : b naria dc un estado a otro y oscila (sins o del per iod0 de Lhpez Mateos (1962) las entidades considerar el Distrito F ederal y 10s territorios) entre unfederativas (excluido el Distrito F ede ralj han recibido por r n h i l n o d e 46% y un minim0 de 2% 1950), de 7 2 % ~tkrmino medio 10s siguientes porcentzjes de las haciendas 2% respectivame~lte 195 l ) , de 66%y 3% (1952), de 58%pdblicas: 16% en el ~na xirn ato 1 929-1934); 14.5% en el y 37%(1 9531, de 60% y 6% (1954), de 73%y 6% (1955),gobierno de Cdrdenas (1 934-1340); 12% en el de Avila e t c . En 1963 el m ax im o es el 6 0 % ~l minimo el 8s.'C a ~ n a c h o ( 1 9 4 0 - 1 9 4 6 ) ; 1 0 % e n e l d e A l e m in 5. La asignacion de la aportaci6 n' federal a cada esta do(1946-1952); 10% en el de Ruiz Cortines (1952-1958) y en particular se hace por razones econ6micas. Son 10s9.5% en 10s cua tro priineros aiios del dc Lbpez Mateos. estados m is avanzados y con mas recursos 10s que recibenAsi pues, en 10s tres iiltimos periodos presidenciales la mayo res cantida des en nume ros abso lutos y relativos. Lasproportion del ingreso de 10s estados -de por s i baja- es razones politicas no dejan sin embargo de contar.mcnor que en 10s anteriores. Desde el pun to de vista Frec uente men te hay variaciones hasta en un 100% d e ~econbmico la concentraci6n llacendaria tiene como fun- un afio a otro , en el mo nto. de la aportacibn federal, loci6n el disponer de recursos escasos con perspectiva que irnplica serias limitaciones para el desarroUo soste nidonational. Es la base de cualquier programa y el requisitorn in i rno de la ~ lan i f i~acion .ero como es obvio, a estaconcentracibn de recursos de la Federaci6n correspondeuna concentracibn de funciones pfibiicas y un poderioinnegable del centro, asi como aI raquitisrno de las de hacienda o el presidente (Cuadro XI).haciendas estatales, corresponde una enorme lirnitacion de 6. Par t iendo de la hip6tesis de que las asignaciones desus funciones piiblicas y una debilidad politica estructural. tip0 politico a las entidades federativas podian estar4. Esta situacicin se ace ntua en virtud de que de 10s ligadas a la filiation de 10s gobernadores y que Csta seingresos estatales, una proporci6n elevada que oscila en podia deducir , en par te, de que el gobemad or hubierapromedio entre el 8 y el 34% durante el period0 sido electo o designado en el regimen anterio r o en e l d e l1950-1963, corresponde a ingresos por participacibn fede- presidente en funciones, hicimos u n estudi o en el per iod0ral, subsidies y emprestitos que dependen del gobierno del presidente Ruiz Cortines sin que se pudiese confirm ar 1federal y de 10s bancos oficiales (Cuadro X). la hip6tesis. En ocasiones es dura nte el aiio de la carnpaAaEn efecto, considerando la aportaci6n de la Federaci6n cuando el aurne nto es considerable, otras, en el primer ,a1 total de ingresos estatales cncontramos que asciende a1 afio de gobierno del nuevo gobernador, per0 se dan aKos28% en 1 9 5 0 , al 29% en 1951, a1 34% en 195 2, a1 22% de campafia en que disminuye la aportaci6n federal, yen 1953 , a1 24% en 1954, al 25% en 1955, a l 2 4 % e n a.iios de primer go bierno en que ocu rre ot ro tan to .1956, al 12% en 1957, a I 16% en 1958, a1 10%en 1959, Lo que s i encontramos en este estudio es que ela1 876en 1960, a1 9% en 1961 y 1962 , aI lO%en 1963. Y calendario politico de la sucesi6n de poderes en 10saunque es visible una tendencia a que disminuya la estados hace q ue la fuerza del presidente de la Repiiblicavaya aumentando conforme se aproxima la sucesi6n presi-38

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    15/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    16/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    17/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    18/34

    nales y l o c ~ e s ~ . e lj 6 r c i t o a &m@- ;10s empresarios nacionales y exrranjmoi. ? . . c z ~ ,:. i- --todo s 10s casos, de in stit~ icio nes que ha1 ~ ~ i l l i l l l l l ) 1influyen_- directamente en la decisibn--.uberimnzi~al , ycuya acci6n co mo instituciones politicas no d l o era ajenaa la teor ia euroamericana de la democracia (pGa Za vidadolitica tod os ellos deber ian haberse organizado comociudadanos), sino que incluso la --ayoria eranU_._l___ll blancode toda la ideologia liberal.El comportamiento de :stos faito res de poder enI hlCxico es como sigue, en sus lineamientos m h generales:

    Una geografia de la politica en Mdxico durante laddcada de 10s veintes habria inclilido a todos 10s estadosde la Rep6blica entre aq~iCllos obernados por caudillos ycaciques regionales. Los caudillos, con sus huestes arma-das, rnh o menos obedientes y leales a1 jefe revoluciona-rio, y 10s ca ci q~ es e 10s pueblos y regiones, supirstitesde la colonia y la kpoca prehispinica, que en persona eran10s nusmos del porfirismo, o habian sido sustituidos en lasmismas funciones por 10s nuevos hombres dc la revolu-cibn, dorninaban todo el panorama na ~i on al . Incluso aprincipios de 10s treintas el poderio del caciquismo eraI todavia enorme: Rodriguez Triana en Coahuila; RodrigoM. Quevedo en Chihuahua; Carlos Real en Durango;Melchor Ortega en Guanajuato; Saturnino Osomio enI Queritaro; Rodolfo Elias Calles en Sonora; Tomb Garri-do en Tabasco; Galvin, Aguilar y Tejeda cn Veracruz;Matias Romero en Zacatecas.A lo largo de estos treinta arios, e~caudillismoy elcaci uismo regionales van desaparecienb o, por lo -me_nmx.+---x-erdiendo in- uencia- - decisiva en la politica de 10s estadosy e n i i e o n d .-- Algunus supirstites como Conzalo N.-~ 5 an to s -en San Luis- vieron recienternente cbmo seextinguia su poderio absoluto a raiz de fuertes presiones

    ( 1 2 t i ( ; ~ ~ i : ~' i u e r c del partido del gobbmo, yn :I convertirse en verdaderos motines poG-ios , como hobardo Reynoso de Zaeatecw, unspuCs de 10s acon:ecimientos de an Luis, en 1959,se vieron expuestos a presiones politicas muy semejmtps.Hoy rninistro de MCxico en Guatemala, Reynosospierdepaulatinamente su antiguo poder. En 1966 es quiz68 unode 10s iiltimos sobrevivientes del viejo cacicazgo c sta td .Se cuentan, es cierto, cuatro estados donde son hom-bres fuertes cuatro ex-presidentes de MCxico o sus familias-Michoac ih, Puebla, Veracruz, Baja California- y dos,como Nayarit e Hidalgo, donde se puede encontrar el tipode relaciones personales que caracterizan a1 cacicazgo. Setrata sin embargo , de supervivencias parciales, resquebraja-das, muy lejanas de ese dominio total, propio de 10sverdaderos cacicazgos del pasado, en que todo dependiadel cacique: la riqueza, 10s puestos, el honor de lasfamilias, el futuro politico. Estos restos de lo que fue elgran cacique -superior a 10s gobernad ores, e incluso a 10spresidentes en turno-, duefio y seilor de tod o un territo-rio y el destino de sus habitantes, es cosa del pasado. Eincluso las iiltimas plazas fuertes de 10s ex-presidentes, suslugares de origen, donde conservan ese ascendiente perso-nal, propio del jefe politico, o del antiguo caudillo, estinsiendo destruidas en 10s iiltimos tieipos. En la luchae el g~hiemo de 10s estados, cada vez m8s;entran peisonas que no son parientes, allegados o cornpa:-- - ---- -,\ - -m n c i a eTZcique subsiste sin embargo en 10sgobiernos locales y Ias pequeiias comunidades de la s zonasmi s -atrasadas del pais, per0 antes q ue con tar en las---.-decisiones de la politica estatal o nacional cuenta en'lasconcesiones de 10s gobiernos estatales y federal, y sobretodo, se hace sentir directarnente sobre las propias comu-nidades. E incluso en Cstas el proceso de disoluci6n delcacicazgo es visible, y son frecuentes 10s actos de rebeldiade 10s antiguos vasallos.El p i. 'ques.- ,.I47

    *

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    19/34

    regior~alcs se irlicia en la presidencia de . .0bregb11 )I sc- .-m e e r n e la profeiionalizacio'n. - . - -deIej ircito, que busca implantar norrrlms r l a c i o m e &e:_die-ncia, sustituyendo a 12s personales. E5te proceso exigeuna energia y una violerlcia que deriva a ~;~erludonhechos sangrientos. El general Amaro fue el encargado decontrolar a 10s jefes militares que quedaron con susfacciones de adictos despuis de la contienda.El Partido Nacional Kevolucionario cumple una fun-ci6n semcjnnte. Integra y controla n 10s "partidos" regio-ndes y personales de 10s caudillos de la revoluci6n. Enefecto, el caudillo, aqui como en otras partes de Hispa-noarnkrica, cuando busca obtener posiciones electoralescu n~ pl e con 10s rituales y 10s simbolos del derecho yfund a "partidos". Todavia en 1929 se registraron 51partidos politicos1 y a1 Uegar las elecciones del 29tornaron parte 61 partidos.2 Para 1933 se registraroncuatro partidos y estaban en trimite 49 solicitude^.^La historia deI W C i d o de l gobierno es, durante todos~ ' q stos aRos, una lustorih de control de 10s caudillos y--- -: i sa es una de sus funciones p~ c i p d e s . ny P u e d e ecirse que todos 10s procesos de concen-traci6n del poder presidential tienen en s u a om ouna de sus funciones, el control- e 10s caciq ues -de sus \~ a r t i d o s , e sus secuaces, de sus presidenres- -. --municipales-,-fen6meno- 9 e -- no implica sin0 indirectamente la desapa-rici6n de 10s c a c i c- - ues:En efecto, si el g ob ie r~ o entral controla el caudillis-mo, al rnismo tiemPo establece con 10s caudillos unaespecie de "contrato politico", de la mis diversa indole; siles quita el mando dc fuerza les otorga btros poderes,iionores o prestaciones. De entre 10s caudillos surgen asipoliticos de pro que trabajan al lado del presidente, osurgen empresarios, o nace un tip0 de caciques-revolucio-narios con 10s que se mantiene durante un largo period0el mismo tip0 de relaciones personales y de controles queaplicaba Po rf iio D iw a sus caciques, y qu e ahalla antece-dentes en la Cpoca colonial y prehispinica. A su vez el

    I :: 5 ~ 1 1 1 ,; i t i ~ i c r i ~ d l ,gfarffttamsntiana f ~ r -j - laciunes personales de mando, i p a l e spredeceso~cs.Pero a1 hacer la reforma agrariaiar en el desarrollo del pais, 61 mismo se transfor-ma. 1)e caudillo y agrarista pasa a ser duefio de ranchos y1 propirdades, y Ilrsia de fibricas y cornercias. S i y e siandocacique, llarnindose revolucionario, y ya pertenece a loque podria llxnarse la alta burguesia rural.Esta transformaci6n del cacique es paralela a1 debilita- .

    I miento del cacicazno. En efecto. las ulazas fuertes de 10s -. . - - - -.: < 5.:- -.- ---.caudillos y caciques son -~ometidas--- '*or__Ll p ode i presid'en-cial;per0 s u v erdade ra d es t ru cc i6 n ? l G p e n i e ~ ~ o E fo i i o+-=- - -- .- . - . . .. . - . . . . .

    del desarrollo del pais: la expansibn de 10s cGii5-0s. la'Ic o n o m ~ a ~ r ~ ~ d ~ ,a industria y el capital acaban conese dornillio total y cerrado que el cacique ejerce en suterritorio. La gente ~ u e d e alir, comprar en otra parte,vender su fuerza de trahajo a otros patronos. Los cami-nos, 10s comercios, las fibricas, la creciente burguesiaurbana y rural, destruyen el poder del cacique. Tan es asique no resulta extrsfio en el proceso de desarrollo nacio-nal ver c6mo hay caciques que se oponen a la construc-ci6n de caminos y a la instalaci6n de fibricas, y qu emueven sus influencias y ejercen hasta la violencia paraque no se construyan, ni 10s unos ni las otras. Pero ya seaque el cacique se oponga a1 desarrollo, ya que 61 mismo lopromueva, el desarrollo acaba destr uyen do su pod er personal.Los caciques y jefes politicos quedan lirnitados hoy-como ya dijimos- a 10s gobiernos locales y a lascorrientes politicas nacionales, vinculadas a su vez co notras fuerzas mais operantes, como las finanzas, la banca,el colnercio y la industria, que se interpenetran conaquCllas en la po litica national, en una etapa de transici6nde 10s antiguos a 10s nuevos grupos de presibn, y de 10ssisternas de agrupaci6n personal a las formas caracteristi-cns de 10s grupos de inter& en la sociedad con tem por ine a.Esto no quiere decir que las relaciones personales,caracteristicas de la politica dominada por 10s caciques,no sigan existiendo en forma notable en el panorama

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    20/34

    - - -- - - -. .- - - -mexicano. El mejor rnodo tod3vi.1 ii; dc.. i1 , i ... . ., - i,.ipolitisa de un i~~dividuo,n la in t imidad dc 1o.i

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    21/34

    ci6n deJ. =tor-rnilitar den tro del partid o v su fusion conef- l l & n a ~ ' ~ c ~ o ro pu la r" ? s i n paso m h- del contrg-,aue tiende a i m ~ ~ s t i n ~ o ~ r e ~ c i v i ~ e smilit ares2 -&ntro de 1- - .- * a .La organizaci6n de carnpe-sinos a 16squ e se les entregan no s6lo tienas, sin0 arrnas, en la Cpocade CQrdenas,es seguramente uno de 10s pasos miis impor-tantes para el control del militarismo.Si a estos pasos de tip0 politico se ailaden las medidasfmancieras a que aludirnos arriba, podemos comprenderen qut? ha consistido el proceso de desmilitarizaci6n de lapolitica mexicana. Pero habria que aiiadir un hecho mis,poco estudiado, que hace eoincidentes la tarea de military la de ernpresario o contratista, en que el antiguo militarparasitario se va aburguesando. En parte se trata de unproceso m h de medidas politicas en que, a1 tiempo quess disrninuye el poder financier0 del ejircito, se celebrancontratos y se dan facilidades para que el jefe militar seconvierta en empresario. Como cuerpo politico el ejircitopierde fuerza; en lo particular, una serie de jefes militarespierden belicosidad y se dedican a sus asuntos particu-lares, ampliarnente tolerados y hasta fomentados.Pero hay algo mzis. A_ b d a s a t a s medidas politicas,f w n c i y- comerciales se afiade--l desanollo econ6micosocial de la Nacibn. El ql it a r is m o de 10ss

    ,k>anoarnerica Gs forma parte d e odo un sistema en queIqs l~~-t i fiy~diosson-A l elemento--- s e n c i ~ p l a r e c i r i o sfos- --la-dios. . m o forma predominante de las relaciones-"--;- - . - --e c o n o r m c a i i ~d.~- tarisma p a s a a o c u K u n aponFEn muy distinta en el conjunto de Ins relaciozsa- - - --------I-------- - --'Ci-d w d a s - _ d e o nt ro l di rect o, re fo rm a ag raria y desa rro-I l a e c o n i c ~ ~ ~ o nl o&en d e l a d e s a p a W i m d e i f i m&5mo--- pJincipal penonafi-6 la politica mexicana. Queesta desaparicibn no aca d e f i t i v a y que pueda renicer enalguna forrna el mtkuo miiitdsmo cs otro problems. Po rlo prcjnto podem~s ablar, en este caso, como en el ,'ooolqusr, da una tendencia secular a su q, ''politico.

    La lglesia -el mb ~ ra n de errateniente y p.annmi.1.del siglo pasado-, desp uis de haber perdido su inmensoGderio en la Xefonna, que termin6 con el latifun-od - eclesihtico, y de haber recuperado parte de s u - 6 e n a enla etapa pofirista, se sinti6 amenazada por la Revoluci6nMexicana y entr6 en grandes conflictos con el Estado.Estos conflictos alcanzaron caracteristicas de inusitada

    violencia con la rebeli6n de 10s cristeros, y llegaron a mclzCm preclsamente cuando el callismo fue me nos revolu-- - --I cionario y sustituyb la politica popular y nacionalista porla demagogia an ticlerical.Con Portes Gil y sobre todo con el general LhamCirdenas se lleg6 a un modus vivendi entre el Estado y elclero; ces6 la persecuci611, cambi6 la politica de uno yotro, e incluso hub0 momentos de franca alianza y hastaapoyo del clero a la politica revolucionaria, como fue elc:,r? de la exp ropi aci6 n petrole ra, en que el Arzo bispo deMixico exhort6 a la grey mexicana a unirse con elgo bierno.A par tir de la Cpoca de Avila Camacho -el primerpresidente revolucionario que se declara cat6lico- laiglesia va recuper ando' su influencia e n la ed u c a c ih y enel propio gobierno; grupos numerosos de catdlicos seorganizan en partidos y movirnientos con ideologias con-, servadoras e incluso fascistas. En sus discursos y procla-, mas manejan deliberadamente 10s simbolos y creenciasreligiosos. Posteriormente va aumentando la actividad po-: litica del clero y de 10s grupos confesionales, que realizani peregrinaciones, manifestaciones y actos pfiblicos, cadat vez mis frecuentes y decididos.I! Desde octubre de 1951 en que el Arzobispo de MexicoI pidi6 a las organizaciones catblicas del pais que partici-1 paran en una Campan'a Nacional Moralizadora, un cornit61 ejecutivo encaberado por el Anobispo, por un sacerdotejesri ita y 10s dirigen es de cuatro grupos: Acci6n Cat6lica,

    C'.~ngreg:lc' ..Ime?.!a Liga de la Decencia y lo s

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    22/34

    - cacla vcz mris frecuen te- con finalidad es politicr;;.La fuerza y actividad del clero -imperceptible a1principio--- ha hecho tanlbidn que el modelo de Constitu-ci6n -liberal y anticlerical- que pas6 del tex to de 1857al de 1917 no se realice: la educacibn religiosa, 10speri6dicos confesionales, las manifestaciones pfiblicas, elgpoyo, unas veces vclado y las rnbs abierto, que brinda lad t a era quia eclesi is tica n 10s partidos y gupos confesio-nales, la org ~ili zac i6n irisistente, perrnanente de grup ospolitico-religiosc,~,:onlo cl hlovirniefito Familiar Cristiano,so n 11~ sl-ueba m i s , no s6lo de esta diferencia entre lazstluctura formid y real de la vida politica mexicana, sin0del creciente poderio de la Iglesia.9 e to dos 10s factores tradicionales de poder puededecirse qiie 13 Iglesia es el Cnico que ha sobrevivido a lasorandes transfonnriciones sociales del Mexico contempo-=raneo y que iilcluso h a recuperado e incrementado parcial-mente su fuerza. k r a conlprender el p~;el politico quepuede jugar en el actual context0 social es necesario sllikmbargo consid erar varios fenbmenos que ameritan estu-dios de fondo, inciispcnsables para una verdadera sociolo-gia de la religi5n en Mixico:

    -&, en la slase me dia y al ta urbana,se ve cbmo- fiesta slas practicas diarias, la moral y lainteqretaci6n-- religiosa de 10s problemas se borran oierden, cediendo el paso a fiestas, cerem3niasy q rac t i ca sp - - - - --pro fan g, a interpretacionesl y conc evtos morales deslina-dos del c o ~ . . _ r -i hoy el calendario deperegrinaciones de las dibcesis y arquidiocesis sigue siendomuy amplio y va de enero a diciembre, si "la concurren-cia mual de ~nexicanos ue visitan la Basilica de Guadalu-9, 1 1pe suma un promedio de 15 648 catblicos a1 dia , si esun especticulo frecuente ver 10s domingos cbmo se que-clan 10s creyentes a l a puertas de las iglesias por falta decupo, estos hechos no necesariamente e s t h e n contradic-

    55w % ~y %cI.&--~-.-a nt . -x

    d i l l l ; l d S ~ i . ' .:oihn- diri@ci una vigor088 carnpaOra q~ l m i n b n ci l t . ro de 1953 en la m b grande qsgnbnacional de jefes cat6licos desde el principio de la revocibn. Esta asamblea dio a conocer datos que hgta entoces estaban fuera del alcance piiblico ... En ella se hallabrepresentados 44 organismos cat6licos con un total 4 530 743 miembros. De estos grupos 24 se clasificacomo brdenes seculares y 20 como brdenes pias. Lgrupos seculares m is fuertes son cuatro: 1. Accibn Catca Mexicana, compuesta de c uatr o unidades principales:Uni6n de Cat6licos Mexicanos, grupo de hombres casao mayores de 35 afios, con 44 000 miembros; b) UnFernenina Catblica Mexicana, compuesta por maestrtrabajadoras urbanas y campesinas, con 198 052 miebros; c) Accibn Cat6lica de la Juventud Mexicana, c18000 adherentes, y d) Juven tud Fem enina Catolica Mexina, organizada por mujeres entre 15 y 35 aAos de edcon un total de 88 221 afiliados; 2. Uni6n NacionalPadres de Familia, con 50 0 00 0 rniembros; 3. Caballede Colbn, con 3 500; 4. Federaci6n de Colegios Particures, formada p or 11 2 colegios y escuelas del DistFederal; 5. Liga Mexicana de la Decencia, con 25 miebros en cada una de las 32 entidad es federales deUnion y otros rniembros mds en 10s subcomit4s;Asociaci6n Nacional de la Buena Prensa que desde 19

    ha publicado una asombrosa cantidad de literatura cat6ca: revistas: 36 971 594 ejemplares; boletines de informcibn: 208 030 509; libros y folletos: 5 990 539; y otp u blicaciones: 13 248 093 ; edita con regularidadrevistas, 8 boletines de informaci6n y dos libros a1 meLa creciente influencia de l clero se percibe tarnbign el n6mero de peri6dicos registrados de 1 952 a la fec65 en 1952; 179 en 1953; 19 7 en 1954; 242 en 19277 en 1956; 312 en 1957; 321 en 1958.9 11 0A ellos habria que aAadir un nlimero extraordinario las llamadas "oraciones" que contien en inform es y comtarios politico-periodisticos y que se distribuyen en todlas iglesias y parroquias del pais, a si como el uso del phip

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    23/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    24/34

    2 G z2 a* .Y 2 .2""3 gz $ u *." -2 AIh a $c n * G-8'" & .$ZcwOX 2I-, 4 ME402 aE U r L" 3 5 g

    'dc a w &c.l 0 - 2 05 c 3a g : ..-.

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    25/34

    Puebla, Sonora, TIaxcala, Yucath, Zacatecas (CuadroXVII).Otro indicador quiz& m is importante para detectar lageografia religiosa de MCxico es el de la poblacion de 12o rn5s afios que teniendo vinculos nlaritales solo se hacasado por lo civil o vive en uni6n libre. En 1960 de unapoblaci6n total de 12 o mis aiios que vivia en vinculosm r i t a l e s y ascendia a 11 689 960 habitantes, el 33.1 3%no habia contraido matrimonio religioso: s6lo se habiaczado por lo civil o vivia en uni6n libre. La mitad de lasentidades federativas tenia una poblaci6n con vinculosmaritales no religiosos superior a la media. En Tabascoesta poblaci6n era el 78.15% del total, en Chiapas el 77%,en Sinaloa el 65%; en Veracruz, Tamaulipas y Sonora m isdel 50%; en Hidalgo, Quintana Roo y Campeche m is del40%; en Morelos, Nayarit, Oacaca, Coahuila, territorio deBaja California y Nuevo Le6n m is de l 33%; y s6l0 en elresto de 10s estados de la Rep liblica era inferior a lamedia national: del 30% en el Distrito Federal, Chihua-hua, Puebla; de menos del 30% y miis del 20% enYucath, Guerrero, Tlaxcda, San Luis Potosi, Durango,hlixico; de menos del 20% y rnh del 10% en Colima,hlichoacin, Zacatecas, y de rnenos del 10% en 10s estadosdonde la religi6n cat6lica no ~ 61 0 s m is general sirlo mhstradicionalista: Jalisco, A gusca lientes, QuerCtaro, Guana -juato (Cuadro XVIIb).6. Por otra parte, la escaia !del fanatisrno politico-rcli-gioso a1 catolicismo moderno y al laicism0 o de is tos naqu61, no es siernpre suficiente para comprender lasdiferencias de la religiosidad en Mtxico: existe ulla pobla-ci6n de m is de un rnill6n de . hab itan tes qu e s6lo hablanlenguas indigenas; y hay 2 millones que hablando lenguasindigenas, tarnbiin hablan espaflol. En ambos casos se danc r e e n c h precorterrianas, politeistas, totemistas, rnigicas,que dri estfatos mbs aculturados se me. A las supersti-ciones ieligiosar y magfcas de corte oico. IJvv yotras soh dl a9 de consideracih~

    F- ' i ~ ) l '

    @olft&a 1 c sto,

    7. En efecto, la politica clerical no es homoginea.Dentro de 10s jerarcas hay -corn0 dijimos- diferenciasque provienen de un espiritu tradicional o mod erno; en10s distintos estratos del clero se presentan hoy, como enel pasado, diferencias culturales e ideologicas; la politicaclerical varia de una a otra entidad federativa, de unaregi6n a otra del pais, de una a otra clase social.8. Pero si el peligro de una politica clerical y deproblemas clericales semejantes a 10s del siglo XIX no seda, si la evoluci6n econ6mica y social del pais, 10scamb ios de estru ctur a,. la dife rente religiosidad d e lasregiones y entidades no permiten pensar en una vuelta alpasado, si pueden darse y se han dado en algunas regionesdel pais nuevas vinculaciones de la politica clerical tradi-cional y de las nuevas fuerzas conservadoras mexicanas yextranjeras.En el Mixico actual y en zonas relativamente vastas delpais se advierte una estrecha vinculacion del clericalimotradicional con In prerra fria, del cristianismo politico conun anticomunismo que manipula 10s simbolos primitives,10s temores de la sociedad tradicional, para provocarverdaderos fen6menos de pinico y de agresividad entr e lapoblaci6n m6s ignorante y fanitica, sea campesina o declase media.h ~ n a n i p u l a c i o n de estos ternores y fobias de lasociedad traditional-- y su &~1acibn_gon~ la guerra fria,mediante carnpdas de rumores, acusaciones, llamadosalarmantes; 10s cuentos y fantasias de miedo que sc hacencircular en el carnpo, 10s pueblos y hasta las ciudades; eluso de instrum entos religiosos -amuletos, exorcisrnos ycanlpanas que tocan a rebato- de profe tas y profecias, deap6stoles y santos, de irnigenes supersticiosas de lo mons-truoso, y conceptos populares de lo demoniaco, vincula-dos y enfrentados a1 comunismo como entidad infernal ydiabhlica, en el sentido tradicional del tirmino; Iigados auna acci6n politica cada vez mis efectiva, en que 10ssn:eril~~lr*s an sustituyendo a 10s maestros como lideres. ... : .L::ilunid:tdes y de 10s ejidos -para formujar

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    26/34

    del antiguo latifundio con sus aparceros y peones acasilla-dos, ni de las plantaciones con trabajadores semi-esclavos.En efecto entre 1915 y 1965 10s distintos presidentes de!tlCxico reparten 53 337 500 Ha. entre 2 240 0 00 jefes def2milia y la estructura agraria se transforma radicalmente.tiparecen 10s pequcllos propietarios, 10s ejidatarios, 10sirabajadores asalariados del campo; se desarrollan 10scornerciantes independientes, y las clases medias rurales;w g e n mh tarde 10s ernpresarios carnpesinos, tarnbiindamados neolatifundistas, cuyo papel y relaciones con elresio de la comunidad, de la economia, del Estado son; ~ u y istintos a 10s de sus predecesores porfrrianos, y m6s?;irecidos a 10s de una alta burguesia rural.A1 fen6meno anterior se a a d e otro no menos impor-tante: la industrialization del pais. Con el aumento delnerc ado inte mo , con las nacionalizaciones -de ferrocarri-Ies y en p articular del petrbleo- con todos 10s procesosCe acumulacibn original y de capitalizaci6n, el Estadoadquiere nuevas funciones de empresario, y las clasesciorninantes -antes reducidas a grupo s minfisculos- juegannuevos papeles de industriales, grandes cornerciantes, ban-queros. Es asi corno el perso ~iaje politico que viene asustituir a1 latifundista es el empresario, y el tip0 derelaciones sociales predominantes es el capitalists, queabarca el conjunto de las zonas desarrolladas del pais ydomina el resto.Intentar un andisis del crecirniento de este nuevo tip0

    Ide relaciones equivaldria a hacerg un estud io general delclesarrollo del sistema econbrnico y social del pais en lasfiltimas dicadas.' Vamos a lirnitamos aq ui a esbozar elpoder actual de 10s empresarios en relaci6n con el proble-ma que nos ocupa y en particular con el gobierno.Un estudio realizado en 1960 por el econornista mexi-can0 Jod Luis CeceAa sobre las empresas m b grandes eimpoltantes de Mdxico (2 040 empresas con in~esosanuales tie cinco rnilloncs de pesos o 111 c enconjunto poseen ingresos de 56 000 mdlonc~ yde heeht, dominan la economia mexicm - '

    1 demandas, levantar protestas, y organizar manifestacionesreligiose-politicas- provoca un rniedo cornpletamente ra-cional entre 10s propios politicos -gobernantes, diputa-dos, lideres-, amenazados siempre de ser acusados de"comunistas", con la conno taci6n migico-diabhlica deltknnino, y las fobias brueghelianas que despierta. -Que 10s extremos de esta politica se encuentran locali-9- - --zados en ciertas regiones mas atrasadas del ais, que la+oncepci6n migica y medgv- del anticomun%mo cedepaso en estratos superiores a una propaganda menosprimitiva, que 10s sectores liberales y de pensarniento mhsmoderno siguen dorninando la situaci6n en 10s pueblos, yque incluso en las entidades federativas donde se da m6sacusadarnente este fen6meno hay grandes niicleos decarnpesinos con tierras, de ejidatarios revolucionarios, queapoyan a las elites liberales y las ayudan 9 mantener elpoder, son hechos indudables. Sin embargo no irnpiden elque hoy el clero tradicionalista represente una de lasfuerzas mis vivas y actuantw en la politica mexicana, yconstituya uno de 10s grupos de presi6n m6s poderosos y&versificados_ .- _--1_ . l que 10s gobernantes deben tomar encuenta en sus decisiones, unas veces corno aliado frente a

    I1 las demandas populares que hacen peligrar su fuerza o susintereses, otras corno enernigo que intenta derrocarlosysustituirlos. IIV. LOS EMPRESARIOSLa reforma agraria, iniciada a raiz de la revoluci6n, yque alcanza su mayor intensidad en la ipo &d e Ch den as,-limina el sist mn d d a 4 d b-- dios v ,co n 61 e l t i p ~ er e l a c i o n b ~ ~ n o sktores equiparan al feuda-l i s m ~ , n busca de una categoria europea que sirva depunto de referencia. De un pa is -como el MCxico de

    1910- en que 11 000 hacendados poseian casi el 60% delterlitorio nacional, pasarnos a ser un pais de pequefiospropic t srios, de ejidatarios y de grandes empresas agrico--!2.tLd5 t~h e n l que no quedan casi vestigios

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    27/34

    relativa de la empresa privada riacional, de la extranjera yde la ernpresa estatal (Cuadro XVIII). De las 100 rnayoresempresas el 50.27% del ingreso corresponde a las decontrol extranjero y de fuene participaci6n extranjera; el13.52% a las del sector privado indepenhente, y el36.21% a 1 s empresas del gobierno. En 1as doscientasmayores empresas las proporciones correspondientes son:53.96% (extranjeras o de fuerte participacibn extranjera),16.53% (sector privado independiente), 29.5 1% (gobier-no); en las 300 mayores: 54.51% (extranjeras o de fuerteparticipaci6n extranjera), 19.04% (sector privado indepen-diente), 26.45% (gobiemo); en las 400 mayores -quetienen ingresos equivalentes a1 77% del total- las propor-ciones son 54.06% (extranjeras), 21.09% (sector privadoindependiente), 24.85% (gobierno). En todos 10s casos,como se ve, las empresas extranjeras y de fuerte participa-ci6n extranjera poseen mis del 50% del total de ingresos,y las de m b empresas privadas del 1 4 a1 22%. Unas y otrasobtienen, en el total de las cuatrocientas mayores, las trescuartas partes del ingreso, mientras el gobierno sblodbtiene la cuarta phrte restante. La_ empresa privada,

    - .--- -mexicana__ _ I extranjera, es asi una extraordinaria 5k rz" anlas-------ecisiones ec6nomicas.- Org

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    28/34

    .a.a~ionales",~ y en la realidad politica funcionan comouna especie de congresos de patronos que tienen influen-cia d ec ~ iv a n la legislacirjn y en la administraci0n. " l i t 1 clpais existe un sistema de cimaras -escribe el invest~gaclornorteamericano Brademburg- que perm ite a1 gobiernoconocer la actitud de un negocio determinado antes deproponer a1 Congreso cualquier ley que pudiera pe jud icaro entorpecer ese negocio. Cada c h a r a -afirma Bradem-burg-- decide sobre. la politica q ue deban adoptar 10sintereses que representa, cuando se le envia el proyectode ley para que haga sus observaciones. La mayoria de lasc h a r a s disponen de un cuerpo de abogados especializa-dos que proponen a1 gobierno las m odii>caciones quecreen oportunas. Si las sugestiones in dican que de terrnina-da propuesta -en caso de adoptarse- seria perjudicial nosolo para 10s intereses de la c h a r a sino tarnbiin para 10sde la sociedad mexicana en general, el gobierno se inclinaa reconsiderar la iniciativa. En esa forma 10s negociosparticipan directamente en el sistema politico de Mexico,aunque con frecuencia no tengan representacibn formal enel partido o en el gobierno. Se siente su influenciadirectamente; la accibn es ripida y 10s resultados tangi-b l e ~ . " ~ 'Y este sisterna de con sult a -real- se sum a unsistema de informes snuales, establecido desde la dicadade 10s treintas, en que el secretario de Hacienda pronunciaun discurso sobre 111 politica financiera y econornica delregimen, que es sornetido a la critica efectiva y, a veces,muy enirgica de 10s convencionistas, respaldada habitual-mente por la prensa.Es asi como encontramos en el Mexico de hoy unsector amplio y profundamente organizado, con financia-miento propio, con representantes propios elegidos derno-craticamente, con expertos y ticr~icos SI I s e ~ i c i o uereciben 10s mejores sueldos del pais y sirven para asesorar-lo en el terreno econ6mic0, juridic0 y poli t icc . conorganizaciones que se c o o r d in ; :~ ~ntre s i y si ;adavez qu e lo juzgan conveniente para . 'tlaestrategia corntin, Este sector, que IE,--- . I

    poblacion, esto es a unos doscientos mil rnexicanos -co-mo observa Gonzhlez Cosio, en su estudio sobre "Lasclascs y cs lr :~ los oci:llcs" 7,2 lict10 ~ I ~ I ~ I I ~ I I Q I ~S~CIJVque i r~ l l u y e~ lll 1i1 Icgrd;lu[urlty la u c l ~ ~ ~ i l l i s t r a c i t ~ luber~ramental, que modifican las decisiones del Ejecutivo, trassometerlas a una critica y a una aprobaci6n tambiknefectivas, que censuran en forma prictica 10s informesecon6nucos que les hace el gobiem o, proponien do m o d s -caciones a la politica econ6mica y fmanciera gubernamen-ta l -con el respaldo de la gran prensa- y en una formacompletamente distinta a la que corresponde a 10s infor-mes anuales del presidente al Congreso, con su significadosimbhlico y 10s comentarios rutinarios que p receden oacompafian la aprobacion automdtica y tambiCn rutinariade 10s mismos.El funcionamiento real, el sentido efectivo de defensade 10s intereses ciudadanos, que buscaban desde la Cpocaclisica 10s ideblogos de la dem ocracia, s i se pu ede aplicaral sector patronal de MCxico, con sus organizacionesrepresentativas c &?fluyentes n las decisiones gubernarnen-tales. Que el poder de este sector frente a1 Ejecutivo y algobiemo e n general. es inferior al de otros paises por unaexcesiva intervenci6n del Estado en la economia es unllecho discutido y discutible que arnerita un cuidadosoandisis.En efecto, el sector pGblico ha venido contribuyendodesde hace tiernpo con m6s de una tercera parte de lainversi6n territorial bruta: en 1961 par tkip6 con e l 46%yen 1963 con el 5 0 % ~ ~ ~iene por lo tanto un gran influjoen la inversion privada y en el desarrollo econbmico: lainversion privada como lo han observado varios economis-13s se comporta como variable dependiente de la piiblica- -el jnversionista privado espera a ver cu;iles son 10s gastose irlversiones del gobierno para invertir a su vez. Enocasiones la i1liersi6n guberrlamen tal con trarre sta -co moocurri6 en 1961- "10s efectos negativos del bajo nivel dela inversijn privada". Opera asi en f o m a supletoria yr e l o t i v ~ n e r ~ t endependiente promoviendo la ocupacibn, el

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    29/34

    t i ; a "3a "a m *2 2 " ' za 2 2 g.:OS.-E+'E CCr i oa g gO E : 0,5 .%2 p so

    .-I0 O W

    3 s 5;h i u , ..g L -2 *g Z g 25@ 3 ' = >- c - ~ zs x - :" 2 5 %cn a s gs g mo E b2 % $Q0 o).zln,0 s m xv, @ Z

    C$ : gz

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    30/34

    r part icipaci6n pro por ~i~ nal me ll te ayor: el 19%81 gobier-!! no francis , el 20.6% al brithico, y el 21% a1 norteameri-C cano.c Pero hay un hecho quizis mis significativo, y que 10s1 criticos de la intervencibn del Estado no consideran, y es3 la situacion especifica de esta intervention estatal, y elI context0 en que opera. En efecto, la inversion estatalc depende en gran medida de un financiamiento extranjero,I que es de l 30.8% e n 1959, del 34.8% en 1960, del 47.4%i en 196 1, y esta dependencia tiene caracteristicas estructu-1 rales -en virtud del alto conte nido de importacion es de10s paises subdesarrollados, y de la coyuntura internacio-1 nal e interna que provoca la disminuci6n en el ritmo de laactividad econbmica, como ocurrib en 196 1- y conduce ala obtenci6n de criditos en el exterior.Ahora bien, estos crkditos que dependen del exterior yen particular de 10s Estados Unidos, sumados a la fuerzade las empresas extranjeras y de fuerte participacibnextranjera, y apoyados directa o indirectcmente por lapolitica e c o n r n c a . y el pod er estatal de NortearnCrica,red- una manera notable el pbder del Estadom m o , e su rig im en p residencialista, y de su aparatoproductive y, financiejo, e invitan a r e f l e x i o n a ~ r i a @ g e

    para saber si C _ _ L -a proposici6n- dl-quz el Estadome_xicanodisminuya su intervenci6n no redundaria, por una ley casifisEa, en un increment0 del poder y la influencia delG -E3t-ado nortea merican o. A ese efecto e amfizarqbjetivamenter d a -4er--@aNoras

    hlemorl? de la Secrerorio de Gobenlocion. (1928 1929) .Ibid. (1929-1930). IIbid. (1933). i

    - - & -pp. 1-36.4 Iturriaga, fos6 E. "Los presidentes y las ' , ~ . inM6xico", en CYencias Politicas v Sociales. Enero-i, 1958.

    Ibid.Liewn, Edwin. A r m s y Politlca en America LatinnBuenosAires, Sur, 1960. pp. 151-152.Liewen. Op . cit.' r a de m bur ~ .p. cit.Direccibn General de ~s ta di st ic a nuarios.

    l o Desde 1959 sblo se publican las cifras conespondientes a10s peribdicos registrados en la Direcci6n General de Correos poxlo que las cifras bajan considerablemente: 206 en 1960, 186 en1961 y 181 en.1962.Informe del Sr. ALfonso ~a r c u d onzdez, Consemador delMuseo del Tesoro ~ rt is ti co e la ~a s& ca , 962.

    l 2 Rivera R., Pedro, S.J. Instituciones Protestantes en Mixico.Mdxico, Editorial Jus, 1962. p. 122.l 3 Este cilculo -extremadamente consemador- es posible quese refiera a la influencia directa de la lglesial 4 Iturriaga, Jo& E. La estructura social y culfural de Mixico.Mdxico, Fondo de Cultura Econbmica, 1951. p. 146.l 5 ~ a z b nespecto del total de poblacibn catblica.

    Para un estudio prelirninai del desarrollo capitalists deMixico cf. nuestro ensayo: "Mdxicd: el ciclo de una revolucibnagraria", en Cuademos Americanos Enero-febrero 1962. pp. 7-29.l 7 Cf. Ceceiia, JOG Luis. 67 capital monopolisfa y la econo-mia de Mixico. M6xic0, Cuadernos Americanos, 1963.l 8 Cf. Gonzilez Cosio, Arturo. "Qases y estratos sociales" en

    Mixico: Cincuenta AAos de Revolucibn Mdxico, Fondo deCultura Econbmica, 1961. T. Il,,p. 73.l 9 Guzmb Valdivia Isaac. "E l movimiento patronal" enCirzcuenta Alios de Revolucibn. T. 11, p. 318.20 Cf. Leyes de Cimaras dc Industria y de Charas dComercio.' Bradcmburg. Op. cit.2 2 Gonzilez Cosio. Op . cit. p. 73.'3 Cf. n'lcntcria de las Oficinas de la Junta de Cobierno de 10sOrgatlismos y Ernpresas del Estado. Mdxico, Secretaria dePatrimonic National, 1962 y 1963.24 Campos Salas, Octaviano. "Las instituciones nacionales decridito" en Mixico: Cincuenta afios de Revolucibn Op. cit. T.1p. 422.2 s Para un estudio m& amplio Cf. Ibid. pp. 420-444.

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    31/34

    CAI'ITULO 111EL PODER NACIONAL Y EL FACTORDE DOMINIO

    Mdxico estb ubicado en la zon3 _de-influepcia d e la+-- --- -

    cconomia y el Estgdo norteamqicanos, a cuyo favoro $ Z Z X E c t o T d e dominio. Su historia internacional en lo+- -que va del siglo XX -sobre tod o en el periodo de laKzvoluci6n hlexica na- es una historia dg med idas politi -,cas, militares, ec on -6- m ica uu e bur-toiJeamericana r incrementar la capacidad de ne go r ia ~i bndel E s t d o qx ic an o . H is to ria de t rop iezos , avances yiitiradas, la diniimica de 13 desigualdad no se rompe. Adistintos niveles, y con una capacidad de negociacibnlnucho m6s alta de la que teniamos en el pasado, eln ~ s m o roblema se sigue planteando, ora en el terrenoecon6mic0, ora en el politico y el cultural.Para tener una idea aproximada del poder nacional y elfactor de dominio que sobre Mexico ejercen 10s EstadosUnidos vamos a lirnitarnos a 10s indicadores m is gruesos

    que caracterizan el fen6meno en lo econ6mico y politico,a sabiendas de que en este breve ensayo dejamos de ladomuchas posibilidades de medici6n y anilisis, tanto de lafuerza de negociaci6n del Estadq mevicano corno del pesoque ejerce sobre dl la gran potentia.I. A unque "la aportacion total del exterior a la capita-lizacibn interna apenas significa el 2.3% de la inversi6nterritorial bruta", ya hemos visto c6mo en las 400empresas m is poderosas de Mixico -aquellas que pric ti-camente controlan la ecpnomia nacional- m i s del 56%y de fyerte participa:__4-

    IPSmpresas e%Wm \ampresaspndomlnantor son itas nortearn~h'&+ 7 S" p & c i 6 n

    en la inversi6n extranjera directa, lejos de disminuir seincrementa a lo largo de las dos dltirnas d6cadas. En laspostrimerias del gobierno de Cirden as la inversibn nortea-mericana representaba el 62 % del total de inversiones. extranjeras; en el periodo de Avila Cdmacho (19 41 46 ) el66%; en el de Alem in (194 7-52) el 72%, en 10s cincoprimeros aiios del gobierno de Ruiz Cortines (1953-57) el74%.Desputs de 19 57 el Banco de Mexico deja de publicar10s datos; pero es creible por la propia tendencia y por

    circunstancias nacionales e iiiternacionales que haya se-guido aumentando la proporci6n que corresponde a Nor-teamdrica del total de inversiones directas en Mdxico o, enforrna muy conservadora, que se haya mantenido igual(Cuadro XIX).111. Del total de crdditos con el exterior la proporcibnm is al ta corresponde a 10s Estados Unidos de ~ o h e a m i r i -ca. En 1964, de 10s crtditos obtenidos a travds deNacional Financiera el 54.8% correspondi6 a ese pais.Estos criditos, mucho mas convenientes desde el punto devista econ6mico que las inversiones directas, en la medidaque no producen saldos desfavorables y, lo que se hadado en llamar descapitalizacibn, no excluyen sin embargoel hecho de que, hasta hoy, 10s intentos de diversificar lasfuentes de cridito en el extranjero no han acabado con elpredominio de las fuentes norteamericanas. En el mismoail0 lnglaterra contribuy6 con 15.2% y Francia con el8.1% pero Alemania solo contribuy6 con el 3.6% BClgicacon el 2.6%, Canada con el 1.6%, Holanda con el 1 . 2 % ~10s organismos internacionales con el 8.4%. La contribu-ci6n de Suecia, Suiza e ltalia fue de menos del I%.'Aiiidase a1 hecho anterior que mientras de 1945 a1954 el yromedio anual de criditos dispuestos fue de35.1 millones de dblares, de 195 5 a 19 64 el prom edio esde 207.1 millones, esto es, m i s de cinco veces mayor(Cuadro XX).IV. "La actividad econ6mica interna depend e en un15 % del mercado extarior, por ciento que constituye el

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    32/34

    v , m a ) ~ W9z-s-3-ccCI L2 , 0 - o x . "m a E C:

    - 0 a),C,. .CL%

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    33/34

  • 8/6/2019 11.- Pablo Gonzlez Casanova - La democracia

    34/34