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Reportaje: El Movimiento por la Dignidad. Su historia; principios y proyecciones para un nuevo año de lucha. Pág. 4 y 5. Informese sobre la nueva lucha de la FENAPO: la ficha de protección social. Pág. 2 Después de 82 años de historia, el Club S. y D. Barnechea se corona campeón de Tercera División y desata un carnaval con su ascenso a la Primera B. Pág. 7. El Pueblo Llama. LA RED INFORMATIVA DE LOS POBRES DE LO BARNECHEA. CONTENIDO: EDITORIAL 2 FENAPO 3 REPORTAJE MPD 4 COP 6 BARNECHEA A LA B . 7 CONOZCA A WILLY E . 9 OTROS CONTACTOS: [email protected] Visitanos en Facebook: El Pueblo Llama. Lo Barnechea, Diciembre 2011, Nº 4.

216 el pueblo llama 4°edicion dicie,bre 2011

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216 el pueblo llama lo barnechea, diciembre 2011 n °4 la red informativa de los pobres de barnechea ---informese sobre la nueva lucha de la fenapo (federacion nacional de pobladores y trabajadores de chile ).-´pag 2 REPORTAJE: EL MOVIMIENTO POR LA DIGNIDAD. SU HISTORIA; PRINCIPIOS PROYECCIONES PARA UN NUEVO AÑO DE LUCHA.PAG 4 Y 5. DESPUES DE 82 AÑOS DE HISTORIA, EL CLUB S. Y D BARNECHEA SE CORONA CAMPEON DE TERCERA DIVISION Y DESATA UN CARNAVAL CON SU ASCENSO A LA PRIMERA B PAG 7. CONTACTO: [email protected] VISITANOS EN FACEBOOK: EL PUEBLO LLAMA

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Reportaje:

El Movimiento por la Dignidad. Su historia; principios y proyecciones para un nuevo año de lucha. Pág. 4 y 5.

Informese sobre la nueva lucha de la FENAPO: la ficha de

protección social. Pág. 2

Después de 82 años de historia, el

Club S. y D. Barnechea se corona

campeón de Tercera División y

desata un carnaval con su ascenso

a la Primera B. Pág. 7.

El Pueblo Llama.

LA RED INFORMATIVA DE LOS POBRES DE LO BARNECHEA.

C O N T E N I D O :

E D I T O R I A L 2

F E N A P O 3

R E P O R T A J E

M P D

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C O P 6

B A R N E C H E A

A L A B .

7

C O N O Z C A A

W I L L Y E .

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O T R O S

CONTACTOS:

[email protected]

Visitanos en Facebook:

El Pueblo Llama.

Lo Barnechea, Diciembre 2011, Nº 4.

Históricamente, nosotros los pobres, hemos sufrido explotación, desigualdad, opresión y represión producto del

poder que ejercen los ricos sobre nuestra clase social. En Chile, esta lógica ha sido permanente, incluso antes de existir

como nación, y ha perdurados durante casi 500 años de historia.

A pesar que, actualmente, aún vivimos bajo un sistema económico, político y social favorable a los ricos y podero-

sos de nuestro país y del mundo, hemos luchado por cambiar las cosas con dignidad. Desde fines del siglo XIX, la organiza-

ción de los trabajadores puso muchas veces en jaque a patrones, gobiernos y estado; desde mancomunales, pasando por

sindicatos, hasta llegar a la conformación de cordones industriales con control obrero de la producción existentes a princi-

pio de la década de 1970.

Sin embargo, el capitalismo, personificado en la derecha política, en los millonarios y en los militares, logró dete-

ner el avance del poder popular, y además rompió con todo el tejido social que los pobres habíamos construido a lo largo de

más de un siglo de lucha. A través de asesinatos y desapariciones, la dictadura impuso un sinfín de leyes que afianzan un

neoliberalismo inhumano e injusto para nuestra clase; y por sobre todo neutralizó la organización de los trabajadores, que

hasta la fecha era el arma más efectiva para combatir la desigualdad. Sumándose a esto, con la vuelta a la “democracia” en

los años 90, se prolongaron y profundizaron estos cambios, a los cuales, los pobres, no hemos podido hacer frente, ni mucho

menos derribarlos. Hoy, muchos aun vivimos con malas condiciones laborales o cesantía; educación y salud privatizada,

situaciones que te llevan a endeudarte o esperar migajas; sin una casa propia donde establecer nuestras familias; con una

cultura que inculca día a día el consumo, el egoísmo y la competencia, y además nos tiene cada vez mas despolitizados y

desorganizados.

¿Cómo luchamos contra estas injusticias, si los trabajadores estamos desarticulados? ¿Cómo exigimos educación

de calidad y gratuita para tod@s, si los estudiantes no son escuchados? ¿De qué forma construimos vida digna si los veci-

nos no solidarizamos con nuestros pares? Nuestro proyecto apunta a la confluencia de las luchas, bajo la bandera de nues-

tra clase, la de los pobres. Los pobladores, a lo largo de todo chile, tenemos un montón de necesidades que son generadas

por el sistema capitalista neoliberal; por eso los invitamos a generar las instancias de discusión, a crear desde las bases e

ir progresivamente construyendo el nuevo barrio. No olvidemos que pobladores somos todos (trabajadores, dueñas de casa,

estudiantes, adultos mayores, etc.), y en nuestras poblaciones confluyen todas las injusticias que nos impone el sistema de

los ricos; aquí y ahora debemos organizarnos, para que entre todos generemos nuestra política, y logremos un proyecto de

vida con solidaridad, dignidad e igualdad.

Editorial

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Jornada de movilización nacional FENAPO. Corte de calle Av. Las Condes.

Fotografía de Aaron Soto Fotografía: Aarón Soto

Colaboradores:

Francisco Cornejo. Andrés Herrera. Javiera Rivas.

Diego Espinoza. Atilio Herrera. Fernanda Valenzuela.

Fotografías:

Nicolás Cubillos.

Aarón Soto.

La Federación Nacional de Pobladores (FENAPO), es una instancia de organización que agrupa comités y

movimientos conformados por familias allegadas, deudores habitacionales, damnificados por el terremoto y tra-

bajadores. Esta idea cobra real fuerza el 27 de febrero de 2010 a raíz del terremoto.

Desde la organización y la lucha buscamos obtener una vivienda digna, en cuyo proceso por conseguirla vayamos

construyendo un nuevo sujeto que, a través del dialogo y la solidaridad, forme una comunidad capaz de luchar por

el derecho a la ciudad y la construcción de un nuevo barrio.

Planteamos que nuestro derecho a la vivienda y a la ciudad debe conseguirse a través de acciones programadas y

concretas que se evalúan constantemente en conjunto con todos los miembros de la Federación.

Nuestro ordenamiento es horizontal, en tanto dentro de la federación, todas y todos los dirigentes son represen-

tantes de cada una de sus asambleas y poseen la legitimidad de opinar en cada decisión que como federación to-

memos.

Actualmente nos encontramos en una etapa en la cual finiquitaremos algunas de las propuestas que se desarro-

llan de manera definitiva con el ministerio de vivienda. Por lo anterior es que nos encontramos en una etapa deci-

siva en donde necesitamos unir la mayor cantidad de fuerza entre las organizaciones que ya somos miembros de

la FENAPO y quienes se sumen a este proceso de lucha.

Tras estos avances la FENAPO hoy cuenta con alrededor de 30.000 familias pertenecientes a los distintos movi-

mientos que nos agrupamos en esta organización.

Ficha de protección social: la lucha que hay que ganar ahora

Más conocida como la ficha CAS, la actualmente llamada Ficha de Protección Social

es el instrumento que utiliza el Estado para medir la pobreza y su puntaje determina

si nos dan subsidio habitacional, si ingresan nuestros hijos a los jardines infanti-

les, si nos dan becas, si nos dan bonos, sin nos ayudan con los remedios del consul-

torio, etc. Sin embargo, este instrumento está siendo utilizado para esconder artifi-

cialmente la pobreza; el gobierno en vez de solucionar los problemas de ingreso y

de oportunidades de nuestra población, lo que está haciendo es subir artificial-

mente los puntajes, para que así aparezcan menos pobres en el país y por lo tanto,

ellos no desembolsen tanta plata hacia la ayuda social, desviándola para ayudar a

las empresas de los ricos.

Por estas razones la Federación Nacional de Pobladores ha rechazado el mecanis-

mo de la ficha, llamando a todos los chilenos y chilenas a NO encuestarse y al gobierno a generar cambios profun-

dos del instrumento, para que de verdad mida la pobreza y no le esconda. Nos declaramos en estado de alerta y

preparamos grandes movilizaciones que apunten a exigir estos cambios; así como llamamos a crear comandos

comunales amplios, para que entre todos y todas ganemos esta batalla. 3

Portada periódico El Quinto, haciendo un llamado

a movilización por la ficha de protección social.

En Lo Barnechea, el problema de los allegados ha sido un conflicto que por muchos años se mantuvo en silencio

y no se tomó en cuenta ni por la alcaldía de Marta Hellers ni de Felipe Guevara en el inicio de su gestión. Ambos

alcaldes, estaban demasiado preocupados en convertir nuestra comuna en el paraíso de los ricos y las inmobi-

liarias como para darse cuenta cómo aumentaba el hacinamiento en nuestras poblaciones. Cada vez que alguno

de nosotros iba a la municipalidad a preguntar por casa, la respuesta de los funcionarios era que la posibilidad

de vivienda era siempre y cuando nos fuéramos a comunas como Colina, Huechuraba, Lampa, Puente Alto, etc.;

pero que aquí, en nuestra comuna, era imposible ya que no había terrenos en donde construir viviendas sociales.

Así fue creciendo el número de allegados llegando hoy a una cifra cercana a los 4 mil. En este contexto nace el

“Movimiento Por la Dignidad” organización que lleva más de dos años de lucha y tiene como característica no solo

luchar por su vivienda sino como su nombre lo dice, por la dignidad de los pobladores de nuestra comuna.

Nuestra Historia

La mañana del 8 de Diciembre del 2008, cerca

de las 12 horas, en la municipalidad se preparaba

la ceremonia del cambio de mando entre Martha

Ehlers y Felipe Guevara, cuando un centenar de

pobladores con pancartas ocupó el teatro munici-

pal para protestar por la falta de respuestas. Ese

fue el puntapié inicial de nuestra larga lucha. En

un principio estábamos organizados bajo las ban-

deras de APST (Agrupación de Pobladores Sin Te-

cho), y fue ahí donde recogimos varias experien-

cias como organización. Pero más tarde, producto

de los conflictos con la dirigencia de APST, quie-

nes pensaban que la asamblea de pobladores era

de su propiedad y por lo tanto podían imponer sus

decisiones a los vecinos, decidimos romper con

ellos y comenzar nuestro propio camino. Nació el MPD (Movimiento Por la Dignidad). Desde ahí, hemos ido crecien-

do de manera lenta pero sólida. Actualmente contamos con tres asambleas de allegados: una en el cerro 18 Norte,

otra en la Población San Lucas y la tercera en Lo Hermita. Desde hace un poco más de un año formamos parte de la

FEDERACIÓN NACIONAL DE POBLADORES (FENAPO), instancia que comenzamos junto con otras 2 agrupaciones y que en

la actualidad representa a cerca de 40 mil familias, entre allegados, deudores habitacionales, campamentos y

damnificados del terremoto, los que se extienden desde Arica hasta Arauco. Con la FENAPO, el año pasado, dimos

una dura lucha por los cambios en la política habitacional que pretendía bajar considerablemente el subsidio e

imponía una política que expulsaría a los pobres de la ciudad a la periferia. Después de cortes de calles, tomas de

terrenos, ocupación masiva de espacios públicos, etc. logramos detener estos cambios y nos sentamos a la mesa,

para aportar en la nueva política habitacional que beneficiara a los pobres.

Los cambios impulsados por la FENAPO en sus diversas movilizaciones han traído importantes victorias para el

mundo de los “sin techo”, y aunque entendemos que aun nos queda mucho por luchar, estamos convencidos de que

es el camino correcto; ya que los cambios que hemos impulsado y seguiremos impulsando en la política habitacio-

nal, no solo nos beneficia a nosotros, sino que esperamos que nuestros hijos no te pasen por lo mismo que noso-

tros: viviendo de allegados, arrendatarios, o endeudándonos de por vida para conseguir el sueño de la casa propia.

MOVIMIENTO POR LA DIGNIDAD

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Mural realizado en el Cerro 18. Noviembre de 2009.

El terreno que estamos peleando

Estamos peleando el terreno denominado como “CALAMA”. Es un terreno de más de 20 hectáreas, perte-

neciente al ministerio de Bienes Nacionales, y entregado en comodato al Ministerio de Educación. Este terreno

está en desuso hace 25 años, y al ser propiedad del Estados tiene la obligación moral de entregarlo a los más

necesitados.

¿Qué es el MPD?

El Movimiento Por la Dignidad (MPD) es una organización social que trabaja principalmente en el proble-

ma habitacional. Es más que un comité de allegados, es un Movimiento de Pobladores que considera la obten-

ción de la vivienda propia como uno de los muchos pasos que los pobladores debemos recorrer para conseguir

una vida digna. Pero así también nos preocupan los problemas educacionales, de salud, del medio ambiente, de

la cultura. De hecho, fuimos nosotros quienes convocamos a las muchas marchas en apoyo a la educación digna,

que movilizaron a muchos vecinos y fueron creciendo hasta llegar a una que aglomeró más de 2.500 personas

transformándose en la más masiva de la historia de la comuna.

NUESTROS PRINCIPIOS EN EL TEMA HABITACIONAL

a) Viviendas en nuestra comuna porque es nuestro derecho a elegir donde vivimos, porque aquí tenemos nues-

tras familias, porque aquí tenemos nuestros trabajos, porque aquí tenemos nuestras raíces, porque aquí na-

cieron nuestros hijos, porque aquí tenemos nuestras amistades, en fin… porque aquí tenemos todo.

b) luchamos por una vivienda digna por sobre 60 metros cuadrados, que se financie con el subsidio básico evi-

tando el endeudamiento de las personas.

c) el que lucha gana, el que no lucha esperará por las limosnas que nunca llegan.

d) no cobramos cuotas porque luchar por una vivienda digna no es trabajo de un dirigente sino que es trabajo

de todos. Solo se hacen actividades de financiamiento para financiar la lucha y solidaridad con los necesita-

dos.

e) la solidaridad entre los vecinos porque para construir una población digna debemos confiar en los nues-

tros.

5 Jornada de Paro Nacional 24 de Agosto 2011. Marcha multitudinaria convocada por MPD.

Los detalles B del ascenso a la B

Señores, esto es fiesta popular:

Un verdadero carnaval se vivió, en nuestra comuna, cuando el Club Social y Deportivo Bar-

nechea Fútbol Club, ascendió al futbol profesional tras sus 82 años de historia. Aquí los de-

talles, de principio a fin, de cómo se vivió aquél histórico día para nuestro pueblo.

En plena avenida Lo Barnechea está ubicada la botillería “Santa Magdalena”, de esas antiguas, espaciosas, la

gente puede entrar y hacer vida social mientras le envuelven cuidadosamente su pedido en papel de diario. Los me-

sones son largos y robustos. El predominio de madera hace una escenografía acogedora que al momento de entrar

invade la sensación de que estamos en una taberna con historia.

Es aquí donde se empiezan a aglomerar algunos hinchas del Club Social y Deportivo Barnechea Fútbol Club.

Están ansiosos porque hoy se juegan el ascenso a la división profesional. “Aquí las cervezas están muy heladas, los

tratamos como rey, no como en el súper mercado”, lanza un vendedor mientras entrega su pedido a uno de los guata

amarilla.

En las afuera de la parroquia Santa Rosa, hay cinco buses dispuesto por el club para llevar a los barnecheinos

al estadio Municipal La Pintana, donde se jugará ante Mejillones para conseguir el tal ansiado campeonato que los

llevaría al fútbol profesional.

Abuelos, padres, madres, jóvenes y niños cantan: “Barnechea tieeeene tooquee, Barnechea tiene goool, Bar-

nechea tiene toodooo, todo para ser campeóooooon”. La escena familiar motivaba a cualquiera.

El periplo al sector sur de la capital, La Pintana, se hizo en caravana en donde se iban levantando las expecta-

tivas al ritmo de los cánticos y con esa sensación de paseo escolar que contagiaba hasta a los más inertes , producto

de su senectud, que piensan que van a perder la vida esperando una hazaña deportiva del club de sus amores.

Ya en el estadio, la festividad está instalada, encima de esa tecnocracia profesional, que se olvidó que esto

es un placer y no un deber. Los guata amarilla parecen los encargados de recordar de que esto no es desechable y

nace de alegrías y sufrimientos. Tres muchachos esperan, con un extintor cada uno, la salida del equipo, que cuando

se produce, los accionan enérgicos como si estuviesen apagando el despiadado individualismo y dando rienda suelta

a compartir la felicidad.

En la barra, el encargado de poner pulso es el Willy, el del

bombo, que en su estado de Parkinson indomable se sacrifica mi-

rando el partido de reojo para aleonar a sus muchachos, los más

jóvenes, a que canten hasta que se coloquen del color de su guata.

“Caaanten. Barnechea es lo más grande”, suplicaba. Sus ayudan-

tes más fieles son dos niños que tocan una corneta y una caja.

Transpiran y miraban felices, mientras tratan de apalear el calor

con una bebida que tienen bronceándose en el tablón. Ese sorbo

les debe haber recordado el agua de la manguera que beben des-

pués de la pichanga en el pasaje. Pero da lo mismo que el refresco

tuviera la temperatura de un té porque ellos estan de fiesta y sacri-

ficio. También, ayudan a recordarle a Willy, las canciones, que

cuando entra en estado de Alzheimer las olvidaba.

Más arriba estan los jóvenes imberbes y pubertos que alientan con su voz recién cambiada que no coincide

con lo que demuestra sus cañuelas. Ellos llevaban constantemente su mano a su camiseta. De reojo miran a alguna

chiquilla que logra desconcentrarlos, pero Willy, el del bombo, les recuerda cual es su misión: alentar.

También están los pololos que llevan orgullosos a sus princesas. Le limpian el tablón, las abrazan para que no

lastimen sus pétalos que combinan delicadamente con el azul y amarillo. Ellas miran el partido mientras sus escoltas

se sientan tranquilitos -quién los vió- a disfrutar del partido.

Las señoras disfrutan acompañando a sus hijos y compañeros de vida. Ellas están con las banderas y se pre-

ocupan de andar con algún engañito en sus bolsos. Esta vez algunas andan con sánguches y refrescos. El polerón del

niño que llevan “ por si se pone helado” sirve para improvisar de cojín. 6

Columnista Diego Espinoza Santibañez.

Hinchada barnecheina. Final contra Mejillones en La Pintana.

Fotografía: Nicolás Cubillos

Señores, esto es fiesta popular:

7

Los padres de familia son todos directores técnicos, pero con una instrucción precisa y poco enredada:

“tooooque, tooooque”. Ellos tienen la formula de la victoria, pero nadie los escucha. Se ponen de acuerdo entre

ellos, “falta toque, hueón”, “Sí, a estos cabros les falta toque”, para llegar a la gran conclusión de que al equipo sólo

le falta, precisamente, “toque”, pero Willy y sus garreros seguían haciéndole guardia a los de Mejillones, los niños

seguían quemándose con sus bebidas, los imberbes pubertos seguían distraídos con las niñas, los pololos segu-

ían estoicos con sus doncellas y sus mujeres seguían disfrutando emocionadas de la fiesta. Nadie los escuchaba.

A los pobres, nadie los entendía.

Pero parece que, al fin, síen la cancha, porque el equipo trianguló de muy buena forma para que Patricio

Rubio le diera rienda suelta a la euforia antes de irse al descanso. Barnechea daba su primera estocada y el “Bar-

ne-che-a club de-por-ti-vo” se escuchaba más fuerte.

En el entre tiempo todo el mundo comenta: “estos muchachos están para cosas grandes”, “somos de la b”,

“todavía falta, pero estamos a un paso”. Julio Wee, que está en la barra, declara: “Con esta felicidad me dio una sed

compañero…”.

En los puestecitos de comida, el marraqueta palta mechada está más sabroso que nunca y el papel del en-

voltorio más suave también ya que ni duele al limpiarse los jugos que derrama aquél exquisito sánguche. Se acer-

caba el tiempo para reanudar el encuentro y los pedazos, producto del nerviosismos, se trozaban más grande . Pero

todo lo arregla una bebida, que sale con hipotermia, de un tambor de agua y hielo.

Uno de los hermanos Manriquez da el aviso: “ Va a empezar. A hacer historia mierda!”, gritaba. Ya todos ins-

talados, se siente el pitazo que da inicio al segundo tiempo.

A los de mejillones se les divisa más alicaídos. Y el aguafiestas, su arquero, está empeñado en no dejar

celebrar a los de la franja amarilla.

Los de Mejillones están ensañados con el árbitro, que según ellos, no los dejaba ganar. Los de Barnechea,

también.

Hay un expulsado y los nortinos no lo pueden creer. “árbitro y la conch… nos estay robando”, alegan con el

alma. Y los Barnecheinos, también: “Al fín cobray como la gente árbitro y la conch…”

Hay otra roja y penal favorable a los precordilleranos, pero Rubio, el del gol, le pegó con la misma fuerza

que tenía cuando era un bebé de seis meses. Lo desaprovechó. La hinchada de Lo Barnechea no lo puede creer y el

sufrimiento se hace insostenible. Las mujeres se muerden los labios, mientras el bombo de Willy suena con sus-

penso. Los jóvenes miran a sus abuelos como preocupados del sufrimiento de sus pobres corazones. Las señoras

gritan “Ahhhhhhhh” frente a cualquier intento de los nortinos. Los hombres gritan “Uhhhhhhhhh” cuando la bala

blanca pasa cerca del pórtico del portero aguafiestas. Todos se peinan para atrás. Hasta Don Montenegro, que no

tiene pelo.

Hasta que la alegría llega en el minuto 85 y Jor-

quera abre la puerta de la alegría.

“Goooooooooooooooooool”, todos se abrazan. Pasan

siete minutos y Reyes da el tiro de gracia a los nortinos

que se ahogaban en su pena mientras Barnechea cele-

braba que es, virtualmente, de la B con un 3-0 a su favor

y 20 segundos para el pitazo final. El carnaval ya está

desatado.

Los hinchas más viejos lloran, Willy sigue en el

bombo que se moja con lágrimas, ahora sí que los ni-

ños no se dan cuenta de que toman, los imberbes pu-

bertos se pasan a la cancha, los pololos se besan con

pasión, Las señoras se ponen las manos en la boca

mientras otras agitan las banderas, los padres de fami-

lia (directores técnicos) están felices porque el equipo había escuchado sus instrucciones de “toque”. Todos feli-

ces. EL pueblo de lo Barnechea celebraba a la antigua. Juntos y no con esa segmentación publicitaria que desune a

las generaciones.

En la vereda de al frente el llanto de los nortinos que miran con cara de can mojado como se desvanece su

sueño y como nace la ilusión en la hinchada de al frente.

Volviendo a la grada Barnecheina, siguen saltando al son de cómo se exhibe la copa. Siguieron en una ca-

ravana multicolor a los buses que los traería, con el alma en paz, de vuelta al viejo y querido Barnechea.

Fotografía: Nicolás Cubillos.

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El Colectivo de Organización Popular es una organización de carácter político, que tiene su cuna y su desa-

rrollo en las calles de Lo Barnechea. Sin embargo, su proyecto de futuro va trazado a nivel nacional articulándose a

la par de múltiples experiencias hermanas, con las cuales vamos tejiendo entretenidas redes de cooperación y

solidaridad entre los pobres. Nos definimos de izquierda revolucionaria y marcamos claramente las diferencias

con el Partido Comunista, principal referente de esta tendencia, ya que este se trata de un partido que, desde hace

muchísimos años, no ha estado al servicio de los pobladores, sino que se vive de ellos para llevar una política que

constantemente se ha tranzado con los poderosos.

En nuestro nacimiento, por allá en Marzo del 2008, nos llamamos Coordinadora Organización Popular. Éra-

mos una organización muy heterogénea, la que poco a poco fue viviendo cambios en la composición interna, hasta

lograr una férrea cohesión en torno a ideas que recogen la historia obrera y popular de Chile, y de las luchas por la

liberación latinoamericana y mundial. En la historia Chilena, nos encontramos en la línea trazada a mediados de

los años 60 por el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), de ahí nuestros colores rojo y negro y nuestras

banderas. Pero más importante aún, de ahí viene nuestra convicción que la única forma de cambiar el sistema ca-

pitalista, es con la creación del “Poder Popular”, que no es menos que la capacidad de nuestra población de deci-

dir por sí misma, de generar las instancias que permitan luchar por nuestros derechos y defenderlos, utilizando

todos los medios que tengamos a la mano, incluidos el voto y la violencia. Sabemos que los poderosos nunca han

entregado nada de lo que nos corresponde por voluntad propia, sino que siempre se los hemos tenido que quitar, y

posteriormente defender lo quitado.

Nuestra primera tarea es ponernos a disposición de la población antes sus necesidades concretas; por lo

que canalizamos y entregamos todas nuestras fuerzas al mundo de los allegados. Junto con los vecinos formamos

el Movimiento Por la Dignidad, convencidos que la lucha por una vivienda digna, por una vida digna y por la nueva

población son una forma real y concreta de creación de poder popular. También hemos impulsado la prensa inde-

pendiente mediante el periódico “216, El Pueblo Llama” con el fin de informar las verdades a nuestro pueblo, ya que

los poderosos tienen todos los medios y recursos para mentirnos y manipularnos. Convencidos también que es

nuestro deber generar instancias culturales al servicio de todos los pobladores, ideamos, creamos e impulsamos

el Centro Cultural La Semilla, proceso que hemos abandonado por tener profundas diferencias con los compañeros

en cuanto a cómo guiar el trabajo. Debido a esta situación, decidimos impulsar, desde el mismo MPD, una verdade-

ra cultura al servicio de los pobladores y de los que luchan.

Hoy estamos a punto de ingresar a un proyecto concreto y de características nacionales, que permitirá a

los pobres, disputarles las concejalías y los municipios a los ricos durante este 2012.

Porque hoy es la hora de los pueblos… ¡Que el pueblo mande!

9

El de las poesías y el bombo del club Barnechea:

WIlly Espinosa: “Quiero rescatar la po-

esía de la cueca obrera” En los cantos de la pileta Lo Barnechea, que es lo único que le queda,

está sentado un hombre con pelo largo liso y en las puntas enroscado

que cae en un polerón tipo canguro color negro que cubre un cuerpo ma-

ceteado que se termina en jeans gastados y chapulinas oscuras. Mira

hacia abajo y se pueden apreciar los cables de los audífonos que lanzan

un chirrido inaudible en el exterior.

El es Willy Espinosa, hombre barnecheino de tomo y lomo: poeta, músico, artesano, copiloto

de un furgón escolar y el encargado de hacer sonar el bombo en la hinchada del Club Barnechea.

Luego de interrumpir su meditación, en la pileta, caminamos por avenido Lo Barnechea.

¿Cómo te hiciste fanático de Barnechea?

Esto parte cuando estudiaba en la Parroquia y me crié muy cerca del estadio. Ahí hacíamos gimnasia.

Luego fui creciendo y en la búsqueda de una identidad de barrio comencé acercarme al club.

¿Qué pasa con Barnechea ahora que subió al fútbol pagado?

Yo creo que está cambiando. Creo que ya es un hecho que es una sociedad anónima. Se está separan-

do el club social y deportivo del Futbol Club. Eso es lo que yo veo y que a la larga es un motivo que va

diluyendo la identidad. Cada vez se toman menos decisiones colectivas.

¿En la B, dónde jugará Barnechea?

Hasta lo que sé Barnechea jugaría en el Estadio Monumental. San Carlos era demasiado caro. Se llegó

a un acuerdo con COLO-COLO para trabajar en conjunto en la promoción de jugadores. El estadio pro-

pio estaría listo a fines del 2012, y por lo que tengo entendido, cumpliría normas FIFA. Yo creo que el

estadio va, pienso que el tema está bien avanzado.

En lo político, en tu tribuna virtual he cachado que disparas para todos lados. ¿Cuál es tu postura?

Cómo caca con ventilador, jajajajaja. Yo soy anarquista, pero no el término manoseado como lo hace

el FEL y otras organizaciones que caen en muchas contradicciones. Pero para mí es trascendental la

disposición a trabajar y hacer cosas para el pueblo.

¿La Municipalidad cuida el “Pueblito Lo Barnechea”?

Como va el asunto yo creo que Barnechea va a desaparecer. Si tú te fijas cada vez quedan menos fa-

chadas, actividades e identidad. Yo estudié Turismo porque precisamente me gusta la cultura de pre-

servación. En Barnechea, y en el país, nada se respeta. Todo se transforma en mercancía: tu trabajo, el

lugar donde vives, el futbol, la música…eso destruye. Lo que ayuda, también, es que en Barnechea hay

gente que no se reconoce como clase trabajadora y eso hay que cambiarlo. Lo importante es hacer

cosas como el día del niño popular y ahora como el Congreso Popular que ojala salga bien.

Padre nuestro que estás en los cielos

con las golondrinas y los misiles

quiero que vuelvas antes de que olvides

cómo se llega al sur de Río Grande

Padre nuestro que estás en el exilio

casi nunca te acuerdas de los míos

de todos modos dondequiera que estés

santificado sea tu nombre

no quienes santifican en tu nombre

cerrando un ojo para no ver las uñas

sucias de la miseria

en agosto de mil novecientos sesenta

ya no sirve pedirte

venga a nos el tu reino

porque tu reino también está aquí abajo

metido en los rencores y en el miedo

en las vacilaciones y en la mugre

en la desilusión y en la modorra

en esta ansia de verte pese a todo

cuando hablaste del rico

la aguja y el camello

y te votamos todos

por unanimidad para la Gloria

también alzó su mano el indio silencioso

que te respetaba pero se resistía

a pensar hágase tu voluntad

sin embargo una vez cada tanto

tu voluntad se mezcla con la mía

la domina

la enciende

la duplica

más arduo es conocer cuál es mi voluntad

cuándo creo de veras lo que digo creer

así en tu omniprescencia como en mi soledad

así en la tierra como en el cielo

siempre

estaré más seguro de la tierra que piso

que del cielo intratable que me ignora

pero quién sabe

no voy a decidir

que tu poder se haga o se deshaga

tu voluntad igual se está haciendo en el viento

en el Ande de nieve

en el pájaro que fecunda a la pájara

en los cancilleres que murmullan yes sir

en cada mano que se convierte en puño

claro no estoy seguro si me gusta el estilo

que tu voluntad elige para hacerse

lo digo con irreverencia y gratitud

dos emblemas que pronto serán la misma cosa

lo digo sobre todo pensando en el pan nuestro

de cada día y de cada pedacito de día

ayer nos lo quitaste

dánosle hoy

o al menos el derecho de darnos nuestro pan

no sólo el que era símbolo de Algo

sino el de miga y cáscara

el pan nuestro

ya que nos queda pocas esperanzas y deudas

perdónanos si puedes nuestras deudas

pero no nos perdones la esperanza

no nos perdones nunca nuestros créditos

a más tardar mañana

saldremos a cobrar a los fallutos

tangibles y sonrientes forajidos

a los que tienen garras para el arpa

y un panamericano temblor con que se enjugan

la última escupida que cuelga de su rostro

poco importa que nuestros acreedores perdonen

así como nosotros

una vez

por error

perdonamos a nuestros deudores

todavía

nos deben como un siglo

de insomnios y garrote

como tres mil kilómetros de injurias

como veinte medallas a Somoza

como una sola Guatemala muerta

no nos dejes caer en la tentación

de olvidar o vender este pasado

o arrendar una sola hectárea de su olvido

ahora que es la hora de saber quiénes somos

y han de cruzar el río

el dólar y su amor contrarrembolso

arráncanos del alma el último mendigo

y líbranos de todo mal de conciencia

amén.

Mario Benedetti.

Un padre nuestro Latinoamericano...

Padre Camilo Torres ( 1929 – 1966 ) . Pionero de la teología de la

liberación, que buscaba la justicia social y planteaba abiertamente su

lucha contra el capitalismo. Fue uno de los creadores del Ejército de

Liberación Nacional ( Colombia) , donde se desempeño como guerri-

llero hasta su muerte.

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