Arrastrando los piesPublicado en Periódico Diagonal (https://www.diagonalperiodico.net)

Dani SánchezNavacerrada, Sierra de Guadarrama

40º 43´48´´ Norte , 4º00´45´´ Oeste, 1203 metros

Los tertulianos se reunían en aquella tasca el segundo jueves de cada mes. El lugar no tenía el másmínimo sentido. No había dos sillas iguales. El camarero a ratos era alcohólico y a ratoscocainómano. A ratos las dos cosas. Una estufa de hierro fundido presidía el salón y daba ciertasensación de hogar a aquel tugurio montañero. Algún cuadro de ciervos y cazadores completaban elcomplicado escenario.

Entre calvas, gafas de vista cansada y proyectos inacabados pasaban la tarde bebiendo botellines.Siempre alguno de ellos traía fotos antiguas que proyectaban sobre la pared. Los Galayos, elCervino, Huayna Potosí, Peña Sirio, qué fue de ese, al final esa te dejó por aquel, sólo tú mantienesel pelazo, pedir otra ronda.

Los siete montañeros se seguían reuniendo a planificar expediciones. Se sentaban allí una vez almes rodeados de mapas, de croquis dibujados a mano, hasta de precios de aviones. Estabanprohibidos los portátiles y los móviles. Uno planteaba un viaje y los demás rápidamente echabanleña a la idea. Habría que entrenar un poco. Deberíamos de juntar algo de dinero. Yo ya no tengo nicrampones, tendríais que prestarme unos.

Al tercer botellín ya estaban todos con los esquís puestos en los Pirineos y en el cuarto se veían yaen la cumbre del Annapurna. En el quinto alguno se retiraba porque mañana madrugaba para unosanálisis y el sexto se quedaba a medias sobre la mesa. Alguien recogía todos los mapas y otro susmuletas. Algunas toses para despedirse y un lo vamos viendo entre abrazos de cumbre. Se alejabanunos de otros despacio, arrastrando los pies, esperando la próxima montaña. El próximo segundojueves de mes.

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