CrecerComoAcompanantes_JacquelinneAlzerreca_2011

Crecer como acompaantes

Ttulo: Crecer como acompaantesAutora: Jacquelinne Alzrreca

Equipo editorial: Beatriz Borjas Marielsa Ortiz Mara Cristina Soto Elvis Rodrguez

Correccin de textos: Luis ngel Barreto

Diseo, diagramacin e ilustracin: Luca Borjas

Edita y distribuye: Federacin Internacional de Fe y AlegraDiagonal 35 (calle), 21-19Bogot, Colombia.Telfonos: (57-1) 3383790/3383792www.feyalegria.org; [email protected]

ISBN: 978-980-7119-46-7Depsito legal: 603 2011 370 2777

Impresin: Editorial Kimpres Ltda.

Publicacin realizada con el financiamiento de: Centro Magis

Agencia Espaola de Cooperacin Internacional para el Desarrollo (AECID)

5Crecer como acompaantes

ndice

Presentacin 7

Introduccin 9

Unidad 1La mirada a m mismo Cmo soy? 10

Autoconocimiento 10Pensamiento crtico 18Manejo de emociones y sentimientos 23Manejo de tensiones y estrs 27Resiliencia 31

Unidad 2La mirada hacia afuera Cmo soy con los dems? 39

Relacin Interpersonal 39Reconocer la existencia del otro 47Empata 52Toma de decisiones 60Solucin de problemas y conflictos 66

Unidad 3Me reconozco como acompaante 72

Acompaante situado 72 Formacin como educador popular 77

Bibliografa 84

Enlaces 85


PresentacinEste material educativo sobre Acompaamiento Pedaggico se enmarca en los objetivos definidos por el Programa Formacin de Educadores de la Federacin Internacional de Fe y Alegra. Se trata de una propuesta encaminada a posicionar una cultura de acompaamiento en las distintas instancias y niveles de Fe y Alegra que busca responder a la necesidad de una formacin especfica para los acompaantes pedaggicos (coordinadores pedaggicos nacionales y regionales) con el fin de garantizar la calidad de la educacin en los centros educativos ubicados en contextos vulnerables.

A partir de un diagnstico y del reconocimiento de experiencias llevadas a cabo por los diferentes equipos pedaggicos nacio-nales, se ha estructurado una coleccin de seis libros, escritos por educadores de Fe y Alegra con experiencia en acompaa-miento y seguimiento que sirven como itinerario bsico para ser desarrollado y adaptado de acuerdo a las necesidades y cir-cunstancias de cada pas o regin por quienes tienen la tarea de acompaar las prcticas educativas.

El Acompaamiento y la educacin popular y El acompa-amiento en Fe y Alegra presentan el marco referencial del acompaamiento con sus fundamentos, bases y principios gene-rales desde la perspectiva de la educacin popular y la misin de Fe y Alegra.

Crecer como acompaantes invita a descubrir desde la re-flexin del propio ser la capacidad para acompaar a otros.

8 Crecer como acompaantes

Bitcora para acompaantes y Aprender del acompaa-miento ofrecen un considerable nmero de herramientas que facilitarn la labor de los acompaantes y les ayudarn a apren-der de este proceso mientras conforman, en conjunto con los acompaados, comunidades de aprendizaje.

Planificar para el cambio brinda los elementos para soar un centro educativo, o para que los sueos se concreten, en otras palabras, para orientar a los acompaados en la construccin de planes de mejora necesarios para la transformacin de las prcticas pedaggicas.

Agradecemos a todos los que de una u otra forma participaron en el proceso de elaboracin de este material educativo y espe-ramos que sea un aporte germinal para la reflexin y discusin sobre las prcticas de acompaamiento, especialmente para aquellas implementadas en la educacin pblica de la regin latinoamericana y del Caribe.

Ignacio Suol S.j.Coordinador General de la FederacinInternacional de Fe y Alegra

Bogot, junio 2011


IntroduccinEste libro no pretende ser un manual que el acompaante de-ber seguir para ser mejor acompaante, tampoco busca que al terminar su lectura el acompaante sienta que ya encontr el camino expedito y directo para acompaar. Se pretende dar algunas herramientas prcticas para fortalecer las experiencias de acompaamiento. Asimismo, motivar al acompaante a des-cubrir desde la reflexin del propio ser su capacidad para acom-paar a otros e invitarle a investigar mucho ms al respecto, pues es un camino, no una meta.

Este libro es para motivarnos, hacernos crecer, para ponernos a dialogar, para invitarnos a inventar, a compartir, para alimentar la esperanza y evaluar nuestro caminar, que nos empuja a for-jar nuevos planes, a ir ms all aportando nuevas propuestas.

El documento est organizado en tres unidades principales.

Unidad 1: La mirada a m mismo: Cmo soy? Esta primera parte nos invita a revisar nuestro interior, fortalecer nuestro autoconocimiento, pensamiento crtico, manejo de emociones y sentimientos, manejo de tensiones, estrs y resiliencia. Esta mirada interna nos ayudar a crecer y ser ms reflexivos con uno mismo para que mejoremos nuestras realciones con los de-ms y stas sean ms enriquecedoras.

Unidad 2: La mirada hacia afuera: Cmo soy con los dems? Esta segunda parte nos permitir tener mayor conscicencia sobre la re-lacin interpersonal, reconocer la existencia del otro, la empata, la toma de decisiones, la solucin de problemas y conflictos.

Unidad 3: Me reconozco como acompaante. Luego de ha-ber transitado por nuestro interior, de haber reflexionado cmo


son nuestras relaciones con los dems, en esta ltima parte se ponen en consideracin diferentes estrategias para desarrollar habilidades y destrezas que nos permitan ser mejores acompa-antes.


Unidad1La mirada a m mismo: cmo soy?

Autoconocimiento1

Descbrete a ti mismo y alcanzars las estrellas. Descubre tu naturalidad y vivirs en felicidad.

Descubre tu vida y sers dueo de tu camino.Annimo

En este primer apartado resaltaremos la capacidad de explorar-se que tiene cada persona, de reconocer sus propias capacida-des, necesidades, deseos, sueos, intenciones, sus maneras de ser, de pensar, de descubrir aquello que es el motor de su vida, de lo que le hace ser mejor persona y lograr aquello que desea. Por eso, el centro de este primer punto es UNO MISMO.

1. Para la elaboracin de algunas partes de este libro nos hemos inspirado en la obra de Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Daro Chahn Pinzn. (2009). Habilidades para la Vida. Manual para aprenderlas y ensearlas. Espaa. Editorial EDEX. 4ta. edicin.


Al autoconocimiento se accede a partir de preguntas que cada persona se formula permanentemente, las respuestas que se obtienen dan sentido a la existencia propia, perfilan el futuro y desarrollan la autonoma y autoestima. Es el proceso de cono-cer al ser que vive dentro de nosotros, a nuestro Yo, y forma parte de nuestra inteligencia emocional.

Lee y reflexiona:

Quin soy?

Para iniciar la reflexin, te invito a leer la siguiente parbola de Anthony de Mello.

Una mujer estaba agonizando. De pronto, tuvo la sen-sacin de que era llevada al cielo y presentada ante el Tribunal.

Quin eres?, dijo una Voz. Soy la mujer del alcal-de, respondi ella. Te he preguntado quin eres, no con quin ests casada. Soy la madre de cuatro hijos. Te he preguntado quin eres, no cuntos hijos tienes. Soy una maestra de escuela. Te he preguntado quin eres, no cul es tu profesin.

Actividad generadora


Y as sucesivamente. Respondiera lo que respondiera, no pareca poder dar una respuesta satisfactoria a la pregunta

Quin eres?.

Soy una cristiana. Te he preguntado quin eres, no cul es tu religin. Soy una persona que iba todos los das a la iglesia y ayudaba a los pobres y necesitados. Te he preguntado quin eres, no lo que hacas.

Evidentemente, no consigui pasar el examen, porque fue enviada de nuevo a la Tierra. Cuando se recuper de su enfermedad, tom la determinacin de averiguar quin era. Y todo fue diferente.

Tu obligacin es ser. No ser un personaje ni ser un don nadie -porque ah hay mucho de codicia y ambicin-, ni ser esto o lo de ms all -porque eso condiciona mucho-, sino simplemente ser.

Finalizada la lectura, te invitamos a que pienses Quin eres t? y compartas tus reflexiones con algn compaero o compaera.

Qu quiero de la vida?

Para ayudar a la reflexin, te invito a recordar y a que te ani-mes a escribir:

En lo personal En lo familiar

En lo profesional

Qu hice?

Qu estoy haciendo

hoy?


Qu deseo hacer?

Cmo se refleja todo lo que apunt en mi proyecto de vida?

1. Describo mi personalidad dando cualidades (Luces) y debi-lidades (Sombras). Si lo deseas, puedes elaborar una lista.

Mis fortalezas, cualidades (Luces) son

Mis debilidades (Sombras) son

2. Cmo creo que me percibe la gente que me rodea: fami-lia, compaeros de trabajo? Puedes describir brevemen-te

_____________________________________________ _____________________________________________ _____________________________________________

3. Si quieres reflexionar un poco ms sobre este tema te in-vitamos a leer una pequea parte del dilogo entre Alicia y la Oruga, en un extracto del Cuento de Alicia en el pas de las Maravillas2.

2. Para ver el dilogo de Alicia y la oruga puedes ir a la siguiente direccin http://www.youtube.com/watch?v=HxaDdjwTCag&feature=related


Me conozco, me descubro, me acepto

El autoconocimiento implica reconocer nuestro ser, carcter, fortalezas, debilidades, oportunidades, actitudes, talentos, valores, gustos y disgustos. Autoreconocerse tambin signifi-ca construir sentidos acerca de nosotros mismos, de las dems personas y del mundo en que vivimos. Desarrollar un mayor conocimiento personal nos facilita reconocer los momentos de preocupacin o tensin. A menudo, este conocimiento es un requisito de la comunicacin efectiva, de las relaciones inter-personales y de la capacidad para desarrollar empata hacia las dems personas.

Conocerse, saber qu se quiere en la vida e identificar los re-cursos personales con que se cuenta para lograrlo, son aspectos que le permiten a una persona tener claridad sobre el proyecto vital que se quiere emprender y desarrollar las competencias necesarias para lograrlo.

Conocerse no es slo mirar hacia dentro de s, tambin signifi-ca poder identificar y usar fuentes sociales de apoyo. En este proceso, no slo se logra afrontar mejor la adversidad; tambin se fortalece la capacidad de hacer frente a los problemas, su-perarlos y crecer como persona. Esto contribuye al fortaleci-miento de factores de resiliencia3 personal, un aspecto que se desarrollar ampliamente en la Unidad 3.

3. El trmino resiliencia se refiere a la capacidad humana de hacer frente a las adversi-dades, superarlas y fortalecerse en el proceso.


1. Leamos cada uno de los puntos que estn en el recuadro y reflexionemos sobre nuestra vida. Identifico los aspectos que tengo que fortalecer y los apunto en hojas independientes, lue-go coloco las hojas en lugares visibles para tener presente qu aspectos necesito reforzar.

El conocimiento de s mismo

Facilita 1. El reconocimiento de las propias fortalezas es lo que estimula la autoestima y la con-fianza en s mismo.

2. El reconocimiento de las propias debilida-des es lo que contribuye a una autoimagen y decisiones ms realistas.

3. El reconocimiento ayuda a tener una ma-yor conciencia sobre deberes, derechos y responsabilidades.

4. El reconocimiento contribuye a la clarifi-cacin de valores.

5. El reconocimiento ayuda a tener una ma-yor motivacin para cuidarse a s mismo.

Actividades de sntesis y de accin


2. Cmo puedo aplicar esta frase de William Shakespeare en mi vida diaria?: De todos los conocimientos posibles, el ms sabio y til es conocerse a s mismo.

Me animo a dar algunos ejemplos:

Diariamente me comprometo conmigo mismo a sa-ber ms sobre las cosas que me hacen feliz y las cosas que me hacen enfadar para poder superarme como persona.

.

3. Para terminar, te invito a leer el siguiente relato pedaggico de una educadora popular que pas a ser miembro del equipo pedaggico de la Oficina Regional de Fe y Alegra.

Lo que voy a contar pas cuando tom la decisin de dejar el trabajo en la Escuela para ser parte del equi-po regional de Fe y Alegra. Fue el perodo ms grato y tenso de mi vida. Si bien mi experiencia en aula es amplia y mi participacin en el equipo directivo seguro ser provechosa, mi primer da en el equipo pedaggi-co de la Oficina Regional en Fe y Alegra me generaba muchos nervios. Me sent tan pequea y ahogada al lado de mis responsabilidades, mis problemas. Tena muchas inseguridades, no me senta capaz de llevar adelante todo lo que implicaba comenzar de nuevo. Pero aunque las dudas y miedos estaban presentes, tena que seguir... deba seguir... subirme y hacerme cargo de lo que decid. El primer da que tuve que ir al centro educativo, no fue precisamente como edu-cadora si no como la nueva del equipo, no me lo po-da creer! Me preguntaba: cmo hago hoy para hablar con el equipo directivo sino me siento capaz? Yo soy


docente, por Dios! Qu hago aqu! Pero, al mismo tiempo, no quiero detenerme ni decepcionar a nadie, ni a m! Detenerme sera fcil, podra volver al aula... pero estoy iniciando una nueva aventura y requiero de todas mis fuerzas para superarlo, no quiero quedar-me atrs... tengo que animarme! Sin dar lugar a ms pensamientos negativos, emprend mi camino a la es-cuela, a encarar las tareas de mi nuevo rol. Una vez en el centro educativo, el contacto con los docentes que son mis colegas y amigos, me ayud a que la an-gustia y los miedos se redujeran hasta desvanecerse. El paso del tiempo en la reunin o visita de acompaa-miento no lo sent, fue muy positivo, ameno, activo, nada fuera de lo normal pero excepcional e imponente para m, porque me di cuenta de que estando frente a mis colegas, mis problemas, mis tensiones o angustias, desaparecen. Mi prctica como docente de aula me permite darme cuenta de lo que los docentes de esa escuela estn pasando. Entend que mi trabajo en el Equipo Directivo me ayudaba a tener la respuesta o sugerencia al problema planteado. En ese momento me sent muy feliz! Vi que la reunin se desarrollaba en un ambiente agradable, dialogbamos y llegbamos a acuerdos. Al salir del centro educativo di gracias a Dios por esta maravillosa oportunidad. No estara ms frente a los estudiantes, pero s senta que con mi ex-periencia ayudara a muchos ms estudiantes porque mejoraramos las prcticas de mis colegas. Hoy en da, an siento los nervios al iniciar una reunin de acom-paamiento, pero estoy segura de mis habilidades y capacidades. Ahora ya no tengo tiempo ni espacio para los pensamientos negativos e inseguridades.

A partir de lo ledo, responde las siguientes interrogan-tes:


Se conoca a s misma la educadora?

Qu fortalezas tena para enfrentar el nuevo reto?

Pensamiento crtico

Para comenzar a trabajar el pensamiento crtico te invito a leer la siguiente narracin y, posteriormente responde, las pregun-tas:

El canto del gallo4

El abuelo se dio cuenta de que cuando su gallo canta-ba, el sol sala. Luego de un mes de comprobar su teo-ra, comunic el descubrimiento: el canto de mi gallo es el que hace salir el sol. El viejo est loco, dijeron. El hombre se molest y decidi marcharse al pueblo vecino. A la maana siguiente, se levant temprano y vio que cuando el gallo cantaba el sol sala. Necios, dijo, ahora est claro que yo tengo la razn. Los del otro pueblo ya deben estar extraando el amanecer.

4. Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Daro Chahn Pinzn. Op. cit.



Cules argumentos tiene la gente del pueblo para consi-derar que el viejo est loco?

Cules argumentos tiene el viejo para llamarlos necios?

Ejemplifica otras situaciones en las que se llega a conclu-siones similares.

Qu queremos decir con pensar crticamente?

En trminos muy amplios significa pensar con un propsito, demostrar una idea, interpretar el significado de algo o solu-cionar un problema. La mayora de los expertos sealan que esta capacidad depende de dos factores principalmente: una serie de habilidades cognitivas y lo que han llamado disposicio-nes afectivas. Lo cognitivo implica aplicar destrezas bsicas del pensamiento, como la interpretacin, el anlisis, la evaluacin, la inferencia, la explicacin y la autorregulacin, en un proceso activo de pensamiento que permite llegar a conclusiones de un orden superior.

La mezcla de las habilidades cognitivas y las disposiciones afec-tivas da como resultado un perfil propio de una persona crtica, segn el cual este tipo de persona es:

Curiosa: tiene deseos de aprender, indagar, investigar. Es la persona que siempre est preguntando: por qu?, para qu?

De mente abierta: tolerante hacia puntos de vista divergentes y consciente de la posibilidad de sus propios prejuicios.


Sistemtica: ordenada, organizada, y con capacidad para cen-trar su actividad mental en las tareas que emprende.

Analtica: valora la aplicacin del razonamiento y el uso de la evidencia para resolver problemas. En otras palabras, le gusta pensar.

Buscadora de la verdad: se interesa en buscar y llegar al mejor conocimiento posible en cada situacin; tiene el coraje necesa-rio para hacer preguntas y la honestidad necesaria para conti-nuar indagando, incluso si los resultados no apoyan sus propios intereses u opiniones preconcebidas.

Tiene confianza en s misma: en la solidez de sus propios jui-cios razonados e inters en guiar a otros en la solucin racional de los problemas.

Madura: con capacidad para abordar los problemas, emprender las pesquisas y la toma de decisiones sobre la base que algunos problemas pueden estar mal estructurados, y que algunas situa-ciones admiten ms de una solucin posible.

Todas las personas tienen la capacidad de pensar crticamente y es una habilidad de uso cotidiano que puede contribuir a la vida saludable y al desarrollo personal y social de muchas maneras.

En el mbito personal, facilita la autocrtica y ayuda a recono-cer y evaluar los factores que influyen en las actitudes, creen-cias y comportamientos de cada cual.

En el mbito social, pensar en forma crtica ayuda a ir ms all de los prejuicios discriminatorios para encontrar otras dimen-siones de la realidad, como creer que ciertos grupos tnicos o de poblacin son buenos y otros son malos. Permite ahon-dar para encontrar las verdaderas causas de las desigualdades


y la falta de equidad, poniendo en duda sentencias aceptadas socialmente como aquella segn la cual las personas pobres no tienen dinero porque son perezosas.

Sugerencia para ser mejor acompaante: En la vida diaria es posible encontrarse con personas que tienen una fuerte dispo-sicin a pensar crticamente. Puedes identificarlas porque con frecuencia estn de acuerdo con afirmaciones como las siguien-tes:

Me disgusta que las personas se limiten a dar sus opinio-nes sin exponer sus razones.

Para m es importante tratar de comprender lo que la gente realmente quiere decir.

Trato de ver los puntos buenos en las opiniones ajenas, aunque no est de acuerdo con ellas.

Tambin es posible identificar a quien est poco dispuesto a pensar crticamente, porque adems de estar en desacuerdo con afirmaciones como las anteriores, posiblemente se muestre de acuerdo con las siguientes:

Prefiero los trabajos en que me dicen exactamente qu hacer y cmo hacerlo.

No pierdo tiempo investigando las cosas.

Detesto cuando los profesores discuten los problemas en vez de dar las respuestas.


1. La pregunta es una herramienta indispensable para el pensa-miento crtico. En este caso hemos recogido algunas formuladas por Carl Sagan5 que nos acercan a mirar crticamente aspectos cotidianos. La propuesta es que en diversas situaciones de la vida, pongas en juego interrogantes como:

Lo que est en discusin es la persona o su argumento?

Se puede convertir la afirmacin en pregunta?

Hay algo ms que dos posibilidades extremas?

2. Analicemos el siguiente estudio de caso:

La coordinadora regional y/o departamental se encuen-tra realizando la segunda visita de acompaamiento correspondiente al ao escolar. Al intentar verificar si se cumplieron los compromisos establecidos en la an-terior visita, se encuentra con que no se cumplieron los acuerdos establecidos: desde asuntos administrati-vos hasta los acuerdos pedaggicos planteados para el primer lapso. Por otro lado, ha notado la ausencia de planificacin del equipo directivo. Sin embargo, nota que los directivos elaboran sendas explicaciones para justificar la situacin encontrada.

5. Sagan, Carl (1998). El mundo y sus demonios. Colombia Bogot. Tomado con cambios del Captulo 12: El sutil arte de detectar camelos. Editorial Planeta.



Imagina ahora el dilogo entre la coordinadora regional y/departamental y el equipo directivo del centro educativo.

Intenta aplicar tu experticia pedaggica para mediar las limitaciones gerenciales del equipo y las incongruencias en el proceso de toma de decisiones. Ejemplifica a travs del dilogo una de las estrategias sugeridas.

Describe qu competencias y habilidades interpersonales debe poseer la coordinadora regional y/ departamental para que el proceso de acompaamiento pedaggico sea exitoso.

Manejo de emociones y sentimientos6

En la provincia de la mente lo que creemos que es verdad, es verdad o se convierte en verdad.

En la provincia de la mente no hay ms lmites que los que se impone uno mismo.

John Lilly

Todos sabemos cul es la diferencia entre un optimista y un pesimista: el optimista ve la botella medio llena y el pesimis-ta medio vaca, pero qu es lo que hace que para uno est llena y para otro vaca? Para un psiclogo de la Universidad de Pensilvania, quien ha realizado estudios acerca de las dife-rencias entre la manera de pensar de los optimistas y la de los pesimistas, un optimista es aquel que cuando le sale mal algo o quiere conseguir algo se plantea qu es lo que yo tengo que hacer o cambiar en esta situacin, mientras que un pesimista

6. Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Dario Chahn Pinzn. Op. cit.


es aquel que se ve a s mismo como impotente ante un mundo adverso, que le es imposible cambiar. Dicho de otro modo, el optimista se responsabiliza de sus reacciones y el pesimista es-pera que el mundo cambie, que la situacin mejore7.

Reflexiona sobre tus emociones y sentimientos a partir de estas preguntas: Cmo manejo las situaciones conflictivas persona-les en mi trabajo como acompaante? Cmo acepto las crticas que hacen a mi trabajo? Qu siento y cmo reacciono ante la indiferencia y la apata?

La inteligencia emocional es la habilidad que desarrollamos para controlar nuestras propias emociones e impulsos, para adecuarlos a un objetivo, para responsabilizarnos de los propios actos, para pensar antes de actuar y evitar los juicios prema-turos. La inteligencia emocional es importante en la vida de las personas, ser equilibrado en una reaccin emocional, saber manejar las emociones y los sentimientos, conocerse y auto-motivarse. Eso da a la persona la capacidad de ser mejor perso-na, con mejores relaciones en su vida personal y profesional. La Inteligencia emocional no depende del corazn, depende de las capacidades intelectuales superiores del ser humano, ya que un cerebro primitivo como el sistema lmbico debe supeditarse a un cerebro ms avanzado, mientras ms control tengamos de

7. http://www.galeon.com/aprenderaaprender/intemocional/optimista.htm



nuestro cerebro, mientras ms rpidas sean nuestras conexio-nes entre el cerebro primitivo y la corteza cerebral, mucha ms inteligencia emotiva tendremos8. Emociones y sentimientos siempre estn enviando seales a la persona sobre su momento afectivo. Pero no siempre se atiende a lo que dicen. A veces, se cree que no se tiene derecho a sentir miedo o tristeza por una buena persona. En estos casos, se aprecia cmo el mundo afectivo es intervenido por la razn que lo distorsiona con base en prejuicios, temores aprendidos y racionalizaciones.

En realidad, todas las emociones y sentimientos son naturales y prcticas. Naturales porque son parte del mundo afectivo de todas las personas, de todas las edades. No hay nadie que no las tenga. Prcticas, porque hablan de necesidades personales y del mundo que nos rodea. Sentimos en respuesta a estmulos inter-nos y externos. Comprender mejor lo que sentimos implica no slo escuchar lo que nos pasa por dentro, sino tambin atender al contexto en que nos pasa. Por ejemplo, alguien que siente tris-teza, posiblemente est recibiendo una seal de falta de afecto o vaco en su vida. Quien siente miedo puede identificar situacio-nes de peligro y actuar para proteger la integridad fsica o emo-cional. Quien siente alegra est siendo informado de algo que le satisface y que le agradara vivir por ms tiempo y ms veces9.

Para aprender a navegar mejor en el mundo de emociones y sentimientos, propios y ajenos, esta habilidad propone tres aspectos centrales10:

1. Sintonizarse con el propio mundo afectivo. De la misma forma en que hace con su estacin radial preferida, bus-que la frecuencia exacta para sintonizarse con su mundo afectivo. Escuchndolo con atencin lograr identificar y

8. http://www.taringa.net/posts/info/1469510/emociones-inteligentes.html

9. http://www.uhu.es/educacion/_paulo_freire.htm

10. http://www.paginadigital.com.ar/articulos/2002rest/2002sept/textos/concep.html


re-conocer mejor sus emociones y sentimientos y tener de stos una vivencia ms plena.

2. Aceptar la gama completa de emociones y sentimien-tos caractersticos de nosotros, y reconocerlos como uno de los aspectos ms valiosos y humanos de cada persona. Como ya se mencion, tendemos a huir de ciertas emo-ciones y sentimientos, como la tristeza o el miedo, por considerarlos negativos, desagradables o inapropiados. No obstante, conviene recordar que esas mismas emocio-nes y sentimientos cumplen con una funcin adaptativa importante. El miedo o la ira funcionan como alarmas que se activan frente a situaciones en que la integridad o dig-nidad personal estn en peligro.

3. Expresarlos asertivamente, sin necesidad de violentar las emociones, sentimientos o derechos de las otras personas, por el hecho de hacer respetar los propios.

1. Qu har para poner en prctica, en mi vida cotidiana, los 3 aspectos centrales indicados en el mapa de ruta?

2. Describe una situacin en la que te ha tocado como acompa-ante ayudar al otro a manejar sus sentimientos o emociones.



Manejo de tensiones y estrs

Analicemos juntos estas situaciones:

1. Son las 7:30 de la maana y al llegar al centro educativo percibo que no han llegado dos educadores. a. Qu hago?b. Cul es mi reaccin?c. Qu decisin tomo?

2. Tengo una reunin con los educadores de un centro edu-cativo que acompao. La reunin estaba planificada y pro-gramada conjuntamente. Antes de plantearles la agenda de trabajo percibo un ambiente tenso, siento cierto recha-zo al trabajo que se iniciar.a. Qu hago?b. Cul es mi reaccin?c. Qu decisin tomo?

El estrs es una presin11. Todos los seres vivos lo sentimos. Lo vive el acompaante cuando tiene que devolver la informacin

11. Tomado de Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Dario Chahn Pinzn. Op. cit.



recopilada a los equipos directivos o equipos de educadores; la joven que est empezando en el equipo pedaggico de una oficina nacional o regional y debe realizar acompaamiento a varias escuelas con realidades conflictivas, apoyando en la toma de decisiones. En esos momentos, en forma automtica, el organismo se activa disponindose para la accin: aumentan la frecuencia cardiaca y respiratoria, la presin sangunea, el metabolismo y el flujo de sangre hacia los msculos.

Se puede manejar el estrs, porque hacerlo depende de la for-ma en que la persona se relaciona con su entorno. Hay cuatro aspectos que pueden ser tiles a la hora de desarrollar esta habilidad:

1. Aprender a identificar las fuentes de tensin y estrs en la vida diaria. El tipo de situaciones y experiencias que producen estrs son distintos en cada persona. La clave es tener claro: qu es lo que te resulta estresante?

2. Reconocer las distintas manifestaciones de estrs. Cmo sientes el estrs?, qu sensaciones fsicas, emocionales o mentales experimentas?, cmo te comportas cuando sien-tes estrs?

3. Identificar la forma habitual de manejar el estrs. Cada per-sona tiene una forma particular de enfrentar las situaciones y lidiar con el exceso de tensiones y estrs. Sin ser muy cons-cientes de ellos, a lo largo del tiempo es posible que hayamos desarrollado estilos adecuados (saludables) o inadecuados para manejar el estrs. Qu haces? Cmo enfrentas habi-tualmente el exceso de tensiones y estrs en tu vida?

4. Aplicar reingeniera al estilo de vida. Si descubres que tu forma habitual de enfrentar el estrs no es la mejor, o que de hecho no ests haciendo nada al respecto, quiz sea el momento de aplicar un poco de reingeniera a tu estilo


de vida. Cmo puedes hacer para tener un estilo de vida ms saludable con los medios y recursos a tu alcance? No siempre se trata de hacer cosas que requieren una inver-sin econmica. Cambiar la actitud con que se enfrentan las situaciones y experiencias de la vida diaria no es fcil pero siempre resulta muy efectivo. Lo mismo sucede cuan-do se aprende a administrar mejor el tiempo.

El listado que se presenta a continuacin, te muestra parte de la diversidad de caminos por emprender, porque para manejar el estrs es necesario poner en prctica varias acciones de ma-nera simultnea:

Levantarse a tiempo. As evitars estar corriendo el resto del da.

Asigna un lugar y un tiempo para hacer tu trabajo. En lo posible, no te lleves trabajo para tu casa, ni los problemas de pareja o de tu hogar a tu lugar de trabajo.

Analiza en detalle lo que tienes que hacer antes de ini-ciar un proyecto. Quiz no sea tan abrumador como pa-rece a primera vista! O tal vez, requiera ms trabajo del que imaginabas y debas destinarle ms tiempo.

Disminuye las interrupciones al mximo. Esto es espe-cialmente importante si requieres concentracin.

Solicita ayuda. Siempre que necesites ayuda, asegrate de solicitarla o de delegar tareas a otras personas. De esta manera te resultar ms fcil concentrarte en tus verda-deras prioridades.

Organzate. Cada persona tiene su propia forma de orga-nizarse y no hay una nica manera de hacerlo. Lo impor-tante es que encuentres tu propia forma de hacerlo.


Recuerda los logros que has tenido. En vez de pensar slo en las cosas que no has hecho, recuerda logros anteriores. Eso te ayudar a motivarte.

Combina tareas fsicas y mentales. Si es posible, alterna el trabajo intelectual con algunas actividades fsicas. Te ayudar a conservar y disminuir la sensacin de fatiga.

Enfrenta los cambios con una actitud positiva. En vez de sentir temor ante los cambios, asmelos con optimismo. Si bien es cierto que los cambios pueden acompaarse de desafos, tambin pueden ser vistos como oportunidades.

Reglate tiempo libre. No pienses en el tiempo libre como lo que queda despus de que has hecho todo lo dems. As como planificas tus compromisos y responsabilidades familiares, profesionales o acadmicas, programa tiempo para leer, hacer ejercicio, ir al cine o hacer cualquier otra cosa que disfrutes y ayude a relajarte. Dejar tiempo para disfrutar de las cosas que te gustan, te ayudar a recargar las baterias. Reljate y divirtete.

1. Dilemas. Qu dilemas plantean en tu vida las recomenda-ciones sealadas anteriormente?, son viables?, realizables? Argumenta tu respuesta.



2. Describe una situacin en la que te haya correspondido como acompaante apoyar a personas que se encuentran estresadas. Sabes distinguir lo que es propio de la persona y lo propio de la institucin?

Resiliencia

Nuestra mayor gloria no est en nunca caer, sino levantarse cada vez que caemos.

Confucio

Leamos esta historia sobre las zanahorias, huevos y caf y sa-quemos conclusiones.

As como el oro debe pasar por el fuego para ser pu-rificado, los seres humanos necesitamos pruebas para pulir nuestro carcter. Lo ms importante es cmo reaccionamos frente a ellas. Una hija se quejaba con su padre acerca de la vida. No saba cmo seguir ade-lante y, cansada de luchar, estaba a punto de darse por vencida. Pareca que cuando solucionaba un problema, apareca otro. El padre, un reconocido chef, la llev a la cocina. Llen tres ollas con agua y las puso sobre fuego fuerte. Cuando el lquido estaba hirviendo, ech



zanahorias en la primera olla, un par de huevos en la segunda, y, algunos granos de caf en la tercera. La hija esper con impaciencia preguntndose: qu es-tara haciendo su padre? A los veinte minutos, l apag el fuego, puso las zanahorias en un recipiente y los huevos en otro, col el caf y lo sirvi en una jarra. Mirando a su hija, le pregunt: -Querida, qu ves? -Zanahorias, huevos y caf, fue la respuesta. Le pidi que tocara las zanahorias: estaban blandas.

Luego, le dijo que rompiera un huevo: estaba duro. Por ltimo, le pidi que probara el caf. Ella son-ri, mientras disfrutaba el rico aroma de la bebida. Humildemente la joven pregunt: -Qu significa esto, pap? -Estos tres elementos -explic l- se han en-frentado a la misma adversidad, el agua hirviendo, y cada uno ha reaccionado en forma diferente.

La zanahoria, fuerte y dura, se torn dbil, fcil de deshacer. El huevo era frgil; la cscara fina protega su interior lquido, que despus de estar en el agua hirviendo se endureci. Los granos de caf transfor-maron al agua, convirtindola en la rica bebida que te reconforta y calienta. Qu eres t? le pregunt el cocinero a su hija-. Cuando la adversidad llama a tu puerta, eres zanahoria, huevo o grano de caf? Y usted, amigo lector, es como una zanahoria, que pa-rece fuerte pero se vuelve dbil cuando la adversidad lo toca?, es como un huevo, cuyo corazn maleable se endurece ante las penas?, o como un grano de caf, que cambia al agua hirviente, al elemento que le cau-sa dolor? El que es como un grano de caf, reacciona mejor cuando las cosas se ponen peor12.

12. Lopera Gutirrez,jaime.(2002). La Culpa es de la Vaca. Bogot. Editorial Nomos S.A.


Reflexiona lo ledo a travs de la siguiente interrogante: Te has preguntado por qu algunas personas parecen mantener la calma frente a los desastres, mientras que otros parecen caerse a pedazos?, y luego te invitamos a leer la historia denominada Un burro no tan burro13 para reflexionar a partir de esta inte-rrogante: Cmo reaccionas t cuando se te presentan inconve-nientes o dificultades en los procesos de acompaamiento que realizas?

Cuentan que un da un burro cay en un pozo seco. El animal rebuznaba lastimero, mientras su dueo, un campesino de tierra adentro, no saba qu hacer para remediar la situacin. El campesino dijo: Bueno, pen-sndolo bien este burro est ya muy viejo. No sirve para nada. Y el pozo ya est seco, tampoco sirve, por eso decidi tapar el pozo y enterrar en l al viejo burro que durante aos le haba sido tan til para acarrear el trigo y la cebada. Llam a sus vecinos y les dijo: Ey, vecinos, chenme una mano!... Vengan! Ellos le respondieron: Qu se le ofrece, compadre? El cam-pesino les pidi: Aydenme a tapar este pozo seco!... Vamos!.

Cada cual agarr una pala y empezaron a echar tierra en el pozo. El pobre burro se dio cuenta de lo que es-taba pasando y rebuzn amargamente por la ingratitud del hombre al que haba servido durante tantos aos. Pero luego de las primeras paletadas de tierra, el burro tuvo una idea.

El vecino le dijo al campesino Ey, vecino, fjate en lo que est haciendo tu burro! El campesino, curioso, mir al fondo del pozo y no daba crdito a sus ojos... A

13. Si deseas escuchar la historia del burro no tan burro puedes hacerlo a travs del siguiente link http://www.radialistas.net/clip.php?id=1200071


cada paletada, el burro se sacuda la tierra y daba un paso encima de ella. Entonces el campesino les pidi que echaran rpido ms tierra en el pozo. Ms rpido tambin, el burro se sacuda la tierra y la iba apisonan-do bajo sus patas. Y ocurri que, mientras ms tierra le echaban, ms pronto suba el burro. Al rato, el cam-pesino vio con sorpresa cmo el animal lleg hasta la boca del pozo y sali trotando.

Sacdete la tierra de la ingratitud. Convierte las difi-cultades en oportunidades para salir adelante.

En ingls definen este fenmeno como resilience, es decir, la propiedad que tienen algunos materiales de doblarse bajo una carga y recuperar su forma original, cuando sta ya no acta.

Las personas que son capaces de mantener la calma tienen lo que los psiclogos llaman resiliencia, o capacidad de hacer fren-te a los problemas y contratiempos. Las personas resistentes son capaces de utilizar sus habilidades y fortalezas para hacer frente y recuperarse de los problemas y desafos, que pueden incluir la prdida del empleo, problemas financieros, las enfer-medades, los desastres naturales, emergencias mdicas, el di-vorcio o la muerte de un ser querido. Aquellos que carecen de esta capacidad de recuperacin pueden llegar a ser abrumados por tales experiencias. Pueden insistir en los problemas y el uso de mecanismos no saludables para lidiar con estos desafos.


En general, estos individuos son ms lentos de recuperarse de los reveses y pueden experimentar ms malestar psicolgico como consecuencia de ello.

La resiliencia no es eliminar el estrs o borrar las dificultades de la vida. En su lugar, consiste en la fuerza para hacer frente a los problemas, superar la adversidad y seguir adelante con la vida. A raz de traumas como los ataques del 11 de septiembre en EEUU, el desastre del huracn Katrina o el terremoto en Hait, muchas personas demostraron los comportamientos que caracterizan la resiliencia. Incluso de cara a los acontecimien-tos que parecen totalmente inimaginables, la gente puede mo-vilizar las fuerzas para no slo sobrevivir, sino prosperar.

Algunas personas ya tienen estas habilidades, naturalmente, con rasgos de personalidad que les ayudan a mantenerse imper-turbables ante los retos. Sin embargo, estos comportamientos no son simplemente un rasgo innato en unos pocos individuos selectos. Segn muchos expertos, la resiliencia es en realidad bastante comn y las personas son muy capaces de aprender las habilidades que se requieren para ser ms resistentes.

Edith Grotberg, una de las investigadoras ms reconocidas en el tema de la resiliencia, propuso cuatro categoras de facto-res que caracterizan a las personas resilientes. De acuerdo con Grotberg (1997), para hacer frente a las adversidades, superar-las y salir de ellas fortalecido e incluso transformado, los nios toman factores de resiliencia de cuatro fuentes que se visua-lizan en las expresiones verbales de los sujetos (nios, adoles-centes o adultos) con caractersticas resilientes:

Yo tengo en mi entorno social.

Yo soy, de las fortalezas intrapsquicas y condiciones personales.


yo estoy, habla de las fortalezas intrapsquicas y condi-ciones personales.

Yo puedo, concierne a las habilidades en las relaciones con los otros.

YO TENGO YO PUEDO

- Personas alrededor en quienes confo y quienes me quieren incondicional-mente.

- Personas que me muestran con su ejemplo la manera correcta de proceder.

- Personas que me ayudan cuando enfermo, estoy en peligro o cuando necesito aprender.

- Hablar sobre cosas que me asustan o me inquie-tan.

- Buscar la manera de resol-ver mis problemas.

- Controlarme cuando tengo ganas de hacer algo peli-groso o que no est bien.

- Buscar el momento apro-piado para hablar con al-guien o para actuar.

- Encontrar a alguien que me ayude cuando lo nece-sito.

YO ESTOY YO SOY

- Con disposicin para res-ponsabilizarme de mis ac-tos.

- Con la seguridad de que todo saldr bien.

- Una persona por la que sienten aprecio y cario.

- Feliz cuando hago algo bueno para las dems per-sonas y les demuestro mi afecto.

- Una persona respetuosa de s misma y del prjimo.


La resiliencia se teje: no hay que buscarla slo en la interiori-dad de la persona ni en su entorno, sino entre los dos, porque anuda constantemente un proceso ntimo con el entorno social.

1. Hacer un inventario

Te invitamos a hacer tu inventario para conocer con qu fac-tores cuentas social y personalmente para hacer frente a las ad-versidades. Puedes echar mano del modelo sencillo propuesto por Edith Grotberg en la dcada de los noventa.

YO TENGO YO PUEDO

YO ESTOY YO SOY



2. Te invitamos a leer los siguientes versos de la cancin Resistir14 y a reflexionar sobre el mensaje que ellos te trans-miten.

Cuando pierda todas las partidas, cuando duerma con la soledad, cuando se me cierren las salidas y la noche no me deje en paz...

Cuando sienta miedo del silencio, cuando cueste mantenerse en pie, cuando se revelen los recuerdos y me pongan contra la pared

Resistir, erguido frente a todo, me volver de hierro para endurecer la piel,

y, aunque los vientos de la vida soplen fuerte, soy como el junco, que se dobla, pero siempre sigue en pie.

Resistir, para seguir viviendo, soportar los golpes y jams me rendir,

y, aunque los sueos se me rompan en pedazos, resistir, resistir...

14. Si deseas escuchar la cancin puedes buscarla en el siguiente link http://www.youtu-be.com/watch?v=2bihwedGFdA&feature=related


Unidad2 Cmo soy con los dems?

Relacin Interpersonal

Hay muchas cosas que podemos hacer para consolidar y fortale-cer nuestras relaciones interpersonales. A veces, es importante encontrar las palabras indicadas en el momento justo. Cuando hablamos o nos comunicamos, hay declaraciones que tienen el poder de forjar nuevas amistades, recuperar una vieja amistad o restaurar relaciones que se han enfriado15.

15. Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Dario Chahn Pinzn. Op. cit.


Cmo es mi relacin con las personas que me ro-dean?

Reflexionemos:

1. Te invito a que hagas un recuento de las relaciones con las personas que te rodean, cmo las describiras?

2. Realiza una lista, reflexionando:

Sobre las perso-nas con quienes me siento me-nos a gusto.

Sobre las perso-nas con quienes me siento ms o menos a gusto.

Sobre las perso-nas con quienes me siento ms a

gusto.

-

-

-

-

-

-

-

-

-

3. Qu opinas de la cantidad de personas con quienes man-tienes una relacin grata, estable, confiable?

4. Hay alguna relacin que te gustara cultivar para hacerla ms cercana? Qu pasos dar para cultivar esa relacin?



Un aspecto importante es aprender a relacionarse en forma po-sitiva con las personas con quienes se interacta diariamente, como la familia o las personas que son compaeras de trabajo. Este aprendizaje es especialmente significativo cuando no se tiene la oportunidad de decidir con quin se comparte la vida cotidiana; por ejemplo, en el caso del trabajo, donde no siem-pre las personas pueden decidir quines son sus compaeros de labor.16 Existen algunos procedimientos que resultan convenien-tes y pueden ayudar a conseguir una mejora sustancial en las relaciones; entre los medios ms relevantes pueden destacarse los siguientes:

Dilogo: Es la capacidad de estar con los otros de modo que se den cuenta de nuestro inters por ellos. Es hacer sentir al otro que es aceptado, querido, valorado por m, aunque no est de acuerdo con su opinin. Es acercarme al otro cuando est tris-te, preocupado, enfadado... y tener gestos que expresen que estoy con l: una palmadita, una mirada acogedora, un beso. Dilogo es expresar al otro con palabras o con gestos lo bue-no que ha hecho, animndole, y cuando hace algo mal, hablar con l con mucho respeto y amor, sin reprocharle, mostrndole siempre CONFIANZA, pero invitndole a la reflexin, al cambio. Dilogo es ponerse en el lugar del otro, hacindole sentir que todo lo de l me interesa. Dilogo es expresar mis sentimien-tos y pensamientos y dejar que el otro los exprese. Es saber cundo callar para escuchar. Dilogo es ESCUCHAR, dejar que el otro se exprese sin cortarle cuando est hablando. Dilogo

16. Ibidem.


es reconocer que me he equivocado y ofrecer disculpas, siendo PACIENTE ante las dificultades de la vida diaria17.

El dilogo18 es un fenmeno humano por el cual se nos revela la palabra, de la que podemos decir que es el dilogo mismo. Por ello, hay que buscar la palabra y sus elementos constitutivos. Descubrimos as que no hay palabra verdadera que no sea una unin inquebrantable entre accin y reflexin y, por ende, que no sea praxis. De ah que decir la palabra verdadera sea trans-formar el mundo.

La palabra inautntica no puede transformar la realidad, pues privada de su dimensin activa, se transforma en palabrera, en mero verbalismo, palabra alienada y alienante, de la que no hay que esperar la denuncia del mundo, pues no posee compro-miso al no haber accin. Sin embargo, cuando la palabra hace exclusiva referencia a la accin, se convierte en activismo, minimiza la reflexin, niega la praxis verdadera e imposibilita el dilogo.

Los seres humanos se construyen en el discurso, en el trabajo, en la accin, en la reflexin. El dilogo implica un encuentro de los hombres para la transformacin del mundo, por lo que se convierte en una exigencia existencial. El dilogo es una gran herramienta de transformacin del propio entorno, y por consi-guiente, del mundo.

Y no podemos dejar de recordar que, para Freire, la palabra tiene dos fases constitutivas indisolubles: accin y reflexin. Ambas en relacin dialctica establecen la praxis del proceso transformador. La reflexin sin accin se reduce al verbalismo estril, y la accin sin reflexin es activismo. La palabra verda-dera es la praxis, porque los hombres deben actuar en el mundo

17. http://www.motivaciones.org/ctosequeesdialogo.htm

18. http://www.uhu.es/educacion/_paulo_freire.htm


para humanizarlo, transformarlo y liberarlo. En consecuencia, el dilogo autntico debe servir para la humanizacin, transfor-macin y liberacin de las personas.

Confianza: Fiarse de los dems supone una actitud optimista ante la vida, los desconfiados jams establecen contactos sli-dos, fructferos, ni verdaderos. Se privan de relaciones autn-ticas. Sin embargo, es bueno admitir que a todos los individuos con los que nos tropezamos no podemos dispensarles el mismo grado de confianza, pero es preciso invocar un clima que fo-mente las relaciones de confianza sin excesos, sin temores o re-servas. Muchas iniciativas importantes pueden malograrse por un exceso o carencia de fe en las capacidades y posibilidades propias o ajenas.

Valoracin de los dems: Con demasiada frecuencia en todos los campos del hacer humano, desafortunadamente se observan crticos o censores de los fallos y errores en el desempeo ajeno. En ocasiones son poco generosos al evaluar la gestin positiva o las cualidades destacadas de alguna persona. Es precisamente el saber fijarse en los otros, el valorar las virtudes y aciertos que hay en cada persona, una actitud que posibilita el cultivar y mejorar las relaciones humanas. Salir de s mismo, mirar con detenimiento alrededor y encontrar lo positivo que hay en las personas, es un magnfico ejercicio que conduce de la clausura a la apertura, de la competitividad a la participacin colabora-tiva, de la intransigencia a la tolerancia, y de la frustracin a la satisfaccin, donde cobra sentido el crecimiento personal que soporta a las autnticas relaciones interpersonales.

Fomento de actitudes sanas: Los avatares de lo que hemos llamado civilizacin y modernidad, nos llenan de dudas, inquie-tudes, interrogantes y, por qu no decirlo, de problematicidad. Nos es imposible dar respuesta adecuada a tanta informacin y situacin nueva.


Estos condicionantes afectan el trato personal cotidiano, en ocasiones surge el retraimiento, y evitamos relacionarnos con los otros. La mejor alternativa en estos casos es el fomento de conductas y actitudes saludables que nos eviten caer en el des-nimo y frustracin, logrando aceptar con serenidad lo que no est en nuestras manos cambiar y actuando con decisin ante lo que sea susceptible de mejora. Si esto se torna una dificultad, analizar calmadamente la situacin, los posibles errores; acep-tando las limitaciones propias y ajenas, as como asumiendo la disposicin interior de superacin, se constituirn en claves para superar angustias y preocupaciones.19

Sugerencias para crecer como acompaante: Anmate a utili-zar estas frases en tu vida diaria.

Puede que tengas razn: Esta frase es altamente efec-tiva para deshacer un argumento y restaurar las emociones debilitadas. El lado curioso de Puede que tengas razn es la humildad de admitir, Puede que yo est equivoca-do. Admitmoslo. Cuando se tiene un enfrentamiento con alguien y se trata de argumentar, lo nico que puede con-seguirse es que el otro refuerce su punto de vista. Al final del da ninguno cambiar su postura y se corre el riesgo de daar seriamente la relacin entre ambos. El dicho Puede que tengas razn fomenta la exploracin del tema, en el que es posible tener la oportunidad de ver las cosas de una manera ms racional, de una manera diferente.

Gracias: La gratitud es una forma exquisita de cortesa. La gente que disfruta del compaerismo de amigos buenos y cercanos son quienes no tienen dificultad en mostrarse corteses. Agradecen con rapidez a sus amigos sus muchas expresiones de bondad. Por otra parte, a la gente cuyo

19. Estruch, joan (2009). Coleccin Gestin de Calidad Direccin Profesional y Calidad Educativa. Monografas Escuela Espaola.


crculo de amigos es notablemente reducido les falta con frecuencia la actitud de la gratitud.

Cuenta conmigo: Un amigo es el que se queda cuando todos se han ido. La lealtad es el ingrediente esencial de la amistad verdadera; es el adhesivo emocional que afian-za a las personas. Los que gozan de buenas y abundantes relaciones tienden a tener amigos constantes y verdade-ros. Cuando se presentan problemas, un buen amigo est ah diciendo: Cuenta conmigo.

Djame ayudarte: Los mejores amigos ven una necesi-dad y tratan de satisfacerla. Cuando perciben un dao ha-cen lo que pueden para sanarlo. Sin que se les pida, echan una mano y ayudan.

Puedes ayudarme?: A veces es necesario, y es seal de humildad pedir ayuda a las personas que nos rodean, a las personas con las que trabajamos. Muchas veces por ser autosuficientes incurrimos en el error de aislarnos.

Te comprendo: Las personas consiguen ser ms cerca-nas y disfrutar entre s ms intensamente si sienten que la otra persona las acepta y comprende. Hacer saber a las personas que nos rodean de cuntas pequeas mane-ras y diferentes formas las comprendemos, es una de las ms poderosas herramientas para dar vida a las relaciones. Esto se aplica a cualquier relacin.

Intntalo: Todos somos individuos nicos. Evita tratar de conseguir que los amigos se conformen con los idea-les propios. Apyalos en la consecucin de sus intereses, por muy raros que estos parezcan. Todos tenemos sueos, sueos que son nicos para esa persona. Es imprescindible apoyar y fomentar en los amigos el conseguir sus sueos, decir siempre: Intntalo. Tambin podemos animarnos a fomentar las innovaciones colectivas proponiendo cambios


y diciendo: Intentmoslo!, juntos ser ms fcil, jun-tos estaremos respaldados.

Te quiero: Quizs son las palabras ms importantes que se pueden decir. Decirle a alguien que verdaderamente le amamos, satisface las necesidades emocionales ms pro-fundas de las personas. La necesidad de pertenecer, de sentirse apreciado y de ser querido.

Te respeto: El respeto es otra manera de mostrar amor. El respeto transmite el sentimiento de que la otra persona es un verdadero igual. Si hablamos a los nios como si fue-ran adultos fortaleceremos su autoestima y conseguiremos ser amigos cercanos. Esto se aplica a todas las relaciones interpersonales.20

Aplica en algunos casos de tu trabajo como acompaante las sugerencias que te damos.

20. http://www.paginadigital.com.ar/articulos/2002rest/2002sept/textos/concep.html



Reconocer la existencia del otro

Te invitamos a reflexionar cmo se encuentra en ti mismo la aceptacin incondicional del otro y cmo influye esto en tu la-bor de acompaante, para ello te presentamos una lectura que refleja la sabidura de los indgenas Sioux y Lakotas, segn la cual, para llegar a ser un hombre sabio es necesario ponerse en el lugar del otro, sin juzgarlo y adems hay que dedicar suficiente tiempo a esta tarea si pretendemos comprenderlo. Antes de juzgar a una persona, camina tres lunas con sus mo-casines proverbio Sioux.

La sabidura de los Lakota21

La paz llegar dentro del alma de los hombres cuan-do ellos reconozcan sus relaciones con el Todo, con el universo y todos sus poderes, cuando reconozcan que en el centro de ese universo est Wakan Tanka, y que ese centro es todo lugar dentro de nosotros mismos. La abuela araa nos ensea que todo est relacionado y se encuentra en relaciones dentro de la red univer-sal.

21. Sntesis en base a un escrito de Cabello, V. Tomado de: http://www.tierradeluna.com/La%20Sabiduria%20de%20los%20Lakota.pdf



Con la edad viene la sabidura, y esa sabidura debe ser compartida de forma amorosa con los menores. Esto es cierto para la tribu y la nacin indgena Lakota. Para los abuelos Lakota todo lo que el poder hace lo hace en crculoel crculo es sagrado en s mismo, pues simbo-liza y representa el conocimiento del universo.

Para convertirse en hombre sabio se requieren unas ce-remonias propiciatorias. El iniciado debe conocer sus leyendas y tradiciones, reverenciar a la Madre Tierra, seguir el camino del corazn Lakota como forma de vida. Caminar en belleza, en flor, en canto, en len-guaje florido que brota del caminar en belleza, saber caminar una milla en los mocasines del otro calzar el zapato de tu hermano. Entonces, sabes interiormente lo que es la sabidura y el amor al despertar en ti las partculas de luz, estar bajo las plumas protectoras del gran espritu que habitan en nuestro cuerpo y esperan ser despertadas desde nuestro corazn.

Cuando acompaas, te colocas en el lugar de tu acompaado? Caminas con los zapatos de l? Logras descubrir lo positivo del entorno y de los acompaados?

Descubrir al otro

Los educadores, sin importar la funcin que desempeemos, so-mos individuos con una interioridad y una historia propia, pero


como humanos, somos tambin seres sociales a los que nos co-rresponde convivir en diversos espacios, entre ellos los escola-res, donde desarrollamos nuestra labor profesional. Acompaar a educadores y educadoras, supone nutrir la dimensin comu-nitaria que tenemos para enriquecer nuestra relacin con los otros.

Segn Garca (2002), descubrir al otro es un proceso que im-plica, en primer lugar, el conocimiento y la aceptacin propia, pues slo quien se conoce y se acepta puede comprender a los dems. Como acompaantes debemos conocer nuestras cuali-dades y defectos, ya que cmo podremos aceptar y reconocer a otros si cuando nos miramos a nosotros mismos no nos gusta lo que vemos? El primer paso para aceptarnos es entrar dentro de nosotros mismos y aclarar nuestras ideas, opiniones, senti-mientos, emociones, as como el sentido de nuestra vida. Saber quin es el otro, en qu grupos y espacios convive, cmo son sus relaciones, sus problemas cotidianos, es fundamental para dar inicio a un proceso de acompaamiento pedaggico. Por otra parte, aceptar al otro exige reconocer que tiene sentimientos, actitudes, valores, afectos y formas de actuar.

Para Cabarrs (2001), la aceptacin incondicional del otro en un proceso de acompaamiento comienza por crear la atms-fera adecuada para que el otro pueda descubrir lo que est su-cediendo en su prctica y empezar desde all un camino de cre-cimiento y transformacin. Esto exige escuchar la historia del otro sin hacer juicios de valor, no slo lo que dice sino cmo lo dice. En tal sentido, los juicios de valor se convierten en ame-nazas para las relaciones que se han comenzado a establecer, as como para el clima de confianza que se ha ido conformando poco a poco. El acompaante debe cuidarse para no categori-zar a sus acompaados como buenos/malos, organizados/desorganizados, comprometidos/sin compromiso. Esto re-quiere que l o ella sepan cmo interactuar con los educadores


y educadoras en un proceso que no los juzga si no actan como la institucin o el centro educativo esperan de ellos.

Comunicarle a tus acompaados que los aceptas tal como son puede convertirse en el punto de partida para un cambio, por lo cual te recomendamos:

Practica la escucha activa: haz que nuestros acompaados y acompaadas se sientan escuchadas y atendidas. Utiliza gestos, miradas, palabras, frases y preguntas para demos-trar inters y tratar de recibir mayores informaciones. Nunca los interrumpas ni hagas gestos que manifiesten cansancio.

Utiliza respuestas que demuestren haber comprendido lo que se escuch: hechos y sentimientos; sin emitir juicios o valoraciones. La idea es expresar una sntesis de lo escu-chado, y as contribuir a hacer que quien habla se explique mejor y se sienta comprendido, aceptado y reconocido en sus emociones y deseos ntimos, aunque ello no suponga la aprobacin de su conducta o de sus deseos.

Y al compartir algn problema:

Expresa mensajes en primera persona, intentando expli-car la situacin desde la perspectiva del acompaado, sin culpabilizarlo ni juzgar su conducta, reflexionando: cmo sera estar en el lugar del otro?, qu sentira yo?, qu hara en su situacin?

Acepta la diversidad en las ideas aunque no ests total-mente de acuerdo con ellas. Reconoce que los que te ro-dean pueden pensar de manera diferente.


Ponerse en el lugar del otro

A continuacin te proponemos una dinmica que puedes utilizar para motivar a tus acompaados a escuchar al otro, sus pala-bras y propuestas.

Objetivos: Aprender a escuchar al otro, ponerse en su lugar, tanto emocionalmente como en los contenidos.

Actividades de preparacin:

1. Invitar a los acompaados y acompaadas que van a participar en el proceso a una reunin.

2. Elaborar carteles con los nombres de las personas que van a asistir.

3. Seleccionar un ambiente adecuado.

4. Colocar un papelgrafo para anotar las conclusiones.

Desarrollo de la actividad:

El grupo se subdivide en parejas o en subgrupos segn el nmero de participantes.

Cada participante se coloca en el frente una tarjeta con su nombre y adems una tarjeta con una idea su-gerida para mantener una posicin. Por ejemplo: la expulsin de un alumno con mala conducta, las tcni-



cas para establecer disciplina, la participacin de los padres en la toma de algunas decisiones.

A cada pareja se le indica un tema conflictivo a discu-tir y se les dan 10 minutos para la discusin. Cada uno debe defender una posicin contraria, indicada pre-viamente en el tarjetn.

Pasado el tiempo, el facilitador corta la discusin y pide cambiar el tema con la persona que tienen en-frente, y continuar la discusin manteniendo la posi-cin del otro por 10 minutos ms.

Posteriormente, se realiza una plenaria y se les pide que expresen cmo se sintieron al defender la posicin del otro.

Luego, anotan las conclusiones y reflexionan sobre ellas.

Empata

Las tres cuartas partes de las miserias y malos entendidos en el mundo terminaran si las personas se pusieran

en los zapatos de sus adversariosy entendieran su punto de vista

Mahatma Gandhi


Leamos este ejemplo:

Un compaero de trabajo me trata mal frecuentemen-te. Yo puedo: 1) pensar que tengo la culpa y que le he debido hacer algo; 2) que es un grosero y se siente bien cuando molesta a los dems, con lo cual, no me sentir personalmente agredido, ya que esto forma parte de su personalidad; y 3) tiene situaciones personales difciles que lo hacen actuar de esa manera. Esto no implica que yo est de acuerdo con el trato que me da, que le llame la atencin por ello, o que le pida un cambio de acti-tud. En el caso de llamarle la atencin, debo hacerlo de forma asertiva comprendiendo su actitud ya que de lo contrario entrara en una espiral de conflicto.

Analiza el caso anterior y responde las siguientes pre-guntas:- Qu opinas de la actitud de la persona que relata

el caso? - Qu consecuencias traera cada una de las opcio-

nes que sta se plantea?- Cmo reaccionas ante situaciones similares?

1. Para ilustrar un poco ms lo que significa ser emptico te invitamos a leer la siguiente historia22.

22. Prez Esclarn, A. (2007) Parbolas para vivir en plenitud. Caracas: Ediciones San Pa-blo. Si lo deseas, te invitamos a revisar un video que encontrars en la siguiente direccin http://www.youtube.com/watch?v=0KTZ2Gbyktk



Hace algunos aos, en los juegos paraolmpicos de Seattle, nueve concursantes, todos con alguna discapa-cidad, se reunieron en la lnea de partida para correr los cien metros planos. Cuando son el disparo, todos corrieron con gran entusiasmo. Uno de ellos tropez, cay en el asfalto y empez a llorar.

Cuando los otros escucharon el llanto del compaero, detuvieron la carrera y volvieron atrs. Todos regresa-ron y una nia con sndrome de Down le bes la herida.

Entonces, los nueve nios y nias se agarraron de las manos y caminaron juntos hacia la meta. Todos en el estadio se pusieron de pie y aplaudieron emocionados durante varios minutos.

Analiza la historia y responde las siguientes preguntas:

- Qu opinas sobre la accin de los competidores?- Qu enseanza nos dejan los competidores?- Qu pensamientos o sentimientos te surgen a par-

tir de la lectura?

Me reconozco como una persona emptica

La empata es la habilidad que tiene una persona de entender y sintonizar emocionalmente con lo que est viviendo y sintiendo otra persona. Se trata de la identificacin personal, emocional, mental y afectiva con los otros, excluyendo los juicios morales. Tambin se le conoce como inteligencia interpersonal.


Para ser empticos y poder entender y sentir con la otra perso-na, hay que haber tenido experiencias similares. Por ejemplo, entiendo y siento el dolor de la muerte de un ser querido, cuan-do yo mismo he pasado por un dolor semejante.

La empata se construye sobre la conciencia de uno mismo; cuanto ms abiertos estamos a nuestras propias emociones, ms hbiles seremos para interpretar los sentimientos.23

Para una persona que se conoce es ms fcil ponerse en el lugar de la otra persona y relacionarse en forma sana y asertiva con las dems, precisamente porque reconoce en s misma la natu-raleza de los seres humanos.

Por qu es importante la habilidad emptica en la Educacin Popular?24

La escasez y estrechez de recursos afecta notablemente las re-laciones emocionales interpersonales, tendiendo a convertir a las personas en tristes, violentas y agresivas; hay abundancia de sentimientos de dolor y frustracin.

La empata no les va a solucionar los problemas sociales, pero s los puede hacer ms humanos y comprensivos en sus relaciones interpersonales. Puede llegar a bajar los niveles de frustracin, agresividad y rabia pues la persona se va a sentir comprendida, acogida, contenida y va a quedar, para decirlo en forma grfica: desarmada.

La empata es una habilidad social que se aprende progresiva-mente. Es una actitud ante la vida que enfatiza el respeto y valoracin de la otra persona. Adems, les ofrece la oportuni-

23. Goleman, Daniel. (1997). La Inteligencia Emocional. Editorial Bantam Books.

24. Fe y Alegra Bogot. (2005). Habilidades para vivir. Bogot, Colombia. Editorial Citygraf impresores Ltda.


dad de sentir la solidaridad y cercana de los otros. La empata requiere de personas dispuestas a escuchar, a comprender y apoyar a los dems, y que sientan que ese es el mejor servicio que podemos ofrecer. La empata busca crear relaciones hu-manas de igualdad, solidaridad y crecimiento. Es importante sealar que la comunicacin es el canal que motoriza o pone en funcionamiento las relaciones y configura el clima social de for-ma definitoria. Si la comunicacin se da con fluidez, la apertura es la consecuencia.

Elementos de la empata25

RESPETO: Significa mirar con atencin o consideracin. Respeto es el reconocimiento de que algo o alguien tienen valor. Se lo puede considerar como la base del sustento de la moral y la tica.

El respeto en las relaciones interpersonales comienza en el in-dividuo, en el reconocimiento del mismo como entidad nica

que necesita que se comprenda al otro. Consiste en saber valo-rar los intereses y necesidades de otro individuo en cualquier si-tuacin, tratndolo de acuerdo con su dignidad como persona.

Principio de respeto o autonoma de las personas

Este principio se basa en dos teoras tico-morales que explici-tan las siguientes ideas textualmente:

1. El respeto por la autonoma del individuo, que se sustenta, esencialmente, en el respeto de la capacidad que tienen las personas para su autodeterminacin, en relacin con las determinadas opciones individuales de que disponen.

25. Ibidem.


2. Proteccin de los individuos con deficiencias o disminucin de su autonoma, en el que se plantea y exige que todas aquellas personas que sean vulnerables o dependientes re-sulten debidamente protegidas contra cualquier intencin de dao o abuso por otras partes.

TOLERANCIA: Se relaciona con la indulgencia, respeto y con-sideracin hacia las maneras de pensar, de actuar y de sentir de los dems, aunque stas sean diferentes a las nuestras: la virtud ms til en la vida social es la tolerancia26. Ayuda a relativizar el propio punto de vista y a considerar la validez del punto de vista ajeno.

COMPRENSION: Es la capacidad de encontrar razones y expli-caciones a los actos o sentimientos de otro. La comprensin va mas all de entender los motivos y circunstancias que rodean a un hecho. La comprensin es y debe ser un producto de la razn, de pensar en los dems, de ponerse en los zapatos del otro sin hacer diferencias entre las personas. Si alguna vez nos hemos sentido incomprendidos, recordaremos el rechazo expe-rimentado que esa sensacin nos produjo.

ACEPTACION: Se concibe como la combinacin de las actitudes de tolerancia, respeto y comprensin emptica, fusionadas de modo natural, en una actitud de acogida. Como el todo de que forma parte; esta actitud es incondicional.

A continuacin presentamos algunas recomendaciones para po-ner en prctica la empata en nuestra vida personal y como acompaantes:

Hacer preguntas con final abierto. Las preguntas cerra-das generalmente llevan implcitas respuestas o sugieren la inclinacin a responder de determinado modo; ejemplo:

26. Pelayo, Ramn Garca y Gross. (1973). Pequeo Larousse Ilustrado. Pg. 1006, Argen-tina. Ediciones Larousse.


Te sientes enfadada conmigo?. Las preguntas abier-tas comunican el deseo de aprender de la otra persona y el inters verdadero que se tiene en su punto de vista. Permiten ahondar en la reflexin como punto de partida de la respuesta. Las preguntas con final abierto como, por ejemplo: Cmo te sientes conmigo?, dan la oportunidad de que la otra persona gue la conversacin hacia lo que ella quiere o necesita, en vez de dirigirla en una direccin especfica.

Avanzar suavemente. Cuando las emociones y sentimien-tos se encuentran en un punto lgido, es til tomarse un momento para pensar y reflexionar. Ir ms despacio per-mite que los pensamientos vayan al mismo paso que las emociones y sentimientos, aportando tranquilidad y sen-satez a una situacin cargada de emociones. No presiones la expresin de la otra persona, dales tiempo.

Evitar hacer juicios. No importa cunto se sepa de la ex-periencia pasada de la persona. No se puede saber con certeza qu est pensando y sintiendo en ese preciso mo-mento. Es mejor preguntar de forma abierta para evitar hacer juicios y valoraciones injustas de la situacin.

Prestar atencin al cuerpo. Hay un componente neta-mente fsico en la empata. Cuando interactuamos con gente hostil o una persona que est enfadada, nuestras reacciones fsicas coinciden con las de ella: se incrementa el flujo en la sangre hacia los msculos, se eleva la presin sangunea, comenzamos a sentir los efectos de la ira en nuestro cuerpo.

En el encuentro emptico, el cuerpo entra en sintona con el de la otra persona y podemos detectar sus reac-ciones fsicas. Prestar atencin a esa informacin aporta


claves importantes sobre sus pensamientos y emociones y facilita una relacin constructiva.

Aprender del pasado. La empata tambin tiene en cuen-ta el pasado. Debemos saber y comprender lo que sucedi, no con la intencin de guiar las acciones de hoy ni de pre-decir el futuro, sino para ver cmo los viejos patrones, los juicios, las teoras y la idealizacin interfieren en lo que est sucediendo en ese momento.

1. Leamos lentamente las siguientes frases y trasladmoslas a nuestra vida y a nuestra accin como acompaantes. Contrasto lo que leo con lo que vivo:

- Aumento la capacidad para expresar los senti-mientos de modo verbal y no verbal a la gente que me rodea.

- Las personas que me rodean llegan a sentirse ple-namente comprendidas, gracias a la aceptacin in-condicional que les brindo.

2. Releamos los elementos de la empata que presentamos en el mapa de ruta y nos animamos a llenar el siguiente cuadro:



Elementos de la empata que poseo

Elementos de la empata que necesito reforzar

3. Te invitamos a escribir situaciones que ests viviendo a las que no le hayas encontrado una solucin; ejemplo: Una educadora que trabaja en el centro educativo donde soy directora siempre llega tarde. Qu estoy haciendo ante esa situacin?, y qu podra hacer? Piensa en actividades que nos permitan ponernos en sintona con la maestra que llega tarde.

Toma de decisiones

En las decisiones el dbil tiembla, el tonto las desafa, el sabio las juzga y el hbil las dirige

Annimo

Tomo decisiones?

Reflexionemos juntos:

En el da a da, me cuesta tomar decisiones?



En la mayora de las situaciones, las decisiones que tomo tienen resultados exitosos o no?

Las decisiones que tomo son totalmente individuales o par-ticipa alguien de mi equipo, si es en mi lugar de trabajo?

Tomo decisiones

El proceso general para tomar decisiones es ms o menos el mismo, ya sea que se trate de decisiones individuales o colecti-vas, e involucra los siguientes aspectos27:

1. Reconocer el problema u oportunidad: El proceso de de-cidir comienza cuando identificamos la necesidad de un cambio.

2. Analizar la situacin: Una vez que se ha identificado la di-ferencia entre lo que es y lo que podra ser, debemos estudiar la situacin para determinar de qu depende esta diferencia.

3. Considerar sus objetivos: Qu objetivos se quieren al-canzar? Los objetivos dependen de lo que se considera importante, lo que se aprecia y valora en la vida. Los he-chos (informacin) pueden combinarse con los valores, las emociones y sentimientos, para lograr una decisin ms acertada.

4. Buscar alternativas: Cuanto ms importante sea la deci-sin que se debe tomar, hay que buscar ms alternativas. Hablar con personas de confianza, la investigacin y la pro-pia creatividad pueden ayudar a descubrir nuevas posibili-dades de accin.

27.Tomado con algunas modificaciones de Improving Decision-Making skills, una publi-cacin del Servicio de Extensin Cooperativa de la Universidad de Kansas. Disponible en: www.oznet.kus.edu/library/famec2/mf873.pdf


5. Analizar las consecuencias: Anticipar posibles conse-cuencias es un aspecto esencial de la toma de decisiones. Distintas fuentes de informacin pueden ayudar a anticipar las consecuencias, pero en ocasiones es necesario guiarse slo por el propio conocimiento o experiencia. Considera tambin los recursos necesarios (tiempo, energa, destre-zas, dinero, conocimiento y otros) para llevar a cabo cada alternativa.

6. Escoger la mejor alternativa: Qu alternativa correspon-de mejor a los objetivos, necesidades, valores y recursos disponibles. Es posible que ninguna de las opciones que se identificaron resulte atractiva; quiz se pueda encontrar otra mediante la combinacin de opciones.

7. Actuar con base en la decisin: El proceso de decidir no termina con la seleccin de la mejor alternativa. Es nece-sario ponerla en accin.

8. Aceptar la responsabilidad: Acepta la responsabilidad por la decisin y las posibilidades y consecuencias de la mis-ma. La mayora de las decisiones se toman en condiciones de incertidumbre y recursos limitados, por lo que es im-portante pensar que se hizo lo mejor posible con lo que se tena. No esperes imposibles.

9. Evaluar los resultados: Es importante evaluar los resul-tados de las decisiones para determinar su efectividad. Incluso, las decisiones habituales deben examinarse de vez en cuando para ver si realmente responden a la situacin actual.

Se necesita de la razn y del corazn para tomar las decisiones ms apropiadas. Un toque de razn es necesario para informar-se mejor, evaluar las opciones y sus implicaciones. La capacidad de pensar crticamente, la disposicin personal a indagar y a in-vestigar, influyen en la toma de decisiones. Tambin se requiere


un toque de emocin para conectar la decisin con los propios intereses, necesidades, valores y deseos.

Decidir sin razn es dejarle el timn de nuestra vida al azar y a las dems personas sin entusiasmo, es como cocinar sin sazn. Conectar la razn y la emocin a la toma de decisiones es ms sencillo cuando la persona se conoce a s misma y sabe qu quiere y necesita, qu valores y criterios orientan su vida y con qu recursos personales cuenta para lograr esos objetivos.

Tomar decisiones es un proceso complejo y con la finalidad de facilitar este proceso a los acompaantes se pueden concretar algunos elementos de inters:

Identificar los verdaderos problemas.

Encontrar, no una solucin a los problemas, sino la mejor. Optimizar las decisiones.

Solucionar los problemas de fondo y no a medida que van surgiendo.

Realizar un proceso de decisiones democrtico, transpa-rente y participativo. Crear un clima propicio para la toma de decisiones

Aprender y aplicar tcnicas para la solucin de problemas.


1. A continuacin te presentamos una matriz en la cual puedes ir desarrollando tu decisin hasta el momento de tomarla.28

Escribe un problema, situacin o preocupacin sobre la que de-bes tomar una decisin; por ejemplo: en el rol de acompaante de un centro educativo te das cuenta que un educador est dando un tratamiento inapropiado a un estudiante (utilizando palabras descalificadoras e hirientes). Qu haces?

En la matriz, identifica tres alternativas posibles y completa cada una de las filas:

Alternativas posibles

Alternativa1

Alternativa 2

Alternativa 3

Consecuencias positivas

Consecuencias negativas

28. Tomado con cambios de Manual de entrenamiento para la Prevencin de Drogodepen-dencias mediante educacin para la Salud con nfasis en Habilidades para la Vida. (Life Skills-based Education for Drug Use Prevention Training Manual), Publicado por UNICEF Ney York. (2004).



Emociones y sentimientos asociados con

cada alternativa

Valores personales que influyen en

cada alternativa

Cada decisin es un trazo que haces en el cuadro de tu vida. Si esa pincelada responde al tipo de persona que quieres ser, estars delineando la versin de ti mismo, convirtindote en lo que quieres y has decidido ser.

Pero, si al decidir cedes siempre a la presin, complaces o dejas en manos de otros la decisin, posiblemente, al final, las dems personas observen en la pintura aquello que desean ver, mien-tras que t no podrs reconocerte en ella29.

2. Aprendiendo a tomar decisiones. Consiste en un modelo sencillo para tomar decisiones paso a paso, como el que se sugiere a continuacin:

1. Identifica las opciones y alternativas involucradas en la de-cisin que debes tomar.

2. Busca ms informacin sobre los aspectos relacionados con la decisin (considera tus valores y metas; establece qu ms necesitas saber antes de tomar la decisin).

3. Haz una lista de las ventajas y desventajas de cada alter-nativa que tienes.

4. Toma la decisin y sustntala (menciona las razones en que se fundamenta tu decisin).

29. Leonardo Mantilla Castellanos e Ivn Daro Chahn Pinzn. Op. cit.


Ahora te invito a que puedas aplicar estos pasos con el siguiente ejemplo:

En el rol de coordinador regional o departamental, responsable de 15 centros educativos a los cuales debes realizar acompa-amiento pedaggico. Tomar varias decisiones para iniciar el trabajo:, Qu haces?, Cmo inicias el acompaamiento?

Solucin de problemas y conflictos

Si no eres parte de la solucin,sers parte del problema

Annimo

Solucionar problemas y conflictos

Reflexionemos leyendo cada una de las siguientes frases:

- No existen problemas, slo son pruebas que hay que superar.

- En esta vida hay que ser solucin, no problema.

- Si exagersemos nuestras alegras como nuestras pe-nas, nuestros problemas perderan importancia.

- Una cosa est clara: hay ms problemlogos que solu-cionlogos.



- No hables de tus problemas si no es para encontrarles una solucin.

Considero que soy una persona que busca verdaderamen-te solucionar los problemas?

Cmo creo que me perciben las personas que trabajan conmigo: como un problemlogo o un solucionlogo?

Me descubro como sujeto solucionador de proble-mas y conflictos30

Un conflicto es la presencia simultnea de intereses diferentes o fuerzas antagnicas. Estos antagonismos pueden presentarse en forma de ideas, valores, deseos, opiniones, intereses o ne-cesidades opuestas, pero que se encuentran presentes en un momento y una situacin dada: el coordinador nacional quiere ir ms veces al centro educativo pero tiene responsabilidades en la oficina; ella quiere renunciar a un trabajo por no estar de acuerdo con su enfoque, pero tiene compromisos econmicos que debe tener en cuenta.

Las personas han encontrado muchas maneras de vivir los con-flictos: a veces ignorando la situacin y haciendo como que no sucede nada. En ese caso las experiencias ms usuales son: es mejor no pelear, no le ponga atencin, esa persona es as, no hay ningn problema.

30. Ibidem.


En otras ocasiones, el conflicto se aborda con violencia y se par-te del principio de que a quien ms fuerza tiene, mayor razn le respalda.

Es mejor aceptar los conflictos como motor de la existencia humana, los esfuerzos se pueden dirigir a desarrollar estrategias y herramientas que permitan manejarlos en formas creativas y flexibles, vindolos como oportunidades para crecer, hacer cambios y enriquecer distintas dimensiones de la vida humana.

Un problema es un objetivo disfrazado. Si tuviramos to-dos los objetivos alcanzados no tendramos ningn problema. Problemas y objetivos son las dos caras de la misma moneda. Cuando nos planteamos una situacin podemos centrar nuestra atencin en cualquiera de esas dos caras de la moneda. El que centremos nuestra atencin en una cara de la moneda o en la otra, tiene efectos profundos en nuestro rendimiento profesio-nal y en nuestro equilibrio personal.

Las diferencias entre pensar en problemas o en objetivos se resumen de la siguiente manera:

Dos maneras de plantearse la misma situacin

PROBLEMA OBJETIVOS

Por qu? Cmo?

Obstculos Posibilidades

Fracaso Informacin

Centrar la atencin en los problemas a resolver puede ser til cuando necesitamos analizar la naturaleza de los obstculos que se nos plantean. Pero si lo que necesitamos es generar al-


ternativas y soluciones, entonces necesitamos dirigir nuestra atencin a lo que nos gustara conseguir.

Sugerencias para ser mejor acompaante: Compartimos tres de los muchos faros que te pueden guiar en la solucin de al-gunos de los problemas y conflictos. Como buenos faros, sirven para guiarse, no indican cmo actuar ni qu decir31.

1. Desarmar la costumbre: Un primer paso significativo en la solucin creativa de problemas es identificar la solucin que ya se ha intentado y disponerse a modificarla. Como dijo Albert Einstein: si buscas resultados distintos, no ha-gas siempre lo mismo.

2. Formas de mejorar: Casi siempre la solucin definitiva de un problema supone optar por la violencia. Por ejem-plo, una estudiante agresiva puede ser expulsada de la escuela, para terminar con el problema. Esa decisin no soluciona el problema, aunque logra ocultarlo a la vista de algunas personas. Inevitablemente el problema reapa-recer. Como alternativa, busca poner en marcha varias formas pequeas de mejorar la situacin, para que, gra-dualmente, se vaya transformando. Volviendo al ejemplo, construye confianza en la relacin con la estudiante, en-crgale nuevas misiones, potencia sus cualidades. Es pro-bable que, poco a poco, puedan tener una relacin que permita superar las manifestaciones agresivas de la estu-diante.

3. Incumbencias: Los conflictos suponen, al menos, dos in-tereses diferentes. Hay que buscar a la persona compa-era del problema, pues es con ella con quien se puede encontrar una solucin.

31. Lopera Gutirrez, jaime. Op. cit.


Tenemos un problema32

Elige un problema o una situacin que te preocupe (por ejem-plo, el elevado nmero de educadores y educadoras a las que debes realizar acompaamiento, las necesidades de formacin de los directores de los centros educativos que acompaas son muy diversas y variadas).

Primer momento: Piensa en ese problema, utilizando las si-guientes preguntas como gua:

Defino un problema:

En qu consiste dicho problema?

Desde cundo existe?

Por qu se origin dicho problema?

De quin es la culpa?

32. http://www.galeon.com/aprenderaaprender/intemocional/objetivofin.htm



Una vez contestadas las preguntas anteriores, cules son tus impresiones y/o sentimientos en este momento? A qu conclu-siones has llegado?

Segundo momento: Ahora, piensa en ese mismo problema uti-lizando las siguientes preguntas como guin:

Problema:

Qu queremos en lugar de ese problema?

Cmo sabremos que hemos conseguido nuestro objetivo?

Cmo podramos solucionar el problema y conseguir lo que queremos?

Quin nos podra ayudar a conseguir dicho objetivo lo ms rpidamente posible?

Qu recursos necesitare-mos?

Qu podemos aprender de este tema?

Una vez contestadas las preguntas anteriores, cules son tus impresiones y/o sentimientos en este segundo momento? A qu conclusiones has llegado?

En el primer momento: Tenemos una serie de pregun-tas que plantea el tema como problema.

En el segundo momento: Tenemos una serie de pre-guntas que plantea el tema, pero como soluciones.


Unidad3Me reconozco como acompaanteAcompaante situado

Hay que trabajar con fe en lo que se hace y con la alegra de estarlo haciendo.

Padre Jos Mara Vlaz

Reflexionemos:

Qu me viene a la mente cuando leo acompaante situa-do?



Me animo y escribo algunas caractersticas propias de un acompaante situado.

Acompaamiento situado

Una vez que el acompaante se ha mirado a s mismo y analiza sus relaciones con los otros, intenta situarse en un contexto determinado con unas caractersticas propias.

El acompaamiento pedaggico ser situado ya que cuando acompaamos lo hacemos en contextos especficos donde ocu-rren numerosas interacciones sociales que influyen en el desa-rrollo de todos los que participan en ellas. Cada uno de estos contextos tiene determinadas caractersticas que lo identifican y lo diferencian de los otros. Cuando actuamos como acom-paantes, generalmente respondemos a las demandas que nos hace el contexto y a situaciones concretas que se nos presentan cotidianamente. Por ello, el acompaante necesita conocerse a s mismo y conocer las caractersticas del espacio o entorno en el que le corresponde actuar, as como diversas estrategias33 que le permitirn adaptarse a cada uno de estos contextos, para iniciar junto con el acompaado un proceso de crecimien-to mutuo que repercutir en el alcance de los propsitos perso-nales e institucionales.

Cada centro educativo tiene su historia, est ubicado en un contexto determinado y mantiene diferentes relaciones con la comunidad que lo rodea. Esto implica entender que cada centro

33. En el libro, Bitcora para acompaantes.


educativo es diferente, y por tanto, no puede ser tratado de la misma manera. Yo, como acompaante, debo saber cmo me si-to desde la educacin popular, en un contexto o una situacin de vulnerabilidad para realizar un proceso de acompaamiento. En tal sentido, no es lo mismo acompaar la implementacin de un plan de mejora con nfasis en procesos de construccin de ciudadana, dirigido a la conservacin del agua en un centro educativo ubicado en una zona urbana que cuenta con el servi-cio y requiere crear conciencia sobre la importancia de este vi-tal lquido, que hacerlo en un centro educativo ubicado en una zona vulnerable donde ni siquiera se recibe agua diariamente.

En el primer caso, se acompaar el diseo y puesta en prc-tica de una serie de proyectos y acciones que contribuyan a la conservacin del agua, mientras que en el segundo, el acompa-ante debe al apoyar al equipo directivo

Documents

CrecerComoAcompanantes_JacquelinneAlzerreca_2011