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Cáritas Genovés Hoja informativa de Cáritas Parroquial Parroquia Ntra. Sra. de los Dolores; www.parroquiagenoves.org Número: 4, Febrero 2012 Extracto de la reflexión ofrecida por el jesuita Darío Mollá al voluntariado de Cáritas Alcoy el jueves 2 de febrero de 2012. ¿Cómo hacemos las cosas? Que la acción social tenga calidad evangélica, sea testimonial y esté siempre referenciada a Jesús. Se trata de un hacer con estilo propio. Pensemos el punto de partida que tenía Jesús: todas las personas son hijos de Dios y tienen dignidad, aunque esté envuelta en pobreza y deterioro. Por eso la gente veía en Jesús otra cosa… porque en tiempo de Jesús también ha- bía personas sensibles al sufrimiento de los demás. El toque de Jesús es su percepción viva de la filiación y dignidad de cada persona. Se trata de tener conciencia de la dignidad de las personas que se acercan a nosotros… Características de la acción social evangélica: CONTEMPLATIVA. Acoger y escuchar la realidad. Se da un proceso: la persona no sólo es sujeto de necesidades; también lo es de valores. Por ejemplo, el encuentro con la mujer cananea: mientras los discípulos dicen “cúrala para que se vaya y nos deje tranquilos”, Jesús va entrando en diálogo con ella. Nos ayuda a descubrir que la per- sona además de sus necesidades tiene sus valores (muchas veces ocultos). DIALOGAL. Los helicópteros que echan comida a la gente hambrienta no establecen diálogo interpersonal. Jesús hace los milagros dialogando –“qué te pasa… qué necesitas”-. El mayor desprecio es pensar que una persona no tiene nada que decirnos. Dialogar es devolver dignidad. Todo el mundo tiene algo que decir, aunque el lenguaje sea diferente al nuestro y nos cueste entenderlo. Jesús no da algo, sino a sí mismo. Es más importante darse uno mismo que dar algo (como los del helicóptero). GRATUIDAD. Si no cobramos en efectivo, tampoco hay que cobrar en afectivo. No hay que “pasar factura”. Gra- tuidad quiere decir incondicionalidad: sigo apostando por la persona más allá de mi éxito. Sigo si me va bien y sigo si me va mal. No estoy para triunfar sino para ayudar. No debo pedir lo que no me pueden dar. Respetar la liber- tad del otro, cuando me da las gracias y cuando me desprecia, o simplemente se va… LIBERADORA. Evitar dependencias. Ayudar a que el otro vaya tomando protagonismo y no se aferre a las depen- dencias. Por eso Jesús dice. “tu fe te ha salvado. Vete en paz”. Lo de liberar no fácil, pero es posible, aunque nun- ca al cien por cien. Es un horizonte. Que lo que hagamos sea momento de encuentro con Dios, experiencia espiritual. Toda actividad humana es susceptible de ser actividad “espiritual”, lugar de la experiencia de encuentro con Dios. Interesa tener unas actitudes in- ternas a la hora de hacer las cosas. El pobre es lugar privilegiado de en- cuentro con Dios, pero no de manera “automática”. En vez de encontrar- me con Dios puedo encontrarme conmigo mismo, dependiendo de las acti- tudes. Son cuatro las actitudes necesarias: Agradecimiento, limpieza de intención, constancia y abnegación. Todo ello nos lleva a la profunda y verdadera comprensión de que nuestra acción social no es otra cosa que un “don”, un precioso don que recibimos cada día… No está en nuestras manos el recibirlo, pero sí que está, y ésa es la tarea, acogerlo, cuidarlo y compartirlo.

Cáritas Genovés · que sin Jesucristo toda la labor caritativa de la Iglesia se relativiza. El Santo Padre, con su fina visión de la Iglesia y la sociedad, decía en su discurso

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Cáritas Genovés Hoja informativa de Cáritas Parroquial

Parroquia Ntra. Sra. de los Dolores; www.parroquiagenoves.org Número: 4, Febrero 2012

Extracto de la reflexión ofrecida por el jesuita Darío Mollá al voluntariado de Cáritas Alcoy el jueves 2 de febrero de 2012.

¿Cómo hacemos las cosas?

Que la acción social tenga calidad

evangélica, sea testimonial y esté

siempre referenciada a Jesús.

Se trata de un hacer con estilo propio. Pensemos el punto de partida que tenía Jesús: todas las personas son hijos de Dios y tienen dignidad, aunque esté envuelta en pobreza y deterioro. Por eso la gente veía en Jesús otra cosa… porque en tiempo de Jesús también ha-bía personas sensibles al sufrimiento de los demás. El toque de Jesús es su percepción viva de la filiación y dignidad de cada persona. Se trata de tener conciencia de la dignidad de las personas que se acercan a nosotros… Características de la acción social evangélica:

CONTEMPLATIVA. Acoger y escuchar la realidad. Se da un proceso: la persona no sólo es sujeto de necesidades; también lo es de valores. Por ejemplo, el encuentro con la mujer cananea: mientras los discípulos dicen “cúrala para que se vaya y nos deje tranquilos”, Jesús va entrando en diálogo con ella. Nos ayuda a descubrir que la per-sona además de sus necesidades tiene sus valores (muchas veces ocultos).

DIALOGAL. Los helicópteros que echan comida a la gente hambrienta no establecen diálogo interpersonal. Jesús hace los milagros dialogando –“qué te pasa… qué necesitas”-. El mayor desprecio es pensar que una persona no tiene nada que decirnos. Dialogar es devolver dignidad. Todo el mundo tiene algo que decir, aunque el lenguaje sea diferente al nuestro y nos cueste entenderlo. Jesús no da algo, sino a sí mismo. Es más importante darse uno mismo que dar algo (como los del helicóptero).

GRATUIDAD. Si no cobramos en efectivo, tampoco hay que cobrar en afectivo. No hay que “pasar factura”. Gra-tuidad quiere decir incondicionalidad: sigo apostando por la persona más allá de mi éxito. Sigo si me va bien y sigo si me va mal. No estoy para triunfar sino para ayudar. No debo pedir lo que no me pueden dar. Respetar la liber-tad del otro, cuando me da las gracias y cuando me desprecia, o simplemente se va…

LIBERADORA. Evitar dependencias. Ayudar a que el otro vaya tomando protagonismo y no se aferre a las depen-dencias. Por eso Jesús dice. “tu fe te ha salvado. Vete en paz”. Lo de liberar no fácil, pero es posible, aunque nun-ca al cien por cien. Es un horizonte.

Que lo que hagamos sea momento

de encuentro con Dios,

experiencia espiritual. Toda actividad humana es susceptible de ser actividad “espiritual”, lugar de la experiencia de encuentro con Dios. Interesa tener unas actitudes in-ternas a la hora de hacer las cosas. El pobre es lugar privilegiado de en-cuentro con Dios, pero no de manera “automática”. En vez de encontrar-me con Dios puedo encontrarme conmigo mismo, dependiendo de las acti-tudes. Son cuatro las actitudes necesarias: Agradecimiento, limpieza de intención, constancia y abnegación. Todo ello nos lleva a la profunda y verdadera comprensión de que nuestra acción social no es otra cosa que un “don”, un precioso don que recibimos cada día… No está en nuestras manos el recibirlo, pero sí que está, y ésa es la tarea, acogerlo, cuidarlo y compartirlo.

152 El movimiento hacia la identificación y la proclamación de los derechos del hombre

es uno de los esfuerzos más relevantes para responder eficazmente a las exigencias im-

prescindibles de la dignidad humana.302 La Iglesia ve en estos derechos la extraordinaria

ocasión que nuestro tiempo ofrece para que, mediante su consolidación, la dignidad hu-

mana sea reconocida más eficazmente y promovida universalmente como característica

impresa por Dios Creador en su criatura.303 El Magisterio de la Iglesia no ha dejado de evaluar positiva-

mente la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, proclamada por las Naciones Unidas el 10

de diciembre de 1948, que Juan Pablo II ha definido « una piedra miliar en el camino del progreso moral

de la humanidad ».304

153 La raíz de los derechos del hombre se debe buscar en la dignidad que pertenece a todo ser humano.305

Esta dignidad, connatural a la vida humana e igual en toda persona, se descubre y se comprende, ante todo,

con la razón. El fundamento natural de los derechos aparece aún más sólido si, a la luz de la fe, se conside-

ra que la dignidad humana, después de haber sido otorgada por Dios y herida profundamente por el pecado,

fue asumida y redimida por Jesucristo mediante su encarnación, muerte y resurrección.306

La fuente última de los derechos humanos no se encuentra en la mera voluntad de los seres humanos,307 en

la realidad del Estado o en los poderes públicos, sino en el hombre mismo y en Dios su Creador. Estos

derechos son « universales e inviolables y no pueden renunciarse por ningún concepto ».308 Universales,

porque están presentes en todos los seres humanos, sin excepción alguna de tiempo, de lugar o de sujeto.

Inviolables, en cuanto « inherentes a la persona humana y a su dignidad » 309 y porque « sería vano procla-

mar los derechos, si al mismo tiempo no se realizase todo esfuerzo para que sea debidamente asegurado su

respeto por parte de todos, en todas partes y con referencia a quien sea ».310 Inalienables, porque « nadie

puede privar legítimamente de estos derechos a uno sólo de sus semejantes, sea quien sea, porque sería ir

contra su propia naturaleza ».311

Quiero compartir con vosotros el gozo que siento por la gran labor que realiza la organización católica Manos Unidas que presenta, para esta campaña LIII- año 2012 de lucha contra el hambre, el lema “La salud, derecho de todos. Actúa”. Así continúa con el desarrollo de los objetivos del milenio, haciendo hincapié en esta ocasión en com-batir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, que por desgracia siguen sesgando vidas humanas que podrían ser salvadas con una buena prevención y tratamiento. Año tras año, Manos Unidas, nos va presentando diferentes problemas que afectan directamente a la persona y se nos invita encarecidamente a tener una visión integral que nos permita un visión general de los grandes y graves dramas que afectan hoy en día a los hombres y mujeres de países más pobres, no pudiendo nunca olvidarnos de campañas anteriores y recapitulando todas ellas para llegar al corazón de la persona, tal y como lo hacía Jesucristo. Es de una trascendencia incalculable el presentar una visión integral de la persona, pues de ello depende que las respuestas sean también integrales y que todas las dimensiones de la perso-na estén presentes. De esta manera, Manos Unidas asume su identidad. Es importante que, en medio de nuestra so-ciedad que enmudece ante las injusticias y se ciega por el materialismo egoísta, se escuchen voces proféticas y cohe-rentes que rompan ese silencio y aviven las conciencias de todos. Pero ese anuncio debe ser ante todo evangélico, ya que sin Jesucristo toda la labor caritativa de la Iglesia se relativiza. El Santo Padre, con su fina visión de la Iglesia y la sociedad, decía en su discurso navideño a la curia romana: “Europa se encuentra en una crisis económica y financiera que, en última instancia, se funda sobre la crisis ética que amenaza al Viejo Continente. Aunque no están en discusión algunos valores como la solidaridad, el compromiso por los demás, la responsabilidad por los pobres y los que sufren, falta con frecuencia, sin embargo, la fuerza que los motive, capaz de inducir a las personas y a los grupos sociales a renuncias y sacrificios.” Jesucristo es esa fuerza que moviliza toda la labor caritativa y permite reconocer en el otro a mi hermano, que me necesita, que me llama, que pregunta por mí, que llora solo, que anda vagabundo… Es impresio-nante leer en los Evangelios cómo el Señor no ignoró el sufrimiento de muchas personas, acercándose a ellas, tocán-dolas, hablando con ellas, mirándolas fijamente a la cara: “¿Qué quieres que te haga?” (Mc 10, 51). Muchas veces, nosotros podemos caer en la tentación de pasar de largo ante las situaciones desagradables de la vida. Hay cosas que nos molestan y nos denuncian, por eso es fácil girar la mirada ante la pobreza, el hambre, la violencia… Tal vez poda-mos poner cara de impotencia, o de no saber exactamente qué es lo que debo o puedo hacer, pero un discípulo del Señor nunca debería ignorar las lágrimas del prójimo. Cada gota derramada es recogida por la misericordia divina y algún día nos recordarán las ocasiones que las ignoramos conscientemente. Jesús le dijo al maestro de la ley que es-cuchó la parábola del buen samaritano: “Anda, haz tú lo mismo” (Lc 10, 37), invitándole a practicar las obras de mise-ricordia. Hoy nos lo dice a nosotros con ocasión de esta campaña de Manos Unidas. + Carlos, Arzobispo de Valencia

Concepto Cantidad 25/01 Alimentos 27,18 23/01 Alimentos y pañales 82,82 6/02 Alimentos 29,07 6/02 Pañales 42,50 TOTAL 181,57

Cáritas Parroquial Del 1 de enero al 6 de febrero de 2012

Este mes no se compró mucha comida gracias a la Campaña de Alimentos de Adviento.

Colabora con Cáritas haciendo una pequeña aportación en la Cuenta de Cáritas

Bancaja: 2077- 0191 - 16 - 1100295146 Las ayudas a la Iglesia Católica y a Cáritas desgravan en el IRPF

El pasado domingo 8 de enero celebrábamos en nues-tra comunidad la misa en acción de gracias por la emi-sión de votos de Sor Amparo Ripoll Mateu, miembro de la Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicen-te de Paúl y Santa Luisa de Marillac. La colecta de aquel día se destinó íntegramente a los proyectos de

acción social que la Compañía de las Hijas de la Caridad tie-nen en Alicante, actual resi-dencia de Sor Amparo. Si quie-res más información puedes acceder a ella en:

w w w. h i j a s c a r i d a d

. o r g

Memoria Año 2011

Ingresos

Cuotas socios 465,00

Donativos 3.375,30

Colecta Corpus 506,00

Colecta Jueves Santo y Navidad 1.329,80

Total Ingresos 5.676,10

Gastos

Gastos vivienda (alquiler, luz…) 877,87

Comida 2.250,44

Farmacia 55,80

Pañales 225,35

Animación 500,00

Día de la Caridad 506,00

República Dominicana 1.000,00

Campamento 502,00

Total Gastos 5.935,46

Resultado año 2011 - 259,36

El pasado 26 de enero, en asamblea, fueron nombrados los miembros del equipo directivo y de coordinación Cáritas pa-rroquial Genovés. Así pues fueron nombrados los siguientes cargos:

Directora: Pilar Giner Tesorera: Mª Nieves Sánchis

Secretaria: Consue Llopis Acogida: Amparo Sánchis y Rosa Conde

Sensibilización: Marga Llopis Voluntarios en Cáritas Genovés:14 personas.

Socios de Cáritas Genovés: 31 personas.

Son funciones de Cáritas Parroquial: 1. Procurar la incorporación de la acción caritativa-social a la vida y la pastoral de la Parroquia. 2. Facilitar a la comunidad parroquial el conocimiento de las realidades de pobreza y exclusión social y de sus causas, a través de estudios y comunicaciones. 3. Animar el sentido del amor cristiano y las exigencias de la solidaridad con los necesitados. 4. Impulsar la comunicación cristiana de bienes. 5. Promover cuantos servicios se consideren necesarios para apoyar la promoción humana, el desarrollo integral y la in-serción social de los pobres y ayudar especialmente a los más necesitados. 6. Proponer al Consejo Pastoral Parroquial y promover, de acuerdo con éste, cuantas iniciativas se consideren necesa-rias para concretar los acuerdos y las orientaciones de Cári-tas Diocesana y de Vicaría.

Estatutos Cáritas, artículo 19

Usuarios y beneficiados

Mes (AÑO 2011) Usuarios por mes

Beneficiados por mes

Enero-Febrero 17 70

Marzo-Abril 12 49

Mayo-Junio 12 49

Julio-Agosto (inc. camp.) 21 31

Septiembre-Octubre 17 70

Noviembre-Diciembre 18 76

REDUCIR LA

MORTALIDAD

INFANTIL

Reducir en dos terceras partes el número de niños que mueren antes de cumplir 5 años para 2015.

En 2008, 72 de cada 1000 niños morían antes de cele-brar su quinto cumpleaños. En 1990 eran 100, lo que muestra que ha habido una reducción, pero todavía significa que 8,8 millones de niños menores de cinco años murieron en 2008 - uno de cada 10 niños en países en vías de desarrollo. Cuatro enfermedades: pulmonía, diarrea, malaria y sida, fueron la causa del 43% del total de muertes de niños menores de 5 años en 2008. La prevención y el tratamiento de bajo costo pudieron ha-ber salvado muchas vidas. Casi no ha habido progreso en África y el sur de Asia, en donde 1 de cada 7 y 1 de cada 14 niños no llega a los cinco años. Sin embargo, contra todas las probabilidades, algunos de países más pobres han realizado un progreso asombroso. Bangla-desh, Bolivia, Eritrea, Malawi, Mongolia y Nepal han reducido sus tasas de mortalidad en niños menores de cinco años en un 4,5 anual o más. Aunque hay más ni-ños con VIH/Sida y tuberculosis, ha habido progreso en otras enfermedades prevenibles como la malaria. La campaña de inmunización contra el sarampión alcanzó una cobertura del 81% en el mundo en vías de desarro-llo en 2008 y tuvo como resultado una reducción del 78% en la cantidad de muertes en todo el mundo; de 733.000 en 2000 a 164.000 en 2008.

Fortalecer nuestros esfuerzos contra el VIH/Sida, es-pecialmente en África y el sur de Asia, con más educa-ción sobre la transmisión del virus de madre a hijo.

Unirnos a la campaña de Caritas "HAART para los ni-ños" para exhortar a las empresas farmacéuticas a que desarrollen medicamentos específicos para niños a pre-cios más bajos. Las medicinas para niños son tres veces más caras que para adultos. Sin ellas, la mayoría de ni-ños con VIH muere antes de cumplir dos años.

Asegurar que más niños se hagan la prueba de VIH lo más pronto posible para aumentar sus posibilidades de recibir tratamiento y de supervivencia.

Hacer campaña en favor de otras intervenciones de salud económicas como desparasitación, suministro de suplementos de vitamina A y mejor nutrición

Seguir con el fuerte incremento en el financiamiento para salud infantil que ha habido en las últimas dos dé-cadas y ampliarlo aún más.

mdg2015.caritas.org

Cáritas UNA VOLUNTARIA DE CÁRITAS,

CON 99 AÑOS,

VISITA A LOS ENFERMOS Por SIC el 30 de enero de 2012

Clotilde Veniel, natural de la localidad valencia-

na de Bicorp, es en la actualidad la “decana” de los

voluntarios de Cáritas en la archidiócesis de Valencia,

y continúa visitando enfermos a sus 99 años de edad,

según publica en su último número el semanario dio-

cesano PARAULA.

Viuda y madre de dos hijos, Clotilde, que cum-

plirá cien años el próximo mes de mayo, tiene cinco

nietos y cinco biznietos y colabora activamente en la

Cáritas parroquial de su localidad, de la que es una de

sus fundadoras. “Ayer mismo fui a ver a una inválida y

a otra mujer que se cayó”, señala Clotilde a la publica-

ción. Reconoce que tiene un carácter alegre y que

“cuando les hago compañía, a veces les cuento chistes

o les recito alguna poesía para divertirles”. También

añade que “hablamos de cosas alegres del pasado, co-

mo cuando íbamos de paseo con los novios, que es

mejor que hablar de los dolores”.

Clotilde inició su colaboración con Cáritas en

1989, cuando el entonces párroco de la localidad, Pas-

cual Ripoll, “nos animó a formar la Cáritas. No tenía-

mos ni un perra ni media, y otra chica y yo íbamos

pidiendo por el pueblo”. En la actualidad, la anciana

colabora en la recogida de ropa usada, en la “campaña

del kilo”, e incluso “haciendo buñuelos y otros dulces

para recaudar fondos en la Feria Medieval que todos

los años se celebra en el pueblo”, señala Juan Vila,

actual párroco de Bicorp.

En la localidad es “una mujer muy querida, acu-

de a todas las reuniones de Cáritas y tiene mucha ini-

ciativa”, según el párroco. Criada en una familia de

siete hermanos, de los que sólo uno era varón, Clotilde

asegura que su longevidad es fruto del trabajo duro.

“He trabajado muchísimo, casi desde que aprendí a

andar”, afirma. Aunque ha dedicado su vida a diferen-

tes tareas, como el cuidado del ganado, la atención en

una carnicería familiar o el trabajo en el campo, su

“gran afición” ha sido siempre la costura y la labor,

según informa AVAN.