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Notas previas (Foreword) Pág. vii Ana Frank escribió en un diario (íntimo) desde el 12 de junio de 1942 hasta el 1 de agosto de 1944. Inicialmente, ella escribía estrictamente para ella misma. Sin embargo, un día en 1944, Gerrit Bolkestein, miembro del gobierno danés en el exilio, anunció en un comunicado radial desde Londres que después de la guerra tenía esperanzas de poder recolectar información sobre las vivencias y sufrimientos de los ciudadanos daneses durante la ocupación alemana, y poder hacerla pública. A modo de ejemplo, el específicamente mencionó cartas y diarios. Impresionada por este discurso, Ana Frank decidió que cuando la guerra terminara, ella publicaría un libro basado en su diario. Por ello, comenzó a rescribir y editar su diario, omitiendo pasajes que no creía lo suficientemente interesantes y agregando otros que recordaba de memoria. Al mismo tiempo, ella continúo escribiendo en su diario original. En un escrito escolar titulado “El diario de Ana Frank: La edición crítica” (1989), El primer diario de Ana Frank, no editado, es mencionado como la versión a, para distinguirlo de la segunda versión, ya editada del diario, la cual es conocida como versión b. La última vez que Ana escribió en su libro fue el 1 de agosto de 1944. El 4 de agosto de 1944, las ocho personas que se escondían en el anexo secreto fueron arrestadas. Miep Gies y Bep Voskuijl, las dos secretarias que trabajaban en el edificio, encontraron el diario de Ana desparramado por todo el piso del lugar. Miep Gies lo escondió en el cajón de un escritorio. Después de la guerra, cuando ya era claro que Ana estaba muerta, ella le dio el diario, sin haberlo leído, al papá de Ana, Otto Frank. Pág. viii Después de mucho considerarlo, Otto Frank decidió cumplir los deseos de su hija y publicar el diario. Seleccionó material de las versiones a y b y las editó en una versión más corta, luego conocida como versión b. Lectores de todo el mundo conocen este libro como “el diario de una joven” (“The diary of a young girl”). A la hora de decidir que publicar, Otto Frank tuvo que tener varios elementos en cuenta. Por empezar, el libro tenía que ser corto para poder formar parte de un compendio (de memorias) editado por la editorial danesa. Además, varias páginas que hacían mención a la sexualidad de Ana fueron omitidas; para el momento de la publicación inicial del libro en 1947, no se acostumbraba hablar tan abiertamente sobre sexo, y menos aún en libros para jóvenes adultos. Por respeto a aquellos que habían fallecido, Otto Frank también omitió algunos pasajes poco halagadores sobre su esposa y otros residentes del anexo secreto. Ana Frank, que tenía 13 años cuando comenzó a escribir su diario y 15 cuando fue forzada a dejar de hacerlo, escribió sin reservas sobre aquello que le agradaba y aquello que no. Cuando Otto Frank murió en 1980, el donó el manuscrito de su hija al Instituto Estatal Noruego para la Documentación de Guerra (Netherlands State Institute for War Documentation) situado en Ámsterdam. Debido a que la autenticidad del diario había sido puesta en duda desde su publicación, el Instituto para la Documentación de Guerra ordenó una investigación exhaustiva. Una vez comprobado, sin duda alguna, que el diario era genuino, fue publicado entero junto con los resultados del exhaustivo estudio. “La edición crítica” no sólo contiene las versiones a, b y c del diario sino también artículos sobre la familia Frank, las circunstancias que rodearon a su arresto y deportación, un examen de la caligrafía de Ana, del documento y del material usado.

El Diario de Ana Frank

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Page 1: El Diario de Ana Frank

Notas previas (Foreword)Pág. vii

Ana Frank escribió en un diario (íntimo) desde el 12 de junio de 1942 hasta el 1 de agosto de 1944. Inicialmente, ella escribía estrictamente para ella misma. Sin embargo, un día en 1944, Gerrit Bolkestein, miembro del gobierno danés en el exilio, anunció en un comunicado radial desde Londres que después de la guerra tenía esperanzas de poder recolectar información sobre las vivencias y sufrimientos de los ciudadanos daneses durante la ocupación alemana, y poder hacerla pública. A modo de ejemplo, el específicamente mencionó cartas y diarios.

Impresionada por este discurso, Ana Frank decidió que cuando la guerra terminara, ella publicaría un libro basado en su diario. Por ello, comenzó a rescribir y editar su diario, omitiendo pasajes que no creía lo suficientemente interesantes y agregando otros que recordaba de memoria. Al mismo tiempo, ella continúo escribiendo en su diario original. En un escrito escolar titulado “El diario de Ana Frank: La edición crítica” (1989), El primer diario de Ana Frank, no editado, es mencionado como la versión a, para distinguirlo de la segunda versión, ya editada del diario, la cual es conocida como versión b.

La última vez que Ana escribió en su libro fue el 1 de agosto de 1944. El 4 de agosto de 1944, las ocho personas que se escondían en el anexo secreto fueron arrestadas. Miep Gies y Bep Voskuijl, las dos secretarias que trabajaban en el edificio, encontraron el diario de Ana desparramado por todo el piso del lugar. Miep Gies lo escondió en el cajón de un escritorio. Después de la guerra, cuando ya era claro que Ana estaba muerta, ella le dio el diario, sin haberlo leído, al papá de Ana, Otto Frank.

Pág. viii

Después de mucho considerarlo, Otto Frank decidió cumplir los deseos de su hija y publicar el diario. Seleccionó material de las versiones a y b y las editó en una versión más corta, luego conocida como versión b. Lectores de todo el mundo conocen este libro como “el diario de una joven” (“The diary of a young girl”).

A la hora de decidir que publicar, Otto Frank tuvo que tener varios elementos en cuenta. Por empezar, el libro tenía que ser corto para poder formar parte de un compendio (de memorias) editado por la editorial danesa. Además, varias páginas que hacían mención a la sexualidad de Ana fueron omitidas; para el momento de la publicación inicial del libro en 1947, no se acostumbraba hablar tan abiertamente sobre sexo, y menos aún en libros para jóvenes adultos. Por respeto a aquellos que habían fallecido, Otto Frank también omitió algunos pasajes poco halagadores sobre su esposa y otros residentes del anexo secreto. Ana Frank, que tenía 13 años cuando comenzó a escribir su diario y 15 cuando fue forzada a dejar de hacerlo, escribió sin reservas sobre aquello que le agradaba y aquello que no.

Cuando Otto Frank murió en 1980, el donó el manuscrito de su hija al Instituto Estatal Noruego para la Documentación de Guerra (Netherlands State Institute for War Documentation) situado en Ámsterdam. Debido a que la autenticidad del diario había sido puesta en duda desde su publicación, el Instituto para la Documentación de Guerra ordenó una investigación exhaustiva. Una vez comprobado, sin duda alguna, que el diario era genuino, fue publicado entero junto con los resultados del exhaustivo estudio. “La edición crítica” no sólo contiene las versiones a, b y c del diario sino también artículos sobre la familia Frank, las circunstancias que rodearon a su arresto y deportación, un examen de la caligrafía de Ana, del documento y del material usado.

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La Fundación Ana Frank (Anne Frank –Fonds) en Basel, Suiza, como única heredera legal de Otto Frank, había heredado los derechos de autor de Anna Frank. Por ello, decidió luego publicar

(Pág. ix) una versión más extendida para el público en general del diario originalmente publicado. Esta nueva edición en ningún modo afecta la integridad de la versión original editada por Otto Frank, quién brindó el diario y su mensaje a millones de personas. La tarea de compilar la versión extendida fue dada al escritor y traductor Mirjam Pressler. La selección original de Otto Frank ha sido complementada con pasajes de las versiones a y b de Ana. La versión definitiva de Mirjam Pressler, aprobada por la Fundación Ana Frank, contiene aproximadamente un 30 % más de material y busca brindar al lector una visión más profunda del mundo de Ana Frank.

En 1998, la existencia de 5 pasajes desconocidos del diario salió a la luz. Por ello ahora, con el permiso de la Fundación Ana Frank en Basel, un extenso pasaje que data del 8 de febrero de 1944, ha sido agregado al final del pasaje ya existente correspondiente a esa fecha. Asimismo, en conexión con recientes descubrimientos, el pasaje escrito el 7 de noviembre de 1942 fue movido al 30 de octubre de 1943. Para más información, el lector puede consultar la Edición Crítica.

Al escribir la segunda versión del diario, Ana inventó pseudónimos para aquellos que aparecerían en su libro. Ella inicialmente quería llamarse a sí misma Ana Aulis, y luego Ana Robin. Otto Frank optó por llamar a su familia por sus propios nombres y seguir los deseos de Ana en cuanto al resto. Con el correr de los años, la identidad de las personas que ayudaron a las familias en el anexo secreto ha llegado a ser de conocimiento público. En esta edición, estas personas han sido nombradas por sus nombres originales, por que se merecen que así sea. Todas las demás personas han sido nombradas de acuerdo a los pseudónimos en la Edición Crítica. El Instituto para la

(Pág. x)Documentación de Guerra ha asignado arbitrariamente iniciales ha aquellos que decidieron permanecer en el anonimato.

Los verdaderos nombres de las otras personas que se escondían en el anexo secreto son:

La familia Van Pels:(De Osnabrück, Alemania)

Auguste Van Pels (Nacido el 9 de septiembre de 1900)Herman Van Pels (Nacido el 31 de marzo de 1898)Meter Van Pels (Nacido el 8 de noviembre de 1926)

Llamados por Ana en su manuscrito del siguiente modo: Petronella, Hans y Alfred van Daan; y en el libro: Petronella , Herman y Meter van Daan.

Fritz Pfeffer(Nacido el 30 de abril de 1889 en Giessen, Alemania).

Llamado por Ana, en su manuscrito y en el libro: Albert Dussel.

El lector debe tener en cuenta que ésta edición se basa en gran parte en la versión b del diario de Ana, el cual ella escribió cuando tenía alrededor de 15 años. Ocasionalmente, Ana volvió en sus escritos e hizo comentarios sobre pasajes escritos previamente. Estos comentarios son claramente marcados en esta edición. Naturalmente, la ortografía de Ana y sus errores lingüísticos han sido corregidos. Aparte de ello, el texto ha sido básicamente publicado como ella lo escribió, ya que cualquier intento de edición ó clarificación sería inapropiado en un documento histórico.

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Pág xi:Espero poder confiar en ti como nunca he podido confiar en nadie, y espero que

seas para mí una gran fuente de confort y apoyo.

Pág xiiThe diary of a young girl

Pág 1:12 de junio, 1942Espero poder confiar en ti como nunca he podido confiar en nadie, y espero que

seas para mí una gran fuente de confort y apoyo.

Comentario agregado por Ana el 28 de septiembre de 1942:Hasta ahora has sido verdaderamente un gran fuente de apoyo para mí, y también

lo ha sido Kitty, ha quien ahora escribo regularmente. Este modo de escribir un diario es mucho mejor y ahora no puedo esperar a que lleguen esos momentos en los que puedo escribirte.

¡Ah, estoy tan contenta detenerte conmigo!

Domingo 14 de junio, 1942Comenzaré desde el momento en que te obtuve, el momento en que te vi apoyado

sobre la mesa entre mis otros regalos de cumpleaños. (Yo estaba cuando te compraron, pero eso no cuenta).

El sábado 12 de junio me desperté a las seis, lo que no es nada sorprendente dado que era mi cumpleaños. Sin embargo, no tengo permitido levantarme a esa hora, por lo que tuve que contener mi curiosidad hasta las siete menos cuarto. Cuando no pude aguantarme más, fui al comedor, donde Moortje (el gato) me dio la bienvenida frotándose contra mis piernas.

Poco después de las siete fui a ver a papá y mamá y luego al comedor para abrir mis regalos, y tú fuiste lo primero que vi, quizá uno de mis mejores regalos. Luego un ramo de rosas, algunos peonías y una planta en una maceta. De papá y mamá obtuve un suéter azul, un juego, una botella de jugo de uvas, la que a mi parecer sabe un poco a vino (Después de todo, el vino es hecho de uvas), un rompecabezas, una jarra de crema fría, 2.50 guilders (nota: moneda noruega en ese momento) y un certificado de regalo por dos libros. Obtuve también otro libro, “Cámara oscura” (Pero Margot ya lo tiene, así que cambié el mío por otra cosa),

Pág. 2:un plato de galletitas caseras (Que yo misma hice, por suerte, ya que me he

convertido en una experta cocinera de galletitas), montones de dulces y una tarta de frutilla de mi madre. Y una carta de Grammy, justo a tiempo, pero eso fue por supuesto, una coincidencia.

Luego Hanneli vino a buscarme y fuimos a la escuela. Durante el receso repartí galletitas entre mis maestros y mi clase y luego fue tiempo de volver a trabajar. No llegué a casa hasta las cinco, ya que fui a gimnasia con el resto de la clase. (No tengo permitido participar porque mis hombros y cadera tienden a dislocarse). Como era mi cumpleaños, pude decidir que juego jugarían mis compañeros de clase, y elegí el voleyball. Luego todos bailaron en un círculo alrededor mío y cantaron el “Feliz Cumpleaños”. Cuando llegué a casa, Sanne Lederman ya estaba allí. Ilse Wagner, Hanneli Goslar y Jacqueline Van Maarsen vinieron conmigo después de gimnasia, ya que vamos a la misma clase. Hanneli y Sanne solían ser mis dos mejores amigas. La gente que nos veía solía decir

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“Allí van Ana (Anne), Hanne y Sanne”. A Jacqueline Van Maarsen la conocí cuando comencé el liceo judío y ella ahora es mi mejor amiga; Sanne va a otra escuela y tiene amigas allí.

Ellas me dieron un libro hermoso, “Sagas y leyendas danesas” pero me dieron el volumen II por error, así que cambié otros dos libros por el volumen I. La tía Helene me trajo un rompecabezas, la tía Stepahnie un precioso broche y la tía Leny un libro increíble: “Daisy va a la montaña”.

Esta mañana me recosté en la bañera pensando cuán maravilloso sería si tuviera un perro como Rin Tin Tin. Lo llamaría Rin Tin Tin también y lo llevaría conmigo a la escuela; él podría quedarse en el cuarto de seguridad y donde se colocan las bicicletas cuando el clima fuese agradable.

Pág. 3:Lunes 15 de junio, 1942.Tuve mi fiesta de cumpleaños el domingo a la tarde. La película de Rin Tin Tin fue

un gran éxito entre mis compañeros de clase. Obtuve dos broches, un marca libros y dos libros.

Comenzaré diciendo algunas cosas sobre mi escuela y mi clase, empezando por los estudiantes.

Betty Bloemendaal luce un tanto pobre, y creo que probablemente lo es. Ella vive en una oscura calle del oste de Ámsterdam y ninguno de nosotros sabe donde queda. Le va muy bien en la escuela pero eso es porque estudia mucho y no por que sea inteligente. Es bastante callada.

Jacqueline Van Maarsen es supuestamente mi mejor amiga, pero nunca tuve una verdadera amiga. Al principio pensé que Jacque sería una, pero estaba muy equivocada.

D.Q. (Las iniciales fueron asignadas a aquellos que preferían permanecer en el anonimato) es una chica muy nerviosa que siempre se está olvidando algo, por lo que las maestras le asignan continuamente tarea extra como castigo. Ella es muy amable, especialmente con G.Z.

E.S. habla tanto que ya no es gracioso. Ella siempre está tocándose el pelo ó jugando con tus botones cuando te pregunta algo. Dicen que ella no me tolera, pero no importa, a mi no me gusta mucho tampoco.

Henny Mets es una chica dulce y muy alegre pero ella habla mucho y en un tono de voz muy elevado y es muy infantil cuando estamos jugando. Desafortunadamente, Henny tiene una amiga llamada Beppy que es una mala influencia para ella porque es vulgar y descortés.

J.R.- Podría escribir un libro entero sobre ella. J. es una detestable, metiche, hipócrita y chismosa que se cree toda una adulta. Ella tiene a Jacque encantada y eso es una verdadera pena.

Pág. 4J. se ofende muy fácilmente y rompe a llorar ante la más mínima cosa y, para

colmo, le encanta mostrarse y ser admirada. La señorita J, siempre tiene que tener razón. Ella es muy rica y tiene un guardarropas lleno de los más adorable vestidos que son igualmente muy viejos según ella. Ella cree que es hermosa pero no lo es. J y yo no nos toleramos la una a la otra.

Ilse Wagner es una chica agradable y de buen humor pero es muy exigente y se puede pasar horas quejándose acerca de algo. Le agrado mucho a Ilse. Ella es muy inteligente pero también perezosa.

Hanneli Goslar, ó Lies que así es como la llaman en la escuela, es un tanto extraña. Ella suele ser tímida- No lo es en su casa pero sí cuando está rodeada de otra

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gente. Ella le cuenta a su madre todo lo que le cuentan. Pero dice lo que piensa y últimamente he llegado a apreciarla mucho.

Nannie van Praag-Sigaar es pequeña, divertida y sensata. Creo que es dulce. Es bastante inteligente. No hay mucho más que se pueda decir de Nannie

Eefje de Jong es, en mi opinión, increíble. Aunque tiene sólo doce, ella es toda una pequeña dama. Actúa como si yo fuera un bebé pero también es muy servicial, y me agrada.

G.Z. es la chica más linda en nuestra clase. Tiene una cara bonita pero es un tanto tonta .Creo que la van a hacer repetir el grado pero por supuesto no se lo he dicho a ella.

Comentario agregado por Ana más tarde ese mismo día:Para mi asombro, G.Z no tuvo que repetir el grado después de todo.

Y sentada al lado de G.Z está la última de las doce chicas de la clase, yo.Hay mucho que decir respecto de los chicos, ó quizás no tanto después de todo.Maurice Coster es uno de mis varios admiradores, pero es una peste (muy

molesto).Sallie Springer tiene una mente pervertida y sucia y hay rumores de que

Pág5: ha llegado hasta lo último (de que ha besado a alguien). De todos modos, creo

que es grandioso porque es muy divertido.Emiel Bonewit es admirador de G.Z pero a ella no le importa. El es bastante

aburrido.Rob Cohen solía estar enamorado de mí también pero ya no lo tolero. Es un

payaso, mentiroso, hipócrita y descortés con una horriblemente alta autoestima.Max van de Velde es un chico granjero de Medemblik, pero es del tipo decente,

como Margot diría.Herman Koopman también tiene una mente sucia como Jopie de Beer, que es un

gran conquistador que vuelve locas a las chicas.Leo blom es el mejor amigo de Jopie de Beer, pero fue arruinado por la mente

sucia de su amigo.Albert de Mesquita vino de la escuela Montessori y se salteó un grado. Es muy

inteligente.Leo Slagler vino de la misma escuela pero no es tan inteligente.Ru Stoppelmon es un chico bajito y con aspecto tonto de Almelo que fue

transferido a esta escuela a mitad de año.C.N hace todo lo que no debe hacer.Jacques Kocernoot se sienta detrás de nosotras al lado de C. y nosotras (G. y yo)

nos reímos de ellos.Harry Schaap es el chico más decente de nuestra clase. Es agradable.Werner Joseph es agradable también, pero todos los cambios que acontecieron

últimamente lo han convertido en alguien muy callado por lo que parece un chico aburrido.Sam Salomon es un verdadero chico malo. Todo un consentido. (¡Y un admirador

mío!)Appie Riem es bastante ortodoxo, pero todo un consentido también.

Sábado, 20 de junio, 1942.Escribir en un diario es una experiencia realmente extraña para alguien como yo.

Pág.6

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No sólo porque nunca he escrito nada antes sino porque creo que en el futuro ni yo ni nadie más estará interesado en las andanzas de una estudiante de 13 años. En fin, no importa. Siento ganas de escribir y más ganas aún de dejar salir todo tipo de cosas de mi interior.

“El papel tiene más paciencia que la gente”. Pensé en esta frase en uno de esos días en que me sentía un poco deprimida y estaba en casa, sentada con mi mentón sobre mis manos, aburrida y desganada, dudando acerca de salir ó quedarme adentro. Finalmente me quedé donde estaba, meditando. Sí, el papel sí tiene más paciencia, y ya que no planeo dejar a nadie más leer el contenido de este tosco anotador al que me refiero como “diario” a menos que algún día encuentre una verdadera amiga, probablemente no implique la más mínima diferencia.

Ahora me encuentro de vuelta en la causa que me alentó a tener un diario: No tengo una amiga.

Déjame explicarlo más claramente, ya que nadie creería que una chica de 13 años estaría sola en este mundo. Y no lo estoy. Tengo unos padres muy cariñosos y una hermana de 16 años; y hay alrededor de 30 personas a las que puedo llamar “amigos”. Tengo un séquito de admiradores que no pueden sacarme sus adorables ojos de encima por lo que a veces deben recurrir a espejitos de bolsillo para tratar de obtener de mí una mirada en horas de clase. Tengo una familia, tíos adorables y una casa. No, desde afuera parezco tenerlo todo, excepto una verdadera amiga. En lo único que pienso cuando estoy con mis amigas es en divertirme. No logro animarme a hablar de nada más que de cosas ordinarias de todos los días. Parece que no pudiéramos llegar a temas más íntimos, y ese es el problema. Tal vez es mi culpa que no podamos confiar las unas en las otras. De todos modos, así es como están las cosas y desafortunadamente no parece que fueran a cambiar. Y esta es la razón por la que comencé a escribir éste diario.

Pág. 7Para estimular la imagen de esta tan esperada amiga en mi imaginación no usaré

este diario para enumerar hechos simplemente sino que quiero que se convierta en mi amiga, y voy a llamarla Kitty.

Dado que nadie entendería una palabra de mis historias cuando se las cuente a Kitty si sólo empezara a escribir de la nada, será mejor que provea un pequeño resumen de mi vida, por más que no tenga interés en hacerlo.

Mi padre, el padre más adorable que haya visto, no se casó con mi madre hasta que tuvo 36 años y ella 25. Mi hermana Margot nació en Frankfurt, Alemania en 1926. Yo nací el 12 de junio de 1929. Viví en Frankfurt hasta los 4 años. Debido a que somos judíos, mi padre emigró a Holanda en 1933, donde se convirtió en el gerente de la compañía danesa Opetka, que fabrica productos relacionados a la producción de jamón. Mi madre, Edith Hollandër Frank, se fue con mi padre a Holanda en septiembre, y Margot y yo fuimos enviadas a Aachen a vivir con nuestra abuela. Margot se fue a Holanda en diciembre y yo la seguí en febrero, como regalo sorpresa por su cumpleaños.

Al poco tiempo, comencé a asistir a la escuela infantil Montessori a la que asistía hasta que tuve 6 años y comencé el primer grado. Mi maestra de primer grado era la directora, Señorita Kuperus. Al terminar el año, ambas lloramos y nos emocionamos al despedirnos, ya que había sido aceptada en el liceo judío al que Margot ya estaba asistiendo.

En nuestras vidas no faltaron altibajos, dado que nuestros familiares en Alemania estaban sufriendo las leyes anti-judíos de Hitler. Luego de las persecuciones en 1938 mis tíos, los hermanos de mi mamá, huyeron de Alemania, encontrando refugio en Norte América. La mayor de mis abuelas vino a vivir con nosotros. Tenía 76 años por esos días.

A partir de mayo de 1940 los buenos tiempos fueron escasos y esporádicos: Primero llegó la guerra, luego la capitulación y

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Pág. 8finalmente la llegada de los alemanes, que es cuando los problemas comenzaron

para los judíos. Nuestra libertad fue seriamente restringida por una serie de decretos anti-judíos: Los judíos debían usar una estrella amarilla; Los judíos debían entregar sus bicicletas; los judíos tenían prohibido usar medios de transporte públicos; Los judíos tenían prohibido manejar autos, incluso los propios; los judíos debían hacer sus compras entre las 3 y las 5 PM.; Los judíos sólo podían frecuentar peluquerías y salones de belleza pertenecientes a judíos; los judíos tenían prohibido estar en las calles entre las 8 PM. y las 6 a.m. ; los judíos tenían prohibido asistir a teatros, cines ó cualquier otro lugar de entretenimiento; los judíos tenían prohibido usar piletas, canchas de tenis, jockey ó de cualquier otro deporte; los judíos no podían quedar envueltos en peleas; los judíos tenían prohibido formar parte de toda actividad deportiva en público; los judíos no podían sentarse en sus jardines ó en los de sus amigos luego de las 8 p.m.; los judíos tenían prohibido visitar cristianos en sus hogares; los judíos eran forzados a asistir a escuelas judías, etc. No podías hacer esto, ni aquello, pero la vida seguía. Jacque siempre me decía: “Ya no me animo a hacer nada, porque tengo miedo de que no esté permitido”.

En el verano de 1941, mi abuela se enfermó y tuvo que ser operada, por lo que mi cumpleaños pasó casi inadvertido. En el verano de 1940 tampoco hicimos mucho por mi cumpleaños, ya que la batalla en Holanda recién había terminado. Mi abuela murió en 1942. Nadie sabe cuan a menudo pienso en ella y que aún la quiero. La celebración de cumpleaños de 1942 debía compensar por las anteriores, y el candelabro de la abuela fue encendido con los demás.

Nosotros cuatro seguimos estando bien, y eso me remonta al día de hoy, 20 de junio de 1942, y a la solemne dedicación de mi diario.

Pág. 9Sábado, 20 de junio, 1942.

Queridísima Kitty;Déjame comenzar ahora mismo; la casa está tranquila y en silencio. Mis padres

salieron y Margot se ha ido a jugar ping-pong con otros jóvenes a la casa de una amiga. He estado jugando un montón al ping-pong últimamente. Tanto así que entre 5 chicas hemos formado un club, que se llama “big dipper menos dos” (big dipper es una constelación de estrellas, no hay traducción para su nombre). Es un nombre tonto realmente, pero está basado en un error. Queríamos darle a nuestro club un nombre especial, y como éramos 5, pensamos en el nombre Little Dipper. Pensamos que esa constelación estaba compuesta de 5 estrellas, pero estábamos equivocadas. Tiene 7, como Big Dipper, por eso le agregamos el “menos dos”. Ilse Wagner tiene un set de ping-pong, y los Wagner nos dejan jugar en su enorme comedor cuando queramos. Ya que a las 5 jugadoras de ping-pong nos gusta el helado, especialmente en verano, y dado que el jugar ping-pong da calor, nuestros juegos generalmente terminan con una visita a cualquiera de las heladerías más cercanas que permiten judíos, Oasis ó Delphi. Incluso ya no tenemos que revolver nuestros bolsos en busca de dinero: La mayoría de las veces hay tanta gente en Oasis que siempre logramos encontrar a algún conocido ó alguno de nuestros admiradores que nos ofrece más helado del que podríamos comer en una semana.

Probablemente estés un poco sorprendida de oírme hablar de admiradores a una edad tan temprana. Desafortunadamente, ó no, como parece ser el caso, esta tendencia inmoral crece sin control en nuestra escuela. Apenas un chico te pregunta si puede acompañarte en su bicicleta hasta tu casa y empiezas a hablar con él, nueve de cada diez veces puedo estar segura de que él se enamorará de mí inmediatamente y que no me

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quitará los ojos de encima ni por un segundo. Eventualmente, sus sentimientos se irán apagando, especialmente porque ignoro sus miradas apasionadas y sigo pedaleando concentrada en el camino. Si llega al punto en que habla de “pedir permiso a mi padre” me

Pág10 tambaleo lentamente en mi bicicleta y dejo caer mi mochila, por lo que el joven se

siente obligado a bajar de la bicicleta y levantarla, y utilizo ese momento para cambiarla el tema de la conversación. Este tipo de acciones son de las más inocentes. Por supuesto, están los que te lanzan besos desde lejos ó aquellos que tratan de tomarte del brazo; pero están muy equivocados si intentan hacerlo conmigo. Yo me bajo de la bicicleta y, ó me rehúso a seguir siendo acompañada, ó actúo como si hubiera sido insultada y le digo que bajo ninguna circunstancia me acompañará a casa.

Ahí lo tienes. Acabamos de sentar las bases de nuestra amistad. Hasta mañana.Tuya, Ana.

Domingo 21 de junio, 1942.Queridísima Kitty;Toda mi clase está en estado de pánico. La razón, por supuesto, es la próxima

reunión de profesores en la cual deciden quiénes serán promovidos al próximo grado y quiénes no. La mitad de la clase está haciendo apuestas. G.Z. y yo nos reímos de los dos chicos que se sientan detrás de nosotras en clase, C.N. y Jacque Kocernoot, quienes se han pasado todo el verano ahorrando dinero para las apuestas. Desde la mañana a la noche, se dicen el uno al otro: “Tú pasarás de grado”, “No, no lo haré”, “Sí, sí lo harás”, “No, no lo haré”. Ni siquiera las miradas de súplica de G ni mis ataques de rabia logran calmarlos. Si me preguntas a mí, hay tantos bobos en la clase que al menos un cuarto de ella no debería pasar de año, pero los profesores son criaturas terrestres impredecibles. Quizás esta vez sean impredecibles de un modo positivo para variar.

No estoy muy preocupada por mis amigas y por mí. Lo vamos a lograr. Matemáticas es la única asignatura de la que no estoy segura. De todos modos, todo lo que podemos hacer es esperar. Hasta entonces, nos seguimos dando fuerzas la una a la otra.

Me llevo bastante bien con mis profesores.

Pág. 11Son 9; 7 hombres y 2 mujeres. El Sr. Keesing, el viejo y anticuado profesor de

matemáticas, es el que más tiempo ha estado enojado conmigo porque hablé demasiado en clase. Luego de varias advertencias me asignó tarea extra. Un ensayo sobre “Un charlatán. ¿Qué se puede escribir sobre ello? Decidí que me preocuparía luego por ello. Anoté la tarea en mi anotador, lo metí en mi mochila, y traté de quedarme callada.

Esa misma noche, luego de terminar mi tarea, la nota sobre el ensayo llamó mi atención. Comencé a pensar en el tema del ensayo mientras masticaba la punta de mi pluma. Cualquiera podría haber balbuceado y dejado grandes espacios entre palabras, pero la trampa era encontrar argumentos convincentes para probar la necesidad de hablar. Pensé y pensé hasta que de pronto tuve una idea. Escribí las tres páginas que el Sr. Keesing me había asignado y quedé satisfecha. Argumenté que hablar era una característica femenina y que daría todo de mi para mantenerla bajo control, pero que nunca podría desligarme completamente de ese hábito ya que mi madre hablaba tanto como yo, ó incluso más y que no había demasiado que yo pudiera hacer respecto a hábitos heredados.

El Sr. Keesing se divirtió con mis argumentos, pero cuando procedí a explicárselos la clase siguiente, el me asignó un segundo ensayo. Esta vez sería acerca de “Un

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charlatán incorregible”. Lo entregué y el Sr. Keessing no tuvo ninguna queja por las siguientes dos clases. Sin embargo, durante la tercera clase, su paciencia llegó al límite. “Ana Frank, en castigo por hablar en clase, escribe un ensayo titulado –“Quac, quac, quac”, dijo la señorita charlatana”.

La clase rió a carcajadas. Tuve que reír también, aunque ya casi había llegado al límite de mi ingenuidad tonel tema de los charlatanes. Tenía que inventar algo más, algo original. Mi amiga Sanne, que es una buena poetisa,

Pág. 12Me ofreció ayudarme a escribir un ensayo en prosa. Salté de alegría. Keesing

estaba tratando de jugarme una broma con este ridículo tema, pero me aseguraría de que fuera él quien recibiera la broma.

Tuya, Ana.

Miércoles, 24 de junio, 1942.Queridísima Kitty, El calor es sofocante. Todos respiran jadeantes y, con este calor, debo caminar a

todos lados. Recién ahora me doy cuenta de lo agradable que son los medios de transporte, pero los judíos ya no tenemos permitido disfrutar este lujo; nuestros dos pies son suficientemente buenos para nosotros. Ayer en la hora del almuerzo tenía una cita con el dentista en Jan Luykenstraat. Es un largo camino desde la escuela, en Stadstimmertunien. Esa tarde casi me quedo dormida en mi escritorio. Por suerte, la gente automáticamente te ofrece algo para tomar. La asistente del destinta es muy amable.

El único modo de transporte para nosotros es el ferry. El conductor en Josef Israëlkade nos dejó subir cuando se lo pedimos. No es culpa de los daneses que nosotros los judíos estemos pasando por un mal momento.

Desearía no tener que ir a la escuela. Mi bicicleta fue robada en las pascuas y mi padre le dio a unos amigos cristianos la bicicleta de mi madre para que la mantuvieran a salvo.

Pág. 13Gracias a Dios que las vacaciones de verano ya llegan; una semana más y

nuestro tormento habrá llegado a su fin. Algo inesperado pasó ayer a la mañana. Pasaba caminando cerca del área de las

bicicletas, cuando escuché que llamaban a mi nombre. Me di vuelta y ahí estaba este chico agradable que había conocido la noche anterior en la casa de mi amiga Wilma. Es el primo segundo de Wilma. Solía creer que Wilma era agradable, y lo es, pero su único tema de conversación son los chicos, y eso termina siendo aburrido. Él vino hacia mí, de un modo tímido, y se presentó como Hello Silberberg. Estaba sorprendida y no estaba segura de que era lo que quería, pero no me costó mucho averiguarlo. Me preguntó si le permitía acompañarme a la escuela. “Mientras que tú también vallas en esa dirección, caminaré contigo”, le dije. Así que caminamos juntos. Hello tiene 16 años y es muy bueno contando todo tipo de historias divertidas.

Él me estaba esperando nuevamente esta mañana, y cuento con que siga haciéndolo de ahora en adelante.

Ana

Miércoles, 1 de julio, 1942.Queridísima Kitty;

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Hasta el día de hoy honestamente no pude encontrar el tiempo para escribirte. El jueves estuve todo el día con amigos, tuvimos compañía el viernes y así se dieron las cosas hasta hoy.

Hello y yo hemos llegado a conocernos muy bien el uno al otro esta última semana, y me ha contado mucho sobre su vida. Él viene de Gelsenkirchen y está viviendo con sus abuelos. Sus padres están en Bélgica, pero no hay forma de que él llegue hasta allí. Hello solía tener una novia llamada Ursula. La conozco a ella también. Es perfectamente dulce y perfectamente aburrida. Desde que Hello me conoció, se ha dado cuenta de que se ha estado aburriendo al lado de Ursula. Así que soy una especie de tónico energizante. ¡Una nunca sabe para qué es bueno!

Pág. 14Jacque pasó la noche del sábado aquí. El domingo a la tarde visitó a Hanneli y yo

me aburrí terriblemente.Hello vendría a casa esa noche, pero me llamó alrededor de las 6. Respondí el

teléfono y él dijo: “Soy Helmut Silberberg ¿Podría por favor hablar con Ana?”“Ah! Hello. Soy Ana”.“Ah, hola Ana ¿Cómo estás?”.“Bien, gracias”.“Sólo quería pedirte disculpas pero no voy a poder ir esta noche a visitarte, aunque

me gustaría hablar unas palabras contigo ¿Estaría bien si voy a buscarte en unos diez minutos?”.

“Sí, esta bien ¡Adiós!”.“OK. Allí voy a estar ¡Adiós!”.Colgué el teléfono y rápidamente me cambié de ropa y me arreglé el cabello.

Estaba muy nerviosa. Me acerqué a la ventana para esperarlo. Finalmente apareció. De milagro, no me abalancé escaleras abajo y esperé a que él tocara el timbre. Bajé a abrir la puerta y él fue directo al grano.

“Ana, mi abuela cree que eres demasiado joven para que nos estemos viendo diariamente. Dice que yo debería ir a casa de los Lowenbachs, pero probablemente ya sabes que no estoy saliendo más con Ursula”.

“No, no sabía ¿Qué pasó? ¿Tuvieron una pelea?”.“No, en lo absoluto. Le dije a Ursula que no éramos indicados el uno para el otro,

por lo era mejor que no siguiéramos saliendo, pero que era bienvenida en mi casa y que yo espera ser bienvenido en la suya. De hecho, yo creía que Ursula estaba saliendo con otro chico, y la traté como si así fuera. Peor no era cierto. Luego mi tío me dijo que debería pedirle disculpas, pero por supuesto yo no tenía ganas de hacerlo, por eso corté con ella. Pero esa fue solamente una de las razones”.

Pág. 15“Ahora mi abuela quiere que la vea a Ursula y no a ti, pero yo no estoy de acuerdo

y no lo voy a hacer. A veces los ancianos tiene ideas anticuadas, pero eso no significa que uno tenga que hacerles caso. Yo necesito a mis abuelos, pero de cierto modo, ellos también me necesitan a mí. De ahora en adelante voy a estar desocupado los miércoles al anochecer. Resulta que mis abuelos me anotaron en una clase de tallado de madera, pero yo voy a un club organizado por los Sionistas. Mis abuelos no quieren que vaya, porque son anti-sionistas. Yo no soy un fanático, pero me interesa. De todos modos, ha sido todo tan problemático últimamente que probablemente deje de asistir. Así que el próximo miércoles es mi última reunión. Eso significa que podré verte los miércoles al anochecer, los sábados a la tarde y al anochecer, domingos a la tarde, y quizás más”.

“Pero si tus abuelos no quieren, no deberías vernos a escondidas de ellos”.“Todo vale en la guerra y el amor”.

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Justo cuando pasamos por la librería Blankenvoort, Peter Schiff estaba allí con otros dos chicos. Era la primera vez que me saludaba en muchísimo tiempo y realmente me hizo sentir muy bien.

El lunes al anochecer, Hello vino a casa a conocer a mamá y papá. Había comprado una torta y unos dulces, pero ni Hello ni yo teníamos ganas de quedarnos sentados así que salimos a dar un paseo y él no me trajo a casa sino hasta diez minutos después de las ocho. Mi padre estaba furioso. Dijo que estaba muy mal de mi parte no llegar a casa a tiempo. Tuve que prometer que llegaría diez minutos antes de las ocho en el futuro. Hello me invitó a salir el sábado.

Wilma me dijo que una noche en que Hello estaba en su casa, ella le preguntó, “¿Quién te gusta más, Ursula ó Ana?”. Él le dijo, “No es de tu incumbencia”.

Pág. 16Pero cuando se estaba yendo (No se habían hablado el uno al otro durante le

tiempo restante), él dijo, “Bueno, me gusta más Ana, pero no le digas a nadie ¡Adiós!” Y ¡Bum!…desapareció.

Por todo lo que dice y hace, me doy cuenta de que está enamorado de mí, y es bastante agradable para variar. Margot diría que es del tipo decente de chicos. Yo también lo creo, pero él es más que eso. Mi madre también está llena de alabanzas para él:” Un chico apuesto. Agradable y educado”. Me alegra que sea tan popular con todos. Excepto con mis amigas. Él cree que son muy inmaduras, y tiene razón. Jacque todavía me hace bromas respecto a él, pero no estoy enamorada. No realmente. Está bien que yo tenga amigos varones. A nadie le interesa.

Mi madre está siempre preguntándome con quién voy a casarme cuando sea grande, pero apuesto que ella nunca adivinaría que será con Peter, porque le saqué esa idea de la cabeza, sin siquiera ruborizarme. Amo a Peter como nunca he amado a nadie, y me digo a mí misma que él solo coquetea con todas esas chicas para esconder sus sentimientos por mí. Quizás él crea que Hello y yo estamos enamorados, pero no es así. Él es sólo un amigo, ó como mi madre lo llama, mi enamorado.

Tuya, Ana.

Domingo, 5 de julio, 1942.Querida Kitty,La ceremonia de graduación en el teatro judío salió como era esperado. Mi libreta

de calificaciones no estuvo tan mal. Obtuve una D, una C menos en álgebra y todo el resto fueron B, excepto por dos B más y dos B menos. Mis padres estaban complacidos, pero ellos no son como otros padres cuando a calificaciones se refiere. Nunca se preocupan por nuestras libretas, sean buenas ó malas. Mientras que esté saludable, feliz, y sea respetuosa al hablar, ellos están satisfechos. Si estas tres cosas están bien, lo demás se arreglará por sí solo.

Pág. 17Yo soy completamente lo contrario. No quiero ser una estudiante mediocre. Fui

aceptada en el Liceo Judío de un modo condicional. Se suponía que yo debía cursar mi séptimo grado en la escuela Montessori, pero cuando los chicos judíos fueron obligados a estudiar sólo en escuelas judías, el Sr. Elte, finalmente aceptó, después de mucho persuadirlo, que Liep Goslar y yo ingresáramos al liceo. Liep también aprobó este año, aunque tiene que repetir su examen de geometría.

Pobre Lies. No es fácil para ella estudiar en su casa; su consentida hermanita de dos años juega en su cuarto todo el día. Si Gabi no obtiene lo que quiere, comienza a gritar; y si Lies no la cuida, la señora Goslar empieza a gritar también. Así que a Lies le cuesta verdaderamente hacer su tarea, y mientras la situación no cambie, las clases

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particulares que está recibiendo no le serán de mucho ayuda. La casa de los Goslar es realmente graciosa. Los padres del señor Goslar viven al lado, pero comen todos juntos. Luego está la empleada, la bebé, el señor Goslar siempre perdido en sus pensamientos, y la siempre irritable señora Goslar, que está esperando otro bebé. Lies, que incluso es torpe y desorganizada, queda siempre atrapada en medio de ese caos.

Mi hermana Margot también ha recibido su libreta de calificaciones. Brillante, como siempre. Si tuviéramos algún tipo de premio a la excelencia académica, Margot debería pasar cada año con honores. Es tan inteligente.

Mi padre ha estado en casa últimamente. No hay nada que él pueda hacer en la oficina; debe ser horrible sentir que uno no es necesitado. El señor Kleiman se ha hecho cargo de Opetka, y el señor Kugler de Gies & Co., la compañía que trabaja con especias y substitutos de especias que se creó en 1941.

Unos días atrás, mientras caminábamos en una plaza del vecindario, mi padre comenzó a hablar acerca de vivir escondidos. Dijo que sería muy duros para nosotros vivir apartados del resto del mundo. Le pregunté porqué había sacado este tema.

“Bueno, Ana”, me respondió. Pág. 18“Tú sabes que por más de un año hemos estado dando nuestra ropa, comida y

muebles a otras personas. No queremos que los alemanes disfruten nuestras pertenencias. Tampoco queremos caer nosotros mismos en sus garras. Así que nos iremos cuando nosotros lo decidamos y no esperaremos a ser arrastrados fuera de nuestro hogar por ellos.

“¿Pero cuando, padre?” Sonaba tan serio que me asusté.“No te preocupes, nosotros nos encargaremos de todo. Simplemente disfruta tu

vida en libertad mientras puedes”.Y eso fue todo. Ay, que estas sombrías palabras no se hagan realidad por el

mayor tiempo posible.El timbre está sonando, Hello está aquí. Es tiempo de parar.Tuya, Ana.

Miércoles, 8 de julio, 1942.Queridísima Kitty, Parece que hubieran pasado años desde el domingo a la mañana. Pasaron tantas

cosas que es como si el mundo hubiera quedado patas para arriba. Pero como puedes ver, Kitty, aún estoy viva, y eso es todo lo que importa, según mi padre. Estoy sana y salva, pero no preguntes dónde. Probablemente no entiendas una palabra de lo que estoy diciendo, así que comenzaré contándote que pasó el domingo a la mañana.

A las tres de la tarde (Hello se había ido pero se suponía que volvería luego), el timbre sonó. No lo escuché, porque estaba afuera en el balcón, leyendo bajo el sol. Poco tiempo después Margot apareció en la puerta de la cocina luciendo muy agitada. “Padre ha recibido un llamamiento de las SS”, susurró. “Madre ha ido a ver al Sr. Van Daan”. (El Sr. Van Daan es el socio de trabajo de mi padre y un buen amigo).

Estaba petrificada. Un llamamiento: todos saben lo que eso significa. La imagen de campos de concentración y celdas solitarias apareció en mi cabeza ¿Cómo podríamos dejar a mi padre sufrir tal destino?

Pág. 19“Por supuesto que él no va a ir”, anunció Margot mientras esperábamos a mi

madre en el living. “Madre se ha ido a ver al señor Van Daan para preguntarle si podemos mudarnos a nuestro escondite mañana. Los Van Daans vienen con nosotros. Seremos siete personas juntas”. Silencio. No podíamos hablar. La idea de mi padre fuera de la casa, visitando a un amigo en el hospital judío, sin conocimiento alguno de lo que estaba

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sucediendo; la larga espera por mi madre; el calor; el suspenso-todo nos reducía a completo silencio.

De repente, el timbre sonó nuevamente. “Ese es Hello”, dije.“¡No abras la puerta!” exclamó Margot para detenerme. Pero no era necesario, ya

que escuchamos a mi madre y al señor Van Daan escaleras abajo hablando con Hello, y luego ellos dos entraron y cerraron la puerta tras ellos. Cada vez que el timbre sonaba, Margot ó yo teníamos que ir en puntas de pie hasta abajo para ver si era mi padre, y no dejábamos a nadie más entrar. Margot y yo fuimos enviadas a nuestra habitación, porque el señor Van Daan quería hablar a solas con mi madre.

Cuando ella y yo estábamos sentadas en nuestra habitación, Margot me contó que el llamamiento no era para mi padre, sino para ella. Ante este segundo shock, comencé a llorar. Margot tiene dieciséis - aparentemente quieren enviar a las chicas de esa edad fuera de sus casas. Peor gracias a dios ella no iría; mi propia madre lo dijo, y debe ser a lo que mi padre se refería cuando me habló acerca de escondernos. Escondernos… ¿Dónde nos esconderíamos?, ¿En la ciudad?, ¿En el campo?, ¿En una casa?, ¿En un refugio?, ¿Cuándo, dónde, cómo,…? Estas eran preguntas que no tenía permitido hacer, pero de todos modos seguían recorriendo mi mente.

Margot y yo comenzamos a empacar nuestras pertenencias más importantes en una mochila escolar. Lo primero que guardé fue este diario, y luego ruleros, pañuelos, libros escolares, un peine y algunas viejas cartas.

Pág. 20Preocupada por la idea de escondernos, empaqué las cosas más ridículas, pero

no me arrepiento. Las memorias significan más para mí que los vestidos.Mi padre finalmente llegó a casa alrededor de las cinco, y llamamos al señor

Kleiman para ver si podía venir esa misma tarde. El señor Van Daan se fue a buscar a Miep. Miep llegó y prometió volver más tarde esa noche, trayendo consigo un bolso llego de zapatos, vestidos, sacos, ropa interior y medias. Después de eso nuestro departamento quedó encalma, ninguno de nosotros tenía hambre. Aún hacía calor y todo era muy extraño.

Habíamos alquilado nuestra habitación grande de arriba al señor Goldshmidt, un divorciado de treinta y tantos años, quien aparentemente no tenía nada que hacer esa noche, ya que a pesar de nuestras sutiles insinuaciones, se quedó con nosotros hasta las diez.

Miep y Jan Gies vinieron a las once. Miep, que ha trabajado para la compañía de mi padre desde 1933, se ha convertido en una gran amiga, como así también su marido Jan. Una vez más, zapatos, medias, libros y ropa interior desaparecieron en el bolso de Miep y los profundos bolsillos de Jan. A las once y media, ellos también desaparecieron.

Estaba exhausta, y aunque sabía que sería mi última noche en mi propia cama, me quedé dormida de inmediato y no me desperté hasta que mi madre me llamó a la mañana siguiente, a las cinco y media. Afortunadamente, no hacía tanto calor como el domingo; una cálida lluvia calló a lo largo del día. Nosotros cuatro estábamos envueltos en tantas capas de ropa que parecía que nos íbamos a pasar la noche a un refrigerador, pero lo hacíamos para poder llevarnos más cosas. Ningún judío en nuestra situación podría animarse a dejar su casa llevando una gran maleta llena de ropa. Yo estaba usando dos remeras, tres pares de ropa interior, un vestido, y sobre eso una pollera, un saco, un piloto de lluvia, dos pares de medias, zapatos pesados, una gorra, una bufanda y mucho más. Me estaba sofocando aún antes de dejar la casa, pero nadie se preocupó por preguntarme como me sentía.

Pág. 21

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Margot llenó su mochila con libros escolares, fue a agarrar su bicicleta y con Miep guiándonos, pedaleó hacia lo desconocido. Así era como yo lo veía, ya que todavía no sabía donde quedaba el escondite.

A las siete y media cerramos la puerta detrás de nosotros; Moortje, el gato, fue la única criatura viva de la que me tuve que despedir. De acuerdo a una nota que le dejamos al señor Goldschmidt, ella debía ser llevada con los vecinos, quienes le darían un buen hogar.

Las camas desarmadas, las cosas del desayuno sobre la mesa, el tarro de carne para el gato en la cocina – todo esto creaba la impresión de que nos habíamos ido a las apuradas. Pero no estábamos interesados en la impresión que daría. Sólo queríamos salir de allí, escapar y llegar a nuestro destino a salvo. Nada más importaba.

Más mañana.Tuya, Ana.

Pág. 21Jueves, 9 de julio, 1942Queridísima Kitty,

Así que allí estábamos, mi padre, mi madre y yo, caminando bajo la llovizna, cada uno de nosotros con una mochila escolar y una bolsa de mercado llena hasta el tope con el más variado surtido de cosas. La gente que iba hacia el trabajo a esas tempranas horas de la mañana, nos brindaba miradas de lástima; Se podía ver por la expresión en sus rostros que se sentían apenados de no poder brindarnos algún tipo de transporte; la llamativa estrella amarilla hablaba por si sola.

Recién cuando estábamos caminando en la calle, mi madre y mi padre comenzaron a revelarnos, de a poco, cual era el plan. Durante meses habíamos estado sacando de nuestro departamento todos los muebles y la ropa que podíamos. Había sido acordado que nos mudaríamos al escondite el 16 de julio. Debido al llamamiento que le llegó a Margot, el plan tuvo que ser adelantado diez días,

Pág. 22 lo que significó que debimos conformarnos con habitaciones menos organizadas.El escondite estaba situado en el edificio de la oficina de mi padre. Esto parece un

poco difícil de entender para los ajenos a la situación, así que lo explicaré. No hay mucha gente trabajando en la oficina de mi padre, sólo el señor Kugler, el señor Kleiman, Miep, y una mecanógrafa de 23 años llamada Bep Voskuijl, todos los cuales estaban informados acerca de nuestra llegada. El señor Voskuijl, el padre de Bep, trabaja en el depósito, junto con dos asistentes que no fueron informados acerca de nada.

Esta es una descripción del edificio (Aparece un plano del lugar en el diario). El depósito en la planta baja es usado como lugar de trabajo y de almacén y está dividido en varias secciones, como la sección de depósito y la sección para moler, donde la canela, los dientes de ajo y el substituto de pimienta son molidos.

Al lado de la puerta del depósito, hay otra puerta que da hacia el exterior, como una entrada separada a la oficina. Cruzando la puerta de la oficina hay una segunda puerta, y detrás de ella, una escalera. En la cima de las escaleras hay otra puerta, con un vidrio paco en el que la palabra “oficina” está escrito en letras negras. Esta es la oficina central – muy grande, muy luminosa, y muy cargada. Bep, Miep y el señor Kleiman trabajan allí durante el día. Traspasando un recoveco en una pared que contiene una caja de seguridad, un guardarropa y un gran armario de materiales, accedes a la pequeña, oscura y recargada oficina de atrás. Esta solía ser compartida por el señor Kugler y el señor Van Daan, pero ahora el señor Kluger es el único ocupante. También se puede acceder a la oficina del señor Kluger desde el corredor, pero sólo a través de una puerta

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de vidrio que puede abrirse fácilmente desde adentro pero no así desde afuera. Si dejas la oficina del señor Kugler y continúas a través del largo y angosto corredor, pasando el compartimiento del carbón y subiendo cuatro escalones, te encuentras en la oficina privada, la pieza de exhibición de todo el edificio. Elegantes muebles de madera majogany, pisos de linoleum cubiertos con unas hermosas alfombras, una radio, una elegante lámpara;

Pág. 23 todo de primera clase. Al lado hay una espaciosa cocina con un calentador de

agua y dos hornallas, junto a un baño. Ese es el segundo piso.Una escalera de madera conecta con el tercer piso. En la cima de la escalera hay

un descanso, con puertas a cada lado. La puerta de la izquierda lleva a un área de reserva de especias, un ático y un loft que dan a la parte delantera de la casa. Un típico descanso de escalera danesa, muy empinada, en el que te puedes doblar un tobillo recorre desde la parte delantera de la casa hacia otra puerta que se abre directo a la calle.

La puerta a la derecha del descanso lleva al “anexo secreto” en la parte trasera de la casa. Nadie jamás sospecharía que

Pág. 24 hay tantas habitaciones detrás de la simple puerta gris. Hay sólo un pequeño

escalón delante de la puerta y luego ya estás adentro. A la izquierda hay un corredor angosto que se conecta con una habitación que sirve de dormitorio y living para la familia Frank. En la puerta continua hay una habitación más pequeña, es el dormitorio y cuarto de estudio de las dos jóvenes damas de la familia. A la derecha de las escaleras hay un cuarto de lavado con un fregadero. La puerta de la esquina conduce al baño, y otra puerta a la habitación de Margot y mía. Si te diriges escaleras arriba y abres la puerta, te sorprenderá ver una habitación tan grande, luminosa y espaciosa en una casa tan angosta como esta. Contiene una cocina (Gracias a que solía ser el laboratorio del señor Kluger) y un fregadero. Esta va a ser la cocina y dormitorio del señor y la señora Van Daan, así como el living, comedor y estudio central para todos nosotros. Una pequeña pieza será la habitación de Peter Van Daan. También así como en el frente de la casa, hay un ático y un loft. Así que ahí lo tienes ¡Te he presentado por completo nuestro adorable anexo!

Viernes, 10 de julio, 1942.Queridísima Kitty;Probablemente te haya aburrido con mi larga descripción de nuestra casa, pero de

todos modos creo que debías saber a dónde había ido a parar; cómo llegué aquí es algo que averiguarás en mis próximas cartas.

Peor primero, déjame continuar con mi historia, porque como tú ya sabes, no he terminado. Luego de llegar al número 263 de la calle Prinsengratch, Miep rápidamente nos guió a través del largo corredor y escaleras arriba, hacia el anexo. Cerró la puerta detrás de nosotros, dejándonos solos.

Pág. 25Margot había llegado mucho antes que nosotros y nos estaba esperando.Nuestro living y el resto de las habitaciones estaban tan llenos de cosas, que no

encuentro palabras para describirlo. Todas las bolsas de cartón que habíamos estado enviando a la oficina en los últimos meses estaban apiladas en el piso y en las camas. El cuarto pequeño estaba lleno del piso al techo con ropa. Si queríamos dormir en camas propiamente hechas esa misma noche, teníamos que ponernos en marcha y ordenar todo. Mi madre y Margot no podían mover ni un músculo. Se recostaron en sus colchones,

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cansadas, con una apariencia miserable y no sé que más. Pero mi padre y yo, los únicos dos ordenados de la familia, empezamos a trabajar de inmediato.

Durante todo el día desarmamos cajas, llenamos bolsas, nos martillamos las uñas y ordenamos todo ese caos, hasta que caímos exhaustos en nuestras camas por la noche. No habíamos probado un plato de comida caliente en todo el día, peor no nos importaba; mi madre y Margot estaban muy cansadas y nerviosas como para comer y mi padre y yo estábamos muy ocupados.

El martes a la mañana empezamos donde dejamos la noche anterior. Bep y Miep fueron a comprar víveres con nuestros cupones, mi padre trabajó en nuestros paneles para camuflar las luces, nosotras fregamos el piso de la cocina, y de nuevo habíamos estado ocupados de la salida a la puesta del sol. Hasta el miércoles, no tuve tiempo de pensar en el enorme cambio en nuestras vidas. Luego, por primera vez desde nuestra llegada al anexo secreto, encontré un momento para contarte todo sobre lo sucedido y para darme cuenta de lo que me había sucedido y de lo que aún me estaba por suceder.

Tuya, Ana.

Pág. 26Sábado, 11 de julio, 1942.Queridísima Kitty;Mi padre, mi madre y Margot todavía no pueden acostumbrarse al repique de

campanas del reloj de Westertoren, que nos dice la hora a cada cuarto de hora. No es así conmigo, a mí me gusto desde el comienzo. Su sonido es tranquilizante, especialmente de noche. Sin dudas quieres escuchar lo que pienso acerca de vivir escondidos. Bueno, todo lo que puedo decir es que no lo sé con certeza aún. No creo que jamás me sienta como en casa aquí, pero eso no significa que lo odie. Es como si estuviera de vacaciones en alguna pensión extraña. Es un modo peculiar de ver la vida en un escondite, pero así es como están las cosas. El anexo es un lugar ideal para esconderse. Puede que sea un poco húmedo y ladeado, pero probablemente no haya un mejor escondite en todo Ámsterdam. No, en toda Holanda.

Hasta ahora nuestra habitación, con sus paredes en blanco, parecía muy vacía. Gracias a mi padre – que trajo de antemano mi entera colección de postales y afiches de estrellas de cine- y a una brocha y un poco de pegamento, es que pude plastificar mis paredes con imágenes. Luce mucho más alegre. Cuando los Van Daans lleguen, podremos construir estanterías y otras cosas con los restos de madera que hay en el ático.

Margot y mi madre se han recuperado en cierta forma. Ayer, mi madre se sintió lo suficientemente bien como para cocinar una sopa de guisantes por primera vez, pero luego se fue escaleras abajo y, charlando, se olvidó por completo de ello. Los guisantes quedaron negros y por más que raspábamos la sartén, no hubo forma de despegarlos.

Anoche los cuatro bajamos a la oficina privado a escuchar en la radio las noticias desde Inglaterra. Estaba tan asustada de que alguien nos oyera que literalmente le rogué a mi padre que me llevara arriba. Mi madre entendió mi ansiedad y subió conmigo. No importa lo que hagamos, tenemos miedo de que los vecinos nos oigan. El día cocimos cortinas de inmediato. De hecho, difícilmente puedas llamarlas así,

Pág. 27 ya que no son más que retazos de tela, que varían en forma, calidad y material,

los cuales mi padre y yo unimos con dedos sin habilidad alguna. Estas obras de arte fueron amarradas alas ventanas, donde permanecerán hasta que dejemos el escondite.

El edificio a nuestra derecha es una sede de la compañía Keg, una firma de Zaandanm, y a la izquierda hay un taller de muebles. Aunque las personas que trabajan allí no se quedan después de hora, cualquier sonido que hagamos podría viajar a través

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de las paredes. Le hemos prohibido a Margot que tosiera durante la noche, aunque tiene un gran resfrío, y le están dando grandes dosis de codeína.

Estoy esperando con ansias la llegada de los Van Daans, que está prevista para el martes. Será mucho más divertido y no tan silencioso. Verás, es el silencio el que me pone tan nerviosa durante la noche, y daría cualquier cosa porque uno de los que nos ayudaron viniera a dormir aquí.

No es tan malo estar aquí, ya que podemos cocinar nuestra propia comida y escuchar la radio en la oficina de papá. El señor Kleiman y Miep, y también Bep Voskujil, nos han ayudado mucho. Ya hemos enlatado una gran cantidad de ruibarbo, frutillas y cerezas, así que por el momento dudo que nos aburramos. También tenemos reservas de material de lectura y vamos a comprar muchos juegos. Por supuesto, no podemos mirar por las ventanas ni salir a la calle. Y tenemos que mantenernos en silencio para que la gente escaleras abajo no nos oiga.

Ayer estuvimos muy ocupados. Tuvimos que descarozar dos cajones de cerezas para que el señor Kugler las enlate. Vamos a usar los cajones vacíos para hacer estanterías para libros.

Alguien me está llamando.Tuya, Ana.

Pág. 28Comentario agregado por Ana el 28 de septiembre de 1942:Estar privada de salir me molesta más de lo que puedo decirlo, y me da pánico

que nuestro escondite pueda ser encontrado y que nos fusilen. Esa, por supuesto, es una perspectiva bastante lúgubre.

Domingo, 12 de julio, 1942.Hace un mes atrás todos eran muy agradables con migo debido a mi cumpleaños,

y sin embargo cada día me siento más distanciado de Margot y mi madre. Hoy trabajé muy duro y me alabaron por ello, pero sólo para volver a molestarme cinco minutos después.

Puedes ver claramente la diferencia en el modo en que tratan a Margot y el modo en que me tratan a mí. Por ejemplo, Margot rompió la aspiradora, y por ello nos hemos quedado sin electricidad por el resto del día. Mi madre dijo: “Bueno, Margot, es claro que no estás acostumbrada a trabajar; de otro modo, no hubieras sacado el enchufe tirando del cable”. Margot protestó un poco, y ese fue el fin de la discusión.

Pero esta tarde, cuando quise rescribir algo en la lista de compras de mi madre por que su letra es difícil de entender, ella no me dejó. Me gritó muy severamente de nuevo, y toda la familia terminó involucrada en el asunto.

No encajo con ellos, y lo he sentido claramente estas últimas semanas. Ellos son muy sentimentales entre ellos, pero prefiero ser sentimental conmigo misma. Ellos están siempre diciendo lo agradable que es estar entre nosotros cuatro, y que nos llevamos muy bien, sin pensar siquiera por un momento que yo no me siento así.

Papá es el único que me entiende, ahora y siempre, aunque siempre termina apoyando a mi madre y a Margot. Otra cosa que no puedo tolerar es que ellos hablen de mí enfrente de extraños, diciéndoles cuanto lloré ó que quiero llamar la atención con mi comportamiento. Es horrible.

Pág. 29Y a veces hablan sobre Moortje y no puedo tolerarlo para nada. Moortje es mi

debilidad. La extraño a cada minuto del día y nadie sabe cuanto pienso en ella; cada vez que lo hago, mis ojos se llenan de lágrimas. Moortje es muy dulce y la quiero tanto que sigo soñando con que ella vuelva algún día a nosotros.

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Tengo muchos sueños, pero la verdad es que vamos a tener que quedarnos aquí hasta que la guerra termina. No podemos salir, y los únicos visitantes que podemos tener son Miep, su esposo Jan, Bep Voskuijl, el señor Voskuijl, el señor Kugles, el señor Kleiman y la señora Kleiman, aunque ella no ha venido por que cree que es muy peligroso.

Comentario agregado por Ana en septiembre de 1924:Papá siempre es muy amable. Me entiende perfectamente y desearía que algún

día pudiéramos tener una charla de corazón a corazón sin que yo me ponga a llorar instantáneamente. Pero aparentemente eso tiene que ver con mi edad. Me gustaría pasar todo mi tiempo escribiendo, pero eso probablemente sería aburrido.

Hasta ahora sólo he confiado mis pensamientos a mi diario. Todavía no he logrado escribir pasajes que me gustaría leer en voz alta más adelante. En el futuro voy a dedicar menos tiempo a sentimentalismos y más tiempo a la realidad.

Viernes, 14 de agosto, 1942.Querida Kitty;Te he relegado por un mes entero, pero tan poco ha pasado que no puedo

encontrar un nuevo suceso digno de contarte cada día. Los Van Daans llegaron el 13 de julio. Pensábamos que vendrían el 14, pero del 13 al 16 los alemanes han estado mandando llamamientos a diestra y siniestra, causando mucha tensión, por lo que decidieron que sería mas seguro llegar un día antes de tiempo que un día demasiado tarde.

Peter Van Daan llegó a las 9.30 de la mañanaPág. 30 (Cuando todavía estábamos desayunando). Peter está por cumplir 16, es tímido,

raro y su compañía no es muy relevante. El señor y la señora Van Daan llegaron media hora más tarde. Para nuestra diversión, la señora Van Daan traía una caja con un gran urinal adentro. “No me siento en casa sin mi urinal”, dijo, y fue la primera cosa en encontrar una ubicación permanente, debajo del sofá cama. En vez de un urinal, el señor Van Daan llevaba bajo su brazo una mesita plegable de té.

Desde el principio, comimos nuestras comidas juntos, y luego de tres días parecía como si los siete nos hubiéramos convertido en una gran familia. Naturalmente, los Van Daan tenían mucho que contarnos de la semana que pasamos separados de la civilización. Estábamos especialmente interesados en qué le había sucedido a nuestro departamento y al señor Goldschmidt.

El señor Vaan Daan nos puso al tanto: “El lunes a la mañana a las 9, el señor Goldschmidt llamó y preguntó si yo podía ir hasta allí. Fui de inmediato hasta allí y encontré a un señor Goldschmidt bastante fuera de sus cabales. Me mostró una nota que la familia Frank había dejado. Como se le indicaba, planeaba llevar el gato con los vecinos, con lo que acordé que era una buena idea. Tenía miedo que la casa fuera registrada, por que lo fuimos por todas las habitaciones, ordenándolas y limpiamos también los restos del desayuno que quedaron sobre la mesa de la cocina. De repente vi una nota en el escritorio de la señora Frank, Con una dirección en Maastricht escrita en ella. A pesar de que sabía que la señora Frank la había dejado allí a propósito, pretendí parecer sorprendido y horrorizado y le rogué al señor Goldschmidt que quemara ese incriminante pedazo de papel. Juré y perjuré que no sabía nada de su desaparición, pero que la nota me había dado una idea. “Señor Goldschmidt”, le dije, “Apuesto a que sé a qué se refiere esta nota. Hace seis meses un oficial de alto rango vino a la oficina. Parecía que él y el señor Frank habían crecido juntos. El prometió ayudar al señor Frank

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si alguna vez era necesario. Recuerdo que el estaba residiendo en Maastricht. Creo que este oficial ha mantenido su palabra y de algún modo está planeando ayudarlos a cruzar a Bélgica y luego a Suiza. No hay nada de malo en contarle esto a los amigos de los Frank que se acerquen preguntando por ellos. Por supuesto, no necesitas nombrar la parte acerca de Maastricht”. Y después de eso me fui. Esta es la historia que ha sido contado a la mayoría de sus amigos, porque la escuchado luego de otras personas.

Creímos que era extremadamente gracioso, pero nos reímos aún más cuando el señor Van Daan nos dijo que algunas personas tenían una imaginación muy vívida. Por ejemplo, una familia que vive en nuestra cuadra asegura que nos vio a los cuatro andando en bicicletas temprano en la mañana, y otra mujer está absolutamente segura de que fuimos cargados en algún tipo de vehículo militar a la mitad de la noche.

Tuya, Ana.

Viernes, 21 de agosto, 1942.Querida Kitty;Ahora nuestro anexo secreto se ha convertido en verdaderamente secreto. Debido

a que muchas casas están siendo registradas en busca de bicicletas escondidas, el señor Kugler creyó que sería mejor construir una estantería de libros enfrente de la entrada a nuestro escondite. Es giratorio y se abre como una puerta. El señor Voskuijl hizo el trabajo de carpintería (Se le ha dicho al señor Voskuijl que estamos escondido y él ha sido de gran ayuda).

Ahora cada vez que queremos bajar las escaleras debemos agacharnos y saltar. Luego de los primero tres días todos teníamos moretones en la frente por golpearnos con el umbral tan bajo. Luego Peter lo amortiguó poniéndole al marco de la puerta una toalla rellena con virutas ¡Ya veremos si ayuda!

Pág. 32No estoy haciendo muchas tareas escolares. Me he dado a mi misma unas

vacaciones hasta septiembre. Mi padre quiere empezar a ser mi tutor para esa fecha, pero tendremos que comprar todos los libros primero.

Hay pocos cambios en nuestras vidas aquí. Peter se lavó el pelo hoy, pero eso no es nada especial. El señor Van Daan y yo no nos entendemos mucho. Mamá me trata como a un bebé, lo cual no puedo tolerar. Por lo de más, las cosas están yendo bien. No creo que Peter esté siendo mucho más agradable. Es un chico arrogante que se la pasa todo el día tirado en su cama, sólo levantándose de vez en cuando para hace un poco de trabajo de carpintería, pero sólo para volver luego a su siesta ¡Qué estúpido!

Mamá me dio otro de sus temerarios sermones esta mañana. Tenemos miradas opuestas en todo. Papá es un dulce; se puede enojar conmigo pero nunca dura más de cinco minutos.

Es un hermoso día afuera, agradable y cálido, y a pesar de todo, aprovechamos el clima lo más que podemos relajándonos en la cama plegable del ático.

Tuya, Ana.

Comentario agregado por Ana el 21 de septiembre de 1942:El señor Van Daan ha sido muy dulce conmigo últimamente. No he dicho nada,

pero lo disfrutaré mientras dure.

Miércoles 2 de septiembre, 1942.Queridísima Kitty;El señor y la señora Van Daan han tenido una terrible discusión. Nunca he visto

nada igual, ya que mi madre y mi padre ni siquiera soñarían en gritarse así el uno al otro.

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El asunto era tan trivial que ni siquiera valía la pena gastar una sola palabra en ello. Pero bueno, cada uno con sus asuntos.

Por supuesto, es muy difícil para Peter, que siempre queda en el medio, pero ya nadie toma a Meter muy en serio, ya que él es hipersensible y muy vago.

Pág. 33Ayer, estaba preocupado porque su lengua estaba de color azul en vez de rosa.

Este extraño fenómeno desapareció tan rápido como apareció. Hoy ha estado usando una gruesa bufanda porque tiene el cuello contracturado. Su señoría también se ha quejado de de un dolor lumbar. Dolores y molestias en su corazón, riñones y pulmones también son parte del show ¡Es un total hipocondríaco! (¿Esa es la palabra correcta, no?)

Mi madre y la señora Van Daan no se están llevando muy bien. Hay suficientes razones para que se produzcan fricciones. Para darte un pequeño ejemplo, la señora Van Daan ha sacado todas sus sábanas del ropero común, excepto por tres de ellas. Ha asumido que la ropa de blanco de mi madre puede ser usada por ambas familias. Se llevará una poco grata sorpresa cuando vea que mi madre ha seguido su ejemplo.

Además, la señora Van Daan está enojada porque hemos estado usando su vajilla en vez del a nuestra. Aún está tratando de descubrir que hemos hecho con nuestros platos; están mucho más cerca de lo que ella cree, ya que están empacados en una caja de cartón en el ático, detrás de una pila de material publicitario de Opetka. Mientras estemos escondidos, los platos se mantendrán lejos de su alcance. Y como estoy siempre teniendo accidentes, ¡Da lo mismo! Ayer rompí uno de los platos para sopa de la señora Van Daan.

“¡Oh!”, Exclamó enojada. “¿No puedes ser más cuidadosa? Ese era el último”.Por favor ten en cuenta, Kitty, que estas dos damas hablan un abominable danés

(No me animo a hacer ningún comentario sobre los hombres: Serían muy insultantes). Si pudieras escuchar sus poco exitosos intentos, te reirías a carcajadas. Hemos dejado de corregir sus errores, dado que hacerlo no ayuda de todas formas. Cada vez que cite ala señora Van Daan ó a mi madre, escribiré en un danés apropiado en vez de tratar de duplicar lo que dicen.

La semana pasada hubo una breve interrupción a nuestras monótonas rutinas.Pág. 34 Fue provista por Peter y un libro sobre las mujeres. Debo aclarar que Margot y

Peter tiene permitido leer casi todos los libros que le señor Kleiman nos presta. Pero los adultos preferían mantener este libro sólo para ellos. Esto inmediatamente llamó la atención de Peter ¿Qué fruta prohibida contenía? Él lo tomó cuando su madre estaba dialogando escaleras abajo, y se fue con su tesoro de guerra al loft. Por dos días todo estuvo bien. La señora Van Daan sabía lo él se traía entre manos, pero lo mantuvo en secreto hasta que el señor Van Daan se enteró de ello. Estaba muy enojado, así que le sacó el libro y pensó que sería le final de la historia. Sin embargo, había olvidado tomar en cuenta la curiosidad de su hijo. Peter, para nada intimidado por la acción de su padre, comenzó a pensar en maneras para poder leer el resto de ese tan interesante libro.

Mientras tanto, la señora Van Daan le pidió opinión a mi madre. Ella pensó que este libro en particular no era adecuado para Margot, pero no veía ningún daño en que leyera la mayoría de los demás libros.

“Verá, señora Van Daan”, dijo mi madre, “Hay una gran diferencia entre Margot y Peter. Por empezar, Margot es una chica, y las chicas siempre maduran antes que los muchachos. En segundo lugar, ella ha leído muchos libros serios y no anda en busca de aquellos que son prohibidos. En tercer lugar, Margot es intelectualmente más avanzada, como resultado de sus cuatro años en una excelente escuela”.

La señora Van Daan estuvo de acuerdo, pero sintió por una cuestión de principios, que estaba mal dejara los jóvenes leer libros escritos por adultos.

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Mientras tanto, Peter ya había descubierto un buen momento en el que nadie estaría interesado en él ó en el libro. A las siete treinta del anochecer, cuando la familia entera estaba escuchando la radio en la oficina privada,

Pág. 35 él tomó su tesoro y se dirigió hacia el loft nuevamente. Debía haber vuelto para

las ocho treinta, pero estaba tan inmerso en el libro que se olvidó del tiempo y estaba justo bajando las escaleras cuando su padre estaba entrando a la habitación. La escena que siguió no fue nada sorprendente: Luego de una bofetada, un golpe y un forcejeo, el libro cayó sobre la mesa y Peter terminó en el Loft.

Así estaban las cosas cuando llegó la hora de la comida familiar. Peter seguía escaleras arriba. Nadie siquiera lo pensó; él tendría que irse a la cama sin cenar. Continuamos cenando, dialogando placenteramente, cuando de repente, escuchamos un penetrante silbido. Dejamos nuestros tenedores y nos miramos el uno al otro, la sensación de shock era claramente visible en nuestras caras.

Luego escuchamos la voz de Peter a través de la chimenea: “¡No voy a bajar!”El señor Van Daan se levantó, tirando su servilleta al suelo y gritó, con la sangre

subiendo a su cara, “¡He tenido suficiente!”Mi padre, asustado por lo que pudiera pasar, lo agarró del abrazo y los dos

hombres subieron al ático. Luego de mucho forcejeo y discusión, Peter terminó En su cuarto con la puerta cerrada, y continuamos comiendo.

La señora Van Daan quería guardar un pedazo de pan para su adorable hijo, pero el señor Van Daan fue inflexible. “Si no pide disculpas en este momento, tendrá que dormir en el loft”.

Protestamos y aseguramos que irse a la cama sin cenar era castigo suficiente ¿Qué pasaría si Peter se agarraba un resfriado? No podríamos llamar a un doctor.

Peter no se disculpó, y tuvo que regresar al loft. El señor Van Daan decidió que ya se le habían dado demasiadas vueltas al asunto, aunque notó a la mañana siguiente que la cama de Peter había sido usada. A las siete Peter fue al ático nuevamente, pero se convenció de bajar las escaleras cuando mi padre habló amigablemente con él durante un rato.

Pág. 36Luego de tres días de miradas maliciosas y silencios tercos, todo volvió a la

normalidad.Tuya, Ana.

Lunes, 21 de septiembre, 1942.Queridísima Kitty;

Hoy te contaré las noticias generales del anexo. Una lámpara ha sido montada sobre mi diván para que en el futuro, cuando escuche disparos, pueda tirar de la cuerda y encender la luz. No puedo usarla por el momento, porque estamos dejando mi ventana un poco abierta, en el día y en la noche.

Los miembros masculinos del contingente Van Daan han construido un almacén de comida muy útil, hecho de madera y hasta con ventanas. Hasta el momento, este glorioso modular ha estado en la habitación de Peter, pero en busca de aire fresco, ha sido trasladado al ático. Donde solía estar, ahora hay un estante. Le recomendé a Peter que pusiera su mesa detrás del estante, le agregara un lindo cobertor, y pusiera su propio modula donde está la mesa. Eso haría su cubículo más cómodo, aunque no me gustaría dormir allí.

La señora Van Daan está insoportable. Estoy constantemente siendo reprimida por hablar cuando estoy escaleras arriba ¡Simplemente dejo que sus palabras reboten en mí! La señora tiene ahora otro truco bajo la manga: Tratar de escapar al lavado de los

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utensilios de cocina. Si queda algo de comida en la sartén ella prefiera dejar allí y que se pudra a que pasarla a un plato limpio. Luego en la tarde cuando Margot está asediada por la gran cantidad de utensilios para lavar, la señora exclama: “¡Ah, pobre Margot, tienes tanto trabajo que hacer!”

Cada semana de por medio el señor Kleiman me trae un par libros escritos para chicas de mi edad. Estoy entusiasmada con la serie “Joop ter Heul”. He disfrutado mucho todos los libros de Cissy van Marxveldt. He leído el “Zaniest summer” (Verano alocado)

Pág. 37Cuatro veces, y las ridículas situaciones aun me hacen reír.Mi padre y yo estamos trabajando en nuestro árbol familiar actualmente, y él me

cuenta algo a cerca de cada persona mientras lo hacemos. He comenzado mis tareas escolares. Estoy estudiando muy duramente francés,

metiendo en mi cabeza cinco verbos irregulares por día. Pero me he olvidado demasiado de lo que he aprendido en el colegio.

Peter ha retomado su inglés con poca predisposición. Unos cuantos libros escolares acaban de llegar, y yo traje una gran reserva de cuadernos, lápices, gomas y etiquetas de casa. Pim (ese es el sobrenombre para mi padre) quiere que lo ayude con sus lecciones de danés. Estoy completamente dispuesta a ser su tutora a cambio de su ayuda en francés y otras materias ¡Pero él comete los más increíbles errores!

A veces escucho la programación en danés desde Londres. El príncipe Bernhard anunció recientemente que la princesa Juliana está esperando un bebé para enero, lo cual creo que es maravilloso. Nadie aquí entiende porque tengo tanto interés en la Familia Real.

Unas pocas noches atrás fui el tema de discusión, y todos decidimos que era una ignorante. Como resultado me dedique a mis tareas escolares al día siguiente, ya que tengo pocos deseos de seguir siendo una cabeza fresca cuando tenga catorce o quince. El hecho de que casi no se me permite leer nada, fue también discutido. En este momento, mi madre esta leyendo “La casa de Tavelinck” y por su puesto yo no tengo permitido leerlo (¡Aunque Margot si!). Primero tengo que estar más desarrollada intelectualmente como la genio de mi hermana. Luego discutimos mi ignorancia a cerca de filosofía, psicología y fisiología (¡Inmediatamente busque estas complicadas palabras en el diccionario!).

Pag 38.Es verdad, no se nada a cerca de estos temas ¡Pero quizás sea más inteligente el

año que viene!He llegado a la shockeante conclusión que solo tengo un vestido de manga larga y

tres sacos para usar en el invierno. Mi padre me ha dado permiso para recortar un suéter de lana blanco. La lana no es muy bonita, pero será calido y eso es lo que importa. Parte de nuestra ropa fue dejada con amigos, pero desafortunadamente no podremos obtenerla hasta después de la guerra. Por supuesto, si es que todavía esta allí.

Acababa de terminar de escribir a cerca de la señora Van Daan cuando ella entro en la situación. Torpemente, cerré mi libro.

“Ey, Ana, ¿puedo echar un vistazo?”“No, señora Van Daan”“¿Sólo la última página entonces?”“No ni siquiera la última página señora Van Daan”Por supuesto, casi muero, ya que esa página en particular contenía una

descripción poco halagadora de ella. Todos los días sucede algo, pero estoy muy cansada y perezosa para escribirlo. Tuya, Ana.

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Viernes, 25 de septiembre 1942.Queridísima Kitty;Mi padre tiene un amigo, un hombre de unos setenta años llamado señor Dreher,

quien esta enfermo, pobre, y tan sordo como un poste. A su lado, como un apéndice inútil, está su esposa, veintisiete años más joven e igualmente pobre, cuyos brazos y piernas están cargados de brazaletes y anillos reales y falsos como resabios de épocas más prosperas. Este señor Dreher ha sido una gran molestia para mi padre y siempre he admirado la santa paciencia con la que maneja a este viejo patético al teléfono. Cuando todavía vivíamos en casa, mamá solía recomendarle que pusiera un gramófono enfrente del

Pág. 39 recibidor, uno que repitiera cada tres minutos, “Si, señor Dreher” y “No, señor

Dreher”, ya que el viejo hombre nunca entendió una palabra de las complejas respuestas de mi padre de todos modos.

Hoy el señor Dreher llamó a la oficina y pregunto por el señor Kugler para venir a verlo. El señor Kugler no estaba de humor y dijo que mandaría a Miep, pero Miep canceló la cita. La señora Dreher llamó a la oficina tres veces, pero dado que Miep había reportado que estaría toda la tarde fuera, tuvo que imitar la voz de Bep. Tanto escaleras abajo en la oficina como arriba en el anexo, todos reían a carcajadas. Ahora cada vez que el teléfono suena, Bep dice, “¡Ese es el señor Dreher!” y Miep debe reír, así la gente al otro lado de la línea es recibida con una risa descortés ¿Te lo puedes imaginar? Esta tiene que ser la mejor oficina en todo el mundo ¡Los jefes y las chicas de la oficina se divierten tanto juntos!

Algunas noches voy a visitar a los Van Daan para charlar un poco. Comemos “galletitas empolilladas” (galletitas gomosas que fueron guardados en un armario con insecticida contra las polillas) y pasamos un buen rato. Recientemente la conversación fue acerca de Peter. Dije que a menudo me da palmaditas en las mejillas, lo cual no me gusta. Ellos me preguntaron en un modo muy de adultos si algún día podría llegar a querer a Peter como a un hermano, ya que el me quiere como a una hermana. “¡Oh, no!” dije, peor lo que pensaba era, “¡Puaj!” ¡Imagínatelo nomás! Agregué también que Peter es un tanto torpe, quizás porque era tímido. Los chicos que no están acostumbrados a estar rodeados de chicas actúan así.

Debo decir que la comitiva del anexo (La sección masculina) es muy creativa. Escucha el plan que han inventado para enviarle un mensaje al señor Broks, un representante de ventas de la compañía Opetka y un amigo que en repetidas ocasiones ha mantenido escondidas nuestras cosas. Ellos vana escribir una carta a un hombre en Zeeland que es, indirectamente, un

Pág. 40.Cliente de Opetka, y le pedirán que llene un formulario y la devuelva en el sobre

cerrado a la dirección indicada en el sobre. Mi padre escribirá la dirección. Una vez que la carta sea devuelta desde Zelanda, el formulario será removido y una carta escrita a mano que diga que mi padre está vivo podrá ser metida en el sobre. De este modo el señor Broks puede leer la letra sin sospechar el engaño. Escogieron la provincia de Zelanda porque está cerca de Bélgica (Una carta puede fácilmente ser inmiscuida por la frontera) y porque nadie tiene permitido viajar allí sin un permiso especial. A un vendedor ordinario como el señor Broks nunca le sería denegado un permiso.

Ayer mi padre volvió a encabezar una situación. Mareado del sueño, se derrumbó en la cama. Sus pies estaban fríos así que le presté mis medias de dormir. Cinco minutos más tarde las revoleó al piso. Luego puso las mantas sobre su cabeza por que la luz le molestaba. La lámpara fue apagada y él temerosamente sacó su cabeza de debajo de

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las mantas. Fue todo muy divertido. Comenzamos a hablar del hecho de que Peter le dice a Margot que es una Buttinsky (trasero). De repente la voz de papá se escuchó desde las profundidades: “Te refieres a que se sienta sobre su trasero”.

Mouschi, el gato, se vuelve cada vez más cariñoso conmigo a medida que el tiempo pasa, pero de algún modo todavía me atemoriza.

Tuya, Ana.

Domingo, 27 de septiembre, 1942.Queridísima Kitty;Mi madre y yo hemos tenido una supuesta “discusión” hoy pero lo molesto de todo

esto es que me rompí en llanto. No puedo evitarlo. Papá es siempre mucho más agradable conmigo, y además me entiende mucho mejor. En momentos como este no puedo tolerar a mi madre. Es obvio que soy una extraña para ella; ella ni siquiera sabe que pienso acerca de las cosas más ordinarias.

Pág. 41Estuvimos hablando acerca de las mucamas y del hecho de que se supone que

debes referirte a ellas como “ayuda doméstica” por estos días. Ella aseguraba que cuando la guerra termine, así es como querrán ser llamadas. Yo no lo veo tan así. Luego ella dijo que hablo sobre “más adelante” muy seguido y que actúo como si fuera toda una señorita, a pesar de que no lo soy, pero no creo que construir castillos de arena en el aire sea algo tan malo, mientras no te lo tomes demasiado en serio. De un modo ú otro, papá siempre salta en mi defensa. Sin él, no podría amoldarme aquí.

Tampoco me llevo muy bien con Margot. A pesar de que no tenemos el mismo tipo de peleas que tiene escaleras arriba, lo encuentro lejos de ser agradable. Las personalidades de Margot y de mi madre son tan extrañas para mí. Entiendo a mis amigas más que a mi propia madre ¿No es eso una lástima?

Por enésima vez, la señora Van Daan está enojada. Ella es muy malhumorada y ha estado moviendo más y más de sus pertenencias y las ha guardado bajo llave. Es una pena que mi madre no responda a cada “desaparición” a manos de los Van Daan con una “desaparición” a manos de los Frank.

Algunos personas, como los Van Daan, parecen disfrutar no sólo en la crianza de sus hijos sino también ayudando a otros en la crianza de sus hijos. Margot no lo necesita, dado que ella es naturalmente buena, amable e inteligente, la perfección en sí misma, pero parece que yo tengo suficientes imperfecciones por las dos. Más de una vez el aire ha estado enrarecido con advertencias de los Van Daan y respuestas descorteces de partería. Mi padre y mi madre siempre me defienden ferozmente. Sin ellos, no podría volver a la discusión con mi compostura usual. Ellos siempre me dicen que debería hablar menos, ocuparme más de mis propios asuntos y ser más modesta, pero parezco destinada al fracaso. Si mi padre no fuese tan paciente, habría perdido hace tiempo mis esperanzas de cumplir con las modestas expectativas de mis padres.

Si me sirvo pocos vegetales y lleno el plato de papas,Pág. 42Los Van Daan, especialmente la señora Van Daan, no puede creer lo caprichosa

que soy. “Vamos, Ana, come más vegetales”, dice.“No, gracias, señora”, respondo. “Las papas son más que suficientes”.“Los vegetales son buenos para ti; tu madre también lo dice. Sírvete más”, insiste,

hasta que mi padre interviene y defiende mi derecho de negarme a comer un plato que no me gusta.

Luego la señora Van D. realmente pierde los estribos: “Deberías haber estado en nuestra casa, donde los niños son criados del modo en que se debe. No llamo a esto una

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crianza adecuada. Ana es terriblemente malcriada. Nunca permitiría eso. Si Ana fuera mi hija…”

Este es el modo en que sus discursos siempre empiezan ó terminan: “Si Ana fuera mi hija…” Gracias a dios que no lo soy.

Pero para volver al tema de la crianza de los hijos, ayer se produjo un silencio luego de que la señora Van D. terminara su discurso. Mi padre luego respondió:” Creo que Ana ha sido muy bien criada. Al menos ha aprendido a no contestar a tus interminables sermones. Y en lo que se refiere a los vegetales, debería fijarse de quién viene el reproche”.

La señora Van Daan fue claramente vencida. El momento en que se refiere a que se fije de quien viene el reproche, está, por supuesto, haciendo mención a la señora en persona, dado que ella no tolera ningún tipo de frijoles ó coles por la noche por que le dan “gases”. Pero yo podría decir lo mismo. ¿Qué tonta, no lo crees? Esperemos que deje de hablar de mí.

Es tan gracioso ver cuán rápido la señora Van Daan se sonroja. A mi no me sucede, y eso secretamente la enfurece.

Tuya, Ana.

Pág. 42.Lunes, 28 de septiembre, 1942.Queridísima Kitty;Tuve que dejar de escribir ayer, aunque no estaba siquiera cerca de terminar.

Muero pro contarte acerca de otra de nuestras disputas, pero primero me gustaría contarte esto: Me parece extraño que los adultos discutan tan fácilmente y tan a menudo por cuestiones de poca importancia. Hasta ahora siempre creía que las peleas eran cosas de niños y que se dejaban al crecer. Por supuesto, a veces hay razones para tener una verdadera “disputa”, pero los intercambios verbales que están sucediendo aquí no son más que simples peleas infantiles. Debería estar acostumbrada al hecho de que este tipo de disputas sean ocurrencias diarias, pero no lo estoy y nunca lo estaré mientras que yo sea el tema de casi toda discusión. (Ellos se refieren a esto como “discusiones” pero no son más que “peleas”, ¡pero los alemanes no conocen la diferencia!) Ellos critican todo, y me refiero a todo, sobre mi: mi comportamiento, mi personalidad, mis modos; Cada pulgada de mi, desde la cabeza hasta los pies y de vuelta nuevamente, es tema de discusión y debate. Palabras hirientes y gritos son constantemente dirigidos a mí, aunque no estoy acostumbrada a ello en lo absoluto. Según los poderosos, debo sonreír y tolerarlo ¡Pero no puedo! No tengo ninguna intención de soportar sus insultos con calma. Les mostraré que Ana Frank no nació ayer. Se sentarán y tomarán nota y mantendrán sus bocotas cerradas cuando les haga ver que debería preocuparse por sus propios modales en vez de por los míos ¡Como se atreven a actuar de ese modo! Es simplemente barbárico. Me he quedado sorprendida, una y otra vez, ante tal descortesía y sobre todo…ante tal estupidez (Señora Van Daan). Pero en cuanto me acostumbre ala idea, y eso ya no debe tardar mucho más, les daré a probar de su propia medicina, ¡Y ahí cambiarán su tono! ¿Realmente soy mal amanerada, cabeza dura, terca, insistente, estúpida, perezosa, etc., etc., como los Van Daan dicen? No, por supuesto que no. Se que tengo mis

Pág. 44Imperfecciones y cometo errores, ¡pero ellos exageran todo! Si sólo supieras, Kitty,

como me enfurezco cuando me critican e insultan. No va a pasar mucho tiempo más antes de que yo explote con toda mi ira.

Suficiente con ello. Te he aburrido lo suficiente con mis disputas, y sin embargo no puedo resistirme a agregar una conversación muy interesante durante la cena.

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De algún modo aterrizamos en el tema de la extrema timidez de Pim. Su modestia es muy bien conocida, la cual ni siquiera la más estúpida persona se atrevería a cuestionar. De pronto, la señora Van Daan, que siente la necesidad de de entrometerse en cada conversación, remarcó, “Yo soy muy modesta y solitaria también, ¡mucho más que mi esposo!”

¿Has escuchado alguna vez algo tan ridículo? ¡Esta oración claramente ilustra que ella no es exactamente lo que llamarías modesta!

El señor Van Daan, que se sintió obligado a explicar el “mucho más que mi marido”, respondió calmadamente, “No tengo ningún interés en ser modesto y solitario. De acuerdo a mi experiencia, ¡se obtiene mucho más siendo insistente!”Y dirigiéndose hacia mí, agregó, “No seas modesta y solitaria, Ana. No te va a llevar a ningún lado”.

Mi madre acordó completamente con su punto de vista. Pero, como de costumbre, la señora Van Daan tuvo que agregar sus dos centavos (bocadillo). Esta vez, en ves de dirigirse directamente a mí, se volvió hacia mis padres y dijo, “Ustedes deben tener una extraña mirada de la vida para decirle eso a Ana. Las cosas eran distintas cuando yo estaba creciendo. Aunque probablemente no hayan cambiado tanto desde entonces, ¡Salvo en tu moderno hogar!”.

Este fue un golpe directo a los modernos métodos de crianza de hijos de mi madre, los cuales ella defendió en varias ocasiones. La señora Van Daan estaba tan enojada que su cara se volvió rojo brillante. La gente que se ruboriza fácilmente se agita aún más cuando se

Pág. 45Enfurecen y rápidamente pierden la discusión ante sus oponentes.La madre que no estaba ruborizada, quien quería terminar con el asunto tan pronto

como fuera posible, hizo una pausa momentánea para pensar antes de responder. “Bueno, señora Van Daan, creo que es mucho mejor si una persona no es demasiado modesta. Mi esposo, Margot y Peter son excepcionalmente modestos. Su esposo, Ana y yo, aunque no somos completamente lo opuesto, no nos dejamos mandonear”.

Señora Van Daan: “¡Ay, pero señora Van Daan, no entiendo a lo que se refiere! Honestamente, soy extremadamente modesta y solitaria ¿Cómo puede decir que soy insistente?”.

Madre: “Yo no dije que fuera insistente, pero nadie la describiría como alguien con una predisposición a ser solitaria”.

Señora Van D.: “¡Quisiera saber en que soy insistente! Si no me ocupara de mi misma, nadie más lo haría, y en poco tiempo estaría muriendo de hambre, pero eso no significa que no sea tan modesta y solitaria como tu esposo”.

Mi madre no tuvo más remedio que reír ante esta ridícula autodefensa, lo cual irritó a la señora Van Daan. No nacida exactamente para debatir, ella continúo su magnífico raconto en una mezcla de alemán y danés, hasta que estuvo tan enredada en sus propias palabras que finalmente se levantó de su silla y estaba a punto de irse de la habitación cuando sus ojos se posicionaron en mí ¡Deberías haberla visto! Por mala suerte, en el momento en que la señora Van Daan giró yo agitaba mi cabeza en una mezcla de compasión e ironía. No lo hice a propósito, pero seguí su discurso tan atentamente que mi reacción fue completamente involuntaria. La señora Van D. se enfureció y me insultó duro, en alemán, de un modo ofensivo y vulgar, exactamente como cualquier vieja gorda y gritona. Era un escenario para disfrutar. Si pudiera dibujar, me gustaría tener un bosquejo de ella en ese momento.

Pág. 46He aprendido una cosa: Uno sólo llega a conocer a una persona verdaderamente

después de una pelea ¡Sólo ahí puedes jugar su verdadera personalidad!Tuya, Ana.

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Martes, 29 de septiembre, 1942.Queridísima Kitty;¡Las cosas más extrañas le suceden a uno cuando esta escondido! Trata de

imaginarte esto. Dado que no tenemos un bañera, nos bañamos en una ducha, y dado que sólo hay agua caliente en la oficina (Me refiero a la planta baja entera), los siete nos turnamos tratando de sacar lo mejor posible de esa maravillosa oportunidad. Pero dado que no somos todos iguales y estamos plagados con distintos niveles de modestia, cada miembro de la familia ha elegido un lugar diferente para bañarse. Peter se baña en la cocina de la oficina, aunque tiene una puerta de vidrio. Cuando es tiempo para su ducha, él nos avisa a cada uno de nosotros que no pasemos por la cocina por la siguiente media hora. El considera esta medida como suficiente. El señor Van D. se baña escaleras arriba, creyendo que la seguridad de su propia habitación hace que valga la pena la dificultosa tarea de cargar el agua caliente todas esas escaleras. La señora Van Daan todavía tiene que tomar su baño; sigue esperando para ver cual es el mejor lugar. Mi padre se baña en la oficina privada y mi madre en la cocina detrás de una hornalla, mientras que Margot y yo hemos establecido que la oficina central es nuestro lugar de aseo. Dado que las cortinas están cerradas los sábados por la tarde, nos lavamos en la oscuridad, mientras que la que no esta bajo el agua mira hacia fuera por un agujerito en la cortina, observando con admiración a la infinita cantidad de peculiares personas.

Hace una semana decidí que no me gustaba el lugar (para bañarse) y he estado buscando un lugar más cómodo para bañarme. Fue Peter quien me dio la idea de establecer

Pág. 47El espacioso bañó de la oficina como mi lugar de aseo. Puedo sentar, prender la

luz, trabar la puerta, utilizar el agua sin ayuda de nadie, y todo eso sin el temor a ser vista. Usé mi amado baño por primera vez el sábado y, por más extraño que parezca, me gusta más que cualquier otro lugar.

El plomero estaba trabajando escaleras abajo el miércoles, moviendo las cañerías y drenajes desde el baño de la oficina al pasillo para que los caños no se congelen durante el frío invierno. La visita del plomero estuvo lejos de ser agradable. No sólo que no pudimos utilizar el agua durante el día, sino que el baño se había rebalsado. Te diré como manejamos este problema; te parecerá increíble que yo mencione el tema, peor no soy tan pudorosa con temas de esta índole. El día de nuestra llegada, mi padre y yo improvisamos un urinal, sacrificando una jarra de lata para este propósito. Durante la visita del plomero, las jarras de lata fueron puestas a nuestro servicio durante el día para responder a los llamados de la naturaleza. Por lo que a mi concierne, esto no fue tan difícil como tener que sentarse todo el día sin decir una palabra. Puedes imaginarte lo difícil que fue para la señora Cuac, Cuac, Cuac. En días ordinarios tenemos que hablar en susurros; no poder hablar ó moverse en todo el día es diez veces peor.

Luego de tres días de estar constantemente sentado, mi espalda estaba tensionada y dolorida. Un poco de ejercicios nocturnos ayudó.

Tuya, Ana.Jueves, 1 de octubre, 1942.Querida Kitty;Ayer tuve una horrible pelea. A las ocho el timbre sonó repentinamente. Todo lo

que pude pensar fue que alguien estaba viniendo a llevarnos, tú sabes a lo que me refiero. Pero me calmé cuando todos juraron que debía de haber sido algún bromista ó el cartero.

Los días aquí son muy calmos. El señor Levinsohn, un pequeñoPág. 48

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Farmacéutico y químico judío, está trabajando para el señor Kugler en la cocina. Dado que está familiarizado con el edificio entero, estamos inconstante temor que se le de por echar un vistazo a lo que solía ser el laboratorio. Estamos tan tiesos como un ratón bebe ¿Quién hubiera creído tres meses atrás que la hiperquinética Ana tendría que estar sentada y quieta por tantas horas y, lo que es más, que podría?

El cumpleaños de la señora Van Daan era el 29. Aunque no tuvimos una gran celebración, la llenamos de flores, regalos simples y buena comida. Aparentemente, los calves rojos de su esposo son una tradición familiar.

Déjame hacer una pausa en la señora Van Daan y decirte que sus intentos de coqueteo con mi padre son una constante fuente de irritación para mí. Ella toca en sus mejillas y su cabeza, le levanta el cuello de la remera y hace supuestos comentarios inteligentes para atraer la atención de Pim. Afortunadamente, él no la encuentra ni linda ni encantadora, por lo que no responde a sus coqueteos. Como sabes, soy del tipo celosa, y no puedo aprobar su comportamiento. Después de todo, mi madre no actúa así con el señor Van D., que es exactamente lo que le dije a la señora Van Daan directo en su cara.

De vez en cuando Peter puede ser muy divertido. Él y yo tenemos una cosa en común: nos gusta disfrazarnos, lo cual hace reír a todos. Un anochecer hicimos nuestra presentación, con Peter vestido con uno de los vestidos ajustados de su madre y yo con un traje de él. Él uso un sombrero; yo tenía una gorra puesta. Los adultos se partían al medio de risa y nosotros nos divertimos por igual.

Bep compró nuevas polleras para Margot y para mí en Bijenkorf. La tela es asquerosa, como la de las bolsas en que vienen las papas. Justo el tipo de cosas que las tiendas no se hubieran atrevido a vender en las viejas épocas, ahora costaron 24.00 guilders (La de Margot) y 7.75 guilders (La mía).

Tenemos una nueva diversión: Bep ha ordenadoPág. 49 Un curso de mecanografía para Margot, Peter y yo. Sólo espera, para esta fecha el

año que viene seremos perfectos mecanógrafos. Sea como sea, aprender a escribir un código secreto como ese es muy interesante.

Tengo un terrible dolor en mi dedo índice (en mi mano izquierda) así que no puedo planchar ¡Que suerte!

El señor Van Daan quiere que me siente junto a él en la mesa, ya que Margot no come tanto como a él le gustaría. Esta bien por mí, me gustan los cambios. Siempre hay un pequeño gato negro ronroneando en el patio, y me recuerda a mi querido y dulce Moortje. Otra razón por la que acepto el cambio es porque mi madre esta siempre regañándome, especialmente en la mesa. Ahora Margot tendrá que sufrir esa carga. Ó no, dado que mi madre no hace esos comentarios sarcásticos a ella ¡No a un parámetro de virtud! Siempre estoy burlándome de Margot diciéndole que es un parámetro de virtud pro estos días, y ella lo odia. Tal vez le enseñe a no ser tan perfectita. Y sí que aprendió.

Para terminar este rejunte de noticias, un particularmente divertido chiste contado por el señor Van Daan:

¿Qué hace clic 99 veces y clac 1?Un cien pies con un pie torcido.

Adios, Ana.

Sábado, 3 de octubre, 1942.Querida Kitty;Todos me molestaron estuvieron molestando bastante ayer porque me dormí junto

al señor Van Daan “¡A tu edad!” “¡Shockeante!” y otros comentarios como estos. Tontos,

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por supuesto. Nunca quise dormir con el señor Van Daan del modo en que ellos se refieren.

Ayer mi madre y yo tuvimos otro encontronazo y ellaPág. 50Realmente hizo un alboroto. Le dijo a papá todos mis pecados y empezó a llorar,

lo que me hizo llorar a mí también, y todavía tengo un horrible dolor de cabeza. Finalmente le dije a papá que lo quiero más que a mi madre, a lo que me respondió que era sólo una etapa, pero no lo creo. Simplemente no puedo tolerar a mi madre, y tengo que forzarme a mí misma para no enojarme con ella todo el tiempo, y estar calma, cuando preferiría darle una cachetada. No se porque he terminado teniendo tanto desagrado por ella. Mi padre dice que si mi madre no se siente bien ó tiene una jaqueca, debo voluntariamente ofrecerme para ayudarla, pero no voy a hacerlo pro que no la quiero y no disfruto hacerlo. Puedo imaginar a mi madre muriendo un día, pero la muerte de papá me resulta inconcebible. Es muy maléfico de mi parte, pero así es como me siento. Espero que mi madre nunca lea esto ó nada de lo que he escrito.

Se me ha permitido leer más libros para adultos últimamente. “La juventud de Eva”, de Nico van Schtelen me mantiene ocupada por estos días. No creo que haya una gran diferencia entre esto y libros para adolescentes. Eva creía que los niños crecían los árboles, como manzanas, y que la cigüeña los sacaba cuando estaban maduros y los llevaba a las madres. Pero la gata de la amiga de Eva tuvo gatitos y ella los vio saliendo de la gata, así que pensó que las gatas ponían huevos y los empollaban como las gallinas, y que las madres que querían hijos también iban unos días escaleras arriba antes de que fuera tiempote poner sus huevos e incubarlos. Una vez que los bebés llegaban, las madres estaban muy débiles luego de tanto estar en cuclillas. En cierto punto, Eva también quería un bebe. Ella tomó una bufanda de lana y la estiró en el piso para que el huevo cayera sobre ella, y luego ella se agachó y empezó a empujar. Ella cacareó mientras esperaba, pero ningún huevo salió. Finalmente, luego de que estuvo sentada por un largo rato, algo sí salio, pero era un a salchicha en vez de un huevo. Eva estaba avergonzada.

Pág. 51.Pensó que estaba enferma ¿Gracioso, no? También hay una parte de La Juventud

de Eva que habla sobre mujeres vendiendo su cuerpo en las calles y pidiendo grandes sumas de dinero. Estaría mortificada enfrente de un hombre de ese modo. Además, menciona la menstruación de Eva. Ah, espero que ansias tener mi período-recién ahí seré una adulta.

Papá esta quejándose de vuelta y amenazando sonsacarme mi diario ¡OH, horror de horrores! De ahora en adelante, voy a esconderlo.

Ana Frank.

Miércoles, 7 de octubre, 1942.Me imagino que…He ido a Suiza. Papá y yo dormimos en una habitación, mientras que el estudio de

los chicos (El primo de Ana, Bernhard y Stephan Elias) se ha convertido en un living en el que puedo recibir visitas. De sorpresa, han comprado nuevos muebles par amí, incluyendo una mesa de té, un escritorio, sillas y un diván. Todo es simplemente maravilloso. Luego de unos días papá me da 150 guilders – convertidos a moneda suiza, por supuesto, pero los llamaré guilders – y me dice que me compre todo lo que creo que necesitaré, sólo para mí. (Más tarde, recibo un guilder ala semana, que también puedo usar para comprar lo que sea que quiera). M e voy con Bernd (Bernhard) y compro:

3 camisetas de algodón por 0.50 = 1.503 bombachas de algodón por 0.50 = 1.50

Page 30: El Diario de Ana Frank

3 camisetas de lana por 0.75 = 2.253 bombachones de lana por 0.75 = 2.252 interiores de pollera por 0.50 = 1.002 corpiños (Talle pequeño) por 0.50 = 1.005 piyamas por 1.00 = 5.00

Pág. 52.1 bata de verano por 2.50 = 2.501 bata de invierno por 3.00 = 3.002 sacos de cama por 0.75 = 1.501 pequeña almohada por 1.00 = 1.001 par de pantuflas livianas por 1.00 = 1.001 par de pantuflas cálidas por 1.50 = 1.501 para de zapatos de verano (escuela) por 1.50 = 1.501 para de zapatos de verano (De vestir) por 2.00 = 2.001 par de zapatos de invierno (escuela) por 2.50 = 2.501 par de zapatos de invierno (De vestir) por 3.00 = 3.002 delantales por 0.50 = 1.0025 pañuelos por 0.05 = 1.004 pares de medias de seda por 0.75 = 3.004 pares de medias a la rodilla por 0.50 = 2.004 pares de soquetes por 0.25 = 1.002 pares de medias gruesas por 1.00 = 2.003 madejas de lana blanca (ropa interior, gorra) = 1.503 madejas de lana azul (sweater y pollera) = 1.503 madejas de colores variados (gorra, bufanda) = 1.50Bufandas, cinturones, cuelleras, botones = 1.25

Más 2 vestidos escolares (verano), 2 vestidos escolares (invierno), 2 buenos vestidos (verano), 2 buenos vestidos (invierno), 1 pollera de verano, 1 buena pollera de invierno, 1 pollera escolar para invierno, 1 piloto, 1 abrigo de verano, 2 sombreros, 2 gorras. Por un total de 108.00 guilders.

2 carteras, 1 traje par a esquiar, 1 par de esquís, 1 caja de maquillaje (que contenga rubor, crema para la cara, crema humectante, crema limpiadora, loción bronceadora, algodón, un kit de primeros auxilios, lápiz labial, máscara para pestañas, sales de baño, talco, agua de colonia, jabón, y una brocha).

Pág. 53.Más 4 sweaters por 1.50, 4 blusas por 1.00, ítems varios por 10.00 y libros, regalos

por 4.50.

Viernes, 9 de octubre, 1942.Queridísima Kitty;Hoy no tengo nada más que lúgubres y deprimentes noticias para reportarte.

Nuestros amigos y conocidos judíos están siendo llevados de a montones. La Gestapo está tratándolos muy duramente y transportándolos en camiones a Westerbork, el gran campo en Drenthe al cual están mandando a todos los judíos. Miep nos contó del alguien que logró escapar. Debe ser terrible en Westerbork. La gente no recibe casi nada para comer, menos para tomar, dado que el agua está disponible sólo una hora al día, y hay sólo un baño y un lavabo para miles de personas. Los hombres y mujeres duermen en la

Page 31: El Diario de Ana Frank

misma pieza, y las mujeres y los niños les rapan la cabeza a menudo. Escapar es imposible; mucha gente parece judía, y son catalogados por sus cabezas rapadas.

Si es tan terrible en Holanda ¿Cómo será en aquellos lejanos e incivilizados lugares a donde los alemanes los están enviando? Asumimos que la mayoría de ellos están siendo asesinados. La radio inglesa dice que están siendo sometidos a cámaras de gas. Quizás esa sea la forma más rápida de morir.

Me siento terrible. Las noticias de Miep sobre estos horrores son tan entristecedoras, y Miep está muy preocupada. El otro día, por ejemplo, la GESTAPO dejó a una anciana judía en muy mal estado en la puerta de la casa de Miep mientras buscaban un auto. La anciana estaba aterrorizada por el brillo de las linternas y las armas disparando a los aviones ingleses que sobrevolaban. Sin embargo, Miep no dudó en dejarla entrar. Nadie lo hubiera dudado. Los alemanes son lo suficientemente generosos cuando de castigos se trata.

Bep también está afligida. Su novio está siendo llevado

Pág. 54A Alemania. Cada vez que los aviones sobrevuelan, ella tiene miedo de que vayan

a descargar todo su cargamento de bombas sobre la cabeza de Bertus. Bromas como “No te preocupes, no pueden caer todas sobre él” ó “Una bomba es todo lo que hace falta” difícilmente puedan ser apropiadas para la ocasión. Bertus no es el único siendo obligado a trabajar en Alemania. Trenes cargados de jóvenes parten cada día. Algunos tratan de salirse del tren cuando para en alguna pequeña estación, pero sólo algunos logran escapar y encontrar un escondite.

Pero ese no el fin de mis lamentaciones ¿Has escuchado alguna vez el término “rehenes”? Ese es el nuevo castigo para los saboteadores. Es la cosa más horrible que puedas imaginar. Ciudadanos- gente inocente- están siendo tomados prisioneros a la espera de su ejecución. Si la GESTAPO no puedo encontrar a los saboteadores, simplemente toman a 5 rehenes y los forman en línea en frente de una pared. Se leen los anuncios de su muerte en los periódicos, donde se refieren a ellos como “accidentes fatales”.

Especimenes de gran humanidad, esos alemanes, ¡Y pensar que soy uno de ellos! No, eso no es verdad, Hitler nos quitó nuestra nacionalidad hace bastante tiempo. Y además no hay una enemistad tan grande en la tierra como la que hay entre alemanes y judíos.

Tuya, Ana.

Miércoles, 14 de octubre, 1942.Querida Kity;Estoy terriblemente ocupada. Ayer empecé a traducir un capítulo de “La belle

nivernaise” y a anotar algunas palabras. Luego trabajé en un horrible problema de matemáticas y además traduje tres hojas de gramática francesa. Hoy, gramática en francés e historia. Simplemente me rehúso estudiar esas desagradables matemáticas todos los días. Papá también cree que son horribles. Soy casi más buena en ellas que lo que él es, pero de hecho ninguno de nosotros

Pág. 55.Es para nada bueno, así que siempre tenemos que pedir ayuda a Margot.

También estoy esforzándome en mi mecanografía, lo cual disfruto. De nosotros tres, soy la que ha hecho más progreso.

He leído “La familia tormentosa” (Storm Family). Es bastante bueno, peor no se compara con “Joop ter Heul”. De todos modos, las mismas palabras pueden ser

Page 32: El Diario de Ana Frank

encontradas en ambos libros, lo que tiene sentido porque ambos han sido escritos por la misma autora. Cissy van Marxveldt es una increíble escritora. Definitivamente voy a dejar a mis propios hijos leer sus libros también.

Además, he leído muchas de las obras de körner. Me gusta el modo en que escribe. Por ejemplo, Hedwig, La prima de Bremen, La gobernadora, El dominó verde, etc.

Mi madre, Margot, y yo somos nuevamente las mejores amigas. De hecho es mucho más agradable de este modo. Anoche, Margot y yo estábamos recostadas una al lado de la otra en mi cama. Estábamos muy apretadas, pero eso lo que lo hizo divertido. Me preguntó si podría leer mi diario de vez en cuando.

“Partes de él”, dije, y le pregunté por el suyo. Me dio permiso para leer su diario también.

La conversación se centró en el futuro, y le pregunté que quería ser cuando fuera mayor. Pero no me quiso decir y fue bastante misteriosa respecto a ello. Supuse que podía tener algo que ver la enseñanza; Por supuesto, no estoy segura, pero sospecho que es algo dentro de esta área. Realmente no debería ser tan entrometida.

Esta mañana me recosté en la cama de Peter, luego de haberlo estado corriendo un rato. Estaba furioso, pero no me importó. Debería considerar ser un poco más amigable conmigo de ahora en adelante. Después de todo, sí le di una manzana anoche.

Una vez le pregunté a Margot si creía que yo era fea. Dijo que era bonita y tenía lindos ojos ¿Un poco vago, no crees?

¡Bueno, hasta la próxima vez!Ana Frank.

Pág. 56.PD: Esta mañana todos nos turnamos para usar la balanza. Margot ahora pesa 60

kilos, mi madre pesa 62 kilos, mi padre 70 kilos, Ana 43.5 kilos, Peter 67 kilos, la señora Van Daan 53 kilos, y el señor Van Daan 75 kilos. En los tres meses que he estado aquí he ganado 8 kilos, ¿Un montón no?

Martes, 20 de octubre, 1942.Queridísima Kitty;Mi mano aún tiembla, aunque ya pasaron dos horas desde que recibimos ese gran

susto. Debo explicarte que hay 5 extinguidores en el edificio. Los oficinistas estúpidamente olvidaron avisarnos que el carpintero, ó como se llame, iba a venir a rellenar los extinguidotes. Como resultado, no nos preocupamos por estar en silencio hasta que yo escuché el martilleo al otro lado del estante de libros. Inmediatamente asumí que era el carpintero y fui a alertar a Bep, que estaba almorzando, que no podía bajar las escaleras. Mi padre y yo nos instalamos en la puerta para poder escuchar cuando el hombre se hubiera ido. Luego de trabajar durante quince minutos, él apoyó su martillo y otras herramientas en la estantería (¡ó eso creímos!) y golpeó a nuestra puerta. Nos pusimos blancos del miedo ¿Había escuchado algo después de todo y quería chequear esta misteriosa estantería de libros? Eso parecía ya que continuó golpeando, empujando y presionando sobre la puerta.

Estaba tan asustado que casi me desmayo tan solo de pensar en la posibilidad de que este perfecto extraño lograra descubrir nuestro maravilloso escondite. Justo cuando pensé que mis días estaban contados, escuchamos la voz del señor Kleiman diciendo, “Abran, soy yo”.

Abrimos la puerta inmediatamente ¿Qué había pasado? El gancho que aseguraba la estantería de libros se había atascado, por lo cual no nos habían podido advertir sobre

Page 33: El Diario de Ana Frank

el carpintero. Una vez que el hombre se fue, el señor Kleiman vino a buscar a Bep, pero no pudo abrir la estantería. No puedo decirte cuan aliviada estaba.

Pág. 57.En mi imaginación, el hombre que creí estaba tratando de entrar al anexo secreto

había continuado creciendo y creciendo hasta convertirse no sólo en un gigante sino también en el fascista más cruel del mundo. Uff. Afortunadamente, todo salió bien, al menos esta vez.

Nos divertimos mucho el lunes. Miep y Jap pasaron la noche con nosotros. Margot y yo dormimos en la habitación de mi padre y mi madre por esa noche para que los Gieses pudieran usar nuestras camas. El menú fue preparado en su honor, y la cena estuvo deliciosa. Las festividades fueron brevemente interrumpidas cuando la lámpara de mi padre hizo cortocircuito y nos quedamos a oscuras repentinamente ¿Qué se suponía que hiciéramos? Teníamos fusiles, pero la caja estaba al otro lado del oscuro depósito, lo cual hacía esta tarea particularmente desagradable. Aún así, los hombres se aventuraron, y diez minutos después pudimos apagar las velas.

Me desperté temprano esta mañana. Jan ya estaba vestido. Dado que se tenía que ir a las ocho treinta, ya estaba arriba desayunando a las ocho. Miep estaba ocupada vistiéndose, y la encontré en ropa interior cuando subí. Margot y yo también nos vestimos y estuvimos listas arriba más temprano de lo usual. Luego de un agradable desayuno, Miep se dirigió escaleras abajo. Estaba lloviendo afuera así que estuvo contenta de no tener que pedalear hasta el trabajo. Papá y yo hicimos las camas, y después de eso aprendí cinco verbos irregulares en francés ¿Bastante laboriosa, no lo crees?

Margot y Peter estaban leyendo en la habitación, con Mouschi hecho una rosca detrás de Margot en el diván. Después de mis verbos irregulares en francés, me uní a ellos y leí Beyond Sing the Woods. Es bastante lindo, pero muy inusual. Ya casi lo termino.

La semana que viene es el turno de Bep de quedarse a pasar la noche.Tuya, Ana.

Pág. 58.Jueves, 29 de octubre, 1942.Mi queridísima Kitty;Estoy muy preocupada. Mi padre está enfermo. Está cubierto de manchas y tiene

la temperatura alta. Parece ser sarampión. Sólo imagínatelo, ¡No podemos llamar a un doctor! Mi madre lo está haciendo transpirar con la esperanza de que le baje la fiebre.

Esta mañana Miep nos dijo que los muebles han sido removidos del departamento de los Van Daan en Zuideramstellaan. No se lo hemos dicho a la señora Van Daan todavía. Ella ha estado muy “nervenmässig” (Nerviosa. Aparece en alemán en el libro) últimamente, y no queremos escucharla nuevamente gemir y lloriquear por toda la bella vajilla y las adorables sillas que tuvo que abandonar. Nosotros también tuvimos que abandonar la mayoría de nuestras buenas cosas ¿Qué tiene de bueno quejarse por ello ahora?

Mi padre quiere que empiece a leer libros de Hebbel y otros reconocidos escritores alemanes. Puedo leer alemán bastante bien ahora, aunque suelo murmurar las palabras en vez de leer silenciosamente para mis adentros. Pero eso pasará. Mi padre ha sacado de la gran estantería de libros obras de Goethe y Schiller y está planeando leerme cada anochecer. Comenzamos con Don Carlos. Animada por mi padre, mi madre puso en mis manos su libro de plegarias. Leí unas cuantas plegarias en alemán, sólo para ser educada. Definitivamente suenan muy bien, pero no tiene mucho significado para mí ¿Porqué me está haciendo actuar como si fuera religiosa y devota?

Page 34: El Diario de Ana Frank

Mañana prenderemos la estufa pro primera vez. La chimenea no ha sido limpiada en años, así la habitación esta destinada a llenarse de humo ¡Esperemos que la chimenea no se ahogue!

Tuya, Ana.

Pág. 59.Lunes, 2 de noviembre, 1942.Querida Kitty;Bep estuvo con nosotros el viernes por la noche. Fue divertido, pero ella no

durmió demasiado bien porque bebió mucho vino. En cuanto al resto, no hay nada especial que reportar. Tuve una terrible jaqueca ayer y me fui ala cama más temprano. Margot está siendo exasperante nuevamente.

Esta mañana comencé a ordenar un índice de archivos de la oficina, porque se había caído y se había mezclado todo. Poco después ya me estaba volviendo loca. Le pedía ayuda a Margot y a Peter, pero estaban muy perezosos, así que lo dejé como estaba ¡No estoy tan loca como para hacerlo todo yo sola!

Ana Frank.

PD: Olvidé contarte la importante noticia de que probablemente vaya a tener mi período pronto. Puedo darme cuenta porque sigo encontrando manchitas blancuzcas en mis bombachas, y mi madre predijo que comenzará pronto. No puedo esperar. Es un evento tan trascendental. Es una lástima que no pueda usar toallitas sanitarias, pero ya no puedes conseguirlas, y los tampones de mamá sólo pueden ser usados por mujeres que han tenido bebés.

Comentario agregado pro Ana el 22 de enero, de 1944:Ya no sería capaz de escribir ese tipo de cosas. Ahora que estoy releyendo mi

diario luego de un año y medio, estoy sorprendida de mi inocencia infantil. En lo profundo de mí ser, se que no podría volver a ser tan inocente, por mucho que me gustase. Puedo entender mis cambios de humor y mis comentarios respecto de Margot, mi madre y mi padre como si los hubiera escrito ayer, pero no me puedo imaginar escribiendo tan abiertamente sobre otras cuestiones. Me avergüenza enormemente leer las páginas que tratan sobre asuntos que recordaba como mucho más agradables de lo que realmente fueron. Mis descripciones son muy poco delicadas. Pero suficiente con ello.

También puedo entender la melancolía por mi hogar y el anhelo por Moortje. Todo el tiempo que he estado aquí he

Pág. 60.Anhelado inconsciente – y a veces conscientemente- por confianza, amor, y

afecto físico. Este anhelo puede variar en intensidad, pero está siempre allí.

Juves, 5 de noviembre, 1942.Querida Kitty;Los británicos han logrado finalmente algunos progresos en África y Estalingrado

no ha caído aún, así que los hombres están felices y tomamos café y té esta mañana. En cuanto a lo demás, no hay nada especial que reportar.

Esta semana estuve leyendo mucho y trabajando poco. Así es como las cosas deberían ser. Ese es seguro el camino al éxito.

Mi madre y yo nos estamos llevando mejor últimamente, pero nunca estamos más cerca. Mi padre no es muy abierto acerca de sus intereses, pero es una dulzura como siempre lo ha sido. Prendimos la estufa unos días atrás y la habitación sigue llena de humo. Prefiero la calefacción central, y probablemente no sea la única. Margot es un

Page 35: El Diario de Ana Frank

apestosa (Y no hay otra palabra para ello), una fuente constante de irritación, mañana, tarde y noche.

Ana Frank.

Lunes, 9 de noviembre, 1942.Queridísima Kitty;Ayer fue el cumpleaños de Peter, de dieciséis. Estaba escaleras arriba a las ocho,

y Peter y yo miramos sus regalos. Recibió un juego de Monopolio, una razuradora y un encendedor de cigarrillos. No es que fume mucho, en lo absoluto; es sólo que luce muy sofisticado.

La sorpresa mayor vino del señor Van Daan, quien reportó a la una que los ingleses habían aterrizado en Túnez, Argel, Casablanca y Orán.

“Este es el comienzo del fin”, todos decían, pero Churchill, el primer ministro británico, quien debe

Pág. 61Haber escuchado la misma cosa en Inglaterra, declaró, “Este no es el final. No es

ni siquiera el comienzo del final. Pero es, quizás, el fin del comienzo” ¿Ves alguna diferencia? Sin embargo, hay razones para el optimismo. Stalingrado, la ciudad rusa que ha sido atacada durante tres meses, no ha caído aún en manos alemanas.

Para que comprendas el verdadero espíritu del anexo, debería hablarte acerca de la comida. (Debería explicarte que son verdaderos glotones en el piso de arriba).

El pan es entregado cada día por un encantador panadero, un amigo del señor Kleiman. Por supuesto, no tenemos tanto como teníamos en casa, pero es suficiente. También compramos cartas de racionamiento en el mercado negro. El precio sigue subiendo; ya ha subido de 27 a 33 guilders ¡Y eso por meros pedazos de papel impreso!

Para proveernos con una fuente nutritiva que pueda conservarse, además de las cien latas de comida que tenemos guardadas, compramos trescientas libras de frijoles. No sólo para nosotros, sino también para el personal de la oficina. Colgamos los sacos de frijoles en ganchos en el pasillo, detrás de nuestra entrada secreta, pero algunas se reventaron por el peso. Así que decidimos moverlas al ático, y Peter fue encargado con la pesada tarea de cargarlas. Logró llevar escaleras arriba cinco bolsas de las seis intactas y se complicó la situación cuando uno de los sacos se rompió y una inundación, ó mejor dicho un granizo de frijoles marrones voló por el aire y por las escaleras. Dado que había al menos cincuenta libras de frijoles en ese saco, hizo suficiente ruido como para despertar a los muertos. Escaleras abajo, estaban seguros de que la casa se les caía encima de sus cabezas. Peter estaba petrificado, pero luego rompió en carcajadas cuando me vio parada al pie de las escaleras, como una isla en un mar de marrón, con olas de frijoles rompiendo en mis tobillos. Rápidamente comenzamos a levantarlos,

Pág. 62.

Pero los frijoles son tan pequeños y movedizos que ruedan hacia cualquier esquina y agujero. Ahora cada vez que vamos arriba, nos agachamos y recogemos algunos de los frijoles esparcidos para poder darle a la señora Van Daan un manojo de ellos.

Casi olvido mencionar que mi padre se ha recuperado de su enfermedad.Tuya, Ana.

Page 36: El Diario de Ana Frank

PD: La radio acaba de anunciar que Argel ha caído. Marruecos, Casablanca y Orán han estado en manos inglesas por varios días. Ahora estamos esperando por Túnez.

Martes, 10 de noviembre, 1942.

Queridísima Kitty;¡Grandes noticias! ¡Estamos planeando traer a ocho personas a esconderse con

nosotros!Sí, de verdad. Siempre pensamos que había espacio y comida para una persona

más, pero teníamos miedo de que fuese una carga aún mayor en el señor Kugler y el señor Kleiman. Pero dado que los escalofriantes reportes sobre lo que se les está haciendo a los judíos se ponen peores día tras día, mi padre decidió tantear el terreno con estos dos caballeros, y ellos creyeron que era un plan excelente. “Es igualmente peligroso, sean siete ú ocho”, dijeron inmediatamente. Una vez que esto quedó establecido, nos sentamos e hicimos un recorrido mental por nuestro círculo de amistades, tratando de pensar en una persona que se ajustara bien a nuestra extensa familia. No fue difícil. Luego de que mi padre rechazó a todos los familiares de los Van Daan, escogimos a un dentista llamado Albert Dussel. El vive con una encantadora dama cristiana que es bastante más joven que él. Probablemente no estén casados, pero eso es otro tema. Es conocido por ser callado y refinado, y por lo que parece desde nuestra relación superficial con él, es también agradable. Miep también lo conoce, así que ella podrá hacer todos los arreglos necesarios. Si viene, el señor Dussel

Pág. 63 Tendrá que dormir en mi habitación en lugar de Margot, quien se tendrá que

conformar con la cama desplegable * (* Luego de que el señor Dussel llegó, Margot durmió en la habitación de sus padres). Le pediremos que traiga algo con que llenar las cavidades.

Tuya, Ana.

Jueves, 12 de noviembre, 1942.Queridísima Kitty;Miep vino para contarnos que había ido a ver al señor Dussel. Él le preguntó

apenas ella entró en la habitación si conocía algún lugar para esconderse y estuvo enormemente complacido cuando Miep le dijo que tenía algo en mente. Ella agregó que era necesario que se escondiera lo antes posible, de ser preferible el sábado, pero él pensó que era muy improbable, dado que quería dejar sus cuentas en orden y atender a un par de pacientes. Miep nos dio el mensaje esta mañana. No creímos que fuera muy conveniente esperar tanto. Todas estas preparaciones requieren explicaciones a varias personas que preferiríamos que no se enteraran de nada. Miep fue a preguntar si el doctor Dussel no podía venir el sábado después de todo, pero él dijo que no, y ahora está programado que venga el lunes.

Me parece raro que no haya aceptado de inmediato nuestra propuesta. Si lo llegan a tomar prisionero en la calle, no va a poder ayudar a sus pacientes ni ordenar sus cuentas, ¿así que porqué el retraso? Si me preguntas a mí, es una estupidez de parte de mi padre aceptar el retraso.

Tuya, Ana.

Pág. 64.Martes, 17 de noviembre, 1942.

Page 37: El Diario de Ana Frank

¡Queridísima Kitty!El señor Dussel ha llegado. Todo salió como fue planeado. Miep le dijo que

estuviera en un lugar determinado en frente de la oficina de correos a las 11 a.m., hora en la que un hombre lo iría a buscar, y él estuvo en el lugar indicado a la hora indicada. El señor Kleiman lo fue a buscar, le dijo que el hombre que él estaba esperando ver no había podido ir, y que pasara por la oficina para ver a Miep. El señor Kleiman usó el transporte público para volver a la oficina y el señor Dussel lo siguió caminando.

Eran las once y veinte cuando el señor Dussel golpeó a la puerta de la oficina. Miep le pidió que se sacara el abrigo, así la estrella amarilla no sería vista, y lo llevó a la oficina privada, donde el señor Kleiman lo mantuvo ocupado hasta que la señora de la limpieza se hubiera ido. Con el pretexto de que la oficina privada debía ser usada para algo más, Miep llevó al señor Dussel escaleras arriba, abrió la estantería de libros y entró, mientras que el señor Dussel la miraba asombrado.

Mientras tanto, nosotros siete nos había sentados alrededor de la mesa del comedor esperando la llegada del nuevo integrante con café y coñac. Miep primero lo llevó hacia la habitación de la familia Frank. Él inmediatamente reconoció nuestros muebles, pero no tenía idea de que nosotros estábamos arriba, justo sobre su cabeza. Cuando Miep se lo dijo, él estaba tan sorprendido que casi se desmaya. Gracias a Dios que no lo tuvo más en suspenso y lo trajo escaleras arriba. El señor Dussel se enterró en una silla y nos observó a todos, enmudecido de la sorpresa, como si creyera que podía leer la verdad en nuestras caras. Luego, balbuceó; “Aber… ¿no sind ustedes en Bélgica? la oficina, el auto, ¿ellos no venían? ¿Tu escape no funcionó?”

Le explicamos todo, como habíamos deliberadamente esparcido el rumor del oficial y del auto para ahuyentar a los alemanes y a cualquiera que pudiera buscarnos por curiosidad.

Pág. 65.El señor Dussel estaba sin habla ante tal ingenuidad, y no pudo hacer más nada

que observar todo con asombro y explorar el resto de nuestro adorable y ultra práctico anexo. Almorzamos todos juntos. Luego él tomó una pequeña siesta, nos acompañó para el té, desempacó las pocas pertenencias que Miep le había podido traer por adelantado y comenzó a sentirse mucho más a gusto. Especialmente cuando le entregamos el siguiente manuscrito con las reglas y regulaciones del anexo secreto (Una producción de los Van Daan):

Prospecto y guía para el anexo secreto

Una ayuda única para la comodidad de judíos y otros desposeídos.

Abierto todo el año: Ubicado en una hermosa, tranquila y arbolada zona de los alrededores de Ámsterdam. Sin residencias privadas en el vecindario. Se puede acceder a él con el transporte 13 ó el 17 y también con autos y bicicletas. Para aquellos a quines dichos transportes han sido prohibidos por las autoridades alemanes, también se puede llegar caminando. Habitaciones y departamentos amueblados y no amueblados están disponibles a toda hora, con y sin comidas.

Precio: Gratis.Dieta: Baja en calorías.Agua corriente en el baño (Perdón, no hay baño): y en varias paredes internas y

externas. Acogedoras estufas a leña para dar calor.Amplio espacio de almacenamiento para una variedad de víveres. Dos amplias y

modernas cajas de seguridad.

Page 38: El Diario de Ana Frank

Radio privada con línea directa a Londres, Nueva Cork, Tel Aviv y muchas otras ciudades. Disponible

Pág. 66.Para todos los residentes después de las 6 PM. No se pueden escuchar las

emisoras prohibidas, salvo ciertas excepciones, por Ej., las emisoras alemanas sólo pueden ser sintonizadas para escuchar música clásica. Está absolutamente prohibido escuchar los boletines de noticias alemanes (Sin importar en que emisora sean emitidos) e informar a otros sobre ellos.

Horas de descanso: Desde las 10 PM. A las 7.30 AM; domingos hasta las 10.15 AM. Debido a las circunstancias, también deben respetarse las horas de descanso diurnas indicadas por la dirección. Para asegurar la seguridad de todos, ¡Las horas de descanso deben ser estrictamente acatadas!

Actividades de tiempo libre: No están permitidas fuera de la casa hasta nuevo aviso.

Uso del lenguaje: Es necesario hablar en voz baja a toda hora. Sólo las lenguas de personas civilizadas deben ser utilizadas, lo que excluye el alemán.

Lectura y relajación: Ningún libro alemán debe ser leído, excepto obras clásicas y libros de materia educativa. Otros libros son opcionales.

Actividad física: Diaria.Canto: Sólo en voz baja, y luego de las 6 PM.Películas: Aviso previo requerido.Clases: Un curso semanal por correspondencia de mecanografía. Cursos en

inglés, francés, matemáticas e historia son ofrecidos a cualquier hora del día ó de la noche. El pago será trabajando como tutor, por Ej., de danés.

Departamento separado para el cuidado de animales domésticos (Con la excepción de gusanos, para los cuales se requiere un permiso especial).

Horario de comidas: Desayuno: A las 9 AM. Todos los días excepto en días festivos y

Pág. 67.Domingos; aproximadamente a las 11.30 AM. Los domingos y en días festivos.Almuerzo: Comida ligera. De 1.15 PM. A 1.45 PM. Cena: Puede ó no ser una comida caliente. El horario de la cena depende de las

emisiones radiales. Obligaciones del comité de provisiones: Los residentes deben estar preparados

para ayudar con el trabajo de oficina a toda hora. Baños: La ducha está disponible para todos los residentes luego de las 9 PM. Los

días domingo. Los residentes deben bañarse en el baño, la cocina, la oficina privada ó la oficina de enfrente, según lo deseen.

Alcohol: Sólo para propósitos medicinales.Fin. Tuya, Ana.

Jueves, 19 de noviembre, 1942.Queridísima Kitty;Justo como lo creímos, el señor Dussel es un hombre muy agradable. Por

supuesto que no le importó compartir la habitación conmigo; para ser honesta, no estoy precisamente encantada con que un extraño use mis cosas, pero hay que hacer sacrificios por una buena causa, y estoy contenta de poder hacer este pequeño al menos.

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“Si podemos salvar aunque sea a uno de nuestros amigos, el resto no importa” Dijo mi padre, y está absolutamente en lo cierto.

El primer día que le señor Dussel estuvo aquí, me hizo todo tipo de preguntas – Por ejemplo, a qué hora viene a la oficina la señora de limpieza, cómo nos habíamos organizados para usar el lavabo, cuando teníamos permitido usar el baño. Puedes reírte, pero estas cosas no son tan sencillas en un escondite. Durante el día, no podemos hacer ningún ruido que pueda ser escuchado escaleras abajo, y cuando alguien más está allí, como la

Pág. 68.Señora de la limpieza, tenemos que ser extra cuidadosos. Le expliqué todo esto al

señor Dussel pacientemente, pero me sorprendí al ver cuán lento era para comprender las cosas. Pregunta todo dos veces y aún así no puede recordar lo que le has dicho.

Quizás esté confundido con el cambio repentino y lo supere pronto. De todos modos, todo está saliendo bien.

El señor Dussel nos ha contado mucho del mundo exterior que extrañamos hace tanto tiempo. Tenías noticias tristes. Incontables cantidades de amigos y conocidos han sido dirigidos a un terrible destino. Noche tras noche, vehículos militares verdes y grises recorren las calles. Golpean a cada puerta, preguntando si hay algún judío viviendo allá. Si es así, la familia entera es llevada. Sino, proceden a la siguiente casa. Es imposible escapar a sus agarras si no te escondes. También suelen merodear con listas, golpeando sólo en aquellas puertas donde saben que pueden obtener un gran botín. A veces ofrecen una recompensa, una determinada cantidad por cabeza. Es como la caza de esclavos en las viejas épocas. No pretendo simplificarlo; es demasiado trágico para hacerlo. Por las noches cuando está oscuro, suelo ver largas filas de inocentes personas, acompañadas por niños llorando, caminando y caminando, al mando de un puñado de hombres que los golpean hasta que casi caen al piso. Nadie está a salvo. Los enfermos, los viejos, los niños, los bebes y las mujeres embarazadas - todos marchan hacia la muerte.

Somos muy afortunados aquí, alejados del horror. No tendríamos siquiera que pensar en todo este sufrimiento sino fuera por el hecho de que estamos muy preocupados por aquellos que queremos, a quienes ya no podemos salvar. Me siento vacía durmiendo en mi cama cálida, mientras en algún lado allí afuera mis más queridas amigas se están desvaneciendo, exhaustas, ó están siendo golpeadas ferozmente.

Me asusto cuando pienso en amigas cercanas

Pág. 69.Que ahora están libradas a la compasión de los monstruos más crueles en toda la

tierra.Y todo ello por que son judías. Tuya, Ana.

Viernes, 20 de noviembre, 1942.Queridísima Kitty;Realmente no sabemos como reaccionar. Hasta ahora, pocas noticias sobre los

judíos han llegado, y pensamos que lo mejor era mantenernos tan alegres y esperanzados como fuera posible. De vez en cuando, Miep solía informarnos sobre lo que le pasaba a algún amigo, y mi madre ó la señora Van Daan empezaban a llorar, así que ella decidió que era mejor no decir más nada. Pero bombardeamos al señor Dussel con preguntas, y las historias que tenía para contar son tan terribles y espantosas que aún no podemos sacarlas de nuestras mentes. Una vez que digiramos las noticias, probablemente volvamos a nuestros chistes y bromas usuales. No nos haría ningún bien a nosotras ni a los que están afuera que sigamos con un humor tan espantoso como el

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que tenemos ahora ¿Y qué sentido tendría convertir el anexo secreto en un anexo melancólico?

No importa que esté haciendo, no puedo dejar de pensar en aquellos que se han ido. Me encuentro a mi misma riéndome y recuerdo que es una desgracia que esté de tan buen humor ¿Pero se supone que me pase todo el día llorando? No, no puedo hacer eso. Esta tristeza pasará.

Agregado a esta miseria, hay otra más, pero de una naturaleza más personal, y se minimiza en comparación con lo que te acabo de contar. Aún sí, no puedo evitar contarte que últimamente me he comenzado a sentir abandonada. Estoy rodeada por una sensación de vacío. No solía darle mucha importancia, dado que mi mente estaba ocupada con mis amistades y en pasarla bien. Pero ahora sólo pienso en cosas tristes, sobre lo que pasa y sobre mí misma. Me ha tomado un tiempo, pero finalmente me he dado cuenta de que

Pág. 70.Mi padre, sin importar lo agradable que sea, no puede tomar el lugar de mi antiguo

mundo. En lo que se refiere a mis sentimientos, mi madre y Margot han dejado de importar hace rato.

¿Pero por qué te molesto con estas tonterías? Soy terriblemente desagradecida, Kitty, lo sé, pero cuando he sido regañada miles de veces y tengo todas estas tragedias en que pensar, ¡Mi mente comienza a andar!

Tuya, Ana.

Sábado, 28 de noviembre, 1942.Queridísima Kitty;Hemos estado usando mucha electricidad y nos hemos excedido de nuestra

ración. El resultado: Exceso de economía y la posibilidad de que nos corten la luz. Sin luz por 14 días; ¿Es una idea agradable, no? Pero quien sabe, ¡quizá no sea por tanto tiempo! Está muy oscuro para leer después de las cuatro ó cuatro quince, así que pasamos el tiempo con las más locas actividades: contando adivinanzas, haciendo ejercicios en la oscuridad, hablando inglés o francés, críticas de libros – luego de un rato todo se vuelve aburrido. Ayer descubrí un nuevo pasatiempo: Usar un buen par de binoculares para espiar las habitaciones iluminadas de los vecinos. Durante el día nuestras cortinas no pueden ser abiertas, ni siquiera una pulgada, pero no hay peligro cuando está tan oscuro.

Nunca creí que los vecinos pudieran ser tan interesantes. Los nuestros lo son, en cierto modo. Me he encontrado con algunos cenando, una familia haciendo películas caseras y el dentista al otro lado del corredor trabajando en una aterradora anciana.

El señor Dussel, el hombre del que se decía que se llevaba tan bien con los niños y que los adoraba completamente, ha resultado ser un anticuado disciplinador y sermoneador de los más largos sermones acerca de modales. Dado que tengo el singular placer de compartir mí muy estrecha habitación con su Excelencia, y dado que soy considerada

Pág. 71.la que peor se comporta de los tres jóvenes, todo lo que puedo hacer para evitar

escuchar los mismos sermones repetidamente es pretender que no los escucho. Esto no sería tan malo si el señor Dussel no fuese tan soplón y no hubiera elegido a mi madre para recibir sus reportes. Si el señor Dussel me da un sermón, mi madre viene por detrás y me sermonea aún más. Y si tengo mucha suerte, ¡la señora Van Daan me llama cinco minutos después para continuar el sermón!

Realmente, no es fácil ser el centro de atención como la maleducada de una familia de quejosos.

Page 41: El Diario de Ana Frank

En mi cama por la noche, al reflexionar sobre mis pecados y mis exagerados defectos, me confundo con la gran cantidad de cosas que debo considerar, por lo que lloro ó río, de acuerdo a mi estado de ánimo. Luego me duermo con la extraña sensación de querer ser diferente de lo que soy ó de lo que quiero ser, o quizás de comportarme de modo distinto a lo que soy ó quiero ser.

Ay, querida, ahora también estoy confundiéndote a vos. Perdóname, pero no me gusta tachar cosas, y en estos tiempos de escasez, es un tabú derrochar una hoja de papel. Así que sólo puedo advertirte que no releas el pasaje de arriba y que no trates de llegar al fondo de la cuestión, ¡Porque nunca encontrarás el camino de salida!

Tuya, Ana.

Lunes, 7 de diciembre, 1942.Queridísima Kitty;Hanukkah y el día de San Nicolás casi coinciden este año; están sólo separados

por un día. No tuvimos una gran celebración por Hanukkah, sólo intercambiamos unos pequeños regalos y encendimos las velas. Dado que el abastecimiento de velas escasea, sólo las encendimos por 10 minutos, peor mientras

Pág. 72.Cantemos las canciones, no importa. El señor Van Daan hizo un menorah de

madera, así que eso también pudimos cumplirlo.El día de San Nicolás, el sábado, fue mucho más divertido. Durante la cena Bep y

Miep estaban tan ocupadas susurrando algo a mi padre que nuestra curiosidad aumentó y sospechamos que se traían algo entre manos. A las ocho, todos marchamos escaleras abajo a través del pasillo en medio de la oscuridad (Me dio escalofríos, ¡y deseaba estar de vuelta a salvo escaleras arriba!). Pudimos encender la luz, dado que la habitación no tenía ventanas. Cuando eso se hizo, mi padre abrió el gran placard.

“¡Oh, qué maravilloso!” exclamamos.En la esquina había una gran canasta decorada con papeles coloridos y una

máscara de Pedro el Negro. (Black Peter)Rápidamente llevamos la canasta escaleras arriba con nosotros. Dentro de ella

había un pequeño regalo para cada uno de nosotros, incluyendo una dedicatoria. Dado que estas familiarizada con los poemas que la gente se escribe una a otra en el día de San Nicolás, No los voy a copiar para ti.

Recibí una muñeca Kewpie, mi padre un sujetalibros, etc. Bueno, fue una buena idea de todos modos, y ya que ninguno de nosotros había celebrado el día de San Nicolás antes, fue un buen momento para comenzar.

Tuya, Ana.

PD: También había regalos para cada uno escaleras arriba, unas pequeñas cosas que sobraron de aquellos buenos tiempos; además Bep y Miep siempre son muy agradecidas por el dinero.

Hoy escuchamos que el cenicero del señor Van Daan, el marco para fotografías del señor Dussel, y el sujetalibros de mi padre, fueron hechos por nadie más que el señor Voskuijl ¡Como alguien puede ser tan capaz con sus manos es un misterio para mí!

Pág. 73.Jueves, 10 de diciembre, 1942.Queridísima Kitty;

Page 42: El Diario de Ana Frank

El señor Van Daan solía estar en el negocio de las carnes, los embutidos y las especias. Fue contratado pro su conocimiento de especias, y sin embargo, para nuestro agrado, fueron sus talentos con los embutidos lo que nos ha sido útil.

Ordenamos una gran cantidad de carne (De contrabando, por supuesto) que planeábamos preservar en caso de que vinieron tiempos peores. El señor Van Daan decidió hacer salchichas y embutidos ahumados. Me divertí viéndolo poner la carne en el molinillo: una, dos, tres veces. Luego agregó los ingredientes restantes a la carne y usó un tubo largo para empujar la mezcla dentro de los moldes. Comimos salchichas con sauerkrauft en el almuerzo, peor las salchichas, que iban a ser enlatadas, se tenían que secar primero, así que las colgamos sobre un poste colgado al techo. Todo el que entraba en la habitación se reía a carcajadas cuando veía las salchichas colgantes. Era una imagen muy cómica.

La cocina era un completo desorden. El señor Van Daan, inmerso en uno de los delantales de su esposa y luciendo más gordo que nunca, estaba ocupado con la carne. Con sus manos cubiertas en sangre, su cara colorada y su delantal a lunares, parecía un carnicero de verdad. La señora Van Daan trataba de hacer todo al mismo tiempo: aprender danés de un libro, remover la sopa, cuidar la carne, y quejarse por su costilla rota ¡Eso es lo que sucede cuando señoras mayores (!) tratan de hacer ejercicios estúpidos para deshacerse de esa grasa de más en la parte trasera! Dussel tenía una infección en su ojo y estaba sentado junto a la estufa aplicándose té de camomila. Pim, sentado en el único rayo de sol que venía a través de la ventana, se estuvo moviendo de un lado a otro constantemente para no estorbar. Su reuma lo debe de haber estado molestando porque estaba bastante encorvado y miraba al señor Van Daan con una expresión de agonía en su cara.

Pág. 74.Me recordó a esos viejos inválidos que se ven en los asilos para pobres. Peter

jugaba al rombo en la habitación con Mouschi, el gato, mientras que mi madre, Margot y yo estábamos pelando las papas hervidas. Si te fijas bien, ninguno de nosotros estaba haciendo su trabajo apropiadamente, por que estábamos todos muy ocupados observando al señor Van Daan.

Dussel ha comenzado su práctica dental. Sólo por diversión, describiré la sesión con su primer paciente.

Mi madre estaba planchando, y la señora Van Daan, su primera víctima, se sentó en una silla en el medio de la habitación. Dussel, desempacando su maletín con aires de importancia, pidió un poco de agua de colonia, que podría ser usada como desinfectante, y vaselina, que tendría que reemplazar a la cera. Miró dentro de la boca de la señora Van Daan y encontró dos dientes que la hacían retorcerse del dolor y llorar incoherentemente cada vez que él los tocaba. Luego de una larga examinación (Larga según la señora Van D. ya que en realidad no tomó más de dos minutos), Dussel comenzó a excavar. Pero la señora Van Daan no tenía intención de dejarlo. Comenzó a mover en el aire sus piernas y brazos hasta que el señor Dussel soltó el utensilio… y quedó atascado en el diente de la señora Van Daan ¡Ahí empezó lo bueno! La señora Van Daan se movió salvajemente en todas las direcciones, lloró (Tanto como es posible con un instrumento como ese en tu boca), trató de removerlo, pero sólo consiguió atascarlo aún más. El señor Dussel calmadamente observó la escena, con las manos en sus caderas, cuando el resto de la audiencia se descostillaba de risa. Por supuesto, eso estuvo muy mal de nuestra parte. Si hubiera sido yo, estoy segura de que hubiera gritado aún más fuerte. Después de mucho retorcerse, patalear, llorar y gritar, la señora Van Daan finalmente logró arrancarse la cosa fuera de su boca, y el señor Dussel continuó con su trabajo como si nada hubiese pasado. Fue tan rápido que la señora Van Daan no tuvo tiempo de hacer más escándalos.

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Pág. 75.Pero luego, él tuvo más ayuda que la que nunca había tenido: no menos de dos

asistentes: el señor Van Daan y yo hicimos nuestro trabajo bien. Toda la escena se parecía a uno de esos grabados de la Edad Media titulado: “Charlatán trabajando”. Mientras tanto, la paciente estaba perdiendo la paciencia, dado que tenía que controlar “su” sopa y “su” comida. Una cosa es cierta: ¡Pasará un buen tiempo antes de que la señora Van Daan haga otra cita con el dentista!

Tuya, Ana.

Domingo, 13 de diciembre, 1942.Queridísima Kitty;Estoy sentada cómodamente en la oficina de delante, espiando hacia fuera, a

través de un agujero en las gruesas cortinas. Está oscuro, pero hay luz suficiente como para escribir.

Es muy extraño ver a la gente pasar caminando. Todos parecen estar tan apurados que casi tropiezan con sus propios pies. Aquellos en bicicletas pedalean tan rápido que no puedo siquiera ver quien va arriba de la bicicleta. La gente en este vecindario no es particularmente atractiva para observar. Los niños especialmente están tan sucios que no querrías tocarlos ni con una pinza. Verdaderos niños de barrios bajos con narices mocosas. Difícilmente puedo entender algo de lo que dicen.

Ayer a la tarde, cuando Margot y yo nos estábamos bañando, dije, “Que pasaría si tomáramos una caña de pescar y subiéramos a esos niños uno por uno cada vez que pasan, los metiéramos en la ducha, laváramos y arregláramos su ropa y luego…”

“Y mañana estarían tan sucios y desaliñados como estaban antes”, Margot respondió.

Pero yo divago. Hay otras cosas que mirar también: autos, botes, la lluvia. Puedo escuchar el transporte público y a los niños y disfruto.

Nuestros pensamientos están sujetos a tan pocos cambios como nosotros mismos.

Pág. 76.Son como un carrusel, pasando de los judíos a la comida, de la comida a la

política. Y hablando de judíos, vi a dos cuando estaba espiando por la ventana. Me sentí como si estuviera admirando una de las Siete Maravillas del Mundo. Me produjo un sentimiento tan peculiar, como si los hubiera denunciado a las autoridades y ahora estuviera espiando su desventura.

Enfrente de la casa hay una barcaza. El capitán vive allí con su esposa e hijos. Tiene un pequeño perrito. Lo conocemos sólo por sus ladridos y por su cola, que puede ser vista cuando corretea por la cubierta del barco. Ay, que pena, acaba de empezar a llover y la gente se esconde debajo de sus paraguas. Todo lo que puedo ver son pilotos de lluvia y, de tanto en tanto, una cabeza cubierta con alguna gorra. De hecho, ni siquiera necesito mirar. Puedo reconocer a las mujeres tan sólo de un vistazo: gordas de tanto comer papas, vestidas con sacos verdes ó rojos y con zapatos usados, una bolsa de compras colgando de su brazo, con expresiones de enojo ó de buen humor, dependiendo del humor de sus esposos.

Tuya, Ana.

Martes, 22 de diciembre, 1942.Queridísima Kitty;Todo el anexo estaba encantado con la noticia de que vamos a recibir un cuarto

más de libra de manteca para Navidad. Según el periódico, cada uno debe recibir media libra, pero ellos se refieren a aquellas almas con suerte que reciben sus bonos de ración

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del gobierno, no a aquellos judíos en escondites como nosotros que sólo pueden costear el pago de cuatro en vez de ocho libros de ración en el mercado negro. Cada uno de nosotros va a cocinar algo con la manteca. Esta mañana hice dos tortas y unas galletas. Hay mucho para hacer escaleras arriba, y mi madre

Pág. 77.Me ha informado que no estudiaré ni leeré hasta que todas las tareas de la casa

hayan sido terminadas.La señora Van Daan está recostada cuidando de costilla lastimada. Ella se queja

todo el día, y demanda constantemente que sus vendajes sean cambiados y en general está disconforme con todo. Estaré contenta cuando se mejore y puedo volver a limpiar y cuidar de sí misma porque, debo admitir, ella es extraordinariamente laboriosa y ordenada, y mientras esté en una buena condición física y mental, es bastante alegre.

Como si no escuchara suficientes “shh”, “shh” durante el día porque hago mucho ruido, mi querido compañero de cuarto ha tomado la costumbre de decirme “shh”, “shh” toda la noche. Según él, ni siquiera debería girarme en la cama. Me rehúso a hacerle caso, y la próxima vez que me calle, lo voy a callar yo a él.

Él se vuelve más exasperante y egocéntrico cada día. Excepto por la primera semana, todavía no he visto siquiera una de las galletitas que él me ha prometido tan generosamente. Él es particularmente molesto los domingos, cuando enciende la luz al amanecer para hacer ejercicios por diez minutos.

Para mí, el tormento parece durar por horas, dado que las sillas que uso para hacer mi cama más larga son movidas por él debajo de mi cabeza. Luego de finalizar sus ejercicios con un estiramiento de brazos, Su Alteza comienza a vestirse. Su ropa interior queda colgando de un libro, así que se estira para alcanzarla y luego se vuelve, pasando por mi cama. Pero su corbata está en la mesa, así que otra vez se va tropezando con las sillas en su camino a la mesa.

Pero no debo usar más de tu tiempo quejándome sobre un viejo desagradable. Mis planes de venganza, como aflojar la lamparita, trabar la puerta y esconder su ropa, han tenido que ser abandonados desafortunadamente para no alterar la paz.

¡Ay, me estoy volviendo tan sensata! Tenemos que ser Pág. 78.Razonables acerca de todo lo que hacemos aquí: estudiar, escuchar, cerrar la

boca, ayudar a otros, ser amable, hacer compromisos ¡y no sé que más! Tengo miedo de que mi sentido común, que siempre fue poco desde un principio, se desgastara muy rápido y no tendré nada de él para cuando termine la guerra.

Tuya, Ana.

Miércoles, 13 de enero, 1943.Queridísima Kitty;Esta mañana fui constantemente interrumpida, y como resultado no pude terminar

ni una de las cosas que había comenzado.Tenemos un nuevo pasatiempo, llamado llenar paquetes con salsa Gravy (no

existe traducción, es una salsa típica europea). L salsa es uno de los productos de Gies. & Co. El señor Kugler no ha podido encontrar a nadie más para que llene los paquetes, y además, es más barato si tu mismo haces el trabajo. Es el tipo de trabajo que hacen en prisión. Es increíblemente aburrido y te marea.

Cosas terribles están pasando afuera. En cualquier momento de la noche ó el día, gente pobre y desamparada es arrancada de su hogar. Sólo se les permite llevar una bolsa y un poco de dinero con ellos, y aún sí, les roban estas posesiones en el camino. Las familias son divididas; hombre, mujeres y niños son separados. Los niños llegan de la

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escuela sólo para descubrir que sus padres han desaparecido. Los cristianos en Holanda también viven con temor porque sus hijos son enviados a Alemania. Todos están atemorizados. Cada noche cientos de aviones sobrevuelan Holanda en su camino hacia ciudades alemanas, para bombardear territorio alemán. Cada hora cientos, ó quizás miles de personas son asesinadas en Rusia Y África. Nadie puede mantenerse fuera del conflicto,

Pág. 79.el mundo entero está en guerra, y aunque a los Aliados les está yendo mejor, el fin

no está a la vista.Y en lo que respecta a nosotros, somos bastante afortunados. Mucho más que

millones de personas. Es tranquilo y seguro aquí, y estamos usando dinero para comprar comida. Somos tan egoístas que hablamos de “después de la guerra” y esperamos con ansias nueva ropa y zapatos, cuando de hecho deberíamos estar ahorrando cada centavo para ayudar a otros después de la guerra, para salvar lo que podamos.

Los niños en este vecindario corretean en shorts livianos y zuecos. No tienen sacos, ni medias, ni gorras y nadie para ayudarlos. Mordisqueando una zanahoria para evitar el hambre, camina desde sus frías casas a través de las heladas calles hacia aulas aún más frías. Las cosas en Holanda se han puesto tan malas que hordas de niños paran a los transeúntes rogándoles por un pedazo de pan.

Podría pasar horas contándote los sufrimientos que la guerra ha traído, pero sólo me haría a mí misma más miserable. Todo lo que podemos hacer es esperar, lo más calmados posible, por su fin. Judíos y cristianos por igual están esperando, el mundo entero está esperando, y muchos esperan la muerte.

Tuya, Ana.

Sábado, 30 de enero, 1943.Queridísima Kitty;Me estoy carcomiendo de ira, y aún así no puedo demostrarlo. Me gustaría gritar,

patalear, dar una buena sacudida a mi madre, llorar y no se que más por las palabras desagradables, las miradas burlonas y acusaciones que ella me lanza día tras día, perforándome como flechas a un arco tensado, que son casi imposibles de sacar de mi cuerpo. Quisiera gritar a mi madre, a Margot, a los Van Daan, a Dussel y a mi padre también: “Déjenme en paz, déjenme tener al menos una noche en la que me duerma llorando con los ojos

Pág. 80.Ardiéndome y mi cabeza latiendo ¡Déjenme irme, lejos de todo, fuera de este

mundo!” Peor no puedo hacerlo. No puedo dejarles ver mis dudas, ó las heridas que inflingieron en mí. No podría tolerar su lástima o sus comentarios irónicos. Sólo me haría querer gritar aún más.

Todos creen que trato de lucirme cuando hablo, que soy ridícula cuando callo, insolente cuando respondo, astuta cuando tengo una buena idea, perezosa cuando estoy cansada, egoísta cuando como un mordisco más de lo que debería, estúpida, cobarde, calculadora, etc., etc. Todo el día no escucho más que lo exasperante que soy, y aunque me río de ello y pretendo que no me importa, sí me importa. Desearía poder pedir a Dios que me diera otra personalidad, una que no fuera antagónica con la de todos.

Pero eso es imposible. Estoy condenada a tener el carácter con el que nací, y aún así estoy segura de que no soy una mala persona. Doy lo mejor de mí para complacer a todos, más de lo que sospecharían en un millón de años. Cuando estoy escaleras arriba, trato de reírme de ello porque no quiero que vean mis problemas.

Page 46: El Diario de Ana Frank

Más de una vez, tras una serie de absurdos reproches, le he largado en la cara a mi madre: “No me importa lo que digas ¿Porqué no te lavas las manos conmigo – soy un caso perdido?”. Por supuesto, ella me dice que no le conteste así y virtualmente me ignora por dos días. Luego de repente todo es olvidado y me trata como a alguien más.

Me es imposible estar sonriente un día y ser puro veneno al día siguiente. Prefiero elegir un punto intermedio, que no es tan intermedio, y quedarme mis pensamientos para mí misma. Quizás algún día trate a los otros con el mismo desprecio con que ellos me tratan a mí. Ay, si tan sólo pudiera. Tuya, Ana.

Pág. 81.Viernes, 5 de febrero, 1943.Queridísima Kitty;Aunque han pasado años desde que te escribí sobre los altercados, aún no ha

habido cambios. Al principio, el señor Dussel tomó nuestros prontamente olvidados altercados muy seriamente, pero ahora se ha acostumbrado a ellos y ya no trata de mediar en ellos.

Margot y Peter noson exactamente lo que yo llamaría “Jóvenes”; ambos son muy callados y aburridos. Al lado de ellos, parezco un dolor de pulgar, y siempre me están diciendo, “Margot y Peter no se comportan así ¡Porque no sigues el ejemplo de tu hermana!” Odio eso.

Confieso que no tengo ningún deseo de parecerme a Margot. Ella es de temperamento débil y pasivo para mi gusto; Ella se deja manejar por otros y siempre cede ante la presión ¡Yo quiero tener más vivacidad! Pero me guardo este tipo de ideas para mí misma. Se reirían de mí si usara esto en mi defensa.

Durante las comidas el aire está lleno de tensión. Afortunadamente, los estallidos son contenidos por los “comedores de sopa”, la gente de la oficina que suba a tomar una taza de sopa en el almuerzo.

Esta tarde el señor Van Daan volvió a traer el tema de que Margot come muy poco. “Supuse que lo hacías para mantener tu figura”, agregó en un tono de burla.

Mi madre, quien siempre sale en defensa de Margot, dijo en voz alta, “No puedo tolerar esas estúpidas insinuaciones un minuto más”

La señora Van D. se puso roja como un tomate. El señor Van D. miró fijo hacia delante y no dijo nada.

Aún así, solemos tener momentos de risas. Hace no mucho la señora Van D. nos entretenía con uno ú otro comentario sin sentido. Ella hablaba sobre el pasado, sobre cuán bien se llevaba con su padre y lo encantadora que era.

Pág. 82.“Y tú sabes”, continuó, “mi padre me dijo que si un caballero se ponía alguna vez

fresco conmigo, debía decir, ‘recuerse señor, que soy una dama`, y el sabría a lo que me refería”. Nos descostillamos de la risa, como si nos hubiera dicho un chiste.

Incluso Peter, aunque es usualmente silencioso, ocasionalmente da lugar a risas. Tiene la mala suerte de adorar palabras extranjeras sin saber lo que significan. Una tarde no podíamos usar el baño porque había visitantes en la oficina. Para advertirnos del desagradable olor, pegó un cartel en la puerta del baño: “RSVP-GAS!” por supuesto quiso decir “Peligro-gas” pero él pensó que RSVP lucía más elegante. Él no tenía la más pálida idea de que significaba “por favor responda”

Tuya, Ana.

Sábado, 27 de febrero, 1943.Queridísima Kitty;

Page 47: El Diario de Ana Frank

Pim está esperando la invasión para cualquiera de estos días. Churchill tuvo neumonía pero está mejorando. Gandhi, el campeón de la libertad india, está en una de sus tantas huelgas de hambre.

La señora Van D. asegura que es fatalista ¿Pero quién se asusta más cuando se oyen disparos? Nadie Más que Petronella Van Daan.

Jan trajo la carta episcopal que los obispos escribieron a los fieles. Era hermosa e inspiradora. “Gente de Países Bajos, levántense y luchen ¡Cada uno de nosotros debe elegir sus armas para luchar por la libertad de nuestro país, nuestra gente y nuestra religión! Brinden su ayuda y apoyo ¡Actúen ahora!” Esto es lo que dicen en sus sermones desde el púlpito ¿Hará algún bien? Es definitivamente muy tarde para ayudar a nuestros hermanos judíos.

¿Adivina que nos ha pasado ahora? El dueño del

Pág. 83.Edificio lo ha vendido sin informárselo al señor Kugler y al señor Kleiman. Una

mañana el dueño llegó con un arquitecto para echar un vistazo al lugar. Gracias a dios que el señor Kleiman estaba en la oficina. Él le mostró al caballero todo lo que había para ver, con excepción del anexo secreto. Dijo que se había olvidado las llaves en su casa y el nuevo dueño no hizo más preguntas ¡Si llegaran a volver para ver el anexo! En ese caso, ¡estaríamos en grandes problemas!

Mi padre vació un fichero para Margot y para mí y lo llenó con fichas vacías de un lado. Esto se convertirá en nuestro fichero de lecturas, en el cual Margot y yo debemos anotar los libros que hemos leído, el autor y la fecha. He aprendido dos nuevas palabras: “brothel” (burdel en inglés) y “coquette” (coqueta en francés). Me he comprado un anotador para palabras nuevas.

Hay una nueva división de manteca y margarina. Cada persona debe poner su porción en su propio plato. La distribución es muy injusta. Los Van Daan, que siempre hacen el desayuno, se sirven una porción y media más de lo que nos sirven a nosotros. Mis padres tienen miedo de decir algo y que produzca una discusión, lo cual es una lástima, por que creo que a gente así se le debe dar una cucharada de su propia medicina.

Tuya, Ana.

Jueves, 4 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;La señora Van D. tiene un nuevo sobrenombre – la hemos empezado a llamar

señora Beaverbrook. Por supuesto, eso no significa nada para ti, así que déjame explicarte. Un tal señor Beaverbrook habla en la radio inglesa acerca de lo que considera ser un demasiado clemente bombardeo a Alemania. La señora Van Daan, quien siempre contradice a todos, incluyendo a Churchill y a los reportes de noticias, está completamente de acuerdo

Pág. 84.Con el señor Beaverbrook. Así que pensamos que sería una buena idea que

estuviera casada con él, y dado que se sintió halagada por este comentario, decidimos llamarla señora Beaverbrook de ahora en adelante.

Vamos a tener un nuevo empleado para el almacenamiento, ya que el anterior va a ser enviado a Alemania. Eso es malo para él peor bueno para nosotros porque el nuevo no va a ha estar familiarizado con el edificio. Todavía tenemos miedo del hombre que trabajaba en el depósito.

Gandhi está comiendo nuevamente.

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El mercado negro está creciendo enormemente. Si tuviéramos dinero suficiente para pagar los ridículos precios, podríamos abastecernos hasta el hartazgo. Nuestro verdulero compra papas del “Whermacht” y las trae en sacos a la oficina privada. Dado que sospecha que nos estamos escondiendo aquí, habló indirectamente de venir durante la hora del almuerzo, cuando los empleados del depósito no están.

Tanta pimienta está siendo molida en el momento que estornudamos y tosemos con cada suspiro que damos. Cada persona que sube no saluda con un “achú”. La señora Van Daan jura que no bajará las escaleras; Una pizca más de pimienta y se enfermará.

No creo que mi padre esté en un buen negocio. Sólo pectina y pimienta. Dado que está en el negocio de la comida, ¿porqué no hacer dulces?

Una tormenta de palabras me golpeó esta mañana. El aire estaba atravesado por expresiones tan duras que mis orejas resonaban con “lo malo de Ana…” y “lo bueno de los Van Daan…” ¡Fuego y azufre!

Tuya, Ana.

Pág. 85.Miércoles, 10 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;Hubo un cortocircuito anoche, y además de eso, los bombardeos no pararon hasta

el amanecer. Todavía no he superado mi temor a los aviones y a los disparos, y me arrastro hasta la cama de mi padre casi todas las noches en busca de protección. Sé que suena infantil, ¡Pero espera a que te pase a ti! Los cañonazos hacen tanto ruido que no puedes escuchar tu propia voz. La señora Beaverbrook, la fatalista, prácticamente rompió en llanto y dijo con voz tímida, “Ay, es tan feo. Ay, ¡las armas son tan ruidosas!” – que es otra manera de decir “tengo tanto miedo”.

No parecía tan malo con las velas encendidas como cuando estábamos a oscuras. Estaba temblando, como cuando tengo fiebre, y le rogué a mi padre que volviera encender las velas. Él fue determinante: No iba a encender la luz. De repente escuchamos un disparo de ametralladora, y eso es diez veces peor que las armas antiaéreas. Mi madre saltó de la cama y, para gran molestia de Pim, encendió una vela. Su respuesta a las quejas de él fue, “Después de todo, Ana no es una ex combatiente” ¡Y eso puso fina la cuestión!

¿Te he contado alguno de los otros temores de la señora Van D.? No lo creo. Para mantenerte al tanto de las últimas aventuras en el anexo secreto, debería contarte esto también: Una noche la señora Van Daan creyó haber escuchado fuertes pisadas en el ático, y tenía tanto miedo que fueran ladrones, que despertó a su marido. En ese mismo momento, los ladrones desaparecieron y el único sonido que el señor Van Daan pudo escuchar fueron los fuertes latidos del asustado corazón de su fatalita esposa. “¡Ay, Putti!” (Putti es el sobrenombre para su esposo) “Deben haberse llevado todas nuestras salchichas y frijoles disecados ¿Y qué habrá pasado con Peter? ¿Ay, crees que todavía estará sano y salvo en su cama?”

Pág. 86.“Estoy seguro de que no han robado a Peter. Deja de ser tan miedosa, ¡y déjame

volver a dormir!”Imposible. La señora Van Daan estaba muy asustada para dormir. Unas pocas noches más tarde, toda la familia Van Daan fue despertada pro

sonidos fantasmales. Peter fue al ático con una linterna – en puntas de pie- ¿y qué crees que vio salir corriendo? ¡Una legión de ratas enormes!

Page 49: El Diario de Ana Frank

Una vez que supimos quienes eran los ladrones, dejamos a Mouschi dormir en el ático y nunca vimos a nuestros indeseables huéspedes otra vez… al menos no durante la noche.

Unas noches atrás (eran las siete treinta y aún había luz), Peter subió al loft a buscar unos viejos diarios. Se tenía que sujetar fuertemente a una trampa para subir las escaleras. Bajó su mano sin mirar, y casi se cayó de la escalera del shock y el pánico. Sin darse cuenta, había puesto su mano sobre una gran rata, que le había mordido el brazo. Para cuando nos localizó, blanco como el papel y con sus rodillas temblando, la sangre se había desparramado por su pijama. No hay duda de porqué estaba tan asustado – tocar una rata no es muy divertido, especialmente cuando se queda con un pedazo de tu brazo.

Tuya, Ana.

Viernes, 12 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;Déjame presentarte: Mamá Frank, ¡la abogada de los niños! Extra mantequilla

para los niños, los problemas que enfrenta la juventud actual – Sólo nombra algo, y mi madre estará defendiendo los derechos de la generación joven. Luego de una discusión ó dos, siempre se sale con la suya.

Una de las latas de lengua a la vinagreta se ha echado a perder. Un festín para Mouschi y Boche.

Todavía no has conocido a Boche, a pesar de que ella

Pág. 87.Ya estaba aquí antes de que viniéramos a escondernos. Es el gato del depósito y

de la oficina, el que mantiene a las ratas alejadas del cuarto de conservas. Su extraño y diplomático nombre puede ser explicado fácilmente. Durante un tiempo la firma Gies & co. Tuvo dos gatos: uno para el depósito y otro para el ático. Sus caminos se cruzaban de tanto en tanto, lo que invariablemente resultaba en peleas. El gato del depósito siempre era el agresor, mientras que el gato del ático salía siempre victorioso, igual que en política. Así que el gato del depósito fue llamado El Alemán, o “Boche”, y el gato del ático fue llamado El Inglés, ó “Tommy”. Un tiempo después se deshicieron de Tommy, pero Broche está siempre allí para entretenernos cuando bajamos las escaleras.

Hemos estado comiendo tantos frijoles negros y navales que no puedo siquiera mirarlos. Sólo pensar en ellos me da nauseas.

El consumo de pan durante la cena ha sido cancelado.Papá acaba de decir que no está de muy buen humor ¡Sus ojos lucen tan tristes

otra vez, pobre hombre!No puedo separarme del libro “un golpe a la puerta” de Ina Bakker Boudier. Esta

saga familiar está extremadamente bien escrita, pero las partes que hablan sobre la guerra, los escritores y la emancipación de la mujer no son muy buenas. Para ser honesta, estos temas no me interesan mucho.

Terribles olas de bombardeos en Alemania. El señor Van Daan está muy quejoso. La razón: La reducción del suministro de cigarrillos.

El debate sobre si comenzar a comer la comida enlatada ó no terminó a nuestro favor.

No puedo usar ninguno de mis zapatos, excepto mis botas de ski, que no son muy prácticas dentro de la casa. Untar de sandalias que fueron compradas por 6.50 guilders me duraron exactamente una semana. Quizás Miep pueda encontrar algo en el mercado negro.

Es tiempo de cortar el pelo de mi padre. Pim jura que

Page 50: El Diario de Ana Frank

Pág. 88.Hago un tan buen trabajo que nunca irá a una peluquería después de la guerra ¡Si

tan sólo no le hiciera cortes en la oreja tan seguido!Tuya, Ana.

Jueves, 19 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;Turquía ha entrado en la guerra. Hay mucho entusiasmo. Esperamos ansiosos los

reportes radiales.

Viernes, 19 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;En menos de una hora, la alegría fue seguida de la desilusión. Turquí no ha

entrado en la guerra aún. Era sólo un ministro hablando de que Turquía abandonaría su neutralidad en cualquier momento. El vendedor de diarios en Dam Square anunciaba “¡Turquía de lado de Inglaterra!” y los diarios le eran arrancados de las manos. Así fue como oímos el esperanzador rumor.

Los billetes de mil guilders vana ser declarados inválidos. Esto será un duro golpe para los vendedores del mercado negro y otros como ellos, pero aún más para la gente en escondites y cualquier otra persona con dinero que no pueda ser declarado. Para devolver los billetes de mil guilders, debes poder decir como los obtuviste y tener pruebas de ello. Aún pueden ser utilizados par apagar impuestos, pero sólo hasta la semana que viene. Los billetes de quinientos saldrán de circulación al mismo tiempo. Gies & co. Todavía tiene algunos billetes de mil guilders sin declarar, que solían utilizar para pagar los impuestos estimativos del año entrante, así que todo parece ser legal.

Dussel ha recibido un taladro de dentista anticuado y mecánico. Eso significa que pronto estaré recibiendo un chequeo completo.

Dussel es completamente flojo cuando se trata de obedecer las reglas de las casa. No sólo le escribe cartas a su

Pág. 89.Charlotte, sino que también mantiene correspondencia constante con otras varias

personas. Margot, la profesora de danés del anexo, ha estado corrigiendo estas cartas para él. Mi padre le ha prohibido seguir manteniendo esta práctica y Margot ha dejado de corregir sus cartas, pero creo que no pasará mucho tiempo antes de que comience a hacerlo nuevamente.

El Führer ha estado hablando con los soldados heridos. Lo escuchamos en la radio, y fue patético. Las preguntas y respuestas eran algo como esto:

“Mi nombre es Henri Scheppel”.“¿Dónde te han herido?”“Cerca de Stalingrado”“¿Qué tipo de herida es?”“Dos pies congelados y una fractura del brazo izquierdo”Este es un reporte exacto del odioso show transmitido por la radio. El herido

parecía orgulloso de sus heridas – mientras más mejor. Uno estaba tan emocionado por poder estrecharle la mano al Führer (Presumo que todavía le quedaba una) que casi no pudo decir una palabra.

Resulta que he tirado el jabón de Dussel al piso y lo he pisado. Ahora falta todo un pedazo. Ya le he preguntado a mi padre como compensarlo por los daños, especialmente dado que Dussel sólo recibe una barra de jabón una vez al mes.

Tuya, Ana.

Page 51: El Diario de Ana Frank

Jueves, 25 de marzo, 1942.Queridísima Kitty;Mi madre, mi padre, Margot y yo estábamos placidamente sentados juntos anoche

cuando Peter de repente entró y susurró algo en el oído de mi padre. Entendí las palabras “un barril cayéndose en el depósito” y “alguien moviendo la puerta”.

Margot también lo oyó, pero estaba tratando de calmarme,

Pág. 90.Ya que me había quedado blanca como la tiza y estaba extremadamente nerviosa.

Las tres esperamos mientras que mi padre y Peter bajaron las escaleras. Un minuto ó dos después la señora Van Daan vino de donde había estado escuchando la radio y nos dijo que Pim le había pedido que la pagara y que fuera en punta de pies hasta arriba. Pero tú sabes que pasa cuando tratas de ser silencioso – las viejas escaleras hicieron el doble de ruido. Cinco minutos después mi padre y Peter, con sus caras totalmente descoloridas, aparecieron nuevamente para relatarnos sus experiencias.

Se habían posicionado al pie de la escalera y esperaron. Nada pasó. Luego de la nada escucharon un par de bangs, como si dos puertas hubieran sido cerradas de un portazo dentro de la casa. Pim subió las escaleras rápidamente y Peter fue a alertar al señor Dussel, quien finalmente se presentó escaleras arriba, no sin hacer un escándalo y un mucho ruido. Luego todos fuimos en puntas de pie hacia la casa de los Van Daan. El señor Van Daan tenía un fuerte resfrío y ya se había ido a la cama, así que nos reunimos alrededor de su cama y discutimos nuestras sospechas suspirando. Cada vez que el señor Van Daan tosía, la señora Van Daan y yo casi sufríamos un ataque de nervios. Él siguió tosiendo hasta que alguien vino con la brillante idea de darle codeína. Su tos paró inmediatamente.

Una vez más esperamos y esperamos, peor no escuchamos nada. Finalmente llegamos a la conclusión de que los ladrones se habían marchado al escuchar pisadas en el silencioso edificio. El problema era que las sillas en la oficina privada estaban agrupadas alrededor de la radio, que estaba sintonizada en la emisora inglesa. Si los ladrones habían forzado la puerta y la seguridad aérea había notado algo y llamaban a la policía, podría haber serias repercusiones. Así que el señor Van Daan se Levantó, se puso su saco y sus pantalones, se puso su gorras y de modo cauteloso siguió a mi padre escaleras abajo, con Peter (Armado con un pesado martillo, para protegerse)

Pág. 91.Detrás de él. Las damas (Incluyendo a Margot y a mí) esperamos en suspenso

hasta que los hombres volvieron cinco minutos después y reportaron que no había signos de actividad en el edificio. Acordamos en no hacer correr el agua ni tirar de la cadena del inodoro; pero dado que el estómago de todos estaba revuelto por toda la tensión, te puedes imaginar el olor luego de que cada uno de nosotros fuera al baño.

Incidentes como estos son siempre acompañados por otros desastres, y este caso no fue la excepción. Número uno: Las campanas de Westertoren dejaron de sonar, y yo siempre las había encontrado muy reconfortantes. Número dos: El señor Voskujil se fue más temprano anoche, y no estábamos seguro se le había dado a Bep la llave y ella se había olvidado de trabar la puerta.

Peor eso era de poca importancia ahora. La noche recién había comenzado, y todavía no estábamos seguros de que esperar. Estábamos de algún modo reasegurados por el hecho de que entre las ocho quince – momento en que el ladrón entró en el edificio y puso nuestras vidas en peligro – y las diez y media, no habíamos escuchado ningún sonido. Mientras más pensábamos acerca de ello, parecía menos probable que un ladrón hubiera forzado la puerta tan temprano en la noche, cuando todavía había gente afuera

Page 52: El Diario de Ana Frank

en las calles. Al mismo tiempo, se nos ocurrió que el manager de la compañía Keg de al lado todavía debía de haber estado trabajando a esa hora. Y con la excitación y las paredes delgadas, es fácil confundir los sonidos. Además, tu imaginación te juega trampas en momentos de peligro.

Así que nos fuimos a la cama, aunque no a dormir. Mi padre, mi madre y el señor Dussel estuvieron despiertos casi toda la noche, y no estoy exagerando cuando digo que difícilmente logré pegar un ojo. Esta mañana los hombres fueron escaleras abajo para ver si la puerta estaba aún trabada, ¡pero todo estaba bien!

Por supuesto, le dimos a todo el staff de la oficina un recuento detalle por detalle del incidente, que había sido todo menos agradable. Es mucho más fácil reír de estas cosas

Pág. 92.Una vez que ya pasaron, y Bep fue la única que se lo tomó en serio.Tuya, Ana.

PD: Esta mañana el inodoro estaba tapado y mi padre tuvo que meter una larga varilla de madera y buscar varias libras de excremento y papel de cerezas (eso es lo que usamos como papel de baño estos días). Luego quemamos la varilla.

Sábado, 27 de marzo, 1943.Queridísima Kitty;Hemos terminado nuestro curso de mecanografía y estamos trabajando en mejorar

nuestra rapidez ¿¡No somos inteligentes!? Déjame contarte más acerca de mis “matadores de tiempo” (Así llamo a mis cursos, porque todo lo que hacemos es tratar de hacer que los días pasen lo más rápido posible así estamos lo más cercano al final de nuestros días aquí). Adoro la mitología, especialmente a los dioses griegos y romanos. Todos aquí piensan que es un interés pasajero, ya que nunca han oído de un adolescente con apreciación por la mitología, De ese modo, ¡creo que soy la primera!

El señor Van Daan tiene un resfrío. Ó lo que es lo mismo, tiene la garganta irritada, pero está haciendo un escándalo de ello. Hace gárgaras con te de camomila, se cubre el techo del paladar con metileno y se pasa crema mentolada en el pecho, la nariz, y la lengua. Y por encima de todo esto, ¡tiene un humor de perros!

Rauter, un pez gordo (persona importante) alemán, dio un discurso recientemente. “Todos los judíos deben estar fuera de los territorios ocupados por Alemania antes del primer de julio. La provincia de Utrecht será limpiada de judíos (como si fueran cucarachas) entre el primeo de abril y el primero de mayo, y las provincias del norte y sur de Holanda entre el primero de mayo y el primero de junio”. Esta pobre gente está siendo enviada a mataderos como un rebaño de ganado enfermo y descuidado.

Pág. 93.Peor no diré más del asunto ¡Mis propios pensamientos me dan pesadillas!Una buena noticia es que la oficina de Intercambio Laboral ha sido incendiada por

los saboteadores. Unos días después las oficinas de la secretaria del condado también fueron incendiadas. Hombres actuando como policías alemanes ataron a los guardianes y lograron destruir algunos importantes documentos.

Tuya, Ana.

Jueves, 1 de abril, 1943.Queridísima Kitty;

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No estoy de humor para bromas (mira la fecha). Por el contrario, hoy puedo citar tranquilamente el dicho: “Las desgracias no vienen de a una”.

Primero, el señor Kleiman, que es nuestro querido sol, ha tenido otra hemorragia gastrointestinal ayer y va atener que estar en cama por al menos tres semanas. Debería decirte que su estómago lo ha estado molestando bastante, y no hay cura. Segundo, Bep tiene gripe. Tercero, el señor Voskujil tiene que ir al hospital la semana que viene. El probablemente tenga una úlcera y tenga que ser intervenido quirúrgicamente. Cuarto, los managers de industrias Pomosin han desde Frankfurt a discutir el nuevo modo de reparto de productos de Opetka. Mi Padre ha repasado los puntos más importantes con el señor Kleiman, y no hubo suficiente tiempo para hacer un resumen detallado al señor Kugler.

Los caballeros llegaron de Frankfurt, y mi padre ya estaba temblando tan sólo de pensar como se desarrollaría la charla. “Si tan sólo pudiera estar ahí, si tan sólo estuviera escaleras abajo”, exclamó.

“Ve y recuéstate con tu oreja contra el piso. Los llevarán a la oficina privada, y podrás escuchar todo”.

La cara de mi padre se iluminó, y ayer a la mañana a las diez y media Margot y pim (Dos orejas son mejores que una)

Pág. 94.Tomaron sus puestos en el suelo. Para el mediodía la charla no había terminado,

pero mi padre no estaba en forma como para continuar escuchando. Estaba muy dolorido por haber estado acostado por horas en una posición tan inusual e incómoda. A las dos treinta, escuchamos voces en el pasillo, y yo tomé su lugar; Margot me hacía compañía. La conversación fue tan larga y aburrida que de repente me quedé dormida en el frió y duro linóleo. Margot no se animó a tocarme por miedo a que nos escucharan, y por supuesto no podía gritar. Me dormí por una buena media hora y luego me desperté de golpe, habiéndome olvidado de cada palabra de la importante discusión. Por suerte, Margot había prestado más atención.

Tuya, Ana.

Viernes, 2 de abril, 1943.Queridísima Kitty;OH no, otro ítem ha sido agregado a mi lista de pecados. Anoche estaba

recostada en mi cama, esperando a mi padre para que me arropara y dijéramos nuestras plegarias juntos, cuando mi madre entre en mi habitación, se sentó en mi cama y me preguntó gentilmente, “Ana, papá no está listo ¿Que tal si yo escucho tus plegarias esta noche?”

“No, mami”, respondí.Mi madre se levantó, se paró junto a mi cama por un momento y luego lentamente

caminó hacia la puerta. Repentinamente se volvió, con un gesto de dolor, y dijo, “No quiero estar enojada con tigo ¡No puedo hacer que me ames!” Unas pocas lágrimas cayeron por sus mejillas mientras salía por la puerta.

Me recosté tiesa, pensando en cuan malvado había sido de mi parte rechazarla tan cruelmente, pero también sabía que era incapaz de responderle de otro modo. No puedo ser hipócrita y rezar con ella cuando no tengo ganas. Simplemente no funciona de ese modo. Me sentí apenada por mi madre – muy, muy apenada – por que por primera vez noté que no era indiferente a mi

Pág. 95.Frialdad. Vi el dolor en su rostro cuando habló de no ser capaz de hacerme

amarla. Es difícil decir la verdad, y sin embargo la verdad es que ella es la que me ha rechazado. Sus comentarios sin tacto y sus bromas crueles sobre asuntos que no

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considero graciosos me han hecho insensible a cualquier signo de amor de parte de ella. Así como mi corazón se hunde cada vez que escucho sus duras palabras, así es como su corazón se hundió cuando se dio cuenta de que no había más amor entre nosotras.

Lloró la mitad de la noche y no pudo dormir. Mi padre ha evitado mirarme, y si sus ojos cruzan los míos, puedo leer sus palabras mudas: “¿Cómo puedes ser tan poco amable? ¡Como te atreves a hacer sentir tan triste a tu madre!”

Todos esperan que me disculpe, pero esto no es algo por lo que me pueda disculpar, por que he dicho la verdad, y más tarde ó más temprano mi madre estaba destinada a saber la verdad. Parezco ser indiferente a las lágrimas de mi madre y a las miradas de mi padre, y lo soy, por que ambos ahora están sintiendo lo que siempre he sentido. Sólo me puedo sentir apenada por mi madre, quién deberá descubrir por ella misma cual debería ser su actitud. Por mi parte, voy a continuar en silencio y distante, y no pretendo retroceder ante la verdad, por que mientras más lo posponga, ¡más duro será para ellos aceptarlo cuando lo oigan!

Tuya, Ana.

Martes, 27 de abril, 1943.Queridísima Kitty;La casa aún está temblando por los efectos de las discusiones. Todos están

enojados con todos: Mi madre y yo, el señor Van Daan y mi padre, mi madre y la señora Van D. Una atmósfera increíble, ¿No lo crees? Una vez más la usual lista de errores de Ana ha sido extensamente comentadas.

Nuestros visitantes alemanes volvieron el sábado pasado. Ellos

Pág. 96.Se quedaron hasta las seis. Todos nos sentamos arriba, sin atrevernos a mover ni

una pulgada. Si no hay nadie más trabajando en el edificio ó en el vecindario, puedes escuchar cada paso en la oficina privada. Tengo hormigas en mis pantalones nuevamente por tener que sentarme y estar quieta por tanto tiempo.

El señor Voskujil ha sido hospitalizado, pero el señor Kleiman ha vuelto a la oficina. Su estómago dejó de sangrar antes de lo previsto. Nos contó que en las oficinas del condado los bomberos no sólo apagaron el incendio sino que inundaron el edificio ¡Eso alegra mi corazón!

El hotel Carlton ha sido destruido. Dos aviones ingleses cargados con bombas aterrizaron en el techo del club de oficiales alemanes. La esquina entera de Vijzelstraat y Singel ha quedado en llamas. El número de ataques aéreos en ciudades alemanes está aumentando diariamente. No hemos tenido una buena noche de descanso en mucho tiempo, y tengo ojeras por la falta de sueño.

Nuestra comida es terrible. El desayuno consiste de pan sin manteca y sucedáneos de café. Las últimas dos semanas el almuerzo ha consistido en espinada ó lechuga cocinada con papas enormes con gusto a podrido. Si tratas de hacer una dieta, ¡El anexo es el lugar! Escaleras arriba se quejan amargamente, peor nosotros no creemos que sea una tragedia.

Todos los hombres daneses que combatieron ó fueron movilizados en 1940 han sido llamados para trabar en los campos de prisioneros de guerra ¡Apuesto a que están tomando esta precaución por la invasión!

Tuya, Ana.

Sábado, 1 de mayo, 1943.

Queridísima Kitty;

Page 55: El Diario de Ana Frank

Ayer fue el cumpleaños de Dussel. Al principio el actuaba como si no quisiera celebrarlo, pero cuando Miep llegó con

Pág. 97.Una gran bolsa de compras repleta de regalos, estaba tan emocionado como un

niño pequeño. Su querida “Lotje” le ha enviado huevos, manteca, galletas, limonada, pan, coñac, torta, flores, naranjas, chocolate, libros y papel de escritura. Él apiló sus regalos sobre una mesa y los exhibió por no menos de tres días, ¡Esa vieja y tonta cabra!

No debes de hacerte a la idea de que él se está muriendo de hambre. Encontramos pan, queso, jamón y huevos en su armario. Dussel, a quien hemos tratado con tanta amabilidad y a quien hemos salvado de la destrucción, es absolutamente desagradecido al guardar cosas a nuestras espaldas y no repartirnos nada. Después de todo, ¡hemos compartido con él todo lo que tenemos! Pero lo que es peor, en nuestra opinión, es que él sea tan tacaño tonel señor Kleiman, el señor Voskujil y Bep. No les da nada. Según Dussel, las naranjas que Kleiman necesita tanto para su estómago enfermo beneficiarán más a su propio estómago.

Esta noche las armas han estado disparando tantas veces que ya he juntado mis pertenencias cuatro veces. Hoy empaqué una valija con todo lo que necesitaría en caso de que tuviéramos que escapar, pero como mi madre correctamente remarco, “¿A dónde iríamos?”.

Toda Holanda está siendo castigada por las huelgas de trabajadores. La ley marcial ha sido declarada, y todos vana recibir un cupón menos para manteca. Que niños traviesos.

Lavé el pelo de mi madre esta tarde, lo que no es una tarea fácil por estos días. Tenemos que usar un líquido limpiador muy pegajoso por que no tenemos más shampoo. Además, a mamá se le ha hecho complicado peinarse el cabello porque al peine familiar sólo le quedan diez dientes.

Tuya, Ana.

Pág. 98.Domingo, 2 de mayo, 1943.Cuando pienso hacer de nuestras vidas, usualmente llego a la conclusión de que

vivimos en un paraíso en comparación con los judíos que no están escondidos. De todas formas, en algún momento en el futuro, cuando todo haya vuelto a la normalidad, probablemente me pregunto como nosotros, que siempre vivimos en tan cómodas condiciones, pudimos haber caído tan bajo. En lo que concierne a los modales, me refiero. Por ejemplo, el mismo mantel de hule ha cubierto la mesa desde que llegamos. Después de tanto uso, difícilmente pueda decirse que no tiene manchas. Hago lo que puedo para limpiarlo, pero dado que lo trapos de fregar han sido comprados antes de que nos escondiéramos y tiene más agujeros que tela, es una tarea ingrata. Los Van Daan han dormido todo el invierno con las mismas sábanas, que no pueden ser lavadas por que el detergente es racionado y escasea. Además, es de tan mala calidad que es prácticamente inútil. Mi padre anda con pantalones gastados, y su camisa también está mostrando signos de haber sido usada muchas veces. El corsé de mi madre se ha roto y es imposible repararlo, mientras que Margot está usando un corpiño que es dos talles más chico que el que necesita. Mi madre y Margot han compartido tres camisetas durante todo el invierno, y las mías son tan pequeñas que ni siquiera cubren mi estómago. Estas son todas cosas que pueden ser superadas, pero a veces me pregunto:¿Cómo podemos nosotros, a quienes cada posesión, desde mi ropa interior hasta la brocha de afeitar de mi padre, están tan viejas y usadas, tener la esperanza de alguna vez volver a ganar la posición que teníamos antes de la guerra?

Page 56: El Diario de Ana Frank

Domingo, 2 de mayo, 1943.La actitud de los residentes del Anexo respecto a la guerraSeñor Van Daan: En opinión de todos, este reverenciado caballero tiene un gran

conocimiento de política. Aún así, el predice que tendremos que estar aquí hasta finales del ’43. Eso es mucho tiempo, y sin embargo, es imposible que podamos aguantar hasta ese momento.

Pág. 99.¿Pero quién puede asegurarnos que esta guerra, que no ha causado más que

dolor y tristeza, habrá terminado para entonces y que nada nos habrá pasado a nosotros ó a los que nos ayudan hasta entonces? ¡Nadie! Eso es por lo cual cada día esta lleno de tensión. Expectativas y esperanzas generan tensión, como también el miedo – por ejemplo, cuando escuchamos algún sonido dentro ó fuera de la casa, cuando las armas disparan ó cuando leemos nuevas proclamas en el diario, dado que tenemos miedo de que aquellos que nos ayudan tengan que esconderse ellos mismos en algún momento. Estos días todo el mundo habla de tener que esconderse. De hecho no sabemos cuanta gente está escondida; por supuesto, el número es relativamente pequeño comparado con la población general, pero dentro de un tiempo sin duda estaremos sorprendidos de cuanta gente buena en Holanda estaba dispuesta a tomar a judíos y cristianos, con y sin dinero, en sus hogares. También hay un increíble número de personas con papeles de identidad falsa.

Señora Van Daan: Cuando esta bella dama (en sus propias palabras) escuchó que cada día era más fácil obtener identificaciones falsas, inmediatamente propuso que cada uno de nosotros se hiciera una. Como si las dieran así como si nada, como si mi padre y el señor Van Daan estuvieran hechos de dinero.

La señora Van Daan siempre está diciendo las cosas más ridículas, y su Putti se exaspera usualmente. Peor eso no es sorprendente, por que un día Kerli anuncia, “Cuando esto se haya acabado, me voy a bautizar”; y al día siguiente, “Desde que tengo uso de razón, siempre he querido ir a Jerusalén ¡Sólo me siento cómoda entre judíos!”.

Pim es un gran optimista, pero siempre tiene sus razones.El señor Dussel inventa cosas constantemente, y si alguien desea contradecir a

Su Majestad debería pensarlo dos veces. En la casa Albert Dussel su palabra es la ley, pero eso no agrada a Ana Frank en lo más mínimo.

Lo que los otros miembros de la familia del anexo piensan

Pág. 100.Acerca de la guerra no importa. Cuando de política se trata, estos cuatro son los

únicos que cuentan. De hecho, sólo dos de ellos cuentan, pero Madame Van Daan y Dussel se autoincluyen también.

Pág. 100.Martes, 18 de mayo, 1943.

Queridísima Kitty;

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Recientemente presencié una feroz pelea callejera entre aviones alemanes e ingleses. Desafortunadamente, algunos de los Aliados tuvieron que abandonar sus aviones en llamas. Nuestro lechero, que vive en Halfweg, vio a cuatro canadienses sentarse al costado de la carretera, y uno de ellos hablaba danés de moco fluido. Le preguntó al lechero si tenía fuego para su cigarrillo, y luego le dijo que la tropa había estado compuesta de seis hombres. El piloto había muerto calcinado, y los cinco miembros de la tripulación se habían escondido en distintos lugares. La policía alemana había venido a recoger a los cuatro hombres que habían quedado, de los cuales ninguno estaba herido. Luego de caer en paracaídas de un avión en llamas, ¿Cómo puede alguien conservar la tal cordura?

A pesar de que indudablemente hace mucho calor, cada día por medio tenemos que encender una fogata para quemar nuestros residuos y los restos de los vegetales. No podemos tirar nada en los tarros de basura, porque los empleados del depósito podrían verlo ¡Un sólo descuido y estamos perdidos!

Todos los estudiantes están siendo llamados a firmar un comunicado oficial a los efectos de asegurar que “simpatizan con los alemanes y el nuevo orden”. El ochenta por ciento ha decidido obedecer a los dictámenes de su conciencia, peor la penalidad será severa. Todos los estudiantes que se rehúsen a firmar serán enviados a campos de trabajo alemanes ¿Qué será de la juventud de nuestro país si todos tienen que realizar trabajos duros en Alemania?

Pág.101.Anoche las armas hacían tanto ruido que mi madre cerró la ventana; yo estaba en

la cama de Pim. De repente, justo sobre nuestras cabezas, escuchamos a la señora Van D. levantarse de golpe, como si Mouschi la hubiera mordido. Esto fue seguido de un fuerte BUM!, que sonó como si una bomba hubiera aterrizado junto a mi cama. “¡Luces!” “¡Luces!”, grité.

Pim encendió la lámpara. Yo esperaba que la habitación se incendiara en cualquier momento. Nada sucedió. Corrimos apresurados escaleras arriba para ver que había sucedido. El señor y la señora Van D. habían vito un destello rojo a través de la ventana, y él creyó que había fuego cerca, mientras que ella asegura que nuestra casa estaba en llamas. La señora Van Daan ya estaba parada junto a su cama, con las rodillas temblando cuado el BUM! Llegó. Dussel se quedó escaleras arriba para fumar un cigarrillo, y nosotros acurrucamos en nuestras camas. Menos de quince minutos después, los bombardeos comenzaron nuevamente. La señora Van D. saltó de la cama y fue escaleras arriba a la habitación de Dussel a buscar el apoyo que no encontraba en su marido. Dussel le dio la bienvenida con las palabras, “¡Ven a mi cama, mi niña!”

Nos descostillamos de risa, y el sondo de las armas ya no nos importó; nuestros temores habían sido desechados.

Tuya, Ana.

Domingo, 13 de junio, 1943.Queridísima Kitty;El poema que mi padre compuso para mi cumpleaños es muy lindo para no

compartirlo. Dado que Pim escribe sus versos sólo en alemán, Margot se ofreció para

traducirlos al danés. Observa por tu misma, el trabajo del que Margot puede estar orgullosa. Comienza con el usual resumen de los eventos del año y luego continúa:

Pág. 102.La más pequeña entre nosotros, pero ya no una niña,

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Tu vida puede ser cansadora, dado que nosotros tenemos la tareaDe ser tus maestros, todo un aburrimiento.“¡Tenemos experiencia, hazme caso!”“Hemos hecho todo esto antes, tu sabes.Conocemos las cuerdas, conocemos el juego”.Desde tiempos inmemoriales, siempre ha sido lo mismo.Los propios errores no son nada más que patrañas,Pero los de los demás se consideran más serios.Encontrar errores es fácil cuando este es nuestro lema,Pero es duro para tus padres, por más que lo intenten,Tratarte justamente, y con amabilidad también;Criticar es un hábito difícil del cual deshacerse.Cuando vives con tus mayores, todo lo que puedes hacerEs soportar sus regaños – es duro pero es la verdad.El remedio puede ser amargo, pero te lo debes tomar,Dado que es para mantener la paz, lo sabes.Los meses aquí no han sido en vano,Ya que malgastar el tiempo va en contra de tus principios.Lees y estudias casi todo el día,Determinada a eliminar al aburrimiento.La muchísimo más difícil pregunta, aún más dura de responder,es “¿Qué debo ponerme?No tengo más medias, mis ropas son muy ajustadas,Mi remera esta hecha añicos, ¡Soy un espectáculo!Para ponerme los zapatos debo cortarme los dedos, ¡OH, dios, estoy plagada de tantas tristezas!”

A Margot le costó que la parte sobre la comida rimara, así que la saqué. Pero sacando eso, ¿no crees que es un buen poema?

En cuanto a lo demás, he sido totalmente consentida y he recibido una gran cantidad de adorables regalos, incluyendo un libro enorme con mis temas preferidos, mitología griega y romana. Tampoco

Pág. 103.Me puedo quejar por la falta de dulces; cada uno ha sacado un poco de sus

últimas reservas. Sendo la benjamina del anexo, obtuve más de lo que merecía. Tuya, Ana.

Martes, 15 de junio, 1943.Queridísima Kitty;Muchísimas cosas han sucedido, pero a menudo pienso que te estoy aburriendo

con mi charlatanería diaria y que preferirías recibir menos cartas. Así que seré breve.El señor Voskujil no fue operado de su úlcera después de todo. Una vez que los

doctores lo tuvieron en la mesa de operaciones y lo abrieron, se dieron cuenta de que tenía cáncer. Estaba tan avanzado que una operación no tendría sentido. Así que lo cocieron, lo mantuvieron en el hospital por tres semanas, lo alimentaron bien y lo mandaron a casa. Pero cometieron un error imperdonable: Le contaron al pobre hombre exactamente lo que le esperaba. Él ya no puede trabajar, y se la pasa sentado en su casa, rodeado de sus ocho hijos, recordándole su cercana muerte. Me siento muy mal por él y odio no poder salir; de otro modo, lo iría a visitar lo más a menudo posible y lo ayudaría a sacar sus problemas de su mente. Ahora el buen hombre ya no puede

Page 59: El Diario de Ana Frank

informarnos sobre lo que se dice y hace en el depósito, lo cual es un desastre para nosotros. El señor Voskujil era nuestra mayor fuente de ayuda y apoyo en lo que se refería a medidas de seguridad. Lo extrañamos mucho.

El mes próximo es nuestro turno de entregar nuestra radio a las autoridades. El señor Kleiman tiene una pequeña escondida en su casa que nos va a dar para reemplazar nuestro hermoso aparato radial. Es una lástima que tengamos que entregar nuestro gran Philips, pero cuando estás escondido, no puedes permitirte tener a las autoridades controlándote. Por supuesto, pondremos la radio “bebé” abajo ¿Qué hace una radio clandestina cuando ya hay judíos clandestinos y dinero clandestino?

Pág.104.En todo el país la gente está tratando de conseguir viejas radios que puedan

entregar en vez de sus grandes aparatos. Es verdad: Mientras los reportes del exterior son cada vez peores, la radio, con su voz maravillosa, nos ayuda a no perder las esperanzas y a seguir diciéndonos nosotros mismos, “¡Anímate, mantén tu espíritu positivo, las cosas están destinadas a mejorar!”

Tuya, Ana.

Domingo, 11 de julio, 1943.Querida Kitty;Para volver al asunto de la crianza de los niños (por undécima vez), déjame

decirte que estoy tratando de ser colaboradora, amigable y amable y de hacer todo lo que puedo para reducir la lluvia de críticas a una suave llovizna. No es fácil tratar de comportarse como una niña modelo cuando se está rodeado de gente que no puedes tolerar, especialmente cuando no lo sientes así. Pero pude notar que con un poco de hipocresía consigo mucho más que con mi viejo método de decir exactamente lo que pienso (Aunque a nadie nunca me pregunta lo que pienso ó lo interesa en lo más mínimo de todos modos).Por supuesto, a veces olvido mi rol y encuentro imposible esconder mi ira cuando son injustos, por lo que se pasa todo el próximo mes diciendo que soy la niña más impertinente ¿no crees que se deben compadecer de mí alguna vez? Es bueno que no sea del tipo de persona gruñona, por que luego me volvería amarga y con un mal temperamento. Usualmente logro ver le lado cómico de sus criticas, pero es más fácil cuando alguien más es regañado.

Además, he decidido (luego de mucho pesar) que dejaré mis clases de caligrafía. Primero, por que así voy a tener más tiempo para mis otras materias. Segundo, debido a mis ojos. Es una triste historia. Me he vuelto corta de vista y debería haber comenzado a usar lentes hace años. (Puaj, ¿no parearía una tonta?) Pero como tú sabes, la gente en escondites no puede…

Ayer de lo único que todos podían hablar aquí eran los ojos de Ana,

Pág. 105.

Porque mi madre había sugerido que fuera al oftalmólogo con el señor Kleiman. De sólo escuchar esto mis rodillas se ablandaron, dado que no es un asunto menor ¡Salir a la calle! Sólo piénsalo, ¡caminar por las calles! No puedo imaginármelo. Estaba petrificada al principio, y luego contenta. Pero no es tan simple como eso; las autoridades que debían aprobar tal hazaña no podían llegar a una rápida decisión. Primero debían que sopesar cuidadosamente todas las dificultades y riesgos, aunque Miep estaba lista para salir conmigo a cuestas inmediatamente. Mientras tanto, hubiera tomado mi abrigo gris del armario, pero era tan pequeño que parecía que perteneciera mi hermana pequeña. Deshicimos el dobladillo, pero aún no puedo abotonármelo. Tengo mucha

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curiosidad por ver qué deciden, sólo que no creo que vallan a concretar el plan, porque los ingleses han desembarcado en Sicilia y mi padre está seguro de que el fin se acerca.

Bep nos ha estado dando a mí y a Margot un montón de trabajo de oficina para hacer. Nos hace sentir importantes, y es de gran ayuda para ella. Cualquiera puede fichar cartas y hacer entradas en un libro de ventas, peor nosotras lo hacemos con gran prolijidad.

Miep tiene tantas cosas que cargar que parece una mula. Ella va casi todos los días a comprar vegetales, y luego pedalea de vuelta con sus compras en una gran bolsa. Ella también es la que trae consigo cinco libros cada sábado. Esperamos con ansias los libros por que ese día significa libros. Parecemos un grupo de niños con regalos. El común de la gente no sabe cuanto pueden significar los libros para alguien que está en cautiverio. Nuestros únicos entretenimientos son leer, estudiar y escuchar la radio.

Tuya, Ana.

Pág. 106.Martes, 13 de julio, 1943.

La mejor mesa pequeñaAyer a la tarde mi padre me dio permiso para que le preguntara al señor Dussel se

por favor serpia tan bueno de permitirme (¿Ves cuan educada soy?) de usar su mesa en nuestra habitación dos tardes a la semana, de cuatro a cinco treinta. Yo ya me siento allí cada día de dos treinta a cuatro mientras el seños Dussel toma una siesta, pero el resto del tiempo la habitación y la mesa están totalmente fuera de mi alcance. Es imposible estudiar en la habitación continua en la tarde, porque hay mucho movimiento. Además, a mi padre a veces le gusta sentarse en el escritorio durante la tarde.

Parecía un pedido razonable, y se lo pregunté a Dussel de modo muy correcto ¿Cuál crees que fue la respuesta del educado caballero? “No”. Un simple “¡No!”

Estaba furiosa y no iba a dejar que me hicieran cambiar de idea. Le pregunté la razón para su “No”, pero esto no me llevó a ningún lado. El eje central de su respuesta fue: “Yo también tengo que estudiar, lo sabes, y si no puedo hacerlo en la tarde, no tengo tiempo en ningún momento del día. Tengo que terminar la tarea que me he dado a mí mismo; de otro forma, no tendría sentido que hubiese comenzado. Además, tú no eres seria en cuanto a tus estudios. Mitología - ¿Qué tipo de estudio es ese? Leer y cocer tampoco cuentan ¡Yo uso es mesa y no me voy a rendir!”

Respondí, “Señor Dussel, sí tomo mis estudios en serio. No puedo estudiar en la habitación continua durante la tarde, ¡y apreciaría si usted reconsiderase mi pedido!”

Habiendo dicho esas palabras, la insultada Ana se dio media vuelta y pretendió que el educado doctor no estaba allí. Me estaba carcomiendo de la ira, y sentí que Dussel había sido increíblemente grosero (lo había sido ciertamente) y que yo había sido muy educada.

Pág. 107.Aquella noche, cuando logré localizar a Pim, le conté lo que había sucedido y

discutimos cual debería ser mi próximo paso, porque no tenía pensado rendirme y prefería lidiar con esto yo sola. Pim me dio una idea breve de cómo abordar a Dussel, pero me advirtió que esperara hasta el día siguiente, dado que estaba muy alterada. Ignoré esta última advertencia y esperé a Dussel luego de lavar los platos. Pim estaba sentado en la habitación contigua y eso tenía un efecto tranquilizador.

Comencé, “Señor Dussel, usted parece creer que continuar la discusión sobre el asunto no tiene sentido, pero le ruego que lo reconsidere”.

Dussel me brindó su sonrisa más encantadora y dijo, “Siempre estoy dispuesto a discutir el asunto, aunque ya ha sido resuelto”

Page 61: El Diario de Ana Frank

Continué hablando, a pesar de las repetidas interrupciones de Dussel. “Cuando llegaste aquí”, dije, “acordamos que la habitación sería compartida por los dos. Si la dividiéramos proporcionadamente, ¡Tú tendría la mañana completa y yo la tarde completa! No estoy pidiendo tanto como eso, pero dos tardes a la semana me parece bastante razonable.”

Dussel saltó de su silla como si se hubiera sentado sobre un alfiler. “Tú no tienes derecho a hablar así sobre tus derechos en la habitación, ¿A dónde se supone que valla? Quizás debería pedirle al señor Van Daan que me construya un cubículo en el ático. Tú no eres la única que no puede encontrar un lugar tranquilo para trabajar. Siempre estás buscando pelea. Si tu hermana Margot, que tiene más derecho a tener un lugar de estudio que tú, hubiera venido a mí con el mismo pedido, no hubiera siquiera pensado en negarme pero tu…”

Y una vez más volvió a sacar el tema sobre la mitología y el tejido, y una vez más Ana fue insultada. Sin embargo, no mostré ningún signo de ello y dejé que Dussel terminara: “Pero no, es imposible hablar contigo. Eres

Pág. 108.Desvergonzadamente egocéntrica. Nadie más te importa, en tanto tú obtengas lo

que quieres. Nunca había visto un a niña así. Pero luego de todo lo dicho y hecho, estaré obligado a dejarte que te salgas con la tuya, ¡ya que no quiero que más adelante la gente diga que Ana Frank reprobó sus exámenes porque el señor Dussel se negó a prestarle su mesa!”

El siguió y siguió hasta que hubo tal diluvio de palabras que me fue imposible comprenderlo. Por un instante pensé, “Él y sus mentiras ¡Golpearé su horrible taza tan fuerte que rebotará por las paredes!” Peor luego pensé, “Cálmate, ¡no vale la pena enojarse tanto!”

Finalmente la furia del señor Dussel se apaciguó, y dejó la habitación con una expresión de triunfo mezclado con ira, y los bolsillos de su saco abarrotados de comida.

Fui corriendo hacia mi padre y le reconté toda la historia, ó al menos aquellas partes que él no había podido oír. Pim decidió hablar con Dussel esa misma noche, y ellos hablaron por más de media hora. Primero discutieron si se le debía permitir ó no a Ana usar la mesa. Mi padre dijo que Dussel y él habían tratado el tema una vez más, y esta vez él profesó estar de acuerdo con el señor Dussel porque no quería contradecir a los mayores enfrente de los menores, pero incluso esta vez, no creía que fuera justo. Dussel sentía que yo no tenía derecho a hablar como si él fuera un intruso que reclamaba para sí todo lo que estaba a su vista. Peor mi padre protestó fuertemente contra ello, dado que él mismo había escuchado que yo no había dicho nada pro el estilo. Y así la conversación fue y vino, con mi padre defendiendo mi “egoísmo” y mi “duro trabajo”, y Dussel protestando todo el tiempo.

Dussel finalmente tuvo que rendirse, y se me dio la oportunidad de trabajar sin interrupción dos tardes a la semana. Dussel lucía muy ofendido, y no me dirigió la palabra por

Pág. 109.dos días y se aseguró de que yo ocupara la mesa de cinco a cinco treinta – muy

infantil, por supuesto.Cualquier persona que es tan mezquina y pedante a los cincuenta y cuatro años

es porque ha nacido de ese modo y nunca va a cambiar.

Viernes, 16 de julio, 1943.Queridísima Kitty;

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Ha habido otro robo, ¡pero esta vez de verdad! Peter fue al depósito esta mañana, a las siete, como todos los días, y notó inmediatamente que tanto la puerta del depósito como la de la calle estaban abiertas. Él inmediatamente informó de esto a Pim, quien fue a la oficina privada, sintonizó en la radio una emisora alemana y trabó la puerta. Luego ambos volvieron escaleras arriba. En tales casos, nuestras directivas son “no lavarnos ó hacer correr agua, estar callados, vestidos a las ocho y no usar el baño”, y como en las otras ocasiones seguimos estas indicaciones al pie de la letra. Todos estábamos muy felices de haber dormido tan bien y no haber escuchado nada. Por un tiempo estuvimos indignados porque nadie de la oficina subió en toda la mañana; el señor Kleiman nos dejó con la intriga hasta las once treinta. Nos dijo que los ladrones habían forzado la puerta externa y la del depósito con una palanca, pero cuando vieron que no había nada que valiera la pena robar, probaron suerte con el piso de arriba. Se robaron dos cajas de dinero con 40 guilders, cheques en blanco y, lo peor de todo, cupones de 330 libras de azúcar, nuestra reserva completa. No será fácil conseguir nuevos.

EL señor Kugler cree que este ladrón pertenece a la pandilla que realizo un intento fallido de abrir las tres puertas seis semanas atrás (la puerta del depósito y las dos puertas que dan al exterior).

EL robo causó otro revuelo, pero el Anexo parece lleno de alegría. Naturalmente, nos puso contentos que

Pág. 110.La caja registradora y las máquinas de escribir estuvieran a salvo en nuestros

armarios de ropa.Tuya, Ana.PD: Aterrizando en Sicilia ¡Otro paso más cerca de…!

Lunes, 19 de julio, 1943.Queridísima Kitty,El norte de Ámsterdam fue fuertemente bombardeado el domingo. Aparentemente

hubo una devastación enorme. Calles enteras están en ruinas, y les va a tomar mucho tiempo rescatar los cadáveres. Hasta ahora ha habido doscientos muertos e incontables heridos; los hospitales no dan a vasto. No s han contado de niños desesperados buscando a sus padres muertos entre los escombros. Todavía me hace temblar el pensar en el lejano ruido que parar nosotros significó la destrucción que se acerca.

Tuya, Ana.

Viernes, 23 de julio, 1943.Bep constantemente consigue cuadernos, especialmente diarios y grandes libros,

¡muy útiles para mi hermana que colecciona libros! Otros cuadernos están a la venta, pero no me preguntes cómo son ó cuanto durarán. Por el momento están indicados con una etiqueta que dice “¡No se requieren cupones!” pero como todo aquello que puedes comprar sin estampillas de racionamiento, no sirven de nada. Contienen doce hojas de papel grisáceo con finas líneas que se traslucen a través del papel. Margot está pensando tomar un curso de caligrafía; le he recomendado que se decida y lo haga. Mi madre no me dejaría debido a mis ojos, peor creo que eso es estúpido. Haga esto ú otra cosa, todo se reduce a lo mismo.

Dado que nunca has pasado por una guerra, Kitty, y dado que sabes muy poco de la vida en un escondite a pesar de mis cartas,

Pág. 111.Déjame decirte, sólo por diversión, lo primero que cada uno de nosotros quiere

hacer cuando podamos volver a salir.

Page 63: El Diario de Ana Frank

Margot y el señor Van Daan desean, por sobre todas las cosas, darse un baño caliente, con la bañera llena, en la cual puedan recostarse por más de media hora. La señora Van Daan quisiera una torta, Dussel no puede pensar en nada más que ver a su Charlotte, y mi madre muere por una taza de verdadero café. Mi padre quisiera visitar al señor Voskujil, Peter iría al centro de la ciudad, y en lo que a mi concierne, estaría tan llena de satisfacción que no sabría por donde comenzar.

Más que nada, deseo tener una casa que sea nuestra, poder moverme libremente y tener a alguien que me ayude con mi tarea nuevamente. En otras palabras, ¡volver ala escuela!

Bep ha ofrecido traernos algo de fruta, a un pseudo precio de oferta: uvas por 2.50 guilders la libra, grosellas a 70 centavos la libra, un durazno por 50 centavos, melones por 75 centavos la libra. Ahora entiendo por que los diarios escriben cada noche en letras grandes y gordas: “¡Mantengan los precios bajos!”

Lunes, 26 de julio, 1943.Querida Kitty,Ayer fue un día muy agitado, y todavía estamos muy abrumados. De hecho, te

preguntarás si es que hay algún día que pase sin algún tipo de emoción.La primera sirena de alarma se encendió a la mañana mientras estábamos

desayunando, peor no le prestamos atención, porque sólo significaba que los aviones estaban sobrepasando la costa. Tenía una terrible jaqueca, así que me recosté por una hora luego del desayuno y bajé a la oficina alrededor de las dos. A las dos treinta Margot ya había terminado su trabajo en la oficina y estaba recolectando sus cosas cuando las sirenas comenzaron a sonar nuevamente. Ella y yo subimos despavoridas. Y en buen tiempo lo hicimos, dado que menos de cinco minutos después el bombardeo era tan fuerte que nos quedamos todos inmóviles en el corredor. La casa tembló y las bombas siguieron cayendo. Yo preparé mi “mochila de escape” más con la intención de aferrarme a ago que de huir. Se que no podemos irnos de aquí, pero si tuviéramos que hacerlo, ser vistos en la calle sería tan peligroso como quedar atrapado en medio de un bombardeo. Luego de media hora el rugir de los motores se disipó y la casa volvió a entrar en actividad. Peter emergió de su puesto de observación en el ático, Dussel permaneció en la oficina privada, el señor Van Daan había estado observando desde el loft, y aquellos que estábamos en el corredor nos separamos para observar las columnas de humo que venían desde el puerto. En poco tiempo el olor a humo estaba en todos lados, y afuera parecía que la ciudad estaba envuelta en una espesa niebla.

Un gran incendio como aquel no es agradable a la vista, pero afortunadamente para nosotros todo había terminado, y volvimos a nuestras diversas tareas. Justo cuando comenzábamos a cenar: otra alarma de ataque. La comida estaba rica, pero perdí mi apetito en el momento en que escuché la sirena. Nada sucedió sin embargo, y cuarenta y cinco minutos después las alarmas se apagaron. Luego de que los platos fueran lavados: otra alarma de ataque, disparos y oleadas de aviones. “Ay, dios, dos veces en un día”, pensamos, “Eso es demasiado”. Pero de poco nos sirvió pensar así, porque una vez mas las bombas volvieron a caer, esta vez en otro lado de la ciudad. De acuerdo a reportes británicos, el aeropuerto de Schiphol fue bombardeado. Los aviones se lanzaban en picada desde el aire, el aire vibraba con el ruido de los motores. Fue escalofriante, y todo el tiempo pensaba, “Aquí viene, este es el final”.

Puedo asegurarte que cuando fui a acostarme alas nueve, mis piernas aún temblaban. A medianoche volví a despertarme: ¡Más aviones! Dussel se estaba desvistiendo, pero no le preste atención y me levanté con el sonido del primer disparo. Estuve en la cama de mi padre hasta la una, en mi cama

Pág. 113.

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hasta la una treinta, y volví a la cama de mi padre a las dos. Pero los aviones seguían llegando. Finalmente dejaron de bombardear y volvía estar en “calma”. Finalmente me dormí media hora después de las dos.

Siete de la mañana. Me levanté de golpe y me senté en la cama. El señor Van Daan estaba con mi padre. Mi primer presentimiento: Ladrones. “Todo”, escuché decir al señor Van Daan, y creí que todo había sido robado. Peor no, esta vez eran noticias maravillosas, las mejores que hemos tenido en meses, quizás las mejores desde que empezó la guerra. Mussolini renunció a su cargo y el rey de Italia se ha hecho cargo del gobierno.

Saltamos de alegría. Luego de los horrendos eventos de ayer, finalmente algo bueno sucede y nos trae… ¡esperanza! La esperanza de que la guerra vaya a terminar, de que vendrá la paz.

El señor Kugler vino a vernos y nos contó que la fábrica de aviación “Fokker” había sido arrasada. Mientras tanto, hubo otra alarma esta mañana, con aviones sobrevolando, y otra sirena de emergencia nuevamente. Me cansé de las alarmas. He dormido muy poco, y lo último que quiero es trabajar. Pero ahora el suspenso sobre la situación en Italia y la esperanza de que la guerra terminará antes del final de año nos mantiene alertas…

Tuya, Ana.

Jueves, 29 de julio, 1943.Queridísima Kitty;La señora Van Daan, Dussel, y yo estábamos lavando los platos y yo estaba

extremadamente callada. Esto es muy inusual de parte mía y ellos lo notaron, así que para evitar preguntas, rápidamente busqué en mi cerebro un tópico neutral de conversación. Pensé que el libro Henry de la calle de enfrente podría aplicar a la situación, pero no me podría haber equivocado más. Si la señora Van Daan no me ataca directamente, el señor Dussel lo hace. Todo se reduce a esto: El señor Dussel nos había recomendado el

Pág. 114.Libro a Margot y a mí para que tuviéramos un ejemplo de lo que era una excelente

escritura. Nosotras pensamos que bajo ninguna circunstancia podría ser un ejemplo de ello. El pequeño niño había sido bien personificado pero en cuanto al resto del libro…mientras menos te diga, mejor. Mencioné algo al respecto mientras lavábamos los platos, y Dussel desplegó su discurso crítico.

“¿Cómo puedes tú entender la psicología de un hombre? Si fuera de un niño no sería tan difícil. Pero tú eres demasiado joven para leer un libro así. Incluso un hombre de veinte años no podría comprenderlo”. (¿Entonces porqué nos recomendó el libro a Margot y a mí?)

La señora Van D. y Dussel continuaron su despectivo sermón: “Tú sabes demasiado respecto a cosas que no se supone que sepas. Has sido criada muy mal. Más adelante, cuando seas grade, no serás capas de disfrutar más nada. Dirás, ‘Oh, leí eso en algún libro hace veinte años’. Mejor apúrate si quieres conseguir un esposo ó enamorarte, dado que todo está destinado a ser una gran decepción para ti. Ya sabes todo lo que debe saberse de teoría, ¿pero en la práctica? ¡Ese es otro cuento!”

¿Puedes imaginar como me sentí? Me sorprendía mí misma respondiendo calmadamente, “Tú puedes creer que no fui criada de un modo apropiado, ¡pero mucha gente estaría en desacuerdo contigo!”

Aparentemente creen que una buena crianza incluye tratar de ponerme en contra de mis padres, porque eso es todo lo que hacen. Y creen que no tratar temas de adultos

Page 65: El Diario de Ana Frank

enfrente de una chica de mi edad esta bien. Todos podemos ver lo que sucede cuando la gente es criada de ese modo.

En ese momento podría haberlos abofeteado a ambos por burlarse de mí. Estaba enfurecida, fuera de mí, y si tan sólo hubiera podido saber por cuánto más tiempo íbamos a tener que tolerar la compañía del otro, hubiera comenzado a contar los días.

¡La señora Van Daan es tan elegante hablando! Siempre pone ejemplo – ¡malos ejemplos! Sabe como ser excesivamente agobiante,

Pág. 115.Egoísta, astuta, calculadora, y estar siempre insatisfecha. Sumado a eso, es

vanidosa y coquea y, además, no hay duda acerca de ello: Es una persona completamente despreciable. Podría escribir un libro entero sobre “madame” Van Daan, y quien sabe, quizás algún día lo haga. Cualquiera puede dar la imagen de un ser encantador cuando así lo desea. La señora Van D. es amigable con los extraños, especialmente si son hombre, por lo que es fácil cometer un error cuando apenas la conoces.

Mi madre cree que es muy estúpida como para gastar palabras en ella, Margot que es muy poco importante, Pim que ella es muy fea (¡Literal y figurativamente!), y tras observarla por un buen tiempo (Nunca soy prejuiciosa desde un comienzo), he llegado ala conclusión de que ella todo lo mencionado arriba, y mucho más aún. Tiene tantos defectos, ¿Por qué debería elegir sólo uno?

Tuya, Ana.PD: ¿Podría el lector por favor tener en cuenta que esta historia fue escrita antes

de que la furia del escritor se haya apaciguado?

Martes, 3 de agosto, 1943.Queridísima Kitty,Las cosas están yendo bien en el área política. Italia ha prohibido al partido

fascista. La gente está batallando contra los fascistas en muchos lugares - incluso la armada se ha unido a la batalla ¿Cómo es que un país así puede aún estar en guerra contra Inglaterra?

Nuestra bellísima radio nos fue quitada la semana pasada. Dussel estaba muy enojado con el señor Kugler por haberla entregado en el día pautado. Mi estima por Dussel decae día a día, y ha llegado a estar por debajo de cero. Cualquier cosa que diga sobre política, historia, geografía o cualquier otra cosa es tan ridículo que no me atrevo a repetirlo: Hitler será borrado de la historia; el puerto en Rótterdam es más grande que el de

Pág. 116 Hamburgo; los ingleses son idiotas por no haber aprovechado su oportunidad de

bombardear Italia y destruirla por completo, etc., etc.Acabamos de tener otra alarma. Decidí ser valiente y tratar de adquirir coraje. La señora Van Daan, quien siempre decía “déjenlos caer” y “es preferible acabar

heridos a que nunca acabar”, es ahora la más cobarde de todos. Esta mañana temblaba como una hoja e incluso rompió en llanto. Fue calmada por su esposo, con quien recientemente declaró una tregua luego de una semana de constantes discusiones; casi me emociono con la escena.

Mouschi nos ha demostrado, sin duda alguna, que tener un gato tiene desventajas como así también ventajas. Toda la casa está cubierta de pulgas, y se pone peor cada día. El señor Kleiman esparció polvo amarillo en cada recoveco y en cada esquina, pero las pulgas ni se han enterado. Esto nos esta alterando mucho a todos; imaginamos mordidas en nuestros brazos y piernas ó en otras partes del cuerpo, por lo que nos

Page 66: El Diario de Ana Frank

levantamos rápidamente y hacemos ejercicios, ya que nos da una excusa para buscar que nuestros brazos y cuello estén más en forma. Sin embargo ahora estamos pagando el precio de haber hecho tan poco ejercicio físico; nuestros cuerpos están tan endurecidos que difícilmente podemos voltear nuestras cabezas. Los ejercicios para mantenernos en forma fueron dejados de lado largo tiempo atrás.

Tuya, Ana.

Miércoles, 4 de agosto, 1943.Queridísima Kitty;Ahora que hemos estado escondidos por poco más de un año, sabes un montón

sobre nuestras vidas. Aún así, me es imposible contarte todo, dado que todo es muy diferente a los tiempos regulares y a la gente regular. Sin embargo, para darte una mirada más cercana a nuestras vidas, de vez en cuando,

Pág. 117Describiré partes de días ordinarios. Comenzaré con el anochecer y la noche.Nueve horas, anochecer. Los preparativos para ir a dormir en el anexo siempre

implican mucha prisa y alboroto. Las sillas son cambiadas de lugar, las camas desarmadas, las mantas se desdoblan – nada queda en donde está durante el día. Yo duermo en un pequeño diván, que sólo tiene un metro cincuenta de largo, así que tenemos que agregar unas sillas para hacerlo más largo. Sábanas, mantas, almohadas: Todo tengo que sacarlo de la cama de Dussel, donde esas cosas se guardan durante el día.

En la habitación continua se escucha un terrible alboroto: es la cama plegable de Margot siendo preparada. Se necesitan muchas mantas y almohadas para hacer de esa cama de madera un lugar más cómodo para dormir. Arriba parece que una gran tormenta tuviera lugar, pero sólo es la señora Van Daan moviendo su cama hacia la ventana para que Su Alteza, cubierta en su ropa de dormir rosada, pueda inhalar el aire nocturno a través de sus delicadas fosas nasales.

Nueve de la noche. Una vez que Peter está listo, es mi turno de pasar al baño. Me labo todo el cuerpo desde la cabeza hasta los pies, y muy a menudo encuentro alguna pequeña pulga flotando sobre mi piel (Sólo durante los meses cálidos). Me lavo los dientes, me pongo los ruleros, arreglo mis uñas y utilizo agua oxigenada para aclarar la pelusa negra sobre mi labio superior – todo esto en menos de media hora.

Nueve y media. Me pongo mi bata. Con el jabón en una mano y mi vaso de noche, mis medias, hebillas de pelo, ruleros y algodón en la otra mano, me apuro a salir del baño. El que espera detrás de mí me llama para que retire el pelo enrulado que he dejado en el lavabo.

Diez en punto. Es hora de ponerme la máscara bloqueadora de luz y decir buenas noches. Por los próximos quince minutos, al menos, la casa se llena del sonido de camas crujiendo y de la imagen de resortes rotos, y luego, a menos que nuestros vecinos de arriba no estén teniendo una de sus discusiones maritales, todo queda en silencio.

Once y media. Se oye el chirrido de la puerta del baño.

Pág. 118.Una angosta línea de luz entra en la habitación. Suelas de zapatos ruidosos, un

gran abrigo aún más grande que el hombre dentro de él…es Dussel regresando de su trabajo nocturno en la oficina del señor Kugler. Lo escucho ir y venir por diez minutos; el ruido de papeles y de la cama siendo preparada. Luego la silueta desaparece nuevamente, y el único sonido es el ocasional ruido del baño.

Page 67: El Diario de Ana Frank

Aproximadamente tres de la madrugada. Tengo que levantarme a usar la lata que está debajo de mi cama, la cual, para estar seguros, está apoyada sobre una alfombra de goma para proteger el suelo. Siempre contengo la respiración mientras lo hago, dado que parece el sonido de una cascada precipitándose desde una montaña. La lata vuelve a su lugar y la figura vestida con una bata blanca (la cual hace que Margot exclame cada mañana, “Ay, ¡que camisón indecente!”) vuelve a la cama. Una cierta persona se recuesta despierta en su cama por alrededor de quince minutos, escuchando los sonidos de la noche. En primer lugar, para escuchar si hay algún ladrón abajo, y luego para escuchar si otros en las demás habitaciones están dormidos ó despiertos. Esta actividad no es nada divertida, especialmente cuando es realizada por un miembro de la familia llamado doctor Dussel. Primero respira fuertemente como si fuera un pez en busca de una bocanada de aire. Esto es repetido unas nueve ó diez veces. Luego se humedece los labios. Esta actividad es alternada con ruidos con su boca, seguidos de un largo período de movimientos en la cama y reordenamiento de almohadas. Luego de cinco minutos de perfecta calma, la misma secuencia se repite tres veces más, luego de la cual aparentemente ha logrado volver a dormirse por un rato.

A veces se escuchan disparos durante la noche, entre la una y las cuatro. Nunca presiento lo que va a suceder, pero de repente me encuentro parada junto a mi cama. Ocasionalmente estoy durmiendo tan profundamente

Pág. 119.(Sobre los verbos irregulares en francés ó las discusiones escaleras arriba) que

sólo cuando mi sueño termina me doy cuenta de que el bombardeo terminó y que permanecí todo el tiempo tranquilamente en mi habitación. Pero en general me despierto. Luego tomo una almohada y un pañuelo, me pongo una bata y mis pantuflas y me dirijo a la habitación de mi padre, precisamente en le modo en que Margot lo describió en este poema de cumpleaños:

Cuando las armas se disparan en lo oscuro de la noche,La puerta se abre chirriando y a la vistaAparece un pañuelo, una almohada, una figura de blanco…

Una vez que he alcanzado la cama grande, lo peor pasa, excepto cuando el bombardeo es muy fuerte.

Seis cuarenta y cinco. Rrrring…la alamar del reloj, el cual suena a cualquier hora de la noche ó el día, lo quieras ó no. Ring…Pum…la señora Van Daan lo apaga. Clac, el señor Van Daan se levanta, pone agua a hervir y va al baño.

Siete y quince. La puerta se abre con un chirrido nuevamente. Dussel ya puede ir al baño. Finalmente sola, remuevo la pantalla bloqueadora de luz… y un nuevo día ha comenzado en el Anexo.

Tuya, Ana.

Jueves, 5 de agosto, 1943.Queridísima Kitty;Hablemos hoy de la hora del almuerzo.Son las doce y media. Toda la pandilla respira aliviada: El señor van Maaren, el

hombre con un pasado turbio, y el señor de Kok llegan al anexo para almorzar. Escaleras arriba puedes oír el ruido de la aspiradora en la única pero bella

alfombra de la señora Van D. Margot toma unos cuantos libros debajo de su brazo y se dirige la clase de “estudiantes lentos”, de la cual Dussel parece ser un estudiante central. Pim se sienta en una esquina con su constante compañero, Dickens, con

Page 68: El Diario de Ana Frank

Pág.120.La esperanza de encontrar un poco de paz y tranquilidad. Mi madre se apresura

escaleras arriba para ayudar a la ocupada ama de casa, y yo aseo el baño y a mi misma al mismo tiempo.

Doce cuarenta y cinco. Uno a uno van llegando los empleados: primero el señor Gies y el señor Kleiman ó el señor Kugler, seguidos por Bep y a veces por Miep.

La una. Reunidos alrededor de la radio, todos escuchan con mucha atención a la BBC. Este es el único momento en que los miembros del Anexo no se interrumpen unos a otros, ya que ni siquiera el señor Van Daan puede discutir con el interlocutor radial.

Una y quince. Distribución de alimentos. Cada una de las personas de abajo recibe un tazón de sopa, más un postre si es que lo hay. El señor Gies, de buen humor, se sienta en el diván ó se recuesta sobre le escritorio con su periódico, su tazón y el gato a su lado en general. Si una de estas tres cosas falta, no duda en dejar que sus protestas sean oídas. El señor Kleiman relata las últimas noticias de la ciudad; es una gran fuente de información. El señor Kleiman se apresura a subir las escaleras, da un corto pero contundente golpe a la puerta y entra moviendo sus manos de manera tensa ó dando señales de júbilo, según si está callado y de mal humor ó charlatán y en buen estado de ánimo.

Una cuarenta y cinco. Todos se levantan de la mesa y se concentran en sus propios asuntos. Margot y mi madre lavan los platos, el señor y la señora Van Daan se dirigen al diván, Petter al ático, mi padre a su diván y Dussel al suyo, y Anna se dirige a hacer su tarea.

Lo que viene a continuación es la hora más tranquila del día; cuando todos están dormidos, no hay disturbios. Juzgando por la expresión en su rostro, Dussel sueña con comida. Pero no lo observo demasiado, porque el tiempo pasa volando y antes de que te des cuenta, serán las cuatro de la tarde y el pedante de Dussel estará parado con el reloj en su mano señalando que ya debería haber despejado la mesa hace un minuto.

Tuya, Ana.

Pág. 121.Sábado, 7 de agosto, 1943.Queridísima Kitty;Hace unas pocas semanas, comencé a escribir una historia, algo que inventé yo

misma desde principio a fin, y lo disfruté tanto que ya mis producciones ya se están acumulando.

Tuya, Ana.

Lunes, 9 de agosto, 1943.Queridísima Kitty, Continuamos con un típico día en el Anexo. Dado que ya hemos almorzado, es

tiempo de que te describa el momento de la cena.El señor Van Daan. A él se le sirve primero, y toma porciones abundantes de todo

lo que le apetece. En general, siempre se une al tema de conversación y nunca deja de dar su opinión. Una vez que ha hablado, no hay forma de cambiar su punto de vista. Si alguien se atreve a sugerir una opinión contraria, el señor Van Daan sabe muy bien como defender lo que piensa. Ay, él puede murmurar como un felino… pero preferiría que no lo hiciera. Una vez que lo has visto hacerlo, no quieres volver a verlo jamás. Su opinión es la mejor, él sabe más que todos sobre cualquier tema. Sin lugar a dudas, el hombre tiene una buena cabeza sobre sus hombros, pero su ego está inflado en proporciones incalculables.

Page 69: El Diario de Ana Frank

Madame. De hecho, lo mejor sería no decir nada sobre ella. Algunos días, especialmente en aquellos en que su mal humor se avecina, sus gestos son difíciles de comprender. Si analizas las discusiones, no siempre es el tema de discusión, ¡pero sí la culpable! Un hecho que todos prefieren ignorar. Aún así, se la puede llamar la instigadora de las discusiones. Encender la llama de la discordia, eso es a lo que la señora Van Daan llama diversión: Entre Ana y la señora Frank, y entre Margot y el señor Frank, pero esto último no es tan fácil.

Pero volvamos a la mesa. La señora Van Daan puede creer que nunca recibe lo suficiente, pero ese no es el problema. Siempre escoge las mejores patatas, el trozo de comida más sabroso y tierno. Los demás ya tendrán su turno, en tanto y en cuanto ella recibe las mejores porciones. (Y hace exactamente

Pág. 122.Lo mismo de lo que ella acusa a Ana). Su segundo característica: seguir hablando.

Mientras haya alguien escuchándola, no pareciera importarle si al otro le interesa lo que tiene para decir. Debe creer que cualquier cosa que la señora Van Daan tenga para decir, debe importarle a todos.

Sonríe coquetamente, pretende saber todo, ofrece a todos un consejo de madre – seguramente logre así dar una buena impresión. Pero si la observas un poco mejor, esa buena impresión de ella se desvanece. Ella es trabajadora, alegre y coqueta – y hasta a veces pone buena cara. Esa es Petronella Van Daan.

El tercer comensal. Habla muy poco. El joven señor Van Daan es usualmente callado y rara vez su presencia se hace notar. En lo que concierne a su apetito, nunca se sacia. Incluso después de una cena suculenta, puede mirarte calmadamente a los ojos y asegurar que podría haber comido el doble de lo que comió.

Número cuatro – Margot. Come como un pajarito y no habla casi nada. Sólo come vegetales y fruta. “Malcriada”, en opinión de los Van Daan. “Falta de ejercicios y de aire fresco”, en nuestra opinión.

Al la do de ella- mamá. Goza de buen apetito y habla bastante. A nadie le da la sensación, como sí sucede con la señora Van Daan, de que ella sea un ama de casa ¿Cuál es la diferencia entre ambas? Bueno, la señora Van Daan cocina y mi madre sólo lava los platos y lustra los muebles.

Números seis y siete. No diré mucho sobre mi padre y sobre mí. El primero es la persona más modesta de la mesa. Siempre se fija que a los demás se les haya servido primero. No pide nada para si mismo; lo mejor debe ser para los niños. Él es dios personificado. Sentado junto a él está el pequeño manojo de nervios del anexo.

Dussel. Se sirve a sí mismo, mantiene su mirada en su plato, come

Pág.123.Y no habla. Y si tiene que decir algo, por dios que sólo de comida. Ese tema no

lleva a disputas, sólo a alardes. Consume porciones enormes, y la palabra “no” no es parte de su vocabulario, sea la comida buena ó mala.

Usa los pantalones hasta el alto de pecho, una chaqueta roja, pantuflas de cuero negras, y anteojos de marcos negros y pronunciados – así es como luce cuando está trabajando en su pequeña mesa, siempre estudiando pero jamás avanzando. Este momento es sólo interrumpido por su pequeña siesta, las comidas y - su actividad favorita- el aseo. Tres, cuatro ó cinco veces al día habrá alguien detrás de la puerta del baño, esperando impacientemente sobre una y otra pierna, tratando de aguantarse y conteniéndose difícilmente ¿Le importa a Dussel? En lo absoluto. De siete quince a siete treinta, de doce y media a una, de dos a dos quince, de cuatro a cuatro quince, de seis a seis quince, de once y media a doce. Podría incluso programar mi reloj en base a sus

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“sesiones regulares”. El nunca se desvía ó se deja desconcentrar por las voces detrás de la puerta, que le ruegan que abra la puerta antes de que ocurra un desastre.

Número nueve. No es parte de la familia del Anexo, aunque ella comparte nuestra casa y nuestra mesa. Bep tiene un gran apetito. Deja su plato vació y no es quisquillosa con la comida. Bep es muy fácil de complacer y eso nos complace a nosotros. Ella puede ser caracterizada del siguiente modo: alegre, de buen humor, amable y bien predispuesta.

Martes, 10 de agosto, 1943.Queridísima Kitty;Tengo una nueva idea: Durante las comidas, hablo más conmigo misma que con

los otros, lo cual tiene dos ventajas. En primer lugar, ellos están contentos de no tener que escuchar mi continuo parloteo; en segundo lugar, no tengo que disgustarme por sus opiniones. No creo que mis opiniones sean estúpidas pero otros sí lo creen, así que

Pág. 124.Es mejor que me las reserve para mí misma. Aplico la misma táctica cuando tengo

que comer algo que odio. Pongo el plato frente a mí, pretendo que es delicioso, evito mirarlo lo más posible, y logro terminarlo antes de si quiera darme cuenta de lo que era. Cuando me despierto a la mañana, otro momento muy desagradable del día, me levanto de la cama y pienso para mis adentros, “pronto estarás bajo las mantas nuevamente”; camino hacia la ventana, retiro las cortinas, estornudo un poco por el polvillo hasta que logro respirar aire fresco, y recién ahí logro despertarme. Arreglo MI cama rápidamente para no caer en la tentación de volver a meterme en ella ¿Sabes que nombre le da mi madre a este tipo de cosas? El arte de vivir ¿No es una expresión graciosa?

Todos nos hemos sentido un tanto confundidos esta última semana porque nuestras amadas campanas de Westertoren han sido quitadas para ser derretidas para la guerra, así que no tenemos idea de la hora exacta, ya sea de noche ó de día. Todavía tengo esperanzas de que consigas unas campanas substitutas, hechas de metal ó de cobre ó de algo similar, para devolverle al vecindario su reloj perdido.

Cada lugar al que voy, arriba ó abajo, recibo miradas de elogio hacia mis pies, los cuales están decorados con un par de excepcionalmente bellos zapatos (¡para estos tiempos!). Miep logró conseguirlos por 27.50 guilders. De color borgoña, aterciopelados y con un taco mediano, me siento como si anduviera sobre zancos, y me hacen lucir aún más alta de lo que ya lo soy.

Ayer no fue un día de suerte para mí. Me pinché el pulgar derecho con la punta de una gran aguja. Como resultado, Margot tuvo que pelar las patas por mí (lo cual no fue nada malo para mí), y escribir también me resultó complicado. Luego me golpeé con la puerta de la alacena tan fuere que casi me deja inconsciente, y encima me retaron por haber hecho tanto alboroto. No me dejaron abrir las canillas del baño para mojar mi frente, así que ahora tengo con un gran chichón sobre mi ojo derecho. Para complicar aún más las cosas, el dedo pequeño de mi pie derecho se atascó en

Pág. 125.La aspiradora. Se dobló y me dolió, pero mis otras heridas ya me estaban

causando tantos problemas que dejé pasar este último, lo cual fue muy estúpido, porque ahora camino con un dedo infectado. Además, con el ungüento, la gasa y la cinta adhesiva, no puedo usar mis celestiales zapatos nuevos.

Dussel nos has puesto en peligro una vez más. Hizo que Miep le trajera un libro, en contra de Mussolini, que ha sido prohibido. En su camino hacia aquí, ella fue golpeada por una motocicleta de las SS. Perdió la compostura y les gritó, “¡Brutos!” y siguió

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caminando. No quiero siquiera imaginarme lo que hubiera pasado si ella hubiera sido detenida y trasladada a los cuarteles generales.

Tuya, Ana.

Una tarea diaria en nuestra pequeña comunidad: pelar patatas.

Una persona consigue los periódicos; otra, los cuchillos (quedándose tonel más afilado para sí mismo, por supuesto); una tercera persona, las patatas; y la cuarta, el agua.

El señor Dussel comienza. Quizás no las pele del mejor modo siempre, peor lo hace sin parar, mirando hacia derecha e izquierda para ver si los demás también lo hacen a su modo. Pero no, ¡ellos no lo están haciendo así!

“Mira, Ana, tomo el pelador en mimado de este modo, ¡y lo hago desde arriba hacia abajo! Nop, no así… ¡así!”

“Creo que mi modo es más sencillo, señor Dussel” le digo tímidamente.“Peor este es el mejor modo, Ana. Toma mi consejo. Por supuesto, no hay

problema, puedes hacerlo del modo en que tú quieras!Continuamos pelando. Lo observo a Dussel por el borde de mi ojo. Perdido en sus

pensamientos, él niega con la cabeza (por mí, por supuesto), peor no dice más nada.

Pág. 126.Continúo pelando. Luego miro a mi padre, que está a mí otro costado. Para él,

pelar patatas no es una tarea, sino un trabajo de precisión. Cuando lee, se le marca una profunda arruga en la nuca. Pero cuando prepara las patatas, frijoles ó vegetales, pareciera estar totalmente absorbido en su tarea. Pone su expresión característica de pelar patatas y cuando está dispuesto en ese modo en particular, sería imposible que las patatas no quedaran perfectamente peladas.

Sigo trabajando. Desvío mi mirada por un segundo, pero ese es todo el tiempo que necesito. La señora Van Daan está tratando de llamar la atención de Dussel. Empieza por mirar en dirección hacia él, pero Dussel pretende no darse por aludido. Ella guiña un ojo, pero Dussel sigue pelando. Se ríe, pero aún así Dussel solevanta la vista. Luego mi madre también ríe, pero Dussel no repara en ellas. Habiendo fallado en su objetivo, la señora Van D. se ve obligada a cambiar de táctica. Se hace un breve silencio. Luego ella dice, “Putty, ¿por qué no te pones un delantal? Si no lo haces, ¡tendré que pasar todo el día de mañana tratando de sacar esas manchas de tu traje!”

“¡No lo voy a ensuciar!”Otro breve silencio. “Putty, ¿por qué no te sientas?”“Estoy bien así ¡me gusta estar parado!”Silencio.“Putty, mira, ¡estás salpicando!”“Ya lo sé, mami, peor estoy siendo cuidadoso”La señora Van Daan busca otro tópico de conversación. “Dime, Putty, ¿por qué los

ingleses no están llevando a cabo ningún bombardeo hoy?”“¡Por que el clima está horrible, Kerli!”

Pág. 127.“Pero ayer el clima estaba agradable y tampoco estuvieron sobrevolando”“Cambiemos de tema”“¿Por qué? ¿Una persona no puede habar sobre ello ú ofrecer su opinión””“¡No!”“Bien, ¿por qué no?”

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“¡Ay, quédate callada, mami!”“El señor Frank siempre le responde a su esposa”El señor Van Daan trata de controlarse a sí mismo. Este comentario siempre le

cae mal, pero la señora Van Daan no renuncia fácilmente: “¡Oh, nunca a va a haber una invasión!”

El señor Van Daan empalidece, y cuando ella lo nota, su rostro se ruboriza pero aún así no se detiene: “¡Los británicos no están haciendo nada!”

El bombardeo comienza. “¡Y ahora cállate, por dios santo!”Mi madre difícilmente puede contener su risa, y yo la miro fijamente.Escenas como esta se repiten diariamente, a menos que hayan tenido una terrible

pelea. En ese caso, ni el señor ni la señora Van Daan dice una sola palabra.Es tiempo de que agarra más patatas. Voy al ático, donde Peter está ocupado

sacándole las pulgas al gato. Él mira hacia arriba, el gato lo nota y zaz…se ha ido. Se escapa por la ventana y se va directo a la alcantarilla.

Peter blasfema; yo me río y salgo de la habitación.

Pág. 128.Libertad en el Anexo

Cinco y media. El arribo de Bep significa el comienzo de nuestras horas nocturnas de libertad. Nos ponemos manos a la obra de inmediato. Subo con Bep, quien en general come su postre antes que nosotros. Apenas ella se sienta a la mesa, la señora Van Daan comienza a enumerar sus deseos. Su lista en general comienza con “Ah, de hecho, Bep, algo más que quisiera es…” Bep me guiña el ojo. La señora Van Daan no pierde oportunidad de hacer saber sus deseos a todos los que suben Debe ser una de las razones por las cuales nadie quiere subir allí.

Cinco cuarenta y cinco. Bep se va. Bajo dos pisos para echar un vistazo: Primero a la cocina, luego a la oficina privada y luego abro la puerta de gatos para que entre Mouschi.

Luego de un largo tour de inspección, entro a la oficina del señor Kugler. El señor Van Daan está ordenando todas las gavetas y ficheros con la correspondencia de hoy. Peter recoge a Boche y la llave del depósito; Pim carga las máquinas de escribir escaleras arriba; Margot busca un lugar tranquilo para hacer su trabajo de oficina; la señora Van Daan pone agua a hervir en una tetera; mi madre baja las escaleras co una sartén llena de patatas; todos conocemos nuestras tareas.

Peter vuelve del depósito. La primera pregunta que le hacen es si ha recordado traer el pan. No, no lo ha hecho. Se arrastra por el piso enfrente de la oficina central y gatea hasta el gabinete de acero, toma el pan y se marcha. Eso es lo que él tenía planeado hacer, pero antes de que se de cuenta, Mouschi salta por encima de él y se sienta debajo del escritorio.

Peter mira a su alrededor ¡Aha! Ahí está el gato. Vuelve gateando a la oficina y agarra al gato por la cola ¿Y qué ha logrado? Mouschi está ahora sentado contra la ventana, lamiéndose, muy

Pág. 129.Contento de haberse escapado de las garras de Peter. Peter no tiene otra opción

que tratar de sobornarla con un pedazo de pan. Mouschi toma la carnada, lo sigue, y la puerta se cierra.

Yo observo toda la escena a través de una rendija en la puerta.El señor Van Daan está enojado y da un portazo. Margot y yo intercambiamos

miradas y pensamos en lo mismo: se debe haber enojado nuevamente por algún mínimo

Page 73: El Diario de Ana Frank

error del señor Kugler, y se ha olvidado por completo de que la compañía Keg está aquí al lado.

Otros pasos son escuchados en el pasillo. Dussel entra, se dirige hacia la ventana de un modo muy ceremonial, estornuda…tose, y aclara su garganta. No ha tenido suerte – la pimienta produjo eso en él. Sigue caminando hacia la oficina central. Las cortinas están abiertas, lo que significa que no puedo acercarse para tomar sus hojas para escribir. Se retira con una mueca de enojo en su rostro.

Margot y yo cruzamos miradas nuevamente: “Una página menos para su amada en la carta de mañana”, la escucho decir. Asiento con la cabeza.

Se oyen pisadas de elefante en la escalera. Es Dussel, buscando refugio en su rincón preferido del anexo.

Continuamos trabajando. Noc, noc, noc…tres golpes a la puerta, ¡significan que es la hora de la cena!

Lunes 23 de agosto, 1943.

Cuando el reloj marca las ocho y media…

Margot y mi madre están nerviosas. “Shhh…padre. Se más silencioso, Otto. Shh… ¡Pim! Son las ocho treinta. Ven aquí, no puedes dejar correr el agua a esta hora ¡Camina más suavemente!” Esto es un ejemplo de lo que se le dice a mi padre en el baño. Cuando dan las ocho y media, él debe estar en el living.

Pág. 130.No más agua corriendo, no más inodoros en funcionamiento, nadie caminando por

los pasillos, no más ruido de ninguna índole. Mientras que el personal de la oficina no haya llegado, todo ruido que hagamos podrá ser más fácilmente escuchado en el depósito de al lado.

La puerta se abre escaleras arriba a las ocho y veinte, y eso es seguido por tres golpecitos al piso…es el cereal caliente de Ana que ya está listo. Subo las escaleras apresuradamente para recibir mi desayuno de perro.

Nuevamente abajo, todo debe ser realizado rápido: Me peino el cabello, vacío el urinario, vuelvo a poner la cama en su lugar ¡Silencio! ¡El reloj indica que son las ocho treinta! La señora Van Daan se cambia los zapatos y camina suavemente en pantuflas; el señor Van Daan hace lo mismo – fiel imagen de Charles Chaplin. Todo está en silencio.

La escena de una familia ideal ha llegado a su clímax. Quiero leer ó estudiar y Margot también. Lo mismo hacen mi madre y mi padre. Mi padre está sentado (con Dickens y un diccionario, por supuesto) en la punta de la hundida y ruidosa cama que ni siquiera tiene un colchón decente. Podría apilar dos almohadas una sobre la otra. “No las necesito”, piensa. “¡Estoy cómodo sin ellas!”

Una vez que comienza a leer, no vuelve a levantar la vista. Se ríe de vez en cuando y trata de hacer que mi madre lea algún pasaje. “¡Ahora no tengo tiempo!”.

Él parece desilusionado, pero luego continúa leyendo. Poco después, cuando vuelve a cruzarse con otro pasaje interesante, trata nuevamente: “¡Madre, tienes que leer esto!”

Mi madre se sienta en la cama plegable, y lee, cose, teje ó estudia, según cual es su prioridad en el momento. De pronto se le ocurre una idea, y rápidamente la comenta para que o se le olvide: “Ana, recuerda hacer…Margot, anota esto…”

Luego de un rato, se calla nuevamente. Margot cierra su libro de un golpe; mi padre arruga su frente, forma una extraña curva con sus ojos y su aruga que denota concentración vuelve a reaparecer

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Pág. 131.Detrás de su cabeza, y vuelve a concentrarse en su libro; mi madre comienza

charlar con Margot; a mi me produce curiosidad y también la escucho. Pim también es arrastrado a la conversación… ¡Nueve de la mañana! ¡Desayuno!.

Viernes, 10 de septiembre, 1943.Queridísima Kitty;Cada vez que te escribo, es por que algo especial ha sucedido, y en general algo

desagradable. Esta vez, sin embargo, algo maravilloso está sucediendo.El miércoles 8 de septiembre, estábamos escuchando las noticias de las siete

cuando escuchamos un anuncio: “Aquí tenemos una de las mejores noticias desde que ha comenzado la guerra: Italia se ha rendido” ¡Italia se ha rendido incondicionalmente!” La transmisión danesa desde Inglaterra comenzó a las ocho y cuarto con la siguiente noticia: “Oyentes, hace una hora y quince minutos, justo cuando terminaba de escribir mi reporte diario, recibimos la maravillosa noticia del rendimiento de Italia. Déjenme decirles, ¡nunca tiré mis notas a las basura con tanta alegría como lo hice hoy!”

“Dios salve al rey”, el himno nacional americano y la Internacional rusa, fueron tocadas. Como siempre, programa danés estaba dando buenas noticias pero sin ser demasiado optimista.

Los británicos arribaron a Nápoles. El norte de Italia está ocupado por los alemanes. La tregua fue firmada el viernes 3 de septiembre, el día que los británicos desembarcaron en Italia. Los alemanes protestan y despotrican contra la traición de Badoglio y del rey italiano.

Sin embargo, también hay malas noticias. Son sobre el señor Kleiman. Como tú sabes, todos lo queremos mucho. Él está siempre alegre y es extremadamente valiente, a pesar de estar muy enfermo y adolorido y de no poder comer mucho ó

Pág. 132.Caminar demasiado. “Cuando el señor Kleiman entra a una habitación, el sol

comienza a brillar”, dijo mi madre recientemente, y estaba absolutamente en lo cierto.Ahora parece que tiene que ir al hospital para realizarse una operación muy difícil

en el estómago, y tendrá que estar ahí por al menos cuatro semanas. Deberías haberlo visto cuando nos dijo adiós. Lo hizo con tanta naturalidad, como si hubiera salido para hacer algún recado.

Tuya, Ana.Jueves, 16 de septiembre, 1943.Queridísima Kitty,Las relaciones dentro del anexo están empeorando cada vez más. No nos

atrevemos a abrir nuestra boca durante las comidas más que para ingerir los alimentos, porque no importa que digamos, alguien siempre estará dispuesto a tomarlo del modo equivocado ó a ofenderse. El señor Voskujil viene a visitarnos ocasionalmente. Desafortunadamente, a él no le está yendo muy bien. Y esto también está afectando a su familia, porque su actitud parece ser la de “que me importa, ¡voy a morir de todos modos!” Cuando pienso en cuan sensibles están todos aquí, puedo imaginar lo que debe ser en casa de los Voskujil.

Estoy tomando valeriana para calmar la ansiedad y la depresión, peor no me impide que me sienta aún más miserable al día siguiente. Unas buenas carcajadas me harían mucho mejor que diez gotas valerianas, pero casi nos hemos olvidado de como reír. A veces tengo miedo de que mi cara se marque con todo este dolor y que mi boca se

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deforme a los costados. A los otros tampoco les esta yendo demasiado bien. Todos aquí temen por la llegada del gran terror conocido como invierno.

Otro hecho que contribuye a oscurecer nuestros días es que el señor Van Maaren, el hombre que trabaja en el depósito,

Pág. 133.Está sospechando de la existencia del anexo. Una persona con un poco de

cerebro ya debería haber notado que Miep a veces dice que va al laboratorio, que Bep va a la habitación de archivos, y que el señor Kleiman busca los productos Opetka, mientras que el señor Kugler asegura que el Anexo no pertenece a este edificio sino al de al lado.

No deberíamos preocuparnos por lo que el señor Van Maaren piense de la situación, excepto porque es conocido por ser poco confiable y muy curioso. No es alguien que pueda ser desanimado con una excusa precaria.

Un día el señor Kugler quiso ser extra precavido, así que a las doce y veinte se puso su saco y fue al mercado que está en la esquina. En menos de cinco minutos estaba de vuelta, y sigilosamente subió las escaleras, como si fuera un ladrón, para venir a visitarnos. A la una y cuarto se decidió a irse pero Bep lo encontró en el descanso y le avisó que Van Maaren estaba en la oficina. El señor Kugler cambió de opinión y se quedó con nosotros hasta la una treinta. Luego se sacó sus zapatos y sólo con sus medias (a pesar del frío) se dirigió al ático y bajó por las otras escaleras, de un paso a la vez para evitar el crujido de los peldaños. Le tomó quince minutos bajar las escaleras en silencio pero logró llegar a la oficina pretendiendo que venía de la calle.

Mientras tanto, Bep se había librado de Van Maaren y había venido al anexo a buscar al señor Kugler. Pero ya se había ido y para ese momento todavía estaba bajando en puntas de pie los escalones ¿Qué habrán pensado los transeúntes al ver al manager de la empresa ponerse los zapatos en la calle? ¡Ey, tú, el de las medias!

Tuya, Ana.

Pág. 134.Miércoles, 29 de septiembre, 1943.

Queridísima Kitty, Es el cumpleaños de la señora Van Daan. En vez de recibir una estampilla de

racionamiento para comprar queso, carne y pan, todo lo que obtuvo de nosotros fue una lata de jamón. Su esposo, Dussel, y el personal de la oficina, no le dieron más que flores y comida ¡Estos son los tiempos en que vivimos!

Bep tuvo un colapso nervioso la semana pasada por la cantidad de tareas que tenía para hacer. Diez veces al día, la mandaban a la calle para realizar alguna tarea, y en cada ocasión le insistían en que volviera rápido, ó en que hiciera más de un viaje, ó le decían que había hecho todo mal. Y cuando te pones a pensar que ella debe hacer su trabajo regular de oficina, que el señor Kleiman está enfermo, que Miep está en su casa con un resfriado, y que la misma Bep tiene un tobillo esguinzado, problemas con su novio y un padre gruñón, no es difícil de comprender por que está al borde de una crisis. Nosotros tratamos de consolarla y le dijimos que si ella se hubiera puesto firme una ó dos veces y hubiera dicho que no tenía tiempo, las listas de pedidos se hubieran reducido cuanto ella quisiera.

El sábado se dio una situación muy dramática, de esas que nunca se han visto aquí antes. Comenzó con una discusión sobre Van Maaren y terminó con una gran pelea y lágrimas. Dussel se quejó con mi madre de que él estaba siendo tratado como un leproso, que nadie era amigable con él y que, al final de cuentas, él no había hecho nada para merecerlo. Esto fue seguido por una charla en un tono muy amable, el cual

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afortunadamente no engaño a mi madre esta vez. Ella le dijo que él nos había decepcionado y que en más de una ocasión, había sido una gran fuente de conflicto. Dussel le prometió la luna, pero como es usual, no hemos visto siquiera un destello de ella.

Es difícil convivir con los Van Daan, déjame decirte. Mi padre está furioso porque nos han estado engañando: se han estado guardando carne y otras cosas. Ay, ¿Qué tipo de bomba está a punto de explotar ahora? ¡Si tan sólo no estuviera

Pág. 135.Envuelta en todas estas revueltas! ¡Si tan sólo pudiera irme! ¡No están volviendo

locos!Tuya, Ana.

Domingo, 17 de octubre, 1943.Queridísima Kitty, El señor Kleiman ha vuelto, ¡gracias a Dios! Luce un poco pálido, y aún así salió

animadamente a vender alguna ropa del señor Van Daan.El hecho desagradable es que el señor Van Daan se ha quedado sin dinero.

Perdió sus últimos cien guilders en el depósito, el cual aún está creándonos problemas: los hombres se preguntan como es que cien guilders han podido aparecer de la nada en el depósito en la mañana del lunes. Las sospechas abundan. Mientras tanto, los cien guilders han sido robados ¿Quién es el ladrón?

Pero estábamos hablando de la falta de dinero. La señora van Daan tiene grandes cantidades de vestidos, sacos y zapatos, y cree que no puede vivir sin ellos. El saco del señor Van Daan es difícil de vender y la bicicleta de Peter fue puesta a la venta, pero esta de vuelta porque nadie la quiso. Pero la historia no termina allí. La señora Van Daan tendrá que deshacerse de su tapado de piel. En su opinión, la empresa debería pagar por nuestros gastos, peor eso es ridículo. El señor y la señora han tenido una gran discusión al respecto pero ahora están en la etapa de “oh, mi querido Putti” y “Querida Kerli”, la etapa de reconciliación.

Me sorprendo al pensar en las atrocidades que este honorable hogar a tenido que atravesar el último mes. Mi padre anda con sus labios fuertemente apretados, y siempre que escucha su nombre, mira alarmado, como si tuviera miedo de ser llamado nuevamente para resolver algún nuevo y delicado problema. Mi madre está tan nerviosa que sus mejillas se han enrojecido, Margot se queja de dolores de cabeza, Dussel no puede dormir, la señora Van Daan vive nerviosa y enojada, y yo me he

Pág. 136 Vuelto completamente loca. Para decirte la verdad, a veces me olvido de con

quién estamos peleados y con quién no.El único modo de despejar mi mente es estudiar, y lo he hecho en gran manera

últimamente.Tuya, Ana.

Viernes, 29 de octubre, 1943.Mi queridísima Kitty,El señor Kleiman ha tenido que ausentarse nuevamente; su estómago no le da un

momento de paz. No sabe siquiera si su estómago ha dejado de sangrar. Vino a decirnos que no se sentía muy bien y que se iba a su casa, y por primera vez se lo veía realmente mal.

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El señor y la señora Van Daan han tenido más discusiones violentas. La razón es simple: están en bancarrota. Querían vender un sobretodo y un traje del señor Van Daan, pero no pudieron encontrar ningún comprador. Ponían precios muy elevados.

Tiempo atrás el señor Kleiman comentó algo sobre un hombre que trabaja con pieles. Esto le dio al señor Van D. la idea de vender el tapado de piel de si esposa. Esta hecho de piel de conejo y lo ha tenido por diecisiete años. La señora Van Daan obtuvo 325 guilders por el, una enorme cantidad de dinero. Ella quería quedarse el dinero para comprarse nueva ropa después de la guerra, por lo que le costó bastante al señor Van Daan hacerle entender que se necesitaba ese dinero desesperadamente para cubrir los gastos diarios.

No te das una idea de los gritos, llantos, pataleos y maldiciones que tuvieron lugar. Era aterrador. Mi familia esperó inmóvil, conteniendo la respiración, al pie de la escalera, en caso de que tuvieran que subir a separarlos. Las constantes riñas, llantos y nerviosismos han llegado a ser tan estresantes y frustrantes que por las noches me desplomo en mi cama llorando y agradeciendo a mis estrellas de la suerte que tengo al menos media hora para pensar en mí.

Yo estoy bien, aunque no tengo apetito. Sigo

Pág. 137.

Escuchando: “Dios, ¡luces horrible!” Debo admitir que están haciendo todo lo posible para mantenerme en condiciones: constantemente me dan glucosa, aceite de hígado, levadura y calcio. Los nervios me sacan de mis casillas, especialmente los domingos; esos son los días en que me siento verdaderamente miserable. La atmósfera está pesada, sofocante, abarrotada. Afuera no se escucha ni a un solo pájaro cantar y un silencio de ultratumba se esparce por la casa y se mete en mí como si fuera a arrastrarme hasta lo más profundo de los confines del mundo. En momentos como este, mi padre, mi madre y Margot no me molestan en lo más mínimo. Me paseo de habitación en habitación, subo y bajo las escaleras como un pájaro al cual le han arrancado sus alas y corretea entre los barrotes de su sombría jaula. “¡Déjenme salir, a donde han aire fresco y risas!”, pide a gritos una voz en mi interior. Ni siquiera me preocupo ya por responderle, sino que me desplomo en el diván. Dormir hace que el silencio y el terrible temor se pasen más rápido, hace que el tiempo se pase más rápido, ya que es imposible matarlo.

Tuya, Ana.

Sábado, 30 de octubre, 1943.Queridísima Kitty, Mi mare tiene sus nervios de punta, y eso no es una buena señal ¿Es una coincidencia que mi padre y mi madre nunca critiquen a Margot y siempre me culpen a mí por todo? Anoche, por ejemplo, Margot estaba leyendo un libro con unas bellas ilustraciones; se levantó y dejó el libro a un costado para continuarlo más tarde. No estaba haciendo nada, así que lo levanté y me puse a mirar las ilustraciones. Margot volvió, vio “su” libro en mis manos, me miró seriamente y demandó que le devolviera su libro. Yo quería seguir mirándolo un rato más. Margot se enfureció y mi madre comentó: “Margot estaba leyendo ese libro; devuélveselo”.

Pág. 138Mi padre llegó, y sin siquiera saber que estaba sucediendo, vio que Margot estaba

siendo maltratada y se dirigió directamente a mí: “¡Me gustaría ver qué harías si Margot estuviera viendo uno de tus libros!”

Page 78: El Diario de Ana Frank

Rápidamente me rendí, dejé el libro, y según ellos dejé la habitación “ofendida”. No estaba ofendida ni enojada, sino meramente triste.

No estuvo bien que mi padre me juzgara sin saber que había pasado. Yo le habría dado el libro a Margot, y mucho antes, si mi padre y mi madre no hubieran intervenido apresuradamente para defender a Margot, como si hubiera sufrido una gran injusticia.

Por supuesto, mi madre se puso de ladote Margot; ellas siempre se defienden mutuamente. Estoy tan acostumbrada a ello que me he vuelto indiferente a las críticas de mi madre y al humor de Margot. Las amo, peor sólo porque son mi madre y mi hermana. No me interesan en lo más mínimo como personas. Por lo que a mi concierne, pueden lanzarse a un lago. Es diferente con mi padre. Cuando lo veo defender a Margot, aprobar cada una de sus acciones, alabarla, abrazarla, siento un agudo dolor dentro mío, porque lo adoro. Es mi modelo a seguir, y la persona que más amo. Él no se da cuenta de que trata a Margot de un modo distinto del que me trata a mí: Resulta que Margot es la más inteligente, la más amable, la más linda y la mejor. Pero yo también tengo derecho a ser tomada en serio. Siempre he sido el payaso de la familia, el cero a la izquierda; siempre he tenido que pagar doble por mis pecados: con críticas de otros y con mi propia frustración. Ya no me satisfacen los afectos sin sentido ó las supuestamente serias charlas. Busco de mi padre algo que es incapaz de darme. No estoy celosa de Margot; nunca lo he estado. No siento envidia de su inteligencia ó su belleza.

Pág. 139.Simplemente me gustaría que mi padre verdaderamente me ama, no porque soy

su hija, sino por mí misma, Ana.Me apego a mi padre porque mi desinterés hacia mi madre crece día a día y sólo a

través de él puedo retener la última pizca de amor familiar que me queda. Él no entiende que a veces necesito expresar mis sentimientos por mi madre. Él no quiere hablar de ello y evita cada discusión que implique las fallas de mi madre.

Y aún así mi madre, con todos sus defectos, es más fuerte a la hora de enfrentarme. No se como debo actuar. Me cuesta lidiar con su desinterés, su sarcasmo, y su duro corazón, y sin embargo no puedo permitir que se me siga culpando por todo.

Soy lo opuesto a mi madre, por lo cual siempre nos enfrentamos. No pretendo juzgarla; no tengo ese derecho. Simplemente la veo como una madre. Peor ella no es una madre para mí – yo debo ser mi propia madre. Me he apartado de ella. Estoy definiendo mi propio camino, ya veremos a donde me lleva. No tengo opción, porque me figuro como una madre y una esposa debe ser y no veo nada de ello en la mujer a la que debo llamar “madre”.

Me digo a mí misma una y otra vez que debo dejar pasar el mal ejemplo de mi madre. Sólo quiero ver sus buenos aspectos, y buscar dentro mío lo que le falta a ella. Pero no resulta, y lo peor es que mi madre y mi padre no se dan cuenta de sus propios errores y de cuanto los culpo por haberme decepcionado ¿Existen aquellos padres que pueden hacer a sus hijos completamente felices?

A veces creo que Dios me está poniendo a prueba. Tendré que volverme una buena persona por mí misma, sin nadie que me sirva de modelo ó me dé consejos, pero me volveré aún más fuerte al fin de cuentas.

¿Quién más que yo va a leer algún día estas cartas? ¿A quién más que a mí misma puedo recurrir en busca de consuelo? Frecuentemente

Pág. 140.Tengo la necesidad de consuelo; a menudo me siento débil, y en la mayoría de las

ocasiones, fallo a mis expectativas. Sé de esta situación, y cada día me propongo ser mejor.

Page 79: El Diario de Ana Frank

Ellos no son consistentes en su trato hacia mí. Un día dicen que Ana es una chica razonable y capacitada para conocer todo, ¡y al día siguiente Ana es un tonto ganso que no sabe nada y cree que ha aprendido todo lo que necesita saber de sus libros! Ya no soy la bebé y pequeña malcriada de la cual todos se pueden reír. Tengo mis propias ideas, planes e ideales, pero todavía no he logrado articularlos.

Y bueno. Muchas cosas se me viene a la cabeza de noche cuando estoy sola, ó durante el día cuando estoy obligada a tolerar a personas con las que vivo y que malinterpretan mis intenciones. Esto es por lo cual siempre termino recurriendo a mi diario – empiezo y termino aquí porque Kitty siempre es paciente. Le prometí que, a pesar de todo, voy a seguir adelante; eso me enseñará mi propio camino y borrará mis lágrimas. Sólo espero poder ver resultados ó, aunque sea una vez, recibir aliento de alguien que me ame.

No me condenes, sólo piensa en mí como una persona que a veces llega a su límite de tolerancia.

Tuya, Ana.

Miércoles, 3 de noviembre, 1943.Queridísima Kitty,Para librar a nuestra mente de los problemas que nos rodean, y también para

crear nuevos, mi padre pidió un catálogo de una escuela por correspondencia. Margot examinó el enorme folleto tres veces sin encontrar nada de su agrado ni dentro de su presupuesto. Mi padre fue más fácil de satisfacer y decidió ordenar una lección de prueba de “Latín elemental”. Dicho y hecho; la lección llegó, Margot puso manos a la obra

Pág. 141.Muy entusiasmada y decidió tomar el curso, a pesar de su costo. Es muy difícil

para mí, aunque realmente quiero aprender latín.Para que yo también comenzara con un nuevo proyecto, mi padre pidió al señor

Kleiman una Biblia para niños para que finalmente aprendiera algo acerca del Nuevo Testamento.

“¿Planeas darle a Ana una Biblia para Hanukkah?” Preguntó Margot, algo perturbada.

“Sí…bueno, quizás el día de San Nicolás sería una mejor ocasión”, mi padre respondió.

Jesús y Hanukkah no van de la mano precisamente. Dado que la aspiradora se ha roto, debo barrer el polvo de la alfombra cada

noche. Las ventanas cerradas, las luces encendidas, el horno cocinando, y ahí estoy yo tratando de barrer la alfombra. “Esto seguro va a ser un problema”, pensé para mis adentros el primer día. “Estoy segura que habrá quejas”. Tenía razón: Margot tuvo una jaqueca por la gran nube de humo que revoloteaba en la habitación; el nuevo diccionario de latín de Margot estaba recubierto de polvo, y Pim protestó diciendo que el piso no lucía en lo más mínimo diferente de todos modos. Definitivamente, pocos agradecimientos a cambio de mis dolores de espalda.

Hemos decidido que a partir de ahora la estufa será encendida a las siete treinta los domingos en vez de a las cinco treinta. Creo que es arriesgado, ¿Qué van a pensar los vecinos de nuestra chimenea humeante?

Lo mismo con las cortinas. Desde que nos estamos escondiendo aquí, las cortinas han estado unidas a las ventanas. A veces, alguno de los caballeros ó de las damas no logran resistir la tentación de mirar hacia fuera. El resultado: una tormenta de reproches. La respuesta: “Ay, pero si nadie lo notará”. Así es como cada acto de descuido comienza

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y termina. Nadie lo notará, nadie oirá, nadie prestará ni un poco de atención. Es fácil decirlo, ¿pero es verdad?

Por el momento, las tempestuosas discusiones han

Pág. 142.Disminuido; solo Dussel y los Van Daan siguen sin ponerse de acuerdo. Cuando

Dussel habla de la señora Van Daan, él invariablemente la llama “ese viejo murciélago” ó “esa entupida bruja”, y al mismo tiempo, la señora Van Daan se refiere a nuestro caballero ilustrado como “ese viejo sirviente” ó como “un neurótico solterón”, etc.

¡Critican en el otro sus propios errores!Tuya, Ana.

Lunes al atardecer, 8 de noviembre, 1943.Queridísima Kitty, Si te pusieras a leer todas mis cartas de corrido, te sorprendería la gran variedad

de estados de ánimo en las que fueron escritas. Me molesta ser tan sensible a los estados de ánimo que imperan en el anexo, pero no soy la única: todos lo somos. Si estoy concentrada leyendo un libro, debo reorganizar mis pensamientos antes de relacionarme con el resto porque sino ellos podrían pensar que soy extraña. Como puedes ver, en este momento estoy en medio de una depresión. No podría decirte que la comenzó exactamente, pero creo que es producto de mi cobardía, que me confronta a cada paso. Esta tarde, cuando Bep todavía estaba aquí, el timbre sonó fuertemente por un rato. Instantáneamente me puso blanca, mi estómago se revolvió, y mi corazón latió salvajemente – y todo porque tenía miedo.

Por las noches en mi cama me veo a mí misma en una mazmorra, sin mi padre y mi madre. Ó vagando por las calles, ó viendo al anexo en llamas, ó siendo arrastrada de aquí en el medio de la noche, por lo que me acurruco debajo de mi cama desesperada. Veo todo como si verdaderamente estuviera sucediendo, ¡Y pensar que todo eso podría pasar pronto!

Usualmente Miep dice que nos envidia por tener tanta paz y tranquilidad aquí. Puede que sea verdad, peor obviamente no esta tomando nuestro temor en consideración.

Pág. 143.Simplemente no puedo imaginar que el mundo vuelva a ser normal para nosotros.

Sí hablo sobre “después de la guerra”, pero es como si hablara de un castillo en el aire, algo que jamás podrá volverse realidad.

Nos veo a nosotros ocho en el anexo como si fuéramos un pedazo de cielo azul rodeados por amenazantes nubes negras. El redondeado punto en el que estamos todavía está a salvo, pero las nubes se mueven hacia nosotros, y el aro que nos separa del peligro que se acerca, cada vez se tensa más y más. Estamos rodeados de oscuridad y peligro, y en nuestra búsqueda desesperada de escapar a ello, nos topamos con nosotros mismos. Observamos las peleas allí abajo y la paz y la belleza de allí arriba. Mientras tanto, hemos sido rodeados por la masa de nubes de negras, por lo que podemos subir, ó bajar. Se aparece ante nosotros como una pared impenetrable, tratando de chocarnos, pero sin lograrlo aún. Sólo puedo llorar e implorar, “RING, RING, ábrete y déjanos salir”.

Tuya, Ana.

Jueves, 11 de noviembre, 1943.Queridísima Kitty,

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Tengo un buen título para este capítulo:Oda a mi lapicera de pluma

In Memoriam

Mi pluma siempre ha sido una de mis más preciadas posesiones; la valoro mucho, especialmente porque tiene una plumilla gruesa, y sólo puedo escribir prolijamente con plumillas gruesas. Ha llevado una interesante vida como pluma, la cual resumiré ahora.

Cuando tenía nueve, mi pluma (envuelta en algodón) llegó como “un ejemplo de un valor no comercial” desde Aachen, donde mi abuela (la amable donante)

Pág. 144.Solía vivir. Yo caí en cama con gripe, mientras los vientos de febrero revoloteaban

alrededor del departamento. Esta formidable pluma llegó a mí en un estuche de cuero rojo, y se las mostré a mis amigas apenas pude. Yo, Ana Frank, la orgullosa poseedora de una lapicera de pluma.

Cuando tenía diez, se me permitió llevar la pluma a la escuela, y para mi sorpresa, la maestra me dejo escribir con ella. Cuando tenía once, sin embargo, mi tesoro tuvo que ser guardado nuevamente, porque mi maestra de sexto grado sólo nos dejaba usar las lapiceras de la escuela y los tinteros. Cuando tenía doce, comencé a asistir al liceo judío y mi pluma recibió un nuevo estuche para celebrar la ocasión. No sólo tenía espacio para un lápiz, también tenía un cierre, que era muy impresionante. Cuando tenía trece, la pluma vino con migo al anexo, y juntas hemos recorrido innumerables diarios y composiciones. Cumplí catorce y mi pluma estaba disfrutando el último año de su vida junto a mí cuando…

Acaban de dar las cinco del viernes a la tarde. Salí de mi habitación y estaba justo a punto de sentarme en la mesa para escribir cuando fui bruscamente empujada a un costado para hacer lugar para Margot y mi padre, quienes querían practicar latín. La pluma permaneció sin ser usada sobre la mesa, mientras que su dueña, suspirando, fue obligada a contentarse con un pequeño espacio en la esquina de la mesa, donde comenzó a limpiar frijoles. A las seis menos cuarto limpié el piso, tiré la basura dentro de un periódico, junto con los frijoles podridos, y tiré todo a la estufa. Una gigante llama apareció en escena, y me pareció que era maravilloso que la estufa, que parecía a punto de romperse, haya tenido una recuperación tan milagrosa.

Todo estaba en calma nuevamente. Los estudiantes de latín se habían marchado, y yo me senté en la mesa para retomar donde había quedado. Pero

Pág. 145.Sin importar a donde mirara, mi pluma no estaba en ninguna parte. Margot buscó,

mi madre buscó, mi padre buscó, Dussel buscó. Peor se había desvanecido.“Quizás cayó en la estufa, ¡junto a los frijoles!”, sugirió Margot.“¡No, no puede haberlo hecho!”, respondí.Pero aquella tarde, cuando mi pluma todavía no había aparecido, todos asumimos

que había sido quemada, especialmente porque el celuloide es altamente inflamable. Nuestros temores más oscuros fueron confirmados el día siguiente cuando mi padre fue a vaciar la estufa y encontró el clip que usaba para asegurarla a mi bolsillo, entre las cenizas. Ni rastro quedó de la pluma dorada. “Se debe haber derretido”, conjeturó mi padre.

Me queda sólo un consuelo, por más pequeño que sea: mi pluma fue cremada, ¡así como yo quisiera serlo algún día!

Tuya, Ana.

Page 82: El Diario de Ana Frank

Miércoles, 17 de noviembre, 1943.Queridísima Kitty,Eventos recientes han hecho temblar la casa. Debido a un brote de difteria de Bep,

ella no podrá venir a visitarnos por seis semanas. Sin ella, las compras y el cocinar, resultarán muy difíciles, sin mencionar lo mucho que extrañaremos su compañía. El señor Kleiman está aún en cama y no ha comido más que papillas por las últimas tres semanas. El señor Kugler está hasta la coronilla de trabajo.

Margot le envía sus lecciones de latín a un profesor, quien los corrige y se los vuelve a mandar. Ella se registra bajo el nombre de Bep. El profesor es muy amable, y también muy inteligente. Estoy segura de que está muy contento de tener una alumna tan brillante.

Dussel está muy alterado y no sabemos por que. Todo comenzó cuando vimos a Dussel muy callado en el piso de los Van Daan; no intercambió ni unas pocas palabras ni con el señor

Pág. 146.Ni con la señora Van Daan. Todos lo notamos. Esto continuó por unos cuantos

días y luego mi madre aprovechó la oportunidad de advertirlo acerca de la señora Van Daan, QUIen podría hacer su vida miserable si así lo quería. Dussel aseguró que el señor Van Daan había comenzado este “trato de silencio” y que el no tenía intenciones de romperlo. Debería explicar que ayer, 16 de noviembre, fue el aniversario de su primer año aquí en el anexo. Mi madre recibió una planta en alusión a la ocasión, pero la señora Van Daan, que había hecho referencia a la fecha desde hacía semanas atrás y expresaba libremente que ella creía que Dussel debía invitarnos a todos una cena, no recibió nada. En vez de aprovechar la ocasión para agradecernos - por primera vez – el haberlo hospedado desinteresadamente con nosotros, eligió no decir una sola palabra. Y por la mañana del dieciséis, cuando le pregunté si debía ofrecerle mis felicitaciones ó mis condolencias, él respondió que cualquiera de las dos estaría bien. Mi madre, habiéndose puesto en el rol de pacificadora, no logró ningún progreso en la situación, y todo terminó quedando igual.

Puedo decir sin exagerar que Dussel definitivamente ha perdido un tornillo. En general nos reímos porque no tiene memoria, ni opiniones estables ó sentido común. Nos ha entretenido más de una vez tratando de comentarnos las noticias que acababa de oír, ya que el mensaje se distorsiona con la transmisión. Además, responde a cada reproche ó acusación con una gran cantidad de promesas, las cuales nunca logra cumplir.

“Der Menn hat einen grossen Geist Und ist so klein von taten!”(Grande es el espíritu del hombre, ¡pero que graciosos son sus actos!)

Tuya, Ana.

Pág. 147.Sábado, 27 de noviembre, 1943.Queridísima Kitty,Anoche, cuando estaba por quedarme dormida, Hanneli apareció de repente frente

a mí. La vi allí, vestida con harapos, con el rostro delgado y demacrado. Me miró con tal

tristeza y reproche en sus ojos que pude leer el mensaje en ellos: “OH, Ana, ¿por qué me has abandonado? Ayúdame, ayúdame, ¡rescátame de este infierno!”

Y no puedo ayudarla. Sólo puedo observar mientras otros sufren y mueren. Sólo puedo rezar para que Dios la traiga de vuelta a nosotros. Vi a Hanneli, y a nadie más, y comprendí porqué. La juzgué mal, no fui lo suficiente madura como para entender cuan

Page 83: El Diario de Ana Frank

difícil era todo para ella. Ella era devota de su amiga, y debe haber parecido como si yo estuviera tratando de separarlas. Pobrecita, ¡se debe haber sentido tan mal! Lo se, ¡porque reconozco la sensación en mí misma! Tuve un flash ocasional de comprensión, pero luego me vi envuelta de un modo egoísta en mis propios problemas y placeres.

Fue muy malvado de mi parte tratarla así, y ahora ella estaba mirándome, desvalida, con su pálido rostro y su mirada de súplica ¡Si tan solo pudiera ayudarla! Querido Dios, tengo todo lo que pudiera desear, mientras que el destino la tiene a ella en sus garras mortales. Ella era tan devota como yo, quizá aún más que yo, y ella también quería hacer lo que era correcto. Pero entonces, ¿por qué he estado eligiendo vivir, mientras que ella probablemente muera? ¿Cuál es la diferencia entre nosotras? ¿Por qué estamos tan lejos ahora?

Para ser honesta, no había pensado en ella en meses – no, al menos por un año. No me había olvidado de ella pro completo, y aún así no fue hasta que la vi frente a mí que pensé en todo su sufrimiento.

Pág. 148.Ay, Hanneli, espero que si sobrevives al fin de la guerra y vuelves a nosotros, yo

sea capaz de compensar por el daño que te he causado. Peor incluso si alguna vez estuviera en la posición de ayudarla, ella no necesitaría

tanto esa ayuda como ahora. Me pregunto si alguna vez piensa en mí, ¿Cuáles serán sus sentimientos?

Dios misericordioso, consúelala, para que al menos no esté sola. Ay, si tan solo pudiera decirle que estoy pensando en ella con compasión y amor, quizá la ayudaría a seguir.

Tengo que dejar de carcomerme con esto. No me llevará a ningún lado. Sigo viendo sus enormes ojos, y me persiguen ¿Hanneli realmente cree en Dios, ó es que la religión simplemente ha sido impuesta en ella? Ni siquiera lo se. Jamás me tomé el trabajo de averiguar.

Hanneli, Hanneli, si tan sólo pudiera rescatarte, si tan solo pudiera compartir todo lo que tengo contigo. Es demasiado tarde. No puedo ayudarla, ó deshacer el mal hecho ¡Pero nunca la olvidaré y siempre rezaré por ella!

Tuya, Ana.

Lunes, 6 de diciembre, 1943.Queridísima Kitty,Mientras más se acerca el día de San Nicolás, todos nos acordamos de la cesta

festivamente decorada del año pasado. Más que nadie, pienso que sería terrible saltear una celebración este año. Tras una larga deliberación, finalmente se me ha ocurrido una idea, algo divertido. Consulté a Pim, y una semana a tras nos pusimos manos a la obra para escribir un verso para cada persona.

El domingo al atardecer a las ocho menos cuarto nos dirigimos escaleras arriba, cargando la canasta de ropa sucia, la cual había sido decorada con pedazos de papel y moños de papel de carbón rosa y azul. Encima de la canasta había un gran pedazo de papel de envoltura con una nota en él. Todos estaban sorprendidos por

Pág. 149.El gran tamaño del regalo. Tomé la nota y la leí en voz alta:

“Una vez más, el día de San Nicolásha llegado incluso a nuestro escondite;

me temo que no será tan divertido,

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como el día festivo que tuvimos el año pasado.Tuvimos esperanzas, sin dudarlo,

De que el optimismo ganaría la pulseada,Y que para este año,

Estaría libre, sano y salvos.Aún así, no olvidemos que es le día de San Nicolás,

Aunque no tengamos nada para regalar.Tendremos que encontrar algo más para hacer:

¡Así que todos revisen sus zapatos!”

Mientras cada uno sacaba su zapato de la canasta, se produjo una oleada de risas. Dentro de cada zapato había un pequeño papel dedicado a su dueño.

Tuya, Ana.

Miércoles, 22 de diciembre, 1943.Queridísima Kitty,Una terrible gripe me ha impedido que te escriba hasta hoy. Estar enfermo aquí es

espeluznante. Cada vez que tenía que toser, me tenía que enterrar bajo las mantas – una, dos, tres veces - y tratar de no volver a toser. La mayoría de las veces, el cosquilleo se negaba a irse, así que tenía que tomar leche con miel, azúcar ó pastillas para la tos. Me mareaba de tan sólo pensar en todas las curas a las que fui sometida: sudar para bajar la fiebre, baños de vapor, compresas mojadas, compresas secas, bebidas calientes, gárgaras, hacer reposo, bolsas de agua caliente, limonada, y

Pág. 150.Cada dos horas, el termómetro ¿Será que estos remedios realmente te ponen

mejor? La peor parte fue cuando el señor Dussel decidió jugar al doctor y apoyo su cabeza recubierta en gel sobre mi pecho para oír los sonidos que emitía. No sólo su cabeza me hacía cosquillas, sino que me sentía avergonzada, a pesar de que fue a la escuela hace treinta años y sí tiene algún tipo de título médico ¿Por qué tenía que apoyar su cabeza en mi corazón?, Después de todo, ¡él no es mi novio! Además, él no sería capaz de distinguir un sonido saludable de uno que no lo es. Debería lavarse sus orejas primero, ya que últimamente le está costando mucho oír. Pero basta de hablar de mi enfermedad. Estoy completamente sana. He crecido un centímetro y engordé casi un kilo. Estos pálida, pero ansiosa de volver a retomar mis libros.

Como una excepción, todos nos estamos llevando bien. No hay discusiones, aunque eso probablemente no dure mucho. No ha habido tanta paz y calma en esta casa por al menos seis meses.

Bep aún debe mantenerse aislada, pero cualquiera de estos días su hermana dejará de ser contagiosa.

Para Navidad, estamos comprando más aceite de cocina, dulces y melaza. Para Hanukkah, el señor Dussel les dio a la señora Van Daan y a mi madre una hermosa torta, que le había pedido a Miep que comprara ¡Encima de todo lo que tiene que hacer! Margot y yo recibimos un broche brillante, hecho con una moneda. No puedo describirlo realmente, pero es adorable.

También tengo un regalo de Navidad para Miep y Bep. Por todo un mes he guardado el azúcar que le pongo a mi cereal caliente, y el señor Kleiman lo ha usado para mandar a hacer un turrón de mazapán.

El clima esta lluvioso y nublado, la estufa apesta,

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Pág. 151.Y la comida nos cae pesada al estómago, produciendo una gran variedad de

sonidos.La guerra está en un impas, los ánimos han decaído.Tuya, Ana.

Viernes, 24 de diciembre, 1943.Querida Kitty,Como te he dicho muchas otras veces, los estados de ánimo tienen una tendencia

a afectarnos bastante aquí, y en mi caso esto ha empeorado últimamente. “En la cima del mundo, ó en las profundidades de la desesperación” (Una famosa frase de Goethe), esta frase verdaderamente se aplica a mí. Me siento en “la cima del mundo” cuando pienso cuan afortunados somos ó cuando me comparo con otros niños judíos, y “en las profundidades de la desesperación” cuando, por ejemplo, la señora Kleiman viene a visitarnos y nos habla del Jockey club de Jopie, de viajes en canoa, obras escolares y tardes de té con amigas.

No creo estar celosa de Jopie, pero deseo pasar un buen rato de una vez por todas y reírme tan fuertemente que duela. Estamos estancados en casa como si fuéramos leprosos, especialmente durante el invierno y las fiestas de Navidad Y Año Nuevo. De hecho, no debería siquiera estar escribiendo esto, ya que me hace parecer tan desagradecida, pero no puedo guardarme todo para mí misma, así que repetiré lo mismo que dije al principio: “El papel es más paciente que las personas”.

Cada vez que alguien viene desde afuera, con el viento en su ropa y el frío en sus mejillas, siento deseos de enterrar mi cabeza debajo de las mantas para evitar pensar, “¿Cuándo podremos respirar aire fresco otra vez?” No puedo hacer eso – por el contrario, debo mantener mi cabeza en alto y actuar con valentía ante las cosas, pero los

Pág. 152Pensamientos siguen viniendo de todos modos. No sólo una vez sino otra, y otra.Créeme, si has estado callada por un año y medio, puede llegar a ser demasiado

insoportable a veces. Pero los sentimientos no pueden ser ignorados, sin importar cuán injustos ó desagradecidos parezcan. Añoro andar en bicicleta, bailar, silbar, observar el mundo, sentirme joven y saber que soy libre, y sin embargo no puedo dejar que mis sentimientos se sepan. Imagínate lo que sería si los ocho sintiéramos lástima de nosotros mismos y camináramos con la sensación de descontento en nuestras caras ¿A dónde nos llevaría eso? A veces me pregunto si alguien alguna vez entenderá lo que trato de decir, si alguien alguna vez dejará pasar mi ingratitud y no se preocupará por si soy ó no judía y me verá meramente como una simple adolescente con una imperiosa necesidad de divertirse. No lo sé, y no sería capaz de hablar de ello con nadie, dado que se que me pondría a llorar. El llorar puede traer alivio, siempre y cuando no llores solo. A pesar de todas mis teorías y esfuerzos, extraño – cada día y a cada hora del día – tener una madre que me entienda. Es por eso que con cada cosa que hago y escribo, me imagino el tipo de mamá que me gustaría ser para mis hijos algún día. El tipo de madre que no se toma tan en serio todo lo que los demás dicen, pero que sí me tomara en serio a mí. Encuentro difícil explicar a lo que me refiero, pero la palabra “mamá” lo dice todo ¿Sabes lo que he inventado? Para poder tener la sensación de llamar a mi madre de un modo que suene similar a “mami”, suelo llamarla “mamsi”. A veces lo acorto a “mams”. Desearía poder honrarla con la eliminación de la “s”. Es bueno que ella no se de cuenta de esto, dado que sólo la haría infeliz.

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Bueno, basta con este tema. Mi escritura de algún modo me ha traído hasta aquí desde “las profundidades de la desesperación”.

Tuya, Ana.

Pág. 153. Es el día después de Navidad, y no puedo evitar pensar en Pim y en la historia

que me contó el año pasado para esta fecha. No entendí en ese momento el significado de sus palabras tan bien como lo hago ahora. ¡Si tan sólo volviera a mencionarlo ahora, podría mostrarle que entendí a lo que se refería!

Creo que Pim me lo contó porque conoce tantos “secretos íntimos” de tantas otras personas, que necesitaba expresar sus propios sentimientos al menos por una vez; Pim nunca habla de sí mismo, y no creo que Margot tenga siquiera una idea de todo por lo que él ha pasado. Pobre Pim, no puede engañarme y hacerme creer que se ha olvidado de aquella niña. Nunca lo hará. Todo esto lo ha vuelto muy tolerante, dado que él no es ciego a los errores de mi madre. Espero ser siquiera un poco como él algún día, ¡sin tener que pasar pro lo que él ha pasado!

Ana.

Lunes, 27 de diciembre, 1943.Viernes por la tarde, por primera vez en mi vida, recibí un regalo de Navidad. El

señor Kleiman, el señor Kugler y las chicas han preparado una maravillosa sorpresa para nosotros. Miep hizo una deliciosa torta navideña con la frase “Paz 1944” escrita sobre ella, y Bep trajo un paquete de galletitas tan ricas como las que había antes de la guerra.

También hubo una jarra de yogurt para Peter, Margot y yo, y una botella de cerveza para cada uno de los adultos. Además, todo estaba tan bien decorado, con preciosas fotos pegadas a los paquetes. Por lo demás, las fiestas pasaron rápidamente para nosotros.

Ana.

Miércoles, 29 de diciembre, 1943.Anoche estaba muy triste nuevamente. La abuela y Hanneli vinieron a mí una vez

más. La abuela, ay, mi dulce abuela. Cuan poco entendimos lo mucho que sufrió, cuan amable

Pág. 154. Era ella siempre y lo mucho que se preocupaba por nosotros. Y pensar que todo

ese tiempo ella estuvo cuidadosamente ocultando su terrible secreto * (* a abuela de Ana tenía una enfermedad terminal)

La abuela era siempre tan buena y leal. Nunca nos hubiera decepcionado. Sin importar lo que pasara, y cuan mal me comportara, ella siempre salía en mi defensa. Abuela, ¿acaso me amabas ó tú tampoco me comprendiste? No lo se. Cuan sola se debe haber sentido la abuela, a pesar de tenernos a nosotros. Uno puede sentirse solo aún siendo amado por muchas personas, siempre que uno no sea ese alguien amado en especial por otro.

¿Y Hanneli? ¿Esta viva aún? ¿Qué está haciendo? Querido Dios, cuídala y tráela nuevamente con nosotros. Hanneli, tú me recuerdas el destino que yo podría haber corrido. Me sigo viendo a mí misma en tu situación ¿Entonces por qué me siento miserable por las cosas que suceden aquí? ¿No debería estar feliz, contenida, alegre, excepto cuando pienso en Hanneli y en aquellos que sufren junto a ella? Soy egoísta y cobarde ¿Por qué siempre sueño con las cosas más espantosas y quiero gritar

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aterrorizada? Porque, a pesar de todo, aún no tengo suficiente fe en Dios. Él me ha dando tanto, que no merezco, ¡y aún así cometo tantos errores cada día!

Pensar en el sufrimiento de aquellos a quienes aprecias te reduce a un mar de lágrimas; de hecho, podrías pasar todo el día llorando. Lo mejor que puedes hacer es rezar a Dios para que produzca un milagro y salve al menos a algunos de ellos ¡Espero estar rezando lo suficiente!

Ana.

Pág. 155.Jueves, 30 de diciembre, 1943.Queridísima Kitty, Desde la última oleada de discusiones, las cosas se han calmado aquí, no sólo

entre nosotros, Dussel y “los de arriba”, sino también entre el señor y la señora Van Daan. De todos modos, unos nubarrones se están acercando hacia aquí, y sólo por una cuestión de…comida. A la señora Van Daan se le ocurrió la ridícula idea de freír menos patatas por la mañana y guardarlas para más tarde en el día. Mi madre, Dussel y el resto de nosotros no estuvieron de acuerdo con la idea, así que ahora también dividimos las patatas entre las distintas familias. Aparentemente, la grasa y el aceite no se están dividiendo de un modo equitativo, y mi madre tenga que ponerle un freno a esta situación. Te haré saber si se producen adelantos significativos en la situación. Los últimos meses hemos estado dividiendo la carne (la de ellos con grasa, la nuestra sin), la sopa (ellos la comen, nosotros no), las patatas (las de ellos peladas, las nuestras no), algunas otras cosas extras y ahora también las patatas fritas.

¡Si tan sólo pudiéramos separarnos por completo!Tuya, Ana.

PD: Bep hizo una copia de una postal con una foto de la familia Real para mí. Juliana luce muy joven, y también así la reina. Las tres pequeñas niñas son adorables ¿Fue un gesto muy amable de Bep, no crees?

Domingo, 2 de enero, 1944.Queridísima Kitty, Esta mañana, cuando no tenía nada que hacer, me puse a hojear mi diario y me

encontré con muchas cartas que trataban el tema de mi “madre” de un modo tan agresivo que me sorprendió. Me pregunté a mi misma, ¿Ana esa eres realmente tú hablando de odio de esa forma?, Ay, Ana, ¿cómo pudiste?

Continué sentada con el libro abierto sobre mis manos y me pregunté por qué tenía tanta ira y odio que debía confiarte a ti. Traté de entender a la Ana

Pág. 156.Del año pasado y me disculpé por ella, porque mientras te deje a ti con estas

acusaciones sin explicar lo que las causó, mi conciencia no estará tranquila. Sufrí (y aún lo hago) por los cambios de ánimo que me mantuvieron con la cabeza bajo el agua (hablando de modo figurativo) y me permití ver las cosas sólo desde mi propia perspectiva., sin considerar calmadamente lo que otros - aquellos que yo, con mi fuerte temperamento, había ofendido ó herido – habían tenido para decir.

Me escondí en mí misma, no pensé en nadie más que en mí y relajadamente escribí mis alegrías, sarcasmos y penas en mi diario. Porque este libro se ha convertido en una especie de libro de la memoria, significa mucho para mí pero igualmente en muchas de sus páginas podría escribir “superado”.

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Estaba furiosa con mi madre (y lo sigo estando la mayor parte del tiempo). Es verdad, ella no me comprendía, pero yo no la comprendía a ella tampoco. Porque me amaba, era tierna y cariñosa, pero debido a la difícil situación en la que la puse y las tristes circunstancias en que se encontró, ella estaba nerviosa e irritable, así que puedo entender porque a veces era distante conmigo.

Yo estaba ofendida, me tomé todo muy a pecho y fui insolente y mal educada con ella, lo cual, en consecuencia, la hizo infeliz. Quedamos atrapadas en un círculo vicioso de maltratos y dolor. No fue un período muy feliz para ninguna de las dos, pero al menos está llegando a su fin. No quise ver lo que estaba sucediendo, y me sentí muy apenada por mí misma, pero eso también es entendible.

Esos arrebatos de violencia en el papel son simplemente expresiones de rabia que, en condiciones normales de vida, podría haber resuelto encerrándome en mi habitación y rebelándome en cuanto a algunas cosas ó insultando a mi madre a sus espaldas.

El período de críticas lastimeras a mi madre ha pasado. Soy más sabia ahora y los nervios de mi madre se han mantenido más estables.

Pág. 157.

La mayoría de las veces logro contener mis palabras cuando estoy enojada, y ella también lo hace; así superficialmente parece que nos lleváramos mejor. Pero hay una sólo cosa que no puedo hacer: amar a mi madre con la devoción de un niño.

Suavizo mi conciencia con la idea de que es mejor escribir en papel las palabras que hieren a que hacer que mi madre las tenga que cargar en su corazón.

Tuya, Ana.Jueves, 6 de enero, 1944.Queridísima Kitty,Hoy tengo dos cosas que confesar. Me va a tomar un largo rato, pero se las tengo

que decir a alguien, y tú eres el mejor candidato, dado que se que guardarás el secreto, sin importar qué.

El primero es sobre mi madre. Como tú sabes, con frecuencia tengo quejas sobre ella y últimamente he tratado de ser más amable. De repente me he dado cuenta de qué es lo malo en ella. Mi madre nos ha dicho que ella nos ve más como amigas que como hijas. Eso es muy dulce, por supuesto, excepto por el hecho de que una amiga no puede reemplazar a una madre. Necesito que mi madre se convierta en mi ejemplo a seguir y una persona digna de mi respeto, peor en la mayoría de los casos ella es un ejemplo de lo que no se debe hacer. Tengo la sensación de que Margot piensa tan distinto a mí respecto a estos temas que creo que jamás sería capaz de comprender lo que te acabo de decir. Y mi padre evita toda conversación que tenga que ver con mi madre.

Imagino a una madre como una mujer que, por sobre todas las cosas, posee un gran tacto, en especial hacia sus hijos adolescentes, y no una que, como mamsi, se ríe de mí cuando lloro. No porque me sienta dolida, sino por otras cosas.

Esto puede sonar banal, pero hay un incidente por el cual jamás la he perdonado. Sucedió un día cuando tuve que ir al dentista. Mi madre y Margot planearon ir conmigo

Pág. 158.Y acordamos en que yo llevaría mi bicicleta. Cuando el dentista terminó y

estábamos nuevamente en la calle, Margot y mi madre me informaron dulcemente que irían al centro a comprar ó mirar algo, no recuerdo qué, y por supuesto yo quise ir con ellas. Pero ellas dijeron que no podía ir porque tenía mi bicicleta conmigo. Lágrimas de rabia se agolparon en mis ojos, y Margot y mi madre se rieron de mí. Estaba tan furiosa

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que les saqué la lengua enfrente de todos en la calle. Una señora mayor pasaba por la calle en ese momento y me miró totalmente horrorizada. Fui en bicicleta hasta casa y debo haber llorado por horas. Aunque parezca extraño y mi madre me haya herido miles de veces, esta herida en particular aún me duele cada vez que pienso en lo enojada que estaba ese día.

Me cuesta confesar lo segundo porque es sobre mí misma. No soy pudorosa, Kitty, y aún así cada vez que alguien comenta sus viajes al baño, lo cual hacen muy a menudo, todo mi cuerpo se revuelve por dentro.

Ayer leí un artículo sobre sonrojarse escrito por Sis Heyster. Fue como si ella lo hubiese escrito para mí. No es que me sonroje fácilmente, pero el resto del artículo sí se refería a mí. Lo que decía básicamente era que durante la pubertad las niñas se encierran en sí mismas y comienzan a pensar en los drásticos cambios que tienen lugar en sus cuerpos. Eso también me sucede a mí, lo cual probablemente de cuenta de mi reciente sensación de vergüenza cuando me encuentro frente a Margot, mi madre y mi padre. Por otro lado, Margot es mucho más tímida que yo y sin embargo no se siente avergonzada en lo más mínimo.

Creo que lo que me está pasando es maravilloso, y no me refiero sólo a los cambios que se están dando en el exterior de mi cuerpo, sino también hacia el interior. Nunca traté estos temas con nadie más, razón por la cual debo hablarlos conmigo misma. Cada vez que tengo mi período (y eso sólo ha sucedido tres veces), tengo la sensación de que a pesar de todo el dolor e incomodidad que me ocasiona,

Pág. 159.Llevo conmigo un dulce secreto. Así que a pesar de que es una molestia, en cierto

modo siempre espero con ansias el momento en que sentiré ese dulce secreto dentro de mí nuevamente.

Sis Heyster también escribe que las chicas de mi edad son muy inseguras de sí mismas y están empezando a descubrir que son individuos con ideas propias, pensamientos y hábitos. Acababa de cumplir trece cuando llegué aquí, y empecé a pensar en mí misma y a darme cuenta de que me he convertido en una “persona independiente” antes que la mayoría de las chicas. A veces cuando estoy recostada en mi cama por las noches, siento la necesidad imperiosa de tocar mi pecho y escuchar el calmo y constante latir de mi corazón.

Inconscientemente, he tenido estos sentimientos incluso antes de llegar aquí. Una noche que me quedé a dormir de Jacque, no pude controlar mi curiosidad por mirar su cuerpo, el cual siempre me ocultó y jamás he visto. Le pregunté si, como una prueba de nuestra amistad, podíamos tocarnos el pecho la una a la otra. Jacque se negó. También tuve un deseo incontenible de besarla, y lo hice. Cada vez que veo a una mujer desnuda, como a la Venus en mi libro de historia, entro en estado de éxtasis. A veces las encuentro tan exquisitas que tengo que luchar para contener mis lágrimas ¡Si tan sólo tuviera una amiga!

Jueves, 6 de enero, 1944.Queridísima Kitty,Mi deseo de tener alguien con quien hablar se ha vuelto tan intolerable que de

cierta forma se ha puesto en mi cabeza el elegir a Peter para este rol. En las pocas ocasiones en que he ido a la habitación de él durante el día, siempre pensé que era agradable y acogedor. Pero Peter es demasiado educado para indicarle a alguien el camino de salida cuando lo están molestando, así que nunca me he atrevido a estar allí por mucho tiempo. Siempre tuve miedo de que él creyera que era una peste. He briscado

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excusas para quedarme en su habitación y lograr que él hable conmigo sin darse cuenta, y ayer tuve

Pág. 160.Mi oportunidad. Peter, verás, está en este momento en una etapa de total

fascinación con los crucigramas, y es lo único que hace en todo el día. Lo estaba ayudando cuando de repente terminamos sentados uno enfrente del otro, él en su silla y yo en el diván.

Me sentí muy bien cuando lo miré directo a sus ojos azules y vi la timidez que le había causado mi inesperada visita. Pude leer sus pensamientos más profundos, y en su rostro vi una mirada de incertidumbre ante cómo comportarse, y al mismo tiempo un destello de su masculinidad. Vi su timidez, y me derretí. Quería decir, “Háblame sobre ti. Mira más allá de mi exterior de charlatana”. Peor describí que era más fácil pensar esas preguntas que realizarlas.

El anochecer llegó, y nada sucedió, excepto que le conté sobre el artículo acerca de ruborizarse. No lo que te escribí a ti, por supuesto, sino que él se sentiría más seguro cuando creciera.

Esa noche me recosté en mi cama y lloré desconsoladamente, pero cuidándome de que nadie me oyera. La idea e pedir favores a Peter era simplemente desagradable. Pero las personas haría cualquier cosa por satisfacer sus deseos; tómame a mí, por ejemplo, me he puesto en la cabeza la idea de visitar a Peter más a menudo y, de algún modo, lograr que me hable.

No debes creer que estoy enamorada de Peter, porque no lo estoy. Si los Van Daan hubieran tenido una hija en vez de un hijo, hubiera tratado de ser amiga de ella también.

Esta mañana me desperté justo antes de las siete e inmediatamente recordé lo que había estado soñando. Estaba sentada en una silla y enfrente de mí estaba Peter…Peter Schiff. Estábamos hojeando un libro ilustrado de Mary Bos. El sueño era tan vívido que hasta recuerdo algunas de las imágenes. Pero eso no fue todo – el sueño continuó. Los ojos de Peter repentinamente se posaron en los míos, y me quedé observando esos

Pág. 161.Aterciopelados ojos marrones. Luego él dijo muy suavemente, “Si lo hubiera

sabido, ¡habría venido a ti hace tanto tiempo!” me moví bruscamente, abrumada de emoción. Y luego sentí una suave, calma y gentil mejilla junto ala mía, y se sentía tan, tan bien…

EN ese momento me desperté, aún sintiendo su mejilla contra la mía y sus marrones ojos mirando dentro de mi alma, tan profundamente que él podía leer cuanto lo he amado y cuanto lo amo aún. Nuevamente mis ojos se llenaron de lágrimas, y me sentí triste porque una vez más lo había perdido, y a la vez me sentí feliz porque supe con certeza que Peter es el único para mí.

Es gracioso, pero a veces las imágenes en mis sueños son muy vívidas. Una noche vía a Grammy* (* Grammy es la abuela de Ana en su rama paterna, Abuela es como llama a la del lado materno) tan claramente que incluso pudo besar su suave y aterciopelado rostro arrugado. En otra ocasión la abuela se me apareció como un ángel guardián. Luego apareció Hanneli, la cual aún simboliza para mí el sufrimiento de mis amigos y de los judíos en general, así que cuando rezo por ella, también lo hago por los judíos y por todos aquellos que lo necesitan.

Y ahora Peter, mi muy querido Peter. Nunca había tenido una imagen mental de él tan clara. No necesito una fotografía, lo puedo ver perfectamente bien.

Tuya, Ana.

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Viernes, 7 de enero, 1944.Queridísima Kitty,Soy una idiota. Olvidé que todavía no te he contado la historia de mi único y

verdadero amor.Cuando era pequeña y estaba en el jardín de infantes, me

Pág. 162.Empezó a gustar Rally Kimmerl. Su padre había muerto, y él y su madre vivían

con una tía. Un de los primos de Rally, Appy, era muy apuesto, delgado, y de pelo oscuro. Tiempo después comenzó a lucir como una estrella de cine y obtuvo más admiradoras que el bajito, cómico y regordete Rally. Por un buen tiempo íbamos a todos lados juntos, pero a un lado de esto, mi amor no fue correspondido hasta que Peter se cruzó en mi camino. Me enamoré profundamente de él. Yo también le gustaba a él, y fuimos inseparables por todo un verano. Todavía puedo vernos caminando de la mano por el vecindario, a él vestido con su traje de algodón blanco y a mí con un corto vestido de verano. Al final del verano, él comenzó el séptimo grado en la escuela secundaria, mientras que yo estaba en sexto grado en la escuela primaria. Él me pasaba a buscar en su camino a casa ó yo lo buscaba a él. Peter era el chico ideal: Alto, apuesto y delgado, con un rostro calmo, serio é inteligente. Tenía el pelo oscuro, unos hermosos ojos marrones, cachetes rosados y una bella nariz puntiaguda. Me volvía loca su sonrisa, la cual lo hacía lucir tan varonil y pícaro.

Me fui de vacaciones al campo durante el verano, y cuando volví, Peter ya no vivía en el mismo lugar; se había mudado con un chico mayor, que aparentemente le dijo que yo era una niñita, porque Peter dejó de verme. Lo amaba tanto que no quería aceptar la verdad. Seguí buscándolo hasta el día en que me di cuenta de que si continuaba persiguiéndolo, la gente diría que era una cualquiera.

Los años pasaron. Peter empezó a juntarse con chicas de su edad y nunca más se preocupó siquiera por saludarme. Comencé la escuela en el liceo judío, y varios chicos de mi clase estaban enamorados de mí. Lo disfrutaba y me sentía halagada por su atención, peor nada más. Más adelante, Hello se enamoró de mí, pero como ya te he dicho, nuca más volví a enamorarme.

Pág. 163.Existe un dicho: “El tiempo cura todas las heridas”. Así fue conmigo. Me dije a mí

misma que había olvidado a Peter y que ya no me gustaba en lo más mínimo. Pero sus recuerdos eran tan fuertes que tuve que admitir que la única razón por la cual ya no me gustaba más era porque estaba celosa de las chicas que lo rodeaban. Esta mañana me di cuenta de que nada ha cambiado; por el contrario, al crecer y volverme más madura, mi amor por él ha crecido junto a mí. Ahora puedo comprender que Peter haya pensado que yo era una niña, y aún así me duele pensar que él se ha olvidado de mí por completo. Vi su cara tan claramente; y supe con certeza que ningún otro se podría haber alojado en mi mente con tanta fuerza como Peter.

Hoy estoy en un estado de total confusión. Cuando mi padre me besó esta mañana, quería gritar, “¡Ay, si tan solo fueras Peter!” He estado pensando en él constantemente, y todo el día me he repetido a mí mima, “Ay, Pete, mi querido, querido, Pete…”

¿Dónde puedo hallarlo? Simplemente tengo que seguir viviendo y rezando a Dios para que, si alguna vez salimos de aquí, el camino de Peter y el mío se crucen nuevamente y el se fije en mí, vea en mis ojos el amor que siento por él y diga, “Ay, Ana, si lo hubiera sabido, ¡habría venido a ti hace tanto tiempo!”

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Un día cuando mi padre y yo estábamos hablando sobre sexo, él dijo que yo era muy joven para entender ese tipo de deseo. Pero yo pensé que sí lo entendía, y ahora estoy segura de ello ¡Nada deseo tanto ahora como a mi adorado Peter!

Observé mi cara en el espejo, y lucía tan diferente. Mis ojos eran claros y profundos, mis mejillas estaban rosadas como no lo habían estado en semanas, mis labios eran mucho más suaves. Lucía feliz, y aún así había una expresión de tristeza en mí por la que la sonrisa rápidamente se desvaneció de mi boca. No estoy feliz, porque sé que Pete no está pensando en mí, y sin embargo aún pudo sentir sus bellos ojos observándome y su

Pág. 164.Fresca y suave mejilla junto a la mía…Ay, Pete, Pete, ¿Cómo voy a lograr alguna

vez liberarme de tu imagen? ¿Acaso no sería un pobre substituto aquel que tomase tu lugar? Te amo, con un amor tan grande que simplemente ya no podría crecer más en mi corazón, sino que tendría que salirse de él y revelarse en toda su magnitud.

Una semana atrás, incluso un día atrás, si me hubieras preguntado, “¿Con cuál de tus amigos sería más factible que te cases?” Hubiera respondido, “¡Sally, porque él me hace sentir bien, en paz y a salvo!” Pero ahora llorando contestaría, “Pete, porque lo amo con todo mi corazón y toda mi alma ¡Me rendiría a él por completo!” Excepto por una sola cosa: Él puede tocar mi rostro, pero eso es lo más lejos a lo que podrá llegar.

Esta mañana imaginé que estaba enfrente del ático con Pete, sentados en el piso junto a la ventana, y tras hablar un rato, ambos comenzábamos a llorar ¡Momentos después sentí sus labios y su maravillosa mejilla! Ay, Pete, ven a mí ¡Ven a mí, mi querido Pete!

Miércoles, 12 de enero, 1944.

Queridísima Kitty,Bep ha regresado hace dos semanas, aunque a su hermana no se le permitirá

volver a la escuela hasta la próxima semana. Bep pasó dos días en cama con un resfriado. Miep y Jan también se ausentaron por dos días, por dolores estomacales.

De momento estoy pasando por una etapa en la que estoy obsesionada con la danza y el ballet por lo que estoy practicando con diligencia mis pasos de baile cada noche. Me he hecho un traje de baile ultramoderno con una camisola de encaje color lavanda que era de mamsi. Una cinta estrecha esta pasada alrededor del traje y esta atada justo debajo del busto. Un moño rosa completa el traje. Traté de convertir mis zapatillas en zapatos de baile, peor no tuve éxito. Mis miembros tiesos comienzan a recuperar su flexibilidad. Un excelente ejercicio es sentar en el piso, tomar

Pág. 165. cada talón con una mano y levantar tus piernas en el aire. Tengo que hacer esto

sentada en una almohada porque sino mi trasero queda realmente dolorido.Todos aquí están leyendo un libro llamado “Saludo a la libertad”. Mi madre pensó

que era extremadamente bueno porque describe una serie de problemas adolescentes. Pensé para mis adentros, un poco irónicamente, “¿¡Por qué no te preocupas más por tus propias adolescentes?!”

Creo que mi madre piensa que Margot y yo tenemos una relación con nuestros padres que es mejor que cualquiera en el mundo entero, y que ninguna madre está tan involucrada en las vidas de sus hijos como ella. Ella deber creer esto teniendo en mente a

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mi hermana, ya que no creo que Margot tenga los mismos problemas e ideas que yo. Igual yo no seré jamás la que le demuestre a mi madre que una de sus hijas es totalmente distinta a lo que ella cree. Ella entraría en un completo estado de shock, y sin embargo, no sería capaz de cambiar; prefiero evitarle esa pena, especialmente porque sé que todo permanecería igual. Mi madre siente que Margot la ama más que yo, peor cree que yo sólo estoy pasando por una etapa pasajera.

Margot se ha vuelto mucho más amable. Parece ser muy diferente a lo que solía ser. Ya no es tan maliciosa y se ha vuelto una verdadera amiga. Ella ya no piensa en mí como una niña pequeña que no tiene voz ni voto.

Es gracioso, pero a veces puedo verme a mí misma como otros lo hacen. Tomo una mirada analítica hacia la persona llamada “Ana Frank” y recorro las páginas de su vida como si fuera una extraña.

Antes de llegar aquí, cuando no pensaba las cosas tanto como ahora, ocasionalmente tenía la sensación de que no encajaba con mamsi, Pim y Margot y que siempre sería una extraña a esta familia. A veces pasaba meses pretendiendo que era una huérfana. Luego

Pág. 166.Me castigaba a mí misma por haberme puesto en el papel de víctima cuando en

realidad siempre había sido tan afortunada. Y me forzaba a mí misma a ser amigable por un tiempo. Cada mañana cuando oía pasos en las escaleras, deseaba que fuera mi madre viniendo a decirme buenos días. Yo respondía a su saludo cálidamente, porque honestamente esperaba con ansias un gesto de afecto de su parte. Pero luego ella me reprendía por haber hecho tal ó cual comentario y me iba a la escuela sintiéndome completamente desanimada. En mi camino de vuelta a casa, buscaba modos de excusar su comportamiento, diciéndome a mí misma que ella tenía muchas preocupaciones. Llegaba a casa de buen humor, hablando hasta por los codos, hasta que los eventos de la mañana se repetían y yo dejaba la habitación con mi mochila en una mano y una expresión pensativa en mi rostro. A veces me decidía a permanecer enojada, pero luego tenía tantas cosas que contar después de ir a la escuela que olvidaba mi decisión y quería que mi madre dejara todo lo que estaba haciendo y me escuchara atentamente. Luego llegó la época en que ya no sentí pasos en las escaleras y me sentía sola y lloraba sobre mi almohada cada noche.

Todo esto ha empeorado aquí. Pero tú ya sabías eso. Ahora Dios ha enviado a alguien a ayudarme: Peter. Acaricio mi pendiente, lo presiono entre mis labios y pienso, “¡Que me importa! ¡Pete es mío y nadie lo sabe!” Con esto en mi mente, puedo dejar pasar cualquier comentario desagradable ¿Acaso quién de todos aquí sospecharía todo lo que sucede dentro de la mente de una colegiala?

Sábado, 15 de enero, 1944.Mi queridísima Kitty,No tiene sentido que siga describiendo todas las peleas y discusiones en cada uno

de sus detalles. Basta con decirte que hemos divido muchas cosas como la carne, las grasas y aceites y que ahora freímos nuestras propias patatas. Últimamente hemos estado comiendo más pan de centeno porque a las

Pág. 167.Cuatro de la tarde estamos todos tan hambrientos que nos cuesta controlar los

sonidos estomacales.El cumpleaños de mi madre se acerca. Ella recibió un poco de azúcar extra por

parte del señor Kugler, lo cual hizo resaltar los celos de los Van Daan porque la señora

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Van D. no recibió nada en su cumpleaños ¿Pero qué sentido tiene aburrirte con palabras sin sentido, conversaciones que no llegan a ningún lado y llantos cuando tú sabes que nos aburren incluso más a nosotros mismos?

Mi madre ha expresado un deseo, que no parece factible que se realice por un buen tiempo: No tener que ver la cara del señor Van Daan por dos enteras semanas. Me pregunto si todos aquellos que comparten su residencia con otros terminan enemistados con sus compañeros de casa ¿Ó acaso hemos tenido simplemente una racha de mala suerte? Durante las comidas, cuando Dussel se sirve un cuarto de una ensaladera llena a medias y deja que los demás nos arreglemos con lo que queda, pierdo mi apetito y me dan ganas de levantarme de un salto, sacarlo de su silla de un puñetazo y ponerlo de patitas en la calle.

¿La gente siempre es tan egoísta y ruin? He ganado algún conocimiento de la naturaleza humana desde que llegué aquí, lo cual es bueno, pero ya he tenido suficiente por el momento. Peter piensa lo mismo.

La guerra va a continuar a pesar de las disputas y de nuestros deseos de libertad y aire libre, así que debemos tratar de que nuestra estadía aquí sea lo más leve posible y sacar el mejor partido de ella.

Estoy sermoneando, pero también creo que si vivo aquí mucho tiempo más, me convertiré en una vieja regañona ¡Y todo lo que quiero es ser una buena y honesta adolescente!

Tuya, Ana.

Miércoles, 19 de enero, 1944.Queridísima Kitty,(¡Otra vez con lo mismo!) No sé que ha sucedido, pero desde aquel sueño que

tuve sigo notando como he cambiado. De hecho,

Pág. 168.Soñé con Peter anoche nuevamente y una vez más sentí que sus ojos penetraban

los míos, pero este sueño fue menos vívido y no tan bello como el último.Tú sabes que yo siempre solía estar celosa de la relación de Margot con mi padre.

Ya no quedan rastros de esos celos; todavía me siento dolida cuando mi padre pierde los estribos y es poco razonable para conmigo, pero luego pienso, “No puedo culparte por la forma en que eres. Hablas tanto sobre la mente de los niños y adolescentes, ¡pero tú no sabes lo más importante sobre ellos!” espero más de mi padre que su afecto, Sus abrazos y besos ¿No es horrible de mi parte estar tan preocupada por mí misma? ¿No debería yo, que quiero ser más buena y amable, perdonarlos primero? Perdono a mi madre también, pero cada vez que ella hace algún comentario sarcástico, ó se ríe de mí, no puedo más que tratar de controlarme.

Sé que estoy lejos de ser quien debería ser; ¿lo lograré alguna vez?Ana, Frank.

PD: Mi padre me preguntó si te conté a ti sobre la torta. Para el cumpleaños de mi madre, ella recibió una torta de moca, como las que se hacían antes de la guerra, de la gente de la oficina ¡Fue un día muy lindo! Pero pro el momento no hay lugar en mi mente para cosas como esta.

Sábado, 22 de enero, 1944Queridísima Kitty,¿Puedes decirme porqué la gente llega a límites inesperados para esconder su

verdadera identidad? ¿Y por qué me comporto de un modo tan distinto cuando estoy en

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presencia de otros? ¿Por qué la gente confía tan poco en los demás? Sé que debe haber una razón, pero a veces pienso que es horrible el no poder confiar en otros, ni siquiera en las personas más cercanas a ti.

Pareciera como si hubiera crecido desde aquella noche en que tuve aquel sueño, como si me hubiera vuelto más independiente. Te sorprenderás cuando te diga que incluso mi actitud hacia los

Pág. 169.Van Daan ha cambiado. He dejado de ver todas las discusiones solamente desde

el punto de vista de mi familia ¿Qué ha ocasionado un cambio tan radical? Bueno, verás, repentinamente comprendí que si mi madre hubiera sido diferente, si hubiera sido una verdadera mamá, nuestra relación hubiera sido muy, muy diferente. La señora Van Daan no es bajo ninguna circunstancia una persona maravillosa, y aún así la mitad de las discusiones podrían haber sido evitadas si mi madre no fuese una persona con la que es tan difícil lidiar cuando se tocan temas controvertidos. De hecho, la señora Van Daan si tiene algo positivo: se puede hablar con ella. Ella podrá ser egoísta, tacaña y poco honesta, pero rápidamente puede dejar esto de lado siempre y cuando no se la provoque. Esta táctica no sirve siempre, pero si eres paciente, puedes seguir intentando y ver hasta dónde llegas.

Todos los conflictos en relación a nuestra crianza, acerca de malcriar a los niños, ó sobre la comida – absolutamente acerca de todo – podría haber tomado un rumbo diferente si hubiéramos permanecido en calma y en términos amistosos en vez de siempre verle el lado negativo a todo.

Sé exactamente lo que vas a decir, Kitty. “Pero, Ana, ¿estas palabras realmente viene de tus labios? ¿De ti, que has tenido que tolerar tantas palabras desagradables de la gente de arriba? ¿De ti, que eres conciente de todas las injusticias?”

Y sin embargo estas palabras sí vienen de mí. Quiero darle una mirada renovada alas cosas y formarme mi propia opinión, no sólo imitar a mis padres, como en el proverbio “La masa nunca cae lejos del árbol”. Quiero reexaminar a los Van Daan y decidir pro mí misma qué es verdad y que ha sido totalmente exagerado. Si termino decepcionándome de ellos, siempre puedo apoyar la postura de mi padre y mi madre. Pero sino, puedo tratar de cambiar su actitud. Y si ello no resulta, deberá apegarme a mis propias opiniones y juicios. Utilizaré cada

Pág. 170.Oportunidad para hablar con la señora Van Daan sobre nuestras diferencias y no

tendré miedo - a pesar de mi reputación de sabelotodo – de ofrecer mis opiniones imparciales. No diré nada negativo sobre impropia familia, lo cual no significa que no los voy a defender si alguien más lo hace, y a partir de hoy, mi chusmerío es parte del pasado.

Hasta ahora estaba absolutamente convencida de que los Van Daan eran culpables de todas las peleas, peor ahora estoy segura de que la culpa era en gran parte nuestra. Teníamos razón en cuanto a los temas que se trataban, peor gente inteligente (¡Como nosotros!) debería saber como lidiar con otros.

Espero tener al menos un poco de esa capacidad y tener la oportunidad de ponerla en uso.

Tuya, Ana.

Lunes, 24 de enero, 1944.Queridísima Kitty,

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Algo muy extraño me ha sucedido (De hecho “sucedido” no es la palabra más exacta).

Antes de llegar aquí, cada vez que alguien hablaba sobre sexo ya sea en la escuela ó en casa, lo hacían siempre de un modo misterioso ó como si se hablara de algo desagradable. Cada palabra que tuviera que ver con sexo, se decía en voz baja y si algún niño no sabía del tema, se reían de él. Me resultaba ridículo, y usualmente me preguntaba por qué la gente era tan misteriosa y mal educada cuado hablaba de este tema. Pero dado que no podía cambiar las cosas, trataba de hablar lo menos posible ó de preguntarle a mis amigas cuando había algo que no sabía.

Tras haber aprendido bastante sobre el tema, un día mi madre me dijo, “Ana, déjame darte un consejo. Nunca discutas estos asuntos con niños, y si ellos lo mencionan, no les contestes”.

Pág. 171.Aún recuerdo mi respuesta exactamente como la dije. “No, por supuesto que no”,

exclamé. “¡Imagina lo que sería!” Y nada más fue dicho.Cuando vinimos a escondernos, mi padre solía contarme cosas que hubiera

preferido escuchar de mi madre, y el resto lo aprendí de libros ó de conversaciones de adultos.

Peter Van Daan nunca fue tan desagradable respecto a estos temas como los niños en la escuela. Quizá lo fue una ó dos veces, al comienzo, aunque no lo hacía para persuadirme de que hablara con él. La señora Van Daan nos dijo que ella nunca discutiría estos temas con Peter, y hasta donde ella sabía, su esposo tampoco lo había hecho. Aparentemente ella no sabía cuánto sabía Peter sobre el tema y de donde obtenía la información.

Ayer, cuando Margot, Peter y yo estábamos pelando las patatas, la conversación de algún modo llegó al tema de Boche. “Aún no estamos seguros de si Boche es un niño ó una niña, ¿ó si?”, me preguntó.

“Sí lo estamos”, respondió Peter, “Boche es un gato”.Comencé a reírme. “¡Que tipo de gato tan extraño si está embarazado!”.Peter y Margot también comenzaron a reír. Verás, un mes ó dos atrás, Peter nos

informó que Boche tendría gatitos pronto, porque su estómago estaba creciendo rápidamente. Sin embargo, la barriga inflada de Boche terminó siendo producto de unos huesos que logró robarse. No había gatitos creciéndole a dentro y mucho menos a punto de nacer.

Peter sintió que debía defenderse de mi acusación. “Ven conmigo. Puedes verlo pro tú misma. Un día estaba jugando con el gato y pude ver que definitivamente es un macho”.

Sin poder contener mi curiosidad, fui con él al depósito. Boche, sin embargo, no estaba recibiendo visitas a esa hora y no estaba en ningún lugar a la vista. Esperamos un rato, pero cuando comenzó a hacer frío, volvimos a subir.

Tiempo después esa misma tarde escuché a Peter bajas las escaleras por

Pág. 172.Segunda vez. Junté coraje y atravesé la silenciosa casa hasta llegar al depósito.

Boche estaba en la mesa de embalajes, jugando competer, que se estaba preparando para ponerlo en la balanza y pesarlo.

“Hola, ¿Quieres echar un vistazo?” Rápidamente, levantó al gato, lo acostó boca arriba, sostuvo su cabeza y sus patas y comenzó la lección. “Este es el órgano sexual masculino, estos son unos vellos púbicos, y este es el sector trasero”.

El gato se levantó de golpe y se paró sobre sus pequeñas patitas blancas.

Page 97: El Diario de Ana Frank

Si cualquier otro niño me hubiera señalado el “órgano sexual masculino”, nunca más lo hubiera mirado a los ojos. Pero Peter continuó hablando normalmente sobre lo que, sin lugar a dudas, un tema incómodo. No es que lo hiciera porque tuviese otros motivos. Para cuando terminó, me sentía tan tranquila que yo también comencé a comportarme con normalidad. Jugamos con Boche, nos divertimos, charlamos un rato y finalmente caminamos como si diéramos un paseo a lo largo del depósito hasta llegar a la puerta.

“¿Estuviste presente cuando Mouschi fue castrado?”“Si, claro. No tarda mucho tiempo. Le dan un anestésico al gato, por supuesto”.“¿Le sacan algo?”.“No, sólo le hacen unos cortes. No hay nada que se vea desde el exterior”.Tuve que juntar fuerzas para preguntarle algo más, ya que no era algo tan

“normal” como yo pensaba. “Peter, la palabra alemana Geschlechtsteil significa “órgano sexual”, ¿no? Pero igualmente el órgano masculino y el femenino tienen diferentes nombres”

“Sí, lo sé”.“El femenino es vagina, eso lo sé, pero no sé como se llama el masculino”.“Hmmm”.

Pág. 173.“Y bueno”, dije, “¿Cómo hemos de conocer estas palabras? La mayoría de las

veces las aprendes de casualidad”.“¿Pero por qué esperar? Yo les pregunto a mis padres. Ellos saben más que yo y

han tenido más experiencia. Ya habíamos llegado a las escaleras, así que nada más fue dicho.Sí, realmente sucedió. Nunca había hablado de estas cosas con una niña con

tanta naturalidad. Además estoy segura que esto no es a lo que se refería mi madre cuando me advirtió sobre los niños.

De todos modos, no fui la misma de siempre por el resto del día. Cuando recordaba nuestra charla, me resultaba muy extraño. Pero al menos he aprendido una cosa: hay gente joven, incluso del sexo opuesto, que puede discutir estas cosas naturalmente, sin hacer bromas.

¿Peter realmente les hará muchas preguntas a sus padres? ¿Es él realmente como parecía serlo ayer?

Ay, ¿¡Pero qué se yo?!

Tuya, Ana.

Viernes, 27 de enero, 1944.Queridísima Kitty,En las últimas semanas he desarrollado un gran interés por los árboles familiares y

los linajes genealógicos de las familias reales. He llegado ala conclusión de que una vez que comienzas tu búsqueda, tienes que seguir excavando más y más profundo en el pasado, lo cual te lleva a descubrimientos aún más interesantes.

A pesar de ser bastante diligente cuando se trata de mis tareas escolares y además puedo seguir el servicio radial de la BBC en casa, aún paso varios de mis domingos organizando y revisando mi colección de estrellas de cines, la cual ha crecido considerablemente. El señor Kugler me hace feliz cada lunes trayéndome una copia de

Pág. 174.

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La revista cine & teatro. Los miembros menos memorables de nuestra morada se refieren a este pequeño placer como una pérdida de dinero, y al mismo tiempo no dejan de sorprenderse de la exactitud con la que puedo nombrar actores de cualquier película, incluso de hace más de un año. Bep, que suele ir con su novio al cine en sus días libres, me cuanta el sábado el nombre de la película que van a ver, y luego yo me concentro en informarme sobre la vida de los actores principales y de las críticas que reciben. Mamsi recientemente me dijo que no necesitaría ir al cine porque ya conozco todas las tramas, los nombres de las estrellas y las críticas de memoria.

Cada vez que aparezco con un nuevo peinado, puedo ver en sus rostros los gestos de desaprobación, y puedo estar segura de que alguno me preguntará a qué estrella de cine trato de imitar. Cuando respondo que es un peinado de mi propia inventiva, me miran con escepticismo. Y en cuanto al cabello, no logro que se sostenga armado con ningún peinado por más de media hora. Para ese momento estoy tan cansada de sus comentarios que corro hacia el baño y vuelvo a dejar mi pelo como la enorme masa de rulos que es.

Tuya, Ana.

Viernes, 28 de enero, 1944.Queridísima Kitty, esta mañana me preguntaba si alguna vez te sentiste como una

vaca, teniendo que masticar mis noticias una y otra vez hasta que estás tan saturada con mis cuentos monótonos que bostezas y secretamente deseas que Ana descubra algo nuevo.

Perdón, yo sé que encuentras todo esto tan insulso como el agua, pero imagina entonces cuan cansada estoy de escuchar siempre las mismas cosas. Si la charla durante las comidas no es sobre políticas ó comida saludable, mi madre ó a señora Van Daan cuentan historias sobre su niñez que ya hemos oído miles de veces, ó sino Dussel habla y habla sobre bellísimas carreras de caballos,

Pág. 175.El maravilloso guardarropas de su querida Charlotte, embarcaciones en mal

estado, niños que pueden nadar a la edad de cuatro años, músculos adoloridos y pacientes atemorizados. Todo se reduce a esto: cada vez que uno de nosotros ocho abre la boca, los otros siete pueden finalizar la historia por el. Sabemos el final de cada chiste antes de que lo cuenten, así que cualquiera que lo cuente queda riéndose solo. Lo diversos lecheros, almaceneros y carniceros de las dos amas de casas antes mencionadas han sido tantas veces alabados y criticados que es como si los conociéramos de toda la vida; no hay absolutamente ninguna chance de que ningún tema nuevo salga a relucir en el anexo.

Sin embargo, todo esto sería tolerable si tan solo los adultos no tuvieran el hábito de repetir las historias que escuchamos del señor Kleiman, Jan ó Miep, agregándoles detalles propios para hacerlas más interesantes, por lo que a veces debo pellizcarme a mí misma para contenerme de poner en su lugar al que esté contando la historia. Los niños, como Ana, nunca deben corregir a sus mayores, sin importar cuantas equivocaciones cometan ó cuanto se alejen de la realidad.

Jan y el señor Kleiman adoran hablar de gente que esta viviendo en escondites; saben que nosotros estamos ansiosos por escuchar acerca de otros en nuestra situación y que honestamente nos compadecemos por el dolor de aquellos que han sido arrestados y que nos sentimos felices por aquellos que han sido liberados.

La vida en escondites ó bajo tierra se ha vuelto algo tan común como el par de pantuflas y la pipa que esperan al hombre en su casa tras un largo día de trabajo. Hay muchos grupos de resistencia, como “Holanda libre” que falsifica identidades, provee

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ayuda financiera a aquellos que se esconden, organiza escondites y encuentra trabajo para jóvenes cristianos que colaboran con la organización. Es impresionante lo mucho que hace

Pág. 176.Esta generosa y desinteresada gente, arriesgando su propia vida para ayudar y

salvar a otros.EL mejor ejemplo son aquellos que nos ayudan a nosotros, que han logrado

mantenernos a salvo por tanto tiempo y que con suerte lograrán mantenernos con vida hasta el final, porque de otro modo ellos se verían sufriéndole destino de aquellos que fueron descubiertos tratando de proteger judíos. Nunca han mencionado ni una sola palabra de la carga que debemos ser, nunca se han quejado de los problemas que debemos traer. Ellos suben todos los días y hablan con los hombres sobre negocios y política, con las mujeres sobre comida y dificultades que acarrea la guerra y con los niños sobre libros y diarios. Viene de muy buen humor, nos traen flores y regalos para los cumpleaños y festividades y siempre estamos dispuestos a hacer lo que ellos digan. Eso es algo que nunca debemos olvidar; mientras otros despliegan su heroísmo en las batallas ó contra los alemanes, nuestros protectores lo hacen cada día con su buen ánimo y afecto.

Las historias más bizarras se están oyendo, y la mayoría de ellas son ciertas. Por ejemplo, el señor Kleiman reportó esta semana que un juego de fútbol se llevó a cabo en la provincia de Gelderland; uno de los equipos estaba enteramente compuesto pro gente que vivía bajo tierra, y el otro por once policías militares. En Hilversum, se distribuyeron nuevos papeles de registro. Para que la gente que vive en escondites obtenga sus raciones (debes tener tu papel de registro para obtener tus cupones de racionamiento ó pagar 60 guilders por cada cartilla de racionamiento), el registrador pidió a todos aquellos que viven escondidos en ese distrito que vallan a retirar sus cartillas a una determinada hora, en la que los documentos estarían discretamente separados en otra mesa.

De todos modos, debes ser cuidadoso de que artilugios como este no lleguen a oídos de alemanes.

Tuya, Ana.

Pág. 177.Domingo, 30 de enero, 1944.Mi queridísima Kitty,Otro domingo ha pasado; no me preocupan tanto como lo hacían al comienzo,

pero son aburridos de todas formas.Todavía no he ido al depósito, pero quizás lo haga pronto. Anoche bajé las

escaleras a oscuras, yo sola, tras haber estado allí con mi padre unas noches atrás. Me quedé inmóvil en la cima de las escaleras, mientras que los aviones alemanes pasaban volando, y sabía que estaba sola, que no podía contar con otros para que me consolaran. Mi temor se desvaneció. Miré al cielo y confié en Dios.

Tengo una Necesidad intensa de estar sola. Mi padre ha notado que no estoy igual que siempre, pero no puedo decirle que es lo que me molesta. Todo lo que quiero es gritar, “¡Déjenme estar sola!”

Quien sabe, ¡quizás llegue el día en que me quede más sola de lo que me gustaría!

Ana Frank.

Jueves, 3 de febrero, 1944.

Page 100: El Diario de Ana Frank

Queridísima Kitty,La locura por el desembarco esta en boca de todo el país. Si estuviera saquí,

estoy segura de que estarías tan sorprendida como yo con todos los preparativos, aunque sin duda te reirías de todo el alboroto que se está haciendo. Quién sabe, ¡quizás todo sea en vano!

Los periódicos están llenos con noticias sobre la invasión y están volviendo locos a todos con anuncios como: “Debido a la invasión británica de Holanda, los alemanes harán cualquier cosa por salvar al país, incluso hundirlo, si es necesario”. Han publicado mapas de Holanda con las áreas de potenciales inundaciones. Dado que grandes partes de Amsterdam están dentro de esa área, nuestra primera pregunta fue que deberíamos hacer si el

Pág. 178.Agua en las calles sobrepasa nuestras cinturas. Esta pregunta suscitó varias

respuestas:“Sería imposible andar en bicicleta, así que habrá que caminar en el agua”.“No seas tonto. Tendremos que hacer el intento de nadar. Nos pondremos

nuestros trajes de baño y gorras y nadaremos bajo el agua lo más que podamos, porque nadie podrá notar que somos judíos”.

“¡Ay, diosito! ¡Puedo imaginar a las damas nadando con las ratas entre sus piernas! (Eso lo dijo un hombre, por supuesto; ¡pero deberíamos ver quién grita más fuerte!)

“Ni siquiera podremos dejar la casa. El depósito es tan inestable que no resistiría la inundación y colapsaría”.

“Dejando las bromas de lado, deberíamos tratar de conseguirnos un bote”.“¿Por qué preocuparse por ello? Tengo una mejor idea. Cada uno de nosotros

puede tomar una caja de embalaje del ático y remar con una cuchara de madera”.“Yo voy a usar zancos. Solía ser muy bueno con ello en mi juventud”.“Jan Gies no los va a necesitar. Llevará a su esposa a cuestas, y Miep usará los

zancos”.Bueno Kitty, ahora tiene una mínima idea de lo que está pasando, ¿no es así?

Estas bromas sin sentido son muy divertidas, pero la realidad probará no serlo. La segunda pregunta sobre la invasión estaba destinada a aparecer: ¿Qué haremos si los alemanes evacuan Ámsterdam?

“Dejar la ciudad con el resto. Disfrazarnos lo mejor que podamos”.“Pase lo que pase, ¡No salgan! ¡Lo mejor que podemos hacer es quedarnos aquí!

Los alemanes son capaces de arrastrar a toda la población de Holanda hacia Alemania y matarnos allí”.

“Por supuesto que nos quedaremos aquí. Este es el lugar más seguro. Trataremos de convencer a Kleiman y a su familia de venir a

Pág. 179.Vivir con nosotros. De algún modo conseguiremos bolsas rellenas de aserrín, para

que podamos dormir en el piso. Pidámosle a Kleiman y a Miep que traigan mantas, por las dudas. Y pediremos granos de cereal extra para complementar las sesenta y cinco libras que tenemos. Jan puede tratar de conseguir más frijoles. Por el momento tenemos sesenta y cinco libras de frijoles y diez libras de guisantes. Y no olviden las cincuenta latas de vegetales”.

“¿Y qué hay del resto, madre? Danos los últimos datos”.“Diez latas de pescado, cuarenta latas de leche, veinte libras de leche en polvo,

tres botellas de aceite, cuatro panes de manteca, cuatro tarros de carne, dos cajas

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grandes de frutillas, dos jarras de cerezas, veinte tarros de tomate, diez libras de harina y nueve de arroz. Eso es todo”.

Nuestras provisiones son bastante buenas. De todos modos, tenemos que alimentar también al personal de la oficina, lo cual significa reducir nuestras provisiones cada semana, por lo tanto no es una gran cantidad. Tenemos suficiente carbón y leña, y también velas.

“Hagamos pequeños monederos para esconder en nuestra ropa, así podremos llevar nuestro dinero con nosotros si necesitamos marcharnos”

“Podríamos hacer una lista con las cosas que son prioritarias y empacar por adelantado por las dudas”.

“Cuando llegue el momento, pondremos dos personas a vigilar, una en el loft en la parte delantera de la casa y una en la parte trasera”.

“Hey, ¿pero cuál sería la utilidad de tanta comida si no tuviéramos agua, gas ó electricidad?”

“Tendremos que cocinar a leña. Filtrar el agua y hervirla. Deberíamos limpiar algunos jarros grandes y llenarlos con agua. También podemos almacenar agua en tres recipientes que utilizamos para conservas y en la tina del baño”.

Pág. 180-Además, todavía tenemos alrededor de doscientas treinta libras de patatas de

invierno en el cuarto de especias”.Durante todo el día esto fue todo lo que oí. Invasión, invasión, nada más que la

invasión. Discusiones sobre sufrir hambrunas, muertes, envenenamiento con gas, etc., etc. Nada precisamente divertido.

Un buen ejemplo de las advertencias explícitas del contingente masculino es la siguiente conversación con Jan:

Anexo:” Tenemos miedo de que una vez que los alemanes se retiren, lleven a toda la población con ellos”.

Jan:” Eso es imposible. No tienen suficientes trenes”.Anexo:” ¿Trenes? ¿Realmente crees que pondrían civiles en los trenes?

Absolutamente no. Obligarán ala población a ir a pie” (Ó como Dussel siempre dice, per pedes apostolorum).

Jan: “No puedo creerlo. Siempre ven el lado negativo ¿Qué razón tendrían para acorralar a todos los civiles y llevarlos con ellos?”

Anexo: “¿No recuerdas que Goebbels dijo que si los alemanes tenían que irse, lo harían cerrando la puerta a todos los territorios ocupados?”

Jan: “Han dicho muchas cosas”.Anexo: “¿Crees que los alemanes son tan nobles y humanos como para hacerlo?

Su razonamiento es: Si nos hundimos, hundiremos a todos con nosotros”.Jan: “Pueden decir lo que quieran, yo simplemente no lo creo”.Anexo: “Siempre es la misma historia. Nadie quiere ver el peligro hasta que lo

tiene enfrente de sus narices”.Jan: “Pero ustedes no tienen ninguna seguridad sobre lo que dicen. Simplemente

están asumiéndolo todo”.Anexo: “Es porque ya lo hemos vivido en carne propia. Primero en Alemania y

luego aquí ¿Qué crees que está pasando en Rusia?

Pág. 181.Jan: “No deberías incluir a los judíos. No creo que nadie sepa lo que está pasando

en Rusia. Los rusos y británicos seguramente están exagerando para hacer propaganda”.

Page 102: El Diario de Ana Frank

Anexo: “Por supuesto que no. La BBC siempre ha dicho la verdad. E incluso si las noticias son levemente exageradas, los hechos ya son suficiente malos de por sí. No puedes negar que millones de ciudadanos pacíficos en Polonia y Rusia han sido asesinados y ahogados en cámaras de gas”.

Te ahorraré el resto de la conversación. Estoy muy tranquila y no me alarmo por todo el alboroto. He llegado al punto en el que no me preocupa si vivo ó muero. El mundo seguirá girando sin mí, y no puedo hacer nada para cambiar los eventos que están teniendo lugar de todos modos. Sólo dejaré que los problemas sigan su curso y me concentraré en estudiar y esperaré que finalmente todo salga bien.

Tuya, Ana.

Martes, 8 de febrero, 1944* (* Los últimos cuatro párrafos de este día no han sido publicados nunca antes. Para una mayor explicación, ver página ix de las notas previas).

Querida Kitty,No puedo decirte como me siento. Por un momento, deseo paz y tranquilidad, y al

momento siguiente, deseo un poco de diversión. Nos hemos olvidado como reír – me refiero a reñirte tanto que no puedas parar.

Esta mañana me reí tontamente; tú sabes, el tipo de risas que te dan en la escuela. Margot y yo nos reímos tontamente como dos verdaderas adolescentes.

Anoche se produjo otra escena con mi madre. Margot se estaba tapando con su manta de lana blanca cuando se levantó de la cama y cuidadosamente examinó

Pág. 182.El acolchado ¿Qué crees que encontró? ¡Un alfiler! Mi madre había emparchado la

manta y se había olvidado de sacarlo. Mi padre meneó la cabeza e hizo un comentario sobre lo descuidada que es mi madre. Inmediatamente después mi madre vino del baño y sólo para molestar dije, “Du bist doch eine echte Rabenmutter”* (* ¡Ay, eres cruel!)

Por supuesto, ella me preguntó porqué había dicho eso, y le contamos sobre el alfiler que había olvidado. Rápidamente adoptó su expresión poco amigable y dijo, “Tú eres excelente para hablar. Cuando coses, todo el piso está lleno de alfileres. Y mira, has dejado el set de manicuría en cualquier lado otra vez ¡Nunca lo ordenas!”

Dije que no lo había usado y Margot me apoyó porque ella era la culpable.Mi madre siguió hablando de cuán desordenada era hasta que me cansé y dije, de

manera más bien cortante, “Ni siquiera fui yo la que dijo que eras descuidada ¡Siempre me culpan por los errores de otros!

Mi madre se calló, y menos de un minuto después fui obligada a darle el beso de las buenas noches. Este incidente puede no haber sido tan importante, pero por estos días, todo me altera.

Como aparentemente estoy atravesando un período de reflexión y dejando que mi mente divague, mis pensamientos se han concentrado en el matrimonio de mi padre y mi madre. Siempre se me había presentado como un matrimonio ideal. Nunca una discusión, nunca caras de enojo, perfecta armonía, etc., etc.

Sé algunas cosas sobre el pasado de mi padre, y lo que no se, lo he inventado; Tengo la sensación de que mi padre se casó con mi madre porque él sentía que ella sería

Pág. 183.Una buena esposa. Debo admitir que admiro a mi madre por el modo en que

asumió el rol de esposa y nunca, hasta lo que a mí me concierne, se ha quejado de algo ó se ha mostrado celosa. No debe ser fácil para una esposa cariñosa saber que nunca será el principal objeto de afecto de su marido, y mi madre lo sabía. Mi padre verdaderamente admiraba el carácter de mi madre y creía que ella tenía una excelente personalidad ¿Por

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qué entonces casarse con alguien más? Sus ideales ya habían sido frustrados y la juventud había acabado ¿Y qué tipo de matrimonio ha resultado ser? No hay discusiones ni diferencias de opiniones - pero difícilmente sea un matrimonio ideal. Mi padre respeta a mi madre y la ama, pero no con el tipo de amor que imagino en un matrimonio. Mi padre acepta a mi madre como es, y a veces hay cosas de ella que le molestan, pero trata de decir lo menos posible porque sabe todo lo que ella ha hecho.

Mi padre no siempre le pide su opinión - sobre negocios, otros asuntos, personas, sobre todo tipo de cosas. Él no le dice todo porque sabe que ella es muy sensible, muy crítica y a veces demasiado influenciable. Mi padre no está enamorado. La besa del mismo modo en que nos besa a nosotras. La mira de un modo amigable, burlón, pero nunca con amor. Puede ser que los grandes sacrificios de mi madre la hayan hecho desagradable y fría para aquellos a su alrededor y la hayan alejado del camino del amor, haciéndola menos admirable. Pero un día mi padre se dará cuenta que mientras exteriormente ella nunca demandó su completa devoción, por dentro lentamente se iba desmoronando. Ella lo ama más que nadie, y es difícil ver este tipo de amor no siendo correspondido.

¿Acaso debería sentir más compasión por mi madre? ¿Debería ayudarla? ¿Y mi padre? - No puedo, siempre me estoy imaginando otra madre. Simplemente no puedo. - ¿Cómo podría? Ella no me ha contado nada sobre su persona, y nunca le he pedido que lo hiciera ¿Qué

Pág. 184.Sabemos nosotras de las ideas de la otra? No puedo hablarle, no puedo mirarla

con cariño a sus fríos ojos, no puedo ¡Nunca podré! - Si tan sólo tuviera siquiera una de las cualidades que las madres compresivas supuestamente tienen, gentileza, amabilidad, paciencia, ó cualquiera, trataría de acercarme a ella. Pero en cuanto a amar a esta persona insensible, esta criatura burlona - ¡se me vuelve cada día más y más imposible!

Tuya, Ana.

Sábado, 12 de febrero, 1944.Queridísima Kitty,El sol está brillando, el cielo está de color azul profundo, hay una brisa magnífica,

y estoy deseando – con todas mis fuerzas – tener todo: charlas, libertad, amigos, estar sola. Deseo… ¡Llorar! Siento como si estuviera a punto de explotar. Sé que llorar me ayudaría, pero no puedo llorar. No consigo estar quieta. Camino de una habitación a otra, respiro a través de la rendija en el marco de la ventana, siento que mi corazón late como si digiera, “Cumple mis deseos de una vez por todas…”

Creo que la primavera está dentro de mí. Siento el despertar de la primavera, lo siento en cuerpo y alma. Tengo que obligarme a mí misma a actuar con normalidad. Estoy en un estado de total confusión, no sé que quiero leer, que quiero escribir, que hacer. Sólo sé que siento deseos de algo…

Tuya, Ana.

Lunes, 14 de febrero, 1944.Queridísima Kitty,Muchas cosas han cambiado para mí desde el sábado. Lo que pasó fue esto:

Esperaba con ansias que algo pasara (y todavía lo hago), pero…una pequeña, muy pequeña, parte del problema ha sido resuelta.

El domingo por la mañana noté, con mucha alegría (voy a ser honesta contigo), que Peter me observaba constantemente. Y no del modo usual.

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Pág. 185.No sé, no puedo explicarlo, pero de repente tuve la sensación de que él no estaba

tan enamorado de Margot como yo solía creer. Durante todo el día traté de no mirarlo demasiado, porque cada vez que lo hacía, lo atrapaba mirándome y entonces-bueno, me hacía sentir muy bien, y ese no es un sentimiento que debería experimentar muy a menudo.

El domingo por la noche, todos excepto Pim y yo, se encontraban reunidos alrededor de la radio, oyendo la “música inmortal de los grandes alemanes”. Dussel no dejaba de modificar la sintonía del aparato, lo cual molestaba a Peter, y a los demás también. Tras contenerse por media hora, Peter le preguntó, sonando bastante irritado, si podía dejar de juguetear con la radio. Dussel le contestó desdeñosamente, “Ich mach’ das schon!”* (* ¡Yo decidiré eso!). Peter se enojó e hizo un comentario insolente. El señor Van Daan lo apoyó, y Dussel tuvo que replegarse. Eso fue todo.

La razón de la disputa no era muy relevante en sí misma, pero aparentemente Peter se lo tomó muy a pecho, por que esta mañana, cuando estaba recorriendo el ático en busca de libros, Peter vino hacia mí y comenzó a contarme lo que había sucedido. Yo no sabía nada al respecto, pero pronto Peter se dio cuenta de que había encontrado una oyente atenta y comenzó a darme todos los detalles del asunto.

“Bueno, fue salgo así”, dijo. “No suelo hablar mucho, dado que sé de antemano que no encontraré las palabras adecuadas para expresarme. Comienzo a balbucear y a sonrojarme y mezclo tanto lo que digo que finalmente debo callarme, porque no logro encontrar las palabras. Eso fue lo que sucedió anoche. Pretendía decir algo totalmente diferente, pero una vez que comencé, perdí el hilo de mis ideas por completo. Es horrible. Solía tener un mal hábito, y a veces,

Pág. 186.Desearía tenerlo todavía: cada vez que me enojaba con alguien, les daba una

golpiza en vez de discutir con ellos. Sé que este método no me llevaría a ningún lado, y por eso que te admiro. Tú siempre utilizas las palabras justas: siempre dices lo que quieres decir y no te sientes avergonzada en lo más mínimo”.

“No, estas equivocado”, respondí. “La mayoría de las cosas que digo me salen muy distintas al modo en que las había planeado. Además, hablo demasiado y eso es tan malo como no hablar”.

“Quizás, pero tú tienes la ventaja de que nadie nota que estas avergonzada. No te ruborizas ni balbuceas”.

No pude evitar reírme para mis adentros al oír estas palabras. Sin embargo, como quería que él siguiera hablando relajadamente sobre sí mismo, oculté mi risa, por que sentí un gran sentimiento de camaradería entre nosotros, el cual únicamente recuerdo haber tenido con mis amigas.

Tuya, Ana.

Martes, 15 de febrero, 1944.

El pequeño encontronazo con Dussel tuvo severas repercusiones, por las cuales él sólo se podía culparse a sí mismo. El lunes por la noche Dussel vino a ver a mi madre y le dijo con aires de victoria que Peter le había preguntado esa mañana si había dormido bien, y luego le dijo lo apenado que estaba por lo que había sucedido el domingo por la noche – que él no había tenido intenciones de decir lo que dijo. Dussel le aseguró que él no se lo había tomado en serio. Así que todo volvió a la normalidad. Mi madre me contó esta historia a mí, y yo estaba secretamente sorprendida de que Peter,

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Pág. 187.Que había estado tan enojado con Dussel, se hubiese rebajado, a pesar de haber

asegurado que sentía todo lo contrario.No pude contenerme de contarle estoa Peter y él me dijo que Dussel estaba

mintiendo. Deberías haber visto la cara de Peter. Desearía haber tenido una cámara. Indignación, ira, indecisión, agitación y muchos sentimientos más atravesaron el rostro de Peter en una rápida secuencia.

Esa noche el señor Van Daan y Peter enfrentaron a Dussel. Pero no creo que hayan sido tan severos, dado que Peter tenía hoy una cita con el dentista.

Hoy por hoy, no quieren volver a hablarse el uno al otro nunca más.Miércoles, 16 de febrero, 1944.Peter y yo no nos hemos dirigido la palabra en todo el día, excepto por unos pocos

comentarios irrelevantes. Hacía mucho frío para subir al ático, y de todos modos, era el cumpleaños de Margot. A las doce y media, él vino a ver los regalos y se quedó charlando un rato más de lo estrictamente necesario en estos casos, algo que nunca había hecho antes. Pero mi verdadera oportunidad llegó a la tarde. Como tenía ganas de complacer a Margot en el día de su cumpleaños, fui a buscar el café, y luego las patatas. Cuando llegué a la habitación de Peter, él inmediatamente sacó sus papales de las escaleras, y le pregunté si debía cerrar la puerta del ático.

“Por que no”, dijo, “hazlo. Cuando estés lista para bajar, simplemente golpea y yo la abriré por ti”.

Le agradecí, subí las escaleras y pasé al menos diez minutos buscando las patatas más pequeñas en el barril. Mi espalda comenzó a dolerme, y el ático estaba frío. Normalmente, no me hubiera molestado abrir la puerta por mí misma. Pero él, muy servicialmente, se levantó y tomó la sartén llena de patatas que llevaba en mis manos.

“Hice lo mejor que pude, peor no logré encontrar patatas más pequeñas”.

Pág. 188.“¿Buscaste en el barril más grande?”“Sí, los revisé a todos”.A estas alturas ya estaba junto a las escaleras, y él examinaba la sartén con

patatas que aún seguía cargando. “Ah, pero estas están bien”, dijo, y agregó mientras yo tomaba la sartén, “¡Te felicito!”

Mientras decía esto, me miraba de un modo tan cálido y tierno que yo me estremecí para mis adentros. Pude darme cuenta de que él quería complacerme, pero dado que no podía brindarme un elogio aún mayor con sus palabras, me lo ofreció con su mirada. Lo entendí perfectamente y estaba muy agradecida por ello ¡Todavía me hace feliz recordar aquellas palabras y esa mirada!

Cuando bajé las escaleras, mi madre me dijo que necesitaba más patatas, pero esta vez para hacer la cena, así que me ofrecí para volver a subir. Cuando entré a la habitación de Peter, le pedí disculpas por volver a molestarlo. Mientras subía las escaleras, él se levantó de su lugar, se paró entre las escaleras y la paré, sostuvo mi brazo e intentó frenarme.

“Yo iré”, dijo. “Tengo que subir de todos modos”. Le respondí que no era necesario, que esta vez no tenía que buscar únicamente

las pequeñas. Convencido, me dejó seguir. Cuando volvía, él abrió la puerta para mí y nuevamente tomó la sartén de mis brazos. Parada junto a la puerta, pregunté, “¿En qué estas trabajando?”

“Francés”, respondió.

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Le pregunté si podía echar un vistazo a sus lecciones. Luego fui a lavarme las manos y me senté frente a él en el diván.

Tras explicarle algo de francés, comenzamos a hablar. Me dijo que tras la guerra quería ir a las Indias Holandesas a vivir en una plantación (rubber plant). Me contó sobre la vida en su hogar, el mercado negro, y sobre como se sentía un completo inútil. Le dije que tenía un gran complejo de inferioridad.

Pág. 189.Habló sobre la guerra, diciendo que Rusia e Inglaterra estaban destinados a

enfrentarse el uno al otro, y también habló sobre los judíos. Dijo que la vida hubiera sido mucho más fácil si hubiera sido cristiano ó si se pudiera convertir en uno tras la guerra. Le pregunté si quería ser bautizado, pero él no se refería a eso. Él dijo que jamás sería capaz de sentirse cristiano, pero que tras la guerra se aseguraría de que nadie supiera que era judío. Sentí como se me estremecía el corazón. Es una lástima que él todavía tenga en sí esa cuota de deshonestidad.

Peter agregó, “¡Los judíos han sido y siempre serán los elegidos!”Respondí, “Pero pro esta vez, ¡desearía que hubieran sido los elegidos para algo

bueno!”Pero él siguió charlando muy placenteramente, sobre mi padre, sobre juzgar a las

personas y muchas cosas más, tantas que no puedo recordarlas todas.Me fui de allí quince minutos después de las cinco, porque Bep había llegado. Esa

noche él dijo algo más que me pareció muy agradable. Estábamos hablando sobre la foto de una estrella de cine que yo le había dado a él tiempo atrás, la cual ha estado colgada en su cuarto pro al menos un año y medio. Le gustó tanto que me ofrecí a darle unas cuantas más.

“No”, respondió. “Prefiero conservarla que ya tengo. La miro todos los días, y las personas en ella se han vuelto mis amigos”.

Ahora entiendo mucho mejor por que él abraza tanto a Mouschi. Obviamente él también necesita afecto. Olvidé mencionar algo más de lo que él estuvo hablando. Dijo, “No, no tengo miedo, salvo cuando se refiere a cosas relacionada conmigo mismo, pero estoy trabajando en ello”.

Peter tiene un gran complejo de inferioridad. Por ejemplo, siempre piensa que él es estúpido y que todos nosotros somos inteligentes. Cuando lo ayudo con francés, me lo agradece miles de veces.

Pág. 190.Uno de estos días le voy a decir, “¡Ay, basta ya!, ¡Tú eres mucho mejor en inglés y

geografía!”Ana Frank.

Jueves, 17 de febrero, 1944.Querida Kitty, Esta mañana estuve arriba, dado que le prometí a la señora Van Daan que la

leería algunas de mis historias. Comencé con “El sueño de Eva”, la cual le gustó mucho, y luego leí unos pequeños pasajes de “El anexo secreto”, con los que se rió a carcajadas. Peter también escuchó durante un rato (sólo la última parte) y le pregunté si le gustaría que fuera a su cuarto alguna vez para leerle más de estas historias. Decidí que debía aprovechar esa oportunidad, así que agarré mi cuaderno y le dejé leer ese pasaje en el que Cady y Hans hablan acerca de Dios. No sabría decir que impresión causó esto en él. Dijo algo que no recuerdo perfectamente, pero no era sobre si le gustó ó no, sino sobre la

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idea detrás de la historia. Le dije que quería que viera que no sólo escribía cosas divertidas. El asintió y yo dejé la habitación ¡Ya veremos si me dice algo más!

Tuya, Ana Frank.

Viernes, 18 de febrero, 1944.Mi queridísima Kittty, Cada vez que voy arriba es para poder verlo a “él”. Ahora que hay alguien a quien

espero ver con ansias, mi vida aquí adentro ha mejorado enormemente.Por lo menos ahora el objeto de mi amistad está siempre aquí, y no tengo que

tener miedo de encontrar rivales (excepto por Margot). No creas que estoy enamorada, por que no lo estoy, pero sí tengo la sensación de que algo hermoso se va a desarrollar entre Peter y yo, una especie de amistad y un sentimiento de confianza mutua. Voy a verlo cada vez que tengo la oportunidad, y ya no es como antes, cuando él no sabía como comportarse.

Pág. 191.Por el contrario, continúa hablándome aún cuando estoy saliendo por la puerta. A

mi madre no le gusta que pase tiempo arriba. Siempre dice que molesto a Peter y que debería dejarlo solo. Honestamente, ¿no puede darse cuenta de que tengo el don de la intuición? Ella siempre me mira de un modo tan extraño cuando voy ala habitación de Peter. Cuando bajo, me pregunta donde he estado. Es terrible, ¡pero estoy comenzado a odiarla!

Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 19 de febrero, 1944.Queridísima Kitty,Es sábado nuevamente, y eso debería decirte todo. Esta mañana todo estaba en

calma. Pasé casi una hora arriba haciendo bolitas de carne, peor sólo hablé con”él” al pasar.

Cuando todos subieron a las dos y media para leer ó tomar una siesta, yo bajé, con mi manta y todo, para sentarme en el escritorio a leer ó escribir. Al poco tiempo no pude soportarlo más. Puse mi cabeza sobre mis brazos y lloré desconsoladamente. Las lágrimas caían sobre mis pómulos, y me sentí desoladamente infeliz. Ay, si tan sólo “él” hubiera venido a consolarme.

Eran más de las cuatro cuando volví a subir las escaleras. A las cinco me senté a comer algunas patatas, esperando nuevamente que nos encontráramos, pero cuando todavía estaba en el baño arreglando mi cabello, él fue a ver a Boche.

Quería ayudar a la señora Van Daan y subir con mi libro y todo, pero de repente sentí que las lágrimas aparecían nuevamente. Corrí escaleras abajo hacia el baño, agarrando el espejo de mano en el camino. Me senté en el inodoro, completamente vestida, bastante tiempo después de ya estar lista, con mis lágrimas dejando aureolas oscuras sobre mi delantal rojo, y me sentí totalmente desdichada.

Esto es lo que pasa por mi mente: “ay, nunca llegaré al corazón de Peter del modo en que yo quiero. Quien sabe, quizás ni siquiera le guste y él no necesite nadie en quién confiar.

Pág. 192.Quizás el sólo piensa en mí de un modo superficial. Debo volver a estar sola, sin

nadie en quien confiar y sin Peter, sin esperanzas, apoyo ó nada por que esperar “¡Ay, sin tan sólo pudiera descansar mi cabeza sobre su hombro y no sentirme tan sola y desdichada! Quien sabe, quizá yo no le importo en lo más mínimo y mira a todos los

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demás del mismo modo tierno en que me mira a mí. Ay, Peter, si tan sólo pudieras escucharme ó verme. Si la verdad es desalentadora, no seré capaz de soportarla”.

Poco tiempo después, volvía sentirme esperanzada y llena de expectativas nuevamente, aunque mis lágrimas seguían cayendo-por dentro.

Tuya, Ana M. Frank.

Domingo, 20 de febrero, 1944.Lo que sucede en otras casas durante la semana sucede aquí en el anexo los

domingos. Mientras otras personas se ponen sus mejores atuendos y van a caminar bajo el sol, nosotros fregamos, barremos y lavamos la ropa.

Ocho horas. Aunque la mayoría de nosotros prefiere seguir durmiendo, Dussel se levanta alas ocho. Va al baño, luego baja, luego vuelve a subir y nuevamente al baño, donde se dedica durante toda una hora a asearse.

Nueve y media. Las estufas están encendidas, las cortinas están descorridas, y el seños Van Daan se dirige al baño. Una de mis duras pruebas de los domingos a la mañana implica tener que quedarme recostada en la cama observando a Dussel mientras reza. Sé que suena extraño, pero ver a Dussel rezando es una imagen terrible de soportar. No es que se ponga muy emotivo ó llore, para nada, pero sí se pasa un cuarto de hora-unos completos quince minutos-meciéndose sobre sus dedos de los pies y sus talones, una y otra vez, y sino cierro mis ojos fuertemente, mi cabeza comienza a dar vueltas.

Diez-quince. Los Van Daan dan un silbido; el baño está libre.

Pág. 193. En las habitaciones de la familia Frank, los primeros rostros somnolientos

empiezan a emerger de sus almohadas. Luego todo sucede rápido, rápido, rápido. Margot y yo nos turnamos para lavar la ropa. Dado que hace bastante frío escaleras abajo, nos ponemos pantalones y gorros. Mientras tanto, Mi padre se mantiene ocupado en el baño. Margot ó yo tenemos turno para usar el baño a las once, y luego ya estamos todos aseados.

Once y media. Desayuno. No me voy a extender en esto, ya que hay suficientes charlas acerca de la comida sin que yo traiga a colación el tema.

Doce-quince. Cada uno se va por su lado. Mi padre, vestido con un guardapolvo, se apoya sobre sus manos y rodillas y cepilla la alfombra tan fuertemente que la habitación queda recubierta por una nube de polvo. El señor Dussel hace las camas (muy mal, por supuesto), siempre silbando la misma melodía del concierto de Beethoven mientras hace su trabajo. Mi madre puede ser oída dando vueltas por el ático mientras cuelga la ropa lavada. El señor Van Daan se pone su sombrero y desaparece en el piso más bajo, seguido usualmente por Peter y Mouschi. La señora Van Daan se calza un largo delantal, un saco negro de lana y botas, se coloca una bufanda de lana roja alrededor de su cabeza, recolecta una buena cantidad de ropa sucia, se la coloca sobre la cabeza como una buena lavandera y se dirige escaleras abajo. Margot y yo lavamos los platos y ordenamos la habitación.

Miércoles, 23 de febrero, 1944.Mi queridísima Kitty,El clima ha estado maravilloso desde ayer, y yo me he recobrado bastante. Mi

escritura, que es lo mejor que hago, está dando buenos resultados. Voy al ático casi cada mañana para quitarme el aire añejo de los pulmones. Esta mañana cuando fui allí, Peter estaba ocupado limpiando. Terminó rápidamente y se acerco a donde yo estaba sentada, que es mi lugar favorito en el suelo. Los dos miramos hacia fuera el cielo azul,

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Pág. 194.Los árboles pelados cubiertos de rocío, las gaviotas y otras aves dando destellos

de luz mientras sobrevuelan por los aires, y nosotros estábamos tan conmovidos con la escena que no podíamos hablar siquiera. Él apoyó su cabeza contra una gruesa viga mientras yo estaba sentada. Respiramos ese aire, miramos hacia fuera y sentimos que el encanto no debía ser roto con palabras. Nos quedamos así por un largo rato y para cuando él se tuvo que ir a cortar leña, supe que era un buen chico, decente. Subió las escaleras hacia el loft, y lo seguí; durante los quince minutos que estuvo cortando madera, ninguno dijo una sola palabra. Lo observé desde donde estaba sentada, y pude ver que obviamente estaba dando lo mejor de sí para cortar esa madera y hacer alardes de su fuerza. Pero también miré la ventana abierta, dejando que mis ojos recorrieran una gran parte de Ámsterdam, sobre los techos y hacia el horizonte, que se fundía en una línea de azul tan pálido que era casi invisible.

“Mientras que esto exista”, pensé, “este sol y este cielo despejado, y mientras yo lo pueda disfrutar, ¿cómo puedo estar triste?”

El mejor remedio parea aquellos que están atemorizados, solos ó infelices es salir a la calle, a donde sea que puedan estar solos, solos con el cielo, la naturaleza, y Dios. Por que así y sólo así puedes sentir que todo es como debería ser y que Dios quiere que la gente sea feliz contemplando la belleza y simplicidad de la naturaleza.

Mientras esto exista, y debería existir por siempre, sé que habrá consuelo para cada dolor, sin importar las circunstancias. Creo firmemente que la naturaleza puede traer consuelo a todos aquellos que sufren.

Y, quien sabe, quizás no pase tanto tiempo antes de que pueda compartir este maravilloso sentimiento de felicidad con alguien que sienta lo mismo que yo.

Tuya, Ana.

Pág. 195.PD: Pensamiento: Para Peter. Nos hemos estado perdiendo de muchas cosas aquí, muchísimas, y por un largo

tiempo. Las extraño tanto como tú. No hablo de cosas materiales, ya que estamos bien provistos en ese sentido; me refiero a cosas internas. Como tú, deseo la libertad y el aire puro, pero creo que hemos sido ampliamente compensados por esa pérdida; internamente.

Esta mañana, cuando estaba sentada enfrente de la ventana observando profunda y detenidamente hacia fuera a Dios y a la naturaleza, estaba feliz, simplemente feliz. Peter, mientras las personas sientan ese tipo de felicidad en su interior, la belleza de la naturaleza, la salud, y mucho más, siempre serán capaces de reconquistar la felicidad.

Riqueza, prestigio, todo puede ser perdido. Pero la felicidad en tu propio corazón sólo puede ser amortiguado; pero siempre estará allí, mientras estés vivo, para hacerte feliz nuevamente.

Cada vez que te sientas solo ó triste, haz la prueba de ir al loft en un día lindo y mira hacia fuera. No a las casas ó a los techos, sino al cielo. Mientras puedas observar sin temores el cielo, sabrás que eres puro en tu interior y encontrarás la felicidad nuevamente.

Domingo, 27 de febrero, 1944.Mi queridísima Kitty,Desde temprano en la mañana hasta tarde en la noche, todo lo que hago es

pensar en Peter. Me duermo con su imagen en mis ojos, sueño con él y me despierto con su imagen aún mirándome.

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Tengo una gran sensación de que Peter y yo no somos tan diferentes como lo parecemos exteriormente, y te explicaré por qué: ni Peter ni yo tenemos una madre. La suya es muy superficial, le gusta coquetear y no se preocupa demasiado por lo que pasa en la mente de él. La mía tiene un gran interés en

Pág. 196.Mi vida, pero no tiene tacto, sensibilidad ó entendimiento maternal alguno.Tanto Peter como yo luchamos con nuestros sentimientos más profundos. Todavía

estamos inseguros de nosotros mismos y somos muy vulnerables emocionalmente como para que se nos trate bruscamente. Cada vez que ello sucede, quiero salir corriendo ó esconder mis sentimientos. En vez de eso, golpeo las cacerolas y sartenes, derramo el agua y soy generalmente ruidosa, para que todos deseen que estuviera a millas de distancia. La reacción de Peter es la de encerrarse en sí mismo, hablar poco, quedarse sentado en silencio y soñar despierto, mientras esconde cuidadosamente su verdadero ser.

¿Pero cuándo y como llegaremos finalmente a conectarnos el uno con el otro? No sé cuanto tiempo más pueda continuar dominando mi deseo.

Tuya, Ana M. Frank.

Lunes, 28 de febrero, 1944.Mi queridísima Kitty,Es como una pesadilla, una que se extiende incluso cuando estoy despierta. Lo

veo casi cada hora del día y sin embargo no puedo estar con él, no puedo dejar que otros lo noten, y debo pretender estar alegre, aunque mi corazón esté sufriendo.

Peter Schiff y Peter Van Daan se han derretido y unido en un sólo Peter, el cual es bueno y amable y al cual deseo desesperadamente. Mi madre es horrible, mi padre es agradable, lo cual lo hace aún más exasperante, y Margot es la peor, dado que ella se aprovecha de verme sonriente para demandar atención de parte mía, cuando lo único que quiero es que me dejen en paz.

Peter no me acompañó en el ático, pero fue al loft a hacer algunos trabajos de carpintería. Con cada martillazo ó cada chirrido, otro pedazo de mi coraje se desmoronaba y estaba aún más infeliz. Desde la distancia un reloj anunciaba, “¡Sé pura de corazón, sé pura de mente!”

Pág. 197.Soy sentimental, lo sé. Soy tonta y un tanto desanimada, y lo sé también.Ay, ¡Ayúdame!Tuya, Ana M. Frank.

Miércoles, 1 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Mis propios asuntos han sido dejados de lado por un…asalto. Sé que te aburro

con todas mis historias de ladrones, ¿pero qué puedo hacer si los ladrones disfrutan tanto el honrar a Gies & co. Con su presencia? Este incidente es mucho más complicado que el último, en julio de 1943.

Anoche a las siete y media el señor Van Daan se dirigía, como siempre, a la oficina del señor Kugler cuando descubrió que tanto la puerta de vidrio como la puerta de la oficina estaban abiertas. Estaba sorprendido, pero siguió caminando y se sorprendió aún más cuando vio que la puerta del vestuario estaba abierta también y que a oficina estaba completamente desordenada. “Ha habido un robo”, es lo que se le cruzó por la mente. Pero para asegurarse, bajó las escaleras hasta la puerta central, chequéo la

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cerradura y comprobó que todo estaba cerrado. “Bep y Peter deben haber sido muy descuidados esta noche”, concluyó el señor Van Daan. Se quedó un rato en la oficina del señor Kugler, apagó la lámpara y subió sin preocuparse demasiado pro las puertas abiertas ó el desorden en la oficina.

Temprano esta mañana, Peter golpeó a nuestra puerta para decirnos que la puerta de entrada estaba totalmente abierta y que le proyector y el nuevo maletín del señor Kugler habían desaparecido del closet. A Peter se le ordenó que trabara la puerta. El señor Van Daan nos contó de sus descubrimientos de la noche anterior, y nosotros estábamos extremadamente preocupados.

La única explicación es que el ladrón haya tenido un duplicado de la llave, dado que no había signos de que la puerta hubiera sido forzada. Debe haber entrado temprano durante el anochecer, cerrado la puerta,

Pág. 198.Y escondido cuando escuchó al señor Van Daan, huido con el botín y, en su

apuro, no se preocupó por cerrar la puerta.¿Quién podría tener nuestra llave? ¿Por qué el ladrón no fue al depósito? ¿Era

uno de nuestros empleados del depósito? ¿Nos delatará ahora que ha escuchado y quizás visto al señor Van Daan?

Es realmente atemorizante, dado que no sabemos si el ladrón tiene intenciones de volver a entrar ¿Ó acaso se asustó tanto al saber que había gente adentro que ya no volverá más?

Tuya, Ana.

PD: Nos encantaría que pudieras encontrar un buen detective para nosotros. Obviamente hay una sola condición: Debemos confiar en que no delate a las personas en escondites.

Jueves, 2 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Margot y yo estábamos juntas en el ático hoy. No puedo disfrutar estar allí con ella

en el modo en que imaginé estaría con Peter (ó alguien más) ¡Sé que ella se siente del mismo modo que yo en un montón de cosas!

Mientras lavábamos los platos, Bep comenzó a hablarle a mi madre y a la señora Van Daan sobre lo desesperanzada que se siente ¿En qué la ayudaron esas dos? Nuestra madre, sin tacto alguno, no hizo más que empeorar las cosas ¿Sabes cuál fue su consejo? ¡Que ella debía pensar en toda esa otra gente en el mundo que estaba sufriendo! ¿Cómo puede ayudarte pensar en la miseria de otros cuando ya te sientes miserable contigo mismo? Eso es lo que yo dije. Su respuesta, por supuesto, fue que yo debía mantenerme fuera de conversaciones de ese tipo.

¡Los adultos son unos idiotas! Como si Peter, Margot, Bep y yo no tuviéramos los mismos sentimientos. Lo único que ayuda es el amor de una madre ó de un amigo muy, muy cercano.

Pág. 199.¡Pero estas dos madres no entienden ni lo más básico sobre nosotros! Quizás la

señora Van Daan lo comprenda un poco más que mi madre. Ay, desearía haber podido decirle algo ala pobre Bep, algo que supiera que desde mi propia experiencia, pudiera haber ayudado. Pero mi padre se interpuso entre nosotras, apartándome bruscamente ¡Son todos tan estúpidos!

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También hablé con Margot sobre mi padre y mi madre, acerca de cuanto más agradable sería estar aquí si ellos no empeoraran todo. Podríamos organizar noches en que cada uno tuviera su turno para discutir temas en particular. Pero ya hemos discutido todo eso ¡Es imposible para mí hablar aquí! El señor Van Daan se pone a la ofensiva, mi madre se pone sarcástica y no puede decir nada en un tono de voz normal, a mi padre no le interesa participar, ni tampoco al señor Dussel, y la señora Van Daan es atacada tan a menudo que simplemente se sienta allí con la cara colorada, sin tener fuerzas ya para empezar otra discusión ¿Y nosotros? ¡No se nos permite dar nuestra opinión! La gente te puede decir que te calles, pero no pueden impedir que te formes una opinión. No puedes prohibirle a alguien que tenga su propia opinión, ¡sin importar cuan joven sea! Lo único que podría ayudar a Bep, Margot, Peter y a mí sería una gran cantidad de amor y dedicación, lo cual no obtenemos aquí. Y nadie, en especial los idiotas ilustrados que nos rodean, son capaces de entendernos, dado que somos mucho más racionales y avanzados en nuestras ideas de lo que ninguno de ellos sospecha.

Amor, ¿qué es el amor? No creo que realmente puedas describirlo con palabras. El amor es comprender a alguien, quererlo, compartir sus penas y alegrías. Esto a veces incluye amor físico. Tú compartes algo, das algo y recibes algo a cambio, estés ó no casado, tengas un bebé ó no. Perder tus virtudes no es un problema, ¡siempre y cuando sepas que mientras vivas tendrás a alguien a tu lado que

Pág. 200.Te entenderá y que no tiene que ser compartido con nadie más!Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 200.

Últimamente, mi madre está tratándome mal otra vez; claramente está celosa por que hablo más con la señora Van Daan que con ella ¡Y a mí que me importa!

Esta tarde logré cruzarme con Peter, y estuvimos hablando por al menos cuarenta y cinco minutos. Quería contarme algo, pero no le resultó fácil. Finalmente lo dijo, aunque le tomó un largo rato. Honestamente, no sabía si era mejor irme ó quedarme ¡Pero realmente quería ayudarlo! Le conté sobre lo sucedido con Bep y el poco tacto que nuestras madres tienen. Él me dijo que sus padres pelean constantemente por política, los cigarrillos y todo tipo de cosas. Como te he dicho antes, Peter es muy tímido, pero no tan tímido como para no poder admitir que estaría perfectamente feliz de pasar un año ó dos sin ver a sus padres. “Mi padre no es tan agradable como parece”, dijo. “Pero cuando se trata de los cigarrillos, mi madre tiene toda la razón”.

Yo también le conté sobre mi madre. Y él salió en defensa de mi padre. Él pensó que es una “persona increíble”.

Esta noche, cuando colgaba mi delantal tras haber lavado los platos, él me llamó por un momento y me pidió que no mencionara abajo el hecho de que sus padres habían peleado nuevamente y que no se dirigían la palabra el uno al otro. Le prometí que no lo haría, aunque ya se lo había contado a Margot. Peor estoy segura de que Margot no lo divulgará.

“Ay, no, Peter”, dije, “No debes preocuparte por mí. He aprendido a no comentar todo lo que oigo. Nunca menciono lo que me cuentas”.

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Se puso contento de escuchar eso. También le comenté lo terriblemente chismosos que éramos, y dije, “Margot está en lo cierto, por supuesto, cuando dice que no estoy siendo honesta, por que por más que quiera

Pág. 201 Dejar de ser chismosa, no hay nada que me guste más que criticar al señor

Dussel”. “Es bueno que lo admitas”, dijo. Se sonrojó, y su sincero halago casi me hace

sonrojar a mí también.Luego hablamos sobre “la gente de arriba” y “la gente de abajo” por un rato más.

Peter se sorprendió bastante al escuchar que no nos agradan sus padres. “Peter”, dije, Tú sabes que yo siempre soy honesta, ¿así que por qué no habría de contarte esto? Nosotros también notamos sus errores”.

Agregué, “Peter, me encantaría ayudarte ¿Me dejarás? Sé que te encuentras en una situación incómoda, y lo sé, aunque no digas nada, que todo esto te afecta”.

“¡Tu ayuda siempre es bienvenida!”“Quizás sería bueno para ti que hablaras con mi padre. Puedes contarle lo que

sea, él jamás lo comentará con nadie”“Lo sé, él es un verdadero amigo”.“Tú realmente lo aprecias, ¿no?”Peter asintió, y yo continué, “Bueno, tú también le agradas a él, ¿lo sabias?”Levantó la mirada rápidamente y se sonrojó. Era emocionante ver lo feliz que lo

hacían esas palabras “¿Crees que es así?”, preguntó.“Sí”, dije. “Lo noto por los pequeños comentarios que hace de vez en cuando”.Luego el señor Van Daan vino a tomar unos dictados.Peter es una “persona increíble”, ¡igual que mi padre!Tuya, Ana M. Frank

Viernes, 3 de marzo, 1944.

Mi queridísima Kitty,Cuando observé el candelabro esta noche, me sentí en calma y feliz nuevamente.

Es como la abuela estuviera en él, y fuera ella la que me cuida y proteja y hace que me sienta feliz de nuevo. Pero…hay alguien más que

Pág. 202.Controla todos mis estados de ánimo y ese es…Peter. Hoy fui a buscar patatas, y

mientras estaba en las escaleras con mi cacerola llena, me preguntó, “¿Qué hiciste hoy durante el almuerzo?”

Me senté en las escaleras, y comenzamos a hablar. Las patatas no llegaron a la cocina hasta las cinco-quince (una hora después de que fui por ellas). Peter no dijo más nada sobre sus padres; sólo hablamos sobre libros y sobre el pasado. Ay, él me observa con tanta ternura en sus ojos; no creo que pase mucho tiempo más antes de que me enamore de él.

Él volvió a mencionar el tema esta noche. Fui a su habitación luego de pelar las patatas e hice mención a lo caluroso que estaba. “Puedes notar cuanto calor hace observando a Margot y a mí, por que nos ponemos pálidas cuando hace frío y coloradas cuando hace calor”, dije.

“¿Enamoradas?”, preguntó.“¿Por qué habría de estar enamorada?”Era una respuesta bastante estúpida (Ó,

mejor dicho, una pregunta bastante estúpida).

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“¿Por qué no?”, dijo, y el momento de la cena llegó.¿A qué se refirió? Hoy finalmente logré preguntarle si toda mi charlatanería lo

aburría. Todo o que dijo fue, “¡no, por mí está bien!”No sabría decirte si su respuesta se debió a su timidez ó no.

Kitty, parezco una enamorada que no hace otra cosa que hablar de su querido amor. Y Peter es un amor ¿Pero me animaré algún día a decírselo? Sólo si él pensara lo mismo de mí, pero soy ese tipo de personas a las que tienes que tratar con sumo cuidado, sé eso perfectamente. Y él sólo quiere que lo dejen en paz, así que no sé cuanto puedo gustarle. De todos modos, estamos comenzando a conocernos el uno al otro mucho mejor. Desearía que nos animáramos a hablar más el uno con el otro. Pero quien sabe, ¡quizás ese momento llegue antes de lo que yo creo! Una ó dos veces al día él me lanza una mirada cómplice, que nos hace felices a ambos.

Pág. 203.Parece una locura estar hablando de su felicidad, y aún así tengo la increíble

sensación de que él siente lo mismo que yo.Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 4 de marzo, 1944.Querida Kitty,Este es el primer sábado en meses que no ha sido cansador, aburrido. La razón

de ello es Peter. Esta mañana, cuando iba e camino al ático a colgar mi delantal, mi padre me preguntó si quería quedarme y practicar Francés, y le dije que sí. Hablamos en Francés por un rato y le expliqué algo a Peter, y luego nos dedicamos a estudiar inglés. Mi padre leyó en voz alta los escritos de Dickens, y yo me sentía extremadamente feliz, dado que estaba sentada en la silla de mi padre, cerca de Peter.

Bajé a las once menos cuarto. Cuando volví a subir a las once y media, Peter ya me estaba esperando en las escaleras. Hablas hasta la una menos cuarto. Cada vez que dejo la habitación, por ejemplo luego de una comida, y Peter tiene la oportunidad y nadie más puede oírlo, me dice, “Adiós, Ana, nos vemos luego”.

¡Ay, me pone tan feliz! Me pregunto si finalmente se enamorará de mí. De cualquier forma, él es un buen chico, ¡Y no sabes lo bien que me hace hablar con él!..

La señora Van Daan no tiene inconvenientes, pero hoy me preguntó en un tono burlón, “¿Puedo confiar en ustedes dos estando solos ahí arriba?”

“Por supuesto”, protesté. “¡Tomo eso como un insulto!”.A la mañana, a la tarde y a la noche, todo lo que hago es esperar con ansias el

momento para ver a Peter.Tuya, Ana M. Frank.

PD: Antes que me olvide, anoche estaba todo cubierto de nieve. Ahora se ha derretido toda y ya no queda nada.

Pág. 204.Lunes, 6 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Desde que Peter me contó lo de sus padres, me he sentido un tanto responsable

por él - ¿No crees que es extraño? Es como si sus disputas me concernieran tanto como a él, y aún así, no me animo a volver a mencionar el tema, por que tengo miedo de que lo haga sentir incómodo. No quisiera entrometerme, ni por todo el dinero del mundo.

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Puedo darme cuenta por el rostro de Peter que él analiza cada cosa tan meticulosamente como yo. Anoche me enojé cuando la señora Van Daan murmuró, “¡El pensador!”. Peter se sonrojó y parecía muy avergonzado, y yo casi estallo de ira.

¿Por qué esta gente no puede mantener su boca cerrada? No te das una idea de lo que es tener que mantenerse al margen y ver lo sólo que está, sin poder hacer nada. Puedo imaginar, como si estuviera en su lugar, cuan impotente se debe sentir ante cada discusión. Y acerca del amor. Pobre Peter, ¡necesita tanto ser amado!

Sonó tan frío cuando dijo que él no necesitaba amigos ¡Está tan equivocado! No creo que lo diga en serio. Él se apoya en su masculinidad, su soledad y su falsa indiferencia para poder mantener este rol y así nunca, pero nunca, tener que mostrar sus sentimientos. Pobre Peter, ¿cuánto más podrá mantener este rol? ¿No lo hará explotar este esfuerzo sobrehumano?

Ay, Peter, si tan sólo pudiera ayudarlo, ¡si tan solo me dejara! Juntos podríamos deshacernos de nuestra soledad, ¡la suya y la mía!

He estado pensando mucho, pero sin hablar demasiado. Estoy feliz cuando lo veo, y aún más feliz si el sol brilla cuando estamos juntos. Me lavé el cabello ayer, y como sabía que el estaba en la habitación continua, fui muy ruidosa. No pude evitarlo; mientras más callada y silenciosa soy por dentro,

Pág. 205.¡Más ruidosa debo ser por fuera! ¿Quién será el primero que descubra mi debilidad?

Es tan bueno que los Van Daan no tengan una hija ¡Mi conquista jamás sería tan apasionante, maravillosa y agradable y si hubiera alguien del mismo sexo!

Tuya, Ana M. Frank. PD: Tú sabes que soy siempre honesta contigo, por lo que creo que debo decirte

que vivo a la espera de un nuevo encuentro. Sigo esperanzada en que él se muera de ganas de verme, y me siento completamente feliz cuando noto sus tímidos gestos hacia mí. Creo que a él le gustaría poder expresarse tan fácilmente como yo lo hago; si tan sólo supiera que es su timidez lo que tanto me conmueve.

Martes, 7 de marzo, 1944.Queridísima Kitty, Cuando pienso en la vida que llevaba en 1942, todo parece tan irreal. Aquella Ana

Frank que disfrutaba esa existencia tan celestial era completamente diferente a la que hoy se ha vuelto tan sabia ente estas cuatro paredes. Sí, era celestial. Con cinco admiradores por cuadra, con más de veinte amigos, siendo la favorita de la mayoría de mis maestros, malcriada enormemente por mi madre y mi padre, con grandes bolsas de golosinas y mucho dinero para mis gastos ¿Qué más podía pedir?

Probablemente te preguntas como pude haber encantado a todas estas personas. Peter dice que es por que soy “atractiva”, pero eso no es tan así. Los maestros estaban fascinados con mis respuestas inteligentes, mis brillantes comentarios, mi rostro sonriente y mi visión crítica de las cosas. Eso era todo: una niña coqueta, y divertida. Tenía unos cuantos puntos a favor, los cuales hacían que le agradara a todos: Era trabajadora, honesta y generosa. Nunca me hubiera negado a que alguien le echara un vistazo a mis respuestas, compartía mis golosinas, y no era engreída.

Pág. 206.

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¿Acaso toda esa admiración no me hubiera convertido en una pedante? Es bueno que, en mi momento de gloria, haya sido repentinamente enchufada a la realidad. Me tomó más de un año acostumbrarme a la falta de admiración.

¿Cómo me veían en la escuela? Era la comediante de la clase, la instigadora de cada travesura, nunca de mal humor, nunca lloriqueando ¿Era entonces tan sorprendente que todos quisieran acompañarme en bicicleta hasta la escuela ó hacerme pequeños favores?

Veo a la Ana Frank del pasado como alguien agradable, divertida, pero superficial, y que nada tiene que ver con la persona que soy hoy ¿Qué dijo Peter sobre mí? “Cada vez que te veía, estabas rodeada por un séquito de chicas y al menos dos chicos, estabas siempre riéndote, ¡y eras siempre el centro de atención!” Estaba en lo cierto.

¿Qué ha quedado de aquella Ana Frank? No, no he olvidado como reír ó como hacer un comentario, y sigo siendo tan buena, ó quizás mejor aún, burlándome de la gente, y puedo aún coquetear y ser divertida, si es que quiero serlo…

Y he ahí el problema. Me gustaría vivir esa aparentemente libre y feliz vida por una noche, por unos días, una semana. Al final de esa semana estaría exhausta, y agradecida con la primera persona que me hable sobre cosas banales. Quiero amigos, no admiradores. Gente que me respete por mi personalidad y mis virtudes, no por mi coqueta sonrisa. El séquito de personas sería mucho más reducido, ¿pero que importa, siempre y cuando sean sinceros?

A pesar de todo, no era completamente feliz en 1942; a veces me sentía abandonada, pero como estaba todo el tiempo haciendo algo, no pensaba en ello. Disfrutaba todo lo más que podía, tratando consciente ó inconscientemente, de llenar el vacío con bromas.

Mirando hacia atrás, me doy cuenta de que ese período de mi vida se ha terminado; mis días de escuela felices y faltos de problemas se ha nido para siempre.

Pág. 207.

Ni siquiera los extraño. Ya los he superado. Ya no puedo actuar como una niña, mi lado adulto está siempre a la vista.

Veo mi vida hasta el año nuevo de 1944 a través de una poderosa lupa. Cuando estaba en casa, mi vida estaba llena de luz. Luego, a mediados de 1942, todo cambió de la noche a la mañana. Las discusiones, las acusaciones – no podía asimilarlo todo. Me agarró desprevenida, y el único modo que encontré para tolerarlo fue respondiendo con la misma agresividad.

La primera mitad de 1943 trajo consigo crisis de llanto, soledad y la gradual comprensión de mis defectos y errores, los cuales eran numerosos y parecían serlo más aún. Llené los días con charlas, traté de atraer a Pim más cerca de mí y fallé. Esto me dejó sola para enfrentar la difícil tarea de mejorar para no tener que escuchar sus reproches, que me hacían sentir tan miserable.

La segunda mitad de este mismo año fue un poco mejor. Me convertí en una adolescente, y comenzaron a tratarme más como a un adulto. Comencé a pensar sobre distintas cosas y a escribir historias, llegando finalmente a la conclusión de que los demás ya nada tenían que ver conmigo. Ya no tenían derecho a mandonearme y moverme de aquí para allá como el péndulo de un reloj. Quería cambiar pero a mi modo. Me di cuenta de que podía arreglármelas total y completamente sin mi madre, y eso duele. Pero lo que más me afectó fue darme cuenta de que jamás iba a poder confiar en mi padre. No confío en nadie más que en mí.

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Después de año nuevo el segundo gran cambio ocurrió: mi sueño, a través del cual descubrió mi atracción por…un chico; por un novio. También descubrí una felicidad interior debajo de mi exterior alegre y superficial. De vez encunado estuve callada. Ahora

Pág. 208.Sólo vivo por Peter, ¡ya que lo que pase con migo de ahora en más depende en

gran manera de él!Me recuesto en la cama por las noches, tras finalizar mis plegarias con las

palabras “Ich danke dir für all das Gute und Liebe und Schöne” * (Gracias Dios, por todo aquello que es bueno, agradable y bello), y me siento llena de alegría. Pienso en la vida en el escondite, mi salud, y toda mi vida como das Gute (algo bueno); en el amor de Peter (el cual es aún tan nuevo, frágil y el cual ninguno de los dos se anima a confesar en voz alta), el futuro, la felicidad y el amor como das liebe (algo agradable); el mundo, la naturaleza, y la tremenda belleza de todo, todo el esplendor, como das schöne (algo bello).

En esos momentos no pienso en toda la miseria, sino en la belleza que aún perdura. Aquí esconde mi madre y yo diferimos en gran manera. Su consejo en lo que se refiere a la melancolía es: “Piensa en todo el sufrimiento que hay en el mundo se agradecida pro que tú no formas parte de él”. Mi consejo es: “Ve al campo, disfruta del sol y de todo lo que a naturaleza tiene para ofrecerte. Sal y trata de recapturar la felicidad dentro tuyo; piensa en toda la belleza en tu interior y en todo lo que te rodea y se feliz”.

No creo que el consejo de mi madre sea bueno, ¿Por que, qué se supone que hagas si te encuentras con el sufrimiento? Estarías totalmente perdido. Por el contrario, la belleza continúa, aún en la desdicha. Si tan sólo la buscas, descubres más y más felicidad y recobras tu estabilidad. Una persona que es feliz hace a otros felices; ¡una persona que tiene coraje y fe jamás morirá sintiéndose miserable!

Tuya, Ana M. Frank.

Miércoles, 8 de marzo, 1944.Margot y yo nos hemos estado escribiendo notas la una a la otra, sólo por

diversión, por supuesto.

Pág. 209.Ana: Es extraño, pero sólo puedo recordar lo que sucedió una noche por la

mañana siguiente. Por ejemplo, repentinamente recordé que el señor Dussel estaba roncando fuertemente anoche. (Ahora son las tres menos cuarte del miércoles por la tarde y el señor Dussel está roncando de nuevo, por eso es que me acordé de esto, por supuesto). Cuando tuve que usar el urinal, hice más ruido a propósito para que dejara de roncar.

Margot: ¿Qué es mejor, los ronquidos ó las bocanadas de aire?

Ana: Los ronquidos son mejor, porque se detiene cuando yo hago algún sonido, sin despertar a la persona en cuestión.

Lo que no le conté a Margot, pero sí te confesaré a ti, querida Kitty, es que he estado soñando mucho con Peter. Dos noches atrás soñé que estaba esquiando aquí en nuestro living con ese niño de la pista de ski Apollo; él estaba con su hermana, la niña de piernas largas y flacuchas que siempre usaba el mismo vestido azul. Me presenté, alardeando un poco, y le pregunté su nombre. Era Peter ¡En mi sueño me preguntaba a cuantos Peter conocía!

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Luego soñé que estábamos parados en la habitación de Peter, mirándonos le uno al otro junto a las escaleras. Le dije algo; me dio un beso, pero me dijo que él no me quería tanto y que yo no debía coquetear con él. En un tono de voz desesperado y de súplica dije, “¡No estoy coqueteando, Peter!”

Cuando desperté, me alegró saber que Peter no lo había dicho después de todo.Anoche soñé que nos estábamos besando, pero

Pág. 210.Las mejillas de Peter eran muy decepcionantes: no eran tan suaves como

parecían. Eran más como las mejillas de mi padre- las mejillas de un hombre que ya se afeita.

Viernes, 10 de marzo, 1944.Mi queridísima Kitty,El proverbio “los problemas no vienen de a uno” definitivamente se aplica al día de

hoy. Peter acaba de decirlo. Déjame contarte todas las cosas horribles que pasaron hoy y que aún siguen repicando en nuestra mente.

En primer lugar, Miep se enfermó, como resultado de la boda de ayer de Henk y Aagje. Tomó frió en Westerkerk, donde la ceremonia tuvo lugar. En segundo lugar, el señor Kleiman no ha vuelto a trabajar desde la última vez que su estómago comenzó a sangrar, así que Bep se quedó sola para controlar el lugar. En tercer lugar, la policía arrestó a un hombre (del cual no voy a escribir su nombre). Es terrible no sólo para él, sino también para nosotros, ya que él nos ha estado proveyendo de patatas, manteca y jamón. El señor M., así lo voy a llamar, tiene cinco hijos menores de trece años, y otro en camino.

Anoche pasamos por otro pequeño susto: Estábamos en medio de la cena cuando de repente alguien golpeó del otro lado de la pared. Durante el resto de la velada estuvimos nerviosos y tristes.

Últimamente no he tenido ganas de escribir lo que está sucediendo aquí. He estado más concentrada en mí misma. No me malinterpretes, he estado terriblemente triste por lo que le pasó al pobre señor M., pero no hay mucho espacio para él en mi diario.

El martes, miércoles y jueves estuve en la habitación de Peter desde las cuatro y media hasta las cinco y cuarto. Estudiamos francés y hablamos de distintas cosas.

Pág. 211. Espero ansiosa que esa hora de la tarde llegue, pero lo mejor de todo es que creo que Peter está igual de interesado en verme.

Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 11 de marzo, 1944. Queridísima Kitty, No he podido quedarme quieta últimamente. Camino escaleras arriba, abajo y nuevamente hacia arriba. Me gusta hablar con Peter, pero siempre tengo miedo de ser una molestia. Él me ha contado un poco sobre el pasado, sobre sus padres y sobre sí mismo, pero no es suficiente, y cada cinco minutos me encuentro preguntándome a mí misma por qué siempre espero más. Él solía pensar que yo era una niña molesta, y el sentimiento era mutuo. Yo he cambiado de opinión, ¿pero cómo sé si él también lo ha hecho? Creo que sí, pero eso no significa necesariamente que nos vallamos a convertir en mejores amigos, aunque si me preguntas a mí, ello haría nuestra estancia aquí mucho más amena. Pero no dejaré que esto me vuelva loca. He pasado demasiado tiempo

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pensando en él, ¡y no te complicaré con esto a ti también sólo por que yo me sienta desdichada!

Domingo, 12 de marzo, 1944. Las cosas se están enloqueciendo bastante con el pasar de los días. Peter no me ha mirado desde ayer. Ha estado actuando como si estuviera enojado conmigo. Hago todo lo posible para no atosigarlo y hablarle lo menos posible, ¡pero no es fácil! ¿Qué sucede?, ¿Por qué se mantiene alejado de mí y luego corre a mi lado repentinamente? Quizá lo veo todo peor de lo que realmente es ¡Quizás esté de mal humor como yo, y mañana vuelva todo a la normalidad! La estoy pasando realmente mal tratando de mantener una fachada normal cuando me siento tan triste y desolada. Tengo

Pág. 212. Que hablar, ayudar en la casa, sentarme con los demás y, lo que es peor, ¡lucir animada! Más que nada, extraño la vida al aire libre, ¡y tener un lugar para estar sola cuanto tiempo quiera! Creo que estoy entendiendo todo al revés, Kitty, y por ello vivo en un estado de completa confusión: por un lado, estoy enloqueciendo de deseos por él, y difícilmente puedo estar en la misma habitación que él sin mirarlo; por otro lado, me pregunto ¡por qué me tiene que importar tanto y por qué no puedo volver a estar en calma nuevamente! Día y noche, y a cada momento en que estoy despierta, no hago más que preguntarme, “¿Le has dado el tiempo suficiente para que esté solo? ¿Has estado pasando demasiado tiempo arriba? ¿Hablas demasiado sobre temas complejos que él no está listo para tratar aún? Quizás ni siquiera le gustas, ¿Ha sido todo esto producto de tu imaginación?, pero entonces, ¿por qué te ha contado tanto sobre sí mismo? ¿Se arrepentirá de haberlo hecho?” Y muchas preguntas más. Ayer estaba tan abrumada con las tristes noticias del exterior que me recosté en mi diván para tomar una siesta. Todo lo que quería era dormir y no tener que pensar. Dormí hasta las cuatro, pero luego tuve que ir a la habitación de al lado. No fue fácil responder a todas las preguntas de mi madre e inventar una excusa a mi padre por el motivo de mi siesta. Dije que era una jaqueca, lo cual no era una mentira, ya que sí tenía una… ¡pero por dentro! La gente común, las niñas comunes, los adolescentes como yo, creerían que estoy un poco loca al tener lástima de mí misma. Pero eso es todo. Abro mi corazón a ti, pero el resto del tiempo soy tan alegre y segura de mí misma como me es posible para evitar preguntas que me pongan nerviosa. Margot es muy dulce y le gustaría que yo confiara en ella, pero no puedo contarle todo. Ella me toma muy en serio, demasiado en serio, y pasa mucho tiempo pensando en su pequeña hermana, mirándome cada vez que

Pág. 213. Abro mi boca y preguntándose, “¿Estará actuando ó realmente lo dice en serio?” Y eso es por que estamos siempre juntas. No quiero que la persona en la que confío esté a mí alrededor todo el tiempo. ¿Cuándo podré desenredar mis pensamientos entrecruzados? ¿Cuándo encontraré paz interna nuevamente? Tuya, Ana.

Martes, 14 de marzo, 1944. Queridísima Kitty,

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Puede ser divertido para ti (aunque no para mí), escuchar lo que vamos a comer hoy. La señora de la limpieza está trabajando abajo, así que en este momento estoy sentada en la mesa de los Van Daan cubriendo mi nariz y mi boca con un pañuelo rociado con un perfume de antes de la guerra. Probablemente no tienes ni la más pálida idea de lo que estoy hablando, así que déjame comenzar por “el comienzo de los comienzos”. Las personas que nos abastecen con cupones de comida han sido arrestadas, así que sólo tenemos nuestras cinco libretas de racionamiento para el mercado negro- no más cupones, ni grasa, ni aceite. Desde que Miep y el señor Kleiman se han enfermado nuevamente, Bep no puede encargarse de todas las compras. La comida está en muy mal estado, y también nosotros lo estamos. Desde mañana, no tendremos ni una pizca de grasa manteca ó margarina. No podemos comer patatas fritas en el desayuno (lo cual hemos estado haciendo para ahorrar pan), así que lo remplazaremos con cereal caliente, y debido a que la señora Van Daan piensa que estados muriendo de hambre, compramos leche condensada. Nuestro almuerzo de hoy consistirá en puré y coles en conserva. Esto explica el por qué de mi medida preventiva con el pañuelo ¡No te das una idea de lo mucho que pueden apestar las coles cuando hace varios años que están en conserva! La cocina huele a ciruelas podridas, huevos en mal estado y agua salada ¡Puaj, tan sólo pensar en tener que comer ese potaje me da nauseas! Además, nuestras patatas han contraído tal enfermedad que uno de cada

Pág. 214.

Dos cubos de patatas han tenido que ser tirado a la basura. Nos entretenemos tratando de pensar ñeque enfermedad podrían tener, y llegamos ala conclusión de que sufren de cáncer, viruela, y sarampión. Honestamente, estar en un escondite durante el cuarto año de guerra no es ningún festín ¡Si tan sólo el potaje maloliente se acabara!

Para ser honesta, la comida no me molestaría tanto si la vida aquí fuera más agradable en otros aspectos. Peor así son las cosas: esta existencia tediosa nos está volviendo a todos intolerables. Aquí van las opiniones de los cinco adultos respecto a la situación actual (los niños no tenemos permitido tener una opinión, y por esta vez me atendré alas reglas);

La señora Van Daan: “He dejado de querer ser la reina de la cocina largo tiempo atrás. Peor sentarse a hacer nada fue aburrido, así que volví a cocinar. Aun así, no puedo dejar de quejarme: Es imposible cocinar sin aceite, y todos esos olores hacen que tenga nauseas. Además, ¿Qué recibo a cambio de mis esfuerzos? Ingratitud y comentarios hirientes. Siempre soy la mala de la película; Siempre me culpan por todo. Al mismo tiempo, creo que la guerra está logrando muy pocos progresos. Los alemanes ganarán finalmente. Me aterra pensar en que vamos a morir d hambre, y cuando estoy de mal humor, maltrato a todo el que se me acerca”.

El señor Van Daan: “Sólo fumo, fumo y fumo. Así la comida, la situación política y el humor de Kerli no me caen tan mal. Kerli es una dulce. Si no tengo nada para fumar, me enfermo, entonces necesito comer carne, la vida se torna insoportable, nada es lo suficientemente bueno y todo termina en una pelea. Kerli es una idiota”.

La señora Frank: “La comida no es importante, pero me encantaría comer una rebanada de pan de sémola ahora, por que tengo mucho hambre. Si fuera la señora Van Daan hubiera hecho que el señor Van Daan dejara de fumar largo tiempo atrás. Pero necesito un cigarrillo ahora desesperadamente, por que estoy mareada. Los Van Daan sonPág. 215.

Page 121: El Diario de Ana Frank

Personas horribles. Los ingleses pueden estar cometiendo muchos errores, pero la guerra sí está logrando progresos. Debería mantenerme callada y agradecer que no estoy en Polonia”.

El señor Frank: “Todo está bien, no necesito nada. Mantente en calma, tenemos mucho tiempo. Sólo dame mis patatas y me mantendré callado. Sería mejor guardar algunas de mis raciones para Bep. La situación política está mejorando, soy extremadamente optimista”.

El señor Dussel: “Debo completar la tarea que me he propuesto, todo debe ser terminado a tiempo. La situación política luce “gut” (bien), es “imposible que nos atrapen” ¡Yo, yo, yo…!”

Tuya, Ana.

Jueves, 16 de marzo, 1944.Queridísima Kitty;¡Uff! ¡Al fin me logro salir por unos momentos de todo ese pesimismo! Todo lo que

he estado escuchando hoy fue: “Si esto ó aquello sucede, estamos en problemas, y si tal ó cual persona se enferma, nos tendremos que defender solos, y si…”

Bueno, ya sabes el resto, ó al menos asumo que en alguna medida estás familiarizada con los residentes del anexo para adivinar de qué podrían estar hablando.

Las razón para tantos “y si…” es que el señor Kugler ha sido llamado para incorporarse a los seis días de trabajo obligatorios, Bep está enferma de un resfrío y probablemente tenga que quedarse en su casa mañana, Miep no se ha recuperado de su resfrío y el estómago del señor Kleiman ha sangrado tanto que él se ha quedado inconsciente ¡Que novedades nefastas!

Creemos que el señor Kleiman debería ver a un médico profesional para que le de un certificado médico que él pueda presentar en la municipalidad de Hilversum. A los empleados del depósito se les dio el día de mañana libre, así que Bep estará sola en la oficina. Y si (por que hay otro “y si…”) Bep tiene que estar

Pág. 216.Estar en su casa, la puerta permanecerá cerrada por lo que tendremos que estar

lo más callados posible para que los de la compañía Keg no nos oigan. A la una Jan va a venir por media hora a chequear que nuestras almas abandonas estén bien, como si fuera el cuidador de un zoológico.

Esta mañana, por primera vez en mucho tiempo, Jan nos dio noticias del mundo exterior. Deberías habernos visto a todos reunidos a su alrededor; era la misma imagen de la pintura “el cuento de la abuela”.

Agasajó a su audiencia con una charla sobre- ¿Qué más sino?- comida. La señora P., una amiga de Miep, ha estado cocinando sus comidas. Antes de ayer, Jan comió zanahorias con frijoles negros, ayer comió las sobras, y hoy ella cocinará guisantes, y mañana planea hacer puré con las zanahorias y patatas restantes.

Le preguntamos por el doctor de Miep.“¿Doctor?”, Dijo Jan. “Lo llamé esta mañana y me atendió su secretaria. Le pedí

una receta médica por una gripe y me dijo que podía ir a buscarlo mañana a la mañana entre las ocho y las nueve. Si tienes un caso de gripe particularmente grave, el doctor se acerca al teléfono y te dice, “Saca la lengua y di “Aaaaa”. Ay puedo oírlo, tu garganta está infectada. Te escribiré una receta médica y tú puedes llevarla a la farmacia. Buen día”. Y eso es todo. Que trabajo fácil que se encontró, diagnostica por teléfono. Peor no debería culpar a los doctores. Después de todo, ellos sólo tienen dos manos, y por estos días hay muchos pacientes y muy pocos doctores”.

Page 122: El Diario de Ana Frank

De todos modos, nos divertimos mucho con la llamada telefónica de Jan. Tan sólo me puedo imaginar como debe lucir la sala de espera de un doctor por estos días. Los doctores ya no se niegan a atender a aquellos más pobres, sino a aquellos con las enfermedades más leves. “¡Hey!, ¿qué haces aquí”, piensan. “Ve al final de la línea: ¡los verdaderos pacientes tienen prioridad!”

Tuya, Ana.

Pág. 217.Jueves, 16 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,El clima está espléndido, indescriptiblemente bello; subiré al ático en unos

instantes.Ahora sé por qué estoy mucho más cansada que Peter. Él tiene su propia

habitación donde puede trabajar, soñar, pensar y dormir. Yo soy constantemente desplazada de una esquina a la otra. Nunca estoy sola en la habitación que comparto con Dussel, y es lo que más deseo. Esa es otra razón por la que me refugio en el ático. Cuando estoy allí, ó contigo, puedo ser yo misma, aunque sea por un rato. Aún así, no quiero ser una quejosa. Por el contrario, ¡quiero tener valentía!

Gracias a dios que ninguno de los demás se da cuenta de lo que siento en mi interior, aunque cada vez tengo más rechazo hacia mi madre, menos afecto para con mi padre, y menos predisposición a compartir mis pensamientos con Margot; estoy totalmente encerrada en mi misma. Pero pro sobre todo, tengo que seguir manteniendo mis aires de auto confianza. Nadie debe saber que mi mente y mi corazón están enfrentados el uno con el otro. Hasta ahora mi razón ha ganado la batalla, pero ¿podrán mis sentimientos llevar la delantera? A veces me dan miedo que lo hagan, ¡pero la mayoría del tiempo deseo que así sea!

Ay, es tan difícil no hablar con Peter sobre estas cosas, pero sé que debo dejar que él de el primer paso; ¡es tan difícil actuar durante el día como si todo lo que sucede en mis sueños no hubiera pasado realmente! Kitty, Ana está loca, pero es que estamos pasando por tiempos locos y circunstancias aún más locas.

Lo mejor de todo esto es poder escribir todos mis sentimientos e ideas; si no fuera así, estaría totalmente sofocada. Me pregunto que piensa Peter sobre todas estas cosas. Sigo pensando que seré capaz de hablar con él sobre ello algún día. Él debe haber descubierto algo sobre la Ana que llevo en mi interior, ¡por que no puede haberse enamorado de la Ana que ha conocido hasta ahora!

Pág. 218. ¿Cómo puede alguien como Peter, a quién le gusta la paz y la tranquilidad,

soportar mi barullo y mis ruidos? ¿Será él el primero y único capaz de ver que hay debajo de mi máscara de cemento? ¿Le tomará mucho tiempo descubrirlo? ¿No hay un viejo dicho que dice que el amor es similar a la compasión? ¿No es eso lo que está sucediendo aquí? ¡Por que a veces me compadezco de él tanto como me compadezco de mí!

Honestamente no se como comenzar, no lo se, ¿Entonces como puedo pretender que Peter lo haga cuando para él es más difícil hablar que para mí? Si tan sólo pudiera escribirle, al menos sabría que estaba tratando de decir, ¡ya que es tan difícil decirlo en voz alta!

Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 17 de marzo, 1944.Mi queridísima amiga,

Page 123: El Diario de Ana Frank

Todo salió bien después de todo; Bep sólo tenía la garganta irritada, no gripe, y el señor Kugler logró conseguir un certificado médico para no tener que cumplir con los seis días de trabajo obligatorio. El anexo entero respiró aliviado ¡todo esta bien aquí! Excepto por Margot y yo que estamos cansadas de nuestros padres.

No me malinterpretes. Sigo queriendo a mi padre tanto como siempre y Margot sigue queriendo a mi padre y a mi madre, peor cuando tienes la edad que tenemos nosotras, quieres tomar algunas decisiones por ti misma, salirnos de su control. Cada vez que subo, me preguntan que voy a hacer, no me dejan ponerle más sal a mi comida, mi madre me pregunta cada noche las ocho y cuarto en punto si y ano es tiempo de que me ponga mi ropa de dormir, y tienen que aprobar cada libro que leo. Debo admitirlo, no son estrictos en ese aspecto y me dejan leer casi todo lo que quiero, pero Margot y yo estamos cansadas de tener que escuchar sus comentarios y preguntas todo el día.

Hay algo más que les desagrada: Ya no me dan ganas de besarlo por la mañana, el mediodía,

Pág. 219. Y la noche. Todos esos sobrenombres me parecen ya muy fingidos, y las charlas

de mi padre sobre los gases y sobre ir al baño me parecen desagradables. Para hacerla corta, nada me gustaría más que poder pasar un tiempo sin ellos, pero ellos no lo entienden. No es que Margot y yo se los hallamos comentado alguna ves, pero ¿qué sentido tendría? Ellos no lo entenderían de todos modos.

Margot dijo anoche, “Lo que realmente me moleste es que si por alguna casualidad apoyas tu cabeza entre tus brazos y suspiras una ó dos veces, ya te están preguntando si tienes una jaqueca ó no te sientes bien”.

Para ambas, ha sido muy sorprendente darnos cuenta de que ¡ya poco queda de esa harmoniosa y apegada familia que solíamos ser! Esto se da en especial porque las noches aquí son muy distintas a lo que solían ser. Me refiero a que somos tratadas como niñas en lo que se refiere a asuntos externos, mientras que en lo que se refiere a los asuntos internos, somos mucho mayores que las niñas de nuestra edad. Aunque sólo tengo catorce, ya se lo que quiero, se lo que esta bien y lo que esta mal, tengo mis propias opiniones, ideas y principios, y aunque pueda sonar extraño viniendo de una adolescente, me siento más adulta que niña- siento que soy completamente independiente de los demás. Sé que soy mejor que mi madre para debatir ó llevar adelante una discusión, se que soy más objetiva, que no exagero tanto como ella, soy mucho más ordenada y más capaz con mis manos, y por todo eso siento (esto quizás te haga reír) que soy superior a ella en muchos aspectos. Para amar a alguien, debo admirarlo y respetarlo como persona, ¡pero no siento ni respeto ni admiración por mi madre!

Todo sería distinto si tan sólo tuviera a Peter, ya que lo admiro a él en muchos aspectos ¡Es tan decente e inteligente!

Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 220.Sábado, 18 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Te recontado más sobre mí y mis sentimientos de lo que jamás le he contado a

cualquier alma viviente, ¿así que por qué no incluir el sexo?Los padres, y la gente en particular, son muy peculiares cuando de sexo se trata.

En vez de contarles todo a sus hijas e hijos a los doce años, manda a los niños a salir de la habitación cuando se toca el tema y dejan que descubran todo por sí solos. Más adelante, cuando los padres se enteran de que sus hijos, de algún modo, han obtenido

Page 124: El Diario de Ana Frank

esa información, ellos asumen que saben más (ó menos) de lo que verdaderamente saben ¿Pero por qué no tratan de arreglar sus errores comprobando si aprendieron todo correctamente?

Un problema de gran envergadura para los padres-aunque para mi no es más que un asunto mínimo- es que ellos tienen miedo de que sus hijos ya no vean el matrimonio como algo sagrado y puro una vez que se den cuenta de que toda esta idea de la virginidad es un sinsentido. En lo que a mí concierne, no está mal que un hombre llegue con un poco de experiencia al matrimonio. Después de todo, no tiene nada que ver con el matrimonio en sí, ¿o no?

Poco después de que cumplí once años, me contaron sobre la menstruación. Pero aún así, no tenía idea de dónde venía la sangre ó para qué servía. Cuando tenía doce y medio, aprendí algunas cosas más por Jacque, que no era tan ignorante como yo. Mi propia intuición me enseño lo que un hombre y una mujer hacen cuando están juntos; parecía una idea loca la principio, pero cuando Jacque lo confirmó,¡estuve orgullosa de mi misma por haberlo descifrado!

Fue también Jacque la que me contó que los niños no salen de las barrigas de sus madres. Como ella lo dijo, “¡Donde van los ingredientes es el mismo lugar de donde sale el producto fina!” Jacque y yo nos enteramos de lo que era el himen, y de varios otros detalles, de un libro sobre educación sexual.

Pág. 221.También aprendí que puedes evitar tener un bebé, pero todavía es un misterio el

modo en que eso funciona. Cuando llegué aquí, mi padre me contó sobre las prostitutas, etc., pero aún hay preguntas sin respuestas para mí.

Si las madres no le cuentan todo a sus hijos, ellos lo aprenden de a partes, y eso no puede estar bien.

Aunque es sábado, ¡no estoy aburrida! Eso es por que he estado en el ático con Peter. Me senté allí a soñar son mis ojos cerrados, y fue maravilloso.

Tuya, Ana M. Frank.

Domingo, 19 de marzo, 1944.Queridísima Kitty, Ayer fue un día muy importante para mí. Después del almuerzo, todo se dio con

normalidad. A las cinco puse a cocinar las patatas, y Peter me dio algo de salsa roja para que llevara a Peter. No quería ir al principio, pero finalmente lo hice. Él no quiso aceptar la salsa, y tuve la horrible sensación de que era por aquella discusión que habíamos tenido sobre la desconfianza. De repente no lo pude tolerar más y mis ojos se llenaron de lágrimas. Sin decir nada más, le devolví el plato a mi madre y fui al baño a llorar un buen rato. Después de ello, decidí tener una buena charla con Peter. Antes de la cena, los cuatro estuvimos ayudándolo con un crucigrama, así que no pude decirle nada. Peor mientras nos sentábamos a comer, le susurré, “¿Vas a practicar tu caligrafía esta noche, Peter?”

“No”, fue su respuesta.“Me gustaría hablarte más tarde”.Él aceptó.Una vez que los platos fueron lavados, fui a su cuarto y le pregunté si se había

negado a aceptar la salsa por nuestra última discusión. Por suerte, esa no era la razón; sólo le pareció que sería de mala educación parecer tan ansioso. Había hecho mucho calor

Pág. 222.

Page 125: El Diario de Ana Frank

abajo y mi rostro estaba colorado como una langosta. Así que tras bajar para llevarle agua a Margot, volví a subir para tomar un poco de aire fresco. Para mantener las apariencias, primero me quedé junto a la ventana de los Van Daan antes de dirigirme a la habitación de Peter. Él estaba parado del lado izquierdo de la ventana, que estaba abierta, así que caminé hacia el lado derecho. Es mucho más fácil hablar junto a una ventana abierta en la semi oscuridad que a plena luz del día, y creo que Peter piensa del mismo modo. Nos contamos tantas, tantas cosas que no puedo repetirlas todas. Y fue muy lindo; la mejor velada que tuve en el anexo desde que llegué. Te daré una breve descripción de los variados temas que tocamos.

Primero hablamos sobre las discusiones y como yo las veo de un modo tan distinto últimamente, y luego sobre como ambos nos hemos distanciado de nuestros padres. Le conté a Peter sobre mi madre, mi padre, Margot y yo. En un momento me preguntó, “Tú siempre le das un beso de las buenas noches a cada uno, ¿no?”

“¿Uno? Docenas de besos. Tú no lo haces, ¿no?”“No, realmente nunca besé a nadie”.“¿Ni siquiera en tu cumpleaños?”“Sí, en mi cumpleaños sí”.Hablamos sobre el hecho de que ninguno de los dos realmente confía en sus

padres, y como ellos nos aman tanto y quisieran que confiáramos más en ellos, pero que él no quería. También hablamos de cómo yo lloro por las noches en mi cama y de cómo él sube al ático a maldecir; de que Margot y yo nos hemos verdaderamente conocido sólo recientemente y que aún así no nos confesamos todos, dado que estamos todo el día juntas. Hablamos sobre todo tema posible, sobre la confianza, los sentimientos y nosotros mismos. Ay, Kitty, él fue tal como yo lo imaginaba.

Luego hablamos sobre el año 1942, y cuan diferentes éramos en aquellos tiempos; ni siquiera nos reconocemos en ese período. También acerca de cómo no nos tolerábamos el uno al otro al principio.

Pág. 223.Él pensaba que yo era una pequeña molesta y ruidosa, y yo rápidamente había

concluido que él no era nadie muy especial. No entendí en ese momento por qué no coqueteaba conmigo, peor ahora me alegra que no lo haya hecho. También mencionó el hecho de que muy a menudo solía recluirse en su cuarto. Yo le dije que mi exaltación y exuberancia y su silencio eran simplemente las dos caras de una misma moneda, y que también me gustaba estar en paz y en calma pero que no tenía nada que me perteneciera a mí sola, excepto mi diario, y que todos preferían darme la espalda, en especial el señor Dussel, y que a veces no me gustaba tener que sentarme con mis padres. Discutimos sobre la alegría que le da a él que mis padres tengan hijos y lo feliz que me pone a mí que él esté ahí. También lo confesé lo mucho que entiendo ahora su necesidad de estar solo y la relación que tiene con sus padres, y lo mucho que me gustaría poder ayudarlo cuando ellos discuten.

“¡Pero tu siempre me ayudas!” Dijo.“¿Cómo?” pregunté, profundamente sorprendida.“Siendo tan alegre como eres”.Eso fue lo más hermoso que dijo en toda la velada. Me dijo que no le molestaba

que yo fuera a su habitación como le solía molestar antes; de hecho, le gustaba. También le dije que todos los sobrenombres de mi madre y mi padre no tienen sentido, y que un beso de vez en cuando no se convertía en automática confianza hacia esa persona. También hablamos sobre hacer las cosas a nuestro modo, el diario, la soledad, la diferencia entre el interior y el exterior de una persona, mi máscara protectora, etc.

Page 126: El Diario de Ana Frank

Fue maravilloso. Él debe haber llegado a amarme como amiga, y por el momento, eso es suficiente. Estoy tan agradecida y feliz, que no puedo encontrar las palabras para explicarlo. Debo disculparme, Kitty, por que mi escritura hoy no alcanza mis estándares habituales ¡He escrito todo lo que me venía en mente!

Tengo la sensación de que Peter y yo compartimos un secreto. Cada vez que él me mira con esos ojos que tiene y con esa sonrisa, es como si un destello de luz se metiera en mi cuerpo. Espero

Pág. 224.Que las cosas se mantengan así y que pasemos muchas, muchas más horas

felices juntos.Tu agradecida y feliz Ana.

Lunes, 20 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Esta mañana Peter me preguntó si volvería a subir alguna de estas noches. Me

juró que no era una molestia y me dijo que donde hay espacio para uno, hay espacio para dos. Le dije que no podría verlo cada noche, por que mis padres no creían que fuera una buena idea, pero él creyó que no debía dejar que eso me impidiera nada. Le dije entonces que me gustaría subir algún sábado pro la noche y que me avisara cuando se podía ver la luna llena.

“Por supuesto”, dijo, “Quizás podamos ir escaleras abajo y observar la luna desde allí”. Acepté; no me asustan realmente los ladrones.

Mientras tanto, un manto de sombras ha caído sobre mi felicidad. Por un largo tiempo he tenido la sensación de que a Margot le gusta Peter. No se cuánto le gustará, peor la situación en sí no es muy agradable. Ahora cada vez que voy a ver a Peter siento que la estoy hiriendo, aunque sin quererlo. Lo gracioso es que rara vez ella deja que sus sentimientos se hagan visibles. Sé que me sentiría absolutamente celosa, pero Margot dice que no debo apenarme por ella.

“Siento que es tan horrible que seas tú la que te has convertido en la que está de más”, agregué.

“Estoy acostumbrada a ello”, respondió, con un tono amargo.No me animo a decírselo a Peter. Quizás más adelante, pero tenemos que discutir

muchos otros temas primero. Mi madre me dio un reto de advertencia anoche, el cual me merecía. No debo

llevar tan al extremo mi indiferencia y falta de respeto hacia ella. A pesar de todo, debo tratar de ser amigable ¡y guardar mis comentarios para mí misma!

Incluso Pim ya no es tan agradable como solía serlo.

Pág. 225.Él ha estado intentando no tratarme como a una niña, pero ahora es muy frío ¡Ya

veremos que resulta de todo esto! Ya me ha advertido que si no hago mi tarea de álgebra, no conseguiré ningún tutor tras la guerra. Podría simplemente esperar y ver que pasa, pero preferiría volver a comenzar, dado que tengo un nuevo libro.

Es suficiente por ahora, No hago más que clavar mi mirada en Peter, ¡y no hago otra cosa más que eso!

Tuya, Ana M. Frank.Evidencia de la bondad de Margot. Recibí esto hoy. 20 de marzo, 1944.

Page 127: El Diario de Ana Frank

Ana, ayer cuando dije que no estaba celosa de ti, no fui completamente honesta. La situación es la siguiente: no estoy celosa de ti ni de Peter. Sólo me siento apenada de no haber encontrado a alguien con quien compartir mis ideas y sentimientos, y no siento que valla a encontrarlo en el futuro. Y es por eso que deseo, desde lo profundo de mi corazón, que ambos logren depositar su confianza en el otro. Ya demasiado te estás perdiendo aquí adentro, muchos cosas que otros dan por sentado que tienen.

Por otro lado, estoy segura de que nunca hubiera llegado a tanto con Peter, por que creo que necesitaría sentirme muy cercana a una persona antes de poder compartir con ella mis pensamientos. Quisiera tener la sensación de que él me entendiera por completo, aún si yo no digiere mucho. Por esta razón debería encontrar a una persona que sea intelectualmente superior a mí, y ese no es el caso con Peter. Pero si puedo comprender tu sensación de cercanía hacia él.

Así que no hay necesidad de que te sientas culpable de tomar algo que crees que me pertenece; nada podría estar más alejado de

Pág. 226.La verdad. Peter y yo tienen mucho que ganar con su amistad.

Mi respuesta:

Queridísima Margot,Tu carta fue extremadamente amable, pero aún no me siento completamente feliz

con la situación, y no creo que jamás lo haga.Por el momento, Peter y yo no confiamos tanto el uno en el otro como tú crees. Lo

que sucede es que cuando estas parado junto a una ventana abierta a media luz dices muchas más cosas que a plena luz del día. Es también más fácil susurrar tus sentimientos que gritarlos aviva voz desde una azotea. Creo que has desarrollado un sentimiento de hermandad hacia Peter y te gustaría ayudarlo, tanto como a mí me gustaría. Quizás pueda hacerlo algún día, aunque ese no es el tipo de confianza mutua que nosotros tenemos en mente. Creo que la confianza tiene que venir de ambas partes; también creo que esa es la razón por la que padre y yo no hemos llegado a ser tan cercanos. Pero no hablemos más de ello. Si hay algo que aún quieras discutir, por favor escríbeme, por que es más fácil para mí decir lo que pienso mediante una hoja de papel que cara a cara. Sabes cuanto te admiro, y sólo espero que algo de tu bondad y de la bondad de padre se impregnen en mí, por que, en ese aspecto, ustedes dos son muy parecidos.

Tuya, Ana.

Pág. 227.Miércoles, 22 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Recibí esta carta de Margot anoche:

Querida Ana,Después de tu carta de ayer, he tenido la horrible sensación de que tu conciencia

te carcome cada vez que vas a estudiar ó a charlar con Peter; o hay razón para ello. En mi corazón, se que hay alguien que merece mi confianza ( y yo la suya), y no podría tolerar a Peter en ese rol.

Sin embargo, como tú escribiste, sí pienso en Peter como una especie de hermano…un hermano menor; hemos compartido nuestras ideas, y un sentimiento de hermandad pudiera ó no desarrollarse algún día, pero ese momento definitivamente no ha

Page 128: El Diario de Ana Frank

llegado. Así que no hay necesidad de que te sientas apenada por mí. Ahora que has encontrado el compañerismo, disfrútalo tanto como puedas.

Mientras tanto, las cosas se están poniendo más y más grandiosas aquí. Creo, Kitty, que un amor verdadero puede desarrollarse en el anexo. Todas esas bromas acerca de casarme con Peter si estuviéramos aquí adentro el tiempo suficiente no resultaron ser tan ridículas después de todo. No es que esté pesando en casarme, imagínate. Ni siquiera sé como será cuando crezca. Ó si nos amaremos lo suficiente como para casarnos.

Estoy segura ahora de que Peter también me ama; sólo que no se de qué modo. No puedo descifrar si sólo me quiere como una buena amiga, ó si él se siente atraído hacia mí como mujer ó como hermana. Cuando él dijo que yo siempre lo ayudaba cuando sus padres discutían, estaba tremendamente feliz; era un paso más hacia mi confianza en su amistad. Le pregunté

Pág. 228.Ayer que haría si hubiera una docena de Anas interrumpiéndolo todo el tiempo

para hablar con él. Su respuesta fue: “Si fueran todas como tú, no sería tan malo”. Es extremadamente hospitalario, y creo que realmente le gusta verme. Mientras tanto, ha estado trabajando muy duro para mejorar su francés, incluso ha estudiado en la cama hasta las diez y cuarto.

Ay, cuando recuerdo nuestra noche de sábado, nuestras palabras, nuestras voces, me siento satisfecha conmigo misma por primera vez; a lo que me refiero es a que diría las mismas cosas y no cambiaría nada, al contrario de cómo suelo pensar. Él es tan atractivo, ya sea sonriendo ó estando serio. Es tan dulce, y bueno, y bello. Creo que lo que lo sorprendió más de mí fue descubrir que no soy para nada superficial, ni una sabelotodo, sino que soy una soñadora, como él, ¡con la misma cantidad de problemas!

Anoche, tras lavar los platos, esperé a que me invitara a subir con él. Pero nada sucedió; me retiré. Bajó las escaleras para decirle a Dussel que era hora de escuchar la radio y se quedó un rato en el baño, pero como Dussel tardaba mucho, volvió a subir. Caminó y caminó adentro de su habitación y terminó yéndose a dormir antes de tiempo.

Durante toda la velada estuve tan cansada que constantemente iba al baño a mojarme la cara con agua fría. Leí un poco, soñé despierta por un rato, miré el reloj y esperé, esperé, y esperé todo el tiempo mientras escuchaba sus pasos. Me fui a la cama temprano, exhausta.

Esta noche tengo que tomar un baño, ¿y mañana?¡Mañana está tan lejos!Tuya, Ana M. Frank.

Mi respuesta:

Querida Margot; Creo que lo mejor es esperar y ver que pasa. No puede pasar mucho tiempo más

antes de que Peter

Pág. 229.Y yo tengamos que decidir si volvemos a tener la relación que teníamos antes ó

hacemos algo más. No se en qué resultará todo esto; No puedo ver más allá de mis narices.

Pero estoy segura de una cosa: si Peter y yo nos convertimos realmente en amigos, le diré que tú también tienes un gran cariño por él y estás preparada a ayudarlo si

Page 129: El Diario de Ana Frank

él lo necesita. Sé que noquearías que se lo dijera, estoy segura, pero no me importa; no se que piensa Peter de ti, pero se lo preguntaré en el momento oportuno. Ciertamente no es nada malo-¡por el contrario! Eres bienvenida a acompañarnos en el ático ó donde sea que estemos. No nos serás una molestia, por que nosotros tenemos un acuerdo implícito de que sólo hablamos por las noches cuando está oscuro.

¡Anímate! Estoy haciendo lo mejor que puedo, aunque no siempre es fácil. Tú momento podría llegar antes de lo que te imaginas.

Tuya, Ana.

Jueves, 23 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,Las cosas han vuelto relativamente a la normalidad. Los hombres que nos traían

los cupones han sido liberados de prisión, ¡Gracias a Dios!Miep está de vuelta desde ayer, pero hoy ha sido el turno de su esposo de caer en

cama-tiene escalofríos y fiebre, los síntomas usuales de una gripe. Bep está mejor, aunque todavía tiene, tos, y el señor Kleiman va a tener que quedarse en su casa por un buen tiempo.

Ayer un avión se estrelló cerca de aquí. Los tripulantes pudieron aterrizar en paracaídas justo a tiempo. Cayó sobre una escuela pero por fortuna no había niños adentro. Hubo un

Pág. 230.Pequeño incendio y untar de personas fueron asesinadas. Mientras los pilotos

descendían desde el aire, los alemanes los balearon. La gente de Ámsterdam que lo vio se llenó de ira ante tal acto de crueldad. Nosotras, las mujeres de la casa, también estábamos muertas de miedo. Brrr, odio el sonido de las armas disparándose.

Ahora hablemos de mí.Estaba con Peter ayer y de algún modo, honestamente no se como, terminamos

hablando de sexo. Tiempo atrás yo ya me había decidido a preguntarle algunas cosas. Él sabe de todo; cuando le conté que Margot y yo no estábamos muy bien informadas, se quedó totalmente sorprendido. Le conté mucho sobre Margot, sobre mí, sobre mi madre y mi padre, y le dije que últimamente no me animaba a preguntarles nada. Se ofreció a ampliar mi panorama y yo accedí: me describió cómo era que funcionaban los anticonceptivos y yo tímidamente le pregunté cómo los niños se daban cuenta de que se habían convertido en hombres. Dijo que tenía que pensar esa respuesta, que esta noche me la daría. Le conté lo que le pasó a Jacque, y como las niñas somos indefensas ante los chicos con malas intenciones. “Bueno, pero tu no tienes que tener miedo a mí”, dijo.

Cuando volví aquella noche, me contó como funcionaban las cosas con los chicos. Fue un poco embarazoso, pero aún así fue increíble poder discutir estas cosas con él. Ni él ni yo jamás pensamos que seríamos capaces de hablar tan abiertamente a una chica ó un chico, respectivamente, sobre temas tan íntimos. Creo que se todo ahora. Él me dijo todo lo que sabía sobre lo que él llama en alemán Präservativmitteln (preservativo).

Aquella noche Margot y yo estábamos hablando en el baño sobre Bram y Trees, dos amigos de ella.

Esta mañana me encontré con una desagradable sorpresa: después del desayuno Peter me hizo señas para que subiera. “Eso que me hiciste fue una muy mala pasada de tu parte”, dijo.

Pág. 231.

Page 130: El Diario de Ana Frank

“Escuché lo que tú y Margot decían en el baño anoche ¡Creo que tú sólo querías saber cuánto sabía Peter y reírte de ello!”

¡Me quedé helada! Hice todo lo que pude para sacarle esa ridícula idea de la cabeza; podía entender como debía de sentirse él, ¡pero simplemente no era cierto!

“Ay, no, Peter”, dije. “Nunca he sido tan mala. Te dije que jamás contaría nada de lo que tú me cuentas y jamás lo haré. Inventar una cosa así y después ser tan malvada…No, Peter, esa no es mi idea de una broma. No sería justo. No dije nada, honestamente ¿No me creerás?” Me aseguró que sí lo hacía, pero creo que tendremos que volver a tocar el tema algún día. No he hecho más que preocuparme por ello todo el día. Gracias a Dios que vino a mí de inmediato y me dijo lo que estaba pasando por su mente. Imagínate si él hubiera andado por ahí pensado que yo podía ser tan cruel ¡Él es tan dulce!

¡Ahora tendré que contarle todo!Tuya, Ana.

Viernes, 24 de marzo, 1944.Querida Kitty,Estoy yendo con frecuencia a la habitación de Peter después de la cena para

respirar el fresco aire del anochecer. Puedes llegar a conversaciones más profundas con mayor rapidez en la oscuridad que con el sol brillando sobre tu rostro. Es cómodo y acogedor sentarse junto a él en una silla mirando hacia fuera. Los Van Daan y Dussel hacen los comentarios más tontos cuando desaparezco para ir a su cuarto. “Annes zweite Heimat” (el segundo hogar de Ana), dicen, ó “¿Es apropiado que un caballero reciba niñas en su habitación por la noche con las luces apagadas?” Peter sabe perfectamente como actuar ante estos supuestos comentarios sabios.

Pág. 232.Mi madre, accidentalmente, se muere de curiosidad y simplemente muere por

preguntar de qué hablamos, sólo que ella secretamente tiene miedo de que yo me niegue a contarle. Peter dice que los adultos están simplemente celosos y que no deberíamos tomarnos sus molestos comentarios a pecho.

A veces él baja a buscarme, pero eso también es raro, por que a pesar de todas las precauciones que toma, su rostro se pone colorado brillante y difícilmente logra que las palabras la salgan de su boca. Me alegra no sonrojarme; debe ser muy avergonzante.

Además, me molesta que Margot tenga que sentarse abajo sola, mientras que yo estoy arriba disfrutando de la compañía de Peter ¿Pero qué puedo hacer al respecto? No me molestaría que ella viniera, pero sería la excluida al sentarse allí como la tercera de un par.

He tenido que escollares innumerables comentarios sobre nuestra repentina amistad. No puedo decirte la cantidad de veces que la conversación en las comidas fue acerca de un posible casamiento en el anexo, si la guerra durara otros cinco años ¿Acaso nosotros nos damos por enterados de toda esta charlatanería de nuestros padres? Difícilmente, ya que todo es tan ilógico ¿Se han olvidado mis padres de que alguna vez fueron jóvenes? Aparentemente sí. De todos modos, se ríen de nosotros cuando estamos serios, y ellos se ponen serios cuando nosotros bromeamos.

No se que pasará de ahora en más, ó si nos quedaremos sin temas de que hablar. Pero si todo sigue así, eventualmente podremos estar juntos sin hablar. Si tan sólo sus padres dejaran de actuar de ese modo tan extraño. Probablemente sea por que no les guste verme tan a menudo; Peter y yo ciertamente no les comentamos sobre lo que hablamos. Imagínate si supieran que discutimos temas tan íntimos.

Page 131: El Diario de Ana Frank

Me gustaría preguntarle a Peter si sabe como lucen las chicas allí abajo. No creo que los niños sean tan complicados como las niñas. Tú puedes ver fácilmente como lucen los niños en fotografías

Pág. 233.Ó retratos de hombres desnudos, pero con las mujeres es diferente. En las

mujeres, los genitales, ó como se los llame, están escondidos entre las piernas. Peter quizás nunca haya visto a una chica tan de cerca. Para serte honesta, tampoco yo lo he hecho. Los chicos son mucho más fáciles ¿De qué modo podría yo explicarle como son las partes íntimas de una chica? Puedo darme cuenta pro lo que él me ha dicho que no sabe exactamente como se une todo. Él estaba hablando de la “Muttermund” (vientre materno), pero está adentro, donde no puedes verlo. Todo está bastante organizado en el cuerpo de las mujeres. Hasta que tuve once ó doce, no me di cuenta de que había un segundo par de labios en el interior, ya que no pueden verse. Lo que es más gracioso es que yo creía que la orina venía del clítoris. Le pregunté a mi madre una vez que era ese pequeño bultito, y me dijo que no sabía ¡Realmente puede hacerse la tonta cuando quiere!

Pero volviendo al tema ¿Cómo es posible explicar como luce todo allí abajo sin un modelo? ¿Debo intentarlo de todos modos? OK,¡aquí voy!

Cuando estás parada, todo lo que ves desde adelante es cabello. Entre tus piernas hay dos cosas suaves y acolchonadas que también están recubiertas con cabello, y las cuales se unen cuando estás parada, por lo que no puedes ver lo que hay dentro. Se separan cuando te sientas, y son muy rojas y carnosas por dentro. En la parte superior, entre los labios exteriores, hay una capa de piel que, pensándolo mejor, luce como una especie de ampolla. Ese es el clítoris. Luego vienen los labios internos, que también se unen formando una línea. Cuando se abren, puedes ver un pequeño montículo carnoso, no más grande que la punta de mi pulgar. La parte superior tiene untar de pequeños agujeritos en ella, desde los cuales sale la orina. La parte superior luce como si fuera solamente piel, y aún así

Pág. 234.Allí es donde está la vagina. Difícilmente puedas encontrarla, por que las capas de

piel esconden su abertura. El orificio es tan pequeño que no puedo imaginar cómo un hombre puede entrar allí adentro, y mucho menos como un bebé puede salir de allí. Ya es bastante difícil tratar de meter tu dedo índice adentro. Eso es todo lo que es, ¡y aún así juega un rol tan importante!

Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 25 de marzo, 1944.Queridísima Kitty, Nunca te das cuenta de cuanto has cambiado hasta que efectivamente sucede.

He cambiado drásticamente, todo en mí es diferente: mis opiniones, ideas, perspectivas críticas. Por dentro, por fuera, nada es lo mismo. Y, debo con toda tranquilidad agregar, ya que es verdad, he cambiado para mejor. Una vez te dije que tras años de ser adorada, era difícil para mí acostumbrarme ala dura realidad de los adultos. Pero mi padre y mi madre son en gran manera culpables de que yo haya tenido que tolerar tanto. Cuando estaba en casa, ellos querían que disfrutara la vida, lo cual está bien, pero estando aquí ellos no deberían haberme forzado a estar siempre de acuerdo con ellos mostrándome sólo su lado de las discusiones y chusmeríos. Pasó mucho tiempo hasta que descubrí que no siempre tenían la razón. Ahora se que muchos de los errores han sido cometidos aquí, tanto por niños como por adultos. El peor error de mi madre y mi padre al lidiar con los

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Van Daan es que nunca son cálidos ó amigables (De hecho, la amistad habría tenido que ser fingida). Por sobre todas las cosas, quiero mantener la paz, y que no haya discusiones ni charlatanería. Esto no es difícil con mi padre y Margot, pero sí con mi madre, por lo cual me alegra que de vez en cuando me de un golpecito en los nudillos. Puedes tener al señor Van Daan de tu lado cuando le das la razón, lo escuchas atentamente, sin decir mucho y por sobre todas las cosas…respondiendo a sus burlas y anticuadas bromas

Pág. 235.Con una broma propia. A la señora Van Daan la puedes tener de tu lado cuando

hablas abiertamente con ella y admites cuando te equivocas. Ella también admite honestamente sus errores, los cuales son muchos. Se perfectamente bien que ella ya no tiene una tan mala imagen de mí como solía ser al principio. Y eso es simplemente por que soy honesta y le digo a la gente en la cara lo que pienso, aún cuando no es nada halagador. Quiero ser honesta; creo que eso te lleva más lejos y te hace sentir mejor contigo misma.

Ayer la señora Van Daan estaba hablando sobre el arroz que le dimos al señor Kleiman. “Todo lo que hacemos es dar, dar, dar. Pero en cierto momento creo que ya ha sido suficiente. Si tan sólo se tomara la molestia, él se podría proveer su propio arroz ¿Por qué debemos donar todas nuestras provisiones? Nosotros también estamos necesitados”.

“No, señora Van Daan”, respondí. “No estoy de acuerdo. El señor Kleiman podría procurar su arroz, pero no quiero tener que preocuparse por ello. No debemos criticar a las personas que nos están ayudando. Deberíamos darles todo lo que necesiten si es que podemos dividirlo. Un plato menos de arroz a la semana no va a hacer la diferencia; podemos comer frijoles”.

La señora Van Daan no veía las cosas del mismo modo, pero agregó que, aunque no estaba de acuerdo, estaba dispuesta a aceptarlo, y eso es algo completamente distinto.

Bueno, he dicho suficiente. A veces se que posición tomar y a veces tengo dudas, ¡Pero eventualmente llegaré a donde quiero!¡Se que lo haré! Especialmente ahora que tengo ayuda, ya que Peter me ayuda a soportar los malos momentos.

Honestamente no se cuanto me quiere y si alguna vez llegaremos a darnos un beso; igualmente, ¡no quiero forzar las cosas! Le dije a mi padre que a menudo voy a ver a Peter y quería saber si lo aprobaba, ¡y por supuesto dijo que sí!

Pág. 236.Es mucho más fácil decirle a Peter cosas que antes solía guardarlas para mí; le

conté que quiero escribir más adelante, y que si no puedo ser una escritora, quiero hacerlo como algo adicional a mi trabajo.

No tengo mucho dinero ó posesiones valiosas, no soy hermosa, inteligente ó sabia, pero soy feliz, ¡y pretendo seguir siéndolo! Nací feliz, amo a la gente, soy confiada por naturaleza, y quiero que todos los demás sean felices también.

Tu amiga devota, Ana M. Frank.Un día vacío, aunque claro y brillante,Es tan vacío como cualquier otra noche.

(Escribí esto unas semanas atrás y ya no tiene validez, pero lo incluí por que mis poemas son muy escasos y poco frecuentes)

Lunes, 27 de marzo, 1944.

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Queridísima Kitty, Al menos un largo capítulo de nuestro tiempo escondidos debería ser sobre

política, pero he estado evitando el tema, dado que me interesa muy poco. Hoy, sin embargo, dedicaré una carta entera a la política.

Por supuesto, hay opiniones muy diversas en este tema, y no es sorprendente escuchar que se discuta a menudo en tiempos de guerra, pero… ¡discutir mucho sobre política es simplemente estúpido! Déjenlos reír, insultar, hacer apuestas, quejarse, y hacer lo que les venga en gana siempre y cuando sea con respeto. Pero no los dejen discutir, ya que sólo empeora las cosas. La gente que viene de afuera nos trae un montón de noticias que luego terminan no siendo ciertas; sin embargo, hasta ahora, nuestra radio no nos ha mentido. Jan, Miep, el señor Kleiman, Bep y el señor Kugler varían constantemente en sus opiniones políticas, aunque Jan es la que menos lo hace.

Pág. 237.Aquí en el anexo, las opiniones políticas nunca varían. Los interminables debates

sobre la invasión, los ataques aéreos, los discursos, etc., etc., son seguidos de incontables exclamaciones como “¡Imposible!”, “Um Gottes Willen” (Ay, por Dios santo), “Si recién están empezando, ¡¿Cuánto va a durar!?”, “¡Todo está saliendo espléndido, gut (bien), genial!”

Optimistas y pesimistas-sin mencionar a los realistas-exponen sus opiniones con inagotable energía, y como es con todo lo demás, creen tener el monopolio de la verdad. Está molestando a una dama en particular que su marido tenga tal fe extrema en los británicos, ¡y un determinado esposo está atacando a su mujer por las bromas y comentarios irrespetuosos que hace de su amada nación!

Y así continúa desde temprano en la mañana hasta tarde en la noche; lo gracioso es que nunca se cansan de ello. He descubierto un truco, y el efecto es sorprendente, tal como pinchar a alguien con una chinche y verlo saltar. Así es como funciona: Comienzo a hablar de política. Todo lo que hace falta es una simple pregunta, palabra ú oración, y antes de que te des cuenta, ¡toda la familia está involucrada!

Como si las noticias del canal alemán “Wehrmacht News” y las de la BBC inglesa no fueran suficientes, han agregado ahora anuncios aéreos especiales. En una palabra, es espléndido. Pero el otro lado de la moneda es que la fuerza aérea inglesa está trabajando ahora todo el día y toda la noche. Igual que la maquinaria de propaganda alemana, ¡que inventa historias las 24 horas del día!

Así que la radio es encendida todos los días a las ocho (si no más temprano) y es escuchada a cada hora hasta las nueve, diez, ó incluso hasta las once de la noche. Esta es la evidencia definitiva de que los adultos tienen una paciencia infinita, pero también de que su cerebro

Pág. 238.Se ha convertido en una simple masa dura (no el de todos, no quisiera insultar a

nadie en particular). Una emisora, dos como mucho, deberían ser suficiente para todo un día. Pero no…esos viejos mañosos…no importa, ¡ya he dicho todo lo que quería! “Música mientras trabajas”, la emisora danesa desde Inglaterra, Frank Phillips ó Queen Wilhelmina, todos en algún momento del día encuentran a un oyente dispuesto a prestarles atención. Si los adultos no están comiendo ó durmiendo, están reunidos alrededor de la radio hablando de comida, de dormir y de política ¡Uff! Esto se está volviendo realmente aburrido, ¡pero esto es lo único que puedo hacer para no volverme una vieja aburrida como ellos! Aunque estando rodeada de tantos de ellos, ¡quizás no sería una mala idea!

Page 134: El Diario de Ana Frank

Aquí tengo un claro ejemplo, un discurso de nuestro adorado Winston Churchill. Nueve de la noche, domingo por la noche. La tetera está sobre la mesa, y los

invitados van entrando a la habitación. Dussel se sienta a la izquierda de la radio, el señor Van Daan frente a ella y Peter a su lado. Mi madre está junto al señor Van Daan y la señora Van Daan detrás de ellos. Margot y yo estamos sentadas en la última fila y Pim en la mesa. Me di cuenta de que esta no es una muy buena descripción de cómo estábamos sentados pero no importa. Los hombres fuman, Peter cierra los ojos para concentrarse en lo que escucha, mi madre está vestida con su largo y negro negligé, la señora Van Daan tiembla por le ruido de los aviones, los cuales no se dan por aludidos con el discurso y vuelan alegremente hacia Essen; mi padre esta bebiendo su té ruidosamente, y Margot y yo estamos unidas en nuestro lazo de hermandad por el adormecido Mouschi, quien ha tomado posesión de nuestras rodillas. Margot tiene puestos sus ruleros y yo mi camisón que ya es demasiado pequeño, corto y apretado para mí. Todo parece tan íntimo, acogedor y pacífico, y por primera vez realmente lo es. Aún sí, yo espera el fin del discurso son temor. Están impacientes, ¡esperando a la primera provocación para empezar a discutir!

Pág. 239.Como un gato que acecha a su presa desde un hueco, se incitan el uno al otro a la

discusión y el desacuerdo.Tuya, Ana.

Martes, 28 de marzo, 1944.Mi queridísima Kitty,A pesar de lo mucho que me gustaría escribir sobre política, tengo muchas otras

noticias para reportarte hoy. Primero, mi madre me ha literalmente prohibido que suba al cuarto de Peter, ya que, según ella, la señora Van Daan está celosa. En segundo lugar, Peter ha invitado a Margot a que nos acompañe cuando estamos arriba. Si verdaderamente así lo desea ó si lo hace por pura educación, realmente no lo se. En tercer lugar, le pregunté a mi padre si debía tener en cuenta los celos de la señora Van Daan y él dijo que no.

¿Qué debo hacer ahora? Mi madre está enojada, no quiere que suba, quiere que vuelva a hacer mi tarea en mi habitación con el señor Dussel. Quizás sea ella la que está celosa. Mi padre no nos envidia por esas horas que pasamos juntos y cree que es lindo que nos llevemos tan bien. A Margot también le agrada Peter, pero cree que tres personas no pueden hablar de las mismas cosas que dos.

Además, mi madre cree que Peter está enamorado de mí. Para serte honesta, desearía que así lo fuera. Así estaríamos en la misma situación, y sería mucho más fácil llegar a conocernos. También asegura que él siempre esta mirándome. Bueno, supongo que ocasionalmente nos miramos el uno al otro. Pero no puedo hacer nada si el continúa admirando mis hoyuelos, ¿no?

Estoy en una posición muy complicada. Mi madre está en contra mía y yo en contra de ella. Mi padre pretende no darse por enterado de la tensión entre mi madre y yo. Mi madre está triste, por que todavía me quiere, pero yo no me siento tan mal, por que ella ya no significa nada para mí.

Y en cuento a Peter…no quiero rendirme. Él es tan dulce y lo admiro tanto. Él y yo podríamos

Pág. 240.Tener una hermosa relación, así que ¿por qué los adultos tienen que meter sus

narices en nuestros asuntos nuevamente? Afortunadamente, estoy acostumbrada a

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esconder mis sentimientos, así que logro no demostrar cuan enloquecida estoy por él ¿Me dirá algo alguna vez? ¿Podré alguna vez sentir su mejilla contra la mía del mismo modo en que sentí la de Petel en mi sueño? Ay, Peter y Petel, ¡son uno y el mismo! Ellos no nos entienden; nunca podrían entender que nosotros nos contentamos tan sólo con sentar uno junto al otro sin decir una palabra ¡No tienen idea de que es lo que nos une! Ay, ¿Cuándo superaremos todas estas dificultades? Y aún así es bueno que tengamos que traspasarlas, así el final será mucho más maravilloso. Cuando recuesta su cabeza sobre sus brazos y cierra los ojos, es aún un niño; cuando juega con Mouschi ó habla de ella, es cariñoso; cuando carga las patatas ú otras cargas pesadas, es fuerte; cuando va a ver los bombardeos ó camina por la casa oscura en busca de ladrones, es valiente; y cuando se comporta como un payaso y hace monerías, es inevitablemente simpático. Es mucho más agradable cuando él me explica algo a mí que cuando yo le tengo que enseñar algo ¡Desearía que fuera superior a mí en casi todo aspecto!

¿Nos deberíamos preocupar por nuestras madres? Ay, si él tan sólo hubiera dicho algo.

Mi padre siempre me dice que soy una consentido peor no lo soy, ¡soy simplemente vanidosa! No ha habido mucha gente que me digiera que era linda, excepto por un chico en la escuela que me dijo que era muy linda cuando sonreía. Ayer Peter me hizo un verdadero elogio, y sólo por diversión te contaré sobre nuestra conversación.

Peter usualmente dice, “¡Sonríe!”Pensé que era algo extraño, así que ayer le pregunté, “¿Por qué siempre quieres que sonría?”

“Por que se te marcan hoyuelos en tu rostro ¿Cómo lo haces?”

Pág. 241.“Nací con ellos. También tengo uno en el mentón. Es la única marca de belleza

que poseo”.“¡No, eso no es verdad!”.“Sí lo es. Sé que no soy hermosa ¡Nunca lo he sido y nunca lo seré!”“No estoy de acuerdo. Creo que eres linda”.“No lo soy”“Te digo que sí lo eres, ¡y tendrás que aceptarlo!”Así que por supuesto después de eso dije lo mismo de él.

Tuta, Ana M. Frank.

Miércoles, 29 de marzo, 1944.Queridísima Kitty,El señor Bolkestein, ministro de gabinete, hablando en la emisora danesa desde

Londres, dijo que tras la guerra se realizaría una colección de diarios y cartas que hablaran de la guerra. Por supuesto, todos se abalanzaron sobre mi diario. Imagínate que interesante sería si publicara una novela sobre el anexo secreto. Sólo por el título la gente creería que es una historia de detectives.

Realmente, diez años después de la guerra la gente encontraría muy entretenido leer como vivíamos, qué comíamos y de qué hablábamos un grupo de judíos en un escondite. Aunque te cuento mucho sobre nuestras vidas, aún no sabes muy poco sobre nosotros: Cuan asustadas están las mujeres durante los ataques aéreos; el domingo pasado, por ejemplo, cuando 350 aviones británicos desparramaron 550 toneladas de bombas en Ijmuiden, por lo que las casas temblaron como láminas de hierba al viento. Ó cómo muchas epidemias se están esparciendo aquí.

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Tú no sabes nada de estos asuntos, y me tomaría todo el día describir todo hasta el último detalle. La gente tiene que esperar en línea para comprar vegetales y todo tipo de productos; los doctores no pueden visitar a sus pacientes, ya que sus autos

Pág. 242.Y bicicletas son robadas nomás ellos las pierden de vista; los asaltos se han vuelto

tan comunes que te preguntas a ti mismo que ha vuelto a los daneses tan ágiles con sus manos. Los niños pequeños, de ocho y once años, rompen as ventanas de las casas y roban lo que sea que haya al alcance de sus manos. La gente no se anima a dejar su casa ni siquiera por cinco minutos, dado que es muy probable que vuelvan y descubran que sus pertenencias se han ido. Cada día los periódicos están llenos de notas con recompensas para aquel que devuelva máquinas de escribir, alfombras persas, relojes eléctricos, telas, etc. Los relojes eléctricos son desmantelados en las esquinas, los teléfonos públicos son destrozados hasta el último cable.

La moral de los daneses no ha de ser muy buena. Todos están hambrientos; excepto por el café, la ración semanal no dura ni dos días. La invasión tarda en llegar, los hombres son enviados a Alemania, los niños están enfermos ó desnutridos, todos usan ropas maltrechas y zapatos gastados.

Una suela cuesta 7.50 guilders en el mercado negro. Además, pocos zapateros hacen arreglos, y si lo hacen, debes esperar cuatro meses por tus zapatos, los cuales pueden también desaparecer en ese tiempo.

Una buena cosa ha resultado de todo esto: mientras la comida empeora y los decretos se tornan más severos, los actos de sabotaje en contra de las autoridades están aumentando. El consejo de racionamiento, la policía, los oficiales-todos están ayudando a los ciudadanos ó denunciándolos y enviándolos a prisión. Afortunadamente, sólo un pequeño porcentaje de daneses están del lado equivocado.

Tuya, Ana.

Pág. 243.Viernes, 31 de marzo, 1944.Queridísima Kitty, Imagínate, aún está bastante frío, y sin embargo hay gente que ha estado sin

carbón por casi un mes. Suena terrible, ¿no? Hay un optimismo general acerca del frente ruso, ¡por que ellos tienen grandes armas! No suelo escribir sobre la situación política, pero debo decirte don de están los rusos ahora. Han alcanzado la frontera polaca y el Río Prut en Rumania. Están cerca de Odessa, y han rodeado Ternopol. Cada noche esperamos un comunicado extra de Stalin.

Están disparando tantas armas a modo de saludo respetuoso en Moscú, que la ciudad debe estar temblando todo el día. ¡Pero no tengo idea si es que lo hacen para pretender que la pelea se está llevando en terreno cercano ó para expresar su alegría!

Hungría fue ocupada por tropas alemanas. Aún hay un millón de judíos viviendo allí; ellos también están condenados.

Nada especial está sucediendo aquí. Hoy es el cumpleaños del señor Van Daan. Recibió dos paquetes de tabaco, una porción de café, la cual su esposa logró guardar, ponche de limón del señor Kugler, sardinas de Miep, agua de colonia de nuestra parte, lilas, tulipanes y último peor no menos importante, una torta con relleno de frambuesas, un poco pegajosa por la baja calidad de la harina y la falta de manteca, pero deliciosa de todos modos.

Toda esa charlatanería sobre Peter y yo se ha apagado un poco. Él vendrá a buscarme esta noche. Es muy lindo de su parte, no crees, ¡ya que odia hacerlo! Somos

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muy buenos amigos. Pasamos mucho tiempo juntos y hablamos de todo tema posible. Es tan agradable no tener que recatarme cuando un tema delicado se acerca, como hacía con otros chicos. Por ejemplo, estábamos hablando sobre sangre y por alguna razón la conversación llegó al tema de la menstruación, etc. Él cree que nosotras las mujeres tenemos bastante coraje para

Pág. 244.Tolerar la pérdida de sangre, y que yo también lo soy ¿Me pregunto por qué? Mi vida aquí ha mejorado, muchísimo. Dios no me ha abandonad, y nunca lo hará.Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 1 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty, Y aún así todo es tan difícil. ¿Tú sabes a lo que me refiero, no? Deseo tanto que

me bese, pero ese beso se están tomando su dulce tiempo en llegar ¿Él aún piensa en mí como una amiga? ¿No significo más que eso?

Ambas sabemos que soy fuerte, que puedo llevar la mayor parte de las cargas yo sola. Nunca he estado acostumbrada a compartir mis preocupaciones con nadie, y nunca me he resguardado en una madre, pero me encantaría poder descansar mi cabeza sobre su hombro y quedarme allí si decir nada.

No puedo, simplemente no puedo olvidar ese sueño sobre la mejilla de Peter, ¡cuando todo era tan bueno! ¿Deseará él lo mismo? ¿Es muy tímido para decirme que me ama? ¿Por qué me quiere tanto cerca de él? Ay, ¿por qué no dice nada?

Tengo que detenerme, estar en calma. Trataré de ser fuerte nuevamente, y si tengo paciencia, lo demás fluirá. Pero-y esta es la peor parte- parece que lo estuviera persiguiendo. Siempre soy la que tiene que subir, él nunca viene a mí. Pero es debido a las habitaciones, y comprende por qué me quejo. Ay, estoy segura de que él entiende más de lo que creo.

Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 245.Lunes, 3 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty,A diferencia e mi práctica usual, voy a escribirte una detallada descripción de la

situación alimenticia, dado que se ha convertido en un problema de gran dificultad e importancia, no sólo aquí en el anexo, sino también en toda Holanda, toda Europa y incluso más lejos.

En los veintiún meses que hemos vivido aquí, hemos atravesado varios “círculos alimenticios” – entenderás lo que eso significa en un instante. Un “círculo alimenticio” es un período en le cual tenemos un solo tipo de comida ó e vegetal para comer. Por un largo período no comimos nada más que endivia. Endivia con arena, sin arena, con puré de patatas, endivia y puré a la cacerola. Luego fue la espinaca, seguida por los rábanos, los nabos, los pepinos, los tomates, el choucroute, etc., etc.

No es muy divertido cuando, por ejemplo, tienes que comer choucrout en cada almuerzo y cena, pero cuando tienes hambre, haces cualquier cosa. Ahora, sin embargo, estamos atravesando el período más delicioso hasta ahora, por que no hay ningún tipo de vegetales.

Nuestro menú semanal para los almuerzos consiste en frijoles negros, sopa de endivia, buñuelos de patata y, por gracia divina, nabos en mal estado y zanahorias podridas, y luego de vuelta a los frijoles marrones. Para hacer sopa usamos frijoles, patatas, paquetes de sopa vegetal, de sopa de pollo y de sopa de frijoles. Hay frijoles en

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todo, incluyendo el pan. En la cena siempre comemos patatas con un intento de salsa y-gracias a dios que aún lo tenemos- ensalada de remolacha. Debo contarte sobre los buñuelos de masa. Los hacemos con harina del estado, agua y levadura. Son tan pegajosos y

Pág. 246.Duros que se siente como si tuviera piedras en tu estómago, ¡pero que más da!Lo mejor es la rebanada semanal de hígado, y el jamón sobre el pan sin manteca.

Peor aún estamos vivos, ¡y la mayoría de las veces la comida aún sabe bien!Tuya, Ana M. Frank.

Miércoles, 5 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty, Por un largo tiempo me preguntaba por qué perdía el tiempo haciendo las tareas

escolares. El final de la guerra aún parece muy lejano, irreal, como un cuento de hadas. Si la guerra no termina para septiembre, no volveré ala escuela, ya que no quiero estar dos años retrasada.

Peter completa mis días, nada más que Peter, los sueños y pensamientos hasta el sábado a la noche, cuando me sentí tan mísera; ay, fue horrible. Contuve mis lágrimas cuando estuve con Peter, me reí jocosamente con los Van Daan mientras tomábamos ponche de limón y parecía alegre y festiva, pero sabía que apenas estuviera sola iba a llorar desconsoladamente. Me arrodillé en el piso sobre mi camisón y comencé a decir mis plegarias, muy fervientemente. Luego apoyé mis rodillas contra mi pecho, recosté mi cabeza sobre mis brazos y comencé a llorar, toda acurrucada sobre el piso frío. Un fuerte sollozo me hizo volver en sí, por lo que sequé mis lágrimas, ya que no quería que nadie en la habitación de al lado me oyera. Después intenté reponerme, diciendo una y otra vez, “Debo…debo…debo…” Acalambrada de estar sentada en esa posición tan poco usual, volví a reclinarme sobre el costado de la cama, tratando de sentirme mejor hasta las diez y media, cuando volvía subirme a la cama ¡Había terminado!

Y ahora finalmente ha terminado. Me di cuenta de que debo hacer mis tareas de la escuela para no ser una ignorante, para mantenerme al día, para convertirme en periodista, ¡por que eso es lo que quiero! Se

Pág. 247Que puedo escribir. Algunas de mis historias son buenas, mis descripciones del

anexo secreto son cómicas, la mayor parte de mi diario es vívida y candente…pero aún no se si realmente tengo talento.

“El sueño de Eva” es mi cuento de hadas preferido, y lo más extraño es que no tengo la más mínima idea de donde viene. Algunas partes de “La vida de Cady2 son buenas, pero en general no es nada especial. Soy mi mejor y más dura crítica. Se que es bueno y que no lo es. A menos que escribas, no sabes lo maravilloso que es; siempre solía lamentarme por que no podía dibujar, pero ahora me fascina saber que al menos puedo escribir. Y si no tengo el talento para escribir libros ó artículos en periódicos, siempre puedo escribir para mí misma. Pero quiero lograr más que eso. No puedo imaginarme tener que vivir como mi madre, la señora Van Daan y todas aquellas mujeres que cumplen con su trabajo y luego son olvidadas ¡Tengo que tener algo más que un marido y un hijo a los cuales dedicarme! No quiero haber vivido en vano como la mayoría de las personas. Quiero ser útil ó traer alegría las personas, incluso a aquellas que no conozco ¡Quiero seguir viva aún después de mi muerte! Y por eso es que estoy tan agradecida a Dios por haberme dado este talento, el cual puedo usar para desarrollarme ¡y expresar todo lo que hay dentro de mí!

Page 139: El Diario de Ana Frank

Cuando escribo puedo despojarme de todas mis preocupaciones. Mi dolor desaparece, ¡mi espíritu vuelve a la vida! Pero, y esta es una gran pregunta, ¿Seré alguna vez capaz de escribir algo maravilloso? ¿Me convertiré alguna vez en una periodista ó una escritora?

Espero, ay, lo ansío tanto, por que escribir me permite grabar todo, todos mis pensamientos, ideales y fantasías.

No me he dedicado a perfeccionar “La vida de Cady” en un largo tiempo. En mi cabeza, ya he definido que pasará a continuación, pero la historia no parece estar resultando muy buena. Quizás nunca lo finalice, y termine tirándolo al cesto de la basura

Pág. 248.

Ó a la estufa. Es una horrible idea, pero luego me digo a mi misma, “Teniendo catorce años y tan poco experiencia, no puedes escribir sobre filosofía”.

Así que de vuelta al ruedo, con espíritu renovado. Todo se va a solucionar, ¡por que estoy determinada a escribir!

Tuya, Ana M. Frank.

Jueves, 6 de abril, 1944.Queridísima Kitty,Me preguntaste cuales eran mis hobbies e intereses y me gustaría responderte,

pero mejor te advierto, tengo un montón, así que no te sorprendas.Primero que todo: Escribir, peor no pienso en ello como un hobby. Número dos: cartas genealógicas. Estoy buscando en cada diario, libro y

documento que puedo encontrar a las familias de las familias reales de Francia, Alemania, España, Inglaterra, Austria, Rusia, Noruega y Dinamarca. He hecho grandes progresos con muchas de ellas, ya que por un largo tiempo he estado tomando notas mientras que leía biografías ó libros de historia. Incluso copié muchos pasajes de la historia.

Así que mi tercer hobby es la historia, y mi padre ya me ha comprado numerosos libros. No puedo esperar por el día en que pueda ir a una biblioteca pública y rastrear toda la información que necesito.

En cuarto lugar están la mitología griega y romana. Tengo varios libros sobre este tema también. Puedo nombrar alas nueve musas y a los siete amores de Zeus. Conozco a las esposas de Hércules, etc., etc., etc.

Mis otros hobbies son las estrellas de cine y las fotos familiares. Me enloquecen la lectura y los libros. Adoro la historia del arte, especialmente cuando concierne a escritores, poetas y pintores; los músicos vienen en último lugar. Odio

Pág. 249. Álgebra, geometría y aritmética. Disfruto todas mis otras materias de la escuela,

¡pero historia es mi favorita!Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 11 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty,L a cabeza me da vueltas; realmente no se pro donde comenzar. El jueves (último

día que te escribí) todo estaba como de costumbre. El viernes a la tarde (Un gran viernes) jugamos al Monopolio; el sábado a la tarde también. Los días pasaron muy rápido. Alrededor de las dos del sábado, un gran bombardeo comenzó – según los hombres de la casa, eran armas de fuego. En cuanto a lo demás, todo estaba tranquilo.

El domingo a la tarde Peter vino a verme a las cuatro y media, por que lo había invitado. A las cinco y cuarto fuimos al ático, donde nos quedamos hasta las seis. Hubo

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un maravilloso concierto de Mozart en la radio hasta las siete y cuarto; en especial disfruté el Kleine Nachtmusik. Difícilmente puedo escucharla en la cocina, ya que la hermosa música me emociona hasta en lo más profundo de mi alma. El domingo pro la noche Peter no pudo tomar su baño, por que la bañadera estaba en la cocina de la oficina, llena con ropa para lavar. Los dos fuimos al ático juntos, y para poder sentarnos cómodamente, tomé el único almohadón que pude encontrar en mi habitación. Nos sentamos sobre una caja. Dado que tanto la caja como el almohadón eran muy angostos, estábamos sentados muy cerca el uno del otro, apoyados contra otras dos cajas; Mouschi nos hacía compañía, así que nos faltaba el chaperón. De repente, a las nueve menos cuarto, el señor Van Daan nos preguntó con un chiflido si teníamos el almohadón del señor Dussel. Dimos un salto y bajamos las escaleras con el almohadón, el gato y el señor Van Daan. Este almohadón fue la fuente de mucho misterio. Dussel estaba enojado por que yo había tomado el que él usa como almohada, y tenía miedo de que estuviera con pulgas; tuvo a toda la casa convulsionada

Pág. 250.Por su almohadón. En venganza, Peter y yo metimos dos cepillos en su cama,

pero tuvimos que volver a sacarlos cuando Dussel inesperadamente decidió ir a sentarse en su cuarto. Nos reímos bastante por esta pequeña intromisión.

Pero nuestra diversión duró poco. A las nueve y media Peter golpeó delicadamente la puerta y le pidió a mi padre que lo ayudara con una compleja oración en inglés.

“Eso me resulta extraño”, le dije a Margot. “Es un pretexto. Te puedes dar cuenta por el modo en que los hombres están hablando, ¡que ha habido un intento de robo!” Estaba en lo cierto. Alguien estaba entrando en le depósito en ese mismo momento. Mi padre, el señor Van Daan y Peter bajaron las escaleras de inmediato. Margot, la señora Van Daan, mi madre y yo esperamos. Cuatro mujeres asustadas necesitan hablar, así que eso es lo que hicimos hasta que escuchamos un ¡Bang! allá abajo. Luego todo quedó en silencio. El reloj dio las diez menos cuarto. El color había desaparecido de nuestros rostros, pero permanecimos en calma, aunque estábamos asustadas ¿Dónde estaban los hombres? ¿Qué fue ese Bang? ¿Estaban peleando con los ladrones? Teníamos mucho miedo para pensar; todo lo que podíamos hacer era esperar.

Diez de la noche, pasos en las escaleras. Mi padre, pálido y nervioso, entró, seguido por el señor Van Daan. “¡Apaguen las luces, suban en puntas de pie, la policía vendrá!”

No había tiempo para estar asustados. Las luces fueron apagadas, yo tomé un abrigo, y nos sentamos escaleras arriba.

“¿Qué pasó? ¡Cuéntanos rápido!”No había nadie que nos pudiera contar; los hombres habían vuelto a bajar.

Ninguno de los cuatro regresó hasta diez minutos después de las diez. Dos de ellos se quedaron observando por la ventana abierta de Peter. La puerta de planta baja estaba cerrada, el estante de libros contra la pared. Cubrimos nuestra lámpara de noche con un sweater, y luego nos contaron que sucedió:

Peter estaba en la planta baja cuando escuchó dos disparos.

Pág. 251.Bajó las escaleras y vio que un gran panel del lado izquierdo de la puerta del

depósito no estaba. Subió apresurado, alertó a los “Guardianes del hogar”, y los cuatro se apresuraron escaleras abajo. Cuando entraron el depósito, los ladrones estaban haciendo de las suyas. Sin pensar, el señor Van Daan gritó, “¡Policía!”; los ladrones huyeron. El panel volvió a ser puesto sobre la puerta para que nadie notara el hueco, pero luego con

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una mínima patada de afuera, el panel cayó al suelo. Los hombres estaban sorprendidos por la audacia de los ladrones. Tanto el señor Van Daan como Peter sintieron que una furia asesina se venía sobre ellos. El señor Van Daan dio un hachazo a la puerta y todo volvió a estar en calma. Una vez más el panel fue sacado de su lugar, y una vez más fue evitado. Desde afuera, un hombre y una mujer alumbraron con una brillosa linterna el interior del lugar a través de un hueco, dejando todo el depósito iluminado. “Pero que….”, murmuró uno de los hombres, pero ahora sus roles se habían invertido. En vez de ser policías, ahora eran ladrones. Los cuatro se apresuraron a subir. Dussel y el señor Van Daan tomaron los libros de Dussel a las apuradas, Peter abrió las puertas y ventanas de la cocina y de la oficina privada, tiró el teléfono al piso, y los cuatro finalmente terminaron detrás del estante de libros.

Fin de la parte unoHabía muchas posibilidades de que el hombre y la mujer con la linterna hubieran alertado a la policía. Era domingo a la noche, domingo de Pascua. El lunes de Pascua la oficina iba a estar cerrada, lo que significaba que no podríamos movilizarnos mucho hasta el martes a la mañana. Imagínate, ¡tener que estar sentada con tal pánico durante un día y dos noches! No pensamos en nada, simplemente nos quedamos sentados en plena oscuridad – por temor, la señora Van Daan había apagado la lámpara. Susurrábamos, y cada vez que escuchábamos un sonido, alguien decía, “Shhh, shh”

Pág. 252.Dieron las diez y media, luego las once. Ningún sonido. Mi padre y el señor Van

Daan se turnaban para subir a vernos. Luego, a las once y cuarto, hubo un ruido abajo. Arriba se podía escuchar la respiración de toda la familia. Sin embargo, nadie movió un músculo. Pasos en la casa, la oficina privada, la cocina, y luego…al pie de la escalera. Todo sonido de respiración cesó, ocho corazones latieron. Pasos en las escaleras y luego un sonido en el estante de libros. Ese momento es indescriptible.

“Estamos perdidos”, dije, y tuve una visión de nosotros quince siendo arrastrados fuera de aquí por la GESTAPO es misma noche.

Más sonidos en el estante de libros, dos veces. Luego escuchamos que una lata se caía, y las pisadas retrocedieron. Estábamos fuera de peligro, ¡por ahora! Una sensación de alivio recorrió nuestros cuerpos, escuché varias mandíbulas temblar, nadie dijo una palabra. Nos quedamos así hasta las once y media.

No hubo más ruidos en la casa, pero una luz brillaba en la planta baja, justo en frente del estante ¿Era por que la policía pensaba que era muy sospechoso ó por que simplemente se la habían olvidado? ¿Volvería alguien a apagarla? Recuperamos el habla. No había más nadie dentro del edificio, pero quizás había alguien afuera haciendo guardia. Luego hicimos tres cosas: tratar de averiguar qué estaba sucediendo, temblar de pánico e ir al baño. Como los urinales estaban en el ático, todo lo que teníamos era el tacho de basura de Peter. Primero fue el señor Van Daan, luego mi padre, pero a mi madre le dio mucha vergüenza. Mi padre llevó el cesto a la otra habitación, donde Margot, la señora Van Daan y yo agradecidas hicimos uso de él. Mi madre finalmente se rindió. Había una gran demanda de papel, y por suerte yo tenía un poco en mi bolsillo. El cesto apestaba, todo pasó muy rápido, y estábamos exhaustos. Era medianoche.

Pág. 253.“¡Recuéstense en el piso y duerman!” A Margot y a mí nos dieron a cada una

almohada y una frazada. Margot se recostó cerca del estante de la comida, y yo hice mi cama entre las patas de la mesa. El olor no era tan malo cuando estabas recostado en el

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piso, pero la señora Van Daan silenciosamente fue en busca de lavandina en polvo que echó sobre el cesto para más precaución.

Charlas, susurros, mal olor, gases, y personas constantemente yendo al baño; ¡Trata de dormir en ese ambiente! A las dos y media, sin embargo, estaba tan cansada que caí rendida y no escuché más nada hasta las tres y media. Me desperté cuando la señora Van Daan recostó su cabeza sobre mi pie.

“¡Por Dios santo, dame algo que ponerme!”Dije. Me trajeron algo de ropa pero no preguntes que: Un par de pantalones de lana sobre mi pijama, un sweater rojo y una pollera negra, medias can-can blancas y soquetes destruidos.

La señora Van Daan volvió a sentarse en la silla y el señor Van Daan se recostó con su cabeza sobre mis pies. Desde las tres y media en adelante estuve despierta pensando y aún temblaba tanto que el señor Van Daan no pudo dormir. Me estaba preparando para cuando volviera la policía. Les diríamos que nos estábamos escondiendo; si eran buena gente, estaríamos a salvo, y si eran simpatizantes Nazis, ¡podríamos intentar sobornarlos!

“¡Deberíamos esconder la radio!”, dijo la señora Van Daan en tono de queja.“Claro, en el horno”, respondió el señor Van Daan. “¡Si nos encuentran, quizás

encuentren la radio también!”“Y también encontrarían el diario de Ana”, agregó mi padre.“Entonces quémalo”, sugirió la más aterrorizada del grupo.Este y el momento en que la policía hurgaba en el estante de libros, fue cuando

más miedo tuve. Oh, no mi diario; ¡si mi diario se va, yo también! Gracias a Dios que mi padre no dijo nada más.

Pág. 254.No tiene sentido seguir detallando la conversación; mucho más fue dicho. Consolé

a la señora Van Daan, quien estaba aterrada. Hablamos sobre escapar, sobre ser interrogados por la GESTAPO, sobre llamar al señor Kleiman y sobre ser valientes.

“Debemos comportarnos como soldados, señora Van Daan. Si nuestro momento ha llegado, entones bueno, lo haremos por la reina y por el país, por la libertad, la verdad y la justicia, como nos están diciendo siempre en la radio ¡Lo único malo es que arrastraremos con nosotros a los demás!”

Después de una hora, el señor Van Daan intercambió lugares con su esposa nuevamente, y mi padre vino y se sentó junto a mí. Los hombres fumaban un cigarrillo tras otro, algún ocasional suspiro se oía, alguien hizo otro viaje al urinal, y luego todo volvió a comenzar.

Cuatro de la mañana, cinco, cinco y media. Fui y me senté con Peter junto a la ventana y escuché, estábamos tan cerca que podíamos escuchar el cuerpo del otro temblar; nos dijimos una o dos palabras de tanto en tanto y escuchamos atentamente. En la habitación de al lado quitaron la cortina que tapa la luz. Hicieron una lista de todo lo que planeaban decirle al señor Kleiman por teléfono, por que planeaban llamarlo a las siete y pedirle que envíe a alguien. Estaban arriesgándose mucho, ya que el policía de guardia en la puerta ó en el depósito podría oírlos, pero el riesgo de que la policía volviera era mayor.

Tengo la lista en mis manos, pero en pos de la claridad, la copiaré aquí.

Ladrón: Policía en le edificio, hasta la estantería pero no más lejos. Los ladrones aparentemente entraron, forzaron la puerta, huyeron a través del jardín. Entrada principal

cerrada; Kugler debe haber salido por la puerta de atrás.Pág. 255.

Máquina de escribir a salvo en escritorio negro de la oficina privada.

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Ropa para lavar de Miep ó Bep en el lavabo de la cocina.Sólo Bep ó Kugler tienen las llaves para la puerta de atrás; la cerradura podría

estar rota.Traten de alertar a Jan y busquen una llave, miren alrededor de la oficina; también

alimenten al gato.

Todo lo demás salió acorde a lo planeado. Se logró llamar al señor Kleiman, los palos fueron removidos de las puertas, la máquina de escribir fue puesta de vuelta en el escritorio. Luego todos volvimos a sentarnos alrededor de la mesa y esperamos a que viniera Jan ó la policía.

Peter se había retirado a dormir y el señor Van Daan y yo estábamos recostados en el piso cuando escuchamos fuertes pisadas que venían desde abajo. Me levanté en silencio. “¡Es Jan!”

“¡No, no, es la policía!” dijeron todos.Se oyó un golpe en la estantería. Miep chistó. Esto resultó demasiado para la

señora Van Daan, quien simplemente se hundió en su silla, blanca como el papel. Si la tensión hubiera durado un minuto más, se hubiera desmayado.

Jan y Miep entraron y fueron recibidas con alegría. La escena de la mesa solamente hubiera creado una buena postal: una copia de Cinema & teatro, abierta en una página de bailarinas y cubierta en mermelada y pectina, la cual hemos estado usando para combatir la diarrea, dos latas de mermelada, media rodaja de pan, un cuarto de rodaja de pan, pectina, un espejo, un peine, fósforos, cenizas, cigarrillos, tabaco y un cenicero, libros, un par de ropa interior, una linterna, el peine de la señora Van Daan, papel higiénico, etc.

Por supuesto, Jan y Miep fueron recibidas con alaridos y lágrimas. Jan puso una tabla de madera de pino sobre el agujero en la puerta y volvió a salir con Miep para avisarles de la entrada de los ladrones. Miep había encontrado a demás una nota debajo de

Pág. 256.La puerta del depósito de Sleegers, el guardia nocturno, quien había visto el

agujero y alertó a la policía. Jan también tenía planeado visitar a Sleegers.Así que tuvimos media hora para arreglar la casa y a nosotros mismos. Nunca he

visto tal transformación como la que se dio en esos treinta minutos. Margot y yo arreglamos las camas abajo, fuimos al baño, lavamos nuestros dientes, nuestras manos y peinamos nuestro cabello. Luego ordené un poco la habitación y volví a subir las escaleras. La mesa ya había sido despejada así que tomamos un poco de agua, hicimos café y té, hervimos leche y pusimos la mesa. Mi padre y Peter vaciaron nuestros improvisados urinales y los subieron llenos de agua caliente y lavandina en polvo. La más grande fue llenada hasta el tope y estaba tan pesada que les costó cargarla. Como para empeorar las cosas, estaba goteando, así que tuvieron que poner un balde debajo.

A las once, Jan ya estaba de vuelta así que nos acompañó a la mesa, y gradualmente todos comenzaron a relajarse. Jan tenía la siguiente historia para contar:

El señor Sleegers estaba dormido, pero su esposa le dijo a Jan que su marido había descubierto el agujero mientras hacía sus rondas. Llamó a un policía y los dos revisaron el edificio. El señor Sleegers, como guardia de seguridad nocturna, patrulla el área cada noche en su bicicleta, acompañado por sus dos perros. Su esposa dijo que él vendría el martes y le contaría el resto al señor Kugler. Nadie en el departamento de policía perecía saber de la intrusión de los ladrones, pero hicieron un reposte para venir a echar un vistazo a primera hora de la mañana del martes.

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En su camino de vuelta, resulta que Jan se encontró con el señor Van Hoeven, el hombre que nos provee de patatas, y le contó sobre el delito. “Lo se”, respondió calmadamente el señor Van Hoeven. “Anoche cuando mi esposa y yo pasamos caminando por el edificio vi el hueco en la puerta. Mi esposa quería

Pág. 257.Pasar de largo, pero yo alumbré hacia adentro con una linterna, y ahí debe ser

cuando los ladrones huyeron. Por seguridad, no llamé a la policía. Pensé que no sería algo inteligente en tu caso. No se nada, pero tengo mis sospechas”. Jan le agradeció y siguió su camino. El señor Van Hoeven obviamente sospecha que estamos aquí, por que siempre entrega la patatas a la hora del almuerzo ¡Que hombre decente!

Era la una para cuando Jan se fue y nosotros terminamos de lavar los platos. Los ocho nos fuimos a la cama. Me desperté a las tres menos cuarto y vi que Dussel ya estaba levantado. Con mi cara de dormida, me encontré con Peter, que acaba de bajar, en la puerta del baño. Acordamos encontrarnos en la oficina. Me arreglé un poco y bajé.

“¿Después de todo esto, todavía te animas a ir al ático que da a la calle?” me preguntó. Asentí, agarré mi almohada, cubierta en una frazada, y subimos juntos. El clima estaba hermoso, y aunque las alertas de ataque aéreo pronto comenzaron a sonar, nos quedamos justo ahí donde estábamos. Peter puso su mano alrededor de hombro, yo puse la mía alrededor del suyo, y nos sentamos en silencio hasta las cuatro, cuando Margot vino a buscarnos para tomar café.

Comimos nuestro pan, tomamos nuestra limonada, y bromeamos (finalmente éramos capaces de hacerlo ora vez) y todo lo demás también volvió a la normalidad. Esa noche agradecí a Peter por haber sido el más valiente de todos.

Ningunote nosotros había enfrentado tal peligro como lo hicimos esa noche. Dios realmente nos estaba cuidando. Sólo piénsalo-la policía estaba justo sobre la estantería de libros, las luces estaban encendidas, ¡y aún así nadie descubrió nuestro escondite! “¡Estamos perdidos!” susurré en el momento, pero una vez estábamos a salvo. Cuando la invasión llegue y las bombas comiencen a caer, cada uno tendrá que arreglárselas por sí solo, pero esta vez

Pág. 258. Temíamos por estos buenos e inocentes cristianos que estaban ayudándonos.“¡Hemos sido salvados, sigan ayudándonos!”, es todo lo que podemos decir.

Este incidente ha traído muchos cambios. Desde ahora, Dussel hará su trabajo en el baño, y Peter vigilará la casa entre la ocho y media y las nueve y media. A Peter ya no se le permitirá abrir su ventana, ya que uno de los empleados de Keg notó que estaba abierta. Ya no podemos tirar la cadena del inodoro después de las nueve y media de la noche. El señor Sleegers ha sido contratado como guardia nocturno, y esta noche un carpintero vendrá a hacer una barricada con los barrotes blancos de Frankfurt de nuestras camas. Los debates en el anexo van de izquierda a derecha. El señor Kugler nos ha retado por ser descuidados. Jan también dijo que nunca debemos ir abajo. Lo que tenemos que averiguar ahora es si Sleegers es de confianza, si los perros ladrarán si escuchan algo de noche detrás de la puerta, como hacer una barricada, y todo tipo de cosas.

Se nos ha claramente recordado que somos judíos encadenados, encadenados a un lugar, sin derechos, pero con mil obligaciones. Debemos dejar nuestros sentimientos de lado; debemos ser valientes y fuertes, soportar la incomodidad sin quejarnos, hacer

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todo lo que esté en nuestras manos y confiar en Dios. Algún día esta terrible guerra habrá acabado ¡Llegará el momento en que volvamos a ser personas y no sólo judíos!

¿Quién nos ha hecho esto? ¿Quién nos ha separado del resto? ¿Quién nos ha hecho atravesar tales sufrimientos? Es Dios quien nos hizo del modo en que somos, pero es Dios también el que nos levantará. A los ojos del mundo, estamos condenados, peor si, después de todo este sufrimiento, aún quedan judíos, seremos motivo de ejemplo y admiración.

Pág. 259.Quien sabe, quizás nuestra religión le enseñe al mundo y a oda la gente acerca de

la bondad, y esa es la razón, la única razón por la que tenemos que sufrir. Nunca seremos tan sólo daneses, ó ingleses, siempre seres judíos al mismo tiempo. Y tendremos que seguir siendo judíos, pero para ese tiempo, querremos serlo.

¡Seamos valientes! Recordemos nuestra misión y llevémosla a cabo sin quejarnos. Habrá una salida. Dios nunca ha abandonado a nuestra gente. A través de los años, los judíos han tenido que sufrir, pero a través de los años han continuado viviendo, y los siglos de sufrimiento sólo los han hecho más fuertes ¡Los débiles han de caer y los fuertes han de sobrevivir y no serán vencidos!

Esa noche creí que iba a morir. Esperé a la policía y estaba lista para la muerte, como un soldado en un campo de batalla. Con gusto hubiera dado mi vida por mi país. Pero ahora, que he logrado salvarme, mi primer deseo es convertirme en ciudadana danesa después de la guerra. Amo a los daneses, amo este país, amo el idioma, y quiero trabajar aquí ¡Y aunque le tenga que escribir a la reina misma, no pararé hasta alcanzar mi objetivo!

Cada vez me vuelvo más y más independiente de mis padres. Así de joven como soy, enfrento la vida con más valentía y tengo un mejor y más honesto sentido de la justicia que mi madre. Sé lo que quiero, tengo un objetivo, tengo mis propias opiniones, una religión y un amor. Si tan sólo puedo ser yo misma, estaré satisfecha ¡Se que soy una mujer, una mujer con fuerza interna y un gran coraje!

Si Dios me deja vivir, lograré más de lo que mi madre jamás logró, haré que mi voz sea escuchada, ¡saldré al mundo y trabajaré en pos de la humanidad!

Pág. 260.¡Ahora se que lo primero que se necesita es coraje y felicidad!Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 14 de abril, 1944.Querida Kitty, Todos aquí están todavía muy tensos. Pim casi ha llegado a su punto de furia

máxima; la señora Van Daan está en cama con un resfrío, quejándose; El señor Van Daan cada día empalidece un poco más por la falta de cigarrillos; Dussel, que ha tenido que dejar de lado muchas de sus predilecciones, trata mal a todos; etc., etc. Parece que últimamente se nos hubiera acabado la buena suerte. El baño gotea, y las canillas están tapadas. Gracias a nuestros variados contactos, podremos tener estas cosas reparadas pronto.

Ocasionalmente me pongo sentimental, como ya lo sabes, pero de vez en cuando tengo razones para estarlo: cuando Peter y yo estamos sentados juntos en una caja de madera dura rodeados de chatarra ó de basura, nuestros brazos alrededor de los

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hombros del otro, Peter jugando con mi cabello; cuando las aves afuera cantan sus propias canciones; cuando los árboles están floreciendo, cuando el sol brilla y el cielo está tan azul-¡Ay, ahí es cuando anhelo tantas cosas!

Todo lo que veo a mi alrededor son caras de enojo e insatisfacción, todo lo que oigo son suspiros y quejas. Creerás que nuestras vidas han dado un giro para lo peor. Honestamente, las cosas son tan malas como tú las dejas serlo. Aquí en el anexo nadie siquiera se molesta en tratar de dar el ejemplo ¡tenemos que buscar el modo de sacarle el mayor provecho a nuestro estado de ánimo!

Cada día se escucha, “¡Si tan sólo todo se acabara!”

Trabajo, amor, coraje y esperanza, ¡hazme bueno y ayúdame alinear con esto!Pág. 261.Realmente creo, Kitty, que estoy un poco loca hoy, y no se pro qué. Mis escritos

están todos mezclados, salto de una cosa a otra, y a veces duro seriamente de si alguien alguna vez se interesará en estos divagues. Probablemente lo llamen “Los pensamientos de un patito feo”. Mis diarios definitivamente no serán de mucho uso para el señor Bolkestein ó el señor Gerbrandy* (*Gerrit Bolkestein fue el ministro de educación y Pieter Gerbrandy fue el primer ministro del gobierno holandés exiliado en Londres. Ver carta de Ana del 29 de marzo de 1944).

Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 15 de abril, de 1944.Queridísima Kitty, “Una cosa mala tras otra se suceden ¿Cuándo terminará?” Con seguridad puedes

volver a decir eso. Adivina que pasó ahora. Peter olvidó destrabar la puerta principal. Como resultado, ni el señor Kugler ni los empleados del depósito pudieron entrar. Él fue a la compañía Keg, rompió la ventana de la cocina, y logró entrar. Las ventanas en el anexo estaban abiertas, y la gente de Keg también lo vio ¿Qué estarán pensando? ¿Y el señor Van Maaren? El señor Kugler estaba furioso. Lo acusamos de no hacer nada para hacer la puerta más segura, ¡y venimos a hacer una estupidez como esta! Peter estaba extremadamente ofuscado. Cuando estábamos comiendo, mi madre dijo que se sentía más apenada por Peter que por cualquier otro, y él casi se pone a llorar. Todos somos igualmente culpables, ya que generalmente le preguntamos si ha destrabado la puerta, y también lo hace el señor Van Daan. Quizás pueda ir a consolarlo más tarde ¡Quiero ayudarlo!

Aquí va el boletín con las últimas novedades sobre la vida en el anexo secreto durante las últimas semanas:

Pág. 262.Hace una semana, el sábado, Bosche se enfermó repentinamente. Se recostó

calmadamente y comenzó a babear. Miep inmediatamente lo levantó, lo cubrió con una toalla, lo metió en su bolsa de las compras y lo llevó a la clínica veterinaria. Bosche tenía algún tipo de enfermedad intestinal, así que el veterinario le dio medicinas. Peter se las dio durante algunos minutos, pero luego Bosche logró escaparse. Apuesto que estaba cortejando a su amada. Pero ahora su nariz está hinchada y maúlla cada vez que lo levantas-probablemente estaba tratando de robar comida y alguien lo golpeó. Mouschi perdió la voz por unos días. Justo cuando decidimos que ella también debía ser llevada al veterinario, comenzó a ponerse mejor.

Ahora dejamos la ventana del ático un poquito abierta cada noche. Peter y yo generalmente nos sentamos allí durante la noche.

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Gracias al cemento y a pintura de aceite, el inodoro pudo ser reparado. La canilla rota ha sido reemplazada.

Afortunadamente, el señor Kleiman se está sintiendo mejor. Irá a ver a un especialista pronto. Sólo podemos rogar que no necesite una intervención.

Este mes recibimos ocho libros de racionamiento. Desafortunadamente, por las próximas dos semanas, los frijoles han sido reemplazados por cereales. Nuestra delicia actual son los pickles. Si no estás de suerte, todo lo que recibes es una lata de pepinos y salsa de mostaza.

Los vegetales son difíciles de obtener. Sólo hay lechuga, lechuga y más lechuga. Nuestras comidas sólo consisten de patatas e imitación de salsa.

Los rusos han tomado posesión de más de la mitad de Crimen. Los británicos no están avanzando más allá de Cassino. Deberemos contar con el frente occidental. Ha habido un montón de ataques aéreos increíblemente fuertes. El registro de nacimientos, muertes y matrimonios en La Haya fue bombardeado.

Pág. 263.Todos los daneses recibirán nuevas tarjetas de registro para los cupones de

racionamiento. Suficiente por hoy.Tuya, Ana M. Frank.

Domingo, 16 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty, Recuerda la fecha de ayer, por que fue un día muy feliz para mí ¿No es acaso

importante el día en que una chica recibe su primer beso? Bueno, entonces no es menos importante en mi caso. La vez en que Bram me besó en la mejilla derecha ó la vez que el señor Woudstra lo hizo en mi mano derecha, no cuentan ¿Cómo finalmente obtuve ese beso? Te contaré.

Anoche a las ocho estaba sentada con Peter en su diván y no pasó mucho tiempo antes de que él pusiera su brazo alrededor mío (Como era sábado, no estaba usando su overol) “¿Por qué no nos movemos un poco?”, dije, “Así no tengo que seguir golpeándome la cabeza contra el armario”.

Se movió tanto hacia delante que quedó casi en la punta. Deslicé mi brazo por debajo del suyo y a través de su cuello, y él puso su brazo alrededor de mis hombros, por lo que estaba prácticamente sofocándome. Nos hemos sentado así en otras ocasiones, pero nunca tan juntos como lo estábamos anoche. Él me sostuvo firmemente contra él, mi lado izquierdo junto a su pecho; mi corazón ya había comenzado a latir más rápido, pero aún había más por venir. No estuvo satisfecho hasta que mi cabeza quedó apoyada sobre su hombro, y la suya apoyada sobre la mía. Volví a sentarme tras cinco minutos, pero poco tiempo después él tomó mi cara entre sus manos y la acercó nuevamente a la suya. Ay, fue tan maravilloso. Casi no podía hablar, mi placer era demasiado intenso; él acarició mi mejilla y mi brazo, un poco torpemente, y jugó con mi cabello. La mayoría del tiempo nuestras manos estaban tocándose.

No puedo explicarte, Kitty, el sentimiento que me atravesaba. Estaba muy feliz como para decir palabra alguna, y creo que él también lo estaba.

Pág. 264.A las nueve y media nos levantamos. Peter se puso sus zapatillas para no hacer

demasiado ruido en su recorrida nocturna del edificio, y yo estaba parada junto a él. Como de repente hice el movimiento indicado, no lo se, pero antes de bajar las escaleras, me

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dio un beso, a través de mi pelo, un poco en mi mejilla izquierda y un poco en la oreja. Bajé las escaleras sin mirar hacia atrás, y no veo la hora de ver que sucede hoy.

Domingo a la mañana, justo antes de las once.Tuya, Ana M. Frank.

Lunes, 17 de abril, 1944.Queridísima Kitty, ¿Crees que mi madre y mi padre aprobarían que una chica de piedad se siente en

un diván a besarse con un chico de diecisiete años y medio? Dudo que lo hicieran, pero tengo que confiar en mi propio juicio en este asunto. Es tanto pacífico y seguro, recostarme sobre sus brazos y soñar, es tan emocionante sentir su mejilla contra la mía, es tan maravilloso saber que hay alguien esperando pro mí. Pero, sí hay un pero, ¿Querrá Peter llegar sólo hasta aquí? No he olvidado su promesa… ¡pero es un chico!

Se que estoy comenzado a una edad muy joven. Ni siquiera tengo quince y ya soy tan independiente – es un poco difícil de entender para otras personas. Estoy segura de que Margot no besaría aun chico si no hubiera una charla sobre compromiso ó matrimonio. Ni Peter ni yo tenemos tales planes. También estoy segura de que mi madre no tocó a ningún hombre hasta que conoció a mi padre. Qué dirían Jacque ó mis otras amigas si supieran que me recosté sobre los brazos de Peter, con su corazón sobre mi pecho, con mi cabeza sobe sus hombros, ¡y su rostro contra el mío!

Ay, Ana, ¡que terrible shock! Pero, seriamente, no creo que todo sea tan alarmante; estamos encerrados aquí,

Pág. 265.Dejados fuera del mundo, preocupados y temerosos, especialmente este último

tiempo ¿Por qué deberíamos estar separados cuando nos queremos? ¿Por qué no hemos de besarnos en tiempos como estos? ¿Por qué deberíamos esperar a alcanzar una edad razonable? ¿Por qué deberíamos pedir permiso?

He decidido guiarme por mis propios intereses. Él nunca me heriría ó haría infeliz ¿Por qué no he de hacer lo que mi corazón me dice y nos hace feliz a ambos?

Aún así, Kitty, tengo la sensación de que puedes notar mis dudas. Debe ser mi sentido de honestidad carcomiéndome ante tanta mentira ¿Crees que es mi deber decirle a mi padre lo que estoy haciendo? ¿Crees que nuestro secreto debería ser compartido con una tercera persona? Mucho de su encanto se perdería, ¿pero haría que me sienta mejor conmigo misma? Lo hablaré con él.

Ay, sí, todavía hay tanto que quiero discutir con él, ya que no le veo sentido a simplemente pasar tiempo abrazándonos. Compartir nuestros pensamientos con el otro requiere de mucha confianza, ¡pero ello nos hará incluso más fuertes!

Tuya, Ana M. Frank.

PD: Ayer todos nos despertamos a las seis de la mañana, por que escuchamos nuevamente el sonido de alguien entrando. Pero esta vez alguno de nuestros vecinos ha de haber sido la víctima. Cuando chequeamos a las siete, nuestras puertas estaban perfectamente cerradas, ¡gracias a Dios!

Martes, 18 de abril, 1944.Queridísima Kitty,Todo esta bien aquí. Anoche vino el carpintero nuevamente para poner algunas

hojas de hierro sobre los paneles de la puerta. Mi padre acaba de decir que

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definitivamente espera alguna tipo de operación a gran escala en Rusia e Italia, como así también en Occidente, para antes

Pág. 266.del 20 de mayo; mientras más dure la guerra, más difícil es imaginar ser liberados

de este lugar.Ayer finalmente Peter y yo nos decidimos a tener esa charla que hemos pospuesto

por los últimos diez días. Le dije todo sobre las chicas, sin dudar en contarle hasta los asuntos más íntimos. Me pareció bastante divertido que él creyera que la parte íntima de las mujeres era simplemente omitida en las ilustraciones. No podía imaginarse que de hecho estaba localizada entre las piernas de la mujer. La velada terminó con un beso mutuo, cerca de los labios ¡Realmente es un sentimiento encantador!

Quizás algún día le muestre a Peter mi cuaderno de “frases preferidas” para que podamos tratar algunos temas con más profundidad. No creo que recostar sobre los brazos del otro todo el día todos los días, sea muy agradable, y espero que él sienta lo mismo.

Tras atravesar un plácido invierno hemos estado disfrutando de una hermosa primavera. Abril es glorioso, ni muy caluroso ni muy frío, con ocasionales lloviznas. Nuestro árbol de castañas ha florecido, y de vez en cuando puedes ver uno que otro capullo.

Bep se presentó el sábado con cuatro ramos de flores: tres ramos de narcisos y un ramo de jacintos para mí. El señor Kugler nos está suministrando más y más periódicos.

Es tiempote que me ponga a hacer mi tarea de álgebra, Kitty. Adiós.Tuya, Ana M. Frank.

Miércoles, 19 de abril, 1944.Queridísima adorada, (¡Es el título de una película de Dorit Kreysler, Ida Wüst y Harald Paulsen!)¿Qué podría ser más agradable que sentarse frente a una ventana abierta,

disfrutando de la naturaleza, escuchando a las aves cantar, sintiendo el sol en tus mejillas y teniendo entre tus brazos a un adorable chico? Me siento tan en calma y a salvo cuando sus brazos me rodean,

Pág. 267.Sabiendo que él está cerca y aún así sin tener que hablar; ¿Cómo puede ser esto

malo cuando me hace tanto bien? Ay, si tan sólo no fuéramos más interrumpidos, ni siquiera por Mouschi.

Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 21 de abril, 1944.Mi queridísima Kitty, Ayer estuve en cama con un dolor de garganta, pero dado que me aburrí esa

misma tarde y no tenía fiebre, me levanté hoy. Mi dolor de garganta casi se ha “verschwnden” * (*Desaparecido).

Ayer, como probablemente ya lo descubriste, fue el cumpleaños número cincuenta y cinco de nuestro Führer. Hoy es el cumpleaños número dieciocho de su alteza real la princesa de York. La BBC reportó que todavía no se la ha declarado en edad de casarse, aunque los niños reales usualmente ya lo están a esa edad. Nos preguntamos con que príncipe casarán a esta belleza, pero no se me ocurre un candidato adecuado; quizás su hermana, la princesa Margarita Rosa, ¡puede quedarse con el ya coronado príncipe Baudouin de Bélgica!

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Aquí hemos pasado de un desastre a otro. Ni bien la puerta de afuera ha sido asegurada, el señor Van Maaren viene a meter sus narices nuevamente. Con toda seguridad, él es quien se robó la harina de patatas, y ahora trata de culpar por ello a Bep. Como era de esperarse, el anexo está nuevamente convulsionado. Bep está completamente enfurecida. Quizás el señor Kugler finalmente ponga más atención a los movimientos de este personaje deshonesto.

El tasador de Beethovenstraat vino esta mañana. Nos ofreció 400 guilders por el escritorio; en nuestra opinión, las otras estimaciones también eran demasiado bajas.

Quiero preguntarle a la revista El Príncipe si ellos aceptarían Pág. 268.

Uno de mis cuentos de hadas, bajo un pseudónimo, por supuesto. Peor hasta ahora todos mis cuentos de hadas han sido muy largos, así que no creo que me den una oportunidad.

Hasta la próxima, querida. Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 25 de abril, 1944.Queridísima Kitty, Durante los últimos diez días el señor Dussel no le ha dirigido la palabra al señor

Van Daan, y todo se debe alas nuevas medidas de seguridad implementadas tras la entrada de ladrones. Una de ellas es que Peter y el señor Van Daan hace la última inspección a las nueve y media, y tras ello nadie puede bajar. Ya no se puede tirar la cadena del inodoro después de las ocho de la noche ni después de las ocho de la mañana. Las ventanas sólo pueden abrirse durante la mañana cuando la luz da en la oficina del señor Kugler, ni tampoco pueden dejarse ligeramente abiertas durante la noche con un palo. Esta última medida es la que tiene a Dussel enfadado. Él asegura que el señor van Daan lo maltrató, pero él mismo es el único culpable de ello. Dice que prefiere vivir sin comida a vivir sin aire, y que simplemente deben encontrar el modo para dejar las ventanas abiertas.

“Debo hablar con el señor Kugler sobre esto”, me dijo.Le respondí que nunca discutimos problemas de esta índole con el señor Kugler,

sino sólo entre los miembros del grupo. “Siempre se resuelve todo a mis espaldas. Debo hablar con tu padre acerca de

esto”. Además tampoco se le permite ya sentarse en la oficina del señor Kugler los

sábados a la tarde ó los domingos, por que el manager de Keg podría oírlo si llegara a estar en el edificio de al lado. Dussel inmediatamente fue y se sentó allí de todos modos. El señor Van Daan estaba furioso, y mi padre bajó para hablar con

Pág. 269.Dussel, quien inventó una excusa poco creíble, pero esta vez ni mi padre se la

creyó. Ahora mi padre tiene el menor contacto posible con Dussel por que Dussel lo insultó. Ninguno de nosotros sabe lo que dijo, pero debe de haber sido horrible.

Y pensar que el cumpleaños de ese miserable hombre es la próxima semana ¿Cómo puedes celebrar tu cumpleaños cuando estás enfadado? ¿Cómo puedes aceptar regalos de personas a las que no les diriges la palabra?

El señor Voskujil esta desmejorando rápidamente. Por más de diez días ha tenido fiebre de casi cuarenta grados. El doctor dice que su condición no tiene remedio; creen que el

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cáncer se ha esparcido hasta sus pulmones. Ese pobre hombre, ¡nos gustaría tanto pero sólo Dios puede ayudarlo!

He escrito una entretenida historia llamada “Blurry el explorador”, la cual fue un gran éxito ente mis tres oyentes.Aún tengo un fuerte resfrío y se lo he contagiado a Margot, como así también a mi madre y a mi padre. Espero que Peter no se contagie. Él insistió en darme un beso, y me dijo que yo era su “El Dorado” (aparece literal en el libro) ¡No puedes llamar así a una persona, niño tonto! ¡Pero él es dulce de todos modos! Tuya, Ana M. Frank.

Jueves, 27 de abril, 1944.Queridísima Kitty,

La señora Van Daan estaba de mal humor esta mañana. No hizo más que quejarse, primero por su resfrío, por no poder acceder a gotas para la tos y por tener que limpiarse la nariz todo el día. Luego se quejó por que el sol no estaba brillando, por que la invasión no había comenzado, por que no podíamos asomarnos por la ventana, etc., etc. No pudimos evitar reírnos, y no debe de haber sido tan malo, ya que rápidamente se unió a nosotros.

Pág. 270.Nuestra receta de Kugel de patatas, modificada por la falta de cebollas:

Colocar patatas peladas en la picadora y agregar un poco de harina seca del gobierno y sal. Aceitar un molde ó plata para horno con parafina y hornearlo por dos horas y media. Servir con compota frutillas. (Las cebollas no están a disposición ¡Tampoco el aceite ó el molde ó el engrudo!)

En este momento estoy leyendo “Emperador Carlos V”, escrito por un profesor de la universidad de Göttingen; él ha pasado cuarenta años trabajando en este libro. Me llevó cinco días leer cincuenta páginas. No puedo ir más rápido que eso. Dado que el libro tiene 598 páginas, podrás darte cuenta lo mucho que voy a tardar en leerlo. Y eso es sin contar el segundo volumen. Pero… ¡es muy interesante!

¡La cantidad de cosas que tiene que hacer una estudiante en un solo día! Tómame a mí como ejemplo. Primero traduje un pasaje de la última batalla de Nelson del Holandés al inglés. Luego, Luego leí un poco más sobre la Guerra del Norte (1700-21) que tenía como personajes al Grande, Carlos XII, Augusto El Fuerte, Estanislao Leczinsky, Mazzepa, von Görz, Brandeunburg, Pomerania Occidental, Pomerania Oriental y Dinamarca, además de los acontecimientos más conocidos. Después, me interné en Brasil, donde leí sobre Bahía Tobacco, la abundancia del café, el millón y medio de habitantes de Río de Janeiro, Pernambuco y San Pablo, y por último pero no menos importante, el Río Amazonas. Luego leí acerca de los negros, mulatos, mestizos, blancos, la taza de analfabetismo – más del 50 por ciento- y la malaria. Dado que he tenido algo de tiempo de sobra, eché un vistazo a un mapa genealógico: John El Viejo, William Louis, Ernest Casimir I, Henry Casimir I, desembocando en la pequeña Margarita Francisca (Nacida en 1943 en Ottawa).

Doce horas: Continúo mis estudios en el ático,

Pág. 271.Leyendo sobre decanos, sacerdotes, ministros, papas y… ¡uf, son las nueve de la

noche!

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A las dos la pobre pequeña se puso de vuelta a trabajar. Monos del nuevo y viejo Mundo venían a continuación. Kitty, contéstame rápidamente, ¿cuántos dedos tiene un hipopótamo?

Luego vino la Biblia, el Ara de Noe, Sem, Cam, y Jafet. Luego, Charles V. Después, con Peter, El libro de Thackeray sobre los coroneles, en inglés. Un texto en francés, ¡y luego una comparación entre el Mississippi y el Missouri!

Suficiente por hoy ¡Adieu!Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 28 de abril, 1944.Queridísima Kitty, Nunca he olvidado mi sueño sobre Peter Schiff (fíjate el comienzo de enero).

Todavía puedo sentir su mejilla contra la mía, y aquel resplandor que me compensó por todo lo demás. Una que otra vez he tenido la misma sensación con este Peter, pero no tan intensamente… hasta anoche. Estábamos sentados en el diván, como de costumbre, cada uno sobre los brazos del otro. De repente, la Ana de todos los días se hizo a un lado y la segunda Ana tomó su lugar. La segunda Ana, la cual nunca es muy divertida ó vanidosa, pero es gentil y sólo quiere ser amada.

Me senté muy cerca de él y sentí una ola de emoción sobre mí. Las lágrimas llenaron mis ojos; las del ojo izquierdo cayeron sobre su overol, mientras que las del ojo derecho rodaron por mi nariz y cayeron en el aire aterrizando junto a las primeras ¿Lo notó? No hizo ningún movimiento para demostrarme que sí lo había notado ¿Se sintió él del mismo modo? Casi no emitió palabra ¿Se dio cuenta de que tenía dos Anas junto a él? Mis preguntas quedaron sin respuesta.

A las ocho y media me levanté y me paré junto a la ventana, donde siempre nos decimos adiós. Todavía estaba temblando,

Pág. 272.Todavía era Ana número Dos. Él se me acercó y arrojé mis brazos sobre su cuello

y lo besé en su mejilla izquierda. Estaba a punto de besar su otra mejilla cuando mi boca rozó la suya, y unimos fuertemente nuestros labios. Sin pensarlo, nos abrazamos, una y otra vez, sin parar, ¡ay!

Peter necesita ternura. Por primera vez en su vida ha descubierto una chica; por primera vez se ha dado cuenta de que incluso las personas mas intolerables tienen un ser interno y un corazón, y se transforman cuando quedan a solas con tigo. Por primera vez en su vida se ha entregado a si mismo y a su amistad a otra persona. Él nunca tenia un amigo antes, ya se un chico ó una chica. Ahora nos hemos encontrado el uno al otro. Para el caso, yo tampoco lo conocía a él, nunca había tenido a nadie en quien confiar, y esto es lo que nos ha llevado a esta situación…

La misma pregunta continua carcomiéndome “¿acaso esta esto bien?” ¿Está bien que yo me entregue a esto tan pronto, que sea tan apasionada, que este llena de tanta pasión y deseo como Peter? ¿Puedo yo, una niña, permitirme llegar tan lejos?

Hay una sola respuesta posible: “tengo tantos deseos… y los he tenido por tanto tiempo. ¡Me siento tan sola y ahora he encontrado consuelo!”.

En las mañanas actuamos normalmente, en las tardes también, excepto una que otra vez. Pero durante las noches los deseos reprimidos durante el día entero, la felicidad y enorme alegría por todos los tiempos que hemos vivido vuelven a resurgir, y lo único que podemos pensar es el uno en el otro. Cada noche, después de nuestro ultimo beso, me

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dan ganas de salir corriendo y nunca volver a mirarlo a los ojos ¡Irme lejos, bien lejos, sola hacia la oscuridad!

¿Y que es lo que me espera al finalizar esos catorce escalones? Luces brillantes, preguntas y risas. Tengo que actuar normalmente y rogar porque nadie note nada.

Mi corazón es aun muy débil para poder recuperarsePág. 273

Tan rápidamente de un shock como el que experimente anoche. La gentil Ana realiza apariciones tan poco frecuentes que no se deja alcanzar tan fácilmente ¡Peter ha llegado a mi en un modo que nunca antes nadie lo había hecho, sólo en mis sueños! Él se ha apoderado de mi y me ha cambiado completamente ¿a caso no necesitamos todos un poco de calma en nuestras vidas para poder reestablecernos? Ay, Peter, ¿Qué me has hecho? ¿Qué quieres de mí?

¿A dónde se dirigirá todo esto? Ay, ahora entiendo a Bep. Ahora, ahora que yo misma estoy atravesando todo esto, entiendo sus dudas; ¿si fuera mayor y él quisiera casarse conmigo, cual seria mi respuesta? ¡Ana, se honesta! No podrías casarte con Peter. Pero es tan difícil dejarlo ir. Peter aun tiene muy poco carácter, muy poca iniciativa, poco coraje y fuerza. Él aún es un niño, y emocionalmente no es mayor que yo; todo lo que quiere es paz y felicidad ¿Realmente solo tengo catorce años? ¿Realmente no soy más que una tonta colegiala? ¿Realmente soy tan inexperta en todo? Tengo más experiencia que la mayoría; he experimentado algo que casi ninguna persona de mi edad ha experimentado jamás.

Tengo miedo de mi misma, miedo de que mis deseos me hagan entregarme muy pronto ¿Cómo podré comportarme decentemente con otros chicos de ahora en más? Hay, es tan difícil, la eterna lucha entre el corazón y la mente. Hay tiempo y lugar para ambos, ¿Pero como puedo estar segura que he elegido el momento adecuado?

Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 2 de mayo, 1944. Queridísima Kitty, El sábado en la noche le pregunte a Peter si creía que debía contarle a mi padre

sobre nosotros. Tras discutirlo, me dijo que pensaba que debía hacerlo. Me puse contenta; me demostró que es sensato y sensible. Tan pronto como baje las escaleras, fui a buscar algo de agua con mi padre. Mientras estábamos en las escaleras, dije,

Pág. 274.

“Padre, estoy segura de que te has dado cuenta de que cuando Peter y yo estamos juntos, no nos sentamos precisamente uno en frente del otro ¿crees que eso esta mal?”

Mi padre hizo una pausa antes de responderme: “No, no creo que esta mal. Pero Ana, cuando vives tan cerca de otra persona, como en nuestro caso, tienes que tener cuidado”. Dijo otras palabras respecto a ello, y luego subimos las escaleras.

El domingo por la mañana me llamo y me dijo, “Ana, he estado pensando en lo que me dijiste”. (¡Ay, ay, sabia que esto se venia!). “Aquí en el anexo no me parece tan buena idea. Pensé que ustedes solo eran amigos ¿Peter está enamorado de ti?”

“Por supuesto que no”, respondí.“Bueno, sabes que los entiendo a ambos. Pero tú debes ser la que muestra un

poco de compostura; no subas tan a menudo, no le des mas esperanzas de las que tu puedes manejar. En asuntos como este siempre es el hombre el que toma el rol activo, y queda a consideración de la mujer establecer los límites. Afuera, donde eres libre, las cosas son bastante diferentes. Ves a otros chicos y chicas, puedes salir a la calle, practicar deportes y todo tipo de actividades. Pero aquí, si están tanto tiempo juntos y

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quieren salir, no pueden. Se ven a cada hora del día – de hecho, todo el tiempo. Se cuidadosa, Ana, ¡y no te tomes esto muy en serio!”

“No lo hago, padre, pero Peter es un chico decente, ¡Un buen chico!”“Si, pero el no es una persona de carácter muy fuerte. Puede fácilmente ser

influenciado para hacer el bien, como para hacer el mal. Espero por su bien que se mantenga en el buen camino porque básicamente es una buena persona.”

Hablamos un poco más y acordamos en que mi padre hablaría con el también.El domingo por la tarde cuando estábamos en el ático, Peter preguntó, “¿Ya has

hablado con tu padre, Ana?”“Si”, respondí, “te contaré todo al respecto. Pág. 275

Él no cree que estemos haciendo mal, pero dice que aquí, donde vivimos tan cerca el uno del otro, podría generar conflictos”.

“Ya hemos quedado de acuerdo que no discutiremos, y planeo cumplir mi promesa”.

“Yo también Peter. Pero mi padre no sabía que esto era serio, pensó que sólo éramos amigos ¿crees que aun podamos serlo?”

“Si, lo creo. ¿Y tú?”“Yo también. Incluso le dije a mi padre que confió en ti. Sí confío en ti, Peter, tanto

como lo hago en mi padre. Y creo que mereces mi confianza, ¿o no?”“Eso espero” (Se lo veía muy tímido y sonrojado) “Creo en ti, Peter”, continué. “Creo que eres una buena persona y que saldrás adelante en este mundo”Después de eso hablamos de otras cosas. Mas tarde dije, “si alguna vez salimos

de aquí, se que mi imagen de ti no cambiará”.Se puso rojo como un tomate. “Eso no es cierto, Ana. Ay no ¡jamás voy a dejar

que pienses así de mi!”Justo ahí alguien nos llamo.

Mi padre sí le habló a él. Él me lo contó el lunes. “Tu padre piensa que nuestra amistad puede derivar en amor”, dijo. “Pero le dije que nos mantendremos bajo control”.

Mi padre quiere que deje de ir arriba tan a menudo, pero yo no quiero. No solo porque me gusta estar con Peter, sino porque he dicho que confío en él. Sí confío y quiero probárselo, pero nunca podré hacerlo si permanezco aquí abajo.

No, ¡Voy a subir!

Pág. 276.

Mientras tanto el melodrama de Dussel se ha resuelto. El sábado por la noche durante la cena se disculpo en un hermoso holandés. El señor Van Daan se reconcilio inmediatamente. Dussel debe haber pasado todo el día practicando su discurso.

El domingo, el día de su cumpleaños, no se produjeron incidentes. Le dimos una botella de buen vino de 1919, los Van Daan (quienes ahora pueden darle su regalo después de todo) le ofrecieron una lata de pickles y un paquete de hojas de afeitar, el señor Kugler le dio una jarra de sidra de limón (para hacer limonada), Miep un libro, “el pequeño Martin”, y Bep le dio una planta. Él ofreció a todos un huevo.Tuya, Ana M. Frank.

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Miércoles, 3 de mayo, 1944.

Queridísima Kitty,¡Boletín semanal! Estamos teniendo vacaciones de la política. No hay nada, me

refiero a absolutamente nada, que reportar. También comienzo a creer gradualmente que la invasión vendrá. Después de todo, no pueden dejar a los rusos hacer todo el trabajo sucio; de hecho, por el momento, los rusos tampoco están haciendo nada.

El señor Kleiman esta viniendo ahora a la oficina todas las mañanas. Ha traído un nuevo juego de resortes para el diván de Peter, así que Peter tendrá que ir a trabajar. Como era de esperarse, él no esta para nada de buen humor. El señor Kleiman también trajo polvo anti-pulgas para los gatos.

¿Te conté que nuestro Boche ha desaparecido? No hemos visto ni su sombra desde el último jueves. Probablemente ella ya este en el cielo de los gatos, mientras que alguno de sus amantes la ha convertido en un delicioso plato. Quizás alguna niña que pueda pagarlo estará usando una capa hecha con la piel de Boche. Peter está destrozado.

Durante las últimas dos semanas hemos estado almorzando a las once y media los sábados; durante la mañana

Pág. 277.

Tenemos que conformarnos con una taza de cereal caliente. A partir de mañana este será el menú de todos los días; así podemos evitar una comida. Los vegetales son aun muy difíciles de conseguir. Esta tarde hervimos lechugas podridas. Lechuga ordinaria, espinaca y lechuga hervida, eso es todo lo que hay. Agrégale a eso patatas en mal estado, ¡y tendrás una comida digna de un rey!

No me ha venido la regla por más de dos meses, pero finalmente volvió a comenzar el domingo pasado. A pesar de todos los problemas que acarrea, me alegra que no me haya abandonado.

Como puedes sin duda imaginar, solemos decir desesperanzados, “¿Qué sentido tiene la guerra? ¿Por qué, ay, por qué la gente no puede vivir toda junta pacíficamente? ¿Por qué tanta destrucción?”

La pregunta es entendible, pero hasta ahora nadie nos ha brindado una respuesta satisfactoria ¿Por qué Inglaterra esta construyendo mas grandes y mejores aviones y bombas y al mismo tiempo bloques para la recontracción de casas ¿Por qué se gastan millones en la guerra cada día, mientras que no hay ni un centavo para gastar en estudios médicos, artes o los pobres? ¿Por qué la gente tiene que morirse de hambre cuando montañas de comidas se amontonan en otras partes del mundo? ¿Ay, por qué la gente está tan loca?

No creo que la guerra sea solamente culpa de políticos y capitalistas. Ay no, el hombre común es tan culpable como ellos; si no fuese así ¡los hombres y las naciones se hubieran revelado largo tiempo atrás! Hay una furia destructiva en la gente, una urgencia por la violencia, los asesinatos y la muerte. Y hasta que toda la humanidad, sin excepción, atraviese una metamorfosis, las guerras continuaran siendo producidas y todo lo que ha sido cuidadosamente construido, cultivado y producido será cortado y destruido ¡Tan solo para volver a ser construido todo de vuelta!

A menudo me he sentido deprimida pero nunca desesperada. Veo nuestra vida en el escondite como una aventura interesante,

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Pág. 278.

Llena de peligros y romance, y cada privación es un elemento interesante para mi diario. Me he decidido a vivir una vida diferente a la de otras chicas y a no convertirme en una ordinaria ama de casa mas adelante. Lo que estoy experimentando aquí es el gran comienzo de una interesante vida, y esa es la razón – la única razón – por la que tengo que reírme del lado cómico de los momentos más peligrosos.

Soy joven y tengo muchas cualidades ocultas; soy joven y fuerte y estoy atravesando una gran aventura; estoy justo a la mitad de ella ¡y no puedo pasarme todo el día quejándome porque sería imposible divertirme! He sido bendecida con muchas cosas: felicidad, un carácter alegre y fuerza. Cada día siento como maduro, siento la liberación acercándose, siento la belleza de la naturaleza y la bondad de la gente que me rodea ¡cada día lo veo como una fascinante y divertida aventura! Con todo eso, ¿Por qué debería desesperanzarme?Tuya Ana M. Frank.

Viernes, 5 de mayo, 1944Querida Kitty, Mi padre no esta contento con migo. Después de nuestra charla del sábado, él pensó que yo dejaría de ir arriba cada noche. Él no va a tolerar todo ese “knutscherei” * (*besuqueo). No tolero esa palabra. Hablar de ello fue lo suficientemente malo - ¡por qué tiene que también hacerme sentir mal! Hablaré con él hoy. Margot me ha dado unos buenos consejos. Aquí va más ó menos lo que me gustaría decir:

Creo que esperas una explicación de mi parte, Padre, así te la daré. Estás decepcionado de mí, esperabas más decoro de mi parte,

Pág. 279.Sin duda quieres que me comporte como una niña de catorce años debe comportarse ¡Pero ahí es donde te equivocas!

Desde que estamos aquí, desde julio de 1942 hasta hace unas pocas semanas atrás, no han sido tiempos fáciles para mí ¡Si tan sólo supieras lo mucho que solía llorar de noche, cuan infeliz y desesperanzada estaba, cuan sola me sentía, entenderías mi deseo de ir arriba! He llegado al punto en que no necesito el apoyo de mi madre ni de nadie más. No sucedió de la noche a la mañana. He luchado muy duramente y por mucho tiempo y he derramado muchas lágrimas hasta convertirme en la persona independiente que soy ahora. Puedes reír y negarte a creerme, pero no me importa. Se que soy una persona independiente, y no creo que necesite rendirte cuenta de mis actos. Sólo te estoy diciendo esto por que no quiero que sientas que hago esto a tus espaldas. Pero hay una sola persona a la que le debo explicaciones, y es a mí.

Cuando estaba teniendo problemas, todos – y eso te incluye a ti – cerraron sus ojos y oídos y no me ayudaron. Por el contrario, todo lo que siempre recibí fueron quejas para que no fuera tan escandalosa. Era escandalosa tan sólo para no sentirme miserable todo el tiempo. Actuaba con mucha confianza de mí misma para no tener que escuchar a la vos dentro de mí. Me he creado un personaje durante el último año y medio, día y noche. Nunca me quejé ó me saqué la máscara, nada por el estilo, y ahora… ahora la batalla se ha acabado ¡He ganado! Soy independiente, en cuerpo y alma. Ya no necesito a una madre, y he emergido de la lucha como una persona más fuerte.

Ahora que ha terminado, ahora que se que he ganado la batalla, quiero seguir mi propio camino, para seguir la senda que creo es la correcta. No pienses en mí

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Pág. 280.Como una niña de catorce años, ya que todos estos problemas me han hecho más grande; no me arrepentiré de mis acciones, ¡me comportaré del modo que creo es el mejor!

La sutil persuasión no debe evitar que yo suba. Tendrás que prohibírmelo del todo, o confiar en mí. Sin importar lo que decidas, ¡déjame en paz!Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 6 de mayo, 1944.Queridísima kitty,

Anoche antes de la cena metí en el bolsillo de mi padre la carta que le había escrito. Por lo que me dijo Margot, él la leyó y estuvo disgustado el resto de la velada. (¡Yo estaba arriba lavando los platos!) Pobre Pim, debí saber el efecto que tal epistolar tendría en él ¡Él es tan sensible! Inmediatamente le dije a Peter que no le preguntara ni dijera nada más. Pim no me ha dicho más nada sobre el asunto ¿Lo hará?

Todo aquí ha vuelto más o menos a la normalidad. Estamos sorprendidos sobre lo que Jan, el señor Kugler y el señor Kleiman nos han contado sobre los precios y la gente de afuera; media libra de té cuesta 350 guilders, media libre de café 80 guilders, una libra de manteca 35 guilders, un huevo 1.45 guilders ¡La gente esta pagando 14 guilders por una onza de tabaco búlgaro! Todos están haciendo sus compras en el mercado negro; cada vendedor ambulante tiene algo que ofrecer. El chico que hace el reparto de la panadería nos ha abastecido con un carrete de hilo por 90 centavos. El lechero puede conseguirnos libretas de racionamiento, y un funebrero vende queso. Robos, asesinatos y asaltos, son acontecimientos diarios. Incluso los policías y los guardias nocturnos están participando de estos actos. Todos quieren llenar sus estómagos con comida, ya que los salarios han sidos congelados, la gente ha tenido que recurrir a

Pág. 281.Chantajes. La policía está ocupada tratando de rastrear a chicas de quince, dieciséis, diecisiete años y más que se reportan como perdidas cada día.

Quiero tratar de terminar mi historia sobre Ellen, el hada. Solo por diversión, puedo dársela a mi padre en su cumpleaños, junto con los derechos de autor.

¡Nos vemos después! (De hecho, esa no es la frase correcta. En el programa alemán emitido desde Inglaterra siempre cierran con “Auf wiederhören”*- *Hasta que hablemos nuevamente-. Entonces debería decir “Hasta que te escriba nuevamente”)

Tuya, Ana M. Frank.

Domingo a la mañana, 7 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,

Mi padre y yo tuvimos una larga charla ayer a la tarde. Lloré desconsoladamente y él también lloró ¿Sabes lo que me dijo, Kitty?

“He recibido muchas cartas en mi vida, pero ninguna tan dolorosa como esta. Tú, que has tenido tanto amor por tus padres. Tú, a la cual sus padres siempre han estado listos para ayudar, a la cual siempre han defendido, sin importa que ¡Hablas de no tener que rendirnos cuentas de tus acciones! Sientes que has sido abandonada y dejado librada a tu propia suerte ¡No, Ana, has sido muy injusta con nosotros!”

“Quizás no era tu intención, pero eso es lo que escribiste ¡No, Ana, no hemos hecho nada para merecer tales reproches!”

Ay, he fallado terriblemente. Esta es la peor cosa que he hecho en toda mi vida. He hablado de mis lágrimas para hacer alarde, para darme importancia a mi misma y así

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obtener su respeto. Definitivamente he tenido mi cuota de infelicidad, y todo lo que he dicho

Pág. 282.Sobre mi madre es verdad. Pero acusarlo a Pim, quien es tan bueno y ha hecho tanto por mí – no, eso es muy cruel.

Es bueno que alguien finalmente me haya puesto un límite, que hay desarmado mi orgullo, porque he sido muy engreída ¡No todo lo que la señorita Ana hace es bueno! Cualquiera que deliberadamente causa tan dolor en alguien que dice amar es despreciable, ¡Lo peor de lo peor!

Lo que mas me avergüenza es el modo en que mi padre me ha perdonado; dijo que tirara la carta al fuego, y se ha estado comportando tan amablemente con migo, como si él fuera el que hizo algo malo. Bueno, Ana, aún tienes un montón que aprender. Es tiempo de que empieces de cero, ¡En vez de mirar con desprecio a las otras personas y siempre culparlos!

He conocido el dolor en gran cantidad, ¿Pero quién no ha tenido mi edad? Me he montado una escenita, pero casi sin darme cuenta. Me he sentido sola, ¡Pero nunca desesperada! No como mi padre, quien una vez corrió hacia la calle con un cuchillo para ponerle un fin a todo esto. Nunca he llegado tan lejos.

Debería estar profundamente avergonzada de mi misma, y lo estoy. Lo que se ha hecho no puede deshacerse, pero al menos puedes evitar que pase de vuelta. Me gustaría comenzar de vuelta, y eso no debería ser difícil, ahora que tengo que Peter. Con el sosteniéndome, ¡Se que puedo hacerlo! Ya no estoy sola. Él me ama, yo lo amo, tengo mis libros, mis escritos y mi diario. No soy tan fea ni tan estúpida, tengo un carácter alegre, ¡Y quiero desarrollar una buena personalidad!

Si, Ana, sabias completamente bien que tu carta era hiriente y falsa, ¡Pero tu estabas completamente orgullosa de ella! Tomaré a mi padre como mi modelo a seguir nuevamente, y mejoraré.

Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 283.

Lunes, 8 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,

¿Alguna vez te he contado algo sobre nuestra familia? No creo haberlo hecho, así que déjame comenzar. Mi padre nació en Frankfurt en una familia muy acaudalada: Michael Frank era dueño de un banco y se convirtió en millonario, y los padres de Alice Stern eran acaudalados y de buena posición. Michael Frank no nació siendo rico; él mismo labró su fortuna. En su juventud su padre llevó la vida del hijo de un hombre rico. Fiestas cada semana, bailes, banquetes, hermosas chicas, veladas, cenas, una enorme casa, etc. Tras la muerte de mi abuelo, la mayoría del dinero se perdió, y tras la Gran Guerra y la inflación no quedo absolutamente nada. Hasta el comienzo de la guerra aún quedaban algunos familiares ricos. Así que mi padre fue extremadamente adinerado, y tuvo que reírse ayer porque por primera vez en sus cincuenta y cinco años, lavó una sartén.

La familia de mi madre no era tan adinerada, pero de todos modos eran acaudalados, y hemos escuchados sorprendidas historias de fiestas privadas, cenas, y fiestas de compromiso con 250 invitados.

En este momento estamos lejos de ser ricos, pero he puesto todas mis esperanzas en el fin de la guerra. Te lo aseguro no me conformaría con una vida de clase media como mi madre y Margot. Me gustaría pasar un año en Paris y Londres aprendiendo los idiomas

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y estudiando historia del arte. Compara esas aspiraciones con las de Margot, quien quiere ser enfermera de recién nacidos en Palestina. Todavía imagino maravillosos vestidos y personas fascinantes. Como te he dicho muchas veces con anterioridad, quiero ver el mundo y hacer todo tipo de cosas increíbles, ¡Y un poco de dinero no vendría nada mal!

Esta mañana Miep nos contó sobre la fiesta de compromiso de su prima, a la cual asistió el sábado. Los padres de su prima son ricos, y los del novio aún más. Miep hizo que se nos hiciera agua la boca al contarnos sobre la comida que se servia: sopa de vegetales con albóndigas, queso, sándwiches de carne,

Pág. 284.

Entremeses con huevos y rosbif, arrollados de queso, pastel, vino y cigarrillos a discreción.

Miep bebió diez copas de agua ardiente y fumó tres cigarrillos – nada mal para una defensora de las bebidas y el alcohol. Si Miep tomó tanto, me pregunto cuanto habrá tomado su marido. Todos en la fiesta estaban un poco mareados, por supuesto. También había dos oficiales del escuadrón de homicidios quienes tomaron fotos de los novios. Como puedes ver, siempre estamos en los pensamientos de Miep, ya que ella tomó nota de sus nombres y direcciones en caso de que algo pasara y necesitáramos contactarnos con daneses de confianza.

La boca se nos hacía agua. Nosotros solo recibimos dos cucharas de cereal caliente para el desayuno y estábamos totalmente hambrientos. Nosotros no recibimos nada mas que espinacas semi cocida (¡por sus vitaminas!) y patatas en mal estado día tras día. Nosotros llenamos nuestros vacíos estómagos con nada más que lechuga hervida, lechuga podrida, espinaca, espinaca y más espinaca. Quizás terminemos siendo tan fuertes como Popeye, ¡Aunque hasta ahora no he visto signos de ellos!

Si Miep nos hubiera llevado a la fiesta con ella no hubieran quedado arrollados de sobra para los otros invitados. Si hubiéramos estado ahí, hubiésemos tomado todo lo que estaba allí, incluidos los muebles. Te lo aseguro, prácticamente teníamos que sacarle las palabras a la fuerza ¡Estábamos reunidos a su alrededor como si nunca en nuestra vida hubiésemos escuchado sobre comidas deliciosas ó personas elegantes! Y estoy hablando de las nietas de un distinguido millonario ¡El mundo es un lugar patas para arriba!

Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 285.Martes, 9 de mayo, 1944.Queridísima Kitty, He terminado mi historia sobre Ellen, el hada. La copié íntegramente a un lindo

cuaderno, lo decoré con tinta roja y cosí sus hojas. El cuento entero parece lindo, pero no se si tanto como para un regalo de cumpleaños. Margot y mi madre han escrito poemas.

El señor Kugler subió esta tarde con las noticias de que a partir del lunes, la señora Broks quiere pasar dos horas por día en la oficina ¡Imagínate! El personal de la oficina no podrá subir, las patatas no serán entregadas, Bep no tendrá su cena, no podremos ir al baño, ¡y habrá muchos inconvenientes más! Le propusimos una gran variedad de formas para deshacernos de ella. La señora Van Daan pensó que un buen laxante en su café sería un buen truco. “No”, respondió el señor Kleiman, “¡Por favor no, o nunca la sacaremos de la lata!”

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Una gran carcajada. “¿La lata?” La señora Van Daan preguntó. “¿Qué significa eso?” Una explicación fue dada. “¿Es correcto utilizar esa palabra?” preguntó inocentemente.

“Imagínate” dijo Bep entre risas” Te encuentras de compras en el Bijenkorf y preguntas donde queda la lata ¡Ni siquiera sabrían de que estás hablando!”

Ahora el señor Dussel, tomando la expresión prestada, se sienta en la “lata” cada día a las doce y media. Esta tarde tomé un pedazo de papel rosa y escribí:

Horarios de baño del señor Dussel:Mañanas: 7:15 a 7:30 a.m.Tardes: Después de la 1 p.m.Además, ¡siempre que sea necesario!

Pág. 286.Pegué el papel a la puerta verde del baño cuando el señor Dussel todavía estaba

adentro. Tranquilamente también podría haber agregado “¡Los que transgredan este horario serán encerrados!” Por que nuestro baño puede ser trabado tanto de adentro como de afuera.

El último chiste del señor Van Daan:

Tras una lección bíblica sobre Adán y Eva, un niño de trece años le preguntó a su padre, “Dime, padre, ¿cómo nací?”.

“Bueno”, respondió el padre, “La cigüeña te sacó del océano, te sentó en la cama de tu madre, y le pegó muy fuerte en la pierna. Sangraba tanto que tuvo que quedarse en cama por una semana”.

No del todo satisfecho con la respuesta, el chico acudió a su madre. “Dime, madre”, preguntó, “¿Cómo naciste tú y como nací yo?”

Su madre le contó la misma historia. Finalmente, buscando obtener más detalles, recurrió a su abuelo. “Dime, abuelo”, dijo, “¿Cómo naciste tú y como nació tu hija?”Y por tercera vez recibió la misma historia.

Esa noche él escribió en su diario: “Después de un meticuloso cuestionamiento, ¡debo concluir que las últimas tres generaciones de mi familia no han mantenido relaciones sexuales!”

Aún tengo tarea que hacer; ya son casi las tres de la tarde.Tuya, Ana M. Frank.

PD: Dado que ya he mencionado a la nueva señora de la limpieza, quiero agregar que ella está casada, tiene sesenta años, ¡y está casi sorda!

Pág. 287.Es muy conveniente, teniendo en cuenta todo el ruido que ocho personas viviendo en un escondite pueden hacer.

Ay, Kit, el clima está tan lindo ¡Si tan sólo pudiera salir!

Miércoles, 10 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,

Ayer a la tarde estábamos sentados en el ático estudiando francés cuando de repente escuché como se derramaba agua detrás de mí. Le pregunté a Peter que podía ser. Sin siquiera responderme, salió disparado hacia el loft – la escena del desastre – y

Page 161: El Diario de Ana Frank

levantó a Mouschi, quien estaba orinando al lado de la caja en donde debería hacerlo, y lo puso donde correspondía. Esta acción fue seguida de gritos y retos, y luego Mouschi, quien para ese momento ya había terminado de hacer pis, huyó escaleras abajo. Buscando algo similar a su caja, Mouschi encontró una pila de maderas, justo sobre una grieta en la puerta. Sus necesidades inmediatamente cayeron por la grieta hacia el ático y desgraciadamente aterrizaron junto al barril de patatas. El techo estaba goteando, y como el piso del ático también tiene una buena cantidad de grietas, pequeñas gotas amarillas caían atravesando el techo hacia la mesa donde cenamos, entre una pila de medias y libros.

Yo me doblaba de la risa, fue una escena tan divertida. Se podía ver a Mouschi acurrucado bajo una silla, a Peter amenazándolo con agua, con polvo de lavandina y una manta, y al señor Van Daan tratando de calmar a todos. La habitación rápidamente fue arreglada, pero es un hecho bien conocido que las necesidades de los gatos apestan en gran manera. Las patatas fueron prueba de ello, como así también la pila de maderas, las cuales mi padre recolectó y las trajo escaleras abajo para quemarlas.

¡Pobre Mouschi! ¿Cómo iba él a saber que es imposible usar turba para su caja de necesidades? Ana.

Pág. 288.

Jueves, 11 de mayo, 1944Queridísima Kitty,

Un nuevo chiste para hacerte reír: El pelo de Peter tiene que ser cortado, y como es de costumbre su madre iba a

hacer la peluquera. A las siete y veinticinco Peter desapareció dentro de su cuarto, y reapareció a las seis y media en punto, usando solo su traje de baño azul y un par de zapatillas.

“¿Vienes?” le preguntó a su madre. “Si, subo en un minuto, ¡Pero no puedo encontrar las tijeras!”Peter la ayudó a buscar, rastreando dentro del cajón de cosméticos de ella. “No

me desordenes todo, Peter” Se quejó ella. No llegué a escuchar la respuesta de él pero debe haber sido bastante insolente

porque ella le pegó un golpe en el brazo. Él le devolvió el golpe y ella lo golpeo con toda su fuerza, y Peter alejó su brazo de ella con una expresión de horror en su rostro. “¡Dale, Veterana!”

La señora Van Daan se quedó helada. Peter la agarró de la cintura y la movió por toda la habitación. Ella rió, gritó, lo retó y lo pateó pero nada sirvió. Peter llevó a su prisionera hasta las escaleras del ático, donde a él se lo obligó a dejarla ir. La señora Van Daan volvió a la habitación y se desplomó sobre una silla con un gran suspiro.

“Die Entführung der Mutter”, bromié * (* “La Abducción de la Madre”, una posible referencia a la ópera de Mozart, “La abducción de Seraglio”).

“Si, pero me hirió”Echó un vistazo y enfrié su enrojecida y acalorada muñeca con agua. Peter, aún

junto a las escaleras y cada vez mas impaciente, apareció en la habitación con su cinturón en la mano, como un domador de leones.

Pág. 289.

La señora Van Daan no se movió, se quedó sobre su escritorio, buscando un delantal. “Me tienes que pedir disculpas primero”.

Page 162: El Diario de Ana Frank

“De acuerdo, te ofrezco mis disculpas, pero solo porque sino lo hago estaremos aquí hasta las media noche”

“La señora Van Daan se rió aunque no quería. Se levanto y se dirigió hasta la puerta, donde se sintió obligada a darnos a nosotros una explicación (por nosotros, me refiero a mi padre, a mi madre y a mí; estábamos ocupados lavando los platos). “Él no era así cuando estábamos en casa”, dijo. “Lo hubiera golpeado tan duro con mi cinturón que se hubiera ido volando escaleras abajo. Nunca ha sido tan insolente. Esta no es la primera vez que se merece quedar castigado. Eso es lo que obtienes con las crianzas modernas, hijos modernos. Yo nunca he agarrado mi madre así ¿Usted trataba así a su madre, señor Frank?”. Ella estaba muy enojada, se balanceaba hacia delante y hacia atrás, diciendo todo lo que le venia en mente y aún no había subido las escaleras. Finalmente, después de largo rato, se retiró.

Menos de cinco minutos después bajó las escaleras aceleradamente, con sus mejillas coloradas, y colgó su delantal sobre una silla. Cuando le pregunte si había terminado, ella me respondió que estaba yendo escaleras abajo. Bajó las escaleras como un tornado, probablemente dirigiéndose a los brazos de su Putti.

Ella no volvió a subir hasta las ocho y esta vez lo hizo con su esposo. Peter fue sacado a los empujones del ático y recibió un reto sin compasión y cargado con frases abusivas: insolente mal educado, holgazán, mal ejemplo, que Ana esto, que Margot lo otro, no pude escuchar el resto.

¡Hoy todo parece haberse calmado nuevamente!Tuya Ana M. Frank.

PD: El martes y el miércoles por la noche, nuestra amada reina se dirigió al país. Se va a tomar unas vacaciones así que estará en muy buen estado para su regreso a Holanda.

Pág. 290.Ella usó palabras como “Pronto, cuando esté de vuelta en Holanda”, “liberación”, “Heroísmo”, y “Pesadas cargas”.

Esto fue seguido por un discurso del primer ministro Gerbrandy. Tenía una voz tan aguda como la de un pequeño niño, por lo que mi madre instintivamente dijo, “Aaah”. Un pastor, quien debe haberle pedido prestado el tono de voz al señor Edel, terminó el discurso pidiendo a Dios que cuide de los judíos, aquellos en campos de concentración y prisiones y a todos los que estaban trabajando en Alemania.

Jueves, 11 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,

Dado que dejé mi cartuchera (incluyendo mi pluma) arriba y no se me permite molestar a los adultos mientras duermen la siesta (hasta las dos y media), tendrás que conformarte con el trazo del lápiz.

Estoy muy ocupada últimamente, y por más extraño que parezca, no tengo tiempo para completar mi pila de tareas ¿Te cuento brevemente qué tengo que hacer? Bueno, antes de mañana tengo que terminar de leer el primer volumen de una biografía de Galileo Galilei, dado que tiene que ser devuelto a la biblioteca. Lo comencé a leer ayer y ya leí 220 páginas de las 320 que el libro tiene, así que lograré terminarlo. La semana que viene tengo que leer “Palestina, una encrucijada” y el segundo volumen de Galilei. Además de eso, ayer terminé el primer volumen de una biografía sobre el Emperador Carlos V, y aún tengo que descifrar la gran cantidad de árboles genealógicos que he recolectado y las notas que he tomado. A continuación, tengo tres páginas de palabras extranjeras de mis variados libros, todas las cuales deben ser anotadas, memorizadas y leídas en vos alta. Número cuatro: mis estrellas de cine están totalmente desordenas y

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mueren por ser arregladas, pero dado que eso me llevará varios días y como la profesora Ana ha dicho que esta llena de trabajo para hacer, tendrán que soportar vivir en el caos por un tiempo más. Luego me esperan Teseo,

Pág. 291.Edipo, Orfeo, Jason y Hércules para ser descifrados, dado que todas sus aventuras se han entremezclado en mi mente. Mirón y Fidias también demandan atención urgente, sino me olvidaré por completo cual es su papel en la mitología. Mismo es el caso de, pro ejemplo, la Guerra de los 7 Años y la Guerra de los 9 Años. Ahora se me está mezclando todo. Bueno, ¡qué se puede hacer con una mente como la mía! ¡Tan solo imagina lo olvidadiza que seré cuando tenga ochenta!

Ay, una cosa más. La Biblia ¿Cuánto más pasará para que yo llegue a la historia del baño de Susana? ¿Y qué significan Sodoma y Gomorra? Ay, todavía queda tanto por aprender y descubrir. Y mientras tanto, he dejado olvidada a Liselotte von de Pfalz. Como verás, estoy a punto de desbordar.

Y ahora algo más. Tu ya sabes desde hace tiempo que mi mayor deseo es convertirme en una periodista, y más adelante, en una escritora famosa. Tendremos que esperar para ver si estas grandes ilusiones (¡Ó desilusiones!) se vuelven realidad, peor hasta ahora no me he quedado sin temas que tratar. De todos modos, después de la guerra me gustaría publicar un libro llamado “El anexo secreto”. Todavía queda por saber si tendré éxito, pero mi diario puede servir como punto departida.

También debo terminar “La vida de Cady”. Ya se me ha ocurrido el resto de la trama. Tras ser curada en el sanatorio, Cady vuelve a casa y continúa escribiéndole a Hans. Es 1941, y no pasa mucho tiempo antes de que ella descubra las simpatías por el nazismo de Hans, y dado que Cady está terriblemente preocupada por la situación de los judíos y de su amiga Mariana, ellos comienzan a distanciarse. Se encuentran y vuelven a estar juntos, pero se separan cuando Hans la engaña con otra chica. Cady está destrozada, y como quiere conseguir un buen trabajo, estudia enfermería. Tras graduarse acepta un trabajo, en el

Pág. 292.Hospital de urgencias de un amigo de su padre, como enfermera en un sanatorio de tuberculosis en Suiza. Durante sus primeras vacaciones va al Lago Como, donde se encuentra con Hans. Él le dice que se había casado dos años atrás con quien conoció después de Cady, pero que su esposa se había suicidado en un ataque de depresión. Ahora que ha visto a su pequeña Cady nuevamente, se da cuenta de cuanto la ama, y una vez más le pide matrimonio. Cady lo rechaza, a pesar de que lo ama tanto como siempre. Peor su orgullo se lo impide. Hans se va, y años después Cady se entera de que él está instalado Inglaterra, donde está luchando contra su salud muy debilitada.

Cuando cumple veintisiete, Cady se casa con un hombre bien acomodado del campo, llamado Simon. Ella llega a amarlo, pero no tanto como a Hans. Ella tiene dos hijas y un hijo, Lilian, Judith y Nico. Ella y Simon son felices juntos, pero Hans siempre está en sus recuerdos hasta que una noche ella sueña con él y se despiden.

No es una historia sentimental sinsentido: Está basada en la vida de mi padre.Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 13 de mayo, 1944.Mi queridísima Kitty,

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Ayer fue el cumpleaños de mi padre, el aniversario de casamiento número 19 de mis padres, un día sin la señora de la limpieza…. Y el sol estaba brillando como nunca antes lo había hecho en 1944. Nuestro árbol de castañas está en pleno florecimiento. Está cubierto de hojas y es aún más bello que el año pasado.

Mi padre recibió una biografía de Linneo por parte del señor Kleiman, un libro sobre naturaleza del señor Kugler, “Los canales de Ámsterdam” del señor Dussel, una gran caja de los Van Daan (envuelta de un modo tan perfecto que parecía hecho pro un profesional),

Pág. 293.Que contenía tres huevos, una botella de cerveza, una jarra de yogurt y una corbata verde. Este regalo hacía que nuestra jarra de caramelo pareciera un poco escasa. Mis rosas olían maravillosamente mejor que los claveles de Miep y Bep. Él fue completamente consentido. Cincuenta pastelillos llegaron de la panadería Siemons, ¡Delicioso! Mi padre también nos convidó una torta picante, y cerveza para los hombres y yogurt para las damas ¡Todo estaba delicioso!Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 16 de mayo, 1944.Mi queridísima Kitty,

Para variar (ya que no hemos tenido una de estas en tanto tiempo) te contaré una pequeña discusión entre el señor y la señora Van Daan anoche:

Señora Van Daan: “Los alemanes han tenido tiempo de sobra para fortalecer el frente Atlántico, y definitivamente harán todo lo que esté en su poder para contener a los británicos ¡Es sorprendente cuan fuertes son los alemanes!”.

Señor Van Daan: “¡Ay, si, es sorprendente!”.Señora Van Daan: “¡Si lo es!”Señor Van Daan: “Tan fuertes que están destinados a ganar la guerra finalmente,

¿es eso a lo que te referías?”Señora Van Daan: “Quizás. No estoy convencida de lo contrario.”Señor Van Daan: “Ni siquiera voy a responder eso”.Señora Van Daan: “Siempre terminas dando una respuesta. Siempre te dejas

llevar, cada vez”.Señor Van Daan: “No, no es así. Siempre mantengo mis respuestas lo más

acotadas posible”.Señora Van Daan: “¡Pero siempre tienes algo que responder y siempre tienes que

tener razón! ¡Tus predicciones casi nunca se vuelven realidad, sabes!”Señor Van Daan: “Hasta ahora sí”Señora Van Daan: “No, no es así. Dijiste que la invasión

Pág. 294.Comenzaría este año, los finlandeses ya deberían estar fuera de la guerra, la campaña italiana debería haber terminado el invierno pasado, y los rusos ya deberían haber capturado Lemberg. Ay, no, yo no confío demasiado en tus predicciones”.

Señor Van Daan: “¿Por qué no cierras el pico para variar? Te demostraré quién tiene razón; algún día te cansarás de sermonearme. Estoy harto de tus estupideces. Espera nomás, ¡un día te haré comer tus palabras!” (Fin del acto uno).

De hecho, yo no pude contener la risa. Mi madre tampoco pudo, e incluso Peter se mordía los labios para contener la carcajada. Ay, esos estúpidos adultos ¡Deben aprender unas

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cuantas cosas antes de comenzar a hacer tantas críticas sobre las generaciones más jóvenes!

Desde e viernes hemos estado manteniendo nuevamente las ventanas abiertas durante la noche.Tuya, Ana M. Frank.

Lo que a la familia del anexo le interesa(Una encuesta sistemática sobre cursos y materiales de lectura)

Señora Van Daan: Ningún curso; busca muchas cosas en la enciclopedia Knaur y Lexicon; le gusta leer historias de detectives, libros médicos e historias de amor, interesantes ó triviales.

Señor Van Daan: Curso por correspondencia en inglés; le gusta leer novelas biográficas y ocasionalmente otro tipo de novelas.

Señor Frank: Esta aprendiendo inglés (¡Con Dickens!) y un poco de latín; nunca lee novelas, pero le gustan las descripciones serias y un tanto secas de personas y lugares.

Señora Frank: Curso por correspondencia de inglés; lee de todo excepto novelas de detectives.

Pág. 295.Señor Dussel: Está aprendiendo inglés, español y holandés con ningún resultado

visible; lee de todo; acuerda con la opinión de la mayoría.Peter Van Daan: Está aprendiendo inglés, francés (curso por correspondencia),

mecanografía en holandés, inglés y alemán, correspondencia comercial en inglés, trabajo en madera, economía y a veces matemática; lee poco, a veces sobre geografía.

Margot Frank: Cursos por correspondencia en inglés, francés y latín, mecanografía en inglés, alemán y holandés, trigonometría, geometría sólida, mecánica, física, química, álgebra, geometría, literatura inglesa, literatura francesa, literatura alemana, literatura holandesa, contabilidad, geografía, historia moderna, biología, economía; lee de todo, preferentemente sobre religión y medicina.

Ana Frank: Mecanografía en francés, inglés, alemán y holandés, geometría, álgebra, historia, geografía, historia del arte, mitología, biología, historias bíblicas, literatura danesa; le gusta leer biografías, aburridas ó interesantes, y libros de historia (a veces novelas e historias cortas).

Viernes, 19 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,Ayer estaba hecha trizas. Vómitos (¡A mí me tenía que tocar!), dolor de cabeza,

dolor de estómago y todo lo que te puedas imaginar. Hoy me siento mejor. Estoy hambrienta, pero creo que dejaré pasar los frijoles que hay para cenar.

Todo esta yendo bien entre Peter y yo. El pobre muchacho tiene aún una mayor necesidad de ternura que yo. Aún se ruboriza cuando reciba su beso de las buenas noches, y luego ruega que le den otro ¿Soy acaso un simple mejor substituto de Boche? No me importa. Él es tan feliz simplemente con saber que alguien lo quiere.

Tras cumplir con mi laboriosa tarea, me distancié

Pág. 296.Un poco de la situación, pero no debes pensar que mi amor ha disminuido. Peter

es una dulzura, pero le he cerrado la puerta a mi yo interior; si alguna vez quiere volver a abrir esa puerta, ¡tendrá que usar lanza más poderosa!

Page 166: El Diario de Ana Frank

Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 20 de mayo, 1944.Queridísima Kitty, Anoche cuando bajé del ático, noté al entrar a la habitación que el florero de los

claveles se había caído al piso. Mi madre estaba sobre sus rodillas secando el piso y Margot estaba rescatando mis papeles el suelo. “¿Qué pasó?” Pregunté con temor, y antes de que pudieran responder, vislumbré el desastre desde esotro lado de la habitación. Toda mi colección de árboles genealógicos, mis cuadernos, mis libros, todo estaba empapado. Casi lloro, y estaba tan enojada que empecé a hablar en alemán. No recuerdo una sola palabra, pero según Margot balbuceé algo sobre “unübersehbarer Schaden, schreckliich, entsetzlich, nie zu ersetzen” (pérdida incalculable, terrible, horrible, irremplazable) y mucho más. Mi padre se rió a carcajadas y mi madre y Margot se le unieron, peor me dieron ganas de llorar por que todo mi trabajo y mis notas elaboradas estaban perdidos.

Miré más de cerca y, por suerte, “la pérdida incalculable” no era tan mala como parecía. Arriba en el ático separé las hojas que estaban pegadas y las colgué para que se secaran. Era tan gracioso, incluso tuve que reírme. Maria de Medici junto a Carlos V, Guillermo de Orange y Maria Antonieta.

Pág. 297.“Es una Rassenschande” (profanación de razas), bromeó la señora Van Daan.Tras dejar mis papeles al cuidado de Peter, volví a bajar.“¿Qué libros se arruinaron?” le pregunté a Margot, que estaba yendo a buscarlos.“Álgebra”, dijo Margot.Pero por suerte, mi libro de álgebra no estaba arruinado por completo. Hubiera

deseado que cayera justo debajo del florero. Nunca he odiado tanto un libro como ese. Detrás de la tapa, están los nombres de al menos veinte niñas que lo han usado antes que yo. Es viejo, amarillento, lleno de garabatos, anotaciones y revisiones. La próxima vez que esté de mal humor, ¡voy a despedazar ese libro!

Tuya, Ana M. Frank.

Lunes, 22 de mayo, 1944.Queridísima Kitty, El 20 de mayo, mi padre perdió su apuesta y tuvo que dar cinco jarras de yogurt a

la señora Van Daan: la invasión aún no ha comenzado. Puede decir con tranquilidad que todo Ámsterdam, todo Holanda, de hecho toda la costa oeste de Europa, hasta España, están hablando de la invasión día y noche, debatiendo, haciendo apuestas y… esperando.

El suspenso esta llegando a su punto de ebullición; todos aquellos a quienes consideramos “buenos” holandeses han dejado de creer en los ingleses; no todos siguen creyendo en que el palabrerío inglés es un movimiento estratégico. La gente quiere pruebas- grandes, heroicos hechos.

Nadie puede ver más allá de sus narices, nadie se pone a pensar que los ingleses están peleando por su propio país y por su propia gente; todos

Pág. 298.Creen que es el deber de Inglaterra salvar Holanda, lo más pronto posible ¿Qué

obligaciones tienen los holandeses con nosotros? ¿Qué han hecho los holandeses para merecer la generosa ayuda que tan claramente esperan? Oh, no, lo holandeses están muy equivocados. Los ingleses, a pesar de todo su charlatanería, no pueden ser culpados

Page 167: El Diario de Ana Frank

por la guerra más que los demás países, grandes ó pequeños, que están ahora ocupados por Alemania. Los ingleses no van a ofrecernos excusas; es verdad, no hicieron nada durante aquellos años en que Alemania estaba rearmándose pero todos los demás países, en especial aquellos que limitan con Alemania, no hicieron nada tampoco. Inglaterra y el resto de los países han descubierto que esconder tu cabeza bajo la arena no da resultados, y ahora cada uno de ello, en especial Inglaterra, tiene que pagar un alto precio por su política de avestruz.

Ningún país sacrifica a sus hombres sin razón alguna, y definitivamente no lo hace en interés de otros, e Inglaterra no es excepción a esta regla. La invasión, liberación y libertad llegarán algún día; y será Inglaterra, y no los países ocupados, la que elegirá el momento.

Para nuestra sorpresa y dolor, mucha gente ha cambiado su postura respecto a los judíos. Nos han contado que el anti semitismo se ha instalado en grupos en los que antes era inimaginable. Este hecho nos ha afectado a todos muy profundamente. La razón para este odio es entendible, quizás incluso humana, peor eso no la hace correcta. Según los cristianos, los judíos están contando sus secretos a los alemanes, denunciando a los que los ayudan y haciéndoles sufrir la penosa suerte y el castigo que ya ha llegado a tantos. Todo esto es cierto. Pero como debe ser con todo, tendrían que mirar el problema desde ambos lados: ¿Actuarían de otro modo los cristianos si estuvieran en nuestro lugar? ¿Podría alguien, sin importar si fuese cristiano ó judío, permanecer callado frente a

Pág. 299.La presión alemana? Todos saben que eso es prácticamente imposible, ¿Así que por qué pretenden lo imposible a los judíos?

Se ha estado diciendo en ciertos círculos que los judíos alemanes que emigraron a Holanda antes de la guerra y han sido enviados ahora a Polonia, no se les debería permitir volver aquí. Se les ha prometido el asilo en Holanda, pero una vez que Hitler se haya ido, deben volver a Alemania.

Cuando escuchas esos, te preguntas por qué estamos peleando esta larga y terrible guerra ¡Siempre se nos dice que peleamos por la libertad, la verdad y la justicia! La guerra no ha terminado aún y ya hay disputas en las que los judíos son considerados seres humanos de menor rango. Ay, es triste, muy triste, que el viejo adagio se haya confirmado por milésima vez: “Lo que un cristiano hace es su propia responsabilidad, lo que un judío hace afecta a todos los judíos”.

Para serte honesta, no puede entender como los holandeses, una nación de gente buena, honesta y derecha, pueden juzgarnos del modo en que lo hacen. En nosotros – el pueblo más oprimido, desafortunado y miserable en todo el mundo.

Tengo una sola esperanza: Que es te antisemitismo sea una cosa pasajera, que los holandeses mostrarán su verdadero ser, que nunca dudarán de lo que saben en su interior que es lo correcto, ¡por que esto es muy injusto!

Y si alguna vez llevan adelante esta terrible amenaza, el puñado de judíos que sobreviva tendrá que irse. Nosotros también tendremos que resignarnos y seguir adelante, irnos de este bello país, el cual alguna vez tan amablemente nos acogió y hoy nos da la espalda.

Amo Holanda. Alguna vez soñé con que se volviera mi madre patria, ya que he perdido la mía ¡Y aún así lo deseo!

Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 300.Jueves, 25 de mayo, 1944.

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Queridísima Kitty, ¡Bep está comprometida! La noticia no es una gran sorpresa, por que ninguno de

nosotros esta muy contento con ella. Bertus puede que sea un joven agradable, centrado, y atlético, pero Bep no lo ama, y para mi esa es razón suficiente para recomendarle que no se case con él.

Bep está tratando de ser alguien en el mundo, y Bertus se lo está impidiendo: él es un obrero, sin ningún interés ó deseo de hacer de él alguien importante, y no creo que eso haga feliz a Bep. Entiendo que Bep quiera ponerle un final a su indecisión; cuatro semanas atrás decidió dejarlo por carta, pero luego se sintió aún peor. Así que le escribió una carta, ¡y ahora está comprometida!

Hay varios factores que rodean a este compromiso. En primer lugar, al padre enfermo de Bep, le gusta mucho Bertus. En segundo lugar, ella es la mayor de las chicas Voskujil y la madre bromea diciéndole que va a ser una solterona. En tercer lugar, ella acaba de cumplir veinticuatro, y eso le afecta mucho a Bep.

Mi madre dice que hubiera sido mejor si Bep tan sólo hubiera tenido un amorío con Bertus. No lo sé. Me siento mal por Bep y puedo comprender su soledad. De todos modos, sólo pueden casarse después de la guerra, dado que Bertus está escondiéndose bajo tierra. Además, no tienen ni un centavo a su nombre. Que escenario tan lamentable para Bep, para quien nosotros deseamos lo mejor. Sólo espero que Bertus mejore bajo la influencia de ella, ó que Bep encuentre a otro hombre, ¡uno que sepa valorarla!

Tuya, Ana M. Frank.

EL MISMO DÍA: Cada día pasa algo. Esta mañana el señor Van Hoeven ha sido arrestado. Estaba

escondiendo a dos judíos

Pág. 301.En su casa. Es muy duro para nosotros, no sólo por que esos pobres judíos están

nuevamente en la cima del abismo, peor también por que esto es terrible para el señor Van Hoeven.

El mundo está patas para arriba. Las personas más decentes están siendo enviadas a campos de concentración, prisiones y celdas solitarias, mientras que los más nefastos están gobernando a jóvenes y adultos, pobres y ricos. Algunos son atrapados por comerciar en el mercado negro, otros por ocultar judíos ó a otras almas desafortunadas. A menos que seas un Nazi, no sabes que te sucederá de un día para el otro.

El señor Van Hoeven es una gran pérdida también. Es imposible que Bep cargue toda esa cantidad de patatas hasta aquí, ni tampoco debería hacerlo, así que la única opción para nosotros es comer menos. Te diré lo que tenemos en mente, peor definitivamente no hará la vida aquí más agradable. Mi madre dice que evitaremos el desayuno, comeremos cereal caliente y pan para le almuerzo y patatas fritas para la cena y, de ser posible, vegetales ó lechuga una ó dos veces a la semana. Es todo lo que hay. Estaremos hambrientos, pero nada es peor que ser atrapado.

Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 26 de mayo, 1944.Mi queridísima Kitty,Finalmente puedo sentarme tranquilamente a la mesa ante la abertura en el

marco de la venta y escribirte todo lo que quiero decir.

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Me siento más mísera de lo que me he sentido en meses. Incluso tras el robo, no me sentí tan devastada, por dentro y por fuera. Por un lado, están las noticias sobre el señor Van Hoeven, el asunto con los judíos (el cual es discutido en la casa por todos con lujo de detalles), la invasión (que se está tardando tanto en llegar), la horrible comida, la tensión, la atmósfera mísera, mi desencanto de Meter. Por otro lado,

Pág. 302.Está el compromiso de Bep, la recepción del día Pentecostés, las flores, el cumpleaños del señor Kugler, tortas e historias sobre cabarets, películas y conciertos. Esa brecha, esa gran brecha, siempre está aquí. Un día reímos sobre el lado gracioso de la vida en un escondite, y al día siguiente (y hay muchos de esos días), estamos asustados, y el temor, la tensión y la desesperación pueden leerse en nuestros rostros.

Miep y el señor Kugler soportan una gran carga por nosotros, y por todos aquellos que se esconden - Miep en todo lo que hace y el señor Kugler con su enorme responsabilidad por nosotros ocho, que a veces es tan sofocante que difícilmente puede emitir palabra por la tensión y el stress. El señor Kleiman y Bep también nos cuidan muy bien, pero pueden quitarse el anexo de la cabeza a veces, aunque sea solo por algunas horas ó unos pocos días. Ellos tienen sus propios problemas, el señor Kleiman con su problema de salud y Bep con su compromiso, el cual no luce muy esperanzador pro el momento. Pero ellos también tienen sus salidas, sus visitas a amigos, sus vidas de todos los días como gente común, por lo que la tensión es aliviada de a momentos, aunque sea por poco tiempo, mientras que la nuestra nunca se alivia, nunca lo ha hecho, ni una sola vez en los dos años que estuvimos aquí ¿Por cuánto más tiempo esta carga intolerable que nos oprime caerá sobre nosotros?

Las cañerías se taparon nuevamente. No podemos hacer correr el agua, y si lo hacemos, sólo sale un chorrito; no podemos tirar la cadena del inodoro; y hemos estado tirando nuestra agua sucia en una fuente grande. Hoy pudimos arreglarnos, ¿pero qué pasará si el plomero no puede arreglarlo solo? Los del Departamento de Higiene no pueden venir hasta el martes.

Miep nos envió un pan con frutas secas que decía “Feliz Pentecostés” en él. Parecía casi como si nos estuviera haciendo una broma, ya que nuestros ánimos y estados de humor están muy lejos de la sensación de felicidad.

Todos estamos más asustados desde que sucedió lo del señor Van Hoeven.

Pág. 303.Nuevamente se escuchan “ShhH” a cada rato, y hacemos todo más

silenciosamente. La policía forzó la puerta allí; ¡fácilmente podrían hacer lo mismo aquí! ¿Qué haremos si alguna vez…? no, no debo escribir eso. Pero la pregunta no pasará al fondo de mi cabeza hoy; por el contrario, todo el temor que alguna vez he sentido en mí resurge nuevamente en todo su esplendor.

Tuve que bajar sola esta noche a las ocho para usar el baño. No había nadie allí, ya que todos estaban escuchando la radio. Quise ser valiente, pero fue duro. Siempre me siento más segura arriba que en la enorme y silenciosa casa; cuando estoy sola con esos misteriosos sonidos que provienen de arriba y el sonido de bocinas en la calle, tengo que rápidamente recordarme a mi misma donde estoy para evitar entrar en pánico.

Miep ha estado actuando mucho más amablemente con nosotros desde que tuvo esa charla con mi padre. Pero no te he contado sobre eso todavía. Miep vino una tarde muy alterada y le preguntó a mi padre directamente si él creía que ellos también estaban infectados con las corrientes de anti-semitismo que estaban teniendo lugar. Mi padre estaba azorado, y rápidamente la convenció de que ello no era así, pero algunas de las sospechas de Miep han permanecido. Están haciéndonos más favores ahora y

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mostrando más interés en nuestros problemas, aunque definitivamente no deberíamos molestarlos con nuestros lamentos. ¡Ay, son personas tan buenas, tan nobles!

Me he preguntado a mí misma una y otra vez si no hubiera sido mejor que no nos escondiéramos, que estuviéramos muertos y no tuviéramos que pasar portada esta agonía, especialmente para quitarles esta carga de encima a los otros. Pero todos desistimos de esta idea. Aún amamos la vida, nonos hemos olvidado de la voz de la naturaleza, y seguimos esperando, esperando por… todo.

Pág. 304.Que algo suceda pronto, aunque sea un bombardeo aéreo. Nada puede ser más desesperante que esta ansiedad. Que venga le final, sin importar cuan cruel sea; al menos así sabremos si seremos los victoriosos ó los que pereceremos.Tuya, Ana M. Frank.

Miércoles, 31 de mayo, 1944.Queridísima Kitty,

El sábado, domingo, lunes y martes estuvo demasiado caluroso para incluso sostener mi pluma, por lo cual no pude escribirte. El viernes se taparon las cañerías, el sábado fueron reparadas. La señora Kleiman vino de visita pro la tarde y nos contó mucho sobre Jopie; ella y el señor Van Maarsen están en el mismo Hockey Club. El domingo Bep vino a vernos para asegurarse de que no hubiera habido ningún robo y se quedó a desayunar. El lunes (que fue feriado por el día Pentecostés), el señor Gies hizo de custodio del anexo, y el martes finalmente se nos permitió abrir las ventanas. Pocas veces hemos tenido un fin de semana Pentecostés tan hermoso y cálido. O quizás “caluroso” sea una mejor palabra. El clima caluroso es horrible en el Anexo. Para darte una idea de las numerosas quejas, describiré brevemente estos días en que nos derretimos.

Sábado: “Maravilloso, que clima fantástico”, todos dijimos por la mañana. “Si tan sólo no estuviera tan caluroso”, dijimos todos por la tarde, cuando las ventanas tuvieron que ser cerradas.

Domingo: “El calor es insoportable, la manteca se derrite, no hay un lugar fresco en ningún punto de la casa, el pan se está secando, la leche se pone agria, las ventanas no pueden ser abiertas. Nosotros, pobres almas, estamos sofocándonos mientras todos disfrutan el día del Pentecostés” (Según la señora Van Daan)

Lunes: “Me duelen los pies, no tengo nada fresco para ponerme, ¡No puedo lavar los platos con este calor!” Quejándose desde temprano en la mañana hasta tarde en la noche. Fue horrible.

Pág. 305.No tolero el calor. Me alegra que el viento haya llegado hoy, pero que el sol este

aún brillando. Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 2 de junio, 1944.

Querida Kitty,“Si vas al ático, lleva un paraguas contigo, ¡preferiblemente uno grande!”

Eso es para protegerte de “Lluvias internas”. Hay un proverbio holandés: “Alto y seco, sano y salvo”, pero obviamente no puede utilizarse en tiempo de guerra (¡por las armas!) y para gente en escondites (¡esto parece la caja de un gato!). Mouschi se ha agarrado el

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hábito de hacer sus necesidades sobre algún diario ó entre las rendijas del piso, por lo que tenemos buenas razones para temer a las goteras y, lo que es aún peor, al olor. El nuevo Moortje del depósito tiene el mismo problema. Cualquiera que haya tenido un gato que no esté adiestrado puede imaginarse Leonor, más que la pimienta y el timo, este olor cubre toda la casa.

Tengo una nueva idea para llevar a cabo durante los bombardeos: Cuando el ataque se vuelve muy ruidoso, acércate a la escalera de madera más cercana. Corre hacia arriba y hacia abajo unas cuantas veces, asegurándote de tropezar al menos una vez. Con las lastimaduras y el ruido de correr y caerte, no podrás oír el bombardeo, mucho menos preocuparte pro él. Tu querida amiga ya ha puesto esta fórmula a prueba, ¡con gran éxito!

Tuya, Ana M. Frank.

Lunes, 5 de junio, 1944.Queridísima Kitty,Nuevos problemas en el anexo. Una discusión entre Dussel y los Frank por la

división de la manteca. Dussel se ha rendido. Hay una gran amistad entre él y la señor Van Daan, coqueteos, besos y amistosas

Pág. 306. Sonrisitas. Dussel ha comenzado a desear una compañía femenina.

Los Van Daan no entienden por que debemos cocinar una torta de especias para el cumpleaños del señor Kugler cuando no podemos comer una nosotros. Muy desconsiderados. Estado de ánimo arriba: malo. La señora Van Daan está resfriada. El señor Dussel tiene tabletas de levadura, pero nosotros no tenemos ninguna.

El Quinto Ejército ha tomado Roma. No hubo bombardeos ni se destruyó la ciudad. Gran propaganda para Hitler.

Hay pocas patatas y vegetales. Una tira de pan estaba mohosa Scharminkeltje (El nombre del nuevo gato del depósito) no tolera la pimienta. Ella

duerme en la caja para gatos y hace sus necesidades en los depósitos de madera. Imposible controlarla.

Mal clima. Constante bombardeo del Pais de Calais y de la costa oeste de Francia.Nadie compra dólares. El oro es aún menos interesante. El fondo de nuestra

alcancía está a la vista ¿De qué vamos a vivir el próximo mes?Tuya, Ana M. Frank.Martes, 6 de junio, 1944.Mi queridísima Kitty,“Hoy es el día D”, anunció la BBC a las doce. “Este es el día” ¡La invasión ha

comenzado!Esta mañana a las ocho los británicos reportaron un fuerte bombardeo sobre

Calais, Boulogne, Le havre y Cherbourg, así como en el Pas de Calais (como de costumbre). Asimismo, como medida de precaución para aquellos que se encuentran en territorios ocupados, todo aquel que viva en un radio de veinte millas de la costa se le advirtió que se preparara para los bombardeos. Donde sea posible, los británicos repartirán volantes una hora antes.

De acuerdo con las noticias alemanas, paracaidistas británicos han aterrizado en la costa de Francia. “Británicos se encuentran

Pág. 307. en combate con unidades alemanas navales”, de acuerdo a la BBC.

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Conclusión a la que llegó el anexo durante el desayuno a las nueve: este es un aterrizaje de prueba, como el que se realizó hace dos años en Dieppe.

La BBC informó a las diez en alemán, holandés, francés y otras lenguas: ¡La invasión ha comenzado! Así que esta es la “verdadera” invasión. La BBC informó en alemán a las once: Discurso del supremo Comandante en Jefe Dwight Eisenhower.

La BBC transmitió en inglés: “Este es el día D”. El general Eisenhower le dijo a los franceses: “Se avecinan duros combates, pero después nos espera la victoria. El año 1944 es el año de la completa victoria ¡Buena suerte!”

La BBC reportó a la una en inglés: 11.000 aviones están sobrevolando el área para bombardear y hacer aterrizar a las tropas detrás de las líneas enemigas; 4.000 buques y otras pequeñas embarcaciones están constantemente llegando al área entre Cherbourg y Le Havre. Tropas inglesas y americanas ya están en pleno combate. Discursos de Gerbrandy, el primer ministro de Bélgica, del rey Haakon de Noruega, de De Gaulle en Francia, del rey de Inglaterra y, finalmente, de Churchill.

¡Gran conmoción en el anexo! ¿Es este realmente el comienzo de la tan ansiada liberación? ¿La liberación de la que tanto hemos hablado, la cual aún parece demasiado buena, demasiado de cuento de hadas como para volverse realidad?¿Será que este año, 1944, nos traerá finalmente la victoria? No lo sabemos aún. Peor donde hay esperanza, hay vida. Nos llena de renovado coraje y nos devuelve la fuerza. Necesitaremos ser valientes para soportar los grandes temores y sufrimientos que aún están por llegar. Ahora es cuestión de mantener la calma y tolerar la situación, ¡de apretar nuestros dientes antes de gritar y mantener la frente en alto! Francia, Rusia,

Pág. 308.Italia e incluso Alemania, pueden exponer su agonía al mundo, ¡pero nosotros

todavía no tenemos ese derecho!Ay, Kitty, lo mejor de la invasión es que tengo la sensación de que nuestros

amigos se avecinan. Esos alemanes nos han oprimido y amenazado por tanto tiempo, ¡que la idea de la salvación y la amistad significa mucho para nosotros! Ahora no es sólo contra los judíos, sino con toda Holanda y toda la Europa ocupada. Quizás, dice Margot, puedo volver a la escuela en septiembre u octubre.

Tuya, Ana M. Frank.

PD: ¡Te mantendré informada con las últimas noticias!Esta mañana y anoche, maniquíes hechos de paja y goma fueron arrojados desde

el aire detrás de las líneas alemanas y explotaron apenas tocaron el piso. Muchos paracaidistas, con sus caras pintadas de negro para que no sean vistos en la oscuridad, aterrizaron también. La costa francesa fue bombardeada con 5.500 toneladas de explosivos durante la noche, y luego, a las 6 de la mañana, el primer buque llegó a la costa. Hoy hubo 20.000 aviones en acción. Las baterías costeras alemanas fueron destruidas incluso antes de aterrizar. Todo está yendo bien, a pesar del mal tiempo. La armada y la gente están juntos en “un deseo y una esperanza”.

Viernes, 9 de junio, 1944.Queridísima Kitty,¡Granes noticias sobre la invasión! Los Aliados han tomado Bayeux, una ciudad en

la costa de Francia, y ahora están peleando para apoderarse de Caen. Claramente, están tratando de cercar la península donde se sitúa Cherbourg. Cada anochecer los corresponsales de guerra reportan las dificultades, el coraje y el espíritu de lucha del

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ejército. Para lograrlo, realizan las más importantes hazañas. Algunos de los soldados heridos que ya están de vuelta en Inglaterra, hablaron por la radio. A pesar del

Pág. 309.Horrible clima, los aviones vuelan diligentemente de untado hacia otro.

Escuchamos en la BBC que Churchill que ría aterrizar con las tropas ene. Día D, pero Eisenhower y los otros generales lograron convencerlo de que no lo haga. Imagínate, tanto coraje en un viejo hombre - ¡debe tener 70 al menos!

El entusiasmo aquí se ha disipado un poco; aún así, todos estamos deseando que la guerra termine para fines de este año ¡Ya es hora! Las quejas constantes de la señora Van Daan son intolerables; ahora que ya no puede torturarnos con la invasión, ella se queja todo el día por el mal clima ¡Si tan sólo pudiéramos dejarla en el loft, metida en una tina de agua fría!

Todos en el Anexo, menos el señor Van Daan y Meter han leído la trilogía de la Rapsodia Húngara, una biografía del compositor, pianista y niño prodigio Franz Liszt. Es muy interesante, aunque en mi opinión, hace mucho hincapié en las mujeres; Liszt no sólo el mejor y más famoso pianista de su tiempo, sino un gran conquistador, incluso a los setenta años. Tuvo un amorío con la Condesa Marie D’Agoult, la Princesa Carolyne SaynWittgenstein, la bailarina Lola Montez, la pianista Agnes Kingworth, la pianista Sophie Menter, la princesa del Caúcaso Olga Janina, la baronesa Olga Meyendorff, la actriz Lilla no sé cuanto, y así sucesivamente. Aquellas partes del libro que tratan sobre su música y otras artes son mucho más interesantes. Algunas de las personas mencionadas son Schumann, Clara Wieck, Hector Berilos, Johannes Brahms, Beethoven, Joachim, Richard Wagner, Han Von Bülow, Antón Rubinstein, Frédéric Chopin, Victor Hugo, Honoré de Balzac, Hiller, Hummel, Czerny, Rossini, Cherubini, Paganini, Mendelssohn, etc., tc.

Liszt parece haber sido un hombre decente, muy

Pág. 310.Generoso y modesto, aunque excepcionalmente vanidoso. Ayudó a otros, puso el arte por sobre todas las cosas, le encantaba el coñac y las mujeres, no podía tolerar ver lágrimas, era un caballero, no podía negarle a nadie un favor, no estaba interesado en el dinero y le preocupaban la libertad religiosa y el mundo.Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 13 de junio, 1944.Queridísima Kitty,

Otro cumpleaños ha pasado, así que ahora tengo quince. Recibí unos cuantos regalos: Los cinco volúmenes del libro de Historia del Arte de Springer, un conjunto de ropa interior, dos cinturones, un pañuelo, dos jarras de yogurt, un tarro de mermelada, dos galletitas de miel (pequeñas), un libro sobre botánica de mi madre y mi padre, un brazalete de oro de Margot, un álbum de stickers de los Van Daan, guisantes endulzados de Dussel, Golosinas de Miep, golosinas y cuadernos de Bep, y lo más importante: El libro de Maria Teresa y tres rodajas de queso cremoso del señor Kugler. Meter me dio un adorable ramo de peonías; el pobre hizo un gran esfuerzo para encontrar un regalo, pero nada dio resultado.

La invasión va de maravillas, a pesar del horrible clima – poderosas lluviosas, grandes vientos, y el mar picado.

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Ayer, Churchill, Smuts, Eisenhower y Arnol visitaron los territorios franceses que los ingleses han capturado y liberado. Churchill lo hizo en un submarino que bordeó la costa. Como muchos otros, él no parece saber lo que es el miedo - ¡Un hombre admirable!

Desde nuestra posición aquí en el anexo-fuerte, no es difícil sondear los ánimos de los holandeses. No hay duda de que muchos se alegran de ver que los “perezosos” ingleses finalmente se ha puesto manos a la obra. Aquellos que no quieren que su territorio sea ocupado pro los ingleses no se dan cuenta de

Pág. 111.Lo injustos que están siendo. Su razonamiento se reduce a esto: Inglaterra debe combatir, luchar y sacrificar a sus hijos para liberar a Holanda y a otros territorios ocupados. Tras ello, los ingleses no deben permanecer en Holanda: deben ofrecer sus más sinceras disculpas a todos los territorios ocupados, devolver la compañía de las Indias Orientales a su respectivo dueño y volver, debilitados y empobrecidos a Inglaterra. Que manga de idiotas. Y aún así, como ya te he dicho, muchos holandeses se encuentran dentro de estas filas ¿Qué hubiera sido de Holanda y sus vecinos si Inglaterra hubiera firmado un tratado de paz con Alemania, como tuvo la oportunidad de hacerlo? Holanda se hubiera convertido en parte de Alemania, ¡y ese hubiera sido el fin!

A todos aquellos holandeses que aún miran con desprecio a los ingleses, desprecian el gobierno inglés con sus antiguos reinados, llaman a los ingleses cobardes, y aún así odian a los alemanes, les deberían sacudir la cabeza como uno sacude una almohada ¡Quizás así se les reorganicen las ideas!

Deseos, pensamientos, acusaciones y reproches revolotean en mi cabeza. No soy tan vanidosa como muchos creen; conozco mis errores y defectos mejor que nadie, pero hay una diferencia: Se que quiero cambiar, que cambiaré, ¡y que ya recambiado enormemente!

¿Por qué será, me pregunto a mi misma, que todos siguen pensando que soy pedante y una sabelotodo? ¿Realmente soy tan arrogante? ¿Soy yo la que soy arrogante, ó son ellos? Suena ridículo, lo se, pero no voy a tachar esa última oración por que no es tan ridícula como parece. La señora Van Daan y Dussel, mis dos principales acusadores, son conocidos por su carencia de inteligencia y, para decirlo en palabras burdas, ¡simplemente estúpidos! La gente estúpida en general no tolera cuando otros son mejor que ellos mismos; el mejor

Pág. 312.De esto son esos dos tontos, la señora Van Daan y Dussel. La señora Van Daan piensa que soy estúpida por que no sufro este encierro tanto como ella. Piensa que soy molesta por que ella es aún más pedante, piensa que mis vestidos son muy cortos pro que los de ella son aún más cortos, y piensa que soy una sabelotodo por que ella habla el doble que yo sobre temas de los que no tiene idea. Lo mismo con Dussel. Pero uno de mis dichos favoritos es “Donde hay humo, es por que hay fuego”, y admito completamente que soy una sabelotodo.

Lo que es tan complicado sobre impersonalidad es que me critico a mí misma más que nadie; Si mi madre me da un consejo, la pila de sermones se hace tan larga que sufro tan sólo de saber lo que se viene. Luego me retracto y comienzo a contradecir a todos hasta que la antigua y familiar Ana aparece inevitablemente: “¡Nadie me entiende!”

Esta frase es parte mía, y por poco probable que parezca, hay un poco de verdad en ella. A veces estoy tan sumergida en auto reproches que deseo que alguien me brinde una palabra de apoyo para ayudarme a salir de esa situación. Si tan sólo tuviera alguien

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que tomara a mis sentimientos en serio. Como no he encontrado a esa persona aún, la búsqueda debe continuar.

Se que te preguntas por Peter, ¿No es así, Kitty? Es verdad, Peter me ama, no como una novia, pero sí como una amiga. Su cariño crece día adía, pero alguna fuerza misteriosa nos tira para atrás, y no se que es.

A veces pienso que mi terrible deseo por él fue demasiado exagerado. Pero eso no es verdad, por que si no puedo ir a su habitación por uno ó dos días, deseo estar con él tanto como lo hice siempre. Peter es amable y bueno, y aún así no puedo negar que me ha decepcionado en varios aspectos. No me preocupa en particular su desapego con la religión, sus charlas sobre comida ó temas de esa naturaleza. Aún así,

Pág. 313.Creo firmemente que nos atendremos a nuestra promesa de nunca pelear. Peter es pacífico, tolerante y extremadamente indulgente. Me deja que le diga cosas que jamás ha aceptado escuchar de su madre. Él está haciendo un gran esfuerzo por conservar sus asuntos en orden. Aún así, ¿Por qué oculta su verdadero ser interior y no me deja llegar a él? Por supuesto, él es mucho más cerrado que yo, pero se por experiencia propia (aunque siempre e me diga que se todo lo que hay que saber en teoría, pero nada en l práctica) que con el tiempo, incluso las personas más introvertidas terminan deseando tener alguien en quien confiar.

Peter y yo hemos pasado nuestros años de formación en el anexo. A menudo discutimos sobre el futuro, el pasado y el presente, pero como ya te he dicho, extraño las cosas esenciales, ¡y se que existen!

¿Será acaso por que no he estado afuera por tanto tiempo que me he obsesionado con la naturaleza? Recuerdo el tiempo en que el magnífico cielo azul, las aves cantando, y la luna brillando, no me asombraban. Las cosas han cambiado desde que estoy aquí. Una noche durante las festividades del Pentecostés, por ejemplo, cuando hacía mucho calor, me esforcé por quedarme despierta hasta las once y media, para poder ver bien la luna yo sola por una vez. Sin embargo, mi sacrificio fue en vano, dado que había mucho resplandor y no podía arriesgarme a abrir la ventana. En otro caso, varios meses atrás, resulta que estaba arriba una noche cuando la ventana estaba abierta. No volvía a bajar hasta que no llegara la hora en que la ventana tuviera que ser cerrada. La oscuridad, la noche lluviosa, el viento, la nubes que se agolpaban, me hechizaron; Era la primera vez en un año y medio que veía a la noche cara a cara. Tras esa noche, mi deseo de volver a verla fue mayor a mi temor a los ladrones, a las ratas o a las patrullas policiales.

Pág. 314.

Bajé sola la escalera y miré hacia fuera por la ventana de la cocina y de la oficina privada. Mucha gente piensa que la naturaleza es hermosa, mucha gente de vez en cuando duerme bajo el cielo estrellado, y mucha gente en los hospitales y prisiones sueña con el día ñeque serán libres de disfrutar lo que la naturaleza tiene para ofrecerles. Pero pocos están tan aislados y despojados de las maravillas de la naturaleza como nosotros.

No es sólo mi imaginación – mirando las estrellas, las nubes, la luna y el cielo realmente me hace sentir en calma y esperanzada. Es mejor medicina que la valeriana y el bromuro. La naturaleza me hace sentir la humildad, ¡y lista para enfrentar cada avatar con coraje!

Dada mi suerte, sólo puedo – excepto pro unas raras ocasiones - ver la naturaleza a través de cortinas polvorientas y sucias ventanas; eso te quita el placer de la observación ¡La naturaleza es la única cosa para lo que no hay substitutos!

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Una de las cosas que en general me molesta es como las mujeres son, y siempre han sido, consideradas inferiores que los hombres. Fácilmente se pude decir que es injusto, pero eso no es suficiente para mí; ¡realmente quisiera saber la razón para tal injusticia!

Supuestamente, los hombres siempre han dominado a as mujeres por su superioridad física; son los hombres quienes traen el sustento al hogar, retan a sus hijos y hacen lo que quieren…Hasta ahora, las mujeres aceptaron esto con calma, lo cual es estúpido, pro que mientras más se tolere esto, peor será la opresión. Afortunadamente, la educación, el trabajo y el progreso han abierto los ojos de las mujeres. En muchos países, se les ha concedido la igualdad de derechos; mucha gente, en su mayoría mujeres pero también hombre, se dan cuenta ahora de

Pág. 315.Cuan errados estaban al tolerar esa concepción por tanto tiempo ¡Las mujeres modernas quieren tener el derecho de ser completamente independientes!

Pero eso no es todo, ¡las mujeres también deben ser respetadas! EN general, a los hombres e les tiene aprecio en todas partes del mundo, ¿así que por qué las mujeres no deberían ser consideradas de igual modo? Los soldados y héroes de guerra son conmemorados y honrados, a los exploradores se les garantiza la fama eterna, los mártires son reverenciados, ¿pero cuanta gente admirada a las mujeres como a los soldados?

Al leer el libro, el Hombre en contra de la Muerte, me sorprendí al saber que tan sólo en el parto, las mujeres sufren más dolor, malestar y miseria que el que cualquier héroe de guerra alguna vez sentirá ¿Y cuál es su premio por soportar tal dolor? Se la deja de lado cuando su cuerpo queda desfigurado pro el parto, sus hijos pronto la dejan y su belleza pronto desaparece. Las mujeres, aquellas que sufren para asegurar la continuidad de la especie humana, ¡son todas juntas más fuertes y valientes que todos aquellos héroes libertadores juntos!

No quiero decir con esto que las mujeres deben dejar de tener hijos; por el contrario, así lo decidió la naturaleza, y así debe ser. Lo que condeno es nuestro sistema de valores y que los hombres no valoren cuan maravilloso, difícil pero bello en última instancia es el rol de la mujer en la sociedad.

Estoy completamente de acuerdo con Paul de Kruif, el autor de este libro, cuando dice que los hombres deben pensar aprender que el tener hijos ya no es considerado algo inevitable en los países civilizados. Es fácil hablar para los hombres - ¡ellos nunca tendrán que soportar las cargas que las mujeres soportan!

Creo que en el transcurso del próximo siglo, la noción de que es el deber de la mujer tener hijos, cambiará y dará lugar al respeto y la admiración de todas

Pág. 316.Las mujeres, ¡quienes soportan cargas sin quejarse!Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 16 de junio, 1944.Queridísima Kitty,

Nuevos problemas: La paciencia de la señora Van Daan se acabó. Habla de darse un disparo, de ir a prisión, de ser colgada y de suicidarse. Está celosa de que Peter confié en mí y no en ella, ofendida por que Dussel no responde adecuadamente a sus coqueteos, y con temor a que su marido se gaste todo el dinero de los tapados de piel en tabaco. Ella discute, maldice, llora, se lamenta de si misma, ríe y todo comienza otra vez.

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¿Qué puede uno hacer con tal espécimen humano? Nadie la toma en serio, no tiene nada de carácter, se queja de todos y de todo, y deberías verla como camina por la casa: von hinten Lyzeum, von vorne Museum * (* Actúa como una colegiala, parece una vieja anticuada). Lo que es peor, Peter se está volviendo insolente, el señor Van Daan intolerable y mi madre cínica ¡Sí, todos están alterados! Sólo hay una regla que debes recordar: ¡ríete de todo y olvida todo lo demás! Suena egoísta, pero es la única cura para aquellos que sufren de lástima de sí mismos.

Se supone que el señor Kugler debe pasar cuatro semanas en Alkmaar en un servicio de trabajo. Está tratando de evitarlo con un certificado médico y otro de Opetka. El señor Kleiman espera que la operación de su estómago sea pronto. Desde ayer a las once de la noche, todos los teléfonos privados fueron sacados de servicio.Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 317.Viernes, 23 de junio, 1944.Queridísima Kitty,

Nada nuevo por aquí. Los británicos han comenzado su masivo ataque en Cherbourg. Según Pim y la señora Van Daan, con toda seguridad seremos liberados antes del 10 de octubre. Los rusos van a formar parte de la ofensiva; ayer comenzaron su ataque cerca de Vitebsk, exactamente tres años después del día en que los alemanes invadieron Rusia.

El ánimo de Bep está por el piso. Casi no nos quedan patatas; de ahora en adelante, contaremos cuantas quedan para cada persona, y así cada uno podrá hacer lo que quiera con ellas. Desde este lunes, Miep se tomará una semana de vacaciones. El doctor del señor Kleiman no ha encontrado nada en los rayos x. él no se decide entre operarse ó dejar que sus problemas sigan su curso de acción. Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 27 de junio, 1944.Mi queridísima Kitty,

Los ánimos han cambiado, todo va maravillosamente bien. Cherbourg, Vitebsk, y Zhlobin han caído hoy. Han capturado muchos equipos y hombres. Los generales alemanes fueron asesinados cerca de Cherbourg y dos fueron tomados como prisioneros. Ahora que tienen un puerto, los británicos pueden traer lo que quieran a la costa. Tres semanas después de la invasión, todo el Cayetin ha sido capturado, ¡que hazaña!

En las tres semanas desde el día D, no ha habido un solo día sin lluvia y tormentas, ni aquí ni en Francia, pero esta mala suerte no ha impedido a los británicos y americanos que desplieguen todo su poder ¡Y como lo han hecho! Por supuesto, los alemanes han desplegado su arma secreta, pero

Pág. 318.Un lanza llamas pequeñito como ese difícilmente obtenga resultados, excepto quizás algún daño menor en Inglaterra y noticias alarmante en el periódico Kraut. De todos modos, cuando en “Krautalandia” se den cuenta de que los bolcheviques realmente se están acercando, temblarán de pies a cabeza.

Todas las mujeres alemanas que no están trabajando para el ejército están siendo evacuadas, junto con sus niños, de la región costera a las provincias de Groningen, Friesland, y Gerderland. Mussert * (* líder del Partido Nacional Socialista Holandés – Nazi) ha anunciado que si la invasión llega a Holanda,

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El se unirá a las tropas ¿Acaso ese gordo cerdo está planeando combatir? Podría haber hecho eso en Rusia largo tiempo atrás. Finlandia rechazó una oferta de paz un tiempo atrás, y ahora las negociaciones se han terminado nuevamente ¡Ya se arrepentirán esos idiotas!

¿Cuánto progreso crees que habremos hecho para el 27 de julio?Tuya, Ana M. Frank.

Viernes, 30 de junio, 1944.Queridísima Kitty,Bad weather from one at a stretch to the thirty June. (Ingles de Ana) ¿No lo dije bien? Ay, si, ya se un poquito de inglés; para comprobarlo estoy leyendo Un marido ideal, ¡con ayuda de un diccionario! La guerra va de maravillas: Bobruysk, Mogilev y Orsha han caído, hay muchos prisioneros.

Todo anda bien pro aquí. Los ánimos están mejorando, nuestro súper optimismo ha triunfado, los Van Daan han estado tomando azúcar a escondidas, Bep ha arreglado distinto su pelo, y Miep tiene una semana libre ¡Esas son las últimas noticias!

Me han hecho un horroroso tratamiento de conducto enano de mis dientes frontales. Ha sido terriblemente doloroso. Fue tan duro

Pág. 319.Que Dussel creyó que me iba a desmayar, y casi lo hice ¡A la señora Van Daan también le duele un diente!Tuya, Ana M. Frank.

PD: Hemos escuchado de Basel que Bernd* (* Primo Bernardo Elías) actuó en el rol de camarero en la obra Minna von Barnhelm. Él tiene “dotes artísticos”, según mi madre.

Jueves, 6 de julio, 1944.Queridísima Kitty;

Se me enfría la sangre cuando Peter habla de convertirse en un criminal ó en un especulador; por supuesto, lo dice en broma, pero aún tengo la sensación de que él tiene miedo de sus propias inseguridades. Margot y Peter siempre me dicen, “Si tuviera tu ímpetu y tu fuerza, si tuviera tu energía y determinación, yo podría….!”

¿Es realmente tan admirable el no dejarme influenciar por otros? ¿Hago lo correcto al seguir mi propia conciencia?

Para ser honestos, no me imagino como alguien puede admitir que es débil y quedarse de ese modo. Si sabes eso de ti mismo, ¿por qué no luchar para combatirlo, por qué no desarrollar tu propio temperamento? Sus respuestas siempre han sido: “¡Por que es más fácil no hacerlo!” Esta respuesta me desalienta ¿Fácil? ¿Eso significa que una vida de engaños y vagancia es fácil también? Ay, no, eso no puede ser verdad. No puede ser cierto que la gente sea tan fácilmente tentada por lo que es fácil… y por el dinero. He pensado mucho en cuál debería ser mi respuesta, sobre cómo debo hacer para que Peter crea en sí mismo y, por sobre todas las cosas, para cambiarlo para mejor. Pero no se si estoy en el camino indicado. A menudo imagino cuan agradable sería si alguien

Pág. 320. Me confiara todo a mí. Pero ahora que he llegado a eso, me he dado cuenta de lo difícil que es ponerte en piel del otro y darle una respuesta correcta. Especialmente dado que “fácil” y “dinero” son conceptos nuevos y totalmente extraños para mí.

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Peter ha comenzado apoyarse en mí y no quiero eso, bajo ninguna circunstancia. Ya es difícil mantenerme a mí misma sobremos dos pies, y es aún más difícil cuando tienes que mantenerte fiel a tu propia alma y carácter.

Me he pasado días enteros buscando un antídoto para esa terrible palabra, “fácil” ¿Cómo puedo hacerle ver que, aunque parezca fácil y maravilloso, esta actitud lo llevará hasta un lugar en el cual ya no tendrá amigos, apoyo ó belleza, tan profundo en las penumbras que quizás nunca vuelva a salir a la superficie?

Todos estamos vivos, pero no sabemos por qué ó para qué; todos buscamos la felicidad; todos tenemos vidas que son distintas e iguales ala vez. Los tres hemos sido criados en buenas familias, hemos tenido la oportunidad de recibir educación y convertirnos en personas de bien. Tenemos muchas razones para ansiar la felicidad, pero… debemos ganárnosla. Y eso es algo que no logras eligiendo la vía fácil. Ganar la felicidad significa hacer el bien y trabajar, no especular y ser haragán. La vagancia puede lucir tentadora, pero sólo el trabajo brinda verdadera satisfacción.

No puedo entender ala gente que no quiere trabajar, pero ese no es el problema de Peter. Él simplemente no tiene un objetivo, además cree que es demasiado estúpido e inferior para lograr algo alguna vez. Pobre chico, nunca ha sabido lo que es hacer a otro feliz, y me temo que no puedo enseñárselo. Él no es religioso, se burla de Jesucristo y toma el nombre del señor en vano, y aunque yo tampoco soy ortodoxa,

Pág. 321.Me duele verlo tan solo, abandona y abatido.

La gente que es religiosa debería estar contenta, dado que no todos han sido bendecidos con la habilidad de creer en un ser superior. Ni siquiera tiene que vivir con temor al eterno castigo; los conceptos de purgatorio, cielo e infierno son muy difíciles de aceptar para algunos, y aún así la religión, sea cual fuere, mantiene a las personas en el camino correcto. No por temor a Dios, sino por atenerte a tu propio sentido de honor y hacer caso a tu conciencia. Cuan noble y bueno podría ser cada uno si, al final de cada día, revisaran sus actitudes del día y diferenciaran el bien del mal. Automáticamente tratarían de ser mejores al día siguiente y, tras un tiempo, habrían logrado maravillas. Todos son bienvenidos a tomar esta posición; no cuesta nada y es definitivamente útil. Aquellos que no lo saben tendrán que descubrir por experiencia propia que “una conciencia en paz te da fuerzas”.Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 8 de julio, 1944.Queridísima Kitty,

El señor Broks estaba en Beverwijk y logró obtener frutillas en le remate de productores. Llegaron aquí sucias y llenas de arena, peor en gran cantidad. No menos de 24 cajones para el anexo y la oficina. Esa misma noche hicimos ocho jarras de mermelada. A la mañana siguiente, Miep comenzó a hacer mermelada para la oficina.

A las doce y media la puerta de entrada estaba cerrada, los cajones fueron metidos en la cocina, y Peter, mi padre y el señor Van Daan los subieron. Ana tomó agua caliente del calentador, Margot tomó un cubo, ¡y manos a la obra! Con una sensación rara en el estómago, entré a

Pág. 322.La cocina de la oficina. Miep, Bep, el señor Kleiman, Jan, mi padre, y Peter: El contingente del anexo y los cuerpos de abastecimientos trabajando juntos, ¡y a la mitad del día! Ventanas y cortinas abiertas, sonido de voces, puertas golpeándose – temblaba de emoción. No dejaba de pensar, “¿realmente estamos escondiéndonos?” Así es como

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se debe sentir cuando finalmente puedes volver a salir al mundo. La sartén estaba llena, así que subí las escaleras, donde el resto de la familia estaba pelando frutillas sobre la mesa de la cocina. Al menos eso se suponía que debían estar haciendo, pero iba más a sus bocas que a las cubetas. Y otra cubeta iba a ser necesitada pronto. Peter volvió a bajar, pero el timbre sonó dos veces. Dejando la cubeta donde estaba, Peter corrió hacia arriba y cerró el estante de libros detrás de él. Nos sentamos temblando impacientemente; las frutillas estaban esperando para ser lavadas, pero nos atuvimos a las reglas de la casa: “Nada de agua corriendo cuando hay extraños abajo – podrían escuchar el drenaje”.

Jan subió a la una para decirnos que había sido el hombre del correo. Peter se apresuró a bajar nuevamente. Ding-dong…el timbre nuevamente. Escuché para ver si alguien venía, parándome primero junto a la biblioteca, luego al pie de la escalera. Finalmente Peter y yo nos recostamos sobre la baranda, agudizando nuestro oído como dos ladrones para ver que estaba sucediendo abajo. Ninguna voz desconocida. Peter fue en puntitas de pie hasta la mitad de la escalera y llamó, “¡Bep!”, y una vez más, “¡Bep!” pero su voz se perdía por la rendija de la cocina. Entonces bajó a la cocina y yo me quedé, nerviosa, observando desde arriba.

“Sube de una vez, Peter, el contador está aquí, ¡debes marcharte!” Era la voz del señor Kugler. Sigilosamente, Peter subió y cerró la biblioteca.

El señor Kugler finamente subió ala una y media. “Dios mío, todo el mundo esta comiendo frutillas. Como

Pág. 323.Frutillas en el desayuno, Jan las come en el almuerzo, Kleiman las come en la merienda, Miep las hierve, Bep las pela yo puedo olerlas en cada lugar al que voy. Vine aquí arriba para deshacerme de toda esa gran cantidad de rojo, ¿y con qué me encuentro? ¡Gente lavando frutillas!”

El resto de las frutillas fueron puestas en conserva. Esa noche dos jarras se abrieron así que mi padre hizo mermelada con las frutillas que había allí. A la mañana siguiente se abrieron dos más y a la tarde otros cuatro. El señor Van Daan no había dejado que los jarros se calentaran lo suficiente cuando estaba esterilizándolos, así que mi padre terminó haciendo mermelada cada noche. Comimos cereal caliente con frutillas, pan con frutillas, frutillas de postre, frutillas con azúcar, frutillas con arena…Durante dos días no comimos nada más que frutillas, frutillas, frutillas, y hasta que nuestra ración se acabó ó fue puesta en conserva y guardada bajo llave.

“Ey, Ana”, me llamó Margot un día, “La señora Van Hoeven nos ha dejado algunos frijoles, ¡veinte libras!”

“Que agradable de su parte”, respondí. Y verdaderamente lo era, pero dan tanto trabajo…. ¡uff!

“El sábado, todos tiene que pelar frijoles”, anunció mi madre en la mesa.Dicho y hecho, esta mañana después el desayuno, nuestra cacerola más grande

apareció sobre la mesa, llena hasta el tope con frijoles. Si piensas que pelar frijoles es un trabajo aburrido, trata de pelar las capas más internas. No creo que mucha gente se de cuenta de que una vez que pelas el frijol, su interior es suave, delicioso y rico en vitaminas. Pero una ventaja aún mayor es que puedes comer hasta tres veces más cuando lo separas que cuando comes simplemente el frijol.

Pelar completamente un frijol es un trabajo preciso y meticuloso que puede ser ideal para dentistas pedantes ó meticulosos expertos en especias,

Pág. 324.

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Pero es un horror para una impaciente adolescente como yo. Comenzamos la labor a las nueve y media; me senté a las diez y media, me volví a levantar a las once, me volvía sentar a las once y media. En mis orejas retumbaba el siguiente cantito: corta la punta, pela el interior, saca los desechos, pon el frijol en la sartén, etc., etc. Mi s ojos nadaban: verde, verde, podrido, verde, verde. Para luchar contra el aburrimiento y tener algo que hacer, hablé durante toda la mañana, diciendo lo que fuera que viniera a mi cabeza, haciendo reír a todos. La monotonía estaba matándome. Cada capa que pelaba me hacía darme cuenta con toda certeza que nunca, pero nunca, ¡seré un ama de casa!

A las doce finalmente comimos el desayuno, pero desde las doce y media hasta la una y cuarto tuvimos que volver a pelar frijoles. Cuando dejé de hacerlo, tenía el estómago un poco revuelto, y así también los otros. Dormí la siesta hasta las cuatro, aún mareada por esos malolientes frijoles.Tuya, Ana M. Frank.

Sábado, 15 de julio, 1944.

Queridísima Kitty, Recibimos un libro de la biblioteca con el controversial título “¿Qué piensas de las

niñas modernas?” Quisiera discutir este tema hoy.El escritor critica a la “juventud actual” de pies a cabeza, aunque no considera que

todos sean “casos perdidos”. Por el contrario, cree que tienen la capacidad de construir un mejor y más maravilloso mundo, pero que se ocupan de cosas superficiales, sin darle importancia a la verdadera belleza.

En algunos pasajes tuve la fuerte sensación de que el escritor dirigía sus críticas a mí, por lo cual quiero finalmente desnudar mi alma y defenderme de este ataque.

Pág. 325.Tengo una gran característica personal que debe ser obvia para todo el que me ha conocido por un buen período de tiempo: tengo un gran conocimiento de mi misma. En todo lo que hago, puedo verme a mí misma como si fuera una extraña. Pude pararme a un lado de la Ana de todos los días, y sin excusas ni condicionamientos, ver que hace de bueno y que de malo. Esta auto conciencia nunca me deja, y cada vez que abro mi boca, pienso, “Deberías haber dicho eso de otro modo”, ó “Eso está bien como lo dijiste”. Me condeno a mi misma de tantos modos que comienzo a darme cuenta de la verdad sobre el adagio de mi padre: “Cada niño tiene que criarse a si mismo”. Los padres sólo pueden dar consejos ó indicarles el camino correcto a los hijos. Pero en última instancia, cada persona crea su propio carácter. A su vez, enfrento la vida con mucha valentía. Me siento tan fuerte y capaz de soportar cargas, ¡tan joven y libre! Cuando me di cuenta de esto por primera vez, me puse contenta por que significa que puedo tolerar más fácilmente los malos momentos que la vida me tenga preparados.

Pero suelo habar de este tema muy a menudo. Ahora me gustaría comenzar con el capítulo “Mi padre y mi madre no me entienden”. Mis padres siempre me han malcriado, tratado amablemente, defendido de los Van Daan y han todo lo que los padres pueden. Y aún así gran parte del tiempo me he sentido sola, dejada de lado, abandonada e incomprendida. Mi padre hizo todo lo que pudo para moldear mi espíritu rebelde, pero no hubo caso. Me he curado a mi misma conteniendo mi comportamiento y analizando que había hecho mal.

¿Por qué mi padre no me apoyó en mi lucha? ¿Por qué se quedó a medio camino cuando trató de ofrecerme ayuda? La respuesta: Usó los métodos incorrectos. Siempre me habló como si fuera una niña atravesando una fase problemática. Parece ridículo,

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dado que mi padre ha sido el único que me ha hecho sentir un poco de confianza y me ha tratado como

Pág. 326.A una persona racional. Pero pasó por alto una cosa: no se dio cuenta de que esta lucha para superar mis dificultades era más importante para mí que cualquier otra cosa. No quiero escuchar sobre “típicos problemas de adolescentes”, ó “otras niñas”, ó “ya madurarás”. No quería ser tratada como todas las otras niñas, pero Pim no lo entendió. Además, no puedo confiar en nadie a menos que ellos me cuenten todo sobre si mismos, y como se muy poco de él, no podemos avanzar hacia una relación más intima. Pim siempre actúa como el padre mayor que alguna vez tuvo los mismos impulsos, pero quien ya no puede relacionarse conmigo como amigo, sin importar cuanto lo intente. Como resultado, nunca he compartido mi visión de la vida ni mis teorías con nadie más que con mi diario y, de vez en cuando, con Margot. He escondido todo sobre mi frente a mi padre, nunca compartí mis ideales con él, deliberadamente me alejé de él.

No podría haberlo hecho de otro modo. Me dejo llevar enteramente por mis sentimientos. Es egoísta, pero he hecho lo que era mejor para mi propia paz interior. Perdería eso y la auto confianza que tanto he trabajo en conseguir si fuera expuesta a críticas a mitad de camino. Puede sonar obstinado, pero tampoco puedo aceptar críticas de Pim, no sólo por que nunca comparte mis sentimientos más profundos con él, sino también por que lo he alejado aún más de mí siendo irritable.

Este es el punto en el que pienso más a menudo: ¿Por qué será que Pim me molesta tanto a veces? Prácticamente no puedo tolerar que me de clases, y su cariño parece forzado. Quiero que me dejen sola, ¡y preferiría que me dejara de hablar por un tiempo hasta que esté más segura de mí misma cuando me dirijo a él! Todavía me carcome la culpa por la maliciosa carta que le escribí cuando estaba tan enojada ¡Ay, es tan difícil ser fuerte y valiente!

Pág. 327.. . .

Aún así, esta no ha sido mi mayor desilusión. No, pienso en Peter mucho más de lo que pienso en mi padre. Se muy bien que él es mi conquista, y no al revés. He creado una imagen de él en mi mente, lo imaginé como un chico tranquilo, dulce, sensato, ¡que buscaba desesperadamente la amistad y el amor! Necesitaba largar lo que había en mi corazón a un ser humano. Quería encontrar un amigo que me hiciera volver a encontrar el camino. Logré lo que me propuse y lentamente pero a paso seguro, lo atraje hacia mí. Cuando finalmente logré que fuera mi amigo, automáticamente se desarrolló una intimidad que, cuando me pongo a pensar, parece indignante. Hablamos de las cosas mas privadas, pero aún no hemos tocado los temas más cercanos a mi corazón. Aún no puedo descifrar a Peter ¿Es superficial, ó es su timidez la que lo reprime, incluso con migo? Pero dejando todo esto de lado, cometí un error: usé la intimidad para acercarme a él, y al hacerlo, cancelé otras formas de amistad. Él desea ser amado, y me he dado cuenta de que él ha comenzado a quererme cada día más. Nuestro tiempo juntos lo deja satisfecho, pero a mí me hace querer empezar todo de vuelta. Nunca saco los temas que deseo tratar con él. Forcé a Peter, más de lo que él se da cuenta, y ahora él espera aún más de mí. Realmente no encuentro el modo efectivo de sacudirlo y hacerlo volver a pararse sobre sus pies y no depender de mí. Rápidamente me di cuenta que él nunca podría tener un espíritu como el mío, pero igualmente intenté librarlo de su acotado mundo y expandir sus jóvenes horizontes.

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“En lo más profundo de sur, los jóvenes están más solos que los viejos”. Leí esto en un libro en algún lado y quedó grabado en mi mente. Hasta donde yo se, es verdad.

Pág. 328.Entonces si tu pregunta es si es más difícil para los adultos estar aquí que para los niños, la respuesta es no, definitivamente no. Los mayores ya tienen una opinión sobre todo y están seguros de si mismos y sus acciones. Es doblemente más difícil para nosotros lo jóvenes atenernos a nuestras opiniones en un momento en que los ideales están siendo destruidos, cuando la peor faceta de la naturaleza humana predomina, cuando todos dudan de la verdad, la justicia y Dios.

Cualquiera que asegura que los mayores la pasan peor dentro del anexo no se da cuenta de que los problemas tienen un impacto mucho mayor en nosotros. Somos muy jóvenes par alinear con estos problemas, pero siguen cayendo sobre nosotros hasta que, finalmente, somos forzados a pensar en una solución, aunque la mayoría de las veces nuestras soluciones sucumben cuando se encuentran frente a la realidad. Es difícil en tiempos como estos: ideales, sueños y añoradas esperanzas crecen entre nosotros, sólo para ser eclipsadas por la triste realidad. Es un misterio que no haya abandonado mis ideales, ya que parecen tan absurdos y poco prácticos. Aún así me aferro a ellos por que aún creo, a pesar de todo, que la gente es verdaderamente buena en su corazón.

Es totalmente imposible para mí crear mi vida en un clima de caos total, sufrimiento y muerte. Veo al mundo siendo lentamente transformado en una selva, escucho el trueno acercándose que, un día, nos destruirá a todos; presiento el sufrimiento de millones. Y aún así, cuando miro al cielo, de algún modo siento que todo cambiará para mejor, de que esta crueldad también terminará, que la paz y la tranquilidad volverán nuevamente. Mientras tanto, debo apegarme a mis ideales ¡Quizás llegue el día en que pueda hacerlos realidad!Tuya, Ana M. Frank.

Pág. 329.Viernes, 21 de julio, 1944.Queridísima Kitty,

Finalmente me estoy volviendo optimista ¡Las cosas van muy bien! ¡Realmente es así! ¡Grandes noticias! Un intento de asesinato a Hitler ha sido realizado, y esta vez no por judíos comunistas ó ingleses capitalistas, sino por un general alemán que no es sólo un conde, sino que también es joven. El Führer le debe su vida a la “Divina Providencia”: escapó, desafortunadamente, con sólo unas pocas quemaduras y rasguños. Algunos oficiales y generales que estaban en el lugar fueron asesinados ó heridos. El jefe de la conspiración ha sido asesinado.

Esta es la mayor prueba que hemos tenido hasta ahora de que muchos oficiales y generales están cansados de la guerra y quisiera ver a Hitler hundido en el infierno, para poder establecer una dictadura militar, hacer la paz con los Aliados, rearmarse y , tras unas pocas décadas, comenzar una nueva guerra. Quizás la Providencia haya evitado deliberadamente la muerte de Hitler, dado que es mucho más fácil y barato para los Aliados, dejar que los alemanes se maten entre ellos. Sería menos trabajo para los rusos y británicos, y les permitiría comenzar a reconstruir sus ciudades más rápidamente. Pero no hemos llegado a ese punto aún, y odiaría anticipar el glorioso evento. Aún así, probablemente notes que te estoy diciendo la verdad, toda la verdad, y nada más que la verdad. Por una vez, no estoy abrumándote con mis grandes expectativas.

Lo que es más, Hitler ha sido tan amable de anunciar a su leal y devota gente que a partir de hoy, todo el personal militar trabajará bajo las ordenes de la GESTAPO, y que cualquier soldado que cualquier soldado que supiera que uno de sus superiores estaba

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involucrado en este intento cobarde de atacar la vida del Führer debe dispararle apenas lo vea.

Eso sí que será una buena trampa. Los pies del pequeño Johnny

Pág. 330.Están adoloridos tras una larga marcha y su comandante en jefe lo regaña. Johnny agarra su rifle, y grita, “Tu, tu has tratado de matar al Führer ¡Toma esto!” Un disparo y el arrogante oficial que se atrevió a reprimirlo pasa a la vida eterna (¿o a la terna muerte?). Eventualmente, cada vez que un oficial vea a un soldado ó le de una orden, estará prácticamente mojando sus pantalones aterrorizado, por que el soldado tendrá más poder que él.

¿Pudiste seguirme, ó acaso volvía cambiar de tema repentinamente? No puedo evitarlo, ¡la idea de poder volver al colegio en octubre me hace tan feliz que no puedo pensar con claridad! Ay, mi querida, ¿No acabo de decirte que no quiero anticiparme a los hechos? Perdóname, Kitty, ¡no me consideran un manojo de contradicciones por nada!Tuya, Ana M. Frank.

Martes, 1 de agosto, 1944.Queridísima Kitty,

“Un manojo de contradicciones” fue el final de mi carta previa y el comienzo d esta ¿Puedes por favor explicarme exactamente qué significa “un manojo de contradicciones”? Como muchas otras palabras, puede ser interpretada de dos modos: una contradicción impuesta desde afuera ó desde adentro. La primera significa no aceptar la opinión de otras personas, sentir que siempre se sabe más, tener la última palabra; en breve, todas esas actitudes desagradables por las que se me conoce. La última, por la cual no se me conoce, es mi propio secreto.

Como te he dicho muchas veces, estoy dividida en dos. Un lado de mí contiene mi exuberante simpatía, mi alegría de vivir y, por sobre todo, mi habilidad par apreciar el lado bueno de las cosas. Con esto me refiero a que no encuentro nada malo en coquetear, besar, abrazar y hacer bromas.

Pág. 331.Este lado de mí en general está a la espera de poder atacar a mi otro lado, el cual es más puro, profundo y preciso. Nadie conoce el mejor lado de Ana, y por eso es que muchas personas no me toleran. Ay, puedo ser un divertido payaso durante una tarde, pero después de eso, nadie quiere verme por un mes. De hecho, soy lo que una película romántica es para un profundo pensador – una mera diversión, un interludio cómico, algo que es prontamente olvidado: no malo, pero tampoco particularmente bueno. Odio tener que decirte esto, ¿pero por qué no admitirlo cuando se que es verdad? Mi lado más superficial siempre opacará a mi lado más profundo. No puedes imaginarte cuantas veces he tratado de dejar de lado a esta Ana – vencerla, esconderla. Peor no funciona, y yo se por que.

Tengo miedo de que la gente que me conoce como habitualmente soy descubra que tengo otra faceta, una mejor y más refinada. Tengo miedo de que se burlen de mí, piensen que soy ridícula y sentimental y no me tomen en serio. Estoy acostumbrada a que no se me tome en serio, pero sólo mi lado superficial está acostumbrado a ello y puedo tolerarlo; la Ana más profunda es muy débil. Si fuerzo a esta Ana a exponerse por más de quince minutos, se cierra completamente en sí misma y deja que la Ana número uno haga todo el trabajo. Sin que me de cuenta, ella desaparece.

Por lo que la Ana agradable nunca es vista en compañía. Nunca ha hecho una aparición en público, aunque siempre toma la delantera cuando estoy sola. Se

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exactamente como me gustaría ser, como soy… por dentro. Pero desafortunadamente sólo soy así conmigo misma. Y quizás esa es la razón por la cual – no, estoy segura de que esa es la razón- por la cual la gente cree que soy feliz sólo exteriormente y yo me considero feliz internamente. Me guío por la Ana más profunda, pero

Pág. 332.Por fuera no soy más que una cabra juguetona tirando de la cuerda que la amarra.

Como te he dicho, lo que digo no es lo que siento, por lo cual tengo una reputación de ser enamoradiza y sabelotodo, de coquetear y leer historias de romances. La alegre Ana ríe, brinda respuestas graciosas, se encoje de hombros y pretende que nada le importa. La Ana más calmada reacciona del modo opuesto. Si soy completamente honesta, tengo que admitir que sí me afecta, que realmente trato de cambiar, pero que siempre me enfrento a un enemigo más poderoso que yo.

Una voz dentro de mí se lamenta, “Ves, en eso te has convertido. Estas rodeada de opiniones negativas, miradas que reprochan, rostros burlones y gente a la que no le agradas, y todo por que no escuchas los consejos de tu lado positivo.”Créeme, me gustaría escuchar, pero no resulta, por que si estoy calmada y seria, todos creen que estoy montando una escenita y tengo que remontar la situación con una broma. Y luego, mi propia familia, la cual asume que debo estar enferma, me llenan de aspirinas y sedantes, chequean que no tenga fiebre, me preguntan como esta mi intestino y me regañan por estar de mal humor, hasta que no puedo tolerarlo más, por que cuando todos me están encima, me enojo, luego me entristezco, y finalmente termino ocultando mis sentimientos, dejando salir el lado negativo y ocultando el positivo, y sigo buscando un modo de convertirme en quien me gustaría ser y en quien podría ser si… si tan solo no hubiera otra gente en el mundo.Tuya, Ana M. Frank.

El diario de Ana concluye aquí.Pág. 332.

Comentarios finales.

En la mañana del 4 de agosto de 1944, en algún momento entre las diez y las diez y media, un auto estacionó en el número 263 de la calle Prinsengracht. Siete figuras emergieron: un sargento de las SS, Kart Josef Silberbauer, de uniforme, y al menos tres miembros holandeses de la policía de seguridad, armados pero con ropa de civiles. Alguien debe haberlos contactado.

Arrestaron alas ocho personas que se escondían en el Anexo, y a dos de sus ayudantes, Victor Kugler y Johannes Kleiman – pero no se llevaron a Miep Gies ni a Elisabeth (Bep) Voskujil – y se levaron todo el dinero y las cosas de valor que encontraron en el anexo.

Tras el arresto, Kugler y Kleiman fueron llevados a una prisión en Ámsterdam. El 11 de septiembre de 1944, fueron transferidos, sin pasar por un juicio justo, a u campamento en Amersfoort, Holanda. Kleiman, debido a su delicado estado de salud, fue liberado el 18 de septiembre de 1944. Permaneció en Ámsterdam hasta el día de su muerte en 1959.

Kugler logró escapar de su encierro el 28 de marzo de 1945,, cuando él y los demás presos eran trasladados hacia Alemania a realizar trabajos forzados. Emigró a Canadá en 1955 y murió en Toronto en 1989.

Elisabeth (Bep) Voskujil Wijk murió en Ámsterdam en 1983.Miep Santrouschitz Gies aún vive en Ámsterdam; su esposo Jan murió en 1993.

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Tras su arresto, los ocho residentes del anexo fueron primero llevados a una prisión en Ámsterdam y luego

Pág. 334.Fueron transferidos a Westerbork, un campamento de tránsito para judíos en el

norte de Holanda. Fueron deportados el 3 de septiembre de 1944, en el último transporte que salió de Westerbork, y llegaron tres días después a Auschwitz, Polonia.

Hermann van Pels (Van Daan), según el testimonio de Otto Frank, asesinado en una cámara de gas en Auschwitz en octubre ó noviembre de 1944, poco antes de que las cámaras de gas fueran desmanteladas.

Auguste van Pels (Petronella van Daan) fue transportada de Auschwitz a Bergen-Belsen, y desde allí a Buchenwald, luego a Theresienstadt el 9 de abril de 1945, y aparentemente después fue trasladada a otro campo de concentración. Se sabe que no sobrevivió, aunque el día de su muerte aún se desconoce.

Peter van Pels (van Daan) fue forzado a participar de la “marcha de la muerte” el 16 de junio de 1945desde Auschwitz hacia Mauthausen, Austria, donde murió el 5 de mayo de 1945, tres días antes de que el campo fuera liberado.

Fritz Pfeffer (Albert Dussel) murio el 20 de diciembre de 1944, en el campo de concentración de Neuengamme, a donde se lo había transferido desde Buchenwald ó Sachsenhausen.

Edith Frank murió en Auschwitz-Birkenau el 6 de enero de 1944, de hambre y cansancio.

Margot Y Ana Frank fueron transportadas desde Auschwitz a fines de octubre y llevadas a Bergen-Belsen, un campo de concentración cerca de Hannover, Alemania. La epidemia de tifus que se desató en el invierno de 1944-1945, como resultado de horrendas condiciones higiénicas, mató a miles de prisioneros, incluyendo a Margot y, unos días después, a Ana. Ella debe haber muerto a fines de febrero ó principios de marzo. Los cuerpos de ambas niñas fueron probablemente enterrados en las tumbas masivas de Bergen-Belsen. El campo fue liberado por tropas británicas el 12 de abril de 1945.

Pág. 335.Otto Frank fue el único de los ocho que sobrevivió a los campos de concentración.

Una vez que Auschwitz fue liberado por tropas rusas, él fue repatriado a Ámsterdam y llevado a través de Odessa y Marseille. Llegó a Ámsterdam el 3 de junio de 1945, y permaneció allí hasta 1953, cuando se mudó a Basel, Suiza, donde vivieron su hermana, su familia, y luego su hermano. Se casó con Elfriede Markovitz Geringer, de Viena, quién había sobrevivo a los campos de concentración de Auschwitz y había perdido a su esposo e hijo en Mauthasen. Hasta su muerte el 19 de agosto de 1980, Otto Frank continuó viviendo en Birsfelden, en las afueras de Basel, donde se dedicó a transmitir el mensaje del diario de su hija a personas de todo el mundo.

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