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8/17/2019 Etica a Nicómaco, Libro I, Cristóbal Videla-Hintze
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
ARISTOTELES
ÉTICA A NIC!ACO Libro I
Trad"cción # comentarios
Cristóbal Videla-Hintze
Santia$o de C%ile, !a#o de &'()
1
8/17/2019 Etica a Nicómaco, Libro I, Cristóbal Videla-Hintze
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
*ndiceCa+t"los Libro I
( Todas las acti.idades %"manas +arecen tender a "n /in
& La ciencia de lo b"eno # e0celente en el ser %"mano es la ciencia +oltica
1 El m2todo de la ciencia +oltica3 sobre la +recisión # la edad de los est"diantes
4 La /elicidad es el bien s"+remo 5"e b"sca el ser %"mano
6 Sobre el bien # la /elicidad - los tres modos +osibles +ara .i.ir n"estra .ida
) 7i/erencia entre la .isión /ilosó/ica de la idea del bien de 8latón # de Aristóteles
9 Hi+ótesis: %a# "na relación entre la /"nción es+ec/ica del ser %"mano # la /elicidad
; Las o+iniones corrientes acerca de la /elicidad # n"estra e0+licación
bito o es en.iada +or losdioses o +or el azar?
(' =8odramos ser /elices antes de morir?
(( =La /elicidad de los .i.os a/ecta a la de los m"ertos?
(& La .irt"d es elo$iable, +ero la /elicidad est> m>s all> de los elo$ios
(1 La e0+loración del alma # la consec"ente di.isión de las .irt"des encond"ct"ales e intelect"ales
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
( Todas las acti.idades %"manas +arecen tender a "n /in
Todas las técnicas y todas las ciencias, del mismo modo que todas las acciones y todas
las deliberaciones políticas, parecen tender a algún bien; por esto se ha afirmado
correctamente que el bien es aquello a lo que todo tiende. (1)
1094a1
ero es patente cierta diferencia entre los fines perseguidos por estas acti!idades, pues
algunos son acti!idades y otros, en parte acti!idades, en parte ciertas obras; cuando hay
obras adem"s de las acti!idades, son por naturale#a preferibles las obras a las
acti!idades. ($)
5
ues bien, como hay muchas acti!idades, técnicas y ciencias, resultan también muchos
los fines% en efecto, el fin de la medicina es la salud; el de la construcci&n na!al, el
barco; el de la estrategia, la !ictoria; el de la economía, la rique#a. (')
ero algunas de estas acti!idades est"n subordinadas a una principal, por eemplo, la
talabartería, esto es, la técnica de fabricar frenos y todo lo dem"s concerniente al arreo
de los caballos, est" subordinada a la técnica hípica, y ésta a su !e#, unto con otras
acti!idades militares, est" subordinada a la estrategia, hall"ndose de la misma manera
que hay técnicas subordinadas a otras; en todos los casos los fines de las acti!idades
principales son preferibles a los de las subordinadas, ya que los fines de estas últimas se
persiguen en interés de los fines de las principales. ()
10
15
* no hay ninguna diferencia en que los fines de las acciones sean las acti!idades mismas
o algo distinto de ellas, como en las ciencias mencionadas. (+)
Comentarios:
(1) Aristóteles afirma que las actividades humanas 'parecen tender a algún bien'; luego dice que 'el bien' esaquello a lo que 'todo' tiende! "abr#a que afinar este ra$onamiento! %&as acciones humanas realmente tienden
a un bien
() Ahora reempla$a el bien al cual tienden las actividades por el 'fin'! sta variante es m*s amplia que la
primera pues podr#an haber fines que no sean bienes; por otra parte Aristóteles hace una distinción entre
actividades que se agotan en s# mismas + otras que adem*s producen una obra (producto)! n todo caso es
relevante profundi$ar en el an*lisis de las actividades humanas pues si bien son importantes los productos que
se obtienen de varias actividades es relevante la actitud que tiene cada persona en la reali$ación de cada
actividad!
(,) n este pasa-e Aristóteles habla de los diferentes fines o bienes que tienen las actividades humanas! sta
descripción de un con-unto de hechos resulta dif#cil de rebatir! Aqu# +a ha+ un germen del m.todo inductivo
tema que lo pondr* en permanente tensión con su /aestro 0latón!
() Aqu# ha+ un punto de discusión interesante: la actividad principal de un talabartero es producir ciertos
productos; entonces para el talabartero mismo puede que ha+a una cierta -erarqui$ación de sus productos
(por e-emplo desde un punto de vista est.tico) pero que socialmente ha+a una -erarqui$ación diferente (por
e-emplo por la utilidad militar que presten ciertos productos)! ntonces ha+ una tensión entre la
-erarqui$ación personal + la social de la actividad!
(2) Conclu+endo su racionamiento sobre los fines de las actividades humanas Aristóteles considera similares a
los fines de todas dichas actividades; independientemente si tienen o no una obra asociada!
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
& La ciencia de lo b"eno # e0celente en el ser %"mano es la ciencia +oltica
ntonces, si nuestras acciones tienen algún fin que deseamos por sí mismo, si
dese"semos otro sería por aquel y si no eligiésemos todo por otro fin (pues si fuese así
se seguiría hasta el infinito, de modo que los deseos serían !acíos y !anos), entonces es
claro que aquel fin sería lo bueno y lo e-celente. (1)
1094a18
* así, su conocimiento tendría gran influencia en nuestra !ida; y tal como los arqueros
tienen un blanco, no alcan#aríamos meor nuestro fin/ 0i es así, hemos de hacernos un
bosqueo de dicho fin, in!estigar qué es y a cu"l de las ciencias o de las artes le
correspondería su determinaci&n. ($)
25
arece que ha de ser la m"s importante y eminentemente constructi!a. Tal es,
manifiestamente, la ciencia política; en efecto, ella es la que establece qué ciencias son
necesarias en cada sociedad y cu"les las que cada ciudadano ha de aprender y hasta qué
punto; o no !emos, adem"s, que las facultades m"s estimadas le est"n subordinadas,como la estrategia, la economía, la ret&rica; y puesto que la política utili#a a las dem"s
ciencias de la acci&n y legisla adem"s sobre lo que se debe hacer y lo que se debe e!itar,
el obeti!o de ella comprender" los de las dem"s ciencias, de modo que constituir" el
bien supremo del ser humano. (')
1095a1
5
ues, aunque el bien del indi!iduo y el de la sociedad sean el mismo, es e!idente que
ser" mucho m"s grande y m"s perfecto alcan#ar y preser!ar el de la sociedad; porque,
ciertamente, ya es apetecible procurarlo para uno solo, pero es m"s hermoso y di!ino
para los pueblos y las sociedades. sí pues, como nuestra línea de in!estigaci&n tiende a
buscar estos bienes, para un indi!iduo y una sociedad, es un tipo de ciencia política.
()
10
Comentarios:
(1) l argumento de Aristóteles es equivocado en efecto pude haber m*s un fin que eli-amos en aras de s# mismo
+ esto no implica que los fines por los que nos ponemos en acción sean el mismo! sta visión tiende a un
mundo monopolar en oposición a un mundo multipolar! A este nivel de an*lisis puede haber m*s de un fin
deseado por s# mismo! 3i bien lógicamente aqu# ha+ un error veremos m*s adelante si acaso es cr#tico! n
este p*rrafo se ve el 'horror al infinito'! 4os parece que no es una limitación cr#tica en este momento!
() A la imagen de un arquero tirando al blanco sub+ace una peligrosa ideolog#a reduccionista de tener en la vida
un único ob-etivo! 5tro modo de lo monopolar! 6n punto interesante es que plantea una pregunta en torno aque si corresponde a una t.cnica (arte) o a una ciencia!
(,) n este p*rrafo Aristóteles impl#citamente asume la fundamental relación entre un ser humano + la sociedad!
3i bien no se puede negar que e7isten ciertas -erarqui$aciones entre las actividades humanas no es menos
cierto el peligro que e7iste al suponer que habr#a o deber#a haber sólo una actividad suprema para el ser
humano; esto ser#a un mundo monopolar (unipolar); parece ser que nuestra construcción social es m*s bien
multipolar!
() s evidente que Aristóteles se pro+ecta m*s all* del individualismo + prefiere un ser humano social!
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1 El m2todo de la ciencia +oltica3 sobre la +recisión # la edad de los est"diantes
2igamos que para una in!estigaci&n te&rica sería suficiente, si se aclarara la materia
subyacente; en efecto, no se ha de buscar la misma precisi&n en todos los conceptos de
los ra#onamientos como tampoco en todos los productos de las artes. (1)
1094b11
Tanto las acciones nobles como las ustas que in!estiga la ciencia política presentan
tantas diferencias y !ariaciones que parece que lo son s&lo por con!enci&n y no por
naturale#a. ($)
15
3na incertidumbre semeante tienen también algunas acciones nobles, pues muchos han
sufrido males a consecuencia de ellas; pues algunos han sido destruidos por su rique#a y
otros por su !alentía. (')
or tanto, hablando en torno a esto y con tales puntos de partida, hemos de darnos por
satisfechos con mostrar en nuestro discurso la !erdad en general y con cierta tosquedad;
hablando s&lo de lo que ocurre en la mayoría de los casos y partiendo de tales premisas,
debemos conformarnos con llegar a conclusiones semeantes. 4"s aun, y con la misma
disposici&n, parece necesario que el estudiante en torno a esto reciba todas y cada una de
estas proposiciones.
20
25
2el mismo modo es manifiesto que la persona culta busca la e-actitud en cada género de
conocimientos en la medida en que lo admite la naturale#a del asunto; pues,
e!identemente, sería tan absurdo aceptar ra#onamientos de probabilidad en matem"ticas
como e-igir pruebas deducti!as en ret&rica. ()
or otra parte, cada uno u#ga bien aquello que conoce y de aquello ser" un buen ue#.
or tanto, de todo aquel que esté bien instruido, ser" un buen ue# absolutamente.
1095a1
or esta ra#&n, un o!en no es un estudiante apropiado para la ciencia política, pues
adolece de e-periencia en las acciones de la !ida, y los ra#onamientos políticos son a
partir de ellas y son en torno a ellas; adem"s, como tiende a dearse lle!ar por sus
pasiones su estudio ser" en !ano y sin pro!echo, puesto que el fin de la política no es el
conocimiento, sino la acci&n. 5o hace ninguna diferencia que sea o!en en edad o en
car"cter, pues el defecto no est" en el tiempo, sino en el !i!ir y perseguir fines, dirigido
por la pasi&n. (+)
5
ara tales personas el conocimiento resulta inútil, como para los intemperantes; en
cambio, para los que encausan buenos deseos y acciones según la ra#&n, el saber acerca
de estas cosas ser" muy pro!echoso.
10
6aste esto como introducci&n en torno al estudiante, al modo de recibir nuestras
ense7an#as y a lo que nos proponemos. (8)
Comentarios:
(1) Aristóteles platea una posición general sobre las investigaciones cient#ficas + las artes en relación a sus grados
de precisión! 8iscutir los casos de diferentes disciplinas en la actualidad!() sta observación de Aristóteles parece involucrar la discusión sobre el punto de vista del relativismo + del
sub-etivismo en la .tica! Aristóteles no adopta ese punto de vista! sto significa que el no considera que lo
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noble + -usto es relativo a una determinada sociedad! %&o -usto + lo noble e7isten sólo por convención &as
diferencias + variaciones se refieren tanto a lo que es -usto como a lo -usto + sus circunstancias! sto e7plica a
los que consideran que toda .tica es relativa (por convención nomos)! n el &ibro 9 cap#tulo regresa a
discutir esta cuestión! Cabe recordar este mismo tema en el caso de la ling#stica tal como lo plantea 4oam
Chomsr?in que ilumina este p*rrafo: @ste complemento sugiere la cone7ión del
pensamiento! Aristóteles parece ob-etar el argumento de la variación de la convención! =esponde que
variaciones similares se aplican a lo bueno sin inferir que lo bueno sea meramente convencional! &a aspirina por e-emplo no siempre es buena para el dolor de cabe$a pero no es un asunto de convención que es buena
para el dolor de cabe$a en aquellas ocasiones en que lo es! 0or tanto el argumento de las variaciones a lo
convencional es inv*lido!@ (>r?in p*g! 1)!
() Aristóteles refle7iona sobre los distintos modos de ra$onar según la materia de la investigación! 4ótese el
problema de las probabilidades! 3i hubiese sabido Aristóteles que la Beor#a de 0robabilidades pasar#a a
formar una rama de las /atem*ticas
(2) Bema a discutir con los estudiantes!
(D) 4uevamente un comentario de >r?in nos parece el m*s apropiado: @n este p*rrafo se resume los cap#tulos 1E,
en orden inverso lo que sugiere que Aristóteles los considera como una introducción al tratado!@ (>r?in p*g!
12)!
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4 La /elicidad es el bien s"+remo 5"e b"sca el ser %"mano
9etomemos nuestro tema y dado que todas las ciencias y todas las deliberaciones
políticas tienden a algún bien, !eamos cu"l es el fin de la ciencia política; en otras
palabras, cu"l es el bien supremo de todos los bienes que podemos lograr por la
acci&n/ (1)
1095a14
:ay algo con lo cual casi todos est"n de acuerdo en las palabras; en efecto, la felicidad
para la multitud y las personas refinadas es equi!alente al buen !i!ir y al actuar bien.
ero difieren respecto a qué es la felicidad; en efecto, la multitud y los sabios la
e-plican de modo muy diferente. ($)
20
n efecto, para la multitud sería algo concreto y manifiesto, como el placer, la rique#a o
el honor; para los otros sería algo diferente; e incluso muchas !eces una misma persona
opina de distinto modo según la ocasi&n% si est" enferma, diría la salud; si est" en la
miseria, sería la rique#a; las que tienen conciencia de su ignorancia admiran a aquellos
que proclaman grandes ideales que est"n m"s all" de su comprensi&n. (')
25
ero hay algunos entre los sabios, que creen que aparte de tantos bienes, habría uno
diferente, el bien en sí mismo y este sería la causa de todos los otros bienes. ero
e-aminar en detalle todas las opiniones qui#"s sea algo inútil, en cambio ser" suficiente
e-aminar las que predominan o parecen tener alguna ra#&n. () 30
ero, no nos equi!oquemos, pues hay una diferencia entre los ra#onamientos que parten
de los primeros principios con respecto a aquellos que conducen a los primeros
principios. n efecto, lat&n tenía ra#&n en plantear esta cuesti&n y preguntar, como a
menudo lo hacía% !enimos caminando desde los primeros principios o !amos
caminando hacia ellos/ ues, efecti!amente, hay una diferencia al igual que en pista de
carrera de un estadio, la pista puede ir desde el punto de partida de la carrera hasta ele-tremo final, o en el otro sentido. (+)
1095b1
or tanto, debemos comen#ar a partir de lo conocido, que lo es en dos sentidos% lo
conocido por nosotros y lo conocido absolutamente. uego, presumiblemente debemos
comen#ar con lo conocido por nosotros. (8)
or esto, para aquellos que deseen comprender las clases acerca de lo noble y de lo
usto, esto es, holísticamente acerca de la ciencia política, es suficiente que hayan sido
criados con buenos h"bitos. n efecto, el punto de partida es el hecho, de modo que si la
persona ha tenido una buena crian#a, ya tiene un buen punto de partida y no habr"
necesidad de alguna e-plicaci&n. dem"s, si esto est" suficientemente claro, no
necesitar" ninguna e-plicaci&n para comprender el punto de partida. (
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
representativas de las cuatro actividades iniciales!
() l 'bien supremo' ser#a la felicidad! "a+ acuerdo que el nombre pero se difiere en la definición! Aristóteles
hace una distinción social entre la ma+or#a (multitud) + una minor#a (los refinados)! 6na importante tarea
para la .tica ser* @esclarecer el significado de esta palabra@! (/ar#as G Arau-o p*g! ,)!
(,) Aristóteles avance dos conceptos de felicidad uno de las multitudes relacionado con el poder la rique$a + el
honor; + otro el de algunos refinados sin e7plicitarlo! timológicamente eudaimon#a significa @los demonios
buenos@! s un estado en que se desenvuelven los demonios buenos! 8a a entender un estado rela-ado sin
sobresaltos! 5tra arista que surge en esta primera revisión de la palabra felicidad es distinguir una estado pasa-ero de uno m*s permanente! 6no podr#a pensar en una alegr#a (esencialmente pasa-era) de un estado de
felicidad m*s permanente!
() Aqu# Aristóteles plantea una diferencia profunda respecto de la felicidad: la visión de la multitud + la visión de
los sabios!
(2) n este p*rrafo Aristóteles da una visión panor*mica de lo que entiende por ciencia al mencionar los
principios (archai)! 4ótese que es una concepción bastante arquitectónica de la ciencia! &os elementos
primarios de la ciencia son los principios que son como los fundamentos de una construcción arquitectónica!
l tema de los principios es crucial en el concepto de ciencia en Aristóteles! ntonces se entiende que ha+ una
apro7imación inductiva + una deductiva a los conocimientos de una ciencia!
(D) 0arece que aqu# Aristóteles plantea el tema de los conocido por nosotros que es relativamente obvio + los
conocido absolutamente que podr#a ser la lógica de la ra$ón que ser#a algo que tenemos intuitivamente +antes de ra$onar!
() Aristóteles recurre una + otra ve$ a ciertas distinciones sociales que si bien incomodan a una persona
ra$onable sirven para indicar ciertas actitudes humanas reiterativas!
(H) Hesodo es un poeta de la Antigua Irecia posterior a Homero! 3u datación en torno al aJo KK A!4!! esdiscutida! 5bras: Teo$ona primer poema escrito acerca del origen del cosmos + el lina-e de los dioses; LosTraba@os # los 7as poema de los hombres + la cone7ión de estos con los dioses a trav.s de la -usticia de
Leus! &a cita corresponde a &os Braba-os + los 8#as M, M2E! l 0rof! >r?in comenta que 'escuche!!!' tal
ve$ sugiere lo que Aristóteles tiene en su cabe$a al decir que podemos adquirir el punto de partida! (>r?in
p*g! 1)
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6 Sobre el bien # la /elicidad - los tres modos +osibles +ara .i.ir n"estra .ida
ues bien, retomemos de nue!o nuestra discusi&n desde donde la deamos. u#gar
por la !ida que !i!en los seres humanos, la mayoría y los m"s !ulgares, parecen (no
sin alguna ra#&n) identificar el bien y la felicidad con el placer; y por esta ra#&n les
gusta !i!ir pas"ndolo bien. (1)
1095b14
:ay tres modos importantes para !i!ir la !ida% el recién dicho, el !i!ir para el poder y
el !i!ir para el pensamiento. ($)
ues bien, es e!idente que la mayoría de los seres humanos parece tener una !ida
escla!a de sus gustos, prefieren una !ida apropiada para las bestias, pero encuentran
alguna ra#&n para ello del hecho que muchos que est"n en lugares importantes
comparten los gustos de 0ardan"palo. (')
20
3na consideraci&n de los tipos de !ida m"s importantes muestra que la gente de
refinamiento superior y de disposici&n acti!a identifica la felicidad con el honor; pues
este es, hablando en general, el obeti!o de la !ida política. ero parece algo
demasiado superficial para que aquel >modo de !i!ir? sea el que estamos buscando,
pues se piensa que depende de aquellos que otorgan el honor m"s que del que lo
recibe, pero pensamos intuiti!amente que el bien es algo propio de uno y no algo que
le pueda ser quitado. dem"s, las personas parecen perseguir el honor para
con!encerse que son buenas; al menos es de los hombres de sabiduría pr"ctica buscar
ser honrados por personas prudentes y entre aquellos que lo conocen y sobre la base de
su !irtud; claramente, entonces, de todas maneras la !irtud es meor que el honor. ()
25
* qui#"s uno podría suponer que la !irtud m"s que el honor es el fin de la !ida política.
ero, incluso esto, parece algo incompleto; porque la posesi&n de la !irtud parece en
realidad compatible con el estar dormido, o una !ida completa de inacti!idad, yadem"s, con los grandes sufrimientos y desgracias; pero un hombre que !i!a así uno
no lo llamaría feli#, a no ser que se quiera defender a cualquier precio una tesis
paradoal. ero, basta con esto, pues el tema ha sido suficientemente tratado en
nuestros escritos de e-tensi&n. (+)
30
1096a1
n tercer lugar, est" el !i!ir para el pensamiento, la que consideraremos m"s adelante. (8)
n cuanto al !i!ir para los negocios corresponde a un modo de !ida que se hace bao
compulsi&n y e!identemente la rique#a no es lo que buscamos; pues ella es
e!identemente útil en !ista de algo otro. 2e este modo, uno puede tomar los
mencionados obetos por fines; pues es meramente útil para esos fines, pues ellos son
deseados por sí mismos. ero es e!idente, que ni siquiera estos son fines; sin embargo
se han utili#ado muchos argumentos para apoyar esto. 2eemos así, entonces, estas
cuestiones. (> A!4!! 3e destacó por ser uno de los
pocos re+es que sab#an leer + escribir! &egendario por su lu-osa vida!
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() Aqu# Aristóteles se e7tiende sobre la vida del pol#tico principalmente!
(2) l tema del honor es que choca contra una de las caracter#sticas de la definición de felicidad que consiste
en la autarqu#a! & pol#tico debe buscar el honor en otras personas para ser @honorable@!
(D) ste tipo de vida lo describe en e7tenso en el &ibro N cap#tulos D + H!
() Aristóteles plantea que sin dudas la vida dedicada a los negocios es una vida ba-o compulsión + lo que se
busca no es la rique$a en s# misma sino con otro ob-etivo!
) 7i/erencia entre la .isión /ilosó/ica de la idea del bien de 8latón # de Aristóteles
Tal !e# sea meor in!estigar el aspecto uni!ersal de nuestra in!estigaci&n y preguntarnos lo
que se quiere decir con aquello, aunque tal in!estigaci&n nos sea difícil por el hecho que el
concepto de la idea ha sido introducido por un amigo nuestro. ero parece que es meor , y
es nuestro deber, sacrificar incluso lo que nos es propio por la !erdad; sobre todo siendo
fil&sofos o amantes de la sabiduría, pues ambas siéndonos amadas, es sagrado preferir la
!erdad por sobre la amistad. (1)
1096a11
15
as personas que introdueron esta doctrina no colocaron el concepto de idea en lo que se
decía anterior y posterior y por eso no establecieron el concepto de idea para los números;
pero el término bien se dice en ambos casos, tanto de lo que est" siendo como de lacualidad y de la relaci&n; ahora bien, lo que est" siendo en sí es anterior por naturale#a a lo
relati!o (pues esto parece ser una ramificaci&n y un accidente de lo que est" siendo), de
modo que no podría haber un único concepto de idea sobre todos estos bienes. dem"s,
como el bien se dice de tantos modos como lo que est" siendo (en efecto, en lo que est"
siendo, por eemplo, el dios y el entendimiento; en la de cualidad, las !irtudes; en la de
cantidad, la medida; en la de relaci&n, lo útil; en el tiempo, lo oportuno; en el espacio, el
lugar; y así en otros casos semeantes), es claro que uni!ersalmente no tienen algo en
común ni unitario; pues, si fuese así, no se podría decir de todas las categorías, sino de una
sola. 4"s aún, como a aquello que responde a una única idea le corresponde una única
ciencia, habría una sola ciencia para todos los bienes; pero como incluso hay muchas
ciencias para una única categoría, por eemplo, en el caso de lo oportuno, en la guerra,
corresponde a la estrategia; en la salud, corresponde a la medicina; en la medida de la
alimentaci&n, también a la medicina; y en los eercicios físicos, a la gimnasia. ($)
20
25
30
ntonces, uno podría preguntarse qué quiere decir algo sí mismo, por eemplo, si la
definici&n de una persona en sí misma y de persona es una y la misma, esto es, es una
persona. ues, en tanto hayan personas, no diferir"n respecto de nada; y si esto es así, no
habr" un @bien en sí mismo@ ni bienes particulares, en tanto sean bienes. ero, nue!amente,
no habr" bien ni ser" eterno, pues lo que dura mucho no es m"s blanco que lo que perece en
un día. os pitag&ricos parecen dar cuenta del bien de modo m"s plausible, cuando colocan
el uno en la columna de los bienes, y ellos dicen que speusipo parece haberlos seguido.
ero estas cuestiones las discutimos en otra parte; una obeci&n a lo que diimos, sin
embargo, se puede discernir en el hecho que los plat&nicos no hayan estado hablando de
todos los bienes, y que los bienes que se persiguen y se desean por ellos mismos se llamen
bien en referencia a una sola idea, en tanto aquellos que tienden a producir o a preser!ar
estos de alguna manera los contrarios se llaman bien por causa de ellos, de modo diferente.
Alaramente, entonces, se debe hablar sobre los bienes de dos modos y algunos son bienes
por sí mismos y otros en ra#&n de estos. 0eparemos, entonces, los bienes en sí mismos de
los bienes útiles y consideremos si acaso los primeros se llaman bienes en relaci&n a unaúnica idea. Bué tipo de bienes uno llamaría bienes en sí mismos/ aquellos que uno
desearía incluso aislados de los otros, tales como la prudencia, la !isi&n, y algunos placeres
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y honores/ 0eguro, si perseguimos a estos también en aras de algo otro, entonces uno los
colocaría a ellos entre los bienes en sí mismos. C no es nada m"s que la idea de bien un
bien en sí mismo/ n ese caso, la idea sería !acía. ero si aquello que hemos nombrado
también es un bien en sí mismo, la e-plicaci&n de bien tendría que parecerse a algo idéntico
en todos ellos, tal como la blancura es idéntica en el caso de la nie!e y en el caso del cuero
blanco. ero en el caso del honor, de la prudencia y del placer, precisamente con respecto a
su bondad, las e-plicaciones son distintas y di!ersas. l bien, por lo tanto, no es algo
común que responde a una única idea. ero entonces, qué queremos decir con el bien/
qué significa el bien/ Aon seguridad no es de aquello que aleatoriamente tiene el mismo
nombre. ntonces, los bienes son una unidad al ser deri!ados de un bien o por contribuir
todos a un bien, o son una unidad m"s bien por analogía/ Aon certe#a, así como la !isi&n
est" en el cuerpo, así la ra#&n est" en el alma y así en los otros casos. ero, tal !e#, sería
meor descartar estas cuestiones por ahora, pues la precisi&n perfecta acerca de ellos es m"s
apropiada para otra rama de la filosofía. * de modo similar en relaci&n a la idea; pues aun
cuando haya algo que permita categori#ar uni!ersalmente a los bienes, o sea capa# de de
una e-istencia separada y por sí misma, claramente no sería algo alcan#able por el ser humano; pero ahora estamos buscando algo que se pueda alcan#ar. Tal !e#, sin embargo,
alguien puede pensar que sea !alioso tener conocimiento de ello con !ista a los bienes que
sean alcan#ables y adquiribles, o bien, que teniendo un paradigma, conoceremos meor los
bienes que sean buenos para nosotros y que si los conocemos los podremos alcan#ar. ste
argumento parece plausible, pero parece chocar con el procedimiento de las ciencias; pues
todas ellas, aunque tiendan a algún bien y busquen lo que les falta, dean de lado el
conocimiento del bien mismo. ero, que todos los e-ponentes del arte sean ignorantes o ni
siquiera lo busquen, una ayuda tan grande no es probable. s difícil, también, !er de qué
modo podría un teedor o un carpintero beneficiarse respecto a su propia técnica sabiendo
lo que es el @bien en sí mismo@ o como la persona que ha !isto la idea en sí misma ser" por
eso un meor médico o general. ues, un médico ni siquiera parece que estudia la salud de
este modo, sino que la salud del hombre o incluso la salud de un hombre en particular; pues
se trata de sanar indi!iduos. ero, basta de estos temas. (')
20
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5
10
Comentarios:
(1) Aristóteles se refiere a su amistad con 0latón + la diferencia en el concepto de idea que tienen! "a+ un duro punto
de elección entre la amistad + la verdad! A m# me pasó con 8iego >$quierdo /en.nde$ que siendo los me-ores
amigos en el colegio luego 8iego se transformó en uno de los asesinos del Ieneral 3chneider! videntemente que
no puedo seguir siendo amigo de un asesino! 4o por lo menos de uno que no se ha arrepentido!
=especto al fondo de la cuestión el 0rofesor =oss plantea que: @l Oedón de 0latón es la me-or fuente de la teor#a
que postula que entidades no sensible eternas e inmutables que pueden ser conocidas solo por el intelecto + no
por los sentidos! 8e este modo se dice que la >dea de bello es la ra$ón de por qu. todos los ob-etos sensibles bellos
son bellos! n la obra &a 0ol#tica (en su traducción m*s conocida como &a =epública) especialmente en los
&ibros 9>E9>> 0latón introduce la idea de bien afirmando que todas las otras ideas tienen su e7plicación en ella!
n este cap#tulo Aristóteles ataca principalmente la afirmación de que e7ista una idea de bien adem*s agrega
otros argumentos contra el concepto de idea de 0latón!@ (p*gina K2)!
() Aqu# Aristóteles entre de lleno a la discusión filosófica de la cuestión utili$ando para ello su doctrina de las
Categor#as!
(,) Aristóteles discute la teor#a de la idea de 0latón!
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9 Hi+ótesis: %a# "na relación entre la /"nción es+ec/ica del ser %"mano # la /elicidad
9etornemos otra !e# al bien que andamos buscando, qué podríamos decir/ ues bien, es
manifiesto que el bien es diferente en diferentes acti!idades y técnicas; en efecto, es
diferente en medicina, en estrategia y, de modo similar, en las otras acti!idades. (1)
1097a15
ntonces, qué es el bien en cada una de esas acti!idades/ aquello en aras de lo cual se
reali#an las acti!idades/ saber, en medicina la salud, en estrategia la !ictoria, la casa en la
construcci&n, los otros fines en las otras acti!idades; en todas las acciones y deliberaciones
políticas es el fin; pues todos reali#an sus acti!idades en aras de ellos. ($)
20
2e este modo, si para todas las acti!idades que reali#amos hay un fin, este sería el bien
reali#able por la acti!idad; y si hay m"s uno, esos serían los bienes reali#ables por la
acti!idad. (')
ues bien, nuestro ra#onamiento nos ha de!uelto al punto de partida. hora, hemos de
establecer este asunto de modo aún m"s claro; a saber, es e!idente que hay m"s de un fin, y
algunos de estos fines, como la rique#a, las flautas y en general, los otros instrumentos, son
medios para algo distinto; por otra parte, claramente no todos los fines son finales; pero el
bien supremo e!identemente es final. 2e este modo, si hubiera s&lo un bien final, ese sería
el que estamos buscando; y si hubiera !arios, sería el m"s final, el finalísimo. ()
25
30
hora bien, nosotros llamamos al que es digno de ser seguido m"s final que aquel que
perseguimos para llegar a otro, y aquel que nunca es deseable por otro m"s final que los que
son deseables por estas dos ra#ones, a saber, por sí mismos y por otro fin; por lo tanto,
llamamos fin final de modo absoluto a lo que es deseable por sí mismo y nunca por otro fin.
(+)
arece que se considera que tal fin es la felicidad por sobre todo; pues a ella la elegimos
siempre por sí misma y nunca por otro fin; en cambio, si bien elegimos el honor, el placer,
el pensar y cada !irtud por ellas mismas (pues aunque nada resulte de ello, igual elegiremos
a cada una de ellas), también los elegimos en aras de la felicidad, y u#gamos que a tra!és
de ellos seremos felices. la felicidad, por otra parte, nadie la elige para logar algunos de
esos otros fines, ni en general, para lograr otro fin. (8)
1097b1
5
s manifiesto que desde la autarquía se obtiene el mismo resultado (que la felicidad es un
bien final); pues el bien final parece ser aut"rquico. hora bien, por autarquía no
significamos aquello que es suficiente para un hombre por sí mismo, ni a uno que !i!a en
solitario, sino que también para los padres, los hios, la esposa y en general para sus amigos
y sus conciudadanos, puesto que por naturale#a el ser humano es un ser político. ero hay
que poner algunos límites a esto; pues si e-tendemos nuestros requisitos a los ancestros y
descendientes y amigos de los amigos tenemos una serie infinita. ero e-aminaremos esta
cuesti&n en otra ocasi&n. (
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0in embargo, decir que la felicidad es el bien supremo, parece ser algo ob!io, y es deseable
una e-plicaci&n m"s clara sobre qué es el bien supremo. (D)
Tal !e# podríamos lograr esto si primero podemos precisar la funci&n del ser humano. ues,
precisamente al igual que para un flautista, un escultor o un artista, y en general, para todo
aquello que tenga una funci&n y una acti!idad, el bien y lo @bueno@ se piensa que reside en la
funci&n, así sería también para el ser humano si tu!iese alguna funci&n propia. (1E)
25
ntonces, podría ser que el carpintero y el curtidor tengan funciones o acti!idades propias
y que el ser humano no tenga ninguna/ or naturale#a, no tiene ninguna funci&n propia/
C como el oo, la mano, el pie y en general cada una de las partes corporales
e!identemente tiene una funci&n propia, también se puede decir que el ser humano
similarmente tiene una funci&n aparte de todas estas/ (11)
30
ntonces, cu"l podría ser ella/ ues el !i!ir parece ser común aún para las plantas, pero
nosotros estamos buscando lo que es peculiar al ser humano, por tanto, deberíamos e-cluir
el !i!ir, en tanto nutrici&n y crecimiento. uego habría un !i!ir de la percepci&n sensiti!a,
pero también es común incluso con el caballo, el buey y cada animal. (1$)
1098a1
Finalmente, queda el !i!ir acti!o de alguien que tiene ra#&n; de este, una parte tener ra#&n
en el sentido de serle obediente, por otra parte tener ra#&n y pensar. (1')
2ado que el término !i!ir acti!o de alguien que tiene ra#&n tiene dos significados, potencial
y actual, y como queremos establecer el sentido del !i!ir acti!o, debemos ser sumamente
cuidadosos con el sentido del término. (1)
5
hora bien, si la funci&n propia del ser humano es la acti!idad pensante del alma y no
despro!ista de ra#&n, y por otra parte decimos que esta funci&n es específica del ser
humano y del hombre bueno, como el tocar la cítara es propio del citarista y de un buen
citarista, y así simplemente en todos los casos, la eminencia agregada respecto de la bondadal nombre de la funci&n, pues la funci&n del citarista es tocar la cítara y la de un buen
citarista es hacerlo bien. dem"s, establecemos que la funci&n del ser humano es un cierto
tipo de !i!ir, y este !i!ir es una acti!idad del alma que incluye la ra#&n; por tanto, la
funci&n de un ser humano de e-celencia es hacerlo bien y finamente. ntonces, cada
funci&n se completa bien al ser completada con la !irtud apropiada. * de este modo, el bien
humano resulta ser una acti!idad del alma de acuerdo a la !irtud, en realidad, de acuerdo a
la !irtud meor y m"s completa, si hubiera m"s de una !irtud. (1+)
10
15
4"s aún, debemos agregar en un !i!ir con un final. ues una golondrina no hace
prima!era, ni un día tampoco, y así también un día, o un periodo de tiempo bre!e, no hace aun hombre biena!enturado y feli#. (18)
20
0ea esto un primer bosqueo del bien; puesto que, presumiblemente, primero debemos
hacer un esquema tosco y después agregar m"s detalles. 0i el bosqueo es bueno, parece que
cualquiera puede a!an#ar y articularlo; y que el tiempo es un buen descubridor o
compa7ero de ruta en tal trabao. sí es como se han hecho los a!ances en las artes, pues
cada uno puede agregar lo faltante. (1
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en tanto que sea útil a su trabao, en cambio el ge&metra in!estiga qué es o qué tipo de
concepto es, pues él es un espectador de la !erdad. ntonces, debemos hacer lo mismo, en
todas las otras materias también, pues nuestra tarea principal no es subordinarnos a
cuestiones menores. (1D)
5i debemos preguntarnos por la causa de todas las materias por igual, pues es suficiente
algunas !eces que el hecho esté bien establecido. sto es así en el caso de los primeros
principios; el hecho >que algo sea !erdadero? es algo primario, esto es, el principio. ($E)
1098b1
hora bien, con respecto de los primeros principios a algunos se los estudia por inducci&n,
a otros por percepci&n, a otros por h"bito, y a otros de otros modos. n cada caso debemos
tratar de encontrarlos por el medio m"s apropiado a su naturale#a, y debemos tomarnos la
molestia de determinarlo correctamente. ($1)
5
ues aquello tiene gran influencia en lo que !iene, porque los principios parecen ser m"s
que la mitad del todo, y muchas preguntas que haremos quedan claras por aquello. ($$)
Comentarios:
(1) Aristóteles toma el camino inductivo (a partir de lo que ha+; esto es ra$ona a partir que ha+ varios bienes)! "ace
esto despu.s de desechar el concepto de 0latón que e7iste una idea de bien + que de modo deductivo se llega a la
realidad de que ha+ varios bienes; pero para 0latón primero es necesario capturar el concepto ubicuo de bien!
() =eitera una descripción de los diferentes bienes (cierta analog#a con cap#tulo D)! 3e establece que en cada
actividad humana ha+ un bien que se busca que el fin de esa actividad + que ha+ ciertas relaciones entre los fines
de las distintas actividades!
(,) ste p*rrafo recuerda el ra$onamiento del cap#tulo !
() Aristóteles introduce el concepto de 'perfecto' pero no lo define! 0ara ello usa la palabra teleion! &a traducciónliteral es final perfecto completo! stamos hablando del bien! l bien final ser#a el que despu.s de .l +a no ha+
nada m*s; el bien perfecto ser#a el que cierra el c#rculo; el bien completo ser#a el que tiene todos los atributos
imaginables! Bra+endo a la mente el -uramento del soldado en el sentido de dar la vida si fuese necesario ha+ un
-uicio ha+ una interpretación acerca de la necesidad de hacer el m*7imo sacrificio! &o mismo pasa con esta
palabra %qu. habr* pensado Aristóteles
(2) Ahora se empie$a a entender el problema en que nos encontramos!
(D) Aqu# Aristóteles conclu+e el ra$onamiento apuntando a la felicidad! s lo único que elegimos en aras de s# misma +
no pensando en algo otro!
() &a condición de autarqu#a para el bien supremo es interesante pues obliga a cada uno de nosotros a anali$ar
cuidadosamente las condiciones para nuestra felicidad! 4ótese la finesa de Aristóteles al hablar de ser pol#tico que
tiene la naturale$a humana! 4o se trata de un individuo aislado sino del entorno de amigos m*s cercanos que
tiene todo ser humano!
(H) Aristóteles califica a la felicidad como un bien sui generis algo especial algo inconmensurable! 4o es un bien
entre otros bienes! s el primus inter pares!(M) Aqu# se inicia la teor#a de la .tica aristot.lica! 0oner mucha atención sobre los fundamentos de la construcción
teórica de Aristóteles!
(1K) 3e inicia la discusión acerca de la función del ser humano! Aqu# ha+ una generali$ación poco clara! s un tema
algo serio pues resultar#a que cada uno de nosotros tendr#a una función en su vida %qu. sentido tiene esto
(11) 4o parece tener un fundamento claro la pregunta que hace!
(1) 3in haber discutido a fondo la pregunta sobre la función propia del ser humano Aristóteles continua el
ra$onamiento que es v*lido sólo si e7istiese dicha función espec#fica! sto significar#a que esta construcción
racional ser#a una fantas#a!
(1,) Bal ve$ aqu# Aristóteles reali$a un descubrimiento crucial para la humanidad: el pensar el ra$onar la actividad
intelectual!
(1) 3e inicia la discusión sobre la actividad propia del ser humano!(12) Concreta la función del ser humano como el pensar!
(1D) 4o se refiere a una momento de alegr#a sino a la vida completa de un ser humano!
15
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(1) /e recuerda una frase de Claudio Beitelboim f#sico chileno que en un di*logo con el público le preguntaron sobre
su m.todo de traba-o! =espondió que era como un -ardinero que iba arreglando su -ard#n poco a poco + cuando
aparec#a un problema se dedicaba a resolverlo; + as# avan$ar en su traba-o!
(1H) =ecordar la discusión acerca de la precisión del m.todo cient#fico en el cap#tulo , de este &ibro >!
(1M) >nteresante visión sobre la diferencia entre la aplicación de las ciencias (el ingeniero el m.dico) + el desarrollo de
las ciencias (el matem*tico el biólogo)!
(K) n este p*rrafo ha+ dos temas importantes: por una parte la traducción de arc%2 como punto de partida o como
fundamento; + en segundo lugar la visión de la teor#a cient#fica como una estructura basada en principios o fundamentos que de alguna manera se aceptan!
(1) Aristóteles le da una vuelta m*s a los principios recordando que no todos son iguales!
() Bal ve$ Aristóteles nos hace ver que el inicio de una aventura es su ma+or dificultad!
; Las o+iniones corrientes acerca de la /elicidad # n"estra e0+licación
ero debemos e-aminar la felicidad no s&lo bao la lu# de nuestras conclusiones y de
nuestros supuestos, sino que también respecto a lo que se dice de ella; pues desde un punto
de !ista !erdadero todos los datos armoni#an, pero desde uno falso los hechos chocan. (1)
1098b10
ues bien, los bienes se han di!idido en tres clases% algunos se dicen e-ternos; otros se
relacionan con el alma o con el cuerpo. 2ecimos que los bienes del alma son bienes m"s
completos y m"s !erdaderos; y consideramos las acciones y las acti!idades psíquicas como
bienes del alma. or tanto, nuestra e-plicaci&n de los bienes es correcta, a u#gar por esta
creencia al menos y es una creencia antigua y aceptada por los fil&sofos. ($)
15
5uestra e-plicaci&n también es correcta al decir que algún tipo de acciones y acti!idades
son fines; pues de este modo el fin se transforma en un bien del alma, no en un bien
e-terno. (') 20
Ctra creencia que también armoni#a con nuestro ra#onamiento es que el hombre feli# !i!e
bien y le !a bien, pues pr"cticamente hemos definido felicidad como una suerte de una
buena !ida y buenas acciones. ()
s claro, adem"s, que lo dicho incluye todos los requisitos de la felicidad. n efecto, unos
identifican la felicidad con la !irtud, otros con la prudencia, otros con cierta sabiduría, otros
con estas mismas cosas o alguna de ellas, acompa7adas de placer o no despro!istas de
placer; otros incluyen adem"s en ella la prosperidad e-terior. ues bien, algunas de estas
opiniones han sido sostenidas por muchas personas y personaes antiguos; otras, por unos
pocos hombres ilustres, y es ra#onable suponer que ni unos ni otros se han equi!ocado en
todo por completo, sino que en algún punto o en la mayor parte de ellos han pensado
rectamente. (+)
25
rimero, armoni#an con nuestra e-plicaci&n aquellos que identifican la felicidad con alguna
!irtud (en general) o una !irtud (en particular), pues la acti!idad de acuerdo a la !irtud
pertenece la acti!idad !irtuosa. 0in embargo, tal !e# no es una diferencia peque7a si
colocamos el bien supremo en posesi&n o en uso, en un estado del alma o en una acti!idad
30
1099a1
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(que actuali#a el estado). ues el estado del alma puede e-istir sin producir ningún bien,
como en un hombre que est" durmiendo o est" inacti!o de otro modo y no est" actuando;
pues alguien que est" actuando, necesariamente est" actuando, y actuando bien. Aomo en
los Guego Clímpicos, no es el m"s bello y el m"s fuerte el que es coronado, sino que el que
compite (pues es uno de estos el que resultar" !ictorioso), de modo que el que actúa, gana y
gana correctamente lo noble y lo bueno de la !ida. (8)
5
dem"s, la !ida de la gente acti!a es en sí misma placentera. ues el sentir placer es una
condici&n del alma >y por tanto, est" incluido en la acti!idad del alma?. dem"s, cada
persona declara que es amante de algo encontrar" placer en aquello; por eemplo, un caballo
es placentero para un amante de los caballos y un espect"culo para el amante de las luces.
2el mismo modo, los actos de usticia son placenteros para los amantes de la usticia y en
general, los actos !irtuosos para los amantes de la !irtud. (para la acti!idad !irtuosa? como una
suerte de atracci&n fatal, sino que tiene su placer en sí mismo. ues, adem"s de lo que
hemos dicho, la persona que no tiene placer en acciones nobles ni siquiera es buena; pues
nadie llamar" a una persona usta si no go#a actuando ustamente ni nadie llamar" a una
persona generosa si no go#a siendo generosa, y así en los otros casos. (D) 20
0i esto es así, las acciones !irtuosas deben ser en sí mismas placenteras. ero estas personas
son también nobles y buenas, y tienen cada uno de estos atributos en el m"s alto grado, pues
la persona buena u#ga bien acerca de estos atributos; su uicio es tal como lo hemos
descrito. (1E)
a felicidad, entonces, es lo meor, lo m"s noble y lo m"s placentero del mundo, y la
inscripci&n en 2elos est" equi!ocada al distinguir estos conceptos%
&o m*s -usto es lo m*s noble + lo me-or es la salud!
0ero lo m*s placentero es obtener lo que deseamos de cora$ón!
ues estas tres propiedades pertenecen a las meores acti!idades; e identificamos la
felicidad con ellas, o meor dicho, con una de ellas, la meor. (11)
25
30
0in embargo, como hemos dicho, e!identemente se requiere de bienes e-ternos también;
pues es imposible, o no f"cil, reali#ar actos nobles sin recursos adecuados. ues, primero
que todo, en muchas acciones usamos amigos, rique#as y poder político como instrumentos.
dem"s, hay algo que falta para sacar lustre a la felicidad, como una buena cuna, buenos
hios, belle#a. ues la persona que es muy fea de apariencia o malHnacido o solitario y sin
hios no es probable que sea feli#, y probablemente ser" menos feli# una persona si tiene
malos hios o amigos o ha perdido a sus hios o amigos por muerte. (1$)
1099b1
5
Aomo hemos dicho, entonces, la felicidad parece necesitar adem"s de una suerte de
prosperidad; por tal ra#&n, algunos identifican la felicidad con la buena fortuna, aunque
otros la identifican con la !irtud. (1')
Comentarios:
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(1) Aristóteles plantea un resumen del m.todo deductivo: supuestos + conclusión!
() Chequear esta división de los bienes!
(,) >nteresante punto: los bienes son para el alma no son e7ternos!
() >nvestigar e-emplos concretos de los que dice Aristóteles!
(2) >ntentar otras definiciones de felicidad!
(D) Aristóteles est* considerando a la felicidad como una actividad efectivamente reali$ada!
() =efuer$a la afirmación anterior!
(H) Algo oscuro el sentido de este pasa-e!(M) Aqu# se va aclarando el sentido de los bueno; se le relaciona con los virtuoso; esto es el bien + la virtud van de la
mano!
(1K) Brata de relacionar directamente el placer con la virtud; %cu*n directa ser* esta relación
(11) s evidente que sobre este punto ha+ opiniones divididas! 8iscutir las distintas opiniones!
(1) Aqu# Aristóteles entra en un terreno algo sub-etivo + se puede dar o lo positivo o lo negativo indistintamente! sto
es delicado pues +a no tenemos una dirección indiscutida que pudiese guiar nuestro pensamiento!
(1,) s claro que muchos pobres pueden ser m*s felices que muchos ricos pero se ve dif#cil que alguien en la e7trema
pobre$a sea feli$!
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bito o es en.iada +or los dioses o +or el azar?
or esta ra#&n uno se pregunta si la felicidad se adquiere por el estudio o por el h"bito o de
otro modo, o !iene mediante la !irtud de alguna pro!idencia di!ina o por el a#ar. (1) 1099b10
ues bien, si los dioses regalasen algo a los seres humanos, es ra#onable que la felicidad
fuese un don de los dioses, con mayor ra#&n si de todo lo humano ella es lo meor. ero esta
cuesti&n tal !e# sea apropiada a otro tipo de in!estigaci&n. 0in embargo, aunque la felicidad
no sea un don di!ino y m"s bien sea el resultado de una !irtud o un proceso de aprendi#ae
o entrenamiento, perece ser algo muy similar a lo di!ino; pues aquello que el premio y el
fin de la !irtud parece ser lo meor del mundo, algo de tipo di!ino y bendecido. ($)
15
2esde este punto de !ista es algo generalmente compartido; pues todos aquellos que no
est"n mutilados respecto de su potencialidad para la !irtud pueden ganarla por cierto tipo de
estudio y cuidado. ero si es meor ser feli# de este modo que por el a#ar, es ra#onable que
los hechos sean así, pues todo lo que depende de la acci&n de la naturale#a es por naturale#a
tan bueno como puede ser. y de modo similar, todo lo que depende del arte o de una causa
racional, y especialmente si depende de la meor causa. ntregarle al a#ar lo que es lo m"sgrande y lo m"s noble sería algo defectuoso. (')
20
a respuesta a la pregunta que estamos haciendo es también clarísima a partir de la
definici&n de la felicidad; pues he dicho que es algún tipo de acti!idad !irtuosa del alma.
2e los otros bienes, algunos necesariamente deben pree-istir como condiciones de la
felicidad, y otros son naturalmente cooperati!os y útiles como instrumentos. ()
25
* se encontrar" que esto est" de acuerdo con lo que hemos dicho al principio; pues
establecimos que el fin de la ciencia política es el meor fin, y la ciencia política requiere de
la mayoría de sus sacrificios en hacer de los ciudadanos de un cierto modo, esto es, capaces
de actos buenos y nobles. (+)
30
ntonces, es natural, que entendamos que ningún buey ni caballo ni otro animal pueda ser
feli#; pues ninguno de ellos es capa# de compartir dicha acti!idad. or esta misma ra#&n,
tampoco un ni7o puede ser feli#; pues él aún no es capa# de tales actos, debido a su edad; y
los así llamados ni7os felices se felicitan en ra#&n de las esperan#as cifradas en ellos. ues,
se requiere, como ya lo hemos dicho, no s&lo la !irtud completa, sino una !ida completa,
pues en la !ida ocurren muchos cambios, de muchos modos aleatorios, y los m"s pr&speros
pueden caer en las mayores desgracias a una edad a!an#ada, como se dice de ríamo en el
Aiclo de Troya; y a uno que haya e-perimentado tales hechos aleatorios y haya terminado
de modo miserable, nadie le llamaría feli#. (8)
1100a1
5
Comentarios:
(1) 4ótese que los dioses de Aristóteles no se relacionaban con los seres humanos; ellos ten#an su vida propia
independiente de la de los humanos!
() Aclara la relación entres los dioses + los humanos!
(,) Aristóteles descarta que la felicidad sea algo que un humano recibe desde el e7terior + plantea m*s bien que es el
resultado de una acción propia que reali$a la persona! >ncluso descarta el a$ar!
() >nsiste que la felicidad es resultado de la acción del alma!
(2) Aristóteles establece una profunda relación entre la felicidad + la acción de cada uno de nosotros lo que lleva al
*mbito de la pol#tica pues nuestras acciones se dan en la sociedad!
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Aristóteles Ética a Nicómaco, Libro I Cristóbal Videla-Hintze
(D) >nteresante asunto la relación entre la felicidad + los animales! 0ara dilucidar este punto es necesario remontarse
a la discusión acerca del alma de los humanos + de los animales!
0r#amo es un e-emplo relevante del cambia e7tremo de la fortuna de los seres humanos!
20
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(' =8odramos ser /elices antes de morir?
ntonces, nadie debería llamarse feli# mientras esté !i!o/ Aomo dice 0ol&n, deberíamos
!er el final. ues, aún en el caso que !ayamos a establecer esta doctrina, ser" el caso que
un ser humano pueda ser feli# solo cuando esté muerto/ ero, esto no es precisamente
absurdo, especialmente para nosotros, que decimos que la felicidad es una acti!idad/ (1)
1100a10
ero, si no decimos feli# a quien esté muerto y si 0ol&n no quiso decir esto >por ser
absurdo?, sino que uno puede con seguridad decir que un ser humano fue bendecido >antes
de morir?, bao el supuesto que ahora finalmente est" m"s all" de los males y las desgracias.
ero esto también requiere una discusi&n; pues si una persona !i!a no sabe que est" bien o
mal, parece entonces que una persona muerta puede estar bien o mal; por eemplo, si sus
hios y sus descendientes reciben honores o deshonores y, en general, !i!en bien o sufren
desgracias. ($)
15
20
* esta conclusi&n también presenta un problema% pues, aunque un ser humano haya !i!ido
feli# hasta una edad a!an#ada y tenga una muerte digna de su !ida, hay muchos re!eses que
afectan a sus descendientes. lgunos pueden estar bien y lograr la !ida que merecen, pero para otros, lo opuesto puede ser el caso; y también es claro que los grados de relaci&n entre
ellos y sus ancestros puede !ariar indefinidamente. 0ería raro, entonces, si un muerto
compartiera todos estos cambios y fuese feli# en un momento, y desgraciado en otro; y
también sería bastante raro si las fortunas de los descendientes no tu!iesen en algún
momento algún efecto sobre la felicidad de sus ancestros. (')
25
30
ero debemos !ol!er a nuestra primera dificultad; pues, tal !e#, por una consideraci&n de
ella se podría resol!er nuestro problema actual. hora bien, si debemos esperar el final y
s&lo entonces decir que un ser humano es feli#, no como siendo feli# >ahora que est"
muerto?, sino como habiéndolo sido antes. ntonces, no sería absurdo, que usto en elmomento cuando él es feli# nos negamos a atribuirle la felicidad que tiene/ Tal recha#o
resulta porque no deseamos decir de ser humano !i!o que es feli#, debido a los cambios que
le pueden suceder y porque hemos supuesto que la felicidad es algo permanente y de
ningún modo f"cil de cambiar, pero un ser humano puede sufrir muchos cambios de la
rueda de la fortuna. ues claramente, si queremos mantener el paso con sus cambios de
fortuna, deberíamos a menudo llamar al mismo hombre feli# y desgraciado, transformando
al ser humano feli# en un camale&n, con base insegura. C, es no es correcto afirmar esto
en relaci&n a los cambios de fortuna/ l é-ito o el fracaso en la !ida no depende de estos,
pero la !ida humana, como decimos, necesita de estos, en tanto que las acti!idades
!irtuosas o sus opuestas son las que constituyen la felicidad o su re!erso. ()
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10
a cuesti&n que acabamos de discutir confirma nuestra definici&n. ues ninguna funci&n
del ser humano tiene tanta permanencia como las acti!idades !irtuosas (se piensa que son
m"s durables aún que el conocimiento de las ciencias) y de estas las m"s !aliosas son las
m"s durables, porque aquellos que son felices pasan su !ida m"s atentos y m"s
continuamente en estas; pues, esta parece ser la ra#&n de porque no los ol!idamos. (+)
15
or esto, el atributo en cuesti&n >la estabilidad? pertenecer" a un hombre feli#, y él ser" feli#
a tra!és de su !ida. ues siempre, o por preferencia a todo lo dem"s, él reali#ar" y estudiar"
las acciones según la !irtud y en la contemplaci&n de la fortuna lle!ar" la !ida m"s noble yapropiada en todas las condiciones, pues es @!erdaderamente bueno, derecho y est" m"s all"
de los reproches@. (8)
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hora bien, muchos e!entos suceden por a#ar, de importancia !ariada. os peque7os
golpes de buena o mala fortuna claramente no destruyen la !ida, pero una multitud de
grandes e!entos si resultan bien har"n una !ida m"s feli# (pues no s&lo ellos, por sí mismos,
a7aden adornos a la !ida, sino que el modo que un ser humano trata con ellos puede ser
noble y e-celente); por el contrario, si resultan mal destruyen la felicidad; pues traen dolor
con ellos e impiden muchas acti!idades. 0in embargo, aun en estos rayos de noble#a,
cuando un ser humano lle!a con resignaci&n muchas y se!eras desgracias, no a tra!és de la
insensibilidad al dolor, sino que a tra!és de la noble#a y grande#a de la psique. (
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(( =La /elicidad de los .i.os a/ecta a la de los m"ertos?
Aon todo, que la buena o mala fortuna de los descendientes y de todos los amigos de un ser
humano no deba afectar en absoluto a la felicidad de los muertos parece ser una doctrina
muy poco amigable y contraria a las opiniones recibidas. ero como los e!entos que se
suceden son numerosos y con todo tipo de diferencias, algunas m"s cercanas y otras menos,
no parece ser una tarea larga, sino una infinita, discutir cada una en detalle; lo que tal !e#sea suficiente es un esquema general. (1)
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ntonces, si algunas desgracias propias de un ser humano tienen un cierto peso e influencia
en la !ida, en tanto otras perecen ser m"s li!ianas, del mismo modo hay diferencias entre
las desgracias de nuestros amigos tomadas en conunto, pero hace una diferencia si acaso
los !arios casos de sufrimiento le suceden a un !i!o o a un muerto H mucho m"s aun cuando
un hecho fuera de la ley y terrible son presupuestos en una tragedia o hechos en una escena.
0e ha de concluir que esta diferencia también debe ser tomada en cuenta, o m"s bien, no se
sabe, respecto de los muertos, si participan de algún bien o sus contrarios. ($)
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ues, parece, que a partir de estas consideraciones, aun cuando cualquier bien o mal penetreen los muertos, debe ser algo débil y desechable, ya sea en sí mismo o por ellas. Incluso si
el bien o mal no es algo débil y desechable, al menos lo debe ser algo en algún grado o tipo
que no haga feli# a los que no son felices o no le quite lo bendecido a aquellos que lo son.
* así, las buenas o malas fortunas de los amigos, entonces, parecen tener cierto efecto sobre
los muertos, pero efectos de tal tipo y grado que ni puedan hacer feli# al infeli# ni producir
algún cambio de cualquier tipo. (')
5
Comentarios:
(1) 0or una parte algo e7traJo %la felicidad de los muertos 0or otra parte Aristóteles parece no estar de acuerdo
con eso de los descendientes + evaluaciones a posteriori!
() Aristóteles parce tentado de seguir el camino de un relato fant*stico!
(,) Aristóteles parece relegar a un lugar secundario esta discusión entre los vivos + los sucesos post mortem!
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(& La .irt"d es elo$iable, +ero la /elicidad est> m>s all> de los elo$ios
:abiendo respondido definiti!amente a estas cuestiones, in!estiguemos ahora si acaso la
felicidad est" entre lo elogiable o m"s bien entre lo !alioso; pues claramente no est" entre
las cuestiones potenciales. (1)
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Todo lo que es elogiable parece ser elogiado porque es de un cierto tipo y est" relacionado
con algo otro. sí elogiamos a la persona usta y !aliente y en general, a la persona buena y
!irtuosa, por las acciones y funciones en!ueltas, y elogiamos a la persona fuerte, al buen
corredor y así en los dem"s casos, porque es de un tipo y est" relacionado de un cierto
modo a algo bueno y e-celente. ($)
15
También, esto es claro, cuando se elogia a los dioses; pues parece absurdo que los dioses
deban ser referidos a nuestros est"ndares, pero esto se hace porque el elogio incluye una
referencia a algo otro. (') 20
ero si el elogio es por algo tal como hemos descrito, claramente lo que se aplica a lo meor
no es un elogio, sino algo mayor y meor, como en efecto es ob!io; pues lo que hacemos
con los dioses y los hombres m"s di!inos, >no es elogiarlos, sino que? felicitarlos por ser
benditos y felices. * así también con las cuestiones buenas; nadie elogia la felicidad como
lo hace con la usticia, sino que m"s bien la llama bendecida, como algo m"s di!ino y meor
>que todo lo que se elogia?. ()
25
n realidad, udo-o parece haber hecho una in!estigaci&n de buena calidad al establecer la
supremacía del placer; pues pens& que al no ser elogiado, indica ser meor que lo que es
elogiado, de igual modo que el dios y el bien; pues en relaci&n a estos es u#gado todo lo
otro. (+)
30
>quí parece que hemos argumentado correctamente,? pues el elogio es apropiado a la
!irtud, pues como resultado de la !irtud la persona tiende a hechos nobles, pero los
encomios son otorgados por los actos, ya sea del cuerpo o del alma. ero, tal !e#, la sutile#a
en estas materias es m"s apropiada en aquellos que estudian los encomios; para nosotros es
claro a partir de lo que se ha dicho que la felicidad est" entre lo que es apreciado y perfecto.
(8)
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ara nosotros es claro a partir de los dicho que la felicidad est" entre lo !alioso y final, pues
parece que es un principio y todo lo dem"s lo hacemos en aras de ella; siendo ella el
principio y la causa de de los bienes, y ella es algo di!ino y elogiable. (
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13. La exploración del alma y la consecuente diisión de las irtudes en conductuales e
intelectuales.
0iendo la felicidad un cierto tipo de acti!idad del alma según la !irtud completa,
debemos in!estigar sobre la !irtud; pues qui#"s así teori#aremos meor en torno a la
felicidad. (1)
1102a5
* parece también que se considera que el !erdadero político ha estudiado la !irtud por
sobre todo lo dem"s, pues desea que los ciudadanos obren bien y sean obedientes a las
leyes. l paradigma de esto son los legisladores de Areta y de sparta, así como también
aquellos similares de otras partes. or tanto, si esta in!estigaci&n de la !irtud pertenece
a la ciencia política, es e!idente que esta indagaci&n estar" de acuerdo con nuestro
proyecto original. ($)
10
n cuanto a la !irtud es e!idente que hemos de in!estigar la !irtud humana, pues así
como no buscamos el bien, sino que el bien humano tampoco buscamos la felicidad,
sino que la felicidad humana. 2ecimos !irtud humana no la del cuerpo, sino la del alma;
y también decimos que la felicidad es una acti!idad del alma. (')
15
ntonces, si esto es así, claramente es necesario que el político tenga un concepto en
torno al alma, así como el oftalm&logo también lo debe tener de todo el cuerpo, y tanto
m"s cuanto que la ciencia política es m"s estimable y meor que la medicina; pero
incluso también entre los médicos m"s educados se ocupan mucho del conocimiento del
cuerpo. or esto, el político ha de tener una teoría del alma, pero ha de teori#ar con
estos obeti!os a la !ista y en la medida suficiente para lo que in!estigamos; pues
e-aminar esta cuesti&n con m"s detalle es acaso demasiado laborioso para nuestro
prop&sito. ()
20
25
n efecto, en los tratados e-otéricos se estudia suficientemente algunos puntos acerca
del alma y hay que ser!irse de ellos; por eemplo, que por una lado tenemos lo
irracional y por otro lado, tenemos lo racional. hora bien, se distinguen estos aspectos
del alma como las partes del cuerpo y todo lo di!isible/ C son dos aspectos s&lo en la
definici&n, pero inseparables por naturale#a, como en la circunferencia lo con!e-o y lo
c&nca!o. ues bien, esto no interesa para los obeti!os presentes. (+)
30
Aonsideremos lo irracional, que parece estar ampliamente distribuida por naturale#a, y
digo que aquello es la causa la nutrici&n y el crecimiento; pues este tipo de poder del
alma se le puede asignar a todos los seres !i!os y que se nutren, incluso a los
embriones, y este mismo poder también est" en los organismos !i!os, pues es m"s
ra#onable esto que adscribir otra facultad al alma. (8)
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s claro, pues, que este tipo de facultad es común a todos los seres !i!os y no solamente
a los humanos; en efecto, parece que esta facultad actúa principalmente en el sue7o; en
donde lo bueno y lo malo se confunden enteramente en el sue7o por eso dicen que en la 5
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mitad de la !ida en nada se diferencian los felices de los desgraciados; y esto se
comprende; pues el sue7o es la cesaci&n de la acti!idad del alma, por lo cual se dice
!irtuosa o per!ersa, a no ser que de algún modo penetren un poco algunos mo!imientos
y resultan así meores los sue7os de los hombres superiores que los de uno cualquiera.
ero basta en torno a esto, y deemos la facultad nutriti!a, pues por naturale#a es aena a
la !irtud humana. (
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Aristóteles establece la primac#a de la pol#tica!
(2) Aristóteles e7plora algunas caracter#sticas de diferentes espacios: en el espacio corporal se pueden separar
las partes en otros espacios no los cóncavo + lo conve7o los aspectos del alma! s interesante la
comparación sugerida por el Oilósofo: por un lado lo cóncavo + lo conve7o; por otro lado lo irracional + lo
racional!
(D) 4ótese que evita designar lo irracional como elemento o parte del alma! s un punto de vista tal como lo
hace el pintor con la perspectiva! s algo que puede ser investigado desde distintos puntos de vista!
() l alma parece incluir los instintos de sobrevivencia de los seres vivos!(H) Aristóteles e7plora los aspectos del alma recordar lo cóncavo + lo conve7o esto es son puntos de vista
inseparables al observar el alma!
(M) Aristóteles penetra el mundo de lo irracional + finalmente encuentra regiones que comparten lo racional + lo
irracional!
(1K) Aristóteles muestra sus cartas: quer#a llegar a clasificar las virtudes en conductuales e intelectuales! sta da
pie a los pró7imos pasos de estudiar cada tipo de virtud!