Promover la igualdad de género y el reforzamiento del

Marco de intervención de DID

Promover la igualdad de género y el reforzamiento del poder económico de mujeres y niñas

Promover la igualdad de géneroMarco de intervención

Página 1

Cuando las mujeres tienen igual acceso que los hombres a los recursos, servicios y oportunidades económicas, se convierten en una verdadera fuerza contra la pobreza. - Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación

Índice

Contexto ................................................................................................................................................................2

Nuestra visión .......................................................................................................................................................3

Nuestro enfoque .................................................................................................................................................4

Nuestra teoría del cambio .................................................................................................................................4

De la teoría a la acción .......................................................................................................................................5

Nuestra apuesta ...................................................................................................................................................6

Nuestro léxico ......................................................................................................................................................7


Página 1

Pági

na 2


Las mujeres y las niñas son poderosas artífices del cambio. Por ello, promover la igualdad de género y el reforzamiento del poder económico de las mujeres y las niñas se encuentra en el corazón de cada una de las intervenciones de Développement international Desjardins (DID).

Si bien se han conseguido grandes avances en la lucha contra la pobreza en el curso de los últimos decenios, el 70% de las personas más pobres del mundo son mujeres. Por lo tanto, queda mucho trabajo por hacer, más específicamente en cuanto a corregir las desigualdades entre géneros y eliminar las discriminaciones basadas en las mismas.

La persistencia de dichas desigualdades compromete las perspectivas de desarrollo económico y social y constituye un obstáculo a la reducción de la pobreza. Por esta razón, los progresos en materia de igualdad de género son una de las condiciones previas para la realización de todos los objetivos del Programa de desarrollo sostenible de aquí a 2030.

Este fenómeno es complejo y debe abordarse considerando que las mujeres no son un grupo homogéneo. Las discriminaciones que les afectan se ven a menudo amplificadas cuando existen simultáneamente otras discriminaciones en base al origen étnico, discapacidad física, religión, orientación sexual, edad o condición social. Las mujeres se ven asimismo afectadas de otro modo y con mayor gravedad por el cambio climático y su repercusión sobre la agricultura.

Este marco de intervención se inscribe dentro de la continuidad de las labores realizadas por DID en el transcurso de los últimos cincuenta años para favorecer la igualdad de género. Tiene como objetivo contribuir al desarrollo de programas más eficaces y coherentes para respaldar el reforzamiento del poder económico de las mujeres y la igualdad de género.

Contexto

El empoderamiento económico de la mujer y su inclusión financiera: una palanca importante para valorizar las mujeres como creadoras de riqueza y empleos, y para eliminar las limitaciones que enfrentan en todo el mundo: • En Asia meridional o África subsahariana, las mujeres

representan más del 60% de la fuerza de trabajo agrícola, y menos del 20% de ellas tienen acceso a la propiedad (ONU-Mujeres).

• El 40% de la población femenina mundial no tiene acceso a servicios financieros formales (Banco Mundial, 2017).

• El acceso a los servicios financieros es uno de los principales obstáculos a la iniciativa empresarial de las mujeres. Aproximadamente el 70% de las mujeres directoras de pequeñas y medianas empresas (PYMES) no obtienen el financiamiento que necesitan (Banco Mundial, 2017).

• Mil millones de mujeres, en otras palabras, alrededor de una séptima parte de la población mundial, no logran alcanzar su pleno potencial y asegurar su propio bienestar económico y social, debido a las barreras que les impiden acceder al mercado laboral y contribuir a la economía de manera productiva (Naciones Unidas).

Pági

na 2



Página 3

DID considera que la inclusión financiera es un enfoque eficaz para contribuir al reforzamiento del poder económico de las mujeres y a la igualdad de género si va acompañado de estrategias que busquen derribar los obstáculos sistémicos que limitan el acceso de las mujeres a los recursos financieros y productivos, a los mercados, al empleo y a la toma de decisiones.

Nuestra visión

Tanto si se trata del principal objetivo de nuestras intervenciones o no, DID tiene en cuenta la situación de todos los grupos marginalizados, así como el papel clave de los hombres y los niños en el avance de la igualdad de género.

Barreras de diversos tipos impiden a las mujeres el acceso y el uso de productos y servicios financieros:

• Oferta de servicios: productos mal adaptados a las necesidades de las mujeres, desconocimiento por parte de las instituciones de finanzas inclusivas del segmento de mercado representado por las mujeres, cobertura territorial limitada, falta de datos desagregados por sexo, etc.

• Demanda: falta de acceso a la información, alto grado de analfabetismo, falta de bienes para las garantías, falta de ingresos estables, bajo poder de negociación, etc.

• Prácticas y normas sociales que contribuyen a mantener a las mujeres en actividades de baja rentabilidad o de bajos ingresos: movilidad reducida, división sexual del trabajo en roles de género determinados socialmente, normas culturales, etc.

DID está convencido de que las finanzas digitales son un acelerador de inclusión financiera, pero que se deben poner en marcha estrategias específicas para llegar a las mujeres, en particular aquellas que viven en comunidades pobres y marginadas – quienes, en general, tienen más probabilidades de estar del lado desafortunado de la brecha digital.

Por último, DID también cree que la inclusión financiera puede fortalecer la resiliencia de las mujeres, que a menudo se ven afectadas desproporcionadamente por los impactos del cambio climático, debido a la persistencia de normas sociales que las discriminan. Las mujeres, al interior de las comunidades, están en una posición estratégica para iniciar actividades de respuesta al cambio climático. Fortalecer la capacidad de las instituciones de finanzas inclusivas a adaptar productos financieros destinados a apoyar mejor estas iniciativas constituye una de las prioridades de DID.

La misión de DID es aumentar la autonomía de las poblaciones menos afortunadas del mundo dándoles acceso a servicios financieros diversificados y seguros. DID apoya e integra la igualdad de género y el reforzamiento del poder de mujeres y niñas en cada una de sus iniciativas en el mundo. Tanto si se trata del principal objetivo de nuestras intervenciones o no, DID tiene en cuenta la situación de todos los grupos marginalizados, así como el papel clave de los hombres y los niños en el avance de la igualdad de género.

Eliminar estas barreras podría dar lugar a mayores inversiones en actividades generadoras de ingresos, el aumento de la demanda de productos financieros y el incremento de los ingresos. Reconociendo que las mujeres reinvierten hasta el 90% de sus ingresos en sus familias y comunidades, comparado con el 30 a 40% de los hombres, la inclusión financiera de las mujeres tiene efectos importantes en el bienestar de las comunidades.

Cuando las mujeres participan activamente en el sistema financiero, pueden manejar mejor el riesgo, ajustar su consumo frente a las dificultades o financiar gastos del hogar como la educación.

Página 3

Pági

na 4


DID considera que una estrategia de inclusión financiera será más susceptible de lograr el reforzamiento del poder económico de las mujeres, la igualdad de género y la reducción de la pobreza:

• SI se establecen acciones de refuerzo de las capacidades, de la confianza, de la autoestima y del liderazgo de las mujeres y las niñas para permitirles aprovechar las oportunidades y hacerse un lugar en el seno de las instancias de toma de decisiones, incluyendo familia y comunidad;

• SI las mujeres y las niñas tienen acceso a una gama completa de productos y servicios y de asesoría asequibles y adaptados a sus necesidades, y tienen la posibilidad de utilizarlos y de controlar los beneficios de los mismos;

• SI, paralelamente, el entorno político, legal e institucional y la estructura de los mercados presenta condiciones favorables a un acceso igualitario a las oportunidades y recursos económicos y al ejercicio de los derechos de las mujeres;

• Y SI se insta a los hombres y los niños a comprometerse activamente en la transformación de normas y prácticas sociales discriminatorias que limitan a mujeres y niñas el ejercicio de sus derechos y el acceso a posibilidades de autonomización y recursos.

Nuestro enfoque El enfoque de DID en materia de inclusión financiera busca efectos transformadores mediante la elaboración de estrategias para abordar las causas subyacentes de la desigualdad. Este enfoque sistémico se basa en intervenciones que buscan cambiar la demanda, la oferta y el ecosistema:

DemandaAumentar el poder y la capacidad de actuar de la mujer (cambios en sus conocimientos, habilidades, capacidad de tomar decisiones y hacer elecciones), y reducir las limitaciones en el uso de los productos y servicios financieros y los recursos productivos

OfertaMejorar las prácticas y políticas de las instituciones financieras y el ecosistema empresarial para hacerlos más sensibles a las cuestiones de género y eliminar las limitaciones de acceso para las mujeres

EcosistemaRevisar las normas sociales y los sistemas de reglamentación que pueden discriminar a la mujer y obstaculizar el ejercicio de sus derechos.

Nuestra teoría del cambio


Página 5

De la teoría a la acciónLas intervenciones del DID tratan de permitir que las mujeres y las niñas aumenten el control sobre sus vidas.

• Asesorar el desarrollo de productos y servicios financieros innovadores, asequibles y adaptados a las necesidades de la clientela, incluyendo los productos de finanzas digitales.

• Facilitar el acceso a recursos productivos, servicios, prácticas inteligentes de cara al cambio climático y tecnologías que permiten aligerar la carga de trabajo.

• Apoyar el desarrollo del espíritu emprendedor femenino, específicamente a través de servicios de asesoría a empresas femeninas.

• Favorecer la adopción de prácticas de gestión de recursos humanos sensibles al género.

• Promover el reparto igualitario del empleo entre hombres y mujeres.

• Facilitar la inserción de las mujeres en los circuitos productivos organizados.

• Aplicar un enfoque sensible al género y que cubra la cadena de valor en su totalidad.

• Favorecer la adquisición y la aplicación de conocimientos por parte de las mujeres, sobre todo en materia de educación financiera y de alfabetización digital.

• Desarrollar el liderazgo y la autoestima de las mujeres, con el objetivo de favorecer su participación en la gobernanza de organizaciones, instando al diálogo entre hombres y mujeres y permitiendo que las mujeres conozcan mejor sus derechos.

5. Acceso al poder

4. Desarrollo de capacidades

3. Acceso a los mercados

2. Acceso a un empleo decente

1. Acceso a recursos financieros y productivos

Mejorar el acceso de las mujeres a las oportunidades económicas

Reforzar el poder y la capacidad de actuar de mujeres y niñas

Página 5

Pági

na 6


Nuestra apuestaDID sigue un riguroso enfoque para asegurarse de que desarrolla intervenciones favorables para el reforzamiento del poder económico de las mujeres y la igualdad de género.

• DID basa todas sus intervenciones en un conocimiento a fondo de la dinámica entre hombres y mujeres, obtenido por medio de análisis realizados in situ. Para DID, el análisis comparativo entre sexos (ACS+) – que tiene en cuenta el género, pero también factores tales como la edad, la raza o la religión – constituye la primera etapa de toda planificación de proyecto, tenga o no éste como objetivo principal el reforzamiento del poder económico de las mujeres y la promoción de la igualdad de género.

• DID consulta sistemáticamente a las organizaciones de mujeres u organizaciones que trabajan con ellas desde el momento de concebir y planificar sus proyectos.

• DID establece asociaciones innovadoras, sobre todo con instituciones financieras, operadores de dinero electrónico, organizaciones que trabajan con mujeres, actores comunitarios, empresas privadas, actores estatales, y la comunidad de ONG locales e internacionales.

• DID promueve la participación de hombres y niños, mujeres y niñas en sus intervenciones. Creemos que la sensibilización de los hombres y los niños sobre la importancia de la igualdad de género y el respeto de los derechos de la mujer los convierte en socios del cambio.

• DID sigue y mide sus resultados. De hecho, la apreciación de los progresos logrados por DID en materia de refuerzo del poder económico de las mujeres y la igualdad de género no puede conseguirse más que por el seguimiento y la evaluación continuos de objetivos e indicadores de resultados.

Pági

na 6



Página 7

Nuestro léxicoSexo y géneroLa definición y la utilización de los términos “sexo” y “género” han evolucionado con el transcurso del tiempo y siguen siendo objeto de debate. Si bien designan conceptos diferentes, estos dos términos a menudo se utilizan incorrectamente, o como sinónimos. Según la ONU:

• Sexo: El sexo se refiere a las características biológicas que definen a los seres humanos como mujeres y hombres.

• Género: roles, comportamientos, actividades, y atributos que una sociedad determinada en una época determinada considera apropiados para hombres y mujeres […] Estos atributos, oportunidades y relaciones son construidos socialmente y aprendidos a través del proceso de socialización. Son específicos al contexto/época y son cambiantes.

Igualdad de géneroLa igualdad de género significa que los derechos, las responsabilidades de las mujeres y de los hombres, así como las oportunidades disponibles, no dependen del hecho de haber nacido con uno u otro sexo. Significa que las mujeres y los hombres tienen el mismo estatus y que disfrutan de las mismas condiciones para realizar plenamente sus derechos fundamentales y su potencial, de manera que puedan contribuir al desarrollo nacional, político, económico, social y cultural, y beneficiarse de los resultados.

Equidad de géneroLa equidad es el medio por el cual logramos la igualdad entre los géneros. Implica ser justos para con las mujeres y los hombres. Así pues, la equidad entre géneros significa que debe darse un tratamiento imparcial a hombres y mujeres, en función de sus necesidades respectivas. Dicho tratamiento puede ser idéntico o diferente, pero debe ser equivalente en cuanto a derechos, ventajas, obligaciones y oportunidades.

InterseccionalidadLa interseccionalidad estudia las formas de dominación y discriminación no por separado, sino juntamente con las relaciones que se forman entre ellas, partiendo del principio de que las diferenciaciones sociales como el género, la raza, la clase o la orientación sexual no están compartimentadas, y que las relaciones de dominación entre categorías sociales no pueden ser explicadas en su totalidad si se estudian por separado.

La autonomización La autonomización significa que un individuo, mujer u hombre, puede tomar las riendas de su vida: definir sus propias prioridades, desarrollar sus competencias o hacer valer sus competencias o sus conocimientos, reforzar su autoconfianza y su independencia, y resolver problemas. Proceso y resultado a la vez, la autonomización implica el reforzamiento de la capacidad de las mujeres para tomar decisiones estratégicas. (Kabeer, 1999).

La autonomización económica La autonomización económica significa que una persona tiene la capacidad, el poder y la libertad de tomar decisiones que mejoren su bienestar económico y financiero. Para las mujeres, ello implica contribuir financieramente al hogar y contar con los medios financierosy la libertad de crear una empresa, estudiar o participar en programas de capacitación.

Documents

Promover la igualdad de género y el reforzamiento del