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NUESTRA PORTADA ES EL
EMBLEMA OFICIAL
DEL EJERCITO
En él están representadosen
los colores de la Bandera: La
espada de Santiago Patrón
El problema del reclutamiento de lo
Coron
__ _ _
sú
Eército Revistailustrada de las Armas y Servtcos
Febrero 1969 AñoXXX Número 349
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
3/76
,
jÓ.rclto
REVISTA ILUSTRADADE
LAS ARMASY SERVIUOS
Modrd febrero
969 - Ao XXX - Núm.
‘DepÓslto legal»:
M.
1633-1958.
Dirección: El General Jefe del Servicio de Publicaciones del
General de División, Excmo Sr. D. Carlos Toboada Sangro, Con
Dirección de Colaboración,
Ilmo.
Sr. Coronel de E. M. D. Alfonso
Fe
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4/76
El
prolema del re -
elutamiento ¿[e la
oficialidad en España
Coronel de Infantería del S. E. M. (Retirado)
Juan FERNANDEZ VIDA, de la 5.’ Región
Militar
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tablero internacional, y ayer Budapest, hoy Pra
ga, mañana... Un dato que comprueba esta cu
riosa teoría de la anestesia y el avance, lo cons
tituye el hecho siguiente: Al iniciarse la G. M. II.,
la frontera rusa iba —en líneas muy generales—
desde las inmediaciones de la Península de Pes
cadores, en el Artico, hasta las proximidades de
la desembocadura del Niester en el mar Negro;
pero sin comprender Estonia, Letonia y Lituania,
estados surgidos del Tratado de Versalles (que
puso fin a la guerra del 14) para alejar a Rusia
del Báltico... Hoy contingentes soviéticos mon
tan guardia en el bajo Elba, no lejos del mar del
Nort, a más de 1.000 Km. de distancia (hacia
el Oeste) de la citada frontera; y su flota, tantos
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utílitario de la sociedad a que pertenecen; es de
cir: analizando pros
y
contras, pesando ventajas
e inconvenientes,
y
al verificar tal examen de la
carrera militar, se encuentran: con que esta nun
ca fue rentable (1), que no les garantiza una resi
dencia fija en que fundar un hogar con tranquili
dad, sino con traslados que muchas veces impo
nen penosas separaciones o complejos problemas
de alojamiento
y
educación de los hijos, etc.; si a
todo ello le agregamos la inexacta y generalizada
idea de la dureza de la disciplina militar, se com
prenderá fácilmente que a la totalización de este
baremo la solución militar sea descartada en el
problema de la vida futura de muchos estudiantes.
Hay que buscar la forma de lograr que las Aca
demias Militares constituyan un foco de atracción
para una parte de la población estudiantil. En re
lación con esta finalidad y sin carácter de remedio,
pero sí con el de ejemplo, señalaremos que en el
En este aspecto
se dice, vamos
lo menos desate
condiciona gran
nas, denominada:
que no es precis
nocida, incluso,
amas de casa en
tico. Pero si po
afirmar que hay
mias, sí podemo
sea de un modo
gico que, por es
parecida a la qu
en situaciones a
rar crear la dem
das las facilidad
lugar de obrar
nos proponemos
nando obstáculo
juzgar por lo q
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7/76
completo, con sus dos reválidas y el curso
preuniversitario y, además, se han agregado a
la clásica preparación de ingreso algunas teo
rías de Matemáticas y alguna nueva asignatura
como la Física, aprobada ya en los Institutos.
¿Y
qué.
hemos conseguido con ello, aparte, claro está,
de que los aspirantes ingresen en la Academia
con más edad? Pues, sencillamente,
que
como el
«preu» es el «coco» de la masa estudiantil, cuan
do logran aprobarlo y, por las razones expuestas
antes en el análisis de la causa de la disminución
de vocaciones militares, escogen otra carrera que
estiman más cómoda o lucrativa; cualquiera me
nos la de militar.
‘No se nos oculta que este plan de estudios es
más benéficioso, indirectamente para los mucha
chos que el anteriormente expuesto, pues si des
pués de sucesivos intentos para ingresar en la
Academia realizados sin éxito, llegan a sobrepa
sar la edad señalada para poder efectuarlo, están
en mejores condiciones para emprender otros de
y siempre que hay dem
se endurce.
Pero también existe
cio importantísima, que
la edad de ingreso en
es la de poder proporc
babilidades de éxito, un
a nuestros futuros Ofic
El incesante
y
continua
cias ha alcanzado a tod
vidad humana y entre el
litar, creando una psicos
briaguez, de tecnicismo
vido de las virtudes mora
que sirven las armas má
más modernos, si no exi
manejarlos.
Hace más de dos mil
historiador romano, afir
que en un combatiente
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8/76
ral y política; puede por consiguiente afirmarse,
que la instrucción moral de los futuros Oficiales
se inicia en su niñez, lo que garantiza la obten
ción de excelentes resultados, mientras que la de
los nuestros comienza cuando cuentan unos vein
te años de edad.
Hay otro aspecto del problema que nos ocupa
que si materialmente, no constituye uno de los
motivos de ese retraimiento de la juventud que
tan repetidamente venimos señalando, no hay du
da de que lo facilita. Nos referimos a esa separa
ción, o más propiamente, a ese aislamiento que
existe entre el Ejército —como Institución—
y
la
sociedad civil, que parece convertirlos en dos mun
dos distintos que mutuamente ignorasen sus res
pectivas existencias. No resulta comprensible que
en una época como la actual, en que la propagan
da y la publicidad son factores capitales de nume
rosas actividades de la humanidad no sólo mate
riales, sino hasta espirituales, permanezca semi
oculto en sus cuarteles con muy escasos contactos
titución Militar
primido también
tades juveniles
aquella popularid
tinuada presenci
naba.
Hay que reva
reforzar este pr
«airear» el Ejér
con la reiteración
cia que en la a
un nuevo aspec
Una de las co
la moral de la
prensión
y
la
Cuando la liber
país peligra, su
Ejército, le pres
adula; pero cua
ras de angustia
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ello nada mejor que convivir con ella, prestarle
nuestro apoyo y nuestra ayuda, tanto en sus con
trariedades como en sus regocijos, e incluso en
sus trabajos, especialmente si son de interés na
:ional. Con relación a este último punto —y única
nente a título de ejemplo— no nos resistimos a
:onsignar aquí lo que. el escritor francés Raymond
artier pone de manifiesto en su obra «Las cm
cuenta Américas’>: Las importantes y costosísi
nas obras —por su gran extensión— efectuadas
Dara proteger las tierras ribereñas del Missisipi de
as frecuentes y devastadoras avenidas del río, las
leyó a cabo el ejército de los Estados Unidos.
No somos partidarios, ni mucho menos, de la
njerencia de ningún Organismo en los asuntos
)rivativos de otro; pero si se puede establecer un
icuerdo previo, nada perdería el Estado con que
n esas pequeñas obras que muchas veces consti
:uyen una necesidad, un anhelo de las modestas
)Oblaciones rurales como el camino que puede
mirlas con la estación de ferrocarril más próxima,
otros detalles de análoga
que tienen en sus manos y
nejen pueden hacer de «la
o un oficio.
Hay una última causa q
tivo
en
el problema de l
La Historia nos ofrece
que cuando un pueblo log
bienestar, una excesiva riq
de sus virtudes cívicas, y
te, no es este el caso de nu
que los treinta años escaso
peridad y bienestar nos ha
dones, un poco egoistas, c
sitivista que nos lleva a m
titud, toda idea que pudie
tranquilo disfrute de dicho
vierte a la sociedad en te
difusión de aquellas propa
apuntamos como la primer
vocaciones; y anula, o por
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El
‘ua
Comandante de Intendencia Francisco DALLARES SAN
de Intendencia de Santander
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Tomando como base un hombre de 70 kgs. de
eso, veamos como se distribuye el agua que nor
almente debe contener su organismo. Treinta
y
inco litros (la mitad de su peso) se encuentran
n el interior de las células retenida en cada una
e ellas por una membrana de propiedades pro
igiosas, ya que sólo deja penetrar las sustancias
utritivas a excepción de la sal,
y
no deja salir
ás que los residuos de la vida celular. Este agua
ntracelular se renueva constantemente. Forma
arte de la sustancia misma de la cédula y es e3
edio propicio e indispensable para que pueda
xistir la vida.
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Cuadro del pin
se verá aumenta
de entrada. Al
do absorve de
do superiores
A través de
dedor de 180 l
eliminados arr
tales como ure
das de la sangr
tituye la orina
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ás de 500. Lo mismo ocurre entre los tripulantes
e los petroleros no climatizados que navegan por
os parajes. Tanto en un caso como en otro, estas
ntes disponen de agua abundante y, sin embar
mueren por deshidratación. Esto es debido a
ue por efecto del calor transpiran abundantemen.
llegando a perder 10 litros de agua extracelular
24 horas. -Pero el sudor que es un mecanisho de
efensa natural, tiene el inconveniente de eliminar
sal de la que contiene un 0,4 por
100.El
calor
focante produce en estos hombres inapetencia
gran desgana para ingerir alimentos, no pudien
o por tanto reponer la sal eliminada por el su
r. Sóio les apetece beber y beber metiéndose en
nces en- un círculo infernal,,ya que cuanto más
quido ingieren más transpiran y más sal pierden,
oniendo en gravísimo riesgo sus vidas.
contra la deshidratación q
común de- uso-normal en
Tan sencilla medida no
tro país donde los verano
tórridos en la región andalu
del interior. La transpiració
soldados durante el desarr
de instrucción y en los ejer
derivados, es realmente im
circunstancias no se les fa
ganismo necesita, aparecen
e indolencia que se achacan
br reinante, cuando en rea
cia de dicha sustancia que
ción acusada de aptitudes
una sed insaciable.
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iuchos casos de eslos se producen entre los ríe
regrinos que anualmente se trasladan a la Meca a
pie.
La deshidratación es particularmente grave en
los niños recién nacidos o de pocos meses, cuyo
organismo no está todavía preparado para defen
derse. Por tanto, se impone una seria vigilancia a
este respecto no sólo en verano, sino también en
invierno, que con los sistemas de calefacción mo
dernos se producen elevadas témperaturas en el
interior de las viviendas. Si además se coloca a los
niños cerca
de los radiadores sin quitarles las
mantas de la cuna, no hay duda dc que sufrirán
una
transpiración intensa
de
consecuencias graví
simas, sin que sus padres lo sospechen. No se per
turba impunemente el equilibrio hídrico
de
un
niño a estas edades y su restablecimiento es a me
opcraoria pu
audaces.»
Es
por tanto
día en mantene
vigilando cons
experimenta s
talar la cama
minución de p
La intervenci
te en los órga
en efecto, una
la exposición
a
una fuerte
que el paciente
te después (l
nársela por v
ción y tan pro
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ación acaba por équlstar el organIsmo. e ha
odido comprobar, incluso en algunas personas
na disminución de su peso aumentando su ra
jón de agua. El agua es también el mejor medio
e disminuir y de impedirla precipitación de cier
as sustancias como los fosfatos, el ácido úrico, el
xalato de cal y, por tanto, la formación de cálcu
)S
renales; incluso si estos cálculos han aparecido
a dando lugar a los peligrosos cólicos nefríticos,
o hay mejor medio natural para -la eliminación
ue beber y beber mucho ingiriendo hasta tres
tros de agua diarios, empezando por la mañana
n ayunas con un buen vaso.
--
El agua preserva también de numerosas afec
ones de las vías urinarias como la colibacilosis.
Cabe preguntarse qué tipos de agua conviene to
Lar, ya que cada vez se consume mayor cantidad
e aguas minerales con la creencia dé ser mejo
estos áasos las aguas mine
modo indispensables. Es
pueden provocar la carenc
superabundancia de otras,
sulta fácil. Utiles y necesari
rnadas indiscriminadamente
aparición de ciertos trastorn
hidratación por sus propie
toman bebidas tales como
veza, de las que no se pu
tomadas de forma razonab
la más higiénica, la más u
mada en cualquier época
y
que puede considerarse co
nuestra salud y la única q
al alcance de todas las fort
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CiIICTEIISTICISDEll SUE
Capitán de Artillería, diplomado de E. M., Julián FE
disponible en la 6. Región Milita
1. Tema.
Del simple enunciado del título de este artículo
se deduce su contenido:
¿Qué es la guerra? (1)
¿Cuál es la evolución que parecen dibujar los
factores más importantes que la condicionan?
Hombre, y po
les, la adopció
les, que ya reg
siglos para el
leza y que se b
tación, y cálc
Son estos p
el de la
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Lo lÓgico, sin embargó, é 4Üe para ser fieles ñ
los descubrimientos y espíritu de este nivel del
tiempo en que nos ha tocado vivir y en el que se
ha enunciado el
principio de la indeterminación
ísica por el alemán Heisenberg, hemos de negar
también para los fenómenos sociales y la guerra
como tal, un riguroso, o r igoroso, cómo diría Or
tega y Gasset, principio de causalidad.
El fenómeno social, que es la guerra, está condi
ionado por una serie amplísima de factores.
No todos son conocidos, ni podemos afirmar que
[os más fácilmente observables sean los más im
portantes
Estos factores se influyen mutuamente obede
:iendo a la dialéctica hegeliana.
Hemos de deducir, pues, la imposibilidad en
ue nos vemos en la valoración total
y
exhausti
‘a de todos.
En el hipotético caso de que la pudiésemos rea
izar, creo que llegaríamos a la conclusión de que
a guerra tiene unas causas remotas y lejanas en
.I.
¿Existe evoiuci6n
Sí. Vivimos en un niv
puede caracterizarse por
social muy acelerada:
Se han necesitado
el hombre alcanzase
hora.
En un siglo se ha p
varios Mach.
• Si hace no más de 2
el camino que toda
nación en nación,
y
t
pa, actualmente se p
mente y en todas la
los medios de comun
•
Si antes
un
período
de un ciclo económ
ra dura un decenio.
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ner que la guerra de ún futuro próximo se iba a
realizar con arreglo a los cánones deducidos de
un conformismo supuesto y no confirmado de las
experiencias recogidas de un pasado reciente.
Dice el General del Aire Kingston McCloughry,
en su libro. «Guerra de tres dimensiones»:
«Se ha visto siempre que las lecciones de una
guerra son inaplicables al estallido de la guerra
siguiente. Es por consiguiente peligroso basar la
organización bélica para el futuro en las condicio
nes del presente; es tan grande, además, el núme
ro de incógnitas,, que es difícilmente posible pre
ver todas las direcciones que puede seguir el des
arrollo de un conflicto, o los aspectos en que han
de realizarse los mayores y más inmediatos pro
gresos. El basar la organización bélica defens.iva
de una nación en una visión fija y permanente de
las condiciones futuras, es no menos peligroso que
fundamentarla en la situación presente o el pa
sado. Las circunstancias futuras a que con la or
breve plazo. Alu
ya evidente
y
q
parcialmente la
das circunstancia
sería inadecuado
Una parte con
de
guerra está
i
de «guerra fría»,
analogía que gu
gicas engañosas,
toma advertidor
tente, pero no p
Iniciadas sin
ducidas sin ci e
flagraciones intcurso anodino,
mativos, pero n
El examen de
y
de sus métodos
sobre el empleo
ganización, así c
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19/76
fila ahora claramente un envolvimiento de Euro
pa por el Sur, al haber irrumpido la flota rusa en
el Mediterráneo y haberse ganado unos aliados
que, sin la agresión israelita, habrían adoptado
una posición neutral en un futuro conflicto.
Lo que para un bloqueo ha sido una derrota
«caliente», se ha convertido en el breve plazo de
un año en una victoria «fría» de importancia infi
nitamente más decisiva.
3.32. Guerra convencional y sús futuras caracte
rísticas.
3.321. Intérdependencia de guerra y economía.
Volviendo a los aspectos habituales de los fac
tores determinantes de la guerra convencional, es
indudable que la estructura económica y social de
los Estados incide enérgicamente sobre la guerra
moderna, ya que requiere la adaptación de su or
ganización a las exigencias de un esfuerzo de pro
ducción de intensidad enorme y de duración im
previsible, modificando profundamente, además,
tensidad y una extensión
do ni siquiera soñar en
3.323. Tridjmensjonaljdad
La guerra ha entrado
dimensional, y este eje
fluencia sobre sus forma
miento.
En el cuadro de una e
acciones se combinan e
en el tiempo, sin posibili
ladas, ni en la concepción
3.324. Armas nuevas, qu
La técnica no actúa sol
armas, pero forja tambié
timas hacen ineficaces m
acción de las anteriores,
ciclo.
Muchas armas, que en
ñado funciones de prime
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rial es función del hombre y de los factores mo
rales.
El espectáculo ofrecido por una potencia mun
dial como Norteamérica, poderosamente armada
y mecanizada, dueáa incontrastable del mar y
del aire, y que se ve obligada, sin embargo, a ba
tirse en retirada ante una masa de infantes, pro
vistos solamente de armas ligeras, como sucedió
en Corea, es un espectáculo que Asia y Europa
no pueden olvidar.
Entre los factores morales se encuentran el es
píritu nacional y el caracter nacional, que son
cualidades intrínsecas del género humano, y por
consiguiente, bienes originarios, no de producción,
que sólo se pueden perfeccionar mediante la cul
tura y la educación.
Entre los factores morales, se suele incluir tam
bién, normalmente, la capacidad de organización,
que comprende a su vez:
• La preparación de las fuerzas armadas;
Alemania comenz
1933, entrando en
Y hay que adver
precedentes, no se
financieras.
En el año 1954, e
de liras el valor de
rra de 30.000 homb
El choque impro
dos grandes masas
de gran potencia
que puede atraer
cos, por la riqueza
coreográficos, pero
su falta de conform
4. ¿Cómo será, pu
A la luz de las c
aquí, voy a trazar
desarrolló de una
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grueso de los Ejércitos se dirigirá volando a los
campos de batalla y recibirá en ellos» por vía aé
rea» los abastecimientos indispensables.
Las operaciones, caracterizadas por un eleva
do dinamismo» harán indispensable esta modali
dad de transporte» porque las situaciones tácticas
y estratégicas cambiarán de hora en hora, en lu
gar de cambiar de día en día o de semana en se
mana, como ocurría en el pasado.
El dinamismo bélico se traduce en una mayor
velocidad operativa, y esta implica tanto para el
General en Jefe como para el último combatiente,
nuevos problemas o nuevos métodos para resolverlos antiguos.
La próxima guerra será total, como ya se ha di
cho, y es conveniente repetirlo. Abarcará a todos
los continentes.
En un conflicto de caráct.er intercontinental, los
• dispersión;
• enterramiento.
Esta actitud defensi
rrestar el primer golpe
muy rudo, debe ser pla
ciones, es decir, con vi
tísima de hacer frente
que no puede evitarse
a afrontar los Tiesgos
Las fuerzas que se
que serán las que con
las disposiciones adopt
berán desde este mom
damente para actuar v
tos enemigos que hay
objetivos; Se les debe i
Sión y recibir refuerzos
vez
contenido el ataqu
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23/76
—
Dtos que obran en las Planas Mayores o Es
tados Mayores.
Asesoramientos previos o consultas que se
consideren necesarias.
1.4. Estudio de las decjsjonés a tomar antes de
iniciar la marcha. (si procede).
Consecuencias:
—
Orden Preparatoria
1.5. Estudio de Factores y asesoramientos de
Estados Mayores y Jefes de Armas y Ser
vicios (en las Grandes Unidades) o de
PLM.s y Jefes Unidades subordinadas (en
las peqüeñas Unidades), así como los Jefes
de otras Unidades y cualquier otra persona
cuyo concurso pueda ser eficaz.
1.& Decisión.
1.7. Recláccjón de la Orden General de Marcha
y sus Anexos.
.
1.8. Difusión o Distribución de la Orden.
1.9. Organización de la acción del mando du
rante la marcha y verificación del cumpli
miento de las órdenes.
vios? Hay
en este sen
¿ Convenienc
2.06. Ejecución del
(Otros detalles
—
Cálculo ráp
y, en razón
diar a fond
dactar las
dirlas; tiem
Unidades su
de sus órden
sus previsio
ra ponerse
movimiento
inicial, tenie
debe tomars
pensable, de
máximo pos
— Hacerse ráp
mitaciones y
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24/76
a víveres, sanidad, automovilismo, carbu
rantes y grasas, ¿hay algo que hacer en re
lación a estos asuntos y que nos haga ganar
algún tiempo?
2.12. Consecuencias.
2.121. Decisiones de carácter inmediato
Trabajos a realizar
que
Red
tes.
2.122. Re
nie
sid
iiúmero de m
a) Organización del trabajo.
b) Acopio de datos.
c) Concepción, redacción y difusión de la Orden
Preparatoria.
d) Concepción, redacción y difusión de la Orden
General y sus Anexos.
e) Decisiones de las Unidades Subordinadas.
f) Preparación de éstas para iniciar el movimien
to.
Puede ser que la orden recibida no esté comple
ta, en este caso muchas de estas consecuencias,
se obtendrían del posterior estudio.
diversos órganos
les un plazo pa
la repartición
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25/76
Materias a estudiar
Consecuencias a obtener
ee-la consideracjn detenida dat
1 —Misi6n
propia
— Unidadee
laterales y fuer—
zas a vanguardia y
reta
guardia.
—
Circunstancias as-tron6mioaa
y atmosferioas
— Zona de Marcha
— Tiempo disponible
—
Caracteristjoaa generales de
loe medios de transporte y
combate.
Terrestre Fuerzas Acorazadas o
Meo.
Peraoaidistas
Qaerrilleros
Otras fuerzas a pie
-
Fuegos de Artilleria
Daben deduoirse
en
prinoiplo
los
tea oonoeptoe
—
Urgencia e importancia del iuo
to.
—
Orden
de
marcha de los distintos
sontos.
—
Orden de urgencia de llegada
—
Despliegue
en fin de jornada
—
Seguridad previsible
— Horas del día
me
conveniente
la marcha.
Terrestr: De-terminación
de posibl
avenidas de carros
idem de tropas a pie
Posibilidad do fuegos
Idem :e obstrucciones
De le. consideración de
le. actividad Pueden deducirse las medidas de se
enemiga: dad:
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26/76
Materias a estudiar
Consecuencias a
e
aulogo estt4io, consideran
—
Trabajos neseaerioe
las tlnida&as (fuerzas
realizarlos y piazo
-
Jaloniento y sefializ
y material necesario,
han de darloé)
— Sistama de Tranz ini.n
— Trabajos pr isoc en
taelónamiento (raarzas
ejeouoi6n).
—
Eiaui4n
y distribución
neo partieutres.
—
Delimitaci6n
de las
da las Unidades.
Puede deducirse lose
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27/76
Materias a estudiar
Consecuencias a obtener
t
antiogee
oozzdioiones
en s- se dedueidt
apeo-tO 8anitario.
— PuestOs de recogidas de bajas
— Medice de evacaiaci6n
— Ragiman de evacuaciones
n lo
que respeota al Seriieio
Le Carburantes y graaE.
.
.
-
‘
.
.
interesat
.
— D.p6sito, horas de i,nioiar
el
suninis-tro plazo marizo pera
realizarlo, tluüdades que han de
sorvirse y s is-t ea a emplear.
—
Dp6sito (civiles o ?nilitare*)
para el c3tIminiz-ro
a
peueUas
fracejonen, ve
ajalados
o
imsjdencidae. Tramite para
el
w21lIiietrc.
para el
8ervloio da Autoaovllia—
.
se teadr en
cruentat.
-
R.paei6n
‘
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28/76
La nación filipina está formada por un archipié
lago de 7.083 islas diseminadas de Norte a Sur,
entre los paralelos
4°
y 21° Norte, que entre todas
hacen una superficie de 300.000 Km.2 Ocupan es
tas islas veintisiete millones de habitantes.
El Presidente de la República es elegido cada
cuatro años y está asistido por un Senado de muy
pocos miembros y por una Cámara de un cente
nar de diputados.
La mayor ciudad de Filipinas es Manila, que tie
ne poco más de un millón de habitantes, de carác
ter étnico y cultural, típicamente malayo. La larga
colonización española hispanizó ampliamente el
país y le convirtió a la Religión Católica y coexis
tiendo con los dialectos malayos difundió mucho
el. idioma castellano. Filipinas es, por eso, el más
europeizado de Asia.
La mayor de las islas es Luzón y también la
más septentrional. En ella viven la mitad de todos
los habitantes de todo el archipiélago. A pesar de
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29/76
vez de la independencia, Filipinas pasó a ser
;esión norteamericana. Luego, en la III Guerra
tndial, se apoderó el Japón de Manila y de una
n parte de Luzón, hasta la llegada de los aliados
que el Japón fue expulsado. Desde 1966 se ha
Lado en el Gobierno filipino una mayor aproxi
ción a España.
principios del año 1960, las mil millas de lar-
que de Norte a Sur tiene el archipiélago filipi.
se ofrecían a los ojos del observador como un
s muy variado socialmente. Los parajes del
itro de Luzón estabán corno cuando los españo
llegaron en 1540; allí viven los campesinos que
tivan el arroz; en las partes ceritrale de las is
Visayas donde se cultiva el azucar de caña se
‘uia vivieiido con la misma pobreza
,
con el
smo aislamiento pero en cambio hab a un in
és real por .ehjiqgreso y por la educación que
:ía de Filipinas, una nción diferente de cual
er repubhca de Malasia
rodeada de una belleza natu
ñada por la viólencia.
MANILA
EJ centro, con sus anuncios
dedores en las aceras, sus c
dos, sus iglesias, sus plazas,
caballos, llamados
calesas
y
de mujeres hermosas, hace q
ta como en una especie de N
—
Estarnos realmente entre
un publicista filipinó—. Yo
un momento de transición y
americános no se dan cuenta
que tenemos. Se dejan llevar
comunes, como una prensa lib
talismo, Coca-Cola. y Cadillac
como ellos. Las palabras pue
pero su significado es distinto
Las discusiones inspiradas
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30/76
y de bronce, establos con aire acondicionado y jar
dines, la maycría. Algunas de estas casas son una
mezcla de buen gusto de lo oriental y de lo occi
dental; en otras, del nuevo rico, el mal gusto apa
recen en tal forma como en ningún otro lugar del
mundo.
L
característico de estos barrios residenciales
son las cercas. Son una especie de ciudades forti
ficadas, cada una con su muro, con su sistema•
de
provisión de agua y policía particular bien arma
da, que mira con mala cara a los filipinos vulgares,
ue saluda amablemente a los norteamericanos y
a Ios ricos y que patrulla por las calles bien arbo
ladas. Es una mezcla extraña de barrio residen
cial norteamericano y de la vieja ciudad española,
en el viejo centro de Manila, cuyos muros se de
rrumban esperando restauración.
Oscar Arellano, que está al frente de la Opera-
ción Herman
rio, mueve l
—Soy arq
esas puertas
tener alejad
sr’ da cuenta
gastase en
no tendríamo
cuencia.
«UNA ESPE
JOHNSON
Malacañan
ca de estilo
guo goberna
dor general
viejo distrito
pera para l
Una calle de Manila
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sidente es el salón de recepciones del primer
,
una sala de un lujo extraordinario, con grue
alfombras, ricas maderas, cuadros de los ante
es presidentes y grandes candelabros de cristal
tamaño de una cápsula espacial.
abía, según descubrí, dos clases de visitantes:
que esperaban ver al Presidente en su despa
y un número igualmente considerable que es
ba ver a la encantadora y activa señora Mar-
en su despacho de recibir, cerca del despacho
Presidente, el salón de música. El Presidente
un promedio de cincuenta personas al día, en-
visitas individuales o de grupos.
s mujeres tienen mucho poder en este país y,
dgunos aspectos, los hombres filipinos se ven
arrollados por ellas como los norteamericanos.
no dentro de la casa. Los maridos de aquí no
n todavía delantales, de manera que dentro
a casa siguen teniendo la actitud del señor y
al estilo oriental o al estilo latino.
i el campo, en los alrededores de Manila, hay
Durante la noche se puede
destos donde están los burdel
taurantes buenos, pero no ele
clubs donde se celebran actos
ta los clubs de Bulevar Rojas
hía, donde se baila día y no
desde el mediodía hasta las tr
mañana; pero se pierde la n
que todos estos establecimien
dos sin ventanas, tienen cortin
ta y ofrecen espectáculos y d
tras otra.
Cerca está «Guernica», un e
ñol visitado por filipinos y ext
del Peace Corps, procedentes
jugadores del frontón, jóvene
peratura de la sala era muy
y en Guernica, un jugador de
un grupo de pelotaris en acti
palmotean.
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—Es una leyenda que la gente se complace en
confirmar. Los filipinos ven nuestras películas
«western» y las copian. Luego, los campanarios
filipinos hacen sus propios «western» en Mindanao.
Se quedaría sorprendido si viera cuántos rasgos
del West hay aquí: pistolas, gentes fuera de la
ley, etc. Cambie jeep por caballos, autobuses por
diligencias y los
moros
y otras gentes de tribus
por los indios.
Los muchachos buenos de Mindanao son los fi
lipinos cristianos del norte: los grandes grupos de
visayanos de las islas centrales, muy trabajadores;
los ilocoanos que provienen del norte de Luzón
y los tagalos, que procedentes del área de Manila,
desempeñan con frecuencia cargos importantes en
empresas capitalistas.
La violencia y la injusticia (o la justicia hecha
por propia mano) han sido una marca caracte
rística de Mindanao. Durante años, las noticias
que se tenían de Mindanao hablaban de que los
moros atacaban a los cristianos. Esto no sucede
lugares, sin em
ro siente predi
ciudad español
isla.
Los filipinos
servan muchas
floles, figuran las gentes de m
ir en coche
viendo los vele
Zamboanga
el viejo fuerte
desnudo Baju,
pidiendo limos
madres enciend
talado en una
sas rejas con
mas reales, el
ruedas con es
roseno y las fa
shing. Es aho
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raban los moros a mirar los forasteros como si
eran a atacarlos. Ahora ven tantos turistas, que
an aprendido a sonreír.
Las islas Visayas en las Filipinas centrales, tie
en un aire de tradición mezclado con el moder
smo que avanza, de iglesias de piedras que se
esmoronan y espléndidas casas viejas de tiempos
ás amables, de millonarios del azúcar y ricos
rratenientes, pero de todos los nombres visaya
os, ninguno tiene más sabor a leyenda que Leyte,
na isla con mucha historia, pero olvidada por el
iempo.
Leyte es pobre en recursos y está además ago
jada por una población excesiva; todavía sufre
s efectos psicológicos profundos del tiempo de
guerra y del período de falta de moral de la Ii
eracion
—Esta provincia es tan pobre que no podemos
ermitirnos la corrupción —decía, bromeando, el
obernador, Norberto Romuáldez, hombre de só
a tomar en sus manos el G
barcó con las fuerzas de lo
tubre de 1944. Este edificio
tos murales en bajorreliev
grandes momentos de la h
Como Magallanes hizo s
una de las playas de Ley
Flipinas, el mural muestra
mera misa celebrada en 1
una reproducción de la fa
neral MacArthur y los jef
cando en 1944. Evidentemen
vista como un homenaje a
importancia, la única imp
tenido nunca.
Aparte los recuerdos, lo
guerra está en Reed Beach,
Tacloban. A unos centenare
está el monumento de M
playa, entre las palmas, ha
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sada diferencla entre el grupo A y los grupos y
C, estos de clara analogía funcional, diferentes en
un todo del grupo A.
Veamos, pues, qué caracteriza a cada grupo y
cuáles son sus ventajas e inconvenientes:
A.
ENCENDIDO POR PERCUSION
INSTANTANEA AL CHOQUE
La aparición de las cápsulas fulminantes en el
primer tercio del siglo XIX (1) no sólo revolucio
rió
el-encendido en las armas de fuego, al sustituir
la llave de chispa por la flamante llave de percu
sión, Sino que también alcanzó su aplicación a las
granadas de mano, llegando a competir en corto
plazo con el encendido por mecha, que era a la
sazón el sistema predominante.
La aparente ventaja del nuevo sistema no fue
decisiva en. la práctica por la dificultad de conse
guir que el choque de la granada coincidiese con
tales dispositivos, sIno
tividad en el funciona
caían
en las condiciones
sión, antes enumeradas.
Pese a lós fracasos
que intentaron resolver
citado: conseguirla exp
diciones menos favorabl
seguridad del atacante,
haber logrado, sin neces
trapesos o «paracaídas»,
explosión al choque, cu
sición al incidir y cuales
dicibnes del terreno, o
rables a la percusión, y
Ambiciosa pretensión,
de dificultades que la
bles conclusiones, sanci
compatibles con el facto
inexcusablemente, ha d
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36/76
n cuantos hubimos de usarlas, pues la lista de
accidentes, algunos de suma gravedad, con multi
tud de muertos y heridos, resulta interminable.
Accidentes inevitables en su mayoría, y no por im
prudencia de los usuarios —caso en que sólo a
ellos cabe culpar—, sino consecuencia lógica de
un dispositivo funcional que no resiste al más li
gero y benévolo juicio crítico.
Basta observar su diseño (1) para comprender
que todas las precauciones y cuidados prescritos,
con ser harto enojosos, resultan insuficientes pa
ra evitar situaciones que, en campaña, son fatal
mente ineludibles y aún frecuentes. Reseñamos las
principales prescripciones:
«La presencia de óxidos o cuerpos extraños en
sus mecanismos pudiera ser causa que al hacerse
uso de ellas se produjeran fallos en sus explosio
nes. Por otra parte, necesitando para hacer explo
sión cebos cargados con explosivos ultra-rompe
dores, que no deben unirse a las granadas has
Toda granada a
debe ser lanzada.
Un vez prepara
rá ninguno de su
No se desenroll
La granada deb
la mano desde e
dor de seguridad
lanzamiento se t
choque contra la
to resistente.
Las granadas l
plosión no deber
pie o mano, efec
do sobre ellas fu
por otros medios
Prescripciones
de instrucción o
en maniobras co
practicables con
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37/76
enfrentado a la cápsula iniciadora, pero entre am
bos se interpone un muellecito antagonista con
misión de
impedir
que la aguja del percutor hiera
la cápsula hasta tanto no se produzca el choque
capaz de vencer la resistencia que el muellecito
opone a tal colisión.
El problema básico a resolver es, como ya diji
mos, que la granada funcione en toda clase de te
rrenos y cualquiera que sea su posición al produ
cirse el impacto, choque q detención, siendo im
prescindible
impedir
que la granada explosione
antes de que el granadero, o usuario, quede fuera
de su radio de acción, pues, caso contrario, él se
ría su primera víctima; pero es obvio que para
hacer técnicamente utilizable una granada de ma
no son muchos más los problemas a considerar,
que afectan a múltiples factores, aparentemente
accesoriós, pero de total y definitiva trascendencia
en el resultado final. Del modo en que aquéllos
sean resueltos; de la buena o mala conjugación de
no completas ya que ést
res dentro, no tienen n
sionar por influencia o s
detonadores juntos, sí:
sólo para transmitir su
te,
a todos los restantes.
Suponiendo un transpo
granadas; sea por tierra,
camión, navío o avión—
susceptibles de provocar
de granadas con su deto
pactos, choques o caída
das, aplastamientos, ince
te susceptible de produc
dual» de cualquiera de l
en caja aparte, y esta de
ría automáticamente a l
les estragos en el ferroca
o avión, supuestos que
práctica, se diferenciaría
Reproducciónde las piezasque componenuna gra.
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nada de manoP. O. con funcionamientoa percusión
Instantáneaal choque.
los riesgos que ello, evidentemente, reporta, ‘pero
que ie aceptan como compensatorios (1).
En las granadas P. O. puede optarse por una
u otra solución» facilitando la reposición de sus
letonadores, caso de envejecimiento.
No sucede así con la cápsula iniciadora, cuyo
alto grado de sensibilidad y consiguiente enveje
cimiento, amén de su peligrosidad, requieren re
posiciones anteriores, pero sólo posibles median
te un completo desarmado de la espoleta; opera
ción delicada y peligrosa, a realizar en taller por
artificieros especialistas y nunca po’r el soldado.
La adecuada conservación de las cápsulas y de
tonadores es primordial no sólo para asegurar su
buen funcionamiento, sino para evitar accidentes
o fallos, debiendo impedirse que sean atacados,
tanto por la humedad —máxime si ésta es salina—
a los procedentes
rrados o aislado
pueden ejercer s
punidad, ya que
las fases de su
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podría producirse la explosión de la granada nada
más faltar el pasador —L—. Este gravísimo in
conveniente es por sí solo suficiente para conside
rar la peligrosidad del sistema, pues la sola falta
de tensión en el muelle puede provocar una ex
plosión prematura de la granada, con sus incalcu
lables consecuencias, mucho antes de que ésta
hubiese chocado con cualquier obstáculo.
Como es sabido se pretende evitar las explosio
nes prematuras enlazando al pasador —L-----con
el extremo de una cinta —J—- que, después de
arrollarse sobre sí dando varias vueltas al cuello
de la espoleta, termina en un contrapeso —K—, de
material termoplástico, que se adapta, a media
caña, al cuerpo exterior de la granada. El espacio
recorrido por ésta durante el tiempo que tardela cinta en desprenderse será la distancia de se
guridad para el lanzador, ya que mientras no se
extraiga el pasador —L— éste impide la colisión
percutor-cápsula. Una vez extraído el pasador es
únicamente el
muellecito
antagonista el que sepa
ra ambos elementos.
el normal funcio
otros términos:
fallada representa
tropas propias, p
fuerza suficiente,
hacerlas funcion
mente.
Como el núme
cuando no conc
bles a una buen
ducirlos, en lo p
máximo la sensib
afilando correlati
aguja percutora,
que sea aplicada
sible, facilitando
cendido de la cá
Y como, pese
visiones, los fall
peligrosidad que
de granadas fal
puedan funciona
posición de seguro queda dentro de límites muy
tal en que se dejaba caer
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estrechos, siendo francamente mayores en los que
no pasa a tal posición.
Trasladando esta experiencia, con granadas de
guerra, a un terreno cubierto de nieve blanda, los
resultados son correlativos ratificando en un todo
los obtenidos anteriormente: cuando el espesor de
la nieve es mayor de 25 cm. las cápsulas no explo
sionan, pero el dispositivo de «recogida» tampoco
se halla en seguro. Cualquier golpe posterior, con
energía suficiente, puede provocar un grave ac
cidente.
Cuando el espesor es menor de 15 cm., las cáp
sulas son percutidas al
100
por 100. Solamente en
tre espesores de nieve comprendidos entre 15 y
25 cm., las cápsulas continúan
activas,
habiendo
pasado el percutor a la posición de seguro.
Esta experiencia, interesante por demás, es apli
cable a terrenos enfangados, o con sembrado alto,
matorrales, heno, etc., donde la energía del dho-
que puede ser muy amortiguada, alcanzando um
brales semejantes a los ya citados, con un elevado
de una altura de 50 mm.,
rra sobre una capa de
comprendidos entre 15 y
da bloqueado, sin pode
rencia inoportuna del se
Los fallos citados no
tiese el llamado seguro
actúa en forma positiva
y oportunamente, son m
en que su función es má
ciosa, destacando, por s
granada queda en fallo
seguro, lo que ha hecho
nes fiados de su eficacia
sin las obligadas precauc
En cierto modo suced
empleo de la cinta: si se
to haciendo corta su lon
aminoran las posibilidade
vamente disminuye la se
quedar pronto sin la pro
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Haciendo estas pruebas con personal no preve
nido al que se hace guardar en cada bolsillo sendas
granadas, desactivadas, colocadas ambas en posi
ciones invertidas, se observa que, después de algu
nas carreras, el desprendimiento del tapón es muy
frecuente y al extraer las granadas del bolsillo, la
cinta se desprende en la mayoría de los casos en
que el tapón quedaba debajo; no sucediendo así
cuando las granadas quedaron con el tapón hacia
arriba.
Hay, sin embargo, un hecho que conviene subra
yai-
y
que todo granadero debería tener presente
buscando su cobertura: por muy bien que llegue
a funcionar la cinta,
nunca protegerá a aquel de
ser alcanzado por alguna de las piezas metálicas
que constituyen las masas de inercia. Experimen
talmente se comprueba que estas piezas pueden
llegar a 40 metros del punto de explosión con ener
gía suficiente para poner a un hombre fuera de
combate; y es sabido que, con las limitaciones que
impone la «realidad del combate», muy rara vez se
obtienen alcances de 40 m. con granadas que dé-
mar éstas cal
mente la pres
nase un cierre
nadas se prod
yos máximos
de más y men
la cinta impid
sión interior
presión atmos
granada conti
ción del aire
«frío», estable
fuera y
de fu
cesiva renovac
salino —salitro
piezas metálic
nitrosos y fen
Si esta prue
do las granada
do artificialmen
cluyente, aun
salina hasta a
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43/76
cómo el seguro de recogida puede ser má per
judicial que beneficioso, al hacer fallar grana
das que sin él hubiesen funcionado, o bien al no
haber actuado a tiempo dejando sin protección
a granadas falladas;
-
cómo las cintas, con su irregular conducta, no
dan la obligada seguridad y cómo coadyuvan a
los fallos;
-
cómo las piezas metálicas que constituyen las
«masas de inercia» son un constante peligro
para el granadero, quien de no tomar especia
les precauciones de cobertura habrá de fiar a
su suerte el ser o no alcanzado por aquellas;
-
cómo pueden producirse explosiones prematu
ras
en el aire a partir del «momento crítico» en
que la cinta extrae al pasador de seguridad;
-
cómo para aminorar el peligro de llevar los de
tonadores dentro de sus granadas el soldado
ha de asumir su difícil custodia y cuidado, te
a veces, muy desfavorab
sas;
—
finalmente, no debe olv
sibilidad exigida a las c
ra reducir el número de
ligro permanente de e
agentes externos muy d
no interviene la voluntad
batiente.
Causas, todas ellas, que c
tos en orden destacado en
usados por el Ejército, co
vado número de accidentes
que, intermitentemente, oca
desvelos y meritorias preca
dad e instructores para red
sible.
Para no ser más extenso
artículo el estudio de los s
roi;écnico —grupos B y C—
cer un contraste entre los
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
44/76
t Cuida VJ Mén su
automóvil
Conduce Vd. Mén su
automóvil?
Capitán de Artillería, Julián GUERRERO TORRES,
de la Brigada Mecanizada XXI.
La adecuada preparación técnica que reciben los
Jefes y Oficiales, que siguen los cursos periódicos
de la Escuela de Automovilismo del Ejército, para
obtener el título de especialistas, va consiguiendo
que las Unidades de Automóviles, estén mandadas
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
45/76
as, en ese dispositivo, se producen por el em
eo inadecuado del mismo. Muchos conductores
-actican y lo que aún es peor, enseñan, el uso
cisioso del medio embrague; que consiste en des
nbragar parcialmente, para hacer patinar suave-
ente los discos; cuando se nos agota la velocidád
.ie lleva el cambio, pero los conductores deben
tker que los embragues no están construídos pa-
patinar, puesto que la presión de las superfi
es flotantes, a partir de 500 r . p. m. es de 800 a
000 kilos. De ellos se deduce, que el medio em
ague, desgasta rápidamente esas superficies y
ce padecer, sin ninguna utilidad a los cojinetes
topes de empuje. Cuando el motor va apurado,
be cambiarse a un velocidad inferior, incluso a
imera, pero nunca, marchar a medio embrague,
estimamos en algo, la economía y necesitamos
automóvil como elemento imprescindible.
Otra parte importante también, y que a nuestro
Licio se presta poca atención, es a los cuidados
ie requieren las baterías de acumuladores.
combustible. Alcanzando so
dos, las cifras respectivas d
potencia y aumento de consu
Además de conducir corr
neficioso para todo conduc
automóvil, ser constante en
sistemas de engrase, frenos,
eléctrica, etc., porque no de
averías importantes no son
de las pequeñas, a’las que n
ción debida en su moment
ración para otro día.
Comprendemos, que la as
tornóvil debe ser cuidado y
en muchos casos, hacen nec
por lo menos. Ello, sin em
dir que haciendo un esfuerz
encuentre en perfectas cond
porque en el caso de no ser
del motor, se puede dispo
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
46/76
cídad. Esto lo han tenido en cuenta algunos fa
bricantes de ciertos países y han llegado, en su
afán por eliminar incomodidades al cliente, a sua
vizar los motores, antes de efectuar la entrega de
sus automóviles. Sin embargo, en España, lo nor
mal es que a cada coche acompañen instrucciones,
sobre la forma en que ha de conducirse durante
los primeros miles de kilómetros. A veces presen
tan los límites de velocidad a que han de ajustar
sc, en el mismo velocímetro o sobre el cristal del
parabrisas, al lado del conductor.
Esto quiere decir, que usted, aunque conduzca
bien, no debe olvidar que en el motor de su fla
mante «cuatro cilindros», existen elementos, que
durante esos primeros miles de kilómetros, por su
mayor ajuste, sufren un calentamiento excesivo y
éste calor, será tanto más elevado, cuanto más se
pise el acelerador, rebasando cierto límite.
Por tanto, estrenar coche, nos impone la servi
dumbre de conducirlo con suavidad y delicadeza,
muy principalm
Tengamos p
debidos, se de
tos y que éste
table pérdida
tar las consec
de ese mal tr
jano en ralen
poco tiempo
con mayor du
Para compl
algo sobre pa
difícil, pero h
re cierta técni
práctica.
Consideremo
la conducción
son conocidos
pero insistimo
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
47/76
cÍdentes, son los adelantamIentos», «adelantar
un coche en una curva, es un locura», «adelan
rio en un cambio de rasante, es hacer oposicio
s al suicidio». Además de esto deben saber los
>nductores noveles que, en determinados mo
entos, es difícil y peligroso adelantar a un tu
smo, pero en igualdad de circunstancias es mu
o más efectuar el adelantamiento de los gran
s camionés de transporte. Decimos que es más
ftcil y peligroso adelantar a estos grandes
hículos, porque aparte de que la mayoría
nuestras carreteras, con excepción de las
diales, conservan su trazado de hace muchos
ios, hay veces en que los conductores no escu
ian la petición de paso, bien por el ruido del
)tente motor o por las notas que, a buen tono,
nza su radio para luchar contra el sueño.
Cuando no se cumplan todas las condiciones
glamentarias; no debe efectuarse el adelanto en
ngún caso. De esta forma se evita que en una
zada libre, reduclr velocId
efectuara de noche> además
pondrá la luz de cruce. En
intenta adelantar, una vez
la circulación en los dos se
seguidamente su desviación,
quierdo y aumentando lige
efectuará el adelantamiento,
no, hasta haber rebasado, co
gos al vehículo que acaba
que si, como decimos, el a
túa de noche, el que haya de
la luz de cruce desde una
150 metros, para no deslum
espejo retrovisor.
Y para terminar, nuestra
a las «cosas del automóvil»
co de la idea central del te
conocer el resultado de un
las causas que motivan lOS
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
48/76
Honor
y
recuerdo de las D
de Sanidad Mil
Matilde ANDUJAR ESPINO. Inspectora Regional d
Sanidad Militar de la 6. Región, B
e
- 1
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
49/76
una reina, la Reina de Castilla —Isabel La Ca-
de sangre, de su sangre fu
dica—, salió a la luz del sol entre dolores y ale
‘ías, en el «Hospital de la Reina», que fundaron
Reyes Católicos en el comienzo de la última
:apa de la Reconquista, en el cerco de Toro, don-
e la augusta Soberana y sus damas fueron las
rimeras Enfermeras del Ejército Español, y de
is manos surgieron las célebres hilas que empa
aron la sangre caliente de nuestros soldados.
Corren los tiempos..., las Campañas de Africa,
Guerra de Liberación en España y allá en Ru.
a..., formando parte de la División Azul... bien
noce nuestra Patria la labor callada y contínua,
abnegación de estas beneméritas mujeres que
cauces, con la de los solda
custo de su ofrenda de am
Existe en La Coruña, en
tel de Sanidad Militar —A
menaje a los Caídos en Cam
bién para un grupo de En
-mas Auxiliares y dos Hijas
yeron prestando sus servici
paña y regaron con su sangr
de dar frutos de valores et
Hoy, después de tantos
EJERCITO un poco de sitio
miento a estas mujeres qu
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
50/76
— Durante los últimos años se han llevado a
cabo en los Estados Unidos diversos estudios para
la modernización de la estructura del sistema lo
gístico del Ejército. Pese a que entre ellos exis
ten. diferencias de concepto, aspectos del proble
ma y detalles de ejecución, todos pretenden alcan
zar, los siguientes objetivos fundamentales:
Reducir el área de control del jefe, especial
mente en lo Preferente al despliegue logístico
de la Zona de Resistencia. Esto permitirá al
— En el marco
tas característ
— Un sistema
sión ordena
TAR (Comb
ahora se p
— Dotación d
vel Brigada
aumentando
sistema y
NUEVA
ORJENTACIONLOISTICA
DE U.
Capitán de Ingenieros Carlos RUIZ JODAR, del curso av nzado
de Ingenieros en EE. UU.
U Control de Tráfico.
O Conducción de prisione
•
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
51/76
—
Servicios de Ejército Hay cuatro Servicios cen
a Mantenimiento del ord
• Escolta de transportes
• Participación en la seg
vicios y en el control
e Control de circulación
• Seguridad y protección
y propiedades.
—-
Brigadas de apoyo: Se
Apoyo por Cuerpo de
de Servicios de Ejércit
—-
Estas Brigadas cuentan
lizadas de Apoyo Direc
e Las Unidades de Apoy
a las Unidades abastec
to y personal bajo el escala», o podríamos
• Las Unidades de Apoy
apoyo «al por mayor».
neral respalda al Apo
una mayor variedad d
ORGANIZACION DEL MANDO LOGISTICO
DE
EJERCITO
do del FASCOM controla y dirige las operacio
nes de carácter logístico de sus Unidades su
8/18/2019 ret_349 Feb 1969
52/76
bordinadas. Estos Centros Especialiados, que
se integran en el Centro de Control (FCC), son
los siguientes
• Centro Especializado de Control de EXISTEN
CIAS (ICC).
• Centro Especializado de Control de MANTENI
MIENTO (MMC).
• Centro Especializado de Control de MOVI
MIENTO (MCC).
— Estos Centros Especializados de Control, utili
zando el equipo eléctrónico del Centro de Pro
ceso Automático de Datos (ADPC), anexo al
Centro de Control (FCC), actúan como «distri
buidores de servicios» en su área respectiva.
Esencialmente, estos Centros tienen por finali
dad la ejecución automática de las funciones
logísticas ordinarias mediante el empleo de los
computadores. En consecuencia, estos Centros
de Control son responsables de:
• Planeamiento diario.
• Análisis de las operaciones en curso.
bre abastecim
cidas en las
— Centro Espec
miento (MM
que precisa
para coordina
con las priori
ra mantener
—
Aparece en este nivel de Brigada de Apoyo el
Centro Especializado de Control de Personal
6) .La petición, no udie
el FCC de la Brigad
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(PSC), que lleva un completo control para
someter oportunamente a la Zona de Etapas,
directamente, las neecsidades de reposición
de Personal de las Unidades ubdrdiiadas
—
Brigada de Apoyo a Ejército (Area de Servi
•
cios) : Dispone de tres Centros Especializados
de Control:
• De Existencias (SCC.).
• De Mantenimientó (MMC),
• De Personal (PSC)
—
Al çarecer de Centro Especializado de. Con
trol de Movimientó (MCC) eta Brigada diri
ge las peticiones de Transporte que recibe,
al MCC del FASCOM directamente.
ACTUACION DE LOS CENTROS DE CONTROL
—
Para ver en conjunto el funcionamiento del sis
tema, y la. intervención de los diversos Centros
de. ue hemos hablado, incluimos el esquema 3
Mando Logístico de
yo Centro Espéciali
vimiento (MCC) c
Transporte (De Ser
den de cumplimiento
to al Batallón de I
de Apoyo Directo,
(GSU) correspondie
7) En caso preciso, se
na de Etapas.
RESUMEN
.
-—
Hemos expuesto en fo
te organización lógísti
Gran Unidad Ejército.
de los. Centros a que
principal novdad, he
pleo de equipo electró
midable «memoria» y
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54/76
JNFORMOON
o]
e Jdea’sy ¡ef/exiones
Efemérides de febrero
l266 1 FEBRERO. RECONQUISTA DE MURCIA
Murcia había sido invadida por Abdeiacis. Hasta 1243
1705. 18 DE
MILITA
ii
el mundo.
en 1559, Francia se vio o
para dar solidez a ,su do
Apenas subido al trono
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55/76
19 DE FEBRERO. GENERAL DON JOSE RAMON
RODIL Y GALLOSØ
)n José Ramon Rodil y Galloso nació en Santa Ma-
tel Trobo (Lugo) el 5 de febrero de 1789 y dio prin
a su brillante carrera militar desde el Seminario
‘Iondoñedo, al batallón de Cadetes que alistó la
ersidad- de Santiago en 1808 para luchar contra los
ores franceses.
chó posteriormente en América del Sur y, más tar
a la Península, durante la guerra civil carlista.
la Guerra de la Independencia alcanzó el grado de
:án; de América regresó siendo general. En ella es-
6
la página más gloriosa de su historia, por la tité-
tenaz y heroica defensa que hizo de la plaza del
Lo, donde encerrado tras la derrota de Ayacucho,
no quiso reconocer, se mantuvo luchando durante
catorée meses contra el bloqueo por mar y tierra
s ifl’surgentes.
escuadra enemiga, compuesta de once buques de
ra peruanos, chilenos y colombianos, que montaba
do rival del César Carlos
a Italia para asegurar la
lán, hacia 1515, logrando
batalla de Melegnano, qu
En junio de 1524 tuvo
tornar por segunda vez
bía cambiado en su disfa
franceses a Vercelli,los i
protegiendo la defensa d
tantes, como Alejandría,
antemurales de Milán, de
contendientes.
El Rey puso ‘sitio a Pa
Leyva con 5.000 lansquene
300 hombres de armas
y
La resistencia de Paví
para reorganizrse y que l
Pronto Francisco 1 se enc
va y las de Borbón y Pes
carié por ambos costados
en Francia y el último en la salida.» Treinta y cinco
años después, Velázquez lo inmortaliza en su cuadro
las: Miguel de
inmortalizado
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56/76
«La rendición de Breda».
El tercio de don Lope de Figueroa, creado en la mis
ma fecha con el nombre de su propio primer rnaetre,
se llamó también Tercio Viejo de la Armada. Por su
primer hecho de armas, la batalla de Lepanto, obtuvo su
nombre de tercio de la Liga Católica. Interviene, con
el marqués de Santa Cruz, en la conquista de Portugal.
En 1581 desembarca y derrota a los enemigos en las
islas Terceras. En 1614 clesembarca en Larache. Pasa
dos veces el Océano para derrotar en las costas del Bra
sil a los holandeses. Dos figuras se destacan en sus fi
Dosimetría de radiacionei
El tercio de
creado en 1536;
a Metz, a Italia,
fue u primer
raciones de Eu
Veinticinco ban
presa de la Inv
zaron la campa
siglo XVIII, só
dejando la vida
gloria del terci
Capitan de A
s radiaciones a considerar son muy variadas, pu
lo ser de naturaleza corpuscular o electromagné
Los rayos alfa y beta emitidos por las sustancias
La intensidad de radia
sa en roentgen por hora
do, por ejemplo, 8 horas
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57/76
Dosis
o
a 25 r
25 a 50 r
Lctivas naturales, son de la primera clase; en cam
los rayos gamma, también emitidos por dichas
Lncias, son electromagnéticos, del mismo modo que
ayos X o la luz (1).
emás, en las reacciones y fisiones nucleares arti
es se producen multitud de otras partículas entre
ue cabe citar los neutrones, de carga nula y masa
a la del núcleo del átomo de hidrógeno.
)ADES
curio
(símbolo c) se define como una cantidad de
ria radiactiva en la que se producen 3,7 x 1010des-
raciones por segundo; este número de desintegra
s por segundo es lo que se llama actividad de una
hilda radiactiva, por lo que indistintamente se
a unidad curio para indicar una cantidad de ma
o una actividad, y así se puede decir, por ejemplo,
irio de radio o una actividad de un curio (es decir,
, 1O des. por seg.). Obsérvese que al hablar de
.tegraciones no- se- especifica qué es lo que se pro-
vidad es uniforme y vale
cabo de ese tiempo será
Los efectos biológicos
ser humano dependen
recibida, pero además d
como son su repartición
la naturaleza de estas r
afectados y si proceden
(ingeridas). Respecto a l
ración, cabe decir que el
capacidad de recuperación
sis recibida en un tiemp
que si se recibe en un b
tabla que sigue a continu
de diversas dosis totales
bre el exterior del cíirpo
Sin ningún
Alteración
Obsérvese que depende precisamente de cual sea esta
sustancia. En los tejidos blandos del cuerpo humano
hay uña equivalencia entre las dosis expresadas en
de cinco por
práctica de q
mento de la
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58/76
roentgens y en rads, cuando se trata de radiación gam
ma, pero en los huesos debido a su mayor densidad,
lógicamente la dosis en rads (no olvidemos quc se re
fiere a ergios por
gramo),
es superior a la dosis expre
sada en roentgens.
ún hay que establecer otra unidad de dosis, el rem,
que se obtiene multiplicando el rad por
un
coeficiente
denominado de eficacia biológica relativa (e. b. r.). Ello
es debido a que los daños biológicos de las distintas ra
diaciones no son iguales, aunque las dosis expresadas
en rads sean las mismas. El rem es la unidad que se
debe emplear propiamente cuando se hable de dosis de
radiación de seres humanos.
Así, pues, para obtener una dosis en rems se multipli
caia dosis en rads, supuesta conocida, por unos coefi
cientes que se detallan para algunos tipos de radiación
en la tabla que sigue:
•
Coef. e. b. r.
(eficacia biológica relativa)
guiente fórmul
siendo d la ci
1-tay que aña
tre se pueden
En ciertos
tivas, puede s
a trabajadores
con ellos y su
casos se establ
gar lo antes p
bajo.
Si del ámbit
las limitaciones
una guerra nu
cuencia de la
tante dado qu
secuencias par
as pinzas para sujetar al vestido en cuyo interior
tienen una o varias películas especiales de un ta
Generalmente se explica
cia en los sólido cristalinos
pas», que son regiones co
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de 3 x 5 centímetros, protegidas de la luz. La ra
u impresiona la película (del mismo modo que
en las radiografías médicas) y mediante un pro
ciuy bien regulado se revela y fija; el mayor o me
anegrecimiento (densidad de oscurecimiento) se
con un fotómetro adecuado o densitómetro, de
idose la dosis recibida por el portador, mediante
uidadosa comparación con una película tipo so-
a previamente a una radiación conocida.
o ocurre con todos los dosímetros, el efecto que
ce una misma dosis sobre la película depende mu
ri tipo de radiación actuante, por lo que se hace
u-io emplear diversos filtros metálicos que permi
cer uña discriminación de las clases de radiacio
cibidas. Así podemos distinguir, por ejemplo, en
diacióñ gamma y beta; la parte de película situa
bajo del filtro sólo habrá resultado afectada por
lación más penetrante (gamma), mientras que la
n de película no protegida por el filtro habrá re-
las dos radiaciones y, por diferencia, se podrá
o negativas en donde son
rados por la radiación; es
niveles energéticos primitiv
po, devolviendo de nuevo
proporcionalmente a la do
lentamiento, las «trampas»
termoluminiscente queda
nuevo.
En la J. E. N. (Junta de
arrollado un dosímetro d
microcristalino del minera
natural) de la provincia d
tidad de este polvo va en
que con unos filtrog de pl
dosímetro, que se puede s
imperdible. Su peso es sól
Este dosímetro abarca u
mr hasta varios millares d
ce mediante un fotómetro
multáneamente el disco a
Por otro lado, los dosírnetros de estado sólido tienen
las siguientes ventajas sobre los de película:
a) Mayor precisión. Las experiencias realizadas en
ganización. Lo
leídos en cual
ves instantes
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60/76
los últimos años en EE. UU. y Alemania para compa
rar la precisión de los dosímetros de estado sólido con
los de. película fotográfica han sido extraordinariamen
te favorables a los primeros.
b) Mayor sensibilidad. Los dosímetros de fluoruro
de calcio pueden integrar dosis a partir de 0,1 mr
y
los
de vidrio de fosfato de, plata a partir de 10 mr, durante
largos períodos de tiempo
y
en cualquier condición cli
mática. El límite inferior de las películas es más alto
(entre 20 y 100 mr).
c) Menor dependencia respecto a la energía de ra
diación y su dirección. La influencia del nivel de energía
entre unos límites de 30 Kev y varios Mev es muy pe
queña para los dosímetros de estado sólido,
y
puede ser
disminuida empleando filtros adecuados o varios dosí
metros simultáneamente. Además, la dependencia res
pecto a la dirección de radiación es mucho más pequeña
en estos dosímetros que en los de película.
d:) Resistencia a las condiciones climáticas. Los do
símetros de estado sólido no son afectados en absoluto
ue aparecen
para las Fuerz
muy portátiles
ple.
f) Campo m
estado sólido p
damente 50 m
superior al .de
g) Posibilid
lículas obviam
símetros de es
ces se desee.
Vistas las ve
tado sólido sob
elección entre
de fluoruros ti
cia del nivel de
larmente aptos
inconvenientes
lectura y del
DEuwOEEXEAA
S
ISTEMTAL
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T «tER E’eu4
A ‘1A .4
EÇ.
.:
. ..
»
LA
k
L’-’H
la que siga al individuo, cuando termine su serviciomilitar activo, hasta que pase a ser totalmente licencia
do, que será enviada a Segovia. La ficha blanca que
vistas, y tanto
de ellos sería f
mer ejemplo (B
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acompañó al mozo hasta su destino a Cuerpo será ar
chivada en la Unidad en que sirvió.
Esta ficha en color, que se propone, será la única que
exista en la Zona, suprimiéndose por tanto los ficheros
de Cuerpos y de Llamada, así como las Documenta
ciones.
El tercer Negociado, Registros de Llamada, no nece
sitará rhás que un libro o los necesarios para tener re
gistrados todos sus Registros de Llamada. El libro será
de hojas intercambiables en cártulina blanca, a cuatro
o cinco hojas, las necesarias; para cada Registro de Lla
mada. En ‘ellas, y por reemplazos, irán anotando los
reservistas de:cada pueblo (el modelo que no reproduci
mos lleva las ,siguieptes casillas: Cátegoría Militar.—
Apellidos
-
nombre.—Domicilio del reservista—Destino
en Movilización, Cuerpo y Ubicación.—Cuerpo y Ubi
caciÓn—Motivo). Cada pueblo llevará también otro li
bro igual, con, el registro por reemplazos de sus reser
(hojas del pueb
y su traslado, p
la baja y fecha.
te, que realiza
Este sistema
mico, sin tener
1. B. M., pero,
uso de las mis
yor asignaría a
diente, y entonc
mayor. Se dota
máquina neces
momento, con
los reservistas
mediata.
Aparte de to
mentaciones
d
relación con el
uestión social en Alemania Fedéral
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63/76
De varias publicaciones e
ducciones d
tado del Gobierno por su exclusión del Ministe
Defensa, Franz-Joseph strauss, tomó la decisión
esperada: se matriculó, con sus cuarenta y ocho
implidos, en la Facultad de Ciencias Económicas
Universidad de Innsbruck. Al cabo de dieciocho
estaba familiarizado con Adam Smith y Ricardo,
Marx y Keynes, Rist y Galbraith. Antes, sus ami
bían descubierto sorprendidos, en su despacho de
o de Defensa, una biblioteca poética de gran ri
Su nueva afición por la Economía fue una prue
de la gran capacidad de asimilación que posee
Pero no se trataba ahora de una simple demos-
de gimnasia intelectual. El ex ministro sabía
devolviendo a Alemania un
vo Marco; y comenzó a’ p
tivo’ del comienzo de la cr
que un constipado», Erhard
creía en los ciclos de la e
que todos los desequilibrios
sí mismos su propio rem
tiemblan de miedo cuando
retraso en su economía y
peridád.
Strauss, menos doctrinal
de Cuatro Años para sanear
gastos públicos fueron red
su Tnasa obrera, que ha logrado su resurgimiento tras
la derrota de 1945.
Al comienzo de los años cincuenta, la central de los
to pueda signifi
años, el Congres
dro-estadística
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64/76
sindicatos alemanes DGB, tenía su sede en un edificio
semiruinoso de Düsseldorf. Sus jefes, famélicos como el
resto de sus compatriotas, salían de los campos de con
centración y no tenían más afán que evitar los conflic
tos sociales, impedir las huelgas y predicar el ardor por
el trabajo. «Para qué sirve, decían, subir los salarios?
Sólo conseguiríamos precipitar la inflación, puesto que
apenas hay nada que adquirir. Al explicarles que co
rrían el riesgo de habituar al obrero a los salarios ba
jos, su actitud era de resignación. «Alemania se recu
pera, pero el obrero se conforma con ser el paria de la
ciudad, aceptando una condición de vida mediocre, si
no llega a ser un gran consumidor y un gran productor,
Alemania caerá en un imperialismo económico, cuyas
consecuencias son fáciles de prever...», pero a esta jus
ta observación, sólo respondía la promesa de ocuparse
del obrero una vez que fuese recuperada la prosperidad.
LOS OBREROS ALEMANES GANAN MAS QUE LOS
FRANCESES
Y
TRABAJAN MENOS HORAS
otros países po
al comprobar q
fha. La presión
de la negociació
lucha social que
patronos están
que los salarios
no sólo el motor
de la verdadera
y mejoras aplic
sobrepasan, con
por los sindicat
de 1966, el Pres
tos, Ludwig Ro
La
sede sindi
edificio sombrío
oficina, se ha tr
tal, de ocho pi
sus afiliados, e
administración
talmente, el problema de los salarios ha desápa
prácticamente, con el sencillo procedimientd de
dos a. la productividad; Y desde este punto de vis
población total—de Alema
manes, uno es ya copropiet
Esto, es la actualidad, en
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65/76
liii deseado y casi ya alcanzado por los sindicatos
aes, esla cogestión.
NCO ALEMANES, UNO ES YA COPROPIETARIÓ
INDUSTRIA NACIONAL
abo
de diecisiete años, los patronos de industrias,
todavía de luchar contra la cogestión. Los obre
gún una encuesta réalizada pr el Instituto dé
)n Pública, de
.
Allensbach,’ la declaran, en prin
•,intéreante,, aunque no consideran de urgente
dad su tmplantacion puesto que se declaran sa
ios çon’laestabilización de los precids, la subida
± de los salarios y la constante mejora dé las
dones de trabajo. Pero la Coriféderación de Sindi
ha decidido implantarla en todas las émpresas ale
que reunan las tres condiciones siguientes un
-o no inferior a 2 000 puestos de trabaio un pre
sto de 50 millones de marcos
y
un capital de 150
tés. Tiené, por oti-á arté la es°eranza de que en
consideraba ricos a los qu
garrillos o manejaban el m
En quince años, el ahor
industria nacional .140.00
175.000 millones de franco
esta oferta de confianza-
-
c
za actual de la Bolsa de
e.rróneamente que el cap
alemanas está actualment
verdad es que sólo está en
de dicho capitaL La. indus
es alemana de fachada,. si
El provecho de este nue
Los pequeños, propietarios
de un -dividendo, anual eq
montante nominal de sus
realizado por él- Banco de
la ganancia de los capital
hace 15 años enla industri
de 9,5 por 100:anual. Al c
Estudio del E it0 francés
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66/76
La formaciónyespecializaciondelosoficiales
De la pablicación española «Asinto». Revista de Ing
y del Arma de Ingenieros. Santiago Estrada Saiz,
1. GENERALIDADES
Para realizar el estudio
completo de la necesidad de
los técnicos de distintos niveles de preparación en el
ejérclw, y cono consecuencia de esa necesidad, el des
arrollo de su campo de acción y, en función del mismo,
la amplitud precisa de su formación, creemos alecciona
dor, sin que ello signifique que hemos de copiar lo de
fuera, partir del siguiente punto:
Examen de la íunción y forma de incorporarse a su
de Transmisiones
tración, Auxiliar
Aquí estimamo
algunas Armas
nodo diferente
2.1.1.
ARMA
DE
En principio
después de la p
hículos automóviles, ingenIos blindados, remolqués,
s y bicicletas, aviones y helicópteros de la A. 1. A. T.,
.mento de todas clases (pequeños y grandes), apa-
«éonjunto electrÓnico» d
[izar el flujo de estas inf
El Servicio de Material
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67/76
para el empleo de los misiles D. C. A., materiales
mas speciales, municiones, misiles, materiales óp
topográficos y del Servicio Geográfico, materiales
aracaidismo y suelta de cargas, máquinas-herra
tas y utillajes, efectos de equipo, materiales de im
n, ingredientes y materiales diversos de limpieza
retenimiento, reglamentos, folletos técnicos y toda
de documentos de instrucción.
ay que considerar que la evolución de armamentos
materiales nuevos, principalmente los que emplean
ctrónica (proyectil HAWK, material de armas es-
les, infrarrojos, aparatos de vigilancia, etc.), au
arán aún más la actividad del servicio tanto en
o a la instrucción como al sostén.
Misión de orden. técnico
misión del Servicio es la de asegurar el abasteci
o de las tropas en materiales completos, conjun
iezas de recambio, municiones, ingredientes de
hacia esta vía, en compet
[erida de los «stocks», ba
[os y la cadencia media d
pia de esta clase de adm
2.1.3.2. La conservación
Esta denominación com
ciones de entretenimiento
finalidad conservar y, ca
cial del empleo de los m
2.1.3.3.
Las operaciones
grado)
Están a cargo de las fo
formaciones son aconseja
cor el Servicio de Materi
Deriódicas a los materiales
tacto» organizados dentro
corresponden al Servicio.
u personal, fabrica y almacena una masa cte aprovisio
namientos muy variados que van desde el simple pasa
dor al motor de carro de 600 CV.
productos quÍm
nal. Atiende tam
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68/76
2.1.4. SERvicio DE TRNsxIisIoNEs
El material de transmisiones es el único
que
no atien
de el Servicio de Material, detalladamente descrito con
anterioridad. Por tanto, podemos definirlo como análo
go a todo lo dicho para él, pero exclusivamente para el
material de transmisiones.
2.1.5. SERvicio DE CARBURANTES
Fue creado durante la guerra del 14, incorporándose
después al Servicio de Pólvoras, y desde 1944 se separó
de él,
siendo su dependencia desde
1952 del Ministerio
de Defensa Nacional. Es, por tanto, un
Servicio que
atiende a los tres ejércitos.
Su misión es el avituallamiento de carburantes y lu
bricantes de todas las fuerzas armadas.
2.1.7. SERvicio
TELECOMU
Asume la res
tes a la fabricac
diversas
Armas
blindados, vehí
res, de transmisio
Está encargad
nos, ya sea en
privada.
3. FORMACIO
FRANCES
3.1.
INGRESO
Estimamos d
char por comple
tienen los oficia
PflOCEDEN CIA CIVIL
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69/76
Centro Condiciones
Preparación
Duración de eatudios
para salir subteniente
Nacionadidad francesa.
Tener diecisiete años y menos de
veintiuno el 1.° de enero del
año del concurso.
Si se firma un compromiso de
servir seis años en un Cuerpo
militar se puede presentar has- Curso de mate-
Escuela Politée- ta los veintitrés años. máticassupe
nica
/
Tener el bachillerato completo riores en Es-
(matemáticas). cuelas civiles o
Haber obtenido el títul0 de ba- militares.
chiller menos de tres años an
tes del 1.0 de enero del año
del concurso:
No haber tomado parte anterior
mente en más de un concurso
de admisión.
Dos años salen
subtenientes
CO
antigüedad de un
año.
4. ENSEÑANZA
pondencia de todos los oficiales administrativos de los
Servicios, que cada uno lo posee propio; duración del
curso, diez meses. También da los cursos de presente
Después de e
mas y los Servic
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para suboficiales y oficiales de reserva, como se indica
en el cuadro de reclutamiento de oficiales para el con
curso único de Servicios.
Servicio de Sanidad—Escuela del Servicio de Sanidad
Militar, Lyón. Alumnos: Medicina y Farmacia. Bachiller
superior. Realizan un complemento militar a sus estu
dios de Facultad, debiendo obtener el título civil de Mé
dico o Farmacéutico para ser nombrados subtenientes.
Servicio de Ve