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FE Y EL SENTIDO DE LA VIDA
¿Cuándo fue el gran estallido?¿Dónde estamos antes de nacer?¿Dónde está el eslabón perdido?¿Dónde vamos después de morir?
¿Quiénes somos ? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos?
¿Estamos solos en la galaxia o acompañados?¿Y si existe un más allá? ¿Y si hay reencarnación?
¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos?
Y aunque la gente no se plantee las preguntas, busca igual
el sentido de su vida, es decir, su felicidad, por diferentes caminos:
• Por los placeres de la vida (drogas, pornografía, el alcohol, etc.).
Por el materialismo y consumismo (dinero, riquezas, motos, autos, etc.).
En las respuestas y descubrimientos de las ciencias empíricas.
En la religión y sus distintas manifestaciones
Los Cristianos buscan el sentido de su vida viviendo como Jesucristo nos enseña en el evangelio, y considerando a Dios como la persona más importante de su vida.
En el voluntariado y la ayuda a los demás
Por las ciencias ocultas (magia, cartas astrales, el espiritismo, brujería, etc.) y todo esto con el fin de dominar las fuerzas de la naturaleza y conocer el futuro.
Y otros...
no encuentran el sentido a su vida y
deciden terminar con la vida suicidándose.
EL PANORAMA DE RESPUESTASEL PANORAMA DE RESPUESTAS
Podemos agrupar las respuestas al sentido de la vida en tres grandes grupos:
1.- Las ciencias empíricas. 2.- Las ciencias ocultas. 3.- Las religiones.
1.- Las ciencias empíricas.
Las ciencias empíricas buscan responder a las preguntas
sobre el sentido de la vida solamente en la razón humana, es decir en
la ciencia, en lo que se puede comprobar científicamente. Para eso,
utilizan el método científico de formular hipótesis y comprobarlas
empíricamente. Prescinden de cualquier explicación que tenga que ver
con Dios o con realidades no comprobadas científicamente (como
extraterrestres por ejemplo, etc.).
conforme avanzan los descubrimientos científicos y técnicos,
se prescinde cada vez más de Dios a la hora de responder a las
preguntas del sentido de la vida. Antes, los que se preguntaban sobre
el origen del mundo y del hombre eran los filósofos y teólogos; pero
ahora estas preguntas son investigadas por las ciencias llamadas
empíricas como la Física, la Química, la Biología, la Geología, la
Arqueología, la Antropología, la Medicina… y en el campo de lo
personal por la Psicología y la Psiquiatría.
A veces las ciencias se basan en hipótesis que no están
comprobadas científicamente, por ejemplo la Teoría de la Relatividad,
la Teoría del Big-Bang, La Teoría del origen del planeta Tierra, el
origen de la vida, la Teoría del origen del ser humano, etc. Estas
teorías son admitidas por una amplia mayoría de gente pero continúan
siendo hipótesis o teorías.
La gran paradoja de hoy día es que cuanto más desarrollada
están las ciencias, muchas personas buscan su sentido de la vida no
en las ciencias sino en las ciencias ocultas o en las religiones. La
razón clara es porque las ciencias no dan la felicidad.
2.- Las ciencias ocultas y la magia.
Las ciencias ocultas aceptan una fuerza o algo superior a este
mundo pero no lo consideran como personal. Tanto la magia, el vudú o
la hechicería como los ritos satánicos, etc. tratan de dominar las fuerzas
ocultas de la naturaleza o las fuerzas maléficas, aprovecharse de ellas e
incluso usarlas contra otros.
En el caso de la astrología, las cartas
astrales o el tarot se pretende llegar a resolver
nuestros problemas y angustias, partiendo
del supuesto de que la posición de los astros,
los planetas y las constelaciones influyen
en las personas y en su destino. En el espiritismo
se trata de averiguar el futuro consultando
a los espíritus que, supuestamente
vagan por el mundo, en una dimensión paralela a la nuestra.
Paradójicamente, en nuestra sociedad, la más científica y
atea de la historia, surgen con mucha fuerza las ciencias ocultas.
Y es que las ciencias empíricas no dan la felicidad, y la gente
necesita respuestas que den sentido a su vida, de ahí que las
busquen en lo oculto, lo extraño, lo esotérico, o en el "Más Allá”.
Sin embargo estas “ciencias ocultas” se suelen presentar
a la gente como verdaderas ciencias. Pero no se pueden
comprobar científicamente. Más bien serían “Pseudo - Ciencias”
porque dan como ciertos unos fenómenos que no se pueden
comprobar científicamente. Sin embargo, si la gente recurre a ellas
es porque, en definitiva, busca su felicidad, cosa que las ciencias
empíricas no la pueden dar.
(Cienciología)
3.- Las Religiones.
También las religiones históricas han cumplido la función
de dar sentido a la vida y responder a las preguntas últimas
recurriendo a un Ser trascendente y Absoluto. Desde muy antiguo,
todas las culturas de la tierra y a lo largo de todos loa siglos han
creído en un ser trascendente y divino, superior al mundo y a la
naturaleza y creador de todo. A esos dioses, o a ese Dios le han
levantado templos, le han dedicado ritos, ceremonias y sacrificios,
le han celebrado fiestas, le han dedicado muchas obras de arte
como esculturas, pinturas, arquitectura, literatura.
Desde los tiempos más antiguos y remotos, allá donde hay
un vestigio de civilización, allá aparecen elementos religiosos.
Cada cultura se lo ha imaginado y concebido de distinta manera.
Veamos este cuadro sobre las religiones y sus distintas visiones.
Todas las religiones históricas han cumplido la función de
dar sentido a la vida y responder a las preguntas últimas recurriendo
a un Ser trascendente y Absoluto. Cada cultura se lo ha imaginado y
concebido de distinta manera, pero lo más curioso es que todas las
culturas de la Tierra y a lo largo de todos los tiempos hayan creído
en un Ser trascendente y Divino al que se le llama Dios, creador de
todo y a quien hay que darle culto. Veamos este cuadro sobre las
religiones y sus distintas visiones.
