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Lección 7 | Infantes | Ven a mi casa | Escuela Sabática Menores

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Queridos padres: Recuerden que los maestros de Escuela Sabática enseñarán esta lección en la fecha señalada. Los alumnos deberán estudiarla y hacer las actividades prácticas después, durante toda la semana, a partir de la fecha indicada.

Sábado 14 noviembre

Ven a mi casaS O B R E N

Hechos 16:6-15;Los hechos de los

apóstoles, pp. 175, 180, 181.

¿Te gusta visitar la casa de otras personas? ¿Te gusta que otros te visiten en la tuya?

Cuando Lidia descubrió a Jesús, invitó a algunos amigos a quedarse con ella. Ocurrió lo siguiente:

V E R S Í C U L O PARA ME MOR I Z A R

“Vengan a hospedarse en mi casa” (Hechos 16:15, NVI)

ME N S A J E

os ojos de Pablo se abrieron de repente.

—¡Ey, ustedes, dormilones! -llamó a sus ami-

i ' | gos Silas, Timoteo y Lucas-. ¡Levántense! ¡Va­

mos a Macedonia!

Silas, Timoteo y Lucas se restregaron los ojos, todavía

medio dormidos.

-¿Adonde dices que vamos? -preguntó Timoteo,

aún confundido.

-Dios me dio una visión anoche -explicó

Pablo enérgicamente-. Vi a un hombre que me

rogaba que fuera a Macedonia y enseñara las

buenas nuevas acerca de Jesús en su país.

Pablo y sus amigos compraron los pasajes y se

embarcaron en un barco de vela. El viaje a Macedonia era

largo, pero Dios envió vientos fuertes para impulsar el barco

con rapidez. Después de cinco días, atracaron en Macedo­

nia. Pablo y sus amigos caminaron hasta una ciudad impor­

tante, grande, con mucho movimiento comercial, llamada

Filipos.

El sábado, Pablo y sus amigos salieron a caminar junto al

Servimos a Dios cuando cuida­mos a los demás.

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río. Habían oído decir que algunos se reunían junto al río cada sábado, para orar y adorar a Dios.

Mientras caminaban, vieron a un grupo de mujeres. Mucha gente, en aquellos días, pensaba

que las mujeres no eran en absoluto importantes; pero Pablo sabía más: sabía que Jesús ama a las

mujeres tanto como ama a los varones.

Los hombres se sentaron, para acompañar a las damas; y ellas se emocionaron al escuchar lo

que Pablo y sus amigos tenían para contarles. Las mujeres ya creían en el Dios del cielo y lo ado­

raban, y ahora aprendieron acerca del Hijo de Dios, Jesús.

Dios abrió los corazones de las mujeres. Entendieron y creyeron el mensaje maravilloso que

escucharon.

-¡Quiero bautizarme! -exclamó Lidia-. ¡Y luego quiero ir a casa y contar a todos estas buenas

noticias!

Lidia era una mujer de negocios muy rica. Vendía ropa de púrpura, muy cara; de la clase que

los reyes usaban en esos días.

-¿Les gustaría venir a casa y hospedarse mientras enseñan en Filipos? -preguntó Lidia a Pablo

y a sus amigos.

Lidia sabía que Pablo, Timoteo, Silas y Lucas estaban sirviendo a Dios al ir hasta su país, y con­

tar a su pueblo la historia de Jesús y de la

salvación. Lidia también quería servir a Dios

al ayudar a cuidar de Pablo y de sus amigos

mientras estuvieran allí.

Pablo, Silas, Timoteo y Lucas predi­

caron en Filipos durante muchos días.

Mucha gente creyó en las buenas nue­

vas de Jesús y fue bautizada gracias al

duro trabajo de cuatro misioneros, y

al cuidado y el apoyo que Lidia les

brindó.

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SÁBADOLean la historia de la lección para esta semana y repasen el versículo para memorizar:

Vengan....................(Mover la mano hacia el pecho)a hospedarse.........(Juntar las manos bajo la mejilla

en señal de “domir”)en mi casa............. (Juntar los dedos para hacer el

“techo de la casa”)Hechos 16:15, NVI. (Juntar las palmas y luego

abrirlas como si fueran un libro)

DOMINGOAyuda a tu hijo a organizar una invitación a un ami­

go para jugar en casa; o inviten a alguien a almorzar el sábado. Incentiva a tu hijo a colgar el cartel que dice “Bienvenidos, amigos” en el picaporte o en la puerta del frente, antes de que lleguen los invitados.

Pregúntale.- ¿Qué hacen los demás para cuidar de ti?

¿Qué puedes hacer tú para cuidar de otros?

LUNESLean Hechos 16:6 al 15. Pregunta a tu pequeño: ¿Có­

mo ayudó Lidia a Pablo y a sus amigos? ¿Cómo ayudó Pablo a Lidia? ¿Necesitas una casa grande para que la gente venga a visitarte?

Considera la posibilidad de llevar a tu hijo a un centro de servicios comunitarios para colaborar esta semana. Junten artículos útiles para el proyecto de servicio comu­

nitario, y llévenlos el sábado a la iglesia.

MARTESBusquen y cuenten todas las cosas de color púrpura

que encuentren en su casa y en el vecindario.Procura que tu hijo logre el tono púrpura coloreando

con un crayón rojo sobre un crayón azul, o mezclando colorante rojo y azul en agua. Conversen sobre el hecho de que los reyes y las reinas, y otras per­sonas importantes, usaban ropa de este

color.

MIÉRCOLESEntonen las siguientes palabras con la me­

lodía de “Con Jesús en la familia”: “Cuando amigos nos visitan, qué hogar feliz, qué hogar feliz, qué hogar feliz”. Usen diferentes nombres.

Busca un mapa bíblico y muestra al niño algunos lu­gares por los que viajó Pablo, incluyendo Macedonia y Filipos.

Hagan de cuenta que son Pablo que está de viaje, y

den un paseo alrededor de la casa o por el vecindario.

JUEVESComenten cómo tratar a un invitado. Que el niño

practique recibir a una familia en la puerta, ofrecerle algo para tomar y que le muestre dónde está el baño. (Enséñale lo que sea apropiado en

tu cultura.)

VIERNESPon la mesa, para la cena de hoy, con

servilletas o mantel púrpura. Sirve, al menos, una comida o una bebida de color púrpura.

Si es posible, usa ropa púrpura hoy.Entonen una canción que trate acerca de compartir.Ayuda a tu hijo a usar accesorios para contar la his­

toria (una caja de cartón como velero, el color púrpura para la ropa de Lidia, etc.).