LOS JUDIOS EN LA ANTIGÜEDAD

POR

GONZALO FERNÁNDEZ,

Universidad de Valencia.

Las raíces de los hebreos.

Los hebreos son un grupo de semitas amorreos (antepasados de los arameos). De ello se conservan dos ecos en la Biblia. Uno figura en Deuteronomio 26, 5 ? 9. Allí se halla la plegaria que todo israelita debe decir al ofrecer las primicias: Un arameo errante fue mi padre, y bajó a Egipto en corto número para peregrinar allí, y creció hasta hacerse gran muchedumbre, de mucha y robusta gente. Afligiéronse los egipcios y nos persiguieron, imponiéndonos rudísimas cargas, y clamamos a Yahwé, Dios de nuestros padres, que nos oyó y miró nuestra humillación, nuestro trabajo y nuestra angustia, y nos sacó de Egipto con mano poderosa y brazo tendido, en medio de gran pavor, prodigios y portentos, y nos introdujo en este lugar, dándonos una tierra que mana leche y miel.

Otro aparece en Josué 24, 14 ? 15: Temed a Yahwé y servidle con integridad y en verdad, quitad los dioses a quienes sirvieron vuestros padres al otro lado del río y en Egipto, y servid a Yahwé. Y si no os parece bien servidle, elegid hoy a quién queréis servir, si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres al lado allá del río, si a los dioses de los amorreos, cuya tierra habéis ocupado. En cuanto a mí y a mi casa toca, nosotros serviremos a Yahwé.

Los amorreos proceden del Desierto de Siria. Así mar.tu en sumerio y amurru en acadio significan gentes del Este o país del Este. En el tránsito del siglo XXI al XX a.C. existe un doble movimiento amorreo. Por un lado grupos de esta etnia se dirigen a Mesopotamia donde destruyen la ciudad de Ur y terminan con el renacimiento sumerio en 2004 a.C. Son los amorreos orientales. Otras gentes amorreas encaminan sus pasos a Palestina. Son los amorreos occidentales. Se instalan en Palestina entre 2000 y 1950 a.C. Entre ellos los más conocidos son los jebuseos quienes ocupan la ciudad de Urusalim (la actual Jerusalén).

También se cuentan con dos noticias escriturísticas que aluden a la raíz amorrea de la Ciudad Santa. La primera se halla en Josué X, 5: Cinco reyes de los

amorreos, el rey de Jerusalén, el rey de Hebrón, el rey de Jerimot, el rey de Laquis y el rey de Eglón, se juntaron y subieron con todos sus ejércitos, y acamparon cerca de Gabaón, asediándola. La segunda es más tardía. Se encuentra en Ezequiel 16, 1 - 3: Fueme dirigida la palabra de Yahwé, diciendo: Hijo de hombre, echa en cara a Jerusalén sus abominaciones, y dí: Esto dice el Señor, Yahwé, a Jerusalén: Eres por tu tierra y por tu origen una cananea; tu padre, un amorreo; tu madre, una jetea.Con la palabra jetea Ezequiel se refiere a la pertenencia de Canaán al Reino Hitita en el momento de instalarse allí el clan de Abraham.

En su ingreso en Canaán los amorreos occidentales se aprovechan de la fragmentación de Palestina. Este territorio había sido ocupado por una oleada semítica anterior a los amorreos occidentales a cuyos miembros la Sagrada Escritura llama cananeos. La instalación de los cananeos en Palestina se sitúa hacia 3100 a.C. coincidiendo con el inicio de la Fase I del Bronce Antiguo I que tiene una duración aproximada de 200 años. Desde la Fase II del Bronce Antiguo I (2900 ? 2800 a.C.) los cananeos de Palestina se dividieron en pequeños cacicatos enfrentados entre sí. Esas luchas internas se perpetúan a lo largo del Bronce Antiguo III y IV (2800 ? 1900) y del Bronce Medio I, IIA, IIB y IIC (1900 ? 1550). Dichos conflictos se complican además con nuevas pugnas contra pueblos foráneos y favorece el dominio de los hititas en la región quienes hacen vasallos suyos a los caciques cananeos y amorreo-occidentales sin eliminarlos.

El clan de Abraham es el germen de los judíos. Pertenece a los amorreos orientales. Su estirpe se desprende no sólo de los anteriores pasajes de la Biblia sino también de la onomástica: Jacob es un nombre amorreo con toda certeza mientras que Abraham e Isaac lo son con muchas posibilidades de verosimilitud. Los antepasados de Abraham se instalan en Mesopotamia a raíz del final en 2004 a.C. del período neosumerio con la toma y destrucción de Ur por los susodichos amorreos orientales. El nacimiento de Abraham ha de situarse en los inicios del segundo cuarto del siglo XIX a.C. Su infancia y primera juventud se desarrollan en Ur. Esta ciudad se reconstruye muy rápidamente tras el desastre de 2004 a.C. Durante los primeros siglos del II Milenio a.C. Ur ejerce un importante papel comercial y religioso. Hacia 1850 a.C. Abraham y su familia deciden abandonar Ur

probablemente por su monoteísmo que les lleva a rechazar a los dioses distintos al Dios de su clan.

El clan de Abraham se dedica al pastoreo nómada de ganado menor (ovejas y cabras). Comprende al propio Abraham, su mujer Sara, el hijo de ambos Isaac (heredero de la primogenitura y por tanto de la jefatura del clan) y sus esclavos y esclavas entre quienes destacan sus concubinas. Se encaminan en primer lugar a la Alta Mesopotamia y en concreto a la ciudad de Harrán. Ese tránsito desde la Baja Mesopotamia (Ur) a la Alta Mesopotamia (Harrán) se explica por un deseo de Abraham de evitar el duro Desierto de Siria para arribar a Canaán.

Cuando llegan a esta última tierra los caciques amorreo-occidentales de Siquén y Urusalim les permiten instalarse en sus dominios. El primer punto es Siquén por su mayor proximidad a Harrán. En los aledaños de la ciudad se alza el Monte Garizín. Me permito situar en su cima el Sacrificio de Isaac (Génesis 22).. Allí Abraham sustituye el sacrificio del primogénito por una ofrenda animal. No obstante Abraham prefiere abandonar Siquén y proseguir su camino rumbo al sur de Canaán. Tal vez ello se explique por considerar que en la parte meridional de Canaán existen más tierras desocupadas donde instalarse

Allí Melquisedec (cacique amorreo-occidental de Urusalim) cede al clan de Abraham un territorio de monte bajo en las cercanías de la actual ciudad de Hebrón. En aquellas tierras Abraham se dedica a la cría de ganado bovino sin abandonar el tradicional cuidado del ovino y caprario. Lo demuestra la carne de ternero con la que Abraham obsequia a sus misteriosos visitantes (en realidad o las Tres Personas de la Santísima Trinidad según la exégesis muy frecuente entre católicos de San Ambrosio de Milán a tres ví a Uno adoré o Dios con dos ángeles revestidos los tres de forma humana) junto al terebinto de Mambré (Génesis 18) . Esta escena supone una prueba de la sedentarización de Abraham pues bueyes y vacas son más difíciles de mover que las primigenias cabras y ovejas. Abraham se ve empero obligado a ciertas obligaciones militares de defender a Melquisedec si éste y los caciques amigos sufren algún ataque. Así se explica la participación de Abraham y sus gentes en una de las muchas campañas intestinas (verdaderamente simples razzias) que aquejan a la Palestina cananeo-amorrea citada en Génesis 14.

El centro de las posesiones del clan de Abraham es el predio de Mambré donde Abraham compra la cueva de Macpela para su tumba y la de su parentela (Génesis 23, 1 ? 20 y 25, 7 ? 11). En esa cueva están enterrados el patriarca y sus familiares más directos con la salvedad de su nieta política Raquel. Herodes el Grande (40 ? 4 a.C.) la cobija en un suntuoso edificio funerario de 50 metros de largo por 34 metros de ancho. Ha sido unas veces iglesia y otras mezquitas con arreglo a los varios dominadores de Tierra Santa. Desde la ocupación israelí de 1967 conviven una sinagoga y la mezquita que aprovecha la vieja iglesia cruzada de San Abraham. Este personaje es el padre de las tres grandes religiones monoteístas: judaísmo, cristianismo e Islam. Hebrón es considerada ciudad santa por hebreos y musulmanes: los primeros junto a Jerusalén, Tiberiades y Safed; los segundos al lado de La Meca, Medina y asimismo Jerusalén a la que los árabes denominan Al Kuds (la Santa).

El Dios del padre.

Abraham venera al Dios de su clan identificado por los cristianos con la Primera Persona de la Santísima Trinidad y llamado Allah en el Islam. No tiene nombre. Se le llama el Dios del padre. En la Biblia aparece a veces citado como El Sadday. Pero esos teónimos responden al modo que tienen personas ajenas al clan de referirse a ese Dios anónimo. Sadday es un vocablo acadio que se traduce por de la montaña o de la estepa. Creo que es el término usado por los sumerios y acadios que viven en Ur para nombrar a aquel Dios amorreo a Quien no consideran una Divinidad perteneciente a su cultura urbana. El vocablo acadio sadu posee los dos sentidos de montaña y estepa. Si se acepta el primero (montaña) alude a la naturaleza extramesopotámica del Dios del padre pues no debe olvidarse que los neosumerios llaman dragones de la montaña a los qutu originarios de los Montes Zagros. En caso de admitirse el segundo significado de sadu (estepa) hace referencia al origen de todos los miembros de esa etnia en el Desierto de Siria. El clan de Abraham lleva un altar portátil del Dios del padre hasta su emplazamiento en Mambré. Entonces fijan ese altar bajo el terebinto donde tuvo lugar la teofanía de Génesis 18.

El es el nombre cananeo del padre de los dioses. Se trata de un dios paternal y benévolo. Los caciques arameos de Siquén y Urusalim tributan culto a El. Incluso es probable que en Urusalim exista una dinastía sacerdotal a la que Melquisedec pertenece con el culto a El centrado en la pequeña colina donde Salomón edificará luego el Templo de Jerusalén conocida por el Monte Moriah. Ello se infiere de la doble naturaleza de rey y sacerdote que Melquisedec tiene (Génesis 14, 18). Los cananeos y amorreo-occidentales identifican con El al Dios del padre del clan de Abraham. Esa equiparación y la relativa proximidad del predio de Mambré a la Urusalim de Melquisedec explica que en el decurso del tiempo los posteriores redactores de la Biblia llamen El al Dios del padre aunque privándole de cualquier connotación politeista.

Influjos mesopotámicos en los Patriarcas.

Los hebreos recogen de su estancia en Mesopotamia la idea del sheol y los relatos del Diluvio Universal y la Torre de Babel que figuran en la Sagrada Escritura. El sheol es un tenebroso lugar de ultratumba por el que vagan como sombras las almas de los muertos. Es muy parecido al Hades que Homero describe en el Canto XI de La Odisea. La raíz sumeria del sheol se infiere de sus similitudes con el reino de los muertos que aparece en el Poema de Gilgamesh. El Diluvio Universal recoge varias fortísimas crecidas del Tigris y el Eufrates acompañadas de lluvias torrenciales a las que se refieren las palabras de Génesis 7, 11 ? 12: Se rompieron todas las fuentes del abismo, se abrieron las cataratas del cielo, y estuvo lloviendo sobre la tierra durante cuarenta días y cuarenta noches.

Estos acontecimientos suceden en época de Yemdet Nars (3000 ? 2850 a.C.). Tienen tal gravedad que los recoge la memoria colectiva y pasan en Mesopotamia de generación en generación. La Torre de Babel (Génesis 11, 1 ? 9) supone un eco del templo-montaña o ziggurat escalonada que representa el cenit de la cultura sumerio-acadia en arquitectura monumental. La ziggurat consiste en un templo (labor de arquitectura) que se erige encima de un gigantesco pedestal escalonado (tarea de ingeniería). En la misma Ur el rey Ur-Nammu (2112 ? 2195 a.C.) dedicó una ziggurat al dios lunar Nannar. Ese edificio tiene una superficie de 62 por 34

metros y hubo de ser conocido por el clan de Abraham antes de emprender su peregrinaje de nomadeo.

La migración de los hebreos a Egipto y el Éxodo.

La llegada de los judíos a Egipto ha de situarse cronológicamente en las postrimerías de la XIII Dinastía Egipcia que se extiende de 1783 a 1680 a.C. Se relaciona con la colonización agraria del Bajo Egipto muy potenciada por Sesostris II (1897 ? 1878 a.C.). Como la mano de obra egipcia no es suficiente los faraones de la XIII Dinastía favorecen el asentamiento pacífico de asiáticos quienes se benefician de un mejor clima y una sociedad más avanzada. Entre ellos se cuentan los hebreos.

Éstos se afincan en Goshen (Génesis 47) que se ubica en el extremo oriental del Delta. Allí instalan el altar portátil del Dios del padre sacado de Mambré. En Goshen los hebreos se dedican a faenas agrícolas en calidad de aparceros del faraón en conformidad con Génesis 47, 23 ? 24: Y dijo José al pueblo: ?Hoy os he comprado para el faraón a vosotros y vuestras tierras. Al tiempo de la recolección daréis el quinto al faraón, y las otras cuatro partes serán para vosotros, para sembrar y para manteneros vosotros, los de vuestra casa y vuestras familias?. El establecimiento de los hebreos en el País del Nilo, su exclusiva dedicación a la agricultura en Goshen y la indiferencia que demuestran ante los problemas de Egipto hacen que su número aumente. No les afecta la entrada de los hiksos. Por tanto los hebreos dejan de ser un clan en Goshen y se transforman en un auténtico pueblo. Andando el tiempo, sin abandonar sus tradicionales quehaceres agrícolas, grupos de hebreos pasan a trabajar en la edificación de los grandes monumentos y complejos urbanísticos de las Dinastías XVIII y XIX. Así se les encuentra trabajando de peones en las ciudades de Pitom y Rameses (Éxodo 1, 11) que han sido identificadas con los yacimientos de Zoan y Tell Mashkuteh

La crisis económica que se inicia en el País del Nilo durante los últimos años de Ramsés II (1289 ? 1224 a.C.) motiva que el faraón imponga unos trabajos forzados a todos sus súbditos. Los hebreos tienen el permiso consuetudinario de los faraones de ir al Desierto de Egipto por tres días a hacer un sacrificio al Dios del padre con el altar portátil coincidiendo con el equinoccio de primavera y

volviendo luego a Goshen. El sacrificio en el Desierto Egipcio se explica por la primigenia naturaleza montaraz y esteparia del Dios del padre. En un año determinado los judíos aprovechan su ausencia por tres días de Goshen para huir por el Sinaí aunque su número no debe superar las seiscientas familias en el momento de su salida de Egipto .

Influjos egipcios en el judaismo

Los hebreos asumen el relato de la creación del hombre del País del Nilo. En la mitología egipcia el dios alfarero Min hace una estatua de arcilla del primer hombre al que Ptah insufla la vida. Es cierto que aparecen otras resonancias egipcias en la Biblia vg. el Himno a Atón de Akhenaton (1364 ? 1347 a.C.) en el Salmo 104 (el 103 de la Vulgata) y la literatura sapiencial. Pero estos influjos son más tardíos y empiezan a raíz de los fuertes contactos egipcio-judíos que acaecen durante el reinado de Salomón (972 ? 931 a.C.). Esa incidencia de lo egipcio se observa asimismo en la pintura de la corte egipcia que aparece en la historia de José (Génesis 37 ? 50 con las interpolaciones de los capítulos 38 y 49). Este relato se debe a la pluma del autor del Génesis al que se le llama el Yahwista. Se sitúa su cronología en el siglo X a.C. y se le considera un judío próximo a Salomón.

Los inicios del yahwismo

En el camino de retorno a Canaán los hebreos adoptan el teónimo Yahwé de los cainitas del Sinaí con el propósito de dar un nombre al Dios del padre. Los cainitas son una tribu madianita cuyos miembros se dedican fundamentalmente a las actividades metalúrgicas aunque tienen algunas actividades pastoriles menos importantes de índole trashumante y esteparia. Los cainitas dan culto a su Yahwé en el Monte Sinaí. No obstante esa tribu madianita posee otros santuarios menos importantes como el de Timnah. Allí se guarda la Serpiente de Bronce que es el instrumento utilizado por el Yahwé cainita para curar las heridas producidas por los mordiscos de los reptiles. La palabra Yahwé se traduce por Yo soy. Esto quiere decir que Dios es el único que existe por Sí Mismo y que las demás criaturas deben la existencia a Él. Asimismo Yahwé no es el Dios de un simple clan como era el

Dios del padre sino el Dios de todo el pueblo hebreo. El Yahwé cainita es un dios muy estricto y justiciero. Ya instalados en Canaán los judíos unen la benevolencia del cananeo El y la severidad justiciera del Yahwé cainita para elaborar esa ambivalencia benignidad/ justicia del Yahwé hebreo

La entrada de los judíos en Canáan

Los judíos vuelven a Canaán. Aprovechan el despoblamiento causado allí por la conquista mitannia, las rebeliones cananeas y amorreas y la primera oleada de los Pueblos del Mar. Lo prueban las destrucciones de Ay a mediados del II Milenio a.C., Jericó y Sunem en el siglo XIV a.C. y Laquis y Debir en el XIII a.C..

Los libros bíblicos de Josué y Jueces dan una pintura heroica a una supuesta conquista judía de Canaán que nunca existió. Los hebreos se concentran en dos centros al instalarse en Palestina. Uno se halla en el norte. Es el Santuario de Shilo que se halla muy cerca del Monte Garizim. Allí nacen las diez tribus septentrionales que tienen por centros religiosos el Monte Garizim y el Santuario de Shilo y político la ciudad de Siquén. Esas tribus son las de Efraín, Zabulón, Galaad, Dan, Asher, Neftalí, Issakhar, Rubén, Manases y Benjamín. Sus miembros empiezan a difundir la idea de que en el Monte Garizim había tenido lugar el Sacrificio de Isaac. Los hebreos que se quedan más al sur se concentran en torno a la ciudad de Hebrón con la Cueva de Macpela. Allí originan el nacimiento de las tribus de Judá y Simeón.

Al conjunto de las diez primeras tribus se conoce por Israel. Su unión se llama la Alianza de Siquén. Se hace en tiempos de Abimelec, sucesor de Gedeón como juez de Israel (Jueces 8, 31 y 9). A la unión de las dos últimas se da el nombre de Judá. Esas denominaciones son anteriores al cisma de 928 a.C. con el nacimiento en el sur del Reino de Judá a base de la tribu homónima y de la de Simeón y con la aparición en el norte del Reino de Israel fundamentado en las diez tribus restantes.

Las dos ideas contrapuestas y al tiempo complementarias de Israel y Judá se perciben en etapas anteriores a la monarquía davídica. El Canto de Débora menciona sólo las diez tribus del norte. El propio Libro de los Jueces diferencia Judá

de Israel cuando narra las hazañas de Sansón. A la muerte de Saúl su hijo Ishbósheth se proclama rey de Israel frente a David. En tiempos de Salomón el Primer Libro de los Reyes vuelve a distinguir entre Israel y Judá. Por tanto la distinción entre Israel y Judá se aprecia desde época muy antigua, pervive bajo la superestructura centralizadora impuesta por David y Salomón y aflora cuando dichos vínculos se debilitan.

En el siglo XI a.C. tiene lugar una segunda oleada de los Pueblos del Mar que desembarcan en el litoral mediterráneo de Palestina. Son los filisteos que lo hacen por los actuales puertos palestino de Gaza e israelí de Ascalón y los zakkala, tjeker y denen en torno al Monte Carmelo. Estos tres últimos pueblos intentan extenderse hacia el interior. Las diez tribus del norte los derrotan en la batalla del Monte Tabor pero quedan muy debilitadas. Mayor es el peligro de los filisteos. Sin embargo las tribus de Judá y Simeón reciben el apoyo de los fenicios quienes son enemigos también de los filisteos.

La monarquía unificada

La amenaza filistea hace que las tribus judías busquen un rey. En torno a 1125 a.C. ocupa ese puesto el benjaminita Saúl quien instala su capital en Gibea dentro del territorio de Benjamín. Sin embargo los filisteos derrotan y matan a Saúl y su heredero Jonatán en el Monte Gilboé (c.a. 1010 a.C.). Ello hace que la tribus sureñas de Judá y Simeón elijan como rey a uno de sus miembros, David, quien se había destacado como valiente militar en las campañas de Saúl contra los filisteos. Las tribus del norte consideran su soberano a Ishbósheth, hijo de Saúl. David instala su capital en Hebrón. Se inicia una guerra entre David e Ishbósheth que finaliza con la victoria del primero por sus mayores dotes castrenses después de dos años de lucha.

David (1010 ? 972 a.C.) se alía estrechamente con el rey de Tiro Abi-baal (c.a. 990 ? 970 a.C.) al tener los mismos enemigos: sirios y filisteos. Los tirios auxilian a David en su aniquilamiento de la pentápolis filistea cuya talasocracia es rival de la tiria. David se beneficia del relativo eclipse que experimentan en el siglo X a.C. Asiria y Egipto para constituir un estado de cierta importancia regional. Conquista la ciudad cananea de Urusalim a la que cambia el

topónimo por el de Jerusalén. En ella instala la capital del Reino unificado con objeto de impedir rivalidades entre las tribus septentrionales y las del sur. No obstante David y su hijo Salomón (972 ? 931 a.C) hacen de las tribus de Judá y Simeón la aristocracia de aquella Monarquía. El pésimo trato que Salomón da a las diez tribus del norte hacen que a su muerte se separen pues en realidad sólo les unía el prestigio militar de David y el complejo aparato funcionarial con sus lógicos ribetes represivos de Salomón.

Salomón no sólo hace grandes construcciones en Jerusalén (vg. Palacio Real y Templo). Además repara y fortifica Baalath, Tadmor, Beth-Jorón de Suso y Beth-Jorón de Yuso. También edifica en otras zonas de Palestina y el Líbano. Esta labor edilicia acarrea unas prestaciones personales por el pueblo que Salomón hace recaer en las diez tribus del norte. En las postrimerías de su reinado Salomón ha de enfrentarse a un movimiento subversivo protagonizado por la tribu de Efraín. El rey consigue ahogarlo en sangre pero no puede evitar que su cabecilla Jeroboam huya a Egipto.

Las relaciones mercantiles de Salomón

El comercio marítimo del Reino de Israel en época de Salomón se desarrolla por el Mediterráneo y el Mar Rojo. En el primero destacan los puertos de Jaffa (actual barrio histórico de Tel Aviv) y Shikmona (al sur de la hodierna Haifa). En el segundo es necesario refeirse al puerto conocido en la Biblia con el topónimo Ezion-geber que hoy se corresponde con el yacimiento de Tell el_Kheleifeh en las cercanías de Elath.

Tráfico mercantil de Salomón por el Mediterráneo

Es inseparable de la alianza del monarca israelí con su colega tirio Hiram I (969 ? 936 a.C.). Ambos soberanos continúan las buenas relaciones de sus progenitores David (1010 ? 972 a.C.) y Abi-baal (c.a. 990 ? 970 a.C.) pues tenían los mismos enemigos: los sirios y los filisteos. Puede igualmente suponerse que los tirios auxiliaron a David en su aniquilamiento de la talasocracia filistea que suponía una grave competencia para la tiria.

La amistad de Hiram I y Salomón trae dos resultados excepcionales. El primero

de ellos es la construcción del Templo de Jerusalén por arquitectos y orfebres de Tiro. El Templo de Salomón está inspirado en el celebérrimo santuario de Melkart en Tiro. Este último influye también en el dedicado al mismo Melkart en la colonia fenicia de Gadir (la actual Cádiz) que será conocido por los autores romanos como el Templo de Hércules Gaditano por haber identificado a este semidiós de la mitología latina con aquel dios astral y marinero de Tiro que era Melkart.

El segundo efecto de la susodicha alianza viene dado por la presencia de judíos en las tareas colonizadoras capitaneadas por los fenicios. Sin embargo los judíos constituyen un grupo más de gentes del Este del Mediterráneo que allí participan junto a otros orientales como sirios o chipriotas. Con plena justeza el moderno vocabulario historiográfico prefiere hablar de colonización oriental antes que de colonización fenicia pues los fenicios suponen el núcleo mayoritario y dirigente pero no el único. Ésta es por tanto la primera gran migración de los judíos en la Antigüedad.

La colaboración de los judíos en las susodichas misiones colonizadoras plantea dos nuevas cuestiones. La primera de ellas es establecer cuándo arriban los primeros hebreos a la Península Ibérica. Los judíos medievales remontan el advenimiento de sus ancestros al reinado de Salomón. Esto siempre se había interpretado a manera de una argucia a fin de no ser responsabilizados de la muerte de Jesús de Nazaret por sus vecinos cristianos. Hoy se piensa que los judíos llegarían a la Península mezclados con los fenicios y junto a otros grupos del Este del Mediterráneo en el seno de la antedicha colonización oriental.

Un segundo tema es el problema de la identificación de la Tartessos de las fuentes griegas con la Tarschisch bíblica. Herodoto de Halicarnaso habla de un reino situado en las proximidades de las Columnas de Hércules (nuestro Estrecho de Gibraltar) y coloca en su trono a Argantonio a quien hace un tajante filoheleno. Otras noticias griegas aluden a los riquísimos reyes de Tartessos y entre ellos destacan a Habis, Gerión y Argantonio de modo que a éste último el poeta Anacreonte le considera el máximo exponente del disfrute de la felicidad terrena. La Biblia se refiere a las naves de Tarschisch que inician sus actividades

mercantiles en época de Salomón y de las que fenicios y judíos consiguen enormes beneficios. Aquí surge el interrogante: ¿es el Reino de Tartessos de las fuentes griegas la Tarshisch de la Sagrada Escritura?

Uno de los primeros autores que contestan afirmativamente es el jesuita P. Juan de Pereda quien fue profesor de la Universidad Complutense a fines del siglo XVI cuando la famosa alma mater cisneriana aún se hallaba en su primitivo emplazamiento de Alcalá de Henares. Su parecer es generalmente aceptado hasta bien avanzado el siglo XX de manera que en la centuria pasada Adolf Schulten llega a mantener no sólo la identidad Tartessos ? Tarschisch sino que ambas se corresponden asimismo con la Atlántida de Platón, tal como aparece en los diálogos Fedro y Critias, y se hallan en el Coto de Doñana.

Los primeros en poner en duda esa identificación son los filólogos clásicos. Antonio Tovar, uno de sus más conspicuos representantes, llega a decir que los antropónimos reales tartessios (Habis, Gerión y Argantonio) se limitan a expresar las riquezas naturales del Valle del Guadalquivir. Esto se ve muy claro en los casos de las leyendas de los bueyes de Gerión y la raigambre celta del antropónimo Argantonio que significa el hombre de la plata: el primero alude a la abundancia de ganado bovino y el segundo a los espléndidos recursos minerales del SSO peninsular en la Edad Antigua.

En 1974 Luis García Iglesias deshispaniza el mito platónico de la Atlántida y lo vincula a la Atenas submicénica que sale indemne de las migraciones dorias. Javier Arce saca a colación un texto de San Jerónimo según el cual Tarschisch se ubica en la India. Arce, empero, duda entre el subcontinente hindú o la zona de Eritrea-Abisinia dado que los geógrafos latinos llaman al primero India Maior (India Mayor) al primero e India Minor (India Menor) a la segunda y el Solitario de Belén no aclara en cuál de ellas coloca Tarschisch.

Juan José Sayas Abengoechea y José María Blázquez localizan la Tarschisch bíblica en la Península Arábiga. Antonino González Blanco se acoge a un texto de San Juan Crisóstomo a fin de postular la idiosincrasia polisémica del vocablo Tarschisch de suerte que en la Escritura puede significar cosas tan dispares como piedra preciosa, el azul de alta mar o factoría ultramarina. Esta hipótesis

acarrearía imprecisión a la palabra Tarschisch. Así las naves de Tarschisch serían barcos de gran calado y embarcarse rumbo a Tarschisch supondría marchar camino de una fundación colonial en ultramar. Este mismo espíritu lo recogen Julián Mateos y Luis Alonso Schökel en la Nueva Biblia Española tal vez por los comunes vínculos de González Blanco, Alonso Schökel y Mateos con la Universidad de Comillas (¿quizás un eco del gran escriturista P. José Alonso S.J. hoy por desgracia fallecido? ).

Recientemente Jaime Alvar identifica la Tarschisch bíblica con la colonia fenicia de Gadir (hodierna Cádiz) en base al embarque de Jonás en el puerto mediterráneo de Jaffa rumbo a Tarschisch. Me inclino a creer que la Tarschisch de la Sagrada Escritura es el conjunto Tartessos ? Gadir. El primero es la entidad productora . El segundo desempeña el papel de puerto por el que los materiales tartéssicos llegan al Oriente Mediterráneo y las manufacturas orientales arriban a Tartessos como pago de sus materias primas. Los hebreos importan sobre todo hierro de Tartessos a través de Gadir por el aumento de la actividad edilicia en el reinado de Salomón que hace insuficientes las antiguas extracciones férricas de Siria en tiempos de David. Por consiguiente las importaciones judías de Tartessos se embarcaran en barcos fenicios primordialmente (aunque también judíos) en el puerto de Gadir. A éstos la Biblia les llama navíos de Tarschisch. Los productos tartéssicos llegan a Israel a través de los puertos de Jaffa (sur del país) y Shikmona (norte del Reino).

Comercio judío a través del Mar Rojo

Se efectúa por el puerto de Ezion-geber. Se hace con barcos judíos que tienen allí su base y actúan de intermediarios para el comercio tirio. Sus destinos principales son el subcontinente hindú, las actuales Eritrea-Etiopía y la Península Arábiga y por tierra llevan los productos de estas regiones desde Ezion-geber a Tiro que a su vez los distribuye por toda la cuenca oriental del Mediterráneo. En sentido inverso hay caravanas que en Tiro recogen productos del Este del Mediterráneo para llevarlos a Ezion-geber y allí toman barcos judíos a fin de ser transportados a la India, Arabia y la zona Eritrea-Abisinia.

Un problema que aquí se plantea es la localización de Ofir. Creo que se trata del subcontinente hindú. Las relaciones de Salomón con ambas márgenes del Mar Rojo quedan claras con la visita de la reina de Saba a Jerusalén. Los dominios de aquella soberana se extienden por el Yemen actual con algunas cabezas de puente en el litoral eritreo como demuestra la leyenda que hace de Menelik, supuesto hijo de Salomón y la reina de Saba, el fundador de la monarquía etiope. Muy probablemente acierta Gaalyah Cornfeld al pensar que el viaje de la de Saba a Salomón se corona con un tratado mercantil por el que los sabeos proporcionan a los judíos las especias de la Arabia Meridional a cambio de productos agrícolas de Israel y manufacturas tirias En cambio no creo que Salomón mantenga relaciones económicas con el País del Punt (la Somalia de hoy). Este es un territorio sometido al influjo comercial egipcio desde el Reino Medio. Los egipcios son los intermediarios entre los estados del Oriente Mediterráneo y el País del Punt. Ello se ve muy claro en el caso de Salomón quien actúa de intermediario proporcionando caballos minorasiáticos al ejército faraónico y carros egipcios a los reyes hititas. Además, para reafirmar esa alianza económica, Salomón se casa con una princesa egipcia cuyo nombre no ha llegado a nuestros días pero que es hija de Siamón, sexto faraón de la Dinastía 21 quien rige los destinos del País del Nilo entre los años 978 y 959 a.C.

La muerte de Salomón y el Cisma

Cuando Salomón fallece en 928 a.C. suceden dos hechos. Consiste el primero en que Jeroboam, el jefe de la precitada rebelión de la tribu de Efraín, vuelve de Egipto aprovechando el interregno. El segundo estriba en la venida a Siquén de Roboam, vástago y heredero de Salomón (I Reyes 12 y II Crónicas 10). La marcha de Roboam a Siquem se debe a pretender allí el acatamiento de las tribus del norte unidas por la Alianza de Siquén (Jueces 8, 31 y 9). Sus miembros exigen a Roboam que aligere las cargas personales a las que habían sujetos por su padre. En cambio Roboam se deja convencer por los notables tanto jóvenes como mayores de las tribus de Judá y Simeón que le proponen acentuarlas. Ello motiva una sublevación de todas las diez tribus norteñas que proclaman a Jeroboam, el héroe de la resistencia de la tribu de Efraín a Salomón, rey de Israel. Roboam se ve obligado a

huir de Siquem para no perder la vida. Sólo tiene el respaldo de las tribus de Judá y Simeón con las que forma el Reino de Judá. Roboan, empero, posee una baza que explica los principales rasgos de la administración de su enemigo Jeroboam: su control del Templo de Jerusalén.

La política de Jeroboam.

Jeroboam se enfrenta al problema de buscar una nueva capital para su reino y construir un santuario que impida las peregrinaciones de sus súbditos al jerosolimitano. En cuanto al primer tema Jeroboam continúa en Siquén en los inicios de su reinado pero luego muda la capital a Penuel (I Reyes 12, 25). Por lo que se refiere al segundo asunto levanta algunos santuarios de los que los libros históricos de la Biblia sólo recoge los topónimos de Beth-El y Dan (I Reyes 12, 29 ? 32).

En ellos el rey de Israel topa con la cuestión añadida de crear un sacerdocio rival del de Jerusalén. En este empeño Jeroboam ha de escoger personas de las últimas extracciones del pueblo, que no eran de los hijos de Leví (I Reyes 12, 31). Ello se debe a haber seguido en la Ciudad Santa todos los miembros del sacerdocio por sus vínculos al Templo del Monte Moriah tras la crisis de 928 a.C. Sin embargo Jeroboam procura que en sus santuarios se celebren las mismas fiestas que en Jerusalén (I Reyes 12, 32 ? 33).

La confirmación arqueológica y la búsqueda de una nueva capital del Reino de Israel.

En 1968 A. Biran empieza la excavación del Templo de Dan en Tell Dan. Se trata de un santuario al aire libre que lo inicia Jeroboam aunque lo concluye su sucesor Ajab (871 ? 851 a.C.). Este último lo amplía y enriquece con una escalinata monumental. Según G. Cornfeld la parte eregida por Jeroboam tiene una superficie de 27 por 61 pies. El resto pertenece a Ajab incluida la cerámica descubierta hasta hoy que se fecha en el siglo IX a.C.

El templo al aire libre de Tell Dan supone un intento más de conceder una estructura estatal al naciente Reino de Israel que lo diferencie de Judá. Se une a la búsqueda de una nueva capital que Jeroboam sitúa primero en Siquén y luego en

Penuel. Una configuración definitiva del Reino sólo acaece con Omri (882 ? 871 a.C .). Este pretende ser para Israel una mezcla de David y Salomón. En primer lugar emplaza la capital en Samaria que es una ciudad de nueva creación y no sujeta a las cuestiones tribales. En segundo término edifica un nuevo Templo en el Monte Garizim rival del de Jerusalén. Así como el nacimiento de Samaria en 880 a.C. acarrea la degradación a ciudades provincianas de las viejas capitales de Siquén, Penuel y Tirsá, los templos de Jeroboam I siguen en funcionamiento (y andando el tiempo Ajab, sucesor de Omri, levanta otros nuevos) pero siempre subordinados al Santuario central del Monte Garizim.

La evolución de los Reinos de Israel y Judá

Mientras tanto en el Reino de Judá se abre paso la idea de que el Sacrificio de Isaac acaece en el Monte Moriah. Esto se hace ante la idea de las tribus del Norte de que ese hecho había ocurrido en el Monte Garizim. El Segundo Libro de las Crónicas es el primero que localiza el Sacrificio de Isaac en el Monte Moriah (2 Cron. 3,1). De aquí pasa a autores posteriores como Flavio Josefo y San Jerónimo.

Tanto Israel como Judá tienen una población escasa. Muy interesantes son las diferencias económicas entre ambos Reinos motivadas por sus diferencias geográficas. Desde el punto de vista ganadero ambos Reinos son parejos. Poseen una rica cabaña ovina y caprina. En recursos agrícolas el Reino de Israel es más rico. A la tríada mediterránea de trigo, vid y olivo añade gran variedad de frutas en Galilea y el Valle de Sharón. El Reino de Judá es más pobre. Se limita a la antedicha tríada mediterránea e higueras.

Esas diferencias geográficas hacen que el Reino de Israel tienda al latifundio. Los reyes de Israel crean latifundios para pagar los servicios de su aristocracia guerrera y funcionarial. La geografía de Judá no permite el latifundio. Ello hace al Reino de Judá más compacto socialmente. Asimismo las sequías frecuentes en el Mediterráneo hacen más daño en Israel que en Judá.

El fin de los Reinos de Israel y Judá.

El rey asirio Sargón II (722 ? 705 a.C.) destruye el Reino de Israel, traslada sus habitantes a Asiria y constituye tres provincias asirias en aquel

territorio. Estos judíos instalados en Asiria pasan a depender de los medos tras la destrucción del Imperio Asirio de 614 a 609 a.C. a manos de los caldeos de Nabopolasar (625 ? 605 a.C.) y los medos de Ciaxares (653 ? 585 a.C.). Los descendientes de los judíos del Reino de Israel se integran en el Imperio Aqueménida una vez conquistada Media por Ciro II (559 - 529 a.C.) en 546 a.C. Para sustituir a los deportados instala colonos asirios en el territorio del antiguo Reino de Israel. Éstos acaban convirtiéndose al judaísmo tras el fin del Imperio Asirio en 609 a.C. Tal vez su conversión se halla recogida por el Libro de Jonás que se escribe en las postrimerías del siglo VII aunque cite un profeta real que había vivido en el VIII y defiende la compasión de Dios por todas las criaturas (no sólo hacia los judíos). Los samaritanos aceptan la vieja idea de sus predecesores judíos del Reino de Israel de considerar el centro del judaísmo el Monte Garizim y no el Templo de Jerusalén.

El emperador neobabilonio Nabuk-Udurri-Ussur II (604 ? 562 a.C.), el Nabucodonosor de la Biblia, destruye en 586 el Reino de Judá, arrasa el Templo de Jerusalén y ordena la ubicación de casi todos sus moradores en algunas ciudades próximas a Babilonia: Tell-Habib, Tell-Melah, Tell-Tarsha, Kerub, Adán, Immer y Casfiah. Deja en el extinto Reino de Judá muy pocos habitantes en torno a Jerusalén quienes se mezclan con los samaritanos.

El judaismo en el Imperio Persa de los Aqueménidas.

Ambos grupos de judíos pasan a depender de Ciro II el Grande: los provenientes de Israel con la conquista de Media y los procedentes de Judá con la toma de Babilonia en 539 a.C. En 538 a.C. Ciro II otorga a los hebreos el permiso de volver a Jerusalén donde constituirían la Quinta Satrapía al lado de fenicios y samaritanos o extenderse por todo el Imperio Aqueménida. De ello se tienen pruebas en la Biblia con el Libro de Tobías. Asimismo han aparecido gentes de etnia judaica en Cachemira , que es el confín oriental del Imperio Persa de los Aqueménidas, fruto de esa autorización de Ciro. Ésta es la segunda migración judía.

Ciro II el Grande autoriza a los judíos a reconstruir el Templo de Jerusalén y les otorga autonomía religiosa y administrativa bajo el Sumo Sacerdote pero

siempre dentro de su Imperio. La tradición judía posterior conoce la época que se extiende entre la destrucción del Primer Templo y el permiso de Ciro para volver a Jerusalén por el Exilio de Babilonia o la Cautividad de Babilonia.

Los judíos que vuelven a Jerusalén expulsan a los samaritanos de la Ciudad Santa. Durante el Exilio de Babilonia los judíos conocen el zoroastrismo y asimilan tres ideas de Zarathustra. La primera es la del demonio Asmodeo que aparece en la Biblia como trasunto del demonio prezarathustriano del furor (Aesma daeva). La segunda es la noción del Juicio Final con el que ha de concluir la Historia. Hasta entonces los judíos sólo admiten que las almas de los muertos vagaban por como sombras por el Sheol (espacio bastante inhóspito muy parecido al Hades de los poemas homéricos).

La tercera es el dualismo bien versus mal que influye en algunas tendencias judías postexílicas. Un caso es el de los sectarios de Qumrán quienes se reputan a sí mismo hijos de la luz en pugna con los hijos de las tinieblas (sus enemigos en Roma y Jerusalén) según el encabezamiento de uno de los más conocidos Rollos del Mar Muerto. Estos tres elementos pasan al cristianismo aunque la exacerbación del último sólo acaezca en algunos movimientos heréticos (vg. los bogomilos y cátaros de la Edad Media). A través de los judíos la idea del Juicio Final pasa al Islam donde puede hallarse un paralelo muy curioso entre las funciones que el Ultimo Día habrán de ejercer Zarathustra y Mahoma. Finalmente Mircea Eliade defiende que el marxismo es la última religión universal pues el establecimiento definitivo de la sociedad socialista, tras el paso por la dictadura del proletariado, representaría un eco del triunfo de Cristo sobre el Anticristo al término de la Historia.

Durante la Cautividad de Babilonia se crean las sinagogas por la destrucción del Templo de Jerusalén. El papel fundamental de las sinagogas es convocar a los judíos para rezar y comentar la Torah o Ley de Moisés expuesta en el Pentateuco (no en vano la palabra sinagoga deriva del término griego synagogé que significa convocatoria). En las sinagogas los encargados de hacer los comentarios a la Ley de Moisés son los rabbís (vocablo que puede traducirse por maestros o doctores de la Ley). Muchos rabbís son itinerantes y con el tiempo Jesús será tomado

por uno de ellos. La sinagoga representa el paso más elevado de la enseñanza de la Torah cuyos escalones anteriores son la familia y la escuela. Sin embargo la sinagoga no es un Templo pues en ella no puede existir el sacrificio que supone la clave de las actividades del Templo de modo que en las sinagogas están prohibidas las vestiduras sacerdotales.

En general los rabbís son laicos que estudian la Torah y se especializan en asuntos religiosos. Representan a las masas guiadas por intelectuales que surgen de los estratos medios y los ambientes artesanales de Palestina. En cambio los sacerdotes son los únicos que pueden ofrecer sacrificios y sus miembros forman la estirpe de los hijos de Aarón. Los sacerdotes no pueden ser removidos de ese clan al que tampoco puede accederse desde fuera.

El Sanedrín.

Ciro II permite volver a los judíos a Jerusalén con autonomía religiosa y administrativa pero siempre en el seno del Imperio Persa de los Aqueménidas. Para esos menesteres los hebreos crean el Sanedrín. El Sanedrín tiene 70 miembros además del Sumo Sacerdote que lo preside. Alejandro Magno, los Ptolomeos (quienes dominan Palestina hasta la batalla de Panias en 200 a.C.) y los Seleúcidas entre la susodicha batalla de Patmias y el comienzo en 169 a.C. de la persecución de Antioco IV Epífanes (175 ? 164 a.C.) respetan la existencia del Sanedrín pues se contentan con que los hebreos paguen sus tributos y reconozcan sus respectivas soberanías en Palestina.

Hasta el reinado de Alejandra (76 ? 67 a.C.) el Sanedrín se halla copado por la aristocracia sacerdotal y laica de Jerusalén de simpatías saduceas. Alejandra abre el Sanedrín a los rabbíes fariseos. Herodes el Grande (37 ? 4 a.C.) no extingue el Sanedrín pero domina a sus miembros por medio del terror. A partir del año 6 de la Era Cristiana, con la implantación del sistema provincial romano, son funciones del Sanedrín legislar en materias que conciernan a la religión judía, la regulación de la enseñanza y los asuntos administrativos e intervenir como Tribunal Supremo en los problemas que aludan a hebreos con exclusividad. El Sanedrín puede imponer pero no ejecutar la sentencia de muerte: para ello necesita

del refrendo de los procuradores romanos en virtud del ius gladii o potestas gladii como se observa de manera muy clara en el proceso de Jesús.

Judaísmo posexílico

Los acontecimientos políticos.

El deceso del Gran Macedonio hace que su Imperio se reparta entre sus generales. Palestina pasa primero a los Ptolomeos de Egipto pero en los albores del siglo III a.C. los Seleúcidas la ocupan en el contexto de las Guerras Sirias. No existen problemas entre los judíos y sus dominadores (primero egipcios y luego sirios) hasta que un rey seleúcida de nombre Antíoco IV Epífanes (175 ? 164 a.C.) lanza una persecución contra los judíos en el primer año de su reinado.

Antíoco IV Epífanes pretende obligar a todos sus súbditos a reconocer la idiosincrasia divina de su persona. El seleúcida se presenta como el representante supremo de la cultura griega. Sin embargo Antíoco IV Epífanes, en su tentativa autodivinizadora, intenta beneficiarse también de las tendencias teocráticas a favor de la sacralización de los monarcas que gozan de enorme predicamento en el Próximo Oriente desde Sargón de Akkad (2334 ? 2279 a.C.).

Esta política de Antíoco no puede ser asimilada por los judíos quienes basan su existencia en el monoteísmo con arreglo a la alianza entre Dios e Israel, llamada pacto deutoronómico por contenerse en los versículos 1 y 2 del capítulo 6 del Deuteronomio, cuyo texto es: Escucha, Israel, soy el Señor tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto. No tendrás otro dios más que a Mí. La persecución de Antíoco IV Epífanes origina la rebeldía de los judíos acaudillados por el sacerdote Matatías y sus dos hijos Judas y Simón.

La espiral movimiento subversivo ? medidas represoras es muy dura. Lo demuestra el calificativo de Macabeos (Martilleadores) que llevan los vástagos de Matatías. Antíoco IV Epífanes clausura el Templo de Jerusalén por algo más de seis años. Los autores judíos posteriores conocen a esta época por la abominación de la desolación pues en su transcurso no se pueden realizar el sacrificio perpetuo que es el oficial de Israel. Éste consta de las ofrendas matutina y vespertina de un cordero sin mancha (holocausto del pueblo) y de 1,1 litro de flor de harina mezclada y no amasada con 45 centílitros de aceite puro.

Los Macabeos logran establecer una dinastía en Jerusalén (designada hasmonea por ser Hasmoneo el antropónimo del padre de Matatías) cuyos titulares son al tiempo reyes y sumos sacerdotes. Asimismo consiguen de los Seleúcidas la reapertura del Templo, una amplia autonomía (no la independencia) y el respeto a sus creencias. No son capaces empero frenar la aculturación helenística. Los romanos conquistan la zona en 63 a.C. Mantienen al rey hasmoneo Hircano II (63 ? 40 a.C.) aunque cercenando en la práctica sus funciones políticas. Antígono (40 ? 37 a.C.), el último miembro de la dinastía hasmonea, intenta recuperar las antiguas prerrogativas de sus antecesores con el auxilio de los partos arsácidas (la potencia rival de Roma en la zona que sucede en Persia a los Aqueménidas). La derrota de éstos últimos a manos de Roma en 38 a.C. ocasiona un año después la ejecución de Antígono, el término de la dinastía hasmonea y el nombramiento de Herodes el Grande (37 ? 4 a.C.) por los romanos como titular del reino vasallo de Palestina aunque desposeyéndole del sumo sacerdocio.

Herodes el Grande reparte sus dominios entre sus hijos a quienes Roma permite ser etnarcas pero no reyes vasallos. A Filipo (4 a.C. ? 33/34 d.C.) le corresponden las provincias de Batanea, Traconítide, Auranítide, Gaulanítide, Panias e Iturea. Filipo es hombre pacífico. Herodes Antipas ( 4 a.C. ? 39 d.C.) hereda las regiones de Galilea y Perea. Judea, Samaria e Idumea pasan a Arquelao (4 a.C. ? 6 d.C.). Las brutalidades de éste último hacen que una delegación de las aristocracias judías y samaritana vayan a Roma para protestar contra sus excesos. Los cargos son tan graves que Augusto sustituye a Arquelao por un gobernador romano con residencia habitual en Cesarea la Marítima. Augusto no acaba con la autonomía religiosa de los judíos centrada dentro de Jerusalén en el Sumo Sacerdote y el Sanedrín o consejo de las comunidades sacerdotales a cuyos miembros los Evangelios denominan príncipes de los sacerdotes, escribas y ancianos del pueblo. Pero el Sumo Sacerdote y el Sanedrín no tienen el derecho de vida y muerte ni siquiera sobre los judíos sujetos a su autoridad religiosa.

Rasgos de la religión judía.

Dentro del judaísmo existen cinco características muy propias: el monoteísmo, la presencia del rito iniciático de la circuncisión (práctica especialmente

repulsiva para griegos y romanos), algunas prescripciones relativas a la preparación y condimento de comidas con arreglo a la diferencia entre animales puros e impuros, el deber de peregrinar al Templo de Jerusalén y la expectativa del Mesías (entendido por muchos hebreos como un monarca terreno que impondría la supremacía de Israel sobre todos los pueblos y la igualdad social de los judíos entre sí). Por el contrario el veto a comer cerdo no resulta extraño en la Antigüedad. Herodoto de Halicarnaso señala que los egipcios nunca lo comen y Flavio Josefo indica lo mismo de sirios y fenicios.

El núcleo de la religión hebrea es el Templo de Jerusalén. El rey David (1010 ? 972 a.C.) emprendió la construcción del Primer Santuario que fue consagrado por su hijo y heredero Salomón (972 ? 931 a.C.) El emperador neobabilonio Nabuk-Udurri-Ussur II (604 ? 562 a.C.), conocido en la Biblia por Nabucodonosor, lo destruye en 587 a.C. Ciro II el Grande de Persia (558 ? 530 a.C.) permite la reconstrucción del Templo tras su conquista de Babilonia en 539 a.C. El Santuario de Jerusalén constituye el foco de la religión judía. Allí se celebran el sacrificio perpetuo y los sacrificios individuales. Nuclea al sacerdocio y a sus ayudantes (levitas). Emil Schürer ha calculado en 1092 el número de los primeros y 284 el de los segundos que viven en Jerusalén a mediados del siglo V a.C. No obstante esa cifra debe multiplicarse al menos por cinco si se cuentan los colegas que residen en las localidades de Judea próximas a la Ciudad Santa.

En estos momentos los hebreos no se oponen al proselitismo religioso entre los no judíos (a quienes llaman gentiles). Incluso crean la categoría de los metuentes o temerosos de Dios. Éstos son gentiles que reconocen a Yahwé por Dios Único y viven con arreglo a la Torah (Ley de Moisés) aunque no se someten a las observancias (nombre bajo el que se engloban la circuncisión, la necesidad de peregrinar al Templo de Jerusalén y las costumbres alimenticias).

Un nuevo elemento son las fiestas. El calendario judío contempla las siguientes (todas ellas móviles al fijarse con arreglo al calendario lunar): Pascua para conmemorar la salida de Egipto; Pentecostés (cincuenta días de Pascua) con objeto de hacer memoria de la entrega por Dios de la Torah a Moisés; Tabernáculos en la que los hebreos vivían en tiendas de campaña por recuerdo de sus andanzas por

el Sinaí tras el éxodo de Egipto; Dedicación con objeto de celebrar la apertura del Templo de Jerusalén por Salomón; Expiación por los pecados del pueblo llamada en hebreo Yom Kippur; de las Luces (Hanukah) donde se festeja la reapertura del Templo de los Macabeos una vez concluida la abominación de la desolación; y Purim o carnaval judío con el propósito de celebrar que el emperador persa Jerjes (llamado Asuero en la Biblia) no provocase el genocidio del pueblo judío a ruegos de su esposa hebrea Ester. En cuanto a esta figura se cree que Ester es una concubina judía de Jerjes. No obstante´no se tiene noticia de que Jerjes pretendiera perseguir a los judíos máxime cuando eran con los griegos los principales mercenarios del ejército aqueménida.

Muy interesante es la Fiesta del Yom Kippur. Constituye un momento excepcional al ser la única ocasión en que el Sumo Sacerdote penetra en el Santo de los Santos del Templo de Jerusalén y pronuncia en voz alta el teónimo Yahwé en la plegaria que reza solicitando el olvido divino de los pecados cometidos por el pueblo. El Nombre de Dios no se podía pronunciar aunque sí escribir de suerte que el lector israelita al encontrarlo escrito lo sustituye en la pronunciación por una serie de circunloquios entre los que el más normal es Adonai (Mi Señor).

Asimismo se registra una fuerte expansión de los judíos fuera de Palestina. Se inicia con su instalación en 330 a.C. en la recién fundada Alejandría. Allí nace una importantísima comunidad hebrea que perdura hasta su expulsión por San Cirilo en la primera mitad del siglo V d.C. . Ese movimiento supone la tercera gran oleada migratoria y se extiende por el Mediterráneo entero. A los hebreos que viven fuera de Palestina se les llama los judíos de la Diáspora. Como les es muy difícil peregrinar al Templo de Jerusalén desarrollan enormemente las sinagogas. La más famosa es la sinagoga principal de Alejandría que dura hasta su arrasamiento por los romanos en 117 d.C. tras el fracaso de una sublevación de los hebreos alejandrinos. Dicha sinagoga se halla en el Barrio del Diapleuston. Finalmente los hebreos de la Diáspora aportan las ideas de la eterna felicidad de las almas buenas tras la muerte y del castigo no menos eterno de los réprobos que toman del orfismo-pitagorismo.

Las actividades económicas de los hebreos de la Diáspora han levantado una seria polémica historiográfica. Algunos autores de fines del siglo XIX y la primera mitad del XX, influidos por prejuicios antisemitas, sostuvieron la dedicación de aquellos judíos a la usura y las actividades bancarias (vg. Herzfeld). No es cierto. Herzfeld y sus seguidores retrasan a la Antigüedad los menesteres de muchos judíos medievales obligados a ello por el veto de los reyes cristianos a su tenencia de tierras. Pero la ley del péndulo se cumple una vez más. Algunos historiadores israelíes han postulado la extrema pobreza de sus antepasados de la Diáspora. Tampoco es verdad. Los judíos se consagran a trabajos artesanales típicos de los estratos medios de la sociedad. Dentro de la historiografía israelí ha habido exageraciones por el otro lado. Así Leon recalca la pobreza de los judíos de Ostia, tan extrema en su parecer que ni siquiera les permitió erigir una sinagoga. Sin embargo las excavaciones arqueológicos han sacado a la luz la sinagoga ostiense.

Las haireseis judías

Dentro de la evolución del judaísmo que se inicia en 323 a.C. con la muerte de Alejandro Magno tienen interés la génesis de las haireseis. Se trata de simples opciones así llamadas por Flavio Josefo. Este autor emplea la palabra griega hairesis que luego da luger al nacimiento de nuestro término herejía. Pero Flavio Josefo usa el susodicho vocablo helénico en su sentido de inclinación o preferencia. Consisten en tendencias judías dentro de las cuales no se engloba la totalidad del pueblo de Israel. Existen cuatro haireseis fundamentales: saduceos, fariseos, esenios y zelotas.

Los saduceos:

Constituyen la hairesis judía más próxima a la aristocracia sacerdotal que dirige el Templo de Jerusalén. Es la más conservadora pues intenta mantener la integridad del patrimonio religioso. Incluso defienden la conveniencia de todo dominio extranjero de Palestina siempre que respete la religión judía pues así los hebreos se olvidan de las contingencias políticas y se centran en la salvaguardia de su patrimonio espiritual. Por su conservadurismo religioso los saduceos

llegan a negar la doctrina de la resurrección de los cuerpos el día del Juicio Final.

Los fariseos:

Constituyen la hairesis opuesta a los saduceos. Se consideran herederos de los Macabeos. Muestran hostilidad a cualquier poder foráneo que señoree Palestina. Si los saduceos se vinculan a la aristocracia sacerdotal de Jerusalén, los fariseos aparecen unidos a los ambientes artesanales y a las sinagogas aunque unos y otros tienen representantes en el Sanedrín. Los fariseos hacen hincapié en el cumplimiento exacto de la Torah y las observancias. Por último sus lazos con las sinagogas explican la importancia de los rabbíes (maestros de la Ley) fariseos quienes acostumbran usar parábolas a fin de esclarecer sus predicaciones. Entre sus doctores de la Ley destacan Hillel y Shammai.

Los esenios:

Los esenios suponen una reacción contra la apropiación del Sumo Sacerdocio por Jonatán Macabeo (161 ? 143/142 a.C.). Hasta esa fecha el cargo de Sumo Sacerdote siempre había recaído en un miembro del clan de Sadoq. Jonatán Macabeo se proclama etnarca de los judíos y Sumo Sacerdote ante el asesinato del Sumo Sacerdote Onías III en 174 a.C. y la prevaricación de su indigno hermano Jesús. Éste último ejerce el Sacerdocio Supremo entre 174 y 171. Jesús es tan simpatizante de la cultura griega y su representante Antíoco IV Epífanes que cambia su nombre por Jasón y envía una contribución a los sacrificios que se hacen en Tiro con motivo de los juegos cuatrienales en honor al dios de la ciudad Melkart.

Los esenios no admiten que el Sumo Sacerdocio recaiga en los Macabeos por no pertenecer al clan de Sadoq pese a los pecados y traiciones de Jesús/Jasón. Consideran pervertido al Sumo Sacerdocio hasmoneo. Aprovechan el fin de la amenaza de la Siria Seleúcida que consigue Juan Hircano I (135/134 a.C. ? 104 a.C.) para fortalecerse. No discuten los títulos de los hasmoneos a regir Israel desde el punto de vista secular. En cambio sí niegan la legitimidad de su Sumo Sacerdocio que a su parecer debe restituirse al clan de Sadoq.

En Jerusalén la rebelión estalla en 103 a.C. cuando sube al trono Alejandro Janeo. En este sentido resulta muy sintomático que el motín surja en el momento en que Alejandro Janeo se apresta a cumplir sus funciones sacerdotales durante la

Fiesta de los Tabernáculos de 103 a.C. La represión es tremenda. Alejandro Janeo crucifica a más de 800 personas en Jerusalén (entre ellos el jefe de los rebeldes de nombre Judas). Los supervivientes (en número de 8.000) se retiran a Damasco, a Egipto donde reciben el nombre griego de terapeutas y se extienden por todo el País del Nilo bien que sus mayores concentraciones se hallan en Alejandría y en las riberas del cercano Lago Mareótico y a Qumrán en las orillas del Mar Muerto. Es probable que en Qumrán y el Lago Mareótico vivesen esenios con un mayor grado de compromiso. Los esenios no rechazan el Templo. Envían sus ofrendas a Jerusalén desde Damasco y sus establecimientos en Palestina y Egipto presididos por las comunidades de Qumrán y el Lago Mareótico. Pero no admiten el culto sacrificial ni el calendario por derivar de un Sumo Sacerdote ilegítimo como es el monarca hasmoneo . Así siguen un calendario solar mientras que el del Templo es lunar.

El nombramiento de Herodes el Grande satisface a los esenios por disociar las funciones de rey y Sumo Sacerdote pues Herodes no puede ejercer las segundas a causa de no pertenecer a linaje sacerdotal alguno y por ser un idumeo y por tanto medio judío. Los idumeos habían sido conquistados por Juan Hircano I (135/134 ? 104 a.C.) aprovechando la debilidad de la Siria Seleúcida. Herodes permite a los esenios que lo deseen volver a las ciudades de Judea donde viven en casas propias haciendo vida en común. Sin embargo muchos prefieren quedarse en Qumrán hasta la destrucción de este lugar por un terremoto en 31 a.C.

La tolerancia de Herodes por los esenios explica el hallazgo de un calendario esenio en el palacio-fortaleza herodiano de Masada. Se ha pensado si supondría un paso de los esenios al zelotismo dado que los zelotas ocupan Masada en 66 d.C. durante la Primera Guerra Judaica una vez expulsos los soldados romanos establecidos allí desde la muerte de Herodes en 4 a.C. No lo creo. Más bien lo considero un documento llevado allí por Herodes el Grande para conocer las peculiaridades de los esenios. Éstos no consideran legítimo el matrimonio pero prefieren la castidad. De aquí el descenso de su número a lo largo del siglo I a.C. Se cree que el número total de esenios no supera en Palestina los 4.000 al tiempo del cambio de Era.

La situación cambia con la muerte de Herodes el Grande. Los esenios no se fían de su sucesor Arquelao y en 4 a.C. reocupan Qumrán. La deposición de Arquelao por los romanos en 6 d.C. hace que los gobernadores romanos nombren nuevos Sumos Sacerdotes. Ello explica que los esenios muestren tanta enemiga a los romanos como a los sacerdotes que ofrecen en Jerusalén un sacrificio impuro. .

En 1947 un pastor beduino encuentra casualmente el emplazamiento de Qumrán. Descubre unos escritos que reciben el nombre de Rollos del Mar Muerto y se guardan en el Santuario del Libro en Jerusalén. La literatura qumránica abarca los siguientes escritos: Himnos de Acción de Gracias, Regla de la Comunidad, Regla de la Congregación, Documento de Damasco, Combate de los hijos de la luz contra los hijos de las tinieblas, Comentario de Habacuc y Fragmento Mesiánico de la Cueva 4.

La arqueología ha demostrado la ocupación de Qumrán a fines del siglo II a.C. Los Rollos del Mar Muerto se escriben a lo largo del siglo I a.C. Allí aparece un personaje llamado el Maestro de Justicia a quien puede identificarse con Judas el fundador del esenismo. Las comunidades esenias son igualitarias y presentan una especialización del trabajo entre sus miembros. La más conocida es la de Qumrán gracias a los Rollos del Mar Muerto. Se accede tras un período de prueba y un rito de iniciación basado en el agua. Sus integrantes tienen todos los bienes en común, comen en la misma mesa y son presididos por un consejo de doce laicos y tres sacerdotes. Los primeros representan a las doce tribus de Israel. Por su parte los segundos simbolizan las tres familias sacerdotales de Gersón, Quehat y Merarí.

Los zelotas:

Flavio Josefo atribuye su creación a Judas el Galileo. Éste ocasiona una seria sublevación en Galilea que es sofocada en 6 d.C. por el general romano Varo en los aledaños de Nazaret. Se ha ligado la génesis a los zelotas con los esenios. Así los primeros ofrecerían una resistencia activa a Roma y los segundos otra pasiva. No parece tal. Pienso que los zelotas son fariseos extremos. El grueso del fariseísmo muestra un enorme odio a Roma pero consciente de la inferioridad

judía frente a Roma esperan el momento oportuno para levantarse que ve muy lejano en el futuro. En cambio los zelotas efectúan continuos actos de terrorismo contra los romanos y los judíos colaboracionistas pese a la derrota de Judas el Galileo a manos de Varo. No puede interpretarse el nacimiento de los zelotas como una excrecencia particularmente violenta de los esenios y sí a manera de un epifenómeno radical del fariseismo porque los zelotas admiten la validez del Templo de Jerusalén y de los habituales sacerdocio y calendario hebreos.

La Primera Guerra Judaica (66 ? 74 d.C.)

Los judíos pueden soportar de mejor o peor grado cualquier dominio foráneo sobre Palestina siempre que la potencia ocupante no atacara directamente los fundamentos de sus creencias como la Torah o el Templo de Jerusalén. Dentro de este contexto se entiende que las legiones romanas taparan en Palestina sus estandartes para no hacer visibles los emblemas y provocar la cólera de los hebreos quienes lo considerarían un atentado contra el segundo mandamiento del Decálogo mosaico que dice No te haras esculturas ni imagen alguna de lo que hay en lo alto de los cielos, ni de lo que hay abajo sobre la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrarás ante ellas, y no las servirás, porque Yo soy Yahwé, tu Dios, un Dios celoso, que castiga en los hijos las iniquidades de los padres hasta la tercera y cuarta generación de los que me odian, y hago misericordia hasta mil generaciones de los que me aman y guardan mis mandamientos (Libro del Éxodo, capítulo 20, versículos 4 ? 6).

La guerra estalla en 66 d.C. Nace de una sublevación de los judíos ante el robo de 17 talentos del Tesoro del Templo. El conflicto es durísimo por el valor de los hebreos tan reconocido en la Antigüedad. Los hitos de esa contienda son la destrucción del Templo en 70 d.C. y los arrasamientos de Qumrán y Masada en 74 con los que finaliza la guerra. Los zelotas dirigidos por Juan de Giscala se apoderan del gobierno de Jerusalén en 67 d.C. Constituyen una feroz dictadura que elimina a la aristocracia saducea bajo el pretexto de tibieza en la hostilidad a Roma. Incluso ajustician a los Sumos Sacerdotes del año 62 Anás II (el hijo del personaje homónimo suegro de Caifás) y del 64 Jesús hijo de Gamaliel. Los zelotas

eligen un nuevo Sumo Sacerdote por sorteo. Su nombre varía según las fuentes. En unas figura como Fanías mientras que otros autores le llaman Fani, Fanaso o Pinjás. Este personaje no tiene experiencia alguna en el ejercicio sacerdotal pero es un hombre del pueblo. Es la primera vez que el Sumo Sacerdocio deja de encontrarse unido a la aristocracia saducea. Los zelotas dirigen su odio principalmente contra los saduceos.

El asedio de Jerusalén por los romanos dura de abril a septiembre del año 70. Los romanos arrasan Jerusalén por completo. De aquella destrucción sólo se salvan las tres grandes torres situadas al norte del Palacio de Herodes de nombres Hípico, Fasael y Mariamme aparte de la pared occidental del Templo. Más duro resulta para los judíos el robo por los soldados de Roma de sus objetos más sagrados. Vespasiano lleva a la Urbe la Mesa de los Panes de la Proposición, los Vasos y el Candelabro de los Siete Brazos. Los deposita en el Templo de la Diosa de la Paz donde perecen en un incendio imperando Cómodo (180 ? 192). En cambio guarda en su Palacio un rollo de la Torah y las cortina purpúrea que separaban en el Templo el Santo de los Santos del Santo.

El visigodo Alarico se apodera de estos objetos durante el Saqueo de Roma de 410 d.C. Los visigodos los depositan primero en Carcasona y luego en Toledo. Desaparecen cuando la invasión árabe de la Península Ibérica en 711. Por eso tal vez sea cierta la leyenda de que esos objetos se ocultan en el Monte del Zulema en las cercanías de Alcalá de Henares.

A consecuencia de su derrota en la Primera Guerra Judaica Roma obliga a los hebreos a abonar la tasa del didracma con destino al Templo de Júpiter Capitolino en la Ciudad Eterna. Antes del 70 esa capitación se dedicaba al Templo de Jerusalén. Era anual. Había de pagarla todo judío mayor de veinte años ya fuese rico o pobre ya viviera en Palestina o en la Diáspora. Se efectuaba en el mes de Adar del calendario judaico (febrero-marzo del nuestro). Las comunidades la recolectaban y luego la transferían a Jerusalén. El desvío de ese tasa al Templo de Júpiter Capitolino es un insulto para los hebreos que se repite todos los años. Los rabbíes fariseos intentan endulzar ese mal trago exonerando a los judíos del deber de tributar al Templo de Jerusalén dado que éste había dejado de existir.

Pero los romanos no prohíben a los judíos volver a Jerusalén. La reconstrucción de la ciudad es mínima. Se limitan a edificarse viviendas muy humildes. Los romanos aprovechan las tres torres supervivientos del Palacio de Herodes para erigir un campamento donde se albergue toda la Legión X Fretensis. Instala a 800 veteranos de guerra en la localidad de Emaús.

La destrucción del Templo de Jerusalén en 70 d.C.supone el fin de la hairesis de los saduceos y del sacerdocio judío. Los arrasamientos de Qumrán y Masada (centro de resistencia de los zelotas) cuatro años más tarde acarrean los términos de las actividades de esenios en Palestina y zelotas.

Queda sólo la hairesis de los fariseos. Éstos cierran al judaísmo sobre sí mismo al acabar con todo género de proselitismo. Como núcleo de la religiosidad y por tanto del pueblo judío (al suprimirse el proselitismo) colocan el respeto a la Torah en vez de los ya inservibles vínculos con el desaparecido Templo. Los fariseos marcan la impronta religiosa del judaísmo posterior hasta el siglo XVII. En ese momento la exégesis bíblica de Baruch Espinosa impulsa el orto del judaísmo laico (configurador del actual Estado de Israel) por más que su desprecio de la Biblia judía le acarreara al filósofo la tremenda condena de la Sinagoga de Amsterdam excomulgamos, maldecimos y separamos a Baruch Espinosa, con el consentimiento de Dios bendito y con el de toda esta comunidad; delante de estos libros de la Ley, que contienen trescientos trece preceptos; la excomunión que Josué lanzó sobre Jericó, la maldición que Elías profirió contra los niños y todas las maldiciones escritas en el libro de la Ley; que sea maldito de día, y maldito de noche; maldito cuando se acueste y cuando se levante; maldito cuando salga y cuando entre; que Dios no lo perdone; que su cólera y su furor se inflamen contra este hombre y traigan sobre él todas las maldiciones escritas en el libro de la Ley; que Dios borre su nombre del cielo y lo separe de todas las tribus de Israel.

Tras la destrucción del Templo de Jerusalén en 70 d.C. el Sanedrín desaparece. Le reemplaza la Academia Rabínica de Yabné que también posee 71 miembros pero con funciones más restringidas. En el siglo II d.C. la Academia de Yabné se

traslada a diversas localidades de Galilea: Usa, Bet-Searim, Séforis y por último Tiberiades. En este último lugar desarrollan su labor exegética entre fines del siglo VII y comienzos del X las Familias Ben Aser y Ben Neftalí que recogen la herencia rabínico-talmúdica de la Biblia hebrea.

El Patriarca de los Judíos es el presidente de la Academia Rabínica de Tiberiades pues esta ciudad, ribereña del Mar de Galilea, se transforma en el auténtico centro del judaísmo en el siglo II d.C. El Patriarca de los Judíos actúa como un etnarca con poderes tan amplios que Orígenes los califica de cuasi-regios. Además recibe las aportaciones voluntarias de los judíos de la Diáspora que hasta el 70 d.C. se encaminaban al Templo de Jerusalén. Por último Roma permite al Patriarca de los Judíos ejercer justicia civil y tolera la criminal sobre los hebreos de siempre que sean judías todas las partes implicadas. No obstante, en caso de imponerse la pena capital por el Patriarca de los Judíos, esta sentencia habría de ser refrendada por el emperador.

La Segunda Guerra Judaica (132 ? 135) y sus consecuencias.

La Segunda Guerra Judaica estalla en 132 cuando los judíos se sublevan por la prohibición de circuncidarse que Adriano (117 ? 138) impone. La dirige un cierto Simón quien se proclama Mesías a juzgar por el título de Bar Kokba (Hijo de la Estrella) que figura en el Libro de los Números con una evidente resonancia mesiánica. Simón Bar-Kokba se apodera de la Ciudad Santa con arreglo a las monedas que acuña y tiene el propósito de reconstruir el Templo aunque los avatares de la contienda impiden el cumplimiento de ese objetivo.

Desde Jerusalén los rebeldes apoderan de toda Palestina y Roma ha de emplearse a fondo para dominar el movimiento rebelde. Adriano se ve obligado a encomendar el mando a uno de sus generales más capacitados, Julio Severo, a quien hace venir desde Britania. Por parte de Roma intervienen en la Segunda Guerra Judaica la flota estacionada en Siria (la llamada classis Syriaca), los restos de la Legión X Fretensis que había sido expulsada por Simón Bar-Kokba de Jerusalén y tres nuevas legiones: la III Gallica y la VI Ferrata acantonadas en Siria y la III Cyrenaica que se traslada de Egipto al teatro de operaciones. La guerra finaliza en 135 con la conquista romana de Jerusalén y la caída de Beter (último refugio de

Simón Bar-Kokba) en poder de las tropas de Adriano.

La Colonia Aelia Capitolina.

Sobre el territorio de Jerusalén Adriano ordena construir una nueva ciudad. La llama Colonia Aelia Capitolina. Es poblada por no judíos pues el emperador prohíbe la entrada a los hebreos. Pese a prohibir el ingreso de los judíos en Colonia Aelia Capitolina bajo pena capital Adriano no quiere construir edificio alguno en el solar del antiguo Templo. Se limita a colocar su estatua en la Explanada a la que luego se incorpora la de su sucesor Antonio Pío (138 ? 161) Éste último levanta la prohibición de la circuncisión. Esto no basta a los judíos quienes intentan rebelarse de nuevo. Su fracaso explica la colocación de la estatua de Antonio Pío junto a la de su predecesor en la Explanada del Templo . En cambio Adriano erige el Foro de la nueva ciudad con el Templo a la Triada Capitolina (Júpiter, Juno y Minerva). Además crea un Circo (copia más pequeña del de Roma) contiguo al ángulo sureste de la Explanada del Templo. Recibe el nombre de Dodécapylon al tener doce entradas.

Las monedas de Colonia Aelia Capitolina se extienden desde Adriano a Valeriano (253 ? 260). Demuestran que en la ciudad se practican los cultos de Júpiter, Baco, Serapis, Venus y los Dióscuros Cástor y Pólux. Colonia Aelia Capitolina se halla dividida en 12 distritos. Ulpiano afirma que se erige como una colonia romana aunque no pesa el ius Italicum. Para humillar a los judíos los romanos colocan la efigie de un cerdo en la puerta de la muralla que abre el camino a Belén. Finalmente para demostrar que la Colonia Aelia Capitolina nada tiene en común con la antigua Jerusalén Adriano ordena en 135 que se pasara un arado sobre la destruida ciudad. Esto tiene para los romanos un doble sentido. Por un lado es un signo de devastación (ya lo hicieron en Cartago en 146 a.C.). Por otro es la prueba de la fundación de una ciudad de nueva planta recordando el mítico trazado por Rómulo del Pomerium de Roma.

Los judíos de Alejandría.

La instalación de los judíos en Alejandría.

El afincamiento más antiguo de los hebreos en Alejandría se une a la fama de

su valor en la Antigüedad. Durante la Época Saita aparecen judíos en Egipto contratados como mercenarios por el faraón Psamético II (594 ? 588 a.C.). Los hebreos suponen la segunda fuente de soldados profesionales del Imperio Persa de los Aquémenidas para el ejército de tierra después de los griegos del mismo modo que los marineros de la escuadra irania son fenicios. No en vano judíos, fenicios y samaritanos forman la quinta satrapía del Imperio Persa Aqueménida.

Alejandro Magno funda la ciudad de Alejandría en el Delta del Nilo en el bienio 332/331 a.C. Las fuentes griegas llaman a Alejandría la ????? por antonomasia en el mismo sentido al que denominan a Atenas el ???? o al que se usa en latín a la hora de considerar a Roma la Urbs. Allí instala Alejandro mercenarios judíos.

Con esto existen dos grupos de hebreos en Egipto: los descendientes de los mercenarios de Psamético II quienes se habían extendido por todo el país aunque con fuertes concentraciones en la Isla Elefantina y Leontópolis y los que figuran entre los primeros pobladores de Alejandría. Con el tiempo los judíos alejandrinos llegan a formar por sí solos el cuarto de los cinco barrios en que se divide Alejandría. Según el mismo Flavio Josefo el barrio judío (cuarto de la ?????) se encuentra en el este de Alejandría, a orillas del Mediterráneo entre la Tumba de Cleopatra y el Heröon de Pompeyo

Rasgos sobresalientes de la cultura hebrea en Alejandría.

En el judaísmo alejandrino existen varios fenómenos interesantes: el auge de la institución sinagogal en Alejandría, la primera traducción de la Biblia hebrea al griego, la presencia esenia en Alejandría, el diálogo del judaísmo con la cultura clásica en la ????? y las relaciones de los hebreos de Alejandría con el poder imperial.

La Gran Sinagoga del Barrio del Diapleuston en Alejandría.

Varias sinagogas existen en Alejandría. La más importante es la Gran Sinagoga del Barrio del Diapleuston a la que se considera el edificio más rico del judaísmo después del Templo de Jerusalén. Tiene forma basilical. Filón de Alejandría la reputa la mayor y mejor de las sinagogas de la ????? Se erige en el reinado de Ptolomeo III Evergetes (247 ? 221 a.C.). El Talmud de Babilonia afirma de la

Gran Sinagoga del Diapleuston: Rabí Yehudá dijo El que no ha visto la doble columnata de Alejandría en Egipto, jamás ha visto la gloria de Israel. Decíase que fue como una gran basílica con una columnata dentro de la otra y que, a veces, daba cabida a seiscientas mil personas, el doble número de los que venían de Egipto. Había en ella 71 cátedras de oro, correspondientes a los 71 miembros del Gran Sanedrín, y ninguna de ellas pesaba menos de 21 talentos de oro.

Ciertamente es exagerada la cifra de un aforo para 600.000 personas. Pero es interesante la conciencia que los judíos de Alejandría poseen de que su Sinagoga del Diapleuston sólo cede en importancia al Templo de Jerusalén. Lo demuestra sus 71 asientos dorados. La presidencia se reserva al archisinagogo mientras que los ancianos ocupan los otros 70 en recuerdo al Sumo Sacerdote y al Sanedrín de Jerusalén. Los ancianos de las comunidades judías ejercen la máxima autoridad en los asuntos religiosos, administrativos, jurídicos y civiles que afecten sólo a los judíos. Pueden imponer la separación temporal o absoluta de la comunidad. Los archisinagogos se eligen normalmente entre los ancianos. El archisinagogo no es el jefe de la congregación sino el director de las reuniones en la sinagoga: designa a quien hubiese de leer la Escritura y la plegaria e invita a predicar a los distintos rabbíes. Vigila que nada impropio ocurra en las sinagogas y toma a su cargo el mantenimiento de sus edificios.

La primera traducción de la Biblia al griego.

Los judíos de Alejandría usan el griego para relacionarse con sus vecinos paganos. Relegan el hebreo a su comunidad. Al cabo de dos generaciones los judíos jóvenes de Alejandría empiezan a ver el hebreo a manera de una simple lengua litúrgica. En pleno siglo III a.C. el hebreo desempeña en la judería alejandrina el mismo papel que el latín para los católicos occidentales hasta la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II.

Ello obliga a verter la Biblia al griego. En el siglo III a.C. se traduce la Torah. Algo más tarde se hace lo mismo con los demás libros. A esta primera traducción se le llama la Versión de los LXX. Su nombre se debe a Filón y a la Carta del Pseudo-Aristeas. Ese autor pretende pasar por un alto dignatario heleno de

la corte de Ptolomeo II Filadelfo (283 ? 246 a.C.). No es verdad. Se trata de un judío que escribe hacia el año 100 a.C.

Ambos dicen que Ptolomeo II Filadelfo llama de Jerusalén a Alejandría a 72 peritos en la Escritura. Aquellos personajes llevan a cabo, en la isla de Pharos de forma simultánea y en 72 días, una traducción que coincide incluso en las palabras. Filón atribuye esa coincidencia a un milagro a la vez que el Pseudo-Aristeas opina que los 72 llegan a un acuerdo entre sí en los puntos en que discrepaban. Por tanto ese texto se considera normativo. Los judíos otorgan gran importancia a la Versión de los LXX. Filón señala la celebración todos los años de una fiesta y una romería en la isla de Pharos para recordar la traducción al griego de la Torah. Los judíos van por mar a la isla donde elevan preces, honran en sus propias palabras el lugar donde resplandeció por vez primera la luz de la traducción, dan gracias a Dios por sus beneficios cotidianos y clavan tiendas en la playa o se recuestan en la arena para celebrar un banquete con sus familiares y amigos.

Los esenios de Palestina y terapeutas de Egipto.

Los terapeutas forman la rama egipcia de los esenios. E. Schürer establece las semejanzas y diferencias entre los esenios corrientes de Palestina (no los más comprometidos de Qumrán) y los terapeutas de Egipto en base a las noticias que Filón de Alejandría proporciona de los segundos en su escrito Sobre la vida contemplativa . Entre las primeras figuran: el rechazo del comercio, sus reuniones en un centro comunitario para las comidas y el culto, celebrar el sábado, la exégesis alegórica de la Biblia, la tenencia de dos vestidos por cada miembro de la comunidad (uno para el verano y otro para el invierno), la devoción filial de los jóvenes a los ancianos, el uso de una vestidura blanca en los banquetes solemnes que estriban en pan y otro plato, recitar las plegarias matutinas mirando al sol naciente, poseer escritos sagrados distintos de la Escritura, la práctica del silencio, el reconocimiento de la legitimidad de la legítima defensa contra los ladrones, el don de profecía de algunos miembros y la obligación de comunicar las verdades que descubrían.

En cambio esenios y terapeutas se diferencian en algunas cosas: los esenios

se dedican a la vida activa mientras que los terapeutas son contemplativos; los terapeutas se abstienen de la ingesta de carne y vino en su fiesta principal y durante su vigilia; los esenios comen dos veces al día mientras que los terapeutas ayunan hasta la puesta del sol; entre los terapeutas viven vírgenes ancianas y esa presencia no se recoge en las noticias alusivas a los esenios; por último los terapeutas no practican la comunidad de bienes y Filón no menciona sus fuentes de subsistencia.

E. Schürer menciona paralelos y divergencias entre los terapeutas y los esenios más comprometidos de Qumrán. Ambos siguen las mismas formalidades litúrgicas, prohíben el uso de la mano izquierda, siguen el mismo calendario pentecostal y su fiesta más importante es la de las Semanas o Renovación de la Alianza. Las diferencias se reducen a que los esenios de Qumrán beben vino en las comidas e ingieren carne con arreglo a los depósitos de huesos de animales, al parecer enterrados ritualmente, que han aparecido entre las ruinas de Qumrán. Pese a esas pequeñas variables los terapeutas pueden definirse como miembros de una rama egipcia del movimiento esenio palestiniense.

La vida intelectual de los hebreos alejandrinos.

La importancia de la judería en la ????? motiva el nacimiento del antisemitismo en Egipto. Su primer representante es Manetón de Sabenitos, sacerdote de Heliópolis, quien escribe una historia antigua de Egipto en tiempos de Ptolomeo II Filadelfo (285 ? 246 a.C.). Allí considera que los hebreos entran en Egipto con los hiksos bien que ello no sea verdad.

El antisemitismo egipcio llega a su punto culminante con Appión. Para contrarrestarlo se desarrolla en Alejandría la obra de Filón (c.a. 20 a.C. ? c.a. 50 d.C.). Este personaje intenta demostrar en sus obras las excelencias de la historia y religión judía que nada ha de envidiar a la cultura clásica grecorromana. Así defiende que Moisés es un legislador de la misma categoría que Solón en Atenas o Licurgo en Esparta, la ausencia de ceremonias nefandas en el culto y que el ideal de virtud practicado por el Patriarca José es asumible por los estoicos. Gran interés tiene la identificación que Filón hace del Demiurgo platónico con la Sabiduría de Yahwé que aparece en el capítulo 8 del Libro de los Proverbios. El

platonismo medio defiende que existen un Dios Creador, la Naturaleza Creada y un Demiurgo (ser intermedio entre Dios y la Naturaleza a través del cual Dios crea la Naturaleza). Filón considera al Demiurgo el ser que en forma continua intercede ante Dios por toda la Creación.

Los problemas de los judíos alejandrinos con el Imperio Romano.

Las relaciones de los hebreos de Alejandría con los reyes lágidas de Egipto son cordiales. En ello juega la disputa sirio-egipcia por el control de Palestina desde la muerte de Alejandro Magno (323 a.C.) hasta la batalla de Panias (200 a.C.) . Ptolomeo VI Filometor (180 ? 145 a.C.) da cobijo en su reino al Sumo Sacerdote Onías IV depuesto en Jerusalén por el jefe de los judíos helenizados de nombre Alcimo. Ante la profanación del Templo de Jerusalén Onías IV construye otro nuevo en Leontópolis (Norte de Egipto). Los versos 600 a 610 del Tercer Oráculo Sibilino muestran las expectativas hebreas en el monarca egipcio Ptolomeo VIII Evergetes II (170 ? 116 a.C.) Con los primeros romanos no existe conflicto alguno. Julio César garantiza sus derechos a los judíos de Alejandría. Los problemas empiezan con Calígula (37 ? 41 d.C.) cuando obliga a los hebreos a tributarle culto. Ello supone el peor insulto a los hebreos pues el fundamento de sus creencias es el monoteísmo recogido en el inicio del Decálogo (Éxodo, 20, 2 ? 3) Yo soy Yahwé, tu Dios, que te ha sacado de la tierra de Egipto, de la casa de la servidumbre. No tendrás otro dios que a Mí. Calígula es muy apreciado en la ????? pues su boda con Druisila recuerda a los alejandrinos los enlaces de los reyes lágidas con sus hermanas y les endulza la pérdida de su naturaleza de capital helenística del reino de los Ptolomeos para transformarse en una ciudad sujeta a Roma. La temprana muerte de Calígula impide males mayores.

La Primera Guerra Judaica (68 ? 74 d.C.) sólo trae consecuencias para Alejandría en su principio y a su término. En 66 existe un motín en el cuarto barrio que es sofocado por el gobernador romano Alejandro Tiberio. Muchas bajas se producen entre los judíos sublevados y los romanos represores pero los hebreos de Alejandría no vuelven a inquietarse en el decurso de la contienda. En 74 los romanos clausuran el establecimiento de los terapeutas en el Lago Mareótico y el Templo de Onías IV en Leontópolis. Ambos sucesos no causan disturbios entre los hebreos

atemorizados por el arrasamiento del Templo de Jerusalén y la devastación de Palestina.

Más grave es la rebeldía de todos los judíos de Egipto en 115. Los supervivientes de la Primera Guerra Judaica ya habían muerto. Los hebreos se hallan muy resentidos ante el humillante e idolátrico desvío al Santuario de Júpiter Capitolino en Roma de la tasa anual de dos dracmas que todos pagaban al Templo de Jerusalén hasta su destrucción en 70 d.C. Igualmente Domiciano (81 ? 96) sanciona con penas severísimas las conversiones al judaísmo.

Este odio de los judíos estalla durante los últimos años de Trajano (98 ? 117). Los hebreos de Egipto, Cirene, Chipre y Mesopotamia se sublevan en 115 mientras el emperador se halla ocupado en una guerra contra los partos. La revuelta es tan dura que la represión romana es brutal. En Cirene los judíos asesinan a muchos de sus vecinos paganos y destruyen los santuarios de Apolo, Zeus, Démeter, Artemisa e Isis. En Chipre los insurrectos efectúan matanzas y se apoderan de Salamina (capital de la isla). Roma necesita el envío de dos legiones a Egipto para sofocarla. Marco Turbón y Lucio Quieto luchan con ferocidad contra los insurrectos de Cirene y Mesopotamia. En Chipre no se permite la entrada a judío alguno de modo que se condena a muerte a cualquier hebreo que llegara a sus costas aunque fuese por huir del mal tiempo.

Los romanos no alcanzan el triunfo hasta el primer año del reinado de Adriano (117 d.C.). En Alejandría se destruye la Gran Sinagoga del Diapleuston y el cuarto barrio queda muy afectado. Sin embargo no son tan graves los daños para la judería de la ?????. Pierden muchos efectivos y abandonan el cuarto barrio pero rehacen su vida más modestamente en un nuevo barrio de la ciudad que se conoce por las Kopriai adonde se habían empezado a extender ya en tiempos de Calígula desde su cuarto barrio primigenio. El término Kopriai se traduce como Estercoleros. Ello puede deberse a depositarse las basuras de la Alejandría primigenia aunque esta función ya no se realizaría en los dos primeros siglos de la Era Cristiana. Las Kopriai se sitúan junto a la Puerta de Canopo que lleva al Hipódromo y al Templo de Ceres y Proserpina en la Llanura de Eleusis.

Los mayores daños son culturales por la destrucción de la escuela rabínica anexa a la Gran Sinagoga del Diapleuston. Esto se ve en las nuevas traducciones

griegas que en el siglo II se hacen del Antiguo Testamento ante el uso cristiano de la Versión de los LXX y más concretamente entre 130 (traducción de Aquila) y 170 (versión de Símaco). Aquila el Prosélito es natural del Ponto. Símaco es un samaritano converso al judaísmo. No obstante Símaco acaba siendo ebionita. Los ebionitas son unos judíos que aceptan la mesianidad pero no la filiación divina de Jesús de Nazaret.

El obispo Cirilo y el fin de la judería alejandrina.

Los judíos son expulsados definitivamente de Alejandría por el obispo San Cirilo en 415 - 416. En la expulsión de los judíos alejandrinos cuentan varios factores El primero es el incremento de la hostilidad contra los hebreos que sucede en el sector oriental del Imperio Romano en los años medios de la segunda década del siglo V y que cristaliza a nivel popular y en las esferas estatales. A nivel popular Sócrates el Escolástico habla de motines antijudíos en Alejandría y en Antioquia de Siria y Calcis.

En las esferas estatales Pulqueria (hermana de Teodosio II) recibe el nombramiento de Augusta el 4 de julio de 414. Pulqueria muestra gran hostilidad a los hebreos. Tras la expulsión de los judíos de Alejandría por Cirilo el poder imperial, influido por Pulqueria, prohibe la construcción de nuevas sinagogas y despoja al Patriarca de los Judíos del título de inlustris (ilustre) y de la dignidad de Prefecto del Pretorio honorario que le habían sido concedidas por Teodosio I el Grande (379 ? 395).

El segundo motivo de la expulsión de los judíos de Alejandría por el obispo Cirilo radica en la declaración el 28 de febrero de 380 del cristianismo ortodoxo como religión oficial del Imperio por el Edicto de Tesalónica. El tercero estriba el poder del obispo de Alejandría que en esta época es el verdadero amo de la ????? en detrimento del poder imperial, lo que ya es advertido por el antedicho Sócrates el Escolástico.

La fuerza de los obispos de Alejandría se basa en su influjo sobre dos estamentos de la población egipcia. Uno de ellos son los monjes coptos del interior del país. Ellos descienden de los campesinos aborígenes sometidos a los latifundistas alejandrinos desde la fundación de la ????? con Alejandro Magno con excepción de algunos terratenientes de estirpe greco-alejandrina (vg. el monje luego

conocido por San Antonio Abad) o soldados licenciados que se instalan en el interior de Egipto (vg. San Pacomio). La división entre alejandrinos y aborígenes es tan profunda en el País del Nilo que hasta la Constitución Antoniana de 212 d.C. un oriundo de Egipto no podía obtener la ciudadanía romana sin pasar antes por la alejandrina. Con el tiempo bastantes de esos agricultores abrazan el cristianismo y constituyen el monacato egipcio. Miran con una triple antipatía a los alejandrinos de etnia griega y creencias paganas. Esa hostilidad es religiosa (cristianos contra paganos), étnica (egipcios versus helenos) y social (jornaleros contra latifundistas).

La otra fuerza de los obispos de Alejandría viene dada por los marineros del puerto. La sede alejandrina es la principal naviera de la ????? desde el siglo IV. Por otra parte el suministro de Constantinopla depende de Alejandría. Atanasio se jacta en 335 de ser capaz de impedir la ?????? (remesa anual de trigo egipcio a Constantinopla dispuesta en 332 por Constantino I el Grande) en el puerto de Alejandría. En el siglo IV se atestigua la devoción de los marineros al Evangelista Marcos considerado el fundador de la cristiandad alejandrina. La Catedral de Alejandría es el Caesareum. El Caesareum está situado junto al puerto y es un antiguo templo que Cleopatra inicia y termina Augusto. Fue reutilizado como iglesia. Primitivamente había sido dedicadopor Cleopatra y luego por Augusto a Julio César en su faceta de protector de los navegantes: de aquí sus designaciones latinas de Caesareum o Templum Augusti y griegas de Sebasteion o Kaisareion. En 379 los marineros de Alejandría, al transportar la ?????? comunican en Constantinopla con el niceno Gregorio de Nacianzo por su fidelidad a las ideas teológicas del obispo de Alejandría Pedro II. Por último Teófilo, tío materno de Cirilo y su antecesor en el obispado de la Polis, se traslada a Constantinopla en la flota que lleva la ?????? .

En tiempos de Cirilo el paganismo egipcio se articula en dos frentes de resistencia. Forman el primero los paganos de Alejandría, fieles a la religiosidad grecorromana, imbuidos de cultura helénica y nucleados en torno a la Escuela de Filosofía de la ?????. El segundo reside en los campesinos aborígenes que no habían aceptado el cristianismo. San Atanasio de Alejandría alude a la momificación

como práctica común en los enterramientos egipcios. Incluso en una fecha tan tardía como el siglo VIII de la Era Cristiana, ya bajo el dominio árabe, se redactan dos fórmulas de encantamiento halladas en El Fayyum que aluden a Isis y a su hijo Horus y a Isis y Neftis, las dos hermanas tristes y afligidas.

Ninguno de ambos sectores paganos defienden a los judíos al ser expulsados de Alejandría en 415 ? 416. Los aborígenes de Egipto les consideran parte de sus aborrecidos dominadores alejandrinos. Los paganos de la ????? sienten aversión a los hebreos por tres razones: reputan al judaísmo el germen del cristianismo cuyas autoridades les empiezan a reprimir tras el Edicto de Tesalónica de 380 y recuerdan las atrocidades cometidas por sus antepasados judíos contra sus ancestros en las rebeliones del año 115 ? 117 en Egipto, Cirene y Chipre.

Excurso I: Zarathustra.

Zarathustra es la figura religiosa más sobresaliente de la Antigua Persia. Crea la religión llamada zoroastrismo que aún cuenta con seguidores llamados gabrs en Irán y parsis en la India. En este trabajo voy a exponer el problema que plantea su cronología, la teología, las creencias escatológicas y por fin sus influjos posteriores

El problema cronológico de Zarathustra

Las fuentes redactadas en antiguo persa o pehleví y el escritor cristiano Teodoro de Mopsuestia en el siglo V dicen que Zarathustra vive 258 años antes que Alejandro Magno. Si estos datos son verídicos Zarathustra habría vivido a principios del siglo VI a.C. Sin embargo la tradición atribuye a Zarathustra la paternidad del Zend-Avesta aunque en realidad esa obra recoge estratos compositivos de muy distintas épocas. Los himnos más antiguos del Zend-Avesta son los Gathas. En ellos aparece un momento de tránsito entre una vieja economía que se basa en la ganadería transhumante, propia de los nómadas de las estepas, y unas formas de desarrollo nuevas más cercanas a los agricultores sedentarios. En este caso sería necesario retrasar la vida de Zarathustra hasta el siglo VII e incluso el VIII a.C.

La historiografía moderna también se ha dividido sobre el tema. Meyer y

Christensen se inclinan por una cronología alta: el primero sitúa la vida de Zarathustra en el siglo X a.C. mientras que el segundo la centra en el siglo VII a.C. Tienden a la cronología baja y le ubican en el siglo VI a.C. Bailey, Herzfeld, Lehmann-Haupt, Kent, Herzfeld y Ehtécham . En el estado actual de nuestros conocimientos el problema hoy por hoy sigue irresoluble. La postura más prudente es la que considera a Zarathustra anterior a la fundación del Imperio Aqueménida por Ciro II el Grande (559 ? 529 a.C.).

Una cuestión reside en el marco geográfico de la vida y predicaciones de Zarathustra. Desde luego ha de ser en el Irán Oriental al no aparecer en los Gathas referencia alguna al oeste de Persia. Concretando más comparto las opiniones de J. Dúchesne-Guillemin: ?Para identificar su país, es preciso tener en cuenta la importancia que concede al buey. Ahora bien, en la actualidad no hay ni en Irán ni en Afganistán una sola región en la que el hombre pueda vivir de la cría de ganado bovino. Por otra parte, Airyanem Vaejo, el espacio ario, es también, según muchos textos, el Espacio del río Datilla, nombre tan mítico como el del país, pero río real, al que se sacrificaba como a la fuente de toda fecundidad y prosperidad. Si suponemos que era el Oxus, podemos imaginar que sus aguas, más abundantes que en la actualidad, proporcionaron extensos pastos, de los que el oasis Khiva, en el Khwarezm medieval y moderno, no es más que un resto. El lago Vourusaka, que tiene un importante papel en el Avesta, no es otro, bajo su nombre mítico, que el mar Aral en el que el Oxus desemboca?

Las ideas teológicas de Zarathustra

Zarathustra es el fundador del zoroastrismo. Es opinión común que Zarathustra acepta la existencia de dos dioses: Ahura-Mazdah (dios del bien) y Ahriman ( el dios del mal). Esto no es cierto. Zarathustra admite la existencia de un solo dios: Ahura-Mazdah. Este teónimo significa el Sabio Señor . En Ahura-Mazdah reconoce una serie de virtudes personificadas sobre las que ejerce pleno dominio vg. el Imperio (Xsathra), la Integridad (Haurvatat) y la Inmortalidad (Ameretat). Por el contrario Zarathustra considera hijos de Ahura-Mazdah otros de los atributos divinos : su Santo Espíritu (Spenta Mainyu), su Justicia (Asa), su Buen Pensamiento (Vohu Manah) y su Aplicación (Armaiti).

La escatología zarathustriana

Ahura-Mazdah se halla en continua lucha contra Ahriman quien es el espíritu (no el dios) del mal. A Ahriman le ayudan los daeva. Estos son los demonios. Bajo ese epíteto Zarathustra engloba tanto a las sempiternas fuerzas malignas que existían ya en el politeísmo iranio anterior a su nacimiento como a los dioses de esa misma mitología que con Zarathustra pierden su idiosincrasia divina y pasan a ser diablos . ) Entre aquellas fuerzas malignas existen algunas personificadas: Aesma (Furor), Druj (Error), Azi (Codicia), Busyanta (Contemporizador), Apaosa (Abrasador), Asto-Vidatu (Desmembrador del Esqueleto) y Duzyairya (Mal Año)

Con éstas últimas Zarathustra practica la génesis de una Niedermythologie. Este fenómeno es muy común en todas las religiones. Consiste en que los representantes de una nueva religión victoriosa declaran demonios a las deidades de las creencias vencidas. Esta lucha de Ahura-Mazdah contra Ahriman sólo concluirá el Día del Juicio Final. Entonces Ahura-Mazdah, en papel de juez supremo y teniendo a su derecha a Zarathustra, dará a cada hombre el premio o el castigo según sus obras pues Ahura-Mazdah exige a cada persona luchar a su lado contra Ahriman si quiere poseer la bienandanza eterna.

Excurso II: La filosofía pitagórica y el orfismo

Pitágoras y los pitagóricos.

La figura de Pitágoras es una de las más problemáticas de la filosofía griega. Por un lado existen muchas referencias acerca de sus doctrinas y sus discípulos. En cambio son muy parvas las menciones sobre su periplo vital. Hoy se piensa que en su edad madura se habría instalado en las colonias griegas del actual Mezzogiorno italiano.

Allí instala comunidades de adeptos a sus doctrinas que se dedican a su purificación para conseguir la inmortalidad de sus almas. Sus seguidores se dividen en tres niveles: oyentes (pueden escuchar pero no ver al maestro de quien les separa una cortina); matemáticos (ya ven al maestro e incluso pueden plantearle problemas); y físicos (se hallan en contacto con el maestro con el cual les está permitido discutir).

Porfirio afirma que Pitágoras a la edad de 40 años huye de la tiranía de Polícrates de Samos y se refugia en la Italia Meridional. Diógenes Laercio hace a Pitágoras establecerse en Crotona y dar constituciones a los italiotas a la vez que menciona la larga duración del predominio de las sectas pitagóricas en las colonias helenas de Magna Grecia. Jámblico señala que Pitágoras termina instalándose en Metaponte donde muere.

La idea de la inmortalidad del alma en el sistema pitagórico.

Un elemento clave de su sistema es la idea de la inmortalidad del alma. Pitágoras mantiene que el alma es el elemento que hace al hombre inmortal y por tanto le asemeja a los dioses. Frente al alma se halla el cuerpo considerada como algo deleznable y auténtica cárcel del alma de forma que cuerpo y alma son los respectivos sinónimos de muerte y vida.

Los pitagóricos defienden también la idea de la transmigración de las almas (metempsícosis). En esta teoría efectúan una curiosa fusión de los conceptos de necesidad y libertad. Así atribuyen al comportamiento humano en una vida anterior el que ese alma se reencarne en un cuerpo mejor o peor.

A su parecer existe una posibilidad total de ciclos. Los distintos grupos pitagóricos varían a la hora de definir una fecha concreta para el cúmulo de ciclos. Sin embargo Herodoto de Halicarnaso dice que lo hacían oscilar en torno a los 3.000 años con más o menos variantes. La psicología pitagórica informa su cosmología. Pitágoras divide el universo en dos grandes zonas con base en la Luna.

Denomina a la primera supralunar. Allí residen la perfección, la pureza y la luz. Llama sublunar a la segunda. Es el ámbito de lo impuro y monstruoso. Por encima de la Luna se hallan los astros. Estos son las sedes de las almas. Pitágoras piensa que la sustancia de las almas es ígnea al igual que la de los astros. Esto explica el testimonio de Aristóteles según el cual algunos pitagóricos degeneran esta hipótesis del maestro al considerar que el alma sería un polvillo que flota en los aires, habitualmente imposible de ver pero que se hace visible al ser iluminado por el Sol.

Las almas residen en el mundo supralunar. Desde esa esfera caen a la Tierra

pagando una cierta culpa aunque en los escritos pitagóricos no se dice cuál fue la idiosincrasia de aquel delito. Con dicha caida las almas pierden su pureza originaria. No obstante poseen la capacidad de reintegrarse a la esfera supralunar.

Porfirio tiene otras dos afirmaciones de interés en torno a Pitágoras. La primera que las más célebres ideas del pensador son: que el alma es inmortal; que se reencarna en otros seres dentro de un ciclo determinado de existencia; y que todos los seres son parientes. En la segunda noticia Porfirio manifiesta que es Pitágoras el introductor de esas doctrinas en Grecia. La aceptación de la metempsícosis explica algunas normas éticas de sus seguidores vg. la prohibición del trato con cazadores y de ingerir carne y habas.

La metempsícosis pitagórica y los cultos órficos.

Las ideas de Pitágoras sobre la inmortalidad contemplan su origen en el orfismo. Esta religión mistérica parte de los mitos del despedazamiento de Dionisio por los titanes, de la resurrección de aquel dios y de la muerte de los titanes de cuyas cenizas nacen los hombres. Pero como los titanes habían engullido parte del cuerpo de Dionisio, antes de que esa deidad volviera a la vida, el hombre tiene una parte titánica y otra dionisiaca.

Los misterios órficos pretenden librar al hombre de su parte titánica. Defienden la idiosincrasia de prisión del alma que tiene el cuerpo al ser la primera inmortal y el segundo mortal. El orfismo consta de unos ritos de iniciación y una vida calificada de órfica. La vida órfica consiste en unas prácticas purificatorias y otras ascéticas. Entre éstas últimas destacan las prohibiciones de comer habas y matar animales. La primera se explica por usarse este producto de ofrenda a los muertos y la segunda por la idea de la metempsícosis