Atalaya Oct 1 2011

Embed Size (px)

Citation preview

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    1/32

    34567

    1 DE OCTUBRE DE 2011

    CINCO MENTIRASACERCA DE DIOS

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    2/32

    EL PROP

    OSITO DE LA ATALAYA es honrar a Jehov

    a Dios, el Soberano del universo. En el pasado, las atalayas, o torresde vigilancia, permit

    an descubrir lo que suced

    a a lo lejos. De igual modo, esta revista nos ayuda a descubrir la

    relaci

    on entre las profecas b

    blicas y los sucesos de nuestro tiempo. La Atalaya consuela a la gente anunciando

    que el Reino de Dios un gobierno de verdad que se halla en los cielos pronto acabar

    a con la maldad y

    transformara la Tierra en un paraso. Adem as, promueve la fe en el Rey reinante de dicho gobierno, Jesucristo,quien muri

    o para que pudi

    eramos alcanzar la vida eterna. Esta publicaci

    on, editada sin interrupci

    on desde 1879

    por los testigos de Jehov

    a, es polticamente neutral y reconoce la Biblia como m

    axima autoridad.

    Esta publicaci

    on se distribuye como parte de una obra mundial de educaci

    on bblica que se sostiene con donativos. Prohibida su venta. A menos que se indique lo

    contrario, las citas bblicas se han tomado de la versi

    on en lenguaje moderno Traducci

    on del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras (con referencias).

    345676 Ti ra da me di a de ca da n umero:42.162.000 EN 188 IDIOMAS OCTOBER 1, 2011

    SERIE DE PORTADA

    3 Le habr

    an mentido?

    4 Dios es un misterio.Cierto o falso?

    5 A Dios no le importamos.Cierto o falso?

    6 Dios es vengativo. Cierto o falso?

    7 Dios es injusto. Cierto o falso?

    8 Dios acepta todas las religiones.Cierto o falso?

    9 La verdad puede cambiar su vida

    SECCIONES FIJAS

    10 Lo saba?

    11 Nuestros lectores quieren saber

    12 La Biblia les cambi

    o la vida

    15 Ac

    erquese a Dios: Es posible hallarel mism

    simo conocimiento de Dios

    16 Ense

    nanzas de la Palabra de Dios:C

    omo pueden ser felices las familias?

    & 18 Ejemplos de fe: Defendi

    o al pueblo de Dios

    24 De padres a hijos: Ocasiones en las queno debemos dormirnos

    Y TAMBIEN

    14 Un acto de autoafirmaci

    on colectivae intransigente que merece atenci

    on

    & 26 Cu

    ando fue destruida Jerusal

    en? Por qu

    ees importante saberlo? Qu

    e muestran las pruebas?

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    3/32

    POCAS cosas duelen tanto como descubrirque alguien en quien confiamos nos hamentido. Tal vez nos sintamos humillados,furiosos o hasta traicionados. Las mentirasacaban con amistades y matrimonios, y arre-batan a la gente incontables sumas de dinero.

    Entonces, c

    omo se sentira si descubriera

    que le han mentido acerca de Dios? Si ustedtiene inclinaciones religiosas, podr

    a afectarle

    profundamente, como le sucedi o a estos feli-greses:

    Me sent traicionada por mi religi

    on.

    (DEANNE.)

    Me enfad

    e mucho al descubrir que me ha-b

    an enga

    nado, que mis esperanzas y metas

    haban sido vanas. (LUIS.)

    Tal vez le parezca impensable que lo quesabe de Dios no sea cierto. Quiz

    as lo aprendi

    o

    de alguien en quien confa y que nunca

    querra hacerle da no, como sus padres, unsacerdote, un pastor o alg

    un amigo

    ntimo.

    Es posible que lleve toda la vida creyendo encierta doctrina. Pero verdad que hasta unaidea muy difundida puede ser falsa? Comoafirm

    o el ex presidente de Estados Unidos

    Franklin D. Roosevelt, una mentira no sevuelve verdad por mucho que se repita.

    C

    omo podemos averiguar si nos han men-tido o no? En una oraci

    on a Dios, Jes

    us le dijo:

    Tu palabra es la verdad (Juan 17:17). Efecti-vamente, la Palabra de Dios, la Biblia, nos per-mite distinguir la verdad de la mentira.

    Lo invitamos a ver c

    omo la Biblia pone aldescubierto cinco mentiras comunes sobreDios. Y se dar

    a cuenta de que la verdad puede

    mejorar su vida.

    LE HABRAN

    mentido?

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 3

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    4/32

    4

    Lo que algunos dicen: Dios obra de manerasmisteriosas.

    Hay un solo verdadero Dios, inmensoe inmutable, incomprensible, todopodero-so e inefable, Padre, Hijo y Esp

    ritu Santo,

    explica el Catecismo de la Iglesia Cat

    olica ha-blando de la Trinidad.

    Lo que ense

    na la Biblia: Jes

    us afirm

    o quequienes adquieran conocimiento [del]

    uni-

    co Dios verdadero tendr

    an muchas bendi-

    ciones (Juan 17:3). Pero c omo podramosconocer a Dios si fuera un misterio? Lejos deocultarse,

    el desea que todos lo conozcan (Je-

    remas 31:34).

    Claro, nunca lo sabremos todo sobre Dios,pues sus caminos y pensamientos son m

    as

    elevados (Eclesiast

    es 3:11; Isaas 55:8, 9).

    C

    omo le beneficia saber la verdad: Si Diosfuera un misterio incomprensible, qu

    e sen-

    tido tendra intentar siquiera conocerlo?

    Lo cierto es que no solo nos permite com-prenderlo, sino tambi

    en entablar una estre-

    cha amistad con

    el. Dios llam

    o a su fiel siervoAbrah

    an mi amigo, y el rey David escribi

    o:

    La intimidad con Jehov

    a pertenece a los quele temen (Isa

    as 41:8; Salmo 25:14).

    Es un sue

    no inalcanzable tener una amis-tad

    ntima con Dios? A primera vista puede

    parecerlo. Sin embargo, fjese en que seg

    un

    Hechos 17:27, Dios no est

    a muy lejos de

    cada uno de nosotros. Por qu

    e no? Porqueen las p

    aginas de la Biblia nos revela todo lo

    necesario para conocerlo bien.1El nos ense

    na que se llama Jehov

    a (Isa

    as

    42:8). Y para que conozcamos su personali-dad, nos ha dejado un registro escrito de surelaci

    on con los seres humanos. M

    as a

    un,

    nos revela que tiene sentimientos. Es miseri-cordioso y ben

    evolo, tardo para la c

    olera y

    abundante en bondad amorosa y verdad(Exodo 34:6). Nuestros actos pueden alegrar-lo o entristecerlo. Por ejemplo, los israelitasde la antig

    uedad lo hicieron sentirse heri-

    do cuando se rebelaron contra

    el. En cam-bio, quienes son sabios y lo obedecen lecausan gran satisfacci

    on (Salmo 78:40; Pro-

    verbios 27:11).

    1 Hallar

    a m

    as informaci

    on sobre lo que la Biblia dice deDios en el cap

    tulo 1 del libro Qu

    e ense

    na realmente la

    Biblia?, editado por los testigos de Jehov

    a.

    1 Dios es un misterioCIERTO O FALSO?

    Si Dios fuerauna Trinidad

    misteriosa,c

    omo

    podramos

    llegar aconocerlo?

    (NuevaYork,EE.UU.)/TheBrid

    gemanArtLib

    raryInternational

    345676Desea obtener m

    as informaci

    on o recibir en

    su hogar clases bblicas gratuitas? Escriba a

    Testigos de Jehov

    a a una de estas direcciones.Encontrar

    a la lista completa de direcciones en

    www.watchtower.org/address.

    Argentina: Casilla 83 (Suc. 27B), C1427WAB Cdad. Aut.de Buenos Aires. Canad

    a: PO Box 4100, Georgetown,

    ON L7G 4Y4. Chile: Casilla 267, Puente Alto. Colombia:Apartado 85058, Bogot

    a. Dominicana, Rep.: Apartado

    1742, Santo Domingo. Ecuador: Casilla 09-01-1334, Gua-yaquil. Estados Unidos: 25 Columbia Heights, Brooklyn,NY 11201-2483. M

    exico: ApartadoPostal 895,06002 M

    e-

    xico, D.F. Per

    u: Apartado 18-1055, Lima 18. Puerto Rico:PO Box 3980, Guaynabo, PR 00970. Venezuela: Aparta-do 20.364, Caracas, DC 1020A.

    The Watchtower (ISSN 0043-1087) is published

    semimonthly by Watchtower Bible and Tract Society of

    New York, Inc.; M. H. Larson, President; G. F. Simonis,

    Secretary-Treasurer; 25 Columbia Heights, Brooklyn, NY

    11201-2483, and by Watch Tower Bible and Tract Society of

    Canada, PO Box 4100, Georgetown, ON L7G 4Y4. Periodi-

    calsPostagePaid at Brooklyn,NY, andat additionalmailing

    offices. POSTMASTER: Send address changes to Watch-

    tower, 1000 Red Mills Road, Wallkill, NY 12589-3299.

    5 2011 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylva-

    nia. Todos los derechos reservados. Printed in Canada.

    Vol. 132, No. 19 Semimonthly SPANISH

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    5/32

    PUBLICADA AHORA EN 188 IDIOMAS: acho-li, afrik

    aans, alban

    es, alem

    an,67 am

    arico,

    arabe, arme-

    nio, armenio occidental, aymara, azer, azer

    (alfabeto

    cirlico), baul

    e, becol, bengal

    , birmano, bislama, b

    ulga-

    ro, camboyano, cebuano, checo,7 chichewa, chino sim-plificado, chino tradicional7 (grabaci

    on solo en manda-

    rn), chitonga, chuuk

    es, cibemba, cingal

    es, congo,

    coreano,67 criollo de las Seychelles, criollo haitiano, crio-llo mauriciano, croata, dan

    es,7 efik, endebele, endon-

    ga, enzema, eslovaco, esloveno, espa

    nol,67 estonio,ew

    e, finland

    es,7 fiyiano, franc

    es,687 ga, georgiano, grie-

    go, groenland

    es, guaran,687 gujarati, gun, hausa, he-

    breo, hiligaynon, hindi, hiri motu, holand

    es,67 h

    unga-

    ro,67 ibo, ilocano, indonesio, ingl

    es67 (tambi

    en enbraille), island

    es, isoko, italiano,67 japon

    es,67 kannada,

    kaonde, kazajo, kikongo, kikuyu, kiluba, kimbundu, ki-niaruanda, kirgu

    s, kiribatiano, kirundi, kwangal

    , kwan-

    yama, let

    on, lingala, lituano, luganda, lunda, luo, lu-vale, macedonio, malay

    alam, malgache, malt

    es, marat

    ,

    marshal

    es, maya, mixe, mizo, mor

    e, nepal

    es, niueano,noruego,67 nyaneka, oromo, os

    etico, otetela, palaua-

    no, pangasin

    an, panjab, papiamento de Curazao, per-

    sa, pidgin de las islas Salom

    on, polaco,67 ponap

    es, por-tugu

    es,687 quechua ancashino, quechua ayacuchano,

    quechua boliviano, quechua cuzque

    no, quichua, raro-tongu

    es, rumano, ruso,67 samoano, sango, sepedi, ser-

    bio, serbio (alfabeto latino), sesoto, shona, silozi, sra-nangtongo, suajili, suati, sueco,7 tagalo,7 tahitiano, tai,tamil, t

    artaro, telugu, tetum, tigri

    na, tivo, tok pisin, ton-

    gano, totonaco, tshiluba, tshwa, tsonga, tsotsil, tsuana,tumbuka, turco, tuvaluano, twi, ucraniano, umbund

    u,

    urdu, uruund, vendal, vietnamita, wallisiano, waray-wa-ray, wolaytta, xhosa, yap

    es, yoruba, zand

    e, zapoteco del

    Istmo, zul

    u

    6 Tambi

    en disponible en CD.

    8 Tambi

    en disponible en CD-ROM (formato MP3).

    7 Tambi

    en disponible en grabaci

    o n d e a ud i o e nwww.jw.org.

    Lo que algunos dicen: Si a Dios le import

    ara-mos, acabar

    a con la maldad y el sufrimiento

    del mundo. Y aun si se interesara por la gente

    en general, le da igual lo que me pase a m

    .

    Lo que ense

    na la Biblia:Jehov

    a no es el causan-

    te de ning

    un mal (Santiago 1:13). Aunque po-

    dra eliminar la maldad en cualquier instante,

    por ahora permite que exista esta sociedad

    corrupta a fin de resolver importantes cuestio-

    nes morales que surgieron al comienzo de la

    historia humana. Llegar

    a el d

    a en que inter-vendr a a favor de la humanidad y reparar a todo

    el da

    no que han provocado quienes rechazan

    su soberana(G

    enesis 3:1-6; Isa

    as 65:17).1

    Adem

    as de interesarse porlos seres humanos

    en general, Dios manifiesta un profundo inte-

    1 Hallar

    a m

    as informaci

    on sobre por qu

    e permite Diosel sufrimiento en el cap

    tulo 11 del libro Qu

    e ense

    na real-

    mente la Biblia?

    r

    es por cada uno de nosotros. Mateo 10:29-31indica que

    el observa detalles nuestros que has-

    ta nosotros mismos desconocemos: No sevenden dos gorriones por una moneda de pocovalor? Sin embargo, ni uno de ellos cae a tierrasin el conocimiento de su Padre. Mas los mis-m

    simos cabellos de la cabeza de ustedes est

    an

    todos contados. Por lo tanto, no tengan temor:ustedes valen m

    as que muchos gorriones.

    C

    omo le beneficia saber la verdad: La mentirade que a Dios no le importamos hace que mu-chos no quieran saber nada de el o que solo lobusquen cuando no ven otra salida. Y con ra-z

    on, pues normalmente evitamos a las perso-

    nas

    asperas o insensibles. Pero saber que Jehov

    ase interesa por usted puede infundirle el deseode conocerlo mejor y hacerse su amigo.

    Por ejemplo, puede que ore a Dios pero sepregunte si lo escucha o si le contestar

    a. Pues

    bien, las Santas Escrituras nos aseguran que

    eles el Oidor de la oraci

    on y que mantiene esta

    lnea de comunicaci

    on abierta en todo mo-

    mento para quienes lo buscan con sinceridad(Salmo 65:2).

    Adem

    as, la Biblia nos exhorta a confiarle aDios todas nuestras inquietudes. Por qu

    e?

    Porque

    el se interesa por ustedes, responde1 Pedro 5:7. Podemos acudir a

    el incluso en mo-

    mentos de angustia, pues su Palabra nos asegu-ra: Jehov

    a est

    a cerca de los que est

    an quebran-

    tados de coraz

    on; y salva a los que est

    anaplastados en esp

    ritu (Salmo 34:18).

    2 A Dios no le importamosCIERTO O FALSO?

    Si a Dios no leimportaramos,por qu

    e

    nos animara

    a orarle?

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    6/32

    6 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    Lo que algunos dicen: Dios lleva la cuentade todos los pecados y condena a la gente alfuego eterno del infierno.

    Dios castiga a los pecadores con desastresnaturales.

    Lo que ense

    na la Biblia: En 2 Pedro 3:9 se de-clara que Jehov

    a no desea que ninguno sea

    destruido; m

    as bien, desea que todos alcan-cen el arrepentimiento.

    El no se concentra

    en nuestros errores, sino en nuestras virtu-

    des. De hecho, sus ojos est an discurriendopor toda la tierra para mostrar su fuerza a fa-vor de aquellos cuyo coraz

    on es completo

    para con

    el (2 Cr

    onicas 16:9).

    El infierno no es una ense

    nanza bblica.

    En realidad, a Dios le repugna la sola idea deun tormento eterno. El peor castigo que Jeho-v

    a puede imponer a alguien es retirarle el don

    de la vida (Jeremas 7:31; Romanos 6:7).

    Y la destrucci

    on indiscriminada que produ-

    cen los desastres naturales no se debe a la in-tervenci on divina, sino a sucesos imprevistosque pueden acaecerle a cualquiera (Eclesias-t

    es 9:11).

    C

    omo le beneficia saber la verdad: Saber queDios est

    a listo para perdonar y no se apre-

    sura a condenarnos hace que nos sintamosatra

    dos a

    el (Salmo 86:5). No tenemos que

    servirle porque nos sintamos culpables ni pormiedo al castigo. M

    as bien, nuestra fe puede

    crecer con el mejor de los motivos: el amor aJehov a. Ese amor es una fuerza positiva quenos impulsa a hacer todo lo posible por agra-darlo (Mateo 22:36-38; 1 Juan 5:3).

    Aunque Dios desea que todos hagan lo queest

    a bien, sabe que muchos nunca lo har

    an.

    Si

    el no acabara con los malvados incorregi-

    bles, sera como un gobernante que pro-

    mulga leyes y no hace que se cumplan, ycomo resultado, la injusticia y el sufrimien-to contin

    uan indefinidamente (Eclesiast

    es 8:

    11). Aprender que Dios no tolerara la maldad

    para siempre nos da una esperanza s

    olidapara el futuro.

    El ha prometido eliminar a

    quienes se empe

    nan en practicar el mal.

    De ese modo, las personas mansas podr

    andisfrutar de vida eterna en la Tierra comoDios se propuso desde el principio (Salmo 37:10, 11, 29).1

    1 En los captulos 3 y 8 del libro Qu

    e ense

    na realmente

    la Biblia? hallar

    a m

    as informaci

    on sobre el prop

    osito deDios de transformar la Tierra en un para

    so.

    3 Dios es vengativoCIERTO O FALSO?

    Querr

    a Dios que lo adoremospor miedo al castigo?

    GrabadodeDore

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    7/32

    Lo que algunos dicen: Dios controla elmundo, y todo lo que ocurre es porque

    el

    quiere. Si el mundo est

    a lleno de discrimina-

    ci

    on, injusticias y opresi

    on, es porque Diostiene la culpa.

    Lo que ense

    na la Biblia: Jehov

    a no es el cau-sante de las injusticias. La Biblia dice de

    el:

    Perfecta es su actividad, porque todos suscaminos son justicia (Deuteronomio 32:4).

    El es generoso con todos, incluso con

    quienes no parecen merecerlo. Por ejemplo,hace salir su sol sobre inicuos y buenos y

    hace llover sobre justos e injustos (Mateo

    5:45). Adem

    as, trata con justicia a gente de

    toda raza y cultura, tal como muestra Hechos

    10:34, 35: Dios no es parcial, sino que, en

    toda naci

    on, el que le teme y obra justicia le

    es acepto.

    Entonces, a qu

    e se deben las injusti-cias? Por un lado, muchas personas optan

    por no imitar a Dios y act

    uan injustamente(Deuteronomio 32:5). Y por otro, la Biblia

    muestra que Dios est

    a permitiendo por un

    tiempo que su enemigo, el Diablo, gobierne

    el mundo (1 Juan 5:19).1Ahora bien, ese per-

    miso pronto expirar

    a. De hecho, Jehov

    a ya

    1 Aprenda c

    omo lleg

    o a existir el Diablo en el captulo 3

    del libro Qu

    e ense

    na realmente la Biblia?

    ha sentado las bases para desbaratar lasobras del Diablo (1 Juan 3:8).

    C

    omo le beneficia saber la verdad: Es muyposible que se sienta perturbado por las inter-minables noticias sobre corrupci

    on, opresi

    on

    e injusticias. Sin embargo, saber la causa delos problemas le permitir

    a comprender por

    qu

    e el mundo est

    a tan mal y por qu

    e siemprefracasan los planes humanos para hacer de

    el

    un lugar mejor (Salmo 146:3). En vez de in-

    vertir tiempo y energ

    as en hacer cambiosque, como mucho, seran temporales, ustedpuede vivir con la seguridad de que las pro-mesas de Dios para el futuro se cumplir

    an sin

    falta (Revelaci

    on [Apocalipsis] 21:3, 4).

    Cuando las desgracias nos tocan de cerca,es muy consolador conocer el verdadero ori-gen de las injusticias. Si se nos trata de mane-ra injusta, tal vez clamemos como lo hizo unsiervo de Dios llamado Habacuc: La ley seentumece, y la justicia nunca sale (Habacuc

    1:4). Dios no castig o a Habacuc por decir eso.Antes bien, le garantiz

    o que hab

    a fijado un

    momento para remediar la situaci

    on y loayud

    o a ser feliz pese a las dificultades (Haba-

    cuc 2:2-4; 3:17, 18). Del mismo modo, con-fiar en que Dios eliminar

    a las injusticias,

    como ha prometido, le infundir

    a a usted se-renidad y paz interior en este mundo injusto.

    4 Dios es injustoCIERTO O FALSO?

    Es Diosel verdaderoculpablede las injusticias

    y el sufrimiento?

    SvenTorfinn/PanosPictures

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    8/32

    8 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    Lo que algunos dicen: Tal como hay mu-chos caminos que llevan al mismo destino,tambi

    en hay muchas formas de llegar a Dios.

    Cada quien debe encontrar la suya.

    Lo que ense

    na la Biblia: Nuestra adoraci

    ondebe ser sincera, no fingida ni hip

    ocrita. Je-

    s

    us explic

    o a los lderes religiosos de su d

    a

    por qu

    e Dios los haba rechazado: Aptamen-

    te profetiz

    o Isaas acerca de ustedes, hip

    ocri-

    tas, como est

    a escrito: Este pueblo me honra

    con los labios, pero su coraz

    on est

    a muy ale-jado de m

    [] (Marcos 7:6). En realidad, la

    sinceridad por s sola no garantiza que Dios

    acepte nuestra adoraci

    on.

    Jes

    us as lo indic

    o cuando puso al descu-

    bierto el principal error de aquellos lderes re-

    ligiosos y sus seguidores. Les aplic

    o estaspalabras de Dios: En vano me siguen ado-rando, porque ense

    nan como doctrinas man-

    datos de hombres (Marcos 7:7). Como po-n

    an sus tradiciones religiosas por delante de

    los mandamientos divinos, su adoraci on eraen vano, o in

    util.

    Envez de apoyar la idea de que hay muchasmaneras de acercarse a Dios, la Biblia ense

    na

    que hay una sola. Mateo 7:13, 14 dice: En-tren por la puerta angosta; porque ancho y es-pacioso es el camino que conduce a la des-trucci

    on, y muchos son los que entran por

    el;

    mientras que angosta es la puerta y estrechoel camino que conduce a la vida, y pocos son

    los que la hallan.

    C

    omo le beneficia saber la verdad: Imagineque tras ganar un marat

    on para el que estuvo

    meses entren

    andose, lo descalificaran porviolar una norma que desconoc

    a. C

    omo se

    sentira? Quiz

    a pensar

    a que todos sus esfuer-

    zos fueron in

    utiles. Podra ocurrir algo pare-

    cido con nuestra adoraci

    on a Dios?

    El ap

    ostol Pablo compar

    o nuestra adora-ci

    on a una competici

    on atl

    eticay escribi

    o: Si

    alguien compite hasta en los juegos, no es co-ronado a menos que haya competido deacuerdo con las reglas (2 Timoteo 2:5). Para

    conseguir el favor de Dios, hay que adorarlode acuerdo con las reglas, es decir, delmodo que

    elaprueba. En una carrera, un atle-

    ta no puede ir por donde quiera y esperar quelo declaren ganador. Igualmente, nosotrosno podemos elegir nuestro propio caminohacia Dios y esperar que

    el nos apruebe.

    Si deseamos agradar a Dios, nuestra reli-gi

    on debe estar libre de mentiras. Jes

    us dijo:

    Los verdaderos adoradores adoraran al Pa-

    dre con esp

    ritu y con verdad (Juan 4:23).Y d onde aprendemos el aut entico caminohacia Dios? En su Palabra, la Biblia (Juan17:17).1

    1 Si desea m

    as informaci

    on sobre la adoraci

    on que aDios le complace, consulte el cap

    tulo 15 del libro Qu

    e

    ense

    na realmente la Biblia?

    5 Dios acepta todas las religionesCIERTO O FALSO?

    Ense

    nan todaslas religionesa adorar a Dioscomo

    el aprueba?

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    9/32

    P

    UEDE que usted haya odo o que le hayan

    ense

    nado alguna de las mentiras acerca deDios que hemos analizado en esta serie deart

    culos. Aun as

    , tal vez dude en cambiar

    de creencias, sobre todo si las abriga desdehace mucho.

    Y eso es comprensible. Algunas iglesiasno animan a sus feligreses a comparar lo queense

    nan con lo que dice la Biblia. Otras tratan

    de defender doctrinas falsas alegando que laBiblia es complicada, que no fue escrita paraque todos la entiendan. Sin embargo, la ma-

    yor

    a de los disc

    pulos de Jes

    us eran gentecom un, sin muchos estudios, que captabancon facilidad lo que

    el les ense

    naba (Hechos

    4:13).

    Quiz

    as usted tambi

    en vacile en examinarsus creencias por miedo a que eso refleje faltade fe. Pero ser

    a l

    ogico que Dios se enojara

    con nosotros por investigar la Biblia paracomprender lo que

    el desea que hagamos?

    Claro que no. La Biblia es su mensaje para lahumanidad, y

    el nos anima a analizarla perso-

    nalmente. En Romanos 12:2 leemos: Prue-ben para ustedes mismos lo que es la buena yla acepta y la perfecta voluntad de Dios.

    Aprender la verdad en cuanto a Dios no es

    solo un ejercicio intelectual, sino que conlle-va beneficios pr

    acticos que mejorar

    an su vida

    (Juan 8:32). Este es el caso de Deanne, men-cionada en el primer art

    culo de esta serie.

    Hoy su fe est

    a cimentada en la Palabra deDios. Ella explica: No supe que la Biblia eratan clara hasta que empec

    e a estudiarla. Aho-

    ra conozco a Jehov

    a y s

    e que no es un Diosimpersonal, sino mi amoroso Padre celestial.Mi vida por fin tiene prop

    osito.

    Es posible que usted diga: Pero yo ya estu-di

    e la Biblia, y no me sirvi

    o de mucho.

    En ese caso, no se rinda. Tratar de entender laBiblia cuando se le han ense nado mentirassobre Dios es como tratar de armar un rompe-cabezas gui

    andose por un dibujo equivocado.

    Tal vez logre encajar algunas piezas, pero aca-bar

    a frustrado cuando no coincidan con el

    dibujo que le han dado. No obstante, si tie-ne el dibujo correcto, todas las piezas encaja-r

    an.

    Le gustara aprender la verdad acerca de

    Dios? En ese caso, lo animamos a comunicar-

    se con los testigos de Jehov a de su comunidado a escribir a los editores de esta revista pararecibir un curso b

    blico gratuito (en la p

    agi-

    na 4 encontrar

    a una lista de direcciones).

    La verdad PUEDE CAMBIAR SU VIDA

    Pruebenpara ustedesmismoslo que esla buenay la aceptay la perfectavoluntadde Dios.(ROMANOS 12:2)

    9

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    10/32

    10 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    Poco antes de su muerte, Jes

    us corri-gi

    o una grave situaci

    on que hab

    a en el

    templo. La Biblia narra este episodioas

    : Jes

    us [...] ech

    o fuera a todos los

    que vendan y compraban en el tem-

    plo, y volc

    o las mesas de los cambistasy los bancos de los que vend

    an palo-

    mas. Y les dijo: Est

    a escrito: Mi casaser

    a llamada casa de oraci

    on, pero us-

    tedes la hacen cueva de salteadores

    (Mateo 21:12, 13).En el siglo primero, muchos jud

    os y

    pros

    elitos viajaban al templo de Jerusa-l

    en desde pa

    ses y ciudades distantes.

    A fin de pagar el impuesto anual parael templo, comprar los animales que

    iban a sacrificar y hacer otras ofrendasvoluntarias, ten

    an que cambiar las di-

    versas monedas que llevaban consigo ala moneda exigida en el templo. Eso eralo que hac

    an los cambistas a cam-

    bio de una comisi

    on. Por eso, cuandose aproximaban las festividades jud

    as,

    instalaban sus puestos en el Atrio de losGentiles del templo.

    Jes

    us acus

    o a los cambistas de con-

    vertir el templo en una cueva de sal-teadores. Esto parece indicar que lascomisiones que estaban cobrando erandesorbitadas.

    LO SABIA?

    Por qu

    e hab

    a cambistas en el templo de Jerusal

    en?

    Entre las bendiciones que Dios pro-meti o a su pueblo si se mantena fielestaban las vi

    nas y los olivares (Deute-

    ronomio 6:10, 11). En nuestros das, el

    olivo sigue siendo un

    arbol muy apre-ciado all

    donde se cultiva. Sin necesi-

    dad de muchos cuidados, puede pro-ducir fruto abundante durante cientosde a

    nos. Adem

    as, crece incluso en sue-

    los rocosos y es muy resistente a las se-qu

    as. Y si por alguna raz

    on se corta el

    arbol, enseguida salen rebrotes quepueden convertirse en troncos.El olivo ten

    a muchos usos en tiem-

    pos bblicos. La corteza y las hojas se

    utilizaban como remedio contra la fie-bre. Y la resina con olor a vainilla de lasramas viejas se empleaba para hacer

    perfumes. Sin embargo, este

    arbol sevaloraba sobre todo por las aceitunas

    y, en especial, por su aceite. Se diceque casi la mitad de la pulpa de unaaceituna madura es aceite.

    Un buen

    arbol puede producir 57 li-tros (15 galones) de aceite al a

    no.

    El aceite de oliva tambi

    en se empleabacomo combustible para las l

    amparas,

    en ceremonias religiosas o de otro tipoy como cosm

    etico para el cuerpo y el

    cabello, as

    como para tratar heridas ymagulladuras (Exodo 27:20; Levtico 2:1-7; 8:1-12; Rut 3:3; Lucas 10:33, 34).

    Por qu

    e eran tan valorados los olivos en tiempos bblicos?

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    11/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 11

    Me angustiaba la idea de que mi hermano pe-que

    no, John, estuviera en el limbo, cuenta Victo-

    ria. Por qu

    e se senta as

    ? A John no lo hab

    an

    bautizado cuando muri

    o, y un cura dijo que eso lo

    condenaba eternamente al limbo. Con raz

    onVictoria estaba angustiada! Pero ense

    na la Biblia

    que los ni

    nos que mueren sin bautizar est

    an con-

    denados para siempre?

    La Biblia s ense

    na que los cristianos deben ser

    bautizados. El propio Jes

    us mand

    o a sus seguido-

    res: Hagan discpulos de gente de todas las nacio-

    nes, bautiz andolos en el nombre del Padre y delHijo y del esp

    ritu santo, ense

    n

    andoles a observar

    todas las cosas que yo les he mandado (Mateo 28:

    19, 20). Seg

    un este texto, para que alguien sea

    bautizado, primero debe ser discpulo de Jes

    us, es

    decir, tiene que conocer a Jes

    us y haber decidido

    seguir sus pasos. Y es obvio que un beb

    e no puede

    tomar semejante decisi

    on.

    As y todo, algunas personas aseguran que el

    mandato que Jes

    us dio de bautizar a sus discpulos

    inclua a los ni

    nos peque

    nos. El pastor luterano

    Richard P. Bucher declar o: Todos deben ser bauti-zados, incluidos los ni

    nos. [...] No hacerlo los priva

    del perd

    on de pecados y los expone a la condena-

    ci

    on eterna. Pero afirmaciones como esta contradi-cen lo que Jes

    us ense

    n

    o al menos en tres aspectos.

    En primer lugar, Jes

    us nunca ense

    n

    o que haba

    que bautizar a los ni

    nos peque

    nos. Qu

    e impor-

    tancia tiene esto? Jes

    us puso mucho inter

    es en

    ense

    nar a sus discpulos los requisitos para servir a

    Dios. De hecho, repiti

    o varias veces las ense

    nanzas

    clave para que ellos las comprendieran bien (Ma-

    teo 24:42; 25:13; Marcos 9:34-37; 10:35-45). Enton-ces, por qu

    e no dijo ni una solavez que hab

    a que

    bautizar a los ni

    nos? Ser

    a que olvid

    o mencionar

    ese requisito? Claro que no! Si el bautismo de in-fantes fuera obligatorio,

    el lo habr

    a dicho.

    En segundo lugar, Jes

    us nunca ense

    n

    o que los

    muertos sufrieran. M

    as bien, crea lo que afirma

    Eclesiast

    es 9:5, que los vivos tienen conciencia deque morir

    an; pero en cuanto a los muertos, ellos

    no tienen conciencia de nada en absoluto.El sa-

    ba que los muertos no acaban sufriendo en el pur-

    gatorio ni en el limbo ni en el infierno ni en ning unotro lugar. Por eso ense

    naba que estaban incons-

    cientes, como si estuvieran durmiendo (Juan 11:1-

    14).

    Y en tercer lugar, Jes

    us ense

    n

    o que todos losque est

    an en las tumbas conmemorativas volve-

    r

    an a vivir (Juan 5:28, 29). Obviamente, entre ellosse contar

    an los millones de personas que murieron

    sin estar bautizadas. Cuando resuciten, tendr

    an laoportunidad de aprender los requisitos de Dios yvivir para siempre en la Tierra convertida en un pa-

    raso (Salmo 37:29).1En resumen: la Biblia no ense

    na en ning

    un lado

    que deba bautizarse a los ni

    nos peque

    nos.

    1 Para saber m

    as acerca de la promesa de una Tierra pa-radis

    aca y la esperanza de una resurrecci

    on, consulte los ca-

    ptulos 3 y 7 del libro Qu

    e ense

    na realmente la Biblia?, edi-

    tado por los testigos de Jehov

    a.

    NUESTROS LECTORES QUIEREN SABER

    Debe bautizarse a los ni

    nos peque

    nos?

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    12/32

    12 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    MI PASADO: Crec en Bertrange,

    una localidad limpia, segura ypr

    ospera cercana a la ciudad de

    Luxemburgo. Soy la menor decinco hijos. Mis padres son testigos de Jeho-v

    a,y desde que

    eramos peque

    nos, procuraron

    inculcarnos los valores cristianos a todos.

    Sin embargo, al llegar a la adolescencia,empec

    e a dudar de lo que ense

    nan los Testi-

    gos. Como no resolv estas dudas, mi fe se fue

    debilitando. Mis padres hicieron todo lo posi-ble por guiarme de vuelta al buen camino,pero yo rechac

    e su ayuda. Sin que ellos lo su-

    pieran, comenc

    e a salir con j

    ovenes queno respetaban la autoridad de nadie. Yo que-ra libertad, y me parec

    a que ellos la ten

    an.

    Ibamos de fiesta en fiesta, nos acost

    abamoscon cualquiera y abus

    abamos del alcohol y

    las drogas. Al principio me gustaba pasarel tiempo con gente que, a mi modo de ver,

    disfrutaba de la vida al m

    a-ximo.

    Pero en realidad no era fe-liz. Aquella vida era superfi-cial y vac

    a: a ninguno de

    mis amigos le importaba loque pasaba a su alrededor.En cambio, a m

    me preocu-

    paban cosas como la injusti-cia que se ve en el mundo.Cada vez me sent

    a m

    as de-

    primida.

    C

    OMO LA BIBLIA CAMBIO

    MI VIDA: Cierto da, cuando

    tena 17 a

    nos, mi madre se

    dio cuenta de que estaba muytriste, as

    que me anim

    o a dar-

    le otra oportunidad a la Bi-

    blia. Me dijo que analizara enserio sus ense

    nanzas y que luego decidiera si

    quera vivir de acuerdo con ellas. Esa conver-

    saci

    on franca hizo que me lo replantearatodo. Acced

    a que mi hermana mayor, Caro-

    line, y su esposo, Akif, me dieran clases de laBiblia. Akif no se hab

    a criado como Testigo,

    sino que haba llegado a serlo ya de adulto.

    Por eso me pareca que pod

    a expresarme con

    total libertad, algo que era muy importantepara m

    .

    LA BIBLIA LES CAMBI

    O LA VIDA

    QUE hizo que una joven regresara a la religi

    on que le hab

    an inculcado

    sus padres? Dejemos que ella misma responda.

    Ibamos de fiesta en fiesta,nos acost

    abamos con cualquiera

    y abus

    abamos del alcoholy las drogas

    Ahora mi vida

    tiene sentido(LISA ANDR

    E)

    ANO DE NACIMIENTO: 1986

    PAIS: LUXEMBURGO

    OTROS DATOS: HIJA ARREPENTIDA

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    13/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 13

    Saba que la vida que llevaba no era propia

    de un Testigo, pero pensaba que lo que yo ha-c

    a solo me afectaba a m

    . Sin embargo, al

    estudiar la Biblia, comprend que con mi

    conducta hera los sentimientos de Jehov

    a

    (Salmo 78:40, 41; Proverbios 27:11). Y no soloeso, sino que tambi

    en her

    a a muchas perso-

    nas m

    as.Cuanto m

    as estudiaba la Biblia, m

    as me

    convenca de que era la Palabra de Dios. En-

    contr

    e razones l

    ogicas y convincentes que lodemostraban, como las numerosas profec

    as

    bblicas que se hab

    an cumplido con asom-

    brosa exactitud. Todo esto meayud

    o a aclarar mis antiguas du-

    das.

    Al a

    no de volver a estudiar laBiblia, acompa

    n

    e a mis padres a

    visitar a mi hermano mayor, quetrabajaba de voluntario en la su-cursal de los testigos de Jehov

    a

    en Alemania. Me conmovi

    o verlotan feliz. Esa era la felicidad queyo buscaba! Tambi

    en me impre-

    sionaron mucho los dem

    as vo-luntarios que conoc

    . No se pare-

    can en absoluto a la gente falsa y

    adicta a las emociones fuertes

    con la que yo sol

    a salir. Poco des-pu es de aquella visita or eaDiosyle hice la solemne promesa deservirle el resto de mis d

    as. Con

    19 a

    nos me bautic

    e para hacerp

    ublica mi decisi

    on de dedicar

    mi vida a Jehov

    a.

    QUE BENEFICIOS HE OBTENIDO: Ahora mi

    vida tiene sentido. Disfruto hablando de laBiblia a los dem

    as y ayud

    andolos a cono-

    cer a Jehov

    a y sus promesas para el futuro.Mi familia tambi

    en se ha beneficiado, pues

    ya no viven preocupados por m.

    Hice muchas cosas mal en el pasado,

    pero procuro no pensar demasiado en ellas.Me concentro en que Jehov

    a es un Dios que

    perdona y me quiere mucho. Concuerdo decoraz

    on con las palabras de Proverbios 10:22:

    La bendici

    on de Jehov

    a... eso es lo que enri-quece, y

    elnoa

    nade dolor con ella.

    Hice muchas cosas malen el pasado, pero procurono pensar demasiadoen ellas

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    14/32

    14 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    DURANTE su calamitoso perodo en el poder, el

    canciller alem

    an Adolf Hitler recibi

    o decenasde miles de cartas. Los sovi

    eticos se llevaron mu-

    chas de ellas a Mosc

    u tras ocupar las proximidadesde Berl

    n en 1945. A fin de averiguar qui

    en escribi

    o

    a Hitler y por qu

    e, el historiador Henrik Eberle exa-min

    o miles de cartas almacenadas en los archivos

    de Mosc

    u. En a

    nos recientes public

    o el resultado

    de su investigaci

    on en el libro Cartas a Hitler.A Hitler le escrib

    an profesores y alumnos,

    monjas y sacerdotes, desempleados e industriales,almirantes y miembros de bajo rango de las SA[tropas de asalto], explica el historiador. Algu-nos incluso le glorificaban como la reencarnaci

    on

    del Mesas, otros le ve

    an como el Mal por antono-

    masia. Recibi

    o cartas de representantes eclesi

    as-ticos que protestaran por las atrocidades cometi-das por los adeptos del nacionalsocialismo, onazis? Lo cierto es que s

    , pero fueron contad

    si-

    mas.No obstante, Henrik Eberle s

    encontr

    o en Mos-

    c

    u un archivo con numerosas cartas de testigos deJehov

    a de distintas regiones de Alemania que de-

    nunciaban la conducta de los nazis. De hecho,Testigos de 50 pa

    ses escribieron un total de

    20.000 cartas y telegramas de protesta por el tratoque estaban recibiendo los Testigos. Miles de ellosfueron arrestados, y varios cientos murieron ejecu-tados o a consecuencia del maltrato de los nazis.Este historiador lleg

    o a la siguiente conclusi

    on:

    La cifra [de vctimas Testigos] parece peque-na frente a los millones de v

    ctimas del r

    egi-

    men nazi, pero es testimonio de un actode autoafirmaci

    on colectiva e intransi-

    gente que merece atenci

    on.

    Un acto de autoafirmaci

    oncolectiva e intransigenteque merece atenci on

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    15/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 15

    JEHOVA DIOS ha puesto a nuestro alcance un

    valioso tesoro y desea de todo coraz

    on que loencontremos. Este tesoro no nos har

    a ricos en

    bienes materiales, pero s nos proporcionar

    a algo

    que ni todo el oro del mundo puede comprar:paz interior y una vida plena y con sentido. Cu

    al

    es ese tesoro? El sabio rey Salom

    on lo explica enProverbios 2:1-6.

    El lo llama el mismsimo conocimiento de

    Dios, es decir, la verdad acerca de Dios y susprop

    ositos tal como se revela en la Biblia (ver-

    sculo 5). Este tesoro tiene varias facetas.

    Respuestas importantes. La Biblia contestapreguntas como cu

    al es el nombre de Dios (Sal-

    mo 83:18), qu

    e nos ocurre al morir (Salmo 146:3, 4) y por qu

    e estamos aqu

    (G

    enesis 1:26-28;

    Salmo 115:16). Siendo sinceros, cu

    anto cree us-ted que vale la respuesta a estas cuestiones?

    Consejos pr

    acticos. La Biblia nos ense

    nael me-

    jor modo de vivir. Nos dice, por ejemplo, c

    omolograr que el matrimonio perdure (Efesios 5:28,29, 33), qu

    e hacer para criar hijos responsables

    (Deuteronomio 6:5-7; Efesios 6:4) o c

    omo vivirfelices (Mateo 5:3; Lucas 11:28). Nuevamente,cu

    anto valor considera usted que tienen estos

    consejos de eficacia probada?

    Una descripci

    on exacta de Dios y su persona-lidad. La Biblia es la principal fuente de informa-ci

    on exacta sobre Dios. En ella se revela su natu-

    raleza (Juan 1:18; 4:24), el inter

    es que siente por

    nosotros (1 Pedro 5:6, 7) y sus maravillosas cuali-dades (

    Exodo 34:6, 7; 1 Juan 4:8). Pues bien,

    no le parece muy valioso tener informaci

    on ver-

    dica acerca de Dios?

    Sin duda, el mismsimo conocimiento de

    Dios es un tesoro espiritual. Y c

    omo podemosencontrarlo? En el vers

    culo 4 del cap

    tulo 2 de

    Proverbios, Salom

    on nos da una pista al compa-rarlo a tesoros escondidos. Claro est

    a, un teso-

    ro escondido no se descubre as como as

    . A me-

    nos que nos esforcemos, no lo encontraremos.Pues lo mismo pasa con el conocimiento de Dios:

    es un tesoro que tambi

    en est

    a oculto, en estecaso en la Biblia. As

    que tenemos que esforzar-

    nos por encontrarlo.

    Entonces, c

    omo lo encontraremos? El mismoSalom

    on lo explica. Al decir si recibes mis di-

    chos o para que inclines tu coraz

    on, indicaque necesitamos un coraz

    on obediente (vers

    cu-

    los 1 y 2). Adem

    as, habla de clamar y de seguirbuscando, es decir, debemos demostrar que deveras queremos encontrar ese tesoro (vers

    culos

    3 y 4). En otras palabras, si queremos encontrarel mism

    simo conocimiento de Dios, tenemos

    que estudiar la Biblia con empe

    no y con un cora-

    z

    on sincero (Lucas 8:15).

    Si damos ese primer paso, Jehov a se encargaradel resto. El vers

    culo 6 garantiza que Jehov

    a

    mismo da la sabidura, demodo que solo con su

    ayuda podemos captar las verdades que se en-cuentran en la Biblia (Juan 6:44; Hechos 16:14).Usted puede estar seguro de que si busca en laPalabra de Dios, encontrar

    a el mism

    simo cono-

    cimiento de Dios: un tesoro que enriquecer

    a suvida m

    as de lo que se pueda imaginar (Prover-

    bios 2:10-21).1

    1 Los testigos de Jehov

    a de todo el mundo dan clasesbblicas gratuitas a quienes desean comprender la Biblia.Puede comunicarse con ellos en su localidad o escribir ala direcci

    on de la p

    agina 4 que corresponda.

    ACERQUESE A DIOS

    Es posible hallarel mismsimo conocimiento de Dios

    LECTURA BIBLICA RECOMENDADA PARA ESTE MES:

    Proverbios 1 a 21

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    16/32

    1. Por qu

    e es vital que una parejase case para ser feliz?

    Jehov

    a, que es el Dios feliz, instituy

    o el matrimonio.Esta instituci

    on es vital para la felicidad familiar por-

    que adem

    as de satisfacer la necesidad de compa

    n

    a,proporciona un marco estable para la crianza de loshijos. Dios considera el matrimonio una uni

    on legal y

    permanente entre un hombre y una mujer (Lucas 2:1-5).

    El quiere que el esposo y la esposa sean fieles el

    uno al otro (Hebreos 13:4). Los cristianos pueden di-vorciarse y volver a casarse solo si su c

    onyuge ha co-

    metido adulterio. (Lea Mateo 19:3-6, 9.)

    2. C

    omo deben tratarseel esposo y la esposa?

    Jehov

    a cre

    o al hombre y a la mujer para desempe

    narfunciones complementarias en el matrimonio (G

    enesis

    2:18). El esposo cumple la funci

    on de cabeza, as que

    debe tomar la iniciativa en cubrir las necesidades fsicas

    de los miembros de su familia y hablarles de Dios. Tam-bi

    en debe estar dispuesto a hacer sacrificios por amor a

    su esposa. Los c

    onyuges deben amarse y respetarse.Y claro, como ninguno de los dos es perfecto, tambi

    en

    deben aprender a perdonarse si quieren ser felices. (Lea

    Efesios 4:31, 32; 5:22-25, 33, y 1 Pedro 3:7.)

    3. Debera ponerse fin a un matrimonio infeliz?

    Si una pareja tiene problemas, ambos de-ben esforzarse por tratar al otro con amor(1 Corintios 13:4, 5). La Palabra de Dios no re-comienda la separaci

    on como un medio para

    resolver las dificultades matrimoniales. Sinembargo, existen situaciones extremas en lasque un cristiano puede optar por separarse.(Lea 1 Corintios 7:10-13.)

    ENSENANZAS DE LA PALABRA DE DIOS

    C omo pueden serfelices las familias?

    Este artculo le permitir

    a encontrar en

    su propia Biblia la respuesta a algunas

    preguntas que tal vez se haya hecho.Si lo desea, los testigos de Jehov

    a pueden

    analizar estas preguntas con usted.

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    17/32

    4. Qu

    e desea Dios para los hijos?

    Jehov

    a desea que los hijos sean felices. Por eso lesense

    na el mejor modo de disfrutar de su juventud.

    Tambi

    en quiere que aprovechen la sabidura y ex-

    periencia de sus padres (Colosenses 3:20). Y valoratodo lo que los j

    ovenes hacen para alabarlo. (Lea

    Eclesiast

    es 11:912:1 y Mateo 19:13-15; 21:15, 16.)

    5. C

    omo pueden contribuir los padresa la felicidad de sus hijos?

    Los padres deben hacer lo posible por darles ali-mento, techo y abrigo (1 Timoteo 5:8). Pero esono basta. Tambi

    en tienen que ense

    narles a amar e

    imitar a Dios (Efesios 6:4). Cuando los padres sonun ejemplo de amor a Dios, eso tiene una profundainfluencia en los hijos. Una educaci

    on basada en la

    Palabra de Dios puede moldear positivamente suforma de pensar. (Lea Deuteronomio 6:4-7 y Prover-bios 22:6.)

    Los hijos necesitan que los animen y los felicitenpor sus buenas acciones. A veces tambi

    en es preci-

    so disciplinarlos y corregirlos, pues as se evitar

    a

    que hagan cosas que los perjudiquen (Proverbios22:15). Con todo, la disciplina nunca debe ser durani cruel. (Lea Colosenses 3:21.)

    Los testigos de Jehov

    a han publicadovarios librosespecialmente dirigidos a los padres y a los hijos.

    Todos est an basados en la Biblia. (Lea Salmo 19:7, 11.)

    Si desea m

    as informaci

    on, consulte el captulo 14

    de este libro, editado por los testigos de Jehov

    a.

    QUE ENSE

    NA

    realmente

    LA BIBLIA?

    17

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    18/32

    18 LA ATALAYA 1 DE OCTUBRE DE 2011

    Eso s, vaya esposo! No es para nada el

    hombre con el que habra so

    nado casarse

    cualquier juda fiel.1 No trata de parecerse a

    personajes como Abrah

    an, quien obedeci

    ohumildemente la orden divina de escuchar asu esposa, Sara (G

    enesis 21:12). Sabe muy

    poco o nada de Jehov

    a el Dios de Ester ysu Ley. Pero s

    conoce muy bien las leyes per-

    sas, una de las cuales prohbe justo lo que su

    esposa est

    a a punto de hacer: presentarse anteel rey de Persia sin haber sido convocada. Yelcastigo por desobedecer es la muerte! Aunas

    , ella se dirige al patio interior del palacio y

    se coloca a la vista del trono real, con la certe-za m

    as que probable de estar cavando su pro-

    pia tumba (Ester 4:11; 5:1).

    Qu

    e razones tiene para arriesgar su vidaesta mujer de excepcional fe? Qu

    e lecci

    on

    aprendemos de ella? Para averiguarlo, exami-

    nemos c

    omo lleg

    o a ser la reina de Persia.

    Era de [...] hermosa apariencia

    Ester es una joven hu

    erfana. No sabemosmucho de sus padres, salvo que la llamaron

    1 Por lo general, se cree que Asuero es el rey Jerjes I, em-perador de Persia de principios del siglo Vantes de Cristo.

    Hadass

    a, nombre que recibe en hebreo elmirto, hermoso arbusto de delicadas floresblancas. Al morir ellos, un buen hombre lla-mado Mardoqueo primo de Ester, aunquebastante mayor se compadeci

    o y se la llev

    o

    a vivir con

    el. Desde entonces la ha criadocomo si fuera su propia hija (Ester 2:5-7, 15).

    Los dos viven exiliados en la capital de Per-

    sia, donde seguramente son despreciados porsu fidelidad a la religi

    onylaLeydelosjud

    os.

    Sin duda, el afecto de Ester por su primo haido creciendo a medida que

    el le hablaba de

    Jehov

    a, el Dios compasivo que tantas veces li-br

    o a su pueblo y pronto volver

    a a hacerlo

    (Levtico 26:44, 45). No es de extra

    nar que

    entre ambos exista un fuerte vnculo de cari-

    no y lealtad.

    Al parecer, Mardoqueo trabaja de funciona-rio en el castillo de Susa, a cuya puerta suele

    sentarse junto con otros servidores del rey(Ester 2:19, 21; 3:3). No disponemos de infor-maci

    on sobre las ocupaciones de Ester duran-

    te su juventud, pero es bastante probable quecuide de su primo y atienda la casa, situadatal vez en la zona humilde de la ciudad, en laribera opuesta del r

    o. Probablemente le gus-

    EJEMPLOS DE FE

    Defendi

    o al pueblo de DiosSEG UN se acerca a los patios del palacio en la ciudad de Susa, Ester

    procura conservar la calma. Pero no es f

    acil, pues la construcci

    on es

    imponente. Saltan a la vista sus coloridas paredes de ladrillo esmalta-

    do con relieves de toros alados, leones y arqueros, sus columnas

    de piedra acanaladas y sus formidables estatuas. El castillo luce espec-

    tacular, erigido sobre unas inmensas plataformas cerca de las cumbres nevadas de los

    montes Zagros, con las cristalinas aguas del ro Coaspes a sus pies. Atravesando este re-

    cinto, donde todo est

    a cuidadosamente estudiado para exaltar el inmenso poder de su

    due

    no, Ester va a comparecer ante Asuero, quien se hace llamar el gran rey y es, ade-m

    as, su esposo.

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    19/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 19

    ta ir al mercado de Susa, donde los orfebres,plateros y dem

    as comerciantes venden sus

    productos. Qui

    en le iba a decir que llegara a

    disfrutar todos los das de esos art

    culos de

    lujo! En ese momento no tiene ni idea del fu-

    turo que le aguarda.Destituyen a la reina

    Cierto da, una noticia se extiende como la

    p

    olvora por toda la ciudad: esc

    andalo en lafamilia real! En el transcurso de un gran ban-quete, en el que los nobles disfrutan de vino yricos manjares, Asuero manda llamar a la her-mosa reina Vasti que est

    a con las mujeres

    en una fiesta aparte, pero ella se niega apresentarse. El rey monta en c

    olera. Humi-

    llado, pregunta a sus consejeros qu

    e casti-go imponerle. Finalmente, decide destituirlade su cargo y buscar una nueva reina. Sus

    servidores salen en busca de las vrgenes m

    as

    bellas de todo el reino, de entre las cualeselegir

    a el monarca su nueva esposa (Ester

    1:12:4).

    Cuando se entera, Mardoqueo tal vez se de-

    bate entre el orgullo y la preocupaci

    on al ob-servar con cari no a su prima y constatarun hecho innegable: se ha convertido entoda una mujer... y muy linda, por cierto.De hecho, la Biblia dice que la joven era debonita figura y hermosa apariencia (Ester2:7). Claro, Ester necesita m

    as que nunca de-

    mostrar sabidura y humildad. Si no, puede

    pasarle como a tantas personas, que, comovemos a menudo, terminan cayendo en la va-nidad y el orgullo (Proverbios 11:22). Qu

    e le

    ocurrir

    a a Ester? Se convertir

    a su belleza enuna trampa? El tiempo lo dir

    a.

    En cuanto los servidores de Asuero la ven,deciden llev

    arsela de su casa y trasladarla al

    otro lado del ro, al palacio real, con las de-

    m

    as candidatas (Ester 2:8). Cu

    anto debe dedolerle la separaci

    on a Mardoqueo, que la

    quiere como a una hija! Desde luego, no de-sea que se case con un pagano por muy reyque sea, pero no puede impedirlo. Antes deque se marche, le da consejos, que de seguro

    ella escucha con atenci

    on. De camino a laciudadela de Susa, Ester no deja de preguntar-se qu

    e ser

    a de ella y qu

    e clase de vida le estar

    a

    esperando.

    Se granjeaba favora los ojos de todos los que la ve

    an

    De un da para otro, Ester se encuentra en

    un mundo nuevo y desconocido, junto conun grupo de chicas tra

    das de todos los rinco-

    nes del extenso imperio Persa. Sin duda,

    entre ellas se da una amplia variedad depersonalidades, costumbres e idiomas. To-das est

    an al cuidado de un oficial de la

    corte llamado Hegai, quien se encarga deque durante un a

    no reciban un exclusivo

    tratamiento de belleza que incluye masajescon aceites perfumados (Ester 2:8, 12). Qu

    e

    Mardoqueo poda estar orgulloso

    de su hija adoptiva

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    20/32

    20 LA ATALAYA 1 DE OCTU BRE DE 2011

    impacto tienen en su car

    acter tantas atencio-nes? Como cabr

    a esperar, muchas se vuelven

    presumidas y coquetas, y se obsesionan conser la m

    as bella. Ser

    a ese tambi

    en el caso de

    Ester?

    Sin duda, el m

    as preocupado por la posibi-lidad de que le vayan mal las cosas es su pri-mo Mardoqueo. D

    a tras d

    a se acerca todo lo

    que puede a la casa de las mujeres para ver siEster se encuentra bien (Ester 2:11). Y la in-formaci

    on que consigue, tal vez de alg

    un

    servidor, lo llena de orgullo y alegra. Por

    qu

    e?

    Ester es tan buena que se ha ganado el cari-no de Hegai, quien le dispensa un trato espe-cial: le concede siete sirvientas y el lugar prin-cipal en la casa de las mujeres. Lo que es m

    as,

    el relato indica: Durante todo aquel tiem-

    po [...] se granjeaba favor a los ojos de todoslos que la vean (Ester 2:9, 15). Por qu e cau-sa tan buena impresi

    on? Por su belleza sin

    igual? No. Ella es mucho m

    as que una carabonita.

    Fij

    emonos en lo que dice la Biblia: Esterno hab

    a informado acerca de su pueblo ni de

    sus parientes, porque Mardoqueo mismo lehab

    a impuesto el mandato de que no lo in-

    formara (Ester 2:10). Como vemos, su primole ha pedido que no revele que es jud

    a, pues

    sabe que entre la realeza persa hay muchosprejuicios. As

    que est

    a claro que, aunque

    el

    no est

    a presente, Ester es sabia y le sigue obe-deciendo. Qu

    e contento debe de estar Mar-

    doqueo!

    Hoy da, los padres y tutores tambi

    en se

    alegran mucho cuando ven que los j

    ovenesson obedientes en todo momento, incluso

    cuando no los est

    an viendo. Y aunque a vecesse encuentren rodeados de compa

    neros fr

    vo-

    los, inmorales o violentos, pueden resistirsus malas influencias y cumplir con su de-ber. En tales casos, al igual que Ester, hacenmuy feliz a su Padre celestial (Proverbios

    27:11).Volvamos a Ester. Cuando por fin le llega elturno de presentarse ante el rey, tiene la opor-tunidad de elegir los adornos que desee para

    verse a

    un m

    as atractiva. Pero como es modes-ta, se arregla

    unicamente con lo que le ofrece

    Hegai (Ester 2:15). Tal vez razona que, para

    Ester saba que la humildad y la sabidura valan mucho m as que la belleza fsica

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    21/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 21

    ganarse el coraz

    on del monarca, no bastar

    acon ser bella, sino que ser

    an mucho m

    as

    uti-

    les cualidades como la humildad y la modes-tia, que tanto escasean en la corte. Estar

    a en

    lo cierto?

    El relato nos da la respuesta: El rey lleg

    o aamar a Ester m as que a todas las dem as muje-res, de manera que ella se granje

    o m

    as favor y

    bondad amorosa ante

    el que todas las dem

    asv

    rgenes. Y

    el procedi

    o a poner el adorno de

    realeza sobre la cabeza de ella y a hacerla rei-na en lugar de Vasti (Ester 2:17). As

    es como

    esta humilde joven se convierte en la nuevareina, la esposa del emperador m

    as poderoso

    de la

    epoca. Qu

    e cambio tan grande paraella! C

    omo se adaptar

    a a su nueva situaci

    on?

    Se le subir

    a a la cabeza?Nada m

    as lejos! En primer lugar, con-

    tin

    ua obedeciendo a su padre adoptivo ymanteniendo en secreto su origen jud

    o.

    Adem

    as, cuando Mardoqueo descubre queunos traidores pretenden asesinar al rey, Estersigue sus instrucciones y advierte a Asue-ro, logrando detener el complot (Ester 2:20-23). Nuevamente demuestra humildad yobediencia, cualidades que revelan lo fuerteque es su fe. Claro, hoy d

    a, la gente no apre-

    cia mucho la obediencia y prefiere rebelarsecontra todo. Pero quienes tienen verdaderafe, como Ester, valoran como es debido esacualidad.

    Se somete a prueba su fe

    Andando el tiempo, un tal Ham

    an comien-za a adquirir prominencia en la corte. Asuerolo nombra primer ministro convirti

    endolo

    en su mano derecha y principal consejero yordena que todos se inclinen ante

    el (Ester 3:

    1-4). Aunque Mardoqueo es leal al rey, consi-dera que obedecer ese mandato ser

    a una fal-

    ta de respeto a Dios. Sabe que Ham

    an es aga-guita, lo que probablemente indica que esdescendiente de Agag, rey amalequita ejecu-tado por el fiel profeta Samuel (1 Samuel15:33). Por si fuera poco, la naci

    on de Amaleq

    actu

    o con muchsima maldad, y Jehov

    a ter-

    min

    o conden

    andola por su hostilidad contrael y su pueblo (Deuteronomio 25:19).1 Va aarrodillarse Mardoqueo ante un miembro dela realeza amalequita? Jam

    as! La actitud

    de este buen jud

    o nos recuerda a la quehan mostrado muchos siervos fieles de Jeho-v

    a a lo largo de los siglos. Incluso cuando

    su vida corre peligro, no dudan en decir:Tenemos que obedecer a Dios como gober-

    nante m

    as bien que a los hombres (Hechos5:29).

    Ante la negativa de Mardoqueo a hacerlereverencias, Ham

    an se pone tan furioso que

    maquina un plan para acabar con

    el y, dehecho, con todos sus compatriotas. En pri-

    mer lugar, acude a Asuero y le habla mal delos jud

    os, pero sin mencionarlos por nom-

    bre. Los presenta como un pueblo insignifi-

    cante, esparcido y separado entre los pue-blos, pero rebelde y muy peligroso, puesno acata las leyes del rey. Finalmente, se ofre-ce a donar una enorme cantidad de dinero altesoro real para erradicarlos de todo el impe-rio.2 C

    omo le responde Asuero? Le da per-

    miso para emitir una orden y le entrega suanillo de sellar para que pueda aprobar en su

    nombre cualquier ley que necesite (Ester 3:5-10).

    En cuanto Ham

    an da la orden, los emisa-rios recorren el imperio al galope, procla-

    mando a los cuatro vientos la sentencia demuerte para el pueblo jud

    o. La noticia debe

    de causar gran conmoci

    on entre los habitan-tes de la lejana Jerusal

    en, quienes han regre-

    sado del exilio en Babilonia y est

    an tratan-do de reconstruir la ciudad. Si ni siquiera

    1Puede que Ham

    an fuera uno de los

    ultimos amalequi-

    tas, pues el resto de Amaleq haba sido exterminado en

    tiempos de Ezequas (1 Cr

    onicas 4:43).

    2 Ham

    an ofreci

    o 10.000 talentos de plata, lo que hoyequivaldr

    a a varios cientos de millones de d

    olares.

    Si Asuero era Jerjes I, la proposici

    on debi

    o de resultarletentadora, pues en sus infructuosas batallas contra losgriegos seg

    un parece, antes de casarse con Ester hab

    a

    perdido una gran fortuna.

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    22/32

    22 LA ATALAYA 1 DE OCTU BRE DE 2011

    cuentan todav

    a con murallas para proteger-se! Sin duda, el propio Mardoqueo no puedeevitar pensar en ellos, as

    como en sus pro-

    pios amigos y familiares de Susa. En se

    nal detristeza, se rasga la ropa, se viste de saco, seecha ceniza en la cabeza y sale por la ciudaddando gritos. Ham

    an, por el contrario, se

    sienta a beber con el rey, sin conmoverse lom

    as m

    nimo por el sufrimiento que ha oca-

    sionado a los judos y sus amigos de Susa (Es-

    ter 3:124:1).

    Mardoqueo sabe que no debe quedarse debrazos cruzados. Pero qu

    e puede hacer? Es-

    ter le enva unas vestiduras para animarlo,

    pero

    el se niega a aceptarlas. Al final llega aentender algo que probablemente lleva tiem-po pregunt

    andose: la raz

    on por la que Jehov

    a

    ha permitido que se lleven a su prima y la ca-

    sen con un rey pagano. Sin demora, le env

    a aEster un mensaje rog andole que intercedaante Asuero por el propio pueblo de ella(Ester 4:4-8).

    Cuando la reina recibe el mensaje, el cora-z

    on le da un vuelco. Se enfrenta a la mayor

    prueba de fe de toda su vida, y en su respuestaa Mardoqueo admite sin reparos que sientemiedo. A qu

    e se deben los temores? A que la

    ley persa ordena la ejecuci

    on de quien se pre-sente ante Asuero sin ser convocado. Cuando

    alguien no sigue esta regla de protocolo, suunica escapatoria es que el rey extienda su ce-tro de oro para perdonarlo. Pero si anterior-mente no mostr

    o clemencia a Vasti cuando se

    neg

    o a acudir a su llamado, por qu

    e va a tra-tarla mejor a ella? Para colmo, hace ya treintad

    as que no la ha invitado a verlo, lo que tal

    Ester arriesg

    o su vida para proteger al pueblo de Dios

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    23/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 23

    vez signifique que ya no le interesa al capri-choso monarca (Ester 4:9-11).1

    Mardoqueo trata de fortalecer la fe de su pri-ma asegur

    andole que Jehov

    a librar

    aalosjud

    os

    del ataque, sea vali

    endose de ella o de cualquierotro medio. Y le aclara que, si se niega a actuar,dif

    cilmente podr

    a salvarse cuando la persecu-

    ci

    on cobre fuerza. De esta manera, Mardoqueodemuestra que conf

    a plenamente en su Dios,

    1 Jerjes I tena fama de antojadizo y violento. El histo-

    riador griego Her

    odoto ofrece ejemplos de su mal genioal relatar las campa

    nas militares que realiz

    o contra Grecia.

    En cierta ocasi on orden o construir un puente sustentadosobre barcos a trav

    es del estrecho del Helesponto. Cuan-

    do una tempestad lo destroz

    o, se enfureci

    o tanto que man-d

    o decapitar a los ingenieros y castigar a las aguas mal-

    dici

    endolas en voz alta y azot

    andolas con l

    atigos. Durantela misma campa

    na, cuando un hombre acaudalado le su-

    plic

    o que eximiera a uno de sus hijos de servir en el ej

    er-cito, el rey orden

    o que cortaran al joven por la mitad y ex-

    pusieran su cad

    aver para escarmiento de todos.

    quien siempre cumple sus promesas y nuncapermitir

    a que su pueblo sea aniquilado (Jo-

    su

    e 23:14). Finalmente, le pregunta a Ester:Qui

    en hay que sepa si has alcanzado la digni-

    dad real para un tiempo como este? (Ester 4:

    12-14). Sin duda, la fe de Mardoqueo es muyfuerte. Podra decirse lo mismo de la nuestra?(Proverbios 3:5, 6.)

    La fe de Ester supera el miedo a la muerte

    Ester comprende que ha llegado el momentode la verdad. Le pide a Mardoqueo que todoslos jud

    os se unan a ella en un ayuno de tres

    das. Y demuestra su extraordinaria fe y valen-

    ta al pronunciar unas palabras que han resona-

    do a lo largo de los siglos: En caso de que tengaque perecer, tendr

    e que perecer (Ester 4:15-

    17). Durante los tres das, sin duda ora con m asfervor que nunca. Cuando llega la hora, se vistecon sus mejores galas, con la intenci

    on de agra-

    dar al rey, y sale de sus aposentos.

    Como vimos al principio, Ester se dirige a lapresencia del rey. De camino, seguro que orasin parar, llena de inquietud. Luego entra al pa-tio, desde donde ve a Asuero sentado en el tro-no. Tratando de intuir su estado de

    animo, pro-

    bablemente se fija en su rostro, enmarcado por

    los cuidad

    simos rizos de su cabello y de su bar-ba perfectamente cuadrada. Cu anto tarda suesposo en reparar en ella? No lo sabemos, perolos segundos deben de hac

    ersele eternos a Es-

    ter. Lo cierto es que, aunque se sorprende alverla, enseguida relaja su expresi

    on facial y le

    extiende el cetro de oro (Ester 5:1, 2).

    Ester ha conseguido que el rey le concedauna audiencia. Se ha puesto inequ

    vocamente

    del lado de Jehov

    a y su pueblo. Qu

    e ejemplode fe para los siervos de Dios de todas las

    epo-

    cas! Ahora bien, esto no es m

    as que el principiode la historia. C

    omo se las arreglar

    a Ester

    para convencer a Asuero de que su conseje-ro favorito, Ham

    an, no es m

    as que un infa-

    me conspirador? Lograr

    a salvarles la vida alos jud

    os? Lo descubriremos en un pr

    oximo

    artculo.

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    24/32

    VERDAD que mantenerse despierto en laescuela es importante? Es cierto quemuchos se duermen durante las clases, pero sit

    u quieres aprender algo, tienes que mante-

    nerte despierto. Lo mismo pasa si vas a reu-niones donde se estudia la Biblia.

    Qu

    e podra ayudarte a mantenerte des-

    pierto?1... Quiz

    as podras acostarte m

    as tem-

    prano por las noches. O tal vez podras dormiruna siesta. En la Biblia se habla de un jovenque se qued

    o dormido una noche mientras

    escuchaba al ap

    ostol Pablo. Veamos qu

    e po-demos aprender de ese relato. Busca el cap

    tu-

    lo 20 del libro de Hechos y lee los versculos 7

    a 12.

    Pablo estaba visitando la congregaci

    on deuna ciudad costera llamada Troas. La Bibliadice que como

    el iba a partir al d

    a siguien-

    te en barco, prolong o su discurso hasta lamedianoche. El relato sigue contando que,sentado a la ventana, cierto joven de nombreEutico se abism

    o en profundo sue

    no mientras

    Pablo segua hablando. Te gustar

    a saber

    qu

    e ocurri

    o entonces?...

    Eutico cay

    o desde el tercer piso. Todos losque estaban all

    , incluido Pablo, bajaron las

    escaleras lo m

    as r

    apido que pudieron. Perocuando llegaron abajo, encontraron a Eutico

    muerto. Te imaginas lo tristes que debieronponerse?... La Biblia explica que Pablo lo ro-de

    o con sus brazos y lo apret

    o contra

    el. En-

    tonces dijo muy emocionado: Calma, Eutico

    1 Si le est

    a leyendo el artculo a un ni

    no, haga una pausa tras

    los puntos suspensivos y permita que responda.

    DE PADRES A HIJOS

    Ocasiones en las que

    no debemos dormirnos

    24

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    25/32

    est

    a bien!. Y as era, pues Dios le hab

    a de-

    vuelto la vida al joven.

    Qu

    e nos ense

    na el relato de Eutico sobreDios?... Para empezar, que Jehov

    a, nuestro Pa-

    dre celestial, puede devolver la vida a los que

    han muerto, incluidos los ni nos. Adem as, el tecomprende mejor que nadie y te quiere mu-cho, a

    un m

    as que tus propios padres. Cuando

    Jes

    us estuvo en la Tierra, demostr

    o que amabaa los ni

    nos tanto como su Padre Jehov

    a. Ade-

    m

    as de abrazarlos y bendecirlos, resucit

    o a va -rios j

    ovenes, entre ellos una ni

    nade12a

    nos.

    Qu

    e sientes por Dios al saber que te quieretanto?... As

    es, todos sentimos mucho cari

    no

    por

    el, y por eso queremos obedecerle. Quie-

    res saber qu

    e podemos hacer para demos-trarle que lo amamos?... Podemos decirleque lo queremos, igual que Jes

    us, que dijo:

    Yo amo al Padre. Pero

    el hizo algo m

    as: de-mostr

    o con acciones que lo amaba.

    Jes

    us obedeci

    o a Dios. Yo siempre hago lascosas que le agradan, afirm

    o. Y si nosotros

    queremos obedecer a Dios para complacerloa

    el y a su Hijo, nos esforzaremos por mante-

    nernos despiertos en la escuela y en las reu-niones donde se estudia la Biblia.

    LECTURA BIBLICA

    Hechos 20:7-12Lucas 8:49-56Juan 8:29; 14:31

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    26/32

    26 LA ATALAYA 1 DE OCTU BRE DE 2011

    Muchos historiadores y arque ologos consideran que Jerusal en fue destruida en el a no586

    o 587 a.e.c. [antes de la era com

    un].1 Entonces, por qu

    e dicen los testigos de Jehov

    a

    que ocurri

    o en el a

    no 607 a.e.c.? Qu

    e pruebas sustentan esa fecha?

    ASI se expres

    o uno de nuestros lectores. Pero

    por qu

    e debe interesarnos la fecha exacta

    en que el rey babilonio Nabucodonosor II arra-s

    o Jerusal

    en? Primero, porque ese aconteci-

    miento marc

    o un antes y un despu

    es en la his-toria del pueblo de Dios. Un historiador b

    blico

    afirm

    o que ese suceso encamin

    o a los judos a

    una cat astrofe, la gran cat astrofe. En esa fe-cha dej

    o de existir el templo que por m

    as de

    cuatrocientos a

    nos haba sido el centro de ado-

    raci

    on del Dios Todopoderoso. Un salmista selament

    o as

    : Dios m

    o, [...] han profanado tu

    Templo santo, han reducido a ruinas Jerusa-l

    en (Salmo 79:1,Biblia de Navarra [BN]).2

    La segunda raz

    on para interesarnos en qu

    e

    a

    no exacto comenz

    o la gran cat

    astrofe es quenuestra fe en la Palabra de Dios se ver

    a reforza-

    1Ambos a

    nos aparecen en fuentes extrab

    blicas. Para

    simplificar la redacci

    on, en esta serie solo nos referiremosal a

    no 587 a.e.c.

    2 Los testigos de Jehov

    a publican una traducci

    on confia-ble de la Biblia conocida como la Traducci

    on del Nue-

    vo Mundo de las Santas Escrituras. Si usted no es testigode Jehov

    a, quiz

    as prefiera consultar otras traducciones.

    En este artculo se citan varias versiones que gozan de am-

    plia aceptaci

    on.

    da. Por qu

    e? Porque nos ayudar

    a a entenderque la restauraci

    on de la religi

    on verdadera en

    Jerusal

    en cumpli

    o una profeca detallada. As

    pues, por qu

    e defienden los Testigos una fechaque difiere en unos veinte a

    nos de la cronolo-

    ga m

    as aceptada? En pocas palabras, por las

    pruebas que la misma Biblia aporta.

    Setenta a

    nos para qui

    en?

    A

    nos antes de la destrucci

    on de Jerusal

    en, elprofeta jud

    o Jerem

    as dio una pista esencial

    para entender la cronologa b

    blica. A todos

    los habitantes de Jerusal

    en les advirti

    o: Estepa

    s entero se convertir

    a en ruina, en espanto.

    Estas naciones servir

    an al rey de Babilonia se-tenta a

    nos (Jerem

    as 25:1, 2, 11, BN). El profe-

    ta a

    nadi

    o m

    as tarde: Esto es lo que ha dichoJehov

    a: Conforme se cumplan setenta a

    nos en

    Babilonia yo dirigir

    e mi atenci

    on a ustedes, yciertamente establecer

    e para con ustedes mi

    buena palabra tray

    endolos de vuelta a este lu-gar (Jerem

    as 29:10). Qu

    e importancia tie-

    nen estos setenta a

    nos? Y c

    omo nos ayudaeste per

    odo de tiempo a concretar la fecha de

    la destrucci

    on de Jerusal

    en?

    Cu

    ando fue destruida Jerusal

    en?PRIMERA PARTE POR QU

    E ES IMPORTANTE SABERLO?

    QUE MUESTRAN LAS PRUEBAS?

    Este es el primero de dos artculos que analizar

    an

    cuestiones relacionadas con la fecha en que fue detruida la antigua Jerusal

    en. Esta serie, que aparece

    en dos n

    umeros consecutivos de La Atalaya, ofrecerespuestas bien documentadas y basadas en la Biba preguntas que han intrigado a algunos lectores.

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    27/32

    LA ATALAYA 1 DE OCTUB RE DE 2011 27

    Algunas traducciones vierten Jeremas 29:10

    de forma diferente, y en vez de hablar de seten-ta a

    nos en Babilonia, dicen para Babilonia

    (BN). Deah que algunos historiadores afirmen

    que este perodo de setenta a

    nos alude al domi-

    nio del Imperio babil

    onico. Seg

    un la cronolo-ga extrabblica, los babilonios dominaron latierra de la antigua Jud

    a y Jerusal

    en durante

    unos setenta a

    nos, que van desde alrededor dela

    no 609 a.e.c. hasta el 539 a.e.c., a

    no en que la

    capital del imperio, Babilonia, fue conquistada.

    No obstante, la Biblia indica que esos setentaa

    nos ser

    an un castigo de Dios contra la gente

    de Jud

    a y Jerusal

    en, un pueblo que se haba

    comprometido a obedecerle (Exodo 19:3-6).

    Cuando ellos se negaron a corregir su mala

    conducta, Dios les avis

    o: Envo a buscar [...] a

    Nabucodonosor, rey de Babilonia, [...] contraeste pa

    s, contra sus habitantes y contra todas

    las naciones de su alrededor (Jeremas 25:4, 5,

    8, 9, BN). Es cierto que las naciones vecinastambi

    en sufrir

    an la ira de Babilonia, pero Jere-

    mas llam

    o a la destrucci

    on de Jerusal

    en y a los

    setenta a

    nos de exilio que le seguiran el casti-

    go [...] de mi pueblo, pues como

    el mismo se-nal

    o, mucho ha pecado Jerusal

    en (Lamenta-

    ciones 1:8; 3:42; 4:6, La Santa Biblia, Evaristo

    Martn Nieto,1980).

    Por tanto, la Biblia muestra que Jud

    a fue cas-tigada con dureza durante setenta a

    nos y que

    Dios utiliz

    o a los babilonios como instrumentode castigo. Con todo, Dios les dijo a los jud

    os:

    Cuando se cumplan setenta a

    nos [...], me ocu-par

    e de ustedes [...] tray

    endolos de nuevo a este

    lugar, es decir, a Jud

    a y Jerusal

    en (Jeremas

    29:10,La Biblia de Nuestro Pueblo [BNP]).

    Cu

    ando comenzaron

    los setenta a

    nos?El historiador inspirado Esdras, quien vivi odespu

    es de que se cumplieran los setenta a

    nos

    que profetiz

    o Jeremas, escribi

    o respecto al rey

    Nabucodonosor: Desterr

    o a Babilonia a los su-pervivientes de la matanza, donde se convirtie-

    ron en esclavos suyos y de sus descendientes,

    hasta la llegada del imperio persa. As se cum-

    pli

    o la palabra del Se

    nor pronunciada por me-dio de Jerem

    as: Hasta que haya recuperado

    sus descansos sab

    aticos, el pas descansar

    a du-

    rante el tiempo de la desolaci

    on que durar

    a se-

    tenta a

    nos (2 Cr

    onicas 36:20, 21, La Palabra[LP]).

    Esto significa que los setenta a

    nos seran un

    perodo de descanso sab

    atico para la tierra de

    Jud

    a y Jerusal

    en. Durante ese tiempo no sera

    cultivada: ni se plantaran semillas ni se poda-

    ran las vi

    nas (Lev

    tico 25:1-5, BN). En vista de

    la desobediencia del pueblo de Dios, entre cu-yos pecados tal vez estuviera no guardar todoslos a

    nos sab

    aticos, el castigo consisti

    o en que

    su tierra no sera cultivada ni habitada por se-

    tenta a

    nos (Lev

    tico 26:27, 32-35, 42, 43).Cu ando estuvo la tierra de Jud a desolada yabandonada? Lo cierto es que los babilonios,cumpliendo

    ordenes de Nabucodonosor, ataca-

    ron Jerusal

    en dos veces, y entre ambos ataquestranscurrieron unos diez a

    nos. Cu

    ando comen-

    zaron los setenta a

    nos? No pudo ser tras el pri-mer asedio. Por qu

    e no? Porque aunque en esa

    ocasi

    on Nabucodonosor se llev

    o muchos prisio-neros a Babilonia, tambi

    en dej

    o gente en el pa

    s.

    Adem

    as, permiti

    o que Jerusal

    en quedara en pie.

    Durante los a

    nos que siguieron a la primera de-portaci on, la clase de condici on humilde quequed

    o en Jud

    a vivi

    o de lo que produc

    a la tierra

    (2 Reyes 24:8-17). Pero despu

    es, los aconteci-mientos dieron un giro radical.

    A causa de una rebeli

    on de los judos, los ba-

    bilonios regresaron a Jerusal

    en (2 Reyes 24:20;25:8-10). Esta vez arrasaron la ciudad y su sagra-do templo, y llevaron a muchos de sus habitan-tes al cautiverio en Babilonia. En dos meses,todos [los que hab

    an quedado] huyeron a

    Egipto, grandes y peque

    nos, junto con los ofi-ciales, pues tem

    an a los babilonios (2 Reyes

    25:25, 26, Nueva Versi

    on Internacional). Fuesolo entonces, en el s

    eptimo mes jud

    o de tisri

    (septiembre-octubre) de ese a

    no, cuando latierra qued

    o desolada y abandonada y comen-

    z

    o su descanso sab

    atico. Mediante el profeta

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    28/32

    Jeremas, Dios record

    o a los refugiados jud

    os

    que estaban en Egipto: Ustedes han visto todaslas calamidades que envi

    e sobre Jerusal

    en y so-

    bre las ciudades de Jud

    a: ah las tienen hoy,

    arruinadas y sin habitantes (Jeremas 44:1, 2,

    BNP). As pues, todo apunta a que este suceso

    marc o el inicio de los setenta a nos. Y en qu ea

    no ocurri

    o eso? Para responder a esta pregun-

    ta, debemos averiguar cu

    ando concluyeron lossetenta a

    nos.

    Cu

    ando concluyeronlos setenta a

    nos?

    El profeta Daniel, quien vivi

    o en Babiloniahasta la llegada del imperio persa, calcul

    o

    cu

    ando deban concluir los setenta a

    nos. Yo,

    Daniel escribi

    o, estuve investigando en las

    Escrituras sobre los setenta a

    nos que tena que

    permanecer Jerusal

    en en ruinas, seg

    un la pala-

    bra dirigida por el Se

    nor al profeta Jeremas.

    (Daniel 9:1, 2,LP.)

    Esdras medit

    o en las profecas de Jerem

    as y

    asoci

    o el final de los setenta a

    nos con el mo-

    mento en que Jehov

    a movi

    o el espritu de

    Ciro rey de Persia; y

    este hizo pasar preg

    on portodo su reino (2 Cr onicas 36:21, 22, Versi onModerna). Cu

    ando fueron liberados los ju-

    dos? El preg

    on que puso fin al exilio se emiti

    o

    en el primer a

    no de Ciro, el rey de Persia (v

    ease

    el recuadro Una fecha hist

    orica aceptada portodos). Y para el oto

    no del 537 a.e.c., los jud

    os

    haban regresado a Jerusal

    en a fin de restable-

    cer la adoraci

    on verdadera (Esdras 1:1-5; 2:1; 3:

    1-5).

    As pues, la cronolog

    a b

    blica indica que los

    setenta a

    nos fueron un perodo literal que fina-

    liz

    oenela

    no 537 a.e.c. Y si retrocedemos seten-

    Fuentes en que se basan los expertos para calcular que Ciro IIconquist

    o Babilonia en el a

    no 539 a.e.c.:

    Antiguos textos hist

    oricos y tablillas cuneiformes: Diodoro de Si-cilia (c. 80-20 a.e.c.) escribi

    o que Ciro subi

    o al trono de Persia en

    el a

    no en que se celebraba la quincuag

    esima quinta Olimpada

    (Biblioteca Hist

    orica, libro IX, 21). Ese a

    no fue el 560 a.e.c. Seg

    un elhistoriador griego Her odoto (c. 485-425 a.e.c.), Ciro fue asesinadodespu

    es de un reinado, en total, de veintinueve a

    nos, lo que im-

    plica que muri

    o en el a

    no treinta de su reinado, el 530 a.e.c. (His-toria, libro I, Cl

    o, 214). Las tablillas cuneiformes muestran que

    Ciro domin

    o la regi

    on del imperio babil

    onico por nueve a

    nos an-tes de fallecer. Si retrocedemos nueve a

    nos a partir de su muerte

    en el 530 a.e.c., llegamos al 539 a.e.c., cuando Ciro conquist

    o Ba-bilonia.

    ' Tablilla babil

    onica cuneiforme que confirma un dato clave: Estatablilla astron

    omica de arcilla (BM 33066) confirma que Ciro falle-

    ci

    o en el 530 a.e.c. Aunque contiene errores en las posiciones delos astros, describe dos eclipses lunares que tuvieron lugar en els

    eptimo a

    no de Cambises II, hijo y sucesor de Ciro. Ambos eclip-

    ses coinciden con los observados en Babilonia el 16 de juliodel 523 a.e.c. y el 10 de enero del 522 a.e.c., lo que indica que els

    eptimo a

    no de Cambises comenz

    o en la primavera del 523 a.e.c.

    Eso convertira al 529 a.e.c. en el primer a

    no de su reinado. Por

    tanto, el

    ultimo a

    no de Ciro sera el 530 a.e.c., y el 539 a.e.c. el pri-

    mero en que gobern

    o Babilonia.

    UNA FECHA HISTORICA ACEPTADA POR TODOS

    Tablilla:

    TheTrustees

    ofthe

    BritishMuseum

    28

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    29/32

    ta a

    nos en el tiempo, llegamos a la fecha en quecomenz

    o ese per

    odo: el a

    no 607 a.e.c.

    Ahora bien, si las pruebas que ofrecen las Es-crituras inspiradas se

    nalan que Jerusal

    en fue

    destruida en el a

    no 607 a.e.c., por qu

    e ase-

    guran muchos expertos que eso ocurri

    o enel 587 a.e.c.? Ellos se apoyan en dos fuentes deinformaci

    on: las obras de varios historiadores

    cl

    asicos y el Canon de Tolomeo. Son estas dosfuentes m

    as confiables que las Santas Escritu-

    ras? Veamos.

    Los historiadores cl

    asicos

    Los historiadores de

    epocas m

    as cercanas a ladestrucci

    on de Jerusal

    en presentan datos dis-

    tintos sobre los reyes neobabil

    onicos (v

    ease elrecuadro Reyes neobabil

    onicos).1 La secuen-

    cia de acontecimientos que ellos proponenno concuerda con la de la Biblia. Entonces, sepuede confiar en sus escritos?

    Uno de los historiadores que vivi

    o m

    as cercade la

    epoca neobabil

    onica fue Beroso, quien

    era babilonio y sacerdote de Bel. Escribi

    o suobra Babyloniaca alrededor del a

    no 281 a.e.c.,

    pero actualmente solo se conservan fragmen-tos en los escritos de otros historiadores. Berosoafirma que emple

    o libros que se hab

    an con-

    servado con gran esmero en Babilonia.1 FueBeroso un historiador fidedigno? Examinemosun caso en particular.

    1 El Imperio neobabil

    onico comenz

    o con el reinado deNabopolasar, el padre de Nabucodonosor, y termin

    o con

    el reinado de Nabonido. A los expertos les interesa este pe-rodo porque abarca la mayor parte de los setenta a

    nos de

    la desolaci

    on de Jud

    a y Jerusal

    en.

    Beroso escribi

    o que el rey asirio Senaque-rib ascendi

    o al trono despu

    es del reina-

    do de [su] hermano, y despu

    es de

    el suhijo [Asarhadd

    on rein

    o] ocho a

    nos, y luego

    Sammuges [Sama

    s-

    sum-ukin] veinti

    un a

    nos

    (III, 2.1, 4). Sin embargo, documentos hist

    ori-cos babil onicos escritos mucho antes de laepoca de Beroso indican que Senaquerib suce-di

    o en el trono a su padre, Sarg

    on II, no a

    su hermano; que Asarhadd

    on gobern

    o docea

    nos y no ocho, y que

    Sama

    s-

    sum-ukin gober-

    n

    o veinte a

    nos, no veintiuno. El historiadorRobartus J. van der Spek admiti

    o que Beroso

    consult

    o las Cr

    onicas de Babilonia, pero escri-bi

    o: Esto no le impidi

    o hacer sus propias a

    na-

    diduras e interpretaciones.2

    Qu

    e opinan sobre Beroso otros especialis-tas? En el pasado se consideraba que Berosoera un historiador, declar

    o Stanley M. Bur-

    stein, quien estudi

    o a fondo las obras de Bero-so. Y lleg

    o a la siguiente conclusi

    on: Como

    historiador, su trabajo sera inaceptable. Inclu-

    so en su estado fragmentario actual, la Babylo-niaca contiene inexactitudes que sorprendenpor su obviedad [...]. Un historiador no puedeequivocarse as

    , pero claro, el objetivo de Bero-

    so no era elaborar un registro hist

    orico.3

    Llegados a este punto, qu

    e piensa usted?Deben calificarse los c

    alculos de Beroso como

    coherentes y exactos? Y qu

    e hay de otros histo-riadores antiguos que, en su mayor parte, basa-ron sus cronolog

    as en los escritos de Beroso?

    Puede decirse que sus conclusiones son dig-nas de confianza?

    REYES NEOBABILONICOS

    Si estos historiadores son confiables, por qu

    e no coinciden en algunos datos?

    Reyes

    BEROSO POLIHISTOR JOSEFO TOLOMEOc. 350-270 a.e.c. 105-? a.e.c. 37-?100 e.c. c. 100-170 e.c.

    Nabopolasar 21 20 21

    Nabucodonosor II 43 43 43 43

    Aw

    el-Marduk 2 12 18 2

    Neriglissar 4 4 40 4

    Labasi-Marduk 9 meses 9 meses

    Nabonido 17 17 17 17

    Duraci

    on de los reinados (en a

    nos) seg

    un los historiadores cl

    asicos

    Fotografatomadaporgentileza

    delMuseoBrit anico

  • 7/30/2019 Atalaya Oct 1 2011

    30/32

    El Canon de Tolomeo

    Esta lista de reyes de ClaudioTolomeo, astr

    o-nomo del siglo II de nuestra era, tambi

    en

    se utiliza para respaldar la fecha tradicionalde 587 a.e.c. El Canon est

    a considerado la

    columna vertebral de la cronolog

    a de la histo-ria antigua, que incluye el perodo neobabil o-nico.

    Tolomeo compil

    o su lista unos seiscientosa

    nos despu

    es de finalizar el per

    odo neobabil

    o-

    nico. Entonces, c

    omo determin

    o la fecha enque el primer rey de su lista comenz

    o a regir?

    Tolomeo explic

    o que emple

    o c

    alculos astro-n

    omicos en parte basados en eclipses luna-

    res para calcular cu

    ando comenz

    o el reinadode Nabonasar, el primer monarca de su lista.4

    Christopher Walker, del Museo Brit

    anico, se

    na-l o que el Canon de Tolomeo estaba pensadopara facilitar a los astr

    onomos una cronolog

    a

    coherente, y no para dar a los historiadoresuna cr

    onica exacta del ascenso y muerte de los

    reyes.5

    El profesor Leo Depuydt, uno de los defenso-res m

    as entusiastas de Tolomeo, declar

    o: Se

    sabe desde hace mucho que el Canon es astro-n

    omicamente fidedigno. [...] Pero eso no impli-

    ca que lo sea en sentido hist

    orico. Y a

    nadi

    o:Respecto a los primeros reyes [entre los que fi-guran los neobabil

    onicos], habr

    a que compa-

    rar el Canon, reino por reino, con los textoscuneiformes.6

    Qu

    e son los textos cuneiformes que nospermiten evaluar la exactitud hist

    orica del Ca-

    non de Tolomeo? Son documentos escritospor escribas que vivieron durante la

    epoca

    neobabil

    onica o cerca de ella, como las Cr

    oni-cas de Babilonia, listas de reyes y tablillasadministrativas.7

    Hay diferencias entre la lista de Tolomeo ylos textos cuneiformes? En el recuadro de aba-

    jo, titulado Diferencias entre el Canon de To-lomeo y las tablillas antiguas, se compara unaporci

    on del Canon con un documento cunei-

    forme. Observe que Tolomeo solo anot

    o cuatroreyes entre los gobernantes babil

    onicos Kanda-

    lanu y Nabonido. Sin embargo, en el texto cu-neiforme que contiene la lista de reyes deUruk aparecen siete reyes en ese mismo pe-

    CANON DE TOLOMEONabonasar

    Nabu-nadin-zeri (Nadinu)Nabu-mukin-zeri y Pulu

    Ululai (Salmanasar V),rey de Asiria

    Merodac-balad

    anSarg

    on II, rey de Asiria

    Primer perodo sin reyes

    Belibos (B

    el Ibni)Assur-nadin-shumi

    Nergal-uzhezib

    Mushezib-MardukSegundo per

    odo sin reyes

    Asarhadd

    on, rey de AsiriaSama

    s-

    sum-ukin

    Kandalanu

    NabopolasarNabucodonosor

    Aw

    el-MardukNeriglissar

    NabonidoCiro

    Cambises

    LISTA DE LO