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El despertar del monstruo. Buscando al asesino de Hélène (1) por Vigee-Lebrun Louis Althusser asesinó a su esposa, Hélène, estrangulándola. Después bajó las escaleras del edificio de la Escuela Normal Superior, en París, donde vivía, y comunicó al director de la institución, Jean Bousquet, la noticia: “He matado a mi esposa”. Ella tenía 70 años, él 62, y hacía muchos años que vivían juntos. Si no fuera porque Althusser es una de las mentes maestras de la filosofía del siglo XX y uno de los creadores del posmarxismo, este hecho no habría ocupado las cientos de páginas de prensa que ocupó. Nuestro mundo está lleno de asesinos y de víctimas. Yo quiero hacerme preguntas sobre unos y otras. En 1980, Althusser tenía la sensación de que la humanidad iba a entrar en una crisis moral y política sin precedentes. Pensaba en la catástrofe total. Su miedo iba en aumento. Su relación con Hèléne fue siempre absoluta, y así la definía. Habían abandonado toda aspiración al honor académico o mundano. Creían que la humanidad iba a entrar en una fase definitiva de destrucción. Y la crisis estallaría en Moscú y en Roma. Althusser fue a Roma para entrevistarse con Juan Pablo II. Deseaba comunicarle sus presentimientos. Al principio de noviembre del 1980. Althusser abandonó su cátedra en la ENS, aunque conservó la vivienda que ahí tenía. Su voz, dicen sus amigos, era ya cavernosa y profética. Escribe “La realidad es terrorífica. No puedo leer ni escribir. Hay una brizna de esperanza, pero tan pequeña que resulta casi insustancial”. El monstruo que había estado consumiéndole durante toda la vida empezaba a adueñarse de su pensamiento. No dejaba de llamar. Depresivo, compulsivo, misógino. Dicen que su despacho estaba lleno de libros, de papeles. Parecía el lugar de trabajo de un activo intelectual. Mas, si se fijaba bien la vista, se veía cómo aquellos papeles y

El Despertar Del Monstruo(Althusser)

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Louis Althusser nació en Birmandreis, Argelia francesa y estudió en la Escuela Normal Superior (Francia) en París, donde más tarde se convirtió en profesor de Filosofía. Durante su juventud se sintió fuertemente identificado con el Cristianismo. Fue luego uno de los principales referentes académicos del Partido Comunista Francés (en cuyo interior se involucró en agrias disputas teóricas que desembocarían en su famosa autocrítica), y su pensamiento puede ser considerado como una respuesta a múltiples interpretaciones del marxismo, entre ellas el empirismo y el humanismo. Y aunque sea habitualmente encasillado como un marxista estructuralista, su relación con las modalidades del estructuralismo francés es muy singular.Participó en la II Guerra Mundial, en la cual fue hecho prisionero por el ejército alemán en Vannes en 1940, y pasó cinco años internado en un Stalag, un campo de prisioneros de guerra. Tras el final de la guerra, en 1945, logró entrar en la Escuela Normal Superior (Francia). Durante los tres años que le llevó preparar su examen, estudió intensamente el Idealismo alemán del siglo XIX. Uno de sus docentes fue Maurice de Gandillac.En 1947 le fue diagnosticado un desequilibrio mental, y fue internado en un hospital psiquiátrico, por una "Psicosis maníaco-depresiva, causante de accesos melancólicos repetitivos". Durante el resto de su vida sufrirá problemas psiquiátricos, y será internado una veintena de veces más, de modo intermitente. Fue psicoanalizado por René Diatkine. A pesar de ello, durante muchos años trabajó como preparador en la Escuela Normal, y sus alumnos recordaron siempre el empeño en su formación, su disponibilidad y la amplitud de sus perspectivas.En 1980 estranguló a su mujer Hélène, bastante mayor que él y compañera de ideas. Fue internado en un hospital psiquiátrico, adonde acudió un juez para instruir la causa por homicidio. Althusser fue procesado, pero el mismo día el juez archivó las diligencias, siguiendo los dictámenes de tres expertos que señalaron que Althusser había cometido el asesinato en un acto de locura. La derecha francesa, por su parte, acusó a la izquierda de mediar para que Althusser no ingresara en prisión. Murió el 23 de octubre de 1990, aquejado de una insuficiencia cardíaca. En sus peores momentos fue visitado asiduamente por Michel Foucault y Jacques Derrida.Su autobiografía, El porvenir es largo (L'avenir dure longtemps), publicada en 1992, puso en claro su desgarrada posición vital. En 2011 se han publicado las Cartas a Elena, que ponen a la luz la compleja relación con su mujer.

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El despertar del monstruo. Buscando al asesino de Hlne (1) por Vigee-Lebrun Louis Althusser asesin a su esposa, Hlne, estrangulndola. Despus baj las escaleras del edificio de la Escuela Normal Superior, en Pars, donde viva, y comunic al director de la institucin, Jean Bousquet, la noticia: He matado a mi esposa. Ella tena 70 aos, l 62, y haca muchos aos que vivan juntos. Si no fuera porque Althusser es una de las mentes maestras de la filosofa del siglo XX y uno de los creadores del posmarxismo, este hecho no habra ocupado las cientos de pginas de prensa que ocup. Nuestro mundo est lleno de asesinos y de vctimas. Yo quiero hacerme preguntas sobre unos y otras. En 1980, Althusser tena la sensacin de que la humanidad iba a entrar en una crisis moral y poltica sin precedentes. Pensaba en la catstrofe total. Su miedo iba en aumento. Su relacin con Hlne fue siempre absoluta, y as la defina. Haban abandonado toda aspiracin al honor acadmico o mundano. Crean que la humanidad iba a entrar en una fase definitiva de destruccin. Y la crisis estallara en Mosc y en Roma. Althusser fue a Roma para entrevistarse con Juan Pablo II. Deseaba comunicarle sus presentimientos. Al principio de noviembre del 1980. Althusser abandon su ctedra en la ENS, aunque conserv la vivienda que ah tena. Su voz, dicen sus amigos, era ya cavernosa y proftica. Escribe La realidad es terrorfica. No puedo leer ni escribir. Hay una brizna de esperanza, pero tan pequea que resulta casi insustancial. El monstruo que haba estado consumindole durante toda la vida empezaba a aduearse de su pensamiento. No dejaba de llamar. Depresivo, compulsivo, misgino. Dicen que su despacho estaba lleno de libros, de papeles. Pareca el lugar de trabajo de un activo intelectual. Mas, si se fijaba bien la vista, se vea cmo aquellos papeles y aquellos libros acumulan el polvo de muchos aos de inactividad mental. Triste, el filsofo lucha contra su otro ser interior. Cuando le vena una idea era como una deflagracin sorda, sin eco. No se plasmaba ya su pensamiento: errtico, vagaba por los pasillos esperando una palabra. Suplicando compaa, pero incapaz de hablar. Althusser se muestra parco, lejano. Cabecea, hace muecas. Se encoge en el silln. Poco habituado a los dems, su mirada no mira: escruta al otro, calculando la distancia que le separa de l, decidiendo que es imposible alcanzarlo. Se sabe solo con su desgracia y su enfermedad. Todos saban de su notable inestabilidad anmica y de sus frecuentes cadas en los estados ms hondos de la angustia. Haba sido internado muchas veces: ms de 20, desde 1947. Tras el crimen, fue internado en el hospital Sainte-Anne de Pars durante seis aos. El juez le declar demente. Haba sido cautivo de los nazis en la juventud. Estaba diagnosticado: era manaco-depresivo. A quienes le interrogaban deca. Vengo de asesinar a mi esposa. Puso una sbana entre la cara de Hlne y sus manos. Y rompi el cuello. Luego, dese incendiar la Escuela. Con frecuencia, la personalidad del homicida hace olvidar a la vctima. Sociloga, Hlne fue militante del Partido Comunista Francs y de la CGT y al final de sus das colaboraba con su marido en sus trabajos tericos. Convivi con Althusser desde 1945 1946. Y tena un carcter violento y absorbente. El crimen de la mujer es la historia del asesino, nunca de la asesinada. La mujer asesinada desaparece. Es muerta dos veces, por el agresor y por la sociedad que la secuestra de su ser vivo y la vuelve el objeto del asesino, nico ser que ser objeto de inters. Y por qu la mujer es la vctima? No era a Yocasta a quien iba a asesinar Edipo. Althusser asesina a Hlne. Qu significa? Cmo se genera el monstruo? La madre de Althusser haba estado profundamente enamorada de un hombre: Louis Althusser. Pero este Louis no fue el padre del nuestro, sino su to. El amado de la madre, el nunca olvidado, muri. La madre se cas despus de esto con el hermano: el padre del filsofo. Y al nacer el hijo, la madre hace renacer al enamorado y le pone su nombre. El nombre del muerto amado. As, el filsofo lleva en su nombre un sino, un mandato: ser el reencarnado amor de Yocasta (aqu Lucienne). El monstruo nace con el nombre. Althusser escribe, ms adelante: Ante este doloroso horror, yo deba sentir sin cesar una inmensa angustia sin fondo, as como la compulsin de dedicarme en cuerpo y alma a ella, de ofrecerme sacrificadamente a socorrerla para salvarme de una culpabilidad que era anterior a m y a mi nacimiento y salvarla a ella de su marido y su martirio, restableciendo la relacin del amado con la amada, ms all de su muerte, a travs de mi nacimiento y mi madurez. Tuve la conviccin de que sa era inextricablemente mi razn suprema, mi suprema razn de vivir. Yocasta (o Lucienne), nunca permiti a su Louis relacionarse con otros nios, lo mantena encerrado en casa y no le permita ensuciarse. Le secuestr para no perderle. Y l consinti, dejando su identidad propia en un cajn, en un atad, y vivi mucho tiempo apropindose de la identidad del otro. Su secuestro infantil le hizo cada vez ms consciente de que no podra superar al muerto en los ensueos maternales. Nunca los llenara. El monstruo comenz a crecer con el secuestro de la personalidad del nio. Al no tener existencia propia dudaba de m, hasta el punto de creerme invisible, insensible, sintindome incapaz de mantener relaciones afectivas con nadie, me vea reducido a intentar artificios de seduccin y de impostura. No poda amar. Cada vez que sus padres discutan, el padre se levantaba y desapareca por unas horas o por unos das. Entonces le deca al nio Hazla feliz! As, la mujer prepara al monstruo para que el monstruo mate a la mujer. Es vctima, pero tambin ejecutora a travs de las manos del hombre que ha creado, del monstruo que ha inficionado en l. En el hijo, en el marido. Es la vctima, verdugo? No s la respuesta. Mi hiptesis no excluye la culpa de Yocasta (Lucienne), en el crimen de Hlne.