La florida

FERNANDO ULLN HERNNDEZ

La florida(1907-2007)Apuntes para los primeros aos de la Plaza de Toros de Pearanda de Bracamonte

Ediciones Bracamonte

Esta obra ha sido posible gracias a la colaboracin desinteresada : Ayuntamiento de Pearanda de Bracamonte, Caja Duero, Diputacin de Salamanca y Fundacin Germn Snchez Ruiprez Texto: Fernando Ulln Hernndez Colaborador: Martn Padn Snchez Diseo y maquetacin: Isabel Martn Macas Fotografas: Fernando Ulln Hernndez Rosa Gmez Barcala Vernica Ulln Madrid Las fotografas de Cosso pertenecen al archivo grfico de Espasa Calpe Cartel de la exposicin (cubierta), Alejandro Mesonero Coordinacin Editorial: Carlos Civieta del texto: Fernando Ulln Hernndez de esta edicin: Ediciones Bracamonte La propiedad de este sello editorial pertenece al Ayuntamiento y la gestin editorial corresponde a la Fundacin. El consejo editorial, que decide las lneas generales de actuacin, est constituido, de forma paritaria, por ambas instituciones. Edita: Ediciones Bracamonte ISBN: 84-921975-8-7 Depsito Legal: S.1121-2007 Imprime: Grficas Varona Polgono El Montalvo, Parcela 49 Salamanca Informacin y pedidos: Fundacin Germn Snchez Ruiprez Secretara Plaza de Espaa, 14 Pearanda de Bracamonte. Salamanca. (Espaa) Tel. 923 541 200 Fax 923 541 687 E-mail: fgsr.pdb@fundaciongsr.es www.fundaciongsr.es/publicaciones

A quien tanto la quiso, que decidi quedarse en ella para siempre

Celebramos este ao los pearandinos el centenario de la plaza de toros La Florida. Su construccin, a principios del siglo XX, supuso un inestimable esfuerzo econmico y una ilusin para todos aquellos pearandinos de toda clase y condicin social que, siguiendo ejemplos anteriores, acometieron la empresa para dotar a Pearanda de un elemento dinamizador de su aletargada actividad socioeconmica. Ante la grave crisis que atraves su gestin, la Sociedad de Accionistas duea del coso, adopto la decisin de ceder la plaza de toros al Ayuntamiento, para que desde la gestin pblica, se le diese la finalidad con la que fue construida, dando por buena la prdida del dinero invertido. La plaza de toros La Florida, con el paso del tiempo, se ha ido convirtiendo en uno de los edificios ms simblicos de Pearanda y desde el punto de vista patrimonial en uno de los bienes ms significativos de nuestra ciudad. A lo largo de estos aos han sido muchos los pearandinos que, de forma desinteresada, han seguido cuidando su aspecto o ideado reformas para su mejora y esbeltez, las cuales se han ido llevando a efecto segn las posibilidades econmicas. Desde hace algo ms de veinte aos y de manera especial durante los dos ltimos, con motivo de la celebracin del centenario, el Ayuntamiento ha venido realizando importantes obras de mejora entre las que destacara algunas como la dotacin de redes de agua y saneamiento, construccin de la nueva enfermera, sustitucin de las viejas gradas de madera, reparacin en dos ocasiones de los tendidos, sustitucin de la barrera y el albero, etc. Creo, sinceramente, que ha merecido la pena, que podemos estar todos orgullosos de continuar el trabajo de quienes hace cien aos con su iniciativa nos legaron algo tan hermoso.

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A todos, pues, a la Sociedad El Fomento de Pearanda que construye la plaza y la cede al Ayuntamiento, a los que trabajaron y trabajan por mantenerla en pie y mejorarla, vaya mi agradecimiento como alcalde y como representante de todos los pearandinos, al tiempo que, desde aqu, invito a las generaciones presentes y futuras a seguir conservndola y a disfrutar de su elegancia a la par que sencillez.

ISIDRO RODRGUEZ PLAZAAlcalde Presidente Excmo. Ayuntamiento de Pearanda de Bracamonte

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La historia y tradicin que desprende la provincia de Salamanca a lo largo de sus 362 municipios se hace an ms patente en municipios que han desempeado, y an hoy lo ostentan, un papel fundamental en la configuracin y el desarrollo socioeconmico y cultural de nuestra provincia. Nadie duda que Pearanda de Bracamonte como cabecera de comarca es uno de esos municipios privilegiados porque, sobre todo, sus gentes, han sabido a lo largo de su historia, dotar a su territorio y a su vida diaria de los instrumentos que propiciasen esa reconocida posicin en el mbito provincial y nacional. A la industria, la cultura, el patrimonio, la gastronoma, Pearanda ha sabido sumar otro atractivo arquitectnico en torno a una de las tradiciones ms arraigadas en nuestra provincia, como es la fiesta de los toros y su plaza taurina, la cual tiene el honor de celebrar este 4 de septiembre su I Centenario. Ya lejano queda aquel 1907 cuando gracias a las aportaciones de los propios pearandinos, que no fueron pocos, a travs de la Sociedad Fomento de Pearanda se concluy la plaza de toros La Florida, tras dos aos de gestin. Un coso taurino que, con el paso de los aos, se ha convertido en emblemtico de la provincia, no slo por su centenario, sino por el prestigio logrado a lo largo de su intensa vida. La Florida se suma as a nuestras singulares e histricas plazas taurinas de la provincia, pero pocas plazas, tras los avatares que surgen en el discurrir diario de los municipios, pueden presumir de haber tenido una actividad propia constante a lo largo de su existencia como la de Pearanda. De ah que el centenario que celebra tenga mayor realce, pues por su albero han pasado las grandes figuras del toreo a lo largo de estos cien aos, desde Chicuelo, la saga de los Bienvenida, y cmo

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no, nuestros grandes maestros salmantinos, el Viti, que de manera perenne est unido a la plaza con la escultura ubicada en la misma, el Nio de la Capea o Julio Robles, sin olvidar a los que hoy siguen en cartel. Los pearandinos que han ocupado muchas veces esas gradas, han disfrutado de grandes tardes que como amantes le han quedado en la retina y recuerdan permanentemente, como tambin, desde la Diputacin de Salamanca, recordamos y agradecemos la colaboracin que ha existido y existe con la plaza La Florida a travs de los jvenes valores que salen de nuestra Escuela de Tauromaquia y que algn da, adems de como alumnos, desean volver a ella como profesionales del toreo. Mi ms sincera felicitacin a todos los que durante estos cien aos han hecho posible que la plaza de toros celebre su centenario y ojal la exposicin y catlogo elaborado para esta fecha histrica traiga buenos recuerdos a los pearandinos y amantes del mundo de los toros, pero tambin sea un aliciente ms para que Pearanda y Salamanca continen disfrutando de una plaza de referencia obligada en los ambientes taurinos.

ISABEL JIMNEZ GARCAPresidenta de la Diputacin de Salamanca

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AgradecimientosAlejandro Mesonero Rodrguez Antonio Garca Martn Antonio Reviriego Bar Valencia Dionisia Hernndez Prez Encarnacin Alafont Freire Felipe del Castillo Madrid Flix Gutirrez Garca Florencio Blzquez Moro (Flores Blzquez) Francisco A. Mesonero Muoz Gregorio Martn Lpez Ignacio Ramos Garca J. Bernal Villa Javier Cancho Holgado Joaqun del Castillo Madrid Joaqun Pinto Escribano Jos Daz Snchez Jos Garca Morales Jos Jimnez Hernndez Jos Luis Snchez Rodrguez Juan Salinero Madrid Julin Rodrguez Padn Martn Padn Snchez Miguel Coll Dvila Nicols Macas Garca Rosa Gmez Barcala Santiago Martn, el Viti Uje Civieta Vernica Ulln Madrid Vctor Martn Mesonero Victoriano Snchez Martn

PRTICO

El CentenarioEn este ao de 2007 se cumple el centenario de la construccin de la plaza de toros La Florida, de Pearanda de Bracamonte. Cien aos son muchos aos en la vida de cualquier persona, institucin o edificio. Son muchos los avatares por los que se pasa. Entendemos que toda historia se sustenta en unos anhelos, en unas pretensiones de mejora y prosperidad para el pueblo, que le llevan a tomar una serie de decisiones con el objeto de convertirlas en realidad. En el caso que nos ocupa, para Pearanda, nos fijamos en la ilusin y el entusiasmo puestos por los pearandinos de los primeros aos del siglo XX en la construccin de esta obra insigne, el disfrute de los espectculos que se organizan, en los momentos de crisis que atraviesa, en la superacin de la misma... Otra vez su remozamiento y esplendor... Por eso, hemos dado la voz a los verdaderos protagonistas que la levantaron para que sean sus ilusiones y sus desasosiegos los que nos lleven a apreciar esta obra que han legado para Pearanda, como un hito ms del esfuerzo de todos. Para celebrar un cumpleaos tan emblemtico hemos pretendido que el protagonismo lo enarbole la plaza de toros, que fue erigida como elemento dinamizador de la vida socioeconmica de la ciudad. Y que sea una celebracin de los pearandinos para los pearandinos. De los pearandinos de antao cuyas ilusiones y trabajos podemos conocer a travs de La Voz de Pearanda y las actas del Ayuntamiento. De los pearandinos de hoy que conservan objetos, fotografas, recuerdos..., de la evolucin de la historia de este edificio emblemtico y que gentilmente las han prestado. Para los pearandinos de hoy que tienen ocasin de presenciar al vivo espectculos en este elegante y coqueto recinto que an perdura en una sorprendente segunda juventud. Para los pearandinos del futuro a los que hemos de transmitir el amor a todo lo que nuestros antepasados idearon, levantaron con sacrificio y nos legaron con el propsito de dar vida y realce a Pearanda. Lo que se ofrece son apuntes sobre los primeros aos de La Florida a la espera de ser completados en el futuro, pues la premura de tiempo ha impuesto su ley de recorte y fragmentacin. Hay que desear que alguien recoja el testigo y complete huecos y vacos para hacer realidad una historia de la plaza de toros La Florida, que en esta ocasin slo se ha podido bosquejar.

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I PRLOGO

La mariseca

Pearanda en FiestasCuando se habla de la fiesta nacional espaola la mayor parte de las personas sabe que se hace referencia a las corridas de toros o a sus variantes ms humildes como son las capeas y novilladas. Puede rastrearse su origen en la Edad Media cuando los caballeros se enfrentaban a los toros como medio de ejercitarse en tiempos de quietud social o como elemento de orgullo y de vanagloria en las manifestaciones sociales. Con la evolucin histrica de la sociedad desaparecen los caballeros, pero las corridas de toros se ofrecen como homenaje a la eleccin o subida al poder de los reyes (aunque los hubo a los que no les gustaban, provocando su retraimiento) o para conmemorar otros acontecimientos de celebracin en ciudades y pueblos. En esta dinmica es donde se tienen que encuadrar las capeas y novilladas1 que se celebran en la mayor parte de los pueblos espaoles, dependiendo su nmero y categora de la importancia del mismo y, especialmente, de su poder econmico. Elemento anejo e indispensable a las capeas/corridas es el encierro, es decir, la trada de las reses bravas desde el campo a un lugar contiguo a la plaza donde se pretende lidiarlas. Con la ayuda de cabestros y caballos, los vaqueros y ayudantes dirigan las reses, que mostraban su nerviosismo a medida que se acercaban a la poblacin que, a su vez, se aproximaba al recorrido para contemplar su lmina y calibrar su bravura. Tambin era preciso disponer de un lugar apropiado que obligara al toro o vaquilla a embestir en lugar de la tendencia natural a huir cuando se ve molestado. Y esto no ocurra en los primeros tiempos.

Conduccin de ganado bravo (Cosso) Encierro en pueblo (Cosso) En estos aos tenemos que entender por capea el lidiar reses vacunas tumultuaria y anrquicamente, en plazas pblicas dispuestas provisionalmente para tal funcin y en las que actuaban promiscuamente nobles y plebeyos, aficionados y profesionales (J. M. Cosso: Los toros, T. 1, p. 679). Y por novillada toda corrida o lidia de reses celebrada en plazas pblicas siendo su caracterstica que se lidien, banderilleen y parcheen reses que deben salir vivas del ruedo (ib., p. 658).1

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Pero se buscaban alternativas con tal de celebrar las capeas, novilladas o corridas. Primeramente se adecuaban las plazas de la poblacin cerrando las bocacalles con obstculos que impidieran la huida: empalizadas, carros o tapiales. Al devenir espectculo se piensa tambin en los espectadores que se ubican en distintos puntos del lugar: sobre paredes, carros, balconadas... y, ms adelante, tablados que se van perfeccionando en busca de comodidad y/o seguridad para un espectculo de algunas horas de duracin, llegando a ser con el tiempo de pago. Tambin se construyen empalizadas y medios de defensa para los lidiadores o toreros improvisados, a los que mova la valenta o el deseo de ser admirados en una tarde de gloria. La celebracin de capeas, novilladas o corridas es un elemento integrante de las fiestas de los pueblos espaoles desde tiempos remotos. Y como un pueblo ms de Espaa, Pearanda inclua, desde el tiempo de nuestros tatarabuelos resalta el cronista de la villa en 1900, la celebracin de capeas y novilladas en las tradicionales fiestas que se celebraban en honor de la Virgen de agosto y de san Roque. Esta celebracin ocupaba la mayor parte de la maana y de la tarde de ambos das. Si repasamos los programas de fiestas a travs del peridico semanal La Voz de Pearanda hasta 1906, y por lo que al tema que nos interesa se refiere, veremos un esquema que se repite todos los aos:1 2 La vspera, da 14, se puede ir a ver el ganado que se ha de lidiar en las capeas y novilladas, en el lugar de las inmediaciones de la villa que se dir (en das posteriores); Los das 15 y 16: a las 10 de la maana, el toque de campana anunciar la trada del ganado al toril de la plaza. Y, una vez verificado el encierro, se lidiarn por va de prueba2 dos bravas reses. A las cuatro de la tarde se celebrarn las corridas del restante ganado encerrado, que se contrata en arriendo, para los dos das: 8 novillos de cuatro hierbas y 8 vacas de cuatro aos (nm. 1.260).2 Va de prueba es una justificacin de la antigua corrida matinal al par que la razn de su menor importancia. Sera un ensayo o prueba en que puede decirse que los concurrentes van a ver la clase de ganado que ha de torearse por la tarde (Pepe-Hillo), si bien se refiere que en las capeas pueblerinas qued la costumbre de lidiar vaquillas o novillos por la maana como verdadera prueba, pues vuelven a torearse por la tarde (ib. p. 669).

Como paso previo a la celebracin de las corridas en los meses de junio/julio se llevaba a cabo la subasta pblica del ganado que haba de lidiarse. En los primeros aos del siglo XX el costo suele oscilar entre las 1.300 pesetas de 1900 y las 1.500 de 1903, si bien en algn ao ha de adjudicarse por cantidad mayor. Otro elemento que se tena en cuenta era el acondicionamiento de la plaza para tales festejos. Se llevaba a efecto con la construccin de los tablados por medio tambin de subasta pblica, como

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Encierro en la plaza de La Corralada (Pearanda en Blanco y Negro, 2002)

norma general, resultando adjudicataria en principio la oferta ms econmica y que fluctuaba entre las 149 pesetas de 1900 a las 25 del ao 1902 o a la par, es decir, sin coste alguno, en 1905. Con los aos se van introduciendo ms exigencias de comodidad y/o de seguridad. As, en el ao 1903 se incluye en las condiciones que uno de los tablados tendr distinta forma que los dems, pues ser construido en meseta y con escalonado a fin de que los numerosos forasteros... puedan presenciarla cmodamente (nm. 1.312), cobrndose por los asientos de preferencia (nm. 1.263). Si ambas subastas pueden tardar ms o menos en cerrarse dependiendo de la competencia de los licitadores, lo que siempre sucede el mismo da y a la misma hora es la colocacin del emblema anunciador de las corridas. Todos los 25 de julio, a las doce de la maana, se coloca en uno de los balcones del segundo piso de la Casa Consistorial la clsica Mariseca, que es saludada con disparos de morteros y cohetes, y entusiastas gritos de los chiquillos que restallaban al propio tiempo sus ltigos, chisme necesario y tambin tradicional en este da (nm. 1.261). Prximos ya los das festivos se reparten los programas de mano y los vecinos de Pearanda se afanan en remozar sus casas y adecentar las calles hasta convertirlas en un ascua de oro a fin de que familiares y forasteros puedan encontrarse a gusto y queden satisfechos para concurrir en aos sucesivos. La animacin y la alegra entre los vecinos se van haciendo cada vez ms desbordantes dejndose seducir todos, grandes y pequeos, por el espectculo. Pero vivamos con el cronista de La Voz de estos aos los momentos de expectacin:El da 14 al valle, a ver el ganado y a hacer clculos; motivos suficientes para que el camino que conduce a La Verdina3 estuviera toda la tarde como de romera acudiendo los romeros en carruajes y3 En los lmites de la Nava de Sotrobal.

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Festejo taurino en la Plaza de la Constitucin (Pearanda en Blanco y Negro, 2002)

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varias clases de la cra caballar, mular y asnal, no siendo escaso el nmero de los que por falta de medios de conduccin, lo verificaban pedibus andando, atrevindose algunos a hacer apuestas sobre el juego de las reses (nm. 1.264). Y despus... el encierro. Los ms impacientes pasaron la noche en vela, no siendo el menor nmero el de las hembras. Amanece: dieron el primer envite y los bichos hicieron punta... En las merinas, en las tapias cercanas del encerradero, en las tierras un gento inmenso. ... Las diez: la campana hace inquietar a las gentes; su dan, dan, dan da algunos sustos y desazones; las calles por donde ha de pasar el ganado hasta la plaza se llenan de gente: empiezan las primeras carreras, y entre el vocero de las mujeres los bichos marchan escapados, y es de ver aquel entrar atolondrado de los que corren y, como cada cual busca el sitio seguro y marcha en distintas direcciones, resulta ese ingente abanico de inmenso varillaje, cuyo pas es la arena del suelo. A partir de aqu, la prueba, y por la tarde, la corrida, que en ambos das han venido a tener las mismas peripecias, dependiendo de la bravura o mansedumbre del ganado: sustos, revolcones, cogidas de ms o menos calado para los que merodeaban por all o se sintieron toreros, resultando ms o menos divertidas (nm. 1.159, 19.8.1900).

Pero si quien nos refiere los acontecimientos es menos entusiasta por la fiesta nos ofrece una visin del espectculo ms griscea:A las cuatro de la tarde comienza la corrida previo despejo de plaza del maestro Potana; sale el primero: da cuatro carreras el novillo; nadie se le acerca (en lo que obran cuerdamente los aficionados), salen despus los mansos... y se meten luego en el toril acompaando al bravo, cuando lo tienen conveniente: y ves el primero... ves los dems... y as transcurren dos o tres horas y al fin exclaman algunos... Pero cunto nos hemos divertido! Al siguiente da, segundo acto, que es, como si dijramos, segunda edicin ni corregida ni aumentada: prueba por la maana, corrida formal por la tarde... Les ha divertido a mis lectores s?. Pues a m... tampoco (nm. 30, 18.8.78).

Si todos los aos la celebracin de corridas de vacas y novillos en Pearanda segua el mismo esquema sucesorio y de animacin, algunos aos hubo corridas extra, bien por obsequio de los representantes polticos (en 1901 de Salvador Gmez de Liao, en 1902 de Eustaquio vila) o porque el ganado que haba de lidiarse el da 16 (1905) en el traslado desde La Verdina tom las de Villadiego

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y no pareci por parte alguna y, aunque ante tal hecho el pueblo reaccion con cordura, acudi al rescate don Santiago Udaeta trayendo una corrida desde Arazo. Al aparecer posteriormente el ganado, fue lidiado el da 17. Estos obsequios provocaron en 1904 un pequeo altercado pblico al no acceder el alcalde a la solicitud de celebrar una capea adicional. La celebracin de las corridas de vacas y novillos se efectu, a lo largo de los aos, en diversos lugares: en la Plaza de la Corralada en 1878 (acta de 20.7), en plazas de madera (una se construye en la corraliza de don Antonio Escudero, prxima al Ejido (nm. 215, 16.7.1982; nms. 216 y 218), para volver en 1888 de nuevo a la Plaza de la Constitucin (acta, fol. 38). Pasados los das de feria se hace balance del resultado de los festejos, se da cuenta de la concurrencia de forasteros y del orden observado. Y de nuevo se instaura en la ciudad la rutina de cada da hasta el momento de programar los festejos del ao siguiente. Slo ante la cercana de los das festivos los pearandinos se dejan embargar por nuevas expectativas de diversin y dejan a un lado las penurias y estrecheces con las que se ven obligados a luchar durante el resto del ao.

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I PROCESO DE GESTACIN

Algunos intentosLa idea de construir una plaza de toros en Pearanda no arranca en los primeros aos del siglo pasado, pues ya en 1879, pasadas las fiestas, se hace eco La Voz (nm. 78) de unas sugerencias para la construccin de una plaza de toros, propsito que de forma intermitente vuelve a aparecer en aos posteriores. As el 9 de julio de 1882 se celebra una sesin extraordinaria del Ayuntamiento en la que se procede a la subasta pblica del terreno que ha de ocupar la plaza con destino a las corridas de toros o novillos. Se recibe como mejor proposicin la de Juan Prez Gmez en la cantidad de 1.150,75 pesetas, pero el Ayuntamiento no la considera aceptable y, por unanimidad, acuerda se celebre un nuevo remate, que tiene lugar el da 10 para la construccin de una plaza de toros de madera. Resulta adjudicatario Valeriano Lpez en la cantidad de 2.000,25 pesetas, construyndose en la corraliza de don Antonio Escudero, prxima al Ejido. En 1899, en sesiones del 12 y 19 de julio, el Ayuntamiento estudia una proposicin elevada por varios concejales para la creacin de una feria anual y la formacin de un proyecto de plaza de toros, con el consiguiente emplazamiento y compra de terrenos. El Ayuntamiento acuerda aprobar la proposicin en cuanto a la necesidad y utilidad de la feria encargando a una Comisin compuesta de los firmantes para que proponga los medios y forma de llevarla a efecto (fol. 65). En el nmero 1.182, de 27 de enero de 1901, se da cuenta en La Voz de una instancia del Ayuntamiento dirigida al ministro de Obras Pblicas, de 25 de enero, en solicitud de autorizacin para adquirir dos huebras de tierra con destino a construir un matadero municipal y una plaza de toros, sealando la ubicacin entre la calzada de Mancera y el camino viejo de San Jos, instancia que es devuelta por el gobernador civil, con fecha 17 de julio, solicitando se complete el expediente respecto al matadero o algn otro servicio municipal que se estime de necesidad por no estar autorizados los Ayuntamientos para la construccin de plazas de toros cuyo objeto no implica servicio de carcter municipal, de lo que queda enterado el Ayuntamiento en la sesin de 19 de julio (fol. 70; 47 v). Otras veces aparece como deseo. As el cronista taurino de 1901 remata de esta forma su resea: Que para el ao prximo sea un hecho la construccin de una plaza de toros, donde se pueda celebrar mejor dicho espectculo!, pues en ese mismo ao hubo grandes sustos entre los que se hallaban en los tablados debido a que los asientos de preferencia colocados estaban poco sujetos al tendido, y con el peso de los numerosos espectadores que los ocupaban se corrieron hacia las talanqueras.

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Pero es el tributo sangriento que se cobra la fiesta nacional, tambin en la pequea escala que representa las corridas de vacas y novillos, el que empieza a remover las aguas tranquilas de la celebracin tradicional de la fiesta. En ese mismo ao de 1901 la corrida del da 16 dej un rastro sangriento: un novillo que entr en el zagun de la Casa Consistorial arroll a varios lidiadores, ocasionando tres heridas gravsimas a nuestro convecino Julin (a) Perrilla de las que fue curado de primera intencin, siendo despus trasladado en una camilla a su domicilio, donde contina en grave estado (nm. 1.212), muriendo en das posteriores. Con la pausa de 1902, en el que las corridas tuvieron lugar sin incidentes graves, en 1903 vuelve a aparecer la faz del horror de la fiesta. Trece fueron las cogidas sufridas en la tarde del da 15 y dos en la del da siguiente. Encogido por la tragedia el cronista contina: bravsimos novillos han herido a muchas personas y acaso matado... a la misma fiesta. Porque el horror causado en todo el pueblo con tanta cogida ha hecho germinar la idea de construir una plaza de toros, de hacer algo que, dando satisfaccin a la aficin, evite que quienes no tienen arte ni conocimientos taurinos bajen a lidiar, realmente a suicidarse (nm. 1.318).

Carta de los vecinos pidiendo la creacin de una feria y construccin de una plaza de torosEsta situacin de dolor general da nimos a los contrarios a la fiesta, o, mejor dicho, a la forma de celebrarse las corridas tradicionales de vacas y novillos, que, liderados por Isidoro Carabias y despus de pulsar la opinin pblica, escriben una carta, con fecha 19 de agosto, al Ayuntamiento solicitando la supresin de las corridas de vacas y novillos y la creacin de una feria como elemento dinamizador de la vida en la villa, postrada en el aletargamiento de una crisis industrial y comercial. Nada mejor que dejar exponer a los protagonistas sus puntos de vista sin adulterar su contenido:Al digno Ayuntamiento de Pearanda: Los que subscriben, vecinos todos de Pearanda y amantes de la cultura, progreso y moralidad de su pueblo, a ese digno ayuntamiento exponen:

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Que apenado el nimo por las recientes desgracias ocurridas en las capeas de novillos verificadas en las pasadas fiestas de agosto, queriendo descartar de nuestros usos y costumbres las diversiones y fiestas que pueden borrar el preclaro timbre de ilustracin que dignifica nuestra villa, creemos que toda autoridad local y entidad jurdica encargada de velar por la prosperidad de su pas tiene el sacratsimo deber de prestar al pueblo que dignamente dirige los elementos indispensables para la prosperidad y recto vivir de sus dirigidos y a la vez desplegar su autoritario poder para encaminar a la opinin pblica por los derroteros de la moralidad y apego a las costumbres importadas por el progreso de los tiempos. Como ese digno ayuntamiento atesora gran capital de medios que son indispensables para la evolucin social a que aspiramos, y adems sabe emplear la fuerza de su autoridad para dar solucin a las peticiones justsimas, esperamos de l: Que suprima las corridas de novillos que tradicionalmente vienen celebrndose en nuestras fiestas de agosto por ser atentatorias a la civilizacin y sentimientos humanitarios que debe guardar un pueblo. Como la supresin de referidas novilladas ha de herir las rutinarias aficiones del vulgo, no por esto nuestro digno ayuntamiento dejar de aplicar la saludable mxima de salux populi suprema lex est (o) (sic). Siendo la vida econmica el baluarte inexpugnable de todo progreso, fije ese digno ayuntamiento su atencin en el concierto financiero de todos los pueblos; y ya que industrial y hasta comercialmente ha muerto Pearanda, debemos trabajar todos con energa para hacer de nuestras fiestas populares un elemento de prosperidad econmica. Recabe esa digna Corporacin municipal cuantos medios estn a su alcance para dotar a este pueblo de una feria de ganados, variando los nmeros del programa de nuestros festejos por otros que despierten en las muchedumbres humanas los sentimientos suavizados por la ilustracin. Ya que por imprescindible necesidad figuran las corridas de toros en los de muchas regiones espaolas, puede ese digno ayuntamiento pulsar con su exquisita tctica la opinin de nuestros capitalistas y comerciantes para que conjuntamente con la clase media de Pearanda, que siempre responde, hasta con el sacrificio, por el bien de su pueblo, se construya una plaza de toros que estimule al forastero mejor que las capeas de novillos con sus sangrientos episodios que llenan de luto a algunas familias y producen en el nimo de las personas que nos visitan un efecto e impresin poco favorable a nuestro querido pueblo. Estando plenamente convencidos de que los intereses morales y materiales de nuestro pueblo son favorecidos por esa digna Corporacin municipal, esperamos que enarbole bandera de reforma para que, en el ao venidero figure en el catlogo de nuestros hechos locales una feria de ganados, la pronta construccin de una plaza de toros, y como remate que corone nuestros esfuerzos la supresin de las capeas de novillos.

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Fiados en el amor a Pearanda y recto proceder de todos los individuos que componen esa digna Corporacin municipal, esperamos que atiendan en un todo nuestras splicas, que son justsimas, porque se dirigen a regenerar a Pearanda, librndola de las costumbres tradicionales que la degradan y la hacen morir de miseria econmica. Favor que no dudamos merecer de ese digno ayuntamiento cuya vida guarde Dios muchos aos. Pearanda 19 de agosto de 1903. (Sigue gran nmero de firmas) (nm. 1.321)

4 Llama la atencin la amplitud de miras con que se aborda el proyecto pues constan los que suscriben acciones en especie: trabajar con carros, aportar materiales..., como reflejan algunos vecinos.

En la sesin del Ayuntamiento del da 2 de septiembre (acta del da 4) se hace eco de la solicitud de varios vecinos para que en beneficio de los intereses morales y materiales de la localidad adopte las medidas oportunas a fin de crear una feria anual de ganados y que se construya una plaza de toros para ofrecer en lo sucesivo a los forasteros un nuevo cartel de nuestros festejos populares y conseguir que desaparezcan las capeas de novillos, particulares que ve con gusto y de que ya antes de ahora se ha ocupado el Ayuntamiento, acordando por unanimidad dejar la instancia sobre la mesa durante ocho das para estudio de los concejales, estudio que se retoma en la sesin del da 9 acordando, a fin de llevar el pensamiento a la prctica, nombrar una Comisin gestora con representantes del Ayuntamiento, del comercio, de la industria, de la propiedad y de las capacidades (fols. 96 y 97). El nombramiento de esta Comisin se lleva a efecto en la sesin del da 24 de octubre. Se empiezan a hacer las gestiones correspondientes para llevar a cabo el proyecto. Por una parte, varias comisiones visitan al vecindario invitndole a comprar acciones a fin de allegar los fondos necesarios. Estiman que no se retraer nadie del proyecto mxime cuando el importe de cada accin es insignificante y a nadie se obliga a que contribuya con cantidad determinada. Adems, el pago se efecta en cuatro plazos para que de esta manera se pueda hacer ms llevadera la liberacin de las acciones, las cuales, aun en el supuesto de ser nominativas, en el momento de su creacin, adquieren el carcter de al portador, segn precepto legal, tan pronto se pague el 50% del valor efectivo (nm. 1.328)4. Se fija un plazo de suscripcin hasta el da 15 de noviembre. Y se anima a los pearandinos trayendo a colacin lo que sucedi en Astorga con la construccin de una plaza de toros por un importe de 75.000 pesetas as como los rendimientos obtenidos por los accionistas de la plaza de toros de Salamanca. Por otra parte, se somete a la consideracin del arquitecto municipal, seor Vaquero, el proyecto y el presupuesto para la construccin de una slida a la par elegante, sencilla y econmica plaza de toros con capacidad de unas 5.000 almas (nm. 1.322).

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El Sr. Vaquero ofrece a la Comisin un proyecto elaborado en 1899, que resulta del agrado de la misma, aunque ha de retocarse el aspecto econmico. Una vez terminado, se expone el trabajo, que presenta como detalle una construccin en ladrillo de estilo mudjar. El seor Vaquero cede, adems, en beneficio de la obra, la mitad de sus honorarios legales de planos y documentos, adquiere en acciones el 20% de los derechos de direccin de obras, si se acepta en totalidad o parte su proyecto y se confa en l la direccin facultativa (nm. 1.330). Si hasta primeros de noviembre se haban suscrito 559 acciones, en los das siguientes el ritmo decae acusadamente, por lo que la Comisin, en reunin del da 21 de noviembre de 1903 en la que da cuenta de que el importe de la suscripcin asciende a unas 30.000 pesetas, acuerda prorrogar el plazo hasta el da 30 y formaliza por escrito una invitacin a suscribir convencida como est de que la construccin de una plaza de toros ha de ser fuente segura de riqueza, un aliciente para la concurrencia de forasteros a las ferias y un paso ms en la mejora de nuestras costumbres (nm. 1.331). El Ayuntamiento, por otro lado, ha encargado un informe al Sr. Lpez Redondo, segundo teniente de alcalde, sobre la creacin de una feria con la agregada construccin de una plaza de toros. Teniendo como base otro informe elaborado ya en 1899 al respecto, sin haber adelantado un paso, y partiendo de que es competencia del Ayuntamiento poder establecer ferias y mercados, sin perder de vista la peticin formulada al respecto por los vecinos, propone que sin reparar en los medios que haya necesidad de emplear y venciendo los obstculos que sean precisos, se celebre una feria de ganados en esta villa y que habr de tener lugar del 5 al 8 de septiembre todos los aos empezando desde el de 1904 (M. Lpez Redondo). Se acuerda pase el informe a una Comisin especial siendo aprobado por unanimidad en la sesin del da 14 de octubre y se inicia la recogida de datos para ver si es posible la realizacin del proyecto dada la escasez de terrenos comunales y se consigna un clculo del ganado que pudiera concurrir as como de su ubicacin (fols. 6, 8 y 9). A pesar de que el nuevo alcalde, elegido a principios de ao, inmediatamente manifest que siendo de vital inters para la poblacin crear una feria anual, ya acordada por el Ayuntamiento anterior, era del parecer que para este asunto se nombrase una Comisin especial a fin de que sta resuelva lo que haya lugar con tiempo y sin precipitacin, a lo que la Corporacin mostr su conformidad (fol. 31 v). En los meses siguientes van escaseando cada vez ms las noticias, tanto referidas a la suscripcin de acciones como del avance del proyecto, hasta que en el nm. 1.341 de La Voz de Pearanda, de

Compromisos vecinales (Archivo municipal)

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31 de enero de 1904, se anuncia que la Comisin, en sesin del 29, ha acordado suspender sus gestiones por considerar insignificante la cantidad suscrita para tan vasto proyecto aparcndolo hasta tiempos mejores. La Corporacin, para evitar contingencias, retoma el esquema tradicional de las fiestas: eleccin de la Comisin de Festejos, decisin de celebrar dos corridas de vacas y novillos, subasta en arriendo del ganado, subasta de la construccin de tablados, celebracin de las mismas en la plaza de la Constitucin con el correspondiente encierro y contemplacin del ganado en La Verdina... Pero los partidarios de la supresin de las salvajes y brutales novilladas hacen ver su disconformidad con la apata y el quietismo que se ha adueado del proyecto de creacin de una feria y construccin de una plaza de toros colocando carteles annimos en los postes de la plaza y preguntando por qu calla La Voz. sta se defiende de las acusaciones, pero reconoce tambin que todo ha cado en el ms lamentable abandono y hoy callan, tal vez arrepentidos de su idea, los que en tiempos auguraban un xito feliz a la construccin de una plaza de toros y creacin de una feria (nm. 1.360).

Un paso decisivo: la creacin de una feriaLos aos 1904 y 1905 discurren entre el querer y no atreverse por parte de la Corporacin. Por una parte, est convencida del inters de la celebracin de la feria, pero, por otra, dada la escasez de recursos y teniendo en cuenta que la venida en septiembre de la Escuela Central de Tiro a hacer prcticas en Pearanda va a conllevar un gasto adicional para el frgil equilibrio de las cuentas municipales, no se vuelca totalmente en el proyecto. Quiere contentar a todos y propone la construccin de una plaza de toros de madera, desconociendo que no es posible realizarla porque est prohibida por ley, como se lo tienen que hacer saber en das posteriores. A su vez, la corriente culta de la villa arrecia en su demanda de supresin de las novilladas. En el nm. 1.407, de 6 de mayo, con el ttulo Siempre igual se recoge una muestra de cmo se van encrespando los nimos hasta pedir incluso el empleo de la razn de la fuerza si no es suficiente la fuerza de la razn para someter al pueblo a la inmediata supresin de las mismas.

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Y cuando se rumorea el recorte de festejos cultos en las fiestas de agosto con objeto de ahorrar recursos con que atender los festejos que se programen en septiembre, desde La Voz se adopta una actitud beligerante. Propone el traslado de las tradicionales fiestas de agosto a septiembre y la supresin de la lidia salvaje, en plena plaza pblica de reses bravas, peticin hecha desde hace tiempo, amplificando hasta la exageracin lo que no es ms que la opinin de esas fuerzas cultas de la villa al decir que todo el pueblo las rechaza y anatematiza (nm. 1.414). Con la publicacin del programa de fiestas de 1905, similar al de otros aos, se hace el anuncio de celebracin de la feria en los primeros das de septiembre de 1906 (nm. 1.420). Se suaviza un tanto la tensin. En vsperas de las fiestas contrapone el pasado y el futuro apostillando: Lstima que el programa de las fiestas haya admitido espectculos que desdicen en algo la cultura general y que los organizadores no hayan podido prescindir de festejos tradicionales y con olor a viejas prcticas, que han alejado a Pearanda del arte y el progreso. El cronista, sin embargo, no quiere dejar una mala impresin de Pearanda dulcificando un tanto el remate: No es que Pearanda no sea progresiva, lo es mucho, pero padece endemias regresivas de costumbres que fueron buenas en la poca de nuestros tatarabuelos (nm. 1.421, 12-8). Pero el ambiente festivo del mes de agosto y el anuncio de la celebracin el ao venidero de una importante feria, que podr competir con las mejores de Espaa, no retiene la agria crtica que el firmante de Cuatro verdades, Incgnita, airea sobre las contradicciones vividas en Pearanda. Si saluda con esperanza el anuncio de la creacin de una feria no olvida la rutina anticuada de reducir nuestras fiestas populares a brutales capeas de novillos propias de pueblos que no ostentan en sus blasones las enseas de progreso que distinguen a esta villa. Y ms adelante contina:No he podido explicarme nunca el motivo de la estimacin y respeto que nos profesan los extraos; gozamos de una fama ficticia e ilusoria que se derrumba en cuanto nos estudian de cerca nuestros hbitos y nuestras aficiones. Aqu no hay siquiera una industria que ponga de relieve el espritu emprendedor que anima a los pueblos modernos, por verdadera desidia vamos dejando poco a poco morir un mercado que fue en tiempos rico elemento de progreso comarcal; guardamos nuestros capitales temerosos de perderlos en empresas fabriles que han dado a muchos justa fama y crecidos intereses, y por ser parcos y pusilnimes estamos tolerando que ingleses aprovechados se estn lucrando con un ferrocarril que debiera ser nuestro para explotarlo. ...

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Dganme ahora si con estos precedentes podemos tener esperanzas en la inauguracin de la feria, en la supresin de las salvajes corridas de novillos, en la abolicin de otros muchos defectos que arraigan en este pueblo y en nuestro despertar augusto para entrar de lleno en la vida de la cultura. Yo creo lo contrario; conozco por desgracia al pueblo pearandino, que tiene la flaqueza de patrocinar los pensamientos ms halageos para el florecimiento de nuestra economa y se queda en la estacada cuando hay que sacrificar el reposo, la vida regalona del casino y las riquezas para conseguir algn bien colectivo y de provecho comunal (nm. 1.421, 12.8).

Una realidad: la feria en 1906En los primeros das del ao se forma un nuevo Ayuntamiento, esta vez presidido por don Sinforoso Nodal Dvila, procedindose igualmente a la formacin de las distintas Comisiones. Dejando transcurrir un par de meses, desde La Voz de Pearanda se airea la necesidad de creacin de una feria haciendo un recuento de la situacin (nm. 1.451).

Feria de ganado en El Ejido (postal editada por M. Coll)

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En efecto. En la sesin del 23 de mayo el seor Alcalde puso de manifiesto las gestiones que en unin de valiosos elementos de esta poblacin viene practicando al objeto de inaugurar en el presente ao y en los das del cuatro al ocho de septiembre una feria digna de esta villa y que, sin duda alguna, ha de ser un venero de riqueza, que favorezca los intereses as generales como particulares. Da cuenta del entusiasmo con que fue acogida la idea en una reunin celebrada el martes, da 22, con representacin tanto del Ayuntamiento como de los gremios del comercio, industria y labradores, nombrndose una Comisin para confeccionar el programa y resolver las dificultades que puedan oponerse a la implantacin de la feria (fols. 41 v y 42). La Comisin nombrada no pierde tiempo y el da 25 de mayo celebra una reunin tomando ya el acuerdo de que la feria se celebre los das 6, 7 y 8 de septiembre con fiestas populares desde el da 4 y que las corridas de novillos y vacas tengan lugar los das 4 y 5 con la finalidad de que en los das de feria los forasteros se dediquen totalmente a recorrer los comercios y la feria. El ferial, siguiendo instrucciones del seor Del Ro, prctico en la materia, tendr la siguiente ubicacin: en el teso del Campo de San Francisco, el ganado lanar; el de cerda en la parte baja del Ejido; en la parte alta de ste y tierras colindantes, el vacuno; detrs del matadero, el asnal; en el

Mercado en la plaza de la Constitucin (postal editada por M. Coll)

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camino de las cruces, el mular; y el caballar, en el trayecto comprendido entre la huerta de don Juan M. Rodrguez y la corraliza de don Teodoro del Castillo (nm. 1.462, 26.5). Desde el semanario se solicita la ayuda de todos porque entiende que la creacin de una feria en esta villa es asunto que interesa en extremo al comercio, a la industria, a la clase trabajadora y jornalera de la localidad, aduciendo igualmente como acicate el buen nombre de Pearanda. Desde el Ayuntamiento se respalda la decisin. Cuida la publicidad de la misma con carteles, confecciona el programa en unin con la Comisin de Festejos, establece premios y da instrucciones precisas a todos los sectores afectados para que los que acudan a la feria encuentren facilidades en cuanto se refiera a pastos, abrevaderos, piensos y espaciosos locales (nm. 1.464, 9.6). A medida que se aproximan las fechas van apareciendo muestras sobre la importancia de la feria: se coloca en la puerta de la Casa Consistorial un hermoso y artstico cartel anunciando la feria de ganados y semillas as como los numerosos festejos programados. Dos corridas con toretes de muerte y sesiones pblicas de un cinematgrafo al aire libre en el Campo de San Francisco son las principales novedades de reclamo. Se anuncia el reparto en breve de los programas de mano y se contacta con la empresa de ferrocarril para el establecimiento en esos das de trenes especiales a precio reducido. Hasta se tiene la previsin de anticipar la llegada del ganado bravo a La Verdina a fin de que, en caso de huida, el ganado vaya a parar al punto que est pastando y no a la dehesa, lo que tambin permitir reunirlo y cerrarlo ms pronto (nm. 1.475). Todo se ve con optimismo, pues el propio cronista taurino considera que con las corridas con toretes de muerte, para los que se ha contratado a Antonio de Andrs (Trueno) y, como sobresaliente, a Paulino Trufero (Salmantino), se rompan los moldes y repican gordo. Incluso los tablados, con escaleras incontables, semejaban tendidos en toda regla. Lstima que luego el ganado y la tormenta deslucieran el espectculo.

xito de la feriaLa concurrencia de cabezas de ganado ha superado con creces las previsiones, y se presentan excelentes ejemplares. El reportero da cuenta de 2.386 reses, de 11.700 cabezas de ganado lanar, 1.670 de cerda y 2.030 del resto, as como del gran nmero de transacciones realizadas detallando algunos precios. Y concluye:

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En las plazas y calles la concurrencia de forasteros es muy grande; los comercios no estn ni pueden estarlo, de queja; las tiendas ambulantes tambin han vendido mucho. Los cafs y las casas de comidas no hay que decir: llenas a todas horas y faltando las provisiones en algunas (nm. 1.477, 8.9).

Los resultados han superado las expectativas y procede felicitar a todos los que han contribuido a lo largo de los aos a la gestacin de la creacin de la feria, desde el doctor Coll que hace aos propugnaba el cambio de fechas, una vez terminada la recoleccin en los pueblos cercanos, al Ayuntamiento actual que ha visto coronada por el xito su apuesta, y a los pearandinos todos que aman este pedazo de tierra y han contribuido con esta obra, base de futura prosperidad y vida en esta villa, abogando tambin por subsanar en el futuro las deficiencias que se puedan haber observado.

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II PROCESO DE construccin

Pasos previosSin dar tiempo a saborear el xito de la feria, el seor alcalde convoca el da 15 de septiembre de 1906 a varias personas con objeto de escogitar (sic) los medios ms conducentes para la construccin de la plaza de toros (nm. 1.479, de 22.9), noticia que es saludada con alegra porque se considera como un medio ms y muy grande para atraer concurrencia a nuestras renombradas ferias. En la sesin del da 19 el seor presidente expuso a los seores concejales la conveniencia para la poblacin de que a la mayor brevedad posible se construya una plaza de toros para dar impulso a la feria que este ao se ha inaugurado y cuyos resultados han sido ms satisfactorios de lo que podra esperarse. Todos convienen en considerar la indicada plaza como medio de dar ms vida a la feria. En la sesin del Ayuntamiento de 26 de septiembre, se somete a discusin la necesidad o no, dadas las circunstancias, de construir una plaza de toros y de que la Corporacin municipal subvencione con algo cada ao en que se celebren corridas de toros, y acuerda por unanimidad apoyar la construccin para fomentar los intereses generales dando ejemplo de desinters y patriotismo en aras del bien comn y subvencionar con una cantidad que no exceda a la que hoy se consigna para tal festejo, fijndola en 2.000 pesetas. Asimismo se acuerda celebrar a tal efecto una reunin magna en el Teatro Caldern el da 2 de octubre (fol. 74). Es el alcalde quien, totalmente decidido a impulsar la construccin de una plaza de toros, aprovecha la tribuna de La Voz para hacerse or por los pearandinos. En el nmero 1.480, de 29 de septiembre, con el ttulo Buen proyecto, hace balance del estado de la cuestin. Partiendo del reconocimiento a los amantes de nuestro pueblo que desde ha tiempo se han afanado por buscar nuevos medios que traigan consigo prosperidad y beneficio a la poblacin, as como de los esfuerzos realizados por ayuntamientos anteriores, y convencido de la necesidad y conveniencia es por lo que de nuevo proponemos el proyecto de la construccin de una plaza de toros acomodada a las necesidades y exigencias de esta villa, seguros de que su realizacin, de la que no dudamos, habr de constituir un elemento poderoso de vida para la misma, que, unido a otros que tambin y para en lo sucesivo han de adoptarse, contribuirn a su regeneracin y a su prosperidad. Es consciente tambin de que las corridas de toros atraen mayor concurrencia de forasteros y animacin y que, en los lugares en que stas existen, son mayores las transacciones, los negocios, la utilidad y hay ms vida. Solicita la cooperacin de todos y da cuenta del acuerdo del Ayuntamiento de contribuir con la cantidad de 2.000 pesetas con destino a los gastos que se originen siempre que

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sus recursos lo permitan, y que stas se verifiquen con su intervencin, armonizando los intereses de todos. Como estaba prevista, la reunin tiene lugar el da 2 de octubre en el Teatro Caldern siendo numerosa la concurrencia. El seor alcalde expone el motivo de la misma as como las ventajas que en todos los rdenes habra de reportar para la villa la construccin de una plaza de toros, solicita el entusiasmo y la colaboracin de sus paisanos por estar en el nimo de todos la supresin de las novilladas y la construccin de una plaza que trajera vida, animacin a esta villa, sirviendo de complemento a nuestras concurridas ferias (nm. 1.481, 6.10). Se suceden algunas intervenciones apoyando el proyecto y, finalmente, se acuerda que el Ayuntamiento designe los seores que, con la Corporacin municipal, constituyan la Junta encargada de llevar a cabo tan beneficioso pensamiento, quedando nombrada en la sesin del da 2 con el objeto de que se procure de entre el vecindario allegar recursos para dicha construccin (fol. 76 v).

Creando opininEn la sesin extraordinaria del da 5 se da un paso ms al nombrar una Comisin que elabore las bases sobre las que ha de descansar la suscripcin. Da cuenta de ellas en reunin del da 6, siendo aprobadas con algn retoque el da 9. En el peridico de la semana siguiente se acoge el comunicado de la Comisin nombrada para dar cumplimiento al acuerdo adoptado en la reunin del da 2 de octubre y publica las bases de la misma, de las que destacamos la segunda y quinta por las que se fija el precio de las acciones (50 pesetas) y los plazos para hacerlas efectivas (40%, 40% y 20%) as como la finalidad de la suscripcin (nm. 1.483, de 20.10.1906). En ese mismo nmero se inicia la publicacin de los suscriptores, la cual contina en nmeros sucesivos, reflejando la acogida del proyecto tanto entre pearandinos residentes como entre los alejados de la patria chica, hacendados y simpatizantes, vecinos de pueblos cercanos o de otras ciudades que, por unos u otros motivos, quieren contribuir a la empresa. Quiero llamar la atencin sobre un pearandino residente en Gijn, don Antonio Roldn, que, no siendo aficionado a los toros, suscribe acciones para cederlas acto seguido, con todos sus derechos, a beneficio del hospital de esta villa (nm. 1.506, de 30-3).

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El nmero de las adquiridas oscila desde las 25 30 de los ms pudientes a una o media de otras personas. En el nmero 1.482, de 12 de octubre, con exceso de optimismo el redactor anuncia que puede darse ya como realizado lo que ayer fue proyecto de construccin de una plaza de toros. Se basa en que la Comisin nombrada por el Ayuntamiento para efectuar los trabajos preliminares y recabar recursos ha obtenido un resultado alentador a todas luces porque en el da de hoy, primero de suscripcin, han sido adquiridas, segn nuestras noticias, unas 250 acciones de 50 pesetas cada una, as como grandes ofrecimientos de adquisicin futura. Para reforzar la necesidad de la construccin de una plaza de toros un vecino abroncado explicita en un declogo las razones, ya alegadas en varias ocasiones anteriores por varias personas:QUEREMOS QUE SE CONSTRUYA LA PLAZA DE TOROS 1 2 3 4 5 6 7 8 9 Porque la quiere el pueblo soberano. Porque creemos que es un elemento de vida para Pearanda. Porque ella suprimir el bochornoso espectculo de nuestras novilladas y evitar desgracias. Porque se dar trabajo a muchos que hoy no lo tienen. Porque con ella daremos corridas de toros de muerte; siendo, sin duda, el nmero ms atrayente de forasteros a nuestra feria. Porque casi todos los pueblos de la importancia del nuestro la tienen. Porque ser una fuente de ingresos para toda clase de comercio. Porque crearemos una fiesta en casa que al ir fuera a buscarla nos resulta muy cara. Porque llevaremos extramuros de la poblacin un espectculo que por varios das entorpece el movimiento en su parte ms cntrica.

La Voz de Pearanda n.1483. La plaza de toros. Bases.

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Y 10 Porque debemos ser humanos con los vecinos de la plaza de la Constitucin, a quienes con levantar los vetustos tablados se les da una gran cencerrada con golpes y martillazos; se les priva de la luz y del aire; se les perfuma con olores ...que no son de mbar, pues de todos es sabido que debajo de ellos tienen los chicos su retrete. Ciego ser el que esto no vea! Un vecino abroncado (La Voz de Pearanda, nm. 1.482, de 12.10.1906, pp. 2-3)

La colaboracin no siempre es la que se poda esperar ante esta empresa. Don Luis de Dios, una de las pocas personas que escribe con nombre y apellido en La Voz de esos aos, explica pblicamente su voto de apoyo a la construccin de la plaza de toros, aunque no lo mueva la aficin taurina. Da su apoyo porque la considera un elemento de vida para el pueblo y proclama que siempre estar dispuesto a sacrificarse, como otros muchos, en aras de la prosperidad del pueblo donde hemos nacido y donde pensamos morir. Y contina:Trabajaremos con ahnco por la idea porque vemos en ella un medio de ocupar al bracero; porque as desparecer el bochornoso y brutal espectculo de las novilladas, porque no se interrumpir ms la circulacin y el trfico en las vas principales en nuestro pueblo, en los das de sus fiestas; porque cesar la condenacin de ciertos vecinos, a quienes se les priva algn tiempo de luz y de aire; porque entre dos males, necesarios, optamos por el menor, prefiriendo las corridas de toros de muerte, donde el torero de profesin se libra con arte, la mayor parte de las veces, de los peligros, a las novilladas, donde hombres sin condiciones ni medios de defensa, pagan con frecuencia el sangriento tributo a tan brbaras costumbres (nm. 1.485).

se rebela contra los iscariotes:Respetaremos al que nada ha dado ni nada ha hecho y nada ha dicho, pero no olvidaremos a los iscariotes que para ocultar su egosmo y tacaera tratan de herir en la sombra al proyecto y a los que lo patrocinan,

terminando con una recomendacin de esperanza y calma, pues la Comisin espera andando.

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Recibe el apoyo pblico de Francisco Nodal porque tambin est convencido de que es un espectculo que atrae concurrencia de forasteros siendo un hecho incuestionable que feria sin corridas de toros es, por lo general, poco concurrida y, aunque conviene en que es un espectculo poco culto, argumenta que lo es mucho menos, por no decir brbaro, el de las corridas de novillos (nm. 1.486).Doa Elisa Muoz D. Eustaquio Avila D. Fernando Schez. De la Pea Marqus de Ivanrey Doa Josefa Mndez D. Joaqun Schez. De la Pea Marqus de Flores Dvila D. Sinforoso Nodal D. Teodoro del Castillo Doa Jesusa Gmez de Liao D. Miguel Coll D. Luis de Dios D. Manuel de la Pea Igea Sres Hijos de L. Marcos Sres Castillo y Olea Sres Hijos de Juanes D. Felipe Avila Ruano D. Juan Junquera D. Manuel Lpez Redondo Crculo de Pearanda D. Fernando Bernaldez Doa Matea de la Pea D. Norberto Hernndez D. Carlos de la Torre D. Cndido Schez. De la Pea D. Jos Avila D. Francisco de Dios D. Luis de la Pea Doa Apolonia Hernndez Doa Paz Snchez de la Pea D. Antonio Alvarez-Cedrn D. Jos Nez D. Francisco Nodal D. Pedro Redondo Prez Doa Luisa Alvarez Sres. A. Martn y C. D. Elas de la Fuente D. Juan Hilario D. Mamerto Lpez Conde de Superonda D. Faustino Nodal D. Hipolito Montero D. Miguel Dvila D. Bernardo Corredera D. Julio Bustillo D. Jun Hernndez Igea D. Restituto Tarro D. Matas Alonso D. Arturo de la Torre 60 45 30 30 25 20 20 18 15 15 15 14 14 14 13 13 13 12 11 10 10 10 10 10 10 10 8 8 8 8 7 7 7 6 6 6 6 6 6 6 6 6 6 6 5 5 5 5 5 D. Francisco Diguez D. Ulpiano Galindo D. Joaqun Anta D. Fabin Muoz D. Emiliano Prez D. Pio Bermdez D. Carlos Snchez de la F. D. Agustn del Castillo D. Fidel Mantilla D. Mariano Arenillas Sanz D. Demetrio Rodrguez Nuez Doa Isidoro Gutierrez D. Casimiro Mirat Doa Gernima Gutirrez Y. D. Jess Martn Sres Santana y Gasco D. Manuel Snchez Bautista D. Eleuterio Ledesma D. Remigio del Ro D. Cristbal Hernndez D. Nicanor Martn D. Rafael Snchez D. Eleuterio Rodrguez Doa Gernima Gutirrez Prez D. Daniel Prez D. Teodoro Gimnez D. Antoln Garca D. Ruperto de la Torre D. Manuel Cermeo D. Rafael Galindo D. Emilio Garca Gutirrez D. Aniceto Gonzlez D. Marcelino de la Torre D. Antonio Rodrguez D. Pablo Nava D. Miguel del Castillo Doa Casilda Serrano D. Jos Padn D. Toms Prez D. Ventura Hdez. y Anselmo D. Cndido Padn D. Nicols Rodrguez D. Ramn Carranza D. Antonio Alfonso D. Luis Familiar D. Zoilo Prez D. Marcos Arroyo D. Ricardo Moro Doa Mara Francisca Hernndez 5 5 5 5 5,5 5 5 5 5 5 5 5 5 4 4 4 4 4 4 4 4 4 3 3 3 3,5 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 2 2,5 2 D: Martn Snchez D. Demetrio Hernndez H. D. Isidoro Brez D. Eloy Muoz D. Inocencio Santos D. Francisco Gonzlez B. D. Cristbal Matallana D. Marcelino de Castro D. Venancio Gombu D. Waldo de la Pea D. Flix Gmez D. Rafael del Rio D: Narciso Hernndez D. Agustn Snchez D. Eduardo de Castro D. Santos Galindo D. Bernardino Martn D. Manuel Garca D. Pedro Arroyo Gil D. Joaqun Prez Doa Mara Lpez Martn D. Pedro Redondo Montero D. Francisco Ramos Pascua D Prudencio Gonzlez D. Casimiro Sagrado D. Manuel Lpez Snchez D. Felipe Rodrguez D. Vicente Gonzlez D. Gonzalo Hernndez D. Ricardo Gonzlez D. Gonzalo Hernndez D. Ricardo Gonzlez D. Mariano Dez D. Jos Rodrguez Nuez D. Francisco de la Fuente Doa Josefa Gonzalez Gasco Doa Elena Snchez D. Jos Snchez Mondelo Doa Bernardina Rodero D. Leopoldo Corbo D. Jos Ruiz D. Juan Prez Gmez D. Pedro Gonzlez D. Marcos Snchez Melero Matias Villoldo D. Pedro Daz D. Eladio Silva D. Rufo Delgado D. Cesreo Merino 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2,5 2,5 2 2,5 2,5 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 1,5 1 1,5 1 1 1 1,5 1 1 1,5 1,5 1,5 1 1 D. Demetrio Hernndez Nava D. Benito Martn Doa Felipa Garca Doa Barbara Galindo D. Jos Muoz D. Manuel Gil D. Juan Antonio Alvarez D. Eduardo Garca Vadillo D. Vicente Gmez D. Baldomero Martn D. Miguel Dosuna D. Pedro Alonso D. Angel Manjn D. Melchor Valle Doa Isabel Igea D. Bibiano Snchez D. Olegario Bolao D. Arsenio Martn D. Jos Vicente Castilla D. Miguel Izquierdo D. Casimiro Santana D. Teodoro Gonzlez D. Toms Nodal D. Federico Cardo Doa Fernanda Rodrguez Doa Teresa Delgado y H. Doa Romana Nava Doa Joaquina Snchez D. Guillermo Gutirrez D. Luis Villoldo Doa Juana Molina D. Guillermo Matallana Doa Carmen Lpez D. Jos Bautista D. Juan Briz D. Gumersindo Ruiz D. Ciriaco Matallana D. Toms Garca D. Vicente Moreno D. Vicente Hernndez D. Melchor Lavera D. Manuel Prez D. Francisco Durn D. Alejandro Gorjn D. Pascasio Muoz D. Antonio Dez Molina D. Joaqun Gonzlez D. Santiago Rodrguez D. Jos Gil

Listado de accionistas (tomado del Libro de Ferias de 1982. Biblioteca Municipal)

1 1 1 1 1 1,5 1 1 1 1,5 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1,5 1,5 1 1 1 1 1 1 1,5 1 1 1 1 1 1,5 1 1 1 1 1

D. Ricardo Morant 1 D. Leandro Navarro 1 y media D. Joaqun Caceres 1 y media D. Antonio Gimnez 1 D. Juan Snchez Mesonero 1 Doa Paula Rodrguez Garca 1 D. Venancio Redondo 1 Doa Mara Gimnez 1 D. Andrs Alonso 1 D. Martn Flores 1 D. Desgracias Lpez 1 D. Inocencio Matias 1 D. Basilio Redondo 1 D. Hermenegildo Mateos 1 y media D. Isidoro Diguez 1 D. Saturnino Gasco 1 D. Martn del Castillo 1 D. Anselmo Contreras 1 D. Enrique Almeida 1 D. Manuel Gmez 1 D. Antonio Escudero 1 D. Jos Tena 1 D. Ramn Mediero 1 D. Alejandro Martn Albarrn 1 Doa Antonia Galbn 1 D. Baldomero Rodrguez 1 D. Fabio Garca 1 D. Julio Herrero 1 D. Eustaquio Padn 1 D. Fructuoso Lozano 1 D. Antonio Prez 1 D. Antonio Rodrguez 1 D. Heliodoro Hernndez 1 D. Angel Ruz 1 D. Jos de la Concha 1 D. Pedro Prez 0,5 D. Miguel Rodrguez 0,5 Doa Mara Molina 0,5 Doa Petra Rodrguez 0,5 D. Martn Martn 0,5 D. Cristbal Matallana 0,5 Doa Saturnina Garca 0,5 D. Teodoro Aparicio 0,5 Doa Luca Ropero 0,5 D. Juan Antonio Rodrguez 0,5 D. Basilio Redondo Montero 0,5

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La Junta Directiva y la Sociedad El Fomento de PearandaLa acogida del proyecto se puede considerar buena pues en poco ms de un mes la cifra recaudada se acerca a los ocho mil duros, por lo que el proyecto ya empieza a tomar visos de realidad. Se procede el da 12, en una reunin de accionistas, a la eleccin de una Junta que dirija, est al frente y disponga cuanto se precise para la construccin hasta dejar terminada la plaza (sesin 9.11.1906). Elegida la Junta, se adopta por unanimidad el acuerdo de otorgarle las facultades ms amplias que al fin para que se constituye convengan pudiendo por lo tanto resolver cuanto estime conveniente acerca del punto donde ha de edificarse la plaza, forma de la construccin, localidades que ha de contener, materiales que han de emplearse, manera de llevar a cabo la edificacin, fijacin de la poca en que han de hacerse efectivas las cantidades suscritas con arreglo a los plazos convenidos y, en general, cuanto afecte a la realizacin del proyecto (acta). Fueron elegidos para la misma, casi por unanimidad, varios seores, quedando constituido de esta forma el organigrama: Presidente: Vicepresidentes: Secretario: Tesorero: Vocales: D. Eustaquio vila D. Miguel Coll y D. Jos Nez D. Martn Snchez D. Toms Prez D. Pedro Redondo, D. Ventura Hernndez, D. Juan Antonio Rodrguez, D. Saturnino Gasco, D. Jernimo Gutirrez y D. Rafael Galindo. (nm. 1.487)

Logotipo de la Sociedad El Fomento de Pearanda (Libro de Ferias de 1982. Biblioteca Municipal)

Apenas toman posesin de sus cargos, da cuenta del primer acuerdo: la eleccin del sitio para el emplazamiento: ste ha sido, despus de recorrer y examinar todos los alrededores del trmino, el alto del camino de Cantaracillo, eleccin que ha sido bien acogida por el vecindario todo. Los propietarios de los terrenos se han prestado gustossimos a la cesin de los terrenos, previa tasacin, posibilitando declarar al cronista: Hoy ha quedado trazado el circo por la comisin

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que ha visitado los terrenos y esta tarde se harn calicatas y comenzar la construccin de un pozo al tiempo que anuncia que los trabajos comenzarn dentro de pocos das. Desde su constitucin la actividad de la Junta es frentica, celebrando varias reuniones para ultimar el proyecto. Se decide dar forma de sociedad a la misma, se recaban datos al respecto y se anuncia que los planos de la plaza de toros han sido delineados por Francisco Gasco, hallndose expuestos en el Crculo de Pearanda. Se hacen ms calicatas que confirman lo acertado de la eleccin del sitio; los encargados del proyecto se ocupan de la formacin del presupuesto y de ultimar detalles.... Dentro de las noticias del nmero 1.490, de 8 de diciembre, se comunica oficialmente que se ha constituido legalmente la sociedad para la construccin y explotacin de la plaza de toros con la denominacin El Fomento de Pearanda y se anuncia que los trabajos de construccin de la plaza comenzarn probablemente el lunes prximo aventurando para entusiasmar al vecindario: Parece que la Junta proyecta dar gran impulso a los trabajos de construccin a cuyo efecto en la prxima semana har efectivo el primer plazo, o sea, el cuarenta por ciento de las cantidades suscriptas.

Paseo de la Florida (postal editada por M. Coll)

Ubicacin de la plaza de toros

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Trabajos de construccinSe terminan las obras para rebajar la primera capa de terreno laborable en que ha de construirse el coso taurino y, sin pausa, se subasta la continuacin de los trabajos de removimiento y extraccin de tierra hasta dejar en gran parte construido el circo anunciando los propsitos de dar gran impulso a las obras de construccin, pues en la mente de la Junta est el que sea inaugurado en la prxima feria de septiembre (1.491). Despus de un pequeo parntesis vuelven las noticias, cortas pero enjundiosas, sobre la construccin de la plaza de toros, si bien de forma ms intermitente. En el nm. 1.496, de 19 de enero de 1907, se refiere que avanzan grandemente los trabajos de construccin siendo a diario muy grande el nmero de pearandinos que concurre al antiguo paseo de La Florida para ver el estado de las obras, consignando ya una costumbre que hoy perdura, mientras que, por otro lado, da cuenta de que la directiva de la Junta recaba datos y estudia para que el circo resulte lo ms esbelto y mejor construido posible conforme a las necesidades de la localidad. Y en el nmero 1.504, de marzo, ya se informa que prximo a terminarse ya las escavaciones (sic) de terreno y nivelacin del piso para el circo taurino, en breve comenzarn las obras de fbrica para la construccin de tendido, toriles y dems dependencias necesarias, al tiempo que se anuncia la subasta para la construccin de 8 puertas y del herraje necesario para las mismas. A partir de finales de marzo se suceden las noticias sobre diversas subastas y algunas adjudicaciones, que recogemos:ALGUNAS SUBASTAS RELACIONADAS CON LA PLAZA DE TOROS5 Objeto Construccin 8 puertas Construccin de herrajes Adjudicatario Eusebio Acosta Casimiro Santana Importe Tipo Tipo 30 ptas. m2 39,75 c/u 14 ptas. m3 cim. horm./cal/piedra 24 ptas. m3 tapial 2 ptas. metro lineal de albardilla

Construccin muros fachada principal Varios Construccin 9 puertas toriles5 Datos incompletos. Habra que consultar las actas de la Sociedad El Fomento de Pearanda, cuyo paradero se ignora y, por tanto, no se ha podido efectuar.

Luis Carabias Luis Cndido Padn

Cierre de corrales

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Construccin paredes palcos con paredes laterales Construccin primer asiento de tendidos Construccin pared de barrera, asiento y piso contrabarrera Construccin de las barreras Batido para dejar tendidos en forma proyectada Colocacin barrotes hierro para contrabarrera Construccin contrabarrera Construccin chiqueros Servicio caballos, picas y un reserva Carne 12 toros Manuel del Ro Tablajeros Pearanda 3.288 ptas. 2.000 ptas. Manuel Heras Tipo: 660 ptas.

El ritmo del trabajo emprendido hace necesario el cobro del segundo plazo de las acciones, es decir, otro 40%. Confirma que los trabajos de construccin de las paredes exteriores adelantan rpidamente merced a la divisin de trabajo que ha establecido la comisin encargada al efecto (nm. 1.514) y ve ya fundado el propsito de que su inauguracin pueda efectuarse en la prxima feria de septiembre teniendo en cuenta que de la construccin de la plaza de toros estarn encargados artistas de la poblacin pues en el nimo de la Junta est, principalmente, que todos participen de estos trabajos, siempre que los tipos sean beneficiosos a unos y otros (nm. 1.506).

Exterior de la plaza. Fernando Ulln

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Jos Carmona Gordito (Cosso)

El avance experimentado por las obras induce al cronista de La Voz a afirmar, sin temor a rectificacin alguna, que Pearanda contar dentro de tres meses con un circo taurino que en nada desmerecer al de otros muchos pueblos de ms vecindario. Terminadas gran parte de las obras, el circo ofrece ya un magnfico golpe de vista y su construccin produce grande entusiasmo a todos los pearandinos, mayor an al considerar que cuantas obras se inician y son tenidas como de bien general se realizan en muy brevsimo trmino, unindose todos cual un solo hombre, y todos poniendo su actividad, su inteligencia y sus intereses en llevarla a cabo, como refiere de otros intentos. El optimismo le lleva a anunciar que la inauguracin se realizar con todo el rumbo posible, en la prxima feria de septiembre, celebrndose dos grandes corridas de toros, y que se espera gran concurrencia de forasteros (nm. 1.515). El da 5 de julio se celebra Junta General de la sociedad constructora en la que su presidente da a conocer el estado de las obras, los recursos con que se contaba y los detalles que faltaban para terminar sta estimando el seor presidente en unas 15.000 pesetas la cantidad necesaria para terminar la construccin. Por ello se decide abrir una nueva suscripcin para cubrir las acciones que faltan, verificndose en el momento, si bien se acuerda hacer una nueva invitacin al vecindario para su colaboracin (nm. 1.520). En las siguientes semanas se da cuenta del avance de la construccin: La fachada exterior hace tiempo que est construida, los corrales estn casi concluidos, los tendidos se terminarn dentro de poco tiempo y ya podemos exclamar con el poeta: Todo jbilo es hoy! (1.521).

Otros aspectos:Contrataciones A falta de remate en las obras, que producen grata sorpresa por la elegancia, solidez y grande efecto de vista y que se espera concluyan a mediados de agosto, la Junta se centra en la contratacin de las ganaderas a lidiar, as como de los toreros encargados de la lidia, y de otros elementos necesarios, gestiones que pronto van quedando cerradas. Se contratan las ganaderas de Teodoro Valle y de Fernando Prz Tabernero, ambas de Salamanca, y a los espadas Fermn Muoz Corchato y Jos Carmona Gordito, a los que desde ese momento se hace un seguimiento especial de sus actuaciones.

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A medida que se aproximan las fechas, los pearandinos se olvidan de otras cuestiones para informarse a cada momento de los ladrillos puestos en la plaza de toros, de los toreros que vendrn, de las reses que se han de lidiar, quedando embebidos al or cantar a los albailes:Pearanda, Pearanda, digamos todos a coro al fin consigues tener bonita plaza de toros (nm. 1.523)

Se coloca la Mariseca en su da y hora tradicional, se facilita el nombre y nmero de los toros elegidos, se adjudica el servicio de caballos (monturas, picas...) a don Manuel del Ro por 3.288 pesetas y la venta de la carne a los tablajeros de la ciudad por 2.000 pesetas, esperando todos que las primeras corridas formen poca en los anales taurinos (nm. 1.524). Precios Tambin se publican los precios de las localidades:PRECIOS EN 1907 Ubicacin Palco con 10 entradas Barrera sombra Contrabarrera de sombra Tabloncillo Delantera de grada Grada Tendido de sombra Sobrepuerta toril 1 fila Sobrepuerta toril 2 fila Barrera de sol Tabloncillo de sol Delantera de grada de sol Tendido de sol Importe en pesetas 50,0 6,0 3,5 4,0 4,0 3,0 3,0 4,0 3,0 3,5 2,5 2,5 2,0Fermn Muoz Corchato (Cosso)

Son un poco inferiores a los de Salamanca.

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6 Fermn Muoz, Corchato, naci en El Viso de los Pedroches (Crdoba) el 11 de octubre de 1882. Se present en Madrid, como novillero, el 5 de abril de 1903. El 8 de septiembre de 1907 Vicente Pastor le cedi el toro Mediabanda, de Murube, al concederle la alternativa en Madrid en presencia de Rafael Gmez, El Gallo. La tarde del 9 de agosto de 1914, toreando con Lagartijillo Chico y Celita, en Cartagena, entr a matar al segundo toro del encierro de don Flix Gmez, de nombre Distinguido, dejando una estocada delantera y atravesada que hizo doblar al toro. Corchato mand a sus peones levantarlo y, despus de pincharlo varias veces, volvi a doblar el animal. No consinti el espada que actuara el puntillero y entr a matar junto a las tablas, empitonndole en esta ocasin el toro y lanzndole contra ellas. All le dio una seria cornada en el pecho y, recogido por las asistencias, fue trasladado a la enfermera, donde muri minutos despus. Perteneci al escalafn siguiente al de las figuras de su poca, pero su toreo tena gracia y manejaba el estoque con habilidad (datos tomados de J. M. Cosso: o. c., t. III, pp. 654-655)

Eleccin de fecha Por su parte, el Ayuntamiento, de acuerdo con la Junta constructora, determina la fecha de celebracin de las corridas. Se eligen los das 4 y 6 (nm. 1.517) a fin de proveer lo necesario: trenes especiales, permisos, nombramiento de comisiones para elaborar los programas, involucrando a comerciantes e industriales (nm. 1.518). El programa queda totalmente confeccionado y se publica a primeros de agosto. Lugar destacado en el mismo es la inauguracin de la plaza de toros que se fija para el da 4 de septiembre de 1907 a las tres y media de la tarde. La inauguracin de la magnfica plaza de toros, recientemente construida al efecto, se llevar a efecto con una corrida de toros de T. Valle, del campo salmantino, que sern lidiados y estoqueados por los espadas Fermn Muoz, Corchato6 y Jose Carmona, Gordito7, acompaados de sus cuadrillas, que se detallan a continuacin (nm. 1.525). Segn se acercan los das festivos crece la expectacin, aunque todava no hay tregua: Nuestra bonita plaza de toros, se consigna en el nm. 1.526, de 17 de agosto, est ya casi8 concluida: en la actualidad los obreros se ocupan de nivelar el piso y sacar escombros. La carretera a vila semeja a diario y por las tardes una romera por la afluencia de gentes que circula con objeto de ver el circo taurino (nm. 1.526: En vsperas de fiestas).

(Libro de Ferias de 1982. Biblioteca Municipal)

La plazaTermina el mes de agosto. La plaza alcanza su esplendor. A pocos das de la inauguracin, veamos la descripcin de la misma por dos pearandinos contemporneos, que resultan complementarias:

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Vista antigua de la plaza (postal editada por M. Coll)

La plazaEn ocho meses se ha construido nuestra bonita plaza de toros. Bien situada, en uno de los puntos ms elevados, al este de la villa, a la derecha de la hermosa carretera de Villacastn a Vigo y a menos de medio kilmetro de la poblacin tiene su emplazamiento. Se presenta a la vista nuestro circo por fuera modesto, pero alegre, todo de ladrillo con lneas elegantes y puertas esbeltas y espaciosas que embellecen sus muros. Pero la sorpresa que se recibe al contemplar el redondel y ver la capacidad del mismo, barreras, tendidos, palcos, toriles, en fin, todo el cuadro completo de una plaza de toros, no puede ser ms agradable. Nuestra plaza es una verdadera caja de sorpresas. Y es que, al revs de lo que ocurre en las dems, en vez de entrar en ella subiendo, los espectadores bajan. Esto hace que los tendidos y palcos se asienten sobre terreno firme y seguro. Pocas plazas reunirn tan buenas condiciones de solidez. Los materiales no pueden ser mejores, la piedra, hierro, ladrillo y maderas empleadas en la construccin han sido escogidos. Dgalo si no, entre otros detalles, el grueso cable que sirve de refuerzo a la contrabarrera, expresamente trado de Barcelona. A los corrales y toriles no puede pedirse ms. Pueden encerrarse para la lidia 8 toros, y puertas y burladeros responden admirablemente al objeto que se destinan. Hasta las paredes divisorias cuentan

7 Jos Carmona, Gordito, naci en Sevilla el da 13 de diciembre de 1883. Desde muy pequeo vivi en su casa un ambiente muy taurino, pues perteneca a una de las ms importantes dinastas toreras de la poca. Su padre era el famoso Antonio Carmona, el primer miembro de los Gordito y tambin era sobrino de Jos y Manuel Carmona Luque, ambos Panaderos. Despus de pasar una temporada en Mxico, regresa a Espaa para vestirse por primera vez de luces en 1903, en Marchena. No encuentra facilidades para presentarse en Sevilla, pero consigue torear en Madrid el 19 de marzo de 1906 novillos de la ganadera de Murube, junto con Bombita III y Manolete. Caus buena impresin y aquella temporada repiti cartel en Madrid tres veces ms. En la temporada siguiente estuvo arriba del escalafn de los novilleros. Toma la alternativa en Salamanca el 13 de septiembre de 1908 cuando Bienvenida le cede el toro Cocinero, de la ganadera de Veragua. Le confirma la alternativa Vicente Pastor el da 27 de marzo de 1910 con el toro Ratillo, de la seora viuda de PrezTabernero. Durante toda su carrera siempre estuvo presente el recuerdo de su padre y, sobre todo, lo que representaba su dinasta, no llegando nunca a estar a esa altura. En definitiva, fue un novillero importante y un torero con una muy corta carrera, pues se retir en 1911, en Yecla. Muri en Sevilla en 1951 (datos tomados de id., o. c., t. III, p. 168). 8 La negrita es nuestra.

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con estrechos pasadizos de ladrillo artsticamente hechos y a propsito para el apartado de las reses. Tiene el circo tambin una elegante habitacin destinada a capilla y enfermera; y ayer alabamos con gusto el que han tenido para colocar el altar de la Virgen que adorna la estancia. Las camas y camillas, as como el botiqun, mesas de operaciones y reconocimiento estn completos y con arreglo a las disposiciones y adelantos modernos. (El Charro de Robliza, La Voz nm. 1.528)

La plaza de toros de PearandaLa Comisin... comenz las obras en los primeros das de enero del presente ao, y tanto inters, celo y actividad ha desplegado que, en el corto transcurso de ocho meses la ha terminado, a falta slo del completo cierre de la galera y de algunos detalles de decoracin, que la falta material de tiempo impedir ejecutar.Carnet de conserje (cedido por Dioni Hernndez Prez) Carnet de arenero (cedido por Jos Daz Snchez)

El coso pearandino est enclavado en la cima de un montculo arcilloso conocido por el Alto de Cantaracillo, situado al noroeste de la poblacin, y distante de ella unos 1.500 metros prximamente. En l se ha practicado la excavacin del rea que ocupa, tallando el azadn en terreno firme las distintas partes de que se compone: desnivel de tendidos, escaleras, pasillos, etc., etc.

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Rodea al edificio un muro de fbrica de ladrillo y mortero de cal que, a la vez que la cierra, sirve de sostn a la cubierta de la galera, an no terminada. Todo el interior de la plaza ser revestido del mismo material. El crculo de sta, con grueso de paredes, mide 72 metros de dimetro, y el del redondel 509; los tendidos tienen 9 filas adems de la barrera y contrabarrera, y la galera es de 3 metros de fondo, y est ocupada en el centro por 26 palcos y a los lados por 4 filas de gradas. Los chiqueros y corrales son una copia, en pequeo, de los de la hermosa plaza de nuestra capital. La enfermera es una espaciosa sala, a la que dan luz dos anchas ventanas; es capaz para 3 camas y sobra un lugar para dos mesas de operaciones y dems accesorios de cura. Dan acceso a la plaza 8 puertas distanciadas por el muro exterior, circunstancia que da una gran comodidad para la entrada y salida de los espectadores. Pearanda cuenta, pues, con una plaza de unas 6.000 localidades que, aunque de pocas pretensiones, resulta espaciosa y slida, sin carecer de belleza; puede servir de modelo en las de su categora. Terminada por completo costar unos 12.000 duros. Cmo tan poco dinero?, se dir. Pues contando con toda clase de facilidades del Ayuntamiento y la mayora del vecindario; comprando los materiales baratos; obteniendo los contratos a precio reducido; trabajando mucho y contentndose con poco jornal la clase obrera de Pearanda, y teniendo una buena administracin. se es el milagro! (Luis de Dios, El Adelanto, 3.9.1907)

Con breves pinceladas se da cuenta de la inspeccin final de la plaza, la buena marcha de la venta de localidades (se han vendido ya 20 palcos con una recaudacin de siete u ocho mil pesetas), la designacin del seor alcalde como presidente, el nombramiento de acomodadores, porteros y vigilantes exteriores que ensayan su cometido. Se cuidan todos los detalles. Nada se deja a la improvisacin.

Inauguracin: 4 de septiembre de 1907Y lleg el da. Con tiempo esplendoroso y gran animacin se efecta, a la hora prevista, la inauguracin de la plaza con la presencia del gobernador civil de la provincia, delegado de Hacienda, autoridades locales, miembros de la Junta constructora, representantes polticos...

9 El coso de Las Ventas, de Madrid, mide 60 m; el de Ronda, 66 m; el de Valencia, 52 m.

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Banda municipal de 1937 (fotografa cedida por Martn Padn Snchez)

La plaza se encuentra engalanada para la ocasin: Una hermosa bandera luca desplegada al aire, los colores nacionales; el palco de la presidencia adornado con colgaduras de terciopelo... ; los dems palcos, balconcillos, gradas y tendidos rebosando de gente. Preside la corrida el seor alcalde, don Sinforoso Nodal. La banda municipal, bajo la batuta del maestro Olegario, alegra el ambiente con un bonito pasodoble y la plaza entera se viene abajo en aplausos cuando aparecen las cuadrillas de los toreros para hacer el pasello dando rienda suelta a las inquietudes contenidas. Hacen el despejo de plaza los alguaciles Ceballos y Silva. Primer toro: primera faena Salta al ruedo el primero de la tarde, perteneciente a la ganadera de Teodoro Valle, con divisa encarnada y azul celeste. Dejemos la palabra a El Timbalero, cronista taurino de El Adelanto (5.9.1907):Se llama Civilero y est marcado con el nmero 34. Es negro, grande, de carnes y corretn. Corchao le saluda con tres vernicas paraditas, rematadas con una navarra.

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Toma 4 varas, con voluntad, no reinando ninguna baja en la caballera. Buenos quites. Pataterillo y Platerito: banderillas. El toro est quedadito. Los picadores le han tratado brbaramente. Corchao, de azul y oro, coge los avos y saluda al de la tierra con tres pases con la izquierda y uno de pecho, sufriendo una muy regular colada. El de Valle anda incierto y juntndose a las tablas. Nueva faena y Corchao sale achuchado, sin consecuencias. Demostrndonos que es un valiente. Corchao aprovecha, y, a toro abierto, suelta un pinchazo en lo alto. Repite con otro aguantando de verdad. Entra de nuevo y deja una estocada aceptable, descabellando a pulso al primer intento.

La lidia del resto de los toros tiene poco que resear salvo que el segundo salta la valla y que en la lidia del quinto salta al ruedo un espontneo (Paulino Trufero, aficionado salmantino) al que se le dedica una bronca general; Corchato lo lleva al presidente y pide que le deje cumplir sus deseos, a lo que no accede la autoridad. Recojamos su resumen:Toros: Toreros: Picadores: bien presentados y criados. Cumpliendo en el primer tercio y dolindose y entablerndose en los ltimos. Corchato: muy valiente y decidido Gordito: bien trabajador y valiente castigaron demasiado. Con puyas no reglamentarias.

En el primer toro de la corrida del da 6 Corchato cort la primera oreja en esta plaza. El cronista local, El Charro de Robliza, llevado seguramente por la pasin, resume de esta manera lo que dieron de s las dos corridas:Las corridas, sobre todo la ltima, como no se ven algunos aos ni en Salamanca, ni en Valladolid, de buenas y animadas. En la ltima seis estocadas, seis toros, y catorce caballos difuntos. Corchato y Gordito haciendo ms que se les peda, y sus cuadrillas muy trabajadoras.

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BalanceHan pasado las ferias y fiestas del ao. Es hora de hacer balance siendo el resultado positivo tanto en la celebracin de los festejos taurinos como en el nmero de cabezas que han acudido al mercado: 2.400 de ganado vacuno; 1.940 de cerda; 2.170 de mular, caballar y asnal; ms de 12.000 de ganado lanar (nm. 1.530), relacionando tambin los adjudicatarios de premios as como lo recaudado en otros espectculos. Se constata la gran concurrencia de forasteros y la satisfaccin de todos. An saboreando el xito, el cronista mira al futuro y aboga por hacer algo y aun algos ms para obtener mayores beneficios. Sugiere la celebracin en dos das seguidos de las corridas de toros, la constitucin de una sociedad de pearandinos para la compra de reses y de ganados que podran venderse despus con ventaja, el establecimiento de relaciones con ganaderos de otras regiones y una activa propaganda hecha con antelacin por la prensa (nm. 1.529).

Construccin inconclusaQuiz el entusiasmo y el patriotismo local han impedido resear en La Voz que, a pesar de todos los esfuerzos y el hecho de ser inaugurada la plaza el da 4, como estaba previsto, lo cierto es que tal evento se lleva a cabo sin que la plaza est concluida (El Adelanto: 5.9; El Lbaro10: 7.9), a falta slo del completo cierre de la galera y de algunos detalles de decoracin, que la falta material de tiempo ha impedido ejecutar (L. de Dios en El Adelanto, 3.9), si bien todos reconocen el gran esfuerzo realizado y se sorprenden de su belleza y solidez, con una capacidad, cuando concluya, de seis mil y pico de asientos (El Lbaro 7.9). Tenemos que esperar a los primeros meses de 1908 cuando desde el peridico local se empiece a hablar de la plaza de toros y de tal circunstancia. La Junta Directiva de la Sociedad El Fomento de Pearanda cita por carta a los accionistas para celebrar una Junta General a fin de rendir cuentas, aunque en un primer momento se especula sea para dar cuenta de los trabajos realizados (nms. 1.548 y 1.549). En dicha Junta General se procede a la lectura de la Memoria anual en que se hace constar el resultado de las gestiones practicadas para la construccin del circo taurino y se rinde cuentas de los

10 Peridico salmantino

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gastos e ingresos, tanto de los referentes a las obras de construccin, como de los relacionados con las corridas de toros, siendo aprobadas por unanimidad y que arrojan un beneficio de 6.199,59 pesetas. A continuacin se trata de la renovacin de la Junta Directiva. Es reelegida la anterior y, a propuesta de un accionista, se acuerda conceder un obsequio a don Saturnino Gasco por los importantes servicios prestados a favor de la sociedad levantando los planos y dirigiendo las obras de construccin de la plaza con sumo acierto, y gran economa de gastos, aunque el interesado, con humildad, reconoci que no mereca distincin alguna y, si acaso, bastaba un papel escrito. En los meses siguientes las noticias hacen referencia a la preparacin de una novillada para el jueves de Corpus, pero no se dice nada del remate de las obras, aunque ya se nos habla de una sociedad explotadora pearandina, que est en negociaciones con toreros y ganaderos (nm. 1.556) con vistas a las corridas de los das 5 y 6 de septiembre, aunque para el festejo del da de Corpus es la Junta administradora de la plaza de toros la que realiza los oportunos contratos (nm. 1.558, de 28.3). Con la mirada puesta ya en las ferias de septiembre desde La Voz se hace un llamamiento especial a los comerciantes e industriales para que todos se unan y colaboren en lograr confeccionar un buen programa de festejos introduciendo algn atractivo que redundar en su beneficio y en el de la villa: Hay que pensarlo con tiempo; hay que organizarse bien; hay que moverse. Hay que reunir dinero y saberlo tirar a tiempo porque el que no siembra no recoge (nm. 1.569). Deben lanzarse a organizar festejos diferentes e independientes de los organizados por el Ayuntamiento porque no hay que ser tan espaoles... que lo esperamos todo del Estado, de las Diputaciones, del Municipio, sin pensar en las mltiples cargas que sobre estas corporaciones pesan. Por parte de la Junta se van dando los pasos necesarios para la celebracin de las corridas. Se anuncia la contratacin de una ganadera, de los matadores Corchato y Relampaguito, pues la Junta quiere dejar enhiesto el pabelln del ao anterior (nm. 1.568); se van a elegir los toros; se anuncian las subastas de los caballos necesarios, de la carne de los 12 toros, del arrastre de caballos y toros con dos tiros de tres mulas y la del servicio de conduccin de los caballos muertos al sitio que la autoridad indique (nm. 1.574). Tambin trabaja en la terminacin de la plaza confirmando por primera vez en La Voz la no conclusin de la misma: Adems de la construccin de un nuevo corral independiente de los construidos, para el encierro de otra corrida y de otras reformas efectuadas, los elegantes palcos del circo taurino tendrn una altura mayor de 50 cm, y el tejado de la plaza ser cerrado en su mayor parte, obras stas de embellecimiento y de comodidad que sern apreciadas por el pblico (nm. 1.574, de 18.7).

Cartel de la corrida de 1908. (Cedida por Manuel Pea)

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Parte de los antiguos corrales. Fernando Ulln

A su vez, el Ayuntamiento est preparando el programa de festejos para las ferias de septiembre en la parte que a l le corresponde, intentando introducir algn espectculo novedoso, como es la actuacin de la banda del regimiento de Toledo, programa que resulta halagador por lo que se sabe. La cercana del tiempo hace crecer las expectativas y el entusiasmo en los pearandinos. Se suceden, como en aos anteriores, la colocacin de la Mariseca, el desfile de pearandinos por el paseo de La Florida para presenciar las obras que en ella se estn efectuando (nm. 1.575), se saborea el programa de festejos, se facilitan noticias sobre las actuaciones de los diestros contratados, se adjudican las subastas anunciadas: por 2.990 pesetas la contrata de caballos; por 60 la del arrastre de los toros y a 41 reales la arroba la carne de los 12 toros (nm. 1.576). Se distribuyen los programas que fijan para el da 5, a las 3.30 horas, la primera corrida de toros en el hermoso y elegante circo taurino que Pearanda construy en el ao pasado por suscripcin popular y que en el presente se ha ampliado con la construccin de nuevos palcos y galeras, y embellecido con hermosa y fantstica decoracin (nm. 1.576). En el peridico del da 8 de agosto se resume su estado:Diariamente y por maana y tarde acuden al nuevo circo taurino multitud de personas, deseosas de enterarse de las nuevas reformas que se han verificado y que en la actualidad se estn verificando en nuestra plaza de toros. El levante de los palcos da ms esbeltez y vista al interior de la plaza. La valla y el antepecho de las barreras y palcos se han pintado con los colores nacionales, dando a la plaza un mayor alegre aspecto, y por ltimo estn haciendo en la actualidad nuevos palcos hasta llegar a la puerta de caballos con lo cual el nmero de localidades de sombra es mayor que el ao pasado.

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Nuestro circo taurino ha mejorado, pues, notablemente, tanto en comodidades como en vista. Otro nuevo avance en el ao prximo venidero, y la plaza de toros de Pearanda podr competir con la de cualquier localidad de mucho ms importancia que la nuestra.

Llegan los das anhelados de ferias y fiestas. Acuden las autoridades invitadas. Las corridas de los das 5 y 6 resultan entretenidas. La animacin es grandsima y los variados espectculos resultan exitosos y numerosa la exhibicin de ganado verificndose muchas transacciones, que convierten la feria de Pearanda en una de las mejores ferias.Tramo de la plaza sin tejado (Pearanda en Blanco y Negro, 2002)

Y... pas el bullicio, pas la animacin, pasaron las fiestas y las ferias como todo pasa en este pcaro mundo (nm. 1.582, 12.9). Entre las noticias del peridico de 10 de octubre se incluye la de que la Junta directiva de la sociedad Fomento de Pearanda prosigue los trabajos de embellec