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CONTENIDO DL B - 14022 - 1998

Cubierta: Juan Carlos García.Edita: Editorial Teosófica SCooCL. para la Sociedad Teosófica Española.Presidente de la Sección: Clarisa ElóseguiLa Sociedad Teosófica Española sólo es responsable de las comunicaciones oficiales queaparecen en esta revista.Las opiniones de los autores son de su propia responsabilidad.

SOPHIANº 227 ENERO 2008

EDITORIALEL AGUA ...............................................................................................................................3

DESDE LA ATALAYA, Radha BurnierLa mente humana....................................................................................................................5Pobreza de sentimientos..........................................................................................................6¿Cómo puede la mente dejar de ver claramente?....................................................................7

EL OBJETIVO DE LA TEOSOFÍA HOYR. C. Rath................................................................................................................................9

LA LIBERTAD SUPREMAHenriette van der Hecht........................................................................................................13

LA VIDA ESPIRITUAL EN MEDIO DE LA VIDA MUNDANAVicente Hao Chin Jr. .............................................................................................................20

BASTA DE TEORÍASAldous Huxley......................................................................................................................26

ACTIVIDADES ........................................................................................................................27

2 Sophia nº 227

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EDITORIAL

EL AGUA

Hay un sabio japonés muy estudioso, Masaru Emoto (Mensajesdel Agua, El Poder curativo del

Agua, El Despertar de la Conciencia)que se ha dedicado en sus laboratoriosa estudiar el agua. No precisamente suscomponentes químicos, sino sus cuali-dades, sus “aptitudes”, sus resultados,en definitiva su “conciencia”, si es queteosóficamente podemos atrevernos acalificarla de eso.

Dice el sabio japonés que el agua esmensajera de Dios. Y no lo afirma conningún sentido peyorativo. Cita a Talesde Mileto, el primer filósofo pre-socrá-tico que decía que el agua es el arjé, elprincipio de todas las cosas.

Si hemos de atenernos a lo que lasenseñanzas teosóficas, y también lascientíficas, preconizan, la vida en nues-tro planeta empezó en el agua y desdeallí surgió y se configuró el resto de lacreación.

Sigue diciendo el sabio que el aguaes el fluido vital, la vida circulando. Esomismo nos dice HPB en su DS cuandoafirma que el agua es la sangre de la Tie-rra.

Masaru Emoto alude a las cualida-

des asombrosas de respuesta por partedel agua, y nos afirma que el agua re-gistra todo tipo de sonido y que, some-tida a diversas clases de música, y colo-cando encima de placas Petri 0,5cc deagua, o prodigándole insultos, o envián-dole pensamientos amorosos u otro tipode emociones, el agua responde reso-nando en cada vibración. Congelandoesa agua y dejándola luego que se vayadescongelando bajo el microscopio,aparecen los cristales.

Si el mensaje que se envió a esaagua fue de amor y gratitud, ¡cristalizaen bellísimos hexágonos! Por el contra-rio, si se trata del agua a la que se insul-tó, no se forman cristales, o bien éstosaparecen en formas irregulares, horri-bles, feísimos. Lo mismo ocurre con elagua sometida a un tipo de música de-terminado. Según sea ésta, así respondela cristalización del agua puesta a prue-ba.

Esto nos hace reflexionar, y mucho,sobre la Unidad de la Vida y de las co-sas, que viene siendo el ‘leit motiv’ denuestros estudios teosóficos.

Sabíamos que las Plantas, y el rei-no vegetal en general, eran responsivos

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a las emociones y a los sentimientos delos humanos. Pero ahora resulta que nosenteramos de que el agua es igualmenteresponsiva y se interpenetra igualmentede toda emoción y de todo sentimientodirigido hacia ella, sea en la forma enque ésta se presente, congelada, circu-lando como manantial, evaporada inclu-so...

¿Cómo no va a estremecernos estasensación de Unicidad de todas las co-sas? ¿Y cómo vamos a proceder a partirde ahora con “la sangre de la Tierra?”Dependemos de ella en absoluto y paratodo; y si nuestra desatención, nuestranegligencia, hacen que nos olvidemosde ello, con seguridad que vamos a pa-sarlo mal.

Científicos y personas bien intencio-nadas vienen advirtiéndonos de ello ynos conminan para que la ahorremos,para que no la desperdiciemos, para queno la contaminemos...

Pero si todo esto no va acompañadodel máximo respeto y concienciaciónpor este elemento de la Naturaleza queentra dentro del cuadro primordial deTierra, Agua, Fuego, Aire y Éter, ¿cómovamos a conseguir que el resto de estoselementos que nos dan vida puedanmantenerse?

La misma Unidad de la Vida llevaal agua que discurre hacia el mar, la eva-

pora con la fuerza del Logos Solar, laconcentra en las nubes y la devuelve ala Tierra por conducto de la lluvia paraque siga ese ciclo de circunvolución yde unidad de todas las cosas.

La Tierra y toda su población nece-sitan el agua para subsistir. Este planetaestá configurado así y no sabemos porqué. Pero obedece a unas Leyes Cícli-cas Eternas de lo Absoluto.

Si no somos capaces de conseguirllegar a ese nivel de comprensión quenos haga amar a la “hermana agua” —como podría haber dicho el santo deAsís— y a respetarla, ¿cómo vamos asubsistir en este planeta?

Lloremos cuando veamos el aguaemponzoñada, y alegrémonos mientrasla Vida vierta a raudales este preciosolíquido desde las cumbres y los montes,por los valles del mundo.

Si lo que el sabio japonés explica escierto —y él lo ha verificado en sus la-boratorios— el agua responderá a nues-tras emociones, a nuestros sentimientos.Que estos sean lo más límpidos posible,lo más amorosos posible cuando con-templemos un riachuelo que brinca porlas piedras escarpadas de un roquedal,deseando que en su deambular llegueindemne a su destino, el mar.

C.B.

DICIEMBRE4. Así pues, paso a paso, y después de una serie de tropiezos, el chela aprende,

por amarga experiencia, a frenar y a guiar sus impulsos; pierde su irre-flexión, su auto-suficiencia y jamás cae en los mismos errores.

K.H .

Meditaciones, K.A.Beechey

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DESDE LA ATALAYA Radha Burnier

La mente humanaLos logros que consigue el ser hu-

mano actualmente implican unos razo-namientos fabulosos y unas matemáti-cas muy complicadas. Pero, al mismotiempo, ¿qué puede ser más irracionalque seguir fabricando armas nucleares,cuando conocemos los resultados de suuso? Sabemos que no solamente el lu-gar donde se usen este tipo de armas,sino la totalidad de la tierra, quedaríanafectados por una guerra nuclear. Y apesar de todo, prácticamente ningún paísquiere dejarlo.

¿Qué puede ser más irracional quelo que le estamos haciendo a la tierramisma? A pesar de conocer las conse-cuencias de nuestras acciones, seguimoshaciendo lo mismo. Uno de los proble-mas menores tal vez sea la cantidad dedesechos que se están produciendo entodo el mundo, pero nosotros seguimosencontrando maneras de aumentar losdesechos. La irracionalidad y la capaci-dad de razonar coexisten y cabría pre-guntarse qué le ocurre a nuestra mentepara seguir con todas estas absurdas con-tradicciones. Los científicos nos dicenque hay miles de especies extinguién-dose continuamente por culpa de la ac-tividad humana; hay innumerables cria-turas que representan un papel muy im-portante, tal vez incluso un papel des-conocido, en el mantenimiento de laecología de la tierra.

Sabemos, por ejemplo, que las abe-jas nos ayudan con la polinización delas flores. Pero ¿acaso sabemos que nopodríamos sobrevivir sin unas bacteriasinferiores? La revista Smithsonian pu-blicó un artículo muy instructivo haceunos años, donde decían que se necesi-tan bacterias para fertilizar la tierra, parahacer funcionar nuestro sistema diges-tivo, para desintegrar los cadáveres, etc.El profesor Louis Thompson dice quehay millones de criaturas que muerencada día, pero no sabemos qué les ocu-rre. El tampoco lo sabe, pero se las ayu-da a desaparecer rápidamente, Todo estoocurre porque hay otras criaturas quenos están ayudando continuamente consu existencia. Si la diversidad de la vidadisminuye rápidamente, como pareceestar pasando ahora mismo, nadie sabequé puede ocurrirle a la tierra.

¿Qué problema tiene la mente hu-mana cuando está haciendo todos estosactos, como reducir la diversidad, fabri-car cada vez más armas nucleares, etc.,actos cuyo fin parece ser el de la autodestrucción? Dicen que el ser humanoes la única especie que destruye sinmotivos, incluyendo a los de su mismaespecie. Ninguna criatura, creo, excep-to el hombre, se dedica a destruir de for-ma tan indiscriminada. Es una de lascaracterísticas extrañas que conlleva elhecho de ser humano, porque estas acti-vidades realmente no ayudan al hombre.

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Parece que estamos haciendo cosas muyraras, si reflexionamos sobre ello. ¿Po-demos, pues, investigar las posibles ra-zones de este tipo de comportamiento yactitud? ¿Existe algún desequilibrio?

No podemos dejar de pensar queeste desequilibrio se encuentra dentro denuestra mente. La actividad mental ex-cesiva debe ser uno de los motivos porlos cuales las cosas han ido tan mal.Muchos de nosotros no alcanzamos a vermuy bien, aunque tengamos una buenavista cuando somos jóvenes y de mediaedad. Miramos las distintas cosas con loque denominamos unos “ojos que noven”, porque tenemos demasiadas cosasdentro de la cabeza. Podemos pasar porun jardín realmente bello sin ni siquieradarnos cuenta de su belleza, o percibién-dolo sólo fugazmente. Tal vez hablamoscon alguien durante media hora sin sercapaces de darnos cuenta de que hayalgo que le preocupa. A lo mejor no so-mos capaces de decir qué tipo de pro-blema la aflige; puede ser la pobreza, opuede ser algún problema psicológicocon el que tiene que enfrentarse.

Incluso una conversación entre dospersonas puede dejarle a cada uno tansólo una apreciación parcial de lo queha dicho la otra. Mientras oyen hablar aalguien, la mayoría de la gente está pen-sando en lo que va a decir a continua-ción, y por eso no escuchan. Tal vez atra-vesamos un jardín sin oír el canto de lospájaros ni ver la brisa que mueve lashojas, aunque creemos oírlo y verlo. Enun texto muy hermoso, Krishnamurtiescribió:

Si miras una hoja, mírala totalmente, yentonces verás todos sus colores, la be-

lleza de su forma, la textura, lo verás todo.Y si miras las nubes, la caída de las ho-jas, las personas, todas las cosas, con cui-dado y detenimiento, entonces te daráscuenta de todo lo que no ves.

La actividad de la mente nos anulalos sentidos. En la mayoría de los ca-sos, estúpidas distracciones de todo tipovan interfiriendo con lo que tenemosante nosotros.

Pobreza de sentimientosLa actividad mental también merma

los sentimientos, por ejemplo los decompasión. Actualmente se están mu-riendo de hambre unos cuantos millo-nes de personas o mueren lentamentepor malnutrición. Oímos hablar de ello,pero realmente no lo sentimos. Acabasiendo otra noticia más de la cual nosolvidamos pronto. Incluso mientras ha-blamos de ello o lo leemos, tenemos lamente puesta en otras cosas, como en loque tenemos que comprar mañana o encualquier otra trivialidad. Los pensa-mientos crean muchas perturbaciones yenturbian nuestra percepción. Tambiénsuprimen nuestros sentimientos más su-tiles y más delicados de distintos tipos;por ejemplo, el aspecto moral, y no merefiero a la forma tradicional o conven-cional, sino al hecho de saber simple-mente lo que no está bien, y lo que noes útil.

El Señor Budha hablaba del pensa-miento correcto, de la palabra correcta,de la acción correcta, etc. ¿En qué con-siste lo correcto? Este es un tema muyamplio por sí mismo, pero él usó, paradefinirlo, una palabra breve que signifi-ca “bienestar” no solamente de nosotrosmismos sino de otras personas, del en-

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torno, de todo. Así pues, es una especiede destreza que hay que aprender, parapoder llevar el tipo adecuado de vida.La gente hace todas esas cosas tan terri-bles y tan poco éticas porque no sabenqué es lo que causará el bienestar de losdemás y del mundo. Saber lo que es bue-no, y lo que no lo es, es algo muy difí-cil, y por esto se dice que “El caminoque lleva al infierno está lleno de bue-nas intenciones”. Pero si nuestro cere-bro no está distorsionado, si realmentenos preocupa el bien de los demás, lle-garemos a comprenderlo todo mejor, yespecialmente lo que el Budha tratabade decir.

Pensar excesivamente es algo que haeliminado nuestra capacidad de respon-der a lo que no se halla a nivel visible.Nos sorprende ver cómo, después de vercaer las manzanas y todo lo demás, mi-les de personas, ante la pregunta delmotivo de esa caída, respondían “Es lavoluntad de Dios”. Una respuesta irra-cional. Sólo Newton fue capaz de ver laconexión que hay entre todas las caídasde los objetos, y consiguió definir la leyde la gravedad. Dicen que algunos des-cubrimientos extraordinarios que ha he-cho la ciencia se han producido medianteun vislumbre de percepción. Pero el he-cho de pensar a veces parece ser un obs-táculo. Algunos científicos han descritocómo después de tratar de resolver unproblema durante años sin obtener res-puesta, un día, de repente, cuando dejande trabajar sobre ese problema, se lesocurre la respuesta.

Podemos estar rodeados por la be-lleza de la tierra o de un lugar profun-damente apacible. Pero la conciencia de

esa belleza puede ir mermando a causade la actividad mental o incluso puedeperderse del todo, según la mente. Estapodría ser una razón para el desequili-brio de la actividad humana. No sólo lacapacidad de pensar suprime y obstru-ye la realización sensorial, los senti-mientos y las percepciones morales yestéticas, sino que también son factoresque reducen la capacidad de pensar conlógica.

¿Cómo puede la mente dejar de verclaramente?

Los Yogasutras de Patanjali mencio-nan una de las causas, como la mala sa-lud, entre otras. Como sabemos, cuan-do el cuerpo de una persona enferma, lamente no funciona bien. Por ejemplo,conozco a una señora que había sidosiempre amable, hospitalaria, y servicialcon los demás hasta muy entrada la ve-jez. Hacia el final, pareció perder todasesas cualidades. Esta y otras cosas pue-den ocurrir debido al mal estado delcuerpo. En la India antigua, en elBhagavadgita, por ejemplo, se dice queciertos tipos de alimentos producen in-quietud, distracción, agresividad, mien-tras que otros dan pie a la inercia, a lapereza, al rechazo al ejercicio etc. Paraconseguir una capacidad mental tranqui-la y lógica, tal vez necesitemos ingerirel tipo adecuado de alimentos.

Krishnamurti tenía una actitud inte-resante respecto a esto. Al parecer, nun-ca tomaba nada que estuviera hecho conleche de búfala; sólo le gustaba tomaralimentos con leche de vaca, o sin lecheen absoluto. Cuando le preguntaban porqué evitaba la leche de búfala, decía sim-

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plemente: “!Mirad ese animal!” Es unanimal pesado y le gusta pisotear las cié-nagas lentamente. Si coméis ese tipo dealimentos, absorberéis algo de esas cua-lidades. Comer carne nunca ha sido algoaconsejable para las personas que quie-ren estar despiertas y despejadas, por-que algunas influencias que se encuen-tran en el cuerpo del animal, como laviolencia, la ferocidad etc., se conser-van, en cierto grado, cuando se absor-ben.

Lo que bebemos también es impor-tante. Por ejemplo, una persona adictaal alcohol antes o después verá dañadasu capacidad mental. Hay también emo-ciones que afectan la claridad de la men-te de una persona. En la tradición india,se dice que todos los enemigos de unapersona están dentro de ella, no fuera, yesos enemigos son la ira, la ambición,la vanidad etc. Es importante darse cuen-ta de todo esto. Es lo que el Buddha lla-maba las “llamas” que arden dentro.

La mente está mucho mejor prepa-rada cuando se da cuenta de todo esto.En las escuelas religiosas, enseñan lanecesidad de mantenerse en calma, detomar las cosas tal como son y de noinventar modos de aumentas nuestra in-satisfacción. La ambición hace que lagente destruya el medio ambiente. En laactualidad, el poder del dinero ha im-pregnado la sociedad moderna, y la irra-cionalidad sigue existiendo aunque lamente se haya perfeccionado tanto. Elcuerpo, los sentimientos, la capacidadmental, nuestra forma de actuar y de re-lacionarnos con todo, están todos conec-tados entre sí. Cuando el pensamientoes mucho más claro, lógico y sensible a

las necesidades de los demás, se puedeayudar a la otra persona, y al mismotiempo aclaramos también nuestra pro-pia mente. Pero si nos sentimos tensosemocionalmente y ansiosos, entoncesesto no será posible, porque las actitu-des egocéntricas obscurecen la mente.

Si comparamos una mente pura yuna mente impura, o una mente clara yuna mente oscura, veremos que pasa lomismo que con el sol que, cuando estácubierto por las nubes, parece no darluz ni calor. Pero el sol está siempre allíy cuando las nubes se disipan, vuelve abrillar. Así pues, esta mente abierta queconfiere cierto tipo de inteligencia a casitodas las criaturas, está en todas partes,pero se ve obscurecida por el deseo per-sonal y egoísta.

Si pudierais dejar de lado todo tipode deseo, entonces, según algunos maes-tros, alcanzaríais la iluminación. Apar-tad todo aquello a lo que os habéis afe-rrado internamente y sutilmente. No te-néis que tirar vuestros muebles, pero nodebéis apegaros a nada. Podéis usar laspalabras “Yo” y “mío” sin tener una sen-sación de posesividad ni de apego anada. Para explicarlo de forma simple:“Voy a tomar una ducha ahora, pero esono significa que me sienta apegado alcuerpo”. Así pues, aunque por conve-niencia podemos usar cierto tipo de len-guaje, deberíamos dejar de lado todasensación de un deseo personal y todaslas implicaciones que eso conlleva. En-tonces la mente podría pensar claramen-te, de forma lógica y sensata. Dicen quela mente impura es la mente del deseo,mientras que la mente pura carece dedeseos.

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¿Cómo podemos conseguir teneruna mente tan clara que sea capaz dedarse cuenta de lo que es importante yde lo que no lo es? En el libro A los piesdel Maestro, se señala como una de lascalificaciones para el discernimiento laclaridad de visión. Si estamos muy ape-gados a las cosas que no son duraderas,la decepción será segura, y tal vez tam-bién el sufrimiento. No nos damos cuen-ta de que existen unas condiciones psi-cológicas que pueden clasificarse a gran-des rasgos como sufrimiento. Así pues

dejar de lado las cosas es sufrir, porqueel apego también es sufrimiento, ya queantes o después tendréis que dejarlas.Muchas de las cosas que consideramosplaceres son, en realidad, causas de do-lor, y hemos de ser conscientes de esto.Si podemos ser conscientes de ello enlo más profundo de nuestro corazón, lamente no perderá su sentido común nisu claridad.

(The Theosophist, noviembre 2007.)

La Teosofía se reveló al mundo en1875 pero sólo es conocida poruna de cada sesenta mil personas

de su población a pesar de una difundi-da publicidad.

Un factor importante para su lentaaceptación es una falsa interpretación dela misma.

La primera falsa interpretación esque la gente piensa que la Teosofía esuna religión. Pero no está incluida entrelas 275 religiones existentes anotadas enel American Year Book of Churches (Li-bro Americano del Año de las Iglesias).Sin embargo, la Teosofía es la esencia

de todas las religiones y presenta el con-cepto más racional del hombre, Dios yel Universo.

La segunda falsa interpretación esque la Teosofía es una filosofía. Pero noes ninguna de las filosofías académicasque se enseñan en los colegios y uni-versidades. Sin embargo, la Teosofía esla filosofía más contundente que ofreceun significado satisfactorio y un propó-sito de la vida.

La tercera falsa interpretación es quese trata de una ciencia. Sin embargo, noes una de las disciplinas aceptadas de laciencia moderna, aunque trata de los rei-

EL OBJETIVO DE LA TEOSOFÍA HOY

R. C. Rath

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nos invisibles de la naturaleza y de lasleyes que operan en ella. En este senti-do, es una ciencia oculta.

La cuarta falsa interpretación es queestá relacionada con el ‘espiritismo’. Sibien la literatura teosófica proporcionaun mundo de información sobre la na-turaleza de los espíritus, sus jerarquíasy sus ambientes, esta misma literaturadesaconseja cualquier identificación ocomunicación con ellos.

La quinta falsa interpretación es quela Teosofía es una variante inglesa delhinduismo. En realidad, la Teosofía tie-ne tantos puntos de contacto con las es-crituras y con la filosofía hindúes que, amenos que se estudien en profundidad,es evidente y probable que se cree unaconfusión.

El Dr. I.K. Taimni, un erudito yhombre de gran espiritualidad que estu-dió con espíritu crítico tanto la Teosofíacomo las filosofías orientales, dice:“Hay una tendencia a considerar a losVedas y a otras escrituras como los úni-cos depositarios de la Sabiduría Divina,y a pensar que todo lo que el hombrerequiere para sus necesidades espiritua-les y temporales está contenido allí. Nohay duda de que las escrituras hindúescontienen una gran cantidad de inapre-ciable conocimiento, especialmente re-lativo a los más profundos problemas dela vida, pero esto no debería ocultarnosel hecho de que ello no significa más queuna representación muy parcial e imper-fecta de la Verdad tal como debe existiren la Mente Divina.”

“...Tomar incluso la más perfectareligión revelada por la verdad misma—como la única representación de la

Verdad— es demostrar la falta de apre-ciación de uno sobre la trascendencia eilimitada naturaleza de la Verdad.”

Añade además Taimni: “Es ciertoque la naturaleza y el origen del conoci-miento que amalgama el nombre de Sa-biduría Divina existe en la Mente Divi-na eternamente y el que pueda elevar suconciencia a ese nivel puede ponerse encontacto con ese conocimiento. Perocuando este conocimiento se expresa enlas religiones reveladas, queda sujeto alimitaciones.”

“El hinduismo y la Teosofía tienenmucho en común pero también existendiferencias en puntos tales como: (a) laslimitaciones de la religión revelada, (b)la falta de ideas claras sobre el propósi-to de la evolución y sobre la necesidadde alcanzar estados definidos de evolu-ción al final de un ciclo más o menosdilatado. La idea de las Rondas y de lasRazas está ausente en el hinduismo, © .. . el poderoso impacto de la ciencia haafectado todos los ámbitos de nuestravida pero la religión y la filosofía hin-dúes se las han arreglado para mante-nerse al margen y para evitar cualquierclase de contacto con las ideas científi-cas. Esto es lo menos deseable y ello vaa confinar a la religión y a la filosofíahindúes a un rincón y a hacer que la gen-te piense que se han quedado anticua-das. La Verdad no tiene nada que temerde la ciencia y si la religión y la filoso-fía hindúes están basadas en la Verdady consideran a la Verdad como su últi-mo objetivo, sólo bien puede derivarsedel contacto con la ciencia, la cual vatambién en pos de la Verdad aunque pordiferentes caminos y a nivel inferior;

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punto (d). La existencia de la Fraterni-dad de Adeptos o Mahatmas. Que elhombre se convierte en inmortal despuésde alcanzar Mukti o la liberación es biensabido en el hinduismo; que algunos deestos seres liberados se convierten en“Adhikari Purushas” y ejercen distintosoficios en el Gobierno Interno del Mun-do es también constatado en losPurânas. Pero toda la idea en si, talcomo existe en el hinduismo, es vaga yestá entremezclada con la mitología po-pular. Así pues, aunque el promedio delos hindúes cree en la existencia de losMahatmas, sus ideas sobre ellos son ex-tremadamente confusas. Cualquiera queen nuestros días cautive la imaginaciónde la gente y sea capaz de atraer la aten-ción pública durante algún tiempo, pue-de ser llamado Mahatma, independien-temente de sus consecuciones espiritua-les, y de este modo el concepto sobrelos Mahatmas se ha vulgarizado porcompleto.”

De todo esto se deducirá que la Teo-sofía no es ninguna de estas religionessolamente, sino que las incluye a todasy mucho más. Así pues, la Teosofía esesencialmente una disciplina espiritualque imparte las siguientes enseñanzas:

1. - Hay una Inteligencia Cósmicaque es, al mismo tiempo Conciencia ypoder en manifestación.

2. - El Hombre es un centro en laInteligencia Cósmica y posee potencia-lidades divinas.

3. - Hay un Plan Cósmico de Evo-lución.

4. - Hay planos multidimensionalesindivisibles en la naturaleza.

5. - Hay un Gobierno Interno com-

puesto de seres superiormente evolucio-nados espiritualmente, conocidos comoMahatmas, Manús, Bodhisattvas,Buddhas, Devas, Ángeles, que guíanbenévolamente los asuntos del universoy de la humanidad en sus diferentes as-pectos.

6. - El hombre tiene una vida post-mortem de feliz descanso seguida de unavida física renacida.

7. - La meta final de la vida es la co-expansión de la concienciaindividualizada con la Conciencia Cós-mica con objeto de conseguir la identi-dad con Ella.

8. - El hombre es en si el arquitectode su propio destino y es el responsablede su dolor y de sus alegrías por sus pro-pios actos.

El estudio de la religión compara-da, la filosofía y la ciencia demuestraque la Teosofía presentada por la Socie-dad Teosófica desde 1875 no fue su pri-mera aparición sino que apareció comoel Taoímo en China en la cuarta sub-razaturania y en la séptima sub-razamongólica de la cuarta raza-raíz o razaatlante. En la quinta sub-raza —los hin-dúes de la quinta raza-raíz o raza aria—llegó a través de la religión brahmánicaen la India, y simultáneamente, como elconcepto egipcio de la Trinidad de Ra-Osiris-Isis. Por todas partes aparecieronlas verdades teosóficas en la Kábala delos hebreos, en los oráculos caldeos, enla religión de Zoroastro y en el sistemaórfico de los griegos. En épocas másrecientes apareció como Buddhismo,Cristianismo e Islam.

Se observará que en cada una de lasapariciones la Teosofía aportó a la hu-

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manidad un mensaje especial adecuadoa las necesidades de la época. ¿Cuálpodría ser su mensaje actual?

Para hallar la respuesta hemos deretroceder hasta mediados del siglo XIXy considerar el aspecto socio-religiosodel mundo en general y de Occidente enparticular. Los nuevos descubrimientosde la ciencia y la hostil actitud de losintelectuales hacia el dogmatismo de lasiglesias por un lado; por el otro, la feciega de un gran número de personas enel psiquismo y en las sesiones encami-nadas a luchar entre los dogmas religio-sos y científicos. La espiritualidad esta-ba en franca decadencia ante el auge delmaterialismo. Los sacerdotes de las igle-sias y de los templos eran, en su mayorparte, ignorantes e ineficaces y el inte-rés de los intelectuales se estaba despla-zando hacia la concepción materialista

de la vida y del universo. Por esto, aque-llos que están a cargo de la evoluciónintrodujeron una vez más el eterno men-saje de la Teosofía.

Hoy, la insaciable mente investiga-dora de la actual quinta sub-raza denuestra raza aria tiene que ser satisfe-cha. El objetivo aparece muy claro. Esel objetivo, con la ayuda de la ciencia,de centrar la atención de la humanidaden la metafísica del mundo objetivo quepuede verse en el inteligente principiounificador detrás de él. Existe suficien-te evidencia de que este propósito se estárealizando por las investigaciones cien-tíficas que actualmente se están llevan-do a cabo en lo que se conoce como ex-plosión oculta.

(The Theosophist, abril de 1984.)

PREFACIO

Has llegado a un punto de tu vida en que adviertes que no te es posible pertenecerexclusivamente al mundo. Estás ligado a una honrosa carrera, y sabes que el porve-nir te allegará éxito y comodidad; pero sientes que ya no puedes trabajar tan sólo porel éxito, sino que te es preciso ser idealista en tu profesión, y permanecer fiel al idealque entrevés, a pesar que por ello te sobrevengan sufrimientos y humillaciones. Es-tás en el caso en que hoy se encuentran la mayoría de personas; pero difieres de ellospor el convencimiento de que el ideal que te obliga a la obediencia no es fruto de tuimaginación, sino la primera luz, vagamente entrevista, de una personalidad a quiendesearías ardientemente dar el nombre de “Maestro”. Sientes que si realmente exis-te este Maestro y te fuese posible conocerlo le serías completamente fiel en todo,contra cuanto pueda ocurrir.

En Su Nombre, C. Jinarajadasa

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Las responsabilidades –o deberes–que son nuestros, limitan nuestralibertad? ¿Son impedimentos para

nuestra libertad? ¿O bien las asumimoscon plena libertad?

La libertad es el poder de actuar ode no actuar, de escoger. Es libre aquelque tiene ese poder.

La ética es la ciencia de la moral, esdecir, las reglas a seguir para hacer elbien y evitar el mal. “La ética reconciliaresponsabilidad y libertad”, esa es la for-mulación del tema de nuestro Congresodando a entender que nuestro sentido delbien, nuestro amor del bien, nos condu-ce con toda independencia a asumir undeber incluso si eso nos obliga a renun-ciar a los placeres, o a otras actividadesque nos apasionan.

El ser humano es un ser libre Estoes lo que proclama la más elevada filo-sofía. Sin embargo, muchos científicospretenden que estamos totalmente deter-minados por innumerables factores ex-teriores. De modo que surge la cuestiónde nuestro libre albedrío, de nuestra li-

bertad de decisión.Nuestro cuerpo está condicionado:

constitución unida a la herencia y a losdiversos antecedentes: alimentación, hi-giene, enfermedades, fatiga, factoresclimáticos, hábitos diversos. La heren-cia de la constitución cerebral determi-na –¿pero en qué medida? – nuestrascapacidades intelectuales y, hasta cier-to punto, nuestro carácter. Pero el cuer-po es nuestro instrumentos y nosotrospodemos decidir cómo vamos a utilizar-lo. No somos capaces de hacer todo loque tal vez quisiéramos hacer, pero en-tre todo lo que somos capaces de hacer,decidimos lo que haremos –dentro delos límites de lo que permiten las cir-cunstancias. Decidimos también lo queno haremos, de lo que nos abstendre-mos. Somos libres de no ceder a las pre-siones exteriores. Podemos mejorarnuestras capacidades intelectuales,nuestro carácter, nuestro dominio del yo(tan justamente citado), en una palabra,podemos tomar las riendas deliberada-mente según las exigencias, particular-

LA LIBERTAD SUPREMA

Henriette van der Hecht

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mente, de una vida espiritual o de unanoble ambición. Pero nuestros actos ynuestras palabras, aspectos de nuestravida física, están condicionados pornuestras emociones y nuestros pensa-mientos, que pueden determinarlos.

Nuestras emociones, a su vez, es-tán condicionadas. Nuestros deseos loestán por las atracciones físicas, emo-cionales, intelectuales. Pero podemosdecidir eficazmente no desear algunascosas, no desear nada: el deseo surgede la representación mental del placerque podríamos experimentar. Si mante-nemos nuestra mente inmóvil, cerradaa toda construcción mental imaginandoun placer, si estamos completamenteatentos al presente, ningún deseo pene-trará en nuestra conciencia.

Igualmente, nuestros temores estáncondicionados por las repulsiones físi-cas, emocionales, intelectuales; el temornace de la representación mental delplacer o del dolor que podríamos expe-rimentar. Si mantenemos nuestra menteinmóvil, sin imaginar los disgustos fu-turos, totalmente atentos al presente,ningún temor, ningún miedo, nacerán ennosotros.

Felicidad, bienestar, alegría, conuna irradiación comunicativa, son lopropio del hombre quien, al liberar supensamiento de toda imagen de sí mis-mo, plenamente atento a lo que es, per-manece indiferente por sí mismo al pla-cer o al dolor. Este estado de equilibrio,Vairagya en sánscrito, es la condiciónde percepción consciente de nuestraidentidad con lo Divino, con el Yo úni-co, y se define como: “la ilusión venci-da, la Verdad única percibida”. De modo

que ninguna emoción se apoderará másde nosotros, dando lugar a un senti-miento profundo de unidad y de paz, ya esta felicidad de la Unidad, que es elAmor. No hemos alcanzado este esta-do; todavía estamos emocionalmentecondicionados, pero podemos decidirconquistar esta libertad interior.

Respecto a nuestros pensamientos,no sabemos cuán excesivamente causanremolinos independientemente de nues-tra voluntad, cuánto se repitenautomáticamente, hasta qué punto es-tán condicionados por nuestros hábitosintelectuales, nuestra formación, nues-tros recuerdos, nuestras emocione,nuestros prejuicios, y sin embargo, tam-bién a estos pensamientos podemos im-ponerles silencio, haciendo que resul-ten inexistentes, en una percepción novelada, con una atención perfecta a larealidad de los seres y de las cosas.

Nuestra naturaleza física, emocio-nal, mental está condicionada, pero estanaturaleza no somos nosotros, es nues-tro instrumento. Nosotros somos el Es-píritu, la Conciencia, que utiliza esteinstrumento, lo afina, hace que sea unservidor obediente. Y este Espíritu, estaConciencia es el Yo del Universo, unoe indivisible, inmaterial, único, origenprimero, inalterable, que engendra to-das las cosas, anima a todos los seres,eternamente incondicionado por elmundo creado. Por el hecho de quesomo ese Yo único, espiritual, del Uni-verso, tenemos un libre albedrío total.Nuestra libertad consiste en tomar lasriendas de nuestra naturaleza enterapara hacer de ella un servidor dócil denuestra voluntad.

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Si dice que en la obediencia a lo Di-vino se encuentra la Libertad Suprema.El la unidad consciente con Él, somostotalmente libres. Cuando nos damoscuenta de que somos el Yo inmaterial,eterno, sin condicionar por las modifi-caciones del mundo material a todos susniveles –físico, emocional, mental– enesta unidad con lo Supremo, su Volun-tad existe sola en nosotros; es nuestravoluntad. Y esta voluntad es puesincondicionada, totalmente libre, utili-zando la personalidad con lo mejor delas capacidades que le son inherentes,al servicio de la acción justa.

Los que niegan el libre albedrío nosdicen: “Ved, vosotros actuáis según loshábitos de vuestro cuerpo físico, condi-cionado por los factores hereditarios, lahigiene, el medio ambiente, todo lo queha hecho y constituye vuestra vida ma-terial; vuestras emociones están condi-cionadas por vuestras experiencias pa-sadas; vuestros pensamientos por vues-tra instrucción, vuestra educación, vues-tra formación profesional, vuestra cul-tura intelectual, moral y tal vez religio-sa, por la información que absorbemossin cesar. Y es según todo este contextoque vosotros actuáis y volvéis a actuar,que decidís o que os abstenéis. Vosotrossois el fruto, la resultante de todo estecondicionamiento, sois esecondicionamiento. Vuestra acción esderivada, y no la expresión de una vo-luntad que no resultaría.

Esta afirmación es contraria a laconvicción íntima de cada uno de noso-tros, a nuestra certeza en nuestra capa-cidad de decisión autónoma y libre. Yconstituye un grave error de razona-

miento. Si, el medio ambiente actúa so-bre nosotros, innumerables factores pue-den determinar e influir nuestro ser físi-co, emocional e intelectual y su actua-ción, pero esta personalidad por la cualnos manifestamos no somos nosotrosmismos; no es más que el instrumentode nuestro ser profundo, verdadero: uninstrumento vivo que puede o bien tenersu actividad autónoma, fruto de sucondicionamiento, o bien servir dócil-mente a la voluntad de su poseedor ydueño, el Yo divino.

Pensad en el árbol: la calidad del te-rreno, el clima, la acción del hombre, delos insectos, de los virus o bacterias, etc.,condicionan su desarrollo pero no hacenque sea una encina o un manzano: eso,está en su propia naturaleza. Igualmen-te para cada flor, cada planta, cada espe-cie animal. Lo mismo para el hombre.Éste no está hecho por las influencias delmedio ambiente y sus reacciones anteéste.

Y el verdadero ser del hombre, es elespíritu divino en él. Es este espíritu elque es nuestra naturaleza propia, eterna-mente el mismo, incondicionado, aspi-rando a manifestar lo verdadero, lo bue-no, lo bello que está en él.

En las primeras etapas de la evolu-ción del alma, aquellas del desarrollo dela personalidad, el espíritu da libre cur-so a los impulsos de la naturaleza física,emocional y mental. Cuando la persona-lidad ha alcanzado su madurez, el espí-ritu la utiliza como instrumento de su ac-ción. Se sirve de todas sus capacidadesplenamente desarrolladas.

No se niega al hombre la libertad dedecisión, llamada libre albedrío, más que

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cuando se ignora su naturaleza total:espíritu universal, infinito, eterno, in-condicionado, animando un conjunto decuerpos sutiles inter-penetrando el cuer-po físico y constituyendo con él el ins-trumento del espíritu, del ser en sí.

De modo que el hombre es libre. Suinstrumento de acción, la personalidad,está condicionado y se perfecciona a tra-vés de encarnaciones innumerables.

En un pasaje del Libro de los Pre-ceptos de Oro, traducido del sánscritoarcaico con el título de Los Siete Porta-les por Mme. Blavatsky, al espíritu delUniverso, el Alma del mundo se la lla-ma Alaya. Leemos:

“Todo es impermanente en el hom-bre, exceptuando la pura esencia deAlaya. El hombre es su rayo cristalino:una flecha de luz inmaculada en el inte-rior, una forma de barro material en sucara inferior. Este rayo es la guía de tuvida y tu verdadero Ser, el Vigilante yel Pensador silenciosos, la víctima de tuyo inferior.”

“Tu debes saturarte de puro Alaya,convertirte en uno con el Alma-pensa-miento de la Naturaleza. Unido a ella,eres invencible; separado de ella te con-viertes en la lucha de samvritti, origende todas las i lusiones del mundo(Samvritti, el conjunto de las incesan-tes modificaciones del mundo fenome-nal, físico, emocional, mental)”.

“¡Decir que todos los hombres po-seen Alaya, que son uno con la granAlma, y que , poseyéndola, ¡Alaya lessirve de tan poco!

Nuestra personalidad entera estácondicionada, pero puede ser utilizada,determinada en su acción y en su acti-

vidad, por nuestro ser profundo, espiri-tual, incondicionado, que conoce y quie-re el bien en sí, lo verdadero en sí, lobello en sí.

Responsabilidad: esta palabra es si-nónimo de deber, carga, obligación im-puesta a una persona (especialmente porla ley o por la ética, por la sociedad.).

El bienestar de todos los seres, suconsecución, depende en cierta medidadiferente de cada uno de nosotros, denuestros actos, de nuestras palabras, denuestros pensamientos, de las emocio-nes a las que damos curso, y eso segúnel radio de nuestro campo de acción ysegún la intensidad de esta acción.

Podemos ayudar al bienestar y alprogreso físico, moral e intelectual deotros seres humanos, o podemos obsta-culizarlo.

En una familia, los padres de almagenerosa son especialmente conscientesde hasta donde el bienestar y la expan-sión de sus hijos dependen de su solici-tud, y su sentimiento de unión con ellos,su amor pues, les impulsa a hacer todolo que está en su poder para su bien. Sesienten investidos de la misión de hacerque sus hijos se expresen al máximo desus potencialidades, a fin de que se con-viertan en hombres y en mujeres con losvalores más elevados posibles.

Y quieren responder lo más plena-mente posible a esta misión que les asig-na la vida, al no ser la vida un mecanis-mo, sino más bien el Ser Supremo, Diosmanifestándose en el mundo que emanade Él: conciencia infinita y pensamien-to dinámico en acción en el universo.

Tenemos que responder a esta VidaUniversal, a Dios, actuando para el bien

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de todos los seres, y en el cumplimientodel plan de evolución que debe condu-cir progresivamente al advenimiento deun mundo de perfección.

La misión de responsabilidad de lospadres con relación a sus hijos se vuel-ve a encontrar con los hermanos y her-manas mayores respecto a sus herma-nos menores. Está presente en el ejerci-cio de todas las profesiones, atribuyen-do la sociedad a cada uno y a cada unael compromiso de trabajar para el biencolectivo según la posición y las capa-cidades que le corresponden, y de res-ponder lo mejor que puedan a lo que seespera de él o de ella.

Y en el cumplimiento de esta mi-sión, en el grado más elevado posiblede perfección en el cual asume su car-ga, cada uno se manifiesta al máximo yencuentra su felicidad, al mismo tiem-po que participa en contribuir a la feli-cidad de los demás.

Responder a la misión que es lanuestra, ser responsable, no es una cosaque se derive de un apremio exterior,sino de la propia voluntad, interior, delhombre o de la mujer, y decir voluntadpropia es decir libertad.

Responder al mundo exterior al mis-mo tiempo que a la voluntad interior, esvivir, es abrirse, es salir de sus límites.Es lo contrario de restringirse, de ser pri-sionero, encerrado en los límites del in-terés personal.

Ser responsable, es ser a la vez li-bre y estar en comunión con los demásy con el Maestro de la Vida. El hombreirresponsable no está motivado por lainquietud del bien de los demás seres,sino que se mueve por pensamientos,

deseos, temores egocéntricos.Sin embargo, volvamos de nuevo al

ser humano, que en la infancia de suevolución, está movido por el deseo, po-deroso estimulante de su desarrollo. Nose lo reprochemos. Recordemos de laspalabras del poeta Kahlil Gibran: “Elfruto no sabría decir a la raíz: sé comoyo, maduro y rico y prodigando siem-pre tu abundancia.”

La ética es la ciencia de la moral,de unas reglas a seguir para hacer el bieny evitar el mal. Es el resultado del cui-dado del bien de todos los seres, con unsentimiento de total solidaridad o inter-dependencia, dimanante de la unidadfundamental de todo lo que vive. To-dos los grandes instructores religiososque indican al hombre el Sendero queconduce a la más elevada realización es-piritual, a la toma de conciencia de launidad de su ser con lo Divino –Buddhacomo los grandes sabios de la India an-tigua, Jesús como Moisés, Patanjali consus Yoga-sutras y los teósofosneoplatónicos con Ammonius Saccas,por no citar más que algunos de los másrelevantes– todos han situado la obser-vación de las mismas normas de éticaal principio del Sendero. Han enseñadoque estas normas constituyen tambiénla base de la felicidad de la humanidadentera.

Cuando la unidad de todo lo quevive se percibe, esta percepción se ex-presa en cada acto, en cada actitud. Siesta percepción es constante, la vidaentera se convierte en una ofrenda sa-grada para el bien de todos los seres ypara la manifestación siempre más ple-na de lo Divino en el mundo.

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Todos los actos son entonces res-ponsables, y se convierten en una mani-festación de lo Divino a través de noso-tros; es decir, que se llevan a cabo entotal libertad, que son pura expresión denuestra voluntad interior, una con lavoluntad suprema.

La responsabilidad de cada uno denosotros es trabajar en todos los momen-tos de nuestra vida en la realización, gra-do a grado, del plan divino que quiereque todo lo que vive evolucione haciala perfección, contribuyendo a hacer unmundo de suprema belleza, expresióncreadora de la inteligencia más elevaday del amor más perfecto, en la libertad yla plena responsabilidad de todos losseres.

Cada momento de nuestra vida pue-de ser una contribución a esta realiza-ción, un paso adelante hecho por todolo que vive en esta dirección, en razónde la repercusión sobre todos, actos,palabras, pensamientos, sentimientos,voluntades de cada uno.

Démonos cuenta de la influenciasobre los demás de nuestras palabras yde nuestros actos, directamente y por elejemplo, de la influencia de nuestrospensamientos y de nuestras emociones,por comunicación directa o a distancia(ondas vibratorias, formas mentales depensamiento y emocionales, dichasastrales), y purifiquemos toda nuestranaturaleza a fin de que esta influenciasea puramente benéfica.

Hagamos pues de nuestra persona,en todos sus elementos, el mejor instru-mento posible al servicio del mundo.Acrecentemos nuestras capacidades consu constante puesta en marcha para este

servicio. Que todo nuestro tiempo sededique a esto. Durante nuestras horasde vigilia, esto será con un espíritu deconsagración al bien, a lo bello, a lo ver-dadero, viviendo en función de lo quees eterno, perdurable, transportado devida en vida, esforzándonos en traducirlo Divino incluso en nuestras necesida-des materiales. Y al acostarnos, tome-mos la decisión de intentar durantenuestro sueño de aliviar la angustia dealgunos seres que sufren, participandoasí astralmente en el trabajo de los “Pro-tectores Invisibles” de los que hablanlos autores teosóficos.

Para este trabajo en particular,inspirémonos en la plegaria de SanFrancisco de Asís. No he encontrado eltexto, pero substancialmente dice: Diosmío, haz de mí el instrumento de tuamor:

Que donde haya tristeza, lleve yo la ale-gría,

Donde haya odio, lleve yo el amor,

Donde haya discordia, lleve yo la paz,

Y así a continuación. Se podría continuar:

Donde haya oscuridad, lleve yo la luz,

Donde haya fealdad lleve yo la belleza,

Donde haya crueldad, lleve yo la compa-sión, etc...

Donde haya desaliento, lleve yo entere-za.

Percibiendo nuestra responsabilidadtotal para el progreso del mundo, einstruídos por la Teosofía, tomemos ladecisión de hacernos aptos, por una fir-me determinación y una atención cons-tante, para convertirnos en discípulos de

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los grandes Maestros de Sabiduría de lahumanidad y así en los dispensadores deSu fuerza, de Su amor y de Su sabidu-ría.. Interesémonos para trepar por elSendero de Santidad, que es también eldel Raja Yoga, y con este fin, desarro-llemos en nosotros conscientemente, conperseverancia y tenacidad, las cualida-des necesarias, tales como se las encuen-tra expuestas en el libro A los Pies delMaestro y dediquémonos a poner enpráctica los elementos preliminares delRaja Yoga, según Patanjeli, la vía realque conduce a la realización divina.

El hombre que percibe su responsa-bilidad hacia el mundo, que ha recono-cido por el estudio de la Teosofía el PlanDivino para la evolución de todo lo quevive y de la humanidad, no puede hacerotra cosa que poner todas sus energíasal servicio del gran plan.

Y para hacer eso, tengamos presen-te sin cesar la naturaleza divina de nues-tro ser, uno con lo divino, el Espíritu queanima el universo, según la meditación

propuesta por Geoffrey Hodson, Un Yogade Luz:

Yo no soy el cuerpo físico

Yo no soy las emociones,

Yo no soy la mente,

Yo soy el Yo Espiritual.

Yo soy el Yo Divino, Inmortal, Eterno,

Irradiando la Luz Espiritual.

Yo soy este Yo de Luz, este Yo soy yo.

El Yo en mí, el Atma o Espíritu es Unocon el Yo en todo, el Paramatma, el Espí-ritu Universal.

Que esta luz espiritual ilumine mis pensa-mientos, irradie a través de mis emocio-nes, fortifique y vivifique mi cuerpo.

Durante todo este día, acordémonos de laPresencia Divina en nuestro corazón, delRegente Inmortal, presente en el corazónde todos los seres.

(Congreso Europeo - Oporto,septiembre 2004.)

LO REAL Y LO IRREALPues deseáis encontrar al Maestro, debéis, por más de un concepto, vivir en el mun-do sin pertenecer a él. Es preciso, por lo tanto, y en primer término, que aprendáis aconocer lo que es real y lo que es irreal.El universo en que vivimos es una grandiosa manifestación del Logos, y así, encierto sentido nada irreal existe en él. Sin embargo, varían los modos en que elLogos se manifiesta, y nosotros pasamos de uno a otro modo de expresión a medidaque evolucionamos. Ascendemos de una fase a otra, y desde el instante en que noses posible vivir y obrar en el plano de una fase más elevada, ésta es para nosotros loreal, y la que hemos trascendido es lo irreal.

En Su Nombre, C. Jinarajadasa

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LA VIDA ESPIRITUAL EN MEDIO DELA VIDA MUNDANA

Vicente Hao Chin Jr.

Cuando se habla de la vida espiritual, normalmente suponemosque es un estilo de vida un poco

apartado de este mundo, algo tal vez nomuy relacionado con los problemas ac-tuales a los que hay que enfrentarse enla vida. Pero si reflexionamos un poco,veremos que el aspecto espiritual de lavida no sólo es algo muy práctico sinoque también es una faceta importante ynecesaria que hay que explorar en la vidade cada uno. Si no somos capaces de verla vida bajo un prisma más amplio, nues-tra vida se verá limitada a loscondicionamientos y presupuestos de lasociedad, una vida que realmente seráuna cárcel psicológica, y el prisioneroni siquiera será consciente de estar en-cerrado en una prisión invisible.

Por ejemplo, cuando un individuocrece suponiendo que lo más importan-te en la vida es encontrar un trabajo ycontar con una seguridad económica,tener marido o esposa y niños, tal vezesa persona no sea consciente de que loque está buscando es algo que ha sido el

objetivo mecánico de todos los sereshumanos desde la época de neandertal,la búsqueda de la seguridad y la satis-facción de las necesidades o deseos, ade-más de la adaptación a las exigenciassociales. Naturalmente, hay cosas quedebemos hacer para sobrevivir, pero li-mitarnos a hacer esas cosas es estar dor-mido y llevar la vida de un robot.

¿Hay realmente diferencia algunaentre cazar triunfalmente un ciervo enla Edad de Piedra y vender triunfalmen-te un Toyota o una parcela en el sigloveinte? ¿O crecer, encontrar trabajo,casarse, tener niños, envejecer y morir?Y nuestros hijos ¿crecerán, encontrarántrabajo, se casarán, tendrán niños, en-vejecerán y morirán? Y nuestros nietos¿crecerán, encontrarán trabajo, se casa-rán, tendrán hijos, envejecerán y mori-rán? ¿Es este el significado de la vidahumana: seguir los impulsos de nuestraadrenalina o de nuestra líbido? ¿Losimpulsos del miedo biológico o psico-lógico o del placer? El estremecimientoproducido por este tipo de preguntas en

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el corazón de algunas personas es elprincipio del proceso del despertar, quees un proceso espiritual. Se siente unainsatisfacción, un descontento, ante losesquemas repetitivos de la vida huma-na.

Un sacerdote jesuita, Anthony deMello, lo expresó de forma contunden-te en su libro titulado Awareness. Dijo:Espiritualidad significa despertar. Lamayoría de la gente, aunque no lo se-pan, están dormidos. Nacen dormidos,viven dormidos, se casan en sueños,crían a sus hijos en sueños y mueren ensueños sin despertarse nunca. Jamáscomprenden la maravilla y la belleza deesto que llamamos la existencia huma-na.”

Este despertar es la visión de unarealidad más amplia y más profunda dela existencia. No es una creencia, por-que una creencia significaría seguir den-tro de los muros de la cárcel. Ver signi-fica ver más allá de los muros de la cár-cel, y no limitarnos a creer que hay algofuera de los muros. Este es el principiode la verdadera intuición. Lo que perci-be esta intuición más sutil y lo que hacela personalidad externa son cosas que nosuelen coincidir y que muchas veces sonincluso contradictorias.

En mi opinión, entonces, el elemen-to primero y más importante para llevaresta vida espiritual en medio de la vidamundana es ver esta perspectiva másamplia de la existencia. Muchas vecesesto nos pasa cuando somos jóvenes,pero después va quedando oculto porotros temas externos e inmediatos, amedida que vamos creciendo.

La comprensión intelectualPara unos pocos, este cuadro más

amplio está siempre claro. Para otros,esta visión necesita sostenerse median-te estímulos intelectuales. Por ejemplo,C. W. Leadbeater escribió una vez di-ciendo que si algo no ha importado du-rante 50 años, entonces ahora tampocoimportará de forma esencial. El budis-mo también habla de la naturaleza tran-sitoria de las cosas como uno de los tresprincipios básicos del Budismo.

Ver las cosas como algo transitoriono significa que no sean importantes yque puedan ser ignoradas. Nos iremosocupando de ellas a medida que apare-cen, pero no nos sentiremos perturba-dos ni alarmados cuando no ocurransegún tiene previsto la sociedad o lamente común y corriente. Las adversi-dades y los éxitos vienen y van y tantonosotros como los demás los olvidamosfácilmente, excepto si se convierten entraumas y condicionamientos subcons-cientes que acaban congelados, paraexplotar más adelante, desencadenadospor ciertas asociaciones. Los principa-les valores de los éxitos, adversidades yexperiencias, son la formación del ca-rácter y la sabiduría más profunda queno se pierden de vida en vida. Los he-chos adversos, cuando no existe este tipode cargas emocionales dentro de noso-tros, no son sino recuerdos mentales ynada más. No nos harán felices ni infe-lices.

He trabajado en distintos negociosa lo largo de mi vida y en muchas oca-siones he tenido grandes ganancias ygrandes pérdidas. Me he dado cuenta deque si no me dejaba traumatizar por las

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pérdidas ni me aferraba a las ganancias,esas ganancias y pérdidas se olvidabanfácilmente y lo más importante es lo quesomos en el momento presente, no lo queéramos hace tres años o siquiera ayer .

Estos son, pues, los tres pasos conlos que entramos en la vida espiritual:

1)la percepción intelectual de la natura-leza transitoria de las cosas

2) la ausencia de pulsadores condiciona-dos emocionalmente

3) la visión directa de la naturaleza tran-sitoria de las cosas y la capacidad detrascender las reacciones emocionales ymentales

Los dos primeros son accesibles atodos los que son capaces de reflexio-nar sobre su vida y que se esfuerzan se-riamente por conseguir el auto controlemocional. El tercero no es accesiblepara todos; requiere el despertar espiri-tual como requisito previo. Vivir conesta visión comporta ciertos efectos se-cundarios o cualidades que apareceránen la vida diaria y que cambiarán de for-ma radical nuestra forma de vivir la vidamundana.

El desapegoUno de los efectos que tiene esta

visión es un crecimiento del desapegohacia las cosas. Podemos amar a las per-sonas y apreciar las cosas y los hechossin convertirlos en motivo de ansiedady preocupaciones. Podemos aceptar lascosas tal como son, y aceptar los hechostal como ocurren. Podemos actuar contranquilidad, ecuanimidad e impersona-lidad. Trascenderemos el elemento per-sonal al tratar con las cosas.

Cuando un arquero dispara sin tener idea

de conseguir un premio, es dueño de to-das sus facultades; cuando dispara paraconseguir la medalla de bronce, ya estámás nervioso; y si dispara para conse-guir la de oro, se ciega, ve dos dianas ypierde el control. Su capacidad es la mis-ma, pero el premio lo divide. ¡Es algo quele importa! Piensa más en ganar que endisparar y la necesidad de ganar le privade todo su poder.

Tranxu,citado por Anthony de Mello.

Este es el karma yoga, el yoga de laacción impersonal. De hecho, tendremoscada vez una mayor capacidad de deci-sión, seremos más rápidos en nuestraacción y más sabios en nuestro juicio.Es la personalidad la que nos obscurecela visión y nos retrasa la acción. Sonnuestras apetencias y aversiones lo quenos confunde. La realidad es mucho másamplia que nuestras preferencias perso-nales.

Los chinos lo llaman wei wu wei, oacción sin acción. Es un principio fun-damental en el Taoismo místico. Con-siste en estar en armonía con esa reali-dad más amplia. Un individuo no es másque una parte de esa realidad total, unarealidad que estaba allí antes de que no-sotros naciéramos, una realidad que es-tará allí mucho después de que todoshayamos muerto, mucho después de quehaya desaparecido todo el sistema solaro la galaxia de la Via Láctea.

En el libro clásico Luz en el Sende-ro, nos hablan del “Canto de la Vida”,con el cual tenemos que sintonizar.

Escucha el canto de la vidaGuarda en tu memoria la melodía que oi-

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gas.Aprende de él la lección de la armonía.

Es esa realidad más amplia. La ma-yoría de la gente no oye esta melodía.Solo oye la melodía de la sociedad, dela televisión, de sus amigos, de los pe-riódicos. Estas melodías sociales sonuna cacofonía que acaba por producirinfelicidad, conflictos, guerras, pobre-za y una lenta destrucción de la tierra.El aspirante espiritual tiene que empe-zar a escuchar el sonido de este “Cantode la Vida”. Al principio será una débilmelodía que unas veces oiremos y otrasno. Pero cuando la oigamos más a me-nudo, nos resultará más fácil reconocersu música como algo distinto al ruidode la música de la sociedad. Entoncesempezará un reajuste de nuestra propiavida. Es una fase necesaria. Nosotros,criados al son de la música de la socie-dad, tendremos que empezar ahora aaprender otros pasos de baile distintos.Tal vez sea algo doloroso. Tal vez im-plique un cambio de profesión o de tra-bajo o negocio. Pero esta sintonizacióntiene que hacerse.

El gran sabio americano, HenryDavid Thoreau, escribió: “Si un hom-bre no sigue el ritmo de sus compañe-ros, tal vez sea porque oye a otro bate-ría distinto. Dejadle bailar al son de lamúsica que él oye, tanto si es rítmicacomo si no lo es”.

Los condicionamientos emocionales¿Y qué podemos decir del equipaje

emocional que hemos acumulado duran-te 20, 30 o 50 años? ¿Cómo podemosdescargarnos y liberarnos de su natura-leza automática cuando nos relaciona-

mos con la gente, con las cosas y con lavida? Aquí es donde entra la auto-reali-zación. Hay formas directas de manejarestos botones automáticos para anular-los más rápidamente. Uno de los plan-teamientos es lo que llamamos procesa-miento emocional, que practicamos enel Seminario de la Auto-Transformación.Pero igualmente importante es la capa-cidad de ser conscientes a cada momen-to en que aparecen estos esquemas dereacción en nuestra vida diaria.

Anthony de Mello, uno de los sa-cerdotes jesuitas místicos más brillan-tes que ha existido, hablaba de estaconcienciación. Decía lo siguiente:

Os lo prometo: Nunca he conocido a na-die que se haya esforzado un poco en serconsciente que no constatara una diferen-cia en tema de semanas. La cualidad desu vida cambia y ya no tiene que hacerlotodo cuestión de fe nunca más. Puedenverlo; son personas distintas. Reaccionande forma distinta. De hecho, reaccionanmenos y actúan más. Podéis ver cosas queno habíais visto jamás. Tenéis mucha másenergía, estáis mucho más vivos. La gen-te piensa que si no dejan de tener deseos,estarán como muertos. Pero de hecho,perderán sus tensiones. Liberaros devuestro miedo al fracaso, de vuestras ten-siones por alcanzar el éxito y consegui-réis ser vosotros mismos. Relajados. Yano conduciréis con los frenos puestos.Esto es lo que ocurriría.

A medida que vamos trabajando ennuestra auto concienciación, momentoa momento, también hemos de saber queeste proceso dura un cierto tiempo, me-ses o años. Las congestiones acumula-das de toda una vida no pueden evapo-rarse con un solo momento deconcienciación. Se han congelado y en-

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durecido, como el barro, y habrá querascar mucho y echarles mucha aguapara poder reblandecerlo y eliminarlo.Y por esto necesitamos persistencia ypaciencia. Porque ésta es la naturalezay la ley del ser.

Así pues, cuando un defecto denuestro carácter siga repitiéndose, a pe-sar de nuestras sinceras resoluciones enel sentido contrario, dejemos que la luzde la conciencia bril le sobre esatrasgresión. Entonces, toda la suciedadque haya aflorado se dispersará y des-aparecerá. Poco a poco, todo se desva-necerá. Llegará un día en que esa urnaoscura quede limpia de toda suciedad,sin posibilidad de nuevas recaídas niempeoramientos. Nuestra acción no vol-verá a ser nunca una reacción.

El desequilibrio externoHemos de hablar de otro punto tam-

bién: el desequilibrio externo. A pesarde nuestro interés por ser conscientes ytener ecuanimidad, puede que nos siganatacando las flechas de nuestro karmaanterior; lo que Shakespeare definecomo “las hondas y las flechas de la te-rrible fortuna”. Es en este punto dondedeberíamos tenerlo claro y ser capacesde comprender bien las leyes de la viday de la acción, dejando que los movi-mientos causados por acciones pasadasrecuperen su equilibrio natural. La ven-ganza y la reacción no hacen sino remo-verlas, retrasando, con ello, ese momen-to de equilibrio externo. (Una de las másnotables cualidades que le encuentro aC.W. Leadbeater es su capacidad de nohaber estado nunca a la defensiva a pe-sar de haberse visto atacado abiertamen-

te. Nunca he visto en sus escritos, ni eninformes sobre él, ninguna actitud deamargura o resentimiento respecto a ladestrucción de su reputación que estabateniendo lugar).

Otro aspecto importante para llegaral equilibrio externo es el desarrollo dela destreza en las acciones externas. Hayque aprenderlo. Hagamos lo que haga-mos, trabajos domésticos, enseñanza,medicina, ventas, negocios, política ocualquier otro trabajo, hemos de desa-rrollar una cierta destreza en la acción,para que no nos perturben fácilmente losproblemas y las crisis que inevitable-mente surgirán en cualquier tipo de ocu-pación en la vida. En otras palabras, encualquier trabajo al que nos dediquemos,hemos de conseguir hacerlo lo mejorposible dentro de nuestras capacidades.Es lo que los hindúes llaman nuestrodharma, una situación en la vida a la quehemos de hacer frente y que debemoscumplir lo mejor posible.

Estar en el presenteEntonces, finalmente, cuando vea-

mos el cuadro más amplio, cuando sea-mos capaces de oír el “Canto de la Vida”,cuando hayamos domado los hábitos ycomportamientos del animal personal,cuando hayamos desarrollado destrezasde la vida, entonces estaremos en mejorsituación para poder vivir consciente-mente el momento presente.

Vivir en el momento presente noconsiste en afirmar intelectualmente elpresente. Es ser conscientes de nuestrocuerpo, de nuestros sentimientos y denuestros pensamientos a medida que vanocurriendo. Y al ser conscientes de todo

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ello, no nos sentiremos arrastrados porlas presiones y los acontecimientos,como ocurriría si no fuéramos conscien-tes de estas cosas. La “parte mecánica”de la vida quedará reducida al nivel ne-cesario, pero las cosas más importantesse harán de forma consciente, sin remor-dimientos, con un entusiasmo y una in-tensidad sin bloqueos.

Vamos a revisar brevemente algu-nas de las ideas que hemos compartidorespecto a llevar una vida espiritual enmedio de la vida mundana:

— El primero es ver, al menos deforma intelectual, el cuadro más amplioy más profundo de la vida y de la exis-tencia. Darnos cuenta de que las exigen-cias del día a día de la sociedad no sonmás que una pequeña parte de esta rea-lidad más amplia.

— Después, necesitamos ser cons-cientes de los profundoscondicionamientos con los que la socie-dad ha impregnado nuestra personalidady dejar que los condicionamientos queson insanos vayan desapareciendo.

— Es de esperar que, después, sea-mos capaces de ver, más allá de la sim-ple lógica, la naturaleza transitoria de lascosas.

— Como resultado, veremos que, deforma natural, florecerá en nosotros lacualidad del desapego respecto a las

personas y a las cosas. No es que dismi-nuya la intensidad de nuestra interaccióncon ellas, de hecho será más profunda ytodo, pero ya no de forma personal.

— Necesitamos desarrollar la des-treza en la acción mientras vivimos lavida social y material. Sea cual sea nues-tro drama, llevémoslo a cabo lo mejorposible.

— Veremos, entonces, que ahora yasomos capaces de liberarnos de nuestrobagaje de recuerdos y de ansiedad y depoder vivir realmente el momento pre-sente, conscientes de nuestro cuerpo, denuestras emociones y pensamientos, amedida que éstos van ocurriendo.

Y entonces podemos amar, podemosequivocarnos, podemos aprender, pode-mos crecer y convertirnos en lo que po-damos convertirnos sin la angustia y laansiedad que experimentan las personasen general en el mundo moderno. Lavida se vive, entonces, con una pasiónnatural que no se ve afectada por nada.La vida, con todas sus complejidades yexigencias, deja ya de ser un problema.Simplemente es.

Nosotros somos cono el agua quefluye en la corriente del universo en elespacio y en el tiempo. Simplemente flu-ye.

(Theosophia, junio 2007.)

DICIEMBRE

5. Hasta aquí estoy satisfecho de tus esfuerzos. Persevera y sigue enseñando.

K.H .

Meditaciones, K.A.Beechey

26 Sophia nº 227

El defecto de nuestra enseñanza de lashumanidades es la de ser exclusiva-

mente verbal. Descuidamos totalmentelas humanidades prácticas. En otras pa-labras, descuidamos educar el organis-mo psico-físico que sirve para aprendery para vivir. El pensamiento oriental tie-ne de particular que no es un pensamien-to teórico. Ninguna filosofía, en Orien-te, ha soñado jamás en predicar una cosay practicar otra.

Sin embargo, esto es precisamentelo que hacen todos nuestros filósofosoccidentales desde hace siglos. Kanthablaba del Imperativo Categórico, perose salía de sus casillas como el día enque unos marineros náufragos se apo-deraron de unas frutas confitadas que élhabía hecho venir de Italia... Niestzchehablaba del Superhombre pero se cau-saba unas indigestiones comiendo dema-siado pfeferkuchen... Schopenhauer ha-blaba del desapego buddhista, pero vi-vía en un apego extremo.

Por encima de todo, lo que hay quehacer, en Occidente, es una filosofía que

sea amor de la sabiduría en la prácticaigual que en la teoría. La idea de unirlos productos verbales de una civiliza-ción a las de otra sería absurda. Nues-tras escuelas y nuestras universidadestienen necesidad de conocer la filosofíaoriental como disciplina práctica y almismo tiempo como explicación racio-nal de una cantidad de fenómenos psi-cológicos. Todos los que enseñan unmétodo psicofísico, desde el golf hastala oración mental, empíricamente handescubierto la necesidad de combinar eldescanso y la actividad, la actividad delYo profundo, el descanso del yo super-ficial o ego. La filosofía oriental es a lavez la práctica sistemática de esta “acti-vidad en el descanso”, y la teoría (Tattvam asi) explicando las concordanciasempíricas de esta experiencia funda-mental del individuo.

Tratar de la cultura oriental comode una serie de textos y de pretextos paraconferencias doctorales sería una catás-trofe. Pero si se vislumbra una teoría yun método práctico de educación

BASTA DE TEORÍAS

Aldous Huxley

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ACTIVIDADES

RAMA ALICANTE

Lunes (a las 18,30h.) - Estudio del libro “Estudio sosbre la Conciencia” de A.B. Conducidopor miembros de la Rama - (a las 20h.) - Reunión, estudio y coloquio de la Rama.

1º y 3º Martes de cada mes (a las 18h.) - Técnicas de Interpretación astrológica. Modera-dor B. Martínez.

Miér coles (a las 18h.) - Curso sobre “El Conocimiento de si mismo” a través de A.Besant,Slater y Krishnamurti. Conducido por T. De la Hoz.

Jueves (a las 19,45h.) - O.T.S. “Onda de Paz”. (A las 20h.) - “Las Fuentes del Conocimien-to”. Coordina A. Pérez con la participación de la Rama Shakti-Pat de Benidorm. Alican-te, 2º jueves de cada mes.

RAMA BHAKTI

Mar tes (a las 19h.) Reflexiones sobre los Yoga Sutras de Patanjali. Coordina P. Pujós. (Alas 20,30h.) Reunión de Rama. Sólo para miembros.

2º y 4º miércoles (a las 18h.) - Grupo de estudio en el Ateneo de Sant Cugat. Coordina C.Elósegui. Las Leyes Universales del Kybalión y La Doctrina Secreta, Isis sin Velo, etc.

Jueves (a las 17h.) - Estudio de “La Clave de la Teosofía” . Coordina C. Elósegui. Tomo I dePláticas sobre el S. Del O. A los Pies del Maestro.

Sábados (a las 17h.) - Coloquio abierto: los retos de la vida diaria a la lu de la Teosofía. 2ºsábado de cada mes (a las 17h.) - Coloquio teosófico a cargo de los miembros de laRama.

RAMA BILBAO

Mar tes (a las 19h.) Lectura de Krishnamurti, seguida de meditación. Coordina Allende.Viernes 4 -Video «La atención y la libertad interior 1º parte (Krishnamurti)» Allende. 11-

Estudio «Vida cotidiana a la luz de la Teosofía. El cuerpo etérico y los chacras» N.Carbonell. 18- «Cuando el sol avanza hacia el norte» E. Hernández. 25- Reunión de

psicofísica, se conseguirá la salud paranuestro sistema de enseñanza. ¿Por qué,a pesar del tiempo, del trabajo, del di-nero y de la buena voluntad que se de-dica a las escuelas, por qué los resulta-dos de la educación son tan decepcio-nantes? Esto es porque no se hace abso-lutamente nada para educar el organis-

mo psicofísico del que se sirve el alum-no para aprender y el maestro para en-señar. Entonces, el ignorante enseña alignorante materias que, muy a menudo,no tienen nada que ver con los verdade-ros problemas de la vida.

(Le Lotus Bleu, nov.dic. 1956)

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miembros. Estudio “La Clave de la Teosofía” Cap. 12.Sábado 12 (a las 19h.)- Cloquios teosóficos. Coordina B. García.Nota: Para simpatizantes las actividades comienzan a las 20h.

RAMA CERES

Lunes: 8, 14, 21, 28 (a las 20h.) (estudio del libro) «EL HOMBRE DIOS Y EL UNIVER-SO» I.K.Taimni.

Miér coles: 9, 16, 23, 30 (a las 20h.) CURSO DE INICIACIÓN A LA TEOSOFÍA: LASLEYES DEL KYBALIÓN (Coordinan: U. García, J. Martín y J. Hisado)

Viernes 18 CELEBRACION DEL 1º ANIVERSARIO DE LA RAMA CERES.Sábado: 12 ( a las 10,30 h.) ESTUDIO DE LA D. S. «PROEMIO» (Coordina: J. L. Mendoza)

RAMA JINARAJADASA

Miér coles - (a las 18h.) - Teretulias teosóficas. Grupo de Meditación. Estudio sobre textosteosóficos. Talleres de trabajo.

RAMA MOLLERUSSA

Lunes (a las 19,45 h.) - Esspiritualidad y vida cotidiana. Observación, auto-conciencia,meditación y relajación. Coordina M. Pellisé.

Martes (a las 20h.) - Estudio en grupo del libro “Luz en el Sendero” (Pláticas III). CoordinaP. Duch.

Miér coles (a las 20h.) - Estudio en grupo del libro “Conocimiento de Si Mismo” de IKT.Coordina M.J. Víctor.

Viernes (a las 20h.) - Estudio en grupo del libro “El Kibalión”. Coordina J. Torres Ges.Viernes en Mollerussa, en “Estudi Ioga”, c/. Navarra, 8. (A las 20,30h. Estudio en grupo

del libro “Conocimiento de Si Mismo” de IKT. Coordina J.M. Espasa.Tercer domingo de mes. Charla-coloquio con Clarisa Elósegui. Lugar de encuentro, c/.

Templers-Escorxador, c/. Lluís Companys, 22, Lleida. Mañana de 11 a 14 h., tarde de 17a 20h.).

RAMA SHAKTI-PAT

Miér coles (a las 17h.) - Conocimiento de Si Mismo (IKT) - Meditación. Sendero de Perfec-ción. Coordinan miembros de la Rama. - (a las 18h.) - Curso de Iniciación a la Teosofía.Cursillo de Raja-Yoga (W. Slater). Coordinan miembros de la Rama.

Jueves alternos (a las 19,30h.) - Rituales de la O.T.S. Las Fuentes del Conocimiento. Miem-bros Ramas Alicante y Shakti-Pat.

En Alicante:Martes (a las 18h.) - Las Cartas de los Mahatmas. Coordinan miembros de la Rama.Viernes alternos (a las 18h.) - Conferencias, charlas, vídeos.

GRUPO DE ESTUDIOS TEOSÓFICOS “DHARMA”

Jueves (a las 21h.) - en c/. S. Vicente Mártir, 172, ptª 8 - Valencia. Y lunes a la misma horay lugar: Curso sobre Teosofía. 2º nivel.

GRUPO DE ESTUDIOS TEOSÓFICOS “LA RIOJA”

Todos los viernes, a las 9,45h. Reunión pública.